Está en la página 1de 32

FUNDAMENTOS DE ACOSO ESCOLAR

El acoso escolar (también conocido como hostigamiento escolar, matonaje


escolar, matoneo escolar, maltrato escolar o en inglés bullying) es cualquier forma
de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma
reiterada a lo largo de un tiempo determinado tanto en el aula, como a través de
las redes sociales, con el nombre específico de ciberacoso. Estadísticamente, el
tipo de violencia dominante es el emocional y se da mayoritariamente en el aula y
patio de los centros escolares. Los protagonistas de los casos de acoso escolar
suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la adolescencia, siendo
ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas.
El acoso escolar es una forma característica y extrema de violencia escolar.
El acoso escolar es una especie de tortura, metódica y sistemática, en la que el
agresor sume a la víctima, a menudo con el silencio, la indiferencia o la
complicidad de otros compañeros.
Este tipo de violencia escolar se caracteriza, por tanto, por una reiteración
encaminada a conseguir la intimidación de la víctima, implicando un abuso de
poder en tanto que es ejercida por un agresor más fuerte (ya sea esta fortaleza
real o percibida subjetivamente) que aquella. El sujeto maltratado queda, así,
expuesto física y emocionalmente ante el sujeto maltratador, generándose como
consecuencia una serie de secuelas psicológicas (aunque estas no formen parte
del diagnóstico); es común que el acosado viva aterrorizado con la idea de asistir
a la escuela y que se muestre muy nervioso, triste y solitario en su vida cotidiana.
En algunos casos, la dureza de la situación puede acarrear pensamientos sobre
el suicidio e incluso su materialización, consecuencias propias del hostigamiento
hacia las personas sin límite de edad.
Suelen ser más propensos al acoso escolar aquellos niños que poseen diversidad
funcional, entre las cuales se pueden contar el síndrome de Down,
el autismo, síndrome de Asperger.

Tipos de acoso escolar:


Los profesores Iñaki Piñuel y Zabala y Araceli Oñate han descrito hasta 8
modalidades de acoso escolar, con la siguiente incidencia entre las víctimas:

1. Bloqueo social (29,3%)


2. Hostigamiento (20,9%)
3. Manipulación (19,9%)
4. Coacciones (17,4%)
5. Exclusión social (16,0%)
6. Intimidación (14,2%)
7. Agresiones (12,8%)
8. Amenazas (9,3%)
Bloqueo social
Agrupa las acciones de acoso escolar que buscan bloquear socialmente a la
víctima. Todas ellas buscan el social y su marginación impuesta por estas
conductas de bloqueo.
Son ejemplos las prohibiciones de jugar en un grupo, de hablar o comunicar con
otros, o de que nadie hable o se relacione con él, pues son indicadores que
apuntan un intento por parte de otros de quebrar la red social de apoyos del niño.
Se incluye dentro de este grupo de acciones el meterse con la víctima para
hacerle llorar. Esta conducta busca presentar al niño socialmente, entre el grupo
de iguales, como alguien flojo, indigno, débil, indefenso, estúpido, llorica, etc. El
hacer llorar al niño desencadena socialmente en su entorno un fenómeno
de estigmatización secundaria conocido como mecanismo de chivo expiatorio. De
todas las modalidades de acoso escolar es la más difícil de combatir en la medida
que es una actuación muy frecuentemente invisible y que no deja huella. El propio
niño no identifica más que el hecho de que nadie le habla o de que nadie quiere
estar con él o de que los demás le excluyen sistemáticamente de los juegos.
Hostigamiento
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que consisten en acciones de
hostigamiento y acoso psicológico que manifiestan desprecio, falta de respeto y
desconsideración por la dignidad del afectado. El desprecio, el odio, la
ridiculización, la burla, el menosprecio, los motes, la crueldad, la manifestación
gestual del desprecio, la imitación burlesca son los indicadores de esta escala.
Manipulación social
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden distorsionar la imagen
social del niño y “envenenar” a otros contra él. Con ellas se trata de presentar una
imagen negativa, distorsionada y cargada negativamente sobre la víctima. Se
cargan las tintas contra todo cuanto hace o dice la víctima, o contra todo lo que no
ha dicho ni ha hecho. No importa lo que haga, todo es utilizado y sirve para inducir
el rechazo de otros. A causa de esta manipulación de la imagen social de la
víctima acosada, muchos otros niños se suman al grupo de acoso de manera
involuntaria, percibiendo que el acosado merece el acoso que recibe, incurriendo
en un mecanismo denominado “error básico de atribución”.
Coacción
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden que la víctima realice
acciones contra su voluntad. Mediante estas conductas quienes acosan al niño
pretenden ejercer un dominio y un sometimiento total de su voluntad.
El que la víctima haga esas cosas contra su voluntad proporciona a los que
fuerzan o tuercen esa voluntad diferentes beneficios, pero sobre todo poder social.
Los que acosan son percibidos como poderosos, sobre todo, por los demás que
presencian el doblegamiento de la víctima. Con frecuencia las coacciones implican
que el niño sea víctima de vejaciones, abusos o conductas sexuales no deseadas
que debe silenciar por miedo a las represalias sobre sí o sobre sus hermanos.
Exclusión social
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan excluir de la participación al
niño acosado. El “tú no”, es el centro de estas conductas con las que el grupo que
acosa segrega socialmente al niño. Al ningunearlo, tratarlo como si no existiera,
aislarlo, impedir su expresión, impedir su participación en juegos, se produce el
vacío social en su entorno.
Intimidación
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que persiguen amilanar, amedrentar,
apocar o consumir emocionalmente al niño mediante una acción intimidatoria. Con
ellas quienes acosan buscan inducir el miedo en el niño. Sus indicadores son
acciones de intimidación, amenaza, hostigamiento físico intimidatorio, acoso a la
salida del centro escolar.
Amenaza a la integridad
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan amilanar mediante las
amenazas contra la integridad física del niño o de su familia, o mediante la
extorsión.

Causas de acoso escolar


Aunque el acosador escolar no tiene por qué padecer ninguna enfermedad mental
o trastorno de la personalidad grave, presenta normalmente algún tipo
de psicopatología. Fundamentalmente, presenta ausencia de empatía y algún tipo
de cognitiva, y generalmente suele ser una persona que ha visto violencia con
regularidad, se acostumbra a ella o en su casa sus acudientes se tratan
agresivamente y lo tratan inadecuadamente a él.
La carencia de empatía explica su incapacidad para ponerse en el lugar del
acosado y ser insensible al sufrimiento de este y que puede llegar al suicidio.
El entorno escolar
Se puede dar el caso de que la ausencia en clase (o, en general, en el centro educativo) de un
clima adecuado de convivencia pueda favorecer la aparición del acoso escolar. La
responsabilidad al respecto oscila entre la figura de unos profesores que no han recibido una
formación específica en cuestiones de intermediación en situaciones escolares conflictiva, y la
disminución de su perfil de autoridad dentro de la sociedad actual.

Evolución de los casos de acoso escolar


El objetivo de la práctica del acoso escolar es intimidar, apocar, reducir, someter,
aplanar, amedrentar y consumir, emocional e intelectualmente, a la víctima, con
vistas a obtener algún resultado favorable para quienes acosan o satisfacer una
necesidad imperiosa de dominar, someter, agredir, y destruir a los demás que
pueden presentar los acosadores como un patrón predominante de relación
social con los demás.
En ocasiones, el niño que desarrolla conductas de hostigamiento hacia otros
buscas, mediante el método de «ensayo-error», obtener el reconocimiento y la
atención de los demás, de los que carece, llegando a aprender un modelo de
relación basado en la exclusión y el menosprecio de otros.
Con mucha frecuencia el niño o niña que acosa a otro compañero suele estar
rodeado muy rápidamente de una banda o grupo de acosadores que se suman de
manera unánime y gregaria al comportamiento de hostigamiento contra la víctima.
Ello es debido a la falta de una autoridad exterior (por ejemplo, un profesor, un
familiar, etc.) que imponga límites a este tipo de conductas, proyectando el
acosador principal una imagen de líder sobre el resto de sus iguales seguidores.
A menudo la violencia encuentra una forma de canalizarse socialmente,
materializándose en un mecanismo conocido de regulación de grupos en crisis: el
mecanismo del chivo expiatorio. Destruir al que no es seguidor, al que se resiste,
al diferente, al que sobresale académicamente, al imbuido de férreos principios
morales, etc.

Consecuencias del acoso escolar


El acoso escolar al igual que otras formas de maltrato psicológico produce
secuelas biológicas (expresión de genes) y mentales. Especialistas del Centro de
Estudios sobre el Estrés Humano (CSHS) del Hospital Louis-H. Lafontaine de
Canadá sugieren que las víctimas acosadas son más vulnerables a padecer
problemas mentales como trastorno por estrés postraumático,5 depresión y
trastornos del ánimo a medida que envejecen.

Acoso escolar homofóbico


El acoso escolar homofóbico o gay bashing se refiere a cualquier clase de daños
hacia las personas, tanto, psicológico, físico y moral por tener o aparentar tener
una orientación sexual diferente. Obstáculos y aislaciones definen la violencia
escolar, - Ángela Gabàs Gasa afirma en “El fenómeno de la exclusión social” “los
obstáculos que encuentran determinadas personas para participar plenamente en
la vida social, viéndose privadas de alguna o varias de las opciones consideradas
como fundamentales para su desarrollo humano”.
Prevención
Se estima que la intervención simultánea sobre factores individuales, familiares y
socioculturales, es la única vía posible de prevención del acoso escolar. La
prevención se puede realizar en distintos niveles.
Una prevención primaria sería responsabilidad de los padres (apuesta por una
educación democrática y no autoritaria), de la sociedad en conjunto y de los
medios de comunicación (en forma de autorregulación respecto de determinados
contenidos).
Una prevención secundaria sería las medidas concretas sobre la población de
riesgo, esto es, los adolescentes (fundamentalmente, promover un cambio de
mentalidad respecto a la necesidad de denuncia de los casos de acoso escolar,
aunque no sean víctimas de ellos), y sobre la población directamente vinculada a
esta, el profesorado (en forma de formación en habilidades adecuadas para la
prevención y resolución de conflictos escolares).
Por último, una prevención terciaria serían las medidas de ayuda a los
protagonistas de los casos de acoso escolar.
La ayuda se puede agrupar en información para padres, profesores y alumnos.

Tipos de acoso escolar

El artículo de hoy es uno de los muchos artículos que a día de hoy aún tenía
pendiente. Seguramente todos coincidiréis conmigo al afirmar que el acoso
escolar -también conocido como bullying– es una auténtica lacra fuera y dentro de
nuestros centros educativos. No cabe duda de que toda la Comunidad Educativa
debe poner el máximo empeño en erradicarlo y nosotros los docentes debemos
adoptar un papel activo en ese proceso de erradicación.

Es por ello que el artículo de hoy tiene como finalidad establecer una clasificación
de lo que se entiende por acoso escolar. Como muchos de mis artículos, estos
cuatro puntos sólo son un punto de partida, pero creo que pueden resultar
tremendamente útiles si conseguimos que lleguen a nuestros alumnos y se den
cuenta de la importancia tanto de la prevención como de la detección de cualquier
actuación relacionada con el acoso escolar.

El artículo de hoy es uno de los muchos artículos que a día de hoy aún tenía
pendiente. Seguramente todos coincidiréis conmigo al afirmar que el acoso
escolar -también conocido como bullying– es una auténtica lacra fuera y dentro de
nuestros centros educativos. No cabe duda de que toda la Comunidad Educativa
debe poner el máximo empeño en erradicarlo y nosotros los docentes debemos
adoptar un papel activo en ese proceso de erradicación.

Es por ello que el artículo de hoy tiene como finalidad establecer una clasificación
de lo que se entiende por acoso escolar. Como muchos de mis artículos, estos
cuatro puntos sólo son un punto de partida, pero creo que pueden resultar
tremendamente útiles si conseguimos que lleguen a nuestros alumnos y se den
cuenta de la importancia tanto de la prevención como de la detección de cualquier
actuación relacionada con el acoso escolar.

Clasificación del acoso escolar en cuatro grandes grupos.

Acoso físico. Forma de acoso que se centra en la persecución ininterrumpida


hacia una persona con la que se pretende tener un contacto físico en contra de su
voluntad. Se trata de un tipo de acoso que puede producirse tanto dentro como
fuera de los centros educativos. Es un tipo de maltrato totalmente intencionado y
se se caracteriza por:

Acoso físico directo:

 Golpear
 Escupir
 Empujar
 Morder
 Arañar
 Tirar del pelo
 Dar un puntapié
 Dar una paliza
 …

Acoso físico indirecto:

 Espiar a un compañero
 Seguir a un compañero por el centro durante el tiempo de patio o entre
cambios de clases
 Escribir notas ofensivas y difamatoria
 Pintar su nombre en paredes y muros
 Robar o romper objetos de su propiedad
Se trata, en definitiva, de hacer la vida imposible a un compañero a través de lo
que se denomina el hostigamiento, es decir, atosigar a un compañero para
obtener la máxima información de él para usarla posteriormente en su contra.

Acoso verbal. Es un tipo de acoso tremendamente dañino para el alumno que lo


padece fuera y dentro de su centro escolar. Se centra principalmente en:

 Amenazar
 Burlar
 Insultar por razones de carácter religioso, de orientación sexual, política,
étnica, cultural…
 Poner motes y apodos con una clara connotación despectiva y ofensiva
 Resaltar defectos

Se trata de un tipo de acoso que, lamentablemente, se da con mucha frecuencia y


no siempre es fácil de detectar, porque en este tipo de acoso escolar no se
produce una agresión física, sino que el daño es moral y psicológico. Resulta muy
perjudicial para el alumno que lo padece porque afecta directamente a su
autoestima.

Acoso social. Este tipo de acoso escolar puede producirse fuera y dentro de los
centros educativos. Es un tipo de acoso que lo que pretende es dañar la
reputación de un alumno y separalo o marginarrlo de un grupo de amigos o
compañeros. En este tipo de acoso nos encontrmos con los siguientes supuestos:

 Dejar a un compañero de lado, es decir, dejar de contar con él para todo


 Influir en otros compañeros para que dejen al alumno de lado
 Propagar rumores sobre un alumno
 Avergonzar y ridiculizar a un alumno en público

Acoso cibernético. También denominado ciberbullying. Se trata de un tipo de


acoso escolar cada vez más común y más extendido dentro y fuera de la
Comunidad Educativa. A día de hoy, seguramente sea un de los tipos de acoso
más frecuentes y que más cuesta detectar, ya que suele producirse fuera del
horario lectivo, lo que dificulta el seguimiento por parte de los docentes y equipos
directivos. Este acoso escolar se caracteriza por hacer un mal uso de la
información telemática entre la que podemos distinguir:

 Correo electrónico
 Mensajería instantánea
 Redes sociales
 Blogs
 Mensajes de texto y mensajes multimedia
 Páginas web difamatorias

El acoso cibernético tiene una clara finalidad dañina y en muchas ocasiones es


difícil poder encontrar la fuente acosadora. También se cuenta con la dificultad de
que aún queda un largo camino por recorrer desde el punto de vista legislativo,
aunque este tipo de acoso puede constituir a día de hoy un delito penal.

Tal y como he dicho al principio de esta entrada, el artículo de hoy sólo quiere ser
un punto de partida para que los alumnos y docentes conozcamos y
reconozcamos qué tipos de acoso escolar pueden producirse en nuestro entorno.
En próximos artículos tengo la intención de profundizar en aspectos como
la prevención y la detección de un problema al que la Comunidad Educativa
debe poner todos los recursos que estén a su alcance para erradicarlo de las
aulas y de la sociedad.

Consecuencias y efectos

Las víctimas de acoso escolar pueden sufrir distintos efectos psicológicos


negativos. 
Una investigación realizada en 2014 en la la King’s College London descubrió que
los efectos psicológicos negativos que sufren las personas con bullying
permanecen durante 40 años después de haber sido víctima de acoso. 
Esto nos debe hacer reflexionar sobre el grave impacto psicológico del acoso en el
resto de la vida de la persona afectada, presentando peores indicadores de su
salud mental y física y un peor desempeño cognitivo respecto a los individuos que
no sufrieron acoso.
Veamos cuáles son los efectos negativos en la salud física y psíquica detectados
en víctimas de bullying.

1. Estrés

Las víctimas de acoso escolar presentan estrés no solo durante la época escolar
sino también años después. Esto se desprende de un estudio llevado a cabo en
la  Tufts University y que revela que las personas afectadas segregan más cortisol,
una hormona directamente implicada en la sensación de estrés. 
Esto explicaría buena parte de las consecuencias para la salud a largo plazo en
estas personas, por ejemplo la aparición de trastornos mentales, como señaló un
estudio de la Universidad Johns Hopkins.

2. Ansiedad y depresión
Otra investigación, en este caso de la  Universidad de Duke, detectó que las
víctimas de acoso tenían una mayor probabilidad de sufrir trastornos como
la agorafobia, el trastorno de ansiedad generalizado y las crisis de pánico.
También presentaban mayores tasas de depresión y de aislamiento social.

3. Somatizaciones

También pueden presentar trastornos psicosomáticos. Así se detectó en un


informe publicado por Randy y Lori Sansone en el año 2008.

4. Suicidio

En el mismo estudio realizado en Duke, se encontró una mayor probabilidad


de suicidios en estas personas. El primer caso de suicidio de una persona que
sufría bullying  fue el del joven español Jokin, que a sus 14 años decidió poner fin
a su vida después de llevar años sufriendo abusos y hostigamiento en su colegio
en la localidad de Hondarribia.

5. Problemas en la socialización y en el futuro laboral

Las víctimas de acoso en la escuela presentan, estadísticamente, peores


indicadores en lo que refiere a su calidad de vida familiar y en su capacidad
adquisitiva en su vida adulta. También pueden sufrir un peor desempeño en sus
habilidades sociales y comunicativas, tal como se indicó en este estudio de Claire
Fox y Michael Boulton publicado en la British Psychological Society.
Desintegración Familiar

La desintegración familiar constituye una modalidad de desintegración, la cual es


el rompimiento de la unidad o quiebra en los roles de sus integrantes, por su
incapacidad de desempeñarlos en forma consciente y obligatoria. Una
desintegración familiar es el producto del quebrantamiento de la unidad familiar y
la insatisfacción de las necesidades primarias que requieren sus miembros.
Los factores más comunes y que han contribuido a la ruptura familiar son de
diversa índole, en lo económico se encuentra la falta de empleo, la pobreza
extrema y el ocio; en lo afectivo, la falta de amor entre la pareja o cualquiera de
sus integrantes, los vicios y la desviación de costumbres; en lo cultural, la falta de
escolaridad, educación y buenos modales.
Los integrantes de una familia se ven obligados a buscar la forma de satisfacerse,
tomando a sí una posición individualista y, por ende deteriorando los lazos
afectivos y físicos que los une.
La desintegración familiar, representa uno de los fenómenos con mayor impacto
en la sociedad mexicana.
Dificultades de Convivencia o comunicación, provocadas principalmente por el
desconocimiento de la pareja, situación que se agrava si estos son de corta edad
y se unieron por un embarazo no deseado, lo cual desemboca en violencia física o
psicológica de parte de alguna de las parejas, abuso sexual u otro tipo de
atropellos por parte del hombre hacia la mujer o viceversa.
La mayoría de relaciones que sufren alguna de las causas de la desintegración
familiar presentan como consecuencias: El divorcio o la separación de la pareja,
Baja autoestima de uno o ambos miembros de esta, lo cual puede provocar
depresión, que en caso de no ser tratada puede desembocar en el suicidio de la
persona, La comunicación entre los padres, entre padres e hijos, así como entre
hermanos para evitar que los niños caigan en problemas como drogadicción o
pandillerismo.
La comunicación es vital para la convivencia humana y más aún cuando se trata
de una convivencia tan próxima y constante como es el matrimonio. Por eso es
que la comunicación de pareja es imprescindible. Sin embargo, esto resulta difícil
en la práctica, ya que el hombre o la mujer son muy distintos. Cada sexo tiene una
manera de ser y de pensar. La mujer, por lo general, es más sensible y el hombre
más frío, ella presta mucha atención a los detalles y él va al grano. A la hora de
platicar, estas diferencias se manifiestan, pero si se tomarían en cuenta estos
contrastes, sería más fácil comprender las reacciones y el comportamiento del
otro.
Al respecto, nadie puede negar que cada vez nos encontramos más inmersos
dentro de una sociedad en la que la comunicación esta obstaculizada. En un
futuro más o menos cercano, por no decir que ya nos encontramos en él.
La desintegración familiar proviene de muchos
f a c t o r e s ; l a m i s m a p o b r e z a h a c e q u e l o s p a d r e s t a l vez emigren a
otros países después de tanto tiempo puede que los padres; tanto el
padre como la madre e n g a ñ a n a s u p a r e j a y a l a v e z e n g a ñ a n d o
p a r t e d e una familia.
 

Formas de desintegración
Existen diversos tipos de desintegración, los cuales se muestran en los puntos siguientes:

•Abandono: Se da cuando alguno de los padres decide dejar el hogar, debido a que no se
siente feliz y tiene otras expectativas en la vida, o porque el ambiente está muy tenso,
predomina la discordia y no hay armonía, por lo cual no pueden seguir juntos y tampoco
por el supuesto bien de los hijos, ya que los daña mucho más.

•Divorcio: Se ha definido como el vínculo familiar que se rompe entre la pareja, ya sea por
decisión de alguno de ellos o por común acuerdo; para divorciarse d e b e n p r e s e n t a r
a n t e l a s a u t o r i d a d e s d e R e g i s t r o C i v i l , e n c a r g a d a s d e dictaminar en que
término se disolverá la unión y los derechos u obligaciones que cada uno de los padres
tendrá con los hijos, si hubiese.

•Abandono involuntario: Se da cuando alguno de los padres, por enfermedad o muerte


deja el hogar, es decir no es deseado y es inevitable. Los efectos causados en los niños
por este tipo de desintegración son diferentes a los de las otras formas; en los hijos
varones d e   s e i s   a   n u e v e   a ñ o s   d e   e d a d   l a m u e r t e d e s u
padre se le crea un
aspecto negativo mayor, pero de
m e n o r   i n t e n s i d a d   c o m p a r a d o s   a   l o s del divorcio o el abandono.

•Desintegración familiar estando la familia junta: Estos casos se caracterizan por las
relaciones conflictivas que establecen sus miembros, dando origen
ar e c e l o s ,   t e m o r e s   y   f r i c c i o n e s   p e r m a n e n t e s .   F r e c u e n t e m e n t e   e
s e   t i p o   d e familias son incapaces de planear y realizar tareas, y resolver los
problemas juntos; expresan conflictos extremos que no tienen la habilidad de comunicarse
con el resto de la familia, lo cual priva al niño de un ambienta
armonioso
yestable, brindándole una atmósfera hostil que obstaculizará su creci
m i e n t o psicológico.
es uno de los mayores problemas que existen en la actualidad en muchos países,
especialmente en los latinoamericanos. Es un problema social que desencadena
la aparición de otros problemas que afectan el desarrollo normal de la familia y de
la sociedad.

Causas de la desintegración familiar Las siguientes son algunas de las


principales causas por las cuales se produce la desintegración en la familia:

Migración a otra ciudad u otro país Abandono del hogar por parte de la madre o el
padre de familia Problemas con los suegros Alcoholismo o drogadicción
Infidelidades Situación económica (pobreza) Violencia intrafamiliar Muerte de uno
de los padres de familia
Efectos de la desintegración familiar
Así mismo la desintegración familiar puede provocar otros problemas sociales
como hemos mencionado anteriormente, y entre estos efectos podemos
mencionar: Hijos más propensos a caer en las garras de las drogas Conducta
violenta Incorporación de los hijos a grupos delictivos Falta de apoyo moral
Enfermedades personales Falta de una educación familiar de calidad Crianza de
los hijos por parte de otros familiares como abuelos.
Soluciones a la desintegración familiar
como la desintegración en la familia tiene causas y efectos, también tiene
soluciones que cada uno puede buscar. Entre estas soluciones están las
siguientes: Establecer una buena comunicación en la pareja Corregir y castigar
adecuadamente a los hijos cuando sea necesario Desarrollar valores familiares y
morales Buscar fuentes de trabajo cercanas a la familia Inculcar respeto a los hijos
y entre la pareja Solucionar todos sus problemas lo más rápido posible Mantener
fidelidad en la pareja.

Desintegración Familiar en Guatemala

La desintegración familiar, es un factor social que afecta cada día más a las
familias guatemaltecas; porque en la actualidad se ve marcado el porcentaje de
hogares desintegrados, que va incrementando cada año.
Los datos estadísticos del Registro Civil de Guatemala, determinan que existe un
aumento de divorcios de más de cien actas cada año.

En la sociedad guatemalteca en los últimos años, ha aumentado enormemente la


tasa de divorcios, la unidad de la familia se ve amenazada cada vez más, ya que
son muchos los hogares que se ven afectados por este problema que afecta a la
familia y principalmente a los hijos.
La desintegración familiar es un problema que no sólo afecta a la familia sino
también a toda la sociedad, ya que cuando una familia se desintegra se pierde la
armonía familiar, los padres buscan la manera de culpar a alguien por la
separación; y generalmente son los hijos los que se ven más afectados.
COMO INFLUYE LA FAMILIA EN LA EDUCACIÓN:

La familia es un factor muy importante en la educación, juega un papel muy


importante debido que es el primer lugar donde se forjan los principios morales de
una persona, ya que la familia es la primera escuela de un niño porque en las
primeras etapas de su vida el niño tiende a imitar la mayoría de cosas que hace su
familia.
A medida que el niño crece, el equilibrio psíquico de los progenitores y la armonía
de la pareja son la mejor garantía de una adaptación familiar bien logrados, los
hogares desintegrados y los que están aparentemente “Bien integrados “tienen
constantes disputas, ejerciendo estos efectos indeseables y de frialdad.
Cuando una familia se desintegra los hijos son los que sufren más porque ellos se
ven afectados en sus estudios, pues bajan sus notas debido a sus series de
problemas. 

Causas y consecuencias de desintegración familia:

  La desintegración familiar trae como consecuencia problemas que van desde la


delincuencia, violaciones, drogadicción, hasta la prostitución.
     La sociedad ha sido considerada como la unidad básica de la familia, por ser
una escuela de relaciones humanas y de estabilidad emocional.
     Según el religioso Héctor Del Castillo, del Tribunal Eclesiástico de la Iglesia
Católica, en este tiempo se ha impuesto un sistema económico que hace que los
miembros de la familia se separen más.
     “En estos tiempos se han privilegiado más los logros personales, provocando
que haya menos tiempo para la familia; incluso, llega a catalogarse como un
obstáculo para la realización personal o para acceder a bienes materiales.
     Ahora se ven familias desintegradas, monoparentales -de un solo padre y sus
hijos- jóvenes que no desean comprometerse en matrimonio porque ven que los
hijos se convierten en obstáculo”, comenta Del Castillo.

Consecuencias
    Existe desintegración familiar cada miembro se ve afectado, especialmente en
cuanto a pérdida de identidad y baja autoestima.
     “De estos dos se derivan el uso de drogas, amigos no adecuados, actividades
incorrectas, prostitución, problemas conductuales, desde pasividad hasta
agresividad, todo especialmente en niños y adolescentes que son los más
afectados.
Pues primero que nada es la falta de comunicación entre los miembros de la
misma. Para que una familia vaya bien deben estar en constante platica, para
saber cómo anda cada uno de los miembros de la familia.

Después vienen más factores como:

* El machismo. - Es cuando el padre quiere poner la autoridad en la casa. Muchas


veces llega a un punto en el que se convierte insoportable y esto hace que se
desintegre la familia.

*Adicción. - Una de las más terribles, ya que afecta a todos los miembros de la
familia. Aquí no solamente son rechazados por la familia, sino por toda la
sociedad.
*La emigración. - Es cuando se van en busca de una mejor vida. Esto pasa mucho
para el norte, cuando el padre se va a Estados Unidos, y deja a toda la familia en
el olvido (suele pasar en la mayoría de las veces).

*La religión.- También puede colaborar a la desintegración familiar cuando sus


miembros pertenecen a distintas denominaciones religiosas, lo cual puede llevar a
una ruptura matrimonial.

*Enfermedades incurables.- Pueden llevar a quien la padece a un aislamiento


voluntario o al aislamiento de sus familiares al tener poco conocimiento de dicha
enfermedad ejemplo el VIH-SIDA por considerar un potencial foco de infección
 
*La defunción. - De uno o ambos padres trae como consecuencia que los hijos
crecen sin un apoyo paternal, maternal o en el peor de los casos de ambos, lo que
traerá como consecuencias que los menores se incorporen a maras o sean
maltratados por otros parientes. · Los medios masivos de comunicación.

Pueden contribuir a convertir al individuo en un ser consumista, a alienarlo e


incitarlo a la violencia, al sexo, a las drogas, especialmente cuando no cuentan
con una asesoría responsable.
 
 
 
 
 

La mayor parte de las creencias y costumbres que conocen los niños la reciben de
sus padres, hermanos, parientes o de las personas que están en contacto con
ellos. Por naturaleza, la familia tiene mayor cohesión y por esos sus valores llegan
más profundamente a los hijos. Gran parte de los problemas familiares los
provocan una serie de causas como la falta de comunicación entre los padres y la
falta de respeto a los derechos que cada uno tiene como seres humanos, entre
otras cosas.

Generalmente es aceptable, que se piense que el aprovechamiento escolar es un


reflejo de la vida familiar; ya que cuando existe armonía y comunicación entre los
padres con los hijos, éstos tienen aspiraciones de superación y de seguir adelante
con sus estudios. Mientras que los que provienen de familias en donde las
problemáticas son grandes, los hijos generalmente se muestran agresivos y
apáticos hacia el mundo que les rodea y a la escuela. Para los hijos es muy
importante que sus padres demuestren atención, cariño y cuidado, pues de esta
manera se sentirán más interesados y tratarán de demostrar lo mismo a sus
padres.
Pero no todo es tan perfecto como se espera, existen muchas familias en un
estado o proceso de desintegración que no logran mantener un equilibrio
emocional en sus miembros provocando diversas reacciones.
Desafortunadamente, muchos padres de familia piensan que sus hijos no se dan
cuenta de lo que sucede y que por lo tanto no les afecta, cuando en realidad es
todo lo contrario ya que los niños van buscando la manera de hacerse ver, de
decir que están ahí, que sienten y que también importan, por lo general, dicha
manera suele presentarse negativamente, con conductas inadecuadas.
Es muy común escuchar que cada cabeza es un mundo y en realidad, es cierto,
ya que cada quien tiene su propia manera de ver y asimilar lo que está a su
alrededor.
Cuando la desintegración familiar se desencadena en un momento de la vida de
los hijos en el que ya tiene conciencia y entiende la situación, representa un golpe
muy duro para ellos. Si nos ponemos a pensar un poco, su familia en ese
momento es su todo, ¿qué sentirá al verla desmoronada?, es algo muy difícil,
quizá no sabe que será de él, cómo será su vida de ahora en adelante, qué le
pasará a sus padres, con quien estará, etc. Uno como adulto entiende este tipo de
situaciones y analiza los factores dando razón de ellos, pero un niño no, para él es
algo incomprensible y generalmente busca culpar a alguien, muchas de las veces
a si mismo.

Existen tres tipos de hogares, en los cuales no siempre hay buena Comunicación
Familiar los cuales son:

Los hogares inexistentes son: aquellos que únicamente aparentan serlo ante la
sociedad y la religión, haciendo creer que son una familia unida y feliz, mas sin la
existencia de interacción y convivencia de sus miembros.

Los hogares inestables son: los más perjudiciales para los hijos, pues presenta
cierta hostilidad entre la pareja, y si los niños reciben por parte de sus padres
agresiones o maltratos, obviamente se darán cambios en su relación con la
sociedad. Como no se atienden debidamente las necesidades de la familia, el
hogar se desestabiliza al faltar comprensión y organización surgiendo entre los
hijos el sentimiento de culpa y la inseguridad en su actuar, al verse dañados en el
aspecto emocional, afectivo y social.

Los hogares destruidos son: aquellos en los que se separa alguno de los dos
pilares que son el padre y la madre, ya que son ellos quienes forman inicialmente
la familia, por ello es necesario que se conozcan y acoplen para pensar en tener
hijos y en mantenerse unidos armónicamente. En este tipo de situaciones, si los
hijos se sienten apoyados y valorados por parte de sus padres a pesar de una
separación, es más probable que lo acepten y superen. Aunque cabe señalar que
inicialmente es muy difícil para los niños asimilarlo y no sabrán a quién darle la
razón y a quién culpar de la situación, por lo que, para beneficio de los hijos, lo
mejor es terminar con la relación de manera pacífica.

La desintegración familiar se puede dar por varias causas, entre ellas:


La violencia doméstica, que viene a ser el maltrato tanto físico, como psicológico y
moral de alguno de los miembros de la familia. Este tipo e violencia se puede
presentar en agresiones físicas mediante golpes, manoseo dañinos o actos
sexuales indeseados; agresiones verbales como ofensas, insultos, gritos,
amenazas o humillaciones; no brindando los cuidados requeridos por cada
integrante de la familia de acuerdo a su edad, sexo estado de salud o psicológico
y cualquier otra conducta que cause algún daño físico o emocional en la persona.
El alcoholismo, que es una enfermedad de dependencia a las bebidas
embriagantes, la cual afecta a toda la familia cuando alguno de sus elementos la
padece, principalmente cuando dicho elemento es alguno de los padres de familia,
ya que genera continuas problemáticas, dejando al niño en cierto abandono, falta
de atención, de afecto, de seguridad y apoyo. A pesar de todo, también debemos
tener presente que un familiar inmerso en el alcoholismo requiere del apoyo de
sus familiares para poder salir de eso, haciéndole ver sus características y
conductas bajo los efectos del alcohol, canalizándolo a un tratamiento adecuado
para su dependencia. Sin embargo, rara vez tomamos esta actitud, normalmente
se tiende a reprender, reprochar y rechazar sus acciones, dejándolo hundir más y
más en su vicio. La situación económica, sobre todo en el caso de pobreza, ya
que es una de las principales causas de la desorganización familiar, al ser la
responsable del bajo nivel educativo de sus integrantes, trayendo como
consecuencia el mantenerse en el mismo nivel, al no estar preparado para
superarse. El abandono, en muchas ocasiones es provocado por el nivel
económico bajo, así como la injusticia social, la falta de empleos, la falta de
medios para desplazarse, los centros de vicio, las carencias en las instituciones
educativas y de salud, etc. Aunque no solamente la escasez afecta, también la
abundancia; la escasez provoca que los padres de familia salgan a buscar trabajo
o a trabajar dejando a su suerte a los hijos descuidándolos en todos los aspectos.
Por otra parte, el hecho de contar con todos los recursos necesarios, provoca
también el descuido de los hijos, debido a la necesidad de atender los múltiples
compromisos laborales que se tienen. El divorcio, que viene a representar en todo
su esplendor la desintegración familiar, al ser la separación legal y definitiva de los
cónyuges donde normalmente se separa también a los hijos, dependiendo de
cada caso. Por ello la necesidad de que los hijos conozcan su situación familiar y
las causas que provocaron tal ruptura para evitar sentimientos innecesarios en los
alumnos como la culpabilidad. En este tipo de casos, no es conveniente engañar a
los hijos dándoles esperanzas de una reconciliar, o de una pantalla familiar que no
durará mucho tiempo, pues tarde o temprano, se darán cuenta de la verdad, y al
descubrirse engañados, su reacción puede ser aun peor, recibiendo un daño más
severo.
La conducta: es la manifestación externa de la personalidad. Son los actos,
omisiones, reacciones, expresiones verbales y gestuales que traducen el mundo
psíquico del individuo.
Mientras que la agresión: es una manifestación de gran necesidad del pequeño
por sentirse querido, comprendido y descostrarse a sí mismo que puede llamar la
atención.
Cuando los niños tienen alguna deficiencia en cuanto a lo físico, lo psicológico o lo
emocional, les cuesta mucho más trabajo el adaptarse a su medio, para ello
necesita de su familia y de la escuela, al ser uno de los lugares en los que más
socializa. Si la conducta es por así decirlo, un reflejo de nuestra persona, entonces
un trastorno de conducta es cuando ésta no es la adecuada de acuerdo a la
sociedad, la cultura, la religión y el medio ambiente.

Muchos jóvenes pasan horas viendo la televisión o sentados frente a la


computadora y carecen de conversación con sus padres, éstos a su vez no
buscan tener conversación con sus hijos. Este problema de comunicación va en
ascenso, causando terribles consecuencias.
Hemos visto que los muchachos se encuentran en serios problemas y que muchos
de ellos experimentan presiones emocionales que contribuyen a la violencia, al
abuso de las drogas, a la actividad sexual prematura y a otras formas de
comportamiento rebelde, incluso, algunos adolescentes que acatan las reglas y
parecen no tener problemas, luchan en silencio con conflictos de identidad y
buscan un significado para sus vidas.

Multitudes de jóvenes llevan heridas irreversibles en sus propias vidas. Estas


heridas han sido adquiridas en su propio hogar.
La principal amenaza para esta generación de adolescentes es la desintegración
de la familia; con esto enfrentan retos que van más allá de sus fuerzas. Es
importantísimo que consideremos que las trágicas consecuencias en las
conductas de los adolescentes, han sido causadas por este problema
principalmente: la desintegración familiar.
Podemos decir que los matrimonios estables que duran toda la vida, proporcionan
un fundamento para el orden social, son una ayuda para los jóvenes donde
pueden formar su carácter, hábitos y valores que puedan darles solidez y arraigo,
para poder mantenerse victoriosos sobre las presiones actuales.

Cuando se desintegra la familia, la sociedad también comienza a desintegrarse;


esto es precisamente lo que nos sucede hoy en día, la familia está siendo
sacudida por las fuerzas que operan alrededor como lo son el alcoholismo, la
pornografía, la infidelidad, la amargura, el divorcio, la ruptura del matrimonio, que
son duros golpes contra la familia. No cabe duda que cuando existen problemas
en el hogar, los hijos son los que más sufren.
Multitudes de jóvenes llevan heridas irreversibles en sus propias vidas. Estas
heridas han sido adquiridas en su propio hogar, a través del maltrato infantil que
padecieron desde edad temprana cuando empezaron a desarrollarse y fueron
golpeados, fueron abusados emocional, física e inclusive sexualmente y hoy llevan
las marcas de esos golpes ocultos en su vida, desfigurando su carácter,
llenándoles de resentimiento, aislándolos socialmente con un gran vacío en sus
vidas, una inseguridad, temor o rebeldía, mientras que otros niños pueden hacerle
frente adecuadamente a una situación difícil a una corta edad cuando están bien
protegidos, instruidos y amados por sus padres.

Los adolescentes varones van a tener más problemas, probablemente, en el


aprendizaje.
Cuando no hay una buena cultura de lectura en sus vidas, cuando pasan
muchísimo tiempo en la televisión, en la computadora, cuando no hay
conversación en casa, ni siquiera pueden desarrollar el idioma, no pueden
desarrollar las habilidades básicas para aprender.
La desintegración familiar se da principalmente por falta de comunicación, y así la
falta de comunicación hace que se vaya terminando el amor, y con esto
comienzan los pleitos y con el tiempo deciden la separación, pero los padres
nunca piensan que los hijos son los más afectados.
Otra causa de la desintegración familiar se da por que los padres no dedican el
tiempo suficiente al dialogo en la familia y que a veces prefieren trabajar y se
preocupan mas por el dinero que por darle un poquito de tiempo y de amor a su
familia. A veces también se debe a que exista violencia intrafamiliar, así como
también por infidelidad, por la existencia de adicciones, por falta de dinero, entre
otros.
La desintegración familiar es un problema que se incrementa cada vez más debido
a que muchas veces los padres no conviven con los hijos, lo cual produce una
grave falta de comunicación, entre muchas otras causas.
Todo esto trae como consecuencias la desintegración familiar, “separación de uno
o varios integrantes de la familia, ya sea hijos o padres”

Muchas familias creen que los conflictos llevan necesariamente a la separación. El


conflicto, entendido como riesgo de ruptura o indicador de disfunción, puede llevar
a la solución inadecuada del mismo

La desintegración familiar en San Simón Yehualtepec.

Causas principal de la desintegración familiar


* La falta de comunicación.
* Drogadicción.
* Enfermedades incurables.
* La constante ausencia del padre o la madre dentro del núcleo familiar.
* La infidelidad.
* El machismo.
* La emigración.
Desplazamiento de un grupo de personas o de un individuo de uno a otro país, ya
sea de forma temporal o permanente. Los padres de las familias de San Simón
Yehualtepec
emigran a otras ciudades o países en busca de mejores trabajos, para darles a
sus familias mejor calidad de vida.
* El abandono por parte del padre a la familia.
El padre abandona a la familia por ir tras de una mujer, en busca de una felicidad,
que en su familia no encontrado.
* La muerte de un miembro de familia.
Esto es cuando un integrante muere por enfermedad o muerte natural.
* El fracaso de la pareja
La pareja se separa por tercera en discordia o por un engaño marital.

Planteamiento del problema familiar


Es costumbre escuchar que la situación familiar, o más bien, la falta de una familia
“normal” es una por no decir la más importante de las causas de todos los males
que afectan la sociedad; entre estos se mencionan principalmente la delincuencia,
la drogadicción, el fenómeno de los niños en la calle, las madres adolescentes. El
alto índice delictivo en el sector, la pobreza extrema, el vicio, etc., son parte del
problema de la desintegración familiar; todos estos problemas unidos con la
desorientación y el abandono por parte de las autoridades encargadas de proteger
la familia agravan más el problema. La desintegración familiar, como tema objeto
del presente escrito, obedece al interés que produce conocer la influencia que
ejerce en el proceso educativo. Más específicamente, en la educación escolar. De
acuerdo al modo de vida, en nuestra cultura, el hombre de la casa (papá) tiene la
obligación de salir a trabajar para mantener a su familia, primera responsabilidad.
Evidentemente, quien queda dentro del hogar es la señora de la casa (mamá).
Pero los tiempos cambian y hoy día las necesidades humanas se han multiplicado
geométricamente y se hace necesario que también salga a trabajar la señora.
Aparentemente esto no es desintegración familiar pero la realidad muestra que sí
lo es: los hijos aprenden a valerse por sí mismos desde muy pequeños, es obvio
que deben aprender a valerse y a sobrevivir, pero hay que enseñarles, en un
hogar moderno ya no se enseña. Los chicos aprenden por otros medios, y vaya
que aprenden, pero muchas veces cosas contrarias a lo socialmente admitido
como buen comportamiento. La desintegración familiar es, por mucho, causa de la
debacle social que puede darse a falta de educación, debido a que la población
carece de un norte que lo conduzca hacia la realización de metas que conlleven
su desarrollo satisfactorio y productivo, en un mundo lleno de humanismo,
comprensión y por sobre todas las cosas lleno de respeto hacia todo lo que existe.
A nivel escolar la desintegración repercute en situaciones de retiro del o la
estudiante, repitencia, violencia, rebeldía, desinterés por lo que la escuela propone
para su desarrollo, negación de sí mismo hasta finalizar en algún tipo de escape,
que puede ser licor, sustancias ilícitas, actos delincuenciales hasta el suicidio.
Fundamentos teóricos del bullying

El Bullying es una manifestación de un acoso que suele ser grupal y todas las
intervenciones diseñadas tienen en común el apoyo incondicional a la persona,
niño o adolescente en este caso, víctima de violencia de sus iguales.
El primer autor que definió este fenómeno fue Dan Olweus:
 “Un alumno es agredido o se convierte en víctima cuando está expuesto, de
forma repetida y durante un tiempo, a acciones negativas que lleva a cabo otro
alumno o varios de ellos.”
De esta definición se desprenden tres características:
Existe un desequilibrio (abuso) de poder.
Hay una repetición de los incidentes a lo largo del tiempo.
Hay intencionalidad por parte del agresor o agresores.
A estas características que definen una situación de Bullying, se añade otra: es un
fenómeno de grupo, no un problema individual. No se trata de conductas
organizadas o espontáneas donde se busca el mal mutuo, ni actos de vandalismo
que se pueden manifestar abiertamente en el entorno escolar. No es un conflicto
entre dos partes con intereses contrapuestos, es un proceso de victimización.
 Es un tipo de violencia insidiosa, que se construye lentamente en el día a día de
las relaciones interpersonales. Es difícil de identificar ya que en los inicios suele
ser poco evidente y puede mantenerse oculta a los adultos, pero es bien conocida
por el alumnado. Supone una vulneración de los derechos fundamentales del
alumno: derecho a no estar sometido a la humillación intencional y repetida y a
estar seguro en la escuela.
 Por tanto, estas situaciones de acoso, intimidación o victimización son aquellas en
la que un alumno o alumna está expuesto, de forma repetida y durante un tiempo,
a acciones negativas que llevan a cabo otros compañeros. Por acciones negativas
entendemos tanto las cometidas verbalmente o mediante contacto físico, como las
psicológicas de exclusión.

Características del Bullying

 Tiende a originar problemas que se repiten y prolongan durante cierto


tiempo.
 Es sistemático y estratégico, ya que el agresor siempre sabe cuándo
actuar.
 Suele estar provocado por un alumno, contra una víctima indefensa.
 Se mantiene debido a la ignorancia o pasividad de los que rodean a los
agresores y a las víctimas sin intervenir directamente.
 La víctima desarrolla miedo y rechazo al contexto en el que sufre la
violencia; pérdida de confianza en sí mismo y otros, y disminución del
rendimiento escolar.
 Disminuye la capacidad de comprensión moral y de empatía del agresor,
mientras que se produce un refuerzo de un estilo violento de interacción.
 En las personas que observan la violencia sin hacer nada para evitarla, se
produce falta de sensibilidad, apatía e insolidaridad.
 Se reduce la calidad de vida del entorno en el que se produce: dificultad
para lograr objetivos y aumento de los problemas y tensiones.
 El Bullying es un proceso de represión de problemas.

Tipos de Bullying
El acoso escolar se divide en dos categorías:
 -  Acoso directo. Es la forma más común entre los niños. Peleas y agresiones
físicas.
- Acoso indirecto. Suele ser más común entre las niñas y en general a partir del
pre-adolescente.
Se caracteriza por pretender el aislamiento social. Este aislamiento se consigue
mediante técnicas variadas que incluyen: difundir rumores, rechazar el contacto
social con la víctima, amenazar a los amigos, hacer criticas de la persona
aludiendo a sus rasgos físicos, grupo social, forma de vestir, religión, raza,
discapacidad, entre otros.
Bullying Físico
Incluye toda acción corporal. Es la forma más habitual de Bullying. En los últimos
años, el Bullying físico se ha mezclado con una frecuencia alarmante, con diversas
formas de abuso sexual. Se identifica porque suele dejar huellas corporales.
Directo. Golpes, empujones, patadas, formas de encierro, escupir
Indirecto. Daño a pertenencias, robar, romper, esconder cualquier clase de objeto
Bullying Verbal
Incluyen acciones no corporales con la finalidad de discriminar, difundir chismes,
realizar acciones de exclusión, bromas insultantes y repetidas. Los niños y jóvenes
son mucho más sensibles que los adultos ante estas cuestiones. La opinión de los
padres constituye una parte esencial entre los factores que ayudarán a formar la
identidad y la personalidad. Es más utilizado por las mujeres mientras se van
acercando más a la adolescencia.
Directo. Poner apodos, insultar, amenazar, burlarse, reírse, entre otros.
Indirecto. Generar rumores raciales o sexistas, malos comentarios, hablar mal.
Bullying Psicológico
Son las más difíciles de detectar ya que son formas de agresión, amenaza o
exclusión que se llevan a cabo a espaldas de cualquier persona que pueda
advertir la situación, por lo que el agresor puede permanecer en el anonimato. Se
usa frecuentemente para subrayar, reforzar o resaltar acciones llevadas a cabo
con anterioridad y mantener latente la amenaza.
Incrementan la fuerza del maltrato, pues el agresor exhibe un poder mayor al
mostrar que es capaz de amenazar aunque esté “presente” una figura de
autoridad.
En el agredido aumenta el sentimiento de indefensión y vulnerabilidad, pues
percibe este atrevimiento como una amenaza que tarde o temprano se
materializará de manera más contundente. Pueden consistir en una mirada, una
señal obscena, una cara desagradable, un gesto, entre otros. También dentro de
este hay un tipo de Bullying que se conoce como Bullying racista que se da
cuando el maltrato hace referencia a los orígenes de la víctima.
Bullying Sexual
Es cuando se presenta un asedio, inducción o abuso sexual. Se da cuando el
maltrato hace referencia a partes íntimas del cuerpo de la víctima.
Incluye el BullyingHomófobo que se da cuando el maltrato hace referencia a la
orientación sexual de la víctima o las que se intentan justificar por motivos de
homosexualidad, real o imaginaria.
Bullying Social
Pretende aislar al joven del resto del grupo, cuando se ignora, se aisla y se
excluye al otro.
Directo. Excluir, no dejar participar a la víctima en actividades, sacarlos del grupo.
Indirecto. Ignorar, tratar como un objeto, como si no existiera o ver que no está
ahí.
Causas del Bullying

Personales: Un niño que actúa de manera agresiva sufre intimidaciones en la


escuela o en la familia. Adquiere esta conducta cuando es frecuentemente
humillado por los adultos. Se siente superior, ya sea porque cuenta con el apoyo
de otros atacantes o porque el acosado es un niño con muy poca capacidad de
responder a las agresiones.       
 
Familiares: El niño puede tener actitudes agresivas como una forma de expresar
su sentir ante un entorno familiar poco afectivo, donde existen situaciones de
ausencia de algún padre, violencia, abuso ejercida por los padres y hermanos
mayores; tal vez porque es un niño que posiblemente vive bajo constante presión
para que tenga éxito en sus actividades o por el contrario es un niño sumamente
mimado. Todas estas situaciones pueden generar un comportamiento agresivo en
los niños y llevarles a la violencia cuando sean adolescentes.

En la escuela: Cuanto más grande es la escuela hay mayor riesgo de que haya


acoso escolar, sobre todo si a este factor se le suma la falta de control físico,
vigilancia y respeto; humillación, amenazas o la exclusión entre personal docente
y alumnos. Por otro lado, los nuevos modelos educativos a los que son expuestos
los niños como la ligereza con que se tratan y ponen en práctica los valores,
según psicólogos y estudios realizados, han influenciado para que este tipo de
comportamiento se presente con mayor frecuencia.

La televisión: El mensaje implícito de determinados programas televisivos de


consumo frecuente entre adolescentes que exponen un modelo de proyecto vital
que busca la aspiración a todo sin renunciar a nada para conseguirlo, siempre y
cuando eso no signifique esforzarse o grandes trabajos, constituye otro factor de
riesgo para determinados individuos.

Los expertos han llegado también a la conclusión de que la violencia en los


medios de comunicación tiene efectos sobre la violencia real, sobre todo entre
niños. Se discute, no obstante, el tipo de efectos y su grado: si se da una imitación
indiscriminada, si se da un efecto insensibilizador, si se crea una imagen de la
realidad en la que se hiperboliza la incidencia de la violencia, entre otros.

Consecuencias del Bullying


El Bullying no entiende de distinciones sociales o de sexo. A pesar de la creencia
extendida de que los centros escolares situados en zonas menos favorecidas son
por definición más conflictivos, lo cierto es que el Bullying hace su presencia en
casi cualquier contexto. Respecto al sexo, tampoco se aprecian diferencias, al
menos en lo que respecta a las víctimas, puesto que en el perfil del agresor sí se
aprecia predominancia de los varones.
Cuando no hay intervenciones efectivas contra el Bullying, el ambiente escolar se
vuelve totalmente contaminado. Todos los niños, sin excepción, son afectados
negativamente pasando a experimentar sentimientos de ansiedad y miedo.
Algunos alumnos que testifican situaciones de Bullying y perciben que el
comportamiento agresivo no trae ninguna consecuencia a quien lo practica,
pueden comenzar a adoptarlo.
El fenómeno social denominado "Bullying" ha traído como consecuencia la
deserción escolar, detrimento en el ánimo de los estudiantes; además ha
propiciado considerables daños en la vida de los alumnos agredidos.
Consecuencias para la víctima
Las consecuencias del acoso escolar son muchas y profundas. Para la víctima de
acoso escolar, la consecuencia se hace notar con una evidente baja autoestima,
actitudes pasivas, trastornos emocionales, problemas psicóticos, depresión,
ansiedad, pensamientos suicidas, entre otros.
También se suman a eso, la pérdida de interés por las cuestiones relativas a los
estudios, lo cual puede desencadenar una situación de fracaso escolar, así como
la aparición de trastornos fóbicos de difícil resolución. Se puede detectar a una
víctima de acoso escolar por presentar un constante aspecto contrariado, triste,
deprimido, por faltar frecuentemente y tener miedo a las clases, o por tener un
bajo rendimiento escolar.

Aparte de eso también corresponde al plano físico presentando dificultad para


conciliar el sueño, dolores en el estómago, el pecho, de cabeza, náuseas y
vómitos, llanto constante, entre otros. Sin embargo, eso no quiere decir que todos
los niños que presenten este cuadro estén sufriendo por un acoso escolar. Antes
de dar un diagnóstico al problema, es necesario que antes se investigue y se
observe más al niño.
Consecuencias para el agresor
En cuanto a los efectos del Bullying sobre los propios agresores, algunos estudios
indican que los ejecutores pueden encontrarse en la antesala de las conductas
delictivas. También el resto de espectadores, la masa silenciosa de compañeros
que, de un modo u otro, se sienten amedrentados por la violencia de la que son
testigos, se siente afectado, logrando provocar cierta sensación de que ningún
esfuerzo vale la pena en la construcción de relaciones positivas.
Para el agresor, el Bullying le dificulta la convivencia con los demás niños, le hace
actuar de forma autoritaria y violenta, llegando en muchos casos a convertirse en
un delincuente o criminal. Normalmente, el agresor se comporta de una forma
irritada, impulsiva e intolerante. No saben perder, necesitan imponerse a través del
poder, la fuerza y la amenaza, se meten en las discusiones, cogen el material del
compañero sin su consentimiento, y exteriorizan constantemente una autoridad
exagerada.

Consecuencias en los observadores

Un aprendizaje sobre cómo comportarse ante situaciones injustas:


Indiferencia.
Asumir la actitud de “No es mi problema, yo no me meto, así es la vida”
Posturas individualistas y egoístas
Deficiente aprendizaje sobre cómo comportarse ante situaciones injustas.
Exposición. Observación y refuerzo de modelos inadecuados de actuación.
Falta de sensibilidad ante el sufrimiento de los otros (Se produce una
desensibilización por la frecuencia de los abusos).

Víctimas del Bullying

Dentro de los acosos escolares podemos encontrar dos tipos de víctimas, las
víctimas pasivas y las víctimas activas.
Las víctimas pasivas tienen una situación social de aislamiento, con frecuencia no
tienen un solo amigo entre sus compañeros y presentan dificultad de
comunicación y suelen tener baja popularidad. Muestran una conducta muy
pasiva, tienen miedo ante la violencia y vulnerabilidad, ansiedad, inseguridad y
baja autoestima. Poseen tendencia a culpabilizarse de su situación y negarla por
ser vergonzosa. Tienden a refugiarse en los adultos y esto se debe a la
sobreprotección que tienen por parte de su familia.
Las víctimas activas cuya situación social de aislamiento e
impopularidad, presentan una tendencia impulsiva a actuar sin elegir la conducta
más adecuada a cada situación. Suelen emplear conductas agresivas, irritantes,
provocadoras. A veces, las víctimas activas mezclan este papel con el de
agresores, son víctimas y a la vez agresores. Tienen un rendimiento académico
peor que el de las pasivas. Varios estudios demuestran que las activas parecen
haber tenido, un trato familiar más hostil, abusivo y coercitivo que otros escolares,
esta situación es más habitual encontrarla entre chicos que chicas. Con
frecuencia, podemos encontrarnos en este tipo de víctimas con escolares
hiperactivos.

Conductas de las Víctimas en la Escuela

· Repentinos cambios en asistencia y logros académicos.


· Asistencia errática.
· Pérdida total de interés por la escuela. Dificultad de concentración en el salón de
clases.
· Descenso en calidad del trabajo escolar.
· Van al recreo tarde y regresan rápido.
· Tienen problemas de aprendizaje o diferencias con el grupo.
· Carecen de interés de actividades escolares.
· Se dan de baja de cursos y no aceptan mentores o tutores.

Conducta Social de las Víctimas

· Solitarios, retirados, aislados.


· Pobre o ninguna interacción social.
· No tienen amigos o solo unos pocos.
· Son no populares en el grupo, pasan desapercibidos. Reciben las migajas de la
clase.

Conductas Emocionales de las Víctimas

· Repentinos cambios de conducta y de humor.


· Pasividad, timidez, callados, temerosos, asustados. Nerviosos, preocupados,
inseguros.
· Baja autoestima y auto confianza. Sobres reactivos ante peligro, hipersensibles.
· Lloran fácilmente delante de otros. Demuestran su debilidad a los otros.
· Bajas o ningunas destrezas asertivas.
· Irritables, destructivos, agresivos, pierden rápido el temperamento.

Características de las víctimas del Bullying

·Soledad: La víctima se encuentra absolutamente sola. No cuentan a nadie lo que


les pasa, a veces no tienen amigos y no se atreven a decir nada a padres o
profesores por temor a que les juzguen como miedosos y/o débiles.
·Sensación de culpabilidad: La víctima suele creer que merece el maltrato, si ya su
autoestima es así de deficiente, la agresión la deja por los suelos.
·Temor a que los padres destapen el tema en el centro escolar y sufran más
agresiones.
·Quieren pasar desapercibidos, ser invisibles.
·No quieren ir al colegio: se excusan con enfermedades o cualquier cosa pues
asistir a clase se les hace muy duro.
·Su salud suele empeorar realmente: El estrés psíquico es una carga para la salud
y si es permanente, la angustia y una sensación continua de intranquilidad y temor
se apoderan del joven en un momento en el que su cuerpo y mente se están
desarrollando. Todo esto influye en los resultados académicos, en el aprendizaje y
en todo su desarrollo.
Agresores del Bullying
Aquellos que practican el Bullying contra sus colegas pueden llevar para la vida
adulta un comportamiento anti-social, adoptando actitudes agresivas en el seno de
la familia o en el ambiente de trabajo.
Estudios realizados en diversos países, señalan la posibilidad de que los autores
de Bullying en la época escolar, más tarde pueden verse envueltos en actos de
delincuencia o criminales. Aunque el acosador escolar no tiene por qué padecer
ninguna enfermedad mental o trastorno de la personalidad grave, presenta
normalmente algún tipo de psicopatología.

Fundamentalmente, presenta ausencia de empatía y algún tipo de distorsión


cognitiva. La carencia de empatía explica su incapacidad para ponerse en el lugar
del acosado y ser insensible al sufrimiento de este.
Las presencias de distorsiones cognitivas tienen que ver con el hecho de que su
interpretación de la realidad suele eludir la evidencia de los hechos y suele
comportar una delegación de responsabilidades en otras personas. Así,
normalmente responsabiliza de su acción acosadora a la víctima, que le habría
molestado o desafiado previamente, con lo que no refleja ningún tipo de
remordimiento respecto de su conducta.
La psicología actual, por otra parte, identifica en los acosadores escolares la
existencia probable de una educación familiar permisiva que les puede haber
llevado a no interiorizar suficientemente bien el principio de realidad: los derechos
de uno deben armonizarse con los de los demás. La consecuencia es la dificultad
para ponerse en el lugar del otro por una carencia de altruismo vinculada a un ego
que crece a costa de los demás, meros instrumentos a su servicio, y que tiene un
umbral de frustración muy bajo. Algunos autores denominan a este tipo de niño
como niño tirano.
Características de los agresores del Bullying
Los agresores suelen venir de una situación social negativa, siendo muchas veces
rechazados por parte de sus compañeros, aunque siempre tienen un grupo de
seguidores.
Tienen tendencia al uso de la fuerza y a la violencia, baja tolerancia, frustraciones,
malas relaciones con los adultos, mal rendimiento escolar, tienen una gran
autoestima, y una ausencia de una relación cálida y segura con los progenitores.
Quienes ejercen el Bullying lo hace para imponer su poder sobre el otro logrando
con ello tenerlo bajo su completo dominio a lo largo de meses e incluso años.
El niño o varios de ellos, comúnmente en grupo, constantemente tienen actitudes
agresivas y amenazantes sin motivo alguno contra otro u otros niños. Es o son
provocativos, cualquier cosa es para ellos motivo de burlas.
Su forma de resolver conflictos es por medio de la agresión. No es nada empático,
es decir no se pone en el lugar del otro. Los alumnos agresores pueden ser
futuros maltratadores y delincuentes si no reciben con urgencia la ayuda que
necesitan. La justificación de sus actos en base a toda la hostilidad acumulada
"contra el mundo" y a los modelos sociales que promocionan estas conductas, se
alía con la sensación inmediata de poderío que produce el hecho de "someter a
alguien a tus caprichos y necesidades".
Los mecanismos que determinan el Bullying no son muy distintos a los que
subyacen a otros tipos de maltrato porque, aunque lo denominamos “intimidación
entre iguales", la realidad es que se da una situación de desigualdad; el agresor
siempre mide las fuerzas de su presa, fuerza física o psicológica, al igual que lo
hace el maltratador doméstico cuando elige su pareja, futura víctima, o el jefe
sádico cuando contrata a sus subalternos.
Trabajar este tema tiene una importancia extraordinaria precisamente como
prevención de estos graves problemas sociales pues, además de terminar con
estas situaciones puntuales de abuso, aprovechamos para abundar en el trabajo
de las relaciones (presión de grupo, asertividad), valores (tolerancia, justicia y
solidaridad), importantes aspectos de educación emocional (control de impulsos y
expresión de sentimientos) y resolución de conflictos, lo cual resulta muy
educativo para todos.
Tipos de agresores
     Agresores activos 
Son los que inician y dirigen la agresión. Lizbeth Flores, especialista en maltrato
infantil del INP, dijo:
“El 30% de la población de México se catalogó como víctima o como agresor,
también un dato importante que encontramos es que la mayor parte de las
agresiones se llevan a cabo en el aula”.
Las agresiones psicológicas son la principal forma de acoso escolar. Esto se debe
a que el Bully escoge a los compañeros con alguna debilidad o diferencia. Ser
inteligente, usar lentes, la timidez o tener alguna otra de este tipo es suficientes
para convertirse en víctima. Pero el Bully no actúa solo, es líder de un grupo que
decide a quién se puede o no molestar y hasta qué grado. Sin el grupo, no podría
ejercer su poder. Paloma Cobo, coautora del libro Bullying en México dijo:

“Hay un grupo que sigue al Bully, que es lo que nosotros llamamos testigos y que
juegan un papel muy importante, porque son finalmente los que le van a dar el
reconocimiento que necesita el Bully.”

Estos testigos cada vez tienen un papel más activo en los maltratos, ya no
simplemente se burlan del compañero agredido, sino que también forman redes
de maltrato, principalmente exhibiendo sus actos por internet por medio del acoso
virtual o Cyber-Bullying.

Aquí, las agresiones pueden llegar a niveles muy elevados de violencia, no sólo
física, sino verbal. Es una paradoja, pero por lo general, el agresor suele tener
más debilidades que a quienes agrede. Generalmente el Bully se relaciona con el
género masculino. Sin embargo, estudios realizados por la Secretaría de
Educación Pública (SEP) sugieren que esta práctica se está ampliando entre las
mujeres.
Agresores pasivos 

Son los que les siguen y animan, aunque en menor grado. 3 de 10 estudiantes de
educación básica en México viven con un temor diariamente, pero no es a la
muerte, inseguridad o algún secuestro.

Es miedo de ingresar por estas puertas de lunes a viernes. Sin embargo, no les
preocupa reprobar un examen o fallar en clases. Su temor es a vivir otro día más,
enfrentando la violencia a la que son sometidos por un "Bully", compañero de
clase que mantiene algún tipo de maltrato sobre él. Paloma Cobo expresó lo
siguiente:

“Creo que el Bullying ha existido siempre, es lo que antes llamábamos la típica


gandaya, el que abusaba del otro, el que le robaba el lunch, el que empujaba, y
crecimos con la idea de que así es y hay que aguantarse.”
Motivos del agresor para hacer Bullying
Según los expertos, un niño puede ser autor de Bullying cuando solo espera y
quiere que hagan siempre su voluntad, cuando le gusta probar la sensación de
poder, cuando no se siente bien o no disfruta con otros niños, si sufre
intimidaciones o algún tipo de abuso en casa, en la escuela o en la familia, cuando
es frecuentemente humillado por los adultos, o cuando vive bajo constante presión
para que tenga éxito en sus actividades.
Observadores del Bullying
Podemos hablar también de clases de público o espectadores que contemplan el
fenómeno y cuya actuación y concienciación es vital para prevenir y atajar el
problema.

¿Por qué permiten ellos que eso ocurra? He aquí algunas razones:
Esas personas desean «ponerse del lado» del agresor porque eso las hace
sentirse fuertes. De otra manera ponerse del lado de la víctima las haría sentirse
débiles.

 Se divierten con las agresiones.


 No creen que protestar pueda ayudar.
 Temen que, si dicen algo, el agresor se iría contra ellos.
 Sienten que están sacando de sí sus frustraciones al lastimar a alguien,
aunque ellos mismos no estén lastimando a la víctima sino mirando cómo la
lastiman.

Los cómplices y observadores pasivos se esconden en un caparazón de temor. Si


no se educa esta actitud y carencia de habilidades ante la presión del grupo, se
podría generar en ellos mucha actitud egoísta, insensibilidad ante la injusticia y
ante el dolor ajeno e incapacidad de pedir ayuda cuando ellos la necesitan.
Cómplices: Toman la postura de hacer lo que el líder acosador dice.

Observadores: Supuestamente pasan del asunto por estas razones: Para


integrarse en el grupo, por mantener su posición. Para no ser los siguientes
agredidos (presión y miedo).

Prevención del Bullying

En la familia

La familia es la principal fuente de amor y educación de los niños; a partir de ella


el niño aprende a socializarse basado en lo valores, normas y comportamientos
enseñados en casa; evitemos que nuestro hogar se convierta en un escenario
hostil, o por el contrario, demasiado permisivo, tenga por seguro que esto siempre
llevará a que los niños adquieran conductas agresivas.
Otro papel de la familia es estar informada constantemente, hay cursos en donde
se orienta a los padres; éstos se basan normalmente en el amor y la comunicación
entre padres e hijos, la observación para detectar inmediatamente cualquier
conducta anormal en el chico, estar al pendiente de las actividades de su hijo, la
existencia de límites y normas, así como el vigilar que se cumplan. Estos cursos le
dan atención especial a la inteligencia emocional, es decir, enseñan a los padres
como ayudarles a sus hijos a controlar sus emociones y comportamientos hacia
los demás de tal manera que puedan convivir sanamente.

¿Cómo deben actuar los padres ante un hijo acosador?

· Tienes y debes acercarte a tu hijo, platica con él.


· Relacionarte más con los amigos de tu hijo y observa qué actividades realizan.
· Una vez que hallas creado un clima de comunicación y confianza con tu hijo,
preguntarle el porqué de su conducta.
· Jamás debes usar la violencia para reparar el problema. Violencia genera
violencia, ¿Dónde está la solución? Tampoco culpes a los demás por la mala
conducta de tu hijo.
· Nunca dejes de demostrarle amor a tu hijo, pero también debes hacerle saber
que no permitirás esas conductas agresivas e intimidantes, deja muy claro
además las medidas que se tomarán a causa de su comportamiento y en caso de
que continúe. Cuando se detecta un caso así, los padres del niño deben ayudar a
la escuela para resolver el problema inmediatamente. Hable con los profesores,
pida ayuda y escuche todas las críticas que te den sobre tu hijo. Manténgase
informado de cómo la escuela está tratando dicho caso y los resultados que se
están obteniendo.
· A través de la comunicación con tu hijo podrás darte cuenta de sus gustos y
aficiones, canaliza su conducta agresiva por ese lado; si por ejemplo le gusta el
fútbol inscríbalo en un club deportivo, si le gusta tocar algún instrumento llévelo
para que tome clases.
· Crea un ambiente en tu hogar donde el chico se sienta con la confianza de
manifestar sus insatisfacciones y frustraciones sin agredir. Enseñarle buenos
modales.
· Debes enseñarle a tu hijo a reconocer sus errores y a pedir disculpas a quienes
les haya hecho daño, elogia esas buenas acciones.

En la escuela

 La disciplina que se mantenga en el salón/escuela es fundamental para la


construcción de una buena conducta.
 Es importante la supervisión de los alumnos dentro y fuera de los salones.
 Establecer claramente las reglas de la escuela y las acciones que se
tomarán.
 Actuar rápido, directa en el caso de que se presente alguna sospecha de
Bullying.
 La escuela debe estar abierta a las quejas y sugerencias del alumnado
 Realizar conferencias para padres donde se pueda tratar temas como
Bullying.
 Adicionar o reforzar el tema de educación en los valores en el curso.
 Los maestros pueden apoyarse en los alumnos para identificar casos de
acoso, deben ser muy inteligentes y saber quién puede darles información
valiosa.

¿Qué deben hacer los maestros?

· Identificar a la víctima y el agresor.


· Si ha detectado a la víctima, pregunte a los padres si el niño presenta dificultad
para conciliar el sueño, dolores de estómago, pecho, cabeza, llanto constante.
· Siga al niño a una distancia prudente a los lugares donde comúnmente esta sin
vigilancia, seguramente se encontrará con el chico que lo está acosando.
· En las paredes de los baños o puertas, suelen escribir burlas y agresiones,
revisarlas.
· Platique con los compañeros más cercanos del acosador/víctima, pueden
ayudarle.
· Tenga consciencia de que tanto el agresor como la víctima sufren, y por lo tanto
necesitan ser atendidos y tratados.

Instituciones gubernamentales

Así como existen líneas gratuitas para hablar o preguntar sobre métodos
anticonceptivos, depresión, el sida, alcoholismo, entre otros, debe haber líneas
abiertas para que los niños puedan hablar y denunciar conflictos que viven dentro
y fuera del hogar. Debe haber mayores campañas para informar a los padres
sobre esta situación, la forma en que puede detectarse, tratarse y prevenirse.

Medios de comunicación y sociedad en general

Los niños son muy dados a ver programas de acción y violencia y aunque no lo
creamos influyen demasiado en su comportamiento. Los medios masivos de
comunicación deben ser más conscientes y controlar más los contenidos que
emiten o publican. La sociedad en general también puede ayudar a prevenir y
atacar el acoso entre los niños, vigilando y no dejando pasar este tipo de
situaciones porque pensamos se trata de una simple broma. Cuando un niño se
burla, amenaza o pega a otro niño, se debe intervenir para que eso no se repita.

Crear y mantener un teléfono público para los niños es una forma de abrir una
puerta a sus posibles conflictos. Las campañas anuales de sensibilización también
pueden funcionar para prevenir el acoso escolar. En cuanto a los medios de
comunicación sería interesante y muy viable que controlasen más los contenidos
que emiten o publican.

La sociedad en general debe prevenir y atajar posibles brotes de acoso. Es


necesario estar atento y no dejar pasar nada o pensar que todo es normal o se
trata de una broma. Cuando un niño se burla, amenaza o pega a otro niño, se
debe intervenir para que eso no se repita. Cuando en el patio del colegio alguien
se burla del aspecto de otra persona, hay que reprenderle. Lo malo se corta por la
raíz.

Causas del Bullying

Personales: Un niño que actúa de manera agresiva sufre intimidaciones en la


escuela o en la familia. Adquiere esta conducta cuando es frecuentemente
humillado por los adultos. Se siente superior, ya sea porque cuenta con el apoyo
de otros atacantes o porque el acosado es un niño con muy poca capacidad de
responder a las agresiones.       
 
Familiares: El niño puede tener actitudes agresivas como una forma de expresar
su sentir ante un entorno familiar poco afectivo, donde existen situaciones de
ausencia de algún padre, violencia, abuso ejercida por los padres y hermanos
mayores; tal vez porque es un niño que posiblemente vive bajo constante presión
para que tenga éxito en sus actividades o por el contrario es un niño sumamente
mimado. Todas estas situaciones pueden generar un comportamiento agresivo en
los niños y llevarles a la violencia cuando sean adolescentes.

En la escuela: Cuanto más grande es la escuela hay mayor riesgo de que haya


acoso escolar, sobre todo si a este factor se le suma la falta de control físico,
vigilancia y respeto; humillación, amenazas o la exclusión entre personal docente
y alumnos. Por otro lado, los nuevos modelos educativos a los que son expuestos
los niños como la ligereza con que se tratan y ponen en práctica los valores,
según psicólogos y estudios realizados, han influenciado para que este tipo de
comportamiento se presente con mayor frecuencia.

La televisión: El mensaje implícito de determinados programas televisivos de


consumo frecuente entre adolescentes que exponen un modelo de proyecto vital
que busca la aspiración a todo sin renunciar a nada para conseguirlo, siempre y
cuando eso no signifique esforzarse o grandes trabajos, constituye otro factor de
riesgo para determinados individuos.

Los expertos han llegado también a la conclusión de que la violencia en los


medios de comunicación tiene efectos sobre la violencia real, sobre todo entre
niños. Se discute, no obstante, el tipo de efectos y su grado: si se da una imitación
indiscriminada, si se da un efecto insensibilizador, si se crea una imagen de la
realidad en la que se hiperboliza la incidencia de la violencia, entre otros.

También podría gustarte