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FUNDAMENTOS DE
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GEOLOGIA FISICA
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EDITORIAL LIMUSA
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COLOMBIA • PUERTO RICO
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del Instituto Mexicano del Petróleo. |
Profesor de Geología del Petróleo en j
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v / Los dibujos, antiguos y nuevos, que figuran en esta edi-
/ ción se deben ¿ la pluma de Edward A. Schmitz, quien tam-
la Facultad de Ingenierí a de la ¡I / bién colaboró con nosotros en cada una de las ediciones pre-
Universidad Nacional Autónoma if ir
vias. Su muerte, acaecida precisamente cuando estaba en
de M éxico. . 1 prensa la tercera edición en inglés, es una pérdida personal
y profesional para nosotros. Sin embargo nos consuela el que
su arte no murió con él, como queda felizmente testimoniado
en las últimas notas de este libro, cuyas ilustraciones fueron
.
dibujadas por su hija, Sra. Anna Nash
Agradecemos con gusto la valiosa y acertada ayuda de
Maurine Lewis, de Proyectos Especiales, y la de James M.
I Guiher Jr., Editor de Geología de la Prentice-Hall, Inc., por
> i la preparación de la edición en inglés.
r Leet fue ayudado tan eficientemente en la tarea de revi-
m > sió n, por su esposa, Florence J. Leet, que debería considerár-
.
sela coautora del libro Judson manifiesta con placer su reco-
nocimiento por la ayuda editorial recibida de Guenever Pen-
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Contenido
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Mm íntimos en deuda con tes colegas que lían dedicado * LA NATURALEZA Y ALCANCE DE LA GEOLOGIA
su tiempo y capacidad ¿a leer y criticar secciones que perte- FISICA ii
necen *EKI acampo de sus especialidades. En las dos primeras
ediciones, incluimos entre esos colegas ¡a Stages Baáíey., Mar-
2
MATERIA Y ENERGIA 19
land MMngs, Frances Burda, Barí Bdk, Ferry Byedey, Edteg
íOrf , William ©reseter, Afced C- Fisdber,
Qifford Fronde!,
3
C. S. Iforlbut, JT.> George Keaswuedy, ÍBauI MacGlintodk, E^ge-
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fdhn B. Moseley, Hned M. BulterdBarsons
, Murvm JL Kauffman, Wil-
, quienes leyeron y
ROCAS IGNEAS \
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s. i EL TIEMPO GEOLOGICO 125
10
MOVIMIENTO DE MASA DEL MATERIAL DE LA
SUPERFICIE 139
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CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA 153
12
AGUA SUBTERRANEA 181
13
GLACIACION 197
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i DESIERTOS 225
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FUNDAMENTOS DE
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GEOLOGIA FISICA
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17
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LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 287
18
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METAMORFISMO Y ROCAS METAMORFICAS 307
*
19
TERREMOTOS 321
20
EL INTERIOR DE LA TIERRA 339 V
21 :
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APENDICES
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A Configuración electrónica de los primeros treinta elementos 391 i
:
La naturaleza y alcance
de la geologí a fí sica
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í ^ constituidos por fragmentos de roca cuyo tamaño varía desde
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NATURALEZA Y ALCANCE 13
. ! te GEOLOGIA EISICA E HISTORICA I- partículas Submicroscópicas hasta guijarros de varias tone-
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I ladas. Este material est á revuelto y muchos de los fragmentos
WMM El estudio de la geología se divide generalmente en dos
1 partes: Geología Física y Geología Histórica . La Geología se presentan estriados y rotos. Sabemos que ning ú n otro agen-
mmm & F í sica, objeto de este libro, estudia la constitución y pro-
3¿r
te, sino los glaciares, producen tal depósito. Imaginemos ha-
llar en las colinas de Nueva Inglaterra, o en las planicies de
piedades de los materiales que componen la Tierra; su dis-
m tribución a través del globo, los procesos que los formaron y
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Ohio, o en los profundos valles de las Monta ñas Rocallosas,
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.« alteraron, la manera en que han sido transportados y distor- depósitos que se parecen en todos los aspectos a los materia -
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a les glaciares, pero no logramos encontrar glaciares en el á rea.
sionados y la naturaleza y evolución del paisaje. A!
La Geologí a Histórica estudia la evolución de la vida sobre Podemos, sin embargo, suponer que el desecho fue deposi-
la Tierra, desde las formas m ás elementales que existieron tado por un glaciar ya desaparecido. Basados en evidencias
hace dos mil millones de años, hasta la flora y fauna actual
I de esta clase, los geólogos han desarrollado el concepto de
y el hombre mismo. También estudia los cambios de la Tie- la Gran Edad del Hielo ( ver el capítulo 13 ) .
rra a través de 4,000 ó 5,000 millones de añ os el avance y
retroceso de los mares, el depósito y la erosión, la formación
— Este ejemplo puede darse repetidamente. En la actualidad
la mayor parte de los rasgos de la Tierra y los de las rocas
—
de cadenas de .monta ñas , en fin, la historia cronológica de
la forma en que han sucedido los procesos que estudia la
de su superficie se explican como el resultado de procesos
pretéritos similares a los del presente. Hallaremos que mu
chas de las conclusiones de la Geología Física están basadas
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Geología Física.
en la convicción de que los procesos actuales tuvieron ma
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EL PRESENTE ES LA CLAVE DEL PASADO nifestación también en el pasado .
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ocurrido hace unos 60 millones de años. en el presente se manifestaron también en el pasado. Este de hoy, pero de tales monta ñas apenas quedan las raíces; V
.
Toman parte en este “ antiguo error * una .. f. . *
perca depredadora ( Mioplosus ) y su deseada principio es conocido entre los geólogos como la doctrina del los grandes picos desaparecieron hace mucho tiempo. Los Ét
ví ctima, un arenque ( Knightia ), que vivieron uniformitarismo; ello significa, simplemente, que los proce- geólogos explican que las antiguas monta ñ as fueron
destrui- Bm i1]
,
en el antiguo lago Gosiute, un gran cuerpo y U
somero de agua dulce que ocupó la región sos que actualmente intervienen en la modificación de la su- i das por la erosión : la lluvia, el agua que escurre sobre el m
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de lo que es ahora la cuenca del Green perficie de la Tierra son semejantes a los verificados en el \ terreno, el viento, los glaciares, los deslizamientos de tierra 1Ü
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River en el suroeste de Wyoming y las áreas
adyacentes. Este episodio de la vida tal pasado geológico, es decir, que existe una uniformidad de A y los peñ ascos que se mueven lentamente, y que estos pro üi. , II
cesos se sucedieron lo mismo que en el mundo del presente.-
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como está registrado en las rocas es parte procesos entre pasado y presente. j / H
de la Geologí a Histórica. Ejemplar N ? 14 ,705, He aquí un ejemplo. Descubre la observación que los gla- Pensemos ahora en lo que significa esta explicació n. Sabe - “ fe Vj
Museo de Historia Natural de la Universidad
de Princeton. Foto por Fred Anderegg . ciares modernos depositan un determinado tipo de desechos mos, por ía simple observación que los rí os, los glaciares y 1
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los vientos ejercen algú n efecto sobre la superficie de la Tie- *
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rra; pero, ¿pueden tales fuerzas allanar del todo las cadenas
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de montañas ? La razón y el sentido com ú n nos dicen que no
puede ser, pero es aquí donde el factor tiempo
interviene.
En efecto, la escasa y casi imperceptible cantidad de erosion
que tiene lugar en el transcursó de una vida humana signi
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14 NATURALEZA Y ALCANCE “ Si se me preguntara , como ge ólogo , cuá l es la más grande y sen-
tentó por establecer un equilibrio. Pero la naturaleza es com- NATURALEZA Y ALCANCE
cilla contribuci ón de la ciencia geol ógica al pensamiento de la pleja y un cambio hacia el equilibrio, bajo un conjunto de 15
civilización moderna, la respuesta sería la concepci ón de la inmen- |
sa longitud del tiempo. Tan vasto es el lapso registrado en la his- $
condiciones, establece una nueva situación que requiere to
davía otros cambios.
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toria de la Tierra que generalmente, se le distingue de las más
modestas clases de tiempo asigná ndole el nombre de 'tiempo geo- Téngase presente que aun las materias inanimadas de la
lógico'." i Geología Física se derivan siempre de algún estado de cosas
preexistente y que igualmente cambiarán a una nueva forma
CAMBIOS i en el futuro. La roca dura que hoy contemplamos puede
haber fluido en forma de lava, hace millones de a ños, de un
La gran extensión de tiempo comprendida en el calendario volcán extinguido actualmente y puede llegar a formar parte
geológico y la incesante obra de los procesos de la Tierra de un suelo f értil. El risco de una colina puede haber sido
nos fuerzan a admitir que la frase “ tan perdurable como los parte de una antigua línea de costa y, en el futuro, un río
cerros” se refiere únicamente a la comparación con la ef íme- todavía no formado podrá llevar sus fragmentos nuevamente
ra permanencia de la vida humana . En la inmensidad del hacia el océano.
tiempo geológico, todo cambia, nada es permanente.
Por lo com ú n, pensamos en cambios a través del tiempo ENERGIA
en relación con las cosas vivientes, como en evolución. Pero 3!
Todo cambio es una expresión de energía, y ésta es un fac-
lo inorgánico cambia y evoluciona tanto como las cosas vi- tor común a todos los procesos de la Tierra, tanto orgánicos
vientes. Así, la roca sólida cambia por intemperismo en y como inorgánicos. Así, las m ú ltiples formas de materia son
cerca de la superficie terrestre, y los minerales primarios de 1
•
la roca se convierten en otros nuevos dentro de un suelo que 1 consecuencia de las diferencias en la energía que actúa sobre
los á tomos. La energía conserva los materiales en estado de
descansa sobre la roca inalterada. A continuación, el agua, jü fusión hasta que pueden brotar como corriente de lava. La SiSiSSÉK
el viento y el hielo se confabulan para remover los minerales energía provoca el movimiento del agua y el deslizamiento
del suelo, clasificarlos y depositarlos en un nuevo medio, en de las rocas como consecuencia de la fuerza de gravedad.
forma de vastos mantos de escombros. Con el tiempo, estas La energía solar sostiene la vida, produce cambios en el es-
FIG. 1-5 capas pueden convertirse en rocas muy diferentes de aqué- tado del tiempo y contribuye a mantener a los océanos en
En el Gran Cañón del íro Colorado llas de las que provienen.
la erosión de rocas sedimentarias duras movimiento. Toda la geología y toda forma material de
—
y suaves que alternan entre sí , ha producido
formas que semejan templos . El rí o Colorado
fluye por un cañón de paredes abruptas,
Este constante cambio viene a ser como un ajuste a las
nuevas condiciones, en un medio mutable, como en un in- —
existencia es una manifestación de energía.
cortado en rócas í gneas y metamórficas. 1 Adolph Knopf, Time and Its Mysteries , Senes III ( Nueva York : RECOPILACION Y USO DE DATOS GEOLOGICOS
Foto por U .S , Army Air Corps . N. Y . Univ. Press, 1949 ) .
El geólogo reconstruye la mutable historia de la Tierra en
su medio natural; visita los cerros, las planicies, los glaciares,
las costas y se abisma en las profundidades de los océanos.
m En síntesis, no es tarea f ácil la recopilación de datos y hechos
y, el hacer acopio de éstos requiere, con frecuencia, mucho
É1-
fM 3s|Htasjfe; tiempo, esfuerzo y trabajo humanos y bastante dinero. Ade
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‘ m ás, hay multitud de detalles importantes que no pueden -
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estudiarse en el laboratorio Al no poder provocar aqu í una
FIG. 1-6
erupción volcánica, debe esperarse a que se manifieste en Muchos de los datos básicos utilizados en
$ la naturaleza, confiandó en llegar a contemplarla. los estudios geológicos deben ser recabados
Para mayor dificultad etx la investigación, se halla frecuen en el campo . En la foto, un ge ólogo usa su
temente incompleto el registro geoló gico. Esto resulta espi- brú jula para determinar el echado o
noso no sólo por la dificultad en recabar los datos, sino
por-
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buzamiento de una capa en pronuncia
—
declive de arenisca, en la cordillera de
Wind River Range, Wyoming
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que el tiempo puede oscurecerlos. Y conforme sucede . Foto por la
la historia escrita, así ocurre con la historia impresa en con Standard OH Co . ( Ñ.J . )
las
\ / rocas: cuanto m ás nos remontamos en el pasado, rtiás pobre
/ e imprecisa resulta nuestra información. Ciertos datos geo /
/ lógicos pueden quedar sepultados, algunos tal vez destruid - /
y quizá otros jamás fueron registrados. En cualquiera os /
de los
casos, muchos de los datos escapan a nuestro alcance .
Un registro incompleto significa no sólo que es extremada
mente importante usar en forma efectiva todos los datos que -
tengamos, sino que nuestro razonamiento, a partir
hechos, debe ser a ún m ás riguroso que si tuviésemosdedatos los
más completos.
En consecuencia, el geólogo debe estar preparado
decidir sobre la base de datos por dem ás insuficientespara . El
científico debe procurar una información tan precisa
sea posible, de manera que la historia de la como
Tierra
ser la historia de una serie de medidas y observa llegue a
ciones cada
.
vez más exactas En los últimos 180 a ños, la Geolog
cambiado de ciencia esencialmente cualitativa a otraía ha
m ás
16 NATURALEZA Y ALCANCE cuantitativa. En el pasado, los geólogos se contentaban con !
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para los que sólo tenemos respuestas tentativas. Necesitamos de cambiar en otra forma. Estas relaciones constituyen un
más hechos y más datos precisos. Hay multitud de preguntas ciclo, como se indica en la fig. 1-9. Esta es simplemente una
para las que no se tienen respuestas y existen, sin duda, mu- 3 manera de se ñalar los varios procesos que sufren los materia- FIG, 1 9-
chas otras que se pueden plantear. les de la Tierra . El cí rculo externo representa el ciclo com- Diagrama que representa el ciclo de ¡as rocas.
pleto; las flechas interiores del círculo señ alaban los caminos Si no sufre interrupciones, el ciclo se
i portos que pueden ser, y con frecuencia son , tomados en el desarrollará completamente, como se indica
LOS TRES TIPOS DE ROCAS en el cí rculo externo, a partir del magma,
sistema. Nótese que en el diagrama se indica que las rocas .
La Geología se basa en el estudio de las rocas. Nosotros tra - ígneas provienen de un magma y que constituyen el eslabón
pasando por las rocas í gneas, los
sedimentos, las rocas sedimentarias y las
tamos de conocer su composición, su distribución, cómo se J. de una cadena continua. De estas rocas ígneas se derivan, a metamorficas , para transformarse nuevamente
forman, cómo se destruyen, por qué se elevan en las masas en magma. Sin embargo, el ciclo se puede
continentales y por qué se hunden bajo las cuencas oceánicas . través de una diversidad de procesos, los restantes tipos de
rocas.
interrumpir en diversos puntos a lo
largo del circuito para seguir el camino
Todos estamos familiarizados con la roca, el más com ún de En primer término, el intemperismo ataca a la roca sólida
indicado por alguna de las flechas
que cruzan marcadas en el esquema.
FIG. 1-7 los materiales de la Tierra. Se reconoce la roca en la grava formada, ya sea por el enfriamiento de un derrame de lava
El rí o Nuevo ( New River ), de Virginia
Occidental , ha cavado su profundo valle del camino, en los guijarros o en los peñascos de un rio, en en la superficie, o bien, como una roca ígnea formada a pro- .
FIG 1-1(1
en las rocas casi horizontales de la meseta los riscos, etc., y es bién sabido que la roca firme aflora a la fundidad bajo la superficie, expuesta m ás tarde a la erosión. Portada del libro que atrajo la atención del
de los Apalaches. Los sedimentos arrastrados superficie de la Tierra, o yace bajo una delgada cubierta :\
Los productos del intemperismo entrará n eventualmente en mundo cientí fico hacia los conceptos
por este rí o eventualmente llegan al Golfo
de M é xico, donde se depositan en capas , .
de suelo o de escombros sueltos Si examináramos las rocas de la formació n de nuevas rocas sedimentarias, metamorficas y
geológicos de Hutton. Reproducido de un
quizá para convertirse en rocas en el futuro , distintas localidades, apreciaríamos las diferencias y analo- facs í mil publicado por la U . de Illinois
Press, 1956 .
aim ígneas. Los derrumbes, el viento, el agua y el hielo de
Foto por: U .S . Geol . Survey . gías de los diversos afloramientos y mediante la observación,
podríamos comenzar a clasificar las rocas en diferentes gru- los glaciares, contribuyen al desplazamiento de materiales.
FIG. 1 8 - pos. En el ciclo ideal, estos materiales buscan los fondos oceáni-
Estas rocas fueron alguna vez rocas Los geólogos, de acuerdo con sus observaciones, basándose cos , donde las capas de lodo suave, arena y grava se con-
sedimentarias horizontales, sepultadas ILLUSTRATIONS
solidan para constituir rocas sedimentarias. Si . el ciclo no
—
profundamente bajo la superficie . Despué s en su origen han dividido las rocas de la Tierra en tres gru-
fueron inclinadas y plegadas por, las fuerzas
de la corteza terrestre y la erosión
pos principales: í gneas, sedimentarias y metamorficas. Aun - interrumpe su proceso, ekas nuevas rocas pueden ser, a su or THE
subsecuente las ha expuesto a la vista . que más adelante estudiaremos cada uno en detalle, a conti- vez, sepultadas profundamente y quedar sometidas a calor
Foto por Geol . Survey of Canada . nuación presentamos una breve explicación sobre los tres v a presiones de las rocas superyacentes y a fuerzas desarro- HUTTONIAN THEORY
tipos. lladas por los movimientos de la Tierra. Como consecuencia
Vi
de estas nuevas condiciones las rocas sedimentarias se trans- \ OF THE F. AXTH.
I Las rocas ígneas, primígenas en la formación de los grupos,
toman su nombre del latín ignis, "fuego” . Estas rocas fueron, I forman en metamorficas, y si éstas, a su vez, sufren de modo
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en principio, una masa fundida, semejante a un liquido ca- Continuo y creciente calor v presió n, pueden eventualmente
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liente, que recibe el nombre de magma, y que, al enfriarse, se / perder su identidad y fundirse, convirtiéndose en magma , BY JOHN PLAYFAIR,
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convierte en roca dura y firme. Así, la lava que desde un Cuando este magma se enfría, tenemos nuevamente una roca r. ..
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volcán en erupción se derrama sobre la superficie de la Tie - ígnea , cerrá ndose así el ciclo completo. IN THE UNIVERSITY OF EDINBURGH
is mm rra, pronto se enfría y endurece, formando una roca ígnea. Pero el ciclo completo de las rocas se puede interrumpir.
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wmm Pero existen otras rocas ígneas expuestas ahora en la super- Por ejemplo, una roca ígnea puede no quedar expuesta nun-
u as ficie del terreno que anteriormente se enfriaron a cierta pro - ca en la superficie y, así, no convertirse jam ás en sedimentos
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13 m por la erosión que las ha despojado de las rocas que las cu-
por la acció n del intemperismo; en cambio, puede quedar
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sujeta a presión y calor y transformarse directamente en roca SIRICA
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S3 tentes, Por lo com ú n, estas partículas son transportadas por completo. PB í KTEO ro* CADELL AKD DAVIE » LOVDO
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WJLLIAd CREECH ED1WBL' ftOtJ ,
£ el agua , el viento o el hielo a los lugares donde se depositan, Es posible que este concepto del ciclo de las rocas haya
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según nuevos acoplamientos. Por ejemplo, las olas que azotan — —
sido enunciada antes a fines del siglo xvm por James Hut- J 802 .
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una costa rocosa pueden aportar los granos de arena y los ton , a quien ya nos hemos referido .
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18 NATURALEZA Y ALCANCE Este ciclo nos permite observar una circulació n en la materia de
nuestro globo y meditar sobre un eficiente sistema de econom í a
en los trabajos de la naturaleza . La Tierra , como el cuerpo de un .i
ENERGIA QUIMICA
formar agua, arena, sal y dem ás sustancias del mundo ma-
terial . \ ENERGIA ELECTRICA
Hoy sabemos que la segunda explicación es la correcta y
5
que tales part ículas son lo que llamamos átomos, de mane- ENERGIA ATOMICA
\
V ra que si queremos comprender la materia, debemos estudiar TRANSFORMACIONES DE LA ENERGIA
/ primero al á tomo y las maneras en que éste se combina . Esto
nos dara un conocimiento básico de lo que son realmente las
;
rocas , por qué difieren unas de otras y cómo se transforman.
Carga eléctrica
Toda materia parece ser esencialmente eléctrica por natu-
raleza. Algunas de las primeras ideas acerca de lo que hoy
llamamos electricidad derivan de un experimento muy sim-
i
—
ple del frotamiento de un pedazo de ámbar contra un trozo
de piel. Se encontró que tanto el ámbar como la piel eran
2
James Hutton , Theory of the EaHh ( Edimburgo, 1795), II, 562. capaces de atraer pedacitos ligeros de otros materiales, tales
La teoría de Hutton sobre la Tierra fue presentada primero como una como barbas de pluma o lana . Pero lo interesante era que
serie de disertaciones ante la Real Sociedad de Edimburgo en 1785.
Estas conferencias fueron publicadas en forma de libro en 1795. Siete los materiales atraí dos por el á mbar eran repelidos por la piel,
a ños más tarde, los conceptos de Hutton recibieron nuevo ^ impulso a de ahí que los cient íficos dedujeran la existencia de dos cla-
través de una presentación m á s accesible, llamada Ilustraciones de la
teorí a de Hutton ( Illustrations of the Huttonian Theory ) , por John ses de electricidad, que hoy llamamos positiva a una y ne-
Playfair . gativa a la otra. Este hecho fue descubierto por los griegos
19
y
: 1
20 MATERIA Y ENERGIA hacia el a ño 600 antes de Cristo. Posteriormente, a fines del i
•
su carga eléctrica . El numero de protones más el n ú mero de MATERIA Y ENERGIA 2i
siglo dieciséis, William Gilbert, médico de cabecera de la neutrones de un átomo constituyen su número de masa. Los
reina Isabel I, propuso denominar electricidad a la fuerza
que produce este fenómeno, derivando el nombre de la pa-
— —
electrones carga negativa giran muy rá pidamente alrede-
dor del n úcleo, al igual que los planetas lo hacen alrededor
labra griega elektron , que significa “ á mbar” . del Sol ( a fin de evitar la atracción de los protones carga —
En términos t écnicos decimos que las cargas eléctricas 1 positiva ) . En efecto, los electrones dan miles de billones de
iguales se repelen entre sí y las cargas opuestas se atraen ( ver vueltas en un segundo a velocidades de cientos de kilómetros
la fig. 2-1 ) . por segundo. Del mismo modo que los planetas giran alre -
A B
Puede observarse este principio activo en los polos de los dedor del Sol, los electrones giran alrededor del n úcleo a
imanes; en éstos los llamados polos norte se rechazan entre diferentes distancias de éste.
.
FIG 2 1 - s í, pero son atra ídos por los polos sur, y viceversa . TAMA ñ O ATóMICO. Los electrones forman un escudo pro
Las cargas eléctricas iguales se repelen; -
las cargos opuestas se atraen. tector alrededor del núcleo y le dan tamaño al átomo. Las
Atomos
A : Esfera peque ñ a con carga positiva. dimensiones atómicas son demasiado pequeñas para tener al-
B: Esta peque ñ a esfera es repelida
.
al aproximársele otra carga positiva ¿Qu é es exactamente lo que sucede cuando el ámbar se fro - gú n significado como nú meros absolutos, pero se obtienen
algunas comparaciones interesantes en términos de tama ñ o
c ; La carga positiva es atraí da por una ta con la piel? Las partículas pasan de la piel al ámbar y
carga negativa . éste se carga negativamente , de donde se desprende que las relativo. En la descripción de las dimensiones atómicas se
partículas que traen consigo esta propiedad est án cargadas usa una unidad de longitud especial, el angstrom, A, que es la
negativamente. Estas partículas con carga negativa reciben cienmillonésima parte de un cent í metro, o sea .00000001 cm .,
el nombre de electrones y son fundamentalmente part ículas y se escribe 1 X 10~s cm.2
de á tomos. Los n ú cleos atómicos tienen di á metros que var ían de un
Sin embargo, los á tomos no pueden estar formados ú nica - I
diezmilésimo a un cienmilésimo de angstrom , esto es, de
10~* a 10~ r A . Los átomos de los elementos más comunes —
mente por electrones, puesto que todos los electrones tienen
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carga eléctrica negativa y no podrían por sí solos mantenerse 1 tienen diá metros de unos 2- Á, lo que es, “ a grosso modo” , de
unidos entre sí; de ahí que los científicos buscaran otra par- 20,000 a 200,000 veces el diámetro del n ú cleo. Vemos nueva -
tícula con carga positiva. Finalmente se encontró esta part ícu- mente que la materia consta , en su mayor parte, de espacios
la y se le llam ó prot ón. Pero éste, además de poseer una carga abiertos. Si el Sol fuese, en verdad, el n úcleo de nuestro
TABLA 2 1 - positiva , difiere del electrón en otro aspecto : el prot ón act ú a modelo atómico, el diá metro del á tomo sería m ás grande que
Part í culas fundamentales como una unidad de materia mucho m ás pesada. Puesto el de todo el sistema solar.
que cualquier cantidad de materia es descrita arbitrariamen- MASA ATóMICA. Aunque el n úcleo ocupa sólo una billoné
te por un n ú mero llamado número de masa, se dice que el I sima parte del volumen de un á tomo, contiene el 99.95 por
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CARCA
ELÉCTRICA MASA protón tiene una masa mayor que la del electrón. En efecto, ciento de la masa del á tomo. En efecto, si fuese posible em- l
Electrón -1 0.00055
nosotros definimos las part í culas fundamentales de los áto - pacar un cent í metro cú bico con solamente protones, este pe-
Protón +1 1.00760 mos en términos de masa y carga el éctrica ( ver la tabla 2-1 ). que ñ o cubo pesar ía más de 100 millones de toneladas en la
Neutrón 0 1.00890 Los científicos siguieron escudriñando los á tomos, hasta í! superficie de la Tierra.
que hallaron una tercera partícula con una masa casi igual
IONES. Un ion es una forma el éctricamente desequilibrada
a la del protó n, pero sin carga eléctrica . A esta partícula ,
de un átomo o grupo de átomos. El átomo es eléctricamente
eléctricamente neutra , se le llam ó neutrón.
neutro; pero si pierde un electró n de su concha o capa ex-
Los protones, neutrones y electrones son las partí culas terna, la porción que qu eda detrás tendrá una carga positiva
fundamentales que se combinan para formar átomos. Toda
la materia est á compuesta de átomos. extra , sin pareja . A esta unidad se le llama ion positivo. Si
^
por el contrario, la concha extema gana un electrón , el ión
Nadie ha explicado todav í a satisfactoriamente qué son exac- tendrá una carga negativa adicional, y será ion negativo.
tamente estas partículas, pero sí sabemos que la energ ía est á
intimamente ligada a su cará cter.
Como veremos m ás adelante, se puede ganar o perder más
de un electrón , lo que conduce a la formación de iones con
ESTRUCTURA ATóMICA . Parte de la información más impor - dos o más unidades de carga eléctrica .
tante que tenernos acerca de los á tomos ha sido establecida í \ Casi toda la materia que conocemos debe su existencia a
por observaciones indirectas del comportamiento de aquello / los iones y se mantiene unida por atracciones
eléctricas .
.
que no podemos ver Los f ísicos, usando partículas positivas
con carga doble, llamadas partí culas a l f a 1 para bombardear Elememos
á tomos, han hecho algunos descubrimientos interesantes. Por i. ' El á tomo es la unidad m ás peque ña de un elemento. En la
ejemplo, si tales part ículas son disparadas contra un blanco
— como un pedazo de metal formado por billones de á tomos ,
no más de una part ícula alfa entre 10,000 choca con alguna
— naturaleza se han encontrado noventa y dos elementos; otros
han sido obtenidos en el laboratorio. Cada elemento es una
combinación especial de protones, neutrones y electrones.
cosa dentro del blanco. De ah í que se haya llegado a la con- Constituye la característica distintiva de cada elemento el
elusion de que el blanco debe ser espacio abierto en su ma- n ú mero de protones de su n ú cleo. Cada
yor parte.
Experimentos reiterados han demostrado que los átomos
:í
_ elementó tiene un
nú mero atómico correspondiente al de protones en
su n úcleo
y a cada elemento se le da un nombre y un s í mbolo
contienen un núcleo de protones y neutrones rodeado por una .
El elemento N? 1 es una combinación de un protón y un
nube de electrones. También han revelado que un átomo electrón ( ver fig. 2-2 ) . Mucho antes de que fuera conocida
Hidrógeno
normal contiene tantos electrones como protones. Los neutro-
FIG. 2 2
-
n es contribuyen a formar la masa del á tomo, pero no afectan 2
Al manejar n ú meros o muy peque
niente expresarlos en potencias de diez,ñ os o muy grandes, es conve - Diagrama esquemático de un átomo de
1 Dos protones y dos neutrones ligados. dice B. como se describe en el apén- hidrógeno formado por un prot ón y un
.
* •
electrón Este es el .átomo más simple .
f
^
\
\\
i /
v / /
.
órbitas está n dispuestas sistem á ticamente a diferentes distan- ( ver la fig. 2-7 ). FIG 2 7
terna del átomo de oxígeno, sin separarse de sus propios ligadura, ¡os electrones del hidrógeno
desempeñan en cierto sentido, un doble
tos, logrados principalmente a través de la unión de iones.
protones. As í, los n úcleos de hidrógeno están en
realidad papel, ocupando los dos lugares vacantes
Los fonnados por procesos biológicos se denominan com- compartiendo sus electrones con el n úcleo de oxígeno ( ver en la concha exterior del oxí geno, a la vez
puestos orgánicos; los otros se llaman compuestos inorgánicos.
FIG, 2-4
)
la fig. 2-8 ) . Cuando esto sucede, se dice que los á tomos que conservan su distancia normal del
í núcleo de hidrógeno. El resultado es la
Diagrama esquemático del deuterio, están ligados covalentemente. El resultado es un
un isótopo del hidrógeno formado por Como acabamos de ver, los elementos con 8 electrones en nuevo com- formación de una molécula de agua,
la adición de un neutrón al núcleo . su concha exterior no se combinan rá pidamente con otros
puesto diferente de los elementos mismos. Este
compuesto
la unidad más pequeña con las
propiedades de ese compuesto.
Tiene un número de masa de 2 .
í
fe: /. -
'
I
es el agua, cuyo s í mbolo H 2O representa los elementos que Jj TABLA 2-2 La organización de la materia MATERIA Y ENERGIA 25
N.
lo forman y sus proporciones. La combinación de dos átomos| j
de hidrógeno y un á tomo de oxígeno forma la unidad m ás|
V
X K f % •
ATOMO £
*
/ * \\
pequeña que posee las propiedades del agua. Esta unidad Jj 1 M
\
y i
/
es la mol écula de agua. Una mol écula es la unidad más peVjj;
quena de un compuesto que posee las propiedades de ese m1
1
NUCLEO JH
i i J®
compuesto.
Puesto que el átomo de oxígeno ha ganado, en efecto, 2|
I|
j
,,
. i
r
—
y:y
- íVVV\
-
r
+ jp
electrones, adquiere una carga negativa y cada á tomo de|
hidrógeno, actuando como si hubiese perdido sus electrones, |
| Elemento n ú mero Protones
DE
Neutrones
NUMERO DEr
Electrones
mmm
§
NUMERO DE ~~ NUMERO +
adquiere una carga positiva . Como consecuencia , una mo- ¡ Los á tomos de
los diferentes X
MASA PROTONES NEUTRONES
JlSlillillll#
lécula de agua act ú a como una peque ña varilla, con una| J elementos se .
carga positiva en un extremo y una negativa en el otro ( ver| ¡ combinan para
-P
la fig. 2-9 ) , las cuales se conocen como polo positivo y polo jj
formar
COMPUESTOS. 2 2 Var ía el 2 Si
de elflctrant
ó
negativo a causa de la semejanza de las moléculas a una| | La unidad m á s y/v/ n ú mero
3
¡ peque ña de 3 3 IONES
barra imantada . Entonces, la molécula es un dipolo ( “ dos| un compuesto
polos ” ) , y el agua conocida como un compuesto dipolar. J
111
es es la MOLECULA •*
Este hecho confiere al agua propiedades especiales que la jj
(± 5X± convierten en un agente excepcionalmente importante en los| ¡j 103 103 103
. -
FIG 2 9
Carácter dipolar del agua
(c)
.
procesos geoló gicos. El mecanismo por el que el
ve la sal ( ver la fig. 2-10 ) , es un ejemplo de
agua
la
disuel
'
V
L, v .v.. •.
26 MATERIA Y ENERGIA su efectividad como agente geológico. Las olas que baten la a tener la energía necesaria para formar compuestos. En con- MATERIA Y ENERGIA 27
costa, y los glaciares que serpentean las faldas de una mon - secuencia, la energía química es la energía necesaria para
ta ñ a realizan un trabajo geológico por medio de la energía formar compuestos, y se produce cuando los á tomos pierden
ciné tica. o ganan electrones.
Mi:
el espacio
'
Molécula . .m
m
Es la unidad m ás peque ñ a de un compuesto. m
Energ í a . i
i
Es la capacidad para producir movimiento. 1
Energí a potencial.
•
EL ESPACIO es la extensión ilimitada en todos sentidos. Es NUESTRO SISTEMA SOLAR
Es la energía almacenada. lo ilimitado, en que todas las cosas est á n ordenadas y rela
cionadas; es la nada que tiene un lugar para todo.
- NUESTRA GALAXIA
Energí a cinética.
Es la energía del movimiento. I
3
De noche, mirando al espacio desde la Tierra , contempla
moá incontables puntos de luz. La mayor ía son estrellas que
- ORIGEN DE NUESTRO SISTEMA SOLAR
.
Energí a calorí fica
permanecen en las mismas posiciones relativas y aparentes
i
* ,
te, de la cual depende la existencia de la vida terrestre. recibe m ás calor y da lugar al verano.
emis* erio noite se recuesta en el lado opuesto de la
Se considera que la energí a radiante del Sol es generada j ,
r lta > apart á ndose del Sol, y se origina el invierno
por reacciones atómicas, que forman núcleos de helio a partir | . ,
de n ú cleos de hidrógeno, mediante un proceso llamado el 1 . Tierra no es, en realidad , una esfera perfecta. A causa FIG. 3-1
ciclo del carbón. En el Sol , cuando el n ú cleo de hidrógeno |
e ^ a fuerza centrifuga creada por la rotación, el diámetro Arreglo esquemático de los planetas de
nuestro sistema solar.
y se le une para ecuatorial es unos 43 Km . m ás grande que el diá metro polar,
1H choca con el n ú cleo de carbono eC
12
1 M ás cerca del Sol están los cuatro planetas
formar el n ú cleo de nitrógeno 7N , se
13
genera energ í a radian - | /
N
Y as cedidas más recientes, obtenidas mediante satélites interiores: Mercurio, Venus, la Tierra y Marte.
Siguen a continuación los asteroides tj los
te. Después de cinco pasos in ás, el proceso termina con la I > Quiciales han revelado dos depresiones o hundimientos de
,
planetas exteriores: J ú piter, Saturno, Urano,
me os el
vuelta del 6C a su estado original, pero acompa ñado por fj / : 0 a §eramentehemisferio
^
12 ‘ en norte, que le dan a la Tierra Neptuno y Plutón. Los planetas no están
? “ semejante a la de una pera , dibujados a escala ( ver la jig . 3 3 ).
un n ú cleo de helio recié n constituido que se formara durante
el proceso citado, y por la energí a convertida a partir de la |
( el é ndice A ) . El ; Paia
^ Sol proporciona
sostener sus
a
formas
la Tierra
de vida .
cantidad de calor suficiente
Aqu í desempeñ a un papel
masa durante la síntesis del helio ver ap | 1X1 importante el
carbono, actuando simplemente como catalizador, toma parte| protege UY manto constituido por la atmósfera , que
en la reacci ón, pero no sufre alteración , lo que le permite : su superficie de las cargas letales de radiaciones
ser usado repetidamente. El hidrógeno se ha convertido en j ultravioleta . Si los rayos ultravioleta no fueran filtrados por
nuestra atm ósfera, sería dudosa la existencia de vida en cual-
helio. De hecho el Sol está “ quemando 4 millones de tone-
”
quiera de sus manifestaciones. La atm ósfera tambié n protege
ladas de hidrógeno por segundo , produciendo una “ ceniza ” í a la superficie de la Tierra de millones de meteoros que
de helio. A pesar de este consumo, el Sol puede conservarse j cada d ía viajan a velocidades superiores a los 70 Km. por
por unos 30,000 millones de a ñ os. segundo cuando alcanzan nuestra atmósfera , en la cual ar-
Estas reacciones at ómicas se tienen a temperaturas de va- j den la mayor parte de ellos. Ocasionalmente algunos meteo-
rios millones de grados y son controladas automá ticamente j , ¡
ros grandes se han abierto camino hasta la superficie de la
Si la temperatura aumenta, el proceso se acelera de inme- j Tierra . El meteoro Gran Siberiano, de 1908, al tocar la Tie-
diato y expande el gas del Sol. Esta expansión produce en- | rra, explot ó tan
friamiento, que disminuye el ritmo de producción de energía. violentamente, que los á rboles en 50 kil ó-
i
1
32 LA TIERRA EN EL ESPACIO metros a ia redonda del área del impacto fueron derribados.
En promedio, los meteoros sólo matan una persona cada 100 | de la Luna es una sexta parte de la que tiene la superficie de LA TIERRA EN EL ESPACIO 33
a ñ os, pero si hubiera ca ído en una ciudad moderna, uno tan la Tierra.
grande como el de 1908 habría causado m ás destrucción 1 El origen de los crá teres de la Luna ha sido discutido por
que la explosión de una bomba atómica . ll
i mucho tiempo. Se ha sugerido que aquéllos fueron alguna
Los primeros satélites artificiales tomaron mediciones que vez parte de volcanes, pero muchos de ellos tienen una ca-
condujeron al descubrimiento de las fajas de Van Alien , fa- 1 racterística que abriga dudas acerca de esta teoría. El volu-
jas que están contenidas dentro de la atm ó sfera terrestre . - i men del material apilado alrededor de algunos de ellos es
Consisten principalmente en n ú cleos ionizados con gran ener- 1 igual al volumen del crá ter, y parece no haber
I casi ón de material procedente de abajo. Esto ha existido
gí a de á tomos de hidrógeno y electrones, atrapados por el adici llevado
campo magnético de la Tierra. Las fajas de Van Alien son a los astrónomos a explicar su formación por otros medios.
tan peligrosas para los seres vivientes que los cosmonautas En la Tierra hay crá teres formados por el impacto de meteo-
necesitan protecci ó n equivalente a una capa de plomo de 12 ros ( ver fig. 3-2 ), de ahí que se haya sugerido este origen
mm . de espesor . sobre algunos de los crá teres de la Luna.
La densidad de la atm ó sfera disminuye con la altura . La Se cree que los mares se formaron por una combinación
mitad de nuestro aire est á contenida en los primeros 5.5 Km ; de impactos meteóricos y derrames de lava. En efecto, las
la mitad de lo que resta, o sea una cuarta parte del total, marcas de casi la mitad de la superficie visible de la Luna
est á en los siguientes 5.5 kilómetros, y as í sucesivamente. A han sido relacionadas con el supuesto impacto de un meteoro
es en el centro del Mare Imbrium. Se infiere que el
-
casi 100 Km . sobre la superficie de la Tierra la densidad gigantesco
la millonésima parte de su valor en la superficie . A esta al - m impacto inició la formación del mar, desprendiendo enormes
tura , se reflejan las se ñales de radio de onda corta . cantidades de material de la corteza de la Luna, que fueron
Los detalles relativos a la composici ó n , estructura y otros i arrojados en todas direcciones formando un inmenso crá ter.
han sido tratados en los cap í - Este impacto debió ocurrir cuando la corteza de la Luna
caracteres f ísicos de la Tierra ,
tulos precedentes.
recubriera un material parcialmente fundido. La masa de ma-
terial desprendido y arrojado fuera del cráter debió sobre-
LA LUNA. Nuestro vecino espacial m ás cercano y nuestro cargar una sección de la costra; ésta y su carga se asentar ían
satélite natural la, Luna , constituye una vista espectacular en el material parcialmente fundido. Entonces se abrirían
cuando se ve a través de un telescopio de regular alcance. grietas y del interior de la Luna brotar ía lava que esparcién-
Galileo, que fue el primer hombre que la observó así y que dose sobre el Mare Imbrium, pudo nivelar las irregularidades
escribió lo que vio les puso nombre a algunos de sus acci- producidas por el asentamiento y ruptura de la corteza lunar.
FIG. 3-2 dentes . A las grandes á reas oscuras que le parecieron seme- Las condiciones que permitieran la formación de los crá te-
Regi ón central de la Luna, mostrando jantes a los mares, los llam ó m úria ( plural del lat ín mare , res y los mares pudieron ser consecuencia del crecimiento
los maresy cráteres y montañas . Foto del “ mar” ) ; sin embargo, ahora sabemos que no existen cuerpos de la Luna por la acumulación de materia procedente del
Observatorio de Mt . Wilson tomada a trav és
del telescopio de 100 pulgadas ( 2.54 m . ) acuosos en la Luna. Se elevan sobre su superficie monta ñas espacio; por lo tanto, su superficie debió estar fr ía . El inte-
de 8 Km . de altura y grandes á reas están salpicadas de crá- rior pudo haber sido calentado por elementos radiactivos de
teres; Clavius, el más grande de ellos, alcanza un di á metro vida corta. Las capas exteriores debieron constituir un buen
de 235 kilómetros. La Luna nos presenta siempre la misma aislante , conservando el calor en proceso de generación hasta
faz porque emplea el mismo tiempo en su movimiento de producirse cierta fusión. En esta etapa, el fondo de muchos
rotación y traslación , pero con la ayuda de la ciencia rusa , el cr á teres y grietas, as í como los mares, pudieron haberse lle-
mundo dispone ahora de una fotograf í a de la otra cara . Esta nado con la lava . La pérdida rápida de calor interno a tra-
fue obtenida el 4 de octubre de 1959 cuando la U .R .S.S. dis-
ves del derrame de la lava debió haber enfriado rá pidamente
la roca líquida debajo de la superficie, dando por resultado la
paró un cohete que pasó frente a la cara desconocida y en-
vió fotos de televisión que revelaron un detalle sorprendente : solidificaci ón.
el otro lado de la Luna tiene relativamente pocos mares . El 3 de noviembre de 1958, N. A. Kozyref , del Observa-
durante siglos . torio Astron ómico de Kharkov, U.R.S.S., que tenía apuntado
La Luna ha sido estudiada intensamente
Hoy, los telescopios de gran alcance nos permiten verla con I \ una
$ ú espectrógrafo al pico central del crá ter Alphonsus
, registró
efusió
el mismo grado de enfoque que se vería a simple vista un 1 probando n de gas del crá ter que duró unas dos horas, com-
que el viejo globo todavía no está completamente
paisaje a 300 Km. de distancia; ello es lo suficiente como I/ muerto.
para distinguir objetos que estén a unos 350 metros uno de
otro. De las observaciones telescópicas se deriva el conocí- VENUS. Con un di á metro casi igual al de la Tierra, Venus
miento de que la Luna no tiene atm ósfera ni ha sufrido cam-| | tiene sólo ocho décimos de la masa terrestre. Su a ño dura
bios superficiales permanentes en varios siglos. Por el modo g 225 d ías en comparación con los 365 del a ño terrestre. Nues-
-
en que la superficie de la Luna refleja la luz a los telesco jj tras mejores observaciones indican que su d ía es tan largo
píos, se ha determinado que el material de su superficie| . :
j como su a ño, puesto que Venus parece girar sobre su eje en
debe ser extremadamente poroso, formado por pequeñas agu- el mismo tiempo que hace su recorrido alrededor del Sol .
polvo amontonados de | El 14 de diciembre de 1962 la nave espacial norteamerica
jas de roca entretejidas o granos de
manera tal que los espacios abiertos representen el 90 por jj na, Mariner II se acercó a 34,500 Km . de Venus y transmitió -
ciento del volumen . En realidad , resultar í a dif í cil caminar gj información cient ífica a la Tierra a través de una distancia
sobre un suelo de tal naturaleza. Los cálculos basados en la de 59.000,000 de kilómetros. Con estos datos, los científicos
distancia a la Luna, su tamañ o y velocidad en su órbita in - estuvieron en condiciones de confirmar sus conclusiones ini-
dican un peso especí fico medio de 3.3, comparado con el de j* cíales en el .sentido de que la superficie de Venus debe ser
la Tierra, que es de 5.5, y que la gravedad en la superficie| tan árida y caliente como para no permitir la existencia de
cualquier forma de vida orgá nica . La temperatura de su su
-
¡
32 LA TIERRA EN EL ESPACIO metros a la redonda del á rea del impacto fueron derribados.
En promedio, los meteoros sólo matan una persona cada 100 de la Luna es una sexta parte de la que tiene la superficie de LA TIERRA EN EL ESPACIO 33
a ñ os, pero si hubiera ca ído en una ciudad moderna , uno tan la Tierra.
grande como el de 1908 habría causado más destrucción El origen de los crá teres de la Luna ha sido discutido por
que la explosión de una bomba atómica. mucho tiempo. Se ha sugerido que aquéllos fueron alguna
Los primeros satélites artificiales tomaron mediciones que vez parte de volcanes, pero muchos de ellos tienen una ca-
condujeron al descubrimiento de las fajas de Van Alien , fa - ractcrística que abriga dudas acerca de esta teor ía. El volu-
jas que est á n contenidas dentro de la atm ósfera terrestre . men del material apilado alrededor de algunos de ellos es
Consisten principalmente en n ú cleos ionizados con gran ener- casi igual al volumen del crá ter, y parece no haber existido
gía de átomos de hidrógeno y electrones, atrapados por el adición de material procedente de abajo. Esto ha llevado
campo magn ético de la Tierra. Las fajas de Van Alien son a los astrónomos ?. explicar su formació n por otros medios.
tan peligrosas para los seres vivientes que los cosmonautas En la Tierra hay cráteres formados por el impacto de meteo-
necesitan protecci ó n equivalente a una capa de plomo de 12 ros ( ver fig. 3-2 ) , de ah í que se haya sugerido este origen
mm . de espesor . sobre algunos de los cráteres de la Luna.
La densidad de la atm ó sfera disminuye con la altura . La Se cree que los mares se formaron por una combinación
mitad de nuestro aire est á contenida en los primeros 5.5 Km ; de impactos meteóricos y derrames de lava. En efecto, las
la mitad de lo que resta , o sea una cuarta parte del total, marcas de casi la mitad de la superficie visible de la Luna
está en los siguientes 5.5 kilómetros, y así sucesivamente. A han sido relacionadas con el supuesto impacto de un meteoro
casi 100 Km . sobre la superficie de la Tierra la densidad es gigantesco en el centro del Mare Imbriuin . Se infiere que el
la millonésima parte de su valor en la superficie . A esta al - impacto inició la formación del mar, desprendiendo enormes
tura , se reflejan las se ñales de radio de onda corta . cantidades de material de la corteza de la Luna , que fueron
Los detalles relativos a la composici ó n , estructura y otros arrojados en todas direcciones formando un inmenso cráter.
han sido tratados en los capL Este impacto debió ocurrir cuando la corteza de la Luna
caracteres f ísicos de la Tierra
tulos precedentes. recubriera un material parcialmente fundido. La masa de ma -
terial desprendido y arrojado fuera del cráter debió sobre-
LA LUNA. Nuestro vecino espacial m á s cercano y nuestro cargar una secci ón de la costra ; ésta y su carga se asentarían
satélite natural , la Luna , constituye una vista espectacular en el material parcialmente fundido. Entonces se abrirían
cuando se ve a través de un telescopio de regular alcance. | ; grietas y del interior de la Luna brotar ía lava que espareié n-
Galileo que fue el primer hombre que la observó así y que dose sobre el Mare Imbrium , pudo nivelar las irregularidades
escribió lo que vio les puso nombre a algunos de sus acci-|producidas por el asentamiento y ruptura de la corteza lunar,
FIG. 3-2 dentes' A las grandes á reas oscuras que le parecieron seme- f Las condiciones que permitieran la formación de los crá te-
Región central de la Luna, mostrando janw , w mares los llamó nidria ( plural del latín mare, :g res y los mares pudieron ser consecuencia del crecimiento
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| BMr teres - Clavius el más grande de ellos, alcanza un diá metro vida corta. Las capas exteriores debieron constituir un buen
de 235 kilómetros La Luna nos presenta siempre la misma aislante , conservando el calor en proceso de generación hasta
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cierta fusi ón . En esta etapa, el fondo de muchos
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| jas de roca entretejidas o granos de polvo amontonados de
manera tal que los espacios abiertos representen
ciento del volumen. En realidad, resultaría dif ícil caminar
el 90 por
El 14 de diciembre de 1962 la nave espacial norteamerica
| , Mariner II se acercó a 34,500 Km . de Venus y transmitió
| na
información cient ífica a la Tierra a través de una distancia
sobre un suelo de tal naturaleza . Los cálculos basados en la gj de 59.000,000 de kilómetros. Con estos datos, los cient íficos
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111 y distancia a la Luna, su tama ño y velocidad en su órbita in| - :| estuvieron en condiciones de confirmar sus conclusiones ini-
dican un peso específico medio de 3.3, comparado con el de|cíales en el sentido de que la superficie de Venus debe ser
la Tierra, que es de 5.5, y que la gravedad en la superficie m fan á rida y caliente como para no permitir la existencia de
cualquier forma de vida orgánica . La temperatura de su su-
ber sido abundantes en el lejano pasado. Una hipótesis con-
LA TIERRA EN EL ESPACIO
34 LA TIERRA EN EL ESPACIO perficie es posiblemente de unos 300° C. Su atmósfera. es.¡ ¡ 35
mucho m ás gruesa que la de la Tierra y puede hallarse muy! sidera que gran parte del ox ígeno fue consumido por combi-
por debajo de las capas inferiores de nubes, la naturaleza1 nación con el hierro de las rocas. Y grandes cantidades de
[*I » I
de las cuales se desconoce. Las capas superiores de nubes agua pueden estar contenidas en combinación química con
probablemente están compuestas de hielo. Es un misterio| las rocas, as í como en la forma de congelación pennanente
Porci ó n del Sol
inextricable que Venus y la Tierra, con casi el mismo tama ñ o| del suelo. En cualquier caso, parece claro que el planeta
y la misma masa , tengan superficies y atm ósferas tan dL1 Marte que vemos boy d ía es un mundo que agoniza .
y NEPTUNo. Estos planetas gi-
ferentes. J óPITER, SATURNO, URANO
m MARTE. Si existe otro lugar en nuestro sistema solar donde
— -
gantes que giran rá pidamente — muy parecidos entre sí , Re-
Urano Neptuno pudieran encontrarse plantas y vida animal semejantes a las # nen gruesas atm ósferas de metano y probablemente amonía
co, con cantidades considerables de helio e hidrógeno con-
de la Tierra,, ese lugar parece ser Marte. Las posibilidades
Saturno Pint ó n J ú piter
500 se basan en gran parte en la cantidad y clase de atm ósfera
centrados hacia sus respectivos centros. No ofrecen acomodo
para ninguna clase de vida que nos sea conocida y difieren
ico 200 300 400
í . —Miles de kil ó metros as í como la presencia y cantidad de agua en este planeta.
¡ tanto de los planetas terrestres, Mercurio, Venus, la Tierra
Los rasgos m ás destacados de Marte son sus “ easquetes |
y Marte que dif ícilmente parecen pertenecer al mismo sis-
FIG. 3 3 - ”
polares , que se forman en invierno y desaparecen en verano . í
Tamañ o de los planetas , comparado tema.
Esto implica la presencia de agua , pero lo que podemos decirfj
con una. porci ón del Sol ,
sobre estas capas es que parecen tener apenas unos cuantos¡¡
J ú piter tiene 12 satélites. Este planeta estuvo a punto de
ser lo suficientemente grande como para estallar en forma
decí metros de espesor. A medida que los "casquetes de hie |>
de estrella radiante, como ocurrió con el Sol. Con una masa
lo” desaparecen , se extiende una coloración obscura que # 300 voces mayor que la de la Tierra , su diámetro es 10 veces
avanza hacia el ecuador a razó n de unos 3 Km . por hora.l! m ás grande y su volumen es 1,000 veces mayor. Toda esta
¿ Representan estas áreas oscuras, vegetación? En 1959, ung mole enorme gira a una velocidad tan grande que le permite
espectro infrarrojo de tales á reas indicó la presencia de ina - 1 d á r una vuelta completa en 9 horas y 55 minutos. Las nubes
terial orgá nico sobre Marte. de colores varios que, como bandas, envuelven a este colosal
La atmósfera de Marte podr ía no ser venenosa para | la f planeta, pueden estar alineadas por poderosos vientos alisios.
vida vegetal, pero resultar a
, í sofocante para los animales de Un rasgo extraordinario, observado por primera vez en 1878,
la Tierra : contiene 14 veces m ás bióxido de carbono que la es la Gran Mancha Roja de 48,000 kil ómetros de largo, o sea,
nuestra y la mayor parte del resto es nitrógeno. La presión casi 4 veces el diá metro de la Tierra, que se mueve como si
de la superficie constituiría un obst á culo adicional, siendo# no estuviera fija a una superficie sólida y que no ha sido
casi igual a la de nuestra atm ósfera a 15,000 metros sobre explicada .
el nivel del mar. A tan baja presión la r á pida evaporación# Saturno es el m ás pintoresco de los planetas. Las tenues
evita la formación de masas acuá ticas, y probablemente tiene bandas que lo circundan son análogas a las de J ú piter, aun -
ello que ver con el hecho de que no podamos ver ningú n
*
í
Puede ser, por ejemplo, que haya vida vegetal parecida a Il
—
?
tí
vegetación desértica de la Tierra acaso musgjos y liq úenes
en su mayor parte. Adem ás, suponiendo que queden poco
oxí geno y agua sobre el planeta, estos elementos pueden ha#
ti .mi .
til
f
m
40 LA TIERRA EN EL ESPACIO zados tienen una resistencia semejante a la de un alambre, Los planetas. LA TIERRA EN EL ESPACIO 41
que resiste estas fuerzas. En 1960, Fred Hoyle sugirió que 1 Giran alrededor del Sol .
la magnetohidrodinámica gobernaba el comportamiento de la j Cuatro planetas interiores:
materia original en las nubes de polvo, compuestas de gases|
ionizados en r á pida rotación. A través de estos gases corrían
—
Mercurio, Venus, la Tierra y Marte todos de casi el mis-
mo tama ño bastante denso, considerados planetas terres-
tres.
lí neas de fuerza magnetohidrodin á mica semejantes en algu-
nos aspectos a hilos o filamentos largos y elásticos, vinculados |
Planetas exteriores.
Jupiter, Saturno, Urano, Neptuno -planetas gigantes muy
a los gases. En las partes exteriores de la nube el gas giraba
más lentamente que en el centro, con lo que los filamentos |
tend ían a enrollarse más y más y a alargarse. Esto aumentó
—
parecidos entre sí y Plutón, asteroide que posiblemente
est á ligeramente fuera de lugar.
RESUMEN
Espacio .
.
La nada sin l ímites ocupada por todas las cosas
El universo.
Compuesto de toda la materia que podemos ver o imaginar; se ]
supone que incluye millones de galaxias.
Estrellas.
Masas de gas autoluminosas.
Grupos de estrellas.
Constelaciones.
Galaxias.
Enjambres o agmpamientos de estrellas.
1
i
iL, K
£
s-
m
m
mm
X
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M
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r
ÍÍ:
Minerales
Hi
I
i,:
n m si
ALGUNOS CIENTIFICOS creen que la Tierra y los demás COMPOSICION DE LOS MINERALES
Ü
;g
planetas se formaron al mismo tiempo que el Sol -hace unos
S
i ;l;
—
4,000 ó 5,000 millones de a ños , a partir de grandes nubes tur-
-
ESTRUCTURA DE LOS MINERALES
bulentas de fragmentos de materia del tama ño del polvo. Den IDENTIFICACION DE MINERALES
* tro de estas nubes empezaron a desarrollarse las concentra-
tiÜ:: dones de materia. Una vez iniciada, cada concentración MINERALES QUE FORMAN LAS ROCAS
i
ííi:
£
Durante los procesos de concentración, los fragmentos des-
arrollaron tal actividad que pasaron al estado de fusión. To-
dos los elementos hoy conocidos estuvieron presentes en esta
n materia original fundida. Muy lentamente, a medida que
estos elementos se iban enfriando, parte del hierro y del ní-
it TirT Í
'
— —
quel elementos más pesados se hundieron hacia el centro,
mientras los m ás ligeros escaparon. Circunstancialmente, al-
;i«í gunos elementos , o se acumularon para formar la atmósfera
&5:
mi : de la Tierra o, cuando las temperaturas lo permitieron, se
ir • •
m *
% combinaron para formar el agua de los océanos. Finalmente, \
1
|
r . _
la masa de materia llegó a ser nuestro planeta, una esfera de
\ 12,800 Km. de di á metro, constituida principalmente de com-
^
''J •
''W
:
. y
/
/
—
halla cubierta por agua.
—
gaseosos la atmósfera y gran parte de su superficie se
TABLA 4 1 -
Elementos más abundantes en la
i
lili
Estamos bastante familiarizados con la superficie de la
Tierra, sobre la cual vivimos. Está compuesta de minerales
corteza de la Tierra *
— —. —
de un elemento el carbono. La sal de mesa com ún el mi- vfj
Mi
fe
FIG. 4-1 neral halita se compone de 2 elementos, sodio y cloro, en p La pirita y la marcasita son otros dos minerales con idé n -
: í;; Arreglo esquemático de iones de sodio con cantidades iguales El símbolo qu ímico de la sal , NaCl indica j tica composición, FeSi», pero con diferentes estructuras cris-
Ii carga eléctrica positiva, Na+, e iones de cloro que cada ion de sodio est á acompa ñada por un ion de cloro. talinas. En la pirita los iones de hierro son equidistantes en
con carga eléctrica negativa, Cl ~, para
El mineral pirita, también llamado “ oro de los tontos” , se rjc : todas direcciones y en la marcasita no lo son. La diferencia
formar el compuesto iónico NaCl o sal
f= .
común Los iones se mantienen juntos por sus compone también de 2 elementos, hierro y azufre; pero este ,! en espaciamiento los convierte en dos minerales diferentes, ( cont .) FIG. 4-2
cargas eléctricas opuestas. Se les considera mineral contiene dos iones de azufre por cada ion de hierro, fj aun cuando su composición sea la misma ( ver la fig. 4 3 ). - B . estructura cristalina del grafito.
en realidad como esferas ( Na+ con un radio Otros minerales pueden tener una estructura cristalina más Fotos de Navios.
de .98 A V Cl ~ con un radio de 1.8 A )* relación que se expresa por el símbolo químico de la pirita 8S
acomodados lo más estrechamente posible . FeS2. complicada: pueden contener más elementos, agrupados és-
En el esquema ¡a estructura se ha abieito tos en patrones más complejos. El color, forma y tama ñ o de
•
é
para mostrar el arreglo de los iones
en tres dimensiones .
Cada mineral tiene una composición constante de elemen
tos en proporciones definidas. Más adelante veremos que la
- cualquier mineral puede variar de un ejemplar a otro, pero »11
el arreglo atómico interno de los elementos que lo componen _
í
composición de un mineral puede variar ligeramente con una|
sustitución ocasional de otros elementos; pero no tienen !u J¡
§
- es id éntico en todos los ejemplares de un mineral particular .
Despu és de haber tomado en cuenta todos estos factores
pv . ¡¡¡I WBBMHBH ¡ ¡¡¡1 iÜ
i gar sustituciones suficientes para crear un mineral nuevo.
se precisa incluir en la definición de un mineral no sólo el
i) Estructura mineral
hecho de que es un elemento o compuesto inorgánico sólido
_ con una composició n qu ímica definida , sino que tiene una rr- :
disposición o arreglo at ómico interno único de sus elementos.
5 \
! fliudc2 en las aguas del océano; muchos se reunieron en po- inentos. Podemos identificar los minerales conforme a sus
siciones ijas constituyendo los sólidos.
FIG. 4-3
propiedades qu ímicas, pero con mayor frecuencia se recurre Atomos vistos a través de los rayos X .
La formación de un sólido puede demostrarse en el labo - g
ratono mediante la preparación de un liquido calentado al . .£>
- a sus propiedades f ísicas como la forma cristalina , dureza , ARRIBA : ¡a pirita muestra un arreglo ordenado ,
caracterí stico de su estructura Cristalina. El
peso específico, clivaje , color, raspadura y estriaciones.- mineral se compone de hierro y azufre, FeSá.
rojo blanco, compuesto de sodio y cloro. Mientras la tempe-
!í Los puntos grandes son átomos de hierro;
> >.
ratura del líquido se mantiene a nivel elevado, la actividad| §\ Forma cristalina los pequeños de azufre . Codo átomo de
•
de los iones es lo suficientemente grande para vencer la| ¡§y hierro está ligado a dos de azufre y el
,
Mf
todos los iones se unen en posiciones fijas. Ahora el sodio y I estuvo restringido. Sin embargo, aun en estos granos irregu-
el cloro se presentan como cloruro de sodio sólido llamado
'
ares los iones est á n dispuestos de acuerdo a su estructura
ó
Ü; ü
FIG. 4-2
mineral halita.
La composición del sólido resultante es la misma que la
|l cristalina t í pica . No obst te, en lugares donde las condicio-
del l íquido inicial, pero en el estado sólido los iones de sodio |j ®stos se pueden identificar rá pidamente, pues siempre resul-
|Í
}eH permitieron el libre desarrollo de los cristales de cuarzo, | f§:
Ü
^^ ^
\
Diferentes arreglos de los átomos de carbono.
.
A estructura cristalina del diamante . ,, ,, ,
ral cons i u5'c su es mc um cris dim ,
° arregl <> ordeMd >' de forma básira dcl
r*
„4
I
l; :
: •
mineral sí puede rayar a los granos minerales de color claro. MINERALES 47
, aunque estos granos son m ás duros que
Consecuentemente , lo son menos que el topacio.
eí acero o el vidrio
Los minerales difieren mucho en dureza ( ver el apéndice
C ) ; algunos son tan suaves que se les puede rayar con
la
u ña ; otros requieren el uso de una navaja de acero; pero el
diamante, que es el mineral más duro que se conoce, no pue-
de ser rayado por ninguna otra sustancia.
Peso específico
M
¡
uno lleno de plumas y el otro lleno de plomo, y la experien-
ÍÜÍ.
i íí mmm cia de sopesar piedras da a la mayor ía de la gente el sentido
jíí i
if del peso “ normal” de las rocas.
: | !
i! . -
FIG 4 4 La forma cristalina del diamante es una figura octaédrica Clivaje o crucero
3f: Cristales de cuarzo.. Independientemente ( ver la fig. 4-5 ) ; la forma cristalina del grafito es un cristal
de la forma o tamaño de los cristales, los El clivaje o crucero es la tendencia de un mineral a romperse
hexa édrico aplanado. Ambos minerales está n compuestos de conforme a direcciones preferentes, a lo largo de superficies .
FIG 4-5
t] ;f¡
ángulos entre las caras aut é nticas permanecen
carbono. La diferencia en la forma de sus cristales se debe
í constantes. Las estriaciones transversales planas, tersas. Los planos de clivaje son consecuencia del Cristal perfecto, grande. de diamante (sin
en las caras del prisma se ven con mayor al arreglo de los átomos de carbono — un patrón en el caso arreglo interno de los átomos y representan las direcciones cortar ), expresión externa del ordenado arreglo
I
:
claridad en los dos cristales grandes,
en cuyas caras se aprecian manchas de del diamante y otro en el del grafito. en que las ligaduras atómicas son relativamente débiles.
interior de los átomos de carbono. El
ejemplar pesa 84 quilates. De Kimberley ,
material extra ño , pero tales estuaciones La forma cristalina de la pirita es un cubo; la de la mar- El clivaje es una direcci ón de debilidad, y la muestra de Africa del Sur. Colección Mineralógica de
I se presentan también en las caras de los otros casita es tubular o aplanada. Una vez m ás la razón de la Harvard . Foto por Harry Groom
;í ó cristales . La reticula de cuadrados de cinco un mineral tiende a rómperse a lo largo de planos paralelos
cent í metros de ésta y de otras fotograf í as diferencia en la forma de los cristales se debe al arreglo a esta dirección ^
K que aparecen en el capí tulo sustituye
& interno de sus á tomos.
i: a la escala . El cristal grande y grueso procede
ÍI Ü ? de Dauphine, Francia; los otros del Brasil. Cada mineral tiene una forma cristalina caracterí stica pro- Color
it Colección Mineraló gica de Haioard . ducida por su estructura cristalina.
mm Foto por Walter R . Fleischer , Aunque el color no es una propiedad segura para la iden- '
%*
V
¡ Dureza tificación de la mayoría de los minerales, se le usa en ciertas
%
5 ,
»>
La dureza es otra propiedad f ísica gobernada también por / distinciones de carácter general. Por ejemplo, los minerales
liü !;
II: el arreglo atómico interno de los elementos de los minerales. ferruginosos, por lo com ún, son de “ color oscuro” . En el len-
S
l ía
í Una vez más el grafito y el diamante vienen a la mente por -^ guaje geológico, “ oscuro” incluye gris oscuro, verde obscuro
y negro, Los minerales que contienen aluminio como elemen -
que representan diferentes arreglos de los á tomos de carbo-
mI no y porque el grafito es uno de los minerales m ás suaves
to predominante son por lo general de “ color claro” , término
!H|i:
ifSi
:!!!
ill - mientras el diamante es el m ás duro. La diferencia se debe ^ que incluye el pú rpura , rojo profundo, amarillo y algunos
tonos de caf é.
al enlace atómico del carbono.
R
íJí
La dureza es la medida de la resistencia que la superficie ]
tersa de un mineral ofrece al ser rayada; podr ía incluso Ha- j
Raspadura
m á rsele “ rayabilidad” del mineral. Por ejemplo, si se torna;] La raspadura de un mineral es el eolor que éste presenta
un fragmento de granito y se trata de rayar uno de sus gra| :
cuando se le pulveriza finamente. La raspadura puede ser
$ nos de color claro con la hoja de una navaja de acero , sim -j muy diferente del color del ejemplar de mano. Por ejemplo
plemente no puede rayarse; pero si uno de esos mismos grad las muestras del mineral hematita pueden ser de color caf é,
:ít!i nos se raspa contra un pedazo de vidrio, se forma en éste] verde o negro, pero la raspadura siempre tiene un color
una raya . Es claro, por ello, que estos granos minerales del caf é rojizo característico. Una de las maneras más simples
granito en particular, son más duros que el acero o el vidrio-
i ¡ de determinar la raspadura de un mineral consiste en frotar
I
( En cambio , si se tiene un pedazo de topacio , se ver á que este! una muestra contra un pedazo de porcelana deslustrada 11a-
í
,
m
: • ••
V:
Sr.: .. M - ..
V
’. » ?/
r r - - . -V-' v"
'
í i' - ü Vi;
•rv
silicio contribuye con + 4. Así, el tetraedro es un ion com- MINERALES 4$
v?
neta de -4. Su símbolo es ( Si 04 ) 4
(
.r . f, 1•
h:
- una carga "
s- .- m
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1plejo con
¿
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!S. = S. - .V
'
v
¿ro de silicio-oxígeno. Algunos silicatos est án formados de i- -:* •
r:
.
'
|
í sí tivos En otros, los tetraedros
se unen en cadenas, placas o
U estructuras tri-dimensionales .
Los m ás comunes minerales silicatados son el olivino, la
!fVi
U
¡18111 augita, la hornblenda, la biotita, la muscovita, los feldespatos
el cuarzo. Cada uno de estos minerales que forman rocas
:
I
;: •
:
m
m mmmm es intercambiable con el magnesio, porque los iones de am-
í*i
Sí bos elementos son aproximadamente del mismo tama ño y
; tienen la misma carga eléctrica negativa. Estos minerales sili-
f ñ! catados se conocen con el nombre de ferromagnesianos, pala -
I
[Í1:!1.Í
bra formada por la unión del término en latín ferrurn, “ hierro
o fierro” , con la palabra magnesium. Los 4 ferromagnesianos
r mencionados son de color muy oscuro o negros y tienen un m
í :
p
m
:
peso especí fico más alto que los otros minerales silicatados
% : SIL . •
:
[?;
y que forman rocas.
1: V Olivino. Los tetraedros de silicio-oxígeno ligados con iones
m- :i
i! positivos de hierro o de magnesio, o con ambos, forman el
1
[M olivino; así su fórmula se escribe ( Mg. Fe ) 2 SiOi. Su peso
I específico varía de 3.27 a 3.37, aumentando con la cantidad
de hierro presente. Este mineral cuyo nombre deriva de su
color olivo característico, se presenta usualmente en granos
s o masas granulares, sin clivaje bien marcado.
2; FIG. 4-6 mada placa de raspaduras. El color del polvo que queda en Augita. La estructura cristalina de la augita se basa en
I Cristales c úbicos de pirita. Las estriaciones la placa ayuda a identificar al mineral. cadenas aisladas de tetraedros,1 como se indica en la fig. 4-8,
1 son claras en el ejemplar grande; las de las
caras adyacentes son perpendiculares enlazados por iones de hierro y magnesio. Su color va de ®«f
i¡8 entre sí . El ejemplar pequeño está constituido Estriaciones verde muy oscuro a negro, su raspadura es incolora ; su peso IÜ
ñ por el intercrecimiento de tres cubos. especí fico var ía de 3.2 a 3.4 y su clivaje o crucero se des -
yi Colección Mineralógica de Harvard . Algunos minerales comunes tienen l í neas paralelas, como fi-
u3 Foto por Walter H . Fleischer . arrolla a lo largo de dos planos casi perpendiculares entre
t í :!Í bras o bandas angostas, llamadas estriaciones, que atraviesan s í. Este á ngulo de crucero es importante para distinguir la
Ii?rjj sus superficies. Se pueden ver claramente, por ejemplo, en augita de la hornblenda . J
a los cristales de cuarzo y de pirita ( ver figs. 4-4 y 4-6 ) ; nue- Hornblenda. La estructura cristalina del mineral horn-
8!
vamente, esta propiedad es un reflejo del arreglo interno de
los á tomos de los cristales.
blenda est á basada en cadenas dobles de tetraedros, como
se ilustra en la fig. 4-9, enlazados por los iones de hierro y
i: : magnesio comunes a* todos los ferromagnesianos y por iones .
FIG 4 8 -
m MINERALES QUE FORMAN ROCAS de calcio, sodio y aluminio. El color de la hornblenda va ARRIBA : Cadena individual de tetraedros
vista desde arriba .
i
m
ijvij-l
!m!
tambi én de verde oscuro al negro, como el de la augita ; su ABAJO: La misma, vista desde una extremidad .
;il& Aunque se conocen más de 2,000 minerales sólo unos cuan- raspadura es incolora , su peso especí fico es de 3.2, y tiene Cada ion de silicio ( pequeña esfera negra )
tiene dos de los cuatro iones de oxí geno
1 tos de ellos son minerales que forman rocas, o sea , que q üe- W dos direcciones de clivaje formando ángulos de aproximada -
dan comprendidos en la mayor parte de las rocas de la cor- A mente 56° y 124°, que ayudan a distinguir la hornblenda de
de su tetraedro enlazados exclusivamente a él
I
1
m
teza terrestre. É la augita ( ver fig. 4-10 ) .
Biotita. Llamada así en honor del f ísico francés J. B. Biot ,
la biotita es una mica ( del latín micare, “ brillar” ). Como las
mismo, y comparte los otros dos con los
tetraedros vecinos atrás y adelante. Las
cadenas individuales resultantes están
enlazadas a su vez, a otras por iones metálicos
positivos. Como estas ligaduras son más
m Silicatos
m
m
demás micas, est á formada por tetraedros en placas, confor- d ébiles que las del silicio oxí geno que
forma cada cadena, el clivaje se desarrolla
-
«iij- Y;
Más del 90 por ciento de los minerales que forman rocas
son silicatos, compuestos de silicio y oxígeno y uno o más
metales. Cada uno de los silicatos minerales tiene como
me se muestra en la fig. 4-11. Cada ion de silicio comparte
3 iones de ox ígeno con sus adyacentes de silicio formando
'
ám,
ISÜ I sobresale del plano entre todos
licio-oxígeno ( ver fig. 4-7 ) , uno de los primeros compuestos | los dem ás. La unidad estructural básica de la mica consiste . Y;
FIG. 4 7 que se formó al enfriarse la tierra fundida. Consiste en una -;
V
i-
Tetraedro de silicio oxí geno ( SiO á )* ~.
La vista superior es desde arriba y la inferior,
- combinación de un “ pequeño” ion de silicio con un radio
en 2 ó 3 l áminas de tetraedros con sus superficies planas ha-
cia fuera, y las interiores unidas por iones positivos. En la - ' ' ;
:X
-
m
&
IIlili: de un lado Este es el ion complejo más . de .42 A , rodeado tan estrechamente como es posible geo- biotita los iones son de hierro y magnesio. Estas lá minas 0.
M
vim
m importante en Geologí a, puesto que integra mé tricamente por 4 iones “ grandes” de oxígeno con un radio -y:
: la unidad central constitutiva de casi el 90 de 1.32 A ( formando un tetraedro ) . Los iones de ox í geno . 1 El é
t rmino “ tíítraedros” se usará en el presente capí tulo para refe-
• T
I i
I
!K
f - A \\
mm§ Ig&N4 *
rfei . i?
i r :-
, '
_%ÉnL
*
^
'
#
iff
pueden deshojar f ácilmente ( ver fig. 4-12 ) , porque existe ] ;
un clivaje perfecto a lo largo de las superficies de esos débiH
les enlaces de potasio. La biotita en bloques gruesos es, pojl
lo com ú n , de color verde oscuro, y de caf é a negro. Su peso í
r-
fe * específico es de 2.8 a 3.2.
m
i NO- FERROMAGNESI A NOS. Los otros minerales silicatados quell
com ú nmente forman parte de las rocas son los llamados f
-
fe \ no- ferromagnesianos, simplemente porque no contienen fie ] ^
•V
%
.
biotita , pero en la moscovita cada par de lá minas de tetrae
dros está firmemente cementada por iones de aluminio. Sin ;
-
.«2I*.
V embargo, como en la biotita, las hojas dobles est á n débil- ¡
K
mente unidas por iones de potasio a lo largo de los cuales FIG. 4 11
-
• I
fe * se desarrolla f á cilmente el clivaje. El color de la moscovita .
Láminas de tetraedros Cada tetraedro está
rodeado por otros tres, ij cada ion de silicio
:• I ' 1
ív
en bloques gruesos es amarillo claro, caf é, verde o rojo. Su i tiene para sí uno de los cuatro iones de
^:
»
¡
í peso específico varía de 2.8 a 3.1. oxí geno, en tanto que comparte los
Is 0
"
i J
i&r
: ret ícula tridimensional. Sin embargo, de un 25 a un 50 por ] clasci y plagioclasa. Esta ú ltima, a su vez, se ha subdividido , Clivaje
, de la mica. El bloque grande
( o <libro > ) está limitado a los lados por las
i: i ciento de los iones de aluminio en los tetraedros con un radio en dos minerales : albita y anortita . Cada uno de ellos re- caras del cristal. Los fragmentos de clivaje
\fe: de .51Á v una carga eléctrica de + 3 han reemplazado alj presenta los “ miembros finales” de la secuencia . La ortoclasa que están al frente del bloque grande tienen
fe 1.
:P ¡i
FIG 4 9 . - silicio ( con su radio de . 42A y una carga eléctrica de + 4 ) es el feldespato pot ásico; la albita contiene sodio y la anor - diferentes espesores como lo indica su
ARRIBA : Cadena doble de tetraedros grado de transparencia .
!"
vista desde arriba. en los centros de los tetraedros. La carga el éctrica negativa tita , calcio. Los feldespatos se hallan enlistados en la tabla 4-2. Foto por Walter R , Fleischer .
*1
ABAJO : La misma, vista desde un extremo.
'
iii
La duplicidad de la cadena de augita
se efect ú a cuando los átomos de oxí geno
"
I ••
son compartidos por cadenas adyacentes .
11- i .:
: ::
FIG. 4-10
Clivaje de la homblenda ( izquierda )
comparado con el de la augita ( derecha ).
La parte superior del ejemplar de homblenda
y las caras superior y perpendicular del lado
izquierdo de la augita son superficies
¡fe .
de clivaje En ambos ejemplares la rotura
más fácil es paralela a estas superficies.
fe : - '
En la cara frontal del ejemplar de augita hay
•
’ ;
:i:
¿i - i
fe
r
£ ...
•
-.
'
•'•'A'
.i
P
SI .
Cuarzo El cuarzo, a veces llamado también sí lice, es el MINERALES 53
tí nico silicato mineral
que forma rocas , compuesto exclusiva -
¡
.
•
. :
•
>
est á compartido con los iones de silicio adyacentes, lo que
significa que hay dos iones de oxígeno para cada uno de
¡i silicio Esta relación est á representada por la f órmula Si02.
»!
i El peso específico del cuarzo es 2.65.
1 El cuarzo asnalmente se presenta de color humo a incolo-
ro pero muchas variedades m ás raras incluyen colores pú r-
.
,
m pura o violeta, amatista rojizo o rosado, cuarzo rosa , humo
m
iM
m i' i
con tonos de amarillo a caf é, como el cuarzo ahumado y el
m
m
m
í
m
¡m
MI
?:v<
cuarzo lechoso. Estas diferencias de color se deben a otros
elementos que aparecen como impurezas, los cuales no af ée-
! tan la estructura cristalina del cuarzo.
•
I
1
w
m Oxidos minerales
1
m tí
>:
m
H
& Los ó xidos minerales está n formados por la unión directa de
II V- un elemento con el ox ígeno. Son minerales relativamente
m simples, en comparación con los silicatos, de estructuras más
1
1 1 complicadas. Los óxidos minerales son, por lo com ú n , m ás du-
ros que cualquier otra clase de minerales, exceptuando los
mI
i :?
•
%
silicatos, y son m ás pesados que otros, excluidos los sulfuros
p¡]
!
,ü Dentro de la dase de los óxidos se encuentran las principales
. . menas de hierro, cromo, manganeso, esta ñ o y aluminio.
1
*
FIG 4 13 TABLA 4- 2 Feldespatos ( aluminio-silicatos )
Crucero o clivaje jeldespático en ejemplares
Algunos óxidos minerales comunes son el hielo ( H 20 ) , el
1m
iii
!
de ortoclasa. El bloque grande de la derecha
y el fragmento peque ñ o colocado sobre
la caja negra presenta planos de cl í vaje de
casi 90° ; esta es una caracterí stica
ION POSITI
VO DIAG
N ÓSTICO
-
-
NOMBRE S Í MBOLO
NOMBRE
DESCRIPTIVO FÓ RMULA *
corundo o corind ón ( AI 2O3 ) , la hematita ( FeaOa ) , la mag-
netita ( Fe.-iCh ) , y la casiterita ( Sn 02 ) .
1 Its :
"iri.-! -:
de los feldespatos .
Foto por Walter H. Fleischer.
K+ Ortoclasa Or Feldespato potá sico K ( AlSi308y
*
Sulfuros minerales
Na + Albita Ab Feldespato sódico / Plagio- Na ( AlSi308)
mI Ca Feldespato calcico ) clasas Ca ( Al2Si 208y
Eos sulfuros se forman por la unión directa de un elemento
!i .
: Anortita An con el azufre.
I ?= }-:
l ;
• ¡i:
En estas f ó rmulas, el sí mbolo dentro de los paréntesis indica los Los elementos que entran m ás f ácilmente en combinación
sl -
0
il$ íi
ííj
—
tetraedros. Los sí mbolos fuera de par é ntesis indican los iones caracte
r ísticos es decir , los iones que est áfi metidos entre los tetraedros. cinc y el mercurio. Algunos de estos sulfuros se presentan
como menas valiosas desde el punto de vista comercial , como
Organización de los minerales comunes
( continuación de la tabla 2.2 ).
1
m klasis, “ rotura” , porque los dos cruceros dominantes se inter| - ORGANICOS INORGANICOS
m sectan en á ngulo recto cuando se rompe un pedazo de orto- 1 í
11=
fll clasa ( ver fig. 4-13 ) . El aluminio sustituye al silicio en cada
si # OTROS
i cuarto tetraedro y los iones positivos de potasio corrigeng MINERALES
el desequilibrio eléctrico. La raspadura de la ortoclasa es \ ,
/
m%
$;
1.1 blanca; su color es blanco, gris o rosado y su peso específico ¿ /
;: K
es de 2.57. : ’
/ T T
N (
Los feldespatos plagioclasa rotura“ oblicua ” ) , se llaman ¡j ELEMENTOS ELEMENTOS ELEMENTOS ELEMENTOS ELEMENTOS ELEMENTOS
Ü
I as í porque tienen planos de clivaje intersectados a unos 86° . 4 4 4 4 4
;;
U110 de los planos de clivaje o crucero est á definido por es j
triaciones. Los dos feldespatos plagioclasa son la albita y la|
- OXIGENO AZUFRE ION C03 ION S04 ION Sí 04
I
I
M
Ambos feldespatos plagioclasa pueden ser incoloros, blan
cos o grises , aunque algunos ejemplares muestran un juego¡
de colores llamado opalescencia .
- Ferromagnesianos
Biotita
Hornbfenda
Augita
3 Olivino
V:
m i
¡i
'
Arreglo interno de los elementos componentes. Un volcá n consiste en el apilamiento sobre la superficie te -
d
Lí Propiedades de los minerales. f
rrestre del material ígneo arrojado desde el interior del glo-
Forman cristales. bo y que se acumula alrededor de uno o varios conductos o
:V La forma externa est á determinada por la estructura crista- respiraderos durante erupciones sucesivas pudiendo crecer en \
lina.
I:
tamaños hasta convertirse en una monta ña ( ver fig. 5-1 ) .
$
u
í
t:
ñ
*.*
•
— V
Dureza , peso específico, crucero o clivaje, color, raspadura, es-
triaciones.
Minerales que forman rocas
Silicatos.
.
Ferromagnesianos: olivino, augita , hornblenda , biotita .
I
|
I \
/
Normalmente tiene la forma de un cono con una depresión
en la cima , que puede ser un cr á ter o una caldera. El cráter
forma
expelidos
una depresión de paredes abruptas, por la cual son
los materiales volcá nicos; su fondo rara vez sobre-
No-ferromagnesianos: moscovita , feldespatos, cuarzo. pasa los 300 metros de diámetro y su profundidad puede
Oxidos, sulfuros, carbonatos y sulfatos. llegar a varios cientos de metros. El crá ter puede encontrarse
!
•
en la parte alta del volcán o sobre su flanco. La caldera, mu-
cho más grande que el crá ter, es una depresión en forma de
*
BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
) cuenca, más o menos circular, con un diámetro mucho mayor
Mineralogy ( 17 ed . ) . que el de el o los respiraderos volcánicos que comprende. En
Hurlbut , Cornelius, Jr., Danas Manual of ’
Nueva York John
: Wiley & Sons , Inc ., 1961. efecto , la mayor ía de las calderas tienen m ás de 1.5 kilóme -
Mason, Brian , Principles of Geochemistr 2* y ( ed. ) . Nueva York : tros de diámetro; algunas alcanzan varios kilómetros y regis-
John Wiley & Sons, Inc., 1960. tran cientos de metros de profundidad.
Pough, Frederick H ., A Field Guide to Rocks and Minerals. Bos- Entre dos erupciones sucesivas puede llegar a taparse el
ton : Houghton Mifflin Company, 1953. conducto volcá nico con la roca consolidada procedente del
55
L > -
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FIG 5 3 . -
. -
FIG 5 1 pón de roca ( ver fig. 5-2 ) . Un volcá n se forma y permanece; corresponden parcialmente a las rocas circundantes. No' obs- Lava endurecida. Foto del U S . Geol Survey. .
Volcán Pavlof , en la pení nsula de Alaska . activo a causa de los materiales procedentes de un gran de- tante, se pueden hacer unas cuantas generalizaciones toma -
Fotograf í a oficial de la Marina
pósito profundo de roca fundida. Mientras esta roca fundida das de la experiencia en el volcá n Kilauea , del Hawaii.
de los Estados Unidos . magma cuando se vierte Cerca del 70% del volumen de gases colectado directamen-
permanece en el interior, se llama ;
sobre la superficie, se le denomina lava . te de un lago de lava fundida fue vapor. Le siguieron en
El volcán más grande del mundo es el Mauna Loa, en la abundancia el bióxido de carbono, el nitrógeno y los gases
isla de Hawaii. Mide 640 kilómetros alrededor de la base y sulfurados, con pequeñas cantidades de monóxido de carbo-
su cima se levanta casi 9.5 kil ómetros por encima del fondo no, hidrógeno y cloro. Aun cuando los otros gases, excluyendo
del océano que lo rodea . Este y el resto de la isla represen - vapor , representan solamente un pequeñ o volumen respecto
tan acumulaciones de las erupoiones habidas durante m ás de del total , sus cantidades absolutas pueden ser grandes. Por
un millón de a ñ os. ejemplo, en 1919, durante el enfriamiento del material erup- FIG 5 4 . -
tado en 1912 del volcá n Katmai, en Alaska, la cantidad total Restos tj materiales piroclásticos que formaron
acumulaciones de 1.20 metros de espesor
Erupciones volcá nicas de HC1 se calculó en 1.250,000 toneladas y la cantidad to- a una distancia de ly100 metros de Kilauea
tal de HE fue aproximadamente de 200,000 toneladas. lkit un conducto activo del volcán Kilauea,
En su receptáculo bajo la superficie terrestre, el magma est á Cuando se calienta cualquier roca ígnea , ésta produce cier- durante una erupción en 1959 . Foto
compuesto por una solución de los minerales que forman las ta cantidad de gases. Nuevamente el vapor de agua predo-
obtenida por el Observatorio
Volcánico Hawaiiano.
rocas. Algunos de los componentes del magma y de las rocas ,
gi¡ii¡ \> V
® peraturas y presiones que prevalecen cuando el magma se . Los cálculos del contenido medio de agua del j¡
|
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mi aproxima a la superficie. Estos componentes volá tiles desenl-
intemperizada l¡
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magma varían de 1 a 8%, coincidiendo la mayoría de las opi- \ • • : \ •
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pe ñan un papel extremadamente importante en ia actividad ,y i-
il íones con una cifra de alrededor del 2 por ciento. La fusión Ü
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Productos piroclá sticos ; ! i
. - a separarse de los otros componentes y escapa , a través de | Los 1
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FIG 5 2
ellos, hacia la parte alta de la masa en movimiento. El agua /
fragmentos arrojados por las explosiones eruptivas y de- ¡ ¿ m
Chorros de gas de las grietas en el magma
consolidado que obstruye un conducto convertida en vapor, se acumula si el conducto volcánico ;! clásticos (
positados despu és sobre el terreno se llaman productos piro
Pirocl ástico significa “ fragmentado por el fuego” ) .
- mm y -
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J :
volcánico. Volcán Kilauea, Hawaii . est á obstruido. La presión crece, y cuando no puede ser con-¡ El
Foto de la 11? sección de U . S. Aimy Corps . tenida mas, el vapor empuja y explota. Si la temperatura material piroclástico más fino es el polvo constituido por
es de 980° C. o más alta , el vapor, al escapar, eleva a varios ] fragmentos min úsculos del orden de un 1/ 4,000 de cent í metro BÉa
de diá . Cuando el polvo volcá nico es arrojado a la at-
miles de veces su fuerza expansiva, haciendo pedazos la roca ] mósferametro ñ ¡3
que obstruye el conducto y los arroja al aire junto con eL superior , puede permanecer allí durante meses, via
jando grandes distancias. Los fragmentos que a continuació n
- mam ’ ni
6
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teniente fluido para escurrir ( ver fig. 5-3 ) El magma, virtual/ m
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mente libre de agua y altamente viscoso para entonces, se ; Ceniza: Escorias finas. r:
m
mueve hacia la superficie cada vez con mayor lentitud y fi- Bloques: fragmentos del cono o masas angulares rotas y des- r lite»
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nalmente se detiene, obstruyendo nuevamente el conducto / prendidas de la roca que obstruye el conducto.
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I
58 ACTIVIDAD IGNEA Bombas: masas redondeadas de magma , que se consolidan
durante su trayectoria en el aire.
Escorias: pequeñ os fragmentos solidificados de magma, es-
cor áceos, o pedazos del cono o tapó n de 5 a 25 mil ímetros S
de longitud. i
Pómez o pumita: pedazos de magma, hasta de algunos cen ¡U -
tímetros de longitud, que atraparon burbujas de vapor de ¡f
agua u otros gases cuando fueron arrojados . Cuando se ¡
solidifican conservan una estructura de panal con orificios á
correspondientes a las burbujas de gas que les imparten jj¡
ligereza y les permiten flotar en el agua ( ver la fig. 5- 5 ) Ü
• : VS
|
NUBES ARDIENTES . Durante la erupción del Katmai en 1912 ¡ ¡
fue eyectada una gran avalancha de ceniza incandescente 4
mezclada con vapor y otros gases. Siendo m ás pesada que el| ¡¡
aire, esta mezcla excesivamente caliente rodó monta ñ a abajo . ¡
Las masas de este material se llaman nubes ardientes ( cita -
i; das algunas veces con su equivalente en francés, nuée ar-
dente ), El volumen del material expelido fue tan grande que vgf
cubrió el valle de 130 Km 2 con una capa de 30 metros de ¡ |
i®
espesor. Durante los siguientes 10 a ñ os continuaron despren
diéndose vapor y gases de ese material a través de un gran M
a
m iyl
n ú mero de conductos llamados fumarolas, d á ndosele al á rea ¡ |
SI el nombre de Valle de las diez mil Fumarolas.
En 1902 el monte Pelée de la Martinica, en las Indias Oc- i
!
¡: i
*
i sió n al reventar el vapor por un lado del volcá n. Una nube
m ardiente, con una temperatura de alrededor de 815° C. barrió
la falda de la monta ña y envolvió la ciudad de St. Pierre §!
" m aniquilando a sus 25,000 habitantes y a muchos refugiados
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p! ,
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* m de otras partes de la isla, que se hab ían reunido all í durante
los d ías precedentes, cuando la erupción estaba anunciá n-
dose con explosiones menores y temblores de tierra. Los
¡1 cá lculos de los muertos ascendieron a 40,000 mil personas.
i .V.
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EFECTOS DE ALCANCE MUNDIAL . En 1783 el Asamaen Japón l
y el Laki , en Islandia produjeron erupciones volcá nicas ex- w •/
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> ón del Tambora arrojó al espacio tanto
te ele java . La erupci
y: ACTIVIDAD IGNEA 61
tres d ías hubo una oscuridad absoluta
polvo que durante kilómetros . Con este polvo en la atmósfera
i
en un radio de 480
arrojado por el Mayon , la cantidad de, calor solar
y con el .
que llegaba a la superficie de la Tierra
ser el “ a ñ o sin verane”
mente. 1815 vino a largos
^
re< UJ0 notahle -
«
todo el mundo por
tas de sol causadas por el polvo en la estratosfera
^
La notable facultad del polvo volcá nico de viajar alrede-
dor del mundo se observó otra vez en 1912. En junio de ese
afío un obseivador del Instituto Smithsoniano se encontraba
en Argelia efectuando mediciones de la cantidad de calor
\0Í
* que la Tierra recibe del Sol. Durante sus observaciones del
19 de junio advirtió bandas de polvo dispuestas a lo largo
ík del horizonte; estas se unieron con otras y en unos cuantos
días el cielo se veía aborregado aun cuando no había nu-
II bes. Finalmente el cielo se oscureció tanto, que hubo que
la suspender las observaciones. El 29 de junio el cielo estaba
cubierto de polvo, el cual perduró durante meses. Al prin-
cipio se supuso que el fenómeno era local, pero los informes
m I obtenidos en otras muchas regiones eventualmente, indica-
ron que aquella manifestación tenía proyección mundial pro-
vocada por una erupció n del Monte Katmai en la Pen ínsula
Si de Alaska . Esta erupción originó una disminución del 20 por
m
m &
V: :.:£
ciento en la cantidad de radiación solar recibida directamen-
S i ' i .
te por la superficie de la Tierra durante el verano de 1912.
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H - . -.vSSi's.h i-
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Los rayos del Sol, reflejados por el polvo de la atmósfera
É —- superior, causaron una brillante anormalidad en el cielo. Si el
polvo del Katmai hubiese perrrianecido en la atmósfera por
i mucho tiempo, podr í a haber llegado a reducir considerable-
mente la cantidad de calor recibido por la Tierra de manera
i
SÉ
que la temperatura media del muiido hubiese bajado casi
7 o C.
Si
Historia de algunos volcanes
II
¡
Se considera que un volcá n está activo siempre y cuando
exista alg ú n registro de que haya hecho erupción en tiem -
pos históricos. Si no lo hubiera, pero sí presentara el volcán
una falta notable de evidencias de erosión que indiquen una
FIG. 5-8
Erupción del Vesubio en 1906 . La ladera
cubierta de nieve señala el volcán moderno.
A la izquierda y en primer plano se ven,
aserrados, los restos del Monte Somma.
Foto por A. y C . Caggiano.
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62 ACTIVIDAD IGNEA erupción dentro de tiempos geol ógicos relativamente recien* J
tes, se le considera latente o “ dormido” , y por tanto, capa ¡
de ceniza y los derrames de ólava han llenado el crá ter , está com -
lleta la etapa para la erupci n culminante del ciclo. La columna
ACTIVIDAD IGNEA 63
¡II
motos violentos sacudi ó el á rea y hacia el atardecer del 24 ff del mundo acaeció en 1883 en Krakatoa, en el estrecho de la
il de agosto del a ño 79 el Vesubio comenzó a entrar en erup | *
Sonda, entre Java y Sumatra. Krakatoa fue en tiempos una
il ción. La catástrofe de ese d ía de agosto permaneció callada 1 sola isla constituida por completo por una monta ña volcá-
nica emergida del fondo del mar. Después , en un pasado
il e impenetrable durante casi 17 siglos. Cuando se descubrie* J
— remoto , se parti ó durante una erupción. Hacia 1883, después
I
II !
'
—
ron los restos de Herculano y Pompeya ciudades que quej
daron sepultadas por el volcá n , surgió una historia qu
asombró a la Humanidad . Los centinelas romanos habían
sido sepultados en sus puestos; grupos familiares que se en jf
|
| |§
-
de un largo período de reconstrucción, se habían levantado
tres conos surgiendo por encima del nivel del mar. Estos co-
nos , llamados Rakata, Danan y Perboewatan, y varios cayos
ÍPÍ! contraban en las bóvedas subterrá neas, consideradas como | sin nombres, completaron el contorno de Krakatoa.
En la tarde del domingo 26 de agosto de 1883 comenzó
refugio seguro, quedaron impresos en moldes de lodo vol| -
|
una serie de explosiones. Al d ía siguiente, a las 10.20 de la
1 vez hace unos 10,000 a ñ os como volcá n submarino en la¡j que anteriormente hab
Bah í a de N á poles, emergiendo entonces como una isla , qiie | d ó cubierta por 270 metros de agua . El estampido de la
rellenó finalmente gran parte de los alrededores de la bah ía, erupci ó n fue o í do en la isla Rodrí guez, a 4 ,800 kilómetros
#1 . a trav é s del Oc é ano Indico y una onda de presión en el aire i
esta erupci ó n fue sepultada Pompeya por materiales piro - distribuido alrededor del globo y tard ó más de 2 a ñ os en
el ásticos; la gente muri ó de asfixia debido a los gases de h { caer . Durante ese tiempo las puestas de sol tuvieron en todo Üllii
i í Kp el mundo un colorido anormal . Un cí rculo de color caf é ro-
ceniza y a la sofocación por el polvo. Herculano fue anegada
Ü
\mx por corrientes de lodo formadas por la mezcla de ceniza y jizo, conocido con el nombre de Anillo del Obispo, que se
•
i ve ía alrededor del Sol bajo condiciones favorables, dio evi - Wmm
agua.
ib¡ Las erupciones de productos piroclásticos ocurrieron a í n !
dencia no só lo de la continua presencia del polvo en el- aire \ 1
|1Í1E
—
*
duró 494 a ñ os, y fue interrumpido por una erupción en 1631 ® diezmil '
m
. é sima de pulgada. Desde 1883 el Krakatoa deja sentir,
que arrojó la primera lava en tiempos hist ó ricos
entonces el Vesubio ha hecho erupci ó n 14 veces. Cada ert B
A partir de Ji
a veces, que se halla activo todavía ( ver la fig. 5-9 ) . BB SSÜ
^
'
¡Ü
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81
ción es la ú ltima de una serie de eventos que se repiten p
un ciclo. Bullard 1 lo describe as í :
| ISLAS QUE DESAPARECEN. Los volcanes submarinos como el
Krakatoa, que se elevan por encima del nivel del mar, des- mu 1mmm
. ir . “ los
ciclos eruptivos” var í an en duración, pero los dos últimosJ
trozan su cima y m ás tarde se reconstruyen, producen las
llamadas islas que desaparecen del Pacífico. Por ejemplo,
ms
BS
ia®
mm
j -! Svll i J duraron 34 y 38 años respectivamente. El ciclo comienza con un | cierto d ía de 1913 la Isla Falcón ( 20.4° S., 175.6* O. ) , del ÜI
te per í odo de reposo que dura un promedio de 7 a ñ os , en los qu£|
solamente brotan gases del crá ter . La renovación de la activida|
Pacífico del Sur desapareció repentinamente despu és de una
| erupci ón explosiva. El martes 4 de octubre de 1927 reapare-
Wm
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1 . . .
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64 ACTIVIDAD IGNEA brotó repentinamente el volcá n Paricut í n. Nueve a ñ os más TABLA 5*1 Volcanes de la isla de Hawaii. ACTIVIDAD IGNEA 65
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F 77 X
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- =^
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i. \ que araba Dionisio Pulido. Hacia las 4 de la tarde empeza- Tomado de H . T. Stearns y G. A . Macdonald , ‘‘Geology and Ground -
/ \ ron a oirse explosiones con intervalos de pocos segundos, Water Resources of the Island of Hawaii ” , Bulletin 9 , Hawaii Division
of Hydrography ( 1946 ) , p. 24.
%
elevá ndose densas nubes de ceniza , mientras empezaba a
s .
FIG 5 10 *
1
i:
Si :
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-
•
habiendo sido formados en el fondo del mar,
emergieron y constituyen las islas del Hawaii . despu és de comenzada la erupción, fluyó la primera lava a B!
través de una fisura del terreno, unos 300 metros al norte i
del centro del cono. A fines de la séptima semana este derra-
me había avanzado 1.5 kiló metros. A las quince semanas de
po comprendido entre 1832 y 1945. Durante el mismo inter-
valo el Kilauea estuvo activo en un 66 por ciento de ese
tiempo. Con anterioridad , remont á ndose hasta el a ño 140
D. C., las leyendas nativas hablan de 40 a 50 erupciones del
!
¡ =!.
-
Kilauea.
W
&
i
la primera explosión la lava había empezado a escurrir de los fj
Las observaciones realizadas en el Observatorio Volcá nico FIG. 5-12
i;- flancos del cono mismo.
Despu és de nueve a ñ os de actividad , el Paricut í n suspen -
del Hawaii indican que tanto el Mauna Loa como el Kilauea Perfil de uno de los conos compuestos más
perfectos del mundo: el Mayon de ¡a Isla
se hinchan durante el per íodo en que el magma sube, inme-
r dió repentinamente sus erupciones y vino a ser otro de los fj diatamente antes de una erupción . Las monta ñas se elevan
Luzon, del grupo de las Filipinas,
f: Foto de la Colección de Gardner,
muchos peque ñ os “ conos muertos” de los alrededores. La realmente muy por encima del nivel del mar y muestran una Universidad de Harvard .
f: historia de esos otros conos, parásitos del Tancítaro o de los tendencia a inclinarse. Despu és de la erupción aquéllas se
:
í:
• h
. grandes volcanes de los alrededores , sin duda, son semejan -
:R
i FIG 5-11 reducen nuevamente.
ii La erupción a través del flanco del cráter tes a la historia del Paricut í n . Cuando el Kilauea está activo el magma se eleva en el
íi
del Kilauea Iki , el 19 de noviembre de 1959, Otros volcanes nuevos que se han desarrollado en tiempos
?
ii!- ft v
1538, exactamente al poniente del Vesubio. i
i en la fosa, formando lo que se llama un lago de lava. Este -
FlG. 5 13
lago de lava puede permanecer por a ñ os y desaparecer com- El Monte Etna visto desde el mar , cerca de
vi r
i
H HAWAII. Las islas del Hawaii son picos de volcanes que Catania, Sicilia. Las pendientes suaves de la
fi¡ pletamente despu és durante per í odos igualmente largos. El izquierda corresponden a un volcán escudo.
i sobresalen del océano v est á n dispuestas a lo largo de una nivel del lago disminuye cuando la lava escurre por los flan-
1! i
l í nea que corre 2.400 kilómetros hacia el noroeste. Las Mar- Cuando el Etna cambi ó posteriormente su
cos del volcán, tanto sobre como debajo del nivel del mar. modo de eruptar , la eyección explosiva de
i: m quesas, las islas de Sociedad , Tuamotu, Tubuai, Samoan y 5 mdierial fragmentario formó un cono
! De tiempo en tiempo se drena el sistema y el piso de la cal- piroclástico de 300 metros ere la cima
otros gruoos volcá nicos del Pacífico del Sur forman l í neas del amplio escudo de derrames de lava.
m dera sufre colapso. Entonces el magma se eleva otra vez, la
.
burdamente paralelas a las islas hawaiianas. Esos materiales piroclásticos forman las
.m
x lava fluye dentro de la caldera, y se repite el proceso.
V fí En el extremo noroccidental de la cadena hawaiiana están Algunos observadores ' han tratado de demostrar que esta
pendientes irregulares y más abruptas
las islas de baio relieve Midway y Océanicas. En el extremo Jf cercanas al conducto que tiene fttmarolas,
actividad ocurre durante ciclos regulares, pero los resulta - Foto por Vittorio Sella.
U
suroriental est á la del Hawaii, que es la m ás grande del gru -
R po. Esta , con 150 kil ó metros de largo y 121 de ancho, es la
r isla de mar profundo m ás grande del mundo. La actividad | |
m
ígnea que produjo este grupo de islas comenzó, aparentemen-
;
WM
I;
iÍ
—
te, en el extremo noroccidental de la cadena donde la acti - fl
—
vidad ha cesado actualmente y se propagó por el sureste| | \' :
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hacia los focos de actividad m ás reciente, incluyendo el propio|/
i ;! Hawaii. r
1í
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La isla de Hawaii est á constituida por cinco |
volcanes
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ém% Kohala, Hualalai, Mauna Kea , Mauna Loa y Kilauea ( ver |
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la fig. 5-10 ) . Cada volcá n se ha desarrollado independiente- ¡ |
L
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\ mente y tiene su propia historia . La lava del Mauna Kea ha
mHl sepultado la falda sur del Kohala y la lava del Mauna Loa
iy
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ha cubierto partes del Mauna Kea , Hualalai v Kilauea. Las
E
F§
n!.S dimensiones de los volcanes aparecen indicadas en la tabla f
lili 5-1 y representan las porciones de aqu éllos que est á n actual-1¡
mente por encima del nivel del mar, sin tomar en cuenta i
: .
*
las faldas sepultadas.
El Kohala lleva extinto muchos a ñ os, pero el Mauna Kea |
ñ
muestra evidencias de haber estado activo en el pasado geo-
m
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lógico reciente, aunque fuera de los tiempos históricos. Elf
Hl
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1 Hualalai hizo erupción por ú ltima vez en 1801 y el Mauna ¡
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Gí> ACTIVIDAD IGNEA dos no han sido convincentes. Al parecer los volcanes del ¡ ¡ (derrumbe ) o por una combinación de ambos fenómenos. A ACTIVIDAD IGNEA Ú7
Vil:
I: :• ducto. Es esto lo que se llama un volcá n compuesto y se que es un ejemplo casi perfecto de la forma de una caldera
caracteriza por pendientes de unos 30° en la parte alta , dis I - t ípica . Esta caldera es circular, con un di á metro de poco
minuyendo a 5° cerca de la base. El Mayon, en la isla Luzon, 1 in ás de 8 kilómetros y una profundidad m á xima de 1 500
, me-
:
del grupo de las Filipinas, es un claro ejemplo de cono com f tros, y est á rodeada por un acantilado que alcanza de 750 a
puesto ( ver la fig. 5-12 ) .
- 1 , 200 metros . El mismo Lago-Cr á ter tiene unos 600 metros
:
:
de profundidad. La caldera se formó cuando la cima de un
;ó
& Un solo volcán puede desarrollarse corno volcá n escudo 1
1:
;
durante parte de su historia y como cono compuesto más cono volcá nico sim étrico, llamado Monte Mazama, se des-
y: tarde. Ei Monte Etna es un ejemplo de esta condición ( ver hizo durante una erupción . Los geólogos han estudiado lo.s
la fig. 5-13 ) . depósitos de las laderas , tratando de reconstruir su historia.
li Finalmente, algunos pequeños conos constituidos princi - Primero se form ó lentamente un cono de unos 3,600 metros
ü i£
¡B
—
palmente por material piroclástico ceniza en particular ,
se llaman conos cineríticos. Estos alcanzan pendientes de — de altura ; a continuaci ón se formaron glaciares que al des-
cender de la cresta estriaron las faldas del cono. Finalmente
ocurrió una erupció n explosiva form á ndose la caldera hace
/ •
Continua la erupción, Parte del cono es 30 ° a 40 ° y rara vez sobrepasan los 500 metros de altura. El
i posiblemente unos 10,000 a ñ os. La actividad volcá nica pos-
¿i j!í
'
:
destruida y hay flujos de lava, que contribuyen
a drenar el receptáculo de magma .
Paricutin, en M éxico, es un ejemplo de cono ciner í tico, for
mado en los tiempos modernos.
- terior form ó un peque ñ o cono dentro de la caldera que so-
íM
: -
bresale de la superficie del Lago-Cráter, constituyendo la
Distribució n de volcanes activos isla Wizard ( ver la fig. 5-14 ) .
No todos los observadores est á n de acuerdo respecto al ori-
s
!
Encontramos evidencia de erupciones volcá nicas en rocas
de todas las edades . Al parecer, la actividad ígnea ha venido
desarroll á ndose a través del tiempo geol ógico. Aparentemen-
gen de la caldera del Lago-Crá ter. La duda está en si todo
o casi todo el material faltante del cono fue en realidad arro-
te ningú n medio geográfico en especial ha favorecido par- jado durante una erupción, o si la caldera fue creada cuando
!:S se desplom ó la cima . La respuesta a este problema debería
I ticularmente tal actividad , la cual ha ocurrido en el fondo
del océano, en las cordilleras m ás altas y en las planicies. ser aportada por un aná lisis del material no consolidado que
i1 se encuentra en los alrededores : ¿Consiste este material en
HUbÍ - Existen 454 volcanes activos 2 situados en determinadas
fajas alrededor del mundo actual. 283 de ellos bordean el restos piroclásticos formados durante una erupci ó n , o con-
La mayor parte del cono se desploma hacia siste en los residuos fragmentados de la cima del Mazama ? ‘
el interior; la actividad posterior forma Océano Pacífico a lo largo de una faja llamada “ cinturón de
i :;: :
' *
conos ciner í ticos dentro de la caldera . fuego” . En la cuenca principal del Pací fico existen otros vol- El problema está en que la parte alta inclu ía originalmente
:0 =
/ piroclásticos y lavas consolidadas de erupciones anteriores y
'
! .
FIG 5-14 canes dispuestos a lo largo de l í neas que corren hacia eljf '
noroeste. Una segunda faja , la faja Alpino- Himalaya tiene 98|• resulta dif í cil distinguir entre ambos. Un investigadora ha
m
i :
Secuencia de sucesos conforme a una teoría llegado a la conclusi ó n que de los 70 Km 3 del Mazama que
Y Í
&i
'
acerca de la formación de una caldera. Según volcanes y se extiende del sureste de Europa a través del / desaparecieron sólo 8 est á n representados en los materiales
H . Williams, “ Calderas and Their Origin . Mediterrá neo y el sur de Asia, al archipiélago de las Indias ¡
liÁ: ::¡ que yacen ahora en las faldas inmediatas, y que el resto se
Orientales. .
sumió dentro del volcá n cuando el techo de la cá mara sub-
i;
i La actividad volcá nica moderna en el Atl á ntico est á limi- yacente se desplom ó. Esta cá mara pudo haber sido vaciada
li! •
tada , en su mayor parte, a las islas de la Cordillera Meso- 1 parcialmente por la eyección de grandes vol ú menes de mate-
Atlá ntica. Estas incluyen las islas Azores, las Canarias, las ria ] durante una erupción. Williams encuentra pruebas de
de Cabo Verde, la Ascensión , Santa Elena y Trist á n da 1 que la ceniza se esparció sobre un radio de casi 50 kilóme-
Cunha. Tambié n hay actividad volcánica en las islas de las tros, y parte del magma puede haber buscado camino bajo
m Antillas Menores.
m la superficie hacia las á reas adyacentes. Sin embargo, esta
En el Océano Indico existen volcanes activos en Mada- explicación de la caldera del Lago-Crá ter ha sido objetada
mVii :/ i gascar, Reuni ón , Mauritius, Rodríguez y Kerguelen . en razón de que se basa en una distinción dudosa entre piro-
i
m clásticos “ antiguos” y “ nuevos” entre los restos que cubren
g Formación de calderas
i el á rea .
Las calderas pueden formarse por explosión, por colapso| .
FIG 5-15
m
II - Bullard, op. cit . p. 367.
3
.
H. Williams “ Calderas and Their Origin ” , Bulletin , U . de Calif . Mapa de la Meseta de Columbia, que muestra ‘ .
" «¡.«’•i
y Dept, of Geological Sciences, XXV ( 1941) . las áreas formadas por erupciones de fisura .
II
Hi !
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sir .
1
Ü
¡::-:;y í i :
¡jy ari° para rundir las rocas Jocamente sea producido por
i¡
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i:
de tales erupciones gigantescas en el pasado geológico. Lasp ‘ nccion.
formas terrestres producidas por estas repetidas erupciones:? !
de fisura son las llamadas mesetas de basalto. La baja visco-
! ^
Los cálculos realizados indican que la temperatura aumen-
ta bajo la superficie en túneles, pozos y minas. El valor de
este incremento, llamado gradiente geotérmico, parece ser
lí; i sidad que debe tener la lava para fluir libremente sobre á reas
tan grandes, parece ser caracter ística solamente de las lavas de alrededor de 30 °C. por kilómetro. Si el gradiente geotér-
mico crece en esta proporció n constante, las temperaturas
de composición basá ltica ( ver “ Rocas ígneas de color oscuro”
¡i
en el capí tulo 6 ) . registradas a ciertas profundidades rebasarían el grado de
Han estado sucediéndose extensos derrames de lava por f¡ fusion de todas las rocas conocidas. Puesto que sabemos que
¡ i¡ unos cincuenta millones de a ñ os en el Atl á ntico Norte. Estos \ la corteza terrestre a esas profundidades es, en efecto, sólida
¡!®ii formaron la gran meseta Brito-Artica y cubren más de 800,000 ( excepto en á reas limitadas de actividad ígnea ) , tenemos
\
wa
m& Km . Se cree que alcanzan , cuando menos , 3,000 metros de
2 que suponer que el gradiente no crece en esa proporción
espesor. constante . Por tanto, debemos buscar otra fuente de calor
que, a ñ adida a las altas temperaturas presentes, provoque
CAUSAS DE LA ACTIVIDAD IGNEA la actividad ígnea.
!K: i:i í -
"
¡|
•
| La actividad í gnea requiere del magma; sin embargo, es evi- Una teoría que ofrece una explicación para la fusión local
dente que no hay grandes zonas de roca fundida dentro de de las rocas entra ña ciertos elementos que tienen una pro-
i!
Sil m
lái:¡
i
mw
i
í . 70 ACTIVIDAD IGNEA piedad singular llamada radiactividad ( ver el capí tulo 10).
Estos son isótopos naturales ( ver el cap í tulo 2 ) del potasio i
mi actinio, torio y uranio, relativamente abundantes en la cor- J
teza terrestre, aun cuando son inestables desde el moment| j¡
<|
que se forman .
Los n ú cleos de estos isó topos emiten espontá neamente par- jjj
‘
-¡
'
II
II
S •:; i :•
.
U 235 -f neutr ó n
impide el escape rápido del calor, los isótopos radiactivos
pueden generar calor suficiente para refundir las rocas cir-
cundantes convirtié ndolas en magma . El aumento de volumen
producto de la fusión podría fracturar las rocas superyacen S -
'
I*
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I:- :
m
!
tes y proporcionar conductos a través de los cuales el magma ®
subiría hacia la superficie.
Resumiendo, podemos decir que una buena parte de la| mm I
its
i
m alta temperatura necesaria para fundir la roca proviene de! j
gradiente geoté rmico; el resto posiblemente procede de las í¡ II
8f
11
radiactividades. ( Para observar una representación diagra -
m á tica de la energía liberada por la desintegración del U 230,
Rocas ígneas
«81Iü véase la fig. 2-12, repetida en esta pá gina ) .
m
II:
Sil
RESUMEN FORMADAS por la solidificación de materia fundida, las ro-
cas ígneas incluyeron la primera corteza de la Tierra ; ésta
MASAS DE ROCAS Í GNEAS
la superficie, para escurrir o salir violentamente por conduc- ROCAS DE COLOR OSCURO
Productos piroclásticos.
li Bloques, bombas, pómez, ceniza, escorias y polvo.
S í
tos o fisuras y solidificarse como roca ; también puede per- ROCAS INTERMEDIAS
il|i
fh
Nubes ardientes.
Efectos mundiales . I '
manecer dentro de la corteza , donde se enfr ía lentamente y
se solidifica. PEGMATITA
Producidos por el polvo en la atmósfera superior .
Im %r Jv
> Productos de ía fisi ó n:
2 n úcleos con n ú meros Historia de algunos volcanes. m MASAS DE ROCAS IGNEAS
lilii E y:
:
at ó micos entre 30 y
65 + .
varios neutrones Vesubio, Krakatoa, Paricut ín y Hawaii . i Durante nuestro estudio acerca de la actividad ígnea nos
li Clasificación de los volcanes. referimos principalmente a la extrusión de lava y productos
I- Í h
í:
Volcanes escudo, volcanes compuestos y conos ciner í tioos. pirocl ásticos y a algunas de las formas terrestres resultantes:
fÍL ¡ Distribución de los volcanes. mesetas de basalto y volcanes, que no son sino masas super- \
Hi ;- Los activos : 454,
"Cinturón de fuego” alrededor del Pac ífico.
ficiales de rocas ígneas.
i:
r Cuando el magma pierde su movilidad dentro de la corteza
Mesetas de basalto. \
y cesa su actividad, se solidifica “ in situ ” , formando masas de
Formas terrestres producto de erupciones de fisura. ;
:n;;
1!
Causas de la actividad í gnea. ^
Magma formado dentro de los 60 Km . exteriores de la superfMjf
I. roca ígnea de diversas formas y tama ños. Tales formaciones
se pueden ver hoy d ía en la superficie de los continentes
§É cuyas rocas han sido desgastadas por la erosión en ciertas
cié de la Tierra.
mü á reas.
Teorí as acerca del origen del calor .
Fricción durante la formación de montañ as.
La primera parte interna de un volcá n expuesta por la ero-
Radiactividad . sion es el tapón que se forma cuando el magma se solidifica
rlTIr! '
iB»ffi
|
*
Whitecombe and Tombs , Ltd., 1944. A medida que el levantamiento y la erosión ( ver capí tulo
Daly, R. A ., Architecture of the Earth. Nueva York : Appleton- 1 15 ) descubren la construcció n interna de un volcá n extinto,
@1 Century-Crofts, Inc., 1938. se pueden apreciar otras masas de roca í gnea. En estas ma-
m
ill
sas quedan incluidos ramales solidificados del magma del
111
8É
I
71
I
Uono
ROCAS IGNEAS
Derrame
Volc á n
.
— ?
., s
adventicio
o "cono
sat élite" . -
i,
tructuras circundantes.
Manto
Manto
Dique ^3
tas Palizadas, a lo largo de la margen occidental del r ío
%
.
I ^ EIJIi
Dique -p-L - - Dique - LUX
Hudson, cerca de Nueva York, son los restos de un manto
Ü 7
I CXZITZIIZl X
que tuvo poco m ás de 100 metros de espesor. En este caso
el magma fue intrusionado originalmente en sedimentos ho-
.
FIG 6 1 Batol ito i- izon tales. Actualmente
tienen una ligera inclinación hacia el
Pintones t / formas terrestres asociadas poniente.
con la actividad í gnea. » / \i . Diques. El plutó n tabular discordante se llama dique ( ver
recept á culo, introducidos en otras rocas de la corteza, sin fig. 6 3 ) . Los diques se originan cuando el magma se abre
-
que necesariamente tengan conexión con la erupción de un camino a través de las rocas adyacentes.
volcá n . La anchura de los diques individuales varía de unos cuan-
tos cent ímetros a muchos metros. El dique Medford cerca
Platones de Boston , Massachusetts, tiene 150 metros de ancho en al-
gunos lugares, aunque es un caso extremo y raro. La longi- m
Todas las masas de roca í gnea que se formaron cuando el tud del dique a través del terreno depende , en parte, del
magma se solidificó dentro de la corteza terrestre se llaman trayecto que haya sido expuesto por la erosión. En Islandia
pintones. Cuando las rocas tienen una disposición definida ’
m]
Las Palizadas del río Hudson son acantilados
verticales de un manto intrusionado durante
el período triásico hace unos 200 millones
.
de años La roca es una diabasa,
— esto es, que se ha introducido por fuerza en las rocas pre-
—
existentes , resulta siempre más joven que las rocas que lo
echado o buzamiento de ciertas hojas de cono en Escocia
sugiere que la c úspide está aproximadamente a unos 5 kiló-
metros debajo de la superficie de la Tierra. Dique de basalto que atraviesa un cuerpo de
-
FIG. 6 3
\
Mi. que constituye una variedad del gabro . rodean . Hay criterios bastante seguros para distinguir entre granito en Cohasset , Massachusetts.
Las columnas verticales se deben a las juntas los dos tipos mencionados: el derrame de lava, por lo com ú n, PLUTONES MACIZOS. Cualquier plutón que no tenga forma .
Foto por John A Shimer.
que se desarrollaron en ángulos rectos tiene en la cara superior una forma ondulada , salpicada con tabular se clasifica como plut ó n macizo.
con relación a los lí mites supenor e inferior las marcas que dejan las burbujas de gas al reventar y que \
de la í gnea, a medida que se enfriaba . Lacolitos. Un plutón macizo concordante, formado cuando
Foto por Ewing Galloway . muestra evidencias de erosi ón , mientras el manto tiene una el
f / sagina empujó hacia arriba las rocas superyacentes crean-
.
' •'v'j
¡§\ / una especie de domo, se llama lacolito ( del griego lakkos,
cisterna y lithos, “ piedra” ) . Si la relación de la extensión
lateral al espesor del plutón es menor de 10, el plutón se cla -
sifica arbitrariamente como lacolito; si esta relación es supe-
rior a 10, se le clasifica como manto. Es claro que, al resultar
extremadamente dif ícil establecer los lí mites de un plutón, en
muchos casos se prefiere usar el término “ plutón concordan-
te , complementado por cualesquiera detalles dimensionales
que se puedan observar.
Un desarrollo clasico de lacolitos se encuentra eii las mon-
ta ñas Henry, La Sal y Abajo del sureste de Utah, donde se
pueden observar sus características. La meseta de Colorado
es un lugar famoso, abundante en detalles geológicos .
Batolitos. El plutón discordante, cuyo tama ño aumenta con
orme se extiende hacia abajo y cuya base o fondo no se pue--
determinar, se llama batolito ( del griego bathos, “ profun
co y lithos, ‘piedra” ) . En este caso el término “ grande”-
jv'.:IT;' .
iff
74 ROCAS IGNEAS significa generalmente un afloramiento de mas de 100 Km 2. i los grandes vol ú menes de roca
sucedió conreemplazados que parecen ROCAS IGNEAS 75
El pintón , que tiene una superficie de afloramiento menor, J haber sido por los batolitos? Nos encontramos
pero que muestra las otras características de un batolito, se aqu í ante el problema del origen de los batolitos — continua ,
llama tronco . por tanto, el misterio de la actividad ígnea . Algunos observa -
ill: Los batolitos son , en realidad , los receptá culos de magma jl dores han llevado su estudio hacia la consideración de hasta
solidificado, que alguna vez, cuando estuvieron en estado de | qué grado los batolitos fueron formados por magmas verda -
M: fusión , alimentaron a los volcanes activos . Hoy d ía estas gran- f deros , sugiriendo que aquéllos pudieron haber sido formados
des masas de roca ígnea sólida yacen expuestas a miles de- mediante un proceso llamado granitización, en el cual las
metros sobre el nivel del mar, donde fueron elevadas por las | soluciones de los magmas se mueven dentro de las rocas só-
fuerzas que operan en la corteza terrestre . Las capas de roca lidas, intercambiando iones con ellas y convirtiéndolas en
de varios kilómetros de altura que cubrí an los batolitos cuan- J rocas ele las caracter í sticas del granito, sin que en realidad
do éstos eran todaví a depósitos de magma , han sido desgas- hayan sido nunca magma . Insistiremos sobre este intrincado
tadas por la erosión a través de millones de años. Podemos| problema en el cap í tulo 18.
observar estos restos de las ra í ces de volcanes extinguidos en 7 . Los batolitos contienen un gran volumen de roca . El
las White Mountains, de New Hampshire y en la Sierra Ne- batolito de la cadena costera de Alaska y Columbia Brit á-
vada de California . nica , por ejemplo tiene toscamente calculados unos 1,750 por
Aun cuando los batolitos nos descubren algunos datos va- 140 a 190 kilómetros; el batolito de la Sierra Nevada de Ca -
liosos , también traen una multitud de problemas insolubles , t lifornia , tiene 650 por 64 a 110 kilómetros ( ver fig. 6-4 ) ; y
Todos estos problemas se relacionan directamente con n úes- | un batolito expuesto parcialmente en el sur de California y en
tro entendimiento de los procesos í gneos y los complejos gf Baja California ( M éxico ) , alcanza probablemente unos 1 ,600
eventos que acompañan al plegamiento, ruptura y elevación | por 130 kil ómetros.
eventual de los sedimentos para la formación de las monta-
jVl
ñas. ( Estudiaremos estos procesos en el cap í tulo 17 . ) FORMACION DE LAS ROCAS IGNEAS
& .
!. Podemos resumir lo que sabemos acerca de los batolitos
en la forma siguiente : Las rocas í gneas que se encuentran actualmente en la su-
¡•iV-ij: perficie se formaron a partir de magma procedente de depo-
1 . Se localizan en las cadenas de montañas . Aunque en
I algunas cordilleras no se hallan batolitos , nunca se encuen- sitos profundos . Según indicamos en el capitulo 5 , la roca
FIG. <M
as trun batolitos que no estén asociados con cordilleras . En fundida dentio de la coiteza terrestie se llama magma ; cuan - El intemperismo ha dejado al descubierto
cualquier cadena montañosa , el número y tamaño de los ba - do el magma se derrama sobre la superficie se llama lava y esta porción del batolito de la Sierra Nevada
cuando los fragmentos solidificados de magma son arrojados en el Parque Nacional de Yosemite, California .
iff tolitos está en relación directa de la intensidad del plegamien -
violentamente, constituyen los materiales piroclásticos. .
Foto por W . C Bradley .
Sil to y corrugamiento que haya tenido lugar . Esto no significa ,
sin embargo, que los batolitos hayan causado el plegamiento Eventualmente los restos pirocl ásticos llegan a endurecerse
i
¡
:
y el corrugamiento. En realidad existen evidencias en contra- convirtiéndose en roca por medio de la percolación del agua
lit
ó
i rio, como veremos en algunos de los siguientes puntos. del subsuelo. En cierto sentido, las rocas formadas as í se po-
2. Por lo comú n los batolitos se extienden paralelamente drí an clasificar como sedimentarias; pero por constar de frag -
I mentos de magma solidificado se las incluirá en la clasifica -
a los ejes de las cordilleras.
3. Los batolitos se han formado solamente despué s del pie- 1 ción de rocas í gneas . La ceniza volcá nica endurecida hasta
m\ gamiento de las montañ as , si bien aquél pudo continuar tras convertirse en roca se llama toba . Una roca endurecida que
I .
contiene bloques angulares de lava solidificada relativamente
f ü-í iJ la formación de los batolitos.
II
m 4 . El techo o parte superior de los batolitos tiene una for- grandes incluidos en una masa de ceniza, recibe el nombre
IB ma dómica irregular. Esta forma caracter ística está relacio- de brecha volcánica . Si los fragmentos grandes incluidos están
1
por me - ¡| redondeados, la roca se llama conglomerado volcánico .
¡ i nada con el escalonamiento, uno de los mecanismos
dio de los cuales los magmas que se solidifican para formar El magma que fluye corno lava en la superficie, se enfría \
B: íLí
batolitos se mueven hacia arriba dentro de la corteza, al me- j y solidifica , formando las rocas í gneas. Las ra í ces del magma
nos en las etapas finales . A medida que el magma se mueve M /ilie se abren camino en las rocas vecinas bajo la superficie
hacia arriba se rompen y desprenden bloques de roca de las N sé enfrí an y solidifican más lentamente . A ún el depósito de
Sil
1 estructuras en las cuales se está metiendo el magma . En los y magma ¿e enfria y solidifica eventualmente, pero tarda mu -
niveles inferiores , cuando el magma está todavía muy callen- Jé cho tiempo, por tratarse de una masa más grande. Todas las
Ü te, los bloques desprendidos pueden ser fundidos y asimila- rocas í gneas fueron formadas a partir de la solidificación del
Íl-í
1 dos por el depósito de magma . A mayor altura dentro de la ma .
If& \ corteza, cuando el magma se estabiliza y su color ha dismi-
m ! '
: nuido hasta casi desaparecer, los bloques quedan como con- Cristalización
VB! !
gelados” dentro de la intrusión , constituyendo los xenolitos,
:
Las rocas ígneas son agregados de silicatos minerales ( o . Ultimos en Cuarzo v:X , - v ~ V. „
cristalizar -
X X. f f t ^^ '
::
minerales silicatados ) formados al enfriarse el magma. Su : Ü
••
“
:• •• :
m
:
lo son en sílice y aluminio. Cuando los magmas ricos en fe| 4 .
( feldespato potásico) Slfft
.
(y rromagnesianos se enfrían, las rocas í gneas resultantes est á n
/
~
::
i ;:-:
• aproximadamente se funde el granito. :
Radios iónicos y cargas eléctricas de los iones indica cuá l es el orden de cristalización de los silicatos. To-
positivos de los feldespatos * nas de tetraedros. Por tener cada nuevo ferromagnesiano una dos los minerales de un magma podrían llegar eventualmente
II estructura cristalina diferente del que le precede, Bowen le al cuarzo si estuviesen en condiciones de pasar a través de la
III
m • S3•rJi’ :
S ü:
\
dio el nombre de serie de reacciones discontinuas. serie completa de reacciones; pero esto rara vez sucede; de
tí Entre los feldespatos, el primero en formarse es la anortita.
ü
¡lecho probablemente nunca ocurre. La serie
i CARGA
ELÉCTRICA
RADIO
( ANGSTROMS) Este mineral cristaliza aproximadamente a la misma tempe
ratura que el olivino. Como reacciona con el líquido rema-
- de reacciones,
por lo com ú n, se interrumpe antes de desarrollar toda la se
- \
Calcio Ca 2 + + 2 0.99 cuencia y esta interrupción explica por qué existen rocas í g-
J Na+ + 0.97 nente del magma, la anortita asimila gradualmente cantida-gj
"
Sodio 1
Potasio KH +1 1.33 neas de diferente composición mineralógica.
ÜL des cada vez mayores de sodio; finalmente, cuando todo ebk
ft Algunas veces tienen lugar las interrupciones en la crista -
l ° Segú n Brian Mason, Principles of Geochemis- calcio característico de la anortita ha sido reemplazado por j / lización cuando escapan los productos volá tiles; éstos, al es-
try, 2* ed. ( Nueva York : John Wiley & Sons, Inc.,
sodio, el mineral resultante es la albita. A causa de esta sus-|g
1 = !:•! ;v •
1960), pp. 287-88.
titución continua de iones de calcio por iones de sodio en fe
tar en solución, dan fluidez al magma, permiten a los mine-
rales moverse casi en completa libertad y tomar parte en las
misma estructura del silicato, Bowen consideró la cristaliza-
nmi ción de los feldespatos plagioclasa como una serie de reac - reacciones qu ímicas. Cuando los productos volátiles escapan,
la reacción se reduce y se suspende eventualmente.
ÍÍ ciones continuas.
111 Este cambio gradual y progresivo no se verifica , sin em
El asentamiento de los minerales formados en primer tér-
mino es otro motivo de interrupción. Esto ocurre en algunos
bargo, entre la formación de la albita y la de la ortoclasa ; no magmas de baja viscosidad , removiendo o eliminando de he-
iite hay un reemplazo, ion por ion, de sodio por potasio, porque
ij!!V.: ;
cho, minerales del líquido remanente, que podr ían haber
Hi el radio del ion del potasio es mucho más grande que el del reaccionado con ellos. Este proceso se llama separació n frac -
: >.:••• •
i
ill .
ion de sodio ( ver tabla 6-1 ) cionada .
- Orden de cristalización. Aun cuando un magma contiene Velocidad de
1 -
Para reflejar este cuadro que varía, se define el magma como cual -.1
cristalización. La velocidad a la que un mag
,
M quier fusión de silicatos que existe naturalmente, bien conteniendo o j fraccionada y la reacción tienen lugar. Cuando el magma se 1 12 días
! j1 10 3 a ños
¡I
i
XXX ( 1922), pp. 177-198.
Petrogenesis” , CU ,
M
^
asicnten o reaccionen con ^ *el¡T ^ . Esto su-
liquido remanente
100
1 ,000
10,000
300 a ños
30,000 años
3.000,000 a ños
-fe
:
/
78 ROCAS IGNEAS cede cuando un magma parcialmente cristalizado es arrojado® ROCAS IGNEAS ROCAS IGNEAS 79
a la superficie o inyectado en forma de diques o mantos del- ¡
Clasificaci ó n de campo o en ejemplares de mano
gados; pero cuando un gran cuerpo de magma se enfr í a len| - (Si á lico ). .
( Simático)
PREDOMINAN LOS MINERALES ZONA DE PREDOMINAN LOS MINERALES
tamente y a profundidad dentro de la corteza, tienen lugar 3 DE COLOR CLARO TRANSICION DE
un alto grado de separación fraccionada o de reacciones® § o8
qu í micas. %
O en
La velocidad de cristalizació n var ía con la profundida d!
.
• i /-
Por ejemplo, un magma formado principalmente de ferro- § .i Jr
magnesianos a 1,100°C., cuya parte superior est é expuesta
al aire y con espesores de uno a 10,000 metros , se solidifica-¡¡ <vTJ
ría como se indica en la tabla anterior,*
^ Í
'
í ?: ; rt
í
TEXTURA DE LAS ROC Í AS ÍGNEAS
o
o .
FIG 6 8 *
—
y que fluya con rapidez , se pueden formar granos gruesos|
grandes, aun cuando el enfriamiento sea relativamente rá pi- ¡
* Textura porf irítica '
te
i
m
do, pues en un magma de este tipo los iones se pueden mover|
f á cil y r á pidamente , para constituir las combinaciones gene-
Un magma puede enfriarse a velocidades variables lenta
mente al principio • •
y con mayor rapidez después. Puede co-
*
r
^
a (lUI a los cristales que por haber cristalizado antes
inmediatos, aparecen primero. La textura resultante
m derivad (> de una pa
° -
m viera en su depósito esf é rico. Y puesto que el enfriamien !
to , 8 » ega, que significa purpura , fue
, aplicado originalmente
iíiiii
,te que ,conten an fenocristales en una pasta de color
!f
* 1?
• i r á pido impide, por lo com ú n, la formaci ó n de granos graft \. 0
m
ip des, las rocas ígneas que resultan tienen texturas de grano. / . En
>° oscuro °
i fino. Los minerales individuales est á n presentes, pero son tan ; mente a la
/
casos raros el magma puede ser expelido lepentina -
de un superficie una vez formados granos minera es
peque ñ os que no se les puede identificar sin la ayuda grandes . En este caso el enfriamiento final es tan rápido que
i microscopio.
Textura vitrea
los
pasta
fenocristales
vitrea.
pueden llegar a quedar incluidos en una
IMh
Si el magma es eyectado repentinamente por un volcán| J TIPOS DE ROCAS ÍGNEAS
jij i -/ - ; por una fisura a la superficie del terreno, se puede enfriar ;
¡ Para la clasificación de las rocas ígneas
m
m&
tan rá pidamente que no dé tiempo a la formación de
rales . El producto resultante es un vidrio , el cual , si
minf
aplica ;;*
sistemas. Todos ellos son artificiales en unsedetalle
conocen vanos
o en otro
U -iVO Ü:
no # ¡ y todos se basan
i íl ü i -
mos rígidamente 'nuestra definición ( ver el glosario ) ,
'
en ciertas características que no se pueden
WM
ü i teV - en realidad una roca , pero generalmente se le trata com ° determinar en el campo o en ejemplares de mano. Para n úes-
tras propósitos haremos hincapi
tal . El vidrio es un tipo especial de sólido en el que los ion#? posición. Tal
é en la textura y en la com-
ii no est á n dispuestos de manera ordenada , sino que aparecefl| clasificación es completamente adecuada para. un
.
FIG 6 7 estudio introductorio de la Geología Física y aun para
Ii Fotograf í a amplificada de una sección delgada R . A . Daly, Igneous Rocks and the Depths of the Earth ( Nu|j ases avanzadas de la Geología. muchas
de una roca í gnea porfirítica. York: McGraw - Hill Book Company , 1933), p. 03. i
i I%
i I
Esta clasificació n se presenta en forma tabular en la Hg.| | j gj equivalente vitreo del granito se llama obsidiana ( ver
ROCAS IGNEAS 81
6-8, junto con una gráfica que muestra
. gr á
la
fica
proporci
da una
ó n de
idea m
-
sili
á
g
1
, ,
6-10 ) . Aunque esta roca figura en el lado claro” del
ó de las rocas por lo com ú n
“
es de color
c¿adro de embargo, los fragmentos de obsidiana suficiente-
catos en cada tipo de roca í gnea La s composici n ,
clara que la tabla acerca de la progresión continua desde los i sin
f;
5-; i :
" •• I -
tipos de rocas en las que predominan los minerales de co/or
claro hasta los tipos de rocas en las
nerales de color oscuro. Los nombres
que
de
nados arbitrariamente tomando como base la composiciónj
predominan
las rocas
los
son asig
|
--
| ^
| ente delgados para ser translúcidos, se ven, contra la luz,
\ c0 jor blanco ahumado.
| Rocas ígneas de color oscuro
mineralógica media y la textura. Algunas veces los tipos iipp ve-
termed ios se indican con nombres tales como gnmodiorita, Las rocas oscuras, más pesadas, son designadas algunas ado
el nombre colectivo de sima . El nombre fue acu ñ
cuya composició n se halla entre la del granito y la diorita. Enll ces con s í labas si del silicio y mu de magnesio, y se le usa
rocas í gneas ( pie las se ñ aladas j con las
realidad hay muchas m á s
FIG. 6-9
en la fig. 6-8.
mi generalmente al hablar de la capa de roca pesada y oscura
Granito. Foto por Navias . qlie envuelve a la Tierra
. El sima yace bajo la costra de los
continentes, y se cree que forma la capa exterior debajo de
Rocas ígneas de color claro profundas , tales como la del Pací fico
FIG. 6- 10 las cuencas oce á nicas
Obsidiana, el equivalente vitreo del granito . Las rocas ígneas del lado “ claro” de la carta de clasificación Medio . Se calcula que el 98 por ciento del volumen total de
Foto por Navias . son de color claro y tienen un peso especí fico menor que el roca formada por magma que ha escurrido sobre la superficie
de la Tierra está , formado por basalto y andesitas.
FIG . 6-12
de las rocas del lado opuesto. Algunas veces se las menciona Basalto. Foto por Navias.
\
como rocas siálicas. El término sial fue acu ñado con los s í m- : Un sin ónimo muy usado del basalto es el nombre roca
"J
bolos qu ímicos del silicio y del aluminio y se le usa com ú n - | trapearí a, derivado de una palabra sueca que significa “ es-
&
mente al hablar de la composición de las rocas de las areas| | calón". Este nombre se refiere a la tendencia de ciertos ba-
r. t ípicamente continentales de la Tierra. Su composición está ni saltos de intemperizar o romperse en columnas que se ven
dominada por los granitos y granodioritas y por las rocas jf como escaleras ( ver fig. 6-11 ) .
K I gas® afines. El basalto es una roca de grano fino ( ver fig. 6-12 ) ; su
Vi
f?
m
(
m
í :
cuentran casi siempre en á reas alrededor del Océano Pací -
fico, donde ha tenido lugar una activa formación de monta-
ñ as ( ver capí tulo 17 ) . La roca de grano grueso equivalente \
i
“ a la andesita es la diorita.
—
Tipos intermedios textura
Procediendo de la parte superior a la parte inferior del cuadro
de la fig. 6-8, observamos que las texturas de las rocas gra-
d ú an continuamente del grano grueso al grano fino, mientras
mmwm .
.
que la composición permanece igual Por ejemplo, si leemos
á pia abajo a lo largo de la primera columna, encontramos
que el granito, la riolita y la obsidiana son progresivamente
m e grano cada vez m ás fino, aun cuando las tres tienen esen -
cialmente la misma composición . Esto mismo es aplicable al TABLA 6-2
gabro y al basalto. í ticas y pórfidos de roca
Rocas vorfir
Adem ás de estas texturas, algunas de las rocas pueden tener
i!! .;; ; : - :
' '
tura porf íntica. En esencia, ello significa que una roca MENOS DE 25% DE M ÁS DE 25% DE
- ada tiene granos de dos tama ñ os claramente diferentes :
j FENOCRISTALES FENOCRISTALES
iií i ocristales glandes, empotrados en una pasta de grano mas Granito porfir í tico Pórfido de granito
mjí *no. Cuando los fenocristales constituyen menos del 2o por Riolita porfir ítica Pórfido de riolita
ciento del total, el adjetivo porfir Diorita porfir ítica Pórfido de diorita
í tico se usa para modificar Andesita porfir ítico Pórfido de andesita
Ijfs'S&l - i
8J4 ROCAS IGNEAS el nombre de la roca , como en el caso del granito porfiríticol ñ o muy grande. Algunos de los cristales m ás
ristales de tamaconocen
ROCAS IGNEAS 83
o andesita porfirí tica. han sido encontrados en pegmatitas.
grandes que se
Cuando los fenocristales constituyen más del 25 por ciento 1 "En‘ |as monta ñ as Black Hills, de Dakota del Sur, se encon-
la roca se Harria pó rfido ( ver fig. 6-13 ) . La composición
del * cristales de espodumeno ( un mineral de litio ) , que
un pórfido y la textura de su pasta se indican usando cl non : i metros de largo; en Albany, Maine, se descubrieron
bre de las rocas y as í se dice pórfido de granito o pórfido*
! C* tales de berilo ( silicatado de berilio y aluminio ) , de 5.5
- gran í tico y pórfido de andesita o pórfido andesí tico. En Ja § á p3 metros. En la pegmatita de Carelia occidental, en la
tabla 6-2 se resumen estas relaciones para las rocas más§
comunes. Unión de Rep ú blicas Socialistas Sovié ticas, han sido minadas
2randes masas
de feldespato potásico con peso superior a
Pegmatita 2000 toneladas que muestran las características de un solo
,
cristal.
Las soluciones que se desarrollan al final en el enfriamiento1 Casi el 90 por ciento de la pegmatita existente es pegma -
de un magma se llaman soluciones hidrotermales . Estas cris 1* tita simple de cuarzo, ortoclasa y porcentajes escasos de mi-
talizan en rocas ígneas de grano excepcionalmente grueso, cas. M ás com ú nmente se le llama granito - pegmatita, porque
llamadas pegmatitas, que dan cuerpo a los principales mine * la composición es la del granito y la textura la de la pegma-
rales formados a partir de las soluciones hidrotermales: fel- tita . El 10 por ciento restante incluye pegmatitas ferromag -
despato potásico y cuarzo. Tan íntimo es el intercrecimiento 1 nesianas, extremadamente raras, y pegmatitas complejas. Los
de los granos de estos minerales, que forman esencialmente principales componentes de las pegmatitas complejas son los
una sola unidad . El cuarzo es más oscuro que el feldespato! mismos minerales siá licos que encontramos en las pegmatitas
y todo el conjunto sugiere las figuras angulares de la escri- i simples, pero que contienen , además, una variedad de mine-
tura de la antigua Asiria , de Babilonia y de Persia. En con-! rales raros. Estos incluyen lepidolita ( una mica que contiene
secuencia, se le conoce como estructura grá fica ( del griego f litio ) ; turmalina ( un silicato complejo de boro y aluminio ) ,
graphein, “ escribir” ) . La asociación í ntima del feldespato y m ás conocido como una gema semipreciosa; topacio, ( un si-
el cuarzo conduce tambié n a la roca de la cual son ellos parte| licato de aluminio y fl ú or ) , también una gema; tantalita ( un
y que se llama pegmatita, palabra derivada del griego pegma, óxido de tantalio, hierro y manganeso ) ; uraninita, llamada
“ mantener juntos” . algunas veces petchblenda ( un óxido complejo de uranio con
La pegmatita se encuentra en diques, en las m á rgenes de pequeñas cantidades de plomo y los elementos raros; radio,
los batolitos y troncos. Los diques var ían en longitud desde torio, y trio, y argón, as í como nitrógeno y helio ) .
unos cuantos cent í metros a cientos de metros, y contienen! Las pegmatitas simples son comunes en algunas regiones;
las complejas, en otras. Por ejemplo en el suroeste de Nueva
Zelandia las pegmatitas son uniformemente simples, pero a
través de las regiones apalachianas de Norteamé rica las peg-
'
lipa matitas complejas son m á s abundantes.
1 RESUMEN
Ü
Rocas í gneas.
Magma solidificado.
Masas de rocas í gneas. í
Formadas en la superficie.
Mesetas de basalto.
Volcanes .
Formada dentro dq la corteza . \
Plutones.
Plutones .
Concordantes.
Tabulares-mantos.
Macizos-lacolitos.
Discordante.
Tabular-diques.
Macizos-batolitos, troncos.
Formació n de rocas í gneas.
Cristalizació n de minerales.
Composici ó n de 'rocas í gneas .
Entrelace de silicatos minerales.
Depende del orden y velocidad de cristalización.
b V- v - - i
'
/
Orden de cristalización.
Serie de reacciones de Bowen.
Interrumpida por separación fraccionada y pérdida de elemen-
tos volátiles.
I Velocidad de cristalización .
I .
FIG 6-14 Influye sobre la clase de minerales desarrollados y en el tamañ o
Granito grá fico. Foto por Walter R. Fleischer . de sus granos.
L ., >
84 ROCAS IGNEAS Textura de las rocas í gneas.
*
¡ü:
'
¡— P ijjiio
Grano grueso, grano fino, vitrea, porfirítica.
Tipos de rocas í gneas .
Basados en la textura y composición.
«IB^I
Ü!V= í: V
De color claro ( siálicas ) : granito, riolita, obsidiana.
De color oscuro ( sim á ticas ) : basalto, gabro, peridotita.
Composición intermedia: andesita, diorita.
Textura intermedia: pó rfido de roca, roca porfir í tica.
lií Pegmatita.
m •
•
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í.-.y.V:
SriUS
'
BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
Daly, R. A., Igneous Rocks and the Depths of the Earth. Nueva
-
York : McGraw Hill Book Company, 1933.
mB
Mason, Brian, Principles of Geochemistry ( 2* ed. ) . Nueva York: I !
Ml
-B
mt.
•
¡»
!
I I LA INSCRIPCION borrosa de una piedra sepulcral, los ci- TIPOS DE INTEMPERISMO
f r2!
II
/ v
:$gf mientos de un antiguo edificio que se desmoronan, las rocas
mm situadas a lo largo de las cunetas de un camino, todo ello nos
dice que las rocas est á n sujetas a una destrucción constante.
INTEMPERISMO MECANICO
i '
: .. g. Los cambios bruscos de temperatura , la humedad que em-
INTEMPERISMO QUIMICO
papa el suelo, la incesante actividad de los seres vivos, todo INTEMPERISMO QUIMICO DE LAS
11 tiende a destruir las rocas. Este proceso de destrucción es
Mi
í ! lo que se llama intemperismo y se le define como los cambios ROCAS IGNEAS
Wm
l; i que tienen lugar en los minerales y rocas en o cerca de la
; - superficie de la Tierra por efectos de la atmósfera, del agua,
VELOCIDAD DE INTEMPERISMO
1
W&i
:
•
{ -
de las plantas y de la vida animal. Más adelante ampliaremos SUELOS
If IB :
•
! , ligeramente esta definición, pero de momento esto basta para
nuestros propósitos.
CLASIFICACION DEL SUELO
II
«1
SI?
L
El intemperismo deja sus huellas dondequiera alrededor
de nosotros. El proceso es tan com ú n, que tenemos la ten-
ALGUNOS TIPOS DE SUELO
m
11
dencia a pasar por alto 1a. forma en que se realiza y la sig-
nificación de sus resultados. Desempeña un papel vital en el
ciclo de las rocas, pues mediante el ataque del material su-
— —
¡ía :
perficial de la corteza terrestre tanto la roca sólida como
los depósitos sin consolidar , produce las materias primas
IB
mi para la formación de nuevas rocas ( ver el capítulo 1 y la \
lili fig. 1-9, repetida en la pág. sig. ). Los productos del intempe-
, :1.!
91 \ rismo son, por lo com ú n, acarreados por el agua y por la
fíl!U •
•
influencia de la gravedad y menos corrientemente por el vien-
. • \ i-
H to y el hielo de glaciar. A continuación caen, para acumularse
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en fragmentos más y más pequeños, como resultado dejj
energía desarrollada por las fuerzas f ísicas. Por ejemplo, cua¿ -^ -
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0 .
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do el agua se congela en una roca fracturada , la presión de
bida a la expansión del agua congelada puede desarrolH
- , 7 V
,
V
lif
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suficiente energía para astillar fragmentos de la roca. O bieií
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una pendiente pedregosa, se puede despedazar en fragmen-
tos más pequeñ os.
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L .
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El intemperismo diferencial de rocas puesta en la superficie y carece de la protección de un manto lente a la que produciría un bloque de granito de 2.1 tone-
La enérgica acción de las heladas en lo dito
sedimentarias de estratificación horizontal , de suelo, los incendios del bosque o de la maleza pueden \ ladas ( sobre una base de un cent í metro cuadrado de pre- de la cordillera Medicine Boto,
de Wyoming , ha formado este campo de
Ui- fLví ii con juntas verticales , ha contribuido a
producir las torres del Castillo de los
Gigantes, en la porción Sur-central de
-
generar calor suficiente para romperla. El calentamiento rá ¡ sió n ) . Esta temperatura no es excesivamente baja y se obtiene
pido y violento de la zona exterior de la roca provoca su [ varias veces al año, aun en las latitudes medias.
.
peñascos angulares El congelamiento y el
deshielo alternativos del agua alojada
lüf .
Wisconsin Tanto la estratificación como los expansión , y si ésta es bastante grande, se desprenden hojue- |
en las cavidades ha desalojado de la roca
lia
mm planos de junta constituyen zonas donde el
intemperismo puede actuar con mayor
Sin embargo, bajo condiciones reales, probablemente estas
las o fragmentos m ás grandes de la roca . Los rayos inician j presiones tan elevadas nunca se producen por la acción del
sólida estos grandes fragmentos
Foto por E . N . Cameron.
.
.
rapidez Foto de la Colección Gardner, tales incendios con frecuencia y, en casos relativamente raros, hielo, al menos, cerca de la superficie. Para desarrollar una
mM Universidad de Harvard .
pueden llegar a hacer pedazos las rocas de la superficie por
ikK
Hi '
]
presión interna de 2,100 Kg / cm 2, la grieta de la roca tendría
medio de un golpe directo. que estar completamente llena de agua y totalmente sellada ,
Subsiste a ú n la duda en cuanto a si las variaciones de tem- y la roca encajonante tendría que ser lo suficientemente fuci -
. peratura del d ía a la noche, o del invierno al verano, pueden
\ mu causar el intemperismo mecánico. En teor ía causan desinte -
le para resistir presiones, cuando menos, por encima de ese
mm valor. Pero la mayoría de las cavidades contienen algú n aire,
gración tales cambios de temperatura . Por ejemplo, sabemos \ además del agua, y est án abiertas, bien hacia la superficie
¡mm
.i
que los diferentes minerales que forman un granito se ex- ¡ o en dilección de otras cavidades. A mayor abundamiento,
: ; panden y se contraen a diferentes velocidades a medida que¡! ninguna roca puede resistir una presió n de 2,100 Kg / cm 2, si
¡
mm
iiiil reaccionan a temperaturas crecientes o decrecientes. Es de ¡ la presión est á dirigida de dentro hacia fuera.
a* suponerse que hasta la expansión y contracción m ínimas de A pesar de todo, la acción del hielo origina una gran parte
los minerales adyacentes por per íodos largos de tiempo pu- del intemperismo mecá nico. E! agua que llena las cavidades
¡ ilf diesen debilitar las uniones entre los granos minerales y que y los poros de una roca, por lo com ú n, empieza a congelarse
Mil entonces ser ía posible que la desintegración ocurriese a lo lar- en su parte superior, por el contacto con el aire frío. El resul -
go de estos lí mites. Sin embargo las pruebas de laboratorio I tado es que, con el tiempo, el agua de la parte inferior est á
¡ I BIS que tienden a demostrar estas especulaciones no son conclu- confinada por un tapón de hielo. Entonces, a medida que
¡ til! yentes. En un experimento de laboratorio, un granito de grail avanza la congelación, el agua confinada se expande, ejer-
I -v- = tl:- >!í no grueso fue sometido a temperaturas que variaban de 13°C. ciendo presión hacia fuera. La roca puede quedar sujeta a
m a 125°C. cada quince minutos. La operación de su calenta| -
| esta acción varias veces al a ñ o. En las altas monta ñ as, por
mmi miento y enfriamiento se repitió hasta alcanzar el equiva- 1 ejemplo, Ja temperatura puede subir y bajar, cruzando la
5.
lente de 244 a ños en proceso diario; no obstante, el granito l í nea de congelación casi diariamente.
‘ Vfc
no mostró signos de desintegración. Quizá los experimentos / Los fragmentos de roca intemperizada mecá nicamente, des-
"
UiEííí H
«SI desarrollados por per íodos de tiempo más largos produjeran alojados, tienen forma angular, y su tama ño depende en gran
efectos observables. En cualquier caso, nos queda todavía la parte de la naturaleza de la roca de que proceden. Por lo
incertidumbre del efecto de los cambios de temperatura d ía- ¡ com ú n dichos fragmentos son de sólo unos cuantos cent í me-
M í !\ :
It
%
ríos o estacionales; si estas fluctuaciones provocan la desinte - tros, pero en algunos lugares -por ejemplo a lo largo de los
gración de la roca, deben hacerlo muy lentamente. ,
h: :
\HML ;< v
r
;
í
88 INTEMPERISMO Y SUELOS Gran parte del agua que cae como lluvia o nieve se embebe\ distancia entre alas juntas es de sólo unos cuantos cent í metros, INTEMPERISMO Y SUELOS 89
en el suelo, donde se congela durante los meses invernales, { pero aumenta uno o varios metros a medida que se pro-
Si las condiciones son propicias, se acumula más y m ás hielo ¡ f fundiza en la roca ( ver capítulo 16 ) . Bajo ciertas condicio-
en la zona de congelación a medida que aumenta la canti| nes, una tras otra de esas hojas curvas, separadas por las
*
dad de agua procedente de la atm ósfera y avanza del suelo i juntas, se descascaran o separan de la masa de roca . Final -
no congelado hacia abajo, en forma parecida a un secante f mente, se desarrolla un cerro o una colina de roca, con su -
.
que chupa la humedad. Con el tiempo se forman masas de j perficie curva, de tipo d ómico, como se indica en la fig. 7-3.
hielo lenticulares, y el suelo que est á sobre ellas “ palpita” o f El cómo empiezan a formarse estas lajas de roca es toda -
se mueve hacia arriba. Esto se observa en los caminos de j v í a materia de discusi ó n . La mayoría de los observadores
construcció n pobre; también los prados y jardines est án sua I * suponen que a medida que la erosión descubre la superficie,
ves y esponjosos en la primavera , como consecuencia de la ¡ se reduce la presión hacia abajo sobre la roca subyacente.
palpitación del suelo durante el invierno. As í, cuando la masa de roca comienza a expandirse hacia arri-
Para que actué cualquier tipo de acci ó n del hielo , deben| ba, se desarrollan l íneas de fractura que delimitan las lajas
existir ciertas condiciones: 1 ) debe haber un abastecimiento o costras que se desprenderá n m ás tarde. Algunas medidas
de humedad adecuado; 2 ) la humedad debe ser capaz de ¡ cuidadosamente practicadas en bloques de granito en las can-
penetrar la roca o suelo; y 3 ) la temperatura debe variar por í teras de Nueva Inglaterra refuerzan esta teor ía . Ciertos blo-
encima y por debajo de la l í nea de congelación. Debe supo-
'
fea
mmmsm 8 SȤ k. mi \
!a mayor expansión y en consecuencia, el mayor n ú mero de
/ costras.
wm mm ¡|/ Eos pe ñascos intemperizados esferoidalmente son produci-
wm dos algunas: veces por el desmoronamiento de capas o costras FIG. 7-5
m
r. ;:j
itll m concé ntricas. Si la fuerza de cohesión de la roca es baja , los
granos individuales se intemperizan y disocian parcialmente,
Esta sección a través de ttri pe ñ asco
intemperizado esferoidalmente, sugiere los
esfuerzos desarrollados dentro de la roca.
con lo que la roca simplemente se desmorona . No obstante, Se cree que este esfuerzo sobreviene como
el proceso fundamental es el mismo en ambos casos. resultado d él cambio de volumen cuando
Imm i el feldespato se convierte en arcilla . N ótese
Ciertos tipos de rocas son m ás vulnerables al intemperismo que las costras se adelgazan hacia la superficie
esferoidal que otros. Las rocas í gneas, tales como el granito, ( ver también las figs. 7- 4 y 7 -6 ).
_ - a orita y el gabro, son particularmente susceptibles porque
^
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íi
Wm&m
K- k
I
m
ir :
90 INTEMPERISMO Y SUELOS
tienen del todo forma mineral, como la solución salada que INTEMPERISMO Y SUELOS 91
t'lr.
V
resulta de la transformación del mineral halita o sal com ú n.
í
,
tancias pueden reaccionar qu ímicamente sólo cuando se po
nen en contacto unas con otras. Cuanto más grande es la
-
superficie de una part í cula, más vulnerable resulta al ataque
[
.
qu ímico Por ejemplo, si tomamos un guijarro y lo molemos,
hasta convertirlo en polvo fino, el á rea total expuesta aumen-
ta enormemente; y como consecuencia los materiales que
constituyen el guijarro será n intemperizados qu í micamente
con mayor rapidez.
La fig. 7-8 muestra cómo aumenta la superficie de un
cubo de un centímetro de lado a medida que lo reducimos
a cubos cada vez más peque ños. El cubo inicial tiene una
superficie de 6 cm2, y un volumen de 1 cm 3. Si dividimos el
cubo en otros que tengan medio centímetro de lado, la su-
perficie aumenta a 12 cm3, aun cuando el volumen total siga
.
,
siendo el mismo Una subdivisión posterior en cubos de 1/ 4 Lado de los cubos ( pulgadas )
de centímetro aumenta la superficie a 24 cm2., y así sucesiva
mente, en la misma proporción . Como hemos visto, este mis-
-
1 cubo de 1"
mo proceso es llevado a cabo por el intemperismo mecá nico: tiene 6 pulgf
éste reduce el tama ño de las partí culas de roca , aumenta la de superficie
superficie expuesta y promueve un intemperismo qu ímico
más rápido. 8 cubos de V2"
t tienen 12 pulgf
1 OTROS FACTORES EN EL INTEMPERISMO QUí MICO La veloci- de superficie
mm m V ..
dad de intemperismo qu ímico está afectada por otros fac-
.
FIG 7-6
-
VV
>
% m
®|g|
§É
r
m m $1
I tores como, por ejemplo, la composición del mineral ori-
ginal. Como veremos adelante, el cuarzo ( SiOa ) reacciona
,, —
r
mucho más lentamente al intemperismo qu ímico que el olivino
IpSÉglL mm
*
Este peñasco de granito con intemperismo
nsfii [ ( Fe,Mg ) «Si04 ]. Y las tuberías de agua de cobre duran m ás
:ü esferoidal ha quedado aislado, casi por
completo, del lecho de roca . ir WSSBIí
que las de hierro, porque el cobre “ se intemperiza” más len-
SZ_
V
tamente que aquél.
[
Foto por Sheldon Judson .
t
i
í
El clima también desempeña su papel en el intemperismo
fragmentos de roca que han quedado sueltos previamente J . "
químico. La humedad, particularmente cuando va acompa-
:
FIG. 7 7 - como también las raíces de los á rboles levantan y agrietan j ñ ada de calor, acelera la velocidad de intemperismo qu ímico;
Un abedul que creció en una grieta está
separando un gran bloque de roca en un
el pavimento de las banquetas ( fig . 7-7 ) . inversamente, la sequedad lo retarda. Finalmente, las plan-
t 64 cubos de j W'
pequeño acantilado de Hermosa Park , Sin embargo, es más importante el mezclado mecá nico del I tas y los animales contribuyen directa o indirectamente al tienen 24 pu íg*
en Colorado, Foto por U .Sr Geol , Survey . suelo, producido por las hormigas, gusanos y roedores. Esta intemperismo qu ímico, puesto que sus procesos vitales pro- de superficie
-
¿ v. - jut**: clase de actividad constante hace a las partículas más sus- ducen oxígeno, bióxido de carbono y ciertos ácidos que en-
EL/,* V-
,r.
ceptibles al intemperismo qu ímico y aun puede ayudar en la ? tran en reacciones qu í micas con los materiales de la tierra
V * .
'f
' ' ruptura mecá nica de aquéllas. \
,i
Finalmente, los agentes f ísicos tales como el agua que co- ; Intemperismo qu ímico de las rocas ígneas
rre en la superficie del hielo de glaciar, el viento y las olas t
del océano pueden contribuir a reducir el material rocoso a f// En el capítulo 6 vimos que los minerales más comunes en
.
r ;i fragmentos cada vez m ás peque ños. El papel de estos agentes fe; rocas ígneas son los silicatos, y que los más importantes
J
en el intemperismo mecánico será tratado en cap í tulos pos- entre éstos son el cuarzo, los feldespatos y ciertos minerales
% ferromagnesianos
. Veamos cómo act úa el intemperismo quí
íIi mico sobre cada uno de los tres tipos de silicato citados -
teriores.
It V? •A1
.
Intemperismo qu ímico .
i
INTEMPERISMO DEL CUARZO. El intemperismo químico afec- FIG 7 8
El intemperismo quí mico , llamado algunas veces descompo- ta al cuarzo muy lentamente, razón por la que decimos que
. Relaciones entre el volumen, tamaño
xj superficie de las partí culas. En esta
¡m sición, es un proceso m ás complejo que el intemperismo me- este es un mineral relativamente estable. Cuando una roca
ilustración un cubo de un cent í metro cuadrado
mm cá nico. Como hemos visto, el intemperismo mecá nico sim- como el granito, que contiene un alto porcentaje de cuarzo, de lado se ha dividido en unidades
.V
|
& |frÍ plemente rompe la roca en part ículas m ás y m ás peque ñas, í se descompone, deja tras de sí una gran cantidad de cuarzo cada vez más pequeñas
El volumen permanece constante, pero,
.
sin alterar su composición. Sin embargo, el intemperismo inalterado. Los granos de cuarzo ( llamados com ú nmente gra- a medida que el tamaño de las partí culas
nos de arena ) que se encuentran en los restos intemperizados disminuye, la superficie aumenta. En virtud
US químico, en realidad, transforma el material original en algo
I «pa¡ MNÜi
f$ diferente. Por ejemplo, el intemperismo químico del feldes- ¡
pato produce arcillas que tienen una composición distinta y m
del granito son iguales a los que aparecen en el granito in-
alterado
*
de que el intemperismo quí mico está
restringido a las superficies, cuanto más
finamente se divida un volumen dado de
I 3 §1 Cuando estos granos de cuarzo se separan de la roca
4mm
& características f ísicas diferentes de los feldespatos originales. m ma- material, mayor será la superficie expuesta
f
t
* - tÁ
2
&
¡Wfí vi Algunas veces los productos del intemperismo qu í mico no
I dre, son angulosos; pero como el cuarzo contin úa sujeto al a la actividad quí mica y más rápido
será el proceso de intemperismo.
¡ ¿y , 55
%
rw M
intemperismo qu ímico lento, los granos llegan a redondearse
más o menos al pasar el tiempo. Tras muchos a ños de intem- habrá formado una arcilla mineral, como en la ecuación an - INTEMPERISMO Y SUELOS 93
perismo, se les ve como si hubieran sido desgastados y ero- I: tes mencionada .
sionados a lo largo del lecho de un río o de una playa . Y, a f Veamos ahora m ás de cerca cada uno de los tres produc-
yü tos de la descomposición de la ortoclasa- Primero, los mine-
pesar de todo, el cambio puede deberse únicamente a la ac
ción qu ímica .
- rales de arcilla . Al principio estos minerales está n muy fina-
lllli i
í ¡
-
-*j „
.
quiumauxciitc uiw
- é n un segundo pro m r rma un suelo aa partir
° „ ' Sc
j
H+ H+
K+ K+
K+
de que el potasio se ha combinado con el silicato de aluminio
para formar el minera arcilla .
La acción de las plantas vivientes puede causar también
la descomposición de la ortoclasa. La ra í z de una planta eiLi
«
que cuand () ]a or ¡nal t¡ene iUita és(a ’ ]a a
rQca
predomina en el suelo, independientemente
I J H+ ) un
*
H+ Fragmento de
$ ortoclasa
H+ per su
• •:
:
í-
i
f
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94 INTEMPERISMO Y SUELOS rreno, y que toda ella, eventualmente, se abriría camino lugar a los mismos productos de intemperismo de los feldes- INTEMPERISMO Y SUELOS 95
hacia los ríos y finalmente al mar. No obstante, los análisis| ¡J patos : arcilla , sales solubles y sílice finamente dividida , pero
indican que en el agua de los ríos y en la del océano no hay ¡ la presencia de hierro y magnesio en los minerales ferro-
tanto potasio como puede suponerse. ¿Qu é sucede con el res ¡ - inagnesianos determina otros nuevos productos.
to del potasio? Parte de él es absorbido por las plantas en¡ | El hierro puede ser incorporado dentro de una de las ar-
su crecimiento antes de ser arrastrado en solución y parte cillas o en un carbonato de hierro. No obstante, suele unirse
por las arcillas, si no entra a formar parte de su estructura| con el oxígeno para formar hematita, FeaOs, uno de los óxi-
cristalina. I
dos de hierro más comunes. La hematita tiene, generalmente,
El tercer producto que resulta de la descomposición de la ii un color rojo intenso que no abandona en forma pulveru-
ortoclasa es la sílice, que se presenta ya en soluci n pues !
ó ( lenta y a cuya caracter ística debe su nombre -del griego
es ligeramente soluble en agua ) o bien como cuarzo dividido haimatites ' corno sangre” . Algunas veces el hierro se une
muy finamente, alcanzando, en tama ño, el rango de los co- con oxígeno para formar otro óxido de hierro, la gohetita,
loides. En estado coloidal la sílice puede presentar algunas FeO ( OH ) , generalmente de color caf é. ( La goethita fue lla-
de las propiedades que muestra en solución. mada as í en honor del poeta Goethe, en deferencia a sus
Hasta ahora hemos tratado solamente del intemperismo profundos intereses cient íficos ) . El intemperismo quí mico de
del feldespato ortoclasa; pero los productos del intemperis- ( los minerales ferromagnesianos produce con frecuencia una
mo qu ímico de los feldespatos plagioclasa son con mucho los •
sustancia llamada limonita de color amarillento a caf é, que
mismos. En lugar de carbonato de potasio, se produce bien en el lenguaje ordinario recibe el nombre de "herrumbre u
carbonato de sodio o carbonato de calcio, dependiendo ello f .
orín” La limonita no es un mineral auténtico, ya que su com -
de que el feldespato de que se trata sea la albita sódica o la
anortita cálcica ( ver la tabla 7-1 ) . Segú n vimos en el capí 1 -
posición no está establecida dentro de l í mites estrechos, aun
que el término se aplica universalmente a los óxidos de hierro
-
tulo 4 ( ver "Silicatos” ) , los feldespatos plagioclasa contienen,
casi invariablemente, sodio y calcio. Los carbonatos de sodio j
de composición indefinida , que contienen una cantidad va
riable de agua. A la limonita y a otros óxidos de hierro se
-
y de calcio son solubles en agua y pueden llegar al mar. Sin \ deben los colores característicos de la mayoría de los suelos.
embargo, debemos indicar aqu í que el carbonato de calcio ¡ ¿Qu é le sucede al magnesio producido por el intemperismo
también forma el mineral calcita ( ver "Carbonatos y Sulfa- j de los minerales ferromagnesianos? Parte de él es arrastrado
tos” en el capítulo 4 ) . La calcita, a su vez, forma la mayor [ en solución como carbonato, pero casi en su totalidad tiende
parte de la caliza ( una roca sedimentaria ) y el mármol ( una ! a quedar en los minerales reci•én formados, particularmente
/
roca metamórfica ) . Tanto la caliza como el m á rmol se estu - fj en las arcillas illita y montmorillonita.
FIG. 7 11
Rapidez relativa del intemperismo quí mico
-
dian en capítulos subsecuentes. de los miner pí es comunes que
INTEMPERISMO DE LOS MINERALES FERROMAGNESIANOS. Re- \
RESUMEN DE PRODUCTOS DE INTEMPERISMO. Conocida la COm
posición mineralógica de una roca ígnea, podemos determi-
- forman rocas í gneas .
La velocidad de intemperismo es más rá pida
gresemos al intemperismo qu í mico del tercer grupo de mi- f nar, en forma general, los productos que probablemente se en el fondo tj disminuye hacia la superficie .
TABLA 7 1 -
Productos de intemperismo quí mico de los
—
nerales comunes en las rocas ígneas los silicatos ferromag- ¡
nesianos. El intemperismo qu í mico de estos minerales da j
derivarán del intemperismo de esa roca. Los productos del
intemperismo qu í mico de los minerales comunes que forman
N ótese que esta tabla tiene el mismo
orden que las series de reacción de Bowen
( insertadas a la derecha ),
La discrepancia en la velocidad de
silicatos comunes que forman rocas . .
rocas aparecen en la tabla 7-1 Estos productos incluyen los intemperismo entre por ejemplo, el olivino y
minerales que constituyen la mayor ía de las rocas sedimen - el cuarzo, se explica por el hecho de que en
tarias, de las que nos ocuparemos de nuevo en el capítulo 8 la zona intemperizada el olivino está más
lejos del medio de su formación que el cuarzo .
En consecuencia reacciona más rá pidamente
VELOCIDADES DE INTEMPERISMO que el cuarzo en su nuevo ambiente y por
PRODUCTOS DE DESCOMPOSICION IMPORTANTES
ello se intemperiza con mayor rapidez .
\
fJ Algunas rocas se intemperizan con mucha rapidez, otras lo
MINERAL COMPOSICIÓ N
MINERALÉS OTROS
i
hacen lentamente. La velocidad de intemperismo está regida
í
-
Biotita Calcita
Silicatos de Al , con
si
wO
Augita
Hornblenda
Fe, Mg , Ca
Limonita
Hematita
Cuarzo ( finamente di-
Carbonates de calcio y mag-
nesio ( solubles)
s W
vidido)
Limonita Algo de sílice en solución
(Fe,Mg)2Si04 Hematita
Olivino Carbonatos de hierro y magne
Cuarzo ( finamente di - sio ( solubles)
vidido )
Í: V
I • !
Iii 96 INTEMPERISMO Y SUELOS por el tipo de roca y una diversidad de factores adicionales, p*í la corteza terrestre, donde las rocas está n en í ntimo contacto
desde los minerales y la humedad , la temperatura y la topo- i y la materia orgánica . Pero otros
;
m ficie. No estamos seguros de todos los detalles y diferentesffj Por consiguiente, también grandes cantidades de agua se
m investigadores dan a conocer conclusiones diversas, pero po- ¡ mueven a través del suelo y penetran al subsuelo, transfor-- mm
Y- Y
demos hacer las siguientes observaciones generales : í: mando ah í algunos de los minerales mucho antes de que que
den expuestos en la superficie. La sal de roca, que se encuen -
1. El cuarzo es sumamente resistente al intemperismo qu í - tra a cierta profundidad de la superficie en forma de roca
mico. «
sedimentaria, con frecuencia sufre esta transformación. Si hay
¡i
'
2. Los feldespatos plagioclasa se intemperizan m ás rá pida| - bastante agua subterrá nea , se disuelve la sal y escurre o es
mente que el feldespato ortoclasa . acarreada mucho antes de que la erosión la deje al descu - iñs.
¡ i.
j
se m ás rápidamente que la plagioclasa sódica ( albita ) . El intemperismo es a veces tan rá pido, que se le puede .
FIG 7-14
4. El divino es menos resistente que la augita , y en mu - j registrar realmente. La erupción del Krakatoa en agosto de Intemperismo diferencial en un monumento de
chos casos ésta parece intemperizar m ás r á pidamente ( pie la arenisca en el cementerio de la Iglesia
1883, descrita en el capí tulo 5, arrojó enormes cantidades de Cristo, Cambridge , Massachusetts El .
hornblenda . de ceniza volcá nica a la atmósfera y las deposit ó con un intemperismo mecánico se ha concentrado
•
: .
5. La mica biotita se intemperiza más lentamente que los
:
espesor de m ás de 30 metros sobre la cercana isla de Long- a lo largo de las caras interiores de las
columnas acanaladas verticalmente.
otros minerales oscuros, y la mica moscovita es mas resis- Eiland . Hacia 1928, 45 a ños más tarde , se había desarrollado La desintegración más rá pida se debe , en
tente que la biotita un suelo de unos 35 centímetros de profundidad sobre la par- este caso, a la exposici ón diferencial ; la
iiv.V
Advié rtase que estos puntos sugieren un arreglo ( í ig . 7 -11 ) te superior de este depósito y los an álisis de laboratorio de- humedad permanece por más tiempo en las
caras interiores , menos accesibles a los rayos
Ú liV:
similar al de la serie de reacción de Bowen para la recrista- mostraron que se había producido un cambio significativo del sol y, en consecuencia , la acción del
lización del magma , tratada en el capí tulo 6 ( ilustrada en la en los materiales originales. El intemperismo qu í mico había hielo es aquí más efectiva que
parte del potasio y el soclio originales, resultando en las caras exteriores.
' i j:
fig. 6-5, intercalada a la derecha de la fig. 7-11, para esta- ! removido Foto por Sheldon Judson .
-
Í!Sy‘C:.'S?
11
* blecer comparación ) . Sin embargo, existe una diferencia - ¡ im claramente susceptible de medirse. Por otra parte , el intem -
portante : en el intemperismo, los minerales formados sucesi - | perismo mec á nico o el qu í mico, o ambos, habían roto las
FIG 7*12 . vamente no reaccionan uno con otro como lo hacen en una part ículas originales de manera que en general éstas eran
Intemperismo de una lá pida de mármol serie de reacción continua .
'
m á s peque
Yill da más abajo. ñ as que las de la ceniza sin intemperizar situa- . -
FIG 7 15
en el cementerio de la Iglesia de Cristo , en Variación en la intensidad del intemperismo
Cambridge , Massachusetts. La inscripción La resistencia relativa de estos minerales a la descompo- j quí mico en bloques de caliza de composición
grabada en 1818 , es ilegible. El movimiento sición puede reflejar la diferencia entre las condiciones que Los cementerios ofrecen muy buenos ejemplos de intempe- semejante, Universidad de Harvard ,
ilustra la inestabilidad y el intemperismo - rismo ocurrido en tiempos histó ricos. La calcita de la lápida Cambridge, Massachusetts. El agua con
rá pido de la calcita ( mineral que predomina exist í an cuando se formaron. El divino, por ejemplo , se for }
la | con que se ilustra la fig. 7-12 se internperizó tan rá pidamente peque ñas cantidades de ácido carbónico,
en el mármol ) en un clima hií medo. ma altas temperaturas y
a presiones , siendo el primero en que escurre sobre la pared , se ha concentrado
!•
fü Foto por Sheldon Judson . cristalización de la masa fundida . Consecuentemente, es ex- j que la inscripci ón a la memoria de Moses L. Gould , grabada a lo largo de los bloques del centro,
.
tremadamente inestable a bajas temperaturas y presiones que ] en 1818 apenas es legible parcialmente, despu és de siglo y donde la disolución ha sido más rá pida.
prevalecen en la superficie y se intemperiza con bastante medio . El examen de otras placas de m á rmol en el cemente- Los bloques adyacentes de material id éntico
no han sido humedecidos con tanta frecuencia
rapidez. Por otra parte, el cuarzo se forma a lo ú ltimo en la rio indic ó que la fecha legible de mayor antigüedad corres- o con tanta intensidad , por lo que están
FIG 7 13 . - serie de reacción , bajo temperaturas y presiones notable- 1 pond ía a 1811. relativamente poco afectados
Intemperismo de una lá pida de pizarra, por la descomposici ón .
en el cementerio de la Iglesia de Cristo,
.
Cambridge Massachusetts La fecha de la
mente bajas. Puesto que estas circunstancias son m ás simi j - con
Sin duda la velocidad de intemperismo se ha incrementado
el tiempo, por dos razones: en primera , el intemperismo
N ótense las diferencias en el patrón de
inscripción, 1693, es testigo de su durabilidad . lares a las de la superficie, el cuarzo es relativamente estable j intemperismo de un bloque al siguiente;
ellas se deben a las variaciones en la
La pizarra está compuesta principalmente y muy resistente al intemperismo. ¡
Y| ,
§ L / continuo pica la superficie de m á rmol exponié ndolo m á s y
solubilidad dentro de cada bloque.
de minerales arcillosos, formados en la zona de Ahora podemos afinar algo m ás la definición de in tempe * al ataque
f / posició n; segunda quí mico y acelerando la velocidad de descom - Foto por Sheldon Judson .
intemperismo ; son relativamente estables el en , como el n ú mero de f á bricas y vivien -
cuando quedan expuestos a un intemperismo rismo dada al principio de este cap í tulo . Hemos visto que V
quí mico adicional . Foto por Sheldon Judson . intemperismo rompe el equilibrio existente mientras los mi [ * en Cambridge y pueblos vecinos aumentó, la cantidad
ncrales estaban todav ía sepultados en la corteza terrestre y j bióxido de carbono en la atm ósfera se incrementó tam-
que esta ruptura los convierte en nuevos minerales. Siguiendo | bien . Consecuentemente, en el siglo xx el agua de lluvia
a Reiche, podemos enmendar
1 o ampliar nuestra definici ó n f arrastro mas acido carbó nico que en el siglo xix, atacando a
0ñ '
como sigue : el intemperismo es la reacción de los materiales j calcita con mayor rapidez.
&9- que estuvieron una vez en equilibrio dentro de la corteza En contraste con el má rmol intemperizado existe una l á -
terrestre a las nuevas condiciones en o cerca del contacto con pida de pizarra erigida en 1693 ( fig. 7-13 ) . Han pasado m ás
el airey el agua y la materia viviente Y§ J dos siglos y medio y la inscripción es todav ía completa -
: mente visible. La pizarra es, com ú nmente, una Iutita meta -
Profundidad y rapidez del intemperismo i
morfizada la que, a su vez, est á compuesta en gran parte de
, . . , iJSi : minerales arcillosos, formados por el intemperismo de los fel-
:
i
I
Y
La mayor parte del intemperismo tiene lugar dentro de
, j
m :
despatos. Las arcillas de la lá pida se formaron originalmente
primeros decí metros o pocos metros de la parte superior en ]a zona de intemperismo, por tanto son relativamente es-
5
w f tables cuando se les expone a un intemperismo qu ímico adi -
1 Parry Reiche. “ A Survey of Weathering Processes and Products •|
V . de Nuevo Mexico Pubs , in Geology , No 3 ( 1950 ) , p. 5 . Clonal . La l ápida de pizarra presenta pocos signos de descom-
i
::
'
% rt--
t
m. .
kL
98 INTEMPERISMO Y SUELOS del suelo INTEMPERISMO Y SUELOS 99
posición, pues la mayor í a de los minerales que la componen •
Clasificación
se encuentran todav ía en un medio similar a aqu él en el que se i
r5 formaron. En los primeros a ñ os del estudio de los suelos en los Estados
Unidos los investigadores pensaban que el tipo de suelo es-
i
Vegetaci ón
A L'3
( ii Estos ejemplos prueban claramente que con frecuencia el I tiba determinado casi totalmente por la clase de rocas o de
HORIZONTE A : intemperismo act ú a con rapidez suficiente para ser medido materiales de los que se derivaba . De esta manera , eonside- -
zona de lixiviación durante el lapso de una vicia . Su velocidad es susceptible de niban que el granito deb í a intemperizarse en un tipo de suelo
r medirse con precisión en casos determinados y en situaciones y la caliza en otro .
Vil *.”
específicas. Pero los factores de intemperismo, numerosos y| Es verdad que un suelo refleja, hasta cierto grado, el ma-
**
variables, hacen muy dif ícil , si no imposible, precisar su velo ! - teria! del cual se derivó, y en algunos casos aun puede uno
HORIZONTE B: cidad exacta . delimitar la distribución de rocas por los tipos de suelo que
zona de acumulación descansan sobre ellas. Pero a medida que se ha contado con
Intemperismo diferencial masis información , se ha visto que la roca basal no es el ú nico
:" -- = El intemperismo diferencial es el proceso por medio del cual !
il
í
factor que determina el tipo de suelo. Los especialistas rusos,
siguiendo los trabajos iniciales de V. V. Dokuchaev ( 1846-
--5
diferentes secciones de una masa de roca se intemperizan a ¡ 1903 ) , demostraron que diferentes suelos se desarrollan sobre
^
''
3
1 T distintas velocidades. Casi todas las masas de roca de cual fI »
rocas idénticas en á reas distintas cuando el clima var ía de un
quier tama ñ o se intemperizan de esta manera . Los resultados í
á rea a otra . La idea de que el clima ejerce gran influencia
I 1
f HORIZONTE C: varían desde las formas libremente esculpidas del Castillo !
I LJ material original sobre la formaci ón del suelo fue introducida en los Estados
i niel parcialmente descompuesto de los Gigantes, en Wisconsin , a la superficie ligeramente f Unidos hacia 1920 por C. F. Marbut ( 1863-1935 ) , quien du -
i
I i i 17
~
L 7
irregular de una piedra sepulcral de má rmol. Las diferentes rante muchos a ñ os desempe ñó la jefatura del Servicio de
1 I velocidades de intemperismo se deben principalmente a Vri ¡ Suelos de los Estados Unidos en el Departamento de Agri-
)
»
I
I r r
I ~ daciones en la composición de la roca misma . Las zonas m ás ! cultura. A partir de esa época , los especialistas han descu-
Roca fresca
resistentes sobresalen como bordes o costillas por encima de i bierto que a ú n otros factores ejercen influencias importantes
la roca que se intemperiza má s r á pidamente en los costados. sobre el desarrollo del suelo. Por ejemplo, el relieve de la
Una segunda causa de intemperismo diferencial es simple 1 »
superficie del terreno desempe ñ a un papel significativo. El
i i mente que la intensidad var í a de una secci ón a otra en la 1 suelo de la cima de un cerro difiere del de la ladera, el que
misma roca . La fig. 7-14 muestra un monumento conmemo j a su vez no es igual al del nivel del terreno al pie del cerro,
FIG. 7 ití - rativo de arenisca que ha sufrido intemperismo mecá nico f
»
aunque los tres tipos de suelo descansan sobre una roca basal
Los tres horizontes principales de un suelo . idé ntica . El paso del tiempo es otro factor. Un suelo que ape-
En muchos casos es posible subdividir en ciertos lugares- La roca es una arenisca homogé nea , roja, i
las zonas. El suelo aqu í representado de grano grueso, formada de cuarzo, feldespato y mica con ¡ nas comenzó a formarse difiere de otro que se ha estado des-
se supone derivado de una caliza. arrollando durante miles de a ños, aun cuando el clima, la roca
.
algunos óxidos de hierro. Las caras interiores de los pilares j
se han basal y la topograf ía sean iguales en cada caso. Finalmente,
, desintegrado
. j . .j
s do destruida
tanto
.
, que la ornamentación original ha 1
«
por completo y los ibordes
i i
laterales
i
i ii
de
,
las pí a- |
cas horizontales se han descostrado notablemente. Es de no-
,el tipo de vegetación de un á rea influye sobre el tipo de sue-
Q £
* a]]í désarrone. ] )ebajo de un bosque de pinos se
ar que estas areas son las menos accesibles a la acci ó n se- ;¡
desarrollará un tipo de suelo, bajo un bosque de á rboles
caducos habrá otro tipo y en una pradera cubierta con pastos
cadora del sol. En consecuencia , la humedad ha tendido a |
existirá todav í a otro tipo de suelo.
persistir aqu í y la acci ón del hielo ha desprendido laminillas f
¿Qué cs exactamente un suelo? Es un material superficial
y a ojado granos individuales.
,
Otro ejemplo de intemperismo qu ímico diferencial se pie |
q
*
-
natural , que sostiene la vida vegetal. Cada suelo posee cier-
tas propiedades que son determinadas por eb clima y los
i
senta en la fig. 7-15. En este caso la caliza ha sido disuelta I organismos vivientes que operan por per íodos de tiempo so-
donde existió un abundante escurrimiento de agua , pero los | bre los materiales de la tierra y sobre el paisaje de relieve
bloques adyacentes de la misma roca han quedado relativa- i variable. En razó n de que todos estos factores se combinan \
mente inafectados. 1 de varias maneras sobre todas las á reas del globo, el n ú mero
¡ / posible de tipos de suelo es casi ilimitado.
\
SUELOS Y todav ía se pueden hacer ciertas generalizaciones vá lidas
Hasta aqu í hemos expuesto las formas mediante las que el
y acerca de los suelos. Sabemos, por ejemplo, que la composi-
ción de un suelo var ía con la profundidad . El afloramiento
intemperismo desintegra las rocas existentes y aporta mate- %
r í ales para formar otras nuevas. Sin embargo, el intemperismo i
natural o artificial de un suelo revela una serie de zonas di-
ferentes entre sí. Cada una de estas zonas constituye un ho-
desempeñ a también un papel important ísimo en la creación \ rizonte de suelos, o simplemente un horizonte . Los tres hori-
i
de los suelos que cubren la superficie de la Tierra y susten- zontes o zonas principales de un suelo t ípico ilustrado en la
tan toda vida . En los ú ltimos a ñ os se ha desarrollado la cien- ! fig. 7-16, se pueden describir, de abajo arriba, como sigue:
cía de la pedolog ía, que se ocupa del estudio de los suelos
( del griego, pedon, “ suelo” y logos , “ tratado o razón ” , o sea, HORIZONTE C. Esta es una zona de roca parcialmente des-
“ conocimiento del suelo o ciencia del suelo” ) .- integrada y descompuesta . Parte de los minerales de la roca
basal original están presentes todavía , pero otros se han trans-
- En los Estados Unidos el término pedolog ía se confunde algunas $ formado en materiales nuevos. El horizonte C pasa gradual-
veces con palabras basadas en las ra íces ped y pedi , combin á ndose con l mente hacia abajo a la roca inalterada
palabras que significan “ pie” , o bien con otras basadas en las ra íces
i; ped y pedo , combinadas en t érminos que significan “ ni ño, muchacho” , | HORIZONTE B. Esta zona descansa directamente sobre el ho-
como en pediatr ía, que es la ciencia m édica que trata de la higiene y | rizonte C; en ella el intemperismo ha actuado con mayor
! enfermedades de los ni ños. Por esta raz ón, hay una tendencia en los
Estados Unidos a decir ciencia del suelo en lugar de pedolog ía . intensidad que en la zona subyacente; sólo aquellos minerales
X
f.
:
kb
100 INTEMPER1SMO Y SUELOS de la roca original m ás resistentes a la descomposición ( el | Segunda : algunos suelos son fuente de depósitos minera - INTEMPERISMO Y SUELOS
cuarzo, por ejemplo ) , se pueden reconocer todav í a. Los otros í 101
se han convertido en nuevos minerales o en sales solubles. ls valiosos ( ver el cap í tulo 22 ) , y el proceso de intemperismo
v ¡. los climas h ú medos el horizonte B contiene una acumulación ¡§ enriquece con frecuencia depósitos que de otra manera re-
de material arcilloso y óxidos de hierro, arrastrados hacia 1 sultar ían de baja ley, haciendo ahora costeable su explola- 60
abajo por las aguas que percolan desde la superficie. En los 1 ción En consecuencia , el entender los suelos y los procesos .
climas secos generalmente se encuentran , adem ás de las arcilf que los forman puede servir como gu ía en la búsqueda de 50
^^
gradualmente a ser f
formu-
¿por qué es importante para el geólogo entender los suelos | ar un esquema de desarrollo de un pedalfer, a partir
y los procesos que los forman ? Existen varias razones. de un
panito , en á reas templadas y h ú medas. A poca profundidad ¿
ÉflttltJ Granito fresco
Primera : los suelos dan indicios acerca del medio en el
que se formaron originalmente. Mediante el an álisis de un|
)
aJO la superficie yace el granito inalterado. Precisamente
¡ encima está la roca desmenuzable , parcialmente desintegra-
suelo antiguo intercalado en la columna de rocas, podemos | a > del horizonte C, donde pueden identificarse todav
&
V
w
mm
cuando se formó. í
i
Espatos hayan comenzado a descomponerse, haci
i
éndose ne-
£!« '
h-
vrií
S
ÉMl i V. V L* v
- *
Vi- A'
. 0 ir
' I
102 INTEMPERISMO Y SUELOS hulosos, y los minerales ferrosos hayan sido oxidados parcial,| | rtgua que est á debajo del suelo o en su parte inferior sube INTEMPERISMO Y SUELOS m
mente. hacia superficie a través de pequeñ as aberturas capilares ,
la
Yendo para arriba , hacia el horizonte B la zona de acumu- §¡
— pe esta manera , cuando el agua de las partes superiores se
evapora , los materiales disueltos se precipitan .
—
laci ón , encontramos que los feldespatos han sido convertí !
dos en arcilla y que el material tiene una textura arcillosa, ¡gf
- •
Jj| TODOS NOSOTROS hemos hundido la punta de los pies en FORMACION DE LAS ROCAS SEDIMENTARIAS
BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA una playa arenosa, o saltado sobre las gravas de un arroyo rá-
r
{
Rock Weathering” , Jour. Geol , XI VI | pido, o quizá hemos caminado por el fango de un pantano.
—
Goldich , S. S., “ A Study in , ORIGEN DEL MATERIAL
-
( 1938 ) , pp. 17 58. .
¡ Ninguno de estos materiales la arena, la grava o el lodo - SEDIMENTACION
Keller, Walter D., Chemistry in Introductory Geology. Columbia! nos sugiere, de inmediato, la roca sólida y dura. No obstante,
Mo. : Lucas Brothers , 1957. If esta clase de depósitos o los materiales similares a ellos cons- COMPOSICION MINERAL DE LAS
, The Principles of Chemical Weathering ( rev. ed. ) . Co- Í¡ tituyen la materia prima a partir de la cual se han formado
lumbia, Mo. : Lucas Brothers, 1959. | las grandes moles de rocas expuestas en la superficie de la
ROCAS SEDIMENTARIAS
Lyon, T. L., H . O. Buckman, y N . C. Bvadv, The Nature and ¡1 Tierra. Cuando, desde arriba, contemplamos el Gran Ca ñón )
TEXTURA
Properties of Soils ( 6* ed. ) . Nueva York: The Macmillan Com-.vl
pany, 1960.
del Colorado, en Arizona, con m ás de 1.5 kilómetros de pro-
:i fundidad , vemos, capa sobre capa, rocas que fueron una vez LITIFICACION
r. \ Reiche, Parry , A Survey of Weathering Processes and Products. f
k!í
i ¡1
Alburquerque, N. M.: U. de Nuevo México Press, 1950. depósitos inconsolidados de arena, grava y lodo. Con el trans- TIPOS DE ROCAS SEDIMENTARIAS
mí Soil, U .S . Department of Agriculture Yearbook, 1957. Washington|
, f curso del tiempo estos sedimentos sueltos se han endurecido,
D. C.: Government Printing Office, 1957. í convirtiéndose en lo que llamamos rocas sedimentarias. CARACTERISTICAS DE LAS
La historia de las rocas sedimentarias comienza con los ROCAS SEDIMENTARIAS
procesos de intemperismo tratados en el capí tulo 7, ya que
i-
ios productos del intempbrismo qu ímico y mecánico consti-
tuyen la materia prima de las rocas sedimentarias. Los ríos,
¡ los glaciares, el viento y las corrientes oceá nicas desplazan los
jf materiales intemperizados hacia nuevas localidades y los de- \
^ positan como arena, grava o fango. La transformación de \
II fstos sedimentos en roca viene a ser la etapa final en el des-
l
-
¡ ^ ^ ' rfollo de
las rocas sedimentarias.
:
‘• v>
¡¡¡n Jgunos sedimentos, particularmente la arena y grava, se
:
/ *is consolidan y convierten en roca mediante un proceso que
| cementa los granos individuales. El agua del subsuelo que es-
a través de los espacios abiertos deja tras ella un de
Pós*t0 mineral que sirve para cementar firmemente los gra-
.
f ;
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I 105
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PTT: I
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100 ROCAS SEDIMENTARIAS Es extremadamente dif ícil establecer una definición corn¡
pleta y concisa de las rocas sedimentarias. El adjetivo sedb¡Él
-| jf
ticas. En segundo término, .losNosdepósitos pueden ser produ -
eidos por procesos qu í micos referimos a estos depósitos
ROC.AS SEDIMENTARIAS 107
«si mentarlo, del lat í n sedimentan , significa “ asentamiento . Así,| y depó sitos qu í micos , y a las rocas formadas a partir de
111 podemos esperar que las rocas sedimentarias se formen cuan - pf
éstos, como rocas sedimentarias quí micas.
do las part í culas individuales contenidas en un fluido se asien|-||
1
mt
tan , como en el agua de un lago o en el océano. Muchas
rocas sedimentarias fueron formadas precisamente de esta»i
manera. Los fragmentos o los minerales derivados de la rup |
|
-
J La grava , la arena , el limo y la arcilla derivados del intern-
perismo y erosi ón de un á rea terrestre., son modelos
.
,c .
mentes detríticos Tomemos un ejemplo espcc ico. Los gra-
de sedi-
m ás, existen rocas sedimentarias, compuestas en gran parte#! neralmente por la precipitación de material disuelto en agua . VA /\ / T1 s/ VOLUMEN EN LA
por las conchas y partes duras de los animales, particularJ ¡ Este fen ómeno puede efectuarse bien directamente a través w -.
CORTEZA TERRESTRE
mente de invertebrados marinos. i de procesos inorgá nicos o indirectamente mediante la Í nter - 75 >
vención de plantas o animales. La sal que queda despu és de
Las rocas sedimentarias se bailan frecuentemente dispues
tas en capas o estratificadas. A diferencia de las rocas í gneas (
- ;
la evaporación de una masa de agua salada es un ejemplo
, '< VA!y
: macizas tales como el granito, la mayor ía de las rocas sedi- j
de depósito producido por un proceso qu í mico inorgá nico,
mentar ías se depositan en una serie de capas individuales I Por otra parte, ciertos organismos, tales como los corales, 50
A' i ' "O
¡i superpuestas. La superficie de cada capa es esencialmente i extraen carbonato de calcio del agua de mar , y lo usan para
paralela al horizonte al tiempo de depósito y una sección : f construir esqueletos de calcita. Cuando los animales mueren,
i;
transversal deja al descubierto una serie de capas como en
un pastel gigantesco. Es cierto que algunas rocas í gneas, tales
sus esqueletos se acumulan como un depósito bioqu ímico
( t é rmino derivado de la palabra griega que significa “ vida ” ,
m ás la palabra qu í mico ) y la roca que se forma , en este
yy
como las formadas por derrames de lava, también están es-
Ü
Si tratificadas. Sin embargo, la estratificación es el rango m ás caso una caliza, es una roca bioqu í mica.
’ A\ '
\/ /
II característico de las rocas sedimentarias ( ver fig. 8-1 ) . Aunque pueden distinguirse los dos grupos generales de
rocas sedimentarias -detrí ticas y qu í micas-, la mayor parte
Rocas
sedimentarias
ñ
. i -}- L o -:
¿fe '
Aproximadamente el 75 por ciento de las rocas expuestas
en la superficie de la Tierra son sedimentarias, o rocas meta-
de ellas son mezclas de los dos tipos. Por lo com ú n encon - 0
>I /
' /,
mórficas derivadas de aquéllas. Sin embargo, las rocas sedi- j tramos que una roca formada qu ímicamente contiene cierta A
i» mentarías representan sólo alrededor del o por ciento en * cantidad de mateiial detiitico. Asi, las rocas predominante
mente detr íticas incluyen algo de material que ha sido de-
-
IOO
volumen de los 15 kilómetros exteriores del globo. El otro
95 por ciento de las rocas en esta zona de 15 kilómetros, son positado qu í micamente.
.
FIG 8 1 - o fueron alguna vez rocas í gneas. La cubierta sedimentaria Los geó logos emplean varios t é rminos para describir el me- PORCENTAJE DE
mmi
AFLORAMIENTO
El río Colorado, visto desde Dead Horse dio en el que se acumul ó originalmente un sedimento. Por Rocas
Pointy Utah. La erosión ha dejado al resulta apenas tan gruesa como la orilla de una pluma donde 1 sedimentarias
ill descubierto estas capas horizontales de rocas recubre las rocas ígneas de las Adirondakes y de las Rocallo- ejemplo, si una caliza contiene f ósiles de un animal que se 7S
¡fií hj sedimentarias que var ían en edad del sas. Eu otros lugares tiene miles de metros de espesor. En la sabe solamente vivió en el mar, la roca es una caliza marina .
'
l ;
pensihdnico ( que finaliz ó hace unos 280
millones de a ños ) al triásico ( que terminó región del delta del r í o Mississippi las perforaciones petrole - El adjetivo fluvial , derivado de la palabra latina que significa
BBl hace unos 180 millones de años ). ras lian cortado m ás de 6,700 metros de corteza sin haber |
“ r ío” , se aplica a las rocas formadas con los depósitos sedi -
Las pendientes abruptas se forman en
encontrado más que rocas sedimentarias. En la cuenca del l mentados por un río. El término eólico , derivado de Eolo,
*
Foto por William C. Bradley . r í o Ganges, en la India , se ha estimado el espesor de los de j - dios griego del viento, describe las rocas formadas por ma-
terial depositado por el viento. Las rocías formadas po'r los
pósitos sedimentarios entre 13,700 y 18,300 metros \
;
depósitos de un lago se llaman lacustres , tomando el término ELI
I
FORMACION DE TAS ROCAS SEDIMENTARIAS |/
Ü de la palabra latina , que significa “ lago” . Rocas ígneas
25
i’ Sin embargo, las principales divisiones de las rocas sedi-
En el cap í tulo 6 vimos que las rocas ígneas se consolidan a /! mentar ías, tomando en cuenta el origen del material, son las
partir de un material fundido, originado en alg ú n lugar bajo í detr
íticas y las qu ímicas y, como veremos más adelante, ellas
la superficie, bajo las altas temperaturas y presiones all í exis constituyen las dos divisiones m ás importantes en la clasifi- ' >' l A' '/ s
/
A /\ \
tentes. En contraste, las rocas sedimentar ías se forman a las cacion de las rocas sedimentarias , 0
mucho m ás bajas temperaturas y presiones que prevalecen ( B
en o cerca de la superficie de la Tierra . Sedimentación
•
.
5 - FIG 8 2
El proceso general por el que se asienta el material que Grá ficas que muestran la abundancia relativa
Origen del material de las rocas sedimentarias tj de las í gneas.
..
ííí
i rorma las rocas se llama sedimentación o depósito. Los facto- La grá fica A indica que la maijor parte
¡es ( 95 por ciento ) de los 15 kiló metros externos
El material que constituye las rocas sedimentarias se oiigina ; qUe regulan la sedimentación son f áciles de visualizar
de dos maneras. Primero, los depósitos pueden ser acumula- f Para tener cualquier depósito, necesariamente debe haber de la Tierra está constituida de rocas
í gneas y que tan sólo una pequeñ a parte
dones de minerales y rocas derivados bien de la erosió n <ic j algo que depositar, lo que quiere decir que debe existir una ( 5 por ciento ) es sedimentaria. En contraste ,
¡a grá fica B muestra que la extensión
rocas existentes o de los productos mtempenzados de estas f fuente de sedimentos. Se necesita también algú n medio para superficial de las rocas sedimentarias en la
rocas. Tales depósitos se llaman detrí ticos ( derivado de » j
: LB
l
transportar este sedimento; y finalmente, debe disponerse de .
En cualquier caso, cuando el material rocoso ha sido iopi y pueden interactuar en muy diversas formas. Consecuente-
temporizado, est á listo para ser transportado a algú n lugar ) mente, el modo en que se efect úa la sedimentación y los se-
de acumulación; su movimiento se efectúa normalmente de I dimentos que de ella resultan difieren notablemente de una
un nivel alto a uno inferior. La energí a para este movimiento j situación a otra ( ver las figs. 8-3 y 8-4 ) .
es proporcionada por la gravedad , que hace posible no sólo i Piénsese, por ejemplo, en las diferentes maneras en que
el proceso de movimiento de masa , sino la actividad de los f ; se asientan los materiales que lleva el agua . Un arroyo de
agentes de transporte tales como el agua de las corrientes | y i monta ñ a , angosto y rá pido, puede depositar arena gruesa y
el hielo de glaciar. Si la gravedad desarrollase libremente su| | grava a lo largo de su fondo. Pero más adelante, corriente
trabajo sin oposición , desde hace mucho tiempo habr ía refjj abajo, a medida que el valle se ensancha , la misma corriente
ducido los continentes a masas terrestres suaves y bajas. Pero 1 puede derramarse sobre sus bordes y esparcir limo y lodo
oponiéndose a la acción niveladora de la gravedad est á n las sobre el terreno de los alrededores. Un lago proporciona un
energías dentro de la Tierra, que elevan los continentes y f ambiente diferente que varía , desde el delta , en la desembo-
partes del fondo del mar ( ver capí tulo 16 ) , Al exponer cons- cadura de la corriente, al fondo profundo del lago y a las
tantemente nuevas á reas de la superficie de la Tierra al in- 1:
temperismo, los movimientos de esta clase aseguran un con
tinuo abastecimiento de material para la formación de rocas ;
-^ —
grandes cuencas de sedimentación también difieren el me-
—
zonas someras y arenosas de las costas. En los océanos esas
dio y la sedimentación de la laguna salobre de la zona de
sedimentarias. mareas, a la pendiente de la zona de rompiente, a las amplias
El intemperismo de las rocas existentes aporta tanto los plataformas continentales y a las profundidades oceá nicas.
sedimentos detríticos como el material soluble que m ás tarde gj
se convierte en depósitos qu ímicos. La naturaleza de la roca J Composici ó n mineral de las rocas sedimentarias
que proporciona el material sedimentario tiene un efecto so- Las rocas sedimentarias, como las í gneas y las metamó rficas,
bre la naturaleza de los sedimentos y, por consiguiente, sobre| I son acumulaciones de minerales. En las rocas sedimentarias,
las rocas que se forman a partir de ellos. Por ejemplo, el ma- los tres minerales m ás comunes son la arcilla, el cuarzo y la
.
FIG 8-3 terial derivado de una meseta de granito difiere del material calcita, aunque , como veremos más adelante, algunos otros
El medio de esta tranquila laguna cerca
de Lexington, Massachusetts, favorece
erosionado de una planicie de caliza. Adem ás, el tipo de in- f minerales son importantes en ciertas localidades.
el depósito de sedimentos de grano fino , temperismo efectuado influye también en el tipo de sedi- ; Es rara la roca sedimentaria constituida por un solo mine-
principalmente fango. Compárese con mentos que se desarrollan. De esta manera , el intemperismo [ ral, si bien, éste puede predominar. La caliza, por ejemplo,
. -.
la fig 8 4 Foto por Sheldon Judson. quí mico de una masa gran í tica produce arcilla , sales solu- se compone principalmente de calcita, pero aun la caliza m ás
bles, óxidos de hierro y sílice; pero el intemperismo mecánico pura contiene pequeñas cantidades de otros minerales tales
de la misma masa gran í tica produce fragmentos de granito J como arcilla o cuarzo. Los granos de muchas areniscas son
roto y granos del cuarzo original, de feldespatos y de los g. predominantemente cuarzo, pero el material cementante que
minerales ferromagnesianos que integran el granito. : * los une puede ser calcita , dolomita u óxido de hierro. En
SU.
:
M éTODOS DE TRANSPORTE. El agua
—
en las corrientes y en
los glaciares, en el subsuelo y en las corrientes oceá nicas es| —
¡
¡
general, podemos decir que la mayor parte de las rocas sedi-
mentar ías son mezclas d¡e dos o m ás minerales.
el principal medio de transporte de material de un lugar a
| ARCILLA. En el capitulo 7 se describió cómo el intempe
otro. Los deslizamientos de tierra y otros movimientos impe- nsmo de los silicatos, particularmente los feldespatos, da lu-
-
lidos por la gravedad , desempeñan tambié n su papel , corno | gar al desarrollo de las arcillas; éstas pueden ser incorporadas &
lo hace el viento, pero veremos estos procesos con m ás detalle i a las rocas sedimentarias para formar por ejemplo, un cons \
en los capí tulos del 10 al 15. tituyente importante de la lodolita y de la lutita. El examen
- V <
.
FIG 8 4-
-->
Expuesto al ataque directo del oleaje
del mar, el medio de esta costa acantilada
de California propicia el depósito de arena
PROCESOS DE SEDIMENTACIó N
—
rial formado por minerales y fragmentos de roca se deposita J
— -
í S:
. El material detr í tico mate |Jí/
- de depósitos marinos antiguos y recientes demuestra que las
artillas caolinita e illita son las m ás comunes en las rocas
sedimentarias y que las montmorillon í ticas son relativamente
,*r x
í ¿SL“ “ •
es | encontra mos »
tructura cristalina . cuando sido el n
tana, pudo haber 0 maS bie
La sí lice se encuentra igualmente en las rocas sediments¡|
r ías en una forma llamada criptocristalina . Este término ( del I
g
griego kryptos , ‘‘oculto” , y cristalino ) indica que la estructura f
cristalina de este tipo de sílice es tan fina que no se la puede ]
que el qu
cjón en la
í mico
roca .
el que permitiera
°
c men
originalm
^
ent
*e su meorpora"
h que rellena las grietas de la roca. y dos perí odos posteriores de depósito
Foto por E . C . Bierwagen. cabeza el “ intemperismo qu í mico” , en el cap í tulo 7. que se origina a partir inorgánico. Foto por E . C . Bierwagen.
i i
:
W
m
112 ROCAS SEDIMENTARIAS de un depósito de arena transportada por el viento, por eje , clásticas se grueso describen como de grano fino, de grano medio ROCAS SEDIMENTARIAS 113
pí o, en la que todas las part í culas son aproximadamente ^ de grano . Una textura de grano grueso tiene granos
0.15 a 0.30 mm. de diámetro. de mas ís de 5 mm de diámetro y una textura de grano fino
.
1 mm . de di á metro.
Las rocas sedimentarias de origen qu ímico pueden mostrar! los tiene de menos de
tambié n una textura clástica. Una roca formada predominar , i
teniente de fragmentos de concha de un depósito bioqu í mico* J Lit í firacíon
tiene textura clástica que es tan f á cil de reconocer como § f Los procesos de litificación convierten a los materiales sin
de la roca formada por depósitos de arena. forman rocas, en roca consolidada , coherente.
Uno de los factores más usados en la clasificación de las I
consolidar, que se deriva de las palabras griega y latina que sig-
El t é rmino
rocas sedimentarias es el tama ño de las part ículas individua, I nifican “ roca ” y “ hacer” , respectivamente. En la siguiente sec-
les. En la práctica expresamos el tamaño de una part ícula ! cion trataremos las diversas maneras como se litifican los
en función de su volumen , peso, o superficie. Cuando habla, depósitos sedimentarios.
mos de “ diá metro” , suponemos que la part ícula es esf érica,
pero es muy raro que cualquier fragmento en una roca sedi- ! CEMENTACIó N. En la cementación , los espacios entre las
TABLA 8 1 - mentar ía sea una esfera verdadera. En geolog ía , el t é rmino ¡ part ículas individuales de un depósito sin consolidar se re-
Escala de Wentworth relativa al tamaño • se refiere simplemente al di á metro que tendrí a una part ícula } llenan con alg ú n agente que los liga . Entre los muchos mi-
de las partí cidas de los sedimentos clásticos nerales que sirven como agentes cementantes, los m ás co-
de forma irregular si fuera una esfera de volumen equiva f
lente. Obviamente, resultar ía muy tardado, si no imposible, t
- munes son la calcita, la dolomita y el cuarzo. Se incluyen
én otros como el óxido de hierro, el ó palo, la calcedonia ,
PARA OBTENER
tratar de determinar el volumen de cada grano de arena o ! tambi y la pirita . Aparentemente, el material cemen-
TAMA Ñ O MAS EQUIVALENTE
de cada guijarro de una roca y convertir esas medidas para j la anhidrita
GRANDE INME -- APROXIMADO
es llevado en solución por el agua que pereda a través
ESCALA DE WENTWORTH DIATO, MULTl EN PULGA - obtener el diá metro apropiado. As í, los di á metros que usamos ¡ tante espacios abiertos entre las part ículas del depósito A
para las part ículas son tan sólo aproximaciones de sus tama 1 de ios
.
TAMA Ñ O FRAGMENTO
Canto
PLIQUE POR DAS
Arena 32 \
1/16 mm .0025 pulg. se usa para describir ciertos minerales. Para evitar confusión »
Limo 16 debemos referirnos siempre al “ tama ño de arcilla ” , o al “ mi- COMPACCIóN Y DESECACIóN. En un depósito clástico de gra -
> .06 mm neral arcilla” , a menos que el contexto no deje lugar a dudas f no fino, con part ículas de tama ño de limo y arcilla , los espa-
,
1/ 256 mm PH
.00015 pulg. Puesto que la determinación del tama ño de las partículas I cios porosos son generalmente tan pequeñ os que el agua no
Arcilla .004 mm
requiere el uso de equipo especial, el procedimiento normal- J puede circular libremente a través de ellos. Por ello es muy
Modificada seg ún C. K. Wentworth, “ A Scale of mente se lleva a cabo solamente en el laboratorio. Al exami- :: poco el material cementante que se abre camino entre las
partículas. Sin embargo, los depósitos de este tipo se litifican
f
Grade and Class Terms for Clastic Sediments” , nar ejemplares en el campo, por lo com ú n basta con una esti-
/. Geol , XXX ( 1922), 381. mación aproximada, basada en un examen cuidadoso. por otros dos procesos : compacci ón y desecación .
i En la compacci ón, el ‘espacio poroso entre los granos in-
das por procesos qu í micos, tienen una textura no-clastica en
la que los granos est án entrelazados. Estas rocas tienen casi la ^
TEXTURA NO CLáSTICA . Algunas rocas sedimentarias forri | dividuales se reduce gradualmente por la presió n de los sedi
montos superyacentes o por presiones resultantes de movi-
miemos de k Ticrra Los depósitos gruesos, de arena y grava
>
misma apariencia que las rocas ígneas de textura cristalina/ sufren alguna compacción , pero los de grano fino de limo \
-
En realidad , la mayor ía de las rocas sedimentarias con tet ó y arcilla responden con mucha mayor
rapidez. A medida que
tura no clástica tienen una estructura cristalina , si bien algiK|/ las part í culas individuales se comprimen , se reduce el espesor
ñ as de ellas, tales como el Opalo, no la tienen. life del depósito y aumenta su coherencia. Se calcula que los de
Los cristales minerales que se precipitan de una solución, ; ; pósitos de part ícldas del tama ño de arc¡naj sepultados a pro--
-
acuosa son, por lo com ú n, de tama ño muy peque ño. A cau?| > fundidades de 1,000 metros, han sido compactados en alrede-
de que el fluido en el que se forman tiene muy baja densi j dor d @() por ciento de su volumen original ,
dad , usualmente se asientan con rapidez y se acumulan en| En ^la desecación, es forzada a salir el agua que original-
el fondo como lodo. Com ú nmente, bajo cl peso de sedimentos , «tente Uenaba los espacios porosos de los depósitos de arcilla
adicionales, el lodo se compacta mas y mas. Después de esto|
el tama ño de los cristales individuales puede comenzar a cre
,
-
y j¡mo asentados En a|gunos casos esto cs cI _
resultado di
| recto de la compacción ; pero la desecación también tiene
cer. Su crecimiento puede ser provocado por el aumento « ¡ lugar cuando un depósito queda expuesto al aire y el agua
presión, dando lugar a que los granos favorablemente oriefl $e evapora
*
^
.
tados crezcan a expensas de los vecinos menos favorablemcn *
, .
te orientados. O bien , los cristales pueden crecer a medid11 ; m:^ IZACION. La cristalización de ciertos depósitos qui-
que se les suma materia mineral de la contenida en las soto i . .'
.es
’ en 51 misma , una forma de litificación. La cristaliza -
^
ciones atrapadas en el lodo original. En cualquier caso| ,| UrVe también para endurecer los depósitos asentados por
á nicos de sedimentación. Por ejemplo, dentro de
nTOc mec
roca resultante está formada de cristales, entrelazados, y p*}i
senta una textura similar a la de las rocas ígneas cristalina ¡ 5 eP J Pueden cristalizar nuevos minerales, o los cris-
e os minerales existentes pueden aumentar de tama ñ o.
De acuerdo con el tama ño de los cristales, las texturas \ f&
l
i
i
Pi
: 114 ROCAS SEDIMENTARIAS Algunas veces los nuevos minerales son producidos por rea< >ión entre el conglomerado, que es de grano
intermedia ROCAS SEMMENTARXAS 115
::
ciones qu í micas entre materiales coloidales amorfos en lodos
de grano fino. Todavía no se sabe bien cómo y cu á ndo
ISieso granos var ía de una arenisca a otra, al hablar
t ma ño de los
rren estas reacciones; pero el hecho de que se hayan formaff¡ ¿e ellas, se dice arenisca de grano grueso, de grano medio
cristales nuevos despu és de la sedimentación inicial del | < j¡ de grano fino.
pósito, arroja m ás luz a medida que se hacen estudios dl Jf ¡ V
. Cón mucha frecuencia, pero no siempre, los granos de una
Hades de las rocas sedimentarias. M ás a ú n, parece claro ÉSi
esta cristalización promueve el proceso de litificación, par lí
arenisca está n constituidos por el mineral cuarzo. Si los mi-
, la are-
rales predominantes son el cuarzo y el feldespato
ticularmente en los sedimentos m ás finos. ñ isca se llama
arcosa , palabra francesa que se aplica a la roca
í:
formada por la consolidaci , , , del
ón de los materiales .derivados
TIPOS DE ROCAS SEDIMENTARIAS r intemperismo mecá nico de un granito. Otra variedad de are-
nisca, llamada grauvaca, se caracteriza por su dureza y
su
Clasificación
color oscuro y por tener granos angulares de cuarzo , feldes -
Habiendo examinado algunos de los factores implicados pato y peque ñ os fragmentos de roca en una matriz de par -
la formación de las rocas sedimentarias, estamos en ihejod t ículas de tama ñ o de arcilla.
situación de considerar una clasificación para esta familia de
rocas. La clasificación que se presenta en la tabla 8-2 repre.
LODOLITA Y LUTITA. Las rocas detrí ticas de grano fino com -
puestas de part ículas de tama ñ o de arcilla y de limo ( menos !
SUS
de 1/ 16 de mm. de diá metro) son llamadas lodolita o lutita.
Vx
senta ú nicamente uno de los muchos esquemas posibles, pero
resultará muy adecuada a nuestros fines. Nótese que existen i
IfltifSlif
.
F1G 8-8 Las lodolitas son rocas de grano fino con aspecto macizo o mmm
Un conglomerado es una grava litificada, — —
dos grupos principales el detrí tico y el qu í mico , basados
en el origen de las rocas, y que la categor ía qu í mica se suU
de bloque, en tanto que las lutitas, también de grano fino,
compuesta de guijarros redondeados , como se se. parten en lajas laminadas m ás o menos paralelas a la es-
ve en este ejemplo. Los guijarros más
grandes tienen unos 5 centí metros de largo . divide después en inorgá nica y bioqu í mica. Todas las rocasf tratificación . Las partículas de estas rocas son tan peque ñas
.
Foto por G . K Gilbert, U S Geol Survey. .. . detr í ticas tienen textura cl á stica , en tanto que las químicas
pueden tenerla cl ástica o no-cl ástica . Nosotros usaremos| ^ que es dif ícil determinar la composición mineral precisa de
I la lodolita y la lutita . Sabemos, sin embargo, que contienen
i
tama ñ o de las partículas para subdividir las rocas detríticas no sólo minerales arcillosos, sino tambié n part í culas del ta -
m y la composición para subdividir las rocas qu ímicas. ma ñ o de arcilla o de limo, de cuarzo, feldespato, calcita y
% A
, ¿r dolomita , para mencionar sólo unos cuantos.
I,
*
C. YÍY
Rocas sedimentarias detrí ticas
ÜH Rocas qu ímicas
CONGLOMERADO. Un conglomerado es una roca detr ítica|
.í :!: i CALIZA . La caliza es una roca sedimentaria formada prin -
•
f J Ás
constituida por fragmentos más o menos redondeados, de los!
cuales una proporción apreciable son del tama ño de gránutó g cipalmente del mineral calcita , CaCOj, depositado bien por
, s !y i
fe". '
( 2 a 4 mm . de diámetro ) , o más grandes. Si los fragmentos! procesos orgánicos o por procesos inorgá nicos. La mayoría
son más angulares que redondeados, la roca se llama brechá¡ de las calizas tienen una textura clástica , pero las texturas
'
- -
FIG. 810
V •
ti
Otro tipo de conglomerado es la tilita, roca formada por los ¡ no-clásticas, particularmente la cristalina, son comunes. Capas alternantes de arenisca y conglomerado
materiales depositados directamente por el hielo de glaciarJ Las calizas formadas bioqu í micamente son creadas por la que buzan hacia tierra en los acantilados de
m acción de plantas y animales que extraen carbonato de calcio Lobos State Park , cerca de Carmel,
( ver el cap í tulo 13 ) . Las part ículas grandes de un congloj California. Foto por Sheldon Judson.
.
FIG 8-9 merado son , por lo com ú n, fragmentos de roca , y las part ícu¡ « del agua en que viven. El carbonato de calcio puede ser
La brecha es una grava litificada que las más finas son generalmente minerales derivados de rocasp: incorporado al esqueleto del organismo o precipitarse direc-
contiene muchos fragmentos angulares. preexistentes ( ver las figs. 8-8 y 8-9 ) . tamente. En cualquier caso, cuando el organismo muere, deja
Este ejemplar es del oriente de Nevada. una cantidad de carbonato de calcio y, con el transcurso de
Los cuadros del fondo tienen 5 cm. de lado . ARENISCA. La arenisca est á formada por la consolidació n! un largo período de tiempo, se pueden formar gruesos depó-
Ejemplar del Museo de Historia Natural
de la Universidad de Princeton . de granos individuales del tama ñ o de la arena ( de 1/ 16 mro| sitos de este material. Los arrecifes antiguos y modernos son
Foto pur Willard Starks . a 2 mm . de di á metro ) . La arenisca ocupa, entonces, una po| *
i:
m
Im 11 < > ROCAS SEDIMENTARIAS nantiales y grutas, si bien la cantidad total de roca
formal . je ]a formación Castille que tiene un espesor m áximo de
, ROCAS SEDIMENTARIAS 117
así, es insignificante.. Cuando las rocas calcicas sufren inte® C 1,200 metros. En el centro del estado de Nueva York
perismo qu í mico se produce bicarbonato de calcio, Ca ( HC03) asi
m gruesos depósitos de sal de roca, y en el centro del de 100
en solució n . Si el agua se evapora en cantidad suficientJgB itfchigan
• i'
^ -
caPas de sa de roca Y Yes0 Algunos depósitos
si la temperatura se eleva o disminuye la presión, se precij f eVaporí ticos se explotan por su contenido mineral, y en cier-
i í
r-
^
calcita de esta solució n . Por ejemplo, la mayor parte del j[É ( á reas, particularmente en los estados de la costa del Gol-
venino y de las estalactitas y estalagmitas, se forman en J f0aS los depósitos de sal han empujado hacia la superficie, para 75
— Lutita,
arenisca y
^
cavernas por la evaporació n de agua que lleva carbonato ! formar domos de sal que contienen importantes reservas co- caliza, 99%
ealcio en solució n . La t u f a ( de la palabra italiana que sig® tercíales de petróleo ( ver el cap í tulo 22 ) .
fica “ roca suave” ) , es una caliza porosa y esponjosa, que se 5
CABBÓ N. El carbón es una roca compuesta de materia com -
i r
forma por la precipitación de calcita del agua de los ríos| 1 bustible derivada de la descomposición parcial de plantas. í I T
I
manantiales. I podemos considerar al carbón como una roca sedimentaria
50
Aun cuando los geó logos entienden los procesos morgá«¡. i bioqu ímicamente, aunque algunos geó logos prefie-
eos por medio de los cuales se precipita caliza del agua dulce, i formada que es una roca metam ó
pensar rfica, porque pasa a tra -
no est á n en cambio seguros de la importancia de estos pro. ; ren de varias etapas ( ver “ Antracita” , en el
vé s cap í tulo 18 ) . Todas las
cesos en la precipitación a partir del agua de mar; incluso proceso de la formación de carbón se inicia con una 25
algunos observadores dudan sobre si dichos procesos operan : El dem á s rocas
ón de restos de plantas en un pantano. Esta acumu - sedimentarias,< 1%
del todo. En el fondo de los océanos modernos y en las rocas iicumulaci ón se conoce como turba, un depósito
formadas en los mares del pasado encontramos, sin embargo, laci , en el cual las estructuras vegetalescaf é, suave, es-
ponjoso son f áciles de
peque ños granos esferoidales llamados oolitas , de tama ñ o de i ,
econocer . El tiempo, junto con la presión producida por se - O =
n
arena y a menudo compuestas de calcita. Se cree que estos¡ , ,]tamiento profundo y algunas veces por
granos se formaron por la precipitación inorgánica del carM ‘norteza, transforma gradualmente la materia movimientos de la .
FIG 8 13 *
bonato de calcio del agua de mar. El té rmino oolita viene |¿n. Durante este proceso el tanto por ciento á nica en car-
org La lutita , la arenisca y la caliza forman
,
de la palabra griega que significa “ huevo” , ya que una acumu. ; menta a medida que los hidrocarburos vol á tilesdey carbono au-
alrededor del 99 por ciento de las
rocas sedimentarias . Las restantes rocas
lació n de oolitas se parece a una hueva de pescado. Las sec- : cxpuIsados del depósito. Los carbones se el agua son sedimentarias representan solo el l por ciento .
ciones a través de las oolitas indican que muchas de éstas, (]0 con el tanto por ciento de carbono que
clasifican de acuer-
i!
i contienen . La tur-
i íí • aunque no todas , han crecido alrededor de un grano mineral |)a, con la menor cantidad de carbono, es
el grado m ás bajo; 75
;! .v. i2 o de un pequeño fragmento de concha que act ú a como nú. siguen ja lignita o carbón caf é, el carbó n
eleo. Algunas calizas está n formadas principalmente de ooli- y finalmente la antracita o carbón duro, el de mayoro suave bituminoso
tas. Una de éstas , muy usada en la edificación , es la llamada nido de carbono, conte-
i FIG. 8- 12 Lutita ..
i
• >
Afloramiento de capas casi horizontales caliza de Indiana o espergenita . 46%
de la lutita Pierre de edad cret ácica ( per í odo 50
J
DOLOMITA. Al examinar el mineral dolomita , CaMg ( CC>3 )V Abundancia relativa de las rocas sedimentarias ¥
que terminó hace unos 65 millones de a ños ) -
en la Reservació n India de Fort Totten, en mencionamos que, cuando se presenta en concentraciones su- { La arenisca, la lodolita , la Arenisca
i
lutita y la caliza constituyen al - 32%/
el centro -oriente de Dakota del No He . ficientemente grandes, forma una roca llamada también do- rededor del 99 por ciento de todas
Las astillas de lutita en pequeñas lajas lonñ ta o dolom ía. El origen de la dolomita -tanto el mineral i De éstas, la lodolita y la lutita son las rocas sedimentarias Caliza
i
•
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i -
í
kL
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WOc-r - '
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c-
depósito tenga la apariencia de una secci ón
t
na
^HI
ROCAS SEDIMENTARIAS
herficie del de
* Ü a travé un gran panal. Puede venir, eventualmen-
11 s
°rK depósito y sepultar el primero. Si los depósitos se
-
i': C Corriente
mm
íi
V
*
. rX X M / ‘
£ é n las
se conservan en las rocas sedimentarias
as rfzaduras que condiciones que prevalecían cuando un
<
Indican tambi dado fue depositado originalmente. Por ejemplo,
:; i
S
.|aS rizaduras son simétricas, con bordes agudos o ligera -
mente redondeados , separados por depresiones
. seguros ,
redondeadas
f
í , n ís suavemente , estamos casi de que se formaron por
.
t
^
( movimiento
de vaiv
rizaduras
agua
son
, tal como
de una costa fuera de la zona de rompiente. Estas ondula -
, do oscilaci
sucede a lo largo
ó. n ,( ver la fig. 8-19 ) . Si ,
.
é tricas, cabe suponer
Etapa de relleno .
i
Nodulos, concreciones y geodas .
i- Muchas rocas sedimentarias contienen estructuras formadas
i
Etapa de truncamiento
i
FIG. 8 15 Ahora, las lluvias torrenciales o la fusión de la nieve pueden solamente después de que el sedimento original fue deposi - .
FIG 8- 17
ñ Arenisca estratificada de edad misisí pica hacer que los ríos crezcan repentinamente y levanten mate I fado. Entre éstas se encuentran los nodulos, las concreciones
*
Secuencia en la formación de estratos
i:
( que terminó hace unos 290 millones de años )
a lo largo de Beaver Creek Canyon rial más grueso, tal como arena , del lecho del r ío. Este ma f y las geodas.
* inclinados por la “ limpia” y relleno alternados
en las monta ñas Big Belt de Montana , . terial ser á transportado y vaciado de golpe en la bah ía. AH! Un nodulo es un cuerpo irregular, de superficie abultada , .
de una corriente Primero una corriente
; i. .
Las capas de roca son prácticamente formado por materia mineral cuya composici ón difiere de la turbulenta limpia una depresión de los
Li se asienta en el fondo y cubre el limo depositado previa *
depósitos sin consolidar Al decrecer la .
horizontales y est án separadas una de otra de la roca sedimentaria en la cual fue formado. Generalmente
por planos de estratificación . Foto por mente. El plano de contacto entre el lodo y la arena repre * velocidad del agua, la corriente comienza a
V1
5 Walcott, U S . Geol. Survey . . senta un plano de estratificaci n.ó Si posteriormente el limo yace paralelo a los planos de estratificación de la roca enea- llenar la depresión con capas inclinadas.
Redibujaao con permiso de Robert R .
y la arena se litifiean y convierten en lutita y arenisca, res * jonante y en ocasiones algunos nodulos adyacentes se unen Schrock, Sequence in Layered Rocks
FIG 8-16 . pectivamente, el plano de estratificació n persiste en la roca| para formar una capa continua. Los nodulos tienen unos 30 ( Nueva York : McGraw Hill -
Estratificación inclinada en una arenisca Book Company , ¡948 )> p . 280 .
¡: pobremente cementada . Advi értanse las capas sedimentaria. De hecho, marca un plano de debilidad a lo cent ímetros en promedio a lo largo de su dimensión mayor.
f
largo del cual la roca tiende a romperse.
:
horizontales separadas , por otras más gruesas
i La sílice, en la forma de calcedonia o pedernal, es el prin-
en las que la estratificaci ón está inclinada Aun cuando los sedimentos son depositados normalmente | cipal componente de estos cuerpos. Por lo com ú n se les en-
hacia la derecha . El martillo da idea
de la escala. Foto por David A. De Vries. en capas horizontales, algunos se forman a ciertos á ngulos j euentra en la caliza o la dolomita . Se cree que la mayor ía .
FIG 8 18 -
•
- .**
» • con relaci ó n al horizonte. Por ejemx> lo, las capas depositadas de los n ódulos se formaran
cuando la sí lice sustituyó algunos Patrón poligonal de las grietas que se forman
!:
i
.
a},- -,
'
r/ L sobre la superficie de las dunas de arena está n inclinadas materiales del depósito original; sin embargo, otros pueden en el lodo como resultado de la desecación
- v
( ver “ Depositación” en el cap í tulo 14 ) , y as í sucede con las estar formados de s ílice depositada al mismo tiempo que las
de sedimentos modernos de grano fino
en un lago- playa en Nevada La naca ja de .
capas que se forman en los deltas. Un tipo especial de estra * capas principales se sedimentaron. bolsillo de la fotograf ía da idea de la
tificación inclinada es el creado por el vaciado y relleno! Una concreción .es una concentración local del material \ .
escala Foto por William C . Bradley.
m alternante del lecho de un r í o. Si la velocidad de la corriente cementante que ha litificado un depósito, para convertirlo
roca sedimentaria.
y¡
: AL
r* aumenta en alg ú n punto a lo largo de su curso, barre, pO
así decirlo, la arena y grava del fondo, y se la lleva . Pos
riormente , si la velocidad decrece, la depresión se llena otj|
|
|
|
í /
^.
f .xfb as concreciones var ían en tama ño desde una fracció n de
|r cent ímetro hasta uno o m ás metros en su dimensión má xima ,
vez con sedimentos que tienden a depositarse en c a p a s m a y o ría tienen forma esf é rica o de disco, aunque al-
-
•
s
di ñ adas ( ver las figs. 8-16 y 8-17). | |- &l*znasn adoptan formas fantásticas y complejas. Por alguna
X gj
. ¿C "
*
Grietas de desecación y rizaduras
I ^
> cuando el material cementante penetra en el sedimento
; un consolidar, tiende a concentrarse alrededor de un pun -
Las rizaduras son las peque ñ as ondas de arena que se des *: as tral com ú n o a lo largo de una l í nea central com ú n ,
0
*
-
^
arrollan com ú npiente sobre la superficie de una duna de are ! ... Partículas de la concreción resultante se cementan m ás
na , a lo largo de una playa , o en el í ondo de una corriente 1 demente que las de la roca que las rodea. El material
. - *
>•
IX; mm t
Las grietas de desecació n son comunes en la superficie seca ¡ Cementgnte, por lo com ú n, consiste en calcita , dolomita, oxi-
de! lodo que queda expuesto cuando bajan las aguas de «n j jai° de hierro o sí lice, es decir, los mismos materiales cemen-
r ío. Con frecuencia estos rasgos quedan preservados en h ! es clue encontramos en las rocas sedimentarias.
m roca sólida y nos proporcionan indicios de la historia de geodas, que adoptan la forma de ojo m ás que las cori-
V
-
t
-
í.\:
m .
t f t ‘
*- •
ii
i' fl
la roca .
Las grietas de desecaci ó n aparecen cuando un dep ó sito
de limo o de arcilla se seca y se encoge ( ver la fig. 8-18 ) . Las ced
Pericas ndones
,
y los nódulos, son estructuras huecas, toscamente
que varían en diá metro desde unos cuantos cent
rwos a más de 30 ( ver fig. 8-20 ) . Una capa externa de calí--
°n¡a está revestida interiormente con cristales que se pro-
í
r:
í.-
i? grietas delimitan á reas burdamente poligonales, haciendo q^e
ít
í
i r : .
i í:
Wh' . * - Y .“ * •f
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••
•
•
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A
:
ÍL
120 ROCAS SEDIMENTARIAS yectan hacia el centro del hueco. Los cristales, a menudo
i ROCAS SEDIMENTARIAS 121
formados perfectamente, suelen ser de cuarzo, aunque tarn li §¡Lg
bien se han encontrado cristales de calcita y dolomita y, m ás ¡
* ¿
! m
raramente, de otros minerales. Las geodas se encuentran fre. | í
i
cuentemente en la caliza, pero pueden hallarse también en 1
la Iutita. $ fe
ti
¿Cómo se foi ma una geoda? Primeramente se desarrolla
*
9
\ £ m ü
una cavidad llena de agua en un depósito sedimentario, pro { ij
bablemente como resultado de la descomposición de alguna - m ti w. > 3
él
mm
m
planta o animal sepultado en los sedimentos. En cuanto el| || ¡ V .'
3i
FIG. 8-21
i»
¡ an *. m Esta laja de caliza se distingue por la
ma alrededor del agua una pared de sílice de consistencia| | j| *
e «
¡i La escala está dada por los cuadros del
fondo, que tienen 5 cent í metros de lado .
sal mayor que la de fuera. Con el fin de igualar las concen i
traciones, se opera una lenta mezcla de ambos l íquidos a tra|
- !
WÉ®
¡
"7 m Y
Ejemplar del Museo de Historia Natural
de la Universidad de Princeton .
Foto por Willard Starks.
| i \ \
vés de la pared de s ílice o membrana que los separa . Este §¡
proceso de mezcla es lo que se llama osmosis. Mientras la da, ya se tratara de un mineral o alguna forma dif ícil de ex- . -
FIG 8 22
Algunas rocas sedimentarias est án formadas
acción osm ótica contin ú a, se ejerce presión hacia el exterior,1\ plicar. Todav ía se la usa ocasionalmente en ese sentido, como de partículas extremadamente finas Esta
de la roca circundante. La cavidad original se expande pau j en la expresión combustible f ósil ( ver el capitulo 22 ) . Hoy .
-
latinamente, hasta que la concentración salina de los líquidos I d ía el té rmino f ósil generalmente significa cualquier eviden -
foto , tomada a través del microscopio
electr ónico, muestra la estructura de una
de dentro y de fuera se equilibran. En este punto se detiene v i cia directa de la vida del pasado — por ejemplo, los huesos de
caliza de edad paleocénica de Zumaya , Espa ñ a
Está amplificada unas 10 , .
FIG. 8-19 la osmosis, cesa la presión hacia fuera y deja de crecer la |¡ un dinosaurio las conchas de una antigua almeja , las impre- Las lí neas geométricas representan 000 veces.
cocolithos
Rizaduras de oscilación en una laja cavidad. A continuación se seca la s ílice de la pared interior| , ¡ siones o huellas de un animal extinto, o la delicada impre- entrelazados en lá minas escalonadas de
de arenisca. La naturaleza simétrica de las calcita que son desarrollados por ciertos
n
:
ondulaciones indica que la corriente se moví a cristaliza, para formar calcedonia , se contrae y se quiebra. | § j sión de una hoja ( ver la fig. 8-21 ) . animales flagelados unicelulares.
alternativamente hacia adelante y hacia
atrás, más que continuamente en una
Si posteriormente', se abren camino al dep ósito algunas 11 Por Ioas,general los f ósiles se encuentran en las rocas sedi- Foto por S . Honjo.
aguas mineralizadas, pueden filtrarse a través de las grietas mentarí aunque a veces aparecen en rocas ígneas o meta-
dirección. Foto por Willard Starks.
de la pared de calcedonia , donde se precipitan los minerales 5 módicas. Son m ás abundantes en la lodolita , la Iutita y la
:
.
FIG 8-20 y los cristales comienzan a crecer en el interior , hacia el cen t|i - Pero también se les halla en arenisca , dolomita y con-
Dos geodas rotas, para mostrar su estructura tro. Finalmente, tenemos una geoda revestida de cristales i glomerado. Los f ósiles constituyen casi todo el volumen de
i
^
^^
s es se Preservan también en depósitos asentados en
Innumerables restos de animales terrestres, tanto
grandesícomo peque ños,
m yW ma
'
^
de inundación y
15 « litaos
! E
H historia detallada
del desarrollo de la vida, como la
If los f ósiles, es
histórica, y no tenemos
propiamente una parte de la geología
tiempo de tratarla aquí, pero en el
m pítulo 9 veremos que los f ósiles son sumamente ú tiles para
i
^
I ? subdivisión del
de la columna geolótiempo
gica.
geológico y para la construcción
sedimentarias
.V¡££:fí Í,;.
^ V. V;: .
i
^ °°
É li
lbifar
examinamo
a tro
a a un
s ej ambiente de depó
ad sobre un área extensa,
sito que existe en un tiem
advertimos que difiere de un
ambiente de agua dulce de un rio cam
*
H
i rzn
I
. I
nes marinas. Pero aun aqu í el ambiente marino cambia, poi jff son diferentes. N ó tese que el lodo y la arena grad ú an una en
— I
f
FIG . 8-23
Caliza z t
I
Diagrama que ilustra un cambio de jacios ejemplo, de aguas someras a aguas profundas; y al cambiar j la otra , es decir, se interdigitan a lo largo de la barra are- n r I
sedimentaria. Los lodos de grano fino el medio, cambia tambi é n la naturaleza de los sedimentos | nosa . Ahora si estos depósitos se consolidan para convertirse T1
i
se depositan en una laguna cercana a la costa;
una barra de arena los separa de los que se depositan . Los depósitos en un medio presentan ca f -J .
en roca, quedan despu és expuestos en la superficie. En este i. L
i r
depósitos de arena que están más allá racter ísticas diferentes de las que muestran los depósitos se 1 caso, encontraríamos finalmente una capa de lutita que gra ~
*
Caliza arenosa
y limosa -?
1 r
de la costa . En este caso la arena ha sido
±
derivada de un acantilado y transportada dimentados al mismo tiempo en otro ambiente. A este cambio —
diia a arenisca esto es, una facies sedimentaria está gra- ¿Hit I
-
i -
T
f T1
1 T
i
por las olas y corrientes marinas. en la “ apariencia” de los sedimentos es a lo que se le llama § duando a otra. 1
T
, TT
1
un cambio en la facies sedimentaria ; la palabra facies se de- Sin embargo , el cuadro no siempre es tan simple. La figura T 1
T
I
i T .
riva de la voz latina que significa “ aspecto” o “ forma ” . 8 24 muestra la distribución de sedimentos costa afuera del
*
T r rt
I
Podemos definir las facies sedimentaria como una acumula - sur de California, donde los sedimentos recientes varían de
FIG . 8-24 , pasando por lodo arenoso a lodo, y constituyendo en
Variaciones en ¡as facies de los sedimentos ci ó n de depósitos que muestran características especí ficas y I arena Caliza
algunos lugares depósitos calcáreos. Donde el fondo del mar lut ítica
modernos costa afuera del sur de California . que grad ú a lateralmente otras acumulaciones sedimentarias
es rocoso , ha habido poca o ninguna sedimentación reciente.
Seg ú n Revelle y Shepard, en Recent Marine
Sediments, Am ., A.vec. Petroleum
formadas al mismo tiempo, pero que exhiben características Si estos sedimentos llegaran a litificarse, resultaría una roca
diferentes. El concepto de facies se usa ampliamente en el FIG. 8 -25
Geol ; ( 19391 V 246 . sedimentaria que variaría de arenisca a lutita arenosa , des- Variación de facies de sedimentos
pu és a lutita y finalmente a caliza. antiguos comprendidos en la formación
Los depósitos sedimentarios antiguos presentan exactamen- Maquoketa en Illinois.
Según E . P. DuBoiSy Illinois Geol . Survey ,
te esta clase de variación en facies. La figura 8-25 representa Report of Investigations 2Vp 105 (I 945j, p. 10.
•
Í -- S la distribución de los tipos de roca identificados en la parte
media de la formación Maquoketa en Illinois. Advié rtase que
los tipos incluyen caliza , lutita, lutita calcá rea y una lutita
calcárea que contiene algo de arena .
RESUMEN
Roca s seclii nCN la rí as. I
? Ii si
: i. :
Cubren el 75 por ciento de la superficie terrestre.
Representan el 5 por ciento de los 15 Km. exteriores de la cor- Üi
i 8S
teza de la Tierra.
Origen del material .
Sedimentos detr í ticos desgastados de las masas terrestres.
Sedimentos qu í micos precipitados a partir de soluciones.
;
£
&
í
l
ls«
mm
mm
i
Depósitos •se dime nt arios. l
Var í an de acuerdo con la fuente del material, con las formas ®1
de transporte y con los m é todos de depósito.
í
El tiempo geológico
Composición . i*
'
!
ü
%^
•
^
' G n dativa de los sucesos en el tiempo
respecto de la his-
humana. Al estudiar la historia de los Estados Unidos,
BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
Pettijohn, F. J., Sedimentary Rocks ( 2* ed. ) . Nueva York: Harper
6c Row, Publishers, 1957.
'
r I
^
ejemplo, es importante conocer que la revoluci
u a guerra entre los estados, y que el l í mite ón precedió
prendida entre estos dos eventos.
entre Canadá
X los Estados Unidos fue establecido en alguna época com
-
Por supuesto, algunas veces, tanto en la historia de la Tie
Shrock , Robert R., Sequence in Layered Rocks. Nueva York gg
|| * ra como en la historia humana , los eventos -
blecer únicamente en términos relativos. Sin embargo esta -
McGraw-Hill Book Company, 1948. se pueden
Williams, Howel, Francis J . Turner y Charles M. Gilbert, Pe - i ros registros llegan a ser cada vez más precisos , mies-
.
trography San Francisco: W. H. Freeman and Co., 1954. l que situamos los eventos en a medida
un verdadero calendario crono-
lógico. Si no
conociésemos la fecha del tratado de límites
entre los Estados Unidos y Canad á, -sabiendo sólo que
fue
£* —
* > entre his dos guerras la colocarí amos entre 1783 y
bl. Desde luego, los registros histó
ricos nos dan la fecha
Verdadera , 1846.
Naturalmente, desearíamos poder precisar la fecha en que
rmm
• 1/
^cedieron determinados eventos geológicos, pero esto ha
125
m
am
mil
i -
EL TIEMPO GEOLOGICO sido imposible, y la exactitud lograda en la determinación (ÉH relación dedeplomo -200 a uranio-238. Esta relación depende
—
EL TIEMPO GEOLOGICO 127
fechas de la historia humana al menos de la que est á escrijl del tiempo desintegraci ón transcurrido. Entonces sabremos
i
—
ta posiblemente nunca será alcanzada en lo que a la |
logia se refiere. Aun la fecha
g¡§ %f
apro teóricamente la edad de un mineral de uranio determinando,
-238 est á n presentes. Así, la
as í , podemos determinar
mada de muchos sucesos geológicos. Aunque puedan carecer
de la precisión de las fechas de la historia humana recientÉI
i-
Tomemos un solo elemento radiactivo para ejemplificar la velocidad de descomposici ón haya sido siempre la misma;
pero si las leyes que gobiernan la energía de las partí culas no
cómo opera este mé todo. Independientemente del elemento f
que usemos, debemos saber qu é productos resultan de su f han cambiado , es razonable suponer que las leyes afines que
gobiernan la velocidad de descomposición tambié n han con-
descomposición radiactiva. Escojamos el uranio-238, 92 Ü f , f
23 í
tinuado inalteradas.
del que se sabe que produce helio y plomo, «¿ Pb 20*1, como i; « i
productos finales. Sabemos, también, la velocidad a la que ; El uranio -238 no es el único elemento utilizable para deter-
el uranio-238 se descompone. Hasta donde podemos deter ! minaf Ia dad de las rocas , hay otros. Pero la idea b ásica es
no la afecta ning ú n I ía misma,° cualquiera que sea el elemento escogido. Si des-
minarlo, esta velocidad es constante y
agente qu í mico o f ísico conocido. La velocidad de descerní- cubrimos un mineral que contiene uno o más elementos ra- \
( met í vos,
estaremos capacitados ( después de hacer un aná li-
-
posición de este elemento radiactivo se expresa en t é rminos
m
de lo que llamamos su media vida -el tiempo requerido poy / cluin
se
)ormóapropiado
ico
el
) para determinar cuá ntos a ñ os hace
. Si el mineral se formo al mismo
* '-v>
;
LL
-Ad V*'
¿y
posiciones de hace unos 150 anos sobre que el tiempo gfiQ, ! "reloj
logico es vasto y que dentro de la historia de la Tierra | cuencia, *
tiempo de sobra para los lentos procesos que aconipagail § posici
g
^
jo radiactivo SQn el argón
,
LQS productos finales de la dcscom.
e calcio.
piroclásticas est á n compuestas principalmente o
proezas o hechos prodigiosos . É- >;SÍrS . alidad de ceniza volcá nica . La biotita contenida en
. vilif :
La mayor parte de los métodos para la determinación en S U ‘
ff ,
]Uye potasio radiactivo, lo que proporciona un
edad mediante la radiactividad no se puede usar para defini. § estas rou S inc minaj. a edad de la bioti{a
—
fechas de eventos historico-geologicos recientes es deSl tried10
eventos acaecidos hace menos de 2 millones de a ñ os. El | t
í
u
.
r0ca misma‘
a veces > ]a de
¡ ^
tasio radiactivo es una excepción y ha sido usado con buer
resultados en algunos casos. Para los eventos geológicos
recientes sólo hay un elemento radiactivo que ha sido u$ü ^
mili
!f
encación y tiempo absoluto
Otro medio de establecer
climentarios consiste en
ec as absolutas en los estratos se-
determinar la velocidad de su de -
cón verdadero é xito, y éste es el isótopo radiactivo del
bón, el carbón- 14 , 6C . Este isótopo sólo se puede utiK|
14
El m étodo de carbón -14, desarrollado por primera vez en sugieren que, al menos en algunos casos, cada una de estas
. -
FIG 9 3 la Universidad de Chicago por Willard F. Libby, act ú a cort ó
*I
capas representa un ano de depósito; asi contando las capas, FIG 9 5 . -
Este fragmento de tronco de abeto fue parte
del árbol de un bosque sepultado t
en Two Creeks, Wisconsin. —
veces llamados rayos cósmicos bombardean nitrógeno en
—
sigue. Cuando los neutrones del espacio exterior algunas í podemos determinar el tiempo que debió transcurrir para
114ue se depositara
la roca.
La lutita Green River de Wyoming , está
compuesta de delgadas capas anuales .
Las determinaciones de carbón-14
de la madera del bosque indican que
atmósfera externa , sacan , por el choque, un prot ón del n úcleo Desafortunadamente sólo en algunos lugares, tales como Puesto que cada escalón de este bloque tiene
100 capas de alto, todo el bloque representa
los árboles murieron nace unos 11 ,350 del nitrógeno, formando asi el carbón -14. « los pa íses escandinavos, nos ha sido posible relacionar este 700 años de sedimentación En el escal ón .
años, estableciendo así la fecha de la invasi ón S I tipo de información con nuestro calendario moderno. El geó-
I grande del lado izquierdo del bloque se ve
del hielo . La cuadrí cula ae 5 cm. da idea neutrón ' :M •
f |0g0 suizo barón de Geer contó los depósitos anuales o la - una parte de un pez f ósil El recuento de .
.
de la escala Foto por Willard Starks . v
J minaciones que se formaron en lagos glaciares ya extinguidos.
las capas indica que el pez murió 471 a ños
después de la formación de la capa más baja.
TN 14
/ \ 14 Estas laminaciones, llamadas varvas o varves ( ver la fig. 9-4 Ejemplar del Museo de Historia Natural
de la Universidad de Princeton.
i;
protón GC í y el capítulo 13 ) nos permiten reunir algunos de los eventos Foto por Willard Starks.
de los ú ltimos 20, 000 a ñ os m ás o menos, en los
El carbón-14 se combina con el oxí geno, para formar un j geológicos
i I
pa íses que rodean al mar Báltico.
bi óxido de carbono especial, C14 Oa, que circula en la atmós í - En otros lugares se han encontrado secuencias de sedimen- FIG. 9-6
fera .y alcanza
.
. la. superficie
eventualmentfc de la Tierra , donde sf
-
i
TÍ
. ., . . tos laminados mucho m ás largas; éstas nos dicen sólo la Ion Sección amplificada de la lutita Green River,
¡; í
"
es absorbido por la matená viviente Se n i
ha encontrado i
que| itud total del tiempo durante el cual tuvo lugar la sedimen- que muestra, muy aumentada, la naturaleza
.
-
constante Su abundancia es independiente de la longitud, ! ,
a distribución del carbon 14 alrededor del mundo es casi j tacj¿n pero no cuánto tiempo hace que sucedió en tiempo
uto Un ejemplo manifiesto de secuencia de tiempo ab
— -
estratificada de la roca El ejemplar
representa un tiempo de , unos 100 a ños
en un pedazo de roca de unos 10 mm.
latitud , altitud y tipo de habitat o ambiente de la materia I Sabso de espesor A esta velocidad de acumulación, .
>
í: 0|ut0 está registrado en las lutitas Green River de Wyoming un metro de lutita Green River representa
viviente. Existe, entonces, una pequeña cantidad de carbón-14 { ( ver figs. 9-5, 9 6 ) . Aqu í cada capa , interpretada como un
l:
— -
en toda materia viviente, y cuando el organismo ya sea| depósito anual, tiene menos de .178 mm. de grueso, y el es-
aproximadamente 10,000 años.
Ejemplar del Museo de Historia Natural
—
vegetal o animal muere, su provisión de carbón -14 no es, i pesor total de las capas es 790 metros. En consecuencia, estas
desde luego, abastecida nuevamente por los procesos vitales. J iutitas representan aproximadamente 4.5 millones de a ños.
de la Universidad de Princeton.
Foto por Fred Anderegg.
En vez de esto, el carbón -14, con una media vida de unos ! I
'c i i
te del organismo, menor ser á la cantidad que retenga de car í Antes de que los geólogos supieran cómo determinar el tiem
- - ..V,
; .
v-x.’
bón -14. As í, cuando encontramos carbón-14 en un pedazo del po . absoluto, descubrieron ellos mismos aspectos de la historia - •
= ' ''
r*:: '
- A *í • '!/
Ú
->
•
madera o en un hueso carbonoso, comparando la cantidad “ e la T> a que les convencieron de la enorme longitud del
\
|
que en él se encuentre con la abundancia moderna universal, j tlemP geológico. AI situar tales eventos en orden cronológi
° -
podemos deducir el tiempo que ha transcurrido desde q® : / ,se encontraron con que estaban subdividiendo el tiempo •t
* - ’
• l!
V -i.
el material dejó de tomar C »02 -esto es, desde que el org¿J ologico sobre una base relativa, usando ciertas marcas
^
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V,
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VI* »*>
nismo mu ño.
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Par
un periódico o una revista, se haya enterado el lector del
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u .b.: .. .
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v
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de a ños, durante el período Cret ácico, o del desarrollo de ..
V -
Hasta hace poco, los minerales radiactivos aprovechables para j un nuevo camp( )
i ' iví j
fechar eventos geológicos eran buscados principalmente e» í millones de a ños, en el período Pcnsilvánico. “ Cret á cico” y
las rocas í gneas; estas eran generalmente, las menas del uí jl "Pensilvá nico” son términos usados por los geólogos para
’ •i
•
..V.
. - "• ' •
'
M 0 • L
- « *'
Varvas del lago glaciar de Hackensack , de edad a algunas de las rocas sedimentarias . í Parte, por la posición relativa de las rocas sedimentarias. Re -
ó. Al '
v. fii
. .. : . '
- A- , -
en el norte de New Jersey. Se cree que cada Algunas areniscas, y con menor frecuencia las lutitas, c | cueréese que una capa determinada de roca sedimentaria :
I
í . ^ .y . . .v- v* 1'
'
¿Si
' #
1' '
*
<
- *
•
* í, al 4 •
/ A
í
N ótese lo variable del espesor de las varvas. mta, formada en ciertos ambientes marinos cuando se dep»| et depósito original en acumularse. AI arreglar J *
T
I varias rocas ;•
¡
•
V
.
í sitan las capas sedimentarias, contiene potasio radiactivo, otf sedimentarias
.
f* *
i
i : i • Ay ]
f :i
I 4C
% jjy v - '
J / - ' f* • e -.
T ' r* • 1
-M
EL TIEMPO GEOLOGICO 131
130 EL TIEMPO GEOLOGICO
- Él á rea conveniente, debemos juntar o integrar la
níldaS en un
r,
pi
« . -
FIG 9 7
Pozo
•
1 — i cia de rocas de localidad en
gir o relacionar la secuencia de
localidad. Este proceso
un lugar con la de otro,
J§8®
Caliza
i*
S: - Diagrama que indica los datos que se deben
usar para cori' elacionar las rocas sedimentarias
de un acantilado marino ( derecha )
con las de un valle fluvial ( centro )
y con las encontradas en una perforación
Arenisca
Lutria
Carb ó n :
Lutita
"
srr
i
iiii
m
¿>
'
1 aue se llama
°
thia <lue si8
nifica “
correlaci
) untar
ón, palabra tomada
” > in ás ‘ relacionar '.
. -
( izquierda ) (Ver fig . 9 8 ), Conglomerado
Lutita' : £ cas sedimentarias muestran caracter í sticas distintivas bastante
amplia á rea geográfica, podemos reía-
til listantes sobre unasecuencias de capas de roca de diferentes
,
r algunas veces
Ül l
C1
locaJidades. Las
figuras 9 -7 y 9- 8 ilustran sobre esto. En ellas
-
una serie de rocas sedimentarias expuestas en un
Iii
bi- Pozo
fit
El principio básico empleado para determinar si una roca { las dos capas de arenisca sean la misma . Proseguimos hacia
sedimentaria es m ás antigua que otra es muy simple, y se le I ahajo, y encontramos algunas capas de lutita muy parecidas
I i®
liUvi r conoce como la ley de superposición. lie aqu í un ejemplo: I a las que está n en el acantilado, debajo de la arenisca. Para
- \^
"
un depósito de lodo sedimentado este a ñ o en, digamos, el j entonces confiamos en que la arenisca y la lutita del ca ñón son
|
;
li Golfo de México, descansar á sobre la cima de una capa que | las mismas capas de arenisca y la lutita superior del acanti-
fue depositada el a ño pasado. El depósito del a ño pasado j lado marino; pero debemos admitir la posibilidad de que
descansa , a su vez, sobre depósitos sucesivamente m ás anti- \ estemos tratando con rocas diferentes.
guos, que se extienden hacia abajo dentro del tiempo, mien- f Al buscar datos adicionales, encontramos un nuevo pozo
en perforación, cuya barrena está cortando la misma caliza
i tras haya estado efectu ándose la sedimentación en el Golfo.
Si pudié ramos hacer un corte a través de estos depósitos! ,!
¡
que vimos en las paredes del ca ñó n . A medida que la barrena
li tendríamos a la vista un registro cronológico con los más j; penetra
¡ una capa deuna
lutita
- ,
a mayor profundidad , encuentra arenisca, después
luego capa de carbón, m ás lutita y a continuación
ill
i
m
•
í
antiguos en el fondo y los más jó venes en la cima. Esta se|
cuencia podr í a ilustrar la ley de superposición : en una serie-
suspenda
conglomerado
finalmente en
, antes de que la perforació n se
) otra capa de lutita . Esta secuencia
.
de rocas sedimentarias que no haya sido volcada, la capa más
alta es siempre la más joven y la capa más baja es siempre j es una réplica de la que observamos en el acantilado y revela,
la más antigua. t adem ás, una caliza, un conglomerado y una lutita subya-
A primera vista , éste es un principio absurdamente simple. ! centes, que no habí amos visto antes. Encontramos ahora jus-
Por ejemplo, en un acantilado de rocas sedimentarias, en el tificada la correlación de la arenisca del acantilado con la \
que una capa descansa sobre la cima de la otra, es perfecta- del ca ñó n y la del pozo : la caliza es la roca m ás joven en el
ásv área; el conglomerado y la lutita inferior son las rocas más
mente claro que la m ás antigua est á en la base y la m
joven en la cima. Podemos determinar r á pidamente la edad / antiguas. Esta correlaci ón se presenta en la fig. 9-8.
relativa de cualquier capa del acantilado en relación a cuaV f Muchas formaciones sedimentarias se correlacionan de esta
quier otra capa . Sin embargo, la dificultad estriba en el hecho ¡ manera , especialmente cuando las características f ísicas son
de que han sido depositadas decenas de miles de metros de nuestros ú nicos medios de correlació n ; pero a medida que ex-
roca sedimentar ía desconocida durante el tiempo que tiene i
tendemos ésta sobre á reas cada vez m ás amplias, los carac-
la Tierra de existir. Y no hay un solo acantilado, ni existe j teres f ísicos son más dif íciles de utilizar. Obviamente, es
ningú n lugar o á rea donde todas estas rocas estén expuestas| imposible usar los caracteres f ísicos para determinar la edad
a nuestra vista. Las rocas de un lugar pueden ser más anti j -
relativa de dos secuencias de rocas estratificadas en, diga-
guas, o más jóvenes, o de la misma edad que las de algán j mos, Inglaterra y el oriente de los Estados Unidos. Afortu - -
FIG. 9 9
r
otro sitio. El problema consiste en encontrar cómo encajan j nadamente contamos con otro mé todo de correlació n un
las rocas de todo el mundo en alguna clase de escala relativa J mé todo que implica el uso de f ósiles.
— William Smith ( 1769-1839 ), ingeniero civil
brit ánico, desexibri ó quet una misma capa de
i roca, por lo común, contiene el mismo
del tiempo. i
CORRELACIó N- POR FóSILES. A fines del siglo XVIII y princi - conjunto de f ósiles, mientras que las rocas de
\ encima y debajo de esa capa contienen
mi pios del xix , un topógrafo e ingeniero civil inglés llamado conjuntos fosilí feros diferentes.
Correlación de rocas sedimentarias William Reproducido de Birth and Development of
i Smith ( 1769-1839 ) qued ó impresionado por la rela -
the Geological Sciences ( 1954 ),
Puesto que no podemos hallar rocas sedimentarias que & íj ción entre los estratos de roca y el éxito de varios proyectos de F . D . Adams, con permiso de
si 1
presenten todo el tiempo de la Tierra perfectamente orde '
—
Je ingeniería particularmente la construcción de canales. Al Dover Publications, Inc., Nueva York .
f:
i -j -
-
ÉL TIEMPO GEOLOGICO investigar los estratos de roca de uno a otro lugar, |Íji
advi| COLUMNA GEOLOGICA EL TIEMPO GEOLOGICO 133
BU I ,
les
1
. .
en tanto que los f ósiles de las rocas de „ .
, arriba
.
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o de aha M
° 5 uue v
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ólogos han
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.. . 1 „ , ,
eran distintos
,, . Eventualmente
que pod ía decir.j ,
. D . . ,,
Smith ,llego
b
„ , dDa¡]o I
• i.
rocas del á rea de Par ís en secuencia cronológica, tal como
Smith lo había hecho en Inglaterra . As í Cuvier y Brongnte ! el cambio
arreglaron su colección de f ósiles en el mismo orden que las
rocas de las cuales habían sido extra ídos los f ósiles. Descu-
lento
^
segmentos completos, en los que quedaba comprendido
de plantas y animales . Estos quiebres
nas en el registro de los f ósiles sirvieron como lí mites en -
tre estratos
de
adyacentes
rocas
. Los nombres asignados
sedimentarias figuran en la columna geol ó-
a los
o
diversos
la -
sistema cenozoico en dos sistemas ,
el cuaternario y el terciario. El sistema
Cuaternario de esta división incluye la
é poca pleistocena y el sistema terciario
incluye las é pocas del paleoceno al plioceno .
B ; Esta columna indica las formas de vida
brieron , adem ás, que los conjuntos de f ósiles variaban en i grupos dominantes encontradas en las diferentes
forma sistem á tica de acuerdo con las posiciones cronológicas gica de la tabla 9-1. unidades de roca. Esto no da el rango de-
tiempo de las formas enlistadas. Por ejemplo,
de las rocas. Al comparar las fonnas f ósiles con las formas de Nótese que las rocas más antiguas se designan con el los peces son conocidos en las rocas
” , t é rmino general que se aplica a
vida modernas, Cuvier y Brongniart descubrieron que los fó. j nombre de “ pre-cá mbrico
i pre-silúricas y obviamente existen hoy d í a;
pero cuando las rocas del silúrico y
, siles de las capas de roca más altas mostraban un parecido todas las rocas que yacen bajo las rocas del cámbrico. Aun- devónico se formaron, los peces representaban
(V -l
más estrecho con las formas modernas que los f ósiles de las que las rocas pre -c á mbricas representan el mayor volumen las formas de vida animal más avanzadas.
rocas m ás bajas y por ello más antiguas. l :
á ( b)
Y.\' i
Por todas estas observaciones llegó a ser evidente que la í; SISTEMA SERIE ALGUNOS ASPECTOS DE LA VIDA
edad relativa de una capa de roca sedimentaria se pod ía de
ü: II-
i- ' -
terminar por la naturaleza de los f ósiles que contuviera. Este j
-
•
Ni
1
y. : i
del op . cit ., de F . D . Adams, con permiso
de Dover Publications, Inc., Nueva York .
ciertas complicaciones. Por ejemplo, es obvio que en nuestro
mundo moderno var ía con el medio la distribución de las y
Eoceno
Paleoceno
ÜH
C
Cd
— i
,
I:-; :
formas vivientes. Es de suponerse que este hecho fue tan f
verdadero en el pasado como en el presente. AI estudiar las \ Mesozoico Cretácico Extinción de los dinosaurios
i *U : i
V;:; -
•
( Se pueden
cd <O 4>
-
00
CU
- O Si
§ <v
a -°
medio, particularmente si viven en el fondo del mar. Los orga 1
nismos que viven en un área donde se est á depositando lodo I
Triásico distinguir tH
^
Aparecen los dinosaurios
son diferentes de aqu éllos donde se deposita arena. De ah í que i Paleozoicos Pérmico muchas oo oo
O
encontremos f ósiles un tanto diferentes en una capa de lutitaj / +--
35,
'
• . ( formada por el Iodo ) de los que se hallan en una capa de| . Pennsylvánico series, S 2
l i
» Ifi
c
—
*F 1
Fonnación de carbón
arenisca ( formada por la arena ) . 4 B 2
0 )
Si tanto las características f ísicas corno los f ósiles son di - l Mississí pico pero no es
^t <8
/5
ferentes, ¿cómo podemos correlacionar las rocas de dos á reas | S g
distintas? Hay dos formas posibles. Primero, podemos, real- Devónico cd
o
00
necesario 0)
mente, estar en situación de ver cómo dos diferentes tipos : i PH
Or
a
«DI
de roca, con sus diversos f ósiles, pasan gradualmente de h j Sil ú rico ^ S PM
una a la otra lateralmente a medida que seguimos las capas í citarlas oo £ ^ Aparición de los primeros
cd
a lo largo del frente de un acantilado. En segundo lugar, j Ordovícico c £ vertebrados ( peces )
a aqu í ) JH oo Comienza la abundancia de
podemos descubrir que unos cuantos fósiles son comunes \ cd O
V ambos medios. En un ambiente oceá nico, por ejemplo, alga j - C á mbrico £ 1
2o J
f ósiles {invertebrados marinos )
ñas formas flotan o nadan sobre una extensa á rea geográfica § 2I -si
que corresponde a m ás de una condición de depósito en el Rocas pre-cámbricas SI
cd ÍH
i
Escaso registro de f ósiles
fondo del mar. Los restos de estas formas nadadoras o fl° Si <D Plantas e invertebrados marinos
*
£ 1 primitivos
tantes pueden asentarse en el fondo, para ser incorporadas a ( Abundantes, pero las subdivisiones mundiales hH
m
:
l.- f
:
J i
134 EL TIEMPO GEOLOGICO de tiempo geológico, quedan todavía por definir otras sulM
aun ¿uando tales fechas gm
será n tant
| ás importantes cuanto EL TIEMPO GEOLOGICO 135
divisiones, porque existe una casi completa ausencia de resto/ fI la medida en que lleguen a tenerse.
f ósiles, tan abundantes en cambio en las rocas cá mbricas ¿y %í ^° fiemos dicho que la columna geológica estaba dividida
en las m ás jó venes. Sin f ósiles que les ayuden, los geology Is finalmente en grupos diferentes de rocas, basá ndose en la
se han visto forzados a basar sus correlaciones en los caracal ° árente
laguna del registro f ósil ; pero a medida que la in -
res f ísicos de las rocas y en las fechas obtenidas de los mine. f
^
L
í. . tigación geológica progresó y que el á rea de investigación
rales radiactivos. Los caracteres f ísicos han sido ú tiles para | ttendió de Europa a otros continentes, los nuevos descu-
f:
estableeer secuencias locales de las rocas pre-cá mbricas, pero ¡ ^^
Cimientos redujeron las lagunas en el registro de f ósiles, Aho-
m
•V :
TABLA 9 2 - tales secuencias no se pueden considerar como subdivisiones íí eS claro que el cambio
en las formas f ósiles ha sido con -
Escala del tiempo geológico. Modificada
de la de ]. Laurence Kulp en Science, de alcance mundial. Por otra parte, las fechas determinadas í
por radiactividad no son todav ía lo suficientemente abundan, !
Tjeuo V que 'las lagunas originales se pueden llenar con datos
as
fop
;
í
Este diagrama ilustra la Ley de las Relaciones
de Intrusión, que establece que una roca es
m Cá mbrico 100.000 ,i 000
í más joven que aquélla a las que corta .
i Las unidades de roca están arregladas en
orden de su antigüedad decreciente
I del 1 al 5. La forma en que las edades
í l : radiactivas de las rocas í gneas ( N ? 2 y N ? 4
del diagrama ) se usan para dar las
600, 000,000 * í
i edades aproximadas en años para las rocas
^
á smisi
* *=55,
sedimentarias ( N ? 1, ¿V? 3 y N <> 5 del diagrama )
" «
EL TIEMPO GEOLOGICO las fechas obtenidas de las rocas ígneas con las
r
136
unidades|jF Correlaci ón. EL TIEMPO GEOLOGICO 137
¿proceso de relacionar, en el tiempo, una secuencia de rocas sedi-
^1
tiempo relativo de las rocas sedimentarias?
&2
^
I
'
•
/|
RESUMEN
Tiempo geológico.
Puede ser relativo o absoluto.
Tiempo absoluto.
Se determina por la desintegració n de elementos radiactivos,
principalmente en las rocas ígneas, pero también en las sedi' :
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MOVIMIENTO DEL TERRENO SUPERFICIAL
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Movimiento de masa
f
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i:
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£•
del material de la superficie
;
Is;
v
las rocas est á n expuestas en la superficie de la
,
r
CUANDO ,
FACTORES DEL MOVIMIENTO
Tierra , el intemperismo comienza a actuar inmediatamente,
: f para establecer un equilibrio entre el material rocoso y su COMPORTAMIENTO DEL MATERIAL
1
• ;
m ! nuevo medio. Sin embargo, otros factores unen sus fuerzas MOVIMIENTOS RAPIDOS
V a los procesos de intemperismo: por ejemplo, la gravedad
act úa para mover los productos de intemperismo, y aun a la DESLIZAMIENTOS DE TIERRA
I.
5
roca inalterada, hacia niveles cada vez más bajos. A este mo-
CORRIENTES DE LODO
í:
5
vimiento de material de la superficie, causado por la grave-
f dad, es a lo que se llama movimiento de masa. Algunas veces FLUJOS DE TIERRA
§
tiene lugar repentinamente, en forma de grandes desliza -
I mientos de tierra y de desprendimientos de roca de los acan- TALUD
•
i:
A:
tilados ( ver fig. 10-1 ) ; pero a menudo se efect úa casi imper -
?! i- MOVIMIENTOS LENTOS
: i : V; i ceptiblemente, como el lento resbalamiento del suelo a lo
: :
•
•
í
i
£
largo de terrenos de suave pendiente. En consecuencia , el RESBALAMIENTO
. movimiento de masa es un tipo de ajuste que los materiales
Y . Y
•
;K
I (ie la tierra hacen en relación con
su ambiente f ísico; es ésta SOLIFLUXION
: m
;
una de las muchas maneras en que act úa la gravedad para GLACIARES DE ROCA
denudar o desgastar las masas terrestres. Otros agentes geo-
Á
lógicos tales como el agua superficial, la del subsuelo, el
i viento, el hielo y las olas, actúan estrechamente unidos a la ,
i
l
I gravedad , para realizar la degradación constante o nivelación
mr / de la Tierra.
..
5
\
'V
r ¿Pero mientras todos estos agentes trabajan sobre la super-
1'
•
139
*
140 MOVIMIENTO DE MASA Es así, bajo el í mpetu de la gravedad , como los productos de] :
intemperismo inician su larga migraci ón a un lugar de repolSl
so, aunque acaso de modo temporal , en el fondo del mar,
mM FACTORES DEL MOVIMIENTO DE MASA 11
E
- - í &SÍ
La gravedad proporciona la energía requerida para el mo.
vimiento pendiente abajo de los escombros superficiales y 1
^
:'
i:
las rocas; pero algunos otros factores, particularmente el agua ¡
acrecientan la efectividad de la gravedad y facilitan su trabajo! m c
m
*
tm 1
Inmediatamente después de un aguacero muy copioso $e ¡
MI'S
m
4
>’•?/
- ' :
Vi
puede presenciar un deslizamiento de tierra sobre una ladera ÉÉHlBttHilife | |
í §gg
(| |
muy empinada o en el banco de un río. Los movimientos de :- - : ‘
ü
v
§gf * m
FIG. KM
Una gran laja de arenisca Wingate , maciza,
se ha caí do y despedazado al pie de esta
esta clase se atribuyen con frecuencia erróneamente a la “ ac {
ción lubricante” del agua; pero ésta no “ engrasa los rodillos* I
en el sentido estricto de la frase. En realidad, el agua coi)
muchos minerales no act ú a como lubricante, sino más bien
«
m
«ME
E&'ífTw
¡$Vv’ Vs'
«Milil
>í
\
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v
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W
m
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mrnm m..
escarpa, donde ahora el rí o San Juan como un antilubricante . Podemos concluir que las lluvias co-
'C
3P
¿# H
%
comienza a mover corriente abajo Bradley .
los fragmentos. Foto por William C .
piosas no promueven el movimiento por “ lubricación” . mí
I
humedad y parcialmente con aire; y mientras esta condición II
persiste, la tensión superficial de la humedad da cierta cohe - za- ( definido como “ fuerza por unidad de área” ) , pero la . -
FIG 10 2
sión al suelo: Pero cuando sobreviene una fuerte lluvia y obli j- - sustancia vuelve a su condición original cuando cesa la fuerza Comienzo de un desplome o falla de
ga al aire a salir de los espacios porosos, se destruye por . I deformante. Un sólido elástico se rompe solamente cuando la pendiente a lo largo de los acantilados
completo la tensión superficial; se reduce la cohesión del marinos de Gay Head , Massachusetts. N ótese
fuerza aplicada es mayor que su resistencia. que el bloque desplomado está ligeramente
suelo al movimiento pendiente abajo y toda la masa se vuelve Una sustancia plástica experimenta cambios continuos de volteado hacia atrás, opuesto a la dirección
m ás susceptible. La presencia de agua también a ñade peso forma cuando la fuerza aplicada pasa de un punto crí tico. Si del océano. Este bloque desplomado se
movió hacia abajo y hacia fuera, rumbo a la
al suelo que está sobre una pendiente, aunque probablemente una pendiente es lo suficientemente empinada, las masas de costai a lo largo de un plano curvo,
este aumento de peso no sea un factor muy importante para tierra se comportan algunas veces como una sustancia plás- parte del cual está representado por la cara
provocar el movimiento de masa. tica, resbalándose lenta, pero continuamente, pendiente aba -
de la escarpa baja que aparece en primer
plano. Foto de la Colección Gardner ,
, El agua que se embebe en el terreno y llena por completo jo por la influencia de la gravedad. Universidad de Harvard .
: ;i los espacios porosos en el material de la ladera contribuye a Finalmente, un fluido, ofrece poca o ninguna resistencia, a
la inestabilidad en otra forma. El agua de los poros se en-
•
d <¡
^ o astamovimientos, desde el corrimiento ^
stico el
tierra
FIG » 10-5
m Diagramas que ilustran la naturaleza del
deslizamiento de Gros Ventre. El diagrama A
muestra las condiciones que existían
antes del deslizamiento , B representa el .
área del deslizamiento y la localización de
los escombros en el fondo del valle.
N ótese que las capas sedimentarias buzan o
se inclinan hacia el valle desde el sur .
' La sección grande de arenisca se deslizó '
mar
, ,
un desplome en Ga i da por Ja erosión cerca de fondo de va ]
ha eliminado de ¡ nieves invernales y las copiosas
, ,
producirse el deslizamiento, la arenisca había sido adelgaza-
le La fusión ¿
^
lluvias que cayeron durante
base dc la pendiente cl material sin consolidar haciendo ; |a primavera de 1925 proveyeron un abundante abastecí
m ás abrupta , hasta el punto en que la masa de tierra no | miento de agua que se f¡ tró debajo de ]a delgada ca ,
puede sostener por m ás tiempo; es entonces cuando comienza j arciI¡a empapá ndoIa y reduciendo ia adhesión entre ésta y la
de
-
a mové rsela lo largo de un plano curvo, como se sugiere | /^ arenisca superyacente. Cuando la
s .
la fig. 10-3.
j arenisca no pudo mantener
¿V t bempo su posición sobre la capa de arcilla, la roca
Una vez iniciado el desplome, es ayudado con p
«esbzó con estrépito pendiente abajo. El diagrama
por el agua de lluvia que se acumula en las depresiones Quej «éf de la fig. 10-5 da idea de la cantidad de material remo
-
infe
quedan entre los bloques inclinados y la pendiente original ]; -
El agua drena a lo largo del plano sobre el cual se desliza
bloque promoviendo movimientos adicionales.
DESLIZAMIENTOS DE ROCA. Los m ás catastróficos de todos
^H pi
ón de las rocaa
W $e deslizaron I
w esta á rea T
Monta ñ a de
— la tortuga
'
Gros Ventre, en el noroeste de Wyoming, no lejos del Paflj| ¡| Sección transversal mostrando las condiciones
i Nacional de Yellowstone ( ver fig. 10-4 ) . Un volumen de g¡J , Caliza kS
m f Manto de carbó n
de la Montaña de la Tortuga que dieron
lugar al deslizamiento de tierra de Frank ,
en Alberta. Redibujado de R. A. Daly
ÉM
t
1
M:
i
ú
rededor de 30 millones de metros c bicos de roca y
se precipitó sobre la pared del valle y barrió su fondo. W5 -
punta del material deslizado embistió la pared opuesta , sub
escomlf |
Escala <>
^ I OOP
I pie = 0.305 m
2090 Feet-
311 y otros, " Report of the Committee to
.
Investigate Turtle Mt , Frank , Alberta” ,
.
Department of Mines, Geol Survey of
. .
Canada, Memoir 27 ( 1912 ), fig 5
ai .
0 '
MOVIMIENTO DE MASA vido de las estribaciones de la Monta ña Sheep ( Sheep Mouiv I óN DE DESLIZAMIENTOS DE TIERRA. Por lo com ú n se MOVIMIENTO DE MASA
1 ááPREVENCI
144
idera un deslizamiento de tierra como una rotura sin
tain ) hasta el fondo del valle, donde quedó en reposo,
^l a * rv
de roca sucedido
»3 >
s SIISWIM
barrió todo el
m TSíÍÍ dieron de la cresta de la Monta ñ a de la Tortuga ( , Suiza en 1806
Mountain ) , que se eleva unos 915 metros por encima del ni ! 457 personas. Los pocos sobrevivientes contaron ( pie ellos no
, pueblo , matando a
;
A
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memxmfaiav*
í*Mn
:
íT
;
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m
m
¡3$
jí V. m
5!
-•
este movimiento, pero básicamente debe atribuirse a causas
*
vel del valle. Las actividades mineras pueden haber activado it j bíau percibido se ñales del deslizamiento, pero que los ani
^ y I°s Insectos de la región parecían haber sido mas
males
-
SHH m naturales. ' '
illlll!
• í|
?|
| j rvadores o quizá, m ás sensitivos, pues horas antes del
m Como indica la fig. 10-6, la Monta ñ a de la Tortuga ha sido caballos y el ganado vacuno parecí an estar
deslizamiento, losnerviosos
labrada en una serie de capas de caliza , arenisca y lutita que extremadamen te y aun las abejas abandonaron sus
buzan hacia el suroeste, en dirección contraria al valle. El día - colmenas . Probablemente tuvo lugar algú n síntoma prelimi-
grama revela 4 factores que contribuyeron al deslizamiento:®! nar antes de que la masa de roca se desprendiera realmente.
1 ) la fuerte pendiente de la monta ñ a , 2 ) la serie de juntase i
fracturas que buzan hacia abajo atravesando los estratos de
i
Durante la primavera de 1935 se produjeron deslizamientos
en depósitos de arcilla a lo largo de una supercarretera ale-
mm«¡¡¡
«
&
a
caliza , 3 ) los d ébiles estratos de lutita que subyacen en la ca- \ mana que se estaba construyendo entre Munich y Salzburgo.
liza y forman la base de la monta ñ a, y 4 ) las operaciones de f El deslizamiento, inesperado, sorprendi ó a los ingenieros, pero
minado de carbón en el valle. §ü ¡
| j0da una semana los trabajadores habían estado murmurando,
La abrupta pared del valle acrecent ó la efectividad d é la f “ Der Abhang wird lebendig” ( La pendiente está viva ) ,
m fuerza de gravedad y las juntas sirvieron como planos poten -I Los deslizamientos como el de la Mountain Turtle está n
ó?:- -
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cíales de movimiento . Las d é biles capas de lutita
de la monta ñ a sufrieron una lenta deformación pl ástica bajo|
de la base [ precedidos con frecuencia por el lento ensanchamiento de las
| fisuras de la roca cerca del l ímite superior del movimiento
, .
Vi'
- “ ““
«m &
Í4 ; X
el peso de la caliza superyacente, y a medida que la lutita se j futuro.
deformaba , la caliza ganaba mayor asentamiento; la acción | Existe alguna evidencia de que los deslizamientos pueden
*;
•
u
-
de éste pudo haber sido ayudada por las operaciones de ex j repetirse periódicamente en ciertas á reas. En el sureste de
tracción de carbó n en el valle as í como por la acción de las he- f Inglaterra , no lejos de Dover, se han venido sucediendo ex- iw :v
ladas, la lluvia, la fusión de las nieves y las vibraciones de j tensos deslizamientos cada 19 ó 20 a ñ os. Algunos observadores
un terremoto que había sacudido el á rea 2 a ños antes. En
ó finalmente el punto en que
creen que puede existir alguna correlación entre tales movi-
mientos periódicos de masa y las épocas de lluvia excesiva,
éamzmfm&ú
.
m
FIO. 10-9
J
cualquier caso, el esfuerzo alcanz
FIG. 10-7 y la gran masa de roca se En las pendientes abruptas, en los climas tropicales muy h ú- Un flujo de tierra en un corte de camino
las capas de caliza se fracturaron
El Cañón del rí o Madison antes ; ®S¡ ¡I I modos o en los semitropicales, por ejemplo, los deslizamientos cerca de Dallas, Texas, muestra la abrupta
del deslizamiento de tierra en agosto de 1959. precipitó hacia el valle. cicatriz en lo alto de la ladera y ,
El deslizamiento comenz ó en la pared
del valle, cubierta de árboles en el lado
-
Esta vez el material rocoso se comportó de 3 diferentes ma I de tierra parecen seguir un patrón cíclico. Primero un desli- más abajo , el área de movimiento de suelo
más distante del rí o. Los escombros cegaron neras. Las lutitas experimentaron deformació n plástica, pro | /amiento arranca el suelo y la vegetació n de una ladera . Con
* por flujo . Compárese con la fig . 10-10.
duciendo una condición de extrema inestabilidad en la falda el tiempo se desarrolla un nuevo suelo y una nueva vegeta - Foto por C . W . É rotan .
el canal del ríot formando un lago. El punto
donde este pescador estuvo una vez,
se encuentra ahora a 30 metros bajo el agua .
de la monta ña . Cuando los estratos que a ú n sostenían la \ ción, la antigua cicatriz se resana y, cuando alcanza la cu-
Compárese ésta con ¡a figura 10-8. masa de caliza sobre la pendiente fallaron por esfuerzo cor [ bierta una cierta etapa , comienza de nuevo el deslizamiento,
*
Foto por Montana Power Co. tante a la manera de un sólido elástico, comenzó realmente j Aunque los deslizamientos de tierra pueden ocurrir en ciclos,
el deslizamiento. Una vez en el camino, saltaron los escom i nuestros datos son a ú n muy escasos para apoyar conclusiones
*
Vista aérea del Cañón de Madison despiués un fluido viscoso, con una serie de olas que se iban desplc - f bujos de lodo
del deslizamiento de tierra. A través del i
gando a lo largo de su frente.
material deslizado que constituye la represa, Un flujo de lodo és una masa de roca , tierra y agua bien \
| de
ha sido cortado un canal de descarga
del lago recién formado .
Foto por William C . Bradley.
Mas recientemente tuvo lugar un
. - nto Jg
deslizamie
en el suroeste de Montana, unos cuantos minutos antes |
de 1959 Un “£ terremoto cuy ¡
mezclada que fluye pendiente abajo en la ladera de un valle
ycpn .I¿ consistencia del concreto recién mezclado. En las á reas
mcd a noche del 17 de agosto monta ñ osas, desé rticas y semi á ridas los flujos de lodo gobier - Escarpa
foeo fue localizado precisamente al norte del occidente naji el transporte de grandes masas de material.
Yellowstone Montana provoco un deslizamiento de roca ® Los flujos de ]odo t í picos se originan en un pequc ñ o ca ñón Superficie anterior
^
:¡
la boca del Canon de Madison unos 30 kilómetros al poniefr „
pebrada de paredes abruptas donde las laderas y el suelo
te. Se estima que unos 80 millones de toneladas de roca » se hallan cubiertos por material inestable o sin consolidar ,
É2 ,ome
Alud agrietado
l'.v-.í
deslizaron de la pared sur del Canon al fondo del valle, clon- Un ¡nundación repentina, provocada por la descarga de las
de represaron un lago de 8 kilómetros de largo y 30 metros nubes en terreno semiárido o por los deshielos de primavera
-
profundidad. Pocas personas perdieron la vida bajo el desliza en ]as regiones monta ñosas, inunda la tierra y las rocas de
miento del á rea del r ío Madison ( ver figs. 10-7 y 10 8 ) -
¡¡
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¡Éll
Flujo
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g csp
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DESLIZAMIENTOS DE ESCOMBROS. Un deslizamiento de escom
- escombros obstruyen el canal hasta que la creciente pre-
S1(to del agua
pido y peque ñ o de material no c<gi llega a ser suficientemente grande para abrirse
bros es un movimiento rá .
FIG 10-10
í;
solidado, que se desliza y rueda hacia abajo y
superficie de mogotes bajos, con pequeñas depresiones M Atento a
termedias. Los movimientos de esta clase son frecuentes J este es
las laderas con pasto, particularmente despu é s
produce
de lluvias
ui
&
#
\
mo
^
Entonces
valle
f o
abajo
'
largo
el agua y los escombros comienzan su reco-
intermitente
, mezclá ndose con un movimiento de roda -
del borde frontal del flujo. El avance de
y a veces se retarda a causa de un estre-
En este diagrama de un flujo de tierra,
nótense la escarpa y los bloques desplomados
que han caí do por el flujo de la sección
superior . En la sección de la pendiente
de las pen < «liento del cauce; en otras ocasiones rompe hacia delante, inferior el flujo se manifiesta en la
largo
l
m
¡S
V
tensas, y en material sin consolidar a lo
dientes abruptas de los bancos de r í o y l íneas de costa. ^
Pojando los obst á culos de los lados o llevándolos consigo. superficie por el abultamiento y
agrietamiento» de la tierra vegetal.
í
¡ü
Ém
w MOVIMIENTO DE MASA Eventuahnente los flujos de lodo rebasan la boca del caftó de la que pueden ser destruidos o movidos, va que- MOVÍMIENTO DE MASA 147
y se desparraman sobre las suaves pendientes all í extendí n !
í:
i:
Al no estar ya confinadas por las paredes del valle o del
ce, se expanden en una gran lengua, esparciendo una
de Iodo y cantos rodados ( pie puede tener desde unos cuatiji
^ v
sepultada la parte superior de los acantilados y se de-
íÜfte crecimiento
con el
de ios taludes. La pendiente del talud
tama ñ o y forma de los fragmentos de roca. Aun
i
:
i
;
cent í metros a varios metros de espesor. Las corrientes de
son capaces de mover grandes cantos y peñascos con un Peso
de 85 toneladas o m ás , por centenares de metros en pendien I
^
cua c]0 jos
rHa de 50°, un
El talud
materiales angulares pueden mantener pendientes
est á
talud sobrepasa raramente á ngulos de 40°.
sujeto a los procesos normales del intempe-
f - qu í mico, particularmente en un clima h ú medo. Los
tes de apenas unos 5o. descomponen , especialmente hacia su l í mite in -
escombrospiese, pudiendo graduar el material de esa parte im-
i
ferior o
Flujos de tierra
perceptiblemente a suelo.
Los flujos de tierra son una combinación del desplome y \
LENTOS
movimiento pl ástico de material sin consolidar. Se mueven ? MOVIMIENTOS
lenta , pero perceptiblemente y pueden implicar desde mlQs f Los movimientos lentos de material sin consolidar son m ás
cuantos hasta varios millones de metros cú bicos de material í
dif íciles de reconocer y comprender que los movimientos rá -
Terroso. Parte de este material se comporta como un sólido f pidos no obstante, son extremadamente importantes en el*
Talud Resbalamiento
*
En sentido estricto, un talud es una pendiente formada por i En ¡os climas templados y tropicales act úa un lento movi
de la superficie llamado res-
miento hacia abajo del material
-
f: la acumulación de fragmentos de roca al pie de un acantilado í
o de una monta ña. T ,os fragmentos de roca son a veces desig f -balamiento. Este act ú a aun sobre pendientes suaves con una
cubierta protectora de pasto y á rboles. Es dif ícil imaginar-
nados como escombros de roca o rocas deslizadas; sin em- 1
bargo, en la práctica, la palabra talud se usa ampliamente j s que este movimiento está realmente desarrollándose. Puesto
I °
Wc no se aprecian quiebres en la cubierta vegetal ni grandes
como sin ónimo del escombro en sí mismo. .
V En el desarrollo de un talud los fragmentos de roca se des- j cicatrices o mogotes, no existe razón para sospechar que el
prenden del acantilado y caen en una serie de saltos libres, j bajo sus pies está en movimiento,
rebotes y deslizamientos. Con el tiempo los escombros llegan j ,
obstante, se puede demostrar este movimiento por aflo-
a formar un montón o una capa de fragmentos de roca. Un } lientos del perfil , del suelo ( ver fig. 10-il ) , por el com -
>. .
talud individual se asemeja a un medio cono cuyo á pice des
cansa contra la cara del acantilado en una pequeñ a ca ñadij
- 17
. Pimiento de las ra íces de los árboles, o grandes bloques
í e roca resistente y de objetos construidos por el hombre
A menudo una serie de estos medios conos forma un cinturón4 tales como las cercas. La fig. 10-12 representa una sección
a través de la ladera de una colina bajo la cual se encuentran
alrededor de las monta ñas, enmascarando completamente sus
porciones inferiores. Si los escombros se acumulan con más
Cl* pas casi horizontales de lutita, caliza , arcilla , arenisca y car
t
-
| n. La pendiente est á cubierta con escombros de roca y
ó
suelo; pero se observa que las capas cercanas a la base del
suelo se arquean pendiente abajo y se adelgazan rá pidamen -
Estas capas está n siendo haladas pendiente abajo por la
. -
FIG 10 12 «i í
wW \
gravedad y est á n extendidas en bandas que se van adelga -
ndo, que pueden extenderse por cientos de metros. Even -
Los bordes de rocas sedimentarias occidentales ^tuumente
íKS en la
parcialmente intemperizadm se deslizan \
—
V
%
pendiente abajo arrastrados por el r. -! »?
• •
•
-1 SSI ^ * abalando lentamente por la pendiente. Puesto que la
Geomorphology , V { Diciembre, 1942 )., L u t íu I p a n y^
V. “ 31Ó, con permiso de Columbia Unit). Press ,
3
^ i Morris Physical Geography ( Boston: Ginn & Com *»
í;
El
! •
. t
. -
FIG 10 13 V
;
Caj;as de /¿mo, arena y grava arcillosa
contorsionadas por la congelación diferencial
* -
Mi
y el deshielo durante los climas más rigurosos
de las é pocas glaciales. La grava de la base ’ -'-I
Í4 4»%-
'•
Wx ’
del afloramiento es una tilita arcillosa M/ > * v:•• •• •
.
y mmm iI u
«i®
£
mm v;y." ¡
m ippr
1 - V: ‘
i Muchos otros factores cooperan con la gravedad para pro-
ducir el resbalamiento. Posiblemente el m ás importante es la
FIG. 10-15
Este glaciar de roca en Silver Basin, cerca de
i 1 humedad del suelo, que contribuye a debilitar la resistencia
de éste al movimiento. En efecto, cualquier proceso que ori-
Ouray , Colorado , ya no se mueve.
Cuando el clima era suficientemente
** «f - ᧮ frío para permitir la formación de hielo
SB
«a -í v '
^
ir '
* -*Vy.
gine una dislocación del suelo trae un ajuste de la pendiente
superficial bajo la atracción de la gravedad . En cpnsecuencia,
intersticial en los huecos entre los
fragmentos gruesos, la masa se mov í a a una
velocidad de 30 cent í metros a un metro
M» .
"
M. ' ' ' C *
•
V Si los orificios y cuevas de los animales tienden a rellenarse por a ño Su mole se puede apreciar por el
v
Mr i\ y - S
<
' '
contraste con los árboles, que se ven
30$ / pendiente abajo y lo mismo sucede con las cavidades que
}
& '
..
. : peque ños en el primer plano
i
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V i
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arboles inclinados, el paso de los animales y aun del hombre
.
*1.
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liliíüi / pueden
|
'é contribuir tambié n al movimiento. El resultado final
u d6d s estos procesos ayudado por la
ilillplf í* '
U
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influencia de la gra -
mm VQpad,°es el de producir un lento e inevitable resbalamiento
h»
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Ma cubierta superficial de suelo y escombros.
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^1ifluxión
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. r -.v-WM
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El término solifluxión ( del latín solum, suelo
.
"fluir” ) y flueie,
se refiere al movimiento pendiente abajo de los es-
m
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combros bajo condiciones de saturación en las altas latitudes
. ¿fe •4 * . -
- asm i donde el suelo se ve fuertemente afectado por la congelación
jr : V, .5» •
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tv -
•
XJ : - X el deshielo alternados. La solifluxión es más
acentuada en
'
as á reas donde el terreno se congela
V
»
, :
el agua que
'
- V V; . . v
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queda libre no puede percolar en el subsuelo y
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4V
Cs v- ' M'
; .
MOVIMIENTO DE MASA .
en las rocas del fondo adyacentes, que est án todavía c nge. I
^ m .
:
f
m 150
°
ladas, por lo que resultan impermeables al agua . Como con. I
Terremotosde los animales ( incluyendo al hombre )
MOVIMIENTO DE MASA 151
y a
1
Actividad ' *
tes bajas.
Durante los avances glaciales del Pleistocene, una zona jg
RAF Í A «SELECCIONADA
'
tor ^ ^
contrar en algunos lugares pruebas de estos climas más ri. fI M ^ , -
R ce ReP rt f lhe Con -
gurosos, preservadas en las capas de material terroso d¡s.
¿ ^,
, Turtle
r Mt > Fr nk > berta ° Department
°
-
^
lnoí Stl
.
torsionadas 1precisamente
?
lU- ld ;.
ftig. ia n _
debajo del suelo moderno (V er í >nittec
Mines ,
^
Geological Survey Branch, Canadá, Memoria, 27, 1912.
j [ul er > s. W., Permafrost or Permanently Frozen Ground and
of
\
La congelación desempe ña un papel interesante en los sue j -
Related, Engineering Problems. Ann Arbor, Mich.: ]. W . Ed-
i.'
los de las altas elevaciones y latitudes; extra ños patrones j wards, ínc., Í 947.
poligonales, formados de anillos de cantos rodados que cir-| National Academy of Sciences, Memoria 18. Washingto n, D. C.,
cundan al material más fino, fajas de piedras regadas al fren- j 1924.
:
te de las laderas de las colinas, grandes masas tabulares |
Roy del
Chalmer J . y Keith M. Hussy, "Mass-wasting on Table
hielo dentro del suelo y profundas cu ñ as de hielo quese é Mountain, Fremont County, Colorado” , Am. ]. Sci ., CCA ( 1952 ) ,
—
adelgazan hacia abajo a partir de la superficie todo esto ;A!§ 5. I ^ .
fj
se encuentra en las á reas donde el terreno está congelador Sharpe,
,
coloni ació„* as
2 regiones Mica, U *
t í
~¡ *ftf|
| . «
de
« -
' »5
.
C. K b. Landslides and Related Phenomena . Nueva York :
- ,
C «P o
*** ,
M parajes ha aumentado en anos recientes y los estudios am¡ History", Geol Soc. Am. Bull , LIV ( 1943 ) , 1433- 1548.
r
ciados por los investigadores escandinavos y rusos se siguen \í Terzaghi, Karl, "Mechanism of Landslides", Geol . Soc. Am . Bull .
L:
sin descanso por los cient íficos americanos. Berkey Volume ( 1950 ) , 83 123. -
j Wahrhaftig, Clyde y Allan Cox, "Rock Glaciers in the Alaska
Glaciares de roca Range", Geol Soc. Am. Bull , LXX ( 1959 ) , 383-436,
White, Sidney E., "Processes of Erosion on Steep Slopes of Oahu ,
Los glaciares de roca son largas lenguas de escombros de i Hawaii", Am. J . Sci. CCI ÍIL ( 1949 ) , 168-86.
roca formados en los valles de ciertas regiones montañosas. I Wooley, R. R ., Cloudburst Floods in Utah, 1850-1938. Washington,
y
( y.
-
Aunque consisten casi por completo en roca , tienen un no- j
y ::' ?
. D. C.: U .S. Geol . Survey, Water Supply Paper 994, 1946.
table parecido con los glaciares de hielo. Un glaciar de roca \
ge
: :
RESUMEN '
;
Movimiento de masa. :M
Movimiento de la roca y del material sin consolidar, en
respue|
#
a la atracció n de la gravedad .
Comportamiento del material.
Como un sólido elástico, como una sustancia plástica o como r
ü:
fluido. t
Factores en el movimiento de masa. i
-
S3 - y
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i
3T
de agua
<
!
H TRAVEStrabajando
de millones de a ños en la historia de la Tierra,
constantemente los agentes de erosión
PRECIPITACION Y FLUJO DE
han estado UNA CORRIENTE
tiara reducir las masas terrestres al nivel de los mares. De
¡
i í estos agentes, el m ás importante es el agua que escurre en LA ECONOMIA DE UNA CORRIENTE
im I
í la superficie. A ñ o tras a ñ o, las corrientes de la tierra mueven
i - I sorprendentes cantidades de escombros y de material disuel - TRABAJO DEL AGUA DE
i to a través de sus valles a las grandes cuencas de asentamien- ESCURRIMIENTO SUPERFICIAL
to, -los océanos.
V K ir . “ Todos los r íos corren al mar, pero el mar no se llena ; al CARACTERES DE LOS VALLES
lugar de donde proceden los ríos, hacia all á regresan otra EVIDENCIAS DE QUE UNA CORRIENTE CORTA
-
vez” , dice el Eclesiastés 1:7. Y hacia allá regresan , a pesar
¡c
;: c de todo, porque, en ultimo an á lisis, el agua que corre por SU PROPIO VALLE
i
las pendientes en delgadas lá minas, y que después escurre CICLO DE EROSION
: - por riachuelos, corrientes y ríos, proviene de los océanos. Hay
d íl una excepción: al parecer, las erupciones volcá nicas traen a PATRONES DE DRENAJE Y CORRTENTES TIPO
mm
'
0M. la superficie agua del interior de la tierra; pero una vez que
i
ha alcanzado la superficie, esta agua también sigue el patrón
S
• 1
general del movimiento! del agua del mar a la tierra y de
nueva cuenta al mar, sistema que conocemos con el nombre
ele ciclo hidrol ó gico ( fig. 11-1 ) .
i
!
T
PRECIPITACION Y FLUJO I)E UNA CORRIENTE
¡Cuando el agua ha ca í do sobre la tierra
/ en forma de precipi-
* . »> tación, sigue
uno de los muchos caminos que integran el ciclo
1 . /
::.3< m
/ « ógico. La mayor parte se evapora , volviendo al aire
jfectamente,
«
.I
•
•
-• l o bien es tomada por las plantas y transpirada
,
ellas a la atmósfera. Una peque ña cantidad sigue el ca-
—
: ?;
wno del escurrimiento el agua que fluye sobre la super-
—
ncie y una cantidad todavía menor se embebe en el terreno
a ravés de la infiltración.
*La figura
-
11 2 muestra cómo la infiltración, el escurrimien-
y Ia evapo- transpiració n var
ían en seis localidades de los
p
i
i
^stados Unidos, muy distantes entre s í. En los ejemplos da-
0s> entre
el 54 y el 97 por ciento de la precipitación total
retorna a la atmósfera a través de la transpiración y evapora-
ción. Aproximadamente
del 2 al 27 por ciento drena a las
i :
Agientes y océanos como escurrimiento y entre el 1 y el 20
y.
P°r ciento se abre camino en el terreno por infiltración.
I Ln algunos de los capí tulos siguientes trataremos del agua
m en Varias etapas del ciclo hidrológico. En el capítulo 12 estu -
:
í -
:m c
153
í
>4 jRp ve]0cidad de una corriente est á determinada por muchos
*
f
Ifcfres
que incluyen la cantidad de agua que pasa por un
I ‘
r-== -:í-
s-zr
. "
dado IBM
, la naturaleza de los bancos o bordos de la co-
:M
y el gradiente o pendiente del lecho de esa misma
í;
-
S ví j;
íV
. !; I 1i . Lluvia
• i
v
Nieve
'
u C,° rídefente
yVi
y? laslongitudinal
rfil
^
. En general, el gradiente de una corriente disminu-
cabeceras hacia la desembocadura; como resultado,
de la corriente es m ás o menos cóncavo i tm>. 7
g¡
i
C
'O
: i
h
¡ Ipli el cielo ( fig. 11-4 ) . Normalmente expresamos el gra -
n ú mero de metros que des-
Aumento de velocidad y turbulencia
o
2
o
\ >
c |
| g
| te de una corriente por el FIG. 11-3
pende por kil ómetro de flujo. El r í o Mississippi entre Cairo ,
o •
s UJ U Glaciares u m <
Diagrama que presenta el flujo laminar y el
el íf Ütois, y Ia k°ca del
vi
River en Arkansas, tiene un gra - turbulento flujo de agua a trav és de una
sección de tuberí a. Las partículas individuales
SJ
LV
$ lí neas negras. En el flujo laminar
g
FIG 1 M. > '
.
\~
> • CL ,
:£ g
| t parte , el r í o Arkansas , en sus cabeceras a través de las las partí culas siguen caminos paralelos a las
paredes que los contienen. Al aumentar la
J ¿'
Monta ñ as Rocallosas en la parte central de Colorado, tiene
' ' > » *•
*
. UJ " "
' "A O. i
.
subsuelo, antes de volver por los rí os
al mar . También puede ser transpirada
una parte o evaporada directamente, volviendo
1
fll \ t:
tienen
6 kil
un gradiente medio de 42 metros por kilómetro, y en
ó metros superiores del r í o Uncompahgre en Colorado ,
flujo de agua en los rí os es turbulento.
a la atmó sfera antes de alcanzar el mar . I ellosgradiente medio es de 63 metros por kilómetro.
c miemos el agua que se infiltia en el terreno; en el capitulo
I ¿ a velocidad de una corriente es contrarrestada por la fric-
j
FIG. 11-4
i
i; -.
nos uParei °s del agua que ha sido depositada en|
I ¿ ¿
¡ n a lo largo de las orillas y del fondo del cauce y , en En perfil longitudinal ( ele la desembocadura
a las cabeceras ), el valle de una corriente es
f
|
I
Rio Miami, aguas capitu o
°
^ ^
tierra en forma de hielo de glaciar, condición que representa ¡
Ull paso ternpoial del avance del agua a trav és del C
|.
¡
|
¡||
mucho
J Rio Red ( Red River), aguas arriba y Transpiració n ) !i rriente. Estas fuerzas crean diferentes velocidades. Las zonas \
N del M
de Grand Forks, Dakota del Norte de má xima turbulencia concurren donde las diferentes velo-
FLUJO LAMINAR Y TURBULENTO. Cuando el agua se mueve ¡f cidades se ponen
® lentamente a lo largo de un canal terso, o a través de un tubo í~ en contacto estrechamente. Estas zonas son O 100
i
200
de paredes lisas, sigue trayectorias en l í nea recta paralelas al i muy delgadas , pues la velocidad del agua crece muy rá pida - Millas
V - Río Mississippi, aguas mente a medida que nos movemos de las paredes y del fondo
c - canal o a las paredes. Este tipo de movimiento se llama flujo í de 8000
arriba de Keokuk, lowa
laminar . ;l la corriente hacia el centro de la misma , pero dentro de
estas zonas delgadas de gran turbulencia muestra una co-
Pero si la velocidad de flujo se incrementa , o si el canal |
confinante se vuelve rugoso e irregular, el movimiento lineal ¡ rriente su más alto potencial de acción erosiva ( ver fig. 11-6 ) .
í
í IT
£ 5. • ¡:
R í o Pomperaug, aguas arriba 1 milla zr 1,609 m
Otro té rmino que nos ayudar á mucho en la explicación del
de Bennetts Bridge, Connecticut tranquilo se rompe. El agua en contacto con el canal retrasa j agua
i
v su movimiento por fricción, mientras que el resto tiende a mo- j por uncorriente es la descarga, o cantidad de agua que pasa 6000
punto dado en una unidad de tiempo. Com ú nmente
verse a lo largo como antes . En consecuencia ( ver fig. ll 3}> | se !e - RIO
Vi . '
y . .-
a R í o Zumbro, aguas arriba
de Zumbro, Minnesota
VA
T t
el agua se desv ía de sus cursos rectos en Una serie de vueltas I w*3 p. mide
y remolinos. Este tipo de movimiento se llama flujo turbi y
lento. El agua de los r íos regularmente fluye de esta maner»| #
en metros cú bicos por segundo, que se abrevia
s. La descarga varía no sólo de una corriente a otra ,
^
0 dentro de una misma corriente de tiempo en tiempo y
YUBA
4000
0 20 40 60 00 loo % siendo su flujo turbulento muy efectivo tanto en la erosión jpjflgai en lugar a lo largo de su curso. Normalmente la
*
hitemperismo es
.
Datos de H G . Hoyt y otros , Studies of
Relation of Rainfall and Run-off in the
ximadamente medio kilómetro por hora ) es relativamente *j j lede i*a tierra
ta, y una velocidad de a 7 8 metros por segundo ( 25
.
a
k
mm
* Ue
a las nuevas
'
y
una
variantes ^
reacci ó n de
condiciones
los materia
que en -
- RIO
YELLOWSTONE
4000
United States. Washington, D. C.: U .S. entran al quedar expuestas en o cerca de la superficie. En
Geol , Survey , Water Supply Paper 772 , 1936 . kilómetros por hora ) es relativamente alta .
Rí o Missouri
í 2000
.
r ’T ;
*
=_ .
Wr' - ]
"
t#A
J¡f % ¿«Sofr
d os, y que al cambiar éstos los miembros de
den ser transformados en miembros de otro.
r
- •
un gm¡
Tales
es ¿« HBMH Bte
«*> aoaju,
^
u * observ
ía verdades
en la naturaleza. Una pendiente c
fanStomentemS Sa. »
i
fueron indicado A
s en ,elT llamado
11 3 iii
ciclo de adas
F1 agua
El niT
las
que corre sobre el1 ^terreno en 1las corriente
rocas
. / C: ~ 1 .. •
tienoc a disminuir la e
MVnde i
proporci
^
•
ó n en que
. i * i
la
/
J J
velocida d «
«
500 «. «»0
establec er un
determinado por ,las oe
particulares que esta encuentra a lo largo de su
equilibr io entre la
3
-C 200
^
-a ai
100
5
A
t/i
E
LT>
O
Una simple ojeada nos dice que el comportamiento en
un lado y las caracter ísticas del canal , la velo- Tc3 .
no durante la é poca de crecientes es muy |
¿ %f /Ldiente
del , por el otro, la corriente reduce su gra - f g 2
Q O
.' v.iy
portamiento durante el estiaje
11 „
lleva
rrt >
mas agua „ } . Durant e
y se mueve con mayor rapidez. Por
diferente del co
las avenida
rT s im S í ente e mu fomenta
su velocidad , su anchura y su profundi - ¿
,
W ¿« med da que fluye no aba o. El perfil* resultan
. *
, It
. Q
. - mas alto y podr íamos suponer, aun sin medirlo, que su nivel $ fjfí
cada sección de la corriente, tti OV
¡
transversal , a velocidad es más lenta a lo si8ue : 1 ,000 10 ,000 ( 00, 000
ammi •
^
des § dativo a arS° t( urso corriente arriba , pues nin - Implications . Washington, D. C.. U.S. Geol .
°
i
aumenta , la anchura , la profundidad y la velocidad <ÉÍ
cada una en un grado definido. La corriente mantiencrecen i Suna
e un
Parfe
! ,
n Pue (ae erosionar bajo el
°
nenos mientras el lago no sea destruido. Pero en sentido geo-
^
nivel del lago al —
*
Survey , Professional Paper 252, 1953, p . 5 .
de I
5
no
jo.
control
Al no
ar
ser
á por
Pasemos ahora del comportamiento de una corriente en um i ésta quedará en libertad de continuar su erosión hacia aba-
perman
m á s
ente
tiempo el nivel- base de la corriente y
I
inos tambié n que la anchura y la
profundidad aumentan a|
. Sabe- : ! otios mas
erosiva está siempre influida por el océano, que es el
/
adelante, corriente abajo. Y su R í o Missouri
Bismarck,
, Rí o Mississippi
San Luis Missouri
medida que vamos corriente abajo. Pero si en lugar de hacer n Dakota del Norte Vicksburg, Mississippi
observaciones casuales reunimos datos precisos acerca de la [ I fina
^
embargo, como veremos en ips capítulos 5 ,000
;
2 ,000
encontraremos de nuevo que los cambios siguen un patrón í Y Por el nivel de la corriente principal de la cual es | j
definido y que la profundidad y la anchura crecen río 1 ,000
un tributario ( ver fig. 11-9 ) .
a medida que aumenta la descarga ( fig. 11-8 ) . Y, con bastan ñ
te sorpresa, hallaremos también que la velocidad de la c 1 W
rriente crece hacia su desembocadura. Esto va contra lo j»
era de esperarse, puesto que sabemos que los gradientes son i
<
*
a
- .
c P« r
Sl
!
_
LTT ® NIVEL-BASE , VARIABLE. Hemos
o
a iÜ qUl UI a C
° razo eIí vel ?,
T¥
definido el n .vel-
° -base pUCd ,e erosl<\nar
Tu
,
<
. 500
simple: a fin de manejar la descarga , m á s grande corriente , ®ntc° al construir una presa T
S
corriente están indicadas por las áreas basc de una
y crear un lago a 1lo ,largo
nlrel ‘
¿"
sombreadas en las secciones a través
de un ír o. Se encuentran allí donde eldel lecho
cambio abajo, la corriente debe no sólo ensanchar y profundizar su su cars<> - « nivel del lago sirve como un
entre las dos fuerzas opuestas — el flujo nuevo nivel-
cauce, sino aumentar también su velocidad . el §radien e de Ia corriente arriba de la presa es ahora
hacia adelante y la fricción del canal de la
—
corriente es más acentuado . Advi értase que
«Z' J
unos pronunciado que en su origen . Como ‘ consecuencia , la
la máxima turbulencia a lo largo de los Ajustes de gradiente
tramos rectos del íro está localizada en la parte
en que las orillas se unen al fondo de la
corriente . Hacia las curvas, las dos zonas
El gradiente de una corriente disminuye a lo largo de su gtede
^
| l dad de la corriente se reduce, y puesto que ésta no
llevar por más tiempo todo el material aportado, co- 2
curso de las cabeceras a la desembocadura, produciendo uu ¡^len2:a a depositar sedimentos en el punto donde penetra al -^ w
m - en que un tributario se une a Una corriente pura. ira hemos visto que cuando cae el agua v se filtra en
disuelve algunos de los componentes del suelo
. principal y por el océano De éstos . ¡
é terreno
el océano es considerado como el último nivel-
V ;
Después el agua puede colarse hacia abajo, a través d é las
base; los otros son niveles-base temporales.
aberturas,, poros y grietas de la roca basal v disolver materia
¿Qué sucede cuando bajamos el nivel-base al quitarMI
y ;
!
adicional asumedida que se mueve. Gran parte de estTagua
camino hacia las corrientes a niveles inferiores
encuentra de materia disuelta
presa y consecuentemente el lago? El r ío podrá ahora cortar í
los sedimentos que depositó cuando todaví a exist ía el| j ppj
:
t
y
puntos a lo largo del valle o los conduce a los lagos o a los I
océanos. Los r íos pueden ayudar a crear un abismo como ei { ítr M0
°
del Gran Ca ñón del Colorado, o en la época de las avenidas, f |SUSPENSION. Las part í culas de materia sólida que son ba -
pueden esparcir lodo y arena sobre vastas extensiones de los I rridas por la corriente turbulenta de un río constituyen el
valles planos, o construir deltas como los de las desemboca- material en suspensión. Este proceso de transporte est á con-
duras de los ríos Ni lo y Mississippi. trolado por 2 factores : 1 ) la turbulencia del agua y 2 ) una
La naturaleza y extensió n de estas actividades depende de| caracter ística conocida como velocidad terminal de cada gra - .
FIG 11-11
!
la energ ía cin ética de la corriente, y ésta, a su vez , depende| no individual. La velocidad terminal es la relación constante Estos rí os convergentes en la Columbia
í; de la cantidad de agua y del gradiente del canal de la co|
energ í de var
í as maneras la
.
- de ca ída que ever tualmente alcanza un grano cuando la ace-
| leración causada por la gravedad se equilibra por la resiten -
británica ilustran las diferentes cargas
acarreadas por dos corrientes. El rí o Frazer,
.
rriente Una corriente gasta su a ; que viene de la parte superior derecha
presenta un aspecto lechoso debido a los>
mayor parte se consume en la fricción del agua sobre el cauce 5 cia del fluido a través del cual est á cayendo el grano. En este sedimentos que lleva en suspensión, derivados
4
Lago
Presa y en la del agua con el agua en los remolinos turbulentos de caso el fluido es el agua. Si dejamos caer un grano de arena en gran parte de la fusi ón de los glaciares
que hablamos anteriormente. Es relativamente escasa la cner- 1 en un estanque tranquilo, se asentará hacia el fondo a una de montaña. Su carga es alta> pero
; . ..
Gradiente de la corriente original gia de la corriente que queda para la erosió n y
• transporte| velocidad siempre posiblemente algo menor que su capacidad .
i.
;
creciente hasta que la fricción del agua
de material. El depósito tiene lugar cuando disminuye k i sobre el grano equilibre este grado de incremento; despu és
El río Thompson, en la pane inferior
es relativamente claro y lleva una carga>
energía y la corriente no puede mover por m ás tiempo el ma- se asentará el grano a una velocidad constante, que es su
¡G 'AG!i
A mucho menor que su capacidad .
velocidad terminal. Si podemos introducir una fuerza que Foto por Elliott A. Riggs.
terial que ha estado trasladando.
:• i
Dep ó sitoa lo largo del lecho de la
corriente aguas arriba del lago %
Gradiente de !a Dep ó sitos ‘guale o exceda a la velocidad terminal del grano, lograremos
¿T nueva corriente en el lago
Canal de erosi ó n
Transporte mantenerlo en suspensión. El agua turbulenta proporciona
/ aguas abajo
levanta directamente de su pro 1 / § fuerza; los remolinos del agua turbulenta se mueven en
• l •
||
El material que una corriente
•
h ( te la presa
*. .
Gradiente antiguo
.
‘1 VIT V’ T
—
pío cauce o que es aportada por el
por sus tributarios o por el movimiento de masa
deslave de una
se
|
|
la
—
( fe
| mía serie de ó rbitas y los granos que caen en estos
Wcp
remolinos
én flotar o mantenerse en supensión mientras la veloci -
B corriente abajo hacia su meta eventual, el océano. La
cantíos j agua turbulenta sea igual, o mayor, que la velocidad
lleva en cualquier momento | , f ,terminal de los granos.
de material que una corriente
. La velocidad terminal aumenta con el tama ñ
que constituye su carga, es, normalmente, menor que su camj
—
Erosi ó n de los dep ósitos Presa y lago o de la par -
fluviales y del lago destruidos Dep ósito en la secci ó n transportar bap | titula , suponiendo que su forma general
A i erosionada del canal cidad es decir, la cantidad total que puede y densidad perma -
una cierta serie de condiciones ( ver fig. 11-11 ) . El tajpM Jtecen
iguales . Cuanto m ás grande es una partícula, m á
s tur -
i i
mover una corriente djBI * ciento deberá ser el flujo que se necesita para mantenerla
máximo de las partículas capaz de experiment# | S su$pensión ; y puesto que la turbulencia aumenta con la
mina la competencia de dicha corriente. Los
Restablecimiento del gradiente
de la corriente original
realizados indican que el diá metro de una partícula que de flujo, resulta que la cantidad m ás grande de
- Iptl es movida durante la época
C
mover una corriente varía aproximadamente con el $¡ cuadra ^
FIG. 11- 10
La corriente ajusta su canal a las variaciones
del nivel-base. La construcción de una presa
de la velocidad. Así, una corriente con una velocidad í ¡
metros por hora puede mover part ículas de arena grueS f j
duplica
¡|
| ¡
¡
ilpP * ^
de avenidas, es
as velocidades y la turbulencia son mayores. Ladecir
fig. 11-12 indica cómo aumenta la carga en sus
a medida que crece la descarga . En
,
grá - _ -
:
a través de un íro eleva su nivel-base, unos 0.5 mm de. di á metro . Si la velocidad se
horas o muy pocos días durante la é pocasolamente unas
impone una velocidad menor que la de la metros por hora, entonces el diámetro de la partículaJS de inunda -
puede ser movida aumenta a 2 mm ., y si la corrientev IS P
corriente aguas arriba de la presa y causa 8 transporta una corriente m ás material que durante
con ello el depósito en esta sección del canal . nJ gj ÉéJV 0S de flujo bajo o normal mucho m ás largos. Las
á La destrucción de la presa rebaja el nivel -base, a una velocidad de 1,600 metros por hora, podrá °| obser -
incrementa la velocidad y provoca la erosión
de los sedimentos previamente depositados. guijarro de unos 8 mm. de diá metro. realizadas en el á rea drenada por Arroyo Coon ( Coon
Wy
i ¡¡¡I
m ño de arcilla y limo. La razón está en que
^
CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA
Creek ) , en el valle de Coon, Wisconsin, por un períodí®S| ®ñas del tama 161
JlB ^^] tet
160 CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA
i
V
i
í
.
••
100.000
>
450 días , demostraron que el 90 por ciento de la carga
en suspensión de la corriente fue transportado durante
intervalo de 10 d ías , que es poco ás m del 2 por ciento Wt ^^^^
iB! &Kk
íeulas m pequeñas tienden a compactarse o conso-
á s
ip §®p|más firmemente , y cuando sucede esto en un depó-
¡ -
^^é^^
fc ft
individuales ser tan pequeñas que no so-
í.
: tiempo total . I íí culas
,
A i::-
m
r
-oc:
c
<D
Cl.
=ons
a
10,000
E1 limo y las part í culas del tamaño de arcilla están di
buidos bastante uniformemente a través de la profundic É|
de una corriente, pero las partículas más
ño de los granos de arena son —
gruesas
transportadas
— del|
en
| ÍjB
rnawfBI ! íícula ha
; '
1° su *
1 §HÍ ser barr* én , Por
tambi
sido
das
c en
en
desalojada
e
e
la
bac
^a
fig
6
del
*
.
l
a
*,
a
11
arr
^
-
lecho
13^ ,
a dentro de la corriente,
roulcnta
que
de la
.
una vez que una par-
corriente , continuara
OJ £
cantidades a nivel inferior de la corriente en la zona wSJ ¿ transportada aun cuando la velocidad de la corriente
g I Sendo
r:.vj oo O
, de '
O (tí
SaÉ> g yor turbulencia . |
E |¡g§gj| |( y Por 1° tant0 menos energí a ) para mantener una
E ° 1000
:
a
•
a> rd
CARGA DE FONDO . Los materiales que se mueven a lo la | || | Jlgeula en movimiento que la necesaria para erosionar la par-
on
a> a
* del fondo de una corriente constituyen la carga de fondo de I Aja e iniciar su movimiento ,
T3
dicha corriente , en contraste con la carga suspendida y iji §¡gg¡ ,
ABRASIóN , IMPACTO Y SOLUCIóN. Las part í culas sólidas trans-
^iJ¡
O
-dw> Q.
carga en solución . Puesto que es dif í cil observar y med Kf
O
Q.
oo 100 movimiento de la carga de fondo, tenemos pocos datos sobM f portadas por
una corriente pueden actuar por s í mismas como
c:
hechas el río Nio. i agentes erosivos , puesto que son capaces ele desgastar el le-
!
«s el particular . Sin embargo, las medidas en
mas grandes del fondo de la corriente,
brara, cerca de Cody , Nebraska , han demostrado que en | § cho o los lecho es desgastado
h- fragmentos
por abrasion, generalmente
cargas entre 6 y 28 m . p.s. , la carga de fondo promedia aproxi-
3
í Cuando el
una serie de superficies curvas, tersas, ya convexas
mudamente el 50 por ciento de la carga total . I as partículas 1 desarrolla
r
,
- nas y los
ch individuales del fondo
10 100 1000 de la carga de fondo se mueven hacia adelante de 3 maneras: f 0 e éncavas
na corrjen
as
e son
**
a^* guijarros
vc es movidos y rodados por la fuer-
£
f ^
Descarga en pies c ú bicos por segundo por saltaci ón , rodamiento o deslizamiento . &IÉSÉÍ ü
E 1 término saltació n no tiene nada que ver con la sal . Se u a9u la’ Y como se frotan unos con otros se redondean
^
FIG . 11- 12 tersos - ,
La carga suspendida de una corriente deriva del latín saltare , “ brincar . Una partícula impelida por I y i)acen llsos £ las part
” *
>:
i!
s •
}<
aumenta muy rá pidamente durante las
inundaciones, como se indica en esta grá fica
basada en observaciones hechas en el rí o
Puerco, cerca de Cabez ón, en Nuevo M éxico.
saltación brinca de un puni ó a otro del lecho de la corrientK
primero levantada por una corriente de agua turbulenta f
despedida hacia adelante; a continuación, si es demasiado | "arSa de la coyrifnte
'
\ ° ^*
impacto
ras PartK
tambi
‘ulas hace saltar fragmentos que se suman a la
; , ,
én algo de erosion de la solución de los es-
,
i
Redibujado de Luna B. Leopold y John pesada para mantenerse en suspensi ó n , cae otra vez al fondo ! apesulta
. : P . Miller, Ephemeral Streams- Hydraulic en algún sitio , corriente abajo . ; %f combros y de las rocas del fondo del cauce en el agua de la
i Factors and Their Relation to the Drainage corriente . Sin embargo, la mayor parte de la materia disuelta
TO .
Net. Washington, D . C i U.S. Geol. Survey , Algunas part í culas son excesivamente grandes y pesadas f
l;i
Professional Paper 282- A, 1956, p . 11 . la transportada por una corriente es probablemente una contri-
i- ?! para ser levantadas , aun moment á neamente , por corriente ; f del subsuelo que drena en ella ,
pero pueden ser empujadas e impelidas a lo largo del lecho| M
i:
'
i
-:
» del agua
; "
'
II
de la corriente y , de acuerdo con su forma , moverse hacia i CAVITACIóN . A velocidades muy altas, de unos 7 a 9 metros
adelante, ya sea por rodamiento o por deslizamiento. I
por segundo, entra en juego un proceso erosivo altamente
efectivo, conocido como cavitaci ón. Derivada de la palabra E pGrá nulos
í-yl
! t
í::
Erosión I latina que significa “ hueco o cavidad” , la cavitación se refiere E E
£
11f rr° - J
Guija
E
E
Una corriente hace más que simplemente transportar material I
i:.v al colapso repentino de las burbujas de vapor en el agua de Arcilla °.
o
Limo 9 ARENA 't s
^W
:
0 tra ído a ella por otros agentes de erosi ó n , ya que es un efec*
| »» corriente . Si una burbuja está en contacto con el lecho
¡
j§| corriente en el momento en que sobreviene la ruptura ,
í T
tivo agente de erosión en s í misma . Una corriente de erosión | ;w
•' i
activa puede mover el material de su cauce o de sus bancos I produce un impacto extremadamente fuerte . Por dificul - 10
— >
^r<
Partículas erosionadas
-
i
íaaes obvias es dif ícil medir la fuerza exacta del impacto;
de varias maneras .
•
:
vg
§¡§ Pera ciertos experimentos, as í como las condiciones teóricas, </>
<L>
LEVANTAMIENTO DIRECTO. Como hemos visto , en el § J
;
^ ^^
turbulento el agua se desplaza a lo largo de caminos na:] ft / 4 Jcentí metro cuadrado, una fuerza erosiva muy efectiva , — c: tz
=3 /
i lelos al fondo. El agua se arremolina y da vueltas, y r j f l u n experimento se demostró que la cavitación había ero-
' -C3
íti
-a
CL»
iyi
Part ículas
transportadas /
/
remolino es suficientemente poderoso, desaloja part ícula | sionado 45 cent ímetros de un vertedor de concreto durante
s
/
/
/
/
/
Part ículas
depositadas
^ ^¡
bles dif í ciles de medir. Pero si suponemos que el J jucir cavitación en las corrientes, es posible que este pro- .01
/
|
^
una corriente está compuesto de part í culas de taiTiañ<? p | ¿ É lamente tenga lugar en el flujo de chorro e impacto /
forme , entonces la gráfica de la fig. 11-13 nos indica as ae *as cascadas y rá pidos ,
cidades aproximadas necesarias para que la corriente
^
erosKP .001
/
-ic¡
í "
part ículas de varios tama ños , tales como arcilla, limo, arena | JgpoN
, DE LA PENDIENTE POR EL AGUA QUE ESCURRE EN LA lf í
O O
\N 04
N
considerado la erosión que se produce so- o o üV* in
grá nalos y guijarros . Por ejemplo , el lecho de un r í o o
a lo
puesto de granos de arena de tamañ o medio puede scr || | ||§
a | e erosion acuatica mas
r del cauce de un río -que es ciertamente Tama ñ o de las part ículas
•
:
sionado por una corriente con una velocidad de menos {Mte ie destacada — , pero el area FIG. 11- 13
5
cent í metros por segundo. A medida que los fragmentoSWliM
cubren los cauces de las corrientes es sólo una pro-
2!
mentan en tama ño, variando de la arena gruesa a los ®
pequeña de la superficie total del terreno dre- Este diagrama indica las velocidades a las
vez Por tales corrientes , que acaso no exceda del 1 por cien- cuales una corriente erosiona, transporta y
los y a los guijarros , se necesitan velocidades cada *
^glpvan
^ deposita partículas de diferentes tamaños.
v
|
ü
:
altas para su desplazamiento
Pero lo curioso por
.
inesperado es que se necesitan velotf *
^
S ateriales m ás gruesosla; despu és, a medida que la veloci-
. v> r
de descarga moderada, el r í o fluyó sobre
p
to
llien
v
ry.
y XA </
- ' '
gp
de Leopold y Maddock , op. cit ., p . 32. mmmm wSiímsn - | o cent í metros
de los
•¿S
0 WíMé&i
¿S M ; Í
FIG . IMS
-A
! ••"
con 160 kilómetros de ríos, una lá mina de agua de 6 milíme- s Parte -ayuas angosto Parte - aguas plano
i - Secciones transversales diagramdticas de valles
.
fluviales tí picos Los rasgos principales
mt:
’
rf
tros de espesor produce un escurrimiento de 623 metros cú «M - ÉÉfS de los valles en sección transversal incluyen
, s 1:
m
-
;?•:
bicos por segundo. Si esta misma lá mina de agua acarreara j
un 10 por ciento de materia sólida por volumen y fluyera i
durante 6 horas, removería entre 6 y 8 milí metros de suelo :
Repitiendo las palabras del autor de este cá lculo : I
:
|
yV
I
.
^ los parte-aguas, las paredes del valle,
el canal o cauce del rí o y , en algunos casos >
una planicie de inundación. Los parte
aguas pueden ser de cuna plana o
-
suavemente redondeados.
B
’ i:
•v
. fc De agua unas cuantas gotas,
v : i
i de arena unos cuantos puntos, 1 CARACTERES D E LOS VALLES
:A !; ni u al correr por siempre juntos
: í
m rompen el suelo y las rocas.- Perfiles transversales de los valles
: : i !\ vi- ¡ Aunque la importancia de la erosión de las laderas a causa í Al principio de este capí tulo mencionamos el perfil longitu-
:<
i
:
:
:
-’ !. :
;
v
i
- de! agua que escurre en la superficie pasa con frecuencia j dinal de una corriente ( lig. 11-4 ) . Consideremos ahora el
i
.
:
1 inadvertida, desempeña un papel importante en el proceso| perfil de una sección que cruce en á ngulo recto el valle de
•- i .- ! :i i general de erosión. Nos referiremos a ella nuevamente más f ¡acorriente. En la fig. 11-15A, se ve que el canal del r ío corre
K
I
Ill adelante en este mismo cap í tulo. S§f| a través de una amplia y relativamente llana planicie d e
m / , , , YT . . . v I inundaci ó n. Durante el per íodo de avenidas, cuando el cauce
•
• T .
iguales otros factores £ . .
, cuanto mas grande es la velocidad ae ¡ ,
i / \ no tiene, cupo
i para ia descarga en aumento, se derrama la
. , .
una corriente,
, f
. . mayor
.
i • c
es su poder erosivo. Es claro , entonces
1
i
. KL. ,1
,\ -emente
cada
, . , ,
i
sobre
lado de la
,
sus, ibordos
planicie
. *
i
de
e inunda esta area . 0
. 1
mundacion unas p a
Se ilevantan
,
r e d e s d e valle
,,
a
i
• /
9. .- >
v
que
1
. . .
1
la tuerza erosiva mas grande (v y/ el mayor / /
, t r a n s p como
*
. o r t e n
copetes , llamadas i
parte -aguas , que son\las separaciones
, -
comente tiene ilugar durante la época de las a
^
. j i
t
cuaiquier vaUes laterales. En la , fig. 11-15
.01
indas. Cuando una comente esta en ia etapa de inundación, i
. , j , , r j- iri WáIAL ®
}
^
esta presente la planicie de mundacion , pues las paredes
i
B
i
el nivel del agua se eleva ,
y el canal se profundiza . El agpT y valle
- J 1levanta
}
. -i capas
i
i
de arena ) íi SC
i *
- j directamente
n * descienden v *
,
i .£
a ilos Ibordos
J
del no. Este
que
1 se mueve ,
con mas rapidez
r las ,J « agrama ilustra
^ tambi u é n
,
dos diferentes
«
. c
formas de parte-
. i
Z durante 1
. t . . . Cí f dsuas
las é pocas normales , y las barre corriente abajo. i eií 1110 r ., , ’
i i TI ij
ce ,
AI .
contrastan con ios parte -aguas
J . Ambos
"
. , ele una navaja
i
ia avenida es importante \
, la roca L j
deli r
fondo i
queda i expuesw ^ °
y se erosiona . Ai descender el nivel de las aguas se junta
;C
:~
i
£
í
nueva capa de escombros; pero para entonces han sido moj*
das grandes masas de material corriente abajo hacia los
Cuencas de drenaje ^
$2
nos, y el fondo rocoso del cauce de la corriente habrá des| « cuenca de drenaje constituye toda el área de la cual
una corriente y sus tributarios reciben agua. El río Mississippi -
FÍG. 11 16
: s“ :
1
-
dido permanentemente. La fig. 11-14 ilustra esta actividad
En consecuencia, podernos decir que, en general, la
^
y sus tributarios drenan una enorme sección del centro de Cada corriente, no importa , la cuant í a ,
sión es m ás efectiva durante los per íodos de inundaci ó n . los Estados Unidos que va desde las Rocallosas hasta los tiene su propia cuenca de drenaje, que es el
área de la cual la corriente y sus tributarios
:
r- ?' .
É - Í8 .
?•
i
2 Robert E. Horton , “ Sheet Erosion - Present and Past ” , Trans.
Ceophys, Union, XXII ( 1941), 300.
aroa ^
alaches y cada tributario del Mississippi tiene su propia
de drenaje, que forma parte de la cuenca más grande.
reciben agua. Esta cuenca semeja la h o j a
de un árbol y sus nervaduras .
1 :s
.
r
0\x 164 CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA Cada corriente, aun la ca ñada m ás pequeñ a, tiene su
Pastal ser eliminada con el tiempo. Las cataratas son origina - CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA
cuenca de drenaje, cuya forma difiere de una corrien H
otra, pero con la forma caracter ística de una pera por c áS
extremo angosto emerge la corriente principal ( ver fig. llrM
el
^® wgfte
Ijfftor
muy diferentes condiciones. Las del Niá gara , por
est á n formadas por una capa de dolomita relativa - /
zz /
Xz
z
165
r
'
to superficia labro por primera vez los grandes valles y fe {
cuencas de drenaje de los continentes, pues as evi enci|
^, se deSploma sobre la base de la catarata. Se repite
$ | pÉgL otra Vez este proceso a medida que pasa el tiempo, y
Cc
i:
pierden en el tiempo. Sin embargo, sa emos, que ciertos
procesos est á n ahora en acción ensanchando y profundizan. i: %l taratas
^ se retraen lentamente r ío arriba. Los datos histó-
- -
y : :»: : ;:?
-ij'i ii£T/ ( iVirm '
A
do los valles, y parece razonable suponer que también actu I
* de
int ]
Ia
ican c
Herradura
^
que la parte canadiense de las cataratas llama -
(Ilorceshoe ) — < jue son las m ás grandes
\ v - y' O- ^ -J &Doo
//
I!
ron en el pasado.
°
misma su nivel- base, erosionaría el lecho directamente hacia
s
Si se dejara a una corriente en libertad de alcanzar P r sí f
f
das
las dos
cidad de L
cascadas
20 a 1.50
del Niá gara se han retirado a la velo-
metros por a ñ o en tanto que la catarata
— Las cataratas del Niágara caen de una capa de
.
FIG 11 19 -
ana se ha erosionado a razón de 6 u 8 cent í metros
¡
*
!L!
abajo, formando un abismo de paredes verticales en el pro. ij »* dolomita bajo la cual existen principalmente
1
>\ v*
Los u kilómetros de garganta entre el pie de las .
capas de lutita A medida que la lutita,
¡ tas y el lago Ontario son evidencia de la regresión de
.L
s
SNS
ceso. Pero como la corriente no es el umeo agente que trabaja menos resistente, se va erosionando ,
en la formación del valle, las paredes c e a mayoi ía de los \ se rompe el borde socavado de la dolomita
hacia sus cabeceras a través del tiempo,
i m valles se inclinan hacia arriba y hacia tuera ciei rondo del| cataratas y el labio de las cataratas retrocede.
I valle. Con el tiempo aun los cantiles de las gargantas más j .
Redibujado de G K . Gilbert , Niagara Falls
and Their History, ( Nueva York: American
i; . abruptas se inclinarán hacia fuera con relación al eje de sus
valles.
Book Company , 1896 ), p 213. .
:
Conforme una corriente corta hacia abajo y profundiza su ! Cascada
B cauce dentro de la superficie del terreno, el intemperismot i IlggSSgSP - - '
.
FIG 11-17 los deslaves y el movimiento de masa entran en juego, des f
.-n.;
; *
: ‘ :
Si la formación de un valle dependiese sólo gastando constantemente las paredes del valle, haciéndolas A
:
retroceder, apartá ndose entre s í. El material bajo la influen j
!•
de la corriente de agua, tendríamos como
3S: . '
V resultado un valle de paredes verticales
no mas ancho que el canal de la corriente, cia de la gravedad , es arrastrado de las paredes del valle ha- !
*
R á pidos
como se sugiere con las lí neas punteadas cia abajo y descargado en la corriente, para ser movido hacia | Perfil de la corriente anterior
en los esquemas A I/ B. adelante rumbo a los mares. El resultado es un valle cuyas| . VA
embargo, desgastan constantemente las paredes paredes se ensanchan hacia fuera y hacia arriba , desde la co j *
rz ?
l! del valle labrando las laderas, que ensanchan rriente, para formar un perfil transversal t í pico ( fig. ll-17). jg| B
hacia arriba y hacia fuera del valle, La velocidad con que las paredes del valle son reducidas íi:.
como se ilustra en los diagramas . y los ángulos que adoptan dependen de varios factores. Si f Is
XT Punto de deflexi ó n '
— —
•J
f
_ FIG. 11-20
lf|f .
FIG IMS
La erosi ón producida por una corriente pequeña
las paredes está n hechas de material sin consolidar que es
vulnerable a la erosión y al movimiento de masa , la veloci- ¡
dad será r á pida ; pero si las paredes está n constituidas de roca
3
¡¡^¡¡gu s-.v.-vv^ i
Perfil de ia corriente anterior
i
"
En las primeras etapas de ensanchamiento del valle, cuando j ( Lower Falls ) . Las cataratas saltan de la boca de un peque- remolinos de agua turbulenta han servido
la corriente está todav í a por encima de su nivel-base, predo- j ño valle alto, situado por encima del valle principal de Yose
. Hmi&a
i
como herramientas de corte que han cavado
mina la erosión hacia abajo. Posteriormente, a medida quep l mite. La sola cascada superior mide 436 metros , que es 9
- los agujeros. Foto por Paul MacClintock .
i ;’
*
.
Y
corriente se aproxima a su nivel-base, la erosió n hacia abajp j veces la altura de la del Niá gara . Durante la edad de hielo
& va siendo cada vez menos importante; en esta etapa se desR los glaciares ahondaron el valle principal más profundamente
tina a la erosión de sus bordos una proporción m ás graiujgji que los valles laterales. En consecuencia , cuando el hielo del
km
,
il de la energí a de la corriente. Como ésta oscila de un lado *g ; glaciar se fundió, el valle principal había quedado bastante
;C - fci.
K >
otro, forma sobre el fondo del valle una planicie de inunegt abajo de su tributario, el cual se le une ahora despu és de una
^
ción que tiende a ensancharse siempre, y el valle se haceg [ caída de poco m ás de 800 metros ( ver “ Valles colgados” en
f:
El cada vez m ás amplio.
Volveremos después al desarrollo progresivo de un v a l l e,
e capítulo 13 ) .
L a s cataratas Victoria del río Zambeze de Africa fueron
v I
cuando consideremos el ciclo de erosión ; pero antes exai | gj husadas por otra serie de condiciones. Aqu í el Zambeze cae
i. naremos algunas características específicas de los valles. Jgj s°bre una capa de lava resistente situada a 90 metros abajo
de la garganta. Esta misma sigue un
Características de los valles angostos v
ilij
curso en zig zag exca
por as cataratas en recesión a lo largo de las zonas -
.
c debilidad en la roca. Estas
/ *
CATARATAS Y Rá PIDOS. Entre los más fascinantes espectácp
los del paisaje figuran las cataratas. Poderosas y atronador^
zonas son el resultado de frac
que se intersectan en las capas de lava. Los rá pidos, al -
*??kl que Jas cascadas, ocurren donde hay un descenso re
como son , representan, sin embargo, rasgos de corta duraci
en la historia de una corriente. Deben su existencia a algu*19
| | Patino en el cauce de la corriente. Aunque los rá pidos no
- lliliiSSS
—
-. SW3S
ca í da repentina en el perfil longitudinal del r ío, ca ída | 9| Usa Precipitan directamente hacia abajo como las cataratas, la
1 1V .
mm S
'
i V?
de su formación es, en el fondo, frecuentemente la mis
m
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i
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B
m t
é
|¡
ma . De hecho muchos rápidos se han desarrollado directa
mente a partir de cataratas preexistentes ( ver fig . 11 -20 ) .
I
oscila sobre
Elisi¿ón
lado interior del siguiente recodo . Como el r í o
cauce odeenunellado a otro, el meandro continúa creciendo por
el lado externo de las curvas y por depósitos
CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA
m
167
\
m m
H;
•
§j
i
una corriente, se forman a veces delinas o sumideros . Est m
son agujeros profundos , circulares o el í pticos, de unos cuantos
cent í metros a uno o varios metros de profundidad. Se 1 1
observa más frecuentemente en el cauce de la comente JjT
^^ C<
J
causa
¿hiriente abajo
un
ja
tama
corriente .
ño crí tico, que se incrementa con el tamaño
-
i
i
I
m
* ^ que en el de corriente arriba , todo el recodo
Mr
-1
¡SÜv
ggl V
;
, .VT
Í
I
n
?
rente la época de estiaje o a lo largo de la parte inferior R
las paredes donde van quedando cuando la corriente pp¿ \’iI
fundiza su cauce . Las dolinas son mas comunes en los valles
angostos, pero con frecuencia se encuentran tambi én en l0s f\1
^ Movimiento
.
¿
üeJl e a moverse lentamente valle abajo. Sin embargo, este
no es uniforme, y bajo ciertas condiciones el
arrasé corriente abajo de una serie de meandros produce
Mtrangulamientos, meandros abandonados y los llamados la -
7Á w.
FIG. 11 24
La faja de meandros es la porción de la
planicie de inundación que incluye
-
: §¡j
¡|iI una corriente serpenteante.
valles amplios . | gos en forma de yugo de buey.
La dolina comienza como una depresión somera en el fea. \
^
gn Su migración valle abajo, corre algunas veces el mean-
; • do del lecho de una corriente. Después, a medida que loslf jr0 dentro de una extensión de tierra relativamente más re
i
^
I71eandros subsiste , y pronto comienza a re -
^
iv! í
La planicie de inundación creada por la erosi ó n lateral y *
-
gada cubierta de grava, arena y limo de unos cuantos ded- f °
^
,1 }/
el nombre de canal de interconexión. ( Ver figs .
metros o pocos metros de espesor. Por otra parte , bajo el >
FIG. 11 25 -
fondo de muchos valles amplios se encuentran depósitos de I Las divagaciones de un no demuestran una unidad de for -
t
Vestigio de , grava arena y limo que alcanzan 100 o más metros de es- Este lago en media luna, cerca de Weslaco ,
mas ,aás <Iue 11n equilibrio de la erosión y el depósito . Por Texas, formó en tiempos pasados parte del
.S
'•
m un meandro á
antiguo J pesor. Estos gruesos depósitos se forman cuando las condi- longitud de un meandro es proporcional a la an- Rí o Grande que se ve al fondo. Una antigua
SK íí
clones variantes fuerzan al rí o a dejar caer su carga a lo e l e I dej jano y esto resulta cierto, independientemente de!
curva del íro quedó separada por un
- ancho del fondo del valle . Tal planicie de inundaci
mada por la construcción del fondo del valle o agradación,
ón for -
" > del « o‘
; se aplica tanto a cauces de escasos metros de
estrangulamiento, permaneciendo
ro y llena de agua.
aislada del í
Foto por Standard Oil Co . ( N . }.).
,M como a tan grandes como el del Mississippi ,
I *
ri
m
:
mi
h i;
p *i
zonas de menor turbulencia, bien a lo largo del centr
^ y
¡á
ns 1 .
mm m CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA
m 1, 000,000
EXPLICACION
4* Bija5 laderas del valle bajo la influencia de los deslaves y CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA 169
. -
FIG H 27 «, Meandros de los I 1 movimiento de
masa, cantidades relativamente peque ñ as
i A : La longitud del meandro crece en relación
r í os y ca ñ adas
z ¡plscombros de varios tipos y tama ñ os y se distribuyen a lo
a la anchura de la corriente divagante .
i 100,000 Meandros de la corriente
*
B : Una relaci ón semejante existe entre
t/l
OI *QMEANDROS
del Golfo ( Golf Stream ) 100,000
'00,000 de *°S *ados de* fondo ded va ^e distribución de los
*
' g ¡
í I!- y M . Gordon Wolman, “ River Meanders”
10 000 i
0.000 construye el fondo de valle.
'
.
Geol. Soc. Am Bull., LXX 1 ( I 960 ), p. 773. o 10, 000 flfite corriente divagante estásucambiando
v?
continuamente su
:l O
§ Una
~ C
2 . II í y on un per íodo de tiempo dado puede haber ocupado
'.000 ,
ft f 000 v
tice
E
1 todaposición pasible de uno a otro lado de la planicie. Una
sección transversal
o 9
a través de la planicie de inundación des-
100 *
5
[=: ai
I arrollada por una
corriente como éstas revela una cubierta
7
x-
T3 loo
a i 1 de grava coronada por sedimentos de grano fino depositados
. t
en
c 10
0 í
cuando el flujo rebasa
los bancos ( ver fig. 11-29, A ). Esta for-
O to
Anchura de[ canal, en pies
100 1000 5 10 100 1000
ma !$ I
lopoo
de
100000 sedimentaci
Radio de curvatura medio, en p s|S I
ó n es t í pica de las planicies de inundació n
i;
A B ^ í erosi ó nales y de las de inundaci ón de agradamiento muy lento.
. i Pero una corriente divagante que construya su planicie de
BORDOS NATURALES. En muchas planicies de inundación la
inundación con rapidez tiene menos oportunidad de ocupar
superficie del agua de la corriente se mantiene por encima j cada lugar a través de la extensión del fondo de su valle. En
FIG. 11-80
del nivel del fondo- del valle a causa de la presencia de ban' \I consecuencia, esta planicie de inundación estará cubierta en El delta ( área sombrada ) del río St . Clair
:: cos de arena y limo llamados bordos naturales. Estos bancos su mayor parte por sedimentos finos, depositados durante las en el lago St . Clair tiene la forma clásica de
; tienen una pendiente suave casi imperceptible, que se extien
de desde su cresta a lo largo del río hacia ambos lados del
épocas de -
creciente . Una secci ó n transversal indica una banda un delta, así como sus canales de distribuci ón.
Redibujado de Leon J . Cole; “ The Delta of
-
FIG. 11 28 irregular de material grueso que señala las posiciones sucesi- the St . Clair River” , Geological Survey
Bordos naturales, caracterí sticos de muchas
valle. La planicie de inundación adyacente a un bordo natu- f vas del cauce ( ver fig. 11-29, B ) . Las planicies de inundación of Michigan, IX ( 1903 ), Pt . I , Plate 1 .
Y
ral puede contener á reas pantanosas conocidas como pautemos i de agradamiento rápido muestran este tipo de depósito.
corrientes de agradación. Estos diagramas,
7
: muy exagerados, indican la formación de las posteriores. Los bordos se forman durante las épocas de ininv | f
capas de limo a manera de cu ña, que se dación, cuando el agua se desborda sobre los bancas del río i DELTAS Y ABANICOS ALUVIALES. Durante siglos, el río Nilo
7; adelgazan hacia los lí mites laterales del valle.
A medida que se van formando los bancos en la planicie de inundación. Puesto que el agua lodosa al ! ha depositado sedimentos a medida que desagua en el mar
:< :
- laterales, se eleva también el fondo elevarse sobre el banco del r í o ya no queda confinada por el I Mediterrá neo, formando una gran planicie triangular con su
del cauce de la corriente.
^-
ce. ri í ) a n a Esta planicie se llama delta a causa de la
^p
:
i i , *7
cauce, su velocidad y turbulencia decaen inmediatamente y {
gran parte de la carga suspendida se deposita cerca del río,
pero otra es arrastrada más allá para ser depositada en ímt | > H -31 ) . J
^
Su *orma con a de a e ra &r e8a
j ^^
* ^ ( ver
l
&
planicie de inundación. El depósito de una avenida es una \ |
cuña estrecha que se adelgaza m ás a medida ( pie se aparta { a ua estucada ,
del río, pero en el transcurso de muchos a ñ os el efecto acumu- fi
®Pre
^^
u * corriente fluye dentro de una masa de
como im lago o un océano, su velocidad
°
^
de transP rte son contenidas rá pidamente. Si He-
lado produce un bordo natural considerablemente m ás alto í v.an suflcientes escombros y si las condiciones en el cuerpo
::
!i 7 : a lo largo de la ribera del r ío, como se indica en la fig. 1L | 28 de ¡
estancada son favorables se formar á gradualmente
ta ’ El delta ideal es triangular en planta, con su á pice
7 7
En el delta del Mississippi, por ejemplo, los bordos quedando j
4 a 6 metros por encima de los pantanos vecinos. T rltando
,
no arriba y con los sedimentos dispuestos de acuer-
Aunque los bordos naturales tienden a confinar a una co- ij on u
7 /< n an01 a una definida. material grueso se asienta
^
¡
la
V !; \
e caPas mclmadds llamadas
? °
^^
I mente dentro de su cauce, cada vez que aquéllos se elevan serie
I ¡
jrontal el material
t
ligeramente, el lecho del r ío sube también. Con el tiempo, el * Per 0 mas fino es arrastrado m ás
nivel del lecho queda por encima del nivel de la planicie deg \ TXXP ra se unentarse en el ondo del mar o lago constitu-
í.
:•i
inundación circundante. Si el río logra escapar de sus paredes \ i . faPas e fon medida que el delta se extiende \ FIG. 11-31
confinantes durante una inundación, abrirá un nuevo caucel cuerpo de agua , la corriente tiene que extender El crecimiento rá pido de algunos deltas está
representado por el del r í o Po, en Italia.
a través de las partes m ás bajas de la planicie de inundado* N|
7É ¡
|¡ § x?,lttaTnaclas capas
,
ta el borde del delta y al hacer] cubre éste con
°
superiores que se extienden por encima y
Todo el terreno del mapa de arriba queda
dentro del área del delta. La sección punteada
harta los Tvintanos
del delta fue construida entre 1559 y 1869 .
. - La corriente tributaria que entre al valle de un r ío con /j * dma de
Ja ^ cf f
:¡ !,
FIG 11 29 frontales ( ver
. as muestran ya sea % 11 -32 ) .
Los depósitos que subyacen la planicie | I mu e
de inundación de un r í o de agradamiento bordos altos, no podr á abrirse paso directamente en el canfc 0 > Ppcos * ^
eS a se('uencia re u ai de sedimentos. Muchos fac
la forma
principal, de manera que fluirá por la zona de pantanos para -
glJ ^
*
lento o los que están debajo de una planicie torePiinrl *
:
agradamiento rá pido, el mayor volumen est á
formado por sedimentos de grano fino m ás tosco es depositado directamente por la corriente | a; |jj
Capas superiores
z Capas frontales
1 superficie del agua i
mar, formando las capas de fondo. Otro
material es decargado en capas inclinadas
depositados durante los per íodos de inundación. largo de su cauce. Durante los per í odos de inundación jgg llamadas capas frontales , que crecen
7 constantemente hacia el cuerpo de agua
i
Los depósitos gruesos del cauce pueden esparcen a través de la planicie de inundación, a los lados de Capas del
y cubren parcialmente las capas de fondo .
formar una faja de grava dentro fondo
las riberas, arena fina, limo y arcilla ; adem ás se muev 7
i- - - \í l
'
i77
7
t
'
7
: •
de los depósitos más finos.
^ 7
La corriente deposita las capas superiores
sobre las frontales .
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......
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- T4"t:J: . v
m <X : .v
*
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&
1 sició n de tiempo en tiempo conforme van encontrando DE QUE UNA CORRIENTE CORTA -
¡EVIDENCIAS
¡PROPIO
í
|g;»
| j §pl
mm i i •.
9fe
- i- -: iv \
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> l;
'
dientes más favorables.
Los deltas son característicos de muchos de los grandes rf 8
del mundo incluyendo el Nilo, el Mississippi, el Ganges, el
¡J |
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VALLE
i'- V
v
^ y
É
T- - - y .i
'
fe fe
bien porque el material depositado es arrastrado tan proní§| | || ]ave¿> y el movimiento de masa , han contribuido al ensan -
• -
-
'fe; '
& :.í lo
g de los valles, pero hemos aceptado que esos pro-
fe
i -;
v: * •
Estos abanicos son típicos de los climas á ridos y semiáridf 1 ón. En efecto, a principios del siglo xix,
i pero se pueden formar en casi todos los climas, si son ade' f mitida esta suposici
dedicaron mucho tiempo a demostrar que los
los geó logos
cuadas las condiciones. Un abanico representa una disminy. no eran grandes zanjas originales en la superficie de la
-- ción repentina en el poder de transporte de una corriente a j valles
.
X
Tierra por la que los r í os flu ían tan sólo en busca de* un
C ; L’ >
.. — - S4
.. y 4'- ;
medida que pasa de un gradiente abrupto a uno suave por
ejemplo, cuando la corriente desciende de la ladera de una I
- lugar mejor a donde ir . Hoy sabemos que la mayor í a de los
valles han sido creados por las corrientes que los atraviesan
feSPifefe;; ; . .'.•VV.
monta ña a una planicie. Al reducirse la velocidad , la corrien \
te comienza rá pidamente a vaciar su carga . En el proceso, f
- mor los procesos que estas corrientes han fomentado. Re-
FIG. 11- 33 construye su cauce , a menudo con pequeñ os bordos natura- visemos algunas de las evidencias sobre el particular .
El abanico aluvial es el equivalente terrestre Muchos de nosotros hemos observado los resultados direc-
les, a lo largo de sus riberas. A medida que los bordos siguen
de un delta. En este ejemplo en el tos del agua que escurre en la superficie durante un aguacero
Valle de la Muerte, de California, las corrientes
fluyen ú nicamente durante las escasas lluvias,
creciendo, puede fluir la corriente por encima del nivel ge
neral. A continuación, durante una é poca de inundación, tien- f
- copioso. Por ejemplo, hemos podido advertir la formación de M
arrastrando escombros de las abruptas de hacia un nivel inferior y desplaza su cauce para empezar f
peque ñ as barrancas o cá rcavas hacia las cabeceras de cuen-
ca ñ adas hasta el pie de los acantilados. cas de drenaje en miniatura. Lo que estamos observando aqu í
Como la velocidad de las corrientes disminuye el depósito donde quiera. Corno el proceso de corrimiento o ¡ es realmente una pequeña corriente en el proceso de forma -
-r i : en el fondo plano de los valles, el material desplazamiento del cauce prosigue, se forma el abanico alu- ción y extensión de su valle. Tan sólo con vaciar el agua con -
s. fe- . se deposita para formar el abanico aluvial . vial ( fig. 11-33 ) .
Foto por Sheldon Judson. f
I tenida en una taza podemos tener la evidencia de la carga
TERRAZAS DE RIO. Una tevrozd de rí o es una superficie reía- f Arrastrada por la corriente y sabemos que estos escombros
Proce er de la cuenca de drenaje de la corriente. La
fe
M
m ::
tivamente plana , que corre a lo largo de un valle con un ban- \5i
co a manera de escalón que las separa , ya sea de la planicie l
^
erosion está en marcha ante nuestros ojos, y el valle se agran-
i
da a cedida que la corriente mueve el material erosionado FIG. 11-35
de inundación o de una terraza inferior. Es un remanente del j Un mausoleo romano, parcialmente sepultado
fe ‘t abajo.
cauce primitivo de una corriente que se ha abierto camino a j \wé
•
;
Planicie de en los depósitos de una corriente, est á
inundaci ó n un nivel inferior. Lo que se llama terraza de corte y rellenó se j Hemos visto, al observar las corrientes modernas, que la expuesto en esta ribera de un rí o
.
:
Abrasi ó n desgasta y pule el fondo y los bancos de roca, y al- precisamente al norte de Roma, Italia
i orina cuando una corriente llena un valle con sedimentos
fe! V
r ‘
¿fe
.
En el año 50 D C . cuando se construyó el
m . fes y labra despu és su cauce a un nivel inferior ( ver figs . 11 - \
34 , ¡ gunas veces perfora dolinas profundas en el fondo de roca mausoleo, el río fluía al mismo nivel que
f
11-35 ) . La agradación o construcci ó n inicial puede ser can - j del cauce . Cuando encontramos estas evidencias de la activi- ahora, pero no existí an los abruptos
V\ K ;
fe:
J
sada por un cambio en el clima que conduzca a un incre - f| |
|
ló gico
de la¡ corriente
que
arriba del cauce
por
de un río moderno, es .
bancos. Poco después del siglo tercero
D C., este río comenz ó a construir su planicie
fe
W .V - ///Mv/I!
At/KAX ; : *v
ment ó en la carga de la corriente o a una disminució n en su J A suponer fueron hechas el rio cuando este flu í a de inundación hasta que el fondo del valle
Vií
descarga. Tambié n puede elevarse el nivel base de la co | un nivel mas alto , y que la corriente ha cortado y profun- qued ó al nivel indicado por ¡a cima del
.
•í :
-
>A Av’.yX •r zVy* w :>S:
0 su valle. banco moderno A continuación cortó la
.
"7* . :
rriente, reduciendo el gradiente y dando lugar al dep ó sito | corriente hacia abajo hasta su presente nivel
A egun ya vimos, una terraza significa el hecho de que una
En cualquier caso la corriente tapa el valle con sedimento y t re-descubriendo la estructura parcialmente
fluyó una vez a un nivel más elevado. Y cuando \
Terrazas
aparejadas se eleva gradualmente la planicie de inundación. Luego, si f j el nente
contramosú terrazas cubiertas de arena y grava arriba de la
sepultada y dejando el fondo de su antiguo
valle y su antigua planicie de inundaci ón
i equilibrio se trastorna y comienza a erosionar la corriente
brará un cauce a través de los sedimentos anteriormente
,
depQ
®
. *
*
? •
-» ^ J^
planicie | | do su camino hacia abajo hasta un nivel inferior,
t
sitados. El nivel de flujo ser á inferior al de la antigua
largo
de inundaci ó n y en este nuevo nivel comenzara la corriente 9 de las paredes de muchas corrientes podemos FIG. 11-36
fe
Si
SIS
..
yvs
. MÍÍ M ÍÍ
'X;
]¡Pi
a labrar una nueva planicie de inundación . Con el tiorn ¡
quedará n vestigios de la antigua planicie de
ambos lados de la nueva . Las
a otra a trav és de la corriente
terrazas
y a la
que
misma
quedan
inundaci
elevaci
una
ó n ,
ó
fr
se
n
|á
{
^
|
J
|
¡ fe
g
¡
?
j
í
ítositados
rrelacionar ^ en
capas
mares
rocas
individuales
formadas de sedimentos que fueron
antiguas , y podemos equiparar o co-
de una a otra paredes del va-
lle. Sabemos que estas capas fueron depositadas original -
Las terrazas disparejas no se equiparan con
las del otro lado de la corriente que las
separa. He aquí una de las maneras en que
se forman. La corriente ha cortado a
través de depósitos sin consolidar dentro
.
:
nocen con el nombre de terrazas aparejadas.
Algunas veces la erosión hacia abajo causada por las co - eliminar mente
como mantos contiguos y que algú n agente debió
grandes secciones de ellos. Haciendo a un lado la
del valle Al ir erosionando hacia abajo,
también se ha desplazado lateralmente a
través del valle, creando una superficie en
FIG. 11-34
rrientes da lugar a la formación de terrazas disparejas en h * evidencia de los movimientos de ía corteza , llegamos a la con - declive. La migración lateral fue detenida
Ejemplo de la formación de terrazas aparejadas, cusion de que la corriente que fluye a lo largo del fondo localmente cuando la corriente encontró roca
En A, la corriente ha llenado parcialmente gar de aparejadas. Si la corriente oscila de un lado a
tiel valle es la causante de ese fen ómeno. resistente ( indicada por ¡as flechas ) debajo del
su valle, creando una amplia
. del valle, erosionando lentamente a medida que avanza, pue suave relleno del valle. Esta roca resistente
no sólo desvió la corriente hacia el otro
de encontrar roca resistente debajo de los depósitos sin c ]
planicie de inundación 0i
En B , alg ún cambio en las condiciones dio Las flechas indican afloramiento de roca áil!É lado del valle, sino que protegió también los
solidar. Entonces la roca expuesta desviar á , |Jj
WmS0
lugar a que la corriente erosionara sus vropios la corriente restos del relleno del valle de la erosión
depósitos; los vestigios de la antigua planicie
de inundación se levantan por encima del
tando la erosi ón posterior. En este caso queda una sola terr || fiipp A posterior por la corriente , permitiéndoles
preservarse como terrazas.
desemparejada al otro lado de la corriente ( ver fig . 11 - 36 ) .
nuevo nivel del rí o corno terrazas de igual
¡ mm Al tratarse de porciones de una superficie
i altura. Este ejemplo es particularmente Las terrazas, ya esté n aparejadas o disparejas, Pueclerlj¡ IRMi V.V
Í
en declive a través del valle, ninguno de los
r
Í
conocido como terraza de corte y relleno restos individuales casa con cualquier otro
fi cortadas también en el fondo rocoso del ío. Por lo fe o Ha
;
[ ventud hacia sus cabeceras. wm O) &S‘ «i
i
mw,
. '
1
HE
2A;
CICLO DE EROSION i INTERRUPCIONES EN EL CICLO DEL VALLE DE UNA CORRIENTE . Sé
darios y atacado acremente por quienes lo critican . Como en f mientos de la corteza elevan y arquean el terreno, la corrien - lüüli
Í V:.
el caso de las controversias más violentas, la verdad proba- f te comenzara a profundizar su cauce y a ajustar su perfil al
K •í;
blemente se encuentra en algú n punto intermedio entre los nuevo nivel base. Entonces, un valle joven en forma de V se FIG. 11-39
i
puede desarrollar dentro de un amplio valle maduro esta -
extremos. Meandros de una corriente a través de la
FIG. 11 -37 El ciclo de erosión nos da una descripción cualitativa de bleciendo un nuevo ciclo de erosión . Si el nuevo nivel base planicie de inundaci ón de un peque ño valle
constante por un tiempo suficientemente largo
los valles de los r íos y de las áreas, pero cuando tratamosffl permanece
maduro cerca de Steamboat Springs,
Terrazas a lo largo del r í o Madison, en Montana. del ciclo original desaparecerá, y Colorado , Foto por Sheldon Judson .
evidencia
de asignarles valores cuantitativos surgen las dificultades. fe todaá de la juventud a la madurez y a la senectudel valle pa-
i.
Los diversos niveles han sido formados por
el rio cuando simultáneamente oscilaba sar
Vi
lateralmente y cortaba hacia abajo en los
depósitos de arena y grava depositados frente
a un glaciar ua extinguido, aguas arriba .
Como un artificio que nos permita describir con palabras el
cuadro de un valle o de una región, es do gran valor y, po, i
, „ „„
jQue sucede cuando los movimientos terrestres elevan el
,„,
d na corriente madllrap SI la corriente ha “alcanzado la
Foto por William C . Bradley. ser tan aportante, el concepto ha llevado a los geologos a I*
elaM de fonni,c¡ón de meandros
investigaciones cuantitativas de la naturaleza de las corrientes!; j el levantamiento , puede ser capaz de
investigaciones i
03 de
“ u“ “ "
hender su cauce
X»
hasta
y del desarrollo de las formas terrestres , que í
i
i la roca subyacente en una serie de meandros entrelazados .
son de reciente iniciación . Quiere decirse que el nuevo valle será joven , pero continuará
El ciclo del valle de un r ío siguiendo el antiguo patrón establecido por la corriente antes
V ;) <
i
de que tuviera lugar el cambio en el nivel-base. Cuando una
Éi
El ciclo del valle de un r í o se divide en tres etapas prin- { corriente se ve forzada a comenzar un nuevo ciclo de erosión
& cipales comparables a las edades del hombre: juventud , ma- j ¡)0r el cambio de condiciones , se dice que se ha rejuvenecido
mí
-
i .yf:
durez y senectud . i ( ver fig. 11- 40 ) .
Cada una de estas etapas tiene ciertas características; pero íj *
Las interrupciones en el ciclo de erosión pueden produ- v
ü as í como es dif í cil decidir en qué momento un hombre pasa >j cirse también de otras maneras . Por ejemplo, si el nivel base
i
m
m
.-
il
IV .
i
de la juventud a la madurez, o de la madurez a la senectud, j sube, el río depositará su carga en un intento de crear un
i
5
j :
igualmente resulta imposible establecer l í neas precisas entre j nuevo perfil . Como resultado, un valle joven puede llegar a
las etapas de la vida de un valle fluvial . j cargarse de sedimentos y adoptar algunas de las característi -
I _ ! Probablemente el rasgo más caracter ístico del valle de una , oas de la edad senil. Sin embargo, tal valle no está estricta-
V
rl
corriente joven es la actividad de esa corriente y la rápida J mente dentro de la etapa senil del ciclo de erosión , pues su
erosi ón de su cauce . En esta etapa , las laderas del valle He- j edad aparente radica en el depósito m ás que en la erosión ,
X
dación, o solo una muy angosta . El gradiente de la corr en j- y concepto del ciclo de erosión ha sido aplicado
i
5.
cs pronunciado, marcado por cascadas y rápidos y los
tarios tienden a ser pocos y pequeños ( ver hg. 11 38 ).
En un valle maduro, la velocidad de corte hacia abajo
- tnbuy
mayona de bis casca-
^^/
es
,
en este caso estemos tratand{) mn un njve]
a la evolu-
de toda una región asi como a a de un valle dc corrien
te. Una vez más el factor de control es el nivel
base
base ’ ¡
muchas cuencas de drenaje . Podemos pensar en el nivelncbase
aunque
,
.
í
j
m R m W?.
CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA Durante la etapa juvenil de una región sus corrientes cortan durante el cual la masa de terreno elevada pasa
^íbilidad
174 CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA 175
rápidamente hacia abajo y la diferencia de elevación entreW R ía juventud a la madurez y a la edad senil. Pero supón -
ü - fondo de los valles y la cima de los cerros ( conocida | <$ g|
| gase que el levantamiento fuera lento o intermitente y tuviera
relieve ) aumentan velozmente. Las corrientes no se han
i
superficie forma un declive. Los r í os principales han ajustado " I a un ejemplo convincente, de superficies de bajo relieve
ahora sus perfiles a las condiciones imperantes a lo largo sepultadas bajo rocas m ás jó venes -a cierta profundi-
sus cursos, y mantienen este ajuste durante el resto del cidagli dad dentro del Gran Ca ñón, o a lo largo de la costa oriental. !
Durante la madurez es cuando las comen es c c una región j
1
Región madura a lo largo de los flancos fgfe y senectud al describir la naturaleza general de un
. ’ de la cordillera Humboldt, en Nevada, tencia de las rocas que se encuentran bajo la superncie. Los f 0 una regió n.
como se la ve desde el Pico Star. El territorio parte-aguas son ahora bajos y est á n espaciados ampliamente. j
i! está intrincadaraente disectado y todo en declive.
En teoría el ciclo progresa hasta que el terreno se reduce a
»
1
y
.
Foto por E N . Cameron . PATRONES I > E DRENAJE Y TIPOS DE CORRIENTES
una planicie suavemente ondulada muy cerca del nivel-base.
? t
X Esta superficie es lo que se llama peniplano, derivado del la- El patrón de conjunto desarrollado por un sistema de corrien-
t í n paene, “ casi” , con la palabra “ plano” . Se elevan sobre esta j les y tributarios depende, en parte, de la naturaleza de las
h superficie unas cuantas colinas representando areas donde la \ rocas subyacentes y en parte de la historia de las corrientes ,
t í: / .
erosion no ha sido capaz de reducir completamente la masa de I Casi todas las corrientes siguen una especie de ramificaciones ,
Éí .
í en el sentido de que reciben tributarios; estos tributarios tie-
tierra original. Estos residuos abandonados por la erosión in \ *
completa se llaman cerros testigo o, en ingles, monadnocks, to- \ nen, a su vez, otros más pequeños; pero 3a forma en que se
mando eL nombre del monte Monadnock, en New Hampshire, { desarrolla la ramificación varía sensiblemente ( ver fig. 11-42 ) . A
el cual se ha interpretado como un promontorio residual so j * La corriente que semeja las ramificaciones de un arce, de
;: : bre un antiguo peniplano que ha sido elevado y disectado. Los j
cerros testigos pueden sobrevivir ya sea por estos compuestos f
una encina u otro á rbol caduco se llama dendrítica, “ como
árbol . Un patron dendritico se desarrolla cuando las rocas
— 4
?- Vo
r.%|
de roca relativamente resistente a la erosion o porque se le- I presentan una resistencia a la erosión uniforme y no ejercen .
! 7W -/ i}
%
vantan en á reas protegidas de la acción de las corrientes. Ií control sobre la dirección de crecimiento del valle. Esta si -
M
;
fp. i l
Vii '
'
.
INTERRUPCIONES EN EL C1CI O REGIONAL. Un cambio en
el pación se. crea al tratarse de; rocas sedimentarias práctica
mente horizontales o de rocas í gneas o metam órf ícas macizas.
-
v <!
nivel base interrumpe el ciclo de erosión de una regi ó n igual \
Us corrientes pueden cortar con igual facilidad en un lugar
Í U;
i? que interrumpe el ciclo de una corriente . Si el terreno se mue - o en otro; el patrón dendrí tico es, en cierto sentido, el resul -
ve hacia arriba, se pone en marcha un nuevo ciclo y se reju|
*
VS
Todo el concepto del ciclo de erosi ón ha estado sujeto a nu- alrededor del cono.
^
Í$ radian hacia fuera y hacia abajo de distintos puntos
han sido arrasadas por la erosión fluvial .
Las corrientes en esta superficie en etapa
de senectud siguen un patrón dendrí tico
y no se ven afectadas por las rocas subyacentes.
merosas cr íticas muchas de ellas bien fundadas. Por ejemy-
— El drenaje rectangular se forma cuando la roca subyacente En B, se indica que el terreno ha sido elevado
plo, el ciclo de erosió n como originalmente se le concibióun cruzada por fracturas casi perpendiculares entre ssií, que y, como consecuencia, las corrientes
rejuvenecidas. La erosión de la corriente
como lo hemos descrito, es el resultado de la erosión en forman zonas de debilidad peculiarmente vulnerables a la principal se ha mantenido al paso con el
clima h ú medo. Pero los climas h ú medos cubren solamente erosión . Entonces la comente principal y sus tributarios si
una fracción de la superficie de la Tierra. Los procesos
ero- guen cursos - levantamientot de manera que la corriente
ha podido cortar a través tanto de las capas
caracterizados por curvas casi en á ngulo recto. resistentes como de las no resistentes.
siónales de otros climas podr í an , presumiblemente, producir' í Algunas corrientes, particularmente en una faja de las Mon- Esto constituye lo que se llama una
una secuencia de eventos un tanto diferente . Y podemos ptf fohas Apalaches, que corre de Nueva York a Alabama , siguen corriente antecedente y ¡os pasos a través
b que se llama patrón en enrejado. Esta forma de drenaje, de ¡as rocas resistentes se llaman gargantas.
guntarnos si el ciclo de erosión que hemos descrito tiene H
'
K
'
1;
'
'
i
i
:
l menzado a formarse cuando las rocas sedimentarias horiz|
tales fueron primero plegadas, después expuestas a la ero$|
|
<
j¿
p[
§¡
¡ p influenciados — —
pequeños menos competentes fueron , sin em -
notablemente por la naturaleza de las
y finalmente desgastadas hasta constituir una superficie
:
:
—
edad senil un peniplano. Las corrientes que flu ían sobre ¡B| |
lilfele
¡ l ^s masas de
zonas
tierra que se elevaban . Así, desviaron
de rocas más débiles, tales como la
m i
¡
esta superficie estaban cerca de su nivel - base y probablemel S¡ í ^
a las
| Blpo osla lutita, y entraron a la corriente principal con á n-
te fueron afectadas apenas por la diferente resistencia de | ¡
j ® gp
cercanos al recto, produciendo el patrón en enrejado
¡m
«
Site.
rocas subyacentes. Como resultado, fluyeron probableme ||¡ l pg 11-43 ) . !
segú n un patrón dendr í tico. La siguiente etapa fue el levan®
miento del á rea, cuando el nivel- base descendió y las C(K podemos clasificar las corrientes conforme a ia historia par-
¡í: .
FIG 11-44 ¿ desarrollo. Las que toman sus cursos siguiendo
ciliar de su original
Fotograf í a aérea de una garganta en Africa mentes comenzaron a cortar hacia abajo. A medida que Él i del terreno a través del cual Huyen , se
del Norte. La corriente principal pasa a través Peod íente
í
t
de una ceja o loma de roca resistente.
Foto por U .S . Army Air Force.
levantaba el terreno, la corriente principal fue capaz de man-
tener su curso original y de cortar su valle en las bandas de
^ los
consecuentes
volcanes
.
El drenaje radial de los flan -
lbman corrientes , ejemplifica una clase
de corriente con -
eos de
secuente.
¡fu tratar el desarrollo del drenaje en enrejado, señalamos
l\
dti£ la corriente principal mantuvo el curso que segu ía ori- Antes de la captura Despu é s de la captura
íÑ : V
antes del levantamiento. A causa de que su cur-
r; :
antecedi ó al levantamiento, tal corriente se llama -
FIG. 11 45
: gplctual El rí o Shenandoah ha capturado la porción
¡¿rfiente antecedente . Sin embargo, los afluentes de una co- superior del arroyo Beaver Dam. El
Heiite antecedente por lo com ú n alteran sus cursos subse- Shenandoah profundizó su valle con mayor
rapidez que el Beaver Dam y eventualmente
cuentes al levantamiento y los cursos modernos, ya alterados
propiedad , corrientes subsecuentes. Los
abrió una brecha en el parte-aguas que los
llamados con separaba . La sección superior del Beaver
!: lÜ uentes del drenaje en enrejado son ejemplos de corrientes
Dam fue entonces desviada hacia el
Shenandoah. La garganta del antiguo
iffjsecuentes que fluyen en zonas de rocas menos resistentes. arroyo Beaver Dam , ahora abandonada ,
La erosión continua hace que las rocas más resistentes sobre- se llama Garganta de Snickers. El nombre
general para tales gargantas abandonadas
salgan como camellones o colinas por encima de angostos es el de “ garganta de aire ' .
segmentos de los valles y de las corrientes antecedentes. Estas
"
*<
*> V
partes angostas y alargadas de los valles se llaman gargantas
; « •*: _ ( ver fig. 11-44 ) .
i í:J Las gargantas se forman también de otras maneras. Supón -
- , ;
i
gase un á rea de lomer íos y valles labrada por la erosión di -
msm ferencial en rocas de diversas resistencias. Después, imagí-
) ,! : i|
'
Slp objeciones
1
slip:; 178 CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA al ciclo de erosión no invalidan el concepto de CORRIENTES SUPERFICIALES DE AGUA m
Mili rrientes, el río Potomac y el arroyo Beaver Dam, flu ían atfg WmesarroÜ o progresivo de las formas terrestres a través del tiempo .
vcsando el lomerío Blue Ridge, cada una de ellas en ¡É% sistemaslasde rocas
drenaje y los tipos de corriente reflejan la natu-
propia garganta. El antiguo í ro Shenandoah se unía al * ^ Mralezade subyacentes y la historia de ¡a contente .
Bife mac, como lo hace ahora , poco antes de que el Potomac entrf I BIOGRAFíA SELECCIONADA
^
; ?
en su garganta en Harpers Ferry. Con el tiempo, el Shenaj.
doah profundizó su valle con mayor rapidez que el arroyo*
I > u; Beaver Dam y eventualmente se extendió aguas arriba fe rvjvis William Morris, "The Geographical Cycle’*, Ceog . J ., X Í V
r-'í
través del parte-aguas que separaba su valle del de arfa Si *11899 ) , 481Level
-504.
£ ^ “ Basey
¡ , Grade and Peneplain ” , / . Geol .t X ( 1902 ) ,
m yo Beaver Dam. En la actualidad las aguas del curso sif ® I¥ f
„77411.
rior del Beaver Dam ya no fluyen a través de la garganta Hjulstrem, Filip, ‘‘Transportation of Detritus by Running Water” ,
\\
del lomer ío Blue Ridge, pues fueron desviadas hacia el ~río J min Recent Marine Sedients, A Symposium, ed , Parker D. Trask.
mm Shenandoah. En este caso el Shenandoah es el r ío pirata /y llTulsa : Am. Assoc . Petroleum Geol., 1939, pp. 3-31.
?
el arroyo Beaver Dam, cuyo curso se ha acortado, es la fa Hoyt, William G . y Walter B. Langbein, Floods. Princeton ; Prin -
rriente descabezada. Al sobrevenir la captura , la antigua ceton University Press, 1955.
garganta del arroyo Beaver Dam quedo abandonada y W Kuenen, P. H., Realms of Water . Nueva York : John Wiley Ik Sons,
.
;
d ía se la conoce con el nombre de Garganta Snickers. El line., 19o5.
• i término general que se usa refiriéndose a una garganta aban- Leopold, Luna B., "Rivers” , American Scientist, L ( 1962 ) , 511-37.
&
tí! donada como ésta , es el de garganta de aire. , Gordon Woiman, y John P. Miller, Fluvial Processes in
Geomorphology. San Francisco; W. H . Freeman & Co., 1964.
U. S. Dept, of Agriculture, Water , The Yearbook of Agriculture,
i
: RESUMEN 1955. Washington, D. C. : Government Printing Office, 1955.
;
Ciclo hidrológico.
;
Sistema de circulació n de agua : de los océ anos a la atm ósfera, I
i :|
.
de fondo.
Erosión. I
. Levantamiento dilecto; abrasión, impacto y solución; excava | *
ki
' V-- El ciclo se aplica a los valles y a las regiones.
-
Los cambios en el nivel-base interrumpen el ciclo. 0.
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Agua subterr ánea I la
*
lis I
l#f SON ENORMES las cantidades de agua expuestas en los ríos, DISTRIBUCION BASICA
l«iií subterrá neas de los Estados Unidos contienen más agua sus-
ceptible de usarse que la de todos los receptáculos superfi-
ciales y lagos combinados y, en los Estados Unidos, la quinta
AGUA ARTESIANA
1
11 í
al agua que está en los espacios porosos, fracturas, conductos,
grietas y cavidades del material consolidado y sin consolidar
que se encuentra bajo nuestros pies. El estudio del agua del
subsuelo constituye una investigación de estas aberturas y
de lo que sucede con el agua que se abre camino hasta ellas.
En el capítulo precedente vimos que la mayor parte del agua
ill
m del subsuelo procede de la lluvia y de la nive que cae sobre
Vi''
\V :
'
I la Tierra. Parte de esta agua se embebe directamente en el
terreno y parte drena hacia los lagos y r íos, y de allí al sub-
m Í1
•
suelo.
Zonas de saturación y aereación
Él / Parte del agua que penetra de la superficie hacia abajo es
\í /
retenida por las rocas y materiales de la tierra que frenan
II
i;
•
*V
*
/
/
mm
mi
^ faja de humedad del suelo, 2 ) la faja intermedia, y 3 ) el
. Parte del agua que entra en la faja de humedad
fleco capilar
del suelo desde la superficie es utilizada por las plantas y
Parte se evapora a la atmósfera ; otra cierta cantidad pasa
¡B ¡
i bacía abajo, a la faja intermedia, donde puede quedar soste-
18!
W\
[ r
fk
'
í 1-82 AGUA SUBTERRANEA nida por la atracción molecular ( como agua colgada ) . AGUA SUBTERRANEA m
Í VH j a nuestra situación ideal, vemos que si el abas-
Solviendo
faja intermedia hay poco movimiento, excepto cuando la ft
via o !a fusión de la nieve env ía desde arriba una nt
I gte |iento
¿e agua desde la superficie se suspendiera por
ítP se aplanaría lentamente el nivel freá tico debajo
oleada de humedad. En algunas á reas está ausente la
cv
Itt ;
intermedia y la faja de humedad del suelo descansa direct# ! |0
mente sobre la tercera, constituida por el fleco capilar pi *
agua se eleva desde abajo dentro del fleco capilar a uÚ
|
¡
É
- j |J a a
^
medida que el agua se descargaba hacia los
eVentualmente
llifico
debajo del
podr ía casi alcanzar la altura del nivel
fondo de los valles, en cuyo caso, se sus-
WZ ÁQXISL el flujo . Esta condici ón es com ú n en las á reas de-
altura que varía de unos cuantos centímetros hasta dos o tr
metros. Debajo de la zona de aereación se encuentra la *
,speas
donde llueve de cuando en cuando.
de saturaci ón. 1
l
DEL AGUA SUBTERRANEA
; En ésta las aberturas de la roca y de los materiales terres %i MOVIMIENTO
tres están completamente llenas de agua subterránea y ] el capí tulo precedente se estableció que el flujo de agua
superficie entre la zona de saturación y la de aereación a od ía medir en las corrientes superficiales en términos de
se
llama nivel de aguas freáticas o simplemente nivel freático i tantos metros por segundo; pero al referirnos al flujo del agua
El nivel freático fluct úa con las variaciones en el abastec í subterrá nea tenemos que cambiar nuestra escala de medida;
miento de agua que viene de la zona de aereación , con varia. i en este caso, aunque el agua se mueve, por lo regular lo hace
ciones en la velocidad de descarga del á rea así como en
la 1 muy lentamente. Así encontramos lugares “ metros
que el hablar de “ metros
o centí metros por a ño” ,
cantidad de agua subterrá nea extra ída por las plantas y por íi. or d ía y en
” algunos
los seres humanos. da fbs
una escala de medida m á s adecuada . La razón prin -
En este capí tulo nos referiremos en especial al agua que cipal de esta lenta velocidad de flujo est á en que el agua
está bajo el nivel freá tico, dentro de la zona de saturación. debe viajar a trav és de peque ñ os conductos confinados , si es
que se mueve del todo. Interesa entonces, considerar la po-
i - :1
í
situación ideal . La fig. 12-3 representa una loma constituida | f: de arena compuesto de granos de cuarzo redondeados, de ta-
Dentro de la zona de aereaci ón existe una faja
humectante del suelo, que es la fuente por material completamente homogé neo. Supóngase que, ini f *
ma ño bastante uniforme, tiene una porosidad alta; pero si
de humedad de muchas plantas. Desde aquí craímente, este material no contieno agua; a continuación | penetra materia mineral en el depósito y cementa los granos
-
y : <•
alguna humedad se evapora también hacia
Ja porosidad se reduce en una canti-
>
<;t
Ih atmósfera. En muchos casos esta faja sobreviene un copioso aguacero y el agua se filtra lentamente formando una arenisca ,
descansa sobre otra intermedia en la que hacia abajo, llenando los intersticios a profundidad , es decir, dad igual al volumen del agente cementante. Un depósito
el agua se sostiene por atracción molecular
se inicia el desarrollo de una zona de saturación . A medida de arena pobremente clasificado, mezclado con part ículas de
y donde ocurren pocos movimientos excepto limo y de arcilla más finas, tiene poca porosidad, porque las
durante los perí odos de lluvia o de fusión que se infiltra m ás agua , continú a elevá ndose el límite supe-
de la nieve. En el fleco capilar, inmediatamente rior de esta zona. El nivel freá tico permanece horizontal hasta J
part ículas m ás pequeñ as llenan gran parte del espacio entre
arriba del nivel . freático, sube el agua de unos las partículas m ás grandes.
cuantos centí metros a varios decímetros alcanzar el del fondo de los dos valles en ambos lados de la j
desde la zona de saturación, dependiendo loma. Luego, como el agua sigue filtrá ndose al nivel freá tico,, \i / Aun una roca densa y maciza como el granito, puede lle-
del tamaño de los intersticios.
f
gar a ser porasa como resultado de fracturamienlo, y en una
parte de ella busca una salida en los valles; pero el agua adi % I
cional es “ sostenida” por el material a través del cual fluye / {
- *
roca maciza y soluble, como la caliza, pueden hacerse más FIG. 12-3
grandes los planos de debilidad por disolución.
'Faja de
y el nivel freá tico deja de ser una superficie plana . El moví | I
*
:
•
li Nivel
terr á nea mediante una salida artificial para el agua. Por ejem
plo, podemos perforar un pozo en la cima de la loma y pene-
- rosidades que var ían entre el 20 y el 50 por ciento; pero cuan-
"ú estos depósitos se consolidan y forman rocas sedimentarias
paso del agua a travé s del material ( y aun
en cierto grado la fricción interna del agua
misma ) da como resultado un " amontonamiento *
freá tico
i. t©É
ist
m
l ZONA DE trar en la zona saturada. Entonces, si bombeamos el agua qwe
SATURACION fluyó dentro del pozo, crearemos una depresió n en el nivel
, ^ cementación o por consolidación, la porosidad se reduce
Notablemente. Los valores de porosidad media para tipos in-
de agua bajo la loma, que alcanza
su punto más alto debajo de la cresta
y los más bajos en los valles ( c ) .
}
y
l liat
freático. Cuanto más se bombee más pronunciada llegará a
—
ser la depresión que se llama cono de depresión. ^ yiduales de roca tienen poco significado a causa de las
Sondes variaciones dentro de cada tipo. No obstante, puede
que, en general, una porosidad de 5 por ciento se
La forma del nivel freático puede ser alterada
al bombear agua de un pozo (DJ. El agua
fluye a esta nueva salida para formar
un cono de depresión.
-tr
.
m
r it
:í. 184 AGUA SUBTERRANEA considera baja ; de 5 a 15 por ciento representa una porost esos dos puntos, distancia llamada altura hidrostática o tiran- AGUA SUBTERRANEA 185
dad media, y de más de 15 por ciento se le considera alta. hjjjk jgn consecuencia, el gradiente hidrá ulico se expresa en la
IgUpa h / l donde h es la altura y l es la longitud de flujo
>
Permeabilidad ¡fjesde el punto de entrada hasta ei de descarga. As í, si h es
El que encontremos o no un abastecimiento de agua | ¡ |
di| jg| | j a 10 metros y / es igual a 100 metros, el gradiente hi-
W& l subterrá nea en un á rea dada depende de la capacidad de 11 á R
ulico es 0.1 ó 10 por ciento.
materiales de la Tierra para transmitir el agua, as í como | | La ecuaci ón que expresa la velocidad de movimiento a tra-
i . - ?: í
su a ptitud para mantenerla . La capacidad de transmitir ® Ü¡$ Je una Darcy
roca fue propuesta
. Lo
en 1856 por el ingeniero fran-
í: l
r.
agua subterránea se llama permeabilidad .
§|É Henri que se conoce como ley de Darcy es
;;
fflencialmente su misma ecuación original. La ley puede ex -
La velocidad a que una roca transmite agua depende no
sólo de su porosidad total, sino también del tama ño de m
presarse como sigue :
conexiones entre sus aberturas. Por ejemplo, aunque una ar- p *l
cilla puede tener una porosidad más alta que una arena, las
V =
part ículas que constituyen la arcilla son l áminas diminutas
y los intersticios entre ellas son muy pequeños. De ahí| q| Donde V es la velocidad , h la altura hidrostá tica, l la longi-
el agua pase con mayor rapidez a través de la arena que de f tud de flujo y P un coeficiente de permeabilidad que depende
la arcilla m ás porosa , simplemente porque la atracción mo- de la naturaleza de la roca en cuestión. Pero puesto que hil-
lecular sobre el agua es mucho m ás fuerte en las min úscu- es simplemente una manera de expresar el gradiente hidr á u -
las aberturas de la arcilla. El agua se mueve con más libertad lico, podemos decir que en una roca de permeabilidad cons-
a través de la arena porque los conductos entre las partículas ¡ tante la velocidad del agua aumenta en proporción al incre-
son relativamente grandes y la atracción molecular sobre el mento del gradiente hidrá ulico. Recordando que el gradiente
agua es relativamente baja. Por supuesto, no importa el ta i - hidráulico y la pendiente del nivel freá tico son una misma
..
ma ñ o de los intersticios de un material; para que pase el agua f cosa, podemos decir también que la velocidad del agua sub-
ri;
debe haber conexiones entre ellos . Si no est á n interconecta- í terrá nea var ía con la pendiente del nivel freá tico. Siendo
í
dos, el material es impermeable. iguales los otros factores, cuanto mayor sea la pendiente del
i
Un material permeable que efectivamente contiene agua : nivel freá tico, m ás rápido será el flujo. En los acu íferos or-
r dinarios ha sido calculada la velocidad de flujo del agua en
.
*; vS
i del subsuelo, se llama acuí fero, palabra que se deriva del ¡ no m ás de 1.5 metros por d ía y no menos de 1.5 metros por
f !; lat ín y que significa que “ lleva agua” . año. Sin embargo, es cierto que se han registrado velocidades
Quizá los acu íferos m ás efectivos sean la arena y la grava dem ás de 120 metros por d ía y tan lentas corno unos cuantos
:
\i ::
! sin consolidar, la arenisca y algunas calizas. La permeabili- cent ímetros al a ño.
•
íI dad de la caliza se debe, por lo com ú n , a la disoluci ón que ¡El movimiento del -agua subterránea, de acuerdo con la
ha agrandado las fracturas y planos de estratificación convir- í:
pendiente del nivel freá tica, es sólo una parte del cuadro,
\\ ü ticndolos en conductos abiertos. Las zonas fracturadas de al- | pues el agua está también en movimiento a profundidad. El
gunas de las rocas más densas, tales como el granito, el ba- agua se mueve bajo el nivel freá tico siguiendo amplias tra-
salto y el gabro, también act úan como acu íferos, si bien,
•i
5 en rocas tales como la caliza cavernosa . movimiento resultante no es ni directamente hacia abajo ni
Ip étamente hacia el cauce, sino m ás bien a lo largo de tra -
En el flujo laminar, el agua cercana a las paredes de lotf yectorias curvas a la corriente.
intersticios se mantiene presumiblemente sin movimiento -
causa de la atracción molecular de las paredes. Las partícu
^
las de agua separadas de las paredes se mueven con uwj
É¡AGUA SUBTERRANEA EN LA NATURALEZA
rapidez, de manera filiforme y suave, pues la resistencia 0
a Hasta aquí hemos supuesto que el agua subterránea es libre
.
movimiento disminuye hacia el centro de una
flujo más rá pido se alcanza precisamente en el centro.
abertura
\í :
) entre la distancia vertical que se 1 Hubbert, “ The Theory of Groundwater
al punto de descarga .
Motion” , J Gaol , XLVIIl ( 1940 ), 930 .
i iX
h3- y
!? '
i
ÉL
m
186 AGUA SUBTERRANEA Algunas capas de roca son más permeables que otras y P020 Pozo AGUA SUBTERRANEA 187
agua tiende a moverse rá pidamente a través de estas el i No. 1
tificación. Aun en una roca que sea esencialmente h®P Para proporcionar una fuente segura,
Eli ! génea , el agua subterránea tiende a moverse en una Jg § ¡¡ Nivel fre á tico superior el pozo tiene que penetrar
profundamente en la zona úe saturación.
«¡ i ti ción preferente. COíIOJ de
depresi ó n En este diagrama el pozo nú mero uno alcanza
m Nivel fre á tico inferior
El
Bill Manantiales y pozos
m
Manantial en la
época de lluvias
una profundidad apenas suficiente para tocar
el agua subterránea durante los períodos
en que se eleva el nivel freático;
el abatimiento estacional de esta
< j SR¡
*
lili
El agua subterrá nea se mueve libremente hacia abajo|
la superficie, hasta que alcanza una capa de roca impe
ble o hasta que llega al nivel freático; entonces comienzlS
|ip |
Corriente
i superficie llegará a secar el pozo.
El pozo número dos alcanza la. parte baja del
nivel freático , pero el bombeo continuo
puede producir un cono de depresión
Sil® r moverse lateralmente. Tarde o temprano fluye nueva K Sllparriba
^^ del nivel freá tico general, se le llama nivel de
‘
P 1i* asiento de templos y oráculos. En la actualidad considera 3 freá tico principal intersecta la superficie a lo largo de una
I
& mucha gente que el agua de los manantiales posee propj8. nendiente, se formará entonces un manantial.
u dades medicinales y terapéuticas especiales . El agua de los * Aun en las rocas impermeables se pueden desarrollar zonas
“ manantiales minerales’* contiene en solución sales que fueron permeables como resultado de fracturas o canales de disolu-
recogidas por el agua mientras percolaba a través del terre - ció n. Si estas aberturas se llenan de agua y se intersectan con
no. La misma agua bombeada de un pozo podría considerarse I h superficie del terreno, el agua brotará como un manantial.
tan sólo como dura y no muy deseable para fines generales. Un manantial es el resultado de la intersecció n natural de
i Los manantiales son sumamente variables : desde los de | a superficie del terreno y el nivel freático, en tanto que un
flujo intermitente, que desaparecen cuando el nivel freá tico i pozo es un abertura artificial que corta la zona de saturación
1111
lililí se abate durante la época de sequ í a, pasando por los de escu- i
desde la superficie. Un pozo es productivo cuando se perfora
dentro de la roca permeable y penetra bajo el nivel freático.
rrimiento tan pequeño que casi podría decirse que gotean, f
I
liffiií
hasta los que producen unos 3,400 millones
corno lo es la abundante descarga de los
encuentran a lo largo de un trecho de 15 kilómetros de largo
de litros por d ía
manantiales que se
Cuanto
ser á la
mayores sean los requerimientos en un pozo, mayor
profundidad que deberá tener éste bajo el nivel freá-
tico. El bombeo continuo crea el cono de depresión previa-
I¡H
;
¡SI
del r ío Fall , en California . mente descrito, el cual deforma el nivel freá tico llegando a
Esta amplia variedad de tipos de manantial es consecuen- f reducir el flujo de agua subterrá nea dentro del pozo ( ver fig.
cia de las condiciones del subsuelo, que var ían enormemente 12-7 ) . Los pozos perforados en roca cristalina fracturada, tal
ai
m
su
de un lugar a otro . Sin embargo , como
nantial se forma en cualquier lugar donde el flujo de agua
subterrá nea se ha desviado a una zona de descarga en fe
regla general , un ma - \ como
dades
el granito, pueden producir agua suficiente a profundi-
notablemente
relativamente someras ; pero no se puede incrementar
el rendimiento de estos pozos profundizá ndo-
superficie ( ver fig. 12-5 ) . Por ejemplo , un cerro constituido i las , ya que el numero y el tama ñ o de las fracturas disminuyen
r por lo com ú n con la rofundidad ( ver fig. 12-8 )
casi exclusivamente de roca permeable , puede contener una | Los pozos x^ . . -
FIG 12 8
Arenisca permeable
fmm
' *
*
k/ Manantial
^
C|aad de flujo
ón desde la superficie al pozo. En cambio la velo-
Corriente en la arenisca es lo suficientemente lenta para
Este diagrama presenta una loma encapotada Permitir la
por arenisca permeable descansamlo sobre 55 neos de eliminaci ón de impurezas aun en flujos subterrá-
_n. Lutita impermeable :
una lutita impermeable. El agua infiltrada
en la arenisca desde la superfice, es desviada
m n Parte,corta extensión . Las bacterias nocivas son destruidas
K; lateralmente por las capas impermeables.
° porque quedan atrapadas, en parte x>or falta de ali-
Los manantiales se forman en el punto en ^ento
V V por cambios de temperatura y en parte por la pre-
m a ncia de sustancias u organismos hostiles, que se encuentran
^^
—
que el nivel freático intersecta la superficie
en el contacto de la lutita y la arenisca. a fargo del camino, particularmente
xmrticularmente en el suelo.
unta
Aplicando la Ley de Darcy, podemos calcular la cantidad
| ||agua que probablemente producirá un x)0Z0 La canti-
M
Nivel freá tico principal
Corriente m mm
. ir Arenisca permeable : ^
T e agua que pasa a través de una sección dada en una
Hgd de tiempo se determina por el área de la sección que
-
. -
FIG 12 6 + 5Ht sa y por la velocidad de flujo. En consecuencia
^ ,
Cuando el agua se acumula sobre una zona
mm
% ilí impermeable separada del nivel freático
—.n
=
~
Lutita impermeable s V Q/ A
principal , se forma un nivel epifreático. í-.
l
«MB W-
m
fe m
É 188 AGUA SUBTERRANEA donde V es la velocidad, Q es la cantidad de agua por Ul
dad de tiempo y A es el á rea de la sección transversal a ^ tan de
que abatió 91 metros el nivel de agua en
bruscamente AGUA SUBTERRANEA 189
cerca Pierre, sobre el r ío Missouri. Entre 1920
S ves de la cual fluye el agua. Si sustituimos h / l de la ecuacijjl
j
^ K935
zo
en el pueblo de Chamberlain la velocidad de decli-
Slppiipj
II original de Darcy por el símbolo i , para representar el|
diente hidrá ulico podremos plantear una ecuación de la
de Darcy que dé la cantidad de agua en función de la Jgjp
g| |ción descendió a razón de 1.80 metros por a ñ o.
l 2sS
y*
'
lili
m
mí
para recibir agua en la superficie; 2 ) el acu ífero está cu-
bierto por una capa impermeable; 3 ) el agua del acu ífero
está confinada de modo que evita su escape, bien hacia aba-
jo o hacia los lados, y 4 ) hay carga hidrostá tica suficiente
riormente, al establecerse la Fundación de las Fuentes de
Aguas Termales de Georgia para el tratamiento de las v í cti-
mas de la parálisis infantil , se hicieron grandes mejoras. La
lluvia que cae en la monta ñ a del Pino ( Pine Mountain ) , unos
lili
m
para forzar al agua por encima del acu ífero en cualquier
lugar que éste sea perforado. Si la carga es bastante grande,
el agua fluirá a la superficie, ya sea como pozo o como ma-
3 kilómetros al sur de Warm Springs, penetra en las rocas
de una formación conocida con el nombre de Hollis. Al co-
menzar su jornada descendente, la temperatura media del
III la
nantial.
á
Nivel fre tico
agua es de unos 17°C. El agua percola a través de la for-
maci ón Hollis hacia el norte bajo Warm Springs, a una pro-
Pili .
FIG 12 9- v.v. v?
El agua se eleva a estos niveles
Gradiente piezomHj- ica \
fundidad de unos cuantos cientos de metros, y despu és sigue
i Los pozos del diagrama encuentran las
condiciones que caracterizan a un sistema
•
--
el buzamiento de la roca dentro de la tierra a una profundidad
de 1,160 metros, a 1.6 kilómetros más al norte. Las tempe-
irI
11
artesiano: 1 ) un acuí fero inclinado , 2 ) cubierto
por una capa impermeable , 3 ) en el que se
impide el escape del agua fiada abajo o hacia
• > 3
raturas normales de la roca en la región aumentan 1°C por
cada 17 metros de profundidad y el agua se calienta a me-
m
H
A
los lados uy 4 )) con carga hidrostática suficiente
para forzar al agua sobre el acuí fero
,
K t ó rminn “ artesiano” se deriva del nombre de un pobia -¡
dida que desciende a lo largo del fondo de la capa Hollis. A \
M 1,160 metros, la capa ha sido rota y empujada contra un
fe 5
en cualquier lugar que se le perfore . El pozo
de la derecha posee una carga hidrostática
suficiente para elevar el agua a la superficie . do ranees, Artois ( llamado originalmente AHeúum por
romanos ), donde fue estudiado por ves primera este iH ; «
ta
» , , .
/ Wo impermeable que hace regresar al agua. Esta agua
“
ahora mas cal ente que la que v ene desde arriba y se
^
^ ^¡gente
l aespiaza hacia la superficie a lo largo de la cima de la for
-
•
^ ¡g£
\
y.
: eUnejemplo clásico de un sistema de agua artesiana se el Hollis, enfri á ndose un tanto a medida que sube. Fi-
.
-
i
cuentra al oeste de Dalcota del Sur, donde las montañas Black
>
emerge en un manant al a una temperatura de
Hills han atravesado una serie de r ü aí>
l:
: i
i
quean o sus or es
— -
cretácica lleva agua y
^ sJ^ SeT*
j t rficie Una de
í
arenisca nermeable de edad
£ ?£ pte arT&'dlS
2E *ea lio
A menos de 1.6 km . de distancia se encuentra Cold Spring,
uyas
£
.
aguas provienen de la misma lluvia de Pine Mountain.
i. : V ' .'V
sir , derivada probablemente del verbo geysa, “ arrojar fy$ AGUA SUBTERRANEA 191
mente". - ill Nivel del agua
Aun cuando los detalles de la acción de un géyser todP ~ V
2 . -
FIG 12 13
Relación entre el nivel freático en un pozo de
m
no están del todo claros, en general su comportamiento es l i IS observación cerca de Antigo, Wisconsin,
causado por la disposición o arreglo de sus conductos OjREMIf
"
1
y la precipitación de acuerdo con los
his* B registros de 1945 a 1952. El nivel freático
Eri
ñerí as" interiores en la proximidad de una buena fueni í; f¡j
calor. He aqu í lo que probablemente sucede. El
^^¡H Ir
refleja los cambios en la precipitación.
Las grá ficas representan promedios
ifpi
111
Kll
III*
terránea que se mueve hacia abajo desde la superficie
un tubo natural o conducto, que se abre hacia la super
Las rocas í gneas calientes o los gases desprendidos de|
calientan gradualmente la columna de agua en el tubo í
| | |
t|
elevan su temperatura hacia el punto de ebullición. Cuanto 1
| t0
|l ^¡ _
rARGA DEL AGUA SUBTERRANEA
mensuales por períodos de 3 años.
Por ejemplo, 5.8 centí metros de precipitación
para mayo significan que la precipitación
dio un promedio de 5.8 cent ímetros
por mes de mayo de 1947 a mayo de 1950
inclusive. De A. H . Harder y William }.
Drescher, Ground Water Conditions in
I mayor sea la presió n del agua , más alto será su punto de ebu- i Como hemos visto, la fuente primaria de la mayor parte del Southwestern Langlade County , Wisconsin.
.
Washington, D C .: U .S . Geol. Survey,
ill Ilició n ; y puesto que el agua est á sometida a una presi& § | f¡
| ¡
|subterrá nea es la precipitación, que encuentra su ca- Water Supply Paper, 1954 .
w* elevada hacia el fondo del conducto, tendrá que ser calen, j
tada a mayor temperatura que el agua de arriba, antes I ggjjtfesl
bajo la superficie, ya sea por medios naturales o arti-
entrar en ebullición. La columna de agua llega a alcanzar ) Parte del agua de precipitación se filtra en el terreno, al-
ifiMi
•
ta ] temperatura que un ligero aumento en ésta o una ligera j canzá la zona de saturació n y eleva el nivel freá tico. Las
I»» j
disminución en la presión harán que hierva. En este punto fggjclidas continuas durante largos períodos muestran en mu-
^
cr í tico el agua cercana a la base del conducto se calienta al 1i Idios lugares de los Estados Unidos una í ntima conexión en-
punto de ebullición; ahora pasa el agua al estado de vapor [
$re el nivel freá tico y la lluvia ( ver fig. 12-13 ) . Puesto que
i y, al hacerlo, se expande, empujando el agua de arriba hacia f e( agua se mueve con relativa lentitud en las zonas de aerea -
la superficie. Pero la elevación de la columna de agua ca- j c¡ón y saturación, las fluctuaciones en el nivel freático acusan
l íente reduce la presión que actú a sobre ella y ésta también j normalmente un ligero retraso con relación a las fluctuacio-
comienza a hervir. La energ í a desarrollada asi arroja al aire f nes de la lluvia .
una alta columna de agua y vapor , produciendo la acción !¡ Varios factores controlan la cantidad de agua alcanzada,
tefe espectacular caracter ística de muchos geyseres. Pasada la \ en realidad , por la zona de saturación. Por ejemplo, la lluvia
erupción , se llena otra vez el conducto con agua y comienza j que cae durante la estación de crecientes tiene que proveer
i
agua subterrá nea , ésta se calienta y en té rmino de una | La recarga natural del abastecimiento del subsuelo no se
.
FIG 12-12 se repite eb mismo ciclo . El tiempo promedio anscujw
¡0
* El vapor se levanta de una mirí ada de
conductos en la zona llamada Yellowstone' s
Geyser Basin. Foto por William C . Bradley. aunque puede variar de 30 a 90 minutos.
^ Nilllllf
entre las erupciones del Old Faithful es de unos 65 niin |
^
|
hombre
en muchas localidades por la necesidad que tiene el
de disponer del agua subterránea; por ello, algunas
han hecho intentos de provocar la recarga artificial.
«iemplo, en Long Island , Nueva York, el agua que ha sido
wmM
f i l i lí I - 1-
í
| ¡|
el
JSpdcio
llll
^
ada para el
¡*0 a través de acondicionamiento de aire se regresa al
pozos de recarga especiales o, en el in-
mediante pozos ociosos que se usan en el verano para
de aire acondicionado. En el valle de San Feman-
0 California,
*.
ya üey es el excedente de agua del acueducto de Owens
introducido al subsuelo con el propósito de mante- Comente
M er el nivel freá tico local a un alto nivel.
í las
pus cavernas son probablemente los ejemplos más espectacu-
I.
de la actividad del agua subterrá nea. Al disolver gran- .
FIG 12 14
*
W:
n
mm
i
i
m
ir
y.t
*
^
0rma
tidades de roca sólida a lo largo de su trayectoria,
el agua grandes salas, galerías y sistemas de corrientes
La recarga de agua subterránea se puede
llevar a cabo mediante el agua de una corriente
superficial que se filtre en el subsuelo.
i !
$
u
mp
1
A
fe
P
,
IÉ8
mm*
m
Í
192 AGUA SUBTERRANEA
—
y de las paredes, construyendo formas fant ásticas con un I
material llamado «á» ( ve fig. W
En las rocas muy solub es, como
CaMg ( C03 ) 2 se forman
sufren _
una soluci ó n tan ápida
,rlas
,
den a formarse grutas de to os , amanos, y en 1 °i
as Pe(luen <
( NaCl ) , el yeso ( CaSO ELO ) , y las rocas de tipo
^
* a
IndeP
p<>nen de ,calcita
escurrido
j
IcavcrjX r i I-
formaciones fant ásticas de roca tan
mayor parte de estas
por encima del nivel freá tico cuando las
estaban llenas de aire. Estas formas caprichosas se com
, depositada por el agua subterr ánea que ha
. abajo
hacia b
•
ah ¿ de la
haves j zona n de d aeieaci
, deben ha
ón. Pueden
aereaci6 rueden
,
-
*
AGUA SUBTERR Á NEA m
li
n
¡
‘ u .
ploman bajo el peso de
la erosion las a ra a
,
a
L
super
rotas
ic
; sope
,ie.
yacentes antes
rtrtcmoonfoc « nfnc A
de
* |
KnrrriWarse
» como estalactitas
ue cuelgan M
, que
,eZ *
se ven como car
<w
k cavetna < grieg0
á mbanos
; =
¿
vi
\
agua natural contieno arico cay ó me ( * ’ , . s j
sia ]actit!i forma a hedida
que el agua cargada
combinación del agua con bióxido de ca í bono. El acido car- ¡ con- bicarbonato de , calcio en solución escurre a través del
peque
que
ña
en solución Si no s
„ Veils
! *¡
í
' ZTulosÍsiPZg¿,SfcalSad 'de t Lato de
má s de cero la participate del apta «tita
e » en la descomposición,
el ion complejo carbonato, ( COj ) - ( formado por el arreglo « ^
mente una gran ~ hdnct
„etle desaml,,r gntduab
se p
'
* .
agua que
íta Parte del asna cae píso
estalactita nue cae al D SO
Ü de tres átomos de ox í geno alrededor de un atomo de car- .
bonoTvelToncalcio
K iZ
Ca*+. Estos dos iones est á n dispuestos
» que el sodio y el cloro que form» I» I
de
«
la gruta escurre
de rntevo «1 depos o
Esta
y parte se evapora evaporación
¿
II!
i«
M “
rtsmo o soluci ó n de la calcita tteuc lugto
l ¡ ktlT , carbono
a
£
fuerte que la atracci ón del
marogenu eApui ^ a uno
hidr ógeno expulsa u
„ g oxgno
de bidr o el
poi el oxigeno el
=
sal o balita ( flg. 4-1, repetida a la izquierda ) . El rntatv |iI
nfflia , LOS
«
i
os otros ¡ Ig
„-
*I
*¡S
formarse
y
i
i
cuando la
^
” Sact"ta qíe S dc tícho
dolinas o simplemente
presiones, llamadas aoiinaso
superficie
r
.
se desploma dentro
suelen
simplemente sumideros, suelen
de una
'
dd toruno sobre la roca soluble se des
*
- F5G. 12-15
El fondo de esta sección de las Cavernas
Luray , en Virginia , está parcialmente ocupado
por un lago. Hay tanto estalactitas como
estalagmitas. Foto reproducida con
autorizaci ón de las Grutas Luray, de Virginia.
^^
dos á tomos de ox í geno permanecen con el á tomo de carb |
pill formando el gas bi óxido de carbono. El ion calcio Ca gM m
HCUá | )-| m m
une ahora con dos iones bicarbonato negativos , (
pül para formar bicarbonato de calcio en soluci ó n . Podemos é iU »?
t
9,
h.m
mmmm
'
. .i , , ¿Swum '
* ’
I Dos partes
de agua
2H 20
+
+
Dos partes de
bióxido de carbono
2C02
producen Dos partes de M'
ácido carbónico
2H2CO3 m
:
mmiM
í
neralmente a lo largo de las l í neas de debilidad origin . ®
tales como la superficie de estratificació n o las fracturas
medida que el agua penetra en estas á reas, disuelve arr
algo
| gi
^
m la roca y agranda las aberturas. El material disuelto es
Í| j
trado por el agua subterrá nea y puede suceder que seel | iJ
posite más adelante descargado en las corrientes . Con |f |
, haSl|
§| J¡
lil del tiempo las aberturas se hacen cada vez más grandes
que, finalmente, forman importantes pasadizos. El | que | a g
i "
.
actividad que forma las cavernas ocurra por encima del nl|-C
i1 freático, en el nivel freá tico o por debajo de éste, es cu ¡
¡ ¡
i1
sujeta a controversia . Sin embargo , la mayor ía de los
ba; ^
lili
tigadores creen que las grutas se forman generalmente ?
el nivel freá tico, y que quedan expuestas posteriormefl ^
rmm
w-
1<Í 4 AGUA SUBTERRANEA gran cavidad subyacente. Entonces el agua de la super .m Hi®
ín sales. Finalmente
. , puede ser que la descomposición AGUA SUBTERR Á NEA 195
i=c; puede drenar, a través de los sumideros, al subsuelo, 0 é .m
jjjg í de los mares antiguos haya sido diferente de la de
salida subterránea llega a obstruirse, se pueden llenar| | .i iS modernos.
¡§¡§|:*3 lias con agua y formar lagos. El área que tiene | nuniJ¡B el agua salada del subsuelo es con -
1«
m
m
« -
:
sumideros constituye lo que se llama topograf ía cárstica
bre tomado del de una meseta de Yugoslavia y del ^^^^
í bargo, no toda
subterrá nea fresca puede llegar a salarse cuan-
nato a través de capas de sal y alg ú n agua salada puede
*
i
, l
de Italia , donde este tipo de paisaje est á ampliament
arrollado . ^S
de la costa .
el océano a las rocas que se encuentran a lo largo
«¡I
iiasii
CEMENTACION Y REEMPLAZA MIENTO
i
I
cualquier caliza a través de la cual pase. M ás tarde esta
teria disuelta puede ser redepositada en los nuevos
dores del subsuelo. En efecto, los cementantes comunes,
| §depj
alrede
¡ ^ Iwcentaje total de espacios huecos en el material terrestre.
Permeabilidad.de
Capacidad
tfivel freático.
los materiales de la tierra para transmitir agua.
— —
calcá reo, silícico o de óxidos de hierro de las rocas| s| g Í8 aperficie irregular entre la zona de saturación y la zona de
|
11
ü¡
mentar ías de grano grueso o de grano fino se derivan!
gran parte, de los minerales precipitados del agua que peíljj
bajo la superficie.
, en aereacié n.
Movimiento del agua subterrá nea.
Principalmente flujo laminar muy lento.
Algunas veces el material disuelto, arrastrado por el ijK El movimiento se efect ú a bajo la influencia de la gravedad .
US subterr á nea , puede reemplazar a otro material. As í, la sfl8¡ Ley de Darcy:
¡¡ni
llh n
en solución puede sustituir a la materia orgánica de los tron-
cos sepultados y producir madera petrificada, con la estruc
tura leñ osa original de los troncos conservados fielmente en
- hemfero.
V
l= F
—
h
lili I cuarzo, como sucede en el Bosque Petrificado de Arizona. Zona productora de agua compuesta de material terrestre per-
psi 4 Agua , juvenil y
nieteórica connata
il meable.
tos.
pt
i® La mayor parte del agua del subsuelo se deriva de la preci-
Los pozos extraen agua de la zona de saturación.
Pozos artesianos son aquéllos en los que el agua se eleva sobre
pitaci ón por lo que, apropiadamente, se le llama agua meteé • la cima del acu ífero.
rica, de la palabra griega que significa “ en el aire” . Pero parte Manantiales.
m
h; - 1
del agua subterr á nea se origina dentro de la tierra misma, en
fuentes relacionadas con la actividad í gnea . Puede aparecer
en la superficie durante las erupciones volcá nicas o acumu-
¡
Son el resultado de la intersecció n natural de la superficie del
¿terreno y el nivel freá tico.
Manantiales de aguas termales .
Su calor se deriva del enfriamiento de las rocas ígneas o por
larse bajo la superficie después de la cristalización de un
IP
«
||; S
:
magma . Esta nueva agua, designada con el apropiado nom
bre de agua juvenil, entra as í por vez primera al ciclo hidro |
|- Lose! geyseres
*
incremento normal del calor terrestre con la profundidad .
son manantiales de aguas termales caracterizados
|por erupciones periódicas violentas.
l ógico. Recarga del agua subterránea .
; El tercer tipo de agua subterrá nea es el agua connota, agua f Natural o artificial.
que ha quedado atrapada en los depósitos sedimentarios a! ¡'memas.
tiempo de su formació n . Toma su nombre de la palabra lati- Disolución de calizas.
na que significa “ congénito ” o “ nacido al mismo tiempo | | g gy pacido carbónico -p agua -f - caliza = disolución de la caliza.
j|
realidad , el agua connata no fue creada al mismo tiempo qüc | jp£S estalactitas crecen a partir del techo; las estalagmitas de
la roca sedimentaria que la contiene, pero formó - parte M abajo hacia arriba desde el piso.
depósito original. De esta manera , la arena depositada iogte Topograf ía cárstica.
un antiguo fondo marino puede ser convertida en una are - Paisaje cacara ñado por sumideros.
nisca, y si las condiciones lo permiten, el agua de mar atr á- ^ mentació n y reemplazamiento .
Cementación de sedimentos para formar roca sólida; por ejem -
pada durante el depósito puede quedar confinada o “ sellacj¡
R1 dentro de la roca. Un ejemplo de agua connata es el aguí i§|
salada que con frecuencia se extrae de los campos Pe | | §¡
^
S pío, la arena cementada por materia mineral forma arenisca.
ppnplazamiento de material; por ejemplo, la madera susti-
p ¿
É Stuida Por materia mineral se convierte en madera petrificada.
ros ( ver el cáp í tulo 21 ) . ^ £lj§¡* ' tientes de aguas subterráneas.
El agua connata de las rocas marinas es salada , refleja®
rjpeteó' rica, juvenil y connata.
:
I:
la naturaleza de su origen , pero difiere en composición
agua de mar actual por varias razones. Parte del mater#
llevado en solución por la antigua agua de mar puede
¡
^ BIOGRAFíA SELECCIONADA
sido precipitado
i . , como
en^ combinaci.ón -qu í mica
#
un cemento
. con otros
,
, o
. puede
i
haber
i
entg
|
¿ate &Breb -
§£ > JT Har r ,
n iían, «,Vadose
”
*
,
minerales en la r o c a C a! v e* r n s r r / r riQAo \ Phreatic Features ot Limestone
and
, Y .
t
j ¡
mentaría. O el agua connata original pudo haber de8a< j Mdland, H * D
í|
>
’ 5
IÜ Mn
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' n \
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, Ground Water in the United
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Tolman, C. F., Ground Water. Nueva York : McGraw IIil} Bool 1
-
Company, 1937.
i
Í
Glaciación
¡
í i
LOS MARES y los ríos de hielo en movimiento, conocidos FORMACION DEL HIELO DE GLACIAR
como glaciares, han atra ído profundamente a los hombres
de mente inquisitiva al á rtico, al antá rtico y a las regiones RESULTADOS DE LA GLACIACION
monta ñosas del mundo. Allí han descubierto que los glacia- DESARROLLO DE LA TEORIA GLACIAL
;
; res son activos agentes de erosión, transporte y depósito y que
estas impresionantes masas de hielo estuvieron más extendi- EFECTOS INDIRECTOS DE LA GLACIACION
das en el pasado de lo que lo están ahora . Los geólogos han
observado, tambié n , que los hielos del último gran per íodo GLACIACIONES PRE- PLEISTOCENICAS
glacial han modificado y moldeado grandes extensiones del
CAUSAS DE LA GLACIACION
paisaje en lo que son en la actualidad zonas templadas.
IMPLICACIONES PARA EL FUTURO
i FORMACION DEL HIELO DE GLACIAR
r
Un glaciar es una masa de hielo formada por la recristaliza-
:
5 :
•
ción de la nieve, y que fluye hacia adelante o ha fluido al -
•
guna vez en el pasado, bajo la influencia de la gravedad . Esta
i i t definición elimina los témpanos flotantes formados por el
i.
—
agua de mar en las latitudes polares y por convención los
—
icebergs ( enormes masas de hielo flotantes ), aun cuando se
| considera que éstos son grandes fragmentos desprendidos del
I extremo de un glaciar que llega al mar *
I yaLo mismo que las corrientes de la superficie y las reser-
N|/ $ de agua subterrá nea, la alimentación de los glaciares de
)S Wife de los océanos. Parte del agua extra ída por
-
/ evaporación
t
t
t 4 : océanos cae sobre el terreno en forma de nieve. Si el
dima es apropiado, parte de la nieve puede durar en el trans-
curso del verano sin fundirse. Gradualmente, con el paso de
‘mos| «DOS, puede crecer la acumulación y
hacerse cada vez
ás gruesa, hasta que, al fin, nace un glaciar.
En las á reas donde la nieve que cae durante el invierno so
llppasa la cantidad que se funde durante el verano, el pai--
Sale se ve cubierto por extensiones de nieve perenne conocidas
campos de nieve. En el límite inferior del campo de nie-
encuentra la lí nea de las nieves. Por encima de ésta , el
de glaciar puede acumularse en las áreas mejor resguar-
¡ r os camPos de nieve. La posición exacta de la l ínea
i ¡ü¡ ^
§ 1 nieves varía de una regi n
* ó climática a otra. En las
r "
I .;
5
W ? neS P lares
, del mar
> ejemplo se
° , pero cerca del ecuadorencuentra
Por ,
,
por debajo del
retrocede hacia la cima
e tos monta ñ
r
i. as. En las elevadas monta ñas del Africa Orien-
'
t !
\ \i ;
* v.
!
(
m
*
f)
SIS
lilS GLACIACION tal var ía entre los 4,600 y 5,500 metros de elevación.
líneas de las nieves más altas del
regiones á ridas conocidas como “
mundo
latitudes
se
cr
localizan
í ticas ” entre
20° y 30° al norte y al sur del ecuador. Aqu í la l í nea de pBl caciones
¡ ^llli^í^T^ps
f cación de glaciares
í
. ' del
glaciares
Pr
, nc
,
* Pa
globo caen en cualquiera de las tres clasifi-
3e í;: 1) glaciares de valle, 2 ) glaciares de
mantos de hielo.
GLACIACION 190
BillL
L,
881 I
-
geno y ox í geno ( ver la fig. 13 1 ) . La nieve no es lluvia
gelada; más bien se forma de la condensación que se |
a cabo del vapor de agua a temperaturas por debajo del nimf
]|
t*ene
j Í § áí*c3areS
f montanas ^^
va e ue e8an hasta los puntos m ás altos de
’ “
occi entales de los Estados Unidos, tienen sólo
.
rI. En la transformación de la nieve en neviza intervienen va
881 r í os procesos. El primero es la sublimación, t é rmino general í
II ***
° S VH 6S e
^ a arrera monta ñ osa, para
? snllda , como ha sucedido a
i
con que se se ñala el paso de un material del estado sólido ;
al gaseoso, sin pasar previamente por el líquido. En la subli
macion escapan moléculas
* i
de vapor de agua de la nieve, par
-
-1 IpB ^-
C * C Sf
etcaPf °
loenlandia y Antá rtica.
g actores ;°e pte ?e monte se forman cuando dos o mas
® us va 'es y se unen para formar una
ticularmente de los bordes de las laminillas. Algunas de estas ¡
ill1
lit moléculas se unen por s í mismas al centro del copo, donde j
6 ie
» q aS 1or ar ° ^
- °
*
movi s bre la planicie que se extiende a )
«tan
ir
ill
Bil í í ¡
:
se adaptan a la estructura de los cristales de nieve. Entonces
con el tiempo, a una nevada sigue otra , y los gr á nulos que ya í
han comenzado a crecer como resultado de la sublimación, se
“ empacan” cada vez m ás estrechamente bajo la presión de la |3*
| ,|
¿ manera
J
?’r a
”0S 6 li
^ ^° °ce
s n amplias masas irregulares de hielo
^ montones , que tienden a esparcirse ra -
FIG . nz
Glaciares de valle en las altas montañas
-
del C áucaso . Foto por Vittorio Sella.
,
mm vf¡|
n
m
nieve superyacente.
El agua posee la propiedad ú nica de aumentar de volumen !
cuando se congela; inversamente, disminuye de volumen cuan j
;
§j|“
-
do el hielo se funde. Pero la causa y el efecto pueden ser
intercambiados : si la presión aplicada al hielo comprime las ¡f
fci . -
FIG 13 1
Las laminillas de nieve muestran una amplia
variedad de formas, todas hexagonales
moléculas estrechamente y reduce su volumen , el hielo puede
fundirse. En efecto, si los grá nulos individuales se ponen en| /
ili ij todas reflejan el arreglo interno de los
étomos de hidrógeno y ox í geno . De estas
contacto, comienzan a fundirse con uii ligero aumento de pre |
*
mimmmf
•
GLACIACION 201
-
!." '
í
m#K £
mantos de hielo que ocultan las monta ñas y planicies de e¡(. troceso ha venido desarroll á ndose desde la ultima parte del
¡fe
! tensas secciones de un continente, tal como aquéllas de Cr0en. siglo x« V ha acelerado a partir de 1920. Un rasgo des-
iforí? idia y Antá rtica ( ver fig. 13-3 ) . En Groenlandia el hie]0 de los glaciares modernos es que siguen el mismo
tacado de crecimiento
mSí* & sobrenasa los 3 000 metros de espesor cerca del centro d0 patrón y de desgaste o perdida en todo el
los casquetes helados. El mayor espesor de hielo que se eo. mundo y sirven como indicadores de cambios climá ticos ex-
í! " noce en la Ant á rtica es de más de 4,250 metros, en la tierra i
i tensos.
:
de Marie Byrd . i Los glaciares de valle no solo son alimentados en la zona
I
iii
de acumulación, sino también por grandes masas de nieve
!
Distribución de los glaciares modernos ‘
wuutttk
Los glaciares modernos cubren aproximadamente el 10 p0r pretación , las avalanchas provocadas por terremotos han per-
i
ciento del á rea terrestre. Se encuentran en localidades am-
m pliamente distribuidas en Amé rica del Norte y del Sur, en
r ; mitido
a un glaciar avanzar en un solo mes tanto como si
Europa, en Asia , en Africa , en la Antá rtica , Groenlandia,
hubiese sido alimentado por la ca ída de la nieve normal de
¡ varios a ñ os.
en muchas de las islas polares del Norte y en las islas de!
:
. - Pací fico, Nueva Guinea y Nueva Zelandia. Muy pocos gfo. | É Por debajo de la l í nea de las nieves, la pérdida tiene lugar
FIG 13 3
|
!¡través de un doble proceso de evaporación y fusión, cono-
Picos aislados que sobresalen a trav é s del ciares de valle está n localizados cerca del ecuador . El monte I
casquete de hielo de la Antártica . Kenya del Africa Oriental, por ejemplo, a sólo medio grado
cido como ablación. Si un glaciar termina en un cuerpo de
Foto por F. /. llootes , iajpa, se rompen enormes bloques de hielo produciendo los
i 111 del ecuador, se eleva casi 5,200 metros hacia los cielos tropi- "icebergs'’ o t é mpanos flotantes de los mares polares.
:i
i
‘
cales y tiene, cuando menos, diez glaciares de valle.
i
Un glaciar formado por la nieve reunida cerca
-
FIG. 13 5
El á rea total de tierra cubierta por los glaciares que existen ; } del glaciar
Movimiento del Dent d’ Herens, el pico de 4 ,172 metros ,
hoy d í a se calcula en 14.800,000 kilómetros cuadrados, de los tasto a la derecha, fluye despué s de pasar
cuales los mantos de hielo de Groenlandia y la Antá rtica re- li
I
f iñ Salvo raras excepciones, los glaciares se mueven ú nicamente el Matterhorn, el pico de 4 ,505 metros de la
izquierda , y arrastra escombros de roca
presentan alrededor del 96 por ciento. Los mantos de hielo unos cuantos cent í metros o, a lo sumo, unos cuantos metros valle abajo . Foto por Vittorio Sella .
-! de la Ant á rtica cubren aproximadamente 12.400,000 kilóme-
ÍíS - f '
tros cuadrados, y los de Groenlandia cubren alrededor de r-\ •
v vy
i / i
''
'
1.700,000 kilómetros cuadrados. A los pequeñ os casquetes .
de hielo y numerosos glaciares de montaña esparcidos alre-
'
r : 1
,
• :I
J. i
;;
;f
vesando la línea de las nieves, hasta que alcanza un á rea don fjjlj - •
i> *
Nevada
*
e
Grieta maestra -
Grietas
Sial.
_
/
& y -
:: Evaporaci ó n
FIG. 13-4 • ent Grietas
:
Un glaciar est á marcado por una zona de m Circo j "K « r.
.
. >
%o ”
acumulación y una zona de pérdida. Dentro
de un glaciar, el hielo puede hallarse en la Cuenca o
. zona de fractura o más profundo,
‘
depresi ó n
v .
en la zona de flujo Un glaciar de valle se
i
— —
origina en una cuenca el circo y está
separado de la pared frontal del circo por una
gran grieta llamada maestra o rimaya .
i
i j?
i
B A:
'
m
lü
m m
: [ I.
m por d ía . Sin embargo, este movimiento se puede deinos K i ra está marcado también por bandas que representan des -
i
m
i
;
.
202 GLACIACION
de varias maneras. La prueba más
medir el movimiento directamente ,
concluyente
clavando una
consiste|
fila
^f
3 j
de esta
| ¡
|
lEstalizaci
g¡ento y movimiento diferencial dentro del glaciar. La
ón ha tomado lugar a lo largo de muchos de los
GLACIACION 203
B Ü lcuos
I
i:
ir
cas a través de un glaciar de valle. A medida que
el tiempo, se mueven las estacas valle abajo con el hielo qUe
avanza y las estacas del centro se mueven con mayor rapi
que las situadas cerca de las paredes del valle . Una
transcf
|
segun|
<
^¡
¡ ¡ ¡
§
fiftg
8
*
planos de esfuerzo cortantes, y a lo largo de otros
sido concentrados los escombros arrastrados hacia de-
por el hielo. Estas observaciones sugieren que en la
¿qua de flujo ha tenido lugar algú n movimiento como resul-
m
f¡pp
P <j
&
evidencia es la aportada por la distribuci ó n de material §§
| ¡ tado de esfuerzos cortantes o de deslizamiento.
.
m. @ ÍP
i
coso sobre la superficie del glaciar Cuando examinamos 0s
cantos rodados y los guijarros que se encuentran a lo largo
]
IESULTAOOS DE LA GLACIACION
m
m mm mm . de un glaciar de valle, advertimos que muchos de ellos no
.
,
pueden proceder de las paredes adyacentes, y que su única Movimiento de material
m
v
m •7^.
. -i fuente de origen posible est á valle arriba . Podemos inferir Los glaciares tienen maneras especiales de erosionar, trans-
K i
m A ;i
-
•
?Ñí>r
•
-
taire«£ f;t KWfr flStf
en consecuencia , que los cantos rodados debieron ser acarrea -
dos a su presente posición encima del glaciar. Otra indicación portar
lle, por
y depositar los materiales terrestres. Un glaciar de va-
ejemplo, recoge escombros por medio de la acción
mm del movimiento del glaciar es que cuando éste se funde, a la congelaci ón, del deslizamiento de tierra y de las ava-
'iwmüos. de
menudo deja ver un fondo de roca que ha sido pulido, rayado lanchas . Las fragmentos desprendidos por acció n de la con-
¡••'.'•i::
y acanalado. Es f ácil de explicar esta superficie al suponer 5 gelación caen ruidosamente de los picos vecinos y vienen a
1
| FIG . 13-6
Fotograf ía aérea del hielo agrietado a lo que el glaciar se movió realmente por encima de la roca del descansar sobre el glaciar. Y los grandes bancos de nieve,
Sil ti largo de la costa noroccidental da fondo, valiéndose de los escombros embebidos en el hielo de sostenerse sobre las abruptas pendientes de las
18 .
Groenlandia N ótense los icebergs que
se han desprendido del borde frontal del
para pulir, rayar y acanalar el fondo. i incapaces
laderas de las monta ñas, se precipitan en forma de avalancha
Es claro, pues, que un glaciar se mueve ( ver la fig. 13-5).
l
glaciar . Foto por George McGill . a! glaciar, arrastrando consigo cantidades de escombros y
En efecto, sus diferentes partes se desplazan a velocidades fragmentos de roca . Este material queda sepultado bajo Ja
diferentes. Pero aun cuando sabemos muy poco acerca de nieve fresca o de nuevas avalanchas, o bien se vuelca en las
cómo fluye hacia adelante un glaciar; ciertas fases no están aberturas de las grietas de la zona de fractura, siendo así
suficientemente claras todavía. En cualquier caso, podemos í: llevado hacia adelante por el glaciar.
BU distinguir dos zonas de movimiento : 1 ) una zona superior en- Cuando un glaciar fluye por sobre una extensión de roca
1 tre los 30 y 60 metros de espesor, que se comporta como una fracturada o con muchas juntas, puede desprender y levantar
. sustancia quebradiza , esto es, se rompe abruptamente, en grandes bloques de piedra y llevá rselos. Este proceso se co
vez de sufrir una distorsión permanente gradual, y 2 ) una noce como arranque glacial. La fuerza del flujo de hielo pue-
-
i :;
' zona inferior, la que, a causa de la presión del hielo super-
yacente, se comporta como una sustancia plástica ( ver “ Com-
de ser lo suficientemente fuerte para levantar los bloques, y
la acción puede ser ayudada por las grandes presiones que
.
portamiento del material” en el capí tulo 10 ). La primera as operan en el fondo de un glaciar. Supóngase que el hielo en - m
IHÉ
IB»
§! :
la zona de fractura; la segunda es la zona de flujo.
En la zona de flujo tiene lugar una deformación plástica;
el hielo quebradizo de arriba es acarreado a
corriente. Pero la zona de flujo se mueve hacia adelante a
—
diferentes velocidades, más aprisa en algunas partes, más
lo largo de la
movimiento encuentra una saliente de roca que sobresale del
fondo del valle. A medida que el hielo del glaciar se fuerza
o se comprime sobre y alrededor de la saliente, la presión so
bre el hielo aumenta, y algo del hielo en tomo de la roca-
puede fundirse. Esta agua de fusión escurre hacia
un lugar
¡p
IM¡¡
üi|
ws —
lentamente en otras y el hielo rí gido de la zona de
es incapaz de ajustarse por sí mismo a este avance irregular.
fractura de menor presión, quizá dentro de una grieta, en la roca
misma. Allí se recongela, formando una fuerte cu ña
entre el
¡III Consecuentemente, la parte superior del glaciar se quiebra y glaciar y la roca. Entonces el continuo
movimiento del glaciar
¡II resquebraja, dando lugar a una serie de profundas y peligro- puede separar el bloque del fondo del valle.
sas grietas ( ver figs. 13-4, 13-6 ) . En las cabeceras de los glaciares de valle el arranque y la
Íi í
i
Un glaciar alcanza su velocidad más grande en cierta par - acci
pegar
ón de las heladas act ú an juntos algunas veces, para des
-
te por encima del fondo del valle, a media corriente, pues N de el material suelto. A lo largo de las paredes posteriores
a /
los lados y en el fondo se retrasa por la fricción contra las \ las cuencas de recolección de los glaciares de monta ñ a ,
se
paredes del valle y contra el lecho . En este aspecto el mov * í / desarrollan en las laderas grandes concavidades, llamadas
Circos o anfiteatros. Cuando el glaciar
If! miento de una corriente de hielo se asemeja al de una de
pendiente abajo, se separa ligeramente de la pared-
comienza su movi
*«| agua .
La mecánica del flujo de hielo es todavía materia de estu-
miento
posterior, formando una grieta
llamada grieta maestra o rima-
!1
! —
dio estudio que se hace dif ícil, por el hecho de que no
podemos observar realmente la zona de flujo, puesto que esta
lJa ( bergschrund ) . Una pared de esta grieta
formada por el hielo del glaciar; la otra por elmaestra est á
cantil , casi
oculta dentro del glaciar. Sin embargo, el hielo de la zona vertical, de la roca del lecho. El agua de fusión
escurre en
de flujo eventualmente emerge en la boca del glaciar y * al 1 J ? dmaya durante el d ía, y llena las aberturas de la roca.
Vr k noche, el agua se congela, produciendo presiones sufi-
¡Bife se le puede estudiar. Se ha observado que en el momento de
emerger es quebradizo, pero retiene las señales del movi - cientemente grandes para aflojar bloques de roca del acanti-
lo. Eventualmente estos bloques se FIG. 13-7
miento de flujo. Los cristales individuales de hielo tienej los arrastra pendiente abajo.
incorporan al glaciar Los fragmentos de roca incluidos en el hielo
ahora varios cent í metros de tama ñ o ; en contraste , los cristales Las corrientes que drenan del frente de un glaciar del glaciar a menudo hacen rayaduras
y
o estriaciones en el lecho rocoso, a medida
en el hielo recientemente formado de la neviza miden| s §j ptto fun-
una fracción de cent í metro. Podemos concluir que los cris
*
, est á n cargadas de harina de
roca , constituida de par
¡§ks muy finas de roca pulverizada. Es tan grande el vo- - que el hielo se mueve sobre aquél .
El afloramiento de ¡a fotograf ía, en el noreste
i i Ii tales de hielo han crecido por recristalización mientras pasa‘ | de Wisconsin, revela que el movimiento del
ron a través de la zona de flujo. El hielo de la desemboca - SSB & de este material, que imparte al agua un color
azul hielo fue paralelo a la orientación de las
estriaciones. Foto por Raymond C . Murray.
mi;
m
15¡
m
204 GLACIACION grisá ceo caracter ístico, similar al de la leche desnatada. Etjjjl| gl mecanismo real por medio del que crece un circo, es GLACIACION 205
^^ feiv a objeto
consecuencia , aqu í hallamos una evidencia adicional de la M ?? í de controversia. Algunos observadores sostie-
fuerza de pulverización del “ molino” del glaciar. ^ < lie
! acc n de las heladas y el arranque en la pared
r;
!: j
iflÉglglf ; Los glaciares tambi én levantan material rocoso por medio de la grieta maestra son suficientes para pro-
ISél circo dentroacantiladas
-
í
& mm de la abrasión. A medida que el hielo en movimiento arrastra ®fecir paredes de centenares y aun miles de me-
U rocas, cantos rodados , guijarros , arena y limo sobre el fondo | tros de altura . Otros , sin embargo , se ñalan que la grieta maes-
I %
del glaciar, el lecho es raspado como con una lima gigantesca, §8 llljf o rimaya , como todas las grietas del glaciar, permanece
m
K Ib
Y las herramientas de corte sufren tambié n abrasión. Esta Wabierta solamente en la zona de fractura, en unos 60 metros
a lo sunio. M ás all á de esa profundidad la presión deforma
'
%
*
VV >:
abrasión mutua es la que produce la harina de roca y da un
plásticamente el hielo, cerrando la rimaya .
\
j. .
m alto pulimento a muchas de las superficies rocosas a través
m
;
i
de las cuales “ cabalga ” el glaciar . Pero la abrasi ó n produce § j Este debate ha conducido a la llamada hipótesis del agua
a veces rayas o estruiciones tanto en el fondo como en las fusión, para explicar la erosión a lo largo de las paredes de
rocas arrastradas por el hielo, las cuales actúan como berra - |a cabecera bajo la base de la rimaya . El principal defensor
mientas ( ver fig. 13-7). La abrasión más acentuada crea sur * esta teor ía explica “ que el agua de fusión desciende perio-
dos sobre la superficie del fondo . Las estriaciones y los surcos ; (feamente por las paredes de la cabeza del circo, se abre
a lo largo de la superficie rocosa indican la direcci ó n del mo - camino por fusión debajo del hielo y en las cavidades de la
vimiento del glaciar. En la isla Kelleys, del lago Erie, al norte r0Ca, y allí se congela en la noche y durante las temporadas
de Sandusky, Ohio, el lecho está marcado con surcos de 30 frjas. El material roto y desprendido de esta manera es reti-
a 60 centímetros de profundidad y de 60 a 90 cent ímetros de
al del lago Great
mdo por el glaciar y la erosión del circo sigue adelante prin
cipamente por esta forma de recesión de las paredes de la
-
anchura. En el valle Mackenzie , poniente I
Bear , en Canad á , se han observado surcos hasta de 45 metros { |; cabecera” .1
de ancho con una profundidad media de 15 metros y longi- Circos
á de 100 metros a casi dos I HORNS , ARETES O ARISTAS Y CUELLOS. Un hom es un pico o
¡
? !. tudes que varían desde poco m s
kilómetros. espina do roca formado por la erosión de las cabeceras de los
mm
¿i circos que rodean a una sola monta ñ a alta . Cuando los gla -
Efectos erosiónales i ciares originados en estos circos desaparecen finalmente de-
*
I 1
£¡
una ¡
Í , monta ñ a ramida abr,uPla > imitada Por las cabece-
an !
^ 3
m»
Los efectos erosiónales de los glaciares no se limitan al pulí
mento fino y a las estriaos mencionadas anteriormente;
pues los glaciares operan tambi é n en mucha mayor escala j
-
Un ore ,e . *'
’
^
13-10 )
, .
^
( termino que se deriva del trances que
m -
FIG. 13 8 produciendo picos y valles espectacularmente labrados en lis ; , » de
A
i Glaciares de valle que fluyen de circos en los á reas monta ñosas del globo.
: “
!%j forma cuando varios circos carcomen una sierra desde lados afilado ” ) se
Mm flancos del monte Deborah, en Alaska .
Foto por U .S . Army Air Force . CIRCOS. Como ya vimos, un circo es la cuenca desde donde !
j Opue$tos. El borde de esa sierra llega a tomar la apariencia
mU&
i
..
fluye un glaciar de monta ña , y es tambié n el punto centra! : de una navaja afilada , dentada y aserrada ( ver fig. 13-10 ) .
para la alimentación del glaciar. Cuando ha desaparecido un |
« :V V
>1.11 n.
fotograf í a es el Lake Marie, en las
cordilleras Snowy , al poniente de Centennial ,
Wyoming . Foto por Barton W . Knapp .
un
.
'
cantil casi vertical . El fondo de un circo
el nivel del borde que lo separa del valle por el que descien
se encuentra bajo
- VALLES GLACIA üOS. M ás que labrar sus propios valles, ios
i
i
forma en las rocas del fondo del j glaciares siguen probablemente el curso de valles preexisten -
de el glaciar. El lago que se fig tes
Cuerno^
-1 ¡
circo se llama higo intermontano de glaciar ( tarn ) ( ver * modific á ndolos de diversas maneras; pero generalmente
13-9 ) .
la ladera de
ü ^
| va es llenen un perfil transversal en forma de U amplia, \
en tanto que los valles de montaña , creados exclusivamente
Un circo comienza con una irregularidad en un por corrientes de agua , tienen perfiles transversales angostos,
la monta ñ a que se forma o por erosi n ó preglaciar , o por /
*
*
fondo el agua de fusión y escurre a lo largo de la margengra- movimiento tiene dificultades para manejar las curvas de
entre las on valle fluvial, tiende a rectificarlo y a simplificar el curso C
banco de nieve . Parte del agua se abre camino
tas de la roca, donde se congela nuevamente, produciefrag
| «| del valle original . En este proceso de rectificación el hielo FIG. 13-10
mmwmm presiones que aflojan y desprenden fragmentos. Estos
- achata cualquier espolón o prominencia de tierra que se ex- Desarrollo progresivo de circos , horns, aretes
arroyue- pende hacia el valle desde cualquier lado. y cuellos. En el primer diagrama los glaciares
mentos de roca son desplazados por solifluxión , por
:.S¿
Los acantilados
los y quizá por desgaste de masa, formando una cuencainás
so - as í resultan tienen la forma de grandes triángulos con su
de valle han producido circos; pero como
¡a erosión ha sido moderada , gran parte
á pice
mera. A medida esta cuenca se hace gradualmente hacia arriba , y se llaman espolones truncados (ver figs . de la superficie montañosa original no ha sido
que
profunda, se desarrolla un circo. La acumulación continua
- 13 11, 13-12 y 13’13 )
rv - .
afectada por el hielo . El resultado de la
erosión de glaciar más extensa se presenta
\ q- /
ir o' jT
'
m: » jf
Jgti
áü
de nieve conduce a la formación de neviza , y si la cuerj 5
| ¡ Jpi glaciares dan también al valle de monta ña un perfil en el segundo diagrama. En el dibujo final,
profunda , la neviza se transform pngitudinal característico, desde el circo hacia abajo. El curso la erosi ón de glaciar ha afectado la totalidad
llega a ser suficientemente circo» de un valle glaciado está marcado por una serie de cuencas de de la masa y ha producido no solamente
A >" &??
en hielo. Finalmente el hielo comienza a fluir fuera del de un circos sino tambié n un matterhorn y aretes
i: al valle que queda debajo, dando lugar al nacimiento xt * Y. Lewis, “ The -Function of Mejtwater in dentados como filo -de navaja. Redibujado
rvy- * Oeog ir Cirque Formation : A . de William Morris Davis, The Colorado Front
44 *
pequeño glaciar.
’
i : ill ^
. •Review , XJL. ( 19.4 ); 110. .
*
Range ” ', Annals Assoc. Am. Geo. , I ( 1911 ), 57 .
# • •
Ha ;
ft
mi I
wpi
*
p8
!
m. roca, formada probablemente por arranque en las á reas don); : ÍMgun0S valles an S1C ° modificados por glaciares conti-
''
^ ^ GLACIACION 207
p
mi
de la roca del fondo estaba despedazada o afectada por juntad I
muy próximas entre sí. Entre las cuencas hay extensiones de
I! R éntales más que por los de valle que hemos venido estu -
jando. Los valles ocupados por los lagos Finger del centro m
¡S si roca relativamente planas que fueron m ás resistentes al arrarf I l
® de Nueva York son buenos ejemplos. Estos lagos,
del estadoangostos |
|¡g
teii
^ ^^I
que. A medida que el tiempo pasa , las cuencas de roca puM >| §gos y , descansan sobre cuencas que fueron exea -
Jp lRl
den llenarse con agua produciendo un rosario o una cad É yadas por el hielo de un glaciar continental. Como el gran &M
an de lagos que suelen llamarse padre nuestro, a causa de su pf manto de nieve se movió desde el Norte, su avance parece ÉR *
H
m
recido con un rosario de cuentas.
a
es
^
frenado
que hab
concentrada
í
por
e
an
en
la escarpa norte de la meseta de los
^ ^el hielo se movio valle arriba en
dienado
ellos fue
pieviamente la meseta . La
tan grande, que el hielo fue
1
IIK
queda desamparada a cierta
cipal a través del cual pasó un glaciar. Como resultado, ^
pri .
mi
II -
®v
. estuviera constituido por roca más susceptible a la j suave mira hacia el lado de donde vino el hielo.
principal
fig . 11 -38. Foto por George McGill .
-
valles colgados se formaron probablemente por la acción rec j Tipos do depósitos glaciales
tificadora y ensanchadora de un glaciar en el valle principal.
llSI
am
'
En cualquier caso, la diferencia del nivel entre los valles i |
tributarios y el principal llega a hacerse aparente cuando el
E1 escombro arrastrado por un glaciar se deposita, bien
porque el hielo que lo lleva se funde o, menos com ú nmen-
glaciar se ha fundido. te porque el hielo embarra el escombro sobre la superficie
i Las depresiones profundas en las costas de Alaska , Norue- del terreno.
ga, Groenlandia , Labrador y Nueva Zelandia son brazos de j É! termino general de depósito de glaciar se aplica a todos
lili¡ mar angostos y profundos llamados fiordos ( ver fig. 13-14 ) . ; lt
ó depósitos asentados directamente por los glaciares o que .
En realidad estas entrantes son valles de corrientes que fueron como consecuencia de la actividad glaciar, se depositan en
Hll
«I
¡
ti:
modificados por erosi nó de glaciar y llenos despu é
mente por el mar. El fiordo m ás profundo que se conoce, en
s parcial - lagos, océanos o corrientes superficiales. El término depósito
de acarreo ( drift ) data de los tiempos en que xlos geólogos
Ü Si c Patagonia , tiene una profundidad de 1,300 metros. pensaban que el depósito de arena y grava sin consolidar que
B
®.H : FIG. 13- 11
cubría gran parte de Europa y Amé rica había sido llevado
: a su posición actual ya fuera por el mar o por icebergs. Los
;
: i Area montañosa antes durante y después
de una glaciación. Redibujado de William
depósitos de glaciar se pueden dividir en dos categor ías ge-
Morris Davis, " The Sculpture of Mountains nerales: estratificados y sin estratificar .
by Glaciers” , Scottish Geopraphical /
jg:; '
* . >
*V
.
Magazine, X X I I ( 1906 ) 80, 81 y 83
y ¡pEPÓsiTOs GLACIALES six ESTRATIFICAR. El depósito sin es-
tratificar asentado directamente por el hielo de glaciar se
lili
BÜ -iP ¡
jpP ^
( tilita cuando se consolida ) y se compone de írag-
tos de°roca de todos los
|!
| tama ñ os mezclados al azar, va -
i |
hando desde peñascos que pesan varias toneladas hasta frag-
jNtos) diminutos de arcilla y part ículas coloidales ( ver fig.
II® P . Muchos de los fragmentos grandes están estriados,
» 1
te ®
|
|
Nidos y presentan facetas a consecuencia del desgaste su-
mientras eran transportados por los glaciares ( ver figs.
Hii |i|f Í6, 13-18 ) . Parte del material levantado a lo largo del tra-
Wmm
Üii Ip
*0 se embarra
¡fvance
, por decirlo así, a través del terreno durante
mm fptndo del glaciar, pero la mayor parte se asienta de golpe
la velocidad de pérdida sobrepasa a la de aliménta-
FIG. 13- 14
:mi -
FIG. 13 12 Spl tilita varia de un glaciar a otro; algunas, por a lo largo de la costa de Groenlandia
Redibujado de Louise A . Botjd y otros,
.
.
Un largo glaciar de valle con muchos Pmpl0 > se conocen como tilitas de arcilla, porque predomi- te
“ The Fiord Region of East Greenland” ,
Ti tributarios, en Alaska. Foto por na las part í culas del tama ño de la arcilla , teniendo solamente Am. Geog . Society , Special Publication
. .
II
§8 . i
U .S Army Air Force. N ? 18 ( 1935 ), p xiu
- M a '
,
7'
'
I j:
3. :J !
3 208 GLACIACION GLACIACION 209
mm .
TIG. 13 15 -
La variedad de tama ños de las partí culas que
. -
FIG 13 18
Fragmentos de roca integrantes de una tilita,
£Ipii componen la tilita es muy grande. En esta marcados por facetas y estriaciones. Ejemplos
fotograf í a de un afloramiento de tilita cerca del norte de Illinois. La cuadrí cula tiene
i
de Guilford, Connecticut, se notan los
cantos rodados y los guijarros mezclados
.
5 centí metros por lado Foto por Willard Starks.
i con part ículas tan peque ñas que llegan al
M m
¿3 - ,
'
^
tama ñ o coloidal . La pala da una idea de
la escala. Foto por Sheldon Judson.
5:
i Planos de
deslizamiento
i >
» .• v.. ri susau!
•vtí
-
•
í
t metros de alto hasta muros de escombros rnuy bajos , .con al- - y se juntan a lo largo de los lados del glaciar. Cuando el hielo
i)
gunas interrupciones. La morrena terminal se forma cuando se funde, todos estos escombros se alinean como un camellón \
i: ’
'
- ¿ •rí
. -
FIG 13 16
E
—
un glaciar alcanza el punto cr í tico de equilibrio el punto o reborde a lo largo de cada lado del valle, formando una
en el cual su desgaste o pérdida alcanza exactamente la mis- j Morrena lateral Hacia el extremo final del valle, la morrena
.
5
Secuencia de diagramas que indica el ma velocidad que su alimentación. Aunque el frente del gStei, ftteral se confunde gradualmente con la morrena terminal ,
crecimiento de una morrena terminal en
el borde de un frente de hielo estable.
ciar es ahora estable, el hielo contin ú a empujando desde an# p otro tipo especial de depósito producido por los glacia -
ba, enviando un abastecimiento continuo de escombros M l
.
de valle es la morrena del centro o morrena media, que se
*
?
I '
' •
.. ..
Aronow, U S Geol Survey ..
! \
wección de la que proviene el glaciar y con una pendiente
G í ;V ü
§;
m •
¡n
¡ cuando esa piedra queda incluida
en un depósito de GLACIACION 211
directamente sobre la roca del terreno. Al-
r«N- í © liivfa
0 descansa
lí bloques erráticos pesan varias toneladas y otros son
más grandes. Cerca de Conway, en New Hampshire,
i.
bloque errá tico de granito que alcanza 27 metros
•
ti
-H
V
. i
¿ ^Llbloques
l sa cerca de 10,000 toneladas. Aun cuando la mayoría de
errá t ícos viajaron una distancia limitada, muchos
arrastrados por el glaciar a cientos de kilómetros. Por
mi de cobre nativo arrancados de la Pen í nsula
e e • * trozos
:
i
im
jjij
$
i
,
I Illinois ).
Los trenes de peñascos consisten en una serie de bloques
errá ticos que provienen de una misma fuente de origen, nor-
malmente con alguna caracter ística que permite reconocer su
procedencia com ún. Los trenes se presentan o como una línea
m de bloques err á ticos que se extienden valle abajo desde su
origen o bien en la forma de un abanico cuyo á pice está
| cerca del lugar de procedencia . Al hacer un mapa de los tre-
5 i
£. ::
:
| lies de peñ ascos que han sido dejados por las capas de hielo
:/
I continental podemos obtener una excelente indicación de la
mmm f dirección del flujo de hielo ( fig. 13-22 ).
$mm
¡si
i
?
i '
"
. El depósito de glaciar
DEPóSITOS GLACIARES ESTRATIFICADOS
es el material transportado por el hielo que ha
estratificado
.. í
j
sido deslavado y clasificado por las aguas de fusión glacial
FIG 13 22 . *
5¡K
ras drumloidal de las lomas y surcos intermedios drumlins varían de unos 7 a 60 metros de altura, siendo el j cargadas con tilita retrab jada o con material deslavado di-
promedio de poco menos de 30 metros. La mayoría de los ^ El depósito fluvio glácial moderno frente
a un glaciar de Alaska muestra depósitos
-
|j rectamente del hielo entretejen un complejo conjunto de
-1 ;í formados paralelamente al flujo del hielo de
glaciar en la meseta Nechako, en Columbia
Británica. El lago Weedon tiene
drumlins tienen de 400 a 800 metros de largo, y son, por Jo¿; canales trenzados a través del terreno que queda enfrente
com ú n, varias veces más largos que anchos.
de arena y grava. A la mitad de la distancia
apenas se distingue una corriente trenzada.
.
-
" i
i:
:
6 kilómetros de largo . La vista es al
noreste , en la dirección del movimiento del
hielo. Foto por U . S . Army Air Force.
En la mayor parte de las á reas se presentan los drumlins
en agrupaciones o campos de drumlins. En los Estados Uni ||
dos est á n desarrollados más espectacularmente en Nueva Itt l / §
*
-
^
i glaciar. Estas corrientes, obstruidas por arcilla, limo, are Foto por Joseph H . Hartshorn, U S . Geol. Survey
*.
glaterra , sobre todo alrededor de Boston, en el oriente ¿de\& \
Wisconsin , en la parte centro-occidental del estado de Nueva / /
York, principalmente alrededor de Syracuse; en Michigan| L m
w •:
1
( fig. 13-20 ) , y en ciertas secciones de Minnesota. En Canaá jl
,
as.
HH
-V
A ;: I
Nueva Escocia y en el norte de Manitoba y Saskatchewan;
la fig. 13-21 muestra un campo de drumlins en Columbio
^ '
s<
M
Brit á nica. H fpfc
: :
. | •
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: • por corrientes, parece probable que se hayan formado a |
‘
V
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• • » <r si 'X
composició n diferente, se llama bloque errático. El térmnfe I I .
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p®»?** ‘ijg- jrZr^ x :$s S¡SCSS®SS»&í¿
* m&m MMI *
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B5;-
»
asemejan a los rellenos de fisura , pero sin el patrón
r.
GLACIACION f
^^áÉSS
t
-v
I
tido se
lineal
*
GLACIACION 213
fea terrazahadequedado
kame es un depósito estratificado de arena y
^
mm
5 K'J
I:
= Á ronow , U .S Geol. Survey. . Cimentados delgados, uno de grano grueso y el otro de
' •
••
i
' grano fino. Generalmente se interpreta esta pareja de capas
:
:
na y grava pierden rá pidamente su velocidad y vuelcan su i
como representativa de los depósitos de un mismo a ño y se
carga de escombros en cuanto se alejan de la capa de hielo cree que se forman de la siguiente manera . Durante el perío-
i .. Con el tiempo se forma un vasto manto de arena y grava
V
/
v
- 7 I Deposito
fluvio - Jt •X ÍyZi
mm
&
í
*
estratificada que se puede extender por kilómetros m ás alia
del frente de hielo. Si la zona de pérdida está localizada en I
un valle, los depósitos fluvio-glaciales quedan confinados al
1
de fusió n llevan grandes cantidades de arcilla , arena fina y
limo a los lagos, a lo largo de la margen de hielo. Las par-
tículas más gruesas se hunden rá pidamente y cubren el fon- FIG 13 27 . -
ws
/ / glacial valle inferior y constituyen un tren de valle ; pero a lo largo i- do del lago con una delgada capa de limo y arena limosa. Este kame aislado en el oriente de Wisconsin
;
®s? ímim9 í B Si
m del frente de un manto de hielo continental, los depósitos i
-
fluvio glaciales se extienden o despliegan por kil ómetros, for. f ¡
Pero mientras el lago permanezca sin congelar, el viento crea
fuertes corrientes suficentes para mantener a las partículas
fue formado por el relleno parcial de una
abertura en hielo de glaciar estancado.
La fusión del hielo ha dejado esta colina
i . A mando lo que se llama una planicie fluvio glacial ( ver fig, - ¡ de arcilla más finas en suspensión . Cuando el lago se congela de laderas pronunciadas, de material
estratificado. Foto por Raymond C . Murray .
: ? -: i
: :
13-24). en invierno, cesan las corrientes generadas por el viento y se
i: Marmitas. Algunas veces un bloque de hielo que se están ( *
asientan las part ículas finas a través de las quietas aguas
ir- i
;.
í ca llega a quedar aislado del glaciar que retrocede en la i del fondo, cubriendo la capa de verano un tanto más gruesa.
mm época de pé rdida , y en tales condiciones se cubre total o ¡ Normalmente una varva tiene una fracción de centímetros,
mm i
\ m t
ss
i '
/
^ - Depósito
fluvio
glacial
í
:
m té
parcialmente con tilita o con depósitos fluvio- glaciales antes j
de fundirse finalmente. Cuando desaparece, deja una mar .
mita, que es una depresión o fosa en el depósito glaciar ( fig, ]
- £
13- 25 ) . Estas depresiones var ían desde unos cuantos metros j - COMPARACION DE LAS CARACTERISTICAS DE LA GLACIACION
aunque se conocen espesores de 5 a 7 cent í metros y, en casos
más raros, hasta de 30 o más cent ímetros ( ver fig. 9-4 ) .
"
hasta varios kilómetros de diá metro y pueden tener desde \ CONTINENTAL Y DE LOS VALLES. Algunas de las características
;
,i
B •
uno hasta 30 metros de profundidad . Muchas planicies flu- ií glaciales que hemos destacado son m ás comunes en las á reas
r
i - :.
- :
ni
.
FIG 13-25
Secuenciasen la formación de una marmita.
vio-glaciales se caracterizan por la presencia de marmitas y que han sufrido la glaciación de valle; otras suelen tener
í
En A se ve - un bloque de hielo estancado,
casi cubierto por depósitos fluvio- glaciales.
se les denomina planicies fluvio- glaciales picadas, por su se
mejanza con las peque ñas cicatrices que dejan las viruelas , j sado
-
lugar solo en las regiones por encima de las cuales han pa-
mantos de hielo; sin embargo, muchos otros rasgos se
La fusión del hielo produce una depresión,
como se indica en B. En algunos casos el
- En el transcurso del tiempo, el agua llena algunas veces las : encuentran en ambos tipos de á reas. La tabla 13-1 enlista
If ::
:
depósito fluvio glacial puede sepultar -
completamente el bloque d é Hielo. Algunas
marmitas se forman también en la tilita.
, marmitas, formando lagos o pantanos, rasgos que se encuen
tran a través de gran parte del Canadá y del noreste de
-
y compara los rasgos característicos de los dos tipos.
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/-
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-/ Hielo-- — / J /
-
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-
comportamiento de los j glaciares modernos y han interpre-
:«* rv>
>:
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mm glaciares
\
.. ó
5
desaparecidos hace miles de a ños. Basá ndose en
wt
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. lo P «> p A o o o o o o o ol1
:
;- i :; » l I»' te fe Tierra donde no existe hielo hoy día, y que los glacia -
mente unos cuantos metros de anchura . La mayor ía de
f;
•
oV :
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£ •
X
! V Vi i : Ti¿
'
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fueron || íé res existentes se extendieron alguna vez bastante más aüá ~o
X ' XXi :
•
: • i
y . ¡é¿¿r>
mados por los depósitos de corrientes que se mov í an a tjpv mites actuales*
.
vés de t úneles bajo el hielo estancado. Entonces, cuandff ;
finalmente desapareció el cuerpo del glaciar, los antiguos
os comienzos
^
depósitos de la corriente quedaron sobresaliendo como un
*»
WZx»TI
m
mm
•
‘¿i
X-
m
.
1 camellón .
Los rellenos de fisura son similares a los eskers en altura
anchura y perfil transversal, pero, a diferencia de los eskers
3 «atar de explicar la
i
^pP
presencia de los bloques errá ticos y las
® extensiones de depósitos glaciales esparcidas a través
el norte de Europa, las Islas Británicas, y á reas adya -
Ofti
y . , <y
ooOo oo
i
í * que se ondulan y ramifican , forman promontorios rectos*
formados probablenien e centes . La fecha exacta en que las mentes Suiza
inquisitivas comen- &
Como su nombre lo sugiere, fueron
;
I
m&
- fC
'
;s* vl cNN .
por el relleno de una fisura en el hielo estancado. Jp°
n a buscar una explicación a estos depósitos duerme
. -
i Kames y terrazas de kame . En muchas á reas el depósj | Sobre lo que ahora
*
iMasado
; pero hacia principos del siglo xvm las explicacio-
Secuencia en el desarrollo de una terraza
FIG 13 28
í &-/A -
iva
1
glacial estratificado ha formado lomas bajas, de laderas rete |
ículos alSla
|glaciales
se
* fueron
!
sabemos que son depósitos y carac-
dando a conocer a través de publi-
de kame. La pérdida de hielo en una topograf í a
irregular tarda más en los valles. Mientras
tivamente abruptas, llamadas kames, como mont acuerdo el hielo llena todaví a parcialmente uno
. - dos o en conjuntos. A diferencia de los drumlins, los kaflU
con la más popular de las primeras
i- FIG 13 26 '
en el Territorio Noroccidental, en Canadá, constituyen est án estratificados. Se formaron con el maten snperfice del terreno en forma repentina y eatacl ísmica, paredes del valle La desaparición final .
del hielo deja el depósitg glacial en forma
7- .
se levanta unos 23 metros por eticima de los
f . A. Noel
terrenos circundantes. Foto por í . colectado en las aberturas del hielo estancado. En este se rieron
depositados por medio de icebergs flotantes. Enton- de terraza a lo largo de los lados del valle.
-: • ¡
Mr :
!
7»i : rk
per í odo
214 GLACIACION ces, cuando retrocedió la inundación, se quedó el | | g interglacial Per í odo Perí odo
i$ § re
ínterglacíaf
*c Interglacial re GLACIACION 215
en su presente posición. Aftoniano re
= Yarmouth
-
o Sangamon¡ano 2
:¡
¡ cr
^— ^
tamente como una gran verdad. Sin embargo, con el^ ¡g§#IS
|
'
fc m 0% del hielo o pleistoceno ha sido caracterizada
por 4 avances principales de los glaciares
lÉtÜ
curso del tiempo, intrigó la idea a un n ú mero cada ve
yor de observadores. El ímpetu más grande vino ^ RS continentales, separados por períodos
m,000.000 de recesión del hielo.
Ü donde la actividad de las glaciares viventes pod ía ser e
diada profusamente. % «Vi
1 antes presente A ños
500,000
del
Presente
En 1821, J. Venetz, un ingeniero suizo, sometió a la ning ú n otro proceso conocido. Por ello Agassiz y sus
So ^
test .] ciedad Helvética un art ículo en el que presentaba el argu colegas encontraron pe ñ ascos y piedras aisladas, ajenas por
y1
!
ii mentó de que los glaciares suizos se habían expandido® gM
guna vez en gran escala. Se había establecido por ento
que desde alrededor de 1600 hasta mediados del siglo
|
| Meto a la zona que les rodeaba . Ellos advirtieron tam-
¡E Ifgj que los cantos rodados habían sido realmente trans-
^
|:í®tados por el hielo moderno desde su localidad original.
hubo en realidad un tiempo de expansión moderada , xvn
(
in?
; »
TABLA 13 1 -
Caracterí sticas de las glaciaciones
continentales y de valle .
persistente de los glaciares, en muchas localidades. Numero
pff| Algunos de los peñascos que observaron eran tan grandes,
sas evidencias en los Alpes, Escandinavia e Islandia indica,-
que no era posible que los r íos los hubieran movido, y otros
se hallaban en lugares tan altos, que un r ío jamás podrí a
li CARACTERÍSTICA
Estriaciones y
VALLE
Común
CONTINENTAL
Común
ban que el clima había sido m ás moderado durante la Edad
Media que por esas fechas, que existían comunidades y gxan,
jas en lugares invadidos después por el avance de los|
J
alcanzar, a menos que fluyera hacia arriba de las colinas.
Observaron igualmente que cuando el hielo moderno se fun -
!? día, dejaba ai descubierto una superficie pulida y estriada,
i pulimento,
etc.
Circos Com ú n Ausente
ciares o que habían sido devastadas por corrientes alimen- i diferente a la formada por cualquier otro proceso conocido.
tadas por los glaciares. Sabemos, por ejemplo, que en el valle Para explicar la existencia de estos detalles en á reas donde
de Chamonix se estuvo trabajando una mina de plata duraníe fno existen glaciares modernos, abogaron por la tesis de que
|S
ííi r « ¡
Horns, Aretes,
cuellos
Valles en for
ma , de U , sa--
lientes t r u n-
Com ú n
Com ú n
Ausente
Raro
la Edad Media y que ésta qued ó sepultada m ás tarde por f el hielo se extendió alguna vez m ás allá de sus actuales
un glaciar. Y la villa de St. Jean de Perthuis fue sepultada i l ímites.
también por el glaciar Bren va alrededor del a ño 1600. \ ¡Nótese que el desarrollo de esta teor ía parti
ó de un con-
m
-. ,
cadas, valles Aunque la idea de Venetz no arraigó de inmediato, hacia cepto que mencionamos al principio: “ El presente es la clave
colgados
Fiords Com ún Ausente
1834 Jean de Charpentier la defendió ante la misma Socie- .
del pasado” La prueba de la glaciación descansa no en la
lililí Tilita y depósi - Com ú n Com ún dad Helvética. Por entonces tenía la teoría más oponentes autoridad del libro de texto o de la disertación ; se funda en
iip|; to estratifica - que defensores. Uno de los escé pticos fue, Jean Louis Ro - la observación directa de la actividad de los glaciares moder-
* *! do
Morrena termi-
nal
Morrena de re
troceso
Morrena de
-
Com ún
Com ú n
Com ú n
Comú n
Com ú n
Com ú n
dolphe Agassiz, quien hizo más labor que ningú n otro para \ nos y en la comparación de los resultados de esta actividad
desarrollar la teoría glacial y lograr su aceptación general \l con los caracteres y depósitos encontrados más all á de la
Agassiz
\
í
actual extensión del hielo.
II
Bilí
fondo
Morrena lateral Com ú n Ausente Louis Agassiz ( 1807-1873 ) , un joven zoólogo, había escu I
chado la explicación de Charpentier; después intentó de-
-
Teoría de la glaciació n m ú ltiple
Antes de la aceptación universal de la teoría glacial, en la
Í Morrena central Comú n, se
lili
mm destruye f á -
cilmente
-
Ausente
Comunes lo-
mostrar a sus amigos y colegas lo erróneo de la teoría . Du-
rante el verano de 1836 los dos hombres hicieron juntos un
que se hablaba de un sola gran edad del hielo, algunos
^
investigadores llegaron a la conclusión de que el hielo había
mm «r Drumlins
Bloques erráti-
eos
Raros o ausen
tes
Com ú n
calmente
Comú n
viaje al valle del Ródano Superior, al glaciar Getrotz. Antes
de que finalizara el verano, Agassiz quedó convencido de su
-
|
|
$
avanzado y retrocedido no sólo una sino varias veces en el
do geológico reciente. A principios del siglo xx se pudo
demostrar una amplia división cuatripartita de la edad del
I» Marmitas
JCskers, rellenos
Común
Raro
Comú n
Comú n
error. En 1837 habló ante la Sociedad Helvética defendien
do la teoría glacial y sugiriendo que durante una “ gran íiS0 o pleistoceno, tanto en los Estados Unidos como en
\
'
i de fisura
edad glacial” no solamente los Alpes sino gran parte gP ¥ pSuropa , De acuerdo con esta teoría, cada avance glacial
Kames Común Común
Terrazas de Comú n Presentes en norte de Europa y de las Islas Brit á nicas hab ía sido cubierta ., ®°ipal estuvo seguido por una retirada y un retorno a los
kame el terreno
ondulado por un mar de hielo. / Jglp que fueron , en tiempos, más cálidos a ú n que en el
presente. En los Estados Unidos cada período glacial
La teoría glacial de Agassiz no fue aceptada de recibe
to, pero en 1840 visitó Inglaterra y se ganó el apoyo de los pjiornbre de un estado del medio oeste, donde los depósitos
illlli principales geó logos britá nicos. En 1846 llegó a Am érica; al Ü ese período en particular fueron estudiados por primera
pi! a ño siguente llegó a ser profesor de zoología en el Colegio W 0 donde está n bien expuestos: nebraskano, kansaniano,
liSHSIP
ter: V.
.
Harvard, y m ás tarde fund ó el Museo de Zoología Cornp&' winoiano y wisconsiniano ( fig. 13-29 ) . .
Esta subdivisión de la edad del hielo fue establecida so-
ISgW rada . Convenció> a los geólogos americanos de la validez Jj re una gran variedad de certidumbres tomadas de locali
la teor ía glacial y hacia el tercer cuarto del siglo xix la teoría
16
-
' estaba sólidamente defendida. La ú ltima oposición mufl
con el siglo.
¡i ;í
ter . Pruebas de la teor ía glacial
¿Cuál es la prueba que demuestra la validez de la Wfflg
i
tef ; '
glacial? La evidencia m ás importante radica en ciertos &
gos producidos por el hielo glaciar que no son produtf|| |
| Gravas de r ío
v. FIG. 13 30
Este diagrama representa algunas de las
evidencias que apuntan a la glaciación
81 múltiple. Ver el texto para aclaración.
ni
SgffiTill gris *
i#
•W:
m
m
in
p 216 GLACIACION dades ampliamente distribuidas. Sin embargo, toda la ev¡.
dencia citada apunta en la misma dirección : que en cada f
¡u
i
perí odo tuvo lugar una glaciación, que ésta fue seguid!
—é
un intervalo durante el cual el glaciar se gastó y desaparej
y que, finalmente, un glaciar más joven avanzó de
Algunas de las líneas de evidencia utilizadas en apoy¿*
- .
este concepto est án indicadas en la fig. 13 30 Es por demá
*r i
•
li
: :
decir que toda esta evidencia rara vez está presente e ji|¡
¡?í . > afloramiento cualquiera de material glacial, de manera ni
el ejemplo hipoté tico representa toda la evidencia que se ten
dría que reunir para demostrar la glaciación m últiple. Con
it
M- i#
te
base en esta evidencia resumida en la fig. 13-30, pod ||
establecer los siguientes argumentos en apoyo de cuando me
nos dos perí odos de glaciación principales:
< |*Ii
-
m
1) Está n presentes los diferentes tipos de tilita: una tilfta
gris en la parte inferior y una tilita roja en la superior. pUes.
to que las dos tilitas son de composición diferente, tien§jj
1»
i!
que habar sido depositadas por hielo procedente de dos dife
rentes fuentes. La explicación más lógica podría ser la de
que la tilita gris fue depositada primero por el hielo de un i
-
II
ilifffl
la desaparición del primer glaciar y antes de la aparición del
segundo. nótese que el suelo desarrollado sobre la tilita gris est á se-
Extensión de la glaciación del pleistoceno
en los Estados Unidos. Las zonas en blanco
representan áreas cubiertas varias veces
a FIG. 13-31
Extensión de la glaciación del pleistoceno 3 ) La capa vegetal sepultada entre la tilita roja y la gris
indica que debe haberse desarrollado un bosque tras la des -
pultado por la tilita roja. Una vez m ás, es válido aqu í el ra-
zonamiento aplicado en los incisos 2 y 3. El suelo ahora
durante la glaciación wisconsiniana. Las líneas
diagonales representan el área glaciada
mi
( áreas blancas ) en el hemisferio norte
Redibujado por Ernst Antees, “ Maps of the aparición del primer glaciar y antes de la aparición del se- sepultado debió formarse en un intervalo libre de hielo entre no fueron cubiertas por el último hielo
. .
Pleistocene Glaciationsf\ Geol Soc
. gundo. t dos glaciaciones. wisconsiniano. La zona gris indica áreas
que no sufrieron glaciación. Generalizado
.
Am Bully XL ( 1929 ), 636 i
Pero existe también otro argumento convincente. Advié r- .
de R F. Flint, Glacial Map of North America
.
7
tase que el suelo desarrollado sobre la tilita roja es mucho Geol. Soc. Am Special Paper N ? 60 ( 1945 ).
y
mmar
mil
* jpgción anterior representada por la tilita intemperizada pro-
sudamente y una glaciación posterior representada por la
mm ®ta intemperizada menos profundamente.
i! 5) La topograf ía de las dos tilitas es diferente, indicando
*!f
as
f !
con ello dos glaciaciones distintas. Véase que existen marmi-
tas llenas de agua sobre la superficie de la tilita roja, pero
no en la superficie de la tilita gris, que tiene un buen dre
naje. Originalmente la tilita gris tal vez estuvo
-
marcada por
a i Ignitas como ahora lo está la tilita roja; pero durante el
Sill |argo período de intemperismo se rellenaron las marmitas,
! ueron desgastadas las lomas bajas y se formó un sistema de
li
¡fe
H ^
gj aje eficiente. Podemos llegar a la conclusión de que la
gris llegó mucho antes que el hielo depositado por
^
3 lita roja y que transcurrió un período de tiempo consr-
r >
:•
fiable entre ambos glaciares.
Ml
: : Í -4 -
13
m
218 GLACIACION Extensión de los glaciares del pleistoceno costa atl á ntica de los Estados Unidos, la velocidad de GLACIACION 219
Durante el avance má ximo de los glaciares de la edad¡
f ? ntamiento anterj0r aj decenio de 1920 fue de unos 9 cm.
¡¡¡8 i: |
1« 0
consiniana ( el ú ltimo de los cuatro grandes avances del Eir siglo- De allí en adelante, aumentó rápidamente la velo-
Ji® i durante el pleistoceno), más de 38 millones de kiló| ¿ iSad
hi£f
ní 'OS C
de elevación a unos 60 cm. por siglo. Este repentino
—
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i
tu
M
-200
landia estuvo también bajo una gran masa de hielo, CQ
lo está ahora. En Europa se extendió un manto de hielo ®
cia el sur, desde Escandinavia a través del Bá ltico, y dentro
de Alemania , Polonia , los Alpes y las Islas Británicas tenj¡§¿
^ | a
H
purante la mayor ía de los per íodos glaciales del pasado,
cantidad de agua retenida sobre la tierra en forma de
hielo fue mucho mayor que en el presente. Por consiguiente,
lili
m l¡ sus propios casquetes de hielo. Hacia el oriente, en Asia, )as el nivel del mar debe haber estado m ás bajo que ahora, y
(
—
m¡il a: :
'
m por la evaporación y los vientos, precipitada como nieve y continentales en el norte modificó la
: •
convertida finalmente en neviza y hielo . Si todo este hielo circulación general de los vientos del globo La faja
tos productores de lluvia desplazó hacia el . de vien-
se fundiera repentinamente, volvería de nuevo a las cuencas, peraturas descendieron. se sur y las tem -
:
oceá nicas y elevaría el nivel del mar entre 21 y 61 metros Consecuentemente, las velocidades
magni evaporación disminuyeron y al mismo tiempo aumentó la
según diferentes estimaciones. Una elevación de esta *
;P
. :
último millón de a ños de la escala geológica del tiempo
g
|:
220 GLACIACION
rrespondiente al pleistoceno. Pero el pleistoceno, en el BfiSos
'í glaciares continentales de Norteamérica tuvieron lu-
mismo tiempo que otras fluctuaciones similares en
GLACIACION 221
todavía estamos viviendo, es un simple momento en el Por otra parte, las observaciones indican que el re- Presente
^ ! JS Io
po geológico. Los geólogos han encontrado signos de que
otros períodos del pasado más remoto han aparecido y |
aparecido glaciares. Los datos son ^general de los glaciares registrado en Norteamérica
¡ wG Europa se repitió en América del Sur.
j —
. CALIDO
Fase
tnegat émiica
i
^Sion
fragmentarios , como
ftrimero de estos tres puntos que la glaciación ha coin-
^ Ke '
09 lac ación
de suponer, ya que el tiempo encubre, destruye y confunda
los efectos de la glaciaci ó n , pero parece
glaciación extensa durante dos per íodos antes de la Grao
cierto que
es
hubo
j
con masas terrestres altas y
—extensas nos induce a
la causa de la glaciación al crecimiento periódico de
tinentas. Aunque muchos investigadores ven una rela-
Avance Valders-
Mankato de la
glaciación
Wisconsiniana A mm*m
m
l' s>
.
N
X
Edad del Hielo. Una de éstas tuvo lugar hacia fines de ]a [ causa y efecto entre la glaciación y las grandes ma FRIO *
©
i : era paleozoica, probablemente en el período pérmico, hace ¡É terrestres, pocos aceptan esto como una explicación com-
i l 7¿>
^
actividad glacial. Una roca formada por la litificación de los tinentes se han estado moviendo de arriba a abajo como
fragmentos derivados de la actividad glacial ( “ till” ) , es ii¡ 1. ¡gehos a través del pleistoceno, y no existe absolutamente
filita. En Africa, India , América del Sur y Australia se han ninguna evidencia de que esto sea así. Sin embargo, podemos
en la grá fica. Podemos suponer que el
clima del futuro diferirá del presente .
En este sentido, estamos saliendo de una
glaciación y entrando en otra .
descubierto tilitas del paleozoico superior. Debajo de la ti- I decir que los procesos geológicos, operando lentamente a
. lita, en muchas á reas se encuentran las superficies estriadas I través de millones de a ñ os, pueden incrementar el tama ñ o
y pulidas que marcan la trayectoria de antiguos glaciares. Sja elevación de los continentes a tal punto que ciertos cam-
1 bios climáticos de duración m ás corta puedan provocar las
CAUSAS DE LA GLACIACION paciones y deglaciaciones de una edad de hielo.
i m Tal como Louis Agassiz lo hizo hace 100 a ños, podemos hoy I una
!
f pe ser esto verdad, tendríamos que buscar, además de
•
perí odos de altos y extensos continentes. Durante la mayor | | ¡ £ í Sol , 2 ) variaciones en la cantidad de energía solar que
! parte del tiempo geológico los continentes han estado m á s | - | ¡
|
: v
trav és de la atmósfera a la superficie de la Tierra, 3)
en la relación de la Tierra al Sol , y 4 ) variaciones
h bajos que hoy d ía y sobre sus má rgenes han existido mares
someros. Tales condiciones resultaron desfavorables para í p ! reg ímenes de circulación océanica , lo que afecta, a su
^^
la que ten ían |
ep | fepersiste y nos enfrenta con un importante problema
á elevada que
'
vados. Ia
¡I * geología no nos enseña ninguna otra cosa, demuestra
no se debe a un enfriamiento lento
2 La
) glaciaci ón |jUe nuestro globo está en constante mutación, que la faz
largo de la Tierra Ya hemos visto que la glaciación extensa! ?§ & Tierra es mutable. Las monta ñas se elevan sólo para
. !
tuvo lugar repetidas veces durante el pasado geológico; pe °4 ser arrasadas por la erosión; los mares avanzan sobre los
estos períodos glaciares son excepcionales, pues durantesi atinentes; regiones enteras cambian a través de varias eta -
mayor parte de la historia geológica el clima no ha y los glaciares vienen y van.
glacial. ® Vimos todavía en la edad del hielo del pleistoceno, un
3 ) El avance y la retirada de los glaciares probablemem Punto clave en el tiempo precedente y al que seguirán exten-
han sido simultáneos en todo el mundo. Por ejemplo, las p $ cambios climá ticos.
i
ti
terminaciones de edad por medio del carbono radiactivo|
demostrado que las fluctuaciones geol ó gicamente
Jj !< e esde el apogeo de la última invasión glacial del norte
reciene * °
10s Estados Unidos hace unos 10,000 a ños,
el clima ha
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222 GLACIACION sido unas veces más cá lido, otras veces m ás frío que en »1
presente.
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Entonces, en un momento dado hubo una elevación
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cw¿ió n glacial
finque
kKi &mz*.
.
y abrasió n.
§striaciones, pulimento y canaladuras.
y
ontor ^os y colina de roca asimé tricos,
¡ g0¿ glaciales.
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, ®
pite
glaciares de las monta ñas occidentales de los Estados Unidos pepo51*0 fluvio-glacial ( depósito estratificado ) , se encuentra en
'
m
iü
A --:-
''
desaparecieron completamente, los glaciares de los Alpes re.
trocedieron y los casquetes de hielo de Groenlandia se en-
cogieron.
Jas planicies fluvio-glaciales, eskers, relleno de fisuras, kames
y terrazas de kame.
fcofia glacial.
IBS» La fase megatermal dio paso a un per í odo en el cual el 1 Venetz, Charpentier , Agassiz,
clima volvió a ser frío. La vida vegetal fue empujada hacia pruebas basadas en "el presente es la clave del pasado” .
I el sur y en las altas latitudes y elevaciones fueron despojadas | chdacióti múltiple .
de sus bosques extensas á reas. Hoy d ía, aparentemente, esta- Nebraskiana, kansaniana , iliinoiana, wisconsiniana.
mos comenzando a salir de la ú ltima fase , a la que algunos ! Resultados indirectos de la glaciación.
ÉSÉi
liáis han llamado la pequeñ
‘‘ a edad de hielo ” , o “ neoglaciaci ón” . i Cambios en el nivel del mar.
81
1pipi
** | pluviales,
¿ Qu é sucederá en el futuro ? Podernos asegurar que el cli - Per íodos
mi ma volverá a ser o más cálido o más frío, y que los glaciares j CditffW de la glaciación.
hasta Ja fecha,
retroceder á n o avanzará n en las edades venideras, tal como i Desconocidas gicos y clim á ticos.
lo han hecho en el pasado. Pero cu áles ser á n los cambios yf i Datos geol ó
cu á ndo sucederá n, es cosa que no podemos predeterminar. Ijgwro -
El pronóstico es de cambios.
Podemos, no obstante, anticipar qué podr ía suceder en cual-
quiera de los dos extremos : 1 ) deglaciación completa , y 2)
una resurgencia del hielo glacial en escala continental. BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
Si los glaciares modernos contin úan desgastándose hasta
llegar o desaparecer, nuestros descendientes se encontrará n
Edward Arnold, 1957.
.
Charlesworth , J . K ., The Quaternary Era ( 2 vols. ) Londres:
ante la inundación de las tierras bajas que bordean los mares
Flint , Richard Foster, Glacial and Pleistocene Geology. Nueva
modernos. Según hemos visto, si todo el hielo se fundiera ¡York
mm
mm el nivel del mar se elevaría de 2i a 61 metros . Es f á cil ima - Thwaites: John , F . T
Wiley & Sons, Inc., 1957.
., Outline of Glacial Geology. Madison, Wisconsin:
mp m- ginar lo que le sucedería a nuestras ciudades costeras. Por
i5 •
1 Publicada por el autor, 1956.
i® otra parte, un cambio climá tico que causara una completa Zeuner, F. E., The Pleistocene Period, Its Climate, Chronology,
Efe
mm
deglaciación en todo el mundo alteraría la actual distribu-
ción de nuestras fajas climá ticas. El norte de los Estados
and Faunal Successions. Londres: Hutchinson and Co., 1959.
¡
: s
• circunstancia ocasionar ía la expansión de los glaciares déi
presente, el nacimiento de otros nuevos y un lento drenajem
de los puertos del mundo.
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I1111
} No podemos decir qué camino seguirá el mundo. Al pre, - .
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8(118» RESUMEN m
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Bill .
uÜ- I. — —
Hielo de glaciar
Nieve > neviza > hielo.
Tipos de glaciares.
Glaciares de valle, glaciares de pie de monte, mantos de hielo
Movimiento de los glaciares .
.
e
Avanzan cuando la acumulación excede a la pérdida o desgas*
Retroceden cuando la pérdida sobrepasa a la acumulaci ón .
Zona quebradiza de fractura arriba de la zona plástica de fluP
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¡Sil!
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Desiertos
IfiV'U
\ m I TODOS LOS SERES vivientes, incluyendo a los humanos, DISTRIBUCION Y CAUSAS
necesitan de la humedad para sobrevivir. Así, no resulta ex-
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traño que las regiones secas de la tierra estén escasamente
jgbladas y que nuestros conocimientos sobre estas regiones
sean limitados. Sin embargo, los desiertos y los casi desiertos
CLIMA
INTEMPERISMO Y SUELOS
Pm
Mf
; cubren cerca de una tercera parte de los continentes, por
lo que no podemos medir su importancia ú nicamente en
AGUA
MM DISTRIBUCION Y CAUSAS
PAISAJES DEL DESIERTO
*m i!; mI
mm* :~S:':í
Aun cuando no hay una definición aceptada generalmente de
lo que es un desierto, podemos decir, cuando menos, que un
desierto se caracteriza por lá falta de humedad lo que —
explica, entre otras cosas, la restricción en cuanto al numero
de seres vivientes que pueden habitarlo. En el desierto puede
existir muy poca humedad inicial, o la que naturalmente
tiene puede ser evaporada por temperaturas extremadamente
altas o encerradas en hielo por un frío extremo. Puesto que
V
m oo estudiamos aqu í los desiertos polares, consideraremos ú ni-
JljSf camente los de los chipas cálidos. Su distribución se indica
Hi
mmrnm M
snlafig. 14-1.
Los desiertos de l s latitudes bajas y medias abarcan dos
ül •
N
/
‘v- ^
grupos generales. El primero es el de los llamados desiertos
1 «hkan,
al norte del Tibet y el Kashmir, en el extremo occi-
ífpl de la China, son ejemplos de desiertos localizados
uy en el interior de masas continentales. El clima desé rtico
i ^
liHlPandes extensiones de Nevada, Utah, Arizona y Colora-
p por otra parte, está determinado por la Sierra Nevada
^ California , que impide el paso de los vientos con lluvia
mSÉ '
ut
soplan del Pacífico. La cordillera de los Andes ha crea
ia en el oeste de Argentina un área desé rtica similar aunque -
¡sil111 pequeña.
, De mayor extensión a ún que los desiertos topográficos son
m
Él •
II
desiertos tropicales que existen en zonas situadas entre los
jjfcjps 30° de latitud al norte y al sur del ecuador. Su orí
s
-
225
mmti
11 4 m
"~ :í -
m
i gen se entiende mejor observando la circulación Señera ¡fMph situado en el hemisferio sur tiende a desviarse DESIERTOS 221
objeto móvil .
..
¿Mí
la atmósfera de la Tierra. ! 48
i izquierda
Imaginemos que la Tierra está completamente euKi | 5?
ahora este principio al movimiento del aire,
Norte
fe .
m por agua. En tal situación el aire se mover w % memos
ía segú n sr*
en la fig. 14-2. En él ecuador, donde es mayor el cale r 1 J
jifo colocamos a los 30° de latitud norte, viendo hacia el
% Alto polar
1IK
i
: ! miento solar, tendr ¿
I
'
:
I ^
*
j ° En contraste, el viento se designa por la dirección
* Alto subtropical ( latitudes crí ticas)
| f' f
..
orte y al .
s ur del ecuador , el aire desciende en las
-
.
-
baja presión de los lados que dan hacia los polos, por ]os 60*
subtropicales de alta presión y se desparrama lateral -
.“ sPKa rset
'
. Alto polar
- '\isra :r
eQa ' 11 r n0f e i111’ v x A a T"
^, . . { superficie tanto hacia el ecuador
ü
p
r . } . rs , : Sí A• 7 . , nombre
á
norte; pero la rotación de la 1 ierra introduce un Va
!
,
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mente
hirientes
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por
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que
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de
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mueven
i
hacia
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los
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*
polos
h ^_
>
predominantes , llamados también
i
vienen
,
a
t.
/
»
ser
Circulaci ó n idealizada del aire sobre una tierra
FIG. 14-2
, .. , .
la Tierra -4a atmósfera, las corrientes oceánicas, fes aves a : v:: ftora en > cuaní° „ s cabente sea e ?,ire> nay°r sera la
^^
t
• > v:
:X ~
^
tornead queliberar
para
fajas
pueda llevar, siendo también el menos ade-
subtropicales
^
esta humedad en forma de precipitación.
de alta presión el aire se calienta
% FIG. Wl desciende sobre la tierra calida y tiende a re-
j
I
^^^
,
En las secciones bien dotadas de agua del oriente fe feLerism ° , tanto químico como mecánico, es extre-
taíiftl
• i
parte de los desiertos reciben apenas de 250 a 375
lluvia anual , y en algunos casos menos todavía . p0r
FrIJ¡¡ fiSlP^1
mm
'
probablemente
fig. 14 - 3 ) .
predomina el intemperismo mecáni-
rn0 mecánico obedece en parte, a la grave-
Cn gran parte del desierto del Sahara , así como en i
Kalahari, Sonora y Atacama, la lluvia anual no a
125 mm . En Lima, Perú, sólo caen 50 mm . de lluvia
en promedio, y en El Cairo, Egipto, no llega ni a es: anual
^^ |KLi
R Bltern
£¿£ ^f^^¿ ^ieiiIS
I
-
como el lasamiento
•
*. de I
A las A
rocas, cuando se desprenden
acantilado La arena llevada por el viento produce
A
I durante el dí a y se enfría rápidamente en la noche, particu- para arrastrar estos minerales en solución. En los desiertos
larmente en los desiertos tropicales . En Trí poli, durante un de Australia por ejemplo, las concentraciones de calcita, óxi -
solo perí odo de 24 horas, un máximo de temperatura de do de hierro y hasta de sí lice forman una costra como roca
Las superficies cubiertas de piedra son
frecuentes en el desierto. Esta es una vista
cercana de las laderas que conducen al interior
del valle de la Muerte, California.
Foto por Sheldon Judson .
37 °C durante el día fue seguido por un mí nimo de -1°C | cn fe superficie
il
II| |
|
en la noche , una variación de 38 ° C. La temperatura más \
elevada a la sombra, registrada oficialmente en un desierto AGUA
de Norteamérica , fue de 57 ° C ( 134 ° F. ) , en el Valle dé la
,
í En los desiertos tropicales a ambos lados del ecuador, son érticas, hay allí agua suficiente para actuar como un impor-
s
muy parecidos el invierno y el verano. Las temperaturas “ in- tante agente de erosión, transporte y depósito. De hecho, el
«
SIi
vernales” no son tan altas como en el verano — y la tempera $cijj
tura en la noche ocasionalmente baja de 0°C pero cuando—
|ejerce mayor influencia que los vientos en la modela-
*
ón del paisaje del desierto.
Ü el Sol comienza a brillar , la temperatura se eleva rápida- omentes
mente a 15, 20 y hasta 27 °C. Sin embargo, en los desiertos / '
•
superficiales de agua
m
m*
tura media en julio alcanza Í 7 °C, pero en enero desci Sp |
— ^ | | ||el río Colorado en los Estadas Unidos y el Nilo de
a 27°C. De hecho, la temperatura media está por debajo Egipto, se originan en áreas bien dotadas de agua, donde
de 0°C durante seis meses del año. j reciben en cantidad suficiente para sustentarla a lo largo
su curso a través del desierto . Sin embargo, la mayor
••
k¡
¡im
mi -
.
menudo vientos impetuosos sobre la tierra reseca. Sin el fe
no que la vegetación representa , arrastran enormes nubes
de polvo a grandes alturas sobre la superficie y mueven | par
t ículas de arena a lo largo del terreno. Localmente, los vien-
-
* alguna avenida ocasional. Con todo, el flujo es de corta
pues el agua , o se evapora rápidamente o desapa-
|||ptre las piedras y escombros altamente permeables del
!
Sin embargo, en algunos lugares, como en el oeste de
tos son ayudados posiblemente por el rápido calentamiento Hptados Unidos , amplias planicies desérticas se inclinan
;I»i I
!
del aire durante el día , lo que provoca movimientos ascen-
dentes repentinos y refuerza el movimiento general de
vientos de la superficie correspondientes a los desiertos mis
las montañas hacia cuencas centrales llamadas playas,
el escurrimiento superficial se junta de cuando en
lllf¡
0 - Pero los lagos - playa que se forman en estas cuencas
11 mos. | |¡¡ dmente se secan en poco tiempo o cuando mucho,
É|S§¿
m J
I mmm
I 230 DESIERTOS quedan como lagos someros, salados, de los cuales el G¡ |® 1 Ipif el lecho de la corriente, destruyendo todo lo que eneuen- mmmm mi
Ill Lago Salado es el mejor ejemplo que se conoce. ff ii a su paso.
: •' t ?
Aunque la lluvia total es escasa y se distribuye irregular
m mente en las regiones desérticas, el escurrimiento de
sola lluvia del desierto es, a menudo, catastrófica. La misma ^ Jgpaduras de lluvias
deficiencia de lluvia es la principal razón de la gran efecti fcg gotas de lluvia que caen sobre una superficie árida
¡fe vidad del agua como agente geol ó gico en el desierto . pUe / agentes de erosión notablemente efectivos, pues cada
Su$ que no hay suficiente agua para sostener una cubierta
$
de ¿ ta tiende a arrojar al aire partículas de material sin con-
vegetación protectora, el escurrimiento de las raras lluvias vidar. Las mediciones cuidadosas han demostrado que un
!
SÜ
llBi
ni
• i
'
T
del desierto barre la superficie sin impedimento alguno. La
avenida de agua rá pida e intensa como es, levanta las pje.
aguacero copioso puede mover hasta 250 toneladas de mate
rial per hectá rea, simplemente por medio de la salpicadura.
-
1 :
dras sueltas de un cauce o una ladera des é rtica y las arrastra In una superficie a nivel las partículas se mueven hacia
hasta que llega a una cuenca del desierto, se evapora olM adelante y hacia atrás, pero en una superficie inclinada tien-
infiltra en el terreno. Algunas veces el escurrimiento se con- en a moverse pendiente abajo.
centra en cauces de paredes verticales — los “
yos del suroeste de los Estados Unidos y los vados o uadis
talioegs ” o ano.
Agua subterrá nea
del norte de Africa y del Cercano Oriente ( fig. 14-4 ) . M
/ otros lugares escurre el agua sobre la superficie en grandes Puesto que la mayor parte del agua subterránea se deriva
ü mantos en un complejo sistema de cauces trenzados . En cual- de la precipitación , no es de extra ñar que los abastecinúen -
Ill quier caso el agua act ú a como un efectivo agente de erosi ón Itos de agua subterránea sean muy pobres y de poca con-
fianza en las á reas desérticas. Aun el agua que cae tiende
I transporte y depósito.
Las inundaciones del desierto son , en consecuencia, dife - a evaporarse antes de abrirse camino hacia los receptáculos
subterrá neos. Si parte del agua superficial logra infiltrarse
I»SI! rentes a las de las áreas húmedas. La avenida t ípica del de
sierto, como la lluvia que la produce, es de extensi ó
-
n local en la zona de aereación, puede suceder que la acció n capilar
las partículas de roca sea suficientemente fuerte para
in y de corta duración. En las regiones h ú medas
parte de las avenidas se derivan de una lluvia general que
, la mayor de
resistir la influencia de la gravedad. Es claro que esto evita
III
US
cae durante un período de tiempo relativamente largo; con-
secuentemente, afectan á reas extensas. A causa de la amplia
distribución de la cubierta vegetal, estas avenidas tienden
que
en
que
el
la
sea
agua
zona
llegue a mayor profundidad, por lo que se queda
de aereación como agua suspendida . A menos
utilizada -
por las plantas del desierto, esta agua re
si»- a crecer y decaer lentamente; pero en el terreno desnudo del toma
fera.
a la superficie por evaporación y se pierde a la atmós-
, desierto el escurrimiento se mueve con ligereza y las aveni-
'
*fe Él
noroeste de Nuevo M é xico . La erosió n es
rá pida durante tos ocasionales perí odos
de flujo . Foto por Sheldon Judson.
corriente. El sabe que , en cualquier momento , un
bravecido de escombros arrastrados por el agua, puede ba- delos
frente em - a
de Sahara la llamada arenisca Nubian trae agua artesiana
oasis de Kharga y Dakhla, 1,040 kilómetros al norte
donde la arenisca aflora a la superficie en el Sudán. Pero
hasta una fuente de esta naturaleza es limitada en cantidad
y las sales disueltas la hacen, en ocasiones, inapropiada para
¡m;
¡i -
•
fcl beber.
En consecuencia, las regiones muy á ridas de la tierra tie-
| nen generalmente abastecimientos de agua subterrá nea ex -
i I.
-
¡lili
?••• • : i
tremadamente limitados, y si estas á reas han de ser desarro
lladas para morada del hombre, será preciso buscar alguna -
i® | | § forma de abastecerlas de agua. Por otra parte en los
|
Ü® * . >
“V
p Ü ¡m
¡¡| — del mundo donde la acción del viento es ape-
g93S así como en áreas más húmedas. No obstante, hasta
¡s partes
111
perceptible hoy en d ía, encontramos una notable eviden
de que aquél ha sido más efectivo en ciertas épocas del -
Pasado.
Ilili
. te
- -,
esPÍ-
m r /.
0
i I
Movimiento de material la velocidad terminal de un grano como la ve-
ímos DESIERTOS 233
m m1 DESIERTOS •
i 232
constante de ca ída alcanzada por el grano cuando
H
^^^ ^^^ SSBLERACI
!Í
Las velocidades del viento aumentan rá pidamente COR ón debida a la gravedad se equilibra con la resis-
altura por encima de la superficie del terreno, del mi | pdel fluido -en este caso el aire- a través del cual
i modo que la velocidad del agua de las corrientes grano ( ver “ Transporte” en el capí tulo 11 ) . La velo-
va
S9
ciales aumenta en niveles por encima del fondo del cauce| @wÍ terminal varía solamente con el tama ño de una par-
"
í c!
m®
mm
Más aun , lo mismo que el agua de las corrientes, la mayojpíÉ
parte del aire se mueve en flujo turbulento. Pero las vel0cL
dades del viento se incrementan a un ritmo mayor qUe jaj, ¡
del agua y las má ximas velocidades alcanzadas son mucho
^f ^^.pcuando la forma y la densidad son constantes. Con-
el tama ño de la part ícula aumenta , crecen también
]a atracción de la gravedad como la resistencia del
¿p Pero la atracción de la gravedad crece a un ritmo ma-
mas altas. que la resistencia del aire : una part ícula con un diá metro
fr 1! El movimiento general del viento es hacia adelante a tra- p
0,01 mm . tiene una velocidad terminal en el aire de alre-
¡ vés de la superficie del terreno; pero dentro de este moví. 5 gyor de 0.01 metros por segundo; una partícula con un
5
miento general el aire se mueve hacia arriba, hacia abajo y \ diámetro de 0.2 mm . tiene una velocidad terminal de alrede-
¡;V> |
•
i
, \ '
'
\ de un lado a otro. En la zona situada a pocos metros sobre i dor de un metro por segundo, y una part ícula con un diá-
la superficie del terreno, la velocidad media del movimiento metro de 1 mm. tiene una velocidad terminal de unos 8
ascendente en un remolino de aire es aproximadamente de metras por segundo,
un quinto de la velocidad media del viento hacia adelante. ¡Para poder ser arrastrada una part ícula hacia arriba por
¡
1 Este movimiento ascendente afecta grandemente la capaci
dad del viento en el transporte de pequeñas partículas de
yn remolino de aire turbulento, debe tener una velocidad
*
-m
s l|
||
m
m
ill
II \mS
torio indican que la profundidad de esta zona depende del
Pfa
S •
v*.-í
TORMENTAS DE POLVO Y TORMENTAS DE ARENA. El material :, * »%
regularmente cae en dos grupos « Part |crdas a lo largo del lecho de una
corriente ; pero :;ú :
v 3 ’
-.<ir
*f *“ ffntar
en función de su tama ño. El diámetro de los granos de arena . & -A!; : ' ;'
PartícuIas individuales dentro de la corriente
• • '
M . f ÉSt ;;
-
Ilevados por el viento promedia de 0.15 mm. a 0.30 mm., con
V
yó
< ¡ S-
m Velocidad del viento en metros por segundo
algunos granos finos hasta de 0.06' mm. Todas las part ículas Wal> m \entras 9ue eI no Puede Por sí mismo í .. seriP^
'terreno
.
.
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i
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MM : .
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del . M ; -
W 1G 14-5
”
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En una zona delgada cerca del terreno, hay En una verdadera tormenta de polvo, el viento levanta par- de arena son arrojadas al aire solamente
' '-
• y ' . . •
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?
independientemente de la velocidad que exista t ículas finas y las arrastra hacia arriba decenas y hasta cien - bal ° el impacto de otras part ículas. Cuando el viento alcanza
»na velocidad critica, Jos granos de arena comienzan a rodar .
inmediatamente arriba . Esta zona tiene del tos de metros en el aire, formando una gran nube que puede
'
•
hac,a adelante a lo largo de la superficie. Uno de los granos
it , i
mm
>
¿ a cula
ft
^ part el bien dar lugar v i
en aire o ,
^ Van
U • - -?
dos zonas: una para las superficies , viento cuya parte superior queda a un metro o menos s 0 3fev|? T seSunpa
\ la primera. í iv .'
'
-!
las part í culas tienen un di ámetro
Imi
Hi
i!
* ‘*v>
en que la
medio de I mm. y otra para las superficies
con part í culas de J cm. de diámetro .
el nivel del terreno. En realidad la mayor concentración
arena en movimiento est á, por lo com ú n, sólo a unos
^veze eve ^
en el aire, el grano de arena queda sujeto a dos
Ml
- ’ Í.T; V, V
.V.
WS
;o
¡SBIB¡
¡
de velocidad de un viento soplando con una
:•
intensidad dada sobre superficies cubiertas con duales rara vez llegan hasta los 2 metros de tritura. El aíre | BP la tierra y eventualmente así sucede; pero aunque el
partí culas de un milí metro u de un es bastante claro por encima del manto de arena móvil y | ?n° caiSa > lo empuja hacia adelante la velocidad horizon-
ii centí metro de diámetro medio, respectivamente .
Reproducido con permiso de K . A . Bagnold ,
The Physics of Blown Sand and Desert pDunes,
hombre que esté sobre el terreno se verá sumergido paw
mente, como si estuviese parado en una laguna somera
|
. gg
§: b ó
. viento. El curso resultante del grano de arena es
lico
Sp «astadesde
¡ ^
el punto donde fue primeramente arrojado
el que finalmente choca con el suelo. El
( Londres: Methuen ir Co .t Ltd .t 1941 ), . 54 . mezclados con h* g É Sjfe en
iü l
á
^
Por suppcsto el polvo y la arena est n
pr n S o de impacto varía entre 10° y 16 ° ( ver fig. 14-7 ) .
! provocada por el pero ° *
¡
W? contra una part ícula grande y ser impulsado hacia
una vez mas P r el viento, o puede sepultarse en
°
y*ena suelta , arrojando quizá otros granos al aire en su
FIG. 14-6
is las de distinto tama ño en diferentes formas . Un grano 0 | |
| 0, Tormenta de que mueve tanto arena como
[
i
tama ño del polvo es arrastrado a gran altura en el aire yjjlg ijgll
grano del tama ño de la arena es llevado hacia adelante eti
del suelo. La diferencia estriba en la fuerza del viento y
cerca En ^
cualquier caso, es a través del proceso general de sal -
tClón como una nube de arena
se mantiene en movimiento.
aire
polvo en la parte central de Wisconsin.
El mí nimo de visibilidad se localiza
inmediatamente encima de la superficie
del terreno donde el grueso del material que se
la velocidad terminal del grano.
0n an ojados
multitud de granos al aire por impacto> y lie
*
-
mueve es arena . Foto por Elliott A. Riggs.
I
**
111
|
A\ l
KÍg££f & \
i 234 DESIERTOS vados por el viento hasta que vuelven a caer al terreno
continuación, éstos rebotan nuevamente al aire, o imjit *
a otros granos hacia arriba por impacto. La energía ir
i
I iI
i _~o
Viento
IgF8 ''¡ Mi
¿¿•¿
‘
que eleva cada grano en el aire procede del impacto de
grano, y el viento contribuye con la energía adicional i
~
mantenerlo en movimiento. Cuando cesa el viento, todas a i
partículas individuales de la nube de arena se asientan en " ; la
tierra.
|
|l Viento Algunos granos de arena, particularmente los más si- 2
P í }
- des, nunca se elevan en el aire por completo, aun bajo ¡f I
Sgg "
•
v impacto de otros granos; éstos ruedan hacia adelante a lo
m largo del terreno, en forma muy semejante al rodamiento y
SIS desplazamiento de partículas a lo largo del lecho de una :
Iis corriente de agua. Se ha calculado que entre una cuartal FIG. 14-8
ISil Viento
Erosión
una quinta parte del material desplazado en una tormeÉfeii Los ventifactos exhiben una diversidad de
111 i (
/
de arena viaja por rodamiento; el resto lo hace por saltación , ;
La erosión del viento se ejerce mediante dos procesos: abra
y deflación.
- facetas, depresiones, bordes y surcos, así como
superficies lustrosas. La escala está indicada
Adviértase que una vez que el viento ha iniciado el moví ¡ sión - por la cuadrícula de 5 centí metros.
Foto por Walter R. Fleischer.
miento de los granos de arena a lo largo de la superficie, ABRASIóN. Al igual que las part ículas arrastradas por el
f
I FIG. 14-7
iniciando la saltación, el viento no act úa por más tiempo agua que corre en la superficie, los granos de arena sujetos
lis Un grano de arena es bastante pesado para ser
levantado por el viento, pero puede para mantenerlos rodando. La nube de granos en acción obs- jI a saltación que mueve el aire son agentes abrasivos suma-
ilili ser puesto en el aire por saltación Aquí un . taculiza al viento y resguarda la superficie del terreno de su j mente eficaces en la erosión de las superficies de roca. Segú n
181 grano individual rueda hacia adelánte fuerza; por lo tanto, tan pronto como comienza la saltació n, l vimos, la arena empujada por el viento rara vez se levanta
impulsado por el viento, hasta que rebota
\ :r . decae rápidamente la velocidad de los vientos que se mué- i más de un metro sobre las superficies del terreno, y los
tu con un segundo grano Una vez en el aire,
es llevado hacia adelante por el viento
y atraí do hacia el terreno por la gravedad.
ven cerca de la superficie. La saltación contin ú a ú nicamente cálculos apreciados indican que la mayor parte de los granos
porque prosigue el impacto de los granos. Cuanto m ás fuer- í se concentra en los 45 cent ímetros más cercanos al terreno,
Sigue una trayectoria parabólica cayendo sobre
el terreno con un ángulo entre 10° y 16° . tes sean los vientos que soplan durante la saltación , más ! I En esta capa de 45 cent ímetros se concentra el poder abra-
pm¡ sobre el terreno . En una regi ó n seca , por ejemplo , el polvo Turkestan chino, donde fueran descritos por primera vez; am
Mí puede yacer imperturbable sobre el terreno, aunque este j los surcos mismos se llaman depresiones de yardang. El per-
4
\
: :t - soplando la brisa; pero si pasa una manada de carneros y j W transversal de una de estas depresiones no es muy dife- r mBBm
'
%sr
11
pfli
! ,
pisotea el polvo, éste se levantará en el aire, moviéndose a :j rente del de un valle de monta ñ a glaciado, en miniatura ,
lo largo con el viento. -i» I variando las depresiones desde unos cuantos cent ímetros qui-
m
MÍ Sfi
FT4 5?
mr,
|Í
| La explicación a esta aparente renuencia de las part í culas j hasta 7.5 metros de profundidad . Se alinean en la dirección mW msm . fí?
il de viento a ser perturbadas se encuentra en la naturaleza j jornal del viento, y su profundizamiento por la abrasión de /
¡Jvv feto
del movimiento del aire. Los min úsculos granos de P° É«arena ha sido observado realmente durante las tormentas
.
| í tií\
quedan dentro de la delgada zona de movimiento impert -g M;Jfeáíena.
^ m
:
*
•5
^ * .
tibie del aire en la superficie. Son tan peque ñas que Ñ j / ^ productos m ás comunes de la abrasión son ciertos gui- m MI* 'á :
Im ft, .X X
;
¡ ¡¡
^ Estos fragmentos de roca se llaman ventifactos, pa-
abra derivada de las voces latinas que significan “ hecho por
Ijen \ \ fjl?611a *0lo” Se encuentran no sólo en los desiertos, sino tam-
L5
- H.
W: *5«
lili
te !!
Alg ú n otro agente puede poner las part ículas de polvo Jn largo de las playas modernas -de hecho, donde-
! i! * movimiento y elevarlas a una zona de
el impacto de part í culas m á s grandes ,
aire
o las
ciones del aire en movimiento. Las irregularidades en **
turbulento
repentinas
, qui ®
sue
u
- fLf 3 que
,
^
soP3e el viento
cíes de roca ( ver figs. 14Sranos
* suPfir caes
-8, 14 -9
de arena contra las super-
y 14-10 ).
3os ventifactos se caracterizan por un m tá 1
campo arado o en el lecho de una corriente recientemente
brillo 0 lustre relativamente alto y por una diversidad de JA
m M
II expuesta pueden ayudar a que el viento inicie su lletas
¡¡
, depresiones, canaladuras o bordes.
creando turbulencia local en la superficie. También el r ¡ , SuP^ rficie de un ventifacto individual puede mostrar
$ a
1
H9
im
m
m I
vimiento vertical del aire frío que desciende durantetegg
tormenta de truenos, choca algunas veces con el
velocidades de 40 a 80 kilómetros por hora y agita y ¡
* í§ §
eV
|
I
^^^
j os
S®as, pero, por
. facetas , forman
— —
mente una faceta, ó 20 facetas o más algunas veces
lo com ú n, son curvas. Cuando se encuen-
a menudo un borde bien definido,
FIG. 14-9
Ventifacto con tres caras bien desarrolladas,
en el desierto de Mojavi, California , La navaja
Is
de bolsillo colocada a la derecha del ventifacto
grandes masas de polvo. t
í fa ^
ln ersección de 3 ó m ás de ellas da al
ventifacto la apa- da idea de la escala. Foto por Sheldon Judson ,
8
J &
|
|
| .
Sli
üüf
I
•
1mr= vimiento del viento en un ángulo de 55° o más, y se
canaladuras cuando está en á ngulos de menos de 55°,
¿Pero cómo puede el viento cortar más de una faceta| |
|
p 55?
I
fornJ¡¡
í
w
•• m .
VHV
“T
.
FIG 14-12
Las mesetas del oriente de Nuevo M éxico
y del occidente de Texas están picadas o
cacarañadas con amplias depresiones someras,
una superficie de roca? Si la roca original es un tanto anjjggr — modeladas en arenisca pobremente consolidada.
II 3 pulgadas lar y est á en posición adecuada con relación a la trayectot®
min A Clima fiGmedo
En este caso la erosión del viento ha creado
.
grueso depositado
como médano arenoso ? Material fino
,
w
?
transportado por
el viento
cuencas de deflación, pero sólo después
de que el cemento calcí fico ae la arenisca fue
destruido por las aguas que percolan hacia
abajo. La destrucción del cementante tuvo
lugar durante los perí odos húmedos del
r. :>$
SU
i!!
fD los. Finalmente, los materiales subyacentes pueden ser reti- &
pleistoceno y la deflación ocurrió en los
*— perí odos secos intermedios.
rados por el viento de manera que la roca cambie de posición
, - -U
.Vr ^ *
VTT
*m»\
Redibujado de Sheldon Judson, Geology of
;•
IB! .
A o se mueva por la fuerza de vientos impetuosos, por las acti- 1-
vidades de los animales o por acción de las heladas. Cual-
hrr
B Clima á rido
— the San Jon Site, Eastern New M éxico.
Smithsonian Miscellaneous Collections
Altura aproximada de la zona más densa
en la capa de arena quiera que sea la causa, cualquier cambio en la posición de \ .
C X X l , N ? 1 ( 1953 13
‘ Sí
1 transportada por el viento la roca, puede exponer una nueva superficie a la acción gos. Si bien se atribuyen con frecuencia al viento estas forma -
abrasiva del viento cargado de part ículas. Los á ngulos que ciones, el iñ temperismo diferencial es el causante en primer
tSli cortan o dividen el viento y la variabilidad de éste, crea término; el viento ha quitado, simplemente, los productos de
sueltos.
j
posiblemente las facetas m ú ltiples de los ventifactos grandes, ; jntemperismoón despoja ú nicamente de las part ículas de are-
«IB en tanto que e! movimiento de la roca misma es quizá res- i S&La deflaci
y de polvo a un depósito y deja las part ículas más gran -
ponsable de la diversidad de caras en los ventifactos de ¡ guijarros; estas piedras, con
ta menos de 25 ó 30 cent í metros de diámetro. Í del tama ño de las chinas osuperficial
| :
wti
Superficie del terreno
solidar. El proceso imprime al paisaje algunos rasgos iden i Depósito
tificables. Por ejemplo, forma huecos o depresiones en los
-
el viento pierde su velocidad y con ello su capacidad
ílir depósitos suaves de material sin consolidar, que varían des- ; Cuando
}
períodos secos, vino el viento y barrió el material suelto. Hoy mse. igl!
1811%
IND. ¡
en Kansas tj en ciertas partes de Nebraska,
el loess probablemente no tiene origen glacial,
m -
10 16° D d ía encontramos las partículas más grandes apiladas en lo-
mas de arena sobre el lado de sotavento de la cuenca exca- wmm
“
m
*
« m
y es de suponerse que se derivó de fuentes
de suministro locales u de las regiones
V . - as> y ’
más áridas del poniente.
r
. - • i; .
. 11 '
FIG 14 10 .1
vada por el viento. Las part ículas de polvo más pequeñ as f KANS
m \ La lí nea de sección señalada con A en
Elimpacto de los granos de arena transportados
corta una faceta en un ventifacto.
por el viento fueron arrastradas m ás lejos, y esparcidas en un manto a i
i
I
LSgfl
. -
Illinois se refiere a la fig 14 15.
. • Redibujado de Robert P. Sharp , “ Pleistocene través de las planicies al oriente ( ver fig. 14- l 2 ) . | . /
I MO.
11
Ventifacts East of the Big Horn Mountains,
é
¡lili®
> . . .
Wyoming” , J Geol , LVIl ( 1949 ), 182 En las regiones á ridas y semi á ridas se ven rocas finamente | KY
»1 "ITs
- TENN.
A R K. \
FIG. 14 14 - mm ! \
’¡
j
. .
Suelo .
•
. V A L A.
im
:
I . -
FIG 14 14
i En muchos lugares, la tilita sin intemperizar
MJSSí está cubierta por loess sobre el cual se ha
:
Loess L A. p;
í
C desarrollado una zona de suelo. La ausencia
de zona de iñtemperismo entre la tilita y el
i
] ¡
.
FIG 14 11 -
Al soplar el viento, ha hecho esta excavación
en los depósitos de arena sin consolidar,
loess revela con frecuencia un depósito rápido
del loess inmediatamente después de la
desaparición del hielo glacial y antes de que
M
II-
v -
*
?
S: i
*
•
•
del parque estatal Terry Andrae, cerca del
lago Michigan, en el oriente de
.
Wisconsin Foto del Departamento
de Conservación de Wisconsin .
los procesos de iñtemperismo pudieran
afectar la tilita. El iñtemperismo y la actividad
orgánica capaces de producir un suelo
no se inician sino hasta que el depósito
de loess se hace más lento o cesa•
'i ¿i
'
wm
w
1
258 DESIERTOS depositados por el viento, son de varios tipos, dependí SSfcfla expuestas .
íf los fuertes vientos del oeste Estos vien - DESIERTOS 239
¿
360
300
Espesor de loess en pulgadas
éstos del tama ño de las part ículas, la presencia o i iV"
de vegetación, la constancia de la dirección del vienta
Todavía nos queda mucho que aprender acerca de esteento
ausencia í
y ^^io^ taron y se llevaron el material del tama ño de polvo
planicies de inundación, moviéndolo hacia el oriente,
cantidad de material susceptible de ser movido por el vi la |f fa tando cerca de los ríos la mayor cantidad y lo m ás
HÜ 1
.
de este material.
240
¡
de depósito, pero hay ciertas observaciones y generalfeacio I ¡II embargo, algunos geólogos han sugerido que los depó-
nes de indiscutible importancia. jÉijr de loess, especialmente aquéllos de la parte inferior del
'
^
I |pdel Mississippi, no fueron depositados por el viento,
SBO
I
LOESS. El loess es un depósito sin estratificar, de color
120
compuesto de pequeños y angulosos fragmentos mineral *
ante j qUe más bien se derivaron de depósitos de grano fino
I1 : Los depósitos de loess varían en espesor desde unos cuanto ^ |I| f&écédente
“
de los pantanos adyacentes mediante un proceso
loessificaci ón” , cuyos detalles no es necesario con- Trayectoria de los granos de arena a
II BO
cent ímetros hasta 10 o más metros en el centro de los $iado través
1 Esta aqu í. Basta decir que la mayor parte de los investi-
dos Unidos, llegando a alcanzar centenares de metros ¡ ¡I siderar de la superficie de discontinuidad
ü
m1II
II 30
I I
Tamaño media de las part ículas
I algunos lugares de China. Una gran parte de los depósitos f gadores
superficiales que se extienden sobre unos 500,000 kilómetros
: creen que el loess del valle del Mississippi se form ó
m i 25 de loess, en micrones cuadrados de la cuenca del Mississippi está constituida por tos fluvio-glaciales que esparcieron las part ículas finas sobre /
I Bi
loess, y este material ha producido los f értiles suelos moder- el paisaje. De hecho, casi la misma explicación es aceptada
20
nos de varios estados del medio-oeste, particularmente I0\va generalmente al referirse a la gran faja de loess que se ex-
| t(ende a través de Francia, por Alemania , norte de los Al-
1i
m 15
Illinois y Missouri ( ver íig. 14-13 ) .
Muchos geólogos, aunque no todos, consideran al loess pes, dentro de los pa íses balcá nicos y hacia el este a través
FIG, 14 - 17
A causa de su momento, la arena del aire
planicies de Polonia y del occidente de Rusia. fuera de la sombra de viento que se mueve
10 como un material depositado originalmente por el viento, I de lasembargo, no todo el loess se con mayor rapidez, bien puede pasar a través
í - i#
10 20 30 40 50 60 70 80 90
Basan su conclusión en varios hechos. Las partículas indivi- 1 Sin deriva de depósitos gla- de la superficie de discontinuidad , para
Distancia en millas, al Sureste de í ! En uno de los primeros estudios sobre el loess se de- asentarse en la sombra de viento detrás
R ío Illinois duales de un depósito de loess son muy peque ñ as, notable- o í ales.
ó que el desierto de Gobi ha sido la fuente de origen del obstáculo, o bien puede chocar con el
FIG. 14- 15 mente parecidas a las de polvo transportadas por el viento mostr obstáculo y caer dentro de la sombra de
que cubre de loess amarillo grandes extensiones
I El loess relacionado con los principales ríos
alimentados por glaciares en el medio-oeste
hoy día. Más a ú n , los depósitos de loess se extienden por I del material de China y que imparte el color característico al
viento situada frente a dicho obstáculo.
Reproducido con la autorización de
al norte
muestra una disminución de espesor , a medida igual sobre colinas, laderas, valles y planicies, indicio éste
I
:
^J," ^
desvía sobre y alrededor del obstáculo. en su apogeo, m ás ( pie durante los intervalos interglaciales. cu re í
Dentro de la sombra del viento, la velocidad Igualmente, puesto que no existen zonas visibles de intempe- í «ertas formas características y f á ciles de reconocer. Con
de éste es baja y el movimiento del aire se 00 el vlcnto re me l£ s Part ículas de arena en mou-
caracteriza por sus remolinos. El aire que queda rismo sobre la tilita y los depósitos fluvio- glaciales el loess j * ,\ }
dentro de la sombra de viento está depó glaciales reci é n ca os promontorios llamados dunas o médanos, los cuales
separado del aire exterior por una superficie
se asent ó probablemente sobre los sitos i
alglinas veces lentamente a lo largo de la direc-
de discontinuidad . Reproducido con la formados, antes de que pudiera desarrollarse algú n suelo j
del viento. Algunos médanos tienen solamente 30 cent í-
autorización de R. A. Bagnold , op . cit ., p. 190. entre ellos ( ver fig. 14-14 ) .
Ciertas relaciones entre los depósitos de loess del medio- | * j ^
g¡¡ de
aJur e
*> Pero otros alcanzan proporciones colosales ,
an existen dunas hasta de 210 metros de
s .
"v>
oeste y las corrientes que drenan las antiguas á reas
sirven para robustecer la conclusión de que existe una
glaciales
íntima
conexión entre la glaciación y el depósito de materiales Bfr ^> i
vados por el viento. La fig. 14-15, por ejemplo, indica que / ) |
J
^¡¡ ^
* on una
**base de más de 900 metros de ancho,
capitulo 11 apreciamos que a medida que decae la
gje dearaunael corriente
fep f transporte
, disminuye también la energía
de material; consecuentemen- WMM .
Remolinos de aire las principales corrientes glaciales pasan a través de la
de loess, y que el espesor de éste disminuye hacia el oriente
. ^
.
reviene , el dep ósito de material. La misma relación ..
»‘ V
"í
cuanto más se aparta de las riberas de las corrientes. Más energía que disminuye y el incremento en el depo-
aú n, el tama ñ o medio de las part ículas disminuye conforme aplica al viento; pero al referirnos a la arena deposi-
se separa de la corriente glacial. Estos hechos se pueden
& por el viento necesitamos examinar
mas estrechamente
z
•
Obstáculo explicar mejor como sigue: sabemos que en la actualidad no
se est á formando loess en esta á rea , de modo que tenemos
que buscar condiciones más favorables en el pasado. Duran
*
011 Y explicar por que la arena se deposita en forma
Y n(> como un manto continuo regular,
de viento. Cualquier obstáculo, grande o pe
naso, que se interponga en el camino del viento, desviará-
lili .
y
I
J
DESIERTOS a diferentes velocidades se llama superficie de discorxti Iggertes vientos costeros que act úan sobre las partículas de
240
dad ( ver fig. 14-16) . mu ¡fede ¡ Ia Playa En muchas costas la vegetación es lo sufi-
Cuando las part í culas de arena empujadas por el vie¿lf I| ¡
Wfe
!|
*
If O
to que est á inmediatamente enfrente de dicho obstácffl
Puesto que la velocidad del viento ( y la
son bajas en esta sombra de viento ,
energ
tiene
se forma gradualmente un pequeño mont ículo de arena . Otras
lugar
ía eonseeuefft
el depósito! |
É|
|
ÍÉ &
^i¡!S
paralela a la l í nea de costa . Por lo com ú n estas du-
g|nen una superficie irregular, caracterizada a veces por
¡§sencia de cavidades o pequeñas cuencas de deflación
W® “ deflación” en las pá ginas precedentes ) .
( ver
Süf part ículas rebasan el obst áculo y cruzan la superficie de di$ , en las á reas de vegetació n escasa , se puede
Éü l! continuidad dentro de la sombra de viento de sotavento f m obstante
la arena tierra adentro, formando una serie de carne-
«over
detrás de la barrera. Aqu í nuevamente son bajas las veloci j sHones en á ngulo recto y en dirección del viento. Estas dunas
II dades, sobreviene el depósito y se forma un montón de arena versales muestran la pendiente suave hacia donde viene
i
ü FIG. 14- 19
•H
( el médano ), proceso que es ayudado por el aire que % líi pnto y Ia pendiente abrupta del lado opuesto, caracte-
viento de una duna y sobre su cresta, arena act ú a por sí misma como una barrera que corta al $jjítjanes. Los barjanes son dunas de arena en forma de
n
IB
y diverge en el lado opuesto . El r é sultado
eventual es la creaci ó n de una sombra de
viento en el lado de sotavento de la duna .
En esta sombra de viento cae la arena hasta
alcanzar el ángulo crí tico de la pendiente ~
viento y , al interrumpir el flujo de aire , puede provocar el luna en creciente ,
depósito de arena . El perfil a través de un médano, en la di- oue sopla el viento, y se mueven lentamente a su impulso,
rección hacia la cual sopla el viento, muestra una pendiente §¡mas pequeñas, a una velocidad de unos 15 metros por
cuyos cuernos apuntan a la dirección en
118 suave del lado del viento y otra pendiente m ás pronunciada las más grandes a razón de 7 u 8 metros tambié n
( uhos 34° ) . Entonces sobreviene un peque ño
|
ül
deslizamiento de arena y se forma la cara
de deslizamiento . Reproducido con la
autorización de R . A. Bagnold, op . c i t p . 202 .
en el lado opuesto. Frente a la pendiente m ás pronunciada ¡
existe una sombra de viento en la que el depósito de arena
es activo. El viento conduce los granos de arena sobre la
pendiente suave hasta la cresta de la duna y a continuación
|
aproximadamente
Todav í a existe
.
§ a ñ o La altura máxima alcanzada por los barjanes es de
unos 30 metros, y su amplitud m áxima,figs
caen dentro del área de la sombra de viento. La pendiente barjanes. Sin embargo, parecen ser esenciales ciertas condi-
de 300 metros
desacuerdo
(
acerca
ver
de
de punta a punta , es
la
. 14-22, 14-23 ) .
formación de los
las
m más en declive, del lado de sotavento, se llama cara de des
lizamiento de la duna , a causa de los«peque ñ os
- j
clones: un viento que sople en una dirección fija , una su -
deslizamien- perficie de terreno duro relativamente plano, un abasteci-
fill tos de arena que se producen allí. miento de arena limitada y una falta de vegetaci ón.
Dunas parabólicas. Estas dunas, de gran tama ño, tienen
iII! La cara de deslizamiento es necesaria para que exista una
verdadera sombra de viento. He aqu í cómo se forma la cara ja forma de una cuchara , son parabólicas, semejantes a un
de deslizamiento. La presencia de un mont í culo de arena barján al revés, es decir, que sus extremos apuntan hacia la
P
i
afecta al flujo del aire por encima de éste, como se indica i dirección de la que viene el viento. Normalmente est á n cal-
en el diagrama superior de la fig. 14-19. Obsérvese que el j biertas por una vegetación escasa que permite un movimien-
.
viento fluye sobre el mont ículo con trayectoria lineal Estas ¡i to limitado de la arena. Las dunas parabólicas son bastante
«ta
! »
l í neas de flujo tienden a converger hacia la cima del mon- j (recuentes en las á reas costeras y en diversos lugares a través
*¡
li
í«Ü
t í culo y divergen hacia sotavento. Las velocidades son rne- ! de los estados del suroeste de los Estados Unidos. En el valle
ñ ores en la zona donde diverge el flujo de aire que en la
.. .
¡ isi V ‘
V ‘
disminuir. A causa del depósito, esta pendiente se hace más movimiento del viento. Las de tipo pequeño tienen menos Estas dunas costeras están dispuestas de manera
abrupta y eventualmente se desploma la arena bajo la in j de 3 metros de altura y unos 60 de largo. Sin embargo, en compleja detrás de la playa en la bahí a
'
• •:V:v
- mmmM v: v. *
I
111
. .; >••’•:*
»
fluencia de la gravedad . El desplome sobreviene, general j el desierto de Libia f ácilmente alcanzan una altura de 100
\ .
de Coos, en Oregon La playa sirve como
mmmxMim *
1
:
i * ai
lilfi 23
se produce una cara de deslizamiento con suficiente declive J ' KgjÓn, Se les conoce también con el nombre de dunas seif
para crear una sombra de viento en el lado de
Dentro de esta sombra caen los granos de arena
sotavento
como 1
.
\
/|
| ¡||
j
¡ ra á rabe que significa ‘espada” .
Estratificación en las dunas , i,as capas de arena de una
}
costeras del agua del océano Los vientos
costeros ( de la izquierda ) llevan la arena
de la playa tierra adentro.
La fotograf ía muestra una extensi ón de
BIS®
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LIFTSWM*m*
15
11
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nieve a través del aire tranquilo El
desplome peri ó dico a lo largo
\\
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M
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* V
{
.| | |
normalmente est á n inclinadas. Las que está n a lo largo
J
cara de deslizamiento tienen un ángulo de unos 34 °,
factor importante en el crecimiento lento o en el movimfeL mientras que las capas de la pendiente del lado del viento
^
nen una pendiente m ás suave.
^
Durias costeras. No sólo se encuentran dunas en el desicr I Uesto que las capas de mayor pendiente son análogas a
Direcci ó n del viento
unos 450 metros .
SSÉI M fflm to. A lo largo de las costas del océano, de los lagos grandes‘ yas capas frontales de un delta ( ver fig. 11-32 ) , podemos
llipj WMS n
ilí :
aun en los climas h ú medos, se forman promontorios o w° $ar el : mismo té rmino para referirnos a ellas. Estas capas
dun
!
M
i®
i
FIG. 14 20 -
tículos de arena soplada por el viento, que se llaman
delanteras. Está n bien desarrolladas a lo largo de las eos
del sur y occidente del lago Michigan, a lo largo de la
^ Ijlparrollan siempre que haya un depósito continuo de
S
í sobre el lado de sotavento de la duna, como en los
^
Hanes y en las dunas transversales en movimiento.
ta atl á ntica , desde Massachusetts hacia el sur, a lo larEP capas traseras se desarrollan sobre la pendiente suave FIG. 14-22
¡¡ "
**
la
Los árboles sepultados por una duna de arena
en movimiento , cerca ae la costa del lago
Michigan, en el condado de Poster, Indiana,
la costa sur de California
de Oregon y Washington
y
(
en
ver
varios
fig . 14-
puntos
21 ) .
.sobre las ^
eos
. v|
men
arlovento
total
^
. Estas capas constituyen una gran parte del
de una duna , especialmente si existe suficiente
Un barján es una duna en forma de lima en
creciente, cuyos cuernos apuntan a favor
del viento y cuya cara de deslizamiento
han resurgido a medida que la duna migra Estas dunas delanteras son modeladas por la influener dación para atrapar la mayor parte de la arena antes
|» : tierra adentro. Foto por David A. De Vries . queda en el lado interior del arco.
»1
m\ -
.. ¿Si
M
m
í
DESIERTOS de que pueda cruzar sobre la cara de deslizamiento.
capas superiores son estratos casi horizontales, asentados Las
mMr wm bre la cima de las capas frontales o de las capas tra$e so.
Wm inclinadas.
wm
pg S £$ PAISAJES DEL DESIERTO
mm- 7 •
un
paisaje caracter ístico. Las perspectivas parecen infinitas. plle
-1 no hay á rboles con los que choque la vista cuando se
'
M
íi este acantilado de arena antigua soplada
por el viento en el Ca ñón Ziony en Utah.
El ciclo de erosión á rido
CLIMA ARIDO
Pedimento
CLIMA HUMEDO
llsiíl
^ Montañas
i»»
.
i
m
¡
:
i i.
Foto por Raymond C . Murray. Al estudiar el ciclo de erosión en el capí tulo 11, la mayoría *
de los ejemplos citados se refer ían a los climas h ú medos; I
«I
sita í1
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•
M
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plw
Pedimento
P iSif -ÉM
•
m
I m
Cubren una tercera parte de los continentes.
de humedad .
falta
¡HUque
posición topográ fica detrás de las monta ñ as o a
debe a la
i- - ®- - . queda en el interior de los continentes.
Relacionada con la circulación planetaria del viento.
ív ' v:
mi
'
ÉS ¡j¡|jpe 250 a 375 mm . por a ño o menos.
FIG. 14-29 Impredecible.
i rperaturas.
I
Estas montañas desérticas al sur de Phoenix,
Arizona , están circundadas por las superficies
inclinadas de los pedimentos erosionados por
las corrientes. Foto por William C . Bradley.
^^^ s
Gran fluctuación diaria.
Temperatura anual ya sea cá lida o fr ía .
Intemperismo.
predomina el intemperismo mecá nico.
t
i*:
li
puede haber quizá unas cuantas protuberancias de roca re gnutrimiento superficial de agua.
- p Com ú nmente intermitente.
Cv
sistente, que sobresalen de su superficie.
En este proceso existe una secuencia de formas terrestres
Es el agente de erosión y transporte m ás importante del desierto .
ligua subterránea.
que difiere un tanto de la de un clima h ú medo. En primer ¡¡ Poca, abastecimientos de poca confianza.
iüfc
pipa
lugar, el pedimento se manifiesta desde muy al principio del
Movimiento del viento.
ciclo árido, en tanto que el pleniplano no aparece sino hasta en su mayor parte.
íifca la etapa senil en un clima h ú medo. Las áreas desérticas avan
Turbulento
ÜÉii'.
m - Tormenta de arena y tormenta de polvo.
i
zan a través de una serie de etapas a medida que el acanti
lado de la cabeza de pedimento retrocede a expensas de la - Granos de arena .
|Se desplazan por saltación y rodamiento.
lili
war 1 masa de tierra situada tras él. A medida que el á rea desértica
Granos de polvo .
BUS envejece, los pedimentos llegan a cubrir un área cada vez | El aire turbulento los mueve en suspensión.
III
lI- '
.
más extensa y las mesetas o las zonas monta ñ osas se reducen
Erosió n.
——
'
; cada vez más. La pendiente del acantilado de la cabeza de Abrasión ventifactos y yardangs.
m - !oó
: i V.;
pedimento y aun el pedimento mismo no llegan a ser sensi - Deflación cuencas de deflación.
blemente m ás suaves del principio al fin del ciclo. Esto con - Depósito de polvo .
m trasta con las pendientes que se desarrollan en los climas I Produce loess.
I
¡Sil m ás h ú medos en los que las pendientes pierden declividad El loess está relacionado con los desiertos y con los depósitos
ISH0!;:v.:
-
conforme pasa el tiempo ( fig. 14 27 ) . fluvio-glaciales.
Otra diferencia entre el ciclo de erosión de un clima á rido Depósito de arena.
im y uno h ú medo, es la presencia de amplias cuencas desérticas | Dunas o m édanos .
gil
—
Sí
5
¡:
grandes á reas del suroeste de los Estados Unidos. Los movi- Tipos de dunas . \
mientos de la tierra no son causados por el clima, pero las Dunas frontales, transversales, barjanes, parabólicas, longitu
dinales.
-
cuencas persisten porque la lluvia es insuficiente para esta - Vicio de erosión en regiones áridas.
blecer corrientes y valles que conduzcan al mar. En conse - Desarrollo progresivo. de formas terrestres. \
cuencia el paisaje se va nivelando por una combinación de ij
i Pedimento, la forma terrestre erosional de un clima árido, en
I *
erosió n y depósito. Las monta ñ as son atacadas por los pedi it
mentos que se van extendiendo y que pasan gradualmente\
- /
^ contraste con el peni- plano de un clima h ú medo.
m
::
.Vi
!
a formar parte de las cuencas. Pero los productos de erosión /
no pueden ser desplazados de estas cuencas sino por el vien '
Vi
- BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
Ü to. Como los sedimentos finos se depositan en las cuencas, Bagnold, R. A., 7' he Physics of Blown Sand and Desert Dunes.
I
i: cubren, aquéllos, la parte inferior de las pendientes de los
V .
pedimentos ( fig. 14-28), se rellenan las cuencas y las por - flbondres : Methuen & Co., Ltd., 1941.
Blackwelder, Eliot, “ Geomorphic Processes in the Desert” , Calif .
:l ciones superiores de los pedimentos se extienden hacia los ». Mines Bull. 170, Cap. 5 ( 1954 ) , 11-20.
i
parte-aguas, 5donde unas cuantas protuberancias pequeñas o ip
Bryan, Kirk, Erosion and Sedimentation in the Papago Country
Vi
picos señ alan los ú ltimos vestigios de las monta ñas.
,
M Á rizona . Washington, D. C.: U.S. Geol. Survey Bull . 730, 1922.
No debemos inferir, sin embargo, que todas las tierras Gautier, E . F., Sahara, The Great Desert , trans. D. F. Mayhew.
X áridas se componen de monta ñas y cuencas intermedias. En ipueva York: Columbia Univ. Press, 1935.
IS P* ,R. P., “ Pleistocene
I
m
ill!
;
muchos desiertos el drenaje alcanza el mar a través de un
sistema continuo de valles, y aqu í se desarrollan los pedí
men tos a lo largo de las corrientes y se mueven hacia atrás
- ^ Ventifacts East of the Big Horn Moun-
ltains Wyoming” , J. Geol., LVII ( 1949 ) , 175-95.
I IS en la masa terrestre misma , a medida que retrocede el vallo *
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1 I,
81 . J
* .
•
Océanos y costas
*is
n MAS DEL 70 por ciento de la superficie de la Tierra yace
f bajo los océanos, encerrada en un profundo misterio, prác-
ticamente desconocida e inexplorada, no obstante ser de pri-
AGUA DEL OCEANO
¡I-
•
i-
•
1
Estas rocas, que cubren actualmente las tres cuartas partes
|de las masas de tierra continentales y las grandes cuencas
LAS CUENCAS OCEANICAS
oceánicas , parecen estar claramente ligadas al origen de los TOPOGRAFIA DEL FONDO DEL MAR
i continentes.
*B Estamos apenas comenzando a integrar el complejo cua -
SEDIMENTOS DEL OCEANO
i —
dro de los fondos oceá nicos su tox ograf ía, composición e
^ químicos
|historia y la naturaleza de los procesos y f ísicos
COSTAS
ii i
m AI hablar del hemisferio norte, se le menciona a veces como
el “ hemisferio terrestre” , porque solamente al norte del ecua
cubren los océanos y los mares alrededor del 60 por
-
m
\ / ciento de la superficie terrestre, mientras que en el hemis-
%
í*
*
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.- -
|J| ||
•
8
V J * sur está cubierto por las aguas marinas m ás del 80
°ciento. Entre los 45° y los 70 de latitud
°
;
norte, el océano
y}
1 °cupa únicamente el 38 por ciento de la superficie; en con-
m :
• Iglste, el 98 por ciento de la superficie de la Tierra está
m cubierta por el océano entre los 35° y los 65° de latitud sur.
ai La mayor profundidad conocida del océano, un punto del
II
¡Pl
co a la mitad de la distancia entre las islas de Guam
S ’ ,
mm
m Ifife* Yap —
tiene 10,863 metros, casi 11 kilómetros , siendo
considerablemente mayor que la altura del monte Everest, —
| j RMnta ña más alta del mundo, que tiene poco m ás de
III ;
$40 metros
sobre el nivel del mar. La profundidad media
i océano es de unos 3,780 metros; la elevación media
¡i! 0s de
m
a
m
\
. ..
continentes es de 822 metros solamente ( ver fig. 15-2 ) .
i® ha calculado que si todas las irregularidades de la su-
!
£g*«cie terrestre se eliminaran, el globo quedar ía cubierto
fgia upa capa de agua de 2,500 a 3,000 metros de espesor. -‘ -. .-
«O N
¿vSi- - ;,.
dación posiblemente nunca existió en el pasado, ni
Í5S
mm 247
.
ü 248 OCEANOS Y COSTAS debemos preocuparnos porque pueda suceder en el m óxido de carbono aumenta, puesto que no hay activi- OCEANOS Y COSTAS 249
:; ¿e bi
Los océanos modernos est á n confinados en grandes |
cue
y es de suponerse que as í lo estuvieron los antiguosjllp 1
| 8 vegetal que la consuma. De esta manera , al aumentar
R J|a profundidad
. , el ox ígeno va siendo relativamente menos 30, 000
e-- ~
-
9
adelante trataremos con algú n detalle las caracteristiS
estas cuencas.
I
| jj¡
, mientras la cantidad de bióxido de carbono au-
¡}ta relativamente
'
jillpe
.
no ser por la lenta circulación de agua de mar a través
20, 000
Everest, 29, 002 p í es
c
•‘O
>
tu
o
í Re las cuencas
: I
océanicas, el agua de las grandes profundi- 10,000 Elevaci ó n media del - ui
¡ Kdes - estar ía desprovista de oxígeno. En realidad, en el terreno, 2, 700 pies
ék
Casi la mitad de los elementos conocidos han sido klefj§§
cados en el agua de mar, e indudablemente habrá n dj |§
|
¡jLjndo de algunas cuencas océanicas es tan lenta la circula- _
tA
.Q2 o Nive í del mar
Profundidad media
O
v cubrirse muchos otros. Entre los materiales conocidos disuel Sil ón de agua que casi no hay ox ígeno, y el agua llega a que-
jjfer estancada. En estos casos se produce una alta concentra- 10,000
de les mares, 12 , 400 pies
J S¡ v tos en el mar se encuentran los cloruros, que imparten
a ¡ ción de sulfuro de hidrógeno. Esto sucede, por ejemplo, en
-a
ftj
dantos, incluyendo algunos elementos raros, como el uranio,- II í t mdidad, y en muchos de los fiordos de Noruega, cuyas o
— -
30,000 Profundidad entre Guay y Yap. i Q
te de a ñ os de tiempo geológico, los r í os del mundo han estado l en el fondo de estas cuencas, los sedimentos all í existentes
transportando a los océanos, poco a poco, enormes cantida- ; se oxidan muy lentamente, si es que se oxidan. En conse-
Porcentaje de la superficie de la Tierra
FIG. 15-2
Distribución relativa de tierras y mares.
Hemisferio continental des de material disuelto. Parte de este material, tal como el i j cuencia el alto contenido de materia orgánica y los compues-
I
! hierro, el silicio y el calcio, es utilizado por las plantas y tos de sulfuro de hidrógeno que se producen le dan su ca -
Obsérvese que la profundidad media del
océano es de 3 ,780 metros , mientras que
mm
• iSgli
animales en sus procesos vitales y es, en efecto, extra ído dei li racterístico color negro. Es probable que el petróleo haya la elevación media de la tierra es
im agua. Como consecuencia , la cantidad de estos elementos en solamente de 822 metros.
' . isido formado en algú n medio similar en los mares de la an- Modificado de H . U . Sverdrup y otros, The
m
US
i -
solución, es menor de lo que esperar íamos hallar, a juzgar
por la velocidad con que los ríos la aportan normalmente a
tigüedad. Oceans Englewood C l i f f s, N . J .:
(
Prentice-Hall , Inc. 1942 ), p , 19 .
111
m r
los océanos. Por otro lado, encontramos un porcentaje relati- ! Movimiento del agua de mar
f
m
‘
t
tí
í ' w vamente alto de iones de “ sal” , especialmente Cl ~, aun cuan-
L
El movimiento del agua de mar ofrece dos tipos generales:
*
• '
*
——
i® porción relativamente baja . Los iones de sal se han seguido 1 ) el movimiento del nivel medio de la superficie ya sea
i hacia arriba o hacia abajo, con relación a la tierra , llamado
acumulando en el agua de mar porque las plantas y los
animales no los concentran y por ser extremadamente so- cambios del nivel del mar, y 2 ) la transferencia de agua de
lubles. un lugar a otro en las cuencas océanicas durante movimien-
Como las proporciones de los diversos iones de sal son tos conocidos generalmente como corrientes.
relativamente constantes a través de todos los océanos, I? ,
Cambios de nivel del mar
cuantificación de cualquiera de ellos nos permite calcular j
tff
í la abundancia de los otros. La concentración total de los I El nivel del mar, en relación con la tierra seca, var ía cons-
*
' ;
:í
, .
—
iones de sal esto es, la salinidad de agua de mar varía, —
sin embargo, de un lugar a otro. En el ecuador la abundante
tantemente. Los cambios diarios causados por las mareas
son bastante conocidos; pero no son por ello menos impor-
*i¡I Hemisferio oceánico precipitació n diluye el agua de mar, reduciendo su salini- tantes otras fluctuaciones mucho m ás lentas; en efecto, en
m & .
FIG 15-1 dad; pero en las fajas subtropicales al norte y al sur, la baja el pasado geológico talbs cambios han sido muy extensos y
11 ! En el mapa del “ hemisferio terrestre” , precipitación y la evaporación excesiva tienden a increment significativos.
fifi considerando como centro Europa occidental , tar la salinidad , como se indica en la fig. 15-3. En las áreas
CAMBIOS DEL NIVEL DEL MAR EUSTATICOS Y TECTÓ NICOS. Es
i el mar y la tierra est án casi igualmente
distribuidos; pero en el <ehemisferio acuático” ,
tomando como centro Hueva Zelandia,
es indiscutible el predominio de los mares .
á rticas y antá rticas la fusión de hielo de glaciar reduce la
salinidad de los mares .
rt
| bastante
TvdP^
f á cil medir los cambios diarios causados en el nivel
mar Por k* elevación y el descenso de las mareas a lo
\
GASES DISUELTOS EN EL AGUA DE MAR . Aun cuando todoS
j •
0
y§ *rgo de la costa; pero existen otros movimientos tan lentos
Jf
ifl
. : a
*y
>
gases de la atm ósfera se encuentran tambi é n en el agua ,
|
^ ¡ que sólo se aprecian a través de la observación continental
bablemente los m ás importantes son el oxí geno y el bióxido / IM nivel del mar, o bien son tan locales y raros que general-
H .
; •
'
•
de carbono. Cerca de la superficie de los océanos está satu - mente no se les reconoce.
m-
isi
t ":
í
.
del oxígeno presente es utilizada por los animales, y
interviene en la oxidación de la materia orgá nica
asienta en el fondo. Al mismo tiempo, la cantidad rel |
| |
|
Upon
Inervando
—
frecuencia es dif ícil si no
¡|*os movimientos eustáticos y tectimposible — distinguir en-
ónicos del nivel del mar
solamente una pequeña sección de la costa . Los
de la superficie. Redibujado de R H Fleming
y Roger Revelle, " Physical Processes in the
Oceans” , in Trask , Recent Marine Sediments
—
A Symposium ( Tulsa: Am Assoc.
Petroleum Geol., 1939 ), p 88
. .
.
. .
1 »;)
ÁC
u
250 OCEANOS Y COSTAS cambios de nivel eustáticos son de alcance mundial v ¡JfjflS glaciares modernos se encuentra todav í a almacenada OCEANOS Y COSTAS 251
para elevar el mar de 21 a 61 metros más, si
TABLA 15-1
do las estaciones de observación distribuidas sobre un lSS * agua
^
'
extensa registran un movimiento del mar persistente y SIL toda , como suceder á probablemente con el tiem-
¡Midiera
|!
11
Principales sales disueltas en el agua de mar. longado, el movimiento debe, seguramente, ser eustático
el contrario, los movimientos tectónicos tienden a ser loo i°r
!|
jo .
13 )
¿r “ Efectos indirectos de la glaciación” en el capí tu-
PORCENTAJE DE TODO y espasmódicos, puesto que su control depende exclu$ jVam ^ Los camb íos modernos en el nivel del mar, causados por
?
EL MATERIAL te de las fuerzas que corrugan y distorsionan los mater í \
f(lOCimientos tect ó nicos , han sido observados en localidades
mi ION DISUELTO
sólidos de la tierra.
i donde se sabe que la corteza terrestre est á sufriendo defor-
lili Cloro Cl- 55.04 Los movimientos eust á ticos pueden ser provocados ® ,
hoy d í a. Un ejemplo notable de movimiento de
^^^
Na+ de
^ p
Sodio 30.61
rias maneras. Si la cantidad de agua tomada por los glacia clase en el Japón, se describe en el capítulo 19.
li Sulfato
Magnesio
S042
”
Mg2+
7.68
3.69 y lagos aumenta , el nivel del mar baja; en cambio, ísi fes f §j¡
Cambios del nivel del mar en el pasado geol ógico. Los
Calcio Ca 2 + 1.16 se funden o los lagos se drenan , el nivel del los ¡
¡|
glaciares gbíos recientes del nivel del mar parecen insignificantes,
« Potasio
Bicarbonato
K4-
HCO:-
1.10
.41. sube. También puede subir o bajar el nivel del mar
°
* arados con los que han tenido lugar en el pasado geo-
Estante, la velocidad del cambio del nivel del
¡i 99.69
consecuencia de cambios radicales e importantes en el
ñ o y forma de las grandes cuencas oceá nicas , bien a caustarna
Tomado de H. U. Sverdrup, Martin W. Johnson depósito continua de sedimentos en el fondo o $A
debido a un *
¿ I iBb
lI
lógico *
¡su Cliffs, N . J .: Prentice-Hall, Inc., 1942), p. 166. verdadera deformación por las fuerzas de la Tierra. Otro mo
tivo m ás de cambio eustá tico puede hallarse en la adicióipf
remoció n de aguas de la superficie terrestre. Los volcanes es
®ad° sobre enormes
actual explica
extensiones
f á
de tiempo geológico, la ve-
cilmente
\ locidad en monta ñas muy altas, y lala depresencia de conchas
costeras su -
I t á n a ñadiendo constantemente agua nueva a la atmósfera la
¡
- ^ !marinas
mergidas ahora en el océano.
terrazas
*
m¡
que generalmente se abre camino al mar. Adem ás, el agu
est á siendo atrapada constantemente en los depósitos sedi
mentarios e incorporada en minerales tales como la arcilla
causando, al menos temporalmente, una considerable pérdida
-
! 1 Seg ú n dijimos, las rocas sedimentarias constituyen algo
1 así como el 75 por ciento de todas las expuestas en la super-
í ficie terrestre. De estas, la gran mayor ía son rocas marinas,
¡ formadas por sedimentos depositados en el fondo de anti-
¡Él! a los océanos. 11 1í fgiios mares, elevadas ahora sobre el nivel del mar. Durante
»
IÍ 1i -
Los cambios tectónicos y eustá ticos se desarrollan conti- 1 siglo y medio los geólogos de todo el mundo han estudiado
nuamente alrededor del globo; el nivel medio del mar está f los caracteres que se conservan en estas rocas sedimentarias
subiendo y bajando interminablemente. Aunque los cambios j marinas y han podido descifrar una parte, cuando menos, de
recientes en el nivel del mar, son ligeros, tenemos amplia I la compleja historia de los avances y retiradas de los mares
ton evidencia de que está n ocurriendo realmente.
Cambios recientes en el nivel del mar . De acuerdo con las i
de la antig üedad. La secuencia de tales eventos es una par-
te ele la geología histórica. Baste decir aqu í que la forma .
FIG 15 5-
¡Siia FIG. 15-4
medidas practicadas sobre las mareas en varios puntos aire *
¿
\ I fe los continentes ha venido cambiando constantemente a La isla de Torghatten, frente a la costa
de Noruega, da testimonio de un descenso
dedor del mundo, los observadores han llegado a la conclu- j 1través del tiempo geológico, a medida que los océanos han de 122 metros en el nivel del mar,
IIP!
PiB#
En el pasado geol ógico reciente, las olas del
océano nivelaron esta plataforma sobre rocas sión de que en la actualidad est á efectu á ndose una elevación
eustá tica del nivel del mar. La inundación de la desembo
i
I f rebasado sus cuencas, inundando lentamente las tierras ad- representado por la distancia entre la lí nea
cortada y la superficie actual del océano.
1 §8 :
Bpa
§ inclinadas en la costa de California* al sur
de San Francisco. Hoy dí a la plataforma cadura de muchos ríos de Nueva Inglaterra hacia el sur
ff yacentes, retirá ndose posteriormente, proceso que se ha re-
j petido muchas veces ,
Adviértanse los bancos que fueron cortados
cuando el mar tení a niveles superiores. Cuando
if ® sobresale ligeramente por encima del nivel
indica que la elevación tiene una larga historia, comprobada j Muchas de las tierras costeras modernas se caracterizan el mar permaneció al nivel más alto, la acción
del mar como prueba de un cambio de nivel de las olas cavó un túnel. En este caso la corteza
entre la tierra y el mar . Eti este caso, los por el descubrimiento de troncos de antiguos á rboles y arte- \ por la disposición de sus terrazas en forma de grandes esca- terrestre se ha movido hacia arriba después
geólogos opinan que el movimiento ha sido
wmm tectónico, y que la tierra se ha movido factos primitivos sumergidos. La invasión del mar es atribuí *
i
í Iones de una escalera gigantesca . Cada terraza indica que de haber permanecido arqueada hacia abajo
por el peso del manto de hielo escandinavo
i hacia arriba con relación al mar. da a la fusión de los glaciares de monta ñas y al decrecimiento j ei mar permaneció a este nivel generalmente' durante un desaparecido en la actualidad .
Foto por William C . Bradley. de los casquetes de hielo de Groenlandia y la Antá rtica. Pero j|tiempo suficientemente largo para crear, por erosión y depó- Foto por C . A. Ericksen.
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OCEANOS V COSTAS
c0NRIENTES
OCEANOS Y COSTAS sito, una superficie relativamente tersa , ligeramente indi# * 253
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•.' íVv.
da hacia el mar. Su actual posición sobre el nivel del, ®* l
de mar está en constante movimiento, en ciertos
indica que éste se retiró a causa de movimientos eustá ® res horizontalmente, en otros hacia abajo y en algunos,
r
/i
m I
o tectónicos, o de ambos.
La glaciación continental ha originado un tipo de
tic0s
^ á
hacia arriba. Su velocidad de movimiento var ía de un
a otro, pero se ha calculado que se realiza una mezcla
^^ ^^^
ífei
.
«*
; :!
! miento en la tierra ( pie se manifiesta en cambios de la
El peso de un glaciar continental es lo suficientemente cos
S Bcta de toda el agua de los océanos una vez cada 1,800
Si
í.
de para provocar un arqueamiento hacia abajo en el
j
terre
que cubre. Cuando el glaciar se funde y cesa la carga ó ]
hielo, la tierra recupera lentamente su posición y acaba t)o
^If ^Mefi^
fcl
*
|
®Dcbemos suponer que otros movimientos an álogos a
presente han venido sucedié ndose a través de la larga
§ia de la Tierra . Estudiando los mares modernos, pode-
obtener una idea de la historia registrada en las rocas
'
recuperar su equilibrio original ( ver fig. 15-5 ) .
Tenemos claras evidencias de la elevación de las
'
tierras
\ Alimentarias
i
antiguos mares
que otrora fueron lodos y arenas del fondo de
.
que sigue al retroceso glacial a lo largo de las costas del gol jtenque no podamos explicar todavía por completo los
fo de Botnia y el mar B á ltico. Las precisas medidas pra| á l ii vimientos de los océanos modernos, sabemos que son cau-
cadas indican que entre 1800 y 1918 el terreno se levantó a |
# | principalmente por las mareas, por las variaciones en
|
velocidades que var ían de 0.0 mm. al a ño en el extremo sur igjensidad del agua del mar, por el viento y por la rotación
a 11.5 mm . por a ño en el extremo norte. Los estudios ind¿ de la Tierra .
i; •
can, además, que el terreno se ha estado levantando a una - ^
i:
? í .
FIG 15-6 velocidad comparable durante 25,000 a ñ os. Ciertas á reas que i Corrientes de marea
fueron, sin lugar a duda, playas marinas en tiempos recien -
/ Las mareas dan lugar, dos veces al dí a, a la
retirada del agua del océano y a la exposición tes, está n ahora elevadas desde unos cuantos metros hasta ¡gj fuerzas de atracción entre el Sol, la Luna y la Tierra
de este fondo lodoso a lo largo de una caleta m ás de 245 sobre el nivel del mar. Una comparación de ni- men a las aguas del océano en movimiento horizontal, para
en Maine . Foto por Sheldon Judson. producir las corrientes de marea. La velocidad de estas co-
velaciones precisas hechas a lo largo de las v í as f érreas y
1¡
MX y
carreteras en Finlandia, de 1892 a 1908, con los cálculos
practicados entre 1935 y 1950, revelan que allí se ha efec-
rrientes puede alcanzar varios kms. por hora, si las condi-
dones locales son favorables. Velocidades de m ás de 18
tuado el levantamiento a una velocidad de 0.30 a 0.90 me- kilómetros por hora se obtienen durante las mareas de pri-
m tros por siglo. El cambio m notable se ha tenido en el
ás s mavera en Seymour Narrows, entre Vancouver y Columbia
i; M
.i golfo de Botnia , aproximadamente a los 64° de latitud norte. Británica, y las corrientes de marea de la mitad de esta velo-
La mayor parte de este movimiento ha sido causada al recu- cidad no son raras. Las corrientes m ás veloces se forman
perar el terreno su antigua forma , como consecuencia del generalmente donde un cuerpo de agua de mar sólo tiene
;i : ¡¡
retroceso del casquete de hielo escandinavo. acceso al océ ano abierto a través de un paso angosto y con-
i1
finado . Tales corrientes pueden mover partículas, incluyen-
Han podido establecerse historias similares de arqueamien
to y de recuperación de forma en otras regiones, incluyendo
- do las del tama ño de arena, y a veces son suficientemente
fuertes para ara ñar el fondo del mar.
el á rea de los grandes lagos en los Estados Unidos. En una
etapa de la retirada final del manto de hielo de Nortéame- , , .. .
^
¡sfrrT' -: '
&EvilTC73 &
S
m rica , los actuales lagos Superior, Michigan y Huron teman \: .
FIG 15-8
¡sfí
m Wm niveles de agua m ás altas que los actuales, y estaban unidos \: La densidad del agua del mar varía de un lugar a otro con
-
m )$<]
£
&
Í••£
Una corriente de densidad fluye del
m t
.ó
!
m ÜÜ para formar el lago Algonquino. Las playas de alrededor ¡ los cambios de temperatura, salinidad y con la cantidad de mar Mediterráneo a través del estrecho
88¡#
'
.? r
mam 181 i de los bordes del lago Algonquino eran horizontales en la material que lleva en suspensión. Así, el agua frí a pesada, de Gibraltar u se esparce en el océano
ji
i SjS
í-p Wmi época de su formación. Hoy d ía son horizontales todavía al se hunde bajo la m ás caliente y ligera ; el agua dé alta sali-
.
Atlántico La alta evaporación y la baja
precipitación en el área mediterránea producen
. :i:
I
Sil
t
m S¡:
mmmm JZSHHHR
m i sur de Green Bay, Wisconsin y Manistee, Michigan; pero
unos 288 kilómetros al norte, en Sault Sainte Marie, Michi -
nidad es más pesada que la de baja salinidad y se hunde
bajo ésta; y el agua lodosa , pesada , se hunde bajo el agua
una agua más salina y , por lo tanto, más
pesada que la de el océano Atlántico vecino.
Corno consecuencia, el agua mediterránea
• :
*
1
.. . § gan, la playa Algonquina m ás antigua est á 110 metros m ás j clara, ligera .
alta que en Manistee. j En el estrecho de Gibraltar, que es el paso de agua entre
\' pasa a través de la parte inferior del estrecho,
y el agua del Atlántico, mas ligera , se mueve
por encima y en dirección opuesta, para
Mmm
Otro ejemplo de terreno elevado cientos ele metros como v /«itolántico y el Mediterráneo, las diferencias de densidad .
reemplazarla La alta temperatura del agua
- •
i
consecuencia de la retirada de un glaciar, se encuentra en ; son causantes, en parte, de dos corrientes que fluyen una del Mediterráneo es contrarrestada por su gran
salinidad , u esa agua se hunde en el Atlántico
mm ! :>
.¡ I
las playas situadas a lo largo de la costa atlántica y en los / jtobijp la otra. El Mediterráneo, que se encuentra en una faja a un nivel de unos 900 metros bajo la superficie
mi :
3 efectos dejados por un brazo de mar que penetró más a)K
g de Montreal, Ottawa. Los geólogos predicen que el océano N
•yi
FIG 15 7 . -
rrestre se haya recuperado de la depresión a que estuvo
sometida durante la gran edad del hielo.
Resulta m ás dif ícil demostrar que los niveles de mar estu -
.
C OV 'f ^
\e eS £
Mar
Mediterrá neo
83
&
M
En algunos brazos de mar confinados, í TV
'
la mareé que sube puede tener un frente vieron alguna vez más bajos que en el presente, puesto que
abrupto, llamado ola de marea, que rompe
hacia adelante a una velocidad de i 6 a 24 km . las evidencias yacen a profundidad bajo los mares moder
nos. Sin embargo, investigaciones recientes en el mar han
- 1000
Aguas frías.
-
.
por hora Las olas de marea se desarrollan
m : :
muy bien en ciertos ríos, incluyendo el
Amazonas, el Seveme, el Yangtse y el Elba
El de la ilustración está cerca de Moncton,
New Brunswick , a lo largo del río
revelado indicios de que su nivel no siempre ha sido tan alto
como en la actualidad. Los detalles observados
monta ñas submarinas de cima plana, grandes valles subm»
incluy ó
*
2000
2 3000*-
£
de baja salinidad
^
MtJmci
son progresivamente más finas
depósito. La
E cjina del explicaci
mejor
del fondo
ón para esta estra-
ón graduada radica en que el depósito fue asentado
!K una corriente de turbidez que llevaba abundantes par-
i
ü
s#l®
Í !
^¡¡plas de tama ños diferentes, y que las más grandes fueron
Irimeras en caer al fondo del océano. Tales depósitos
I Ejg|
el nombre de turbiditas.
s corrientes de turbidez se pueden poner en movimiento
i .
F1G 159
Esta fotograf í a muestra una corriente lodosa mm
| ¡
Í#or k desplome y deslizamiento de material a lo largo de
Bglndientes de la cuenca oceá nica bajo la influencia de la
Kavedad, ya sea por sí mismas o ayudadas por la sacudida
en Alaska al entrar a las aguas más claras del b§ím terremoto. También estas corrientes pueden ser crea-
'
- .
Golfo El agua de la corriente a pesar de ser RÉÉÉIt
turbia, no se hunde, porque es más, ligera HE Ippor la agitación de los sedimentos del fondo, bajo la
lili todaví a que el agua salada del océano. Éliilli pSfluencia de tormentas violentas.
S¡1181
¡¡¡gilí üüS
m cá lida , de clima seco, pierde alrededor de 1.5 metros de agua
;v>*:
mi -
e Irlanda por el norte. Se ha calculado que, como conse he indica en la fig. 15-10.
su cuencia de esta actividad , el agua de la cuenca mediterránea
se renueva una vez cada 75 a ñ os ( ver fig. 15-8 ) .
Las corrientes ecuatoriales se localizan a cada lado del
fe La densidad del agua se ve afectada también por las va --
ecuador y se mueven casi al poniente. Su energía se deriva ,
Par*e > de los vientos alisios que soplan constante-
: hacia
m
i, : riaciones de temperatura. Corno resultado de tales
nes, el agua de las fr í as regiones Artica y Antártica se arras-
tra lentamente hacia el medio m ás cá lido, cerca del ecuador.
variado
¡
¡ i¡ ^ ^^
1 Ijl l esc el ecuador, desde el noroeste en el hemisferio
j ¡ ? corrientes
ÉIÉ
e el sureste qn el hemisferio sur. La dirección
m
m
- !: n
f: i
El agua fr ía relativamente densa del Artico se hunde cerca |
de Groenlandia en el Atlá ntico del Norte y se le puede se-
guir al ecuador y mas all á hasta los 60 ° de latitud sur. El
^ hacia el occidente se explica por el efecto
, pjp hitado en el capí tulo 14 . Se recordará que este efec-
jS producido por la rotación de la Tierra, y que da lugar
llljj'hemisferio
los objetos en movimiento se desv íen hacia la derecha
í UlMí-
:
'
aqua m ás densa y m ás fr ía se mueve hacia abajo al fondo norte y hacia la izquierda en el hemisferio
del mar Ant á rtieo, y se desliza hacia el norte bajo el agua del | M ISp *1110 a ua impul$ada Por
^ vientos alisios se mueve
ecuador , en el hemisferio norte se desv í a a la dere-
Atl á ntico del Norte. De hecho, el agua ant á rtica llega
«
* .' '
•
vi
al norte del ecuador antes de perder su identidad No se Poniente ) y en el hemisferio sur a la izquierda ( tam-
medido con precisión la velocidad de estas corrientes, pero | : M | poniente ) . Como consecuencia de esto, se forman las
|
se calcula que la velocidad del agua ant á rtica a lo largo del : norte y sur ecuatoriales. A medida que estas co-
íondo del mar es de 1.5 o más kilómetros por d ía. | i!s Se acércan a América del Sur, una se desvía hacia el
^ ^
pi
¡^ -
Un tercer tipo de corriente de densidad , llamado corriente ra a sur La deflexión es causada , en gran parte,
lili °
lili de turbidez , es el causado por el agua turbia o lodosa que
, se
, ¡®;
Jgcto
onna < e las cuencas oceá nicas, pero es ayudada por
coriolis y por el ligeramente m ás alto nivel de los
con una densidad mayor que el agua clara , naturalmente
1*1 hunde bajo ésta . La evidencia de que existen corrientes ma - a o largo del ecuador, donde la lluvia es m ás copiosa
Si ri ñ as de turbidez en el océano es más bien indirecta. Pode - cualquiera otra parte.
-
,
mos demostrar cómo act ú an estas corrientes en pequeñ a es norecuatorial se mueve en aguas del Caribe,
cala en el laboratorio, y se les ha observado en lagos de agua j Jplh hacia el noreste, primero como la corriente de Fio-
supon despu corriente del Golfo. La corriente del
dulce y en presas, de
corrientes de
hay razones
turbidez
para
parecen ofrecer
^ \
jif
H l ÉSí 0 col l s )
|
ij te *
é
desvia
°
s
,
*
como
a su
-
vez , hacia el oriente ( a la derecha , por
movimiento. al oriente es reforzado
la explicación más aceptable a ciertos depósitos de las pro - occidentales ( contralisios ) que predominan
s- J fs ¿5 y los 4o de latitud norte, donde se
sr
‘
fundidades del océano que han sido estudiados. Las mu é
^m
>.¡L
convierte ,
i-
¿St»
:
-
r/i
mr:
mm noratlántica. Al aproximarse a Europa, la OCEANOS Y COSTAS 257
anl la corriente se divide; parte de ella se mueve hacia
íente noratl
Mijlflrte,
á ntica
como una corriente cálida que pasa por las Islas
mttánicas y paralela a la costa la de Noruega. La otra parte
hacia el sur formando corriente de las Canarias
se 0esvía es capturada por los vientos alisios del nor-
y eventualmente conducen a la corriente norecuatorial .
ia
Ü este que ántico del Sur el cuadro es muy semejante, pues
3 ® jSn el Atl
^
fSgpituye una especie de réplica de las corrientes del Atlán -
. Después de que la corriente surecuatorial
tico del Norte el sur , sigue paralela a la costa oriental de
¡¡ ¡¡ í a hacia
¡|pdesv érica del Sur como corriente del Brasil; después dobla
$ al oriente por ( hacia la izquierda ) , por el efecto coriolis, y es
lllpiijada los vientos contralisios dominantes hacia Afri -
Esta corriente , que se mueve al oriente , se desvía más
la izquierda , hasta que, finalmente, frente al Africa , se
hacia
mueve hacia el esnorte . Se la conoce all í como corriente de
Élbnguela; que empujada por los vientos alisios para vol -
ver a la corriente surecuatorial .
Í E1 agua frí a de la superficie de las regiones Antárticas se
mueve a lo largo de un curso bastante simple , sin complica -
por las grandes masas de tierra , siendo conducida ha -
ciones
cia el oriente por los vientos dominantes del oeste . Sin em -
bargo, en el hemisferio norte se complica el esquema por
las masas continentales . El agua ártica emerge de los mares
polares a través de los estrechos que están a ambos lados
de Groenlandia , para formar la corriente del Labrador en el
poniente y la corriente de Groenlandia en el oriente . Ambas
corrientes se unen subsecuentemente a la noratlántica, des-
vi ándose al oriente y al noreste.
1 No necesitamos examinar en detalle las corrientes super-
j ficiales del océano Pacífico y del océano Indico. Podemos
notar, sin embargo, que las corrientes superficiales del Pací -
f (ico siguen el mismo patr
•
ón general que las del Atlántico.
. Más aún , las corrientes superficiales del océano Indico
sola -
mente difieren en detalles de las del Atl ántico del Sur ( ver
S; % 15. - 10 ) .
^
mado, al parecer, de roca simática , con una cubierta de
pedimentos para alcanzar un espesor de 1 ,500 a 2,000 metros
ea algunos lugares, pero cuyo promedio es de unos 1,000
metros . En consecuencia , podemos considerar a los conti -
nentes como grandes bloques de material relativamente li -
gero, que flota en masas de material inás denso.
Wá: -
La mayor parte del agua marina que rodea a los conti -
nentes está contenida en una gran cuenca (pie bordea al he-
I misferio sur y se ramifica hacia el norte bajo los océanos
-
«7 v Atlántico, Pacífico e Indico. El Atlántico y el Pací fico están
¡8 conectados , a su vez, con el océano Artico a través de es-
m
I
techos angostos; pero los océanos se derraman todaví a so-
las márgenes de los continentes, pues aún esta gran
f§ ipnca ramificada no puede contener toda el agua de los
ím
toares.
m
¡
OCEANOS Y COSTAS TOPOGRAFIA DEL FONDO DEL MAR ggunos de los valles que atraviesan las plataformas con- OCEANOS Y COSTAS 259
en
la
el
é ste
China
y
,
otros
fueron
pleistocene ,
valles
cuando
similares
cortados durante
el nivel
per íodos
del mar
12
§ 20 ,000 de Am érica del Sur, al sur del r í o de la Plata , y de 1, 200 a ¿taba quizá unos 90 o 100 metros más bajo que en el pre-
ME*
£
Q-
1,300 kil ómetros frente a las costas á rticas de Europa y f|
| | |g y cuando extensas partes de las plataformas continen-
30, 000 . Rusia. |
| j!¿ se hallaban sujetas a la erosión de las corrientes te-
Isla Shetland S. Isla Georgia S. Isla Bouvet
El borde del lado del mar de las plataformas continentales ¡rrestres.
grandes valles de corriente, existen pe-
Trinchera
CL
-
Sandwich S, tiene una profundidad media de unos 130 metros , pero co- Además de estos en
5
10 , 000
m ú nmente es tan profunda como 180 metros ( 100 brazas ) o jjig
ñ as depresiones las plataformas continentales, que se
~
tan somera que tiene apenas 90 metros. Los sondeos indican |j| g one causó la acción de las mareas. Frente a la costa
c
20,000
que la topograf ía de las plataformas cambia ligeramente de ¿¿oriental de los Estados Unidos se advierten algunas de
88! o
un lugar a otro, pero parece haber una carencia general estas depresiones . Otros valles de las plataformas continen-
¡lC11
ÉS 30, 000
; - :!
50* 40* 3 Xla 20° io*w . de rasgos definidos. Algunas plataformas tales como las de tales parecen haber sido cortados por hielo glaciar que pudo
:
haber profundizado los ya existentes.
'
Ú : ii•
60" \ de Sandwich teriales por ellos depositados existen todavía en algunos lu- nentales y del fondo de las cuencas oceá nicas profundas son
ÜI»
1gpS Isla Shetland 5 . gares y han sido erosionados en otros. La superficie de casi más dif íciles de explicar. Estos ca ñ ones se conocen desde la
lül todas las plataformas est á marcada irregularmente por lomas, ultima parte del siglo xix ; hoy, aun cuando los sondeos son
ü . - valles y depresiones de relieve bajo a moderado. Adem ás, escasos e incompletos, parece cierto que los ca ñones subma-
» FIG 15 11
los sondeos a lo largo de la plataforma que bordea la costa rinos son caracter ísticos de las pendientes continentales de
w
Cuantas más determinaciones se tienen de
t;
s$ profundidad, más diverso se presenta el cuadro oriental de Norteam é rica acusa la presencia de terrazas sub- todo el mundo. Algunos ca ñones, tales como los de las pen-
del fondo del océano. La localizació n de un marinas que representan antiguos niveles inferiores de! océa- dientes enfrente de la desembocadura de los ríos Hudson y
perfil está indicada en el diagrama inferior
de los tres que se muestran. El diagrama no, tal como los niveles más, altos est á n representados por Congo parecen ser extensiones de los valles en tierra o en
IB¡* superior forma una sección a lo largo de esta las terrazas que se levantan sobre el nivel del mar. las plataformas continentales. Otros no parecen tener asocia-
L lí nea de perfil, basada en unas cuantas
determinaciones de profundidad . El diagrama Generalmente las plataformas se inclinan suavemente ha- ción con tales valles. En cualquier caso, estos ca ñ ones tienen
i!¡
| i medio constituye una sección a lo largo del cia las cuencas oce á nicas hasta terminar en una pendiente perfiles transversales en forma de V y gradientes que dismi-
nuyen a lo largo de las secciones inferiores de las pendientes
II mismo perfil , basada en sondeos más
profusos del fondo del oc éano. Redibujado de
.
H . U Sverdrup y otros9 op. cit ., p 18 . .
continental abrupta más acentuada , que desciende cientos
o miles de metros en las profundidades del océano. Las pen-
dientes continentales son m ás acentuadas en su parte supe-
continentales. Su curso, ligeramente ondulante, puede exten -
derse en el mar hasta 230 kilómetros, como lo hace el ca ñón
FIG. 15- 12
Los sondeos del océano Pací fico realizados
durante la segunda guerra mundial, revelaron
del Congo. Algunos ca ñ ones cortan más de 1.5 kilómetros la presencia ae montañas submarinas, de cima
rior, y se extienden m ás de 3,650 metros hacia abajo. En
m: ciertos lugares del fondo del océano donde los movimientos
de la Tierra han creado trincheras profundas, las pendientes
bajo la superficie de la pendiente continental
Para explicar el origen de los ca ñones submarinos se han
. plana, llamadas guyots. El guyot de esta
sección se localiza a los 8.8° de latitud
norte y 163.1° de longitud oriente. Redibujado
itÜ 5
;
continentales alcanzan profundidades mucho mayores. Fren-
te a la isla de Mindanao, en las Filipinas, la pendiente des -
desarrollado muchas teor ías. Algunos ; investigadores creen
que se formaron por movimientos de la Tierra; otros supo-
de H . H . Hess, “ Drowned Ancient Islands of
the Pacific Basin\ Am. J . Set.,
CCXLIV ( 1946 ), 777 .
I \
ciende unos 9,000 metros. Surcando la cara de las pendientes Superficie oce ánica
111iiU! continentales, en varios lugares alrededor del globo existen 0
llj .
profundos ca ñones submarinos; pero el fondo de la gran ; v .<
cuenca que circunda al mundo y que contiene a los océanos, /
/
%
-
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¡1181
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1 260 OCEANOS Y COSTAS
li
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$ 1*
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”
«
*
FIG. 15 13
- -v
*
11 . si'-
P Los guyots del océano Pací fico se agrupan a
semejanza de las cadenas de islas de base
volcánica actuales. Redibujado de H . W .
••Vv v/ V‘
mS»
É Experientia, XV , N ? 6 ( 1959 ), 210 , 212.
í
’•
í: ‘ :í l nen que fueron excavados por corrientes de turbidez y otros •
Cordillera del
i
!
es similar al valle del mar Muerto, en el cercano oriente , y
al llamado Rift Valley de Africa, que aloja lagos tales como
i -
-; . ’ *
Emperador
I
.9
¡fe:
m j el Tanganica y el Nyassa. Estos valles terrestres han sido »
3
I
ll
originados por el descenso de secciones de la corteza terres- .Tasmania j-
to
fe -
i
>:
{
‘
I:
i
tre. El valle submarino de la cresta de la cordillera meso-
atlántica pudo haber sido formado de la misma manera. 4 ^ del sur fe
i : fe '.
' ’
'
""
°o Ito
! ,
;!
y::;
MONTES MARINOS. Salpicando el fondo de los océanos hay : t
í
t
"í
Mm to O
m
mM
.
picos sumergidos, aislados, de pendientes abruptas, llamados ¡S ? Í t >: O
to
i
l '
:
;
cubiertas por profundidades de agua que se miden por cien-
tos de metros. Estos montes marinos han sido identificados en
tejí
;C:l
ir>
O
. 3
%
*
3
^V-
A *
r^
m- ü
262 OCEANOS Y COSTAS todos los océanos, pero el mayor n ú mero de ellos se
*
¡8
lizado en el océano Pacífico. Hacia mediados de I 1
ha
960 ,^
i mm
habían fijado unos 1,500 de tales picos, y se calc|
permanece sin descubrir un n ú mero diez veces mayor.
J
\ ®S
¡1
i vmm Los montes marinos tienen picos aguzados y, hasta d
sí
2
podemos decirlo, son de origen volcá nico. Algunos de
picos tienen cima plana y se les llama guyots en honor ^w iiL
IIÉ xm Arnold Guyot, un geólogo suizo-americano de mediados M §
Ui fractura Mendocfna siglo pasado. Se cree que las guyots son conos volcá ni * I
li Murray m
cuyas cimas han sido cortadas por la acción de las olas d
la superficie. Casi todas las evidencias muestran qUe } C
! i
m
m
& m
/
\
guyots se hundieron después bajo el mar, pero también
posible que hayan quedado sumergidos por una elevacióesn
z
l
It M
i í Clarion
• ' '
Í2¡ del nivel marino ( ver figs. 15-12, 15-13 ) . $
smm
m, CORDILLERAS SUBMARINAS, ELEVACIONES Y FRACTURAS.
CWpperton © Entre i i
los principales rasgos de las cuencas oceá nicas profundas es
tán las largas cordilleras sumergidas y las elevaciones. En-
:
¿tasi •
I
i
Ii
i
general, las cordilleras tienen laderas escarpadas y topogra i
f ía irregular. Las elevaciones difieren en su forma m ás am--
.
FIG 1515 plia y suave. Se levantan cientos de metros sobre el fondo
V
1115
OCEANOS y COSTAS En las plataformas donde no se acumulan ni arena MvOt parte de los depósitos pel ágicos de mar pro- OCEANOS Y COSTAS 265
la superficie está cubierta a menudo con fragmentos
y grava. Generalmente, éste es el caso en las
abiertas de una plataforma , donde las fuertes corrientes
de -
res profundos son , generalmente, mucho más finos que los ! | ¡j|| to constituye el mayor volumen de sedimentos, pero
de las pendientes y plataformas adyacentes a los continen- j
(Éígranos minerales son bastante grandes para haber sido
tes, si bien se han encontrado capas de arena ocasionales j transportados por las corrientes en el á rea donde se encuen-
hasta en las profundidades. i tan al¡: presente; en consecuencia , se cree que cristalizaron
Los depósitos marinos profundos, de material derivado de f directamente del agua de mar.
los continentes, se llaman depósitos terrí genos ( “ generados j -I** depósitos aut ígenos más espectaculares son los nodulos
en la tierra ” ). Los que se forman de material derivado del ij .
( ver f *& 15-19 ) Estos tienen, eii promedio,
océano se llaman depósitos pelágicos ( “ pertenecientes al j Mt
océano” ) . ^^ ímetros de diámetro, y cuando se les corta, muestran
.
lirones de crecimiento concéntrico Constituidos principal-
j
Entre los depósitos terr í genos se encuentran capas de ce
niza volcá nica , transportada por el viento, que ha ca ído so \ j- j
*
*
¡
de óxidos de hierro y manganeso, contienen, ade \
óxidos de muchos de los elementos mas raros. Se
-
bre el océano y se ha asentado a través de cientos y a | ¡j ^
c u r e n spl) re eI 20 por ciento del fondo del
miles de metros de agua, en el fondo del mar . En las composición y abundancia sugiere un uso co-
nes polares los limos y arenas del hielo glaciar constitujSft ' | I|
^ l| p
|eD potencia no , solo para el manganeso, sino tam-
elementos mas raros, como el cobalto, titanio y
muchos de los depósitos del fondo, y alrededor de las
genes de los continentes se encuentran a menudo depósw . 0 t
^ de 5os
de lodo de mar profundo, de limo y de arcilla deslavados de |» maJ
0ria sedimentos se depositan en las aguas
las masas de tierra. Gran parte del fondo oce á nico —
especial - I jgS?
8
. as
^ plataformas continentales o en las pendientes
mente en el Pacífico- está cubierto por un depósito de grano Vndiicen al mar profundo. Muy pocos sedimentos lle-
extremadamente fino, conocido como arcilla caf é, que pu#»: | I las profundidades marinas donde, en promedio, la
é f 1 de sedimentación parece ser de 12 mm . por cada
v t jlp
f
haberse originado en los continentes y pasado despu s
FIG. 15- 17 océano abierto. ^ * o a ú n menor. En contraste, sobre las plataformas
Arena con huellas de oleaje en la plataforma
continental entre los bancos de George y
Brown, frente a la costa de Nueva Inglaterra.
Las rizaduras indican corrientes en
movimiento diagonal desde arriba, hacia
Se cree que algunos de los dep ósitos de mar profundo
Antá rtico y del Artico han sido llevados de la tierra a
océanos por los icebergs. Estos depósitos marino-glacia
^p I TAS ^^^ pendientes parece ser la velocidad diez o veinte veces
i
m
i
el viento, a medida que avanzan sobre una costa. - | | jj|
1
mi OLAS FORMADAS FOR EL VIENTO. La mayor ía de las ¡L .
¡
I acu á ticas se producen por la fricci ó n del aire que se ¡i «
muefl
til sobre una superficie de agua . Cuanto m ás fuerte es el viento
m
g¡ - i
J
que sopla , mayor es la altura del agua que se acumula for PSP
mando largas crestas de onda con depresiones intermedias * vi
siendo perpendiculares a la dirección del viento tanto las
*
Í EJ v
Glaciales marinos
Arciíia caf é
lili las olas formadas por el viento persisten aun despu és de que ;i
fell el viento que las produjo, cesa . Estas olas o marejadas pue- i- •
i
4
Aut ígenos
ÉÉ den viajar por centenares y hasta millares de kiló metros USE J
i
i
desde la zona donde se originan . i Abanicos de turbidez con una
A nosotros nos interesa tanto el movimiento de la ola como ! w. delgada cubierta pel á gica
el de las part ículas de agua en el trayecto de la ola misma. li,
Obviamente la forma de ola se mueve por sí misma hacia
l
Sh
“í ¡ delante a una velocidad mensurable; pero en agua profunda. {í
las part ículas de agua de la ola en sí , describen una ó rbita i
MU
L-
í: - :!
circular: cualquier partí cula dada se mueve hacia dentro ¡
sobre la cresta de la ola , se hunde a medida que se aproxima
i •' •
•
'
t - i:'- : sión y sube conforme avanza la cresta siguiente. Este moví - í
- .
iiíí
: miento se puede visualizar mejor imagin ándose un corcho f
que se mueve hacia arriba y hacia abajo sobre la superficie | - : •
í
y la superficie las partículas de agua se mueven hacia aefe ,
^p
i i:
'
i i en el movimiento de las partículas y en la forma de l :i
aproximada I *
$
mente la mitad de la longitud de la ola, comienza el fond ¡*
interferir el movimiento de las part í culas de agua en la
0 J
i .
$
éI - E
' yectoria de la ola y sus órbitas se van haciendo ca a .&|
m á s el í pticas. Como consecuencia, la longitud y la ve
^ \
*
^j
-
Vis ; .-
Wmm .
.
—
¡fk í i
^ . En
la sección costa afuera puede haber tam-
k: •
Longitud de onda
&
^
i
que de esta manera se desarrolla es capaz de erosiona
costa y formar, a lo largo de ella, corrientes que pueden
portar los sedimentos producidos por la erosión. >HSS .
^
¡Sil I biP°érnuna acumulaci
una terraza
ón de depósitos sin consolidar, que cons-
formada por las olas (
de Ia cos*a cambia continuamente. Durante las
fig. 15- 25 ) .
Planta
Area de! bloque
diagramá tico
^
REFRACCIÓ N DE LAS OLAS Y CORRIENTES COSTERAS. Aun
cuan. ®li3es tormentas
do la mayoría de las olas avanza oblicuamente hacia la costa TÉejiiL , erosion
la resaca puede batir directamente contra
á ndolo hacia atrás, rascando al mismo
1 acan tilado
Á
^
la influencia del fondo del mar tiende a combarlas o refjt >
é s de los depósitos de playa , para erosionar la
Altura
tanas, hasta que se acercan, al fin, a la costa, casi de frjggl
ó
tiempo a trav
I
cortada por las olas. Cuando la tormenta ( y en con-
pk : ^ Supongamos que se tiene cierta extensión de costa re® kqáencia la energía disponible ) se calma , se forman nuevos
vamente recta con olas que se aproximan oblicuamente sobp
un fondo que va haciéndose somero con un gradiente (f¡ ¡§ ÍSipIfil Ul
ósitos de litoral frente al acantilado marino. Por lo tanto,
de una costa, en un momento dado, no es más que la
lili FIG. 15-21 tante. Conforme la cresta de la ola se acerca a la costipjl & íesión de la energía disponible, y cambia cuando la ener-
J
SHI! Explicación diagramático. de los términos sección más cercana a tierra “ siente” primero el efecto del ¡§|varía. Esta relación entre el perfil y la energía en dispo-
P
empleados al describir las ondas de agua u olas . fondo, cuya profundidad va disminuyendo y retard ándose nibilidad yessusemejante a las variaciones del gradiente de una
¡IB —
en tanto que la parte de atrás o sea la que est á del | |g| cauce cuando la descarga ( y con ello la ener-
ISSlSiiSi
III
11*1
—
del mar avanza con su velocidad original. El efecto es e! ¡ip
de hacer girar la ola y cambiar la dirección con que se apro.
|
iente
|
de la corriente varía ( ver capí tulo 11 ) .
xima a la costa, como se indica en la fig. 15-23.
Su
111
Cuando una ola se rompe , no toda su energía se consume i
Caracter ísticas de la costa
FIG. 15-23
en la erosión de la costa . Parte del agua empujada hacia ade- J
Tampoco las costas han escapado al deseo constante del
Las olas , que avanzan según cierto ángulo
lante se desv í a y se mueve paralelamente a la costa. La I jjómbre de clasificarlas; pero hasta la fecha no se ha ideado sobre una costa recta y cruzan un fondo cuya
energía de este movimiento del agua se gasta en parte por | un sistema completamente aceptable. Durante muchos a ños profundidad disminuye de manera uniforme,
se doblan hacia la costa, como se muestra
fricción a lo largo del fondo, y parte se emplea para el tram fue práctica com ú n agrupar las costas en emergentes y su-
,
en este diagrama. La refracción es causada
i
1
porte de material. mugentes , dependiendo de que el mar hubiera bajado o por la creciente interferencia entre el fondo y
La refracción también ayuda a explicar por qué, en una subido en relación con la masa terrestre. De esta manera, las órbitas de las partículas de agua en
grandes secciones de la costa de California que movimiento dentro de la ola.
costa irregular, la mayor parte de la energ í a se concentra , hab ían emer -
í Sf . generalmente sobre las puntas o salientes y en menor pro
i gido del mar durante tiempos geológicamente recientes, ten
¡ - - FIG. 15 24 -
BU
- : ' porción a lo largo de las bah ías. La figura 15-24 representa j Irían que considerarse como costas emergentes. A través del Refracción de las olas sobre una costa irregular.
:: V ; i una bah ía que separa das puntas o promontorios y una serie Í continente, la costa de Nueva Inglaterra indica que ha sido Se ha supuesto que el agua es más profunda
frente a la bahí a que frente a las salientes.
kV / k ,
kk Hi) de crestas de ola que avanzan hacia la costa, barriéndola invadida por I
un mar que se eleva lentamente , con lo que Considérese que la ola original está dividida
a las salientes y profundo \ tendría que considerársele como costa sumergente. El sistema en tres segmentos iguales, A-B, B-C y C - D.
|
l ' , , , somero frente
sobre un. fondo
! ha recibido cr í ticas , porque algunos de los rasgos que pare - C áda segmento tiene la misma energ ía
m
Pili Sí
trente a a a ia
Donde a pro un i a e g
. ..
*
¡
c ían representar
-
emergencia
la longitud de onda , la cresta de la ola que avanza es relati I mn cuando ésta se está sumergiendo. Inversamente, a lo
a s stas ae sun
°
,
de la tierra , en realidad se for-
sumergencia se oueden
° )erSeycia pueaen desarrollar
desarrollar
potencial , pero obsérvese que, al tiempo
que la ola alcanza la costa, la energí a de
A- B y C -D se concentra a lo largo de la costa
de las puntas A*-B* y C*-D\ mientras la energía
del segmento B-C se dispersa sobre un frente
Hi - ;- puntas, la profundidad llega a ser menor que la i
* nntad ae f]e la
ja también rasgos que ** caracterizan la emergencia, más grande ( B’ -C* ) alrededor de la bahí a.
v
»B longitud de onda, y la ola comienza a retardarse. En el agua |
í
0tro intento de clasificación se basa en los procesos que
-
.
i
más profunda de la bah ía contin úa moviéndose la ola rápida :j «man las costas. Algunos tienen rasgos principales atribuí-
mente hacia a costa , hasta que el agua se hace somera tan- | » a la erosión glacial, otros al depósito glacial El sistema
La energía erosional pormnidad de costa es,
en consecuencia, mayor sobre las puntas
que a lo largo de la bahía.
¡ SI
lil! bien v la cresta de la ola retarda su movimiento. El comba - J
**re estas bases no es muy recomendable. No obstante, exa -
111 Direcci ó n del
movimiento
miento diferencial de la ola tiende a amoldarse de
general a la línea de costa . Al hacerlo, la energía de la oh j
modo j «uñaremos algunos de los rasgos costeros individuales, sin in
« ar colocarlos en un sistema que los incluya a todos ,
- xAi -
La energ ía de *
i
8
í
i
D
:
v|*, este segmento de i
de ia ola se concentra sobre las puntas y se dispersa alrededor de la : La erosión y el depósito trabajan juntos para producir la , ola se concentra iI La energ ía de J
Ú i i!
I
I en I este segmento de
bah ía, como aparece en la fig. 15-24. { gf de caracteres de la costa. Forman una excepción la “ punta" I
^
• r
«i
t
13 i
ola se dispersa i
rt
'
• M ' - -
Un perfil compuesto de una costa desde un punto M ,1í *.«a generalización a ( lUellas islas que son, en realidad, las i
>
T
I
i
alrededor de la bah ía
i
-- M
:
i
l
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.
>! 1
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s «crT*r\ >S
^D o
\' - :• 1 encima de la marea alta hacia el mar, hasta un punto abajo. J canas de un cerro o de una cordillera que quedaron rodea- !
I J
i
i i
J
mm
mmmm .
6 . segú n son influenciados por la naturaleza de las olas y* gal terreno. Sin embargo, aun las islas formadas de esta
corrientes costeras. No todos esos rasgos se encuentran en j manera se J
modifican por efectos de erosión y del depósito.
la
i
\
/
i
/ i
i
i
i
mm
k
c! r \
m
WM
lili !
9 V
*
i
todas las costas, pero algunos de ellos sí se hallan
yoría de los perfiles de la costa , a secci n c
extiende hacia el mar desde el punto e a m
sección de litoral o playa compren e es e e
, y
p
, .
ma
se
en
.
|
l
||
3
|| |
ll í
OCASIONADOS
® por las olas son rasgos
¡
POR LA EROSI ó N . LOS acantilados
erosiónales comunes a lo largo
costa , particularmente donde ésta se inclina abrupta-
bajo el mar ( ver figs. 15-26, 15-27 ). En estos casos
corta-
k
A': 8'-
Erosi ó n de
/
\
; C' D’ i
/
llllltts V:V: FIG. 15 22 * rea baja hasta el pie del acanti ado marino
.plu\P | IJ i
§|Pueden romper directamente sobre la costa y gastar la punta
* sobtf |
I hacia adelante, bajo la cresta, y hacia atrás que semejan peque ñas terrazas con came ones de
las olas empuja al cantil cortado por las olas
uiodo constante, produciendo a su pie una to-
IBi
bajo la depresión, en órbitas cuyo diámetro
decrece con la profundidad Tal movimiento . los bordes que dan al mar, constru í os por a
menta. Hacia el mar, mas alia de as ermas y
i
,
^ por las olas o plataforma. Puesto que el agua
se extiende hacia abajo a una distancia acjentro ks c ías $j: Dep ósito
Jl¡
que rompen tiene que cruzar esta terraza
aproximadamente igual a la mitad de marea baja , está la ante- playa ( ores ore .. pn¿ dd | § e alcanzar el acantilado, pierde por turbulencia y frie-
en la bah ía
H
11i .
de la longitud de onda Redibujado de u . s . más allá del litoral, se encuentra la eos a. *os sitos
ol#
P
cantidad considerable de energ&ía . Así, cuanto más
i
Hydrographic Office Publication
604 ( 1951 ), fig . 1 2. - litoral pueden cubrir una superficie cortada por
m
m
m
m W -.
m
m-
WBBlJSl ..n mrnmsmm
270 OCEANOS X COSTAS Costa afuera Litoral o playa Costa
. .
WmM&isim '
BáSííffi tegSiiSS
^ m
; 45
2j \
m liT
i
Anteplaya Trasplaya
Acant iijj
marino "
>;
5
'•1’
v ú. mmm
¡
1WMíMmmíSí^
Bermas ^
1. 1 i ’
Marea baja
Terraza formada por las oías
Barra Depresi ó n y a
Marea alta
-
-rrrrjTy..syvTA;
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v
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a?
£
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, • ' ‘
‘A ‘ '
SI
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í •\
*m
;
..
FIG. 15-25
.
Foto por Edward A Schmitz . deposita en la bah í a Raritan, y forma una larga playa areno ¡
*
Qnera o cordones litorales . Se ha
indicado que estas California. Foto por Sheldon Judson .
n su ijggk en las lenguas
^^
sa, que se proyecta hacia el norte, formando una lengua xí origen
•
separadas de tierra por
ormen as las
conocida con el nombre de Sandy Ilook.
Precisamente al sur de Sandy Ilook
. , los valles inundad
#os }: jm¡ S^ologos
/
A
}
\ L
creen
Que rompen
* que pueden representar en diversos puntos.
lenguas ais-
berra firme por un mar que sube de nivel lenta -
mmi¡
mm«
ü
de los r íos Navesink y Shrewsbu ry son
|
ón . nUe
^-
,
na tercera posibilidad es la de que la acción de las
erosionado durante un largo per íodo de tiempo
e onc*0 del mar somero, apil á ndola en promontorios
*
La arena arrastrada hacia el sur, desde la zona de erosi ffjjk r e s a d e l nivel del mar.
j
m ha formado otra lengua de arena . Detr ás de ella se encuen
JPO de depósito es el támbalo, playa de arena o grava
m *
ec
*
^ ,
m
m %
ha una laguna somera , la bah ía de Barnegat ,
agua del mar a través de una caleta, llamada caleta
gat. Este paso a través de la lengua fue abierto
mente primero por una tormenta violenta , posiblemlaente
que recibe
Bart
probabl
*
e'
í|
ujj I :
jj|| ^
| . s
^
sla$ o una isla con tierra firme. Existen
fJernP a argo de la l í nea de costa de Nueva '°
> ligeramente a un lado de la costa del poniente , si
0ca Morro, una isla de flancos abruptos, está
ente
*
unida
'
Km ti; huracá n . Precisamente se ha formado dentro de cale
la rotor^ |
|
j |
»rAS DE ARR
g
» en California, por un t ó mbolo.
. ,
Ii un delta de material , depositado, parcialmente, por come ,
.
T?
df
(
1
jfcafe
^
* '
original de la barra y parcialmente por las continuas , comprendidas dentro una faja etóre los 30
» norte y 25° de latitud
; J tes de marea que penetran en la laguna .
Largas extensiones de la costa de Long Island a
d ¡| JJ , sur, existen muchas costas ca-
jl!í 2ada$ por arrecifes de coral de tipos y tama ños varia-
1
s
i»
1
bles . Estos arrecifes est án formados por corales individual OCEANOS Y COSTAS 273
- 272 OCEANOS Y COSTAS
ales, ®BKf ¡ í fStmt del océ ano .
en una gran cuenca que se ramifica hacia el norte,
Mi con esqueletos calcá reos, así como por otros animales y
Plan. l te Contenida
Éi tas que secretan calcio . Las costas de arrecifes de cotif
ü^ formando los océanos Pacífico, Atlántico y Artico.
de tres tipos : Las de arrecifes anulares, las de pjjyp0 pograf í a las cuencas oceánicas.
barrera y las de atolones . El arrecife anular crece direetam |¡íí
6 plataformas, pendientes, profundidades oceá nicas.
M
>- • te de una masa de tierra , mientras el arrecife de barrera J ¡|¡g Valles submarinos
;
, montes marinos; cordilleras, elevaciones y
trincheras de mar profundo .
está separado del cuerpo terrestre principal por una laguna fracturas
Sandy Hook ( lengua)
1«! Bahí a Raritan de anchura y profundidad variables, abierta al mar
Sill ;
IB» }&k\\\\ oo
\
. - vés de pasajes en el arrecife . El atolón es un anillo de iis|
f Más potentes sobre las plataformas y las pendientes.
Más delgados sobre el fondo del mar profundo.
8a de coral bajas , dispuestas alrededor de una laguna central .
I’
£3
K £ El origen de los atolones ha sido discutido por más del§¡ ¡jÍ ¡postas .
II
•
«1
-CJo siglo después de que Charles Darwin expuso su teor|
1842. Darwin sostuvo que el atolón se inicia como un arre
í|8 ¡¡ Se modifican
por el viento.
por la energí a derivada de las olas impulsadas
• c
- perfil de la costa.
p
|®¡ ¡ ®
Río
Navesink
vO
o
o
OI
O
cife anular alrededor de una isla volcánica . Puesto que jp
isla descansa como una carga muerta sobre el material | <¡| ! jj Rasgos ^
Cambia de acuerdo con la cantidad de energía disponible.
de la costa.
Si .
Rí o ¡ jf\ Barrera de bahía la sostiene, comienza a hundirse, pero a una velocidad sufi-
cientemente lenta para que el coral se desarrolle y crezca
De erosión : acantilados, farallones , cavernas, arcos, caletas.
Shrewsbury ] "v
De depósito : lenguas, playas barreras de bah ía, islas de barre-
manteniendo el arrecife . A medida que se hunde, la isla se ras o cordones litorales, tómbolos.
III i *»®! i z> o V» hace más pequeña y la sección del arrecife, que crece activa- jjt Costas de arrecifes de coral.
II oE
íti
«s >
mente , se transforma en un arrecife de barrera. Tras la des- I
aparición final de la isla bajo el mar, el arrecife que crece
Aguas tropicales y subtropicales.
Costas de arrecifes de atolones relacionadas con los cambios
i
I :¡i
if
«ti o.
lia-
Vi + >
oc
v n.
hacia arriba circunda solamente a una laguna, y viene a ser gg
un verdadero atolón . En apoyo de esta teoría existen muchas
islas volcánicas en el Pac í fico, rodeadas ahora por arrecifes
de barrera . Por otra parte, las investigaciones en la isla de
del nivel del mar.
BIBLIOGRAFí A SELECCIONADA
«a
i y¡
\
Posici ón o -o
NI
Bikini ( un atolón ) indican que el núcleo de roca volcánica
está coronado por varios cientos de metros de roca de coral .
j Garson, Rachel, The Sea Around Us ( ed. rev. ) . Nueva York : Ox-
ford University Press, 1961.
i
«s §
w
^ *•
*
primitiva
de las
puntas
Por ú ltimo, las evidencias geof í sicas sugieren que ha habido,
en realidad , un hundimiento de algunas de las islas volcá-
nicas del Pac í fico . jj
Menard, H . W . , Marine Geology of the Pacific . Nueva York :
McGraw-Hill Book Company, 1964.
Pickard , George L. , Descriptive Physical Oceanography . Nueva
*
¡¡¡Bife
11!
ill!
La teor í a del hundimiento, propuesta originalmente por
Darwin , no explica , sin embargo, la profundidad casi cons -
tante de innumerables lagunas modernas que carecen de
York : The Macmillan Company, 1964.
I Russell , R . J. , “ Instability of Sea Level” , Am . Sci . , XLV, N? 5
I ( 1957 ) , 414-30.
atolones. | Shepard, F. P. , Submarine Geology ( 2« ed. ) . Nueva York : Harper
«8lili ¡ and Row, Publishers, 1963.
Ü¡ * Para vencer, en parte, esta dificultad, se ha propuesto la ¡ Sverdrup, H . U . , Martin W . Johnson , y Richard H . Fleming,
§’|S8! llamada “ teor ía del control glaciar. Quienes proponen esta The Oceans . Englewood Cliffs, N. J. : Prentice- Hall, Inc. , 1942.
explicación sobre el origen de los atolones, sostienen que las
;
SBB
IBtl islas volcánicas fueron truncadas a un nivel inferior del ma?
¡Üf :
durante uno o más avances del hielo del pleistoceno. Los
mI í
«I arrecifes de coral comenzaron a crecer alrededor de los bor-
f
_
nivel del mar. Así , las islas de coral alrededor del borde de
las plataformas, podr í an circundar lagunas de profundidad
\
p«
5j fO
§§ apoyo
más o menos constante. En resumen, hay evidencia en ambftfry /.
v
ti
( V
o» <U
de cada teorí a. Cuando se conozca la respuesta final ,
I«¡¡! <
pueden ser aplicables. / /
(
ma
RESUMEN
m
i¡:
.
La erosión del mar ha hecho retroceder la
línea de costa de New Jersey, según se indica
.
en este mapa Parte del material erosionado
de las puntas se ha desplazado hacia
el norte; a lo largo de la costa, formando la
Nivel del mar .
Sube y baja con el transcurso del tiempo.
Movimientos eustáticos y tect ónicos .
Circulaci ón del agua del océ ano.
locales, pero a menudo rápidas.
lift lengua de Sandy Hook . Al sur, un rasgo Corrientes de marea — ¡g
ü $
semejante, pero más largo, encierra la bahí a
de Barnegat, una laguna con acceso al
Corrientes de densidad —causantes de los movimientos g| ,
.
**v; -
*
. fundidad .
tSSBP océano, abierto a través de una caleta
« I Seg ú n un mapa inédito de Paul MacClintock . Corrientes superficiales, impulsadas por el viento.
• '
1® Hr
*¡i
1
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l1!
' Deformación
*
faití
UPI
de la corteza terrestre
><
¡MI
.
li
iiss,,.,,
lllil
.
sentido vertical y de seis metros en sentido lateral. En Cali
fornia , en 1906, el movimiento fue casi por completo hori -
i! zontal, con unos seis metros como má ximo. -
Durante el verano de 1954 se hizo un levantamiento topo
II gráfico en los valles de Fairview y Dixie, en Nevada. Poste-
s
:
riormente, el 16 de diciembre, ocurrieron dos terremotos en
esa área. Un nuevo levantamiento realizado en 1955 demos-
-
' tró que los valles se habían movido de dos a tres metros con
relación a su posición inicial, y que la corteza se había
queado en varios kilómetros a la redonda.
mmmh• . Movimientos lentos
i
|
rI
Í ITiJ
i®
mM
- Los casos anteriores de deformación de la corteza que impli-
can desplazamientos de algunos metros, claramente visibles,
ocurrieron casi instantáneamente. Sin embargo, hay otros mo
vimientos que se efect úan lentamente y de modo más o menos
-
% realizados indican que algunas de las rocas que están en los FIG . 16-3
mm continuo. La costa de California se está moviendo hacia el pos
:i . •
noroeste a razón de unos cinco centímetros por a ñ o. Hay un j opuestos a 550 kilómetros unas de otras, estuvieron jun - Dibujo que muestra el cantil elevado de la
.
Bahía de Sagami , en el Japón Ahajo,
n j tas, como una unidad , hace 70 millones de a ñ os ( ver la fig , a la derecha, las conchas de litó faga.
lugar en el que este lento desplazamiento ha podido adver-
-
FIG. 16 1 18-4 ).
i
ü
MIm ñocíis inclinadas casi veHicalmente.
tirse sin levantamientos topográficos: en Tres Pinos, Califor- i
| H Otro '
tipo de evidencia de la deformación de la corteza
Cuarcita en los Great Smoky Mountains . nia , una f ábrica de vinos construyó uno de sus edificios abar-
cando las dos porciones de tierra que se están moviendo una tenestre se encuentra en las minas, donde el carbón tiene la
Foto por L. B . Gillett , I
con relación a la otra, como consecuencia de lo cual el edi - I forma de los troncos de árbol de los cuales se deriva. Estos
m
WBSffl
ficio se ha ido torciendo paulatinamente. En el Japón, los
levantamientos han indicado que la corteza terrestre está for-
:
;
troncos se encuentran a diversas profundidades algunas ve-
—
oes a cientos de metros por debajo del nivel de los pantanos
—
lí ú T . i mada por un verdadero mosaico de bloques de unos 15 kiló
metros de largo, que se están removiendo e inclinando de
- I donde crecieron los á rboles. Asimismo, arrecifes de coral, que
fueron seres vivientes en los mares de la antig üedad, se ha-
FIG. 16 -2 |
Wli : Esta escarpa vertical , de 6 metros, está en el
Red Canyon, Montana. Apareció durante
una u otra manera, como tortas de hielo en un mar tormen-
toso. La cantidad de movimiento por a ño es min úscula ; pero
llan sepultados en rocas fonnadas por sedimentos que gra-
el terremoto del Lago Hebgen,
j dualmente los cubrieron cuando se hundió la corteza. Estos
h del 17 de agosto de 1959. existe, e involucra todo el espesor de la corteza. No se puede arrecifes se encuentran en y bajo la superficie actual .
j
i. : Foto por Gordon Oakeshott . negar que hay potentes fuerzas en acción y estos cambios en \
la corteza terrestre no son cosa intrascendente.
Evidencia geológica 1 la»
li
- -
.
• ; i \<, •.
r-
La evidencia de que la corteza terrestre ha sido deformada '
no se limita a eventos recientes. En el Japón, por ejemplo, el
mismo acantilado, elevado como consecuencia del terremoto
de 1923, contiene otras hileras de agujeros de litófaga. Los |
sism ó logos japoneses han correlacionado estos terremotos de
i
los a ñ os 33, 818, 1703 y 1923 ( ver la fig. 16-3 ) . La elevación|
®
j
total ha sido de unos quince metros en casi 2,000 a ños. Esto
puede parecer poco espectacular, pero un simple cálculo arit
mé tieo nos convencerá de que si el levantamiento continuara
- ROCAS
— —
a esa frecuencia por dos millones de a ños lo cual no os
mucho en el tiempo geológico , el ascenso total podría ser DISTORSIONADAS ’¡íiVi
.
FIG 164
Sección de la falla de San Andreas en las
colinas Indie, de California, hacia el noroeste.
de 15,000 metros. El desplazamiento total a lo largo de esta
Las rocas han sido estudiadas con cuidado en la sección ;* falla se ha calculado en 550 kilómetros. Un
I
í de la corteza que se rompió a lo largo de la falla de San i&i. movimiento abrupto de 6 metros, ocurrido '
. -
V* * i /
•V 1
'Sev
I%
M !
278 DEFORMACION al escudo durante el perí odo cámbrico . En catorce DEFORMACION 279
|
:
aerentesseocasiones , ciertas partes de estas tierras bajas conti -
1
P
ii
11-
T
AAA
A
**A*
AA AV
A
#?*?>
^
||
jggles
|
hundieron
del
bajo el océano y emergieron más tarde
|¡|el agua . Así , ésta fue
continente , y
un á rea sin descanso durante la
las rocas llevan impresas las hue-
¡¡
ere
Wk Je tiempos inestables. Ligeramente inclinadas en algunos i w 1 afclS ¡§¡
-
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plegadas en pequeños domos y cuencas en otros , su S 9Íf É
IBltes
^
¡gg&?W
AV vAVA «Awj;, ,
A A : '
A A A ü
ter :
** *
AAA
AAA
A A
ijfc JLcor var ía hasta más de 3,000 metros en las áreas de hun- ML ;
* S ?K állsp*
í
;fe D£>°
i
CA
A AAAAA A'' A AA ¡¡¡|¡| |tento y dep ósito excepcionales, a pesar de lo cual yacen •J*
ms
BSÜ
\ Ax
A
\A
AA^ A A
A
A AA A A
Vfl AAA ^ A
|
I | |ativamente bajas y planas y constituyen planicies.
sedimentarias que circundan las planicies de las
ItJ»' V
í
;¿' v:
| Las rocas y
UBI VAAi{AA AA A
A A A A.
18 tierras bajas interiores han sido levantadas y arqueadas con
¡1
jlitud , formando mesetas; no obstante esto, las rocas ya -
T
A
L
I :
i
•
m
pii * A A «V
’
V
\
\ Echado
\1 A\A AA AA AA AA CARACTERISTICAS ESTRUCT Ü RALES 'x s. sSi
lili
•N
A A A I s Nv
lis A
FIG. 16-5
A
A
A
A
M la deformación de la corteza . Las rocas que tienen tales ras-
FIG 16 7 . -
Mapa de los rasgos superficiales generales A
Echado y rumbo , Foto que muestra ARRIBA :
;- í .
de Norteamérica. gos poseen ciertas caracterí sticas estructurales llamadas plie - el afloramiento de los bordes de capas
mi
s* gues, fallas, juntas y discordancias. inclinadas, en el suroeste de Colorado, unos
mIf*:s ';: ‘
RASGOS SUPERFICIALES GENERALES
Los grandes movimientos de la corteza terrestre nos han ori-
Al describir la posición de los rasgos estructurales, los geó-
logos han hallado conveniente el uso de dos términos espe-
I Jdaíes: aechado y rumbo , que se pueden atribuir más f ácil -
cuantos kilómetros al oriente de Durango.
ABAJO: esquema que ilustra los t érminos que
se usan para describir la posición de esas
capas. Las capas tienen rumbo norte y un
r-? ' ‘'
!
: ginado los continentes y estas partes continentales de corteza echado de 30° al oriente. Foto de: Soil
.
F5G 16 6 - han venido defonnándose de modo continuo a través del tiem”- pfmente las rocas estratificadas. Cuando una roca no está Conservation Service, U .S . Dept . Agriculture. y
Midiendo el echado con la brú jula Brunton. po geológico, de acuerdo con la historia que puede “ leerse j horizontal , el valor de su pendiente es lo que se llama echa -
mI en las rocas. La deformación ha producido los rasgos de los ¡ d(M|( ver la fig. 16- 6 ) y corresponde al ángulo agudo que
{ forma la capa con relación al horizonte. El echado se mide en
terrenos continentales que encontramos hoy d í a : las plani-
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varias partes del continente; el afloramiento más grande se \ . V:
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que es una extensión considerable de la porción nororiental >
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de Norteamérica. Cubre más de 4.5 millones de kilómetros|¡¡¡| tj .vi
cuadrados e incluye todo Labrador, gran parte de Quebec,
i 'vl
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de Ontario y de los territorios del noroeste ; las partes ñor- jjj
orientales de Manitoba y Saskatchewan y parte de las islas
Articas . Sin la elevación que en este caso produjo un am- |
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plio arqueámiento del complejo basal — , no podrí a existir
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i
afloramiento en la superficie. En las partes bajas de las rocas
.: ii
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elevadas hubo un depósito adicional de sedimentos que for tM
Sa
man ahora la tierra al sur y poniente del escudo ( ver la
fig. 16-5 ) . ;|
:
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Bordeando el escudo se encuentran las tierras bajas ínt a lj¡jjMi
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riores, que se extienden hasta Ohio oriental por el este,
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t FIG. 16-8
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m 280 DEFORMACION ¡ as tierras
9g| bajas y en las planicies, las capas de roca se-
*
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i
J
1
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mid
ptaria han s
° ligeramente inclinadas por distancias de
^
de kilómetros, formando monoclinales. En un mono
los estratos buzan por una longitud indefinida o desco-
» en nna
sola dirección. Tales pliegues no se pueden
-
I de inmediato, porque la cantidad de deformación
II
1m
flm
IIISKdistribuida
muy ampliamente. En las á reas donde las ca-
t afloran , se usan perforaciones o sondeos, para definir
wm
i P ción de éstas.
pliegues rara vez son estructuras aisladas; generalmente
m
i
Jjlesentan en grupos estrechamente relacionados. Cuando las
flÜ&s en un pliegue est án arqueadas, de manera que se incli-
i |¡¡¡ ¡uno y otro lado con relación a un borde central, o eje
I ¡ ¡1
¡¡
£ )0 ocurre con lo que se llama “ techo de dos aguas” , el —
¡ gue es un anticlinal ( ver las figs. 16-8 y 16-9 ) . El pliegue
-
al anticlinal es un sinclinal , en el que las capas se in
FIG. 16-9
lili ^ ^ os os Para dentro, hacia el eje ( ver la fig. 16-10 ) .
Anticlinal en capas de arenisca a lo largo del *mas
* veces estos pliegues son muy amplios, y otras son
camino 602, cerca de Newport , Virginia .
Foto por T . M . Gathright , II .
llpretados y angostos. También pueden estar inclinados para
ll|
| ado, o hacia uno de sus extremos ( ver la fig. 16-11 ) . Pero
:
: ¡
I |
¡ i
i
Éos son anticlinales o sinclinales de una u otra clase. La
ti
m licenciatura de las partes de un pliegue está indicada en
Ifeg. 16-12, y en la fig. 16-13 algunos tipos especiales están
«¡ ilustrados.
!
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I:
Bilí»
m
i
®
¡n movimientos de la corteza terrestre que crean los pliegues
ilSltan lentos que pueden ajustarse a ellos sin ruptura las
]
5
is de roca . Pero cuando los movimientos de la corteza son
j de tal naturaleza que fracturan una masa de roca y desplazan
m i fes secciones separadas, se produce un rasgo estructural lia
:
.
3 ? Diado falla El terremoto de 1906 en California fue provocado
-
[ un movimiento repentino a lo largo de la falla de San FIG. 16-11
|Andreas. Antes del terremoto hubo una ruptura a lo largo
¡ Foto aé rea que muestra las capas resistentes
de un anticlinal buzante erosionado .
|jfi esta falla y se han producido otras desde entonces. El esquema ilustra la relación de los
j¡| ¡
J ¡desplazamiento que tiene lugar a lo largo de la mayoría afloramientos con el pliegue . Sahara español,
Africa. Foto por U .S . Army Air torce .
%
fe las fallas no se ve en la superficie. Cada a ñ o ocurren rup-
II §Htt:de masas de roca en millares de terremotos, sin que haya FIG. 16- 12
i Perturbaciones visibles en la Superficie. Y aunque la superficie
FIG. 16 10 Nomenclatura de las palies de un pliegue,
fjgp sido desplazada durante un terremoto, la erosión borra
*
i ofe puede seguirse por kilómetros y, de pronto, se ve cortada pliegue lo más simé tricamente posible .
Cuando el eje no est á horizontal , se dice que
v. í Aptamente por el afallamiento de las capas.
:
m Algunas el pliegue buza o “ se clava , y el ángulo
”
I : *
perpendicular a la del echado. Si la capa de roca est á incli- /
|
/1 veces estas fallas separan grandes masas de roca
felá corteza que las rodea, formando los grandes bloques afa-
entre el eje y el horizonte se Uama
ángulo de buzamiento . Los lados del
pliegue se denominan flancos.
nada de manera que desaparece bajo la superficie, pero so-
í;.
Wos qUe constituyen monta ñas. La Sierra Nevada es en rea-
bresaliendo un poco a causa de su resistencia al intemperismo, mad un bloque afallado, inclinado hacia el poniente : su lado
p! como se indica en la fig. 16-7, el rumbo viene a ser la direc- dental se levanta casi 3,000 metros sobre la sección confi- j
*
ció n de la costilla o borde resultante. Una capa que tenga
gil
®B un echado al oriente o al poniente tendrá un rumbo norte- *
ante
de la corteza. La erosión se encarga de modificar muchos
los detalles del bloque, pero aun así resulta una vista im- Anguto de
sur, que se designa generalmente como norte. Una capa que Wjfonante, el que se levante abruptamente desde el fondo buzamiento t Üe
buce, ya sea al norte o al sur, tendrá un rumbo oriente- 1 Pa ño del valle de Owens. El bloque afallado se inclina suave-
•
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282 DEFORMACION TIPOS DE FALLAS . Una falla a lo largo de la que ha habiu
I • movimiento horizontal recibe el nombre de falla de
i*
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Anticlinal Sinclinal Anticlinal
porque el deslizamiento ha sido paralelo al rumbo de la falj ¡ á¡
Las fallas de rumbo pueden ser designadas, además, como :É
. M
1
iiilñ mano derecha o mano izquierda La que aparece en laflgSp
m 16-14 es de mano derecha; si uno marcha sobre el caminé
señalado en el esquema , y llega al desplazamiento causado pofp
la falla, tendr á que caminar a la derecha , para encontrar l jr |
|
otra sección.
I «-
^^
i. Las fallas han sido clasificadas de diversas maneras, pe '
A.
|Élf una de las más aceptadas se basa en el movimiento relati IT
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de las dos masas de roca implicadas en el fenómeno. Los nom- :
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\ P A/
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el nombre de bloque del techo, y a la que queda abajo, bloque
del piso. La falla en la que el bloque del techo parece haberse I
B. movido hacia abajo en relación con el bloque del piso, es una!
SI falla normal. En el caso contrario, en que el bloque del techo1 vv
Ki9í Flanco Invertido
parece haberse movido hacia arriba en relación con el bloque r,V:'
^
Flanco normal
i del piso, se tiene una falla inversa ( ver la fig. 16-15 ) ,
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El rasgo más com ú n de las rocas expuestas en la superficie
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[- - f A la junta, es simplemente una rotura en una masa de roca que ; . y
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a lo largo de la rotura . . • •• í ;
. 7*
í :
c. Las juntas se presentan como grupos conjuntos, y el espa- y •
gulo ( ver la fig. 16-16). La mayor parte de las masas de roca s», lado a lado , los iones con la misma electricidad , pero al . .
panamericana. Foto por Thos F Thompson.
N \ N N > está n atravesadas por m ás de un grupo de juntas; a menudo # haber ninguna presión confinante que los mantuviera en
son dos conjuntos que se intersectan en á ngulos aproximada aposición anormal , la roca se rompió.
\\ y V
*
Si
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Dt mente rectos. i r
v
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:r7: Un patrón de juntas esencialmente horizontales se llama V
N .
Prentice Hall , Inc , 1954 ) - . . ciones de voladura. de « 7 ,°se llama discordancia.
Los geólogos han tratado de encontrar durante a ños una *
ras mas
explicación satisfactoria acerca de las juntas. La mejor
‘ antiguas
rePresen^a ° P r UI1 discordancia es evidencia
^
mm
mm sugiere que el junteo es el resultado de una liberación de
y
||
j ps
importante
^ ^
en la historia de una región, y marca
superficie estuvo por encima del
^ ^
V 611
presión. Todas las masas de roca que muestran ahora junt
/
h -í; 7
-
1
I - Pi
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debaft no hubo deposito de sedimentos. Algunas dis
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S han estado, en alguna etapa de su pasado, sepultadas
cien
.
^ interrupciones de un s cuantos miles
de °ños.
de otras rocas, donde quedaron sujetas a presiones suf í ? y
j
17 i temente grandes como para fluir plásticamente. Fue tan 8®
l nto como 400 millones
L
ii! JU r I
\\
de la distorsi ón que los iones en algunos de los mineralor
comprendidos en las rocas fueron virados de su posici ó n ñ
# ;
^
IIBSL
^
*' JP S principales de discordancias: discordancia
^
sconformidad e inconformidad.
,
^ Cuando esta masa de roca metamórfica, con
muchas intrusiones í gneaS, fue volada para
-
FIG. 16 16
J
^J
I T T
mal en las estructuras cristalinas ( ver el capitulo 4 ) j construir un camino, se rompió de tal
Ü
L i i
,
material ha o e cual habían quedado sepultadas las |
antiguos buzan con un á ulo djfcrente ¿ de ]os
llenes, se llama discordancia angular. En una pared
grupo de juntas principales casi paralelas.
Se las ve aquí en sombras, con sus aristas,
I ú '
Esquema de la falla de rumbo de “ mano las expuso en la superficie. Aunque no existiera ya mas 3ox Canyorl cerca de Qurayj Colorad0 se pueden ver
) )
y ligeramente inclinadas con relación a la
vertical , y cortan indistintamente la
Phys*#^ j B
¡II ;
derecha” , que representa el movimiento
a lo largo de la falla de San Andreas,
California, en 1906 . IX
1 P. w. Bridgman , “ Reflections on Rupture” , / . Applies
, N <? 8 ( Agosto, 1938), 517 - 28.
’ pado
f
^a
|
í
’ stratOS de rocas sedimentarias del precá mbrico con
m
:
de casi 90°. Sobre éstas se encuentran algunas
roca metamórfica deformada y la roca
í gnea maciza. Carretera 2, cerca de West
Acton, Massachusetts. Foto por L. Don Leet.
L v
:
W
m
284 DEFORMACION capas de rocas sedimentarias del devónico, práctieameni §| É JI Se forma ésta cuando las rocas estratificadas son eleva - DEFORMACION 285
M
!' horizontales. Las rocas más antiguas fueron depositadas h¡Év Plily expuestas a la erosión , Iludiéndose más tarde, para
1 . -
las aguas del océano y posteriormente plegadas y elevad J fijjr ?- el depósito de nuevos sedimentos, sin haber sido ple-
FIG 16 18 sobre el nivel del agua. Mientras estuvieron expuestas IB lfeaS
¡i Notable discordancia angular entre rocas
sedimentarias precámbricas, que de su posición
la superficie, las capas inclinadas fueron desgastadas
erosión. Al pasar el tiempo, estas rocas inclinadas y
I *
^
" disconformidades en la gran columna de rocas sedimen -
¡ que forman las paredes superiores del Gran Cañón.
|
m —
cuentran con las del devónico más jóvenes, segú n cierto !| | | í la interrupción más larga en la sedimentación duró
t?
11 —
á ngulo ; en consecuencia, ésta es una discordancia angu|ar unos 80 millones
el
de a ñ os y está representada por lo que se
nombre de “ gran disconformidad” .
DISCONFORMIDAD. La discordancia con estratos paralelos arri- I conoce
con
lis
W . La discordancia entre las rocas ígneas o
ba y abajo de la superficie de erosión se llama disconforme ^CONFORMIDAD
I/ ,netam órficas que est á n expuestas a la erosión y que después
Ií
se . « quedan cubiertas por sedimentos, se llama inconformidad. La
«
»
*m
Ü
^^^tfhación de la corteza terrestre .
| /¿Forma continentes.
I ¡JEs de alcance mundial.
| Mdencias de la deformación.
; P^
|®JÑÍ mnientos abruptos al ocurrir los terremotos.
| ovimientos lentos ; corrimiento e inclinación de bloques de la
corteza terrestre.
.
II
j=
;i :
: Registro en rocas de todas las edades ,
|
. .
tegos superficiales generales producidos por la deformacion /
i
B Planicies, mesetas y cadenas montañosas.
m
m
m
mgos estructurales.
Pliegues, fallas, juntas y discordancias.
i m
¡ |jpwición: rumbo y echado.
£ í • • ••
MS m °
ill
11
II . -
FIG 16 17
^
1
m fc°
§Jw
^
rfioies de
tras
^
erosión sepultadas que separan rocas jóvenes de
m s anhguas.
discordancias.
.
Laminado en granito Foto por Dale. ^^dancia angular, disconformidad e inconformidad.
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Las monta ñas
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«iHii i y su formación
la fig. 17-1 ) . Se les llama monta ñ as porque sus picos se le- DESARROLLO DE UNA CORDILLERA
P
Ifit
1 i vantan desde unos cuantos cientos hasta algunos miles de MONTA Ñ AS PLEGADAS
W! metros por encima del terreno circundante. Así, la caracte-
5! • 3
írstica com ún de todas ellas es su elevación sobre los alre- MESETAS INTERMONTA ÑAS
dedores inmediatos.
II§¡ Las rocas más antiguas hoy conocidas sobre la superficie
de la Tierra fueron parte de alguna cordillera antigua. En
MONTA Ñ AS DE BLOQUES AFALLADOS
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i 287
LAS MONTAÑ AS Y SU FORMACION
289
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im una vigésima parte aproximadamente de la superficie tola! 5
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§ I de tierra, est á n situadas en el lado del planeta opuesto al de ) \ 4 í*N
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¡ á reas cubiertas por agua. Pero esta distribución se hace me í *
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in nos notable cuando nos damos cuenta de que algunas mon I *¿¡gmz
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se extienden a lo largo de una l ínea casi recta de 2,400 ^
metros de longitud, orientada hacia el noroeste. Paralelas r3
m
p¡ - esta línea hay otras cadenas de islas del Pacífico : las M?~'
quesas, las islas de Sociedad, las Tuamotu , las Tubuai y *
m de Samoa.
Bajo el océano Atlántico, de Islandia a la Antá rtica,
,
M
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ks una faja de monta ñas llamada cordillera atlántica, o r
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llera mesoatlántica, que es burdamente paralela a los k° I
des de los continentes y est á casi en medio de ellos. Se e I
í unos 2,000 metros sobre el fondo del océano y está cubi* j
en algunos lugares por 3,000 metros de agua. Sus p*c0S ^ te ‘
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feernas; pero desde hace unos 80 millones de a ños fueron LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 291
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quedar convertidas en planicies. Veinte mi-
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l ¡Monadasa ñ os despu
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hasta
és, comenzó a levantarse lentamente la
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una vez m ás, y ahora tiene la forma de un arco am-
l¡S¡¿p con montañas y picos que se levantan formando las
É* íaches del presente. Obviamente, las fuerzas de la cor-
ftggg terrestre que trabajan en la creación de las monta ñ as
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II Monta ñas plegadas — antes de la ero-
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rkv FIG* 17 3 - bresalen en algunos sitios por encima del agua, y forman
•• « Cadenas de montañas cerca de Síon, Suiza; islas tales como las Azores, Santa Elena y Tristan da Cunha .
$
• :
vista al suroeste, aguas abajo del valle del
Ródano Foto por Bradford Washburn. Bajo el océano Indico existen cordilleras semejantes. La cor~ \ i III Montañas arqueadas « / — ante de la ero-
•:
-
dillera Kerguelen Gaussberg está entre India y Antártica, y «•
sion
: - .
'
.
la cordillera Carlsberg del Golfo de Aden corre al sur de
! H Arabia, para unirse a la Kerguelen -Gaussberg, cerca de las
k :vv
i islas Maldivas, al suroeste de India.
Todas estas cordilleras son monta ñas de una clase u otra, m Wmm
e I!
B
como lo son los Himalaya , los Alpes y las Rocallosas .
.
ílk í
IV Monta ñ as en bitoques afallados —
DESARROLLO DE UNA CORDILLERA
- antes de la erosi ón
'i V
: :: \
TÉP ^ = 1
dos, o en l íneas o grupos, como en una cordillera ( ver la fig.
üv
u
i!
17-3 ) . El desarrollo de una cordillera se llama orogenia, del
griego oros, ‘'monta ña * y génesis “ formación de’\ Las fuer-
ir L-
...-
JJJLL
: .
:í
zas orogénicas determinan d ónde y cu á ndo aparecerá n irre- \
/
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m amiríTíT
mm
i; ; i:
: i ? .
'V
" gularidades superficiales en la corteza terrestre. /
I
I La formación de una cordillera toma millones de a ños, / m V Montanas volcánicas
durante los cuales las fuerzas internas de la tierra está n
sosteniendo una batalla constante contra la erosión . Para pro
ducir la elevación de un Everest, por ejemplo, las fuerzas
-
:
internas deben empujar el terreno hacia arriba más aprisa
: de lo que la erosión lo desgasta . Pero aunque estas fuerzas
iVfl MI¡Si ? wifiUfi*«í *»Vi« V
consigan elevar una cordillera , ello constituye sólo un triunfo
j
5
; y
puede constituir también un triunfo pasajero.
VI Monta ñas complejas — muy erosionadas
i En la actualidad, las monta ñas Apalaches atraviesan una
¡i
:
- M í ^M
•
: - Vi
nueva fase de su ciclo de crecimiento y decadencia. Confor
me a una reconstrucción de eventos pasados, hace unos 200
life® m-
-
FIG. 17 4
\ Aí -l-í.y "
i:
I '
: r-
: ?V
i
ú£í
LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION ciertos tipos en los que predomina , al presente, una carac- BGjtpalache, por ejemplo, se iniciaron en capas casi horizon- LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 293
terística. Sobre esta base, existen cuatro clases de montañas: íteales de depósitos predominantemente marinos, que ten ían
lia plegadas, bloques afallados, volcánicas y de arqueamiento I
originalmente más de 12,000 metros de espesor. Posterior-
H;
| ¡
amplio ( ver la fig. 17-4 ) . Las cordilleras que consisten pri Ifinente estas capas de roca se plegaron y elevaron muy por 400 midas
mordialmente en rocas sedimentarias plegadas se llaman mon- Ifipciina del nivel del mar. En otras cordilleras de monta ñas
tañas plegadas ( o monta ñas de plogamiento ) . Cuando pre- ue plegamiento se encuentran rocas similares. En las mon-
domina el afallamiento y se han producido grandes bloques
de la corteza elevados, limitados por fallas normales cuyo
1tañaskRocallosas
s depó
centrales y en la cadena costera de Califor-
sitos sedimentarios originales ten ían aproxima-
Planicies
de Hungr ía —-
nia , >
1 !
slffiS
plano tiene una gran pendiente, se tienen las llamadas mon
-- I clámente 10,000 metros de espesor. Y los depósitos marinos .W. 5
tañas de bloques afallados. Las rocas que forman estos blo los Himalaya pueden haber sido a ú n m ás gruesos que
ü
m; ques pueden ser horizontales o estar plegadas. Las monta ñas ¡¡Iquéllos, antes de su elevación.
Geosinclinal .>
i
i: i
formadas por la extrusión de lava y de materiales piroclás - |Las principales cadenas montañosas del mundo se han
ill ticos se llaman montañas volcánicas ( ver el capí tulo 5).8 I desarrollado a partir de gruesos depósitos de sedimentos
Cuando un amplio arqueamiento de la corteza ha elevado y |acumulados en geosinclinales. Los geosinclinales son enor-
expuesto las rocas a la erosión y se ha producido un relieve FIG. 17 7
-
mes cuencas rellenas de sedimentos que se formaron, en
monta ñ oso, las formas terrestres resultantes son las montañas ¡
ciertas á reas, por la defonnación de la corteza terrestre. La
Sección hipotética que ilustra la teorí a de la
relación entre un geosinclinal y las montañas
m .
de arqueamiento amplio Las rocas que participan de este palabra geosinclinal significa, literalmente, “ sinclinal de la derivadas del mismo. Según Leopold Koher .
amplio arqueamiento hacia arriba pueden ser capas hori- Tierra” , y alcanza proporciones muy grandes en comparación
ni zontales, o plegadas durante algún ciclo previo en su histo
ria, o ambas.
- con el simple sinclinal concebido como pliegue de los estra-
jtos ( ver la fig. 17-6). Generalmente tienen decenas y aun
% a
Monta ñas plegadas
| cientos de kilómetros dé ancho y varios cientos a veces
—
miles de kilómetros dé largo, y en muchos geosinclinales —
.
FIG 17 5 -
Los sedimentos plegados y elevados forman
Las Rocallosas, los Alpes, los Andes, los Himalaya, las Jura
y los Cá rpatos son monta ñ as plegadas que, por otra parte
se han acumulado sedimentos por 15,000 o m ás metros de
| espesor; sin embargo, sus f ósiles, su textura, la presencia
estas montañas en las Rocallosas . destacan como las cordilleras más numerosas. Las montañas jde rizaduras y otros detalles, indican que el agua en la que
lt
| . .
Foto por D B Dowling . plegadas nos proporcionan ejemplos espectaculares de rocas 8 se depositaron no era profunda, sino de alrededor de 300
Si -
metros en la mayor ía de los casos, de acuerdo con las esti-
IIP
a deformadas: los pliegues son destacados ( ver la fig. 17-5) ;
( inaciones hechas. En consecuencia, debió producirse un len-
iff numerosos los anticlinales y sinclinales, que han quedado al
| to hundimiento de la corteza terrestre a medida que ten ía
1
IÜ
pocos los pliegues que no están rotos. Algunas de las fallas
sobre los flancos de los anticlinales son normales; muchas
son fallas inversas o de empuje, de poca inclinación, que
han montado unas rocas sobre otras por kilómetros. Algunas
arrollo de una cadena de monta ñas de plegamiento está pre-
cedido siempre por la formación de geosinclinales; pero éste
no es un proceso simple y rá pido; una enorme cuenca en la
¡ superficie terrestre, en la que se viertan sedimentos hasta
i»l: de las fallas normales se pueden marcar por cientos de kiló - Jplenarla por completo, no se desarrolla en forma repentina.
Ír8
I : ' metros a lo largo de su rumbo, hasta que eventualmente ter - La formación de un geosinclinal implica , más bien, un ar-
¡fcfifis
-i minan. El terreno contra el que fueron empujadas esas rocas ffqueamiento cóncavo de la corteza, lento y continuo, simul-
mm
Kí' - 1
permanece ahora en forma de mesetas amplias, regiones ele- ¡táneo al depósito de sedimentos. El peso cada vez mayor de
l|
iI
vadas, profundamente disectadas por corrientes y ríos, bajo ¡ estos sedimentos tiende a profundizar la cuenca , pero no lo
las cuales se encuentran rocas sedimentar ías relativamente suficiente para hacerle sitio a los espesores que se han acumu-
lili . poco deformadas. lado.
FIG 17 íi- Las monta ñas de plegamiento se formaron a partir de po-
í
Como corolario al problema del hundimiento de un geosin-
Un geosinclinal que subyace una parte de la
i 'í .
pení nsula sur de Michigan Según A. C Lane . . tentes depósitos de roca sedimentaria. Las primeras monta ñas clinal, surge la necesidad de la elevación de los terrenos ad-
yacentes, para aportar las variables cantidades de sedimentos
/
Depósito glacial \ n
P . >
Lago que hacen falta para llenar dicho geosinclinal. En consecuen-
1000*
*V
Michigan Lago
Erie / I cía, éste debe ser elevado también si ha de llegar a conver-
m
ge
en una cordillera. Parece que se produjeron movimientos
—
i
—
continuos de la corteza unas veces hacia abajo, otras hacia
5L
m
arriba en el proceso de la formación de monta ñas
jEos sedimentos del geosinclinal se hunden circunstancial-
.
-1000 mcnte a niveles donde llegan a quedar rodeados por rocas
;
£ !¡¡¡
-
¡| $ densas, y su propia “ flotabilidad” marca un
l ímite a la
gis - 2000 i
| j |frofundidad a que se pueden hundir por su propio peso. Por
ejemplo, supongamos el comienzo de una cuenca de 300 me-
- 3000 jfy°s de profundidad y el vaciado de sedimentos en su inte-
Los sedimentos empujará n el fondo de la cuenca hacia
|
1 t S tro
II - 4000 » | | & del subestrato más denso, hasta que llegue a los
¡g
®0 metros bajo el nivel del mar. Pero para entonces, los se-
jjpientos habrán llenado la cuenca hasta el nivel del- mar y
1£
í i O 50 IQO Millas ff
o «abrá lugar para a ñadir nada más. Todo el sistema habrá
2Negado
a un estado isostático, o de equilibrio, y el espesor
i|
É
-
ff! I i
üip
lint
ej.'í i
LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION de los sedimentos ya no puede acrecer por aumento de NUEVA YORK ORIENTAL SUR OE VERMONT NEW
294
la Geosinclinal
HAMPSHIRE
Geosinclinal MAINE
carga . Islas
«i Los geosinclinales que llegaron a convertirse en los Mar zjjvll¿ 0 rdovíclco
f
/j Mar volc ánicas
Mar
^
'/ á
meros Apalaches tení an ciertos rasgos comunes a todos
geosinclinales. Los sedimentos fueron aportados por las t °S :
m
mm
‘
^
oL
gran planicie deltaica, graduada hacia el noroeste en cali¿ *
50 loo Millas
mente parte de un depósito que tuvo, en principio 12,000 . cadenas de montañas tales .
metros de espesor. Un depósito tal de sedimentos de agua
ZONAS DE GEOSINCLINALES Las
Apalaches fueron formadas, no por la Condiciones posibles en los geosinclinales
FIG 17 9 -
como los primitivos
somera sólo pudo acumularse cuando ciertas fuerzas defor ón de un geosinclinal sino por la deformación de apalachianos a travé s de Nueva York,
mantes profundizaron lenta pero inexorablemente el geosin-
*
deformaci , Vermont y New Hampshire, a fines del perí odo
clinal , en tanto que la sedimentación era consecuente con el muchos . La región donde ahora se levantan los Apalaches ordovícico . Seg ún reconstrucción por Kay .
lite hundimiento. estuvo ocupada antes por dos grandes fajas de geosinclinales
K -r M ¡i burdamente paralelos entre sí . Alineados a lo largo del con-
Los geosinclinales modernos se desarrollan de manera de- j nte, del lado del Atl ántico, desde Newfoundland hasta
masiado lenta, para poderlos medir directamente Pero par- ^
j Alabama, tenían una extensión de 2,200 km. y una anchura
mI tiendo de la suposición de que la velocidad de sedimentación f de 560 laa 640 km . Están cubiertas con masas de tierra eleva-
en el pasado era similar a la actual , han calculado los geó- das de ahora parte central de los Estados Unidos, y con
logos que los geosinclinales del pasado pueden haber au - i M
masas de tierra volcánica en lo que hoy es el océano Atlán-
.
pill
taiill!
.
tos del calor y la presión , empiezan a plegarse en lugar de
ser forzadas más profundamente
zando así la
la fig. 17-7 ) .
elevación de las monta
en
ñas
el subestrato
de plegamiento
, com é y
.|
j ó
llgfefes
^ SPps
j
^
tmetros. La deformación y elevación en estos geosincíi-
comenzó, cuando menos, tan temprano como en las
de los Apalaches, pero fue más extensa, y continúa
|aún hasta el presente.
»
/
Mili Las rocas son quebradizas en la superficie y se rompen; en :
/
a
Jfpos
4
°o ^
Pitado a la parte superior de la corteza. Hay algunos geó-
que consideran el plegamiento y el sobrecorrimiento
c mo resultado del
lar de
deslizamiento de las rocas sedimentarias
hacia arriba, para formar una meseta intermontana (
Mings
8 ° ó a la conclusión basal
lleg
un complejo
de
rígido e inflexible. Pero
fig. 17-8 ) . f - v; i
que “
los estudios de campo
1 ..
‘ íf &e
U
as $$
H
.
ni gyv
«
I Se requieren
—
amplios movimientos verticales para elevar LAS MONTA Ñ AS V SU FORMACION
:il
296 LAS MONTABAS Y SU FORMACION
%#y?5ñ
K
m :
MmM milesde kilómetros cuadrados de rocas, casi horizon-
297
Jütos
vi'üSwwS**
«
¡1I 1 ;
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•
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m
¡¡¡pit mssmt
Pa
m«CHS
»3
^Rs gptañas de bloques afallados
montañas que se forman por el levantamiento de gran-
¡i¡»
n
m
_ wm y
mm
a ¡illo secciones de la corteza terrestre, que quedan limitadas
¡i £ fallas
| se clasifican como montañas de bloques afallados.
,
m !í 5 «§5s
r
¡|
gp rocas depositadas originalmente en geosinclinales, han
m m
- > -
mm ,
plegadas en alguna ocasión durante un previo ciclo de
Reformación antes de que fueran elevadas; otras veces sus
|| yacen casi horizontales. Las montañas bloques
3%
|! ( s de afa-
m ^ IT* jllrfos fueron elevadas casi al mismo tiempo que los pliegues
.
II
s «ai wI £
Él!
amplias mesetas vecinos.
jjglLas montañas de bloques afallados están limitadas, cuando
p nss -X 5
5 ?
i! ¡¡l enos, ennormales
í dos lados opuestos, por fallas de gran ángulo, casi
fell
Éfl»
2
&
mm m
ffi
a
*3
lÉÉ l Psiempre
fias
. Tales montañas están ligeramente inclina-
con frecuencia, dando lugar a la elevación de un lado y
¡¡ la consecuente depresión del otro.
¡¡
lBii
'. í i »
ín .r
•
a
m m lili: la cordillera Oquirrh, la Wasatch, la Ruby- East Hum-
Eoldt, y la Stillwater, y en California, las montañas Inyo y
i-í •
de 1,600 metros de elevación.
Muchas de las rocas elevadas son sedimentarias,
K
-’ J % BSierra Nevada ( ver la fig. 17-11 ) . Las montañas de bloque
ISfaDado se encuentran también en otros puntos de la Tierra,
•
i
tarias, tenemos que determinar la longitud de esas capas
antes y después del plegamiento. Por ejemplo, en una sección
al
p amplio arqueamiento hacia arriba y a la erosión que ha
j esculpido sus elevadas rocas. Entre las montañas así forma-
m
Ü P|
s Ü
.í
a través de los Apalaches, en Pensilvania, puntos que es- i|
í das se incluyen las Adirondacks, los Apalaches, las
Black
?
HÜ tuvieron originalmente a 130 kilómetros uno de otro, se en- ||Ms, las tierras montañosas del Labrador y muchas otras
ill.
I'< x “j
cuentran ahora a sólo 105 kilómetros , resultando que, al ¡ montañas en diversas partes del mundo,
plegarse, se acercaron 25 kilómetros, lo que representa un Se cree que la mayorí a de las montañas arqueadas tuvie-
acortamiento del 18 por ciento de la distancia original entre ; ron una historia previa similar a la de las actuales montañas
los puntos considerados. En los Alpes, puntos que original- 1 p plegamiento; que después fueron desgastadas y más tarde
mente estuvieron a 624 kilómetros uno de otro, ahora están te-elevadas. Las montañas Adirondack , por ejemplo
, fueron
separados solamente 149 kilómetros, lo que significa un acor- j completamente
m
-
*
•
^ re-elevó la región de las Adirondack y
sometió una vez más a la influencia de los procesos ero-
sionales. Las actuales montañas Adirondack fueron esculpi-
daI en las antiguas rocas precámbricas una vez desgastada
cluidas dentro de ellas, existen mesetas elevadas bajo las que « delgada cubierta de sedimentos paleozoicos
.
II se encuentran rocas relativamente horizontales. Un ejemplo
bien conocido es la meseta del Colorado, a 1,600 metros o
i or otra parte, mientras en la regió
n de Adirondack se
m más, de altqra, en la que los r íos han cortado el Gran Cañóo
y una serie de gargantas asociadas con aquél forman un re-
depositaba una -delgada capa de sedimentos, en los geosin-
clinales de los Apalaches se estaba acumulando un potente FIG. 17-11
lieve verdaderamente montañoso ( ver la fig. 17- 10 ) . La me-
seta del Tibet , de 4,200 metros de elevación, está circundada
por las montañas plegadas de los Himalaya, Karakorum, Kun-
^ sor de depósitos sedimentarios. Se supone que los pri-
mitivos Apalaches fueron montañas de plegamiento, como
Va se indicó; pero los actuales deben su elevación a un amplio
Sección a través de la región de Cuencas y
Montañas ( Basin and Range country ) de
Nevada, la meseta del Colorado y el
Piemonte de Colorado. Según A. K . Lobeck .
A
i
i ll arqueamiento. En efecto, la mayoría de las montañAg» m pecífico de 3.0, hasta que la cordillera quede flotando LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION
l tv l^
i Sil 299
i íM-
WM
li§¡
: tentes, que fueron plegadas inicialmente y elevadas ant
terciario, se redujeron a simples lomeríos, y han
| ^
§ una “ ra í z” de aproximadamente nueve décimas partes
PW volumen, mientras que a las montañas corresponder ía
18 elevadas después por amplios arqueamientos desde el parte restante.
ciario. gravedad fuese la ú nica fuerza que act ú a sobre la
m Las fuerzas que deforman la corteza terrestre parecen M¡ jcie de la Tierra, todas las masas de rocas superficiales
¡
ií i
estar gS[ ían hoy d ía a alturas regidas por su espesor y por
^^ ^ ¡¡levantar
i
;
activas en todo el mundo, pero los efectos que
K está n gobernados por condiciones crustales locales gllaci
ón entre su peso específico y el de las rocas que las
LI
m i
secuencia, pueden ser sumamente variables. En determi S
ífenen. Este principio sobre las diversas porciones de la
-
época y cierto lugar, pero en una época posterior, es pos ki
que la misma porción de la corteza terrestre desarrollara e
Uteza
terrestre que deberían equilibrarse de acuerdo con las
-
V.
lili
m
I ÉI
| •
;: ft
ten ían originalmente. |
Al respecto, han sido sugeridas tres posibles explicaciones ||
^ j¡|
¡
gf ¡ ijpplernente en un plomo con un cordel, de all í el término
i Padacua’ derivado del plumbum, plomo . Como ocu-
el globo, la plomada sus-
\
^- f
| ljcon ^^
Una es que la corteza que subyace a las monta ñas es | f! u er otro sobre
p|S cientemente fuerte como para soportarlas como cargas muer ji pendida
r
¡v clase de fuerza interna activa. apuntará directamente hacia el centro de la Tierra. Supóngase
-i
ÍM Una tercera explicación para la elevación continua de tes gjp nos hallamos sobre una suave franja de terreno en la que
i: ii monta ñas es la de que éstas se encuentran en equilibrio isos JljBpn pequeñas variaciones de densidad a profundidades
!um *
tático con relación a las partes circundantes de la corteza, «meras ( o variaciones notables a grandes profundidades ).
sm
! Esto es, que las monta ñas no son sino las crestas de grandes jBpte caso, la plomada será atra ída hacia las regiones de
U; .
masas de roca que flotan en un subestrato, del mismo modo | lfiplta densidad y nuevamente, la l í nea de la plomada se
¡JI«#I!!
*
¡ que los témpanos de hielo flotan en el agua ( ver lajjj Igl á r del cer|fro de la Tierra.
¡Hli
.- >
v 17-12 ) . Tal situación requiere un subestrato de roca, a pbca| | ^ ^
' ff mediados del siglo xix, un grupo de topógrafos ingleses
.
profundidad, que fluya para ajustarse por sí mismo a ) «RD empleando en sus observaciones de las estrellas la lí-
11
i
8
exceso de carga. Esta roca , sin embargo, no necesita ser M
^^ ^ ^ a plomada , con el propósito de fijar la latitud de
líquido en el sentido ordinario de la palabra. Podría ser roca - . háíia, cerca de Delhi en el norte de la India , y de Kalian -
en un estado parecido al de una masilla de silicón, a la que ft a unos 600 kilómetros al sur. Observaron que la dife-
se le puede dar la forma de una pelotilla que rebote, pero | m en latitud entre estas dos estaciones era de 5o 23'
||
—
,
ill
que bajo la acción de una carga muy ligera aun bajo
propio peso- pierde gradualmente su forma . De ah
esta roca tendrí a que ser suficientemente rígida para p*o |
í q «e
^ fifil
M
|
m
; Comprobaron después la diferencia directamente por
é
nc
/ *
todos de levantamiento usuales, y encontraron que la
a tafhud era de 5° 23' 42.29". Había, pues, una
m
ifcg
i
siones de corta duración, pero tendr ía muy poca resiste
durante un largo periodo de tiempo. Un pedazo pequeño |
resina cuya densidad fuere de nueve décimos de la
en f f
2
&
|
|
j
^
j.
j^
¡
W
^^p
pancia de 5.23", equivalente a unos 150 metros, entre
medidas. Puede parecer insignificante en una distan-
jpplicada
600 kilómetros, pero resulta demasiado grande para
por errores de observación. En consecuencia ,
11
L-f -
lili
masilla de silic nó podr í a , con el tiempo ,
hasta quedar flotando con sólo una décima parte de
hundirse
pif
^^*^
^
íeos llegaron a la conclusión de que la l ínea de la
©lí:
mm
fe
¡S j :
con un peso específico promedio de 2.7 ( el del
puede hundirse dentro de una capa de roca simática ^^
lumen sobre la superficie. De igual manera* una cord | ada en Kaliana se había desviado más por la atracción
frases tales como “ equilibrio isostá tico’* o “ balance isostá tico son
!¡t 0 comñn en geología, pero son redundantes.
m
a 300 LAS MONTA Ñ AS V SU FORMACION de las monta ñas Himalaya, que en Kalianpur, que e , ,
1m
Iff
«É8
; al sur. En realidad, la discrepancia debería haber $
veces mayor, suponiendo que las monta ñas tuvieran 1 ^^^l ^^ !lüerficie
de la Tierra a la isostasia. Desde luego, si la
isostá tica, no existir ían anomalías,
LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 301
«n
IK
Üt116
ma densidad media que los terrenos circundantes *
hallaran descansando como carga muerta sobre la
La discrepancia conduce, primeramente, a la
-^^ puehos los lugares de la Tierra que se apartan de la
Iggk En las montañas occidentales de los Estados Uni
I¡ una faja de anomalías negativas donde la gravedad
conerB ¡R
llly
jmenor que la teórica, lo que indica que debajo de
-
de que los Himalaya no son tan densos como los t ® ft
L^
ita ñas existen extensas masas de rocas siálicas. A lo
m
II
m
.
cercanos Por otra parte, puesto que la corteza é
puede soportar un peso muerto tal como el de los Himafc* ?*
parte de las rocas himaláyieas más ligeras deberían **®
hundidas en un subestrato plástico más denso. En
i
Wt
os
terrell jBjpfla trinchera oceánica que bordea Puerto Rico se pro
Sichera
anomalía negativa de 338 miligales, prueba de que
se debe a una violenta depresión de la corteza
-
I
cia, los Himalaya y también el terreno bajo de ellos consecu
én |Mpy representa una divergencia radical de la isostasia .
rían la plomada con menor intensidad de lo esperado* jfip ¡¿s anomal valores hasta de 280 miligales. Por otra par
- i ate ' ías positivas en algunas partes de la isla de
g
i
¡¡
ii
Slí»
en diferentes lugares de la superficie terrestre. Un objeto que í|
pese un kilogramo al nivel del mar, pesará algo menos a
¡^ f
clavía en acción, deformando dondequiera la corteza
§ í ¿ e impidiendo que quede en equilibrio.
é
3,000 metros de altitud, reflejando la disminución en la atrac JgA DE LA FORMACION DE LAS MONTA ÑAS
-
i ción gravitacional que corresponde al aumento de la distan-
a1 i -§1
P ír-i ;
I
cia entre la Tierra y el objeto. Por tanto, las variaciones de la todavía no se han puesto de acuerdo los geólogos en alguna
i
l!
lésima parte de un gal. Un domo de sal de 600 metros
radio, cuyo centro se halle a 1,200 metros bajo la
do
superficie
rodeado por rocas sedimentarias 10 por ciento más densas j
, :
,
¡§g
f-^
montanas había estado restringida a ciertas épocas
! ?ro a medidaTierra: por ejemplo, a fines del paleo-
toria
^ la
que se fue disponiendo de datos, llegó
provoca, directamente encima del domo, una atracción de & ilg?6 caro que la formación de montañas ha estado y
gravedad 1 miligal menor que la de los puntos cercanos¡É§ iMlip^ uo proceso, en algú n lugar del globo a través
:-:
it- •
5 . Me
afectados por la sal .
La fuerza de la gravedad en un punto
^ de ]a
Tifrra *
^ ncon
oca?
^
m OT anti
'
m-
?
i *
:. m
^° r
f 4
is ancia
¿
e ese p\m o a
. , ,
.
probablemente son restos de un anterior sistema
Así, en nuestros intentos de explicar la formación
t»ns derar que esta actividad ha per
. aceptados. ? por la mayor parte de
-
.
m LW lms han sido j
¡
m
Los factores 1 y 2, que pueden calcularse para cualquier
punto, nos permiten establecer los llamados valores teóricos
^^Ra
¿g Uno es que durante la formación de las mon-
—
¿
;^
' ímente hay una reducción de á rea, un acorta-
í Á\ de la gravedad de un punto. Si el gravímetro revela que
PU
ón, como°1las que resultan de la
valor real difiere del teórico, la diferencia constituye ,
de compresi¿
•fci
m
anomalía de la gravedad. En consecuencia, la fuerza de g»
vedad en la cima de una monta ña debería ser menor qu horizontal. Por otra parte, existe la opinión gene-
m -
^ CJlT
la de la planicie adyacente, pero las medidas indican que * , P ra tener montanas debe haber levan a
mí i
mI . .„
problema no es tan simple Esta anomalía de la grav
y otras son consecuencia de variaciones en el factor
L «d d, ellas »p0rt evidencias del de V *
.
tai
^ ,en la
?1tcde fevaci
muchas
ón de las montan.as de PIe
rocas
'
II
í-*3
ülS:
mm Para deformar y elevar extensas partes de la corteza terr^ - |
• -
mm m 302 LAS MONTA Ñ AS V SU FORMACION | ntaóas deberían estar distribuidas de manera más re- LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 303
üi tre y convertirlas en monta ñas, se requieren cantidades o S que como lo está n. En apoyo de esta objeción tenemos
lí sales de energía. Para explicar la formación de las montá| fÍ P ¿^posición de que el calor se pierde uniformemente a tra-
¡i debemos tomar en cuenta las fuentes de esta energ í a .|vs c je la corteza terrestre, sin tomar en cuenta el calor loca-
ti veniente esbozar aqu í al respecto , tres de las teor í as m ás tf y la pérdida de materiales debido a las erupciones
s minentes: 1) la teorí a de la contracción termal, 2 ) ]a te jf i ¡
de las corrientes de convección y 3 ) la teor ía de migracll
ü ¡ picas.
m-
li
*
continental . ^ ||
|
g¡ p
Wr
de las corrientes de convección
-
d ía apoya esta eona con calen os basados en evidencias sis 0 pero fluyen plásticamente, si se les somete a la ón acci
mológicas y en el comportam ento de las rocas sujetas a calor Jna
fuerza adecuada. Tienen alguna resistencia aunaue
m i1
ifssrs TS s í ; ssrs jdrLpurpara ?,aE
í
Tierra es sólida hasta una profundidad cte ,880 Mómetra.
aquellas todaví a se
2
-
¿ i
e
el
manto
^
superyaceite
,
manto ^
pa sal sea
Se ha calcu
caicu
estuvo
del nu
emo ael nú
cercanos
”
,
fundidad las rocas est á n todav ía tan calientes como lo esta - ^
que empezaron a moverse
'
movers h hacia arriba; entonces du-
P »
^
Q
1
ban cuando solidificaron originalmente.
mando se solidificaronoriginalmente T unos 25
afe o millones de a ñ os habr
ía ido aumentando gra
111! De acuerdo con estas condiciones de temperatura podemos .
tmente su velocidad, hasta ser de unos 12 centímetros ñor
í
n delimitar tres zonas. La interior y la exterior tienen volume- ¡fe. Cuando las corrientes alcanzaron la base de k corteza
l iS:S ! j
| nes fijos, porque no e enmentan perdida de calor; pero la faon haberse desviado horizontalmente,* movié, u ,e a lo lo ndome
H
m ^
zona intermedia se esta enfriando y encogié ndose a medida arfo de la hasp HP la
que se enfría. La aona exterior trata de ajustarse, por si mi, éy nó*££ ;
u JW
Xo1¡ ^° teviindoso
ma, a la runa que queda debajo y que se est á encogiendo Mapa |a cortc2a hac a aba
| ' ocluíales.
geos
&
"£"° ali"
|
i
en. este proceso se contrae . Como consecuencia de la contrae S É nsidera
*
auc una VP ? «, w
~ ^osincina es profun
• i
- *
- ^
I
| *.
*
* .
> peratura los funde, estas se expanden y producen
del geosmchnal, para formar montanas. 3
la elevaci / | | disminuyendo su
* knto, la fusión en ln<
'
gvelocidad
hasta"< en
r olo . „ .
„ A
£" M íen"
Mien
*¡¡¡g¡
goncmnli '
^
¡
'
Algunos geólogos han criticado la teoría de la « fcdujo levantamiento, para fomtar monS" - ^
con . -
FIG 17 13
Corrientes i/ celdas de convección.
kilóme- m:
ción los datos sismológicos que indican que los 600 llegan a ( I
tros exteriores del manto son sólidos, los cientí ficos - CELDADE- - CELDA DE
i Á'
canhj
r
i ...
i':' I"
material que encontramos en las monta ñas. Otro tiempo
volucra la distribución de las cordilleras en el
dirección y en lugar. Hay quienes consideran que al
estudio
, ®J
.
IP m
m
-1 V
Im J
.
fen
m
OT¿ientes mucho
antes que el supuesto ' continente originar LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION 305
304 LAS MONTA Ñ AS Y SU FORMACION núcleo desarrollaba de nuevo suficiente calor para vencer k ffiubiera
subdividido .
resistencia de las rocas superyacentes, a fin de poder coin¿¿
i zar un nuevo ciclo. ¡
j ESTADO DEL PROBLEMA. A pesar de las impresionantes lis-
Esta teoría recurre al calor como fuente de energía. En «T 0 2 de datos reunidos acerca de las montañas, ninguna de las
feMi
apoyo se ofrecen cálculos de que la temperatura del núej
de la Tierra debe ser enormemente alta para
| ^
| ¡ígpas propuestas para explicar su formación ha tenido acep-
mantener } liljón general . Aparentemente se necesitarán más datos, o
£ §$íí1l:;: •:
| • ••
material en estado líquido ( ver el capítulo 20 ) , bajo presio ¡| |i mejor análisis de los que se tienen hoy día, antes de que
nes de 1.75 a 3.5 millones de Kg. por centímetro cuadra | ¡¡ M alcance una solución final.
k Se presume que existe el abastecimiento de calor suficiente
para echar a andar el mecanismo de la convección . Adem ás
Ip las rocas plegadas y deformadas revelan una cesión plástica RESUMEN
SE §& i
‘
nes nucleares han venido aportando datos cada vez más pre- i Clases dif íciles de clasificar.
de montañas.
1: ® ón de las ondas j ( Son
:
: : •
: cisos acerca del tiempo de propagaci en el
Se tienen : pliegues, bloques afallados, volcánicas y de arquea-
• V':; Sf*i
? r .T manto. Estos datos establecen claramente que en la estruc- t miento.
p j ;i tura del manto pueden definirse varias zonas. Desde luego,
|É no podría existir tal zonificación o estratificación en el manto
j Montañas de plegamiento .
; Se componen de rocas deformadas derivadas de potentes depó-
1 !¡
si las corrientes de convección lo pusieran en movimiento,
'
„
Geosinclinales.
H [i convección para explicar la distribución geográfica de las 1 I Enormes cuencas donde se acumulan grandes espesores de
Mi montañas, o las épocas de su formación, aun de manera muy i : ; sedimentos de aguas someras.
i»i aproximada. i Se deforman y elevan, para constituir montañas de plegamiento,
Mili proceso que implica encogimiento de la corteza.
¡Bill!
¡(É¡SIlIí
¡¡ Teoría de la deriva de los continentes | Mesetas intermontañas .
! Son producidas por amplios levantamientos verticales,
Hace aproximadamente un siglo, Antonio Snider propuso la IjEjemplos : meseta del Colorado, meseta del Tibet , meseta del
lili®! teoría de la deriva continental, tratando de explicar la apa- { f - Irán, planicies de Hungría.
: •*
" rente concordancia de las líneas de costa a lo largo de los bor- ! Montañas de bloque afallado.
il des del océano Atlántico, así como las estructuras en ambos Producidas por el afaliarniento de grandes secciones de la cor-
sif lados del Atlántico, orientadas en direcciones similares y con- g teza terrestre.
i semejanza litológica . A principios de este siglo, Alfred We Ejemplos : Basin and Range, montañas Inyo, Sierra Nevada.
gener revivió la teoría . ~ WjMañas de arqueamiento.
1 m: ún Producidas por un amplio arqueamiento hacia arriba y erosión \
m '
v:m
La teoría de la deriva continental se examina
detalle en el capí tulo 21. Por ahora nos limitamos a
con
decir
alg
que
psn i
|j f que labra sus rocas.
(
Ejemplos : Adirondacks, actuales Apalaches, Black Hills, tie-
.»
•
la teoría invoca la separación o división dé un
continente en fragmentos más pequeños
y que tales " fragmentos
único
representado s
í
” deriva ®»
*
^
i rras altas del Labrador.
fesfasía.
por nuestros continentes,
lateralmente a sus posiciones actuales . V ;%
los An -
; v ¿
| J ¡j
| ¡§ monta ñas flotan en un subestrato plástico.
truehas de la isostasia.
Se ha sugerido que algunas montañas tales comoérica de de la plomada .
des, en América del Sur y las Rocallosas en Am
terrestre
^^^^^^
del material vimetr í a.
Norte, representan el corrugamiento la gravedad .
auns | || de
en el borde frontal de los continentes en deriva. M á la ca 6- j j elan profundas raíces gran íticas en las montañas.
s
gunos adeptos a la deriva continental sostienen que ¡¡if ¡¡¡
>
¡
lili
na alpino
v la India
-himalaya se form ó cuando Eurasia choc ó con Ag
I SSI
1 wL
^ ,
fajas de anomal ías negativas,
encias de que *as fuerzas deformantes actúan aún sobre
§¡¡¡t
Kf
i El tiempo puede probar que existe alguna
estos sistemas de monta ñas y la deriva continental hW
más dif ícil apreciar c6mo pueden expWe mediante
ría de la denva continental, montanas tales capaz como
Apalaches. Tampoco parece que la teona sea antiguas
; pe» *
las
^ ^ 4
¡|
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Ninguna de
^ ha s¡do &
^
A .
de. montanas
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-
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:
Metamorfismo
? i
" L
- :•
; •
J,A MAYOR parte de las rocas expuestas hoy en d ía en las FORMACION DE LAS ROCAS METAMORFICAS
;
;
i regiones monta ñosas, muestran evidencias de cambios. A pri-
mera vista , algunas de ellas parecen asemejarse a rocas í g-
AGENTES DEL METAMORFISMO
id
-
! •
' • !
neas que nos son familiares, pero luego descubrimos que sus TIPOS DE METAMORFISMO
granos minerales está n arreglados en una forma peculiar ( véa-
se fig. 18-1). Otras rocas tienen la misma composición que la ROCAS DE METAMORFISMO REGIONAL
V :’
! caliza , pero parecen haber desarrollado granos minerales más FACIES DE METAMORFISMO REGIONAL
I.! :
ii
grandes. Algunas se diferencian notablemente, tanto de las
*1 rocas ígneas como de las sedimentarias. Todas ellas son rocas
metamórficas ( “ que han cambiado su forma” ) .
ORIGEN DEL GRANITO
i
FORMACION DE LAS ROCAS METAMORFICAS
j
*
:
Las rocas metamórficas han sufrido modificaciones en el es-
tado sólido como consecuencia de intensos cambios en la
-
—
temperatura , presión y ambiente qu í mico todos producidos
por las mismas fuerzas que pliegan , afallan, inyectan magma
y elevan o deprimen las masas de roca. Estas fuerzas produ -
cen modificaciones dentro de las rocas mismas, a través del
proceso llamado metamorfismo ( del griego meta, ‘más allá
¡de ” , ‘ por encima de” y morphe “ forma” , de donde se deriva <
.
Bajo la acción de la presión , se operan cambios que redu-
cen el espacio ocupado por la masa de roca. Estos cambios
i •
*»
: ;
&
ga -
308 METAMORFISMO Cuando las rocas quedan sepultadas a una profundidad i de la roca, o de una fuente externa , se introducen iones que METAMORFISMO
de varios kilómetros, se vuelven gradualmente plásticas y sus
§j ceptibles al calor y a las fuerzas de deformación que act úan-
Ugeneran un nuevo mineral o hacen que éste cambie de com-
I posición, originando otro; a este proceso se le llama metaso-
jj dentro de la corteza y el manto terrestres ( ver fig. 18-2 ) , § mutismo. El té rmino se aplica a todas las transferencias ióni-
mW* Í1 tipo de la roca original es también de gran importancia
en ( cas, y no solamente a aquéllas en las que act úan los gases
m •
los resultados producidos por la sepultura y la deformación. ¡@ o soluciones de un magma .
5? |Parte de un l íquido qu ímicamente activo en el metamor-
M
m
g¡ AGENTES DEL METAMORFISMO
fismo, ya existe en los poros de las rocas, que quedan sujetos
lililí .V El término metamorfismo se restringe a los cambios en la tex 1a los agentes de metamorfismo. Se cree que este l íquido pue-
-
-’
Metamorfismo regional
metamorfismo.
p metamorfismo regional
| se desarrolla en á reas extensas,
Fluidos químicamente activos afectando frecuentemente miles de kilómetros cuadrados de
focas a varios miles de metros de profundidad. Aunque se
Las soluciones hidrotermales que se desprenden al final de oree que el metamorfismo regional está relacionado con la
la solidificación de un magma, percolan frecuentemente m ás 5
existencia de enormes cámaras magmáticas durante la for-
allá de los límites de la cámara magmá tica y reaccionan con |
jación de cadenas monta ñosas, esto
las rocas circundantes. A veces cambian y sustituyen o agre- no ha sido probado. Sus
gan iones a los minerales de la roca, para producir nuevos
Hectos pueden observarse mejor, sin embargo, en las raíces
oe viejos plegamientos montañosos y en los escudos precám
.
FIG 18-2
minerales. Cuando se producen reacciones qu í micas dentro í|
| ícos continentales. Para que estas rocas metam órficas apa-
i -
.
Capas deformadas de caliza Fotograf í a de la 1 Recuérdese, sin embargo, que la roca sólida puede existir en estado |p«can hoy en la superficie, es necesario erosionar miles de
colección Gardner, Universidad de Harvard . plástico. I ¡litros de roca que las cubren.
g*.
¡g
METAMORFISMO MINERALES DE METAMORFISMO REGIONAL . Durante el meta- -
wtales caracter ísticos, de 12 ó 24 lados, bien desarrollados ( véa METAMORFISMO 311
morfismo regional se forman muchos minerales nuevos, a|
quedar las rocas sujetas a aumentos de temperatura y de pre
_ || ¿ fig. 18-5) y, en realidad, es dif ícil distinguir un granate
!Je otro, sin recurrir al análisis químico. Un granate com ún de
sión. Estos incluyen algunos silicatos que no se encuentran ¡¡hierro y aluminio de color oscuro, se llama almandita.
en las rocas í gneas y sedimentarias, como son la silimanita La epidota es un silicato de calcio, aluminio y hierro en el
la kianita, la andalucita, la estaurolita , la almandita , el gra’ cual los tetraedros forman pares independientes entre sí. En
nate, la biotita caf é o marrón, la epidota y la clorita. |una superficie fresca este mineral es de color verde pistache;
Los tres primeros silicatos tienen la f órmula ALSi 03. Sus i
Je otra manera , tiene un color negro o verde negruzco.
tetraedros independientes de SiCb se ligan unos a otros por m La clorita es un silicato de estructura laminar de calcio,
medio de iones positivos de aluminio. La silimanita ( en ho- magnesio, aluminio y hierro. El color verde característico de
ñor de Benjam í n Silliman, profesor de Química de la Univer- |la clorita fue la base para su nombre, del griego cloros, “ ver-
sidad de Yale ) cristaliza en formas alargadas y delgadas de i- de” ( como en clorofila ) . La clorita tiene un clivaje seme-
color marrón, verde o blanco. La kianita ( del griego Kyanos !jante al de la mica, pero las pequeñas hojuelas no son elás-
“ azul” ) forma cristales azules en figura de hoja. La andalu - |S cas como las de la mica. La clorita se presenta en forma
cita ( de Andalucía, regi ón de Espa ñ a ) forma gruesos pris- I de agregados de pequeñas escamas o como escamas indivi-
.
mas, casi cuadrados. j duales esparcidas en la roca
La estaurolita ( del griego stauros “ cruz” ) es un silicato Zonas de metamorfismo regional. El metamorfismo regio-
compuesto de tetraedros independientes, ligados entre sí por |nal puede dividirse en zonas de alto, mediano y bajo grado.
iones positivos de hierro y aluminio. La estaurolita tiene un ¡ Cada grado se relaciona con la temperatura y presión al-
há bito cristalino, llamativo y f ácil de reconocer: desarrolla .
canzados durante el metamorfismo El metamorfismo de alto
prismas de 6 lados, que se interceptan , bien en ángulo de 90° , I grado se lleva a cabo en las rocas inmediatas a la cámara
formando una cruz ( véase fig. 18 4 ) , o en ángulo de 60°, for-
mando una X.
- magmá tica, más allá de la zona del metamorfismo de con-
jgtacto. El metamorfismo de bajo grado se encuentra más lejos
Los granates ( del latín granatus “ grano” ) constituyen un ¡de la cámara magmática y se hace transicional con la roca
grupo de silicatos metamórficos. Todos tienen la misma es- sedimentaria no metamórfica.
tructura atómica de tetraedros independientes de SiCb, pero Las zonas de metamorfismo se identifican mediante el uso
forman una gran variedad de composiciones químicas por de ciertos minerales metamórficos diagnósticos, conocidos
is
los muy diferentes iones positivos que ligan los tetraedros como minerales í ndices. Las zonas de metamorfismo regional
;:í
FIG. 18-4
Cristales de estaurolita de Farmingtonf
entre s í. Estos iones pueden ser de hierro, magnesio, alumi - reflejan la variada respuesta mineralógica de rocas qu ímica-
a% Georgia. Fotograf í a por Benjamin M . Shaub . nio, calcio, manganeso o cromo. Pero cualquiera que sea la mente semejantes a condiciones f ísicas diferentes, especial-
composición qu ímica de los granates, se presentan como cris- I mente de temperatura. Y cada mineral índice descubre las
1m condiciones prevalecientes en el momento de su formación.
I | La primera aparición de clorita, por ejemplo, nos dice que
iI ;
' i r -; - -
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estamos entrando a una zona de bajo grado metamórfico. La
U
lililí wm
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primera aparición de almandita, es signo de entrada a una
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m rocas de metamorfismo regional y de contacto se en-
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FIG 18 5
Cristal de granate en un esquisto de
mica. Puede verse el molde ocupado
m
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»
^
f 1* relacionadas entre sí.
i Estas y otras características del metamorfismo regional su-
o por una lutita está n bien ilustradas en Nueva Hamp-
I
anteriormente por otro cristal. Los
cuadros de la base tienen 5 cms. de I
Slmmmm .
i®
86 Ij ¡ttre *ro Connecticut, al oeste de las Montañas
A lo largo del í
¡ wáncas ( White Mountains ), se encuentran rocas que origi- .
'1r
m m,
:
!
j 312 METAMORFISMO grado, formando en una parte pizarras con clorita y en otra IJIPminerales
ricas en minerales claros, y en otros presentan abundancia METAMORFISMO 313
ü
parte con biotita. Al sureste de estas rocas, la lutita origin
se encuentra formando una filita que gradú a a esquisto Más
hacia el sureste aparecen, uno tras otro, nuevos minerales me-
. ^ oscuros. Estas bandas pueden o no presentar
foliación
iVSi®*f
o clivaje de roca.
tamórficos: almandita, estaurolita y luego silimanita. Estas iw9f ípos rocas metamórficas
lutitas metamórficas aparecen en una franja que rodea al
! batolito de la Montaña Blanca ( véase fig. 18-6 ). A mayor fx>s numerosos tipos de rocas metamórficas proceden de la
proximidad del batolito, es mayor el grado de metamorfismo gran variedad de rocas originales y de los diferentes tipos
regional Esta correlación queda indicada por la presencia
¿e metamorfismo. Las rocas metamórficas se pueden deri-
de los minerales índices en la roca metamórfica. var de cualquiera de las rocas sedimentarias o ígneas.
Generalmente las rocas metamórficas se clasifican confor-
1
í
Textura de las rocas metamórficas ^me a su textura. Algunas se clasifican también agregando el
¡¡¡ombre de algún mineral que incluyan, como por ejemplo,
8
En la mayor parte de las rocas sujetas al calor y a fuerzas esquisto de clorita, esquisto de mica, esquisto de homblenda.
iil de deformación durante el metamorfismo de contacto, los PIZARRA. La pizarra es una roca metamórfica, producida
minerales tienden a estar ordenados en franjas paralelas de un metamorfismo de bajo grado, a partir de una lutita .
granos planos o alargados. Este arreglo le da a la roca la j de grano fino y presenta clivaje de roca apizarrado, pro-
propiedad llamada foliación ( del latín folium, “ en hojas u j ducido por el alineamiento de minerales laminados bajo
Éf . hojeado"', por lo tanto formada por hojas o láminas delgadas ).
Misi ón del metamorfismo ( véase fig. 18-7). Algunos de los
la
I Las texturas más utilizadas en la clasificación de las rocas btírinerales arcillosos que forman la lutita original han sido
metamórficas son simplemente: 1 ) foliada, 2 ) no foliada ( ya I Transformados por el calor en clorita y mica. La pizarra
está
sea densa o granular ). Veamos primero las texturas no folia- j pómpuesta predominantemente por pequeñas hojuelas incolo
1!
m
lí das. En las rocas de textura densa , no pueden distinguirse a j ras de mica con cantidades menores de clorita. Se presenta
-
f simple vista los granos individuales y estas rocas no muestran I pa una gran variedad de colores. La pizarra de color oscuro
y clivaje de roca. Recuérdese que usamos el término clivaje
i para describir la relativa facilidad con que se rompe un mi - j debe su color a la presencia de material carbonáceo o a sul
Il ɧj>s de hierro.
-
i
neral a lo largo de planos paralelos. Pero nótese que utiliza - ¡
mos en esta ocasión el término clivaje de roca para distinguirlo { FILITA. La filita es una roca metamórfica de composición
X
T
del clivaje de los minerales. En las rocas de textura granular -
"
V- 1
semejante a la de la pizarra, pero cuyos minerales se presen
'
i:
y los granos individuales son claramente visibles pero , tampoco lijfcn
% en mayor tamaño. La filita es, en realidad, una pizarra
$
íü es evidente la presencia del clivaje de roca . j ique ha sufrido un grado superior de metamorfismo. Cuando
fí¡
Las rocas con textura foliada , en cambio , muestran inva - r ¡ j
» pizarra ha quedado sujeta a temperaturas que sobrepasan
Ü
§u riablemente clivaje de roca . Hay tres grados de clivaje de |
| |
: $ 250 o 300 ° C., la clorita y los minerales de mica que la
j componen se desarrollan en hojuelas de mayor tama ño, dando
i roca :
ll á la roca su caracter ístico clivaje filítico y un brillo sedoso
i!
it! 1. Apizarrado. En el cual el clivaje se presenta a lo largo i en la superficie de las fracturas recientes. Los minerales pre -
I
| í de planos separados por distancias de dimensiones micros - jldominantes de la filita son la clorita y la moscovita. Esta
Ü; cópicas. 3¡
| ¡a contiene generalmente las mismas impurezas que la pi
| -
\í
2. Filítico ( del griego phyllon “ hoja" ) , en el que el cliva- zarra, pero a veces se presenta en ella algún mineral meta -
II je produce láminas apenas visibles á simple vista. El clivaje Jprfico nuevo, como la turmalina o el granate de magnesio.
il
II filítico produce hojuelas m ás gruesas que el apizarrado. I ESQUISTO. De todas las rocas metamórficas formadas por
m 3. Esquistoso ( del griego schistos, “ dividido, divisible” ), en I Jfmetamorfismo regional, el esquisto
m
1 éste el clivaje produce láminas claramente visibles. Las super - es la más abundante. Hay
m
y ficies del clivaje esquistoso son más rugosas que las del api - toa
jachas
gran variedad
rocas í
de
gneas,
esquistos, ya
sedimentarias
que se pueden deriyar de
o metamórficas de bajo \
u FIG. 186
zarrado o filítico.
» \ Pero en todos los esquistos domina la presencia clara-
El término gneis ( palabra alemana, que se pronuncia “ nais ±> N ijfltte visible de hojuelas de algú n mineral laminado, como
1
te ? .- >
v Sección a través de Nueva Hampshire, aplicada originalmente a una roca granítica ), se le da a una talco, clorita o hematita. Igualmente comunes son los
Ii mostrando las zonas metamó rficas alrededor
ó rfica ígnea caracterizada por bandas alternas , ¡«
di / «erales
pirales fibrosos. El esquisto tiende a romperse entre los mi-
il
í del batolito de las Montañas Blancas
de los antiguos Apalaches .
roca metam o
eeneralmente de unos cuantos milímetros de espesor, de ca- - laminados o fibrosos, imprimiéndole a la roca el ca-
m forente composición mineral. Las bandas son, en muchos
1 Longitud ae la sección, aproximadamente
80 kilómetros . Según Marland P . Billings.
j Wcterístico clivaje esquistoso.
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biotita
Zona de estaurolita s
Zona de i
Silimanita- *!
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Bloque de
sedimentos
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Bloque de
sedimentos
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Zona de
I
m Zona de clorita ^ granate
i
hundido
5,0 OO' - Silimanita
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mineralS Jfcsin
Los esquistos contienen frecuentemente grandes , la roca no presenta foliació
n debido a que Esquistos comunes.
de cuarzo y feldespato, así como otras menores de
cantidad ;
tienen mismo color y el alineamiento no es 1
! .
i!
puesta esencialmente de calcita o dolomita; es de grano l
grueso y se deriva del metamorfismo de contacto o regional ¡I
de la caliza o la dolomita . No presenta clivaje do roca . El ¡
j¡
jjf
§ ü
^
rficas
scopio
formadas
estructura
. Pero
d
,
é
por metamorfismo de bualquier grado.
la cuarcita no puede reconocerse sin el
al laminarla en secciones delgadas, pode-
granos mine | Jj| identificar tanto los¡ granos redondeados originales de
I mármol difiere de la roca original en que tiene *
*
tfena, como la sílice que ha rellenado los antiguos espacios
porosos.
¡j a cuarcita pura es blanca, pero el hierro y algunas otras
|
impurezas algunas veces le imparten un color rojizo u oscuro.
Romerales secundarios que se presentan en la cuarcita, el
feldespato, la moscovita, la clorita, el circón, la turmalina,
* -
' VA |
|g Báte, la biotita, la epidota, la homblenda y la silimanita ,
¡BP de metamorfismo regional
Kf!capítulo 8 se definió el término facies, referido a rocas
Gpentarias. En realidad, tiene una aplicación más amplia:
: '
. ,
:
-
P|
^
lpiente facies es un conjunto de caracterí sticas minera
pPfft litológicas o fosilí feras que reflejan el medio en el
iipe formó la roca.
|§&teriormente notamos que, si durante cierta época se de
- FIG. 18-8
Bf* uoa secuencia sedimentaria marina, consistente en are- Roca metamórfica mostrando el alineamiento
plutitas y calizas, podemos hablar de la facies de arena, la de minerales no orientados previamente .
í Ipfe ffa lutita y la facies de caliza de las rocas formadas en
Kplepósito. De la misma manera, al hablar de las rocas
Las bandas de color claro son principalmente
ortoclasa y cuarzo; las bandas de color oscuro
-
FIG. 18 7 son biotita y otros minerales ferromanganesianos .
ít ú
óí M
•
•
i
f
;;
..
-
Cantera de pizarra en Vermont , mostrando
có mo el clivaje de roca controla el
rompimiento. Fotograf í a de la colección
Gardner, Universidad de Harvard .
^iBÓtficas que han estado sujetas a un mismo grado ge-
Bfóte temperatura y presión, se dice que pertenecen a la
BU* facies. Una facies metamórfica está constituida por un
La composició n global es el granito; pero los
minerales están distribuidos en un arreglo
sistemático , a diferencia de la mezcla al azar ,
que presenta el granito . Fotograf í a por Navios.
rte :
3
conjunto de minerales que alcanzaron su equilibrio durante asu vez & rocas clue contienen grandes y abundantes feldes - METAMORFISMO $17
el metamorfismo bajo una serie espec ífica de condic iones patos caracter *st*cos del granito, pero que al mismo tiempo
SÍ I:
Cada facies recibe el nombre de la roca metamórfica cotn úñ los
muestran , estas restos confusos de una estructura esquistosa ,
que contiene, agregando algunas veces el nombre de algú n finalmente
nen la teor ía de
rocas grad úan a granito puro. Quienes pro
la granitización , dicen que el granito es
-
mineral com ún, como por ejemplo, anfibolita de epidota .Y p°
cada roca metamórfica se asigna a la facies de acuerdo con $ resultado de metasoma tismo extremo, y que los esquistos,
!
i ó no de acuerdo g ^ ^ tas y las rocas que se asemejan al granito, pero
las condicion
composición.
es bajo las que se form ,
Para ilustrar la manera en que una roca original puede acuerdo en un punto fundamental: el de que varias rocas
i cambiar de una facies a otra , supongam os que tenemos una ] composición y estructura del granito pueden haber te-
P11 historias
I mezcla de sodio, calcio, hierro, magnesio y silicio en las pro | - ddo diferentes. En otras palabras, algunas rocas
ñ
porciones que se encuentran en el basalto , pero distribuidas j pueden ser ígneas ( véase fig. 18-10 ) y otras metasom á ticas.
I quedara sujeta |feacionistas , se ha ón entre los
® k discusi “ magmatistas” y los “ grani-
m
m.
•X' :
dentro de una lutita
temperatu ra de 200 °
. Si
C.
esta
y a
mezcla
una presi
mente el 40% del volumen de la mezcla formar ía albita;
ón baja , aproximad
a una
a
J
- j
PU
^ reducido a dilucida r qué porcentaje del
granito del mundo es metasomático y qué porcentaje es mag-
¿el 20% formar ía clorita y el 23% formar í a epidota Este es el
. j orá tico. Eos que está n en favor del origen magmático admi-
conjunto de minerales típicos de una facies
s
de
de
esquisto
que
- ver
. Tierra
vez
es metasom á
Sranito expuesto en la superficie
tico. Pero los granitizacionistas in-
]
de, formado de una mezcla de los elemento partimos
Si la misma mezcla original fuera calentada a 600 ° C ., for - porcentaje e insisten en que aproximadamente el
m\ maría un conjunto de minerales diferentes. En esta ocasión, | jS| es metasom á tico y solamente el 15% es de origen mag-
i
m ¡ orático.
aproximadamente el 26% ser ían feldespatos de plagioclasa, el
Ü
& 72% formaría homblenda y el 2% integraría cuarzo. Este con- Los magmatistas buscan todavía una explicación adecuada
i junto es t í pico de la facies de anfibolit a , a partir de la mez - al origen del magma, particularmente el de composición siá-
i
e FIO. 18-9 cla original do elementos. La tabla 18-3 nos muestra las rela - .lica Los granitizacionistas, en cambio, tratan de descifrar un
Cantera de mármol mostrando la forma en que ciones entre la zona, facies y conjuntos minerales en un
problema igualmente espinoso: el mecanismo por medio del
se asierran los bloques a determinado tamaño,
metamorfismo progresivo sufrido por rocas de ciertas compo - cual las rocas preexistentes pudieron haberse convertido en i .
—
para su uso en la construcci ón de edificios . j granito.
Fotograf í a por Benjamin Ai. Shauh . siciones.
ORIGEN DEL GRANITO TABLA 18-2
Productos del metamorfismo regional *
El geólogo del siglo xvm, James Hutton , asentó en una oca-
|
Mnwaa ««j mm wmmmmm
J
SSfflS
‘
a Pizarra Biotita Biotita-granate Esquisto de biotita Esquisto o gneis
metamórfica producida a partir de rocas preexistentes i
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318 METAMORFISMO %
ASUMEN METAMORFISMO 319
f -smm& zmm -
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IBS®! «K8liir
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i Foliadas, no foliadas.
JClivaje de las foliadas: apizarrado, filítico, esquistoso.
Tipos de rocas metamórficas .
Foliadas: pizarra, filita, esquisto.
M
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|
Ligeramente foliadas: anfibolita.
Bandeadas: gneis.
|lo foliadas: má rmol, cuarcita.
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Conjunto de minerales que alcanzaron su equilibrio durante el
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j metamorfismo.
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«IKílli» »
Ilpfts» H., Francis J. Turner, y Charles M. Gilbert, Petrog
A; ’
V.
i:
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Terremotos
t
c
HEMOS VISTO repetidamente en capí tulos anteriores cómo EFECTOS DE LOS TERREMOTOS
las rocas de la Tierra muestran evidencia de cambios ince-
santes: la inundación de los continentes sobre los océanos y CAUSA DE LOS TERREMOTOS
la retirada de éstos, del material separado de las continentes PROFUNDIDAD DEL FOCO
y transportado y acumulado en geosinclinales, y el levanta-
miento de estos sedimentos, para formar altas cadenas mon - INTENSIDAD DE LOS TERREMOTOS
;f ¡añosas. Tales procesos a ú n contin ú an en el mundo que nos
MAGNITUD Y ENERGIA DE LOS
rodea. Naturalmente que se efect ú an muy lentamente; tan
lentamente que el hombre no puede observarlas a primera TERREMOTOS
vista. Pero ciertos datos clave nos indican claramente que
DISTRIBUCION DE LOS TERREMOTOS
todavía contin úan actuando. Entre los indicios m ás impor-
tantes est á n los 150,000 terremotos que acontecen en el mun -
do cada a ñ o.
Los terremotos son las sacudidas causadas por las fuerzas
interiores del globo cuando las rocas que han sido distorsio-
| nadas m ás allá de su resistencia , finalmente se rompen . Son
evidencia de la deformación de las rocas y revelan las regio-
I i '
ns
$
donde está n sucediendo cambios en la corteza terrestre.
&15CTOS DE
Im
Kt
LOS TERREMOTOS
Ü m !np * \
i- * ^ mayor
iM
j parte de las personas se interesan en los terremotos
vmmlos e^ectos que éstos tienen sobre la corteza terrestre,
'
i J» . •>
v \ i los seres humanos y sobre las estructuras. De todos los
lit 1
/| Wernotos 9ue suceden cada a ño, probablemente sólo uno
¡i I ¡ps producen efectos espectaculares, como deslizamientos
|
P tierra, levantamientos o depresi ón de grandes masas de
i f¡¿ y aproximadamente unos cien de ellos son lo suficiente
| -
i i • i •
||íte fuertes cerca de su origen, para destruir vidas huma-
y propiedades. El resto, sin embargo, son demasiado
• •
i|
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wm
rv-
i»
si
i %
^
Bes para causar efectos importantes.
rapida.—
total de 366,262. La propagación del fuego
ciudad de medio millón de habitantes
A las 12 hrs., habían
§$ de las estructuras de la ciudad, y al finalsido
0 quemadas el
la ciudad quedó
— TERREMOTOS 323 í
ruptura produjo vibraciones que se esparcieron con tal ener completamente destruida ( véase fig. 19-1 ) .
gía, que causaron serios destrozos en un á rea de 145
|| ¡!
f |Jap fuego causó también gran mortandad en
este
metros de largo y 100 kilómetros de ancho a lo largo d$ ]a
costa. Cuando comenzó el terremoto, el profesor Akitsune |
| | | ón. Un caso espectacular aconteció en Tokioterremoto , en una
Imamura estaba sentado en su oficina del Instituto de Sis
mología de la Universidad Imperial de Tokio. - ^¡g^¡
ficie abierta de 100 hectá reas, en la margen
§jo;$urnida. La gente se había reunido allí con sus pertenen
|¡buscando refugio contra el fuego que les rodeaba. Ha --
¡
oriental del
^ ^
ti
techo caían haciendo gran estrépito, me
y pregunté si resistir ía el m 10 t0d d aÍre reSpÍra
-
edificio. Pude determinar con exactitud la dirección de los prin jft reemplazá ndolo por humo ° y llamas. ° '
r! cipales movimientos, y encontré que éstos eran aproximadamente |<g s estad ísticas finales del gobierno, para
toda área del
del noroeste o sureste. Durante los siguientes 10 segundos, el mo- | :
Mii devastada por este terremoto, informan de 99el,333
!
muer-
II vimiento, aunque violento todavía, comenzó a ceder un tanto y su desaparecidos y 103,733 heridos, con un total
carácter cambió gradualmente; las vibraciones eran m ás lentas, | de
i
II | |
$| 2 casas completamente destruidas.
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d&xssszT* «í¿as
v hora y media después n üestro instituto estaba envuelto en densa|
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dirección del viento hicieron crecer considerablemente |
afectada por la conflagración. A las 18 hrs., el
casas de Tokio se habían incendiado. El fuego se
a las 58 hrs., quedando el 71% de las casas consuming WSm
^
jj|| j m
U: ¡
.
EIG 19 1
*
L J
m
TERREMOTOS Da ños causados a las estructuras WM entonces cuando se dio cuenta de que había visto un TERREMOTOS 325
Después de esto el agua se levantó en varias oca-
u
í
i
Los edificios modernos bien .
dise. ñados
. y .construidos con
una j ¿ones p<>r encima de sus niveles de marea alta , y despu és
estructura de acero, pueden resistir aun las sacudidas de h Ipretiró como absorbida por el océano,
: más fuertes terremotos. En el terremoto de Tokio en 1923 i Punzando * en las aguas de Alaska , donde aconteció el
Mitsubishi qued ó rodeado estas
i el edificio del banco
viejas construcciones que sufrieron grandes da ños, sin sufrir
de muchas ° as slsmicas marinas se propagaron en for-
semejante a la de las que se forman al dejar caer una
m sH
i
1[
fc Ü :
ciudad de México, el edificio de 43 pisos de la Torre Latino.
americana resistió las ondas sin sufrir da ñ o, mientras los edfe
^J¡lsuS
él deterioro. En el terremoto del 28 de julio de 1957 en la piedra en un lago. Pero estas olas eran de una longitud enor-
^
crestas esta an como a 160 kilómetros de separación
cent ímetros ni metros, sino kil ómetros de distancia. Las
s.
•
'
ficios contiguos quedaron seriamente afectados. j* barrieron a través del océano Pacífico, moviéndose a la
m
m Las chimeneas son especialmente sensibles a las vibraciones í JP**® ve oc a ( -
^ ^^ casi 800 kms / hr. Al pasar por puntos
m
igil
de los terremotos, por la tendencia a sacudirse en una direc.
ción, mientras el resto del edificio se mueve en la otra. Por
^
habí a em arcaciones, estas olas no fueron percibidas,
que cn una Pr°lun(hdad de agua de 3,000 metros una ola
Lí í ;
m
I lo tanto, las chimeneas
del techo . En New
se rompen
Hampshire , en
frecuentemente
1940 , dos
a la altura fe «n mctr0 de altura > con crestas a distancia de 160 kms.,
terremotos d é- jjjJ detectan. Su efecto es semejante al de un terreno que
MB
ill biles arrancaron docenas de chimeneas sin causar ningú n i # eleva un metro después de caminar 160 kilómetros; sim-
otro da ñ o. En contraste, los tú neles y otras estructuras sub- l Énente, no es apreciable. Pero al llegar a Oahu y a las
i
m
ill
fuertes , ya que se mueven corno una unidad junto con la roca |
J
terrá neas son poco afectadas, aun por los terremotos más 0S costas del Pacífico, el efecto fue dramá tico. La energía
j ie había movido miles de metros cú bicos de agua en mar
m que los rodea . ligio, se deconcentr ó en unos cuantos metros de agua sobre
m El grado de da ñ o que sufre un edificio por las ondas de costa poca profundidad. Aqu í el agua form ó gigan-
aí
pipí
un terremoto depende, en gran parte, del tipo de terreno | j S¡» crestas, quey aumentaban en altura, hasta barrer por
sobre el cual está construido. En el terremoto de 1906, en San encima de costas varios metros por encima del nivel normal
¡ marcas: diez metros en Oahu , dieciséis metros en
*
lisI
if
Francisco, los edificios construidos sobre arenas h úmedas, : i¡
grava o arcilla sufrieron doce veces m á s da ñ o que las -
estruc
|
Hawaii ( véase fig. 19-2 ) .
turas similares construidas sobre roca sólida en las cercanías. Estas mismas olas sísmicas marinas continuaron barriendo
l««!í! Este factor es el responsable de la aparente distribución errá- i través del Pacífico, y 18 horas después de haberse iniciado,
tica de los da ñ os causados por algunos terremotos. Jgaron a Valpara íso, Chile, donde a ú n conservaban sufi-
—
í »j Maremotos P
—
Jgnte energía después de recorrer 13,000 kms. para elevar
ÍVel de las aguas metro y medio. Algunas todavía regre-
Si en alguna ocasión tiene usted la fortuna de asolearse en |
,. .
| JfP a his costas del otro lado de Hawaii, 18 horas después.
| hecho, las mediciones de marea mostraron que las olas
la playa de Waikiki, y nota que el agua se retira repentina laicas marinas rebotaron de un lado para el otro de la cuen -
*
terre
Jap una hora o menos después de que hubiera tenido Cuerpo de Ingenieros del U .S . Army .
to por deslizamientos de tierra submarinos durante un *
tsumfiú
| |
| |j
moto. Estas gigantescas olas se llaman maremotos o |)
( palabra japonesa, que es igual en plural que en singulat |
*
/
*.
hawaiianas los han sufrido 30 veces desde su descubruftie|
por el capit á n Cook en 1778. ,
la
a
is!» 1
I
i
.
^
esposa V1
^*5y'
riño Francis P Shepard y su V1
ÜÉ> í
• V tana a tiempo de ver las aguas del mar borboteando
:: alto montículo, que se acercaba hacia su , vio
un
tomó su c á mara , pero , cuando lleg
ilusión cómo las aguas del mar se retiraban á
cia el océano. El nivel del mar
ó
baj
a
ó
la
rá
puerta
^^
casa
r pidameijw
pidamente
de$*
mm
¡II
fe
m
g?-V< mm
1
m
I TERREMOTOS lugar. Una vez localizado el epicentro, si éste se encontraKP TERREMOTOS 327
dentro del océano Pací fico, se pod ía pronosticar el tiempo 1*
326
m
^
ñ
m
mi llegada de las olas sísmicas marinas a las costas que estal P
en peligro. Sin embargo, un detalle faltante era el de sá
qué terremotos dar ían lugar a la formación de olas sísmio
hfA
^
m
marinas y cuáles no. El comandante C. K. Green , del &pSS
m vicio Geod ésico y Costero de los Estados Unidos, ideó §S ]¡
i artificio capaz de detectar la particular elevación o descenso
de la superficie de los océanos osociada con las olas s ísmicas
II .
marinas El instrumento identifica las diferencias en el perío -
I do de las olas, pasando por alto tanto a las olas causadas por
m
IU
i
el viento como al movimiento de las mareas. Cuando hav
m olas espaciadas de 10 a 40 minutos, intervalo característico
81
Ii de las crestas de las olas sísmicas marinas, suena una alarma
ljií
El sistema de previsión resultó muy efectivo el 4 de no .
t
viembre de 1962 durante una sacudida bajo el mar, frente a
|
é
la península de Kamchatka a las 17.07, hora de Greenwich FIG. 194
Dentro de la hora siguiente, con la ayuda de los informes
i
¡I
m
de las estaciones sismográficas de Alaska, Arizona y Califor - Un camión de correos está medio sepultado
en los escombros de una zona residencial
i nia, la de Honolulu localizó el terremoto a los 55° latitud en Hilo, Hawaii . Las olas sí smicas marinas
*
m
i
norte y 158° de longitud oriente. Los informes de las esta
ciones de observación de Attu y Dutch Harbor indicaron que Ii
- '
del terremoto de Chile del 22 de mayo de 1960
devastaron la comunidad . Wide World Photos .
I
II
.
el terremoto había provocado la iniciación de olas marinas |jpmció que las olas sísmicas marinas iban corriendo sobre
N
m Por consiguiente, Honolul ú calculó el tiempo que tardar ía la JfPacífico, se lanzaron avisos previniendo el peligro, reeo-
m
m
a iií
primera ola sísmica en llegar a Oahu y Hawaii, así como
a otras de las islas hawaiianas ( ver fig. 19-3 ) . La ola llegó a |
J Rendando la evacuación inmediata de las áreas costeras y
{rediciendo correctamente la hora de llegada de las prime -
i Honolulu a las 23:30 horas de Greenwich , 6 horas y 23 mi- * ps olas. Estas llegaron a las 6 horas de difundidos los avisos
m nutos después del terremoto de Kamchatka. En poco más 5 después de su comienzo lejos de América del Sur. La
t!
de 3 horas, Midway inform ó que qued ó cubierta por 2.7 me - P
circunst ancia de que mucha gente no escuchara los avisos
i
im tros de agua al llegar la primera ola. En Honolulu e Hilo, | o lugar, sin embargo, a que se perdieran 61 vidas en Hilo,
. j
las olas no se retrasaron tanto como las de 1946. Los daños f mayoría aplastadas o ahogadas; 282 fueron lastimadas lo
ü
M
H .
vida gracias, en gran parte* al sistema de previsión Los ins- ¡ ¡ .
se estimaron en 800,000 dólares, pero no se perdió ninguna |suficiente para necesitar hospitalización y atención médica,
J¡9 casas fueron destruidas o seriamente dañadas ( ver fig.
trumentos del comandante Green todavía no habían sido ins- |84), estimándose los daños totales en 20 millones de dólares ,
i
:
í¡
m talados en la costa de América del Sur en 1960, cuando una i feas 9 horas después de azotar Hawaii y . m ás de 22 horas
serie de fuertes sacudidas culminaron en una, a las 19:10
Ü i '
III
de mayo de 1960 . No obstante, la
jéspués de comenzado el terremoto, estas olas sí
las
smicas ma -
i hora de Greenwich , el 22
existencia de olas sísmicas marinas pronto fue claramente
llegaron con estrépito a las costas de Honshu y Hokkai
® én el Japón. Allí, a más de 17,000 kilómetros del punto -
comprobada a lo largo de 250 millas de costa marina devas- pife partida, mataron a 180 personas, afectaron seriamente las
IS
,
í \
II tada en las cercanías de Valdivia , en el sur de Chile. Comoy * feas y los medios de vida de otras 150,000 y causaron da ños
de costumbre, Honolulu hab ía calculado la localización se ii estimados en cerca de 500 millones de dólares .
i hora del terremoto submarino; de esta manera, cuando |
| Afortunadamente sólo una fracción extremadamente peque-
1 & de los terremotos submarinosj causan olas sísmicas marinas.
m
M n 1 Balizamientos de tierra
y . v>
* y ] En las regiones donde existen muchos cerros de laderas abrup-
; |
|
|los
,/ ; terremotos vienen acompa ñados con frecuencia de
¡ feslizamientos de tierra. Estos
Iffl deslizamientos se producen
ptro de una zona que rara vez sobrepasa los 30 o 50 kiló-
«I
, ! 'Betrosáreas
de radio, si bien los terremotos muy fuertes han afec-
hasta de 120 kilómetros de radio ( Anchorage,
1
ISí
®t O. terremoto originado en la sonda Prince William, el
7 P de marzo de 1964 ).
| Uno de los peores deslizamientos de tierra causado por un
P7,
¡flphoto, del que se tenga noticia, se registró el 7 de junio
É»
1
B962. Se perdieron más de 20,000 vidas y muchas propie-
*
. s
'ades fueron destruidas en un gran sector del por entonces
Iñ
-i
¡Üi
í¡ A
i i
FIG 19 3
-
. -
Estimaci ón del número de horas que tarda
una ola sísmica marina en alcanzar las de
i sZtfs hawaiianas , considerando el origen los
terremotos en diferentes puntos del Pac í fico.
Según Joseph Bernstein, en Scientific
^¡
fcioso pueblo de Puerto Real (Port Royal ), Jamaica. Toda
* §ona de los muelles fue lanzada al mar, junto con varias
Jlcon edif icios de ladrillo de dos y cuatro pisos. Las casas
rillo y otras construcciones habían sido fabricados sobre
y grava sueltas y tierra de relleno. Sacudidas por el
American, agosto de 1954 .
I i
i , j:|
mi
a.- aa
II =A
A
m
ñ “
de
de loess
que
, uno de los i
jgKued á
vaca cayó en una de tales grietas y quedó sepulta-
nclole solamente la cola afuera ; pero no se ha con-
I más impresionantes deslizamientos
dan . El nú mero de muertos fue de 100
tierra
,000 . Grandes
de material de la superficie se corrieron mas de 1.5 kilóme-
se recuer-
masas l ó elo ning
absorbido
ú n
todo
caso en el que la roca sólida se haya abierto
.
***:i
m ia
I
II tros , y algunos de los bloques desplazados destrozaron ca
minos, á rboles y casas.
- Cambios en el nivel del terreno
— Cerca de la fecha en que acaeci ó el terremoto japon és del jggunos terremotos vienen acompa ñados por cambios en el
siti *** . •
ir
L 923, un gran deslizamiento movió un valle como si fuera! Si del terreno sobre extensas á reas. La superficie se ha
ft
» vi
— .i* '
•. una pared de agua a una velocidad de alrededor de 1.6 kiló-
?•
*
-X Í
ferrocarril en la desembocadura del valle. Ifin Missouri y
ha inclinado
Tennessee , durante las sacudidas de 1811,
$ En los alrededores de Hebgen Reservoir, Montana ,^ se pro- depresi ón del terreno form ó el lago Reelfoot de 50 Km.2,
L, m dujeron varios deslizamientos de tierra cuando el á rea fue |
| a
l Üdo ésta solamente una parte de los miles de kilómetros
violentamente sacudida por un terremoto poco antes de la Ijjllrados que se hundieron. Al mismo tiempo se formaron
m & media noche del 17 de agosto de 1959 ( ver fig. 19-5 ) . Mu-
WL _
íí
¡iáp si m federal U. S. 287 se desplo- i muchos otros lagos y 500 Km. 2 de bosques quedaron inun-
I iSli ü mmmM
- chas secciones de la
4 carretera
dados.
marón al río Madison. Un deslizamiento gigantesco originó
II A
mmm
rotura y desprendimiento de rocas del frente de una monta -
Ipi los alrededores de la bah ía de Yakutat, Alaska, hubo
FIG. 19 5 -
Deslizamiento de tierra en Rock Greek . Es uno
de los varios deslizamientos que tuvieron
ñ a que bordeaba al río. Este enorme bloque
metros de ancho, 400 metros de altura y 120 metros de es-
de
f
^ É ciones
septiembre
alrededor
y depresiones en 1899. Entre los días 3 y 29 de
los
del
investigadores
instrumentos poco sensibles que funcionaban
mundo
que
registraron tres fuertes terremotos. Los
acudieron a esa apartada regió n a ñ os
i lugar en Montana el 17 de agosto de 1959 . de 130 metros sobre la ladera opuesta. La masa contenía 31 |oiás tarde, encontraron una gran profusión de lapas 6
i
I Foto por Gordon Oakeshott . millones de metros cú bicos de material Este . repres ó el río ,
ladheridas
muertas ,
i
i mu y el agua retenida formó el lago Earthquake , de unos 10 ki- a secciones elevadas de la costa primitiva . No muy
t ñ
lómetros de largo y 55 metros de profundidad . Durante los
jlejos, bosques completos habían quedado inundados bajo el
i - llar . Los geó logos encontraron cambios en el nivel del terre-
meses siguientes los ingenierps construyeron vertederos y pro j so sobre una superficie de 75 Km.-, cambios que variaban
tegieron las laderas, para convertir este lago en una presa
I desde depresiones de 1.5 metros hasta elevaciones de 15
permanente. i metros .
Las capas de roca que cayeron fueron esquistos y gneises
que estaban intemperizados, agrietados y relativamente sua - |
j Los 640 kilómetros de la costa sur-central de Chile, que
¡
ves; había también una gran cantidad de mica y arcilla en
estas rocas
nerón devastados por una serie de terremotos en 1960, su
frieron cambios de nivel notables en algunos lugares. El lado
-
m
¡ muchas juntas. Los planos de estratificación de
accidental de la pen ínsula de Arauco se levantó 1.20 metros,
que estaban fuertemente inclinadas hacia el r í o , descansaban )
marmorizada que , en efecto , j formándose nuevas playas. La isla Mocha fue elevada 2 me-
sobre una masa de dolomita ¡tos; pero la mayorí a de los cambios de nivel consistieron en
sostenía la ladera de la monta ña. Probablemente la dolomitay í hundimientos. Valdivia
se cuarteó por la primera sacudida; entonces los esquistos era un puerto de río, pero el cauce
FIG. 19 -6 gneises cuya base se había movido y la acci ó n lubricante de IJl ío se hundi ó lo suficiente para permitir que el agua del
Grietas en el . pavimento, causadas por un
la arcilla y de la mica , precipitaron la ladera al r í o. avanzara e inundara terrenos aguas arriba de la ciudad.
terremoto en Tokio, Japón en 1923. ¡Como resultado del hundimiento e inundación se perdieron \
Foto por L. Don Leet. IpOO hect á reas de praderas productivas y de tierra de cul- FIG. 19-7
Grietas en el terreno
relación .
\ B ( ver fig. 19-7 ) . Campos de cultivo de un rancho cerca de
Valdivia, Chile, inundados cuando el terreno
Uno de los temores m ás persistentes del hombre en trague
7 .
-> I
se hundió durante los terremotos de 1960.
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i \ Xí
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- r ~; mm- »T A
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—— con los terremotos es el de que la tierra se abra y sesido a i- / Ijg*
v'
todo lo que está a su alrededor. Tales temores han como i ' ncio tiene lugar un terremoto, las vibraciones
mentadas por leyendas incre íbles, así como por cuadrosen un »
el de la fig. 19-6, que muestra grietas superficiales
^ el aire con frecuencia y producen ondas de sonido
del terreno
Foto por John H . Hodgson.
m
g, •
li
- i *
MM
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li-
:: !
¡1 CAUSA DE LOS TERREMOTOS
|
]|| jo estas presiones, las rocas cambian gradualmente de for-
Hace siglos se creía que las misteriosas sacundidas de lad | j pero resisten m ás a medida pie aumenta la presió n hasta
I
!!
Tierra eran provocadas por la intranquilidad del monstruo
que se supon ía estaba sosteniendo al mundo. En Japón $e
j
^ (
Los Andes
!! TERREMOTOS
Millas Hawai fABLA ld 1- Intensidad de un terremoto, seg ún la escala de Rossi Forel -
^^ |
I o ES
| c5HÜa Millas
j
i
TERREMOTOS 333
R 20 H
w
•+• o
Manto 20 í
I. Registrable por instrumentos; sentido solamente por observa
s! ¡i • •• dores experimentados, que está n en reposo.
-
i¡Jp]I. Sentido por un reducido n ú mero de personas en reposo.
I
r i IIJ. Sentido por varias personas en reposo; suficientemente fuerte
*
1
í
que ciertos terremotos son pequeñ os y otros de grandes pro- ?
porciones. Por ejemplo, el terremoto de 1906 en California í
m
ffl liberó una cantidad de energí a equivalente a la de un millón !
j
t
\ de bombas A ; en contraste, una bomba A tiene una energí a A
II! ! r)
.J
» •
i
1«
100,000 veces mayor que la del terremoto más pequeño.
Los levantamientos realizados en 1922 y en 1916 indican V (
* \
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m8 i
i i.
puede ser liberada por terremotos futuros. i
i;
m - f\ -
i
m
PROFUNDIDAD DE FOCO i .r i
Ii W' /
Wmi
i En sismología , que es el estudio cientí fico de los terremotos,
se usa el término foco para designar la fuente de origen de
i
V
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1g -i
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\ V
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un conjunto dado de ondas de terremoto. ¿Cuál es este ori- /
/
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x : :
R! m el tratar de fijar estas dimensiones con mayor fidelidad cons
*
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mwyy¿mmrn
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m
;A: A tituye un verdadero problema, todavía sin solución . | ggip
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B!
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M En todo caso, el foco de un terremoto está generalmente | §:
a alguna profundidad bajo la superficie terrestre. El área . ||
la superficie que se encuentra verticalmente encima ciei en : illlBllllfe
constituye el á rea epicentral o epicentro, del griego epi ,
J g, 3
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cima” y centro .
i J
jovte
Los focos se han localizado a todas las profundidapa * |y : . -
m
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N
í í -
hasta los 700 kilómetros, que es poco más' de la décima :
^ v- FIG 19 12
Mapa isosismico del terremoto de Charleston,
Carolina del Sur, el 31 de agosto de 1886.
fe! k' i:i
iüiM-
~'p
I
¡mi
nil
334 TERREMOTOS ron focos someros; el 12% fueron de focos
3% restante correspondió a focos profundos.
intermedios y el —
Bpdida en el terremoto , siendo correspondientemente dis-
® yios resultados. La energía liberada por un terremoto
TERREMOTOS 335
Ii!
i
I
si ^
tintos
BÉ jÜgnitud 8.6 es tres millones de veces mayor que la de
¡ijlerreinoto de magnitud 5 ó que la primera bomba atómica
INTENSIDAD DE TOS TERREMOTOS
¡ggi mencionada.
1
i El cómo especificar la magnitud de un terremoto ha con$ti
I tuido siempre un problema. Antes del desarrollo de la sisi o
I
i
i
logia instrumental moderna, algunas de las primeras invest
gaciones sobre los terremotos utilizaron varios m étodos para
^! B ibución de los terremotos
^Mi
§§primer estudio estadístico general de los terremotos, que
i
i intentar describir la intensidad de las sacudidas. En alguna ó en consideración tanto la energía liberada como las
f
I región apartada, un misionero podr í a llevar un diario de M
- profundidades de foco, cubrió los a ños de 1904 a 1946. Este
i
$ rremotos, clasificándolos como débiles, fuertes o muy fuertes reveló que hubo, a ño con a ño, amplias variaciones en la
siendo esto, en el mejor de los casos, una escala personal. En energía total liberada, así como en el n úmero de sacudidas
i Italia en 1874 y en Suiza en 1878 se desarrollaron escalas . El
individuales promedio anual de terremotos de foco somero
8sí arbitrarias que culminaron, poco más tarde, en la escala de | ¡
|pL en la tabla 19-2 de acuerdo con su magnitud.
1 -
Rossi Forel, en la que se combinaron los esfuerzos de M. S
II de Rossi, director del Observatorio de Geodin ámica en Rocca TABEA 19-2 Promedio anual de terremotos de joco somero .
di Papa, cerca de Roma, y de F. A. Forel, de Lausana, rniem - ( 1904-1946)
% bro de un comité comisionado por la Sociedad Helvética cíe
g Ciencias Naturales para el estudio de los terremotos en Suiza 1 TERREMOTOS MAGNITUD PROMEDIO
I?
1 durante el ú ltimo cuarto del siglo xix. La escala de Rossi -
í
ANUA! .
I Forel ( ver tabla 19-1) fue utilizada en todo el mundo du- pande —
7.7 8.6
7.0— 7.7
21
12 y Observados realmente
- rante medio siglo. Bi ÍPnte - — -
FIG. 19 13
m S::
I Destructivo potenciai 6.0 7.0 108 ,
a De acuerdo con esta escala, los efectos de un terremoto se i
5.0— 6.0 800 ^ Estimaciones para to-
Localizaciones de los focos de 3 ,737 terremotos
ti m clasificaban según 10 grados de intensidad . Sin embargo, la 4.0— 5.0 6,200 da la Tierra , basadas
que ocurrieron en 30 años ( 1899- 1910;
1913- 1930, inclusive ), señalados en la
Im escala ten ía limitaciones definidas desde un punto de vista
cient ífico. Por ejemplo, la determinación del sexto grado de
3 0— 4.0
, 49,000 * en el muestreo de re-
giones especiales.
proyección de igual área de Aitoff .
Este mapa destaca la importancia de las
m£ £ |g|K ! v 2.5— 3.0
j intensidad inclu ía “ el despertar general de aquéllos que duer - 100,000 ^ regiones ae relativamente poca actividad
sí smica, puesto que no muestra el número de
i
!III
£ í$
men; el toque general de las campanas; oscilación de los
candeleras; paros de relojes; algunas personas asustadas aban -
|
Seg|B. Gutenberg y C. F. Richter,
Upon Univ. Press, 1949 ).
Seismicity of the Earth ( Princeton: repeticiones en centros activos tales como Japó n.
Preparado por L . Don Leet .
m
SI donan sus casas” . Sin embargo, un terremoto de este tipo en
m Italia o Suiza, podía no despertar siquiera a un ni ñ o en el §§!número anual de terremotos de foco somero, suficien-
s Japón , o podría causar una estampida en Boston . 1 píente fuertes para ser notados por cualquiera que estu-
*im
iig Mediante tarjetas postales, cartas y entrevistas, los investi- ¡pra cerca, excedió, segú n se calcula, de 150,000 durante el
¡
gadores hicieron encuestas acerca del nú mero de personas |J
¡|
eríodo comprendido entre, 1904 y 1946. Gutenberg y Richter
1 que despertaran, del crujir de pisos y del ta ñer de las cam- | |
l Íkn que el n úmero total de terremotos verdaderos “ bien
I
II
panas, provocados por cada terremoto. De esta manera mar - |¡fuera ser del orden de un millón cada a ño” , y las estaciones
j Jjiregistro distribuidas a través del mundo aportan datos por
caron los lugares que habían sido sacudidos con parecida
Rjitál de 600 terremotos al a ño.
11I
I
intensidad, y los unieran en un mapa con lí neas isostsmicas,
o líneas de igual intensidad de sacudimiento ( ver fig. 19-12 )
ajg
n
mm
Un terremoto de magnitud 5 libera aproximadamente
misma cantidad de energía que la primera bomba
probada en el desierto de Nuevo México el 16 de í
1945. Por supuesto, 1 la energía se aplica en formas muy
uhtfjjg^
Hf —
rentes altamente concentrada en la bomba y extensanien
Scale' ^
- 1 , "An Instrumental Earthquake Magnitude
C . F. Richter !
mM Bull Seis . Soc . Am ., XXV ( 1935), 1 -32.
if
1
mm
wí>¿
1
H '
,
336 TERREMOTOS tos que tienen lugar en la zona más activa, alrededor d I \ energía má xima liberada por un terremoto es progresi- TERREMOTOS 337
í bordes del océano Pacifico, representan poco más del 80 l°S iÉlitc menor a medida que aumenta la profundidad de
ciento de la energ í a total liberada en todo el mundo. La Por i ® 7 más grandes terremotos de foco somero, enlista-
^
:
|
¡- berada se concentra en un número relativamente pequeño de | i| g¡terreno, ruidos.
terremotos muy fuertes. Un solo terremoto de magnitud 8*4\ ¡
'
lh i
.-
libera casi tanta energí a como la que fue liberada en prüfe£ | |
7.
j| j yores riesgos para la vida y para las propiedades, que los
I
y>
dio, cada a ñ o durante la primera mitad del siglo xx. No 6$ 1 producidos por el sacudimiento del terreno.
¡II1 raro que la energía de un terremoto grande supere a la de | j g|extienden a causa de la rotura de las tuber ías de agua.
!PI:
18
todos los otros en un a ñ o dado , o a la de varios a ñ os juntos . | *o$ a las estructuras. p
Cerca del 25 por ciento de la energía total liberada de ISX® | | ependen, en parte, del tipo del terreno sobre el que se levan -
! a 1964 corresponde a 7 grandes terremotos de foco somero É tan los edificios, y también del tipo de construcción ,
I '
( tabla 19-3 ) . fe sí smicas marinas.
I*
i ipn causadas por .terremotos submarinos o por deslizamientos
rr
r
- TABLA 19-3 Grandes terremotos de foco somero ( 1906-1964).
Bde tierra.
r fiajan a 800 kilómetros por hora aproximadamente.
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g®8¡pi
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^
Afeamientos de tierra.
; FECHA LUGAR POSICIÓ N MAGNITUD S|
$ n causados por las vibraciones que sacuden arena suelta, gra-
31 de enero de 1906 Colombia 1° N ., 82° O. 8.6 5 j va o roca.
"
!
ii
m
ms
mis
¡ I 338 TERREMOTOS Cambios en el nivel del terreno.
ft
i Acontecen sobre áreas extensas; pueden consistir en e ,
evac¡óni
Wr
1 hundimiento o inclinación.
m
ü Sonidos o ruidos. HÉ
1
i Vibraciones en el terreno que perturban el aire con frecu m:
y producen ondas sonoras audibles. encia
1r Ii! m
Causa de, los terremotos. ff
>ento. !!
Ruptura en las rocas, conocida con el nombre de afallanii :
1« -
is
¥
;
Üí
Somero, intermedio, profundo. m
V
.
m
'
£ Intensidad ,
m¡
fá
Descripción de los efectos en varios lugares de la superficie
B
r-" : .
.
Magnitud.
Tama ñ o del terremoto en el foco.
' í
ii •
11
fe
- ¿i
'
Cantidad de energía liberada. El interior de la tierra
t.
•V
plm
í
BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA
Inc., 1942.
-
Byerly, Perry, Seismology. Englewood Cliffs, N . J.: Prentice Hall, ®IANTE EL ESTUDIO de la forma en que se propagan
. - - Vffi.: Wtadas sísmicas terrestres producidas por los terremotos,
OBSERVACION INSTRUMENTAL
m •
Gutenberg, B. y C. F. Richter, Seismicity of the Earth ( 2* ed ) , fgeólogos han reunido un caudal de información acerca
l&
m
Princeton: Princeton Univ. Press, 1954.
ifl ONDAS TERRESTRES
'7
jj¿ estructura del globo, de la superficie al centro. Pero
I
r í . íí EQrthqwtes <* nd Earth Structure. Englewood ONDAS DE CUERPO
H
^
°Cliffs,. \N.°hJn.: Prentice IB
'
*
11 Roberts, Elliott, Our Quaking Earth. Boston : Little, Brown & Co., I los primeros aparatos detectores de ondas sísmicas. Con- LOCALIZACION DE LOS TERREMOTOS
llj 1963. f ía en una esfera hueca, con un vástago en la parte su
¡| -
m- . g
\ En la esfera se mov ía un péndulo, suspendido del ESTRUCTURA DEL INTERIOR DE LA TIERRA
rHj /¿ago. Ocho canales permit ían al péndulo oscilar en las di - LA CORTEZA
¡p| :f
s principales de la brú jula. Al final de cada canal y
is ;aliendo
de la esfera había una cabeza de dragón, con
abierta , que conten í a una pequeña bola . Debajo de
ia
EL MANTO
firí;
W pon ían en movimiento al péndulo, éste oscilaba en uno ‘
P .
v , frios de los canales y empujaba las bolas correspondientes
de las ranas, que estaban esperando. Se supon ía
mL
| >. *V>
/ lj|
| fe boca
in
§1I /
/ Jipi quedaba indicada la dirección del movimiento de un
íOto. Pero ahora sabemos que el terreno se mueve en
/
fe:32. ! Jfl
,v
H
-. Ipntes direcciones conforme las ondas sísmicas atraviesan
¡punto dado. As í, aunque el artificio de Choko constitu-
:flpp triunfo art ístico, estaba basado en una concepción
Pfica errónea.
Igmisma idea general fue redescubierta en 1703 por de
m ]
tefeuille, cient ífico francés, quien colocó mercurio sobre
111
--- r
"
e superior de una semiesfera truncada, con ocho ca ~
*
m
¡. i ÉK dirección desde la que se deslizaba el mercurio a los
lentes durante un terremoto, indicaba la dirección del
ipjtede dicho terremoto.
3 í|
, *
fines del siglo xix se inventaron varios artificios destina-
m
iás
¡ !
|detener un reloj en el instante de producirse una sacu-
|
BjJna
SCSI
variante de esta idea , desarrollada en 1900, con-
1
¿
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339
JKH
as
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-. .
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v •$ ;v ' .
-.
• V
r I , , , *
<* movimientos horizontales. Una plumilla o
: ~7 V ••• • • v .~.
•i” ”
EL INTERIOR DE LA
.
n
zó ' ° Cualqmer otro aditamento conectado a k TIERRA
SB 1 340 EL INTERIOR DE LA TIERRA sistio en un péndulo que, al desplazarse por una vibración Eo^ el m 0 Vlmient° de la tierra en relación con 1
Mi
dejaba salir mercurio de un deposito en forma de embudo R] fJstra
« Terremolo
¡¡ m *
i1 Marea - baja
lTve"
^^^ "' “ < - °-
0 nente P
0
ii® !
hora, mientras la palanca oprimí a un segundo bn» que ‘
norte sur ) como -
3
;
Los primeros registros efectivos de ondas s
haberse logrado de modo accidental. Hacia fines de
í smicas' iro -í“Si ^ 56 P da Í
$ pendida
“ “
bremente haciaVSU
^
amente > a masa permanece en reposo,
un resorte de modo
arriba y hacia abajo
xix , algunos cient íficos alemanes estaban utilizando un nénir 1 S i. J S
lilii
Sata di do para registrar la ligera inclinación del terreno a causar 0 n ° . ’ ° ,°
recluiere cierta longitud de tiempo
Terremoto
°-
un lcl t
de las variaciones de peso en el Mar del Norte, segú n el fkjdp eJecutar
hacia arriba y hacia abajo- completo
11
1i lili Wli
s- i
ü
I
i
y el reflujo do las mareas. Sin embargo, a menudo sus regisieste
tros se volvían borrosos o confusos ( ver fig. 20-2 ) , condición
que duraba , a veces, dos o más horas. Casualmente descuíií
t!
*^
tiempo
emp
mas corto (
^
0 se le 1Iama período. Si el
SS mueve hacia arriba y hacia abajo
terreno que está baio Las marcas representan espaciam íenlos de I
tomando menos tiempo del cm
en un período
hora
FIG. 20-2
¡§! brieron que esas distorsiones eran originadas por las ondatra para cada oscilaci ón si el peso rebotara libremenf - el
Grafxca que muestra la inclinación del
por efecto de las mareas en el golfo terreno
de terremotos distantes. Este descubrimiento dio lugar al natopende todav ía en el espacio o cosa ”. . de
í“ Maine
^
II Tomada en la Estación Sismográ fica
cimiento de la sismolog í a modo . » ffcm» mueve '
hacia artba y ac aba “ ?1S5? de Harvard , 56 km. tierra adentro.
1 r fi
;
J-
m gonces
sirve como punto de referencia para
de la tierra siendo tan pequeño, que se le debe-
medir el movi
El sismógrafo
ente -
tv í i Las ondas que causa un terremoto se propagan en y a travé?*P“ lcar’ Para poderlo registrar ,
íli '
Un sismógrafo está diseñado para medir y registrar des luz será mayor la amplificación
Y marCa 6 m 0VÍ
Uant Jr °
Se ale G , '
P odus de 5 60
° ^
ún
-
wmM'Víí
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l
.
Í
/ mtyA
| ®|
iwpenteniente fuerte ) . Otras sismógrafos son ía ) • < b)
tan peque ñ os
api pueden llevarse en el bolsillo, o trasladar varios en
-
i EL INTERIOR DE LA TIERRA kl
Ifr os observar este movimiento
masa en la que se generan y 2 ) ondas superficiales, qUe en la trayectoria de las ondas ( ver fig. 20- 6 ) .
I
ñ i
¡¡ipi
!
i
Las ondas de cuerpo son de dos tipos generales: ondas de corrí, v. r es, hacia adelante, arriba , atr ás y abajo. I
«i presión y expansión y ondas transversales. Cada una de éstas
T "
.
0
*íi üífe
I
se define por el movimiento de las part ículas a medida que
propagan.
,
m
wmg
u; §
longitudinales, pueden transmitirse a través de cualquier
terial — sólido, l í quido o gaseoso. Estas mueven las parties
las hacia atr ás y hacia adelante alternativamente; en conse-
?
•
Ib ^ analizados
§¿pdo la
#*1
los
con
comprimidos
velocidad
fen ó menos
precisi
en
del
de
ó n
un
,
tambor
una
porque
espacio
hora
de
en
los
de
sucesos
registro
un
6 milí
aument
espacio
de una hora
metros
de
ó
. Pero
para
60
se-
centí-
ft ii \ cuencia, los materiales en la trayectoria de estas ondas se
comprimen y rarifican en forma alternativa. Por ejemplo, j
ptios o un metro o m á s, se advirtió que desaparec í a la con -
Wm ó n y surgía una gr áfica clara.
cuando damos un golpe corto a un diapasón , vibran las ex- ! fusi
| gsta grá fica consistía en tres conjuntos de ondas terrestres,
tremidades de la horquilla , expandiendo primero y compri- primeras en llegar a la estación registradora se llamaron
i miendo después las moléculas de a íre con las que se ponen en
contacto. Cada mol écula choca con la siguiente, y se pone
¡pdas primarias; a; las segundas se le dio el nombre de ondas
I
Spin en movimiento una onda de presió n a través del aire. Si las
icimdarias y las terceras fueron designadas con el nombre
fondas largas . Para referirse a estos tres tipos de ondas se
pal!
TlilisÉfci¡: ii
moléculas cercanas a nuestro tí mpano se comprimen a la ve
locidad de 440 veces por segundo, escuchamos un tono lla-
- ¿an por lo com ún las abreviaciones P, S y L. Las estudios
í ¿ detalle descubrieron que las ondas P son de compresión,
mado LA ( nota musical) ( ver fig. 20-4 ) . ¿ se propagan con una velocidad determinada por el coefi-
mp i! i
« íte : .. Las ondas transversales sólo pueden propagarse a través de ¡¿ate de masa , la rigidez y la densidad de las rocas.1 Esto
I i los sólidos. Estas ondas sacuden las part ículas, a lo largo de i pveló también que las ondas S son transversales, y que se
i
a
m ,
m VTÍ j
T í;
f
¡I rigidez y d — densidad , entonces :
4
mÍ \I \i .
::
B + 3C
* V2
d
Í3L Riendo V = velocidad de las ondas S ; G —
rigidez y d ~ den-
-
m -
; [
i ¿i
t &
P
» entonces :
y2 = G
d
“ vW,
344 EL INTERIOR DE IA TIERRA TABLA 20-1 Ejemplo de tiempo de recorrido de les ondas F y -: «
i
ín - v
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XTLÓI»CETROS DE TIEMPO DE RECORRIDO INTERVALO ?
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DISTANCIA DESDE ONDAS P ONDAS P T) S (S ¿VJ . o V
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11,200 KILó METROS. Partiendo de millares de oh,
MENOS DE
servaciones sobre todo el mundo, sabemos que las ondas p
tes
Sílll í?
.
im:
iS3 N
I i i y 3 segundos.
I Las ondas P llegar án a Indian á polis, a 3,200 kilómetros de
.
v-
;r Cuando se reconoció por primera vez el extra ño caso del
retardo de las ondas P y la desaparición de las ondas S, los
sismólogos quedaron estupefactos; pero luego se dieron cuen -
ta de que no estaban registrando terremotos precisamente, j <
‘*'
i
;
I.T.
'
rr
|
i
I
•Tí
?.
%
!
h . ;; A
í ¿V Localización de terremotos
-i.
*
En la actualidad se dispone de tablas de tiempo para las on -¡
de las olas sobre la superficie del aguas fe
^^ t
das P, S y L, para todas las distancias posibles de un foco j
sísmico. Estas está n representadas en la gráfica de la fig* i
i
de los sismólogos.
Cuando los registros de una estación indican claramente *
ondas P, S y L de un terremoto, lo primero que hace el ob |
ufl|
-
servador es determinar los intervalos entre ellas. Usando *
( c) Orbita de la
?} part ícula a medida tabla de intervalos ( ver tabla 20 1 ) , é l puede convertir -
inm J ^
chatamente éstos en distancias. Por ejemplo, si observa
.i
que pasan las otas
*
l
1 • rycg$g:. 5¿
M
+
ONDA SUPERFICIAL
I
i ondas P necesitan 9 minutos y 50 segundos para recorrer a las
i ® 6,400 kilómetros. En consecuencia, el terremoto ocurri ó ;
•
. -
FIG 20 7 Movimiento producido por los tres principales tipos de ondas sísmicas.
Ií : 4 horas 02 minutos 32 segundos.4
FIG. 20
'
*
M étodos para ilustrar o describir el movimiento 4 4 horas 12 minutos 22 segundos menos 9 minutos 50 se
gUlK
^! I
;
de las ondas superficiales . = 4 horas 02 minutos 32 segundos. Lr .
i
¿i
5
ONDAS PRIMARIAS
ONDAS SECUNDARIAS wich, el 16 de diciembre de 1920 en los alrededores de 35.6° N,
Jy 105.7°E. Ese lugar quedaba situado en la provincia de Kan-
EL INTERIOR DE LA TIERRA 347
Quecomenzaron a registrarse en Harvard, Mass.,
a 7442 Km. de distancia, 10 minutos
y 32 segundos después del terremoto. fcifc Chinaborde
, unos 1,600 kilómetros tierra adentro de Shanghai,
del Tibet.
1sobre el aislada
Esta á rea est á densamente poblada,
i •
Jjpero bastante ; sin embargo, no hubo informes acerca
J:49 o.m. 59
|¿3e los da ñ os, y el asunto pronto fue olvidado por el pú blico
¡p en general. Pero no ocurrió así con los miembros de la prensa,
quienes estaban seguros de haber sido informados errónea-
Estaci ó n sismogr áfica de Harvard,
Registro Ben íoff nortesur del mente. Tres meses más tarde un sobreviviente conmovió a las
comunicaciones modernas con la historia de una tremenda ca-
TERREMOTO RUMANO Kansu
i que ocurri ó el 10 de noviembre de 1940,
O
ITJ
- li tá strofe en el d ía y hora anunciados por la prensa,
ú a las 1:39:09: a.m., hora de Greenwich 3
.2?
¡catástrofe que mató a unas 100,000 personas y causó daños
ONDAS SUPERFICIALES incalculables, provocados por los grandes deslizamientos des-
jljcritos en el capítulo 10.
14
En contraste, en otra ocasi ón viajaron las noticias de un
|terremoto m ás aprisa que las ondas mismas. El 20 de agosto
! U de 1937, a las 6:59 p. m . tuvo lugar un terremoto en Manila
i \
•
\
|¡|
|
i
i
—
S¡ Filipmas , y la información fue trasladada con una pron-
titud asombrosa. Se transmitió a Norteam é rica, y llegó a la
i
|oficina de una agencia de noticias en Boston ; all í tomó un
í
FIG. 20 \ Duraci ó n tota) del registro, operador el teléfono y llamó a la estación sismográfica de
*
Sismograma moderno en el que un minuto se
aproximadamente 2 horas
i Harvard; en Harvard, Massachusetts, a 13,450 kilómetros
extiende sobre un espacio mayor que el Copia preparada y dibujada por Met
¡
ff Manila, 1 hora después de sucedido el terremoto, para
de
-
dado a 3 krs. en la fig. 20 2. Todas las ondas
comenzaron en Rumania en el mismo | preguntar si la perturbació n hab ía sido registrada. La con-
instante. Llegaron como se indica arriba,
Este proceso se lleva a cabo en todas las estaciones sismo-
: a causa de las diferentes velocidades y gráficas que hayan registrado el terremoto. A continuación ¡ M !versaciónsuperficiales
se desarrolló 10 minutos antes de que las ondas
trayectorias. La experiencia ha demostrado que
sísmicas llegaran a la estaci ón.
se traza un arco sobre un globo, que representa la distancia
cuando las ondas secundarias comienzan calculada desde cada estación. El punto donde se interseetan
8 minutos y 41 segundos después de la ESTRUCTURA DEL INTERIOR DE LA TIERRA
iniciación de las ondas primarias, como en todos los arcos indica el centro de la perturbación.
este caso, y cada grupo incluye una onda -
especial ( marcada pP y sS ) ellas se Aunque el procedimiento total es esencialmente muy sim- Los estudios sobre la forma de propagación de las ondas a
t
encuentran a 7 ,400 kilómetros de sus lugares ple, algunos creen dif ícilmente en su precisión. El martes, 16 través de la tierra y de las ondas superficiales a su alrededor,
de origen y a una profundidad de 128 de diciembre de 1920, los sismólogos de todo el mundo en- íÜ han aportado datos sobre la estructura del globo desde su
i kilómetros bajo la superficie de la Tierra. contraron en sus sismógrafos el registro de un terremoto ex- I: superficie hasta su centro. Tales estudios han podido hacerse
FIG. 20-9 cepcionalmente severo. Cada uno de ellos calculó la distancia m basándose en el conocimiento de la velocidad de estas ondas
Posiciones sucesivas del frente de avance de y envió la información a través de las oficinas centrales donde terrestres y de su comportamiento en los diferentes materia-
las ondas de compresión en el interior de la se prepararon varias informes. Al d ía siguiente se anunció a
Tierra. Se indican también las trayectorias de la prensa la localizaci ó n del terremoto , siendo dif ícil que otras f
* jpjfes Por ejemplo, se ha comprobado que las ondas terrestres
i
las ondas P. S y las superficies a 3
distancias diferentes, con los sismogramas
correspondientes a las mismas. El efecto
del núcleo al retardar las ondas P
y eliminar las ondas S aueda ilustrado minutos 43 segundos despu és de las 12:00, hora de Green - Jf
l
^
sacudidas menores falsearan la noticia. El comunicado indi- p¡ m á ticos que de los siálicos.
caba que un terremoto muy duro había tenido lugar a los 5
§
iajan a velocidades mayores a través de los materiales si-
^
70 V 60
—
i: corresponder ía a P por el
i!
i-i a P. retraso
r jj Basándose en los datos reunidos a partir del estudio de la
|
| -
Grá fica de tiempo distancia para ondas sísmicas .
ii
i y. j I donde
/Punto i
SL I , / registrarse las ondas S
deber ían
jjljmia de propagación de las ondas terrestres, la Tierra ha
Pr es una onda de compresión que ha
atravesado el núcleo. La lí nea de Pf se divide
H
• 20 -
- * iyr V* v H* W *** fjpF0 dividida en 3 zonas: corteza, manto y núcleo. más allá de los 16 ,000 kilómetros por efecto
del interior sólido del núcleo .
i
EL INTERIOR DE LA TIERRA
EL INTERIOR DE LA TIERRA
La corteza de la Tierra a las velocidades de las ondas sísmicas, parece
Conforme 349
348
Ia corteza debajo del Pací fico no esta dispuesta en capas
i ;
La información sobre la corteza terrestre se deriva principa], l ^que apreciablemente m ás delgada que la de los continentes.
... observaciones sismológicas.
mente de Estas incluyen las OIV lies
r i.
locales ( dentro de los primeros 1,120 I $n el4.8Pac ífico nororiental se han apreciado espesores de ape-
das P y S de terremotos kilómetros.
kilómetros ) , explosiones de dinamita y explosiones nucleares. ftl - La corteza
'
debajo del océano Pací fico est á constituida de
Uno de los primeros descubrimientos es que la corteza de la
Tierra está formada de roca sólida. Al iniciarse los estudios prócas y del . Indico
sim á ticas La composición de la corteza debajo del
acerca de la corteza un sismólogo de Yugoslavia , A. Moho-
| | ¡
j tlántico es todav í^a materia de discusión , prin-
L. .
rovicic, hizo un estudio especial de los registros de las ondas !% almcnte porque carecemos de información fidedigna res-
¡jlpto de las velocidades de las ondas que se propagan a
TABLA 29-2 terrestres de un sismo que tuvo lugar el 8 de octubre de 1809 I [favés de esta parte de la corteza. Algunos investigadores
-
í ;; La corteza de la Tierra debajo de en el valle de Kulpa, en Croacia. El llegó a la conclusión de | Estiman que las rocas sim áticas subyacen, cuando menos, en
Nueva Inglaterra . que las velocidades de las ondas P y S aumentaron en forma
brusca bajo una profundidad de unos 48 kilómetros . Este Iciertas partes de los océanos Indico y Atlá ntico, sin que estén
ESPESOR VELOCIDAD TIPO DE cambio violento en la velocidad de las ondas P y S indicaba I
ípsentes las rocas siálicas. Por otra parte, la forma de estas
I ; cordilleras oceá nicas submarinas se asemeja a la de las mon-
(km/seg)
una transformación en el material, y llegó a conocérsele como
BOCA
( kilómetros)
s ! tañas continentales plegadas, constituidas de rocas sedirnen-
la discontinuidad de Mohovovicic. Por conveniencia se ha
P
16
12.8
Capa 1
Capa 2
6.08
6.72
3.36
3.84
Si álica
Intermedia acortado su nombre y en la actualidad se le cita como el J tarias o de rocas siálicas.
6.4 Capa 3 7.20 4.32 Simática M 0 ]l0 El moho marca el fondo de la corteza de la Tierra y
t
El manto
MOHO
4.64
la separa del manto. i
Cima del manto 8.32
Debajo de la corteza terrestre se encuentra una segunda zona
LA CORTEZA DE LOS CONTINENTKS. La
profundidad del moho
L. D. Leet, “ Trial Travel Times for Northeastern . Los datos reuni - | principal, el mantoy que se extiende hasta una profundidad
America” , Bull . Seis . Soc . Am. XXXI ( 1941), 325- var í a en diferentes partes de los continentes
34 . dos hasta el presente en los Estados Unidos indican que la Ide aproximadamente 2,880 kilómetros en el interior de la
i Tierra . Lo ( jue sabemos del manto se basa, en parte, en las
aproximadamente 35 kil ó metros , y |
11 porció n m ás somera tiene
la más gruesa 56 kilómetros. evidencias aportadas por el comportamiento de las ondas P
Ha resultado dif í cil obtener datos precisos sobre la corteza ms registradas entre 1 ,120 y 11,200 kil ómetros.
¡i1 ;
terrestre a partir de las ondas de los terremotos . Sin embargo , ¡ SfComo la velocidad de las ondas P y S aumenta brusca-
las ondas generadas por explosiones de dinamita , cuya loca - Jmente igual que en el moho, ello indica que la composición
il y tiempos de detonaci ó n se conocen 3 del material cambia repentinamente. Carecemos de evidencias
lización en la superficie
con precisión, han completado los detalles. En 1941
la esta - Idirectas acerca de la naturaleza del nuevo material, pero el
la estructura de la cambio de velocidad sugiere que puede contener más mine-
ción sismográfica de Harvard determinó corteza. En la actualidad se
¡I corteza continental en Nueva Inglaterra , la que , a su vez , ha || cí ales ferromagnesianos que la
i representativa de otras secciones de los j est á desarrollando un proyecto para perforar el moho, para FIG. 20-12
resultado ser bastante explosiones de- |averiguarlo,
m-
continentes. El análisis de muchas gráficas de | Dos registros sí smicos que muestran el efecto
m
mostró que en Nueva Inglaterra la costra continental tiene |
i| j -Sabemos que el manto es sólido porque es capaz de trans-
S. Tratando de explicar los procesos de for-
del núcleo terrestre en la propagación de ondas.
En cada uno de los registros, H representa la
iu
tres capas, una con propiedades elásticas
con ello distintas clases de roca . La
diferentes
tabla 20 - 2
, indicando
resume esta |^^^f
-;
Kitir
ci ó
las
n de
ondas
monta ñ as y la tendencia de la corteza hacia la
, algunos observadores han hecho énfasis en el sen -
hora a que ocurrió el terremoto . La primera
onda P llegó a los 76.4° ( 8 ,842 kil ó metros )
I
II
1
' *V> océanos se adelgaza, con la excepción de
grueso debajo de Nevada
bre de Gran Cuenca .
, conocida popularmente con el
*
npW
1
|lR
/|
\ | S ͧ?una velocidad
^ as S viajan a través de la parte exterior del manto
de 4.6 kilómetros por segundo, y la velo-
Se incrementa con Ia profundidad. Como resultado de
a la superficie a 14,900 kilómetros de su origen
encontraron el núcleo en su trayecto . Si los
recorridos sobrepasan los 11 ,200 kiló metros
y se extienden a 14,900, se verá que P y S
deben llegar a las horas indicadas por las
MB?deobservaciones , los geof ísicos han llegado a la conclu-
1 id CORTEZA BAJO LOS OCEANOS
,
. Nuestro
XT
^ de la
^ fg que la rigidez del manto aumenta con la profundidad,
flechas en el registro más distante . Pero P .
P estructura de la corteza ajo os oc • dlpxiste una discontinuidad de carácter universal en el man-
“
se retrasa , y llega en el momento P', sin que
S o un equivalente retardado de S llegue jamás.
II
¡
observaciones de las rocas que
y en los estudios de las velocidades de
afloran en
las
las islas volcan
ondas
por los terremotos. En la actualidad éstos seperfiles de on as
L ,
han estado conv^
genera as
Distancia » 76*4
H
*
p
S - P * 9.4 M¡n.
s
\
ss
Ondas superficiales W ,
i= i y
,- FIG. 20- 11 lugares con
plementando en unos cuantos
Posición de la lí nea de andesita en el suroeste .
el
del océ ano Pací fico . Esta lí nea señalafica producidas por explosiones de dinamitaislas contribuyen a de -
i
V
lí mite de la verdadera cuenca Pací Pacen
sentido geoló gico . Sobre el ladoemotivas
del í fico ,
Los tipos
terminar los
de roca
bordes
estudiados
de la cuenca
en las
del Pacífico. La l ínea
del océ ano rocas
de —
III Escala de tiempo minutos
5 10 Punto
Punto que
deber ía
a partir de esta lí nea, las rocas
andesita ( ver fig. 20-11 ) tiene sobre el lado correspondiente corresponder
jó venes son basálticas; en el otro lado son
andesí ticas principalmente . Las islaspicos
situadas al oriente de la lí nea son
extrusivas más jó venes, constituidas de
del otro lado están formadas principalmente
basalto, mientras <Iue
de andesita- _Distancia “ I 34?1
K
a las ondas P
l p PP
a las ondas S
Iti i
i |La Tierra al girar alrededor del Sol, se comporta como una
esfera con un peso específico de 5.5; pero los geólogos han
a observado que el peso específico medio de las rocas que aflo-
I!
1l¡ ran a la superficie es menor de 3.0, y aunque las rocas de
I
&
este mismo peso específico quedaran debajo de 2,880 kiló
metros de rocas similares, su peso específico aumentaría a
-
i
II
i
i
m
-
ÍKJS&J;; t í!
m
sa
¡
mm
¿oo ¿
HHas
solamente 5.7. Los geof ísicos han calculado que el peso espe-
cífico del n ú cleo debe ser de alrededor de 15.0, a fin de dar
a todo el globo un promedio de 5.5. Para satisfacer este re-
m
m wm m quisito, se ha sugerido que el núcleo puede estar compuesto
&
& Rífe principalmente de hierro, mezclado posiblemente con alrede-
li
i
IBS8*1 m
l¡ig¡
dor del 8 por ciento de n íquel y algo de cobalto, en las mis-
mas proporciones que existen en los meteoritos metálicos .
II
Í¡S
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sálta m
V
I RESUMEN
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70°
I Sismógrafo.
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¿i.
i
1i Instrumento para registrar ondas terrestres.
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ay i \ Ondas terrestres.
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m •v> t i
i
Ondas superficiales.
II
i
i
Ipiidas L, que se propagan a lo largo de la superficie de la
II!
11 m, T 5Tierra.
i Registros de ondas sí smicas .
S has ondas ' P y S se propagan desde el foco de un terremoto
|hasta la estación de registro, pasando por el interior de la
I) Wwm
liilli f IjpTierra.
IIII gMfl
I HHi
ondas P son más rá pidas que las ondas S.
¡Ü&s ondas L viajan a lo largo de la superficie de la Tierra, des-
de el epicentro hasta la estación de registro.
ILas ondas
!£ wimm 143° L son las ú ltimas en llegar, porque viajan a menor
i H m
1 velocidad y siguiendo una ruta m á s larga.
l'feffipos de recorrido de las ondas s
lmí i i
¡ í smicas.
Se les usa para determinar la localización y la hora en que
m 1
||sucede un terremoto.
Revelan la estructura interior de la Tierra.
«
II
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ii
. -
FIG 20 13
Estructura del manto y del núcleo .
^K corteza terrestre .
Es aquella porción de la Tierra que queda .
encima del moho
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1
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! 352 .
EL INTERIOR DE LA TIERRA Se compone de roca sólida.
f! Puede subdividirse en corteza continental y corteza oceá nica .
Corteza continental .
V -