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UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES

ÉTICA PROFESIONAL SECC. 72 VESPERTINA

(INTERCICLO 2017)

LCDO. ERICK RODRIGO SPIEGELER HERRERA

Examen Final

16 de julio de 2017

NOMBRE: Salvador Baldizón Penados CARNÉ: 1124013

INSTRUCCIONES: Proceda en cada caso según lo pedido. Conteste a continuación las


interrogantes que se le plantean. Cuide su ortografía, redacción y el orden de sus ideas y
argumentos. Valor total del examen 30pts.

PRIMERA SERIE: Valor 20pts. Valor de cada pregunta 4pts.

1. Responda con sus propias palabras: (A) ¿Cuáles son los cuatro principios éticos aplicables a
todas las profesiones que deben regir en nuestro actuar profesional? (B) ¿En qué consiste
cada uno de ellos? (C) Cite dos ejemplos a la hora de su aplicación. (Leer material que se
proporciona).
2. Explique las relaciones estrechas que guardan el principio de beneficencia y autonomía. Y
responda: (A) ¿Cómo debe entenderse correctamente el principio de Beneficencia? (B)
¿Qué dificultades o posibles contradicciones en la aplicación de los mismos pueden
presentarse? (C) ¿Dónde empieza y donde termina el querer hacer el bien a alguien y el
transgredir su autonomía? (Leer material que se proporciona).
(D) Se le presenta la siguiente situación: Usted como doctor se encuentra haciendo turno
en la emergencia de un hospital público y le presentan a una persona gravemente herida,
usted sabe que si no lo opera inmediatamente está persona morirá pero la víctima aún
consciente le indica que por favor no lo opere hasta que el sacerdote llegue y lo confiese y
usted sabe que tiene a lo sumo 10 minutos sino sabe que morirá desangrado y a pesar de
que ha hecho todo lo posible por persuadirlo, el paciente persiste en la misma posición,
pero usted ya ha adelantado indicando al personal de emergencia que prepare la sala de
operación, incluso tiene ya al paciente con la mascarilla de anestesia, por lo que la
pregunta sería ¿Qué haría usted? Opción 1: Se queda a la espera de que llegue el
sacerdote que supuestamente ya viene en camino. Opción 2: le da vuelta a la perilla de la
anestesia para dormir al paciente y proceder a operar. En cualquiera de las dos opciones
que opte, justifique su accionar con base a los principios de autonomía y beneficencia y
como aplica los mismos.
3. Ante la siguiente frase: “la primacía de la forma sobre el fondo, la verdad probada dentro
de un juicio sobre la verdad histórica y la importancia más de la apariencia sobre el
contenido” establezca una crítica al sistema legal guatemalteco. (Recuerde la película vista
en clase “A Justice for all”). ¿Qué debería ser lo más importante en el andamiaje de
justicia? ¿Qué debe buscar por sobre todo el abogado defensor, el juez y el fiscal?
4. La moralidad del asesinato. Ética Categórica vrs. ética consecuencialista. Se le plantea la
situación en donde se encuentra conduciendo un vehículo, como a 250 metros de
distancia se percata que sobre la vía hay 5 trabajadores, cuando decide disminuir la
velocidad presionando el pedal del freno, dramáticamente se percata que ha perdido los
frenos, sabe que si continua recto dará como resultado la muerte de 5 personas, pero
considera una única posibilidad, de poder virar a la derecha, en donde solo se encuentra
un trabajador y como consecuencia matar solo a esta persona evitando la muerte de los
otros 5. (A) ¿Usted que haría? ¿Qué es lo correcto hacer?

En caso de que la respuesta sea preferible matar a uno en vez de a cinco, (B) ¿Qué
sucedería si a lo lejos reconoce en el rostro del trabajador que se encuentra solo y
descubre que es su padre? ¿Cambiaría eso su decisión inicial? ¿Se justifica moralmente su
cambio de posición?
(C)Resuma en que consiste la fundamentación de la ética consecuencialista y relaciónelo
con el dilema anterior.
(D)Resuma en que consiste la fundamentación de la ética categórica o Kantiana y
relaciónelo con el dilema anterior.
5. Con base a los postulados y principios de la ética profesional desde su profesión, responda
las siguientes preguntas:
a. ¿En qué consiste su costo de oportunidad como profesional en la prestación de
servicios? Y ¿para qué sirve conocerlo?
b. Establezca si el contexto de pobreza en la sociedad guatemalteca le impone
moralmente el deber de prestar sus servicios de forma gratuita a los más pobres,
si o no ¿Por qué?
c. Cómo profesional considera usted que es posible negociar con el cliente el pago
de sus honorarios garantizándole resultados.
d. Establezca desde su punto de vista y jerárquicamente cuales son los 3 valores más
importante que deberían regir su actuar profesional y ¿Por qué?

II. SEGUNDA SERIE: A continuación, se le presentan dos casos, valor de cada uno 5pts. En cada
caso responda según lo pedido.

Caso No.1: La nueva cerveza

Agobiada por la pesada carga de sus deudas, la G. Heileman Brewing Company estaba buscando
un segmento del mercado de la cerveza del que pudiera apropiarse para mantenerse a flote.
Además de sus problemas financieros internos, la compañía estaba atrapada en una industria
plagada de problemas.

En 1991 el mercado de la cerveza tendría una baja del 2.1% respecto al año anterior, tendencia
que se achacaba a la creciente conciencia de los múltiples problemas médicos y sociales asociados
al alcohol. Los médicos señalaban una y otra vez que el abuso de la bebida producía un
menoscabo en el funcionamiento del hígado que podía acabar en cirrosis. Las preocupaciones
acerca de los efectos a largo plazo del alcohol sobre los órganos internos -sobre todo el hígado y el
corazón- habían redundado en la aprobación de la Ley de Etiquetado de Bebidas Alcohólicas de
1988 que exigía incluir en las etiquetas de todas las bebidas alcohólicas, advertencias de la
relación entre el consumo de alcohol y problemas de la salud, el riesgo de defectos congénitos y
una capacidad mermada para conducir un automóvil u operar maquinaria.

MADD (Mothers Against Drunk Driving, Madres Contra Conductores Ebrios) y otros grupos de
interés estaban cabildeando para que el gobierno elevara la edad mínima para beber, aumentara
los castigos por conducir en estado de ebriedad y limitara la disponibilidad del alcohol para
menores de edad. Otros grupos estaban cabildeando para que se promulgaran leyes que
restringieran la publicidad de la cerveza, apoyándose tanto en la relación entre el alcohol y los
problemas médicos como en el atractivo que los anuncios de radio y televisión tenían para los
menores de edad. La creciente conciencia de los problemas sociales creados por el alcohol
también fue una causa de la popularidad del número cada vez mayor de impuestos “por pecar”
nuevos que los políticos estaban cargando a la cerveza y otras bebidas alcohólicas. En 1991 el
impuesto federal interno sobre la cerveza aumentaría de 16 centavos de dólar por “six –pack”, a
32 centavos. Además, varios estados, condados y municipios estaban añadiendo impuestos
adicionales al precio de la cerveza.

Una mirada a sus propias cifras de venta y a las características demográficas de sus principales
mercados mostró a la Heileman Brewery que una de sus cervezas, un licor de malta enlatado bajo
en nombre de “Colt 45” se vendía mucho entre los jóvenes de los guettos. DE hecho, las ventas de
Colt 45 en este sustancial y creciente segmento del mercado estaban aumentando mientras las
ventas de cervezas normales en otros mercados estaban en decadencia. La característica distintiva
de Colt 45 era su elevado contenido de alcohol: 4.5%, en comparación con el 3.5% característico
de la cerveza normal. Por ello, Heileman introdujo en 1991 la PowerMaster, una nueva cerveza de
malta dirigida a jóvenes negros e hispanoestadounidenses de barrios céntricos que contenía 5.9%
de alcohol.

Para promover su nueva cerveza, la compañía contrató a músicos de rap populares que gustaban a
su mercado objetivo. Los anuncios de la nueva cerveza asociaban la cultura de pandillas de los
barrios céntricos con la nueva marca PowerMaster y sugerían sutilmente sensaciones de poder y
dominio.

La nueva cerveza y su publicidad dirigida de inmediato se topó con una oleada de críticas. La
cirujano general de Estados Unidos, Antonia Novello, acusó a Heileman de que, al dirigir su cerveza
a los jóvenes negros de sexo masculino, había seleccionado “un grupo con un nivel de cirrosis
hepática más alto que el de otros”. El New York Times dijo en un editorial que la compañía debía
“dejar de dirigirse específicamente a una población que ya estaba siendo devastada por problemas
de alcoholismo y drogas”. Ministros religiosos negros atacaron a la compañía y su nueva cerveza
desde sus púlpitos.

Respondiendo a las críticas, la Federal Bureau of Alcohol, Tobacco and Firearms (BATF) ordenó a la
compañía en 1991 dejar de usar la marca “PowerMaster” para su producto de cerveza de malta.
Según la BATF, el nombre de “PowerMaster” estaba diseñado ilegalmente para promover el
elevado contenido alcohólico de la cerveza. La BATF informó a la compañía que podía vender las
existencias que tuviera de la cerveza, pero que una vez que éstas se agotaran ya no podría usar la
marca.

La compañía se reagrupó, y varios meses después sacó una nueva cerveza de malta con alto
contenido de alcohol en un envase que era visualmente similar a la lata de su descontinuada
marca “PowerMaster”, sólo que ahora la lata llevaba el nombre “Colt 45 Premium”. La BATF no
objetó el uso de este nuevo nombre.

Preguntas

1. Elaboren una síntesis del caso desde el punto de vista ético. No más de 5 líneas.
2. La decisión de la G. Heileman Brewing Company de elaborar y comercializar su nueva
cerveza de malta, ¿Fue moralmente incorrecta en todo sentido?
3. ¿Fue correcto que la BATF permitiera a la compañía comercializar su cerveza en un nuevo
envase?
4. ¿Considera usted que en Guatemala es censurable moralmente promover la venta de
alcohol en áreas geográficas donde hay mayor población propensa al alcoholismo?

Caso No. 2: Un soborno japonés

En julio de 1976, Kukeo Tanaka, antiguo primer ministro de Japón, fue arrestado acusado de
aceptar sobornos (1.8 millones de dólares) de la Lockheed Aircraft Company para asegurar la
compra de varios aviones a reacción Lockheed. El secretario de Tanaka y varios otros funcionarios
del gobierno fueron arrestados junto con él. El público japonés respondió exigiendo airadamente
que se revelaran en su totalidad los tratos de Tanaka. A fines del siguiente año, los japoneses
habían destituido al sucesor de Tanaka, Takeo Miki, quien, en opinión de muchos, había estado
tratando de encubrir las acciones de Tanaka.

En los Países bajos ese mismo año, el príncipe Bernhard, esposo de la reina Juliana, renunció a 300
puestos que tenía en el gobierno, en el ejército y en organizaciones privadas. La razón: se le
acusaba de haber aceptado 1.1 millones de dólares en sobornos de Lockheed en relación con la
venta de 138 aviones a reacción F-104 Startfighter.

En Italia, Giovani Leone, presidente en 1970 y Aldo Moro y Mariano Rumor, ambos primeros
ministros, fueron acusados de aceptar sobornos de Lockheed en relación con la compra de aviones
por valor de 100 millones de dólares a fines de los años sesenta. Todos quedaron excluidos del
gobierno. Escandinavia, Sudáfrica, Turquía, Grecia y Nigeria también se contaron entre los quince
países en los que Lockheed admitió haber entregado pagos, y al menos 202 millones de dólares en
“comisiones” desde 1970.

Se reveló que la implicación de Lockheed Aircraft en los sobornos japoneses se había iniciado en
1958 cuando Lockheed y Grumman Aircraft (otra compañía estadounidense) estaba compitiendo
por un contrato de aviones a reacción para la Fuerza Aérea Japonesa. Según el testimonio del
señor William Findley, socio de Arthur Young & Co. (auditores de Lockheed), en 1958 Lockheed
contrató los servicios de Yoshio Kodama, un criminal de guerra de ultraderecha con fama de figura
del bajo mundo que tenía fuertes vínculos políticos con funcionarios del Partido Liberal
Democrático gobernante. Con la ayuda de Kodama, Lockheed obtuvo el contrato del gobierno.
Diecisiete años después se reveló que en ese entonces la CIA había sido informada (por un
empleado de la embajada de Estados Unidos) de que Lockheed había entregado varios sobornos
mientras negociaba el contrato.

En 1972 Lockheed volvió a contratar a Kodama como consultor para que le ayudara a vender sus
aviones en Japón. Lockheed estaba desesperada por vender aviones a cualquier línea aérea
japonesa importante, porque estaba tratando de recuperarse de una serie de desastres
financieros. Los costos excesivos de un contrato con el gobierno habían llevado a Lockheed al
borde de la quiebra en 1970. Fue sólo gracias a una controvertida garantía de préstamo de
emergencia del gobierno por 250 millones de dólares, en 1971, que la compañía había logrado
evitar apenas la ruina. El señor Carl Kotchian, presidente de Lockheed de 1967 a 1975, estaba
especialmente ansioso de lograr la venta porque la compañía no había podido conseguir tantos
contratos en otras partes del mundo como hubiera deseado.

«Esta sombría situación hacía casi obligatorio un esfuerzo intenso por conseguir ventas en el más
grande de los mercados que todavía no se habían aprovechado: Japón. Este esfuerzo, si tenía éxito,
bien podría redituar ganancias de más de 400 millones de dólares. Una inyección de efectivo
semejante ayudaría mucho a restaurar la salud fiscal de Lockheed y, por supuetso, salvaría los
empleos de miles de trabajadores de la compañía». (Declaración del señor Kotchian.)

Finalmente, Kodama logró negociar un contrato para Lockheed con All-Nippon Airways, venciendo
incluso a McDonell Douglas, que estaba compitiendo activamente con Lockheed por las mismas
ventas. A fin de asegurar la venta, Kodama pidió a, y recibió de Lockheed cerca de 9 millones de
dólares, durante el período de 1972 a 1975. Gran parte del dinero fue a dar supuestamente a
manos del entonces primer ministro Kukeo tanaka y otros funcionarios del gobierno, quienes
supuestamente intercederían por Lockheed ante All-Nippon Airways.

Según el señor Carl Kotchian, “sabía desde el principio que ese dinero iba a dar a la oficina del
primer ministro”. No obstante, él estaba convencido de que al pagar ese dinero tendría
garantizado el contrato con All-Nippon Airways. Las negociaciones finalmente consiguieron para
Lockheed contratos por valor de más de 1300 millones de dólares.

Además de Kodama, Lockheed también había sido asesorado por Toshiharu Okubo, funcionario de
la compañía comercial privada Marubeni, quien actuó como representante oficial de Lockheed.
Posteriormente, el señor Carl Kotchian defendió los pagos que el veía como una de muchas
“prácticas comerciales japonesas” que él había aceptado siguiendo el consejo de sus asesores
locales. La compañía estaba convencida de que los pagos eran congruentes con las “prácticas
comerciales” locales.

«Además, como he señalado, tales desembolsos no violaron las leyes de Estados Unidos. También
quiero hacer hincapié en que mi decisión de efectuar tales pagos se originó en mi opinión de que
los (contratos)… darían empleo a los trabajadores de Lockheed y así redundarían en beneficio de
sus dependientes, sus comunidades y los accionistas de la corporación. Quiero hacer hicapié en que
todos los pagos a los llamados “altos funcionarios del gobierno japonés” fueron solicitados por
Okubo y no fueron sugeridos de mi parte. Cuando él me dijo “se necesitan quinientos millones de
yenes para lograr esas ventas”, desde una posición puramente ética y moral yo habría rechazado
tal solicitud. Sin embargo, al hacerlo yo habría sacrificado sin duda alguna el éxito comercial… (Si)
Lockheed no hubiera seguido siendo competitiva según las reglas del juego, tal como se jugaba
entonces, no habríamos vendido (nuestros aviones)… Yo sabía que si queríamos que nuestro
producto tuviera una oportunidad de ganar por sus propios méritos, teníamos que seguir el
sistema en funciones» (Declaración del señor Kotchian.)

En agosto de 1975 investigaciones realizadas por el gobierno de Estados Unidos obligaron a


Lockheed a admitir que había hecho pagos secretos por un monto de 22 millones de dólares.
Investigaciones subsecuentes del Senado en febrero de 1976 hicieron públicos los tratos de
Lockheed con funcionarios del gobierno japonés. Posteriormente Japón canceló su contrato de mil
millones de dólares con Lockheed.

En junio de 1979 Lockheed se declaró culpable de ocultar del gobierno los sobornos japoneses
declarándolos falsamente como “costos de marketing”. La ley hacendaria estadounidense dice en
parte, “No se permitirá ninguna deducción… por ningún pago efectuado, de forma directa o
indirecta, a un funcionario o empleado de cualquier gobierno… si el pago constituye un soborno o
cohecho ilegal”. No se acusó específicamente a Lockheed de soborno porque la ley
estadounidense que prohibe el soborno no entró en vigor sino hasta 1978. Lockheed se declaró
culpable de cuatro cargos de fraude y cuatro cargos de efectuar declaraciones falsas al gobierno.
No se formularon cargos contra el señor Kotchian, pero la mesa directiva lo presionó para que
renunciara a Lockheed. En Japón, Kodama fue arrestado junto con Tanaka.

Preguntas

1. En su opinión, ¿los pagos de Lockheed a las diversas partes japonesas fueron “sobornos” o
fueron “extorsiones”? Explique con detalle su respuesta.

2. En su opinión ¿el señor Carl Kotchian actuó de forma correcta desde un punto de vista
moral? (Su respuesta debe tomar en cuenta los efectos de los pagos sobre el bienestar de
las sociedades afectadas, sobre los derechos y obligaciones de las diversas partes
implicadas, y sobre la distribución de beneficios y cargas entre los grupos implicados.)

3. En su opinión, ¿el señor Kotchian era moralmente responsable de sus acciones? En última
instancia, ¿recibió él un trato justo?

4. ¿Qué relación encuentra con el nuevo caso presentado por la MP y la CICIG denominado
por los medios “Construcción y Corrupción” “los negocios del MICIVI” y la transgresión a
los valores éticos? Razone su respuesta.

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