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Cursos CLÍNIC de Formación Continuada en

Obstetricia y Ginecología

CURSO INTENSIVO EN
MEDICINA MATERNOFETAL
Cardona (Barcelona), del 4 al 9 de marzo de 2012
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede
ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Es-
pañol de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta
obra

© 2012 Laboratorios Menarini

2012 Ergon
C/ Arboleda, 1. 28221 Majadahonda (Madrid)
Pza. Josep Pallach 12. 08035 Barcelona

ISBN: 978-84-8473-998-2
Depósito Legal: M-8323-2012
Cursos CLÍNIC de Formación Continuada en
Obstreticia y Ginecología

CURSO INTENSIVO EN
MEDICINA MATERNOFETAL

DIRECTORES:

Francesc Figueras
Especialista Senior. Jefe de Sección de Obstetricia de Alto Riesgo.
Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic de
Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Hospital Clinic. Barcelona.

Eduard Gratacós
Consultor. Jefe de Servicio de Medicina Maternofetal.
Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic
de Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Hospital Clinic. Barcelona.

Bienvenido Puerto
Consultor Senior. Jefe de Sección de Obstetricia de Alto Riesgo. Responsable Unidad de Neurología Fetal.
Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic de
Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Hospital Clinic. Barcelona.

ORGANIZA:
Instituto Clínic de Ginecología, Obstetricia y Neonatología (ICGON). Hospital Clínic.
Universidad de Barcelona. (Director: Prof. Juan Balasch)
Autores

JORDI BELLART FRANCESC FIGUERAS


Especialista Senior. Responsable Unidad de Diabetes. Especialista Senior. Jefe de Sección de Obstetricia de Al-
Servicio de Medicina Materno-fetal. Institut Clínic de to Riesgo. Responsable Unidad de Crecimiento Fetal y
Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia (ICGON). Preeclampsia. Servicio de Medicina Maternofetal. Insti-
Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. tut Clínic de Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia
(ICGON). Hospital Clinic. Barcelona.
MAR BENNASAR
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti- RAUL GARCÍA-POSADA
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia Fellow en Medicina-Materno Fetal. Servicio de Medici-
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. na Maternofetal. Institut Clínic de Ginecologia, Obstetri-
cia i Neonatologia (ICGON). Hospital Clinic. Barcelona.
VIRGINIA BOROBIO
Especialista Senior. Servicio de Medicina Materno-fetal. OLGA GÓMEZ DEL RINCÓN
Institut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia Especialista. Senior. Servicio de Medicina Materno-fetal.
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. Institut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona.
ANTONI BORRELL
Consultor Senior. Responsable Unidad de Diagnóstico ANNA GONCÉ MELLGREN
Prenatal. Servicio de Medicina Materno-fetal. Institut Especialista Senior. Responsable Unidad de Infecciones
Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia (IC- Perinatales. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti-
GON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia (IC-
TERESA COBO GON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona.
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti- EDUARD GRATACÓS
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia (IC- Consultor. Jefe de Servicio de Medicina Maternofetal.
GON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. Responsable Unidad de Gestación Múltiple. Servicio de
FÀTIMA CRISPI Medicina Maternofetal. Institut Clínic de Ginecologia,
Especialista. Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Obstetricia i Neonatologia (ICGON). Hospital Clinic.
Clínic de Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (IC- Barcelona.
GON). Hospital Clinic. Barcelona. SANDRA HERNÁNDEZ
ELISENDA EIXARCH Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal.
Especialista. Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Institut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonato-
Clínic de Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia logia (ICGON). Hospital Clínic. Universidad de
(ICGON). Hospital Clinic. Barcelona. Barcelona.
MIRIAM ILLA MONTSE PALACIO
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti- Consultora.. Resposanble Unidad de Prematuridad.
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic de
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Hospital Clinic. Barcelona.
MARTA LÓPEZ
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti- BIENVENIDO PUERTO
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia Consultor Senior. Jefe de Sección de Obstetricia de Alto
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. Riesgo. Responsable Unidad de Neurología Fetal. Res-
ponsable Unidad de Patología Malformativa.
JOSEP MARIA MARTÍNEZ
Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic de
Consultor. Responsable Unidad de Cardiología Fetal.
Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Servicio de Medicina Maternofetal. Institut Clínic de
Hospital Clinic. Barcelona.
Ginecologia, Obstetricia i Neonatologia (ICGON).
Hospital Clinic. Barcelona. JUAN CARLOS RAMIREZ
Fellow en Medicina-Materno Fetal. Servicio de Medicina
MÓNICA MARTÍNEZ-TERRÓN
Maternofetal. Institut Clínic de Ginecologia, Obstetricia
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti-
i Neonatologia (ICGON). Hospital Clinic. Barcelona.
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona. MAGDA SANZ
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti-
NARCÍS MASOLLER
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti-
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona.
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona.
RAQUEL MULA
Especialista. Servicio de Medicina Materno-fetal. Insti-
tut Clínic de Ginecologia, Obstetrícia i Neonatologia
(ICGON). Hospital Clínic. Universidad de Barcelona.
Sumario

Alteraciones del crecimiento fetal 1


M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras
Cribado y prevención de preeclampsia 15
F. Figueras, J.C. Ramirez
Preeclampsia: control antenatal 27
F. Crispi
Complicaciones graves de la preeclampsia 33
S. Hernández, J. Bellart
Ecografía del sistema nervioso central 43
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz
Ventriculomegalia 53
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanzs
Anomalías de la fosa posterior 61
B. Puerto, M. Sanz, E. Eixarch
Diagnóstico prenatal de les cardiopatías congénitas 69
O. Gómez, M. Bennasar, N. Masoller, F. Crispi, J.M. Martínez
Patología renal 77
V. Borobio, F. Figueras
Defectos de la cara y el cuello 93
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada
Defectos de la pared abdominal 103
M. Bennasar
Patología pulmonar 111
E. Gratacós
Obstrucción urinaria baja (luto) 123
N. Masoller, J.M. Martínez
Cribado de anomalías cromosómicas 127
R. Mula, A. Borrell
Procedimientos invasivos de diagnóstico prenatal 133
A. Borrell, R. Mula
Anemia fetal: isoinmunización 141
A. Borrell, R. Mula
Citomegalovirus (CMV) 149
A. Goncé, M. López
Toxoplasmosis 157
A. Goncé, M. López
Otras infecciones emergentes 165
M. López, A. Goncé
Hidrops fetal 175
V. Borobio, A. Goncé
Alteraciones del líquido amniótico 185
M. Illa, M. Palacio, F. Figueras
Manejo ambulatorio de la paciente con riesgo de parto prematuro 195
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón
Rotura prematura de membranas 203
T. Cobo, M. Palacio
Amenaza de parto pretérmino 213
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón
Control del bienestar fetal anteparto 221
M. Illa, F. Figueras
Control del bienestar fetal intraparto 235
S. Hernández
Gestación gemelar 245
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós
Finalización de la gestación. Inducción del parto 259
S. Hernández
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento 269
M. López
Alteraciones del crecimiento fetal
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

DEFINICIONES Y ETIOLOGÍA tos PEG ha recibido una considerable atención


Alrededor del 5-10% de las gestaciones presen- en los últimos años, pues esta condición es uno
tan un feto con un crecimiento por debajo de la de los grandes contribuyentes a los resultados pe-
normalidad, es decir, un peso fetal estimado (PFE) rinatales adversos. Condiciona un aumento del
por debajo del percentil 10. No obstante, este gru- riesgo de pérdida de bienestar fetal intraparto y
po de fetos no es homogéneo e incluye esencial- de acidosis metabólica, dos situaciones asociadas
mente tres tipos de fetos que corresponden a di- con el posterior desarrollo de encefalopatía hi-
ferentes grupos etiológicos: póxica, parálisis cerebral y desarrollo psicomotor
• Fetos con un crecimiento intrauterino restrin- anormal(1). El CIR es, además, uno de los prin-
gido (CIR). Son fetos pequeños con insuficien- cipales factores asociados a la morbilidad neo-
cia placentaria. Aproximadamente la mitad de natal significativa, como la enterocolitis necroti-
estos casos se asocian a preeclampsia pues los zante o el síndrome de distrés respiratorio, y se
procesos fisiopatológicos placentarios son co- ha descrito como el responsable de la mortalidad
munes para ambas patologías. en el 50% de los fetos pretérmino y en el 20% de
• Fetos pequeños para la edad gestacional nor- los fetos a término(2). Muchos factores de riesgo
males (PEG). Son fetos constitucionalmente pe- de CIR son comunes a los de presentar un parto
queños, representando el espectro inferior de prematuro y existe una asociación epidemiológi-
peso de fetos normales. ca entre ambas: el CIR es el principal factor de
• Fetos pequeños para la edad gestacional anor- riesgo independiente para parto prematuro en
males. Son fetos pequeños por una condición nulíparas (responsable de un 23% del riesgo en
patológica extrínseca a la placenta. la población) y uno de los principales factores en
La tabla I resume por grupos etiológicos las cau- multíparas(3). La asociación entre parto prema-
sas más frecuentes de alteraciones del crecimiento. turo y CIR se mantiene en embarazos posterio-
res. Finalmente, es destacable que los cambios en
el metabolismo lipídico y en los factores hemos-
IMPORTANCIA CLÍNICA táticos que ocurren en los fetos con crecimiento
El primer grupo, el de fetos con CIR, a pesar restringido son factores de riesgo en la vida adul-
de que sólo representa un 20-30% del total de fe- ta para hipertensión arterial crónica, diabetes me-

1
Alteraciones del crecimiento fetal

TABLA I. Causas más frecuentes de alteraciones del cre- nica va a residir en la patología subyacente y no en
cimiento fetal el grado de restricción que presente.

Fetos pequeños para edad gestacional normales (50-70%)


• Constitucional
Crecimiento intrauterino restringido (20-30%) FISIOPATOLOGÍA
• Primario La fisiopatología del CIR más aceptada en la ac-
• Secundario: tualidad es la vasoconstricción crónica de los stem
– Trombofilias
villi terciarios debida a la invasión trofoblástica
– Vasculopatías
Fetos pequeños para edad gestacional anormales (10- inadecuada de las arterias espirales maternas(5). En
20%) las fases iniciales de esta situación patológica, el fe-
• Causa infecciosa: to se adapta disminuyendo su velocidad de creci-
– Citomegalovirus
– Rubeola miento, modificando sus patrones de conducta y
– Herpes virus capturando de manera más eficiente el oxígeno,
• Síndromes genéticos entre otros mecanismos mediante la policitemia.
• Malformaciones congénitas:
No obstante, si la situación se mantiene, el feto en-
– Fetales
– Placentarias: síndrome de transfusión feto-fetal tra en una fase de hipoxemia que se puede pro-
• Síndromes cromosómicos: longar durante semanas. Por debajo de cierto um-
– Trisomía 18 bral de saturación de oxígeno se activan una se-
– Triploidía
rie de quimiorreceptores que ponen en marcha to-
– Delección brazo corto cromosoma 4
– Mosaicismo placentario do un conjunto de cambios hemodinámicos que
• Disomía monoparental tienen como principal función preservar el apor-
• Tóxicos: te de oxígeno a los órganos nobles, es la llamada
– Tabaco
– Alcohol centralización. Dentro de los cambios incluidos en
• Cocaína la centralización nos encontramos con:
• Fármacos: • La vasodilatación cerebral o “brain sparing”, que
– Hidantoínas
es el que ocurre a nivel del SNC y el que ha re-
– Dicumarínicos
cibido mayor atención.
• El oligohidramnios que se observa en los fetos
llitus tipo II, accidente vascular cerebral y muer- con insuficiencia placentaria se considera otra
te por enfermedad coronaria(4). de las manifestaciones de la centralización.
El segundo grupo, los fetos PEG normales, a pe- • La redistribución cardiaca donde el corazón fe-
sar de no presentar tantas complicaciones como el tal se encuentra en una situación que no es fi-
grupo de fetos CIR, sí que ha demostrado tener pe- siológica ya que el ventrículo izquierdo irriga
ores resultados perinatales y un peor desarrollo un territorio de baja resistencia, el cerebro,
neurológico a largo plazo. Sin embargo, este sub- mientras que el derecho irriga un territorio de
grupo de fetos representa una parte más grande de progresivamente alta resistencia, la placenta.
la población de fetos con alteración del crecimien- Si la situación persiste, el feto pone en marcha
to, por lo que en proporción será consumidor de mecanismos de obtención de energía vía anaeró-
gran parte de los recursos clínicos. Finalmente, en bica a partir de la glucosa que conllevan la pro-
el caso de los PEG anormales, la importancia clí- ducción de hidrogeniones que acidifican el medio,

2
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

Captura más eficiente del oxígeno bado más utilizado. En conjunto, la sensibilidad pa-
Disminución de la velocidad de crecimiento
Disminución de la actividad
Mantenimiento del balance energético
ra CIR es baja, alrededor del 15%. No obstante, si
Liberación hormonas de estrés
consideramos sólo aquellos CIR que requieren un
Saturación de oxígeno

Redistribución del flujo


Metabolismo anaeróbico
en tejidos periféricos parto prematuro, la sensibilidad es cercana al 90%
Hipoxia Mantenimiento del
balance ácido-base
en órganos centrales para CIR asociado a preeclampsia y 60% para el CIR
Hipoxemia Metabolismo
anaeróbico en sin preeclampsia(6). Se ha explorado la posibilidad
órganos centrales

Acidosis
Muerte fetal
de avanzar al primer trimestre el cribado. No obs-
tante, para la predicción de CIR que requiere parto
Días y semanas Horas Minutos
prematuro, la sensibilidad es del 30% (12% para
Respuesta fetal Tiempo
el CIR normotensivo)(7). En los últimos años ha re-
Figura 1. Acontecimientos fisiopatológicos durante el proce- cibido considerable atención la combinación de fac-
so de deterioro fetal. tores de riesgo, estudio Doppler de las arterias ute-
rinas y marcadores bioquímicos para la predicción
de CIR-preeclampsia. Aunque estudios prelimina-
es la fase de acidosis. Entre los órganos más afec- res sugieren una mejora de la sensibilidad, faltan se-
tados por está acidemia esta el corazón fetal, pues ries prospectivas para establecer su validez.
las fibras miocárdicas sufren fenómenos de ne-
crosis y son substituidas por tejido fibroso. Estos
cambios histológicos a su vez conllevan una alte- DIAGNÓSTICO
ración de la función diastólica del corazón. Si es- La detección de los fetos con un déficit de cre-
ta situación persiste, la muerte fetal acontece en cimiento es de gran importancia desde un punto
horas. La figura 1 ilustra la secuencia de aconteci- de vista de salud pública. Recientemente se ha des-
mientos fisiopatológicos que ocurren durante el crito que el riesgo de resultados perinatales ad-
proceso de deterioro de los fetos con CIR. versos es hasta 4 veces mayor en aquellas gesta-
El estudio de las vías fisiopatológicas que cau- ciones con fetos pequeños no identificados pre-
san la disminución del peso en los fetos PEG anor- natalmente(8). Además, el manejo antenatal su-
males es muy complejo y tiene poco interés clíni- bóptimo de estos fetos se ha demostrado como el
co. En general, la mayoría de causantes combi- factor más frecuentemente identificado en los ca-
nan una acción sobre el desarrollo de la placenta sos de muerte perinatal considerada evitable(9).
(mediante lesión endotelial) así como un efecto ci-
tolítico que limita el potencial de crecimiento in- Anamnesis
trínseco del feto. Debe ir dirigida a descartar los factores de ries-
go antenatal que se han asociado con las altera-
ciones del crecimiento (Tabla II). Aunque los fac-
CRIBADO tores de riesgo epidemiológico son múltiples y no
Debido a que la base fisiopatológica placenta- siempre bien definidos, una adecuada anamnesis
ria de la preeclampsia y del CIR es una deficiente sigue siendo indispensable en el control antenatal
invasión trofoblástica de las arterias espirales, el es- para poder seleccionar una población sobre la que
tudio Doppler de las arterias uterinas en el segun- llevar a cabo un seguimiento más estrecho del cre-
do trimestre se ha constituido en el método de cri- cimiento y bienestar fetal.

3
Alteraciones del crecimiento fetal

TABLA II. Factores de riesgo para las alteraciones del cre- crecimiento y la valoración del crecimiento fetal
cimiento fetal con estándares apropiados.

• Historia previa de alteración de crecimiento o muerte


Asignación a una edad gestacional
perinatal
• Factores ambientales: alcohol, tabaco y otras drogas La edad menstrual sistemáticamente sobreestima
• Infecciones la duración de la gestación, pues hasta un 20% de las
• Enfermedades maternas: mujeres con reglas regulares presentan ovulaciones
– Trombofilias
tardías(12). En nuestro medio, debido a la realización
– Enfermedades renales y vasculares
– Obesidad casi universal de una exploración ecográfica en pri-
– Diabetes mer trimestre, parece poco justificado no corregir la
– Hipertensión arterial edad gestacional por la primera ecografía en todos
los casos, pues aporta una estimación más verosímil
de la edad gestacional, incluso cuando la primera
Altura uterina ecografía se realiza en el segundo trimestre. Dife-
Tanto la palpación abdominal como la altura rentes fórmulas permiten datar la gestación a par-
uterina presentan sensibilidades muy bajas, alre- tir de datos biométricos del primer y segundo tri-
dedor del 30%(10). No obstante, en los últimos años mestre, con errores sistemáticos y aleatorios com-
se ha demostrado que el uso de estándares indivi- parables a los obtenidos con las gestaciones con trans-
duales, es decir, ajustados a las características ma- ferencia embrionaria(13). La longitud craneocaudal y
ternas y fetales, presenta una sensibilidad cercana las biometrías cefálicas son los métodos de elección
al 50%(11), parecida a la descrita para la ecografía para el primer y segundo trimestre, respectivamen-
del tercer trimestre. Además, el uso de estándares te. Cuando tengamos que datar en el tercer trimes-
individuales ha demostrado disminuir la tasa de tre, tanto las biometrías cefálicas como la longitud
falsos positivos(11). Su medición requiere de una femoral son parámetros adecuados.
sistemática cuidadosa que incluye la observación
enmascarada (se aconseja utilizar una cinta mé- Estimación antenatal del crecimiento
trica marcada por sólo una cara que quedaría en En algunos centros se utiliza como estándar de
la parte inferior), empezando por el punto varia- crecimiento las biometrías fetales medidas por eco-
ble (el fundus uterino) hasta la sínfisis y en posi- grafía que se comparan con referencias de nor-
ción de decúbito supino(10). La altura uterina tie- malidad, normalmente no propias. No obstante,
ne especial importancia en los medios en los que esta estrategia ha demostrado ser poco rentable ya
basados en la evidencia disponible no se realiza de que las biometrías cefálicas y de fémur publicadas
manera rutinaria exploración ecográfica en el ter- tienen, en tercer trimestre, un rango de normali-
cer trimestre. dad notablemente estrecho, lo cual genera muchos
falsos positivos. Tradicionalmente se usaba la re-
Estimación ecográfica del crecimiento fetal lación entre las biometrías cefálicas y abdomina-
La ecografía es el método estándar para la es- les para definir la simetría o asimetría del defecto
timación biométrica fetal. Requiere la concurren- de crecimiento. No obstante, estudios comparan-
cia de tres pasos sucesivos: la asignación del feto a do defectos simétricos con asimétricos no han de-
una edad gestacional; la estimación antenatal del mostrado diferencias entre ambos grupos(14).

4
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

En población de alto riesgo se ha demostrado dominal no hayan aumentado mejora la sensibi-


que tanto el peso fetal estimado como la circunfe- lidad para predecir el CIR(10). No obstante, genera
rencia abdominal tienen rendimientos clínicos pa- un elevado número de falsos positivos, por lo que
recidos(9). Sin embargo parece más adecuado, con- revaloraciones en menos de dos semanas deben
ceptualmente, usar el peso fetal estimado(14). Las fór- ser evitadas(16). Además, la mayoría de referencias
mulas de cálculo del peso fetal a partir de los da- biométricas publicadas son transversales, es decir,
tos biométricos tienen una alta validez, con bajos cada feto ha contribuido con una medida, por lo
errores aleatorios y sistemáticos, especialmente aque- que usarlas para cuantificar longitudinalmente el
llas que incorporan medidas cefálicas, abdomina- crecimiento de un feto sería metodológicamente
les y de extremidades, que en un 95% de los casos inadecuado.
consiguen predicciones con ± 15% de error(9).
Discriminación entre CIR Y PEG
Valoración del crecimiento fetal La discriminación entre estos dos grupos de fe-
tos es esencial desde una óptica clínica ya que am-
Estándares poblacionales bos van a presentar grandes diferencias en el pro-
Una manera sencilla de valorar si el crecimien- nóstico, evolución y manejo antenatal. ¿Qué pa-
to fetal es adecuado sería comparando el peso con rámetros utilizaremos para diferenciar estos dos
la normalidad poblacional descrita para una de- grupos de fetos?:
terminada edad gestacional. Existe evidencia dis- • Los fetos con un PFE inferior al percentil 3 se
ponible para elegir el percentil 10 como límite de consideran afectaciones severas del crecimien-
normalidad en nuestro medio(15). No obstante, la to. Estos fetos presentan un riesgo per se au-
elección de un estándar apropiado es indispensa- mentado(15), por lo que en muchos protocolos
ble para poder seleccionar de manera válida los ca- se clasifican como CIR independientemente del
sos en que el tamaño fetal está fuera de la norma- resto de criterios.
lidad descrita, por lo que son necesarias referen- • La arteria umbilical (AU) es el parámetro esen-
cias en población propia. Idealmente se deben usar cial para diferenciar entre CIR y PEG, es decir,
curvas de peso fetal más que neonatal, pues de lo entre riesgo y no riesgo(10). Los procesos cróni-
contrario se infradetecta a los fetos PEG. Esto ocu- cos de vasoconstricción a nivel del stem villi ter-
rre porque entre los nacidos prematuros la preva- ciario son los responsables del aumento de la re-
lencia de bajo peso para la edad gestacional es al- sistencia al flujo río arriba, en las arterias um-
rededor del 30-40%(3). Finalmente, otra limitación bilicales(5). Modelos animales han demostrado
de las referencias neonatales radica en criterios de que la alteración de onda de velocidad de flujo
exclusión incompletos por lo que no representan de la arteria umbilical se produce cuando está
el peso óptimo, por ejemplo, incluyen gestantes fu- afectado más de un 30% del territorio placen-
madoras y diabéticas. tario(17). Los motivos por los que la mayoría de
protocolos utilizan este parámetro para dife-
Velocidad de crecimiento renciar entre CIR y PEG se pueden resumir en
Existe una evidencia aceptable en considerar cuatro puntos(10):
como criterio diagnóstico el hecho que, entre dos – Todos los ensayos randomizados que han de-
exploraciones, el peso estimado o el perímetro ab- mostrado el beneficio del estudio Doppler en

5
Alteraciones del crecimiento fetal

los fetos con sospecha de CIR se han realiza- ha demostrado que los estándares individua-
do a nivel de la arteria umbilical. les tienen capacidad discriminante adecuada
– En presencia de un flujo umbilical normal, la para diferenciar a los fetos pequeños constitu-
ocurrencia de mortalidad perinatal es un even- cionales de los que realmente tienen una res-
to excepcional. tricción en su potencial de crecimiento. A pe-
– El flujo anormal en la arteria umbilical es un sar de que no se dispone en nuestro medio de
buen estratificador de riesgo de resultado pe- estándares individuales, se ha demostrado que
rinatal adverso y desarrollo psicomotor. incluso el uso de estándares externos mejora la
– Existe evidencia sólida que los fetos pequeños capacidad discriminante para mal resultado
con Doppler normal no requieren un ingre- perinatal respecto a referencias poblacionales
so hospitalario y no se benefician de un con- locales(14).
trol intensivo.
• El ratio cerebroplacentario (RCP) nos va a me-
jorar el rendimiento de la AU, ya que es un mar- PROFILAXIS Y TRATAMIENTO
cador más sensible de la redistribución. Por un Aunque la mayoría de metaanálisis concluyen
lado se ha demostrado que el RCP es mejor pre- que el tratamiento con ácido acetilsalicílico en ges-
dictor de resultado adverso que sus componen- tantes de riesgo disminuye el riesgo de presentar
tes por separado, con sensibilidades cercanas preeclampsia, no se ha demostrado que disminu-
al 70%(18). Además, modelos animales han de- ya la incidencia de bajo peso al nacer ni de CIR(20).
mostrado que se correlaciona mejor con la hi- Se han ensayado múltiples tratamientos para el
poxia que sus componentes por separado(19). CIR. Entre ellos reposo absoluto, hiperoxigenación
• Los estándares individuales de crecimiento fe- materna, β-miméticos, heparina y anticoagulan-
tal se basan en el hecho de que el crecimiento tes, ácido acetilsalicílico, donantes de óxido nítri-
fetal está influenciado por algunos factores que co, suplementos nutricionales y expansores del
determinan el potencial de crecimiento de un plasma. Ninguno de ellos ha demostrado un efec-
feto, por lo que deberíamos ajustar los están- to beneficioso por lo no que están recomenda-
dares de crecimiento a estos factores. Entre es- dos(10).
tas variables están la raza, la edad, la paridad,
el peso y altura materna, el sexo del feto y el
número de fetos. Existe una amplia y crecien- CONTROL DEL BIENESTAR FETAL
te evidencia de los beneficios de ajustar están- El control del bienestar fetal tiene como obje-
dares a las características individuales(14). Ade- tivo decidir cual es el momento óptimo para fina-
más, las referencias ajustadas reducen el nú- lizar la gestación, que sería aquel en el que los ries-
mero de falsos CIR. La correlación con el re- gos de dejar al feto en un ambiente que le es hos-
sultado perinatal adverso y la morbimortali- til superan a los riesgos de la prematuridad. La in-
dad perinatal es significativamente mejor que tegración de las diferentes pruebas de bienestar fe-
la descrita para estándares poblacionales. Tan- tal parece ser la estrategia más adecuada, pues nos
to es así, que algunos autores de referencia con- informa de manera complementaria de diferentes
sideran CIR y bajo peso según estándares in- aspectos del bienestar fetal. Las pruebas de bie-
dividuales como términos equivalentes(14). Se nestar se pueden agrupar en crónicas y agudas:

6
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

Figura 2. AU: arteria umbilical, ACM: arteria cerebral media, DV: ductus venoso, ILA: índice de líquido amniótico, Resp:
movimientos respiratorios, Mv Gr: movimientos groseros, RCTG: registro cardiotocográfico.

• Crónicas: se alteran en las fases de hipoxemia e resistencia creciente a lo largo del proceso de de-
hipoxia fetales y son marcadores crónicos que terioro fetal, por lo que en estadios avanzados de
pueden persistir alterados durante semanas. insuficiencia placentaria se puede observar una
• Agudas: se alteran en las fases de acidosis y sue- progresión a la ausencia e incluso reversión del flu-
len preceder a la muerte fetal en horas-días. jo durante la diástole (Fig. 2).
La secuencia de alteración entre las diferentes Hasta un 80% de los fetos presentan flujo au-
pruebas de bienestar fetal no es fija, por lo que se sente dos semanas antes de la alteración de las prue-
requiere de una valoración conjunta e integración bas agudas, por lo que este signo Doppler debe en-
de sus resultados para optimizar el manejo. La fi- tenderse como un estadio avanzado dentro de la
gura 2 ilustra la secuencia de alteraciones de las prue- secuencia de deterioro del flujo umbilical(21).
bas de bienestar fetal en relación al deterioro fetal. Un 40% de los fetos con signos de acidosis pre-
sentan flujo reverso(21). El flujo reverso aparece de
Marcadores crónicos media una semana antes de la alteración de los mar-
cadores agudos(21), por lo que podría considerarse
Arteria umbilical como un marcador subagudo. Aunque la asociación
Las alteraciones a nivel de la arteria umbilical entre flujo reverso con acidosis y mal resultado pe-
son secundarias a los procesos de vasoconstricción rinatal está ampliamente descrita (con sensibilida-
crónica que ocurren en los stem villi terciarios(5). des y especificidades cercanas al 60%) gran parte de
El flujo a nivel de la arteria umbilical presenta una esta asociación se explica por la alteración conco-

7
Alteraciones del crecimiento fetal

mitante de los marcadores agudos y por la prema- Líquido amniótico


turidad extrema(22). No obstante, la conducta ex- El mecanismo fisiopatológico de la existencia
pectante en casos de flujo reverso y ausencia de mar- de oligoamnios en los casos de CIR no está clara-
cadores agudos de deterioro fetal es controvertida(23). mente definido. Sólo en parte se explica por la dis-
minución de la perfusión renal en el estadio de
Doppler de la arteria cerebral media (ACM) centralización hemodinámica.
Las alteraciones a nivel de la ACM reflejan lo que La cantidad de líquido amniótico en los fetos
antes hemos definido como vasodilatación cerebral CIR va disminuyendo progresivamente(24).
o brain sparing. El aumento del diámetro vascular Un 20% de los fetos presentan oligoamnios una
reduce la impedancia y condiciona un aumento de semana antes de la alteración de los marcadores
las velocidades diastólicas, con la reducción de los agudos(26).
índices de pulsatilidad de las arterias cerebrales. El Un índice de líquido amniótico inferior a 5 cm
seguimiento del Doppler de la ACM durante el pro- se asocia con Apgar patológico a los 5 minutos, pe-
ceso de deterioro fetal demuestra que este paráme- ro no se demuestra la asociación con acidosis(10).
tro se altera de manera progresiva sin observarse
ningún punto de inflexión(24). Marcadores agudos
Un 80% de los fetos presentan vasodilatación
cerebral dos semanas antes de la alteración de los Venas precordiales (vena cava inferior, ductus
marcadores agudos(21). venoso y vena umbilical)
Observaciones preliminares que describían una Ante la persistencia de la hipoxia de manera
pérdida de vasodilatación en etapas finales del de- crónica se desencadena la acidosis metabólica que
terioro fetal no se han observado en las series más provoca la destrucción de fibras miocárdicas. Es-
recientes(24). Por lo que, una vez alterado este pa- ta situación condiciona una disminución de la
rámetro, su evaluación longitudinal no parece distensibilidad del miocardio con aumento de las
aportar ningún valor añadido en el seguimiento presiones telediastólicas, por tanto, una mayor
antenatal. Es objeto de debate e investigación si dificultad de llenado del corazón derecho. Esta
la vasodilatación cerebral es únicamente un me- situación se manifiesta en las ondas de velocidad
canismo adaptativo del feto sin repercusiones pos- de flujo venosas como una disminución de las ve-
teriores en su desarrollo psicomotor. Existen re- locidades durante la contracción atrial y en un
sultados controvertidos, pero parece observarse aumento general de los índices de pulsatilidad.
que los fetos que han presentado este signo pre- La alteración del DV ocurre en las últimas fa-
sentan un resultado psicomotor subóptimo(25). ses del deterioro fetal, por lo que se considera un
marcador agudo(21,24,26).
Ratio cerebroplacentario (RCP) Su relación con los otros marcadores agudos es
Como predictor de resultado adverso, el estu- variable: en un 50% de los casos primero se alte-
dio Doppler de la arteria cerebral media presenta ran los flujos venosos mientras que en el resto pri-
sensibilidades bajas, alrededor del 30%. Por el con- mero lo hace el registro cardiotocográfico(24). En
trario, la sensibilidad de este parámetro cuando se un 90% de casos, las alteraciones de los flujos ve-
combina con la arteria cerebral en el ratio cere- nosos preceden a la alteración del perfil biofísico
broplacentario es alrededor del 70%(18). en solamente 48-72 horas(26).

8
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

El ductus venoso (DV) presenta una afectación vera. Aunque el único estudio randomizado que
progresiva (Fig. 2) con lo que nos permite utilizar ha valorado el impacto del RCTG computeriza-
la presencia del aumento de pulsatilidad, la au- do no ha demostrado mejorar la mortalidad pe-
sencia o la reversión del flujo durante la contrac- rinatal, series observacionales posteriores sugie-
ción atrial como criterios de anormalidad del DV ren un papel como marcador agudo de descom-
en función de la edad gestacional, utilizando las pensación fetal(24).
alteraciones más severas en las edades gestaciona- A pesar de que el RCTG deja de ser reactivo ya
les más extremas(27). en fases muy iniciales del proceso de deterioro de
La combinación de parámetros Doppler pre- los fetos con CIR(26), la pérdida de la VCP ocurre
cardiacos(28) (y cardiacos) resulta en una mejor de- sólo unos días antes de la descompensación fetal,
tección del momento en que los mecanismos adap- coincidiendo con la alteración de los flujos veno-
tativos fetales claudican. sos(24), sugiriendo que refleja los cambios más agu-
La asociación entre las alteraciones a nivel de dos en el estado fetal que ocurren al final del pro-
los flujos venosos y los resultados perinatales ad- ceso de deterioro.
versos es clara e independiente de la edad gesta-
cional(22). Se correlaciona bien con la acidosis me- Perfil biofísico (PBF)
diante cordocentesis(29). La sensibilidad y especifi- Conforme la hipoxia persiste se produce una
cidad para mortalidad se sitúan alrededor del 70 disminución progresiva de la cantidad de líquido
y 50%, respectivamente(22). amniótico, siendo éste el único parámetro del PBF
que refleja cronicidad. En estadios avanzados de
Registro cardiotocográfico (RCTG) hipoxia se produce la desaparición de los movi-
En situaciones severas de hipoxemia, estímulos mientos respiratorios. Finalmente, cuando apare-
procedentes de quimio y barorreceptores periféri- ce la acidosis se afectan el tono y los movimientos
cos generan estímulos parasimpáticos que dan lu- groseros, y el RCTG muestra patrones manifiesta-
gar a la aparición de desaceleraciones. Además, en mente patológicos.
estadios avanzados de compromiso fetal, el efecto La correlación del PBF con hipoxia es pobre
de la acidosis sobre el sistema nervioso y el efecto mientras que la correlación con acidosis es acep-
directo sobre la actividad intrínseca cardiaca fa- table. Los parámetros mejor correlacionados son
vorecen la aparición de desaceleraciones y de la el tono fetal y los movimientos groseros.
pérdida de la variabilidad. La asociación entre el PBF y la mortalidad pe-
El RCTG tiene una capacidad para detectar rinatal ha sido confirmada únicamente en estu-
los enfermos cercana al 90%, pero con una es- dios observacionales, aunque el número de casos
pecificidad muy baja (alrededor del 40%). La in- confiere validez aceptable.
terpretación visual del RCTG de manera inde- Aunque el PBF presenta una sensibilidad muy
pendiente al perfil biofísico no parece justifica- buena tanto para mortalidad como para morbi-
da. lidad perinatal, su eficacia clínica se ve limitada
La variabilidad a corto plazo (VCP) disminuida por la tasa de falsos positivos, situada cerca del
(< 3,5 m) evaluada mediante el RCTG compute- 50%, siendo el RCTG y la cantidad de líquido am-
rizado ha demostrado ser el parámetro que me- niótico los parámetros individuales que más gra-
jor identifica a los fetos con acidosis e hipoxia se- van la especificidad.

9
Alteraciones del crecimiento fetal

TABLA III. Protocolo de estudio ante un feto con PFE por debajo del percentil 10

Doppler
Arteria umbilical Siempre
Arteria cerebral media Siempre
Arteria uterina Siempre
Estudio morfológico fetal Malformaciones presentes en el 25% de los casos
Malformaciones Siempre
Signos ecográficos sugestivos de infección Siempre
ventriculomegalia, microcefalia, calcificaciones
cerebrales, hiperrefringencia intestinal,
placentomegalia, polihidramnios
Estudio cromosómico Alteraciones cromosómicas presentes en el 15%
Malformación
Debut < 28 sem
Restricción severa (percentil < p3)
Estudio de infecciones Infecciones presentes en menos del 5% de los casos
Serologías CMV Signos ecográficos
Debut < 28 sem
Amniocentesis para PCR CMV Si sospecha infección
Estudio de trombofilias
Después de la gestación Si preeclampsia < 34 sem
Si preeclampsia recurrente
Si desprendimiento de placenta
Despistaje preeclampsia
Analítica completa Siempre
Proteinuria de 24 horas o ratio prot/creat Siempre
Determinación de la tensión arterial Siempre

El criterio de anormalidad, una puntuación in- MANEJO


ferior a 4 o inferior a 6 cuando existe oligoamnios,
tiene un buen rendimiento clínico(30). Estudio del feto con alteración del crecimiento
La secuencia de afectación de los parámetros Ante el diagnóstico de un PFE por debajo del
del PBF en los fetos CIR es la siguiente(26): percentil 10 debemos aplicar una serie de pruebas
• La cantidad de líquido amniótico se afecta de diagnósticas con el objetivo de clasificar el feto en
manera progresiva durante el proceso de de- uno de los tres grandes grupos: PEG normal, PEG
terioro, reflejando cronicidad. anormal y CIR. La Tabla III recoge las exploracio-
• El RCTG deja de ser reactivo de manera muy nes complementarias que deben realizarse así co-
precoz, pero no es patológico hasta el final del mo en qué pacientes está indicada cada una de ellas.
proceso de deterioro, correspondiendo con la La aplicación de estas pruebas no permite dife-
aparición de flujos venosos patológicos. renciar entre los tres grupos clínicos:
• En un 90% de casos las alteraciones de los flu- • Alteración Doppler: CIR.
jos venosos preceden a la alteración del perfil • Infección o malformación: PEG anormal.
biofísico en solamente 48-72 horas(26). • Todas las pruebas son normales: PEG normal.

10
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

TABLA IV. Clasificación, manejo y finalización de las gestaciones con alteraciones del crecimiento

PFE Doppler Seguimiento Finalización Vía del parto


(Doppler y PBF)

PEG anormal < p10 Normal En función de la patología No electiva Vaginal


PEG normal < p10 Normal Cada dos semanas 40 semanas Vaginal
Tipo I < p3 Normal Semanal 37 semanas(10) Vaginal(22)
Tipo II < p10 RCP < percentil 5(22) Semanal 37 semanas(10) Vaginal(22)
Tipo III < p10 Flujo ausente en AU Dos veces por semana 34 semanas Cesárea(10)
Tipo IV < p10 IPACM < percentil 5 (24) Dos veces por semanas 34 semanas Vaginal
Persistente (> 2 ocasiones Ingreso > 32 semanas Si AEDV 32 sem Si AEDV cesárea
separadas 24 horas)
Tipo V < p10 Presencia criterios de gravedad Cada 12-48 horas > 28 semanas si:
PBF patológico persistente Ingreso a partir de la REDV en AU
(> 2 ocasiones separadas viabilidad y desde el
12 horas) momento del diagnóstico < 28 semanas si:
DV reverso
Presencia de REDV en AU. RCTG desacel. Cesárea
RCTG desacelerativo o silente PBF < 4
en ausencia de medicación sedante
Alteraciones severas y persistentes
flujos venosos (> 2 ocasiones
separadas 12 horas):
IP DV > percentil 95(25)
Presencia de pulsaciones dícrotas
en la vena umbilical

p3: percentil 3, p10: percentil 10, RCP: ratio cerebroplacentario, IP: índice de pulsatilidad, ACM: arteria cerebral media, PBF:
perfil biofísico, REDV: flujo diastólico reverso, RCTG: registro cardiotocográfico, DV: ductus venoso.

Seguimiento antenatal gicos parece adecuada, a pesar de que no se


El seguimiento antenatal, que se encuentra re- acepta de forma universal (Tabla IV). El con-
sumido en la tabla IV, presenta algunas peculiari- trol del bienestar fetal está condicionado al gra-
dades dentro de los tres grupos definidos: do de severidad del CIR, por lo que también
• PEG anormales: manejo específico de cada pa- dependerá del estadio de severidad en el que
tología. nos encontremos.
• PEG normales: existe evidencia sólida como pa- En los fetos CIR está indicada la maduración pul-
ra recomendar un control no intensivo. Existe monar con corticoides entre las 24 y 34 semanas(10).
un estudio randomizado que observa como el El momento de administración es cuando se cum-
control intensivo aumenta las inducciones sin plen los criterios de ingreso descritos en la Tabla IV.
mejorar los resultados(31).
• CIR: existe un buen consenso en considerar Finalización de la gestación
que existe un deterioro progresivo fetal. Así Los criterios de finalización también dependen
que una clasificación en estadios fisiopatoló- del grupo al cual pertenezca el feto:

11
Alteraciones del crecimiento fetal

• PEG anormales: no se benefician de una finali- growth restriction in twin pregnancies at 23 weeks of
gestation by transvaginal uterine artery Doppler. Ul-
zación electiva. trasound Obstet Gynecol 2002;20(6):535-40.
• PEG normales: la conducta expectante parece ra-
7. Martin AM, Bindra R, Curcio P, Cicero S, Nicolaides
zonable hasta la semana 40. La mayoría de pro- KH. Screening for pre-eclampsia and fetal growth res-
tocolos institucionales aconsejan un intento de triction by uterine artery Doppler at 11-14 weeks of
gestation. Ultrasound Obstet Gynecol 2001;18(6):583-
parto vaginal con monitorización continua(10). 6.
• CIR: aunque tampoco existen recomendacio-
8. Lindqvist PG, Molin J. Does antenatal identification
nes sólidas en este sentido, la mejor eviden- of small-for-gestational age fetuses significantly im-
cia disponible hace razonable el protocolo re- prove their outcome? Ultrasound Obstet Gynecol
2005;25(3):258-64.
flejado en la tabla IV. Se recomienda la mo-
9. European comparison of perinatal care- the Eurona-
nitorización continua(10). En todos los casos es
tal Study, 2001.
recomendable la presencia de alguien con ex-
10. British College of Obstetricians and Gynaecologist.
periencia en reanimación neonatal(10). En los The Investigation and Management of The Small-for-
casos pretérmino es recomendable el parto en Gestational Age Fetus. Geen-Top Guidelines 2002
(Guideline No.31).
un centro con cuidados intensivos neonata-
les(10). Siempre que el feto sea un prematuro 11. Gardosi J, Francis A. Controlled trial of fundal height
measurement plotted on customised antenatal growth
extremo (< 28 semanas) el asesoramiento por charts. Br J Obstet Gynaecol 1999;106(4):309-17.
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12
M. Sanz, E. Eixarch, F. Figueras

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13
Cribado y prevención de preeclampsia
F. Figueras, J.C. Ramírez

INTRODUCCIÓN ción de diferentes formas de esta condición. En


La preeclampsia (PE) afecta cerca del 2 al 3% años recientes ha llegado a ser aceptado que la
de embarazos y es un contribuyente mayor a la preeclampsia de comienzo temprano y la pree-
mortalidad materna con un estimado de 100.000 clampsia de comienzo tardío están asociadas con
muertes anuales alrededor del mundo(1). Es tam- hallazgos bioquímicos, histológicos y clínicos di-
bién la primera causa de admisión materna a ferentes(7-9); la forma de comienzo temprano es-
unidades de cuidados intensivos(2) y está asocia- tá casi invariablemente asociada con insuficien-
da con un riesgo aumentado de mortalidad pe- cia placentaria y restricción de crecimiento y la
rinatal, siendo responsable del 10% de los mor- forma de comienzo tardío es más prevalente y, en
tinatos(3) y del 15% de los nacimientos pretér- general, el compromiso placentario está míni-
mino(4). En total, el costo adicional de un caso mamente presente. Un hallazgo reciente sopor-
promedio de preeclampsia en países desarrolla- tando este concepto llega de un estudio pobla-
dos ha sido estimado en £ 9.000(5). Así, prede- cional en el cual solamente la preeclampisa pre-
cir preeclampsia es un reto mayor en la obste- término previa estuvo asociada con aumento en
tricia contemporánea. La importancia de esta el riesgo en un embarazo posterior(10). Por lo tan-
condición está resaltada cuando investigaciones to, cuando se evalúa la predicción de una prueba
confidenciales son analizadas, mostrando que dada o la combinación de pruebas para pree-
en una proporción sustancial de casos de muer- clampsia se ha hallado una clara distinción entre
te fetal debido a preeclampsia un manejo dife- formas clínicas de comienzo temprano y de co-
rente podría haber alterado el resultado(6). Una mienzo tardío.
predicción exacta de preeclampisa puede, por lo Hay múltiples marcadores de preeclampsia,
tanto, permitir una asignación más eficiente de algunos de ellos son conocidos en el registro
recursos para la monitorización y mejoría de re- médico y otros llegan a ser disponibles desde el
sultados maternos y perinatales. primer trimestre. Los primeros están basados
En el pasado, la evaluación de la predicción de en características demográficas o un pasado fa-
preeclampsia ha sido oscurecida por la agrupa- miliar, historia médica u obstétrica, incremen-

15
Cribado y prevención de preeclampsia

tando el riesgo de preeclampsia de 2 a 6 veces(11). centación anormal(20). Esta discusión no debe-


Su principal ventaja es permitir la selección de ría ser colocada como un falso dilema, porque
aquellas mujeres a las que se les debería ofrecer otras estrategias alternativas basadas en criba-
remisión para valoración con subespecialista dos secuenciales o contingentes han demostra-
muy temprana en el embarazo. Los otros mar- do ser útiles para otras enfermedades y puede
cadores son secundarios a los cambios fisiopa- permitir aprovechar las ventajas de ambos pe-
tológicos que preceden el comienzo clínico de riodos.
preeclampsia, principalmente debido a invasión El objetivo de este artículo es proveer una revi-
trofoblástica defectuosa. La principal ventaja de sión concisa de los avances en la predicción de pre-
estos marcadores es que están especialmente eclampsia, destacando los artículos más impor-
asociados con preeclampsia de comienzo tem- tantes e interesantes entre los muchos publica-
prano(12), la cual es la forma clínica que más con- dos durante los pasados meses. Con esto se pre-
tribuye a los resultados maternos y perinatales tende dar a los trabajadores en el campo un resu-
adversos(13,14). Como no hay una única prueba men fácil de leer, actualizado y asequible de los re-
que prediga preeclampsia con suficiente exac- cientes avances en esta materia.
titud para ser clínicamente útil(15), el interés por
combinar varias pruebas dentro de modelos
multiparamétricos ha sido creciente en años re- HISTORIA MATERNA
cientes. Al registrar algunas características demográfi-
El momento óptimo para el cribado de pre- cas o pasado familiar, la historia médica u obsté-
eclampsia es también controversial. Muchos trica debería crear conciencia con respecto al ries-
marcadores son más sensibles en el segundo tri- go de preeclampsia. Una revisión exhaustiva so-
mestre, porque los cambios fisiopatológicos son bre este tema ha identificado la presencia de sín-
más manifiestos a medida que el embarazo pro- drome antifosfolípido y una historia previa de pre-
gresa. Por ejemplo, la tasa de detección en la ar- eclampsia como los factores con más riesgo indi-
teria uterina es casi dos veces más alta en el se- vidual, confiriendo un riesgo para el desarrollo de
gundo que en el primer trimestre(16,17). Cuando preeclampsia de cerca de 8 veces(11). De anotar, la
el objetivo del cribado es el de asignar la vigi- historia de una preeclampsia previa confiere un
lancia a las mujeres acorde a su riesgo, el se- riesgo relevante para un siguiente embarazo, prin-
gundo trimestre sería apropiado para este pro- cipalmente cuando una forma clínica de comien-
pósito, ya que una preeclampsia antes de las 24 zo temprano ocurrió en la primera gestación(21,22).
semanas de gestación es muy rara(18). Sin em- Aun en mujeres no preeclámpticas, una historia
bargo, esta etapa avanzada en la progresión pre- de preeclampsia antes del término tiene un ries-
clínica de la enfermedad explica que las inter- go de resultado perinatal adverso. Esto soporta el
venciones profilácticas en el segundo trimes- concepto que las preeclampsias de comienzo tem-
tre para esas mujeres cribadas como positivas prano y tardío tienen diferentes vías fisiopatoló-
no sean efectivas(19). Al contrario, una revisión gicas. Con una asociación más débil, mujeres con
sistemática reciente mostró que la aspirina ini- índice de masa corporal de al menos 35 kg/m² o
ciada antes de la semana 16 reduce la inciden- con diabetes pregestacional tienen un riesgo au-
cia de preeclampsia severa en mujeres con pla- mentado de 4 veces; la nuliparidad, el embarazo

16
F. Figueras, J.C. Ramírez

múltiple y la historia familiar de preeclampsia tri- ESTUDIOS HEMODINÁMICO


plica el riesgo, y, la edad materna de al menos 40 Y VASCULAR MATERNOS
años, la hipertensión crónica y las enfermedades Varios parámetros reflejando la función car-
renales o autoinmunes, además de un intervalo diovascular han sido usados para predecir pree-
entre embarazos de más de 10 años, están asocia- clampsia. Sin embargo, solamente unos cuantos
dos con preeclampsia aunque con riesgos más ba- de ellos han sido evaluados lejos del comienzo clí-
jos. El hecho de que otros estudios bien diseñados nico, cuando las intervenciones profilácticas son
recientemente publicados en otras poblaciones más probables de ser efectivas. Entre ellas, la pre-
muestran un perfil médico-demográfico diferen- sión arterial en el primer trimestre e inicios del se-
te de mujeres en riesgo de preeclampsia, destaca gundo ha sido extensamente evaluada, con resul-
la necesidad de ajustar la asesoría en cada pobla- tados conflictivos, secundario a diferencias en los
ción(23). estudios y en la técnica de medición(27).
Una limitación de la mayoría de los estudios Un gran estudio en el Reino Unido ha mostra-
en los cuales estos riesgos han sido estimados es do que la presión arterial media entre las 11-13 se-
que no se ha evaluado si ellos son factores de manas predijo preeclampsia de comienzo tem-
riesgo para preeclampsia de comienzo tempra- prano y tardío con una tasa de detección del 59,5
no o tardío. Poon y cols.(24) mostraron, en un es- y 36,7%, respectivamente, para una tasa de falsos
tudio sobre una gran población, que los facto- positivos fija del 10%(28). Otras series previas(27)
res de riesgo significativamente asociados con también han hallado una capacidad diagnóstica
preeclampsia predijeron preeclampsias de co- superior de la presión arterial media que los valo-
mienzo temprano y tardío con diferentes tasas res sistólicos y diastólicos, aunque otras series más
de detección, del 37 y 28,9%, respectivamente, pequeñas no han confirmado este hallazgo(29). Re-
para unos falsos positivos del 5%. Interesante- cientemente, Vollebregt y cols.(30) han compara-
mente, diferentes subconjuntos de factores fue- do el esfingomanómetro de consultorio estándar
ron mejores prediciendo preeclampsia tempra- con mediciones ambulatorias de la presión arte-
na (historia previa de preeclampsia, raza negra, rial por 48 horas, sin ninguna diferencia en la pre-
hipertensión preexistente y uso previo de in- dicción de preeclampsia en general (tasa de de-
ductores de la ovulación) y preeclampsia tar- tección de cerca del 60% para unos falsos positi-
día (historia familiar o materna de preeclamp- vos del 10%), aunque su tamaño de muestra no
sia, raza blanca, índice de masa corporal y edad permitió diferenciar preeclampsia de comienzo
materna), reflejando diferentes vías fisiopatoló- temprano de la preeclampsia de comienzo tar-
gicas para ambas formas clínicas. dío.
Es una recomendación de buenas prácticas(25,26) Parámetros más complejos, tales como gas-
verificar el registro médico de los factores de ries- to cardiaco materno(31) y mediciones hemodi-
go de preeclampsia para la vigilancia más apro- námicas cerebrales(32), han sido propuestas tam-
piada. La incorporación de factores maternos den- bién pero mostrando solamente un beneficio
tro de los algoritmos predictivos, como es discu- marginal sobre mediciones menos complejas.
tido después en esta revisión, resulta en una me- Una técnica promisoria es el análisis de la on-
joría del rendimiento diagnóstico de otros marca- da de pulso, la cual es una técnica no invasiva
dores. que refleja la compliance vascular y es anormal

17
Cribado y prevención de preeclampsia

en varias enfermedades relacionadas con el en- rámetro con índices de probabilidad positivo y ne-
dotelio. Un estudio reciente en 210 mujeres de gativo para preeclampsia de 7,14 y 0,7 cuando es
riesgo intermedio (incidencia de preeclampsia medido antes de la semana 16 de gestación(35). Sin
del 6,7%) mostró cómo esta técnica aplicada a embargo, muchos estudios han evaluado solamente
las 11 a 14 semanas tuvo una tasa de detección el rendimiento de estos parámetros para pree-
del 88%, con una falso positivo del 10%, para la clampsia general y datos separados para la pree-
detección de preeclampsia de comienzo tem- clampsia temprana y tardía son más escasos. Spen-
prano. Estos hallazgos sugieren que esta técnica cer y cols.(36) reportaron para la proteína plasmá-
provee una estimación más exacta de la presión tica A asociada al embarazo (PAPP-A, por sus si-
vascular central que la presión arterial conven- glas en inglés) a las 11 a 13 semanas de gestación
cional. El mismo grupo ha evaluado la combi- una tasa de detección del 23 y 26% (20% de falsos
nación de esta medición con marcadores bio- positivos) para preeclampsia temprana y tardía,
químicos (proteína placentaria – 13 [PP13]) y respectivamente. Más recientemente, un modelo
Doppler de las arterias uterinas en mujeres con integrando estriol no conjugado, α-fetoproteína y
factores de riesgo médicos para preeclampsia al β-gonadotropina coriónica humana (hCG, por sus
primer trimestre, mostrando una tasa de detec- siglas en inglés) en el segundo trimestre con PAPP-
ción del 93%, para unos falsos positivos del 10%, A en el primer trimestre ha mostrado, para un 5%
en la predicción de preeclampsia de comienzo de falsos positivos, una tasa de detección del 25,6%
temprano(34). para preeclampsia asociada a restricción de cre-
Por lo tanto, como resultado de su factibilidad cimiento intrauterino y del 18,5% para embara-
y rendimiento diagnóstico aceptable, tan tempra- zos con preeclampsia en embarazos finalizados an-
no como en el primer trimestre, la medición de la tes de las 32 semanas de gestación(37). Así, los mar-
presión arterial es mandatorio en el registro mé- cadores séricos maternos para aneuploidías en el
dico. Mujeres con valores anormales deberían ser segundo trimestre tienen, individualmente o en
derivadas a una vigilancia apropiada con cheque- combinación, pobre capacidad predictiva para pre-
os establecidos de presión arterial, exploraciones eclampsia. Estrategias combinando estos marca-
ecográficas y análisis bioquímicos. dores bioquímicos con otros marcadores Doppler
o cardiovasculares son discutidas después en esta
revisión.
MARCADORES BIOQUÍMICOS La PP13, producida por el sincitiotrofoblas-
Varios marcadores han sido probados para la to, ha sido evaluada para la predicción de pre-
predicción de preeclampsia. Entre ellos hay pro- eclampsia en el primer trimestre, mostrando
ductos de origen fetal y placentario, marcadores una precisión moderada tanto en poblaciones
de daño endotelial o renal, marcadores de estrés de bajo riesgo(36,38) y de alto riesgo(39) para pre-
oxidativo y factores angiogénicos. eclampsias tempranas (36-71%) y tardías (36-
Notablemente, los marcadores bioquímicos del 71%).
síndrome de Down han sido extensamente eva- Otro grupo de analíticas que han sido pro-
luados. Ninguno de estos marcadores ha mostra- badas son los factores angiogénicos: factor de
do capacidad predictiva individual aceptable para crecimiento placentario (PIGF), fms-like tyro-
el uso clínico. La inhibina A parece ser el mejor pa- sine kinasa-1 soluble (sFlt-1), factor de creci-

18
F. Figueras, J.C. Ramírez

miento vascular endotelial y endoglina soluble ESTUDIOS DOPPLER UTERINOS


(sEng). En el primer trimestre o al inicio del se- La preeclampsia de comienzo temprano está
gundo, la tasa de detección de PIGF o sEng pa- caracterizada por una invasión trofoblástica de-
ra preeclampsia con parto antes de las 34 sema- fectuosa, llevando a hipoperfusión placentaria.
nas se halla entre el 40 y 65% para una tasa de El Doppler de la arteria uterina es una buena co-
falsos positivos del 10%(38,40). Este rendimiento rrelación funcional, usada para evaluar no inva-
diagnóstico limitado podría ser mejorado con sivamente la invasión trofoblástica(47,48) y se ha
la combinación de PIGF/SEng en un índice y con realizado una investigación extensa en el valor
la evaluación de los cambios longitudinales en- de este parámetro para el cribado de preeclamp-
tre el primero y el segundo trimestre(41), y aun- sia. Los reportes iniciales usaron apreciaciones
que lograron una tasa de detección por encima cualitativas evaluando la presencia de muesca
del 90% es necesaria una confirmación adicio- diastólica. En los últimos 10 años el uso de va-
nal en diferentes poblaciones. Wortelboer y riables continuas ha llegado a ser extendido co-
cols.(38) han evaluado la combinación de PIGF y mo más mediciones objetivas para cuantificar la
PP13 en el primer trimestre mostrando una ta- impedancia vascular, principalmente el índice de
sa de detección del 54% para unos falsos positi- pulsatilidad medio, del cual han sido publicados
vos del 10%. La adición de PAPP-A a este mo- los rangos de normalidad de la semana 11 a 41(49).
delo no resultó en una mejoría del rendimiento El cribado en el segundo trimestre (semana 21 a
diagnóstico. Concentraciones urinarias de PIGF 23) con el Doppler de las arterias uterinas ofre-
han sido también evaluadas a las 11 a 13 sema- ce unas tasas de detección para preeclampsia del
nas mostrando ninguna capacidad predictiva pa- 48 al 66%, con tasas de falsos positivos del 13 al
ra preeclampsia(42). 20%(5). Consistente con nuestro conocimiento
Finalmente, en los últimos meses, algunos es- sobre la fisiopatología de esta condición, el ren-
tudios han evaluado en el primer trimestre el pa- dimiento del Doppler de las arterias uterinas es
pel de los niveles de leptina sérica materna sola(43) mejor para preeclampsia de comienzo tempra-
o en combinación con PAPP-A(44), con resultados no, con una tasa de detección al segundo tri-
poco concluyentes. mestre alrededor del 80% para unos falsos posi-
Así, hay un cuerpo creciente de evidencia mos- tivos del 5 al 10%.
trando que niveles séricos maternos de factores El estudio más grande(50), llevado a cabo en el
angiogénicos en el primer trimestre y en el inicio Reino Unido, incluyendo más de 30.000 mujeres
del segundo pueden tener un papel como pará- de bajo riesgo, halló para el Doppler uterino del
metros predictivos para preeclampsia. Esto es es- segundo trimestre (índice de pulsatilidad media)
pecialmente interesante porque la asociación es una tasa de detección del 42,8, 31,6 y 77,8% para
principalmente con preeclampsia de comienzo preeclampsia en general, de comienzo tardío y de
temprano, la cual es la forma clínica que contri- comienzo temprano (parto antes de la semana 34),
buye más a la morbilidad materna y perinatal, y para una tasa de falsos positivos fijada del 5%. El
porque el inicio del segundo trimestre es el mo- siguiente paso natural fue mover el cribado al pri-
mento cuando la etapa de la progresión fisiopa- mer trimestre, con la idea de dar en forma más
tológica puede aún permitir estrategias profilác- temprana en el embarazo, un riesgo individual pa-
ticas efectivas(45,46). ra preeclampsia, en una forma similar al cribado

19
Cribado y prevención de preeclampsia

para aneuploidía. Un gran estudio aleatorizado PRUEBAS COMBINADAS


también contribuyó a este cambio mostrando que Es ampliamente aceptado que diferentes líne-
el cribado a la semana 21 a 23 con Doppler uteri- as fisiopatológicas convergen en el síndrome clí-
no y tratando con aspirina aquellas pacientes con nico común de preeclampsia(55). No es sorpren-
flujo anormal, no resulta en una reducción en la dente que esta complejidad etiológica podría no
incidencia de preeclampsia(19). El rendimiento del ser tratada en términos de predicción con una
cribado en el primer trimestre para preeclampsia única prueba. Esta limitación podría ser supe-
en general fue desalentador, con tasas de detección rada con la combinación de dos o más pruebas,
que van del 20 al 31% para una tasa de falsos po- cada una reflejando una vía fisiopatológica di-
sitivos del 5%(51). Sin embargo, para preeclamp- ferente, para dar un riesgo individual para pree-
sia severa (incluyendo el comienzo clínico antes de clampsia en una forma similar a la realizada pa-
las 34 semanas) la tasa de detección agrupada fue ra el cribado de aneuploidía.
del 40% (12 al 74%) para unos falsos positivos del En las últimas dos décadas, muchos estudios
10%. han combinado uno o más marcadores bioquí-
En mujeres de alto riesgo (incidencia de pree- micos con Doppler uterino, algunos de ellos pro-
clampsia del 10,6%) un estudio reciente(34) ha mos- porcionando datos en tasas de detección para
trado una tasa de detección del 21,4% para una ta- preeclampsia temprana y tardía separadamen-
sa de falsos positivos del 10%. Más recientemen- te.
te, se ha demostrado que cuanto más bajo es el ín- Entre esos, cuando todas las mediciones fueron
dice de pulsatilidad promedio, adquiere un rendi- realizadas en el segundo trimestre, Aquilina y
miento de cribado marginalmente mejor para for- cols.(56) hallaron que la inhibina A y el Doppler ute-
mas de comienzo temprano(40,52), sugiriendo que rino tuvieron una tasa de detección del 43% para
el Doppler uterino del lado placentario refleja me- un 3% de falsos positivos para preeclampsia tem-
jor la invasión trofoblástica. prana (menor de 37 semanas). Otros estudios en
La evaluación Doppler de la arteria uterina tie- el segundo trimestre han combinado el Doppler
ne un rendimiento diagnóstico aceptable para pre- uterino con PIGF (57-59), sFlt-1(57,59) o sEng(60) con
eclampsia en general(5). Su rendimiento es aún me- una tasa de predicción que va del 83 al 100% con
jor para preeclampsia de comienzo temprano y una tasa de falsos positivos de 11 al 24% para pre-
para preeclampsia asociada con restricción de cre- eclampsia temprana. Spencer y cols.(61) hallaron
cimiento intrauterino, las cuales son las formas que el Doppler uterino en el segundo trimestre,
clínicas con más alto riesgo de morbilidad ma- PP13 y PAPP-A tuvieron una tasa de detección pa-
terna y neonatal(13,14). Esta medición tiene también ra preeclampsia temprana del 80% para una tasa
una reproducibilidad aceptable(53), es realizable y de falsos positivos del 20%, donde el Doppler ute-
económica cuando es incorporada en la ecogra- rino, PP13 y β-hCG tuvieron una tasa de detec-
fía de rutina. Así, el Doppler de la arteria uterina ción del 100% para preeclampsia temprana a la
en el segundo (permitiendo mayores tasas de de- misma tasa de falsos positivos.
tección) o en el primer trimestre (permitiendo El enfoque de la determinación en el primer tri-
una identificación temprana del riesgo) es el can- mestre de marcadores biológicos seguidos por
didato más sólido para ser incluido en estrategias Doppler de la arteria uterina en el segundo tri-
predictivas. mestre ha sido evaluado en varios estudios del mis-

20
F. Figueras, J.C. Ramírez

mo grupo. La detección secuencial de inhibina A, tre de PP13, Doppler de arteria uterina y una me-
activina A o ADAM-12 (una metaloproteasa) en dición no invasiva de la rigidez vascular deriva-
el primer trimestre y Doppler en el segundo tri- da de la onda de pulso arterial braquial, predijo
mestre mostró una tasa de detección para pree- preeclampsia temprana con una tasa de detección
clampsia general cercana al 65% (5% de falsos po- del 93% para un 10% de falsos positivos. Intere-
sitivos)(62,63). De manera similar, PAPP-A o PP13 y santemente, también examinaron un cribado de
Doppler uterino mostraron una tasa de detección contingencia mediante el cual la evalución de la
de aproximadamente del 70 al 75% para pree- rigidez vascular, PP13 y Doppler de arteria uteri-
clampsia temprana, pero con una tasa de falsos po- na fue realizada secuencialmente, adquiriendo
sitivos del 20%(36). una tasa de detección del 86% para un 10% de
En otros estudios, todos los marcadores han falsos positivos.
sido obtenidos en el primer trimestre. PAPP-A La ventaja de esta estrategia resultó en casi un
más Doppler de la arteria uterina tuvo una tasa 50% menos de pruebas que en el cribado simul-
de detección para preeclampsia temprana del 47% táneo.
para un 5% de tasas de falsos positivos. Cuando
los factores maternos fueron adicionados a este
modelo, la tasa de detección mejoró al 63%(64). CONCLUSIÓN
Nicolaides y cols.(65) mostraron que PP13 y el 1. La preeclampsia es un problema de salud im-
Doppler uterino tenían una tasa de detección del portante con una etapa latente reconocible.
90% (10% de falsos positivos) para preeclampsia 2. Ninguna prueba sola predice esta condición
temprana. Akolekar y cols.(66) reportaron que el con suficiente precisión para ser clínicamente
Doppler uterino, PAPP-A, inhibina A y factores útil.
maternos adquirieron una tasa de detección pa- 3. Combinando varias pruebas dentro de mode-
ra preeclampsia temprana del 81% para una tasa los multiparamétricos resulta en la identifica-
de falsos positivos del 5%. El mismo grupo en una ción temprana de una gran mayoría de casos
cohorte de 7.797 mujeres de bajo riesgo halló que destinados a desarrollar preeclampsia tempra-
una combinación de factores maternos, PIGF, na, la cual es la forma clínica que más contri-
PAPP-A y presión arterial media tuvo una tasa de buye a resultados maternos y perinatales ad-
detección del 93% (5% de falsos positivos) para versos.
preeclampsia temprana (menor de 34 sema- 4. Esto puede permitir una asignación de los re-
nas)(67). Más recientemente, un estudio en una co- cursos acorde al riesgo individual.
horte de 8.234 mujeres de bajo riesgo ha halla- 5. La definición del subconjunto de mujeres so-
do que un modelo combinando factores mater- bre las cuales las estrategias profilácticas son
nos, Doppler de arteria uterina, PIGF y sEng en más eficientes será un reto mayor en la obste-
primer trimestre adquirió, para una tasa de fal- tricia para la siguiente década.
sos positivos del 10%, una tasa de detección del
96,3% para preeclampsia temprana(40). Khalil y
cols.(34) han hallado en un estudio incluyendo 395 BIBLIOGAFÍA
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F. Figueras, J.C. Ramirez

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25
Preeclampsia: control antenatal
F. Crispi

INTRODUCCIÓN rá clave en el manejo y decisión de la finalización


La presencia de hipertensión en el embarazo del embarazo.
a menudo genera confusiones en su diagnóstico Finalmente, aunque no existe un acuerdo inter-
debido a múltiples terminologías y criterios po- nacional sobre la utilización del Doppler de las ar-
co claros. Este texto explica con detalle los crite- terias uterinas tras inicio de la clínica hipertensiva,
rios diagnósticos de cada una de las categorías en este texto se han incorporado como criterio diag-
de hipertensión en la gestación, que son impres- nóstico y pronóstico debido a su alto valor predic-
cindibles para comprender el pronóstico y deci- tivo(8), existencia de valores de normalidad en nues-
dir el manejo adecuado de cada una de las cate- tra población(9) y datos propios que indican una
gorías. asociación al pronóstico sobre todo fetal.
Diversas líneas de evidencia indican que el pro-
nóstico de la preeclampsia depende claramente de
la edad gestacional al debut(1-4). La preeclampsia DEFINICIONES
precoz (antes de las 32-34 semanas) suele acom- Hipertensión arterial (HTA): tensión arterial sis-
pañarse de criterios de gravedad maternos, retra- tólica (TAS) ≥ 140 mmHg y/o tensión arterial dias-
so de crecimiento, Doppler placentofetal patoló- tólica (TAD) ≥ 90 mmHg, en dos tomas separadas
gico y alteraciones morfométricas placentarias. Por 6 horas tras 10 minutos de reposo con la gestante
otra parte, la preeclampsia tardía tan sólo se acom- sentada, los pies apoyados y el brazo a la altura del
paña de criterios de gravedad maternos y/o retra- corazón.
so de crecimiento en un 15-30% de los casos, y por Proteinuria: presencia de > 300 mg (0,3 g) de
lo tanto presenta mejor pronóstico. Asimismo, el proteínas en orina de 24 horas y/o ≥ 2+ protei-
pronóstico del recién nacido dependerá en gran nas en tira reactiva en dos ocasiones y en ausencia
medida de la prematuridad. Sin embargo, los cri- de infección urinaria confirmada por urinoculti-
terios expuestos en este texto siguen las principa- vo. El diagnóstico debe basarse en la determina-
les guías y consensos internacionales(5-7) y la edad ción cuantitativa en orina de 24 horas.
gestacional no se ha incluido específicamente co- Doppler uterino patológico: índice de pulsatili-
mo criterio diagnóstico o de gravedad, aunque se- dad medio > percentil 95,9.

27
Preeclampsia: control antenatal

TIPOS DE HIPERTENSIÓN EN EL • Trombocitopenia (<100.000 mm3).


EMBARAZO(5-7) • Hemólisis ( LDH > 600 UI/L + presencia de es-
Hipertensión crónica: HTA que está presente an- quistocitos y/o Hp < 0,3 g/L).
tes del embarazo o que se diagnostica antes de la • Presencia de crecimiento intrauterino restrin-
semana 20 de gestación. gido.
Hipertensión inducida por la gestación: HTA que Síndrome de HELLP: variante de la pree-
aparece después de las 20 semanas de gestación. Se clampsia grave que se diagnostica si aparece he-
subdivide en: mólisis, elevación de las enzimas hepáticas y
• Hipertensión gestacional: proteinuria negativa. trombocitopenia. El síndrome se considerará in-
• Preeclampsia: proteinuria positiva. completo cuando falte alguno de los tres crite-
Preeclampsia sobreañadida: empeoramiento rios.
brusco de la HTA y/o aparición o empeoramien- Eclampsia: aparición de convulsiones tipo gran
to de proteinuria y/o aparición de signos o sínto- mal o coma no atribuibles a otras causas.
mas de afectación multiorgánica en una paciente
con HTA crónica y/o proteinuria previa.
MANEJO ANTENATAL
El único tratamiento realmente eficaz de la pre-
TIPOS DE PREECLAMPSIA(5-7) eclampsia es la finalización de la gestación. Sin em-
Preeclampsia leve: presencia de HTA y protei- bargo, con el objetivo de prevenir la prematuridad
nuria sin ningún criterio de gravedad. del feto, frecuentemente se decidirá mantener el em-
Preeclampsia grave: la aparición de uno o más barazo. En este caso será necesario realizar un con-
de los siguientes criterios establece el diagnóstico trol estricto materno y fetal, e ir valorando el ries-
de preeclampsia grave: go de mantener la gestación frente al riesgo de pre-
• HTA severa: TAS ≥ 160 mmHg y/o TAD ≥ 110 maturidad del recién nacido para decidir la con-
mmHg en dos ocasiones separadas por 6 horas ducta a seguir(10).
con la paciente en reposo. O cifras de TAS >180 La vía de parto preferible es la vaginal y la anes-
y/o TAD > 120 en dos ocasiones separadas por tesia regional es la técnica de elección siempre que
30 minutos. no existan contraindicaciones.
• Pródromos de eclampsia persistentes: hiperre-
flexia con clonus y/o cefalea intensa y/o altera- Manejo de la hipertensión gestacional
ciones visuales y/o estupor y/o epigastralgia y/o o preeclampsia leve
dolor en hipocondrio derecho y/o náuseas y/o El ingreso hospitalario es recomendable para
vómitos. completar el estudio inicial y establecer la pauta
• Proteinuria ≥ 2 g/orina de 24 horas. a seguir. No es imprescindible si el feto presenta
• Oliguria: ≤ 500 ml en 24 horas o < 100 ml/3 h pruebas de bienestar fetal correctas y la paciente
y/o insuficiencia renal (creatinina sérica > 1,2 sigue correctamente los controles.
mg/dL y/o urea > 40 mg/dL). Es necesario control antenatal estricto ya que la
• Edema de pulmón o cianosis. preeclampsia es extremadamente variable y pue-
• Elevación de enzimas hepáticas (GOT y/o GPT de empeorar bruscamente:
> 62 UI/L). • Control 1 vez/semana.

28
F. Crispi

• Restricción de la actividad a la gestante (repo- • Exploración general (incluye la realización de


so relativo) y dieta normal (normocalórica, nor- un ECG).
mosódica y normoproteica). • Exploración obstétrica general (incluye el TNS).
• Información sobre la sintomatología prodró- • Maduración pulmonar fetal entre las 24-34,6
mica de eclampsia (recomendar una consulta semanas.
en Urgencias ante su aparición). • Control de diuresis horaria (con sonda de Fo-
• Control de la tensión arterial, peso y protei- ley).
nuria cualitativa 1 vez/1-3 días. • Suero fisiológico o Ringer lactato (100-125
• Control analítico 1 vez/1-2 semanas. ml/h) con el objetivo mínimo de mantener una
• Control de bienestar fetal: valoración de cre- diuresis > 30-40 ml/h(14). En caso de terapia hi-
cimiento fetal, índice de líquido amniótico, Dop- potensora administrar adicionalmente 500-
pler umbilicofetal(11) y NST 1 vez cada 1-2 se- 1.000 ml de la misma solución.
manas. • Control analítico.
El tratamiento hipotensor en general no está in- El objetivo del tratamiento de la HTA severa es
dicado en la HTA leve. Se debe mantener una TAD conseguir una TAD preparto entre 90 y 105 mmHg
entre 90-105 mmHg. Iniciar tratamiento en aque- y posparto < 90 mmHg. Importante evitar des-
llas pacientes en que no se pueda realizar un con- censos bruscos de la TA por el riesgo de hipoper-
trol adecuado y/o con TA cercanas al rango de la fusión placentaria(12). Se pueden utilizar diferen-
HTA severa(12). Se pueden utilizar diferentes fár- tes fármacos endovenosos (ev), aunque el labeta-
macos vía oral, aunque el labetalol se considera lol se considera el fármaco de primera elección:
el fármaco de primera elección: • Labetalol (Trandate®): iniciar con un bolus ev
• Labetalol (Trandate®) 50-100 mg/6 h (máximo lento de 20 mg, si no se controla la TA repetir
2.400 mg/día). cada los 20 minutos (40, 80, 80 mg, máximo 220
• Hidralazina (Hydrapres®) 25-50 mg/día en 3- mg). Seguir con perfusión continua (50-400
4 tomas (máximo 200 mg/día). mg/6 h). Si la TA no se controla se aconseja aso-
• Nifedipina (Adalat®) 10 mg/6-8 h (máximo 60 ciar hidralazina.
mg/día). • Hidralazina (Hydrapres®): iniciar con bolus ev
• Alfa-metildopa (Aldomet®) 250 mg/8 h (má- lento de 5 mg (máximo 4 bolus en intervalos de
ximo 2-3 g/día). 20 minutos). Continuar con perfusión de 3-7
La finalización de la gestación se indicará entre mg/h. Máximo 200 mg/día.
las 37 y 40 semanas en función del bishop y del • Nifedipina (Adalat®): iniciar 10 mg oral (se pue-
pronóstico del parto. de repetir en 30 min). Dosis de mantenimien-
to 10-20 mg/6-8 h. Máximo 60 mg/día.
Manejo de la preeclampsia grave(13) La prevención farmacológica de las convulsio-
Se debe ingresar a la gestante para realizar una nes se indicará en todos los casos que cumplan cri-
valoración del estado maternofetal y establecer la terios de gravedad. El fármaco de elección es el sul-
necesidad de tratamiento. fato de magnesio(15-16).:
Valoración inicial: • Sulfato de magnesio (Sulmetin®): bolus ev de 2-
• Control de TA cada 5 minutos hasta la estabiliza- 4 g y perfusión ev de 1-2 g/h con el objetivo de
ción del cuadro. Posteriormente control horario. obtener unos niveles plasmáticos entre 4,2-8,4

29
Preeclampsia: control antenatal

mg/dL. Riesgo de paro cardiorrespiratorio si se • Pródromos de eclampsia persistentes y que no


acumula el fármaco, por lo que se debe contro- ceden tras instauración del tratamiento profi-
lar el reflejo rotuliano (debe estar presente), fre- láctico de las convulsiones.
cuencia respiratoria (debe ser > 14 resp./minu- • Signos de pérdida del bienestar fetal.
to), diuresis (debe ser > 100 ml en 4 horas) y con- • Afectación orgánica materna progresiva: dete-
trol de la saturación de O2. La intoxicación se tra- rioro de la función renal y/o oligoanuria per-
ta con gluconato cálcico en bolus de 1g ev en sistente y/o deterioro de función hepática.
3-4 min. • Aparición de complicaciones maternas graves:
Controles posteriores a la estabilización del cua- hemorragia cerebral, edema pulmonar, rotura
dro: hepática, DPPNI.
• TA horaria. Peso y balance hídrico/24 horas. La vía del parto preferible es la vaginal. Reali-
• Control del bienestar fetal: NST, control de lí- zar una cesárea electiva si edad gestacional < 32
quido amniótico, Doppler uterino, umbilical semanas y Bishop < 5.
y fetal, perfil biofísico cada 24-72 horas y siem- En el postparto debe realizarse un control ex-
pre que existan cambios clínicos maternos. haustivo materno en las primeras 24-48 horas:
• Control analítico 2 veces/semana. • Balance hídrico estricto y monitorización de la
• Monitorización hemodinámica (PVC, presión saturación de O2 (periodo de máximo riesgo de
venosa central y/o TAC, TA cruenta): en los ca- EAP).
sos de oligoanuria persistente (< 100 ml/4 h), • Mantener sulfato de magnesio mínimo de 24-
HTA severa refractaria al tratamiento, aparición 48 horas posparto y siempre que persista la clí-
de edema agudo de pulmón y/o insuficiencia nica prodrómica de eclampsia.
cardiaca. • Profilaxis de la enfermedad tromboembólica
• Tratamiento diurético (furosemida 20-40 mg con heparina de bajo peso molecular siempre
ev) si existe oligoanuria persistente a pesar de en caso de cesárea y cuando exista un factor aso-
fluidoterapia correcta, edema agudo de pulmón, ciado de riesgo trombótico en el parto vaginal.
edema cerebral o indicación por cardiopatía o • Inicio del tratamiento hipotensor vía oral a las
nefropatía. 24-48 horas posparto.
• Se realizará profilaxis de la enfermedad trom-
boembólica con heparina de bajo peso molecu- Manejo del síndrome de HELLP
lar (Fragmin ®) siempre que existan un mínimo Valoración inicial y controles posteriores si-
de tres factores de riesgo trombótico asociados. guiendo igual pauta que en la preeclampsia grave.
Posología: peso materno pregestacional < 60 kg, El tratamiento con corticoides ha demostrado
2.500 UI/24 h sc; entre 60-90 kg, 5.000 UI/24 h una mejoría clínica-analítica transitoria, lo que
sc, y > 90 kg, 7.500 UI/24 h. permite la utilización de una anestesia regional y
La gestación debe finalizarse a partir de la se- mejora el pronóstico del parto vaginal (17). Ini-
mana 32, previa maduración pulmonar con cor- ciar tratamiento tan sólo si la cifra de plaquetas
ticoides. Aunque existen criterios de finalización < 100.000/μl. Corticoides de elección:
inmediatos, independientes de la edad gestacio- • Betametasona (de elección cuando se requiera
nal: realizar maduración pulmonar fetal): 12 mg/12
• TA grave incontrolable farmacológicamente. h im durante 48 horas.

30
F. Crispi

• Metilprednisolona (de elección cuando no se la presencia de un desprendimiento de placenta


requiera realizar maduración fetal o si se preci- o de una pérdida del bienestar fetal.
sa prolongar el tratamiento materno) 40 mg/12 Tratamiento de la HTA siguiendo igual pauta
h ev hasta evidenciarse ascenso de la cifra de que en la preeclampsia grave.
plaquetas > 150.000 preparto y > 100.000 pos- La finalización del embarazo debe realizarse con
parto, y después disminución de la dosis pro- la mayor urgencia posible dentro de las primeras
gresivamente. En caso de no respuesta se pue- 24 horas posconvulsión y siempre después de la
de aumentar a 40 mg/6 h. estabilización hemodinámica de la paciente.

Manejo de la eclampsia
Control de las convulsiones: PUNTOS CLAVE
• Colocar a la paciente en decúbito lateral iz- La preeclampsia se diagnostica por la aparición
quierdo, mantener una vía aérea permeable (tu- de HTA y proteinuria a partir de las 20 semanas de
bo de Mayo) y aspirar las secreciones farínge- gestación.
as. Iniciar la administración de oxígeno a razón Es una enfermedad con gran variabilidad clí-
de 6 l/min (mascarilla al 30%) y evitar las le- nica.
siones maternas (proteger la lengua). Exige un control estricto materno y fetal.
• Colocar vía periférica e iniciar tratamiento ev Su único tratamiento eficaz es la finalización
con sulfato de magnesio(15,16) bolus 4 g + per- del embarazo.
fusión continua de 2 g/h. En caso de no res-
puesta al tratamiento repetir un segundo bolus
de 2 g de sulfato de magnesio y/o aumentar el BIBLIOGRAFÍA
ritmo de la perfusión continua a 4 g/h. 1. Sibai BM. Preeclampsia as a cause of preterm and la-
te preterm (near-term) births. Semin Perinatol 2006;30:
• Si no hay respuesta se puede utilizar diazepam
16-19.
(10 mg ev en 1 min) o fenitoína (15 mg/kg ev
2. Levine RJ, Lam C, Qian C, Yu KF, Maynard SE, Sachs
en 1 hora + 250-500 mg/12 h vo o ev). BP, Sibai BM, Epstein FH, Romero R, Thadhani R, Ka-
• En caso de que las medidas anteriores fallen se rumanchi SA; CPEP Study Group. Soluble endoglin
pueden utilizar barbitúricos (tiopental D: 50- and other circulating antiangiogenic factors in pree-
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• Radiografia de tórax (recomendable para des-
4. Crispi F, Dominguez C, Llurba E, Martin-Gallan P,
cartar la existencia de una aspiración). Cabero L, Gratacos E. Placental angiogenic growth fac-
• Control NST: tener en cuenta que la presencia tors and uterine artery Doppler findings for characte-
de patrones patológicos de la frecuencia car- rization of different subsets in preeclampsia and in iso-
lated intrauterine growth restriction. Am J Obstet Gy-
díaca fetal durante la crisis convulsiva no es in- necol 2006;195:201-207.
dicación de cesárea urgente ya que habitual-
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31
Preeclampsia: control antenatal

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32
Complicaciones graves de la preeclampsia
S. Hernández, J. Bellart

La preeclampsia grave es una patología poten- terial provoca el vasoespasmo de las arterias ce-
cialmente muy grave que puede progresar de for- rebrales, con la consiguiente hipoperfusión cere-
ma brusca a un deterioro de la madre y del feto. bral, isquemia localizada/infarto y edema citotó-
Las complicaciones más frecuentes se citan en la xico (intracelular). La pérdida de la autorregula-
Tabla I. ción del flujo sanguíneo cerebral en respuesta a la
La gestante debe permanecer ingresada, hasta alta presión sistémica (es decir, la encefalopatía hi-
la finalización de la gestación, en una unidad que pertensiva) se traduce en hiperperfusión, daño en-
permita la vigilancia intensiva tanto de la madre dotelial y edema vasogénico (extracelular).
como del feto(1). La frecuencia de la eclampsia ha disminuido
El tratamiento adecuado e intensivo de la pre- progresivamente con los años, en relación direc-
eclampsia grave evita en gran parte la aparición de ta con la mejora de los cuidados pre y postnatales,
complicaciones graves, a pesar de ello, un porcen- siendo un buen marcador de calidad asistencial(2).
taje pequeño de pacientes pueden desarrollar al- Su incidencia es de alrededor de 1/2.000-3.500 em-
guna de las complicaciones citadas. A continua- barazos. Ocurre en el 2-3% de las preeclampsias
ción se revisan las más prevalentes y que compor- graves y en aproximadamente el 0,6% de las pre-
tan un mayor riesgo vital materno. eclampsias leves(3).
Su forma de presentación será en la mayoría de
los casos anteparto (38-53%) y hasta un 12% de
ECLAMPSIA los casos su aparición será más allá de 48 horas
Se trata de un cuadro convulsivo en el curso de posparto.
la preeclampsia. Su origen parece deberse a una Su mortalidad se ha estimado alrededor del
vasoconstricción severa a nivel cerebral y su ma- 1,8%.
nifestación es difícilmente distinguible de un ata-
que de gran mal. La causa exacta de las convulsio- Diagnóstico
nes en mujeres con preeclampsia no se conoce. Se La presencia de convulsiones o coma en una
han postulado diferentes teorías. El exceso de re- gestante obliga a descartar lo antes posible una
gulación cerebral en respuesta a la hipertensión ar- eclampsia. Después de una convulsión en una em-

33
Complicaciones graves de la preeclampsia

TABLA I. Complicaciones de la preeclampsia tolimitadas y rara vez duran más de tres o cuatro
minutos (duración habitual 60 a 75 segundos).
Maternas El síntoma más frecuente es el dolor de cabeza
SNC: Hepático: persistente (frontal u occipital), hasta en el 70%
• Convulsiones (eclampsia) • Ictericia
de los casos. Otras manifestaciones clínicas son
• Hemorragia cerebral • HELLP
trastornos visuales (escotomas, amaurosis fugaz,
• Edema cerebral • Hematoma hepático
• Ceguera cortical • Rotura hepática
visión borrosa, diplopía, hemianopsia homóni-
• Edema de retina Coagulación: ma), dolor en cuadrante superior derecho o dolor
Renal: • CID epigástrico, y alteración del estado mental. Los sín-
• Necrosis cortical • Hemólisis microangio- tomas pueden ocurrir en las horas previas a la con-
• Necrosis tubular pática vulsión.
• Insuficiencia renal aguda Placenta:
Un dato a remarcar es que el 38% de las pa-
Respiratorio: • Infartos placentarios
cientes con eclampsia no tiene hipertensión arte-
• Edema pulmonar/laringe • DPPNI
• Edema laríngeo Morbilidad cardiovascular
rial ni proteinuria en el momento de la convulsión.
a largo plazo Una presión arterial normal no descarta la eclamp-
Muerte sia.
Fetales
• CIR Manejo clínico
• Acidosis
Aunque no existen evidencias firmes de finali-
• Prematuridad
zación inmediata, una vez diagnosticado el episo-
• Muerte
• Secuelas neurológicas dio eclámptico se procederá a la finalización de
la gestación para mejorar el pronóstico materno y
fetal, ya que existe riesgo de reconvulsión (hasta el
barazada no conocida hipertensa previamente, los 20%), secuelas neurológicas y muerte materna.
dos diagnósticos más probables son crisis epilép- El manejo clínico será el mismo que el de la pre-
tica o preeclampsia grave complicada con eclamp- eclampsia grave. No obstante, en la eclampsia se
sia. Si existía diagnóstico previo de hipertensión o deberán poner en práctica una serie de medidas
preeclampsia no hay dificultad en establecer el diag- generales previas:
nóstico, pero esto no siempre es así. a) Cuando se presenta la crisis eclámptica, más im-
En caso de duda, se debe intentar descartar lo portante que parar las convulsiones es asegu-
antes posible una eclampsia, ya que, a diferencia rar la oxigenación materna y minimizar en lo
de una crisis epiléptica, constituye una indicación posible el riesgo de broncoaspiración. Para ello,
clara de finalizar la gestación, aunque las cifras de se colocará a la paciente en decúbito lateral iz-
presión arterial en ese momento sean de hiper- quierdo y se mantendrá una vía aérea perme-
tensión leve o la situación clínica esté estable. able (tubo de Mayo) aspirando las secreciones
El diagnóstico de la eclampsia se basa en la clí- faríngeas e iniciando la administración de oxí-
nica: evidencia de una o más convulsiones gene- geno a razón de 6 l/min (mascarilla al 30%).
ralizadas y/o coma en una mujer con preeclamp- b) La prevención de lesiones maternas es otro as-
sia y en ausencia de otros trastornos neurológicos. pecto básico a tener en cuenta en el tratamien-
Las convulsiones eclámpticas son casi siempre au- to inicial.

34
S. Hernández, J. Bellart

c) El tratamiento anticonvulsivante debe ini- TABLA II. Efectos del sulfato de magnesio según los ni-
ciarse inmediatamente. De elección para la pre- veles plasmáticos
vención y tratamiento de las convulsiones
Mmol mg meq Efecto
eclámpticas es el sulfato de magnesio (SO4Mg),
dada su relativa inocuidad y su margen tera- 2-3,5 6-8 4-6 Terapéutico
péutico. The Eclampsia Trial Collaborative Group 3,5-4 8-9 6-10 Alargamiento PQ QRS
4-6,5 9-10 <10 Desaparición del reflejo rotuliano
halló que el tratamiento con sulfato de magne-
6,5-7,5 12-14 >13 Depresión respiratoria
sio reducía la recurrencia de convulsiones un >10 22-24 >25 Paro cardiaco
52% respecto al diazepam y un 67% respecto a
la fenitoína y a su vez, el SO4Mg también dis-
minuía la mortalidad materna(4,5). La monitorización de los niveles de magnesio
El mecanismo de acción del SO4Mg no es del to- se realizará mediante: control de la frecuencia
do conocido. Es un depresor del sistema nervio- respiratoria, de los reflejos tendinosos (con el
so central, con acción vasodilatadora arterial, con objeto de detectar hiperreflexia o hiporreflexia)
lo cual disminuye la isquemia cerebral sin dismi- y el control de la diuresis. Las mediciones pe-
nuir la perfusión cerebral. Su acción anticonvul- riódicas de magnesemia están indicadas sobre
sivante radica en el efecto inhibidor sobre los re- todo ante la disminución de la diuresis o signos
ceptores NMDA con bloqueo de los canales del de toxicidad del fármaco.
calcio. Otros efectos beneficiosos son su transito- d) El tratamiento farmacológico hipotensor se-
rio efecto hipotensor y cierta actividad tocolítica. rá el mismo que el de la preeclampsia grave.
El rango terapéutico del SO4Mg es de 4-6 mEq/l. Para la valoración del estado materno se reali-
Cuando las concentraciones plasmáticas superan zará un equilibrio ácido-base, una gasometría
los 6 mEq/l se producen efectos tóxicos, tales co- y un estudio de coagulación tras la estabiliza-
mo depresión del Q-T, hiporreflexia, debilidad ción neurológica y hemodinámica de la pa-
muscular, somnolencia y depresión respiratoria, ciente.
pudiendo llegar al paro cardiaco (Tabla II). Como norma general y al igual que en los ca-
La dosis inicial de sulfato de magnesio es un bo- sos de preeclampsia grave, es preferible perder
lus de 4 g a razón de 1 g/5 min y posteriormente unos minutos, e incluso unas pocas horas, si con
seguir con una perfusión continua de 2 g/h. ello se consigue estabilizar al máximo a la pa-
En caso de no respuesta al tratamiento, se debe ciente, lo que incluye una valoración clínica y
repetir un segundo bolus de 2 g de SO4Mg y/o analítica lo más completas posible. Precipitar-
aumentar el ritmo de la perfusión continua a 4 se a realizar una cesárea urgente sin una ade-
g/h. Si sigue sin haber respuesta se puede uti- cuada terapia anticonvulsivante o sin descartar
lizar alguno de los fármacos siguientes: diaze- una coagulopatía, puede contribuir a empeo-
pam 10 mg ev en 1 minuto, fenitoína 15 mg/kg rar la ya comprometida situación materna. Tam-
ev en 1 hora + 250-500 mg/12 h vo o ev. En ca- bién es recomendable trasladar a la paciente a
so de que las medidas anteriores fallen se pue- un Hospital de Referencia, siempre que se pue-
den utilizar barbitúricos de acción corta (tio- da realizar en condiciones de seguridad y ra-
pental, dosis de 50-100 mg ev) o la intubación pidez. En caso contrario, el traslado se pos-
y curarización. pondrá hasta después de la extracción fetal.

35
Complicaciones graves de la preeclampsia

Se procederá, por lo tanto, a la finalización del frecuencia cardiaca fetal) antes de proceder a la ci-
embarazo con la mayor urgencia posible den- rugía, si es posible.
tro de las primeras 24 horas posconvulsión y
siempre tras de la estabilización hemodinámi- Prevención de la eclampsia
ca de la paciente(5, 6). Los factores identificados, o por lo menos par-
cialmente responsables de la falta de prevención de
Pruebas complementarias maternas la eclampsia, son: errores médicos (36%), falta de
La realización de una radiografía de tórax es re- atención prenatal (19%), aparición súbita (18%),
comendable para descartar la existencia de una as- niveles infraterapéuticos de magnesio (13%), el ini-
piración. cio del puerperio tardío (12%) y el inicio tempra-
La realización de estudios de imagen (TAC, no antes de las 21 semanas (3%). Por lo tanto, mu-
RNM) no es necesaria de forma rutinaria. Deben chos casos de eclampsia no parecen ser prevenibles,
realizarse en aquellas pacientes que cumplan: per- incluso entre las mujeres que reciben cuidado pre-
sistencia de convulsiones a pesar del tratamiento, natal regular, o las que están ingresadas.
presencia de focalidad neurológica, psicosis y per- El riesgo de recurrencia de preeclampsia en ges-
sistencia de coma. taciones posteriores es del 2%.

Monitorización fetal
Para valorar el estado fetal se realizará un NST, SÍNDROME DE HELLP
teniendo en cuenta que la presencia de patrones Constituye una etapa progresiva de la pree-
patológicos de la frecuencia cardiaca fetal duran- clampsia, y las formas de presentación dependen
te la crisis convulsiva no es indicación de cesárea de la extensión del daño endotelial y el depósito
urgente ya que habitualmente se recuperan a los de fibrina.
3-15 minutos. La persistencia de patrones patoló- El síndrome HELLP se caracteriza por la pre-
gicos debe hacer sospechar la presencia de un des- sencia de hemólisis (H), elevación de las enzimas
prendimiento de placenta o de una pérdida del bie- hepáticas (EL) y recuento de plaquetas bajo (LP)(7).
nestar fetal. En la anemia hemolítica microangiopática se
observan hematíes deformados, consecuencia del
Parto paso de estos a través de vasos sanguíneos peque-
El parto es el único tratamiento curativo, pero ños con depósitos de fibrina, y en la sangre peri-
esto no excluye necesariamente la inducción del férica se detecta un patrón hemolítico típico con
parto. El parto por cesárea es una opción razona- presencia de esquistocitos.
ble para las mujeres de menos de 32 semanas de Alteraciones hepáticas: la clásica lesión hepá-
gestación que tienen un cuello uterino desfavora- tica es la necrosis parenquimatosa periportal o fo-
ble. Sin embargo, los beneficios de la reanimación cal, en la cual los depósitos hialinos se observan
intraútero del feto antes del parto es deseable. Hay dentro de los sinusoides hepáticos. La obstrucción
que esperar 15 o 20 minutos, después de la con- de los sinusoides por la fibrina causa daño hepa-
vulsión, hasta que la madre y el feto muestren sig- tocelular, que se caracteriza por el aumento de las
nos de recuperación (control de las convulsiones, enzimas hepáticas y dolor en el cuadrante supe-
recuperación de la conciencia, recuperación de la rior derecho y en el epigastrio.

36
S. Hernández, J. Bellart

El aumento de la presión intrahepática va au- TABLA III. Criterios analíticos del diagnóstico de Sín-
mentando progresivamente, pudiéndose formar drome de HELLP
hematomas subcapsulares que provocan una dis-
1. Hemólisis:
tensión de la cápsula de Glisson, con el consiguiente
• Bilirrubina > 1,2 mg/dl
dolor intenso. Cuando estos eventos son conti- • LDH > 600
nuados y excesivos, causan rotura hepática con pe- • Presencia de esquistocitos
ligro inminente para la vida, con una incidencia 2. Enzimas hepáticas:
aproximada de 1/45.000. La alteración de las en- • Transaminasas >70 UI
zimas hepáticas se manifiesta con aumento de la • LDH > 600 UI
GOT por encima de 70 U/L, LDH mayor de 600 3. Plaquetas < 100.000/ml
U/L y bilirrubinemia sobre 1,2 mg/dl.
Trombocitopenia: la disminución del recuen-
to plaquetario se debe al consumo de plaquetas se- un 80% de los casos: dolor en epigastrio o hipo-
cundario al daño endotelial; es frecuente verlo tem- condrio derecho, náuseas y vómitos.
pranamente en la preeclampsia. Se observa ade- Característicamente la hemólisis es de tipo mi-
más un recambio plaquetario aumentado, una dis- croangiopático, demostrable por la presencia de
minución del tiempo de vida medio y un aumen- esquistocitos y por el aumento de la haptoglobi-
to de la adherencia plaquetaria al colágeno expuesto na, LDH y bilirrubina. La anemia, sin embargo, es
a la pared endotelial. poco común.
La incidencia del síndrome HELLP, es del 0,5- La trombocitopenia es secundaria a hiperdes-
0,9% y constituye una complicación de pree- trucción periférica, observándose en el 5-10% de
clampsia grave en un 4-12% de los casos. En nues- las pacientes recuentos inferiores a 30.000 mm3.
tra población, es del 11,9% de las pacientes con Hasta en un 20% de los casos no hay hiperten-
preeclampsia, lo que representa un 0,23% del to- sión en el momento del diagnóstico.
tal de partos. En algunos casos, el síndrome de HELLP pue-
Su forma de presentación más frecuente es an- de debutar con ictericia, hemorragia gastrointes-
tes del parto, hasta el 70% de los casos. En el 6% tinal o hematuria, por lo que frecuentemente es-
ocurre durante el parto y en el 24% en el pospar- tas pacientes son diagnosticadas erróneamente de
to. hepatitis viral, úlcera péptica, nefrolitiasis, pielo-
Suele ser más frecuente en gestantes multípa- nefritis, hígado graso del embarazo, púrpura trom-
ras y la hipertensión y la proteinuria pueden estar bocitopénica trombótica o síndrome hemolítico
ausentes o estar sólo ligeramente alteradas(9). urémico(8,9).
Sobre su etiopatogenia, se puede decir que es Los criterios analíticos propuestos por Sibai(10)
una presentación multisistémica de una PE grave. se expresan en la Tabla III.
Al igual que la preeclampsia, la etiopatogenia y la
fisiopatología de este síndrome no está aclarada. Complicaciones (Tabla IV)
Su aparición condiciona una morbimortalidad
Diagnóstico materna y fetal elevadas.
Clínicamente los signos y síntomas predomi- Las complicaciones asociadas al síndrome
nantes son los de la afectación hepática hasta en HELLP incluyen la coagulación intravascular di-

37
Complicaciones graves de la preeclampsia

TABLA IV. Complicaciones del síndrome de HELLP TABLA V. Aspectos generales del tratamiento del síndro-
me de HELLP
Manifestaciones clínicas Incidencia(%)
1. Estabilizacción del estado materno:
Dolor epigástrico e hipocondrio derecho 70 • Tratamiento profiláctico de las convulsiones con
Náuseas y/o vómitos 36 SO4Mg
Cefalea y/o fotopsias 30 • Tratamiento de la hipertensión severa
HTA 84 • Corregir las alteraciones de la coagulación
Proteinuria (>300 mg/24 h) 74
Manifestaciones hemorrágicas 5-9 2. Evaluación del estado fetal:
Ictericia 5 • Cardiotocografía fetal
Dolor en hombro o cuello 5 • Valoración de crecimiento fetal, ILA
• Doppler umbilical
Complicaciones 3. Evaluación de la madurez pulmonar fetal:
CID 21 • Si maduro: parto
DPPNI 16 • Si inmaduro: corticoides, parto
Insuficiencia renal aguda 8
Ascitis grave 8
EAP 6
Derrame pleural 6 puesto diferentes terapéuticas con el fin de pro-
Rotura hematoma hepático 1 longar la gestación hasta conseguir la madurez fe-
Hemorragia cerebral 1
tal. Sin duda, la más estudiada y al mismo tiem-
SDRA 1
po la más controvertida ha sido el tratamiento con
corticoides, aunque actualmente no existe con-
seminada (CID) con una incidencia del 21%, el senso.
desprendimiento prematuro de placenta con una Se dispone de datos que demuestran una me-
incidencia que oscila entre el 7% y el 16%, el fra- joría clínica-analítica transitoria tras el tratamiento
caso renal agudo, los hematomas hepáticos, la as- con corticoides, lo que permitirá la utilización de
citis y el edema agudo de pulmón(10). Las menos una anestesia regional y por lo tanto, mejora del
frecuentes, aunque las más difíciles de tratar, son pronóstico del parto vaginal.
la rotura del hematoma hepático y la hemorragia Se recomienda iniciar tratamiento con corti-
cerebral. coides tan sólo si la cifra de plaquetas es inferior a
100.000/ l. El corticoide de elección es la betame-
Manejo clínico (Tabla V) tasona (corticoide que atraviesa la placenta cuan-
El tratamiento del síndrome de HELLP se de- do se requiera realizar maduración pulmonar fe-
bería realizar en un centro de tercer nivel. En lí- tal (12 mg/12 h im durante 48 horas). La metil-
neas generales, la valoración inicial, los controles prednisolona (corticoide que escasamente atra-
posteriores y la pauta de tratamiento son iguales viesa la placenta, sin potenciales efectos adversos
que en la PE grave (profilaxis de las convulsiones sobre el feto) es de elección cuando no se requie-
con SO4Mg, tratamiento de la HTA severa, flui- ra realizar maduración pulmonar fetal o en aque-
doterapia y control del bienestar fetal). llos casos en los que se precise prolongar el trata-
No obstante, dado que en un porcentaje ele- miento materno por debajo de las 32 semanas de
vado de pacientes el síndrome se presenta en el se- gestación (40 mg/12 h ev hasta evidenciarse as-
gundo o al inicio del tercer trimestre, se han pro- censo de la cifra de plaquetas por encima de

38
S. Hernández, J. Bellart

150.000 preparto y por encima de 100.000 pos- En caso de cesárea, se realizará una incisión de
parto). En caso de no respuesta a las 8-10 horas del Pfannestield siendo preciso dejar drenajes a nivel
inicio del tratamiento se deberá aumentar la do- subaponeurótico y subcutáneo. La retirada del ca-
sis a 40 mg/6 h ev(11). téter de peridural en caso de anestesia locorregio-
Por tanto, el diagnóstico de síndrome de HELLP nal siempre se debe realizar tras la normalización
no significa la realización de una cesárea de forma de las pruebas de coagulación y con cifra de pla-
inmediata ya que hay que valorar la gravedad de quetas superiores a 80.000 l.
la madre, la edad gestacional del feto y la respues-
ta al tratamiento instaurado con hipotensores, sul-
fato de magnesio y con corticoides. EDEMA AGUDO DE PULMÓN
Además de hacer posible la prolongación del El edema pulmonar se presenta en el 2-6% de
embarazo, el tratamiento con corticoides ha de- las pacientes con preeclampsia grave(15). Consiste
mostrado, en diferentes estudios, una menor ne- en la acumulación anormal y rápida de líquido en
cesidad de transfusión de hematíes y un incre- los componentes extravasculares del pulmón, lo
mento de la utilización de la anestesia peridural que incluye tanto el intersticio pulmonar (fase in-
sin incrementar la morbilidad materna(12,13). tersticial del edema) como los espacios alveolares
(edema alveolar).
Pruebas complementarias Su etiología es multifactorial. Durante la ges-
La realización de estudios de imagen (TAC/eco- tación existen una serie de factores que favore-
grafía abdominal) tan sólo están indicadas si exis- cen el edema y que a grandes rasgos podrían sin-
te clínica sugestiva de hematoma hepático (dolor tetizarse en que existe una disminución de la pre-
epigástrico severo, dolor en hipocondrio derecho sión oncótica (hemodilución), un aumento de
o en hombros, hipotensión, CID o evidencia de as- la permeabilidad vascular, especialmente a nivel
citis severa). pulmonar y una disfunción ventricular (16). La
administración de corticoides incrementa la re-
Finalización de la gestación: vía del parto tención hídrica y puede, a su vez, favorecer to-
Las indicaciones de finalización y la vía del par- davía más el traspaso vascular, lo que puede abo-
to no difieren de las de la preeclampsia grave. car, en ciertos casos, al cuadro del edema de pul-
La vía del parto preferible es la vía vaginal con món.
anestesia locorregional. Se debe tener en cuenta, Las gestantes añosas y las multíparas parecen
sin embargo, que cifras de plaquetas inferiores a ser más susceptibles a desarrollar un edema pul-
80.000 mm3 contraindican las anestesias locorre- monar en el transcurso de una preeclampsia.
gionales (peridural, intradural y pudendos)(14). El edema pulmonar se asocia frecuentemente a
Otro aspecto relevante es que se recomienda la disfunción de otros órganos y sistemas, tales co-
transfusión de plaquetas inmediatamente antes del mo CID (49%), fracaso renal agudo (27%), crisis
parto si las plaquetas son inferiores a 40.000/ l en hipertensivas (16%), paro cardiorrespiratorio
caso de cesárea, si las plaquetas son inferiores (13%) o edema cerebral (5%).
20.000/ l en caso de parto vaginal y si en las pri- El edema pulmonar constituye una emergencia
meras 24 horas posparto existe clínica de sangra- clínica que requiere un diagnóstico y tratamien-
do. to inmediatos.

39
Complicaciones graves de la preeclampsia

Diagnóstico de una hora si no se consigue una diuresis ade-


El comienzo del cuadro suele ser abrupto, fre- cuada(17).
cuentemente nocturno. El síntoma principal es Una vez estabilizada la paciente se debe proce-
la dificultad para respirar (disnea). En muchas oca- der a la finalización de la gestación lo más rápida-
siones la paciente no tolerará permanecer tumba- mente posible.
da teniendo que estar incorporada (ortopnea).
Otros de los síntomas son: mal estado general, in-
quietud, angustia, sudoración abundante, frialdad FRACASO RENAL AGUDO
en la piel, tos con expectoración sonrosada, dis- El fracaso renal agudo ocurre en aproximada-
minución de la cantidad de orina, aumento de la mente el 1-8% de las preeclampsias graves. Se aso-
frecuencia cardiaca, aumento de la frecuencia res- cia habitualmente a aquellos casos en los que co-
piratoria con uso de la musculatura accesoria, etc. existe una hemorragia importante o CID(18). Sin
Es muy característica la auscultación pulmonar embargo, grados leves de insuficiencia renal pue-
en la que se escuchan los llamados crepitantes hú- den observarse como consecuencia, en parte, de la
medos, en ambas bases pulmonares, debidos a la reducción de la permeabilidad de la pared del ca-
trasudación del contenido del capilar sanguíneo pilar glomerular.
hacia el alvéolo. Con la finalización de la gestación la función
La radiografía de tórax es el estudio más útil pa- renal se recupera habitualmente en 48-72 horas,
ra el diagnóstico del edema agudo de pulmón y pudiendo en algunos casos tardar en normalizar-
nos mostrará la presencia de líquido en el espacio se 8 semanas posparto(19).
pulmonar (redistribución varcular), en ocasiones
también se observará un aumento del tamaño del
corazón (cardiomegalia). PUNTOS CLAVE
Para completar el diagnóstico se realizará un • La presencia de convulsiones o coma en una
electrocardiograma, que ayudará a identificar si gestante obliga a descartar lo antes posible una
existe una cardiopatía de base que haya desenca- eclampsia.
denado el cuadro, y una analítica de sangre y ori- • La eclampsia, en la mayoría de los casos, ocu-
na. rre anteparto (38-53%) y hasta en un 12% de
los casos más allá de las 48 horas postparto.
Manejo clínico • Una presión arterial normal no descarta la
El tratamiento de este cuadro tiene tres objeti- eclampsia con seguridad (el 38% no tiene hi-
vos: mejorar la ventilación pulmonar, disminuir pertensión arterial ni proteinuria en el momento
la presión venocapilar para intentar disminuir la de la convulsión). El síntoma más frecuente es
congestión pulmonar mediante la administración el dolor de cabeza (hasta en el 70%).
de fármacos diuréticos y fármacos con acción va- • De elección para la prevención y tratamiento
so dilatadora (que disminuyan la precarga). El tra- de las convulsiones eclámpticas utilizaremos el
tamiento inicial del edema pulmonar debe incluir sulfato de magnesio.
la administración de oxígeno, la restricción de lí- • El síndrome de HELLP, se caracteriza por la pre-
quidos y la administración de 20-40 mg de furo- sencia de hemólisis (H), elevación de las enzi-
semida intravenosa repitiendo la dosis al cabo mas hepáticas (EL) y recuento de plaquetas ba-

40
S. Hernández, J. Bellart

jo (LP). Hasta el 80% de los casos presentarán 7. Weinstein L. Syndrome of hemolysis, elevated liver en-
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dolor en epigastrio o hipocondrio derecho, náu- of hypertension in pregnancy. Am J Obstet Gynecol
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9. Baxter JK, Weinstein L. HELLP Syndrome: The State
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el síndrome de HELLP ha demostrado en al-
10. Sibai, BM. Diagnosis, controversies, and management
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cremento de la utilización de la anestesia peri- 11. Martin JN, Rose CH, Briery CM. Understanding and
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HELLP es la vía vaginal con anestesia locorre- 12. Martin JN Jr, Thigpen BD, Rose CH, Cushman J, Mo-
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• Edema agudo de pulmón: alerta desencade- venous corticosteroid therapy for HELLP syndrome.
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nantes (fluidoterapia, corticoides, etc.). Diag-
13. Woudstra DM, Chandra S, Hofmeyr GJ, Dowswell T.
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41
Ecografía del sistema nervioso central
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

INTRODUCCIÓN • Los patrones de normalidad cambian con la


Las malformaciones del sistema nervioso cen- edad gestacional.
tral (SNC) son unas de las malformaciones con- • Las lesiones son progresivas. Pasa un tiempo
génitas más frecuentes. Los defectos del tubo neu- desde que se ha presentado la situación de ries-
ral son los más frecuentes y afectan al 0,1-0,2% de go hasta que la anomalía se evidencia en la ima-
los recién nacidos. A pesar de que la incidencia de gen.
las anomalías intracraneales es incierta, a partir de • Una ecografía normal en la semana 20-22 no
datos de estudios de seguimiento a largo plazo se excluye patología que se pueda presentar pos-
estima que podrían presentarse en alrededor de 1 teriormente.
de cada 100 recién nacidos. Son la segunda causa El contenido de este protocolo incluye planifi-
de discapacidad en la infancia y el origen de lesio- cación del diagnóstico ecográfico de las anomalí-
nes severas y permanentes sin posibilidad de plan- as del SNC, la sistemática de la exploración y las
tear opciones terapéuticas en gran parte de los ca- indicaciones de la neurosonografía (NSG) deta-
sos. llada.
El desarrollo del SNC presenta unas peculia-
ridades diferenciales del resto de los órganos. El
desarrollo de las diferentes estructuras se man- PLANIFICACIÓN DEL DIAGNÓSTICO
tiene durante toda la gestación y prosigue des- ECOGRÁFICO DE LAS ANOMALÍAS DEL SNC
pués del nacimiento. Por esta razón está expues- Se basa en dos niveles de atención definidos por
to a que se produzcan alteraciones importantes el contenido y la complejidad de la exploración:
y malformaciones por el efecto de accidentes o Ecografía básica. El objetivo es confirmar la
por la presentación de situaciones de riesgo de normalidad y la ausencia de imágenes asociadas a
diferente naturaleza en cualquier edad gestacio- patología. Su contenido no se limita a la ecografía
nal (infecciones, traumatismos, hipoxia, etc.). de las 20-22 semanas, es extensivo a todas las eco-
Por lo tanto, en la planificación de la detección grafías realizadas, con independencia de la edad
prenatal de sus anomalías debe tenerse en cuen- gestacional. En las exploraciones nos podemos en-
ta que: contrar diferentes grados de anormalidad: ano-

43
Ecografía del sistema nervioso central

malía segura, sospecha de anomalía, variante de la TABLA I. Indicaciones de NSG detallada


normalidad y alarma. Cualquiera de ellas justifica
que sea remitida a un equipo especializado. • Antecedente familiar o malformación del SNC en gesta-
NSG detallada. Centrada en el diagnóstico y ción previa
caracterización de las anomalías, es realizada por • Anomalía o sospecha de anomalía del SNC detectada en
especialistas en el estudio del SNC fetal idealmen- la ecografía de screening:
– Atrio ≥ 10 mm
te integrados en un equipo multidisciplinario for-
– Cisterna magna ≥ 10 mm
mado por genetistas, neurólogos pediatras, neo- – Cisterna magna < 2 mm
natólogos, patólogos y especialistas en diferentes – Alteración morfológica o ausencia del cavum del sep-
aspectos de la medicina fetal con capacidad de pro- tum pellucidum
porcionar la atención más integral del SNC, in- – Alteraciones en la morfología craneal
– Alteración en los biometrías cefálicas (por debajo o por
cluidas la indicación de pruebas complementarias,
encima de dos desviaciones estándar)
información a los padres, emisión del pronóstico – Estructuras quísticas intracraneales
a corto y largo plazo, planificación de los contro- – Alteración morfológica de las astas anteriores de los
les, planteamiento de las diferentes opciones y ase- ventrículos laterales
soramiento genético para futuros embarazos. – Alteración morfológica o biométrica del cerebelo
– Alteración en la ecogenicidad del parénquima cerebral
– Alteración en las circunvoluciones
• Sospecha de infección fetal por seroconversión o pre-
INDICACIONES DE NEUROSONOGRAFÍA
sencia de signos ecográficos:
DETALLADA – Citomegalovirus
En la Tabla I se muestran las indicaciones de re- – Toxoplasma
alización de NSG detallada. – Rubéola
– Varicela
• CIR severo (< p3)
ECOGRAFÍA BÁSICA DEL SNC SISTEMÁTICA • Malformaciones extracraneales:
La evaluación del SNC en la ecografía de scre- – Anomalías faciales
ening se realiza mediante ecografía transabdomi- – Cardiopatías ductus dependientes
– Rabdomiomas cardiacos
nal. Comprende la evaluación de los planos axia-
– Signos ecográficos asociados a determinados síndro-
les de la cabeza fetal y la evaluación de la colum- mes genéticos
na vertebral en los tres planos, axial, transversal y
• Patología hematológica fetal: anemia moderada y seve-
coronal. ra, trombocitopenia
La sistemática incluye:
• Situación de riesgo hipóxico-isquémico
Barrido de la cabeza fetal en sentido craneo-
caudal. Para evaluar la morfología e integridad • Complicaciones de la gestación monocorial:
– Síndrome de transfusión feto-fetal
del cráneo, el grado de osificación y la posible de- – Restricción del crecimiento intrauterino selectivo tipo
formación por efecto de la mínima presión del II-III
transductor. Comprobación de la disposición del – Éxitus intraútero de uno de los fetos
eco medio y de la simetría de las estructuras in- • Consumo de tóxicos (alcohol y drogas) y fármacos: anti-
tracraneales en todos los planos. A pesar de que coagulantes, antiepilépticos, antimetabolitos y retinoides
el análisis del desarrollo cortical no está incluido

44
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

Corte transventricular Corte transtalámico Corte transcerebelar

Figura 1. Cortes incluidos en la exploración de NSG básica.

en la evaluación básica recomendada por la In- Tamaño de las astas de los ventrículos latera-
ternational Society of Ultrasound in Obstetrics les a nivel del atrio. La medición se realiza en un
and Gynecology (ISUOG), incluimos en este ba- plano intermedio entre el corte transventricular
rrido la evaluación subjetiva de la presencia y y el transtalámico. La referencia del plano óptimo
morfología de la cisura de Silvio con objeto de es la identificación de la fisura parietooccipital y
confirmar su desarrollo en relación a la edad ges- del eco medio en posición horizontal. Se debe re-
tacional. alizar a nivel del glomus de los plexos coroideos,
Corte transventricular (Fig. 1). Es el corte más trazando una línea perpendicular al eje longitu-
alto e incluye la visualización de las astas fronta- dinal de los ventrículos laterales y colocando los
les, el cávum del septum pellucidum y las astas pos- cálipers en la parte interna de las paredes ventri-
teriores del ventrículo con los plexos coroideos en culares (Fig. 2). En todos los casos debe estimar-
su interior. En todos los casos, entre las 18 y 37 se- se la medida de ambos ventrículos. Su valor se
manas, a nivel del tercio anterior, el eco medio se mantiene estable a lo largo del segundo y tercer
aprecia interrumpido por el cavum del septum pe- trimestre de la gestación (6-8 mm) y se conside-
llucidum, formado por dos líneas paralelas que se- ra patológico cuando es ≥ 10 mm.
paran las astas anteriores de los ventrículos late- Corte transtalámico (Fig. 1). Es el corte del diá-
rales (VL) que a este nivel adoptan forma de co- metro biparietal. Es ligeramente inferior y parale-
ma. A nivel del atrio las astas posteriores están ocu- lo al transventricular. Se deben identificar las as-
padas por el glomus del plexo coroideo. Con ob- tas frontales de los VL, el cavum del septum pe-
jeto de que no pase desapercibida la ausencia de llucidum, el tálamo y el giro hipocampal. En este
cavum es importante tener en cuenta que en un corte se realiza la medición de:
plano discretamente inferior y a su mismo nivel se • Diámetro biparietal (DBP): es la distancia com-
pueden identificar las columnas del fórnix (tres lí- prendida entre el límite externo proximal y el
neas paralelas). La morfología en gota de agua de interno distal del cráneo.
los VL, dilatados a nivel de las astas posteriores y • Perímetro cefálico (PC): corresponde al con-
puntiagudas y separadas las anteriores, junto a la torno externo del cráneo. En el Anexo 1 se in-
ausencia del cavum son signos indirectos de age- cluye la cita bilibográfica de las tablas de refe-
nesia del cuerpo calloso. rencia.

45
Ecografía del sistema nervioso central

Atrio ventricular Fosa posterior

Figura 2. Mediciones incluidas en la exploración de NSG básica.

• Índice cefálico (IC): cociente DBP/diámetro oc-


cipitofrontal. Límites normales entre 75-85%. ANEXO I. Referencias de las tablas de normalidad de las
medidas incluidas en NSG básica y avanzada
Cifras inferiores a 75 advierten de dolicocefalia
y superiores a 85 de braquicefalia. • Perímetro cefálico: Kurmanavicius et al. Br J Obstet Gy-
Corte transcerebelar (Fig. 1). Es un corte más necol 1999; 106: 126-135
inferior, obtenido por una discreta oblicuación del • Diametro transverso del cerebelo: Sherer et al. UOG 2007;
29:32-7
transductor hacia la parte posterior de la cabeza
• Astas anteriores ventrículos laterales: Sondhi et al. Acta
en relación a los cortes transventricular y transta- Pædiatrica. 2008; 97: 738-44
lámico. Se considera que el corte es correcto si in- • Tercer ventrículo: Sari et al. Acta Radiol 2005; 6: 631-5
cluye el cavum del septum pellucidum, las astas • Espacio craneo-cortical: Malinger et al. Prenat Diagn
anteriores de los VL, los tálamos, el cerebelo y la 2000; 20: 890-3
cisterna magna con una correcta visualización del • Longitud cuerpo calloso: Achiron et al. Ultrasound Obs-
hueso occipital. El cerebelo está formado por los tet Gynecol 2001; 18: 343-347
dos hemisferios, de morfología, dimensiones y dis- • Altura vermis del verebelo: Malinger et al. Prenat Diagn
2001; 21: 687-92
posición simétricas, y el vermis, estructura más
ecogénica y de localización central entre ambos.
En ningún caso debe apreciarse comunicación en-
tre la fosa posterior y el IV ventrículo. En este cor- tico. Corresponde a la distancia entre el límite
te se realiza la medición de: posterior del vermis y el borde interno del hue-
• Diámetro transverso del cerebelo (DTC): con so occipital, simulando la continuación del eco
los cálipers en el límite externo de ambos he- medio. Su valor normal se mantiene estable en-
misferios. En el Anexo 1 se incluye la cita bili- tre 2 y 10 mm durante toda la gestación. Es muy
bográfica de las tablas de referencia. importante tener en cuenta que el desarrollo
• Diámetro anteroposterior de la fosa posterior del vermis no se completa antes de las 20-22 se-
(Fig. 2): a nivel del plano suboccipitobregmá- manas. Por esta razón no se debe establecer el

46
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

diagnóstico de anomalía del vermis hasta pasa- obtiene si el grado de flexión de la cabeza fetal
das las 24 semanas. Incluso en edad gestacional facilita la insonación a través de la ventana acús-
más avanzada, la insonación de la fosa poste- tica proporcionada por las fontanelas, imitan-
rior en cortes demasiado coronales puede dar do la técnica de la ecografía intracraneal neona-
lugar a falsos diagnósticos de anomalía del ló- tal.
bulo inferior del vermis (hipoplasia/disgene- La sistemática incluye el análisis de la morfolo-
sia). gía, disposición, ecogenicidad y tamaño de las di-
Evaluación de la columna vertebral. Por la ele- ferentes estructuras intracraneales. En general, los
vada sensibilidad y especificidad de los marcado- rangos de normalidad (entre el 5-95 percentil)
res craneales de defecto del tubo neural, la mor- de la mayoría de estructuras se estiman en función
fología del cerebelo (signo de la banana) y la de- de la edad gestacional. En el Anexo 1 se incluyen
presión de los frontales (signo del limón) la eva- las citas bibliográficas de las tablas de referencia.
luación ecográfica de la columna vertebral debe
iniciarse con la evaluación craneal. Otros signos Planos axiales
que obligan a confirmar su integridad son la ven- a. Corte transventricular.
triculomegalia y los pies equinovaros. En todos los b. Corte transtalámico: se incorpora la evaluación
casos se debe comprobar la identificación clara de del tercer ventrículo:
la disposición, osificación e integridad de los cuer- • Tercer ventrículo (Fig. 4): medición de su
pos y de los procesos laterales de todas las vérte- diámetro máximo colocando los cálipers en
bras en los tres planos, axial, coronal y sagital, y el borde interno de las paredes ventricula-
confirmar la integridad de la piel. En caso de que res.
por tratarse de una presentación podálica la eva- c. Corte transcerebelar: evaluación adicional del
luación no sea concluyente, se debe realizar eco- cuarto ventrículo y su relación con la fosa pos-
grafía transvaginal o programar una nueva eco- terior.
grafía con objeto de evaluar la porción más cau-
dal de la columna. Planos coronales (Fig. 3)
a. Corte transfrontal: evaluación de la cisura in-
terhemisférica y la porción más anterior de las
NEUROSONOGRAFÍA DETALLADA astas anteriores de los ventrículos laterales, por
Consiste en la evaluación de los cortes axiales delante de la rodilla del cuerpo calloso.
descritos para la ecografía básica de cribado a b. Corte transcaudal: a nivel de la rodilla del cuer-
partir del acceso transabdominal y la evaluación po calloso (que interrumpe la cisura interhe-
más detallada mediante el análisis de múltiples misférica) y del núcleo caudado. Se identifica el
planos de los cortes coronales y sagitales, obte- cavum del septum pellucidum, las astas ante-
nidos mediante ecografía transvaginal o tran- riores de los ventrículos laterales y la cisura de
sabdominal, en los casos en que por la estática Silvio. En este plano podemos evaluar la zona
fetal u otra causa no permita la realización de ex- periventricular de las astas anteriores, así como
ploración transvaginal. En cualquier caso es muy estimar el tamaño de las astas frontales de am-
importante tener en cuenta que la mayor reso- bos ventrículos laterales y el espacio subarac-
lución y calidad de las diferentes estructuras se noideo.

47
Ecografía del sistema nervioso central

PLANOS CORONALES
Corte transfrontal Corte transcaudal Corte transtalámico Corte transcerebelar

PLANOS SAGITALES
Corte sagital medio Corte de los tres cuernos

Figura 3. Cortes incluidos en la exploración de NSG avanzada.

• Astas anteriores (Fig. 4): medición del diá- de los ventrículos laterales, la cisura interhe-
metro craneocaudal colocando los cálipers misférica, los hemisferios cerebelosos, el vermis
en el borde interno de las paredes ventri- y la situación del tentorio.
culares.
• Espacio subaracnoideo (Fig. 4): medición de Planos sagitales (Fig. 3)
las distancias craneocortical y senocortical. a. Corte sagital medio: facilita la visualización di-
El valor de este último se mantiene estable recta y el análisis de las características morfo-
durante toda la gestación (3,0 ± 0,9 mm). métricas las estructuras que se encuentran en
c. Corte transtalámico: a nivel de los tálamos. Se la línea media: cuerpo calloso, cavum del sep-
identifican las astas anteriores de los ventrícu- tum pellucidum, fórnix, III y IV ventrículos,
los laterales, el cavum del septum pellucidum tronco del encéfalo, protuberancia, vermis, fo-
y, en ocasiones, el III ventrículo en la línea me- sa posterior y tentorio. En este plano se con-
dia entre ambos tálamos. firma la presencia de la cisura cingulata y la dis-
d. Corte transcerebelar: se obtiene orientando el posición de las circunvoluciones de la cara me-
transductor hacia la fontanela posterior, lo que dial así como la estimación del tamaño del cuer-
facilita la visualización de las astas occipitales po calloso y el vermis del cerebelo.

48
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

Tercer ventrículo Astas anteriores Espacio subaracnoideo

Longitud del cuerpo calloso Altura vermis cerebelo

Figura 4. Mediciones incluidas en la exploración de NSG avanzada.

• Longitud del cuerpo calloso (Fig. 4): la me- importante la identificación del trayecto de las
dida se realizará desde la parte más anterior arterias cerebral anterior, pericallosa y de la ve-
de la rodilla del cuerpo calloso a la parte más na de Galeno.
posterior del esplenio. b. Planos parasagitales: permiten evaluar la mor-
• Altura de vermis (Fig. 4): la medida se reali- fología y contenido de los ventrículos laterales
za desde la porción más craneal del culmen a en el corte de los tres cuernos de los plexos co-
la porción más caudal de la úvula. roideos y las áreas periventriculares.
Si existe la evaluación subjetiva de engrosa-
miento o adelgazamiento del cuerpo calloso, de- Evaluación del desarrollo cortical
be medirse colocando los cálipers en el límite La evaluación de las circunvoluciones debe re-
interno de las dos líneas hiperecogénicas que lo alizarse a lo largo de toda la exploración en los di-
limitan, que corresponden al sulco calloso en la ferentes planos. Las fisuras y circunvoluciones prin-
parte superior y la interfase con el cavum sep- cipales son la cisura de Silvio, cingulata, parieto-
tum pellucidum y vergae. Se consideran nor- occipital, calcarina y surcos convexos. Es muy im-
males valores entre 2 y 7 mm. La aplicación del portante tener en cuenta que tanto su aparición
Doppler color facilita el estudio de la vasculari- como las características morfológicas guardan una
zación arterial y venosa. En ocasiones puede ser precisa relación con la edad gestacional (Fig. 5).

49
Ecografía del sistema nervioso central

Figura 5. Patrón de aparición de las principales circunvoluciones evaluadas en NSG avanzada (Toi et al. Ultrasound Obs-
tet Gynecol 2004; 24: 706-15).

teriovenosas y ante imágenes heterogéneas intra o


TABLA II. Indicaciones de resonancia magnética extraparenquimatosas.
• Ventriculomegalia >15 mm o tetracameral La ecografía tridimensional permite la adqui-
• Detección de las astas anteriores de los ventrículos late- sición de volúmenes cefálicos para su posterior
rales fusionadas análisis en diferido por el mismo equipo o para
• Retraso de la maduración cortical ser remitido a expertos. Ha demostrado un po-
• Infección fetal confirmada por DNA en líquido amnió- tencial diagnóstico considerable y un importan-
tico te avance para la docencia y comprensión de las
• Episodios de hipoxia aguda
anomalías. Sin embargo, su metodología y apli-
• Esquizencefalia
cación clínica no es contemplada en este capí-
• Hemorragia intracraneal
tulo por no utilizarse de forma rutinaria en la
• Diagnóstico ecográfico de tumoración intracraneal
práctica clínica.
• Rabdomiomas cardiacos (comprobar/excluir signos de
esclerosis tuberosa)

USO DE LA RESONANCIA MAGNÉTICA


En casos seleccionados, la adición del Doppler La resonancia magnética es una herramienta
color puede mejorar la capacidad diagnóstica de diagnóstica que en determinadas situaciones apor-
la NSG, por lo que estaría indicado en imágenes ta información complementaria de gran valor clí-
quísticas, sospecha de aneurismas o anomalías ar- nico. Al igual que la ecografía presenta ciertas ven-

50
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

tajas y limitaciones. En líneas generales, la reso- clínica. La Tabla II muestra las situaciones en las
nancia magnética no se debe considerar como que se aconseja su realización Se consideran in-
técnica de screening ni antes de las 18 semanas dicaciones opcionales los casos que la NSG no sea
de gestación. Actualmente, el planteamiento más concluyente para descartar anomalías, como en
razonable es que ambas técnicas deben estar dis- los casos de oligoamnios severo, la presentación
ponibles para utilizar una u otra de forma prefe- podálica y/o la presencia de obesidad materna
rente o combinada de acuerdo con la situación (IMC > 40).

51
Ventriculomegalia
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

INTRODUCCIÓN DIAGNÓSTICO
Ventriculomegalia (VMG) es el término des- Se realiza a partir de la estimación del diá-
criptivo, biométrico, que expresa la dilatación de metro de los ventrículos laterales en el plano
los ventrículos laterales (VL). Con frecuencia se transversal. La medición debe realizarse a nivel
utiliza indistintamente VMG o hidrocefalia, no del atrio, donde descansa el glomus de los ple-
obstante corresponden a dos anomalías diferen- xos coroideos (Fig. 1). La técnica es sencilla, la
tes. Hidrocefalia expresa la dilatación de los ven- reproducibilidad alta y el valor normal se man-
trículos laterales con aumento de la presión in- tiene estable durante toda la gestación. El valor
tracraneal como consecuencia del aumento de la medio está entre 5,5 y 7 mm, y se considera pa-
cantidad de líquido cefalorraquídeo, en tanto que tológico si es superior a 10 mm, correspondien-
en la VMG la dilatación es la consecuencia de la te a +4 DS.
existencia de una anomalía intracraneal. En al- Podemos clasificar la VMG en tres grados en re-
gunos casos la VMG puede evolucionar a hidro- lación a la severidad de la dilatación:
cefalia. • Leve: 10 ≤ 12 mm.
La VMG es uno de los marcadores más sensi- • Moderada: 12-15 mm.
bles de anomalía del desarrollo del sistema ner- • Severa: > 15 mm.
vioso central (SNC) por lo que la medición de los Estos grados de severidad están relacionados
ventrículos laterales forma parte de la ecografía de con la causa, la asociación a otras anomalías y la
screening con independencia de la edad gestacio- evolución neurológica postnatal. También debe-
nal. Su inicio se puede presentar a cualquier edad mos tener en cuenta que la VMG puede ser uni-
gestacional y comprometer a ambos o solo uno de lateral (si sólo afecta uno de los dos ventrículos)
los ventrículos laterales. Su incidencia es incierta o bilateral (si afecta a ambos ventrículos). Reser-
pero se estima que afecta entre el 0,3 y 1,5 de 1.000 vamos la denominación de asimetría ventricular
fetos. Es muy importante tener en cuenta que no cuando el diámetro de los atrios está dentro de los
se trata de un diagnóstico en sí mismo si no de un límites de la normalidad, pero difiere en más de
signo común a diversas situaciones patológicas del 2,4 mm. Esta entidad se considera una variante de
SNC. la normalidad, sin embargo requiere controles se-

53
Ventriculomegalia

TABLA I. Etiología de la ventriculomegalia

Malformativas
• Anomalías cerebrales
• Defectos del tubo neural
• Holoprosencefalia
• Malformación de Dandy-Walker
• Agenesia/disgenesia del cuerpo calloso
• Trastornos del desarrollo de la corteza cerebral
• Quistes aracnoideos
Figura 1. Medición de asta posterior de ventrículo lateral. • Estenosis del acueducto de Silvio
a) Ecografía transabdominal. Plano axial. Corte transven- • Holoprosencefalia
tricular con la visualización de los puntos de referencia. • Aneurisma de la vena de Galeno
b) Esquema de la correcta colocación de los cálipers para la • Anomalías cromosómicas
medida del ventrículo lateral a nivel del atrio colocando los • Síndromes genéticos
cálipers en el borde interno de las paredes del ventrículo.
Adquiridas
• Hemorragia intracraneal
riados cada cuatro semanas para descartar la pro- • Trombocitopenia alloinmune
gresión a VMG. • Hemofilia
• Infecciones (2-4%)
• CMV
• Toxoplasma
ETIOLOGÍA • Varicela
• Hipoxico-isquémicas
La etiología de la VMG es heterogénea y se agru-
• Retraso del crecimiento intrauterino severo
pa en causas congénitas y causas adquiridas. La ta- • Complicaciones del síndrome de transfusión feto-fetal
bla I muestra las causas más frecuentes. • Otras causas
• Tumores

MANEJO CLÍNICO
Consiste en establecer las pruebas complemen- d. Ecocardiografía fetal.
tarias para conocer la causa, catalogarla como ais- e. Evaluación del crecimiento fetal.
lada o parte de un síndrome malformativo, y pro- f. Estudio de infecciones: estudio materno de CMV
gramar los controles sucesivos para comprobar y toxoplasma (IgG e IgM) y de rubéola en caso
la evolución. El resultado de las diferentes pruebas de no disponer de serología materna o si la pa-
y la evolución son las bases para establecer el pro- ciente no fuera inmune. Si se objetiva serocon-
nóstico sobre la posible repercusión en el desa- versión materna, debemos realizar amniocente-
rrollo neurológico a largo plazo. La figura 10 re- sis para confirmar infección fetal mediante la eva-
coge el manejo clínico y el pronóstico: luación de la presencia de ácidos nucleicos en
a. Historia clínica detallada. líquido amniótico mediante el análisis PCR.
b. Neurosonografía dirigida a descartar anomalí- g. Cariotipo fetal: debemos ofrecerlo en todos los
as del SNC asociadas. casos, en especial en los que exista una anoma-
c. Ecografía morfológica integral y detallada diri- lía asociada.
gida a descartar la presencia de anomalías aso- h. Resonancia magnética (RM) en casos seleccio-
ciadas de algún órgano o sistema. nados.

54
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

Figura 3. Cortes sagitales en la exploración transvaginal.


Evaluación del sistema ventricular en los cortes: a) sagital y
b) parasagital. En este corte se puede apreciar la morfología
y disposición normal de uno de los ventrículos laterales.

Figura 2. Cortes coronales en la exploración transvaginal.


Imágenes de los cortes coronales obtenidos mediante la ex-
ploración transvaginal incluyendo los cortes: a) transfrontal,
b)transtalámico, c)transcerebelar anterior y d) transcere-
belar posterior.

Neurosonografía
Debe ser realizada por un especialista experto en
la evaluación ecográfica avanzada del SNC, con ob-
Figura 4. Evaluación de los planos coronales mediante eco-
jetivo de comprobar el desarrollo de todas las es- grafía tridimensional. El volumen de una paciente con hi-
tructuras intracraneales y de la columna vertebral en drocefalia obtenido en el plano sagital es evaluado median-
los planos axiales, coronales y sagitales. El análisis de te TUI (Tomographic Ultrasound Imaging) en el plano co-
ronal. Esta técnica permite navegar a través del volumen pu-
los tres planos requiere el acceso mediante ecografía
diendo obtener múltiples imágenes en el mismo plano.
transvaginal y transabdominal, y la realización de un
barrido muy lento para apreciar las características
morfométricas de todas las estructuras en planos su- c. Simetría de los dos hemisferios.
cesivos (Figs. 2 y 3). La ecografía tridimensional a d. Evaluación de las estructuras de la línea media:
partir de la adquisición y reanálisis en diferido o a • Línea interhemisférica.
distancia de un volumen es un recurso para la eva- • Cavum del septum pellucidum.
luación de los tres planos por un experto (Fig. 4). • Cuerpo calloso.
La neurosonografía avanzada incluye la eva- • Tálamo.
luación de: e. La evaluación del sistema ventricular incluye
a. Morfología y continuidad del cráneo. Localiza- la morfología y el tamaño de los ventrículos la-
ción y disposición de las suturas. terales y el tercer y cuarto ventrículos. Incluye el
b. Biometrías básicas: análisis detallado de la morfología, ecogenici-
• Diámetro biparietal. dad intraventricular, disposición de los plexos
• Perímetro cefálico. coroideos, visualización de la línea del epéndi-
• Índice cefálico. mo y características del contorno y del área pe-

55
Ventriculomegalia

Figura 6. Morfología ventricular en la agenesia del cuerpo


calloso. En el corte transventricular se aprecia ausencia del
cavum del septum pellucidum, la disposición paralela de las
Figura 5. Medida de las astas anteriores de los ventrículos la- astas anteriores y la colpocefalia, signos indirectos de agene-
terales. La medición se realiza en el corte coronal transcaudal sia de cuerpo calloso.
o transtalámico evitando la flexión excesiva de la cabeza, que
magnificaría el tamaño de las astas anteriores. Como en las
astas posteriores, la medición se realiza colocando los cálipers
en el borde interno de las paredes del ventrículo.

riventricular. La medida de los ventrículos late-


rales debe incluir tanto el asta anterior como
posterior y atrio. La estimación del asta anterior
Figura 7. Evaluación de las astas anteriores en la ausencia
en el corte coronal es un dato importante en la de cavum de septum pellucidum. Ausencia de cavum de sep-
monitorización del seguimiento (Fig. 5). La mor- tum pellucidum y fusión de las astas anteriores de los ven-
fología de los ventrículos puede orientarnos ha- trículos laterales que adquieren la forma característica de
cuernos en el corte transversal (a) y en el coronal (b).
cia la posible causa. En la agenesia del cuerpo
calloso la dilatación es a expensas de las astas
posteriores (colpocefalia) y las astas anteriores trículos o pequeños quistes o focos ecogénicos
están afiladas y más separadas de lo habitual, lo periventriculares (Fig. 8). En las hemorragias in-
que le da forma de gota o lágrima (Fig. 6). Sin traventriculares, se pueden identificar la pre-
embargo, en la ausencia de cavum del septum pe- sencia de los coágulos en el interior del ventrí-
llucidum se aprecian las astas anteriores fusio- culo y las modificaciones que tienen lugar por
nadas en un ventrículo, anomalía que plantea el la evolución natural de la patología (Fig. 9).
diagnóstico diferencial entre displasia septoóp- f. Continuidad y ecogenicidad del parénquima.
tica y holoprosencefalia lobar (Fig. 7). También g. Espacio subaracnoideo: medición de las dis-
es muy importante evaluar la ecogenicidad in- tancias craneocortical y senocortical en los cor-
tra y periventricular, ya que cambios en los mis- tes coronales.
mos pueden ayudarnos en el diagnóstico. En los h. Fosa posterior y cerebelo: morfología y tama-
procesos infecciosos, como CMV, se pueden ño de los hemisferios y vermis. Situación del
apreciar bandas o ecos en el interior de los ven- tentorio.

56
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

Figura 8. Evaluación de la ecogenicidad periventricular:


a) Focos ecogénicos y b) pequeños quistes periventriculares
identificados en el control evolutivo de un caso de infección
por CMV confirmada por estudio serológico materno y del
líquido amniótico.

Figura 9. Hemorragia intraventricular grado II. En la ima-


i. Desarrollo del córtex, en relación a la edad ges- gen se identifica la ocupación del ventrículo lateral por una
tacional: imagen isoecoica (*) que se encuentra unida al plexo coroi-
• Características de la morfología de la cisura deo que corresponde al coágulo. En este momento no se iden-
tifica la presencia de dilatación ventricular.
de Silvio.
• Identificación de la parietooccipital, calcari-
na y cingulata. Controles sucesivos
• Disposición de las circunvoluciones de la ca- Es muy importante tener en cuenta que, por
ra medial. su carácter progresivo, la VMG puede ser la ma-
j. En casos seleccionados, Doppler de la arteria nifestación inicial de una hidrocefalia y/o de ano-
cerebral media. malías importantes, malformativas o degenera-

Figura 10. Algoritmo de manejo clínico y pronóstico de la ventriculomegalia.

57
Ventriculomegalia

Figura 12. Evolución de hemorragia intracraneal grado III:


a) en un primer momento se identifica el coágulo intraven-
Figura 11. Control evolutivo de ventriculomegalia. En los cor- tricular (*), b) posteriormente se aprecia la desaparición del
tes coronal (a) y sagital (b) obtenidos por vía vaginal se iden- coágulo con hidrocefalia progresiva y c) finalmente aparece
tifica la presencia de atrofia cerebral, lisencefalia y dilatación el refuerzo ecogénico de las paredes de todo el sistema ven-
del espacio subaracnoideo. tricular.

tivas sin expresividad ecográfica a determinada HISTORIA NATURAL


edad gestacional (Fig. 10). Tras el diagnóstico En relación a la etiología, la VMG se puede so-
debemos realizar un primer control a las 2 se- lucionar de forma espontánea, mantenerse estable
manas para descartar/confirmar la progresivi- o aumentar de forma progresiva hasta la hidroce-
dad de la misma. En el caso de VMG no pro- falia con la implicación de todo el sistema ventri-
gresivas en el primer control realizaremos con- cular y la obliteración o no del espacio subarac-
troles ecográficos seriados según el tamaño de noideo. En el caso de VMG leves y aisladas la tasa
la misma: de resolución espontánea es del 25-35%.
• Entre 10-12 mm: cada 4 semanas.
• Superior o igual a 13 mm: cada 2 semanas.
En las VMG progresivas se individualizará en PRONÓSTICO
función del caso (edad gestacional, pruebas com- El pronóstico de la VMG depende principal-
plementarias), pero en general se realizarán con- mente de la presencia de anomalías asociadas que
troles semanales. El contenido de la neurosono- se presentan en el 6% de casos de VMG < 12 mm
grafía seriada está orientado a detectar signos de y hasta en el 56% en los casos que superan los 12
severidad que modifiquen el grado de dilatación mm. De igual manera, el riesgo de anomalía cro-
y pronóstico iniciales (Figs. 11 y 12). mosómica es de hasta el 36% en los casos de VMG
No hay indicación de realizar RM en todos los asociadas a otras anomalías y de alrededor del 3%
casos, sino únicamente en aquellos que la ecogra- en los casos de presentación aislada.
fía no es concluyente y que ante determinadas ano- Si la VMG forma parte de un síndrome o si-
malías, como la agenesia completa o parcial del tuación clínica determinada, el pronóstico está
cuerpo calloso, los padres deciden continuar la ges- relacionado con la importancia del resto de ano-
tación. En estos casos la RM está dirigida para des- malías y problemas presentes. El pronóstico es se-
cartar anomalías, cerebrales no evidentes por eco- vero en caso de anomalía cromosómica, síndro-
grafía (heterotopias, trastornos de la maduración me polimalformativo o en presencia de malfor-
cortical). maciones de otros sistemas, anomalías del SNC
Finalmente, debemos descartar la aparición de (defectos del tubo neural), otras anomalías in-
otras anomalías por lo que se realizará una eco- tracraneales, microcefalia, infección, anemia,
grafía morfológica detallada cada 4-6 semanas. trombocitopenia, síndrome de transfusión feto-

58
B. Puerto, E. Eixarch, M. Sanz

fetal o restricción severa del crecimiento intrau- • Es muy difícil anticipar los casos que precisa-
terino. rán la colocación de drenaje postnatal, sin em-
bargo, en VMG superiores a 18 mm la tasa de
Ventriculomegalia aislada necesidad de derivación alcanza el 75%.
El pronóstico de la VMG aislada depende de dos En todos los casos se debe insistir en la impor-
factores: tancia de un examen postnatal completo y segui-
Tamaño: la tasa de alteraciones en el neurode- miento neurológico durante la infancia y hasta que
sarrollo en los casos de VMG depende del grado el neurólogo lo crea necesario.
de la dilatación, siendo del 4% en los casos leves, En caso de interrupción de la gestación o muer-
del 24% en los moderados y del 72% en los seve- te intrauterina, el diagnóstico definitivo se debe
ros. La tasa de mortalidad perinatal también de- establecer por el estudio de necropsia y consultar
pende del tamaño con tasas del 10% en las VMG con el genetista clínico para informar del riesgo de
moderadas y del 25% en las VMG severas. Los ca- recurrencia.
sos leves presentan tasas de mortalidad similares
a la población general.
Progresión: en el caso de VMG no progresiva BIBLIOGRAFÍA
el riesgo de resultado final adverso es del 7% fren- 1. Beeghly M, Ware J, Soul J, du Plessis A, Khwaja O, Se-
napati GM, Robson CD, Robertson RL, Poussaint TY,
te al 44% de los casos de VMG progresiva. Barnewolt CE, Feldman HA, Estroff JA, Levine D. Neu-
Factores como el sexo fetal, la uni o bilaterali- rodevelopmental outcome of fetuses referred for ven-
dad, la asimetría o la edad gestacional de debut no triculomegaly. Ultrasound Obstet Gynecol 2010;35(4):
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se relacionan con el pronóstico final.
2. Benacerraf BR, Shipp TD, Bromley B, Levine, D. What
El consejo prenatal de la VMG aislada no es fá- does magnetic resonance imaging add to the prena-
cil. Se debe comentar a los padres cuales son los tal sonographic diagnosis of ventriculomegaly? J Ul-
objetivos y el contenido de los controles sucesivos, trasound Med 2007;26:1513-22.
informarles de las limitaciones de la ecografía pre- 3. Breeze AC, Alexander PM, Murdoch EM, Missfelder-
Lobos HH, Hackett GA, Lees CC. Obstetric and neo-
natal y advertirles de la posibilidad de que la VMG: natal outcomes in severe fetal ventriculomegaly. Pre-
• Puede ser progresiva. nat Diagn 2007; 27(2):124-9.
• Puede ser la manifestación inicial de un proce- 4. Davies MW, Swaminathan M, Chuang SL, Betheras
so de mayor severidad y por tanto, el pronósti- FR. Reference ranges for the linear dimensions of the
intracranial ventricles in preterm neonates. Arch Dis
co se puede modificar a lo largo de la gestación. Child Fetal Neonatal Ed 2000;82(3):F218-23.
• De la existencia de determinadas condiciones
5. Devaseelan P, Cardwell C, Bell B, Ong S. Prognosis of
patológicas que no se pueden identificar con las isolated mild to moderate fetal cerebral ventriculo-
técnicas actuales de diagnóstico prenatal. De- megaly: a systematic review. J Perinat Med 2010 Jul;38
(4):401-9.
bemos tener en cuenta que existe un 13% de fal-
6. Falip C, Blanc N, Maes E, Zaccaria I, Oury JF, Sebag
sos negativos, es decir, casos de VMG clasifi-
G, Garel C. Postnatal clinical and imaging follow-up
cados como aislados en periodo prenatal que of infants with prenatal isolated mild ventriculome-
en periodo neonatal son diagnosticados de ano- galy: a series of 101 cases. Pediatr Radiol 2007:37:981-
9.
malías asociadas.
7. Gaglioti P, Oberto M, Todros T. The significance of
• En la mayoría de casos no se puede descartar fetal ventriculomegaly: etiology, short- and long-term
una evolución desfavorable. outcomes. Prenat Diagn 2009 Apr;29(4):381-8.

59
Ventriculomegalia

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60
Anomalías de la fosa posterior
B. Puerto, M. Sanz, E. Eixarch

INTRODUCCIÓN • Diámetro anteroposterior de la cisterna magna


entre 2-10 mm. La medida corresponde a la dis-
El estudio de las anomalías de la fosa posterior tancia entre el límite posterior del vermis y la
incluye el de las estructuras intracraneales que la cara interna del hueso occipital en la línea me-
limitan, cerebelo, tronco del encéfalo y tentorio, y dia.
las características del IV ventrículo. El vermis ce- • Cerebelo de características morfométricas nor-
rebeloso es la que tiene más trascendencia ya que males:
está implicado en la mayor parte de patologías. – Dimensiones normales. El diámetro trans-
La etiología es muy variada. Se pueden presen- verso abarca ambos hemisferios y vermis. Su
tar aisladas, ser consecuencia de infecciones con- evaluación debe realizarse en relación a la
génitas, alteraciones vasculares o formar parte de edad gestacional a partir de las tablas de re-
síndromes genéticos y cromosómicos. ferencia.
– Anatomía normal: el vermis se localiza en la
línea media, entre los dos hemisferios, re-
EVALUACIÓN ECOGRÁFICA DE LA FOSA dondos y simétricos. La ecogenicidad es si-
POSTERIOR milar al resto de los hemisferios cerebrales.
Se basa en el análisis del corte axial transcerebe- En el tercer trimestre se aprecia la aparición
lar (Fig. 1). Con objeto de evitar falsos diagnósticos de las circunvoluciones. Para evitar falsos po-
es muy importante seguir las recomendaciones bá- sitivos es importante tener en cuenta que el
sicas para la óptima obtención del plano de evalua- desarrollo del vermis es incompleto antes de
ción, inferior y con ángulo correcto en relación al la semana 18. Otros falsos diagnósticos en la
corte transtalámico del diámetro biparietal. Las re- evaluación del vermis se presentan por la in-
ferencias anatómicas incluyen la identificación del sonación en cortes inferiores y/o más coro-
cavum de septum pellucidum en el tercio anterior y nales al descrito.
del vermis entre los dos hemisferios cerebelosos. • Confirmar que el IV ventrículo no se comuni-
Los puntos clave para descartar la existencia de ca con la cisterna magna. El IV ventrículo, de
patología se muestran en la figura 2: morfología romboidea, se identifica en la lí-

61
Anomalías de la fosa posterior

Figura 2. Plano axial. Fosa posterior normal. IV ventrículo,


vermis y hemisferios cerebelosos normales.

Figura 1. Corte transcerebelar.

nea media, entre el tronco del encéfalo y el ce-


rebelo.
El plano axial transcerebelar forma parte de la
ecografía sistemática de screening para la evalua-
ción del sistema nervioso central y de signos indi-
rectos de defectos del tubo neural. La concavidad
de la fosa posterior, adoptando forma de pláta-
no, junto a la depresión de los frontales (signo del Figura 3. Ecografía transvaginal. Evaluación del tentorio,
limón) y la ventriculomegalia son los signos in- cerebelo y fosa posterior en el corte coronal occipital.
tracraneales que han demostrado alta sensibilidad
para la detección de la espina bífida. 1. Morfología y continuidad del cráneo. Localiza-
Cualquier desviación de la normalidad apre- ción y disposición de las suturas.
ciada en el plano axial de la fosa posterior es indi- 2. Biometrías básicas: diámetro biparietal, perí-
cación de completar la evaluación en los planos metro cefálico, índice cefálico.
sagital y coronal (Fig. 3) por un especialista ex- 3. Simetría de los dos hemisferios.
perto en neurosonografía. El corte sagital es el de 4. Evaluación de las estructuras de la línea media,
elección para el estudio del vermis y de las estruc- línea interhemisférica, cavum del septum pellu-
turas de la línea media. La ecografía tridimensio- cido, cuerpo calloso y tálamos.
nal a partir de la adquisición y reanálisis en dife- 5. La evaluación del sistema ventricular incluye la
rido o a distancia de un volumen es un recurso pa- morfología y el tamaño de los ventrículos la-
ra la evaluación de los tres planos por un experto. terales, III y IV.
La detección de alguna variación de la norma- 6. Continuidad y ecogenicidad del parénquima.
lidad en la fosa posterior establece la indicación de 7. Espacio subaracnoideo, especialmente en cor-
realizar una neurosonografía por un especialista tes coronales y medición de las distancias cra-
experto, que incluya: neocortical y senocortical.

62
B. Puerto, M. Sanz, E. Eixarch

Figura 4. Plano sagital. Evaluación de las estructuras de la Figura 5. Clasificación anatómica de las anomalías de la fo-
línea media. Morfología y altura del vermis. Distancia ver- sa posterior.
mis tronco. Disposición del tentorio.

8. Fosa posterior y cerebelo. Morfología y tama- - Hipoplasia: reducción del diámetro craneo-
ño de los hemisferios y vermis. Situación del caudal estimado en corte sagital en relación
tentorio. lineal con la edad gestacional.
9. Desarrollo del córtex, en relación a la edad ges- - Morfología anormal, sin lobulaciones (au-
tacional. Características de la morfología de la ín- sencia de fastigium y comisuras anterior y
sula-fisura de Silvio. Identificación de la cisura posterior).
parietooccipital, calcarina y cingulata, y dispo- - Distancia entre el vermis y el tronco del en-
sición de las circunvoluciones de la cara medial. céfalo inferior a 5 mm, estimada en el cor-
10.En casos seleccionados, Doppler de la arteria te sagital.
cerebral media. • Elevación del tentorio, estimada en corte sagital.
Signos ecográficos de alarma de anomalía de
la fosa posterior:
• Diámetro anteroposterior de la cisterna magna ORIENTACIÓN DIAGNÓSTICA
inferior a 2 mm o superior a 10 mm. Se establece en base al tamaño de la cisterna
• Anomalías morfométricas del cerebelo: magna y del IV ventrículo, la disposición del ten-
– Reducción del diámetro transverso en rela- torio, la severidad de las alteraciones morfométri-
ción a la edad gestacional (referencia de nor- cas del cerebelo y la asociación con otras altera-
malidad en Anexo 1). ciones intracraneales, esencialmente con la ven-
– Reducción del tamaño global o focal de los triculomegalia.
lóbulos cerebelosos, estimada por diámetros La clasificación de las anomalías de la fosa
y circunferencia. posterior es un tema controvertido. Por su apli-
– Anomalías de las circunvoluciones y ecoge- cación práctica nosotros adoptamos la clasifi-
nicidad. cación propuesta por Guibaud, en la que las dis-
– Anomalías del vermis (Fig. 4) (referencia de tribuye en tres grupos diferenciados por las ca-
normalidad en Anexo 1): racterísticas descritas para la evaluación eco-

63
Anomalías de la fosa posterior

Figura 6. Anomalías quísticas de la fosa posterior. Figura 7. Megacisterna magna.

gráfica prenatal y con buena correlación con la


etiología, severidad y pronóstico, basado esen-
cialmente en el grado de afectación e integridad
del cerebelo (Fig. 5).

Grupo I. Anomalías quísticas (Fig. 6)


Cisterna magna superior a 10 mm. El dato cla-
ve es la disposición del tentorio, evaluada en el pla-
no sagital. En función de su situación del tentorio
y otros datos, se distinguen dos subgrupos:
Tentorio en situación normal. Si la morfología
y el tamaño del cerebelo también es normal, se
Figura 8. Quiste aracnoideo. Se identifica el cerebelo de ca-
plantean tres opciones diagnósticas. En caso de
racterísticas normales.
presentarse aisladas, sin anomalías asociadas in-
tracraneales o de otros sistemas y en ausencia de
hidrocefalia o de otras complicaciones evolutivas, la vallecula cerebelosa y la cisterna retrover-
el pronóstico es favorable en la mayor parte de los miana a través del agujero de Magendie.
casos para los tres subgrupos: Tentorio elevado. Malformación de Dandy Wal-
a. Megacisterna magna (Fig. 7): presencia de au- ker (Figs. 9 y 10). Incluye comunicación del IV ven-
mento del tamaño de la fosa posterior en au- trículo con la cisterna magna, puede cursar con
sencia de quiste. agenesia completa o parcial del vermis e hipopla-
b. Quiste aracnoideo (Fig. 8). En relación al ta- sia de los hemisferios cerebelosos. Con frecuencia
maño y localización puede dificultar la com- se asocia a otras anomalías cerebrales (agenesia de
pleta evaluación del desarrollo del vermis. cuerpo calloso, holoprosencefalia), cromosomo-
c. Quiste de la bolsa de Blake. Consiste en la her- patías (35%), anomalías de otros sistemas (car-
niación de la parte inferior del IV ventrículo en diopatías y nefrourológicas) y a síndromes gené-

64
B. Puerto, M. Sanz, E. Eixarch

Figura 9. Malformación de Dandy-Walker. Se aprecia dila-


tación de la fosa posterior. Comunicación del IV ventrículo
con la cisterna magna. Agenesia completa del vermis. Hi-
drocefalia.

Figura 10. Ecografía tridimensional. Análisis del volumen


ticos (Meckel-Gruber, Walker-Warburg entre mediante cortes tomográficos. Malformación de Dandy-Wal-
otros). El pronóstico es incierto-desfavorable. La ker. Se aprecia dilatación de la fosa posterior. Comunicación
evolución con hidrocefalia antes del nacimiento o del IV ventrículo con la cisterna magna. Agenesia completa
del vermis e hidrocefalia.
durante el primer año de vida es muy frecuente,
se presenta en el 80%. Secuelas neurológicas y al-
to grado de discapacidad intelectual en el 40-70%
de los casos, en relación a la anomalía del vermis.
Mortalidad perinatal superior al 20% por la alta
tasa de patología asociada.
Coincidimos con los grupos que excluyen el tér-
mino de variante de Dandy-Walker, dado que es
motivo de confusión sin aportar ninguna ventaja
para la estimación del pronóstico.

Grupo II. Reducción del tamaño del cerebelo con


anatomía normal: hipoplasia cerebelosa
En función de la afectación del desarrollo del
cerebelo se distinguen dos subgrupos. En todos los
casos, el pronóstico es muy desfavorable. Con fre- Figura 11. Reducción global del cerebelo.
cuencia se asocian a alteraciones de la migración
neuronal (lisencefalia y polimicrogiria).
Reducción focal. Displasia, isquemia o hemo- Grupo III. Cerebelo de anatomía anormal
rragia. Pronóstico incierto, relacionado con la etio- Chiari II. Obliteración de la cisterna magna y
logía. anomalía morfológica del cerebelo (signo del plá-
Reducción global. Puede ser primaria, presen- tano). Es un marcador intracraneal muy sensible
tarse asociada a cromosomopatías o síndromes y específico de defecto del tubo neural (Fig. 12).
genéticos o como consecuencia de infección. Se Agenesia del vermis. Completa o parcial. En es-
puede presentar con hipoplasia pontocerebelar te grupo se incluye el síndrome de Joubert. Pro-
(Fig. 11). nóstico severo.

65
Anomalías de la fosa posterior

Figura 12. Chiari II. Signos del plátano y del limón. Alta Figura 13. Rombencefalosinapsis. Fusión de los hemisferios
sensibilidad y especificidad de espina bífida. cerebelosos. Ausencia del vermis anterior. Deficiencia del ver-
mis posterior.

Rombencefalosinapsis. Cerebelo pequeño de • Estudio fetal mediante amniocentesis o cordo-


morfología anormal con agenesia del vermis. Pro- centesis en caso de infección confirmada o sos-
nóstico severo (Fig. 13). pecha de hemorragia intracraneal para descar-
tar trombocitopenia alloinmune.
• Investigar tóxicos.
MANEJO CLÍNICO • El diagnóstico preciso no siempre es fácil. A pe-
El dato fundamental es que el diagnóstico dife- sar de que no se realiza de forma sistemática, en
rencial es difícil. Incluso en los casos más leves, en casos seleccionados la evaluación se comple-
los que se sospecha que se trate de una anomalía menta con la resonancia magnética para con-
leve y con pronóstico favorable, el manejo clínico firmar la integridad del vermis y detectar otras
debe ir orientado a excluir las anomalías asocia- anomalías (alteración de la migración neuro-
das, investigar la etiología y controlar la evolución nal, heterotopias, etc.).
con objeto de catalogarlas como aisladas o for- Seguimiento ecográfico seriado, cada 4 sema-
mando parte de un síndrome o ser consecuencia nas. El contenido de estos controles incluye neu-
de una complicación de la gestación: rosonografía avanzada y ecografía completa y de-
• Ecografía integral y detallada dirigida a descar- tallada.
tar la presencia de anomalías asociadas de al- Excepto en las anomalías incluidas en el pri-
gún órgano o sistema. mer subgrupo, megacisterna magna, quiste arac-
• Ecocardiografía. noideo y quiste de la bolsa de Blake aisladas y sin
• Estudio del cariotipo fetal. complicaciones, la severidad del pronóstico en el
• Análisis serológico y microbiológico. Estudio resto de casos justificaría la interrupción de la
materno (IgG e IgM) de CMV y toxoplasma y gestación. En caso de interrupción de la gestación
rubéola (en caso de no disponer de serología o muerte intrauterina, el diagnóstico definitivo
materna previa o si no era immune). se debe establecer por el estudio anatomopato-

66
B. Puerto, M. Sanz, E. Eixarch

lógico a través de necropsia y consultar con el ge- 11. Forzano F, Mansour S, Ierullo A, Homfray T, Thila-
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67
Diagnóstico prenatal de las cardiopatías congénitas
O. Gómez, M. Bennasar, N. Masoller, F. Crispi, J.M. Martínez

IMPORTANCIA DE LAS CARDIOPATÍAS En abortos espontáneos la presencia de CC es


CONGÉNITAS: EPIDEMIOLOGÍA aún más alta (20-25/1.000) casos, mientras que en
Entendemos por cardiopatía congénita (CC) niños que sobreviven al año de vida la frecuencia
toda malformación estructural resultante de la es de 5/1.000. Se dan por igual en todos los grupos
morfogénesis del corazón y de los grandes vasos étnicos y no muestran diferencias en cuanto a su
intratorácicos. Las CC constituyen las malforma- frecuencia con respecto al sexo, aunque sí se han
ciones congénitas severas más frecuentes. Afectan descrito diferencias en cuanto al sexo para deter-
aproximadamente al 0,8-1% de los recién naci- minados tipos de CC.
dos(1,2), siendo la mitad de ellas defectos mode- Además, las CC son cuatro veces más frecuen-
radamente severos o muy severos, en los que exis- tes que el síndrome de Down y ocho veces más fre-
te aún una mortalidad no despreciable: se consi- cuentes que los defectos de tubo neural, dos ejem-
dera que, de forma global, el 15% de los niños na- plos de patologías en los que, por la gravedad mé-
cidos con una CC no llegarán a la adolescencia. dica y la trascendencia social, se han instaurado
En cifras globales, y en concreto en nuestro país, programas de cribaje a la población general. A su
la mortalidad postnatal es más alta, e incluso hay vez, la prevalencia de anomalías cromosómicas y
que tener en cuenta que muchos recién nacidos síndromes genéticos asociados a las CC es alta, es-
con CC no son diagnosticados al nacer y serán de- pecialmente en vida fetal y sobretodo si se asocia
jados a su evolución espontánea, presentando una a otras malformaciones. Cuando la CC se presen-
mortalidad superior al 50% ya durante el primer ta de forma aislada tenemos que considerar hasta
año de vida. un 15-25% de riesgo total de anomalía cromosó-
Sin embargo, ante el diagnóstico de una CC en mica, dependiendo del tipo de CC. Más aún, has-
vida fetal hay que considerar que la mortalidad ta en un 25-40% de los casos de CC diagnostica-
global se acerca al 25-35%, un 60% de ella duran- das prenatalmente, ésta se presentará asociada a
te el primer año de vida. Asimismo, a las CC se las otras malformaciones, por lo que hay que tener en
considera las responsables de más del 50% de la cuenta que la sola presencia de CC supone un ries-
mortalidad infantil debida a anomalías congéni- go 10 veces superior al de la población general de
tas, y de un 20-30% de las muertes neonatales(1,2). presentar cualquier otra malformación.

69
Diagnóstico prenatal de las cardiopatías congénitas

Para acabar de dibujar el panorama de las CC, 2. Salida de aorta del ventrículo izquierdo, o cor-
tenemos que recordar que la mayoría (> 90%) de te de las cinco cámaras.
CC aparecen en fetos que no son de riesgo, sin an- 3. Corte de los tres vasos y tráquea, o de la ‘V’.
tecedentes o factores de riesgo conocidos. Por to- En primer lugar valoraremos el situs visceral, la
do ello, el papel de la ecografía prenatal de scree- relación de las cámaras cardiacas y las venas con
ning es fundamental. Asimismo, sabemos que mu- los órganos intraabdominales. La relación normal
chas CC son evolutivas durante la gestación, por de los órganos fetales queda definida como el si-
lo que su aspecto anatómico, y por tanto ecográ- tus solitus: aurícula derecha, lóbulo hepático ma-
fico, va a modificarse a lo largo del tiempo, y de yor, vena cava inferior y pulmón trilobulado a la
igual manera postnatalmente. Es fundamental te- derecha fetal, y aurícula izquierda, estómago, aor-
ner este concepto claro en el manejo perinatal de ta descendente y pulmón bilobulado a la izquier-
las mismas. Finalmente, actualmente está acepta- da fetal. El corazón se orienta en el tórax hacia la
do que el diagnóstico prenatal mejora el pronós- izquierda (levocardia). El situs inversus corres-
tico postnatal de al menos alguna de las CC, espe- ponde a una imagen en espejo, con los órganos que
cialmente las ductus dependientes(3). habitualmente se encuentran a la derecha fetal en
El espectro de las CC que existen es amplísimo, el lado izquierdo mientras que los que están a la
imposible de abordar de forma completa en un cur- izquierda fetal se presentarían a la derecha. En es-
so como el de estas características. Por ese motivo, te situs, el corazón se orienta hacia la derecha (dex-
vamos a insistir en cómo realizar el cribaje básico trocardia) y, en general, tiene bajo riesgo de aso-
de las CC durante la ecografía de las 20-22 sema- ciación a patología. Diferente es el situs ambiguous,
nas y comentaremos las principales características altamente asociado a diversas malformaciones, en
de sólo unas cuantas de ellas, pero que suponen en- general a los síndromes cardioesplénicos. Existe
tre el 80-85% del total, lo que justifica plenamen- una localización variable de los órganos fetales tan-
te su elección, ya que son las que vamos a ver con to en el lado derecho como izquierdo. El corazón
mayor frecuencia en diagnóstico prenatal. se halla en estos casos tanto en levocardia, como
dextrocardia, o incluso mesocardia, con la punta
del corazón orientada hacia la línea media.
ESTUDIO ANATÓMICO CARDIACO Pasamos a continuación a realizar el corte de
A LAS 20-22 SEMANAS las cuatro cavidades(2,4). Es un corte transverso en
La exploración cardiaca básica durante la eco- el tórax fetal aproximadamente a nivel de la 4ª cos-
grafía de screening anatómico consiste en identi- tilla, paralelo al corte del perímetro abdominal. Va-
ficar una serie de planos al realizar un barrido con- loramos inicialmente el eje cardiaco, así como el
tinuo desde el abdomen al mediastino superior y ángulo entre el septo interventricular y una línea
además, a nuestro criterio que es cada vez más imaginaria que vaya de esternón a vértebra. En ge-
aceptado internacionalmente, debe realizarse tam- neral se sitúa alrededor de 45 ± 10 grados hacia la
bién con la aplicación de Doppler color. De los cin- izquierda y se mantiene constante a lo largo de la
co cortes transversales, prácticamente paralelos, gestación. La desviación marcada del eje cardiaco,
descritos por Yagel, destacan por su extrema utili- ya sea a la izquierda o más raramente a la derecha,
dad para diagnosticar CC(4,5): es un posible marcador de cardiopatía estructural,
1. Corte de las cuatro cavidades o cuatro cámaras. principalmente conotruncal.

70
O. Gómez, M. Bennasar, N. Masoller, F. Crispi, J.M. Martínez

Figura 1. Corte de las cuatro cavidades apical. Figura 2. Corte de la salida de la aorta o de las cinco cavi-
dades. Se identifica la continuidad entre el septo interven-
tricular y la aorta.

En el corte de las cuatro cavidades (Fig. 1) te- 1/3 medio del septo interauricular. Finalmente
nemos que comprobar siempre: el situs solitus, no debe haber exceso de líquido (> 2 mm o a ni-
el tamaño cardiaco, cuya relación normal es de vel auricular) en el pericardio.
aproximadamente 1/3 de área cardiaca respecto Es importante realizar este análisis detallado de
al área torácica total. Las aurículas son aproxi- forma sistemática, y preferiblemente en diversos
madamente del mismo tamaño, la izquierda es la planos, es decir, con el dorso anterior (4 cavidades
posterior y está cerca de la columna y aorta des- basal), dorso posterior (4 cavidades apical), que es
cendente, mientras que la derecha es la anterior en general el que más información nos da, y dor-
y cerca del esternón. La apertura del foramen oval so lateral que es el que mejor valora la integridad
es hacia la aurícula izquierda. Los ventrículos fe- de los septos. A su vez, el Doppler color nos de-
tales también son aproximadamente del mismo muestra el llenado simétrico de los ventrículos en
tamaño. El izquierdo es el posterior y tiene la ca- diástole, sin flujo durante la sístole.
vidad lisa, mientras que el derecho es el anterior A continuación pasamos a valorar los tractos
en el tórax y tiene el 'moderator band', que es la de salida de las grandes arterias(4). El corte eco-
confluencia de los músculos papilares en el ápex gráfico principal es el del tracto de salida de la ar-
y ayuda a distinguir al ventrículo derecho como teria aorta en el ventrículo izquierdo o corte de
tal. Una estructura importantísima es la cruz car- las 5 cámaras (Fig. 2). Se trata de identificar la con-
diaca: la confluencia de la parte baja del septo in- tinuidad anatómica entre la aorta y el septo in-
terauricular, la parte alta del septo interventricu- terventricular por un lado y el complejo mitroa-
lar y las válvulas atrioventriculares. Estas se in- órtico por el otro. En general, este corte se obtie-
sertan con cierto decalaje en el septo interventri- ne prácticamente paralelo al de las 4 cavidades, al-
cular: la tricúspide es algo más apical que la mi- go superior en el tórax fetal. Con este plano de las
tral y ambas deben abrirse y cerrarse de forma 5 cámaras cardiacas se mejora la detección de las
sincrónica. También tenemos que comprobar la cardiopatías congénitas, por lo que ya se aconse-
integridad del tabique inteauricular e interven- ja añadir de forma rutinaria este plano al de las
tricular, identificando el foramen oval a nivel del 4 cámaras cardiacas dentro de la sistemática de la

71
Diagnóstico prenatal de las cardiopatías congénitas

ecografía morfológica de 20-22 semanas. La arte-


ria pulmonar sale del ventrículo derecho, cruza
prácticamente perpendicular sobre la arteria aor-
ta y después se divide en dos ramas pequeñas, la
rama derecha y la izquierda, siendo su continui-
dad natural el ductus arteriosus, que conecta la
arteria pulmonar con la aorta. La aplicación del
Doppler color puede facilitar la comprobación del
cruce entre ambos tractos de salida. El calibre de
ambas arterias tiene que ser similar, con una mí-
nima dominancia derecha, a lo largo de todo su Figura 3. Corte de los tres vasos + tráquea. De izquierda a
trayecto hasta converger a nivel de la aorta des- derecha identificamos: pulmonar, aorta, vena cava superior
y tráquea por detrás de esta última.
cendente. De nuevo el Doppler color es especial-
mente útil para confirmar la normalidad de todos
estos puntos. entre ambos troncos arteriales, se corresponde con
El último corte, muy útil, es el de los 3 vasos más la presencia de un arco aórtico derecho. Un cuar-
tráquea, o corte de la 'V'(4). Es un plano en el me- to vaso a la izquierda de la arteria pulmonar es
diastino superior, prácticamente paralelo al de las típico de la persistencia de la vena cava superior
4 cavidades, y por tanto fácil de conseguir. Se iden- izquierda.
tifica a ese nivel de forma alineada de izquierda a Finalmente, también se debe identificar co-
derecha y de diámetro mayor a menor la arteria rrectamente el drenaje venoso pulmonar y sisté-
pulmonar a nivel de ductus arterioso, la aorta as- mico. El drenaje venoso pulmonar a la aurícula iz-
cendente a nivel del istmo y la vena cava superior. quierda se identifica en el corte de la 4 cámaras. Es
En ese corte el istmo aórtico y el ductus arterioso imposible visualizar las cuatro venas pulmonares
confluyen en forma de V, quedando la tráquea, eco- a la vez entrando en la aurícula izquierda, dos en
negativa, a la derecha de la rama aórtica de la V y el lado derecho y dos en el lado izquierdo de dicha
por detrás de la vena cava superior (Fig. 3). Ade- aurícula. Por lo tanto, se trata de descartar el dre-
más se puede identificar el timo por delante de la naje venoso pulmonar anómalo completo al iden-
V limitado por el esternón. En el plano de la V, el tificar dos de las venas pulmonares. En cuanto al
Doppler color ayuda a identificar los troncos aór- drenaje de las venas cavas superior e inferior en la
tico y pulmonar, confirmando que tienen un cali- aurícula derecha, se identifican en un corte longi-
bre muy parecido (algo menor la rama aórtica) y tudinal parasagital derecho.
ambos con flujo anterógrado y confluente (ambos Finalmente, queremos destacar que, además,
de azul cuando la columna sea posterior, ambos es posible realizar un estudio ecocardiográfico
de rojo si la columna es anterior, color diferente si fetal de forma precoz. La correcta evaluación de
es transversa). A ese nivel, sería una clara sospecha las 4 cavidades y grandes arterias se consigue
de cardiopatía estructural la ausencia de uno de prácticamente en el 100% de los casos a las 13-
los vasos, discrepancias en el tamaño de los tron- 14 semanas, con una necesidad de repetir la ex-
cos arteriales o la presencia de flujo retrógrado en ploración por valoración inadecuada de menos
uno de los vasos. La forma de “U”, con la tráquea de un 5%, especialmente si se utilizan la vía trans-

72
O. Gómez, M. Bennasar, N. Masoller, F. Crispi, J.M. Martínez

vaginal y el Doppler color y pulsado. Esta explo-


ración precoz se debe ofrecer a las gestantes de
alto riesgo, siendo la TN aumentada la indica-
ción más rentable durante el primer trimestre.
En general, las CC diagnosticadas antes de las 16
semanas suelen ser más complejas y con mayor
trastorno hemodinámico, y por tanto cuanto más
precoz es el diagnóstico peor es el pronóstico.
Asimismo, la incidencia de malformaciones es-
tructurales asociadas y de anomalías cromosó-
micas y abortos espontáneos es más alta en estos
casos(6,7). Figura 4. Gran comunicación interventricular perimem-
branosa (alto riesgo de anomalía cromosómica) en el corte
de 4 cavidades basal.
PROTOCOLO PARA EL DIAGNÓSTICO
DE LAS CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
• Ecografía fetal de screening rutinario a todas las 1. Comunicación interventricular (CIV), es la CC
gestantes: más frecuente al nacimiento y por tanto en vi-
– Entre 11-14 semanas: estudio anatómico pre- da fetal. Representa hasta un 30% del total de
coz (evaluar 4 cavidades, si es posible gran- CC. Son difíciles de diagnosticar. Su importan-
des vasos) y valoración TN. cia reside en que es un marcador de anomalía
– Entre 20-22 semanas: estudio anatómico. Es- cromosómica, especialmente las perimembra-
pecial valoración 4 cavidades, salida aorta, nosas y de gran tamaño (Fig. 4).
corte de la 'V' (3 vasos + tráquea). 2. Canal atrioventricular (AV), que corresponde
• Ecocardiografía fetal dirigida a las pacientes de hasta un 15-20% de las CC en el segundo tri-
alto riesgo: mestre. Existe una marcada anomalía de las 4
– Entre 13-16 semanas: la indicación más fre- cámaras, es imposible identificar una cruz car-
cuente es la TN aumentada. diaca completa (Figs. 5a y 5b). Su importancia
– Entre 20-22 semanas: si riesgo y si la precoz reside en que con gran frecuencia se asocia a
fue normal. otras anomalías: hasta un 50% de casos se aso-
– Entre 32-34 semanas: si alto riesgo, y en es- cia a la trisomía 21 y también trisomía 18. Úni-
pecial diabéticas. camente un 30% de los canales AV diagnosti-
• Ecocardiografía neonatal: si alto riesgo. cados en el segundo trimestre son aislados.
3. Síndrome de corazón izquierdo hipoplásico (sd-
CIH), que también corresponde hasta un 15-
EXPECTATIVAS DIAGNÓSTICAS 20% de las CC en el segundo trimestre. Su diag-
EN LA ECOGRAFÍA DE 20-22 SEMANAS nóstico también es sencillo, en teoría, por la im-
Cuando realizamos una ecografía de 20-22 se- posibilidad de conseguirse un corte de las 4 cá-
manas tenemos que tener como objetivos básicos maras (Fig. 6). La importancia de esta CC es
descartar las siguientes anomalías(2): la alta mortalidad y morbilidad que tiene, a pe-

73
Diagnóstico prenatal de las cardiopatías congénitas

Figura 5a. Canal atrioventricular común con válvula única Figura 5b. Canal atrioventricular común con válvula única
abierta. cerrada. Se identifica la inserción en línea de las valvas tri-
cúspide y mitral.

Figura 7. Tetralogía de Fallot. Se observa acabalgamiento


Figura 6. Hipoplasia severa del ventrículo izquierdo por atre- de la aorta a nivel valvular sobre la comunicación inter-
sia mitral. ventricular.

sar de los avances en cirugía cardiaca, siendo la de los casos se asocia a una anomalía cromosó-
CC de peor pronóstico. mica (incluida la microdeleción 22q11-) y que
4. Tetralogía de Fallot (TF)(8) y transposición de su pronóstico dependerá demás del grado de
grandes arterias (TGA), correspondiendo cada obstrucción de la pulmonar. La TGA suele ser
una de ellas aproximadamente a un 10% de las aislada, pero su pronóstico vital mejora de for-
CC. Típicamente no son detectables en el cor- ma significativa si es diagnosticada prenatal-
te de las 4 cámaras, que suele ser normal, por lo mente.
que hay que descartarlas explorando adecua- 5. Coartación de aorta, que correspondería a un
damente las grandes arterias (Figs. 7 y 8). La im- 5% de las CC. Es difícil del diagnosticar, y de
portancia de la TF reside en que hasta un 30% hecho, se considera siempre un diagnóstico de

74
O. Gómez, M. Bennasar, N. Masoller, F. Crispi, J.M. Martínez

Figura 8. Transposición de las grandes arterias en la que se Figura 9. Marcada dominancia de las cavidades derechas en
observa la salida en paralelo de ambas arterias, sin cruzarse. un caso de coartación de aorta.

sospecha al encontrarse básicamente una mar- BIBLIOGRAFÍA


cada dominancia de cavidades derechas (Fig. 1. Allan L, Sharland G, Milburn A, Lockhart S, Groves
A, Anderson R, Cook A. Prospective diagnosis of 1006
9). Es la principal fuente de falsos negativos. Es consecutive cases of congenital heart disease in the fe-
importante sospecharla y asumir un falso po- tus. J Am Coll Cardiol 1994;23:1452-8.
sitivo ya que se asocia hasta un 15% a anoma- 2. Allan L, Hornberger L, Sharland G. Textbook of fetal
lías cromosómicas (en especial, síndrome de cardiology 2000. Greenwich Medical Medial Limited,
London.
Turner) y su diagnóstico prenatal también me-
3. Campbell S et al. Isolated major congenital heart disease
jora significativamente su manejo y pronóstico (Opinion). Ultrasound Obstet Gynecol 2001;17: 370-9.
postnatal. 4. Yagel S, Cohen SM, Achiron R. Examination of the fe-
6. Todas las demás: aproximadamente un 15%. tal heart by five short-axis views: a proposed screening
Además, hay que tener en cuenta que aún en method for comprehensive cardiac evaluation. Ultra-
sound Obstet Gynecol 2001;17:367-9.
las mejores manos y con las mejores condiciones
5. Chaoui R, McEwing R. Three cross-sectional planes
posibles, el diagnóstico prenatal de algunas CC for fetal color Doppler echocardiography. Ultrasound
como la CIA-OS o la persistencia del ductus ar- Obstet Gynecol 2003;21:81-93.
terioso, lógicamente nunca podrá ser posible, ya 6. Carvalho JS. Nuchal translucency, ductus venosus and
congenital heart disease: an important association-a
que son dos situaciones fisiológicas en vida fetal. cautious analysis. Ultrasound Obstet Gynecol 1999;14:
Asimismo, las CIV pequeñas (< 1-2 mm), las es- 302-6.
tenosis valvulares, así como la coartación de aor- 7. Hyett J, Perdu M, Sharland G, Snijders R, Nicolaides
ta leve o moderada, muy difícilmente podrán KH. Using nuchal translucency to screen for major
cardiac defects at 10-14 weeks of gestation: population
diagnosticarse prenatalmente, y al ser anomalí- based cohort study. Br Med J 1999;318:81-5.
as evolutivas puede darse la situación de que se- 8. Martínez JM, Gómez O, Bennasar M, Olivella A, Cris-
an severas en el tercer trimestre con una explo- pi F, Puerto B, Gratacós E. The 'question mark' sign
ración completamente normal a las 20-22 sema- as a new ultrasound marker of tetralogy of Fallot in
the fetus. Ultrasound Obstet Gynecol 2010 Nov;36(5):
nas o antes. 556-60.

75
Patología renal
V. Borobio, F. Figueras

Las anomalías nefrourológicas presentan una 2. ¿Están presentes ambos riñones?


frecuencia total desconocida, ya que muchas son 3. ¿Están en el lugar correcto?
asintomáticas. Son las malformaciones más fre- 4. ¿Son normales en cuanto a tamaño, forma y
cuentemente diagnosticadas prenatalmente (30%). ecogenicidad?
El 2-4% de los neonatos presentan una anoma- 5. ¿Está dilatada la vía excretora? ¿A qué nivel?
lía nefrourológica y son las terceras en frecuencia 6 . ¿Es normal la cantidad de líquido amniótico?
en los recién nacidos. Son las responsables del 4%
de la mortalidad perinatal y el 75% son de tipo
obstructivo. AGENESIA RENAL BILATERAL
El estudio prenatal de una anomalía nefrou- La agenesia renal bilateral se presenta con una
rológica debe incluir la valoración del volumen de frecuencia de 1 cada 4.000 nacimientos. Es una
líquido amniótico, la localización y caracterización malformación letal y por tanto no plantea dilemas
de las anomalías y la búsqueda de defectos asocia- a nivel de manejo clínico. El diagnóstico se basa en
dos. la constatación de la ausencia de riñones y vejiga
La presencia de un oligoanhidramnios a par- urinaria, así como la presencia de un oligoanhi-
tir de las 16-18 semanas, y descartada una rotura dramnios a partir de las 16 semanas, que puede di-
prematura de membranas, infecciones perinatales ficultar la visualización de las estructuras. La au-
o un retraso de crecimiento severo, debe hacer sos- sencia de las arterias renales con el estudio Dop-
pechar fuertemente un problema renal, y por el pler color nos ayudará en el diagnóstico, pero la
contrario, en el contexto de una anomalía renal, la disposición “tumbada” de las glándulas suprarre-
presencia de un volumen normal de líquido am- nales nos pueden confundir con unos riñones hi-
niótico nos indica que al menos hay un riñón fun- poplásicos.
cionante y por tanto, un buen pronóstico en cuan- En la figura 1 observamos ausencia de riñones
to a función renal se refiere. y vejiga, y el signo de “suprarrenal tumbada” co-
Las siguientes cuestiones son útiles en el estu- rrespondiente a las glándulas suprarrenales en dis-
dio del aparato urinario fetal: posición vertical, paralelas a la columna vertebral.
1. ¿Es visible la vejiga? ¿Está dilatada? ¿Es de mor- Se ha asociado a síndromes genéticos en un 25%
fología normal? (Vacterl, síndrome de Fraser, otocefalia, etc.) y exis-

77
Patología renal

Figura 1.
Figura 2.

te un riesgo de recurrencia del 3-5%. La asociación


a anomalías cromosómicas es baja (1-5%).

AGENESIA RENAL UNILATERAL


Se presenta con una frecuencia de 1 cada 1.000
nacimientos. Puede ser un diagnóstico difícil, e
incluso pasar desapercibido tanto prenatalmen-
te como en vida adulta. En la ecografía no obser-
varemos riñón en su fosa renal correspondiente
al lado de la columna, tanto en el corte sagital co-
mo en el axial. El Doppler color constatando la Figura 3.

ausencia de la arteria renal nos ayudará en el diag-


nóstico. El pronóstico es excelente. Habrá que in- ga o a la cresta ilíaca. El Doppler color nos puede
vestigar antecedentes familiares, el riesgo de aso- demostrar la salida de la arteria renal desde la ar-
ciación a cromosomopatías es bajo (< 1%) y tam- teria ilíaca o próxima a su bifurcación. El pronós-
bién el riesgo de recurrencia (< 5%). Siempre ha- tico es bueno, aunque están descritas algunas com-
brá que constatar el hallazgo posnatalmente. plicaciones como reflujo (5%), infecciones u obs-
trucción. La asociación a cromosomopatías es ba-
ja (< 1%) así como a síndromes genéticos (< 5%).
ECTOPIA RENAL En ocasiones se presenta una ectopia renal cru-
Es más frecuente que la agenesia unilateral, la zada con o sin fusión, donde el riñón se encuen-
incidencia publicada varía entre 1:500 y 1:1.200. tra en el lado opuesto de su uréter.
La forma más habitual es el riñón pélvico. El ri- En la figura 2 observamos un riñón descendi-
ñón está ausente en la fosa renal correspondien- do hacia vejiga urinaria en la fosa ilíaca y en la fi-
te y habrá que hacer una exploración minuciosa gura 3 no observamos riñón en su fosa renal co-
para demostrar su presencia adyacente a la veji- rrespondiente.

78
V. Borobio, F. Figueras

Figura 4. Observamos una masa renal prevesical correspon-


diente a un riñón en herradura, los dos riñones se encuen- Figura 5. Pieza de necropsia de un riñón en herradura.
tran descendidos y fusionados en su polo inferior.

RIÑÓN EN HERRADURA blecer en base al conocimiento actual un algorit-


Se presenta con una frecuencia de 1/400-500 mo diagnóstico, pronóstico y de manejo prena-
nacimientos. Los polos inferiores renales están tal.
fusionados. Asociación a anomalías cromosómi-
cas (trisomía 18, síndrome de Turner, microde- Semiología ecográfica
leción 22q,11,2) y diversos síndromes genéticos Se entiende por riñón grande el que mide por
(<10%). En general tienen un buen pronóstico, encima del percentil 95. Aunque hay tablas para
el 50% son asintomáticos, las complicaciones sue- cada uno de los diámetros, el diámetro longitudi-
len ser por reflujo (10%) y litiasis. Acostumbran nal es el más rentable. En un corte sagital fetal, un
a presentar un pobre diagnóstico pre y postnatal leve movimiento de inclinación del transductor
(Figs. 4 y 5). a uno y otro lado permite visualizar y medir los ri-
ñones en su corte longitudinal. Como regla fácil,
el riñón no debe superar en su diámetro longitu-
RIÑÓN AUMENTADO DE TAMAÑO dinal (mm) la edad gestacional (semanas) + 10:
Y/O REFRINGENTE por ejemplo, a las 20 semanas el percentil 95 es 30,
Una de las cuestiones básicas que nos plante- a las 30 es 40 y a las 40 es 50. Entendemos por ri-
amos en el examen del aparato nefrourológico fe- ñón refringente el que tiene una refringencia su-
tal es si los riñones son normales en cuanto a for- perior al hígado.
ma, tamaño o ecogenicidad. El hallazgo de un ri-
ñón aumentado de tamaño y/o refringencia es un Clasificación diagnóstica (Fig. 6)
signo ecográfico final de varias condiciones fi- El patrón ecográfico de un riñón grande pue-
siopatológicas, con pronósticos muy diferentes, de ser sólido, sólido-quístico o quístico. Cada uno
y va a suponer un reto diagnóstico. Partiendo de estos patrones es sugestivo de un grupo de pa-
de estos signos ecográficos, intentaremos esta- tologías.

79
Patología renal

Figura 6. Algoritmo diagnóstico del riñón grande y/o refringente.

Figura 7. Masa sólida en riñón correspondiente a un tumor Figura 8. Colección eco negativa en polo superior de riñón
renal. correspondiente a hemorragia suprarrenal.

Riñón grande sólido ción, la clave para la diferenciación es que la he-


El patrón sólido puede ser focal cuando afecta morragia no capta color y presenta una evolución
solamente a una parte del riñón. En este caso pen- de su patrón ecográfico entre exploraciones su-
saremos en patología tumoral (el más frecuente es gestivo de colección hemática (presencia de nive-
el nefroma mesoblástico). Los tumores renales se les y tabiques finos) (Figs. 7 y 8).
observan como una masa sólida, con vasculari- Los patrones sólidos no focales, que afectan a
zación periférica. No modifican la conducta obs- todo el riñón, suelen corresponder a la presencia
tétrica. Su principal diagnóstico diferencial es con de un riñón de tamaño y refringencia aumenta-
la hemorragia suprarrenal. Además de la localiza- dos. En este grupo nos encontramos las anomalí-

80
V. Borobio, F. Figueras

Figura 9. Algoritmo diagnóstico del riñón refringente.

as genético-sindrómicas y las poliquistosis renales Riñón quístico


(en sus formas dominante y recesiva). En el gru- En el riñón pueden existir quistes aislados, aun-
po de las causas genético-sindrómicas, las más fre- que son muy frecuentes. Entre las formas quísti-
cuentes son la trisomía 13 y los síndromes de Beck- cas la mayoría son obstructivas. El principal diag-
with-Wiedeman, Meckel-Gruber, Perlman, Bar- nóstico diferencial va a ser con las displasias mul-
det-Bield, Zellweger y Elejaide). Las poliquistosis tiquísticas. La clave diagnóstica es que en las for-
renales se engloban dentro del grupo de las dis- mas obstructivas existe comunicación entre los
plasias renales. quistes. Las formas más precoces de obstrucción
pueden evolucionar a displasia obstructiva en cu-
Riñón sólido-quístico yo caso, el patrón será mixto con quistes cortica-
Algunas displasias renales también se pueden les de pequeño tamaño y un riñón refringente.
presentar con múltiples quistes con un parénqui-
ma refringente entre ellas: son la displasia renal mul-
tiquística y en menor medida la displasia obstruc- DISPLASIAS RENALES
tiva. La diferencia entre ellos es que en la forma obs- Dentro del término genérico de displasias re-
tructiva el riñón suele ser de tamaño reducido y pue- nales se incluyen una serie de patologías en las que
den verse quistes pequeños de distribución corti- histológicamente se evidencia una desestructu-
cal. Por el contrario, en la displasia multiquística ración del complejo glomerulotubular debido a
el riñón es de tamaño aumentado sobretodo si el una interacción alterada epitelio-mesénquima in-
diagnóstico se ha realizado antes de las 30 semanas. ducida por una expresión anómala de moléculas
Cerca del término de la gestación, el tamaño del ri- clave en la nefrogénesis. Es decir, se trata de un tér-
ñón con displasia multiquística se va reduciendo, mino histológico que en la clínica no tiene una tra-
pero no se llegan a visualizar los quistes corticales ducción práctica. Alrededor de un 10% de los ca-
propios de la displasia obstructiva. sos de displasia presentan una historia familiar de

81
Patología renal

Figura 11. Riñones grandes y ecogénicos correspondientes a


una enfermedad poliquística autosómica recesiva.

Figura 10. Pieza de necropsia de unos riñones poliquísti-


cos, obsérvense los quistes corticales de pequeño tamaño. do, también se presentan quistes hepáticos. Tiene
un patrón de herencia recesiva y se ha localizado
la mutación en la región 6p21 (Fig. 10).
anomalía nefrourológica. Recientemente se han
asociado a mutaciones en distintos genes, como el Diagnóstico prenatal
TCF2/HNF 1 beta, el PAX2 y las uroplakinas. El diagnóstico genético es indirecto, es decir, só-
El signo guía va a ser un riñón refringente que lo se puede hacer si existe otra gestación previa
puede o no estar aumentado de tamaño. Estos dos afecta y estudiada. El diagnóstico prenatal ecográ-
parámetros junto con la cantidad de líquido am- fico está dado por el hallazgo de ambos riñones
niótico van a ser determinantes en el algoritmo aumentados de tamaño y ecogenicidad, que ocu-
diagnóstico. pan parte importante del abdomen fetal, de as-
La figura 9 ilustra este algoritmo y detalla las pecto sólido o con algún microquiste. Esto se acom-
principales condiciones patológicas. paña de oligohidramnios y ausencia de imagen ve-
sical por pérdida de función renal fetal. El diag-
nóstico diferencial es con la forma de herencia do-
RIÑÓN POLIQUÍSTICO DE HERENCIA minante (existe líquido y vejiga normales, en el ri-
RECESIVA (ANTES, INFANTIL) ñón se puede ver la diferenciación corticomedu-
Esta enfermedad se presenta con una frecuen- lar) y con la displasia obstructiva (suelen ser ri-
cia de 1 cada 20.000 neonatos. Afecta a ambos ri- ñones pequeños) (Fig. 11).
ñones y se debe a una alteración de los túbulos co-
lectores, que se dilatan formando quistes de has- Manejo obstétrico
ta 2 mm de diámetro. El fenómeno ocurre en for- La evaluación del cariotipo es recomendable
ma radial desde la corteza hasta los cálices y es lo pues aunque se trata de una enfermedad mono-
que lleva a un aumento del tamaño renal. La for- génica, en la mayoría de ocasiones no podremos
ma más común de presentación es la perinatal, realizar diagnóstico prenatal al desconocer la mu-
donde más del 90% de ambos riñones está afecta- tación. Debe incluir seguimiento ecográfico para

82
V. Borobio, F. Figueras

evaluar vitalidad fetal, ya que en la forma perina-


tal es frecuente la muerte fetal (30%). Además hay
que observar la evolución respecto al diámetro ab-
dominal, ya que el gran aumento de tamaño de los
riñones ocasionalmente puede determinar difi-
cultades en el parto vaginal, vía de elección para
esta malformación.

Pronóstico
Las formas perinatal y neonatal son letales por
hipoplasia pulmonar en el primer caso e insufi-
Figura 12. Riñones aumentados de tamaño y ecogenicidad.
ciencia renal en el segundo. Las formas de inicio
infantil o juvenil tienen mayor supervivencia, pe-
ro también desarrollan insuficiencia renal cróni-
ca, fallo renal e hipertensión arterial crónica se- dular. Puede haber algún macroquiste pero estos
cundaria. La enfermedad primaria no tiene trata- son más típicos de la vida adulta. La principal di-
miento. La única alternativa terapéutica para los ficultad será diferenciarlo del riñón refringente sin-
casos no letales es el trasplante renal. drómico (T13, Beckwith-Wiedeman, Meckel-Gru-
ber, etc.). En un 95% de los casos uno de los pro-
genitores estará afecto, por lo ante la sospecha es-
RIÑÓN POLIQUÍSTICO DE HERENCIA taría indicado un estudio ecográfico de los padres.
DOMINANTE (ANTES, DEL ADULTO) Una vez conocida la mutación, se puede hacer diag-
La patogenia viene dada por un defecto en el nostico prenatal indirecto (Fig. 12).
desarrollo del botón ureteral; se produce una di-
latación de los túbulos colectores que no es gene- Manejo obstétrico
ralizada, por lo que coexisten el tejido renal nor- A no ser que el diagnóstico sea seguro (identi-
mal y los quistes. Existe una gran diferencia en la ficación de la mutación), es recomendable el es-
gravedad de la enfermedad en los distintos pa- tudio del cariotipo. Desde el punto de vista obsté-
cientes, situación que se explica por tener una ex- trico el manejo del parto sigue las conductas ha-
presividad variable. Existe una forma de aparición bituales de cada centro, pero no se aconseja variar
prenatal, que se presenta en 1 de cada 1.000 recién la actitud obstétrica.
nacidos y una forma postnatal tardía que debuta
en la cuarta o quinta década de la vida. Pronóstico
Cuando se hace diagnóstico ecográfico prena-
Diagnóstico prenatal tal, el pronóstico es reservado. En general, si la can-
Consiste en la observación de riñones aumen- tidad de líquido amniótico es normal, el pronós-
tados de tamaño e hiperecogénicos con quistes pe- tico perinatal es bueno, aunque un tercio de los
queños. Se diferencian porque el líquido amnióti- afectados desarrollará hipertensión arterial o in-
co suele encontrarse en cantidad normal y porque suficiencia renal durante la infancia. En el resto de
suele poder observarse diferenciación corticome- los pacientes la supervivencia y la sintomatología

83
Patología renal

Figura 13. Displasia renal multiquística.

dependerá de la edad en el momento del diagnós-


tico y la gravedad del cuadro clínico, destacando
que entre un 50 y un 70% se harán hipertensos a
partir de la tercera o cuarta décadas de la vida.
Figura 14. Masa quística en riñón izquierdo, donde coexis-
ten quistes de distinto tamaño no comunicados y con parén-
quima refringente.
DISPLASIA RENAL MULTIQUÍSTICA
Existen dos teorías para explicar la génesis de
este defecto. La primera propone un fallo en el de- El riñón contralaretal puede presentar problemas
sarrollo de la pelvis renal y del tercio superior del obstructivos (hidronefrosis) en un 25% y, lo que
uréter, generando una obstrucción muy precoz por es más frecuente, una hipertrofia compensadora,
atresia ureteral. La segunda plantea un fallo en el por lo que debe ser seguido mensualmente (Fig.
blastema mesonéfrico que impide la formación de 14).
nefronas normales (Fig. 13).
Manejo obstétrico
Diagnóstico prenatal En el manejo prenatal se puede ofrecer estudio
El hallazgo típico es una masa que correspon- citogenético por la asociación de esta anomalía a
de a un riñón aumentado de tamaño con quistes aneuploidas, que es frecuente en la forma bilate-
de varios tamaños, fácilmente visibles en la eco- ral. En la forma unilateral, la asociación a anoma-
grafía, distribuidos en la periferia renal y no co- lías cromosómicas es más baja (2%). La vía de par-
municados entre sí, distorsionando de este modo to de elección es la vaginal, siendo la cesárea sólo
la forma normal del riñón, con parénquima re- por indicaciones obstétricas habituales.
fringente entre los quistes. El principal diagnós-
tico diferencial es con la hidronefrosis, en la que Pronóstico
los quistes sí que están comunicados entre sí. A Los casos bilaterales son letales. En los unila-
lo largo del tercer trimestre pueden regresar de ta- terales, la evolución es variable: en un 5% de los
maño, en cuyo caso el diagnóstico diferencial tam- casos los quistes involucionan durante el periodo
bién incluye la displasia obstructiva. En la displa- fetal y en el 12% las lesiones desaparecen en el
sia obstructiva la afectación es bilateral en el 80% transcurso del primer año de vida, sobre todo con
de los casos, mientras que en la displasia multi- riñones de longitud inferior a 5 cm. La nefrecto-
quística suele ser unilateral en el 80% de los casos. mía sólo se realiza si hay clínica: hematuria, hi-

84
V. Borobio, F. Figueras

Figura 15. Algoritmo diagnóstico en la patología obstructi-


va renal.

pertensión, etc. Se ha descrito un riesgo de recu- Figura 16. Riñón displásico por una obstrucción baja al flu-
rrencia de un 2-3%. jo urinario. Aparece ecogénico, pequeño y con quistes corti-
cales.

DISPLASIA RENAL OBSTRUCTIVA ro hay que tener en cuenta que también pueden
La patología obstructiva de la vía urinaria pre- presentar un tamaño normal o agrandado. La res-
senta un espectro amplio de afectación renal. La puesta del riñón ante la obstrucción precoz pue-
respuesta del riñón frente a la obstrucción puede de presentar varias apariencias ecográficas. En un
ser muy variada, y ecográficamente podemos en- feto con uropatía obstructiva, la identificación de
contrar una amplia gama de imágenes. quistes corticales es indicativa de displasia renal
La figura15 ilustra el algoritmo diagnóstico an- (Fig. 16).
te la sospecha de patología obstructiva. Cuando la En un 80% de las veces la afectación es bilate-
obstrucción de la vía renal es precoz y severa, pue- ral. Siempre se deben buscar signos obstructivos
de presentarse en forma de displasia, que se cono- para determinar la verdadera causa de la patolo-
ce como displasia obstructiva. El nivel de la obs- gía; así, es posible encontrar imágenes que corres-
trucción puede estar en cualquier punto de la vía pondan a megavejiga, megauréter o hidronefrosis.
urinaria. El diagnóstico diferencial será con el riñón poli-
quístico de herencia dominante (riñón aumenta-
Diagnóstico prenatal do de tamaño), con la displasia multiquística (pre-
La imagen ecográfica típica es la presencia de sencia de macroquistes no comunicados) y con
riñones de tamaño disminuido, con parénquima el riñón refringente sindrómico (no suele haber
hiperecogénico y quistes en la región cortical, pe- quistes corticales).

85
Patología renal

Figura 17.

Manejo obstétrico alta incidencia (1/100-500 recién nacidos) y re-


Considerando la asociación con defectos cro- presentan el 75% de las anomalías nefrourológi-
mosómicos, siempre se debe ofrecer obtención de cas diagnosticadas in utero. Prenatalmente son 5
muestra para el cariotipo fetal. La presencia de sig- veces más frecuentes en el varón que en la mujer.
nos de displasia obstructiva junto con oligoanhi- Pueden presentar anomalías asociadas: estruc-
dramnios y ausencia de vejiga son altamente su- turales en un 10% de los casos (genitourinarias y
gestivos de una función renal no recuperable. No cardiacas) y cromosómicas en un 2-5%.
existe indicación para finalizar la gestación pre- Es importante tener en cuenta que el 40% de-
término. saparecen.

Pronóstico
En las formas unilaterales el pronóstico es bue- CLASIFICACION DE LAS UROPATÍAS
no. En las bilaterales, el principal factor pronós- OBSTRUCTIVAS (FIG. 17)
tico es la cantidad de líquido amniótico: si es nor- La obstrucción al flujo urinario puede presen-
mal, solamente el 20% de los neonatos presentan tarse en cualquier nivel de las vías excretoras y co-
insuficiencia renal, y si está disminuido, un 80%. mo consecuencia se producirá una dilatación re-
trógrada que, dependiendo de dónde se encuentre
la obstrucción, será una dilatación pielocalicilar,
UROPATÍAS OBSTRUCTIVAS hidro o megauréter o una megavejiga. Hay que te-
Las uropatías obstructivas son las anomalías ne- ner en cuenta que una dilatación del tracto uri-
frourológicas más frecuentes. Se presentan con una nario no siempre obedece a una causa obstructiva.

86
V. Borobio, F. Figueras

Figura 18. DAP pelvis renales.

Figura 19. Algoritmo diagnóstico de la ectasia piélica.


DILATACIÓN DEL TRACTO URINARIO
SUPERIOR
La dilatación de la pelvis renal es la anomalía frosis más severa. El pronóstico es excelente, el 66-
más frecuente publicada en diagnóstico prenatal. 92% según series publicadas tienen una resolución
A nivel práctico, hablamos de ectasia cuando la espontánea pre o posnatal y sólo el 3-5% requeri-
pelvis renal es menor a 10 mm (medida en su diá- rán cirugía.
metro anteroposterior en un corte transverso del Aunque la ectasia piélica es un marcador de aneu-
abdomen fetal) y de hidronefrosis cuando es ma- ploidía en el segundo trimestre, su presencia aisla-
yor de 10 mm. El objetivo del diagnóstico prena- da no modifica el riesgo basal de cromosomopatía
tal es intentar definir los criterios que mejor se co- y por tanto, no ofreceremos prueba invasiva.
rrelacionan con la función renal en vida posnatal A pesar de su benignidad, es un diagnóstico que
o con la necesidad de cirugía. crea ansiedad en los padres y que genera en mu-
No hay un acuerdo unánime respecto de los chas ocasiones ecografías prenatales y distintas
puntos de corte para hablar de una dilatación pié- pruebas posnatales innecesarias. En la figura 19
lica, pero distintos autores consideran que un diá- presentamos un algoritmo diagnóstico prenatal.
metro anteroposterior de la pelvis renal > 4 mm <
33 semanas y > 7 mm > 33 semanas tendrían una Hidronefrosis
sensibilidad diagnóstica del 100% para detectar Hablamos de hidronefrosis prenatalmente cuan-
problemas nefrourológicos en vida posnatal. do la pelvis renal es mayor de 10 mm de diámetro
anteroposterior en un corte transverso. Los cálices
Ectasia piélica renales pueden estar o no dilatados. El aspecto so-
Es la anomalía más frecuente detectada en el nográfico típico será el de varias imágenes quísti-
screening ecográfico del segundo trimestre (Fig. cas comunicadas entre sí, y el parénquima puede
18). presentar un aspecto normal o anómalo.
Puede ser expresión de cambios fisiológicos aso- El diagnóstico diferencial se hará funadamen-
ciados al desarrollo y crecimiento de la pelvis re- talmente con la displasia renal multiquística, don-
nal. Su identificación y seguimiento permite de- de los quistes no están comunicados y también con
tectar aquellos casos que evolucionan a hidrone- los quistes renales y los urinomas.

87
Patología renal

Doble sistema pielocalicial


El doble sistema colector se presenta con una
alta incidencia (1:25 estudios post mortem), se ha
descrito una herencia dominante (Atwell, 1977)
y se presenta con mayor frecuencia en la mujer
(65%). La anomalía consiste en la presencia de
dos sistemas colectores, es decir, dos sistemas pie-
localiciales que coexisten en un mismo riñón. La
pelvis del polo superior suele estar dilatada, así
Figura 20. Imágenes quísticas comunicadas correspondien-
como su uréter, y con frecuencia (88%) presen-
tes a una hidronefrosis grado IV.
tan un ureterocele en la vejiga. El polo inferior
suele ser normal, pero frecuentemente presenta
Clasificación (Society for Fetal Urology) reflujo.
• Grado I: dilatación piélica sin dilatación cali- El diagnóstico ecográfico se hará ante la pre-
cial. sencia de un riñón grande, con un quiste en su po-
• Grado II: dilatación piélica con dilatación cali- lo superior (que es la pelvis dilatada), la objetiva-
cial moderada. ción de dos pelvis renales separadas, dilatación ure-
• Grado III: dilatación piélica con dilatación ca- teral (habitualmente del polo superior) y uretero-
licial severa con parénquima normal. cele que se presenta como una imagen quística, de
• Grado IV: dilatación piélica con dilatación ca- finas paredes en el interior de la vejiga. Siempre
licial severa con parénquima anormal (Fig. que se visualiza un ureterocele, habrá que descar-
20). tar un doble sistema, ya que éste se presenta en el
La hidronefrosis puede ser una situación tran- 88% de los ureteroceles; por el contrario, siem-
sitoria, lo que ocurre entre el 41-88% según dis- pre que se sospecha un doble sistema habrá que
tintas series publicadas. En ausencia de dilatación explorar detalladamente la vejiga para descartar la
ureteral, la causa más frecuente es la estenosis de presencia de un ureterocele.
la unión pieloureteral, y en el 90% de los casos se La mayoría de los dobles sistemas son asinto-
presenta de forma unilateral, siendo más frecuen- máticos, y si hay clínica es por reflujo u obstruc-
te en el varón. ción (Fig. 21 a 23).

Figuras 21 a 23. Doble sistema con dilatación del grupo superior. Doble sistema con apariencia ecográfica de quiste en polo
superior. Ureterocele.

88
V. Borobio, F. Figueras

Figura 24.

PRONÓSTICO Y MANEJO CLÍNICO DE LAS aparición de quistes corticales y disminución del


DILATACIONES OBSTRUCTIVAS DEL volumen de líquido amniótico.
TRACTO SUPERIOR En cuanto al manejo clínico, se hará un examen
El pronóstico en general dependerá del tipo, detallado del resto del aparato urinario para in-
grado y bilateralidad de la lesión, cuyo diagnósti- tentar identificar el nivel de la lesión, lo que pue-
co exacto muchas veces es posnatal. En general tie- de ser difícil prenatalmente, y descartar otras ano-
nen un buen pronóstico: el 30-40% presentan re- malías nefrourológicas asociadas. Asimismo, para
gresión espontánea a los dos años de vida y entre excluir otras anomalías morfológicas extrarrena-
el 20-50% requieren cirugía. Según distintos estu- les y cromosómicas asociadas, se realizará ecogra-
dios reportados, el 80% de las hidronefrosis gra- fía morfológica del resto de la anatomía fetal, eco-
do IV con dilatación ureteral, así como las dilata- cardiografía y se valorará la práctica de una am-
ciones de la pelvis renal > 15 mm en la ecografía niocentesis.
prenatal, necesitan cirugía. En la valoración pre- El control ecográfico se realizará cada cuatro se-
natal hay unos signos de mal pronóstico en cuan- manas en los casos unilaterales y cada dos en los
to a función renal se refiere, que son: cambios en bilaterales. Es importante la valoración del grado
la ecogenicidad o adelgazamiento del parénquima, de dilatación a término, ya que si el diámetro an-

89
Patología renal

teroposterior de la pelvis renal es superior a 10 mm 2. Livera LN, Brookfield DSK, Egginton JA, Hawnaur JN.
Antenatal ultrasonography to detect fetal renal ab-
se prescribe antibioticoterapia profiláctica posna- normalities: a prospective screening programme. Br
tal hasta que se excluye patología obstructiva y/o Med J 1989;298:1421-3.
reflujo vesicouretral. 3. Rosati P, Guariglia L. Transvaginal sonographic as-
En general no se variará la actitud obstétrica sessment of the fetal urinary tract in early pregnancy.
Ultrasound Obstet Gynecol 1996;7:95-100.
salvo en hidronefrosis severas de grado IV con al-
teración del parénquima y oligoanhidramnios aña- 4. Romero R, Pilu G, Jeanty P, Ghidini A, Hobbins J. Pre-
natal diagnosis of congenital anomalies. Ed. Mac-Graw-
dido, en cuyo caso y tras un consenso multidisci- Hill Education, UK. Appleton & Lange. 1ª ed., 1988.
plinario, se valorará la madurez pulmonar fetal y 5. Saphier CJ, Gaddipati S, Applewhite L, Berkowitz R.
se planteará la finalización de la gestación. En al- Prenatal diagnosis and management of abnormalities
gunos casos de obstrucción severa, se puede con- in the urologic system. Clin Perinatology 2000;27:921-
45.
templar la posibilidad de terapia fetal, como pun-
6. Potter EL. Type I cystic kidney: tubular gigantism. In:
ciones descompresivas, shunts, etc., aunque las in- Normal and abnormal development of the kidney. Chi-
dicaciones cada vez son más restrictivas. cago:Year Book, 1972; 141-53.
En la figura 24 se describe un algoritmo de ma- 7. Zerres K, Mucher G, Becker J, et al. Prenatal diagno-
nejo posnatal de las ectasias/hidronefrosis. sis of autosomal recessive polycystic kidney disease
(ARPKD): molecular genetics, clinical experience and
fetal morphology. Am J Med Genet 1998;76:137-44.
8. Blyth H, Ockenden BG. Polycystic disease of kidneys
PUNTOS CLAVE and liver presenting in childhood. J Med Genet 1971;8:
• El término displasia renal es anatomopatológi- 257-84.
co y no tiene utilidad clínica en el manejo pre- 9. Winyard P, Chitty L. Dysplastic and polycystic kid-
neys: diagnosis, associations and management. Prenat
natal. Diagn 2001;21:924-935.
• El tamaño del riñón, el patrón ecográfico y la
10. Winyard P, Chitty L. Displastic kidneys. Seminars in
cantidad de líquido amniótico permiten esta- Fetal and Neonatal Medicine 2008;13:142-151.
blecer algoritmos diagnósticos. 11. Dezerega V, Corral S, Sepúlveda W. Diagnóstico pre-
• Un volumen normal de líquido amniótico > 16 natal de malformaciones urinarias. Rev Chil Ultraso-
semanas indica que al menos existe un riñón nog 2000;3:122-33.

funcionante. 12. Mellins HZ. Cystic dilatations of the upper urinary


tract: a radiologist’s developmental model. Radiology
• La respuesta del riñón frente a una obstrucción 1984;153:291-301.
precoz puede ser muy diversa y ofrecer una va- 13. Eckoldt F, Woderich R, Smith RD, Heling KS. An-
riedad de imágenes ecográficas. tenatal diagnostic aspects of unilateral multicystic
• El grado de dilatación del tracto superior no se kidney dysplasia: sensitivity, specificity, predictive
values, differential diagnoses, associated malforma-
correlaciona con la función renal y en pocas tions and consequences. Fetal Diagn Ther 2004;19:
ocasiones se variará la actitud obstétrica ante 163-9.
hidronefrosis severas. 14. Hateboer N, Dijk MA, Bogdanova N, et al. Compari-
son of phenotypes of polycystic kidney disease types 1
and 2. Lancet 1999;353:103-7.
15. Sinibaldi D, Malena S, Mingarelli R, et al. Prenatal ul-
BIBLIOGRAFÍA trasonographic findings of dominant polycystic kid-
1. Rumack, Wilson, Charboneau. Diagnostic Ultrasound. ney disease and postnatal renal evolution. Am J Med
Ed. Mosby-Year book, Inc. 1998. St. Louis, Missouri. Genet 1996;65:337-41.

90
V. Borobio, F. Figueras

16. Mac Dermont KD, Saggar-Malik AK, Economides DL, a prospective study. Ultrasound Obstet Gynecol 2004;
et al. Prenatal diagnosis of autosomal dominant 24:745-749.
polycystic kidney disease (PKD1) presenting in utero
and prognosis for very early onset disease. J Med Ge- 21. Mouriquand PDE, Whitten M, Pracos JP. Pathophy-
net 1998;35:13-6. siology, diagnosis and management of prenatal upper
tract dilatation. Prenat Diagn 2001;21:942-951.
17. Ranke A, Schmitt M, Didier F, Droulle P. Antenatal
diagnosis of multicystic renal dysplasia. Eur J Pediatr 22. Mure PY, Mouriquand P. Upper urinary tract dilata-
Surg 2001;11:246-54. tion: Prenatal diagnosis, management and outcome. Se-
minars in Fetal and Neonatal Medicine 2008;13:152-163.
18. Wellesley D, Howe DT. Fetal renal anomalies and ge-
netic syndromes. Prenat Diagn 2001; 21:992-1003. 22. Whitten SM, Wilcox DT. Duplex systems. Prenat.
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19. Chudleigh T. Mild pyelectasis. Prenat Diagn 2001;
21:936-941. 23. Hiep T. Nguyen et al. The Society for Fetal Urology
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20. Bouzada el al. Diagnostic accuracy of fetal renal pelvis ment of antenatal hydronephrosis. J Pediatric Urol
anteroposterior diameter as a predictor of uropathy: 2010;6:212-231.

91
Defectos de la cara y el cuello
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada

La cara del feto juega un papel central en el des- ¿Cómo se debe realizar el estudio de la cara fetal
pistaje de malformaciones fetales ya que una pro- durante la gestación?
porción significativa de las cromosomopatías y de La mayoría de protocolos de ecografía estable-
los síndromes genéticos se asocian a anomalías de cen que el estudio de la cara fetal debe incluir:
la cara. Por tanto, ante cualquier anomalía facial • El corte sagital de la cara para evaluar el perfil
fetal debemos ir a buscar otras anomalías y vice- del feto. Estudio de la morfología de la frente,
versa. nariz, labios y barbilla.
Puntos en común: • Los planos coronales, que son los más impor-
1. Se asocian frecuentemente a otras anomalías de tantes para evaluar la integridad facial. A nivel
la cara, SNC, corazón y esqueléticas. Realizare- de las órbitas para evaluación de las mismas así
mos una ecocardiografía y estudio anatómico como para realizar la medición de la distancia
fetal detallado. interorbitaria en caso de que sea necesario. El
2. Forman parte de múltiples síndromes para los plano frontocoronal tangencial, que permitirá
que constituyen un signo dismorfológico de- evaluar la nariz, los labios y el mentón.
terminante para definirlos. Es importante rea- Se pueden realizar también una serie de cortes
lizar una buena historia familiar y examen físi- transversales desplazando el transductor hacia la
co de los progenitores. En algunos casos será re- base del cráneo a partir del corte de diámetro bi-
comendable realizar una consulta con el gene- parietal. Con ellos será posible evaluar de nuevo
tista. las órbitas, el paladar, el labio superior, la mandí-
3. En general se asocian a cromosomopatía. Valo- bula y el labio inferior. Estos cortes no son obliga-
rar la necesidad de estudio de cariotipo. torios en la ecografía de screening, pero son de gran
4. Hay que descartar la coexistencia de teratóge- utilidad ante el diagnóstico de una anomalía fa-
nos. cial.
El objetivo básico ante el diagnóstico de una
malformación facial será demostrar si estamos de-
lante de una anomalía aislada y por tanto, de po- FISURA LABIAL/PALATINA
tencial buen pronóstico, o ante una anomalía aso- La fisura labial y la fisura palatina son anoma-
ciada a otros problemas. lías fisiopatológicamente diferentes que acontecen

93
Defectos de la cara y el cuello

1) 2) 3)

4) 5) 6)

Figuras 1 a 6. (1) Corte sagital de la cara fetal en un feto de 12 semanas de gestación. Nótese la correcta alienación de la fren-
te, nariz y mentón. (2, 3). Cortes coronales de la cara fetal a nivel de las órbitas, de los labios y mentón. (4, 5 y 6) Cortes trans-
versales de la cara fetal a nivel de las órbitas y maxilar superior. Estos cortes permiten realizar el estudio del paladar en con-
diciones óptimas.

frecuentemente juntas. Es la anomalía más fre- La fisura labial y palatina centralD es una enti-
cuente de la cara con una incidencia que está en dad mucho menos frecuente (0,5%) y etiopatogé-
aumento (estimada entre 1: 850-1.000 nacidos vi- nicamente diferente. Forma parte de otro grupo
vos). de anomalías faciales (hipotelorismo, ciclopia, pro-
boscis, etc.) o intracraneales de la línea media. La
Presentación clínica mayoría de los casos presentan una anomalía cro-
• En un 25% está afectado tan sólo el labio (de mosómica asociada.
forma uni o bilateral) A.
• En un 25% está afectado sólo el paladar secun- Diagnóstico ecográfico
dario o posterior B. El diagnóstico se establece al demostrar el sur-
• En un 50% de los casos el defecto afecta al la- co o la solución de continuidad a nivel del labio
bio y al paladar primario o anterior C (parte y/o del paladar. El corte frontocoronal tangencial
alveolar del maxilar hasta la fosa incisiva que de la cara es imprescindible para el diagnóstico y
separa el paladar anterior del posterior), sien- para establecer si el defecto es uni o bilateral. El
do la afectación del paladar posterior varia- corte transversal a nivel del maxilar nos permitirá
ble. comprobar la continuidad de los alvéolos denta-

94
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada

Figura 7. Esquema resumen sobre formas de presentación clínica. Diagrama modificado de Kemohan DA (Plast Reconstr
Surg 1971; 47: 469).

8) 9) 10)

Figuras 8, 9 y 10. Ilustran la fisura palatina completa en tres casos: el primero corresponde a una fisura bilateral, el segun-
do a una fisura unilateral y el tercero a una fisura central. Ante el diagnóstico de una fisura labial se debe buscar la fisura pa-
latina, ya que lo más frecuente es que esté presente. Se puede recordar que la fisura palatina se presenta en el 75% de las fi-
suras labiales unilaterales, en la mayoría (90%) de las bilaterales y en el 100% de las centrales. En la figura central, el Dop-
pler color permite confirmar la fisura palatina ya que permite evidenciar la presencia de flujo de líquido amniótico continuo
a través de la boca y las fosas nasales, siendo especialmente útil cuando el feto realiza movimientos diafragmáticos.

rios y por tanto, descartar o confirmar la presen- fía, pero superior a la hora de evaluar la afectación
cia de una fisura palatina. del paladar y la extensión de una fisura palatina(2).
La evaluación del paladar posterior es de ele- La ecografía tridimensional ofrece algunas ven-
vada dificultad debido a la sombra acústica que tajas a la hora de evaluar la extensión de la ano-
provocan las estructuras adyacentes y la presencia malía(3-5). El modo surface (reconstrucción de la
de la lengua, por lo que el diagnóstico de fisura de imagen) nos permite obtener un volumen de la ca-
paladar posterior puede ser muy difícil o casi im- ra y realizar rotaciones de la imagen para evaluar
posible si se presenta aislada. En la actualidad se si la anomalía es bilateral e incluso evaluar el pa-
han descrito diferentes signos ecográficos que fa- ladar. El modo 3D multiplanar nos muestra cor-
cilitan la visualización del mismo desde el segun- tes simultáneos de la cara (sagital, coronal y trans-
do trimestre de la gestación(1). Por otro lado, la re- versal), lo que nos permite evaluar el paladar de
sonancia nuclear magnética se considera en la ac- forma orientada para identificar si existe o no fi-
tualidad una prueba complementaria a la ecogra- sura palatina.

95
Defectos de la cara y el cuello

11) 12) 13) 14)

Figuras 11, 12, 13 y 14. (11 y 12) Modo surface en feto con fisura labial y palatina central en el que además se evidencia una
arrinia. Con el modo multiplanar se confirma la fisura palatina total y la ausencia de huesos nasales. Nótese como la cavidad
bucal conecta con la nasal completamente. (13 y 14) Modo surface en feto de 30 semanas con una fisura labial y palatina bi-
lateral. Las imágenes ilustran la anomalía con gran claridad por lo que son muy útiles para mostrar la anomalía a los padres.

Conducta clínica y pronóstico 3. Considerar el estudio del cariotipo fetal, obli-


El reto ante el diagnóstico de una fisura labial gado en la fisura labial central y recomendable
es realizar un correcto diagnóstico de extensión en la fisura palatina aislada y cuando se detec-
(afectación paladar sí/no) y tratar de asegurar si la ten otras anomalías asociadas.
anomalía es aislada o no. Ello es lo que va a mar- 4. Descartar teratógenos. En alrededor de un 5%
car el pronóstico. de los casos puede existir una asociación con
La forma más frecuente de presentación es la agentes teratógenos típicamente los anticon-
aislada, es decir la no asociada a otras anomalías vulsivantes en el primer mes de gestación.
ni síndromes. Sin embargo, estudios recientes con- 5. Es aconsejable remitir a los padres a pediatría,
firman que entre un 30-45% de las fisuras labiales para informarse sobre las posibilidades tera-
con o sin fisura palatina presentan anomalías aso- péuticas más actualizadas y de otros aspec-
ciadas(6). Existe riesgo de aneupliodia (sobretodo tos prácticos a los que tendrán que enfrentar-
si hay afectación paladar posterior y si hay otras se.
anomalías asociadas), hay hasta 350 síndromes aso- Casi todos los casos son tributarios de una repa-
ciados a fisura labial y/o palatina (que además pue- ración quirúrgica con resultados funcionales y es-
den tener muy poca expresividad clínica) y exis- téticos buenos, y en muchas ocasiones excelentes.
ten malformaciones asociadas como mínimo en La intervención quirúrgica será más difícil cuanto
¼ casos. mayor y más posterior sea la afectación del paladar.
La conducta clínica a seguir es similar a la que Lo habitual es realizar la reparación definitiva a los
recomendaremos ante el diagnóstico de otras ano- 4-6 meses de vida. Los casos más severos pueden re-
malías faciales: querir reintervenciones y pueden existir secuelas a
1. Historia familiar buscando las llamadas micro- largo plazo: defectos en la dentición, en el habla e
formas de fisura labial, como la úvula bífida o incluso en la olfacción en el caso de fisuras palati-
indentaciones lineales en labios. nas extensas.
2. Ecografía dirigida, incluida una ecocardiogra- Esta es una anomalía de herencia multifacto-
fía. rial que puede seguir cualquiera de los patrones he-

96
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada

15) 16) 17)

Figuras 15, 16 y 17. Caso de micrognatia diagnosticado en la semana 20. Nótese la prominencia del labio superior. La bar-
billa se encuentra mal alineada respecto a la nariz y labio superior. Medición del ratio mandibular en este caso.

reditarios descritos. El riesgo de recurrencia es dis- Diagnóstico ecográfico y diagnóstico diferencial


tinto para las diferentes variedades y requiere de un El signo guía para su diagnóstico es la impre-
completo análisis de la historia familiar. Si los pa- sión subjetiva de una barbilla pequeña. En el pla-
dres tienen una exploración normal y no hay his- no sagital medio de la cara se evidencia el despla-
toria familiar, el riesgo de recurrencia se estima en- zamiento del mentón hacia atrás y como conse-
tre el 4-10%. cuencia la prominencia del labio superior. En es-
ta anomalía es imposible identificar la nariz, boca
y mandíbula en un mismo plano.
MICROGNATIA La confirmación diagnóstica requiere de re-
La micrognatia es la hipoplasia de la mandíbu- cursos biométricos. Aunque se dispone de curvas
la, lo que causa un receso de la barbilla (retrogna- de normalidad de la longitud de la mandíbula a lo
tia) y de la lengua. En los casos más severos, la mal- largo de la gestación, es un hueso con curvatura
posición de la lengua puede asociarse a fisura del y por tanto, difícil de medir en su totalidad, so-
paladar posterior y puede dificultar la deglución del bretodo en el tercer trimestre. Por esta razón, se
feto. El control del líquido amniótico constituye uno han propuesto diversos índices(7,8). El ratio man-
de los puntos clave ante el diagnóstico de esta ano- dibular(8) es el cociente obtenido entre el diáme-
malía. tro transversal de la mandíbula (límite más poste-
Su incidencia se sitúa alrededor de 1 de cada 1.000 rior de la mandíbula y realizando la medición des-
recién nacidos vivos. Su presentación aislada es muy de el borde interno del hueso) y el diámetro ante-
rara y por lo general forma parte de un síndrome roposterior de la mandíbula. Este ratio es muy útil
genético (se han descrito más de 100 asociados), en ya que se mantiene relativamente constante du-
los que la micrognatia es considerada un signo esen- rante toda la gestación. Podemos utilizar un pun-
cial para definirlos. Es frecuente también su asocia- to de corte fijo durante toda la gestación (ratio
ción a cromosomopatía (30-60% de los casos: tri- mandibular < 1,5 en condiciones de normalidad).
ploidías y trisomía 18) así como su asociación a otras Es importante tener en cuenta lo siguiente:
malformaciones sobretodo esqueléticas y del cora- 1. Las formas moderadas pueden debutar tardí-
zón. amente. Se recomienda en la medida de lo po-

97
Defectos de la cara y el cuello

18) 19) • Considerar el estudio del cariotipo, que es re-


comendable por la alta asociación a cromoso-
mopatía.
• En los casos más severos, la lengua puede obs-
truir el tracto respiratorio y complicar la re-
animación del recién nacido. El polihidram-
nios puede alertarnos de este hecho. Se debe
planificar el parto en un centro especializado
ya que puede ser necesaria la intubación o
Figuras 18 y 19. (18) Micrognatia en feto de 28 semanas aso- la aplicación de otras maniobras extraordi-
ciado a polihidramnios severo y ausencia de movimientos fe- narias.
tales. (19) Micrognatia en feto de 32 semanas asociado a fi-
sura labial y palatina bilateral, polihidramnios severo, res- El pronóstico depende de las anomalías asocia-
tricción de crecimiento intrauterino y artrogriposis distal das y de la severidad del síndrome del que forma
de todas las extremidades. parte. Podemos decir que, globalmente, es malo por
su alta asociación a otras anomalías y síndromes ge-
néticos(9).
sible, el estudio del perfil fetal también en la eco- Tras el nacimiento, la caída de la lengua hacia
grafía del tercer trimestre. atrás puede provocar episodios de ahogamiento y
2. El desarrollo de la mandíbula depende de la pre- dificultades de alimentación. Los problemas de suc-
sencia de un movimiento normal de la misma. ción pueden acabar provocando desnutrición y re-
Está establecido que aquellas situaciones que lo flujo esofágico. En general, todo ello tiende a me-
limiten, pueden favorecer la aparición de mi- jorar durante el primer año de vida debido a que
crognatia (ausencia de movimientos fetales, al- la mandíbula acelera entonces su crecimiento. En
teraciones neurológicas que impidan el desa- casos moderados, el niño requiere la colocación de
rrollo correcto de la deglución, etc.). una sonda nasal para evitar la obstrucción de la vía
respiratoria. El tratamiento ortopédico incluye el
Conducta clínica y pronóstico alargamiento mandibular y actualmente se reali-
El diagnóstico diferencial se centrará en esta- za por distracción ósea, lo que ha disminuido con-
blecer si la micrognatia es aislada o está asociada siderablemente las complicaciones asociadas a los
a un síndrome, alteración cromosómica u otra ano- tratamientos previos.
malía. Realizaremos: La recurrencia dependerá específicamente del
• Ecografía y ecocardiografía dirigida a la detec- síndrome al que pertenezca.
ción de anomalías asociadas y de otros signos
característicos de los diferentes síndromes aso-
ciados. El síndrome de Pierre-Robin es uno de DEFECTOS ORBITARIOS
los más conocidos. Se caracteriza por microg- Los defectos orbitarios comprenden aquellos
natia, que causa la obstrucción de la vía aérea, que afectan a la distancia entre las órbitas y los que
y por la presencia de fisura palatina. afectan a la órbita y al globo ocular:
• Historia familiar buscando otros casos o expo- 1. Hipertelorismo: incremento de la distancia
sición a drogas. interorbitaria. Puede darse aisladamente o

98
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada

asociado a síndromes. Lo importante es des-


cartar defectos craneofaciales de la línea me-
dia.
2. Hipotelorismo: disminución de la distancia in-
terorbitaria. Aislado es rarísimo y siempre de-
be alertarnos hacia una anomalía craneofacial
de la línea media.
3. Microftalmia: disminución del tamaño del glo-
bo ocular.
4. Anoftalmia ausencia de todas las estructuras del
globo ocular. Requiere de la confirmación his-
tológica para su diagnóstico. Son entidades ex-
tremadamente raras. Figura 20. Técnica EXIT. Véase cómo se realiza una tra-
queostomía en un feto con una tumoración orofacial antes
de seccionar el cordón umbilical. En el margen inferior iz-
Diagnóstico ecográfico quierdo se observan los bordes de la histerotomía que están
La evaluación de las órbitas en la ecografía de pinzados para evitar el sangrado,
screening debe comprobar que ambas órbitas tie-
nen un mismo tamaño, identificar el cristalino y
comprobar que el ojo se mueve adecuadamente. u otras alteraciones el pronóstico será el espe-
Debemos evaluar también la distancia interorbita- cífico de la condición.
ria. Existen normalidades tanto para el diámetro in- • En el caso de la microoftalmia y de la anoftal-
terorbitario externo como para el diámetro inter- mia se deberá descartar la existencia de una in-
orbitario interno. También existen rangos de refe- fección fetal, principalmente por TORCH y
rencia para la distancia intraorbitaria y para la me- otros virus, así como la ingesta materna de al-
dición de la órbita propiamente. Desde un punto cohol y otros medicamentos. Esta patología se-
de vista práctico podemos recordar que la distan- rá responsable de alteraciones visuales así co-
cia interorbitaria es similar al diámetro de la órbi- mo de un mal desarrollo de la órbita de ese la-
ta aproximadamente. do, lo que dará una asimetría marcada de la ca-
ra. El tratamiento quirúrgico consistirá en la in-
Conducta clínica y pronóstico serción de diferentes prótesis oculares que pro-
• Confirmar si la anomalía es aislada o está aso- muevan el desarrollo de la órbita.
ciada a otras anomalías, frecuentemente cra-
neofaciales o síndromes.
• Realizar un estudio anatómico detallado, in- TUMORES CERVICALES
cluyendo ecocardiografía y el estudio del ca- Las anomalías del cuello más frecuentes son los
riotipo fetal. tumores. Ante el diagnóstico de una tumoración
• Historia familiar evaluando la morfología or- cervical se deben tener en cuenta los siguientes as-
bitaria y la distancia interorbitaria de los pro- pectos:
genitores. En caso de hipertelorismo aislado el 1. Es posible su asociación con otras anomalías
pronóstico no es malo. Si se asocia a síndromes debido al efecto masa de la tumoración, prin-

99
Defectos de la cara y el cuello

TABLA I. Diagnóstico diferencial de las tumoraciones cervicales

Tumor Apariencia Vascularización Característica

Hemangioma Ecogenicidad homogénea Sí Fallo cardiaco e hidrops


Linfangioma Quística-septada, áreas de sangrado No Aneuploidía
Malformaciones asociadas
Teratoma Heterogénea, calcificaciones Variable Efecto masa

cipalmente del sistema nervioso central y de Diagnóstico diferencial


la cara. El hemangioma es el más frecuente al nacimiento
2. Dicho efecto masa puede causar obstrucción de y el 60% se localiza en el cráneo o en el cuello. Son
la vía aérea, que se puede sospechar ante la pre- tumoraciones benignas de la piel o tejido subcutá-
sencia de polihidramnios, la ausencia de movi- neo, que por lo general crecen lentamente in utero.
mientos de deglución y la presencia de un es- El segundo tumor más frecuente en el recién naci-
tómago pequeño. También es posible su aso- do es el linfangioma. Su localización más frecuen-
ciación a hipoplasia pulmonar. te es en el cuello y se denomina higroma quístico.
3. Es posible la afectación de la médula espinal y Se produce por una dilatación quística linfática de-
nervios diafragmáticos, que se pueden sospe- bido a un secuestro o fallo de drenaje del sistema
char ante la ausencia de movimientos respira- linfático al sistema recolector venoso. Según don-
torios y fetales. de se encuentre la obstrucción el higroma será de
4. Por último, las tumoraciones que presenten una mayor o menor tamaño. Por último, los teratomas
mayor vascularización tienen un riesgo eleva- son tumoraciones raras y en el feto tienen como lo-
do de fallo cardiaco e hidrops, por lo que re- calización más frecuente la sacrococcígea. Es una
quieren de controles seriados. tumoración benigna que deriva de las tres hojas
La ecografía tridimensional y la resonancia nu- germinales. Se asocian a hipoplasia pulmonar en
clear magnética son técnicas complementarias que un 30% aproximadamente por compresión mecá-
pueden ayudarnos a realizar el estudio de exten- nica del pulmón. Su exéresis quirúrgica es compleja
sión de estas tumoraciones. ya que generalmente son grandes y requieren de
El manejo de estas tumoraciones debe ser mul- múltiples intervenciones.
tidisciplinar. La reanimación postnatal puede ser
extremadamente compleja en algunos casos, por
lo que es recomendable remitir estos casos a cen- BIBLIOGRAFÍA
tros con experiencia. La técnica EXIT (ex utero 1. Wilhelm L, Borgers H. The “equals sign”: a novel mar-
intrapartum treatment) permite abordar la vía ker in the diagnosis of fetal isolated cleft palate. Ul-
trasoun Obstet Gynecol 2010;36:439-44.
aérea del feto antes de la sección del cordón um-
bilical, por lo que la perfusión fetal está preser- 2. Mailath-POkorny M, Worda C, Krampl-Bettelheim
E, Watzinger F, Brugger PC, Prayer D.What dos mag-
vada y el tiempo para conseguir permeabilizar la netic resonance imaging add to prenatal ultrasound
vía aérea fetal se incrementa sin riesgo de ano- diagnosis of facial clefts? Ultrasound Obstet Gnecol
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100
O. Gómez del Rincón, R. García-Posada

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101
Defectos de la pared abdominal
M. Bennasar

INTRODUCCIÓN fecto de pared abdominal, aunque la exploración


Los defectos de pared abdominal engloban una sea previa a las 12 semanas.
serie de entidades clínicas que se caracterizan por Exploraremos la pared abdominal en la eco-
la presencia de una solución de continuidad a ni- grafía de primer, segundo y tercer trimestre para
vel de la misma, a través de la que se exterioriza en confirmar la integridad de la misma, fijándonos
contenido abdominal. En función de la localiza- en el cordón umbilical, compuesto únicamente por
ción del defecto, de la amplitud, de la presencia o las estructuras vasculares y en su entrada en la pa-
no de membrana y de las estructuras exterioriza- red, que en condiciones normales está centrada.
das podemos destacar las siguientes patologías: La utilización del Doppler color puede ser muy útil
1. Gastrosquisis. para su valoración, sobre todo en el primer tri-
2. Onfalocele. mestre (Fig. 1).
3. Malformaciones del septo-urorrectal.
4. Limb body wall complex.
Para el correcto diagnóstico de estas entidades, ANOMALÍAS DE LA PARED ABDOMINAL
hay que tener en cuenta un aspecto embriológico La gastrosquisis y el onfalocele constituyen los
básico: en fases iniciales de la embriogénesis el in- defectos que más frecuentemente nos encontrare-
testino es extraabdominal y se encuentra hernia- mos en vida fetal, siendo mucho menos frecuen-
do a nivel del cordón umbilical (hernia umbilical tes las malformaciones del septo-urorrectal y el
fisiológica). A las 10 semanas de gestación el in- limb body wall complex.
testino empieza a migrar hacia la cavidad abdo-
minal, migración que se completa a partir de las Gastrosquisis
12 semanas, por lo que no será hasta este momento
que podamos hablar de defecto a nivel de la pared Definición
abdominal(1). No obstante, la presencia de un on- La gastrosquisis es un defecto paraumbilical que
falocele grande, de más de 7 mm, que contenga hí- afecta a todo el grosor de la pared abdominal. El
gado o estómago, o la presencia de asas intestina- defecto se localiza típicamente a la derecha de la
les flotando libremente en el líquido amniótico se- inserción del cordón umbilical. Se trata de una ex-
rán altamente sugestivos de que se trata de un de- trusión libre de vísceras abdominales, principal-

103
Defectos de la pared abdominal

testinal secundaria al edema y a la inflama-


ción de las asas en contacto con el líquido am-
niótico(7).
– Un 10% de exitus fetal.
– Un 10% complicaciones intestinales: exis-
Figura 1. Exploración normal de la pared abdominal. Se ten varias teorías respecto a la lesión intesti-
identifica el cordón central sin soluciones de continuidad nal en la gastrosquisis. Por una parte, el con-
en la pared mediante escala de grises (a) y Power Doppler
(b).
tacto de las asas intestinales con el líquido am-
niótico, que contiene creatinina, meconio y
otras sustancias irritativas, puede provocar
inflamación, depósito de fibrina y edema de
mente asas intestinales, que se encuentran en con- la pared, que comportan una alteración de la
tacto directo con el líquido amniótico. motilidad y de la absorción de nutrientes. Fi-
La prevalencia se sitúa alrededor de 1/2.000- nalmente, la inflamación puede provocar una
3.000(2) recién nacidos. lesión intestinal tipo atresia o perforación in-
testinal. La presencia de estas sustancias irri-
Etiopatogenia tativas en el líquido amniótico es más fre-
La embriogénesis de la gastrosquisis es contro- cuente a medida que progresa la edad gesta-
vertida y existen varias teorías; la más aceptada cional, por lo que los cambios a nivel de la se-
es la teoría vascular, que incluye o bien la involu- rosa aparecerán tardíamente, a partir de las
ción anormal de la vena umbilical derecha, o bien 30 semanas. Por otro lado, la constricción y
la disrupción de la arteria onfalomesentérica que consecuente isquemia a nivel del anillo her-
irriga la porción lateral derecha de la pared, dan- niario será responsable de parte de las lesio-
do lugar al defecto. Como factores de riesgo de gas- nes intestinales asociadas.
trosquisis se han descrito la edad materna inferior
a los 20 años, el nivel socioeconómico bajo, con- Diagnóstico
sumo de tóxicos como el tabaco, el alcohol o la co- El diagnóstico de la gastrosquisis es ecográfi-
caína, y otros agentes vasoactivos como la aspiri- co y debería ser un diagnóstico precoz, durante la
na, la efedrina y el ibuprofeno, lo que apoyaría la ecografía de primer trimestre (siempre que ésta se
teoría vascular(3-5). realice más allá de las 12 semanas). El diagnóstico
se basa en la visualización de las asas intestinales
Anomalías asociadas flotando libremente en el líquido amniótico, sin
• Baja asociación a anomalías estructurales y/o ningún tipo de recubrimiento. El defecto suele es-
cromosomopatías(6). tar a la derecha del cordón, por lo que encontra-
• Elevada tasa de complicaciones perinatales: remos la inserción normal del cordón umbilical a
– Un 20-40% de los fetos con gastrosquisis son la izquierda (Fig. 2).
pequeños para edad gestacional. El Doppler Habitualmente sólo se exteriorizan asas intes-
placentario y fetal suele ser normal. Se con- tinales, aunque en un porcentaje menor de casos
sidera que la causa es una alteración de la ab- podemos encontrar otras vísceras abdominales ex-
sorción de nutrientes por la disfunción in- puestas al líquido amniótico.

104
M. Bennasar

be ser multidisciplinar, por un equipo que in-


cluya obstetras, neonatólogos y cirujanos pe-
diátricos.
Seguimiento: se recomienda un control eco-
gráfico mensual a lo largo del embarazo para va-
Figura 2. Feto afecto de gastrosquisis. Exploración median- lorar la presencia de las complicaciones asocia-
te escala de grises (a) y Doppler color (b). Se identifican asas das, como el déficit de crecimiento o signos su-
intestinales flotando libremente en el líquido amniótico (←),
extruidas a través de una solución de continuidad de toda la
gestivos de lesión intestinal. En caso de que apa-
pared. La inserción del cordón se localiza lateral al defecto, rezcan complicaciones el seguimiento será más
a la izquierda (↑). estricto.

Pronóstico
El diagnóstico diferencial se plantea básicamente En los casos con patología asociada el pronós-
con el onfalocele y se resume en la tabla I. tico dependerá de la severidad de la misma. En la
gastrosquisis aislada la supervivencia es del 90%,
Manejo perinatal dependiendo, básicamente, de las anomalías in-
Diagnóstico: aunque la asociación a otras ano- testinales asociadas. Las complicaciones intestina-
malías estructurales y/o cromosomopatías es ba- les serán responsables de gran parte de la morbi-
ja, ante el diagnóstico de una gastrosquisis, se mortalidad de los recién nacidos con gastrosqui-
debe realizar una exploración anatómica ex- sis. El espectro final de las complicaciones intesti-
haustiva en búsqueda de otras anomalías (in- nales será el síndrome del intestino corto, secun-
cluyendo ecocardiografía fetal) y ofrecer estudio dario a la necesidad de resecar una gran cantidad
de cariotipo. El asesoramiento de los padres de- de intestino al nacer(7).

TABLA I. Resumen de gastrosquisis y onfalocele

Gastrosquisis Onfalocele

Membrana recubrimiento No Sí
Vísceras herniadas ↑↑ intestino aislado Intestino
Hígado hasta en el 80%
Anomalías asociadas 5-15% 50-70%
• Cromosómicas (30%): T13, T18
• Estructurales (50% cardiacas)
Complicaciones perinatales: 50-60% 5-10%
• Exitus 10% 1%
• PEG 40% 5%
• Lesión intestinal 10% 1%
Finalización A término A término
Cesárea electiva sistemática No No
Pronóstico postnatal Bueno Depende de las anomalías asociadas

105
Defectos de la pared abdominal

Factores de mal pronóstico semanas, algunos grupos se han planteado la uti-


Como se ha comentado anteriormente, el fac- lidad del recambio del líquido amniótico para pre-
tor pronóstico más importante en la gastrosquisis venir una posible lesión intestinal. Modelos ani-
es la presencia de una lesión de las asas, así que el males mostraron que el recambio de LA modifi-
objetivo principal en el manejo perinatal de estos caba las características del LA y reducía las com-
fetos será detectar aquellos casos con más riesgo plicaciones intestinales. No obstante, estudios en
de presentar una complicación intestinal. Existen humanos han demostrado que las características
numerosos estudios que evalúan diferentes signos del LA no se modifican si se realizan recambios bi-
ecográficos y su asociación con una lesión intesti- mensuales(15). El único estudio que valora el efec-
nal; to del amniodrenaje en fetos con gastrosquisis no
• Dilatación de las asas extraabdominales: es el encontró diferencias significativas en la aparición
factor pronóstico más estudiado. Los resulta- de lesión intestinal, por lo que, de momento, no
dos son controvertidos y, por el momento, no hay evidencia para recomendar el recambio de
existe evidencia de que sea un signo predicti- LA(14).
vo de lesión intestinal. Aparece bastante fre-
cuentemente en la gastrosquisis, y parece estar Finalización de la gestación y vía del parto
más relacionado con la irritación de las asas y Debido al efecto negativo del líquido amnióti-
con un mayor tiempo hasta alcanzar la nutri- co sobre las asas intestinales, algunos autores de-
ción enteral que con una lesión intestinal di- fienden el parto pretérmino para que el contacto
recta. de las asas con el líquido sea menos prolongado, y
• Dilatación de las asas intraabdominales: es un mejorar así los resultados neonatales. Sin embar-
signo menos frecuente. Existen pocos estudios go, el único estudio randomizado(16) en relación al
al respecto. Aunque se asocia más a lesión in- momento del parto no encuentra diferencias es-
testinal, su valor predictivo positivo es bajo. tadísticamente significativas entre el grupo finali-
• Dilatación gástrica: de momento, no hay evi- zado electivamente a las 36 semanas, y el grupo en
dencia sólida que permita considerar la dila- el que se adopta una actitud expectante en espe-
tación gástrica como factor pronóstico en la gas- ra del inicio espontáneo del parto.
trosquisis. Otro punto de gran controversia en el manejo
• Polihidramnios: parece ser uno de los signos clínico de la gastrosquisis es la elección de la vía
que más se asocia a obstrucción intestinal. del parto por la presencia de las vísceras desprote-
Aunque no hay datos concluyentes, la aparición gidas. No existen ensayos clínicos randomizados
de polihidramnios y la dilatación de las estructu- que comparen los resultados neonatales tras un
ras intraabdominales (asas, estómago) son los fac- parto vaginal versus abdominal. Los estudios dis-
tores que podrían estar más asociados con una obs- ponibles muestran resultados neonatales simila-
trucción intestinal(8-14). res en ambos grupos, sin evidencia de beneficio en
la práctica de una cesárea(17).
¿Terapia fetal? Es imprescindible la coordinación con el servi-
Dado que la lesión intestinal se debe básica- cio de cirugía, que debe iniciar el manejo y cuida-
mente a la presencia de sustancias irritativas en do de las asas intestinales desde el nacimiento, en
el líquido amniótico, sobre todo a partir de las 30 sala de partos.

106
M. Bennasar

Tratamiento
El tratamiento de la gastrosquisis consiste en el
cierre primario y precoz del defecto.

Onfalocele
Figura 3. Feto afecto de onfalocele. Exploración mediante es-
Definición cala de grises (a) y Doppler color (b). Se identifica un de-
fecto a nivel de la pared abdominal por el que protuyen asas
El onfalocele es un defecto de la pared abdo- e hígado. El defecto está cubierto por membrana (↓). La in-
minal a nivel de la línea media que se caracteriza serción del cordón está en el ápex del defecto (←). El Dop-
por la herniación de contenido abdominal recu- pler color nos ayudará a identificar la inserción umbilical (*)
en el ápex.
bierto por una membrana de peritoneo y amnios.
Típicamente, la salida del cordón umbilical se lo-
caliza en el ápex del defecto. brana, lo que, a diferencia de la gastrosquisis, las
La prevalencia se sitúa alrededor de 1/3.000 re- protegerá del efecto lesivo de las sustancias irri-
cién nacidos vivos(18). tativas, siendo bajo el riesgo de una lesión intes-
Desde el punto de vista embriológico, la etiopa- tinal asociada.
togenia del onfalocele es secundaria a un desarro-
llo insuficiente de los pliegues laterales embriona- Diagnóstico
rios, de manera que la herniación intestinal fisioló- El diagnóstico del onfalocele es ecográfico y de-
gica no se corrige y persiste de forma anómala(1). bería ser un diagnóstico precoz. Ya en la ecografía
del primer trimestre (siempre que ésta se realice más
Anomalías asociadas allá de las 12 semanas) veremos el contenido abdo-
La asociación del onfalocele a otras anomalías minal herniado recubierto por una membrana con
es muy alta, siendo las más frecuentes las anoma- el cordón umbilical inserto en el ápex del saco her-
lías cromosómicas (trisomías 13 y 18) y las car- niado, lejos de la pared abdominal (Fig. 3). En la
diopatías congénitas (representando el 50% de las ecografía de las 20 semanas deberemos confirmar
malformaciones asociadas). La presencia de estas que la inserción del cordón es correcta y valorar la
anomalías es más frecuente en los onfaloceles de integridad de la pared abdominal.
pequeño tamaño que únicamente tienen hernia-
ción intestinal. La asociación a síndromes genéti- Manejo perinatal
cos también es elevada sobretodo la pentalogía de Diagnóstico: en el onfalocele la asociación a
Cantrell, síndrome de bandas amnióticas, síndro- otras malformaciones, cromosomopatías y/o sín-
me de CHARGE (Coloboma, Heart defects, Atre- dromes genéticos es alta(19-21), por lo que, ante el
sia de coanas, anomalías genitourinarias y renales, diagnóstico, ofreceremos a los padres un estudio
anomalías auriculares [Ear] y sordera), síndrome anatómico detallado, incluyendo ecocardiografía
OEIS (Onfalocele, Extrofia vesical, ano Imperfo- fetal y estudio de cariotipo.
rado y defectos eSpinales) y el síndrome de Beck- Seguimiento: el asesoramiento de los padres de-
with-Wiedemann(19). be ser multidisciplinar, por un equipo que inclu-
Complicaciones perinatales: en el onfalocele las ya obstetras, neonatólogos y cirujanos pediátricos.
vísceras abdominales están cubiertas por mem- El seguimiento será mensual. El objetivo principal

107
Defectos de la pared abdominal

será detectar posibles complicaciones hemodiná- do hepático, por el riesgo de traumatismo de vís-
micas secundarias a la tracción de las estructuras ceras abdominales y/o rotura del saco hernia-
vasculares por la extrusión de las vísceras. El ries- rio. En el momento del parto será importante re-
go de complicación cardiovascular será mayor en cordar que el cordón debe pinzarse distalmente
aquellos onfaloceles de gran tamaño, con conte- a la salida del mismo ya que, sobretodo en onfa-
nido hepático. loceles pequeños, puede haber asas intestinales
herniadas distalmente.
Pronóstico También es importante la coordinación con el
La gran asociación a otras anomalías es respon- servicio de cirugía y que estén presentes en sala de
sable de una elevada tasa de interrupciones de la partos.
gestación. En casos de onfaloceles no aislados el
pronóstico dependerá de la anomalía asociada(22). Tratamiento
Una vez descartadas las anomalías estructurales y El tratamiento del onfalocele consistirá en el
cromosómicas, podemos informar a los padres que cierre directo del defecto, a no ser que se trate de
actualmente la supervivencia postquirúrgica de es- defectos grandes, en los que se reducirá progresi-
tos niños es buena. Deberemos tener en cuenta que, vamente el defecto y se cerrará posteriormente.
en onfaloceles grandes, con gran contenido hepá-
tico, el compromiso respiratorio postnatal y la hi-
poplasia pulmonar pueden ser significativos. PUNTOS CLAVE
1. La gastrosquisis es un defecto total de la pared
Finalización de la gestación y vía del parto abdominal en la que el contenido intestinal es-
No se han demostrado beneficios de la finali- tá directamente en contacto con el líquido am-
zación electiva de la gestación antes de las 37 se- niótico. La inserción del cordón es lateral al de-
manas. A diferencia de lo que ocurre en la gas- fecto.
trosquisis, las asas intestinales no están en contac- 2. La gastrosquisis tiene baja asociación a ano-
to directo con el líquido amniótico por lo que no malías estructurales y cromosómicas. La tasa de
existe efecto de toxicidad sobre ellas. complicaciones perinatales es mayor que en el
Igual que en la gastrosquisis, existe controver- onfalocele.
sia en cuanto a la vía del parto en estos fetos. La 3. El onfalocele es un defecto de pared abdominal
ausencia de estudios randomizados hace difícil la recubierto por membrana, en el que la inser-
recomendación clara de una u otra vía del parto. ción del cordón se encuentra en el ápex del de-
Existen varios estudios retrospectivos que no han fecto.
demostrado un beneficio de la cesárea electiva 4. El onfalocele presenta elevada asociación a ano-
respecto al parto vaginal(17), aunque la mayor par- malías cromosómicas y estructurales, especial-
te de estos estudios no estratifican a los pacien- mente cardiopatías.
tes en función del tamaño del defecto ni de la pre- 5. El parto en la gastrosquisis y en el onfalocele
sencia o no de contenido hepático. Así que, a pe- puede ser a término y por vía vaginal, excepto
sar de la controversia, la mayor parte de grupos en onfaloceles grandes, con gran contenido he-
defiende la cesárea electiva en aquellos fetos con pático, en los que se indicará cesárea electiva a
defectos grandes (más de 5 cm) y con conteni- término.

108
M. Bennasar

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109
Patología pulmonar
E. Gratacós

INTRODUCCIÓN Clasificación de patología pulmonar fetal


Las malformaciones y patología pulmonares según mecanismo patogénico
constituyen aproximadamente un 2% de las de- Las malformaciones pulmonares también se
tectables con ecografía (aproximadamente 1/1.000 pueden clasificar según el mecanismo patogéni-
gestaciones). Presentan una alta asociación (hasta co que conduce al mal resultado (Tabla I).
50% según diagnóstico) a anomalías cromosómi-
cas y otras malformaciones.
HIDROTÓRAX (DERRAME PLEURAL)
Exploración normal del tórax fetal El hidrotórax es una patología de fácil diag-
en la ecografía de rutina nóstico. La prevalencia es de 1/10.000 embarazos,
Se puede realizar en pocos segundos en la ma- unos 50 casos/año en España. El pronóstico de-
yoría de casos, comprobando los siguientes pun- pende fundamentalmente de la causa y de la mag-
tos: nitud. Los derrames severos, cualquiera que sea la
1. Los pulmones ocupan todo el tórax hasta la cos- causa, producen hipoplasia pulmonar, hídrops por
tilla en todo el barrido. compresión mediastínica y muerte fetal.
2. El parénquima es homogéneo en todo el barri-
do. Criterios para el tratamiento fetal
3. El corazón está centrado y los pulmones pare- El tratamiento se realiza para reducir el riesgo
cen “abrazarlo”. elevado de hipoplasia pulmonar y en casos de hi-
4. Los diafragmas son de morfología normal (cor- drops para evitar la muerte fetal:
te sagital o coronal). • Hidrotórax aislado a tensión, uni o bilateral,
5. El árbol traqueobronquial no es visible. con alteración del retorno venoso.
En base a los puntos alterados se puede esta- • Hidrops fetal.
blecer un algoritmo diagnóstico para diagnosticar • Gestación de menos de 34 semanas.
las posibles patologías. La exposición en el texto se Después de las 34 semanas, se puede finalizar,
realizará siguiendo este orden. con maduración previa y toracocentesis ecoguia-

111
Patología pulmonar

TABLA I.

Mecanismo principal de enfermedad Problema fundamental Tratamiento principal

Obstrucción de vía aérea:


• Síndrome CHAOS Obstrucción de vía aérea al nacer Descompresión de vía aérea al nacer
• Tumores cervicales
Efecto masa (± hipoplasia pulmonar):
• Masas pulmonares: Hidrops fetal por desplazamiento Descompresión mediastínica
- Malformación adenomatoidea quística mediastínico in utero
- Secuestro broncopulmonar Menos importante, hipoplasia
• Hidrotórax pulmonar
Hipoplasia pulmonar (± efecto masa)
• Hernia diafragmática congénita Hipoplasia pulmonar: posible Manejo postnatal. Posible
insuficiencia respiratoria letal reversión in utero de hipoplasia
pulmonar

Figura 1. Algoritmo para el diagnóstico de patología pul-


monar.
Figura 2. Hidrotórax severo que ha evolucionado a hídrops.
Corte parasagital derecho, no se llega a observar pulmón en
el corte sagital, diafragma en el centro y parte de lóbulo he-
da intraútero inmediatamente antes del parto o pático e intestinos rodeados por líquido libre en cavidad ab-
cesárea, para facilitar la reanimación neonatal. dominal.
La técnica de elección es la colocación de una
derivación (o shunt) toracoamniótica. Previamente
se puede realizar una toracocentesis evacuadora, dad y ausencia de hidrops. La supervivencia en fe-
para mejor examen ecográfico de tórax y corazón, tos no hidrópicos es superior al 90%. En hidró-
y cariotipo fetal si no hay, aunque salvo excepcio- picos en conjunto oscila entre el 50 y 70%, funda-
nes, el líquido pleural se reacumula en 24 horas y mentalmente por que el riesgo de que haya una
se precisa una derivación. causa grave subyacente es más alto. En general, los
unilaterales, aunque presenten hidrops, suelen evo-
Pronóstico y resultados lucionar bien en una proporción muy elevada. La
Depende fundamentalmente de la causa sub- derivación, en manos expertas, es muy segura pa-
yacente, y más secundariamente de la unilaterali- ra el feto, consigue la descompresión pulmonar y

112
E. Gratacós

a) b) so hasta el punto de producir un fallo cardiaco y


un hídrops que, independientemente de la causa,
finalmente es el que produce la muerte fetal in ute-
ro. El tratamiento fetal sólo estaría indicado en es-
tos casos, y siempre va a estar orientado a reducir
el nivel de compresión por una reducción del ta-
Figura 3. Derivación pleuroamniótica en el feto de la Figu- maño de la masa.
ra 2. A las 48 horas existe una franca mejoría del hidrotórax
y la ascitis empieza a desaparecer. a) Corte axial: shunt por
detrás del pulmón izquierdo, en hemotórax inferior en la Principales diferencias entre MAQ y SBP
imagen. b) Corte parasagital: trayecto del shunt a través de La diferencias entre MAQ y SBP ayudan en la
la piel hasta el tórax. orientación diagnóstica. Se resumen en la tabla II.
A pesar de estas diferencias, es posible observar
mejora claramente el pronóstico. Los supervivientes formas híbridas o lo que se ha denominado “com-
presentan función pulmonar normal. plejo MAQ-SBP” en las que una masa con aspecto
de secuestro y vaso nutricio de origen aórtico pre-
senta componentes displásicos característicos de
MASA PULMONAR MAQ.
La masa pulmonar más frecuente es la malfor-
mación adenomatoidea quística (MAQ), aislada o Algoritmo para la orientación diagnóstica ante
en forma de complejo MAQ-secuestro pulmonar. la sospecha de una masa pulmonar
El resto son secuestros broncopulmonares (BPS). El signo clave de sospecha es la pérdida de ho-
De forma excepcional, pueden observarse quistes mogeneidad del parénquima pulmonar normal. Una
broncogénicos o masas de otros orígenes, como vez establecida la sospecha de masa pulmonar, las
teratomas pericárdicos. En conjunto, se presentan preguntas que debemos hacernos y la orientación
en 1/3.000 embarazos, pero claramente menos del diagnóstica resultante se reflejan en la Tabla III.
10% requieren tratamiento.
El principal problema potencial en las masas Aspectos específicos de la evaluación ecográfica
pulmonares es la compresión mediastínica, que Aunque se trata de una simplificación, con la
desvía el corazón y compromete el retorno veno- resolución actual es extremadamente infrecuente

TABLA II. Principales diferencias entre MAQ y SBP

MAQ SBP

Alteración Displasia de vía aérea Pulmón supernumerario (“secuestrado”)


Localización más habitual Cualquiera Lóbulo inferior izquierdo
Tamaño habitual Muy variable, desde pequeñas masas a todo Casi siempre pequeño
el pulmón
Conexión con vía aérea Sí No
Perfusión arterial Directa de vasos pulmonares Directa de aorta

113
Patología pulmonar

TABLA III. Aspectos clave a evaluar ante una sospecha de


masa pulmonar y que deben seguirse en la descripción de
la masa en el informe ecográfico

• Lateralidad
• Localización en el pulmón (superior, media o inferior)
• Ocupación relativa del pulmón y parénquima pulmo-
nar restante
• Quistes y tamaño de los mismos
• Presencia/ausencia de vaso nutricio
• Desplazamiento mediastínico y grado subjetivo (dis-
creto, moderado, marcado)
• Presencia/ausencia de signos hidrópicos

encontrar una MAQ que sea sólida en su globali-


dad, y en la mayoría es posible observar varios quis-
tes, aunque sean de pequeño tamaño. Por tanto, el
hallazgo de un quiste permite establecer que se tra-
ta de una MAQ con seguridad, aunque podría tra-
tarse de un complejo MAQ-SBP, sobre todo si se
sitúa en lóbulos inferiores. Figura 4. Representación esquemática de MAQ y SBP.

MAQ: características fundamentales


del diagnóstico ecográfico
• Masa pulmonar hiperecogénica de tamaño muy
variable, desde masas pequeñas a masas muy
grandes que ocupan todo el pulmón.
• Quistes de tamaño variable (casi siempre), se-
gún el tamaño de los quistes se ha propuesto
clasificarlas en tres tipos. Se puede utilizar es-
ta clasificación o simplemente definir el tama-
ño de los quistes que se observan.
• Potencialmente (en masas grandes):
Figura 5. MAQ sólida que ocupa todo el pulmón en este corte.
– Polihidramnios.
– Desviación del mediastino.
– Hidrops fetal. SBP: características fundamentales del diagnóstico
• Evaluación del pulmón restante: en masas muy ecográfico:
grandes puede intentar visualizarse si existe • Masa pulmonar ecogénica.
pulmón restante, aspecto en el que ayuda la • No quística.
RM. • Lóbulos inferiores.

114
E. Gratacós

a) b) a) b)

Figura 6. SBP: a) Masa hiperecogénica, casi siempre inferior Figura 7. Resonancia magnética del mismo caso de la figura
y posterior. b) Vaso nutricio que procede directamente de la aor- anterior. En el corte axial (a) y coronal se observa con más cla-
ta en un corte coronal. ridad la distinción entre parénquima normal y patológico.

• Sólo excepcionalmente la masa es grande y pue- a) b)


de producir:
– Polihidramnios (excepcional).
– Desviación del mediastino (excepcional).
• Hidrotórax (posible incluso en secuestros pe-
queños, generalmente leve o moderado). d)
c)
Híbrido o complejo MAQ-SBP
Se caracteriza por una masa generalmente de
localización baja, con aspecto de secuestro pul-
monar, en la que coexisten quistes y vaso nutri-
cio de origen aórtico. Figura 8. MAQ de gran tamaño con desplazamiento medias-
tínico muy marcado, que ha producido un hidrops fetal gene-
ralizado (a y b). La colocación de un shunt en el quiste más
Quiste pulmonar único grande (c) permitió una reducción significativa de la masa, re-
El aspecto no ofrece dudas y queda explicado posicionamiento del mediastino, reaparición de parénquima
en la propia definición. Casi siempre se tratará pulmonar sano y desaparición del hídrops (d). La masa se re-
secó postnatalmente.
de una MAQ con un quiste único, y muy raramente
es un quiste broncogénico.

Protocolo de estudio y seguimiento Historia natural y pronóstico


El diagnóstico debe complementarse con: En general muy bueno, excepto en los casos gra-
• Estudio morfológico completo fetal. ves, que son menos del 10% de las MAQ o híbri-
• Estudio de cariotipo. dos. La evolución más habitual en la MAQ es que
• Resonancia magnética: complementa a la eco- exista un crecimiento discreto hasta las 25 sema-
grafía en la definición del tipo, tamaño de la nas. A partir de este momento, en más del 90% el
masa y parénquima sano restante. tamaño se estabiliza, e incluso en la MAQ suele re-
El seguimiento dependerá del tamaño de la ma- ducirse.
sa, y oscila entre una periodicidad semanal o in- En raros casos la masa desplaza el mediastino y
cluso bisemanal en masas grandes, a cada 4-6 se- produce un trastorno de retorno venoso e hídrops
manas en casos de secuestros de pequeño tamaño. fetal. En estos casos, el pronóstico es infausto y la

115
Patología pulmonar

mayoría de fetos morirán in utero. Por tanto, el fac- yor o área con mayores cavidades. La clave del tra-
tor principal que condiciona el pronóstico es el ta- tamiento es conseguir una reducción, no la desa-
maño de la masa. El tipo histológico no tiene in- parición de la masa, cosa que es imposible. Con
fluencia. gran frecuencia muy pequeñas reducciones consi-
El SBP no crece prácticamente nunca. Si lo ha- guen mejoras espectaculares, dado que se baja el
ce debe sospecharse un componente híbrido MAQ- tamaño por debajo del punto crítico que produce
SBP. el hídrops. No existen series publicadas pero sí di-
versos casos clínicos en series clínicas o como ca-
Criterios de gravedad y terapia fetal sos aislados. En la experiencia del autor, en cinco
• Criterios de gravedad para seguimiento muy es- casos tratados, todos con hídrops, el shunt permi-
tricto: tió la reversión del hídrops y supervivencia pre-
1. Desplazamiento mediastínico muy marcado. natal en todos ellos.
2. Signos francos de trastorno del retorno ve- De forma muy excepcional, en masas sólidas
noso (Doppler de ductus venoso con flujo con arteria nutricia o vasos visibles existen dife-
atrial reverso y/o regurgitación tricuspídea). rentes experiencias personales que describen la
• Criterios de terapia fetal: coagulación con láser intersticial.
– Aparición de cualquier signo de hídrops.
Evolución postnatal
Terapia fetal La evolución a largo plazo de la MAQ y el se-
El objetivo es evitar la muerte fetal y llegar a la cuestro pulmonar sugieren que la mayoría de ca-
cirugía neonatal sin hídrops, que tiene buen pro- sos presentan una función postnatal pulmonar
nóstico. Para ello es imprescindible reducir el ta- buena. Los niños que sobreviven a la colocación
maño de la masa. de un shunt presentan buena función pulmonar,
aunque existe un riesgo de anomalías deformati-
Primera opción: corticoides vas leves de la pared torácica, por lo que deben ser
Betametasona a dosis de maduración pulmo- seguidos por especialistas.
nar: 12 mg im materno en dos días consecutivos.
Estudios recientes que sugieren que los corti-
coides maternos podrían asociarse a una reduc- HERNIA DIAFRAGMÁTICA CONGÉNITA
ción de la masa en las MAQ, e incluso se han des- (HDC)
crito casos de resolución del hídrops. Los resul- La HDC es la existencia de un defecto en el mús-
tados son preliminares y deben confirmarse con culo del diafragma. Se acompaña de la herniación
series más amplias – existen nueve casos publica- de vísceras abdominales a la cavidad torácica, que
dos – pero dado lo poco agresivo del tratamiento, impiden el desarrollo pulmonar normal y pueden
parece razonable intentar un tratamiento con cor- conducir a hipoplasia pulmonar letal después del
ticoides y esperar unos días a una posible mejoría. nacimiento. La HDC ocurre con una incidencia
aproximada de 1/2.400 gestaciones; en aproxima-
Segunda opción: descompresión de la masa damente un tercio de los casos, la HDC se presen-
La técnica de elección siempre que haya quis- ta asociada a otras malformaciones, en el contex-
tes es la colocación de un shunt en la cavidad ma- to de un síndrome o aneuploidía (Tabla I). La HDC

116
E. Gratacós

a)

Figura 9. Esquema ilustrativo de la HDC.

es unilateral en el 95% de los casos, de los cuales


aproximadamente el 80% son izquierdas y el 20%
derechas.
b)
El principal problema de la HDC es la hipo-
plasia pulmonar, que por debajo de ciertos niveles
resulta letal. La mortalidad perinatal de la HDC
no ha cambiado en más de 20 años, como de-
muestran estudios poblacionales, a pesar de una
percepción subjetiva por algunos especialistas de
Figura 10. HDC izquierda con herniación hepática. a) Corte
mejoría de la supervivencia, en realidad sesgada axial: desplazamiento mediastínico y hemitórax izquierdo ocu-
por la interrupción del embarazo y los nacidos en pado por hígado, estómago e intestinos (de anterior a posterior).
hospitales periféricos que no sobreviven al trans- b) Corte axial abdominal: desviación de vena umbilical en su
trayecto intrahepático, producida por la herniación hacia arri-
porte.
ba del hígado.
El objetivo de la terapia fetal es identificar los
casos de peor pronóstico e intentar revertir de ma-
nera parcial la hipoplasia pulmonar forzando el
crecimiento pulmonar mediante la oclusión tra- Las características ecográficas varían notable-
queal fetal. mente según el lado de la hernia.

Diagnóstico ecográfico Hernia izquierda


La detección es sencilla si se realiza una explo- Más fácil de diagnosticar que la derecha:
ración sistemática del tórax fetal en la ecografía de • Corte de cuatro cámaras claramente anormal.
rutina, y se basa en dos signos fundamentales: • Marcada desviación mediastínica.
• Pérdida de la ecogenicidad uniforme de los pul- • Tejido pulmonar uniforme remplazado por un
mones. contenido heterogéneo característico en el que
• Marcada desviación mediastínica: corazón des- se pueden identificar las vísceras más habitua-
plazado al lado contralateral de la hernia, el án- les (estómago e intestinos siempre, hígado en
gulo normal de 45º se aproxima a 0º con res- la mitad de los casos).
pecto al eje anteroposterior.
• Observados estos dos signos, se puede com- Hernia derecha
probar la interrupción del diafragma en cor- De más difícil diagnóstico por la similar ecoge-
tes sagitales o coronales. nicidad de pulmón e hígado:

117
Patología pulmonar

Figura 12. Resonancia magnética de HDC en corte coronal


Figura 11. HDC derecha.El hígado es más parecido al pulmón, (estómago casi en el centro del tórax en blanco e intestino,
pero hay diferencia de ecogenicidad y desplazamiento medias- con corazón [oscuro] muy desplazado a la derecha)y corte
tínico claro. parasagital izquierdo (estómago e intestino por encima, ocu-
pando hemotórax).

• Corte de cuatro cámaras anormal, pero más su- lucencia nucal en el primer trimestre). En al-
til que en izquierda. gunos casos puede observarse la presencia de
• Desviación mediastínica pero a la izquierda. un discreto edema subcutáneo en tronco su-
• Ecogenicidad derecha diferente. perior.
• En muchos casos se puede observar la vesícula • Líquido libre en tórax, es posible observarlo
biliar en tórax. en algunos casos, más frecuente en las dere-
chas.
Hernia bilateral • Hídrops: aparece sólo de forma excepcional.
Malformación excepcional, en general asocia- • Polihidramnios: se observa líquido amnióti-
da a otros defectos. Diagnóstico prenatal difícil, co en límites altos en la mayoría de casos, por
habitualmente se orientan como izquierdas. alteración de la deglución fetal, y los casos
más graves se asocian con polihidramnios
Visualización de los pulmones franco.
El pulmón que se visualiza en la hernia es el con-
tralateral a la hernia, y se sitúa por detrás del co- Protocolo de estudio
razón. Su tamaño es el signo más consistente pa- • Estudio morfológico detallado (excluir signos
ra predecir pronóstico. El pulmon ipsilateral es vi- compatibles con los síndromes o cromosomo-
sible en los casos menos severos, normalmente en patías más comúnmente asociados), cálculo de
cortes transversales altos o coronales. Se sitúa en LHR y valoración de herniación hepática.
general anterior por la rotación del paquete car- • Cariotipo: además de estudios convencionales
diopulmonar. de cariotipo, puede descartarse la tetrasomía del
12p (síndrome de Pallister-Killian), que requiere
Otros signos ecográficos la utilización de FISH.
• Edema nucal: puede observarse en hernias gra- • Resonancia magnética: confirmación de diag-
ves en el momento del diagnóstico (o a tras- nóstico y de vísceras herniadas.

118
E. Gratacós

TABLA IV. Valores normales esperados de LHR para edad


gestacional. El O/E LHR se obtiene dividiendo el obteni-
do por el esperado y multiplicando por 100. Se expresa co-
mo un porcentaje

Edad gestacional Pulmón izquierdo Pulmón derecho

20 1,25 1,86
21 1,33 1,99
Figura 13. Medición del LHR en HDC izquierda. Diámetros 22 1,42 2,12
mayores del pulmón por detrás del corazón en corte axial. La 23 1,5 2,24
fórmula es LHR = Diámetro mayor x Diámetro menor/Cir- 24 1,57 2,36
cunferencia cefálica. 25 1,64 2,47
26 1,71 2,57
27 1,77 2,67
28 1,82 2,76
29 1,87 2,84
30 1,92 2,92
Establecimiento de pronóstico y criterios 31 1,96 2,99
de tratamiento prenatal 32 2 3,05
El pronóstico lo determina el tamaño del pul-
món contralateral, que se calcula mediante el lung-
to-head ratio (ratio entre área pulmonar y perí- • División del área resultante por el perímetro
metro cefálico) ajustado por edad gestacional: craneal.
• Hernia izquierda: se combina el LHR con la pre- • Comparación del valor obtenido con el valor
sencia-ausencia de herniación hepática. esperado por edad gestacional (O/E LHR).
• Hernia derecha: se utiliza únicamente el LHR.
Cómo evaluar la presencia o ausencia
Cómo medir e interpretar el lung-to-head ratio de herniación hepática
• Corte transversal del tórax con imagen de cua- • Ecografía:
tro cámaras. – Signos indirectos: estómago posterior y des-
• Medición de los diámetros mayores del pulmón viación de vena umbilical en corte transver-
contralateral; sal de abdomen.

a) b)

Figura 14. Probabilidad de supervivencia en función del O/E LHR para hernia izquierda (a) y derecha (b).

119
Patología pulmonar

a) b)

Figura 15. Oclusión fetoscópica con balón traqueal. a) Balón


insertado en tráquea. b) Visión ecográfica del balón.

– Visualización directa: con la resolución ac-


Figura 16. Impacto del tratamiento prenatal en la superviven-
tual es fácil en casi todos los casos, tanto en cia según probabilidad inicial en base al LHR.
corte transversales como parasagitales o co-
ronales.
– RM: confirmación de los datos ecográficos, ferior al 8%. La supervivencia global es del 60%, pe-
puede permitir visualizar herniaciones míni- ro la cifra debe ajustarse al nivel de gravedad inicial.
mas que no se observan por ecografía, pero En definitiva, la terapia fetal incrementa un 35-
en esencia la ecografía actual y la RM deben 45% el pronóstico de supervivencia establecido ini-
coincidir en el diagnóstico. cialmente. La oclusión traqueal no es una solución
definitiva, pero a pesar de sus limitaciones, es efec-
Criterios utilizados actualmente para terapia tivo en una proporción significativa de casos. Cons-
prenatal tituye una esperanza real para parejas que deseen
En general se ofrece tratamiento a todos los ca- mejorar el terrible pronóstico de la enfermedad, con
sos con pronóstico de supervivencia igual o infe- un número ya importante de niños vivos que se han
rior al 60%, tanto para las hernias izquierdas co- beneficiado del tratamiento prenatal. Se están ini-
mo derechas. ciando ensayos clínicos para evaluar diferentes as-
pectos del tratamiento en el contexto de proyectos
Terapia in utero: oclusión traqueal endoscópica subvencionados por la Comisión Europea.
La oclusión traqueal fetoscópica con balón im-
pide la salida del fluido traqueobronquial e induce Evolución postnatal
un crecimiento acelerado pulmonar. El balón se co- La secuela principal de la HDC es obviamente
loca en un momento variable que puede oscilar en- la morbilidad respiratoria. La calidad de vida de
tre 27-28 semanas en casos con LHR O/E < 28% y los supervivientes es en general buena. No existen
a las 30-32 en LHR O/E de 28-40%. El balón se re- series suficientemente amplias para estimar la ca-
tira en una segunda fetoscopia, punción ecoguiada lidad de vida en función de la gravedad prenatal,
o técnica EXIT (ver apartado siguiente). El grupo aunque existe un gran estudio europeo que per-
Euro-CDH, que creó y ha aplicado la técnica ma- mitirá disponer de datos en pocos años. Excepto
yoritariamente hasta ahora, la colocación-retirada para los casos en los que se presente en el contex-
del balón se ha realizado con éxito en más de 150 to de un síndrome, la HDC aislada es una malfor-
casos realizados. La duración media es de 17 mi- mación casi siempre esporádica y por tanto, el ries-
nutos y la tasa de RPM actual < 32 semanas es in- go de recurrencia es extremadamente bajo.

120
E. Gratacós

Figura 17. Síndrome CHAOS. Pulmones hiperecogénicos y dia- Figura 18. Secuencia de imágenes en un linfangioma cervical
fragmas invertidos, con imagen muy prominente del árbol tra- que afecta el cuello fetal bilateralmente y engloba desde man-
queobronquial. díbula inferior a clavículas.

OBSTRUCCIÓN DE LA VÍA AÉREA • Asociación muy habitual a síndromes polimal-


Patologías extremadamente poco comunes en formativos y alteraciones cromosómicas.
las que el feto al nacer no va a poder respirar por la
vía natural, e incluso es posible que no sea posible Tumores cervicales
la intubación fetal. La traqueotomía de urgencia es Aunque no se trata estrictamente de malforma-
un procedimiento difícil y estos casos presentan un ciones pulmonares, los teratomas de origen orofa-
alto riesgo de muerte neonatal o secuelas graves. El ríngeo o cervical pueden tener tal tamaño que com-
tratamiento común es la cirugía EXIT (Ex-Utero prometan la respiración neonatal, e incluso impidan
Intrapartum Treatment), que permite la extracción la intubación fetal, conduciendo con gran frecuen-
fetal parcial manteniendo la perfusión placentaria. cia a la muerte neonatal. El diagnóstico es fácil. De-
Tiene riesgos evidentes para la madre, pero bien re- be pensarse siempre en la posibilidad de un EXIT,
alizada permite a los cirujanos pediátricos dispo- aunque aparentemente el tumor no sea muy gran-
ner de un tiempo corto pero suficiente para reali- de, puede tener extensión hacia dentro del cuello y
zar una traqueostomía o incluso resecar la masa bloquear la tráquea hasta hacerla inaccesible, o des-
si no existe otra opción. La técnica EXIT también viarla lo suficiente para impedir una intubación.
se utiliza en casos de parto prematuro para retirar
el balón en la hernia diafragmática.
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122
Obstrucción urinaria baja (luto)
N. Masoller, J.M. Martínez

INCIDENCIA ESTIMACIÓN DE LA GRAVEDAD


En 1:6.000 recién nacidos vivos. 1. Signos ecográficos:
• Anhidramnios en ausencia de rotura prema-
tura de membranas a partir de la semana 16.
ETIOLOGÍA Signo de mala función renal.
• Sexo masculino: valvas de uretra posterior • Apariencia ecográfica de displasia renal (quis-
(completas o incompletas). tes corticales periféricos, parénquima hipe-
• Sexo femenino: atresia uretral. recogénico o adelgazado).
• Ureterocele obstructivo. • Hidronefrosis (pelvis renal de más de 10 mm).
• Origen no obstructivo: neuropatía vesical, sín- • Dilatación ureteral.
drome de la ciruela-pasa (síndrome de Prune- • Megavejiga.
Belly), síndrome de megacistis-microcolon-hi- • Dilatación progresiva de la uretra posterior
poperistaltismo intestinal. (signo de la cerradura).
2. Analisis de la orina fetal obtenida por vesico-
centesis o punción de la pelvis renal:
DIAGNÓSTICO a)Considerar los diferentes componentes (elec-
• Megavejiga (Fig. 1). trólitos y proteínas) en relación a la edad ges-
• Dilatación uretral. Signo de la cerradura (Fig. 2). tacional. Antes de la semana 20 la evaluación
• Ureterohidronefrosis progresiva (Fig. 3). se ve dificultada porque a esta edad gestacio-
• Displasia renal. nal la orina es casi isotónica con el plasma.
• Oligoanhidramnios. b)Estudio seriado de la tendencia de los com-
ponentes de la orina fetal, obtenida a inter-
valos de 48-72 horas. La orina de los fetos con
PROTOCOLO DE ESTUDIO afectación renal es más hipertónica y con ma-
• Cariotipo fetal. yor concentración de proteínas que los fetos
• Ecografía detallada. Ecocardiografía. controles o con patología obstructiva pero
• Estudio de la función renal. buen resultado postnatal (Tabla I).
• Estimación de la lesión renal. 3. En los casos que no se puede obtener orina fe-
• Control evolutivo. tal se puede analizar la concentración de 2-mi-

123
Obstrucción urinaria baja (luto)

Figura 2. Obstrucción del tracto urinario inferior. Megavejiga.


Figura 1. Catorce semanas de gestación. Megavejiga. Signo de la cerradura. Sospecha de valvas de uretra posterior en
un feto varón.

TABLA I. Valores de referencia de concentración de elec-


trólitos y proteínas en la orina fetal

Componente Normal Anormal

Sodio (mEq/L) 75-100 > 100


Cloro (mEq/L) < 90 > 90
Calcio (mEq/L) <8 >8
Osmolaridad (mEq/L) < 210 > 210
β2-microglobulina (mg/L) <2 >2
Proteínas (mg/dL) < 20 > 20
Figura 3. Obstrucción del tracto urinario inferior. Dilatación
uretral bilateral.

croglobulina en sangre fetal obtenida por cor- RIESGO DE MORTALIDAD


docentesis. Valores superiores a 4,9-5,6 mg/l son El 30-50% fallece por hipoplasia pulmonar/in-
predictivos de mala función renal. suficiencia renal severa.

HISTORIA NATURAL ANTE SIGNOS DE EVOLUCIÓN ADVERSA


La evolución espontánea es siempre progresi- Y PRONÓSTICO SEVERO
va: megavejiga, hidronefrosis/displasia renal, oli- Inicio a edad gestacional precoz, anhidramnios
go/anhidramnios, hipoplasia pulmonar, insufi- y signos de displasia renal progresiva.
ciencia pulmonar, insuficiencia renal y muerte ne- Considerar la opción de interrupción de la ges-
onatal. tación.

124
N. Masoller, J.M. Martínez

Figura 5. Patología obstructiva del tracto urinario inferior. Cis-


toscopia. Ablación con láser de las valvas uretrales.

Figura 4. Patología obstructiva de tracto urinario inferior. Cis- ha sido del 100% con función respiratoria nor-
toscopia. Confirmación de la dilatación de la uretra posterior. mal en todos los casos y en un solo caso la fun-
ción renal neonatal fue anormal.
3. Ureterocele obstructivo: evacuación mediante
TERAPIA INTRAUTERINA punción ecoguiada. Ablación con láser por fe-
toscopia.
Objetivo
Descompresión de la vejiga para prevenir el de- Indicaciones y criterios de selección
terioro renal progresivo, corregir las consecuen- • Anomalía aislada.
cias del oligo/anhidramnios, prevenir la hipopla- • Oligoamnios.
sia pulmonar y los problemas derivados de la dis- • Función renal conservada, evaluada por eco-
tensión abdominal. grafía y análisis de la orina.
• Inmadurez pulmonar.
Opciones de terapia intrauterina
1. Drenaje vesicoamniótico. Limitación: necesi- ¿Cuándo realizar la terapia intrauterina?
dad de reinserción por el desplazamiento oca- Cuanto antes mejor:
sionado por el crecimiento fetal. Resultados: • Antes de la alteración de la función renal: de-
fracaso, 40%, y supervivencia global, < 30%. masiado pronto.
2. Ablación de las valvas de uretra posterior con • Después de la alteración: demasiado tarde.
láser mediante fetoscopia. La principal ventaja • En caso de madurez pulmonar comprobada, fi-
frente al drenaje es que no precisa sucesivas in- nalizar la gestación y corrección postnatal.
tervenciones y que se trata de una técnica cu-
rativa per se, que supone la aplicación de una
sola intervención definitiva en el periodo peri- PUNTOS CLAVE
natal (Figs. 4 y 5). Desde el año 2006 hemos tra- La presencia de una megavejiga es sugestivo de
tado mediante ablación láser a 9 fetos, de los una obstrucción urinaria baja y requiere deriva-
cuales 3 acabaron en una interrupción volun- ción a un centro con experiencia en cirugía fetal
taria de la gestación. Del resto, la supervivencia para valoración de conducta.

125
Obstrucción urinaria baja (luto)

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126
Cribado de anomalías cromosómicas
R. Mula, A. Borrell

El cribado consiste en un programa epidemio- CRIBADO DE PRIMER TRIMESTRE


lógico de aplicación sistemática o universal, que La utilización de un método de cribado de pri-
tiene la finalidad de detectar en una población de- mer trimestre nos permitirá la realización de un
terminada y asintomática, una enfermedad grave diagnóstico de forma más precoz, dando a los pa-
en estadio inicial o precoz, con el objetivo de dis- dres tiempo para tomar una decisión y permi-
minuir la morbimortalidad. En este capítulo nos tiendo realizar una intervención precoz en el ca-
centraremos en el cribado de anomalías cromo- so que fuera solicitada (interrupción de la gesta-
sómicas durante la gestación. ción).
Las anomalías cromosómicas más frecuentes La edad materna es un factor de riesgo clási-
son las aneuploidías y concretamente las triso- camente asociado a anomalías cromosómicas. La
mías autosómicas. El síndrome de Down o triso- prevalencia de la trisomía 21 aumenta a medida
mía 21 es la aneuploidía más frecuente junto con que aumenta la edad materna, hasta que el riesgo
la trisomía 18 y la trisomía 13. se estanca a partir de los 45 años, como puede ob-
La realización del cribado de aneuploidías es de servarse en la figura 1. Pero aisladamente no es un
vital importancia dado que la trisomía 21 es la pri- buen método de cribado, porque únicamente el
mera causa conocida de retraso mental y es la más 30% de las trisomías 21 aparacen en mujeres ma-
frecuente de las anomalías cromosómicas viables yores de 35 años, por lo que se ha abandonado la
en nuestro medio, con una prevalencia de 1/250 idea de realizar un procedimiento invasivo por in-
en primer trimestre. Más allá de la presencia de re- dicación de una edad materna avanzada.
traso mental, la asociación de estas anomalías cro- Por lo tanto, en el cribado de primer trimestre
mosómicas a cardiopatía u otras malformacio- será necesario combinar la edad materna, que es-
nes hace que empeore su pronóstico, por lo que tablecerá el riesgo de base de aquella gestación, con
sus repercusiones tanto a nivel familar como en el unos factores de riesgo independientes: marcado-
sistema sanitario justifican que se haya desarro- res ecográficos fetales y marcadores bioquímicos
llado un programa de cribado universal. fetoplacentarios.
Por lo tanto, el objetivo de los programas de cri-
bado será calcular el riesgo personalizado de una Marcadores ecográficos
gestante de ser portadora de un feto con trisomía La translucencia nucal (TN) es, en el primer tri-
21 o trisomía 18. mestre, el acúmulo de líquido subcutáneo en el

127
Cribado de anomalías cromosómicas

Figura 1. Prevalencia de trisomía 21 en función de la edad ma- Figura 2. Corte sagital medio de la cabeza fetal requerido para
terna: La curba más reciente de Morris et al., demuestra que la medición de la translucencia nucal.
el riesgo se estabiliza a partir de los 45 años.

cuello fetal tanto si está tabicado o no y tanto si Un aspecto a tener en cuenta es que dado que
envuelve o no a todo el feto o está más o menos una TN aumentada (> percentil 99) se asocia a
extendido por el dorso fetal. Un feto con una TN malformaciones y síndromes genéticos, a parte de
aumentada presenta un riesgo aumentado de ano- anomalías cromosómicas, por sí sola será indica-
malías cromosómicas, malformaciones fetales y ción de realizar un estudio detallado y ecocardio-
síndromes genéticos. Este riesgo será mayor cuan- grafía fetal.
to mayor sea el grosor de la TN. El momento óp-
timo para la valoración de la TN será entre las 11,2 Marcadores bioquímicos
y las 13,6 semanas, que corresponden a un CRL Los marcadores ecográficos utilizados en el cri-
entre 45 y 80 mm. La sistemática para la correcta bado de primer trimestre son la fracción libre de
medición de la TN, descrita por la Fetal Medici- la gonadotropina coriónica (f -hCG) y la proteína
ne Foundation, será (Fig. 2): plasmática A asociada a la gestación (PAPP-A), que
• Magnificación de la imagen: visualizar cabeza se determinarán entre las 8 y 12 semanas de ame-
y tórax superior. norrea (preferentemente entre las 8 y las 10).
• Plano sagital medio donde se visualicen el dien- La tabla I muestra los niveles de los marcado-
céfalo, el paladar y el hueso nasal, y en cambio res bioquímicos en las aneuploidías más frecuen-
no se visualicen los plexos coroideos ni el pro- tes. La tasa de detección del cribado bioquímico
ceso zigomático. de primer trimestre combinado con la edad ma-
• Posición neutra de la cabeza fetal, evitando su terna es del 65%.
extensión o hiperflexión. Los valores obtenidos de la TN y de los mar-
• Distinguir bien entre amnios y piel. cadores bioquímicos se expresarán en múltiplos
• Colocación de los calipers en el margen inter- de la mediana (MoM), es decir, en múltiplos del
no (on-to-on) disminuyendo la ganancia para valor esperado definido por la mediana corres-
definir mejor las líneas. pondiente a la edad gestacional. Finalmente, los
La tasa de detección de trisomía 21 de la TN MoMs se traducen en likelihood ratios que son fac-
combinada con la edad materna es del 70%. tores que multiplicaremos por el riesgo inheren-

128
R. Mula, A. Borrell

TABLA I. Niveles observados de los marcadores bioquímicos en el primer y segundo trimestre para la trisomía 21 y
18-13

Marcador Trisomía 21 Trisomía 18-13 Trimestre

PAPP-A ↓↓ ↓↓ 1º
fβ-hCG ↑↑ ↓ 1º y 2º
hCG ↑↑ ↓ 1º y 2º
uE3 ↓ ↓ 2º
Inh A ↑ ↑ 2º
AFP ↓ ↓ 2º

te a la edad materna para dar el riesgo post-test, TN, después de aplicarse unos factores de corre-
que constituye el resultado del cribado. ción para los marcadores bioquímicos.
En gestaciones gemelares monocoriales se cal-
Test combinado culará un riesgo único a partir de la media de las
El test combinado es el método de cribado de dos TN.
primera elección ya que presenta una tasa de de- En gestaciones múltiples de orden superior se
tección de trisomía 21 del 90% para una tasa de calculará el riesgo con la combinación de la TN y
falsos positivos del 5%. Consiste en la estimación la edad, sin incluir los marcadores bioquímicos.
de las probabilidades de que un feto presente una
trisomía 21 o 18-13 a partir del riesgo inherente Cribado a las 14 semanas
de la edad materna, modificado por la desviación En aquella gestación en que se realize la ecogra-
encontrada en los marcadores ecográficos y bio- fía de primer trimestre entre las 14,0 y las 14,2 se-
químicos de primer trimestre. manas, es decir, en que se obtenga un CRL entre 81
Además de ser el test de cribado con una alta ta- mm y 84 mm, la medición de la TN se puede utili-
sa de detección, tiene la ventaja de que, al ser el más zar para calcular el riesgo de trisomía si existe bio-
precoz, permite un diagnóstico precoz mediante química previa, obtenida antes de las 14 semanas
la realización de una biopsia de corion y, en con- (hasta un CRL 80 mm). Hay centros que conside-
secuencia, la realización de una interrupción legal ran que no se puede extraer sangre en dicho pe-
del embarazo precoz con menos repercusiones pa- riodo límite (14,0-14,2 que corresponde a unos CRL
ra la paciente en los casos en que fuera solicitado. 81-84), ya que se habría sobrepasado el periodo en
Se considerará una gestación de alto riesgo que la bioquímica de primer trimestre sería válida.
cuando el riesgo sea > 1/250 para trisomía 21 o 18-
13. Ninguno de los valores extremos de los mar-
cadores aislados se considerará indicación de pro- CRIBADO DE SEGUNDO TRIMESTRE
cedimiento invasivo, por sí solos. A partir de las 15 semanas, el método de criba-
do de elección consiste en la estimación del riesgo
Cribado en gestaciones múltiples para las trisomías 21 y 18-13 a partir del riesgo de
En gestaciones gemelares dicoriales se realiza- la edad materna modificado por la desviación de
rá una estimación del riesgo para cada feto con su marcadores bioquímicos de segundo trimestre.

129
Cribado de anomalías cromosómicas

TABLA II. Diversas opciones de cribado bioquímico de segundo trimestre para trisomía 21

AFP fβ-hCG uE3 InhA TD*

Doble test X X 60%


Triple test X X X 70%
Quad test X X X X 80%
*TD: tasa de detección.

Marcadores bioquímicos
TABLA III. Tasa de detección para trisomía 21 para una
Los marcadores bioquímicos utilizados en el tasa de falsos positivos del 5% de diferentes métodos de
cribado de segundo trimestre son la fracción libre cribado
de la gonadotrofina coriónica (f -hCG), la alfa-fe-
Método de cribado TD (5% FP)
toproteína (AFP), el estriol no conjugado (uE3)
Edad materna (EM) 30%
y la inhibina-A (Inh-A) que se realizarán entre las EM + bioquímica 15-18 semanas 70%
15 y las 18 semanas aunque será factible entre las EM + TN 11.2-13.6 semanas 70%
14 y las 20 semanas. Igual que en el cribado de pri- Test combinado primer trimestre 90%
mer trimestre, los valores obtenidos se expresarán
en múltiplos de la mediana (MoM) en función de
la datación ecográfica. En la tabla II se compara la cribado de segundo trimestre en gemelares pre-
tasa de detección de trisomía 21 de los programas senta una tasa de detección inferior (50%).
de cribado de segundo trimestre que se han utili-
zado hasta la actualidad. Diagnóstico prenatal no invasivo
En nuestro medio se optó por el doble test (AFP El diagnóstico prenatal no invasivo que se basa
+ f -hCG) en la década precedente, con similares en la detección del DNA fetal libre en sangre ma-
tasas de detección del 65% con un 14% de falsos terna ya fue comercializado en el año 2011 en Es-
positivos. El cribado bioquímico presenta una ta- tados Unidos y China. Al tener una sensibilidad
sa de detección de trisomía 18-13 del 60%. del 99,1%, una tasa de falsos positivos del 0,3% y
Por lo tanto, siempre que sea posible en el cri- una tasa de fracaso del 1,4% se considera como un
bado de aneuploidías de segundo trimestre se uti- método de cribado avanzado.
lizará el test cuadruple ya que presenta una tasa de
detección del 80%. Al igual que en el cribado de
primer trimestre, se considerará una gestación de PUNTOS CLAVE
alto riesgo cuando el riesgo a término sea > 1/250 • La edad materna como método único de cri-
para trisomía 21 o 18. bado tiene una tasa de detección baja (30%).
• Es importante realizar una correcta datación de
Gestaciones gemelares la gestación mediante CRL dado que los valores
En gestaciones gemelares se realizará el mismo de la TN y de los marcadores bioquímicos se ex-
cribado, pero aplicando los factores de corrección presarán en múltiplos de la mediana en función
correspondientes a cada marcador bioquímico. El de la edad gestacional en ese momento.

130
R. Mula, A. Borrell

• Debe realizarse una correcta medición de la TN 3. Benn P, Cuckle H, Pergament E. Non-invasive prena-
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siguiendo la sistemática descrita por la Fetal Me- shift, but slowly. Ultrasound Obstet Gynecol 2012
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binado de primer trimestre (edad materna + Sanchez A, Soler A, Cararach V, Vanrell JA. First-tri-
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131
Procedimientos invasivos de diagnóstico prenatal
A. Borrell, R. Mula

INTRODUCCIÓN AMNIOCENTESIS
A pesar de los recientes avances con el análisis Es el procedimiento diagnóstico que consiste
de DNA fetal en la circulación materna, el diag- en la obtención de líquido amniótico por punción
nóstico de las alteraciones cromosómicas y mo- transabdominal. La introducción de la amniocen-
nogénicas requiere un análisis citogenético o mo- tesis para el diagnóstico genético se inició a fina-
lecular a partir de un tejido fetal. Para obtener te- les de los años 60, quedando reservado como un
jido o células fetales, sea líquido amniótico, ve- procedimiento a considerar únicamente para las
llosidades coriales o sangre fetal, es necesario re- gestantes de alto riesgo y practicado en centros de
alizar un procedimiento invasivo que comporta referencia. Con la introducción de la ecografía en
un cierto riesgo de pérdida fetal. Se ha conside- la práctica clínica y la posibilidad de realizar el pro-
rado razonable que aproximadamente el 5-10% de cedimiento completo de forma ecoguiada, la prác-
las gestantes con mayor riesgo decidan someterse tica de la amniocentesis se ha generalizado en nues-
a un procedimiento invasivo(1). tro medio hasta alcanzar tasas cercanas al 40%
Además, los procedimientos invasivos pueden en la década anterior.
tener también otras indicaciones de diagnóstico
prenatal no genético para el estudio de: Indicaciones
• DNA viral y parasitario si se sospecha infección Las indicaciones en medicina fetal de la am-
fetal (en líquido amniótico). niocentesis son las siguientes:
• Marcadores de corioamnionitis y detección de a) Estudio citogenético:
bacterias (en líquido amniótico). • Cribado bioquímico con riesgo ≥ 1/250 para
• Marcadores bioquímicos de defecto de tubo trisomía 21 o trisomía 18.
neural o pared abdominal (en líquido amnió- • Anomalía cromosómica en gestación previa.
tico). • Anomalía cromosómica en uno de los pro-
• Madurez pulmonar fetal (en líquido amnióti- genitores.
co). • Anomalía morfológica fetal.
• Marcadores de función renal (en orina fetal). • Marcadores ecográficos de aneuploidía de se-
• Hematología fetal (en sangre fetal) si se sospe- gundo trimestre y riesgo reevaluado de tri-
cha anemia o trombocitopenia fetales. somía 21 o trisomía 18 >1/250.

133
Procedimientos invasivos de diagnóstico prenatal

• Confirmación de resultado citogenético no aguja espinal del 22G de la forma más rápida po-
conclusivo en vellosidad corial. sible, no siendo necesaria, al emplearse una aguja
• Anomalía discordante en gemelos monoco- fina, la inyección de anestesia local, que puede au-
riales diamnióticos con riesgo de gestación mentar incluso el discomfort materno. Es preferi-
heterocariocítica (para asegurar dos mues- ble utilizar funda para sonda ecográfica y gel esté-
tras diferentes). riles. Posteriormente, se retira el fiador y se aspi-
b) Riesgo de enfermedad monogénica con diag- ran 20 cc de líquido amniótico, manualmente o
nóstico bioquímico en líquido amniótico. mediante “vacutainer”, técnica que facilita la tarea
c) Sospecha de infección fetal. Estudio del DNA del asistente con resultados similares a la aspira-
mediante PCR de: ción habitual(3). Todo el proceso de punción y as-
• Toxoplasmosis. piración se realiza guiado ecográficamente de for-
• Citomegalovirus. ma continua.
• Varicela. Aunque no se ha demostrado que la punción
• Rubéola. transplacentaria esté asociada a una mayor inci-
• Parvovirus B19. dencia de complicaciones, en general es preferi-
d) Riesgo de corioamnionitis: estudio bioquími- ble evitar una punción transplacentaria siempre
co de marcadores de inflamación y estudio mi- que haya un acceso no transplacentario factible.
crobiológico de líquido amniótico. Se debe evitar totalmente en gestaciones con se-
e) Estudio de madurez pulmonar fetal. rologías positivas para VIH, VHB, VHC y en la
f) Riesgo de defectos de tubo neural en ecografía isoinmunización.
no concluyente: Las recomendaciones post-procedimiento con-
• Alfafetoproteína en sangre materna > 3,0 sisten en reposo de 24 horas (como medida de pre-
MoM. caución, pues su efectividad no está demostrada)
• Defecto de tubo neural en gestación previa o y gammaglobulina anti-D en casos de gestante RhD
en uno de los progenitores. negativas, antes de 72 horas.

Procedimiento Estudio citogenético


La punción se practica de manera ambulatoria El estudio citogenético en líquido amniótico se
habitualmente entre las 16 y las 21 semanas. La efectúa después de un cultivo celular habitualmente
amniocentesis antes de las 14 semanas se asocia a según el método del flascón. Hay alrededor de un
un mayor riesgo de pérdida fetal y a una inciden- 0,5% de posibilidades de fracaso de cultivo. La pre-
cia superior a la de la población general de talipes sencia de contaminación materna es muy depen-
equinovarus, que se cree asociado a una amnio- diente de la experiencia del operador, entre el 0,7
rrexis a edades gestacionales tempranas con sali- y el 2%. Cuando se detecta un mosaico (0,4%),
da del líquido amniótico al celoma extraamnió- es recomendable confirmarlo en otro tejido (pla-
tico o a su pérdida por vagina(2). centa, sangre, etc.). Para obtener un resultado rá-
Previamente a la punción se selecciona ecográ- pido, especialmente relevante en situaciones de al-
ficamente el "pool" más importante accessible de to riesgo, se puede emplear la técnica de QF-PCR
líquido amniótico, y la vía a seguir en la punción. o FISH que estudia el número de copias de 5 cro-
En condiciones de asepsia se efectúa punción con mosomas (13,18, 21, X e Y). En fetos malforma-

134
A. Borrell, R. Mula

dos con cariotipo normal hay la opción de aplicar • Anomalía cromosómica en gestación previa.
un array-CGH que presenta una resolución supe- • Anomalía cromosómica en uno de los pro-
rior al cariotipo. genitores.
• Anomalía fetal ecográfica detectada en el es-
Complicaciones tudio morfológico precoz.
Las complicaciones fundamentales de la am- • Confirmación de un diagnóstico preimplan-
niocentesis son la rotura prematura de membra- tatorio.
nas y la corioamnionitis. En el caso de la rotura • Aborto diferido, especialmente en el caso de
prematura de membranas, suele tratarse de pér- los abortos de repetición.
didas escasas que se autolimitan con el reposo, aun- • Discordancia > 1semana en CRL entre ge-
que en ocasiones conducen a oligoamnios severo melos (CIR severo precoz).
y malos resultados perinatales. La incidencia de la b) Enfermedad monogénica con diagnóstico mo-
corioamnionitis es aproximadamente de 1/1.000 lecular o bioquímico disponible en vellosidad
y puede evolucionar a un shock séptico. corial.
El aumento de pérdidas gestacionales se ha si-
tuado clásicamente alrededor del 1%, según datos Procedimiento
basados en un estudio randomizado(4). En un me- La biopsia corial, como la amniocentesis, es un
taanálisis del año 2007, Mujezinovic y Alfirevic(5) procedimiento ambulatorio. Por vía transcervical
observaron que el exceso de riesgo de pérdida de (TC) se practica entre las 10-14 semanas, y por vía
la gestación a los 14 días postprocediemiento era transabdominal (TA) entre las 11-14 semanas. Téc-
del 0,6%, y el riesgo total a lo largo de la gestación nicamente se podría realizar la toma de vellosida-
ascendía al 1,9%. Los estudios más recientes apun- des coriales antes de la semana 10, pero se ha aso-
tan a un riesgo de pérdida fetal todavía inferior. ciado a severos defectos de reducción de las extre-
midades(6). En ocasiones especiales también es fac-
tible en edades gestacionales posteriores por vía
BIOPSIA CORIAL transabdominal y por vía transcervical sólo en ca-
La biopsia corial es un procedimiento diagnós- sos de buena accesibilidad placentaria.
tico invasivo que consiste en la obtención de ve- En la práctica de la biopsia corial se requiere
llosidades coriales. Se introdujo a finales de los una experiencia suficiente del operador y una ex-
años 80, pasando en los años 90 a convertirse en celente coordinación entre el operador y el resto
un procedimiento rutinario. Actualmente se con- del equipo. En la vía TC se procede a la asepsia vul-
sidera el procedimiento de elección para el diag- var y vaginal y entallado previamente a la coloca-
nóstico prenatal de anomalías cromosómicas y en- ción de un espéculo. Con una pinza semirrígida
fermedades hereditarias en primer trimestre. ("snake forceps"), a través del canal cervical se ac-
cede al corion frondoso, bajo control ecográfico
Indicaciones continuo. Es posible la toma de vellosidades co-
a) Estudio citogenético: riales también mediante una cánula de aspiración
• Cribado combinado bioquímico-ecográfico rígida o flexible, sin que existan suficientes estu-
del primer trimestre con riesgo ≥ 1/250 pa- dios que permitan una comparación entre las di-
ra T21 o T18. ferentes técnicas.

135
Procedimientos invasivos de diagnóstico prenatal

En la vía TA, la técnica de elección en nuestro la punción en el caso de la técnica TA. Existe un
centro consiste en la punción con un trócar del cierto riesgo de rotura prematura de membranas
18 G para acceder a la placenta, bajo control eco- y corioamnionitis, inferiores al 1%.
gráfico continuo, previa asepsia abdominal, enta- El riesgo de pérdida fetal ha ido disminuyendo
llado y anestesia local. Se retira el fiador y, a través con la experiencia de los equipos. Un estudio ran-
del trócar, se introduce una pinza fina ("crocodri- domizado realizado en nuestro centro mostró que
le forceps") hasta el corion. También se puede rea- la pérdida fetal acumulada hasta la semana de vi-
lizar con técnica de aspiración con jeringa y utili- da postnatal era idéntica entre la biopsia corial TC
zar una aguja de 20G. y la amniocentesis(7). Los datos del metaanálisis de
La elección de una u otra técnica depende de la Mujezinovic y Alfirevic(8), mostraron una tasa de
experiencia del operador, no hallándose en un me- exceso de pérdida de gestación a los 14 días post-
taanálisis de la Cochrane diferencias entre las dos procedimiento del 0,7%, y de pérdida total a lo lar-
técnicas(5). Sin embargo, la medida de la muestra go de la gestación del 2,0%, por lo que podemos
de vellosidad corial obtenida por vía transcervical concluir que en manos experimentadas la tasa de
es habitualmente muy superior a la transabdomi- pérdida fetal de la biopsia corial es muy similar a
nal. la de la amniocentesis. Los estudios más recien-
Las recomendaciones post-procedimiento son tes en centros de reconocida experiencia muestran
las mismas de la amniocentesis: 24 horas de repo- un riesgo de pérdida fetal mínima.
so después de la extracción y administración de
gammaglobulina anti-D (300 g) en casos de ges-
tantes RhD negativas, antes de 72 horas. CORDOCENTESIS
Es el procedimiento diagnóstico que consiste
Estudio citogenético en la obtención de sangre fetal. Habitualmente se
La muestra se procesa según el método semi- pueden obtener muestras de sangre fetal a partir
directo, que presenta un 2% de resultados “no con- de la semana 17-18.
clusivos” y que deben descartarse en líquido am-
niótico, ya que habitualmente son anomalías (en Indicaciones
línea pura o mosaico) confinadas a la placenta. Se a) Estudio citogenético:
puede realizar también un cultivo largo adicional • Cariotipado rápido en anomalía estructural
para aumentar la fiabilidad del resultado. Los fal- fetal.
sos negativos del estudio directo seguido de culti- • Confirmación o no obtención de resultado
vo son extremadamente raros (0,08%). En casos citogenético en líquido amniótico (mosaicos).
de fetos malformados o translucencia nucal au- • Hídrops fetal no inmune.
mentada es recomendable guardar DNA para es- • CIR precoz severo inexplicado.
tudios moleculares (FISH microdelección 22q11, • Diagnóstico prenatal de anemia de Fanconi.
o array-CGH). b) Riesgo de enfermedad monogénica y consulta
tardía.
Complicaciones c) Sospecha de anemia fetal:
Las complicaciones más frecuentes son el san- • Isoinmunización.
grado vaginal y el dolor abdominal en la zona de • Infección por PVB19.

136
A. Borrell, R. Mula

• Agonía/muerte reciente de un gemelo MC. y realizar previamente maduración pulmonar. Des-


d) Sospecha de trombocitopenia fetal: pués del procedimiento es recomendable realizar
• Trombocitopenia aloinmune. un registro cardiotocográfico fetal. Se administra
• Trombocitopenia autoinmune severa. gammaglobulina si la gestante es RhD negativa no
e) Establecer el pronóstico en infección fetal (com- sensibilizada antes de 72 h. Se recomiendan 24 ho-
probada) por CMV: ras de reposo post-procedimiento y profilaxis an-
• Trombocitopenia. tibiótica en casos de procedimientos complicados.
• Síndrome biológico fetal. Se debe confirmar el origen fetal de la sangre
f) Estudio de la función renal en uropatía obs- extraída mediante la realización de un hemogra-
tructiva baja: determinación β2-microglobulina. ma. Una macrocitosis y una linfocitosis relativa
son características de la sangre fetal. Se cursará una
Procedimiento fórmula manual para contaje de eritroblastos y de-
Previamente al procedimiento se debe realizar terminación de HbF (o test de Kleinhauer) a pos-
una ecografía detallada, con estudio anatómico fe- teriori, si se considera conveniente.
tal completo, y localización de la inserción pla-
centaria del cordón umbilical. Se practica asepsia Complicaciones
del campo y entallado con preparación quirúrgi- Las complicaciones más frecuentes son la he-
ca de los operadores. Se utiliza funda para sonda morragia del cordón o de la placenta y la bradi-
ecográfica y gel estériles. cardia. La hemorragia de cordón es una compli-
Se realiza punción percutánea con aguja de 20G cación frecuente que se produce entre el 20% y el
ecoguiada de forma continua, según la técnica 40% de los casos. Habitualmente cede de forma
"free-hand" (manos libres), que permite reconsi- espontánea en un minuto, aunque en ocasiones
derar la dirección de la aguja en todo momento. puede producirse un sangrado masivo que lleve
El lugar escogido preferentemente es la inserción a la muerte fetal. Es más frecuente en punciones
placentaria del cordón que permite evitar el ries- de la arteria umbilical y en casos de trombocito-
go de movimientos fetales bruscos y especialmen- penia fetal. La bradicardia se produce aproxima-
te si se realiza de forma transplacentaria minimi- damente en el 8% de los casos, y habitualmente la
za el riesgo de sangrado. El vaso diana será la ve- duración es menor de un minuto, pero si es per-
na umbilical, intentando no puncionar la arteria. sistente se debe suspender el procedimiento.
Si ésta es de difícil acceso, se puede pinchar un asa El riesgo de pérdida fetal se sitúa alrededor del
libre de cordón, la inserción fetal, o bien el trayec- 3%, y sobretodo afecta a los procedimientos más
to intrahepático de la vena umbilical. Se puede lle- precoces, siendo menor el riesgo de pérdida fetal
var a cabo inmovilización fetal con vecuronio (0,1 si el procedimiento se realiza en edades gestacio-
mg/kg peso fetal ev) en caso de procedimiento nales más avanzadas(9).
complejo o transfusión fetal intrauterina. Dado
que el volumen fetoplacentario es unos 140 ml/kg,
se pueden extraen de 3 a 5 mL de sangre a partir PROCEDIMIENTOS INVASIVOS EN
de la semana 18. GESTACIONES MÚLTIPLES
En gestaciones viables (≥ 26 semanas) hay que La elección de un procedimiento invasivo en
tener preparada una extracción fetal de urgencia, una gestación múltiple dependerá de muchos fac-

137
Procedimientos invasivos de diagnóstico prenatal

tores como la edad gestacional, la localización de 2. Todos los procedimientos invasivos compor-
la/s placenta/s, la experiencia del operador, y de la tan un cierto riesgo de pérdida fetal, por lo tan-
eventualidad que se solicite una interrupción fe- to se debe tener clara la indicación del proce-
tal selectiva. Si ésta una opción de la pareja, el diag- dimiento y hacer un balance riesgo-beneficio.
nostico más precoz es ventajoso. 3. La edad materna ha dejado de ser una indica-
En nuestro centro la biopsia corial se conside- ción médica de procedimiento invasivo.
ra la primera opción, excepto en casos individua- 4. La amniocentesis debe realizarse a partir de
lizados. En gestaciones monocoriales se considera la semana 15.
suficiente la obtención de una única muestra. En 5. La biopsia corial TC se puede realizar a partir
gestaciones dicoriales, a pesar del riesgo de con- de la semana 10, pero precisa de una buena co-
fusión de las dos muestras, que debe ser minimi- ordinación entre operador y ecografista.
zado con una exploración y seguimiento ecográ- 6. En manos expertas, la biopsia corial y la am-
fico minucioso de todo el procedimiento, presen- niocentesis tienen similar tasa de complica-
ta la ventaja de permitir una interrupción selec- ciones.
tiva precoz en caso de anomalía discordante. 7. No se necesita tener el laboratorio de citoge-
La amniocentesis se considera de elección si la nética cerca, pero sí que debe existir una bue-
edad gestacional es superior a 15 semanas y tam- na comunicación con los citogenetistas.
bién en caso de gestación monocorial diamnióti- 8. Las técnicas rápidas de diagnóstico de aneuploi-
ca con anomalía ecográfica discordante con ries- días, sobre todo la QF-PCR, cubren el 95% de las
go de gestación heterocariocítica (higroma quís- anomalías cromosómicas con significación clí-
tico en un gemelo) para asegurar la obtención de nica y deben acompañarse de un cariotipo com-
dos muestras diferentes. En este supuesto se con- pleto en indicaciones distintas a la edad mater-
sidera conveniente la extracción de dos muestras, na avanzada y cribado de segundo trimestre.
sin perforar nunca la membrana que separa los dos 9. El asesoramiento sobre cualquier anomalía cro-
sacos amnióticos. mosómica es preferible que lo realice un ge-
El riesgo de pérdida fetal después de un pro- netista clínico.
cedimiento invasivo en una gestación gemelar es 10. La cordocentesis es una técnica difícil, con unas
ligeramente superior al de las gestaciones múlti- indicaciones que han quedado muy restringidas.
ples, especialmente para la amniocentesis. Los dos 11. En gestaciones gemelares dicoriales con riesgo
únicos estudios que comparan amniocentesis ver- de anomalía discordante, la técnica de elección
sus biopsia corial en gestaciones múltiples no en- es la biopsia corial si la interrupción selectiva
contraron diferencias estadísticamente significa- sea una opción para la pareja.
tivas, con una ligera ventaja de la biopsia corial(10).

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139
Anemia fetal: isoinmunización
A. Borrell, R. Mula

La causa más frecuente de anemia fetal es la 30 pueden desencadenar enfermedad hemolítica


isoinmunización, especialmente la isoinmuniza- fetal. La gran mayoría de casos son el resultado de
ción anti-D. Otras causas conocidas de anemia en incompatibilidad ABO (2/3) o incompatibilidad
el feto son la isoinmunización por otros antígenos, Rhesus. La incompatibilidad ABO no presenta
la infección por parvovirus, le hemorragia feto- nunca anemia prenatal y sus anticuerpos son los
materna y la hemorragia feto-fetal en gemelos mo- únicos que se consideran “regulares” y por tanto,
nocoriales (Tabla I). La isoinmunización se define no incluidos en el test de Coombs indirecto. El ma-
por el desarrollo de anticuerpos maternos, del ti- nejo clínico es similar para los diferentes tipos de
po IgG, contra antígenos de membrana de los he- isoinmunización con mayor riesgo de isoinmuni-
matíes fetales en respuesta a un contacto previo zación, anti-D, anti-Kell y anti-c, con la particula-
con el antígeno. Sin tratamiento, estos anticuerpos ridad que la anemia en isoinmunización Kell no
provocan un cuadro de hemólisis en el feto cono- es exclusivamente de origen hemolítico y por lo
cido como enfermedad hemolítica fetal o eritro- tanto, el análisis espectral de líquido amniótico no
blastosis perinatal. será fiable, ni existe buena correlación entre el tí-
En función del grado de anemia hemolítica, las tulo de anticuerpos con la severidad de la enfer-
manifestaciones clínicas de la isoinmunización va- medad (Tabla II).
riarán desde el feto asintomático o que presenta
un cuadro de anemia leve, que aparece en un 45-
50% de casos, a anemia moderada, hepatoesple- TIPOS DE ISOINMUNIZACIÓN
nomegalia e ictericia neonatal, en un 25-30% de Incompatibilidad ABO. Es el tipo más frecuente
los casos, que puede progresar a daño cerebral (ker- de isoinmunización (2/3 de los casos). Aparece en
nicterus), secuelas mayores (sordera, espasticidad, un 20% de los embarazos, en fetos del grupo A y
coreoateatosis) y muerte postnatal. En el 20-25% B de madres del grupo O que han desarrollado an-
de casos más severos, la enfermedad se manifiesta ticuerpos IgG anti-A y anti-B, los cuales atravie-
con hidrops fetal y muerte intraútero o en el pe- san la placenta. Raramente se asocia a enfermedad
riodo neonatal. hemolítica fetal (< 2%) por lo que el diagnóstico
Existen al menos 100 antígenos de superficie de suele ser postnatal por la aparición de hiperbili-
hematíes diferentes y de estos, aproximadamente rrubinemia, que excepcionalmente requerirá de

141
Anemia fetal: isoinmunización

TABLA I. Causas de anemia fetal TABLA II. Sistemas de antígenos eritrocitarios

• Isoinmunización RhD Anticuerpos asociados a afectación fetal severa


• Isoinmunización anti-Kell, anti-C, anti-E
Sistema Ac
• Infección por oarvovirus B19
• Hemorragia feto-materna Rhesus D, c
• Transfusión feto-fetal/ Exanguinotransfusión en geme- Kell Kell (k1)
lo monocorial
• Alfa-talasemia Anticuerpos raramente asociados a
afectación fetal severa
Sistema Ac
Colton Coa, Co3
exanguinotransfusiones. Los anticuerpos antieri- Diego ELO, Dia, Dib, Wra, Wrb
trocitarios anti-A y anti-B son los únicos que se Duffy Fya
consideran anticuerpos regulares. Kel Jsa, Jsb, k (K2), kpa, kpb, K11, K22, Ku, Ula
Kidd Jka
Incompatibilidad RhD. Es la segunda causa MNS Ena, Far, Hil, Hut, M, Mia, Mit, Mta, MUT,
más frecuente de isoinmunización. El locus Rhe- Mur, Mv, s, sD, S, U, Vw
sus se localiza en el brazo corto del cromosoma 1. Rhesus Bea, C, Ce, Cw, Cx, ce, Dw, E, Ew, Evans, e, G,
Goa7, Hr, Hro, JAL, HOFM, LOCR, Riv, Rh29,
Se han identificados dos genes en el locus Rhesus:
Rh32, Rh42, Rh46, STEM, Tar
gen RhD y gen RhCcEe. En madres RhD negati- Otros HJK, JFV, JONES, Kg, MAM, REIT, Rd
vas el estatus RhD lo determina el padre. La trans-
misión es autosómica codominante. Si un padre Anticuerpos no asociados a afectación fetal severa
RhD positivo es homozigoto para el antígeno D Sistema Ac
todos sus hijos serán RhD positivos. Si en cambio Dombrock Doa, Gya, Hy, Joa
es heterozigoto, presentará un 50% de riesgo en Duffy Fyb, Fy3
Gerbich Ge2, Ge3, Ge4, Lsa
cada embarazo de tener descendencia RhD posi- Kidd Jkb, Jk3
tiva. Scianna Sc2
La incidencia de la incompatibilidad RhD va- Otros Vel, Lan, Ata, Jra
ría en función de la raza y etnia. Aproximadamente
un 15% de los blancos, un 5-8% de los africanos
americanos y un 1-2% de los asiáticos y america- matíes RhD positivos fetales, dando lugar a un cua-
nos nativos son RhD negativos. La isoinmuniza- dro de anemia fetal que puede culminar en hidrops
ción RhD requiere de al menos dos exposiciones y muerte fetal.
al antígeno RhD. La primera exposición produce Incompatibilidad no ABO no RhD. Derivada
una inmunización primaria (“sensibilización”). La de transfusiones sanguíneas, entre un 1-2% de los
segunda exposición se caracteriza por una rápida receptores desarrollan anticuerpos atípicos. El ti-
y marcada producción de anticuerpos (“anamné- po más frecuente es Lewis. La mayoría o producen
sica”). La exposición prolongada al antígeno RhD IgM que no atraviesan la barrera placentaria o son
activa la producción de anticuerpos maternos del poco inmunogénicos y no producen enfermedad
tipo IgM que rápidamente son sustituidos por IgG hemolítica fetal (p. ej., anti-P, anti-lewis, anti-I)
que pueden atravesar la barrera placentaria. Estos o su prevalencia es muy baja (p. ej., anti-M, anti-
anticuerpos IgG producen la hemólisis de los he- N, anti-S). Algunos de estos, sin embargo, como el

142
A. Borrell, R. Mula

anti-Kell y anti-C pueden provocar cuadros de en- de riesgo de muerte in utero en el siguiente feto
fermedad hemolítica severa y muerte intrauteri- RhD positivo.
na. El manejo antenatal de este tipo de isoinmu- 2. Títulación de anticuerpos irregulares ma-
nización es el mismo que en el caso de isoinmu- ternos que se detectan en suero materno median-
nización RhD, con la particularidad que en la isoin- te el llamado test de Coombs indirecto:
munización anti-Kell la concentración de anti- • Títulos < 1/16 se relacionan con enfermedad
cuerpos maternos no se correlaciona con la seve- hemolítica fetal leve.
ridad de la anemia. • Títulos ≥ 1/16 se relacionan con enfermedad
hemolítica severa.
La titulación a partir de la cual puede correla-
FISIOPATOLOGÍA DE LA ANEMIA cionarse con anemia fetal debe definirse en cada
La isoinmunización RhD requiere de al menos centro.
dos exposiciones al antígeno RhD. Inicialmente, el Alternativamente, la concentración de anti-
paciente sintetiza IgM que no pueden atravesar la cuerpos maternos puede medirse mediante uni-
placenta y que rápidamente son substituidos por dades internacionales por mililitro.
anticuerpos del tipo IgG. Los anticuerpos IgG atra- 3. Actividad de los anticuerpos “in vitro”: se pue-
viesan la barrera placentaria y se unen a los antí- de medir la actividad de los anticuerpos, aunque
genos de membrana de los hematíes fetales pro- no mejora de manera significativa la predicción de
duciendo su hemólisis por parte del sistema reti- anemia fetal.
culoendotelial. Si el proceso hemolítico es leve, el 4. Determinación del estatus antigénico pater-
feto compensa la situación de hemólisis aumen- no. Si es homozigoto para antígeno RhD, 100% de
tando la producción de eritrocitos. En estos casos, riesgo RhD positivo en la descendencia. Con la in-
la concentración de hemoglobina y de bilirrubina troducción del genotipado fetal, ha quedado en
en sangre de cordón umbilical suele ser normal. Si desuso a excepción de su uso en el asesoramiento
la anemia es severa puede provocar un cuadro de para gestaciones posteriores.
hidrops fetal (ya sea por aumento del gasto car- 5. Genotipado fetal mediante técnicas de PCR
diaco o bien por hipoproteinemia secundaria al en plasma materno, líquido amniótico, tejido co-
aumento de eritropoyesis extramedular conse- rial o preimplantacional para conocer el estatus
cuencia del estado anémico) que puede culminar RhD. En la actualidad, el genotipado RHD fetal en
en la muerte fetal. sangre materna es un método asequible, que es fia-
ble a partir del segundo trimestre.
6. Concentración de bilirrubina en líquido am-
DIAGNÓSTICO DE ANEMIA FETAL niótico. Es un método indirecto de valoración del
grado de hemólisis fetal. Liley observó cambios en
Factores predictores de anemia fetal la densidad óptica a 450 nm (delta OD450) pre-
1. Historia obstétrica de embarazos previos afec- dictores de severidad en la enfermedad hemolíti-
tos. La historia natural tiende a ser progresiva- ca fetal. Este análisis espectral de líquido amnióti-
mente más severa en embarazos sucesivos. Así, con co está en desuso desde la introducción del estu-
el antecedente de hidrops o muerte intrauterina o dio Doppler de la arteria cerebral media, ya que
neonatal por isoinmunización RhD existe un 90% este último es un método indirecto no invasivo con

143
Anemia fetal: isoinmunización

una buena correlación con incrementos de los ni- TABLA III. Valores del PVS-ACM correspondientes a 1,5
veles de bilirrubina detectados en líquido amnió- MoM para cada semana gestacional (Mari. Ultrasound
tico. Obstet Gynecol 2005;25:323-30)
7. Alteraciones ecográficas sugestivas de anemia
MCA-PSV (cm/s)
fetal: hepatomegalia, polihidramnios, ascitis, de-
GA (weeks) Median 1,5 MoM
rrame pericardico, esplenomegalia, placentosis.
Son signos ecográficos tardíos. 14 19,3 28,9
8. Patrón sinusoidal en el registro cardiotoco- 15 20,2 30,3
16 21,1 31,7
gráfico: relacionado con anemia severa fetal o dé-
17 22,1 33,2
ficit severo de oxígeno. 18 23,2 34,8
9. Estudios hemodinámicos mediante Doppler. 19 24,3 36,5
El aumento del gasto cardiaco debido a la anemia 20 25,5 38,2
21 26,7 40,0
produce una hiperdinamia circulatoria que es ob- 22 27,9 41,9
servable a nivel de la vena umbilical, vena cava in- 23 29,3 43,9
ferior, aorta torácica descendente, arteria carótida 24 30,7 46,0
y arteria cerebral media. Existe una relación in- 25 32,1 48,2
26 33,8 50,4
versamente proporcional entre la medición de la 27 35,2 52,8
velocidad del pico sistólico (PVS) en la arteria ce- 28 36,9 55,4
rebral media y la concentración de hemoglobina 29 38,7 58,0
30 40,5 60,7
fetal. Valores de PVS > 1,5 MoM se asocian a ane-
31 42,4 63,6
mia moderada o severa con una alta sensibilidad 32 44,4 66,6
(cercana al 100%) y un porcentaje de falsos posi- 33 46,5 69,8
tivos cercano al 12%. Mediante estudio Doppler 34 48,7 73,1
35 51,1 76,6
podemos hallar también regurgitación tricuspídea 36 53,5 80,2
que precede el desarrollo de ascitis e hidrops. 37 56,0 84,0
10. Cordocentesis: permite el acceso a la sangre 38 58,7 88,0
39 61,5 92,2
fetal para poder realizar la medición de la concen-
40 64,4 96,6
tración de hemoglobina fetal así como de otros va-
GA, gestational age (modified from G Mari et al. N Engl J Med
lores bioquímicos y hematológicos predictores del
2000;342:9-14, with permission. © 2000 Massachusetts Me-
grado de anemia, como la reticulocitosis, la hiper- dical Society). Ultrasound Obstet Gynecol 2005:25:323-330.
bilirrubinemia y el aumento de eritropoyetina fetal.

DOPPLER DE ARTERIA CEREBRAL MEDIA 3. Color Doppler para identificación del polígo-
no de Willis.
Técnica de medición de la velocidad del pico 4. Zoom del polígono de Willis.
sistólico de la arteria cerebral media (ACM) 5. Ventana del Doppler pulsado a nivel porción
1. Feto en reposo y madre en apnea. proximal ACM con un ángulo de isonación cer-
2. Sección transversal de la cabeza a nivel del es- cano a 0º.
fenoides sin ejercer presión. 6. Zoom de la ACM.

144
A. Borrell, R. Mula

7. Doppler espectral con 5-10 ondas de velocidad TABLA IV. Concentraciones de la Hb fetal correspon-
de flujo señalando el pico sistólico. Repetir la dientes a la mediana y a – 4 SD, valor límite para la ane-
secuencia al menos en dos ocasiones. mia moderada según Sheier et al (Ultrasound Obstet Gy-
necol 2004;23:432-6)
8. Calcular la velocidad máxima del pico sistóli-
co. Los valores son normales hasta 1,5 MoM Semana
(Tabla III). Gestacional Hb mediana - 2 SD - 4 SD

18 11,0 9,1 7,2


19 9,3 7,4
MANEJO CLÍNICO EN CASO DE 20 11,3 9,4 7,5
ISOINMUNIZACIÓN RHD 21 9,6 7,7
22 11,6 9,7 7,8
1. Gestantes con isoinmunización RhD sin ante- 23 9,9 8,0
cedentes: 24 11,9 10,0 8,2
• Determinación mensual de títulos de anti- 25 10,2 8,3
cuerpos irregulares (test de Coombs indirecto). 26 12,2 10,3 8,5
27 10,5 8,6
• Genotipado RHD fetal cuando el título sea 28 12,5 10,6 8,8
≥ 1/16. 29 10,8 8,9
• Monitorización de PSV de la ACM hasta la 30 12,8 10,9 9,1
31 11,1 9,2
semana 35. Indicación de cordocentesis si PVS
32 13,1 11,2 9,4
> 1,5 MoM para la edad gestacional. 33 11,4 9,5
• Inducción del parto a las 38 de gestación. 34 13,5 11,6 9,7
2. Gestantes con antecedentes previos de feto o re- 35 11,8 9,9
36 13,8 11,9 10,0
cién nacido afecto de enfermedad hemolítica o 37 12,1 10,2
transfusión intrauterina previa o exanguino- 38 14,1 12,2 10,3
transfusión previas: 39 12,4 10,5
• Derivación a un centro hospitalario de nivel 40 14,4 12,5 10,7

III. En estos casos los títulos maternos no son


predictivos del grado de anemia.
• Genotipado RHD fetal a partir de la semana drán en cuenta como alternativas terapéuticas
15 de gestación. y el uso de inmunoglobulinas endovenosas a al-
• Monitorización de PSV de ACM desde las 18 tas dosis y la é.
semanas con un intervalo de 1-2 semanas.
• Indicación de cordocentesis cuando PSV
ACM > 1,5 MoM para la edad gestacional. TRATAMIENTO DE LA ANEMIA
• Indicación de transfusión cuando el hema-
tocrito fetal sea < 30% o la hemoglobina fe- Monitorización de la anemia fetal
tal < 2 SD para la edad gestacional. El método diagnóstico más importante como
3. Gestantes con antecedentes de hidrops fetal o predictor de anemia es la medición de la velocidad
muerte fetal antes de las 20 semanas de gesta- del pico sistólico (PSV) de la arteria cerebral me-
ción. Son los casos más complejos debido a la dia. La PVS > 1,5 MoM en función de la edad ges-
temprana aparición de la anemia fetal. Se ten- tacional tiene una sensibilidad cercana al 100% pa-

145
Anemia fetal: isoinmunización

ra predecir anemia moderada o grave con un 12% rio después de 2 transfusiones y del 0,6% des-
de falsos positivos. El diagnóstico certero de la ane- pués de 3 transfusiones.
mia fetal necesita un método invasivo fetal para
obtenerse sangre fetal. Técnica de transfusión intravascular
1. Generalmente se transfunde la vena umbilical
Indicaciones de cordocentesis a nivel de inserción placentaria o en su porción
1. Feto hidrópico o con ascitis. intrahepática.
2. Estado de hiperdinamia circulatoria con PVS 2. Inicialmente se determina el hematocrito fetal.
> 1,5 MoM para la edad gestacional. 3. Administración de un agente paralizante in-
travascular para provocar el cese de movimiento
Indicación de transfusión intravascular fetal (vecuronium 0,1 mg/kg del peso fetal es-
Hematocrito fetal < 30% o hemoglobina fetal timado).
< 2 SD para la edad gestacional. 4. El total de hematíes transfundidos dependerá
del hematocrito pretransfusión, de la edad ges-
Complicaciones transfusión intravascular tacional y del hematocrito del donante (gene-
El riesgo de complicaciones se estima en el 1-5% ralmente este último suele ser el 70-80%).
pero si el feto está hidrópico el riesgo de complica- 5. Ritmo de infusión de la transfusión 10 ml/min
ciones en relación a la transfusión aumenta al 20%: para evitar bradicardias fetales.
1. Bradicardia fetal. 6. Determinación de hematocrito post-transfu-
2. Hemorragia intraamniótica. sión (se considera exitoso si el hematocrito fe-
3. Hematoma de cordón. tal se remonta por encima del 40%).
4. Corioamnionitis.
5. Muerte fetal.
RESULTADOS NEONATALES
Indicación de transfusiones sucesivas El porcentaje de supervivencia de los embarazos
Generalmente las transfusiones se repiten en in- con isoinmunización tratados con transfusiones in-
tervalos de 3 a 5 semanas hasta la semana 35 y el travasculares es generalmente superior al 85%. El
parto se planificará a las 36-38 semanas. Si existe porcentaje de supervivencia en fetos no hidrópicos
alguna complicación relacionada con la transfu- es superior al 90%; en cambio, en fetos hidrópicos
sión intravascular más allá de las 32 semanas de la supervivencia es aproximadamente del 72%.
gestación se optará por finalizar la gestación. Las Al nacimiento, pueden presentar un cuadro de
transfusiones sucesivas se planificarán en función anemia como consecuencia del paso pasivo de an-
de los siguientes parámetros: ticuerpos maternos. La indicación de exanguino-
1. Hemoglobina fetal conseguida post-transfu- transfusión dependerá del incremento de la bili-
sión. rrubina a niveles que no respondan a fototera-
2. Aparición de ascitis y/o hidrops. pia. En casos de fetos politransfundidos “in utero”
3. Hiperdinamia circulatoria (estudio Doppler): puede desarrollarse una anemia aplásica durante
PVS > 1,5 MoM para la edad gestacional. algunas semanas y hasta meses que requiera el tra-
4. Después de 2 o más transfusiones se estimará tamiento con transfusiones seriadas y eritropoye-
la caída del hematocrito fetal en un 0,9% dia- tina.

146
A. Borrell, R. Mula

El desarrollo neurológico de estos niños es nor- sa de la exposición (Tabla I), aunque en la prácti-
mal en más del 90% de casos. En nuestro medio ca clínica es mejor administrar siempre dosis en-
ya no existen complicaciones como el kernicterus teras. En el post-parto puede estar indicada una
o la sordera por el efecto tóxico de la bilirrubina dosis superior.
en el desarrollo del VIII par craneal.
Protocolo de protección contra
la isoinmunización RhD
PREVENCIÓN DE LA ISOINMUNIZACIÓN RHD 1. RhD negativas durante el embarazo:
Sin inmunoprofilaxis, la isoinmunización RhD • Visita inicial: grupo sanguíneo y RhD. De-
se produce en un 17% de las gestantes RhD negati- terminación de anticuerpos irregulares (Co-
vas. La inmunoprofilaxis consiste en la administra- ombs indirecto).
ción de inmunoglobulinas IgG anti-D hiperinmu- • A las 28 semanas: anticuerpos irregulares. Si
nes que producen la destrucción de los hematíes fe- test negativo, administración de 300 g de in-
tales que han pasado a la circulación materna para munoglobulina IgG anti-D. Sería ideal poder
evitar la síntesis de anticuerpos maternos. realizar genotipado RHD en sangre materna
de rutina y en caso de feto RHD negativo, no
Indicaciones de inmunoprofilaxis es necesario administrar la gammaglobulina.
1. Aborto espontáneo (riesgo de isoinmunización • Parto: RhD feto. Si positivo, administrar 300
del 3,5%). g de inmunoglobulina IgG anti-D a la ma-
2. Aborto inducido (riesgo del 5,5%). dre en las primeras 72 h. En caso de olvido,
3. Embarazo ectópico (riesgo < 1%). se puede administrar hasta un máximo de 28
4. Procedimiento invasivo (amniocentesis, biopsia días postparto, ya que existe todavía un efec-
corion, cordocentesis, cerclaje) (riesgo del 35%). to leve. Si el parto ocurre en menos de 3 se-
5. Reducción multifetal (riesgo bajo-moderado manas de la administración de la inmuno-
no cuantificado). globulina, no es necesaria la repetición de es-
6. Transfusión sanguínea de sangre RhD positiva ta salvo si existe una importante hemorra-
(riesgo del 55-80%). gia fetomaterna intraparto.
7. Contagio mediante agujas (riesgo alto, inde- 2. Si se sospecha hemorragia fetomaterna: reali-
terminado). zar test de Kleihauer o HbF para cuantificar la
8. Hemorragia en la segunda mitad de la gestación. hemorragia fetomaterna y administrar al me-
9. Traumatismo abdominal materno. nos 300 g de inmunoglobulina IgG anti-D por
10. Versión externa (riesgo del 1-6%). cada 30 ml de sangre fetal total (se administra-
11. Tercer trimestre (riesgo del 1-2% entre las 28 rá aproximadamente 10 g de inmunoglobuli-
semanas y el parto). na IgG anti-D por cada 1 ml de hemorragia fe-
12. Parto de un feto RhD positivo (riesgo del 14- to-materna).
17%).

Dosis de inmunoprofilaxis PUNTOS CLAVE


La dosis estándar de inmunoglogulina anti-D 1. En la isoinmunización anti-D existe riesgo de
im es de 300 g. La dosis varía en función de la cau- anemia fetal a partir de un título de 1/16 de

147
Anemia fetal: isoinmunización

Ac irregulares; sin embargo, no existe una bue- 4. Ante la sospecha de anemia fetal, sea o no de cau-
na correlación entre titulación y grado de ane- sa inmune, debe monitorizarse el Doppler de la
mia. ACM de manera seriada. A partir de 1,5 MoM
2. Los Ac irregulares deben determinarse de ma- existe riesgo de anemia moderada o severa.
nera universal en el primer trimestre para de- 5. El diagnóstico de la anemia fetal se establece
tectar también las isoimnunizaciones no an- mediante cordocentesis y hemograma en san-
ti-D. gre fetal.
3. Debe realizarse el genotipado RHD fetal en san- 6. La inmunoprofilaxis de la isoinmunización an-
gre materna para confirmar la isoinmunización ti-D debe incluir administración de gamma-
anti-D. globulina en el tercer trimestre.

148
Citomegalovirus (CMV)
A. Goncé, M. López

DESCRIPCIÓN DEL PATÓGENO zada suele ser asintomática, pero hasta en un 30%
Y EPIDEMIOLOGÍA de los casos puede aparecer un cuadro de fiebre,
CMV es un ADN virus de la familia Herpesvi- astenia y mialgias(3). Aunque se trata de una sin-
ridae que establece un estado de latencia celular tomatología muy inespecífica, es importante tener
después de la primoinfección con capacidad de re- en cuenta la posibilidad de una infección por CMV
activación. La reinfección por diferentes cepas tam- en las gestantes que presenten fiebre sin focalidad
bién es posible. aparente, linfocitosis e incremento de las transa-
CMV se transmite por contacto próximo a tra- minasas.
vés de la saliva, orina, secreciones vaginales, semen,
por vía transplacentaria y también por la leche ma-
terna. CMV produce una de las infecciones congé- INFECCIÓN CONGÉNITA POR CMV
nitas más frecuentes con una incidencia de infección
materna primaria del 1-1,5% y una prevalencia es- Transmisión perinatal
timada de neonatos infectados de entre el 0,6 y el Infección materna primaria. Durante la gesta-
0,7%(1). De estos, un 17-20% presentarán secuelas ción se produce una transmisión vertical global
inmediatas o a largo plazo. CMV es la primera cau- del 40%, con un aumento del riesgo a mayor edad
sa de sordera neurosensorial en la infancia(1). gestacional(4) (Tabla I). Hay casos descritos de trans-
La seroprevalencia en gestantes de nuestro entor- misión vertical en infecciones maternas primarias
no es aproximadamente del 60%, aunque no hay ci- pregestacionales hasta cuatro meses previos a la
fras recientes debido a la ausencia de cribado siste- gestación, pero con una transmisión vertical más
mático gestacional(2). La seroprevalencia se va incre- baja (8%)(5).
mentando con la edad de la gestante y también es más La afectación fetal más grave y las secuelas neu-
elevada en mujeres procedentes de países en vías de rológicas se producen sobre todo cuando la infec-
desarrollo y en mujeres con hijos en edad escolar. ción fetal ocurre durante las primeras 24 semanas
y el primer trimestre es especialmente crítico(6).
Antes de las 24 semanas se producen los fenóme-
CLÍNICA MATERNA nos de crecimiento y migración neuronal y el vi-
El periodo de incubación es variable, de entre rus puede producir lesiones destructivas. Más allá
3 y 12 semanas. La primoinfección en la embara- de las 24 semanas podrá producir lesiones infla-

149
Citomegalovirus (CMV)

TABLA I. Infección materna primaria: transmisión fetal • Microcefalia, convulsiones, hipotonía y letar-
en función de la edad gestacional gia, coriorretinitis y atrofia óptica.
De estos niños, el 50-60% presentarán secuelas
Infección primaria 1T Æ 30-35%
importantes:
(Transmisión 40-45%) 2T Æ 40-45%
3T Æ 70-75% • Retraso psicomotor (45-90%).
Pregestacional (4 meses) Æ 8% • Déficit auditivo neurosensorial (30-65%) que
puede ser de aparición tardía.
• Déficit visual (15-30%).
matorias menos graves y fenómenos de interfe-
rencia con la mielinización. El 85-90% de los neonatos son asintomáticos
Infección materna recurrente. Debido a la pre- al nacimiento
sencia de inmunidad previa, las infecciones ma- De estos, un 10-15% pueden presentar secue-
ternas no primarias (reactivación o reinfección) las de aparición tardía, principalmente defectos
tienen un riesgo de transmisión placentaria muy auditivos (11-12%) y retraso psicomotor (6,5%).
bajo (1-3%) y probablemente también menor ries-
go de afectación fetal. No obstante, se ha visto que
la infección recurrente por CMV también puede DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN
ser causa de infecciones congénitas graves. Las in- MATERNA
fecciones recurrentes son la principal causa de in-
fección congénita en los países con elevada sero- Cribado gestacional
prevalencia en la edad genésica(7). Las principales sociedades científicas no reco-
Las infecciones neonatales adquiridas en el ca- miendan el cribado serológico gestacional. Las con-
nal del parto o a través de la lactancia materna secuencias negativas de su implementación (an-
no tienen efecto en el desarrollo neurológico pos- siedad e interrupciones iatrogénicas de la gesta-
terior, pero hay casos descritos de sepsis en pre- ción) superarían a la posibilidad de evitar secue-
maturos de menos de 32 semanas(8). las importantes. No existe en la actualidad una va-
cuna preventiva y hay escasa evidencia sobre la uti-
Manifestaciones clínicas de la lidad del tratamiento intrauterino y sobre las me-
infección congénita didas de prevención primaria aplicadas durante la
gestación. Además, el diagnóstico serológico mu-
El 10-15% de los neonatos son sintomáticos chas veces es poco claro en cuanto al momento de
al nacimiento la infección materna y existe la posibilidad de in-
La infección por inclusiones citomegálicas in- fecciones recurrentes que en la mayoría de casos
cluye principalmente afectación del sistema reti- no se van a poder diagnosticar con la serología ma-
culoendotelial y sistema nervioso central (SNC), terna.
y la prematuridad es frecuente. La manifestacio- Las indicaciones para solicitar la determinación
nes clínicas más frecuentes son: serológica materna son:
• Plaquetopenia, anemia, ictericia, hepatoesple- • Clínica compatible con infección materna.
nomegalia. • Hallazgo de marcadores ecográficos compati-
• Restricción de crecimiento intrauterino. bles con infección fetal.

150
A. Goncé, M. López

Diagnóstico serológico de • ADN viral en sangre materna: en infecciones


infección materna primaria primarias agudas, la detección de ADN viral en
• Seroconversión durante la gestación. sangre materna puede ser positiva.
• IgG e IgM de CMV positivas: este hallazgo no
confirma una infección primaria durante la ges- Diagnóstico serológico de infección
tación. Puede tratarse de una infección primaria materna secundaria
preconcepcional ya que la IgM tiene un patrón La IgM se positiviza en menos del 10% de los
de descenso rápido, pero ocasionalmente puede casos(9) y, por tanto, el diagnóstico de reinfección
persistir positiva durante más de 12 meses(9). La o reactivación es muy difícil. Se ha de valorar tam-
presencia de una IgM positiva en una paciente bién esta posibilidad en los casos de anomalía eco-
asintomática obliga a solicitar el test de avidez de gráfica compatible, en gestantes con IgG positiva
la IgG, que puede ayudar a conocer el momen- e IgM negativa.
to de la infección con una sensibilidad aceptable.
Es importante realizar esta determinación en un
laboratorio virológico con experiencia, ya que DIAGNÓSTICO DE TRANSMISIÓN FETAL
existe mucha variabilidad entre los reactivos diag- La amniocentesis con amplificación del ADN
nósticos existentes(10). La interpretación de la avi- viral en líquido amniótico mediante técnicas de
dez de la IgG será la siguiente: reacción en cadena de la polimerasa (PCR) es el
– Avidez elevada (≥ 0,8): infección de > de 3 método de elección. Debido al especial tropismo
meses. del virus por el riñón fetal, la PCR en líquido am-
– Avidez baja (< 0,2): infección de < 3 meses. niótico tiene una sensibilidad (90-95%) y una es-
– Avidez intermedia (0,2-0,8): infección de pecificidad (95-100%) muy elevadas, siempre y
tiempo indeterminado. cuando la amniocentesis se realice como mínimo
• IgG positiva e IgM negativa: indica una infec- 6-7 semanas después de la posible infección ma-
ción materna primaria pasada hace más de 2-3 terna y siempre después de las 21 semanas de ges-
meses. Hay que tener en cuenta que una IgG tación, momento a partir del cual el feto excreta
positiva con IgM negativa en el contexto de un una elevada cantidad de virus por la orina(12).
hallazgo de marcadores ecográficos sugestivos Indicaciones de la amniocentesis:
de infección fetal, no puede descartar una in- • Sospecha serológica de infección materna du-
fección primaria al inicio de la gestación. En rante la gestación.
nuestra experiencia, en el momento del diag- • Marcadores ecográficos de afectación fetal con
nóstico de los marcadores ecográficos, la IgM serología materna positiva (IgG positiva con
materna es negativa en más del 50% de los ca- IgM positiva o negativa).
sos (datos pendientes de publicar).
Se ha visto que la realización de la serología en Interpretación del resultado
laboratorios de referencia y una correcta inter- ADN-CMV indetectable en líquido amniótico:
pretación de los resultados por especialistas clí- descarta la infección fetal y permite tranquilizar a
nicos con experiencia, disminuye de forma sig- la paciente. No obstante, debido a la remota po-
nificativa la ansiedad materna y las interrup- sibilidad de un resultado falsamente negativo, se
ciones de la gestación de fetos no infectados(11). recomienda añadir algún control ecográfico su-

151
Citomegalovirus (CMV)

plementario (a las 28 y 36 semanas, por ejemplo) – Microcefalia.


y confirmar la ausencia de infección congénita – Aumento del espacio subaracnoideo (micro-
en el recién nacido con una determinación de encefalia).
ADN-CMV en orina en las dos primeras semanas – Pseudoquistes periventriculares.
de vida. – Cuerpo calloso hipoplásico.
ADN-CMV positivo en líquido amniótico: de- – Quistes de fosa posterior, cerebelo hipoplási-
muestra que se ha producido infección fetal. La co.
cuantificación de la carga viral en líquido amnió- – Lesiones destructivas y hemorrágicas.
tico no parece relacionarse con el pronóstico fetal. – Anomalías de la sulcación y de las circunvo-
La conducta posterior irá dirigida a la detección luciones cerebrales.
de marcadores de afectación fetal que puedan ayu- • Otros marcadores de infección sintomática:
dar a determinar el pronóstico neonatal. – Restricción del crecimiento intrauterino.
– Ascitis, hidrops.
– Hiperecogenicidad intestinal, focos hipere-
DIAGNÓSTICO DE AFECTACIÓN FETAL cogénicos hepáticos, hepatomegalia.
– Cardiomegalia.
Marcadores ecográficos – Oligoamnios.
Únicamente están presentes en el 10-15% de los – Placentomegalia.
fetos infectados que probablemente serán los fetos – Signos de anemia fetal (Doppler de la arteria
sintomáticos. Acostumbran a ser defectos progre- cerebral media con velocidad sistólica má-
sivos y pueden no aparecer hasta el tercer trimestre. xima superior a 1,5 MoM).
La sensibilidad de la ecografía dirigida para la de-
tección de lesiones producidas por CMV, incluidas Marcadores biológicos y
las lesiones del SNC, es elevada y puede llegar al 80- virológicos de afectación en sangre fetal
85% en ecografías realizadas en centros de referen- Estudios recientes han intentado valorar en san-
cia(13). La resonancia magnética (RM) intracraneal gre fetal los marcadores biológicos y virológicos
realizada a partir de las 30 semanas es una técnica que se encuentran alterados en el recién nacido
complementaria y mejora el diagnóstico de las al- con enfermedad por inclusiones citomegálicas, pa-
teraciones de la sulcación y del cerebelo, y permite ra poder hacer una predicción del pronóstico del
el diagnóstico de alteraciones de la sustancia blan- feto infectado, sobretodo en los casos con ausen-
ca(13,14). La RM puede en ocasiones informar de ano- cia de marcadores ecográficos de afectación seve-
malías leves de pronóstico incierto(15). ra del SNC(17,18).
• Marcadores de SNC: son marcadores de apari- Los marcadores en sangre fetal que mejor se han
ción tardía y de mal pronóstico(16). El hallazgo correlacionado con un feto/recién nacido sinto-
de anomalías del SNC se asocia en general a se- mático son:
cuelas graves en el recién nacido: • Plaquetopenia, sobretodo severa (< 70.000/µl).
– Ventriculomegalia, hidrocefalia. • β2 microglobulina elevada (≥11,5 mg/l).
– Calcificaciones periventriculares, focos eco- • IgM CMV positiva.
génicos intraparenquimatosos, vasos hipere- • ADNemia positiva y elevada (>30.000 co-
cogénicos en los tálamos. pias/ml).

152
A. Goncé, M. López

ASESORAMIENTO Y SEGUIMIENTO EN Sospecha de infección


materna per CMV
CASO DE INFECCIÓN FETAL CONFIRMADA
PCR DNA CMV LA
EN LÍQUIDO AMNIÓTICO (Fig. 1) > 21 s/> 6 s de la infección

En caso de infección fetal confirmada por de-


Indetectable Positivo Pronóstico variable
tección de ADN del CMV en líquido amniótico Buen pronóstico
y en ausencia de marcadores ecográficos de afec- Eco dirigida / 2 sem RM SNC fetal
Neurosono / 4 sem > 30 s
tación fetal, se requiere una evaluación exhausti-
va para determinar el pronóstico neonatal. Debe Patológica Normal
Anom. leves SNC
Normal
Anom. leves
Patológica
Mal pronóstico Anom. extra SNC Anom. Px incierto Mal pronóstico
tenerse en cuenta que únicamente el 17-20% de
Plaquetopenia
los fetos infectados presentarán secuelas postna- Proponer
Cordocentesis Beta2-microglobulina ↑
IgM CMV +
tales a corto o a largo plazo. En el momento del DNAemia CMV ↑

diagnóstico, el riesgo de mal pronóstico irá rela- Normal Alterada


Pronóstico favorable Mal pronóstico
cionado con el trimestre en el que se produjo la
infección fetal: el riesgo será muy bajo en infec- Figura 1. Algortimo de actuación en caso de sospecha de infec-
ciones maternas ocurridas después de las 26 se- ción materna/fetal por CMV (PCR: reacción en cadena la po-
manas, pero el riesgo será de hasta un 15-20% en limerasa; LA: líquido amniótico; SNC: sistema nervioso central;
RM resonancia magnética nuclear; Px: pronóstico).
infecciones del primer y segundo trimestre. De-
be informarse a la paciente de la necesidad de se-
guimiento y de la posible aparición tardía de los
marcadores ecográficos compatibles con afecta- una cordocentesis para valorar los marcadores bio-
ción fetal(19). No obstante, con la ley actual vigente lógicos y virológicos fetales. Antes de indicar el pro-
que permite las interrupciones tardías en los ca- cedimiento deberá valorarse el riesgo/beneficio del
sos de afectación fetal grave diagnosticados en mismo, teniendo en cuenta el riesgo de pérdida fe-
etapas avanzadas de la gestación, el diagnóstico tal de la cordocentesis (alrededor del 3%) y la evi-
de una infección fetal en líquido amniótico con dencia científica limitada de la utilidad de los re-
ausencia de anomalías ecográficas no justifica una sultados en sangre fetal.
interrupción de la gestación. A pesar de que un estudio puso de manifiesto
El seguimiento que proponemos en caso de una que la utilización de inmunoglobulina hiperin-
infección fetal por CMV es el siguiente: mune antiCMV administrada por vía endoveno-
• Ecografía cada 2 semanas. sa a la madre disminuía el riesgo de transmisión
• Neurosonografía cada 4 semanas. fetal y de afectación de los fetos infectados(20), la
• RM intracraneal a las 30-32 semanas evidencia científica en el momento actual es insu-
En ausencia de marcadores del SNC al final de ficiente para recomendar este tipo de tratamiento
la gestación, el pronóstico de secuelas neurológi- en las pacientes infectadas.
cas, excepto el déficit auditivo, es bueno. Queda
por definir el pronóstico de marcadores sutiles y
aislados que no necesariamente se asocian a un PREVENCIÓN PRIMARIA DE LA INFECCIÓN
mal pronóstico(15). POR CMV DURANTE EL EMBARAZO
En caso de pruebas de imagen normales o no En todas las gestantes, especialmente las sero-
concluyentes, puede recurrirse a la realización de negativas conocidas pero también en las gestantes

153
Citomegalovirus (CMV)

inmunes por el riesgo de infección recurrente, es ponder a una infección adquirida intraparto o
importante recordar las medidas higiénicas profi- postnatalmente.
lácticas para prevenir la infección por CMV du- La identificación de un recién nacido con in-
rante la gestación. Algún estudio prospectivo ha fección congénita por CMV hace necesario un se-
demostrado que las recomendaciones higiénicas guimiento a largo plazo para la detección de posi-
en el primer trimestre son efectivas(21). bles secuelas auditivas y así hacer posible una in-
Los niños menores de 3 años son la principal tervención precoz.
fuente de contagio. El lavado frecuente de las ma-
nos con agua caliente y jabón después del contac-
to con saliva y orina (cambio de pañales, alimen- PUNTOS CLAVE
tación, tocar juguetes, etc.) y evitar el contacto ín- 1. En el estado actual de conocimiento y en au-
timo con niños pequeños (besos en la boca, com- sencia de tratamiento, el cribado universal del
partir cubiertos y vasos, etc.) son las medidas más CMV durante la gestación no está indicado. Su
efectivas. aplicación comportaría más perjuicios que be-
neficios. Es importante solicitar la serología a
las gestantes con sintomatología compatible o
CONSEJO PRECONCEPCIONAL ante la evidencia de marcadores ecográficos su-
CON EL ANTECEDENTE DE INFECCIÓN gestivos de afectación fetal.
POR CMV 2. La prevención primaria puede tener utilidad y
En las pacientes con el antecedente de parto o por tanto es aconsejable dar a las embarazadas
aborto de un feto infectado se recomienda un tiem- recomendaciones sobre las medidas higiénicas
po de espera de 6 meses hasta intentar una nueva preventivas, especialmente a las madres de ni-
gestación(5). ños menores de 3 años.
El seguimiento de la IgM hasta su negativiza- 3. La interpretación serológica puede ser comple-
ción no es una buena herramienta ya que puede ja. En casos dudosos es preferible remitir a la
tener un patrón de descenso muy variable (2-3 me- paciente a un centro especializado.
ses o superior a 1 año)(9). 4. La PCR en líquido amniótico presenta una ex-
celente sensibilidad y especificidad para el diag-
nóstico de infección fetal.
DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN 5. La ecografía y la RM en manos expertas pre-
CONGÉNITA EN EL RECIÉN NACIDO sentan una elevada sensibilidad para la detec-
Y SEGUIMIENTO ción de infecciones fetales sintomáticas, pero
La sospecha o el diagnóstico de una infección las anomalías del SNC pueden aparecer de for-
congénita por CMV durante la gestación ha de ma tardía.
constar en la historia pediátrica ya que se ha de 6. Los marcadores biológicos y virológicos en
confirmar en el recién nacido durante las dos pri- sangre fetal pueden ser útiles para definir me-
meras semanas de vida. La técnica más sensible es jor a aquellos fetos infectados y sintomáticos
la detección de ADN-CMV en la orina o en la sa- pero sin afectación ecográfica o con afecta-
liva neonatal(22). Una primera detección del virus ción leve, aunque faltan estudios para confir-
a partir de las 3 semanas de vida puede corres- marlo.

154
A. Goncé, M. López

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155
Toxoplasmosis
A. Goncé, M. López

DEFINICIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA gestaciones(7) y la incidencia de infección congé-


La toxoplasmosis está causada por el Toxoplas- nita es de aproximadamente 0,3 por 1.000 naci-
ma gondii, parásito protozario intracelular. mientos.
La infección se adquiere principalmente por
la ingestión de carne o productos cárnicos crudos
o poco cocinados que contengan quistes o taqui- INFECCIÓN CONGÉNITA POR
zoítos. El agua, la tierra o los vegetales contami- TOXOPLASMA
nados son la segunda fuente de infección, mien- La transmisión fetal del parásito se produce en
tras que el contacto con gatos domésticos se con- mujeres que adquieren la infección durante la ges-
sidera un factor de bajo riesgo(1-3). El periodo de tación. Excepcionalmente, se puede producir una
incubación es variable, de entre 5 y 23 días. reactivación de la infección con la consiguiente
La biología del parásito condiciona una alta va- transmisión vertical en gestantes crónicamente in-
riabilidad en la prevalencia de la infección en los di- fectadas en situación de inmunosupresión(9-11).
ferentes países e incluso dentro de un mismo país, El riesgo de transmisión vertical, así como la
según el área geográfica y las condiciones ambien- gravedad de la afectación fetal está en relación con
tales y socioculturales(4-6). La seroprevalencia en mu- la edad gestacional en la que se produce la pri-
jeres en edad fértil ha disminuido en España de for- moinfección materna (Tabla I). El riesgo de trans-
ma importante en los útimos años. Estudios re- misión aumenta de forma importante a medida
cientes muestran una seroprevalencia global en ges- que avanza la gestación, pero en cambio, el ries-
tantes del 20-22%, pero con variaciones importan- go de afectación fetal es mayor si la infección fetal
tes en función de la edad de las gestantes y del país se produce durante el primer trimestre y va dis-
de origen. Así la seroprevalencia en gestantes naci- minuyendo posteriormente (Tabla I)(9,12-13).
das en España es del 12-16% mientras que aumen- El riesgo de transmisión vertical cuando la in-
ta hasta el 40-50% en las gestantes inmigrantes pro- fección se produce en el periodo preconcepcional
cedentes del continente africano, de Latinoamérica es excepcional.
o del este de Europa(7,8). Neonatos infectados sintomáticos al nacimiento:
La frecuencia de primoinfección materna en el 15% de los fetos infectados son sintomáticos al
nuestro medio se calcula que es del 0,7-1 por 1.000 nacimiento y provienen principalmente de infec-

157
Toxoplasmosis

TABLA I. Transmisión vertical y afectación fetal en fun- del 90% de los casos. Puede ser totalmente asin-
ción de la edad gestacional tomática o cursar como un síndrome pseudogri-
pal. La manifestación clínica más frecuente es la
Edad Transmisión Afectación
gestacional vertical fetal aparición de adenopatías cervicales. La linfadeno-
patía puede asociarse con cefalea, malestar, fatiga,
< 14 semanas <15% 60%
mialgias y fiebre(10,13,15).
14-28 semanas 15-55% 25%
>28 semanas 55-80% 15%

DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN MATERNA


ciones adquiridas antes de las 24 semanas, excep- Y CRIBADO GESTACIONAL
to la afectación ocular que también se puede pro- Para diagnosticar la infección por toxoplasma
ducir en infecciones adquiridas durante el tercer en la gestación en un estadio inicial, antes de que
trimestre. La tétrada de Sabin (toxoplasmosis con- se produzca la transmisión del parásito al feto, es
génita en fase de secuelas) incluye: hidrocefalia, necesario identificar a las embarazadas seronega-
calcificaciones intracraneales, coriorretinitis y con- tivas, que son las que tienen riesgo de sufrir una
vulsiones, pero es muy poco frecuente. Sólo el 4% primoinfección. Tanto el cribado como el diag-
de los recién nacidos sintomáticos presentarán se- nóstico de la toxoplasmosis materna se llevan a ca-
cuelas neurológicas permanentes, muerte o ceguera bo mediante pruebas serológicas que permiten de-
bilateral(13). Signos más inespecíficos pueden ser: terminar la presencia de anticuerpos específicos
exantema, ictericia, hepatoesplenomegalia, ane- frente al Toxoplasma.
mia, trombocitopenia, cardiomegalia y microof- El cribado universal de las gestantes es cuestio-
talmía. Los signos clínicos al nacimiento no nece- nable debido a que no es coste-efectivo; la inci-
sariamente comportan un deterioro funcional. dencia de toxoplasmosis congénita es muy baja, las
Neonatos infectados asintomáticos al nacimien- características demográficas de la población son
to: el 85% de los neonatos con infección congé- muy diferentes, resulta difícil la interpretación de
nita son asintomáticos al nacer, pero una propor- los tests diagnósticos y la efectividad del trata-
ción importante de éstos (20-30%) puede presen- miento es muy controvertida(15-18). El último Do-
tar afectación ocular a largo plazo, sobretodo co- cumento de Consenso de la SEGO de 2002(19) con-
riorretinitis, que en general no condiciona defec- sidera que el cribado prenatal de la toxoplasmosis
tos importantes de la visión. Esto no es extensi- no cumple los criterios necesarios para ser aplica-
ble a otros países como Sudamérica donde debi- do, pero en la práctica clínica la serología de toxo-
do a la existencia de genotipos más virulentos del plasma se solicita de forma trimestral a la mayo-
parásito, la infección congénita produce secuelas ría de gestantes seronegativas.
oculares mucho más graves(14). Seroconversión durante la gestación: será indi-
cativo de infección aguda y deberá iniciarse trata-
miento inmediatamente(13,20).
MANIFESTACIONES CLÍNICAS DURANTE La IgG se positiviza a las 2 semanas de la infec-
LA GESTACIÓN ción, tiene unos títulos ascendentes durante 6-8
La infección aguda por Toxoplasma en pacien- semamas, y persiste toda la vida positiva. Los títu-
tes inmunocompetentes pasa inadvertida en más los de IgM aparecen a las 2 semanas y pueden per-

158
A. Goncé, M. López

TABLA II. Interpretación de la avidez de la IgG TABLA III. Pauta de tratamiento recomendado en fun-
ción del resultado en líquido amniótico
Avidez IgG Tiempo de infección
Transmisión vertical Tratamiento
Baja (< 20%) Probable infección reciente <12 s (ADN-toxoplasma en
Intermedia (20-30%) Probable infección >12 s líquido amniótico)
Alta (> 30%) Confirma infección >20 s
Negativo Espiramicina 1 g/8 h
toda la gestación
sistir positivos meses o años, por lo que se trata de Positivo Espiramicina 1 g/8 h
alternando cada 3 semanas
una infección en la que resulta difícil establecer
Sulfadiacina 3 g/24 h +
el diagnóstico de infección aguda. pirimetamina 50 mg/24 h
Detección de una IgM positiva en la primera (> 14 semanas) +
ácido folínico 15 mg/24 h
muestra: no permite precisar el momento de la in-
(hemograma semanal)
fección, independientemente de los títulos de IgG.
La determinación de una IgM positiva puede ser
un falso positivo o tratarse de una infección anti- infección al feto. La primera opción para el diag-
gua, por lo que se debe confirmar con una segun- nóstico de transmisión vertical es la detección me-
da muestra(20-24). Se deberá solicitar también un es- diante PCR en líquido amniótico del ADN del To-
tudio de avidez de la IgG ya que puede resultar útil xoplasma gondii. Este método ha desplazado al cul-
para establecer la cronología de la infección, con tivo del parásito y a la IgM en sangre fetal. El lí-
un margen de error aceptable (Tabla II). La avidez quido amniótico es el mejor medio biológico pa-
de la IgG es el parámetro que mejor se correlacio- ra el diagnóstico de infección fetal(35-37). La sensi-
na con el inicio de la infección materna(25-29). Re- bilidad de la PCR en líquido amniótico es del 70-
quiere una técnica precisa y un laboratorio con ex- 80% y la especificidad cercana al 100%(35). Debido
periencia(31,34). Las infecciones antiguas presen- a factores poco conocidos, parece que la sensibili-
tan grados de avidez elevados y en cambio, los an- dad del procedimiento varía en función de la edad
ticuerpos de baja avidez indican la posibilidad de gestacional, con una sensibilidad máxima cuando
una infección en los últimos 3 o 4 meses, aunque la infección se produce entre las 17 y las 21 sema-
se ha visto que los anticuerpos de baja avidez pue- nas(35). Con las nuevas técnicas de PCR a tiempo
den persistir durante periodos más prolongados(13). real, que permiten además cuantificar la carga pa-
Ante el diagnóstico de una IgM positiva es re- rasitaria, la sensibilidad diagnóstica alcanza el 92%
comendable esperar el resultado de la avidez de la y al parecer sin diferencias significativas en fun-
IgG, e iniciar el tratamiento materno sólo si se sos- ción del trimestre gestacional(36).
pecha infección durante la gestación. Es muy importante tener en cuenta que para
obtener la máxima sensibilidad diagnóstica de la
amniocentesis es imprescindible:
DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN FETAL • No realizar la amniocentesis nunca antes de las
Cuando se confirma que una gestante ha sufri- 18 semanas.
do una infección por Toxoplasma o cuando exis- • No realizar la amniocentesis antes de que ha-
ta una sospecha serológica fundada, será impor- yan transcurrido por lo menos 4 semanas des-
tante saber si se ha producido la transmisión de la de la infección materna.

159
Toxoplasmosis

Figura 2. Ecografía: Ventriculomegalia severa en feto con to-


xoplasmosis.

se el estudio con una resonancia magnética (RM)


intracraneal a partir de las 30 semanas (Fig 1).
Figura 1. RM: ventriculomegalia leve en feto con toxoplas-
mosis.
Marcadores ecográficos de afectación fetal
La ecografía no es un procedimiento eficaz pa-
Interpretación del resultado ra el diagnóstico, aunque permite detectar algunas
(PCR en líquido amniótico) manifestaciones graves de afectación fetal, pero és-
• ADN-toxoplasma indetectable: el riesgo de in- tas suelen aparecer de forma tardía. La toxoplas-
fección fetal es poco probable, por lo que se pue- mosis congénita en la mayoría de los casos suele
de tranquilizar a la paciente. Sobre todo en in- cursar de forma subclínica, y por tanto las lesio-
fecciones del primer trimestre, debido a la ba- nes fetales detectables ecográficamente se presen-
ja transmisión vertical, el valor predictivo ne- tan únicamente en los casos más graves, que son
gativo de una PCR es próximo al 100%. A pe- los menos frecuentes(38-39).
sar de todo, debido a la posibilidad de un re- Las imágenes más características son la hidro-
sultado falsamente negativo, es recomendable cefalia y las calcificaciones cerebrales. Las calcifi-
continuar el tratamiento con espiramicina has- caciones aisladas no siempre indican que el feto
ta el parto, hacer un seguimiento ecográfico sea sintomático. La hidrocefalia es la lesión más
mensual y también un seguimiento pediátrico frecuente en casos de afectación fetal grave (Fig.
del recién nacido. 2). También pueden aparecer focos de necrosis pa-
• ADN-toxoplasma positivo: indica que se ha pro- renquimatosa calcificados que ecográficamente se
ducido infección fetal y se añadirá tratamiento manifiestan como focos hiperrefringentes nodu-
con sulfadiazina + pirimetamina. La ecografía lares de distribución periventricular o intrapa-
es imprescindible en el seguimiento de estos fe- renquimatosa. La afectación grave periventricular
tos, especialmente la evaluación neurosonográ- multifocal puede ser causa de porencefalia(39).
fica. Deberá realizarse un seguimiento ecográ- Las lesiones extracraneales son menos frecuen-
fico mensual y a ser posible deberá completar- tes e incluyen ascitis, hidrops fetal, hepatoesple-

160
A. Goncé, M. López

nomegalia, calcificaciones intrahepáticas y engro- los fetos infectados, por su mayor capacidad
samiento placentario. No hay evidencia de asocia- de alcanzar el compartimiento fetal. Ningún
ción con restricción del crecimiento intrauterino. estudio ha podido demostar una disminu-
En casos de infección fetal confirmada en lí- ción de las lesiones leves ni de la coriorreti-
quido amniótico, el seguimiento ecográfico debe nitis en edad escolar en los hijos de madres
ser realizado por ecografistas experimentados e in- tratadas, aunque se ha demostrado una re-
cluir una neurosonografía mensual. La neuroso- ducción de las secuelas neurológicas graves y
nografía y la RM son técnicas complementarias(40). de muerte postnatal(41-47). La pirimetamina es
un fármaco potencialmente teratógeno, por
lo que no debe utilizarse antes de las 14 se-
TRATAMIENTO manas de gestación. Deberá realizarse un he-
Las recomendaciones terapéuticas son las si- mograma semanal por riesgo de aplasia me-
guientes(41): dular. Una vez acabada la sesión de pirime-
• Siempre que haya sospecha serológica funda- tamina más sulfadiazina, el ácido folínico de-
mentada de infección materna durante la ges- be continuarse una semana más.
tación: La eficacia del tratamiento en la infección fe-
- Espiramicina 1 g/8 h vía oral hasta el final de tal ha sido muy cuestionada y hasta el momento
la gestación. La espiramicina tiene una capa- actual ninguna revisión sistemática(42), incluida la
cidad baja para atravesar la placenta, pero el Cochrane, han podido demostrar que exista evi-
tratamiento tendrá como objetivo reducir la dencia científica de su utilidad(46). En cualquier ca-
posibilidad de que se produzca la infección so, la eficacia del tratamiento dependerá de dife-
fetal. Su efectividad es controvertida, pero rentes factores, como son la edad gestacional en la
existe una evidencia débil de que su admi- que se produce la infección, el intervalo con el co-
nistración de forma precoz en las 3 primeras mienzo del proceso materno y de si el feto está ya
semanas después del contagio materno dis- infectado o no cuando se inicia.
minuye la transmisión respecto a un inicio Nuevas drogas como la atovacuona y la azitro-
más tardío del tratamiento(42). Los efectos se- micina han sido evaluadas en el modelo animal
cundarios de la espiramicina son poco fre- con cierto éxito, pero su utilización no está reco-
cuentes, pero pueden incluir náuseas, vómi- mendada de momento en la gestante infectada(48).
tos, anorexia y diarrea.
• Si el resultado de PCR-toxoplasma en LA es po-
sitivo, se sustituye cíclicamente cada 3 semanas, MEDIDAS DE PREVENCIÓN PRIMARIA
espiramicina por: Aunque hay pocos datos que demuestren que
- Pirimetamina 50 mg/24 h vía oral más sulfa- las medidas de prevención primaria sean eficaces
diacina 3 g/24 h vía oral y ácido folínico 15 para disminuir la infección materna, la mayoría de
mg/día (para contrarrestar los efectos inhi- documentos de consenso consideran que las ges-
bidores sobre el ácido fólico). Aunque no se tantes seronegativas deben recibir la información
ha demostrado una mayor efectividad de es- sobre las medidas higiénicas que permiten dismi-
tos dos fármacos respecto a la espiramicina, nuir el riesgo de exposición y de infección duran-
en general se recomienda este tratamiento en te la gestación(49-51). En países donde no se realiza

161
Toxoplasmosis

el cribado sistemático, estas medidas informativas interpretación serológica y las determinaciones


deberán ser para todas las gestantes. El American en centros referenciales pueden hacer modificar
College of Obstetricians and Gynecologists esta- el pronóstico y el seguimiento de la gestación.
bleció un nivel de evidencia C para estas reco- 4. No existe evidencia clara de que el tratamiento
mendaciones, que incluyen(13): materno disminuya la transmisión fetal. No obs-
1. Cocinar la carne adecuadamente sin que que- tante, existe una evidencia débil de que un ini-
de “roja” por dentro. cio precoz del tratamiento (en las primeras 3
2. La carne curada o ahumada puede ser conta- semanas) sí que lo pueda conseguir.
giosa. 5. El diagnóstico de infección fetal en líquido am-
3. Evitar el contacto con mucosas cuando se ma- niótico tiene una fiabilidad elevada, sobre todo
nipula carne cruda. con las técnicas más recientes de amplificación
4. Lavado cuidadoso de las manos después del con- del ADN a tiempo real. Es recomendable ofre-
tacto con carne cruda. cer una amniocentesis a todas las gestantes con
5. Limpiar bien los utensilios y superficies de la infección en cualquier trimestre de la gestación.
cocina en contacto con carne cruda. 6. En caso de infección fetal confirmada, no exis-
6. Evitar el contacto con materiales potencialmente te evidencia clara de que el tratamiento intrau-
contaminados con heces de gato y también al terino disminuya las secuelas neonatales excepto
realizar trabajos de jardinería. Si no se pueden las secuelas neurológicas muy graves.
evitar, utilizar guantes. 7. La prevención primaria puede tener utilidad y,
7. Lavar las frutas y vegetales antes de consumirlos. por tanto, es aconsejable dar a las embarazadas
8. Evitar beber agua potencialmente contamina- no inmunes recomendaciones sobre las medi-
da con ovoquistes. das higiénicas preventivas.
La congelación a menos de 20˚C bajo cero du-
rante por lo menos 24 horas parece ser efectiva pa-
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una primera analítica requiere siempre una con- Whitelaw A, Eskil A, et al. Incidence of Toxoplasma
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164
Otras infecciones emergentes
M. López, A. Goncé

Con el concepto de enfermedades infecciosas te en América Latina. Es una enfermedad endé-


emergentes se designa a enfermedades conocidas mica de zonas continentales del norte, centro y
en cuanto a sus agentes causales, pero que recien- sur de América (excepto islas del Caribe). La ta-
temente han adquirido carácter epidémico, mayor sa de prevalencia es muy variable dependiendo del
gravedad o extensión en regiones en las que an- país. A causa de los movimientos migratorios, la
tes no existían o existían con mucha menor fre- enfermedad de Chagas se ha extendido como en-
cuencia. Con la llegada de población inmigrante a fermedad no endémica en América del Norte y
nuestro país en los últimos años, han aparecido Europa. Según estudios realizados en Cataluña, la
ciertas enfermedades infecciosas, como sería el ca- prevalencia de enfermedad de Chagas en mujeres
so de la enfermedad de Chagas. La infección lué- embarazadas latinoamericanas es del 3,4%, lle-
tica ha visto aumentada su incidencia en nuestro gando al 27,7% en gestantes procedentes de Boli-
medio, también en la población gestante. En otros via(3,4).
casos, como en la hepatitis B, la infección puede Las principales vías de transmisión son:
presentarse con formas clínicas distintas a las que • Vectorial: a través de la picadura de triatomas
predominaban en nuestro medio. En el siguiente hematófagos (conocidos como chinche o vin-
capítulo se van a detallar las principales caracte- chuca), que trasmiten el parásito cuando de-
rísticas de cada una de ellas, así como los aspectos fecan sobre la piel o las mucosas al picar. El pa-
relacionados con la gestación y la repercusión pa- rásito se introduce en el organismo por cual-
ra el feto o el recién nacido. quier solución de continuidad de la piel o las
mucosas cuando el individuo se toca o rasca
la picada.
ENFERMEDAD DE CHAGAS • Vía sanguínea: por transfusión de sangre y tras-
plante de órganos contaminados.
Epidemiología y mecanismos de transmisión • Transmisión vertical: la tasa de transmisión es
Es una zoonosis provocada por el parásito Try- alrededor del 4-7% en nuestro medio, alcan-
panosoma cruzi, causante de la tripanosomiasis zando el 12% en algunos países de origen(5).
Americana. Existen entre 8 y 11 millones de per- En nuestro medio, dado que no existe el vector
sonas infectadas a nivel mundial(1, 2), la mayor par- (insecto chinche o vinchuca) y se realiza un cri-

165
Otras infecciones emergentes

bado sistemático en todas las donaciones de san- ración del 100% de los casos) y en la fase aguda,
gre, órganos y tejidos, la principal vía de trans- disminuyendo su efectividad con el tiempo de in-
misión es la vertical. fección (algunos estudios reportan un 25% de cu-
ración parasitológica en adultos tratados en la fa-
Infección materna se crónica)(6).
La enfermedad presenta dos fases: El uso de benznidazol o de nifurtimox está con-
• Fase aguda: cursa de forma asintomática, pa- traindicado durante el primer trimestre del em-
sando inadvertida en la mayoría de casos. barazo. No existen estudios sobre los efectos del
• Fase crónica: tratamiento durante la gestación en humanos. Da-
- Forma indeterminada (60% de los casos): au- da la baja eficacia del tratamiento en adultos en fa-
sencia de sintomatología, pudiéndose reacti- se crónica, el riesgo-beneficio no justifica el trata-
var tras décadas de la infección o ante la pre- miento durante la gestación.
sencia de enfermedades concomitantes como En caso de gestación bajo tratamiento con benz-
la infección por VIH u otras causas de in- nidazol se aconseja suspender el tratamiento aun-
munosupresión. que no está justificada la interrupción legal del em-
- Forma sintomática (40% de los casos): puede barazo. Debe realizarse un seguimiento ecográfi-
cursar con alteraciones cardiacas (10-30%), co estricto.
digestivas (5-10%) o del sistema nervioso, con
distintos grados de gravedad. Las complica- Cribado en la gestación
ciones pueden ser graves y producir la muer- y manejo de la gestante infectada
te, sobre todo si existen alteraciones cardia- El cribado está indicado en aquellas gestantes
cas. de origen latinoamericano (excepto islas del Cari-
be), aquellas cuyas madres son de origen latinoa-
Diagnóstico de la infección materna mericano, incluso si la paciente ha nacido aquí, y
El diagnóstico de la enfermedad de Chagas pue- también en mujeres con una estancia superior a 1
de realizarse con tests parasitológicos (identifica- mes en área endémica(7). Se realiza mediante prue-
ción directa del parásito por microhematocrito o ba serológica (IgG anti-Trypanosoma cruzi con téc-
por técnicas de PCR) o serológicos. Se requerirá la nica ELISA), en la primera analítica que se solici-
confirmación serológica por dos métodos dife- te, que deberá confirmarse con una segunda de-
rentes para hacer un diagnóstico definitivo. terminación en caso de resultar positiva.
Las gestantes positivas deben ser informadas
Tratamiento del diagnóstico, del riesgo de transmisión vertical
Se dispone de 2 fármacos para el tratamiento y de la necesidad de seguimiento neonatal. En
de la enfermedad de Chagas: benznidazol y nifur- cuanto a la infección materna, se recomienda re-
timox, ambos disponibles como medicación ex- mitir a la gestante al serivicio de Medicina Tropi-
tranjera. El fármaco de primera elección es benz- cal o Medicina Interna de referencia para la valo-
nidazol en una única tanda de 60 días. La efectivi- ración del estado clínico y detección de formas
dad del tratamiento mantiene una relación inver- crónicas sintomáticas. La detección de cardiopa-
sa al tiempo de evolución de la enfermedad. Son tía materna durante la gestación es de especial im-
altamente efectivos en el primer año de vida (cu- portancia debido a las posibles repercusiones en

166
M. López, A. Goncé

el tercer trimestre y el parto. La enfermedad de SÍFILIS


Chagas no requiere de modificaciones en la con-
ducta obstétrica habitual ni durante la gestación Descripción del patógeno y epidemiología
ni en el parto. No existe contraindicación para la La sífilis es una infección sistémica debida a
lactancia materna. la espiroqueta Treponema pallidum que tiene dos
vías de transmisión: sexual y transplacentaria.
Infección congénita En los últimos años se ha asistido a un incre-
El chagas congénito suele ser asintomático. Só- mento de los casos de sífilis y es fundamental que
lo una minoría de recién nacidos pueden presen- el cribado gestacional permita su detección pa-
tar una infección sintomática con hepatoesple- ra evitar un incremento de sífilis congénita(8, 9).
nomegalia, anemia y trombocitopenia, e incluso
en casos más severos, con meningoencefalitis o Infección materna
miocarditis. La mortalidad oscila entre un 5% y La infección por sífilis tiene distintas fases.
un 20% y depende a menudo del retraso en el La sífilis primaria en que aparece el chancro en el
diagnóstico(6). La eficacia del tratamiento con ben- lugar de la inoculación tras un periodo de incu-
zidazole es muy alta, con tasas de curación cerca- bación de 2 a 6 semanas. Sin tratamiento médi-
nas al 100%. co, las úlceras desparecen en 3-8 semanas, cuan-
do se produce la diseminación de T. pallidum en
forma de rash en la sífilis secundaria. La clínica
Diagnóstico de la infección congénita(6, 7) de esta etapa se resuelve sin tratamiento en 2-6
Para detectar la transmisión vertical debe rea- semanas, pasando a una fase de sífilis latente, que
lizarse una exploración clínica para descartar for- constituye un periodo subclínico sólo diagnosti-
mas sintomáticas. La detección de las formas asin- cable por serología. Se divide en latente precoz
tomáticas se realiza a todos los recién nacidos de cuando ha pasado menos de 1 año desde la pri-
madres con serología de Chagas positiva median- moinfección, o latente tardía cuando hace más de
te: un año o bien la fecha de la primoinfección es
• Test parasitológico a las 48 horas de vida: de- desconocida. Al cabo de años de sífilis latente,
tección de Trypanosoma por microhematocri- puede aparecer la sífilis terciaria y cuaternaria,
to o por técnicas de PCR. En caso de positivi- que incluye gomas sifilíticos, alteraciones cardia-
dad del microhematocrito o clínica compati- cas, auditivas y neurosífilis. Es poco frecuente des-
ble con infección aguda congénita, los neona- de la introducción de la penicilina pero puede
tólogos iniciarán el tratamiento con benznida- darse hasta en 1/3 de los pacientes nunca ex-
zole. puestos al tratamiento.
• Test serológico a los 9 meses de vida: la presen-
cia de anticuerpos anti T. cruzi confirma la Diagnóstico de infección materna
transmisión vertical y debe iniciarse tratamiento El diagnóstico clínico de sífilis se deberá sospe-
con benznidazol, consiguiendo tasas de cura- char ante cualquier úlcera indolora que no cura en
ción del 100%. Si es negativo, se descarta la in- 2 semanas, independientemente de su localización,
fección congénita y el niño puede ser dado de y ante cualquier rash cutáneo generalizado en una
alta. gestante, para descartar un secundarismo. La sos-

167
Otras infecciones emergentes

TABLA I. Interpretación de serologías luéticas en la mujer gestante

Reagínicas Treponémicas Interpretación Conducta

- - No infección Si clínica sugestiva o sospecha de


- - Infección muy reciente contagio, repetir en 2-3 sem
+ + Infección confirmada o tratada recientemente Tratamiento si no tratamiento previo
+ - Probable falso positivo (títulos < 1/8) Repetir en 3 sem para confirmar
- + Infección antigua (tratada o tratamiento Confirmación del resultado si no
incompleto) antecedentes de tratamiento
Infección reciente si IgM positiva
Tratamiento si no tratamiento previo

pecha diagnóstica deberá ser siempre confirmada Tests treponémicos: ELISA, TPHA, FTA-Abs
mediante estudio serológico, que incluye dos tipos Consiste en la determinación de anticuerpos es-
de tests(10): pecíficos antitreponema. Presentan una alta sen-
sibilidad y especificidad. Los tests TPHA y Elisa
Tests no treponémicos o reagínicos: VDRL y RPR IgG son equivalentes. Actualmente se está genera-
Detectan anticuerpos no específicos y reflejan lizando el uso de las técnicas de ELISA por su au-
el grado de actividad de la enfermedad en títu- tomatización. Se positivizan en la primoinfección
los. Son útiles para evaluar la respuesta al trata- antes que las pruebas no treponémicas, sobre to-
miento y evolución de la enfermedad. Se pueden do las IgM (75% VDRL vs 90% treponémicas). Las
negativizar con el tiempo incluso sin tratamiento, IgM persisten 2-3 meses y las IgG pueden persis-
sobretodo en fases avanzadas. En cambio, hasta en tir positivas toda la vida en el 85% de pacientes co-
el 50% de pacientes correctamente tratados pue- rrectamente tratados.
den persistir títulos positivos sin que ello signifi-
que un fracaso terapéutico. Cribado durante la gestación
Se han descrito falsos positivos a títulos bajos El cribado de sífilis debe realizarse en todas las
(en general ≤ 1:8 excepto en adictos a heroína) por gestantes en el primer trimestre. Pueden realizar-
la propia gestación, en usuarios de drogas por vía se tests no treponémicos, pero con la aparición de
parenteral, enfermedades autoinmunes, neopla- los tests de ELISA, se recomienda el cribado con
sias, infecciones bacterianas, víricas (VIH, VEB, vi- ELISA IgG por su mayor sensibilidad y especifici-
rus hepatotropos) o por micobacterias, paludis- dad(11). En caso de resultar positivo, el diagnóstico
mo, vacunaciones. Asimismo, en el periodo inicial debe completarse con la realización de un test no
de la enfermedad se han descrito hasta un 25% de treponémico (valoración de actividad). En caso de
falsos negativos, por lo que se recomienda repetir VDRL negativo y sin historia previa de tratamiento,
la serología a las 2-3 semanas. Otras causas de fal- se recomienda realizar una segunda prueba tre-
sos negativos pueden ser la infección VIH, o por ponémica confirmatoria(10-12). La serología luética
fenómeno prozona por exceso de anticuerpos (2% debe repetirse en el tercer trimestre en gestantes
en sífilis secundaria). con conductas sexuales de riesgo. La sífilis es una

168
M. López, A. Goncé

TABLA II. Tratamiento de sífilis en la gestación

• Sífilis primaria, secundaria o latente precoz (< 1 año)


Penicilina G benzatina 2,4 M U im (1 dosis)
- En pacientes con infección VIH coexistente, administrar tres dosis (misma pauta que en sífilis tardía)
• Sífilis latente tardía (> 1 año) o imposibilidad de datar la infección
Penicilina G benzatina 2,4 M U im/semana, durante tres semanas

enfermedad de declaración obligatoria y debe re- se realiza el tratamiento adecuado, el 40% de los
comendarse el estudio de la/s parejas sexuales. neonatos desarrollarán sífilis congénita tardía que
representa la expresión evolutiva de la noxa intra-
Transmisión intrauterina útero y es irreversible a pesar del tratamiento(16).
La transmisión intrauterina de T. pallidum pue-
de ocurrir a partir de las 14 semanas con un in- Tratamiento materno(10)
cremento a medida que avanza la gestación. El ries- Se deben tratar todos los casos de sífilis (inde-
go de transmisión los primeros 4 años es elevado pendientemente de los títulos serológicos) cuan-
por espiroquetemias frecuentes. En ausencia de do no exista la seguridad de que la paciente haya
tratamiento, el riesgo de transmisión intrauterina realizado anteriormente un tratamiento correcto.
es del 50% para sífilis primaria y secundaria, del En caso de alergia a penicilina, se recomienda
40% en sífilis latente precoz y del 10% en sífilis la- desensibilización oral o endovenosa en ambiente
tente tardía, terciaria y neurosífilis. hospitalario. Las pautas antibióticas alternativas
no contraindicadas durante la gestación no son
Sífilis congénita suficientemente eficaces para tratar la infección
La asociación a resultados perinatales adversos materna y prevenir la sífilis congénita (eritromi-
de la sífilis no tratada es elevado, incluyendo: 40% cina, azitromicina) o bien no han estado suficien-
de aborto espontáneo o muerte perinatal (más fre- temente probadas (ceftriaxona)(15, 17).
cuente en sífilis primaria y secundaria), 40% de sí- Durante las primeras 24 horas posteriores al
filis congénita neonatal, parto prematuro, retraso tratamiento puede aparecer, principalmente en los
de crecimiento o anomalías congénitas sobre to- casos de sífilis primaria o secundaria a partir del
do a nivel musculoesquelético(13, 14). 2º trimestre, una reacción de Jarisch-Herxheimer,
Los marcadores ecográficos de sífilis congénita cuadro clínico de fiebre, cefalea y mialgias debi-
incluyen CIR, hepatoesplenomegalia, anemia fe- do a la destrucción treponémica. Pueden presen-
tal, hidrops, polihidramnios y placentomegalia(15). tar amenaza de parto prematuro, pérdida de bie-
A nivel neonatal, la mayoría de signos guía de nestar fetal y se han descrito casos de muerte fetal
sífilis congénita aparecen tras la 1ª semana de vida intraútero, pero en todo caso, el beneficio del tra-
neonatal, teniendo en cuenta que 2/3 de los recién tamiento supera los riesgos. El tratamiento es sin-
nacidos infectados son asintomáticos al nacimien- tomático con hidratación ev, antitérmico, tocolí-
to. Si después del nacimiento no se diagnostica la tico, así como monitorización del bienestar fetal.
infección (rinitis, hepatoesplenomegalia, icteri- El tratamiento durante la gestación con penici-
cia, rash, linfadenopatía, lesiones óseas, etc.) y no lina consigue el tratamiento de la infección fetal en

169
Otras infecciones emergentes

la mayoría de los casos. Existen situaciones de ma- TABLA III. Interpretación serológica del VHB
yor riesgo de afectación fetal a pesar del tratamiento,
como el inicio de tratamiento después de las 20 se- HBsAg AntiHBs AntiHBc
IgG IgM
manas, o tras la aparición de anomalías ecográfi-
cas, el parto antes de 30 días del tratamiento o la Infección aguda +/- - - +/-
evolución desfavorable del título de anticuerpos(18). Infección crónica + - + -
El control de la respuesta al tratamiento se rea- Infección curada - + + -
liza con la determinación seriada de tests reagíni- Vacuna - + - -
cos a los 3, 6 meses y en el momento del parto. El
tratamiento se considera efectivo si a los 6 meses
hay una disminución en 4 veces de los títulos de misión ocurre por contacto con sangre, semen o
VDRL (equivalente a disminución en 2 diluciones, secreciones vaginales infectadas.
por ejemplo, de 1:16 a 1:4 o de 1:32 a 1:8)(10, 15). El riesgo de cronificación de la infección por
Durante la gestación puede no dar tiempo a va- VHB depende de la edad de infección. Mientras
lorar la evolución serológica antes del parto. Por que en adultos es inferior al 5%, aproximadamente
ese motivo, se considera indicado repetir la mis- el 90% de casos de infección perinatal desarro-
ma pauta de tratamiento si los títulos VDRL, a los llarán una infección crónica por VHB.
3 meses de finalización del tratamiento, no han La infección crónica por VHB pasa por tres fa-
disminuido. ses(20, 21):
1. Fase inmunotolerante: puede durar décadas.
HBeAg +, DNA elevado, transaminasas nor-
VIRUS DE LA HEPATITIS B (VHB) males.
2. Fase inmunoactiva: HBeAg +, DNA elevado,
Epidemiología y descripción del patógeno transaminasas elevadas.
A nivel mundial se estima que existen unos 350 3. Fase de portador inactivo: HBeAg negativo,
millones de portadores crónicos del virus de la he- DNA disminuido, transaminasas normales.
patitis B (VHB). La infección crónica por VHB Las gestantes de origen asiático que han llega-
es responsable de entre 500.000 y 700.000 muer- do a nuestro entorno en los últimos años tienen
tes anuales debidas a cirrosis hepática y carcino- una alta prevalencia de infección por VHB, la ma-
ma hepatocelular. España se considera una zona yor parte de las cuales se infectaron por transmi-
de prevalencia intermedia, con aproximadamen- sión vertical(22). Han aparecido en nuestro medio
te un 2% de población infectada, aunque ha dis- gestantes que se encuentran en fase inmunotole-
minuido con la introducción de la vacunación sis- rante, con cargas virales muy elevadas, que re-
temática. Aún así, la aparición de población in- quieren de un manejo específico por su distinta
migrante procedente de áreas de alta prevalencia implicación en cuanto a salud materna y a riesgo
ha hecho aumentar la presencia de la infección cró- de transmisión al recién nacido.
nica por hepatitis B en nuestro medio (en gestan-
tes de origen asiático, 3,4% con HBsAg +)(19). Diagnóstico de infección materna
El VHB puede transmitirse por vía sanguínea, El diagnóstico de infección materna es seroló-
sexual o por transmisión vertical (TV). La trans- gico (Tabla III). La infección crónica por VHB se

170
M. López, A. Goncé

define como la persistencia de HBsAg positivo en TABLA IV. Transmisión vertical VHB
sangre durante más de 6 meses.
La valoración de la actividad y de la fase evolu- HBeAg/DNA
Negativo Positivo
tiva de la infección se realiza con los siguientes pa-
rámetros: TV natural 10-15% 70-90%
TV con profilaxis neonatal ≈ 0% 5-15%
• HBeAg y DNA VHB: valoran la replicación vi-
Riesgo de cronificación si TV 85-95%
ral. La cuantificación de DNA es el método más
sensible para valorar la actividad de la infección.
• Estudio de perfil hepático con transaminasas y dina son otros antivirales considerados seguros en
tiempo de protrombina: valoración de citólisis el embarazo aunque con menor experiencia en su
y función hepática. uso durante la gestación. No se han descrito resis-
tencias a tenofovir(23, 24).
Cribado durante la gestación En las gestantes infectadas por VHB debe rea-
Debe realizarse cribado universal de todas las lizarse también una serología de VHC y cultivos
gestantes del VHB antes del parto para poder apli- genitales para descartar enfermedades de trans-
car las medidas establecidas de prevención de la misión sexual concomitantes que puedan incre-
transmisión vertical correctamente. Se recomien- mentar el riesgo de TV.
da la realización de serología de VHB en la primera
analítica que se solicite, idealmente en el primer Transmisión vertical
trimestre de la gestación. La transmisión vertical del VHB ocurre princi-
Ante el diagnóstico de infección por VHB, de- palmente en el periparto. Puede existir también
be valorarse la actividad y la fase evolutiva de la in- transmisión intrauterina sobretodo en casos con
fección. En casos con infección activa o sospecha elevada carga viral o HBeAg positivo. El riesgo de
de afectación significativa de la función hepática, transmisión vertical del VHB depende del estado
debe remitirse para control y seguimiento al he- de replicación viral(25, 26).
patólogo de referencia. En todos los recién nacidos de madres VHB
En ocasiones, puede estar indicado el trata- positivas debe comprobarse la ausencia de TV y
miento antiviral para mejorar la salud materna, la eficacia de la vacuna con la determinación de
como en la infección crónica por VHB en fase in- HBsAg y HBsAc a los 9 meses de vida(27).
munoactiva (es decir, personas con DNA VHB ele-
vado y alteración de transminasas, sea el HBeAg Prevención de la transmisión vertical
positivo o no), con complicaciones clínicas por fi-
brosis o cirrosis hepática, o en aquellas pacientes Profilaxis pasiva-activa
con riesgo de reactivación del VHB por tratamiento La medida más establecida para la prevención
inmunosupresor(22). Si la mujer se encuentra en de la transmisión vertical de la VHB es la inmuni-
tratamiento antiviral durante la gestación, se re- zación pasiva-activa neonatal que consiste en la
comienda continuar el tratamiento, pudiendo ser administración de inmunoglobulina específica
modificado a pautas seguras en el embarazo. El fár- contra VHB (HBIG) 100 UI (0,5 ml) junto con la
maco antiviral con mayor experiencia en la gesta- 1ª dosis de vacuna VHB antes de las 12 horas de
ción es la lamivudina o 3TC. Tenofovir y telbivu- vida. Posteriormente, deben completarse las 3 do-

171
Otras infecciones emergentes

sis de la vacuna, adaptado al calendario de vacu- Aspectos específicos de la gestación


nas sistemáticas (pauta 0-1/2-6 meses)(27-29).
La eficacia de estas medidas es de un 85-95%. Procedimientos invasivos durante la gestación
Los fallos de profilaxis pueden ser debidos a trans- Globalmente, con la escasa información de que
misión intraútero (mayor riesgo si HBeAg+ o DNA se dispone al respecto, el riesgo de transmisión
VHB elevado), no cumplimiento de las pautas de vertical del VHB a través de una amniocentesis es
HBIG + vacuna o no generación de títulos de pro- bajo, pero parece estar aumentado en caso de
tectores de la vacuna(30). HBeAg o DNA positivo(38). Por tanto, debe cono-
cerse el estado serológico antes de cualquier pro-
Tratamiento antiviral materno cedimiento invasivo, así como el grado de activi-
La existencia de fallos de profilaxis de entre un dad de la infección (HBeAg, DNA VHB cuanti-
5 y un 15%, principalmente en aquellas mujeres tativo).
con HBeAg positivo o carga viral elevada, ha plan- En caso de estar indicado, el procedimiento in-
teado la necesidad de adoptar medidas de preven- vasivo de elección para el diagnóstico prenatal es
ción adicionales en este subgrupo de pacientes. Se la amniocentesis NO transplacentaria. No existe
ha evaluado en los últimos años la eficacia del tra- información sobre la TV del VHB por una biop-
tamiento antiviral materno con el único objetivo sia de corion, que tendría un mayor riesgo teórico
de disminuir la transmisión vertical(31-34). Con la de transmisión.
evidencia disponible en la actualidad, puede plan- Existen medidas de profilaxis postexposición
tearse la indicación de tratamiento antiviral a la de VHB que pueden aplicarse como profilaxis post-
madre como medida para disminuir la transmi- procedimiento para disminuir el riesgo potencial
sión intrauterina y periparto al recién nacido. Dis- de TV en los procedimientos de mayor riesgo. Pue-
tintos autores proponen el tratamiento materno de administrarse inmunoglobulina específica VHB
en aquellos casos de carga viral de VHB muy ele- (HBIG 600 UI dosis única antes de 24 horas) en
vada, por ejemplo > 107 copias/ml, así como en aquellos casos con HBeAg positivo o DNA VHB
aquellas gestantes con DNA positivo y un hijo pre- detectable, en amniocentesis de tercer trimestre
vio infectado por VHB(23, 35-37). o amniocentesis transplacentarias, así como cuan-
La decisión de iniciar tratamiento debe ser con- do, informada la paciente del riesgo-beneficio, se
sensuada con la paciente tras ser informada de la realicen procedimientos invasivos de mayor ries-
evidencia científica disponible y de los riesgos/be- go teórico de transmisión: biopsia corial, cordo-
neficios. El tratamiento antiviral se inicia en el ter- centesis, amniodrenaje, cirugía fetal.
cer trimestre, a partir de la semana 28, tras valo-
ración e indicación por el hepatólogo de referen- Conducta intraparto
cia, y se recomienda mantenerlo al menos unos Con la evidencia científica existente en la ac-
meses después del parto, por existir un mayor ries- tualidad, la cesárea no protege de la TV del VHB.
go de reactivación de la hepatitis B si se suspende La infección por VHB no modifica, por tanto, la
en el posparto inmediato. vía del parto(39).
En todos los casos deberán aplicarse las medi- Deben evitarse procedimientos invasivos in-
das establecidas de prevención neonatal comple- traparto (monitorización de FCF invasiva, micro-
tas (HBIG neonatal + vacunación completa). toma de calota fetal).

172
M. López, A. Goncé

Lactancia 4. Gascon J, Bern C and Pinazo MJ. Chagas disease in


Spain, the United States and other non-endemic coun-
A pesar de la presencia de VHB en leche ma- tries. Acta Trop 2010;115:22-7.
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terna respecto a lactancia artificial, siempre que se of Trypanosoma cruzi infection among pregnant La-
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apliquen correctamente las pautas de inmuniza-
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2. El cribado a todas las gestantes de sífilis está jus- for syphilis infection in pregnant women: evidence for
tificado a nivel mundial. Se deben tratar todos the U.S. Preventive Services Task Force reaffirmation
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pendientemente de los títulos serológicos) cuan-
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Otras infecciones emergentes

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174
Hidrops fetal
V. Borobio, A. Goncé

DEFINICIÓN CARACTERÍSTICAS ECOGRÁFICAS


El hidrops se define como la presencia anormal DEL HIDROPS
de líquido seroso en al menos dos compartimien- El diagnóstico ecográfico inicial de hidrops es
tos fetales. La principal clasificación del hidrops se sencillo. El feto puede presentar ascitis, derrame
basa en dos grupos de etiologías: inmune y no in- pleural o pericárdico y edema subcutáneo. Asi-
mune. El hidrops no inmune (HNI) se define por mismo podemos encontrar frecuentemente aso-
la ausencia materna de anticuerpos circulantes con- ciado polihidramnios y edema de placenta.
tra las células rojas sanguíneas. Antes de los años En la ascitis (Fig. 1) veremos líquido rodeando
setenta, en que se introdujo de manera extendida las vísceras, las asas intestinales, que pueden estar
la inmunoglobulina de Rhesus (Rh), la mayor par- flotando libremente, y si el acúmulo de líquido se
te de los casos de hidrops eran inmunes, pero hoy encuentra en la parte anterior de la cavidad ab-
en día la mayoría son no inmunes (90%); en este dominal, visualizaremos el trayecto de la vena um-
capítulo nos ocuparemos fundamentalemente de bilical cruzando el espacio de líquido (Fig. 2). Asi-
estos últimos. mismo es frecuente que el líquido ascítico descienda
La frecuencia de aparición del hidrops no in- hasta el escroto originando hidrocele (Fig. 3).
mune varía según series de entre 1/1.500 y El derrame pleural (Fig. 1) puede ser uni o bi-
1/4.000(1,2) partos, y el pronóstico sigue siendo ma- lateral. Los derrames unilaterales severos suelen
lo, con una mortalidad descrita de entre el 76 y ser debidos a una causa local o una etiología co-
90%, a pesar de que cada vez disponemos de más mo el quilotórax. Los derrames pequeños pueden
medios para un diagnóstico cuidadoso y podemos aparecer como una banda sonoluscente que bor-
seleccionar los casos susceptibles de tratamiento dea la silueta pulmonar y las estructuras medias-
intraútero. En caso contrario, es importante in- tínicas. y los grandes se visualizan como una gran
tentar afinar el diagnóstico para ofrecer un conse- cantidad de líquido que bordea a los pulmones
jo prenatal de cara a futuras gestaciones. Es fun- (Fig. 4). La compresión progresiva puede produ-
damental que el estudio del hidrops se realice en cir edema en la parte superior del cuerpo por obs-
un centro terciario y que sea llevado por un equi- trucción de los vasos mediastínicos y polihidram-
po multidisciplinario. nios por obstrucción funcional del esófago.

175
Hidrops fetal

Figura 1. Corte sagital de un feto hidrópico de 20 semanas. Figura 2. Arterias umbilicales que rodean la vejiga urinaria
Ascitis y derrame pleural. y atraviesan el líquido ubicado en la parte inferior del ab-
domen.

Figura 3. Hidrocele bilateral. 20 s. Figura 4. Derrame pleural bilateral. Pulmones flotando en


el líquido pleural: imagen en “alas de murciélago”.

El derrame pericárdico (Fig. 5) aparece como tercer trimestre), ecogénico, esponjoso o puede te-
una banda sonoluscente de entre 1-3 mm de es- ner la apariencia de vidrio deslustrado.
pesor alrededor de los dos ventrículos cardiacos.
Los casos severos suelen deberse a causas cardia-
cas específicas. FISIOPATOLOGÍA
El edema subcutáneo (Fig. 6) aparece como un El hidrops se produce por un disbalance a favor
engrosamineto por debajo de la piel de entre 2 y 6 de la cantidad de líquido intersticial frente al líqui-
mm. Puede ser generalizado o estar localizado en do del espacio intravascular debido a un aumento de
la parte superior o inferior del cuerpo. la permeabilidad capilar, un aumento de la presión
El edema de placenta (Fig. 7) es un signo va- hidrostática intravascular, una disminución de la pre-
riable y frecuentemente tardío. La placenta pue- sión oncótica plasmática o una dificultad al flujo
de presentar un aspecto engrosado (>4-5 cm en de retorno venoso(1,3). Todas estas condiciones hacen

176
V. Borobio, A. Goncé

Figura 5. Derrame pericárdico. Figura 6. Edema subcutáneo.

que haya un acúmulo anómalo de líquido en los te-


jidos blandos y en las cavidades serosas.
Así, podemos considerar varias situaciones que
pueden desencadenar el hidrops: 1) la obstrucción
linfática, malformaciones, tumores y anomalías ge-
néticas pueden afectar al retorno del fluído desde el
espacio intersticial al sistema linfático; 2) la obs-
trucción venosa, cardiopatías o lesiones en tórax, pel-
vis y cordón umbilical que dificultan la circulación
de retorno; 3) el fallo cardiaco, bien primario por car-
diopatía o secundario a anemia, hiperdinamia o hi- Figura 7. Edema placentario.
pervolemia, y 4) la extravasación por hipoproteine-
mia o por aumento de la permeabilidad capilar: me-
tabolopatías, infecciones o idiopático. (15%), infecciones (13%), alteraciones hematoló-
gicas (5%), metabolopatías o errores congénitos
del metabolismo (2%) e idiopáticas (20%)(1,2).
ETIOLOGÍA El mecanismo más común de producción de
El hidrops se puede considerar como el estadio HNI en las cardiopatías o arritmias es el fallo car-
final de los mecanismos de compensación fetales diaco congestivo. El pronóstico de un hidrops en
que se producen en múltiples causas descritas y el contexto de una cardiopatía es muy malo, con
que describimos en la tabla I. una mortalidad casi del 100%(4).
La principal clasificación del hidrops es inmu- En muchos casos de malformaciones estruc-
ne (10%) y no inmune (90%). Dentro del HNI las turales, la circulación de retorno se ve compro-
causas más frecuentes son las cardiopatías (25%), metida (p. ej., masas torácicas o abdominales)(5,6)
malformaciones (sobre todo torácicas) o síndro- y es la causa del HNI, pero en algunas alteraciones
mes genéticos (20%), anomalías cromosómicas gastrointestinales, genitourinarias o neurológicas,

177
Hidrops fetal

TABLA I. Etiología de hidrops fetal

Inmune: Anemia - Riñones poliquísticos


• Aloinmunización Rhesus - Malformación cloacal
• Aloinmunización frente a otros antígenos - Síndrome nefrótico congénito
– Alteraciones de la motilidad fetal:
No inmune: Origen fetal - Artrogriposis
• Enfermedad cardiovascular (25-30%): - Distrofia mioclónica
– Malformación: - Síndrome del pterigium múltiple
- Hipoplasia de corazón izquierdo – Displasias esqueléticas:
- Canal atrioventricular - Acondrogénesis
- Hipoplasia de corazón derecho - Acondroplasia
- Ventrículo único - Osteogénesis imperfecta
- Transposición de grandes arterias - Displasia tanatofórica
- Tetralogía de Fallot - Displasia torácica asfixiante
- Anomalía de Ebstein - Síndrome de costilla corta-polidactilia
- Tronco arterioso – Miscelánea:
- Cierre del ductus arterioso - Síndrome de Noonan
- Cierre del foramen oval - Anomalías linfáticas
- Insuficiencia valvular severa - Tumores: neuroblastoma, pulmonares, hemangioma he-
- Fibroelastosis endocárdica pático
– Arritmias: - Leucemia congénita
Taquiarritmias: • Alteraciones cromosómicas (15%):
- Taquicardia supraventricular - Síndrome de Turner (45X)
- Taquicardia paroxística atrial - Trisomía 21
- Flutter auricular - Trisomía 18
Bradiarritmias: - Trisomía 13
- Bloqueo cardiaco completo - Trisomía 16
– Otras: - Trisomía 28
- Tumores. Rabdomioma - Triploidías
- Cardiomiopatía - Translocaciones
– Insuficiencia de alto gasto: - Deleciones
- Coriangioma placentario • Infecciones (5%):
- Otros angiomas fetales grandes - Citomegalovirus (CMV)
- Teratoma sacrocoxígeo - Parvovirus B19
- Aneurisma de la vena de Galeno - Toxoplasma
- STFF (receptor más frecuente) - Rubéola
- Gemelo acardio (donante) - Herpes simple 1,2
• Malformaciones o síndromes (20%) - Sífilis
– Malformaciones cara/cuello: - Enterovirus (Coxsackie B)
- Higroma quístico • Hematológicas (< 5%):
– Pulmonares: - Alfa-talasemia (homocigotos)
- Malf. adenomatoidea quística - Transfusión fetomaterna
- Hernia diaframática congénita - Déficit de G6PD
- Masas intratorácicas - Infección por parvovirus B19
- Secuestro pulmonar - Hemorragia fetal
- Quilotórax • Metabolopatías (1-2%):
- Linfangiectasia pulmonar - Enfermedad de Gaucher
– Gastrointestinales: - Gangliosidosis GM1
- Atresia duodenal - Sialidosis
- Malformaciones intestinales - Mucopolisacaridosis VII
- Tumores - Mucopolisacaridosis Iva
- Hepatitis
– Urinarias: Causas maternas
- Obstrucción del tracto inferior • Diabetes mellitus severa
- Obstrucción del tracto superior • Anemia severa
- Prune-Belly • Hipoproteinemia severa

178
V. Borobio, A. Goncé

los mecanismos íntimos de producción del hidrops so puede ser difícil; recientemente se ha publica-
permanecen todavía desconocidos. do que la identificación de la causa puede hacerse
El síndrome de Turner es la causa más fre- hasta en un 56% de los casos prenatalmente(6), por
cuente de HNI en las cromosomopatías con el tí- lo que sigue siendo un reto llegar a un diagnósti-
pico hallazgo de higroma quístico acompañante. co etiológico (pre y/o posnatalmente). Ante una
En las infecciones, la etiopatogenia puede ser situación de hidrops fetal, se deberá remitir a la
debida a anemia por supresión de la hematopoye- paciente a un centro terciario y deberá ser atendi-
sis, miocarditis o hepatitis fetales. La infección por da por un equipo multidisciplinario. Es impor-
parvovirus B19 es una causa frecuente de hidrops tante apurar al máximo las posibilidades diagnós-
que siempre hay que tener en cuenta(7). Se pro- ticas para distinguir los fetos que sean susceptibles
duce una aplasia medular que origina una pro- de tratamiento y, en caso contrario, poder ofre-
funda anemia e hidrops consecuente, que puede cer a los padres la posibilidad de una interrupción
resolverse espontáneamente hasta en el 30% de los legal de la gestación, o realizar un consejo frente a
casos sin secuelas o producirse una descompensa- futuras gestaciones.
ción que conduzca a la muerte fetal. Los pilares básicos para el diagnóstico del hi-
La anemia fetal severa que conduce a un alto drops son la ecografía exhaustiva, el estudio de la
gasto cardiaco es la causa más frecuente de HNI sangre fetal y el de la sangre materna (Tabla II).
en los trastornos hematológicos, y puede ser de- En primer lugar se deberá realizar una histo-
bida a la producción de hemoglobina anómala (al- ria clínica detallada, teniendo en cuenta los facto-
fa-talasemia), hemorragia fetal (p. ej., sangrado in- res étnicos, por ejemplo, la alfa-talasemia en ho-
tracraneal), hemólisis (déficit de G6PD), fallo en mocigotos es mucho más frecuente en el sureste
la hematopoyesis (infección por parvovirus B19) asiático, la consanguineidad (60% de los errores
o hemorragia fetomaterna. congénitos del metabolismo presentan un patrón
En las metabolopatías, la etiopatogenia no está de herencia autosómica recesiva) así como los an-
clara, pero el edema y la obstrucción del retorno tecedentes personales: puede existir historia de LES,
venoso se han apuntado como posible causa(8). diabetes o pérdidas de anteriores embarazos que
Hay ciertas patologías de origen no cardiaco que podrían estar relacionadas con errores del meta-
producen un fallo por alto gasto como el terato- bolismo o con anomalías cromosómicas. El ante-
ma sacrococxígeo, el neuroblastoma, el aneurisma cedente de fiebre, artralgias o exantema durante la
de la vena de Galeno, el gemelo acardio, el corian- gestación actual podría orientar hacia una infec-
gioma placentario y los tumores de cordón umbi- ción materna. La infección por parvovirus es más
lical. frecuente en profesores, cuidadores de guarderí-
Las causas maternas de HNI son extremada- as o en madres de niños de corta edad(7).
mente infrecuentes: diabetes mellitus, anemia se- La ecografía exhaustiva intentará investigar cau-
vera e hipoproteinemia. sas malformativas y cardiopatías. La realización de
una ecocardiografía específica es preceptiva para
descartar anomalías estructurales (más frecuente-
DIAGNÓSTICO mente si presentan afectación valvular) o arrit-
El diagnóstico ecográfico del hidrops es senci- mias(4). Buscaremos cuidadosamente marcadores
llo, pero llegar al diagnóstico etiológico del proce- ecográficos de infección como microcefalia, ven-

179
Hidrops fetal

TABLA II. Estudio del hidrops no inmune

Historia clínica • Ecocardiografía


• Etnia (alfa-talasemia) • Estudio de sangre fetal. Cordocentesis:–
• Consanguineidad (metabolopatías, talasemia) Cariotipo
• Antecedentes familiares (metabolopatías, anomalías – Hemograma completo
congénitas) – Test de Coombs directo
• Antecedentes personales (diabetes, LES, hidrops pre- – Grupo sanguíneo
vio, muertes perinatales, ictericia en hijo previo, his- En casos seleccionados:
toria de infecciones, trabajo en escuelas o guarderí- – Perfil hepático (síndrome biológico de infección)
as) – Estudio de metabolopatías específicas
– Estudios de ADN genéticos y metabólicos
Analítica materna – Estudio de hemoglobina
• Hemograma completo • Estudio de líquido amniótico. Amniocentesis:
• Grupo sanguíneo y Rh, Coombs indirecto y anti- – Cariotipo
cuerpos irregulares – Diagnóstico de infección: PCR (PV B19, toxo-
• Test de Kleihauer-Betke plasma, CMV, HSV)
• Bioquímica – Metabolitos en LA (mucopolisacáridos)
• Serologías (IgG/IgM): PV B19, CMV, toxoplasma, En casos seleccionados:
rubéola, sífilis (RPR/treponémicas) – ADN: estudios genéticos y metabólicos. Estudio
En casos seleccionados: de la fibrosis quística.
• ADN-CMV (PCR) parvovirus B19 (si IgG positiva – Metabolitos (colesterol) si anomalía de genitales
e IgM negativa) (Smith-Lemli-Opitz)
• Electroforesis de hemoglobina • Estudio de vellosidades coriales. Biopsia de corion:
• G6PD piruvato kinasa – Cariotipo rápido en edad gestacional temprana
• Anticuerpos anti-Ro, anti-La En casos seleccionados:
• Cariotipo – ADN: estudios genéticos y metabólicos
• Cariotipo y electroforesis de Hb paterno • Estudio de derrames fetales:
– Recuento de linfocitos (poco útil en vida fetal)
Estudio fetal – Proteínas/albúmina
• Ecografía: – Posibilidades de cariotipo
– Anatomía detallada. Descartar malformaciones • Estudio post mortem
– Volumen de LA – Necropsia de feto y placenta
– Doppler: arterial y venoso para valorar estado fetal – Estudio de infecciones (PCR e inmunohistoquí-
– Velocidad máxima de la ACM. Valor predictivo de mica)
anemia. – Examen del esqueleto
– Perfil biofísico

triculomegalia y calcificaciones intracraneales o La cordocentesis, cuando lo permita la edad ges-


hepáticas. Asimismo, pensaremos en metabolo- tacional, es una prueba clave en el estudio del hi-
patías cuando al hidrops se le asocie CIR, miocar- drops que nos puede aportar gran cantidad de in-
diopatía hipertrófica, hipomotilidad o acinesia, formación. El estudio básico debe incluir cariotipo,
anomalía esquelética o hepatoesplenomegalia(8). test de Coombs directo, hemograma completo, pro-
El examen ecográfico incluirá estudio Doppler pa- teínas, albúmina y perfil hepático. Las inmunoglo-
ra valorar el estado fetal y la velocidad máxima de bulinas virales específicas no se investigarán en san-
la arteria cerebral media que presenta alto valor gre fetal salvo en casos individualizados, ya que la
predictivo de anemia fetal(9,10). IgM es negativa hasta en un 70% de los casos a pe-

180
V. Borobio, A. Goncé

sar de que exista infección activa(11). Otros estudios


se realizarán de forma selectiva (p. ej., estudios de
ADN en metabolopatías conocidas). Si se prevé una
transfusión (p. ej., en la infección por parvovirus
B19) es prudente tener sangre cruzada a punto, pa-
ra evitar procedimientos sucesivos.
La amniocentesis es una prueba que deberemos
realizar siempre a la vez que la cordocentesis, pa-
ra practicar estudios adicionales o de manera pre-
ferente en edad gestacional inferior a 17-18 sema-
nas para estudio de cariotipo. La amniocentesis es
preceptiva para el estudio de infecciones median- Figura 8. Feto hidrópico. Necropsia.
te técnicas de PCR (parvovirus, citomegalovirus,
herpes simple virus y toxoplasma) así como para
posibles estudios de ADN para la investigación de vo (Fig. 8) que nos ayudará a aclarar la etiología
determinadas enfermedades genéticas y metabóli- hasta en un 92% de los casos según series descri-
cas (estudio de metabolitos en líquido amniótico). tas(14). Sin esta prueba no podemos dar por con-
La biopsia de corion se practicará cuando el cluído el estudio del HNI.
diagnóstico se realiza en edades gestacionales tem-
pranas, para obtener un resultado rápido de ca-
riotipo, y también permitirá en casos selecciona- PRONÓSTICO
dos realizar estudios de ADN para determinadas El pronóstico del hidrops sigue siendo malo,
enfermedades genéticas y metabólicas(12,13). con una mortalidad del 76-90% a pesar de que ha
La analítica materna incluirá hemograma com- mejorado algo globalmente en los últimos años;
pleto, curva de glucemia, grupo sanguíneo y Rh, sin embargo, un diagnóstico en segundo o tercer
Coombs indirecto e investigación de otros anti- trimestre y la asociación a anemia fetal, arritmia
cuerpos irregulares, test de Kleihauer-Betke, sero- fetal e infección por parvovirus B19 mejorarían el
logías (parvovirus B19, citomegalovirus, toxo- pronóstico, ya que son causas tratables; mientras
plasma, rubéola y lúes) y en casos seleccionados que un diagnóstico en primer trimestre, la asocia-
electroforesis de hemoglobinas, investigación de ción a malformaciones, cromosomopatías, meta-
déficit de G6PD y anticuerpos anti-Ro y anti-La. bolopatías y una evolución progresiva ensombre-
Hay que tener en cuenta que cuando aparece el hi- cerían el pronóstico(12,13,15).
drops fetal en la infección por parvovirus B19, la No existen series en la literatura suficiente-
IgM materna puede ser negativa hasta en el 15- mente amplias para poder predecir la historia na-
25% de los casos. En esta situación, la determi- tural de los HNI en cada caso.
nación de ADN-viral en sangre materna (PCR) in-
crementa la sensibilidad diagnóstica(7,11).
En los casos de muerte fetal o neonatal y de in- COMPLICACIONES MATERNAS
terrupción legal de la gestación, es muy importante Cabe destacar el “mirror syndrome” o síndro-
la realización de un estudio necrópsico exhausti- me de Ballantyne o del “triple edema”, complica-

181
Hidrops fetal

Figura 9. Derrame pleural unilateral previo a ser drenado Figura 10. Shunt de derivación toracoamniótico. Obsérve-
(v. Fig. 7). se la reexpansión del pulmón.

ción materna grave que puede aparecer en los ca- Anemia


sos de hidrops fetal severo. Por un mecanismo fi- La transfusión intraútero constituye el tratamien-
siopatológico todavía desconocido, el hidrops fe- to de elección en los casos de anemia por isoinmuni-
tal se acompaña de edema placentario y edema ge- zación, en la anemia por infección de parvovirus B19
neralizado en la madre, que cursa con hemodilu- y en la hemorragia fetomaterna severa, logrando en
ción, HTA y cambios analíticos muy similares a la mayoría de los casos unos buenos resultados(15).
los que se producen en la preeclampsia y con gran
riesgo de edema agudo de pulmón(16). Derrame pleural
El drenaje de derrame pleural estaría indicado
cuando las causas del mismo son locales intrínsecas,
TRATAMIENTO como el quilotórax y la malformación adenomatoi-
El estudio y manejo clínico del hidrops fetal de- dea congénita quística. El fin de este procedimiento
be ser realizado en un centro de tercer nivel con es evitar la hipoplasia pulmonar, el polihidramnios
un equipo multidisciplinario. Es muy importante e intentar revertir el hidrops. Si se prevén varios dre-
realizar un exhaustivo estudio de la situación pa- najes sucesivos, se puede valorar la colocación de un
ra seleccionar los casos tributarios de tratamiento shunt toracoamniótico(17)(Figs. 9 y 10).
intraútero.
Hernia diafragmática congénita (HDC)
Arritmias Se han tratado con éxito casos de hidrops aso-
Muchas son tributarias de tratamiento antia- ciados a HDC con toracocentesis. La cirugía abier-
rrítmico, casi siempre por vía transplacentaria, po- ta intraútero se ha practicado en algunos centros
cas veces se recurre a la vía fetal directa. La digo- con muy malos resultados(2).
xina ha sido durante muchos años el tratamiento
básico. En los últimos años se han utilizado otros Infecciones
antiarrítmicos como la flecainida, adenosina, ve- En el hidrops por parvovirus B19, la transfu-
rapamilo y amiodarona(2). sión intrauterina (pueden ser necesarias más de

182
V. Borobio, A. Goncé

una) mejora el pronóstico con una supervivencia ble. Parece razonable plantear una cesárea (aunque
fetal de hasta el 85% sin secuelas(7). No obstante, no hay evidencias contrastadas) en los casos con un
series recientes de seguimiento a largo plazo de fe- futuro favorable para evitar la distocia de partes
tos transfundidos han evidenciado secuelas neu- blandas, aunque en los casos de mal pronóstico o
rológicas hasta en el 12% de los casos(18). En las de- fetos no viables se puede realizar una toracocente-
más infecciones (citomegalovirus, toxoplasmosis, sis o paracentesis para facilitar un parto vaginal.
herpes simple, rubéola, lúes, etc.) un feto en esta- El riesgo de recurrencia dependerá del diagnós-
dio de hidrops presenta un riesgo muy importan- tico exacto y de las enfermedades subyacentes; ya he-
te de secuelas a largo plazo y esto puede con- mos visto que hay una gran cantidad de situaciones
traindicar cualquier actuación. que se asocian a hidrops fetal. La probabilidad de
que se repita un HNI idiopático es extremadamen-
Uropatía obstructiva te rara, y así hay que transmitirlo a los padres(1,6,13).
Rara vez se asocia a hidrops. Pero se pueden pre-
sentar como ascitis urinaria. El shunt de deriva-
ción vesicoamniótico se puede contemplar en ca- CONCLUSIÓN. PUNTOS CLAVE
sos muy seleccionados cuando se ha hecho una va- • El hidrops es una descompensación fetal muy
loración ciudadosa de la función renal(2). grave inducida por diversos mecanismos pero
tratable en algunas situaciones, y por ello se de-
be derivar a la paciente con urgencia a un cen-
MANEJO CLÍNICO Y ACTITUD OBSTÉTRICA tro terciario con capacidad para realizar un tra-
Si el hidrops es susceptible de tratamiento o se tamiento intraútero.
decide una actitud expectante, hay que controlar • El hidrops fetal inmune presenta un tratamiento
el bienestar fetal con la valoración del perfil bio- intraútero favorable en la mayoría de los casos.
físico, el registro cardiotocográfico y las ecografí- • El hidrops fetal no inmune, excepto el secun-
as seriadas con estudio Doppler para control mor- dario a anemia fetal, tiene todavía en la actua-
fológico y hemodinámico fetal. lidad una elevada mortalidad y pero es impe-
Hay que tener en cuenta la posibilidad de apa- rativo que un equipo multidisciplinar seleccio-
rición de complicaciones maternas (“mirror sín- ne los casos tratables.
drome”) y monitorizar frecuentemente a la pa- • El estudio ecográfico exhaustivo y las pruebas
ciente. En caso de aparecer esta complicación y si invasivas fetales (fundamentalmente la cordo-
no se puede realizar terapia fetal para revertir el centesis) son los pilares del diagnóstico y en los
hidrops o finalizar la gestación, el tratamiento con- casos de muerte fetal es imprescindible un es-
siste en ingresar a la paciente y administrar diuré- tudio necrópsico completo para un futuro con-
ticos y tratamiento antihipertensivo (Labetalol)(16) sejo genético.
El parto prematuro inducido por polihidrama-
nios, así como la rotura prematura de membranas
y el desprendimiento de placenta son complica- BIBLIOGRAFÍA
ciones frecuentes(5). 1. Machin Geoffry A. Hydrops revisited: Literature Re-
La vía del parto se decidirá según razones obsté- wiew of 1.414 Cases Published in the 1980. Am J Med
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183
Hidrops fetal

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184
Alteraciones del líquido amniótico
M. Illa, M. Palacio, F. Figueras

ASPECTOS GENERALES titativas permiten predecir las alteraciones LA de


El líquido amniótico (LA) desempeña un papel manera igualmente sensible y limitada que la va-
fundamental en el desarrollo y crecimiento del fe- loración cualitativa y con menos falsos positivos(3).
to. Permite el desarrollo normal de los tractos res- Las dos técnicas semicuantitativas más utilizadas
piratorio y gastrointestinal y del sistema musculo- son: la máxima columna vertical (MCV) y el ín-
esquelético, a la vez que amortigua traumas físicos dice de líquido amniótico (ILA).
y proporciona una barrera contra la infección en MCV(4). Se realiza midiendo la máxima colum-
un ambiente termorregulado. La cantidad total del na vertical de líquido libre de partes fetales y de
LA es el resultado del balance entre su producción cordón de manera vertical. Se considera normal
y su eliminación. Durante el primer trimestre exis- cuando es inferior a 8 cm por debajo de la sema-
te un transporte de agua y de pequeñas moléculas na 20 y cuando es inferior a 10 cm a partir de la
a través del amnios y de la piel fetal, por lo que la semana 21. El límite bajo de la normalidad es 2 cm
composición del LA es muy semejante a la del lí- a cualquier edad gestacional(5).
quido extracelular. A partir del segundo trimestre ILA(6). Es el valor obtenido a partir de la suma de
(>17 semanas) el volumen del LA está regulado por las máximas columnas verticales de líquido, libre de
diferentes vías de entrada y salida a través del feto partes fetales o cordón umbilical, en cada uno de los
y de la placenta. El principal mecanismo que par- cuatro cuadrantes que se delimitan por la intersec-
ticipa en la formación es el tracto urinario, segui- ción de dos líneas perpendiculares en el abdomen
damente de las secreciones traqueales y de las mem- materno: la línea media longitudinal con la línea
branas fetales. Los elementos que participan en la transversal media entre la sínfisis púbica y el fondo
eliminación del LA son: tracto gastrointestinal (a uterino (método de Phelan). Útil a partir de las 24
través de la deglución fetal), respiratorio (median- semanas, cuando el útero se encuentra por encima
te movimientos respiratorios fetales) y, el más im- del ombligo. El transductor se coloca en posición sa-
portante, la resopción intramembranosa(1,2). gital y lo más perpendicular posible al suelo. Se con-
sidera normal valores entre 5 y 25 cm(5).
En ambas técnicas se aconseja no medir co-
MEDIDA DE LÍQUIDO AMNIÓTICO lumnas de LA menores a 1 cm de amplitud(7).
A pesar de que no existe un patrón oro en la va- De acuerdo a un metaanálisis publicado en el
loración de la cantidad de LA, las técnicas cuan- año 2008(8-10), la máxima columna vertical (mé-

185
Alteraciones del líquido amniótico

TABLA I. Causas fetales de polihidramnios

• Alteraciones gastrointestinales: onfalocele, atresia (esófago, íleon, yeyuno), gastrosquisis


• Alteraciones del SNC: anencefalia, defectos del tubo neural
• Causas infecciosas: parvovirus, CMV, toxoplasma, lúes
• Cardiopatías congénitas: arritmias, truncus, Co Ao
• Alteraciones torácicas: MAQ, secuestro, HDC, quilotórax
• Alteraciones renales: tubulopatías renales (como el síndrome de Bartter)
• Alteraciones esqueléticas: acondroplasia, displasia tanatofórica
• Alteraciones neuromusculares: distrofia miotónica o enfermedad de Steiner, artrogriposis
• Alteraciones metabólicas: gangliosidosis, enfermedad de Gaucher
• Alteraciones cromosómicas: T 18, T 21, síndrome de Turner
• Tumores fetales: teratoma sacrococxígeo

todo sencillo) parecería ser actualmente la técni- son moderados, apareciendo a partir del tercer tri-
ca recomendada en el diagnóstico de oligoamnios mestre de la gestación.
(< 2 cm), con iguales resultados perinatales que
el ILA (< 5 cm) y sin aumentar el número de pro- Etiología
cedimientos invasivos (menos falsos positivos)(9). El polihidramnios se produce por un dese-
Por otro lado, varios trabajos publicados en los quilibrio entre las entradas (la más importante,
últimos años recomiendan no abandonar el ILA por producción renal fetal) y las salidas (princi-
en base a que presenta una mayor reproducibi- palmente por deglución fetal) de LA a favor de
lidad interobservador(11), y utilizando puntos de las entradas. Hasta el 60% de los polihidramnios
corte diferentes en función de la edad gestacio- son idiopáticos(15) y de rango moderado, y en el
nal se podría mejorar el rendimiento diagnósti- restante 40% se puede identificar una causa (ma-
co del ILA(7,12-13). terna, fetal o placentaria). Podemos definir tres
grupos en las causas identificables de polihi-
dramnios:
POLIHIDRAMNIOS • Causas fetales: hay descritas múltiples patolo-
gías fetales en relación al polihidramnios (Ta-
Diagnóstico bla I). Las malformaciones representan el 20%
Se define polihidramnios como la medida de de las causas de polihidramnios y sobretodo
ILA >25 cm o una columna máxima >10 cm. Se pensaremos en esta causa ante polihidramnios
definen tres niveles de severidad: de aparición más precoz, evolución rápida y se-
• ILA entre 20 y 25: se considera el límite alto de veros. La causa malformativa más frecuente es
la normalidad. la obstrucción alta del tubo digestivo. Por otra
• ILA entre 25 y 32: polihidramnios moderado. parte, los fetos macrosómicos, aún en ausencia
• ILA >32: polihidramnios severo. de diabetes materna, presentan frecuentemen-
De forma global se estima que afecta cerca del te un LA en el límite alto de la normalidad sin
0,2% de las gestaciones (14). La gran mayoría de ellos que se acompañe de malformaciones(16).

186
M. Illa, M. Palacio, F. Figueras

• Causas maternas: algunas patologías maternas TABLA II.


se han descrito como posibles causas del po-
lihidramnios, como el mal control metabólico Anamnesis materna:
por diabetes (principalmente tipo 1), respon- • TTOG
• Ac. irregulares
sable de hasta el 20% de polihidramnios con
• Serologías: TORCH, PVB 19
causa conocida, o la isoinmunización Rh.
• Causas placentarias: algunas anomalías placen- Estudio ecográfico fetal:
• Ecografía anatómica detallada(1)
tarias (p. ej., corangioma) se acompañan tam-
• Ecocardiografía(2)
bién de polihidramnios. • Actitud y movimientos fetales
• PSV ACM
Protocolo de estudio (Tabla II)
Estudio de líquido amniótico:
• Cariotipo(3)
Seguimiento y pronóstico • PCR de toxoplasma y CMV
Aunque de forma global se asocia a un pro- • Estudio de metabolopatías y enfermedad de Steinert
nóstico fetal incierto, en algunas series clásicas se • Aldosterona(9)
reportan porcentajes de mortalidad fetal hasta en 1Especial énfasis en la visualización de la cámara gástrica: la
un 10-30% de los casos. Gran parte de esta mor- ausencia de estómago o estómago pequeño así como el signo
talidad sucede en aquellos casos severos y preco- del bolsón esofágico, son sugestivas de atresia de esófago; la
imagen de doble burbuja es sugestiva de atresia o estenosis duo-
ces con una causa conocida o sospechada (ma-
denal y la dilatación intestinal de obstrucción intestinal. 2Al-
crosomía, diabetes materna, alteración de la de- ta asociación de patología digestiva y cardiaca. 3Ante la sos-
glución por distrofias miotónicas o por patolo- pecha de patología digestiva alta, hasta un tercio de los casos
gía intestinal fetal) y que además acaban aso- se asocian a anomalías del cariotipo (T13 y T18 en la atresia
esofágica y T21 en la estenosis/atresia duodenal).
ciando la complicación más frecuente: la prema-
turidad (22%). Referente al polihidramnios idio-
pático, estudios retrospectivos con poca muestra
no encontraron un incremento en la morbimor- Manejo clínico
talidad perinatal. Sin embargo, en un estudio re- El tratamiento del polihidramnios puede ser
ciente parece indicar que la presencia de un ILA etiológico o sintomático:
aumentado estaría relacionado con una mayor 1. Etiológico: cuando se identifica la causa po-ten-
morbilidad perinatal, junto con un aumento del cialmente tratable intraútero; por ejemplo, con-
riesgo de cesáreas por macrosomía, malposición trol metabólico óptimo en la diabetes materna,
fetal y DPPNI(18), así como también de bajo pe- tratamiento antiarrítmico en fetos hidrópicos
so(10,19). con arrítmias, colocación de shunt torácico en
El control del polihidramnios se realizará en derrames pleurales, etc.
función de la severidad. En casos de límite al- 2. Sintomático: cuando no exista una causa defi-
to de la normalidad es suficiente un control ca- nida o esta no sea tratable intraútero.
da dos semanas. Ante un polihidramnios mo-
derado o severo, el control debería ser más es- Amniodrenaje
tricto con valoración de la longitud cervical en El amniodrenaje es un tratamiento sintomático
cada visita. con dos objetivos: disminuir la sintomatolgía ma-

187
Alteraciones del líquido amniótico

terna y la amenaza de parto prematuro. Por ese mo- • Si edad gestacional viable, realizar control NST
tivo no se realizarán amniodrenajes más allá de la 1 hora post-procedimiento.
semana 35. Las complicaciones relacionadas con
esta técnica son el desprendimiento de placenta, la Inhibidores de las prostaglandinas
rotura prematura de las membranas y la bradicar- Los fármacos inhibidores de las prostaglan-
dia fetal, complicaciones que pueden presentarse dinas disminuyen el filtrado glomerular fetal dis-
hasta en un 3,1% de los casos(20). Las recomenda- minuyendo secundariamente la cantidad de ori-
ciones sobre cuándo realizar amniodrenaje son: na fetal, también favorecen la reabsorción pul-
• Polihidramnios severo y longitud cervical infe- monar y el paso de LA a través de las membra-
rior a 15 mm o dinámica uterina materna clí- nas. Mediante estos tres mecanismos de acción se
nica. consigue una disminución de la cantidad de LA.
• Discomfort materno importante (sensación de No obstante, estos fármacos tienen importantes
disnea o dinámica uterina clínica) indepen- efectos secundarios fetales, el más importante de
dientemente de la severidad del polihidramnios. ellos es el cierre prematuro del ductus arterioso,
de forma más aguda a partir de la semana 32;
Técnica del amniodrenaje otros efectos son enterocolitis necrotizante e in-
• Ingreso y colocación de vía periférica. suficiencia renal. Por este motivo, su uso debe li-
• Decúbito semilateral (para evitar hipotensión mitarse y, en cualquier caso, siempre debe consi-
materna). derarse como un tratamiento de segunda línea
• Localizar la máxima columna de LA, evitando cuando el polihidramnios siga siendo sintomáti-
la zona fúndica por el riesgo de dislocación de co a pesar de los amniodrenajes y por debajo de
la aguja al descender el útero. las 32 semanas.
• Aseptización estricta de la zona y colocación La indometacina es el fármaco del cual se dis-
de tallas estériles delimitando la zona donde pone de más experiencia(21). Se utiliza a dosis de
se realizará la punción. 50 mg/8-12 horas durante un periodo máximo
• Aguja de calibre 18G y aspiración (con sistema de 5-7 días. Se realizará el tratamiento bajo es-
de vacío) a la máxima velocidad que permita el tricto control ecocardiográfico (a las primeras 24
calibre de la aguja (170-180 ml/min)(20) y siem- horas y a los 4 días de iniciar el tratamiento; si
pre bajo visión directa por ecografía durante to- normal, control semanal) para detectar precoz-
do el proceso. mente una posible restricción del ductus arte-
• Extracción de líquido hasta conseguir un ILA rioso (22). En caso de que aparezca se debe sus-
normal (ILA < 20, máximo 5.000 ml). La me- pender el tratamiento.
dia de tiempo suele estar en 30 minutos. Los signos sugestivos de restricción del ductus
• En caso de que la paciente presente dinámica arterioso son:
uterina clínica, antes, durante o tras el proce- • Aparición de una insuficiencia tricuspídea sig-
dimiento se realizará tratamiento tocolítico (ev nificativa (velocidades superiores a 200 cm/s y
o vo en función clínica de la paciente) duran- duración durante toda la sístole).
te 24 horas. • Presencia de un índice de pulsatilidad de duc-
• No es necesaria la administración de antibióti- tus arterioso inferior a 1 (en condiciones nor-
co profiláctico de forma sistemática. males IP ductus venoso: 1-1,9).

188
M. Illa, M. Palacio, F. Figueras

En gestaciones > 32 semanas no están indica- renal bilateral, riñones multiquísticos bilate-
dos salvo en situaciones excepcionales y valoradas rales, riñones poliquísticos infantiles bilate-
de forma individual. rales, displasias tubulares congénitas), defec-
tos del tubo neural, aneuploidías.
• Causas maternas: medicación materna (inhibi-
OLIGOAMNIOS dores de la síntesis de prostaglandinas, hipo-
tensores que actúan inhibiendo la enzima con-
Diagnóstico versora de la angiotensina).
Complica cerval del 0,5-8% de todas las gesta-
ciones(23). Utilitzando criterios clásicos, se define Protocolo de estudio (Tabla III)
oligoamnios como la medida de ILA inferior a 5 o
la presencia de una máxima columna vertical in- Pronóstico
ferior a 2 cm (< 500 ml)(24). Hablamos de anihi- Vendrá determinado por:
dramnios cuando de forma cualitativa no existe • La edad gestacional en el momento del diag-
LA y cuando cuantitativamente no observamos nóstico:
ninguna columna superior a 1 cm. Cuando la can- – A menor edad gestacional mayor riesgo de
tidad de LA es muy pequeña, es fácil confundir bol- hipoplasia pulmonar y malposición de ex-
sas de LA con asas de cordón, por lo que debe uti- tremidades. Es muy raro que exista hipopla-
lizarse sistemáticamente el Doppler color. sia pulmonar si no existe anhidramnios com-
pleto (< 1 cm). Los principales factores de
Etiología riesgo de hipoplasia pulmonar son las sema-
Contrariamente al polihidramnios, sólo el 5% nas de gestación en el momento de la rotura
de los oligoamnios son de causa idiopática. En el (< 24 semanas) y la duración del oligoamnios
segundo trimestre de la gestación la presencia de (> a una semana). No obstante, aunque se
una rotura prematura de membranas explica el cumplan ambos factores de riesgo la inci-
50% de los casos de oligoamnios, seguido por el dencia de hipoplasia pulmonar se sitúa alre-
retraso de crecimiento intrauterino y las malfor- dedor del 30%(25,27).
maciones fetales en el 18% y el 15% respectiva- – En cuanto al oligoamnios aislado que apare-
mente, siendo un 5% de los casos, idiopáticos. ce a término, situación que puede llegar a
Podemos dividir las causas en tres grupos: afectar hasta el 10-20% de las gestaciones en
• Causas placentarias-membranas: rotura pre- algunas series, existe más controversia(28). A
matura de membranas. pesar de estar históricamente relacionado con
• Causas fetales: peores resultados perinatales y motivar en
– No malformativas: restricción del crecimien- consecuencia la finalización precoz de estas
to intrauterino, gestación cronológicamente gestaciones, todo ello derivado de estudios no
prolongada, infección fetal por citomegalo- randomizados, los últimos trabajos publica-
virus. dos abogan que el oligoamnios aislado, una
– Malformativas: obstrucción del tracto urina- vez descartadas las posibles causas o factores
rio (obstrucción ureteral bilateral, valvas ure- de riesgo asociados (como hipertensión, dia-
trales posteriores), patología renal (agenesia betes, retraso de crecimiento, gestación cro-

189
Alteraciones del líquido amniótico

TABLA III. Protocolo de estudio ya que presenta resultados perinatales com-


parables a aquellas gestaciones que no se in-
Anamnesis materna: ducen(29,33).
• Comprobación de RPM. En caso de duda, PROM Test® • Causas de oligoamnios:
o Amniosure® – En el caso de la RPM, tendremos que vigilar
• Descartar toma de fármacos
la aparición de una corioamnionitis.
• Serologías: CMV
– En el caso de diagnosticar un retraso de cre-
Estudio ecográfico fetal: cimiento intrauterino, hay que informar del
• Peso y Doppler fetal y art. uterinas(1) seguimiento ofrecido en nuestro centro y del
• Ecografía anatómica detallada(2)
pronóstico neonatal en función de la prema-
Prueba invasiva(3): turidad prevista.
• Cariotipo – En el caso de ingesta de fármacos: se inte-
• ß2-microglobulina rrumpirá la toma de los mismos de forma in-
• PCR CMV en LA
mediata. Si la paciente ha consumido inhibi-
1Ante la presencia de un estudio Doppler normal se puede dores de la síntesis de prostaglandinas se re-
excluir razonablemente una causa placentaria. La restricción
alizará valoración del ductus arterioso. Si exis-
de crecimiento de causa no placentaria que se inicia antes de
las 28 semanas y que es severa (< percentil 3) se asocia de tiera una restricción (IP < 1 o insuficiencia
manera más frecuente a malformaciones fetales y cromoso- tricuspídea significativa (holosistólica >200
mopatías. 2Especial énfasis en la valoración del sistema ne-
fro-urológico y del tubo neural. En cuanto a los riñones de- cm/s) se realizaría control cada 48 horas has-
bemos valorar su posición (habitual en fosa lumbar), tama- ta su normalización.
ño, ecogenicidad y arquitectura ecográfica (debemos poder
– En aquellos casos en los que el feto presente
reconocer las pelvis renales). Unos riñones hiperecogénicos y
de tamaño reducido pueden sugerir la presencia de una po- una malformación, se informará del pronós-
liquistosis renal recesiva. En cuanto a la vejiga, deberemos tico de la misma y del riesgo de hipoplasia
valorar su posición (situada entre las arterias umbilicales) y
su tamaño. Finalmente deberemos descartar la presencia pulmonar, y en función de esta información
de marcadores fetales (microcefalia, ventriculomegalia, fo- los padres podrían acogerse a la interrupción
cos parenquimatosos hiperecogénicos, hiperrefringencia in-
legal del embrazo. Si los padres deciden se-
testinal) de infección por CMV. A menudo la falta de LA
puede dificultar de forma importante la valoración ecográ- guir adelante con la gestación, debemos rea-
fica: en este caso, una amnioinfusión estaría justificada con lizar amniocentesis/cordocentesis para estu-
el fin de mejorar la capacidad diagnóstica(15). 3Prueba in-
vasiva: sobretodo cuando el oligoamnios se asocia a retraso dio de cariotipo y valorar el estudio de la fun-
de crecimiento de causa no placentaria es útil realizar estu- ción renal en orina fetal.
dio de cariotipo. En casos de anhidramnios puede ser más fá-
En los casos de origen renal, el pronóstico pa-
cil la cordocentesis que la amniocentesis. Además, algunas
tubulopatías congénitas no ofrecen signos ecográficos y en es- rece haber mejorado con el desarrollo de equi-
tos casos puede ser útil la determinación en sangre fetal de la pos multidisciplinares y la posibilidad de tras-
ß2-microglobulina, pues valores superiores a 5,6 mg/L se aso-
cian a un pronóstico muy adverso de función renal(13). En ca- plante renal neonatal(30).
so de duda serológica, podemos intentar la determinación de – En el caso del oligoamnios idiopático, existe
PCR de CMV en líquido amniótico.
escasa evidencia en la literatura: a pesar de
que algunas series reportaban una tasa supe-
nológicamente prolongada), no debería ser rior de malos resultados perinatales, los da-
motivo de finalización inmediata de la gesta- tos más recientes sugieren que las gestaciones
ción si el resto de pruebas de bienestar fetal, con oligoamnios aislado hasta llegar a térmi-

190
M. Illa, M. Palacio, F. Figueras

no (37 semanas) no presentan peores resul- registro (previa comprobación del estado áci-
tados neonatales en comparación con la po- do-base si está indicado) y/o aguas meconia-
blación con LA normal(28-29) y pueden ser sus- les(37,38).
ceptibles de una conducta expectante bajo vi-
gilancia estricta hasta llegar al término.
PUNTOS CLAVE
Manejo clínico. Tratamiento • Las últimas recomendaciones sugieren que la
El manejo clínico del oligoamnios depende MCV es mejor método de screening para iden-
principalmente de la causa del mismo, así como tificar desviaciones de la normalidad de la can-
de la edad gestacional en el momento del diag- tidad de LA. Sin embargo, para el manejo clí-
nóstico: nico, podremos utilizar indistintamente el ILA
• Manejo anteparto: realización de perfil biofí- o la MCV.
sico y estudio Doppler semanalmente y esti- • El 60% de los polihidramnios son idiopáticos.
mación de peso fetal estimado cada dos se- Por el contrario, sólo el 5% de los oligoamnios
manas: son idiopáticos.
– Algunos trabajos no randomizados sugieren • Las causas no malformativas son la causa más
la amnioinfusión como una técnica útil en frecuente de alteración del LA: la diabetes en el
aquellos casos de oligoanhidramnios preco- polihidramnios y la rotura de membranas y el
ces (< 26 semanas) al disminuir el riesgo de retraso de crecimiento en el oligoamnios. Sin
hipoplasia pulmonar y de anomalías posi- embargo, cualquier alteración de LA requiere
cionales(31). Sin embargo, a falta de estudios descartar patología fetal malformativa. En el po-
con elevada calidad metodológica, hoy en día lihidramnios, particularmente digestiva, car-
no se recomienda su práctica habitual(32). diaca y neurológica. En el caso de oligoamnios,
– Por otro lado, la hidratación materna por vía particularmente nefrourológica y neurológica.
oral, método de bajo coste y no invasivo, pa- • El manejo del polihidramnios idiopático radi-
rece aumentar el volumen de líquido amnió- cará principalmente en asegurar el confort ma-
tico en las siguientes horas a la ingesta de un terno y descartar la amenaza de parto prema-
volumen de agua elevado (hasta 2 litros). Sin turo.
embargo, los potenciables beneficios a largo • El oligoamnios idiopático o a término no re-
plazo, así como el grado de satisfacción ma- quiere de una finalización immediata de la ges-
terna no han sido evaluados(34). tación. La finalización mediante prostaglandi-
• Finalización de la gestación: en caso de oligo- nas no está contraindicada.
amnios idiopático e incluso a término, nosotros
recomendamos finalizar la gestación a las 40 se-
manas(35,36). No existe contraindicación para el BIBLIOGRAFÍA
uso de prostaglandinas para la inducción del 1. Ross MG, Brace RA. NIH Workshop Participants. Na-
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193
Manejo ambulatorio de la paciente con riesgo de parto
prematuro
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

INTRODUCCIÓN ETIOLOGÍA
La prematuridad se considera la principal cau- La etiología de la prematuridad es multifactorial:
sa de morbimortalidad neonatal y se define como 1. Parto pretérmino espontáneo: representa el 31-
el parto que tiene lugar antes de la semana 37 de 40% de los partos pretérmino:
gestación. A pesar de la administración de tocolí- 1.1. Infección intraamniótica. Responsable del
ticos, la prevalencia se ha mantenido invariable, o 10-12% de los casos de parto pretérmino
incluso ha ido en aumento, en los últimos años y con bolsa íntegra.
representa aproximadamente un 7-9% de los par- 1.2. Causa vascular: isquemia (trombofilia he-
tos. reditaria o adquirida) o hemorrágica (pla-
En función de la edad gestacional en la que tie- centa previa, DPPNI, hemorragia 1º o 2º
ne lugar el parto pretérmino definimos(1): trimestre de causa no filiada).
1. Prematuridad extrema: parto antes de las 28,0 1.3. Estrés psicológico/físico.
semanas de gestación. Representa el 5% de los 1.4. Sobredistensión uterina: gestación múlti-
partos pretérmino. ple, responsable del 15-20% de los partos
2. Prematuridad severa: entre 28,1 y 31,6 semanas pretérmino.
(15% de los partos pretérmino). 2. Rotura prematura de membranas: aparece en
3. Prematuridad moderada: entre 32,0 y 33,6 se- un 3-5% de las gestaciones. Representa un 30-
manas (20% de los partos pretérmino). 40% de los partos pretérmino.
4. Prematuridad leve: entre las 34,0-36,6 semanas. 3. Finalización electiva por patología materna y/o
Representa 60% de los partos pretérmino. fetal (hipertensión gestacional, RCIU). Repre-
La introducción de mejoras prenatales como el senta el 20-25% de los partos pretérmino.
uso de corticoides y de antibióticos en las roturas
prematuras de membranas y mejoras postnatales
como la introducción de surfactante, de terapias FACTORES DE RIESGO DE PARTO
ventilatorias más efectivas y de nutrición neona- PRETÉRMINO ESPONTÁNEO
tal, han mejorado la supervivencia y han dismi- 1. Pretérmino anterior. Es el factor de riesgo más
nuido la morbilidad de los neonatos. potente relacionado con la prematuridad. Los abor-

195
Manejo ambulatorio de la paciente con riesgo de parto prematuro

tos antes de las 17 semanas no confieren más ries- 8. Factores uterinos:


go de parto pretérmino recurrente. El riesgo de re- • Cirugía uterina previa (p. ej., conización).
currencia en gestantes con historia de parto pre- • Malformaciones uterinas (p. ej., cérvix hipo-
término anterior es del 15 al 50% dependiendo del plásico secundario a tratamiento médico con
número y la edad gestacional de los partos pretér- dietilestilbestrol, miomas uterinos que defor-
mino anteriores: men la cavidad endometrial).
• Si antecedente de parto < 28 semanas, el riesgo • Antecedentes de incompetencia cervical.
de presentar un nuevo parto pretérmino se mul-
tiplica por 10 (RR 10,5).
• Sin embargo, gestantes con historia obstétrica GRUPO DE RIESGO DE PARTO PRETÉRMINO
de un parto pretérmino espontáneo antes de las Son susceptibles de un seguimiento específi-
35 semanas tienen un riesgo de un parto pre- co, óptimamente en una Unidad de Prematuridad,
término en una nueva gestación del 15%. Si 2 aquellas pacientes con un “riesgo potencial” de par-
antecedentes, el riesgo es del 41% y si 3 antece- to pretérmino por sus antecedentes obstétricos o
dentes, del 67%. bien por presentar un cuadro de riesgo en la ges-
2. Raza. Más frecuente en raza negra (multipli- tación actual:
ca por 3 el riesgo de parto pretérmino). 1. Antecedente previo de parto pretérmino es-
3. Estado nutricional. IMC bajo incrementa el pontáneo o rotura prematura de membranas
riesgo de parto pretérmino.Se considera significa- < 34 semanas. Se excluye la patología mater-
tiva una disminución del IMC > 5 kg/m2 de lo es- na y/o fetal que motiva una finalización más
perado. precoz de la gestación (trastornos hipertensi-
4. Estrés laboral. Existe controversia. Cierta re- vos, RCIU, DM mal controlada, etc.).
lación con el número de horas trabajadas con un 2. Historia obstétrica sugestiva de incompetencia
grado de actividad física importante sobre con- cervical ≥ 15 semanas de gestación. Incluye pa-
diciones psicológicas de estrés. Mujeres expuestas cientes con abortos de 1er trimestre en las que
a condiciones de estrés tienen niveles aumentados en la gestación actual se objetiva en la ecogra-
de marcadores inflamatorios como la PCR, hecho fía de cribado prenatal en 2º trimestre un cér-
que sugiere que la vía inflamatoria sea la causa del vix < 25 mm o un acortamiento cervical des-
riesgo de parto pretérmino en estos casos. pués de presión suprafúndica.
5. Tabaco. Relación con la respuesta inflamato- 3. Episodio de amenaza de parto pretérmino a la
ria. La reducción/supresión del tabaco durante la gestación actual.
gestación disminuye el riesgo de parto pretérmino. 4. Cuadro de rotura prematura de membranas
6. Enfermedad periodontal. Posible transmisión < 24 semanas de gestación.
hematógena. Controvertida la relación con el par- 5. Hallazgos ecográficos de acortamiento y/o mo-
to pretérmino porque estudios randomizados no dificaciones cervicales en pacientes asintomá-
han visto una reducción de las tasas de prematu- ticas.
ridad en mujeres tratadas de enfermedad perio- 6. Factores uterinos:
dontal durante el embarazo. No se ha estudiado el • Cirugía uterina previa (p. ej., conización).
efecto a nivel preconcepcional. • Malformaciones uterinas (p. ej., cérvix hipo-
7. Periodo intergenésico < 6 meses. plásico secundario a tratamiento médico con

196
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

Figura 1.

dietilestilbestrol, miomas uterinos que de- también está alrededor del 30% y vendrá deter-
formen la cavidad endometrial). minado por la edad gestacional y la longitud cer-
• Antecedentes de incompetencia cervical. vical al ingreso(4).
De acuerdo con los hallazgos ecográficos, se re- 2. Fibronectina fetal. Es una proteína de la ma-
valorará el riesgo de la paciente de presentar un triz extracelular que se localiza en el corion y es
parto pretérmino en la actual gestación. De acuer- marcador de disrupción coriodecidual. En condi-
do con estos hallazgos, se propondrá un segui- ciones normales está ausente de las secreciones cér-
miento de alto o de bajo riesgo. vicovaginales por encima de las 24 semanas de ges-
tación. Predicción de parto pretérmino del 48%.
De igual forma que el cérvix, lo más importante
MARCADORES PREDICTORES es su alto valor predictivo negativo: sólo el 1% de
1. Valoración cervical ecográfica. Hay evidencia las mujeres con un test negativo parirán en los 7
de que en ausencia de contracciones uterinas, la días siguientes.
medición ecográfica de la longitud cervical es un 3. Screening y tratamiento de la bacteriuria asin-
método eficaz para detectar la población de ries- tomática. El tratamiento con antibióticos en las
go de parto pretérmino; considerando un cérvix mujeres embarazadas con bacteriuria asintomáti-
≤20 mm, la sensibilidad sería del 10% y la especi- ca es efectivo en la reducción del riesgo de pielo-
ficidad del 99%(2). En pacientes asintomáticas, un nefritis, bajo peso al nacer y parto pretérmino (OR
cérvix ≤15 mm a las 20-24 semanas incrementa el 0,60 95% CI 0,45-0,80).
riesgo de parto pretérmino < 34 semanas a un 4. Detección y tratamiento de la vaginosis bacte-
34%(3). En población con amenaza de parto pre- riana en el segundo trimestre. Se ha demostrado que
término, el riesgo de parto antes de las 34 sema- el tratamiento de la vaginosis bacteriana asinto-
nas una vez se ha estabilizado el cuadro agudo, mática con clindamicina oral en el 2º trimestre re-

197
Manejo ambulatorio de la paciente con riesgo de parto prematuro

duce el porcentaje de pérdidas fetales tardías <20 de gestación. Se cursarán cultivos vaginales, en-
semanas en la población obstétrica general y de ro- docervical, tinción de Gram vaginal y urino-
tura prematura de membranas en mujeres de ries- cultivo previo al cerclaje.
go. No obstante, y dado que la prevalencia de la va- • Seguimiento a la semana del cerclaje. Se valo-
ginosis bacteriana en nuestra población es muy ba- rará la longitud cervical de forma sistemática
ja, no parece indicado por el momento el estudio cada 2-4 semanas hasta la semana 26. A partir
sistemático de la vaginosis en la población general. de la semana 26 se individualizará según la es-
5. Detección y tratamiento de Chlamydia tra- tabilidad clínica y el contexto social de la pa-
chomatis, Ureaplasma y Streptococco B agalactiae. ciente el posible seguimiento convencional. Se
No hay suficiente evidencia científica para integrar recomendará la valoración de la longitud cer-
el screening y tratamiento de Chlamydia, urea- vical de forma sistemática cada 2-4 semanas has-
plasma o SGB en un intento de reducir el riesgo ta la semana 35.
de prematuridad. Sí tiene sentido el screening de • Se repetirán los cultivos vaginales, endocervi-
SGB en el tercer trimestre para reducir el riesgo de cales, tinción de Gram vaginal y urinocultivo a
sepsis neonatal intraparto. las 20-22 semanas. En caso de cultivos positi-
En el manejo clínico diario, tanto la ecografía vos, se hará tratamiento antibiótico oral según
como la fibronectina tienen una eficacia similar. antibiograma específico. Si la tinción de Gram
Debido al mayor acceso y menor coste de la eco- vaginal confirma el diagnóstico de vaginosis
grafía en nuestro ámbito, nosotros utilizaremos la bacteriana (según criterios de Nugent), se rea-
medida de la longitud cervical (por ecografía trans- lizará tratamiento con clindamicina 300 mg/12
vaginal) como elemento predictor para el segui- horas vía oral durante 5 días.
miento de las pacientes. A las 34-35 semanas se cursará el cultivo de SGB
vaginal y rectal. Sólo se tratará la infección por
SGB en el contexto de bacteriuria asintomáti-
SEGUIMIENTO OBSTÉTRICO ca.
En pacientes con antecedentes, es conveniente • Retirada del cerclaje a partir de la semana 37.
iniciar el seguimiento obstétrico a partir de las 13- 2. Pacientes con antecedentes de una o más pér-
14 semanas de gestación, tras constatar normali- didas fetales de 2º o 3º trimestre (documentada o
dad en la ecografía de primer trimestre y en el scre- no) compatibles con incompetencia cervical así
ening prenatal. En el resto de pacientes, se inicia- como antecedentes de pretérmino anterior o ro-
rá el seguimiento ante hallazgos de riesgo: tura prematura de membranas antes de las 34 se-
1. Pacientes con historia de tres o más pérdidas manas:
fetales en el segundo o inicio del tercer trimestre, • Se planteará un control ecográfico cada 2 se-
donde no haya evidencia documentada que el ori- manas desde la semana 16 hasta la semana 26.
gen sea una incompetencia cervical, y pacientes • En casos de hallar una longitud cervical infe-
con historia de dos o más pérdidas fetales en el se- rior a 25 mm, se ofrecerá tratamiento médico
gundo o inicio del tercer trimestre, documentadas con progesterona vaginal; en casos selecciona-
como sugestivas de incompetencia cervical: dos o en aquellos en los que se evidencie per-
• En este grupo de pacientes se ofrecerá la opción sistencia del acortamiento cervical a pesar del
de un cerclaje electivo entre las 13-16 semanas tratamiento médico, se ofrecerá la opción de cer-

198
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

claje terapéutico(5). A partir de la semana 26, in- 4. Rotura prematura de membranas. El factor de
dividualizar según el contexto clínico y social de riesgo más importante es el cérvix corto. En casos
la paciente la frecuencia de las visitas así como muy seleccionados de pacientes RPM < 24 sema-
el posible seguimiento convencional si la situa- nas, estables desde el punto de vista clínico y ana-
ción se estabiliza y el riesgo de prematuridad es lítico, se planteará el alta domiciliaria con manejo
bajo. Se recomienda valorar la longitud cervical ambulatorio cada 1-2 semanas. El control obstétri-
de forma sistemática cada 2-4 semanas (depen- co en esta situación se describe en capítulo aparte.
diendo de la evolución) hasta la semana 35. Se 5. Metrorragias de 2º y 3º trimestre excluyendo
realizarán cultivos en la semana 12-16 y 20-22 la placenta previa. Son pacientes con un mayor ries-
según se especifica en el apartado anterior. go de rotura prematura de membranas. A la se-
3. Amenaza de parto pretérmino. A la semana del mana del alta hospitalaria se revalorará el riesgo:
alta hospitalaria se reevaluará el riesgo de parto • En ausencia de clínica de metrorragia y con lon-
pretérmino de estas pacientes: gitud cervical estable (mismo criterio que el es-
• Si la longitud cervical es superior a 25 mm an- pecificado al apartado anterior, se derivará a
tes de la semana 28, superior a 20 mm entre 28- la paciente para seguimiento obstétrico con-
32 semanas o superior a 15 mm más allá de las vencional).
32 semanas de gestación, y la paciente está es- • En el resto de casos, se individualizará el segui-
table, se considerará que el riesgo de presentar miento y se harán controles clínicos, analíti-
un parto pretérmino es bajo y se hará un con- cos y ecográficos cada 1-2 semanas valorando
trol obstétrico convencional remitiendo a la pa- la evolución clínica de la causa que produjo la
ciente a control convencional. metrorragia (p. ej., hematoma placentario, etc.).
• En el resto de casos, se individualizará el segui- En una nueva gestación, si no se repite el mo-
miento obstétrico y se harán controles cada 1- tivo que produjo la metrorragia, la paciente no se-
2 semanas valorando la medición ecográfica del rá susceptible de seguimiento como paciente de
cérvix y cursando los cultivos pertinentes según riesgo.
el apartado anterior.
• Se valorará la repetición de dosis de corticoides
únicamente si ≥ 15 días de la última dosis y se MEDIDAS PREVENTIVAS
plantea reingreso hospitalario por reaparición 1. Reposo y relaciones sexuales. No hay diferen-
de clínica de dinámica uterina. cias en el reposo domiciliario versus hospitalario
• No se ha demostrado que los tocolíticos profi- y el riesgo de parto pretérmino. No se ha estudia-
lácticos reduzcan el riesgo de parto pretérmino do el efecto del reposo o de las relaciones sexua-
ni la morbimortalidad perinatal. No se adminis- les en gestantes con cérvix corto. Parece pruden-
trarán tocolíticos vía oral profilácticos (betami- te recomendar la baja laboral a gestantes con cér-
méticos, nifedipino) de forma sistemática. Úni- vix < 25 mm antes de las 28 semanas.
camente se podrán utilizar como tratamiento sin- 2. Tabaco y otras drogas. Se ha demostrado una
tomático en pacientes en que la percepción de la asociación entre el uso de tabaco u otras drogas
dinámica uterina es muy acusada, a pesar de no (heroína, cocaína) y malos resultados perinatales.
objetivarse una evolución de las condiciones obs- Según un metaanálisis de la Cochrane, la intro-
tétricas y que les impide una vida normal. ducción de programas de desintoxicación en el

199
Manejo ambulatorio de la paciente con riesgo de parto prematuro

abuso del tabaco se ha asociado a una reducción miento. En consecuencia, la duda está en si, con
del riesgo de parto pretérmino (RR 0,84, 95% CI los datos de los que disponemos hoy en día, la
0,72-0,98) así como en una reducción del porcen- puesta en marcha del cribado universal en la prác-
taje de bajo peso al nacer. tica clínica es útil para disminuir la prematuridad
3. Progesterona. Ha demostrado su utilidad en o bien si la estrategia de identificación de las pa-
gestantes con historia de pretérmino anterior (re- cientes de riesgo y su correspondiente seguimien-
ducción aproximadamente de un 14% del riesgo to en una unidad específica sería capaz de obtener
de pretérmino recurrente) y en pacientes asinto- similar coste/beneficio sin tener que adoptar me-
máticas con cérvix muy corto < 15 mm (reduc- didas poblacionales.
ción del 40% el riesgo de parto pretérmino)(6). 5. Antibióticos. No se ha demostrado que la ad-
Por lo tanto, recomendaremos su utilización: ministración interconcepcional de antibióticos en
1. En pacientes con antecedentes de pretérmino pacientes con antecedentes de pretérmino anterior
anterior y cérvix < 25 mm. reduzcan el riesgo de pretérmino recurrente.
2. Pacientes asintomáticas sin antecedentes de pre- 6. Hierro. La anemia incrementa el riesgo de
maturidad con un cérvix < 20 mm. parto pretérmino principalmente en el 1º y 2º
3. Hallazgo ecográfico de acortamiento cervical trimestre de la gestación y el riesgo incrementa
progresivo. con la severidad del déficit de hemoglobina. Si
En general, se iniciará el tratamiento con pro- Hb ≤ 9,5 g/dl, el riesgo de parto pretérmino se mul-
gesterona vaginal 200 mg/24 horas alrededor de tiplica por 2. La hipoxia crónica generada por la
las 20 semanas y hasta la semana 34 excepto si el anemia puede provocar una respuesta de estrés se-
antecedente de parto pretérmino anterior o el ha- guida por la liberación de CRH por la placenta con
llazgo ecográfico de acortamiento de cuello fue- incremento de la producción de cortisol por el fe-
ron en una edad gestacional más precoz(5, 6). to, que aumenta así el riesgo de parto pretérmino.
4. Cribado universal de la longitud cervical. Ac- El suplemento con ferroterapia mejora los resul-
tualmente, existe controversia sobre la introduc- tados perinatales cuando la madre presenta una
ción del cribado universal de la longitud cervical anemia ferropénica, pero la suplementación pro-
en la ecografía de segundo trimestre; trabajos ba- filáctica incrementa el riesgo de diabetes gestacio-
sados en estimaciones apuntan a que el cribado es nal y de estrés oxidativo sin afectar el riesgo de par-
coste efectivo, cuando está seguido de una actua- to prematuro.
ción precoz mediante tratamiento con progeste- 7. Suplementos vitamínicos (vitamina C o E) o
rona en pacientes con longitud cervical ≤15 mm, calcio. No tienen efecto sobre la disminución de la
lo cual supondría tratar menos de un 2% de la po- prematuridad.
blación. Sin embargo, aunque las pacientes con 8. Ácidos grasos omega-3. Inhiben la producción
una longitud cervical ≤15 mm presentan un 34% de ácidos araquidónicos y por tanto, disminuyen
de parto pretérmino, la sensibilidad de la prueba las concentraciones de citoquinas, actuando sobre
es de sólo un 8% (IC 2,1-10,2%)(7, 8), lo cual quie- el factor inflamatorio de la prematuridad. La So-
re decir que el 92% de las pacientes que finalmente ciedad Internacional para el estudio de ácidos gra-
presentan un parto prematuro antes de las 34 se- sos y lípidos recomienda que durante el embara-
manas, tenían un cérvix “largo” a las 20-24 sema- zo y lactancia se tendría que garantizar una inges-
nas y no fueron, por tanto, susceptibles de trata- ta diaria de 300 mg de ácidos grasos omega-3 y un

200
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

descenso del consumo de grasas saturadas. Insis- BIBLIOGRAFÍA


tir en ingesta de frutas, pescado azul y verduras. 1. Goldenberg RL, et al. Epidemiology and causes of pre-
Pendiente de demostrar su utilidad como preven- term birth. Lancet 2008;371(9606):75-84.
tivo del parto pretérmino. Existen preparados co- 2. Hassan SS, et al. Patients with an ultrasonographic cer-
vical length < or =15 mm have nearly a 50% risk of
merciales que contienen exclusivamente aceites de
early spontaneous preterm delivery. Am J Obstet Gy-
omega-3. Otras fórmulas multivitamínicas (p. ej., necol 2000;182(6):1458-67.
Ginenatal Forte, Femivit, Natalben, etc.) contie- 3. Fonseca EB, et al. Progesterone and the risk of preterm
nen también suplementos de omega-3 a dosis re- birth among women with a short cervix. N Engl J Med
2007;357(5):462-9.
comendadas(9-11).
4. Palacio M, et al. The use of a variable cut-off value of
cervical length in women admitted for preterm labor
before and after 32 weeks. Ultrasound Obstet Gyne-
PUNTOS CLAVE col 2007;29(4):421-6.
• Es necesario definir correctamente a las pa- 5. Hassan SS, et al. Vaginal progesterone reduces the ra-
cientes que constituyen el grupo de riesgo. te of preterm birth in women with a sonographic short
cervix: a multicenter, randomized, double-blind, pla-
• De las pacientes que pertenezcan al grupo de cebo-controlled trial. Ultrasound Obstet Gynecol 2011;
riesgo, cabe separar las que, en la gestación ac- 38(1):18-31.
tual, el riesgo parece no estar presente. Estas pa- 6. ACOG Committee Opinion number 419 October 2008
cientes pueden seguir un control obstétrico con- (replaces no. 291, November 2003). Use of progeste-
rone to reduce preterm birth. Obstet Gynecol 2008;
vencional. 112(4):963-5.
• El seguimiento de las pacientes es óptimo si se 7. Werner EF, et al. Universal cervical-length screening
realiza en una consulta especializada. to prevent preterm birth: a cost-effectiveness analysis.
• Utilidad de la progesterona en población gene- Ultrasound Obstet Gynecol 2011; 38(1):32-7.

ral con hallazgo de longitud cervical ≤ 20 mm 8. Cahill AG, et al. Universal cervical length screening
and treatment with vaginal progesterone to prevent
y en pacientes con antecedentes de riesgo con preterm birth: a decision and economic analysis. Am
longitud cervical ≤25 mm. J Obstet Gynecol 2010;202(6):548 e1-8.
• El cerclaje NO mejora los resultados en el cér- 9. Iams JD, et al. Primary, secondary, and tertiary in-
vix inferior a 15 mm en población general, pe- terventions to reduce the morbidity and mortality of
preterm birth. Lancet 2008;371(9607):164-75.
ro debe considerarse en pacientes de riesgo.
10. Lu MC, et al. Preconception care between pregnan-
• Queda por determinar la utilidad del cribado cies: the content of internatal care. Matern Child He-
universal de la longitud cervical en segundo tri- alth J 2006;10(5 Suppl):S107-22.
mestre y su impacto en la reducción del parto 11. Mazaki-Tovi S, et al. Recurrent preterm birth. Semin
prematuro. Perinatol 2007;31(3):142-58.

201
Rotura prematura de membranas
T. Cobo, M. Palacio

INTRODUCCIÓN sis materna una complicación rara (1%). Como


Rotura prematura de membranas (RPM) se de- morbilidad neonatal se ha descrito un mayor ries-
fine como la rotura de membranas espontánea que go de distrés respiratorio (complicación más fre-
ocurre antes del inicio del trabajo de parto. La ro- cuente), de sepsis neonatal, de hemorragia intra-
tura de membranas antes de las 37 semanas se co- ventricular, de enterocolitis necrotizante, un ma-
noce como rotura prematura de membranas pre- yor compromiso neurológico y un mayor riesgo
término (el término anglosajón es preterm prela- de compresión de cordón en casos de anhidram-
bour rupture of membranes, PPROM) y complica nios si además existe dinámica uterina(1).
un 2-4% de todas las gestaciones únicas y un 7-
20% de las gestaciones gemelares, representando CAUSAS DE LA ROTURA PREMATURA DE
un 30% de los partos pretérmino(1). Debido a que MEMBRANAS: PAPEL DE LA INFECCIÓN
el límite de la viabilidad se ha reducido en los úl- INTRAAMNIÓTICA SUBCLÍNICA
timos años, actualmente definimos RPM previa- En el caso de la RPM pretérmino, la etiología es
ble cuando ésta se produce antes de la semana 24 multifactorial. Excepto en los casos que es secun-
de gestación. daria a una agresión mecánica, como un procedi-
La finalización activa de la gestación vendrá de- miento invasivo, en la mayoría de casos la etiolo-
terminada, independientemente de la edad ges- gía es idiopática.
tacional, por la presencia de corioamnionitis clí- De las causas conocidas, la más frecuente es la
nica, parto instaurado o compromiso fetal. En au- infección intraamniótica en una fase subclínica. Sin
sencia de dichas complicaciones, en la RPM pre- embargo, la práctica habitual se basa en la identi-
término se deberá individualizar el manejo clíni- ficación no de esta fase subclínica sino en la identi-
co en función de la edad gestacional estimando ficación de la fase clínica conocida como corioam-
el riesgo para la madre, para el feto y las compli- nionitis clínica. La corioamnionitis clínica se defi-
caciones neonatales derivadas de un parto pre- ne por la presencia de fiebre > 37,8ºC y dos o más
maturo. Como morbilidad materna se ha descri- de los siguientes criterios menores: 1) irritabilidad
to mayor riesgo de corioamnionitis clínica tardía uterina; 2) leucorrea maloliente; 3) taquicardia ma-
(13-60%), infección postparto (2-13%) y des- terna > 100 latidos/minuto; 4) taquicardia fetal >
prendimiento de placenta (4-12%), siendo la sep- 160 latidos/minuto, y 5) leucocitosis > 15.000

203
Rotura prematura de membranas

La infección intraamniótica subclínica está pre-


sente en un 30-60% de mujeres con RPM pretér-
mino(4). Representa la etapa previa a la aparición
de signos clínicos. Su diagnóstico es microbioló-
gico y requiere de un cultivo de líquido amnióti-
co. El principal inconveniente es que es un méto-
do diagnóstico tardío, cuya lectura requiere al me-
nos 48 horas, por lo que generalmente no suele es-
tar disponible para la toma de decisiones en el ma-
nejo clínico de este grupo de pacientes. Como mar-
cadores de lectura rápida de infección intraam-
niótica se habían clásicamente propuesto la tin-
Figura 1. Etapas de la infección uterina. PM. ción de Gram y el recuento de glucosa en líquido
amniótico(5). Son marcadores muy específicos de
infección (especificidades cercanas al 94%), pero
cels/mm3(2). Sólo se presenta en un 29.7% de las cuya mayor limitación es su baja sensibilidad (al-
RPM pretérmino(3) por lo que se considera un mar- rededor del 50-55%).
cador específico de infección pero poco sensible y La presencia de microorganismos en la cavidad
sobre todo un marcador tardío (Fig. 1). Hasta el mo- amniótica puede generar una respuesta inflama-
mento actual, el tratamiento de la corioamnionitis toria en el organismo que consiste en una diferente
clínica no ha demostrado beneficiarse de la con- expresión en la síntesis de citoquinas, neuropép-
ducta expectante con antibióticos, posiblemente tidos y otras proteínas inflamatorias en el líquido
porque su diagnóstico refleja un estado de la infec- amniótico, y que se conoce como inflamación in-
ción muy avanzado. Es por ello que ante el diag- traamniótica. La evidencia actual sugiere que no
nóstico de corioamnionitis clínica, la actitud ade- sólo la infección intraamniótica sino el diagnósti-
cuada es la finalización activa de la gestación bajo co de inflamación intraamniótica, independiente-
cobertura antibiótica de amplio espectro. mente del resultado del cultivo de líquido amnió-

TABLA I.

Sensibilidad Especificidad VPP VPN

Glucosa1 55% 94% 86% 76%


IL-62 100% 82,57% 36,67% 100%
MMP-83 83% 95% 56% 99%
Calgranulins A,C, Neutrophil defensins 1,24 86,2% 89,5% 83,3% 91,4%
39 61,5 92,2
40 64,4 96,6
VPP: valor predictivo positivo; VPN: valor predictivo negativo.
1Romero R. Am J Obstet Gynecol 1990. 2Romero R. Am J Obstet Gynecol 1993. 3Nien JK. Am J Obstet Gynecol 2006.

4Buhimschi I. BJOG 2005.

204
T. Cobo, M. Palacio

tico, está asociada a mayor tasa de prematuridad, en el diagnóstico ya sea porque: a) la pérdida de lí-
de corioamnionitis clínica y mayor morbilidad ne- quido es intermitente; b) no se evidencia hidro-
onatal en forma de test de Apgar más bajos, ma- rrea en vagina durante la exploración física, y c)
yor porcentaje de admisión a Unidades de Cuida- existe contaminación por secreciones cervicales,
dos Intensivos Neonatales, distrés respiratorio ne- semen, sangre u orina.
onatal, hemorragia intraventricular, bajo peso al En caso de no objetivarse hidrorrea franca, y
nacer y morbilidad a largo plazo como la parálisis si los resultados de la comprobación del pH vagi-
cerebral, alteraciones cognitivas y enfermedad cró- nal (test de nitrazina), arborización del líquido am-
nica pulmonar(3). Es por ello que la investigación niótico mediante microscopía óptica o evidencia
actual se centra en la búsqueda de marcadores de de oligoamnios en la exploración ecográfica ofre-
inflamación intraamniótica que complemente la cen dudas, puede recurrirse a la determinación de
información aportada por los cultivos microbio- ciertas proteínas en vagina:
lógicos, para proporcionar una información pro- 1. PROM test® (IGFBP-1): insulin-like growth fac-
nóstica en el subgrupo de pacientes con RPM pre- tor binding protein-1. La IGFBP-1 es una prote-
término. La presencia de leucocitos en líquido am- ína sintetizada en el hígado fetal y en la deci-
niótico, citoquinas, neuropéptidos y otras proteí- dua. Está presente en líquido amniótico a gran-
nas inflamatorias se han propuesto como marca- des concentraciones, pero ausente en muestras
dores de inflamación intraamniótica(6-8). De for- biológicas como el plasma seminal, la orina y la
ma individual, todos ellos presentan una buena sangre materna. Su sensibilidad varía del 74-
sensibilidad y especificidad para detectar infección 100% y su especificidad del 77-98,2%(10).
intraamniótica subclínica. Sin embargo, la utiliza- 2. Amnisure® (PAMG-1): placental alpha micro-
ción clínica de algunos es limitada por su tasa de globulin-1. Es una proteína que se sintetiza en
falsos positivos (es el caso de la interleukina 6) y la decidua. La concentración en el líquido am-
por la dificultad técnica en su determinación (Ta- niótico es de 100-1.000 veces superior a la que
bla I). Por el momento, no existe evidencia que el se presenta en sangre materna. Está ausente en
tratamiento antibiótico de la infección intraam- muestras biológicas como semen u orina. Pre-
niótica subclínica en gestantes con RPM pretér- senta una sensibilidad cercana al 99% y una es-
mino erradique el estatus de infección(9). Está pen- pecificidad que varía del 87,5-100%(10).
diente de ser demostrado si el tratamiento anti- Ambas son pruebas no invasivas con suficien-
biótico/antiinflamatorio en el estadio de inflama- te sensibilidad y especificidad para ser incluí-
ción intraamniótica subclínica, puede mejorar el das en la práctica clínica para despistaje de
pronóstico de estas gestaciones, en relación a la aquellas mujeres con dudas de RPM pretér-
prematuridad, el riesgo de infección y la morbili- mino.
dad neonatal. 3. En casos muy seleccionados, el diagnóstico de-
finitivo puede realizarse instilando fluoresceí-
na en la cavidad amniótica mediante amnio-
DIAGNÓSTICO centesis. La detección de fluoresceína en vagi-
La mayoría de las veces, el diagnóstico de la ro- na a los 30-60 minutos confirma el diagnósti-
tura es sencillo, al objetivar la hidrorrea. Sin em- co de RPM, aunque pasado este tiempo pierde
bargo, en un 10-20% de los casos, aparecen dudas especificidad.

205
Rotura prematura de membranas

MANEJO CLÍNICO y su tendencia no significativa a reducir la mor-


Ante el diagnóstico inicial de RPM debemos: talidad antenatal y neonatal(15). Sin embargo, a
1. Comprobar la edad gestacional (a ser posible, pesar de sus beneficios a corto plazo, a largo pla-
con una ecografía de primer trimestre). zo en un seguimiento de 7 años, los antibióticos
2. Realizar cultivos endocervicales, vaginal/anal no han demostrado ningún beneficio ni per-
de SGB y/o Gram vaginal. juicio en la morbimortalidad perinatal(16).
3. Evaluar las condiciones obstétricas limitando El tipo de antibiótico a utilizar va a depender
el número de tactos vaginales, ya que la repetición de la sensibilidad a estos de las cepas micro-
de las exploraciones disminuye el tiempo de la- bianas prevalentes en cada centro. La mayo-
tencia e incrementa la morbilidad de origen in- ría de autores recomiendan el uso parenteral
feccioso. Los tactos digitales deberían evitarse sal- de antibióticos durante la primera semana de
vo fase activa del parto o parto inminente(11). ingreso y su repetición únicamente si los cul-
4. Descartar signos clínicos o analíticos de corio- tivos iniciales son positivos para algún germen
amnionitis o sospecha de pérdida de bienestar fetal patógeno, ajustándolos al antibiograma obte-
mediante el perfil biofísico o el registro cardioto- nido. A raíz de los resultados del estudio ORA-
cográfico (test no estresante, NST). El NST diario CLE se recomienda evitar el tratamiento de las
permitirá identificar alteraciones en forma de de- RPM por debajo de las 34 semanas con amo-
saceleraciones así como valorar la contractibilidad xicilina-clavulánico, ya que la combinación de
uterina. Se deberá tener en consideración que en ambos antibióticos aumenta el riesgo de ente-
RPM < 32 semanas, un registro cardiotocográfico rocolitis necrotizante dado que favorecen la co-
no reactivo no traduce necesariamente un cuadro lonización microbiana del tracto intestinal por
de pérdida del bienestar fetal sino que puede ser re- gérmenes como Enterobacter, Citrobacter y
flejo de la inmadurez fetal. Un perfil biofísico ≤ 6 se Pseudomonas(14). Se debe realizar profilaxis pa-
ha correlacionado con un mayor riesgo de infección ra el estreptococo del grupo B con cualquiera
intraamniótica y de sepsis neonatal(12). de las pautas antibióticas si no disponemos de
5. Administrar antibióticos siempre y/o corti- un resultado en las últimas 5 semanas.
coides dependiendo de la edad gestacional. 5.b.Corticoterapia. Se recomienda la administra-
Aunque existen controversias respecto el ma- ción de corticoides en mujeres con RPM entre
nejo óptimo de las RPM pretérmino, en general las 24,0 y las 32 semanas de gestación por su co-
existe consenso sobre: nocido beneficio para reducir el riesgo de dis-
5.a.Antibioterapia. A raíz de los resultados de di- trés respiratorio, hemorragia intraventricular,
versos metaanálisis de la década de los 90(13) y enterocolitis necrotizante y mortalidad neona-
del estudio ORACLE(14), las recomendaciones tal, sin aumentar los riesgos de infección neo-
actuales sugieren la utilización de antibiotera- natal o corioamnionitis o sepsis materna inde-
pia profiláctica en mujeres con RPM pretér- pendientemente de la edad gestacional(17). No
mino por su efecto a corto plazo en la reducción existe consenso sobre la utilización de cortico-
del porcentaje de infección materna, retraso del esteroides en RPM entre las 32-34 semanas. Sin
parto, reducción del porcentaje de infecciones embargo, la mayoría de expertos recomiendan
neonatales, de distrés respiratorio, de hemorra- la administración de esteroides en estas sema-
gia intraventricular, de enterocolitis necrotizante nas de gestación si no está documentada la ma-

206
T. Cobo, M. Palacio

durez pulmonar fetal. En la RPM pretérmino, oligoamnios no se ha asociado ni a un ma-


existe además controversia sobre la utilización yor riesgo de infección materna ni neonatal(20).
de dosis repetidas de corticoides debido al ries- Respecto a la valoración ecográfica del cérvix,
go incrementado de morbilidad de origen in- la evidencia de un cérvix corto, a pesar de ser
feccioso(18). Por ello, actualmente se tiende a ser factor de riesgo de parto en 7 días, es un ha-
restrictivo en la utilización de dosis repetidas de llazgo raro en la RPM pretérmino(21). Por ello,
esteroides. Únicamente se plantea utilizar dosis ni la valoración del volumen de líquido am-
de recuerdo ante la desestabilización del cuadro niótico ni la valoración del cérvix son herra-
(aparición de dinámica uterina, metrorragia, mientas diagnósticas de primera elección en
etc.) que sugiera una finalización inminente de el manejo de la RPM(1).
la gestación, o si existe evidencia de inmadu- 8.c. Debe valorarse el riesgo de prolapso de cordón
rez pulmonar fetal. en caso de presentación fetal no cefálica en ges-
6. Tocolíticos. Aunque no existen datos conclu- taciones con dilatación avanzada. Esta cir-
yentes sobre la utilización de tocolíticos en la RPM cunstancia podría justificar una finalización
pretérmino, parece razonable pensar que la tocó- más temprana por el riesgo de pérdida fetal.
lisis profiláctica puede permitir el efecto benefi- 8.d. Aunque existe literatura contradictoria al res-
cioso de los corticoides y los antibióticos al pro- pecto, en pacientes portadoras de cerclaje, ac-
longar la gestación durante al menos 48 h(19). tualmente no se recomienda su retirada si la
7. Manejo hospitalario versus domiciliario. En paciente se mantiene estable(22).
general se recomienda la hospitalización de la ges- 8.e. Una vez estabilizada la paciente y según la edad
tante con RPM pretérmino una vez alcanzada la gestacional, deberá optarse por un traslado in
viabilidad fetal, para un mejor manejo neonatal utero, si el centro no dispusiera de una unidad
ante una situación de urgencia como el parto ins- de cuidados intensivos neonatales adecuada.
taurado o la compresión de cordón umbilical.
8. Otras consideraciones:
8.a. La administración de corticoides conlleva un FINALIZACIÓN GESTACIÓN SEGÚN LA
aumento de la leucocitosis materna en los 5-7 EDAD GESTACIONAL
días siguientes a su administración y una dis- La finalización de la gestación se basará princi-
minución de la variabilidad en el registro car- palmente en la edad gestacional y en el bienestar
diotocográfico (test no estresante, NST), sin fetal. En caso de parto instaurado imparable, co-
que estos factores traduzcan necesariamente un rioamnionitis, desprendimiento prematuro de pla-
cuadro séptico o de pérdida de bienestar fetal. centa o de sospecha de pérdida de bienestar fetal
8.b.La valoración del volumen de líquido amnió- se dejará evolucionar el parto independientemen-
tico tiene escaso valor predictivo positivo pa- te de la edad gestacional.
ra el diagnóstico de resultado adverso. A pe-
sar de que un índice de líquido amniótico < 5 RPM 32-36 semanas
cm o una columna máxima de líquido am- A las 32-34 semanas, el riesgo de complicaciones
niótico < 2 cm se han asociado a un interva- severas relacionadas con la prematuridad es bajo.
lo de parto más corto y un mayor riesgo de Se recomendará la finalización de la gestación cuan-
morbilidad neonatal (distrés respiratorio), el do se haya documentado la madurez pulmonar. A

207
Rotura prematura de membranas

pesar de que la eficacia de los corticoesteroides no El manejo hospitalario de este tipo de pacientes
se ha valorado en mujeres con RPM entre las 32-34 consistirá en la detección precoz de signos clínicos y
semanas de gestación, la mayoría de expertos reco- analíticos sugestivos de infección y la valoración del
miendan la maduración pulmonar con corticoides bienestar fetal mediante el NST y el perfil biofísico.
durante 48 horas valorando posteriormente la ma- Ante el diagnóstico clínico de corioamnionitis,
durez (surfactant/albumina ratio [TDX FLM]; le- el tratamiento más adecuado es la finalización de
citina/esfingomielina ratio, recuento de cuerpos la- la gestación bajo cobertura antibiótica materna de
melares). En casos de inmadurez pulmonar fetal, amplio espectro.
generalmente se finaliza de acuerdo con los neona-
tólogos en un intervalo de tiempo inferior o igual a RPM en edades gestaciones previables
una semana. La RPM por debajo de las 24 semanas es una
En centros donde no estén disponibles pruebas complicación obstétrica infrecuente (1-7/1.000 ges-
de madurez pulmonar fetal o si Neonatología no taciones) pero de manejo complejo que se asocia a
puede aceptar prematuros extremos, puede con- una importante morbimortalidad materna y fetal.
templarse una actitud conservadora hasta la se- En edades previables, los malos resultados pe-
mana 34, si la paciente permanece estable, ya que rinatales descritos en la literatura, con una mor-
a partir de la semana 34 el riesgo de morbimorta- talidad del 40-60%(23, 24), podrían justificar la inte-
lidad neonatal es bajo y el prolongar la gestación rrupción legal del embarazo. En nuestra serie, la
hasta las 36 semanas incrementa el riesgo de co- supervivencia global es del 42,9%(25). La morbili-
rioamnionitis y de compresión de cordón(1, 23). dad materna más frecuente en RPM en edades pre-
viables es la corioamnionitis (37%) seguido de la
RPM 24-31 semanas endometritis (11%). La sepsis materna es rara
El parto antes de las 32 semanas se asocia a un (1%)(26). Un 66% de los recién nacidos presenta-
riesgo significativo de complicaciones neonata- ran distrés respiratorio, un 29% displasia bronco-
les relacionadas con la prematuridad, por lo que pulmonar, un 5% hemorragia intraventricular y
estas gestaciones se benefician de un manejo con- un 19% sepsis(26). En el seguimiento de los recién
servador(1). El manejo conservador generalmen- nacidos a los 2 años de vida, el riesgo de secuelas
te consiste en la maduración pulmonar con cor- neurológicas varía enormemente según los traba-
ticoides, la administración de antibióticos y el re- jos publicados (6-44%). No obstante, no hay sufi-
poso relativo hospitalario en un intento de mi- ciente bibliografía sobre los resultados neurológi-
nimizar la pérdida de líquido amniótico y detec- cos a largo plazo, por lo que deberemos ser cautos
tar signos de infección o de pérdida de bienes- a la hora de informar a los padres sobre el pro-
tar fetal. En ausencia de parto instaurado, des- nóstico de estos recién nacidos. En general, de-
prendimiento de placenta, sufrimiento fetal o co- penderá de la presencia de infección y del grado
rioamnionitis clínica, el objetivo es prorrogar la de prematuridad en el momento del parto(23, 24).
gestación hasta alcanzar las 31-32 o más semanas Los principales contribuyentes del mal resulta-
de gestación dependiendo del centro, y conside- do perinatal en el caso de las RPM previables son la
rar la finalización si la madurez pulmonar está la prematuridad, la hipoplasia pulmonar, la seve-
documentada, tal como hemos referido en el pun- ridad y persistencia de oligoamnios, la corioam-
to anterior. nionitis y el riesgo de deformidades esqueléticas.

208
T. Cobo, M. Palacio

La hipoplasia pulmonar letal raramente ocurre rioamnionitis, test de Apgar más bajos (pero no
en RPM más allá de las 24 semanas, probablemente más acidosis) y más deformidades esqueléticas.
porque la fase crítica del desarrollo pulmonar (fa- Deformidades esqueléticas. La incidencia glo-
se canalicular) tiene lugar entre las 17 y las 24 se- bal descrita de deformidades esqueléticas es del
manas de gestación. El riesgo de hipoplasia pul- 20% y dependerá fundamentalmente del inter-
monar después de RPM pretérmino entre 16-26 valo de tiempo al parto y del oligoamnios severo
semanas varía de 1-27%(1). En nuestra serie, el ries- y persistente. Dichas deformidades esqueléticas
go de hipoplasia pulmonar es del 11,8%(25). Una suelen ser reducibles con fisioterapia y la mayo-
vez está presente, la mortalidad asociada a hipo- ría de ellas no requieren cirugía(26).
plasia pulmonar es muy alta, del 70-100%(26). Los El manejo obstétrico generalmente incluye una
factores predictores de hipoplasia pulmonar des- actitud conservadora con administración de anti-
critos en la literatura son la edad gestacional en el bióticos profilácticos(23) en el momento del ingre-
momento de la amniorrexis (a partir de la sema- so y corticoterapia para mejorar la madurez pul-
na 26 el riesgo es casi nulo), el oligoamnios seve- monar a partir de las 24,0 semanas(1). Sin embar-
ro y persistente, y el intervalo de tiempo desde la go, la evidencia actual es insuficiente sobre el tipo
amniorrexis hasta el momento del parto(23, 24). de antibiótico así como sobre la duración del mis-
Severidad y persistencia del oligoamnios. La va- mo en este tipo de RPM(26).
loración del líquido amniótico juega un papel crí- No existe consenso sobre el manejo obstétrico
tico en el manejo conservador de RPM extremas. óptimo de dichas gestaciones ni referencia en la li-
Columnas de líquido amniótico < 1 cm, lo que teratura sobre los riesgos y beneficios de la opción
se define como oligoamnios severo, de forma man- expectante domiciliaria versus el ingreso hospitala-
tenida durante más de una semana, se asocian a rio continuado hasta el momento del parto, de mo-
mayor riesgo de hipoplasia pulmonar y de mal- do que puede ser razonable un control ambulato-
posiciones esqueléticas. rio semanal y reingreso en una etapa gestacional
La presencia de una columna máxima de líqui- viable, 26-27 semanas, hasta la finalización de la ges-
do amniótico > 2 cm será un factor pronóstico fa- tación a las 31-32 semanas, según los centros.
vorable para ausencia de hipoplasia pulmonar, in- A modo de conclusión, el pronóstico actual de las
dependientemente de la edad gestacional en el mo- gestaciones complicadas con RPM previable sigue sien-
mento de la RPM o del intervalo de tiempo desde do globalmente malo. Sin embargo, en la información
la RPM al parto, de modo que un punto de corte dirigida a los padres, cabe diferenciar el pronóstico de-
de la columna máxima de líquido amniótico de 2 pendiendo de las semanas que alcance la gestación.
cm presenta una sensibilidad (S) del 52-100%, es-
pecificidad (E) del 41-82% y valor predictivo po-
sitivo y negativo (VPP y VPN) del 22-64% y 89- PUNTOS CLAVE
100% para la predicción de hipoplasia pulmo- 1. Considerar la infección intraamniótica subclí-
nar(26). La utilidad clínica de puntos de corte más nica como la causa conocida más frecuente de
bajos es más limitada. RPM pretérmino responsable del 30-60% de los
Por otra parte, los fetos con oligoamnios seve- casos de rotura de membranas. En centros en
ro tienen mayor riesgo de desaceleraciones intra- que se disponga de posibilidades técnicas, pa-
parto, mayor tasa de cesáreas, mayor riesgo de co- rece razonable la realización de una amniocen-

209
Rotura prematura de membranas

RPM ≥ 34 s RPM 24-34 s RPM < 24 s

Antibioterapia

Supervivencia 40%
Corticoterapia 24.0-34-0 Semanas Hipoplasia pulmonar 10%
(1 dosis /24h x 2 días) Morbilidad prematuridad

Conducta expectante hasta semana 31-32.0 s: ILE

Si no disponibilidad de comprobar madurez: conducta expectante hasta semana 34.0

Si disponibilidad de comprobar madurez pulmonar:


Amniocentesis

Si madurez pulmonar Si inmadurez pulmonar

1 dosis recuerdo corticoides o


2 dosis si última dosis > 15 d.

Posibilidad comprobar madurez pulmonar hasta semana 34.0

Finalización gestación (excepto evidencia de inmadurez pulmonar fetal)

Figura 1. Algoritmo terapéutico en la PM. Pruebas complementarias: Hemograma, PCR. Cultivos endocervical, Gram vagi-
nal, SGB vagino-rectal, urinocultivo.

tesis al ingreso, para un despistaje de infección. se limita a la tanda inicial de dos dosis de corti-
Sin embargo, aún no está demostrado si la de- coides. La repetición de dosis debe quedar re-
tección y tratamiento precoz de esta circuns- servada para casos seleccionados y ser recogida
tancia es capaz de cambiar el curso clínico. en los protocolos clínicos de cada centro.
2. En casos de dudas sobre el diagnóstico de RPM,
recurrir a pruebas no invasivas muy específicas
como PROM test® y Amnisure® en muestras BIBLIOGRAFÍA
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210
T. Cobo, M. Palacio

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211
Amenaza de parto pretérmino
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

INTRODUCCIÓN siones, podemos identificar factores infecciosos de


La amenaza de parto pretérmino se define clá- otros focos del organismo (pielonefritis, apendici-
sicamente como la presencia de dinámica uterina tis, etc.). Pero hasta en un 13%, existe una infec-
regular asociada a modificaciones cervicales pro- ción/inflamación intraamniótica subyacente desen-
gresivas desde las 22,0 hasta las 36,6 semanas de cadenante del cuadro, sobre todo en los debuts en
gestación. No obstante, estos parámetros presen- edades gestacionales tempranas(2). Dado que la lite-
tan una baja sensibilidad y especificidad para pre- ratura refiere un aumento de la morbilidad neona-
decir el parto pretérmino. En la mayoría de casos tal secundaria a este proceso infeccioso y un mayor
en los que la paciente ingresa con el diagnóstico riesgo de parto pretérmino, la identificación de es-
clásico de amenaza de parto pretérmino, el riesgo ta etiología podría tener una importancia relevan-
real de desencadenarse el parto es muy bajo (20- te para mejorar el pronóstico global de la gestación
30%)(1). Existen métodos objetivos que evalúan es- en estos casos. Es por este motivo que podría in-
te riesgo con una mejor capacidad predictiva y con cluirse la realización de una amniocentesis en el pro-
una alta especificidad permitiendo descartar los fal- ceso diagnóstico. Sin embargo, no existe aún lite-
sos positivos. Entre estos métodos podemos desta- ratura que describa si los resultados perinatales pue-
car la ecografía transvaginal y métodos bioquími- den ser mejorados con esta estrategia.
cos como la fibronectina o la detección de IGFBP-
1 (Partus test®), cuyos resultados son comparables
entre sí. Por su bajo coste y su facilidad en la apli- DIAGNÓSTICO
cación clínica en nuestro contexto, utilizamos la Frente a una paciente que nos consulta por sin-
medición de la longitud cervical como la explora- tomatología compatible con dinámica uterina y en
ción complementaria de primera elección. la que se objetiva dinámica uterina regular, se de-
La amenaza de parto pretérmino puede tener un ben realizar sistemáticamente y de manera orde-
origen multifactorial. En la mayoría de casos, des- nada:
conocemos la causa desencadenante (causa idiopá- • Anamnesis dirigida.
tica). Otras veces existe una razón más o menos ob- • Exploración física (descartar otro posible foco
via (gestación múltiple, polihidramnios, etc.) que que dé origen al dolor, fiebre, peritonismo, pu-
explique la aparición de la dinámica. En otras oca- ño percusión, etc.).

213
Amenaza de parto pretérmino

• Exploración obstétrica: Se deben descartar siempre otras patologías que


1. Comprobar frecuencia cardiaca fetal positi- contraindiquen la tocólisis: DPPNI, corioamnio-
va. nitis, etc.
2. Valoración del abdomen (altura uterina, es-
tática fetal, irritabilidad uterina, etc.).
3. Espéculo: visualización del cérvix (descartar EVALUACIÓN DEL RIESGO
amniorrexis, metrorragias, etc.). En presencia de dinámica uterina regular, se
4. Tomar muestras para cultivo previo al tac- considerarán pacientes de alto riesgo cuando es-
to vaginal: tén presentes UNO O MÁS de los siguientes cri-
– Frotis rectal y vaginal (1/3 externo de va- terios:
gina) para SGB. • Criterios clínicos:
– Frotis endocervical. – Bishop ≥ 5.
– Extensión de frotis vaginal en porta para – Parto pretérmino anterior (espontáneo) an-
Gram (sin fijar). tes de la semana 34.
– Sedimento y urinocultivo. – Gestación múltiple.
5. TV: valoración cervical mediante el índice – Portadora de cerclaje cervical en gestación
de Bishop. actual.
6. Ecografía transvaginal: medición de la lon- • Criterios ecográficos:
gitud cervical (con vejiga vacía, sin presio- – Longitud cervical < 25 mm antes de las 28,0
nar excesivamente con el transductor, con semanas.
contracción o presión fúndica y escoger la – Longitud cervical < 20 mm entre las 28,0 y
menor de tres mediciones). 31,6 semanas.
7. RCTG: confirmar la presencia de dinámica – Longitud cervical < 15 mm a las 32 semanas
uterina y descartar signos de pérdida de bie- o más.
nestar fetal. Si utilizamos la fibronectina en lugar de la lon-
8. Analítica (hemograma, bioquímica básica, gitud cervical, el hallazgo de fibronectina positiva
coagulación y PCR). en este contexto será equivalente a la considera-
9. Valorar la realización de amniocentesis si sos- ción de un cérvix corto.
pecha de infección subyacente (p. ej., resul- Se considerarán pacientes de bajo riesgo cuan-
tados dudosos de analítica, etc.). Determi- do no esté presente NINGUNO de los criterios ci-
nar: tados anteriormente.
– Glucosa. En ausencia de dinámica uterina regular, es ne-
– FLM (valorar según la edad gestacional). cesario valorar estos parámetros con precaución,
– Leucocitos. dado que pueden no relacionarse con el parto pre-
– Tinción de Gram. término. En este caso, se debería hacer un segui-
– Cultivo de líquido amniótico, aerobios y miento (en 1-2 semanas) de la situación clínica.
anaerobios. Estos hallazgos, en ausencia de clínica, NO SON
– Cultivo de micoplasmas. TRIBUTARIOS de tratamiento tocolítico ya que
– Cariotipo (valorar según la edad gestacio- pueden representar el extremo de la normalidad.
nal). Como medida de precaución, podría recomen-

214
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

darse restringir la actividad laboral y el estilo de Corticoides


vida parcialmente hasta evaluar la evolución clí- Entre las 24,0 y 33,6 semanas: 12 mg betameta-
nica. sona (Celestone Cronodose) según pauta de una
dosis diaria durante dos días. Si se realizara amnio-
centesis, considerar necesidad de corticoides de-
MANEJO pendiendo de resultado de FLM. La repetición de
A partir de la semana 35,0 se recomienda una dosis de corticoides debe contemplarse con caute-
conducta poco agresiva. Se suspenderá el trata- la, dado que las dosis repetidas de corticoides no
miento tocolítico endovenoso y se indicará re- han demostrado mayor beneficio y sí se ha relacio-
poso. De forma opcional, si precisa, se adminis- nado con una disminución de parámetros antro-
trará tocólisis vía oral respetando el reposo noc- pométricos(3).
turno.
A partir de la semana 36,0 se suspenderá todo Tocolíticos
tipo de tratamiento tocolítico. Existen múltiples opciones terapéuticas:
1. Atosiban ev (antagonista de la oxitocina): ee
a) Si existe dinámica uterina (DU) EN PACIEN- los fármacos autorizados para este uso, es el fár-
TES DE BAJO RIESGO de parto pretérmino maco que presenta un mejor perfil de seguridad.
Reposo y observación 2-3 horas en el área de De absoluta elección en gestaciones múltiples y car-
Urgencias para valorar si hay cambios en las con- diópatas, en pacientes diabéticas pregestacionales
diciones cervicales: o gestacionales, y en todas aquellas pacientes con
• Considerar la necesidad de administrar una do- intolerancia o contraindicación a otros tocolíticos.
sis única de 20 mg de nifedipina. 2. Ritodrine ev (miméticos): está autorizado pa-
• Si cede la DU y no existen modificaciones cer- ra este uso pero presenta relevantes efectos secun-
vicales, podrá valorarse el alta domiciliaria con darios. Su administración debe realizarse bajo vi-
reposo relativo 24 horas. gilancia estricta. Utilizar sólo en ausencia de con-
• Si no cede la DU, pero no hay modificaciones traindicaciones: patología cardiovascular (incluye
cervicales, se puede valorar el ingreso u obser- hipertensión), pulmonar o tiroidea materna, dia-
vación durante 12-24 horas. Inicialmente, NO betes pregestacional o gestacional, migrañas de re-
se administrará tratamiento tocolítico ni corti- petición o gestación múltiple.
coides. Sólo se utilizarán los tocolíticos como En el caso de requerir elevadas dosis de mi-
tratamiento sintomático y con una pauta corta méticos ev de manera persistente, realizar:
de 12-24 horas. Alta precoz cuando ceda el cua- 1. Control ECG.
dro sintomático. 2. Peso diario para corroborar un correcto balan-
ce hídrico.
b) Si existe dinámica uterina (DU) EN PACIEN- 3. Controles glicémicos periódicos.
TES DE ALTO RIESGO de parto pretérmino El objetivo será la inhibición de la dinámica
Ingreso, reposo absoluto 24 horas (permi- uterina. Una vez logrado este objetivo, disminuir
tiendo higiene personal si el cuadro clínico lo dosis a la mitad a las 6-12 h y suprimir como má-
permite) y control maternofetal (RCTG/8-12 h, ximo en 24-48 h tras el inicio del tratamiento, pa-
cts/6 h). sando a tocolítico oral tras estabilización clínica.

215
Amenaza de parto pretérmino

Cambiar de fármaco si: taquicardia > 140 lati- Exige:


dos/minuto (paciente sana) y/o sensación de aho- • Si edad gestacional entre 27-32 seg: ILA+Dop-
go y/o opresión torácica y/o cualquier otra sinto- pler/48 h para control de una posible restric-
matología atribuible a posibles efectos secunda- ción del ductus arterioso y proseguir según los
rios de los beta-miméticos. resultados.
3. Nifedipino (inhibidor del canal del calcio): to- • Si >32 seg: evitar como tratamiento tocolítico.
colítico de administración oral que ha mostrado ser Si se usa como tratamiento del polihidramnios,
tan efectivo como atosibán y superior a los β2-adre- requiere control estricto del ILA y Doppler del
nérgicos por presentar menos efectos secundarios(4). ductus arterioso/24-48 h (posible cierre irre-
Requiere peticiones de medicación de uso compa- versible del ductus a partir de la semana 32).
sivo si se administra de manera pautada. Contrain- 5. Terapia combinada: si a pesar del trata-
dicado en pacientes con disfunción renal, hepática miento con monoterapia, la paciente presenta di-
o cardiaca, uso concurrente de medicación antihi- námica uterina persistente, se valorará la posi-
pertensiva, MgSO42+ o nitroglicerina transdérmica bilidad de terapia combinada (preferentemente
(GTN), betamiméticos, alergia a la nifedipina o hi- nifedipina + atosibán), considerando la edad ges-
potensión clínica en circunstancias basales. tacional y las modificaciones cervicales. No aso-
Pauta: 20 mg vo de entrada seguido de pauta de ciar nifedipina + betamiméticos de manera pau-
20 mg/6 h durante 48-72 horas. tada.
Si no existe respuesta al tratamiento inicial: 20 En caso de que hayamos realizado una amnio-
mg vo de dosis de rescate a los 30 minutos de la centesis, NO SERÁN TRIBUTARIAS DE TRATA-
primera dosis y 20 mg vo más a los 30 minutos si MIENTO TOCOLÍTICO pacientes:
no hay respuesta. Si después de esta segunda do- a) ≥ 34 semanas: si glucosa < 5 mg/ml o tinción
sis de rescate no hay respuesta, está indicado cam- de Gram con gérmenes.
biar de tocolítico. b) < 34 semanas: si glucosa < 5 mg/ml y 50 leu-
La pauta convencional será de 20 mg/6 h pero cocitos y tinción de Gram con gérmenes.
existe un margen de 20 mg/3-8 h, sin sobrepasar c) Con cultivo positivo en líquido amniótico en la
una dosis máxima de 160 mg/día. amniocentesis de este ingreso.
Después de 72 h, si requiere terapia de mante- En el resto de casos, se realizará tratamiento to-
nimiento, se puede cambiar a Adalat Oros vo 30- colítico (y tratamiento antibiótico si es necesario)
60 mg/día (existen comprimidos de 30 y 60 mg). a la espera de los resultados del cultivo de líquido
Control de constantes: control de pulso y TA ca- amniótico.
da 30 minutos la primera hora o mientras se utilice
terapia intensiva. Después, control horario. Si se es- Antibióticos
tabiliza el cuadro, control de constantes cada 6-8 h. No se ha demostrado beneficio con el trata-
4. Indometacina (inhibidor de la síntesis de pros- miento antibiótico en estas pacientes(5) y sí un po-
taglandinas): útil sobretodo en APP precoces (< 26 sible efecto perjudicial(6). Por lo tanto, serán úni-
seg). Dosis: 50 mg/6 h vo (alternativas: vía vaginal camente tributarias de tratamiento antibiótico pro-
o rectal; 150-200 mg como dosis de entrada y 100 filáctico las pacientes con exposición franca de la
mg/12 h de mantenimiento). De uso restringido bolsa amniótica en vagina (bolsa visible a través
por encima de las 32 semanas de gestación. del OCE con espéculo o en vagina “en reloj de are-

216
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

na”) o aquellas pacientes en que la amniocentesis to con sulfato de magnesio (miastenia gravis, car-
sugiriera signos de infección. diopatía grave, insuficiencia respiratoria, altera-
Inicialmente se utilizarán antibióticos con una ciones hidroelectrolíticas como hipocalemia o hi-
cobertura amplia: ampicilina 1g/6 h ev + genta- pocalcemia e insuficiencia renal).
micina 80 mg/8 h ev. Si la paciente se mantiene clí- La PAUTA de administración será de un bolus
nicamente estable, el tratamiento será corregido, inicial de 4-6 g de sulfato de magnesio (tiempo de
suspendido o mantenido según situación clínica. administración 20-30 minutos) seguido de una
perfusión de 1-2 g/h, que se mantendrá un máxi-
Neuroprofilaxis mo de 12 h, tras lo cual se revalorará la situación
La prematuridad es el principal factor de ries- clínica y la necesidad de su utilización.
go de parálisis cerebral; aproximadamente un ter- Si tras completar la tanda de administración rea-
cio de los casos de parálisis cerebral se asocian con parecen signos de parto inminente, se valorará el tiem-
recién nacidos prematuros, aumentando propor- po transcurrido desde su finalización: si son menos
cionalmente el riesgo al disminuir la edad gesta- de 6 horas, reiniciar únicamente la perfusión; si son
cional (10% a las 28,6% a las 29, y 1,4% a las 34 más de 6 horas se deberá repetir la tanda de nuevo.
semanas). En recién nacidos prematuros, la expo- Es deseable que la perfusión se mantenga al me-
sición intaútero a sulfato de magnesio ha demos- nos durante 4 horas antes del parto, por lo que se
trado disminuir la incidencia y gravedad de la pa- tendrá en cuenta en los casos de finalización elec-
rálisis cerebral(7, 8). tiva. No se justifica el uso de tocolíticos únicamente
Las INDICACIONES para iniciar el tratamien- para completar las 4 horas de tratamiento.
to con sulfato de magnesio son aquellas gestacio- La monitorización del tratamiento se realizará:
nes únicas o múltiples entre las 24,0 y las 31,6 se- a) Antes de la administración: control de TA, FC,
manas y que presenten: FR y reflejo patelar.
1. Riesgo de PARTO INMINENTE (aquél que b) Inmediatamente tras la administración del bo-
puede producirse en 4-6 horas): lus: control de TA, FC, FR, reflejo patelar y sa-
• Longitud cervical ≤15 mm y dinámica uteri- turación de oxígeno (pulsioximetría).
na regular a pesar de tratamiento tocolítico. c) Durante la perfusión de mantenimiento: con-
• Condiciones cervicales de parto y dinámica ute- trol cada 4 h de TA, FC, FR, reflejo patelar, sa-
rina regular a pesar de tratamiento tocolítico. turación de oxígeno (pulsioximetría) y diure-
• Condiciones cervicales de parto muy avan- sis. En caso de tratamiento conjunto con nife-
zadas, en las que el parto se puede producir dipino, se realizará control cada 2 horas por el
de forma imprevisible. efecto sinérgico de bloqueo neuromuscular.
2. Planificación o posibilidad de FINALIZACIÓN Se debe suspender el tratamiento si hipotensión
ELECTIVA de causa materna o fetal en menos (disminución >15 mmHg respecto TAD de base),
de 24 horas (RPM, CIR, sospecha de corioam- FR<12 por minuto, reflejo patelar ausente y/o diu-
nionitis, metrorragia de 3er trimestre, PE, etc.). resis <100 ml/4 h.
Está CONTRAINDICADO en los casos de mal-
formación fetal letal o decisión consensuada de li- Finalización de la gestación
mitación del esfuerzo terapéutico, o en aquellas Será criterio de finalización:
pacientes con contraindicación para el tratamien- • La corioamnionitis clínica, o

217
Amenaza de parto pretérmino

PACIENTE QUE CONSULTA POR DU Y EN LA QUE SE OBJECTIVA DU REGULAR

DU + PACIENTE BAJO RIESGO DU + PACIENTE ALTO RIESGO


Criterios clínicos:
Bishop 5
Parto pretérmino anterior antes 34 sem
Gestación multiple
Reposo y observación 2-3 h Portadora cerclaje gestación actual
Considerar dosis única nifedipino Criterios ecográficos (o fibronectina +):
LCx < 25 mm si < 28,0 sem
LCx < 20 mm entre 28,0-31,6 sem
LCx < 15 mm si 32,0 sem
Si persiste DU
Ingreso y reposo 24 h
Corticoides
CEDE DU NO CEDE DU Tocolíticos
Antibioticos si indicado
Cosiderar amniocentesis

Domicilio Ingreso/observación 12-24 h


Reposo relativo 24 h NO tocolíticos ni corticoides inicialmente
Control obstétrico habitual Valoración cambios LCx ecográfica
Considerar tocolíticos sintomáticos 12-24 h
Control obstétrico habitual

Figura 1.

• ≥ 34,0 semanas, madurez comprobada y algún lidad para higiene personal. Posteriormente y si
signo de infección intraamniótica (glucosa < 5 persiste estable, se flexibilizará el reposo. No exis-
mg/dl y/o tinción de Gram con gérmenes y/o te literatura contundente, pero parece razonable
cultivo positivo en el líquido amniótico). la baja laboral y abstinencia de penetración en las
relaciones sexuales (si el ingreso estuvo acompa-
Tratamiento al alta ñado de criterios de riesgo).
Previamente al alta se permitirá a la paciente
deambular por la sala y movilizarse para su higie-
ne personal durante 24-48 h según el riesgo, la edad CIRCUNSTANCIAS ESPECIALES
gestacional y las condiciones cervicales.
Si no reinicia el cuadro clínico, será alta a do- Tratamiento de mantenimiento
micilio. Únicamente se le administrará tratamiento Dado que NO está demostrado el beneficio del
tocolítico oral si fuese imposible retirarle antes del tratamiento de mantenimiento (de larga dura-
alta, y se le mantendrá durante un corto periodo ción)(9, 10), se suspenderá todo tratamiento tocolí-
de tiempo (48 h o máximo una semana), ya que se tico después de un máximo de una semana de tra-
ha demostrado que el tratamiento tocolítico de tamiento endovenoso u oral. En caso de reinicio
mantenimiento no alarga la gestación. persistente de dinámica uterina con riesgo muy
Se remitirá a la paciente a un control en 1-2 se- elevado de parto pretérmino por debajo de las 32
manas para reevaluación del riesgo y con indica- semanas o de dinámica muy sintomática, se con-
ciones de volver a Urgencias si reaparece de la sin- siderará prolongar el tratamiento oral (Prepar o
tomatología. Inicialmente se le recomendará re- nifedipina oral), o reiniciar más ciclos, o iniciar
poso relativo en domicilio manteniendo la movi- una pauta de mantenimiento endovenoso.

218
M. Palacio, T. Cobo, M. Martínez-Terrón

Utilización de progesterona BIBLIOGRAFÍA


Actualmente se ha demostrado la utilidad de 1. Gomez R, et al. Ultrasonographic examination of the
la progesterona como tratamiento profiláctico uterine cervix is better than cervical digital examina-
tion as a predictor of the likelihood of premature de-
(es decir, antes de la presentación de sintoma- livery in patients with preterm labor and intact mem-
tología) en pacientes de riesgo (pretérmino an- branes. Am J Obstet Gynecol 1994;171(4):956-64.
terior o con cérvix muy corto (inferior a 15 2. Gomez R, et al. A short cervix in women with preterm
mm)(11, 12). Se está llevando a cabo un estudio labor and intact membranes: a risk factor for micro-
bial invasion of the amniotic cavity. Am J Obstet Gy-
multicéntrico para evaluar la progesterona co- necol 2005;192(3):678-89.
mo tratamiento de mantenimiento al alta tras 3. Wapner RJ, et al. Long-term outcomes after repeat do-
episodios de APP, pero hasta que no disponga- ses of antenatal corticosteroids. N Engl J Med 2007;
mos de más evidencia científica, fuera de las in- 357(12):1190-8.
dicaciones descritas, su uso debe ser bien justi- 4. Conde-Agudelo A, Romero R, Kusanovic JP. Nifedi-
pine in the management of preterm labor: a systema-
ficado. Dosis recomendada: progesterona 200 tic review and metaanalysis. Am J Obstet Gynecol 2011;
mg/día vía vaginal. 204(2):134 e1-20.
5. Kenyon SL, Taylor DJ, Tarnow-Mordi W. Broad-spec-
trum antibiotics for spontaneous preterm labour: the
ORACLE II randomised trial. ORACLE Collaborati-
PUNTOS CLAVE ve Group. Lancet 2001;357(9261):989-94.
La utilización de pruebas complementarias a
6. Kenyon S, et al. Childhood outcomes after prescrip-
la exploración por tacto vaginal nos permite des- tion of antibiotics to pregnant women with sponta-
cartar las pacientes de bajo riesgo: nos permite neous preterm labour: 7-year follow-up of the ORA-
CLE II trial. Lancet 2008;372(9646):1319-27.
disminuir los ingresos y agilizar el alta hospita-
laria. 7. Doyle LW, et al. Magnesium sulphate for women at
risk of preterm birth for neuroprotection of the fetus.
La fibronectina y otras pruebas bioquímicas Cochrane Database Syst Rev 2009(1):CD004661.
(Partus test) son equivalentes a la medición de la 8. Conde-Agudelo, A. and R. Romero, Antenatal mag-
longitud cervical en cuanto a capacidad predicto- nesium sulfate for the prevention of cerebral palsy in
preterm infants less than 34 weeks' gestation: a syste-
ra. Un resultado negativo en cualquiera de estas
matic review and metaanalysis. Am J Obstet Gynecol
pruebas tiene un valor predictivo negativo para 2009;200(6):595-609.
parto prematuro de alrededor del 90%. 9. Gaunekar NN, Crowther CA. Maintenance therapy
La paciente con un cuadro de APP y criterios with calcium channel blockers for preventing preterm
birth after threatened preterm labour. Cochrane Da-
de riesgo, tiene tres veces más riesgo de parto pre- tabase Syst Rev 2004;(3):CD004071.
maturo que la gestante normal, aún cuando se es-
10. Sanchez-Ramos L, et al. Efficacy of maintenance the-
tabilice el cuadro y pueda ser dada de alta. rapy after acute tocolysis: a meta-analysis. Am J Obs-
El tratamiento del cuadro agudo consiste en to- tet Gynecol 1999;181(2):484-90.
colíticos y corticoides. Las dosis repetidas de cor- 11. ACOG Committee Opinion number 419 October 2008
ticoides deben ser contempladas de manera muy (replaces no. 291, November 2003). Use of progeste-
rone to reduce preterm birth. Obstet Gynecol 2008;
restrictiva y sólo en casos seleccionados. 112(4):963-5.
Los antibióticos, excepto si existe exposición de 12. Hassan SS, et al. Vaginal progesterone reduces the ra-
las membranas a la vagina, no están indicados. te of preterm birth in women with a sonographic short
Los tocolíticos de mantenimiento no han de- cervix: a multicenter, randomized, double-blind, pla-
cebo-controlled trial. Ultrasound Obstet Gynecol
mostrado ser útiles. 2011;38(1):18-31.

219
Control del bienestar fetal anteparto
M. Illa, F. Figueras

INTRODUCCIÓN tivos. Además, la especificidad y sensibilidad de las


El objetivo primordial de la atención obstétrica es pruebas variarán en función de la población en la
la prevención de las complicaciones fetales y neona- que se aplique el test, mejorando su rendimiento
tales. Actualmente, nuestra capacidad para evaluar diagnóstico con la correcta selección de pacien-
el estado fetal ha mejorado notablemente con la evo- tes (población con elevada prevalencia de malos
lución de la tecnología, así como la mayor com- resultados obstétricos). Existe evidencia de que
prensión de la fisiología del feto en los últimos 50 la realización de una monitorización adicional del
años. Como resultado, la morbimortalidad perina- control del bienestar fetal de forma universal, in-
tal se ha reducido considerablemente (5,3 por 1.000 dependientemente de su indicación, no ofrece nin-
nacimientos registrada en 2006). De hecho, en paí- guna reducción significativa en la mortalidad pe-
ses donde no se han incorporado medidas eficaces rinatal(2-3).
en el control prenatal presentan cifras de mortalidad
perinatal de hasta 25,5 por 1.000 nacimientos, cifras
que se aproximan a las observadas en países desa- SELECCIÓN DE LA POBLACIÓN
rrollados hace 50 años(1). Mientras que sólo el 30% de la morbilidad
perinatal ocurre en pacientes de bajo riesgo, la
realización de pruebas de bienestar fetal más allá
OBJETIVO de las pruebas básicas recomendadas constituye
El objetivo principal del control fetal antepar- un uso ineficaz de recursos, incrementándose a
to es el de predecir y detectar la acidemia y la hi- la vez el número de finalización sin mejorar los
poxemia fetal (generalmente secundarias a una in- resultados. Por el contrario, los embarazos de al-
suficiencia placentaria). to riesgo son los que presentan un mayor riesgo
de morbimortalidad perinatal, por lo que la re-
alización de controles adicionales está justifica-
ESTRATEGIA da. Será de especial importancia catalogar cada
gestación como de alto o bajo riesgo. Esta dife-
Principios básicos del control renciación se realizará en función de la presen-
Los tests propuestos son test de screening con cia o no de determinados factores de riesgo (Ta-
unos porcentajes no despreciables de falsos posi- bla I)(4-6).

221
Control del bienestar fetal anteparto

TABLA I Se ha estimado que llegar a la semana 42 está


asociado a un riesgo de hasta 4 veces de muerte fe-
Características de la gestación tal anteparto (1 cada 500) y de 3 en muerte neo-
• Malos antecedentes obstétricos
natal, comparado con el parto a término (riesgo
• Gestación cronológicamente prolongada
• Retraso de crecimiento intrauterino (RCIU) y EHE de muerte fetal anteparto a las 37 semanas: 1 cada
• Disminución de los movimientos fetales 2.000 nacimientos)(6-7).
• Rotura prematura de membranas
• Gestación gemelar
• Isoimunización Rh
• Colestasis intrahepática TESTS DISPONIBLES
• Alteración del LA Aunque se dispone de varias pruebas en la mo-
• Malformación fetal, anomalía cromosómica, infección nitorización del bienestar fetal desde hace más de
fetal
• Anomalías placentarias (vasa previa, hematoma placenta) tres décadas, aún hoy en día no se sabe si estas
• Amenaza de parto prematuro pruebas son eficientes o no en el control de las ges-
Condiciones maternas taciones de alto riesgo. Esto se debe a la falta de
• Diabetes materna estudios con una elevada calidad metolodógica.
• Otros trastornos endocrinos: alteración tiroidal Gran parte de la evidencia actual parece indicar
• Hipertensión crónica
que las pruebas diseñadas en el control del bie-
• Enfermedad cardiaca materna
• Enfermedad renal materna nestar fetal presentan unos porcentajes relativa-
• Síndrome antifosfolipídico mente bajos de falsos negativos (0,08-0,09%), a
• Trombofilias expensas de porcentajes muy elevados de falsos
• Otras enfermedades médicas concomitantes
• Síndrome antifosfolipídico
positivos (30-60%), incrementando por lo tanto
• Infecciones maternas (HIV) el número de actuaciones médicas sin mejorar los
Factores de riesgo (epidemiológicos)
resultados (prematuridad). Revisiones actuales
• Edad materna (> 40 años) parecen indicar que la especificidad se incremen-
• Obesidad (IMC > 30) ta (disminuyendo el porcentaje de falsos positi-
• Hábitos tóxicos (tabaquismo, alcoholismo) vos) mediante la combinación de varias de estas
• Raza negra
• Nivel cultural y/o socioeconómico bajo pruebas(8-9) y no limitar la decisión clínica al re-
sultado de una sola prueba. De hecho, clásicamente
se ha considerado la combinación de NST + PBF
INICIO DEL CONTROL como la estrategia princeps en el seguimiento de
En condiciones normales, los controles se efec- las gestaciones de alto riesgo, aunque estudios ac-
tuarán cada 4-6 semanas en el primer y segundo tuales lo cuestionan(10).
trimestre de la gestación. A partir de las 28 sema-
nas los controles serán progresivamente más fre- Percepción materna de los movimientos fetales
cuentes hasta ser de cada dos-tres semanas > 34 (Tabla II)
hasta el término de la gestación. A partir de las La ausencia o alteración del patrón normal de
40 semanas se recomendará volver a estrechar los movimientos fetales se asocia a un aumento en el
controles (semanales) y cada 48-72 horas entre la riesgo de posibles complicaciones perinatales (re-
semana 41 y 42, debido al aumento de resultados traso de crecimiento, parto prematuro, malforma-
perinatales adversos a partir de las 41 semanas. ciones fetales y exitus fetal), incluso en población

222
M. Illa, F. Figueras

TABLA II. Información a toda gestante (19-23 semanas) Medición de la altura uterina
A partir de las 12 semanas, el fondo uterino
Patrón normal de los movimientos fetales (MF)(11-12) se localiza sobre la sínfisis pubiana y puede ser
• Inicio esperado de percepción de los movimientos: medido en su eje longitudinal, desde el borde su-
< 22 sem en primigestas y <18 sem en multigestas (en
obesas hasta las 24 sem) perior de la sínfisis pubiana hasta el fondo uteri-
• Aparición de todo el abanico de movimientos: 20-22 sem no. El objetivo principal de la prueba es la detec-
• Evolución de los movimientos: máximos entre las 28 y ción de fetos con poco crecimiento, aunque tam-
las 34 con disminución > 34 sem
bién tiene la posibilidad de facilitar la detección
• Posibles factores confusores (obesidad, primiparidad,
placenta anterior, tipo de actividad materna y posición, de embarazos múltiples y de fetos excepcional-
ayuno prolongado, hábito tabáquico, ingesta de fárma- mente grandes. La medida obtenida debe ser lo-
cos sedantes, ansiedad materna) calizada en una tabla de altura uterina/edad ges-
Signos de alarma (¿cuándo consultar?) tacional(18); de esa forma obtendremos indirec-
• No percepción MF a partir de las 24 semanas tamente una estimación del tamaño fetal y su pro-
• Ausencia total de movimientos que dura >2 h (no es-
gresión en cada control prenatal. Sin embargo,
perar más de 24 h)
• Disminución en la percepción habitual de MF que du- presenta un bajo rendimiento diagnóstico, sobre
ra >12 h (no esperar más de 48 h) todo para el retraso del crecimiento intrauterino
• Si dudas: contar MF. Si < 10 movimientos en 2 horas (sensibilidad del 56%, especificidad del 91%, va-
en algún momento del día que en condiciones norma-
lor predictivo positivo del 80% y valor predictivo
les el feto está activo (después comidas + decúbito late-
ral izquierdo) negativo del 77%)(19). Esta sensibilidad puede me-
jorar si la altura uterina se realiza por el mismo
observador (sensibilidad del 86%)(20). Ante la sos-
pecha de una alteración en el crecimiento fetal,
de bajo riesgo(12-13). Se estima que hasta un 25% de realizaremos una ecografía fetal(21).
gestantes a término que consultan por una dismi-
nución de los movimientos fetales presentan al- Evaluación de la cantidad de líquido amniótico
guna complicación perinatal; y del mismo modo. (LA)
Dada esta asociación, diversos autores postula- Estudios clásicos relacionaron la alteración de
ron la utilización del Contaje diario de los movi- la cantidad de LA (sobretodo el oligoamnios) con
mientos fetales como un test de screening por > 24 un incremento del riesgo de morbimortalidad fe-
semanas de gestación(14). Sin embargo, en un estu- tal en gestaciones más allá del término, incluso des-
dio multicéntrico randomizado observaron que la pués de un RCTG normal(22-24). Por ello, la evalua-
aplicación de esta estrategia no disminuía de for- ción del volumen de líquido amniótico es un pa-
ma significativa el número de muertes fetales an- rámetro importante en la evaluación del bienestar
teparto(15). Por lo que, actualmente, guías inter- fetal(25). Actualmente, las técnicas más utilizadas
nacionales desaconsejan su práctica(16). Sin em- son la máxima columna vertical (MCV) y el índi-
bargo, actualmente se postula que la mejor estra- ce de LA (ILA). De forma global, ambas son ma-
tegia es la de informar a toda gestante sobre qué se las estimadoras de la cantidad real de LA(26), sin
considera como movimientos fetales normales y embargo, por su relativa facilidad son las más acep-
instruir en qué situaciones concretas deben con- tadas. Aunque no hay consenso(27), de forma clási-
sultar (signos de alarma)(11, 17). ca se utilizan 2 cm en la máxima columna de LA y

223
Control del bienestar fetal anteparto

5 cm en el ILA(7). De acuerdo a un metaanálisis pu- TABLA III


blicado en 2008(28), la máxima columna vertical
(método sencillo) parecería ser actualmente la téc- Línea de base FCF ≥ 2 min de duración en un seg-
nica recomendada en el diagnóstico de oligoam- mento mínimo de 10 minutos

nios, con iguales resultados perinatales que el ILA Bradicardia < 110 lpm > 10 minutos

y sin aumentar el número de procedimientos in- Taquicardia > 160 lpm durante >10 minutos

vasivos (menos falsos positivos). Por otro lado, va- Variabilidad Fluctuaciones de la frecuencia cardiaca
rios trabajos publicados en los últimos años reco- basal, medido desde el pico a valle
miendan no abandonar el ILA en base a que pre- Ausente Indetectable
senta una mayor reproducibilidad interobserva- Mínima ≤ 5 lpm
dor(29). Además, el aumento en el porcentaje de fal- Moderada 6-25 lpm
sos positivos podría ser debido a la utilización de Aumentada > 25 lpm
un punto de corte no adecuado, por lo que algu- Aceleración (valorable >32 semanas de gestación)
nos autores postulan como alternativa la utiliza- Incremento brusco de ≥15 lpm ≥15 seg
ción de diferentes puntos de corte en función de Prolongada ≥ 2 min y < 10 min (≥ 10 min es un cam-
la edad gestacional, definiéndose oligoamnios bio de base)
cuando la medida del ILA y MCV están por deba- Desaceleración Disminución en la FCF
jo del percentil 2,5. Utilizando estos criterios, se Variable Rápido descenso inicial del trazado has-
definiría oligoamnios como un ILA < 2,5 cm y una ta el nadir <30 s; posteriormente dis-
minución ≥ 15 lpm de duración ≥ 5 s <
MVC < 1,5 cm(21,27,30-31).
2 min
Precoz Disminución gradual hasta el nadir ≥
Registro cardiotocográfico no estresante (NST) 30 s con una contracción
Aunque no se dispone de estudios bien diseña- Tardía Disminución gradual hasta el nadir ≥
dos que nos informen de la capacidad predictiva 30 s que ocurre después del pico de la
real del NST, está totalmente considerado como contracción
un test básico en el control del bienestar fetal en la Prolongada Disminución ≥ 15 lpm durante ≥ 2 mi-
nutos, pero <10 min (≥ 10 min es un
práctica clínica habitual (adaptado de National
cambio de línea de base)
Institute of Child Health and Human Develop-
Recurrente En 20 minutos sucede en >50% de las
ment workshop report, 2008)(32). En la valoración contracciones
de la frecuencia cardiaca fetal, se deben interpre- Intermitente En 20 minutos sucede en <50% de las
tar los parámetros expuestos en la Tabla III. contracciones
Un patrón normal y reactivo de un NST se defi-
ne como una frecuencia cardiaca fetal entre 110-
160 lpm de 20 min de seguimiento que contiene dos realizar una valoración del LA al reducir el núme-
aceleraciones del ritmo cardiaco que dura 15 se- ro de falsos positivos (0,8 por 1.000(34-35)).
gundos o más por encima de la línea de base. La au-
sencia de reactividad o la presencia de desacelera- Registro cardiotocográfico no estresante
ciones se producen en 3-5 por 1.000 NST(33), sin que (test de Pose)
esto signifique que exista un riesgo real de pérdida Se basa en la evaluación de la FCF fetal bajo el
del bienestar fetal. De esta manera, se recomienda estrés de contracciones uterinas, detectando de

224
M. Illa, F. Figueras

TABLA IV

Score Comentario Porcentaje Manejo


complicaciones

10/10 Normal 1/1000 No intervención


8/8 o 8/10 (NST no normal) Normal – No intervención
8/10 (LA disminuido) Sospechar causas 89/1000 En función de la EG:
de oligoamnios considerar finalización
6/8 (LA disminuido) Sospechar hipoxia 89/1000 Repetir en 4-6 h, considerar finalización
6/8 (otro) Posible hipoxia variable Repetir en 4-6 h, considerar finalización
4/8 Sospechar hipoxia 91/1000 Si ≥36 semanas o madurez pulmonar
documentada: finalizar; sino, repetir en
4-6 h
2/8 Alta sospecha de hipoxia 125/1000 Finalización inmediata
0/8 Alta sospecha de hipoxia 600/1000 Finalización inmediata

Adaptado de Manning FA et al., 1987.

una manera más sensible la insuficiencia placen- agudos de hipoxia, siendo la reactividad en el NST
taria. Se administra de forma endovenosa oxi- el primer parámetro que se altera, seguido de los
tocina hasta conseguir como mínimo tres con- movimientos respiratorios, el tono y finalmente
tracciones durante 10 minutos de moderada in- los movimientos fetales(37). En cambio, la hipoxia
tensidad durante 20 minutos. Presenta una se- crónica viene manifestada básicamente ante una
rie de contraindicaciones absolutas (placenta pre- disminución de la cantidad de LA(38). La norma-
via, etc.) y relativas (cicatrices uterinas, etc.). Se lidad en cada uno de los parámetros suma 2 pun-
considera una prueba negativa o normal cuando tos, en total hasta 10. Si no se incluye el NST, la
no se objetivan desaceleraciones tardías. La prue- puntuación total será de 8.
ba es positiva si presenta dichas desaceleraciones Se valorarán los siguientes parámetros con sus
en el 50% de las contracciones. Será sospechoso correspondientes criterios de normalidad: NST
ante desaceleraciones intermitentes o variables. (patrón reactivo); movimientos respiratorios
En este caso, se recomienda la realización de una (≥1 episodio con una duración > 30 seg); movi-
ecografía para la evaluación de la cantidad de LA mientos fetales (≥ 3 movimientos de las extre-
para descartar un oligoamnios como causa prin- midades o del tronco); tono fetal (≥1 episodio de
cipal. extensión activa y flexión de las manos, extre-
midades o el tronco), y LA ( MCV 2-8 o ILA >5-
Perfil biofísico (PBF) 25).
Con el PBF se consigue una valoración com- El que mayor correlación presenta con resulta-
pleta del estado fetal mediante la evaluación con- dos adversos es la disminución del LA. Aunque no
junta ecográfica y de la frecuencia cardiaca fetal(36). se dispone de estudios de elevada calidad meto-
El test consiste en valorar cinco parámetros du- dológica que evalúen cuál es la mejor conducta a
rante 30 minutos. La alteración de todos, a excep- seguir ante los diferentes resultados del PBF, en
ción de la cantidad del LA, sucede ante episodios la Taba IV se presenta una propuesta(39).

225
Control del bienestar fetal anteparto

Perfil biofísico modificado (PBF m): en un in- Estudio Doppler fetal


tento de conservar los objetivos básicos del perfil El estudio Doppler es considerado como uno de
biofísico pero cuya realización fuera más rápida, los métodos más objetivos para evaluar el bienestar
se diseñó el PBF m. En él se incluye el NST (eva- fetal en los casos de restricción del crecimiento in-
luación de la situación aguda) junto a la evalua- trauterino(44). Proporciona información sobre la
ción de LA (situación crónica). Estudios iniciales función cardiovascular del feto y la placenta sobre
parecen indicar que el porcentaje de falsos negati- la base de la dinámica del flujo sanguíneo medido
vos (0,008%) y falsos positivos (60%) se mantie- en las arterias uterinas, umbilical y fetal. En base a
ne. Aunque no hay consenso sobre cuál sería el me- la mejor evidencia disponible, el Doppler de la ar-
jor protocolo, actualmente se considera que la es- teria umbilical ha mostrado disminuir la mortali-
trategia más coste efectiva sería realizar el NST con- dad perinatal en un 29% (RR 0,71, IC 95%: 0,52 a
juntamente al PBF modificado, y ante algún re- 0,98) en embarazos de alto riesgo(45), por lo que la
sultado anómalo detectado se realizará un PBF estrategia a aplicar en el control del bienestar fetal
completo(40). en el contexto de un retraso de crecimiento intrau-
terino debe incluir la evaluación Doppler.
Peso fetal estimado (PFE)
La realización de controles ecográficos adicio-
nales ha demostrado mejorar los resultados en pa- CONTROL DEL BIENESTAR FETAL
cientes de riesgo alto al diagnosticar de forma pre- ESPECÍFICO EN SITUACIONES CLÍNICAS
coz estadios iniciales de restricción de crecimien- FRECUENTES
to intrauterino, considerada la causa más frecuente A continuación describiremos pautas de ac-
de mortalidad perinatal en países desarrollados tuación en las situaciones clínicas más relevan-
(ver cap. Retraso de crecimiento intrauterino). Me- tes, en base a la mejor evidencia actual. Otras si-
diante la aplicación de fórmulas matemáticas que tuaciones concretas consideradas de alto riesgo, y
utilizan una combinación de mediciones del feto que por lo tanto precisan de una monitorización
se obtiene una aproximación al peso fetal verda- fetal específica, se desarrollan en sus correspon-
dero (PFE). La fórmula matemática más utilizada dientes capítulos de este libro.
es la de Hadlock(41), con un margen de error del
15-20% incluso en manos expertas(42). Se reco- Disminución de los movimientos fetales (DMF)
mienda evaluar el crecimiento fetal cada 3-4 se-
manas, con un mínimo de 15 días para objetivar Definición
diferencias significativas. Varios estudios han con- Entendemos como DMF cualquier cambio del
cluido que la evaluación ecográfica del peso fetal patrón normal que nos manifieste la paciente (Ta-
es mejor que la estimación del mismo mediante la bla II). Constituye un motivo de consulta frecuente
medida de la altura uterina, por lo que será la téc- en los servicios de Urgencias (5-15% de las gestan-
nica de elección ante la sospecha de un retraso de tes durante el tercer trimestre de gestación).
crecimiento fetal así como también ante la sos-
pecha de fetos con crecimiento excesivo (PFE con Fisiopatología
un percentil de crecimiento > 90) o de macroso- La correcta adquisición del patrón normal de
mía fetal (PFE > 4.500 g)(43). los movimientos fetales nos indica un neurodesa-

226
M. Illa, F. Figueras

rrollo correcto. Por otra parte, la causa más fre- Gestación cronológicamente prolongada (GCP)
cuente de una alteración en el patrón normal de
los movimientos fetales en un feto que los había Definición
adquirido de forma adecuada es la insuficiencia Aquella que sobrepasa de las 42,0 semanas de
placentaria. duración (294 días), situación que ocurre en un 5-
10% de las gestaciones. Ésta se ha asociado a un
Control específico del bienestar fetal incremento en la morbimortalidad perinatal y de
Se irá a descartar una situación tanto aguda co- la morbilidad materna(48,49). Este riesgo, sin em-
mo crónica de pérdida del bienestar fetal. bargo, empieza ya a aumentar a partir de la sema-
NST: constituye el primer escalón en la detec- na 41, por lo que se recomienda realizar una mo-
ción de la hipoxia fetal (elevado VPN [99,8%]). nitorización maternofetal estrecha o incluso plan-
Ecografía fetal: con evaluación del peso fetal es- tearse finalizar la gestación(50).
timado, de la cantidad de LA y despistaje de la exis-
tencia de algún tipo de malformación fetal. Fisiopatología
PBF: por su bajo valor predictivo positivo (40%) La insuficiencia placentaria se ha postulado co-
solamente se usará ante un NST no reactivo. mo el mecanismo subyacente. Esta hipótesis viene
Los resultados de un estudio prospectivo ob- apoyada además por el hecho que hasta el 11,5%
servacional que evaluaron esta estrategia aquí ex- de las gestaciones de 41 semanas presentan un ILA
puesta observaron que la ecografía fue la técnica por debajo de 5(51), hecho que en un porcentaje no
con mayor rendimiento diagnóstico, al diagnosti- despreciable de los casos va asocido a un retraso de
car hasta un 50% de retrasos de crecimiento in- crecimiento intrauterino(24). Sin embargo, otras ve-
trauterino a término que no se habían diagnosti- ces esta disfunción placentaria no se manifestará
cado previamente, observándose además un des- de una manera tan evidente (LA y crecimiento nor-
censo a la mitad del número de muertes fetales an- mal, crecimiento fetal normal o incluso riesgo au-
teparto, sin incrementar el porcentaje de finali- mentado de macrosomía), sino que se sospechará
zaciones(46). básicamente por el hallazgo de una vasodilatación
cerebral. Algunos estudios han relacionado índices
Conducta clínica de pulsatilidad de la arteria cerebral media (IPACM)
Si las pruebas aplicadas salen negativas, se dará alterados (< percentil 5 utilizando curvas específi-
el alta a la paciente. Si se repite el episodio de DMF cas para gestaciones por encima de la semana 40)(52)
o presenta factores de riesgo adicionales (edad ma- con peores resultados neonatales(53,54).
terna, raza negra, obesidad o enfermedades con-
comitantes) se recomendará un seguimiento ges- Manejo clínico a partir de la semana 41
tacional estrecho, primero en 48-72 horas y poste- 1. Datar correctamente la gestación según la pri-
riormente cada 1-2 semanas en función de la se- mera exploración ecográfica disponible. Datar
veridad del caso. Aunque no hay suficiente evidencia correctamente la gestación ha demostrado dis-
al respeto, algunos autores recomiendan que en el minuir hasta un 70% el número de finalizacio-
subgrupo de pacientes con DMF persistente y con nes por gestación prolongada(55).
normalidad de todas las pruebas aplicadas, se fi- 2. Iniciar monitorización maternofetal versus fi-
nalizará la gestación a partir de la semana 41(47). nalizar la gestación en ese momento.

227
Control del bienestar fetal anteparto

El protocolo en nuestro medio era el de ini-


ciar una monitorización cada 48-72 horas en es-
pera del inicio espontáneo del parto. Esta prácti-
ca se instauró a raíz de la escasa evidencia aporta-
da por estudios de baja calidad metodológica (ob-
servacionales) que la inducción del parto a las 41
semanas aumentaba el riesgo del número de cesá-
reas. Esta evidencia contrasta con los estudios ran-
domizados recientemente publicados que indican
que este dogma no es cierto. Incluso algunos de
Figura 1. Normalidad del IPACM a partir de las 41 semanas.
ellos indican que la morbilidad maternofetal po-
dría disminuir (porcentaje de cesáreas, partos trau-
máticos, síndrome de aspiración meconial, etc.)(47, se planificará la finalización en un periodo de tiem-
56). Más controvertido si la finalización de forma po no superior a las 24 horas:
electiva a las gestaciones de 41 semanas disminu- • LA: el ILA ha sido el único parámetro que ha
ye la mortalidad perinatal(57). sido valorado en las gestaciones postérmino(60),
La estrategia que se plantea, pues, es(56): demostrando ser un método útil en la predic-
• En mujeres con embarazos de alto riesgo (se- ción de peores resultados perinatales.
gún Tabla I) se recomendará como primera op- • Peso fetal estimado: descartar tanto el retraso de
ción el de finalizar la gestación a partir de las 41 crecimiento fetal intrauterino (< percentil 10 de
semanas. crecimiento) como la macrosomía (> 4.000 g).
• En mujeres de bajo riesgo, siempre que el bis- • Doppler fetal: evaluar IPACM como marcador
hop sea desfavorable (< 6), se recomendará co- subrogado de insuficiencia placentaria (no útil
mo primera opción realizar controles del bie- evaluar arteria umbilical). La presencia de una
nestar fetal cada 2-3 días. Además, en cada una vasodilatación cerebral (IPACM < percentil 5 se-
de las visitas se ofrecerá el despegamiento de las gún curvas de normalidad para edad gestacio-
membranas amnióticas(58). En caso de no ha- nal, Fig. 1) deberá confirmarse en 12-24 horas.
berse puesto de parto junto con normalidad de • NST: constituye el primer escalón en la detec-
todas las pruebas practicadas, se demorará la fi- ción de la hipoxia fetal (elevado VPN [99,8%]).
nalización de la gestación hasta las 42 sema- • PBF: por su bajo valor predictivo positivo (40%)
nas (41,6-42,1). solamente se usará en el contexto de la GCP co-
mo backup de un patrón no reactivo con el res-
Monitorización del bienestar fetal entre 41-42s to de pruebas normales(61).
Aunque no existe ningún estudio que nos in-
dique qué test es superior al resto, ni tampoco cuál Antecedentes obstétricos desfavorables (MAO)
debe ser la combinación de pruebas ni el momento
de iniciar dichas exploraciones, de forma estan- Definición
darizada se optará por realizar las siguientes prue- Aquellos antecedentes que pueden tener rela-
bas de forma conjunta(59). Cualquier anormalidad ción con la morbimortalidad perinatal o materna
(a excepción de NST no reactivo con PBF normal), en la gestación actual. En este capítulo conside-

228
M. Illa, F. Figueras

raremos como MAO el antecedente de muerte fe- epidemiológicas (factores de riesgo) que se en-
tal previa (sobretodo la de causa inexplicable), de cuentran de manera más frecuente en pacientes
preclampsia (PE) y/o retraso de crecimiento in- con una PE, RCIU y muerte fetal (ver Tabla I).
trauterino (RCIU) y abortos de repetición: En un metaanálisis recientemente publicado,
• Antecedente de muerte fetal previa: Muerte fe- hallaron la edad materna >35 años, la obesidad
tal anteparto por encima de las 20 semanas o y el hábito tabáquico como los tres factores de
con un peso fetal ≥ 500 g (OMS). riesgo que se relacionaron de una manera más
• PE: HTA≥140/90 + proteinuria 24 horas >300 importante con el riesgo de muerte fetal tanto
mg/24 horas. de causa desconocida como de RCIU. Este he-
• RCIU: peso neonatal < percentil 10 de creci- cho tiene especial importancia dado el incre-
miento. mento actual de estos tres factores de riesgo en
• Abortos de repetición: ≥ 3 abortos previos du- nuestra población gestante y que, tanto la obe-
rante el primer trimestre de gestación. sidad como el hábito tabáquico, son potencial-
mente modificables(65).
¿Cómo afectan estos antecedentes
a la nueva gestación? Antecedente de muerte fetal previa
De forma global se estima que las pacientes con de causa inexplicable
malos antecedentes obstétricos presentan un riesgo Se estima que afecta entre el 0,5-1% de la po-
incrementado de recivida del mismo proceso (ries- blación, con un riesgo de 2-10 veces tanto de re-
go entre 2-10 veces tanto de volver a presentar una currencia del mismo como de presentar una
nueve muerte fetal como de repetir una PE, RCIU o PE/RCIU/aborto (otros malos antecedentes) en ges-
un aborto). Además existe un riesgo cruzado entre taciones siguientes(66). De forma global, ante cual-
ellos, es decir, cualquiera de los MAO presentan un quier muerte fetal anteparto debemos realizar una
riesgo entre 2-7 veces de desarrollar otras compli- evaluación precisa de cada caso con el objetivo de
caciones diferentes a la previa (PE, RCIU, abortos o poder determinar la causa específica de esta muer-
muerte fetal anteparto) en las gestaciones siguientes. te. Este punto es uno de los más importantes, ya que
Esta relación cruzada de riesgos probablemente nos el riesgo de recidiva dependerá de la causa. La uti-
está reflejando un sustrato fisiopatológico común, así lización de un protocolo exhaustivo de estudio jun-
como un sustrato epidemiológico común(62-64): to con la utilización de las clasificaciones actuales
• Sustrato fisiopatológico común (hipótesis pla- de muerte fetal anteparto (que incluyen el RCIU co-
centaria): parte de la premisa que las diferentes mo causa relevante) han conseguido disminuir de
entidades (abortos, PE, RCIU, muerte fetal an- forma considerable el porcentaje de muertes feta-
teparto) corresponderían a diferentes manifes- les de origen desconocido (previamente era del 50%,
taciones clínicas del problema placentario ma- mientras que series actuales llegan a ser del 30%).
nifestadas en diferentes momentos a lo largo de Actualmente se acepta que hasta un 30% de las
la gestación (primer, segundo, tercer trimestre) muertes fetales acaben siendo muertes de causa des-
y lo que estaría realmente recidivando sería pre- conocida, hasta un 50% secundarios a un RCIU(67).
cisamente el problema placentario. En los casos con causa conocida de exitus fetal, el
• Sustrato epidemiológico común: varios trabajos manejo posterior de estas pacientes es conocido y
han identificado determinadas características está bien estandarizado. Sin embargo, los casos de

229
Control del bienestar fetal anteparto

exitus de causa desconocida, al no saber la causa, no • Aplicación de protocolos ya establecidos (si se


se sabe actualmente qué manejo realizar en futuras dispone de un protocolo específico, por ejem-
gestaciones. plo, protocolo de PE, RCIU, diabetes, etc.).
• Si no hay disponibilidad de un protocolo es-
Antecedente de PE y/o RCIU tandarizado (situación que observaremos en
Se estima que de forma global ambas situacio- el antecedente de muerte fetal anterior de cau-
nes pueden llegar a afectar hasta un 10% de la po- sa desconocida)(70,71) se recomendará, en ba-
blación, con un riesgo de 2-15 veces de recurren- se a la mejor evidencia disponible en el mo-
cia o presentar una muerte fetal anteparto o mento, la siguiente estrategia:
PE/RCIU/abortos. Este riesgo está directamente a) Control pregestacional: a parte de la reali-
relacionado con la edad gestacional en la que apa- zación del control gestacional básico y ge-
reció el problema: a menor edad gestacional (RCIU neral, se incluirán tests específicos para la
< 32; PE < 37), mayor riesgo de recidiva como de detección de la insuficiencia placentaria:
otros problemas(68). 1. Screening primer trimestre + Doppler de
arterias uterinas en el primer y segundo
Antecedente ≥ 3 abortos trimestre (ver cap. Preclampsia).
Referente a éste, la evidencia que se tiene al res- 2. Percepción materna de la DMF; altura
peto es baja debido a la baja calidad metodológi- uterina; evaluación adicional del peso
ca de los diferentes estudios que se dispone. Aún fetal estimado en 28 semanas (ver cap.
así, parece de que el riesgo de presentar una com- RCIU).
plicación ante el antecedente ≥ 3 abortos estaría li- 3. Test dirigidos a la detección de la pérdi-
geramente elevado (x2)(69). da de bienestar fetal en fase aguda: NST,
Evaluación del LA (ILA vs MCV). Si exis-
Manejo clínico MAO ten dudas se realizará un PBF completo.
Aunque se tiene escasa evidencia de cuál de- Aunque no está bien establecido el mo-
bería ser nuestra conducta, parece que la mejor es- mento de iniciar el control del bienestar
trategia estaría basada en: fetal, la gran mayoría de autores coinci-
1. Estratificación del riesgo en función del riesgo den en inciarlo a partir de las 32 semanas
de recurrencia: con una periodicidad de 2-4 semanas(72).
• Riesgo alto de recurrencia: antecedente de b) Deliveración de la finalización de la gesta-
PE/RCIU/muerte fetal anteparto o antece- ción (en principio a término): a medida que
dentes ≥ 3 abortos previos). aumenta la edad gestacional, incrementa el
• Riesgo bajo de recurrencia: accidentes funi- riesgo de muerte fetal anteparto. Las ges-
culares, determinadas malformaciones feta- tantes con un antecedente de muerte fetal
les, etc. anteparto presentan un riesgo superior a
Valorar además la presencia de factores de ries- igualdad en edad gestacional comparado
go añadidos (obesidad, tabaquismo, etc.) que con gestantes de bajo riesgo. Por ejemplo,
puedan agravar el riesgo de base. a las 40 semanas el porcentaje de muerte fe-
2. Determinar el control gestacional a realizar en tal por 1.000 nacimientos es de 0,4, mien-
pacientes con alto riesgo de recurrencia. tras que en pacientes con este antecedente

230
M. Illa, F. Figueras

es de 0,8. Por ello, la gran mayoría de auto- BIBIOGRAFÍA


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233
234
Control del bienestar fetal intraparto
S. Hernández

DEFINICIONES tarán asintomáticos (75%). Sustituye al tér-


• La hipoxia fetal es el déficit de aporte de oxí- mino clásico de asfixia neonatal.
geno a los órganos fetales secundaria al de- • La encefalopatía hipóxica-isquémica es la ma-
terioro del intercambio de gases. Cuando es nifestación clínica a nivel del SNC de la acido-
persistente, progresa a acidosis hipóxica. La sis metabólica.
hipoxia y en última instancia la acidosis, son
los grandes contribuyentes en el desarrollo de
parálisis cerebral, encefalopatía hipóxico-is- OBJETIVOS DEL CONTROL FETAL
quémica y otras situaciones mórbidas del ne- INTRAPARTO
onato. El control del bienestar fetal intraparto es de ca-
• El riesgo de pérdida de bienestar fetal se define pital importancia para asegurarnos que el parto,
como la presencia de signos o síntomas secun- que sin duda es una situación de estrés para el fe-
darios a una acidosis hipóxica. Sustituye al tér- to, no produce situaciones de hipoxia fetal que pue-
mino clásico de sufrimiento fetal. dan provocar lesiones neurológicas al feto. Por ello,
• La acidosis hipóxica tiene dos formas clínico- es muy importante saber cómo vigilar y detectar
analíticas que en la práctica suelen combinarse dichas situaciones.
en grado variable: Diferentes situaciones clínicas maternas, utero-
– Acidosis respiratoria: disminución del pH y placentarias o fetales pueden afectar la oxigena-
PCO2 elevada con un exceso de bases normal. ción fetal durante el parto (Tabla I).
Refleja la alteración en el intercambio de ga- El control fetal intraparto tiene como objetivos:
ses, pero limitada en el tiempo. Las compli- • La detección precoz de la pérdida de bienestar
caciones secundarias postnatales son poco fetal secundaria a la hipoxia fetal.
frecuentes y el pronóstico es excelente. Si exis- • La aplicación de medidas efectivas para preve-
te un deterioro más prolongado en el inter- nir la mortalidad y/o morbilidad perinatal de-
cambio de gases, se activan mecanismos fi- rivadas de la hipoxia.
siológicos compensatorios para mejorar la El cerebro fetal modula la frecuencia cardiaca
disponibilidad de O2. fetal (FCF) a través del sistema nervioso simpáti-
– Acidosis metabólica: pH bajo y exceso de ba- co y parasimpático. Cambios en los patrones nor-
ses de más de 12 mmol/L. Ocurre en el 2% de males de la FCF constituyen el fundamento bási-
partos y la mayoría de estos recién nacidos es- co para la monitorización de la FCF intraparto.

235
Control del bienestar fetal intraparto

TABLA I. Factores que pueden comprometer la oxigena- La monitorización de la FCF se debe realizar
ción fetal durante el parto preferentemente con un registro externo. Las in-
dicaciones para realizar monitorización interna
Factores maternos serían los casos de alto riesgo, en los que la calidad
• Presión arterial de oxígeno materna disminuida:
– Enfermedad respiratoria grave del registro externo sea insuficiente para su eva-
– Hipoventilación, convulsiones, traumatismo luación. Está contraindicada en gestantes con in-
– Tabaquismo fección por VIH, VHB y VHC.
• Disminución de la capacidad de transporte de oxígeno:
La monitorización de la dinámica uterina (DU)
– Anemia severa (ferropenia, hemoglobinopatías, etc.)
– Carboxihemoglobina (fumadoras) puede ser externa o interna:
• Disminución de la perfusión uterina: • Control externo de DU: el trazado permite ob-
– Hipotensión jetivar la frecuencia de las contracciones y la re-
– Anestesia locorregional
lación entre las contracciones y la FCF. Es el mé-
– Postura materna (decúbito supino)
• Enfermedades crónicas: todo de elección.
– Vasculopatías (lupus eritematoso sistémico, DM I, • Control interno de DU: permite una evaluación
HTA crónica) precisa del registro del tono uterino en reposo, de
– Síndrome antifosfolípido
la intensidad, duración y frecuencia de las con-
Factores uteroplacentarios tracciones. Está indicada en los casos de progre-
• Actividad uterina excesiva:
sión inadecuada del parto en los que se necesite
– Hiperestimulación secundaria a oxitocina, prosta-
glandinas o trabajo de parto espontáneo monitorizar de manera segura la DU (hasta 200
– Infarto placentario, oligoamnios, insuficiencia pla- Unidades Montevideo [UM] en fase de dilatación
centaria y 250 UM en fase de expulsivo) y en las induccio-
– Corioamnionitis
nes con riesgo incrementado de rotura uterina.
Factores fetales
• Compresión de cordón umbilical:
– Oligoamnios
– Prolapso de cordón MONITORIZACIÓN FETAL INTRAPARTO
• Disminución de la capacidad de transporte de oxígeno: Monitorización fetal intermitente
– Anemia severa (isoinmunización, sangrado mater- La RCOG(2), el ACOG y la SOGC recomiendan
nofetal, rotura vasa previa)
– Carboxihemoglobina (madres fumadoras)
en mujeres sin factores de riesgo, para el control
del bienestar fetal intraparto, realizar una auscul-
tación fetal intermitente (nivel de evidencia A). La
MÉTODOS DE CONTROL DE BIENESTAR monitorización intermitente, comparada con la
FETAL INTRAPARTO continua, no aumenta las secuelas neurológicas y
La vigilancia fetal se basa esencialmente en la disminuye en un 40% las cesáreas por riesgo de
monitorización electrónica de la FCF en relación pérdida de bienestar fetal, los partos instrumenta-
con las contracciones. El registro cardiotocográfi- dos y las necesidades de anestesia peridural. La aus-
co tiene una buena sensibilidad, pero una muy de- cultación intermitente, por lo tanto, es el método
ficiente especificidad, por lo que va a ser muy im- de elección para la monitorización fetal en ges-
portante poder discriminar los falsos positivos. tantes de bajo riesgo(3-5).
Además, la variabilidad intra-interobservador es En la fase activa del parto la auscultación in-
muy elevada(1). termitente se debería realizar:

236
S. Hernández

• En el primer periodo del parto: cada 15-30 mi- – Infección intrauterina/corioamnionitis.


nutos durante 60 segundos en el periodo post- – Inducción del parto con oxitocina.
contracción immediato, o bien ventanas de 20 – Hipertonía uterina.
minutos cada hora. – Gestación > 41,3 semanas.
• En el segundo periodo del parto: el riesgo de aci- – Líquido amniótico meconial.
dosis fetal es mayor por lo que se recomienda re- • Gestantes de bajo riesgo con FC anómala du-
alizar una monitorización continua de la FCF. rante la auscultación intermitente.
No obstante, si se decide realizar una ausculta-
ción intermitente, se realizará cada 5 minutos
durante 60 segundos después de la contracción. INTERPRETACIÓN DEL RCTG
Se aconseja pasar a monitorización continua si No siempre es fácil interpretar adecuadamente
aparece algún riesgo nuevo(2). el registro de la FCF, además, existe una gran va-
• Evaluación de la FCF: riabilidad intra-interobservador.
– FC normal: FC 110-160 por minuto. Será muy importante una nomenclatura estan-
– FC anómala: FC > 160 x min o < 110 x min darizada, para hablar todos el mismo lenguaje(6-8).
o presencia de desaceleraciones. Evaluación del RCTG: el RCTG se debe evaluar
• Actitud si FC anómala: cada hora y debe quedar registrado en pantogra-
1. Colocar a la paciente en decúbito lateral (de- ma.
recho o izquierdo).
2. Evaluar las constantes maternas: FC, PA, Tª. Dinámica uterina
Si hipotensión, administrar cristaloides en- • Polisistolia: > 5 contracciones en 10 minutos,
dovenosos. en un promedio durante una ventana de 30 mi-
Si fiebre materna (> 38˚C) administrar an- nutos.
titérmicos (paracetamol 1 g endovenoso). • Bradisistolia: < 2 contracciones en 10 minutos,
3. Realizar una exploración vaginal para descar- en un promedio durante una ventana de 30 mi-
tar procidencia/prolapso de cordón umbilical. nutos.
4. Asegurarse de la persistencia de una FC anó- • Hipertonía: después de la contracción no se con-
mala auscultando nuevamente la FC en la si- sigue relajación uterina (tono uterino > 12
guiente contracción. Si la FC anómala per- mmHg).
siste, se realizará una monitorización contí-
nua de la FCF. FCF basal
• La FCF media aproximada por minuto, duran-
Monitorización fetal continua te un segmento de 10 minutos. Es normal en-
tre 110 y 160 latidos por minuto.
Indicaciones • Los β-miméticos y la fiebre materna son las cau-
• Gestantes de alto riesgo sas más frecuentes de aumento de la FCF.
• Si se cumple alguna de las siguientes condicio-
nes: Variabilidad
– Sangrado vaginal materno durante el traba- Se define como las fluctuaciones de la FCF ba-
jo de parto. sal. Es la medida de la diferencia entre la FCF mí-

237
Control del bienestar fetal intraparto

nima y máxima de un segmento sin aceleraciones a) Típicas o no complicadas: consisten en una ace-
ni deceleraciones. Es normal entre 5-25 lpm. leración inicial, una rápida desaceleración de la
La variabilidad cardiaca fetal es episódica y pue- FCF en el punto más bajo, seguido de un rápi-
de ser mínima de forma intermitente, incluso en do retorno a la línea de base, con una acelera-
el feto sano durante periodos de sueño, por fár- ción secundaria.
macos (narcóticos, sedantes, beta-bloqueantes, be- No se asocian a mal resultado perinatal.
tametasona), prematuridad, taquicardia fetal sos- b) Atípicas o complicadas, si cumplen alguna de
tenida o anomalías congénitas. las siguientes características:
Se ha descrito un incremento de parálisis cerebral • < 70 latidos por minuto > 60 segundos.
asociado a una disminución de la variabilidad de la • Pérdida de la variabilidad de la FCF basal <5
FCF, sin determinarse específicamente a partir de qué lpm tras la desaceleración.
límite aparece este riesgo. Si se evalúa la correlación • Pérdida del ascenso transitorio inicial.
de la variabilidad con los resultados perinatales, se • Desaceleraciones bifásicas.
interpreta una variabilidad inferior a 5 lpm como lí- • Aceleración prolongada secundaria (más de 20
mite más sensible y una variabilidad inferior a 3 lpm, latidos/min o que dura más de 20 segundos).
como límite más específico para la detección de un • Taquicardia o bradicardia basal.
pH < 7,20 y Apgar < 7 a los 5 minutos(9,10). • Continuación de la FCF basal de referencia
en un nivel inferior al previo de antes de la
Aceleraciones desaceleración.
Consisten en el aumento brusco de la FCF por • Regreso lento en la línea de base de la FCF
encima de la línea de base: 15 lpm por encima de previa.
la línea de base (10 lpm en gestaciones < 32 se- No han demostrado su asociación con peores
manas), durante 15 segundos y < 2 minutos. resultados perinatales si son aisladas, pero sí se aso-
Los sedantes y narcóticos disminuyen las ace- cian a otras alteraciones de la FCF.
leraciones.
La presencia de aceleraciones es un indicador de 3. Desaceleración precoz
buen resultado perinatal, más de dos aceleraciones Disminución de la FCF coincidiendo con una
en 20 minutos tienen una sensibilidad del 97% pa- contracción uterina: el inicio, el nadir y la recupe-
ra predecir un Apgar a los 5 minutos > 7(9,10). ración de la desaceleración coincide con el inicio,
pico y final de la contracción, respectivamente.
Desaceleraciones Visualmente son simétricas a la contracción
(imagen especular).
1. Desaceleración variable Se asocian con compresión de la cabeza fetal, se
Disminución abrupta de la FCF con un inter- consideran benignas y sin trascendencia (general-
valo desde el inicio de la desaceleración hasta el pi- mente no están asociadas con acidosis fetal).
co mínimo de la FCF <30 segundos, con una du-
ración > 15 seg y < 2 minutos y de 15 latidos por 4. Desaceleración tardía
debajo de la FC basal. Disminución de la FCF y retorno a la FCF ba-
Son una respuesta de la FCF a compresión del sal, desde el inicio hasta la FCF mínima > 30 se-
cordón y son las más frecuentes: gundos de duración.

238
S. Hernández

TABLA II. Clasificación del RCTG externo

Normal Atípico Anormal

Linea basal 110-160 lpm 100-110 lpm <100


160-180 (>30 min ≤ 90 min) 160-180 > 90 min
>180/ ritmo sinusoidal >20 min
Variabilidad 5-25 lpm < 5 lpm < 90 min <5 lpm>90 min
Desaceleraciones No desaceleraciones Variables típicas >50% de Variables atípicas > 50% de
Variables típicas ocasionales las contracciones > 90 min las contracciones >30 min
Precoces (<30 seg de decalaje) Tardías ocasionales Variables tardías >50 % de
Prolongada única de < 3 min las contracciones >30 min
Variables atípicas ocasionales Prolongada única de >3 min

El inicio de la desaceleración no coincide con • No son predictivos de acidosis fetal.


el inicio de la contracción (inicio después de 20- • Requieren una vigilancia continua y la ree-
30 segundos desde el inicio de la contracción), y la valuación, teniendo en cuenta las circuns-
recuperación de la desaceleración se produce tras tancias clínicas asociadas.
el final de la contracción. • En algunas circunstancias, para garantizar
Se asocian con insuficiencia uteroplacentaria y el bienestar fetal serán necesarias pruebas
hipoxia. El riesgo de parálisis cerebral se incre- complementarias o medidas de resucitación
menta si coexisten con variabilidad disminuida. intrauterina.
La variabilidad normal se asocia fuertemente a 3. RCTG patológico, dos o más criterios atípicos
pH > 7.15 y Apgar > 7. La variablidad disminuida o uno o más criterios anormales:
en presencia de desaceleraciones tardías es el fac- • Se asocian con alteraciones del estado áci-
tor predictor de acidemia más consistente, a pesar do-base fetal en el momento de la observa-
de que la sensibilidad es sólo del 23%(9,10). ción.
Existe una relación positiva entre el grado de • Requieren una rápida evaluación.
acidemia y la profundidad de las desaceleraciones
o bradicardia. Actitud clínica antes las diferentes clasificaciones del
La taquicardia leve tiene un valor predictivo po- RCTG:
sitivo bajo para pH < 7,20, no obstante, este valor 1. RCTG normal: catalogar y registrar en el par-
aumenta si se prolonga en el tiempo la taquicardia. tograma cada hora.
2. RCTG sospechoso.
Clasificación del RCTG (Tabla II)
1. RCTG normal, tres criterios normales: Medidas generales de resucitación intraútero(11)
• Altamente predictivo de la normalidad del es- Decúbito lateral derecho o izquierdo, hidrata-
tado ácido-base fetal, estado en el momento ción y determinación de glucemia en pacientes dia-
de la observación. béticas.
2. RCTG sospechoso: un criterio atípico y el res- Evaluar las constantes maternas: frecuencia car-
to normales: diaca, presión arterial y temperatura.

239
Control del bienestar fetal intraparto

Si hipotensión: disminución de la presión arte- • Evaluar las constantes maternas: frecuencia car-
rial sistólica (PAS) del 20% respecto a la basal o diaca, presión arterial y temperatura.
presión arterial sistólica PAS < 90 mmHg, admi- • Si hipotensión, administrar cristaloides ev más
nistrar cristaloides ev más/menos efedrina: /menos efedrina 5 mg ev/en bolo (dilución pre-
• Cristaloides: infusión rápida de 250 ml de Rin- via).
ger lactato o suero fisiológico. • Si fiebre materna (> 38˚C) administrar antitér-
• Efedrina: administración ev directa en bolus de micos (paracetamol 1g ev).
5 mg. • Si existe un ayuno prolongado o una glucemia ca-
Si fiebre materna (> 38˚C) administrar antitér- pilar < 60 mg, administrar suero glucosado al 5%.
micos (paracetamol 1g ev). • Evaluar si existe hipertonía (1 contracción de
Evaluar si existe hipertonía (1 contracción de más de 2 minutos de duración) o polisistolia (>
más de 2 minutos de duración) o polisistolia (> 5 contracciones en 10 minutos). En estos casos,
5 contracciones en 10 minutos). En estos casos, considerar parar/reducir la perfusión de oxito-
considerar parar/reducir la perfusión de oxitoci- cina y/o administrar betamiméticos (Ritodrine
na y/o administrar betamiméticos (Ritodrine ev ev).
60 ml/h = 200 μg/min). • Realizar una exploración vaginal para descar-
Realizar una exploración vaginal para descartar tar prolapso de cordón, determinar la dilata-
prolapso de cordón, determinar la dilatación rápi- ción rápida del cuello uterino, o descenso de la
da del cuello uterino o descenso de la cabeza fetal. cabeza fetal.
Si desaceleraciones variables típicas + oligo- • Realizar pH de calota fetal. Si existe imposibi-
amnios/meconio: valorar amnioinfusión. lidad o contraindicaciones para la realización
del pH de calota se procederá a la administra-
Estimulación de calota fetal ción de beta-miméticos ev y extracción fetal in-
Si a pesar de estas medidas persiste un RCTG mediata (vía vaginal si factible o cesárea ur-
atípico, se realizará la estimulación de la calota fe- gente).
tal durante la exploración vaginal (puede dismi- Ante un RCTG patológico siempre se indivi-
nuir hasta en un 45% la necesidad de pH de ca- dualizará el caso y se actuará teniendo en cuenta
lota fetal). La estimulación debe ser suave y se evi- la situación clínica de la mujer y las condiciones
tará una presión digital excesiva ya que puede pro- cervicales.
ducir bradicardia vagal y no se debe hacer duran- Mientras se realizan los intentos de reanima-
te una desaceleración, ya que impide establecer una ción intrauterina se preparará el parto y notifica-
respuesta simpática durante la estimulación. rá a los anestesiólogos.
Si ésta no provoca la aparición de aceleracio-
nes, se procederá a realizar un pH de calota fetal.
CONTROL BIOQUÍMICO: EQUILIBRIO
RCTG patológico ÁCIDO-BASE (pH DE CALOTA FETAL)
Medidas generales: La sensibilidad y el valor predictivo positivo del
• Colocar a la paciente en decúbito lateral dere- pH de calota fetal para la acidosis metabólica es de
cho o izquierdo, hidratación y determinación aproximadamente el 40 y 10%, y para la encefalo-
de glucemia en pacientes diabéticas. patía hipóxico-isquémica es de aproximadamen-

240
S. Hernández

te un 50 y 3%. La utilidad más importante de pH – Repetir pH del calota a los 15 minutos y pre-
de calota fetal está en su alto valor predictivo ne- parar una posible extracción fetal:
gativo (97-99%). - Si incremento de pH ≥ 0,05, repetir pH a
Nos permite discriminar los falsos positivos del los 30 minutos o antes si empeoramiento
RCTG(14,15). del RCTG.
La técnica de realización del pH de calota es una - Si incremento de pH ≤ 0,05, seguir admi-
técnica incómoda, invasiva, que requiere expe- nistrando beta-miméticos ev (Ritodrine) y
riencia. El tiempo de realización de la prueba es extracción fetal inmediata (vía vaginal si
variable dependiendo de la situación obstétrica y factible o cesárea urgente). No se detendrá
de la experiencia. Los resultados sólo son válidos la perfusión de beta-miméticos hasta la ex-
por un periodo corto de tiempo (20-30 minutos). tracción fetal.
Además cabe destacar que no es un recurso que • Si pH <7,15:
esté disponible en todos los centros. – Se procederá a la administración de beta-mi-
méticos ev y extracción fetal inmediata (vía
Indicaciones vaginal si factible o cesárea urgente). Se con-
• CTG sospechoso en el que la estimulación de la sidera como tiempo óptimo para la extrac-
cabeza fetal no produce aceleraciones. ción fetal 30 minutos.
• RCTG patológico.
ADMINISTRACIÓN DE BETAMIMÉTICOS
Contraindicaciones EV (RESUCITACIÓN INTRAÚTERO)
• Infecciones maternas: VIH, hepatitis B, hepati-
tis C. Dosis y forma de administración
• Sospecha de enfermedad hematológica fetal: • Presentación Ritodrine 10 mg/ml. Total vial 50
trombocitopenia, hemofilia. mg en 5 ml.
• EG < 34 semanas. • 2 cc de Ritodrine en 100 cc de suero glucosado
al 5%. Velocidad de 200 μg/min (60 ml/h).
Actuación en función del resultado del pH de ca- • Siempre administrar en bomba.
lota fetal:
• Si pH > 25,7: Indicaciones
– Actitud expectante. • Bradicardia fetal sostenida (FCF < 100, 5-7 mi-
– Repetir si persisten anomalías. nutos), en relación o no con hipertonía uteri-
• Si pH 7,21-7,25: na o polisistolia.
– Parar la perfusión de oxitocina (si llevaba). • pH de calota fetal < 7,15: mantener hasta la ex-
– Valorar administrar beta-miméticos ev (Ri- tracción fetal
todrine) si polisistolia o hipertensión. • pH de calota fetal 7,15-7,20: mantener duran-
– Repetir el pH de calota a los 30 minutos o an- te 15 minutos hasta repetir el pH. Si después de
tes si se evidencia empeoramiento del RCTG. repetir el pH, el incremento es < 0,05, mante-
• Si pH 7,15-7,20: ner betamiméticos hasta la extracción fetal.
– Parar la perfusión de oxitocina (si llevaba). Se detendrá la perfusión de Ritodrine si: FC ma-
– Administrar beta-miméticos ev (Ritodrine). terna> 140 por min, TAS < 80, sensación de aho-

241
Control del bienestar fetal intraparto

go, opresión torácica u otros síntomas atribuibles La pulsioximetría y el estudio computerizado


a los efectos secundarios de los beta-miméticos. del ECG fetal intraparto (STAN) son técnicas com-
plementarias que permiten eliminar parte de los
Contraindicaciones absolutas del Ritodrine falsos positivos del RCTG continuo y dan infor-
• Patología cardiovascular grave. mación continuada del estado fetal. No se reco-
• Patología pulmonar (hipertensión pulmonar). mienda el uso habitual de la pulsioximetría ya que
no ha demostrado mejorar los resultados perina-
Contraindicaciones relativas del Ritodrine tales. Hasta el momento sólo el STAN ha sido va-
• Hipertiroidismo en tratamiento. lidado en la práctica clínica, obteniendo mejoras
• Diabetes pregestacional. en los resultados perinatales, eso sí, con muchas li-
• Migrañas de repetición. mitaciones.
• Gestación múltiple.
La utilización de Ritodrine como método de re-
sucitación intraútero ha demostrado en algunos PUNTOS CLAVE
estudios mejorar los resultados perinatales y la dis- • El RCTG es un método de control de bienestar
minución de cesáreas emergentes(16,17). intraparto muy sensible pero poco específico
que condiciona intervenciones innecesarias.
• En mujeres sin factores de riesgo, la recomen-
EQUILIBRIO ÁCIDO-BASE DE SANGRE dación para el control de bienestar fetal intra-
DE CORDÓN FETAL parto es realizar auscultación fetal intermiten-
Se debería realizar sistemáticamente en todos te.
los partos ya que nos permite realizar una aten- • Si se utiliza monitorización continua de fre-
ción adecuada al recién nacido, planificar un ma- cuencia cardiaca y DU, se debería tener rápido
nejo posterior y establecer el tipo (metabólica o acceso a la determinación de pH de calota fetal.
respiratoria) y la gravedad de la acidosis fetal. • El tratamiento conservador (resucitación in-
Será necesario obtener dos muestras (arterial y traútero) en caso de pérdida de bienestar fetal
venosa) para estudio del equilibrio ácido-base (pH, es posible. Los betamiméticos pueden mejo-
la base, el déficit, PCO2, HCO3, pO2, saturación O2). rar los resultados perinatales en caso de pérdi-
Sangre arterial Sangre venosa da de bienestar fetal y probablemente disminuir
pH 7,20-7,34 7,28-7,40 la tasa de cesáreas.
PCO2 (mmHg) 39,2-61,4 32,8-48,6
HCO3(mEq / L) 18,4-25,6 18,9-23,9
• Es necesaria una formación continuada de
Exceso de base (mEq/ L) -5,5-0,1 -4,4-0,4 RCTG (interpretación, clasificación) a nivel de
todos los estamentos.

OTROS MÉTODOS PARA MEJORAR LA


ESPECIFICIDAD EN EL ESTUDIO DEL BIBLIOGRAFÍA
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243
Gestación gemelar
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

INTRODUCCIÓN 1/90, regla que sirve para estimar la incidencia de


La gestación múltiple presenta una proporción las gestaciones de orden superior (1/902 para la
muy importante de complicaciones perinatales gestación triple, 1/903 para la cuádruple y así su-
graves, tanto fetales como maternas, siendo una de cesivamente). En todo caso, lo que interesa al clí-
las causas del aumento de consumo de recursos sa- nico es la incidencia real, que en este momento re-
nitarios en consecuencia al incremento asociado presenta el 1-2% de todas las gestaciones, porcen-
a la utilización creciente de la reproducción asis- taje que varía notablemente en diferentes áreas se-
tida(1). En los últimos 10 años se ha producido un gún la difusión de las técnicas de reproducción
importante cambio en nuestros conceptos sobre asistida. En España, la cifra se aproxima al 3% en
gestación múltiple derivado del desarrollo en el la mayoría de áreas. No existe un factor claro de
conocimiento sobre la gestación gemelar mono- riesgo para la gestación múltiple, excepto la re-
corial y actualmente es inaceptable hablar de ges- producción asistida, a pesar de que existen fami-
tación gemelar simplemente sin precisar la co- lias con una tendencia aumentada a presentar ges-
rionicidad. La gestación gemelar monocorial y bi- taciones múltiples, sin embargo las causas de esta
corial representan entidades completamente dife- predisposición son desconocidas.
rentes, que comparten algunos riesgos maternos y
obstétricos, pero el tipo y gravedad de la patología
fetal asociada es marcadamente independiente. En GESTACIÓN GEMELAR:
consecuencia, los protocolos de control clínico de- EMBRIOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN
ben ser propios de cada gestación, ya que las deci- La gestación gemelar se clasifica según su zi-
siones clínicas pueden variar notablemente en al- gosidad y corionicidad, aunque respecto a los re-
gunos puntos según la corionicidad. sultados perinatales lo único que tiene relevancia
La incidencia de gestación múltiple ha aumen- es la corionicidad(3,4). Aproximadamente dos ter-
tado notablemente en las dos últimas décadas por ceras partes de las gestaciones gemelares espontá-
la implantación y difusión creciente de las técni- neas son dizigóticas, de forma que se originan en
cas de reproducción asistida. La incidencia de la dos ovocitos fecundados y, por definición, son bi-
gestación múltiple espontánea es de aproximada- coriales. El otro tercio son monozigóticas, habi-
mente el 1%(2). La cifra clásica mencionada es de tualmente referidos como gemelos idénticos, pro-

245
Gestación gemelar

Gestación gemelar

2/3 1/3

Dizigótica Monozigótica

1-4 d 4-7 d 7-13 d > 13 d

20-30% 70-80% 1-2%

Bicorial Bicorial Monocorial Monocorial Siameses


biamniótica biamniótica biamniótica monoamniótica

70-80% 20-30%

Figura 1. Distribución de la zigosidad y corionicidad.. En este diagrama de flujo se pueden ver los diferentes tipos de gestaciones gemelares en función de su zigosidad. En el ca-
so de los gemelos monozigóticos, la definición de la corionicidad así como de la animonicidad viene condicionad en función del momento de división. En los 3 primeros días (fase
preimplantatoria de mórula) se produce una separación total de los zigotos; entre el día 4 a 7 (fase de blastocisto) se ha diferenciado el trofoblasto pero no el disco embrionario; en-
tre el día 7 a 13 ya se ha diferenciado la cavidad amniótica y el disco embrionario y del día 13 en adelante la división del disco embrionario se produce de forma incompleta.

vienen de un solo óvulo fecundado que se ha di- DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO


vidido después de la fecundación. El momento DE CORIONICIDAD
exacto de esta división condiciona importantes di- Como ya hemos dicho anteriormente, la gesta-
ferencias, respecto al tipo de placentación y am- ción gemelar presenta una clara diferencia en re-
nionicidad. Aproximadamente el 70% de las ges- lación a las complicaciones fetales en función de
taciones monozigóticas son monocoriales, y el 30% la corionicidad. La gestación monocorial presen-
bicoriales(3). Dentro de las monocoriales el 99% ta unas tasas de complicaciones que son superio-
son biamnióticas y el 1% restante se reparte en- res que las que presentan los gemelos bicoriales,
tre monoamnióticas, mayoritariamente, y la ex- y evidentemente a las observadas en las gestacio-
cepcionalidad de los gemelos siameses (Fig. 1). nes simples, con una mortalidad 2-3 veces supe-
En resumen, aproximadamente el 70-80% de rior en los monocoriales(5) y un porcentaje de le-
los embarazos múltiples espontáneos son bicoria- sión neurológica del 3% en gemelos bicoriales fren-
les y el 20-30% monocoriales. La reproducción te un 30% en los monocoriales(6), explicándose es-
asistida puede distorsionar algo estos porcentajes, ta elevada morbilidad por la existencia de una cir-
dado que hay más casos de gestaciones dizigóticas, culación compartida a través de las anastomosis
pero también se ha demostrado que la reproduc- vasculares placentarias. La unión entre las dos cir-
ción asistida se asocia a un mayor número de ge- culaciones fetales puede ser mayor o menor, pero
melos monocoriales. De forma aproximada se po- siempre existe una conexión vascular entre los dos
dría considerar que en la actualidad, en España, de sistemas, que va a condicionar un riesgo fetal anor-
cada 1.000 gestaciones habría unas 23 bicoriales y malmente elevado con respecto a la placentación
unas 7 monocoriales. bicorial(4). Pero a este requisito básico se unen otros

246
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

condicionados por el reparto desigual de placen- TABLA I. Diagnóstico ecográfico de corionicidad


ta y el incremento en la incidencia de malforma-
ciones. En definitiva, se estima que al menos una Monocorial Bicorial
de cada tres gestaciones monocoriales presentará <11 sem 2 sacos amnióticos 2 sacos amnióticos
algún tipo de complicación en la gestación. 2 vesículas vitelinas 2 vesículas vitelinas
Actualmente no es aceptable el no establecer la 1 espacio extracelómico 2 corion envolvente
corionicidad en el momento del diagnóstico ini- 11-15 sem Signo T Signo delta o lambda
(Fig. 2b) (Fig. 2a)
cial de una gestación múltiple, ya que la corioni-
>15 sem Sexo fetal discordante
cidad nos va a definir qué tipo de seguimiento de-
bemos hacer y cuáles son las complicaciones que
debemos vigilar a lo largo del embarazo. Este es un
diagnóstico fácil para un ecografista de nivel me- a la pared uterina, debe hacer sospechar una TFF
dio y no requiere más que la concienciación de la en vez de una situación monoamniótica. Si ambos
importancia de establecer la corionicidad. Debe- fetos son claramente móviles y con vejigas nor-
ría idealmente establecerse antes de las 15 sema- males, es posible que se trate de una monoam-
nas, cuando los signos ecográficos tienen una sen- niótica, pero siempre se debería establecer el diag-
sibilidad y especificidad cercanas al 100%(7). Más nóstico después de una exploración concienzuda.
adelante el diagnóstico ecográfico pierde efica-
cia. Por ejemplo, a las 16 semanas el 3% de las ges-
taciones bicoriales no muestra ya el signo delta, CRIBADO DE ANEUPLOIDÍAS
aunque la presencia del mismo sigue siendo diag- El cribado de aneuploidías en gestaciones ge-
nóstica(7). A medida que avanza la gestación resulta melares se debe realizar al igual que en las gesta-
ya muy difícil o imposible establecer con certeza ciones únicas, de forma preferente en el primer tri-
un diagnóstico. La utilización de la medición del mestre mediante el test combinado y en el caso de
grosor de la membrana interfetal por ecografía ha que esto no sea posible con el de segundo trimes-
dado resultados generalmente malos, por lo que tre. Sin embargo existen algunos matices en el cál-
no parece un método fiable para establecer el diag- culo del riesgo a partir del test combinado de pri-
nóstico(7). mer trimestre que debemos conocer. En las gesta-
Como regla general, una gestación monocorial ciones bicoriales dispondremos de un riesgo indi-
es biamniótica hasta que no se demuestre lo con- vidual para cada feto para el cual utilizaremos el
trario. Cuando no se visualiza la membrana am- valor de la translucencia nucal (TN) de cada fe-
niótica, es necesario descartar una TFF precoz, en to. Sin embargo, en las gestaciones monocoriales
la que el anhidramnios de un feto produce la fal- dispondremos de un riesgo único para los dos ge-
sa impresión de que no existe membrana. Debe re- melos para el cual utilizaremos la media de la TN
cordarse que la probabilidad de observar una TFF de ambos fetos.
(12% de monocoriales) es claramente superior a Las indicaciones de procedimiento invasivo son
la probabilidad de encontrarse ante una monoco- la evidencia de un riesgo >1/250 o la presencia
rial monoamniótica (1% de monocoriales). La pre- de discordancia en el CRL superior a una semana.
sencia de un feto inmóvil y siempre en la misma La técnica de elección es la biopsia corial que en el
posición, muy cercano o prácticamente "pegado" caso de la gestación monocorial sólo precisa una

247
Gestación gemelar

única toma de muestra. Pasaremos a realizar am- Si bien es cierto que ni el cerclaje sistemático(10) ni
niocentesis si la edad gestacional es ≥ 15 semanas el uso de progesterona vaginal(11) han demostrado
o en el caso de gestaciones monocoriales con ano- ser eficaces para reducir la tasa de prematuridad
malía discordante para asegurarnos la obtención en mujeres de alto riesgo de parto pretérmino se-
de dos muestras diferentes por el riesgo de gesta- leccionadas por la longitud cervical, parece razo-
ción heterocariocítica. nable pensar que el reposo muy marcado o estric-
to en los casos seleccionados podría prolongar la
gestación por periodos a veces suficientes para mo-
RIESGOS MATERNOS Y OBSTÉTRICOS dificar significativamente el pronóstico neonatal.
DE LA GESTACIÓN GEMELAR Además, la evaluación del estado del cérvix evita
El principal riesgo de una gestación múltiple es prolongar ingresos y actuaciones agresivas inne-
la prematuridad, que es responsable de una im- cesarias en gestaciones gemelares con cérvix largo
portante proporción de malos resultados perina- y que no se modifica entre exploraciones. Por es-
tales(8). La tasa de prematuridad de la gestación te motivo, en nuestro centro realizamos controles
múltiple es obviamente muy variable en función de longitud cervical y actuamos en función del
del área geográfica y nivel socioeconómico, pero mismo:
incluso en áreas desarrolladas es importante esta- • 15-25 mm: insistir en el reposo domiciliario.
blecer protocolos específicos para mejorar la ele- Control cervical cada 15 días
vada tasa de prematuridad(9). • < 15 mm: extremar el control individualizan-
Los otros riesgos clásicamente mencionados son do cada caso. Valorar maduración pulmonar e
la anemia materna, mayor incidencia de hiperten- ingreso en función de la edad gestacional.
sión gestacional y preeclampsia, y ligero incremen- ¿Cuáles son las recomendaciones generales que
to de diabetes mellitus. También existe un mayor daremos a una gestante gemelar sin complicacio-
riesgo de presentar edema asociado a retención hí- nes?:
drica y oliguria. Ante los casos en los que exista au- • Aumento ponderal materno en función del ín-
mento de peso marcado y/o oliguria es necesario dice de masa corporal (IMC):
realizar control bajo ingreso hospitalario y control – IMC 18,5-24,9: incremento 17-25 kg.
estricto de balance hídrico. El reposo en decúbito – IMC 25-29,9: incremento 14-23 kg.
lateral y la utilización de medias o vendajes com- – IMC ≥ 30: incremento 11-19 kg.
presivos suelen mejorar la situación en breve pe- • Ferroterapia y suplementos de ácido fólico has-
riodo de tiempo. Más raramente, es necesario re- ta el final del embarazo. El suplemento de cal-
currir a la utilización de diuréticos, siempre con es- cio y resto de minerales y vitaminas se indivi-
tricto control de balance hídrico e ionograma. dualizará según la dieta.
El protocolo rutinario de control recomenda- • Reducción gradual de la actividad física, indi-
do para una gestación gemelar difiere en general vidualizando y teniendo en cuenta el tipo de ac-
poco del habitual para la gestación única, con dos tividad de la paciente.
excepciones fundamentales, el control ecográfico ¿Qué controles debemos añadir con respecto
y el control de la prematuridad. Pero, ¿es realmente a una gestación única?
útil realizar este cribado si no existen en este mo- • Añadir hemograma entre la analítica habitual
mento medidas terapéuticas claramente eficaces? del 2º y 3er trimestre.

248
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

TABLA II. Control gestacional gestación gemelar bicorial

16-18 20-22 24 28 30 32 34 36 40

Biometrías +/- Doppler AU X X X X X


Longitud cervical X X X X X X X X

• Adelantar el cribado de SGB vaginal y rectal a 36 sem. No existe evidencia de que en presencia de
las 34 semanas. crecimiento similar de los gemelos, el Doppler de
• Control NST semanal a partir de la semana 37- la arteria umbilical (AU) aporte información de
38. valor, por lo que en nuestro centro no lo realiza-
mos si el crecimiento es normal. El diagnóstico
prenatal en estas gestaciones viene detallado en
GESTACIÓN BICORIAL el capítulo correspondiente.
En las gestaciones gemelares bicoriales no com-
Control gestacional plicadas parece prudente finalizar la gestación de
En las gestaciones múltiples es recomendable forma electiva. En nuestro centro decidimos el mo-
realizar la visita y el control ecográfico de forma mento en función de la edad gestacional y las con-
simultánea, ya que nuestro objetivo será valorar la diciones cervicales:
presencia de dos de las complicaciones más fre- • Bishop ≥ 6: finalización a partir de 38 sem.
cuentes de la gestación gemelar bicorial, la res- • Bishop < 6: finalización a partir de 39 sem.
tricción de crecimiento y la prematuridad, y para
ello es imprescindible estimar el crecimiento fetal Complicaciones de la gestación bicorial
y medir la longitud cervical. Debemos destacar que Después de la prematuridad, la complicación
el riesgo de malformaciones y aneuploidías es si- más frecuente es el crecimiento intrauterino res-
milar al de la gestación única. tringido (CIR), cuya incidencia es del 10%, más ele-
Uno de los pasos más importantes en cualquier vada que en las gestaciones únicas(13), y habitual-
gestación es la datación. En nuestro centro siem- mente afecta sólo a uno de los dos fetos. La explo-
pre utilizamos la longitud craneocaudal (CRL) pa- ración ecográfica es exactamente la misma que en
ra ello y modificamos la fecha de la última regla la gestación única e incluye la evaluación de la ar-
en función de la fecha teórica que nos proporcio- teria umbilical, la arteria cerebral media y el duc-
na el CRL. En el caso de las gestaciones gemelares, tus venoso. Sin embargo, existen diferencias en el
debido a que en aproximadamente un 20 % de los comportamiento clínico que se pueden explicar por
casos existe una diferencia como mínimo de 5 mm su etiopatogenia mixta, ya que el CIR en gestacio-
entre ambos gemelos(12), se debe datar en función nes bicoriales tiene su origen en la combinación va-
del CRL más grande. riable de una invasión anómala de trofoblasto con
En la Tabla II se representan las visitas que se un espacio de implantación reducido.
deben realizar y los controles que deben incluir las La utilización del Doppler es de gran ayuda en
mismas. A partir de la semana 28 las visitas se re- la mayoría de casos y nos permite distinguir dos
alizarán cada 2-3 semanas y semanal a partir de las grandes grupos de patrones:

249
Gestación gemelar

TABLA III. Control y finalización de la gestación gemelar bicorial con CIR

Control Finalización Vía

PFE <p10 + IPAU normal Bisemanal 39 semanas Vaginal


PFE <p3 + IPAU normal Semanal 37 semanas Vaginal
PFE <p10 + ICP<p5 Semanal 37 semanas Vaginal
PFE <p10 + AEDV AU 2-3 días 34 semanas Cesárea
PFE <p10 + IPACM <p5 2-3 días 34 semanas
(si AEDV AU 32 semanas) cesárea
PFE <p10 + criterios de gravedad 12-72 horas 30 semanas cesárea
PBF ≤4/10 o 6/10 con oligoamnios
RCTG variabilidad <5 o desaceleraciones
Flujo reverso en AU
IPDV <p95 y/o vena umbilical pulsátil
PFE: peso fetal estimado; IPAU: índice de pulsatilidad de la arteria umbilical; ICP: índice cerebro-placentario; AEDV: flujo
ausente diastólico; IPACM: índice pulsatilidad arteria cerebral media; PBF: perfil biofísico; RCTG: registro cardio-tocográ-
fico; IPDV: índice pulsatilidad ductus venoso.

TABLA IV. Control gestacional en ls gestación gemelar monocorial

14 16 18 20 22 24 26 28 32 34

Biometrías +Doppler AU X X X X
LA + vejigas + circunferencia abdominal X X X X X X X X X X
Longitud cervical X X X X X

• Doppler AU normal: permiten una conducta habitual en estos casos es la individualización y en


expectante con un margen de seguridad razo- la medida de lo posible el consenso con la familia
nablemente elevado. de la actitud adoptada.
• Doppler AU anormal: presentan una mayor du-
ración del tiempo de latencia entre el hallazgo
de arteria umbilical anormal y el deterioro de GESTACIÓN MONOCORIAL
flujos venosos y función cardiaca. El deterioro
agudo cardiovascular tiene el mismo valor pre- Control gestacional
dictivo que en la gestación única. La gestación monocorial representa una situa-
Cuando se presenta un CIR grave discordante ción de alto riesgo para los fetos y podría consi-
en edades gestacionales límite (por debajo de las derarse que al menos un tercio de las gestaciones
30 semanas), el manejo y las decisiones pueden ser monocoriales presentan algún tipo de problema.
muy comprometidas, por el dilema de actuar en Los controles en las gestaciones monocoriales van
beneficio del feto afecto contra la amenaza de ex- dirigidos a diagnosticar las principales complica-
traer un prematuro extremo sano. Nuestra actitud ciones: transfusión feto-fetal (TFF) grave, creci-

250
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

miento intrauterino restringido selectivo (CIRs) y


un mayor riesgo de malformación.
Como en las gestaciones bicoriales, la gestación
monocorial la dataremos en función del CRL más
grande.
En la tabla IV se representan las visitas que se
deben realizar y los controles que deben incluir las
mismas. A partir de la semana 36 las visitas se re-
Figura 2. Diagnóstico ecográfico de corionicidad. (a) Gestación bicorial de 15 se-
alizarán de forma semanal. Dado el riesgo au- manas: signo “delta”. La presencia de corion entre las dos membranas amnióticas re-
mentado de malformaciones graves en estas ges- sulta en la gestación bicorial en un signo característico en forma de ‘v’ invertida, o del-
taciones(14), en todas las gestaciones monocoriales ta griega. (b) Gestación monocorial de 15 semanas: signo “T”. La ausencia de corion
entre las dos membranas amnióticas configura una forma de ‘T’ invertida.
se solicitará una ecocardiografía fetal a las 20-22
sem por el mayor riesgo de defectos cardiacos. El
diagnóstico prenatal en estas gestaciones viene de- riales o veno-venosas) y conexiones arterio-veno-
tallado en el capítulo correspondiente. sas, que en realidad son cotiledones compartidos,
En las gestaciones gemelares monocoriales no perfundidos por una arteria de uno y drenados por
complicadas parece prudente finalizar la gestación una vena del otro feto. En una parte mayoritaria
de forma electiva. En nuestro centro decidimos de casos resulta en un intercambio sanguíneo per-
el momento en función de la amnionicidad: manente equilibrado. Sin embargo, la distribución
• Monocorial-biamniótica: finalización a las 37 y número de anastomosis en una y otra dirección
semanas condiciona que en un 10-12% de los casos el in-
• Monocorial-monoamniótica: maduración pul- tercambio de sangre sea desequilibrado y se pro-
monar a las 31 semanas y finalización a las 32 duzca una transfusión feto-fetal grave. En esta si-
semanas previa comprobación de la misma. tuación, un feto se comportará como donante de-
sarrollando hipovolemia e hipertensión, y su her-
Complicaciones de la gestación monocorial mano como receptor desarrollando hipervolemia
y paradójicamente también hipertensión al reci-
Transfusión feto-fetal bir sustancias vasoactivas del donante. La evolu-
ción espontánea de la TFF se asocia a una morta-
Bases fisiopatológicas e historia natural lidad del 100 % antes de las 20 semanas, y más del
La base anatómica son las anastomosis vascu- 80% entre las 21-26 semanas, con más de un 50%
lares interfetales de la placenta monocorial, que fa- de secuelas graves en supervivientes(15).
cilitan un desequilibrio crónico en el intercambio
de sangre(15). En la placenta monocorial cada feto Diagnóstico y estadificación
dispone de un territorio vascular propio, pero exis- La presencia de un ductus venoso reverso en el
te una zona intermedia, o "ecuador vascular", en primer trimestre en alguno de los fetos así como la
la cual se establecen conexiones vasculares, o anas- existencia de discordancia precoz en la cantidad de
tomosis interfetales. Las anastomosis pueden ser líquido amniótico en cada saco en la ecografía, son
de varios tipos, pero esencialmente debe distin- signos predictivos de mayor riesgo de TFF y nos
guirse entre directas vaso con vaso (arterio-arte- puede ayudar a identificar a las pacientes de alto

251
Gestación gemelar

TABLA V. Estadios evolutivos del síndrome de transfusión feto-fetal (Quintero y cols.)

Estadio Polihidramnios/ Vejiga Alteraciones Hídrops Exitus fetal


Oligohidramnios donante ausente Doppler*

I +
II + +
III + + +
IV + + + +
V + + + + +
*Flujo ausente o reverso en arteria umbilical de donante o flujo reverso en ductus venoso o vena umbilical pulsátil en receptor.

riesgo(16). Sin embargo, el diagnóstico lo hacemos tivo de la técnica es la identificación y coagulación


ante la presencia de la secuencia poli-oligohi- de las anastomosis para intentar interrumpir la co-
dramnios cuando cumple los siguientes criterios(17): nexión vascular que une a los dos fetos y por tanto,
• Diagnóstico confirmado de monocorionicidad. el proceso de transfusión. La evaluación preopera-
• Secuencia poli-oligohidramnios: toria de la localización de la placenta es imprescin-
– Receptor: columna máxima vertical > 8 cm dible para decidir el punto de entrada en función de
(< 20 sem) o > 10 cm (>20 sem). la posible localización del ecuador placentario, y por
– Donante: columna < 2 cm. lo tanto, de la zona donde nos encontraremos las
El Doppler no es necesario para el diagnóstico, anastomosis. La técnica de coagulación utilizada en
pero es útil para estadiar la progresión de la en- la mayoría de grupos, denominada coagulación “se-
fermedad. Quintero y cols. definieron cinco esta- lectiva”, consiste en la realización de un correcto ma-
dios evolutivos (Tabla V), teniendo en cuenta el pa placentario y la posterior obliteración únicamente
grado de severidad del cuadro, en los cuales el pro- de las comunicaciones interfetales.
nóstico global de la gestación es diferente(18). Los resultados de la coagulación láser en centros
con experiencia publicados en los últimos diez años
Tratamiento y resultados oscilan entre un 75 y 90% de supervivencia para
El tratamiento de elección es la coagulación lá- al menos un feto(20-28). La tasa de secuelas neuroló-
ser de las anastomosis placentarias por vía fetos- gicas graves al año de vida oscila alrededor del 6%(29),
cópica, que elimina las anastomosis interfetales y siendo en los gemelos monocoriales no complica-
revierte el proceso hemodinámico(19). Como trata- dos del 3-4%(30, 31). El amniodrenaje obtiene peores
miento alternativo si no se dispone de fetoscopia resultados con supervivencias de al menos un feto
se puede realizar amniodrenaje agresivo. Sin em- alrededor del 50%(19,20,28,32) y tasas de secuelas muy
bargo, no debemos olvidar que su papel es paliati- superiores que alcanzan el 40% al año(33).
vo con el único objetivo de reducir el polihidram-
nios sin actuar sobre la causa de la enfermedad. Crecimiento intrauterino restringido selectivo
La coagulación láser se realiza a través de fetos-
copia, con endoscopios de 1,2 a 2 mm y cánulas ex- Bases fisiopatológicas
ternas de diámetro máximo aproximado de 2,5 a 3,5 Se trata de la presencia de CIR en un sólo feto,
mm y puede realizarse con anestesia local. El obje- producida por un reparto asimétrico de la placenta,

252
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

TABLA VI. Clasificación CIRs en función Doppler arteria umbilical

Tipo Doppler AU (Fig. 3) Pronóstico Evolución


I Normal Bueno Casi siempre buena
Crecimiento menor pero lineal, en paralelo con el hermano
Raramente progresa a flujo ausente o reverso
II Ausente o reverso Malo Deterioro in utero de feto CIR en 90%
constante Alteración progresiva de arteria umbilical y ductus venoso(34, 35)
III Ausente Habitualmente no deterioro CIR(36)
reverse intermitente Muerte súbita de feto CIR en 15%
Lesión neurológica de feto normal en 15-20%(36)

que condiciona una insuficiencia placentaria en to afecto, que presentarán patrones de comporta-
un feto. Esta situación provocará en aproxima- miento clínico muy diferentes(34) (Tabla VI).
damente un 15% de casos una restricción de cre- La aparición del flujo intermitente en el CIRs
cimiento grave en uno de los fetos (14, 34). A dife- tipo III tiene su base en la presencia de una gran
rencia de un embarazo único o un gemelar bico- anastomosis arterioarterial que condiciona el cur-
rial, la existencia de anastomosis interfetales in- so clínico particular de estos fetos y sus complica-
terfiere en la historia natural del crecimiento in- ciones al favorecer accidentes agudos de transfu-
trauterino restringido selectivo y determina dife- sión feto-fetal(37,38).
rentes patrones clínicos con cursos clínicos y pro-
nósticos muy diferentes. Tratamiento, manejo y resultados
El manejo cambia sustancialmente según el ti-
Diagnóstico, clasificación e historia natural po de CIRs:
El diagnóstico se establece por un crecimiento • CIRs tipo I:
inferior al percentil 10 en un feto. Esta situación – Conducta expectante con seguimiento estricto
suele asociarse a discordancia interfetal de peso semanal-quincenal.
mayor al 25 %, pero esto no es imprescindible pa- – Criterio de finalización: estancamiento fran-
ra el diagnóstico. co de crecimiento o empeoramiento de Dop-
El CIRs representa un riesgo muy elevado para el pler AU. En general permiten finalizar por en-
gemelo con crecimiento normal ya que si el gemelo cima de las 34 semanas.
con restricción de crecimiento muere, el feto nor- • CIRs tipo II:
mal presenta un riesgo del 25% de muerte y del 25- – Seguimiento estricto semanal.
45% de secuela neurológica grave(31). Sin embrago, – Ante signos de deterioro fetal con alto riesgo
las tasas de muerte intrauterina así como las secue- de muerte intrauterina del feto CIR, actuare-
las en el hermano con crecimiento normal no se dis- mos en función de la edad gestacional:
tribuyen de forma homogénea a lo largo de todas las • Gestación previable: oclusión de cordón del ge-
gestaciones con un CIRs. Dentro de este grupo se melo afecto, pero si los progenitores rechazan
diferencian tres tipos de CIRs en función del estu- un feticidio se puede ofrecer coagulación láser
dio Doppler del flujo en la arteria umbilical del fe- de anastomosis(39).

253
Gestación gemelar

Figura 3. Flujos umbilicales en CIR selectivo. (a) Flujo diastólico presente en arteria umbilical en gestación monocorial con CIRs tipo I. (b) Flujo diastólico ausente en arteria
umbilical en gestación monocorial con CIRs tipo II. (c) Flujo diastólico intermitente ausente- reverso en arteria umbilical en gestación monocorial con CIRs tipo III.

• Dentro de las etapas de viabilidad neonatal la blema, por el riesgo de muerte fetal y de com-
opción será la finalización de la gestación. plicaciones asociadas, por ejemplo, polihidram-
• CIRs tipo III: nios.
– Seguimiento estricto semanal.
– Finalización electiva alrededor de las 32 se- Tratamiento y resultados
manas. No existe un criterio estricto de tratamiento y
– Valorar tratamiento intrauterino en casos de la actitud más recomendable es informar de los
gran discordancia de pesos o deterioro de fe- riesgos de forma individualizada según cada mal-
to CIR: formación. En caso de decisión de feticidio del fe-
- La coagulación láser en el 65% de los casos to afecto, la técnica de elección es la oclusión de
resulta en la muerte del feto CIR, pero me- cordón, que se realiza bien con láser o, más habi-
jora los resultados del feto mayor(40). tualmente, con coagulación bipolar(17,41,42). En ca-
– La oclusión electiva de cordón presenta al- so de gestación monoamniótica debe realizarse
gunos problemas éticos ya que se está rea- además sección del cordón para evitar el riesgo ele-
lizando un feticidio a un feto que tiene una vado de accidente de cordón con muerte del feto
elevada probabilidad de nacer vivo y con normal.
resultados aceptables. La supervivencia suele aproximarse al 90%(41)
con una edad gestacional media al parto de 36 se-
Malformaciones manas(41, 42). Dado que el procedimiento se reali-
za en el saco del feto reducido, las tasas de RPM
Prevalencia e historia natural son inferiores con respecto a otros tratamientos
Un 3-4% de las gestaciones monocoriales pre- fetoscópicos, siendo de un 3% antes de las 32 se-
sentan una malformación grave(14). En más del manas(20,41,42). La aparición de secuelas se observa
90% la malformación es discordante, sólo la pre- fundamentalmente en niños nacidos antes de las
senta un feto, y los riesgos para el feto normal se 30 semanas, y se sitúa en un 3% aproximadamen-
incrementan, de forma variable según el pro- te en las series recientes(41).

254
E. Eixarch, A. Goncé, E. Gratacós

TABLA VII. Vía del parto en la gestación gemelar

Estática fetal Vía del parto

Cefálica-Cefálica (40-45%) Vaginal (en ausencia de contraindicación obstétrica)


Cefálica-Podálica/Transversa Peso fetal estimado < 1.500 g o < 32 semnas
(35-40%) • Cesárea, con el objetivo de minimizar riesgo de lesiones del segundo gemelo
en extracción podálica
Peso fetal estimado ≥ 1.500 g o ≥ 32 semanas
• Vaginal con parto de segundo gemelo de nalgas por vía vaginal. Si presentación
transversa: versión interna y gran extracción.
• Cesárea si sospecha segundo gemelo con mayor peso, con gran diferencia de
tamaño comparado con primero
Podálica / Transversa (15-20%) Cesárea

Secuencia TRAP ceptúa la gestación monoamniótica, como se co-


menta más adelante. El parto gemelar presenta sin
Prevalencia e historia natural duda y por razones obvias un riesgo muy superior
Afecta al 1% de los monocoriales. Se trata de al del parto único. La conducta más adecuada a se-
un caso extremo de discordancia placentaria, un guir va a estar influenciada por diversas variables
feto se desarrolla parcialmente y su cuerpo sobre- que pueden modificar sustancialmente las deci-
vive por una comunicación arterioarterial que lle- siones a seguir, entre ellas edad gestacional, peso
va sangre del hermano en sentido inverso (Twin estimado fetal, presentación de ambos gemelos,
Reverse Arterial Perfusion sequence [TRAP]). El ge- disposición y entrenamiento del equipo obstétri-
melo perfusor presenta circulación hiperdinámi- co de atención del parto. Como concepto general,
ca, con riesgo de insuficiencia cardiaca e hidrops el parto gemelar presenta un aumento significati-
fetal. El riesgo de prematuridad es del 75% y la vo del riesgo de hemorragia primaria o secunda-
mortalidad perinatal es del 30%(43). ria, desprendimiento de placenta y traumatismos
del canal del parto.
Tratamiento y resultados
La técnica es la oclusión del cordón del feto acar- Decisión de la vía del parto
dias y es recomendable realizarla electivamente a En el caso de las gestaciones biamnióticas, la de-
las 16-18 semanas, y no esperar al desarrollo de hi- cisión de la vía del parto debería tomarse en fun-
drops. Las tasas de supervivencia en series conse- ción de edad gestacional, peso estimado y presen-
cutivas oscilan entre el 80-90%(38,44,45). En caso de tación de ambos fetos (Tabla VII). En la gestación
gestación monoamniótica es fundamental realizar monoamniótica, situación de alto riesgo asociada
sección del cordón. a una mortalidad perinatal elevada por el riesgo
de entrecruzamiento de los cordones umbilicales,
la vía del parto es la cesárea electiva(46).
CONTROL Y ASISTENCIA AL PARTO Sin embargo, debemos tener en cuenta que la
Durante el parto la corionicidad no va a repre- selección del modo del parto también puede de-
sentar ninguna diferencia para el obstetra, si se ex- pender del entrenamiento del equipo médico en

255
Gestación gemelar

la asistencia al parto de nalgas y/o la versión po- una actitud inicialmente no activa para la ex-
dálica interna o la extracción de nalgas. Ante una tracción del segundo gemelo.
falta de experiencia para la práctica de estas inter- 9. Alumbramiento dirigido tras la salida del se-
venciones obstétricas, la opción más razonable se- gundo gemelo con el objetivo de prevenir ato-
rá seguramente la práctica de una cesárea electiva. nía uterina.

Conceptos generales sobre la dirección del parto


Como idea general, el parto gemelar es un par- PUNTOS CLAVE
to de alto riesgo y debe ser conducido siempre por 1. El primer paso imprescindible en el manejo de
un médico, idealmente por un equipo obstétrico una gestación gemelar es establecer su corioni-
y de matronas experimentado: cidad.
1. Equipo médico: 2 obstetras, 1 anestesiólogo y 2 2. Las principales complicaciones de la gestación
neonatólogos. bicorial son la restricción de crecimiento y la
2. Analgesia de elección: peridural. Es aconsejable la amenaza de parto pretérmino, y por tanto, el
utilización sistemática de anestesia por el riesgo protocolo de control ecográfico se orienta a es-
de intervenciones obstétricas o cesárea urgente. tas dos complicaciones.
3. La utilización de prostaglandinas y de oxitoci- 3. En la gestación monocorial las complicaciones
na no está contraindicada y es aceptable en el más frecuentes son la transfusión feto-fetal y el
manejo de la gestación gemelar si es necesario(47). crecimiento intrauterino restringido selectivo,
4. Monitorización fetal continua obligada. ambas diagnosticables mediante ecografía.
5. Comprobación estática fetal al inicio del par- 4. La transfusión feto-fetal debe tratarse urgente-
to mediante ecografía. Disponer de ecógrafo en mente con coagulación láser placentaria, que
sala de partos en el momento del explusivo, so- consigue la supervivencia de al menos un feto
bretodo en partos con segundo gemelo en pre- en un 90% de los casos.
sentación no cefálica. 5. El crecimiento intrauterino restringido en la
6. Expulsivo realizado idealmente en una sala de gestación monocorial debe clasificarse en tres
partos que permita la reconversión a cesárea ur- tipos, según las características del examen Dop-
gente, o al menos disponer de la posibilidad de pler de arteria umbilical, con pronóstico y evo-
un traslado a quirófano en un tiempo mínimo. lución completamente diferentes. Si el Doppler
7. Después del nacimiento del primer feto y des- es anormal el pronóstico es malo y debe consi-
pués de pinzar el cordón, comprobación de la derarse el tratamiento intrauterino como una
presentación del 2º gemelo manteniendo ínte- de las opciones.
gra la bolsa. En caso de gestación monocorial
pinzar el cordón inmediatamente para evitar fe-
nómenos agudos de transfusión del 2º gemelo. BIBLIOGRAFÍA
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258
Finalización de la gestación. Inducción del parto
S. Hernández

INTRODUCCIÓN perdinamia e hipertono con o sin alteraciones de


La inducción del parto es un procedimiento di- la frecuencia cardiaca fetal (FCF), aspiración de
rigido a desencadenar contracciones uterinas pa- meconio, rotura uterina, intoxicación hídrica y
ra conseguir un parto por vía vaginal. prolapso de cordón postamniorrexis.
La maduración cervical es un procedimiento Se debe tener precaución especial, por el riesgo
dirigido a facilitar el proceso de ablandamiento, aumentado de rotura uterina, en caso de cesárea
borramiento y dilatación del cuello uterino. anterior y cuando hay hiperdistensión uterina (em-
La inducción se asocia con un aumento de com- barazo gemelar, polihidramnios, gran multipari-
plicaciones en comparación con el trabajo de par- dad y macrosomía).
to espontáneo, sobretodo en primigestas, por ello
siempre que se decide finalizar un embarazo me- Contraindicaciones de la inducción
diante una inducción es necesario: Incluye las contraindicaciones para el parto vagi-
• Establecer una correcta indicación. nal. Las más frecuentes en nuestro medio son: más
• Evaluar cuidadosamente la relación riesgo-be- de una cesárea anterior, cesárea anterior no seg-
neficio (evitar la prematuridad iatrógena). mentaria, cesárea anterior con incisión en “T” in-
• Elegir el método más vertida, miomectomía previa con entrada a la cavi-
dad uterina, antecedente de rotura uterina, situación
no cefálica del feto único, placenta previa oclusiva,
GENERALIDADES vasa previa y herpes genital activo. Estas condiciones
deberán ser excluidas antes de indicar una inducción.
Indicaciones de la inducción del parto
• Complicaciones maternas o fetales.
• Indicación "social" o "geográfica" (razones lo- MADURACIÓN CERVICAL PREVIA
gísticas, riesgo de parto precipitado, distancia A LA INDUCCIÓN DEL PARTO
al hospital, razones psicosociales, etc.). Un test de Bishop igual o menor de 6 (Tabla I)
se considera un cérvix desfavorable y por lo tanto,
Riesgos de la inducción indicación de maduración cervical con prosta-
Los riesgos potenciales de la inducción inclu- glandinas o métodos no farmacológicos previa-
yen: aumento de riesgo de parto por cesárea, hi- mente a la inducción del parto.

259
Finalización de la gestación. Inducción del parto

TABLA I. Test de Bishop Producen cambios histológicos en el tejido co-


nectivo, similares a los que se observan al comienzo
Puntuación 0 1 2 3 del trabajo de parto de un embarazo a término (di-
Posición cérvix Posterior Media Centrado --- solución de los haces de colágeno y aumento del
Consistencia Dura Media Blanda --- contenido hídrico de la submucosa):
Longitud 3 cm 2 cm 1 cm borrado
• Las complicaciones y efectos adversos de las PG
Borramiento 0-30% 40-50% 60-70% > 70%
Dilatación 0 cm 1-2 cm 3-4 cm > 4 cm son los siguientes:
Plano de Hodge libre I-II III IV - Frecuentes (>1/100, <1/10): alteraciones de la
FCF, hipertonía uterina, taquisistolia, hiperes-
timulación uterina, hipotensión o taquicardia.
Requisitos para la preinducción del parto/ - Poco frecuentes (>1/1000, <1/100): náuseas,
maduración cervical vómitos, diarrea, pérdida de bienestar fetal
Antes del inicio de la maduración cervical se secundaria a hiperestimulación uterina.
deberán evaluar los siguientes requisitos: - Raros (>1/10.000, <1/1000): coagulación in-
• Indicación de la inducción. travascular diseminada, rotura uterina.
• Revisar la historia clínica: edad gestacional (FUR • No deben utilizarse prostaglandinas si:
por ecografía), paridad, antecedente de cesárea - Trabajo de parto instaurado.
previa y contraindicaciones de parto vaginal. - Administración simultánea de oxitocina.
• Se debe informar a la paciente y firmar el con- - Multiparidad (4 o más partos a término).
sentimiento informado según el método de ma- - Contraindicación de parto vaginal.
duración/inducción previsto. - Antecedentes de hipersensibilidad a las PG o
• Valorar la presentación fetal y condiciones obs- a alguno de los excipientes.
tétricas mediante test de Bishop. - Cardiopatía moderada-grave (estenosis mi-
• Evaluación del estado de las membranas am- tral o aórtica, tetralogía Fallot, lesiones cia-
nióticas (íntegras o rotas). nosantes, IAM previo, prótesis valvular me-
• Evaluación de la pelvis y el tamaño del feto por si exis- cánica,TGA tras switch atrial, TGA corregi-
tiera sospecha franca de desproporción pelvifetal. da, coartación de aorta, síndrome de Marfan,
• Registro cardiotocográfico basal previo durante 20- circulación Fontan IC III-IV e hipertensión
30 minutos para descartar sospecha de pérdida de pulmonar).
bienestar fetal y dinámica uterina (DU) regular. • Hay que tener especial precaución en caso de:
hemorragia uterina de causa desconocida, glau-
Métodos de maduración cervical coma, asma (a pesar de que la PG E2 es un bron-
codilatador), patología pulmonar, renal o he-
Métodos farmacológicos pática grave, epilepsia, cesárea anterior, emba-
razo múltiple, macrosomía o polihidramnios.
Prostaglandinas (PG)
Se trata de sustancias derivadas del ácido ara- Prostaglandina E2 de liberación controlada de
quidónico. Existen dos tipos fundamentales de PG: inserción vaginal (Dinoprostona: Propess®) de 10 mg
los derivados de la prostaglandina E2 (PGE2) y los Consta de una base de polímero que contiene 10
derivados de la prostaglandina E1 (PGE1). mg de dinoprostona con una cadena de recupera-

260
S. Hernández

ción de poliéster que se coloca en el fondo de saco • La administración simultánea de oxitocina y


posterior de la vagina sin necesidad de espéculo. otros fármacos que estimulen las contracciones
Las prostaglandinas PGE2 han demostrado uterinas está contraindicada.
acortar el intervalo inducción-parto ya que pro- • No se recomienda el empleo de una segunda
ducen una mejoría significativa del test de Bishop dosis.
sin incrementar la tasa de cesáreas(1). • Se debe esperar 30 minutos desde su retirada
Se conserva en el congelador y produce una li- antes de utilizar oxitocina.
beración vaginal controlada y constante a una ve-
locidad de 0,3 mg/h durante 12-24 h en mujeres PGE1 (Misoprostol: Cytotec®)
con bolsa íntegra, mientras que la liberación en El misoprostol administrado por vía oral (50
mujeres con rotura prematura de membranas es µg/4 h) ha demostrado ser tan eficaz como la di-
algo más alta (0,4 mg/h) y más variable. noprostona (PG E2) para inducir el parto. Las ta-
La ventaja más importante es que se puede re- sas de hiperestimulación son similares a los de las
tirar fácilmente ante cualquier complicación en la mujeres inducidas con dinoprostona (4-12%)(3,4).
madre o en el feto (hiperdinamia o pérdida del bie- En comparación con la prostaglandina E2 va-
nestar fetal). Hasta en un 4,4% de las maduracio- ginal, la prostaglandina E2 intracervical y la oxi-
nes cervicales con PGE2 se puede producir una hi- tocina, el misoprostol por vía vaginal se asocia con
perestimulación uterina con cambios en la FC (2,3): un menor uso de analgesia epidural, con mayo-
• Antes de la administración, deberán ser mo- res posibilidades de lograr un parto vaginal den-
nitorizados la actividad uterina, la FCF y valo- tro de las 24 horas.
radas las características del cérvix (Bishop). En comparación con la prostaglandina E2 va-
• Después de su administración se monitoriza- ginal o intracervical, la posterior estimulación con
rá la FCF y la DU durante 2 horas. Después se oxitocina y las aguas teñidas son menos frecuen-
pueden realizar monitorizaciones en ventanas tes con misoprostol(5).
de 30-60 minutos cada 8 horas hasta que se ini- El misoprostol administrado por vía vaginal va-
cie una DU regular. Si se establece DU regular, ginal a dosis > 25 µg/4 h ha demostrado ser más efi-
la monitorización FCF/ DU debe ser continua. caz que los métodos convencionales de inducción
• La ventaja más importante es que se puede re- del parto, pero con más riesgo de hiperestimulación
tirar fácilmente ante cualquier complicación en uterina(5). Dosis más bajas de misoprostol vaginal
la madre o en el feto (hiperdinamia o pérdida fueron similares a los métodos convencionales en
del bienestar fetal). cuanto a eficacia y los riesgos. Actualmente existe
• Si no hay complicación, se debe retirar cuando consenso en que la mejor vía de administración del
se ha completado la maduración cervical (test misoprostol para la maduración cervical es la oral(6).
de Bishop igual o mayor de 6) o si han trans- No se recomienda la utilización de misoprostol
currido 12-24 h desde su colocación. si existe el antecedente de una cesárea previa (ries-
• Se extraerá el dispositivo vaginal de PGE2 en go de rotura uterina) y tampoco en casos de tras-
caso de que se produzca: DU de parto, hiperes- tornos hipertensivos del embarazo:
timulación uterina o hipertonía, sospecha de • Contraindicaciones relativas: macrosomía, po-
pérdida de bienestar fetal o evidencia en la ma- lihidramnios, multipararidad (> 4 partos), CIR,
dre de efectos sistémicos adversos. PEG, gestaciones múltiples.

261
Finalización de la gestación. Inducción del parto

• Dosis: la eficacia por vía oral (dosis de 50 μg) es Cuando se produce una actividad uterina ex-
similar a la vía vaginal (25 µg/4 h) y tiene ta- cesiva, especialmente si se asocia a un RCTG atí-
sas más bajas de hiperestimulación. Se reco- pico o anormal, se deberán realizar las siguientes
miendan un máximo de 5 dosis y la frecuen- medidas:
cia de administración no debe ser superior a 3- • Si se está utilizando un dispositivo de liberación
6 horas. La dosis recomendada es de 50 μg vía controlada de PG, este debe retirarse inmedia-
oral a intervalos de 4 horas(7-10). tamente.
• Antes de su administración se monitorizará la • Medidas de reanimación:
actividad uterina, la FCF y las características del - Decúbito lateral izquierdo.
cérvix (Bishop). - Si exceso de actividad uterina y la alteración
• Si se establece DU regular, la monitorización de la FCF persiste, se deberá administrar un
FCF/DU debe ser continua. tocolítico (Ritodrine 60 ml/h= 200 μg/min)
• Se debe interrumpir su administración en caso de y valorar la finalización del parto en función
que se produzca: DU de parto, hiperestimula- del bienestar fetal.
ción uterina o hipertonía, sospecha de pérdi-
da de bienestar fetal o evidencia en la madre de Actuación clínica ante maduración
efectos sistémicos adversos tales como náuseas, cervical que resulta fallida
vómitos, hipotensión o taquicardia. Si el cérvix uterino sigue siendo desfavorable
• Si se produce amniorrexis espontánea, valorar (Bishop < 6) después de completar la pauta de ma-
las condiciones cervicales y la DU antes de una duración cervical, se deberá revisar individual-
nueva administración. mente la situación clínica para valorar las diferentes
• La administración simultánea de oxitocina y alternativas: proseguir con la inducción o finali-
otros fármacos que estimulen las contracciones zación mediante cesárea.
uterinas están contraindicados. El intervalo en-
tre la última dosis de misoprostol y el inicio Métodos no farmacológicos
de oxitocina se recomienda que sea superior a Los mecanismos de acción de los métodos no
4 horas. farmacológicos para la maduración cervical con-
sisten en la dilatación del cuello uterino a través
Actuación ante actividad uterina excesiva de la presión mecánica y el aumento de la pro-
durante el proceso de maduración cervical ducción de prostaglandinas (PG).
Puede ocurrir que durante el proceso de ma- Existen diferentes dispositivos: doble balón cer-
duración cervical se produzca una actividad ute- vical, balón cervical único y la sonda de Foley. La
rina excesiva: sonda de Foley es una alternativa para la madura-
• Taquisistolia: más de cinco contracciones en 10 ción cervical y ha demostrado tener una eficacia
minutos. similar a las PG(11-14).
• Hipertonía: contracción uterina mantenida más Una reciente revisión sistemática concluye que
de 2 minutos, sin producirse la relajación com- en pacientes con un cérvix desfavorable, la colo-
pleta. cación del catéter de Foley antes de la inducción
• Hiperestimulación: actividad excesiva del útero oxitocina reduce significativamente la duración
con alteraciones en la FCF. del trabajo de parto. La colocación del catéter re-

262
S. Hernández

sultó en un menor riesgo de parto por cesárea. bio cervical anterior, una guía rígida colocada a
Cuando la sonda de Foley se comparó con el gel través de la sonda o la utilización de sondas vesi-
de PGE2, la mayoría de los estudios no han en- cales de silicona.
contrado ninguna diferencia en la duración de la
inducción al parto o la tasa de parto por cesárea(15). Inducción del parto domiciliaria
Sin embargo, el uso de prostaglandinas (intrava- Según los datos disponibles en la literatura a día
ginales intracervical, o misoprostol) se asocia con de hoy, la inducción del parto en pacientes ambu-
un mayor riesgo de taquisistolia con o sin cambios latorios parece factible. Aunque todavía no hay da-
en la FCF, en comparación con el catéter de Fo- tos suficientes sobre qué métodos de inducción
ley(16). En comparación con la oxitocina, en las mu- son mejor tolerados y cuáles son las intervencio-
jeres con cuello uterino desfavorable, los métodos nes más eficaces y seguras(19,20).
mecánicos reducen el riesgo de cesárea.
Si comparamos el catéter de Foley transcervi- INDUCCIÓN DEL PARTO
cal con el misoprostol, ha demostrado una efica- El objetivo de la inducción es conseguir con-
cia similar en conseguir un parto vaginal y no pa- tracciones cada 2-3 minutos, con una duración en-
rece haber tampoco diferencias significativas en tre 60-90 segundos y una intensidad de 50-60
cuanto el tiempo medio hasta el parto. mmHg, sin elevar el tono uterino por encima de
Las ventajas de la utilización de métodos me- los 20 mmHg.
cánicos residen en la confortabilidad de la paciente,
que pueden utilizarse en régimen ambulatorio(17), Métodos de inducción del parto
la potencial reversibilidad y sobre todo la reduc-
ción de efectos secundarios (hiperestimulación Oxitocina (Syntocinón®) y/o amniotomía
uterina). El catéter de Foley ofrece la mejor com-
binación de seguridad y comodidad del pacien- • Generalidades:
te(18) y, por otro lado, no parece incrementar el ries- - Se debe informar a la paciente de la indica-
go de corioamnionitis. ción de inducción y obtener consentimien-
Generalmente se recomienda su utilización en to informado.
gestantes a término, con cultivo negativo para SGB - Se recomienda realizar la amniotomía al ini-
y con bolsa amniótica íntegra. cio de la inducción, excepto cuando la pre-
La técnica de colocación del catéter endocervi- sentación esté muy alta o cuando haya riesgo
cal es relativamente sencilla. Con la ayuda de un infeccioso.
espéculo y una pinza de Pean se coloca la sonda de Para minimizar el riesgo de prolapso de cor-
Foley (calibre 16) a través del canal cervical, so- dón con la maniobra, se debe evitar desalo-
brepasando el orificio cervical interno. Seguida- jar la cabeza fetal de la pelvis (ejerciendo pre-
mente se infla el balón con aproximadamente 30 sión fúndica y suprapúbica simultáneamen-
cc de suero fisiológico y se fija la sonda al muslo te) y controlar la FCF antes e inmediatamente
de la gestante. después del procedimiento.
En casos determinados (dilatación cervical mí- • Monitorización: antes de administrar oxitoci-
nima, obesidad, etc.) puede resultar de ayuda la na hay que realizar monitorización externa con-
utilización de unas pinzas de Pozzi para fijar el la- tinua de la FCF y DU. En caso de no conseguir

263
Finalización de la gestación. Inducción del parto

TABLA II. Dosificación de la oxitocina

Siempre con bomba de infusión y diluïda en solución salina balanceada (ClNa 0,9% o suero Ringer lactato): 5 UI en 500
ml o 10 UI en 1.000 ml. Concentración 10 mU/min
Dosis inicial Aumento de dosis Intervalo de dosis Dosis máxima

1 mU/min (6 ml/h) Doblar dosis hasta 20 minutos 30 mU/min (180 ml/h)**


conseguir DU eficaz o
alcanzar 48 ml/h*
*A partir de 48 ml/h (8 mU/min), el incremento de dosis se reducirá a 2-3 mU/min (12-18 ml/h) cada 20 minutos para
evitar la aparición de hiperestimulación. Una vez que el trabajo de parto avanza y la intensidad de las contracciones uteri-
nas aumenta, debe disminuirse la velocidad de infusión de oxitocina. **La dosis máxima será de 30 mU/min (180 ml/h). Si
se emplean dosis más elevadas, el incremento debe ser muy prudente y con una estrecha vigilancia de la infusión siempre
con bomba y con monitorización interna de FCF y dinámica uterina con el fin de evitar una hiperestimulación.

registrar la DU, si existe un progreso inadecua- - La FCF y la DU deben ser evaluadas y docu-
do del parto o riesgo alto de rotura uterina se mentadas con cada aumento de la dosis.
recomienda la monitorización de DU a través - A partir de 48 ml/h (8 mU/min), el incre-
de un catéter interno de presión. mento de dosis se reducirá a 2-3 mU/min (12-
• Dosificación (Tabla II): 18 ml/h) cada 20 minutos para evitar la apa-
- Preparación: 10 UI de oxitocina en un litro de rición de hiperestimulación. Una vez que el
solución salina normal o Ringer lactato o 5 trabajo de parto avanza y la intensidad de las
UI en 500 ml solución salina normal o Rin- contracciones uterinas aumenta, debe dismi-
ger lactato. Concentración final de 10 mU/ml. nuirse la velocidad de infusión de oxitocina.
- Debe administrarse con una bomba de infu- - La dosis máxima será de 30 mU/min (180
sión para permitir una dosificación precisa. ml/h). Si se emplean dosis más elevadas, el in-
Para evitar la administración de bolus inad- cremento debe ser muy prudente y con una
vertidos, se debe conectar a una vía secunda- estrecha vigilancia de la infusión siempre con
ria. bomba y con monitorización interna de FCF
- La dosis de oxitocina debe ajustarse para ob- y dinámica uterina con el fin de evitar una hi-
tener la actividad uterina adecuada. perestimulación.
- La respuesta uterina a la infusión de oxito- - No debe superarse nunca la dosis máxima de
cina se presenta a los 3-5 minutos y se re- 40 mU/min (240 ml/h).
quieren 20-30 minutos para alcanzar una con- - Cuando se suspende la oxitocina, la concen-
centración plasmática estable, motivo por el tración plasmática disminuye rápidamente
cual la dosis se puede aumentar tras este in- porque su vida media es de 5-12 minutos.
tervalo. La respuesta depende mucho de la
sensibilidad miometrial, por lo se empleará Complicaciones de la inducción con oxitocina
la dosis mínima eficaz con la que se consiga
dinámica uterina y una progresión adecuada Hiperestimulación uterina
del parto, con un patrón de frecuencia car- Ocurre cuando la frecuencia de las contraccio-
diaca fetal tranquilizador. nes es de una cada 2 minutos o menos y duran más

264
S. Hernández

de 60-90 segundos, o bien cuando el tono uterino • El patrón de contracciones debe ser de 3 con-
en reposo supera 20 mmHg. tracciones/10 minutos durante 2 horas sin cam-
La polisitolia o la hipertonía pueden causar bios cervicales sin analgesia epidural y 3 horas con
hipoperfusión uteroplacentaria e hipoxia fe- analgesia epidural. Si disponemos de un catéter
tal. También pueden causar rotura uterina o des- de presión interno para la monitorización de la
prendimiento prematuro de placenta, parto pre- DU: 200-225 UM (en un periodo de 10 minutos)
cipitado y hemorragia postparto por atonía ute- durante 2 horas sin cambios cervicales sin anal-
rina. gesia epidural y 3 horas con analgesia epidural.
Las medidas terapéuticas para controlar la hi-
perestimulación son: interrumpir la infusión de Fracaso de inducción
oxitocina, colocar a la paciente en decúbito la- Consideramos un fracaso de inducción cuan-
teral izquierdo y, si persiste hiperestimulación, do después de 12 horas de inducción, con DU ade-
administrar Ritodrine endovenoso a dosis útero cuada, no se consigue que la paciente entre en la
inhibidora (60 ml/h=200 µg/min). fase activa del parto.

Rotura uterina
El primer signo suele ser una alteración de FCF SITUACIONES ESPECIALES
de inicio brusco, desaparición de la DU y pérdi-
da de altura de la presentación. Cesárea previa
La inducción del parto en estas pacientes au-
Intoxicación hídrica y otras complicaciones menta el riesgo de rotura uterina (1%) y de cesá-
La oxitocina tiene propiedades antidiuréticas, rea urgente, incrementando el riesgo de mal re-
por ello si se administra en altas dosis (más de 30 sultado perinatal. Sin embargo, el parto vaginal
mU/min/180 ml/h) durante periodos prolonga- después de una cesárea puede evitar las complica-
dos y en soluciones hipotónicas puede producir ciones a corto y largo plazo asociadas con la repe-
una hiponatremia sintomática. tición de cesárea.
La intoxicación hídrica conduce a hiponatre- Está contraindicado un parto vaginal después
mia, convulsiones, coma, insuficiencia cardiaca e de cesárea en las pacientes con: dos o más cesáre-
incluso la muerte. as previas, incisión clásica o “T” invertida, mio-
Hay que evitar la administración ev rápida de mectomía previa con entrada en cavidad uterina,
oxitocina sin diluir, ya que puede producir efectos rotura uterina previa, placenta previa, presenta-
cardiovasculares graves (hipotensión). ción fetal anómala o periodo intergenésico infe-
rior a 6 meses.
Distocia por falta de progresión Si Bishop < 6 se recomienda realizar madura-
del trabajo de parto ción previa con dispositivo de liberación de pros-
taglandinas.
Debe cumplirse: Si Bishop > 6 se realizará inducción con oxi-
• Haber completado la fase latente e iniciada la tocina:
fase activa del trabajo de parto (cérvix dilatado • Monitorización externa continua de la FCF y
4 cm o más). DU (salvo en caso de no conseguir registrar di-

265
Finalización de la gestación. Inducción del parto

námica uterina, anormal progreso del parto o PUNTOS CLAVE


alto riesgo de rotura). • La inducción se asocia con un aumento de com-
• Iniciar la administración de oxitocina, siempre plicaciones, por ello, siempre que se decide fi-
con bomba de infusión y diluida en suero fi- nalizar un embarazo hay que establecer una co-
siológico (5 U en 500 ml o 10 U en 1.000 ml). rrecta indicación, evaluar el riesgo-benefico y
• Dosis de inicio: 1 mU/min (6 ml/h). elegir el método más adecuado.
• El aumento de dosis, si fuera necesario: 1-2 • Si cérviz desfavorable, las prostaglandinas PGE2
mU/min (6-12 ml/h) cada 20 min. Interrum- han demostrado acortar el intervalo inducción-
pir la administración de oxitocina si se registra parto ya que producen una mejoría significati-
polisistolia o más de 200 UM. va del test de Bishop sin incrementar la tasa de
• El parto estacionado o prolongado se asocia con cesáreas.
un aumento del riesgo de rotura uterina. • El misoprostol administrado por vía oral (50
• La analgesia epidural es el método de elección, µg/4 h) ha demostrado ser tan eficaz como la
ya que no enmascara los síntomas de rotura ute- dinoprostona (PG E2). Las tasas de hiperesti-
rina (registro de frecuencia cardiaca fetal pato- mulación son similares a los de las mujeres in-
lógica de inicio brusco, desaparición de la di- ducidas con dinoprostona (4-12%).
námica uterina, sangrado vaginal y pérdida de • Las ventajas de la utilización de métodos me-
altura de la presentación). cánicos residen en la confortabilidad de la pa-
• La sospecha de rotura uterina requerirá la rea- ciente, que pueden utilizarse en régimen am-
lización de cesárea urgente para disminuir la bulatorio, la potencial reversibilidad y, sobre to-
morbimortalidad materna y fetal. do, la reducción de efectos secundarios (hipe-
• Durante el periodo expulsivo, no es necesario restimulación uterina).
la instrumentación sistemática ni el examen di- • La inducción del parto en pacientes ambulato-
gital de la cicatriz postparto. rios parece factible. Por el momento, no hay da-
• Si en el postparto existe metrorragia o clínica tos suficientes sobre qué métodos de inducción
sugestiva de rotura uterina se debe realizar una son mejor tolerados y cuáles son las interven-
laparotomía exploradora. ciones más eficaces y seguras.

Gestaciones múltiples BIBLIOGRAFÍA


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simples, pero teniendo en cuenta que existe un
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• Se utilizará como método de elección para ma- Syst Rev 2008 Jan 23;(1):CD006971.
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• Si existe antecedente de cesárea previa, está con- tion of labor in term pregnancies with a Bishop score
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266
S. Hernández

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267
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento
M. López

INTRODUCCIÓN JIDO (retención de restos) y TROMBINA (altera-


Se define hemorragia posparto (HPP) como to- ciones de la coagulación).
da pérdida sanguínea después del parto ≥ 500 ml. Se Múltiples factores predisponentes pueden rela-
considera HPP severa o mayor en caso de ser ≥ 1.000 cionarse con estas causas (Tabla I).
ml(1). Sin embargo, la cuantificación de la pérdida
sanguínea posparto es un parámetro subjetivo que
dificulta la aplicación de esta definición y que nor- PREVENCIÓN
malmente se infraestima(2). Por este motivo, se ha de- La valoración de factores de riesgo antenatales
finido también HPP como aquella que produce un predice únicamente el 40% de casos de HPP. Por tan-
descenso del hematocrito igual o superior al 10% o to, además de evitar factores predisponentes, la me-
cuando hay necesidad de practicar una transfusión dida preventiva de mayor eficacia consiste en el ma-
sanguínea. Más recientemente se ha propuesto defi- nejo activo de la 3ª fase del parto, que se ha demos-
nir la HPP como aquella pérdida sanguínea que pue- trado eficaz en la reducción de un 60% de los casos
da producir inestabilidad hemodinámica(3). de HPP(5), en la disminución significativa de la ane-
Por otro lado, la hemorragia posparto puede mia posparto y de la necesidad de transfusión. Con-
clasificarse en primaria o precoz cuando aparece siste en el uso profiláctico de agentes uterotónicos
durante las primeras 24 horas posparto, o bien en (siendo la oxitocina de 1ª elección), el pinzamiento
secundaria o tardía cuando ocurre entre las 24 ho- del cordón y tracción controlada del mismo hasta
ras y las 12 semanas posparto(4). obtener la placenta, seguido de masaje uterino(6).
La HPP primaria es la principal causa de morta- Distintos fármacos pueden ser usados como
lidad materna a nivel mundial, produciéndose en un profilaxis de la HPP(7, 8) (Tabla II).
1-5% de los partos. La incidencia de HPP severa es
de alrededor del 0,2-0,4% de los partos (3,7/1.000).
DIAGNÓSTICO
Ante una HPP primaria, será importante efec-
ETIOLOGÍA tuar un correcto diagnóstico etiológico, ya que la
Las causas de hemorragia posparto pueden sim- conducta a seguir dependerá de la causa de la he-
plificarse en “4T”: TONO (atonía), TRAUMA, TE- morragia. La atonía uterina es la causa más fre-

269
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento

TABLA I. Etiología de la hemorragia posparto

Etiología Factores de riesgo


Tono: Sobredistensión uterina Gestación múltiple
Atonía uterina (80%) Macrosomía
Polihidramnios
Malformaciones fetales
Hidrocefalia
Agotamiento musculatura uterina Parto prolongado o precipitado
Multiparidad
Infección. Corioamnionitis RPM prolongada
Fiebre
Anomalía uterina Miomas uterinos
Placenta previa
Fármacos útero-relajantes Betamiméticos, nifedipino, SO4Mg, anestésicos
Trauma Laceración cervicovaginal Parto instrumentado
Parto precipitado
Episiotomía
Prolongación histerotomía en cesárea Malposición fetal
Manipulación intrauterina fetal
Presentación en plano de Hodge avanzado
Rotura uterina Cirugía uterina previa
Inversión uterina Placenta fúndica
Tracción excesiva del cordón
Paridad elevada
Tejido Retención de restos (placenta, membranas) Cirugía uterina previa
Alumbramiento incompleto Anomalías placentarias (placenta
succenturiata, cotiledón accesorio)
Trombina: Alteración de la coagulación preexistente Hemofilia
alteraciones Von Willebrand
de la coagulación Hipofibrinogenemia
Antecedentes familiares de coagulopatía
Alteración adquirida durante la gestación PTI
PE, HELLP
CID: preeclampsia, muerte intrauterina,
infección
DPPNI
Embolia de líquido amniótico
Tratamiento anticoagulante

cuente de hemorragia posparto, siendo responsa- ción del obstetra, el anestesiólogo y el equipo de
ble de un 80% de ellas. De todos modos, no se de- comadronas, de enfermería y personal auxiliar.
be olvidar que la etiología en muchos casos pue- También se puede requerir la participación del
de ser mixta, con un factor causal inicial que aca- hematólogo o del angiorradiólogo en un segun-
ba desencadenando el resto de mecanismos. do término. La comunicación entre los miembros
del equipo es básica. Es necesario un manejo “de
menor a mayor” teniendo en cuenta la etiolo-
MANEJO TERAPÉUTICO gía, el riesgo vital y el deseo de fertilidad poste-
Es necesario un manejo inicial por un equi- rior. Es necesaria una valoración basal lo más pre-
po multidisciplinar experimentado, con implica- coz posible. Es importante actuar por adelanta-

270
M. López

TABLA II. Fármacos uterotónicos para profilaxis de hemorragia posparto

Fármaco Dosis Vía* Cuando Comentarios

Oxitocina 3-5 UI Bolus lento ev • Al salir hombro anterior La administración antes de salir la placenta no
Syntocinon® 10UI im • Después del nacimiento disminuye la incidencia de HPP pero tampoco
(1ª elección) • Al salir la placenta aumenta el riesgo de retención placentaria.
10-20 UI Perf ev Dada la vida media de la oxitocina (10-15 min),
SSF 0,9% 500 ml se recomienda complementar la prevención de
a 125 ml/h HPP con perfusión EV posterior
Metilergome- 0,2 mg im • Al salir la placenta. En casos seleccionados de alto riesgo de HPP.
trina Más efectivo que la oxitocina, pero más efectos
Methergin® secundarios (especialmente riesgo de crisis
hipertensiva)
Misoprostol 400-600 µg vo • Útil donde no se dispone Menos efectivo que los anteriores
(PGE1) de vía, agujas o nevera.
Cytotec®
Carbetocina 100 µg Bolus ev o im • Únicamente aprobado Agonista sintético de la oxitocina de mayor
Duratobal® tras cesárea. vida media (40 min vs 10-15 min)
No evidencia de mayor eficacia que la oxitocina.
*EV: Endovenoso. IM: Intramuscular. VO: Vía oral. VR: Vía rectal.

do, con previsión de las posibles complicaciones. En caso de persistencia o agravamiento de la


Estar preparado para la aparición de complica- HPP, debe realizarse un manejo más agresivo, pro-
ciones es el primer paso para evitarlas y para su fundizando en la monitorización, en el transpor-
correcto tratamiento. te arterial de oxígeno y en el mantenimiento de
La valoración basal y el manejo inicial debe in- una adecuada hemostasia, con transfusión de san-
cluir los siguientes aspectos(9, 10): gre y hemoderivados.
• Monitorización de constantes vitales (PA no in- Para un correcto diagnóstico etiológico debe
vasiva, FC, SatO2) realizarse siempre y desde la fase inicial:
• Venóclisis: segundo acceso venoso de buen ca- • Revisión del canal del parto. Importante buen
libre (14-16G). campo, con instrumentos adecuados y con una
• Determinación basal de laboratorio: hemogra- buena analgesia.
ma, coagulación y lactato. • Revisión intrauterina. Utilizar soporte ecográ-
• Reserva de sangre. fico y si hay dudas clínicas. En caso de sospe-
• Cristaloides (Ringer lactato/SSF) y/o coloides cha, legrado uterino ecoguiado.
ev (Voluven®, Gelafundina®), evitando su ad- El objetivo del correcto diagnóstico etiológico
ministración agresiva. será realizar también un tratamiento etiológico
• Mantener temperatura corporal (evitar hipo- desde principio.
termia).
• Oxigenoterapia. Tratamiento de la atonía uterina
• Sondaje vesical. El tratamiento médico será la primera opción
• Masaje uterino abdominal o bimanual. terapéutica a usar (Tabla III).

271
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento

TABLA III. Tratamiento médico de la atonía uterina. Fármacos uterotónicos(1, 11, 12)

Fármaco Dosis Vía* Frecüència Efectos secundariois Precauciones/


contraindic

Oxitocina 10-40 UI Perf ev Poco frecuentes • Neumopatía, cardiopatía,


Syntocinon® (SSF 0,9% • Efecto antidiurético (riesgo nefropatía, hepatopatía
a 125ml/h) edema cerebral o pulmonar) graves
• Náuseas, vómitos
5 UI Bolus ev lento • Si rápido: hipotensión
10 UI im/imm súbita, arrítmia, parada
Metilergo- 0,2 mg im /2-4h
metrina (Máx 5 dosis) • Crisis HTA • HTA, cardiopatía o f. riesgo
Methergin® • Vasoespasmo cardiovascular
• Nauseas y vómitos • Nefropatía, hepatopatía
0,125 mg imm • Infección sistémica
Carboprost 0,25 mg im /15 min-90 min • Broncoespasmo - Neumopatía, cardiopatía,
(15-methyl imm Máx 2 mg • Diarrea, náuseas y vómitos nefropatía, hepatopatía
PGF2α) (8 dosis) • HTA o hipotensión grave
Hemabate® • Fiebre • CI relativas: HTA, glaucoma,
• Cefalea, rubefacción asma bronquial
• Epilepsia
Misoprostol 1000 µg vr /2-6h • Fiebre
(PGE1) • Diarrea, náuseas y vómitos
Cytotec®
*EV: Endovenoso. IM: Intramuscular. IMM: Intramiometrial VR: Vía rectal.

Si el tratamiento médico no es suficiente para El balón intrauterino se considera mayorita-


tratar una atonía uterina, será necesario aplicar riamente el siguiente paso a seguir en caso de fra-
otras técnicas más o menos conservadoras (Fig. 1). caso del tratamiento médico. Es un método eficaz
Se considera una técnica conservadora para el tra- y de fácil aplicación. Proporciona tiempo para ob-
tamiento de la atonía uterina aquella que conser- servación y posibles traslados, además de ser una
va el útero y la fertilidad. En general, deben cons- maniobra terapéutica en sí misma. Clásicamente
tituir el primer paso cuando fracasa el tratamien- se han utilizado diferentes métodos para taponar
to médico, quedando la histerectomía como la úl- o comprimir el útero (gasas, sonda de Foley, balón
tima opción terapéutica, dada su elevada morbi- esofágico de Sengstaken, balón urológico de
lidad. En todo caso, se deberá valorar el riesgo vi- Rusch). En la actualidad, se dispone de un balón
tal de la paciente, el contexto clínico, el equipo especialmente diseñado para su uso obstétrico, el
de profesionales y el deseo de fertilidad posterior balón intrauterino de Sos Bakri (Cook®). Es de fá-
de la paciente(11). La eficacia de las técnicas con- cil colocación y se rellena con 300-500 ml de SSF
servadoras parece ser comparable entre ellas(13), estéril. Los diferentes métodos descritos de tapo-
por lo tanto, la aplicación de una u otra técnica de- namiento uterino consiguen el cese definitivo del
berá individualizarse en función de otros facto- sangrado en un 91,5% de los casos(13-15). Antes de
res como son la vía del parto, la posibilidad de tras- su colocación debe descartarse la retención de res-
lado, el riesgo vital de la paciente y la experiencia tos y la rotura uterina. También puede colocarse
del equipo profesional responsable. en caso de cesárea.

272
M. López

El balón intrauterino también puede conside-


rarse como método de estabilización que permita
el acceso de la paciente a un servicio de angiorra-
diología para embolización de vasos pélvicos.
Este tratamiento conservador endovascular con-
siste en realización de una arteriografía con la oclu-
sión del vaso sangrante o de las arterias uterinas
de forma bilateral mediante la inyección selectiva
de partículas absorbibles o no absorbibles. En oca-
siones también deben embolizarse las arterias ová-
ricas. Se trata de una técnica conservadora y mí-
nimamente invasiva, con una eficacia entre el 88% Figura 1. Algoritmo terapéutico de la atonía uterina.
y el 97%(16, 17) y que conserva la fertilidad. Se han
descrito alrededor de 100 gestaciones con éxito
posteriores a una embolización(18). Es una técni- Por otro lado, la ligadura de ambas arterias ilí-
ca muy útil cuya principal limitación es la dispo- acas internas resulta técnicamente más compleja,
nibilidad y acceso a un servicio de angiorradio- requiere la apertura del peritoneo desde la bifur-
logía, o que la hemorragia sea tan importante e in- cación de los vasos ilíacos, identificar y separar me-
controlable que imposibilite el traslado. La com- dialmente el uréter y posteriormente individuali-
plicación más frecuente es la fiebre 2-3 días post- zar la arteria ilíaca interna procediendo a la do-
procedimiento. También se han descrito compli- ble ligadura de su rama anterior (a unos 2-3 cm
caciones por embolización de órganos adyacentes de la bifurcación) sin seccionar el vaso(21). La efi-
(necrosis glútea, uterina, vesical, rectal, Lesión n. cacia de la técnica es similar a la ligadura de arte-
ciático, trombosis de la arteria femoral). rias uterinas, aunque también puede usarse en ca-
En cuanto a los tratamientos quirúrgicos con- sos de lesión traumática uterina o incluso después
servadores, en la actualidad existen dos alternati- de la realización de una histerectomía(22, 23). Debe
vas. En primer lugar, la clásica ligadura de vasos tenerse en cuenta que puede dificultar una pos-
pélvicos, ya sea de arterias uterinas o de arterias terior embolización. Entre sus complicaciones, des-
hipogástricas, ambas siempre de forma bilateral. taca la necrosis uterina o de otros territorios veci-
La ligadura de arterias uterinas es una técnica nos, la perforación vascular (vena ilíaca princi-
familiar para el ginecólogo, que puede incluir la palmente) y la lesión ureteral.
parte terminal de la rama ascendente (arteria ute- Como tratamiento quirúrgico conservador al-
roovárica), una segunda sutura más baja para in- ternativo se han desarrollado en los últimos años,
cluir las ramas cervicales, o bien ligar en masa ar- por su facilidad, y rapidez aún en manos poco ex-
terias y venas uterinas, incluyendo parte del mio- pertas las suturas de compresión uterina, en par-
metrio (sutura de O’Leary)(19, 20). Tiene una efica- ticular la sutura de B-Lynch, descrita en 1997(24), y
cia de entre 40-100%, puede conservar el útero y la sutura de Hayman(25). Ambas se consideran téc-
la fertilidad posterior y es más sencilla que la liga- nicas conservadoras de fácil aplicación cuyo obje-
dura de arterias hipogástricas, aunque se asocia un tivo es conseguir la disminución de la llegada de
mayor riesgo de lesión ureteral. sangre desde los vasos uterinos a la zona sangran-

273
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento

Figura 2. A) Sutura de B-Lynch. B) Sutura de Hayman.

te y el contacto y compresión de las paredes an- La histerectomía subtotal o total es la opción


terior y posterior uterinas con suturas alrededor terapéutica más radical y compromete de forma
del útero con material grueso absorbible. La sutu- definitiva la fertilidad posterior, por lo que no de-
ra de B-Lynch requiere histerotomía, incluso en be considerarse una técnica de primera elección
caso de parto vaginal. Consiste en una sutura al- sino de rescate en caso de fracaso de las técnicas
rededor del útero (Fig. 2A). Durante todo el pro- conservadoras.
ceso es básico que el cirujano ayudante haga una Se ha descrito el uso de factor VIIa recombi-
compresión bimanual del útero, para conseguir nante en el tratamiento de la hemorragia pospar-
una tensión adecuada y uniforme de la sutura. La to. Sus indicaciones se limitan a casos de hemofi-
sutura de Hayman es una modificación de la su- lia, trombastenia de Glanzmann, pero también en
tura de B-Lynch que NO requiere histerotomía otros casos de hemorragias severas. En obstetricia,
(Fig. 2B). Es técnicamente más sencilla y rápida. en uso compasivo, se ha descrito una eficacia en la
Requiere realizar habitualmente 2 puntos, pero se reducción o cese del sangrado del 85%(28), pero no
pueden realizar más. Se recomienda realizar un es despreciable riesgo de complicaciones, princi-
punto de unión a nivel de fundus entre los dos palmente tromboembolismos (descritos hasta en
puntos longitudinales, para evitar desplazamien- un 5%)(29, 30). Su eficacia como tratamiento con-
tos de los mismos. Su eficacia global se sitúa entre servador que evite la histerectomía no ha sido su-
el 81 % y el 91,7% y también se han descrito ges- ficientemente evaluada.
taciones posteriores a su aplicación(13, 26, 27). Entre
sus complicaciones destaca la isquemia y la in-
fección uterina, sobretodo en casos en que se apli- Tratamiento del trauma obstétrico(31)
quen suturas transversas que pueden dificultar el
drenaje del contenido endouterino. Existe también Lesiones del canal blando del parto
un riesgo teórico de estrangulación intestinal en La identificación de una laceración vulvar, va-
el espacio que queda entre la sutura y el útero cuan- ginal o cervical requerirá un tratamiento quirúr-
do este involuciona. Por este motivo deben utili- gico como primera elección. Se intentará inicial-
zarse suturas reabsorbibles. mente un tratamiento conservador (sutura).

274
M. López

La embolización puede aplicarse en casos de le- sión manual de la cavidad uterina. Si no es posi-
siones cervicovaginales y de hematomas disecan- ble la extracción manual, el tratamiento de elec-
tes de difícil acceso. ción es el legrado uterino ecoguiado, con admi-
nistración posterior de fármacos uterotónicos.
Rotura uterina
En la dehiscencia simple de cicatriz de cesárea Anomalías de la implantación: placenta accreta,
previa, puede realizarse una sutura en dos capas. increta o percreta(32, 33)
En caso de rotura a nivel del segmento, también En caso de acretismo placentario parcial, el le-
puede intentarse su manejo conservador con su- grado uterino ecoguiado con aplicación posterior
tura. Puede ser necesario asociar una ligadura de de fármacos uterotónicos puede considerarse co-
vasos uterinos o de arterias hipogástricas en caso mo tratamiento inicial. Si fracasa, o en caso de sos-
de afectación de vasos uterinos o parametrio. Tam- pecha de acretismo total, o placenta increta o per-
bién puede ser necesario asociar una embolización. creta, el tratamiento clásico es el tratamiento qui-
Si la lesión cervical o uterina se considera irrepa- rúrgico radical. Si la situación hemodinámica de
rable, se indicará un tratamiento quirúrgico radi- la paciente lo permite, puede intentarse la embo-
cal (histerectomía). lización, con casos recientes descritos con éxito.
En casos muy seleccionados, sin hemorragia, pue-
Inversión uterina de plantearse un tratamiento médico conservador, de-
Se caracteriza por la aparición de una masa a jando la placenta in situ, requiriendo un seguimiento
nivel cervical o vaginal junto con la no palpación estricto posterior hasta la reabsorción o expulsión to-
del fundus uterino. Es un cuadro grave, con he- tal de la placenta. El tratamiento con metotrexate no
morragia, dolor y shock (hemorrágico o vagal), parece aportar ningún beneficio adicional.
que requiere una actuación rápida y siempre con Si se sospecha un acretismo placentario duran-
una anestesia adecuada. te la gestación, se podría contemplar la emboli-
El tratamiento de elección es la reducción ma- zación profiláctica previa al parto.
nual por vía vaginal, empujando el fundus uteri-
no en sentido inverso. En caso de contracción ute- Tratamiento de las alteraciones de la coagulación
rina intensa, se pueden requerir fármacos utero- Las alteraciones de la coagulación, ya sean he-
rrelajantes (betamiméticos, SO4Mg, nitrogliceri- reditarias o adquiridas, requerirán un tratamien-
na, gases halogenados). Una vez reducida, se de- to específico en función del factor causal (trans-
berá aplicar un tratamiento uterotónico enérgico fusión de plaquetas, plasma o crioprecipitados).
para evitar la recidiva. En el caso de la enfermedad de von Willebrand
Si fracasa la reducción por vía vaginal, se inten- (coagulopatía hereditaria más frecuente), se pue-
tará por laparotomía, con tracción desde el fundus. de utilizar desmopresina o DDAVP (análogo sin-
tético de la vasopresina).
Tratamiento de las alteraciones de “tejido”

Retención de restos (placenta, membranas) PUNTOS CLAVE


Ante la sospecha de retención de restos inme- • El manejo activo de la tercera fase del parto es
diatamente posparto, puede realizarse una revi- la maniobra más eficaz para prevenir una he-

275
Hemorragia posparto: prevención y tratamiento

morragia posparto, siendo la oxitocina el fár- 5. Prendiville WJ, Elbourne D and McDonald S. Active
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maco de primera elección. bour. Cochrane Database Syst Rev 2000:CD000007.
• La mayor parte de las de las HPP se producen
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en mujeres sin factores de riesgo conocidos. prevention of postpartum haemorrhage: WHO; 2007.
• Ante una HPP es importante el manejo por un 7. Gulmezoglu AM, Forna F, Villar J and Hofmeyr GJ.
equipo multidisciplinar experimentado, precoz Prostaglandins for prevention of postpartum hae-
y coordinado. morrhage. Cochrane Database Syst Rev 2004;
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• La principal causa de hemorragia posparto es
8. Su LL, Chong YS and Samuel M. Oxytocin agonists
la atonía uterina (80%), pero es importante un for preventing postpartum haemorrhage. Cochrane
correcto diagnóstico etiológico, valorando las Database Syst Rev 2007;CD005457.
“4T” (tono, trauma, tejido y trombina). 9. Mousa HA and Walkinshaw S. Major postpartum hae-
• El tratamiento médico será la primera opción morrhage. Curr Opin Obstet Gynecol 2001;13:595-603.
terapéutica a usar (oxitocina, metilergometri- 10. Plaat F. Anaesthetic issues related to postpartum hae-
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• Si fracasa el tratamiento médico siempre debe-
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ría intentarse un tratamiento conservador que delines for Obstetrician-Gynecologists Number 76,
conserve el útero y la fertilidad, quedando la October 2006: postpartum hemorrhage. Obstet Gy-
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histerectomía como última opción.
• El primer tratamiento conservador a aplicar es 12. Mousa HA, Alfirevic Z. Treatment for primary post-
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el balón intrauterino. 2007;CD003249.
• Las suturas de compresión uterina, la ligadura 13. Doumouchtsis SK, Papageorghiou AT, Arulkuma-
de vasos pélvicos o la embolización son otros ran S. Systematic review of conservative management
tratamientos conservadores de eficacia similar. of postpartum hemorrhage: what to do when medical
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La elección de una u otra técnica dependerá de
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