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Asociación Civil.
VS.
Sistema de Transporte Colectivo (Metro)
(Requerimiento documental)
Escrito inicial
II.- Autorización
Estudiantes en derecho:
Le pido amablemente en atención circular 12/2009 que emite el Secretario Ejecutivo del
Pleno del Consejo de la Judicatura Federal de fecha 18 de Marzo del 2009 en el que
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autoriza el uso de aparatos como lo son cámaras, grabadoras o lectores ópticos, solicito
Página
se autorice en el presente expediente utilizar dichos medios en la consulta del
expediente, sus apéndices o anexos a las personas autorizadas, asi como al suscrito.
Le pido amablemente en atención circular 12/2009 que emite el Secretario Ejecutivo del
Pleno del Consejo de la Judicatura Federal de fecha 18 de marzo del 2009 en el que
autoriza el uso de aparatos como lo son cámaras, grabadoras o lectores ópticos, solicito
se autorice en el presente expediente utilizar dichos medios en la consulta del
expediente, sus apéndices o anexos.
En atención a que el quejoso ya cuenta con la firma electrónica certificada del Poder
Judicial de la Federación (FIREL) lo cual acredito con:
Atendiendo al contenido del artículo 22 del Acuerdo General 21/2020, del Pleno del
Consejo de la Judicatura Federal, relativo a la reanudación de plazos y al regreso
escalonado en los Órganos Jurisdiccionales ante la contingencia por el virus Covid-19,
se proponen como formas especiales y expeditas para entablar comunicaciones no
procesales con el Órgano Jurisdiccional (de considerarlo pertinente), las siguientes:
trenes en la línea doce del metro en la Ciudad de México ocurrido el día lunes tres de
Página
mayo del 2021, ocasionado diversas víctimas entre ellas menores de edad, este
lamentable evento no puede entenderse sin pensar en una clara falta de cuidado y
mantenimiento de la infraestructura del metro derivada de fallas de origen en la
construcción del sistema colectivo de transporte, tampoco puede entenderse sin pensar
en actos de corrupción en su construcción y/o mantenimiento, es de todos conocido que
cuando ocurren este tipo de eventos las instituciones implicadas ofrecen cantidades
rídiculas como monto de “ayuda” a manera de indemnización, cantidades ofensivas que
de ninguna manera alcanzan las premisas de una justa indemnización también llamada
reparación integral del daño, esto ha ocurrido en eventos como las explosiones en San
Martín Texmelucan, la torre B2 de PEMEX, Tlahuelilpan etc. Tal cual se ha publicado
en los medios de comunicación los lesionados tienen que comprar sus insumos médicos
para su atención. No puede permitirse que a los mexicanos se nos trate de esa forma
tal cual y fuésemos humanos desechables que no importan, como en los anteriores
casos se ofrecieron no mas de diez mil pesos a las familias que ni siquiera alcanzan
para los gastos funerarios o la atención médica futura de los lesionados, es necesario
tal cual y lo cita la exposición de motivos de la reforma en materia de acciones
colectivas, el mandar un mensaje a la sociedad a las entidades sobre los derechos que
nacen de este tipo de eventos que matan y lesionan a nuestra población. Por último
deseo llamar al sentimiento de mayor relevancia para quien escribe que debe tener un
funcionario judicial al momento de juzgar, acordar, deteminar, que es la empatía
realmente quiero suplicarle que se ponga en el lugar de las víctimas cuál sería su sentir
si fueran sus hijos, sus hermanos, su esposa, la conducta de las entidades no puede
ser tan indolente pues aprovechan la situación de vulnerabilidad de las víctimas para
aceptar cantidades insuficientes en todos los aspectos y que no cumplen con las
premisas de reparación del daño.
Por medio del presente escrito con fundamento en lo dispuesto en los artículos
contenidos en el Libro Quinto denominado De las acciones colectivas del Código
Federal de Procedimientos Civiles, y los que se precisan en el apartado de
fundamentos de derecho, venimos a instar acción colectiva denominada acción
colectiva en sentido estricto, en contra de organismo público descentralizado del
Gobierno de la Ciudad de México denominado “Sistema de Transporte Colectivo” 1,
1
Se crea dicho organismo por el DECRETO POR EL QUE SE CREA EL ORGANISMO PÚBLICO DESCENTRALIZADO
“SISTEMA DE TRANSPORTE COLECTIVO”, PARA CONSTRUIR, OPERAR Y EXPLOTAR UN TREN RÁPIDO CON
RECORRIDO SUBTERRÁNEO Y SUPERFICIAL, PARA EL TRANSPORTE COLECTIVO EN EL DISTRITO FEDERAL,
y sus diversos acuerdos modificatorios TRANSITORIOS DEL DECRETO QUE REFORMA Y ADICIONA EL DIVERSO
POR EL QUE SE CREA EL ORGANISMO PÚBLICO DESCENTRALIZADO “SISTEMA DE TRANSPORTE COLECTIVO”.
PUBLICADO EN LA GACETA OFICIAL DEL DISTRITO FEDERAL EL 29 DE SEPTIEMBRE DE 2002. TRANSITORIOS
DEL DECRETO QUE REFORMA Y ADICIONA EL DIVERSO POR EL QUE SE CREA EL ORGANISMO PÚBLICO
DESCENTRALIZADO “SISTEMA DE TRANSPORTE COLECTIVO”. PUBLICADO EN LA GACETA OFICIAL DEL
DISTRITO FEDERAL EL 21 DE FEBRERO DE 2007. FE DE ERRATAS FE DE ERRATAS AL DECRETO QUE REFORMA
Y ADICIONA EL DIVERSO POR EL QUE SE CREA EL ORGANISMO PÚBLICO DESCENTRALIZADO “SISTEMA DE
TRANSPORTE COLECTIVO”, PUBLICADO EN LA GACETA OFICIAL DEL DISTRITO FEDERAL, DÉCIMA SÉPTIMA
4
ÉPOCA, NÚMERO 34, DE FECHA 21 DE FEBRERO DE 2007. PUBLICADO EN LA GACETA OFIXCIAL DEL DISTRITO
Página
Delicias 67, Colonia Centro, Centro, Cuauhtémoc, 06000 Ciudad de México, CDMX.
Por tanto
Artículo 585.- Tienen legitimación activa para ejercitar las acciones colectivas:
I. La Procuraduría Federal de Protección al Consumidor, la Procuraduría Federal de
Protección al Ambiente, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los
Usuarios de Servicios Financieros y la Comisión Federal de Competencia;
II. El representante común de la colectividad conformada por al menos treinta
miembros;
PUBLICADO EN LA GACETA OFICIAL DEL DISTRITO FEDERAL, DÉCIMA SÉPTIMA ÉPOCA, NÚMERO 34, DE FECHA
21 DE FEBRERO DE 2007.
3 https://www.google.com/search?client=firefox-b-
d&q=oficinas%20sistema%20de%20transporte%20colectivo%20metro&tbs=lf:1,lf_ui:2&tbm=lcl&rflfq=1&num=10&rldimm
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III. Las asociaciones civiles sin fines de lucro legalmente constituidas al menos
un año previo al momento de presentar la acción, cuyo objeto social incluya la
promoción o defensa de los derechos e intereses de la materia de que se trate y
que cumplan con los requisitos establecidos en este Código, y
IV. El Procurador General de la República.
Del objeto social, dentro de la ampliación al objeto social de la moral que represento se
encuentra claramente la facultad de instar acciones colectivas de cualquier naturaleza,
así se lee en el acto de Protocolización del Acta de Asamblea General Ordinaria de
Asociados que otorga “Organización Nacional de Responsabilidad del Estado”
Asociación Civil por conducto de Jesús Alberto Guerrero Rojas llevada a cabo en
Ciudad de los Reyes la Paz, Estado de México, a los diez días del mes de enero del
año dos mil diecinueve, ante el Licenciado Raúl Name Neme, Notario Público Número
Setenta y Nueve del Estado de México, con residencia en la Paz, donde hace constar
LA PROTOCOLIZACIÓN DEL ACTA DE LA ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DE
ASOCIADOS DE “ORGANIZACIÓN NACIONAL DE RESPONSABILIDAD DEL
ESTADO”, ASOCIACIÓN CIVIL, que en su parte conducente se lee:
citadas hipótesis, similares o diversas genere uno o varios servidores públicos y/o
entidad pública un daño patrimonial que tenga una afectación individual o
colectiva. Los objetivos de la asociación contenidos en el protocolo de origen
y en el presente podrán llevarse a cabo sin importar la calidad o naturaleza
jurídica del causante del daño, ya sea particular, social o público, que no
tendrá limitantes por la nacionalidad del causante (s) o afectado (s) o su
posición social, política o económica.
(énfasis añadido)
Por tanto la moral que represento se encuentra legitimada para iniciar acciones
colectivas, según el permiso que se agrega y que es de consulta pública en la página
del consejo de la judicatura federal, que se anexa pero inserto la imagen del oficio
relativo en original:
8
Página
1.b.- De la legitimación ad causam del demandado, “sistema de transporte
colectivo” (Metro).
Se insta la presente acción de tipo Las acciones colectivas pueden hacerse efectivas
en contra de usuarios de bienes o servicios públicos o privados, que es el caso, pues
se trata de usuarios del servicio de transporte colectivo (metro) dependiente del
Gobierno de la Ciudad de México, así lo autoriza el artículo 588 del Código Federal de
Procedimientos Civiles que me permito transcribir:
Le solicitamos expresamente la aplicación del artículo 583 del Código Adjetivo aplicable
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Aplicable:
HECHOS NOTORIOS. TIENEN ESE CARÁCTER LAS VERSIONES
ELECTRÓNICAS DE LAS SENTENCIAS ALMACENADAS Y CAPTURADAS EN
11
Tercer Tribunal Colegiado de Circuito del Centro Auxiliar de la Quinta Región, con
residencia en Culiacán, Sinaloa, el Décimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito, el Octavo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y
el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Tercer Circuito. 8 de marzo de
2018. Mayoría de siete votos de los Ministros Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
Margarita Beatriz Luna Ramos, José Fernando Franco González Salas, Jorge
Mario Pardo Rebolledo, Eduardo Medina Mora I., Javier Laynez Potisek y Luis
María Aguilar Morales; votaron en contra José Ramón Cossío Díaz, Arturo Zaldívar
Lelo de Larrea y Alberto Pérez Dayán. Ausente: Norma Lucía Piña Hernández.
Ponente: Javier Laynez Potisek. Secretario: Carlos Alberto Araiza Arreygue. Tesis
y criterios contendientes: Tesis I.10o.C.2 K (10a.), de título y subtítulo: "HECHO
NOTORIO. LO CONSTITUYEN LAS RESOLUCIONES DE LOS ÓRGANOS DEL
CONSEJO DE LA JUDICATURA FEDERAL QUE SE REGISTRAN EN EL
SISTEMA INTEGRAL DE SEGUIMIENTO DE EXPEDIENTES (SISE).", aprobada
por el Décimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y publicada
en el Semanario Judicial de la Federación del viernes 8 de mayo de 2015 a las
9:30 horas y en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época,
Libro 18, Tomo III, mayo de 2015, página 2187.Tesis (V Región)3o.2 K (10a.), de
título y subtítulo: "HECHOS NOTORIOS. PUEDEN INVOCARSE COMO TALES,
LOS AUTOS O RESOLUCIONES CAPTURADOS EN EL SISTEMA INTEGRAL
DE SEGUIMIENTO DE EXPEDIENTES (SISE), AL SER INFORMACIÓN
FIDEDIGNA Y AUTÉNTICA.", aprobada por el Tercer Tribunal Colegiado de
Circuito del Centro Auxiliar de la Quinta Región, con residencia en Culiacán,
Sinaloa, y publicada en el Semanario Judicial de la Federación del viernes 14 de
agosto de 2015 a las 10:05 horas y en la Gaceta del Semanario Judicial de la
Federación, Décima Época, Libro 21, Tomo III, agosto de 2015, página 2181, y El
sustentado por el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Tercer Circuito, al
resolver el recurso de reclamación 23/2016, y el diverso sustentado por el Octavo
Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el amparo en
revisión 244/2016. El Tribunal Pleno, el veintiocho de mayo en curso, aprobó, con
el número 16/2018 (10a.), la tesis jurisprudencial que antecede. Ciudad de México,
a veintiocho de mayo de dos mil dieciocho. Nota: El Acuerdo General del Pleno del
Consejo de la Judicatura Federal que establece las disposiciones en materia de
actividad administrativa de los órganos jurisdiccionales citado, aparece publicado
en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época, Libro 14,
Tomo III, enero de 2015, página 2127. Esta tesis se publicó el viernes 8 de junio
de 2018 a las 10:14 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende,
se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 11 de junio de 2018, para
los efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013.
Instancia: Pleno. Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima
Epoca. Libro 55, Junio de 2018 (5 Tomos). Pág. 10. Tesis de Jurisprudencia.
a) Nuestro sistema jurídico, en especial el procesal, fue diseñado desde una visión liberal
e individualista que permite la titularidad de derechos y la protección de los mismos mediante
mecanismos que privilegian la actuación individual sobre la colectiva. El procedimiento civil
ordinario no cumple con las características necesarias para satisfacer las exigencias que
presentan la tutela de derechos e intereses colectivos.
b) Mediante el estudio del derecho comparado se ha advertido que las acciones colectivas
han permitido la tutela colectiva de derechos e intereses, así como la organización y asociación
de personas para la defensa de los mismos. Se consideró que la incorporación de dichos
12
20
20-21 56. Los objetivos de las acciones colectivas son: a) proporcionar economía procesal; b)
garantizar el acceso a la justicia y brindar seguridad jurídica, y c) generar en la sociedad un
efecto disuasivo ante abusos.
26 70. De lo anterior, podemos advertir que en el caso en análisis nos encontramos ante una
13
situación fáctica agrupó a una serie de individuos en una colectividad con base en el siguiente
criterio: todos ellos eran titulares, individualmente, del mismo derecho sustantivo. La
concesionaria tiene un vínculo obligacional independiente con cada miembro de la colectividad,
aun cuando éstos decidan ejercer su derecho por la vía colectiva.
“
39 En México, aunque alguna forma de denuncia popular y de acciones colectivas están relativamente
previstas en algunos ordenamientos legales, su tratamiento es deficiente, sus efectos restringidos o
su ejercicio se encuentra limitado por restricciones procesales. Por otra parte, el desarrollo
jurisprudencial en la materia ha sido exiguo y no es sino en fechas recientes que hemos sido testigos
de algunos criterios que comienzan a reconocer la legitimación colectiva para la defensa de los
14
Por su parte, los juzgadores tendrán la misión de cuidar que los principios de interpretación para las
acciones y procedimientos colectivos sean compatibles con espíritu de éstos y con la protección de
los derechos e intereses de los individuos, grupos o colectividades. Ello implicará necesariamente que
nuestros juzgadores deberán comenzar a elaborar estándares y guías que le auxilien en su labor,
pues los paradigmas procesales actuales, en muchos aspectos, serán insuficientes e incluso
contrarios al espíritu de las acciones y procedimientos colectivos. En un inicio será necesario que
nuestros juzgadores revisen el espíritu de éstos de acuerdo con las interpretaciones que se han
llevado a cabo en otras jurisdicciones. Deberán asimismo abstraer su función esencial y adaptarlos a
las peculiaridades del sistema procesal mexicano.
[…]”
41, 42 En efecto, la inclusión de las acciones colectivas al marco constitucional, responde al propósito de
garantizar el efectivo acceso a la jurisdicción, pero ya no desde una óptica meramente individualista,
sino más bien, desde un ámbito colectivo, que tiene como propósito resolver de manera adecuada
conflictos en los que se encuentran en juego derechos sustantivos que, por su incidencia colectiva,
pueden llegar a considerarse de índole social.
Así, bajo la lógica de que en ese tipo de acciones, no sólo se encontrarían en juego intereses
individuales, sino que estaría inmersa una colectividad con derechos e intereses difusos o colectivos
en sentido estricto, se reconoció la necesidad de que las acciones colectivas se rigieran por
procedimientos sencillos y eficaces, capaces de permitir un acceso real a la justicia, pues de no ser
así, estaríamos inmersos en un sistema de justicia perversa capaz de permitir y tolerar violaciones a
los derechos, de modo que para evitarlo y lograr la plena y real efectividad de esos derechos, el
Constituyente expresamente consideró que en la regulación de esas acciones, el acceso a la
jurisdicción no debería estar limitado por restricciones procesales, sino que por el contrario, el
procedimiento debería ser ágil y flexible; y para ese efecto, ordenó que el legislador ordinario
instrumentara medidas que fomenten la protección de los derechos de incidencia colectiva, sobre
todos en aquéllos en que hay un evidente interés público en juego.
No obstante, aquí es de suma importancia señalar que para lograr el fin buscado a través de la reforma
constitucional, el Constituyente no sólo consideró la necesidad de delegar en el legislador ordinario la
instrumentación de un proceso ágil y flexible para el ejercicio de las acciones colectivas; sino que por
el tipo de derechos que pueden encontrarse en juego en dichas acciones, consideró que para cumplir
el fin buscado, los juzgadores deben tener un margen de actuación tendiente a lograr la realización
de los valores considerados como supremos y, con ese propósito, se les asignó la misión de cuidar
los principios de interpretación que deben regir a las acciones y procedimientos colectivos, a fin de
que realmente sean compatibles con el espíritu de éstos y con la protección de los derechos e
intereses de los grupos o colectividades que hacen uso de dichas acciones.
43 Una parte importante de esta nueva realidad a la que se ha hecho referencia en el apartado anterior,
afecta fundamentalmente aquellas relaciones e interacciones existentes entre consumidores, usuarios
de servicios, o en general entre miembros de una colectividad respecto de algún interés común y
relevante para ellos, como, por ejemplo, la protección al medio ambiente, el respeto a los espacios
públicos, la suspensión de una construcción peligrosa en la colonia, etc.
44, 45 La problemática antes planteada, converge necesariamente con un concepto que ha sido analizado
en formas diversas y se ha mencionado repetidamente, pero que aún constituye una asignatura
pendiente en nuestro país: el "acceso a la justicia". Sin embargo, aun cuando la noción de "acceso a
la justicia" es un problema relativo al procedimiento, por su finalidad concierne también al fondo del
derecho.
La razón de ello estriba en que para hablar de un efectivo acceso a la justicia se requieren de dos
elementos esenciales:
(i) El reconocimiento de los derechos que le asisten a las personas (ya sea en forma individual o como
miembros de una colectividad), que necesariamente corresponden a los fines e intereses que una
sociedad en un momento determinado estima como valiosos, y
(ii) La previsión de instrumentos y mecanismos que permitan un efectivo cumplimiento de dichos
derechos o en su caso, la reparación del daño, en caso de su inobservancia.
Es en este último punto (la previsión de instrumentos de tutela de derechos) donde debe hacerse un
especial énfasis.
En efecto, la sola existencia y previsión de procedimientos e instrumentos de tutela y protección de
los derechos de las personas no es suficiente para poder hablar de un efectivo acceso a la justicia,
sino que es indispensable valorar y analizar si dichos instrumentos son comprensibles, asequibles y
eficaces a favor de todo aquél que pretenda hacerlos valer, lo que de suyo demanda del propio Estado
instituciones de calidad y con capacidades materiales, económicas y humanas que puedan llevarlo a
cabo.
El panorama actual en materia del acceso a la justicia en México y en concreto, en materia de
15
protección de los derechos fundamentales reconocidos en nuestra Constitución, no sólo los derechos
individuales sino de los nuevos derechos colectivos, también llamados de "tercera generación", nos
Página
refiere que iniciar un procedimiento judicial implica enfrentarse a procesos complicados, difíciles de
comprender debido a su tecnicidad, lentos y costosos, lo que induce a la parte económicamente más
débil a aceptar injusticias, transacciones desventajosas o en último caso, a permitir la violación o el
desconocimiento de los derechos que le asisten por parte de autoridades o de los propios particulares.
Lo anterior conduce a generar una percepción generalizada de desconfianza hacia el propio Estado
y de su incapacidad de resolver en forma pacífica y dentro del marco de la ley, los conflictos sociales.
Es decir, se presenta un fenómeno denominado en algunos órdenes jurídicos como anomia, una
situación donde realmente un individuo no encuentra el camino para que sus derechos sean definidos
o determinados jurídicamente.
47 De esta manera, la acción colectiva puede constituir un mecanismo eficaz para cambiar las conductas
antijurídicas de las empresas del sector privado, inclusive las del sector público, así como de los
particulares en general que afectan a grandes sectores de la sociedad.
En tal virtud, estas comisiones unidas consideran procedente incorporar en la Constitución este tipo
de instrumentos de tutela de derechos colectivos. Estamos conscientes de que corresponderá al
legislador ordinario la adecuada interpretación del contenido y esencia de la reforma, con la finalidad
de que se prevean acciones y procedimientos ágiles, sencillos y accesibles a todo grupo de individuos
que permitan alcanzar los fines propuestos.
Asimismo, estas comisiones dictaminadoras creen firmemente que no es posible continuar
permitiendo que las violaciones a los derechos de los miembros de nuestra propia comunidad (sean
de carácter individual o colectivo) y al sistema jurídico en general, sean simplemente toleradas por la
falta de medios de acceso a una real justicia.
Es importante recalcar que, como lo menciona la iniciativa de mérito, los juzgadores tendrán un papel
fundamental en la efectiva protección de los derechos e intereses colectivos, así como la misión de
cuidar que los principios de interpretación para las acciones y procedimientos colectivos sean
compatibles con espíritu de éstos y con la protección de los derechos e intereses de los individuos,
grupos o colectividades. Ello implicará necesariamente que nuestros juzgadores deberán comenzar a
elaborar estándares y guías que le auxilien en su labor, pues los paradigmas procesales individuales
actuales, en muchos aspectos, serán insuficientes e incluso contrarios al espíritu de las acciones y
procedimientos colectivos.
48, 49, 50 Como se ve, en las consideraciones anteriores se reitera que el efectivo acceso a la justicia no sólo
requiere el reconocimiento de los derechos; sino la previsión de instrumentos y mecanismos que
permitan el efectivo cumplimiento de los mismos, pues el espíritu de la reforma es impedir que se
sigan cometiendo violaciones a derechos que afectan a un gran sector de la sociedad.
Bajo esa lógica, se reconoce que la necesidad de proveer esos instrumentos, obedece a que en
muchas ocasiones el procedimiento judicial ha implicado enfrentarse a procesos complicados, lentos,
costosos y difíciles de comprender debido a su tecnicidad, y que ello ha conducido a que la parte
económicamente más débil sufra injusticias, transacciones desventajosas o en último caso la violación
o el desconocimiento de sus derechos, llevando a una percepción generalizada de desconfianza hacia
el propio Estado, ante su incapacidad de resolver en forma pacífica y dentro del marco de la ley los
conflictos sociales.
En efecto, se reconoce que en ocasiones los costos del litigio para una de las partes hace que sea
económicamente inviable la defensa de sus derechos, pero ello no significa que no estén siendo
vulnerados, evidenciándose así, la existencia de un sistema distorsionado que provoca que las
violaciones a los derechos y al sistema jurídico sean tolerados por su incosteabilidad en tiempo y
dinero, colocando a las personas en un estado de indefensión virtual que ha sido reproducido a lo
largo de muchos años.
58 De suerte que, si la causa de pedir, entendida ésta de la manera más laxa posible, es una institución
capaz de traducirse en una herramienta eficaz para cumplir con esa obligación, ésta debe ser utilizada.
Página
72, 73 Pese a ello, es importante destacar que esa libertad de configuración tampoco es irrestricta, pues el
legislador no puede establecer normas que impongan requisitos impeditivos u obstaculizadores del
acceso a la jurisdicción, por tanto, no puede imponer trabas que resulten innecesarias, excesivas y
carentes de razonabilidad o proporcionalidad.
106, 107 En efecto, ésta consiste en la identidad del actor con la persona a cuyo favor está la ley; en
consecuencia, el actor estará legitimado en la causa, cuando ejercita un derecho que realmente le
corresponde; no obstante, ello sólo se pude determinar con certeza después de analizar con
detenimiento las prestaciones, los hechos de la demanda y el derecho que se estima infringido
a la luz del cúmulo probatorio aportado y en vista de las defensas y excepciones propuestas.
Como se ve, la legitimación ad causam, atañe al fondo de la cuestión litigiosa; y por tanto, sólo
puede analizarse válidamente, en el momento en que se pronuncie la sentencia definitiva, pues
es en ella en donde se analiza el fondo del asunto.
En ese orden de ideas, si como ya se mencionó, la legitimación “ad causam” es una cuestión
substancial, que atañe al fondo del asunto, y su análisis debe realizarse hasta el momento de emitirse
la sentencia definitiva, no resulta válido que ésta sea analizada desde el inicio del procedimiento
como condición para admitir una demanda, ya que ello restringiría excesivamente el derecho de
acceso a la jurisdicción, pues sin analizar a fondo las pretensiones reclamadas por la actora, los
hechos y el derecho que ésta invoca a su favor, y sin además darle la oportunidad de tener un periodo
probatorio para demostrar la procedencia de las mismas; y por ende, su derecho, de manera
anticipada se estaría decidiendo que no cuenta con ella.
110 Pese a lo anterior, no se puede desconocer que a través de esos requisitos y bajo un estándar de
apariencia del buen derecho, el juzgador hace una aproximación del caso, a fin de verificar las
posibilidades que tiene el actor de obtener o no una sentencia favorable, ya sea por la existencia de
causas que pueden impedirlo (fracciones V y VI), o por la ausencia de circunstancias que debido al
tipo de acción ejercitada (fracciones I, II, III y IV) deben verificarse antes de la admisión de la misma;
pero de ninguna manera pueden considerarse como erróneamente los denominó el legislador al
señalar que eran requisitos de legitimación en la causa, en tanto como ya se demostró en los dos
ejemplos anteriores, en realidad, no lo son.
112 Entonces es válido que el legislador haya establecido que antes de la admisión de la demanda el
juzgador se cerciore de que la acción intentada realmente versa sobre cuestiones comunes de hecho
o de derecho entre los miembros de la colectividad actora; y que además, verifique que exista
coincidencia entre el objeto que se persigue a través la acción ejercitada y la afectación sufrida.
Esto es así, pues si se tiene en cuenta que la palabra “objeto”, entre las diversas acepciones que
puede tener, alude al fin al que se dirige una acción u operación, se debe entender que desde el punto
de vista jurídico, el fin de ejercer una acción determinada, necesariamente se vincula a las
pretensiones de aquél que ejerce la acción, es decir a las prestaciones que reclama, pues éstas
necesariamente deben encontrar sustento en el derecho que el actor estima le corresponde, pero que
ha sido infringido; por tanto, los requisitos a que aluden las fracciones II y IV del artículo 588, no
pueden considerarse un obstáculo innecesario en el ejercicio del derecho a la jurisdicción a través de
las acciones colectivas.
113 Se estima de esa manera, porque sólo después de satisfacerse esos requisitos, el juzgador estará en
condiciones de establecer si existe coincidencia entre el objeto de la acción ejercitada y la afectación
sufrida, para finalmente determinar si las prestaciones exigidas son o no procedentes.
116 Esto es así, pues mientras el primero de esos preceptos atañe a requisitos de índole formal, el
segundo alude a requisitos que el juzgador debe derivar no sólo del análisis de los primeros, sino del
análisis integral de la propia demanda, pues sólo a través de ese análisis, el juzgador podrá advertir
la seriedad o fundamento de la acción que se propone; y por ende, constatar la pertinencia e idoneidad
de la acción ejercitada.
123, 124 tal examen tampoco es un análisis de decisión sobre los daños atribuidos, la viabilidad de su
acreditación, ni de la procedencia de las prestaciones, sino un mero examen lógico, para constatar
que la demanda cuenta con el peso suficiente para ser admitida, precisamente por las repercusiones
que dicha admisión puede tener.
Bajo esta lógica, la certificación a que alude el artículo 590 del Código de Procedimientos Civiles no
puede considerarse contraria al espíritu de la reforma constitucional que introdujo las acciones
colectivas, pues aunque en la exposición de motivos correspondiente se dice que a través de las
acciones colectivas se busca favorecer el establecimiento de procedimientos flexibles, alejados de
tecnicismos, lo cierto es que debido a la trascendencia que tiene la admisión de una demanda
colectiva, el juzgador, antes de admitirla, debe constatar que cuenta con el peso suficiente para ser
admitida.
17
Así, el análisis de los requisitos a que alude el artículo 588 del Código Federal de Procedimientos
Civiles, está orientado a dar procedencia a demandas que realmente tengan posibilidades de
Página
prosperar, lo que es lógico y de ninguna manera puede considerarse como una restricción al derecho
de acceso a la jurisdicción, pues como ya se mencionó, no se debe perder de vista que debido a la
naturaleza de las acciones colectivas, si a raíz de la certificación la demanda es admitida, la acción
ejercida deja de tener repercusiones limitadas a la actora y demandada y ahora hace referencia a una
potencial colectividad de afectados que puede ir aumentando durante la substanciación del juicio; por
ello la necesidad de constatar a través del análisis de los requisitos a que alude el artículo 588, que
la demanda tiene posibilidades de prosperar.
que haya pertinencia e idoneidad entre la las pretensiones y el tipo de acción ejercitada, como se
mencionó, éste debe realizarse a través de un enfoque centrado en la apariencia del buen derecho.
126 Aunque para el otorgamiento de esas medidas, el artículo 611 exige ciertos requisitos, éstos son
sumamente sencillos de cumplir, pues basta con que la colectividad solicitante de la medida manifieste
claramente cuáles son los actos, hechos o abstenciones que están causando un daño o vulneración
a los derechos o interés colectivos, o los que pueden llegar a causar y que además exista urgencia
en el otorgamiento de la medida para que ésta sea concedida.
128 Ahora bien, el que ese análisis se realice antes de la admisión de la demanda, no restringe el derecho
de acceso a la jurisdicción, pues por las repercusiones que puede tener la admisión de la demanda
en que se ejercita una acción colectiva y la concesión de las medidas cautelares a que aluden los
artículos 610 y 611 del Código Federal de Procedimientos Civiles, la premura de ese análisis está
justificada, máxime si se tiene en consideración que como ya se mencionó, ese análisis debe
realizarse ponderando la apariencia del buen derecho, la cual consiste en determinar hipotéticamente,
con base en un conocimiento superficial del caso, la existencia del derecho cuestionado y las
probabilidades de que la sentencia sea favorable.
139 Finalmente, en la fracción III, dispuso que el objeto de la acción individual homogénea es reclamar
judicialmente de un tercero el cumplimiento forzoso de un contrato o su rescisión con sus
consecuencias y efectos según la legislación aplicable.
140, 141 Si no fuere posible lo anterior, el juez condenará al cumplimiento sustituto de acuerdo a la afectación
de los derechos o intereses de la colectividad. En su caso, la cantidad resultante se destinará al Fondo
a que se refiere el Capítulo XI de este Título.”
consecuencias y
efectos según la
legislación
aplicable.
144, 145 Ahora bien, no pasa inadvertido que cuando el citado artículo 581, fracción I, señala que la acción
colectiva difusa tiene por objeto reclamar judicialmente del demandado la reparación del daño, señala
que esa reparación consistirá en restituir las cosas al estado que guardaren antes de la afectación, o
en su defecto se deberá realizar un cumplimiento sustituto, excluyendo de manera implícita la
posibilidad de hacer una reparación del daño de manera individualizada a los miembros de la
colectividad, a diferencia de lo que prevé para las acciones colectivas referidas en las fracciones II y
III del propio precepto, pero ello de ninguna manera implica una restricción del derecho de acceso a
la justicia, pues aunque ello parece limitar los remedios judiciales que las colectividades pueden
obtener a través del ejercicio de una acción colectiva difusa, ello obedece a la naturaleza de la propia
acción, pues no se debe perder de vista que la acción colectiva difusa, a diferencia de la acción
colectiva en sentido estricto y la acción individual homogénea, se ejerce para tutelar derechos e
intereses difusos, es decir aquellos cuya titularidad pertenece a una colectividad indeterminada.
Así, contrario a lo que indica la parte quejosa, el precepto combatido (artículo 581, fracción I), no limita
el derecho de acceso a la jurisdicción, ni los remedios judiciales que la colectividad que ejercita esa
acción puede obtener atendiendo a las prestaciones reclamadas, pues sólo se concreta a señalar cuál
es el objeto de la acción colectiva difusa; y al hacerlo, no establece ninguna limitante en cuanto al tipo
de prestaciones que pueden o no reclamarse a través de la misma; por el contrario, si ese precepto
se analiza de manera sistemática con lo dispuesto en el artículo 582 del propio ordenamiento, en el
cual se establece de manera genérica que la acción colectiva podrá tener por objeto pretensiones
declarativas, constitutivas o de condena, es claro que el objeto de la acción colectiva difusa por sí
mismo, no constituye una limitante del derecho de acceso al jurisdicción, en tanto que en él no se
hace ninguna limitación en cuanto al tipo de prestación que puede intentarse en la demanda; sin
embargo, es importante señalar que atendiendo al tipo de acción ejercitada –una colectiva difusa-,
debe entenderse que dichas prestaciones siempre deben estar encaminadas a la reparación
del daño, reparación que necesariamente deberá radicar en volver las cosas al estado que guardaren
antes de la afectación o en su defecto el cumplimiento sustituto, sin que pueda pretenderse una
reparación individualizada en función de los daños particulares que haya sufrido cada miembro de la
colectividad, pues no debe olvidarse que la acción colectiva difusa se estableció para tutelar derechos
e intereses difusos, cuya titularidad pertenece a una colectividad indeterminada, situación que de
ninguna manera es contraria al orden constitucional en tanto que el legislador también previó acciones
colectivas diversas (colectiva en sentido estricto e individual homogénea), a fin de tutelar derechos e
intereses diversos a los difusos, en las cuales sí se puede establecer una reparación individual del
daño.
147, 148 En principio, resulta importante reiterar que el derecho de acceso a la justicia, en acciones colectivas
como la que nos ocupa, debe entenderse flexible, pues como se indica en la propia exposición de
motivos que elevó a rango constitucional esas acciones, el procedimiento debe ser sencillo y eficaz,
a efecto de permitir una protección efectiva de los derechos, pues los paradigmas procesales actuales
son insuficientes e incluso contrarios al espíritu de la reforma constitucional que busca acabar con un
sistema perverso en el que simplemente, y debido a diversos tecnicismos, tolera violaciones a los
derechos humanos.
153, 154 Petición que en su caso, debió atenderse antes de considerar que no se señaló con precisión la
colectividad afectada, en primer lugar porque el determinar con precisión qué comunidades fueron
afectadas, es una cuestión que debe determinarse en la sentencia; y en segundo lugar, porque la
acción ejercitada, aun y cuando se encuentre regulada en el marco del Código Federal de
Procedimientos Civiles, debe carecer de los rígidos tecnicismos propios de la materia civil; por tanto,
el juzgador estaba en condiciones de solicitar la información requerida, pues no se debe perder de
vista que en las acciones colectivas difusas en defensa del medio ambiente, debe no de manera
potestativa, sino obligatoria, actuar de manera oficiosa a fin de tener los elementos necesarios para
valorar debidamente la causa en que se sustenta la acción, pues en este tipo de acciones, debe operar
con mayor eficacia y rigor el principio que reza “dame los hechos y te daré el derecho”.
162 Esto es lógico, porque en este tipo de acciones, las prestaciones de la demanda, no sólo deben
encontrarse vinculadas con el objeto de la acción ejercitada (previsto en el artículo 581), sino que
además, deben vincularse con lo que puede o no ser motivo de condena (artículos 604 y 605).
164, 165 Establecido lo anterior, debe indicarse que la decisión del juzgador al desechar la demanda de la
colectividad quejosa por considerar que no se satisfacen los requisitos a que aluden las fracciones
VIII del artículo 587 y IV del artículo 588, no es del todo acertada.
19
Para entender el por qué de esta decisión, en principio conveniente dejar en claro que si bien el
Página
juzgador consideró que algunas de las prestaciones reclamadas no eran acordes con el objeto de la
acción intentada, lo cierto es que de manera implícita consideró que otras, concretamente las
previstas en los incisos a), b), c) y d), si lo eran.
Al respecto no se prejuzga si ello es o no acertado, en tanto que a través de ellas sólo se piden
declaraciones judiciales que de ser procedentes, conducirían a dar sustento a una sentencia
condenatoria.
Con relación a la prestación reclamada en el inciso n), referente al pago de gastos, costas y
honorarios, la autoridad responsable tampoco se pronunció; sin embargo, debe concluirse que esta
prestación sí tiene correspondencia con la acción intentada, pues en los artículos 616, 617 y 618, se
prevé la posibilidad de una condena de ese tipo en las acciones colectivas, incluida la difusa.
166, 167 Bajo esa lógica, es evidente que las prestaciones reclamadas en esos incisos, no tienen ninguna
vinculación con la reparación del daño, pues a través de ellas, se solicitan declaraciones sobre
incumplimientos, que impacten de tal manera, que incidan no sólo en la revocación de concesiones,
sino en prohibiciones para desempeñar cualquier labor, oficio u ocupación que pueda impactar en el
medio ambiente, peticiones que evidentemente van mucho más allá de la reparación del daño que se
busca a través del ejercicio de un acción colectiva difusa, pues a través de esas prestaciones se
persigue castigar y sancionar a la parte demandada, a través de peticiones que no sólo escapan a la
competencia del juzgador (como lo es el decidir si deben o no cancelarse las concesiones); sino que
además, pretenden imponer una limitación a la libertad de trabajo consagrada en el artículo 5°
constitucional; situación que no es dable determinar a través de una resolución judicial emitida en una
acción colectiva difusa, pues aunque el precepto constitucional permite que por determinación judicial
se vede el ejercicio de esa libertad, esa permisión está condicionada al ataque de los derechos de un
tercero, tercero que evidentemente debe estar plenamente identificado, a fin de que la autoridad
judicial pueda hacer la ponderación que en su caso conduzca a determinar si procede o no vedar el
ejercicio de esa libertad, pero ello no puede acontecer en una acción colectiva difusa, precisamente
porque los derechos e intereses que se pretenden tutelar son indivisibles y pertenecen a una
colectividad indeterminada.
168 Bajo esa lógica, debe decirse que por lo que hace al reclamó genérico consistente en la reparación
del daño, no pueden considerarse incumplidos los requisitos a que aluden las fracciones VIII del
artículo 587 y IV del artículo 588, ambos del Código Federal de Procedimientos Civiles, pues esa
prestación sí encuentra correspondencia o coincidencia con el objeto de la acción colectiva difusa
ejercitada y la afectación sufrida.
Se estima de esa manera, porque en el caso la parte quejosa instauró una acción colectiva difusa, y
esta acción de acuerdo lo dispuesto en los artículos 580, fracción I y 581, fracción I del Código Federal
de Procedimientos Civiles, sirve para tutelar derechos e interés difusos, es decir aquellos, de
naturaleza indivisible, cuya titularidad pertenece a una colectividad indeterminada; y su objeto radica
en reclamar del demandado la reparación del daño causado a la colectividad, consistente en restituir
las cosas al estado en que se encontraban antes de la afectación o en su defecto el cumplimiento
sustituto.
170, 171 Estos reclamos específicos que se hacen como parte de la reparación del daño, no pueden conducir
a considerar que con relación a la prestación identificada en el inciso e), no se satisfacen los requisitos
que aquí se analizan; pues como ya se mencionó, el reclamó genérico que se hace en ella, sí satisface
los requisitos mencionados.
En todo caso, deben analizarse de manera independiente las reclamaciones específicas que se hacen
para determinar si éstas tal y como lo exigen los requisitos mencionados, encuentran correspondencia
con la acción intentada y si hay o no coincidencia entre el objeto de la misma y la afectación sufrida.
Se llega a esa conclusión, pues no se debe perder de vista que el artículo 604 del Código Federal de
Procedimientos Civiles, es claro al establecer que en este tipo de acción, es decir la colectiva difusa,
la restitución puede consistir en la realización de una o más acciones, de manera que nada impide
que en la demanda se reclame la realización de diversas acciones como parte de la reparación del
daño, máxime que de lo dispuesto en el artículo 582, se desprende que para alcanzar el objeto de la
acción intentada, las pretensiones de la demanda pueden buscar sentencias declarativas,
constitutivas o de condena; de manera que si en forma genérica se reclama la reparación del daño, y
como parte de esa reparación se solicitan medidas específicas, en todo caso, deben analizarse de
manera concreta cada una de esas medidas, a fin de determinar si satisfacen o no los requisitos a
que aluden los artículos 587 y 588, fracciones VIII y IV, respectivamente.
ese precepto, no limita las prestaciones que pueden reclamarse, con tal de que éstas estén dirigidas
a concretar el objeto de la misma, es decir la reparación del daño.
Página
173, 174 Se afirma lo anterior, porque como se desprende de esos numerales, estas prestaciones se enfocan
a cuestiones médicas que se encuentran vinculadas con el derecho a la salud que pudo afectarse con
la contaminación a que hace referencia la demanda; por tanto, ese reclamó sí se vincula con el objeto
de la acción que es la reparación del daño (en este caso, el causado a la salud a raíz de la
contaminación del agua); y por ende, también existe relación entre el objeto y la afectación que se
dice sufrida.
Bajo esa lógica, si los artículos 587, fracción VIII y 588, fracción IV, del Código Federal de
Procedimientos Civiles, exigen como requisito de la demanda, el precisar las prestaciones
correspondientes a la acción intentada y que haya coincidencia entre el objeto de la acción y la
afectación sufrida, entonces el juzgador debe verificar que en la demanda se señalé con precisión
cuáles son las prestaciones que se reclaman, y que éstas busquen concretar el objeto de la acción,
que en el caso de la colectiva difusa, es la reparación del daño, entendido éste como la restitución de
las cosas al estado en que se encontraban antes de la afectación, pero atendiendo al principio pro
acción, no puede decidir en la certificación si las medidas que se piden como parte de la reparación
del daño, son o no las idóneas para ese fin, ya que de lo contrario se negaría a la colectividad actora
la posibilidad de probar el por qué considera que las prestaciones reclamadas, sí resultan adecuadas
o idóneas para lograr el objeto de la acción, que como ya se dijo, radica en restituir las cosas al estado
en que se encontraban antes de la afectación, máxime cuando como en el caso, se trata de una acción
colectiva difusa en defensa del medio ambiente, derivada de lo que se dice fue una contaminación al
agua de dos ríos.
184 En el caso, el objeto de la acción colectiva difusa es acorde con la reparación adecuada, en tanto que
al prever la reparación del daño a través de la restitución las cosas al estado en que se encontraban
antes de la afectación o en su caso, el cumplimiento sustituto, el cual conlleva al establecimiento de
una indemnización o una satisfacción, es claro que el objeto de la acción es acorde a la reparación
adecuada, de manera que si la prestación exigida en el inciso m) de la demanda, se aleja de la
reparación del daño o el cumplimiento sustituto, obviamente no podría prosperar, de ahí que como ya
se dijo, la certificación a que alude el artículo 590 del Código Federal de Procedimientos Civiles,
resulta adecuada por lo que hace a dicha prestación.
185, 186, 187 Bajo esa lógica, como ya se mencionó, por lo que se refiere a la prestación identificada en el inciso
m) de la demanda, no queda sino concluir que la certificación es adecuada; y que por ende, el
desechamiento de la demanda por lo que hace a esta prestación también lo es.
Atendiendo a lo anterior, la certificación a que alude el artículo 590 del propio ordenamiento, no es del
todo acertada; y por ende, el desechamiento de la demanda tampoco lo es.
Esto es así, pues si algunas de las prestaciones reclamadas en la demanda, encuentran concordancia
con el objeto la acción colectiva difusa intentada; y además, hay correspondencia entre éste y la
afectación que se estima sufrida con la contaminación del agua que da origen a la demanda, ello
bastaba para que el juzgador en lugar de proceder al desechamiento total de la misma, procediera a
su admisión, desechándola únicamente por lo que hace a las prestaciones incompatibles con la
acción.
En efecto, admitir la postura asumida por el juzgador de primera instancia, misma que fue avalada por
el tribunal de alzada, no sólo iría en contra del principio pro acción; y por ende, en contra del derecho
de acceso a la jurisdicción; sino que además, implicaría pasar por alto que en la exposición de motivos
de veintinueve de julio de dos mil diez, la cual dio origen a la reforma que eleva a rango constitucional
las acciones colectivas, se busca privilegiar el derecho de acceso a la jurisdicción a través de
procedimientos ágiles, flexibles y sencillos, carentes de restricciones procesales innecesarias; y que
bajo esa lógica, el juzgador está obligado a cuidar que la interpretación de las normas que rigen el
procedimiento, sean compatibles con el espíritu de la reforma constitucional, misma que de acuerdo
a lo indicado por el constituyente, busca maximizar el derecho de acceso a la jurisdicción, acabando
con un sistema que se calificó de perverso, por permitir que las violaciones a los derechos sean
simplemente toleradas, cuando que por el contrario, su protección debe ser vigorosa y efectiva.
Sobre todo cuando en la propia exposición de motivos se indicó que los juzgadores tendrían la misión
de cuidar que los principios de interpretación para las acciones y los procedimientos colectivos fueran
compatibles con el espíritu de éstos y con la protección de los derechos e intereses de los individuos,
grupos o colectividades; y que además, esa intención se ve reflejada en el en artículo 583 del Código
Federal de Procedimientos Civiles, al disponer lo siguiente:
“Artículo 583.- El juez interpretará las normas y los hechos de forma compatible con los principios y
21
objetivos de los procedimientos colectivos, en aras de proteger y tutelar el interés general y los
derechos e intereses colectivos.”
Página
Lo anterior se robustece si se tiene en consideración, que los órganos encargados de administrar
justicia deben asumir una actitud de facilitadores del acceso a la jurisdicción.
Sobre este aspecto la CIDH al resolver el caso Myrna Mack Chang Vs. Guatemala (sentencia de
veinticinco de noviembre de 2003 (Fondo, Reparaciones y Costas, párrafo 211), señaló que los jueces
como rectores del proceso tienen el deber de dirigir y encausar el procedimiento judicial con la finalidad
de no sacrificar la justicia y el debido proceso en pro del formalismo y la impunidad.
188 En efecto el principio pro actione está condicionado a no entorpecer ni obstruir el derecho a la tutela
efectiva, por lo que ante la duda, los requisitos y presupuestos procesales siempre deberán ser
interpretados en el sentido más favorable a la plena efectividad de ese derecho humano, esto es, en
caso de duda entre abrir o no un juicio en defensa de un derecho humano por aplicación de ese
principio, se debe elegir la respuesta afirmativa
189, 190 Lo anterior se considera así pues en la referida exposición de motivos se dijo que predomina una
ideología procesalista que impide la resolución de fondo de los conflictos plateados ante los tribunales.
Se observó que en la impartición de justicia en todos los niveles de gobierno, las leyes se aplican de
forma tajante o irrestricta y no se valora si en la situación particular cabe una ponderación del derecho
sustantivo por encima del derecho adjetivo para resolver la controversia.
Por lo anterior el constituyente fue categórico en señalar que la referida reforma constitucional exige
un cambio de mentalidad en las autoridades jurisdiccionales para que no se opte por la resolución
más sencilla o rápida, sino por aquella que decida efectivamente la controversia y la aplicación el
derecho sustantivo.
Atendiendo a lo anterior, esta Primera Sala estima que si como se analizó, alguna o algunas de las
prestaciones reclamadas, encuentran correspondencia con el objeto de la acción intentada y algunas
de esas prestaciones encuentra relación con la afectación sufrida, ello bastaba para que el juzgador
procediera a la admisión de la demanda, al menos por lo que hace a dichas prestaciones, pues no es
en la etapa correspondiente a la certificación donde se debe determinar si esas prestaciones van o
prosperar o no, ni tampoco puede determinar si las prestaciones reclamadas con el propósito de lograr
la reparación del daño, serán o no adecuadas para ese fin, ya que ello debe determinarlo en la
sentencia, máxime cuando como en el caso, la demanda se sustenta en una contaminación al agua,
porque por un lado, como ya se mencionó, una contaminación ambiental como la que sustenta la
demanda, sí puede llegar a tener trascendencia en el derecho a la salud, de manera que sólo hasta
el momento de emitir la sentencia respectiva, y a la luz de las pruebas aportadas por las partes, o
incluso recabadas de oficio por el juzgador (artículo 598), es cuando se puede válidamente determinar
si la contaminación en que se sustenta la demanda afectó o no el derecho a la salud de la colectividad
actora; si esa afectación ya se manifestó o puede manifestarse con posterioridad; y en su caso, cuáles
serían las medidas necesarias para restituir la salud afectada, por tanto, es hasta ese momento en
que se puede o no determinar si las prestaciones reclamadas son o no idóneas para lograr la
restitución de las cosas al estado en que se encontraban antes de la afectación, que es precisamente
el objeto de la acción colectiva difusa intentada.
191 admita parcialmente la demanda, resolviendo con plenitud de jurisdicción lo que conforme a derecho
proceda.
La principal anotación que hay que hacer de la sentencia dictada es que en el juicio que
resuelve la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la parte actora DEFENSA
COLECTIVA, ASOCIACIÓN CIVIL, demanda, entre otras prestaciones, en resumen:
Foja 166-167
Bajo esa lógica, es evidente que las prestaciones reclamadas en esos incisos, no tienen ninguna vinculación con la
reparación del daño, pues a través de ellas, se solicitan declaraciones sobre incumplimientos, que impacten de tal manera,
que incidan no sólo en la revocación de concesiones, sino en prohibiciones para desempeñar cualquier labor, oficio u
ocupación que pueda impactar en el medio ambiente, peticiones que evidentemente van mucho más allá de la reparación
del daño que se busca a través del ejercicio de un acción colectiva difusa, pues a través de esas prestaciones se persigue
castigar y sancionar a la parte demandada, a través de peticiones que no sólo escapan a la competencia del juzgador
(como lo es el decidir si deben o no cancelarse las concesiones); sino que además, pretenden imponer una limitación a la
libertad de trabajo consagrada en el artículo 5° constitucional; situación que no es dable determinar a través de una
resolución judicial emitida en una acción colectiva difusa, pues aunque el precepto constitucional permite que por
determinación judicial se vede el ejercicio de esa libertad, esa permisión está condicionada al ataque de los derechos de
un tercero, tercero que evidentemente debe estar plenamente identificado, a fin de que la autoridad judicial pueda hacer
la ponderación que en su caso conduzca a determinar si procede o no vedar el ejercicio de esa libertad, pero ello no puede
acontecer en una acción colectiva difusa, precisamente porque los derechos e intereses que se pretenden tutelar son
indivisibles y pertenecen a una colectividad indeterminada.
Foja 168
Bajo esa lógica, debe decirse que por lo que hace al reclamó genérico consistente en la reparación del daño, no pueden
considerarse incumplidos los requisitos a que aluden las fracciones VIII del artículo 587 y IV del artículo 588, ambos del
Código Federal de Procedimientos Civiles, pues esa prestación sí encuentra correspondencia o coincidencia con el
objeto de la acción colectiva difusa ejercitada y la afectación sufrida.
Foja 171
Considerar lo contrario, implicaría limitar excesivamente el derecho a la jurisdicción, pues como ya se mencionó, si bien
es verdad que el artículo 581, fracción I, señala que el objeto de la acción colectiva difusa radica en restituir las cosas al
estado que guardaban antes de la afectación, también lo es que ese precepto, no limita las prestaciones que pueden
reclamarse, con tal de que éstas estén dirigidas a concretar el objeto de la misma, es decir la reparación del daño.
23
Fojas 186
Página
En efecto, admitir la postura asumida por el juzgador de primera instancia, misma que fue avalada por el tribunal de alzada,
no sólo iría en contra del principio pro acción; y por ende, en contra del derecho de acceso a la jurisdicción; sino que
además, implicaría pasar por alto que en la exposición de motivos de veintinueve de julio de dos mil diez, la cual dio origen
a la reforma que eleva a rango constitucional las acciones colectivas, se busca privilegiar el derecho de acceso a la
jurisdicción a través de procedimientos ágiles, flexibles y sencillos, carentes de restricciones procesales innecesarias; y
que bajo esa lógica, el juzgador está obligado a cuidar que la interpretación de las normas que rigen el procedimiento,
sean compatibles con el espíritu de la reforma constitucional, misma que de acuerdo a lo indicado por el constituyente,
busca maximizar el derecho de acceso a la jurisdicción, acabando con un sistema que se calificó de perverso, por permitir
que las violaciones a los derechos sean simplemente toleradas, cuando que por el contrario, su protección debe ser
vigorosa y efectiva.
Foja 188
En efecto el principio pro actione está condicionado a no entorpecer ni obstruir el derecho a la tutela efectiva, por lo que
ante la duda, los requisitos y presupuestos procesales siempre deberán ser interpretados en el sentido más favorable a la
plena efectividad de ese derecho humano, esto es, en caso de duda entre abrir o no un juicio en defensa de un derecho
humano por aplicación de ese principio, se debe elegir la respuesta afirmativa
Foja 190
Atendiendo a lo anterior, esta Primera Sala estima que si como se analizó, alguna o algunas de las prestaciones
reclamadas, encuentran correspondencia con el objeto de la acción intentada y algunas de esas prestaciones encuentra
relación con la afectación sufrida, ello bastaba para que el juzgador procediera a la admisión de la demanda, al menos por
lo que hace a dichas prestaciones, pues no es en la etapa correspondiente a la certificación donde se debe determinar si
esas prestaciones van o prosperar o no, ni tampoco puede determinar si las prestaciones reclamadas con el propósito de
lograr la reparación del daño, serán o no adecuadas para ese fin, ya que ello debe determinarlo en la sentencia, máxime
cuando como en el caso, la demanda se sustenta en una contaminación al agua, porque por un lado, como ya se mencionó,
una contaminación ambiental como la que sustenta la demanda, sí puede llegar a tener trascendencia en el derecho a la
salud, de manera que sólo hasta el momento de emitir la sentencia respectiva, y a la luz de las pruebas aportadas por las
partes, o incluso recabadas de oficio por el juzgador (artículo 598), es cuando se puede válidamente determinar si la
contaminación en que se sustenta la demanda afectó o no el derecho a la salud de la colectividad actora; si esa afectación
ya se manifestó o puede manifestarse con posterioridad; y en su caso, cuáles serían las medidas necesarias para restituir
la salud afectada, por tanto, es hasta ese momento en que se puede o no determinar si las prestaciones reclamadas son
o no idóneas para lograr la restitución de las cosas al estado en que se encontraban antes de la afectación, que es
precisamente el objeto de la acción colectiva difusa intentada.
Por tanto, los jueces deben elaborar estándares y guías que les auxilien en su
labor, pues los paradigmas procesales actuales, en muchos aspectos, serán
24
Al hacer esa aseveración, con un criterio rigorista que dista mucho de ser flexible,
25
que es como se pretende que sean los procedimientos relativos a las acciones
Página
colectivas,
Porque la acción ejercitada, aun y cuando se encuentre regulada en el marco
del Código Federal de Procedimientos Civiles, debe carecer de los rígidos
tecnicismos propios de la materia civil;
Además, en cualquier caso, y teniendo en cuenta que el procedimiento de las
acciones colectivas debe ser flexible y debe maximizar el acceso a la justicia,
atendiendo a lo dispuesto en el penúltimo y último párrafos del artículo 587, en
vinculación con lo establecido en el numeral 583 del Código Federal de
Procedimientos Civiles
Les reiteramos nuestra petición para que, en atención a dicho principio, resuelvan
en forma integral la litis, y no solo para quien suscribe, sino que emitan los criterios
torales, claros, valientes y progresistas que se debe tomar en cuenta al juzgar temas
relacionados y evitar los abusos de grandes corporaciones o entidades frente a la
población me permito transcribir otra vez la parte final de la sentencia primaria sobr3e
el objeto de las acciones colectivas:
Además, conforme a los dispuesto por el artículo 582 del Código Federal
de Procedimientos Civiles, la interpretación de las normas legales citada
es la más compatible con los principios y objetivos del procedimiento
colectivo, en tanto que la defensa de los derechos e intereses individuales
que se hacen vales en la demanda desechada, no encontraría una
solución adecuada a través de acciones individuales en un procedimiento
tradicional o común, sino mediante la acción colectiva ejercida.
Artículo 619.- Por ser la representación común de interés público, las asociaciones
civiles a que se refiere la fracción II del artículo 585, deberán registrarse ante el Consejo
de la Judicatura Federal.
Es necesario destacar los alcances del permiso que otorga el Consejo de la Judicatura
Federal a las asociaciones civiles para la defensa de los intereses de la colectividad,
inserto las porciones normativas que nos interesan de dos acuerdos relevante del
Consejo de la Judicatura Federal, a saber:
ACUERDO General del Pleno del Consejo de la Judicatura Federal, que reforma y
deroga diversas disposiciones del similar que reglamenta la organización y
funcionamiento del propio Consejo, en cumplimiento a la resolución de doce de marzo
de dos mil trece, dictada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el expediente
4/2012.
CUARTO.- Mediante Decreto de trece de julio de dos mil diez, publicado en el Diario
Oficial de la Federación el veintinueve de julio siguiente, se adicionó el artículo 17 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, incorporándose un nuevo
párrafo, el tercero, relativo a las acciones colectivas.
A fin de regular las acciones colectivas, mediante Decreto publicado el 30 de agosto de
dos mil once, en el mismo medio oficial se reformó, entre otros cuerpos normativos, el
Código Federal de Procedimientos Civiles.
Las adiciones al citado Código establecen que la defensa de los derechos e intereses
colectivos será ejercida ante los tribunales de la Federación, precisando que las
acciones colectivas tutelan derechos e intereses difusos o colectivos e individuales de
incidencia colectiva.
De conformidad con los artículos cuarto y quinto transitorios del Decreto de reformas
legales mencionadas, el Consejo de la Judicatura Federal, en el ámbito de las
28
atribuciones que le fueron conferidas, dictó las medidas necesarias para lograr el
Página
efectivo cumplimiento del referido Decreto, y creó el Registro dentro de los noventa días
siguientes a la entrada en vigor del Decreto.
Con fecha veintiuno de marzo de dos mil doce, el Pleno del Consejo de la Judicatura
Federal aprobó por unanimidad de votos el Acuerdo General del Pleno del Consejo de
la Judicatura Federal, que adiciona el diverso Acuerdo General que reglamenta la
organización y funcionamiento del propio Consejo, por el que se crea y regula el
registro de las asociaciones civiles a que se refiere el artículo 585, fracción II, en
relación con el 619, del Código Federal de Procedimientos Civiles, mismo que
entró en vigor el 30 de mayo de dicho año, fecha de su publicación en el Diario
Oficial de la Federación;
ACUERDO
ARTÍCULO ÚNICO. Se reforman los artículos 187; 194, párrafo primero; así como 205,
fracción IV; y se deroga el artículo 196, del Acuerdo General del Pleno del Consejo de
la Judicatura Federal, que reglamenta la organización y funcionamiento del propio
Consejo, para quedar como sigue:
"Artículo 187. El Registro a que se refiere el artículo 619 del Código Federal de
Procedimientos Civiles, tiene como finalidad la inscripción de las asociaciones
civiles previstas en el diverso numeral 585, fracción III, del mismo ordenamiento.
Artículo 194. Las asociaciones civiles que podrán solicitar su inscripción en el Registro
son aquellas sin fines de lucro, legalmente constituidas, cuyo objeto social incluya la
promoción o defensa de los derechos e intereses en materia de relaciones de consumo
de bienes o servicios, públicos o privados y medio ambiente, independientemente del
número de sus miembros, que tengan al menos un año de haberse constituido y
que acrediten haber realizado actividades inherentes al cumplimiento de su objeto
social.
...
4
Artículo 581.- Para los efectos de este Código, los derechos citados en el artículo anterior se ejercerán a través de las
siguientes acciones colectivas, que se clasificarán en:
II. Acción colectiva en sentido estricto: Es aquélla de naturaleza indivisible que se ejerce para tutelar los derechos
e intereses colectivos, cuyo titular es una colectividad determinada o determinable con base en circunstancias comunes, cuyo
29
objeto es reclamar judicialmente del demandado, la reparación del daño causado consistente en la realización de una o más
acciones o abstenerse de realizarlas, así como a cubrir los daños en forma individual a los miembros del grupo y que deriva
de un vínculo jurídico común existente por mandato de ley entre la colectividad y el demandado.
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Lo anterior visible en la siguiente liga de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y
Protección Civil @SGIRPC_CDMX5
Lo anterior ya fue atendido al cumplir con los apartados II y III los cuales solicito se
tengan por reproducidos como sí a la letra se insertaren en obvio de repeticiones
ociosas.
5 https://twitter.com/SGIRPC_CDMX/status/1389541126445621248/photo/2
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PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN COLECTIVA EN SENTIDO ESTRICTO:
El Código Federal de Procedimiento Civiles define la acción colectiva en sentido estricto
de la siguiente manera:
Artículo 581.- Para los efectos de este Código, los derechos citados en el
artículo anterior se ejercerán a través de las siguientes acciones colectivas,
que se clasificarán en:
I. Acción difusa: Es aquélla de naturaleza indivisible que se ejerce
para tutelar los derechos e intereses difusos, cuyo titular es una colectividad
indeterminada, que tiene por objeto reclamar judicialmente del demandado la
reparación del daño causado a la colectividad, consistente en la restitución de
las cosas al estado que guardaren antes de la afectación, o en su caso al
cumplimiento sustituto de acuerdo a la afectación de los derechos o intereses
de la colectividad, sin que necesariamente exista vínculo jurídico alguno entre
dicha colectividad y el demandado.
II. Acción colectiva en sentido estricto: Es aquélla de naturaleza
indivisible que se ejerce para tutelar los derechos e intereses colectivos, cuyo
titular es una colectividad determinada o determinable con base en
circunstancias comunes, cuyo objeto es reclamar judicialmente del
demandado, la reparación del daño causado consistente en la realización de
una o más acciones o abstenerse de realizarlas, así como a cubrir los daños
en forma individual a los miembros del grupo y que deriva de un vínculo
jurídico común existente por mandato de ley entre la colectividad y el
demandado.
III. Acción individual homogénea: Es aquélla de naturaleza divisible,
que se ejerce para tutelar derechos e intereses individuales de incidencia
colectiva, cuyos titulares son los individuos agrupados con base en
circunstancias comunes, cuyo objeto es reclamar judicialmente de un tercero
el cumplimiento forzoso de un contrato o su rescisión con sus consecuencias
y efectos según la legislación aplicable.
Por otra parte, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación al resolver
el amparo Directo 28/2013 (específicamente en sus parágrafos 62, 64 y 68) se
pronunció al respecto sobre los elementos que deben contener este tipo de acciones
colectivas en sentido estricto, a detalle:
AMPARO DIRECTO 28/2013
QUEJOSOS: **********
federal la obligación de expedir las leyes que regulen las acciones colectivas y
estableció que los juzgadores federales estarán a cargo de los procedimientos y
Página
mecanismos respectivos.
52. El texto del artículo 17 de la Constitución establece lo siguiente:
a) Nuestro sistema jurídico, en especial el procesal, fue diseñado desde una visión
liberal e individualista que permite la titularidad de derechos y la protección de
los mismos mediante mecanismos que privilegian la actuación individual sobre
la colectiva. El procedimiento civil ordinario no cumple con las características
necesarias para satisfacer las exigencias que presentan la tutela de derechos
e intereses colectivos.
56. Los objetivos de las acciones colectivas son: a) proporcionar economía procesal; b)
garantizar el acceso a la justicia y brindar seguridad jurídica, y c) generar en la sociedad
un efecto disuasivo ante abusos.
referido libro.
58. En ese sentido, atendiendo a la finalidad del presente estudio debemos destacar el
contenido de algunos de los preceptos antes referidos.
59. El artículo 580 del Código Federal de Procedimientos Civiles establece que las acciones
colectivas son procedentes para tutelar derechos e intereses difusos y colectivos, y
derechos e intereses individuales de incidencia colectiva. La primera especie,
conformada por los derechos e intereses difusos y colectivos, se refieren a aquéllos
de naturaleza indivisible cuya titularidad corresponde a una colectividad de personas,
indeterminada o determinable, relacionadas por circunstancias de hecho o de derecho
comunes; y la segunda especie, tiene que ver con los derechos e intereses individuales
de incidencia colectiva, como son aquéllos de naturaleza divisible cuya titularidad
corresponde a los individuos integrantes de una colectividad de personas determinable,
relacionadas por circunstancias de derecho.
60. Asimismo, en el artículo 581 se establecen tres tipos de acciones colectivas que pueden
ser empleadas para proteger los intereses y derechos colectivos: a) la acción difusa; b)
la acción colectiva en sentido estricto, y c) la acción individual homogénea.
61. La acción difusa, es aquélla de naturaleza indivisible que se ejerce para tutelar los
derechos e intereses difusos, cuyo titular es una colectividad indeterminada, que tiene
por objeto reclamar judicialmente del demandado la reparación del daño causado a la
colectividad, consistente en la restitución de las cosas al estado que guardaren antes de
la afectación, o en su caso al cumplimiento sustituto de acuerdo a la afectación de los
derechos o intereses de la colectividad, sin que necesariamente exista vínculo jurídico
alguno entre dicha colectividad y el demandado.
63. La acción individual homogénea, es aquélla de naturaleza divisible, que se ejerce para
tutelar derechos e intereses individuales de incidencia colectiva, cuyos titulares son los
individuos agrupados con base en circunstancias comunes. Su objeto es reclamar
judicialmente de un tercero el cumplimiento forzoso de un contrato o su rescisión con sus
consecuencias y efectos según la legislación aplicable.
64. Las principales diferencias entre los 3 tipos de acciones se reflejan en el siguiente cuadro:
67. Los derechos individuales homogéneos se distinguen de los difusos y colectivos en dos
aspectos: su naturaleza y los efectos derivados de su protección6.
68. Los derechos difusos y colectivos en sentido estricto trascienden la esfera subjetiva y se
proyectan en un grupo o clase. La titularidad es indivisible y el derecho le corresponde a
la colectividad. Al contrario, los derechos individuales homogéneos son auténticos
derechos individuales. Éstos pueden ser objeto de las acciones colectivas porque a)
existen de manera plural; b) tienen un origen fáctico común, y c) su contenido sustantivo
es homogéneo7. Además, el defender este tipo de derechos mediante una acción
colectiva se justifica cuando no sea más eficaz tratar la situación desde la perspectiva del
litisconsorcio activo o del mero ejercicio de acciones individuales.
69. En cuanto a los efectos del litigio, la solución que se determina en las acciones difusas y
en las colectivas en sentido estricto es la misma para todos debido a la indivisibilidad del
objeto de la acción. Consecuentemente, los límites sustantivos de la cosa juzgada se
extienden incluso a quienes no han sido parte del proceso. En cambio, en las acciones
individuales homogéneas la solución no es igual para todos los miembros de la
colectividad debido a su carácter divisible y esencialmente individual.
En el caso que nos ocupa, se cumplen cada uno los numerales antes citados, lo cual
es necesario explicar en los siguientes términos:
6
Cfr. FERRER MAC-GREGOR, E., 2004: Juicio de amparo e interés legítimo: la tutela de los derechos
37
7
Ídem. página 15.
prudente destacar que la reparación individual no será la misma para todos
los miembros de la colectividad afectada dada las circunstancias
particulares y la afectación de diversos derechos sustantivos) que
corresponde a las víctimas del evento que en evidencia les causo un daño.
difusos necesariamente
exista vínculo cumplimiento
jurídico con la sustituto
colectividad
Colectiva en Derechos e Colectividad La reparación del Cubrir los daños
estricto sentido intereses determinada en daño común y los en forma
colectivos circunstancias individuales de los individual a los
comunes miembros de la miembros del
colectividad grupo. Los
Individual Derechos e Individuos Reclamar de un miembros de la
homogénea intereses agrupados con tercero el colectividad
individuales de base en cumplimiento forzoso podrán promover
incidencia circunstancias de un contrato o su el incidente de
colectiva comunes. rescisión con sus liquidación en el
consecuencias y que deberán
efectos según la probar el daño
legislación aplicable sufrido
Tampoco debe pasar desapercibido que la fracción II del artículo 581 del Código
Federal de Procedimientos Civiles refiere que el objeto de la acción colectiva en sentido
estricto radica en reparar el daño de la colectividad de forma común e individual,
también lo es que ese precepto, no limita las prestaciones que pueden reclamarse, con
tal de que éstas estén dirigidas a concretar el objeto de la misma, es decir la reparación
del daño, argumento que debe ser retomado de la sentencia que resuelve el AMPARO
DIRECTO 36/2017, RELACIONADO CON EL AMPARO DIRECTO 37/2017,
QUEJOSA: DEFENSA COLECTIVA, ASOCIACIÓN CIVIL A TRAVÉS DE SU
APODERADO VÍCTOR HUGO LÓPEZ LAMADRID, PONENTE JORGE MARUO
PARDO REBOLLEDO, emitida por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación, tal cual se expuso en la sentencia en las porciones que ya se transcribieron-
CAPITULO IV
De los Porteadores y Alquiladores
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Artículo 2646.- El contrato por el cual alguno se obliga a transportar, bajo su
inmediata dirección o la de sus dependientes, por tierra, por agua o por el
aire, a personas, animales, mercaderías o cualesquiera otros objetos, si no
constituye un contrato mercantil, se regirá por las reglas siguientes.
Por tanto, el vínculo jurídico por mandato de ley se encuentra debidamente acreditado.
Es decir que la palabra indemnizar se refiere a dejar sin daño o libre de daño, y en el
caso que se plantea las cosas no pueden volver al estado en el que se encontraban
previo al siniestro sino que es necesario indemnizar, dejar sin daño a los afectados y
esto tiene estricta relación con la reparación integral del daño, la reparación integral
del daño es el concepto que integra los elementos necesarios para “reparar el
daño” “dejar sin daño a los afectados” , y este concepto se relaciona con el
artículo 63.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos 9, adoptada
en la ciudad de San José de Costa Rica, el 22 de noviembre de 1969..- Publicada
el Jueves 7 de Mayo de 1981, artículos 1913, 1915, 1916, 1917, 1918, 1924, 1931,
del Código Civil Federal, así como en el criterio cuyo rubro reza “REPARACIÓN
INTEGRAL DEL DAÑO O JUSTA INDEMNIZACIÓN. ESTE DERECHO
FUNDAMENTAL QUEDÓ INCORPORADO AL ORDENAMIENTO JURÍDICO
MEXICANO A RAÍZ DE LA REFORMA AL ARTÍCULO 1o. CONSTITUCIONAL,
PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 10 DE JUNIO DE
2011”10, así como la diversidad de tratados, sentencias, artículos y
jurisprudencias que se citan a lo largo del presente.
8
https://dle.rae.es/indemnizar
9
Artículo 63.- 1. Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en esta
Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o
libertad conculcados. Dispondrá, asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las
consecuencias de la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos
y el pago de una justa indemnización a la parte lesionada.
10
REPARACIÓN INTEGRAL DEL DAÑO O JUSTA INDEMNIZACIÓN. ESTE DERECHO FUNDAMENTAL QUEDÓ
INCORPORADO AL ORDENAMIENTO JURÍDICO MEXICANO A RAÍZ DE LA REFORMA AL ARTÍCULO 1o.
CONSTITUCIONAL, PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 10 DE JUNIO DE 2011.El decreto de
reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, publicado en el medio de difusión y fecha referidos,
tuvo por objeto ampliar el marco jurídico en la protección de los derechos fundamentales y obligar a los órganos del Estado
a promoverlos, respetarlos, protegerlos y garantizarlos, para lo cual se consideró necesario incorporar a la Ley
Fundamental los derechos humanos previstos en los tratados internacionales celebrados por el Estado Mexicano, a fin de
que trasciendan y se garantice su aplicación a todo el ordenamiento jurídico, no sólo como normas secundarias, pues de
los procesos legislativos correspondientes se advierte que la intención del Constituyente Permanente es garantizar que se
apliquen eficaz y directamente, así como incorporar expresamente en el artículo 1o. constitucional el principio de
interpretación de los tratados internacionales en materia de derechos humanos, conocido como pro personae o pro homine,
que indica que éstos deben interpretarse favoreciendo la protección más amplia posible y limitando del modo más estricto
posible las normas que los menoscaban. De conformidad con lo anterior, corresponde al Estado tomar las medidas
necesarias para asegurar que cualquier violación a los derechos fundamentales de los gobernados, ocasionada por
particulares, sea reparada por el causante del daño. Así, a partir de la entrada en vigor de la citada reforma constitucional,
42
el derecho a una reparación integral o justa indemnización ante la vulneración de derechos fundamentales, previsto en el
artículo 63 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, puede considerarse incorporado al ordenamiento
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jurídico mexicano. 1a. CXCIV/2012 (10a.) Amparo directo en revisión 1068/2011. Gastón Ramiro Ortiz Martínez. 19 de
octubre de 2011. Cinco votos. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.
Ahora bien, ¿Cuáles son los conceptos que deben integrar la reparación integral
del daño?
Lo anterior es resuelto por el siguiente criterio:
DERECHOS A UNA REPARACIÓN INTEGRAL Y A UNA JUSTA INDEMNIZACIÓN POR PARTE DEL
ESTADO. SU RELACIÓN Y ALCANCE. El artículo 113, párrafo segundo, de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos reconoce el derecho de los particulares a obtener una indemnización
en caso de que el Estado, a través de sus servidores públicos, cause un daño en su patrimonio, sea
en el plano material o inmaterial, con motivo de su actividad administrativa irregular, mientras el párrafo
tercero del artículo 1o. constitucional prevé la obligación del Estado de reparar las violaciones a los
derechos humanos. De acuerdo con lo anterior, quienes prueben haber sido dañados en su patrimonio
con motivo de una actividad administrativa irregular del Estado, deberán acreditar que ésta constituyó
una violación a un derecho o a diversos derechos humanos contenidos en la Constitución o en los
tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, para poder ser "reparadas
integralmente" y, en algunos casos, el estándar de "reparación integral" podrá alcanzarse
mediante una indemnización, como lo prevé el párrafo segundo del artículo 113 constitucional,
siempre y cuando no pueda restablecerse a la persona afectada a la situación en que se
encontraba antes de la violación y la medida indemnizatoria o compensatoria sea suficiente para
considerarla "justa". Sin embargo, si en otros casos la indemnización fuera insuficiente para
alcanzar el estándar de "reparación integral", las autoridades competentes deben garantizar
medidas adicionales – como lo son las de satisfacción, rehabilitación o las garantías de no
repetición – que sean necesarias y suficientes para reparar integralmente a las personas por los
daños materiales o inmateriales derivados de la actividad administrativa irregular del Estado
que impliquen violaciones a sus derechos humanos, en términos del párrafo tercero del artículo
1o. constitucional. 1a. CLXII/2014 (10a.)
Amparo directo en revisión 2131/2013. 22 de noviembre de 2013. Cinco votos de los Ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Alejandra Daniela Spitalier Peña.
Instancia: Primera Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Epoca. Libro XII, Septiembre
de 2012. Pág. 522. Tesis Aislada.
43
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Esta tesis se publicó el viernes 25 de abril de 2014 a las 9:32 horas en el Semanario Judicial de la
Federación.
Instancia: Primera Sala. Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Epoca. Libro
5, Abril de 2014. Pág. 802. Tesis Aislada.
a una persona a quien se le amputó una extremidad inferior como consecuencia de la actividad
administrativa irregular del Estado, no debe considerarse únicamente una vulneración genérica del
derecho a la salud, sino que, conforme al principio de interdependencia y a fin de lograr una reparación
integral del daño, debe tomarse en consideración el cúmulo de derechos transgredidos por la actividad
administrativa irregular del Estado, como son los relativos a la: vida, integridad personal, salud (física
y mental), dignidad y, en su caso, los especiales que corresponden a un adulto mayor, producto de su
vulnerabilidad y la grave afectación a la libertad física del particular afectado. CUARTO TRIBUNAL
COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL PRIMER CIRCUITO. I.4o.A.134 A (10a.) Amparo
directo 418/2017. Inés Georgina Lledias Velasco y otra. 28 de junio de 2018. Unanimidad de votos.
Ponente: Jean Claude Tron Petit. Secretaria: Aideé Pineda Núñez. Esta tesis se publicó el viernes 19
de octubre de 2018 a las 10:29 horas en el Semanario Judicial de la Federación. Instancia: Tribunales
Colegiados de Circuito. Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Epoca. Libro
59, Octubre de 2018 (3 Tomos). Pág. 2482. Tesis Aislada.
Criterio jurídico: La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que la
Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas debe otorgar a las víctimas, como medidas
complementarias: la investigación de los hechos; la restitución de sus derechos, bienes y libertades
vulnerados; las medidas para su rehabilitación física, psicológica o social; las medidas de satisfacción,
mediante la realización de actos en beneficio de las víctimas; las garantías de no repetición de la
violación; y una indemnización compensatoria por daño material e inmaterial.
Justificación: Ello, pues resultaría imposible y, por tanto, nugatoria, la reparación integral de las víctimas
si la autoridad resolutora sólo se ocupara de prescribir actos o medidas tendentes a cumplir con sólo
una o algunas de esas medidas, lo que se traduciría en una reparación del daño parcial o incompleta.
PRIMERA SALA 1a. XXXV/2020 (10a.) Amparo en revisión 1133/2019. 1 de julio de 2020. Mayoría de
cuatro votos de los Ministros Norma Lucía Piña Hernández, quien reservó su derecho para formular
voto concurrente, Ana Margarita Ríos Farjat, quien reservó su derecho para formular voto concurrente,
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, quien formuló voto concurrente, y Juan Luis González Alcántara
Carrancá, quien reservó su derecho para formular voto concurrente. Disidente: Jorge Mario Pardo
Rebolledo, quien reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Juan Luis González
Alcántara Carrancá. Secretarios: Pablo Francisco Muñoz Díaz y Fernando Sosa Pastrana. Esta tesis
se publicó el viernes 09 de octubre de 2020 a las 10:19 horas en el Semanario Judicial de la Federación.
Instancia: Primera Sala. Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Epoca.
Libro 79, Octubre de 2020 (3 Tomos). Pág. 283. Tesis Aislada.
11
Artículo 582.- La acción colectiva podrá tener por objeto pretensiones declarativas, constitutivas o de condena.
VIII-A.- Que la sentencia materia del presente juicio contenga las siguientes:
DECLARACIONES
Se declare nulo cualquier convenio que se celebre entre la entidad demandada o sus
representantes y una o mas víctimas que sean contrarios al derecho humano de
reparación integral del daño, pues la entidad demandada pude abusar de las
condiciones de vulnerabilidad y condición asimétrica de las víctimas y ofertar bienes o
servicios a manera de compensación e indemnización que no respeten los parámetros
del derecho humano a la reparación integral del daño, y la revisión de los convenios
corresponde estrictamente a esta autoridad atendiendo al contenido del artículo 595 del
CFPC12
PRETENCIONES
12
Artículo 595.- Realizada la notificación a que se refiere el segundo párrafo del artículo 591 de este Código, el juez señalará
de inmediato fecha y hora para la celebración de la audiencia previa y de conciliación, la cual se llevará a cabo dentro de los
diez días siguientes.
En la audiencia el juez personalmente propondrá soluciones al litigio y exhortará a las partes a solucionarlo,
pudiendo auxiliarse de los expertos que considere idóneos.
La acción colectiva podrá ser resuelta por convenio judicial entre las partes en cualquier momento del proceso
hasta antes de que cause estado.
Si las partes alcanzaren un convenio total o parcial, el juez de oficio revisará que proceda legalmente y
que los intereses de la colectividad de que se trate estén debidamente protegidos.
Previa vista por diez días a los órganos y organismos a que se refiere la fracción I del artículo 585 de este Código
y al Procurador General de la República, y una vez escuchadas las manifestaciones de los miembros de la colectividad, si
46
las hubiere, el juez podrá aprobar el convenio elevándolo a la categoría de cosa juzgada.
Página
relata en el APÉNDICE TRES Y CUATRO de la presenten
demanda, en este orden de ideas la condena de cuenta deberá
tratarse de un porcentaje del capital contable de la demandada,
que sugerimos no debería ser menor al 1% del capital contable
de la demandada (capital que se cita en el apéndice de cuenta)
que correspondería a la cantidad de $ 21´195´000,000.00
(Veintiún mil ciento noventa y cinco millones de pesos 00/100
M.N), suma que deberá repartirse entre las víctimas que integran
la colectividad después de evaluar los elementos que impactan en
la cuantificación de este rubro (gravedad del daño, conducta del
responsable y capacidad económica del causante).
1. Disculpas Públicas:
2. Publicación de la sentencia:
1. Atención psicológica
v. Garantías de no repetición:
1. Medidas de Revisión
hecho forma parte de la cultura normal de un sector de la sociedad y pueda ser considerado
como notorio por el juzgador y, consecuentemente, valorado en una decisión judicial, por
tratarse de un dato u opinión común indiscutible, no por el número de personas que
conocen ese hecho, sino por la notoriedad, accesibilidad, aceptación e imparcialidad
de este conocimiento. Por tanto, el contenido de una página de Internet que refleja
hechos propios de una de las partes en cualquier juicio, puede ser tomado como
prueba plena, a menos que haya una en contrario que no fue creada por orden del
interesado, ya que se le reputará autor y podrá perjudicarle lo que ofrezca en sus
términos. TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER
CIRCUITO.I.3o.C.35 K (10a.) Amparo en revisión 365/2012.- Mardygras, S.A. de C.V.- 7 de
diciembre de 2012.- Unanimidad de votos.- Ponente: Neófito López Ramos.- Secretaria: Ana
Lilia Osorno Arroyo.Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Fuente: Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, Décima Epoca. Libro XXVI, Noviembre de 2013. Pág. 1373.
Tesis Aislada.
HECHOS
Primero.- El organismo descentralizado organismo público descentralizado “Sistema
de Transporte Colectivo”, se crea para para construir, operar y explotar un tren rápido
con recorrido subterráneo y superficial, para el transporte colectivo en el Distrito Federal
y su última reforma el 13 de Julio de 1992, según su manual adminstrativo publicado
en las redes oficiales del Gobierno de la Ciudad de México 13 , su funcionamiento y
operación se sustenta en:
Estatutos
Lineamientos
Criterios
Decretos
4- Decreto por el que se crea el organismo público descentralizado “Sistema de Transporte Colectivo”,
para construir, operar y explotar un tren rápido con recorrido subterráneo y superficial, para el transporte
colectivo en el Distrito Federal y su última reforma el 13 de Julio de 1992
II. ATRIBUCIONES
Artículo 2
Artículo 3
51
Página
13
https://metro.cdmx.gob.mx/acerca-del-metro/mas-informacion/manual-administrativo
Para el cumplimiento de su objeto, el Sistema de Transporte Colectivo conducirá sus actividades en
forma programada, con base en las políticas que establezca el Consejo de Administración para el logro
de los objetivos y prioridades del Programa General de Desarrollo y de los Programas Sectoriales e
Institucionales que se deriven del mismo y a las asignaciones de gasto y financiamiento autorizados,
en los términos del artículo 67 de la Ley.
Artículo 4
Por su naturaleza jurídica y en los términos del artículo 47 de la Ley, la Entidad goza de autonomía de
gestión para el cabal cumplimiento de su objetivo, y de los objetivos y metas señalados en sus
programas; en tal virtud, para el estudio, planeación y despacho de los asuntos y actos administrativos
que le competen conforme a las leyes aplicables en la materia.
Artículo 1
Se instituye un organismo público descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios, que
se denominará "Sistema de Transporte Colectivo", con domicilio en el Distrito Federal y cuyo objeto
será la construcción, mantenimiento, operación y explotación de un tren con recorrido subterráneo,
superficial y elevado, para el transporte colectivo de pasajeros en la Zona Metropolitana de la Ciudad
de México, áreas conurbadas de ésta y del Estado de México, así mismo, dicho Organismo tiene por
objeto la adecuada explotación del servicio público de transporte colectivo de personas mediante
vehículos que circulen en la superficie y cuyo recorrido complemente el del tren subterráneo.
De igual manera, el referido Organismo tendrá la atribución de prestar servicios de asesoría técnica a
Organismos Nacionales e Internacionales en el ámbito de su competencia.
Artículo 2
El patrimonio del "Sistema de Transporte Colectivo" se constituirá con los inmuebles, numerario,
muebles y demás bienes que le destine y entregue el Departamento del Distrito Federal, así como los
que el propio Organismo adquiera en el futuro.
Artículo 3
El "Sistema de Transporte Colectivo" podrá utilizar las vías públicas y otros inmuebles cuyo uso le
conceda el Departamento del Distrito Federal, ya sea en la superficie o en el subsuelo, para sus
instalaciones, servicios y actividades, acatando las disposiciones legales y reglamentarias a que está
sujeto el régimen de dichos bienes.
Misión: Proveer un servicio de transporte público masivo, seguro, confiable y tecnológicamente limpio,
con una tarifa accesible, que satisfaga la expectativa de calidad, accesibilidad, frecuencia y cobertura
de los usuarios y se desempeñe con transparencia, equidad y eficiencia logrando niveles competitivos
mundialmente Visión: Lograr un servicio de transporte de excelencia, que coadyuve al logro de
losobjetivos de transporte sustentable en la Zona Metropolitana del Valle de México, con un alto grado
de avance tecnológico nacional, con cultura, vocación industrial y de servicios a favor del interés general
y el mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos.
Objetivos:
1- Proporcionar durante los 365 días del año un servicio publico de transporte colectivo de
pasajeros, seguro y eficiente, mediante la construcción, mantenimiento, operación y explotación de un
tren con recorrido subterráneo, superficial y elevado, a fin de contribuir a satisfacer las necesidades que
en materia de transporte tienen los habitantes de la Ciudad
de México y de sus zonas conurbadas.
52
Página
Hacemos una breve referencia al manual de procedimientos del metro citado, que
anticipo la palabra “mantenimiento” se repite mas de mil doscientas veces,
inserto del manual:
Foja 638 Subdirección General de Mantenimiento Atribuciones específicas: Estatuto Orgánico del
Sistema de Transporte Colectivo Artículo 29
La Subdirección General de Mantenimiento tendrá las siguientes facultades y obligaciones:
Artículo 29
La Subdirección General de Mantenimiento tendrá las siguientes facultades y
obligaciones:
I. Establecer y promover las políticas, lineamientos y directrices a los que deberán
ajustarse el mantenimiento y conservación de las instalaciones fijas y el material rodante y todos
aquéllos mantenimientos y construcción que se contraten a través de obra pública y servicios
relacionados con la misma, aplicables en los inmuebles e instalaciones que conforman la
infraestructura operativa del Organismo, a fin de garantizar la continuidad del servicio que se presta a
las personas usuarias;
IX. Instrumentar las políticas y estrategias para mejorar las condiciones de mantenimiento de la
infraestructura operativa del Organismo;
X. Aprobar, a propuesta de las unidades administrativas adscritas a la Subdirección
General de Mantenimiento, los Programas Anuales de Adquisiciones y Contratación de Servicios
correspondientes, en congruencia con el Programa Operativo Anual y el Presupuesto de Egresos
autorizados;
XI. Aprobar los Programas Anuales de mantenimiento y rehabilitación de trenes, así como el de
supervisión de fabricación del nuevo material rodante, propuestos por la Dirección de Mantenimiento
de Material Rodante;
XII. Autorizar la instrumentación de los sistemas internos de programación, control,
verificación y supervisión, propuestos por las áreas adscritas a la Subdirección General de
Mantenimiento para el logro y cumplimiento de los objetivos y metas contenidos en el Programa
Operativo Anual;
XIX. Informar periódicamente a la Dirección General sobre el avance y cumplimiento de las metas y
programas encomendados;
Foja 659 Gerencia de Obras y Mantenimiento Atribuciones específicas: Estatuto Orgánico del Sistema
de Transporte Colectivo
Artículo 48
La Gerencia de Obras y Mantenimiento tendrá las siguientes facultades y obligaciones:
I. Establecer los lineamientos y directrices para el desarrollo de los estudios y los
proyectos ejecutivos y de detalle de la construcción de las obras nuevas, de ampliación y de
mantenimiento a la infraestructura del Organismo;
foja 665-666
53
Función principal 1:
Realizar acciones encomendadas inherentes a los procesos de planeación, coordinación, supervisión
y validación de los proyectos ejecutivos estructurales, para las obras de mantenimiento mayor
relacionadas con la obra civil, en las líneas en operación de la red del Sistema de Transporte Colectivo
Función básica 1.1:
Verificar los criterios de análisis y diseño de los proyectos estructurales para las obras civiles que se
realicen en las líneas en operación del Organismo y sus obras inducidas y complementarias,
comprobando que cumplan con las normas, especificaciones y reglamentaciones vigentes
Función básica 1.3:
Revisar los planos, memorias descriptivas y de cálculo, elaborados por las empresas contratistas y
en su caso, por los proveedores, así como conciliar con las diversas especialidades las divergencias
en su interpretación en los proyectos para la reparación y mantenimiento mayor de las estructuras
que integran la red del STC y de cualquier obra inducida y complementaria
Foja 671
Enlace de Desarrollo de Proyectos de Mantenimiento Funciones:
Función principal 1:
Realizar actividades para la planeación y desarrollo de proyectos dirigidos al mantenimiento de la red
de servicio, así como de las instalaciones en general, que garanticen el óptimo funcionamiento del
Sistema de Transporte Colectivo
Foja 682
Subgerencia de Obras y Mantenimiento Funciones:
Función principal 1:
Verificar que se realice la planeación, programación, presupuestación, contratación, supervisión y
recepción de los proyectos de construcción, ampliación, mantenimiento mayor, rehabilitación y
modificación de líneas e instalaciones que conforman la red de servicio, cumpliendo en los tiempos
determinados en el programa establecido para tal fin.
foja 695
Coordinación de Mantenimiento Mayor de Obras Funciones:
Función principal 1:
Controlar y supervisar que todos los procesos inherentes a la contratación y ejecución de la obra
pública se realicen conforme a las políticas, procedimientos, normas y disposiciones legales y
administrativas aplicables
Función básica 1.1:
Planear, programar y realizar juntas de coordinación e información con las subdirecciones de Obra
Civil y Electromecánica, residencias de obra civil, eléctrica, electrónica y electromecánica, las
empresas constructoras, las supervisoras, la Subgerencia de Proyectos y las áreas del Organismo
que intervengan en la ejecución de las obras.
Foja 700
Jefatura de Unidad Departamental de Proyectos, Arquitectura y Urbanismo Funciones:
Función principal 1:
Realizar las acciones inherentes al proceso de ejecución de estudios, proyectos y especificaciones
en materia de arquitectura y urbanismo para la construcción, ampliación, mantenimiento mayor,
rehabilitación y modificación de instalaciones que conforman la red
https://www.eluniversal.com.mx/metropoli/cdmx/estacion-olivos-temian-en-2017-colapso-de-linea-12-
55
del-metro-tras-el-sismo (VIDEO)
Página
https://www.eluniversal.com.mx/metropoli/cdmx/vecinos-temen-colapso-de-linea-12-del-metro-por-
sismo
https://twitter.com/johnfrexxx/status/1389596531372838915/photo/1
56
Página
https://twitter.com/marianabp1509/status/1389604359374266370/photo/1
https://www.forbes.com.mx/linea-12-del-metro-fallo-en-diseno-y-construccion/
57
Página
https://twitter.com/monse_TaeTae/status/1389607227737231360/photo/1
https://twitter.com/KittyPelwchy/status/1389603483859390473
(VIDEO)
https://arturoespinosa.com.mx/la-linea-12-el-pasado-de-la-4t/
Aquí se muestra una cronología sobre las irregularidades de la Línea 12
“Un total de 11 mil fallas en toda la ruta contabilizadas desde su inauguración hasta 2013,
más las que se fueron acumulando”
58
Página
https://www.sinembargo.mx/04-05-
2021/3971274?fbclid=IwAR0N1kd_brAg51tXEv5hWW8C54ccomLS4Fn8yBmEpT83TECSW6QOR1
Up-Ro
59
Página
Tercero.- Ya sea por responsabilidad objetiva (uso de instrumentos peligrosos) o
responsabilidad subjetiva, aspectos de negligencia por falta de mantenimiento de la
infraestructura del metro la responsabilida sobre los elementos causantes del daño lo
60
Por otro lado, para que exista responsabilidad contractual basta con que
se incumpla con la obligación pactada, mientras que la extracontractual
exige que se cumplan distintos requisitos dependiendo de si es objetiva o
subjetiva. La responsabilidad de índole subjetiva se funda en un
elemento de carácter psicológico, ya sea porque existe la intención
de dañar o porque se incurre en descuido o negligencia. En cambio,
en la responsabilidad objetiva se encuentra ausente el elemento subjetivo,
esto es, la culpa o negligencia.
..
..
A lo anterior se le ha denominado en España, “unidad de la
responsabilidad civil”, siendo irrelevante el tipo de responsabilidad que
alegue el afectado, ya que el Tribunal tiene que resolver el caso
14
Contradicción de Tesis 93/2011, resuelta el 26 de octubre de 2011, por unanimidad de cinco votos
de los Ministros Jorge Mario Pardo Rebolledo, José Ramón Cossío Díaz, Guillermo I. Ortiz
Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente (Ponente) Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea.
15
Se clasifica tradicionalmente, atendiendo a su origen (por la especie de norma violada), en
61
16
“En la sentencia del Tribunal Supremo de 18 de febrero de 1997, se dice que sería erróneo
considerar que si el perjudicado ha fundamentado su demanda de indemnización sólo en normas de
responsabilidad extracontractual o sólo en normas de responsabilidad contractual, el órgano
jurisdiccional incurre en incongruencia por cambio de la causa de pedir si funda la decisión en normas
distintas de las invocadas, de suerte que la causa pretendi que con el petitum configuran la
pretensión procesal se define por el relato de hechos y no por la fundamentación jurídica, que, en
casos de culpa, no vincula al Tribunal ni en la calificación de la relación jurídica controvertida, ni en
las normas de aplicación, de manera que el órgano jurisdiccional actúa dentro de los límites de la
congruencia, aunque cambie el punto de vista jurídico” Bello Janeiro, Domingo, Cuestiones Actuales
de Responsabilidad Civil, Madrid, 2009, p. 231.
17
Artículo 6 (Código Civil para el Distrito Federal). La voluntad de los particulares no puede eximir
62
de la observancia de la ley, ni alterarla o modificarla. Sólo pueden renunciarse los derechos privados
que no afecten directamente al interés público, cuando la renuncia no perjudique derechos de
Página
tercero.
.
. En resumen, la diferencia entre la responsabilidad subjetiva y la objetiva
es que en la segunda no se tiene que mostrar el elemento subjetivo de la
conducta, esto es, la culpa o negligencia de la demandada.
.
.
.
Mantenimiento deficiente de las instalaciones y omisión de medidas
de seguridad en su uso. La empresa omitió el mantenimiento adecuado
de las instalaciones y medidas de seguridad para verificar que el lago
artificial se encontrara en las condiciones más óptimas para su uso y que
de esta manera no significara un riesgo para los usuarios.18 Lo anterior
debido a que la bomba sumergible que se encontraba en el lado oriente
junto a la cascada artificial presentaba fallas, ocasionando un corto circuito
en el equipo, lo cual permitió la conductividad eléctrica en el lago artificial.
Ello se evidencia con las siguientes pruebas:
18
De la contestación a la demanda y de la confesional se desprende que la empresa no presenta
pruebas que acrediten el mantenimiento del lago o bien que el 16 de septiembre de 2010, el personal
del hotel hubiera verificado que el lago se encontraba en las condiciones habituales para su uso.
19
Artículo 380 (Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal).- Hay presunción
legal cuando la ley la establece expresamente y cuando la consecuencia nace inmediata y
directamente de la ley; hay presunción humana, cuando de un hecho debidamente probado se
deduce otro que es consecuencia ordinaria de aquél.
20
En la iniciativa presentada por el Presidente de la República y publicada el 22 de noviembre de
1993 se manifestó: “En cuanto al daño moral, en términos del Código Civil para el Distrito Federal
en Materia Común y para toda la República en Materia Federal, el Estado es subsidiariamente
responsable por el que se cause con motivo de la actuación ilícita de sus funcionarios, por lo que
esta responsabilidad debe establecerse en forma directa en caso de dolo, como se propone respecto
del daño material. Asimismo el concepto de dicho daño moral, contenido en el Artículo 1916
del Código Civil debe complementarse, para incluir la presunción del mismo, tratándose de
violaciones intencionales a la libertad y la integridad física y psíquica de las personas.” (El
énfasis es añadido).
21
Artículo 1916 (Código Civil para el Distrito Federal).- Por daño moral se entiende la afectación
que una persona sufre en sus sentimientos, afectos, creencias, decoro, honor, reputación, vida
63
privada, configuración y aspecto físicos, o bien en la consideración que de sí misma tienen los
demás. Se presumirá que hubo daño moral cuando se vulnere o menoscabe ilegítimamente la
Página
libertad o la integridad física o psíquica de las personas. (el énfasis es agregado) […]
En efecto, la doctrina reconoce que el sistema de presunciones es
adecuado para tener por acreditado los daños de difícil acreditación. 22 La
Corte Interamericana de Derechos Humanos también es participe de esta
idea.23 En esa misma línea esta Primera Sala también ha determinado que
es posible invertir la carga de la prueba cuando el demandado cuenta con
mayor facilidad de probar que actuó con la diligencia debida.24
22
Pizarro, Ob. Cit., pp. 625-627.
23
Aunque generalmente la Corte Interamericana de Derechos Humanos asigna la carga de la prueba
a la parte que alega los hechos, hay circunstancias sin embargo, en que la carga de la prueba es
revertida y recae en la parte que niega los hechos. Ello ocurre cuando existe una presunción de que
la violación ha ocurrido (categorías sospechosas, casos de discriminación institucionalizada, cuando
el Estado pudo prevenir la violación), y cuando es el Estado quien se encuentra en mejor posición
probatoria. Ver casos González Medina y familiares Vs. República Dominicana, párr. 132, Velasquez
Rodriguez v. Honduras par. 123, entre muchos otros.
24
Así en la Contradicción de Tesis 93/2011, se manifestó: “Debido a la dificultad que representa para
la víctima probar la culpa del médico anestesiólogo se posibilita un desplazamiento de la carga de la
prueba para que sea el médico el que demuestre que la aplicación de la anestesia se realizó de
acuerdo a los cuidados establecidos en la normatividad de la materia y al deber de diligencia que le
exige la profesión. Así, el personal médico deberá demostrar que tuvo el cuidado debido en cada
una de las etapas que involucra el procedimiento anestésico.”
25
Pizarro, Ob. Cit., p. 626.
26
Artículo 282 (Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal).- El que niega sólo
será obligado a probar:
fojas 164-193
Página
29
Cuaderno del juicio ordinario civil **********/2011, Tomo II fojas 435-456
de su hijo Víctima. Por lo tanto, se tiene plenamente probado el daño en
sus afectos y sentimientos.
Es claro que del simple sentido común y después de observar las imágenes del estado
previo del fragmento que colapsó esto no se puede entender sin tomar en consideración
la clara falta de mantenimiento en la infraestructura del metro, inserto nuevamente la
imagen:
65
Página
Cuarto.- De la reparación integral del daño:
La reparación integral del daño es un derecho humano que debe ser garantizado
cuando existe daño, trasgresión o violación a derechos sustantivos de las personas, y
esta garantía corre a cargo del Estado conforme al párrafo tercero del artículo 1°
constitucional y el último párrafo del numeral 109 de la Costitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, así lo refieren:
Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán
de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea
parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá
restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que
esta Constitución establece.
La responsabilidad del Estado por los daños que, con motivo de su actividad
administrativa irregular, cause en los bienes o derechos de los particulares,
será objetiva y directa. Los particulares tendrán derecho a una indemnización
conforme a las bases, límites y procedimientos que establezcan las leyes.
numeral:
Página
Artículo 63
Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad
protegidos en esta Convención, la Corte dispondrá que se garantice
al lesionado en el goce de su derecho o libertad
conculcados. Dispondrá asimismo, si ello fuera procedente, que se
reparen las consecuencias de la medida o situación que ha
configurado la vulneración de esos derechos y el pago de una justa
indemnización a la parte lesionada.
Ahora bien, como previamente se aclaró, la constitución (en su artículo 1°) nos da pauta
para interpretar los alcances del derecho humano a la reparación integral del daño y
justa indemnización conforme al numeral 63.1 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, situación que es relevante pues ahora este derecho fundamental
debe ser visualizado en primer lugar desde el esquema reparatorio previsto en Sistema
Interamericano de Protección de Derechos Humanos, utilizado particularmente por la
Corte Interamericana de Derechos Humanos en las sentencias que resuelven asuntos
de su competencia.
En el sistema interamericano de derechos humanos, así como en la gran mayoría de
los Países del mundo que presumen un estado democrático, se establece en la
jurisprudencia internacional el desarrollo de los conceptos del derecho humano a la
reparación integral del daño (restitutio in integrum), contenido en el artículo 63.1 de
la Convención Americana sobre Derechos Humanos 30, la literatura y jurisprudencia de
la Corte Interamericana precisa como medidas reparatorias las que se enlistan, así
como los conceptos de condena que incluye cada premisa, detallamos:
La obligación de reparar en la Convención Americana sobre Derechos Humanos
artículo 63.131, adoptada en la ciudad de San José de Costa Rica, el 22 de noviembre
de 1969 se establece como obligación a los estados parte a reparar las violaciones a
los derechos humanos, por medio de una justa indemnización, ahí nacen los
conceptos de reparación integral del daño y justa indemnización, que se desdobla en
el sistema de jurisprudencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en
donde la multicitada Corte IDH en las resoluciones que emite y que son vinculatorias
para el estado mexicano, define que para que exista una verdadera reparación integral
30
Artículo 63.- 1. Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en
esta Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho
o libertad conculcados. Dispondrá, asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las
consecuencias de la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos
y el pago de una justa indemnización a la parte lesionada.
31
Artículo 63.- 1. Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en
esta Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho
o libertad conculcados. Dispondrá, asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las
68
REQUERIMIENTO DOCUMENTAL
REQUERIMIENTO DOCUMENTAL A LA DEMANDADA relacionada con su plan
integral de aseguramiento.
Por tanto, dado que se trata de los documentos que obran el poder de la demandada y
69
el suscrito no tiene acceso a ellos, lo que manifiesto bajo protesta de decir verdad,
y con fundamento en los artículos 79, 80, 84 y 90 del Código Federal de
Página
Procedimientos Civiles, solicito se le requiera a la demandada que al momento de
contestar la demanda exhiba adjunta a su contestación:
2. Carátula de la póliza
3. Contratos de seguro
5. Endosos.
Criterio:
Página
VALOR ASEGURADO EN EL SEGURO CONTRA LA
RESPONSABILIDAD CIVIL. SU DETERMINACIÓN Y LÍMITE EN
RELACIÓN AL TERCERO DAÑADO.
Existencia de seguro:
Http://transparencia.finanzas.cdmx.gob.mx/repositorio/public/upload/repositorio/SIPOT
2020/4TRIMESTRE/AD_2290_GMS.pdf
El suscrito y las víctimas tienen derecho por ley, a conocer el contenido total del contrato
de seguro pero no tiene los medios legales para hacerlo, sino a través del requerimiento
judicial que se solicita por este conducto, pues el trato que le otorga la ley a estos
documentos es de confidenciales.
Respetuosamente afirmamos que es evidente que no existe modo legal alguno para
que la colectividad pueda o el suscrito pueda solicitar los documentos material de la
prevención, pues el contrato de seguro es un documento confidencial que
celebran dos entes (METRO y la aseguradra) dentro del cuál es evidente que no
tuvimos ninguna participación, y no hay una forma legal de solicitarlo, y sí es así le
suplico nos lo informe pues la documentación del contrato de seguro y sus derivados
es confidencial, así lo establece la Ley de Instituciones de Seguros y Fianzas,
inserto:
Artículo 190.- Los informes que las Instituciones obtengan respecto a los solicitantes de seguros de
caución o de fianzas, o de quienes ofrezcan contragarantías, serán estrictamente confidenciales,
aun cuando dichos seguros de caución y fianzas se refieran a infracciones de leyes penales, y
se consideran solicitados y obtenidos con un fin legítimo y para la protección de intereses
públicos.
Artículo 268.- Las Instituciones podrán contratar con terceros, incluyendo, según sea el caso, a otras
Instituciones de Seguros o a otras Instituciones de Fianzas, la prestación de servicios necesarios para
su operación, de conformidad con las disposiciones de carácter general que expida la Comisión, con
acuerdo de su Junta de Gobierno.
74
Las disposiciones de carácter general a que se refiere el primer párrafo de este artículo, deberán
Página
APENDICES
APÉNDICE UNO (LEGITIMACIÓN)
75
concéntrico).
Las consecuencias dañosas de los actos materia de juzgamiento no solo afecta a los
que reciben la afectación en forma directa (fallecido, herido) sino a su núcleo familiar de
origen en el primer círculo concéntrico, aunque podría tratarse de cualquier persona
que sufre una lesión inmaterial por la pérdida o sufrimiento ajeno, es el primer círculo
familiar concéntrico quien tiene la presunción legal de sufrir un daño, así lo establece el
siguiente criterio:
auténticos perjudicados con su muerte, que pueden ser o no herederos por tratarse
de daño moral. CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER
CIRCUITO. I.4o.C.15 C (10a.) Amparo directo 719/2011. Marinee Gordian Zamayoa
y otro. 5 de julio de 2012. Unanimidad de votos. Ponente: Francisco J. Sandoval
López. Secretario: Raúl Alfaro Telpalo. Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Epoca. Libro XIV,
Noviembre de 2012. Pág. 1934. Tesis Aislada.
Artículo 4.- Se denominarán víctimas directas aquellas personas físicas que hayan
sufrido algún daño o menoscabo económico, físico, mental, emocional, o en general
cualquiera puesta en peligro o lesión a sus bienes jurídicos o derechos como
consecuencia de la comisión de un delito o violaciones a sus derechos humanos
reconocidos en la Constitución y en los Tratados Internacionales de los que el Estado
Mexicano sea Parte.
Son víctimas indirectas los familiares o aquellas personas físicas a cargo
de la víctima directa que tengan una relación inmediata con ella.
Son víctimas potenciales las personas físicas cuya integridad física o
derechos peligren por prestar asistencia a la víctima ya sea por impedir o detener la
violación de derechos o la comisión de un delito.
La calidad de víctimas se adquiere con la acreditación del daño o menoscabo
de los derechos en los términos establecidos en la presente Ley, con independencia
de que se identifique, aprehenda, o condene al responsable
Siendo aplicables:
de su muerte y los años que les faltaban para completar la expectativa de vida y
los ingresos que obtenían con base en su salario real; y, c) A falta de salario real,
Página
DEBE FIJARSE NO SÓLO CON UNA CANTIDAD POR ESE CONCEPTO, SINO
TAMBIÉN DEBEN TOMARSE EN CUENTA LAS CONSECUENCIAS DE ORDEN
INMATERIAL QUE SUFRIERON LA VÍCTIMA Y SUS FAMILIARES. SEXTO
TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO. I.6o.C.11
C (10a.) Amparo directo 284/2013. Ciria Althair Naholy Corral Castañeda y otros.
6 de septiembre de 2013. Unanimidad de votos. Ponente: Ismael Hernández
Flores. Secretaria: Rebeca Rosales Zamora. Esta tesis se publicó el viernes 2 de
mayo de 2014 a las 12:05 horas en el Semanario Judicial de la Federación.
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Fuente: Gaceta del Semanario
Judicial de la Federación, Décima Epoca. Libro 6, Mayo de 2014. Pág. 1949. Tesis
Aislada.
CONSIDERANDO:
En esta hipótesis, el daño moral no está destinado a convertirse en una indemnización que forme parte
de los bienes de la víctima; en ningún momento entra a formar parte del patrimonio de la víctima porque
81
quienes tienen derecho a reivindicarlo judicialmente son precisamente algunas de las personas que
resienten las consecuencias no materiales de su muerte. Afirmar que la indemnización a que se refiere
Página
el artículo 1849 de la legislación civil del Estado de Veracruz, debe ser exigida por el albacea de la
herencia de la víctima y no directamente por su familia, contradice centralmente esta correspondencia
estructural básica entre el sujeto que puede reclamar la indemnización y la causa por la cual el
ordenamiento la concede.
Tampoco es obstáculo para arribar a las conclusiones anteriores que exista una tesis de la extinta
Tercera Sala, invocada por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, del
tenor literal siguiente:
Esta tesis, como detallaremos a continuación, se refiere a normas que regulan hipótesis distintas a la
regulada por el artículo 1849 del Código Civil para el Estado de Veracruz. Si este último, como
sabemos, regula específicamente la reparación por concepto de daño moral reconocible en favor de la
víctima de un delito, o en favor de su familia cuando fallece, los artículos 1915 del Código Civil para el
Distrito Federal y 1836 del Estado de Jalisco se refieren a la responsabilidad objetiva por daños
derivados de la comisión de actos que producen la muerte o la incapacidad de una persona. Resulta
imprescindible al respecto la lectura de los artículos 1915 y 1916 del Código Civil para el Distrito Federal
en Materia Común y para toda la República en Materia Federal, vigente en la época de la emisión de
ese criterio jurisprudencial y que constituye, por tanto, lo que se interpretaba al emitir esos criterios:
"Artículo 1915. La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido, en el restablecimiento de
la situación anterior, cuando ello sea posible, o en el pago de daños y perjuicios.
"Cuando el daño se cause a las personas y produzca la muerte, incapacidad total permanente, parcial
permanente, total temporal o parcial temporal, el grado de la reparación se determinará atendiendo a
lo dispuesto por la Ley Federal del Trabajo. Para calcular la indemnización que corresponda se tomará
como base el cuádruplo del salario mínimo diario más alto que esté en vigor en la región y se extenderá
al número de días que para cada una de las incapacidades mencionadas señala la Ley Federal del
Trabajo. En caso de muerte la indemnización corresponderá a los herederos de la víctima.
"Los créditos por indemnización cuando la víctima fuere un asalariado son intransferibles y se cubrirán
preferentemente en una sola exhibición, salvo convenio entre las partes.
82
Página
"Las anteriores disposiciones se observarán en el caso del artículo 2647 de este código."
"Artículo 1916. Independientemente de los daños y perjuicios, el Juez puede acordar en favor de la
víctima de un hecho ilícito, o de su familia, si aquélla muere, una indemnización equitativa, a título de
reparación moral, que pagará al responsable del hecho. Esa indemnización no podrá exceder de la
tercera parte de lo que importe la responsabilidad civil. Lo dispuesto en este artículo no se aplicará al
Estado en el caso previsto en el artículo 1928."
Como se aprecia claramente, el primero de los artículos transcritos -el 1915, al cual hace referencia la
tesis de la extinta Tercera Sala de esta Suprema Corte- regulaba exclusivamente la reparación del
daño patrimonial resentido por una persona, no la relativa al daño moral.(9) La reparación del daño
moral estaba regulada en el artículo 1916 del mismo ordenamiento, y en idénticos términos regulan la
responsabilidad por daño patrimonial y por daño moral, respectivamente, los artículos 1848 y 1849 del
Código Civil para el Estado de Veracruz. La presente contradicción de tesis, como es entonces claro,
se centra en una disposición análoga al segundo de los artículos transcritos (el 1916, que regula la
responsabilidad por daño moral), no al primero (el 1915, que regula la responsabilidad por daño
patrimonial), que fue el interpretado en el criterio jurisprudencial de la extinta Tercera Sala invocada
por el Segundo Tribunal Colegiado. Si uno revisa, por el contrario, las tesis de la extinta Tercera Sala
relativas al artículo 1916, se comprueba que las conclusiones a las que arriba son perfectamente
análogas a aquellas que, según hemos apuntado, deben regir la resolución de la presente contradicción
de tesis. Así lo demuestra el texto de las tesis que a continuación transcribimos, que aunque son
rubricadas en términos de responsabilidad civil objetiva en general, en realidad se refieren sólo a
aquella relativa al daño moral, regulada en ese momento en el artículo 1916.
En esta hipótesis, el daño moral no está destinado a convertirse en una indemnización que forme parte
de los bienes de la víctima; en ningún momento entra a formar parte del patrimonio de la víctima porque
quienes tienen derecho a reivindicarlo judicialmente son precisamente algunas de las personas que
resienten las consecuencias no materiales de su muerte. Afirmar que la indemnización a que se refiere
el artículo 1849 de la legislación civil del Estado de Veracruz, debe ser exigida por el albacea de la
herencia de la víctima y no directamente por su familia, contradice centralmente esta correspondencia
estructural básica entre el sujeto que puede reclamar la indemnización y la causa por la cual el
ordenamiento la concede.
El hecho de que después, según las reglas de la sucesión correspondiente, la cantidad pudiera ser
repartida por el albacea entre los familiares correspondientes, presupondría, de nuevo, afirmar que
dicha indemnización ha ingresado o tiene el derecho de ingresar en el patrimonio de la víctima, cuando
83
esta última en ningún momento está ni podría estar en condiciones de reclamar la compensación del
daño moral que su muerte provoca en sus familiares. Además, un esquema según el cual es el albacea
Página
el que reclama judicialmente la indemnización a que tiene derecho la familia y después lo reparte a los
miembros de ésta según las reglas de prelación aplicables en el derecho sucesorio no sólo incurre en
una extralimitación de las atribuciones jurídicas de un albacea -cuyas facultades se ejercen, como
hemos subrayado, sobre el patrimonio de la víctima fallecida, no sobre el patrimonio de otras personas-
, sino que propiciaría con toda seguridad una discontinuidad entre los parámetros de conformidad con
los cuales el Juez habría decretado los montos por concepto de daño moral a una serie de personas y
su recepción última por parte de esas personas. El daño moral es un daño con una dimensión
fuertemente subjetiva, pues la reacción o el impacto emocional que experimentan las personas ante
unas mismas circunstancias varía mucho, y el Juez, más allá de los límites que una norma como el
1849 le puede imponer (en este caso, que la compensación por ese concepto no sea superior a un
tercio de lo acordado por concepto de daños y perjuicios materiales), tiene discreción para ponderarla
y cuantificarla de conformidad con las circunstancias de cada caso. El necesario carácter específico y
personalísimo de este tipo de determinación judicial es innecesariamente dificultado por un esquema
en el cual es el albacea quien tiene la legitimación procesal exclusiva para reclamar la compensación
por daño moral que corresponde a la familia de la víctima.
Pero sobre todo, sería la equidad del sistema indemnizatorio diseñado por la ley la que quedaría
seriamente cuestionada en un esquema procesal en el que las cantidades obtenidas por concepto de
reparación del daño moral experimentado por los familiares les fueran repartidas posteriormente por el
albacea, no ya según los criterios tomados en cuenta por el juzgador a la hora de determinar el daño
moral sufrido por cada uno de ellos, sino según los muy diferentes criterios que rigen el reparto de los
bienes patrimoniales de una persona de conformidad con las reglas del derecho sucesorio.
1. Carpió Nicolle y otros, párr. 117; 30. Hermanas Serrano Cruz, párr. 157;
2. Masacre Plan de Sánchez. Reparaciones, párr. 81; 31. Huilca Tecse, párr. 97;
3. De La Cruz Flores, párr. 159; 32. Niñas Yean y Bosico, párr. 222-223;
4. Tibi, párr. 243; 33. Gutiérrez Soler párr. 83;
5. “Instituto de Reeducación del Menor”, párr. 299; 34. Caesar, párr. 126;
6. Ricardo Canese, párr. 205; 35. Comunidad Moiwana, párr. 192;
7. Hermanos Gómez Paquiyauri, párr. 215; 36. Comunidad indígena Yakye Axa, párr. 197 y 205;
8. 19 Comerciantes, párr. 247; 37. Comunidad Indígena Sawlioyamaxa, párr. 220;
9. Molina Theissen. Reparaciones, párr. 66; 38. Fermín Ramírez, párr. 139;
10. Herrera Ulloa, párr. 200; 39. Acosta Calderón, párr. 159;
11. Maritza Urrutia, párr. 166; Myma 40. Yatama, párr. 243;
12. Mack Chang, párr. 260; 41. “Masacre de Mapiripán”, párr. 285;
13. Bulado, párr. 96; 42. Palamara Iribame, párr. 245;
14. Juan Humberto Sánchez, párr. 172; 43. Gómez Palomino, párr. 131;
15. “Cinco Pensionistas", párr. 180; 44. García Asto y Ramírez Rojas, párr. 268;
16. Trujillo Oroza. Reparaciones, párr. 83; 45. Blanco Romero y otros, párr. 87;
17. Bámaca Velásquez. Reparaciones, párr. 60; 46. Masacre de Pueblo Bello, párr. 258;
18. Cantoral Benavides. Reparaciones párr. 57; 47. López Alvarez, párr. 200;
19. Comunidad Mayagua (Sumo) Awas Tingni párrs. 166 y 48. Acevedo Jaramillo y otros párr. 309;
167;
49. Baldeón García, párr. 189;
20. Cesti Hurtado. Reparaciones, párr. 51;
50. Masacres de Huango, párr. 387;
21. “Niños de la Calle” (Villagrán Morales y otros) Repara-
ciones, párr. 88; 51. Ximenes Lopes, párr. 236;
22. "Panel Blanca" (Panlagua Morales y otros). Reparaciones, 52. Montero Aranguren y otros (Retén de Catia) párr. 131;
párr. 105; 53. Claude Reyes y otros, párr. 156;
23. Iucher Bronstein, párr. 183; 54. Goiburú y otros, párr. 156;
24. Baena Ricardo y otros, párr. 206; 55. Goiburú y otros, párr. 160;
25. Tribunal Constitucional, párr. 122; 56. Servellón García y otros, párr. 180;
26. Biabe. Reparaciones, párr. 55; 57. Vargas Areco, párr. 150;
84
27. Castillo Páez. Reparaciones, párr. 84; 58. Trabajadores Cesados del Congreso, párr. 147;
Página
28. Neira Alegría y otros. Reparaciones, párr. 56; 59. Penal Miguel Castro Castro, párr. 431;
29. El Amparo. Reparaciones, párr. 35; 60. La Cantuta, párr. 219;
61. Masacre de la Rochela, párr. 264; 87. otros, párr. 233;
62. Escué Zapata, párr. 149; 88. Usón Ramírez, párr. 187;
63. Zambrano Vélez y otros, párr. 142; 89. Radilla Pacheco, párr. 374-375;
64. Cantoral Huama- ní y García Santa Cruz, párr. 180; 90. Masacre Dos Erres, párr. 293;
65. García Prieto y otros, párr. 183; 91. Garibaldi, párr. 193;
66. Boyce y otros, párr. 126; 92. Campo Algodonero, párr. 584-585;
67. Chaparro Alvarez y Lapo Iñiguez, párr 250; 93. Barreto, párr. 148;
68. Albán Cornejo y otros, párr. 148; 94. Anzualdo Castro, párr. 219 y 222;
69. Pueblo Saramaka, párr. 195; 95. Chitay Nech, párr. 274;
70. Kimel, párr. 117; 96. Manuel Cepeda Vargas, párr. 253;
71. Yvon Neptune, párr. 168; 97. Fernández Ortega, párr. 293;
72. Apitz Barbera y otros ("Corte Prime de lo Contencioso 98. Rosendo Cantú y otra, párr. 178-179;
Administrativo") párr. 224 y 242;
99. Gomes Lund párr. 311.
73. Castañeda Gutman, párr. 239;
100. Cabrera García y Montiel Flores, párr. 261; Gelman ,
74. García Prieto y otros, párr. 163 y párr. 239; párr. 296;
75. Pueblo Saramaka, párr. 186; 101. Salvador Chiriboga. Reparaciones, párr. 112;
76. Yvon Neptune, párr. 152; 102. Abrill Alosilla, párr. 132;
77. Castañeda Gutman, párr. 214; 103. Torres Millacura párr. 192;
78. Heliodoro Portugal párr. 239; 104. Contreras y otros, párr. 228;
79. Bayarri, párr. 164; 105. Barbani Duarte, párr. 260;
80. Tiu Tojín, párr. 65; 106. Fleury y otros, párr. 145;
81. Ticona Estrada y otros, párr. 130; 107. Familia Barrios, párr. 378;
82. Valle Jaramillo, párr. 224; 108. González Medina, párr. 319;
83. Tristón Donoso, párr. 189; 109. Atala Riffo, párr. 291;
84. Ríos y otros, párr. 403; 110. Forneron e Hija, párr. 197;
85. Kawas Fernández, párr. 184; 111. Díaz Peña, párr. 166;
86. Acevedo Buendía y otros ("Cesantes y Jubilados de la 112. Pueblo Indígena Kichwa de Sarayaku, párr. 314.
Contraloría”) párr. 133; Escher y
Todas estas sentencias refieren en resumen que los familiares directos de la víctima
fallecida (Padre, Madre, Hijo o Hermanos) de origen tienen son los que recienten el
daño y sería inhumano establecer cualquier requisito para legitimar la acción
reparatoria, pues la muerte de la Madre, Padre, Hijo o Hermano es propio de la
naturaleza humana que se resiente por los familiares cercanos (Padre, Madre, esposa
(o) Hijos o Hermanos).
incluido una definición de cada una de estas medidas, las que entiende como:
Medidas de compensación
Medidas de satisfacción
Estas medidas se encuentran dirigidas a reparar el daño inmaterial (sufrimientos y las aflicciones
causados por la violación, como el menoscabo de valores muy significativos para las personas y
cualquier alteración, de carácter no pecuniario, en las condiciones de existencia de las víctimas).
Comprenden asimismo, entre otros, actos u obras de alcance o repercusión pública, actos de
reconocimiento de responsabilidad, disculpas públicas a favor de las víctimas y actos de
conmemoración de las víctimas, pretendiendo de esta manera la recuperación de la memoria de las
víctimas, el reconocimiento de su dignidad y el consuelo de sus deudos.
En este sentido, algunos ejemplos de medidas de satisfacción son los siguientes: a) acto público de
reconocimiento de responsabilidad y de desagravio a la memoria de las víctimas; b) publicación o
difusión de la sentencia de la Corte; c) medidas en conmemoración de las víctimas o de los hechos;
d) becas de estudio o conmemorativas; y e) implementación de programas sociales.
Medidas de restitución
Estas medidas implican el restablecimiento hasta donde sea posible de la situación que existía antes
de que ocurriera la violación. La restitución como forma de reparación contempla medidas tales como:
a) el restablecimiento de la libertad de personas detenidas ilegalmente; b) la devolución de bienes
confiscados ilegalmente; c) el regreso al lugar de residencia del cual la víctima fue desplazada; d) el
reintegro al empleo; e) la anulación de antecedentes judiciales, administrativos, penales o policiales y
cancelación de los registros correspondientes, y f) la devolución, demarcación y titulación del territorio
tradicional de las comunidades indígenas para proteger su propiedad comunal.
Medidas de rehabilitación
Son aquellas medidas destinadas a brindar atención médica y psicológica necesaria para atender las
necesidades de salud física y psíquica de las víctimas, lo cual deben hacer de forma gratuita e
inmediata, incluyendo la provisión de medicamentos, y en su caso, suministro de bienes y servicios.
Garantías de no repetición
Éstas son medidas tendientes a que no vuelvan a ocurrir violaciones a los derechos humanos como
las sucedidas en el caso, materia de estudio de la Corte. Estas garantías tienen un alcance o
repercusión pública, y en muchas ocasiones resuelven problemas estructurales, viéndose
beneficiadas no sólo las víctimas del caso pero también otros miembros y grupos de la sociedad. Las
garantías de no repetición se pueden dividir a su vez en tres grupos, según su naturaleza y finalidad,
a saber: a) medidas de adecuación de la legislación interna a los parámetros convencionales; b)
capacitación a funcionarios públicos en derechos humanos; y c) adopción de otras medidas para
garantizar la no repetición de violaciones.
Artículo 1.- La presente Ley general es de orden público, de interés social y observancia en todo
Página
el territorio nacional, en términos de lo dispuesto por los artículos 1o., párrafo tercero, 17, 20 y 73,
fracción XXIX-X, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Tratados
Internacionales celebrados y ratificados por el Estado Mexicano, y otras leyes en materia de
víctimas.
.
.
La reparación integral comprende las medidas de restitución, rehabilitación,
compensación, satisfacción y garantías de no repetición, en sus dimensiones individual,
colectiva, material, moral y simbólica. Cada una de estas medidas será implementada a favor
de la víctima teniendo en cuenta la gravedad y magnitud del hecho victimizante cometido o
la gravedad y magnitud de la violación de sus derechos, así como las circunstancias y
características del hecho victimizante.
Artículo 3.- Esta Ley se interpretará de conformidad con la Constitución y con los Tratados
Internacionales favoreciendo en todo tiempo la protección más amplia de los derechos de
las personas.
Artículo 4.- Se denominarán víctimas directas aquellas personas físicas que hayan sufrido
algún daño o menoscabo económico, físico, mental, emocional, o en general cualquiera
puesta en peligro o lesión a sus bienes jurídicos o derechos como consecuencia de la
comisión de un delito o violaciones a sus derechos humanos reconocidos en la Constitución
y en los Tratados Internacionales de los que el Estado Mexicano sea Parte.
Son víctimas indirectas los familiares o aquellas personas físicas a cargo de la víctima
directa que tengan una relación inmediata con ella.
Son víctimas potenciales las personas físicas cuya integridad física o derechos peligren por
prestar asistencia a la víctima ya sea por impedir o detener la violación de derechos o la comisión
de un delito.
La calidad de víctimas se adquiere con la acreditación del daño o menoscabo de los
derechos en los términos establecidos en la presente Ley, con independencia de que se
identifique, aprehenda, o condene al responsable del daño o de que la víctima participe en algún
procedimiento judicial o administrativo.
Son víctimas los grupos, comunidades u organizaciones sociales que hubieran sido afectadas
en sus derechos, intereses o bienes jurídicos colectivos como resultado de la comisión de un delito
o la violación de derechos.
Artículo 5.- Los mecanismos, medidas y procedimientos establecidos en esta Ley, serán
diseñados, implementados y evaluados aplicando los principios siguientes:
.
.
.
.
Enfoque transformador.- Las autoridades que deban aplicar la presente Ley realizarán,
en el ámbito de sus respectivas competencias, los esfuerzos necesarios encaminados a que
las medidas de ayuda, protección, atención, asistencia y reparación integral a las que tienen
derecho las víctimas contribuyan a la eliminación de los esquemas de discriminación y
marginación que pudieron ser la causa de los hechos victimizantes.
.
.
.
Integralidad, indivisibilidad e interdependencia.- Todos los derechos contemplados en
esta Ley se encuentran interrelacionados entre sí. No se puede garantizar el goce y ejercicio
de los mismos sin que a la vez se garantice el resto de los derechos. La violación de un
derecho pondrá en riesgo el ejercicio de otros.
Para garantizar la integralidad, la asistencia, atención, ayuda y reparación integral a las
víctimas se realizará de forma multidisciplinaria y especializada.
Interés superior de la niñez.- El interés superior de la niñez deberá ser considerado de
manera primordial en la toma de decisiones sobre una cuestión debatida que involucre
niñas, niños y adolescentes. Cuando se presenten diferentes interpretaciones, se elegirá la
que satisfaga de manera más efectiva este principio rector.
Cuando se tome una decisión que afecte a niñas, niños o adolescentes, en lo individual o
colectivo, se deberán evaluar y ponderar las posibles repercusiones a fin de salvaguardar su interés
superior y sus garantías procesales.
Máxima protección.- Toda autoridad de los órdenes de gobierno debe velar por la
aplicación más amplia de medidas de protección a la dignidad, libertad, seguridad y demás
87
.
.
.
.
Victimización secundaria.- Las características y condiciones particulares de la víctima
no podrán ser motivo para negarle su calidad. El Estado tampoco podrá exigir mecanismos
o procedimientos que agraven su condición ni establecer requisitos que obstaculicen e
impidan el ejercicio de sus derechos ni la expongan a sufrir un nuevo daño por la conducta
de los servidores públicos.
.
.
.
Progresividad y no regresividad.- Las autoridades que deben aplicar la presente Ley
tendrán la obligación de realizar todas las acciones necesarias para garantizar los derechos
reconocidos en la misma y no podrán retroceder o supeditar los derechos, estándares o
niveles de cumplimiento alcanzados.
.
.
. Trato preferente.- Todas las autoridades en el ámbito de sus competencias tienen la
obligación de garantizar el trato digno y preferente a las víctimas.
Artículo 7.- Los derechos de las víctimas que prevé la presente Ley son de carácter enunciativo y
deberán ser interpretados de conformidad con lo dispuesto en la Constitución, los tratados y las
leyes aplicables en materia de atención a víctimas, favoreciendo en todo tiempo la protección más
amplia de sus derechos.
Las víctimas tendrán, entre otros, los siguientes derechos:
I. A una investigación pronta y eficaz que lleve, en su caso, a la identificación y
enjuiciamiento de los responsables de violaciones al Derecho Internacional de los derechos
humanos, y a su reparación integral;
Artículo 10.- Las víctimas tienen derecho a un recurso judicial adecuado y efectivo, ante las
autoridades independientes, imparciales y competentes, que les garantice el ejercicio de su
derecho a conocer la verdad, a que se realice con la debida diligencia una investigación inmediata
y exhaustiva del delito o de las violaciones de derechos humanos sufridas por ellas; a que los
autores de los delitos y de las violaciones de derechos, con el respeto al debido proceso, sean
enjuiciados y sancionados; y a obtener una reparación integral por los daños sufridos.
Las víctimas tendrán acceso a los mecanismos de justicia de los cuales disponga el
Estado, incluidos los procedimientos judiciales y administrativos. La legislación en la materia
que regule su intervención en los diferentes procedimientos deberá facilitar su participación.
Artículo 26.- Las víctimas tienen derecho a ser reparadas de manera oportuna, plena, diferenciada,
transformadora, integral y efectiva por el daño que han sufrido como consecuencia del delito o
hecho victimizante que las ha afectado o de las violaciones de derechos humanos que han sufrido,
comprendiendo medidas de restitución, rehabilitación, compensación, satisfacción y
medidas de no repetición.
Artículo 27.- Para los efectos de la presente Ley, la reparación integral comprenderá:
I. La restitución busca devolver a la víctima a la situación anterior a la comisión del delito o a
la violación de sus derechos humanos;
II. La rehabilitación busca facilitar a la víctima hacer frente a los efectos sufridos por
causa del hecho punible o de las violaciones de derechos humanos;
III. La compensación ha de otorgarse a la víctima de forma apropiada y proporcional a la
gravedad del hecho punible cometido o de la violación de derechos humanos sufrida y teniendo
88
en cuenta las circunstancias de cada caso. Ésta se otorgará por todos los perjuicios,
sufrimientos y pérdidas económicamente evaluables que sean consecuencia del delito o de
Página
CAPITULO III
MEDIDAS DE ATENCIÓN Y ASISTENCIA EN MATERIA DE PROCURACIÓN Y
ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA
TITULO QUINTO
MEDIDAS DE REPARACIÓN INTEGRAL
CAPITULO I
MEDIDAS DE RESTITUCIÓN
CAPITULO II
MEDIDAS DE REHABILITACIÓN
Artículo 62.- Las medidas de rehabilitación incluyen, entre otras y según proceda, las siguientes:
I. Atención médica, psicológica y psiquiátrica especializadas;
CAPITULO III
MEDIDAS DE COMPENSACIÓN
Artículo 64.- La compensación se otorgará por todos los perjuicios, sufrimientos y pérdidas
económicamente evaluables que sean consecuencia de la comisión de los delitos a los que se
refiere el artículo 68 de este ordenamiento o de la violación de derechos humanos, incluyendo el
error judicial, de conformidad con lo que establece esta Ley y su Reglamento. Estos perjuicios,
sufrimientos y pérdidas incluirán, entre otros y como mínimo:
I. La reparación del daño sufrido en la integridad física de la víctima;
II. La reparación del daño moral sufrido por la víctima o las personas con derecho a la
reparación integral, entendiendo por éste, aquellos efectos nocivos de los hechos del caso
que no tienen carácter económico o patrimonial y no pueden ser tasados en términos
monetarios. El daño moral comprende tanto los sufrimientos y las aflicciones causados a
las víctimas directas e indirectas, como el menoscabo de valores muy significativos para las
personas y toda perturbación que no sea susceptible de medición pecuniaria;
III. El resarcimiento de los perjuicios ocasionados o lucro cesante, incluyendo el pago
de los salarios o percepciones correspondientes, cuando por lesiones se cause incapacidad
para trabajar en oficio, arte o profesión;
IV. La pérdida de oportunidades, en particular las de educación y prestaciones
sociales;
V. Los daños patrimoniales generados como consecuencia de delitos o violaciones a
derechos humanos;
VI. El pago de los gastos y costas judiciales del Asesor Jurídico cuando éste sea
privado;
Artículo 65.- Todas las víctimas de violaciones a los derechos humanos serán compensadas, en
los términos y montos que determine la resolución que emita en su caso:
a) Un órgano jurisdiccional nacional;
b) Un órgano jurisdiccional internacional o reconocido por los Tratados Internacionales
ratificados por México;
c) Un organismo público de protección de los derechos humanos;
d) Un organismo internacional de protección de los derechos humanos reconocido por los
Tratados Internacionales ratificados por México, cuando su resolución no sea susceptible de ser
sometida a la consideración de un órgano jurisdiccional internacional previsto en el mismo tratado
en el que se encuentre contemplado el organismo en cuestión.
Lo anterior sin perjuicio de las responsabilidades civiles, penales y administrativas que
los mismos hechos pudieran implicar y conforme lo dispuesto por la presente Ley.
En los casos de víctimas de delitos se estará a lo dispuesto en los montos máximos previstos
89
en el artículo 67.
Página
CAPITULO IV
MEDIDAS DE SATISFACCIÓN
Artículo 73.- Las medidas de satisfacción comprenden, entre otras y según corresponda:
I. La verificación de los hechos y la revelación pública y completa de la verdad, en la medida
en que esa revelación no provoque más daños o amenace la seguridad y los intereses de la víctima,
de sus familiares, de los testigos o de personas que han intervenido para ayudar a la víctima o para
impedir que se produzcan nuevos delitos o nuevas violaciones de derechos humanos;
II. La búsqueda de las personas desaparecidas y de los cuerpos u osamentas de las personas
asesinadas, así como la ayuda para recuperarlos, identificarlos y volver a inhumarlos según el
deseo explícito o presunto de la víctima o las prácticas culturales de su familia y comunidad;
III. Una declaración oficial o decisión judicial que restablezca la dignidad, la reputación
y los derechos de la víctima y de las personas estrechamente vinculadas a ella;
IV. Una disculpa pública de parte del Estado, los autores y otras personas involucradas
en el hecho punible o en la violación de los derechos, que incluya el reconocimiento de los
hechos y la aceptación de responsabilidades;
V. La aplicación de sanciones judiciales o administrativas a los responsables de las
violaciones de derechos humanos, y
VI. La realización de actos que conmemoren el honor, la dignidad y la humanidad de las
víctimas, tanto vivas como muertas.
CAPITULO V
MEDIDAS DE NO REPETICIÓN
Artículo 74.- Las medidas de no repetición son aquéllas que se adoptan con el fin de evitar que las
víctimas vuelvan a ser objeto de violaciones a sus derechos y para contribuir a prevenir o evitar la
repetición de actos de la misma naturaleza. Estas consistirán en las siguientes:
I. El ejercicio de un control efectivo por las autoridades civiles de las fuerzas armadas y de
seguridad;
II. La garantía de que todos los procedimientos penales y administrativos se ajusten a las
normas nacionales e internacionales relativas a la competencia, independencia e imparcialidad de
las autoridades judiciales y a las garantías del debido proceso;
III. El fortalecimiento de la independencia del Poder Judicial;
IV. La limitación en la participación en el gobierno y en las instituciones políticas de los
dirigentes políticos que hayan planeado, instigado, ordenado o cometido graves violaciones de los
derechos humanos;
V. La exclusión en la participación en el gobierno o en las fuerzas de seguridad de los
militares, agentes de inteligencia y otro personal de seguridad declarados responsables de planear,
instigar, ordenar o cometer graves violaciones de los derechos humanos;
VI. La protección de los profesionales del derecho, la salud y la información;
VII. La protección de los defensores de los derechos humanos;
VIII. La educación, de modo prioritario y permanente, de todos los sectores de la sociedad
respecto de los derechos humanos y la capacitación en esta materia de los funcionarios
encargados de hacer cumplir la ley, así como de las fuerzas armadas y de seguridad;
IX. La promoción de la observancia de los códigos de conducta y de las normas éticas, en
particular los definidos en normas internacionales de derechos humanos y de protección a los
derechos humanos, por los funcionarios públicos incluido el personal de las fuerzas armadas y de
seguridad, los establecimientos penitenciarios, los medios de información, el personal de servicios
médicos, psicológicos y sociales, además del personal de empresas comerciales;
X. La promoción de mecanismos destinados a prevenir, vigilar y resolver por medios pacíficos
los conflictos sociales, y
XI. La revisión y reforma de las leyes, normas u ordenamientos legales que contribuyan a las
violaciones manifiestas de las normas internacionales de derechos humanos o las permitan.
Artículo 75.- Se entienden como medidas que buscan garantizar la no repetición de los delitos ni
de las violaciones a derechos humanos, las siguientes:
I. Supervisión de la autoridad;
II. Prohibición de ir a un lugar determinado u obligación de residir en él, en caso de existir
peligro inminente para la víctima;
III. Caución de no ofender;
IV. La asistencia a cursos de capacitación sobre derechos humanos, y
V. La asistencia a tratamiento de deshabituación o desintoxicación dictada por un juez y sólo
en caso de que la adicción hubiera sido la causa de la comisión del delito o hecho victimizante.
90
Artículo 4.- Para efectos del artículo 4, segundo párrafo, de la Ley, se consideran como
familiares de la víctima directa que tienen una relación inmediata con ella:
I. Quienes tengan parentesco por consanguinidad o afinidad, en la línea recta,
ascendente y descendente, sin limitación de grado;
II. Quienes tengan parentesco por consanguinidad o afinidad en la línea transversal
hasta el cuarto grado;
III. El cónyuge, y
IV. La concubina o concubinario o, en su caso, quienes estén sujetos al régimen de sociedad
en convivencia u otras figuras jurídicas afines existentes, en términos de la legislación aplicable.
Se entiende como persona a su cargo, aquella que dependa económicamente de la víctima,
en cuyo caso se deberá acreditar ante la Comisión Ejecutiva.
Para todos los demás supuestos no previstos en las fracciones anteriores, el Pleno de la
Comisión Ejecutiva determinará si el grado de relación con la víctima se considera de relación
inmediata.
Como ya mencioné al inicio de esta exposición, coincido en gran parte con las consideraciones de
la sentencia. Comparto la urgencia de establecer parámetros de cuantificación del monto de la
compensación del daño moral que reduzcan la discrecionalidad judicial y transparenten la toma de
decisiones. Sin embargo, me parece que en la sentencia se introdujo un concepto, totalmente
novedoso en nuestro país, que ameritaba un análisis más detallado dada su enorme potencial y
posibles consecuencias. Me refiero a los “daños punitivos”.
En la sentencia se establece que la reparación del daño moral debe tener una faceta punitiva,
además de la propiamente resarcitoria para la víctima.32 Lo anterior al estimar que la compensación
tiene también la función de desaprobar a las personas que actúan ilícitamente y premiar a aquellas
que cumplen con la ley. Se sostiene que “la compensación es una expresión social de
desaprobación hacia el ilícito y si esa punición no es dada, el reconocimiento de tal desaprobación
91
Página
32
Página 88 de la sentencia.
prácticamente desaparece”.33 Por ello, se establecen daños punitivos con el objeto de prevenir
hechos similares en el futuro. Es decir, se trata de imponer incentivos negativos para que se actúe
con la diligencia debida.
Entiendo la racionalidad detrás de estas sanciones ejemplares. Comparto que procuran una cultura
de responsabilidad en nuestro país. Sin embargo, la intención que inspiró el ejercicio de la facultad
de atracción por parte de la Primera Sala para conocer de este asunto fue precisamente generar
parámetros objetivos que guiaran a los jueces en la compleja cuantificación del monto de la
compensación del daño moral. A mi juicio, la introducción de los “daños punitivos” en la ecuación
sin establecer cuáles serían los elementos específicos que se tendrían que tomar en cuenta y,
sobre todo, cuál tendría que ser su proporción en relación con la faceta meramente resarcitoria del
daño moral, termina por generar precisamente el efecto que se buscaba evitar, esto es, abrir un
espacio enorme para la discrecionalidad judicial.
En primer lugar, la sentencia enuncia el concepto de “daños punitivos” como parte integrante de la
“justa indemnización”, con la justificación de que la reparación del daño tiene una vertiente
sancionatoria del culpable.34 No comparto esta conceptualización. Me parece que cualquier
condena de indemnización por daño moral no sólo tiene como fin resarcir a la víctima sino que
también trae aparejada una sanción al causante. Por lo tanto, lo que es reparador para la víctima
implica una sanción para el culpable, lo que haría que los “daños punitivos” tuvieran que estar
justificados en algo más. Más adelante, ahondaré en ello.
Asimismo, la resolución tampoco es clara en cuanto a si una indemnización para ser “justa” debe
contemplar los “daños punitivos”. En otros términos, ¿siempre que se condene por daño moral,
habrá que prever este tipo de daños? ¿O sólo cuando el grado de responsabilidad del causante
sea alto? ¿Qué es exactamente lo que abre la puerta a que la condena establezca “daños
punitivos”? Creo que dar respuesta puntual a estas interrogantes era crucial para la correcta
implementación de una figura tan novedosa.
En segundo lugar, creo que lo más grave de la mecánica propuesta en la sentencia para cuantificar
el monto del daño moral es que no distingue claramente la cantidad que corresponde pagar por
daños resarcitorios (es decir, aquellos que van encaminados a reparar la afectación cualitativa y
cuantitativa a la víctima) de los daños propiamente punitivos. Pareciera que la distinción propuesta
es entre los factores relacionados con la víctima y aquellos relacionados con la responsable. En
este último rubro, la sentencia incluye el grado de responsabilidad del causante y su situación
económica. ¿Ello quiere decir que el grado de responsabilidad del causante no debe ser evaluado
para reparar la afectación cualitativa y cuantitativa de la víctima, sino sólo la reparación en su faceta
punitiva? ¿O más bien quiere decir que los elementos de cuantificación tanto de la víctima como
de la responsable abarcan ambas facetas del daño moral, esto es, tanto la resarcitoria como la
punitiva?
Ya que la mecánica propuesta no aclara esta situación, se vuelve imposible saber la configuración
del monto final de la reparación del daño, es decir, cuánto fue asignado por daños resarcitorios y
cuánto por “daños punitivos”. A mi parecer, esta circunstancia es sumamente preocupante, ya que
si bien se establecen elementos de cuantificación —calificados en la propia ejecutoria como
“meramente indicativos”— los mismos no permiten establecer una proporción o relación numérica
entre los daños destinados a resarcir a la víctima y los “daños punitivos”. ¿Pueden los daños
punitivos ser tres, siete, veinte veces más altos que los resarcitorios? Nada dice al respecto la
sentencia.
En contraste, en el derecho comparado se ha determinado, por ejemplo, que una proporción 4:1
(daños punitivos: daños resarcitorios) apenas pasa la línea de la constitucionalidad, 35 y más
recientemente, la Suprema Corte de Estados Unidos estimó que en muy pocos casos la proporción
9:1 satisface el debido proceso.36 Creo que el órgano jurisdiccional tenía la responsabilidad de
establecer un parámetro en este sentido, pues de no ser así se desvincula totalmente una cantidad
de la otra, cuando, a mi modo de ver, debieran guardar siempre una proporción directa que
transparente el monto final.
33
Ibidem. La cita es de Pizarro, Ramón Daniel, Daño moral. Prevención. Reparación. Punición. El
daño moral en las diversas ramas del Derecho, 2° edición, Buenos Aires, Hammurabi, 2004.
34
Páginas 88, 89 y 90 de la sentencia.
35
Pacific Mutual Life Insurance Company v. Cleopatra Haslip Eta Al, 499 U.S. 1 (1991).
92
36
Exxon Shipping Co. Baker, 554 U.S. 471, fallado en el año de 2008 por la Suprema Corte de
Página
Estados Unidos.
¿Cómo integrar, entonces, los daños punitivos en la ecuación que origine el monto total de la
indemnización por daño moral? Si bien coincido con la sentencia en que el elemento definitorio es
el grado de responsabilidad del causante, soy de la opinión de que tendría que incorporarse en la
ponderación un elemento objetivo que atienda el efecto inhibidor que se pretende que tengan los
“daños punitivos”, mismo que no fue desarrollado ni desglosado en la sentencia. Lo anterior ya que,
si bien se hizo referencia a que el grado de responsabilidad de la sociedad mercantil fue alto, no
se realizó un ejercicio de justificación de cómo la cantidad específica podría “prevenir hechos
similares en el futuro”.
Al respecto, ejercicios interesantes han sido desarrollados por los tribunales en los Estados Unidos
de América, no sin ciertas reticencias y cuestionamientos. Una de las fórmulas utilizadas ha sido la
siguiente37:
Fórmula:
h = magnitud del daño causado
p = probabilidad de que al causante lo declaren culpable
h/p = nivel de culpabilidad
Esta cantidad estaría compuesta de un pago (h) en daños resarcitorios y, consecuentemente, (h/p)
– h equivaldría a los daños punitivos.
De acuerdo con la fórmula reseñada, una vez obtenida la magnitud del daño causado a la víctima
(h), debe estimarse cuál es la probabilidad de que el causante sea detectado y condenado por una
conducta ilícita que genere daño moral (p). Este factor es el crucial para determinar el nivel de
culpabilidad (h/p). El monto final estará compuesto, entonces, por los daños propiamente
resarcitorios (h) y los daños punitivos [(h/p) – h]. Lo anterior, justamente, para que el monto final
cumpla con el objetivo de evitar que el posible causante prefiera ser condenado nuevamente a
pagar una indemnización por daño moral que cumplir con la normatividad y el deber de diligencia,
por resultarle menos costoso.
Quiero ser muy enfático que con este ejemplo no estoy afirmando que debiera ser ésta la fórmula
utilizada para cuantificar montos de indemnización por daño moral. Simplemente deseo destacar
la necesidad de transparentar la mecánica que permite obtenerlos y sentar precedentes claros que
fijen parámetros objetivos. Entiendo el énfasis que pone la sentencia en que la sanción comunique
la desaprobación social de la conducta ilícita. Sin embargo, me parece fundamental no centrarnos
en el aspecto vindicativo y generar elementos que objetivamente constituyan incentivos negativos
para que se actúe con la diligencia debida. Lo que debe perseguir el juez no es la retaliación, sino
un verdadero efecto inhibidor.
En suma, considero que, ante la novedad de la figura, debimos haber sido mucho más enfáticos
en el carácter extraordinario de los “daños punitivos”, que tienen la negligencia grave en un extremo
inicial y la malicia en el final opuesto. De ahí que sea solamente en ese espectro en el que pueda
resultar condenado un demandado por este tipo de daños. Asimismo, estimo que debimos sentar
parámetros objetivos para su cuantificación y, sobre todo, definir la proporción que debe existir
entre éstos y los daños resarcitorios a fin de racionalizar su determinación.
Ahora bien, derivado de lo anterior sabemos que hoy en día no existe una mecánica
que nos permita obtener una cuantificación objetiva por daño moral (tanto en su
aspecto resarcitorio como en su faceta punitiva), no obstante lo anterior somos
conscientes de los elementos que la Suprema Corte de Justicia de la Nación consideró
para condenar al Hotel Mayan Palace al pago de $ 30´000,000.00 (treinta millones de
pesos 00/100 M.N), es por ello que es prudente continuar con el análisis de la sentencia
que resuelve el Amparo Directo 30/2013, para dejar claros los elementos considerados
para cuantificar la faceta resarcitoria y punitiva del daño moral:
De esta transcripción se deriva que el legislador también buscaba fortalecer la protección de los
bienes elementales del ser humano derivados de su propia dignidad. Así, consideró necesario
reparar no sólo el dolor sino sancionar al culpable, para crear una vida colectiva que se
rigiera por el respeto a dichos intereses.
93
37
Polinsky Mitchell, ¿Are punitive damages really insignificant, predictable, and rational?, Journal of
Página
Dicho derecho ordena que todas las personas que sufran daños sean resarcidas integralmente,
por lo tanto, si al tomar en cuenta el grado de responsabilidad del causante se busca resarcir
plenamente a la víctima, dicha indemnización se encontrará plenamente justificada. Siendo que,
por otra parte, mediante la indemnización se logren fines sociales deseables.
Tal como se sostuvo en el apartado anterior, la compensación que se fije debe ser justa, por lo
que para lograr dicho fin es necesario establecer parámetros que auxilien al juzgador a resarcir el
daño causado. Lo anterior, atendiendo por un lado a tal derecho fundamental y, por otro, a la
naturaleza de la institución del daño moral.
Una vez que el daño ha sido valorado, corresponde ponderar su repercusión en el plano
indemnizatorio, esto es, determinar cuánto se debe pagar, para alcanzar una justa
indemnización que atienda a los fines de la institución prevista en el artículo 1916 del
Código Civil para el Distrito Federal.
Asimismo, como ya se ha destacado, si bien los intereses extrapatrimoniales no tienen una exacta
traducción económica, ello no debe dar lugar a dejar sin reparación al afectado.
Así, puede afirmarse que el régimen de ponderación del quantum compensatorio depende de la
conceptualización del derecho a una justa indemnización, de la visión que nuestra tradición jurídica
38
Artículo 1882 (Código Civil para el Distrito Federal).- El que sin causa se enriquece en
detrimento de otro, está obligado a indemnizarlo de su empobrecimiento en la medida que él se ha
enriquecido.
39
Pizarro, Ob. Cit., p.419 nota al pie 3.
40
Amparo en Revisión 75/2009, resuelto el 18 de marzo de 2009, por mayoría de cuatro votos de
los Ministros José Ramón Cossío Díaz (ponente), Juan N. Silva Meza, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Presidente Sergio A. Valls Hernández, contra el emitido por el Ministro José de
Jesús Gudiño Pelayo.
41
Amparo Directo en Revisión 1068/2011, resuelto el 19 de octubre de 2011, por unanimidad de
94
cinco votos de los Ministros Jorge Mario Pardo Rebolledo (ponente), José Ramón Cossío Díaz,
Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente Arturo Zaldívar
Página
Lelo de Larrea.
adopta de la responsabilidad civil y, en particular, del deber de mitigar los efectos derivados del
daño moral.
A lo largo de esta sentencia se ha establecido que el daño moral tiene repercusiones tanto
patrimoniales como extrapatrimoniales, las cuales a su vez pueden ser presentes o futuras. Se ha
afirmado asimismo, que el carácter compensatorio del daño moral implica, por un lado el valorar
el tipo de derecho o interés lesionado, esto es, ponderar el aspecto cualitativo del daño, y por otro,
cuantificar sus consecuencias patrimoniales. A su vez, atendiendo a la literalidad del precepto
ahora analizado y a la intención del legislador, en la determinación del quantum compensatorio
también deberá valorarse el grado de responsabilidad de la parte demandada, así como el
aspecto social del daño causado, esto es, la relevancia o implicaciones sociales que pueda
tener el hecho ilícito.
Así, en la cuantificación del daño moral deben ponderarse los siguientes factores, los cuales a su
vez pueden calificarse de acuerdo a su nivel de intensidad, entre leve, medio o alto. Dichos
modalizadores permitirán establecer el quantum de la indemnización.
Respecto a la Víctima:
A) El aspecto cualitativo del daño o daño moral en sentido estricto: Estos elementos deberán
ser valorados prudencialmente por el juez, atendiendo a periciales psicológicas que determinen i)
el tipo de derecho o interés lesionado, así como, la existencia de un daño y la gravedad del mismo.
Aunque no es posible señalar que los derechos o intereses extrapatrimoniales tienen mayor o
menor valor, sí es posible determinar la importancia del valor o interés afectado. En ese sentido,
puede asignarse como cuantificador de este aspecto del daño una afectación leve, media o
severa.
Así por ejemplo, no será lo mismo el daño que ocasionaría la muerte de la mascota (importancia
leve del interés afectado), que la de los descendientes directos (importancia severa del derecho
lesionado).
A su vez, la entidad del daño puede incrementarse debido a la pluralidad de intereses o derechos
lesionados. 42
ii) La existencia del daño y su nivel de gravedad. Como se afirmó anteriormente en todos
aquellos casos en los que se vulnere o menoscabe ilegítimamente la libertad o la integridad física
o psíquica de las personas, la existencia del daño moral deberá presumirse, siendo que en el caso
concreto estamos en dicho supuesto. No obstante en el resto de los casos el daño moral deberá
ser probado.
La gravedad del daño puede calificarse de normal, media o grave. Normalmente una persona
que experimenta la pérdida de un ser querido, tiene una etapa que puede definirse un duelo
“normal”, en el que la persona a pesar de sufrimiento, prosigue durante este período llevando una
vida normal y no abandona sus responsabilidades laborales, sociales, familiares y personales.
No obstante puede acreditarse un sufrimiento muy intenso (daño moral), que, dada su gravedad,
modifique el comportamiento social de quien lo padece, como podría suceder en aquellos casos
en que la muerte de un ser querido afecta profundamente la vida familiar y social de una persona.
En efecto aunque se presuma la existencia del daño las partes podrán allegar pruebas al juzgador
que tengan valor suficiente para persuadirlo respecto de la mayor o menor envergadura del daño.
42
“Señala con razón Zavala de Gonzales que “…no es igual un hecho que únicamente lesiona la
intimidad que si también menoscaba la reputación, ni la sola afectación estética que la acompañada
con una efectiva perturbación síquica con ribetes patológicos, etcétera”, en Resarcimiento de daños,
t.4, “Presupuestos y funciones del Derecho de daños”, Vol. 112, p.510.”
95
43
Pizarro, Ob. Cit., p.428. “Se ha ponderado: la personalidad del damnificado, su edad, sexo,
condición social, si el damnificado es directo o indirecto, entre muchas otras circunstancias
Página
concretas.”
Esta prueba suplementaría apuntaría a demostrar que en el caso concreto puede haberse
producido un daño mayor a aquel que se produce razonablemente en casos similares.
B) Aspecto patrimonial o cuantitativo derivado del daño moral: En este aspecto el juez deberá
valorar: i) los gastos devengados derivados del daño moral, estos pueden ser los gastos
médicos derivados de las afectaciones a los sentimientos y psique de la víctima, si se demuestra
que tal daño generó consecuencias médicas; y ii) los gastos por devengar. En este rubro pueden
ubicarse aquellos daños futuros (costo del tratamiento médico futuro, por ejemplo el costo de las
terapias psicológicas durante el tiempo recomendado por el médico) o ganancias no recibidas
derivadas de la afectación a los derechos y bienes morales, (por ejemplo, si derivado de una fuerte
depresión la víctima se ve imposibilitada a trabajar).
En tanto estos elementos tienen un aspecto patrimonial el cual puede ser medible o cuantificable,
no es necesario establecer modulaciones al grado de afectación a este aspecto del daño.
Así, a mayor gravedad de la conducta deberá establecerse una indemnización mayor. Esto es,
puede modalizarse la intensidad de la gravedad en leve, media y alta. Para ello deberá
ponderarse: el bien puesto en riesgo por la conducta negligente; el grado de negligencia y sus
agravantes; la importancia social de los deberes incumplidos a la luz del tipo de actividad que
desempeña la parte responsable; entre otros factores.
En efecto, debe valorarse el tipo de bien o derecho puesto en riesgo; así como el número de
personas que podrían haberse visto afectadas por los actos negligentes.
Para calificar el grado de negligencia, deben valorarse sus agravantes, esto es, la malicidad,
mala fe, intencionalidad, o si se trató de una actitud groseramente negligente.44 En este aspecto
resulta relevante el tipo de atención que recibieron las víctimas una vez ocurrido el hecho dañoso.
Por otro lado, es necesario observar la relevancia social del hecho, esto es, la importancia de
generar una cultura de responsabilidad, a la luz del tipo de actividades que realiza la responsable.
Esto es, el evaluar la necesidad de colocar incentivos que logren disuadir tales conductas.
Los aspectos anteriores deben analizarse a la luz de los deberes legales incumplidos, los
deberes genéricos de responsabilidad del desarrollo de la actividad que generó el daño y
por supuesto, basarse en material probatorio. El grado de responsabilidad no se presume, por lo
que debe ser probado.
ii) Situación económica. En tanto la reparación por daño moral tiene una faceta punitiva y
resarcitoria, debe valorarse la capacidad de pago de la responsable para efectivamente disuadirla
a cometer actos parecidos en el futuro. Aunque la situación económica de la responsable no es
definitoria el quantum compensatorio derivado del daño moral, es un elemento que debe valorarse,
especialmente en aquellos casos, como en este, en los que la responsable obtiene un beneficio o
lucro por la actividad que originó el daño.
Así, también debe tomarse en cuenta si la parte responsable recibe un beneficio económico por la
actividad que afectó los derechos e intereses de la víctima.
Debe destacarse que los elementos de cuantificación antes señalados, así como sus
calificadores de intensidad, son meramente indicativos. El juzgador, al ponderar cada uno de
ellos, puede advertir circunstancias particulares relevantes. Su enunciación simplemente pretende
guiar el actuar de los jueces, partiendo de la función y finalidad del derecho a la reparación del
daño moral, sin que ello signifique que estos parámetros constituyen una base objetiva o
exhaustiva en la determinación del quantum compensatorio.
En efecto, lo que se persigue es no desconocer que la naturaleza y fines del daño moral “no
permite una cuantificación absolutamente libre, reservada al subjetivismo del juzgador, ni
tampoco resultar de una mera enunciación de pautas, realizadas de manera genérica y sin
precisar de qué modo su aplicación conduce, en el caso, al resultado al que se arriba”.45
44
Díez Picazo, Ob. Cit., p. 529.
96
45
En similares términos resolvió el Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba, en la
Página
sentencia “Marshall, Daniel A.”, TS Córdoba, Sala Penal, 22/3/84, JA, 1985-I-215.
La suma que se imponga debe ser razonable, cumplir con el objeto de reparar pero también de
disuadir, imponiendo reparaciones responsables, justificadas y debidamente motivadas en las
consideraciones antes señaladas.
3. Determinación del monto de la compensación derivada del daño moral de los padres de
Víctima.
En el apartado IV.2 referente a los parámetros de cuantificación del monto de la compensación del
daño moral, se destacaron una serie de componentes que deben ser considerados por el juzgador
con el fin de lograr una justa indemnización. Se señaló así, que debería ponderarse, respecto a la
víctima: A) El aspecto cualitativo del daño o daño moral en sentido estricto, el cual se compone a
su vez de la valoración de: i) el tipo de derecho o interés lesionado, ii) la existencia del daño y iii)
la gravedad de la lesión o daño. B) El aspecto patrimonial o cuantitativo derivado del daño moral.
En este aspecto el juez deberá valorar: i) los gastos devengados derivados del daño moral, y ii)
los gastos por devengar. En cuanto a la responsable: i) su grado de responsabilidad y ii) su
situación económica.
En la victima:
A) Aspecto cualitativo:
A su vez, dichos derechos tienen una entidad o importancia elevada, dado que se trata de la
pérdida de la vida del único hijo de la parte actora.
ii) La existencia del daño y su gravedad. Ahora bien, por lo que hace a la gravedad del daño
resentido, se señaló que esta consiste en el grado de la modificación disvaliosa del espíritu, en el
desenvolvimiento de su capacidad de entender, querer o sentir, y por la repercusión que tal
minoración determina en el modo de estar de la víctima.
B) Aspecto patrimonial:
Como se señaló, en este rubro deben computarse los gastos efectuados al momento de dictarse
sentencia y los gastos futuros esperados derivados del daño moral. En el caso se demostró que
los padres de Víctima resintieron cuadros depresivos y a razón de ello se recomendó un
tratamiento psicológico y psiquiátrico por un periodo de tres años.
De esta manera, el Juez de primera instancia estableció que el costo de las sesiones
psicológicas y psiquiátricas oscilan entre $600.00 (seiscientos pesos 00/100 M.N) y
46
Acta de defunción 00906 que obra en el libro 005 de la oficialía 001, en Acapulco Guerrero, la cual
obra agregada como anexo 2 del legado de pruebas en el juicio ordinario civil *********/2011.
47
Acta de nacimiento, agregada como anexo 1 del legado de pruebas en el juicio ordinario civil
*********/2011.
48
Dictámenes periciales rendidos por el doctor Perito 2, perito designado por la parte actora en el
juicio de origen, el doctor Perito 3, perito designado por Admivac, y el doctor Perito 4, perito tercero
en discordia, se demostró que Madre Víctima y Padre Víctima, manifiestan afectaciones psicológicas
97
49
Pizarro, Ob. Cit, p. 631.
$1,200.00 (mil doscientos pesos 00/100 M.N), por lo que un costo promedio sería por la
cantidad de $900.00 (novecientos pesos 00/100 M.N), la cual tomándola como base
considerando dos terapias de cada una de las especialidades al mes para cada uno de los
actores, se obtiene la cantidad de: $259,200.00 (doscientos cincuenta y nueve mil
doscientos pesos 00/100 M.N).
Por lo que pueden cuantificarse las consecuencias patrimoniales derivadas del daño moral
en la suma de $259,200.00 (doscientos cincuenta y nueve mil doscientos pesos 00/100 M.N).
2) En la responsable:
i) El grado de responsabilidad.
Del resumen de hechos, así como de las pruebas con base en las cuales se mostró la negligencia
de la parte responsable, se acredita un alto grado responsabilidad de Admivac. En efecto, a la
luz de los deberes legales y de cuidado, que debía respetar la empresa, se considera que se afectó
la vida, no sólo de Víctima, sino que se puso en riesgo a los huéspedes del hotel; que se acreditó
una conducta negligente grave; y que los hechos que dieron lugar a los daños causados deben
tener repercusión social.
Primeramente, se demostró que la empresa incumplió con dar mantenimiento al lago artificial.
Resultaba imprescindible que el hotel diera mantenimiento a la bomba de agua que se encontraba
sumergida en el lago artificial. Es de la mayor gravedad que un artefacto eléctrico que está en un
medio húmedo estuviera en las condiciones que señala el dictamen técnico rendido por la propia
empresa. Es claro que de haberse atendido tal cuestión, hubiera sido evitada la muerte de Víctima,
pero además, la negligencia de Admivac puso en riesgo a los demás huéspedes del complejo
turístico.
Por otro lado, la empresa no contaba con protocolos de actuación ante situaciones de emergencia.
Ante la eventualidad, el personal del hotel se mostró totalmente incapacitado. La corriente eléctrica
no fue cortada sino transcurrido un periodo de 20 a 30 minutos después de que los afectados
cayeron al lago. Los salvavidas tuvieron que esperan a que Novia Víctima y Amiga Víctima 1
regresaran a la orilla para poder intentar rescatar a Víctima y a Amigo Víctima 1. Los primeros
auxilios que recibieron fueron por huéspedes del hotel. Tardaron más de 20 minutos en llevar a
Víctima a la clínica del hotel (agregados al tiempo en que fue rescatado). Se deprende asimismo
que el hotel no contaba con una ambulancia, y que ésta llegó en un periodo entre 30 y 40 minutos.
Además, debe destacarse que los sentimientos de angustia de las víctimas se vieron agravados
por la circunstancias en que ocurrió la muerte de su hijo, así como los eventos posteriores al trágico
evento.50 En efecto, se acreditó que la empresa no brindó un trato digno a los familiares de
Víctima, pues la médico del hotel no acompañó a las víctimas al nosocomio, a pesar de que
constató que no presentaba signos vitales en el momento en que llegó la ambulancia, no se le
informó a los paramédicos, permitiendo que se realizara su traslado a diversos nosocomios,
incrementando con ello la esperanza de los padres de Víctima de encontrarlo todavía con vida.
Asimismo de autos no se advierte que los familiares recibieran apoyo alguno posterior a la muerte
de su hijo.
Finalmente, debe ponderarse la alta relevancia social de las conductas y omisiones antes
descritas. Es de la mayor importancia que las empresas sean cuidadosas en cumplir con los
deberes de cuidado a su cargo. Al reprocharse severamente su negligencia, se persigue un fin
social y se colocan incentivos tendentes a proteger los derechos e intereses de todos sus
huéspedes.
Se considera que la Sala responsable no valoró en su justa dimensión diversos elementos que
llevan a concluir que la Empresa cuenta con una situación económica alta.
La Sala responsable tomó en cuenta los siguientes elementos para determinar la capacidad
económica de la empresa: (i) capital social; y (ii) contrato de prestación de servicios turísticos de
quince de diciembre de 2009, celebrado entre Sociedad 2 y Amigo Víctima 1.
De tales documentos estableció que no se evidenciaba una capacidad económica alta por parte
de la Empresa. Indicó que del contrato de prestación de servicios turísticos, se desprende que
este fue suscrito por la suma de $183,250 (ciento ochenta y tres mil doscientos cincuenta pesos
00/100 M.N) y que si bien de su contenido se desprende que el hotel forma parte de un
98
50
Foja 14 del dictamen del dictamen rendido por el doctor **********, perito tercero en discordia.
puede determinar una capacidad económica alta con base en dicho documento dado que pese a
señalar que el hotel forma parte de un gran conglomerado, la cantidad por la cual se suscribió no
es tan onerosa”. Por su parte, de la escritura pública ********* de 28 de abril de 2010, sólo se hace
evidente que el capital social de la empresa asciende a la cantidad de $500,000 (quinientos mil
pesos 00/100 M.N).
Ahora bien, de autos obran los siguientes documentos para fijar la capacidad económica de la
empresa:
• Se cobra la cuota de mantenimiento por el año en curso, por la cantidad de $10,275.00 (diez
mil doscientos setenta y cinco pesos 00/100 M.N)
• La empresa es legítima propietaria del hotel The Grand Mayan, Nuevo Vallarta.
• Son hoteles filiales: The Grand Mayan Nuevo Vallarta, The Grand Mayan Acapulco, The
Grand Mayan Riviera Maya, The Grand Mayan San José del Cabo, Mayan Palace Regency Nuevo
Vallarta, Mayan Palace Regency Acapulco, Mayan Palace Puerto Vallarta, Mayan Palace Puerto
Peñasco, Mayan Palace Ragency Mazatlán, Mayan Palace Ragency Riviera Maya, Garden Nuevo
Vallarta, Sea Garden Mazatlán y Sea Garden Acapulco.
• La empresa puede proporcionar los servicios de golf, club de tenis, gimnasio y spa.
Así contrario a lo manifestado por la Sala responsable dicho contrato no sólo representa que la
empresa obtiene un ingreso por un monto de $183,250.00 (ciento ochenta y tres mil doscientos
cincuenta pesos 00/100 M.N). Pues es evidente que éste sólo representa uno respecto de los
demás contratos que probablemente suscribe la empresa anualmente. Lo cual hace evidente que
las transacciones de la empresa superan por mucho, la cantidad del citado contrato.
De su contenido, se advierte que si bien el capital social original de la empresa fue por un monto
de $500,000 (quinientos mil pesos 00/100 M.N), éste fue aumentando mediante escrituras públicas
de 29 de abril de 1992, 19 de abril de 2001, 21 de mayo de 2004 y finalmente mediante escritura
51
Anexo 8 del legajo de pruebas en el juicio ordinario civil *********/2011.
99
52
Juicio Ordinario Civil *********/2011, tomo II, páginas 121-139.
Página
53
Juicio Ordinario Civil *********/2011, tomo II, páginas 492-497
pública número ********* de 26 de octubre de 2009, se estableció el aumento del capital social a la
cantidad de $10´000,000.00 (diez millones de pesos 00/100 M.N).
En ese sentido, resulta incorrecto que la Sala responsable tomara como monto del capital social
de ADMIVAC la cantidad de $500,000. (quinientos mil pesos 00/100 M.N) pues dicho monto sólo
corresponde al periodo en que inicio la empresa ya que su capital fue aumentando gradualmente
hasta constituirlo por la cantidad de $10´000,000.00 (diez millones de pesos 00/100 M.N).
Por otro lado debe precisarse que el capital social no refleja la situación económica de la
empresa responsable. En efecto, no es posible equiparar el patrimonio de la sociedad mercantil
con su capital social. No obstante la sociedad puede adquirir o perder bienes en la realización de
sus actividades, sin embargo dicha circunstancia no se refleja automáticamente en el capital social
de la empresa. Es decir, en tanto que el patrimonio es variable, mutable, desde que la sociedad
comienza a funcionar. El capital social, en cambio, permanece inalterable, constante, invariable,
mientras la sociedad no resuelva modificarlo.54
Por esa razón, la doctrina distingue entre el capital social y el capital contable, siendo que
el segundo sí es equiparable al patrimonio de la sociedad.55 En este mismo sentido se
pronunció esta Suprema Corte en la tesis de rubro: “SOCIEDADES, CAPITAL SOCIAL Y
CAPITAL CONTABLE DE LAS”.56
(iii) Hechos notorios.57 De acuerdo al citado contrato de servicios turísticos el hotel Mayan
Palace, se considera como un hotel de gran categoría en el ramo turístico, por su infraestructura,
además de que forma parte de un conglomerado de complejos turísticos vacacionales
internacionales.
Lo anterior también se puede verificar en el contenido de su página web. Mayan resort establece
que tiene los siguientes complejos turísticos: The Gran Mayan, Mayan Palace, Sea Garden, Mayan
Island, describiéndose como “extraordinarias instalaciones ubicadas frente a las mejores playas y
su espectacular arquitectura, lo han colocado como líder dentro del turismo en México por más de
30 años. Mayan Resorts ha redefinido el concepto de lujo vacacional, logrando que sea la mejor
opción para aquellos que desean experimentar las vacaciones de sus sueños”.
Beneficio económico que recibe la empresa por la actividad que ocasionó la muerte de
Víctima. Cobra particular importancia que a través de la prestación del servicio hotelero Admivac
recibe cuantiosos ingresos, los cuales pueden estimarse como muy altos, de acuerdo al contrato
de prestación de servicios antes detallado.
54
Soyla H. León Tovar y Hugo González García, p.408.
55
Soyla H. León Tovar y Hugo González García, p.407.
56
Tesis Aislada, publicada en el Semanario Judicial de la Federación, Tomo XCI, página 484, de
texto: “No debe confundirse el capital contable de una negociación, con el capital social de la misma,
pues no requieren las mismas formalidades para su aumento; por tanto, si las utilidades no retiradas
por los socios, fueran acumulándose en los años anteriores a aquel en que se finca la época de un
período controvertido y, por lo mismo, esas utilidades estuvieron en funciones de capital, siendo la
causa generadora de las utilidades, es indudable que permanecerán dentro del capital contable y
deben aceptarse como parte del activo de la negociación.”
57
El Tribunal Pleno ha establecido que “por hechos notorios deben entenderse, en general, aquellos
que por el conocimiento humano se consideran ciertos e indiscutibles, ya sea que pertenezcan a la
historia, a la ciencia, a la naturaleza, a las vicisitudes de la vida pública actual o a circunstancias
comúnmente conocidas en un determinado lugar, de modo que toda persona de ese medio esté en
condiciones de saberlo; y desde el punto de vista jurídico, hecho notorio es cualquier acontecimiento
de dominio público conocido por todos o casi todos los miembros de un círculo social en el momento
en que va a pronunciarse la decisión judicial, respecto del cual no hay duda ni discusión; de manera
100
que al ser notorio la ley exime de su prueba, por ser del conocimiento público en el medio social
donde ocurrió o donde se tramita el procedimiento. Lo anterior se desprende de la tesis de rubro:
“HECHOS NOTORIOS. CONCEPTOS GENERAL Y JURÍDICO”. [Tesis: P./J. 74/2006. Localizable
Página
en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, tomo XXIII, Junio de 2006, página 963]
Respecto a la responsable, se estableció que su grado de responsabilidad fue grave, pues
puso en riesgo la vida e integridad física, no sólo de Víctima, sino potencialmente de todos sus
huéspedes; se acreditó un alto grado de negligencia; y se justificó la alta relevancia social de
las actividades que realiza la empresa. Además, se considera que Admivac se beneficia
económicamente de las actividades que, al haberse desempeñado negligentemente llevaron a la
muerte del joven, y que dicha empresa tiene una alta capacidad económica.
En tal sentido, dada la grave afectación a los derechos de las víctimas, el alto grado de
responsabilidad de Admivac y su alta capacidad económica, el quantum de la
indemnización debe ser igualmente severo. Por tanto, esta Primera Sala considera que fue
incorrecto el monto de indemnización determinado por la Sala responsable, sin embargo, ello no
se realizó en perjuicio de la parte quejosa.
Una vez establecido que se afectaron los sentimientos y afectos de los actores de
manera ilícita, debe resolverse si tal daño moral está relacionado con el derecho a la justa
indemnización.
…
En específico, respecto al derecho a una justa indemnización, esta Primera Sala en el
Amparo Directo en Revisión 1068/2011, resolvió que dicho derecho tiene vigencia en las
relaciones entre particulares.58
Por tanto, puede decirse que aun cuando la relación que ahora se analiza es de índole
civil, la reparación al daño moral que se fije deberá analizarse desde el derecho a la justa
indemnización, el cual se encuentra consagrado en los artículos 1° constitucional y 63.1 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos.59
58
Amparo Directo en Revisión 1068/2011 resuelto por la Primera Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, en sesión del 19 de octubre de 2011, por unanimidad de cinco votos de los
101
Ministros Jorge Mario Pardo Rebolledo (ponente), José Ramón Cossío Díaz, Guillermo I. Ortiz
Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Página
59
Artículo 1.- […]
Este derecho ha sido ampliamente desarrollado por la Corte Interamericana de Derechos
Humanos. Dicho tribunal en diversos precedentes ha establecido que es un principio de Derecho
Internacional que toda violación de una obligación internacional que haya producido un daño
comporta el deber de repararlo adecuadamente.60
53. La Corte pasa a considerar aquellos efectos nocivos de los hechos del caso que no tienen
carácter económico o patrimonial y que no pueden ser tasados, por ende, en términos monetarios.
El mencionado daño inmaterial puede comprender tanto los sufrimientos y las aflicciones causados
a las víctimas directas y a sus allegados, el menoscabo de valores muy significativos para las
personas, otras perturbaciones que no son susceptibles de medición pecuniaria, así como las
alteraciones de condiciones de existencia de la víctima o su familia. Es una característica común
a las distintas expresiones del daño inmaterial el que, no siendo posible asignárseles un preciso
equivalente monetario, solo puedan, para los fines de la reparación integral a las víctimas, ser
objeto de compensación, y ello de dos maneras. En primer lugar, mediante el pago de una
cantidad de dinero o la entrega de bienes o servicios apreciables en dinero, que el Tribunal
determine en aplicación razonable del arbitrio judicial y en términos de equidad. Y, en segundo
lugar, mediante la realización de actos u obras de alcance o repercusión públicos que tengan
efectos como la recuperación de la memoria de las víctimas, el restablecimiento de su dignidad, la
consolación de sus deudos o la transmisión de un mensaje de reprobación oficial a las violaciones
de los derechos humanos de que se trata y de compromiso con los esfuerzos tendientes a que no
vuelvan a ocurrir.61
Por lo tanto, en el presente caso se deberá partir del derecho a recibir una “justa
indemnización”, para determinar la debida compensación en tratándose de los daños ocasionados
en los sentimientos de las personas. Lo cual significa que la reparación debe cumplir con los
estándares que dicho derecho establece.
Artículo 63.1.- Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en esta
Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o libertad
conculcados. Dispondrá asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las consecuencias de
la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos y el pago de una justa
indemnización a la parte lesionada.
Caso Kawas Fernández Vs. Honduras. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 3 de abril
60
de 2009 Serie C No. 196, párr. 156. Caso Velásquez Rodríguez Vs. Honduras. Reparaciones y
Costas. Sentencia de 21 de julio de 1989. Serie C No. 7, párr. 25. Caso Ríos y otros Vs. Venezuela.
Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 28 de enero de 2009.
Serie C No. 194, párr. 395. Caso Perozo y otros Vs. Venezuela. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 28 de enero de 2009. Serie C No. 195, párr. 404.
61
Caso Cantoral Benavides Vs. Perú. Reparaciones y Costas. Sentencia de 3 de diciembre de
2001. Serie C No. 88, párr. 53.
102
62
Amparo Directo en Revisión 1068/2011 resuelto por la Primera Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, en sesión del 19 de octubre de 2011, por unanimidad de cinco votos de los
Ministros Jorge Mario Pardo Rebolledo (ponente), José Ramón Cossío Díaz, Guillermo I. Ortiz
Página
Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Presidente Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
indemnización, la víctima obtiene la satisfacción de ver sus deseos de justicia cumplidos. 63 Así,
mediante la compensación la víctima puede constatar que los daños que le fueron ocasionados
también tienen consecuencias adversas para el responsable.
Por otro lado, dichos daños tienen el objeto de prevenir hechos similares en el
futuro. Se trata de imponer incentivos negativos para que se actúe con la diligencia debida,
sobretodo en tratándose de empresas que tienen como deberes el proteger la vida e
integridad física de sus clientes. A través de dichas sanciones ejemplares se procura una
cultura de responsabilidad, en la que el desatender los deberes legales de cuidado tiene un
costo o consecuencia real.
Por otro lado, una indemnización insuficiente, provoca que las víctimas sientan
que sus anhelos de justicia son ignorados o burlados por la autoridad, por lo que, se le
acrecienta el daño (no reparado) y se acaba revictimizando a la víctima, violándose de esta
forma el derecho a una “justa indemnización”.
Ahora, esta Primera Sala considera que el carácter punitivo de la reparación del
daño moral también puede derivarse desde una interpretación literal y teleológica del
artículo 1916 del Código Civil para el Distrito Federal.
El artículo 1916 del Código Civil para el Distrito Federal dispone que: “Cuando un
hecho u omisión ilícitos produzcan un daño moral, el responsable del mismo tendrá la
obligación de repararlo mediante una indemnización en dinero” y que para determinar el
monto de la indemnización se debe tomar en cuenta: “los derechos lesionados, el grado
de responsabilidad, la situación económica del responsable, y la de la víctima, así como las
demás circunstancias del caso (el énfasis es agregado)”.
Por lo tanto, dicho artículo establece el derecho a recibir una indemnización por el
daño moral resentido. Pero, por otro lado, obliga a que en la determinación de la
“indemnización”, se valoren, entre otras circunstancias, los derechos lesionados, el grado
de responsabilidad y la situación económica de la responsable (más adelante se determinará
en qué sentido se debe valorar la situación económica de la víctima).
63
Owen, David W. Punitive damages in products liability litigation, “Michigan Law Review”, 1976,
june, vol. 74, n°7, p. 1279.
64
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
65
Owen, Ob. Cit., p. 1285.
66
Pizarro, Ob. Cit, pp. 521-552; Owen, David G., Ob. Cit.,Owen, David G., The Moral
Foundations of Punitive Damages, “Alabama Law Review”, 1988, 40, p. 705; Morgan, The
evolution of punitive damages in product liability litigation for unprincipled marketing behavior,
“Journal de Public Policy & Marketing”, 1989n n° 8, p. 279; O’Donnell, Punitive damages in
Florida negligence cases: How much negligence is enough?, “University of Miami Law Review”,
n° 42, p. 803
103
67
Íbid., p. 1281
Página
68
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
atendiendo al bien jurídico lesionado y a la gravedad de la conducta de la responsable. Es
decir, el juez no debe solamente considerar en su condena aquellos aspectos necesarios
para borrar, en la medida de lo posible, el daño sufrido por la víctima, sino que existen
agravantes que deberán ponderarse en el quantum de la indemnización.
Tal fue el caso que genera la sentencia analizando del tan sonado asunto Mayan
Palace en donde la negligencia del Hotel constituyó en la muerte de un menor que
generó un daño moral que tuvo que contemplarse desde el daño punitivo para que de
esa manera las empresas dedicadas a ese tipo de servicios de hotelería contemplaran
que no se volvieran a cometer actos agrestes a derechos de las personas.
69
En este sentido hay doctrinarios que sostienen que si el daño es dolor físico o psicológico, la
104
indemnización debe limitarse a contribuir a sobrellevar tal dolor, sin ir más allá. Por lo tanto, en su
criterio, no deberían tomarse en cuenta ampliaciones a la indemnización del daño, como lo serían
el lucro cesante, la pérdida de los placeres de la vida, el daño de disfrute u otros criterios similares.
Página
Artículo 1916.- Por daño moral se entiende la afectación que una persona sufre
en sus sentimientos, afectos, creencias, decoro, honor, reputación, vida
privada, configuración y aspectos físicos, o bien en la consideración que de sí
misma tienen los demás. Se presumirá que hubo daño moral cuando se vulnere
o menoscabe ilegítimamente la libertad o la integridad física o psíquica de las
personas.
siempre ha sido parte de la regulación civil aplicable, esto lo explica el siguiente criterio:
Página
DAÑOS PUNITIVOS. ENCUENTRAN SU FUNDAMENTACIÓN LEGAL EN EL ARTÍCULO 1916
DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL.El carácter punitivo de la reparación del daño
se deriva de una interpretación literal y teleológica del artículo 1916 del Código Civil para el Distrito
Federal. Dicho artículo dispone que en la determinación de la "indemnización", se valoren, entre
otras circunstancias, los derechos lesionados, el grado de responsabilidad y la situación económica
de la responsable. De esta forma, el juez no debe solamente considerar en su condena aquellos
aspectos necesarios para borrar, en la medida de lo posible, el daño sufrido por la víctima, sino
que existen agravantes que deberán ponderarse en el quántum de la indemnización. Como se
puede observar, este concepto no busca únicamente reparar el daño en los afectos de la víctima,
sino que permite valorar el grado de responsabilidad de quien causó el daño. Tal conclusión
también se deriva de los antecedentes legislativos que dieron lugar a la reforma publicada en el
Diario Oficial de la Federación el 31 de diciembre de 1982. 1a. CCLXXI/2014 (10a.) Amparo directo
30/2013. J. Ángel García Tello y otra. 26 de febrero de 2014. Cinco votos de los Ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto concurrente, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo,
quien formuló voto concurrente. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Ana María
Ibarra Olguín. Amparo directo 31/2013. Admivac, S.A. de C.V. 26 de febrero de 2014. Mayoría de
cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente: Jorge Mario Pardo
Rebolledo, quien formuló voto particular. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Ana
María Ibarra Olguín. Esta tesis se publicó el viernes 11 de julio de 2014 a las 8:25 horas en el
Semanario Judicial de la Federación. Instancia: Primera Sala. Fuente: Gaceta del Semanario
Judicial de la Federación, Décima Epoca. Libro 8, Julio de 2014. Pág. 143. Tesis Aislada.
Fojas 52 y 53
Fojas 87 y 88
70
“En la sentencia del Tribunal Supremo de 18 de febrero de 1997, se dice que sería erróneo
considerar que si el perjudicado ha fundamentado su demanda de indemnización sólo en normas
de responsabilidad extracontractual o sólo en normas de responsabilidad contractual, el órgano
jurisdiccional incurre en incongruencia por cambio de la causa de pedir si funda la decisión en
normas distintas de las invocadas, de suerte que la causa pretendi que con el petitum configuran
la pretensión procesal se define por el relato de hechos y no por la fundamentación jurídica, que,
en casos de culpa, no vincula al Tribunal ni en la calificación de la relación jurídica controvertida, ni
en las normas de aplicación, de manera que el órgano jurisdiccional actúa dentro de los límites de
la congruencia, aunque cambie el punto de vista jurídico” Bello Janeiro, Domingo, Cuestiones
Actuales de Responsabilidad Civil, Madrid, 2009, p. 231.
71
Sentencia del Tribunal Supremo Español, de 24 de julio de 1964, p.
106
253.
Página
72
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
doble función: ya que las personas evitaran causar daños para evitar tener que
pagar una indemnización, por otra parte, resultará conveniente desde un punto de
vista económico sufragar todos los gastos necesarios para que evitar causar daños
a otras personas.73
Por otro lado, dichos daños tienen el objeto de prevenir hechos similares en el
futuro. Se trata de imponer incentivos negativos para que se actúe con la diligencia
debida, sobretodo en tratándose de empresas que tienen como deberes el
proteger la vida e integridad física de sus clientes. A través de dichas sanciones
ejemplares se procura una cultura de responsabilidad, en la que el desatender los
deberes legales de cuidado tiene un costo o consecuencia real.
Por otro lado, una indemnización insuficiente, provoca que las víctimas sientan que
sus anhelos de justicia son ignorados o burlados por la autoridad, por lo que, se le
acrecienta el daño (no reparado) y se acaba revictimizando a la víctima, violándose
de esta forma el derecho a una “justa indemnización”.
Fojas 90 y 91
73
Owen, David G., Ob. Cit., p. 1285.
74
Pizarro, Ob. Cit, pp. 521-552; Owen, David G., Ob. Cit.,Owen, David G., The Moral Foundations
of Punitive Damages, “Alabama Law Review”, 1988, 40, p. 705; Morgan, The evolution of punitive
damages in product liability litigation for unprincipled marketing behavior, “Journal de Public Policy
& Marketing”, 1989n n° 8, p. 279; O’Donnell, Punitive damages in Florida negligence cases: How
much negligence is enough?, “University of Miami Law Review”, n° 42, p. 803.
75
Íbid., p. 1281
76
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
77
En este sentido hay doctrinarios que sostienen que si el daño es dolor físico o psicológico, la
107
indemnización debe limitarse a contribuir a sobrellevar tal dolor, sin ir más allá. Por lo tanto, en su
criterio, no deberían tomarse en cuenta ampliaciones a la indemnización del daño, como lo serían
el lucro cesante, la pérdida de los placeres de la vida, el daño de disfrute u otros criterios similares.
Página
Finalmente, debe decirse que una indemnización que tenga en cuenta además del
daño sufrido, el grado de responsabilidad del causante, no enriquece injustamente
a la víctima. En efecto, el enriquecimiento ilegítimo tiene como presupuesto que
no exista alguna causa legítima para enriquecerse,78 siendo que en el caso la
compensación se encuentra plenamente justificada a partir del derecho a una justa
indemnización.
Dicho derecho ordena que todas las personas que sufran daños sean resarcidas
integralmente, por lo tanto, si al tomar en cuenta el grado de responsabilidad del
causante se busca resarcir plenamente a la víctima, dicha indemnización se
encontrará plenamente justificada. Siendo que, por otra parte, mediante la
indemnización se logren fines sociales deseables.
Foja 94
Fojas 90 y 91
78
Artículo 1882 (Código Civil para el Distrito Federal).- El que sin causa se enriquece en
detrimento de otro, está obligado a indemnizarlo de su empobrecimiento en la medida que él se ha
Página
enriquecido.
aquellos aspectos necesarios para borrar, en la medida de lo posible, el daño
sufrido por la víctima, sino que existen agravantes que deberán ponderarse en el
quantum de la indemnización.
Finalmente, debe decirse que una indemnización que tenga en cuenta además del
daño sufrido, el grado de responsabilidad del causante, no enriquece injustamente
a la víctima. En efecto, el enriquecimiento ilegítimo tiene como presupuesto que
no exista alguna causa legítima para enriquecerse,80 siendo que en el caso la
compensación se encuentra plenamente justificada a partir del derecho a una justa
indemnización.
Dicho derecho ordena que todas las personas que sufran daños sean resarcidas
integralmente, por lo tanto, si al tomar en cuenta el grado de responsabilidad del
causante se busca resarcir plenamente a la víctima, dicha indemnización se
encontrará plenamente justificada. Siendo que, por otra parte, mediante la
indemnización se logren fines sociales deseables.
Foja 94
79
En este sentido hay doctrinarios que sostienen que si el daño es dolor físico o psicológico, la
indemnización debe limitarse a contribuir a sobrellevar tal dolor, sin ir más allá. Por lo tanto, en su
criterio, no deberían tomarse en cuenta ampliaciones a la indemnización del daño, como lo serían
el lucro cesante, la pérdida de los placeres de la vida, el daño de disfrute u otros criterios similares.
Ver Díez-Picazo, Ob. Cit., p. 240.
109
80
Artículo 1882 (Código Civil para el Distrito Federal).- El que sin causa se enriquece en
detrimento de otro, está obligado a indemnizarlo de su empobrecimiento en la medida que él se ha
Página
enriquecido.
cuantificar sus consecuencias patrimoniales. A su vez, atendiendo a la literalidad
del precepto ahora analizado y a la intención del legislador, en la determinación
del quantum compensatorio también deberá valorarse el grado de responsabilidad
de la parte demandada, así como el aspecto social del daño causado, esto es, la
relevancia o implicaciones sociales que pueda tener el hecho ilícito.
Parámetros del caso particular que esta H. Autoridad debe considerar para la
cuantificación del daño moral en su faceta resarcitoria y punitiva.
Es entonces pertinente, habiendo transcrito la parte medular de la sentencia que se
analizó lo siguiente:
Respecto a la víctima:
psicológica).
Debemos recordar que la calificación de la conducta del Sistema de Transporte
Colectivo se hace en un ámbito estrictamente Civil, bajo la regulación que le
correspondería a un particular, por ello también puede ser condenada al concepto de
daños punitivos.
Criterios aplicables:
existencia o no de un vínculo previo entre las partes; de manera que este segundo
tipo de responsabilidad, puede derivar de cualquier causa establecida en la ley, ya
sea que se tome en consideración el hecho ilícito general que implica la infracción de
un deber, o bien, cuando sin ninguna ilicitud se produce un hecho dañoso, que coloca
al agente en la obligación de repararlo, por mandato expreso de la ley, resultando así
lo que se conoce como responsabilidad objetiva. La responsabilidad extracontractual
nace de un daño producido a una persona sin que exista una relación jurídica
convenida entre el autor del daño y el perjudicado; misma que puede derivar de un
hecho propio, de hechos ajenos, por daños de animales o por las cosas que se
poseen. Entre los elementos delimitadores de la responsabilidad civil extracontractual,
el relativo a su distinción con la responsabilidad contractual alcanza un relieve
particular, pues ésta tiene su presupuesto en el incumplimiento, o en el cumplimiento
inexacto o parcial de las obligaciones derivadas de un contrato, a consecuencia de lo
cual queda insatisfecho el derecho de crédito convencional y, además,
eventualmente, es causa de un daño o perjuicio adicional o suplementario para el
acreedor. Por su parte, la responsabilidad extracontractual tiene como presupuesto la
causación de un daño sin que entre los sujetos involucrados exista una relación
contractual previa, o preexistiendo ésta, el daño es ajeno al ámbito que le es propio.
Esa distinción conduce a la existencia de regímenes diversos para esos tipos de
responsabilidad, en tanto que, sin dejar de lado la responsabilidad objetiva, además
de la declaración unilateral de voluntad, el enriquecimiento ilegítimo y la gestión de
negocios, de manera paralela se regula el hecho ilícito como fuente autónoma de
obligaciones, en su vertiente de derechos de crédito indemnizatorios, y se regula
también el incumplimiento de las obligaciones que derivan de un contrato o convenio,
es decir, derechos de crédito convencionales. El Código Civil Federal contempla un
sistema de responsabilidad civil que abarca la responsabilidad contractual y la
responsabilidad extracontractual.QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA
CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO.I.5o.C.55 C (10a.)Amparo directo 740/2010.
Spectrasite Communications, Inc. 15 de diciembre de 2011. Unanimidad de votos.
Ponente: María Soledad Hernández Ruiz de Mosqueda. Secretario: Ricardo Mercado
Oaxaca.Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Fuente: Semanario Judicial de
la Federación y su Gaceta, Décima Epoca. Libro XXIII, Agosto de 2013. Pág. 1721.
Tesis Aislada.
Esta sanción debe ser precisada principalmente en lo que respecto a los daños
punitivos (Sanción disuasiva), es decir generar sanciones ejemplares para que este tipo
de tratos agresivos a la dignidad humana no se repitan, así que como ya explicamos
que la simple violación a cualquier derecho humano genera un daño inmaterial (moral)
como la agresión que se acredita en los hechos y pruebas, atendamos principalmente
lo que el novedoso derecho de daños denomina daños punitivos o el estímulo negativo
o disuasivo de la conducta, a saber:
Como una medida de prevención para daños ocasionados principalmente por personas
morales con amplias condiciones de riesgo según su giro, la Suprema Corte de
Justicia de la Nación ha dejado un precedente respecto a la viabilidad y exigencia de
condena por el concepto de DAÑOS PUNITIVOS, mismos que constituyen una condena
elevada en términos económicos, para que dicho comportamiento que generó el daño
no vuelva a suceder y las empresas se vean obligadas, dado el elevado costo que les
generaría recibir condenas por este concepto, a cumplir como su obligación legal de
vigilar, prevenir y con ello evitar negligencias y así evitar la ocurrencia de siniestros
como el que se expone en el presente asunto que se adecua perfectamente a la
hipótesis que genera la sentencia de la SCJN para la condena de daños punitivos, pues
el asunto trata de un evento por falta de pericia, atención y vigilancia.
En sentencia de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
correspondiente al día veintiséis de febrero de dos mil catorce respecto del
Amparo Directo 31/2014 relacionado con el Amparo Directo 30/2013, en donde la
parte quejosa es ADMIVAC SOCIEDAD ANÓMIMA (Hotel Mayan Palace Acapulco)
bajo la ponencia del Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea y la Secretaria Ana
María Ibarra Olguín, se resolvió en sus partes medulares y que nos atañen a la
presente, lo siguiente que analizaremos.
…
81
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
82
Owen, Ob. Cit., p. 1285.
83
Pizarro, Ob. Cit, pp. 521-552; Owen, David G., Ob. Cit.,Owen, David G., The Moral Foundations
114
of Punitive Damages, “Alabama Law Review”, 1988, 40, p. 705; Morgan, The evolution of punitive
damages in product liability litigation for unprincipled marketing behavior, “Journal de Public Policy
& Marketing”, 1989n n° 8, p. 279; O’Donnell, Punitive damages in Florida negligence cases: How
Página
84
Íbid., p. 1281
Página
85
Pizarro, Ob. Cit., p. 532.
determinará en qué sentido se debe valorar la situación
económica de la víctima).
86
En este sentido hay doctrinarios que sostienen que si el daño es dolor físico o psicológico, la
indemnización debe limitarse a contribuir a sobrellevar tal dolor, sin ir más allá. Por lo tanto, en su
criterio, no deberían tomarse en cuenta ampliaciones a la indemnización del daño, como lo serían el
lucro cesante, la pérdida de los placeres de la vida, el daño de disfrute u otros criterios similares. Ver
Díez-Picazo, Ob. Cit., p. 240.
116
87 https://www.congresocdmx.gob.mx/comsoc-emite-comision-movilidad-sustentable-opinion-positivo-sobre-
proyecto-presupuesto-egresos-ejercicio-fiscal-2021-2127-1.html
Página
Emite Comisión de Movilidad Sustentable opinión en positivo sobre proyecto de
Presupuesto de Egresos para el Ejercicio Fiscal 2021
Los integrantes de la Comisión de Movilidad Sustentable del Congreso de la Ciudad
de México aprobaron, con seis votos a favor, dos en contra y una abstención, la opinión
en positivo al proyecto de Presupuesto de Egresos para el Ejercicio Fiscal 2021
enviado por el Gobierno de la Ciudad de México, en el cual se contempla una
economía de 21 mil 195 millones de pesos para el sector de movilidad en su
conjunto.
De acuerdo con la propuesta enviada por el Ejecutivo local con este monto se
continuará con proyectos de infraestructura vial y de transporte masivo, por ejemplo,
la ampliación de la Línea 12 del Metro en su tramo Mixcoac-Observatorio; la
construcción del Tren Interurbano de pasajeros Toluca-Valle de México; la
ampliación de la Línea 4 del Metrobús; construcción de las Líneas 1 y 2 del
Cablebús, y mejoramiento del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
Otros proyectos que se contemplan realizar son: la construcción de la ruta de trolebús
en Ermita Iztapalapa; mejoramiento en el circuito Interior; modernización de los trenes
de la Línea 1 del Metro; construcción de ciclovías; construcción de
biciestacionamientos; mantenimiento de la infraestructura vial; adecuación de cruces
conflictivos en las vías primarias y mantenimiento de la carpeta asfáltica, entre otros.
Unanimidad de votos. Ponente: Carlos Arteaga Álvarez. Secretario: Jorge Alberto Camacho
Pérez. Amparo directo 77/2008. 10 de octubre de 2008. Unanimidad de votos. Ponente: Carlos
Página
Arteaga Álvarez. Secretario: José Martín Lázaro Vázquez. Amparo directo 74/2008. 10 de
octubre de 2008. Unanimidad de votos. Ponente: Carlos Arteaga Álvarez. Secretario: Jorge
Alberto Camacho Pérez. Amparo directo 355/2008. 16 de octubre de 2008. Unanimidad de
votos. Ponente: Antonio Artemio Maldonado Cruz, secretario de tribunal autorizado por la
Comisión de Carrera Judicial del Consejo de la Judicatura Federal para desempeñar las
funciones de Magistrado. Secretario: Rolando Meza Camacho. Amparo directo 968/2007. 23
de octubre de 2008. Unanimidad de votos. Ponente: Marta Olivia Tello Acuña. Secretaria: Elvia
Aguilar Moreno. Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Fuente: Semanario Judicial de
la Federación y su Gaceta, Novena Epoca. Tomo XXIX, Enero de 2009. Pág. 2470. Tesis de
Jurisprudencia.
También aplicable:
Aplicables:
daños para evitar tener que pagar una indemnización y, por otra, resultará
conveniente desde un punto de vista económico sufragar todos los gastos
necesarios para evitar causar daños a otras personas. A dicha faceta del derecho
de daños se le conoce como "daños punitivos" y se inscribe dentro del derecho a
una "justa indemnización".1a. CCLXXII/2014 (10a.) Amparo directo 30/2013. J.
Ángel García Tello y otra. 26 de febrero de 2014. Cinco votos de los Ministros
Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto
concurrente, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto concurrente. Ponente:
Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Ana María Ibarra Olguín. Amparo
directo 31/2013. Admivac, S.A. de C.V. 26 de febrero de 2014. Mayoría de cuatro
votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz,
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular. Ponente:
Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Ana María Ibarra Olguín. Esta tesis se
publicó el viernes 11 de julio de 2014 a las 8:25 horas en el Semanario Judicial de
la Federación. Instancia: Primera Sala. Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de
la Federación, Décima Epoca. Libro 8, Julio de 2014. Pág. 142. Tesis Aislada.
En caso de no estar acorde con estos criterios a explicarnos los motivos por los cuales
no estaría de acuerdo lo que no hace en la especie, aplicable el siguiente criterio de
aplicación obligatoria:
TESIS DE JURISPRUDENCIA, AISLADAS O PRECEDENTES INVOCADOS EN
LA DEMANDA DE AMPARO. CORRESPONDE AL ÓRGANO JURISDICCIONAL
119
Por tanto en lo que a este apartado se refiere se debe tomar en cuenta para la
cuantificación del daño moral (en su faceta resarcitoria y principalmente punitiva)
derivado de la responsabilidad extracontractual y el impacto disuasivo de la conducta la
capacidad económica del responsable que se encuentra acreditado, pues como refiere
el criterio de daños punitivos, si bien es cierto, este no se circunscribe dentro del sistema
reparatorio de derechos humanos, si es una prestación civil que resulta procedente al
caso, la cual puede tomarse en cuenta para impulsar una condena ejemplar en el rubro
de daño moral tal como lo hizo la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación en el asunto multicitado Admivac, en el cual condeno a dicha moral por concepto
de daño moral en su faceta resarcitoria (que forma parte de la naturaleza del derecho
humano a la reparación integral del daño y justa indemnización) y en su faceta punitiva
(la cual entendemos como previamente se señalo, es una prestación de carácter civil).
Artículo 1915.-La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido en el
restablecimiento de la situación anterior, cuando ello sea posible, o en el pago de
daños y perjuicios.
88
Artículo 1o.En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en
esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías
para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta
Constitución establece.
Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad con esta Constitución y con los tratados
internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia.
121
Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar
los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad.
En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en
Página
Cuando el daño que cause a las personas produzca la muerte o incapacidad total
permanente, la indemnización de orden económico consistirá en el pago de una
cantidad de dinero equivalente a mil cuatrocientos sesenta días de salario, sueldo
o utilidad que percibía la víctima.
Cuando esos ingresos excedan del cuádruplo del salario mínimo general vigente
en el Estado, no se tomará el excedente para fijar la indemnización.
Si los peritos carecen de bases suficientes para fundar su opinión, lo mismo que
en el caso de que la víctima no disfrutara sueldo, salario o no desarrollare actividad
alguna, la indemnización se calculará sobre la base del salario mínimo general en
el lugar en que se realice el daño.
Lo anterior por tratarse de premisas contrarias a la reparación integral del daño y justa
indemnización, tomando en consideración que la muerte de una persona por sus
condiciones de vida o entidad federativa, no puede valer menos que diversa que tiene
mejores oportunidades y que vive por ejemplo en la Ciudad de México, además de lo
anterior, hasta antes de la reforma del Código Civil Federal en el apartado respectivo
de indemnización por muerte, existieron condenas reparatorias por parte de los
Tribunales Federales con empatía en el texto vigente del artículo 1915 del Código Civil
para el Distrito Federal, y lo anterior es evidente pues su contenido era similar:
Código Civil Federal antes de la Reforma del 19 de enero del año 2018
Artículo 1915.- La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido en el
restablecimiento de la situación anterior, cuando ello sea posible, o en el pago de
daños y perjuicios.
cuádruplo del salario mínimo diario más alto que esté en vigor en la región y se
extenderá al número de días que para cada una de las incapacidades
mencionadas señala la Ley Federal del Trabajo. En caso de muerte la
indemnización corresponderá a los herederos de la víctima.
Artículo 1915.La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido en el
restablecimiento de la situación anterior, cuando ello sea posible, o en el pago de
daños y perjuicios.
Es por lo anterior reiteramos la solicitud para el caso de que se aplique el control difuso
de constitucionalidad de los artículos citados al inicio del presente capitulo,
específicamente por ser incompatibles con el artículo 1° Constitucional al no garantizar
la reparación integral del daño a consecuencia de violaciones a los derechos humanos
de las víctimas, en consecuencia dichos preceptos normativos deben ser inaplicados
por ser inconstitucionales, luego entonces, solicitamos a su Usía, que al presente
asunto le sea aplicable la hipótesis que contiene el Código Civil para el Distrito Federal
(la cual incluso ha sido materia de análisis, interpretación y aplicación en diversas
sentencias emitidas dentro del sistema jurídico mexicano, elementos que fueron
utilizados como fundamentos para determinar la indemnización por fallecimiento de una
persona, por lo cual ahora tomar en cuenta distintos elementos sería agreste al derecho
humano a la reparación integral del daño, maxime que los juzgadores en armonía con
el principio pro persona y de interpretación conforme, deben buscar aquella
interpretación que le sea más favorable a la persona), la cual es clara en el sentido de
que tratándose de fallecimiento se debe atender a la premisa de la Ley Federal del
Trabajo con la particularidad que el salario mínimo debe multiplicarse por cuatro, según
el artículo 191589 de dicho cuerpo de leyes, por tanto, la referencia hacia la Ley federal
89
Artículo 1915. La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido en el restablecimiento de la situación
anterior, cuando ello sea posible, o en el pago de daños y perjuicios.
123
Cuando el daño se cause a las personas y produzca la muerte, incapacidad total permanente, parcial permanente, total
temporal o parcial temporal, el grado de la reparación se determinará atendiendo a lo dispuesto por la Ley Federal del
Página
Trabajo. Para calcular la indemnización que corresponda se tomará como base el cuádruplo del salario mínimo diario más
alto que esté en vigor en el Distrito Federal y se extenderá al número de días que, para cada una de las incapacidades
del Trabajo obliga, en atención al presente caso, en aplicar el artículo 502 de la Ley
Federal del Trabajo es decir la indemnización por muerte se debe multiplicar por 5000
días de salario mínimo diario más alto 90, por tanto, los elementos para elaborar el
cálculo son:
a) Salario Mínimo diario más alto, al momento que ocurrieron los hechos (Mayo 2021),
REPORTERO GRÁFICO EN PRENSA DIARIA IMPRESA 91, así lo informa la
Comisión Nacional de Salarios Mïnimos $ 317.29 (Trescientos diecisiete pesos
29/100) x cuatro, da un total de $1,269.16 (Un Mil doscientos veintinueve 16/100)
la unidad para el cálculo.
b) 5000 días por expresión del artículo 502 LFT, así pues:
SALARIO MÍNIMO MAS X4 X5000 DÍAS
ALTO Reportero(a) en
prensa diaria impresa /
Reportero(a) gráfico(a) en
prensa diaria impresa
Total $ 6,345,800.00
mencionadas, señala la Ley Federal del Trabajo. En caso de muerte la indemnización corresponderá a los herederos de
la víctima.
…
90
Época: Novena Época Registro: 167246 Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Tipo de Tesis: Aislada Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta Tomo XXIX, Mayo de 2009 Materia(s): Civil Tesis: I.7o.C.130 C Página:
1062
INDEMNIZACIÓN POR REPARACIÓN DEL DAÑO. EL SALARIO MÍNIMO DIARIO PREVISTO POR EL ARTÍCULO 1915
DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL, PARA CALCULARLA, ES EL PROFESIONAL MÁS ALTO. El
artículo 123 constitucional menciona dos tipos de salarios mínimos: general, según el área geográfica para el cual se
establezca; y, profesional, en función de la actividad que se desempeñe. El artículo 1915 del Código Civil para el Distrito
Federal sólo se refiere al "salario mínimo diario más alto que esté en vigor en el Distrito Federal", sin especificar si se trata
del general o del profesional en dicha entidad. Entonces, no tendría sentido que el legislador hubiera precisado que se
trate del salario mínimo más alto, pues en el área geográfica del Distrito Federal rige tan sólo uno de esta especie.
Consecuentemente, es incorrecto sostener que dicho salario deba ser el general. En cambio, una interpretación congruente
con la Constitución Federal lleva a concluir que la expresión del artículo sobre el salario "más alto", tiene como presupuesto
lógico necesario la existencia de al menos dos tipos de ellos para elegir el superior. Por lo tanto, para calcular la
indemnización a que se refiere el precepto 1915, debe considerarse el profesional, que normalmente es más cuantioso en
comparación con el general. Ahora, la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos es el órgano constitucional para
establecer la aplicación de los mismos, tanto generales como profesionales; en consecuencia, del catálogo de profesiones
y el salario mínimo que corresponde a cada una de ellas según esa comisión, el salario que debe considerarse para la
indemnización en cuestión debe ser el profesional más alto, pues el artículo 1915 en comento no hace distinción alguna al
respecto. SÉPTIMO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO. Amparo en revisión 84/2009.
Autobuses de Oriente ADO y otra. 23 de abril de 2009. Unanimidad de votos. Ponente: Julio César Vázquez-Mellado
García. Secretario: Benjamín Garcilazo Ruiz. Nota: Por ejecutoria del 15 de noviembre de 2016, el Pleno en Materia Civil
del Primer Circuito declaró inexistente la contradicción de tesis 21/2016 derivada de la denuncia de la que fue objeto el
criterio contenido en esta tesis, al estimarse que no son discrepantes los criterios materia de la denuncia respectiva.
124
91
https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/602096/Tabla_de_salarios_m_nimos_vigente_a_partir_
Página
de_2021.pdf
Es por lo anterior que la parte demandada deberá pagar la cantidad de:$
6,345,800.00 (Seis millones trescientos cuarenta y cinco mil ochocientos pesos
00/100 M.N), por concepto de indemnización de daño directo por muerte, esta
cantidad es por cada una de las víctimas fallecidas y deberá ser pagada a sus
familiares directos.
92
Página
http://dof.gob.mx/nota_to_imagen_fs.php?codnota=4670446&fecha=01/04/1970&cod_diario=201227
Lucro cesante. El lucro cesante hace referencia al lucro, al dinero, a la ganancia, a la
renta que una persona deja de percibir como consecuencia del perjuicio o daño que se
le ha causado. Si una persona no hubiera sufrido un daño o perjuicio, hubiera tenido la
capacidad de seguir lucrando sin problemas, lucro que se pierde, que cesa por culpa
del daño o del perjuicio, y por supuesto que el responsable será quien causó el daño y
el perjuicio, y en algunos casos tendrá que indemnizar a la víctima del daño o perjuicio.
Este concepto forma parte de la reparación integral del daño cuando se actualiza el
fallecimiento de la víctima directa, en el sistema jurídico nacional, se encuentra regulado
en la fracción III del artículo 63 de la Ley General de Víctimas, además, esta medida
reparatoria ha sido citada y definida en diversos criterios que integran el semanario
judicial de la federación, a detalle:
CAPÍTULO III
MEDIDAS DE COMPENSACIÓN
Artículo 64. La compensación se otorgará por todos los perjuicios, sufrimientos y pérdidas
económicamente evaluables que sean consecuencia de la comisión de los delitos a los que
se refiere el artículo 68 de este ordenamiento o de la violación de derechos humanos,
incluyendo el error judicial, de conformidad con lo que establece esta Ley y su Reglamento.
Estos perjuicios, sufrimientosy pérdidas incluirán, entre otros y como mínimo:
III.El resarcimiento de los perjuicios ocasionados o lucro cesante, incluyendo el pago de los
salarios o percepciones correspondientes, cuando por lesiones se cause incapacidad para
trabajar en oficio, arteo profesión;
Criterios relevantes:
Suprema Corte de Justicia de la Nación Registro digital: 2011487 Instancia: Primera Sala
Décima Época Materias(s): Penal Tesis: 1a. CXXV/2016 (10a.) Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación. Libro 29, Abril de 2016, Tomo II, página 1144 Tipo:
Aislada
Ibarra Olguín. Esta tesis se publicó el viernes 22 de abril de 2016 a las 10:22 horas en el
Semanario Judicial de la Federación. Criterios de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, sobre el pago de lucro cesante en relación con sus ingresos trasladados al
Página
Suprema Corte de Justicia de la Nación Registro digital: 2018873 Instancia: Primera Sala
Décima Época Materias(s): Civil Tesis: 1a. CCCXL/2018 (10a.) Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación. Libro 61, Diciembre de 2018, Tomo I, página 474 Tipo:
Aislada
sentido, pero con salvedad en las consideraciones. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín. Esta tesis se publicó el viernes 07 de diciembre de 2018
a las 10:19 horas en el Semanario Judicial de la Federación.
Página
Suprema Corte de Justicia de la Nación Registro digital: 190989 Instancia: Tribunales
Colegiados de Circuito Novena Época Materias(s): Laboral Tesis: XII.2o.7 L Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XII, Octubre de 2000, página 1285
Tipo: Aislada
(Reparaciones y Costas)
47. Sin embargo es preciso tener en cuenta que el cálculo del lucro
cesante debe hacerse considerando dos situaciones distintas. Cuando el
destinatario de la indemnización es la víctima afectada de incapacidad total y
absoluta, la indemnización debe comprender todo lo que dejó de percibir con
los ajustes correspondientes según su expectativa probable de vida. En este
supuesto, el único ingreso para la víctima es lo que habría recibido como
importe de ese lucro cesante y que ya no percibirá.
Cuantificación:
129
Página
De consulta pública en la siguiente liga:
https://www.inegi.org.mx/app/tabulados/interactivos/?pxq=Mortalidad_Mortalida
d_09_46539d4a-2d98-4770-8672-3c39071d2682
https://www.inegi.org.mx/app/tabulados/interactivos/?pxq=Mortalidad_Mortalida
d_09_9f52a6c9-7026-4b1a-b444-45510ce472c4
mínimos para profesionista y generales, tomando como base el salario mínimo más alto
al momento de los hechos que como se analizó en el apéndice cuatro que antecede
denominado “indemnización por muerte”, el cual corresponde al de $317.29
(Trescientos diecisiete pesos 29/100) por día, cantidad que debe ser multiplica por los
30 dias del mes que da un total de $9,518.70 (Nueve mil quinientos dieciocho pesos
70/100 M.N.) que a su vez debe multiplicarse por 12 meses que integran el año, como
salario anual obtenemos la cantidad de $114,224.40 (Ciento catorce mil doscientos
veinticuatro pesos 40/100 M.N.)
2. En relación con los elementos por considerar para la cuantificación del lucro
cesante que deriva de un daño moral debe tomarse en cuenta el salario mínimo
diario de la víctima para obtener el salario anual tal como se expuso en el numeral
que antecede, posteriormente se toma en cuenta el tiempo que la víctima se verá
impedida para poder lucrar de manera licita (lo anterior como elemento distinto
del promedio de vida en el caso de daño material), por último se tiene que
considerar de la misma manera el interés legal anual que corresponde al 9%.
A manera de ejemplo en el presente asunto y con el animo de demostrar la procedencia
del presente numeral, es necesario exponer lo siguiente:
En la sentencia que resuelve el Amparo Directo 30/2013 que resuelve la Suprema Corte
de Justicia de la Nación, al analizar la procedencia y cuantificación del daño moral se
arriba a la conclusión de que existen elementos patrimoniales que derivan de la lesión
inmaterial y que merecen ser contemplados y reparados en la cuantificación
correspondiente, luego entonces, así lo refiere la Corte:
Por ello en el presente asunto consideramos debe tomarse en cuenta el tiempo que ha
transcurrido desde que ocurrieron los hechos dañosos, hasta la fecha en que las
víctimas se vena posibilitadas para regresar.
93
Nash Rojas, Claudio, Las Reparaciones ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (1988-2007), 2a. ed.,
Santiago, Universidad de Chile, 2009, p. 43.
94
Corte IDH. Caso Velásquez Rodríguez Vs. Honduras. Reparaciones y Costas..., supra nota 5, párr. 42; Caso Ricardo
Canese Vs. Paraguay. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2004. Serie C No. 111, párr. 203;
Corte IDH. Caso Radilla Pacheco Vs. México..., supra nota 28, párr. 369. Por ejemplo, el caso de Radilla Pacheco Vs.
México (2009) pareciera demostrar una posición más estricta respecto de la prueba sobre el nexo causal al establecer
que: "en relación con los alegados gastos de atención médica y psiquiátrica en que incurrieron las víctimas en el presente
caso (...) Si bien la Corte ha establecido que por la naturaleza y gravedad de los hechos constitutivos de desaparición
forzada, las víctimas en el presente caso han padecido graves afectaciones psicológicas que resultan evidentes, para que
la Corte pueda ordenar el reintegro de gastos por daño emergente, éstos deben ser acreditados. Debido a lo anterior, en
el presente caso no corresponde fijar un monto al respecto"
95
Nash Rojas, Claudio, Las Reparaciones..., op. cit., p. 44. Véase asimismo: Corte IDH. Caso Bámaca Velásquez Vs.
132
Guatemala..., supra nota 73, párr. 54; Corte IDH. Caso Servellón García y otros Vs. Honduras. Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 21 de septiembre de 2006. Serie C No. 152, párr. 177.
Página
96
Corte IDH. Caso Ricardo Canese Vs. Paraguay..., supra nota 75, párr. 203.
persona97; b) los gastos funerarios 98; c) los gastos relacionados con los trámites que se
realicen para esclarecer las causas de los hechos; d) los gastos por las gestiones
realizadas por los familiares de la víctima en diferentes dependencias para localizarle
(acciones de búsqueda); 99 e) alimentación y hospedaje100; f ) los gastos de traslado
incurridos por los familiares para visitar a la víctima durante su privación de la libertad 101,
y g) los gastos médicos y psicológicos cuantificables (gastos que son anunciados en
este capítulo, no obstante deben ser materia de análisis y cuantificación en las
medidas de rehabilitación 102 dada su naturaleza), siempre que exista nexo causal
entre las lesiones y los hechos denunciados.
97
78Cfr. Corte IDH. Caso Ximenes Lopes Vs. Brasil. Sentencia de 4 de julio de 2006. Serie C No. 149, párr. 226; Corte
IDH. Caso de laMasacre de la Rochela Vs. Colombia. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 11 de mayo de 2007.
Serie C No. 163, párr. 251, y Corte IDH. Caso Zambrano Vélez y otros Vs. Ecuador. Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 4 de julio de 2007. Serie C No. 166, párr. 138.
98
Corte IDH. Caso de los "Niños de la Calle" (Villagrán Morales y otros) Vs. Guatemala..., supra nota 6, párr. 80; Corte
IDH. Caso Del Caracazo Vs. Venezuela. Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 de agosto de 2002. Serie C No. 95, párr.
85 y Corte IDH. Caso Cantoral Huamán y García Santa Cruz Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 10 de julio de 2007. Serie C No. 167, párr. 174.
99
Corte IDH. Caso de los "Niños de la Calle" (Villagrán Morales y otros) Vs. Guatemala..., supra nota 6, párr. 80. Asimis-
mo en Corte IDH. Caso Castillo Páez Vs. Perú. Reparaciones y Costas.Sentencia de 27 de noviembre de 1998. Serie C
No. 43, párr. 76; Corte IDH. Caso González y otras ("Campo Algodonero") Vs. México..., supra nota 64, párr. 565, y Corte
IDH. Caso Chitay Nech y otros Vs. Guatemala..., supra nota 5, párrs. 265-266.
100
Corte IDH. Caso Blake Vs. Guatemala. Reparaciones y Costas. Sentencia de 22 de enero de 1999. Serie C No. 48,
párr. 69, y Corte IDH. Caso De la Cruz Flores Vs. Perú. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 18 de noviembre de
2004. Serie C No. 115, párr. 153.
101
Corte IDH. Caso Cantoral Benavides Vs. Perú..., supra nota 58, párr. 51.
102
APÉNDICE relativo del presente documento.
103
Corte IDH. Caso Loayza Tamayo Vs. Perú..., supra nota 41, párr. 129. b y d.y Corte IDH. Caso Cantoral Benavides Vs.
Perú. Reparaciones y Costas. Sentencia de 3 de diciembre de 2001. Serie C No. 88, párr. 51; Corte IDH. Caso Radilla
Pacheco Vs. México..., supra nota 28,párr. 375
133
104
Corte IDH. Caso de los "Niños de la Calle" (Villagrán Morales y otros) Vs. Guatemala..., supra nota 6, párr. 80, se reparó
al familiar de una de las víctimas quien sufrió una parálisis facial en razón de los hechos y a otro por la agra-vación de una
Página
diabetes.
APÉNDICE NUEVE (DISCULPAS PÚBLICAS)
Disculpas Públicas
En lo que respecta a la disculpa pública, la jurisprudencia de la Corte Interamericana ha
ido variando a través del tiempo. En un primer momento, la Corte no incluía este aspecto
en sus decisiones, pese a que le era solicitado por los peticionarios. 105 Inclusive, en
Suárez Rosero, los peticionarios alegaron y presentaron prueba de que dicha disculpa
era necesaria para la recuperación de la víctima.106
Con sus decisiones más recientes, la Corte ha variado su postura jurisprudencial
anterior. En Yean y Bosico, por ejemplo, la Corte ha ordenado que el Estado manifieste
públicamente sus disculpas a las víctimas y a sus familiares. 107 En igual sentido se ha
pronunciado la Corte en Bulacio, 108 Goiburú v. Paraguay, 109 y Vargas Areco v.
Paraguay. 110 En Caso del Penal Miguel Castro Castro la Corte se refirió a un
“desagravio.”111
Por otro lado, la práctica reciente de los Estados ha incluido la realización espontánea
de expresiones de disculpa pública. Esto ha ocurrido, particularmente cuando existe un
reconocimiento o acquiesencia estatales de responsabilidad expresados en audiencia
pública ante la Corte Interamericana. En este sentido, ha sido el caso en Masacre de
Mapiripán112 y Moiwana.113
Concepto sustentado al tenor de los siguientes párrafos contenidos en la Sentencias de
la Corte Interamericana sobre Derechos Humanos de las cuales es parte el Estado
Mexicano y por obvio su obligatoriedad, detallo:
105 Ver Suárez Rosero v. Ecuador, 1999 Corte I.D.H. (ser. C) No. 44, ¶ 72 (20 de enero de 1999) (denominando la sentencia lo
equivalente a la reparación); Loayza Tamayo v. Perú, 1998 Corte I.D.H. (ser. C) No. 42, ¶¶ 155 y 158 (27 de noviembre de 1998)
(considerando que la sentencia de fondo constituyó per se una adecuada reparación); Caballero Delgado y Santana v. Colombia, 1997
Corte I.D.H. (ser. C) No. 31, ¶ 58 (29 de enero de 1997) (aceptando la sentencia como suficiente reparación).
106
Ver Suárez Rosero, 1999 Corte I.D.H. (ser. C) No. 44, ¶ 69 (presentando prueba de parte del terapeuta).
107
Ver Las Niñas Yean y Bosico, 2005 Corte I.D.H. (ser. C) No. 130, ¶ 235.
108
Ver Bulacio v. Argentina, 2003 Corte I.D.H. (ser. C) No. 100, ¶ 145 (18 de septiembre de 2003) (señalando que el Estado debe
publicar en el Diario Oficial la parte resolutiva de la Sentencia del caso).
109
Ver Goiburú v. Paraguay, 2006 Corte I.D.H. (ser. C) No. 153, ¶ 173 (22 de septiembre de 2006) (estableciendo que el Estado
debe realizar un acto público reconociendo su responsabilidad por la desaparición de las víctimas).
110
Ver Vargas Areco v. Paraguay, 2006 Corte I.D.H. (ser. C) No. 155, ¶ 158 (26 de septiembre de 2006) (ordenando un acto público
en la comunidad de los familiares de la víctima dado que estos no estuvieron presentes en la audiencia pública del caso).
111
Ver Penal Miguel Castro Castro v. Perú, 2006 Corte I.D.H. (ser. C) No. 160, ¶ 445 (25 de noviembre de 2006) (señalando que el
Estado debe manifestar públicamente su responsabilidad en relación a las violaciones declaradas en la sentencia).
112
Ver La “Masacre de Mapiripán” v. Colombia, 2005 Corte I.D.H. (ser. C) No. 134, ¶ 314 (15 de septiembre de 2005) (ejemplificando
como el Estado reconoció su responsabilidad internacional y a la vez reafirmó como su política la promoción y protección de los derechos
humanos).
134
113
Ver La Comunidad Moiwana v. Suriname, 2005 Corte I.D.H. (ser. C) No. 124, ¶ 216 (15 de junio de 2005) (apreciando la declaración
que Suriname “no tiene objeciones a emitir una disculpa pública a toda la nación, y a los sobrevivientes y familiares en particular, en
Página
medios impresos, radio y televisión; iii) que un memorial se establezca en el predio donde fueron
encontradas las víctimas y otro en la Ciudad de México, y iv) que el día 6 de noviembre de cada
año se conmemore como “Día nacional en memoria de las víctimas del feminicidio”.
467. El Estado ofreció: i) el reconocimiento público de responsabilidad; ii) la difusión pública en
medios masivos de comunicación del reconocimiento de responsabilidad, y iii) la realización de un
evento público en el que se ofrezcan disculpas a los familiares de las víctimas por las
irregularidades reconocidas por el Estado durante la integración inicial de las investigaciones de
los homicidios y los daños sufridos por los familiares de las víctimas.
Es prudente aclarar en este apartado, que dentro del contexto internacional (derecho
convencional) de un análisis exhaustivo e integral de los preceptos e instrumentos en
materia de derechos humanos que lo integran, específicamente hablando del tema
reparatorio que encuentra fundamento en el artículo 63.1 de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, no existe condicionante alguna para la condena a las
disculpas públicas como medida de satisfacción, basta con la generación de un
sufrimiento a razón de una evidente violación a las garantías individuales y derechos
humanos inherentes al ser humano.
Este es un medio de satisfacción contemplado en las sentencias que se contienen en
el pie de página tomado del libro del Jurisconsulto Dr. Sergio García Ramírez dos veces
presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en su libro “La Corte
Interamericana de Derechos Humanos” Editorial Porrúa, 2007, páginas 339 y 340, cita
el tema y fundamento su dicho con las sentencias de dicha corte que igualmente cita, a
la letra:
En sentido amplio, la satisfacción pudiera abarcar diversas reparaciones que tienden a
compensar el detrimento de bienes no patrimoniales. En sentido más limitado, que permita el
deslinde entre las satisfacciones y la indemnización por daño inmaterial, se suele aludir a
ciertas medidas específicas que miran al prestigio o a la buena fama pública de las víctimas.
Se trata, pues, de rescatar y preservar el honor, reivindicar a la persona ante la propia
comunidad. La sentencia misma, que pone de manifiesto la realidad de los hechos y el carácter
ilícito de éstos, puede constituir un factor de satisfacción para la víctima, por el desagravio
que implica, y en este sentido cubre tanto el propósito de la reparación por daño inmaterial
como el fin de la satisfacción, que va más lejos que aquélla, en tanto se proyecta hacia la
comunidad en su conjunto.
Al propósito que ahora interesa obedecen las disculpas públicas por parte del Gobierno
mencionadas en diversas sentencias de la Corte (y que en casos recientes han sido
expresadas en el curso mismo del enjuiciamiento internacional, antes de la resolución de
fondo, en nombre del Estado o específicamente del correspondiente Jefe de Estado); la
construcción de monumentos en memoria de las víctimas, la imposición del nombre de éstas a
calles, plazas o edificios; la publicación de la sentencia en el periódico oficial o en diarios de
circulación nacional, e incluso en diarios que se editan y circulan en el país donde reside
actualmente la víctima, aunque no sea en el que se cometió la violación, etcétera. Esto implica
la traducción de la sentencia al idioma correspondiente, como también ha sucedido en el caso de
víctimas pertenecientes a comunidades indígenas, con el fin de que en éstas se conozcan los
hechos y las decisiones de la justicia internacional.
DEL ARTÍCULO 1916 DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL, VIGENTE EN 2005).
El citado precepto establece en la primera parte de su último párrafo, que cuando el daño moral
haya afectado a la víctima en su decoro, honor, reputación o consideración, el juez ordenará, a
petición de la propia víctima y con cargo al responsable, la publicación de un extracto de la
sentencia que refleje adecuadamente la naturaleza y alcance de la misma en los medios
informativos que se considere convenientes, es decir, deja al prudente arbitrio del juzgador la
determinación del medio informativo en el que debe publicarse la sentencia relativa cuando el daño
cause lesión a alguno de los derechos personales enunciados, con independencia del acto o hecho
que cause la afectación, siempre y cuando la víctima así lo pidiera. Por otra parte, en la segunda
parte del artículo 1916 del Código Civil para el Distrito Federal, se establece que en los casos en
que el daño derive de un acto que haya tenido difusión en los medios informativos, el juez ordenará
que éstos den publicidad al extracto de la sentencia, con la misma relevancia que hubiera tenido la
difusión original. Ahora bien, de la interpretación armónica del indicado artículo, se concluye que
cuando el daño a los bienes jurídicos tutelados en él haya sido difundido en algún medio
informativo, el juez ordenará que se publique el extracto de la sentencia en un medio de
comunicación que estime conveniente, con la particularidad de que se le dé publicidad con la misma
relevancia que el acto que produjo el daño moral, lo que no implica en forma alguna, que el medio
de comunicación deba ser exactamente aquel en que se difundió originalmente. Amparo directo
6/2009. 7 de octubre de 2009. Cinco votos. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretarios: Laura
García Velasco y José Álvaro Vargas Ornelas.”
El texto que deberá publicarse en cada uno de los medios impresos que se enlistan una
vez por semana por ocho semanas consecutivas se toman del Padrón Nacional de
Medios impresos (PMNI)53 de la Dirección General de Medios Impresos de la
Secretaría de Gobernación como medios autorizados para su impresión y difusión
inscritos en dicho padrón para la Ciudad de México, estos son:
1. 24 Horas El Diario Sin Límites - Información Integral 24/7, S.A.P.I. de C.V.
2. El Gran Diario de México, El Universal - El Universal, Compañía Periodística
Nacional, S.A. de C.V.
3. EL INFORMANTE - JGBC Medios Masivos, S.A. de C.V.
4. El País - Diario El País México, S.A. de C.V.
5. El Punto Crítico - Enterprise Multiconsulting México, S. A. de C. V.
6. El Universal El Gráfico Primer Diario de la Mañana - Artes Gráficas en
Periódico, S. A. de C. V.
7. Excélsior - Periódico Excélsior, S.A. de C.V.
8. Impacto El Diario - Potros Editores, S. A. de C. V.
9. La Crónica de Hoy - La Crónica Diaria, S.A. de C.V.
10. La Crónica de Hoy Jalisco - La Crónica Diaria, S. A. de C. V..
11. La Jornada - Demos, Desarrollo de Medios, S. A. de C. V.
12. Metro - Consorcio Interamericano de Comunicación, S. A. de C. V. /
Ediciones del Norte, S. A. de C. V.
13. Miled México - Miled México AS Ediciones, S.A. de C.V.
14. Milenio Diario - Milenio Diario, S. A. de C. V.
15. Nuestro México - Diario del Centro, S.A. de C.V.
16. Ovaciones - Editorial Ovaciones, S. A. de C. V.
17. Periódico ABC - Milenio ABC, S.A. de C.V.
18. Periódico Nosotros, Así Nos Movemos - Eureka Multimedia, S. A. de C. V.
19. Récord - Notmusa, S.A. de C.V.
20. REFORMA, CORAZON DE MEXICO - Ediciones del Norte, S.A. de C.V.
139
incluso en diarios que se editan y circulan en el país donde reside actualmente la víctima,
aunque no sea en el que se cometió la violación, etcétera. Esto implica la traducción de la
sentencia al idioma correspondiente, como también ha sucedido en el caso de víctimas
pertenecientes a comunidades indígenas, con el fin de que en éstas se conozcan los hechos y las
decisiones de la justicia internacional.
Para ser más pragmáticos, la pérdida de la oportunidad no es otra cosa que aquellas
oportunidades que desaparecen en las víctimas, por los eventos responsabilidad de la
entidad demandada, pues como quedo expuesto en el presente asunto, Sistema de
Transporte Colectivo tenía y tiene la obligación de responder por los daños ocasionados
a las víctimas, en ese sentido aquellas personas que requerían atención médica para
salvaguardar su salud o incluso su vida y no la recibieron, significativamente perdieron
esa oportunidad de estar bien, o por lo menos mejor, en algunos escenarios, el poder
vivir.
De igual suerte, la amenaza latente nos lleva a la virtual aplicación de criterios tales
141
como:
Página
10. El derecho a una indemnización pronta, justa y adecuada por torturas o malos
tratos a que se refiere el artículo 14 tiene múltiples dimensiones y la indemnización
concedida a una víctima debe ser suficiente para compensar los perjuicios a los
que se pueda asignar un valor económico y sean consecuencia de torturas o malos
tratos, sean o no pecuniarios. Ello puede incluir el reembolso de los gastos
médicos y fondos para sufragar servicios médicos o de rehabilitación que necesite
la víctima en el futuro para lograr la rehabilitación más completa posible; los
perjuicios pecuniarios y no pecuniarios resultantes del daño físico o mental
causado; la pérdida de ingresos y el lucro cesante debidos a la discapacidad
causada por la tortura o los malos tratos y la pérdida de oportunidades, de
empleo o educación, por ejemplo. Además, una indemnización suficiente de los
Estados partes a las víctimas de tortura o malos tratos debe cubrir la asistencia
letrada o especializada y otros gastos que entrañe la presentación de una solicitud
de reparación.
Aplicable:
Época: Décima Época Registro: 2018806 Instancia: Primera Sala Tipo de Tesis: Aislada Fuente:
Gaceta del Semanario Judicial de la Federación Libro 61, Diciembre de 2018, Tomo I Materia(s):
Constitucional Tesis: 1a. CXCV/2018 (10a.) Página: 402
simultáneo, en el que se busque la reparación de cada uno de los derechos afectados. Ahora bien,
dependiendo de la naturaleza del caso, es posible que los procedimientos no permitan el dictado
de medidas de distinta naturaleza, pues su viabilidad no es idéntica en todas las materias ni en
Página
todas las vías, no obstante, ello implica que se deban revalorizar las indemnizaciones de modo que
se consideren justas o integrales. Así, las indemnizaciones serán consideradas justas cuando su
cálculo se realice con base en el encuentro de dos principios: el de reparación integral del daño y
el de individualización de la condena según las particularidades de cada caso, incluyendo: 1) la
extensión de los daños causados y su naturaleza (físicos, mentales o psicoemocionales); 2) la
posibilidad de rehabilitación; 3) la pérdida de oportunidades, en particular las de empleo, educación
y prestaciones sociales; 4) los daños materiales (ingresos y el lucro cesante); 5) los daños
inmateriales; 6) los gastos de asistencia jurídica o de expertos, medicamentos y servicios médicos,
psicológicos y sociales; 7) el nivel o grado de responsabilidad de las partes; 8) su situación
económica; y, 9) las demás características particulares. Por ello, el derecho a la reparación integral
del daño en casos que afecten derechos humanos es incompatible con la existencia de topes,
tarifas o montos máximos y mínimos que impidan que la cuantificación de una indemnización
atienda a las características específicas de cada caso. Amparo directo en revisión 5826/2015. 8 de
junio de 2016. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Jorge
Mario Pardo Rebolledo, Norma Lucía Piña Hernández, quien reservó su derecho para formular voto
concurrente y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío Díaz. Ponente: Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Arturo Guerrero Zazueta. Esta tesis se publicó el viernes 07 de
diciembre de 2018 a las 10:19 horas en el Semanario Judicial de la Federación.
100. En cuanto al pago de las becas educativas a las víctimas y a la hija de una de éstas, así como
de las indemnizaciones por concepto de daño material e inmaterial y el reintegro de costas y gastos
establecidos en la presente Sentencia, la Corte nota que las partes acordaron lo correspondiente
en caso de que el Estado incurriere en mora, así como también indicaron que los montos serán
pagados de acuerdo con lo establecido en las “Reglas de Operación del Fideicomiso para el
Cumplimiento de Obligaciones en Materia de Derechos Humanos”, documento que no fue aportado
al Tribunal. No obstante lo anterior, la Corte estima pertinente recordar que, de acuerdo con su
jurisprudencia, los referidos pagos deberán ser realizados directamente a las personas y a la
organización indicadas en la presente Sentencia, dentro de los plazos establecidos en el acuerdo
de solución amistosa. Estas cantidades no podrán ser afectadas o condicionadas por cargas
fiscales actuales o futuras. Por ende, deberán ser entregadas a los beneficiarios en forma íntegra
conforme a lo acordado por las partes.
1. Corte IDH. Caso Trabajadores Cesados del Congreso (Aguado Alfaro y otros) Vs. Perú.
Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 24 de noviembre de 2006.
Serie C No. 158, Párrafo 136
Perú | 2006 X
Consideraciones de la Corte
136. En el presente caso los intervinientes comunes alegaron que el Estado es responsable por la
violación del artículo 26 de la Convención, basándose en que el supuesto carácter arbitrario del
cese de las víctimas y su no reposición trajeron como consecuencias, entre otras, la privación
injusta de su empleo y derecho a una remuneración y demás beneficios laborales; la interrupción
del acceso de las presuntas víctimas y sus dependientes a la seguridad social; el cese de
acumulación de sus años de servicio, lo que impidió a muchos que accedieran a su jubilación; así
como efectos graves en su salud. Sin embargo, el objeto de la presente Sentencia no ha sido
determinar ese supuesto carácter arbitrario de los ceses de las presuntas víctimas ni tampoco su
no reposición, que son las bases de la argumentación de los intervinientes comunes. Lo declarado
por la Corte fue que el Estado violó los artículos 8.1 y 25 de la Convención, relativos a las garantías
judiciales y protección judicial, respecto de las presuntas víctimas, en razón de la falta de certeza
143
acerca de la vía a la que debían o podían acudir para reclamar los derechos que consideraran
vulnerados y de la existencia de impedimentos normativos y prácticos para un efectivo acceso a la
justicia (supra párrs. 129 y 132). La Corte es consciente de que las violaciones a dichas garantías
Página
necesariamente tuvieron consecuencias perjudiciales para las presuntas víctimas, en tanto que
cualquier cese tiene consecuencias en el ejercicio y goce de otros derechos propios de una relación
laboral. Tales consecuencias pueden ser consideradas, de ser pertinente, en el próximo capítulo
de Reparaciones (infra párr. 149).
2. Corte IDH. Caso Lagos del Campo Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2017. Serie C No. 340., Párrafo 143
Perú | 2017 X
143. Respecto a los derechos laborales específicos protegidos por el artículo 26 de la Convención
Americana, la Corte observa que los términos del mismo indican que son aquellos derechos que
se derivan de las normas económicas, sociales y sobre educación, ciencia y cultura contenidas en
la Carta de la OEA. Ahora bien, los artículos 45.b y c194, 46195 y 34.g196 de la Carta establecen que
"[e]l trabajo es un derecho y un deber social" y que ese debe prestarse con "salarios justos,
oportunidades de empleo y condiciones de trabajo aceptables para todos". Asimismo, señalan que
el derecho de los trabajadores y trabajadoras a "asociarse libremente para la defensa y promoción
de sus intereses". Además, indican que los Estados deben "armonizar la legislación social" para la
protección de tales derechos. Desde su Opinión Consultiva OC-10/89, la Corte señaló que:
[...] Los Estados Miembros han entendido que la Declaración contiene y define aquellos derechos
humanos esenciales a los que la Carta se refiere, de manera que no se puede interpretar y aplicar
la Carta de la Organización en materia de derechos humanos, sin integrar las normas pertinentes
de ella con las correspondientes disposiciones de la Declaración, como resulta de la práctica
seguida por los órganos de la OEA197.
194.Artículo 45 de la Carta de la OEA. - Los Estados miembros, convencidos de que el hombre sólo
puede alcanzar la plena realización de sus aspiraciones dentro de un orden social justo,
acompañado de desarrollo económico y verdadera paz, convienen en dedicar sus máximos
esfuerzos a la aplicación de los siguientes principios y mecanismos: [...] b) El trabajo es un derecho
y un deber social, otorga dignidad a quien lo realiza y debe prestarse en condiciones que,
incluyendo un régimen de salarios justos, aseguren la vida, la salud y un nivel económico decoroso
para el trabajador y su familia, tanto en sus años de trabajo como en su vejez, o cuando cualquier
circunstancia lo prive de la posibilidad de trabajar; c) Los empleadores y los trabajadores, tanto
rurales como urbanos, tienen el derecho de asociarse libremente para la defensa y promoción de
sus intereses, incluyendo el derecho de negociación colectiva y el de huelga por parte de los
trabajadores, el reconocimiento de la personería jurídica de las asociaciones y la protección de su
libertad e independencia, todo de conformidad con la legislación respectiva [...].
3. Corte IDH. Caso Acevedo Jaramillo y otros Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 7 de febrero de 2006. Serie C No. 144, Párrafo 318
Perú | 2006 X
F) MODALIDAD DE CUMPLIMIENTO
318. El Estado debe cumplir, en el plazo de un año, con garantizar a los lesionados en el goce de
sus derechos, a través de la efectiva ejecución de las sentencias de amparo cuyo incumplimiento
parcial o total fue declarado por este Tribunal (supra párr. 299), tomando en cuenta que los
tribunales internos competentes de la ejecución de las sentencias deberán realizar algunas
determinaciones (supra párrs. 259, 265 y 270). En el caso del cumplimiento de las sentencias que
ordenan reponer a trabajadores en sus cargos o similares, en el plazo de un año, el Estado debe
restablecer en dichos puestos a las víctimas que se encuentran con vida y, si esto no fuera posible,
brindarles alternativas de empleo que respeten las condiciones, salarios y remuneraciones que
tenían al momento de ser despedidos (supra párr. 299). Si no fuera posible reponer en sus puestos
o en otros similares a los trabajadores, el Estado debe proceder, en el plazo de un año, al pago de
una indemnización por concepto de terminación de las relaciones laborales por causa injustificada
(supra párr. 300).
4. Corte IDH. Caso Flor Freire Vs. Ecuador. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 31 de agosto de 2016. Serie C No. 315., Párrafo 251
Ecuador | 2016 X
251. Este Tribunal ha establecido que el concepto de daño material abarca la pérdida o detrimento
de los ingresos de las víctimas, los gastos efectuados con motivo de los hechos y las
Página
consecuencias de carácter pecuniario que tengan un nexo causal con los hechos del caso sub
judice315. En casos en las cuales los actos ilícitos cometidos por parte del Estado tienen como
consecuencia el despido y la consiguiente pérdida del puesto de empleo de la víctima, en el marco
de daño material se debe reconocer los salarios y prestaciones sociales dejados de percibir por la
víctima desde el momento de su remoción arbitraria hasta la fecha de emisión de la Sentencia,
incluyendo los intereses pertinentes y otros conceptos anexos316.
5. Corte IDH. Caso Acevedo Jaramillo y otros Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 7 de febrero de 2006. Serie C No. 144, Párrafo 299
Perú | 2006 X
En el caso que nos ocupa, es importante identificar los alcances de las consecuencias
del evento dañoso, particularmente las víctimas perdieron sus empleos, oportunidades
de crecimiento laboral y personal, incluso perdieron la oportunidad de continuar con sus
estudios, es por ello que la presente medida de compensación resulta procedente, pues
el Juzgador puede condenar a la demandad a cumplir con estas medidas que en
evidencia ayudarían a que las cosas regresen al estado que guardaban antes del
desafortunado hecho dañoso.
Tiene relación directa con el desarrollo físico, mental, espiritual, moral, psicológico y
social de la personal, para cuantificar esta medida es necesario tomar en cuenta los
siguientes rubros que son por sentido común parte de cualquier proyecto de vida, se
trata de un cuadro básico de aspiraciones de la persona como lo son:
Para el cumplimiento especifico y reparación de estos rubros existen 2 vías tal y como
lo ha dicho y ejecutado la Corte Interamericana de Derechos Humanos, puede ser
reparada en especie, es decir, que la responsable de reparar los daños y violaciones a
derechos humanos cometidos, otorgué los medios idóneos para materializar dichos
conceptos, es decir, que se otorguen, por ejemplo, fideicomisos con administración de
becas a las víctimas, que sean colocados en un trabajo con prestaciones y salarios
145
dignos, construcción de casas que cumplan con las características de una vivienda
digna, que se les de acceso al sector salud para que cualquier necesidad que requieran
Página
en este rubro (no necesariamente la que derive por daños ocasionados por el siniestro)
sea debidamente atendida y cubierta.
De lo anterior es necesario resaltar, que en el caso que nos ocupa existen menores de
edad que fallecieron o que tienen incapacidad total permanente a consecuencia del
evento dañoso, cierto es que la procedencia de la medida reparatoria por lucro cesante
en lo que respecta a estos menores es compleja pues se podría apreciar que ellos no
trabajaban en dicha etapa de su vida, sin embargo lo que si se puede considerar es que
ellos tenían un proyecto de vida, en el cual existía una gran posibilidad de que en el
futuro consiguieran un empleo y obtuvieran ganancias licitas, es por ello que dentro de
esa previsión futura puede considerarse dentro del proyecto de vida una compensación
por lucro cesante, en el caso de menores que fallecieron o incluso de menores que
quedaron imposibilitados para trabajar a consecuencia del evento dañoso que les
causara una incapacidad total permanente. Para el caso de menores de edad se debe
considerar el salario de sus padres, pues se entiende que se trata del ingreso más
próximo. Es necesario manifestar que en la presente hipótesis se cumplen dos factores
determinantes para la cuantificación en el presente apartado; 1) se trata de menores,
2) Se quebranta el derecho humano por excelencia a la vida, en atención a ello esta H.
Autoridad debe considerar el concepto de realización personal de los menores
fallecidos, mismo que encuentra sustento en las opciones que los mismos pudieron
114
293. En el caso de Ramiro Osorio Cristales la Corte estima pertinente fijar, en equidad, una compensación que asciende
a la suma de US$40.000.00 (cuarenta mil dólares de los Estados Unidos de América), tomando en cuenta que: a) fue
146
declarado víctima de la violación a los artículos 5.1, 8.1 y 25.1 de la Convención por la denegación de justicia y el
correspondiente sufrimiento causado; b) fue declarado víctima de la violación a los artículos 17, 18 y 19 de la Convención
por encontrarse separado de su familia y con otro nombre, y no garantizársele las medidas especiales de protección por
Página
306. Por otro lado, el legislador también tenía el deber de proteger en su regulación a las
personas que padecen una enfermedad o fueron víctimas de un accidente, y que sin embargo,
ello no se relaciona directamente, o al menos desde un punto de vista tradicional, con la capacidad
para trabajar. En este sentido, conforme al derecho de igualdad, el legislador tendría que haber
advertido las diferencias específicas de la situación de estas personas, y en atención a las mismas,
protegerlas de manera diferenciada.
307. Toda vez que el legislador dejó de cumplir con este parámetro, y que además,
aunque no intencionalmente, dejó a estos grupos de personas fuera de la regulación que emitió, a
juicio de esta Segunda Sala, el sistema normativo contenido en los preceptos impugnados, es
inconstitucional por subinclusivo, porque excluye injustificadamente del acceso a una
indemnización por daños personales, a individuos que se sitúan en condiciones iguales que otros
respecto del daño producido por la actuación irregular del Estado, personas a las que además, en
147
atención a su situación especial o vulnerable, tendría que haber protegido con mayor especialidad
y alcance.
Página
308. Conforme al principio de igualdad jurídica, debe existir la seguridad de no tener que
soportar un perjuicio o privarse de un beneficio desigual e injustificado, pues el valor superior de
dicho principio consiste en evitar la existencia de normas que por su aplicación, produzcan un trato
diferenciado no justificado, que genere un trato discriminatorio en situaciones análogas, o bien, que
prevean efectos idénticos en situaciones diametralmente diferentes, esto es, la igualdad debe
entenderse como la certeza de no privar a nadie de un beneficio al que tiene derecho, en forma
injustificada, a partir de la existencia de normas que, llamadas a proyectarse sobre situaciones de
igualdad, de hecho produzcan, por su aplicación, la ruptura de esa igualdad, generando un trato
discriminatorio entre situaciones análogas, tal y como ocurre con la aplicación de la norma
impugnada, frente a los menores de edad, por cuya condición no pueden desplegar una relación
laboral y, en general, contra toda persona que no ostente o haya ostentado la condición de
trabajador.160
160 Ver al respecto, la Tesis de la Primera Sala de esta Suprema Corte, número 1a. LXXXIV/2015
(10a.) (Registro 2008551), publicada durante la actual Décima Época en la página 1409 del Libro
15, Febrero de 2015, Tomo II, de la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, bajo el rubro
y texto siguientes:
309. Adicionalmente, debe señalarse que conforme al derecho a la reparación integral del daño
contenido en el artículo 109 constitucional, el Estado, frente a las violaciones perpetradas por
actuaciones irregulares, contrae la obligación de volver las cosas al estado en que se encontraban,
restableciendo, en la medida de lo posible, la situación anterior y, de no ser esto posible,
compensando los daños ocasionados mediante el pago de indemnización.
311. En tal sentido, la condición de trabajador de las víctimas no puede considerarse como la
única vía para determinar el monto de la indemnización correspondiente a los daños personales
inferidos; ni la generación de un merma en la capacidad de trabajo puede considerarse la
única forma de lesión a la integridad personal del individuo y, por ende, tales limitaciones resultan
inconstitucionales al ser aplicadas a menores de edad que no pueden trabajar.
origen étnico o social, condición económica, discapacidad o de cualquiera otra índole. En ese
sentido, la Convención sobre los Derechos del Niño -específicamente en su artículo
Por lo que derivado de lo anterior, sería procedente que en este rubro correspondiente
al proyecto de vida o perdidas de la oportunidad de las víctimas, exista una condena
como compensación por los daños causados al motivo de existencia real de cada
persona víctima.
1. Corte IDH. Caso Cruz Sánchez y otros Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 17 de abril de 2015. Serie C No. 292, Párrafo 484
Perú | 2015 X
484. Igualmente, este Tribunal considera que, en lo que respecta a Edgar Odón Cruz Acuña, la
reparación relativa a la medida de rehabilitación constituye una reparación suficiente y adecuada
para compensar la afectación sufrida en su integridad personal.
2. Corte IDH. Caso Rochac Hernández y otros Vs. El Salvador. Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 14 de octubre de 2014. Serie C No. 285, Párrafo 219
El Salvador | 2014 X
Consideraciones de la Corte
219. La Corte valora positivamente las acciones emprendidas por el Estado a fin de dar atención
médica a algunas de las víctimas del presente caso y reconoce las medidas de carácter general
adoptadas por el Estado para garantizar la atención médica y psicosocial de las víctimas de graves
violaciones de derechos humanos en El Salvador. Como lo ha hecho en otros casos [307] , la Corte
estima que es preciso disponer una medida de reparación que brinde una atención adecuada a los
padecimientos psicológicos y físicos sufridos por las víctimas derivadas de las violaciones
establecidas en el presente Fallo. Por lo tanto, habiendo constatado las violaciones y los daños
sufridos por las víctimas, la Corte considera necesario ordenar medidas de rehabilitación en el
presente caso.
3. Corte IDH. Caso García Lucero y otras Vs. Chile. Excepción Preliminar, Fondo y Reparaciones.
Sentencia de 28 de agosto de 2013. Serie C No. 267, Párrafo 200
Chile | 2013 X
200. La Corte ha determinado, desde sus primeras decisiones, que un recurso es formalmente
adecuado cuando es "idóne[o]", en el "sistema de derecho interno", para "proteger la situación
jurídica infringida"[212]. En relación con la reparación de víctimas de torturas, los recursos adecuados
que el Estado debe proveer deben posibilitar el reclamo y acceso a medidas que contemplen la
compensación y la rehabilitación[213].
4. Corte IDH. Caso Manuel Cepeda Vargas Vs. Colombia. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 26 de mayo de 2010. Serie C No. 213, Párrafo 139
149
Colombia | 2010 X
Página
139. Como lo ha señalado anteriormente, al evaluar la efectividad de los recursos incoados en la
jurisdicción contencioso administrativa nacional[194], la Corte debe observar si las decisiones
tomadas en aquélla han contribuido efectivamente a poner fin a la impunidad, a asegurar la no
repetición de los actos lesivos y a garantizar el libre y pleno ejercicio de los derechos protegidos
por la Convención. En particular, tales decisiones pueden ser relevantes en lo que concierne a la
obligación de reparar integralmente una violación de derechos[195]. A su vez, en varios casos
contra Colombia, la Corte estimó que la reparación integral de una violación a un derecho protegido
por la Convención no puede ser reducida al pago de compensación a los familiares de la
víctima[196]. Una reparación integral y adecuada, en el marco de la Convención, exige medidas de
rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición. Los resultados alcanzados en estos
procesos serán tomados en cuenta al momento de fijar las reparaciones (infra párrs. 245 a 247 y
249 a 253).
5. Corte IDH. Caso Vélez Loor Vs. Panamá. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 23 de noviembre de 2010. Serie C No. 218, Párrafo 263
Panamá | 2010 X
263.La Corte estima, como lo ha hecho en otros casos[302], que es preciso disponer una medida de
reparación que brinde una atención adecuada a los padecimientos físicos y psicológicos sufridos
por la víctima. Por lo tanto, habiendo constatado las violaciones y los daños sufridos por el señor
Vélez Loor mientras permaneció bajo la custodia del Estado de Panamá (supra párr. 227), el
Tribunal considera necesario ordenar medidas de rehabilitación en el presente caso, las cuales
deben tomar en cuenta la expectativa de la víctima y su condición de extranjero (supra párr. 258).
Es por ello que este Tribunal no considera pertinente que el señor Vélez Loor reciba su tratamiento
médico y psicológico en Panamá, sino que debe poder ejercer su derecho a la rehabilitación en el
lugar donde se encuentre para poder cumplir con el objetivo y fin de dicha rehabilitación. En este
orden de ideas la Corte, tomando en cuenta las consideraciones realizadas supra (párr. 258),
estima necesario que Panamá proporcione al señor Vélez Loor una suma destinada a sufragar los
gastos de tratamiento médico y psicológico especializados, así como otros gastos conexos, en el
lugar en que resida.
6. Corte IDH. Caso Poblete Vilches y otros Vs. Chile. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de
8 de marzo de 2018. Serie C No. 349., Párrafo 114
Chile | 2018 X
114. Asimismo, el derecho a la salud está consagrado por un vasto corpus iuris internacional; inter
alia: el artículo 25.1 de la Declaración Universal de Derechos Humanos 142; el artículo 12 del Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales143, el artículo 10 del Protocolo
Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales 144.
Además, el derecho a la salud se reconoce en el artículo 5 apartado e) de la Convención
Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial 145; el artículo 12.1
de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer 146;
el artículo 24.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño147; el artículo 28 de la Convención
sobre la Protección de los Trabajadores Migratorios y sus Familiares 148, y el artículo 25 de la
Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad149. Este derecho también se
encuentra plasmado en varios instrumentos regionales de derechos humanos, como en el artículo
17 de la Carta Social de las Américas150; el artículo 11 de la Carta Social Europea de 1961 151, en
su forma revisada; el artículo 16 de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos 152, y
recientemente en la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de
las Personas Mayores153 (cabe señalar que, sobre esta última, por razones de temporalidad, no
resulta exigible en relación con los hechos del caso en análisis). Además, el derecho a la salud ha
sido reconocido en la sección II, apartado 41, de la Declaración y Programa de Acción de Viena154,
y en otros instrumentos y decisiones internacionales155.
diciembre de 1966 y en vigor desde el 3 de enero de 1976. Ratificado por Chile el 10 de febrero de
1972. En su artículo 12,?Derecho al más alto nivel posible de salud?, establece la obligación de
adoptar medidas para reducir la mortinatalidad y la mortalidad infantil; asegurar el sano desarrollo
Página
de los niños; mejorar la higiene del trabajo y del medio ambiente; prevenir y tratar enfermedades
epidémicas, endémicas y profesionales, así como asegurar la asistencia médica a todos.
144.Adoptado por la Asamblea General de la OEA el 17 de noviembre de 1988 en San Salvador.
Entrada en Vigor 16 de Noviembre de 1999. Hasta la actualidad no ha sido ratificado por el Estado
de Chile. Artículo 10. Derecho a la Salud. 1. Toda persona tiene derecho a la salud, entendida
como el disfrute del más alto nivel de bienestar físico, mental y social. 2. Con el fin de hacer efectivo
el derecho a la salud los Estados partes se comprometen a reconocer la salud como un bien público
y particularmente a adoptar las siguientes medidas para garantizar este derecho: a) la atención
primaria de la salud, entendiendo como tal la asistencia sanitaria esencial puesta al alcance de
todos los individuos y familiares de la comunidad; b) la extensión de los beneficios de los servicios
de salud a todos los individuos sujetos a la jurisdicción del Estado; c) la total inmunización contra
las principales enfermedades infecciosas; d) la prevención y el tratamiento de las enfermedades
endémicas, profesionales y de otra índole; e) la educación de la población sobre la prevención y
tratamiento de los problemas de salud, y f) la satisfacción de las necesidades de salud de los grupos
de más alto riesgo y que por sus condiciones de pobreza sean más vulnerables.
el 3 de septiembre de 1981. Artículo 12. 1. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas
apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la esfera de la atención médica a fin
de asegurar, en condiciones de igualdad entre hombres y mujeres, el acceso a servicios de
atención médica, inclusive los que se refieren a la planificación de la familia.
3 de mayo de 2008. Ratificada por Chile el 25 de agosto de 2008. Artículo 25. Los Estados Partes
reconocen que las personas con discapacidad tienen derecho a gozar del más alto nivel posible de
salud sin discriminación por motivos de discapacidad. Los Estados Partes adoptarán las medidas
pertinentes para asegurar el acceso de las personas con discapacidad a servicios de salud que
tengan en cuenta las cuestiones de género, incluida la rehabilitación relacionada con la salud.
Unidad Africana, reunida en Nairobi, Kenya, el 27 de julio de 1981. Artículo 16. 1. Todo individuo
Página
tendrá derecho a disfrutar del mejor estado físico y mental posible, [y] 2. Los Estados firmantes de
la presente Carta tomarán las medidas necesarias para proteger la salud de su pueblo y asegurarse
de que reciben asistencia médica cuando están enfermos.
154. Conferencia Mundial de Derechos Humanos, aprobados el 25 de junio de 1993, Viena. Apartado
41. La Conferencia Mundial de Derechos Humanos reconoce la importancia del disfrute por la mujer
del más alto nivel de salud física y mental durante toda su vida. En el contexto de la Conferencia
Mundial sobre la Mujer y de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, así como de la Proclamación de Teherán de 1968, la Conferencia
reafirma, sobre la base de la igualdad entre hombres y mujeres, el derecho de la mujer a tener
acceso a una atención de salud adecuada y a la más amplia gama de servicios de planificación
familiar, así como a la igualdad de acceso a la educación a todos los niveles.
155.Resulta relevante para el análisis del derecho a la salud, la Observación General No. 14: ?El
derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud?, del Comité DESC, la cual será abordada
infra. Revisten también utilidad las Observaciones del Comité de los Derechos del Niño, en
particular la Observación General No. 3: ?El VIH/SIDA y los derechos del niño?, CRC/GC/2003/3
(2003), así como la Observación General No. 4: ?La salud y el desarrollo de los adolescentes en
el contexto de la Convención sobre los Derechos del Niño?, CRC/GC/2003/4 (2003). Asimismo, la
Recomendación General No. 24 del Comité sobre la Eliminación de la Discriminación contra la
Mujer, ?Artículo 12 de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
contra la Mujer ? La mujer y la salud? de 2 de febrero de 1999, A/54/38/Rev.1, y los Informes de
Relatores Especiales de la Comisión de Derechos Humanos sobre el Derecho a la Salud. ONU.
Comisión de Derechos Humanos, ?La no Discriminación en la esfera de la Salud?, Resolución
1989/11. Aprobada en la 46ª Sesión de 2 de marzo de 1989.
7. Corte IDH. Caso García Lucero y otras Vs. Chile. Excepción Preliminar, Fondo y Reparaciones.
Sentencia de 28 de agosto de 2013. Serie C No. 267, Párrafo 224
Chile | 2013 X
8. Corte IDH. Caso González y otras ("Campo Algodonero") Vs. México. Excepción Preliminar,
Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 16 de noviembre de 2009. Serie C No. 205, Párrafo
549
México | 2009 X
549. Por lo tanto, la Corte, como medida de rehabilitación, ordena al Estado que brinde atención
médica, psicológica o psiquiátrica gratuita, de forma inmediata, adecuada y efectiva, a través de
instituciones estatales de salud especializadas, a todos los familiares considerados víctimas por
este Tribunal en el casosub judice, si éstos así lo desean. El Estado deberá asegurar que los
profesionales de las instituciones de salud especializadas que sean asignados para el tratamiento
de las víctimas valoren debidamente las condiciones psicológicas y físicas de cada víctima y tengan
la experiencia y formación suficiente para tratar tanto los problemas de salud físicos que padezcan
los familiares como los traumas psicológicos ocasionados como resultado de la violencia de género,
la falta de respuesta estatal y la impunidad. Asimismo, el tratamiento debe prestarse por el tiempo
152
que sea necesario e incluir el suministro de todos los medicamentos que eventualmente
requieran[528].
Página
9. Corte IDH. Caso Masacre de Santo Domingo Vs. Colombia. Excepciones Preliminares, Fondo y
Reparaciones. Sentencia de 30 de noviembre de 2012 Serie C No. 259, Párrafo 309
Colombia | 2012 X
309. Por esta razón, y constatando las violaciones y los daños sufridos por las víctimas, tal como
lo ha hecho en otros casos[441], la Corte considera necesario ordenar medidas de rehabilitación
en el presente caso. En este sentido, el Estado debe brindar gratuitamente, a través de sus
instituciones de salud especializadas, y de forma adecuada y efectiva, la atención y el tratamiento
médico, psicológico o psicosocial a las víctimas y los familiares que así lo soliciten, previo
consentimiento informado, incluyendo el suministro gratuito de los medicamentos y exámenes que
eventualmente se requieran, tomando en consideración los padecimientos de cada uno de ellos.
Asimismo, los tratamientos respectivos deberán prestarse, en la medida de lo posible, en los
centros más cercanos a sus lugares de residencia[442] por el tiempo que sea necesario. Al proveer
el tratamiento psicológico o psicosocial se debe considerar, además, las circunstancias y
necesidades particulares de cada víctima, de manera que se les brinden tratamientos colectivos,
familiares e individuales, según lo que se acuerde con cada una de ellas y después de una
evaluación individual[443].
10. Corte IDH. Caso Chinchilla Sandoval y otros Vs. Guatemala. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 de febrero de 2016. Serie C No. 312., Párrafo 189
Guatemala | 2016 X
189. Las autoridades deben asegurarse de que, cuando lo requiera la naturaleza de una condición
médica, la supervisión sea periódica y sistemática dirigida a la curación de enfermedades del
detenido o a prevenir su agravamiento, en lugar de tratarlos de forma meramente sintomática 289.
El Tribunal Europeo ha tomado en cuenta el principio de equivalencia de la atención médica,
señalado por el Comité Europeo para la Prevención de la Tortura y Tratos Crueles o Degradantes,
con base en el cual el servicio de salud en los recintos de privación de libertad debe poder proveer
tratamiento médico y de enfermería así como dietas apropiadas, fisioterapia, rehabilitación y otras
facilidades necesarias especializadas en condiciones comparables con aquellas disfrutadas por
pacientes en la comunidad exterior 290. La falta y/o deficiencia en la provisión de dicha atención
médica, o un tratamiento médico negligente o deficiente, no es acorde con la obligación de proteger
el derecho a la vida de las personas privadas de libertad 291.
11. Corte IDH. Caso Furlan y Familiares Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2012 Serie C No. 246, Párrafo 265
Argentina | 2012 X
265. Por todo lo anterior, la Corte considera probada la desintegración del núcleo familiar, así como
el sufrimiento padecido por todos sus integrantes como consecuencia de la demora en el proceso
civil, la forma de ejecución de la sentencia y los demás problemas que tuvo Sebastián Furlan para
el acceso a una rehabilitación adecuada. De lo expuesto anteriormente, la Corte considera que el
Estado argentino ha incurrido en la violación del derecho a la integridad personal consagrado en el
artículo 5 y el derecho al acceso a la justicia establecido en los artículos 8.1 y 25, en relación con
el artículo 1.1, todos de la Convención Americana, en perjuicio de Danilo Furlan, Susana
Fernández, Claudio Erwin Furlan y Sabina Eva Furlan.
12. Corte IDH. Caso García Lucero y otras Vs. Chile. Excepción Preliminar, Fondo y Reparaciones.
Sentencia de 28 de agosto de 2013. Serie C No. 267, Párrafo 196
Chile | 2013 X
196. Adicionalmente, en relación con las medidas referidas, la Corte observa que los "Principios
Básicos" (suprapárr. 186) señalan que "[c]onforme al derecho interno y al derecho internacional, y
teniendo en cuenta las circunstancias de cada caso, se debería dar a las víctimas de violaciones
manifiestas de las normas internacionales de derechos humanos [...], de forma apropiada y
proporcional a la gravedad de la violación y a las circunstancias de cada caso, una reparación plena
y efectiva [...] en [...] formas [que incluyen] indemnización [y] rehabilitación". La primera " ha de
concederse, de forma apropiada y proporcional a la gravedad de la violación y a las circunstancias
de cada caso, por todos los perjuicios económicamente evaluables", y la segunda "ha de incluir la
153
atención médica y psicológica, así como servicios jurídicos y sociales" (Principios 18, 20 y 21). El
Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, a propósito del artículo 7 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos relativo a la prohibición de la tortura, señaló que"los
Página
Estados no pueden privar a los particulares del derecho a una reparación efectiva, incluida la
indemnización y la rehabilitación más completa posible" [204]. En efecto la reparación por violación
de derechos humanos incluye la rehabilitación lo cual debe incluir "la atención médica y psicológica,
así como servicios jurídicos y sociales" [205]. Además como se refirió (supra párr. 188), el Comité
contra la Tortura ha señalado el derecho de víctimas de tortura a obtener "una indemnización", así
como "la rehabilitación más completa posible" y, en relación con ello, un "recurso judicial".
13. Corte IDH. Caso de las Comunidades Afrodescendientes Desplazadas de la Cuenca del Río
Cacarica (Operación Génesis) Vs. Colombia. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 20 de noviembre de 2013. Serie C No. 270, Párrafo 453
Colombia | 2013 X
453. Como se ha constatado que los daños sufridos por las víctimas se refieren no sólo a aspectos
de su identidad individual, sino también a la pérdida de sus raíces y vínculos comunitarios, resulta
pertinente disponer una medida de reparación que busque reducir padecimientos psicosociales.
Con el fin de contribuir a la reparación de estos daños, el Tribunal considera que el Estado debe
brindar gratuitamente, sin cargo alguno, el tratamiento adecuado y prioritario que requieran dichas
personas, previa manifestación de voluntad, dentro del plazo de seis meses contado a partir de la
notificación de esta Sentencia, y por el tiempo que sea necesario, incluida la provisión de
medicamentos. Al proveer el tratamiento psicológico se deben considerar las circunstancias y
necesidades particulares de cada persona, de manera que se les brinden tratamientos colectivos,
familiares e individuales, según lo que se acuerde con cada uno de ellos y después de una
evaluación individual. Para estos efectos, el Estado deberá otorgar dicho tratamiento a través de
los servicios nacionales de salud, para lo cual las víctimas deberán acudir a los programas internos
de reparación a los cuales se remite esta Sentencia ( infra párrs. 471 a 473), específicamente a
los programas dispuestos para hacer efectivas las medidas de rehabilitación. Las víctimas deberán
tener acceso inmediato y prioritario a las prestaciones de salud, independientemente de los plazos
que la legislación interna haya contemplado para ello, evitando obstáculos de cualquier índole.
14. Corte IDH. Caso de las Comunidades Afrodescendientes Desplazadas de la Cuenca del Río
Cacarica (Operación Génesis) Vs. Colombia. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 20 de noviembre de 2013. Serie C No. 270, Párrafo 452
Colombia | 2013 X
452. La Corte reconoce y valora los logros alcanzados por autoridades del Estado en cuanto al
otorgamiento de prestaciones de salud para población desplazada. Sin embargo, en atención a los
padecimientos de las víctimas la Corte, como lo ha hecho en otros casos[710], ordena
determinadas medidas de rehabilitación. Lo anterior, teniendo en cuenta que a la fecha, conforme
a lo manifestado en el peritaje de Juan Pablo Franco, el Ministerio de Protección Social está
diseñando un programa de atención psicosocial[711], es decir, que el mismo no ha entrado en
vigencia y por ende estas víctimas requieren atención psicosocial adecuada, teniendo en cuenta
que su cobertura en salud ha sido catalogada por la propia Corte Constitucional como
"bajísima"[712].
15. Corte IDH. Caso Atala Riffo y Niñas Vs. Chile. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia del
24 de febrero de 2012. Serie C No. 239, Párrafo 294
Chile | 2012 X
294. Finalmente, en relación a los gastos relacionados con el tratamiento médico y la compra de
medicamentos, la Corte observa que obra prueba en el expediente respecto a dichos gastos ysu
relación con los efectos que tuvo en la señora Atala la pérdida de la tuición de sus niñas 302. El
Tribunal considera que dicha prueba es razonable para concluir que las violaciones declaradas en
la presente Sentencia pudieron tener efectos negativos respecto al bienestar emocional y
psicológico de la señora Atala. Sin embargo, el monto solicitado por los gastos en medicamentos
realizados hasta 2010 (US$ 14.378) no se desprende de manera clara de los certificados anexados.
De otra parte, la Corte observa que la señora Atala recibía atención médica por la afectación de su
salud desde antes del proceso de tuición. Por lo tanto, la Corte no puede determinar con precisión
qué componentes del tratamiento médico se relacionaron exclusivamente con las afectaciones
sufridas por las violaciones declaradas en el presente caso. Respecto al pago de los gastos futuros
del tratamiento médico por el periodo 2012-2017, la Corte considera que dicho gasto será cubierto
por medio de la implementación de la medida de rehabilitación de asistencia médica y psicológica
ya ordenada (supra párr. 254 y 255). Por lo tanto, la Corte fija, con base en un criterio de equidad,
la suma de US$ 10.000 por concepto de los gastos ya realizados por atención médica y psicológica.
154
efectuados por la psiquiatra Figueroa Morales. Según el certificado extendido por esta psiquiatra,
la señora Atala fue atendida en 314 oportunidades, desde junio de 2003 hasta diciembre de 2010,
por un valor total de $12.560.000 pesos chilenos equivalentes a US$ 25.120 (veinticinco mil ciento
veinte dólares de los Estados Unidos de América). Cfr. Certificado emitido por la psiquiatra Figueroa
Morales de 21 de diciembre de 2010 (expediente de anexos al escrito de solicitudes, argumentos
y pruebas, tomo VI, folio 2762 y expediente de fondo, tomo I, folios 242 y 243). Según los
certificados extendidos por la psiquiatra Figueroa Morales, la señora Atala realizó los siguientes
gastos en medicamentos y consultas: i) desde junio de 2003 hasta junio de 2006: $5.775.000 pesos
chilenos. Certificado emitido por la psiquiatra Figueroa Morales de 27 de junio de 2006 (expediente
de anexos al escrito de solicitudes, argumentos y pruebas, tomo VI, folio 2764), y ii) desde junio de
2006 hasta mayo de 2008: $268.000 pesos chilenos. Certificado emitido por la psiquiatra Figueroa
Morales de 19 de mayo de 2008 (expediente de anexos al escrito de solicitudes, argumentos y
pruebas, tomo VI, folio 2763). Además, la psiquiatra Figueroa Morales indicó que la señora Atala
?requerirá apoyo psiquiátrico permanente hasta que las hijas sean independientes, que significa al
menos 7 años más considerando la edad de la hija menor?. Peritaje de Claudia Figueroa Morales
de 4 de agosto de 2010 (expediente de fondo, tomo II, folio 797).
16. Corte IDH. Caso Contreras y otros Vs. El Salvador. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia
de 31 de agosto de 2011. Serie C No. 232, Párrafo 199
El Salvador | 2011 X
199. La Corte estima, como lo ha hecho en otros casos[291], que es preciso disponer una medida
de reparación que brinde una atención adecuada a los padecimientos psicológicos y físicos sufridos
por las víctimas derivadas de las violaciones establecidas en el presente Fallo. Por lo tanto,
habiendo constatado las violaciones y los daños sufridos por las víctimas, el Tribunal considera
necesario ordenar medidas de rehabilitación en el presente caso.
17. Corte IDH. Caso Furlan y Familiares Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2012 Serie C No. 246, Párrafo 201
Argentina | 2012 X
201. Con base en lo anteriormente expuesto, la Corte considera relevante recordar que el presente
proceso civil por daños y perjuicios involucraba un menor de edad, y posteriormente un adulto, en
condición de discapacidad, lo cual implicaba una obligación reforzada de respeto y garantía de sus
derechos. Particularmente, respecto a las autoridades judiciales que tuvieron a cargo dicho proceso
civil era imprescindible que éstas tuvieran en cuenta las particularidades relacionadas con la
condición de vulnerabilidad en la que se encontraba la presunta víctima, pues, además de ser un
menor de edad y posteriormente un adulto con discapacidad, contaba con pocos recursos
económicos para llevar a cabo una rehabilitación apropiada. Al respecto, la Corte recuerda que "es
directo y significativo el vínculo existente entre la discapacidad, por un lado, y la pobreza y la
exclusión social, por otro"[343].
18. Corte IDH. Caso Furlan y Familiares Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2012 Serie C No. 246, Párrafo 282
Argentina | 2012 X
Consideraciones de la Corte
282. La Corte resalta que la atención de salud debe estar disponible a toda persona que lo necesite.
Todo tratamiento a personas con discapacidad debe estar dirigido al mejor interés del paciente,
debe tener como objetivo preservar su dignidad y su autonomía, reducir el impacto de la
enfermedad, y mejorar su calidad de vida[440]. Asimismo, sobre los alcances del derecho a la
rehabilitación en los términos del derecho internacional, el artículo 25 de la CDPD establece el
derecho a gozar del más alto nivel posible de salud sin discriminación por motivos de discapacidad
y la obligación de adoptar medidas pertinentes para asegurar el acceso de las personas con
discapacidad a servicios de salud, incluida la rehabilitación relacionada con la salud[441]. En similar
sentido, se refiere el artículo 23 de la Convención sobre derechos del niño en relación con las
155
medidas que deben adoptar los Estados respecto a las niñas y niños con discapacidad[442].
Página
19. Corte IDH. Caso Furlan y Familiares Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2012 Serie C No. 246, Párrafo 283
Argentina | 2012 X
283. Este Tribunal ha constatado el daño producido en perjuicio de Sebastián Furlan por la demora
en el proceso que impidió que accediera a los tratamientos médicos y psicológicos que habrían
podido tener un impacto positivo en su vida (supra párrs. 197 a 203), lo cual fue evidenciado por
los peritajes médicos que fueron allegados al proceso (supra párrs. 197 a 203). Igualmente, se
encuentra probada la afectación producida al núcleo familiar de Sebastián Furlan (supra párrs. 252
a 265), los cuales fueron respaldados por los estudios socio-económicos y los peritajes remitidos
en el presente caso (supra párrs. 252 a 265). Al respecto, la Corte resalta que de la prueba pericial
allegada al expediente se deriva que en casos como el presente la rehabilitación debe ser brindada
en forma temprana y oportuna, para lograr un resultado idóneo[443], debe ser continua y abarcar
más allá de la etapa de mayor complejidad inicial. Asimismo, la rehabilitación debe tener en cuenta
el tipo de discapacidad que la persona tiene y ser coordinado por un equipo multidisciplinario que
atienda todos los aspectos de la persona como una integralidad[444].
20. Corte IDH. Caso Furlan y Familiares Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2012 Serie C No. 246, Párrafo 254
Argentina | 2012 X
254. Como se observa, la familia Furlan no fue orientada y acompañada debidamente para ofrecer
un mejor apoyo familiar para la rehabilitación de Sebastián Furlan. Al respecto, este Tribunal
considera pertinente destacar que "la mejor forma de cuidar y atender a los niños con discapacidad
es dentro de su propio entorno familiar, siempre y cuando la familia tenga medios suficientes en
todos los sentidos"[403], lo cual implica que las familias deben contar con un apoyo integral para
poder asumir dicha responsabilidad de manera adecuada. Este tipo de apoyo debe incluir "la
educación de los padres y los hermanos, no solamente en lo que respecta a la discapacidad y sus
causas, sino también las necesidades físicas y mentales únicas de cada niño [y] el apoyo
psicológico receptivo a la presión y a las dificultades que significan para las familias los niños con
discapacidad"[404]. Por su parte, el artículo 28 de la Convención de Naciones Unidas sobre
Discapacidad reconoce el derecho de las personas con discapacidad y sus familias que viven en
situaciones de pobreza a la necesidad y a que el Estado les preste atención para sufragar gastos
relacionados con la discapacidad, incluido la capacitación, el asesoramiento, la asistencia
financiera y los servicios de cuidados temporales[405].
21. Corte IDH. Caso Mendoza y otros Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo y
Reparaciones. Sentencia de 14 de mayo de 2013 Serie C No. 260, Párrafo 314
Argentina | 2013 X
314. La Corte considera, como lo ha hecho en otros casos, que el proyecto de vida atiende a la
realización integral de la persona afectada, considerando su vocación, aptitudes, circunstancias,
potencialidades y aspiraciones, que le permiten fijarse razonablemente determinadas expectativas
y acceder a ellas[384]. Asimismo, se expresa en las expectativas de desarrollo personal, profesional
y familiar, posibles en condiciones normales[385]. Esta Corte ha señalado que el "daño al proyecto
de vida" implica la pérdida o el grave menoscabo de oportunidades de desarrollo personal, en forma
irreparable o muy difícilmente reparable[386]. Dicho daño se deriva de las limitaciones sufridas por
una persona para relacionarse y gozar de su entorno personal, familiar o social, por lesiones graves
de tipo físico, mental, psicológico o emocional que se le hayan ocasionado. La reparación integral
del daño al "proyecto de vida" generalmente requiere medidas reparatorias que vayan más allá de
una mera indemnización monetaria, consistentes en medidas de rehabilitación, satisfacción y
garantía de no repetición[387]. En algunos casos recientes la Corte ha valorado este tipo de daño y
lo ha reparado[388]. Asimismo, el Tribunal observa que algunas altas cortes nacionales reconocen
daños relativamente similares asociados a la "vida de relación" u otros conceptos análogos o
complementarios[389].
156
22. Corte IDH. Caso Mendoza y otros Vs. Argentina. Excepciones Preliminares, Fondo y
Reparaciones. Sentencia de 14 de mayo de 2013 Serie C No. 260, Párrafo 191
Página
Argentina | 2013 X
191. Por otro lado, la Corte reitera que frente a niños, niñas y adolescentes privados de la libertad,
el Estado debe asumir una posición especial de garante con mayor cuidado y responsabilidad, y
debe tomar medidas especiales orientadas en el principio del interés superior del niño [264] (supra
párrs. 142 y 188). La condición de garante del Estado con respecto al derecho a la integridad
personal le obliga a prevenir situaciones que pudieran conducir, por acción u omisión, a la
afectación de aquél[265]. En este sentido, el Tribunal recuerda que la Convención sobre los Derechos
del Niño reconoce "el derecho del niño al disfrute del más alto nivel posible de salud y a servicios
para el tratamiento de las enfermedades y la rehabilitación de la salud", y compromete a los Estados
a esforzarse "por asegurar que ningún niño sea privado de su derecho al disfrute de esos servicios
sanitarios"[266].
23. Corte IDH. Caso Chinchilla Sandoval y otros Vs. Guatemala. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 de febrero de 2016. Serie C No. 312., Párrafo 218
Guatemala | 2016 X
218. Por otro lado, respecto de las facilidades prácticas y procedimientos que debían seguirse para
permitir las salidas de la señora Chinchilla del COF y su asistencia a las citas médicas en hospitales,
se daban múltiples dificultades de accesibilidad física al transporte y de disponibilidad de medios
de transporte y tiempo de los policías que la custodiaban. Así, era necesario que guardias la
cargaran y la subieran con dificultades a una camioneta "pick up" sin facilidades para transporte de
una persona en silla de ruedas325. Ella alegó además que no alcanzaba los teléfonos para
comunicarse con su familia. Estas situaciones permiten considerar que la señora Chinchilla estaba
limitada en su entorno y no existía personal asignado para desplazarla. En esta situación, era
razonable que el Estado adoptara las medidas necesarias para garantizar la accesibilidad a los
servicios, por ejemplo mantener personal disponible para atender y movilizar a la señora Chinchilla.
No obstante, a pesar de las medidas adoptadas, es posible concluir que no fueron adoptadas otras
medidas para paliar la situación ante su discapacidad sobrevenida, en particular un acceso
razonable a medios para posibilitar su rehabilitación cuando su salud se había deteriorado.
24. Corte IDH. Caso Poblete Vilches y otros Vs. Chile. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia
de 8 de marzo de 2018. Serie C No. 349., Párrafo 128
Chile | 2018 X
128. Por su parte, la Observación General Nº6 del Comité de DESC de la ONU 207, resalta el deber
de los Estados Partes del Pacto (PIDESC) de tener presente que mantener medidas de prevención,
mediante controles periódicos, adaptados a las necesidades de las mujeres y de los hombres de
edad, cumple un papel decisivo; y también la rehabilitación, conservando la funcionalidad de las
personas mayores, con la consiguiente disminución de costos en las inversiones dedicadas a la
asistencia sanitaria y a los servicios sociales208. Al respecto, en la Observación General Nº 14 del
Comité DESC se detallan las cuestiones sustantivas que se derivan de la aplicación del derecho a
la salud y se tratan cuestiones concretas relacionadas con las personas mayores, incluida "la
prevención, la curación y la rehabilitación [...] destinadas a mantener la funcionalidad y la autonomía
de las personas mayores [...] [y] la prestación de atenciones y cuidados a los enfermos crónicos y
en fase terminal, ahorrándoles dolores evitables y permitiéndoles morir con dignidad"209. Asimismo,
el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (en adelante TEDH) se ha referido también respecto a
la protección de los derechos de las personas mayores210.
25. Corte IDH. Caso Espinoza Gonzáles Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones
y Costas. Sentencia de 20 de noviembre de 2014. Serie C No. 289, Párrafo 331
Perú | 2014 X
C.3.4. Rehabilitación a las mujeres víctimas de violencia sexual durante el conflicto peruano
331. En el presente caso, la Corte estableció que la práctica generalizada de la violación sexual y
otras formas de violencia sexual fue utilizado como una estrategia de guerra y afectó principalmente
a las mujeres en el marco del conflicto existente en el Perú entre 1980 y 2000 (supra párrs. 67, 228
y 229). Por ello, la Corte considera que el Estado debe implementar si no lo tuviere, en un plazo
razonable, un mecanismo que permita a todas las mujeres víctimas de dichas violaciones que lo
157
soliciten, tener acceso gratuito, a través de las instituciones públicas del Estado, a una
rehabilitación especializada de carácter médico, psicológico y/o psiquiátrico dirigido a reparar este
tipo de violaciones.
Página
26. Corte IDH. Caso Chinchilla Sandoval y otros Vs. Guatemala. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 de febrero de 2016. Serie C No. 312., Párrafo 210
Guatemala | 2016 X
210. En cuanto a la salud de las personas con discapacidad, el artículo 25 de la CDPD reconoce "que las personas con
discapacidad tienen derecho a gozar del más alto nivel posible de salud sin discriminación por motivos de discapacidad",
para lo cual los Estados deben adoptar "las medidas pertinentes para asegurar el acceso de las personas con discapacidad
a servicios de salud que tengan en cuenta las cuestiones de género, incluida la rehabilitación relacionada con la salud" 316.
Asimismo, el artículo 26 de la CDPD establece la obligación de los Estados de adoptar medidas
PRUEBAS.
A reserva de ofertarlas dentro del plazo legal que fija el artículo 596 del Código Federal
de Procedimientos Civiles 115 ya sea dentro del presente juicio o en los incidentes que
se lleguen a formar en ejecución de sentencia, e igualmente bajo la premisa del artículo
601116 de dicho código donde precisa que no es necesaria la oferta o desahogo de
pruebas individualizadas por cada uno de los miembros de la colectividad, ofrezco como
pruebas las siguientes:
115
Artículo 596.- En caso de que las partes no alcanzaren acuerdo alguno en la audiencia previa y de
conciliación, el juez procederá a abrir el juicio a prueba por un período de sesenta días hábiles, comunes para
las partes, para su ofrecimiento y preparación, pudiendo, a instancia de parte, otorgar una prórroga hasta por
veinte días hábiles.
Una vez presentado el escrito de pruebas, el representante legal deberá ratificarlo bajo protesta ante
el Juez.
El auto que admita las pruebas señalará la fecha para la celebración de la audiencia final del juicio en
la cual se desahogarán, en un lapso que no exceda de cuarenta días hábiles, el que podrá ser prorrogado por
el juez.
Una vez concluido el desahogo de pruebas, el juez dará vista a las partes para que en un periodo de
diez días hábiles aleguen lo que a su derecho y representación convenga.
El juez dictará sentencia dentro de los treinta días hábiles posteriores a la celebración de la audiencia
final.
116
Artículo 601.- No será necesario que la parte actora ofrezca y desahogue pruebas individualizadas por cada
uno de los miembros de la colectividad.
158
117 https://www.congresocdmx.gob.mx/comsoc-emite-comision-movilidad-sustentable-opinion-positivo-sobre-
proyecto-presupuesto-egresos-ejercicio-fiscal-2021-2127-1.html
Página
En su oportunidad, la legisladora de MORENA, Guadalupe Chavira de la Rosa, indicó
que el año 2021 será complicado para la Ciudad de México, “hoy las condiciones son
distintas y el Gobierno de la Ciudad de México hace esfuerzos para atender los
problemas. El gobierno ha sido responsable, está haciendo una programación del
presupuesto pensando en la estructura en condiciones de pandemia”.
Propuso que ante las dudas y críticas vertidas, diputadas y diputados realizaran
Preguntas Parlamentarias, con el propósito de que las autoridades emitan una
respuesta puntual a las inquietudes; propuesta que fue votada y aprobada.
Por su parte, la diputada del PAN, Gabriela Salido Magos, comentó que votaría en
contra de la opinión, ya que ésta no se solicitó a la Comisión, “lo que se intenta con
esta opinión es avalar las acciones de un gobierno y de un funcionario, siendo que hay
un descontento social y hay voces que critican la forma de la atención de los
problemas”.
La legisladora, también criticó que para el siguiente año el Gobierno de la Ciudad de
México prevé un recorte de 90 por ciento para el Fondo Público de Atención al Ciclista
y al Peatón.
Finalmente, el diputado Jorge Gaviño Ambriz, del PRD, coincidió con lo expuesto por
la legisladora panista, y propuso realizar un debate a fondo de los recursos fiscales
que se están invirtiendo en materia de movilidad.
También aplicable:
Código Federal de Procedimientos Civiles los tribunales pueden invocar hechos notorios
aunque no hayan sido alegados ni probados por las partes. Por hechos notorios deben
entenderse, en general, aquellos que por el conocimiento humano se consideran ciertos e
Página
Http://transparencia.finanzas.cdmx.gob.mx/repositorio/public/upload/repositorio/SIPOT
2020/4TRIMESTRE/AD_2290_GMS.pdf
2. Carátula de la póliza
3. Contratos de seguro
5. Endosos.
Por tanto, dado que se trata de los documentos que obran el poder de la demandada y
el suscrito ni tiene acceso a ellos, lo que manifiesto bajo protesta de decir verdad, y
con fundamento en los artículos 79, 80, 84 y 90 del Código Federal de
Procedimientos Civiles, solicito se le requiera a la demandada que al momento de
contestar la demanda exhiba adjunta a su contestación:
Artículo 1.- Por el contrato de seguro, la empresa aseguradora se obliga, mediante una prima,
a resarcir un daño o a pagar una suma de dinero al verificarse la eventualidad prevista en
el contrato.
Artículo 81.- Todas las acciones que se deriven de un contrato de seguro prescribirán:
162
origen.
Artículo 82.- El plazo de que trata el artículo anterior no correrá en caso de omisión, falsas o
inexactas declaraciones sobre el riesgo corrido, sino desde el día en que la empresa haya tenido
conocimiento de él; y si se trata de la realización del siniestro, desde el día en que haya
llegado a conocimiento de los interesados, quienes deberán demostrar que hasta
entonces ignoraban dicha realización. Tratándose de terceros beneficiarios se necesitará,
además, que éstos tengan conocimiento del derecho constituido a su favor.
Http://transparencia.finanzas.cdmx.gob.mx/repositorio/public/upload/repositorio/SIPOT
2020/4TRIMESTRE/AD_2290_GMS.pdf
163
Página
Por tanto es claro que existe un seguro con la cobertura de responsabilidad civil que
cubre los eventos del metro.
El suscrito y las víctimas tienen derecho por le a conocer el contenido total del contrato
de seguro pero no tiene los medios legales para hacerlo que no sea a través del
requerimiento judicial que se solicita por este conducto, pues el trato que le otorga la
ley a estos documentos es de confidenciales.
Respetuosamente afirmamos que es evidente que no existe modo legal alguno para
que la colectividad pueda o el suscrito pueda solicitar los documentos material de la
prevención, pues el contrato de seguro es un documento confidencial que
celebran dos entes (METRO y la aseguradra) dentro del cuál es evidente que no
tuvimos ninguna participación, y no hay una forma legal de solicitarlo, y sí es así le
suplico nos lo informe pues la documentación del contrato de seguro y sus derivados
es confidencial, así lo establece la Ley de Instituciones de Seguros y Fianzas,
inserto:
Artículo 190.- Los informes que las Instituciones obtengan respecto a los solicitantes
de seguros de caución o de fianzas, o de quienes ofrezcan contragarantías, serán
estrictamente confidenciales, aun cuando dichos seguros de caución y fianzas
se refieran a infracciones de leyes penales, y se consideran solicitados y
obtenidos con un fin legítimo y para la protección de intereses públicos.
Artículo 268.- Las Instituciones podrán contratar con terceros, incluyendo, según sea
el caso, a otras Instituciones de Seguros o a otras Instituciones de Fianzas, la
prestación de servicios necesarios para su operación, de conformidad con las
disposiciones de carácter general que expida la Comisión, con acuerdo de su Junta
de Gobierno.
Las disposiciones de carácter general a que se refiere el primer párrafo de este
artículo, deberán contener, entre otros, los siguientes elementos:
I. Los lineamientos técnicos y operativos que deberán observarse para la
realización de tales operaciones, así como para salvaguardar la confidencialidad
de la información de los contratantes, asegurados y beneficiarios, o bien de los
fiados y beneficiarios, y proveer que en la celebración de dichas operaciones se
cumplan las disposiciones aplicables;
Artículo 380.- La Comisión podrá proporcionar a la Secretaría, al Banco de México, a
la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, a la Comisión Nacional del Sistema de
Ahorro para el Retiro y a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los
Usuarios de Servicios Financieros, la asistencia que le soliciten en el ejercicio de sus
funciones, para lo cual podrá proporcionarles información y documentación que obre
en su poder respecto de las Instituciones y Sociedades Mutualistas, así como las
demás personas y empresas sujetas a la inspección y vigilancia de la Comisión, sin
que ello implique la violación a la confidencialidad que deba observar conforme
a las disposiciones legales aplicables.
Los requerimientos de información previstos en el artículo 117 de la Ley de
Instituciones de Crédito, respecto de las operaciones a que se refieren los artículos
118, fracciones XXI a XXIII, y 144, fracción XVII, de este ordenamiento, así como los
relativos a lo previsto por el artículo 190 de esta Ley, se formularán, en su caso, a
través de la Comisión.
165
Página
Las operaciones de seguro se encuentran protegidas como confidenciales, dado el
secreto propio de las operaciones a que se refieren los artículos 46, fracción XV, en
relación con el artículo 117 de la Ley de Instituciones de Crédito.
conocido o probado, a otro que no lo es, si entre ambos existe un enlace preciso y
directo según las reglas del criterio humano. De ahí que, el procedimiento racional
para analizar la actualización de la prueba presuncional humana, debe seguir
estándares determinados, a saber: El primero, está constituido por los hechos
base, mismos que deben encontrarse suficientemente acreditados por cualquier
medio de convicción; de tal forma que, si éstos no están suficientemente
acreditados o han sido puestos en duda debido a contrapruebas y contraindicios,
o porque se obtuvieron ilegalmente, entonces fallará la base probatoria de la cual
debe partir imprescindiblemente la prueba y, por tanto, la misma no podrá ser
aplicada. El segundo elemento, es la formulación de una inferencia, está sujeta a
un estudio de razonabilidad, a efecto de determinar si la misma resulta razonable,
o si, por el contrario, es arbitraria o desmedida; es decir, la inferencia debe
encontrarse acreditada inequívocamente, de tal manera que exista una conexión
entre los hechos base y los hechos consecuencia, en el sentido de que
actualizados los primeros, se debe afirmar la generación de estos últimos.
Además, la inferencia debe surgir de forma natural e inmediata de los indicios que
constituyen los hechos base, pues la eficacia de la presunción judicial disminuirá
en la medida en que las conclusiones tengan que obtenerse a través de mayores
inferencias y cadenas de silogismos. Así, la inferencia lógica debe sustentarse en
máximas de la experiencia, esto es, en una clara idea de razonabilidad, de forma
tal que el vínculo entre hechos base y hechos consecuencia debe construirse de
modo coherente. Después de extraer las inferencias lógicas o lo que la doctrina ha
denominado presunción abstracta, el juzgador deberá proceder al análisis de todo
el material probatorio, para llevar a cabo un proceso de exclusión de cualquier otra
posible conclusión, con la intención de determinar si resulta factible la actualización
de otra hipótesis, lo cual restaría cualquier alcance a la prueba presuncional
humana. Una vez realizado lo anterior, se actualiza lo que la doctrina ha llamado
presunción concreta, misma que debe ser elemento probatorio plasmado por el
juzgador en la resolución correspondiente.SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO
EN MATERIA CIVIL DEL DÉCIMO PRIMER CIRCUITO.XI.2o.C.5 C (10a.) Amparo
directo 1028/2018. Leticia López Rodríguez. 7 de marzo de 2019. Unanimidad de
votos. Ponente: Juan García Orozco. Secretaria: Norma Navarro Orozco. Nota: La
tesis aislada 2a. LXIII/2001, de rubro: "DOCTRINA. PUEDE ACUDIRSE A ELLA
COMO ELEMENTO DE ANÁLISIS Y APOYO EN LA FORMULACIÓN DE
SENTENCIAS, CON LA CONDICIÓN DE ATENDER, OBJETIVA Y
RACIONALMENTE, A SUS ARGUMENTACIONES JURÍDICAS." citada, aparece
publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época,
Tomo XIII, mayo de 2001, página 448, registro digital: 189723.Esta tesis se publicó
el viernes 13 de septiembre de 2019 a las 10:22 horas en el Semanario Judicial de
la Federación. Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación, Décima Epoca. Libro 70, Septiembre de 2019
(3 Tomos). Pág. 2202. Tesis Aislada.
COMPETENCIA
Este Honorable Juzgado es competente para conocer del presente asunto, pues la
fracción IV del artículo 24 del CFPC, establece que la competencia por territorio surte
en acciones colectivas surte a a favor del juez del domicilio del demandado y el
organismo dependiente de la Ciudad de México, el sistema de transporte colectivo
tiene su domicilio radicado en la Ciudad de México, ubicado en Delicias 67,
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numeral en cita:
Artículo 24.- Por razón de territorio es tribunal competente:
.
..
IV. El del domicilio del demandado, tratándose de acciones reales
sobre muebles o de acciones personales, colectivas o del estado civil;
Por lo antes expuesto y debidamente fundado:
A Usted C. Juez, atentamente pido se sirva:
Segundo.- Admitir la demanda en sus términos y proceder conforme a los artículos 590
y siguientes del Código Federal de Procedimientos Civiles, ordenando la
correspondiente vista a la entidad demandada.
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