Boletín No.

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CUERPOS
RECUPERADOS
DEL AGUA
María Dolores Morcillo Méndez

Son usualmente casos de gran complejidad y reto para los María Dolores Morcillo Mé-
forenses. Ofrecen dificultad especialmente en cuanto a la ndez, Médica de la Universi-
determinación de la causa y de la manera de la muerte. Se dad del Rosario, especialista
presentan muchas causas de muerte y todas las maneras de en Medicina Forense de la
muerte son probables. Universidad Nacional de Co-
lombia.
Al recuperar un cuerpo del agua no debe pensarse en que
necesariamente se trata de una muerte por sumersión. Como Actualmente coordina la
en las otras muertes por asfixias, el diagnóstico realmente se Unidad de Justicia y Paz en el
hace excluyendo otras causas de muertes. Grupo Nacional de Patología
Forense del Instituto Nacio-
La recuperación de un cadáver del agua plantea una serie de nal de Medicina Lgeal y Cien-
preguntas a las que es necesario dar respuesta, resultando en cias Forenses.
ocasiones imposible por diversos factores. Del examen forense
se obtendrá información que permitirá determinar quién es la
víctima?, estaba viva antes de entrar al agua?, corresponde
a una asfixia por sumersión?, y si no, cuál es la causa de la
muerte?, por qué la víctima no pudo sobrevivir una vez estuvo
en el agua?, existe algún toxico que haya desencadenado o
contribuído a la muerte?, cuál es el tiempo de muerte?, entre
otros1. Ocurre con frecuencia que la mayoría de estos cu-
erpos presentan cambios por descomposición en diferentes
estadíos, lo que dificulta enormemente la interpretación de los

Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses

Subdirección de Servicios Forenses
Grupo Nacional de Patología Forense
e-mail: patologianacional@medicinalegal.gov.co

Diseño y Diagramación: Grupo de Comunicaciones- Claudia Lotta P.

1
hallazgos. Muchos casos son
dejados en estudio o quedan
indeterminados después del
estudio postmortem respec-
tivo, sin embargo en mu-
chas ocasiones, esto ocurre
como consecuencia de la
falta de información o de la
dificultad de interpretar de
forma integrada los hallaz-
gos de necropsia y hallazgos
de laboratorios a la luz de la
información sobre la esce-
na, sobre las circunstancias
y sobre la víctima que debe
aportar la respectiva inves-
tigación del caso. El abor-
daje de estos casos debe
considerar las circunstancias
alrededor de la muerte que
aporta la investigación judi-
cial y determinar a partir de
los hallazgos de necropsia si
estos son o no consistentes
con las circunstancias2.
Investigación de la es-
cena y las circunstan-
cias
Esta información permite
una orientación o determi-
nación de la condición de
la víctima, de su premorbili-
dad y de todos aquellos fac-
tores que estén relacionados
con el aumento del riesgo
de ahogamiento de un in-
dividuo en particular. Sin
embargo esta información
es, la mayoría de las veces
de difícil obtención, ya que
el hecho suele no tener testi-
gos2. En otros casos la infor-
mación no es real, sino que
consiste en versiones contra-
dictorias relacionadas con
el vínculo entre la víctima y
el supuesto testigo, lo que
hace mas difícil el análisis.
Aún cuando la información
sea buena o relevante, ex-
iste casi siempre un margen
de duda sobre si la entrada
al agua fue realmente acci-
dente o de forma delibera-
da.
A pesar de lo inespecífico
de los hallazgos postmortem
en los cuerpos recuperados
del agua, el ahogamiento
comprende mecanismos fi-
siopatológicos muy comple-
jos que dependen de varios
factores relacionados tanto
con la víctima como con
la escena3, denominados
también factores humanos y
factores ambientales4.
Es importante que la investi-
gación aporte datos acerca
de la seguridad del sitio (re-
jas, cercas, etc), especial-
mente en los casos en donde
la víctima es un menor. En
los casos en los que el menor
es encontrado en una tina,
balde o alberca, hay que
registrar el tipo de contenido
del mismo y hasta que nivel
estaba el líquido. Se han
registrado muertes de niños
en baldes con solo el 10%
de su capacidad llenos3.
En los casos de cuerpos en-
contrados en el baño (tinas)
cualquier manera de man-
era de muerte es posible, y
debe considerarse como
sospechosa y el investiga-
dor debe estar preparado
para encontrarse con alter-
aciones en la escena, inten-
cionales o por el personal
2
que inicialmente atiende
la emergencia (i.e. para-
médicos). En casos de tinas
vacías, debe buscarse la ev-
idencia de que hubo agua y
que la tina se desocupó pos-
teriormente, como el pelo y
las prendas mojadas.
En todos los casos, la tem-
peratura del agua es tam-
bién importante. Se debe
indagar sobre las activi-
dades que usualmente una
persona realiza, como pes-
car, nadar, caminar o jugar
cerca de la orilla del agua.
Otros aspectos como si es-
taba vestida o no, o como
era su vestimenta son impor-
tantes para ayudar a deter-
minar las circunstancias en
la que las victimas entraron
al agua. Donde se encuen-
tren las pertenencias y ropas
del fallecido y de qué forma
están dispuestas. Hay que
tener en cuenta que en ca-
sos de homicidios y suicidios,
ambas muertes son inten-
cionales, y eso es lo que hay
que valorar en la escena y
posteriormente en la autop-
sia4.
La identificación de la víc-
tima es fundamental para
saber su historia y determi-
nar intentos previos, o al-
teraciones en el compor-
tamiento, entre otras cosas.
En el suicidio la investigación
debe demostrar la intención
de la víctima de cometerlo1.
En Colombia los ríos han sido
tradicionalmente la vía de
descarte de cuerpos victi-
 mas de homicidios, las cir-
cunstancias alrededor de
los hechos y aspectos sobre
el hallazgo del cuerpo mar-
can la diferencia, en estos
cuerpos recuperados del
agua, la sumersión no causa
el ahogamiento sino que se
usa para descartar eviden-
cias y el cuerpo mismo. En
la parte final de este docu-
mento se amplian algunos
aspectos en relación a estos
casos en este contexto.
Aspectos epidemi-
ológicos
En los grupos de riesgo, la
mayoría corresponden a
hombres. eneralmente
esta relacionado con época
de verano o en lugares de
clima cálido. Hay factores
asociados según grupos de
edad, como por ejemplo los
Toni Frissell, parque Weeki Wachee Spring, Florida
jóvenes y el consumo de al-
cohol y/o drogas. La may-
oría de las víctimas sabe
nadar, lo que implica otros
factores presentes.
Los niños tienen un alto ries-
go de ahogamiento por di-
versas circunstancias, espe-
cialmente los menores de 2
años. En estos casos se ha
relacionado la falta de su-
pervisión de los padres o de
adultos, lo que es importante
porque orienta el caso hacia
posible maltrato por negli-
gencia, por omisión o inten-
ción. Los niños usualmente
sobreviven a la reanimación
que se inicia mas temprana-
mente si el hecho ocurre en
una piscina y es atestiguado
a si ocurre en un lago, una
alberca o en un rio.
En el año 2000 se estimó
que los ahogamientos oca-
sionaron a nivel mundial un
3
total de 450000 fallecidos5,
aproximadamente medio
millón de personas mueren
cada año en todo el mundo
a causa de una asfixia por
sumersión1. En Colombia,
así como en otros países, las
muertes por sumersión están
la mayoría de las veces aso-
ciadas a actividades recre-
ativas acuáticas y al consu-
mo de alcohol. Entre el año
2004 y 2007 el ahogamiento
constituyó en Colombia la
segunda causa de muerte
accidental en menores de
18 años con el 40.8%, den-
tro de los cuales la mayoría
corresponden a menores de
4 años con el 42.3%. Es mas
frecuente en los departa-
mentos de Valle, Antioquia,
Cundinamarca, Santander,
Bolívar y Meta. Aunque la
mayoría de los casos ocurrió
en los meses de enero, junio,
julio y diciembre, la presen-
tación de estas muertes no
se limita a la época de va-
caciones5. En el año 2008,
se realizaron en Colombia
26.958 necropsias médico
legales, dentro de las cuales,
las muertes por sumersión
(597) explican la mayoría
de las lesiones accidentales
fatales. De estas, el 44.6%
se presento en menores de
edad y 47.4% en adultos en-
tre 18 y 59 años. En relación a
otras maneras de muerte, se
registraron en Colombia 14
casos de suicidios por sum-
ersión, todos en hombres,
contrario a lo que se registra
en la literatura mundial en
donde en los casos de suici-
dio por sumersión, la mayor
incidencia es de mujeres y
grupos de edad mayores
que en los casos de etiología
accidental1. En 67 casos se
determinó que la causa de
la muerte fue sumersión pero
no se pudo determinar la
manera de la misma. No se
registró en Colombia ningún
caso de homicidio por sum-
ersión en el año 20085, sin
embargo en el año 2009 se
registraron 20 casos (0.11%
del total de homicidios)6,
estudios en otros países de-
scriben una tasa de inciden-
cia del 0.46%.
Fisiopatología y patológico producidos por
Mecanismos de
muerte
Existen varias definiciones
del término ahogamiento
o sumersión, así como del
mecanismo de muerte en
estos casos. En términos
generales, la causa de la
muerte está dada por la
entrada de líquido al tracto
respiratorio o a la vía aérea,
excluyendo fluidos orgáni-
cos propios del individuo3.
Ante la gran cantidad de
muertes por ahogamiento
en el mundo, especialmente
en países del tercer mundo,
se desarrolló en Amsterdam,
Holanda en junio de 2002
el primer congreso mundial
sobre asfixia por sumersión
(o ahogamiento). Debido
también a la gran cantidad
de definiciones disponibles
en la literatura mundial sobre
ahogamiento y sumersión,
se definió al ahogamiento
como el proceso de experi-
mentar insuficiencia respi-
ratoria por la sumersión o
inmersión en medio líquido
(“Drowning is the process of
experiencing respiratory im-
pairment from submersion/
immersion in liquid.”) 1,7. En
dicho congreso, también
existió un cierto consenso
para que el término de casi-
ahogado (near-drowning)
fuera abandonado ya que
se prestaba para múltiples
interpretaciones, es confu-
so e impreciso. En sentido
médico legal, Concheiro y
Suárez8 definen la sumersión
como la muerte o el trastorno
la introducción de un me-
dio líquido, habitualmente
agua, en las vías respira-
torias. Primaria cuando la
muerte sobreviene de forma
inmediata, y secundaria
cuando la introducción en
medio líquido solo ocasio-
na un trastorno patológico,
que eventualmente puede
generar la muerte de forma
posterior1. El volumen y las
características del medio en
el que se produce el ahog-
amiento determinaran en
gran parte los eventos fisio-
patológicos por los que se
desencadena la hipoxia y fi-
nalmente el paro cardiaco.
A pesar de las diferentes
experiencias y la gran can-
tidad de estudios clínicos
en casos de ahogamien-
tos, los mecanismos exactos
de la asfixia por sumersión
en humanos siguen siendo
desconocidos en muchos as-
pectos9. Es por esto que po-
demos encontrar en la litera-
4
tura varios tipos de sumersión
o de ahogamiento. Tenien-
do en cuenta el mecanismo
fisiopatológico de la muerte
en estos casos, es posible
distinguir entre asfixia por
sumersión y muertes en el
agua con los denominados
pulmones secos (dry lung),
o en otras denominaciones,
muerte súbita por sumer-
sión, ahogamiento seco, sín-
drome de inmersión1,3.
El mecanismo de muerte es
complejo y varia de acuer-
do a las circunstancias. No
se trata de una simple asfixia
debido a la sofocación por
líquido. En los casos de as-
fixia por sumersión propia-
mente dicha, es importante
tener, ojalá, información
precisa acerca de las cir-
cunstancias precisas alred-
edor de los hechos. Pudo
ser que el individuo estaba
en al agua y de repente se
ahogó, pudo ser que ingresó
rápidamente al agua y luego
se ahogó, entre otros, que
puede explicar en muchos
casos los variados hallazgos
de necropsia que suelen ob-
servarse en estos casos.
De forma habitual, se pro-
duce inicialmente una
fase de apnea en la que
el individuo mantiene la re-
spiración para evitar la pen-
etración del agua. Luego
se da la fase de struggling•
o lucha, que puede ser por
10 a 20 segundos en niños
o en adultos alrededor de
60 segundos. El mantener
la respiración perdura hasta
un “punto de quiebre”3, que
 es la irresistible necesidad
de respirar y se produce un
gasp o boqueada invol-
untaria en donde hay in-
halación del agua, seguida
de una disnea espiratoria
por estimulación del agua
sobre la mucosa laringea1.
Puede darse también la
presencia de vómito, con el
riesgo de aspiración de con-
tenido gástrico. Después del
Museo Bajo el Agua, Cancun, México.
gasp involuntario hay larin-
goespasmo, con lo que se
produce mayor entrada de
agua que es tragada por el
individuo. Cuando el líquido
es inhalado, se produce un
reflejo vagal o parasimpáti-
co que ocasiona una con-
stricción de la vía aérea
periférica que conlleva a un
incremento de la resistencia,
lo que significa una reduc-
ción de la complacencia
(compliance) pulmonar. Se
crean cortos intrapulmonares
por diversas razones depen-
diendo del medio en el que
ocurre la sumersión. El agua
inhalada afecta la membra-
na alveolar y el surfactante.
Impurezas en el agua u otros
detritus son también lesivos.
Seguidamente se produce
el colapso del alvéolo, cor-
tos (shunts) intrapulmonares,
alteración de la ventilación
– perfusión, y sobrevienen los
reflejos de respuesta pulmo-
nar.
Además de la hipoxia o an-
oxia, lo más importante es el
edema pulmonar. Aunque
hay cambios en el volumen
sanguíneo y trastornos elec-
trolíticos, según experimen-
tos de animales, estos son
usualmente insignificantes
en el cuadro clínico3. Se
ha concedido gran impor-
tancia a las alteraciones
electrolíticas que el agua
podía producir al ingresar a
la circulación, no obstante,
5
en observaciones hechas a
sobrevivientes se pudo com-
probar que las alteraciones
electrolíticas no eran alta-
mente significativas y usual-
mente eran compatibles con
la vida1. Sin embargo meno-
res cantidades de agua in-
halada que producen estas
alteraciones en el volumen
sanguíneo y en los electroli-
tos si puede jugar un papel
importante en el casi ahog-
amiento.
En cualquier caso, la forma
en que ocurren las alter-
aciones a nivel de la mem-
brana alveolar y las alter-
aciones electrolíticas, se ve
influenciado por la osmo-
laridad del líquido inhala-
do. En agua dulce, el me-
dio líquido será hipotónico
en relación al plasma. De
manera que cuando in-
gresa al alveolo esta se ab-
sorbe rápidamente y pasa
a la circulación pulmonar
lo que lleva a hemodilución
que llevará a hipernatremia,
hipervolemia y finalmente
insuficiencia cardiaca8.
Ocurre también hemólisis
que puede llevar a hiper-
kalemia desencadenando
arritmias y la muerte del indi-
viduo. En agua salada, el
medio líquido es hipertónico
en relación al plasma. La
inhalación de agua lleva
a salida de líquido de la cir-
culación pulmonar hacia
el espacio alveolar como
resultado de la diferencia
de osmolaridad. Al mismo
tiempo electrolitos como so-
dio, cloro, magnesio pasan
a la circulación sanguínea.
Es decir que ocurre una el mecanismo sea un espas- tre los tradicionales signos
hipovolemia, hemoconcen- mo severo de la glotis lo que de ahogamiento, especial-
tración y edema pulmonar evita que el agua entre a los mente edema pulmonar,
severo, que en conjunto van pulmones. Los testigos de- debe considerarse otros
a afectar la función cardia- scriben que la víctima cae al eventos como causa de
ca llevando a bradicardia y agua y rápidamente se sum- muerte. Así como la muerte
asistolia. Sin embargo hay erge sin observar un struggle súbita ocurre fuera del agua,
que tener en cuenta que las o lucha, incluso aunque sea esta también puede ocurrir
alteraciones en la función retirado del agua rápida- dentro del agua. De man-
cardiaca no se debe sola- mente la muerte ocurre casi era que deben investigarse
mente a los cambios hemod- de forma inmediata. Puede más detenidamente las cir-
inámicos por la diferencia de
osmolaridad, sino mas bien
a efectos de la hipoxia pro-
longada - no solo como re-
sultado de la apnea sino del
daño pulmonar secundario
-, con descarga de cateco-
laminas (vasoconstricción
generalizada) y en los ca-
sos de bajas temperaturas,
a la hipotermia. Aunque los
efectos de las alteraciones
electrolíticas que se presen-
tan son muy discutidas, estos
cambios tienen rara vez real
significancia, por lo menos
en los pacientes víctimas de
ahogamiento que han so-
brevivido10.

Muerte súbita por sumersión

(Ahogamiento seco, sín-
drome de inmersión).

En 10 a 20 por ciento de
los casos3 los hallazgos del
tradicional ahogamien-
to húmedo no están pre-
sentes porque la aspiración
de agua no ocurre. No se
encuentra líquido en los
pulmones. A estos casos,
se les ha denominado de
diferentes maneras como
pulmones secos o ahog-
amiento en seco, sumersión
sin aspiración, muerte súbita
por sumersión. Se cree que
que se deba a que la apnea
ocasiona un estimulo vagal
en los quimiorreceptores del
cuerpo carotídeo y se pro-
duzca un paro cardiaco por
esta razón.
Otros autores11 consideran
que en los casos de cuer-
pos recuperados del agua
en los que no se encuen-
cunstancias alrededor de los
hechos y antecedentes per-
sonales del individuo. Gen-
eralmente estas víctimas
son hombres mayores que
han ingerido previamente
alcohol o que tienen enfer-
medad cardiaca de base.
Algunos individuos puede
que estén predispuestos al
colapso cardiaco por anor-

6
malidades en la conduc-
ción. Este aspecto es impor-
tante para la determinación
de la causa básica y la man-
era de muerte. Por ejemplo,
de tratarse de una muerte
súbita de origen cardiaco,
la causa de la muerte será
la condición patológica ori-
gen del colapso y la manera
de muerte será Natural.
Recientemente se ha recon-
siderado el concepto de
ahogamiento con pulmones
secos y se ha visto que la in-
cidencia real es tan sólo del
2%12. Es decir, que la gran
mayoría de los cuerpos re-
cuperados del agua con
pulmones de aspecto nor-
mal corresponden mas bien
a casos de muertes natu-
rales que tal vez pasan de-
sapercibidos por los servicios
forenses en general.
Síndrome post inmersión,
Casi ahogamiento
Quiere decir que la muerte
no ocurre en la escena sino
que hay un cierto tiempo de
sobrevivencia después de la
resucitación y el tratamien-
to. Generalmente fallecen
por las complicaciones sub-
siguientes. Estas muertes son
usualmente a causa de la le-
sión pulmonar como resulta-
do de la pérdida del surfac-
tante pulmonar y los efectos
de la hipoxia prolongada9.
Las complicaciones pulmo-
nares pueden aparecer con
o sin pérdida de la concien-
cia, y las alteraciones en el
surfactante pueden apare-
cer incluso 12 horas después
del incidente. Los riesgos mayor tiempo de apnea sin
a pesar del éxito en la re- riesgo de asfixia en estos teji-
sucitación son aspiración dos.
gástrica, la inhalación de
material extraño lo que con- La Necropsia Médico
tribuye a la infección y al
síndrome de distress respira-
Legal
torio del adulto. En los ca-
No existen hallazgos de
sos de casi ahogamiento la
necropsia patognomónicos
mayoría tiene algún grado
de sumersión o ahogamien-
de daño cerebral. También
to, los hallazgos son muy vari-
puede verse insuficiencia re-
ables y dependen en gran
nal aguda como resultado
medida del estado en el que
de rabdomiolisis asociada al
se encuentra el cuerpo. De
trauma o inducida por el frio.
manera que determinar que
También se observa necrosis
la víctima estaba viva antes
tubular aguda3.
de ingresar al agua, y excluir
causas de muerte naturales,
Se han establecido ciertos
traumáticas y toxicológicas
factores pronósticos como
es críticamente importante.
son la edad, el tiempo de
A pesar de que existen hal-
sumersión - la muerte ocurre
lazgos característicos de
de manera casi invariable
sumersión, el diagnóstico de
cuando el periodo de sum-
muerte por ahogamiento es
ersión excede los 10 minu-
más bien de exclusión9,13
tos7 -, el agua fría, que no
. La necropsia debe ser
haya habido aspiración,
completa, e incluir un tam-
reanimación temprana, re-
izaje toxicológico completo
torno espontáneo rápido
e idealmente el estudio mi-
del ritmo cardiaco, que no
croscópico de todos los ór-
haya habido pérdida de la
ganos. Aunque esto no es
conciencia, respuesta pu-
siempre posible, entre otras
pilar presente. También hay
causas por el estado de
que tener en cuenta si la in-
descomposición en el que
mersión es en agua fría que
son usualmente recupera-
puede desencadenar otros
dos muchos de los cuerpos.
mecanismos de respuesta
como respuesta a choque
El estado de las prendas es
frio e hipotermia, y a la re-
fundamental. Es importante
spuesta al reflejo de buceo
contar con información clara
de los mamíferos (Mam-
o fotografías de estos detall-
malian diving response) que
es en la escena y sobretodo
en cierta forma protege al
de registros por el personal
sujeto, especialmente a los
de la escena en cuanto a
menores, debido a la redis-
alteraciones que ocasionen
tribución del flujo sanguíneo
a las prendas durante la re-
asegurando aporte con-
cuperación del cuerpo del
tinuo de oxigeno al corazón
agua, lo mismo que ayudas
y al cerebro, lo que lleva a
7
 empleadas, como por ejem-
plo cuerdas. El tipo de pren-
das y si se encuentran húme-
das o no es frecuentemente
un importante aspecto al
momento de correlacionar
hallazgos de necropsia con
las versiones de los hechos,
especialmente en los casos
de menores que fallecen en
casa con historia de caída
al agua o de haber sido en-
contrados dentro de una
alberca o de cabeza en un
balde.

Al examen externo podemos

Figura 1. Hongo de espuma en cuerpo recupera-
do del agua. (Foto cortesía Dr. Jairo Vivas)
encontrar hongo de espu-
ma sobre los orificios nasales
y la boca. Es considerado
un hallazgo indicativo de as-
fixia por sumersión (Fig. 1),
sin embargo, corresponde
más a un signo indicativo de
edema pulmonar severo, por
lo que puede también estar
presente en otras causas de
muerte (Fig. 2). General-
mente es de color blanque-
cino, amarillento o rosado.
No esta presenta en todos
los casos bien sea porque la
espuma no alcanzó a salir al
exterior o porque habiendo
salido se ha limpiado al tratar
de sacar el cuerpo del agua
o durante las diligencias de
inspección de cadáver.

Debido a que en los casos

de sumersión se puede pre-
sentar el espasmo cadavé-
rico, también conocido
como rigor instantáneo1,13,
puede observarse a nivel
de las manos, que los de-
Figura 2. Hongo de espuma en caso de muerte por trauma to-
dos, fuertemente flexiona-
raco abdominal cerrado compresivo. (Foto Álvaro García)
dos pueden retener ramas u
otro tipo de vegetación de

8
donde se produjo la sumer-
sión. Se considera como un
claro significado de reac-
ción vital3,8. En este sentido,
debe valorarse con atención
la presencia de material en
las manos o en las uñas, que
pudieran indicar struggle o
lucha dentro del agua.
A la exploración de los
fenómenos cadavéricos,
hay que tener en cuenta
que estos casos requieren de
un cuidadoso análisis e inter-
pretación de hallazgos para
la determinación del interva-
lo postmortem. Aspectos
tales como el tipo de agua
de donde fue recuperado
el cadáver, la temperatura
del agua y del ambiente,
si es agua sucia, agua cor-
riente, o agua estancada,
la salinidad del agua y la
cantidad de bacterias son
factores determinantes en el
proceso de descomposición
del cadáver15. Por ejemplo
la descomposición en un
medio pantanoso, con ba-
suras y muy contaminado
será más rápida que si es
en aguas limpias como una
piscina. Normalmente la
descomposición ocurre más
lentamente que en cuerpos
a la intemperie. Aproxima-
damente en una rata de la
mitad de la descomposición
en aire, como resultado de
temperaturas mas bajas y
actividad animal (insectos)
reducida. Normalmente la
víctima se sumerge a medida
que va saliendo el aire de los
pulmones hasta llegar al fon-
do. Al iniciarse los cambios
por descomposición inicial,
comienza la producción de
gases por la actividad bac-
teriana que luego hace que
el cuerpo flote o salga nue-
vamente a la superficie. El
cuerpo adopta una posición
en decúbito prono con la
cabeza y extremidades in-
feriores a un nivel más bajo
que el tronco. Debido a
esta posición en el agua, es
de esperarse que las lividec-
es se observen con mayor in-
tensidad en la parte anterior
del tórax, cuello y en la cara
y cabeza (parte frontal). Si
el cuerpo ha cambiado de
posición varias veces por ac-
ción de las aguas en las que
se encuentra, es posible que
las livideces no se ubiquen
con predominancia en al-
guna zona, y en algunos
casos pueden ser casi im-
perceptibles1. En cadáveres
frescos, podemos encontrar
que las livideces se observen
de un color ligeramente más
claro, lo que puede deberse
a las bajas temperaturas del
agua.
La actividad de carroñeros
e insectos en las superficies
expuestas orientaría al mo-
mento en que el cuerpo salió
a flote, que depende princi-
palmente de la temperatura
del agua. En temperaturas
medias se espera que el cu-
erpo salga a flote en pocos
días, pero en aguas frías o
heladas, el cuerpo puede
tardar en salir a flote por se-
manas, incluso meses15. La
presencia de fauna acuáti-
ca también interviene, por
ejemplo retirar partes de
tejido hace que el cuerpo
9
salga a flote mas rápido, y
así mismo es una entrada
de bacterias que acelera la
descomposición.
En estos casos y en todos los
descompuestos en general,
además de los múltiples fac-
tores que hay que tener en
cuenta, siempre hay que
pensar en la descomposición
irregular o desproporcional y
en la preservación artificial
del cuerpo a la hora de esti-
mar el tiempo de muerte de
un individuo.
En relación a la temperatu-
ra, hay que considerar una
pérdida de la temperatura
corporal más rápida, debi-
do a que la nivelación de la
temperatura entre el cuerpo
y el medio líquido ocurre con
mayor rapidez.
En general los cuerpos tien-
den a tener una rata de
descomposición menor si
están sumergidos en agua,
proceso que se acelera
considerablemente al sacar
el cuerpo del agua y pon-
erlo en contacto con el aire
libre15. Si el cadáver ha per-
manecido un tiempo consid-
erable en el agua, el cuerpo
tiende a sufrir el proceso de
saponificación, encontran-
do en muchos casos los cu-
erpos con adipocira al mo-
mento del examen forense,
lo que favorece la conser-
vación del cuerpo.
Durante el examen externo,
podemos encontrar signos
de hipoxia inespecíficos en
piel y mucosas que gen-
eralmente se representan
en la congestión. Debido
a la posición que adopta el
individuo en el agua, esta
congestión se encubre por
la presencia de livideces
o puede no estar presente
porque la causa de muerte
sea de otro origen y por lo
mismo requiere especial cui-
dado al momento de la in-
terpretación.
En los cuerpos recuperados
del agua pueden obser-
varse una serie de cambios
que están más relaciona-
dos con la prolongada per-
manencia del cuerpo en el
agua que con la asfixia por
sumersión misma1,13 lo que
es importante al momento
de interpretar los hallazgos
de necropsia:
• Piel con aspecto an-
serino, cutis anserina: Dada
por la piloerección debido a
la rigidez que sufren los mús-
culos piloerectores, favoreci-
do por la exposición al frío.
• La maceración¶ cu-
tánea es uno de los proce-
sos más frecuentemente
observados en los cuerpos
que han permanecido en
el agua. El agua produce
un blanqueamiento, engro-
samiento y arrugamiento de
la epidermis. Aparece prim-
ero en la piel de la cara an-
terior de los dedos, posterior-
mente en las palmas y luego
en la cara dorsal2. Es lo que
esta descrito en los textos
clásicos como manos de la-
vandera (“washerwoman´s
hands”). Si la exposición
se prolonga este despren-
dimiento de la epidermis
Figura 3. Maceración cutánea: Blanqueamiento, engrosamiento y ar-
rugamiento de la epidermis. “Manos de lavandera”.
(Foto cortesía Dra. Nora Arredondo).
puede incluir las uñas y pe-
los, y desprenderse como un
guante o una media. La pres-
encia de prendas y zapatos
retarda la maceración de la
piel. Este fenómeno puede
aparecer a los minutos o
pocas horas, especialmente
en agua tibia. En general
es un proceso que demora
entre 8 y 24 horas pero hay
autores que lo han descrito
como de inicio a las 4 horas20,
aunque puede tardar hasta
48 horas. En ocasiones, si el
agua es muy fría todo el pro-
ceso completo puede de-
morarse varios días3. Debi-
do a la gran variación en el
tiempo de aparición de este
fenómeno y a los múltiples
factores que pueden inter-
venir, es extremadamente
difícil estimar el tiempo que
un cuerpo ha permanecido
inmerso en el agua y se re-
quiere de especial cuidado
al momento de tratar de dar
opiniones al respecto.
10
• Es frecuente encon-
trar lesiones externas de
diferente naturaleza en los
cuerpos recuperados del
agua. Debido a la posición
que usualmente toman los
cuerpos, y dependiendo
de las características del
medio, pueden observarse
abrasiones especialmente
en las partes prominentes
de la cara, del tórax y de
las extremidades. Pueden
encontrarse lesiones tam-
bién producto de embarca-
ciones (hélices) que golpeen
el cuerpo, así como lesiones
dejadas por fauna acuática
de diferentes tipos y tama-
ños. Debe también evaluar
posibles lesiones causadas
al momento de la recuper-
ación del cuerpo por difer-
entes medios. En algunos
casos las lesiones tienen un
claro carácter vital, pero
esto debe ser evaluado con
cuidado. A veces es difí-
cil diferenciar entre lesiones
antemortem o postmortem.
Puede ocurrir que lesiones
vitales sean “lavadas” ex-
haustivamente por el agua
dejando los bordes pálidos
y prácticamente exangües,
haciendo parecer que se tra-
ta de lesiones postmortem.
De otro lado, lesiones post-
mortem pueden tener apari-
encia de vitalidad especial-
mente si están ubicadas en
los sitios donde haya mayor
predominancia de livideces.
Los estudios de histología en
estos casos pueden resultar
de gran ayuda, aunque el
hecho de no encontrar re-
acción celular en las lesiones
no quiere decir que la herida
sea postmortem1,2,13,14.
rosa más intenso debido a
la impregnación con san-
gre más fácil a este nivel.
La presión de los pulmones
hará que mayor espuma sal-
ga hacia la vía aérea. Hay
que recordar que la espuma
es un resultado de un proce-
so vital y por lo tanto indica
que la persona estaba viva
al momento de ingresar al
agua2.
Puede también observarse
la presencia de material
foráneo o cuerpos extraños
en la vía aérea superior, sin
embargo este hallazgo por
si solo tampoco es suficiente
para la determinación del
ahogamiento. Este hallazgo
no siempre está presente,
no solo por la manipulación
del cuerpo antes referido,
sino por el paso del tiempo,
es decir a mayor tiempo de
intervalo del cuerpo en el
agua menor la incidencia
de observar este hallazgo.
En el examen de los pulmo-
nes, el peso se ha empleado

Al examen interno, la disec-

ción del cuello es manda-
toria en todos los casos, así
como la exploración de la
columna cervical especial-
mente. Una disección de
piel anterior y posterior y en
extremidades es importante
para documentar la pres-
encia de lesiones que no se
observen al examen externo
y que pueden contribuir al
esclarecimiento de un caso,
especialmente para la man-
era de muerte.

Los hallazgos en los casos

de muerte por sumersión es-
tán reflejados en el aparato
respiratorio y están relacio-
nados con la entrada del
líquido a las vías respiratorias.
La espuma que puede ob-
servarse sobre nariz y boca Figura 4. Apariencia de los pulmones en la cavidad torácica. Nótese
se encuentran también en como los arcos costales pueden quedar marcados sobre la superficie
tráquea y bronquios. En es- de los pulmones, debido a la distensión de los mismos ocupando la
tas áreas puede ser de color cavidad torácica en su totalidad.

11
como soporte de ahog- tensión de los mismos ocu- así como con el componen-
amiento en varios estudios, pando la cavidad torácica te traumático a la entrada
siendo este de aproxima- en su totalidad (Fig. 4). La del agua. Pueden también
damente entre 1000 y hasta superficie de los pulmones es observarse focos hemor-
2200 gramos en conjunto. lisa y de color violáceo, en rágicos en el parénquima
No se ha descrito que exista ocasiones grisáceo-azuloso,; pulmonar1. El edema pul-
una relación importante en- pueden verse pequeñas monar no es específico del
tre el peso de los pulmones áreas rosadas o más claras ahogamiento y puede verse
y el medio de ahogamiento que corresponden a teji- en varios tipos de muerte.
(agua salada o dulce), sin do pulmonar más aireado. Debe correlacionarse este
embargo, la presencia de Tienen consistencia pastosa, hallazgo con el resto de hal-
líquido en cavidad pleural y al corte se observa gran lazgos y con las circunstan-
se ha visto mas incrementa- salida de líquido. Pueden cias de los hechos.
do en los ahogamientos en verse también bulas enfise-
agua salada. Debe tenerse matosas, ocasionalmente Encontrar la presencia
en cuenta enfermedades petequias en la serosa pero del medio acuático en el
preexistentes especialmente esto es muy raro, o hemorra- tracto gastrointestinal tam-
de origen cardiaco que gias subpleurales relaciona- bién es un hallazgo muy
pudiera influir en el hallaz- das con el proceso asfíctico, inespecífico3,9. La presen-
go de líquido en cavidades
pleurales o en el peso de los
pulmones3. Así como en to-
dos los casos, el estado de
descomposición del cuerpo
que obviamente afecta el
hallazgo de líquido en cavi-
dades pleurales y el peso de
los pulmones no tiene la mis-
ma significancia porque el
proceso de descomposición
puede disminuir el peso de
los órganos. En cualquier
caso, el peso de los pulmo-
nes es importante y puede
ser significativo dependien-
do de las circunstancias y
de otros hallazgos.

La apariencia de los mismos

es voluminosa, como hiper-
insuflados (Fig. 5). Al hacer
la disección del tronco y reti-
rar el peto esternal se obser-
va como si los pulmones se
fueran a salir de la cavidad,
incluso los arcos costales
pueden quedar marcados
sobre la superficie de los Figura 5. Apariencia de los pulmones voluminosa, hiperinsuflados.
pulmones, debido a la dis-

12
cia de grandes cantidades
de líquido en el estómago
sugiere fuertemente sumer-
sión, sin embargo, la entrada
de líquido en el tracto gas-
trointestinal puede darse de
forma pasiva postmortem y
no estar relacionada con un
proceso de asfixia por sum-
ersión. Encontrar grandes
cantidades de líquido (más
de 500 cc), o agua en el
duodeno puede ser más sig-
nificativo1. La ausencia de
líquido puede darse en ca-
sos de ahogamiento rápido
o en casos de muertes por
otras causas en medio líqui-
do2.
Pueden observarse hemor-
ragias intramusculares, es-
pecialmente en el cuello y
extremidades, las cuales de-
ben interpretarse teniendo
en cuenta varios factores.
Puede ocurrir por ejemplo
rompimiento de vasos post-
mortem, lo que está influen-
ciado por los cambios de
presión, la descomposición
y/o el trauma. Estas hemor-
ragias postmortem se pre-
sentan en las áreas en donde
hay livideces y son atribuibles
a la hipostasis, aunque tam-
bién se han atribuido a las
convulsiones agónicas du-
rante el evento16. Pueden
ser extensas o pueden ser
focalizadas y observarse
tanto en los compartimen-
tos anterior, como medio y
posterior. Estas hemorragias
no están asociadas solo al
ahogamiento, sino también
a cualquier caso en el que
la posición del cuerpo sea
con la cabeza hacia abajo
y con mayor razón si el resto
del cuerpo esta en un plano
más superior3. En el caso
de hemorragias en el cuello,
debe explorarse el mismo
con sumo cuidado tratando
de identificar otras lesiones
más profundas que se aso-
cien a trauma en el cuello
como en casos de estran-
gulación, por ejemplo. En
este sentido es importante
la interpretación de otras
lesiones u otras hemorragias
en el examen del cuerpo,
así como la interpretación a
la luz de la información de la
escena y de las circunstan-
cias que aporte el investiga-
dor.
Hallazgos en cráneo
En el oído medio y en la
región mastoidea pueden
aparecer focos de infil-
tración hemorrágica que se
trasparentan a través del pe-
ñasco con una coloración
azulada. La hemorragia se
ha atribuido al cambio de
presión y a la oclusión de las
trompas de Eustaquio por
el agua. Puede emplearse
eventualmente como un in-
dicador de que la persona
estaba viva antes de in-
gresar al agua y sumergirse
y explicar por que nada-
dores expertos o profesion-
ales tienen posteriormente
problemas de equilibrio3.
Para muchos autores este si-
gno es poco fiable, ya que
puede observarse en otros
tipos de asfixia en incluso en
muertes naturales de tipo
congestivo18. El hallazgo de
líquido sanguinolento de los
13
senos paranasales, esfenoi-
dal principalmente puede
eventualmente también ser
interpretado como indica-
dor de ahogamiento, pero
harían falta estudios más
concluyentes en este sen-
tido3.
Hallazgos radiográficos
Dependiendo de la di-
sponibilidad de los recursos,
se recomienda la toma de
radiografías generales es-
pecialmente en los casos
de cuerpos descompuestos,
que incluye fines de identifi-
cación. En la radiografía del
cráneo puede observarse
líquido en senos paranasales,
esfenoidales, etmoidales y
maxilares, pero su interpret-
ación debe ser cuidadosa,
porque puede haber líquido
en otras causas de muerte,
así como deberse al ingreso
pasivo del líquido a estos
sitios1,19. Actualmente, con
la práctica de autopsias vir-
tuales, se puede empezar a
considerar la oportunidad
de realizar tomografía com-
putarizada en estos casos.
En un artículo publicado
por Levy et al (2007) encon-
traron hallazgos significativos
de líquido espumoso en vías
respiratorias, senos parana-
sales, celdas mastoideas, y
opacidad de campos pul-
monares19.
Hallazgos histopatológi-
cos
Debe realizarse estudio his-
topatológico en todos los
órganos, y no solo en tejido
pulmonar. Como con los
hallazgos macroscópicos, no
existen hallazgos histológicos
específicos o patognomóni-
cos sumersión, además que
en muchos casos, los cuer-
pos recuperados del agua
ya han sufrido cambios por
putrefacción lo que dificulta
la interpretación de hallaz-
gos.
En los pulmones, deben de-
jarse cortes de varias partes,
que incluyan como mínimo
un corte del área central
y otro periférico de cada
lóbulo, esto en razón de que
los cambios son muy hetero-
géneos. Además de tinción
con hematoxilina y eosina,
tinciones para reticulina y
elastina pueden ser útiles, es-
pecialmente si el cuerpo ha
sufrido cambios por putre-
facción20. Los principales
hallazgos en pulmones son
congestión en el intersticio,
edema, macrófagos alveo-
lares, hemorragia alveolar
con disrupción de la pared
alveolar. El edema alveolar
puede estar presente en los
alvéolos aun conservados
y ausente en las zonas de
dilatación aguda1. El en-
fisema acuoso es el hallaz-
go más característico, en el
que se observa la dilatación
de los espacios alveolares,
con un adelgazamiento y
elongación marcados de
los tabiques alveolares y
compresión de los capilares
alveolares. En otros órga-
nos, como encéfalo, hígado
y corazón, los principales
cambios estarán dados por
hipoxia, lo que quiere decir
que no son específicos de
sumersión. Se observa mar-
cada congestión aguda,
asociada a extravasación
perivascular localizada con
aumento del endotelio cap-
ilar. En el examen del cora-
zón y del encéfalo debe ten-
erse en cuenta la posibilidad
de encontrar cambios his-
topatológicos asociados a
enfermedades de base que
puedan explicar la muerte o
ser la razón del colapso.
En este sentido, el valor de
la histología en el estudio
de cuerpos recuperados del
agua se centra en la confir-
mación de los cambios en
pulmones especialmente
el enfisema acuoso, y en la
exclusión de otras enferme-
dades de base.
Hallazgos de toxicología
Deben realizarse especial-
mente para descartar o
confirmar la presencia de
etanol, y otras drogas, que
generalmente ocasionan
una serie de alteraciones
que se relacionan con la in-
habilidad de un sujeto para
afrontar situaciones ines-
peradas. Se debe incluir la
toma de muestras de humor
vítreo, sangre periférica y
cardiaca, orina y bilis. De-
pendiendo del estado del
cuerpo se preservará mús-
culo, hígado, riñón y cere-
bro.
De otra parte, el solo con-
sumo de alcohol aún sin
alcanzar el estado de em-
14
briaguez, se ha relacionado
con precipitar ciertos reflejos
del tracto respiratorio como
laringoespasmo, estimulado
por la exposición al agua, lo
que ocasionaría el llamado
ahogamiento seco ya men-
cionado. El alcohol también
puede precipitar un estado
de hipoglicemia y dificultad
para regular la temperatura
lo que también puede pre-
cipitar la muerte por sumer-
sión. La vasodilatación que
produce el alcohol, hace
que se aumente ligeramente
la temperatura de la piel ha-
ciendo que se cree un gradi-
ente de temperatura mayor
entre el agua y el cuerpo,
disparando eventualmente
los receptores del frío, lo que
puede desencadenar refle-
jos cardiorrespiratorios incre-
mentando así la posibilidad
de arritmias o respiración
incontrolable súbita. Exis-
ten estudios en los que se
ha confirmado la presencia
de alcohol en 40 a 60% de
las muertes por sumersión
en personas adolescentes y
adultos3.
Dependiendo de las cir-
cunstancias alrededor de
la muerte, el hallazgo del
cuerpo y los hallazgos de
necropsia, debe solicitarse
otros estudios toxicológicos
que contribuyan al esclare-
cimiento de los hechos, o a
identificar otros factores que
sean causa de muerte por si
mismos.
Pruebas de Laboratorio de
Muerte por Sumersión
Debido a la dificultad en el
diagnóstico de muertes por
sumersión, existen o se han
propuesto numerosas prue-
bas, muchas de las cuales
tienen importancia ahora
solo histórica por su falta
de especificidad y alter-
ación de los resultados por
la simple descomposición
y el tiempo durante el cual
la víctima permanece en
el agua antes de ser recu-
perada3.. . Puede afirmarse
que el test diagnóstico ideal
como prueba definitiva de
asfixia por sumersión está
por ser establecido. Piette y
De Letter17 en su artículo, se
refieren a los requisitos que
debe cumplir un buen mar-
cador para ser aplicado al
diagnóstico de la muerte
por sumersión; el marcador
debe tener la posibilidad de
atravesar la membrana al-
veolo capilar y penetrar en
la circulación, debe estar
presente en grandes canti-
dades en el medio de sum-
ersión y en muy pequeñas
cantidades en la sangre de
personas sanas, no debe
penetrar en la circulación a
través de otras vías (aparato
digestivo) o por fenómenos
de difusión postmortem1,17.
Prueba de la Osmolaridad
plasmática La sangre en
la aurícula izquierda que
está diluida por agua prove-
niente de los pulmones tiene
una osmolaridad más baja
que la sangre de la aurícu-
la derecha. Sin embargo
la hemólisis y autólisis de las
proteínas como parte del
proceso de descomposición
afecta el valor de esta prue-
ba.
Prueba del cloro (Gettler
test) Los valores de sodio
y de cloro en las cavidades
izquierdas del corazón, com-
paradas con las del lado
derecho o con las de la vena
femoral están disminuidos en
agua dulce y más aumen-
tados en ahogamientos en
agua salada. En la práctica
los resultados han mostrado
inconsistencias.
Prueba de las Diatomeas
Las diatomeas son un grupo
diverso de algas microscópi-
cas unicelulares con pare-
des celulares y compuestas
de sílice en altas cantidades
en la pared celular (Bacillar-
iophyceae). Están amplia-
mente distribuidas en agua
dulce y en agua salada,
aunque también están pre-
sentes en el aire y en la tierra.
Existen más de 100.000 espe-
cies. La parte de sílice de las
diatomeas es altamente re-
sistente a la descomposición
y a la acción de ácidos
fuertes, de ahí su utilidad en
el estudio de los cuerpos re-
cuperados del agua. Las di-
atomeas ingresan al cuerpo
con el agua aspirada y pos-
teriormente a la circulación
para depositarse en varios
órganos, pudiendo identifi-
carse en médula ósea, hí-
gado, cerebro o riñones1.
Esto indicaría que había cir-
culación en una persona,
es decir que estaba viva al
ingresar al agua. Su presen-
cia depende de la concen-
tración de diatomeas en el
15
medio en el que se ocasiona
el incidente, así como de la
cantidad de agua inhalada.
Las concentraciones de di-
atomeas en el agua varían
mucho y son dependientes
del clima y de la porción de
agua de la que se tomaron
las muestras. Es por eso que
las muestras que eventual-
mente se tomen del medio
en el que se recuperó el
cuerpo deben ser de varias
partes, a diferentes tiempos
y de diferentes profundi-
dades,. aunque hay estu-
dios que muestran que una
sola muestra es suficiente3.
La prueba de las diatomeas
tendría mucha utilidad en
los casos de cuerpos en
descomposición debido a la
ausencia de los otros signos
típicos de ahogamiento por
el estado del cuerpo.
Hay que tener en cuenta
también que generalmente
en el agua dulce de tu-
bería o de la llave (piscinas
y tinas) pueden no haber
diatomeas por los procesos
de purificación y limpieza
a que han sido sometidos.
Las diatomeas pueden es-
tar ausentes si la muerte
ha ocurrido de forma muy
rápida, evitando que las di-
atomeas ingresen a la circu-
lación. Es importante tam-
bién para la interpretación
tener en cuenta el sitio u ór-
gano en el que se identifica
o cuantifica las diatomeas.
Algunos autores consideran
que deben identificarse por
lo menos 20 diatomeas por
campo en las muestras de
pulmón analizadas21.
 sa de muerte haya sido el
ahogamiento.

El estudio de las diatomeas

puede contribuir a la deter-
minación de las muertes por
sumersión. Para esto es im-
portante considerar los resul-
tados falsos positivos y falsos
negativos al menos por las
siguientes razones1,2,12:

Pueden encontrarse di-

atomeas en pulmones y otros
órganos por causas distintas
a la sumersión, que dan lu-
gar a falsos positivos, entre
las que se encuentran:
Figura 6. Gomphonema acuminatum.
(Fotos cortesia Dra. Aida Galindo)
• Contaminación ante-
mortem Ingestión de vege-
tales con alto contenido de
Se deben tomar muestras diatomeas como la lechuga
del cuerpo de varios sitios y el apio, ingestión de maris-
como pulmones, corazón,
cerebro, hígado, riñones y
medula ósea. Sin embargo
el hallazgo positivo debe
ser interpretado con pre-
caución. Puede deberse a
contaminación de los me-
dios empleados para pro-
cesar las muestras. Se em-
plea la muestra de tejidos
óseos ya que son menos sus-
ceptibles de contaminación
externa durante la descom-
posición por ejemplo. En al-
gunos casos se ha descrito la
presencia de diatomeas en
personas no ahogadas por
inhalación de diatomeas de
tierra. Puede encontrarse
diatomeas en individuos que
nadan con frecuencia en Figura 7. Cocconeis placentula Fragilaria ulna.
cierto lugar y posteriormente (Fotos cortesia Dra. Aida Galindo)
encontrárseles diatomeas y
no quiere decir que la cau-

16

Figura 8. Anomoeoneis sp.
(Fotos cortesia Dra. Aida Galindo)
cos con alto contenido de
diatomeas como las ostras
y los mejillones, ingestión de
bebidas en cuyo proceso se
emplea sílice como material
de filtración como la cerve-
za y el vino, inhalación de di-
atomeas en las fábricas de
materiales de construcción
y de aislantes, inhalación de
diatomeas al fumar cigarros,
o inhalación de diatomeas
que se encuentren en sus-
pensión en el aire.
• Penetración postmor-
tem Sumersión prolongada
en el agua a alta presión,
penetración en cadáveres
sumergidos a través de heri-
das producidas en vida,
penetración durante mani-
obras de reanimación en
cadáveres recuperados del
agua.
• Contaminación du-
rante la toma y preparación
de las muestras Contami-
nación por las ropas del
cadáver, durante la eje-
cución de la autopsia, a
través de instrumental y
materiales utilizados en la
autopsia, por el agua y re-
activos, contaminación del
material de vidrio utilizado.
• Otras fuentes de con-
taminación Inhalación de
agua en nadadores y buce-
adores, paso transplacen-
tario de diatomeas, con-
taminación del páncreas
y vesícula biliar por el paso
retrógrado del contenido
del duodeno, en casos
de exhumación, contami-
nación postmortem por el
aserrín que pueda haber en
el ataúd.
17
De otra parte, se pueden
obtener resultados falsos
negativos en los casos de
baja concentración de di-
atomeas en el medio de
sumersión, escasa cantidad
de líquido inhalado, pérdida
de diatomeas durante el
proceso de preparación de
las muestras o técnicas er-
róneas e inadecuadas.
Es necesario también men-
cionar, que además del
estudio de las diatomeas en
las muestras tomadas al cu-
erpo, es indispensable con-
tar con muestras del medio
en el que se encuentra el
cuerpo. Esta toma de mues-
tras debe hacerse al mismo
tiempo que se recupera el
cuerpo, se deben tomar
muestras de la superficie y
muestras de mayores pro-
fundidades en recipientes
por supuesto estériles.
Se recomienda que para el
estudio de las diatomeas22,
se incluya el estudio cuanti-
tativo y cualitativo de las di-
atomeas, determinación de
las especies y aspectos de la
morfología. Se deben anali-
zar las muestras del medio
en donde se encontró el cu-
erpo, muestras de pulmón,
sangre y medula ósea. Las
otras muestras (contenido
gástrico y duodenal, hígado
y riñón) se deben preser-
var como muestras sustitu-
tas. Aunque existe aún hoy
mucha controversia en rel-
ación al uso de este test en
muertes por sumersión, y solo
hasta que existan protocolos
estandarizados el método
de las diatomeas no puede
ser aceptado en juicio como
diagnostico de muerte por
sumersión. Sin embargo, si
representa una herramienta
de apoyo útil en el estudio
de los cuerpos recuperados
del agua. Para que los re-
sultados sean considerados
aceptables23 debe haber
concordancia taxonómica,
cualitativa y cuantitativa
entre las diatomeas encon-
tradas en el cuerpo y en el
medio de sumersión y el pro-
ceso debe ajustarse a un es-
tricto protocolo para evitar
la contaminación.
También se han propues-
tos otros estudios como el
estudio de las algas verdes,
realizando estudio de cloro-
fila en pulmón, análisis bac-
teriológico de la sangre, y el
estudio de componentes al-
veolares que pueden ser en-
contrados en la circulación
general como células de
fumadores y surfactante pul-
monar sin embargo ninguno
de ellos es concluyente.
Circunstancias relacio-
nadas
Es preciso mencionar otras
circunstancias asociadas
que deben tenerse en cuen-
ta como causa de muerte
cuando un cuerpo es recu-
perado del agua. Por ejem-
plo en el caso de clavados
(“diving”), en donde se obser-
va trauma cráneo encefáli-
co o trauma raquimedular,
ocurre mas frecuentemente electrocución dentro del
en hombres jóvenes, inex- agua, las quemaduras eléc-
pertos o con falta de cono- tricas están ausentes. Si el
cimiento del área y consumo choque eléctrico no es letal,
de alcohol u otras drogas puede ocasionar parálisis de
sicoactivas concomitante- los músculos respiratorios in-
mente. También puede hibiendo la habilidad para
darse el caso de accidentes nadar y la muerte ocurre fi-
acuáticos, que son aquellos nalmente por sumersión.
que ocurren estando dentro
del agua, como golpearse En las muertes relacionadas
con algún objeto dentro del con actividades de buceo,
agua o que algún objeto la autopsia requiere de una
golpee a la persona; gen- interpretación cuidadosa,
eralmente se relaciona con además de conocimiento
trauma cráneo encefálico amplio sobre esta práctica y
que oca-
siona la
pérdida
de la con-
ciencia
antes que
el ahog-
amiento
como tal.
En los ac-
cidentes
acuáti-
cos entre
botes u
otros ve- Museo Bajo el Agua, Cancun, México.
hículos
acuáticos se presentan le- sus peligros e implicaciones
siones de tipo contundente, en el organismo. La fisiopa-
que pueden incluir trauma tología de muerte en estos
cráneo encefálico, con casos está relacionada con
alteración del estado de los efectos de la descom-
alerta, no necesariamente presión, que incluyen dos
de la conciencia y generar entidades importantes, el
la caída al agua. Hay que embolismo gaseoso arterial y
pensar en que primero es el la enfermedad por descom-
trauma, luego la pérdida de presión20. En el primer caso,
la conciencia y la caída al puede ser causa de muerte
agua es una consecuencia por si misma o puede ser fac-
de esto. tor precipitante de la muerte
por sumersión. En el segun-
En los casos en donde la do caso, la descompresión
muerte esté asociada a ocurre después de haberse
18
sumergido a bajas profundi-
dades y durante un período
prolongado.
Es indispensable un estudio
integral que involucra la es-
cena, el equipo e instrumen-
tos de buceo, las circunstan-
cias, etc. A continuación
se resaltan aspectos impor-
tantes en la investigación de
estos casos3,20:
• Aspectos de la víctima
como historia personal, en-
fermedades preexistentes,
consumo de medicamen-
tos, certificación de buceo,
entrenamiento o record de
inmersiones, accidentes pre-
vios en buceo, entre otros.
• Aspectos del ambi-
ente como características
del agua, el sitio, hora del
día, visibilidad bajo el agua,
corrientes del agua.
• Aspectos Técnicos
como condiciones de fun-
cionamiento del equipo y
accesorios revisados por ex-
pertos.
• Aspectos del cadáver
como documentar; la ubi-
cación del equipo si este
no ha sido retirado, el color
de las livideces (rosadas
en caso de intoxicación
con monóxido por contami-
nación del aire inhalado,
hipotermia), de veteados
venosos, hallazgos relacio-
nados con el proceso de
descomposición, registrar
signos de trauma o lesiones
por animales marinos, buscar
la marca de la mascara o
careta en la cara, signos de
barotrauma como epistaxis,
realizar otoscopia y fondo de
ojo si es posible (embolismo
de arteria retiniana o hemor-
ragias retinianas), buscar si-
gnos de muerte por sumer-
sión, enfisema subcutáneo
(palpar la piel de cuello y
tórax), buscar neumotórax,
tomar radiografías del cu-
erpo (cara, cuello y tronco)
que incluyan una toma en
decúbito lateral izquierdo
(lado derecho arriba), ex-
aminar el encéfalo antes
de retirar el corazón, buscar
neumopericardio, consid-
erar otras causas de muerte
como enfermedad natural o
trauma, considerar artefac-
tos por reanimación, realizar
la prueba de lesiones en las
pleuras viscerales (mediante
retirada de los pulmones con
el hilio y las venas pulmo-
nares ligadas y poniéndolos
dentro de un recipiente con
agua, se inyecta aire y se
observa la salida de este en
caso de lesiones en pleuras),
signo de Leibermeister en la
lengua24, que corresponde
a un área muy delimitada
de palidez en la lengua
como resultado del proceso
de maceración, preservar
el encéfalo y la medula, re-
alizar determinación de tóxi-
cos (alcohol y drogas).
Enfermedades preexis-
tentes
En el momento de la deter-
minación de la causa de
muerte, el valor que se le
19
dé a la enfermedad preexis-
tente debe ser cuidadosa y
siempre en relación con las
circunstancias del hecho.
La enfermedad preexistente
puede ser simplemente un
hallazgo coincidencial y no
ser la causa de la muerte,
enmascarando de esta for-
ma un posible homicidio. Se
debe considerar con cui-
dado el valor de la enfer-
medad preexistente como
factor coadyuvante en la
muerte por sumersión, pero
aún así, hay que establecer
la razón por la cual esa per-
sona cayó o entró al agua.
Debe también pensarse en
que una enfermedad pre-
existente o enfermedades
terminales, sean mas bien
un motivo para un suicidio,
especialmente en personas
mayores3.
Quienes padecen de epi-
lepsia están en riesgo de
ahogamiento, aun cuando
estén controlados sus episo-
dio, y se ha descrito como
mecanismos precipitadores
de las convulsiones el agua
fría, las duchas calientes, las
actividades acuáticas, la
hiperventilación por sí mis-
ma. Existen estudios en los
que se ha encontrado que
del 3 al 6% de los ahoga-
dos tiene historia de epilep-
sia3; esta puede ocurrir en
cualquier medio o incluso el
individuo puede presentar
el episodio convulsivo y ser
este la causa de la caída al
agua y el ahogamiento por
no usar medidas de salva-
mento como chalecos, en-
tre otros.
Manera de Muerte
La manera de muerte,
pueden ser cualquiera de
las cuatro principales man-
eras - natural, accidental,
suicidio, homicidio-. Dentro
del grupo de los accidentes,
el factor precipitante mas
frecuentemente asociado
es el alcohol u otras dro-
gas, enfermedades de base
(eventos cerebro vasculares,
enfermedad cardiaca, epi-
lepsia), discapacidades,
caídas y falta de supervisión.
En casos como la epilepsia
la autopsia debe buscar si-
gnos de episodios convulsi-
vos, especialmente lesiones
en la boca. En casos de
niños, las edades oscilan
entre 6 meses a dos años y
generalmente relacionadas
con falta de supervisión de
un adulto. El nivel del agua
puede ser tan bajo como 5 no salvamento, notas, ante- Muertes en el contexto de in-
cm, el promedio es 20 cm3. cedentes, etc ). vestigaciones de violaciones
Tener presente que en al- a los Derechos Humanos o al
gunos casos de menores En casos de homicidios, Derecho Internacional Hu-
recuperados del agua, no puede que la víctima haya manitario y en Desaparición
siempre la muerte es de tipo sido arrojada posteriormente Forzada.
accidental, existen casos de al agua o el homicidio hab-
maltrato infantil con muerte erse cometido directamente La investigación médico le-
por sumersión. en el medio líquido como gal de los cuerpos recupera-
en una tina, estanque o pi- dos del agua, debe siempre
En suicidios, las víctimas son scina por ejemplo. En estas considerar que se trata de
mayores y se encuentra en circunstancias, es necesa- una practica de ocultamien-
muchos casos una histo- rio establecer la causa de to del cuerpo y/o obstaculi-
ria psiquiátrica. Debe bus- la muerte y si el lugar fue zación de la identificación
carse evidencia de lesiones llenado posteriormente para en casos aislados, más sin
auto infligidas. Puede verse simular el ahogamiento y/o embargo, puede tratarse
el empleo de pesos u otros para desaparecer o alterar de prácticas sistemáticas
mecanismos para asegura- evidencia traza. La mayoría de muertes con violación
rse la sumersión completa. de las victimas son mujeres y a los derechos humanos o
Se debe tener en cuenta los el alcohol u otras drogas esta infracciones al Derecho In-
aspectos sugestivos o indica- generalmente presente con ternacional Humanitario en
dores de suicidio (idoneidad la intención de imposibilitar el contexto del conflicto ar-
del método, condiciones de una defensa de la victima. mado.

20
Con cierta frecuencia, los
cadaveres recuperados de
muchos de los rios de nues-
tro país corresponden a víc-
timas de homicidios y otros
delitos como desaparición
forzada. Se debe resaltar las
labores investigativas y espe-
cialmente las desarrolladas
durante el procedimiento
de necropsia medico legal,
aquellas con fines de iden-
tificación del cuerpo, que
resultan la mayoria de las
veces de gran dificultad, en-
tre otras razones porque es
precisamente esta la inten-
ción del victimario para con
su victima, con las graves re-
percusiones en sus familiares
y en la trama social en gen-
eral. En este sentido docu-
mentar adecuadamente
los hallazgos en relación al
estado del cuerpo y mani-
obras o acciones tendientes
a ocultar e impedir delibera-
damente la identificacion
del cadaver cobran mucha
importancia en este tipo de
casos. El trabajo pericial y los
recursos invertidos en resolv-
er las dificultades inherentes
al proceso de establecer
la identidad del fallecido,
en estos casos complejos,
se ven recompensados al
facilitar la aplicación de la
normatividad legal interna y
del Derecho Internacional a
la investigación de posibles
violaciones de los Derechos
Humanos25.
Para contribuir de manera
efectiva a una investigación
penal, el perito debe en-
tender el delito objeto de in-
vestigación, por tanto resulta
imperativo que, al abordar
casos de cuerpos recupera-
dos del agua con sospecha
de tratarse de casos relacio-
nados con la desaparición
forzada, se proporcione y
de testimonio a partir de la
evidencia fisica, para lo cual
debe comprender la natu-
raleza de este tipo de cri-
men, cuya caracteristica es
borrar, de muchas maneras,
la existencia de la víctima,
que es sustraida de la pro-
tección legal del Estado26.
Los rios en estos casos (puede
ser también mar, lago o la-
guna), constituyen el sitio de
recuperación del cadáver,
lo que significa una escena
de los hechos desplazada
y oculta, con un cuerpo sin
nombre casi siempre con-
vertido en restos descom-
puestos o esqueletizados.
“…La practica forense con-
tribuye a llenar tales vacios,
aunque en estos casos en-
frenta una paradoja: a may-
or y más grave delito, menor
evidencia fisica disponible
para análisis científico”.26
Para satisfacer las necesi-
dades de la investigación
judicial en estos casos, es
responsabilidad del perito
conocer estas modalidades
delictivas y las circunstan-
cias usualmente asociadas
a estos hechos y, “…sobret-
odo, estar advertidos de las
implicaciones que tiene en
la investigacion el concluir
secamente que los hallazgos
en el cadaver dejan indeter-
minados los puntos escen-
ciales que debe aclarar una
21
experticia, debido a que el
cuerpo esta descompuesto
o en reduccion esqueletica
o ha sido despojado de la
evidencia fisica.” 26 Es es-
pecialmente importante
documentar todos aquellos
hallazgos e información que
permitan determinar las cir-
cunstancias del caso, asi pa-
trones de lesión y/o lesiones
patrón, y todos aquellos as-
pectos tendientes a deter-
minar la identidad de la víc-
tima, el tiempo de muerte,
la causa y la manera de
muerte.
El abordaje de estos casos
como toda investigación de
una muerte violenta, requi-
ere de la aplicación de una
metodología científica, ori-
entada inicialmente a esta-
blecer el tipo de caso27,28
según el contexto y la infor-
mación disponible aportada
por la Autoridad y posterior-
mente a definir un plan de
abordaje y desarrollar pro-
cedimientos adecuados
con fines de satisfacer los
objetivos de la necropsia
medico legal y demas re-
querimientos de la investiga-
cion judicial.
Conclusiones
El examen forense de los
cuerpos recuperados del
agua genera una de las di-
ficultades más grandes al
momento de interpretar los
hallazgos postmortem. In-
vestigaciones de muertes en
este contexto, son quizás las
que mayores requerimien-
tos tienen en cuanto a in-
formación de la historia del
hecho y de las circunstan-
cias de hallazgo del cuerpo.
En este tipo de casos es muy
peligroso la tendencia a
emitir opiniones sin consid-
erar adecuadamente toda
la información disponible. Es
muy importante que el médi-
co forense conozca y tenga
en cuenta los mecanismos
fisiopatológicos de muerte
en casos de sumersión, así
como los hallazgos que se
relacionan con inmersión
en agua, incluyendo arti-
ficios postmortem. Existen
signos que indican que el
cuerpo ha permanecido en
el agua por cierto tiempo, y
que no quieren decir que la
muerte haya sido por sum-
ersión. Hay que recordar a
las Autoridades Judiciales
que toda necropsia requiere
para su adecuado aborda-
je y correcta interpretación
de hallazgos, información
completa y precisa de las
circunstancias de hallazgo
del cuerpo y de la escena.
La investigación de un cu-
erpo recuperado del agua
va mucho más allá de una
buena necropsia, con una
adecuada disección y resul-
tados de laboratorios com-
pletos.
No existe un procedimiento
o prueba diagnóstica de
ahogamiento cuyos resulta-
dos sean irrefutables, como
no existe ningún signo
patognomónico de muerte
por sumersión. Sin embargo,
la realización de muchas de
ellas puede aportar infor-
mación útil siguiendo las re-
spectivas especificaciones
técnicas.
De tal manera que, obtener
prueba que la víctima es-
taba viva antes de entrar al
agua, y excluir la presencia
de enfermedades, lesiones
traumáticas o hallazgos de
toxicología como causa
de muerte, es indispens-
able. Aunque algunos hal-
lazgos son característicos
de muertes por sumersión, el
diagnóstico es más bien de
exclusión. El papel del médi-
co forense es fundamental
al momento de determinar,
con base en toda la eviden-
cia circunstancial y científica
(de escena, de necropsia y
resultados de laboratorio) si
el caso es consistente con
accidente, suicidio u homi-
cidio, y/o si es consistente
con la versión disponible de
los hechos.
En nuestro país la practica
rutinaria de tantos años nos
permite afirmar que en mu-
chos casos los cuerpos recu-
perados del agua correspon-
den a victimas de delitos
como homicidio y desapa-
rición forzada y como tal es
imperativo que el perito fo-
rense conozca la modalidad
delictiva y la importancia de
la actividad pericial en la in-
vestigación judicial de estos
casos.
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