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C olombia Internacional 62, jul - dic 2005, 120 - 131

PRÓLOGO
A LA LLAMADA
‘INVESTIGACIÓN
CUALITATIVA’
en ciencias sociales
Rodolfo Masías Núñez1

recibido 31/01/06, aprobado 01/03/06

120
R odolfo Masías Núñez

Este artículo ofrece una visión panorámica de lo que se conoce corrientemente en


ciencias sociales como ‘investigación cualitativa’. Bien podría considerarse un
exordio, pues al tiempo que sólo asoma una cuestión deja el suspenso necesario para
continuar una indagación futura más profunda. El artículo parte de una discusión
general sobre el significado de la investigación cualitativa concebida a la luz del
concepto de paradigma, para analizar luego su génesis y las razones que hacen a su
expansión en las ultimas dos décadas del siglo XX. Se afirma que es una expansión
difícil y conflictiva y, como realización de una legitimidad, todavía lejos de estar
terminada: la oposición a este enfoque, en particular del positivismo académico, es
aun en la actualidad una férrea barrera que superar, pese a las voces contemporáneas
de integración o confluencia. Posteriormente, se detiene en la discusión acerca de su
estatuto epistemológico y en los elementos que la distinguen de las otras
concepciones de investigación. El trabajo se cierra con una propuesta de
interpretación diferente de la presencia y generalización de todo este proyecto
intelectual en ciencias sociales: retomando a Bourdieu, abre una pista para analizar
este fenómeno más como producto de unos juegos de un campo social, que de una
rebelión exclusivamente epistemológica.

Palabras clave: Epistemología, hermenéutica, métodos cuantitativos, paradigmas,


positivismo

This article offers a panoramic view of what it is commonly known in the social
sciences as “qualitative research”. It could well be considered an introduction, as it
simply poses questions and points to areas of future research.The text begins with a
general discussion on the meaning of qualitative research, based upon the concept of
paradigm, and analyzes its genesis and the reason of its expansion in the last two
decades of the twentieth century. The author affirms that it is a difficult and
conflicting expansion and, that its legitimacy is far from assured: opposition to this
approach, in particular by academic positivism, continues to present a difficult barrier
to overcome, despite contemporary voices of integration or dialogue. Subsequently,
the article discusses qualitative analysis’ epistemological status and the elements that
distinguish it from other conceptions of research. The paper concludes with an
interpretative proposal that differs from this entire intellectual project in the social
sciences: making use of Bourdieu, it opens a path to analyzing this phenomenon
more as the product of games within a social field than as an exclusively
epistemological rebellion.

Keywords: Epistemology, hermeneutics, qualitative methods, paradigms, positivism

1 Profesor Asociado del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de los Andes, Colombia.

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P rólogo a la llamada ‘Investigación cualitativa’ en ciencias sociales

Introducción Este parece ser, al menos con mayor

R
eflexionar sobre la claridad, el curso que toma en el
naturaleza y significa- tramo más cercano de su historia,
do de eso que se con- desde los años 80 hasta ahora. En estos
vino en llamar pragmáticamente últimos 25 años, aproximadamente,
‘investigación cualitativa’ en ciencias esta subcomunidad de las ciencias
sociales resulta una tarea compleja y sociales, tras la bandera de una forma
de suma responsabilidad. La compleji- diferente de hacer investigación, ha
dad tiene que ver con la ya larga his- expresado una justificada rebeldía e
toria de reformulaciones del insatisfacción con el estado de cosas,
concepto, que dificulta precisar sus ha representado una voz de alarma
notas de identidad por antonomasia; sobre las aporías de las ciencias socia-
con las iracundas, agotadoras y des- les, resultado de su ligazón umbilical
concertantes controversias que ha sus- con ciertas ciencias naturales y sobre
citado en la comunidad de estudiosos las sendas señales de imposibilidad de
de la sociedad; y con la cada vez significar el mundo social que han
mayor recurrencia en su aplicación venido manifestando en los últimos
(muchas veces a la usanza de una años, especialmente la denominada
moda) que se muestra, sin embargo, investigación cuantitativa3.
bastante disímil y contradictoria. La Ahora bien, con todo, y por
extrema responsabilidad se liga a la sobre la relativa exactitud de los jui-
tensión que supone reflexionar de cios hasta ahora expresados, las pre-
manera independiente y crítica sobre guntas siguen siendo las mismas: ¿qué
este tema, más aún cuando sus pro- es ‘investigación cualitativa’? ¿Qué es
pugnadores exponen todavía sus vir- ‘metodología cualitativa’? ¿Cuál es la
tudes en términos de superioridad y historia de este movimiento y practi-
sus detractores presentan sus defectos ca de investigación? ¿Es posible
como manifestación de su nulo carác- encontrarle un estatuto epistemológi-
ter científico y por ende cognitivo. co autónomo o es un fenómeno más
Bien vista la cuestión, y enten- de diferenciación social y distinción
dida como movimiento intelectual, es en el campo de las ciencias sociales?
decir, como un fenómeno de identi- ¿Cuál es su relación con la llamada
dad colectiva, la investigación cualita- ‘metodología cuantitativa’? ¿Cuáles
tiva se despliega como una alternativa son los signos de identidad social de
a las maneras convencionales y legiti- los ‘cualitativistas’ y qué es lo que bus-
madas de investigar, pero tal vez, más can investigando de esa otra manera?
importante aún, se desarrolla como una ¿En qué aspectos reside la intensa
conciencia de vigilancia y develamiento controversia con la subcomunidad de
de los límites de la investigación clásica2. la investigación cuantitativa?

2 Por ‘investigación clásica’ estoy entendiendo aquella práctica de conocimiento que tiene como ideal a la ciencia, esa prác-
tica que busca reproducir el método cientifico.
3 Hablo de ‘ciertas ciencias naturales’ teniendo en cuenta que éstas no son en la actualidad un bloque estructurado en una
unitaria filosofía de la ciencia. Hay toda una vertiente renovadora que redefine el concepto de ciencias naturales aseme-
jándolo bastante al de ciencias sociales.Véase al respecto Prigogine y Stengers (1983), Prigogine (1997) y Holton (1998).

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R odolfo Masías Núñez

Una historia para la parece encontrar sus orígenes en los


‘investigación cualitativa’ remotos momentos de la Grecia
La historia de la investigación Clásica, en la concepción aristotélica de
cualitativa es en verdad la historia de conocimiento de la realidad6. No se
lo que Kuhn denominaría un paradig- trata, pues, de un intento sin pasado, ni
ma4: una visión de la realidad, una de una ocurrencia exclusiva de la
perspectiva para abordarla y conocer- modernidad, como tampoco se trata de
la, unos objetos privilegiados de inte- un movimiento que se explique sola-
rés y unos procedimientos en mente, aunque si bien bastante, en
particular para obtener un saber. Lo paralelo al desarrollo de la ciencia y en
que resulta reciente en la historia en particular de la ciencia cuantificadora
cuestión es su expansión en el mundo de estirpe galileana. Esa secular bifurca-
de las ciencias sociales en las ultimas ción de la historia cultural de la huma-
tres décadas. Se trata de un fenómeno nidad entre una forma de generar
de generalización y mayor aceptación. conocimientos de manera clara y dis-
Es decir, se trata de la cada vez mayor tinta y con base en el universo de las
acogida de su propuesta epistemológi- matemáticas y esa otra forma humanís-
ca y metodológica, y del cada vez tica más apoyada en la imaginación y el
mayor numero de investigadores que discurso, dan cuenta de la extensa
ven en su promesa una superación de génesis de esto que ahora conocemos
los problemas cognitivos y prácticos como investigación cualitativa o para-
de las ciencias sociales. Es reciente digma cualitativo, a falta de una deno-
también en esta historia la intensidad minación más justa.
del debate que suscita y la constitu- Si bien mi propósito es con-
ción de verdaderos gremios defensores centrarme en este periodo de auge7,
de esta propuesta o la de su antagóni- conviene precisar algunos hitos de
ca, sea bien que se le denomine ‘inves- esta historia, así sea con una finalidad
tigación cuantitativa’, cientificismo o estrictamente informativa. Este repaso
simplemente positivismo con todas sus servirá posteriormente para hollar en
mutaciones. Sin embargo, es al mismo su identidad epistemológica y en los
tiempo de poca data la conformación fenómenos sociológicos que refleja la
de un movimiento a favor de la con- comunidad de los que la erigen como
vergencia entre estas visiones de la modalidad efectiva de realizar las
investigación5. ciencias sociales.
Pese a esta juventud de su propa- Desde que hay ciencia moder-
gación, legitimación y hasta institucio- na (siglos XVI y XVII), la concepción
nalización, como proyecto intelectual de investigación que posteriormente

4 Véase al respecto Kuhn (1971).


5 Un trabajo sugerente sobre cómo lograr esta deseada integración es el de Bericat (1998). En Colombia se publicó hace
algunos años un libro con la misma inspiración, véase Bonilla-Castro y Rodríguez (1997).
6 Los textos mas recientes de metodología cualitativa parecen estar de acuerdo con esta afirmación. Si se quiere profundi-
zar, véase Mardones (1991).
7 Sin poder documentar la afirmación contraria sobre el auge actual de las posiciones cualitativas, debo decir que tal corrien-
te circula bastante en los medios académicos. Es una visión que también apuesta por la integración paradigmática.

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P rólogo a la llamada ‘Investigación cualitativa’ en ciencias sociales

fue denominada positivismo, nunca se En busca de una identidad


desarrolló solitaria; siempre tuvo opo- epistemológica y política
sición y, desde ese punto de vista, La propuesta de investigación
siempre hubo algo así como una pers- cualitativa que aquí estoy concibiendo
pectiva de investigación cualitativa. en el marco del concepto de paradig-
Sin embargo hubo de pasar dos siglos ma ha sido denominada en los últimos
para que, en el siglo XIX, se edificara años de diversos modos; es una gama
toda una filosofía crítica y alternativa de denominaciones que quieren
en el conocimiento de lo humano: es expresar su elemento esencial. Son
la filosofía de Nietzsche. Aquí el posi- calificaciones sugerentes pero frag-
tivismo encuentra un gran crítico y mentarias, al tiempo que plasman las
un gran opositor, pero sobretodo los discrepancias entre sus sistematizado-
perfiles de una manera diferente de res. Es, con todo, un esfuerzo grande
aproximarse y entender la realidad8. Es por conferirle una identidad, filosófi-
también hacia finales del siglo XIX y ca, metodológica, académica y social.
comienzos del XX que se conforma Por lo general, han tenido como con-
toda una corriente crítica a la imita- trapartida la ‘otra’ forma de investiga-
ción mecánica de la estructura episte- ción, también reconocida de muy
mológica de las ciencias naturales en diversas maneras, más comúnmente
las ciencias sociales9. Por su parte, sin como cuantitativa. Así, frente a la lla-
desconocer la hegemonía del positi- mada propuesta ‘prevaleciente’ la cuali-
vismo durante todo el siglo XX, este tativa es la ‘emergente’; cuando la
es el siglo que, más que cualquier otro, primera es denominada ‘clásica’, la
ve dilucidar los principios de un enfo- segunda es nombrada ‘alternativa’; al
que propiamente cualitativo, lo ve llamar a la otra ‘racionalista’, se le ha
competir con la academia convencio- opuesto el apelativo de ‘naturalista’;
nal, lograr aceptación y posicionarse cuando la otra es identificada como
finalmente.Todo este proceso de siglos ‘realista’, ésta ha recibido la denomina-
es el que cuaja en un panorama de las ción de ‘hermenéutica’. Con todas sus
ciencias sociales más diverso, en térmi- imprecisiones, en estas apuestas hay
nos de entender el conocimiento y de bastante de cierto: la investigación cua-
sus formas de conseguirlo. La actual es litativa hasta ahora no ha prevalecido,
una época de coexistencia, de acerca- no es ni ha sido una propuesta hege-
mientos y aceptaciones, aunque no mónica; frente a la manera convencio-
siempre pacifica y convergente. Sin nal de concebir la investigación en
embargo, no sería del todo inexacto ciencias sociales, ha emergido como
decir que es la época de la investiga- una alternativa; al predominio de la
ción diferente, en la que la ‘cualitativa’ razón, este proyecto intelectual le ha
ocupa un lugar muy especial10. opuesto la imaginación y la intuición;

8 Sobre esta historia y sobre la ‘hermeneutización’ de las ciencias sociales, véase la compilación de Gutiérrez (2004).
9 Sobre el punto, la reconstrucción de mayor impacto, por su precisión epistemológica e histórica, se puede encontrar en
Rossi (1982).
10 Utilizo la palabra ‘diferente’ para dar cuenta de una suerte de sensibilidad bastante extendida en las ciencias sociales por
innovar, por encontrar nuevas formas de hacer investigación y abordaje. Es una especie de actitud vanguardista que quie-
re cancelar el pasado y la repetición.

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R odolfo Masías Núñez

y a los limites de la objetividad científi- del movimiento de la investigación


ca ha querido oponerle el sustento filo- cualitativa? El primero es el del méto-
sófico de la hermenéutica y mas do científico: a la investigación cualita-
recientemente del constructivismo11. tiva se le ha criticado por no seguir el
Este juego de calificativos, que dan método científico y en situaciones
cuenta de los difíciles movimientos en extremas por no desarrollar algo así
busca de una identidad filosófica y tam- como un método, de manera que su
bién política, expresan igualmente los cientificidad ha sido desaprobada. Se
problemas que se han debido de sortear cuestiona que no haya un procedi-
desde el punto de vista epistemológico, miento que le sea suyo, que la identifi-
básicamente el estatuto de cientificidad que y que asegure la valía de los
de esta concepción alternativa. enunciados sobre la realidad que con-
Desde los parámetros de la epis- cluyen. Junto a ello, e íntimamente
temología clásica, la investigación emer- ligado, está el criterio-problema de la
gente ha tenido que enfrentar múltiples objetividad: el estudio de la subjetivi-
y justificadas críticas, sobre las cuales no dad desde la subjetividad misma, obje-
siempre ha habido refutaciones consis- to privilegiado de la investigación
tentes ni convincentes12.Y es que lo que cualitativa, no puede considerarse una
permanentemente ha estado en cues- aproximación objetiva y consecuente-
tión es la naturaleza del conocimiento mente los resultados que se alcancen no
que de estas prácticas brota: ¿se hace lo pueden ser. Si un conocimiento no
ciencia? ¿Se quiere hacer finalmente es objetivo, por ende no es real, puede
ciencia? ¿Son científicos los conoci- ser pura imaginación y no es científico.
mientos producidos? Si no lo fuesen, El criterio-problema de la generaliza-
¿qué son? Ante los viejos criterios de ción es un tercer ámbito de críticas: la
demarcación entre ciencia y no-ciencia, investigación cualitativa, en tanto que
las respuestas de los cualitativistas han casuística, está vedada a un tipo de
sido diversas y divergentes: por un lado, conocimiento que revele alguna forma
aparece un sector que acepta los clásicos de regularidad del mundo social. Si esto
criterios, respondiendo con matices o es así, se trata de un tipo de investiga-
replanteándolos tímidamente; por otro ción que poco aporta a desentrañar el
lado, hay un sector que los desconoce orden social. Todas las reconvenciones
completamente. Si bien ambas posicio- anteriores desembocan en el criterio-
nes son vigentes, me atrevería a decir problema de la validez del conocimien-
que la segunda ha ido cobrando más to obtenido: no habría en estos
fuerza en los últimos años. conocimientos la mínima posibilidad
Pero ¿cuáles son algunos de estos de su verificación.
criterios-problema en que se ha visto Bajo el lente de la perspectiva
sometida la identidad epistemológica convencional, pues, la investigación

11 La comunión entre metodología cualitativa y constructivismo queda muy bien esclarecida en las compilaciones de
Watzlawick y Krieg (2000) y en Watzlawick y otros (2000).
12 Para ahondar en las exigencias de la filosofía clásica de la ciencia conviene volver al antiguo libro de Bunge (1989). Si se
quiere tener una imagen más actual de estos planteamientos puede consultarse, también, Bunge (2002).

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P rólogo a la llamada ‘Investigación cualitativa’ en ciencias sociales

cualitativa difícilmente podrá consi- cualitativa y que parece plasmarse en


derarse científica o todavía dista la práctica.
mucho de serlo como para ser toma- Filosóficamente, como tenden-
da en serio13. Es solamente sobre una cia general, se emparenta con la feno-
imagen diferente de la ciencia o del menología, la hermenéutica y el
conocimiento que puede tener cabida constructivismo; bebe de éstas tanto
un movimiento que emerge justa- para dilucidar un concepto de ‘reali-
mente sobre la crítica a la manera dad’ como para sentar las líneas maes-
legitimada de hacer las cosas. La tras de un esquema de abordaje de la
investigación cualitativa solo podrá misma. La búsqueda de un sustento en
ser aceptada si se ensancha el hori- estas corrientes representa un distan-
zonte epistemológico o se conviene ciamiento crítico del objetivismo
en la posibilidad de abrir otro igual- positivista, a su creencia de que el
mente legitimo14. Este parece ser el conocimiento es un cotejo, un enca-
meollo de los dilemas de los ideólogos jamiento, con la realidad externa a los
y practicantes de la no tan reciente sujetos. En el espíritu cualitativo se
propuesta. cuestiona que el conocimiento se ori-
gine más allá y con excepción del
La investigación cualitativa actor que conoce. La comprensión
realmente existente: un tipo interpretativa como actitud frente al
ideal ‘objeto’ es una máxima metodológica
El gran escollo a sortear en una de comportamiento, toda una postura
caracterización de la propuesta cuali- del investigador. No es casual por ello
tativa es establecer si hay algo así que, en el plano de la teoría social, la
como un sustrato ontológico, episte- investigación cualitativa reproduzca
mológico y metodológico colectivo los principios de la fenomenología
en todas sus manifestaciones concretas social de Schutz, el interaccionismo
de investigación, pues la primera simbólico, la etnometodología o la
impresión es la de la disimilitud. En teoría del discurso, entre otros.
efecto, el problema es poder encontrar Pero en lo que podría llamarse
si, entre quienes investigan portando el ‘programa de la investigación cuali-
su emblema, responden por igual, o tativa’, hay otros elementos caracterís-
tienden a hacerlo, a un mismo tipo de ticos, varias veces mentados por sus
criterios paradigmáticos15. El recurso pensadores y que no tienen tanto que
metodológico weberiano del ‘tipo ver por lo que es mas conocido, con
ideal’ puede servir en este difícil ejer- su critica a la función del numero
cicio. En efecto, en un plano muy ele- como propio y exclusivo representa-
vado de abstracción, hay una suerte de dor de la realidad. Si con los términos
ethos al que responde la investigación de la discusión de la época de la

13 Muy ilustrativo al respecto es el artículo de Aunger (1995).


14 Una muy notable contribución sobre el punto se puede confrontar en Balandier (1999). Aunque si bien en una posición
diferente, una sugerencia de amplitud de horizontes de encuentra en Geddes (2003).
15 En los últimos 25 años se han producido infinidad de intentos por caracterizar el programa de la investigación cualitati-
va. Las referencias a continuación son las que, por lo menos al autor, le han sido las más influyentes: Crabtree y Millar
(1992),Valles (1997),Vasilachis de Gialdino (1993) y Delgado y Gutierrez (1998).

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Batalla del Método se quisiera esta- del llamado marco teórico: la pro-
blecer si la postura cualitativa es más puesta en cuestión es más inductiva, la
“ideográfica” que “nomotética”, teoría no está allí para partir de ella, es
habría que decir que propende a la más bien o debería ser, un punto de
primera. Hay una inclinación hacia la llegada16.
búsqueda de la singularidad de los Por ultimo, respecto de la
fenómenos sociales que a generar medición, no es que sea satanizada, si
enunciados que recojan regularidades no que se estima que no todo puede
a la manera de la antigua pretensión ser expresado cuantitativamente. El
legaliforme. tema aquí es el del isomorfismo posi-
Por su parte, el conocimiento ble, real, entre el sistema de los núme-
no es más prospero con la verificación ros y la condición social o humana, la
de hipótesis. En esta postura verificar, medida en que los fenómenos de la
tras que es un imposible cognitivo, vida social encuadren como datos
reproduce la ontología positivista de cuantitativos17. Sin embargo, no es
la realidad independiente de la volun- cierto que los investigadores cualitati-
tad humana. En vez de verificar se vos no hagan uso de cifras en sus
trata de describir profundamente, investigaciones, mas importante es
comprendiendo e interpretando. El saber cómo se usarán y qué sentido se
investigador cualitativo no se siente les conferirá.
seguro verificando, se siente cómodo Particularmente, a ese nivel de
conjeturando, especulando, ilustrando abstracción, hay además otros signos
la realidad. de distinción mas concreta. Por lo
Si bien es uno de los temas común, esta investigación reivindica
que mayor desaprobación o contro- como objeto de observación la vida
versia ha suscitado, la flexibilidad cotidiana, quiere acceder al mundo de
metodológica que se desarrolla en la la vida de los actores y expresar sus
investigación cualitativa es uno de sus hallazgos en el lenguaje corriente o en
signos de distinción. Hay toda una uso. Son las actividades diarias, los
ruptura respecto del normativismo motivos de la acción y sus significados,
metodológico, a la reproducción el saber de los actores, su conocimien-
mecánica del llamado método cientí- to práctico, en el lenguaje de la
fico y en general a cualquier protoco- Etnometodología, lo que quiere saber-
lo a tan solamente aplicar. La se. De todo ello es consecuencia que
flexibilidad tiene que ver con que el sus fuentes principales sean los mismos
método se realiza también en la prac- individuos o sus prácticas, frente a la
tica; no es un dispositivo, cual técnica, idea fallida de que los sujetos no pue-
que se aplique como receta. Investigar den decir algo acerca de ellos mismos.
es ver el método en movimiento. Tal El actor social también quiere ser rei-
aserto se extiende, además, al papel vindicado como participe del acto de

16 Sobre cómo los programas cualitativo y cuantitativo comparten una misma finalidad inferencial y sobre los alcances y limi-
tes de esta operación puede consultarse King, Keohane y Verba (2000).
17 Se puede llegar a una gran claridad sobre el punto consultando el magnifico trabajo de Cicourel (1982).

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investigación. En esta perspectiva, mente más elevadas. Por mucho tiem-


pues, los agentes pueden decir algo po se ha querido acotar el debate
sobre la sociedad, el lego es considera- entre estas propuestas como uno tan
do sapiente de su situación. La coin- solo epistemológico y metodológico,
vestigación es un resultado de este pero surge la sospecha si no es posible
principio. Los dispositivos y técnicas y también productivo verlo combina-
de recopilación de información han damente, al menos integrando en la
de ser correspondientes al espíritu de reflexión una perspectiva sociológica.
estos mandatos epistemológicos y teó- Sería algo equivalente a sobrepasar los
ricos. Es en razón de ello que esta modelos racionales de explicación del
forma de investigación sea tan conoci- cambio científico y de la adhesión o
da, desafortunadamente, como meto- conversión de las comunidades a las
dología cualitativa. Efectivamente, lo teorías más potentes, por eso que se
que se verá será una inclinación a llama modelos no-racionales; sería un
practicar la observación participante, intento por reunir en una misma
la entrevista a profundidad, el relato empresa explicativa los ‘factores inter-
biográfico para la historia de vida o los nos’ y ‘externos’ que dan cuenta del
grupos focales, entre otras18. movimiento en las disciplinas. Esta
perspectiva, a mi juicio, permitiría lle-
A manera de coda: nar los vacíos que deja una discusión
una sociología de la controversia solamente referida a la manera de
Los fenómenos de división y producir conocimientos, pues, como
diferenciación interna en ciencias he tratado de argumentar, no es una
sociales, sean bien de naturaleza filo- cuestión que pueda reducirse a tan
sófica, teórica o metodológica, como sólo una cuestión de metodología.
lo es éste entre los colectivos de la Ciertamente, para los propulsores de
investigación cualitativa y las otras cada movimiento las divergencias son
formas de investigar, engendran dudas de fondo, racionales e internas; más
sobre su justificación y hasta utilidad. ante la fuerza de la experiencia vivida
No deja de pasar intensamente por la no es banal prestar atención a esas
conciencia cuánto pueden ser divisio- señales que parecen indicar algo más.
nes caprichosas, agrupamientos extra- No es difícil comprobar enrolamien-
vagantes de la comunidad de los tos a estas cofradías sólo por razones
estudiosos de la sociedad; cuánto pue- de prestigio, de distinción social o
den ser sólo modas, o circunstancias reconocimiento académico y finan-
de clasificación social, que se explican ciero; y otras falsas adhesiones, ya que
mas por razones sociológicas, como identificarse con alguna postura es el
productos de unos juegos de un resultado de una socialización fortuita
campo social, en la terminología de en una determinada tradición de
Bourdieu19, que por razones supuesta- investigación, para la que no hubo

18 Para abundar en los fundamentos filosóficos de las técnicas usuales en metodología cualitativa, véase Saltalamacchia (1992).
19 Al respecto los estudios de Bourdieu (1990; 1998) tienen mucho que aportar. Particularmente para la ciencia y los cien-
tíficos como objeto de reflexión ver Bourdieu (2000; 2003).

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R odolfo Masías Núñez

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les poder “elegir” una u otra opción, Ediciones Nueva Visión
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