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Sofonías

En hebreo, el nombre «Sofonías» significa «El Señor protege». Él es el único profeta


que enlista en su ascendencia familiar a cuatro generaciones (1:1). Como tátara-
tataranieto del rey Ezequías de Judá (quien gobernó entre 716-687 a. C.) Sofonías
provenía probablemente de una familia que tenía riqueza y posición social; por lo
tanto, Sofonías nos comunica su propio linaje real y también nos dice, que él estaba muy
familiarizado con las costumbres y la política de la corte real en Jerusalén. Sofonías
puede haber conocido a los profetas Nahúm y Jeremías, sus contemporáneos.

Sofonías vivió en las épocas finales del reino Judá

El profeta presenta un relato histórico que comienza con el juicio de Judá (1:1-13), el
Gran Día de Jehová o el dia del Señor (1:14-18), el juicio sobre los enemigos de
Israel (2:1-15), la maldad de Jerusalén (3:1-7), el castigo y la conversión de las
naciones (3:8-13), y una Canción de Alegría

Muestra y nos ilustras unas imágenes casi apocalípticas de lo le sucederá a Judá, y las
naciones alrededor, refiriéndose a un ejército que Dios usara para traer este juicio,
que no nombra, no nos dice que ejercito es, pero que a la luz de otros libros que
hemos estudiado, como Miqueas o Habacuc, que se refiere a Babilonia.

No le da importancia a este apunte, quizás porque quiere resaltar más el papel de


DIOS en orquestar la culminación y la caída de la ciudad

Vemos a la justicia de Dios convertida en ese fuego consumidor, devorando la maldad


de la tierra. Pero vemos al final que este fuego consumidor no es para destruir a las
personas, más bien su propósito es purificar a las naciones, incluyendo a Jerusalén

Dios sanar a las naciones rebeldes

La justicia de Dios restaura, sana libertad

Sofonías nos enseña a abrazar estos dos caracteres de Dios, su justicia y su amor

Aplicación Práctica: Con unos pocos ajustes en cuanto a nombres y situaciones, este


profeta del siglo VII a.C., podría pararse en nuestros púlpitos de hoy y predicarnos el
mismo mensaje de juicio sobre la maldad, y esperanza para quien es fiel. Sofonías
nos recuerda que Dios está ofendido por los pecados morales y religiosos de Su
pueblo. El pueblo de Dios no escapará del castigo cuando peque deliberadamente.
parece que el mal está imparable y victorioso. Tenemos la libertad de desobedecer a
ENTENDER EL PROPOSITO:
Nos ofrece consuelo, alivio, esperanza para quien es fiel
El juicio puede ser doloroso, pero su propósito puede ser redentor más que punitivo
o de castigo. El inevitable castigo de la maldad nos ofrece un consuelo, en un tiempo
cuando Dios, pero no la libertad para escapar de las consecuencias de esa
desobediencia. Aquellos que son fieles a Dios pueden ser relativamente pocos, pero Él
no los olvida.

Las dos perspectivas, la de la niña y la de Dios

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