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Literatura NM - Trabajo Escrito
Literatura NM - Trabajo Escrito
Asimismo, cabe resaltar que Medea desobedeció a las reglas sociales ya establecidas; se
observa esto cuando ella comienza a mostrar su odio y rencor hacia Jasón, hombre que la
abandonó por conveniencia personal. Entre estas reglas se hallaba la prohibición de sentimientos
negativos hacia el marido después de la separación; pero Medea hace caso omiso a esas reglas
y organiza su venganza.
Por otra parte, se observa el aspecto religioso que presentan todos los personajes, es
decir todos estos muestran cierta creencia en divinidades y deidades; desde la protagonista
Medea, al pedir que se haga justicia y se tome venganza en contra de Jasón, su nueva
esposa(Glauce) y su padre(Creonte).
En esta obra, se presenta un recurso estilístico que actúa como una representación de
las emociones y sentimientos de Medea en el transcurso de sus acciones, este es la animalización.
Pues para el desarrollo de este ensayo, en primer lugar se aclarará el significado del recurso
estilístico a estudiar para luego comprender la intención de otros personajes cuando se refieren a
Medea como una leona, un toro y Escila, además cuando esta acepta dicha animalización. Cabe
resaltar, que cuando la historia comienza, Medea era un modelo de mujer, puesto que renunció a
todos sus poderes como hechicera para cumplir con una orden social que era ser madre y ama de
casa. Ella, rompe los lazos familiares, deja prácticamente toda su vida atrás por formar una nueva.
Sin embargo, su esposo Jasón, la traiciona al llegar al pueblo de Corinto, porque se “enamora” de
Glauce, la hija de Creonte el rey de aquel lugar. Debido a esto, se desencadena el desequilibrio y
el caos, generando una transformación en Medea, cuando ella decide hacer uso de sus poderes
como hechicera.
La leona y el toro representan la ira de Medea. Esta ira se refleja en uno de los diálogos
de la nodriza: […] lo haré más tendré miedo de no persuadir a mi señora; y tomaré esta gracia de
pena. Y aunque se comporta como un toro con la mirada de una leona que ha parido en contra de
las criadas, cada vez que alguien hablándole se acerca […] (Eurípides (2015) Medea. Editorial
Losada S.A. (pág. 48))
Debemos saber que un toro, por mejor tratado que sea, no es dócil y siempre mantendrá
una distancia y una accionar de furia. Por ende, cuando la nodriza se refiere de esa manera a
Medea, quiere decir que Medea se está comportando impulsivamente, así mismo ese cruce de
miradas que existe entre ambas logra describirla como una mirada de leona que ha parido, porque
una leona al convertirse madre da la vida por sus hijos y no dejaría que nadie ni nada les haga
daño, ni se acerquen, en este caso, Medea no desea aquello para sí misma, pues está demasiado
molesta armando un plan de venganza.
Por otro lado, Escila representa la agresión de Medea. Pues, Jasón, el hombre causante
de todos esos sentimientos en Medea, la animaliza en uno de sus diálogos: […] ¡No existe mujer
griega que jamás se hubiera atrevido a eso, de entre las cuales yo te consideraba digna antes de
casarte, unión odiosa y funesta para mí, leona, no mujer, de naturaleza más salvaje que la tirrena
Escila! […] (Eurípides (2015) Medea. Editorial Losada S.A. (pág. 113 - 114))
Esta vez, Jasón comparó a Medea con una leona así como lo hizo la nodriza y además
dice que no es una mujer, es decir un humano, este tipo de ofensa hace referencia a la violencia
que este percibe en Medea. Puesto que al describirla como Escila, quien en la mitología griega
es un monstruo marino, descrita con torso de mujer y cola de pez, con seis perros partiendo de su
cintura con dos patas cada uno y cada cabeza con triple dentadura como un ser terrorífico y
espantoso; sin embargo, a ningún ser humano por más malo o grotesco que sea, no se sentiría
alagado al ser llamado así. Jasón, a pesar de ser el causante de todas esas emociones, continúa
con su despotismo hacia dicha mujer; es más, la culpa de lo sucedido: […] Zeus, ¿escuchas esto
y cómo somos rechazados y qué soportamos de esta sucia y filicida1 leona? […] (Eurípides (2015)
Medea. Editorial Losada S.A. (pág.118))
En los dos últimos diálogos mencionados, Jasón la compara nuevamente con una leona,
pues la agresividad que muestra Medea al cometer infanticidio simplemente para descargar la
molestia que siente contra alguien y quien mejor que sus hijos, unos seres inocentes e
inconscientes de lo que está sucediendo. Además, Medea llega al punto de aceptar la
animalización en ella misma, como lo menciona en el siguiente diálogo: […] No ibas a llevar vida
placentera riéndote de mí tras tu deshonra del lecho conyugal; ni impunemente habían de echarme
del país la princesa o Creonte, que una esposa te dio. Ante esto, llámame leona, si es tu gusto,
Escila y habitante de tirsénicas cuevas; el caso es que herí tu alma como lo merecías. […]
(Eurípides (2015) Medea. Editorial Losada S.A. (pág. 114))
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Dícese de la persona que mata a su(s) hijo(s).
Medea acepta que la representen de esa manera, después de tantas ofensas y
comparaciones con seres irracionales por parte de otros personajes y también tanta presión e ira
que siente contra Jasón, Glauce, Creonte y hacia sí misma por haber traicionado a su familia por
un hombre que al fin y al cabo la traicionaría por conveniencia personal.
No obstante, Medea al consentir esa animalización, se siente triunfante porque hirió a
Jasón con lo que más quería en su vida o sea matando a sus propios hijos, además asesinando a
Glauce y Creonte, quienes le darían la felicidad materializada. También, piensa que si es
desterrada, es porque los otros personajes están aceptando su victoria y ella les causa miedo y
terror.
En conclusión, la cólera y la ira, la agresividad y la aceptación de dichos sentimientos
aparecen como producto de una animalización hecha por personajes como la nodriza y Jasón
hacia Medea. Pues, mediante este recurso estilístico, la animalización, se logra representar las
emociones y los sentimientos de Medea en el transcurso de sus acciones, o sea cómo varía el
estado anímico de la protagonista en el transcurso de su venganza hacia las personas causantes
de aquel dolor. Pero en primer lugar por personajes que la rodean y luego y aceptándolo. Mediante
la obra Medea, Eurípides, el autor de la misma, logra describir la sociedad de ese entonces,
cuando a la mujer no se le aceptaba sentir desprecio, cólera, ira, dolor, sufrimiento y odio hacia un
hombre aunque la haya traicionado. Sin embargo, este dramaturgo muestra una mujer distinta,
valiente que cree en la justicia cree que puede ponerla en práctica con sus propias manos y no le
tiene miedo ni al rechazo, ni a la expulsión social ni a la muerte, ni al castigo que pueda recibir
mientras crea que está en lo correcto. No obstante, las mujeres se caracterizan por eso, o sea por
ser muy dulces y valientes a la vez pero si tienes una intención negativa para con ella, el resultado
puede ser fatal. Recordemos una frase que dijo William Shakespeare: “La mujer es un manjar
digno de dioses, cuando no lo cocina el diablo”
Fuentes primarias:
Simonov, N. (2016) The Free Dictionary (filicida), Farlex, Inc., recuperado el 14 de octubre
del 2016 de http://es.thefreedictionary.com/filicida