Página 1

Discurso Reflexivo Especial N° 101

Reflexiones Post Pandemia Global

Por Reynaldo Charres Vargas
(Rey Charré)

Señores y Señoras:

Este discurso los ofrezco a las almas que moran en el infinito celestial tras
haber sufrido el embate de un virus asesino importado de Europa y Asia, muy
bien planificado en el oscurantismo y el secretismo de unos humanos en
contra de otros humanos. Aquí expreso mis opiniones sobre lo que ha
ocurrido en mi país Perú, nación dependiente y sumisa, que nunca supo
valorar ni defender lo que posee: las particularidades de su genética y la
sabiduría popular ancestral en salud preventiva.

Un 15 de Marzo del 2020 el gobierno declaraba una Cuarentena fáctica y

obligatoria en todo el país por la llegada de un virus foráneo, sin servicios de
atención sanitaria en el primer nivel, con cierre de pequeños negocios más
no de farmacias, bancos, lubricentros ni de las grandes industrias. Como
nunca el encierro domiciliario duró más de seis meses, un tiempo de parálisis
y martirio que el gobernante de turno aprovechaba para anunciar
diariamente sólo malas noticias y prohibiciones por el impacto del virus
foráneo, en obediencia a la OMS. Ese hecho ya demostraba que algo
perverso y oscuro estaba sucediendo por una causa importada y ajena. Las
altas autoridades decían estamos en guerra contra un enemigo invisible y
daban anuncios calamitosos de muertes y más muertes y los medios
propagaban noticias de dolor y fatalidad. Todos esos mensajes causaron un
impacto emocional doloroso con cuadros severos de angustia y
2

desesperación.
Página
Otra hubiera sido la respuesta de la población peruana, si el gobernante
trasmitía calma y ponía en valor las particularidades del Perú, que no es una
nación europea, africana ni asiática. Perú es una geografía andina con gente
valiosa, inmensas áreas rurales y campos libres, distinta alimentación,
además aquí nunca hubo pandemias ni pestes. En los registros históricos de
la salud humana urbana relacionadas a enfermedades virulentas propias o
estacionarias están el dengue, la influenza, u otras originadas por
desnutrición y anemia infantil por el consumo de aguas no potables y
contaminadas con residuos mineros.

En 12 meses de padecimientos con derroche del erario en publicidad

aterradora, banalidades, corrupción y compras inadecuadas, nunca se mejoró
la prevención ni las atenciones sanitarias tampoco el tratamiento del virus. Y
viendo tales realidades, puedo afirmar que se fracasó en la contención de
este penoso episodio donde hubo una alianza sucia para causar muertes,
depresión masiva y parálisis de la economía y las actividades cotidianas. El
rol criminal de la mediática globalizada, que inundó de publicidad al Covid
como una mercancía fue cómplice del fracaso. De esta manera la imposición
de la OMS al gobierno nacional contó con la ayuda de las cadenas
internacionales incluidas las redes sociales y algunos profesionales
inhumanos de la salud pública. Todos ellos agudizaron una crisis sanitaria en
mi país. Era terrible el martirio diario y repetitivo por millones de veces las
palabras virus mortal, muy contagioso y sin cura, las que finalmente
generaron terror, miedo, pánico e incertidumbre generalizada.

De otra parte, los autores de esta pandemia, desde el inicio anunciaron que
habrá una vacuna como la solución única al problema. Esto me llevó a
entender que se trataba de una obra cruel antihumana muy bien planificada,
pues ya se habían fabricado con anticipación un conjunto de equipos,
implementos e insumos de uso directo para la pandemia. Sin duda, era una
operación estratégica de negocios económicos. Hoy pasado un año (2020),
podemos comprobar del cómo los gobiernos pugnan por comprar vacunas de
3

una decena de laboratorios y centros de investigación que con una velocidad

Página
asombrosa ya fabrican y venden vacunas a las naciones del planeta, en cuyo
negocio ahora circulan miles de billones de dólares US.

Cierto, el negocio salió perfecto, y este hecho quedará grabado en la historia

humana de comienzos del siglo XXI, como una demostración de crueldad y
maldición por la vida humana y la convivencia saludable. Una demostración
de degeneración y asesinato sin usar armas convencionales de guerra ni de
bombardeos que ya han causado la muerte de más de dos millones de ser
humanos en su mayoría ancianos, según la OMS.

El futuro es incierto, es posible que la codicia económica y el afán por el

dominio político global sigan generando zozobra porque la pugna
hegemónica científica, tecnológica, política y económica es tan fuerte entre
los ricos; además cuando la ciencia, la técnica y el dinero se mezclan pueden
ocurrir más episodios macabros y destructivos de la paz, la convivencia y la
sanidad en el planeta.

Se sabe que los laboratorios científicos, están afanados por la manipulación

micro-genética o micro-orgánica, y no sabemos a dónde llegarán en el
futuro, porque la investigación de la vida humana se ha vuelto un tema
fascinante. Pero, si tal interés se siga manejando con secretismo y
oscurantismo, es posible que vengan mayores amenazas para la humanidad,
lo cual hace impensable sus funestas consecuencias. Quizás más pandemias y
enfermedades letales, pugnas, invasiones y guerras parecen nunca acabar
entre los humanos ambiciosos de poder y dominio.

Qué duda cabe, aquel afán siniestro y catastrófico de la manipulación

sanitaria impulsada por fabricantes unida a la manipulación mediática, han
originado el asesinato de millones de humanos. Ahora queda claro, que la
exagerada publicidad con apología a la enfermedad y a la muerte, atacó
gravemente a la sensibilidad, emociones y sentimientos de las personas
causando zozobra, miedo y pánico colectivo especialmente en personas de
edad avanzada o con enfermedades preexistentes. Las grandes cadenas y
4

redes mundiales de la información y la comunicación han cumplido esa

Página
aterradora misión destructiva en las frágiles vidas de niños, jóvenes, adultos y
ancianos.

Covid-19 y los anteriores virus, son sólo una muestra de los planes
comerciales más lucrativos hasta hoy conocidos, allí están la intensa
producción y venta de cientos de equipos, implementos, medicamentos,
vacunas y aditivos. Nadie podrá negar que el virus fue una fuente de
enriquecimiento para los negociantes de la salud humana, los mismos que
ahora han asegurado una fortuna por muchos años hacia adelante.

La vida humana por naturaleza es frágil y vulnerable tanto orgánica como

psicológicamente y esto explica del por qué existe un temor natural por la
enfermedad y la muerte. Este factor es muy bien aprovechado por los
negociantes de la medicina humana, y como lo dicen algunos investigadores
honestos de la ciencia y la técnica médica como Peter Gotzsche, las grandes
farmacéuticas han corrompido el sistema y la ciencia médica, pues ahora se
han convertido en las impulsoras de enfermedades atadas al consumo de
medicamentos. De ese modo, la ciencia y la tecnología médica ahora son un
gran negocio, allí están y a la vista de todos, los millones de establecimientos
farmacéuticos y clínicas privadas que ha proliferado alrededor del mundo. Y
el 90% de estudiantes en medicina se forman para ser vendedores de
medicamentos a través de sus recetas.

Desde el inicio de la vida humana, nuestra especie al igual que los animales
somos proclives a enfermedades congénitas y otras adquiridas por diversas
causas o existentes en el ambiente donde se vive, que desde luego necesitan
de atención y cura oportuna. Por eso nuestros ancestros supieron curar sus
cuadros críticos usando sabiduría instintiva y no necesitaron de hospitales ni
médicos. Por ejemplo, los partos eran en casa y no había problemas porque
la mujer tiene capacidad y dones innatos para salir airosa del bello episodio
del alumbramiento.

Pasado los siglos, y en tiempos de modernidad donde se impone el sistema

5

industrial y comercial consumista y materialista por dinero como el principal

Página

modo de vida, se compra y se vende todo y los seres humanos son ahora
monigotes sumisos con débil razonamiento y sin fuerzas para reaccionar, por
eso caemos fácilmente a un mundo de peligros, pesadillas, horrores y
tristezas. En tal lógica, la generación de los enemigos de la vida saludable
así como los serviles de la ciencia médica lucrativa va en crecimiento, y las
universidades conceden grados y títulos para administrar las enfermedades
antes que para la prevención o salvación oportuna. Mujeres como hombres
van perdiendo el valor de las dimensiones humanas y humanistas, es decir la
vida y la convivencia saludable con equilibrio y armonía.

Peruanos y peruanos, tenemos que reconocer que somos seres humanos con
particularidades porque nacemos y vivimos en un territorio andino, no
somos Asía, Europa, África ni EE.UU, nuestra geografía es única, por eso es
importante marcar la diferencia. El valorar nuestras fortalezas nos ayudarán
para salir airoso de cualquier episodio agresivo y es urgente ir formando una
mente superior al actual, y tendremos fuerzas internas poderosas para
conocer nuestro organismo y así prevenir o vencer cualquier intromisión e
infiltración orientada a crear enfermedades, rupturas, miedos, pánico, dolor
e incertidumbre, tal como ha ocurrido con la pandemia reciente.

Lamentablemente, estamos atados a un mundo cruel inhumano,

antihumano de extremo mercantilismo y consumismo donde lo artificial
destruye lo natural de la vida. Hoy, los productos artificiales químicamente
alterados son consumidos a diario sin saber que tarde o temprano tendrán
efectos drásticos en el organismo humano, pues se agravarán las patologías
volviéndose episodios irreversibles.

Sin embargo, también debo decir que sí hay ciencia y técnica médica
honesta y no corrupta, es decir aquella que ayuda a prevenir y curar
enfermedades con sinceridad; en cambio los malévolos nos dicen que
somos enfermos y necesitamos de ellos. Por ejemplo, los profesionales
honestos de la salud nos dirán: NO MÁS CONSUMO DE ALIMENTOS
ALTERADOS QUÍMICAMENTE, NO MÁS NUTRIENTES SUSTITUTOS, NO MÁS
6

ANTIBIÓTICOS.
Página
 Organizar campañas masivas de educación sanitaria pública, dotación de
agua potable para el 35% de habitantes que no la tienen, incentivar el
consumo de alimentos naturales, las buenas prácticas de higiene, impulsar
la sabiduría sanitaria ancestral, la curación emocional, el entretenimiento
cultural y deportivo, y tantos otros estímulos saludables que fortifican el
sistema inmunológico, tienen que ser prioridades en la vida de unos y otros.

Nunca olvidemos que el consumo, valoración y preferencia por los medios

artificiales colisionan y genera desprecio a la vida natural, ellos nos ponen al
borde de las fatalidades ya que subvaloran la alimentación saludable,
además al poner en el mercado productos alterados químicamente con
ayuda publicitaria se cometen delitos que nadie repara ni sanciona. En
cualquier tienda o bodega de barrio, ahora se ofrecen productos artificiales
de consumo directo. Y mientras existan ésas cadenas de negocios
alimentarios venenosos, la vida humana estará en peligro y riesgo
constante.

La pandemia Covid en el escenario global supo diseminar el miedo a la

muerte por sugestión y debilitamiento de la psicología humana y al debilitar
sus emociones, sentimientos y conocimientos se apoderó la infección hasta
matarlo. La sensibilidad humana a través del cerebro, se vio forzada a
asimilar los mensajes y contenidos de la fatalidad y el dolor, gracias al sucio
montaje de un espectáculo audiovisual sin conmiseración, con datos e
imágenes degradantes que no respetaron la privacidad ni la dignidad
humana del dolor.

En mi país, la sucia alianza entre gobernantes, científicos, médicos,

periodistas y otros asalariados, así como farmacias, clínicas, y fabricantes de
insumos nunca fueron solidarios ni empáticos con los enfermos ni sus
familiares, al contario se sentían felices al anunciar más muertes, olas,
variantes pues así hicieron su festín. Ellos creyeron tener vida eterna. Pero,
algún día ellos también morirán quizás con la misma peste o el virus que
defendieron, por tanto es repugnante que existan hombres y mujeres
7
Página

empecinados en aprovechar la desesperación humana.

Está claro, que las secuelas del terror durarán por mucho tiempo en la
conciencia de los más vulnerables y frágiles de la sociedad. El daño emocional
se ha enquistado en el cerebro, por causa de un virus cuyo nombre ya no
quiero repetir, porque se ha repetido miles de millones de veces alrededor
del mundo.

Perú, Marzo 2021

Muchas Gracias

Reynaldo Charres Vargas, autor peruano

https://reynaldocharresvargas.blogspot.com

Emal: charres.rey@gmail.com

NOTA DE PUBLICACIÓN

Como todos los discursos escritos por el autor, son documentos de libre
circulación, no tienen costo y son editados en la página web siguiente:

https://publicacionesrchv.blogspot.com

Se autoriza su reproducción y traducción, citando la fuente y al autor.

8
Página