Está en la página 1de 6

REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR

ARTÍCULOS ARTÍCULOS

LA ADOPCIÓN INTERNACIONAL Y SU REGULACIÓN EN 6LJXLHQGRHVWDOtQHDGHSHQVDPLHQWRHODUWtFXORGHQXHVWUR&yGLJRGH)DPLOLDGH¿QHODDGRSFLyQGHOD


VLJXLHQWHIRUPD
COSTA RICA
“La adopción es una institución jurídica de integración y protección familiar, orden público e interés
Dra. Vilma Alpízar Matamoros 1
social. Constituye un proceso jurídico y psicosocial, mediante el que el adoptado entra a formar parte de la familia
de los adoptantes, para todos los efectos, en calidad de hijo o hija”.4
El fenómeno de la globalización ha cambiado profundamente al mundo actual. Los países han dejado de vivir
DLVODGRVXQRVGHRWURVJUDFLDVDOFUHFLHQWHDXPHQWRGHOWUi¿FRLQWHUQDFLRQDOHOUiSLGRWUDQVSRUWHGHXQSDtVDRWURHO
0RGHUQDPHQWHODDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDOVXUJHFRPRFRQVHFXHQFLDGHOD6HJXQGD*XHUUD0XQGLDOFXDQGROD
GHVDUUROORGHODVFRPXQLFDFLRQHV\ODVWUDQVIRUPDFLRQHVHFRQyPLFDV\SROtWLFDVTXHKDQPRGL¿FDGRODVUHODFLRQHVHQWUH
adopción entre países se convirtió en una práctica reiterada. Los niños huérfanos producto de la guerra, los abandonados
los seres humanos.
\GHVSOD]DGRVIXHURQDGRSWDGRVSRUSDUHMDVGHSDtVHVTXHQRVXIUtDQODVFRQVHFXHQFLDVGHOFRQÀLFWREpOLFR6HSURGXMR
HQWRQFHVXQDPLJUDFLyQGHpVWRVQLxRVDPXFKRVSDtVHVGH(XURSD\(VWDGRV8QLGRVHVSHFLDOPHQWH
/DJOREDOL]DFLyQQRVRORVHUH¿HUHDDVSHFWRVHFRQyPLFRV\SROtWLFRVVLQRTXHDGHPiVVHLQWURGXFHHQHOiPELWR
de la vida privada de las personas, por lo que es frecuente conocer de matrimonios de personas que viven en lugares
En esta etapa, se considera a la Adopción Internacional como una respuesta humanitaria a una situación de
distantes o de adopciones notorias que se dan en países distintos al nuestro.
emergencia y crisis, encontrando hogares permanentes a niños que habían perdido a sus familias en la guerra.5
Dentro de este panorama la adopción internacional ha tenido gran importancia en los últimos tiempos y
HQ HVSHFLDO D SDUWLU GHO VLJOR ;; \D TXH ODV PHGLGDV GH SURWHFFLyQ GH ORV QLxRV KDVWD HQWRQFHV HUDQ SUiFWLFDPHQWH /DDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDOWLHQHPiVLQFLGHQFLDHQSDtVHVTXHYLYHQFRQÀLFWRVDUPDGRVGHVDVWUHVQDWXUDOHVR
inexistentes. KDPEUXQDV\HPSH]yDFXHVWLRQDUVHFXiOHUDHOUpJLPHQOHJDODSOLFDEOHDHVWDLQVWLWXFLyQ¢VHUtDHOGHOSDtVGHRULJHQGHO
niño o el de los padres que lo pretendían adoptar?
Esta institución ha sido objeto de estudio no solo de las personas que pretenden adoptar a un menor sino
GHHVSHFLDOLVWDVFRPRSVLFyORJRVDERJDGRV\RWURVLQYHVWLJDGRUHV(OLQWHUpVHQHVWD¿JXUDVHKDYLVWRLQFUHPHQWDGR (VWHGLOHPDIXHUHVXHOWRPHGLDQWHOD¿UPDGHFRQYHQFLRQHV\WUDWDGRVHQWUHHOORVOD&RQYHQFLyQGH/D+D\D
por la existencia de una gran cantidad de niños abandonados producto de las guerras, catástrofes naturales y las crisis GHTXHVHUH¿HUHDODFRPSHWHQFLDGHODVDXWRULGDGHVDODOH\DSOLFDEOH\DOUHFRQRFLPLHQWRGHODVGHFLVLRQHVHQ
económicas que viven muchos países del mundo. PDWHULDGHDGRSFLyQOD&RQYHQFLyQ(XURSHDVREUHDGRSFLyQGHPHQRUHVGHFX\RREMHWRHVXQL¿FDUHOGHUHFKR
PDWHULDO \ ORV SURFHGLPLHQWRV HQ PDWHULD GH DGRSFLyQ OD &RQYHQFLyQ ,QWHUDPHULFDQD VREUH FRQÀLFWR GH  OH\HV HQ
Originalmente en culturas antiguas como la romana, se concibió a la adopción como una forma de proveer de PDWHULDGHDGRSFLyQGHPHQRUHVGHOD'HFODUDFLyQGHODV1DFLRQHV8QLGDVGHTXHUHYLVWHODIRUPDGHXQD
hijos a los padres que no los habían podido tener o los habían perdido, perpetuando con ello su apellido y su herencia, recomendación y no de un tratado, en la que se consignan los principios sociales y jurídicos aplicables a la protección y
es decir operaba esencialmente en función de los padres y no necesariamente en favor de los hijos adoptivos. En la al bienestar de los niños, contemplados sobre todo desde las prácticas en materia de adopción y la colocación familiar
DQWLJHGDGPRULUVLQGHVFHQGHQFLDVLJQL¿FDEDTXHQDGLHUHDOL]DUtDDIDYRUGHOIDOOHFLGRULWRVI~QHEUHVQLFXLGDUtDGHORV VREUHORVSODQRVQDFLRQDOHLQWHUQDFLRQDO\OD&RQYHQFLyQGH1DFLRQHV8QLGDVVREUHGHUHFKRVGHOQLxRGH6
dioses de la familia o espíritus de los antepasados, lo que implicaba el desamparo en el más allá, además de la extinción
del culto familiar y de la familia en sí. El 29 de mayo de 1993 nace otro tratado internacional, denominado Convenio relativo a la protección del niño
\DODFRRSHUDFLyQHQPDWHULDGHDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDOPHMRUFRQRFLGRFRPR&RQYHQFLyQGH/D+D\DGH7 donde
/D DGRSFLyQ VH FRQYLUWLy HQWRQFHV HQ OD VROXFLyQ D OD DXVHQFLD GH GHVFHQGHQFLD ³6X ¿QDOLGDG QR HUD GDU VHUHJXODODDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDO\VHHVWDEOHFHQYDULDVPHGLGDVGHVXPDLPSRUWDQFLDHQWUHODVTXHVHSXHGHQVHxDODU
consuelo a las personas sin hijos u obtener una situación moral ni proteger a los menores huérfanos, sino cumplir con
deberes religiosos”.2
% El reconocimiento que para el desarrollo armónico de su personalidad, el niño debe crecer en un medio
familiar, en un clima de felicidad, amor y comprensión.
En nuestro país, la legislación hizo eco de esta idea y un ejemplo es la regulación que se hace de ella en el
&yGLJR*HQHUDOSURPXOJDGRHQ3 según el cual solo se podía adoptar a personas mayores de catorce años y los % Que cada Estado debería tomar, con carácter prioritario, medidas adecuadas que permitan mantener al niño
adoptantes debían ser mayores de cincuenta años y no tener hijos ni descendientes legítimos. en su familia de origen.

Esta concepción clásica de la adopción ha sido superada y hoy es una institución dirigida a dotar de una familia % El reconocimiento de que la adopción internacional puede presentar la ventaja de dar una familia permanente
DXQDSHUVRQDTXHSRUXQDXRWUDFLUFXQVWDQFLDQRODWLHQHGH¿QLpQGRVHDFWXDOPHQWHFRPRXQ acto jurídico que crea a un niño que no puede encontrar una familia adecuada en su Estado de origen.
entre el adoptante y el adoptado un vínculo de parentesco civil del que se derivan relaciones análogas a las que resultan
GHODSDWHUQLGDG\¿OLDFLyQELROyJLFD 9HUDUWtFXOR&yGLJRGH)DPLOLD
9HU&$5'(1$60,5$1'$(OYD/HRQRU/DDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDO
/LFHQFLDGDHQ'HUHFKR\'RFWRUDHQ(GXFDFLyQ'HFDQDGHOD)DFXOWDGGH'HUHFKRGHOD8QLYHUVLGDGGH/D6DOOH6DQ-RVp&RVWD5LFD 75(-266$/$6*HUDUGR'HUHFKRGH)DPLOLD&RVWDUULFHQVH7RPR,,(GLWRULDO-XULFHQWURSiJVD
/$&58=%(5'(-2/XLV(OHPHQWRVGHO'HUHFKR&LYLO,9IDVFtFXOR,,,'HUHFKRGH)DPLOLD%DUFHORQD%RVFKSiJLQD (VWHWUDWDGRIXHUDWLÀFDGRSRU&RVWD5LFDPHGLDQWH/H\1RGHGHMXQLRGH\HQWUyHQYLJHQFLDDSDUWLUGHVXSXEOLFDFLyQHQOD*DFHWD
9HUDUWtFXORVDGHO&yGLJR*HQHUDOGH&DUULOOR GHOGHMXOLRGH

 
REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR
ARTÍCULOS ARTÍCULOS

% La necesidad de adoptar medidas que garanticen que las adopciones internacionales tengan lugar en
consideración al interés superior del niño y al respeto a sus derechos fundamentales, así como para prevenir d) Adoptarán todas las medidas apropiadas para garantizar que, en el caso de adopción en otro país, la colocación
ODVXVWUDFFLyQODYHQWDRHOWUi¿FRGHQLxRV8 QRGpOXJDUDEHQH¿FLRV¿QDQFLHURVLQGHELGRVSDUDTXLHQHVSDUWLFLSDQHQHOOD

e) Promoverán, cuando corresponda, los objetivos del presente artículo mediante la concertación de arreglos o
Esta Convención se inspiró en acuerdos informales que la precedieron y en especial en la Declaración de las acuerdos bilaterales o multilaterales y se esforzarán, dentro de este marco, por garantizar que la colocación del
1DFLRQHV8QLGDVGH\HQ&RQYHQFLyQGH1DFLRQHV8QLGDVVREUHGHUHFKRVGHOQLxRGH9. Tanto la Declaración niño en otro país se efectúe por medio de las autoridades u organismos competentes.
FRPROD&RQYHQFLyQGH1DFLRQHV8QLGDV\OD&RQYHQFLyQGH/D+D\DUHFRQRFHQXQSULQFLSLRHVHQFLDOHQHVWDPDWHULD
cual es el interés superior del menor, el cual debe estar presente en todo proceso sea nacional o internacional. /RVSULQFLSLRVTXHVHGHULYDQGHORVDQWHULRUHVDUWtFXORVVRQHOLQWHUpVVXSHULRUGHOQLxRODVXEVLGLDULGDGGHOD
adopción y la comunicación y cooperación de las autoridades del país de origen de los niños y la autoridades del país
3RGUtDGHFLUVHTXHOD&RQYHQFLyQGHOD+D\DUHWRPDHQJUDQPHGLGDORVSULQFLSLRVFRQWHQLGRVHQOD&RQYHQFLyQ receptor.
GHORV'HUHFKRVGHO1LxRHQVXVDUWtFXORV\TXHVHWUDQVFULEHQ
El principio del “interés superior del niño” implica que en todas las medidas concernientes a los niños que
Artículo 20 tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los
órganos legislativos, la prioridad será la aplicación de este principio.10
1. Los niños temporal o permanentemente privados de su medio familiar, o cuyo superior interés exija que no
permanezcan en ese medio, tendrán derecho a la protección y asistencia especiales del Estado. (QUHODFLyQDHVWHSULQFLSLROD6DOD&RQVWLWXFLRQDOKDVHxDODGR

2. Los Estados Partes garantizarán, de conformidad con sus leyes nacionales, otros tipos de cuidado para esos ³«VHSRGUtDGH¿QLUHOLQWHUpVVXSHULRUFRPRHORUGHQSUHYDOHQWHGHORVLQWHUHVHVGHORVPHQRUHV
niños. tomando en cuenta su condición de sujeto de derechos, su edad, madurez, capacidad, condición
económicas y todas aquellas condiciones propias de una persona en desarrollo. Este interés
VXSHULRUFRQ¿JXUDXQSULQFLSLRFRQVWLWXFLRQDOTXHULJHWRGRVORVSURFHVRVRDVXQWRVHQORVTXH
(QWUHHVRVFXLGDGRV¿JXUDUiQHQWUHRWUDVFRVDVODFRORFDFLyQHQKRJDUHVGHJXDUGDODNDIDODGHOGHUHFKR intervenga directa o indirectamente un menor de edad. Sin embargo, es preciso indicar, que
islámico, la adopción o de ser necesario, la colocación en instituciones adecuadas de protección de menores. DOWUDWDUVHGHXQSULQFLSLRpVWHQRFXHQWDFRQXQDGH¿QLFLyQH[DFWDQLXQDOLVWDWD[DWLYDGHVXV
Al considerar las soluciones, se prestará particular atención a la conveniencia de que haya continuidad en la alcances, por lo que su desarrollo, aplicación, límites, alcances y protección, se encuentran a
educación del niño y a su origen étnico, religioso, cultural y lingüístico. cargo de la ley”11.

Artículo 21
El principio de subsidiaridadVLJQL¿FDTXHODDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDOGHEHVHUFRQVLGHUDGDFRPR~OWLPRUHFXUVR
Los Estados Partes que reconocen o permiten el sistema de adopción cuidarán de que el interés superior del para la protección del niño, pues la prioridad es que los niños convivan con sus padres o familiares.
QLxRVHDODFRQVLGHUDFLyQSULPRUGLDO\
Por último el principio de cooperación VH UH¿HUH VREUHWRGR DO SDSHO GH ODV$XWRULGDGHV &HQWUDOHV HQ FDGD
D  9HODUiQ SRU TXH OD DGRSFLyQ GHO QLxR VyOR VHD DXWRUL]DGD SRU ODV DXWRULGDGHV FRPSHWHQWHV ODV TXH (VWDGRFRQWUDWDQWHODFXDOGHEHYHODUSRUHOFXPSOLPLHQWRGHODVREOLJDFLRQHVTXHOHDVLJQDOD&RQYHQFLyQGH/D+D\D
determinarán, con arreglo a las leyes y a los procedimientos aplicables y sobre la base de toda la información en aras de la protección de los derechos fundamentales de los niños.
SHUWLQHQWH\¿GHGLJQDTXHODDGRSFLyQHVDGPLVLEOHHQYLVWDGHODVLWXDFLyQMXUtGLFDGHOQLxRHQUHODFLyQFRQ
sus padres, parientes y representantes legales y que, cuando así se requiera, las personas interesadas hayan (Q&RVWD5LFDIXHGHVLJQDGDFRPR$XWRULGDG&HQWUDOHO&RQVHMR1DFLRQDOGH$GRSFLRQHVGHO3DWURQDWR1DFLRQDO
dado con conocimiento de causa su consentimiento a la adopción sobre la base del asesoramiento que pueda GHOD,QIDQFLDLQVWDQFLDTXHFXHQWDFRQHODSR\RDGPLQLVWUDWLYRWpFQLFR\ORJtVWLFRGHOD2¿FLQDGH$GRSFLRQHVODFXDO
VHUQHFHVDULR está compuesta por un equipo interdisciplinario (abogados, trabajadoras sociales y psicólogas), cuyas funciones se
HQFXHQWUDQHVWDEOHFLGDVHQHO5HJODPHQWRSDUDORV3URFHVRVGH$GRSFLyQ1DFLRQDOH,QWHUQDFLRQDOGHO3$1,
b) Reconocerán que la adopción en otro país puede ser considerada como otro medio de cuidar del niño, en el
caso de que éste no pueda ser colocado en un hogar de guarda o entregado a una familia adoptiva o no pueda
VHUDWHQGLGRGHPDQHUDDGHFXDGDHQHOSDtVGHRULJHQ
F 9HODUiQSRUTXHHOQLxRTXHKD\DGHVHUDGRSWDGRHQRWURSDtVJRFHGHVDOYDJXDUGLDV\QRUPDVHTXLYDOHQWHV
DODVH[LVWHQWHVUHVSHFWRGHODDGRSFLyQHQHOSDtVGHRULJHQ 9HU&iUGHQDV0LUDQGD(OYD/HRQRU/D$GRSFLyQ,QWHUQDFLRQDOSiJ
([S&25HV1žGHOD6$/$&2167,78&,21$/'(/$&257(6835(0$'(-867,&,$6DQ-RVpDODV
3UHiPEXORGHOD&RQYHQFLyQGH/D+D\DGH TXLQFHKRUDV\WUHFHPLQXWRVGHOWUHLQWDGHMXOLRGHOGRVPLORFKR
(VWD&RQYHQFLyQIXHÀUPDGDSRU&RVWD5LFDHOGHHQHURGH\UDWLÀFDGDFRPROH\GHOD5HS~EOLFDHQMXOLRGHHVHPLVPRDxR

 
REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR
ARTÍCULOS ARTÍCULOS

En nuestro caso particular y de acuerdo a los Tratados que se han suscrito y a la legislación emitida, el instituto (ODUWtFXORGHO&yGLJRGH)DPLOLDGH&RVWD5LFDHVWDEOHFHTXHODDGRSFLyQSXHGHVHUFRQMXQWDRLQGLYLGXDO
GHODDGRSFLyQVHHQFXHQWUDUHJXODGRHQOD&RQYHQFLyQVREUHORV'HUHFKRVGHO1LxRHO&RQYHQLR5HODWLYRDOD3URWHFFLyQ
GHO1LxR\DOD&RRSHUDFLyQHQ0DWHULDGH$GRSFLyQ,QWHUQDFLRQDO &RQYHQLRGH/D+D\DGH HQHO&yGLJRGH Individual: Si el adoptante es único. El adoptado de esta forma repetirá los apellidos del adoptante.
)DPLOLDHQHO&yGLJRGHOD1LxH]\OD$GROHVFHQFLDOD/H\2UJiQLFDGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLD\HQHO
5HJODPHQWRSDUDORV3URFHVRVGH$GRSFLyQ1DFLRQDOH,QWHUQDFLRQDOGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLD12. Conjunta: Si la adopción es solicitada por ambos cónyuges, que tengan un hogar estable y vivan juntos.
El adoptado en forma conjunta llevará, como primer apellido, el primero del adoptante y como segundo apellido, el
3DUWLFXODUPHQWHHODUWtFXORLQFLVRG GHOD/H\2UJiQLFDGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLDDGYLHUWHTXH primero de la adoptante.
GHQWURGHORV¿QHVGHODLQVWLWXFLyQHVWi³*DUDQWL]DUDODVSHUVRQDVPHQRUHVGHHGDGHOGHUHFKRDFUHFHU\GHVDUUROODUVH
en el seno de una familia, sea ésta biológica o adoptiva.” 13 La doctrina moderna considera que la adopción internacional en general debe considerarse como una solución
SDUDEULQGDUXQDIDPLOLDDXQQLxRRQLxDHQFRQGLFLyQGHDGRSWDELOLGDGSVLFRVRFLROHJDO\TXHHO&RQVHMR1DFLRQDO
'HHVWRVLQVWUXPHQWRVVHGHVSUHQGHHOFRPSURPLVR\ODQHFHVLGDGGHTXHORV(VWDGRV¿UPDQWHVHVWDEOH]FDQXQ GH$GRSFLRQHV1DFLRQDOHVKD\DGDGRSRUDJRWDGDODXELFDFLyQHQIDPLOLDLGyQHDFRQUHVLGHQFLDKDELWXDOHQVXSDtVGH
marco jurídico que garantice el respeto de estos principios y derechos fundamentales. origen.16

&DEHVHxDODUTXHHQHOSUHiPEXORGHOD&RQYHQFLyQGH/D+D\DGHVWDFDQGRVLGHDVHVHQFLDOHV Efectos Jurídicos de la Adopción

De acuerdo con el ordenamiento jurídico de Costa Rica, la adopción, sea ésta nacional o internacional, una vez
‡ El papel de la crianza y evolución del niño, como una especie de hábitat donde se desarrolla y forma su TXHHVDSUREDGDSRUHO-XH]GH)DPLOLDVXUWHXQDVHULHGHHIHFWRVDVDEHU
personalidad y
1. a) Entre los adoptantes y adoptados se establecen los mismos vínculos jurídicos que unen a los padres con los
‡ La importancia de la familia biológica, recordándose el carácter subsidiario de la adopción internacional. hijos e hijas consanguíneas. Además, para todos los efectos, las personas adoptadas entrarán a formar parte de la familia
consanguínea del o los adoptantes.

Y es que la adopción debe considerarse como una excepción cuando al niño o niña no puede vivir con algún b) Otro efecto importante de la adopción, en cuanto al adoptado, es que, produce la desvinculación de éste
familiar o en último caso cuando es objeto de una adopción y es llevado a otro país ajeno a sus raíces. con su familia consanguínea, es decir, no se le exigirán obligaciones por razón de parentesco con sus ascendientes o
colaterales consanguíneos, igualmente la persona adoptada no tendrá derecho alguno respecto de esos mismos parientes.
&RQEDVHHQHVWHPDUFRMXUtGLFR\REOLJDGRVSRUOD¿UPDGHHVWRV&RQYHQLRVDOJXQRVSDtVHVODWLQRDPHULFDQRV\ Sin embargo hay que hacer notar que, los impedimentos matrimoniales por razón de parentesco consanguíneo,
entre ellos Costa Rica, iniciaron un proceso de reformas en materia de adopción dentro del cual se emitió el Código de la permanecen vigentes.
1LxH]\OD$GROHVFHQFLDSXEOLFDGRHQOD*DFHWDGHOGHIHEUHURGHHQFXPSOLPLHQWRGHXQFRPSURPLVRGLUHFWR
DOKDEHUVHUDWL¿FDGROD&RQYHQFLyQVREUHORV'HUHFKRVGHO1LxR\DGHPiVVHUHIRUPDHOFDStWXOR9,GHDGRSFLRQHVGHO c) El o los adoptantes ejercen la autoridad parental del adoptado.
Código de Familia en 1995.
d) La adopción es irrevocable, es decir, una vez que la autoridad judicial competente dicte sentencia en donde
(QQXHVWURSDtVODDGRSFLyQSXHGHVHU1DFLRQDOR,QWHUQDFLRQDOGHSHQGLHQGRGHOOXJDUGHOGRPLFLOLRGHODV DSUXHED OD DGRSFLyQ \ HVD VHQWHQFLD DGTXLHUD ¿UPH]D QR VHD DSHODGD HQ HO SOD]R GH WUHV GtDV SRVWHULRU DO GtD GH OD
personas adoptantes. De esta forma, se entiende por Adopción Internacional, aquella que es tramitada por personas con QRWL¿FDFLyQDWRGDVODVSDUWHV QRVHSXHGHUHYHUWLU
residencia permanente fuera del territorio de Costa Rica, independiente de su nacionalidad. Por ejemplo como se señala
HQLQIRUPDFLyQGHO3$1,14, podría darse el caso de una familia conformada por costarricenses con residencia habitual Es importante indicar que la familia adoptante puede solicitar al juez el cambio del nombre de pila en forma
en España que desee adoptar en Costa Rica deberá seguir el procedimiento establecido para la adopción internacional.15 parcial o completa, de la persona menor de edad. Sin embargo, el cambio de nombre de pila debe hacerse tomando en
cuenta la edad y las implicaciones que a nivel psicológico ello pueda conllevar para la persona menor de edad, pues el
nombre de pila es un elemento que conforma la identidad de la persona. Dependiendo de la madurez que el niño o niña
tenga, deberán estar totalmente de acuerdo con este cambio, por lo que en algunos casos tal decisión debe ser compartida
tanto por la persona menor de edad como por los adoptantes.
(QODVHQWHQFLDGLFWDGDHQHO(;3(',(17()$92721RGHO 75,%81$/'()$0,/,$GH6DQ-RVpDODVQXHYH
KRUDVFXDUHQWDPLQXWRVGHOGLHFLVpLVGHQRYLHPEUHGHOGRVPLOFLQFRVHKDFHXQDFODUDUHODFLyQKLVWyULFDGHODHYROXFLyQGHODDGRSFLyQHQQXHVWUR
SDtV\GHORVLQVWUXPHQWRVMXUtGLFRVTXHODUHJXODQ
KWWSZZZSDQLJRFUDGRSFLRQHVSKS
6LJODVGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLD
9HUKWWSZZZSDQLJRFUDGRSFLRQHVSKS ,ELGHP

 
REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR
ARTÍCULOS ARTÍCULOS

Procedimiento para el trámite de Adopción Internacional


7UDWiQGRVHGHDGRSFLRQHVFRQMXQWDVORVDGRSWDQWHVGHEHUiQFRPSUREDUDQWHORV7ULEXQDOHVFRVWDUULFHQVHVTXH
'HDFXHUGRDODLQIRUPDFLyQTXHVXPLQLVWUDHQVXSiJLQDZHEHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLDSDUDHO
trámite de adopción de niños, niñas y adolescentes que realizan las personas solicitantes de adopción internacional se a) Tienen por lo menos cinco años de casados.
requiere tramitar una solicitud de adopción internacional a través de ellos, las personas interesadas deben primeramente
contactar al organismo que funge como Autoridad Central de su país de residencia habitual, conforme a lo dispuesto b) Además de los requisitos generales establecidos en el artículo 106 del Código de Familia, deberán comprobar
HQHO&RQYHQLRGH/D+D\DRELHQDXQD$JHQFLDX(QWLGDG&RODERUDGRUDHQPDWHULDGH$GRSFLyQ,QWHUQDFLRQDOOD que reúnen las condiciones personales para adoptar, exigidas por la ley de su domicilio.
cual deberá estar debidamente autorizada para tales efectos por la Autoridad Central de su país y acreditada por parte
GHO&RQVHMR1DFLRQDOGH$GRSFLRQHVGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLDFRPRHQWLGDGFRODERUDGRUDHQODDGRSFLyQ c) La autoridad competente los ha declarado aptos para adoptar.
internacional en Costa Rica.
G 8QDLQVWLWXFLyQS~EOLFDRHVWDWDORXQRUJDQLVPRDFUHGLWDGRGHVXGRPLFLOLR\VRPHWLGRDOFRQWUROGHODV
'LFKD$XWRULGDGFHQWUDOGHEHUiFRPXQLFDUVHFRQOD2¿FLQDGH$GRSFLRQHVGHO3$1,FRQHO¿QGHVROLFLWDUOD autoridades competentes del Estado receptor, velará por el interés del adoptado.
UHPLVLyQGHO)RUPXODULR2¿FLDOGH$GRSFLyQ,QWHUQDFLRQDOTXHGHEHUiQFRPSOHWDU\¿UPDUODVSHUVRQDVVROLFLWDQWHVDVt
como la lista de requisitos y documentos que deben aportar para poder adoptar en nuestro país. Tratándose de adopciones individuales, los adoptantes sin domicilio en Costa Rica deberán cumplir con los
requisitos b), c) y d) anteriores.
La Autoridad central del país de residencia habitual de los solicitantes deberá realizar todas las valoraciones
VRFLDOHV SVLFROyJLFDV PpGLFDV OHJDOHV \ GHPiV  FRQ HO ¿Q GH GHWHUPLQDU OD LGRQHLGDG GH ORV VROLFLWDQWHV SDUD OD b) Documentos que deben presentar las personas solicitantes de adopción
realización de una adopción internacional de niños, niñas o adolescentes de Costa Rica. Si la Autoridad Central LQWHUQDFLRQDODOD2¿FLQDGH$GRSFLRQHVGHO3$1,
determina que la familia es idónea, emitirá un documento denominado “Declaratoria de Idoneidad”. Dicha Declaratoria
GHEHUiUHPLWLUVHDOD2¿FLQDGH$GRSFLRQHVGHO3$1,FRQMXQWDPHQWHFRQHOUHVWRGHGRFXPHQWRVUHTXLVLWRVTXHGHEHUiQ /DFRQVWDWDFLyQGHWRGDVODVFRQGLFLRQHVVHxDODGDVDQWHULRUPHQWHVHKDUiDWUDYpVGHXQDVHULHGHGRFXPHQWRV
FRPSOHWDUODVSHUVRQDVVROLFLWDQWHVGHQWURGHVXVROLFLWXGGHDGRSFLyQ/D2¿FLQDGH$GRSFLRQHVHVHOyUJDQRFRPSHWHQWH UHTXLVLWR TXH GHEHUiQ DSRUWDU ODV SHUVRQDV VROLFLWDQWHV GH DGRSFLyQ LQWHUQDFLRQDO DQWH OD 2¿FLQD GH$GRSFLRQHV GHO
GHO 3$1, SDUD UHDOL]DU WRGRV ORV WUiPLWHV GH DGRSFLyQ LQWHUQDFLRQDO IXQJLHQGR FRPR DSR\R WpFQLFR \ ORJtVWLFR GHO 3$1,
&RQVHMR1DFLRQDOGH$GRSFLRQHV $XWRULGDGFHQWUDOGH&RVWD5LFD 
'LFKRVGRFXPHQWRVVRQORVVLJXLHQWHV
Adopción Internacional en Costa Rica:
)RUPXODULRR¿FLDOGH$GRSFLyQ,QWHUQDFLRQDOGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLDFRPSOHWR\¿UPDGR
Para poder adoptar en Costa Rica, las personas solicitantes de adopción deben cumplir con las condiciones por los solicitantes. Este formulario podrá ser solicitado (ya sea por las personas solicitantes o bien por la
JHQHUDOHVHVWDEOHFLGDVSRUHODUWtFXORGHO&yGLJRGH)DPLOLDDVDEHU $XWRULGDG&HQWUDOGHOSDtVGHVXUHVLGHQFLDKDELWXDO GLUHFWDPHQWHDOD2¿FLQDGH$GRSFLRQHVGHO3$1,RELHQ
al Consulado de Costa Rica más cercano.
1. Poseer capacidad plena para ejercer sus derechos civiles.
2. Dos fotografías tamaño pasaporte de ambos solicitantes.
2. Ser mayor de veinticinco años, en caso de adopciones individuales. En adopciones conjuntas, bastará que
uno de los adoptantes haya alcanzado esta edad. &HUWL¿FDGRGHQDFLPLHQWRGHORORVVROLFLWDQWHV

3. Ser por lo menos quince años mayor que el adoptado. En la adopción conjunta, esa diferencia se establecerá &HUWL¿FDGRGHPDWULPRQLRRHVWDGRFLYLO6LHVXQDDGRSFLyQFRQMXQWDGHEHUiQGHWHQHUORVVROLFLWDQWHVFLQFR
con respecto al adoptante de menor edad. años de casados como mínimo.

4. Ser de buena conducta y reputación.  &HUWL¿FDGR GH 'HOLQFXHQFLD H[SHGLGR SRU OD DXWRULGDG MXGLFLDO R DGPLQLVWUDWLYD FRPSHWHQWH GHO SDtV GH
residencia habitual de los solicitantes.
5. Poseer condiciones familiares, morales, psicológicas, sociales, económicas y de salud, que evidencien
aptitud y disposición para asumir la responsabilidad parental. &HUWL¿FDGRGHLQJUHVRVHFRQyPLFRV

De acuerdo con lo establecido en el artículo 112 del Código de Familia las personas sin domicilio en Costa Rica 7. Dictamen médico de salud.
pueden adoptar, en forma conjunta o individual.
9DORUDFLyQVRFLDO (VWDYDORUDFLyQGHEHUHDOL]DUVHFRQIRUPHDORVDVSHFWRVDWRPDUHQFXHQWDHQODHYDOXDFLyQ

 
REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR
ARTÍCULOS ARTÍCULOS

GHIDPLOLDVHVWDEOHFLGRVSRUHO3$1,  %LEOLRJUD¿D
9DORUDFLyQ3VLFROyJLFD (VWDYDORUDFLyQGHEHUHDOL]DUVHFRQIRUPHDORVDVSHFWRVDWRPDUHQFXHQWDHQOD
HYDOXDFLyQGHIDPLOLDVHVWDEOHFLGRVSRUHO3$1,  Libros y Revistas

10. Compromiso de Seguimiento expedido por la Autoridad Central del país de residencia habitual de los BENAVIDES SANTOS, Diego. Código de Familia, actualizado, concordado y comentado, con jurisprudencia
adoptantes, o por la Agencia u organismo colaborador en materia de adopción internacional acreditado en FRQVWLWXFLRQDO\GHFDVDFLyQ6DQ-RVp(GLWRULDO-XULWH[WR6$(GLF
Costa Rica. Mediante dicho documento, la autoridad indicada deberá comprometerse expresamente a realizar
HO VHJXLPLHQWR SRVWXELFDFLyQ DGRSWLYD FRQIRUPH D ORV FULWHULRV D WRPDU HQ FXHQWD SDUD HO VHJXLPLHQWR BRENA SEMA, Ingrid, “Convención sobre la Protección de Menores y la Cooperación en Materia de
HVWDEOHFLGRVSRUHO3$1,\SRUXQSOD]RQRPHQRUDFLQFRDxRVSOD]RTXHFRUUHDSDUWLUGHODIHFKDGHLQJUHVR Adopción Internacional”, 5HYLVWDGH'HUHFKR3ULYDGR0p[LFR$xR1RVHWLHPEUHGLFLHPEUHGH
de la persona menor de edad al país del domicilio habitual de los adoptantes. Dicho seguimiento deberá
hacerse mediante informes semestrales, a los cuales deberán anexarse fotografías y demás documentos que BELLUSCIO, Augusto César. Manual de Derecho de Familia, Buenos Aires, Ediciones de Palma, 1974.
demuestren los avances en la adaptación y el desarrollo integral de la persona menor de edad con la familia
adoptiva. BRENES CORDOBA, Alberto. Tratado de las Personas6DQ-RVp(GLWRULDO&RVWD5LFD(GLF

11. Documento de Declaratoria de Idoneidad expedida por la Autoridad Central del país de residencia habitual GONZALEZ MARTIN, Nuria y RODRIGUEZ BENOT, Andrés. Estudios sobre adopción internacional,
de los solicitantes, para adoptar a un niño (s), niña (s) proveniente (s) de Costa Rica. 0p[LFR,QVWLWXWRGH,QYHVWLJDFLRQHV-XUtGLFDV8QLYHUVLGDG1DFLRQDO$XWyQRPDGH0p[LFRHGLF

7RGRVORVGRFXPHQWRV VDOYRODIyUPXODR¿FLDO GHEHUiQYHQLUFRQORVYLVRVFRQVXODUHV\FRQODDXWHQWLFDFLyQ LACRUZ BERDEJO, Luis. Elementos del Derecho Civil IV, fascículo III, Derecho de Familia, Barcelona,
del Ministerio de Relaciones Exteriores de Costa Rica correspondientes. Bosch, 1982, página 674.

 7UDGXFFLyQ 2¿FLDO GH FDGD XQR GH ORV GRFXPHQWRV DQWHV LQGLFDGRV TXH YHQJDQ HQ LGLRPD GLVWLQWR DO PEREZ VARGAS, Victor. El nuevo derecho de Familia en Costa Rica6DQ-RVp(GLWRULDO8QLYHUVLGDGGH
español. &RVWD5LFD(GLF

Conclusiones SAENZ CARBONELL, Jorge. Los sistemas normativos en la Historia de Costa Rica, Santo Domingo de
+HUHGLD(GLFLRQHV&KLFR(GLF
3DUDFRQFOXLU\VLJXLHQGRORVSRVWXODGRVGHO3DWURQDWR1DFLRQDOGHOD,QIDQFLDVHSRGUtDFRQFOXLUFRPRHOORV
señalan que la adopción internacional se plantea como otra posibilidad que amplia el horizonte de las esperanzas de TREJOS SALAS, Gerardo, Derecho de Familia Costarricense7RPR,,6DQ-RVp(GLWRULDO-XULFHQWUR
las personas menores de edad de no tener que quedar institucionalizados al no contar con una familia nacional, por lo Edic. 1999.
que se considera como la mejor alternativa de protección para estos niños, niñas y adolescentes, a través de la cual se
podrá garantizar su derecho a contar con una familia que les provea de todas las condiciones para su desarrollo normal e Fuentes Normativas
integral y que, principalmente les dote del amor que ellos necesita. Sin embargo, es esencial que los Estados se aseguren
Código de la Niñez y la Adolescencia, Concordado y con índice Alfabético, Convención sobre Derechos
de que las adopciones internacionales se realicen respetando los derechos de los niños, niñas y adolescentes.
del Niño Concordado y con índice temático6DQ-RVp(GLWRULDO-XULWH[WR(GLF

Código General del Estado de Costa RicaHPLWLGRHOGHMXOLRGH6DQ-RVp,PSUHQWDGHO(VWDGR


HG

Constitución Política de la República de Costa Rica6DQ-RVp,PSUHQWD1DFLRQDOVQH

 
REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR REVISTA COSTARRICENSE DE POLÍTICA EXTERIOR
ARTÍCULOS ARTÍCULOS

Sitios de Internet LA COMISION DE DERECHO INTERNACIONAL, SU OBRA Y


SU IMPORTANCIA
CARDENAS MIRANDA, Elva Leonor. La adopción internacional http://www.bibliojuridica.org/
libros/1/145/4.pdf, consultado el 10 de febrero de 2009. Dr. Bernd H. Niehaus Q.1
Introducción:

Convención sobre la protección de menores y la cooperación en materia de adopción internacional, ³1RVRWURVORVSXHEORVGHODV1DFLRQHV8QLGDVUHVXHOWRVDSUHVHUYDUDODVJHQHUDFLRQHVYHQLGHUDVGHOÀDJHORGH


(Convención de La Haya de 1993) en KWWSZZZDFQXURUJELEOLRWHFDSGISGI consultada el 8 de ODJXHUUDDUHD¿UPDUODIpHQORVGHUHFKRVIXQGDPHQWDOHVDFUHDUFRQGLFLRQHVEDMRODVFXDOHVSXHGDQPDQWHQHUVHOD
febrero de 2009. justicia y el respeto a las obligaciones . . . a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto
PiVDPSOLRGHODOLEHUWDG´&RQHVWDVSDODEUDVVHLQLFLDOD&DUWDGHODV1DFLRQHV8QLGDVVXVFULWDHQ6DQ)UDQFLVFR
Patronato Nacional de la Infancia*XtDSDUDODDGRSFLyQLQWHUQDFLRQDOKWWSZZZSDQLJRFUDGRSFLRQHV HQDO¿QDOL]DUOD6HJXQGD*XHUUD0XQGLDO\TXHFRQOOHYDODH[SUHVLyQGHODYROXQWDGGHOD6RFLHGDG,QWHUQDFLRQDO
php consultado el 8 de febrero de 2009. de aunar esfuerzos en favor de la paz y la seguridad internacionales, así como en la búsqueda del progreso económico
y social de todos los pueblos.

Sentencias Semejantes propósitos nunca podrían ser logrados si no es sobre la base del respeto a la ley, del acatamiento del
Derecho Internacional, lógico y necesario marco de acción de las relaciones de los Estados entre sí.
6HQWHQFLDGLFWDGDHQHO([S&2PHGLDQWH5HV1žGHOD6DOD&RQVWLWXFLRQDOGH
Conscientes de ello, apenas tres años después de promulgada la Carta, en el año de 1948, nace, en el seno
OD&RUWH6XSUHPD'H-XVWLFLD6DQ-RVpDODVTXLQFHKRUDV\WUHFHPLQXWRVGHOWUHLQWDGHMXOLRGHOGRVPLORFKR
GHODQXHYD2UJDQL]DFLyQOD&RPLVLyQGH'HUHFKR,QWHUQDFLRQDOFRQHOREMHWRFODUDPHQWHGH¿QLGRGHLPSXOVDU\GH
SURPRYHUHOGHVDUUROORSURJUHVLYRGHO'HUHFKR,QWHUQDFLRQDO\VXFRGL¿FDFLyQ
6HQWHQFLDGLFWDGDHQHO([SHGLHQWH)$PHGLDQWHYRWR1RGHO7ULEXQDOGH)DPLOLDGH
6DQ-RVpDODVQXHYHKRUDVFXDUHQWDPLQXWRVGHOGLHFLVpLVGHQRYLHPEUHGHOGRVPLOFLQFR
En la historia de las Relaciones Internacionales y del Derecho Internacional, ésta no es una idea nueva. Ya
KDFLD¿QDOHVGHOVLJOR;9,,,-HUHP\%HQWKDPKDEtDFRQFHELGRXQDFRGL¿FDFLyQGHO'HUHFKR,QWHUQDFLRQDOLGHDTXH
en los últimos dos siglos pasados fué retomada y tratada de desarrollar por múltiples juristas, inspirada sobre todo en
el convencimiento de que un Derecho Internacional escrito conllevaría mayor claridad, certeza y seguridad para la
comunidad internacional.

&RQ RFDVLyQ GHO &RQJUHVR GH 9LHQD   QDFHQ \D DOJXQRV DFXHUGRV LQWHUQDFLRQDOHV FRQFUHWRV HQ
forma de Convenciones, en materia de régimen de ríos internacionales, abolición de la trata de esclavos y varios aspectos
referentes a las representaciones diplomáticas.

A partir de entonces se han concretado una gran diversidad de normas jurídicas internacionales sobre las más
diversas materias que, en gran parte, reponden a la voluntad y al esfuerzo de la comunidad internacional por impulsar,
SURPRYHU\GHVDUUROODUHO'HUHFKRGH*HQWHV

(QHOPDUFRGHOD6RFLHGDGGH1DFLRQHVGLFKDE~VTXHGDGHSURPRFLyQ\GHVDUUROORGHO'HUHFKR,QWHUQDFLRQDO
YDDWHQHUXQDHVSHFLDOLQWHQVLGDGHLPSRUWDQFLD(QHODxRGHSRUUHVROXFLyQGHOD6RFLHGDGGHODV1DFLRQHVVHFUHD
SRUSULPHUDYH]XQyUJDQRSHUPDQHQWHGHQRPLQDGR³&RPLWpGH([SHUWRV(QFDUJDGRGHOD&RGL¿FDFLyQ3URJUHVLYDGHO
Derecho Internacional”, al que se le encomienda sugerir una serie de temas que fuera conveniente y posible reglamentar,
mediante la creación de acuerdos internacionales, así como indagar el que fuera realizable coordinar con los distintos
JRELHUQRVFRQHVH¿Q

'RFWRUHQ'HUHFKR,QWHUQDFLRQDO(PEDMDGRUGH&RVWD5LFDHQ$OHPDQLD\PLHPEURGHOD&RPLVLyQGH'HUHFKR,QWHUQDFLRQDOGHODV1188
0LQLVWURGH5HODFLRQHV([WHULRUHV\&XOWRGH&RVWD5LFDGHD\GHD

 

También podría gustarte