SCARR Y WEINBERG 1983

THE TRANSRACIAL ADOPTION STUDY

Este estudio muestra un patrón un tanto contradictorio de resultados: los niños

adoptados demuestran una mejora considerable de las puntuaciones de CI, pero la
correlación de su CI es mayor con los padres biológicos, no con los padres adoptivos. Esta
controversia se resuelve en la idea de influencia aditiva de factores genéticos y
ambientales.

Objetivo:
Investigar la maleabilidad ambiental de la inteligencia.

Participantes:
Este estudio analizó 101 familias adoptivas que tenían hijos biológicos y adoptados.
Algunos de los niños adoptados eran negros y otros blancos. Algunos niños fueron
adoptados en los primeros 12 meses de vida y algunos fueron adoptados más tarde. El
lugar de estudio en Minnesota.
Debe entenderse que ser negro en el momento en que se realizó el estudio en Minnesota
significaba, en promedio, tener un nivel socioeconómico más pobre y tener menos
educación.

Método:
Estudio de adopción

Procedimiento:
Todos los niños fueron evaluados en inteligencia (CI) y prueba de rendimiento escolar. Se
calcularon correlaciones entre el coeficiente intelectual de los niños y sus padres (tanto
adoptivos como biológicos).

Resultados:
La tabla muestra los resultados de comparar el coeficiente intelectual en varios
subgrupos.
Como se puede ver en la tabla, los niños negros colocados en familias blancas vieron un
aumento sustancial en su coeficiente intelectual; si fueron adoptados en el primer año de
vida, alcanzaron el mismo nivel que los niños blancos adoptados (aunque habían
experimentado un año de privación en el orfanato).

La siguiente tabla muestra los resultados de la investigación correlacional.

Conclusión:
Los resultados del estudio pueden parecer algo contradictorios al principio. Por un lado,
hubo una mejora considerable en el coeficiente intelectual de los niños adoptados. Por
otro lado, la correlación fue mayor con el CI de los padres biológicos, no con los padres
adoptivos.

Estos resultados demuestran la idea de la influencia aditiva de la genética y el medio

ambiente en el desarrollo del coeficiente intelectual. La influencia aditiva sugiere que los
factores ambientales pueden influir en el CI, pero la medida en que un individuo
responderá a estas influencias favorables depende de factores genéticos.