Destrucción de ozono por electrones solares en relación de la variabilidad

solar y la latitud terrestre

La capa de ozono se encuentra en peligro bajo diferentes amenazas, tanto

antropogénicas y naturales. En este artículo se estudia un fenómeno natural que
ha sido el centro de atención de diversos científicos ya que supone otra amenaza
a la destrucción de la capa de ozono, en el que se ven involucrados electrones
con altos niveles energéticos y a la radiación solar. Las reacciones con los
clorofluorocarbonos (CFC), los compuestos responsables del agotamiento del
ozono en la estratosfera más baja, no podrían explicar por si solos la declinación
en capas más altas. Uno de los puntos más importantes en el agotamiento de la
capa de ozono y el cambio climático, es el equilibrio del oxígeno que se ve muy
afectado por el nitrógeno.

Los electrones energéticos son recopilados por el satélite polar ruso METEOR que
se encuentra a una baja altitud, mientras que los datos del ozono son recolectados
por 90 estaciones de todo el mundo en una latitud de entre 40 y 70 °N. Más del
60% de estas estaciones han detectado una visible disminución del ozono durante
y después de la aparición de un exceso de flujo de electrones. Además, la
disminución del ozono es más grande entre más al note este ubicada una
estación.

El Sol emite radiaciones a lo largo de todo el espectro electromagnético, desde el

infrarrojo hasta el ultravioleta. Aunque no toda la radiación solar alcanza la
superficie de la Tierra, porque las ondas ultravioletas más cortas son absorbidas
por los gases de la atmósfera, fundamentalmente por el ozono. Este tipo de
radiación está conformada por electrones, protones y partículas alfa, que
introducidos en la atmosfera superior de la tierra elevan la producción de los
óxidos de nitrógeno por un factor de cuatro, dichos óxidos son considerados
grupos asesinos del ozono, por lo que la relación de los electrones energéticos
con la destrucción de la capa de ozono parece ser más sólida.