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La felicidad depende del sentido que cada uno de nosotros le damos a nuestra
vida
A veces no somos capaces de dejar que nuestro cerebro discierna de lo bueno y
de lo malo tome las decisiones correctas, muchas veces nuestra vida va sujeta a
esas emociones que tenemos a través de las pantallas.
Algo que muchas veces sabemos pero que sin embargo seguimos haciendo es
ser esclavos de las redes sociales, nos hacemos adictos a ellas que simplemente
deja al descubierto la vulnerabilidad o necesidad que tenemos como humanos de
sentirnos queridos, apreciados.
El consumir sustancias (drogas) como marihuana, cocaína, heroína, etc., esto nos
genera placer, el placer esta modulado por la dopamina. La dopamina comienza a
subir hasta llegar a un punto máximo y una vez hecho esto, comienza a descender
de manera abrupta, por ello, cuando esta ha llegado a su punto mas bajo, la
misma dopamina nos produce necesidad de seguir consumiendo todo aquello que
nos hace bien, que nos hace sentir mejor. Por ello, las redes sociales podrían
asociarse como una “adicción” dada la manera en que va produciendo dopamina a
tal grado de querer seguir “consumiendo”.
La mente es una “maquina” completísima, por ello, todo lo que realmente
deseamos con fuerza, la mente hará lo posible por conseguirlo, sobre todo si lo
enfocamos con completa certeza, si realmente conectamos con nuestro corazón,
debemos dar por asentado que lo podemos lograr, porque al final de cuentas, el
corazón y la mente deben trabajar a la par para discernir lo que esta bien, lo
correcto.
Muchas veces no nos damos cuenta, pero lo realmente cierto es que los
creadores de las “adicciones” , sea redes sociales, sustancias prohibidas, etc., son
quienes realmente no las consumen porque saben el peligro potencial que estas
generan, entre ellos esta por sentado “que consuman ellos menos nosotros”
porque realmente es un peligro, y difícilmente, nosotros como consumidores nos
damos cuenta de ese daño que nos estamos generando, creemos que tenemos
todo bajo control cuando la realidad es completamente diferente.
Es común que nos sintamos abrumados, estresados , aburridos por las
actividades diarias, por ello es que recurrimos a las redes sociales, porque estás
están diseñadas para brindar alivio, nos enganchan y poco a poco caemos en
ellas, el contenido de ellas es tan diverso que buscamos más y más hasta que se
nos pasan las horas, la realidad es que somos esclavos de la pantalla, y lo más
triste quizá es que lo sabemos pero lo seguimos haciendo.
Un error que también cometemos continuamente es no estimular a los pequeños,
ellos cuando son pequeños tienden a desarrollar su corteza prefrontal a través de
3 principales factores; luz, sonido y movimiento. Con ello, ellos van despertando
esa curiosidad, su corteza prefrontal va conociendo como es la voz de papá, de
mamá , de la gente que te rodea, como se escucha el viento, una lluvia, el aire, las
olas, de qué color es el cielo, el mar, un árbol, etc., sin embargo, se ha visto que
en repetidas ocasiones , la gente opta por darle un aparato electrónico, un Tablet,
un celular, desafortunadamente, estos aparatos tienen esos 3 factores para el
desarrollo de la capa prefrontal, lo que impide que no se desarrolle correctamente,
que sea dependiente de un aparato digital desde pequeño .