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Encabezado

Resultando

Considerando:

I- Hechos probados

En este proceso se tienen como probados los siguientes hechos y por los motivos que acá se

analizara a continuación.

1) El hecho primero expone:

“Que el Sr. Juan Diego Cerdas Rodríguez, funge como profesor del CTPR

San Carlos, en tanto que la Sr Marcela Céspedes Ramírez, es la madre de la

Señorita Karla Castro Céspedes, joven que cursa noveno año en la

institución y además es alumna del aquí investigado Cerdas Rodríguez.”

Este hecho se tiene por probado en virtud de que el procedimentado lo tiene como cierto

al momento de impugnar el acto de inicio a este procedimiento (ver impugnación del

Profesor Juan Diego Cerdas, folio xxxxxx). El hecho primero no fue un punto debatido, o

que se discutiera o refutara en la audiencia, ni en ninguna etapa del procedimiento.

2) El hecho segundo se refiere a que:


“La Señora Marcela Céspedes, vive en las cercanías del Bar La Deportiva en

el barrio el Carmen de Ciudad Quesada, ubicado a 300 metros del CTPR San

Carlos.”

El procedimentado se refiere a este hecho, en el documento de la impugnación al acto

de inicio, como que este hecho no le consta, sin embargo esto se constata con la declaración

de la misma marcela céspedes, y su hija en la audiencia de pruebas, además se constata en

la investigación preliminar referido al órgano decisor sea el director general de personal de

este ministerio. Además este no fue un hecho controvertido, puesto que no fue refutado

tampoco por el investigado, por tanto este hecho se tiene por probado.

TERCERO: Que la señora Céspedes Ramírez refiere, que día 25 febrero del 2020, en

compañía de su hija, luego de realizar algunas compras en el supermercado la canasta

básica que queda en frente del bar la deportiva, observan al Profesor Juan Diego Cerdas,

salir del bar gritando “sos un hijo de puta”, en estado de aparente ebriedad,  y al salir a la

acera, en las afueras del bar, lo observa y escucha alegar con un hombre desconocido, para

luego mantener una pelea, en la cual golpea al hombre, y luego se marcha en su auto del

lugar, mientras el hombre de identidad que no trasciende, se marcha igualmente del sitio.

4) Hecho probado, el criterio del órgano director y la recomendación de sin lugar por

sanción menor.

II- Hechos No probados


No hay hechos no probados.

III- Por el Fondo

No se está imputando al investigado por el alcoholismo, sino por actos contrarios a la

moral, en este caso se alega que el imputado estaba en un bar restaurante y que no es un

lugar prohibido estar en tales establecimientos, si bien eso es cierto, también sabemos que

en el mismo se vende licores, y es un lugar donde personas arriban con la intención de

tomar licor, por tanto es predecible que este tipo de altercados podrían ocurrir, por esto

mismo el profesor juan diego cerdas, si gustaba ir a un lugar de esta índole debió haberlo

hecho en un bar restaurante que no estuviera tan cercano a su lugar de trabajo, siendo que el

bar de nombre la deportiva donde ocurrieron los eventos, está ubicado en el mismo barrio

donde se ubica el CTPR San Carlos, colegio donde labora el imputado, por tanto si bien no

es un lugar prohibido, tampoco es una iglesia, siendo que por ejemplo un “night club” no es

tampoco un lugar prohibido, sin embargo no seria aceptable que un profesor lo visitare a

vista de alumnos o demás comunidad educativa. Por tanto no es aceptable que un profesor

se meta a un bar ni aunque sea restaurante además, pues no es lo de restaurante lo que debe

valorarse acá para tratar de minimizar la valoración negativa del sitio, sino más bien el

hecho de ser un bar, en cuyo sentido no es un buen ejemplo para los estudiantes del entorno

ver a su profesor de ciencias estar dentro de este sitio.

Por otro lado se tiene que el investigado no se le está imputando que tenga un problema de

alcoholismo, sino los hechos imputados son en relación a palabras inapropiadas para un
docente que debe dar el ejemplo a la comunidad educativa en son de fomentar las buenas

costumbres y construir en sus estudiantes un comportamiento en pro de las buenas

costumbres, propiciando formar personas de bien, y de altos valores según los principios de

la educación, y según la ley general de educación que se cita en el fundamento legar del

traslado de cargos y ya ampliamente analizado. Sin embargo el investigado al impugnar y a

la hora de plantear su defensa se escuda en el hecho de haber tenido problemas de

alcoholismo, refiere que está en recuperación en el centro de alcohólicos anónimos, y

presenta evidencia que así lo prueban, siendo esto un hecho indiscutible, pero sin embargo

poco relevante para lo que interesa en relación a los hechos imputados el aquí

procedimentado, puesto que no se le esta acusando de llegar en estado de ebriedad al lugar

de trabajo, ni tampoco se le persigue por su problema de alcoholismo, no discuta que el

imputado sea o no, tenga o no problemas de esta naturaleza, sino que la imputación refiere

a un hecho único, el cual fue el día 25 de Febrero del 2020 en el bar la deportiva y su

comportamiento fuera del lugar, lo cual se le imputa esta fuera de la moral y las buenas

costumbres, según lo exigen las citas de derecho que refiere el acto de inicio en su

imputación de cargos. Por tanto el problema de alcoholismo del profesor cerdas previo a

este evento no tiene por qué ser considerado como una prueba de descargo de los hechos

que se le imputan, y no son relevantes.

Por otro lado, según algunas doctrinas, el profesor cerdas, pudo actuar distinto, ya que en

primera instancia, según la teoría de la previsibilidad, era fácilmente previsible que al

visitar un bar, sea este además restaurante o no, habrán personas tomando licores, y en

estado de ebriedad, por tanto es predecible que se pudiera tener este tipo de altercados,
previendo esto el profesor cerdas pudo visitar un bar restaurante si es que ese era su

intención, en un lugar más alejado de su lugar de trabajo para evitar este tipo de conductas

que pudieran constituirse en un mal ejemplo para los estudiantes de la institución donde

labora, y que viven en las cercanías del bar la deportiva, a como ocurrió, sin embargo a

pesar de que esto era fácilmente predecible, el profesor Cerdas Rodríguez, faltando a su

deber de una buena conducta, propicio que los hechos ocurrieran. Además el mismo

imputado alega en la impugnación del traslado de cargos que él estaba en el bar y terceras

personas empezaron a ofenderle y a sus compañeros, sin embargo el procedimentado en vez

de retirarse del lugar a sabiendas de que se encontraba en las inmediaciones del colegio

donde labora, se quedó en el sitio, desencadenándose los eventos que se le imputan.

En este punto es importante valorar que el articulo XXXXX determina para lo que nos

interesa que se considerara una falta a la moral lo tipificado en el código penal, siendo que

las conductas del señor cerdas se ajustan a varios artículos del código penal, los cuales se

indican en la imputación de cargos del acto de inicio, además en el fundamento legal del

mismo, puesto que el señor cerdas si grito “sos un hijo de puta”, y si fue participe de un

evento que de ninguna manera puede dejarse pasar por alto, puesto que definitivamente se

ajusta a conductas tipificadas en el Código Penal, como lo son las tipificadas en los

artículos 139, 388 (incisos 1) y 2) , 391 (inciso 1), 392 (incisos 1,3 y4), el 395 (incisos 1 y

3) y el articulo 145 del Código Penal.

Y haciendo un análisis de las conductas tipificas en estos artículos se tiene que las del

profesor cerdas encajan en cada uno de estos, no desde un punto de vista penal, pues esta
no es una sede penal, sino como conductas que al encajar son amorales según lo expone el

articulo xxxxxxx

Así tenemos que el articulo 139 sobre la riña expone que es el que “tomare parte en una

riña en la que intervinieren dos o más personas”, y eso fue precisamente lo que ocurrió

según se extrae de los testimonios de testigos y la propia versión del acusado. Además el

articulo 392 impone que, “Se impondrá de cinco a treinta días multa: 1) A quien se

presentare embriagado en un lugar público y causare escándalo, perturbare la tranquilidad

de las personas o pusiere en peligro la seguridad propia o ajena.” Esta conducta fue la que

tuvo el imputado de este procedimiento administrativo en cuanto pudiendo evitar este tipo

de situaciones las propicio, primero metiéndose en un bar, segundo uno que está

sumamente cerca del lugar de trabajo, y donde en los alrededores viven gran cantidad de

estudiantes de esta institución educativa, por tanto la conducta se encaja en lo estipulado en

este artículo en su inciso 3, expone que “3) A quien, en sitio público o lugar privado

expuesto a las miradas de los demás, profiriere palabras obscenas…”

Si bien el señor cerdas alega una legítima defensa y un ataque verbal previo por parte de

personas que se encontraban en este Bar restaurante, el mismo profirió palabras obscenas al

decir “sos un hijo de puta” y discutir con estas personas, pues era innecesario este tipo de

actitudes para constituir una legítima defensa, así que gritar “sos un hijo de puta” más bien

viene a fomentar más la discusión o como dicen “le echa más leña al fuego” y no puede

verse esta conducta como necesaria para la defensa de la que se viene alegando, siendo que

mas bien la conducta del denunciado, se encaja en el inciso 4 de este mismo artículo 392

pues este expone que: “4) A quien expresare a otro frases o proposiciones irrespetuosas, le

dirigiere ademanes groseros o mortificantes, o le asediare con impertinencias de hecho,


orales o escritas.” Siendo que al gritarle improperio el profesor Cerdas esta asediando a los

tipos, con frases irrespetuosas, constituyendo además un ejemplo fatal para la comunidad

educativa que lo observaba en ese momento, y todos los demás que se darían cuenta por

efecto de la noticia de boca en boca.

Por otro lado el código penal expone en su artículo 395 que e impondrá de cinco a treinta

días multa: “1) Al que, en cualquier forma, causare alboroto que perturbe la tranquilidad de

las personas.” Sabemos por las pruebas recabadas de las versiones de los testigos, que si

bien cerdas no fue quien inicio esta discusión y pelea, si tomo parte en ella y propicio que

los hechos terminaran en el desagradable ejemplo que termino dando, pues decidió como se

dijo ir específicamente a ese bar tan cercano al colegio donde labora, y además por no

evitar, e irse en el momento inicial de los eventos, sino decidió quedarse ahí, y sumarse a la

discusión y la riña acontecida, siendo parte del alboroto, y causando perturbación en la

comunidad donde labora.

Finalmente tenemos que la conducta de cerdas se adecúa además a las referidas en el

Artículo 145, el cual expone que “Será reprimido con diez a cincuenta días multa el que

ofendiere de palabra o de hecho en su dignidad o decoro, a una persona, sea en su

presencia, sea por medio de una comunicación dirigida a ella.” Como se ha venido

analizando era innecesario gritar improperios a estas personas, siendo que al señor cerdas se

le puede exigir otra conducta, pues debió irse del lugar apenas se percató de los problemas

que se veían venir desde que llego al sitio de los eventos.

Así las cosas si aplicamos la doctrina de la imputación objetiva al caso, tenemos que la

conducta del profesor cerdas ex ante, tenía la posibilidad potencial en gran medida de
provocar el resultado ex post, por cuanto cerdas pudo evitar ese lugar a cambio de uno más

lejano o retirado, y además siendo que pudo luego evitar el evento retirándose del sitio

desde el primer momento, siendo que era innecesario para la defensa que alega gritar

improperios a las personas involucradas cuya identidad no trasciende.

En relación al problema de alcoholismo del imputado, eso no está en discusión, pues si bien

el señor cerdas podría ser alcohólico, a sabiendas, podría consumir el licor en su casa, o en

un lugar menos inapropiado, puesto que si deseaba tomar licor, no era un requisito sine e

qua non, visitar ese bar tan cercano al lugar de trabajo imprudentemente, es por tanto que

no se aprecia como un hecho relevante para descartar los eventos ocurridos, el problema

alcohólico del imputado, puesto que esta causa no se le sigue directamente por tomar licor,

sino por los gritos inapropiados, y la pelea que mantuvo en el bar La Deportiva, además por

estar simplemente en ese lugar donde se vende licor, y quedando expuesto a la mirada de

toda la comunidad educativa del colegio donde labora como su profesor de ciencias

exactas.

también es importante explicar que el análisis de la conducta a la luz del código penal no

tiene el fin de asumir una competencia penal en este caso, sino de concluir sin ninguna

duda razonable que las conductas que se le achacan al profesor Cerdas al constituir tipos

penales, deben ser entonces calificadas como faltas graves según el artículo 9 del

reglamento al estatuto del servicio civil el cual expone en lo que interesa que, “Entre las

prohibiciones para los servidores docentes que prescribe el artículo 58 del Estatuto, están

comprendidas: e) Incurrir en actos que desprestigien su profesión…” y, el mismo artículo

más adelante define esto como que “se considerarán actos que desprestigian o menoscaban
la dignidad de la profesión docente o contrarios a la moral pública, todos aquellos que

cometan los educadores y que estén comprendidos dentro de las faltas o delitos

contemplados en los Códigos Penal y de Policía. Por tanto dado que las conductas del

imputado se ajustan a los tipo penales ya supra analizados, constituyen entonces una de las

prohibiciones según el artículo 58 del estatuto del servicio civil, además el artículo 11 del

mismo reglamento al estatuto expone claramente que “se consideran faltas graves de los

servidores docentes: … que sus actos riñan con la moral pública y las buenas costumbres.”

Por todo lo anterior se concluye que la conducta del profesor cerdas constituye una falta

grave al reglamento y el estatuto del servicio civil.

Siendo así las cosas este órgano decisor, se aparta de la recomendación del órgano

director sobre minimización de la sanción que recomienda, basado en que según los hechos

imputados y probados, la sanción que procede se estipula en el artículo 43, que dice en lo

que nos interesa que:

“Los servidores públicos sólo podrán ser removidos de sus puestos si

incurrieren en las causales que determina el artículo 81 del Código de

Trabajo y 41, inciso d), de esta ley, o en actos que impliquen infracción

grave del presente Estatuto, de sus reglamentos.”

Como los hechos probados constituyen una falta grave al estatuto del servicio civil y su

reglamento según se analizó supra, entonces la sanción que procede y se impone al

procedimentado es la del despido sin responsabilidad patronal.

Por tanto
Con base en los hechos expuestos, y los considerando supra citados y citas de derecho, se

tienen por demostrado la falta grave del servidor Cerdas Rodríguez, consecuentemente se le

impone la sanción del despido sin responsabilidad patronal, a partir de la firmeza de esta

resolución se esto en 10 días hábiles.

Se indica además que tiene derecho a impugnar esta resolución según el art 69 en un

término de días.

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