LAS VIDAS NO VIVIDAS

Querría escribir una historia

con capítulos no vividos,
palabras extraviadas,
momentos que no llegaron,
decisiones incompletas.
Podría llenar un libro
con habrías que no fueron,
propósitos perdidos,
anhelos encerrados
en la prisión
que los tímidos
llevamos dentro.
Tendría también,
mi relato,
sueños recurrentes,
que no sé
si son promesa,
juego
o pesadilla.
Entre la memoria y la fábula
iría volcando en las páginas
del cuaderno inexistente
desenlaces alternativos.
Pero la vida es la que es.
Y de nada sirve
perderse
en el laberinto
de los mundos paralelos.

José María Rodríguez Olaizola, SJ

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