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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD CATÓLICA SANTA ROSA


FACULTAD DE DERECHO

ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE


VENEZUELA, EL CÓDIGO CIVIL Y LA INTERPRETACIÓN DE LAS
NORMAS

Autora: Mariangel Arenas

Carora, 26 de febrero de 2021


ANÁLISIS DE LOS ARTÍCULOS 2, 3 Y 7 DE LA CONSTITUCIÓN DE LA
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Y 4 DEL CÓDIGO CIVIL Y
LA INTERPRETACIÓN DE LAS NORMAS
Ensayo

El artículo 2 de la Constitución de la República Bolivariana de


Venezuela (1999) establece que:
Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de
Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de
su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la libertad, la
justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la
responsabilidad social y, en general, la preeminencia de los
derechos humanos, la ética y el pluralismo político.

Este artículo da por establecido el hecho de que Venezuela es un


Estado que está fundamentado en la forma de gobierno basado en la
Democracia, que defiende los derechos humanos, respeta la pluralidad
política, y que mantiene responsabilidad social para con ciudadanos, además
de que tiene como principios fundamentales, el respeto por la vida, la justicia,
la solidaridad entre los conciudadanos, y la igualdad de derechos
y obligaciones, para cada uno de ellos. Por su parte, el artículo 3 establece
que:
“El Estado tiene como fines esenciales la defensa y el desarrollo
de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático
de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y
amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del
pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y
deberes reconocidos y consagrados en esta Constitución. La
educación y el trabajo son los procesos fundamentales para
alcanzar dichos fines”.

Este artículo resalta los valores de la Educación, y del trabajo, que tiene


el Estado, como recursos esenciales para alcanzar los fines personales y
sociales, que requieren los ciudadanos, tales como; su defensa, su
desarrollo, el respeto a su dignidad, la promoción del bienestar y la
prosperidad social, el ejercicio democrático y además de permitir construir
una sociedad que establezca la justicia, defienda la paz, y garantice el
cumplimiento de los principios, derechos y deberes establecidos en la
Constitución.
Mientras que, el artículo 7 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela (1999) establece que “La Constitución es la norma
suprema y el fundamento del ordenamiento jurídico. Todas las personas y los
órganos que ejercen el Poder Público están sujetos a esta Constitución”, por
lo que este artículo le confiere a la Constitución Bolivariana de Venezuela,
todo el poder jurídico, al cual todas las personas y órganos que ejercen el
poder público deben estar sometidos a sus leyes establecidas.
Ahora bien, en lo que concierne al Derecho Constitucional, la persona
que aplica el Derecho, o el Juez que dicta el fallo, lo hace con base a la
Constitución, que es un texto normativo de carácter fundamental, abstracto y
general. El juez que la trae a un caso concreto, dicta para ello una norma
individualizada: la sentencia. En la sentencia plasma el resultado de esa
labor y constituye la nota definitoria de lo que se conoce con el nombre de
Jurisprudencia.
En todo momento se habla de la interpretación de la Constitución y se
debe tener en cuenta que durante este proceso se garantizar la libertad y
dignidad humana, que el derecho tiene que ser interpretado con criterio
amplio, liberal y práctico y como un conjunto armónico y sistematizado, que
las palabras del texto constitucional deben ser interpretadas en su sentido
general y común y debe considerarse dentro del contexto interpretativo el
conjunto de situaciones sociales, económicas y políticas que existen en el
momento de realizarse la interpretación, es decir, las fuentes del Derecho,
los métodos y técnicas de interpretación.
Dependiendo a las fuentes, los métodos y técnicas de interpretación,
las interpretaciones realizadas por mí podrían tener un sinfín más de
interpretaciones, puesto que se debe considerar la naturaleza de la materia
legislada y el propósito deseado por el legislador y, además, no interpretar
aisladamente una norma, sino en concatenación con todo el sistema jurídico
de que forma parte, los cuales son aspectos en el que no he ahondado en mi
análisis y que puede ser una arista de otro legislador, esto con la finalidad de
demostrar las múltiples interpretaciones que pueden realizarse a un mismo
artículo de la constitución.
La forma cómo se justifica la interpretación jurídica tiene un fuerte
basamento legal presente en el Código Civil Venezolano de 1982 en su
artículo 4, que reza lo siguiente:
A la ley debe atribuírsele el sentido que aparece evidente del
significado propio de las palabras, según la conexión de ellas
entre sí y la intención del legislador. Cuando no hubiere
disposición precisa de la ley, se tendrá en consideración las
disposiciones que regulan casos semejantes o materias
analógicas y, si hubiese todavía dudas, se aplicarán los principios
generales del Derecho.

La utilidad fundamental de este artículo radica en que es una norma


que, según Petzold-Pernía (2008) “permite al intérprete y especialmente al
juez, justificar la interpretación que ha realizado, ayudándole a presentar su
decisión como conforme al Derecho Positivo vigente” (p. 118). Si se efectúa
un análisis sistemático partiendo de la hipótesis de que el Derecho es
ordenado, se encuentra que en la primera parte del artículo prevalece el
sentido del significado propio de las palabras y, si por el contrario,
analizamos desde una óptica psicológica, en la búsqueda de la voluntad del
legislador concreto, también encontraremos evidencias de la necesidad de
precisar la razón de la ley, reconstruyendo la intención del legislador,
pensando en el problema concreto que tenía que resolver, en los principios a
los cuales se refiere en las enmiendas aportadas al proyecto primitivo.
La interpretación del Derecho es una materia que pertenece a la
Doctrina y sobre la cual existen diferentes criterios, pero también es
importante considerar que sin la existencia de este artículo sería muy difícil
justificar desde un punto de vista legal, las diversas interpretaciones del
Derecho que puedan presentarse en un caso concreto.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela prevé dos
clases de interpretación constitucional. La primera está vinculada con el
control difuso de la constitucionalidad de las leyes y de todos los actos
realizados en ejecución directa de la Constitución; y la segunda, con el
control concentrado de dicha constitucionalidad. Todos los jueces tienen la
obligación de asegurar la integridad de la Constitución; y el Tribunal Supremo
de Justicia debe garantizar la supremacía y efectividad de las normas y
principios constitucionales.
La diferencia entre ambos tipos de interpretación es patente y produce
consecuencias jurídicas decisivas en el ejercicio de la jurisdicción
constitucional. Esas consecuencias se refieren a que la eficacia de la norma
individualizada se limita al caso resuelto, mientras que la norma general
producida por la interpretación abstracta que constituye una interpretación
cuasi auténtica que prefiere el contenido constitucionalmente declarado por
el texto fundamental.
En ese sentido, para lograr un resultado perfectamente coherente en la
interpretación de la Constitución, no debe fragmentarse ésta, sino que hay
que analizar el ordenamiento en su totalidad. El intérprete seguirá los
lineamientos propuestos por el legislador en la referida norma, pero lo hará
según su leal saber y entender y con vista a obtener la interpretación que
mejor se adecúe a los fines y valores en juego, considerando que en la
aplicación de una determinada norma jurídica general a un caso determinado
es importante conocer los elementos que constituyen el proceso
interpretativo y que a su vez representan los medios de que el intérprete se
sirve para realizar dicha actividad.
La interpretación jurídica es un tema relevante para la aplicación del
Derecho, lo mismo en la teoría que en la práctica, ya que la dinámica jurídica
y la aplicación de las normas no pueden ser entendidas como el resultado de
un proceso deductivo; las sentencias de los tribunales, así como las
decisiones administrativas, casi nunca pueden explicarse como deducción
lógica de lo establecido en las normas generales. La interpretación es un
proceso intelectual, que se mueve en el ámbito de un ordenamiento jurídico y
en la práctica de la vida social para aprehenderlo en su significado global, en
donde ambos aspectos de la interpretación jurídica se complementan e
integran mutuamente.
Nuestra constitución sigue la estructura formal de todos los documentos
constitucionales. Fue creada un día para una sociedad venezolana y para un
tiempo determinado, pero extiende su ámbito temporal de validez a todo
tiempo posterior hasta el día de su derogación. Los artículos analizados
permiten entrever el carácter democrático de la República, la participación y
control ciudadano, los derechos humanos, la unidad latinoamericana, entre
otros aspectos que no pueden ser analizados de forma aislada y cuya
discusión se mantendrá hasta su derogación.
La interpretación jurídica nos exige considerar todos los diferentes
ordenamientos, partiendo de la Constitución, como norma suprema, pero
también analizando, estudiando y considerando la subjetividad y lo objetivo,
lo lingüístico y lo sistemático, sus controversias y limitaciones.
Referencias

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, (1999). Gaceta


Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 5453 (Extraordinario).
Marzo 24, 2000.

Petzold-Pernía, H. (2008). Sobre la Naturaleza de la Metodología Jurídica.


Frónesis, Revista de Filosofía Jurídica, Social y Política, 15 [Revista en
línea] Disponible: https://bit.ly/2ZTdxPf [Consulta: Febrero 24, 2021]

Código Civil de Venezuela, (1982). Gaceta Oficial de la República


Bolivariana de Venezuela, 2990 (Extraordinario). Julio 26, 1982.

Anchondo Paredes, V. (2009). Métodos de Interpretación Jurídica. [Artículo


en línea]. Disponible: https://bit.ly/3aXviDr [Consulta: Febrero 23, 2021]

Iturralde, V. (1991). Sobre el silogismo judicial. Anuario de Filosofía del


Derecho VIII [Revista en línea] Disponible: https://bit.ly/3uBBBEo
[Consulta: Febrero 24, 2021]

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