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FORMATO 

DE JUICIO DE AMPARO INDIRECTO EN CONTRA DE LAS


MULTAS, ADEUDOS, Y RECARGOS EXCESIVOS PARA DECLARAR
INCONSTITUCIONAL A LA DIRECCIÓN DE RECUPERACIÓN DE
ADEUDOS Y EJECUCIÓN FISCAL; ASÍ COMO CUANDO HAY CORTE
DEL SERVICIO DE AGUA POTABLE

JUICIO DE AMPARO INDIRECTO NÚMERO: _____________

C.JUEZ DE DISTRITO EN TURNO CON RESIDENCIA EN LA

CIUDAD DE [NOMBRE DE LA CIUDAD], ESTADO DE [NOMBRE DEL


ESTADO].

PRESENTE.

                        [NOMBRE COMPLETO DEL PROMOVENTE], de


nacionalidad mexicana, mayor de edad legal, con plena capacidad para
obligarse y contratar, por mi propio y personal derecho, señalando como
domicilio para oír y recibir toda clase de notificaciones el ubicado
en [DOMICILIO COMPLETO, CIUDAD Y ESTADO], para recibir
notificaciones; y que por medio del presente escrito vengo ante Usted por
lo siguiente:

Que vengo a solicitar ante Usted el AMPARO Y PROTECCIÓN DE LA


JUSTICIA FEDERALpor lo dispuesto en los artículos 1, 2, 3, 5, 35, 107,
108, 109, 110 de la Ley de Amparo reglamentaria de los artículos 103 y
107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a fin de
que me proteja ampliamente contra las violaciones a mis derechos
humanos reconocidos por nuestra Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos así como por los Tratados Internacionales de los cuales el
Estado Mexicano es parte.

Fundo mi demanda de amparo en lo siguiente:

I.- NOMBRE Y DOMICILIO DEL QUEJOSO.- Ha quedado establecido en


el rubro de la demanda.

II.- TERCERO INTERESADO.- No existe tercero interesado.

III.- AUTORIDADES RESPONSABLES:

1. A) AUTORIDADES ORDENADORAS:

1.- GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL ESTADO LIBRE Y


SOBERANO DE QUINTANA ROO, CON DOMICILIO UBICADO EN EL
PALACIO DE GOBIERNO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO EN
AVENIDA 22 DE ENERO, NÚMERO 001, COLONIA CENTRO, CÓDIGO
POSTAL 77000, DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD DE
CHETUMAL, CAPITAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO.

2.- SECRETARIO DE GOBIERNO DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE


QUINTANA ROO, CON DOMICILIO UBICADO EN AVENIDA 22 DE
ENERO NÚMERO 001, COLONIA CENTRO, CÓDIGO POSTAL 77000,
ANEXO AL PALACIO DE GOBIERNO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO,
CON DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD DE CHETUMAL, CAPITAL
DEL ESTADO DE QUINTANA ROO.

3.- XV LEGISLATURA DEL CONGRESO LOCAL DEL PODER


LEGISLATIVO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, CON DOMICILIO
UBICADO EN COLONIA BARRIO BRAVO, CALLE ESMERALDA
NÚMERO 102, ENTRE MIGUEL HIDALGO Y BOULEVARD BAHÍA,
CÓDIGO POSTAL 77098, CON DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD
DE CHETUMAL, CAPITAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO.

1. B) AUTORIDADES EJECUTORAS:

1.- DIRECTOR GENERAL DEL PERIÓDICO OFICIAL DEL ESTADO DE


QUINTANA ROO, CON DOMICILIO UBICADO EN AVENIDA ÁLVARO
OBREGÓN NÚMERO 271, COLONIA CENTRO, CÓDIGO POSTAL
77000, CON DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD DE CHETUMAL,
CAPITAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO.

2.- DIRECTOR DE LA COMISIÓN DE AGUA POTABLE Y


ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, CON
DOMICILIO UBICADO EN AVENIDA EFRAIN AGUILAR NÚMERO 210,
COLONIA CENTRO, DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD DE
CHETUMAL, CAPITAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO.

 
3.- DIRECTOR DE LA UNIDAD DE RECUPERACIÓN DE ADEUDOS Y
EJECUCIÓN FISCAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, CON
DOMICILIO UBICADO EN AVENIDA VENUSTIANO CARRANZA
NÚMERO 207, COLONIA CENTRO, CÓDIGO POSTAL 77000, CON
DOMICILIO CONOCIDO EN LA CIUDAD DE CHETUMAL, CAPITAL DEL
ESTADO DE QUINTANA ROO.

IV.- ACTO RECLAMADO:

1. SE RECLAMA DEL GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL


ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE QUINTANA ROO, LA
PROMULGACIÓN Y ENTRADA EN VIGOR DE LOS ARTÍCULOS
INCONSTITUCIONALES 13, 34 FRACCIÓN VI, 81 Y 105-BIS
FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, QUE
FACULTA EL COBRO DE ADEUDOS, MULTAS Y RECARGOS
POR EL SERVICIO DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO
BAJO LA MODALIDAD DE CRÉDITOS FISCALES QUE AFECTA
REAL Y DIRECTAMENTE MI ESFERA JURÍDICA DE
CIUDADANO ANTE LOS ILEGALES COBROS Y CARGOS
FISCALES AL VITAL LÍQUIDO, NECESARIO PARA LA
SUBSISTENCIA DEL SER HUMANO, EN MI CALIDAD DE
USUARIO Y CONTRATANTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO.
 

2. SE RECLAMA DEL SECRETARIO DE GOBIERNO DEL ESTADO


LIBRE Y SOBERANO DE QUINTANA ROO, LA RATIFICACIÓN
DE LA FIRMA DE PROMULGACIÓN Y ENTRADA EN VIGOR
DEL GOBERNADOR DEL ESTADO DE QUINTANA ROO DE
LOS ARTÍCULOS INCONSTITUCIONALES 13, 34 FRACCIÓN
VI, 81 Y 105-BIS FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA
ROO, QUE FACULTA EL COBRO DE ADEUDOS, MULTAS Y
RECARGOS POR EL SERVICIO DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO BAJO LA MODALIDAD DE CRÉDITOS
FISCALES QUE AFECTA REAL Y DIRECTAMENTE MI ESFERA
JURÍDICA DE CIUDADANO ANTE LOS ILEGALES COBROS Y
CARGOS FISCALES AL VITAL LÍQUIDO, NECESARIO PARA LA
SUBSISTENCIA DEL SER HUMANO, EN MI CALIDAD DE
USUARIO Y CONTRATANTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO.

3. SE RECLAMA DE LA XV LEGISLATURA DEL CONGRESO LOCAL


DEL PODER LEGISLATIVO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO,
LA VOTACIÓN Y APROBACIÓN DE LOS ARTÍCULOS
INCONSTITUCIONALES 13, 34 FRACCIÓN VI, 81 Y 105-BIS
FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, QUE
FACULTA EL COBRO DE ADEUDOS, MULTAS Y RECARGOS
POR EL SERVICIO DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO
BAJO LA MODALIDAD DE CRÉDITOS FISCALES QUE AFECTA
REAL Y DIRECTAMENTE MI ESFERA JURÍDICA DE
CIUDADANO ANTE LOS ILEGALES COBROS Y CARGOS
FISCALES AL VITAL LÍQUIDO, NECESARIO PARA LA
SUBSISTENCIA DEL SER HUMANO, EN MI CALIDAD DE
USUARIO Y CONTRATANTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO.

4. SE RECLAMA DEL DIRECTOR GENERAL DEL PERIÓDICO


OFICIAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, LA PUBLICACIÓN
EN EL PERIÓDICO OFICIAL DEL ESTADO DE QUINTANA ROO
DE LOS ARTÍCULOS INCONSTITUCIONALES 13, 34
FRACCIÓN VI, 81 Y 105-BIS FRACCIONES I Y III DE LA LEY
DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE
QUINTANA ROO, QUE FACULTA EL COBRO DE ADEUDOS,
MULTAS Y RECARGOS POR EL SERVICIO DE AGUA POTABLE
Y ALCANTARILLADO BAJO LA MODALIDAD DE CRÉDITOS
FISCALES QUE AFECTA REAL Y DIRECTAMENTE MI ESFERA
JURÍDICA DE CIUDADANO ANTE LOS ILEGALES COBROS Y
CARGOS FISCALES AL VITAL LÍQUIDO, NECESARIO PARA LA
SUBSISTENCIA DEL SER HUMANO, EN MI CALIDAD DE
USUARIO Y CONTRATANTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO.

5. SE RECLAMA DEL DIRECTOR DE LA COMISIÓN DE AGUA


POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA
ROO Y DEL DIRECTOR DE LA UNIDAD DE RECUPERACIÓN DE
ADEUDOS Y EJECUCIÓN FISCAL DEL ESTADO DE QUINTANA
ROO, LA EJECUCIÓN DE LOS ARTÍCULOS
INCONSTITUCIONALES 13, 34 FRACCIÓN VI, 81 Y 105-BIS
FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA
ROO  MEDIANTE EL INCONSTITUCIONAL, ILEGAL,
INCONVENCIONAL Y EXCESIVO COBRO DE ADEUDOS,
MULTAS Y RECARGOS POR EL SERVICIO DE AGUA POTABLE
Y ALCANTARILLADO BAJO LA MODALIDAD DE CRÉDITOS
FISCALES QUE AFECTA REAL Y DIRECTAMENTE MI ESFERA
JURÍDICA DE CIUDADANO ANTE LOS ILEGALES COBROS Y
CARGOS FISCALES AL VITAL LÍQUIDO, NECESARIO PARA LA
SUBSISTENCIA DEL SER HUMANO, EN MI CALIDAD DE
USUARIO Y CONTRATANTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE Y ALCANTARILLADO, DICHAS MULTAS Y
RECARGOS EXCESIVOS Y QUE SOBREPASAN EL SALARIO
MÍNIMO QUE PERCIBO PARA SUBSISTIR; ASÍ COMO SE
RECLAMA DE LAS AUTORIDADES SEÑALADAS COMO
RESPONSABLES EN CALIDAD DE EJECUTORAS EL
INCONSTITUCIONAL CORTE DEL SERVICIO DE AGUA
POTABLE, QUE ME AFECTA EN MI ESFERA PERSONAL
JURÍDICA, EN MI VIVIENDA, EN MI FAMILIA Y EN EL
DESARROLLO DE MI PERSONALIDAD.

V.- DERECHOS HUMANOS Y GARANTIAS VIOLADAS:

SE CONSIDERAN COMO VIOLADOS LOS ARTÍCULOS 1, 4 PÁRRAFO


VI, 14, 16, 17, 22, 27 PÁRRAFOS VI Y V, Y 39 DE LA CONSTITUCIÓN
POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS; 1, 2, 3, 4, 8, 24,
25 y 29 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS
HUMANOS “PACTO SAN JOSÉ, COSTA RICA”; 11 DEL PROTOCOLO
ADICIONAL A LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS
HUMANOS EN MATERIA DE DERECHOS ECONÓMICOS, SOCIALES Y
CULTURALES “PROTOCOLO DE SAN SALVADOR”; 1, 2, 3, 6, 7, 8, 25
Y 30 DE LA DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS
HUMANOS.

VI.- PROTESTO.- Bajo protesta de decir verdad señalo que los


antecedentes que fundan los conceptos de violación y el acto reclamado
son ciertos.

VII.- HECHOS:

1. Soy propietario en pleno uso, goce y disfrute del


predio [DESCRIPCIÓN DE LA PROPIEDAD TAL COMO VIENE
EN LA ESCRITURA PÚBLICA, TITULO DE PROPIEDAD O
CONSTANCIA DE PROPIEDAD], ubicado en el
Municipio [SEÑALAR MUNICIPIO], del Estado de Quintana
Roo, inscrito en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio
del Estado de Quintana Roo bajo el Folio Electrónico
número [NÚMERO DE FOLIO ELECTRÓNICO QUE VIENE EN
LA ESCRITURA PÚBLICA, TITULO DE PROPIEDAD O
CONSTANCIA DE PROPIEDAD]; del cual, anexo una copia
simple de dicho documento público al legajo de la presente
demanda bajo el número que corresponda.

2. Soy usuario del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado en el


Estado de Quintana Roo, el cual celebré Contrato del Servicio de
Agua Potable con la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del
Estado de Quintana Roo desde el año [INGRESAR EL AÑO EN
QUE SE CELEBRÓ EL CONTRATO CON CAPA] identificado con el
número [NÚMERO DE CONTRATO], del cual, anexo copia simple
de dicho documento público al legajo de la presente demanda bajo
el número que corresponda.
3. Que desde la fecha [INGRESAR LA FECHA, SEGÚN SEA EL
CASO CONCRETO], la Comisión de Agua Potable del Estado de
Quintana Roo, mediante la Dirección de Recuperación de Adeudos
y Ejecución Fiscal me ha ejecutado el cobro de multas y recargos
por adeudos por el servicio de agua potable de USO
DOMESTICO que tengo en mi hogar, mediante la Orden
Número [INGRESAR EL NÚMERO DE FOLIO O NÚMERO DE
OFICIO CON EL CUAL SE HACE EL REQUERIMIENTO DE
PAGO], por el excesivo monto de $ [INGRESAR EL MONTO
DESGLOSADO DE LAS MULTAS Y RECARGOS QUE SE ESTÉN
EJECUTANDO EN COBRO], mismas que resultan
inconstitucionales, inconvencionales y excesivas sobre un
elemento vital para el desarrollo y sustento de la vida humana,
más aún cuando soy un obrero que me dedico a [SEÑALAR EL
OFICIO A QUE SE DEDICA] y que percibo mensualmente el
ingreso como salario de $ [INGRESAR EL MONTO DEL SALARIO
MENSUAL QUE PERCIBE], mismas situaciones que hago constar
con la copia simple de la ejecución de adeudos por multas y
recargos de fecha [INGRESAR LA FECHA DEL DOCUMENTO
DONDE SE REQUIERE EL PAGO DE LAS MULTAS Y
RECARGOS] identificado con la Orden Número [INGRESAR EL
NÚMERO DE FOLIO O NÚMERO DE OFICIO CON EL CUAL SE
HACE EL REQUERIMIENTO DE PAGO], con la copia simple de
mi recibo de agua potable del último bimestre de
fecha [INGRESAR LA FECHA DEL RECIBO DE AGUA POTABLE
DEL ÚLTIMO BIMESTRE PAGADO], y con la copia de mi recibo
de nómina de fecha [INGRESAR LA FECHA DEL RECIBO DE
NOMINA], todos anexos al legajo de la presente demanda bajo el
número que corresponda.

4. Con fecha [SEÑALAR LA FECHA EXACTA DEL CORTE] la


Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana
Roo, me realizó el corte del servicio de agua potable en mi hogar,
con el cual se ha perjudicado a mi persona, mi vivienda, mi familia
y el desarrollo de la personalidad, dicho acto de restricción
inconstitucional y que viola los derechos de disposición de agua
potable.

5. Que dicho acto proveniente de las autoridades ordenadoras y


ejecutoras son fundados en los artículos 13, 34 FRACCIÓN VI, 81
Y 105-BIS FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE QUINTANA ROO, que otorgan
la facultad de que las multas y recargos provenientes de los
adeudos de agua potable y alcantarillado tengan el carácter
de Créditos Fiscales, para su ejecución y cobro; situación que
convierte en inconstitucional tanto la ley misma de donde proviene
así como el acto de autoridad que se desplega a través de esta.
Derivados de los hechos anteriormente escritos y como puede
darse cuenta su Señoría me encuentro en un estado de
indefensión total y desventaja ante las autoridades del Estado; por
lo que es conveniente otorgar Amparo y Protección de la Justicia
de la Unión.

VIII.- CONCEPTOS DE VIOLACIÓN.- Se consideran violados los artículos


constitucionales que a continuación se precisan:

 Se viola el artículo 1 de la Constitución Política de los Estados Unidos


Mexicanosvigente que a la letra señala:

ARTÍCULO 1o.  En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas


gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución
y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea
parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio
no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las
condiciones que esta Constitución establece.

Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de


conformidad con esta Constitución y con los tratados
internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las
personas la protección más amplia.

Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la


obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los
derechos humanos de conformidad con los principios de
universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En
consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y
reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos
que establezca la ley.

Está prohibida la esclavitud en los Estados Unidos Mexicanos. Los


esclavos del extranjero que entren al territorio nacional alcanzarán,
por este solo hecho, su libertad y la protección de las leyes.

Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o


nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social,
las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias
sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la
dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los
derechos y libertades de las personas.

El 10 de junio de 2011 el Estado Mexicano (Estados Unidos Mexicanos) se


publica en el Diario Oficial de la Federación la reforma Constitucional en
materia de derechos humanos y reconocimiento de los derechos
fundamentales de las personas, así mismo, debido a estas tan importantes
reformas, entran en vigor los principios tuteladores no solo de los derechos
humanos, sino también de los principios rectores de estos, los  cuales son
los siguientes:

1.- Principio Pro Cives, Favor Libertatis  o Pro Personae: interpretación


conforme a la norma que más beneficie a la persona y la máxima tutela a
Favor de la Libertad Personal, como derecho inherente a la persona.

2.- Principio de Progresividad: determina que los derechos humanos están


en proceso constante de evolución, desde la aprobación de la Declaración
Universal de los Derechos Humanos. De la misma forma se prohíbe el
retrotraimiento de los derechos humanos reconocidos de fuente
Constitucional y de Fuente Internacional.

3.- Principio de Indivisibilidad: los derechos humanos forman parte de un


sistema interamericano de reconocidos, en el que todas las personas, sin
que tenga injerencia alguna si son derechos individuales, económicos,
solidarios  o sociales, deben ser igualmente respetados y protegidos, sin
perjuicio de su debida ponderación específica.

4.- Principio de Universalidad: todas las personas, nacen libres e iguales,


dotados de razón y conciencia, por lo tanto, tienen de forma amplia y no
limitativa, el goce de todos los derechos de los que naturalmente son
inherentes, no reservándose a un grupo o grupos de personas, sino más
bien, tomando a toda una sociedad como dignos de ser reconocidos en su
ius naturale.
5.- Principio de Interdependencia: un derecho humano es un sistema de
derechos concatenados entre sí, al momento de lesionar un derecho
humano, no se considera una lesión individual a este derecho, sino más
bien, se lesionan todos aquellos inherentes y dependientes de la propia
persona, al lesionar un derecho humano se lesionan todos los
dependientes.

Estos esfuerzos de modificación a nuestros sistema  de interpretación y


aplicación de los derechos humanos en nuestra Nación se debe a la
Sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, en el Caso
Rosendo Radilla Pacheco Vs México , en el cual, se condenó al Estado
Mexicano a modificar la Constitución Federal para hacerla sumamente
protector de los derechos interamericanos que asisten a toda persona y que
de fuente internacional se encuentran vigentes. Dichos derechos de rango
internacional se encuentran previstos en diversos Tratados Internacionales
que México ha suscrito y que el Senado de la República ha ratificado con las
reservas correspondientes, sin embargo, es de rescatar lo que expresa en
el texto del artículo 1°Constitucional en su párrafo segundo, al señalar de
forma imperativa la regla de interpretación de los propios derechos
humanos, entendiendo que éstos no son entregados por el Estado, sino
más bien, reconocidos en toda su amplitud para el respeto y reparación de
los derechos universales de las personas.

Dentro de los principios que esta reforma logró se encuentran las


siguientes:

1.- Entrada en vigor del Principio Pro Personae: reconocido en el artículo 29


de la Convención Americana Sobre Derechos Humanos “Pacto de San José
de Costa Rica”, que implica la interpretación conforme, es decir, de la
forma en la que más beneficie a la persona, la inaplicación de la norma
general que perjudique y el beneficio amplio de interpretación conforme
que tutele el Favor Debilis, Favor Libertatis e In Dubio Pro Actione de todas
las personas. Dicho principio Pro Persona entabla una encomienda para el
Estado y las Entidades Federativas de tratar de todas formas en grado
supra la existencia natural de la propia persona, esto es, en caso de duda
sobre que norma regula o reconoce derechos humanos deba aplicarse al
caso concreto, ya sea de fuente Constitucional o fuente Internacional, debe
preferirse aquella que mejor proteja a la persona y que le permita gozar de
una mejor manera su derecho, en una aplicación coherente con los valores
y principios que conforman la base de todo ordenamiento jurídico.

2.- Entrada en vigor del Control de Convencionalidad: este principio


aparece por primera vez en la Sentencia de la Corte Interamericana de los
Derechos Humanos denominado Almonacid Arellano Vs Chile , en dicho
cuerpo de sentencia se reconoce que los Jueces y Tribunales Locales de tal
Nación se encuentran estrictamente ceñidas a Ministerio de Ley y por ello
están obligados a la aplicación de las normas internas nacionales, sin
embargo, un Estado que ha suscrito y ratificado la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, también están sometidos y obligados a velar por
que los efectos de la Convención Americana no se van mermados por la
aplicación de leyes contrarias a su objeto y fin, por lo tanto, en el punto
126 de tal Sentencia la Corte Interamericana expresó lo siguiente:

[…] En otras palabras, el Poder Judicial debe ejercer una especie de


“control de convencionalidad” entre las normas jurídicas internas
que aplican en los casos concretos y la Convención Americana
sobre Derechos Humanos. […]

Este principio orientador arrojo luz por primera vez, aunado fuerte e
inseparablemente del Principio Pro Personae, donde se otorga la facultad a
las autoridades locales de cada Nación, en el ámbito de sus competencias
de realizar dicho Control de Convencionalidad, cuando una norma general
se contrapone a un derecho humano reconocido tanto en la Carta Supra
Nacional y en los Tratados Internacionales en materia de Derechos
Humanos de los que México es parte, debe de realizarse ponderadamente
dicho Control de Convencionalidad, lo que implica la inaplicación de la
norma que menos beneficie y favoreciendo la norma con más rango
tutelador, las cuales pueden encontrarse en los Tratados Internacionales de
la materia o de la Convención Interamericana sobre Derechs Humanos,
este hecho hace surgir diversos modelos de Control de Convencionalidad en
la aplicación firme y amplia del principio Pro Personae reconocido en el
propio artículo 29 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos
“Pacto de San José de Costa Rica”, ya que en la Sentencia de la Corte
Interamericana de los Derechos Humanos denominada Caso Boyce y otros
Vs Barbados , expreso la forma correcta en que debe de ser implementado
un exacto Control de Convencionalidad en cuestiones del ámbito interno, ya
que plantea que las autoridades locales no deben limitarse a realizar un
examen de constitucionalidad de las resoluciones, sino también de
Convencionalidad. Este principio poco abordado por las autoridades
Federales y Locales, es uno de los que tutela la existencia del actual
artículo 1° Constitucional, ya que en este sentido es de entenderse que no
se debe limitar a las normas generales de carácter internas, sino también y
de forma Ex Officio, de forma Convencional.

3.- Entrada en vigor de la regla Ex Officio : de conformidad por lo previsto


en el artículo 133 de la Constitución Política Federal, en contraposición con
el artículo 1° del mismo mandamiento supra, es considerada como una
clara obligación a todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias,
de aplicar de forma amplia el principio de control difuso de
constitucionalidad, de acuerdo a la aplicación conforme del principio pro
personae, implica que todas las autoridades tiene la responsabilidad de
realizar el control de convencionalidad y de constitucionalidad de los
derechos humanos. Si bien es cierto que las autoridades locales no pueden
realizar una declaratoria sobre la inconstitucionalidad de una norma o parte
de ella, porque esa tarea concierne al Poder Judicial de la Federación, de
acuerdo al propio artículo 103 de la Constitución Federal, si pueden realizar
la ponderación sobre la aplicación de la norma que más beneficie a la
persona. Es el caso que tales principios rectores y tuteladores a favor de la
persona son los siguientes:
1. a) Principio Interpretación Conforme: Todas las normas que
regulan la actuación de las autoridades públicas deben ser leídas a
la luz de las obligaciones generales en materia de derechos
humanos, sus principios de interpretación y los alcances que
tengan las normas que reconocen derechos humanos en la
Constitución y los tratados internacionales de los que México es
Parte, es decir, las normas integrantes de lo que se da en llamar
“Bloque de constitucionalidad en materia de derechos humanos”.
Esta interpretación requiere una actividad creativa para lograr la
compatibilidad de la norma nacional conforme al parámetro
convencional y así lograr la efectividad del derecho o libertad de
que se trate, con los mayores alcances posibles en términos del
principio pro persona.

1. b) Principio pro personae: En caso de darse un posible conflicto


entre una disposición de carácter interno y una norma del Bloque
de constitucionalidad, o de existir más de una norma del Bloque
disponible sobre una misma materia, las autoridades deben aplicar
siempre la norma que más amplíe al máximo la protección de los
derechos de la persona, o, en su caso, que reduzca al mínimo su
restricción. Esta disposición constitucional encuentra, a su vez, su
correlato convencional en el artículo 29 inciso b)de
la CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS
“PACTO DE SAN JOSÉ DE COSTA RICA”, que establece:

Artículo 29. Normas de interpretación

Ninguna disposición de la presente Convención puede ser


interpretada en el sentido de:

[…]
1. b) limitar el goce y ejercicio de cualquier derecho o libertad
que pueda estar reconocido de acuerdo con las leyes de
cualquiera de los Estados Partes o de acuerdo con otra
convención en que sea parte uno de dichos Estados.

Como se mencionó en un principio, es gracias a la Sentencia de la Corte


Interamericana sobre Derechos Humanos en el Caso Rosendo Radilla
Pacheco Vs México, abrió  la posibilidad a la interpretación amplia y
conforme de los derechos naturales de los que somos inherentes los seres
humanos, ya que nuestra Suprema Corte de Justicia de la Nación, en
el Expediente Varios 912/2010, donde determina las obligaciones
concretas del cumplimiento de la sentencia de referencia, estipuló aún más
principios sobre la interpretación del principio pro personae y los criterios
orientadores de fuente internacional para la mejor aplicación del derecho
comparado, es decir, que la Jurisprudencia de la Corte Interamericana de
los Derechos Humanos, en los casos en los que México no sea parte, son
criterio orientador para la aplicación del principio de convencionalidad y
para la mayor protección de las personas y los derechos inherentes,
sustentado en la Contradicción de Tesis 293/2011. Ahora bien, es de
suma importancia resaltar tal obligación del Estado Mexicano con relación
al Bloque de Constitucionalidad en las cuestiones de derechos para la
aplicación de la Interpretación Conforme vía Ex Officio las contenidas en
el Expediente Varios 912/2010 de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación, al admitir la competencia de la Corte Interamericana sobre
Derechos Humanos en el Caso Rosendo Radilla Pacheco Vs México,
contrayendo el Estado las siguientes obligaciones:

1. a) Todas las juzgadoras y todos los juzgadores del país están


obligados a ejercer de manera oficiosa un control de la
convencionalidad en materia de derechos humanos, que habrá de
practicarse mediante el uso del criterio de interpretación
conforme;
 

1. b) La jurisprudencia emanada de la Corte Interamericana de


Derechos Humanos será obligatoria para todas las juzgadoras y
todos los juzgadores de México cuando se trate de casos en los
que el Estado mexicano sea parte, en tanto que el resto de la
jurisprudencia interamericana tendrá un carácter orientador sobre
obligaciones que se desprenden de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos y otros ordenamientos del marco jurídico
regional en la materia.

1. c) La Suprema Corte de Justicia de la Nación conocerá de los


conflictos competenciales entre tribunales de la justicia ordinaria y
autoridades con funciones jurisdiccionales del orden militar cuando
se hallaran civiles involucrados en los procesos, asentando el
criterio que habría de prevalecer en sus resoluciones, a saber, que
habría de fallar a favor de la justicia ordinaria mediante la
inaplicación del artículo 57 fracción II inciso a) del Código de
Justicia Militar para cada caso concreto.

Es observable entonces la obligación de los jueces dentro del territorio


nacional de la aplicación vía Ex Officio en favor de los derechos y libertades
de todas las personas, de conformidad a los principios de universalidad e
interdependencia, ya que al reconocer en su integridad aquellos derechos
humanos inherentes a las personas y que por su propia naturaleza son
inseparables del propio ser humano, las autoridades tienen que preferir en
todo momento la mejor interpretación en favor de la persona, tal como
indica el primer inciso del listado anterior, la Resolución del Expediente
Varios 912/2010 incluyó, a fin de atender a lo señalado en el párrafo
339 del fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de
mérito, un método para la aplicación de la Interpretación Conforme que se
haya prevista en el párrafo segundo del artículo 1º, como se ha comentado
ya en el apartado anterior. En la lectura que dio el intérprete último de la
Constitución a estas disposiciones, se admiten tres grados de intensidad o
pasos de la Interpretación Conforme, explicitados en el numeral 33 del
Engrose de la resolución en comento, que se cita a continuación:

33. De este modo, este tipo de interpretación por parte de los


jueces presupone realizar tres pasos:

1. A) Interpretación conforme en sentido amplio.  Ello significa


que los jueces del país, al igual que todas las demás autoridades
del Estado mexicano, deben interpretar el orden jurídico a la luz y
conforme a los derechos humanos establecidos en la Constitución
y en los tratados internacionales en los cuales el Estado mexicano
sea parte, favoreciendo en todo tiempo a las personas la
protección más amplia.

1. B) Interpretación conforme en sentido estricto.  Ello significa


que cuando hay varias interpretaciones jurídicamente válidas, los
jueces deben, partiendo de la presunción de constitucionalidad de
las leyes, preferir aquélla que hace a la ley acorde a los derechos
humanos establecidos en la Constitución y en los tratados
internacionales en los que el Estado mexicano sea parte, para
evitar incidir o vulnerar el contenido esencial de estos derechos.

1. C) Inaplicación de la ley cuando las alternativas anteriores


no son posibles.  Ello no afecta o rompe con la lógica del
principio de división de poderes y del federalismo, sino que
fortalece el papel de los jueces al ser el último recurso para
asegurar la primacía y aplicación efectiva de los derechos
humanos establecidos en la Constitución y en los tratados
internacionales de los cuales el Estado mexicano es parte.

No resulta entonces opcional el que una autoridad jurisdiccional del Estado


prefiere interpretar o aproximar la interpretación aun mero raciocinio
superfluo de los derechos humanos, sin que aquella actividad conlleve a
una interpretación de forma amplia que tienda, en ocasiones, a inaplicar
aquellas normas generales que tiendan a restringir los derechos humanos
de las personas y que mediante esta restricción tiendan a menoscabar el
ejercicio amplio de un derechos humano, puesto que, como se vuelve a
repetir, no es opcional para el Estado la Interpretación Conforme, sino que,
vía Ex Officio tiene la obligación de preferir la mejor interpretación para el
caso protector amplio de la persona.

Tomando en consideración todo lo expuesto hasta este punto, resulta


importante no solo el reconocimiento de los derechos naturales de las
personas, sino también la forma en la que se interpreta y aplica en los
casos concretos, sin embargo, mencionando nuevamente lo mandado en el
artículo 1° Constitucional Federal en su párrafo tercero, es obligación de
todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias la protección de
los derechos considerados como fundamentales a nivel nacional y de fuente
internacional. Más aún para las entidades federativas, sus órganos de
gobierno y los poderes soberanos. Dicha obligación de la Nación y de cada
uno de los Estados está dividida en los siguientes rubros:

1. a) Promover.
2. b) Proteger.
3. c) Reparar.
4. d) Garantizar.
Marcadas obligaciones del Estado frente a esta evolución del sistema de
interpretación en materia de derechos humanos y cabe recordar que éste
surge como la consecuencia de una Sentencia de rango internacional que
obliga a tutelar aquellos derechos naturales inherentes a la persona. Esta
responsabilidad que adquirió la Nación y por ende, cada una de las
Entidades Federativas de las que forman parte, están ligados a la
observancia y aplicación de tales formas de interpretación y aplicación. Uno
de los primeros efectos que las Entidades Federativas tienen que realizar es
la denominada armonización y aproximación Constitucional en el ámbito
legislativo.

 Esto se trata de lograr un método de seguridad jurídica a nivel Nacional, lo


que implica armonizar cada una de las leyes a los principios que rigen la
existencia del principio pro persona así como aproximar al derecho
comparado, sin violentar la Soberanía y Autonomía reconocidos a nivel
Constitucional, pues se trata de armonizar las Normas Generales de
carácter interno a los principios que tutela la fuente internacional
establecido en los Tratados Internacionales en materia de derechos
humanos. Resulta entonces obligatorio no solo para la Nación, sino para
cada una de las Entidades, sus Leyes, Códigos y Reglamentos el contener el
mismo espíritu de protección amplia bajo la interpretación conforme, pues
es el Estado quien tiene la obligación y la facultad de proteger y garantizar
el acceso a estos derechos y su pleno reconocimiento.

Existen no solo entonces, los  Tratados Internacionales, sino también la


Jurisprudencia de la Corte Interamericana sobre Derechos Humanos y el
denominado Soft Law, como criterios orientadores para el mejor proveer y
mejor reconocimiento de los derechos fundamentales reconocidos por el
Estado. Es imposible llevar al máximo los lineamientos requeridos para la
máxima protección de los derechos humanos cuando en el Estado no se
armoniza ni aproxima la Ley y el Reglamento del órgano que tiene la
obligación directa de proteger estos derechos fundamentales, así como de
insertar en el cuerpo dogmático de estas leyes aquellos criterios de fuente
internacional para lograr una mayor armonización y aproximación no solo
Constitucional, sino también Convencional.

Dentro de lo mandando por el artículo 1° de la Constitución Política de los


Estados Unidos Mexicanos se encuentra la responsabilidad del Estado de
Proteger los derechos humanos, es decir, evitar la pérdida o riesgo
inminente en el caso concreto. La propia Corte Interamericana de Derechos
Humanos ha emitido sentencias claras en el caso de las investigaciones y
aplicaciones de criterios y estándares internacionales para la debida
investigación y documentación de la tortura, tanto física como psicológica,
tal es el ejemplo del Caso González y otras (Campo Algodonero) Vs. México
, el cual señaló de forma Convencional lo siguiente:

González y otras (“Campo Algodonero”) Vs. México

– El Estado deberá, en un plazo razonable, continuar con la estandarización


de todos sus protocolos, manuales, criterios ministeriales de investigación,
servicios periciales y de impartición de justicia, utilizados para investigar
todos los delitos que se relacionen con desapariciones, violencia sexual y
homicidios de mujeres, conforme al Protocolo de Estambul, el Manual sobre
la Prevención e Investigación Efectiva de Ejecuciones Extrajudiciales,
Arbitrarias y Sumarias de Naciones Unidas y los estándares internacionales
de búsqueda de personas desaparecidas, con base en una perspectiva de
género. Al respecto, se deberá rendir un informe anual durante tres años.

Sirvan entonces a fin de abundar dichos razonamientos con la


interpretación de nuestro Máximo Tribunal de la Nación la siguiente
Jurisprudencia:

Época: Décima Época

Registro: 2007561
Instancia: Primera Sala

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 11, Octubre de 2014, Tomo I

Materia(s): Constitucional, Común

Tesis: 1a. CCCXXVII/2014 (10a.)

Página: 613

PRINCIPIO PRO PERSONA. REQUISITOS MÍNIMOS PARA QUE SE


ATIENDA EL FONDO DE LA SOLICITUD DE SU APLICACIÓN, O LA
IMPUGNACIÓN DE SU OMISIÓN POR LA AUTORIDAD RESPONSABLE.

El artículo 1o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos


impone a las autoridades el deber de aplicar el principio pro persona como
un criterio de interpretación de las normas relativas a derechos humanos,
el cual busca maximizar su vigencia y respeto, para optar por la aplicación
o interpretación de la norma que los favorezca en mayor medida, o bien,
que implique menores restricciones a su ejercicio. Así, como deber, se
entiende que dicho principio es aplicable de oficio, cuando el Juez o tribunal
considere necesario acudir a este criterio interpretativo para resolver los
casos puestos a su consideración, pero también es factible que el quejoso
en un juicio de amparo se inconforme con su falta de aplicación, o bien,
solicite al órgano jurisdiccional llevar a cabo tal ejercicio interpretativo, y
esta petición, para ser atendida de fondo, requiere del cumplimiento de una
carga mínima; por lo que, tomando en cuenta la regla de expresar con
claridad lo pedido y la causa de pedir, así como los conceptos de violación
que causa el acto reclamado, es necesario que la solicitud para aplicar el
principio citado o la impugnación de no haberse realizado por la autoridad
responsable, dirigida al tribunal de amparo, reúna los siguientes requisitos
mínimos: a) pedir la aplicación del principio o impugnar su falta de
aplicación por la autoridad responsable; b) señalar cuál es el derecho
humano o fundamental cuya maximización se pretende; c) indicar la norma
cuya aplicación debe preferirse o la interpretación que resulta más
favorable hacia el derecho fundamental; y, d) precisar los motivos para
preferirlos en lugar de otras normas o interpretaciones posibles. En ese
sentido, con el primer requisito se evita toda duda o incertidumbre sobre lo
que se pretende del tribunal; el segundo obedece al objeto del principio pro
persona, pues para realizarlo debe conocerse cuál es el derecho humano
que se busca maximizar, aunado a que, como el juicio de amparo es un
medio de control de constitucionalidad, es necesario que el quejoso indique
cuál es la parte del parámetro de control de regularidad constitucional que
está siendo afectada; finalmente, el tercero y el cuarto requisitos cumplen
la función de esclarecer al tribunal cuál es la disyuntiva de elección entre
dos o más normas o interpretaciones, y los motivos para estimar que la
propuesta por el quejoso es de mayor protección al derecho fundamental.
De ahí que con tales elementos, el órgano jurisdiccional de amparo podrá
estar en condiciones de establecer si la aplicación del principio referido,
propuesta por el quejoso, es viable o no en el caso particular del
conocimiento.

Amparo directo en revisión 4212/2013. BJL Construcciones, S.A. de C.V. y


otra. 21 de mayo de 2014. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Mónica Cacho Maldonado.

Esta tesis se publicó el viernes 03 de octubre de 2014 a las 09:30 horas en


el Semanario Judicial de la Federación.

Época: Décima Época


Registro: 2005942

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 4, Marzo de 2014, Tomo II

Materia(s): Común

Tesis: (III Región)5o. J/8 (10a.)

Página: 1360

CONTROL DIFUSO DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO. SU


APLICACIÓN ES DE NATURALEZA SUBSIDIARIA O
COMPLEMENTARIA DEL SISTEMA JURÍDICO MEXICANO.

De la interpretación sistemática y teleológica de los principios pro persona


establecido en el artículo 1o. de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, que dispone que las normas relativas a los derechos
humanos se interpretarán de conformidad con ésta y con los tratados
internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la
protección más amplia, hermenéutico en materia convencional, previsto en
el preámbulo de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que
reconoce que los derechos esenciales del hombre no nacen del hecho de
ser nacional de determinado Estado, sino que tienen como sustento los
atributos de la persona humana, razón por la cual justifican una protección
internacional, de naturaleza convencional coadyuvante o complementaria
de la que ofrece el derecho interno de los Estados Americanos, se advierte
que la aplicación del control difuso ex officio en materia de derechos
humanos es una herramienta de interpretación subsidiaria o
complementaria del sistema jurídico mexicano, cuyo uso está condicionado
a la optimización de la norma que la integra para maximizar la defensa de
los ciudadanos cuando el derecho interno no alcanza para ese fin. Esto
significa que la aplicación del mencionado control se realiza en suplencia de
la deficiencia de la normativa interna; es decir, el juzgador no debe acudir
directamente a la normativa internacional para buscar respuesta al asunto,
en virtud de que, antes, por lógica y preferencia del derecho interno,
deberá analizar cómo está establecido el derecho humano en controversia
en los contenidos que existen en las reglas y los principios constitucionales,
así como en la legislación ordinaria, para que, una vez que se determine
mediante los razonamientos respectivos que el derecho fundamental no
está protegido o, si lo está, no suficientemente en favor de la persona, se
justifica que se realice el control difuso de convencionalidad ex officio. De
no hacerse así, éste pudiera aplicarse sin restricción alguna, acudiendo de
manera directa a la normativa internacional para resolver el caso, sin antes
ponderar y justificar la insuficiencia o imperfección del derecho interno,
pues no debe soslayarse que el sistema jurídico de cada Estado presenta
características especiales que lo distinguen, por lo que de acuerdo a su
situación, cada Nación deberá establecer cómo aplicar el control difuso de
convencionalidad que lo haga coherente con su derecho interno y, como
consecuencia, que se logre la optimización de los derechos humanos.
Además, es importante establecer que el sistema nacional prevé una serie
de formalidades e instancias para que el gobernado haga valer sus
derechos y se reparen sus posibles violaciones; por lo que si se acudiera
directamente al control difuso de convencionalidad, se provocaría desorden
e incertidumbre en la aplicación del derecho para la solución de los casos,
pues podría pasar que existiendo solución en la normativa interna y sin
agotarse sus recursos o instancias, se aplicara la normativa internacional,
dispensando a la persona del cumplimiento de las cargas que le
correspondían de acuerdo con el orden jurídico nacional, lo que es
irrealizable y agrede la coherencia y la funcionalidad del sistema interno;
máxime que la Constitución Federal, en su artículo 1o., condiciona que
dicho control sea útil para optimizar el derecho humano, lo que constituye
un presupuesto constitucional previo que el aplicador deberá ponderar para
estar en condiciones de realizar o no el control citado.

QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO DEL CENTRO AUXILIAR DE


LA TERCERA REGIÓN, CON RESIDENCIA EN MORELIA, MICHOACÁN.

Amparo directo 684/2013. Felipe David Ordaz. 20 de septiembre de 2013.


Unanimidad de votos. Ponente: Jaime Uriel Torres Hernández. Secretaria:
Sonia Suárez Ríos.

Amparo directo 674/2013. Sergio Emilio Aldeco Ramírez. 20 de septiembre


de 2013. Unanimidad de votos. Ponente: José Ramón Rocha González,
secretario de tribunal autorizado para desempeñar las funciones de
Magistrado, en términos del artículo 81, fracción XXII, de la Ley Orgánica
del Poder Judicial de la Federación, en relación con el diverso 52, fracción
V, del Acuerdo General del Pleno del Consejo de la Judicatura Federal, que
reglamenta la organización y funcionamiento del propio Consejo.
Secretaria: Marvella Pérez Marín.

Amparo directo 562/2013. María del Carmen Castillo Miranda. 25 de


septiembre de 2013. Unanimidad de votos. Ponente: Antonio Ceja Ochoa.
Secretaria: Verónica Aparicio Coria.

Amparo directo 415/2013. Eusebio Alfaro López. 25 de septiembre de


2013. Unanimidad de votos. Ponente: Antonio Ceja Ochoa. Secretario:
David Israel Domínguez.

Amparo directo 549/2013. 25 de septiembre de 2013. Unanimidad de


votos. Ponente: Jaime Uriel Torres Hernández. Secretaria: Sonia Suárez
Ríos.
Esta tesis se publicó el viernes 21 de marzo de 2014 a las 11:03 horas en
el Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se considera de
aplicación obligatoria a partir del lunes 24 de marzo de 2014, para los
efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario
19/2013.

Época: Décima Época

Registro: 2001717

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Libro XII, Septiembre de 2012, Tomo 3

Materia(s): Común

Tesis: I.4o.C.12 C (10a.)

Página: 1945

PRINCIPIO PRO PERSONA. SU APLICACIÓN PERMITE OPTIMIZAR


LA ADMISIÓN DE RECURSOS EN AMPARO. El artículo 1o. constitucional
contiene el principio pro persona que, como ha explicado la doctrina, es un
criterio hermenéutico que informa todo el derecho de los derechos
humanos, en virtud del cual se debe acudir a la norma más amplia, o a la
interpretación más extensiva, cuando se trata de reconocer derechos
protegidos e, inversamente, a la norma o a la interpretación más
restringida cuando se trata de establecer restricciones permanentes al
ejercicio de los derechos o su suspensión extraordinaria. Una manifestación
de ese principio es la preferencia interpretativa (la otra es la preferencia de
normas) que, a su vez, se expresa en la interpretación extensiva y la
interpretación restringida. Pero ya sea en una u otra de las variantes, lo
relevante es que en la preferencia interpretativa el intérprete ha de preferir
la interpretación que más optimice un derecho fundamental, sin que pueda
dejar de tomarse en cuenta que dicho principio interpretativo se materializa
en distintos sub-principios, entre los cuales se encuentra el de in dubio pro
actione, que constituye la aplicación del principio pro persona al ámbito
procesal, de forma que el intérprete debe analizar las restricciones o
limitaciones legales para acceder al órgano jurisdiccional de forma
restrictiva, con el objetivo de lograr que el mayor número de procesos sea
iniciado y, en la medida en que sea posible, se satisfaga la pretensión del
demandante optimizando con ello el derecho a la jurisdicción. La
optimización del derecho a la jurisdicción puede lograrse si se facilita la
acción, pero también el recurso relacionado con dicha pretensión. A los
derechos de recurrir el fallo y contar con un recurso efectivo se refieren los
artículos 8.2. h y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
De acuerdo con la Corte Interamericana de Derechos Humanos y los
preceptos invocados, el recurso debe ser eficaz, efectivo. Ello puede
lograrse si, mediante la preferencia interpretativa extensiva, como
manifestación del principio pro persona, y la aplicación del principio pro
actione, se optimizan la interposición y admisión de los medios de
impugnación, sobre todo de aquellos relacionados con el control
constitucional de amparo en donde el debido proceso debe observarse con
mayor rigor, dada su calidad de instrumento garante de los derechos
fundamentales.

Reclamación 5/2012. Fidel Almaraz Berra. 21 de junio de 2012. Unanimidad


de votos. Ponente: Francisco J. Sandoval López. Secretario: Raúl Alfaro
Telpalo.

Luego entonces, derivado de la reforma constitucional en materia de


derechos humanos y que  tiene como fin la tutela efectiva de los derechos
fundamentales de la persona y en consonancia con lo dispuesto por el
artículo 1° de la Constitución Federal que otorga la obligación a todas las
autoridades, en el ámbito de su competencia, de proteger y garantizar los
derechos humanos de las personas, con los actos de la autoridad así como
de la norma general en materia de agua potable del Estado de Quintana
Roo donde funda y que permite su actuar, resulta real y directamente
violado el derecho fundamental para la subsistencia de la vida humana que
lo es el agua potable para el uso doméstico, por lo que tanto el actuar de la
autoridad así como de las normas generales de las que se funda, resultan
inconstitucionales, inconvencionales e ilegales, pues restringen real y
directamente el goce y ejercicio de un derecho humano previsto de rango
constitucional mediante el cobro de carácter fiscal de los adeudos y multas
del servicio de agua potable y alcantarillado; es entonces que las
autoridades antes mencionadas, encargadas de aprobar, promulgar y
ordenar la entrada en vigencia de la Ley de Agua Potable del Estado de
Quintana Roo así como del mismo acto de autoridad, resultan
inconstitucionales.

Se considera como violado el artículo 4 de la CONSTITUCIÓN POLÍTICA


DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS VIGENTE que dice:

CAPÍTULO II

DERECHOS CIVILES Y POLÍTICOS

ARTÍCULO 7. Derecho a la libertad personal

[…]

Toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de


agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente,
salubre, aceptable y asequible. El Estado garantizará este derecho y
la ley definirá las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso
equitativo y sustentable de los recursos hídricos, estableciendo la
participación de la Federación, las entidades federativas y los
municipios, así como la participación de la ciudadanía para la
consecución de dichos fines.

[…]

Se considera violado el artículo cuarto de la Constitución Federal, pues las


autoridades señaladas como responsables, tanto ordenadoras como
ejecutoras, en la aplicación de los artículos 13, 34 FRACCIÓN VI, 81 Y 105-
BIS FRACCIONES I Y III DE LA LEY DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO
DEL ESTADO DE QUINTANA ROO,  en específico, en el artículo 81 de la
mencionada ley, la cual a continuación se inserta:

Artículo 81.- En caso de mora por parte de los usuarios, en el pago


de dos o más meses de la cuota o tarifa establecida por los
servicios de agua potable procederá la suspensión de dichos
servicios, sin perjuicio de que la Comisión encomiende el cobro de
los adeudos a la Dirección de Recuperación de Adeudos y Ejecución
Fiscal, dependiente de la Dirección General de la Comisión de Agua
Potable y Alcantarillado.

Siendo entonces de forma clara la inconstitucionalidad de dicha norma


general en materia de agua potable del Estado de Quintana Roo, al
restringir de forma real y directa el servicio de agua potable y alcantarillado
que presta la misma Comisión de Agua Potable y Alcantarillado, dicha
restricción que se encuentra en la Ley de Agua Potable y Alcantarillado del
Estado de Quintana Roo es contraria a lo vertido en el artículo 4 de la
Constitución Política Federal con relación en lo dispuesto por el propio
artículo 1 Constitucional, pues el ejercicio de los derechos humanos
previstos en la Constitución Federal y en los Tratados Internacionales en
materia de derechos humanos, no podrá restringirse ni suspenderse de
ninguna forma, aunado a lo anterior y, tomando con consideración lo
dispuesto por la misma norma general en materia de agua potable,
resulta inconstitucional con lo dispuesta, pues nos encontramos en el
entendido que las normas de carácter general tienen que armonizarse y
aproximarse al espíritu de la Carta Magna y no contravenir así los
derechos fundamentales que en ella se encuentra y no otorgar más
facultades que las previstas en los derechos fundamentales
constitucionales, es el caso que, la Ley de Agua Potable y Alcantarillado del
Estado de Quintana Roo resulta inconstitucional la limitar y restringir
el goce y ejercicio de un derecho fundamental de rango
constitucional, pues como se puede observar en el numeral supra
insertado en este concepto de violación, no existe limitante alguna para el
goce del derecho humano al agua potable, y el caso del adeudo de agua
potable no es suficiente para restringir un derecho que es de vital
importancia para el desarrollo de la personalidad, de la vida y de la salud
de las personas. Debe de recordarse que el principio
de INTERDEPENDENCIA de los derechos humanos se encuentra previsto
en nuestro sistema constitucional, así como en el sistema interamericano
de derechos humanos, se refiere a que todos los derechos humanos están
relacionados entre sí, esto es, no puede hacerse ninguna separación ni
pensar que unos son más importantes que otros, deben interpretarse y
tomarse en su conjunto y no como elementos aislados. Todos los derechos
humanos y las libertades fundamentales son indivisibles e
interdependientes; debe darse igual atención y urgente consideración a la
aplicación, promoción y protección de los derechos civiles, políticos,
económicos, sociales y culturales; esto es, complementarse, potenciarse o
reforzarse recíprocamente; es por tanto que, al quebrantarse un solo
derecho humano, se quebranta por regla de interpretación los derechos
fundamentales que dependan del mismo, luego entonces, al violarse y
restringirse de forma inconstitucional el goce al derecho de agua, se viola el
derecho humano a la integridad personal, la vivienda, la familia, la vida y la
salud de las personas, pues de una interpretación más amplia y que más
beneficie a la persona, es de recalcar que la familia, el desarrollo de la
personalidad, la dignidad, la vida y la salud, dependen del agua como vital
liquido de sustento, y que la Ley de Agua Potable y Alcantarillado del
Estado de Quintana Roo no solo viola la Constitución Federal por prever
restricciones que la propia Carta Fundamental no tiene previsto, sino que
esta restricción, basados en los principios de INDIVISIBILIDAD E
INTERDEPENDENCIA   de los derechos fundamentales, viola todos los
derechos humanos que dependen de tal restricción permitida por la norma
general local en materia de agua potable, razones por la cual se considera
en si misma inconstitucional y no armonizada de ninguna forma con la
Carta Magna. Sirva la presente Tesis Aislada en materia Constitucional
emitida en Tribunales Colegiados de Circuito para fundar el presente
concepto de violación y la propia inconstitucionalidad de la norma misma:

Época: Décima Época

Registro: 2003350

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Libro XIX, Abril de 2013, Tomo 3

Materia(s): Constitucional

Tesis: I.4o.A.9 K (10a.)

Página: 2254
PRINCIPIOS DE UNIVERSALIDAD, INTERDEPENDENCIA,
INDIVISIBILIDAD Y PROGRESIVIDAD DE LOS DERECHOS
HUMANOS. EN QUÉ CONSISTEN.

El tercer párrafo del artículo 1o. de la Constitución Política de los Estados


Unidos Mexicanos dispone, entre otras cuestiones, que todas las
autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de
promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de
conformidad con los principios de universalidad, interdependencia,
indivisibilidad y progresividad, los que consisten en lo siguiente: i)
universalidad: que son inherentes a todos y conciernen a la comunidad
internacional en su totalidad; en esta medida, son inviolables, lo que no
quiere decir que sean absolutos, sino que son protegidos porque no puede
infringirse la dignidad humana, pues lo razonable es pensar que se adecuan
a las circunstancias; por ello, en razón de esta flexibilidad es que son
universales, ya que su naturaleza permite que, al amoldarse a las
contingencias, siempre estén con la persona. En relación con lo anterior, la
Corte Interamericana de Derechos Humanos (Caso de la “Masacre de
Mapiripán vs Colombia) ha señalado que los tratados de derechos humanos
son instrumentos vivos, cuya interpretación tiene que acompañar la
evolución de los tiempos y las condiciones de vida actuales, interpretación
evolutiva que es consecuente con las reglas generales de interpretación
consagradas en el artículo 29 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, así como las establecidas por la Convención de Viena sobre el
Derecho de los Tratados. De ahí que dichos derechos, dentro de sus límites,
son inalterables, es decir, que su núcleo esencial es intangible; por ello, la
Norma Fundamental señala que ni aun en los estados de excepción se
“suspenden”, pues en todo caso, siempre se estará de conformidad con los
principios del derecho internacional humanitario; ii) interdependencia e
indivisibilidad: que están relacionados entre sí, esto es, no puede hacerse
ninguna separación ni pensar que unos son más importantes que otros,
deben interpretarse y tomarse en su conjunto y no como elementos
aislados. Todos los derechos humanos y las libertades fundamentales son
indivisibles e interdependientes; debe darse igual atención y urgente
consideración a la aplicación, promoción y protección de los derechos
civiles, políticos, económicos, sociales y culturales; esto es,
complementarse, potenciarse o reforzarse recíprocamente; y iii)
progresividad: constituye el compromiso de los Estados para adoptar
providencias, tanto a nivel interno como mediante la cooperación
internacional, especialmente económica y técnica, para lograr
progresivamente la plena efectividad de los derechos que se derivan de las
normas económicas, sociales y sobre educación, ciencia y cultura, principio
que no puede entenderse en el sentido de que los gobiernos no tengan la
obligación inmediata de empeñarse por lograr la realización íntegra de tales
derechos, sino en la posibilidad de ir avanzando gradual y constantemente
hacia su más completa realización, en función de sus recursos materiales;
así, este principio exige que a medida que mejora el nivel de desarrollo de
un Estado, mejore el nivel de compromiso de garantizar los derechos
económicos, sociales y culturales.

CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL


PRIMER CIRCUITO.

Amparo en revisión 184/2012. Margarita Quezada Labra. 16 de agosto de


2012. Unanimidad de votos. Ponente: Jean Claude Tron Petit. Secretaria:
Aideé Pineda Núñez.

Es entonces claro que, la norma general no se


encuentra armonizada ni aproximada al sentido protector de la
Constitución Política Federal, ya que ésta norma general local en materia de
agua potable y alcantarillado permite una restricción a un derecho humano
constitucional que la misma Carta Superior no tiene previsto, siendo
violatorio y restrictivo, razón de peso por la que debe de considerarse
inconstitucional y permitir la aplicación e interpretación de la norma
que más beneficie a la persona basados en el principio PRO
PERSONA establecido en el artículo 29 de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos “Pacto de San José de Costa Rica”, que a
la letra dice:

ARTÍCULO 29.- Normas de Interpretación

Ninguna disposición de la presente Convención puede ser


interpretada en el sentido de:

1. a) permitir a alguno de los Estados Partes, grupo o


persona, suprimir el goce y ejercicio de los derechos y
libertades reconocidos en la Convención o limitarlos en
mayor medida que la prevista en ella;
2. b) limitar el goce y ejercicio de cualquier derecho o libertad
que pueda estar reconocido de acuerdo con las leyes de
cualquiera de los Estados Partes o de acuerdo con otra
convención en que sea parte uno de dichos Estados;
3. c) excluir otros derechos y garantías que son inherentes al
ser humano o que se derivan de la forma democrática
representativa de gobierno, y
4. d) excluir o limitar el efecto que puedan producir la
Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre
y otros actos internacionales de la misma naturaleza.

Es de aquí donde se fundamenta la inconvencionalidad de la Ley de Agua


Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana Roo, en especial en su
artículo 81, donde se faculta a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado
a realizar suspensiones del vital líquido, necesario para la subsistencia de la
vida, la salud, el desarrollo de la personalidad, la vivienda y la familia, en la
interpretación pro persona y con base en los principios de indivisibilidad
e interdependencia de los derechos humanos convencionales, pues la
misma ley resulta restrictiva en un derecho humano constitucional
y convencional, existiendo una clara incompatibilidad entre la Ley de
Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana Roo y la Convención
Americana sobre Derechos Humanos “Pacto de San José de Costa Rica”, y
con el propio artículo 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos. En el mismo sentido de ideas, la norma general omitió  tomar
en consideración las circunstancias económicas, sociales y culturales de las
personas, pues en el caso de las personas que ganan un salario mínimo,
como es mi caso, se ven obligados a resentir el corte de los servicios de
agua potable, que afecta de forma real y directa al ámbito jurídico
personal, circunstancias que no fueron tomadas en consideración en forma
alguna de la ley misma, razón de peso para considerarla inconstitucional,
inconvencional y violatoria de los derechos humanos por lo que se
tiene que inaplicar para así evitar más violaciones a los derechos humanos
de las personas y que estos sean colocados en el estado en que se
encontraban; puesto que la misma norma es restrictiva y no compatible
con los principios interpretativos de los derechos humanos constitucionales
y convencionales. Sirva la presente Jurisprudencia emitida por la Suprema
Corte de Justicia de la Nación para robustecer este punto:

Época: Novena Época

Registro: 192289

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo XI, Marzo de 2000

Materia(s): Constitucional

Tesis: P./J. 25/2000


Página: 38

LEYES, INCONSTITUCIONALIDAD DE LAS.

La inconstitucionalidad de una ley surge de su contradicción con un


precepto de la Constitución y no de oposición entre leyes secundarias.

Amparo en revisión 5323/81. José Manuel Chávez Campomanes. 7 de


diciembre de 1982. Unanimidad de diecinueve votos. Ponente: Carlos del
Río Rodríguez. Secretario: Juan Solórzano Zavala.

Amparo en revisión 336/95. Marco Antonio Rentería Cantú y coags. 31 de


marzo de 1998. Once votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano.
Secretaria: Alejandra de León González.

Amparo en revisión 2254/98. I.G. MEX, S.A. de C.V. 26 de octubre de


1998. Unanimidad de nueve votos. Ausentes: José Vicente Aguinaco
Alemán y Juan N. Silva Meza. Ponente: Genaro David Góngora Pimentel.
Secretaria: Rosa María Galván Zárate.

Amparo en revisión 698/98. Michelín México Services, S.A. de C.V. 29 de


octubre de 1998. Unanimidad de ocho votos. Ausentes: José Vicente
Aguinaco Alemán, José de Jesús Gudiño Pelayo y Juan N. Silva Meza.
Ponente: Humberto Román Palacios. Secretario: Jesús Enrique Flores
González.

Amparo en revisión 2465/98. Productos Eléctricos Aplicados, S.A. de C.V. 2


de diciembre de 1999. Unanimidad de ocho votos. Ausentes: Presidente
Genaro David Góngora Pimentel, Juventino V. Castro y Castro y José de
Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Secretario: Miguel Ángel Cruz Hernández.
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada hoy veintinueve de
febrero en curso, aprobó, con el número 25/2000, la tesis jurisprudencial
que antecede. México, Distrito Federal, a veintinueve de febrero de dos mil.

En este sentido, es necesario hacer mención de la RESOLUCIÓN 64/292


DEL 28 DE JULIO DE 2010 APROBADA POR LA ASAMBLEA GENERAL
DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS EL 28 DE JULIO
DE 2010 reconoció explícitamente el Derecho Humano al agua y al
saneamiento,  reafirmando que un agua potable limpia y el saneamiento
son esenciales para la realización de todos los derechos humanos. La
Resolución exhorta a los Estados y organizaciones internacionales a
proporcionar recursos financieros, a propiciar la capacitación y la
transferencia de tecnología para ayudar a los países, en particular a los
países en vías de desarrollo, a proporcionar un suministro de agua potable
y saneamiento saludable, limpio, accesible y asequible para todos, el cual,
señaló de la siguiente manera:

1. Reconoce que el derecho al agua potable y el saneamiento


es un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la
vida y de todos los derechos humanos;
2. Exhorta a los Estados y las organizaciones internacionales a
que proporcionen recursos financieros y propicien el
aumento de la capacidad y la transferencia de tecnología
por medio de la asistencia y la cooperación internacionales,
en particular a los países en desarrollo, a fin de intensificar
los esfuerzos por proporcionar a toda la población un
acceso económico al agua potable y el saneamiento;
3. Acoge con beneplácito la decisión del Consejo de Derechos
Humanos de pedir a la experta independiente sobre las
obligaciones de derechos humanos relacionadas con el
acceso al agua potable y el saneamiento que presente un
informe anual a la Asamblea General, y alienta a la experta
independiente a que siga trabajando en todos los aspectos
de su mandato y a que, en consulta con todos los
organismos, fondos y programas pertinentes de las
Naciones Unidas, incluya en el informe que le presente en
su sexagésimo sexto período de sesiones las principales
dificultades relacionadas con el ejercicio del derecho
humano al agua potable y el saneamiento y su efecto en la
consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.

En el mismo orden de ideas, es necesario señalar también


la OBSERVACIÓN GENERAL NÚMERO 15 DEL AÑO 2002 SOBRE EL
DERECHO AL AGUA DEL COMITÉ DE DERECHOS ECONÓMICOS,
SOCIALES Y CULTURALES DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES
UNIDAS, EN EL 29 PERIODO DE SESIONES, señalando lo siguiente:

1. El agua es un recurso natural limitado y un bien público


fundamental para la vida y la salud. El derecho humano al
agua es indispensable para vivir dignamente y es condición
previa para la realización de otros derechos humanos.

Por último, en materia de derechos humanos, agua y saneamiento, es


necesario hacer mención de la RESOLUCIÓN APROBADA POR EL
CONSEJO DE DERECHOS HUMANOS DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS
NACIONES UNIDAS, NÚMERO A/HRC/RES/18/1 DENOMINADA EL
DERECHO HUMANO AL AGUA POTABLE Y EL SANEAMIENTO,  EL 12
DE OCTUBRE DE 2011, estableció lo siguiente:

7. Exhorta a los Estados a que:


8. a) Vigilen de continuo y analicen periódicamente la
realización del derecho al agua potable y el saneamiento
con arreglo a los criterios de disponibilidad, calidad,
aceptabilidad, accesibilidad y asequibilidad;
9. b) Evalúen las políticas, programas y actividades existentes
en materia de agua y saneamiento, teniendo debidamente
en cuenta la ordenación de las aguas residuales y en

particular su tratamiento y reutilización, controlen los recursos


destinados a aumentar el acceso adecuado, identifiquen las partes
interesadas y evalúen su capacidad;

1. c) Preparen planes y estrategias integrales en que se


definan las responsabilidades de todos los agentes del
sector del agua y el saneamiento, con objeto de lograr
progresivamente la plena realización del derecho humano
al agua potable y el saneamiento para todos, o
reconsideren y revisen estos planes y estrategias, según
proceda, para garantizar su compatibilidad con los
principios y normas de derechos humanos;
2. d) Valoren si el actual marco legislativo y de políticas es
acorde con el derecho al agua potable y el saneamiento y lo
deroguen, enmienden o adapten según proceda para
garantizar el cumplimiento de los principios y normas de
los derechos humanos;

De aquí se desprende y basado en el derecho internacional, la necesidad de


la protección y observancia del respeto y garantía de acceso al agua
potable y su saneamiento, como recurso indispensable para el
sostenimiento de la vida y la salud de las personas, reconocido como un
derecho humano de primer rango del que depende la existencia humana y
que, el Estado, tiene que proteger y garantizar, basado en la interpretación
conforme al derecho más favorable, ya que, como ha quedado de
manifiesto, el agua, como derecho fundamental, es necesario para la
subsistencia misma de la vida y la salud de las personas, encontrando
entonces esta limitante en la norma general en este acto controvertida y
que resulta violatoria de los derechos fundamentales de las personas y que
no se ajusta al sistema constitucional e interamericano de derechos
humanos. En cuanto al corte del servicio de agua potable   realizado por
la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado en mi domicilio, resulta
totalmente inconstitucional y restrictivo, puesto que la Constitución Federal
no enmarca restricción alguna para este derecho humano, y que está
perjudicando al libre desarrollo de mi personalidad y del acceso al agua,
para el sostenimiento de la vida y de la salud personal. Sirva la presente
Tesis Aislada proveniente de los Tribunales Colegiados de Circuito para
robustecer este concepto de violación:

Época: Décima Época

Registro: 2012100

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 32, Julio de 2016, Tomo III

Materia(s): Común

Tesis: VI.2o.A.4 A (10a.)

Página: 2230

SERVICIOS DE AGUA POTABLE, SANEAMIENTO Y DRENAJE.


PROCEDE LA SUSPENSIÓN EN EL AMPARO CONTRA SU CORTE POR
FALTA DE PAGO DE LOS DERECHOS CORRESPONDIENTES
(LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE PUEBLA).
Si bien el artículo 99, fracción I, de la Ley del Agua para el Estado de
Puebla prevé que el prestador de los servicios públicos hídricos podrá
suspenderlos justificadamente ante la falta de pago de los derechos
correspondientes, lo cierto es que procede conceder la suspensión en el
amparo contra el corte de aquéllos, pues de no otorgarse se privaría al
afectado del acceso, disposición y saneamiento del vital líquido para el
consumo personal y doméstico en forma suficiente, como lo refiere el
párrafo sexto del artículo 4o. de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, sin demérito de apuntar que, el acceso al agua ha sido
centro de múltiples tratados internacionales, con el propósito fundamental
de garantizar una distribución mínima indispensable, como son la
Convención sobre los Derechos del Niño, la Convención sobre la Eliminación
de todas las formas de Discriminación contra la Mujer, la Convención sobre
los Derechos de las Personas con Discapacidad y el Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Asimismo, no puede
condicionarse la medida suspensional al pago del servicio de agua, en
términos del artículo 135 de la Ley de Amparo, toda vez que el acto
reclamado no constituye un crédito fiscal que pudiera hacerse efectivo
mediante el procedimiento administrativo de ejecución.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL


SEXTO CIRCUITO.

Incidente de suspensión (revisión) 554/2015. José Julián Alejandro


Colombres Aldama y otros. 3 de marzo de 2016. Unanimidad de votos.
Ponente: María Leonor Pacheco Figueroa. Secretaria: Krystell Díaz
Barrientos.

Esta tesis se publicó el viernes 8 de julio de 2016 a las 10:15 horas en el


Semanario Judicial de la Federación.

Se considera como violado el artículo 22 de la CONSTITUCIÓN POLÍTICA


DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS VIGENTE que dice:
Artículo 22. Quedan prohibidas las penas de muerte, de mutilación,
de infamia, la marca, los azotes, los palos, el tormento de cualquier
especie, la multa excesiva, la confiscación de bienes y cualesquiera
otras penas inusitadas y trascendentales. Toda pena deberá ser
proporcional al delito que sancione y al bien jurídico afectado.

Resulta violatorio de mis derechos fundamentales, tanto el actuar de las


autoridades señaladas como responsables, así como de la norma general en
materia de agua potable que permite el cobro excesivo de las multas y
recargos por adeudos, mismas que el artículo 13 de la Ley de Agua Potable
y Alcantarillado del Estado de Quintana Roo permite que se lo otorgue el
carácter de CRÉDITOS FISCALES al sistema de agua potable y
alcantarillado en el Estado, acto que no se apega ni armoniza con el
numeral constitucional arriba invocado, siendo que, derivado de la
ejecución de la autoridad ejecutora denominada DIRECCIÓN DE
RECUPERACIÓN DE ADEUDOS Y EJECUCIÓN FISCAL perteneciente a
la COMISIÓN DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO
DE QUINTANA ROO, que permite este cobro excesivo, sin tomar en
consideración el salario mínimo que recibo como obrero, y que dichas
multas y recargos son totalmente excesivos a lo obtenido por mi esfuerzo y
trabajo y que exceden de mi capacidad de pago, pues al momento de
realizar el pago por las multas y recargos derivado de los adeudos que la
Ley de Agua Potable para el Estado de Quintana Roo y tomando en
consideración el salario que obtengo por el fruto de mi trabajo como
obrero, resulta incongruente, inequitativa y no ajustado a los principios
constitucionales de igualdad, así como resulta claramente violado el artículo
5 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que señala:

Artículo 5o. A ninguna persona podrá impedirse que se dedique a la


profesión, industria, comercio o trabajo que le acomode, siendo
lícitos. El ejercicio de esta libertad sólo podrá vedarse por
determinación judicial, cuando se ataquen los derechos de tercero,
o por resolución gubernativa, dictada en los términos que marque
la ley, cuando se ofendan los derechos de la sociedad. Nadie puede
ser privado del producto de su trabajo, sino por resolución judicial.

En el caso concreto y, derivado de la ejecución de cobro por parte de las


autoridades responsables en calidad de ejecutoras, señaladas en esta
demanda de juicio constitucional, violan real y directamente el precepto
supra arriba invocado, pues al momento de imponer una multa excesiva
con carácter de crédito fiscal por el servicio de agua potable y
alcantarillado, no toman en cuenta la capacidad económica de las personas,
más aún cuando se trata de imponer un crédito fiscal a un derecho humano
de primer rango, tal como se ha señalado en los conceptos de violación que
anteceden, siendo por una parte violatorio el acto de autoridad que consiste
en la ejecución del cobro de multas y recargos por el servicio de agua
potable con carácter de crédito fiscal y por otra parte, la norma general
local en materia de agua potable que permite catalogar como crédito fiscal
las multas y recargos en materia de agua potable, resultando entonces lo
siguiente:

1. INCONSTITCIONALIDAD DEL ACTO DE AUTORIDAD: Al


momento de imponer las multas y recargos sobre los adeudos del
servicio de agua potable y alcantarillado del Estado de Quintana
Roo con carácter de créditos fiscales, siendo éstos excesivos a la
capacidad económica del salario mínimo que obtengo en calidad de
obrero y con estos, mermar los ingresos que obtengo para
alimentación, vestido, vivienda, familia y necesidades básicas de la
persona, siendo real y violatorio de los artículos 5 y 22 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
2. INCONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 13 DE LA LEY DE
AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE
QUINTANA ROO: Es inconstitucional también, la norma general
local en materia de agua potable y alcantarillado, que permite a la
autoridad responsable señalada como ejecutora, pues no se apega
a los estipulado en los mismos artículos 5 y 22 de la Constitución
Política Federal, excediendo de los permitido por la propia Carta
Magna, imponiendo multas excesivas y mermando los ingresos
básicos que provienen del salario mínimo que se obtienen en
calidad de obrero.

Estos dos efectos violatorios de la Constitución Política Federal se observan


claramente vulnerados, tanto por el actuar de las autoridades responsables
señaladas como ejecutoras, así como por la propia ley que permite esa
actuación, y que ambos, tanto el acto de autoridad como la  norma general
que lo permite, resultan claramente inconstitucionales y violatorias de la
Supremacía Constitucional, pues en tanto, la Carta Magna, trata de
proteger y favorecer a las personas de la forma más amplia, la Ley de Agua
Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana Roo obra en contravención
con el espíritu de la Constitución Política Federal, sirva para robustecer el
presente concepto de violación las siguientes Jurisprudencias emitidas por
la Suprema Corte de Justicia de la Nación:

Época: Novena Época

Registro: 203340

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo III, Febrero de 1996


Materia(s): Administrativa

Tesis: VI.3o. J/4

Página: 322

MULTAS FISCALES EXCESIVAS, SON INCONSTITUCIONALES.

De la lectura del artículo 76 del Código Fiscal de la Federación, se aprecia


que en ningún momento se faculta a la autoridad que deba imponer las
sanciones para tomar en cuenta la gravedad de la infracción realizada, los
perjuicios ocasionados a la colectividad y la conveniencia de destruir
prácticas evasoras, en relación con la capacidad económica del infractor,
sino que el monto de la sanción esté en relación directa con la causa que
originó la infracción y con el momento en que debe cubrirse la susodicha
multa, estableciendo porcentajes fijos. Lo anterior encuadra en el concepto
constitucional de multa excesiva, pues con este proceder el legislador de
ninguna manera permite a la autoridad calificadora de la sanción, su
individualización para la fijación del monto de la misma. Si bien es cierto
que el artículo 22 constitucional no establece un límite para la imposición
de una multa, también lo es que para que ésta no resulte excesiva, es
indispensable que el precepto secundario le otorgue a la autoridad
sancionadora la facultad de determinar y valorar por sí misma, las
circunstancias que se presenten en cada caso en que existan infracciones a
las disposiciones fiscales, lo cual no sucede cuando la ley establece multas
fijas, como son las previstas por el artículo 76 del Código Fiscal de la
Federación. En estas condiciones, debe concluirse que una multa resulta
excesiva y por ende inconstitucional, cuando la misma se establece en un
porcentaje invariable y en su imposición no se pueden tomar en
consideración los elementos citados.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.


Amparo directo 478/89. Servicio San Felipe, S.A. 24 de enero de 1990.
Unanimidad de votos. Ponente: Jaime Manuel Marroquín Zaleta. Secretario:
José de Jesús Echegaray Cabrera.

Amparo directo 375/90. Corporaciones Charles, S.A. de C.V. 25 de


septiembre de 1990. Unanimidad de votos. Ponente: Jaime Manuel
Marroquín Zaleta. Secretario: José de Jesús Echegaray Cabrera.

Amparo directo 404/90. Odín Textil, S.A. de C.V. 9 de octubre de 1990.


Unanimidad de votos. Ponente: Jaime Manuel Marroquín Zaleta. Secretario:
José de Jesús Echegaray Cabrera.

Amparo directo 34/91. Integración Electrónica y Sistemas, S.A. de C.V. 30


de agosto de 1991. Unanimidad de votos. Ponente: Ana María Yolanda
Ulloa de Rebollo. Secretario: José Manuel Torres Pérez.

Amparo directo 221/95. Gloria Márquez Hernández. 14 de septiembre de


1995. Unanimidad de votos. Ponente: Norma Fiallega Sánchez. Secretario:
José Manuel Torres Pérez.

Época: Novena Época

Registro: 200347

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo II, Julio de 1995

Materia(s): Constitucional
Tesis: P./J. 9/95

Página: 5

MULTA EXCESIVA. CONCEPTO DE.

De la acepción gramatical del vocablo “excesivo”, así como de las


interpretaciones dadas por la doctrina y por la Suprema Corte de Justicia de
la Nación, para definir el concepto de multa excesiva, contenido en el
artículo 22 constitucional, se pueden obtener los siguientes elementos: a)
Una multa es excesiva cuando es desproporcionada a las posibilidades
económicas del infractor en relación a la gravedad del ilícito; b) Cuando se
propasa, va más adelante de lo lícito y lo razonable; y c) Una multa puede
ser excesiva para unos, moderada para otros y leve para muchos. Por lo
tanto, para que una multa no sea contraria al texto constitucional, debe
establecerse en la ley que la autoridad facultada para imponerla, tenga
posibilidad, en cada caso, de determinar su monto o cuantía, tomando en
cuenta la gravedad de la infracción, la capacidad económica del infractor, la
reincidencia, en su caso, de éste en la comisión del hecho que la motiva, o
cualquier otro elemento del que pueda inferirse la gravedad o levedad del
hecho infractor, para así determinar individualizadamente la multa que
corresponda.

Amparo en revisión 2071/93. Grupo de Consultores Metropolitanos, S.A. de


C.V. 24 de abril de 1995. Unanimidad de once votos. Ponente: Juventino V.
Castro y Castro. Secretario: Indalfer Infante González.

Amparo directo en revisión 1763/93. Club 202, S.A. de C.V. 22 de mayo de


1995. Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretaria:
Angelina Hernández Hernández.
Amparo directo en revisión 866/94. Amado Ugarte Loyola. 22 de mayo de
1995. Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario:
Enrique Escobar Angeles.

Amparo en revisión 900/94. Jovita González Santana. 22 de mayo de 1995.


Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario:
Salvador Castro Zavaleta.

Amparo en revisión 928/94. Comerkin, S.A. de C.V. 29 de mayo de 1995.


Unanimidad de nueve votos. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretario:
Francisco de Jesús Arreola Chávez.

El Tribunal Pleno en su sesión privada celebrada el veinte de junio en curso,


por unanimidad de diez votos de los señores Ministros Presidente en
funciones Juventino V. Castro y Castro, Sergio Salvador Aguirre Anguiano,
Mariano Azuela Güitrón, Juan Díaz Romero, Genaro David Góngora
Pimentel, José de Jesús Gudiño Pelayo, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia,
Humberto Román Palacios, Olga María Sánchez Cordero y Juan N. Silva
Meza; aprobó, con el número 9/1995 (9a.) la tesis de jurisprudencia que
antecede; y determinó que las votaciones de los precedentes son idóneas
para integrarla. México, D.F., a veinte de junio de mil novecientos noventa
y cinco.

Época: Novena Época

Registro: 200348

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta


Tomo II, Julio de 1995

Materia(s): Constitucional, Común

Tesis: P./J. 7/95

Página: 18

MULTA EXCESIVA PREVISTA POR EL ARTICULO 22


CONSTITUCIONAL. NO ES EXCLUSIVAMENTE PENAL.

Es inexacto que la “multa excesiva”, incluida como una de las penas


prohibidas por el artículo 22 constitucional, deba entenderse limitada al
ámbito penal y, por tanto, que sólo opere la prohibición cuando se aplica
por la comisión de ilícitos penales. Por lo contrario, la interpretación
extensiva del precepto constitucional mencionado permite deducir que si
prohíbe la “multa excesiva” como sanción dentro del derecho represivo, que
es el más drástico y radical dentro de las conductas prohibidas
normativamente, por extensión y mayoría de razón debe estimarse que
también está prohibida tratándose de ilícitos administrativos y fiscales,
pues la multa no es una sanción que sólo pueda aplicarse en lo penal, sino
que es común en otras ramas del derecho, por lo que para superar criterios
de exclusividad penal que contrarían la naturaleza de las sanciones, debe
decretarse que las multas son prohibidas, bajo mandato constitucional,
cuando son excesivas, independientemente del campo normativo en que se
produzcan.

Amparo en revisión 2071/93. Grupo de Consultores Metropolitanos, S.A. de


C.V. 24 de abril de 1995. Unanimidad de once votos. Ponente: Juventino V.
Castro y Castro. Secretario: Indalfer Infante González.
Amparo directo en revisión 1763/93. Club 202, S.A. de C.V. 22 de mayo de
1995. Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretaria:
Angelina Hernández Hernández.

Amparo directo en revisión 866/94. Amado Ugarte Loyola. 22 de mayo de


1995. Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario:
Enrique Escobar Angeles.

Amparo en revisión 900/94. Jovita González Santana. 22 de mayo de 1995.


Unanimidad de nueve votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario:
Salvador Castro Zavaleta.

Amparo en revisión 928/94. Comerkin, S.A. de C.V. 29 de mayo de 1995.


Unanimidad de nueve votos. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretario:
Francisco de Jesús Arreola Chávez.

El Tribunal Pleno en su sesión privada celebrada el veinte de junio en curso,


por unanimidad de diez votos de los señores Ministros Presidente en
funciones Juventino V. Castro y Castro, Sergio Salvador Aguirre Anguiano,
Mariano Azuela Güitrón, Juan Díaz Romero, Genaro David Góngora
Pimentel, José de Jesús Gudiño Pelayo, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia,
Humberto Román Palacios, Olga María Sánchez Cordero y Juan N. Silva
Meza; aprobó, con el número 7/1995 (9a.) la tesis de jurisprudencia que
antecede; y determinó que las votaciones de los precedentes son idóneas
para integrarla. México, D.F., a veinte de junio de mil novecientos noventa
y cinco.

Se considera como violado el artículo 27 PÁRRAFOS 4° Y 5° de


la CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
VIGENTE que dice:

Corresponde a la Nación el dominio directo de todos los recursos


naturales de la plataforma continental y los zócalos submarinos de
las islas; de todos los minerales o substancias que en vetas,
mantos, masas o yacimientos, constituyan depósitos cuya
naturaleza sea distinta de los componentes de los terrenos, tales
como los minerales de los que se extraigan metales y metaloides
utilizados en la industria; los yacimientos de piedras preciosas, de
sal de gema y las salinas formadas directamente por las aguas
marinas; los productos derivados de la descomposición de las
rocas, cuando su explotación necesite trabajos subterráneos; los
yacimientos minerales u orgánicos de materias susceptibles de ser
utilizadas como fertilizantes; los combustibles minerales sólidos; el
petróleo y todos los carburos de hidrógeno sólidos, líquidos o
gaseosos; y el espacio situado sobre el territorio nacional, en la
extensión y términos que fije el Derecho Internacional.

Son propiedad de la Nación las aguas de los mares territoriales en


la extensión y términos que fije el Derecho Internacional; las aguas
marinas interiores; las de las lagunas y esteros que se comuniquen
permanente o intermitentemente con el mar; las de los lagos
interiores de formación natural que estén ligados directamente a
corrientes constantes; las de los ríos y sus afluentes directos o
indirectos, desde el punto del cauce en que se inicien las primeras
aguas permanentes, intermitentes o torrenciales, hasta su
desembocadura en el mar, lagos, lagunas o esteros de propiedad
nacional; las de las corrientes constantes o intermitentes y sus
afluentes directos o indirectos, cuando el cauce de aquéllas en toda
su extensión o en parte de ellas, sirva de límite al territorio
nacional o a dos entidades federativas, o cuando pase de una
entidad federativa a otra o cruce la línea divisoria de la República;
la de los lagos, lagunas o esteros cuyos vasos, zonas o riberas,
estén cruzadas por líneas divisorias de dos o más entidades o entre
la República y un país vecino, o cuando el límite de las riberas sirva
de lindero entre dos entidades federativas o a la República con un
país vecino; las de los manantiales que broten en las playas, zonas
marítimas, cauces, vasos o riberas de los lagos, lagunas o esteros
de propiedad nacional, y las que se extraigan de las minas; y los
cauces, lechos o riberas de los lagos y corrientes interiores en la
extensión que fija la ley. Las aguas del subsuelo pueden ser
libremente alumbradas mediante obras artificiales y apropiarse por
el dueño del terreno, pero cuando lo exija el interés público o se
afecten otros aprovechamientos, el Ejecutivo Federal podrá
reglamentar su extracción y utilización y aún establecer zonas
vedadas, al igual que para las demás aguas de propiedad nacional.
Cualesquiera otras aguas no incluidas en la enumeración anterior,
se considerarán como parte integrante de la propiedad de los
terrenos por los que corran o en los que se encuentren sus
depósitos, pero si se localizaren en dos o más predios, el
aprovechamiento de estas aguas se considerará de utilidad pública,
y quedará sujeto a las disposiciones que dicten las entidades
federativas.

Tal artículo de carácter Supra resulta vulnerado, tanto por el acto de


autoridad, así como por la norma general local en materia de agua potable
que es en sí misma inconstitucional, con la cual funda y motiva la ejecución
de los adeudos relativos a multas y recargos por el servicio de agua potable
y alcantarillado, siendo esta violación de la siguiente forma:

1. ACTO DE AUTORIDAD INCONSTITUCIONAL: Es lo relativo a la


ejecución y cobro de las multas y recargos de carácter fiscal que la
Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana
Roo y la Dirección de Recuperación de Adeudos y Ejecución Fiscal
de la misma entidad pública realizan, de las cuales dichos
organismos locales en materia de agua potable, se encuentran
impedidos y son incompetentes para ejecutar y cobrar
contraprestaciones y contribuciones fiscales en materia de agua
potable y alcantarillado, con respecto a aguas del subsuelo ya
que esta es una atribución expresa y reservada al Congreso
de la Unión, razón por la cual resulta inconstitucional e
ilegal el cobro de las aguas nacionales que provienen del
subsuelo como atribución única a la Federación, así como
se encuentra impedida para imponer gravámenes ya que
esto implica una invasión de esferas competenciales, esto
es, gravar los servicios de agua potable y alcantarillado  tal
como se dispone en el artículo 13 , 34 Fracción VI , 81, 105-BIS
fracciones I, II y III todos de la Ley de Agua Potable y
Alcantarillado para el Estado de Quintana Roo, pues de lo previsto
en la Constitución Política Federal señalado como concepto de
violación encontramos que, el organismo en materia de agua
potable, carece de facultades, es incompetente y se
encuentra impedido para imponer gravámenes, cobrar y
ejecutar gravámenes y contraprestaciones impuestas en
forma de multas y recargos por el adeudo del servicio de
agua potable y alcantarillado, ya que ésta es competencia
exclusiva de la Federación por corresponder a aguas del
subsuelo y servicio de alcantarillado del subsuelo, de uso
exclusivo de la Federación,  por el acto de autoridad resulta
inconstitucional y violatorio del artículo 27 Constitucional en sus
párrafos 4° y 5°, al gravarse aguas nacionales, lo cual no está
prevista en el ámbito estatal. Para el caso concreto, es necesario
acudir a la LEY DE AGUAS NACIONALES en su artículo 16, que
señala lo siguiente:

TÍTULO CUARTO

Derechos de Explotación, Uso o Aprovechamiento de Aguas


Nacionales

Capítulo I
Aguas Nacionales

ARTÍCULO 16. La presente Ley establece las reglas y condiciones


para el otorgamiento de las concesiones para explotación, uso o
aprovechamiento de las aguas nacionales, en cumplimiento a lo
dispuesto en el Párrafo Sexto del Artículo 27 Constitucional.

Son aguas nacionales las que se enuncian en el Párrafo Quinto del


Artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos.

El régimen de propiedad nacional de las aguas subsistirá aun


cuando las aguas, mediante la construcción de obras, sean
desviadas del cauce o vaso originales, se impida su afluencia a ellos
o sean objeto de tratamiento.

Las aguas residuales provenientes del uso de las aguas nacionales,


también tendrán el mismo carácter, cuando se descarguen en
cuerpos receptores de propiedad nacional, aun cuando sean objeto
de tratamiento.

Razón por la cual el acto de autoridad que ejecuta y realiza el cobro de


gravámenes, contraprestaciones y créditos fiscales sobre los servicios de
agua potable resultan en sí mismos inconstitucionales, puesto que es
facultad directa de la Federación y no así de la Entidad Federativa, siendo
dichos organismos del Estado de Quintana Roo incompetentes e impedidos
para realizar estos cobros en materia fiscal sobre las aguas nacionales,
teniendo en cuenta también el servicio de alcantarillado, puesto que ésta es
facultad exclusiva de la Federación; sirva para efectos de robustecer el
presente concepto de violación las siguientes Jurisprudencias emitidas por
la Suprema Corte de Justicia de la Nación:

Época: Octava Época


Registro: 389520

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Apéndice de 1995

Tomo I, Parte SCJN

Materia(s): Constitucional

Tesis: 67

Página: 83

AGUAS DEL SUBSUELO. LAS LEYES LOCALES QUE ESTABLECEN


CONTRIBUCIONES SOBRE SU USO Y APROVECHAMIENTO INVADEN
LA ESFERA DE ATRIBUCIONES DE LA FEDERACION.

En términos del artículo 73, fracción XXIX, apartado segundo, de la


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, es facultad exclusiva
del Congreso de la Unión establecer contribuciones sobre el
aprovechamiento y explotación de los recursos naturales comprendidos en
los párrafos cuarto y quinto del artículo 27 de la Carta Magna, entre los que
se encuentran las aguas del subsuelo y no es facultad concurrente ya que,
constitucionalmente, se encuentra reservada a la Federación. En
consecuencia, las leyes locales que establecen contribuciones sobre el uso y
aprovechamiento de las aguas extraídas de pozos invaden la esfera de
atribuciones de la Federación resultando contrarias a la Ley Suprema.

Octava Epoca:
Amparo en revisión 11665/84. Productora Industrial, S. A. de C. V. 16 de
junio de 1987. Unanimidad de dieciocho votos

Amparo en revisión 4041/85. Compañía Nestlé, S. A. 25 de agosto de


1987. Unanimidad de dieciocho votos.

Amparo en revisión 1479/87. Cervecería Cuauhtémoc, S. A. 14 de abril de


1988. Unanimidad de dieciocho votos.

Amparo en revisión 9092/83. Vidriera “Los Reyes”, S. A. 30 de junio de


1988. Unanimidad de diecinueve votos.

Amparo en revisión 822/88. Compañía Hulera Good Year Oxo, S. A. 11 de


agosto de 1988. Unanimidad de dieciocho votos.

NOTA:

 Tesis P./J.25/88, Gaceta número 10-12, pág. 35; Semanario Judicial de la


Federación, tomo II, Primera Parte, pág. 131.

1. INCONSTITUCIONALES DE LOS ARTÍCULOS13, 34


FRACCIÓN VI, 81 Y 105-BIS FRACCIONES I Y III DE LA LEY
DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO DEL ESTADO DE
QUINTANA ROO:  Resultan inconstitucionales los artículos en
donde las autoridades señaladas como responsables ejecutan el
cobro de las multas y recargos con motivo de adeudos del servicio
del agua potable y alcantarillado, como se ha descrito en el punto
que antecede, con relación a la inconstitucional del acto de
autoridad, en este apartado corresponde a
la inconstitucionalidad de la norma general  de donde las
propias autoridades señaladas como responsables fundan y
motivan su actuación, y que en sí mismas resultan
inconstitucionales; pues es el caso que los artículos de la norma
general que en este acto se combate por el presente Juicio
Constitucional, al realizar el cobro de multas y recargos en
forma de créditos fiscales, invade la esfera de competencias de
la Federación, y por tanto, viola lo establecido en el mismo artículo
27 párrafos 4° y 5° de la Carta Magna, pues la Entidad Federativa
no está facultada para imponer cargas fiscales sobre el uso de
agua y alcantarillado del subsuelo el cual es de uso exclusivo de la
Federación, así mismo es violatorio del artículo 31 Fracción IV de
la Constitución Política Federal, porque dichas normas generales
que prevén gravámenes y contraprestaciones en materia de
agua del subsuelo, el cual es facultad exclusiva de la
Federación,  no observan ni se apegan a los principios
de JUSTICIA, PROPORCIONALIDAD Y LEGALIDAD
TRIBUTARIA, careciendo la norma general en materia de agua
potable carecen de proporcionalidad y equidad y por supuesto de
legalidad, en materia fiscal, así como de una base equitativa y
proporcional sobre la cual se realice el cobro de los gravámenes y
contraprestaciones de carácter fiscal que permite la propia norma
general, razón en donde radica la propia inconstitucionalidad,
situación en donde se observa una invasión a la esfera de
competencias de la Federación, y en especial importancia, la
propia norma general que se combate no tiene previsto los
principios constitucionales en materia tributaria, de donde se
desprenden las multas excesivas y que no se encuentran sujetas a
una base gravable o una base donde se respeten los principios
constitucionales en materia tributaria, situación que pone de
manifiesto la inconstitucionalidad de la norma general en materia
de agua potable y alcantarillado del Estado de Quintana Roo. Sirva
la presente Jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación para robustecer este concepto de violación:

 
Época: Séptima Época

Registro: 232796

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación

Volumen 91-96, Primera Parte

Materia(s): Constitucional, Administrativa

Tesis:

Página: 172

IMPUESTOS, ELEMENTOS ESENCIALES DE LOS. DEBEN ESTAR


CONSIGNADOS EXPRESAMENTE EN LA LEY.

Al disponer el artículo 31 constitucional, en su fracción IV, que son


obligaciones de los mexicanos “contribuir para los gastos públicos, así de la
Federación como del Estado y Municipio en que residan, de la manera
proporcional y equitativa que dispongan las leyes”, no sólo establece que
para la validez constitucional de un tributo es necesario que, primero, que
esté establecido por ley; sea proporcional y equitativo y, tercero, sea
destinado al pago de los gastos públicos, sino que también exige que los
elementos esenciales del mismo, como pueden ser el sujeto, objeto, base,
tasa y época de pago, estén consignados de manera expresa en la ley, para
que así no quede margen para la arbitrariedad de las autoridades
exactoras, ni para el cobro de impuestos imprevisibles o a título particular,
sino que a la autoridad no quede otra cosa que aplicar las disposiciones
generales de observancia obligatoria dictadas con anterioridad al caso
concreto de cada causante y el sujeto pasivo de la relación tributaria pueda
en todo momento conocer la forma cierta de contribuir para los gastos
públicos de la Federación, del Estado o Municipio en que resida.

Séptima Epoca, Primera Parte:

Volúmenes 91-96, página 90. Amparo en revisión 331/76. María de los


Angeles Prendes de Vera. 31 de agosto de 1976. Unanimidad de quince
votos. Ponente: Carlos del Río Rodríguez.

Volúmenes 91-96, página 90. Amparo en revisión 1008/76. Antonio


Hernández Abarca. 31 de agosto de 1976. Unanimidad de quince votos.
Ponente: Arturo Serrano Robles.

Volúmenes 91-96, página 90. Amparo en revisión 5332/75. Blanca


Meyerberg de González. 31 de agosto de 1976. Unanimidad de quince
votos. Ponente: Ramón Canedo Aldrete.

Volúmenes 91-96, página 90. Amparo en revisión 5464/75. Ignacio


Rodríguez Treviño. 31 de agosto de 1976. Unanimidad de quince votos.
Ponente: Arturo Serrano Robles.

Volúmenes 91-96, página 90. Amparo en revisión 5888/75. Inmobiliaria


Havre, S.A. 31 de agosto de 1976. Unanimidad de quince votos. Ponente:
Arturo Serrano Robles.

Nota: En el Informe de 1976, la tesis aparece bajo el rubro “IMPUESTOS,


PRINCIPIO DE LEGALIDAD QUE DEBE SALVAGUARDAR LOS.”.

Época: Quinta Época

Registro: 807811
Instancia: Segunda Sala

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación

Tomo LXXXI

Materia(s): Administrativa, Constitucional

Tesis:

Página: 5753

IMPUESTOS, PRINCIPIO DE LEGALIDAD QUE EN MATERIA DE,


CONSAGRA LA CONSTITUCION FEDERAL.

El principio de legalidad se encuentra claramente establecido por el artículo


31 constitucional, al expresar, en su fracción IV, que los mexicanos deben
contribuir para los gastos públicos “de la manera proporcional y equitativa
que dispongan las leyes”, y está además, minuciosamente reglamentado en
su aspecto formal, por diversos preceptos que se refieren a la expedición
de la Ley General de Ingresos, en la que se determinan los impuestos que
se causarán y recaudarán durante el periodo que la misma abarca. Por otra
parte , examinando atentamente este principio de legalidad, a la luz del
sistema general que informan nuestras disposiciones constitucionales en
materia impositiva y de su explicación racional e histórica, se encuentra
que la necesidad de que la carga tributaria de los gobernados esté
establecida en una ley, no significa tan solo que el acto creador del
impuesto debe emanar de aquel poder que, conforme a la Constitución del
Estado está encargado de la función legislativa, ya que así se satisface la
exigencia de que sean los propios gobernados, a través de sus
representantes, los que determinen las cargas fiscales que deben soportar,
sino fundamentalmente que los caracteres esenciales del impuesto y la
forma, contenido y alcance de la obligación tributaria, estén consignados de
manera expresa en la ley, de tal modo que no quede margen para la
arbitrariedad de las autoridades exactoras, ni para el cobro de impuestos
imprevisibles o a título particular, sino que el sujeto pasivo de la relación
tributaria pueda, en todo momento, conocer la forma cierta de contribuir
para los gastos públicos del Estado, y a la autoridad no quede otra cosa
sino aplicar las disposiciones generales de observancia obligatoria, dictadas
con anterioridad al caso concreto de cada causante. Esto por lo demás, es
consecuencia del principio general de legalidad, conforme al cual, ningún
órgano del Estado puede realizar actos individuales que no estén previstos
o autorizados por disposición legal anterior, y está reconocido por el
artículo 14 de nuestra Ley Fundamental. Lo contrario, es decir, la
arbitrariedad en la imposición, la imprevisibilidad en las cargas tributarias y
los impuestos que no tengan un claro apoyo legal, debe considerarse
absolutamente proscrito en el régimen constitucional mexicano, sea cual
fuere el pretexto con que se pretenda justificársele.

Amparo administrativo en revisión 5605/43. Hernández Reyes Ramón. 20


de septiembre de 1944. Unanimidad de cinco votos. Relator: Nicéforo
Guerrero.

Época: Séptima Época

Registro: 1011931

Instancia: Pleno

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Apéndice de 2011


Tomo I. Constitucional 3. Derechos Fundamentales Primera Parte – SCJN
Vigésima Primera Sección – Principios de justicia tributaria

Materia(s): Constitucional, Administrativa

Tesis: 639

Página: 1784

IMPUESTOS, PRINCIPIO DE LEGALIDAD QUE EN MATERIA DE,


CONSAGRA LA CONSTITUCIÓN FEDERAL.

El principio de legalidad se encuentra claramente establecido por el artículo


31 constitucional, al expresar, en su fracción IV, que los mexicanos deben
contribuir para los gastos públicos de la manera proporcional y equitativa
que dispongan las leyes y está, además, minuciosamente reglamentado en
su aspecto formal, por diversos preceptos que se refieren a la expedición
de la Ley General de Ingresos, en la que se determinan los impuestos que
se causarán y recaudarán durante el período que la misma abarca. Por otra
parte, examinando atentamente este principio de legalidad, a la luz del
sistema general que informa nuestras disposiciones constitucionales en
materia impositiva y de explicación racional e histórica, se encuentra que la
necesidad de que la carga tributaria de los gobernados esté establecida en
una ley, no significa tan solo que el acto creador del impuesto deba emanar
de aquel poder que, conforme a la Constitución del Estado, está encargado
de la función legislativa, ya que así se satisface la exigencia de que sean los
propios gobernados, a través de sus representantes, los que determinen las
cargas fiscales que deben soportar, sino fundamentalmente que los
caracteres esenciales del impuesto y la forma, contenido y alcance de la
obligación tributaria, estén consignados de manera expresa en la ley, de tal
modo que no quede margen para la arbitrariedad de las autoridades
exactoras ni para el cobro de impuestos imprevisibles o a título particular,
sino que el sujeto pasivo de la relación tributaria pueda, en todo momento,
conocer la forma cierta de contribuir para los gastos públicos del Estado, y
a la autoridad no queda otra cosa sino aplicar las disposiciones generales
de observancia obligatoria, dictadas con anterioridad al caso concreto de
cada causante. Esto, por lo demás, es consecuencia del principio general de
legalidad, conforme al cual ningún órgano del Estado puede realizar actos
individuales que no estén previstos y autorizados por disposición general
anterior, y está reconocido por el artículo 14 de nuestra Ley Fundamental.
Lo contrario, es decir, la arbitrariedad en la imposición, la imprevisibilidad
en las cargas tributarias y los impuestos que no tengan un claro apoyo
legal, deben considerarse absolutamente proscritos en el régimen
constitucional mexicano, sea cual fuere el pretexto con que pretenda
justificárseles.

Séptima Época, Primera Parte:

Volúmenes 91-96, página 92.—Amparo en revisión 331/76.—María de los


Ángeles Prendes de Vera.—31 de agosto de 1976.—Unanimidad de quince
votos.—Ponente: Carlos del Río Rodríguez.

Volúmenes 91-96, página 92.—Amparo en revisión 1008/76.—Antonio


Hernández Abarca.—31 de agosto de 1976.—Unanimidad de quince votos.
—Ponente: Arturo Serrano Robles.

Volúmenes 91-96, página 92.—Amparo en revisión 5332/75.—Blanca


Meyerberg de González.—31 de agosto de 1976.—Unanimidad de quince
votos.—Ponente: Ramón Canedo Aldrete.

Volúmenes 91-96, página 92.—Amparo en revisión 5464/75.—Ignacio


Rodríguez Treviño.—31 de agosto de 1976.—Unanimidad de quince votos.
—Ponente: Arturo Serrano Robles.
Volúmenes 91-96, página 92.—Amparo en revisión 5888/75.—Inmobiliaria
Havre, S.A.—31 de agosto de 1976.—Unanimidad de quince votos.—
Ponente: Arturo Serrano Robles.

Semanario Judicial de la Federación, Séptima Época, Volúmenes 91-96,


Primera Parte, página 173, Pleno.

Apéndice 1917-2000, Tomo I, Materia Constitucional, Jurisprudencia,


Suprema Corte de Justicia de la Nación, página 297, Pleno, tesis 252.

IX.- SUSPENSIÓN DEL ACTO RECLAMADO.- Con fundamento en los


artículos 126, 127, 128, 129, 130, 131, 136, 138, 139, Solicito a su
Señoría que con fundamento en el principio de peligro de omisión en la
demora y apariencia del buen derecho suspenda los actos reclamados de
forma provisional, en el caso concreto con relación al corte del servicio
de agua potable así señalar la forma en que deberá quedar suspendido
provisionalmente el acto reclamado así como evitar que se me moleste o
trate de perjudicar en mi persona por la interposición de este amparo y en
su momento otorgar la suspensión de forma definitiva de los actos
reclamados por el quejoso, otorgando copia certificadas de tales
suspensiones, sirvan las presentes consideraciones de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación que a continuación se describen:

Época: Novena Época

Registro: 174836

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito


Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo XXIII, Junio de 2006

Materia(s): Común

Tesis: IV.2o.A.32 K

Página: 1218

SUSPENSIÓN PROVISIONAL. PARA RESOLVER SOBRE ELLA ES


FACTIBLE, SIN DEJAR DE OBSERVAR LOS REQUISITOS
CONTENIDOS EN EL ARTÍCULO 124 DE LA LEY DE AMPARO, QUE EL
TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO ANALICE EN EL RECURSO DE
QUEJA LAS PRUEBAS SUPERVENIENTES QUE HUBIEREN SIDO
APORTADAS POR LA PARTE QUEJOSA DURANTE SU
SUSTANCIACIÓN.

La suspensión de los actos reclamados participa de la naturaleza de una


medida cautelar, cuyos presupuestos son la apariencia del buen derecho y
el peligro en la demora; por tanto, tratándose de cuestiones relacionadas
con la suspensión y más aún la provisional, es indispensable atender a
todos los aspectos relacionados con ella, inclusive los elementos de
convicción allegados al incidente, esto con la finalidad de que en términos
del artículo 140 de la Ley de Amparo, se observe su naturaleza
superveniente y se dicten las medidas correspondientes, como en aquellos
casos en que el Juez de Distrito no conozca de un medio de prueba que se
aportó al incidente en fecha posterior al momento en que se resolvió sobre
la suspensión provisional, pero que se produjo dentro de la sustanciación
del recurso de queja contra la negativa de la medida precautoria, pues en
ese supuesto el Tribunal Colegiado de Circuito deberá asumir su estudio y
examen, por economía procesal, en atención al objeto de la institución
provisional, que es resolver de manera inmediata la paralización de los
actos reclamados o sus efectos, a fin de preservar la materia del juicio y
evitar en perjuicio y agravio de la parte quejosa la realización de actos de
imposible reparación con su ejecución. Lo anterior, toda vez que en esos
casos, cambian las circunstancias que prevalecían al momento de
resolverse la suspensión provisional, cuya apreciación debe realizarse por el
Tribunal Colegiado, quien de acuerdo con el criterio de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, plasmado en la tesis P./J. 10/2001, publicada en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XIII,
enero de 2001, página 13, de rubro: “SUSPENSIÓN PROVISIONAL. LA
OMISIÓN DE FUNDAR Y MOTIVAR EL AUTO EN QUE SE RESUELVE, DEBE
REPARARSE POR EL TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO QUE ESTÁ
FACULTADO PARA ELLO, AL RESOLVER EL RECURSO DE QUEJA.”, debe
sustituirse al Juez de Distrito en cuanto a la apreciación de los requisitos
previstos en el artículo 124 de la Ley de Amparo, con base en la totalidad
de las pruebas que éste le remita para la sustanciación del recurso, con el
fin de conservar la materia del juicio y evitar al quejoso daños y perjuicios
de difícil reparación que se le podrían ocasionar con la ejecución del acto.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL


CUARTO CIRCUITO.

Queja 18/2006. José Eugenio Maguey Ramírez. 3 de marzo de 2006.


Unanimidad de votos. Ponente: Martín Ubaldo Mariscal Rojas, secretario de
tribunal autorizado por la Comisión de Carrera Judicial del Consejo de la
Judicatura Federal para desempeñar las funciones de Magistrado.
Secretaria: Blanca Patricia Pérez Pérez.

Nota: Esta tesis contendió en la contradicción 1/2007-PL resuelta por el


Tribunal Pleno, de la que derivó la tesis P./J. 20/2009, que aparece
publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena
Época, Tomo XXIX, abril de 2009, página 8, con el rubro: “PRUEBAS
SUPERVENIENTES EN EL INCIDENTE DE SUSPENSIÓN. LOS TRIBUNALES
COLEGIADOS DE CIRCUITO PUEDEN VALORARLAS AL RESOLVER EL
RECURSO DE QUEJA PREVISTO EN EL ARTÍCULO 95, FRACCIÓN XI, DE LA
LEY DE AMPARO.”

De la misma forma solicito a Usted sea aplicado en mi favor el principio de


la suplencia de la queja deficiente.

Por lo anteriormente expuesto a USTED C. JUEZ DE DISTRITO EN


TURNO, solicito:

PRIMERO.- Tenerme por presentado con el siguiente escrito de demanda


de amparo en tiempo y forma, así como admitir el mismo en favor del
ahora quejoso.

SEGUNDO.- Otorgar la suspensión provisional señalando las medidas


cautelares que se habrán de observar para el cumplimiento de la misma así
como evitar molestias en mi persona por la interposición de la presente
demanda de amparo, y en su momento otorgar la suspensión definitiva,
otorgando a la parte quejos las copias debidamente certificadas de tales
medidas provisionales.

TERCERO.- Amparar y proteger por medio de la Justicia Federal por las


violaciones a mí persona humana.

CUARTO.- Proveer conforme a derecho.

Atentamente,
Cancún, Quintana Roo a 02 de enero de 2018.

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