Está en la página 1de 6

TRABAJO POR ANIVERSARIO DESPLAZADOS PUNO

Los distintos estudios realizados durante los años anteriores mostraron que, pese a la radicalidad
y masividad de las afectaciones de tierras, el proceso no incluyó a los minifundistas y pequeños
propietarios y menos a los campesinos sin tierras. A pesar que la Ley de Reforma Agraria –en el
título relativo al minifundio– anunció la realización de acciones de Concentración Parcelaria y
Reordenamiento Rural, es sabido que fue prácticamente nulo lo que se avanzó en este campo

sin entrar a la discusión de si la totalidad de los adjudicatarios reciben beneficios efectivos, puede
afirmarse que la mayoría del 13 Gorriti, Jorge. “¿Rentabilidad o Supervivencia?: La agricultura de
la costa peruana” En Debate Agrario, Nº 35, Lima, CEPES, enero 2003. LAUREANO DEL CASTILLO
PINTO 267 millón de minifundistas con menos de tres hectáreas. ha quedado totalmente
marginado de la reasignación de tierras”14.

Parte de los problemas que derivan luego en la crisis de las cooperativas agrarias creadas por la
reforma agraria tienen que ver con dicho problema

Como se ha dicho, tampoco las comunidades campesinas fueron objeto privilegiado de la


adjudicación de tierras. Su actual significación en la distribución de tierras agropecuarias se
debería a varios factores: tomas de tierras en algunas zonas, pero también el proceso de
redistribución de tierras a favor de comunidades existentes y muchas otras que se constituyeron
en medio de esa coyuntura. En efecto, en junio de 1985, había en Puno 486 comunidades
campesinas reconocidas y más de 500 parcialidades. Nueve años más tarde, el III CENAGRO
arrojará 1.274 comunidades en dicho departamento del sur del Perú.

Comunidades campesinas de la zona. En este proceso muchos grupos campesinos se inscribieron


como comunidades campesinas para ser beneficiarios, por lo que entre 1986 y 1990 se
registraron 1.321 nuevas comunidades, 3

Los conflictos que surgieron entre el campesinado y los terratenientes caracterizan por lo tanto
este período, que muestra la incapacidad de los últimos para lograr los cambios a su favor ante las
luchas campesinas por la tierra, que abarcaron los años 1948–1964. Cuando el gobierno militar
dictó la ley de Reforma Agraria de 1969, sólo asestó el golpe final a este sistema de propiedad de
la tierra.

2. La modernización urbana El deterioro de las condiciones de vida en el campo, significó también


la expulsión de importantes contingentes rurales, que comenzaron a migrar a las ciudades

En Puno, el proceso de urbanización fue particularmente incidente en las ciudades de Puno y,


sobre todo, Juliaca, que tenía 30,890 habitantes en 1960, 87,651 en 1981 y en el 2000 contaba
con 214,058 habitantes

Los movimientos guerrilleros en el Perú en la década de 1960 surgieron a raíz del problema
agrario y campesino expresado en las movilizaciones campesinas antilatifundistas, especialmente
las del sur andino. Las guerrillas de los años 60 no lograron convertirse en el brazo armado del
movimiento campesino pues políticamente, eran bastante débiles, ni habían logrado comprender
la complejidad de las áreas rurales y urbanas, ni contaban con un modelo de gobierno viable. En
el plano militar, no pudieron enfrentar con éxito la ofensiva policial y de las fuerzas armadas y
demostraron escasa capacidad de influencia en las poblaciones locales.

El 24 de junio de 1969, el gobierno de la Fuerza Armada promulgó la Ley de Reforma Agraria, que
sí expropió los complejos agroindustriales, iniciando con ello un proceso de cambios radicales. La
extensión máxima de las propiedades se estableció en 150 has. en la costa, 1 500 en las haciendas
ganaderas, y de 15 a 55 has. en la sierra y ceja de selva. Se establecieron asimismo diferentes
formas de propiedad cooperativa y asociativa, donde destacaban las Cooperativas Agrarias de
Producción (CAPs), formadas sobre la base de los complejos agroindustriales de la costa; las
Sociedades Agrícolas de Interés Social (SAIS), integradas por los trabajadores de los antiguos
latifundios y comunidades dedicadas a la agricultura y la ganadería; los Grupos Campesinos, para
beneficiar a asalariados; y las Comunidades Campesinas, reestructuradas para participar de los
beneficios de la Ley de Reforma Agraria.

Puno. Porcentaje de tierras poseídas según tipo de organización Puno Individual 777 71 346 4%
CAP 14 6 417 486 639 25% CC 77 11 314 47 413 2% SAIS 23 12 877 1 004 937 52% Empresas
propiedad social 5 736 221 877 11% GC 39 1 011 105 691 5% 158 33 132 1 937 903 100% Como
vemos, más del 60% de la tierra quedó en manos de grandes empresas, sobre todo SAIS, por ello,
a pesar de que la estructura tradicional desapareció violentamente en el campo puneño y la clase
terrateniente como clase social casi se diluyó social y políticamente, no se resolvió la
contradicción principal entre gran propiedad y comunidades campesinas. La gran propiedad
terrateniente fue reemplazada por las grandes empresas asociativas. Se produjo una nueva
concentración de la propiedad de la tierra: en 1969 había 950 grandes propietarios y 1,000
propietarios medianos, que poseían en total casi 3'000,000 has.; para 1980, 100 empresas
reformadas poseían más de 1'800,000 has.

3.2. ZONIFICACIÓN DE LA VIOLENCIA 1.3.2.1. ZONA I: PUNO EL PROCESO DEL


CONFLICTO ARMADO INTERNO en el norte del departamento de Puno, región
predominantemente quechua, está vinculado a la crisis del sistema asociativo creado por la
reforma agraria y a la lucha por la reestructuración democrática de la propiedad de la tierra, en
cuyo conflicto se vieron involucrados diversos actores políticos y sociales (PCP–PCP-SL, las Fuerzas
Armadas y Policiales, la Iglesia Sur Andina, las organizaciones campesinas, el gobierno, las
empresas asociativas y los partidos políticos). La característica más importante, entonces, que la
hace diferenciable de otras zonas es el entrecruzamiento del proceso del conflicto armado interno
con el viejo conflicto por la tierra, la presencia de los rezagos del poder terrateniente, y la
desigualdad social y étnica. Otra característica es, a diferencia del caso del Cuzco, que en esta
región los centros de poder se encuentran fragmentados: el centro político en la ciudad de Puno,
el centro comercial en la ciudad de Juliaca y el centro económico en las provincias productoras de
lana (Melgar, Azángaro y Huancané), cada una con características sociales y culturales propias, y
en constante competencia entre sí. La presencia del PCP–PCP-SL en algunos gremios sindicales y
populares también fue importante. Asimismo, estas ciudades también se constituyeron en
fuentes de aprovisionamiento y apoyo a las actividades subversivas en otras regiones del
departamento. En el sur del departamento de Puno (provincias de El Collao, Chucuito y Yunguyo),
se iniciaron las actividades subversivas. La región tiene una fuerte presencia de comunidades
campesinas, con una población campesina predominantemente aymara. A diferencia de las
provincias del norte, la presencia de empresas asociativas producto de la reforma agraria del
general Velasco no fue significativa.

REESTRUCTURACIÓN DE LAS EMPRESAS ASOCIATIVAS DE PUNO


Fuente: Ministerio de Agricultura, Puno 1985-enero 1993

CUADRO 11. DISTRIBUCIÓN DE TIERRAS POR LA REFORMA AGRARIA DESPUÉS DE LA REESTRUCTURACIÓN

Fuente: Elaborado por la autora a partir del cuadro precedente y de datos en V. Caballero 1991:141.

CUADRO 13. NUEVO ESTADO DE LA SITUACIÓN DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN PUNO (1994)

Fuente: III Censo Nacional Agropecuario-1994.


El Perú después de 15 años de violencia (1980-1995)

RODRIGO MONTOYA ROJAS

Grandes olas de desplazados en el Perú


Si nos detenemos un momento para mirar la historia del Perú a partir del problema de
los desplazados de la guerra, es posible constatar que el territorio peruano conoce
desplazados desde hace mucho tiempo y por esa larga tradición no es exagerado decir
que el Perú es una fábrica de desplazados. Un recuento breve condensa este proceso en
cinco grandes momentos:
• Momento 1. Desplazados por vencidos en tiempos de los Incas. Antes de la invasión
europea, los incas trasladaron compulsivamente a decenas de miles de familias de etnias
vencidas para restarles fuerza en sus lugares de origen, para evitar que resistan y se
rebelen, para poblar otras zonas. Los yana (palabra quechua) fueron estos hombres y
mujeres condenados al desarraigo y a la nostalgia.
• Momento 2. Desplazados por vencidos en tiempos de los conquistadores españoles. Por
las mismas razones que los incas, la monarquía española a través del virrey Toledo ordenó
el masivo y compulsivo desplazamiento de millares de familias en las llamadas
reducciones de indígenas. La sola palabra reducción revela la manipulación de la
población vencida. 296 ESTUDOS AVANÇADOS 11 (29), 1997 • Momento 3. Desplazados
por ser los únicos capaces de sobrevivir en el monte. Entre 1880 y 1930 decenas de miles
de indígenas de los grupos étnicos de la selva fueron llevados a miles de kilómetros por
los caucheros, porque sólo ellos conocían la shiringa, el arbol del caucho, porque sólo
ellos podían resistir a el trabajo en medio del monte. Los esclavizaron y los llevaron
atados. Cuando el caucho se agotó, los desplazados no pudieron volver a sus zonas de
origen. Hoy, en 1993, por ejemplo, quedan en las riberas del río Madre De Dios – en la
frontera con Bolivia – los descendientes de los quichuas del alto Napo ecuatoriano y
peruano, que fueron llevados hasta allí en 1911, a más de dos mil kilómetros de distancia,
navegando seis meses por los ríos de la amazonía.
• Momento 4. Desplazados por pobres (1940-1993). En 1940 el Perú tenía seis millones
de habitantes, hoy tiene 22 millones. En el mismo período, los recursos y la frontera
agrícola no han crecido en la misma proporción. El resultado es un proceso migratorio
muy intenso. La insuficiencia de la tierra agropecuaria disponible, la falta de fuentes de
trabajo, la necesidad de estudiar para defenderse, el crecimiento demográfico, y los
avances de la medicina, son las razones principales que explican la llegada de migrantes
que las zonas deprimidas exportan a Lima y otras grandes ciudades. En Lima los
provincianos representan el 75% de sus 6.4 millones de habitantes. Conviene agregar que
este período de desplazamiento por pobres continúa hoy y se mantendrá si es que los
problemas de fondo no se resuelven. La violencia política de los últimos 13 años ha
precipitado y multiplicado la salida de estos pobres del campo.
• Momento 5. Desplazados por pobres y por huir de una guerra inaceptable. Son los
llamados desplazados de la guerra en los últimos diez años 1983-1993. Antes de huir,
eran ya potenciales desplazados debido a su pobreza. El fuego cruzado ha precipitado una
decisión que habrían podido tomar más tarde porque ninguno de los tres gobiernos en los
últimos 13 años tiene una propuesta de desarrollo para el campo andino, selvático y
costeño.
Ya no es posible, felizmente, que desde el poder pueda obligarse a los pobladores a
abandonar sus lugares de origen para poblar otras zonas, como en los momentos un e
dos, ya descritos. El regreso sólo puede ser voluntario y, para que se produzca de modo
natural, sólo hace falta una condición indispensable: que en los Andes, en la costa y en la
Amazonia hayan fuentes de trabajo y esperanzas de una vida mejor.

Un perfil ideológico-partidario: la sustitución de la realidad por la ideología. Desde el


inicio de la República, las instituciones políticas peruanas nacieron desconociendo la realidad
cultural, social y económica que debía sustentarlas. Carentes de ciudadanía, en una sociedad
fundamentalmente rural y analfabeta se imaginaron las “constituciones imposibles”, se adoptó el
presidencialismo nacido en los Estados Unidos de América y se configuró un régimen político cuya
hibridez, después de casi dos siglos, sigue siendo parte de la tradición política peruana.

Se puede decir “técnicamente” que Sendero era un partido de cuadros, militarizado, que en su
nacimiento y desarrollo tuvo un rol fundamental la Universidad de Huamanga, que el contingente
inicial con el que inicia la lucha armada estaba principalmente conformado por estudiantes, que
Ayacucho era una región muy pobre, etc. Pero comprender esa realidad solo será posible si nos
acercamos a su ideología, a la naturaleza fundamentalista de sus ideas y desde allí a su
concepción del partido (“el partido es todo”), y a la importancia central de la violencia como el
instrumento privilegiado para la construcción de la nueva sociedad. Ese núcleo ideológico fue
eficazmente transmitido a sus militantes, a quienes desde muy temprano se les educó para
“desdramatizar la violencia” y, de este modo, despojar a la lucha política del respeto por la vida y
las personas, no se diga ya de las organizaciones populares en las que nunca confiaron y a las que
siempre infiltraron, debilitaron y amenazaron formando organizaciones paralelas.
XIV ANIVERSARIO
ASOCIACION REGIONAL
DESPLAZADOS PUNO-ARDIRP

16 AÑOS DE LA PROMULGACION DE LA Ley N° 28592-PIR


PLAN INTEGRAL DE REPARACIONES

17 AÑOS DEL INFORME FINAL


COMISION DE LA VERDAD Y RECONCILIACION

17 AÑOS DE LA PROMULGACION DE LA LEY N° 28223


LEY SOBRE LOS DESPLAZAMIENTOS INTERNOS

23 AÑOS DE LA INTENSIFICACIÓN DE LA PROMOCIÓN Y EL FOMENTO DE LOS DERECHOS


HUMANOS Y LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES, EN PARTICULAR LA CUESTIÓN DEL PROGRAMA Y
LOS MÉTODOS DE TRABAJO DE LA COMISIÓN DERECHOS HUMANOS, ÉXODOS EN MASA Y
PERSONAS DESPLAZADAS Informe del Representante del Secretario General, Sr. Francis M. Deng,
presentado con arreglo a la resolución 1997/39 de la Comisión de Derechos Humanos
Adición.- PRINCIPIOS RECTORES DE LOS DESPLAZAMIENTOS INTERNOS

También podría gustarte