Está en la página 1de 1

La Belleza.

Dice Dostoievski: la belleza salvara al mundo. Y esa belleza es la belleza redentora


de Cristo, quien dice en el Evangelio: CUANDO SEA LEVANTADO EN ALTO
ATRAERÉ A TODOS HACIA MI. Y contemplando a Cristo crucificado,
contemplamos la belleza paradójica, paradoja que encierra dos aspectos
fundamentales, contrapuestos pero no contrarios; Jesucristo es el mas bello de los
hombres , pero a la vez es el varón de dolores, cuyo rostro en su Pasión aparece
desfigurado sin aspecto atrayente. ¿ como comprender esta paradoja? Solo
comprenderemos con el corazón cuando somos traspasados por el dardo de esta
belleza y para comprender con el corazón, es fundamental el conocimiento al que se
refiere Kabasilas, conocimiento experimental, de un ser concreto, al ser tocados por
la realidad; por la presencia personal de Cristo, entonces entramos en la senda del
amor.
En definance, la belleza es una cuestión disputada, debido a que la trancendentalidad,
queda en entredicho, porque la belleza implica en el objeto un elemento sensible, y
ademas, el sentimiento estetico parece ligado a una estructura sensitivo-racional. Este
autor nos muestra dos aspectos fundantes en el concepto de belleza, en cuanto a la
noción y naturaleza de lo bello. Habla de la “ratio boni” como la impresión que lo
bello produce en el sujeto; y la “natura boni” que viene a ser el elemento constitutivo
de lo bello.
Lo bello se define por la aptitud para provocar un sentimiento, un placer especial: el
sentimiento o el placer estético. Es un placer ligado a la percepción , entonces lo bello
es aquello cuya visión produce placer. Esto nos lleva a preguntarnos por la naturaleza
de dicho placer. Hay corrientes filosóficas que han tratado de dar respuestas de
maneras muy diversas a dicha pregunta, los empiristas lo definen a partir de las
sensaciones y los intelectualistas con la captación intuitiva. (Kant dará una respuesta,
refiriendo la percepción estética a una facultad intermedia ubicada entre el conocer y
el desear.)
Definance, hace una trascendentalidad de lo bello, diciendo que tiene su lugar propio
en el mundo espiritual ,pero sin caer en la pura idealidad abstracta, por ser como
irradiación de la idea en el ser, lo bello reside en lo existente; pero lo existente no se
reduce a lo sensible. Así el autor va a definir lo bello como el esplendor del ser, idea
en lo existente que es captada inmediatamente por el espíritu. Esto se comprueba en
la persona que es mas profunda espiritualmente, porque se hace mas capaz de
descubrir la belleza en las cosas que parecen mas insignificantes.

También podría gustarte