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El Capitán General Pablo Morillo recibe instrucciones el 6 de junio de 1820 desde España para
arbitre con Simón Bolívar un cese a las hostilidades. Morillo informa a Bolívar sobre el cese al
fuego unilateral del ejército español y la invitación para negociar un acuerdo de regularización de la
guerra. Los plenipotenciarios de ambos bandos se entrevistan en Trujillo y el 25 de noviembre de
1820 y el mismo día se firma el Armisticio entre la República de la Gran Colombia y España el cual
suspendía todas las operaciones militares en mar y tierra en Venezuela y confinaba a los ejércitos
de ambos bandos a las posiciones que sostenían el día de la firma según lo cual la línea de
demarcación territorial seria la siguiente:
El río Unare, remontando desde su embocadura al mar hasta donde recibe el Guanape; las
corrientes de éste subiendo hasta su origen; de aquí una línea hasta el nacimiento del Manapire;
las corrientes de éste hasta el Orinoco; la ribeza izquierda de éste hasta la confluencia del Apure;
éste hasta donde recibe al Santo Domingo; las aguas de éste hasta la ciudad de Barinas, de donde
se tirará una línea hasta Boconó de Trujillo; y de aquí la línea natural de demarcación que divide la
Provincia de Caracas del Departamento de Trujillo.
ACCIONES POSTERIORES DESPUÉS DE
CARABOBO
El Libertador logra su primera batalla en Bombona, el 7 de abril de 1822 y Antonio José de Sucre
completa la libertad de Ecuador, el 24 de mayo en Pichincha. Es importante mencionar que
Guayaquil, que ya era independiente, fue anexada a Quito. El 26 y 27 de julio de 1822 se llevo a
cabo una entrevista entre dos de los más grandes hombres del continente; Simón Bolívar y
el General argentino San Martín.
La campaña siguió muy exitosa: el 18 de marzo de 1823 las fuerzas patriotas entran a Lima, el 7
de agosto vencen en Junín y el 9 de diciembre Sucre logra una victoria en Ayacucho, batalla que
marco el fin de la dominación española en el continente. Bolívar escribió:"La batalla de
Ayacucho es la cumbre de la gloria americana y la obra del General Sucre. La disposición de ella
ha sido perfecta y su ejecución divina. Maniobra hábiles y prontas desbarataron en
una hará a los vencedores en catorce años, y a un enemigo perfectamente constituido y
hábilmente mandado. Ayacucho, semejante a Waterloo, que decidió el destino de la Europa, ha
fijado la suerte de las naciones americanas".