Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Competencia:
Quiero confesarles que hoy tengo un profundo pesar; hoy amanecí triste.
Ante esta situación pregunto: ¿Les parece justo? ¿Acaso nosotros no debemos ser
impecables en nuestro comportamiento dentro y fuera de nuestra organización?
¿Podemos hablar de valores cuando no los practicamos?
¿Qué trascendencia les damos a los valores? No es una pregunta limitada a los
valores corporativos. Pregunto por los valores en la vida que, al final, son creencias
compartidas y compartibles en todos los espacios: en la casa, en el trabajo, con los
amigos, en nuestras diarias actuaciones.
Puede parecer un tema etéreo, pero es tan esencial que por eso me parece
importante compartir esta reflexión con todos mis compañeros. Para ser más
concretos, la pregunta que planteo es: al advertir el error de otro, ¿me aprovecho de
la situación o apoyo la corrección?
Invito a todos para que siempre seamos coherentes entre lo que pensamos, lo que
decimos y lo que hacemos. Pero sobre todo, los invito a que aprovechemos este
proceso de transformación hacia una banca más humana como una oportunidad para
nuestras vidas: creemos valor a través de los valores.
Ojalá podamos, todos los días de nuestras vidas, mirar a nuestros hijos y seres
queridos a sus ojos y poderles decir, con orgullo, que somos seres íntegros en toda la
extensión del concepto. Porque la integridad no admite términos medios: se es o no
se es.
Hoy amanecí triste y quise compartir las razones de este sentimiento con ustedes. Los
invito a reflexionar, a pensar y a actuar con principios, con integridad: esto depende
de cada uno de nosotros