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El Enigma Politico-Martinotti
El Enigma Politico-Martinotti
LAS ESTRUCTURAS
LA COMUNIDAD
EL ESTADO
LAS INSTITUCIONES
A) LA COMUNIDAD
Concepto y caracteres
A diferencia de la vida animal y vegetal, la vida human esta signada por el principio vital
(ALMA) sensible e inteligente. Luego por la responsabilidad moral y jurídica que la
sobreeleva al máximo rango de la Creación. Además mantiene un orden jerárquico que le
da una continuación histórica.
Superando las fuerzas centrífugas de dispersión, y los embates de otras comunidades, o sea
las fuerzas centrípetas del exterior. Desaparece cuando dichas fuerzas, internas o externas,
vencen la capacidad centrípeta del aglutinamiento, sea por subdivisión en varias
comunidades independientes, o por dominación de una Comunidad conquistadora.
TIPOS DE COMUNIDAD
Las Comunidades rurales o Feudos: se dieron luego de la caída del Imperio Romano de
occidente. Constituyeron recintos medianamente extensos y escasamente poblados, con una
economía rudimentaria y fuertes lazos de solidaridad religiosa.
EL ESTADO
El termino Estado (lo stato) usado hasta el medioevo, ha identificado desde el siglo 15 al la
organización política fundamental de la sociedad. Ello no obstante subsiste por parte de
los juristas la versión impuesta por el iluminismo y la Revolución, es decir : La concepción
del Estado como la sociedad política o jurídicamente organizada.
Se entiende por estado otra cosa, inclusive algunos lemas conocidos el de achicar el estado
para agrandar la sociedad, carecen de sentido si uno y otra abarcan el mismo contenido.
ORGANO DE SÍNTESIS
La síntesis de las fuerzas es por lo tanto comunitaria, pero no se logra sino en la medida que
el estado posee, en cuanto grupo autónomo especializado, la capacidad, poderío y voluntad
de desempeñar sus funciones.
ORGANO DE CONCIENCIA
Para poder realizar la síntesis de la fuerzas, el Estado debe en primer lugar conocerlas.
Conocer la existencia, la naturaleza, las necesidades y las relaciones de los grupos básicos y
las comunidades intermedias. Un conjunto de conocimientos fragmentarios no le permitiría
desempeñar el papel de unificador.
Pero este conocimiento no es del todo satisfactorio, la comunidad crece en un doble medio
inferior y exterior. Esta condicionada en su desarrollo por la geografía. El estado capta
funcionalmente el conjunto de los datos de la evolución comunitaria.
El organismo comunitario tiene que dirigirse en el sentido de su afirmación, o sea,
intervenir en el proceso de los acontecimientos por una elección entre el progreso y lo
decadencia, entre la vida y la muerte.
El futuro no es sino proyección prevista del pasado a través de un presente escurridizo. Para
que el cuerpo social dure, es indispensable pues, que el estado capte su evolución en su
línea de fuerza vital, esto es, que encarne su intención histórica.
ORGANO DE MANDO
Para todo lo anterior el estado debe mandar, ejerciendo así el poder organismico. Su
existencia, su estructura, su dinamismo y hasta sus demás actividades mencionadas
proceden de la función de mando.
El Estado pues no manda a la comunidad, como a veces se dice, sino en nombre de la
Comunidad. Por un lado tiene por naturaleza autoridad sobre el conjunto de los grupos y
federaciones que constituyen el cuerpo social. Por otro lado, es el funcionario de la
Comunidad, a la cual esta sometido por definición y sin la cual su poder se esfumaría,
puesto que todo poder supone una fuerza pero también un punto de aplicación. No hay
mando sin alguien a quién mandar, y el Estado solo manda a los grupos federados en su
carácter de órgano comunitario. Es preciso que dicho mando este orientado hacia la
máxima afirmación de la Comunidad.
La palabra Estado tiene en efecto dos sentidos distintos, por un lado significa Comunidad
políticamente organizada. Es esta la acepción que le dan por lo general los juristas, y
también muchos sociólogos más o menos influidos por el hegelianismo. Por otro lado se
llama Estado, como lo hemos hecho, al órgano de síntesis, conciencia y mando de la
comunidad.
Hoy se llega a no distinguir muy bien el Estado-Comunidad del Estado-órgano
comunitario. Muchas de las críticas que se han formulado del totalitarismo fascista
proceden de esa confusión.
La palabra Estado en su acepción de Comunidad, por definición, posee un orden político.
No tenemos otro termino que Estado para designar un órgano bien diferenciado en su ser y
bien definido en sus funciones. Es lo que diferencia de los otros grupos que forman la
comunidad. El ORDEN comunitario, nace del mando del Estado.
En el estado de caos social-la alta edad media- el orden nace del mando y no el mando del
orden.
FORMAS DE ESTADO.
El tema se estudia generalmente como formas de gobierno. Es una confusión mucho más
burda aun que la de Estado-Comunidad. Uno es la institución política suprema, y otro es
uno de sus órganos de acción y decisión.
Así serán MONÁRQUICOS (La Francia de Luis XIV) los regímenes que mandan en
nombre de uno, ARISTOCRATICOS (La generación del 80) los que dirigen en nombre de
pocos y DEMOCRÁTICOS (La Argentina de Perón) los que lo hacen en nombre de las
mayorías.
Se denominan AUTOCRÁTICOS (Casi todos los de hoy) los estados que reservan
exclusivamente a los magistrados públicos las decisiones administrativas, legislativas o
jurisdiccionales. Es el caso de la mayoría de los regímenes incluido el nuestro. Son
HETEROCRATICOS (Suiza) aquellos donde ciertas funciones decisorias se remiten a los
dirigidos. Es el caso de países como Suiza que han instrumentado referéndum, plebiscito,
recall o los juicios por jurados populares (Estados Unidos).
Son Aristocráticos los sistemas que restringen a la mayoría el acceso a las funciones
publicas superiores, mediante criterios de selección determinados por el nacimiento, la raza,
la religión o recursos económicos. Son democráticos los estados que reducen al mínimo
dichas restricciones, aunque no desaparezcan totalmente (mínimo de edad para votar o
requisitos especiales).
La Iglesia es también una sociedad completa o perfectas, solo que esta ordenada a la
salvación sobrenatural y no al bien común publico. Las relaciones entre el Estado y la
Iglesia han adoptado a través el tiempo un gran diversidad de sistemas que van desde el
Teocrático donde se confundían ambos papeles y sus magistraturas, hasta el régimen
SACRAL del medioevo, en el que el papado ejercía supremacía sobre el Imperio. En USA
han adoptado la libertad de cultos. Ese laicismo incubado desde la Primera Republica
francesa fue degenerando durante el siglo 19 en un ateismo militante dedicado a combatirla.
De un modo oficial es la postura que adoptaron las diversas versiones revolucionarias del
marxismo a partir del asalto a la dinastía rusa de los Romanov en 1917.
LA CONSTITUCION DEL ESTADO
CONSTITUCIONES:
Real: más allá del pedazo de papel, la demostración de la restructuración de los órganos
comunitarios.
Normativa: la expresión jurídica de la organización comunitaria
LAS INSTITUCIONES
Toda organización, sea o no política, indica una idea fuente y un principio de organización
estructural. Solo constituyen el aspecto técnico de un régimen. Nos remitimos a la
naturaleza de las instituciones fundamentales del Estado: Gobierno, Parlamento y
Administración Pública, sin perjuicio de aclarar el rendimiento científico de una mayor
desagregación en las demás subdivisiones corrientes de la estructura publica: ministerios,
entes descentralizados y autárquicos.
EL GOBIERNO
Formas de Gobierno:
Hay dos formas que vienen del Derecho Constitucional, referidas al gobierno de IURE o de
FACTO. Los primeros se dan conforme a las leyes, los segundos bajo formas irregulares.
Este es otro método de justificación, tal como lo de la Constitución del Estado. También es
un método de objeción, dando preferencia siempre a los de IURE. Este es un distingo
jurídico, no político.
Demostrativamente, todos los gobiernos son de FACTO –de HECHO- y hay muchos que
son también de derecho. No existen gobiernos de iure que no sean de facto; a no ser que
hablemos de un gobierno en el exilio (como el polaco durante la Segunda Guerra Mundial)
De todas maneras acercamos una clasificación política de las formas de Gobierno (que es
un elemento del Estado)
PARLAMENTO Y LA JUSTICIA
Recién a partir de las teorías de John Locke, y sobre todo al barón de Montequieu en el
siglo 18, promotores del famoso mito de la división de poderes, se concibió a los cuerpos
deliberativos como legislaturas.
Los parlamentos han conservado y reforzado el papel de contralor del gobierno, y de caja
de resonancia de la opinión pública, por lo cual mas cabe referirse a un cambio parcial de
funciones que a una crisis institucional, con las salvedades que merece cada regimenes
político en particular.
LA ADMINISTRACIÓN.
La acción del Gobierno, y lo mismo del Parlamento o de la Justicia, solo es eficaz cuando
se resuelve en actos. De ahí el carácter indispensable de la administración publica. Por ella
las autoridades políticas son informadas, sus ordenes son transmitidas y eventualmente
impuestas a sectores e individuos a quienes están dirigidos.
Modulo II
LA DINAMICA
A) EL PODER PÚBLICO
Se propone definir el poder en general como la capacidad intrínseca de todo ente para
alcanzar su fin. Pero lo nuestro se centra en el poder publico, para ello acudiremos al
sistema clásico de Bertrand de Jouvenel basado en la antitesis entre protestas y autoritas.
PODER Y AUTORIDAD
Decíamos que poder indica potencia, posibilidad de acción. El poder humano constituye el
margen de las disponibilidades de la especie para modificar el medio (Posibilismo
humano), conforme a sus necesidades de plenitud. El poder sobre los demás constituye la
faz social de esta potencia o aptitud y responde a la desigualdad existencial entre los
humanos. El mando es la capacidad de obtener obediencia, ningún grupo puede articularse
y mantenerse unido sin un factor de dirección que oriente su actividad. El poder político es
una potencia, la más eminente o suprema que subordina a los demás poderes sociales de
carácter sectorial. (Carro)
La obediencia es tan natural y necesaria como el mando, pero este es causa de aquélla y la
obediencia solo condición de la eficacia de mando. El poder político no se agota en la
facultad de emitir órdenes, sino que además esta comprometido en la posibilidad- libre pero
forzada de hacerlas cumplir.
Además el poder crece a medida que los recursos éticos se debilitan. No debe descuidarse
el factor complementario que la fuerza y la autoridad poseen como componentes del poder.
SOBERANIA Y LEGITIMIDAD
Jean Bodin acuño el vocablo soberanía en el siglo16 como adjetivación de la función del
monarca o soberano., por oposición al antiguo señorío. La soberanía designa, no ya una
potestad, sino una cualidad, cierta forma o grado de poder. La soberanía es el carácter
supremo de un poder, en el sentido que no admite otro por encima suyo ni en concurrencia
con el.
Una de las nota de la soberanía es la SUPREMACÍA endógena del poder publico sobre el
resto de los poderíos sociales, condición indispensable de la unidad colectiva. Esto es lo
que los clásicos llamaban autarquía.
Los límites operacionales de la soberanía son pues una cuestión de hecho, cuyos casos
marginales consisten en la disolución interna o en la ocupación externa por otro Estado
vencedor. Sin soberanía e Independencia, la comunidad se diluye por la anarquía o es
ocupada por una potencia exterior.
Dícese legitimo de todo ente (objeto, energía y espíritu) justificado filosóficamente, vale
expresar: que en su existencia responda a los presupuestos de su esencia.
Los sistemas políticos responden a la pregunta ¿cómo mandan? En tanto que los sistemas
sociales lo hacen a aquélla de ¿a quien mandan? Por el contrario, las formas de Estado y de
Gobierno, al decir Bidart Campos, responden a la pregunta ¿quién manda?
Si bien es corriente que los sistemas totalitarios sean simultáneamente colectivistas (como
ocurre en China) los hubo también individualistas en algunas dictaduras
hispanoamericanas.
B) LAS CREENCIAS
Bien dice Fernández de la Mora que toda ideología es una filosofía vulgarizada. Todo
ideólogo esta movido por la pasión de mandar o de influir en el mando en la dirección de
sus intereses, compromisos y preferencias.
Los mitos también se encuentran no solo en la política sino en la cultura (el progreso
indefinido) en el deporte (los campeones morales) pero estos mitos son potencialmente
utilizables para la política de acuerdo a las circunstancias.
LA OPINIÓN PÚBLICA
En la opinión subyace la sospecha de que lo opuesto pueda ser verdad, aunque con menos
chance (en la duda las posibilidades son iguales) se tiene la inquietud de conciencia de que
existe un contradictor: yo opino no es sinónimo de yo creo, sino de me parece.
La opinión se caracteriza por una pretensión de verdad; son muchos menos los que se
retractan de una opinión que quienes lo hacen de un dato equivocado.
Como el vacío de una evidencia lo llena la opinión, el vacío de las ciencias sociales la llena
una ideología, o sea, una opinión colectiva, vulgarizada y radicalizada sobre la cosa
publica.
Expresa Freund que dominar la opinión es una de las tácticas fundamentales de cualquier
actividad política. Los procedimientos para ello son extremadamente diversos, pero hay dos
ligados con la opinión: LA CENSURA Y LA PROPAGANDA.
No se trata de propagar ideas cuando un individuo trata de convencer a otro sobre un punto
de vista personal. Solo puede llamarse propaganda cuando se trata de PERSUADIR a un
grupo o muchedumbre para hacer triunfar una causa política determinada. Como los filmes
de Leny Lienfthain.
Privilegiando a los resultados sobre las pretensiones, a las realización sobre los proyectos y
a las consecuencias sobre las expectativas.
LA TOMA DE DECISIONES
Se tuvo en claro que la toma de decisión es la etapa definitoria del proceso político, por
tanto de que dibuja formalmente sus caracteres especificadores. No obstante esta regla,
también ocurre que por obra de la costumbre algún cargo menos relevante suma
significación repentina (los militares en la guerra o los ministros de economía en crisis)
como a inversa, algunas funciones antes eminentes solo conservan su valor simbólico, que
incluye pitanzas y protocolo (los reyes constitucionales o los diplomáticos)
EJECUCIÓN Y CONTRALOR
En todo caso el papel EJECUTOR de las administraciones del Estado siempre tiene por
misión hacer cumplir las leyes, decretos, sentencias u ordenanzas emanadas de los
diversos órganos que lo integran. La imprecisión terminológica de denominar Poder
Ejecutivo al órgano de gobierno, cuando más bien se ve que su titular no es poder sino
pudiente, y no ejecuta sino que MANDA.
¿En que consiste hacer cumplir las leyes? La respuesta depende del tipo de órdenes que se
trate. Por empezar supone la comunicación , publicación o notificación pertinente a sus
destinatarios, además la supervisión de los flujos de acción tendientes a que las conductas
se plieguen al mandato y finalmente la apelación de la coerción o la coacción, con el objeto
de constreñir espiritualmente o forzar materialmente a cumplirlas o sufrir las condignas
consecuencias por no haberlas cumplido.
El proceso político no concluye, como pudiera creerse en una visión superficial, con la
ejecución de las órdenes proyectadas e impartirlas previamente. Sucede muchas veces que
la administración falla no tanto por defecto, incumplimiento total o parcial en la ejecución,
sino por exceso, ejecución abusiva, desproporcionada, inoportuna, morosa y algunas veces
de mandatos inexistentes. El Estado tiene un interés preventivo en eliminar el desfasaje
entre sus órdenes y la respectiva ejecución.
Pero resulta enteramente inapropiado semejante procedimiento de control directo entre
burocracias enormes y complicadas que componen las estructuras políticas centrales de casi
todos los Estados de la Actualidad.
Modulo III
LOS PROTAGONISTAS
(ELENCOS HUMANOS)
A) LOS ACTORES
EL LIDERAZGO
Opina de Mahieu que lo seres humanos son desiguales, unos son fuertes, inteligentes,
artistas y sabios, otros son débiles, torpes, filisteos o cobardes. Todas estas consideraciones,
como las que son previas fundadas en la raza no en el biotipo, se imponen en este análisis,
pues la organización de las comunidades se funda en la naturaleza social de los seres que
las componen. El mando no es pues consecuencia de la organización, sino esta de aquel. Y
el mando, es una función social ejercida por seres humanos a quienes abarcamos en el
mote de lideres o conductores.
El liderazgo no incluye todo el poder personal, dado que el mismo también lo entraremos al
ocuparnos de la minoría dirigente, puesto que sus personajes, aparte de su valor colectivo,
poseen dotes de mando individuales, al punto que entre ellos surgirán los futuros caudillos.
Fácil resulta concluir que la jefatura del líder político se basa prioritariamente en el
prestigio de la autoridad, puesto que su condición de tal depende precisamente de la
capacidad para suscitar obediencia libre. La autentica autoridad no la que se disfraza
mediante la coacción, es la única garantía de libertad política son los riesgos de la anarquía.
Decía Palacio que el estadista nunca actúa solo, sino que por natural atracción o por
afinidad vital, atrae a su orbita a los principales valores dirigentes, con lo que da forma a
una minoría legitima. (Esto último en países decididos a la afirmación comunitaria) En
efecto, cuando expresamos que el liderazgo, como vértice de la estructura de la pirámide
comunitaria, es un elemento imprescindible.
Esto quiere decir que en toda comunidad y en todos los tiempos, desde la tribu más
primitiva hasta la URSS o USA, necesariamente aspiran, consiguen y o soportan cierto
poder personal. Lo que esta en duda en momentos de crisis anárquica es que se queda con
la presa.
Esta es la categoría intermedia entre el la mayoría dirigida y el poder personal. Tales son
sus notas constitutivas, la una cualitativa y la otra cualitativa. La adjudicación legal de
poderes no coincide sino de manera lejana e imperfecta con la distribución del poder real.
De más esta decir que solo nos interesa la minoría dirigente real, es decir, la que
efectivamente actúa y presta su fisonomía o imprime su sello a toda la Comunidad. Clase
que se caracteriza por una cierta COHERENCIA, que es la garantía de su existencia como
tal, y cuya DENSIDAD, o concentración de valores supera en energía a la que pueda
desarrollar, para reemplazarla cualquier movimiento popular que se le oponga.
Los valores dirigentes que encarnan las minorías representado realmente a las mayorías son
también variados como las culturas que florecen. De manera que siempre intentara ser
representativa de toda la sociedad y no solo de una parte de ella. Solo será legítima y
estable en la medida que sea de tal modo expresión del conjunto.
Esto es así porque los valores dirigentes no dejan de ser tales, por la mera circunstancia de
estar excluidos de la función publica. Influyen por su propio peso y cuando se los excluye
del poder formal, se los coloca al margen del orden establecido o se los combate, ellos
operan contra ese orden y se convierten en factores de perturbación si no logran
reconquistar el poder fuera de los métodos legales, pero restableciendo el orden esencial de
la colectividad que reclama siempre, COHERENCIA –capacidad de adaptarse-,
DENSIDAD – concentración de valores- y REPRESENTATIVIDAD.
TIPOS DE MINORIAS
Permanentes y Funcionales
Transitorias y Funcionales
Transitorias y Disfuncionales
Mitos iluministas de Rousseau, entre los cuales la voluntad general es el preferido, luego de
su traducción a la soberanía popular. Con lo cual la voluntad popular es idéntica a la
voluntad de los marginados, o mejor es decir: de los intérpretes iluminados que son los
demagogos.
A ese sector mayoritario del pueblo que no participa directamente del festín del poder
denominamos mayoría dirigida. Siempre son más que los que mandan y su papel en política
es obediencial.
Puede participar en la selección de la minoría y del liderazgo, pero tal intervención nada
tiene que ver con las “elecciones” tal como las entiende la mitología partidocratica. Dice
Palacio que la verdad es que el pueblo (mayoría dirigida) no elige a dirigentes, sino que los
consagra (en eso si participa), su operación se limita a votar a quienes ya lo mandan. El
sufragio es la ratificación de una superioridad previa, obtenida por los medios habituales de
ganar autoridad: prestigio propio o temor a otros.
Digan lo que quieran los principios, el sufragio es siempre un acto de obediencia, como tal
no se inscribe en le protagonismo de los que gobiernan sino de quienes son gobernados.
B) LAS ORGANIZACIONES
Define de Mahieu a las organizaciones como “la adecuación estructural de los órganos
sociales a las exigencias funcionales de la comunidad”. Un órgano del cuerpo tiene una
función específica, y existe dentro del todo por y para esa función, no otra. Siempre que
dichas organizaciones estén destinadas a la obtención, retención o recuperación del
poder publico, estamos en presencia de verdaderas organizaciones políticas. No se trata de
entidades de naturaleza política, aunque de ellas surgen consecuencias políticas.
De suyo que toda organización, tanto política como educativa, comercial o bélica es, en
cuanto tal, un mero instrumento de la función a la cual sirve. Cabe mencionar nuevamente
el inocultable rostro contendiente de lo político, el cual exige el alineamiento de las
voluntades de poder entre quienes poseen afinidades de intereses, expectativas y
convicciones para emprender la aventura de la lucha por le mando.
Los partidos políticos, tienen su punto de partida en le siglo XIX. Surgieron en Europa y,
poco después, en América, como un mecanismo apto para la disputa de candidaturas
electorales. Sobre todo a partir de la posguerra de 1918, en que se difunde casi
mundialmente el “sufragio universal”. A partir de entonces los liderazgos populares
dependían, en gran medida del apoyo de los “aparatos” partidarios y la misma minoría
dirigente era reclutada entre sus cuadros permanentes.
Las alianzas entre partidos o movimientos políticos forman parte de una vieja tradición
consistente en recurrir al acuerdo cuando no conviene la confrontación. Tal como ocurre en
el mundo de la política exterior, también en le orden interno son frecuentes los “pactos” o
“frentes” establecidos para obtener mejor rédito electoral o, en su caso, para conseguir las
mayorías parlamentarias que requiere el sostén del gabinete.
Mas allá del acuerdo o desacuerdo que, en cada caso, se pueda tener respecto de dichos
valores, lo cierto es que el resultado fatal es la politización de las sociedades intermedias,
mas o menos disfrazada de democratización. Pues bien, así como no parece pertinente
excluir a las asociaciones políticas de la puja por imponer criterios de conducción y a sus
hombres para ejecutarlos, debiendo en todo caso recibirse las demandas sectoriales por
mecanismos institucionales de “consejo” o asesoramiento, tampoco es razonable politizar la
cultura, la economía o el deporte con la vacua excusa de los “proyectos nacionales” o la
“democracia integral”.
LA TIPOLOGIA PARTIDARIA
Según la competencia
Únicos: cuando el propio régimen monopoliza los niveles representativos para sus
candidatos.
Dominantes: cuando de hecho ocupan caso todos los cargos públicos relevantes, aunque
toleren cierto margen de oposición.
Contendientes: cuando aceptan la competencia electoral irrestricta.
Según el prestigio:
Mayoritarios, cuando tienen vocación y posibilidades reales de triunfo comicial, aunque
ocasionalmente se encuentren en la oposición.
Minoritarios, son aquellos que carecen de sustento en la opinión como para aspirar al
gobierno.
Simbólicos, son los que carecen de todo peso electoral pero conservan la organización para
disfrutar no ciertas prerrogativas de que gozan todos los dirigentes, entre ellas la
publicidad.
Conservadores, cuando sus preferencias se orientan a mantener el statu quo, sin perjuicio
de aceptar modificaciones secundarias.
Reformistas, son los que propician cambios relativamente profundos.
Revolucionarios, son aquellos que proponen cambios profundos y súbitos.
Conforme al ámbito:
Según la estructura
Comité: los partidos de cuadros de hace 100 años, que funcionaban en períodos pre
electorales.
Sección: Los partidos de masas, que debieron estructurarse por barrios para una mejor
organización. (Unidades Básicas)
Entre las ESTRUCTURAS DE BASE están los denominados partidos de cuadros como
eran en sumaria hace cien años, solo tenían organización de COMITÉ, que funcionaban
solo en periodos pre electorales. Dicha estructura de base es la SECCION, localizada en
los barrios y aldeas rurales para promover la participación activa de los acólitos o afiliados.
Los partidos menos secretos son llamados CELULAS, compuestas por pocos miembros
que solo conocen a sus camaradas y se vinculan a otras por la única vía de sus jefes.
Finalmente, como escuadras de combate abierto, estaban las MILICIAS, más numerosas
que las células pero igualmente absorbente para el militante.
C) LAS INFLUENCIAS
Ha sido el tema clásico de la literatura clásica política referente al poder tras el trono, a los
hilos que mueven a los actores. Al margen del poder, en toda época y lugar, siempre ha
funcionado una suerte de poder paralelo destinado a influir en las decisiones o en la
ejecución de las mismas.
No son pocos los autores que a causa de la influencia de las presiones sobre el poder oficial
han considerado que el verdadero poder ha sido quitado de su sitio legal y que es asumido
por poderes de hecho. Gobernantes APARENTES y OCULTOS. Siempre, el poder político
formal padece influencias mayores o menores, a veces superables y otras invencibles.
Cabe admitir que dichos factores de influencias, en cuanto también despliegan una energía
o fuerza frente al Estado, son contrapoderes de este. El caso de los factores de influencia se
localiza en el ámbito del ejercicio del poder y se instala en uno o varios de los tramos del
proceso político. Los factores de influencia siempre son de procedencia SECTORIAL.
Factor de PRESION, es en cambio, aquel capaz de influir en las medidas del gobierno sin
que, inexorablemente las autoridades satisfagan sus requerimientos totales o parcialmente.
Que la presión provenga desde fuera del Estado, no implica siempre que proceda desde
fuera de la Comunidad, como es el caso e los factores EXTERNOS, generalmente
provienen de los sectores privados de la sociedad civil.
Es presión DIRECTA la de un partido político sobre los ministros que son sus afiliados, es
INDIRECTA la de un gremio sobre un partido o sobre la opinión para llegar a través de
estos destinatarios, al poder publico.
Las presiones además pueden ejercitarse en cualesquiera de los órganos del estado
(Gobierno, Parlamente, y Justicia)
Hay cierto tipo de presiones que, no se hacen explicitas como otras, apenas disfrazadas de
peticiones, o demandas. Estos son los casos en que los agentes presionantes operan en
SECRETO. Las presiones se pueden identificar tanto en sus factores cuanto en sus
objetivos, adecuadamente embozados en el interés común, pero perfectamente
identificables al analista menos avisado. Estas son categorizadas como EXPRESAS o
manifiestas.
Factor de poder, ese termino se usa para designar a las fuerzas reales y efectivas, activas y
eficaces, que informan todas las leyes e instituciones jurídicas, haciendo que no puedan ser
sino lo que son.
Algunas precisiones:
Si bien hay factores de poder internos (una gran Central Sindical o Empresaria), es mas
frecuente su origen exterior (Estados hegemónicos, empresas multinacionales)
Aunque no desechan lo vínculos indirectos, como aquí la presión es invencible proceden
habitualmente en forma indirecta.
Los Estados Unidos, al consagrar una vieja práctica de las influencias sobre los
congresales, sanciono la Lobbyng Act en 1946 que regula con minución, todo los
procedimientos destinados a influir en la actividad legislativa del Congreso Federal.
Ante un Estado gigantescos, anónimo, y con funcionarios casi irresponsables, es más fácil
presionar y conseguir éxito en las demandas, es más fácil corromper y disuadir, es más fácil
infiltrar y neutralizar.
Modulo IV
LA CONTIENDA
A) LA FINALIDAD
La acción política siempre tiene un sentido, ante todo, EXISTENCIAL, a fuerza de toparse
con lo concreto y ondulante, con lo contingente e incidente, llega a veces a descuidar lo
esencial.
Dice Freund que hay algo extraordinario en cualquiera decisión sorpresiva: Pone a los
demás en un brete. El carácter irreversible de una resolución seguida de actos de ejecución
(recordar lo ya expuesto) coloca al adversario en una situación de inferioridad, o en el
campo de batalla, no solo por la sorpresa sino porque lo fuerza a combatir en un terreno
que el no escogió y a veces ni siquiera tenia previsto.
LA META ESPECIFICA
En todo caso, sea por el medio de la fuerza bélica o de la diplomacia negociadora, siempre
busca el Estado, ante el conflicto, que la ocasión llama a resolver, la victoria parcial o total
que sus armas o su burocracia esta en condiciones de proporcionarle de acuerdo a las
circunstancias. En ello esta comprometida su misión fundamental de brindar protección y
seguridad, no solo a alas actuales generaciones, sino a las que compondrán en el devenir la
población cuya bandera defiende.
Ello es así porque la patria es una unidad social concreta y única, donde se introduce la
coordinación del pluralismo entre las sociedades intermedias y el sentido de colaboración
entre los hombre. Una colectividad que deja de ser patria para sus hijos, también deja de ser
defendida por ello para caer bajo la dependencia de otra unidad política. La SEGURIDAD
y la CONCORDIA son dos metas DISTINTAS, ingredientes infaltables del único bien
común.
La realización empírica del bien común varía con el desarrollo técnico, el de los
transportes, el de las comunicaciones, la explotación de las riquezas del suelo y del
subsuelo, los ejércitos, la sanidad, o la educación.
En el plano tecnológico de los objetivos es donde Freund plantea los cuatro grandes
problemas de la acción política:
Casi siempre hay varios medios para llegar a donde queremos ir, algunos son más costosos,
otros mas tolerantes o más prestigiados.
No solamente ocurre que el agente se vuelva victima de su método, sino que cegado por la
repetida eficacia que muestra fuera de contexto, corre el riesgo de tomar el método por el
fin.
El verdadero éxito político por el contrario se mide siempre con relación a la meta. El
éxito es bueno en si, cuando la colectividad encuentra en el una garantía de perduración y
prosperidad.
LOS FINES
Aclara Freund que por fines entendemos los valores últimos que el hombre se propone
cumplir con su actividad individual o bien con la acción de los grupos y la colectividad,
para dar sentido a su vida histórica. Firmar un tratado de Paz o redistribuir la riqueza
constituyen objetivos políticos y no fines. Asegurar la defensa nacional o proveer a la
prosperidad, son propios de la meta especifica. En cambio aspirar a la libertad, a la
igualdad, a la justicia o la paz, en abstracto, independientemente de las condiciones
históricas contingentes, es perseguir fines.
Los fines son extrapolíticos en el sentido que no son específicos de la política. La religión,
la educación o la economía, tiene también la tarea de promover esos grandes fines que
enunciamos. Los fines ordenan la vida política, la orientan y la coordinan con las demás,
puesto que todas las comparten. Le confieren un carácter sistemático, una unidad de miras,
de manera que las operaciones políticas no solo están al servicio de su meta específica, sino
también al servicio de los hombres.
Por ese camino es posible humanizar lo político sin incurrir en utopía, ya que no se puede
desconocer la relación de amigo-enemigo, tal vez se vuelva a conseguir que los eventuales
enemigos admitan reconocerse como tales, lo que significa respetarse como semejantes y
rescatar por tanto al hombre en el enemigo.
El papel OBJETOR de los fines, se busca el prestigio del adversario como táctica
circunstancial y empleando los mismos argumentos referenciales (fines escatológicos) que
se emplearían para defender la propia gestión, en este caso necesariamente concorde con
dichos fines.
De cualquier modo, una cosa resulta clara: No obstante el papel benéfico de los fines como
reguladores y el papel nefasto como arsenal polémico, ambas características son
irrescindibles: a la responsabilidad de los hombres de gobierno, incumbe privilegiar uno u
otro papel, nunca suprimir uno o ambos.
B) LOS MEDIOS
Por una parte podría implicar una alusión a los recursos. Maquiavelo propone reunir en el
gobernante la ASTUCIA y la FUERZA. En este caso nos remitiremos a los medios de
acceso al poder y concurrentemente el de los medios para conservarlo y o recuperarlo. Son
los recursos institucionales.
Pero también hay recursos EXTRAORDINARIOS, como las revoluciones o las guerras.
Son NATURALES las formas de acceso el poder donde esta resulta una cualidad añadida
al nacimiento al matrimonio, tal como sucedía en las dinastías europeas para la sucesión del
trono.
Llamamos ARTIFICIALES las que acuden a algún arte o artificio humano para su
otorgamiento, ora voluntario, ora automático.
La ADQUISICION de cargos públicos era muy frecuente para alguna magistratura del
antiguo régimen. Si los electores son jerárquicamente superiores a los elegidos se trata de
NOMBRAMIENTO (procedimiento para la mayoría de los cargos públicos actuales). Si
los electores son pares de los elegidos, se trata de COOPTACION (forma de cubrir
vacantes en la cámara alta) y si finamente si los electores son subordinados de los elegidos,
se denomina SUFRAGIO. El CONCURSO, raramente aplicado en materia política desde
el mandarinato chino, se reserva para funciones técnicas carentes de nivel decisorio. El
SORTEO, propuesto por Aristóteles como típico de la democratización, solo se ha
conservado para la nominación de jurados en algunos tribunales de justicia.
PARTICIPACION Y REPRESENTACION.
Por el VINCULO, de forma DIRECTA, donde los participantes participan sin mediación
alguna, como en el referéndum. INDIRECTA cuando los actores solo intervienen en la
elección de los dirigentes a quienes pertenecerá, la exclusividad deliberar, ejecutar y
controlar.
Se denomina participación REAL, cuando alude a actos expresamente efectuados por sus
actores, en cambio es SIMBOLICA cuando resulta atribuida por otros, sin requerir actos
expresos de sus presuntos titulares.
Según de Mahieu, toda representación invoca una nueva presencia que será tanto más fiel
cuando mejor exprese aquella que evoca.
Para retener las fuerzas internas del cuerpo social y realizar su síntesis el Estado proyecta
hacia abajo sus administraciones. Al hacerlo, se encuentra con la dirigencia sectorial que no
solo conduce a las empresas, sindicatos, sino también, lo expresan hacia arriba.
Tenemos por un lado una jerarquía que proviene del Estado, y por el otro una
representación ascendente que procede de los elementos constitutivos internos de la
Comunidad.
SUFRAGIO Y ELECCIONES
Se trata de una función pública ejercida por un órgano del Estado especializado para tal
evento: el CUERPO ELECTORAL.
El sufragio CALIFICADO es aquel por el cual se reserva el voto a cierta clase de electores
privilegiados por su posición económica, social y cultural. Por ejemplo, cuando se excluye
a los analfabetos en algunos países americanos hasta bien entrados el siglo 20.
RESISTENCIA Y REBELIÓN
ES evidente que la Revolución no puede hacerla el Estado mismo, puesto que precisamente
solo resulta posible cuando este último ha perdido su misión y se convierte en el objeto
inmediato de la acción rebelde.
GUERRA Y DIPLOMACIA
Bueno es saber que la diplomacia es siempre una función publica que solo puede obedecer
a las directivas del poder político.
Toda guerra es un acto de fuerza llevado a cabo por un grupo con poder de
autodeterminación para obligar a otro SIMILAR a someterse a su voluntad de poderío. Más
que una continuidad de la política es solo su forma mas violenta, como la diplomacia la
menos violenta.
También aquí la política esta subordinada a los valores morales a condición que los mismo
sean aplicables a todos los contendientes y no se trate de expedientes argumentales para
propiciar, a través del pacifismo cómplice, la indefinición de las propias fronteras.
Cuando se produce una guerra civil, coronada o no con una Revolución triunfante, casi
siempre hay apoyo logística, económico y hasta técnico de otras potencias interesadas en
determinados resultados.
Todo ello implica la ingenuidad de limitar el papel de las fuerzas armadas a la defensa y
sustraerlas por completo de los conflictos internos, precisamente cuando estos dejan de ser
endógenos, para cumplir un papel subordinado a los intentos de dominación política,
económica e ideológica.
C) LAS CONSECUENCIAS
El objeto de esta sección es discriminar dichas consecuencias, felices o no, que el desenlace
del drama agonal en la vida pública presenta con más frecuencia: Nacimiento, desarrollo,
crisis, ocaso y desaparición de las Comunidades.
Aquello en que desemboca una acción se encuentra raras veces conforme con las
intenciones iniciales, ya que los medios empleados, así como el resultado, desarrollan series
de efectos imprevistos y desconcertantes.
El hombre organiza los medios según la coyuntura y utiliza unos preferentemente a otros
según que espere un éxito inmediato o a largo plazo.
Nunca se quiere un objetivo por el mismo, sino a causa de las REPERCUSIONES que
pueda tener sobre otras empresas o proyectos. En lo que concierne a nuestro mundo
temporal, nada empieza absolutamente y nada tampoco termina. Como la vida, la
humanidad va de acción en acción, de esperanza en esperanza, de consecuencia en
consecuencia.
Esta es la razón por la cual los éxitos pueden manifestarse a la larga por sus repercusiones y
lo fracasos como salvaciones.
ORIGEN Y DESARROLLO
Bastante tenemos con la historia para bucear en ella cuales han sido las formas mas
frecuentes de aparición o surgimiento de colectividades autónomas, con vida política
propia.
EL Nacimiento por CONQUISTA. Ello sucede cuando un pueblo promotor reúne bajo al
férula de su estado a otros vencidos en guerra, los cuales pasaran a integrar su pueblo y su
territorio.
CRISIS Y DECADENCIA
Por eso es difícil saber, con el solo dato del disenso, cuanto hay de cierto en las campañas
de descrédito hacia la dirigencia por el régimen político, en suma, si estamos o no en
presencia de una CRISIS.
ACA aparece con su ética majestad el ejerció de la PRUDENCIA obediencial propia del
súbdito, aptitud muy necesaria, como habito de perfección, para moldear la responsabilidad
de la mayoría dirigida.
LA EXTINCIÓN COMUNITARIA