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Pastor Ureña, ¿Qué quiere decir la gente cuando

dice que Dios nos dio libre albedrío?


El libre albedrío o libre elección es la creencia de aquellas doctrinas filosóficas y/o religiosas
que sostienen que los humanos tienen el poder de elegir y tomar sus propias decisiones. La
Doctrina del Libre Albedrío es una de las doctrinas dorsales del cristianismo ortodoxo. La
mayoría de los pensadores más influyentes del cristianismo histórico han creído en esta
doctrina, en oposición a la Doctrina de la Pre-Destinación.

Yo creo firmemente en la doctrina del libre albedrío. En mi mente no cabe que la Biblia mienta
cada 4 ó 5 versos. Si no somos dueños de nuestras decisiones, entonces, ¿por qué
habríamos de ser juzgados un día? Y si no seremos juzgados, ¿para salvarnos de qué tenía
que venir Jesucristo?

Al juzgar sobre el libre albedrío, le pido al lector de ADF, que es altamente exigente, que
considere los siguientes puntos importantes:

1. Mucha gente tiende a culpar a Dios de los desastres naturales, hambrunas, injusticias,
porque presumiblemente Dios está en control y/o es responsable de todo lo que sucede en la
tierra. Esta es una creencia errónea. Que Dios permita que todo suceda, no significa que Él es
quien causa todo lo que sucede.

Mucho del dolor y el sufrimiento en la tierra realmente lo causa la maldad de nosotros los
seres humanos y ni siquiera son culpa directa de la naturaleza y mucho menos de Dios. La
maldad de nosotros es responsable de mucho de lo que a menudo atribuimos a Dios. Mucho
de este dolor y sufrimiento podría reducirse considerablemente si nosotros decidiéramos
comportarnos de manera diferente, usando nuestro libre albedrío.

Usemos el ejemplo de las hambrunas africanas, que tanto usan los irresponsables enemigos
de Dios para culpar al Dios de la Biblia de ser indiferente, en el mejor de los casos y culpable
del dolor y el sufrimiento de incontables millones de personas en África, en el mejor de ellos.

LAS HAMBRUNAS

¿Cree usted que alguien moriría de hambre en África si cada persona "amara a su prójimo
como a sí mismo"? De hecho, muchos expertos en la materia sostienen que la tierra produce
más alimento del que necesitan los seres humanos que estamos vivos hoy, de forma tal que
nadie tiene la necesidad de acostarse con el estómago vacío... ¡Nadie!

El problema es que hay unos países que tienen demasiado y otros no tienen suficiente. Con lo
que se desperdicia en EE.UU., Italia, Inglaterra, Francia, Japón, Alemania, Finlandia, Austria,
Bélgica, Hong Kong, Australia, etc., se alimentaría a África con toda facilidad. La ropa, jabón,
calzado, medicamentos, etc. que tienen estos países per cápita es suficiente para suplir a
todos los demás países para que nadie tenga ausencia de nada de lo que es vital.

Los americanos son sólo el 7% de la población mundial, pero consumen LA MITAD de los
recursos de TODA LA TIERRA!

LAS GUERRAS

¿Cuánta maldad y dolor pudiera evitarse si los seres humanos de Irán no quisieran destruir a
Israel y si los Rusos no quisieran invadir a Chechenia y los Talibanes Shiitas no quisieran
subyugar a los Sunitas y los americanos no quisieran que hubieran guerras interminables para
encontrar a quién vender todas las armas que producen sus multimillonarias compañías?

¿Cuánta sangre y dolor pudiera evitarse si los islámicos de Nigeria no quisieran imponer su
religión sobre los cristianos que viven en su territorio y los comunistas no quisieran imponer su
forma de gobierno sobre los que no estamos de acuerdo con ese malvado sistema de
gobierno?

¿Qué pasaría si de un momento a otro, se le ocurriera a toda la humanidad compartir todo lo


que tiene y vivir en paz, armonía y abundancia -- como fue el plan original de Dios?

La lista podría nunca acabar: accidentes causados por conductores ebrios, muertos por balas
perdidas, niños nacidos con SIDA, mujeres con traumas psicológicos por los golpes de
maridos ebrios y drogados, niños con defectos de nacimiento en Chernobyl, y Japón, millones
de bebitos abortados, niños con adicciones heredadas de sus tecatos padres...

Si somos francos, lo que hace 5 minutos parecía obra de Dios, parece que es obra del
"maldito hombre" y sus obras malignas (Ger. 17.5).

2. Ahora consideremos un tema un poco profundo, pero en unos minutos leyendo mis
palabras, usted se dará cuenta de que a veces nos equivocamos porque no pensamos bien lo
que decimos.

Hay muchas cosas que consideramos "malas", pero que realmente son cosas buenas... pero
en un mundo físico, todo tiene un límite. El hecho de que lo que Dios ha creado es menor que
Él mismo, introduce limitaciones e imperfecciones en el sentido general de la palabra. Me
explico:

Cualquier cosa creada debe, por ejemplo, tener un número limitado de características que
excluyen la posibilidad de tener otra característica incompatible con ellas. Pero esas cosas
creadas, para poder usarlas en el mundo físico, requieren que paguemos un precio por
tenerlas disponibles!

¿Se perdió? Pues me explico:

Una roca en la que usted se para y brinca y usa como cimiento para construir su casa debe
ser tan dura que TAMBIÉN le causaría daño a su piel si usted resbalara y cayera sobre ella!
Entonces el sufrimiento y el dolor de caerse sobre ella o chocar contra ella a 60 kilómetros por
hora no es una cosa "mala", sino una limitación que es ventajosa pero desafortunada a la vez.
El aire que respiramos tiene que ser tan tenue que le permita a un paracaidista caer o a un
avión volar a través de él, pero también, esas mismas características "buenas" podrían ser
"malas" y causar dolor y sufrimiento si no se abre el paracaídas o el motor del avión se
detiene! Y así por el estilo.

No es que estas cosas son malas, sino que son limitaciones que deben tener porque ninguna
de ellas son el Creador, sino que son la creación... ¡para seres físicos en un mundo físico!
Ellas causan dolor y sufrimiento, aun cuando no sea nuestro mal uso de ellas el que nos meta
en problemas.

3. Este tercer punto es vital. A menudo, cuando pensamos en este tercer punto que
presentaré ahora, nos olvidamos de que en la creación, hay tres entes o seres y que cada uno
tiene libre albedrío de por sí: Dios, el Diablo y el hombre.
Dios creó al diablo con libre albedrío igual que a nosotros, pero a veces queremos eximir al
Diablo y hasta a nosotros mismos de las consecuencias de las decisiones del diablo y de
NUESTRAS PROPIAS DESICIONES y culpamos a Dios, en un ejercicio egoísta y
eminentemente irresponsable... ¿Qué esperar de los hijos de Adán y Eva? -- ¡Quienes
comenzaron a culpar a Dios de las consecuencias de sus propias decisiones desde el primer
día!

Pero además del diablo y el hombre, la Biblia nos habla de otros seres creados por Dios que
YA DECIDIERON, usando su libre albedrío, hacer lo que les vino en gana y ahora también
son jugadores reales en el ajedrez de la realidad que nos ha tocado vivir.

Al hombre le encanta ignorar que interactuamos con seres espirituales como el diablo,
ángeles caídos y demonios.

Estos seres nos son niños gorditos flotando en las nubes y tocando arpas. No! No se
equivoque! Tampoco andan vestidos de rojo, con grandes tenedores en las manos y cuernos
en la cabeza. La Biblia no dice ninguna de esas estupideces acerca de estos seres. Todo lo
contrario. Algunos de los malos, por ejemplo, son seres grandes, poderosos y
extremadamente inteligentes, además de que al menos uno de ellos, SU LÍDER, se disfraza
de ángel de luz.

Ignoramos estas verdades a nuestro propio riesgo!

Todo cristiano tiene que tener claro que la Biblia es enfática cuando nos habla de que
interactuamos con estos seres, algunos de los que son tan imponentes que gobiernan zonas
mundiales y hasta reinos... desde el mundo espiritual. Todos ellos, también tienen libre
albedrío.

Ellos, en su intento de romper el plan de Dios para con la humanidad, a menudo terminan con
más seguidores día a día que nuestro buen y amoroso Dios. ¿Ha visto usted un desfile gay?
¿Ha visto una protesta de aborcionistas? ¿Ha estado presente en un club de stripers? ¿No ha
visto en la Internet cómo a diario apresan a personas libres, que ejercitan su libre albedrío, e
intercambian pornografía infantil?

Si leemos la Biblia sin tapujos y limitaciones infantiles de las que los materialistas nos han
querido imponer, tenemos que admitir que la tierra y sus habitantes están literalmente en un
estado de sitio por parte de fuerzas externas muy poderosas. Pablo por ejemplo nos dice que
"porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades,
contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra huestes espirituales de maldad
en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis
resistir en el día malo y, habiendo acabado todo, estar firmes." Efesios 6.

Note que Pablo descansa la responsabilidad de hacer o dejar de hacer... ¡EN EL HOMBRE!...
"tomad toda la armadura de Dios"

Hay poderes de maldad que a diario están bombardeando a cada persona a través de los
medios, la educación, la publicidad, la internet, etc. Entonces, debemos concluir que como la
única influencia no es la del Creador Bueno, como a veces queremos convenientemente
afirmar, cuando nosotros alineamos nuestro libre albedrío con la de estas entidades malas,
¿Qué terminaremos haciendo? Cosas malas que tienen consecuencias negativas para
nosotros y los que nos rodean.
Si usted cada día alinea su VOLUNTAD con la voluntad de Dios, que es siempre buena,
siempre tendrá bien.

Si usted cada día alinea su VOLUNTAD con la voluntad del Diablo y la de sus huestes, que es
siempre mala, siempre tendrá mal.

En esta lucha diaria, cualquier cosa que usted DECIDA hacer terminará alineada con Dios o
con el Diablo y será un arma en que usted o alguien más será la víctima y causará dolor y
sufrimiento.

DIOS SOLAMENE ES BUENO... ¡CUANDO NOS CONVIENE!

Note lo siguiente:

Un padre pasa por la caja a cobrar el cheque de la quincena. De camino a casa se para en
una barra y se toma todo el dinero. Se embriaga y termina en una riña con otros borrachos. Es
llevado al hospital con una lesión cerebral. La familia llega al hospital y comienza a llorar. La
esposa le pregunta a Dios "Por qué permitiste que esto sucediera?". Los vecinos y amigos
llegan y en ese momento aparece el médico diciendo que el señor quedará en estado
vegetativo para siempre.

Todos se preguntan: ¿Dónde está Dios?

Pero... ¿Consultó a Dios el hombre antes de entrar a embriagarse? ¿Consultaron los demás
borrachos a Dios antes de casi matar a este hombre? ¡Por Supuesto que no! Pero ¿Qué dice
todo el mundo? ¿A quién responsabiliza todo el mundo... conveniente pero
irresponsablemente? ¡A DIOS!

Algunos consuelan a la señora diciendo: "Fue la voluntad de Dios y tenemos que resignarnos".
Pues no!!!!! Esa no era la voluntad de Dios. A Dios nadie lo consultó. Si lo hubieran hecho,
otro gallo cantaría!

Eso, amados lectores de ADF se llama "Libre albedrío".

Ahora mismo cada lector PUEDE, tiene LA AUTORIDAD y tiene EL PRIVILEGIO de ejercitar
ese libre albedrío y alinear sus deseos y decisiones futuras con la de Dios. ¿Pero todos lo
harán? ¡Por supuesto que no!

Entonces, mañana, ¡no culpe a Dios por las consecuencias de usted haber alineado su
voluntad con la del Diablo!

Lic. Dawlin Ureña

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