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1.

Después de leer el texto: Prometeo y Pandora, realice las siguientes actividades

a. Establecer la diferencia de actitud entre Zeus y Prometeo, con respecto a los hombres.

b. ¿Qué motivos tenia Zeus para adoptar esa actitud en contra de los hombres?
c. ¿Qué necesidades logró satisfacer el hombre con la ayuda de Prometeo?

d. Establecer unos puntos de comparación entre Zeus, el dios griego con el Dios supremo del
cristianismo (Jehová).
e. ¿En qué idea se basaba Prometeo para creer que el hombre no desafiaría a los dioses?
f. En la lectura aparecen dos relatos protagonizados por dos personajes diferentes: ¿Qué relación existe
entre los dos relatos? (el relato de Prometeo y el de Pandora)
g. ¿Qué características tenía Pandora y cómo las había obtenido?
h. De los hechos presentados ¿Cuáles son fantásticos y cuáles podrían ser reales?
i. ¿Qué clase de lugar sería el Olimpo? ¿Con qué otro espacio se podría comparar hoy?
j. ¿Con qué finalidad, Zeus envió a Pandora a la tierra?

2: En las acciones aparecen varios dioses griegos. Teniendo en cuenta el significado general de la
lectura, establezca la función de cada dios y únalo con una flecha.
Zeus diosa de las guerras y labores femeninas
Cronos dios herrero modelista de armas y otras herramientas
Prometeo dios supremo del Olimpo
Hefestos dios alado y muy astuto mensajero de los dioses
Atenea titán dios del tiempo que devoraba a sus hijos
Hermes diosa del amor y la belleza
Afrodita titán gigante que entregó el fuego a los hombres

3: Plantear un punto de vista a cerca de los siguientes interrogantes:


a. En la lectura se da una explicación al origen y desarrollo del género humano. ¿Conoce otras
creencias semejantes? Redactarlas en mínimo un párrafo.
b. Prometeo creía que si al ser humano se le amaba y se le daba buenas enseñanzas, éste jamás
desafiaría a los dioses. ¿Considera que estas dos condiciones son suficientes para lograr la buena
formación de una persona?
c. Prometeo es símbolo de amor, entrega y sacrificio por el género humano ¿Qué otros personajes
históricos han luchado y padecido por el bien de la humanidad? Mínimo tres ejemplos y explicar la
respuesta
d. En el cofre de Pandora también estaba la esperanza ¿Qué sentido tiene para usted la esperanza?
¿Está de acuerdo con que la esperanza pueda ser la única manera de sobrevivir en este mundo hostil?

4. Completar la idea teniendo en cuenta el aspecto literario. Según el tema tratado, el texto se puede
clasificar como:

A * Historia *leyenda * cuento *fábula * mito. Explicar la respuesta.


b. La forma de expresión predominante es:

* Descripción * narración *exposición * diálogo


c. Escoger algunas frases en las cuales encuentre epítetos, (adjetivos calificativos) copiarlas,
subrayarlas y señalar a quién o a qué sujeto están caracterizando. Ejemplo: uno de los viejos dioses.
Se refiere al dios Prometeo.
d. En la mitología griega, cronos el dios del tiempo, devoraba a sus hijos ¿Qué explicación cree que
quisieron dar los griegos a través de esta metáfora?

5. De las palabras griegas se han derivado varias palabras del español. Veamos:
a. Crono (tiempo) cronometro, crónica, cronista crónico. Buscar en el diccionario el significado de
estas palabras y señalar su relación con tiempo.
b. Según la lectura los titanes pertenecieron a los viejos dioses, o sea a la primera generación. Eran
gigantes dotados de mucha fuerza.
¿Qué significado tiene entonces, la frase empleada a menudo: Es una labor titánica?
c. Del nombre afrodita diosa del amor y la belleza se ha derivado la palabra afrodisiaco
Escribir dos oraciones en las cuales empleen el término afrodisiaco.

6. A Pandora le fueron concedidos varios dones por parte de diferentes dioses. Así, ella adquirió
cualidades especiales. Por ejemplo al darle belleza (nombre) se convirtió en bella (adjetivo)
A cada uno de los siguientes nombres escribirle, el adjetivo correspondiente. Tener en cuenta el
ejemplo anterior.
a. astucia e. felicidad

b. atracción f. bondad

c. curiosidad g. egoísmo

d. engaño h. temor

7. En las siguientes oraciones, identificar el sujeto, el verbo y el complemento con sus respectivos
núcleos.
a . El hombre hizo rápidos progresos con ayuda de Prometeo.

b. Un águila feroz se alimentaba todos los días con su hígado.

c. Su hijo Hefestos modeló una muchacha con una mezcla de arcilla y agua.

d. La vida sería una lucha constante contra dificultades de todo género.

e. La esperanza daba una razón para seguir viviendo.

8. De la lectura extraer un ejemplo de las siguientes clases de oraciones, según la actitud del hablante:
afirmativa, interrogativa, exclamativa.

9. Establezca algunas relaciones y diferencias entre el Génesis cristiano-mito de la creación- y el texto


de Prometeo y Pandora.
10: Escribir un comentario en mínimo dos párrafos en el cual exprese su opinión sobre el texto, ya sea
positiva o negativamente.
11. Escribir los sinónimos de: vida, rápidos, dioses, engaño.
12. Determinar los antónimos de: feroz, desobedeció, sonrió, ayuda

¡ÉXITOS!
PROMETEO Y PANDORA

Según los primeros griegos, los creadores del hombre fueron Zeus y Prometeo. Prometeo era un Titán,
uno de los viejos dioses que habían ayudado a Zeus en su lucha contra Cronos. Fue Prometeo el que
modeló a los primeros hombres de barro, concediéndoles la posición recta para que mirasen a los
dioses. Zeus les dio el soplo de vida.

Los primeros hombres eran aún seres primitivos que vivían de lo que podían matar con sus arcos de
madera, sus hachas de cuerno y sus cuchillos, y de las escasas cosechas que lograban hacer crecer. No
conocían el fuego, así que comían la carne cruda y se envolvían en gruesas pieles para abrigarse del
frío. Eran incapaces de hacer vasijas o escudillas y no sabían trabajar los metales para procurarse
herramientas útiles y armas.

Zeus estaba contento de que vivieran en aquel estado, porque temía que alguno pudiera crecer lo
suficiente como para rivalizar con él. Pero Prometeo había aprendido a amar al género humano y sabía
que con su ayuda los hombres podían progresar. Él y Zeus habían creado a la raza humana, no a unos
animales cualquiera.

-Hay que enseñarles el secreto del fuego, dijo Prometeo a Zeus, si no, serán siempre como niños
inermes. Hay que terminar lo que hemos empezado.

-Son felices con lo que tienen, respondió Zeus. ¿Para qué preocuparnos?

Prometeo comprendió que no conseguiría convencer a Zeus y entonces subió secretamente al Olimpo,
donde ardía el fuego día y noche, y encendió una tea. Con ella prendió un pedazo de carbón vegetal
hasta convertirlo en un tizón, lo escondió entre los tallos de una planta de hinojo y se lo llevó a los
hombres.

Aquel primer tizón proporcionaba el fuego a los hombres y Prometeo les enseñó a utilizarlo. También
los ayudó de otros modos. Por ejemplo, cuando se hacían sacrificios, la parte mejor del animal
sacrificado iba siempre destinada a los dioses y la peor, a los hombres. Valiéndose de un engaño,
Prometeo aseguró a los hombres una parte más adecuada. Dividió la carne de un buey en dos
montones: uno, el más aparatoso, no contenía más que huesos mondos cubiertos de grasa; el otro, la
carne mejor. Zeus escogió el primero, y al verse engañado de ese modo, se encerró en un irritado
silencio.

Con ayuda de Prometeo el hombre hizo rápidos progresos. Aprendió a modelar vasijas y escudillas, a
construir casas con bloques de arcilla cocida y con el tejado de ladrillos en vez de trenzado de cañas.
Aprendió a trabajar el metal para defenderse y cazar. Pero una noche en que Zeus estaba mirando
desde el cielo, vio un fuego que ardía en la tierra y comprendió que había sido engañado. Mandó
llamar a Prometeo.

-¿No te prohibí que dieras a conocer al hombre el secreto del fuego?, preguntó. Dicen que eres sabio;
pero, ¿no comprendes que con tu ayuda algún día el hombre desafiará a los dioses?

-No tiene por qué suceder, si lo amamos y le damos buenas enseñanzas, respondió Prometeo. Pero
Zeus se enfureció sobremanera y no quiso oír más explicaciones.
Ordenó que Prometeo fuese llevado a las montañas del este y encadenado a una roca. Un águila feroz
se alimentaba todos los días con su hígado, y el hígado volvía a crecerle durante la noche para que la
tortura pudiera empezar otra vez. Pasaron muchos años antes de que Prometeo fuera liberado: hay
quien dice que treinta mil, y no está claro cómo sucedió. Según una leyenda fue rescatado por el
poderoso Hércules.
De todos modos, Zeus no había quedado satisfecho con su venganza e hizo sufrir todavía más al
género humano. Por voluntad suya, su hijo Hefesto modeló una muchacha con una mezcla de arcilla y
agua. Atenea le infundió el soplo de la vida y la instruyó en las artes femeninas de la costura y la
cocina; Hermes, el dios alado, le enseñó la astucia y el engaño; y Afrodita le mostró cómo conseguir
que todos los hombres la desearan. Otras diosas la vistieron de Plata y le ciñeron la cabeza con una
guirnalda de flores; luego la llevaron ante la presencia de Zeus.

-Toma este cofrecito, le dijo, entregándole una cajita de cobre bruñido. Es tuyo, llévalo siempre
contigo, pero no lo abras por nada del mundo. No me preguntes la razón y sé feliz, ya que los dioses te
han dado lo que todas las mujeres desean. Pandora, que así se llamaba la muchacha, sonrió. Pensaba
que el cofrecito estaría lleno de joyas y piedras preciosas.

-Ahora tenemos que encontrarte un marido que te ame, y yo conozco al hombre adecuado: Epimeteo.
Él te hará feliz.

Epimeteo era hermano de Prometeo, pero le faltaba toda la prudencia de su hermano. Prometeo le
había advertido que no aceptara ningún regalo de Zeus, pero él, un poco halagado y quizá temeroso de
rechazarle, aceptó a Pandora como esposa.

Hermes acompañó a la muchacha hasta la casa del flamante marido en el mundo de los hombres.
-Bueno, amigo Epimeteo- le dijo- no olvides que Pandora tiene un estuche que no debe abrir por
ningún motivo. Epimeteo tomó el estuche y lo colocó en sitio seguro.

Al principio, Pandora fue feliz viviendo con su esposo y se olvidó el estuche; más tarde, empezó a
inquietarla el gusanillo de la curiosidad. -¿Por qué no podemos ver al menos lo que contiene?- dijo un
día Pandora a su marido. Luego, mientras Epimeteo dormía, abrió el cofrecito y, rápidos como el
viento, salieron todos los males que desde entonces nos afligen: el cansancio, la pobreza, la vejez, la
enfermedad, los celos, el vicio, las pasiones, la suspicacia... Desesperada, Pandora intentó cerrar el
cofrecito, pero era demasiado tarde. Su contenido se había desparramado por todas partes.

La venganza de Zeus se había realizado: la raza humana no podía ser noble como había querido
Prometeo. La vida sería una lucha constante contra dificultades de todo género. Había pocas
probabilidades de que el hombre pudiera aspirar al trono de Zeus.

Pero el triunfo del rey de los dioses no era completo. Una cosita de nada había quedado en el fondo del
estuche y Pandora consiguió encerrarla. Era la esperanza. Con ella el género humano había encontrado
la manera de sobrevivir en este mundo hostil. La esperanza les daba una razón para seguir viviendo.

Tomado de Dioses y héroes de la mitología griega. Ed. Anaya.

Para grado 11. Promoción 2017.

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