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BREVE HISTORIA DEL BARRIO “SESQUICENTENARIO” DE LA CIUDAD DE RIOBAMBA

ECUADOR

El nombre de “Sesquicentenario” data desde los años ochenta, un pequeño grupo de


viviendas especialmente conformado por las familias Guailla, Obando, LLamuca y Guamán,
conformaban inicialmente lo que hoy llamamos barrio Sesquicentenario. Conocido por el barrio
de los Guaillas, apartado del sector urbano, sin acceso a servicios básicos, el agua debíamos
abastecernos mediante baldes a una distancia de un kilómetro, era lo más preciado tener el
líquido vital, no conocíamos lo que es luz eléctrica, por las noches se utilizaba lámparas de
querosene o velas, y los más pelucones petromax, un radio receptor de pilas era nuestra
compañía, ni hablar del alcantarillado.

Sin embargo ya desde ese entonces se tenía la idea de ir formando una agrupación de
jóvenes con el fin de hacer actividades de entretenimiento para las familias, se organizaba las
fiestas de fin de año, todos colaboraban y se festejaba, disfrutando de un programa ceñido a
la realidad de ese entonces, ahí estaba los bailes, las fono mímicas, los concursos; jóvenes
entusiastas del sector, los encamadores de ese entonces, el Hugo, el Oswaldo y el Mario, al
frente de los programas.

La navidad lo pasábamos en la Gruta de Lourdes y se veía como los otros barrios lo hacían,
hasta que cierta ocasión lo nombraron a la señora Ana Huebla la prioste de la fiesta del Niño
de Navidad de ese barrio, para que efectuare la fiesta, la misma que no se llevó a cabo como
demandaría la celebración por la muerte de su Papá, sin embargo se realizó la festividad,
podríamos decir entonces que fue quien dio paso a las celebraciones futuras de estas fiestas
en el barrio.

Este barrio fue considerado siempre como una parte del barrio de Lourdes en virtud de la
limitación efectuada por el municipio de la ciudad; pues así se lo conocía como el barrio de
Lourdes Bajo, muchas han sido las revanchas barriales con el barrio central en el aspecto
sociocultural y deportivo, por lo que fuimos relegados y aislados. Los jóvenes de ese entonces
buscábamos tener otra denominación, por lo que se probaba ciertos nombres, entre ellos
THE Guaillas, sector del canal. Por el año de 1982, Mario en busca de superación personal,
probó suerte como locutor en una radio local, llamada “CANAL TROPICAL” y desde ese medio
de comunicación emitió mensajes hacia sus amigos en el barrio de Lourdes sector del canal, y
conocedor que en el sector se iba a construir un parque al cual lo iban a denominar
Sesquicentenario, empezó a bautizarle desde ese entonces como el barrio de Lourdes sector
del Parque “Sesquicentenario”, hasta que decidió nombrarlo como barrio Sesquicentenario
porque era muy largo el nombre anterior, así se da inició al nombre de este recordado y
próspero barrio Sesquicentenario, al cual humildemente me honro en pertenecer.

Los directivos de ese entonces encabezados por don Gerardo Guaylla, un sindicalista de
cepa, fue quien logró a través de sus gestiones y el esfuerzo de los habitantes del sector se
consiguió materializar llevar el agua potable desde la vía principal Panamericana Norte hasta
el barrio (ex control policial norte), con puro mingas y dinero propio de los morados se logró
ubicar dos grifos de agua en el sector, de igual forma se logró poseer la luz eléctrica, con las
mismas gestiones.

Muchas anécdotas hemos vivido en nuestro barrio, como es el tener que traer luz por
intermedio de cables de teléfono desde la casa del señor García, los alambres que prestaba
Héctor Concha un morador del sector, o a veces tener que coger la luz trifásica de los
alambres públicos, la misma que hacia explotar los focos cada media hora y así pasábamos la
noche de baile y claro, los equipos de sonido de ese entonces si soportaban. Los niños de ese
entonces ávidos de entretenimiento debíamos trasladarnos a ciertas distancias a pedir a la
vecindad que tenían televisores para que nos hagan ver algunos programas y como es lógico
siempre éramos burlas de ellos, hasta que la primera televisión apareció en el lugar, fue don
Tomás quien adquirió una tv b/n a batería, pues por lo menos ya no debíamos viajar lejos a
ver tv. Los tradicionales carnavales lo festejábamos en el famoso canal de riego.

Desde ese entonces el barrio ha sufrido una metamorfosis, llena de progreso, hoy por hoy
cuenta con todos los servicios básicos y una personería jurídica, cuyos directivos oriundos del
sector luchan por el bienestar y progreso del sector, alimentados por ricas tradiciones, felicito
desde esta página a quienes son los actuales portadores de la hegemonía barrial, espero
seguir alimentándoles con información sobre la incipiente creación de nuestro querido barrio.

MSc. M. Eduardo Guailla G.

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