Está en la página 1de 72

,l

o'

¿Córno habrá pc,iido L¡c:rn -si cs quc ha poCitlo- roc3r .

dccisivarncnte los lundamen¡os mismos rlei psicoaníiisis ir, por lo


caliro, a[en¡ar coGE¡a un bucn número de i:ostuladcs frcucii'¡nos'
sin quc por ciltl el psicoanálisis rsí rcccrnpucsto
hava deja<1o cic scr frcudiano?
La respuestu. en lo succsivo iccibidc como prcconccbide. ;sa que
sc ilarn'¡ "rerorno ¡ Frcud" no bastl, o yr ao brs¡a: ese relomo íuc
un rierjio, r.¡n rnomeico cambién. no unü r¿zón- Dei mismo modo,
rcsultr que es',;¡ secucnci¿ Frtd, ) dacu¿s Lacatao sc dc,ia
idencific:r con ninquno de ios c:¡sos ce crmbio dc paracigma
rcgiscrados por Thomas Kuhn-
.\quí sc mucstrl que eilir. c;^l :iu singulrridad, no es rbord¿blc'más '
quc ':i)n ir ivuci ,le un cicrro núrn¿¡o dc cctttzulos (mérodo, cxmoo.
'.rr,,, p"rriiqnra. disciplinu. lnáiisrs' r'¡zón, escuel¡. crc'), cuva rcC
p.imi:* ji¡urr 1,r.c.i,1n lj. cie:tos "petort';jl*' ('el analizlntc, ei
itumno, ¿i ¡rtcs¡it.¡. ci recrcli¡ltl) seqún cl despiicguc de una
hu¡itia con5i:i¡.t€Ítenr: en ci ¿ire. ll dcl ;emino '¡bicr¡o por Lacan'
iso mttr:lsmo epi sic;noló.qic.irncnce noclbIe: ¡nien cres F rcud
rec'iicrb¿ ;l gcs:o cie !i,rqui.rvcic in.'rugur'11 riei 'li:;curso dei méiodo
(cxclusión-iici ,rzar, cnscñ¿nza reci'oiáa de los c:sos hiscórico.'i), Ios-
'
tji;s o¡irntics --cos i.it L¡crn (ieorÍa dcl ';o' rn'is =rdc dei suiero)'
cr¡ntiririn,..loic, ,:crresccnccn csciic:ancncc r los 'ios úlcimcs gestcs
,-.ur 1,,, e u. sc.icíí:l :i iiiscur:;tl ici métoúr; ,t' t'r';:"I.::f:il:.;:
,\si. ccscubrlmos ei crr'ic::r rn,¡lÍcic':men-¡"'n"tt'orio dt l"
continuill,.i, det,'¡ tltsauis', tesconije ¡i hscho dc quc ci
o¡-icoinilisis. :i no sci un mo''i¡ricnii: de pur'l 'joc;rina' li icncr
rlil€ !ef a..!il ut.¡ iccuru quc lc r::poircc' n¡-:nc't is, incluso cn sus
m:is )cl:i¡lcnrcs Jc:ubri miencu ;.. " :i;m pieumcnrc cso'
Lican
Lrr.rrcsii?,-¡¡:i ..;cr;r--::¿:nl:1i:'o it l)75- 9or ci :u¿l el mismo
.i-.1-;.i
U-r,lv -,..¿,
r'',\L-t -.
e" ,''ie.lión
!! ci ;;rr'¡lir,' ie'¿l simbóiico im'rglnino'
Ju cur'l<jiginr D'Ji'j ':1 :-sicírrnilisis iicuii'¡no'

p'l
IJoln
LHY¡JÚ
!-;.¡l(
1

¡
I
Freud, y después Lacan

I
;(
I
I

i
\I
i
I

Jean Allouch
I:
Freud,
I
y después Lacan
,,'tr

I TraCucción: Elisa llolina

I Iieip
i;-^,r
L'L
i r,\a \\:t:\'\tE
L-
¡i Se\/aL.i\i.\!'./i:
YIL:\l \L z L I .J I vl r/-,1 'l/1L I iL
- '-,4\-,11

l;
I
l

:T
tt
I

i
I
I
!
Diseño de TaPa: Virginia Nembrini -1

Produccién Gnifica: lvfarch Ríos Prodücciones I f


I
,{
-r
"¡No es eso!" Es el grito por el cual se dísingue el goce obtenido del
esperad.o. Ahí se especifica aquello que puede decirse en el lenguaje' ['.-]
La estructura -Por conectarse allí no demuestra otra cosa más que
pertenecer al texto mismo del goce, pues, respecto a marcar la distancia
qtte media en relación al goce de que'se trata, sifuera eso, la distancia
que leJ-alta, no sólo supone lo Ete sería esa sino que, ademós, es soparte
de otro.
He aquí que esa di(cho)-mensión, [...] es el decir de Freud. Es incluso
la pnteba de la exis¡encia de Freud -pues dentro de alganos años se
necesitard una.

I
Jacques Lacen, Encore,
sesién dei E de mayo de 197-'1.

I
@ iee¡ J'llouch

O Eiitorial ECelp S.A. C¿ritc 510 5"C' C:p'


FeC'

V:rsión en espaiol tj,e la cbra drularia


"lritd ¿t puis f-tccn" ' de Jeen Allouch' I
t993'
pJii."¿" cnlinaim.nte :a ir:ncjs ¡or E'? E'L" Pcns'

Hecho ¿i ijccósito que pie'rieae ia icir I


l'7i3
I
t.i.3.N. )' 98?'99i6;-:'9

I
Introducción
Erés' 1984' [En
"Freud déplacá' apareció pimero en Linoral no14' Toulouie'
.,ireud desplazado", L.i¡torcl, Textos de psicoanálisis n" I, Ed. La torre
espanoi, ..Lacen Freud
¿qué reiación?". Ed.
vilicaña.lvléxico,
.llii¿;. co_¿"ua. ls"8O. p.Z:l;
ü8;i. u;,
'i¡,r'r*1.n" primera ,..iión d.l
j+-3:, Pais.
capítulo
EPEL. a¡rii
I de ia segunda parte lre Publicada en
¿e 1992' E1 capírulo 2 nunca tue objeto de una
Y entonces. ILo es eso
de dicho texto fue publicado en
comunicación orai. pero una primera versión
de l99l' El capírulo 3' ei más
Esquisses osychanai,*tiq;' ;" 15' primavera
una exposición oral en ocasión de un
considerablemenle corregido, fue primero
ios diez años de la muerte de Jacques
.ái"qri" inier-asociativo-.on*t*o'"ndo
Lacrn.

--¿Y entoncss? (er puis)

¿No es ésta. en su más simpie expresión, 1a prin:era in¡erv'encirin dei


psicoanaiista'? ¿No es ésta. reduciCa e su latz, la fón:ruia misma del
rei:nzemiento de la palabra. 'Je ia regia fundamentai en su efecti"'idai?
¿No es ést: ir única palabra, laúnicapalabra
aiecuaCa (yaque es una) que
con toda iegitrmidad puede en principio decir un pslcoanalisra?

Sin embargo esie "¿v entonc:s'l" no 'ra de su'ic. ¿Qué psiccaneliste no


esiijvo rlguna vez coniicnrrco a La experiencia ce un hombrs o ce u¡c.
muje: cue 'riene a peCrrie a', uda i' que, ienienio en :nenie cera incu:C¡:i
su sciici:uC ¿i rnoCeio ,je ir:onsuite mérjicq coniia .u iir'icuited ¿i'r
r..lilii
cu]ntas irlses. luego...se;:i1:... y':s:-':r') uQué) 3'.:ero' il,i "'e: lac::
e';enr,..irli-¡enle que se le nag:e y'19liünia's. Dero ¿so sí, creg':ntas seias' Ce
esas que prcceceíae dilec:enenle Ce lcCo el saber ietenlado pc'r acuél
o ,iqueiia cue, en ¡cafrencir. ::n cómodunenie .erii.if,:lece en ¡u sillón.
Porque 9i sabe. porcue Ei ¿s ::'n 3x;enmenll;o' ve Ce ;'.:1;o que:i-'vl¿cic':
JOncce :lnciél ies 'c'::rrs :regui:fs. ; C-ue i:s :i;;:re:' pues I L:
ccr:esiciiG. : ii. ¡crnar ahcri i: iicilitivr. Cespué:; ds ¿:a: lccls ?niiie:ls
:¿::;r:s üIje se suaone ic Lln:lcluzaiio. Er u:. .:tri'ilj'i:c ilrns;::el;lli
Ce esle ti;e., resccnCer:
.r ,? ¡á',\^,\á\. /
r L rtt!Vl;!vJ,
¡

Ín¡roducció¡ II

! l0 F,ed, Y desoués t"acu


r
^^t,' ¡.-ioncr rnre el psicoanalist
nsicoanaliSta el reconocida no resiste ( de nuevo aquí la palabra que vuelve, pero no es la
i-" ¿Cómo es esto del "Y entonces?" (piensa ante
recuPera' súbitamente misma), termina por ser destruida como obra de arte, una vez que se le
ou.i""n,., al principio sorPrendido, pero, no bien se
--^ todavíayo tengaque tomar aplica el " ¿Y entonces?" de una rnanera suficientemente... recalcada
Inoiu¿o o mordaz) ¡Lo único que faltaes que (éppuyée). Destr:ir, diie é1. El " ¿Y entonces? ", recalcado (cppuyé)
h paiaUral ". I-uego, m:is abiertamente: agoa (épuise).
a usted' Doctor, interrogarmel "
--" ¡Pero le correspcnde Al erigir ese " ¿Y entonces? " al rango
rie conector lógico qr:e liga ios

Es entonces, cuando una nueva resPuesta


: caminos de Fieud y de Lacan, anticiparnos una solucién (si es que hay
alguna) para aporrar al probiema de la articuiación de aquellos. Sin
"
-" ¿Y entonces? embargo, esta anticipación queda como ia mrís ligera que se pueCa
junto con la Cesconcertada y, de alií en más' deñnitivamente poco locuaz suponer: que se piense en ei peso de sentido, es decir, en que liga, es decir,
reli-siosamente, de un cooector cgmo "relcmo a-.."r;es asimismo la miís
¡
répiica: 1
{
vasta, la más abierta. A menos que..., a menos que, por la asociación libre
--"ll!" ,.
que instaura el ¿Y entonces? ", dicha apertuia ao sea inás que un sesgo
ti
resbaloso de un abismo que no susceptible de reveiar mejor hasta qué punto esta alticuiación, Cado un
orecipitan a los dos parienaires al borde
de una notabie paradoja' Muy^ pronto' i
cierto punto de partida, tue aigo pauado o incluso imauesto'
es otra cosa que la comprobación "
que ese ouevo " ¿Y enronces? no es
en etecro, se pondrá en evideacia
verdadera pregunta' no es "seri.a". De Ciertamenre, nadase le podríafundamentalmente objetarequien decla¡a¡a
recibido por el paciente como una que Cistinguir y, por lo tanto, promover la secuencia "Freud, y Cespués (er
" entonces? "' no se
*r," *o¿o, planreanCo una y otra vez la pregunta ¿Y pais) Lacan" depende de un prejuicio, aunque mulr ilusraCo' En una
una pregunla' aún
recoúoce que ei psicoanalista piantee '"id*dtto*tnte
que' ei aún-no-analizante (pero' a 1o época como Ia acfuai, en iaque valiosos trebajos de nistoria de1 psiccaná1isis
cuando reslmente la haga' Enlanto ven la luz de una manera hasta acuí inigualable pcr su arcplitud (ai punio
otra pregunta (otra
L:"t, ¿quién io sabe'f ya lo es)' J no piantearse cue uno llega a pregufltarse si no son candidetos a hacer las veces de
demanda), Dianrea rerlmente una
y' en esle seniido' tamDoco é1 es
(ilotabie arnbigüecad la de ese tecría), resui¡a claro que ei moviraiento inpuisado pL1r sigmunci Freud;-
re:cnocido cuanco se :scucha responder 'ün'l poréi acrnbr:Co psiccanáiisis .lodnadar iugar a muchas ciras secuencirs.
"é1", pero que justrmenle no oplra¡ ,'tI :"t:nt¡ti^'-:].::::te
si exisle una situación en la ioddrhaber aigunas d.e Imisrno tipo, vincsladas ei]as ¡ambién accniiic:os
srtuación en il ,iue "uno no se ccmpienie'" tie escueias: " Freud, 1;' deslués l¡téiani¿ iüein " no seía ia úiiirnaque se
i." "f meieniendlco se ve recucido a su iilis
siinple expresión' es
nos ocsn-inl. Asii'nis¡io había o6s iie unr faclura un poco Cliirente.
ciecisamente és:¡. perc no pr:resto estxitn menos ntsiiricemente reaiizlcas 1i que consrirul;en
porque ese en lo
Y sucede que las ccsas quedan así' ¿Será er'lcnces uno ae ics rantos nombres de la:nnslirencia: " Freud. ;v cespués toccs
que naCie ei agcta;nielto hacla ¿l " ''
los o¿lcs", " Freuti, y descués ':aca unc c¿ ios circs r'Vlianies: Freuc'
s,¿cesivo no-en¿iizmre e:lir:vió más
cual le conduce ei ' ¿Y entonces? ?
" Thon:as BernhryC lo ha puesto
.v después
'tiqunos clios muy pccc numercsos " -1r éstos seí¡n ios
pLa€3s cosas' en eíecto' que pueCen ieteniailores d,el anillc-; o bien,ll varianie más Ciii':ii Ce e'xhrbir
nota'Dlenent¿ Ce m¡iiiiesto: hay
esr palal'rra 'osiccanalíllc¿Ílenr-e "
pú'oiicemelte: " Fieud, y'Jeslués 1''c " )' o aún. Fieuc' ;z leslués"' itr;
resisiir ( he aquí (-1.';€ 3pare¡Js de prcaro
del pacicate que ac¿ba Je
iin cargeda) ei "¿Y enicnc¿s? " ' A Cii'eren;ia
ser¿voc:'ic,3c==rdseeu\isn¿erel"'1'enior:::sl.''s:'ncut
Ce éi' segil su
i . Lrc:n ¿5¡¡ii $'rcr:dc cei :osrbi: esbsiófl:n es3:!j361c'i: ]e :lio 'l'l:esliillonio iu
ju '::'lJrar) i ': isie
eparenternen,. .i ,;oul*'a se .lo .Cernanrj*n'
hacienCo incesant: uuestiona¡:g :c::c: ':¿i rdor que :¿ lebt: :crri:i :
js¿ cf,i':cclof igliio
ieeiiijad no 3s Dii'l c,:¿slonarnienfo iu¿ ,:n :ccrnciiarn:rnto ¿setc:a1 ije su ,roñLO,clln le
inspiración. 'ln üso li earecer'Jesbcchlc' iJero
q'..iü
"n ':: 'ztcL¿: ) f ''tLC i¿ luc'lLtc:
r-n:¡ii¿:;i¡¡er. r,u :liacir:n coo 3l:-uo. lC,ir Pl'ui,c¿e .luii¿n'
!,\..á -!,r
Jlv lr .1: "'¡'a= t-lí1 "cu;li" 3: ::oyc" :s:i''is;icc j,S¿:1:' ¿-*:: ., .. .:: r^:.; Fpci lgqll ilv ',.e:slÚn;¡ a,,r-a,i. :j :¿:crtt¿ .t ,;'z'-t¿ )r,''::.rl¿i L:::":'
ilci'-i¡c 1l ;br: :: :C: ::¡
-U:* 1
Íilesiic aus'.¡l:cl) :il ";\' e"tct't:s l
"
l¡trod.uccli¡ . 13
\2 ' uisltcu
Fr¿ud,:t,l¿squis Ltcu .

i
tenemcjs la versión del
". Y en tal caso, clasificable como " epistemoiogía psicoanalítica"? Esio se puede poner
más (necesidad) de Freud en ducia.
psicoaniilisis como ciencia que, ai igual que un buen ntirnero de ciencias,
no necesita referirse a su fundadcr salvo a dfulo de respeluosa rv-fejor establecida aparece la rfirmación según la cual el psicoanáiisis,
conmemoración. \
más que algunos otrc§ sectores localizedcs de proCucción de un saber, rro
ha cesado de incerrcgar-se scbre su estalils ccmo saber. irio es seguro, ni
se ve con ciafidsd en ese úlri¡ao ítem de la lisra: caca una de sus ¡nucho menos, que esto üonsiituya un buen signo, un signo que man.ifieste
secuencias piantee, c al menos comPromete de una manera específica'
el
que el psicoanálisis erisie como una ciiscipli;:a que derie su oi:jeto, su
problemaefistemolegico del psicoaniilisis que incluye el de su transmisión-
métcio, su paraciigma, sus instituciones, su dispositivo de i'ormación de
i ¿..ir rei¿ad, habiercomo si fileraobvio Cei"problema epistemológico
cien¡ííicos, su enseñanza, sus proce<J,imien¡os ,je admisién o rechazo ie
,Jei psicoanálisis" resulta inrempestivc. ¿Pcdemos acaso, a.propósito del
lcs nue'¡os enunciados produciios, sin oividar, en fli:, ei reconccimiento
psicoanálisis, continueÍ ccn 1a idea según la cual a cada una cie las (¿eter-ao?) del Es¡ado. A juzgar PCr slr historia. ei psiccanáiisis no se
ciscipiinrs sociaknente reconccidas le corres¡cnde un ccnjunto deijnido be rle¡'ició en absoiuro de ias épocas Ce tregua que Thornas Kuhn ilanr
consideraclas
de pleguntas iefencas al est:tus de su saber'l Esxs pregunlas "ciencia normal", épocas rluranle ias cuales, tranquiiari:enie apt:ynd65 e11
.*.un-h,,compondnenlaepisremología'otradisciplina,peroceun una marriz paraCigmática admiti¿a pcr toCos, los cienliilcos *.le una
prcpio ei
Ésrails dittrente al ciel resro Duesio que ha elegido ccmo objeto
(suconemcs poco ciegamenie,\ cadauna Ciscipiina como la físice o la química rabajan para ampliar ei impe:;o
sa'cer lr1 como lc produce que un
a ial proceder un hacia nuevos territodos. Sena equivccrtlo figurarse que del anáiisis
ce la: crrrs cisciplinas. Ei hecho de que ie debamos iomado como referencia. pueia surgir la invención de una noción ;on:o
que
cienc número ,ie traoa.;os ya ciásicos no impide pregunler: ¿Cómo
es
ia J.e "ciencir. normal". Esto se iece ai hecho d,e que, ea lo reiaiivo i ,u
cada una de las cienái;:s, duras o blanias, xceptan de.jarse trtiar
así?
que manitlestan que un est3tus como saber. ei psicoanáirsis nc ha cgsaco cie prcducir res¡ueslas
por las ¿[1as
¿Cuáies son las rnii 1; una maneras que 3n un iiernpo más o n:enos breve. se rel'elaron incon',.elielres.
coco mai'l En lo que ccncieme
:.=tan:i."to ie ese iipo les conviene bien, u'

y escecialinence Cebido aque con Lrcan recusó ia noción


ei pslcoanáiisi.s, És¡r es, pues, la ambicióa iiei presenie ir:bajo: h¡biceco elegi'io !a
;:eialenguaje. es ciaro que una
(-1e reccnsiderac.ión semejance Cei sabel secuencia "FreuC. v iesoués L-ecln" ccrnc ia mds aprc-'ieca ,ara loiijÍ
que Éroduce no resulre obvio. Desie ei punto ce vista rlel propic ri .jía lr especliiciili epistenicr cei :siccanáiisi-i iie u'ji¿no. nosiri.r. :i
psicoanáiisis, nc ¿s pcr ic lanto e'¡iienie que ::<ista ni que deba
existir no üerrosit:i. quc -i sciuc:e n qu: io-tj -:oc:n:r;s J.:ori1: i 3i:e :robii,i'if,
,lgo 4,.. se ilame ecisie:iologíl cel psicoaniiisis' c.cn,,'ieile, por ci:::c. oerc no absciutr¡r.eni-''¡ t¡nbiér qri€ en esii
',iri an te reside n i né'J i tos orc b ie mls''::isi: no ió -sict-s ".
ñ¡ rl!í ¡qrp :l:n .irn, no oficiioxo: ul;: o"n'tarJo""e. ¡e,.:ucici: unas
ot-.cls páuin¿s. q'..1¿ e;(!fesa una iueÍa ,:le respuesl:-rr,:ri;:esic ai
i.:¡,r-,.-t:¡i::-a,r,i-:1{
"'.
:.,^,-l.i,1r;:r:-.-l lr'-,-r,t:l¡iiJ':i1::l:l:-3i:.:
i;uc sü:nunci:i"l ai::.rro:'.-1¿ ics ¡s;e::cs cue queia;on.¿:;ices:n i:
.'-)! -r-.
/e¡U'.
.::vu.,¡-- -,-iirr iil ,*l'3 i§ ..:r;ll]. liCia:t1i :f í :f iLr:i
-uJL¿.
r
=:ie:l
,l-,,¡'.r, . r:a--:Fr. 5.:¡
i---, -*J U- UiL .¡U ?J - \;--s

l'jti¿';ane n;e :naLrniitnrij ::.'Juí el isi:r:icr-,:sno Cel run;o je Düil'11.


;.c';éi ,jacc rorei ',. i'::ilcn;:s?" ia:,:u,:'), elire ia rcilc:';li-in;ei né:i-r'lo

-l
' :. .':::c
Intoducción IJ
l+ FreuC. v desoués [tcan

abierros), el "no es eso", primer instante de vef ia evidencia como


freudianoaicasoysupresenteaplicaciónalaarticulaciónFreud.Lacan. evidencia (por 1o ianro, primer tiempo de su vaciamiento) muy pronto
rnanifiesto
;; ";";r;, ¿a qué se refiere esta oposición ertre unporlacónico
oltl pory' el caso golpea ia invención dei saber. Dicho con más rigor: en el análisis basta
y u* ior".rrJ despiegado? No solamente -y ése es' que un saber sea producido para que, por ese hecha misrna, se encuentre
metáfora' Se reflere
en el sueño- a una condensación o incluso a una ya marcado por el "no es eso". Es necesario aún tomar nota de e11o...; y
al estatus del saber' En efecto'
hmbién a nuesuo objeto aquí mismo, aquí interviene el trabajo de vaciamiento de ia evidencia que, como ¡odo
un saber' se ha insistido
a"rJ" qu" Lacan designa el inconsciente como tiempo para comprender, puede ilevar un cieno tiempo. No hay en el
que sin embargo sabía' Se ha
mucho'en que el ser hablante no sabía eso aniilisis, decíamos, momento de "ciencianormal". Elmomento de concluir,
y ya no cuentan los comentarios
f*.r,o *uy O. relieve el saber no sabido de Freud' Sin embargo' ese
tercer momenro del tiempo lógico de Lacan y pnmer momento aquí (ya
y traaucciÁnes de Wo Es vvar soll lch werd'en que aquella primera pafie a la que llamamos "manifiesto", en ei-ecro, fue
que persista el prejuicio
rnucho deviene un demasiado, porque deja en principio una conciusión), es, Lacen lo advirtió, un mornento
mismo tenninó por aiimentar' porque conduce I de
psi""iogista que é1 concluir "de través"ó.
descuidarlactfeCafadelamonedadelsaberconlacualelanálisisaotiene
que no sabe 1o que sabe es
menos ql¡e ver: ese ser hablante ( parlAte)
Pero, apuntaiando esta tesis, se podría ¡ambién subra¡rar que un punto
que no sabe' Con el saber' éi común a los caminos de Freud y de Lacan esiuvo constituido por esa
iambién aquel que sabe (que cree saber) 1o
una constanle renovación de problemas ,v soluciones que, al agudizarse, se
"r".u.nr*historios' ". Lacan 1o percibió hasra elpunto de disponer.de j
en la medida de lo posible: se convierte en lrxstorno que causa innumerables disgustos a los sesuidores
paiabra para expresar cómo hacer con eso
'' No hay razón alguna (siempre a ia zaga de un tren de saber), pero que asimismo oc:siona un
trateba ettonc3s, iecía é1. de "vaciar la evidencia
psicr:análisis escape a esa tbrmidabie y ori_einal probierna de lecrura. Aigunos de los cambios que
fort q*. Ei saber sobre e[ esialus dei saber en
intrcduce Freud en su doc¡rina alcanzan iealmen¡e r. sus fund.amentos.
mai(r)-,ji(c)ción(puestoqueioes)deiaevicencia:secreyósaberqueei
que no 10 era ( eso que Bástencs rnencionar uno, eleeido oor hrberse oroducido tardírmenre:. la
psicoaná1isis er3 una cieacie, se cre;;ó saber
ilamamcs melefse a Popper en ia cebezs)'
:e cre'vó sa'Det que ero' un inrroducción de la puisión de muene. Se sabe que ésta provccó enrre lcs
que ere una enl'erireCri psiccanalistas una cii '.'isión rn "pro" :/ "ccürie" tan '¡iole:r¡a e iire,.iuc:ib le
géaero partic§lar ¿e ciencla. se creyó.saber
Jorno la pro'/oc3.da por el sur?imiento de un nu€vo paredigma en la nás
conlxgicsa. se creyó saber que er3 un lllscuisc"'
inccntes¡¿ble Ce ias cie ncias. Dei rnisn:o moio. Lacen deciuraba e sus
el anáiisis' runciona según un iégirne:r
La evice¡cia iei saber, en ¿iumnos :t l96l: "i...] no cr?en que ciliealrus ,".iva. podrín us¡e'jes :oma¡
q'rle esin' :'¡idencir' ie']n'inf,
iei''nstril taíticuiil'r. Por rcdos iarics' .oarec' aigunes d.e nis fórnui:s corno deiinilivrs ". Ci¿:rlrncnte, i'¿ suc:sión .ie
cornc un ileinasiaoo'
por rnanii;slar:. 3ll un cieler:ilinado mcmeiloj¿ Ics ma¡enas ;scriio-s iilr i-acrn por sí soia !iancer ia cuestión ,je -.abe: si
i¡vención Cel sl'ce: l
dcmesirco cosiosa. especialnente 3n iérn'iin65 u:ic :i:11,:s pue.e j¿: ¿i buii..o, cuesi:rin iue Lo lue.:¿ sc: ¡esuelt¿
no resllellos' Pelo e: ¿i
pr"pOri:o ie orcbien¿s cruclaies i' sin erabargo
gui co mDarte ' lunq'':e
*niiisi r. .rilí e srj su singui:i'Ja''i { un r' sing': i:iiclc
v ccn sxi¿ r:ca Ce ias rii¿s -se hr j- '': i:mcc;riC;¡.: lue ücsiJna l;. prcduccicn,isi sai:::n ;sicomáii:;is :s :cuciii qu:
en ',in ;i¿ro 3'siecto, ':cn ir iiteri¡ura L:c:=ll:n¡ i¿i.:.<.no,:.,);:cr. :u::on::cr:3igs:crn:::.ls: :i in¡;:¡iÍ:::,c:.:i ::cnco
jier]itre '; ¡s¡i;v3{:r':r:e
s!5s¡vidc que a3 lircraruir' lcs ;er'i:los scn par::cmcre::a:r , :i mcmerto le conciuir (C,i: -rac¡ucs L:c::¡. Sstri:or !,5igio XXI
E:lirores. \léx:,:c. ¡' -ci.. i98-l :.1 I ).

ó- ,'-',i Er< ?:r':c. i¿ :tmp!¿.':rotr le:emcs 'o:;i::ue :c L:ctn,l¡uii.lus¿, Éles. 1989.


I- l::.: :i:::r :c:u::e:e - .:;¿:c:,or:u ¡o:q::: :c:::1t: -ii .:s:.1;::s :::in:n::i i:?:n
j .i./.: ri ..a.--
-irr -¡ - . .:-rñ \ -.,J

.uc:rr¿cni:ii:rr;¡loncre'vrccibilsíJeii ':1 :f:::.r;rc::Í!:ax.oii¿-r.c:rlru¡:''.asi&;


::.::r:-\ it -:l'.:;::::: ,r,a- a'." :¡¡ !!:-.tl:: ::: :-i:s: i.(::iJ:J:::::'¡cJ i¿ .o
,l!¿:iiir lrca::1.--
íntroducción 11
(|' Frerrl. v tjespués !¿can
i

saivo que se cié a la sabido con el "no es eso" que vecía aigunas cie sus evicien'cias. Si se nos
mediante ia elección dei fechado en último término' perrnite decirlo aquí, éstcs son los puntos Ce "cietnlle" que asÍ esturliados
no conlingente respecto de
muerte real de Lacan ei estaus de un hecho merecen nuestro interés. De este modo, hemos d.ebido aprendel a cosia
manera miis radicai' esta
esa sucesión, paso que no daremos' Pero'
de
nuesiraque resultabainrempesrivo y desde todo punto erióneo considera¡
SuCeSiónincicaquenohayunafórmuladefiniti.¡aenpsicoailálisis,que al psiccanálisis como una disciplina ccnstiruida (¡La prirnera línea de
desde que Ia
el an,ilisis estí conden"io u un" suerte de curso loco nues¡ro pimer capíruio i); que en esa falta misma (si es que es una) reside
invenciéndelsaber.porlolanto,Suhacersaber-estambiénaqueiioque tocio el interés de un conc:pto como e! de carnpo freudiano. Hemos
lo vuelve caducc. debido aprender, esta vez no como corrección de un saber mai adcuirico
psicoanálisis tiene qu€ ver con un real al cual
replica' con un sino como un suplemento cor:ectivo localizan¡e, que, por lo tantc, limita
Es que el
:i.ene su historia, que no ignora del todo
la acogida que ie ieser'¡a lo que supierrenta. que este concepto de campo freudiano sólo tenía
**iqu" y que se ilama
ei psicoanálisis, que " ,u "' replicr a esta acogida se nddo ep is iémicc vi nculaco a aquel,ie mé t o do fr e ud iano, Y es prcbable
''locurr".Leacrualhisteria'p""ólornencionariaeeila'yanoesmás que cie iales pocias resuiren algunos ftu¡cs: en et-ecto, andand.o camino,
con la pobre trguia que ca de eiia un Jean \lertin
Charcot' descubrirrcs que ia secuencia consecuti'i a "Freud. v después Lacan" ¿ra
co*",potioie
tarnbién el non'lbre de un recorddo que rehacÍa has¡a cerr:¡i.o aquel orro
Lacan,CespuésdeFreud,esiudiómuyespecialn:enteelesntusdelsaberproblema) prirner reccn'icio que de lfaquiaveio a Descaries ha'oía esr¿biecido un
." pri."."'iiisis (inciuso llegó a decir que el saber ere sB una ¡eona discurso subjeiivaCo dei nétoio. De la nnisma roanera, en ei punto exac:o
situando al inconscien" to*J saber no sabido 'desarrollando donce en Lacen ei ter¡ario red simbólico imaginano nc pr:Cia lrr
saber es
ie Ia trensferer:cia en la que la ilgura de un s*jeto sup!¿esto aquí por tuncionar como paredigma dei psiccanáiisis sin convenirse éi misno ¿n
retcfllamos
cruciai. aCviriiesdo esa relación que nosotrcs cuesiión. encontremos esa,Ji'¡isión del simbóiico en sírnbolo y sínrona
y su caducidacl. en panicular, con ia
nuesrfa cuenia en'e ei saber sa'oico de ia cuai no hemc.s sabioc exirxer toCavía las consecuencir.s .oare ei
parx olro
indiceción de que cuando un signiiicen[e represenra al sujeto
e<lviene así al psicoanálisis de hoy.
sigr:iiicanie' .r" ,u¡*'o t'ruJ"' estí en'{:dürg cu:ndo
"
cle ese otro signiilcanie ionrie el saber es proCucido como sabiCc' -"Ex¡raña ernbición parx uxa obra . se dirá. ia ie hacer vaier un ''ino .s
lugar
"Freud' -v iespués Lacen" nos esc l" En ei'ecio. a un lecior arl'¡eriiio, ¿no se ie Ce'ceda proccnel unacbfe
De esie mcoo' ia secuencia ccnsecutiva :i
¿ los i-ines Ce coner de reiieve sólo una'/ez que se discusiera je una fescuesti] positiv e i la cuesilón uue
parece más lprcpiaúa que cualquier ctra
por esi¿
ian panicular 3siatus siber en psicoanáiisis y pare aoonar' éi ;r=::lde r'ci.-rdrl Si se llamr "prcgreso" ai hecnc ,ie '¡l no saber eso
'jel
meiiio,unaccnri,bucióndeianílisisrlaecislenroit:gia.rlmenosbajola quc se sabí¡ sin saber üue se ic sibía ince biriei::¿ni:. ;ccrá acimiiiise c',le
iorma (e.".:r:ñal 'J,e un probienir'oicn
p.lanteado' i¿ secuencia consecul:va "Fie'.:C. y cesúués L¿cin" coll§iii'.::/ü u:'i
parsci (seivo Wiituenste:n' Ce quien no prcgresc. Lecan .¡acía ¡. F¡eu,l: un ciqro nú¡nerc 'le ¿viier,cias iiei saber
En ¿ieclo, coni-rsénosio: l'io nos !i!iv.,Ly.r .- E-o',,j ¡r.
. '. n¡-¡'.n¡!¡éñfá
i,:t¡!./+.-:.s,,!v ñr-. i.O Jr":a :.CS Imp0Í3. 1qU.." .l-.
rq-*
'/emosquérr:ones-ha'bidatut*'oce;uobr:-nosharírncolcrcersus i: que el ;siccandirsis :u','iera ¿n Freuti;1 :sI:i:s de r-ln¿':len'::ll
Ce ia:pisienciogí:) que hrs:i i¿chur
s[5g1';ecrcnes sccfe Frtud ba.jo e i ¡;bro hilili ;ub',:-i,ias --ür Í acxn. Este, ¿ su ve:. procoicionó
nclr l'el'jrCtlstrlenie del cso s¿ oires
el prese nie la:pisiernclogía hlrua torn¿d.o iesp,uesixs, las cuii¿s se 3nccnii3.rín '¡lciaias eij.es taniiÉn ie su
que ésre pone 'ie reii¿"'e respecto oei
.iei psiccanáiisis' scbre tt]¿o' tn io .--.., i: Lvr
-,/ :i¡e!¡.u-¿
E
rip*.iC jsli, :,;divíi ¿Xli".St :r i¿ lctu:iiiac , Sr;l
-,rr Ljv¡.
en'c:r':o. ie ci;dcier duccsc: :l psicr:anáiisis i:o ¿s ci¿rcie siio .iiscurso ).
ccn su ccjc:D: en pd::er iugil'
Este ii'cio lr; pi:ur-ii ;ino ¿star;oni'lrine .f.:¡'i.:,:eso, ic sabe :r¿.'r¡,'i: ::lii.ts r ia ini¿r;ención 'jel"ro es :sr¡", s¿.i:
presentailSr)ü.üt5¿'9"',t1ócomounsabercier::r'en:e;lt'l¿'io'per:o'socre u i: .:: ;:c i c', i r-' l i rcb ie ;::rs hes ¡r. ¿n:cncss ::c :i:', ciics. T¡l'' qz. !L.
:, l.r ¿ a

",:,1
LUL'' '^-n,r -::. i; lcrcpiico:;'::'1:r;ucn:r¿c lrtec:e:cir'::r:sec'-ti
!!
'r )!!-l- \J ^,
rVr
\' t'a" : -'"L.::iL','.:'::;i:cJ h¡11:::cs, sc i';cicr.:s :i:.:ii;i.
-.¡v-*.
t,.,--:-e-i-i
.'Fl:l:;. ',' ;:l,auis Lr:in" '\ :c¡'i;n';:cioti. i'¿''"
:.a-r-
'L!-.r-'ru''L-' :-.¿
- r ;L:t:

-4
1
I
I
¡

I
i

No saber eso que no se sabe, tal es lo que aparece como intento de


realización del psicoanrálisis en su curso loco. ¿No es esto lo que-define
al psicoanallsta lo que lo hace ser lo contrario de un'especialistas? Y es
,ut .rrro mismo el problema que el psicoaniílisis presenta a Ia
episremología, probtrema del cual ia epistemoiogía no se ha podido hacer
carso hasta ahora.
- " ¿Y entonces? " Primera parte
- " ¿'¿Y entonces?' ? ¡Pero mire! ¡Las páginás siguen!"
- " iNo es esol"
- " ¿Y entonces? "
De un rnanifiesto

3-Es€''aosacerloquenosesab'l"no¿sunac:esiiónesoe:ificlti:ipsiccanaiisr:';C'5cto
/on tlucC;:r'' tie ir rec:reCad üel
no rnencionir aquí h fabuloso ¡venru'x il3 '\rjve¡:ldr: '
saber osiquiíu:cc' ¿l meesro rje K¡aecti in se neg:lea
aerniirun úiagn, s-u:o' saivo ci c:§Ü'
odrálisis 5erenl' :13i3 ¿i 4íren q¡le"' ht¡o u¡r: ¿xc*:cián:
e*rcnces bi¿l ¿s¡¿¡iecido. de ia
-conclusión lógicr::e:sc
¿s;iefo oue se iru:abade su ie-v. I-uis il :je 3¿v!en- cco:i cu¡l
6¡56 d :osildo en :elación ¡ ¡u étic¿ ':u¿ il ;usrno ¿nunció ¡ su muie¡-mul''ó üc'¿l:':'
t
!
I
i
I

FreuC desplazadol
!L:s pntes irign b'zdui,
B¡acue

f
Cero
{
a
El psiccanálisis es una oisciplina locai y iazonada.
¿Cuiil es su objero? i a cuestión no se de.ia fcrmular fácrinerre.
¿Ei
psi,luismo humano? ¿Le personalidad?
¿Ei inconsciei:re.) ¿Ei oblero r?
correladva¡nenie, su siruación bajo la miraca de la ciencia si .sienco
slie
problemárica: ¿ciencia cel aina?,
¿ciencie conjeturai?.¿no cincia si¡o
discurso? ¿Deiiric ?

l.- Auncuc esie ie.r:g esrá louíccmo cun¿o de caricir- consuruyó


¿i i-in:I. I Ia a:u¡+r: ie
un io{ue d¿ t¡cmcet;r. iie,Jn c:efo ¡únero ie ,.raoajos ya;r;ec.¿
o l¡di¡eci¡.nente
:lisier::oidg:ccs en ios 'Jue s¿ :nccnfaba probiemauzicia ia::-ic:¡iic:ón
;:?uc/L:c:r¡.
Ei:rre los ¡n:''r:os. se siru;¡á. urs tcdo. ir puest::n ob¡a de
ir::on¡.:e.¿ -,ir""*r,.,:J
tai-cori:,o-¡uede r.é¡s¿i¡ ¡unr:icn¡r:l luesiro :stuiio üruhoo
iarlr¿pr;rr ,¿lirs-iouiü.jse.
Erüs.i98+fc:r:so:ñoi L¿¡¡.ato¡:¿rc.Eieio.tss.A§..t993];¡¡e¿s¿¡tiii:aci.ónn:sn¡
l¡ iue ¡os levgiri ics línrries ie rquclra- lni¡e ios se,¿undcs. *an","n*.oru
qüe :uesi¡c inlel.ds ¿st¡ibaúa e:.¡ :sa$s Je 1¡ l¿:¡a
¿i.recro ie
=i en ci psrcoai.:iii.is i".;¡ _: ci:r¡ .:r¿,
me;lcicnloa). P.¡ner i¿ ir:-.lsli€r:,:ión :1 ies¡,¿co rereir que ¿i rnáisis
:s inciisitlc:bie
deotrc i:§ ::ie3cdas rra ¿s i¡.b i¿c:ü:r: :n o¡r¿cu i:Í. su m¿t.rniq¡:c,ón
'ie io rciii: r.a ;rs
s¿r ccnsidet:u¿ ccrno :ii . ucíi ¿.tritmenÉ i¿i it dsmo
crúe:l que ai Jg :crnrliz::c:ón :on
ei ¡ue s¿ oocró,rn las c:¿;c::¡ jurs. jc
lr¡:uerido :quí ie:r;.d,rcir.x,,:ei..F:.:u,j
Cesplazadn' :asi ::l cui;cr¡o:,:en pubiic:io ¿n !_t¡rirai n. /-¡.
l.;uiouse. i::s.
Novie:ibre ie i93¿ ien ¿sor.ici. l;jir,-rl te..Elos i¿ psiccaní.iisis. 1,., l.
L¡ i¡re :bcii;:-
Córcicb¿. i96ó r ¿: üc:n F¡eia! Q2,¿il;i[r.' i1]l*,c:.ir..\té::c:.
l?gll:::c:¡,;: :r:o
:rotit;.:'inl¡sci:¡:eccion¿s¡lce::¡:;i:¿i::¿¿s¡::iios:snL.:alesllcsou?::.t:.:caiti:;ri:l:i
Jio :r¿:. i::lus := l,;:::i:s.,c;lc;i.r:;l -.:: :: ;c:lti:J ¡tí:: ,., --,a.,.",. ;;ra_ ,,
''L-¿c:c:.ts'
\

Freutl. t desDués |¿tctn Fr¿atl desolc:aio 1'1

Así ei apoyo del nombre propio de Freud tornado como calificativo - la oposición inconscienre/ccnsciente-óreconscienre (CS-pCS) es
mantiene una prudente y, en consecuencia, un feliz dejar en suspenso la esencial,pero está acompañada de la distinción secundaria CS/?CS.
respuesta a estas preguntas, pero con la posible contrapakida de - la oposición pulsión sexuaVpulsióo del yo se Eansformari en la
descuiciarias demasiado, de dejarias aoscuras. Fue necesaria iaenseñ¿nza oposición pulsión de vida/ pulsión de muerte, sin que ni una ni orra
de Lacan, en acto, para que ése no fuera el caso. Sin embargo, teniendo oposición logren por otra parte reabsorber verdacierarilente lo que
en cuenta hoy el camino que abrió, aquel apoyo mismo se ha vueito perrnanece planteado corno pulsión parcial,
problemático: "keudiano" y " lacaniano" ¿son concurrentes? ¿Sinónimos?
- Ia oposición amor/odio con la cual Freud {ea Análisis terminable e
¿Qué <iisimetría liga el uno al otro?
interminable) se remonta a Empédocles, pero no sin da¡ tesrimonio,
ccrelativamente, de su iropiezo con el complejo cie castración.
Uno Este binarismo basta para señalar cjue ei objeto de Freud, no es ei
inconsciente sino, más bien, ccmo lo afirma ia Inrernarional Psychoanr-
ly'tic .\ssocierion (I.P.A.) cuanCo define en sus esr:,rutos la ciencia
Freud ibrjó el inconsciente (ICS) por un razcnamiento de tipo abducti,.'o.
psicoanalítice, le personalidcd -de la cual el inconscienie es unr'
Charles Sanders Peirce da es¡e nornbre a la puesta en juego de una instenci a-
hipótesis capaz de permitir que se ieduzca la extrañeza de una clase de
fenómencs obser¡ados. Freud constrr:ye una clase de ese tipo mostrandc
que los síniomas hisréricos, ios sueños, los lapsus, ios acios flallicios, los
Dos
chistes dependen toCos de los mismos mecanismos: ei ICS es el nombre
de esa hipótesis de base que abre la posibilidad de dar cuenta de la
homogeneidaci de ics mecanis;nos. Esto impiica inroducir en ei '' a.oarato Carlo Guinzbure, croiesor de historia meCieval en la universiiaci .d¿
psíquicrr" al n:enos Cos polos. ios insrancias; se lrata cie hacer valer el Bologne. inscnbió ei camino abieno por Freud en lo que dencminó un
conflicto como ta.i, pues hay ccnl-iictc ya que esos tenómencs deaotan, paredignu dei lnciiclo.cuyaintroducción sitúa rfinales ielsi_sio XLX. Fl
cacia uno a su manera. la oposición de una rerlizacióa iel Cesec y de rigc téri:lino "indicio" reniie norabiemente ai orden de lo personai. y i*
que se consiituye en su obsríc:lo. msnera ¡anio mús :rdicei cuanlo gue se ir3ix de circsnscn'rir " ia
El c:jelc d,e F:t:C es ist3 llcailio pslcuico -!a oe¡;¿nci;/cC-. pcro personaiidld a 1u,:r¡,jcnie :l esii:rzo persoa¿i es ei nnenr:s iate::sor".
=se
conside raCo rq¡ntjamenta]rnenle ci'riiico en dos lugeles. Hry un binailsi'llo Hey, lues. aquí. ,iivrsión, y Freud se heila. en ef'eclo, pró;<imo : -',lcr:iii
en Freud r ia vez esenciai: e insostenibie. Lo más notabie 3s que, en sus (como éi m,isri,: ic escilbió). a Sheriock liciil'.:s (como lc hl cc;aCo ie
escdtos. Freu,i lestii:lonil. ;sie iirsosleni'Die ccno ta!. Así. por e;e:npio: suponer la ooinión pubilca). a \i.:biilon cie Cuvier. a Senlllon icrea¿cr
ce la anrii:ponie:ír.), a Purk;;ne (funijaCor Ce ia his¡ologí':t,... src. Sin
- [l opersición perc:pcióvmerncda:s iurti¡rr,ental'iesCc st Pro;;ecto it er:rbar3c, esla li:;r 3asia cor sí sola cara ml¡i:ssier q,re ei iaercionlcc
una psicclagtla cien:íficc part nc'tróioi{1l.t, pero Fleuci Oisti;lgrre alií ires paraiigna riel incicio, ai rbaicri ¡rucho, occc apiera rl csiccrcáiisis: se
tipos ,ie neuronifs. Ie escuri: lo oue hrce a su esc¿ciilciCai.

l. - 'Yuesi¡i clnc:pciú c ;r:.,:esae vi i¡;¿ lpir-' .hriJtsla ;r ho;- lcrm::"'r*e ui Ll¿ ii:anen nes
lecrdidr ¡ún. .le¡¡e :i :cnertO Éx .: je :!-\ ij::tilCs ipIssiü:.; :¡ i]o sün tc¡¡ i]rlsca:cs
puisrones dai lro-pulsicnes.¿:::¡es. ¡:¡o :uisron¡s ie Yi¿:-nulsr':ncs;e;ii:,rcñe. L¡:tor':i
ie l: libido ie lunq ¿s, :i:cntmo. :lonr.r:1...i". S. F::uu. '),:s :ilj ;:i :ne:::lu i: ''Signcs. l-:c:s. tis::s'. ¿n '-¿ dlic¡. r' ó. :ovierbr: .:e ii)90, ?:¡::.
:r:ir:'. <5 ü.'1.. '/;i.X' jli,. -is. .\... . :- '.

)
F re,t¿. y,Jet pué s ltc en
Freyd,jesDíazaCa ?5

. Tres era el caso -incluso sin contar a ios disidenies- eniie


los iliscípuios cie
Freud. Kuhn subrava también que la intro,Juccidn cei nuevo
paiadigma
ccmienza enre aqueliosigus se aplican a él con la concieicia
cuando examina el irabajo d.e Lacan a pariir de sus últimos seminaics
se Ce las
anornalías de la teoría en 'r!s¿¡si3. Ahora bien, esta anomaiía
( lo que es de buen mérodo en ese paradigma aer indici', uno ce cuyos esrá
perrccumente designada.,i' circunscripta pr:r Lacan: ..ei
rasgos es cI de au;oriza¡ prorecías a postenoril, cuancc se tienr en cuenra narcisismo -
esci,e en i933 en su ¡esi§- en reaiiriac se presenta en ra eccnomía
la m:'nera en que Lacan se abismó en :l es¡ucio dei borromec ai quercr de ia
cocrrina psicoanaiírrca corno ü'.a. retra incógnka (er subrayado
resolver rnatemáüc;rmente la ternarización de sus tres dimensiones, reai, es ie
Lrcan), culras ironrerrs han permirrdc ceiirnita¡ios nedics de
imaginario y sin'rbóiico (R.S.I.), no es abusivo atjnnar que con !.5.R. invesrigación
cer-ivrdos cei esiuciio.de las neurosis, pero cuyo interici peñní,,,ecg
Lacan ha datlo su oaradigm, ai psicoanál¿s¿s. De aouí se sigue un ;¡ísiico 1' desconocidoó". Ei psicoanárisis perminecerá incperanre
<iesniaz:.mienli,,' ,-'ie las cuestiones; en pardcuia;. no s_- uat3 ya, hablanCo en ei
l*¡r¡ri¿nro ,.1e ras psicosis. si no aoreride de ias psicosis pua.i;r
con prop.iecad,,is coni'jicro sino de anudarnienio/desanudarnienro (clr.su su
ccnsiscencia ai narcisisn:o. De allí la
leciura ce Joyce''), no se rr-aro /& ce un insostenibie ¡los, sino d,e un pr:siblc i*mera inrervenció¡: cie Lacrn en ei
üampo iieuilano, la ini¡cducción iei esiadic, Cet espejc,
ires. ,-ilí dcnde d,os no cesaba de causar problear¿s, se crlna por lo sano in¡e:vención
cu¡rt-'r alclnc: está exclícitarnenre ¡edc. dos años
de la dii-icuitad. coiocanCo un rres .o*o p.in:*.o. más |n¡ie, en ei ie;<!o
sobre l,:s ccmplejos ¡atniiiores. cuando Lacan escibe que ..Freri
No :soabrará q.ue a esio haya seeuico un cuestionamiento dei esrarus Dei'menece cer¡-aco [...] a la noción de la aulo.nomía de i¿s
fcrrnas,'. Ei
mismo cei ICS, que Lacan haya dichc. que :i ICS le penenecía o, inciuso, punro de raniia Jei nue"'o parr.clgrna. rc venos. nc esti
¡n Freud...L:ir
jue hava r,'re :encido inrrcciucir "aiiio que ,-a más aliá del inconsciente". inrrcclucción de es¡e iipo. ile:adl cje otro iado, es otic.,je ios cni:rics
Esta probien:ai:zación esrá el ei hiio mismo iie ia in¡rori.ucción de un seir'iacios por Luhn. L¡. inielvencicin ce un par:dit*a nue"/.c, cbserva-
es
flue'io paredigma: i3.r:ipcco .rscmbrrrj que no halra sido e.xriícinme:lre a m:nucc ei producto de ur hombre
10ven. recién lle eido a ia cisclrili:
rornulaCr. o siturrlc en sus mársenes. T¿i ¿r: ei ciso ce Jaccues L¿c:n
1- -'¡a ¡
en ri in¡;ricr
,
" ñ ,lr u!,J
r ñ..
I r urlLsJ
^i,. rnar,¡i ¡al
; .

L uN ) t-'L ¡-\ Ci-iS:


En rci¡clin ¡ los erecios cue siguen a la:;l;:oduc:ir-i¡:
Cuatro
d: ui rar:ii.¡rr¿- K:rn ¡.rs,l,;i cierto númcrc ce cnierios.d._ E,
:ue',,o
a ::¡:tj i
,. lu.'je:;lez: ::i",iL :ur^bi ir l,: : i :ii íicrc lon,ie li;s J j nc:lr:üs ¿s::t ieci.:.. ;.
r

En lo que resaü.:i ll cescubnr¡ie nic ce un nuevo pur.dier::a ,¡ iambién (.-,., lrls irJriüri't¿i !i. se -.i:tc:;r ¡ei: ill.:1,)35;;,,"s:.-.. j._,:¡
:1.:ic::ci.ies ;a:: c:.:ii:!l ..,.íl:s ii:n io: Cri;cler:::s ccÍ:ntnres v i¿s
a las ccnsecuenci¿s de su inc¡ocuc:ión, se lcne de nanii-ies;c que los
so uc : un¿s l.ii:,.n:qi. -
=. gi ".., J;.; ;i,.; ;i" *.tlor.
; : :lcr :.,
rtrsgos ce Íinerii,:s. seial:cos rcrThomis s. Kuhn. se encüenrran:eiimenie =oc
iu¿ u:,r :!-e.ll.s :quesles*,ie i¿:ccr,-lcgi.r lacanjrna.
:r la r:la::o; ,i¿ , :ct¡l ¡cn Fr--uCj hcl; :px"¿onrd¡ *n ¡r:.:l
me,.:ic¿ . -; . inrrcir..:u. .u*,,.i ¡orlls ir pl:c:,;:s
p'Elr-L5r(-\iti\
f\ Cl
-f '- ñ ñ r.ñ\
--^ ,:, ; ,;;r":".;*f *.
:.t:l{uhn h:ce
accar que scbre.¡icil§ cianco unli :t:,:::1.::,t:;,,:el:¿::i: í;¡ci-: e::a _i:i::ro tunio. if,:i,.:li:::;:in i:.
cisclpl:na ¿srá:n ci-isis. cuanic is:a cr;sis ¿s reconocida. sienio Ll .o:r',bar3 aa,,- aI ireuiisnr-r','i:cii iv¡br¿ irs sesicnes no
rrolirer:ción ie'ersii:nes iiir'ercnres uno ie iDS si,¿:.ios isi ircc:so. Tri "i0rils" sl:o :anbiei puni-;.,i¿i. :ue,-j= ser acuí ii¡:imclle;ir.¡i¿r.:lerr¿
i:.:onocic:
-',Jíi..!Lr li¿:.i r,.ilüice: :i i,.;¡-n;:ie ::i si,:ne. se:ún (uh:..i coniliit:;:t¡:3
.1, -Í¿c:ues ::c¿r- Ls :intht)m!. -senii:.¡:o
".:e 9-
r j-:5. in.iirra ür)s :i."::::j:.ts.. St nl.:l:.:si: :i_:lr:¡:ie üui ji:JS _.:::.; ,:i:::uS
i..lllor¡,:s j. '¡ichn. !*; tr-,ruc:ttt: j¿ :us .!,.\trclon¿s r:¿r:ií,ic:t.1, i:.nd¡ le C:ilu¿
!:::ltr,rrc:. rlix:¡c. 1911. ccmo c. l.¡::r¡: ::c;:.;ui l: --_re librc.:l :;¡cÍc.:r:s¡::¡io:n
ai .ru¿ lf; :0,:::ii:cia nls :¡icl. \:li.¡ nrc: roi-.c¡¿:t:-s iom.o cscl:t:,i:u ::lig i: ::c¡;¡::.i:,d
-= ..1 :',¿ ;f:r-.:ctsir.t:tjj.
i

26 Fr¿x{, t Cesoué.r {tcan Freud. d¿sal¿,zcdo; 2i

kuhnianos definen 1o que fue ei trabajo de Lacan a partir del I dejuiio de parcial, está desiinado a trxcasar. EI ternario I.S.R., como td, no se halla
1953, día en que formuió por primera vez el tern¿rio i.S.R. como tai. en Freud. Antes bien, la operación de Lacan con Freud pueie ser pensada
como la que "desiiza" i.S.R. bajo 1os pies de Freud (esta metáfora es de
Ei conjunto de trabajos de Lacan anteriores a esta fecha puede ser
Lacan). Freud, notlba Lácan, no era lacaniano.
coasiderado, a pañir de ahí, como un formidable esfuerzo pcr reconstruir,
en primer lugar, Ia ciencia psiquiátrica y, luego, ei psicoaniiiisis, sobre ia EI anuciamiento tle I.S.R., ausente en Fre'¿d, es , entonces, ¡ar¡bién
única base cie ia función :. Ia vez estructuran[e y alienante de la imagen aquello que se encuentra denotado aquí por el térrnino "lacadano" -por
(q*.ei texto fundamental sobre los complejos familiares, en donCe lo nnto, en L3.c3n mismo. Es decir, que 1a articulación Lacan"¡Freud. debe
rechaza ei Edipo y ei compiejo de castración de Freud siruándolos mejor situarse como una susti¡ución. ¿Susritución metafórica o metonímica? En
de lo que lo habían hecho las "intuici,¡nes demasiado apresuradas" -las de modo alguno puede decirse dei paradigmr lacaniano que se3 uIIe metífor:
Freud en Torem y Tabú-, a partir del estadic dei espejo; cf. también, en ciei camino abieno por Freud: la susdrución de un paradigma por oro
los años cuarenca, su noción de identificación resolutiva v su definición (esto marca ia dil-erencia entre los segundos y teíceros casos di:¡insuid.cs
¿ei ¿nálisis corr,o pcrcnoia dirigidal). por Kuhn) los reveia inconraensurabies; y, corno 1o sugiere el térn:ino
"deslizar" que usa Lacan cuando interroga a Freud con el LS.R., cua;lCo
contronta Freud a.[ I.S.R., término que Évoca el desliz¿mien¡o Cei ,:bjeto
Cinco parciai por debajo de la cadena signif;cante, es a tíluio -ie una susti¡ución
rnetonímica Que halr que mnrcsi i¿ articuiación Ce Lrcen ccn Freud.
I-acan despl4za e Freuci. Tal es la singuiaridad de su posiclón iien¡e a
Kuhn distirgue ires cesos de inrioducción de un auevo paradiema:
Freud. Lacan no es ni un ecísono de Fleud ni un herédco resi:ecto iel
1.- Dicha intrcducción crea una Ciscipiina en un campo que no esteba psicoanálisis. Despiazancio a Freuci, i ::.can consiiiui'e e I cbjeto Liel
has¡a en¡onces jaioriacio rnás que por discusiones de escr:elas. Ese caso psicoanálisis üorno no rirencs metonírtico que el de la pulsiun.'z ei iel
coiiesponCe r. lo cue se iiamó en la tpistemol¡',gía post-bacheial1iena ianl¡.srna.
i';lne:sa "corie e:isternoiógico".
l.- Dic.ra in:rcc:cc:in iustit'-.1:i3 con 'in rue','o parajigni un ::¡:dic:i1:
ariiguo, en ei crrairc ce una discipiina .va ;cnsdtuiia"
i.- Dicha irroduccicín .s una ¡eruniición Ce un car:d.igma en 'rigencie.
ei cuai subsisl:, eatcnc¿s, ccrno orüenaCu-c d¿ 1l'Jiscl.ciinl ¡. irlvés '.'
gracias a est¡. relunc:cirjn n:isma. i

\.:i -: .^... ^i ,l : .'..-dq-.\-,¡:a a l1 ¡-i -,'¡..,.:óf.;_.:_C:1.",'F::,:d. i lt::¡:O


ruid.r> ei lsic'-.iráiisis: ixñrpücc rel';l,jió un rc.ra'.ji¿na in';enta(o cor
:-.:,,.i :\.r , -.,-.-.:.,^ l-¡-:^^i"...
gL ; ^F..,,.1 -..^ r...-,r- J-..:,-,-..':¿--^
! .J:L. l{l,rd L;:iiJlivl d¡.i.Ui:¡:f. L -rL -\rl. e..u;r.'
E-,., i -,,.,:,..r,-^.-q
', i.u..'-) -^.^ Í r- ,.a ¡\.,
I -., J.
D -; '-:5- -,'áir
)i -l-.¡ ltJ ,.f,:.ici: ¿:,-:: i::::.i;
---. - --

¡l
l
23 Freud. y ti¿souás !¿c¿n
F,¿u,l despto¿aáo :9

más oue en un segundo tiempo ( en i95-?), cuandc Lacen consoiide su Freud. en los casos de Freudy no en latecdarreuciianayaque precisamente
prirner trayecro con la nominación ce la cimensión dei imaginano como ia noción de representacién ama],s,ama y así vuelve iilo;itinto lo que
tal; dicho de orro modo, en tanro in-eductible a las dei simbólico y dei real. depende del simbóiico y lo que depende ciei imaginario. De este
modo,
sóio a par'.ir cie alií puece ser aborcaca la cuesrión de saber lo que rue, o la conferencia de 1953 que iniroduce s.i.R. se apiica principalmenre
a
aún, lo que hebrá sido e[ paradigma freudiano. Ér paradigma
iisdnguir imaginario y simbólico (he mostrado en otra parie que pa,o esia
T"jol
üeuciano que aoaÍece apris-coup manitlesn no tui o cuai elemenro o cistinción Lacan se apoyaba en ra r¡a-'rsriieración). y duranre toda u¡a
tiempo de su :iaboracrón doc¡rinal sino,habland,o ccn oropiedad, el csso, época (hasta ia int¡oducción ,jer boriomeonismo) la ineriuc¡ibijidaci
riel
rea.i no podrá excresarse más que por necio tie la distinción dei
clda uno de los casos relaredos por Freud. eue todos los primeros reai y ce
seminadcs de I acr:n (anteriores a los semina.i"ios púbiicos) hayin esmdo la reaiidad...
consagrecos a'.1n ücmentaio literai de ir.ls casos de Freud, recobra aquí Leer a Lacan consi:rie hoy :a siruar tc iección o tal iexto s¡.¡vos en f:-:nción
todo su a,lcance. Pcr "cr¡so" se entencierá asimismo ei¡amiitcncrio sobre Ce aquella puntu;ción iundamen¡¡.i cle su ray,ect¡:; esto es, ieeric
en sus
el cuai i-acen se interroga.ri duranie un año y pa¡a cuya lecrura consEi:irá propias coordenadas. ,\hí ¿srá ei veriaijero ciesen,¡anche ¡especio del
;u 3:afc. Lacan iesignaba ese modo de la ieciura diciendc que se rranba "Lacen he dicho", de ese argun:enro qüe se lmpon:: tac:o rnás
cu;cio riás
,:c "jle,¡¿r el caso ai pa¡aciiema". Este tórmula da con su equívoco el seorolonga el atoiladero crotjuciic en ia lec¡ura.
e::.actc ie¡or ie Freud .¡ de 1¡ rniculación de Lecan con Freurj.

¿[naovr.rá aqi-rí ei ps¡coaná]isis más de lo sue se cree. incluso más de Io


que se pueda lmaginai? ¿Es preciso ligar ese hecho il la singuiancac de Ocho
su :osición iespecto iei ciscurso rie la cienci:.l) Resuita claro, en ei.ec¡o,
que la operación q';e sustiiuye a la puesra en paradiema dei caso (el
,\rjemás. la localización que se acel:.nt¡. acui;e la a¡iiculacrón Lacan"/
iiali ecto tieucriano rnisn:o cue se separa así raiiceime:re ciei discurso
Freud despeja ia vía ear: hacer una lec:ure iis¡inia de Freurl. la c:ai ¡asa
rrécico) ¡or:i ¡ar:digne:xpiíciro que consrirul;e el anud.amienro de rres
cn :-;ner iuurr por ul]r. nr-i'/r rrucucciifl i: Freud. Ccrno lc .ie.:iu-ln
dimensiones nc-;e ceja ¡crehender ai en ¿l pJ.'ero ni en el seguncc.ie
ios iiaba;os de la T¡;,,1;c t.ci. L;ttcrul::, ! j, así con:o :l gu-j¿:ini¿ ie,
ios casos tjis¡ir:suiCcs ior Kuhn i.yi punio cuaro); pariicipa cie ios oos
Trensc:, se ir:'ta,je un as;eclo ciisiinto ie aq,:¿l crje je ccns¿gil ¿
sir r:ei:r;,: ;:r:i:cir : :iEulo Je :llos.
prcrnover lo que ho:., ei1oru. v que ,v-o iiamr¡á la anaig:na f:euir:-
iacaniane. Sc i:ace J.¿ cuen¡a que ei .¡o Ce Freui ¿;: ¿i r:e L:u:.n. ia
¡:riesctreción ir:uciir¡a el sigrir'icanre, ei'rV:.¿nsch.¿1 i¿scc... g:c. )io se
Siete
,r=",.,.a e Fieud. se iu. :simiie t/.n ,,,e2 ce rensclbir ios senllrcs ,ji:ies
- il;lcs. Esl: ir_r¡,:nen1 ,,.a:.i e ncuen¡ro dei ie_.c:é,iiio
Eil ei nriselo nornenrD .n :ue L¡can r.cr:nrebr: orcr3:r consis¡ei:cia ai c:si :;itci,i¿-r) ict i'ri ic tcaa. T¡lel:n :::en[f,.:i :er:¿i:::':.;.:;inn,¡
panciriia R. s. i greclas ri ¡uco 'tcrro meo, moil:ó ias señ:ies que iniiicrn
iiin:rt t:l in:ii:: ie-;:r i: c_-,lt:s¿ ccn :i :::e:cirs ir::iuc:;i.;: .::-.i:e
I acin l; Fr:,,¡..1: lrnpii.:e
su DroFi,) i',eccri'ic.io clcrenco que, en pnmerlusri tibía puesio ei acenio ¡r:i;:ni ias sam.rs j'ei ,tgal*ea ia ¡.¡ii].¿u:ti. Es
-l-l'i.,"1.^', i¡..;-
uLu¡. .¡ - Í -¡r¡
uu! .;,.-,.:.-^ ., :-o.,: i-- ..,.^ I : f
sobre cr :n:siiani.. lueso so.i:i'::i simbriilcc y iinaln'le;:te scbre:i ;eai. L*L-.¡i suru,gr¿ r ¡ ..; :u ^;
li u¿i __.i ñ.).i. ii-i
Pnr ll,:.::ar:iac de':n:i:rcipio c; Arquirxeties gue no estab¿¿n Freud ;a¡':¿i¿:r.: :j ;sicc¿:-iir,, ;, ;.-* ¡.1".a li -.r^-c. ei e.lt:in:¿ i.^c: su:s

- ¿:e:rr.
"'i i'o cl;mo une iui: iden¡i¡ic:ción esDecuiarcu-il b lmage:r ie
:n ;':l:.::::i:- i.;,j;e ,_;c:.r. lc..,i:l Signiilc:ntii:n:l ;:r:d.iSI:i: Ce

I
l0 Freud. v d.espués lacu Fre'td. dcspla¿ado 3l

;
Itiueve de Freud. Que ia consigna de un retorno a Freud haya seguiCo Ce
i inmediato, señala suficientemente que Lacan había adveruicio el peligro.
A partir de ese momento, sí. vuelve a Freud, pero para inscribir el nuevo
Hacer ceso del paradigma lacaniano implica hacer girar eI psicoanálisis paradigma en el psicoanáiisis.
hacia la ciencia allídonde la meiáfora del "retomc a..." la inclinaba hacia Ei discurso analítico resulta ser así uno de los nombres de aquello
un modo filosóflco patentado. Tomar ese modo como modelo habría mediante lo cual Lacan inrentaba desliza¡ LS.R.. en Freud. Es uno de los
conCucido a] psicoanálisis a propcnerse como una nueva religión: todas polos del discordio que necesariamente consti['r]irá su aniculacién ccn
las tllosofías elaboradas de este modo se revelan L¡ertemente teñidas de Freud a partir del momento en que fue producid¿ una invencién tan
religión. tundamental como S.I.R., siendo ei otro polo el desarroilo de las
El registro del "retorno a..." no pertenece, en efecto, a la misrna ven cel inrpi.icaciones del paradi_ema misrno. Eta oportuno ubicar en su lugar ese
aprés-coup. Ei primero no deja de iamentar, nostaigioso, un saber ya-a'hí, ternario, no en cualquier lado sino ñuy precisan:ente en Freud. ToCo
ranro más ya-ahí cuanto que es un saber perdido, oculto, desconociCo. desplazemiento impiica una sustitución.
inciusive sis¡enáticrmentr desconocido. Es¡o aüarece con evidencia en Porque la discursividad no es en Lac:.n ni primera ni última. parque no
el ,¡íncuio de lieidegger con el oigen griego de la filosofÍa. I{eidegger fue el último ciliado produciCo pare escribir su relacién coü Freud \esie
tbr;ó un discurso gríego; su vinculación a los "presccráticos" (las ú1timo ciiiaCo es nodoLigico), porque e1 reconocimienio efecti.¿o,jei :c:o
comillas scn suyas) encarna ei tipo mismo de una discursividad en el insteurador de un discurso subvierte ese discurso a1 nismo tienpd que no
senrido Ce ¡\zlichel Foucault,en ia que está comprendiCa hasta su denuncia se de.ja pensar en ei interior de la problernática de la discursiv iriad. pcrque
dei piaronismo, isomorfa a la ie los sucesores de Freud respectc de la escriura lacaniana de los c';atro discursos no subsul:ie en el prorio
Lecrn'. Ese saber ciesconocido y un día reCescubieno gracias a la Lacan el conjunlo de los Ciscursos y, sobre todo, ccrque ss;a :sc¡liuri. al
opereción del "reiomo 4 ..." nuncs es otra cosa que un saber disponible disiinguir ios lueares Ce la ¡roducción ciel lugar iei agenie. no lcs:l
sene;anie a ia ciase de reseryr cuai'ldo la ar¡raCa ieguiar ¿s insufic',ente. crlnscnbir ei cierre de ia experiencia analític: hasta ic.i-lio ei ageni3 se
El j,,rás-coap inventa un sabe¡ a parjr del cuel ei prin:er tra;'rs¡¡' - ¿iic:úe corno procluctc. el :nlte rne rie ios cuatro discursos no cuec¿ se:
iniccesibie ccmo tal- s¿ tncue:itra escdto por io C.ue habri siio. Nad¡ ¡cmado ccrno si f-'reia ei matei:ra rnisrno Cel psiccanáiisis. \-o -:ue¿¿.
mjs cie¡io, pe:o l;mbién na,la rflencs, i'a qi-le "nás" :quivale aquí a ertcnc3s. v'Jiar c,;oriio,-j ccmo su par:C.ignra
"i1e=:aSiiCC". ;i reiorilo a Fl:uC i':.o poira Ce ninzun¡ ilier.eif, ie etliai:e
-._ ii:u:utli'je l¿ t¡:vec:cdr de I acai- Se i,-¡ s:.i'¿uj:: ielc:r lr:grr'
ccnu-
ir se cuei'li: cci:.o pnine:c la iuesla rl de snudo .le ia función de ia irnagen Diez
d€: {)iio cin ¿1 estudio d,e la earanoia:luego -'r a parir de aiii- ei
,Jr)l-:.::.i:.:S()Cc LJ.craCcn el 3sicc.-]niii.is, unJ'Jn'l:i¡rnisoquc no¿Si'-.1'"1)
sule:o ¡ Fr':'-iJ r.ceCa uno cie sus pdmeros iex:cs io subralia) sinc'a le
cier:ct¡ :ticcar¿iíricx. De este nCCO. "retcrno a FreuC" se m;rnil-les::
a,,-,,, ., ir)i:iai: :ei lci-ly'o cuc L;':tn bu:c:l-::i ¿i :ex:tl ir:u'jiar'o
,jv¡c:¿!s :¿ in', eniri el ier::rlu .;imbcliicci i,nagiraici reei. i-a invención
ii:: es¡: pirlcigma {-iue ccmLr t3i no es freuCianu ielor:rba ¡ Licrl ie ics
3: Freu\ v después Ltcan Frcvd :i!:1ü;:!4e j-1

En un texio de 19.16, Lacan da testiri:onio eipiícitamente ie haberse airer/o a decir, a i9¡-l Dar3. que eiia se vueiva efeciiva coi: [e,:lelción ya
reÍc3i¡,do de ese peiigro'o. Adviene que Freud identifica ei 1ro con el no de una socieda¿ francesa ce psicoa:iáiisis, sino d.e una escueia
sisiema percepci<1n-conciencia y deciara sepaÉrse de esa co*cección ciel f¡eudiana iocaLizaia en Pans.
y'o, "1a concepción más común", "que icientiijc¿ el Yo coa le síncesis de De esie modo queCa oemostracio ¿n los hechos es¿ ccrelación ent¡e i:
i¿s iunciones de reiación dei oreanismo". FreuC, ag;ega Lacan. " en e.rclusión y el aienlado cue Ltcxn habíl montadc ian bien a penir ie
contrade todoe i ino"¡i¡¡iento Ce su investigación, seguiiásiendo pisionero 19.16.
cie pa.-aieiisia](...) cuando, pcr 1o demás- atentar lel
éi [ei prejuicio
subreyado es mío] conra él en esa época habría equivaiiilo tai ,¿ez a 1'o at'irmo que ese atentf,Go ccnsisie en ia intioducción de un n,-le.,,c

e,rciuirse de la ccmunicabilidad científica". Ahcra bien, este texto oue paradigma para ei psiccaniiiisis; dicho Ce otro mcdo, en un iespiazarnirnio
Cesigna ia vincliacicnecile aquel "eií':ntado";r' unaposibie e;<c1usión uue Ce Freud. irio se ,ie,ia rtiás a F:eud. nil se io prcicnur ni r:r^rp,:co se ic
seda :u ccnsecuencia es verdaderamenle prctético. Esto se pon,jrá de intei-pi:re: aquí se lo ies¡iazr.
maniilesto si se aceuta aplicarie a Llcan lo que é1 misrnc enuncia aquí a Fl cont'licto ie Lecan con la iPA:uvo coiitc apuesie ipero ir.:isiln.o no
propó:ito d¿ Freud: Cesplazamiento que es le¡:ítino puesio gue Lacrn. a esiá jugaCo, d,ecende hof ie ncsüircs) ia inticducción d¿ un nltey{)
i:riir de 1.936, lue el agenle de ese etentrdo lesnmos lrece eños rnás para,ligma en el psiccaná1isis.
tarie;. Pcr otro laCc, no seía La primera yez que Lacan -conocimienlo
")f is tres no scn ios sulios" decÍa I rcr.n :n Caracas, :n una ,je :us ulti mas
paranoico cbiige- iormuia sobre el objeto Freud algo que le concieme
esenci¿lmente aéi, aLacan. !o digo que ese tex¡o es prc¡ético, puesto {tue
inter';encicnes. Pi::cisam.0te. a.nies había Cecier:to:" ies .cí';tscL)nde :
usiedes ser iacenirnos. si qui¿:en. ¡¡ is que a mi ¡:s-.ecll, so_;:ieucir.l;r".
sicre :ios nás larde. tuvc iugar iquel e'renro en ei que, por io que ;;o sé,
Se cued¿ cornprcbrr. rnis iie ¡res lños iespués,:ue n::::.:u:: il.s
naiie ha reparaco tciavía, a saber. el hecho de que ia ¡brmulecion
prine:a Ceí p*radigrna LS.R.. el 8 cie juiio cie i953,se ¿,'rc,i.ujo ¿! nlsmo insliiuciL)nes que se c¡er-ian :u.,,i:ron ia au¿:cie ,:e :irc.".eci.i¿r .§:
Ctc¡ (o c'.Janic más al día siguienre) en que Lacer" recibió ie cartc d.¿! cc:siuin.1-¡l ''tcdcs i"c:1.¡.:i:i..s":: f;.cc.ues-.\llur ].iii.¿: ¿¿l ,i ::
ciciembre ,je i979, a p¿sar ae les :;i¡:rcias. mmi:l¿si¿ l¡. niisna
;¿cretario generd Ce {.a {Pt, cue tonübü acta oJ:icialm¿r.t¿ ij.e si¿
rbsreación: 1a universal a¡lri::aiiva. L¡cii lc ¡ecricó '¡asiinre. no :mrrici
ii:-:;iin.!t la S,¡c:"éti -:crís;¿nt.¿ ie 2s..'ci..ar.c!"se ('5.F.,e.) t tor'.¿:anio
,je Le !P,\. L: crÍa ie Eissler iue en"¡iica el 6 de julio; ;S.i-R. iue
:erii:ue se :eisisie en auroprcclenais.:
de ningún ne;iu: 1a¿.-.isi¿rcia. 5s
nr^:---,j,r
"ireuriiano'' por iCenli:iclci"tn ¡cn l-;cen, tal vez ,a¡t ñtaitieÍ'ti: esÉ
-i ? '
::sg,liier:;::c.rtJñ,J Sepie:::.:sí:.'-:irn;-rFreut.ii:ro,:.,:;.-;.-.,;':-'.
.r,,jr.ilo se ie';eiri, entonc:ls. ccmo ei mx:"or:tenio a ia vez púbiicc y su 3Íicuiación.
reúnco ce i¿ ariculación.le I rcrn con Freuc. Enire paréntesis, r¿', i nrmos "Lrca;l::o" cier,: ';in i:r.crr :o :cui, :: br;c:: Ce Llcri. -ir¡ i:::i.:,:r;i,. r
cue L¿clrr haiÍ ¡ransicrtrtrse oii? r.'z i:ás una "e.xciusión" suinCa por
precisa. El ¡ér::ii:o no renii¿: il;ersona d'- I ac:n slno ::. i.S.l.. ::,,¡
éi :n inv¿ncrón :eóricr: L: nci:'linlcicn'ieiCiscurso ui:i',ersil:r:c vinr: en
:::,-:':i:r.',.Ji j'jj i'.:i.l;:t I :: ¡s:e:: i: jer í:cr:icc:;c :: ju : j:l:j.5 ::
respuesi:r ¿ ia exclusi,in ciei sen:ri:eic.'ici rbi:;c que le ,:i::cl¿ I'r ¿-coi¿
puriii g=e par: :i ps icr-.indil-;is i r.
r.ormai¿ suciri.¿:¡r¿ tlls iici:¡s irnl-.ien :l asie caso io :iesi:g'':in).
q, 'a,¡ r ¡,r,!.\ rr ;r,.-,':a,Lr .,aa ra
L¡ l..g JI.¡:LV L- tiu\\
7.. -', r^,.,r
LL'U¿ ilriul:-Lers rc eLrLr-jssr
-.r
-, '--..r rr,r
-J
jr TD r ,, ¡- r 'i-r.i ¡ r:¡ -,-..:-.;.-\-i .,i:.,.'-:- l. 'if= I¡ .-¡'.a,' .q

:i ii)lar¡,cii:3ntcnces. *n iasiguieni.3:!'',lpt|iur:], '¡ en'v'ien¿. que I lcen


l:,n;::::;u c0nsi ft:],le un t,:icr:,o r F::uc::s';clame:¡l :nil)nais L''l¿
ilarr,rii "i:er.:iiina" i su rcsici,in -trln s-'ri ficnesiii: "esaer:]r', iti¿

l
SegunCa parte

Latencias
-,
,.i §F
\

:J
I

Capítulo uno

Del método freudiano


ante toCa cosa
freudiana
t .ll a <lne s t it gu tm nts rut wt*xfal ga
; Shakspeere. Hcmt¿t,l7l.l.

E*rw¡o esbbqndes¿tna.
)hquiavelo

Donde se muestrq. (¡u¿ habien¿l.o tomc¿la e! rele,¡o,Je Freud. Lacan !!cvó


¿! trit:ecto freu¿¿iti¡'Lo hasra e! iírnite aouel ¿n que regeiríc e! recorrido
Liu¿ d¿sd,¿ §leouiíi','elo a Descarres ccnstiru.yó un,Lisc;¿rsa subjei,;o dei
;né¡odo. Donde se mil€sira.:et,""bién Ete de ellí se sigue, en !ó rei,aiv'o e
ltt iit¡tción rlel psicotttrr;iisia. un notlo ie ccnsiCerar lu !c.ctra, segtin t!
.c:tai ha,; que hacerse lc;. sujerc ¿! secre¡aria.

Iiav. hubo (i:¿ habr: )l núi¡ioles pala'crrs parr,;ered;se I is() cu: hrbna
¡razltji: Freud cc ¡:i cirnera ,¡ue ia cu.sa i-reuditna cna:i'.i;lir r1lí su
¿siatus. Por otn ii.:¿. "ccsa freuCima" es une :niie ¿il* y to ia menos
iniicatia. Dichas iai::¡:s no ion ¿cuivalelles ni irr,clican i¿s n:isnas
consec'.::r.ci:s. C:u: ..ii:x :iinc su his¡crir.¿n l¡ ;"e -,. :rsriiciiis:!3 cuc
no tcdas están rec¿s¿¡ri]ñientc en buenos... iér¡inrts les -::s.on ioa
uti.j,5-

.\l--Iunrs :uvi¡r:r il .:L.r::: slc:ia. luerc cesapa:=:ie:c: ::i '-:;c. E; .¿;:n


.:ulir) .i ir nr) ie :',:.:-::: .-.e .r ia ",:sicr:ic,--::: ic l;:s prciun:r;l;cs". I-rs

I
38 Freu¿L. v desoués l¡can De! mérodo freuciiano 19
i
t
nietáforas se gasian o se revelan inconvenientes. Pero esas palabras ¿son que admisibie y que es heuísticamente importante distinguir v nombrar
todas metáforas? Otras parecen de¡'iniiivamente implantadas. Así el corno ial a.l ciiscurso tiel método ¡eudicno.
nornbre de Psicoanálisis contra el que Lacan no atentará. mientms que,
en cambio, no consideraró ia "realidad psíquice" freudiana como una
referencia obiigadar. Discurso dei método en Freud
Pero lo que denota cada una de aquellas palabras tan unánimemente
aprobacias, ¿perdura en el ser tanto coroo parece? El senrido, al iguai que
El discurso de Sigmund Freud fue el de un método prornovido por é1. Así
la denoración de esos términos, ¿no experimentan ambos un cambio
fbrmulado. ha-v* algo que merece considerarse como un econtecimientc.
previo a los contr:goipes (posiblemenre indirectos) de las modificaciones
Es preciso todavía significario el'ecivamenie en la lórmula..
o innovaciones teóricas posteriores asu oromoción? La"realidad psíquica"
¿tiene el mismo sentido para quie n usa hoy la metapsicología y para quien Freud presenta explícitamente su tra¡rectoria como la Ce un nuevo
la recusa en aombre cie la hermenéudca: )¿Quid, enronces, del PSI de mércdo. Así dicho, y puesto que las palabras "tra'¡ectoria" y "mércCo"
"psicoanáiisis" sobre el que ni el uno ni el otro tienen la ilusión de nos remiten al término "cemino" (Odos!), en prircipio podría verse rn
encontrarse ? esto un pieonasmo, si no estuvierr. comprobaCo que todo recorrido por un
camino no se produce necssariamente cie manerf, metódica. !ia:/ un¿
Otros términos son admitiCos aouíy recusados o simplemenre inutiliz¡dos
historia de i método.
aliá. Tal es. actualmenie, el caso del concepto de "campo freudiano",
reíerencia esencial entre los lacanianos, pero que oara oiros no corta ni Cieíiai'nente, este nuevo métod.o se ca¡rcteriza en ;1 texlo iieudiano ccmo
^:-^L^1.
PttrLil4 "métoCc de interprención" y tiere ccrno referencia y realización ma) cres
lc.TraumCeu:riung. Sin embargo, Freuci usa f,i I'nenos otr:s ianr¡.s veces el
Finalmenre, otros vienen a primer plano, lue,qo se alejan dei tcd.o sin ser
término "método psicoanaiíticcj". Éste se define en panicular pcrocosición
nunca e,rplícinmente e.',cluicios, mds ¡arde regresan otrt vez. Uno ce
a ütrcs mérodos designados pcr él ccno rales : inciu'¡e Ce scie el "mé:otir:
e ilc.s, el de "mércCo" nos relenorá en primer lugar.
anitomo-clínico" al "mé:odo Ce Breuer", pasanCo eor ei ''mé:cco
|i¡ 1o celifiquemcs preÍraturaroenie ll¡mándolo "ireuciiano" o hlcnorlco'', el "método de Bernheirn'' '; ¿1 "raé:ccio cal;nico". Pen¡utxse3L-s
''psicoanaiÍrico". O rnás.ien. puesto cue es necesaíio inde:<arlo bien ce
enirad¿, aunque más no se3 pais nabiar Ce éi, nos inclinaremos a il¡mario -t-- ?\:iipce Des¡".r, ,V'¿i.rs¿;:cc .te !L;. r.!tl'.ui¿. ?¡t'.s, '-:b nr:: : \. -C Yize:. 1981. ¡. :i. ii
.

"iieudiano". sin igcorar:n modo aigunc ics nre.juicics que una:elifirición autor jübrxl;a que;i pdner ':sc ccnc:cluai :e ,z¿titodos jue :nccn[i3,r'::os ¿n ?l¡tóa ro
lo rgrn¡u::¡n los presccriiccs; está s.-.ciíci,l::-ce:rl: :::¿ndo : un nr.tiu l¿ .ri:i3r. e:i;..brn
,Je ¿s¡e tico cueie ¡r;nstrar o io que puede nabe r dg leyenda e n :lla. Nada -.ear:¡i i1e iusteS(o ,xÍ: .o .;ug .e'.I:ll:
j.-1i :iruió;ategoncemenie ¡n¡. Je sus obr:s "Ei nétotlc. :slccr¡¿liticc.jc F:suc". Djc
puede ser a,leiantado por g,.iien i:scie ei principio se absiuvi¿:a
¡'reti:scite osvclzoua!,¿:cn¿.\,lt:ioi¿. i'cc. i9¡)..1 :n i-.:e'rtli¡lrl. li¿ P:.c,:r-.',:::r
enérgicament¿..1e ieci; una ¿s:uoiccl, ccsa por otro lrdo incosibie de Zivr:::,¡:ersc.\e::tung:n. O.r.v , j. l- iiJ. Sric:eq trcll::ó :;liucir cl.\l¿!;ted¿:i¿ni. .:ue
re11i¿r.r va üue ¿l ,iecir silencioso, cu¡ ;r:tiia paf?cer ccmr: una solución, :iese sin *rn'Dx3c su tccesci:¡ui:ll: :on el lagiÉs netÍ¡,:,1.:at:¡,'L:cr.zr¿r¡u, ¿!=:-s I
io ,:::1. ¡ ra:'.lr de i¿ ¡n¡ne:: l¡¡e. :u .c ;on.lcr:lri: ;-cr :ui ¡l 'ncrlscio ¿rdr.:c:',:sai
lxinpocc esr¡nr ,¡erm¡iz¡do rje no serio.
S::c:cyi!,cuc¡::rsldd¡r,üio:.itx::::l.lc:gc:::c::-üi:j\itrtf,sJii!'ie:iJ lc::.jJmo
:l :i it'¡io. Sü:c::ev :¡:i¡ocuc.: ;t tr'¡t:i;¡t¿':..: '. :'jj\:::)n iJ3 :ü :¡Jri :l::':i:: 'e::;.:;.
E:;udiernt¡s gr: ¡dn'letiugarel crin¿r
,iiscu.rso tj¿i'nétotlo en Fr¿uC. Ese
;e:o .lu¿ irnccne la i¡:cuc::órl :ilí.:onüe nis itnelen-:eri; F:tuü nos hlbi::: ':cs
D:rso ncs prrmitirá x ccniinuaciein con;:in¿r que el discurso iieuiilito -j.^,'^.^ii-..ñ,¡.:,.¡.J,'ll-;,r..^;.-ñ,'

v:ic :a ¿ie c:o ccrno un iiscuiso del :',é:odo: cue §oi lo i:nto result: nis :nrgr.:r i: ¡.,:d,nOmi¡,""a rO*r"*,arrO,..1e :;c-ccSO I ¡ciO.-¡ jti.j:,f ñgt3cüio.¿:cC.
rinlc*rJ;leose )¡'ic::t¡nente jl lr:i'ii:r ,,:c:so.; JÍ::44.1,\s :nJs:lc:iiiccl) ¿n -'i.ut::¡
::irsi:lo i:i rl'¡e i:,:::l :ü se';unÚo :c:' I::¡ ril,Jric,:. :i::r1:r¿ rt!(. "!. !'.\¡n!! i¿ r:c:ttt.
i..i. :-i.:r. .?.-i.,'.. ,:é-::ro. ies:ús :;i :i :e :l:e:':.je l9-i.
:c=ic=¡ ?:r.:;.3?Ei-. i990.¿:oiruio i-i -¿l:s¡¡ii-:i..¡,tti:ue::::. ;id.:?!!.-:t;;atir{!.l:ng;. l:g:ic.
1..C,.i. .os 'ribtrios ije 3.uy Scl.,-i::. .in J:::.':.:tai. ;:tqt;t zl :ruri¡:t. P:r,:;. ?r-F. iqS¡. \iü:::¡. :: .rnirerLe :;':rc:'j:- j:': :J: j j .-: .: j - .:::':.1--:j:. - ::x j:-"., ): ..1':.1:r.:L'
-i -.lii. l¡:l ;i.sra», c:;r¡ulo j.
:O y deslué: Lctn
-.1¡eL<1.
__ Del nétodo lrewiiató -¡l

no entrar aquí en un estudio cii'erenciai (no


LrD,irante loüer ¿ntiever que Breuer aceció así ¡cner er: práci;c: en reiacidn a Benha pappenheim
sena muv instr-,:ctivo), a ios i'ines iJe riri:iui¡os ia
a cinio obser;aciones. lección ce mélodc cue recibió de ¿iia -rnércdo que debe sei en¡enriiio
aquí en el sen¡id,¡ en que se ha podido oDoner. a propósiro ciei aorendizlje
de ia lecrura, iai "-ré^ic,-1o globai" a ial orro rnís pióxir:o al d-eletreo.
La histérica. dadore de una lec::ión de méto<io A
paiiir ie Ése *ümL'nto icaugural, slgno eteciiva*enie suevo de que aigo
se prcducía, Breuer ¡raascribió los ielatos, la reiación cie caia
ulo de silcs
Breuel i¡'¡ente ccn ei síntoilla que 1¿ correspr:nCía, ¡ransniúó algunos ,ie eilos a
el csicoarálisis -tal como io- ;:one ,le reiieve Freui- FreuC,
acepranco rat6.r rot síntomas ae genha pacpen!rcim pero tambrén a oircs. como lo alesiigua su inicn¡e sobre ei crsc,
ce k¿ man.era ¿n pub'licado en esics ,iías. -vvineis, en su mul., Iemprana presenteción
que Benha Pacpenheim l.e sugeria. Hac.ie¡,lo ce
¿sio cieó un méicdo.
Fre'¡c ¡raducica ¡l lirrcés en I92i. r. r"ru"r,rr. nás bien ¿scéprico en
lo
que rescecia a esl:. ailbucion rcr p,u:: Je Freud
a Breue: cei i::éi:c ce
h:ber in're ni¡cc eI mélodo osicoailaliilcc. 1vi¡te,is emriea una me::¡'o*
t Lra a x; r: saf .a :.::::sie. n ,: u: le c:lus rn las :e Ircic::es \/ a:c r:is ie
s a:ü:i...i]s
Ce Freud v Breuel er.l esit in,,'ención:

Breuer ra vislc acrar:ise ci inccnsci¿rle comc Bn:ecke l,ic i:.


ie:rna.P::c F¡eud nos ha prccorcicna,lo ra lente con i: :r.¡f.¡ ii.e ra r,"l:i
ias rmageres r::l psiccanáiisis :e toma¡.1 .¿isibies,r

sin embareo esic ro es en rbsol'¡,o asíce sincie. segúr rueie .,..r:e.cn


-ii,O :e:¿r:r:n quc ;(li :Jicce::ii:¡trs ]r) isii: :rir)s,ie :c-:.:¡i1., ;i ¡uci.c
mcnDS, en lo reiiiivr¡ r Ir Ienl: :.isll¿: if,iircCCo en io q,.:= ia cc¿.s;i:u,..¿
¡i en sus ernDiecs. )ic cbsianre. si rc se hl je:-cido r.bsoiri:ne::¿ iL)cc.
s¡ d:ce L Jui jsJ:i',--:1,::ón :ue :: -e Ll ir¡!'uuu ¡,r1 ::ricr .: ri-c'-LLU
:=tcd,¡ vi¡ *>..-,:,-, -:
lllii()
';uc =i
si:bi: ia Jcc:¡::¡.

.i. . : ',! ;;11. .: -: -: . :. -¡:¿. l: :,.,, :-;:: ! i..


I
i

i
-12 l
Freud. v despui: Itcun
Dei método freuliano {3
lvlétodo y téccica necesitaban ndto más ser precisamenre distinguidos
1

lAhora bien, sólo el método puede definir la práctica como ..una,'. En


cuanto que históricamenre esra distinción mjsma fue constirutivi
¿e la ¡et'ecto, una práctica "no necesita esta¡ esclarecida para operar,'... por el
noción moderna de mérodo : en Grecia, ei mérodo fue concebido
siempre hecho de que es meródice. De este modo, Lacan puede discutir a menudo
como un ane. rcchné, y esta identificación -salvo er el sector
médico con en sus seminarios tal y luego tal otro caso publicado por un psiccanalista,
Galeno- nó será desanudada hasn er Renacimienro, o sea, en er
momenro 'mientras que no se encontrará en él a 1o iargo de más de cua¡enu años Ia
inaugural en oue el mérodo se vuelve científico.
mi'nima discusión, aunoue seapoco desarrollada. de caso algunopublicado
¿Pcr qué, a pesar de Freud para quien és¡e no era el caso, se privilegian por un psiquiatra.
en el análisis los problemas ilamados récnicose u .*p.nro, de
los se adviene aouíque debe haberunacienarelaci ónen*e méndo tieudieno
problemas me¡ccolóeicos (parano abundaren citas, mencionaremos
el Diccicnarío de psicoanálisis no incluye ningún ítern ..método",
que y camlo freudiano (una reiación mérodo/campo rJe ese tipo, como se
puece esperar y como debe ser si nuesrra probiemárica no se haila deltotjo
mientras que se puede enconrrar ailí el ítem "técnica activa',) ?
El hecho extraviada. se encuentra también en orro lado, especialrnente en
de tener que piantear esta pregunra resurta todavía más extraño si
se lvlaouiavelo a oropósito de la prácrice poiítica).
advierce que cubir ]as cuesdones metodológicas con consideraciones
técnicas tiene por efecio volver insorubles cienos problemas planread.os,
mientras que, recíprocamente, distinguir mérodo v técnice oirece la
ilfétodo y Iocura
venraja bastanre apreciable de hacer factibie la innovación técnica
con
sólo rnantener ia tráciica anciada en er mis¡no método. Esto nos conrluce
a una tercera obser'¿ación. Freud -este rspecro es crucial- no limira el uso eue h¿ce Ce la palabra
mé:odo a la manera según ia cuai, a su parecer, el ¡nédico debe proceier,
EI señala y escnbe que ia dei'ensa es un mérodo. rl igual oue la búsqueda
l{étodo. práctica y carnpu y ia obtención d.e satis¡'rcción o, incluso, que el chisie. A panir i":. raies
inclicaciones, se descubre que hay un posibie rnélodo fieucjiano. porgue
ha'¡ méicd.o en [a lccur:. Shakespeel: lo sosienía ,¡ a Freuci le .:usi:.ca
L.:c:r ;:eruiie:Ie .lo :ei'¡iniicó ;etr. si n"l:s=r; :ri par: icuellcs cu: ^:.^ -¡.r I l.
suscnbieron su:nseñi;lz¡.ei n:cncpoiio cel e.ielcicio cel csiccanálisis.
-ri
Though ihis ':e nainess. vet rhere is rn¿lnc,l in't ,:.
¡

ccnrrr.fio. püimax.:nieÍ]e nle reccnoció cue 3n orics lug:res. incluso a.iií


conce iii: ie su ¿nseianz: -;e iabía;ro1'ecrado. inciusi-. eilí conie crios 5in ern'oar,3o. vererilos que ¿sia tiispandad ¿niie ¿l r-nélod,r: ¡rcoio a1
hen hetho ¿scuela (;;a ser la ;erpeciiva irdaoticcra d.e la E,¡r:-os.¡cJo[- olrje:ü v rquei elegiic cail su :bordaie, rc.r e I hecho rie que urü no se
,:gv o .',feianie Kiein) s¿ :i:lauha rerlrnenie ,le ¡siccaná.iisis. Fn Tei¿,¡isión so:'i'l::r r ni¡gui'¡ re los Jcs. no se ii¡:lii:::e:=ilir ¡;:Cir.:i 5r.,ruico
eiiconriririos ia ¡órnuii iel 'ze: rds sinié:ica ie su ;crsición. cu;nic scbr: el pdrnero. siicr,tuc t:mbién:s,n:ns¡a,icri,je una iensiin mi-i.¡
iecia¡:,:u¿: ci¡nicular.
una priclicr r.o :¡cssirl ¿sler esciaiecica c¿rt ooer:i i...]',)

I i.-.{sf. :.:rooós¡lo i¿ itr ve:d.id i:isiórica e:l :i :giiio:'. l_¿ iccrr¡ lo soi!,ngnrc ¡rrcecg
ccn nélcdo.;;r::c ,,¿ lo :::¡ntx:ó ¿l poetl :;;;o lr j rüni:i./a ::mbié: un jq:g üe./eraj.d,
htsidnc::". S. F::un. 'C.:cs¡¡¡cion Cans i':¡¿i".ie '. j: .l¿r.air(;ÍJ. :dits. pronltnc: .1. ,.\.
F:r.s. PU F, l9ii-j. ;.ll9. : 3r escañol, 'Crnsi-:c: iones :r :i :¡jjisis''. :n rJ. C 7ol. .\l(. il-

I
Frew!., y desou{s íacqn nitxio frLuCicno
_ De!
§

Faradoja del método en Freud ¡anto cio resrimonio de una expenencia inau_sural. poi lo tanro crucial
v
larsarnenre considerad.a ccmo paradi,imáiica. pero también está eso que
puede serrecogido de lapuesiaen prd.crica(únicrcacaivez) cje
su mérodo,
r;n índice de esia ¡ensión nos lo esc que !larnamos la prácrica analÍrica. Escrs ios hogueras no rienen el
bnüda ¿l hecho de que Freud no purio
conducir a buen puerio el proyecro oue albergaba en 190g, el de escribir mismc es¡atus: ios ítodos Ce producción, de pues¡a a prueba y de
'tn Ai!gcmeine .lle:,1;odik der Psychoanal,tse,dejiíndonos acepraeión o de rechazo de los enunciados no soñ los mismos; el
en iugar de ésre
unos poccs papeies sobre la Écnica. argumenro de rutoridad aparentemente no inler.,,ie::e, ni ¡arnpoco ei
¿por qué Freui no $vo éxi¡o en
esenrxr. negro sobre blanco. su discurso del mélodo,dándole así su rnodo ce consii¡ución del saber en ianro cxpaz de hacer iugar común. Esra
no n:ibre'l ,J i s pari Cad verd¡.Cerarne
nie d ¿ s c u a n i:ant e, fue quend.a por Fre ucir j.
sin ernbargo. éi inirodujo ese rnéroio y hubo quienes lo retoma"ron,,y 1os De esre modo. ceca uno cie los prac¡icenres cer psicoanálisis se encuenira
h¿'¡ aclualmente, ;adx u.no a su manerx. Ahore bien, es:a situación pone puüsio poi Freud en posición de ienei qrJe cjecidir permanentemeate en io
a clda uno de ellos en una ciena di¡lcuhad especificr. pa.ra ccn que se ¡eiie:e a saber si io que i"Ecibe como verdac procecenre,c,e une u
ai texto de
.qreuc (cara cca cl saber de i cuel el ¡e,xlo es ponadcr). e:l uaa cuerda f'loja otra hog'-lera i'esulte cor¡carible () no con el saber estabiecido, y esro no
dc la cucl pend.en so¡pr"rdicos ei cons¡¡rar hasra c.ué punro Freud soiamenre ce una milnera inrerioi- a cad,a una de ellas, sino también en le
radici:iizó Cicha diíicukad. ccnirontación de sus enunciacos respecti',,os. Ei pr'.ncipio fre:.:di¿no
En ef'ectc., Freud recornienda aborcar cada nuer.o caso como si fuera el raiicei es ei de manrenerias dili¡enciacas. Dicho de orro morlo. Freud
Dnl],:ero; dicho de otro rnodo, recomienda dejar ,Je lado ioco el saber inscrii:e en su mé¡odo un asl:ecio que, al aplicr.rse. es cl¡az de recusai:.
rticulricc e:: ir;s cescs erecedeci:me;rre irat¡,cos, a ¡-in ce iue ese ruevo ceia insranre los i'esuiraios. Iii'"'en ei rnétoco¡ieuiiano asíescecii'ic¿riu,
psiccaráiisis que se ennbia se: ei'eciivrir:ente uno. un cunto cisi suicida.

Pero esconiiuo en ese ounro c3.ir,siióiico. ha;r iccavÍe un :lus de diiiculiad.


Lac:n reicr;:-lula esie e.xigencia ¿n sus iropios terninos:
un .aius vincuiado al hecho .le 'jue los misncs eler:ren¡os consiiiuri.".os
Es cue t:¡nbren el oslccan.iiisis es unx pric::ce suborCin¡C¡ ocr Jei mé:oc.r son un saber. en ;ridL) cu.so. un saber hr.cer. En otras paiabras,
', cclción ¡ lo nás panicular riel suielo. v cuando Freud oone en e:lo el ¿1¡unos cc lcs ¿ierne:lrcs q:e:"-:ln:n el i-'-rélo,J,c:bni:an pa:c eiios
lc:n:o :.ls¡c,:i punro,ie ieclr c.u¿ ii ciencia ana.iíric: debe,¡olver a :nismcs ie ese saber ¡eiquiiir) ij:.re. cor orio laco. l¡ apiiclción iei
ociJrse :r lei¡ Ce juicto :n ei rnáiisis Ce cada :aso i,v'. .'El hcmbre de ¡-¡ l-)-- --^l-^-^-lo
.i.v-\/u\, ',1,. u!LL te-¡ld¿jl
ics ioocs', prssim: ¡cda li:iscusión Jel ceso se jesarliie soDre JS:e -

,:nncicio i, ;:i.:e.srrr, ¡uilci¿Í.liir.-:.:'lie rl ¡lali¿rrio i¿.¡í:,.ie su ibnneción:i. Sel :or ejcnrio ia rel::a 1i:r,:u: Je l¿ rsocir::ón iibre. l.iaCie niee:,-1,.:e
.\hure pari üuien :cng:::, :ric:;;a ¿l nl,jlcric ¡ieuiiiano. ese se: né:cco li nü técnice. .'C¡n,t atiicerle !a e:ig¿ncia. ramiié;.1
'\ie::. me,.ci,:iticici.,:: rburca:;:tct.:iuci.o ü3So :cmo si iiela ei pni::c:ol
lsi:üJ:c:c:,,..jc1,;-¡:cr::;'slt. ci)n-io;cj ''hcu,-:elxs,.",:i:'.::en:es. C¡s
,Que se ccnsiderarj aom.) !r,-:;7lcl-;:sr;'l ;Curnsiis::iexics conio ¡r:n¿r
iu,:"it:s dcsCe ion.je :ucCei ,:d,;in.rise iiuevos ¿nu:ciiccs ,,, icrn:ui¡rse .^. , ..-,.rr .,-
-j.r;..,\'.: ._,,..; i ¿, Jü.... _-_._..--
^.-,.:_-__ iir_-ir,_^ .,-:¡- r;
en ;u .:e:'*;.:;:¿
-.i ,os ¡f.:bi¡:.ls .;ue ei ¿n¿:i;is ri¡i:- r =..-i -; .---.
vi: HL! l¡¡ .1.uu...\. .* _-.-.._.U

F,..,: ; ..:;,'rJ'"j;.;""i.";;;':,;'J:,!l-:j:; ;;
:;j;:j: ;: tlr.irc:allso is:quciei q'Jc:iij,r ¡lsi::cl. l¿ ir;u:;i; r,;r rrédicc cLle:,;i.c
ia:,:i¡c:: lnlnr,:inibie j.: :lrl ü0,;i.e:sc I is¿: Jr_-: :ii;r::riil.as no son. !ur
.16 Freu¿1. y después Lscan
Dei méto¡lo i¡exiicno d,'

cieno, equivalentes. ¡No ie da igual ar médico (ni .orn,Dco al tratamienro cual se constituyó, desde Platón y iv'laquiavelo n.¡sra Desca¡res, un
mismo) dejarse imponer la asociación libre o propoo"iio.o*o.egiar d.iscurso y una puesta en práctica del mécocio. y. ds este modo, se pone
No
es, pues, equivaiente considerarcomo Drimer caso de referencia
que la regia se formulara por primera r", -"n otras paiabras
aquei en de manifiesto también que el discurso del méto,io ireudiano *"r... ,.,
ei segundo- reconocido como tal.
o elprimero ce hecho, en que ya raregrase indicaba, pero
no era reámada
a cuenta su,va por el médico.

De igual manera sucede con la inte¡pretación. ilIétodo y az-arr


¿consideraremos que ra
Traumd,eutung nos revela, digamos, los giros de iainterpretación (incluso
a desptcho de las muy particurares condiciones de la escrirura
de esa El gran gesro por el cual Freud constituye y a la vez signa el caiác:er
obra) o bien la recibimos como una iección de método que nos indica
que metodológico de su discurso fue, como. debe ser, un gesto de exclusiónr7;
cada análisis ef'ectivo no puede más que inventar su métcd,o de
interpreración de los sueños? olvidar esta otra y verdacera lección puede Freud -¿lo sabda él?- reitera pues aquella misma exclusión que en el
conducir al pracricante a desesperar por no lregar e interpretar ros Renacimiento iue constiruuva de la emergencia de un rjiscurso e:,plícito
sueños sobre y del rrétodo. ¿Qué se rara de excluir? |iada ni:¡ros cue el azar.
provenientes de nl cura de la misma forma en que Freud inrerpretó
los
suyos (el paciente no asocia, a pesar de las insistentes invinciones de su En Freud, la cosa es bastante conocida para que ser de alguna ut:iidad
psicoanalisrx. que terminan, por io demás, irritando seriamente ai rnultipiicar las citas. sin embargo, ei carícter absoiuro de esre recllazo
analizante). una desesperación sin salida, mientras que, en vez ce tieudiano del azar so¡prende tanto más cuanto gue Freuci no es ian
lanzar
larnentaciones nacidas de failar constanlemente frente a un standard,
se
categórico sobre este punio .n su Drácticei8. En Cla¡k universiry, en
pociría ratar ce inventar ccn ese analizante lcs procedimientos 1909, no se contentará con tl,ecir "[que] no exista naria pequeño, naCa
de
recepción de sus sueños tal ccr¡o Freud. invenró la gramática que
le
arbi¡ra¡io ni fortuito en las expresiones psíquicas", sino que cie¿rá
pen-nitiera leer los su,vos propios. LaTraumceuntng seri.rton..,
una opoñuno agreguun poco más ia¡ie que se riira Ce ,'un dere rn:inismo qu,:
avuca a:cisiva. Dero a condición e,-\,Dresa ce haber sabico no con,¡eniria no tolera ninguna excepciónre".
rñ rt-
vr¡ .'a.^,:^-rl
urr Jr{¡luúú.
Es¡r. exclusión habrijurgado su papeI constiruri.¡o ¿r ¿i né:ccc ii::,:diri,-.
Nr: ;ería nnulr diiícri muiriplicer ios e;emplos ie "paraiojas". A pesar ccmo io jueó'¡0. en ei nétocio ex cusnro i:.1. E¡ e¡r:crr:. ¿i né:oco no ccdr'.i
de
los prcbiems i-ne¡ctioir,isiccs o. mis bien. a causa ie elios. cr.be adc.uirlr su pienr. iunción en 1a inrerrogación riii;s,i¡lc: { :s Lj:clr. é::;;.
preg,ii:t3r3e: iazón Freuc :n iei,,,inC,ica¡ el habe r crelio un nuevo crác:icr v r:n:;iJii tencéuticr; in :aÍ,i:c üuc ie lrs :c,;iones c¿
-:r.xse:u¿
"Tr:,,.o
¡ré:otio? L; ¡¿srues¡a los dicses v 'ie ios hombres. como asimisn:o lcs ¿,/ellr,is cosmir:os
se:i sí. pero un sí que ,rl más ailá i::ciuso ,ie toio
acuello que se iue''ra imasiner: prcpcisitc su-1.o. lios cesliza;ros iie es¡e úer:nan.:e:1 en gÍan medltjacecenrjienc¿s dei rzar, .\.dsióreies no:cuelcl
inr-rio,ie un,:iscuisi,. iei mélcdc ¿: F:eu¡i hacir un iiscurso iel n:érc.co exscl:.irenie ic's inisnios sen¡iics cue Denócdro ¿.c.s aanc.tti)s :e;o¡¿
i'¡e r , r-'l i
".,. l¡ c¿ a:¿¡on-(i:)r.. gero en lcs ics censacores ri ::ir í.ic es iriai.rci
recr,.ncciCo ccr,o ie:¡r:'i'linai::: :n al:c giad.o ijc :cs lsul..;J.; .1J;:,r-i,lt,.:j i_)

iiei esiilliu. ei ccrsr¡.os i-, ia l:¡urlie¿r. Los i_.lii:rcs i::::riittrcn;r.,¡


Di:cu rso dei rnÉlcdo l'ieuiieno J,'j--rj-I,'^. r :a -.,.', .,, a--...-^
¡ :u
1.-.-^ J:--...-
í.-,r¡;¡:.¡c. Cicsa --.
aui :i-l'..r_) ,ii :{'a:¿.i i¡ üüc. ,,.iil
cciir..r-if t,ti3i in [,.]rao su,;i) ":n,:'".ii:o nu.,'pcpuirl. Li.:jl)a:r.in:l.is ceribi:i.,::.

i.n iiaciO. ¡ii'f :-luesiro r:CmbiO, i:Sr:ii: ,jte esc disc'.:¡so c:i rnér,odc
i¡3,rf i.^,¡ iá,r,\-i:r,Á.,a-j-rr ,.,..11^ , r. .-i,..
:vstj\..? :¡uu / lrliLtrLvt.¡-ll:a l.::CirJ. :l i¡i¡el:io : lt-¡ lr.r,lc iei
I

+3 Freud. v Lesoués taccn


Del nétrxlo ¡reuCuao +g

§iiN una pregunta que llegó a ser clásicx en Ia misma R.orna fue la d,¿ saber si
el éxito de Roma dependía de laFortuna o de lavintio.sin embargo, este
cuesdonanienro no impidió que la Forrusa gozara de otros c!ías fefi:es;
especialmente gracias a Ia sutileza cristiana que logró recuperarla para
beneficio propio, ai imponer ia iciea de gue aquello eue visto por el
hombre aparecía corno librado al aear de ia buena o ma.la Fonuna
correspondÍaexacm.rnente alaFrcvide¡cia divina, reeulaca alaperfeccion
aún cuando la criarura nada pueda saber cie ei.la. Fue necesa.o, pues. cue
se pusiera en cuestión a la Picvidencia para que la Foñuna. que se
mantenía bajo cubiena de aque[]a, fuera ¡ambién rech¿zada v que se
abriera paso a una prequnra de base sobre la oriennción d.e la acciún
humr.na. se podrá advenir, enfonces. cuánto conviene apelar ai nércdo.

.{.nces de lbanConer ei F,unro en :i que hen:os visio la puesit ¿n orác::ce


rjel método reciamar 1a exclusión iel azar, subrayemos que Lac:n no iu.,.o
al respecro la misma pcsición oue Freud curndo Freud ieod¿.. La su;":
no es simpiernente mÉnos dura o mer:os radicai; no ,-,{clu,¡¿ ri azer -¿se
aznr cuya exisiencia, poi ctts parte, aún no se h¡ ,jemos:;t.i,J
mlte :i:ldticerne nre:'. Que hava a;u en ial ¿ncueniro emcicso ;lo ie p.;;ece
a Lecan inadmisible. Lieguá incluso a proponer una ibrrnr.iiz:cién rar:
dar cuerra;e que una ley de un orCen Civerso ai estadístico puec: nac:r
cie jugadas sin:bólicas estriciarnenre iibr:rias al aeri:.

¿Qué pasó Ce Freud a Lecen pai:. que :l osicoanáiisis hi,.,: .:cCidc asi
¿cce.ier r. una pcsiclón ijirer::lie i3specio ciei ezar..

-\sí'comc hebí:mcs iroraCc r. procósiro iei mélod,o er Freud. cie.cs


sigios ,j¿ un¿ dii'icui¡ii en su iuesia L pit,to, tambien ¿iconr;:ncs ¡n ji
un. insicio scnejanre a prccósiro cei az:r. Sce o¡ e;encio ia ¡r:"¡ebe
ciisica proDuesia por el psiccanrils¡¡ el escáprico:
Díg:ine il¡l:¡ cifra:i:¡:i. no irnpone cuil y;e .:j....,)ji:l::.
t ol:ec:érCol* gui me ciigt icio io que se le c¡cur:x a:rclrsiic:.j¡ :iil,
.\ic3orír: ¿!¿ la FortLt¡te aa Scb*:uri¿t
je
que se ::xta verCa,i;iiment¿ una ibrmación Ce suine ;ns;i;liit j -t.i
lCrebt ca ¿n mdCer.. Sigi'o ){'t'i) lo ianlo. cue e...isle :l m¿ncicnedc inconsciente .

csDrichosa..;oiubie. Es ciaro q.ue cuando se iinxsint ia Drccil vica lJ..Plutxco. ¿n:;\ D¿ ií)ciint: .Turtturtm:onciuYe ¿n iavcr l¿ l¿ i,:r:,in¡-
li..C-,rr l,;a¡3k¿i;,d..itht:;¿r,J.3:¡:s.Scuri. i99l.Eiiebare.,:i¡:iiliofi'J;,¡c:c::.;Jn
;e :cidie:i,io :e E.l:. lr iCer ie Cl:--::ri: dc unl :ci"::: =¿:;ci:::lc li::: ,.le -:.i'3c,..:rr. si se :ncuentr:- ¡c ¿¡;:le
.lkeia¡o lo slbri;,,r: EI rssuit:,":c,j j iíx:,i :i!rli:ro
nin'¡ún senti,io. Cuanco e I .1e:e d¿ ia a¡i:'iada Jiiiiulii lcs aus;lci¡s ier: :c : :ioeri:::¿ .¿ t:cja i JÍi :l;[:e:-,:::ncii:::l:i::o ::r l:.:r=: :¡ i:a.¿ ]
i-- i.' -.:'''j': --^'l;:l :crn.¡ :n ir i:¡ro. :l :¿:to ;:¡s,¡o,ic :¡¡ztia- :i :unio,ie ino.:c:c ¡cci: Libi..;.: - i: j.l.
-. \ :,-.-.-¡,. r,-.j,',.-^!1:r-^
-.--.lJt. L'L :"'-¿'*"J'
:': -l- L_'!_LUll
-' ¡i' _)L*
-- ..1, :;f ,ll " .:CtO:.:.-l:3:: -i :.,: :u:-.Í::i:i. ::J.,.
,1... ll.-j¿:irt;:e:r,::¡iriii¿:c:i¡j¿ l:::il¡;.:¡-:it'.Ci7.,.p:¡!rl;"r.jj..js:j;r:1.);r''
5A Fryd 1t después ltcu
D¿l ñétodo .fr¿ua!¡¿no 5l

A esro, Wingenstein objetó que, si en lugar


de asociar sobre lf base de una de golpe eficiente); en Maquiavelo y en Frbud constiruyen ios
cifra de su cosecha, se le propone al su¡lto asociar,"Ur" lugares
," elegidos para debates teóricos y fuente de enseñanzas. Lacan to*ó
sea propo¡cionada por otro, se podrá hacer ""¿ "ifr"!u"
igualm.nrl
no,u
demostración, probar que la mencionada cir¡a
lu *ir_o del estatus del caso en Freud, a punto tal de situar alrí el descubrimienrc
r.süti _r" de Freud:
formación del inconsciente"La preocupación "ii","*iiu",
ar respecfo nos basta
aquí'Foco impona de dónde venga ra ciira, [..-]en la recons¡in¡ción completa de la historia del sujero esui
obseru" win-n.iri"in,'rr er
sujeto está preocupado por argo, no hay nada "t elernenro esenciar, consütutivo, estn¡c¡ur¿.1 , del progresá
sorprendente en consrarar anaiítico.
que esa preocupación se manifiesra a propósito Creo haberres demostrado que Freud era partidario de esro,que para
di cuaiquier cosa que se él
siernpre se tr¿taba de ra aprehensión de un caso singurar y ésrá .u
Ie haga asociar iibremente- Ahora bien, ,o
,oru*"nre esto no es ra]so, sino ro qu.
vaionzó ei anárisis, cada uno de sus cinco grandes psicoanárisis (ros
que Freud mismo acogió y reivindicó tar posibiii.dad.
¿cómo áarse tres que ya hemos visto, elaborados, trabajados conjunramente,
cuenca? La diferente acoeida que Lacan resen¿a lo
al 0". porJ." ser en este demuesrran), es eso ro que resuita verdaderamente io esenciar,
punto ei indicio con el que podría formula¡se su
una solución. progreso. su descubrimiento, en lr manera de tomar un csso
en 5u
singularidads.

semej ante re gulación por er caso imp lica en panicular dos nunros. por
Método y caso un
lado un tomar distancia del saber sabirlo: en la meCida .n
0". se cree
saber, no hay lección algr.:na a recibir de los cascs his¡óricos. por
orro
Ei .métcCo pone en marcha un tipo de cuestionamiento ..por lado, ,v concomitanremente, la prcmoción de ros casos que los presenis
ejemplos y
comparaciones". Ahora bien, también en esre punro como capaces de enseñar impiica la idea de que son pcnador.i d" un"
.n.onrá*o, or.
Freud recoa'e la vía que debía terminar en el ciiscurso '¡ercad escondida que se trara d.e desciitar.En estos dos punros rie releción
canesiano der
mérodo. Es lfacuia'¡ero quien ra inausurr con el esiarus al saber y a Ia verdad, la resonancia enrie Freud v liaquiaveio resurta
de ejemplos y
comDaraciones de su príncipe. \faqúiave10, también también n:¿nit'iesta.
é1 un iecrerario,
rcma en considereción ejemplos históncos a ros ef.ecros De igual rncdo, el gesro cie i\Iequia'relo que despraza ia Fon:¡na en
de que su
pnncipe ¡uetja e:<¡reer lis iecciones del pasatlo, re,¿ular orovecho de ia virrú nos parece ciel rnisino rei-nole que el de Freud cuando
su accrón
presenr: de ¿cuerio a eilas v así accecer a,ravirtú.¡ niesa eue ei sueio <ieba ser considerado como unr mer:. i.JC:eción iibrac¡
ia obrención tje i-ines
i1e serccs. En esra obr: )rlacuir.v'elo,
ciaramen¡e r"uncacor de una nueva ei azu iei iuncionamientc ce lrs cérulas rel',:cs¿s. se-iúa io curi l:
ética. escnbirá ,ie ia For:una: ¡entariva,le le:r ¿n él una rerli;rclón cei deseo seda i:rse;lsaie. Freuü
su pcdei narurr'r xrresi ccn rccos lcs huma.rcs su dcrninaclón ccra rariicaimenie ccn ¿sa persoec:iva así ccmo )f ;cuiav=lc ;crn;e h
¡, cedena que, con Bcecio. ligrba ent;: sí a Dios, ir prc,.,icelcia. i¿ Fcnuna
nuncs' ¿s sin v'ioiencia- a .nenos gue una
vimi superior la ,iornine:
1r ei hombre.
E¡ lc c'-re resiec:a ai .r'aior d¿i "caso his¡óncc:r,', ra resonancia
ri,ei
riiscurso ce )r[¿r"'r"lir'eio con:Id,e Freud., sobre ¡odo
en su lrirnera écoca.
L: prr:.rinicac ¿cn l\r[¿quil,¡eio pernite ifiti3,,.ei que cr esia
neier3.
3s f a:enie. .{sí ccmo )rlicui:'¡eio cone en circuración F:eud insc:ibe su irayecicns en un criscl que ecs hlr: clii:lcarlo :ono
casos ni.sródcos.
dei nis;::r. modo eni:e Bre,;er. Fiicss y Freuil lcs cts{ls "canesiano". E1 canesianismo de ,'vlrqui:.v.e io
no dejan.ie es, e:l e:'ec:c. si pctisncs
.-i-^'',:-1!;iu, ri.u,/ :jiOnio. ini..tc:.ir)S OtroS: ilna iu¡Ción ..púbiiCA,,
-!^¿r , :.',,,.
_¡, habiar ;¡s í re:rcs;¿c:i.¡anenie. m,miiieslo. .\d,,.i ;::mcs :r:s p uni,-r.
resu]i¿
13.-)'iaquiavrio. CiiDtioto j¿ lu Frtr:it¿-,/. ij ir,cii;<lo
oor ph. Desa¡. 0.,19).
l:.-L.¡ :cm:il;s s,ln :¿ftr rerit¡:¡f jt .quí,/C\:o. jn ---.:,j; , ,, ,i"0,-.,i".,1iS.',=r=i"o
::ci. silaiim3:.1:¿ :i lnisi:o s¿nuclrt, io oue ,eÍillra:t :cl¡¡:¡,,, .o
us:sr ambos s¿:lii,ios.
"nnc
ie -'::er1 'ir . )j"i I

,,1

)
5l Frev¿L, v desoués [tcan Dei Réto¿a ire'¿úiado 5l

y la infinirud. lio es,necesario, enronces, puesto que todas las cosas


Como 1o será ei de Descanes y, por orro iado, también ei de Freud, el
rnétodo rnaquia,/eliano es deductivo y no inducivo. Esto resulta. tanro en
están así ordenacas, iomular siempre, en cuaiqurer con¡unto dqoue
y buscar en cida caso una iérmula única - se la encd¡rerá rllí.
se trare,
fufaquiaveio como en Freud, ciirectarnente cie ia función conceCida a los
en efecto. presente [...] He ailí pues, lo Cecía. lo que los riioses nos han
casos hislóricos. transmitico corno método de investigación, de iescubrimiente rie
,v.
Al iguai que Descartes su Dlsc¡¿rso del méto¡io, lvíaquiavelo publice su enseñanzalo.

Príncipe como un saivavidas gracias ai cuai podrá restabiecerse; es "en


ranto que autoanáiisis y ierapéutica cue iebe leerse Ei Príncipe26",
escribe Phiiippe Desan. Como para la Traumrleur'¿ng, l.a invención l{étodo -v formalización
I
doctrinal permanece de punca a Dunta un ¿sunro Derslrnal y es es calided
de tal que ella se planieará.
¿Qué es, pues, lo que hace que ios ca5os disiineuidcs no se presenien en
Y de la nnisma maüerx que Descanes dejará.orincipescarnente a Dios la el discurso me:cdoiógico con'to una puri. Cir¡ersidad ie la cual ninguna
carga de las verciades eternas. ivlaquiavelo zatarj .Dot una lbfmiCab]e enseñanzr pciía se r er'trrícia ? En !íaquiavelo es ia comDarxción. perc...
"pirueta:7" de los problemas que le pianrerban ias comunid¿des ieiigiosas; " conparación no es r¿¿ón". ¿E::tonces? Ciertamente. la noc.ión ,iei
ia idea de un poder metóciicamenre reguiado ciaba en el blanco d.e la mé¡ocio cien¡ífi.cc, naciio en el Re nacimiento. puede inl:rvenir acuí.
concepción según la cual sóic Dios diige sus cornuniiarles: ¿unque set como un acil'icio de noiebie fecundiCatj.
Pues sólo sus principados scn seguros y felices- Fero como ellcs En prirner luear. Piere Ce La R¡mée debió ,lar cue;po -u\a.;o el aombie J,.
esián gcberiados por azones su.oeiores que el espírite no puede "dialéclice"- x esa er.igencia,ie cienriticiCad sobre lr. cue Fre,;d.
i:o
ententier, cejaré de h¿biar cie ellosl pues estanCo sostenidos y
cederí. La rebelión de Fiere de La Ramér cciriia el lnslcrelisnc
mante¡iccs por Dios. sena acto cie un hornbre pr?sunruoso l/
Dre fi gura Ia ducia hiperbó iica el Descartes. se il:ta. po r cie nc, ,je ¡ecusar
terneraric discumr sobre ¿llos:8
esa cersDec¡i'¡aescolás¡icaque. al amparo ce ia autondac de jos -f"nriguos.
H:1r ailí un asrecto cepitaL en el que se capta vivamente cómo la m.:iticlica ias ccrnenriras í.Jejen:cs ese bienvenico ic¿s¿¡s cele;zi; ,.t
dele:inii:¿ci:n i¿ un méroiio apeia a ia de un campo. Nlaquiavelo no ccmentxrios ie ccmeniiios hasta ia sacieCaiil -un ieit:c:i: que ¿,
puec.. imclai'ltai su ndiodo más que iin:itando su car^irc() de ;piicación: osicoanilisis ,ie a1'er )' de esr,. no sicrnore succ e,;ii:i:. Ferc hr,,, n;s ea
.si¡. r.niicipación de laCuca hiperoólica; er erectü. ::.rolJr ul.lt s..iíi:
Ntr se ,Jirl:irá el Fs¡edc con el rosaric entre los deccs:e. j- I r ? ra-i¡
::a1,'
,j- ..tti¿
ue ibJd-¡L .I,::lL= .-':^¡1..
l.¡l 'ímir¿ !r;..-r -..^-j'
.¡u..iei
¿.\sorrbrlran estas conver?encias'l Lc harin mencs. si :os ¡or:arnos ei -!- \,¡^ .-,.- q.. :i,:Lo ._.:
:.1 .¡.rSiótcl¿S
trLULL.¿) i:O
r.U a) .lid.í* .¡,,ó
¡S .a, tü: i.t.. ¡,r^
:f:)\:L;u. i
lrabajo de prcbar irasta cué pu;rio ei iné:crjo iieudiano es ana!írico'. ¿n ' 4,,.,-..*.,,,, -;.:.,.:::Cte:¿:!ic:atSS¿:::.C¿m¡¡..¿,:::t:¡:.;;¿.
oc;':-s lailbrrs. ql:c ie e nc,..lent;r cocectadc ai ,dmer raso -piarrinico- de
la ecicpcicin iei nétodo: Desc:;"i:s ;c sll¿ Ce ailí :rn :i :clc dei c:ii:o-. ¿e L¿ .?.:;.i:. :.:,_-;s
todi.:qucllo true se;u:'Je ie;lr ¡uc :xi:ie:slá.'.e':;o:e .c uno v
::iicri. :cf ..lñ rec'.t13c: ?l:i"n cc_li;u. li::sri:t;üilcls 3 iui.)ir)i i:t ,J..1: j
f ..1
'" e iido :,;r-.\;':s:óreies t. I Lrs Cis gus:cs .De.as .;;i.;;;
ICelor:nuilri¿'¡conrien¿ersímismo,orisiniii'r'rente rscciaio.:iiímite
I
;;.;'.i'. i;;ir,,,
t_
I
I l:..Ph. l¿sen. .ra. .-'¡¡..':.:-1.
)7 .- íhu-:. i-r. De ia ;ni5m1 ñ:ai1erI :lrl¡enccsc l D¿sc¡¡-i:s .-:ug -u-.bu"c ¡ Dlr:s I :i :os jitido ¡cr ?h. les,in. oo. c::.. 2.ó:.
-rr).-PI:lón. P.til'c.fd.
f,lrer'¿mos:,j¿crric¡í)i¿::r'::-:el¡-svereeirs:icr':Js.Lic:'1 li¡¡i. lici:;o..lj'!nod¿ li.-Scr¡:ie¡jeorC*::e::.-rn:;ió¡ei:si).i:til icc:of ñc.l:co.¡C;je:o.!i,-:iijr:,,r:l:::c::¡
los m¡-s :r:i:crdr¡rf,rios iloraos d.: :s¿::rni ,lue se ha:/rr ilg::ri¡:do ':má-s :l i¡ ii:l¡r: ¡¿i
io{io :J:iasc:J ii¿ :si¡ ¡ecl:r;t¿r.
c¡iir:ii'' j. l-¡c:¡t.
r I-¿: intLi¿n€túi -.ie :d¡r:c,u:;:;!';j¿. :aiiilo. :iesión -:¿l ! ..le;unio r:
-rl.-[s::.:e:;li¿:;¡1r¡io ie:::si;:i:]::;::l,js :u¿ s;:le,:-¡..ii.:l:: l:.s j-rs..l;.::::::s,
i

54 Freul. v desorés lzcan Dcl mé¡odo freud,itru 5-<

se acentúan en la medida en que agrava su caso añadiendo a su platonismo Esta preocupación por formalizar, es¡e horizonte de cientificidad, son
los
una conversión protestante, con lo cual se echa en contl a, además de a los componentes esenciales del método. Es un hecho que ni Freúd ni Lacan
aristotéiicos, a los católicos. Pereció defenestrado y decapitado el tercer recus¿rfon esta exi-Sencia- [Jn hecho también, pero desvenmrado, es el
día de la masacre ie San Banolomé. rechazo de aquel hoiizonte que se encuenrra en la pluma.de cierros
psicoanaiistas franceses contemponíneos que, más o menor rl*b.bido,
lv{ientras que el aristotelismo había disueito la noción de método en una de la posición de Heidegger y pretencliéncose los defensores ce un
sarta tje métodos cada uno de ellos ligado a un objeto, de La Ramée, subjetivismo que bien merece ieputarse de vuigar en ranto defini,Jo por
volviendo a Platón. reencllentra su método único o, para decirlo mejor, la anti.-tecno-ciencia, no advierten que en Freud no se rraaa tanto de
universal. técnica sino de método. También es una ciena reiación con la clínica lo
(Ese conflicto entre pluralidad de métodos y método universal presentado que está puesro aquí en discusión. puesto que la lbrmalización, lejos cie
aquí no ha dejado Ce estar presente en la problematización de un discurso ser andnómica a la singularidad del caso. iepresen¡a más bien el purrro
de EL método. En cierto modo, lo reencont¡amos en la prácica analítica extremo.
donde, dada ia delimitación del campo, en el inrcrior de esa limitación el Formuiemos ei problerna en términos más moderncs que aquellcs oue
método permanece universal: sea 1o que fuere lo que se le presente, el llamaron nuestra atención desie le invención cei métorlo científico en el
psicoanalista no tiene otro tratamiento posibie más que 1a aplicación de R-enacimienio. L¡ relación entre los cesos no procede de une pura
su métcdo. Es una postura idiota, pero Ce una idiotez heurística, al menos
cn cienos casos).
comparación puesro que re'rela que, al. menüs parcialmenre. su l,
multiplicidad se ieja ord.enaren una gra má.tic a,que ics casas se ce c ! iran,
Es Iícito hablar res,r€cto del tema de la Cialéclica de Pierre de La Ramée que tienen, entonces. elementos en común, cue nos presentan lo que
de ''fr:rmalización", puesio que, decididamente piatónico, la construlró a wittgensrein liama. a propósito de sus jueeos de iengua,i e, un aire cle J,
lravés de sucesivas dicctcmías. La dialéc¡icr se di.¡ide en in'rención y j'amiLia.
juicio; ei juicio en enunciación, silcgisrno ¡r método; el métoCo en Desde enroncss. una formaiización se cresente tanto m.ás susce¡tibie Ce
"mérod,¡ de naluraleza" y " métoio Ce prudencia". Conclusión ser escrira cuanto que ios ieccries lbrma]es resuiian estff a ais.lados ea
esiiclr.n'iente rneroCoiogista. en la que acemis se le: tambián la
;i
¡ai o cua.i t¡milia de casos- Las seccicnes cónicas, hisródca¡::enre iran
uni.¡ersaiid.ad: dese*peñado ese papei ie reunir c.sos en ei cued;c de un piovec:o
Es absolur:¡nente impcsibie cngir bien un tfie ,or ctrl ví¡.ii. iiiosór-ico-clen:ífico; reagi'anrban ranic una muitipiiciciad ce,f girras (lsí
,eicírcuio o la¿Ii¡sis: basiabacon imnsibrrileiei úilgulo ¡.e ;cr:e;el:l¡no
Peio de La R¡rné: nos reserva una sorrresa de entergedura. C¡n la con ei cono para obrener el u¡:o o el or¡o) como una. muitipiic:dec ,3e
r:li¡nción it si¡uar los di'¡ersos elemei'.ios ;ie su nélotio en reiación unos
.ii¿nciones (1a parábr-.1a. 1a hipérboie son insciicri :ie: ¿:: cl ccnojj;.
cr)n ctros, lle':r. en eiecto, r unr lóm:ull lue meÍece plenarnenie ¿l
norabre ,ie c:d.enr bciioner. iNa'li nencsl f: eil:c:o, éi Cescnbe ;u Jean-Cleuie Dumoncel ,.ies::ci,j,;. :: i.i iis:cn.a :l iLso ícuizás un sasc
rnélcdr: ccri'lo: excesiro) Ce senejanie i'oi-mait:clón i::e aquei qd.: ?cr ¡rimela vez dic
Bergscn, nii¿n¡ras que Wirtg:nslein : :esar c¿, o tai,, ¿z : causa Ce cienos
l
[...] una lerra cerjena d,e oro. i¡.i ccnic le imagiaó licmeic. 'le la cuai I

los rsiabcnes ¡uesen esi;s g:r,jcs rsÍ depeniiientes unos de ()!Ícs l/


3sgus;nr.s Ce su cosecha, :re¡li-,o e::;i:rc nc.co ína:.i3ners€ el e.i urrbrai:
eoc:,ienidcs lodcs ten pr:cisar...ente :.lnit;s que nada se pued: quiiir Ifi di¡li';iid ¿s ccmoie::;:::tir: c:rscir.i¡ a le ¿e ul hcnbre que
sin romper ti ¡rden ;' h.:cnriluiuad ,jei :ctjci'.

.n , ;¡ r'li
ii ":r-. n; :.;: '- l.i- .nt.--.\ -: -:a:Jt:i::i:iJ :'.r'r:C::i'l -.Or l¡r ll.::;;
l,:=crc::. ; .:!! :4 ',.1::
it-
:t:::::.t. ':s.
.

I
l
,¿
36 Freud, y desouÉs L¿can
Del méto(o lre,uliano 57

encuentre un nuevo cíiculo (por ejemolo ei cáicuio diierencial) y que sino cie una en particular que lo introducía como rnonogiafía clínica
buscl un simbolismoió' prciundizldarr.
'Elasunco del c:ilculo diferencial e./oca la distancia entre N-ewton v
Que Freud ha;ra sido conducido a panir de :se abordaje del caso tai corno
Leibniz, este últirno rebonocido como ei que invenró el sinbciismo io manifesró aquei'día al asentar por escriio algunos matemas (ei cel
adecuacio. P royecto ,luego, las cd.scarx de ce bolla de Los lsr¡¿¿'ios s obre ra histeria,

Ahora bien, hasra ci.elto punto37, unü distancia de este iipo ordena los ei esquema del capíruio Vtr de laTraui,l,utulg e incluso :l dei huevo
carnii:cs de Freud y de Lacan uno en relación aI otro. Se rara, por cierrc, escrilo tn El;to y el eLIo) no tiene nada de contradicrorio. pero si es ¿xacrc
de no hacerle decir demasi¿do a esia metáfora de ia aniculación Lacan/ que su bruja rnetapsicológica no facilitaei "tbr:lalismo correspondiears",
Freurjrs, pero iambién de rneCir hesta qué punro ella no cs una simple ccrno es de no¡rr, y no scia:nente entre los l¡canianos. seri. necesaio
.-lecidírse ¡. admj¡ir que, sin en:bargo, con Fieut1 el méroco no cesa
analo¡:ía. de
sisnilcarse en el aboriaje,iel caso.
Freud invenn un métoCo de recepción, cie ¡¡at¡.miento '¡ C¿ invesrig:ciónie
rlonciu'.'amcs 3ste punto: Freud volvió r h:rcer :ecorndo ins¡luiacor
cie lo que se haiiaba catalcgado como eniennedad menrrJ. En é1, ei --l
paradigrna es ei caso; *ncontró, como Wineens¡ein, itn nuevo ciiculc, ,lel ijiscurso del mé¡cio hasta N{aquiavelo ,¡ rj.e La Ra:nri=, con quienes
sero no puso a nuesira disposición el sirnboiismo que ie.o*"rpon.ií". compane la ca¡acrensiica poco lograda ,ie la ior¡-nalizaciin. Ei ei. ei
parad.i,:rna del méiocio es, como en l[acuiaieio. ei c:so hisróicc. ,{hori
Ei asoeclo epidémico de la irans;nisión del psicoandlisis no esrá ranlo bien. como en l[aquiavelo, esro ya impiicr la,leiimiteción de un cemlo.
liea;io a ia dccrina tieudiana consideraCa ccmo una red Ce tesis (esra ese cxmpo eue Lacr.n caliilca¡á de íreudiaro. lnscnbidrccse en cicho
docrd;ra acreheniida por un gran públicc no rrosiró un crri.cier muy c;.iaDo, Lacan iomarí el rel¿vo, dese etbr--canCo ei: Descan:s cor haber
dii-eren¡e a la de un Janet), como al esdlo de Freurl. a un cierto ceriz se,:uiio ei imoulsc carjo pcr Freud ir su d.iscursc d¿i ¡:e¡odo. L¿
"liieraio ', inciuso "ao,¿elesco" se,sún 1o leccncció éi mismo. en relación
subjerivación d.ei mirccc irá.cues a lapa¡ie iainircduccion:n einé:ci.r
a su n:icrjo je dar cuenre de ios cascs. lluchos anajisias de ia priraera ireu<j.iano de un pariciema- si no maiemáticJ, ai menos susc::iibic ge ser
seneración i:elon ¡estimonic ije esro. por ejernpio. 5. Sterb¿$. ¿Córno rrf¡mrri:r¡_l,r
r:l'.,id,¿r. nor ciic iedo, que ¿n ccasión Ce su pdiierr. in;ervención en ¿l
curso cei prirne:;cngreso iniernecionai de psiccandiisis, Freud, en vez
cc Car ir. ccí:ocer ei ¿stlio úlilrno ije su dcctrina.:r;:i'ir:ci hat,iar... de un - )Iontaigne, luego üescxrtes; el -vo. juegc el sujerc
crsi;l -úno soio. ;Sin ncras y durlnie ocho hcrisl )ieda nis etecti'¡o.
c:¿l::::c:::. ili:L q,-e sc ::::e:ci¿ll. qtje iu mi:c¿t-l :rr el clso,
evic¿nreme:ite no iecibiio ni ¡cr lo ianto dellaico ce cr-ialcuie r maneÍit a' .i ..:¡,,o,-.t-i ,-r.: - 1iq,.(¡¡. -¡
uer !rru r¡rrLuriLU .ii LFro.,..¡
lauu .---,ip
;.iL.Ltr
r.__"_-...
.ri --tiii:l:.C ;,- _iÁ- ¡-
-.rr :r:J:rif.
)U -_
::r'^ci:=l :i sei;iC; t::rn:.;ical cei :ér¡i¡,,.,:) dei i:¡:c,:o. E:
í¿r.
:ci;:j:ie i'reuCi:no ,iel ;rso, ;or n() crsf,r.:c :e:sislir::: i: ;l:.¿:,arc:i
i¿i crso, pcr lunderse en la iireralicatj ie ic c.ue:i casi; le lr:se:ii:.
:s;e'-i:lm:n;e a:lruic je si;i¡cnrr y en ru :::¿::nci::l :ei::;;;:c que
:c:i'.:,u r.:n int¿:cic:c ¡:::;ic: i:.:::c';c;:in .e: s::.:¡r_-:_t. i,:ir?:c__.
,r ,/
58 ireut. y desouis bcan i
% Del nirodo ire'diano 59

en términos "cienríficos"), destaca en acto que


er método es unl.ejercicio Puede verse que los dos últimos pasos de la puesta en marcha de un
subjetivo+3". sin embargo, Freud rio roma'en cuenta
teóricamente es¡a discurso del método ccrresponden a ios dos primeros dei carnino de
referencia como nr, no se encuentrh en ér una reoria explícita
ciei sujeto. Lacan empalmiindose con ei de Freud: teor-Ía del yo, tecda ¿sj 5rrjero.
Lacan encuentra el camino f¡eudiano especialmente
en esta recepción
lireral del caso; consagra alos casos'de Freud uñor.nr.ros
de su semina¡io
ir' en i966, resume ei tema en una fórmura que nos habra ,:" ,u ,."orr-l¿o )Iontaigne: ei yo, primer momento de la subjetivación del mérodo
después de Ia enseñanze recibida de de Cléiambaulr*:

singularmenre, pero de manera necesaria fuimos conducidos


a Hasta lvfonteisne, el discurso rnetodológico no es el dei su,ielc sino ¿l C¿i
Freud.
hombre uni:tersai. Tal era ia figura ordenacore dei discurso eue recusara
Por la iideiidad a la envortur¿ formar ciei síntoma. que ![ontaigne- En efecto, en éi enccnirari:os lo que ya habíamos cescu'oieno
es ra verdadera
hueila ciínica por la que ncs inclinamos. en ca.da uno cie aqueilos que contibuyeron a ia constitución de un
[...]
L¿ reoría lacr.niana der sujeto es consecuenie con esta fidelidad, discurso dei método, a saber, el hecho de gue esa con¡ribución dere::de
por la
si¡npie razón que eila es su consecuenciá. puede considerarse de una avenlura panicuiar, personal. Pero con il{onraigne. .-s;r
qu. L"""n,
aguí -v en esro ( cor lo ranto: no sie;npre) ..orolonga" ¡ particularidad se inscribe en el método, ella misma deviene un eier¡en¡c
Freud. Aiore bien,
así cier. el isomorfismo del cuai acabamos de desgranar ciel método. Es lo oue se llamará su ,vo.
ras prin:eras
caracreísdcas, aquei isomofrsrno que asocia el discurso En primer iugar, el rechazo. Se pueden da¡ di,¡ersas fórmulas d,e é1, erl;e
del mlrodo en
Freud al discurso dei mé¡odo que desoués de plarén y a través

y de ce La R-rn:ée encuentra su re¿iización en Descartes yia


cie los
a,ari.res bre're¡¡g¡¡¡g subsurnicos aouí bajo los nombrei de llaouiave.lo
}fontai_ene.
las cuales tel vez ia más divenida sea esta ccni-esión: por más que
llonraisne "se d,evana lcs sesos en el esrudic de .{risrireies", iu.
comprendió naCa en " ese aiborr¡io d.e tantos cerebrcs liiosóilccs,ó,'.
ir
En este punto nos espera un hailazgc ¡nu.¿ notabie. si sd sigue avanzando, Su "yo no soy t'iiósofo"'7 al cue por lin se resisna, e.¡cc: i¡nbiái
c0mo no hernos iejadc de hacerl0, ea ei estuiio qu. ilrrtipp. clanmenie el rechazo canesiano d.eI saber recj,bido. En ![or.ui:g;:c 1r,.,
Desan
consasri a ia .valssenc e d,e [a méthcd.e, se r.dveniri cue ia suüjetivaci;n también una iuda Cecisi.¡a cue . sin embargo. no sabrá ccn'¡eÍi; :x ;unic
dci métcco se croduce in cos [ei-ncos que se iia¡n¡n Nfontaiene ,; ie apoyc de una cea¿:f, sub;el:va _y que.pcf io i¿ti!ü. pcs;l.lec.:ri
Descrnes respecii,zamence. Aiom.biet, philiope D¿sa¡:. esc:rbe inCe¡l¡:Cr.. En:lmcn-'entc ea cr-:c:1 rris¡oteiisnc se ien¿nca. -\icn:ii,:le
r proccisiio
ie estcs dos oori:bres una f*se que tos hace aguz:r :i oído ;antc mis ton'la not¡,lei ";ciilcl o ';ano üe ia cienci;:. rti:i.I,]¿na'3" ]i 5s ,¡r.r¡ ivs r ¡;e::::
,;uanlil que su estudii: no ha siao
reaiizr.ijo por naCie que se prisenie como a ... sí rnismo. Ai-ro¡': L-ien. hay mélcdo aqr:í. f,crr ei i.i¿..:hc de c,.::
l:r,-¡¡ir.^.
.\,foniaigi¿. mu.,' iecrnt;rn3fiieilce. consiier¡ iichc sí misino en :i lug:i
trsi¿ .i-i,."-^
¡co¡:r uei suje:c en .:i r.:itcr:o ccrructz: ¿vid::ir:n:en¡i ;cr
u;i ,.^
u11¿ ,¿ur,4 ,i-l ro f., , rtás ---
-x.- esce.;iaimente,
-
,je la ccnsi:--:cclin ijel ,¡o5. Filec:azcieir"c:e:cit':.;.::r::in ii .-ec:3:1)ccunf,,,,erd:t:f,f:sc:::::
como ob.1c'.i'v a. Ei taso que acuí i.Dara a J,lcn¡rigne ie :\f aquir..e i,¡ c .:¿
rre La Renée es ;ai:gi5icc. I ¿ v'erdrd.Jevien¿ "venciCaC :ersi)nii-u" ...

l.ó.-PI. Des;.r. oa :::.. ,. I l;


.::../á¡¡J.. p. i i3.

:o -i;r¿.. c. iil.

)
60 Frtwj. r ¿lespués. f¿can
Del métoCo fre*iü¡no 6l
;
sólo io será si rs ¡cepnda por el oro. El rrte dei escito deviene méiodo
Lacan supo iornar non de la imponaccia de lVlontai-sne en lc que llamó.
y e I méiodo desc:¡bre el ienguaje como " la únjca base de icda veriadr'":
qulizás i nventande aquel dÍa una paiabra de destiao efímero, "ese momenlo
La palabre ¿s rnirad de cuien ia habla lr ínitad de quien l¿ escuchast. inaugural de la apanción. del surgimienro dei término que se llarna ei
sujero55". Esto será, coínc se puede suponer, paia desenbocar
De esre modo, Ilontaigne puede Ieer a lcs An¡ieuos e iminrlos er :us
i nmedi arar¡ente en Descartes:
rela¡os buscinijose a sí misrno. Su
1i6 5s re gr-¡l¿ 9¡..i otro, en interaccicin
con el otro (así su oosición de secretario de LaBoérie,,\. y en moric aiguno [...] ]ícntaigne, en ci*nc senri<jo, es verdaderar¡enic aquel que re
result¡. casual que Philipe Desan se sirva d.e ia teor:a l.lamada dei looking- centró, no en torno a un:sc:pticisrnc. sino en iornc x un monei{o vi,,,o,
g/r:ss sef para reierirse a estc. Pero no. no es la ,le Lacen sinc la,le un es¡a aphanisis del sujeto. Y es ¿n es¡o en lo que es i'ecunio, en sei guía

psicosociólogo irmericeno de principios Ce siglo. .temo qi.:e permenece,v vailds allár:le toCo aqueilo que puio rearesentaf
coffic mome:lro cje§niroio Ce un giro históricc, pe.o no :s¡:ba tiijel
Exisre sin ecrbargo una ciferencia imponanie entr.e esra c:is¡cizeción escepticismor
que Lacan aí:ia corno constituyente ciei
¡zo v ese yo tai corno )fcniaigne Respecto ie
esia pcsicion sub,ie:iva oreseniii-icada, ina,"rguraCi ioi
io constr.tye meródicamente en refere::cia a Le Bcérie, a plr:mrco, a
¡-Iontaigne, ia inrervención ie DescaÍtes .será dcbie: ele.;aiá la iiuda
séne:a. l aquéiics que no vaie la pena ciier puesro que éi se vaie ce sus
haciendo de ella la pai;¡nca pa;a ei ¿cceso a una csÍiizt sub.ie:j,¡i. Liegado
esci :os c;nv in;endc :. los suvos ;ro cios ea Lin ncsr,icc,,.er:¡J: a :quelics
a esie punro, no serí necssado, r::is ailá,;el pasaie il ac:o Cei Cc,gito,
.:'-:e iermine ior liamar sirnplenente el or¡c: '.corno dice ctrr:i1...,' En persistir en recusar iodo sabe: uni'¡e rsai para situario comc prccio iie un
'' elda'1, N{cntaigne se buscaefecdvan:enre en ¿l iugrr rni.snic ce ese crrc:
sujero.
Ese sr:a erunCo que eigunos muiticiican aún inás corrc :slecles ba,io
un gÉre;c cs el :scyjo el :i que Cebenos mir:ncs t1- ccnccj=oj
¿n :i i:uen sesgc I Fse :esgo es el rrél'-dr.]j:. El cierre riei cirtuiio crrtesianc del Ciscurso dei ri:éru¿r::
P¿ro en ]¡icnaigre. i¿ idenui'icación dei yo en el Drro i.ic resonancias ireudianas
te i:ii::a ,Je ro
cns¡:lizer:e. :\yfi)ntrtrne inrrcCuce eis',je:c en ei i;létc¿o lejo ia ibr::re Ce
lquei yo. nunci :ma3inaiame¡:ie icienti;ic:iol la ieen¡::lceción es. por
Desc-:rtes :eúne cornc ¿s un haz ei conjunto ii.e lrsgos ;cnstiiuii.;os cei
c:e-c. en rl Lrt:c, pe:o;to ri ctroj" (esa mrne:l cie cc.cueiglr con la
ii:curso cei nréroco. Besi:¡dn :i:unas cbser,¡aciones. ,;1.1.. :li ¡i cun¡c
id.entii-icacirin inagiiaracs coheren¡¿ ¿n llonnrgne cr;n ¿i;nrnrenir::jen¡o
''.iv'az de ia duda i:i ¡i:seri: ties¡::ciiri:l :l qi:e a"r ra.""raa.-uris.3tccxir ;,;t;í:;irs i,-rs
).
,l:ic-,s coresponiientes i¿i iiscurso ¡iei n:e:ctJo fieucianc:
( - sobr: .:l re'-:hr:o Jrl r:r::
[...] :s ':rl :c',1iseaLr r.aa,aa.rra :.:crt J¡l :nc¿-,: ,r :'.::un:.-i...;
d.e

íccns;jo daCr: a le pnncesa =liz:ceth a prciósi",r ,le un c.r.:nr:ic ie


\frquiave:o ilue ¿ila ie hebía :.di¿o,
- )()bre ia ,:e:en,je:cia de lr ',;ll:,1 tiria,i:D c.ei ne:r,-cr;:
\

62 FrewJ, t tlespués ltcu


Qel método freud.iano 63

Pa¡a int¡oducirse en la búsqueda dE la verdad de las cosas, no se rnanifiesto que Lacan toma el relelo del discurso freudiano del método.
puede prescindir de un método (cuarta regla).
Aunque la comprobación de este ijomorf,rsmo sea muy considerable, nos
-sobre el historicismo: es necesario, sin embargo, ir más allá del hecho de tomar nota de eila. En
Empleé el resio de mi juvenrud en viajar denrro de mí mismo o bien efecto, ese sujero, tal cdmo Lacan es llevado a definirio, no es parecido
por el gren libro del mundo, en ver las cones y los ejércitos, en ai sujeto d,el Cogito y, por lo tanrb,'otro: es realmente ei Cel Coglro. No
frecuenrar a la gentÉ de diverso humor y condición, en recoger hav, pues, simplemente pa¡alelisrno, sino con,¡ergencia. encuenrro. ToCo
disrintas experiencias, en probarme a mí mismo. lo que acabamos de desplegar converge en esta iesis de Lacen. pero,
¿oué
- sobre el carácrer eminentemente personai ciel camino y del hecho de que
quiere decir esto? Que ese discurso freudiano dei método ( que aquí debe
la historia del método es una historia singular: distineuirse deI discurso de Freud, puesto que se compone d.e ese rele,¡o
en el que Lacan prolonga a Freud) consdüye realmente el discurso del
IIi propósito no es enseñar aquí [se refiere al Discurso] el nnétodo que mé¡odo en el senrido muy preciso del "constituir" : repitiéndojo (cre:rnos
cada uno debe seguir para ccnducir correctnmen¡e su razón, sino haberlo demostraCo) lo inaugura.
solamente ciestece¡ de qué manera he procuredo conducir la mía.
Dos obser.¡aciones de orden indisociablemente epistemolóeicc e hisrórico
- sobre el constructivismo y su carácter lireral:
se deducen de es¡e estaio de cosas o, mejor dicho, cie la cosa.
El método [...], muy a menudo, no es orra cosa que la obser¡eción
escn:pulosa de un orden, ya sea que exist¡ en la cosa misma o que lo
si Freud no pudo abnr por sí mismo el discurso de su mércdo hasia
enccntrxr r Descanes, esto se debió no ianÍO a la ausencia de ilna lecna
haya inrroducido ingeniosarnenre ei pensamienro: por ejemplo. si
querertos leer una escritura escondida bajo caracteres cel sujeto en é1. como oodna suponsrse, sino al hecho de que esia. ausexcia
desconocidos, no yemos orden alguno maniiesiarse claremente. ccmienza l/a en su travecrorie con un cteno exrravío de la tecna,;el
¡,o.
pero. sin erebargo. fo{amcs uno. Es esta der'iniclón del yo en Freud ia que en pnncipio operó ccrao un
b iocueo par:que su ciiscurso pudiera haberse reriizr.do clenamente :cmo
-{::reguemos a ¿sios Dunros el paracii_sma maremárico (no es el mét.rdo tiiscurso dei ¡nélodo. Así, no so¡prenCerí que esia reona ciei y.c i.,r,;a
sino i¿ matemárii:r 1a que es uni.¿ersal: ma¡hesis uni,-ersalis,. la ;onsliiuioo renbién ei -lunco de d.cc¡iini(en,alanenbaC. en lgJb)Coi.];e
tieiimii:ción de un campo (L:cen esruoió ¿se punto en Descert¿s. ¿l enf¡entrmien¡o de I-icln con Freud ere más v,rolenlo (esciio ccn a
su br:vando que istaba regiaCo rror la tunción ainbuicla r las rnencionidas
n inúscuia. vio ianre ); Lacrn no cu b iicardjar.aás e i te xro d.e esa inrei,;e::cirie.
',eria,ies ercii'tirs), el crríclel iiuminlii.ro (sueie d,ecirse inuiii,.,o,r
,,,

r:jeiuc:i,;o iel métcco (ligario ri hecho ie que se !ia:i ie veriad..¡ no. Se:':ncil obsei'¡;:ción en hs r,ntílcc:s rje la ci;reia: s¡ ,:on ei pai:iirna
ccrnLr in ei méroio inductivo baccniano, ije ier.itde,.j):¡. iinaimence. el ,:uc lig: borrorneenamence R.S.I.. I ecin pudo cesembocti in un inJjico
rire irr.ncrneir¿ i:ovelesco de ias i:bras de Desc..r.r:es i;ie señalario :or ":bcr,irie d.el ;uielc, cso se de 'tió a la i:celición cuns;iiu.,,en¡¿ c¿l -liscuiso
L:lbniz) v habren'los tl¿rdo una gran vueii;:r: :o::o,je esüs rasq,)s de ;ei ilitcdo -,ie lr nism¿ n.tnerf, -n juü el c:erie J:i ,:irc,-:i:c !,1:slL.nli
¿r¡rrss;,:niencii F:eu¿Descxrres que hic:ti ;i'lel:os af,rc cue Lacan h;.'.,:r :i¡ne :r:r cr'eclc la lrcCuc:ión de un "i"tr..!a',,{) §Lieio-':i".
iu\cico ccnciui: ¿i asu¿to scs¡:niendo,.iue ei sure:; i:iuue Ce hechc se l::st: nr,:c,;. jL-:L\i-.ü j¿ n::li::¿stc Cuj:lnic:i isomcr:.s;r) fj-.
:ij.:,] j3 ir:r":J ¿s e! Cei C:tgito. :c:tai:cs i: i:scie,::r :tr.i: i¡ :ll',¿:E;:ci¡. :n Desc:::::s :e i:s -:cs
.\:i. :n suc:si'¡c ñur.s.Dlticciiá coniitirio .;ue ios .:cs pi,mcrcs :rscs
,cr :'rers Pl:r,;r,\i:cuii., eic, J: L: R.:né:,,),ícc::i:n: ,, F:euc, l:¡:n. i:;i:s
¿:i r:.i,irddo Je I-:cen ii¡ona dei y'r:, recn¡ ,i¿i :uleic; ccriespotiel : :cs ,i:,iesencoc:u'ii'i ui'l sal¡er absoluio,ju. se:l:r ei Cei,r.r;e:o:l lin
.los j iti mi;s pisos ,li iLüi:rir,!duu .,.^..j
ln .:is;urso iei méto.ci) r,esos
la pi:esie ¿n m:ic ha Ce
i,.¡--::"':-..\.;1
Lrii)ixu-,. .
l:]isñ10. no nc.c3i otIS clri3 0ue ,-ial:::i ide una
:':: lc','L;::r)r nCrr.:t: luiun¡ii ;¡c,; Des--:::s. 3¡ rs;o, ic:(lni i.
it

fcutL v desoués ltccn


. Del mltotio ir¿wliano 65

' Lacan en gran medida acogió, estudió, inreryretó e incluso


manera que, bien puede anticiparse peninenre en relacióil a la expeiencia consrr¿vó los
casos rnás importantes de Freud consagrando a cada uno de eilos un año
tieudiana) la cues¡ión de este nuevo sujero que Lacan abordó con el
de semina¡io. Pero, sobre rodo, aquei argumenro se rebate ian pronro se
cifrado borromeo. Destinaremos un préximo capítulo a esre úirimo avarar
advierte que la bocacerredaccnsriruye uno de los mocios miis imlocanres
sutndo por el suje:o
cie.Ia reaiización de una funcién secretario: "la obligación de silencio qr:e
os incumbe", escribe un secrera¡io a orro. se traraba de Buonacorsi a
La función secretario N[aquiavelon.

¿cómo daÍ cuenta. pues, de la pr',:dente reserva de Lacan respecto de sus


prcpios cesos? Es de notar en es¡e punto cómrl a menutjo. salvo el dato
Lacan no ro,rnó su vueio Ce Freud sino Ce Gaétan de Cierarnbauit. Es más pariicular dei cont¡ol, cuando un psiccanaiista cres rr-.cer hacer saber ¡.
que sorprenciente conslaur que en sus primeros pasos, como en los de un público más o menos selecto ral o cual lragmento ce u¡e cura de ia cual
Freud (para esie último Bertha Prppenheim y algunos otros; para aquéi se encr.rgó. es¡e hacersaber nismo interviene hicr:rec¡,ndi: lacontinu¿ción
un encueniro rnás cruciai que otros, el Ce la enferma cie La cuai iba a hacer ce ia cuia. Aquí, el masccuismo de "el hombre de ios lobos" nos enseña,
tesis; la innovación rnetodoiógicres el producto de eualquiera ¿n lunción pues supo producir del no-cierie de circuito una í3nri y ce dicha renr¿.un
,je secretario. De una manera que se deberá considera¡ muy clásica. si se no-c:ere de circuiro.
lajuze;r según eso que tuvo va lugarcomo iniroducción ie un ciscurso del
Freud, por otro lado, ilegó a reconeaciai ai psicoanalista no lanzarse en
r:né:odo, e1 rnétcdo se invente pr;niénCcse en príclica l oropósito de un
crsc. El hrcsr s¿ber,iei ¡:étorjo ¿s ra¡ncien y ea prin:ip:o ei cie un crso. seri:ejante e'/eniura más que ¡u¡.nio ei ¡náiisis estuvier¡ celminaco. p:ro
Esro err verdai tanto de llaquiaveio l¡ de Ce La Ra¡¡rée ccmo cle ¿córno saber que ha lermicado cuarco una inciinación a habiar e:.1 cuic:r
habda esrado en el iuger iei rsicoanaiisra hace. pr:r io pronro. cuesiion:bie
Nlontugne o de Descrnes. De Arna C. 1i oe Aimée, no se habrá sabi,io
en princioio mís que equello que guisieron decirnos sus secÍetairls - ia verdar: de ese sabe:]
,l
incluu'encio alil "la honestr Cisimulaclónie" de los nonabres ,Je Bertha Si enconces incumbe ai psiccanaliste una "obligación rje ;llenc.io',, lo cual
P:ppenhein c ie \larsuerite .{nzieu. ninsuno de eilos niega. dicha obiig:clón ier:nandc j n:e::ospreciacl en ;u
vercadero alcence mientris sc ia retlera a un cóii,:o ier:n:oiógico. Se
'1 \Ierecs esn:i::cionsecrclaio sel;onsitier:Ca ccmo unc,ie lcs ;lernenros
¿,

cu¿ cspeciiicr: ei rnc:cd.o ¡ieuci;:r.c I rs;o no ccnsiiruinr u::r ;cnse cuencil


sabe que Ia deo¡.re.lo,Jia ndcica a.eri::. cie¡tos ¿comcdllientos. 3i]
iescrecíabie ¿ei ir.'sen¡¿ ¿s¡uiio si éi re'".eire que haber subra';atjc ei canic,"llrr ia comunicaclón ie .asos l;oleg:s o ts:ujlrii:s a ios i'ines ce
cliácrer meiccr-.icigicc iiel cr.nino i-reudiano iiebía '--,er¡iiir inscibir la ll invesiiglcicin o Ce la enseñanz:. Sin embar3o. ni esa re.:1a ri ia-s
,l ¡ui:cirin secr::aio ,Jllr-iü unc Ce lu.s :Lernenros esenclr..les de Cicho i;(.::cciLanes aJnrit:crs:n lo cue se:cilele I )u:es:c:J ccn'¡ientn ¡:.1
psicoanálisis, aunque nds nc set i()ícue. se.júl io cue inrus:reel arétcco
né:cdo,
freuciano en reiación ¿ lt lL)c'iíe. i¿,iiritenciacicin enl;e méiicc ]i
Cbse:var itu.. J. :i::renci: de Fr:uu. Lrcen no se reritiól,:eec Ce la lircieiie ao es:i clanrnente esiibiecica. ei liLi:lac.io coie3a pue,_:e
n",rime maneif, f un Jas() i: sr-l ¿xceiencia sln.: que permarieció nds blen enconaixtse en siiuación ce rnrlizan¡e 1; :l lixr:ic :rci¿nle ¡n lt je
c'on [a bccl c:l:rüa en relicir;n r. juienes psicc.].naiizrba.:¿r:ce en psicoanaiista. A lc que se aglegl ri cuicl:l ;i¿i-nnr: nás "incestuoso'' ce
pnncicio c:niilve ni::ic:¡ác::r::eiininabie Ce ir. iuncir;n sec;e:ario en lo que se inlegina,je los .¡Íl¡urits c,,:e:n lcs :;-¡;cs psic,-,.anr.iíriccs ;e
ei ¡'iétoCo ireuciano. S r¡ ,:nba¡:o. ro se oodri desat:ade::i hcc:o dc que crern de1 ,ji.,'án al siilón y,jei siiión ri Civjn. Pcr crro iaco, es un.;i r:,o

:9. -I:::::tc \,::::lu'. L'¿ '-i )i:;j;fra4:a7)ile rrn¿J:c. C¿ncva. CJsil


:,: ! r.':! : t .l.l:i¿¡:r.;::¡,'¡. ?r¡:t.. ! ::ui:r. l';9¡). ii:cuccirin :J ),1i,,-l
t

:,.t ie :,: : :-. ::c l*::,.],¿. :ro(:r.i: : a i.::)¡rua r il.¡ :r: r S:i,¡etore S. lii.r:c.
r
:

66 Freu!, y después,[acan i
,

del desfase que instaura spbre este punto ei método freudiano


al mérodo
en relación
anátomo-clínico el que suceda que un anaiizan¡e en ei
, ovamás
allá de ser una fantasía- Freud, ai
rnovimiento de su cura, después de haber ."inocentemente,' hablado 4evar el chiste a ta aignraal a. una
formación del inconsciente, ha abiérto una brecha decislva
durante un tiempo de lo que pasaba en su aniírisis a su enromo
famiiiar,
ru onr_
body-psychology, de donde se puede enrrever un hecho
amistoso o profesional advierte que" al hacer esto, comerió un ,in"nlJ*go
error, y pate,te: que ernprender un análisis es también un asunro
liega así a reconocer que más Ie hubiera valirJo somererse a público y que,
una ciena de punta a punta" ei sujeto en aniiiisis tiene que ver, en
obiigación de silencio. Ahora bien, un probremaédco de este tipo no tiene su mismo anájisis
con un cieno púbiico sin que nada asegure que ei psicoanarista
lugar en un código deontorógico profesional (¡er enf'ermo pu"d" pueda
o encargarse de encamarlo compretamente ni quepuec
quien quiera y 1o que quiera de su enfennedadr), mientras que "oor",
Io tiene por convertirse en é1. Ivfuy por el contrario, acoger la
a, afo niori, t áin*
plenamenre en la ética del psicoanálisis. En psicoanálisis, la función secretario
obiigación como un elemento der mérodo freuciano es equivalenre a
de silencio no incumbe solamente ai psicoanalista; que eila tener en cuenra
recaigJsobre que ranto la acción dei públicc en ei anáiisisil como
ei anaiize.nte es de 1o más común: la función secretaio no sietpre la del anárisis sobre
es el (o los) púbiico(s) es cort 1o que cada análisis iiene qu* *r,
deienrada por el secretario ¡itular. no
accesoriamente sino de una manera esencial a su er.ectuación.
P:ro esra virtud del silencio no es mds que uno,Je los princicios de una
Hay un vínculo estrecho y esenciar ¿nrre ei púbrico de cada
ie¡er*inación más seneral, aqueila n:isrna que definió como tai la anárisis y ia
tunción secretario definida como d,eterminando ia ononunida,j
iunción secreraric y cuyx tiirmura se condensa en una afir¡nación de o ia
inoportunidad del decir. pues en ei andlisis no se ira¡a tanro
![i;eilie B ianc-S¿nchez.r : "la erección cie decir o de no decir penenece ai .
de decir c no
al psicoanalisra como cie llevar eso que, der cecir no
secretario". A-hora bien, cuando un psicoanáiisis se reveia efecti.¡o da dicho, no cesa de no
poder no ser dicho, eso que se ,ama sínroma. ar iugar
lugar a que sea reelmente bien planreada rratada ra cuesrión de una de acuer púbrico que
r/ es tembién el iugar conde ese ciecir lo seri efeciivamenrc.
eiección de ese dco. A este iespecro, Lacr.n pudo hablar de una..érice,iel Lc que signa
ei comprorniso de un sujero con su rnáiisis es precisamenre
Bien-Cecirs:" sin igaorrr en modo alguno, según creo, hasta oué punto ei hecho d¿
que él habrií romado nora de su síüroma danco tesrimoaio
esra fórnula podíe iar lusar a excesos (oue no faitaron). ie ou¿ cse decir
no era ll:vaio a su lugar.
Tcnar ncra de ia incidencla de la iunción secre:rrio en el r,nói.isis ¿xi,¿e
A est¿ i3s'ecic. Freud inven¡a su ncción inau,rurai d¿,Je:ensa. pues
en odrcioio o,.te Se ha,ia g¿¿t"¿o haste qué cunto ;rrla csico-andiisis su
invención de un :rércdo a la vez de lnvestigr.ción ce rriiarnie¡io
eitcli';o riei:e pocc que 1/er ccn un a. puenxs cerradas. La rannsí: tiei ;r es a¡í,-.1
l esia nc'cirin- E¡ er'e:ro, ¿cón:o irxarí ii ese cecir en suspens() ai curl el
ccnsuitcrio anliiiico ccri:o luslr con:bra':le. ce-:d,i:, ,ie ouerirs'
sínrcma rei'nire l 5o sugirienco il sujerc ieci¡ ¿ilí ccnc¿ il c::iur.c¡r
accichai.as, co.iro un imbiro ma¡erno-seiviano. proregiic iei muni. nc
d:cir (el acan.cnc ce la hipncsis es 3(lr lo ianro c:.-:ciai ¡ara ia ,u.rrr.n
ilamado exteior, así ccn:o rambién el J,e una piez: negra cn la que
ei p,ríc:ica de un ¡u¿.io mélcCo) sino. a.l ccnrrario, rornánicic
anairz:nre enrian¿ murico ,Je sín¡omas ,arr s¿iir,i¿ allí ceseiba;l::co ai pie .je ia
Ie:rr en su ::s;:ic:ón: prccon;i:iuie ir:e.:la llar.ei¿ ce la:scc:aciin
ie elics. sin que durrnie rcdo ese dernpo ei mundo ''exrerc.r" h:.,,a iibre, io Cescr.-:z a -L,rcr.n io advinró-,J* ru ,*rr"nrrbili¿a,l en r:nco
ii:ier"'enicio y sin que aquei ha.v-a suitio algún er.c:o, :sa iinrisír su.ie:c
:uece. de la enunciación. 'i' ei osiccenarisia crr!=. scbl" sí esa
pci;::;:c, cf;e,.:::l¿ ¿ Jic:o rneli;l¡:te l: sec.:dda,:,,j ..je un :s::cio cr ¿i iesccnsabilic¿c.
Sin enbar-zo, esic :lo podnaser;araasumiriaen iugarcer
,ui.,o, pseudo-
sc iuc iú n en ll :ue : i ;:c:r. cie.:nerr¿. :.1() cbr3nir:.f,
su :ere:lc; o. Es ::rs
bier p:ru hac:r ju'::r, en:i lu,J:r nismo rje esie hacerse c3rgc. la i.unclda
5 i.-liirrrlic 3l:nc.Suchez.,;p. ..:r.
á1..j. L¡m. 'i!livtton.,¡o. tjr..a.65 ,.En esp:.i:r--i" .i;tt;a¡itrttt.: l¿!¿r..15;¿ia. ,¡p.
se:r:::no :ue. :;re',cahánccs¿ ,i:l :l::co crcdu:iio :cr i: :s"::::::cn
I iii).

ó-1--)io ¿s cr én ci§.to r:i..; muv giierente ú¿ lcs ruesifos ¡dcncci:ticcs


,iic: r¿c;,.:l::.-c. !l
68
§
Fre,¿d,.,¡ desoués !Ácsn
Dei métodolreudiano ó9

iibre, puede hece r que se presente Ce otra manera la dist¡ibucióh de lo que sr:jeto ya no tiene necesidad de ese "hombre bajo0s", d,e ese "liberto
está para ser dicho y de 1o que debe ser localizado sobre "la couche6s',,, empieado en los asuntos confidencialesóe", tal corno Táci¡o ilamaba al
en esÍa cucha dei secretario, que hace ahora de objeto de la honesta secretario.
disi:irulación por haber sido reconocido como quien en un de¡erminado
momento no pudo servir mejor ai Cecir público que esnndo callado. pe¡a I{aber señalado ia incidencia de la ñ¡nción secrerario en el métcCo
termina¡, ¿qué resulta Ce aqueila coucke? SerÍa eiróneo suponer que ese ireuiliano confirma que está en ia lógica de cada una de las aplicaciones
callar, debe necesanamente lerminar por hace rse saber un día u otro, aún cie dichc método el tener un fin.
cuanoo tal pueCa ser ocasionalmente el caso. La función secretario, ai
iguai que la del psicoanalista. compona el ¡cto Ce callarse y d.e ser, pues,
una tumba, como tan justamente io dice esta expresión francesa. pero
¿enlonces qué? El callar, ¿se evanescerá con la muefe de su portador?
Esta no es tundamentai¡nenre una solución pcrque vuelve inCefiniria la
relaclón del secretaric y dei sujeto. ¿Entonces?
Para avanzar e n este diiicil problema y llegar al punro en el que la iunción
secretario maniflesta toda su peninencia para ei análisis, conviene
advertir que la distribución del decir no es tanro tsunro de comunicación
como de gcce y de pius Ce sozar. Practicante dei "eclipsarseft', ei
psicoat¿lis¡a en ianio secretado no pueie más que llevar hasta ei i'in su
iógica (la del eciipsarse, pero tanbién la suya propia -en ianio cue haya
siclo ia cel eciipsarse): cn otras palabras, no puede rnás que eclipsar el
eciipsarse n:ismo. Para nosotro s, De la honesta iiisimuiación Dei-manece
a irilvés de los sislcs como iln ie;ito crpital por no haber hecho trxmpas
resEecto de csa lógica del eciipsarse, El eciicsarse no puede, con roda
lógica, más que inciuir :i eciipsarse rjei ecli¡sarse i ei obsesivo lo sabe
ter;tciarnerrai: no cuer.je, pu;s. mas que incluir iaraoién C secrertno
mismo qi.re ier:nina pof nc se: más que su couche. Ob'iigada hastr ¡al
puritc, ia ¡unclón secrerario aCguiere entonces ese gi.ro panicuiar en elque
:ie ioria ratenie qu;, le.;cs rie ¡ener su ccuche, el se.Jreto.rio se encuentra
iilmaCo t. s¿rlc¿. De esle nctio, su ¿cto lo desdn¡. ccmo :l ac:o Cei
psicor.nalistr o incluso el ¿:r ;mro, ir iet ese "desLecio Jel gcce,'" cue,
re:iizaCo ccr¡o ral, como deshecho, hace posibie e[ declr, ¡e;o un Cecir
eue paru ser lle','aüc ¡l é1 hi sabrCo iocaiizarun ú, un celler. Decididamen¡e
pue,Se,Jecir:e, en ei'ecto. cue ha-v cue saber cailar. Con:sra hazrña,:l
su ieto devie ne jec:etario dc sí niisno ,,- ei anáiisis :ncu,entia. su ií¡riie. Ei

1--i ir^-5 -)i;'..'.- to. c:!.. ). 19 iEn ¿s;:liu.l, Rciittrtut¿ ': i:l¿t,i:ui* ,¡?. .::t.. ).
í,3.-Tcrqu:r; .1;:ji::,,
59.- a,'r. \i::::l.i 3'Jc
¿

I
¡
o t
Baltzas lacanianas
en campo freuCiano

la ulgtz,k n p'uñaa * d oiuw & L;s críss .+x o'al,cit_t.


Gilles Deleuze¡

Donde se trataaquelclirnatanceracurísticc.v sensitiva.mente pers€cutorio


que distingue a ¡oda cultura que puja en el camcofreud.icno; luego, cie!
alumno de Lacan a qt¿ien le tocó la cargace cecir cómo ese campo habrá
sido bali:a¿o por Lacan.Dande se muestra tanbién ro que rest¿!;a ccn
respecio al esto.ti¿s del osicoanálisis como discr.pLinct.

aq
verCai, pero se e.rpliciró inils aún a canii J.e \{equia,,.eio cuien. ¿j
introducir el mi:oCo en la crd.crica pr:lítica, no :udc hacer orra ccse que
descenar de su i:empo ce :piiclc:ón a ias comui:iiaies ieiigicsas csi'f,
dir:cción y suere cerinanecía.'l única¡neate en is nianos de Dios. p::o
h det-iniuión de un clmcc no ¿s reiuc:ible r ia i;ijnicii_rn tje un ccnju;ro
.
Ce r.oiiclcicn:s. E, ;ue l¿:;<;iusiúi: d¿i ¡zery ie .:s r':it:cies ccr.sul;:s
que le es¡án asl.ciadas val,J¡, a partir Ce Jvlacuit.,,eio, ccmo ur:¡
oetenninectórr del camco ;rocio al dei naéloCo ml::strx :cr sí siilo cur

i Ciiles De:::¡:- ?c.u,'zari¿::. Pr.s. )'f i¡uir. l9qrl. :..1.5


Í:eu/, y desnui.: lttan
Aaiizas bcsniaMs en camzo Frcuii¡;no ?j

\l De iguai rnanera Freud: la especificidac de su mérodo imprica la más aguda y urgenre la ceterminación cie lo que han'a que isas i¡es
cielin:itacirin ce un camFo en el dobie senriiio que acaba de ser crisis
no ñ.reran sin embargo absolutamente extrañas las unas en relación
\ expuesro.Fsto se comprueba con sóio connparar ei abanico de probiemhs con
ias otras, y no se nos rorneran lugares sin reracióa entre sí. Toco el
y punios cie apiicación de! análisis con los de su vecina pióxima. la interés
ciel método consistía, ya lo habÍamos advenido, en perrnir.ir esos
ptiqui*d", inten¡rr insraurÍ:.rse movlmlenios sln que por ello desemboca¡an en una pura disoersión.
I como ga cijscurso coherenre sobre Desarrollemos ahora eso en lo que habrá consistido la incicencia de una
\l llr
llcuenis
rooa una se¡-ie d.e i'enómencs que nc podlan ser considerados
de aquelias implicaciones dei métocio, su delimiración,le un campo. y
comencemos Dues...
normaies n.i paroiógicos iporque son ranro io uno ccmo lo otro), ral como
ll
el :ueño. ei actc fellicio, ei chiste, ei orgasmo y la c.ngustia: mientras que
ll
l a la esencia dei mérodo ireuiiano. a panir de sus primeros
llpenenecs Sobre el campo
ll pasos. no dtsociarlos d.e lo que se ccnsiCen sinrcmárico.
Ei mé¡cco fr+udieno implicrba [a deiimi¡ación ie ,.:n camúo escecíiico.
Y ese carlco, a su vez, vol'.,ía posible (cienarnenre no sin ccnfliclos, Freud trazó un crriipo que Lacan ligó a su ncmbre. i\o¡ebie v:rtui ie la
rairitccc sin ccn¡radicciones) oiios crmincs disrintos al de Freu,J- iercsra persona: ccn lr. soi¡ lec¡urr. tls esta frlse :ltl :c¿n:¡nos cecldir si
¿De e i nombre que calirica rl campo asídesignadoes er de Freuci c ei ce
qué inaileru,(s) l S i es correcio, ccmo lo hemos adeiantad,o, que "Freuci. y l_¿cin.
üespués Lacan" signii'lc¡ ia introciucción de un raradigrna nuevo en ei Cienamente, no caben dudas y menos aún después ,Je lo que acabam,cs
cer:rro tie'¡diano -¿s .jecir. en ninguna oirr. Dar.:e-, toco ei inrerés ce cesarroilar ccncerniente ai mérodo freuciano. s in en:bargo, ei equír,ccir
e¡is¿emoióeicc de esre secueiciaccnsecuiiva resia.irá en su singuia¡idac. *eramarical en cuesiión signa le insis¡en¡e incld:ncia d.e un orcbienna
:n :i hecho de cue no cuede ser ie,iuciria : ningunc de ics Cos cesos basianre panicuiar. como se ,¡e en el hecho ie que. si no se es¡eró a Lacen
cis:inguicios por T. Kuhi:: L- creeción ex-ditiio ie un paradigina. c:je a para habiar de una -'ej'c¿re jc ;ieudiena" (incluso cuandc ésie f',¡era ei casc
la .iez e,iui.rale : ia creación Ce una nueva discipiina. 2- crmbio ie una de ios cjelrac:ores dei anáiisis), en contrapartida, parece ;:.Cecuadc Cecii
mar:iz oarad.igmálrca ei'l unl disclplinr :srrbiecica. Aunque iio sea inás que ei "canoo lreudiano" es -¿cómo direnios? - ..inr.¿ación"
iie
¿una...
Í acen? En ictlo caso ¿sta nominación le ce-enec:.
cue 9or el hechc' ce su he:erctopíx resDec:o ,je la r:i¡a kuhnirna. ¿sia
rr:r¿uiación L¿car¿Treuc a¿rece ei inrerés cei ¿:is¡emóiogo v. pcr lrr Lacen intrr:iu.;o v esiudió ei ¡érnii:.o "clmrc" en la sesrón ineui:uruj de
ixnio. que iesa¡:oi1en:os ccn ci.ena pre:isiiln su hi,stcd:, su ccnrenjio ,¡ selcminant: e:': la 6ccl¿ ;\'arynal¿ Sute-i¿:;r¿,¿l i-< iie ¡:c:; Je :l)6-i. L¡
sus conilicioi:es ije ¡csibiiii:c. hrzo 'le i.ina ñiane13. un DCco sofisticer, pues. ai cons¡iixr ¿i ,:ecno üe cu¿
se ¡rura¡: ie indic¿¡ cu¿ el :ir¡ino ieLr.can en osici:análisis. si cgce
cii¡. cie::cia nr::ccír;er cei'iniiia ÉLrr su objero ique es cmbian¡--),
cc nc iuy'e le ¿ jlí que ¿ra neces¡.io crr:c:edzrria ccmo c3riitrc ueii¡nir:co
Oresiirse e ccnseauencl,rs ¡e iina manete ccnsecrenie ccn lo cue Lecin
,:ab:i s;cr: v r:'l:j:i:s;eci:l::str¿ c: ;-:ei¿cijn ccn f:eu¿:io cue ::o:s D()i'iii'llr, cra:ils: ceto ista nueva deiinición resuiió enictces ro icr
necesadc er lbsciu¡o: pcilenos cis¡;ensi;:tcs Je :s.r :xi:¿::icla:. sóio ¿s ;s:e,;li'icc.: ¿i ;i;s;icis:;:o asícomo tambiJn ia aicuimia cr:nsiriu.,en eiias
pr:sib ie si se lo e :lfcci ie,;ce l¡ secuencia de isos :ies lie n:cs ,je c: sis cue ,.-bi;, una crl.iis ceiinii:¡ivs Ce un cernco. T¡i coí-¡o s¿ haiiaba
:,.1:cn l9lc. lg-:-l;r lQ-_{. ieq'::nCa iacuesiión rieloi::en, ei camco no podír. aper:ilJ.e:s:c, mís
iiiíe:lci:,_-:s:r:.; r3ncrsj:l;¿::nres
.r" ii¡.-:-,:.
'-- -.r.-..J! C-5,,.r .. :af "l{lbr.:
* -.;J,- .--:iii:j.:íiS,-.,.11-..
ül:e:etiJs;:r:CS
-i,r
¡-.! ái:-,.
-Jiqi
re-'=Jl,¡
i-.e..uu ?.-.,.¡
r¡ -.!uu. L¡
=i dJür;.u.,
^",,^.^ ...'-
¡uufl.iJnlCSlr,l, a) :U::.;:tei¡j
:e íe:1,-::ill..i Ji)i.l
F:.:ii=s¡: aca.'a:,,,r i(l :(lc::r.;er e,:;lr:ii¡ -:.ir:..,r:;l: ::: ;: ,,.,.;i,,.1:r: :r..ir¡icc: Llcrn puso de ¡:iie',e .i..,nro i;=;;;;;;.i;l; ;,r;:;:;'"r.

,,)9' i.f..i 3r:::l C:-r:;in. '5:cor: l:l=l¿. ;n:..ctr:s::Cue,.ie:jic!lss.:ic::


T,-riliOuSe. Í:,:s. iriS j.
\

.74 F¡e,¿d, y d¿spués l¿can Bali¿cs ltcani¡nas en camDo Freuditno 75


.

labró acta públicamente de su "excomunión". pero, por ser polírica, ests ¡Afortunádo rerrocesol ¡Bienvenida prudencia! Por cierto, esto cermite
nominación no deja de tener que vérselas con el equívocó gramadcai que sean problemarizadas las cuestiones miis ciecisivas pare el anáiisis,
antes mencionado: campo freudiano, ¿es el de Lacan? especialmente ésas que inciden. sobre su estatus epistémico. Pero,
Teniendo en cuent¿ esto, ¿cómo sorgrenderse de que el cerí.crer, al correlativamente, ¿a qüé se le abre la puerta? Si Freud no solamente creó
parecer necesario, de semejanrc locaiización del campo en Freud apone una escuela en un dorninio determinado ( en medicina" en fiiosofía, en"..,)
tanto un problema como una solución? por otro lado, sino que también circunscribió un campo, ¿se dirá que en ese campo hay
la solución ¿acaso
no vaie aquí sobre todo por lo que manifiesta de probiema? ivfás aún, lugar para diversas escuelas? ¿Una escueia adleriana? ¿Orajungiana?
¿ Annafreudiana? ¿Frommiana? ¿Kleiniana? ¿Y
tuni¡ratti quese disputen
¿acaso el problema no se halla exacerbado por su solución? parece que
ese campo? ¿Freudiana? ¿Ademas? Aquí, se huele no a quemaio sino a
sí. que la histona del camino de Lacen es también el de un cuestionamienro
paradoja. ¿Cuáles son, pues, las leyes de hospitalidad en ese campo? Pero
cada vez más exacerbado de lo que significa ,.freudiano',.
también: ¿cie qué otros campos se secaraio que calificamos de f¡euCianc?
ide¡ltlficar un "camoo lreudiaao" equivare a servirse de una merá¡bra ¿Se lo rel'erirá a un campo ddieriano? ¿Jungiano? ¿Y tutti a¿¿anti2
como deíctico de aqueilo a io que Freud se habda reterido v habría puesto ¿Laceniano? ¿Ademas? Aquí se huele no la inconveniencia sino la
de reiieve. ¿Una metáfora agrícola+ ? incon'ección. ¿Cómo es que es.oontáneamente existe una lendencia
semejante a rechazar la noción de campo iiommieno o annrii:ud.irno o
¿Física? ¿Ónrica? ¿Surreaiisramenre magnérica? C, menos
rvinnicoftiano,como si no tuviera ningún seaddo, mienuas que en 1o que
específicamenre, ¿espacial? sin resolver apresuradarnente la cuesrión.
advir¡amcs que esta metáfora parece obtener su peninencia cje su escaso respecta a Jung, tai rechazo no resulta evidente'l ¿Y Lacan? "Campo
ccnrenicio. ¿Puede, en et'ecro, ciecirse menos? Freud habda abieno... un kleiniano" o "campo lacaniano" son sintagmas que nos disgustan. E.riiaño.
espacio, ei cual no podría ser distinguid,o de oiro modo que... por su ¿Tenernos razón? Nada lo asegura. ¿Cómo deünimos, sin esta¡ seguros,
nombre... por el de Freud. ranto lc escuela como el campo para así iormula¡ 1o que nos parece? Sin
disponer tcdavía de un aborda.ie bien ccnceptuaiizado de :scs cios
De la misrna tbrma minimai y discieta. L¿can habria hablado de ,.la ccsa términos, escuela y campo. no pocemos de.jar de preguncarios desiic
lieud.iana". ¿Cómo no advenir. en es¡e ernpleo Ce la calebra ,.cosa.', ese rhora si no es que Lrcen habna cretdo ( ¿sin saberio?) la pcsibiiiiad de
mrneri rie cesignar e.llí conce ialta la oalabra. ¡roceiimienro ai cual no una escueia lacani¿na poniendo de lelieve un "c3mpo freuciaao".
hrv quien ao haya recur¡rio:lsuna.riz ,..pero sí, de hechcr.
¿córno se- iei
llan::eso'l Tú concces bicn eso, esa cosir...;A;1, cer:m,-!al See lo cue fuere, a 1i luz rie I "cunpo freudiano", el hecho de habir¡
;No me salel,.. psiccan;iiisis ccri,o Ce una ciscipiina parece. de ahora en más una
Ccsa o camoa, Ce lo que ie ira:3 es Ce hipotecar Io nenos posible ai
cesicnarlos, pero ailí mis,no ,joni¿ un cierto núm.e¡-o Je )zi¡otec!).s ,\at grosena. En efecto, ¿lué es una discipiina incecaz Ce despr:nderse dei
sldo ;*a hechas, en es;ecial cn y Dor'ta. lnte¡-naiicnar ps.vchoer.ci'tric aornbre de quien. ei i;npnmirle su odmer impuiso, delinió su icminioj?
.lsscc!¿¡:icn. De esie moco ¡s¿xÍrios ui.lo de los tjalcs ioiíiicos ¡ei En ciencies, aún en las bientlas" nadie se lrugt eso. Ni sicui¿r: ix.
crobiena : prccianar cr.rc c cernpo lo que ncs ,¡iene de Freud ecuiv:je eeiprolosÍa cuede ccnl.::elirorc.¡ nucho nas lr:nquiia y iiigr:r:enie a
e pn'i . .- a la iPA ce ua cieno númerc ii.e celeri:rinacicnes cue erl¡ Champolion pcrque iio iiere eue ve:. desCe hace ,va mucho iienco. ccn
sos;:ene
( y' que la sos¡ie¡en ) com,c i;lsli::ción: en especiai
és:a. que no es lr xenos
imroriante, le ¡uc cuería ,rescnrar:i lsiccanarisis evicenienrenr: ccnro
,.-^.-;-^^:^ :.Ccn Frege. il¿mo ''ior¡:nio' ¡ un cilnpo cel c:al irav Juieres -ésacs 'rie¡ Jetinidcs"
obcienen:i ;cc:: ios:ísicos. ios mat¿¡nádccs. lcs sráncrnos. los:ui¡licos. jenen::a¡
unc un,lorninlo,:¿l;u¿i ie ¡cuc:¡. Se:bserra. ¡o cbsi:.nte. ellc,:se .rnceal:do lo Jel¡
le ..:usal:robi¿rn¡;: rai(a r¡l funto :s esro ?erildcrl. cu¿ c:i;¡ ci¿lc:: ;c t$la:cr.lo
-lobis: neti¡is:ca. ¡un:croiog::. :strcic,:::, :i,luimla ::¡iio-* -u:'ro
cbsesro::!C¡ rcr :n
-l 1.,:- l:*Lz:::¡n ' :t::.:i:.i:: :::-.,: ¡l¿::c:r,n:ios. Sin ¿nb u:r:. :s¿ i¡r:::ción l¿ jt¡s ce dil;cuur l¿ ¿ l:usur:i¿i i,.:«lt¡lc. :¡:'::
;.' .^-.ñ :- ,or. :ercrzxl:: ie isie :iccc. ¡o .nvriiiia:ues¡;: i¿l'ln:ción.
9a!iz,¿: fucan;t¡as sn cnnpa frc!¡iisno i7

los es¡udius de éste. Pero esto se debe a que e.ros estudios han sid,c tales iugar que parece también signit-icar. Decir " earnpo freudiano ", ..co$a
que pudieron realizar ia performance de vclverse caducos por efecto de lreudiana", "escuela freuciiana", impiica reconocer que el nombie
aquello mismo que los prolongaba. En ei análisis, esramos lejás de un misrno de psicoanálisis no puede venir a susriruirse, como término áe
§emgj-anteó, del cua!.podemos sin embargo admitir que vaie referencia,a aquei elerido ¡.cr indexar e i cam.ino abieno por su invenror.
l._t,1!"1:
como slgno patosnomonlco d,e que uno tiene que vérselas con una Ei campo no es "piicoanalítico" (¡ciertos laca¿ianos intempesti,,.os
ciscipiina cieadfica. uno de los dramas der anáiisis
¿no es acaso el hecho
incluso han pretenclido caiificarlo de "maternárico"i), permanecL
Ce que ningún resulndo ciínico o d.e tjocrrina no haya sido jamás fieudiano. Por o'ro lado, ¿cómo pcCna ser de ora i'lnanera, ailí doncie ia
declarado caduco? consistencia y aún ia misma exislencia de una reaiiciaC ilamada..psi" son
las que felizmente se constituyen elias mismas en orcbieme, las que no
¿Entenderemos ese iérrnino "discipiina" no como si designara un secror
pueCen ser recibidas como priacipios a panir de los cilales se dejari
del saber cienríflco sino en ei sentido ce "regla d.e conciucra ccmún a un
der'inir no solarnente un carnDo sino también un dominic del saber?
grupo"? Cie*as instiiuciones psicoanalíricas ( si semejante calificación
iiene un seaddo detbndible. es decir, un senrido dei cual no se prohíce
dudar) se af'e;:m a este riltima deirnición "Cisciplinana" cie ia aisliplina:
Sobre un cierto clima
constaiandc la cecofonía dcctdr:al que ieina Énrre sus miembros ;r en
ctras Daries. e Llas cromueven e1 cuairo técaico de la cura anaiítica como
crirerio que Due,ie discnmina¡ lo que es psicoanalítico y lo que no io es.
Tomar ei nom'cre Ce Freud como rasgo det'initoric d.ei ca¡npo nc Ceia de
liadie ignora del toio, sin ernbargo. que se trata ie una apariencia. en,qenCrar nurlÉrosas dirlcuitaies. entie las curl*s una Ce ias ¡nu
A¿ernás, ei hechu. de cue esos criieios iécnicos no concernjdan más,"iue
imconantes parece ser ésta : ¿córao discini¡:ar, a paflir de dicho rassr:.
a ias neurosis. ieben. a los ei-ectos d,e iuncionarcerno tajes. prr:naoecer
io gue fbrmará ieeítirnarnen.e Darie Cel carnpo v io que ,jebeá, no me tos
imcrecisos ailí..Jonde son requendos '¿ resuitrn inoceranies ailí conce ia
icgiiin-iar:lenre. ser cxciuiilo. es ,jecir, separa. el buen gr;no ie la ci:rñi
práctica presenri ias más seias dificuitad.es (orerendido "contraro" o no. (pues, inietecribiemeÍlte. ¡cda brecha, iod.c rercño que r.dvien¿ : :se
por poco que :l a.nalista jueeue ei ;uego de su iunción. no dejará cie ser
cf,.r'ii!{) será ircidafirente ubicado en ,Jicha al¡emati'¿:)'l
interroeido p,:r ei :naiiz:nte acerc¡ Ce su rslación con la lev, .¡ se sabe.
escccialmenie cespués ie ciefo ¡raba,io,;e G. Deieuze, de qué esrrrciura
E-
Lir el--_v. 'i --:"J^!u "Eieui"
'ij '^" vr,-¡..u, I rLuu cisit
u¡i!J.rlqt.:u ie ser,:nl';ccl
nuc::o ug )úi Ji¡1 /uL.J :ezón ;c
¿a .J¿u[l
:il ce i,-
Gua.
clinica decence ie resDuesi¡ que el:lcnces ¿s_grime el conratoT). A pesar Cescie que Freuo no puede interveni¡ é1 rni.rmor, decenie ca ,:rtn ne :id:
ile ¿sa acanenci.a,ie un cnreric iécnicc ccrnún, se e,-,ciuve, Dues. la Ce io cue se insdrucicn. es Cecir, sus guaiiia;:es) cii:
ise: genei'r.l¡:ien:e i:
presenración psicoanáiisis ccrno si hubiere'ya acr¡uiiio e i estarus de i:ue Freui na ,iicho. Esio ¿s '¡eried incluso cu¡nio se ¿ssd;:',a ,rrna
'1:i
una ciiscioiinl. ea ei senrido.ie "prác:icr. cu;-as regles :Cmiiidas, no son igrmuii: que F:eud hai:ría cresenracc cciao cdredr: cecisivo .l¿i:
c'¿es iic.nacles : c n'lo irles". ,ie:¿;=in¿rqué es psicoaeíiisi::)is;r ioqu. nc lo cs. )lo.:xisi¿ nin:,-:na
ri:ón :ar: que üila i'ór¡lui¡;enetanle -peÍtse:n{l:; ¡r:r ejemcio en ia
El in¡e:és Cei :é=iino "cxinro f'r:u¿irno" resuica resiCir:u¿s..r rdmer
crienc:¿ ¿n !; ¿-zis:¿ticia i¿l lnccnsci.en¡e- se: rn:.iiienica iuelr cc
lu'::r, en su '¿rcl'o nisi'no, inciuso li': rlna suene de es¡aicrmienlo en el iiis¿usión';, üe negho. ése lc. :s:i c:so {.se n:encioaan simuitáneamenie
Liuj -:'-^' ' '-" qult
'iJ¡¿Li!.L*J '" ' -¡da !.in;. :ci sí soi¿ es¡á leics de ¡cl.rC:r ios nunros
ó.Q":. J. -:can. teninano ilei lj ,..1e:nero,:e l9ó¿:"i...] ¿l :xitlorCrnarlc jl .
¡lreiorninio.
Ínaili¿:.i:i:rrcn!o c:¡-ri rcll,:iosr¡ ¡1e ics ::rniacs ldel¡¡nc¡:s ;-or lrgr.i ¡¡e:§'.i".:!:uf:J :J ii¿ , :sil :,. ;onJunleinenie, i;s :res it,iñt()cr) ;ueden i:ce:ir-r).
erped:ncl; muíucr. ;cca e ué se ::i¡c:ona I ., Se lrli¡. ¡c:so ,ie un leaho ¡:u,¿ ror¡b ls. in,J,;
sor?re:ii¿;l:ges:¿:liiionxiei¡sclsÍtc::Ls¿l stqur<tte: queseíl:i :crnercv:lúnrcc ¿n
ir,ialer:il!:iciún,L:saateac:tr.::1 ;.1r.:i:;e:u:oncf...j ei iraberrnrxjuc:coics;cnceilos
no -;Ú io r unu¡me:rt¡ics ¡ino t:¡Ínclcfl its,: ue :erinanvcílt lsilJos.,"
:

7.Ciil¿s icicu;:.'?:sscÍt!:c:D0 i¿,iic:le: !l:scc;t'in J.rcx¿r.,.,/rr..rr_..: r i(r¿tc. Cillcb:.


i'
-. ,--,c1. . ;6';.
'a--:
78 Freuú, t desgués ltcan BaLiu b¡aa¡sut en cañDo Fre*iiano 79

La apelación a Freud como criterio ce juiiio se producd -contrariameote eomo criterio, no es miís que parciil y torpemente operante, es menester
alo que se escucha decir a menudo- sobre Ia base de carecer de un d,osma; hacer todo lo posible de sue¡te que no haya que ser'¿irse de é1. La
esta apelación confirma esa ca¡encia, la admite corno efectiva. El rexto instirución priviiegiará, pues, ranro entre sus miernbros como en la
[reudiano no ha sido tomado en el análisis como un texio sagrado, seleccién que haga de ellos, a los que sepan a su vez repeir mejor lo que
rntocable de por sí, aunque diera lugar a otra serie de textos (una los renores del grupo digan que Freud ha dicho. a los que, cuando una idea
,Cogmática) los cuales sí podrían servir d,e base para que fuera proferido apenas penurbante les venga a la cabeza, se desvivan por sacrificaria en
un juicio de herejía. |.Io es en este sentido, no es como un escriio el altar de Ia ideoiogía del gruoo; ellaprivilegiará rambién a ros oue sepan
dogmárico que el texto tirmado Freud "sobresale'' en (la palabra es de inhibir mejor toco acto juzgado inrempesrivo. se ¿cuerda así un premio
lfichel Foucault) la lireratura analítica. Al referirnos a él como a un a la faisa modestia, a la meCiocridad, a ia ausencia de vagueciad, en
criterio, ¿lo dr:gmatizaremos? ¡Pero se rrata de un camino! ¿No lo síntesis, al conformismo. Aquí Freud, a falta de funcionar como crircrio.
malograremos al pretender tomarlo ( si eso fuera posible) por 1o que no estomado como rehén: su texro superyoicemente es_srimido se transforma
es'l se adviene que la dificuhad de remidrse al texto freudiano corco en el instrurnento privilegiado de una activa aungue no dicha poiítica cie
criterio es. por lo menos, doble. Por un lado, está el carácter plunvoco de esterilización. ¡
los enunciados freudianos, siempre susceptibies de ser discutidos, pero
cada uno de los que en el canFo lieudiano se'¿ieron rievad.os (Dios sabe
iambién está la enunciación de Freud, en reiación a la cuai parece que se
por qué loca razón) e haceroír una voz cuaaco nada les impedía cecii cue
nc's fuerza a un camino sin salida desie el momento en que damos a sus
era Ia de ellos en la meCida en que ert la,1e una e,rperiencii cuando, pcr
enunciados el aicance de un criteio discriminatorio. 1;
otra parte, no había que ser un gran sacerdore oara advertir rápidan:enr¿
seen. por e.,iempio, las condiciones que det'inen el cuadro cie ra práctica que resuitaba discr:rdante, cacie uno de esos. dieo vo, ruvo eüe vs¡ ssr]
analíiica. Freud las presentaba como ligadas a su persona y admiría que aquel eugenisrno tie inrención esieiiizante. Lacan no c¡eó de cabo a iibo
otros podían lroceder de distinto modo. llis eiiá de esra observación, ia eI probiema que había encon¿r:d.o con, luego en, y lueeo de nuevo con la
instirución o más precisamenie aún 1o que )li;:uel sosa ilame ce m¿nera IP.\. ¿cómo esra cuhura del camro iieuciano pudo lles:r 3. ser disfrezr.ci
tan ¿cjecuada. ei " espÍriu Eiringon", debía transforrnar esas cr¡ncliciones ce ¡ai naneraque un lVinnicori ruvo cue ietbrmar, sí: de-rbrnar r.esir iue
en regias cuva inobse rr,,ancia podía consiiiuir mcrivo de e,-,clusión. Se;:ún su exlresión) sus crocias reonts, lara poder niosirii que elias se
se ve. el criterio asÍ exraírio de Freuc iesui¡a tai ai precio i.ie desconoc:r desorencírn lóeicirmenre de ias ie Freud'? o inciuso; disirazalJe ¡ii
uni posiuia enuncia¡i'¡r. prociamenre freudiana. pero. en crmbio. s¿ manerx que una !t. i(]ein no renír. mds aiternr.¡iva iart hac:lse oíi guc
nilnifiesia cue la rccpclón de oicho cri;¿no no está en r.bsoluto:n:l aicltrr a los,:iscl;ulos a cre.iic:r ¡u,lcc:inr has¡r el puiiio en qu: elia
ori.ler tle una eiaboración dogrnárica icrjada e panir,jei rex;c.,je Freuu: (ella: la dcc:nna) lu¡se "ociilc¿:i)" ¿Oué es lo que ''es:ani;bar" ie :s;:
;etra¡aiieun:.el¿cciónsocioLó,gica,iesui¡anteüed.ererminaiisreiaciones, culiure e winnico¡¡ cuando se in¡ni.scuvó en ei ccn¡lic:c A. Freuúlv{.
'-le fuerzr en los gr'.:pcs analíricos, ,Ie un rn.vilegio acordeco r. unf,. ñi.ii-ierf, Kieinl Sí: es-crn-¡a-bu ('esa üe su ¿r.oresión). Cualcuie:r cu: h:,.:
dc hac:r comDri;metitia. en crimer lugrr. con e[ Ins¡iluro ie Bcrlín míninrncni¿ ,.'isi¡"Jo il ais¡c.r-i¿ iei ::lovinien¡r: psiccaniiíllcc si.be cue
rEiiingon), Iue,:o relornaCa por ia IP.\ en ccniunro. Eviden¡enenre . rs h¿chos cono ;cs que rclban ie se: ie:,:ir:,os a pri..cósiro .::i ,:i:.];o i:-:gl:s
i-nús uue rnotesic rjue ias cuesliones csiccanaiíricrs :san pdne:r: lecucidas dis;en mucitc ,ie se: :scecíilccs ,le ese giucü.
¿ croblemas iécnic'-.s v pri.c:iccs pafi seí ¡nradas e cr:nilni:aciuin nc por
i') qu3 iiias son 'i por lc que va han deje,ic ile se:. parf, ser :ci:!:eiai3.s en ¿Córac:s que ui:e ¡:tiarr:.:ilr-:..) :¿,:e Freud. que ¿x:rrci:io
iust¡.ii.ieaie rec:'oi,il ccr-iio ur.i sc:io ri: ¡iie iiescc. sc :i;ó:l cr.:n¡c
:':91:ir::cnic.s lot' su de conaci,jn rl ciano socioiógico.

5s r)tl] consecuencil'zicios¿ de estl ciit'icuirecl de hic:r Cc F:euC ui.l r l. v ,\.:nicJ(:. L¿::t.s .i..!::. ?:-:s. C.::li::;i. 19ts7. : l,)
::i::::rt q'-:e scn:,,erj,¿üe:¡::.:enie Jis;:::::it:tcnr-r. pu¿s;,;,:l¿ :i :¡l:ir.r.
1:;\,.) ^
30 i;reu<!. v d*pués Ltcan
7¿li:ts i.¡cuntunus ¿n ccnlo Freudiuno Sl

funcicnar como un cepo? ¿Y qué resuita de ei.lo ipso facto para quien cGntinuado en esol:. ¿Qué sucede si Deri-nanece no distinEuido un crirerio
ienga aigo que decir en un campo así cultiv:aCo? Ei espanto surge no de simbóiico derermin¡n¡e de aquellos que fcr:nan parte ;on toco derecho
un criterio dogmático comúnmenre recibidó que nadie recusane sino, ai de la "hcrda sal,zaje"?
conrrario, de la falta rnisma de un citerio ciaro y disdntc que permitiera
A esie respecto, Lecan inscibía su ''Proposición rje ocrubre de t9ó7 sobre
deslinda¡ lo que depende del campo ireudieno y lo que no. A i¿ir¡ de ral
rasgo discriminante de lo que sería ia cultura del carnpo freudiano, ia
el osicoanalista de la escuela". Fuerr. de esta exDeriencia oue hoy no
concierne mís que a una muv débil pane de los psicoanalisras, ei
situación fundarnentai permanece siendo ésia: nada de lo que pueda
resultado más enojosamenre inreresanre de la aoenura de un crmpo
proiucirse allí puede pretender exi,stir iegídmamenie allí. Ve mcs te¡nbién
que, salvo ei caso Ce quien declara desvincularse de él (lo que, por otra lreudiano en el que f'aha un cri¡erio posirivo de pertenencia pero cue
par:e, no deja de ser prcblemdrico), todos los cue lo marcan ccn
dernanda r cada uno que se produzca ailí como sujeio, consisre en ,isio:
si.1s
vienen r inscribirse en esre campo los oue con Lacan -citanco a rr-aie:"¿-
huellas reivindicrn ;cn ranra más veherncncia ¡.trreud. cuanro que saben
designaremos como un " pueblo de únicos", una cieta especie Ce
muy bien que no se ciispone de ningún rneCio simbólico que oernrilr.
sujetaccs, especie a clasificar en el género ''prot'esión deliranie,'. Fi qije
deciCir ilc que nc sieniiica que todas esas rei,¡indicaciones vai_ean ni gue
Lecan hava copiaco ¿n su iesis ce 1931 scbre ia psicosis par:noica las
ninguna de dichas im:pcicnes no pueda ser nuncs probiemaiizada).
rrein¡r. líneas de Vaierv ,-lue iius¡ran esit ilanefa tan par:icuiar Ce
Sin ernbargo, esta culiura que tan fácilmente genere un micro-clima de prcrisión (se trr.r¡. de la cita rnis larsr de la lesis) no nos parece un hecho
3sDr.nro sclo oi¡ece estr. cr.rt cue se nuede juzear pe nose. si no negaiiva. menor. aunque más no se3. oorque subra-va hasra oué punto Llcrn se
cuando r:biiga a tal o cual a pagar un iribuio ian pesado (¿habrá debido disrenciaba de un puebio d.e inrercrmbiebies (ei de los sanos cue cuic¿n.
también Lecen .como Wilnicctt defornar su C,ocrina parx volverla entonc3s ¿ncenrados en un oc Cléramblrult), acectanco ser si¡u:jo :lr
conibr:le'l). En efecro, la ialta,je cnteio. junro con ia acimitiCa penine ncia Valerv l/ como psicuia¡ra en ia ¡risma vere,ia tie ésos ;- ésas :ue debia
ie un cieno núrnero,le análisis iociies pero aún no serian:en:e ciiscutidos :uii,ier. Fie rauí ei lex:o ,¡aied¿nc.:
iel síilromr neurótico. et sueño,:i laosus. ei ac:o i-ailiric, ei chiste, en Llamo ¡si [prolesión Ceiirenrel ¡ tctios esos ot'lcios cu¡c lr:r.c:c:i
síntesis. iodo aquclio que 'ü.oera corno cccien¡e de la hrpótesis del insir¡rnento es la opinion que se tiene ie sí ¡rismc. y cu)/x m¿i::l
inccnscieni¿) hac*n del camoo iieuii¿no un cunto tle apeiaclón -que hr. Ddrnenes iacpinicin qu: lcs ciics :ienen ue vosotrcs. Las ¡erson¿s c,::
iunci r,.nacio,; que :uncio ;o mo ¡ei- par¡. cua.iqui ere uue no aCmiia co mo
n¿ i::. -'leri:en. ccnsagredis l una j:3rnx c::n,Jidrtur:. son sl-::cl:
váiic: i: rcc-:i,ia que :i crCe:: :ctual .ie r!.:.si:i' ncdena sociedr.C ieser'.'l: ne'JeJan'Jmenl: iili_¿:Ces ic.c u¡ :i¿ao ,ielir:o rie grii:de;r. ü'-:: Jn
ll
it locurl Pcr oric iad.c. rar: entie.rer el alcence de la subvers¡,-in cieno ue i inc,1e pclsecucitln ¡tra " icsr.'.' rto rncn¡¡ ;i n desiinso. Er:;:
iieuci¡.nl:escecio de ¿se ¡ccg:ia. bas¡a con iomar::c¡¡ ile la rncrlirlcecirja gse Cuebit; .je únicCs leina ra i¿r; ¡¿ rrs.- iLr qU. raCie hi ..:e.;tr;i:l:t._;

ixcicai cue ¿lh eEoft¡.:n el binadc rné'¡icoienier¡:,o cuando. tir¡ánriose ', ir: que nrcie;lnds hrri. E:. c.i r¡crcs. la iey,je los ne.lcres. es i.-,::r.
,t-.r.,,,-t .,...-,i4 .,¡:.r-a--r=..t-¡.rÁ..,..¡,r - :
ce ias vrdadrs ibr¡:as,ie ia iccur:. in.¡iti l1 rTécicc, si es que quiere
(l:drunoJ¿¿llcsi,.il,.i:.u..iste,rc,r.soirellin¿,r.istencl,aieics,:rils.
f rf,d:ic:]f ;cmc iai. ¡ adEiiiise como i-io sieaCo nLr-;ucc, üornc a,c ¿s¡indc
'- '-r" ; ' Ui¡ '-^r' eJl.
"- ':vtiiUlU "::ici¡li:leii:
il.J:¡irU.i:, Cri¿ler;e:i
Ut.'-¡ v.lLÉ :c su :ni¿r=,: Es¿:ulttu'
rr::ue':e ra, *á, ¡r:ciosc, l/ no es uni: de los melores n'lii¿¿rcs ie1 il.l:r,:rc:: iatl¿ r i.io cun :i:r:il:i :,:c :i :siccl¡lii:sis iuncr¡naca iomo rr¿ :re,,tra::i
ri:..,..,- i'iiir,,r.o .1 .i.J6.: t..
,;-:rJ- j.i:rglc:;. ':t)r.!tDtrn/tti;c!.T.i. l9{13-19:j. Crr.ú.!ji:,
:'j.Í3Í::a\J1c§ri,t-'r -i.
-t E-c,,i -1. :í.',: :j-n
'-Jñ,.. ^^-^:.rlm>-rr
: rL-r ?rri.. ioql. r.-lo 1..., 'l-'.i:j is i::r¡!3:l '-l .r,i:ict :uc :os c::iti:::ri:sor::s. lci
i¡:Écrcos'. ;3::r.l::abr,a;iio::¡::.)s.:ii:LaJ .o;ue.\¡;r,)rcie:;. úa "nresiio Jl..i)
¡f,rcsiÍr)s. iuc ¡u: ics :iiúsofcsl Jrle ici:l¡tr:io ,: -:n ¿i J¿sculnn.i:¡:o is:::i:r
i¿alaiLir.icnio:.:icii¡i:lc¡.icil,¡:ostu:::r.lJrr(É:riii!r:el ¿¿seo.=t:csJr-.)ia-t!.
u:r,j:¡ :c¡:::: .:1rr!' lra::ncr¡r:a:os;blc:::::: ¡:ise:1. si iie:r ¿n i: :-óriluj: 'i::::;c;
i. --./, ,.. ... :,-^-. .: -,..- '
'J::..:U j1 rr j . j : ;.i,\ .i:;j;:::J ::j ji¿ :L). L-jl:irj-- : ,: f l:nr) jJr ':j::l:.-::.r'
.i ',.o ¡-.
82 Freu¡[, y desoués Ltcan
Eaiizas laceniarus en camoo Frewliano i3
t
pero a los que es necesario arrancarres !
su cbnsentimiento de que no de su suelo, luego esruiiar, comprender en sus contrf,dicciones la
existen...[...] Si dudáis, buscad pues culrura
¿¿ qué riende un Á.jü;;;; I
tan particular a Ia cuai dio lugar. I.o que esraba y lo que queca e:.cluid,o
no poder ser hecho en ab§oruto más que por I
un individ¡.lo determinado, de estudia¡ es el camino de Lecan independienrernenre del sueio en el
y que depende de la particularidad de que
los hombres?
se marcaba su huella.'Es cierto que, en una esp€cie de rizo a lo Escher,
fue
Luego, Valery desarrolia la metáfora de dos elecrones que esencialmente a partir de ese carnino (pero no únicamente) que hemos
serían
inseparabies en su respecdva singularidad: podido renombra¡ dicho campo y poner d.e relieve cienas *rpr.iñ.id*d..
una [de las dos energÍas] r-s er etemo movimienlo de un de su cultura.
fuerte
electrón positivo, y ese movimiento inagotable engendra
una serie de
sonidos graves a[í dr:nrie ei oído interno distingue sin
ninguna pena
una prolunda frrse monótona: No hay na<ia rnás-que yo.
No"tr"y n"Oa Sobre el cogito del alumno
mds que yo. hay nada miis que yo,yo, yo....E, .uorro al pequeno
Io
eiecrrón radicarmente negadvo, grita en er extremo
de ros üudos v
cala y vuerve a carar de Ia manera más cruer,
er rema egoísta
sí. pero halz un tar...sí, pero hay un tar...Tai. tal. rar,.y
i.i Lacan fundó la escuela freudiana de perís, más exactemen¡e la escueia
",.o,
t"iot.ot...pues.t liancesa de psiccanálisis (pues tar fue su primer v efímero ncr¡bre),
nornbre cambia tan a menudo...B
CicienCo:
¿Por qué habríade so¡prendernos el que unacierrapero reladvacacofonía Yo fundo -tan soro corno siemDre lo he estado en mi relación con
sea la iegla en ese puebio de únicos? En cieno ra
senddo. juzgaAa. po. causa psicoanalídce- 1...1
r*1
ejernpio. con la vera de un ordenamiento "diagnóstico
estaiíslco,,, ei]a
es eminentenenre preciosa (r.i menos En tal permanece el pcder sierrpre vi.¡o ile ia ie.;enCa oei iuncjeCcr
no se pretenie haber resuerto [cs -erado
problemrs que n0 io scn. ni se niega a priori solitario lFreud, por su cuenra. o lo que éi creía ral, se ocucri mucho ,le
1a ambición ce resorver
probiemrs clue pueCen serio). aiimentaila) que ilo siempre se alc:nza r le:r iireralnente esa frise de
¿por qué nos escandai.izaría eI que ia
irrnsitrencia irter-renga eilí determina¡do las Lacln, dicho de orr-r. ñroner?, a iomar ncca ce que eil"r no iice ¡:ica .iei
erecciLlnes que, sienáo a la
vez pciíticas erado de la soledad en cuesrión:5. Ahora bien. ¿s un i:echo, r¡n hechc re
-v de 'iocrrina, aparecenan cemasiadc rbieriamenre como
ín¡imas' cuanoc se sabe de ia viorencia ce cnunciado. que se recicbla más en su enunciación, r.l inelos ¿n ia sue
los ccrilbaies dcctinares en ras
ciencias r-nás tiur¡.s ;:r ra ti"rncrón rle ¿namor.ciia¡r.,erIo L¡,crn quiso intrcducir al encar3arie e uno de sus aiunincs ror r,iu:iia
:lr dlchos clebares l
Que ,as escuei¿s se criscaricsn ailí sobre uq moio que i.jo pueoe ipoce, Frangois Pen':er, proi'enr su "1-o iuni¡...". p:nier se rr3ó i ello.
c./'cc'f,r- l-e-tblie i ¿eux,
of ar oe primera señli de un iechrzo d¿ h. ¿sc,.lela lor ios eiumncs .no..
¿por qué ilo reconocen[mos e n esa ocasión lo que ,
tal confi-uurrcrón pueCe componar sín:oma. primel ccm¡roi-niso .le L:can iie:ir¿ ¿ un r::hazc se;:i¿,i:lie:
cje decisivo?
F.euti' rl or;neren pricücesu raé.-orio se habdaencar.:aiio
;lue un :¡rabador ei cue :r:icuio ¡i "1'c :i,:cc... 'I 1'¿i olvi¿r; .:e:s" ac:o.
iecircunscibir con su aspec:o dr ibr:cldab.rr. aiencrna la ;c- ie¡:urc.,ls ia i i:se ¡-.1n¿accra.
'; '..lescifiar un cr.¡'i'lDo oue otiecÍa a ia Iccura una rcogi,Je lr !e'.:ndl i: ur: L:c:r ..ci:::io,:u: h:cla ue:er.d¿r. :,;Jo c: si ,-c.
como nin g,in crrc
ic ofreciere rnies. Nos hiibno. falratlo probarun
,*, ;, i; ,i.""Jir.u
i ..i ¡cques L:c:i:. ",\cié .:e :'ondtric n' . ¿t .1¡nutn i¿ ! i:ai.¿ ,,-: aJrcrt¿ :¿ p.)/s. ) ,-7
, .
C.lS.;i.J..{:i.::1.:. .':2.;t:tt,;.tr:.;,;t¿c.t.;cJ¡¿::;c:,.¡. 1:u.u,:.c. I..:s.:9i.J.:.:_: 3l
:sceioi. li-i ttcziienctu rt¡t Jr¿tqu¿s L:c;¡t 3:. icr:i¿-iit:s¿. Jrléxlcc. i9i9l;. i.;n¡
),i:rl'¡r.¡¡¡c-:ls ic 3--ccrs ?:r::, ¡:i::: ¿i i,)t:ga:Í¡::cato :: )u JcÍ:
-_t;tt :..¿c
Der¡¡l¿. Pr.s. .'rlen*¿ lg9l. p.3.
!i.r;li;mo e;e:'i:oio i-ecli.:0. r:n ltícu1o,ie Ci¿uce CL\nté iue.iiri ii un :e:lo :c;iic:co
r. .'I '.-
'' i i¡¡ ¡.¡
,-,r. JL -i-:.: -. :-i
-;. .r,:::i3 '. j..::v ::-ir.:: j\;.. .....)
'CiU
:r '::rlri
l] F:et¿. y l¿spués tgcan ,,

\a!í:utacaniunas €n cailDo Freu<iiuno 35

Ahora bien, los alumnos estaban ailí yra soreciec no era, por ro ranto, ran Í
abscluta. Ponerio de relieve no es accesorio puesto que el recorrido para que no tardaran en da;se cuenn oue ése no era ei adecuado. con eso
de
Lacrn en ei camco fieudiano no Duede r". iirlrdo iin perjuicio ce ra Lacan, quiero decir el analista, inseparable del 'teóncc, sabía armar el
manera en que esruvo ecompañado por sus alumnos en cacia una ce juego; dicho de oir¿ menera, desarma¡ Ia trampa que le ¡endfan sus
sus
etapas. Nfenos aúa en tanto que dicho reco,r-rido se constiruyó en gran ¿lumnos: "Cú-cú. ;.{quí estemosl ¿=5 esie nuest:o tren. verCaC?"
meriida como una respuesra a 1a'respuesta que Lacan recitió ce sus cataclum. Error. En ia siguiente sesión del seminario se rprendía que ese
aium¡ros (no soiamenle, Dues, como una resouesta ¡ren no err. el ad.ecuacio. ;Tcdo o casi todo.d.ebía ccrnenzrr ce nuevo I Es¡e
¡ las otias escuelas
cómico arsumenio, digno de una tira de his¡orieta. tenía luear sobre la
ps icoanaiíticas).
base de io oue uno de sus aiumnos cecía explícitamenre] "¡por qué
No nos queda más oue sesuir aquí una ce ras consecuencias de nuesrra hablaría'vc cei psicoanáiisis si el lo hlce mucho mejcr I" y cienarnente.
ie esta soiedad de leyenda. Er eiecro, yx no potlemcs
recusacicin ere verdr.il... Duesic que él io decía, pero no sólo por esro. No obstanie el
pre:ender en rnodo alguno Dresentar el recorndo de L¡.can ial ccm,o
seril aiumno, r.i rlecir ral cosa. se aiega como a.lurnno, pues un aiurnno es aquel
en sí mismo o desde siempre; de ahora en más. ya no podemos prerender que fbrmula las pregunrr.s (wiiteenstein. ei ¡lunno id.eal seeún Russeil).
no rs.ar compiicados en esie u;unio ni, por lo ¡anto, en su presenrlción. lo cual no es lc mismo que denand,araciaraciones. o sue bien puece seric,
En sÍnresis. resul¡:: inevitabie la expricitacion ,Jel punro i.r.
iartir dei cuat pero a condición de cue la iemanda sea sostenida. De rs¡e mcdo, Lacan.
nOs sire!'eÍnos D. sosienei que el iecr;riic ie Lacan habnl sido éste v
ntr que tenía ianros elumnos. pued.e sel considerado también corno aiguien
otro. Denosr:f,remos qlre no pr--dna tratarse mis que ie un punco d¿ que ruvo pocos alumnos. Es cierto que ot¡o iue ,Eo ariía. en su ...quernad.or
( briiiew), quiero decir
en su consulion o ( bureau\, aiií don,je recibia a ios
Ah'ra- un pcco de hisroria. Par: los alumncs ¡ue se,guíai: los seniinadc.s analizanres. ¿Es pcsibie que con'ro analizmre, por ei hecho r-jei anáiisis.
de i :cin ( Ia ieiaii'¡a crotjuce acuí un piecrasmo), que iban, :ues.:l ¿i alurnno ¡erniinara por volverse ei eiumno que erx al no serjo en
rilc:los L;'5i3 isSD€C:O. Siern¡re re:;3.51.cos. r la zag: dei :len ( I ¿cei rbsciuro, scbre tcCo. no sienrloloJ Quién sab,e. La ,,proposición ce
estimiba il cltia,je diez añcs iara ese ieiiaso:6). se i¡trrba ;cbre tcdo de ociubre de l96Tsobreei psicoaiaiisr.,ielaescuelr."creebaeiriisposirl,,.o
a0r¡3i lcc:n'lenre, nc ::.niü pam sal"'ar un ieiiiso que :or c¡ro lad,; sóii; aÉio pan inieriogrr especir,imenle .se punrü.
eC,.eÍíiin cr:i¡isanen¡e;cmo tal. si;:o i{irí-lue io que L¿cln jecír le Pero sigancs li xe:áior:. Cie*¡i¡leni¿. en esit cltiri::. ini;iierunoida
;r:,:r:ni'cr l::..i: unt):. Ii::,; ri,-c i¿ cini;; .i,* crr:s:f,. p(-.rtu: oaÍa trrecar un iren ü!.re r:o era jamás ¿l ,rde:uetlc. ai,¿uncs se igirlbaa ,;.
'¡es¡ib:':ue ics :lunros ir3-¡¡i3n ii¡;lnerie r. un",¡ren run .;lcii,icnrie ,)
r:,¿,-liarTel-ri. ic icm;cn::a rlc:i:los ie :ur:eicre5 L-ui s; se;:ti¡r.;i c: :i
sueio. ccn ios corjos reriegados scbie i¿s rocili:, f i;..:abl:r :r::re ias
manLrs. ¿iiabía encl.n¡rad.o i'inai¡nen¡¿:icr. uno su L:clnl Dici:c ie cri;
mu.Co. ;::abi: enccniracc in Í ¡¡i¡ aqu¿ilo inismo que io habí¡
:crr:crci'ne :lio ccn iich¡cir:e:rl islc no is jeg:jrc. p:;o i,ií:¿r:ibién iis
:ecu:ils i::ses que ie p;.lsit;tn ,je ;:c it i)i:o i()iJ:aJt:t:rrj. veldajelc
[ex:o cornos:iricc. señ¡.i¡L,an aqueilo ce ii: que se rrir:ba. Así ;e enrieniie
que un riu;:nno. ,¡ nr¡ ii iiienL\r en cuanio r ir norc¡.lej:.:. ieciar:n qu:
86 Freu¿[. .t desoués !¿cm Eali:as [acani¿nas ¿n campo F¡e%liano gi

Lacrn sí, de acuerdo, pero que eso se ditenía en 1966, en el momento de confundido la puena del baño con la de su vasón, cayó en pijama del rren
la aparición de los Escri¡os. oiiciai frenre a un guarda barrera, quien no pudo hacer otra cosa que
romarlo por loco ai escucharque se presentaba como quien realmenie era.
se vió surgir así otra tigura, sobre todo a pq.rur del seminario tiruiado
¿Tendrán los últimos aigún privilegio en ia carera? Cienamenre, al
R-s.I., Ia de los alumnos completamenre a la deriva que condnuaban
perrnanecer clavados en su lugar" éstos ccnservaron sus Ciez años de
asistiendo ai seminario pero habiendo ya asumido el hecho de que no
retraso. Pero, ¿no estaban ellos, más cue ios otrcs, en condiciones de
comprenderían jamás nada de lo que se abría paso. Estos no permanecían
levantarse y díez años después de la rnuerte de Lacan cubrir al t-in el
sentados, pero tampoco corrían más; ma¡chaban..., aún..., arrastrando la
último tramo? Haber hecho por sí mismos el reccmdo completo los
pata..., poniendo al mai tiempo buena cara..., a pesar de todo, a pesar... de
volvería capaces de hablarnos con precisión. Ya se ha su_eerido que [a
El.
etec¡iviCad de ese posible priviiegio se vio más que sensibiemenre
sin embargo el tln de las sesiones de los seminarios y ra muene de Lacan reducicio con e I sursimien¡o del nudo borromeo en los úl¡imos seminanos.
tbrmuiarían, incluso a quienes habían intentado correr hasta el fin. un Fuera de algunas ransimas exCepciones, carls a menuCo nuevas por otra
problema por cierto diferente pero de todos modos análogo a aquei que parie que ilegaban al audirorio, nadie ccntinuaba. y, desde ese punro de
creyeron solucionar los que se habían decidicamente derenid,o en la vista. e1 borromeo declrreba a ¡odo el mundo si nc de acuerd.o, pr:r io
banquina, y que en realidad habían resuelto - si es verded que un menos al marsen de un e.jercicio al cual se negaba la inmensa rra-voría.
salvajismo puede obrar como soiución. En efecto, ahora resuita que los Esre procsso se vio contirmado es¡e vez no por unx ocurrencia sino pclr
úitimos adetas habían sido privados de la zanahoria en pos de la cual un aclo: el suicidio deI matemd.tico Pierre Sourv (uno d,e ios úniccs en
com'an v a la que tanto menos ¡.lcanzaben cuanto que ella pendía a ciena irabajar con Lacrn en sus últimos seminarios. por ser un alurnno-
distancia sos¡enida por un bastón ñjo a sus espardas. Ar permanecer a inreriocuror:0) dio iestimonio «ie que ese camino entoncss trazaclc con
oanir de ese momenro en el punto a1 que habían iiegado, no se direrenciaban Lacr.n no pociía. según lo juzerbe Soury, ser reaomado con algún orro.
ibrmalmente d.e los que se habían detenido pcco o mucho iiempo antes. Ninsuno de ics que tení¡n en acieianre más posibilidades de obiener el
E incl.uso alií. viene al caso una pequeña frase qr-re lue profericla. si se le lugrr de in¡eriocutor (aiguien Ce ia Escuela de la causa tieudiana o cle la
hubiese o¡orsldo a Lacan diez años suplen:eniarios de producción. otra revista Liitoral -Souqu intentó ambos) resukó, a t'in de cuenits en
''generación" habna lcarecicio, se dijo, la cual hebna posrción .le poder:omar el ie le.¡o. Fse suiciC.io (de quren eniocces erl el
iecibiio de Lacan
las rientias para conrinuai. Por cieno, esr: frase no dice toCo. quizás rnás canaz cie lrolongar e I ¿stucio de cjeftcs punrcs cr,:ciaies ,jel úiri¡ro
inciuso piercie un cla¡o iecisi';o que ccr:ciene a ciicho iin (su- reccrido ie l-¡c:n) nos nos¡¡ó clrramente. Dues. cue ccn la muer:¿ de
¡cniiiari:ac!ón:e), p.'ro ti oue haya sico prot'.:riia'¡.¡ehiculizad,a iics i] Lecar aillo ce esa ru;Hif, se habr::. :crci,Jo br¡sca ¿ ir:enedirbien¿nte.
me'iias ¡c ;cdas ir'r3nerr.s una ,,'erdad a la cual nuesiri liegcn¿ intenta d,ai
.f.sí pues. ai ::..:!r,:irse ei pr,.:ible pnviie3:'; ce ios úi¡i:los, crd,a uno se
tbr;na.
enccnrirbaccmo iijaco a un deter:nirarlo nttnen¡o deicar:ino de L¿c:n.
;Qué podría hacel e I ccrrsdor r. par:ir Cel nomento en que con la muen¿ ccr lo ianic. r. una i.ie:einini:: t;sis que sa sosienír. tor ¿nicitces.
Ce Lacan y ei cese dei sec:11ne¡:o se encl]erut cd,¡aic,l¿ lacarre:a'l La R:sui¡ar:a iácii ¡scciar bi,vecti';i;:elre ics norsbres procics e irciuso los
sr>iuciún mis in;¡e,.ii:it -peto:embién ia mís ccs:osa-, cu.::l pdnclpio ,je l:s insii¡uci<tnes con irts ie rcu¿ilc.s :,)nieatcs sucesi,¡os ,,:a.ies ccmo
se le manltles:¡.:s la d,e n:eateierse en el puntc en el cue se l* ¡band,oncí. le :aiabrr;lene. el simbóiico re i'isico, l: ¿iscursivicati,). P:rc par::: i:is
i:.1 ccmc ecuei ¡:resitlenie ..i¿ la R.epú';iicr Frincesa eue, por. haber irnpoc:nie pcne: de ieiieve q\:e otro :i¿tn;:o se !;bríd:an eí jin;e lc
-oÍ,n;i;.1,',1 i¡ic¡r,t,1, l.-,-^r.t.-.i-.-is.l¿ I.,-"n Tn¡irri¡ ^-rr::.rrií

ji:::iJ jli:r,':i::
ia.lc:¡ .\.j;uc:. 'Cci". :r ?'L?. !r!i:.:;j¿f .iln:::,¡Li.t :(): \l:.:::l I:cr:;,
L¿ ;¿9 !.t;ii¿i -ii
I l¡)_' ! í\ u 3:ubou:g-üu'rencte. : i. ?:rlsr.
I
j

í
.t
38 FrcL.l. ,- l$prés l4cun
Baliats lacanianus cn camDo freuiisno 39
!
senm.do en la bansuiha no tenía er mismo esrarus que
cuando Lecan e pr-irnera vista. ¿i{ay o no hav creación meiaiéricr. en, e inciuso de la
continuaba problematizando a su manera las cues¡iones cn¡ciales
del psicosis'? ;Lacan dijo ambas cosas I ¿Ei psic.oanáiisis es o no una c:encia,,r
anáiisis. ¿con qué'pocía nmar bien estar clavacio en ei borde
de la pisra ;Lacan dijo ambas coses I ¿Lacienciaes e lne c pius ulrr*.ce lo rransmisibie
un¡' vez que , terminado el número del ciownr, el mismo púbuco
habír o bien un ianrasmh? ¡Lacan dijo ambas ccsasi ¿El sujeto supuesro saber
q
abandonado Ias gridas? E¡a necesarib que el alumn a {.!'éléve) ,.ele.¿anrarl
es o nc e I anaiista'J ;Lacan dijo ambas cosas i
( se t2'¿e), que se rindiera rl hecho de que le ccrresponde ¿E.l d,es-seral i'in rjei anáiisis
de ¿hora en mi1s le concierne il analizrnte o al anaiisn? ;Lacan dijc ambas cosas I una vez
a éi, ausen¡e der'inidvgmente Lacan, ce.... Lacan lo había
invirado i:. esro que un síncoma encuenrra su sen¡ido, ¿se halla borraoo o reforzado?
en sus ¡érminos,... "abrirlo::".
;Lacan díjo ambas cosasl ¿Se ocupé Lacan de 1a ibrmacidn cie los
Esrarupruracon unaposición... sentado-crlladc r¿ssis-s',al;r. impiicau\a anaiis¡as o rechazó ei uso dei concepto de "for;nación" para cichc
que el ai.umno hubiese comprobaco que propósiro') Tarnbién ai1í, pudo decii.ambas cosas. ¿Fs el inconscienie u¡:a
Lrcan -habiernos sin iais,¡s
pudores- esiaba muedo. invención de Freud o de Lacan'l ;Lacan sosiuvo ambas cosas i Ahore brei.l,
¿Cómo se enriencie que sóro alsunr:s Doco.s
al.umncs hayan podido hacgrnos señas de haber cruzado seme¡ant. no se irate aquí de una querella de prooiedadl s€ 3l]cu€iltr-a ¿n cues¡ión
R"ubicón? El hecho de que duranre rigunos decenios hayan dejado nadt mencs que la deriniciórr misma dei inconscienr:.
r
Lac:n hablar el osiccanáiisis ccmo si estuviera solo:r, poicieno no les
\o es en absoiuto necesaio multiplicar ios ejemplcs. ccni'rcniado ir. e s.a
facilinba Ias cosas. Pero ha.¿ orra razón. y mis insidiosa: ¿lios ,,,islumbrab¿n
,ii¡lcuitacl. a csca dispar:da '¡enerai ("rout foui'canp")', ei tiuritnc ije
en qué contusiones caen¿n si iejaban sus Durtos cie anclaje en Lacan. I rcln (tle lü !'cemp: cie ahí ei carnpo,\, preccupailo pcr rransnirir esa
¿Qué confusiones.r Piivaco de la posibilicad de reierirse a la docrnni enseñanzaque i¿ inleresa. se ancuenrra.ie sarnparado en ei sen¡jdr; prccio
iecaniane coÍno a also sabidc cesie el momenio :n que habda cesacio tle ,je1 ¡érmino: es¿ misrna ense ñanza. las hueilas que ;ila iejó lo des-¿cr:eña
nr) toErar en auents. de :ila mis que un tro70 iocrilzido iL¡.can, cln:cr
de
ilc ¿so mismo de io cue cree deber adueñarse para irinsmicirt¿:..
las ','inurj.es ie
ia calebrr: I-acrn, iógicc de i psiccandlisis: L:can, henkjt_.
'i'nue'a¡ner'lte nos ecaiecg aquí una cuesrlón Ce rnétc.dc. .{i isuai ¡ue
cle unlazo sociai llamado discursrr anaiíiici...), el :.lumno se encuenrs con
Descan:s hacÍe Ce la,iude una,,,irtud al voi'¡erla hiper:ólicr. al aiurn;r:
que debe croiucir corno tal la ens¿ninz¡. ije
Lac:n; rjichc de orro. i:tane¡i.1. r:o ie queJl otra sc iución que llevar h¿s;a su lírnire e:irr3í:lc ia ccnsia¡ación
en unr' iemccralic¡d que es la ireuciana. acueila ie1,aorás-cor;¡:. clebe ,ie ese ;¡:r¿tir ui'cam.p. ijicho ce otra manerS.
metoioit:sis¡a:ln -.¡ciic:¿o"
e;rniícirame r:ie cecir loque ¿sa:nseñanu * no l'.rr" { probienia ce his icria) ccrncr iue e ia gue-a ei g,:clr:rc de Pr.uihai:j, no tr:ií: siro jeclii: ar:
sino lo cue "haord. siijo" (probient ,je rrensr:isión). Ahcra bien.¿i
probieara no ieside irntc en cue ji io ignore absi;lu¡rmen¡e sino rnás
'lc3:if,f ninguna ¡ór:iula,je Lr:can que pui.ieri,jecir o inciuso ncsirir ju
cicr: :nsc5;:n:1.. -'.'¿ n:c: ,rtle :c:;i nisno,3s:c. ürir oi:o ll:.lt-.. ¡t: itce lIis
en quc. si cornienzr ¿;re'luniarse por io qu;,iicha enseñanzr. if3. en
iu,:ir c u¿ ir ii D iano ce i¿ le:;urr de L¿cao su'ieiinició n ..i¿i si,¡ni:icir.:re :oi
iiev
,ie c:eer sabcrio. mul/ pronirf, ienir: que vérscias, pLrr-
ooco c,ie no ei sicriiicanrc: ¿n orls :ai¡oras. lo h¿nos señai¿cc:5. uce deli¡licirii'l
descene rr1 \l c'jnl D¿..¿ il prior:.. con :scrcit;nes clarin:ecie cirnraiic:on:r,s
:riis¡,-.rjlii:tr:'len:: ilo I iilca): ctc:..i DLi.ttu¡. crcll ir::Lr d.ebe je:
:r-¡o,cr.ali¿:eo. ).,: .'it'. :iinC':lt irlSe,.i.¿ L:,::¡:: ie ,e c'.:¡l :lr .-.:l:S '..;
il.,;Dlslustera Jue L;cul J¿: io.nlio..ic:si¿ modo., Si rsie iue:c:i ciso. i¡i,..:¿::rr¡
podrÍi 'je cri¡ rns,,ers inrer:q:ise .JCai lse :c,lon¿ie.:ei ciorvn +cn ia.:.¡urja,.l:
S:ilini- :e:o tlmbré:r c¡n ,ls iicse./lciones ¿: ua l{:e:s:3:rd. cu¡.ndc :on i¡c nll :i ;r¡c.,
.ri ,.iiio. .',ltr?uell: ,\n¿:cu :¡e. ir¡-sil,.ionr:c .onocirnos. i¡ ¡c:¡era:n
f:i;.r f, Lica.' -.1,j :t)itIi)lti ,-::¡ai1. JCn(;:c.::ón 1¿:,¡:tt.l,ul
!¿,:::na.::siitonciriniclacn;Jl¡,:.rtlJti¡:.?r:
ciown. l, cuc:ar¿ nü5or,)5 :odna,,{sc=c(x::n un¿ cte:l¡:e :ón : in ¡lown cs
:¿ueiic :r sc:i:men(J :uuj al c:;¡cc t :rar:i¡ui¿: senarn:tt¿ ¡¡rrt:r:ic:i :-r:c.
io rue :¿ :r:rsibinc ¿i ;:nc,¡,:::lrio :c:tl:,.icj:¡se:i¿:r;lr:or l.¡. :sie c.,rr;. l:.:l¿:::ri::=:r::ui.;,-l;:ci:.:::o:::::r;,;:ro:¿,ls;::ric.:i:J,.cllitlxI:i.ts:iñt
.. r .^" i.-.J, -.... '..-.^ ,, i:: :r:::a:
J¡,.-r¿:5i _grirJJ¿ iuqri¡ ¡ ios:.niiist,ls,ic i¿:-rcueir..\.E.:r l: :-c¡:g:h¡;:.\);:i:os...:-:,r:::ni=r,J::c::r:::l::..,c-.uaca:a::i:::ac::¿::x:,::;r::
''?:::osidt:n -.iu ,) ,L¿ ,r:c,brs sur lc ?r-;c:m:isi¿
Jc i';c::ic... Scilic:1. ¡r i. pr,s. -ic:ri. ::r) :t ,l ::r il).:O.c tccii:t.:mis.
:!)ó.ll ': i-,.- )a:, ,,; --.,.::,- , .. , , ,'-., -.-. ,,,
l.:.1:í:,'rlict::, i:.'J f,{) ::::: -.,, - ,i ^-...^:.. .., .i .i-..i ;li ¡:l:i::::,r -.1 -.-,- l,;l -i..-.::: )::;:1. ::e-e.:: -é;.t,t-::--1..: ):¡. ..
-" ;=-¡ :- 1 3,.:::.
\

W Freu¿i, I tlespu¿s [Lccñ

pueda decir que


encierra srr Fnca;-;_^ _. i
la sangre de la ens :--- --
¡q lsr¡d u¡clendo;
y;t,="1._,1*"t:ilh";:,:,.,:.:ü1,ü:ffi ;:t11..:r:i:,.:L1l
he aquí, esta es Ia came
de Lacan' Toda enunci^"iJ""¿" Todos Ios prejuicios no son er esto,
resulta hoy una *or.tnon'o ,,0" .quiro1.n,*r:argunos pueden
"r,. heurísticos, resur¿ar

_x ,"J:,;;*i: T :üil+it ".,:Luo"j"¿ *i:*,..rfi I? mientras'que otros no tanto, incruso no tendrán


que voivercorta laproblemaiización. otro et-ecic
ei,ora Ul.n, éi no pue<ie serjuzgado
o b s tac u
;";."J,:, l # H :T lT;,
r i zen¿; o, ur-ñiJ,";j 1:"", r pcr esta ciiferencia más que por
medio de Ia
en un ruevo üempo.. E; ,;*p; ;;;;r;-:;:;#::ü:i:"ffi::.:X,:;
1u:,:.n er anárisis: rvinnicoiir;;#t;,1T1,
de lfelanie Klein).
i."ureno que no es
tu uslcnolo a propósito
de los discípuios rambién aquer en que ros arumnts
d.uoti"r* entre e,os y con otros, sobre
todo' Ios prejuicios con los qu.
como en ra e'xpenencia .=ao uno se ha-va comprornetido
canesiana de cambio, no habÍa nlnqún debate (en
ra duda, aquí no se posible, solamente acusaciones
puede sarir ,re
p'o * n a o, I p r. n
traición, puesro que rodos creían de
r,lJ ir...r'
ffiI T'""i:,H',nH : iT "i. n,. . o n .ir.. É n e re c t o,
"*.
pudo ;['r:::i::H:"f.t'obremático
que
"J" "i" o. ,",
decía ei to..r.oj. lrperando qr;
suponiendo que otros f-acrores
;d.r;.;ffi::ffi i::::lJ:Jr;
:tso, no impiaan s,
n n s un o. co mo
i
i ;s te o ile ra ci; :#.::.lL cuestión de saber de qué manera o,"l;, ,;
i?rlXíJH* ií;,:; "t..i"r"-*:",'r.
s
.1.gl. ta,i prejuicio en vez de
di";;" ;;;in"ipio más que Llegaio a este punto nc pueco más que
oro.
-l§.,i",::::1.T.'^:::: una parárisis
elección que ha sido.ia
expresar ras razones de
una
y la a" .t_r'ñr, orros
::,'l:ld"(p;;;;iqffi
vez' esta im posi bi lidadi::t#Ii#::::Hn:ii#.,::ff
so I a ¿T,,1
1níi
dererminanre Ia opción de en la que resuiió ser
,q;r-;;""i"nada. !a prohíbición
mismar* ñ; #l'::::T::'", .oarti,la
cuar en acierante nos some:imos, a la
de iiecc ionar a prior.i ta,
:1,:lll;T,.'::*:":*tT:l=:fi:¡::il'H';',';',-:":;H:; o oenbdo Celcrmino tie Lacan:s.
Bien rira¿o,.i.n"s U"lirrr
o cuai ¡*mo
r" pr.rl.r*.0.
r.,, ;.,,' í;;i-fff:: li
-q
L r c : n. como por sí mismas, oue las
"
nun
rnieri:pesrio"o Derc que
o

necssadamerr. o'rigo
l:il:t ;: ff : :,t1.1; prejuicios, y que en
rtanros a eiegir como si fuerrn
ese ins¡anre C¿r..,
nucs¡ics
no, ,olraban ianro mis vi,,,arnenie
cc¡sech¡ (.no js :n arjeianre a reivinciica¡ro como cie ante ios ojos.cuunro que ciesce
,3i.¡e
..;;;;;,J" su hicíe nucho ,¡"*po las ierlan:os
aoar:nlin,Jo no esrai
alií en absoluil i;j;
lo que su maesrro ha
dicho nues¡ias narices. asi como ia paiabr: fien¡: l
grac a 0.. r. "p r.;
i
u.g..' i . i i n r, ni ii,ro ;;."":r'j
.fl::;i EL;o.D.{
:
aiuiilno: ciicn' ue ¡r;c noco. ., ,r¡", ;-illl,Íl ll
C."rjl]ri.. Lacln :omo scbre un n:apa ie Eurocl ,:ei;ianrce
Habremos
r, I
iiegibre DL)f e.¡r.f escir¡ con ieli:s
comci:niido lo que Cil.ereacia el pun¡o
""".r,ro. I
rJeinasiado gianijes _.0." ,.1.
de imposibiiidaci I ieíclas.

I::::j:":.":,,,.
J_Jr;i.ú5 :.:
ro .*i.....,.',.1
.,r,.: i:.:jen:.-:s ¡ue Ren; rJe
I
cr su ..soie,lid., cre.,.ó pnc.. .*lr*.,. I
coi1._secuencias t::.Íf,s,ilo..1u"-.r.f .ro;, ;;, ;;;rr;r.",n_.", i
i".gr, lo disrinción ue li
¿os
I
II
.Jjil;' :,':.:r' ll^'::l
..i: la:' ceiT3zf,
..'".,
"o.,.l J" or"'"' f u'-" n,., f
" cc.3'i;o), .t r,
,."
^,
ji:c:.reniiL.:¡r ;'i;:" i
ccr:r::io ":ei
"lu*no
;u -'r;ir:nuiJ*. ,.r..,..'. ,fifi-tt'i.'.''e::;r:cn¡:¡:s.".,.q". -=r:;;.,".-

*
I
I
,

:11 ffi i
_.lber;s,.
:i ::1i : ::.::
l:l
::1*i iirlorecie"r.-r"*r.l¿ol.
.na p.ensa en ; :r *'fj"r.i",r.,
rt it
; I
I
t

I
,
I
,
i
t
92 FreLd. y d.esouis ltccn ?a!i:as !¿ctnLunus cn ttmDo Frewlia¡o 9l

Sobre por lo menos tres balizasr,,: la relación de ia Eocrrina iacairiana coo esa currura, por lo tanrá. oo
solamenre con el texto rreudiano. Entonces, Ia (o ias) versión(es)que
Lacan consrruía a io largo de su reccn'ido pa¡a exDresar.ra aniculación de
Si se ie pregunrarn a cua.iquiera un poco conocedor del tema, ese recomdo con Freud y la cultur: ireudianr no podí:h7, por cie«o,
un poco
sciamenre, lo que re evoca el nombre de Lacan desde cejar de dependeide ia actualidai de su cuestionamienro reórico como así
un punto ,istade
reórico, oarec3 que se i-pondnan una, rr.l vez cos tanlpcco de otros datos lales como: [o oLie se decía :ntonces que era el
o aún tres t-echils: i 95 i,
prercndido comienzo de io que se irama Dompos¿
v abusivarnenre EL análisis en la FA. la recepción oue le estaba reservada ai ravecro
serninario: 1936. ei ramoso pero r.ún inasrbie Eim¿¡i ¿et iacaniano en la rPA v iuera de la LD-{, inciuso ra pura;r simple relaci,jn
esoejo..y luego.
ouién sabe, quizás rambién 1975, fecha en que un nue./.o de fuerzas en lo que Elisaberh Roudinesco designó con el nombre
rumor comienzl de
r h¡.cer saber que Lac:n. se dice isin habetlo vis¡o Ce cerca), quc .. se "barallal:" que L,c:n por su cueitia lle,..nó ..peiea" u1lr. paiab*
-v , más
*rnbrolla en sus nucios". He ahí los zueccs. Enire ianro, caicámosiós. jusia por su ccnnoiación "curso de escuela", dicho de oria manera, por
En su
e:icro, en rres ocrsiones el e,renro nos inpona. no ." ,"n,o
,ri, -.ino *i, ret'erencia rl
carnpc común. Pero, precisarflenre parque es[f, o estc.s
bien como sign, de cnsis que scn a re vez e indisoci¿blemenre versiones de la hisroria propue'ias ,cr Lecan no se ,Je;an inscnbir en
un el
mornenro crftico de las reracicnes de L¿can con Freud, cespe.jado cielo de ias iceas piarónicas sino que están circui:s¡anci:l ,,
con ra IpA y.
asimismo, un inomenlo cn¡ico del camino de Lacan cera x
ce* consiso poiÍiicurenre crienrair.s. se p,;dír espjrxr Je aqucilus .lue hlbr:_l::
mismo. ioinado el reievo leceni¿no que, lejcs ce iar salica :. ral c cuil r.ersión de
i ecrn y poroue ¿llos mismos se ünconrrai:an en orro iaco 1r no dlí ::r
donce hablaba Lr.crn. reconsideraran la histori¡- ¡recisarnenre Dafa
8 de julio : Le propcsición de! ;ernario S.I.R. aienerse r la niisma poiítice -mienrras que lo que hacen
--s canbiei :e
colítice rreniÉndose: la misma.;ersión rie iahisrona. AsÍ ncs enccnt¡3.ilics-
iesDec:o tje los aconrecimienros C¿ t9j3. sin pcCer ,lar sajiC¿ li ranicccr)
Cienamente. exisien una c varias ,¡ersionesi¡ ce lo aue habna
consiituic.c in¡errosar la versión cue Lecan iio cie eiros. oriacicrinen¡e ecue iia
u¡': acontecirniento en I 953.
¿Fiav ./aÍ:as eniie los ieceniancs l Esto ¡o es i lam¿Ca la excomunicación.
seguro. ¿Es su,¡ersión. inciusit ho,z. r-:nt sim¡ie y
iui3
recuDeraciiin;e Pr;rc,.e cs:lí:.lcs i¡t13:ssJ.ir)s .:quí --n i¡. :.tis¡on: Je; ,:r=;:o de L;ici:i.,:
icucll¿,;ue Lrcrn misno puso.n circul_ición i,.la;icomunicrcl..jn.,) =:.s
I Es 'que in re,Jei psicorndlisis, hemcs siio lie,,.adc.s r cclsiielei cr.ri .l
bl-sirii re ;rcbabie. Y ent¡'.so.
¿por ¡ué r':zón .-no joso r Lacrn. luesio cue :c0n¡¿:inie¡io l.I'iai'or,je ese nun¿:rio r:e :risis ii;e ii :cn-.:l:,:cl. _:¿c:
l:r:r::iu ;i:.lc ¿s¿r;i¡.i :i :sic:::.-:lts;s. no :tldÍr hlc:r oraa."ra i.t-.iai rue
romi: iÍr ..1"," cso ,'ue h;;"r-ii;;;";rl;;.;:euiiina,"i .n,.u :rti Lrct:. :l 3 ,:c;ulio ie igj jir. Il :rese:i:ó rii: .:ci ,,e: :i¡::rf. ::l
..il]
sli,: Liesaliñadl: ilo --rlcíe. Fues. ¿',,irir i-nu¡:i¡se rjs un: polírica:art su ocasioin ue la pnncra reunión ":ienrí:icr" ¿e la S,;cledr.s iir.nces¡ ,.i:
ieorir. la que :enía cue i:',tsc;bir :n ei :amcl. i¡_^,¡Cirno: ihcrl csicr;¿nelisis. su :enano si¡nbóiicc ii:i:,¡lla¡ic ieei. Tri .s su i;s:,"reii¿
,"o púbiica ¡ la;:ira ie Sisslel isntcnces se.:::iiito je:er:i :e ,r Ip-i,,;ue
.J¿ icrs ¿ieniertos "i.".
ci¿',.es,r::(. -,¡;;.;^^ "--,1'.^b" ser la ris¡orir nisna:e
-lu::;:b;l i: l:,::ci::eii¡.:s;;;:che¿e:i o ¡e juilu..), ctÍl{ti :rli-:tl:toij jii
hccir) üue. ai Jiml¡il..le la socieolc rsiccanaiíiiie .le pals. L:cin , lunil.

l.f . S,ouriin:sco . L¿,t.:tii!!¿ :!¿ tt:tt:r-,. i'!a.\:iotr¿ ::¿ i; pr...c.:¿r.r(Ji.rsc I .,,rJ-.- ig-:'o. 2:r.i.
,:

R.¡ms¡r', i.,-)9:. fs:cii¿do cn icuii. I 9S6. :i .:u:l .:u: :L ;r.m,: , .,. l9l_.-..,;l_.. p:.:.s. ieuil.
i9,jó.:ex::;c:rci.:¡ i:<t:t:i.l.i¿ j¿ ir¡d:¿¡!.uill.J.ELjil.Fsaii¡¡c¡ioi.i.3s..{.. i99-;: iiÍ.
idcñ. i tl-c;i.l
.: ;. j. _.:l-. ".:;r.nor¡liq.:e. l':;:::i;:.:::rg :: lc :j:i... :oc::l::c:: ::.i: :: i: S.x::d:.,1
l'-v,:¡:¿ ,lg:sicca¡lii"is.::r jale.':¡l :¿: .i.;tt,t.:::::o,1 ,-r:ui!t,t::t.::,)1.;r:,,.1¿;ib¡e.je l9:il.
94 Fren!, y desoués L¿can

EaLi:qs lacanianus en cumoo


icon aigunos orros) abandonaba Fresli¡no 95
hixbién la IpA. I
sr no por entero' consagrados al
'Responder así, a Ia vez en
fbrrna inmediata y vivaz.como medía, al menos parcialmente, hasta
estabrecimiento der ,.*áio
R.s.r. Lacan
guanre y no sin provocació-n ieyantendo el qué punto ei injerfo de su R.S.L
es propio de Ia rnanera
reaccionado de Ia misma ron d. noor, L""";.;;"n el campo freudiano dada rugar u ,.o."i'on",
o"
en
,;rlo. J.
o .,
r q3á"uonao, inremrmpido
mienrras política de ra teoría,.a Ia cuai acabamos-de .,r, .r,
presenraba a Ia comunidad
anarítica su Esio¿¡o d,et espejo,emprendió publicación inrerviene a.,í como
*.t",
ooo o3.ooo r^'ro no
escrilura de un texto cuyo título Ia un in isorio medio de'nb dar un páburo
.ro .*in.nr.mente prov66xds¡ puesto demasiado fácii ar "adversado").
que significaba que su auior,
aunque muy joven psicoanalista.
xo ¿.r.cnor;;;;;;;*l*"'"r,*."
al nivet de Freud : .. se eleraba de una vuelta a Freud es posterior a
N[ás. ¡rrá á.i p¡rJ,pl" d; *"rü;:Xl.'L? i_*uol ese momento de invención. tie
proposición, que acabamos de rei-erid7.
manera, excl ui do de c te n o ), u p é) i, u r r,Lacan reaccionará e n-
t
se_euida invenrrndo I:la -E
1 .rmo Sin embar_go, el tex¡o. freudiano no esrá, por cieno,
H ay rep re s ai
"
r
minimal. La presentación
.; ;;:: i:!:..? i:ff
ilT:: :, ;:::': :,I ffi i ; ' [:*;
norablemente aparece el hecho de quq,
al dirigirse
aquella noche, edviniendo desde eicomienzJque
a sus
ausenre.
..bueno,
)[uv
.*i;;r.:
del ,.*",.,1si¡i. iL., ," ;ü:::];:r: .; it" ;;;;; ;H"
como una in',ención reacriva. "que no carece de ambición" puesto
Esro no suirr nada a."íilp"rrr".i" qu. t" tra¡aba de ..una suene de
cjocri-inal, sino a.l conrrarioj5. pref'acio o de inroducción a-una
Nfr;;"; .Él"n,o, nos ljevan incluso a ciÉrta oriennción de esudio rier
situar ia producción de s.i.R.
.r. dí;.;;; .r o.on,..i*ienro psicoanáiisis"' Lacan hacía reieren.ia
mavor dei e*pií.itomenre a ros casos de
camino de Lacan. Freud' er hombre ,e los lobos, er hombre
dJ los retas y Dora. es¡udiacos
cn los dos años prececenres ,le su ;eminario
Limiiémonos a rrarxr aquí rres para sosrencr ia vaiitjez Je
de eilos. En Ia discusión que lo que él aderanraba- a saber. el temario
conr'erencia. Dir,ier Anzieu pregunró siguió a ra simb,óiico/imaginarioirear -..ios
n0 era nada rnenos cue un "
o ir.."
,, io que éi proponía ese día regisrros esenciarcs cie Ia reeiiiad hurnana".
A panir de acuí. nuesrrl iare a
cambio ce modero r:ue perrniría pensar serí la de dar cuenra episiernciósicfmenre
dacos clínicosi." ios ,Je esta es¡recha
..rpii.irr*.ie ¿nzieu diterencia,\a ese
de la épc.ca: (reunicia en ras dos pnmeras anicur¿c:ón
páginas ce esta conf'erencia) enrre
modelo der de Freud' segundo ios casos
co¡f'erencia' ig g'-re a nues¡ros "i.*.n,o,
ir..n no publicerí janás esa de Freud '¡ el ierna¡io .e.Lacan en
ojos ie da un esrarus comparabie
ar Je ra
ei lugar tunt,ernenral .n q;;
sirúa. io qu€ ya expresa bien ia nccióni.....gir,.o ,, i..."
rniervención de NlarienL,atl esencir.l,..
en l9ió sobre el Esmti,i.o Art rrpr¡]-
tamcién lundarnentai ,,, jamás rr*ro
punlic*Jo. l" Cei S Ce iulio
,, h abrá pe rnaneci co no, pu b lica.ia
pr, "o"r¡."rcia
p()rque L¿c¿n no's¡raba denasi¿d"' ",
r*,, r;;' :;=;
;'J."":. ir. r, 1936 : un otio ).o. que BS -vs_¡¡¡e
i, ounri=J. sil nar:z.r L¿ orueba ire ¡ue
no nos ia croporci,:na. ei D¿".c¡¿¡r,
u', R,r,or* ¿, ¿! ou¿ ,ru ,n,,orrrrr,rrlr7r",
ttit'"grttt* n¿ncicjn ¿-rarici¡¿
de i.u dis¡incl¡¡n s.t.a. i.t-rtrcduci.do
sitt ztr-
.{i rropilner oril. conceictrjn i¿i
hur.g,s tlos ne.rgs ¡:ni"-r.
El hechc., C.""rir¿u
:io en su inrerlenc:ón de I9_tó -.n
_cruesc ,:omo Drr.rf, nc habe¡ )[¿nenbli' Lacan se tfocus() res;r;nder r -:na cr;sis
sido cuericlo nor Llr::n. Finrlmcnre. ,iei psiu:anáiisis
.l ,;;., cien:ciiro L_ue nos in.,.rrr :
cirnsi,Jei-a¡- como ce:isivl
... ñ1;l,vr)i- ta,."*¡._a.i¿ tlei S rie;uiir: de l9_.-,1
es¡á ci;n.s¡l¡uicit ,lr)r ir;s úlrlmr.¡s
sa*ria"¡o, ¡l Laci;. mu.; t¡¡iix¡s¡¡*

:1. irrlt¡ Jc t0s pcll., ¿L,a!i., (: citnter¿licr::


96 Freui. v despué.s ttcad

caracrerizada esenciarmente. según é! (pero


no iue soramenre éi quien
enronces hizo esra observaciónl. por el fiacrso
Cel análisis en relación a ducir la
las psicosis, un rrr.caso cuyo arcance habí¡ personaridad' Esro ccu¡rio en lg0g,'en
dennido cuarrLr a¡os anre, .n el momenro preparatorio dei
estos iérminos: congieso de Saizburgo. Auhraham sabía que
a Freud no io sadsfacia
pienameare er "'retcrno de ra libido
ar estaciit der auto-eroiismo,,
[...]el proble'a rerapéurico de ras psiccsis. nos Dar3.3 quc romr más cuenT de la '.pérdicia de reaiicjad,,{z en oara ¿ar
necesario un p sicoantilisis dei.r'o eue un psicoanáiisis ias prl.ori.; ir"ffirí o¡odi,
der inccnscienre 3. también a este mecanismo er de una fijación
en ese r¡ismo es¡adio. Le
Era necesa¡-io tenei- cieno descar,_r para escribir demencia Precoz, al volverse.fijación,
semeirnte cosa siendo oue iependería esí cie ui.la iniribición
Freuci hrb,ía ;ra iniro¿ucido ilesde hacíe al gunos del desarro,o'pero, ¿de qué deiarroiio?
"ñ"rl;,.i.J:a. f..r;'ir;*
r.;;;;;;il;;; Éreud había mencionado va en
ello/sucer-vo). Era nccesant¡ iarnbién qu*. sobre.r. sus Tre.r ensaycs esa En*vicklungshemmung
se hubiese hecho una reiigión. Trl iue ci c:.so. " at.J.;.r*'ri" ",.;,.0"
a inirociucir su idea de una persintichkeirlir**ung,una
Dieciccho años qies.oués tie inhibiclóa cei
"ln¡rod.ucción ¿l nlrcicismo" (ie cesarrollo cie la perscn,iiciad. En su resDuesia.
:,ir) ,je l9 i_r), Lacan escriLría: Freud habrÍa ce ¡eirera¡
casi paiabr: oor pair'bia io que re había
El narcicismo iie hecho se pí3senie en ra economía tre ia docrnna eicriro a Jung pcco tiempo rnies.
Decrdidarnenre. ia personaiicad no re
psicoanaiitica ccmo una cerra inccgnrta cuvss ircn¡eras con,¡enn ¡, s. juee. .on¡.iur".
han potiirio su respuesta de purr. cr:nesía ai envío que au.
tleiimirer los medios rie inv:sri-srción prevenienres rier esrucio
.re las Ie hizo oi"."n o. ,u ,.rir.nJ
era necesariamenre una pura ibrmaiiáad.r.
neurcsis' Derc cu'/D inte:'icr peÍmirnecJ ,-',írico desconccltlo-,').
1z
Esa ,.perscnalidai,, corno
tí¡ulo de aquella ¡esis, he acuíque ccnstituía
Incluso unos üa¡orce años rnús iarce. fracan repeliría su ijesacuerdo parr. éi un aniisuo asu:.lro, v
con sobre el cuai se había pronunciado.
iir cirncepción ireu.iir.na ..iei '.'rr ccri":{) iisiem¿ ce:c¿ecióru,c,nscienci¿.
F:eud., rciege L¿c¡n. En io que respecra ai yo Lpor oro iacc asociedo
a ia perscniiiida. :n ia
cafia :. Jung anre' ciiada), aJ ¿srar basianre
precisamenre de¡iniCu :n i¿
[...1 en conrra de rcoo el no,...imtento Lje su
in,;esiigición. seguirá siendc cociina-lo que quiere cecir anicuir.;o aotra.s
pnsicneic de él [ei pre_iuicio car:ielisrl] i...r Jurnrio. ncciones la¡nbién d:rrnid¡-
¡;cr:o ilemiis. no se ccrie gran desgo ri sucone: a prccósir.r
i¡teri:tr conr¡a i1 en esa Jpccr. hrcnl ¡ai ,..¿z..cuivaiido .r:,,cluirse
de
c¿ él cue un nr.ro
acercamienro ile estr. insiancia sóro lcdíi
il comu nicabi lirjri"l creniíiicet)i.-] susc,¡er. cr.nio **, a"-,,
una iianca ¿esconilanza anies rie ie. "..,
X;;l;||¡.*o, puil. ,,, sir¡oiene:i¿
evrrur:{uw,

\o se iué h¡cer.:r_:n l:r perscnaiiuad.....r

P,;cr> ,.lcs¡,-.:,is -le:.; -::lli l;.uli:t,:iijn,_: 3.e :::1,, pr:::jienc,.] r .l.J.in tcr

i-:c:n.D.:.':j,?tir¡)f¡.I;?(¡ii.,tt,!.:i-..,.,n.r:.-..:_l-i-l iil:itiis.jcl.-¿c;l ,

i,-c;¡t. Or l¡¿ -" t:r', r.ti.t..ll¡r,,'¡ i. t; ...1 n r.:t. :. 1,..1].


¡) )

l(i., -*c:n. ¿L;, ':.i,r /. ,,rr '- r 'rJ.


i:::lri. f :¡li.l ,l C. iur:.:;¡i li i: l,if;¡(r).;!. irrri:
i

j
i
98 Frqud, y d.es?ués lacan
But¡zds lacuniarus ¿n chpo Frzud¡ano
í 99

-1936: El esradio del es$ejo. TecrÍa de un momento esrn¡ciuranre v Ia inroducción dei


genérico cje la consdrución de la realidad, concebida en relación con la, lstadio cer espejo,Lacan trabría inteata,Jo responder
éi mismo a una crisis der psicoanrílirir .r"n"iur"r.tr"
experiencia y la doctrind psicoanaiítica.
fracaso de éste ccn las psicosis y .""rulr^ia"*por.r
-1949: El esradio del espejo como formador de Ia función del yo fie) también' en ¡odo caso según Lacan
ao.,a" lo qr*
... ..,oi";"i;"
en.sa eeo;o, nada menos
tal como se nos revela en\la experiencia psicoanalítica. que la ruina
en el caso en que ," ."r"1"r,
incapaz de asumir su
.4..j"r"r.,:,Xr;riisis
Tres dit'erencias saltan a ia yisra.
pues un estancamiento
Primera dit'erencia: en I936, la concepción Iacaniana se presenta ..en de ros resurtados técniccs
en su actuai arcance
produciía ripidamente la ruina
relación" con la experiencia y la doctrina psicoanaiírica. En 1949 se de Ia doctrinaq.
pr3senta como "reveiada en la experiencia", enconiríndose la reflerencia AI aportar su harazgo en )farienbad,
Lacan transforroaba una crisis
a ia Cocrrina evacuada por el mismo golpe. psicoanálisis en su relación der
tu priqui"trfo, id est:l fracaso
:-ol
conquista de ias psicosis (en 1932 y Ce la
Segunda dit'erencia: en 19-:6, el esradio dei espejo es un "momenro t uro 1936, é¡ veía esra
cesce afuera)' en cnsis en er psicoanaisis c¡-isis como
esiructurante y genético"; en I949 es "t-ormador" de una "tunción". f¡usro desoués de que se re i:ava
conado ra parabra, éi se siúa, en su
.sc.iio emprendicio .n lr*.ri?¿l
Tercera diferencia: en 1936, el es¡adio del espejo es considerado como lbrrrando pane de.la sesunda
seneración ¿1, pr¡."rr"firirli.nri,
constiiutivo Ce la reaiidad; en 1949 e s formador de la función del yo (7e). de a'í en más consiiruid.a poi ei
anágonismo rechazo/acepración
renovación ten pacicuiar de la ie esa
Esta tipie dispaidad basra r.mpliamenre para invirarnos a no seguir a .ri.l ,. enconrraba,
a paitir Ce ese
momenro, siendo ei ponavoz. &fanenbaC: ..estadio
Lacin cuendo ter:nina .;or sugerir que e sra versión de 19.19 re[omada en el dei.rp"jo,:lquioli"
a un saque' Eso ocurria er de
ios Escri ros vaiía por la de 1936. Lacan no ha publicado pues, reaimenre, -l agosro a las r5.-l0hs.:.ri"'.1*ü.".iu"
es Ia única a propósito de Iacual
su inter.¡enclón de lfa¡ienbad -lo que no jusrifica de ninsuna manera se hlce mención en ios
Escrlros ce ra ho*
Ce su pronunciación.
rnsntener hoy ese texlo capiral en los archivos famiiiares. Pero, con sólo
consiJerar ie rercen ,jispandaij puesra de r--iieve rnceriorn:ent¿, resulte Se notará que se rrnra aquí Cel psicoanálisis
co
posibie precisar, si no el mcii),o, a[ menos la r¡zón de es¡a auio-censura. renovación l/ no del campo ireudiano
-,r.,T:o::tlpiina,desup-qsioie
i a tecda según ia cual una idenrif'icación ni:.rcisisia serír. constiruri.¡a de
ia rerii<irc chocaba iicnraimen¡e con las ccncecciones r.rlmi¡iias en ra
du*nie ei perício .u" ,. ex¡ienie ie 1936
cci'lrra el ¡ieucisno, incruso ial ,¡ez "
ii!r]'ol",,t_"..* jrllr:il:
rcomo señaié antes). Freu,i :cnrra
Ccc¡ina iieu,ii¡¡:¡. Ai iiacer Cel in'¡esrinirnic naicisisla Ia ,¡ia Ce lcceso ¡rismo. Dur:r::¿ ¡cC éi
ai ,;bjelo, Lacrn ccntianaba la concepción sesún la cuei ei inves¡imie¡to
que no:ec:ria sobre:i oble:o voivía al vo y recíprccerr,ente (io üue iue 13
ps i coanár is is, u u. u"7"
psicoaniiisis. I
::'üfi: .il:$: :il.il ;l';". H;l :l
rc:¡. que habÍa corn¿o ,n
*;;.;':"-.;..:;r.,
ci:nrinulción humerrisiícrrnenie ilamaCl "t¿cne Cei tubo en -u"). Era cons iruve su conce oció n"i""o
l.; 1"":i;:::-r.r.o, iel psicoanáj sis,¡
necesanr) una l:ofli d.ei :liicicismo absoiureriicnr: ii;'erent¿ r ia.:: ireuri ¡q 7 ¡iLr.
i se aciic:r,

l¿ie inrenrlr.:1 coniiirir:. Donet i. anbos.;;o., ob;eio. de un ¡:isrno',,


.+ esie resD.c:D. ei :ex:o más:-ienpiar:,
únicc lado. Un::¿cría n:i:icisn'lo Dcr ciÍo iadr: i"nenos chu-canie que
d,el
{ r;s cctn"pilos
ej mencs compie,io es :q::ei scbi-e
ii,:ei1ic. ,oorqu¿ iuni:'oa:l .,o en la ailgnilad. mienirus que ¿n F::uti se ¡amii.iu ts en ia;brnic!ón de! i.n-Ci,;iti.*t=,cuno.s¿ñence.
:cnsiúcrebr que :l :c::si,. a la aireri,ja.J se i'.:riizrb::. ] cosrs iei ,¡o.
Ei eslo raiicaba, ccilce¡á:dttio bien. :ctjc ei ii'coasse en eLque :e había
i":e:iCo ei psicoanÍiisis en ei abcrcr;e de ias psici.sis:i..n eje -:- j L¿c:n. L1e ia o.::co.ris
:rurcnoica..., op. :!:.,p. )53-
r-'-,. L:c:1. .-}...:¡o.r. )p.
e:lir:nianirnto dcc:¡:nri.:la,.iirn.ie se neiieba:uesdL.reCo. Er i i],5. con c::-. ) ó:.
'-]L" c i:lc:eÍ:rl(J,.:,jic:¡:cr: :j ;:cír::rr: i: jc ,tt:t;cct::¿,
¡ !,.t..2¿::¿ *.¿.:n.
;f ,..2
lA) Fzud. y después ttctn
3alials 'aganianas en ca^r, irzulitnoi !01

irmpoco pubiicacio en sus Escritos en 1966'7 (habrá que esperer 198-t Ei uso de la ciave kuhniana al cuai nos scmetemos
para encontr:trlo de nue'r'o disponibie fuere de las bibliorccas). rexro a aquí, destace , y de
manera inevitabie, la c¡:estión de saber
propósiro tjel cual un E. Pichon no se equivocaba al desisnarlo "docrrina
a qué paradigrne en ptaza
susrituirá el ternano iacaniano.
de IÍ. Lacan'E".
' En 198'i, en "Freud'Jesprazado-',", nc vi irevaco
a rieianrar que :o cue
El acontecirrien¡c Ce 1953. Ia invención de S.I.R.. convulsion¿ ese cera L¡can habia creaCo un parxdigrns ccn
respecio a.l psicoaniiisis ere
crÍnino. trazado por comoleto, de una generalización tiel cs¡¿dio rjel el aborcaje freudiano der caso, aque"iir¡trcducido
porel método freudiano
espcjo ( ése que es el iexro de I 9i 8 ). Vi src Cesdc S.I.R.. es¡: seneralizrción - -v no la doc¡rina freudiana o nr o cuar
paae de erü5r. ¿pr¿rooupli*rutr¿
Darece ser en adelante, cuanto más una pars pro íü¡o. Será con ese nuevo evicente que meenconraba ce maneramanii-iestaen
ese esciito emoreanio
paradigma oan el csiccanálisis que i] partir cie enlonces Lecan ios dos sen¡idos de ra paiabra parac{i-rma
reconsi«Jererá ei coniunto de los oroblemas clínicos. técniccs v de i¿ distrnguir rlespués e^11l.1iri,-r*ción
qu. Kui;i;;;;^;;'ii;;r." .
ioc¡rina.
p.i*.roie., oir." ¡...isi.,,o -io qu"
vc no adverií sino r¡
s egun da cb ie
j:.
." . i,:,ffi ,T;:j; :::,f j i," n :: ji:::'"i:,::
se le asig¡a un vaior cenónico, que sir,rl para
Iiacia ei giro de 19?5 resolvei piobiemas
ibrmalr¡enre parecidos ai que él planrea.
Tales eran, yisios por L:.cra
por oiros), un cieno iv
número cie casos de Freud, cümo iios
he cho ya subrayado de que sus priineros
i;.";;;.]
"'Perac1isma" ¿s :ues rquí empleado en el senti.lo ,.le T. ,I{uhn'e. H¿ri'los seninaios son consasrii,,.s i
eiios' esenciaimen¡e a eiros y no a ia (o a
vi::[o quc ¡r:,ir: ¿i irabajo de L:cr.n de l9jj e i9l;'resor¡ntje e cincc ias) r.o*oiJ
oaradigrna ricne rembién --i sen¡ico de "ma:riz
ri.";t;;r;=r"
cri¡eios ,leiliicos tr;r'li.uhn ccn'lo ínilices ,.ie un cimbio iie c*ru.ciigrnu en iisciarinana,'o, o,.io ¡.
oirs nancra' de "genera.iización-esbozo",
unaiiscloiina,i¡ri¡: l.-jc.sco.nceprosesnbiecirios.:rnbiu:-lesisnir-icrcirin qu. .r".r op.ro"r. ."
seniico
r§i,'ur - -)..'.. .i-..-!.-t¡¡.i:-.¡O jC ICS frObiCmiS Uue ;e u.ll-¿::n I i.l
la primerl obra tje Kuhn. Sirnilar a esro, io
que exa¡nina¡enios, ei
desplazrrnien¡c de Freud;or Lecrn Cebió
in,iestig:.ción. l.- :i auevo pariiigma de:iie 1¿ ccrtii'icncia de *s,:s gr:.madcei ¡.1 senti,jc.de n:¿iiz de ia pajabr:
ccnsistir ¿n p¡ser rjei sendco
probienas ', .:c 1r> st:iucion¿s ie'¡irirnas. -i.- rnodificl ll imagii..aciiin paraCi?ma (jse tie ei
. l(r probierna de una roríricl. ¡e la :ecda
r.LiL.¡q'-. ' e/,
a ¡ar:i¡ iei 3 ce
'-: '^r"-': '^ -:
liu.LL¡i¡r¿
":nriocucciúnd.e I¿tocuic,:ir,.-i.-in::r-.cucanui'. rs in¡rcducir R..S.I. rili locde no ;e dis;cnia :i:ts .,ltio ce ig:ii. ¡i
ior;nas ,ic or;c:irr i en "'s¡e ser¡ico. lr :ccriizrción ce ia I.P..\. sobre ias qu: ¿r-,,i *¿"rri ;,;.'
cie-o. r.o ere cesc¿irbre, :ero cue. r i:rtr i- =":
sesioncs puniui,.:as :ssuii:l'rien :unijrco -¿ún >i esiu iue cr,.r mu¡,, r-nrils
no h¿bía c¡"eiic Ia tecí¿ ¿e la pric:ice que jr
_;-;.;i=;" L,;;. ;;;
¡ermir.la), ie :barCrie .je hs
divers¿s mlniiisi:clc¡:es ie le iocura.

T¿nro ei retci¡^rl r F:er.:,i :cn:c la non:ii¡ación .Je


un crmpo ileucir::o.
c¡cvie:'le;l e¡nbos. bien,:onsi,ic:aCcs,,ie ul.]
i¡ie¡.n lpii¡r,-r^ ., -r-,,,,
pcrcue i¿ c-sis en¡cnces ebiera -n .i
¡eña.ii:ido por i<.ur:n de un c:nbio de "nc:sil'.;::;;i';,,..'::;:;;
,.a.raCigae s,,¡ e! inr¿rior i¿ unc
i

l}i Freud. v dc¡oués Ltcun

(del tipo Einstein/ * rdelos


disciptina constitltida. A partir de tales cambios seminarios lo que Lacan ha liamado una exclusión interna. pero, a la
dra tocio por tierra: la
Newton) la crisis abierta, observa Kuhn, no'
e§pera (estamos en 1964) de que se resuelva enüe esas dos posibilidades
discipiina(coRsucomunidaddesabios'suslaboratorios,.SusdiSPositivos que conciemen ei afuera (¿afuera? ¿o no ai,:era?), es el no sabido que
realidad con la cual
de debate, sus insti¡uciones) permanece como una concierne ei afuera lo que peif 1975 levantará parciaimente Ia hipoteca
pu"O.n contlr quienes introducen allí un crmbio de
paradigma'
momento de de ese no-sabido.
la catástrofe es grande' puesto que en ese
Cien¡mente,
aquello mismo que Después de 1953 v duranre 20 años, la teriaca lacaniana real simbólico e
conr-lictos de paradigmas, se encuenrra rlesposeídade
problemas' es decir' un paradigma' Pero ests imaginario5o habrá sido eso a panir de lo cual Lacan barría la quasi-
p.r*itio ,*rolr., lós
con su nombre' sus objetos' su totaiidad del dominio de aplicación del campo f¡eudiano. un solo
carástrote no es tan rbsáluta: la discipiina'
reeliclad socio-cultur¿1, puede sopoftar ese momento de excepcton y ejemplo basrará para mostrcr la posición tan particuiar de esos rres
que un funcionamiento órdenes o caresorías o regisrros o dimensiones o di(cho)-menciones
hacerle liente con los recursos tiisponibies hasn
''normal" nueva.n.n" ,t"'ieblecido' Entonces' si la introducción respecro de la probiennarización la pra<is analírica. En el semina¡io
pueda cie ies
deS"i.R.noequivalíaalasustitucióndeunamatrizdisciplinariaporotra' psychoses, Lacan habla de:
que teníl el valor de un primer
o see. de una iormalizeción por otrr' sino [...]tres órdenes dei campo de ios que les muesrro, mach¿cando desd.e
paracligmaformal consritt"i'o tal d'e una disciplina' se comprende hace un cierto tiempo, cuán necesário es inrro,lucirios siempre en
"^' con una disciplina
que Lacan, ai no poder conlar' para su injerto' nuesua perspectíva paracomprend.ercualquier cosa de esta expeiencia
permitir' o g:tof de todo
ccnslituida. debía crear el conceDto capaz de fla experiencia analírical; es. a saber, el simbóüco, ei imaginano y ei
de lo que
iJig"*"t, a pesar de la ausencia de discipiina) la recepción
1<<
reSl*
aportaba sin que con ello echan a perder
el crmpo' Así como se nos
se manifiesta también la Que el anáiisis haya obrenido de esta _cesrión un tbrmidabie benel1qo de
manit'iestr. el alcrnce del concepto de campo' t'ecunciid.ad, he ahí 1o que nos parece inconresabie. |{o es soiarnenre que
necesitiari inder.ar el campo solo al nombre de Freutl'
'Je ésra ha1'a revalorizedo cieros puatos de lecrura de Freud, ios cuaies no
"campc traudiano"'l Nil
qué iugil nos propone L¿can el.término pue.-ien ser desCeñaCos cor naCie: la tearporajidad del apris-caup,la
¿Desiie
<iónde habl¿ en
J, po.o'sorpren,ienr. to*""t' que éi precisa desde irnponen'ia 'ie ia puisión iie muere en rantc consusrancíai al simbóiico,
inrrotluce ia no'ción ce
Cel ii ¿e enero tie i96t' tn ia
sesi,in
que la denesación, la fbrciusión, ¡1 fari-de, ei conc:pro ie'das Ding, la
"".*ii"
campo; imoonancia Cei. Pro cle una psicología para neuróíogossó,etc. §o es
"-ec¡o
:i que yo relomo tI probiemr [el prt:blerna:n uuestión ioiaments ¡ctj.o lo que esa,¿:srién ¿cofia Ce inéCi;c y de interesante: el
Ei lugar GesJe
Io.t=.rC, *."oi q": ;Qué cs el psrcoanúiisisll' el heclro 'le Liu-- binlno acrin',outi pasa.je ii ic¡o, ias tniogí:s r:ecesidaC/demanrj¡/ieset:
qu¿ ';¡ :lo esiá mͧ o senuiloigcc: idiico/eoce .iei O¡ro, o la noción Ce ,Jiscurso o inciuso la
pctlarr,os iietinirlo ccmo Jn-lugu que ha c:rnbi'¡tic'
cctrnpletamente deltrc' i¿i luai nc se sabe si :s¡i :lu¿¡¡' no es
puesrt ¿i :esnuCc ,ie les ccorienacas orocies a ias iiilogías f;e,;ii¿nes
'rne':dotictls ' cas;¡acicirv' ii-,.isr;acicin.i pn.riclói: e ir-:i:ibiclón,sirirona/ang'Jsiir. No ¿s
¿r-er]: no ss:L soi:nenie ,que :sí liegarín ¡ esci'airse un cie*o nü;i,¿lo Ce naren:es. cue
S¿ utl'"'eltlrá que ha,r disparidari ¿nlíe
esc Jentro
'se
li
pie:.lr;':erte cer.i:c i"n '"'¡to :elinrtio ;or Klhn *,lt','p"t:t:
ru¡-tabt":o si isi'l'::-t"':
¿iuerl} c: j¿ .:.:e L:can ,luien lla*ló 'tenaca ' J, su iaÍ::ario. ,resesd¡cclo isí ccmo un ixedic3a¿:lro
i-ip(.rr:f, un ir'.1e1,'o par:rligma)' püri) 3¿rñl:Inecz comoriesro ocr írüiúoics ;ueeos. 5c ;ira: n:crr:io a Cyra:ro ,..ie 3crg:rr,c: ''..vf i lclgul :s
,:n: vioor: qu¿ conrieae ci ,¡sneno .¡ !¿;eriaca :c<1o junto''.
j j. j. Í-:c:¡. Lcs :trzc:tres jieuiiemes :ians i.es plcnc*i, sesióc dei l6 Je íovr¿r:ire lc
l9ji. iriiiro.
jó.i. 3:::d.'Esbozo i: r::a :sie ciogia ¿i.entiilc:¡" :¡- Ii ,-tt:¡.ntento J¿! fr:c:rnt!i:;t.t-
l).'J.. .r.i::o¡;orr-u ¿u.. 3¡. i.s.. l;)30. ,;oi.l, .;.i39--i-<.
lM FreqJ. v 4espuis Ltcan güli:ns [ucun¡unc.f rn ¿umQú Frsu¿iüto l05i

¿f
guardan cada'uno su pertinencia lccal aún cua.ndo ninguí:o cie ellos no problema de ia te:naridad de su o:lredisrna (por el sesgr.l ¿tet nu¿o
pucd.a prercnder ser EL materna dei psicoanálisis. Tampoco es solamente borrorneo ce lrs ¡res "consistencias", comc !-nuy prantJ iban a ser
todo lo que por esa gestión se encontró asocircio al discurso analítico que, ilamadas), que Lacan ilecó a poner.n cues¡ión su esratus. A parrir ce uiiÍ,
a pesar de lo que habían sido sus comienecs, manifestaba uaa neta la reriaca lacaniana,,en l,ugar de persistir en presenierse ccma ¿so L!
rendencia a clausurarse sobre su propio vocabulaio, en especial, la parrir de lo cuai podía ser reconsitlera¿lo el conjunro de probientu, se
puesta en obra efectiva de relaciones de inte¡pre¡ación-n:rodit'icaqén- transformará ella rnisma en un problem*
aprcpiación con ias Ciscipiinas ccnex3s (lingüística, fiiosotÍa, Iógice, Nues¡ro próximo capítulo esiaríconsagrxdo a un abordaje de esre iitino
tooología). Fue también (diremos, por cieno, "sobre todo") a nivel cje ias e inesperado iearr.l. Por cierto, la proiongación de
-=olpe ¿inesperado'?
observaciones clínicas cie detalle que se puede evaiuar esa fecunCidad. Freud por Lacan. ai cerra¡ ei'ecdvameare ei circui¡o del estibiecimienrc
Ejemplo: se está Ce Cuelc no por la muene de cualquier próxirno sino por del mércdo tieudiano. podía inducir x pensar que er sujrro '-al iin en
aquel o,:queila solo(a) del que uno habráñecho sopone de su castración; cuesrión"i3 hailaba su base en esie mérodo que, L Su manerf,.. dejaba
oro ejenplo: lo riecisivo del mito de Edipo, únicajustiiicación verdadera aC.;enir la obra de la li:cura. Fn io que concieríie al par:disnla R.S.i., ei
de haberlo elevado a la :ltu¡a de complejo, se vincula con el hecho cie que probiema oue ,iesce enionces se plantea puer:e f'orn:ularse así. e! cier¡e
Eiipo no sab¿c; ctro ejemplc: e! objeto parcial en juego enel iantasma "se rneroco lóeico ei: e i que Freuc por me .jio dr Lrcen se re u n ía ccn Descrrtes
pe'zl. n un niño" es ia mireda: otro ejernpio: la cooquista cie la voz como haciendo así d,el suieto "una cues¡ión :l i'in'', ¿habrá estad,o .:.cci¡cañaco.
objeto cuisionei, por 1o tanto, la puesta ai desnudo de una nueva pulsién; sos¡eniio, confirinarjo pcr:i esliblecimienlo üe un carrrlisrna parr :l
otro ejemplo: el amor es dar 1o que no se tiene; otro e.jempio: ei objeto a psicoanáiisis que a panir de enronces lo consri¡uiria en,iisciriin¿:iií
inrerviene siemore corno un "no es eso"; otro ejemplo: es la iigura Cel ccnCe resuiteba:niis..iusic no conrai m:is,lue ccn ei campr--r iieui:irio.,;r
sujeto supuesto sabel lo que constiru;ve ei eje de ia transi'erencia...etc. iuera que el y.araiiemr. lo consliiu;;era el caso {Freudl o que ei
Ei rugo gener3d,oc de esa iujuriosa fecunCidad que tuvo también el esiai: lecimienro Ce R.S.i. :r-.nio para,ji:n:¿ no --stuviera aCcuil,';r: i i_ac:n, l

asceclo ie un soplc Ce aire fresco no puede más que ser locaiizado en la "Freuii. y rlesnués Lrcrn". Esra secuencia cr:nsecutiva se na;iiiies::
¡ernaicad misraa. cianmente diferenciada Cel binaismo doctrinal como eoisremoliigicrraenre singulrr. ,ues no corr:spl;nie i ningunc .3e
fieudiano. Le cr:ncepción ie un ¡eraado corno fundamental no És tan los cl.sos icscrioro-r :or Tc i-nas Kuhn; cerc en carnbio. .;e reve ia iscmor-, a
exiiavs.:an!e cono quizás se io quiere hacer creer. Un Fcuceuii. al menos (con ,.rna in,, ersión ..ie sidito. lo ','eremcs ) ¡i :e:orddo propi,.; ije :se :u:cr..
ial ccmo io iee sLl :migo Deieuze. ¿no liegó fcxso a :so cuanCo pasaba I r-éistinción a i.:. que Kur:n ile.;ó.je uir.. a o¡ic. üe sus d()s ._:r:i.:ies li'cics
ce un esiudio dei s¿:,)er ú ael. porler y iuegc :i de la subjeti,;eción'? En ccriespon.le .-ilu\., ir(:a:.Ir-e:ic r Ie ;uc.-:cLcia :uns¿l'-::i',: l:e,:,-:, Llc::1.
c'Jen:ü r Deieuze, aísia lcs térrainos concepto, p€rce?ic ;i afecto carr,o cerc consitierluc en:i ot;c senridc. -.,liel¡:rs :ue Ku;;.1 ::.i:cil. i.iii:3r iii
fiilrjrnenteles y, rnuv .bororneenamente. corno iniisocirbies. Yl K. cern,;l t una ¡cc:cir.e:rr:,li:=¿ ju:tt.tt -;pr!s-.-.a:i,a:r.:r ji Jjrttrs;lu.j
Popper disirngr.:ía tres mun,Cos. no sin tenblor oor otia ilar¡e, puesio cue cur: -,iisiin:ui¿n,i,r fnilii?nl3 cilniatic:i rei clsit :ar:ui,¿:i;:icor ,.

:n su le:rqua;:. el tercero se llamc'oa Drite R.¿ich... Por últin:o. ¿s iór:ruie :rr:ii.inilice, i: nei;iz :ornri i.riet¡.rdora il,e un: .:i.i;i:iin: ::t
nccestfio señelu como crpaz de poner ¿scecialr¡ente 'Je le lie',e hastr ,..i;t ir't()menio ¿:LiO r-. ,ie iquí
iue 5e iOCc ie nani:iesto ci1rf, i.lcs\l(ios üue
qué ¡unto el ternaisrnc Ce Lacen iba,v va a ccnracelo dei ;iilaismo gue ,i¿ .;¿cuencir ccn:ec::ti.,:l Freur:;'L¡c¡.n le,jLr¡¡3 ci mismo i:.1\i j-lil. ;e;r: _t,
j,cmi;l¡ aueslr:. rnocer:lr,jad, el ¿studio Ce Danir-Rc'ee;i Duicu;-7 que. ::';és r'un '¿i le';es" i'.:: ::c:. :fiii-;. -;cl.:,:.¿:.::rcnia. ::r. '_Li -¡:ta:.lr)'..
ccno Lacen ¿n 19i5, no le sacó ei cuerpo ai probiena llsrnr:c d¿l ciso :;r:cigc'ii:ico I l:r alr;:¿ rcrnai cacaz ,l: ¡t:ir:ui¿i lr;.;
5in er:nbargo. iue precisamerte por heber :'cr:rd.r.d.o tiont¿inente ese
106 Freu¿L, y después Lac«n ,

pqoblemas y de definirer abanico


de soruciones posibres de unadisciprina
advenida así como dada.
I

¿No habría ya lugar de ahora en mds para referirse


al campo tieudiano?
Este' al igual que un comodín'
¿r,au.ro t.niJo ru ,i"*po rnienrras cumpría
sr¡ot'icio? ciertos Iacanianos concruyen
,ur,.ouo¡or^-o"i.iili"""r, ,,,
preciosos argumentos, que de "" der
Freuá a Lacan " Ia cosrura der ruear
sujeto esrá de ahora más termino¿".,, qu¿
.en
advenimienro de Canroberrie,,. pero, ,i ioiiu.ro
ü;;;;'i*",.
",
el caso, ¿por qué Lacan
habría sido llevado a probiematizar
su ,.**io (ar punro de escindir en
dos una de las cuerdas) en el momento
borromeanismo, podna haber creído
n ir*o en que, of .n.onr.., .i
e.ritosa su opeiición a. imponerto
R.I.S., y después I
como paradigma para el psicoanálisis.)
[...]en ñn. 30 cÍeln que miencr¡s viy¡
podrán us*des iomar ¡is
iT¿ #;-:',T]1:
J. Laceo, 1967

Donde semuesta que en el mismo momento en que í-acan se ocupebe Ce


convenir en matems. el ternario real, simbólico, imaginario gracias e la
topología del nudo borromeo, Cicho terns.río, le¡os de encontrarse
cómodo en sufunción de paradigma pq.ra e! psiccanálisis freudiano, se
tornó é! mismo exolícitamente problemático. Dond,e se muestra en
particular que el simbóiico sufrió entonces unverdaiero cataclismo y no
se restableció mes que di'"idido, d¿ ciií en rnÁs, en símbolo y sínroma.

Voiver a poner a Lacrn an 5u lugei

Freud. y Cespués Lacan. Esta secuencia ccnsecuti,¡a no fu,e la Ce rjos


soliranos cuvrs .sirrnpas tue:an irn i;npone:ites quc ics ctros, ai iado
suyo parecieran cecnss, Ccscuidabies ccmo ta1es. Pcr el cont¡a¡ic, esle
secr:eacia consecuiiva se jugó en reiliced iisióricernente con ios otÍos -
pequeños o grances, poco imrcc:. Si de FreuC ¡ Lacrn hay real¡nerie
i.,,,,p. r.rpolo:¡íaci.rrens¡dn. paris. lesr!. presentn:on
:lt: iT";"]'::::::ff,.*"
,_.,:.. .1,.. ¿s t)()\¡t;i( ,iuc r¡r.lce ase morncnto ¡ou¡¡drisie
algo cue merece ser l.larnacio una transrnisión (lo cuai hemos intertrio
L:cu
,¡ue i¡c::iri.ic¡,,:on ¿l
nombie de C¿¡robe¡ :r :iu 'inrrciucriun ¡ jc:jjc¿r,. p**. situer con la r;rucia Ce cienos concertcs: mé;ctio. caso, canpo, escuel¡.
2::c u: :iií; !-ons;dÉ::,f, ierii:¡d:... ,,:_::mosle lj,.,lr.l", nr-i. S¿uil. i 96.¡. :. I I ).
'¿:,:o. av(xf, ese :nJmc:to e omLl
;;.f ;;r;;";:;; * a.._. ," ._ pararSigna, Cisclciina).en;cnces iesuii:rá :oi:ble ¿i hechc cc que L¡c:r
:uslhl-- .i¿ Jvsnir. aa*u ,nlara,aa:nrc:ru
ce:c:ada.ci§. y.isio muctc,i¡,es,ls ll int¡ot-tuución -:¿s+:brc. nc haDiá sid.o iom.tcc por Freud ¿n su ,ell:si-¡ ('arnlliamente:.ctuaia; ie
¿.i !oao*.r.:ue lo;biig:i:::
:icons¡dcí:t ii icgic:s¡:r:,iü :l i:Lr:i, JlÍil¿it¡,. un hiio si:c:scf. Í :c:¡::o iue iesizn¿c¡ :ci Fr:::d. ¡ar:;ucederl:. Ilis
\
i

l1g Feq!. ,y cl.zs?uis l¿cdn l

bien fue confundido enre


Ia muld¡ud, a iuz.Sll por la
cc:'tesii que le envió despu¿s respuestajde pura
(único conracio entre ellos,
¿e ¡reberáiúa" ," e,.;"*i*, i? ,, ,.r,, ,las que ncs habria proporcionado y, raeore
en todo cesc, a Cecir u.r¿oO, no
fr*r" oon¿" .ono".*orl. sin .,rl*go,
to puede elegir un procsdimiento dii'ere::ie en er punro
,.
e;<isrencia ce cienos.otÍos, en especial de paniáa. sin
directameore impricados .n
de aqueros que esruvieron pretender,rustiticar 4oresuraiamenre una elección1d vez
ro ror,oliulT."udioou,'dei injusüfic¿bie e
ñ:e pr:ca cosa -rnuv por hijo sucesor, no incluso (como se d!ce) incarificabie, dejemos asen¡lda ia
e! conrario- ."-lo sucesión fórmura de
solarnenre ,orque Freu,l Laian. rvo Lacan a l¿ cuai nos confiamos. L'no de los temasque ella desa¡rorJa
ella permire destacar esa origina.i cuede
.:l_.o:rr1p:nro
posición de Lacan respecro ser'¿ir de apoyo a su e iección; consdtuye, en et'ecro, una cie
ias iiru,,¿'ra¡:s
cet retevo d; F;;, ,;;üñ:
advenirque dichorelevo IIegó
dedonde ro
i..,ri,.
o to.rp.raba,. AnJIog.*"nr.,
aserciones Ce Lacan (1a única, haste donde conocemos) en la que
sugi.re
runque,ie crro modo, hemos ,iebi,Jo a sus alurnnos que lo pongail a é1" a Lacan, en su iugar.
*"di;;í;^il",?#;:i. ou.
fleia aquí:
lily algo que sorprende mucho y es que quieaes hacen nuy bien et
cumoañeios y luego .;;;';i;"*
n:eiicia la lransmi;ión de su enseña"=.,
I;T::JJHi::?:: rabajo de ra iransmisión sin ciiarme pierden regularáenie
ra

hubo de opiar por u¡a rransmision


ui ,n"no, has¡a ei "":i:i;
*"*."*J""jJl
oporn:nici¡d. r menudo r.isible que ar'lora en sus ie.{rcs. la
pequeño hailazgo que pcdrían ¡ac:r más acelan¡e. pequeño
de hacei ei
esencialmenre famiiiar. üir, o *srinde.
iecques Lacan esú muerto, Ou. incluso' porque. por ciero, no he tenido riempo de cecir
siennpi. .cco,
sus a,umnr:s' por lo nnto,
esa iransmisió" d.p;;;.
rambién. o. o r.roción de éstcs
,i, ü"T]i."
o" cie ¡cuñar toco - en fin. ao ciean que n:ienrras vo viva.
pcdri. usieies
opción ihmijiansta: por lo tanto, con agueria iomar algunas de mis riirmulas cbmo rlerlairivas: aún rsnso
or.os
a"i g.oá'i"
:onsrreñico su anhel0 iransr'erencia.r
.,,o¿i.r",oi;i;ffi;:,j pequeños rrucos en ni bclsa Ce maiicias.[...] El1os
no me ;iü. upcr
de ,., J"l" ro*ria ce su csicor#il] qué? Para oue tcdo ¿l nuniociea.que eso Les cerienece:
.,y porque
De :s¡e modo, resu*a que, no haaan er pequeño haiiazgc, eh)
como en ;ciia aplicación tJe 1 naé¡odo ¿si rnc ci¿¡rae.l Io es'corcue me
ei ";; desoués" se rcireia an¿iÍtico, cirrra,r- sino oorque ocr:i hecho ,ie cirarne, prese¡riiica.'an írc
¡nismo
ieb¿ crractenzr cada-una,le
1ro que
"" ;;l;;;"cir que una misma fac:ura
,.g"ir.r.;, ocufr3 en un psicoae,isis con ics nombres picpics. oue ien
útii --s -
io.s cu. .riér toios en parida,,J usrecies lo saben- lue la genie los diga), e.¡ccai¡n :r cci:r¡.rio.
Que' por qernpio' ei iercero ¿eba ;l ¿ saber.
l're,-esairmente ser iden¡ir-rcabre por :l conrexio rie peler, ar cual yo empujo rodo lqueiro. coa
siic
ffopio): "Freuc r.",,,u '¿ua¡iia), ¡nr,¡,.i-r¿j,r
e¡¡u¡¡u,&ru ci¡-^ CSéCCnt3ÍtO Ce pelea. Se me uOive¡.A 13onjÍ.:n rn:
,:;:'3":: :: H::: .z iescués
Lacan
iugrr:..justaniente eso ies pernidna hacei ¿l pecueio ¡xiir:go
i...i
E¡ 1o cue se rerrsre r ¿si¿ú*imareiiericion, liuesira ¡en¡ari'¡a será enionces :queila pari ia cuel ei iiegó ¿ cirecerse
eo estáprohibiio pregucnrse ¿i
ce
'ius rnanei-a la "'islu¡¡brabaL¿crn.,".irr" conirarse a ic ryJncs una vez: vsi..,g, e pcn¿: r i-acan en su iugii (1:ero,
haben:os indrcacio :i :es¡ec¡o. que pccría ¿ecasc it.re
ciei:ancnre. L¿crn i¡bc.rió es;e probierna ouesto :iguila ,rez?), nos ocne, il mismo iiemco i. acscr;cs ai] nll¿siio
incluso se .rüvo . ru ,rnr" po,-ienco
¿ de riuienu.s (¿voivemos a pcner1.ios al1í?) ;r por.so misnc
lr'Lger
:::',',,t::T:i:::
rrv.i:=,Lcs y ias;a cuninoic:oiis. de inienciones
comci:ziaos ;or ci¡irlo ¿n ;u :¿;t;o.Esra iue la ,erscectiva ci:r:.rnerle
De este noCo, no eiiminrremos
:"'":::?:i:::.":1t:
.."_-"-,.c5 :i resDeclo ¡rn:rrincccos .n
iu rjue j, jt.jo
un ,.me conrerio con anunciaca iie ia revisra Li:torar gue. iesde su piner ¡úrn¿io
¿r 1980,
;r reeUiaf je ¿Ci:erCO I
.. i:i¡eció a sus iecrores i¿s... ccn::iilasr. N{ás de iiez :rñcs iesouér;.
D:r3ce
eri io q ue r r.,i ..ro".ir, n o,o
*o cani co.,. .,r;i;".,_Tl j "rlXi[:t:Tl; iiificil ai:rmai que ios iacani¿¡ics ha,van aecho uso ie .s. .icn n."r.or..
que iecíarncs en ccesión .e
r¡a¡ar i, ,.rponr*eili,ai del y aun amoroso, puesro que ésr: er:, según la,.ier:-niclrin iacriiana dei
alumn.,
anor. su ''da¡ io,;ue nc se :iele", io cue se pubiic: Cescr:js.
'Fi;rr"nro:iivir-uó ir p::dio:,le.;u i1¡rc3 :eiacrón ¡ ros hereieros ariurares
=::c:ii;:bij:
elescrso a'¡anc3. ¿n esrcs úl;:¡::os iiez rñcs, der :nbajc,1e:scarleci,:ieico
de F:euc_.lii .i jonrenzo .jel texio .:,lx :jl¡ ,iel ¿ir.onnc;cio ,je rexiid¡d,,.. ¡sciro ¿r
!l.xe::Dtc :n .gló. .;l¡;eci:ra,rl".,;
r..;;';"'..
ici '.:sradio ijei ,r""ro,:
,i"*rr*'l ; ,I:[It:?r::;:,Í,r,";.:t j::.i;::
l1.,.T*,r" l.-jlcques L:c¡.n. "P:dr ¿isccuÍ: tux )s).c:.:iat¡es... ined,iro. i9óI
3..L:::¿rui:'r i. 'Bi.»cns iü rt iccbr¿. iourcus¿. ilcs. i930.
ll0 Freud, y rlesoués Lacan R.,1.5., v¿issrsá¡5 lll
ii
crítico de los seminarios de Lacan lo atestiguan.. especii de doble bucleT. Teoría del yo y teoría dei sujeto,"esos dos
primeros pasos de Lacan han sido como un redoblanúento de los dos
Que la tarea sea la de volver a poner a Lacan en su lugar (lo que muy
curiosamente, algunas yeces, es recibido como insultante por aquel a úkimos pasos exigido.s por la inrroducción de un discurso dei método e
quien le llega esto, cuando no habría más que regocijarse de eilo) es io que indexados por los nombres de lvlontaigne y de Descartes. Con estos dos
nos exige admitir que Lacan fue una persona desplazada, que poCerosos pasos, el método pudo constituirse como subjetivo e, indiscciablemente,
intereses estuvieron y están enjuego en esta partida que perdura y que se científico.
paga tan cara. en especial por la "desaparición" de los alumnos (ya no Esraba en la légica misma Ce ese cier¡e de circuito el que el psicoaniilisis
esián miís en l¡nción de tales, al haber sido ellos también desplazados por se constituyera entonces como una disciplina al proporcionarse un
ese despiazamiento) y, por lo tanto, con su esterilización. No es éste el paradigma formal. Y tal fue exactamente ei crso en ese viraje que hemos
lugar para tratar €se dobie desplazamiento5; se traia, tal vez más desarrollado, donde, en la secuencia consecutiva "Freud, y después
arduamente, de remoritar esa cuesta haciendo nuestra la f'órmr¡ia de John Lacan", el concepto mismo de paradigma veía despiazad.o su sentido y
Cage6, según la cual "hablar es necesario, pero cuando se pued,e hacer pasaba del senddo gramadcal (el caso, ral como lo aborda Freuci) ai
algo, es siempre mejor". senrido de una matriz--seneradora (el ¡ernario S.I.R. de Lecan).
LIna vez estabiecido este paradigmacomo tai (digrinos: desde el I ie juiio
El calderón : R.S.I. en borromeo de 1953), habría podido ocui-rir algo muy simple, a sabe.. que se lo
destinara de allí en mís a hacerlo desempeñar su papel en cada uno de L:s
grandes probiemas planteados en el campo "psicoanalítico" (el que será,
En los dos capítuios precedentes hemos puesto mucho el acenro sobre el en efecto, nombrado como tai desde esta perspectiva). Es inrjiscutible.
''ccniexlo ie-peiee" que acaba de ser planreaCo y que delimita ¿1 lusar de
por otra parte, que sobre todo Lacan, pero también aigunos poccs
Lacan. A dicha peler, el mérodo inveniado por Freud daba su cempo al alumnos se xbocaron mucho a elio. Sin embargo, no tue tan simtie, y esta
r-nismo tiemoo que pennitía, al rnenos loca.lmenie, que fueran vaiiciaCcs
vía de ia "ciencia nori¡ai" (como ia llama Kuhn) no ooCna ser consiCerad,a
o invrlidados ciecos enunciados que p.uciieran prcducirse ailí. aunque ccmo la única en.juego respecto ds io que acotteció r psnir rie i95l en
iuviese tambié:l el estetus Ce un arma. adeianie. AsÍ como se necesits¡cn varias décadas pare que Ne'.vtcn se
impusiera en Francia. el estrbiecimiento de S.I.R. ccn:o larlcisria no
E¡iccado ciesde ei pun¡o de '¿ista Cel rnélocio. la singulanCaC de la iue inmeCiato, ni tampcco el :eria¡io iacr.niato iue ad,inj¡icc en su
sucesión "Freud, ;r ,Jespués L¡can" se Ce.;a siruar comr: un ciere Ce lunción de paradigma portoCr:s. muy pcreiconlreric. De :ilí:i "contexlo
circuito: así como pueiü tenclerse un hiio de Plerón a Descartes, el cuai de peiee" que no sólo fue propio ce ia.l n.tomento iei c:inino rbienc por
le permite a Ph. Desan hablar de un ''aacirniento dei mélodo", ,Dor iLr i3.nro Lacrn sino veriaCerarfle:'iie pfeseite ;.r ;.c:ivo ¿n cada niom¿nto Ce su
ile aigo cur:rpiido flo 'aue impiice la id,e:: Ce n:cimienro), c.::noiiio ieccrido. E:: iér:ninos kuhnianos se iilj ¡ue ei rncmcrlo d.e :se reccrdio
i-nomentáneemenle en Descr.r¡es, de ia mis¡aa manerf, se nos pusc de no fue un rien:pc d.e cicncia normal: rue (¿ io es :ún l) un tiempo de
manii'iesto que Ce Freud r i-acrn nacía un né:odo freudi¡.nc, isoncno a.i ,Joni-liclo de parliig:n¿s. Sln enbargc. ienemcs tjue decir una vez mjs
,jiscurso del néloC,o. cue io reicblaba,r que incluso iracía,je ii u;la qu¿ no iue tan sirn-cle. ¿ Porcué::zón.) Pcrqu¿ ¿Ce:rjs ie las d,cs vens
que lcaban c1e ser menc:onads ii:acer iuncioner S.I.R. ccmo paraCignl
!.-Ct'r. €t P, i¿ :rc¡t:i¿n t!¿¡s :ous' ,¿s ¿rraiu. P:is, 3?EL. i 991. i¡ uni ciencia ioiinai, impcner S.l.R. como paradig:ra d¿ ul mcmer:lo
j.-C.-eo haler nosiiailo .;ue iste sc jccló. :or'lna .-¡iie, J tna.,'itmiiur:.::c:in ,ie i:
t¡:ns¡nrslón uue. )cr :ro l¡co, iuvo su greaete::re ccn Flelti ,r ia I nrenaciollu i r;r "Cei".
cn. k rrcns¡Zrt it;x.r toas r¿J eríila, i?.,-':f.. :. !39-l!ü). i -'Dcote bucle" es ¿i ron:bre l:c*r¿no,-:e rn Jigfo c3-Íie :'.:clulio' en cso':cid' :obr:
6.-Cii¿cc Dor.{Írnc .lev':n ¿i :..jculo ¡ecrcióercc,.]ue eil¡ ie ccnstg:ó t,'-c l{onC¿ ,:::', i: ':i ri:nc ¡rorec';';o. Ei ,jobie ¡ucl¿ .¡ril¿.ili ios oblelos iienuii;:Dics iorno : ru:Úsc'Jlj
.ie :q,:sto ,le l>:,)'l'.. '¡.\ r:¿'¡úsculr -¿s. ;r:r io l:.:¡o. g1 :omi-'re je su se?:¡ielón.
F rewl,.v Jc: cuis l¿t::n R.i.S.. v Cespués I
1!
de crisis del psicoanáiisis), una rercera vera más difícir cuesiionaco en su aicr.nce, sin dejar de dese¡¡loeña¡, rocr.rmenre, srlpap.l
de loca.rizar no fue
por eso rnenos eficiente. con eila, salimos del esquema
kuhniano, del
de paradigrna. 1

résimen temporal binario ciencia normai/conflicto dc paradigmas,


con Pero no fi:e sino ai final, ciespués de ios úitimos sern-inarios..nodoiógicos,,,
ell¿, el -"sicoanállsis se presenta como caso inédito. no balizeJo gu¿ esrs tercera vera accedió a un primer plano.
aún por El terna¡ic se" tornó
ei saber episternoiógico. pero, vera? ¿qué entonces explícitamente ei problema que se rraraba de ebordar:y
de esi¿
cienamenre no erl filsc -muv re.ios de eiro- ad.eiantar, como ro probiemarizacíón no saitjna indemne. Desarroliernos un pcco ál ,.*".
hernos
hecho, que el ternaio s.I.R. tue rntrodr¡cido pcr Lacan como
aoueilo a La pnmera acogida sue Lacan reservaría ai nudo borromeo (que ie
panir de io cual ilegarían a coder ser trarados de otra ibrma er cán;unto iiegó
a partir del curso de rraremática de cuilbaut) debió mucho, cieriamenie,
de los probiemas pianleados por ei análisis, adernás de arqunos e la. persistencia de esra tercera vera en le que puni:.:aimente. e veces
crros
recién '¡eniios '¿ ad'enicios ccmo abordables justamenre poi ei rurtivamente, aunque nunce de flianere rceniuada, las Ees oimensiones
te rnano
( en esp:ciai. una aproximación psicoanaiírica de ras psicosis que ya no cerrni:ían ir rnicuiación .le ios problemas sino que acarecí:r
era.
precisarnenre el probiema con el que Lacan había enrrado .n ellas
mismas como problema.
sin embargo esro consriruía ro más expiícito de 1a ernpresa."n,ilirirr;.
En los
subsuelos. oiro asunro se jueaba ,Jcncie er ter¡ano mismo iejos según es su hábito, Lacan esiá en ,¡ias cre inveniar un cifrad.o:,: en esia
, de ser
rccibidc como un principio a paair ciel cual... tocio ei resto. era en sí ocasión, un ctiiado caoaz de dar cuenn .le la irase
misno inre rogado. Esia pregunta se refene en especíai pnncioalmen:e ,Te demanco de rechezen"¡e io oue ie oriezcc. porque no es isc.
li -v
seniirit.¡ cue ccnvenía darie a c:¡ria uno de ros ires ié.rninos, p..o
asimismo a las reiaciones tr.e istos ¿atre sí. Tai ¡esultaba ,"a, p".r, Lacrn esteba. .pues, en vías de ccnstiliir una "térada" susceptibie de
asa
tercera !'e:a: 'Jna eiabr:ración reguiar sunque disccn¡:rua. r. veces soEoner ia inscri,cción Je ias múitiples reiaciones oue ics ."r.rro ,ér,-.,.,ino,
inciustr ie ¿ste iiase ¡nanciener enlre sí (,iema¡d.a. rechazc, creita, no rs eso)
una ir:ns:brnación cr-¿cirl de io gue subsumír. clrja uno de los rrrs
cuand.o, acuel 8 ie lebrsro ce i911, cor ia:irde, en la vísperr,Je un
ririninos sei ¡ern¿do. día
de seninano...
see. por ejemclo. ei simbóiico. L¡ deilnicrón cei si3niiicanre como ..1o
que ¡'srieserca ii suiero para Drro sienii'icenr:" val¿ como de¡'inic:ón C¡sa ::.¡raia, mient¡u qui con mi :ecmerni¡ de ]a :é:reija s:e
dei ii:rerosrba f,:/.r ¡ ie:¡¡de sobre ia maner¡:n,Jue les preseaiaia no,r
simbóilcc. -l.ioru bien. ai se: ¿ila nisrne nuevr.'/ ei esi¡r e;r ruriurs. ccn
:s¡c. suc:c;,i iue ;e::indo con ,lnx 3ic:nuccrx pirscna ;ue ¡is¡e r
io ¡ue has:r i.ironc3s se eniercíicorno "signiilca.lre" tia pa.labir
_.lena). los curscs ce l l. Ct¡i]baut, §e $e r:cu=ó 1!qo :1tr¿ r,1:¡ ,,ññ.r .1-;r!
se si:¿ue cue ei ;e¡rido ce i¿ ¡allbrr "simcólicc" r..*.u."r," nás que q-ru " !¡L; !ür¿:o fiiostrlrles, iigo que :s aade -ai :aiec3í- cue
sensi'cicrneni: cerncirdo. Pero esro es sólo un eje r:lcic. eiegidc e nrre los los bia¡cnes .:¿ lcs 3,:r¡omecil. ",encs
mis ilcr;bies. de acueilos ac¡ntecimienros reúdccs que e veces,
)/:l
me::udo si: griiar cul,JeCo icues i lcrn como Fr:uC no ,iice nunca
exp iíciranie;re que esrí ea li:n üe ccn'eqir ei iirc. cej anco due je
crer. así. 9.'(l¡ .íe3n -iiouci. !-¿:r::, .2.,r a/¡¡r. :¡insa::bir. ixd.dc:r. :¡r.¡siirei:¡
que sc i¡:ilsl:lllcr:ce lo nis;no), lie3:rin r ¡ncciiic:¡eisen¡idc iEji:c. 3ri.,r.r..
de los i993), ubr::rit¿:ii,,inie :Cns¿gÍa.a ri ¿siuOiO ie cSCa ma¡e:: ie i¿er ie ,:rcs.
iérminr:s "sinbóiico'' "rnasinano"'/ "rrf,i"; nociiiclciones cu.,,e 10.-S¿ lra¡:ba ;e :n ;:li:rio 3eor::é,;icc : ¡irere¡cir,¡ .i¿ :sie !lr¡o. icooirisl:c.
:: :ue
:cc¡:b¿ r-rr-¡ ::-e líi. .i,iu: :1os.:¡c3olirxcs ccn ei ::ecilo i¿ ia..-ac:s¿c:ln :e ln
ex:s¡encia cenuesiit.loi ii icia que cicnr-. i3rn¿j:o :ir.t ha c¿sai.o ce :ll¿tsfna sn ?ro./ec:O :e oC¡c. 5s¡¿ :aSarie ..:si
ser 3eornú.;co Li :oColii3:Cc :S ::rn: ¡é::.
rr:brectjcimenre. jl :3:iajc je un ;.Jaro ,.la :e.;:ol
3torné=ci ;a altes:lon I i jn .isj cl
nuCo borÍ:rnec ,.
-i:g:.:.: :! ...:eI!:o :1 .t u¿ :i : ijJíio aSrno .: i: jsaiio .;91v31¡ ¿ , . ,;ce:.iic::
¡i :rrr¿i .:.1¿i 5orr-.m¿c ¡.:is¡no li_¡i io lue lrgue I,:cñLnuec;ónl.
I I . -"Iaccues L:c:¡1. .l¿ ;rrz_..- ':r ..:tvoir,iu :s-:¡:!tcn¿:I,;¡r.¿. .:esiiri ;ei c ._i¿ ::hr,::o ,:; I 9?
J.-EliJ ille I crccr:siru rjc ,li.::so. i-r? .,::l .lliouc:: l.
i- \ r - - \ , -
):ns. 3PEi. i-1.} I , Ea .s0a¡jc!..¡,¡{r,-?xc.r:;. -...:)!.:uL.,rl¡.,:._..--.-..!1.*..rcl¡.:'il-a..in:ts:::::jxa::..-,jí.-j::.:;:t j;.cr).-.t:::j--i )
.^.- ..,i^, -;irl,.r :¡,1
i.l-¡ iiÍrliÍtlCitr5 -.::¿:¡ :::,:i lCsCill i¡:;:e ..if,:c . i: :t -=:¡:ii:i ¡¿,::::.::,_.
ll4 Ereud, y dzspués {.acan

¡"Como anilto al ded.o"! Por cierto, no se irata aquí inmediatamente del lerra a una fórmula cuarqui,era, es toda la fórnrura
cifrado de s.I.R. porel nudo borromeo de rres redonderes de hilo sino sóio la que no tiene ningún
valor, la que se desanuda, 2.-er nudo borromeo cifra
del simbóiico. Da testimonio de lo exrrañamenre bien que caerá el nudo peninentemenre ei
fenómeno de ras fr.ases inremrmpidas en schrebe.,
borromeo la exhortación que acompaña esa constatación: qr.l"in,o a" ."'i*
un eslabón libera las otras.
Es algo que sin embargo reviste interés, porque es necesario record.ar
La unión enrre ros tres del nudo borromeo y ras t¡es dimensiones
que, cuando habié de la cadena signit-rcanre, siempre impiiqué esta R.s.I.
tendrá iugar en la primera sesión dei seminario
concatenación. tes ,on-arpÁ"rinrr,
13 de noviembre de 19i3. La secuencia simbólica "l ou. .rroUi."ij ..u
Lo que cae tan bien está pues, en ese momento inaugural de emergencia unión es fácil de reconstiruir, siendo su punto de
bisagra,pr..iror*n*,
del borromeo en Lacan, claramente siruado como la corresponáencia Ia noción de dimensión. Dos cuerdas qu"i" .*r*,
subraya ahora Lacan,
entre ese nudc y la cadena significante abordada de esta manera: si faita se desiizan la una sobre la ora no podrÍan,
1, io t*to, i:or d.,..n,inor rn
un elemento, lacadena se deshace (caso de lafrase entonces en cuestión). punro, rar corno ra perspectiva recibida, la de ras coordenadas
canesianas,
sin embargo, surge a partir de ese momento un primer equívoco: esos tres io pretende. para que haya coingage, cercar:rlento,
po. Io--trnc"
redondeles pueden también ciftar no los rérminos de Ia frase: "demanda", determinación efectiya de un punto, es necesario primero
"rechazo", "oferte" (en las relaciones que dicha frase instaura entre el.los
un o., y.rro
es ro que nos brinda el nudo borrome_o. Los rres redondeles
ce hiro
y que subrava su cifrado borromeo: ya no se sosdenen más de dos en do§) aparecsn' pues, como unciftado peninente aras tres (nue.ias)
iimensiones.
sino aquelio que los términos denotan (Bedeuttng), la demanda, el Ahora bien, hacía ya mucho riempo que Lacan
había llanarlo
rechazo, la of'ena. tomados desde su vertiente de acio. Lacan d,esi_sna "dimensiones" a esas ires caiegodas, reel, slmbólico, i.n"gl"orro,
inmed,iatamente enioncss "función de a minúscuia" al hecho d.e que ,.eso
solo no se sostiene nunca cie a dos", por 1o ranto, Cesigna al anud.amien¡o
["']siempre es nec-'sario rres parx determinar, en
todo cesc, un
punro.[..-] Ies he hecho obsen¡ar que eso parie.
e§a noción. de orn
rnisrno (más tarde, v conforme a io que desan'ollaremos, idencificará ese manera de operar con el esoacio. ccn ei espacio
qu. hobirr*",
objeto a minúscula con ei "no es eso"). La teriaca lacaniana ¿se tmtaía. realmenre"' si ei incoascienre e,risre.
entoncis. no de una nueva aproximación a la consisrencia del simbólico dime:rsiones. riestecáncoias :cn los ldrnincs
ii
t...r caii¡icer esas .l3s
cue hasi¿ ,"uirr.,..ci
(io que imoiica ese nueyo ciiiado Cei simbólicc) que, oor io tenro, se di¡¿renciar ¡xictamenre r.ros rér:.:inos <ie srmbóiico,
Lie inaiinano v ie
habr-ía vuelto caduca en el mismo lrl'omextc €n que ela int¡oduciia, sino reri), lo q'.re r3to ,:e rccirnrr.es is due -;e ros :ue,ie
aanri,la.araa*,
ie algo distinro que no ¿nconlraba su ;sien-is rnás que ccn el eng:nche Ce.' esrric ga¡:e:rr¿ ¿c.ui',,a1entes.
ia ternandatl,,iel boriomeo a iadeiR.s.i. I v¿remos que runcioni ailíesra'' lie ¿quí ' cues. er renrano lac:n:ano ese dír enbcrcneizedo,
ieicein '¡era, lt del "no es eso"i y no soiamenre "aiií :cCavír", sino, ccn io cue
Ce. se p,riría ral vez ll¿mar -ccrrlo ccnsecuencia innecil¡a
üe :sta puestr :n
ahcra en mis. allí más que nunca, nd.s ¿bienameite que nuncit. equivaiencia de s.I.R' : i¡mecie¡amen¡e ad'¡eÍida por
Lacan- un ,oir*-
\fás rie un eño v mienkes los soportes :sciros d.el scninano a toner en su lugar ai sirnbciicc. k: cual cons¡iru,,.e.
CespuÉs, ei :odo crso, uI:¿
perri:ane:íen princicairnente tetddicos y geonjliic;:s (las i'órnulas de recusac:on ,:el pnmaio Cei :iiibóiico:
los cuatro d.iscursos. ias cuatro:lr:tuias <ie la sexuecioinl, Lrcan. ai
[.,.] usteCes siempre ha¡ .:r:mcr:ndido. re:c :cui.¡cc:ilanienre
reenud,er ccn el boriomec ii: a.bord,ará tociavía como " al*o que, sin dudas. i;:c::
iiumnos iienrl buenas es; iicas :, ; rambien i?," iso
srrr,.i,, ics aiuinncs I
rlc:nz:: la escnluitr1". Se irara sien:cre Ce un crirr.dc ciei simouiii:o ¿n las '!-ueci rrogresc. :i ;iso :ri¿imr; lo ;cns;:lute :i il¡er .;;..; ..
I

dos observaciclles siguienres : l . -ei ludo bor:o rrec ci;ia,:e ninÉnieÍnc ni. incon:ncla abr¿rnaicc: iei simbólicc ..?scr.:o le cse C:svenur:co
esta e.ri3encia cie la escd*¡ra ma¡¿náiica seeún ia cuei. si ial:a ,,:i:a soia in:rgraaio por:i cua,i ,:cr:e ncá ,¿oitej,nCcio I ¡elorazos. :n ii¡:.
c:n :i
prelextodeinarciclsl'ir:. Ji.: jrense. scllrneni:.,::ue ¡.¡eri;brciui:n¿rr¿
f -;:c;u¿s '- jci¡x--Erai)r¿. jerninanc icl i -i ie rn::.vo rle I 9:l irc busc:¡:
i;:éurco. icsion .'eai ue ia i¡-nig:r .:cl :s;cri) e:iu.;ie::
I .

::1 ra.no .-'st¡ .---:::g::ci: : ll :sc:..,.u1a ::1 l; .:si.in i:::rl '. ?'rius J:l :c:cicn:co
e
ln,. erl.:.
semlr:.io l.
116 Freutl, y'desnués Lucun 1l
, . R.l.Sr, :r Je:pués Í i t7

Por ia gracia dei bonomeo, R.S.I. ui""J", ese día al fin, su esrarr.ls de
afliigua escriura frrncesa ce sltmorórne) ¿eué es lo que impuso a
dirncnsión. Un calderón, pues. Pero q¡re inaugura también nuevas... Lecan
esta inesperaca distinción de sínroma y símboro? Digo *impuso"
dii'icultades. Dues
resulie ciarc que fuc necesarir l¿ inten¡ención de algo sinlula-.rne::re
crucial para empu.iarlo isí a padir en dos el simbólico, el cual, en vinud
de su pcsición basal ccn elimasinario y el reai, en vim¡d de su definición
EI giro inesperado de 19?5
ccmo resisrio o carescría fundameutal o di(cho)-mrnsióa. hubiera
debido esrar. en princ:pio, definirivamenre ai amparo de semejanie
T,;Cc parecíarnarcharperi'ectamente conel cifrado de las t¡es dimensiones desventura.
luncia¡nentaies. real, simbóiico e imasinano,
-eracias ai nudo borromeo
cie Ahora se frara de comenzc,r n expcner io que hizo posibre eso que lramo
cres reCondeies de hilo. ¿lrío ieníamos, en especiai efl uno y orro ceso, un aquí "desvenrurs'' l/ que lo es únicamente ea relación aj conservaciurismo
tr:s absolutamenie primero? ¿ No disponíamos al fln, con el nudo qüe se ins¡ala ien pronto ccmo uüa trx:r'ec¡oria se maniijestaefecrivar*.
He
bon'orneo, de unaescrituraque daiacuennCe lo que teaían de equivrJente aquí, pues, la comprobación de io que consriruve un probleraa para
úsas tres dimensiones; ciicho ci€ otra manera. de io que per;niría nosorros: el simbóiico se vio refutado en su especiiicidad (e inciusc,
consiCerarias como dirnensicnes? Pero rambién, /a st but not ieasr, ¿ acaso roiundamente, en su uniciiad) en ei preciso momenro ea que la reiaca
el ciiracio bor¡crneo del iemario lacaniano no pe rrnitía que se io enganchara iacaniana comnuesi!. dei sirnbólico, del imaginario y del reai dejó cle ser
,:. ias m.aternáticxs, en ÉsFeciai a 1a teoría na¡ernárica,le ios nucir:s (incluso considerada como ariomárica para cevenir probieniirica. Io cuai ocurrió
si :sta ieona esteba, en .se ¿ntonces, rnuy poco avenzada)? ¿Ibam,:s a a panir de cue Lacr.n ciiió las reiaci.ones de esos tres ¡érininos
esis;ir: un acontecinientc arás bien inaudirc, a saber. una ci.encia'cianoa boromeizánioios.
r ei psiccanáiisis) aci.nani.c su ccniribución a la ciencia reputad.a como
Lian:encs a esie l]ccnrecin.ienro ci giro d.e 1975. Es¡e siro ha sico hasn
la más dun. acueila üue eo debíanada r. nadie sino que daba a caca una-
ei presenre m,ri' pcco esudiiio.
se::ún sus necesidadesl- DesCe el ounro Ce viste tJe ia hrstcria dei c¿rninc
:bienc por l-acan. ¿no rlaraos ¿ realizl'r, Ce este modo, algo así ccmo ei s in ducas. se:'reianre :srudio ina ai;ncuenrio de ccnsicer:bies cirlcuinces:
corcnimienio del ccnjunro tie la e.ncresa. ésa que desce ¿i 3 de juiio ce 1.- ias'¡ersiones cue circulan;.e lcs se¡rinados en cuestión scn más
l9 j I irabía ¿ie':iCc eirem¡.iio S.i..R." como paiaiigna carael psicoanáiisis I de¡'ectuosas gue nunc3.: :n esFecial, pñorcue ciebiercn ser rcaii¿rdis sic
Y i:ien, en absoluto. Neca ie üso iuvo lugu. Y pi;r sobre io sue se ,Ji::. proiunCizar ia rroble rnj.¡icr. :cooiógica subvacetre ilcernis. sin esos
hoy corno aver. sc.bre la i'aitr rie sedeCad Ce la enpresa Ce Jac:.ues estudics iocoiócicos :n ,i¿rriie es in'lcr>si'cie descubdr ios erores ie ios
L:cii'l:-'. ai melos se le deoeri i!'conocer que supo, bien al finai, n,: g¡tar ciibujos. lusgo. incosibie sin dibujos .xecios, ¿srabie:er
--i iexlo rue les
';rc:ci:J,:. iesto ie ücscr.ncc3Í unr.;ii¡lcui;ri: quc ;upo :o .JCnrri:e il;'l esii. .sirecharnenre :scciaiol, 2.- esra últirna ¡ia'¡ec:.Jd¡. iocoios:ca de
cueí''ito. P',.iesic que, ior ;iconinio, allí misno C,cniie cudo h:rbe i:sudi: Lacan se ¿iicreble n un iiáioso ccn ¿i mi¡enárico pier: souqi, diiiogr-.
,a ;ic:oria. suro piinteer ::n prcbierna. uno nis. lf.it ¿si:3c:'rc -lue:iil./ prcr:c I:c:¡: ile:c I ilo Cis;:n,:,:ir irs sesiol..:s de
sus serni¡:¿r:os ie jus incue nrics con sour;i. hablancc ,.je ¿jlÍ cn inás al
Dichc ciio ;rodL). :-rc:n ;u¿o .'jar:n¡onces la imc¡esión Ce ,t:nerse :r
,-le
au"iitu'¡do iei seniracc ccm.o si l¿ habiare a soui-ii5. ce suere cue rquel
sí nisnc ir :¡eb:r en sus :rccl,.li i"¡edas l.tr:tindcse ie ¡edonCeles rie niic.
.cs ¿i ::sr) J¿ tier:irio). E.r:r:.,::u-. inier.,ino ccmc;nba ia inescer:ii¿ i]ll]l].,.iins;no :e rl::nr :qui ..¡r:.,¡¡do Jei s¡n:ooiicc..: ::cre sus ;rr:ios Js
:oblcz: :: l_:cs ¡ :ún nis .iíx :eiic:s :or a:ialie_ :ucsio {ue .:s :so ior lo :re.
ilis¡i;:ción iel simcoio ;' cei síntoma, uniija a ie ,Jirer:ncirci,jn cue ¿siccl:ii. ji .:::miflo ¿br¿¡:o cor L:¿it ccn fi¡a ¿ la;ei¡gión.juzg:oo r 3rances iasscs. ii.) ou.
,:n

sinu itane¡rncÍ'iia se inic:;. i; :e i ;in¡oma l;,;r-,a rórne) v sínroma i;i r.;i'tcm¿. no,;uier:;ecir tr::l c¡_sa_ :i :¡lió,:i¿:i: seá l¿c:s¡¡.lo lo<.I:v:i un :sc n:ü
.¿crnis¡¡o no
da .icft;c ::.:f, .¡ue i¿ i:.1c:.;.t13 :císlsie. üc .iíl:r.:u¿ :l::¡ :.;:::t:.
rt )cslclin. il
lj.-Cl:r::¿:r ?,r-.s:.e:::t:nr:.ie l.^s i¿chrdos¿¡ r.:luno:j:mlni¡. il,'i J.: :- :c.-p"- .;. )t;:¡. ij -L¡; .:cs¡ ll¿-:¡r¡n ::;l ,-unrc -tuc Su,rr-r icmr: ia inici:i:.,: je.jsr.:¡1¿ I L:c:.]: '.\jo.
l Ii,::raruicr. i¡t Sc:tC:. .:o :'li;s ,,er:ÍCs :i ::t:-1¿s i .: :i;i:::l: ,:ulca? iuc ;3 rt i5¿ :rx.:s i:;:: tucluo
'-i:nur:. i';() -:;:¡¿11,.'s ;:¿¡¡e¡rr. lf:esic. \iixlc:; i9úl I
:i¡mo:rc::::¡o:r:il jj ,,ji\i;: ::i:;:i .:::ut jj ,iÍ:t::rü :six .ü\iü;l :.r.:.r'
ll3 Frewl. v despuás La,cu
R.l.S..vdcspusE l19
se encontrabacomo melodía alaque le faltaran dos notas
si escuchara una ,

de cada tres (sería necesario, pues, retomar especialmente los cursos de IJn punto-nudo : La duplicidad S.I.
¡
Soury de aquella época para reconstiruir, tanto como firera posible, las. I

cuestiones debatidas entre ellos), 3.-Lacan se equivocaba; a veces se daba


cuenta, otras no, o bien se percataba" pero mucho tiempo después, 4.-las Actualmente,se escucha decir a ciertos lacanianos que el psicoaniíjisis no
correcciones de los dibujos dei piza.rrón estaban más o menos bien tiene por vccación desemba¡azar de su síntoma a quienes se acerquen a
anotadas; los dibujos mismos eran e menudo de una complejidad tal que éi para ese iin; que, por ei contrario, el psicoaniíiisis puede pecnidrie al
había muy pocas posibilidades de no cometererrores de transcripción, 5.- sujeto "hacercon" su síncoma-Joyce si*e aquÍ abusivamente cie modeio.
Lacan "buscaba" i dicho de otro moCo, afirmaba cosas que a continuación Tal sería, según esos sabios falsarnente desengañad.os, la lección a exrraer
se revelarían falsas. Cuando uno se atreve a abordar esos seminarios del senrinari o 19'7 5 - 197 6 ütulado Le s intho m e. Al esruciiar la fracrure de I
nodológiccs, todo esto da la impresión de tener que caminar por una seiva simbóiico en símboio y síntoma" el S. y E., quisiera especialmenre
virgen abriendo camino a goipe de machete, creyendo encontrarse aquí demostrar que dicha conclusión es más que intempestiya : es abusiva.
en un sendero ya trazado, allá en una encn:cijada, imaginando determinar Ei esteblecimieüto en Lacan de la pareja símbolo/sínroma sobre.¡iene a
ei norte a panir de tal huella de hun:us en un árbol, para darse cuenta, la paitir de problemas, a primera visn, de orden diverso. Hay aiií problemas
rnayoría de las veces, que todas aquellas supuestas indicaciones no tienen propiarrenre topológicos ( el nuCo borromeo. ¿comienza de iíes o bien es
el .ralor que se pensaba se les podía atribuir. No sorprende, por cierto, que necesario partir de un "minimum cuatro"?), probiemas históricos
en ESas condiciones prime aún hoy como referenciaen sus alumnos lo que (pnncipalmen¡e la articuiación Freuci/Lacan, que este último cilra con la
puCo haber dicho Lacan antes de :quellos seninados nodológicos'6, ni ay-uda de un nudo de cuaro), probiemas de orden clínico (¿como ciín:
que co se sepa hacer naCa mejor que parafrasearics, cuando se hace borromeanamente 1o que ia clínica reveia acerca de una dii-erencieción o
reierencia a ¿1los a pesar cie todo. ,je una no-ciii'erenciación del reel. del simbóiicc o del imaeinario';?) y
Sin embargo,es de norarque no basiacon habersituaCo un acontecimiento problemas de carácter propiamente docrrinales que nos susrana caiificar
tan particuiar ccmo ei giro cie 197j, por el cuai el rcrnario R'S.I. adviene inciuso de ciogmáricos si Ia palabra no esruviera hoy ran desvaicnz:Ca
e.xpiícitarnente ccrno problenia (mos¡rando así que pierde un poco su 1¿cómo dii'erenclar los elemenios que cornponen la "tnnldacl ini'ernair3"
üsteiirs d,e mainz paradigminca para el estudio del conjunto cie los de otra nanera que no ser hrcienCo inier.¡eair un sen¡iCo ct,Jo ,JesCe el
prob iemas Cel camco), ni aún con haber no¡acio también que ese -siro bien e-r;erior aceda uno Ce es,cs iér:::inos?). Nr: prerendemos, Dor cieitc, *sia¡
psre,Je haler vuelto posibie rauella liactura del simbóiico que se lleina ie vueita de esos crobiemas. Ni rje tcdos ¡i de ninsuno cn panicular. Por
"símboicr'síntcrila" o, inc iuso, ''R.i.S.:.". paraCisconer de una expiicación ei con¡ndo, toio iniica cue L;:can. en esio ;- cisi 30 anos cespués.
cle ¿icna irec:url. ¿Cómo iiegó L:can a esto'J T¡i es ei -lrobiena en el que mantiene una buena verraje. Cuanro md.s, irlzxer:'los aquí un :eccriio
ncs acenlra¡ernos, admitiendo ia ii-nportrnce reser','3 q'ue resulta de io que e:'ltre o.ios posibies.
actba ¿e ser iicho iespecio iri esrado :cluai ie los seminarios nodoiógiccs L¡c:.n introdujo io cue llanó ia "ciucliciCad Ce sínboio ,r sínrorna" en :i
.v Je lcs ¿s:ud,ics que ie es;ín ¡o, :rd,s exrc:imrnls' que no le :stá¡) cursr; ce ia pdn:ere jcrnircr del seninano L¿ si,ntitomc cue :s. :ues.
cc nsaglaucs. ra¡:rbién aqueila en ic, cue propuso ¿scibil "s¿ ntkcrne" tcr syrtc:óne. ¿Et
cué consiste lo no.¿edcso Ce es¡a Cupiicidai? En pnncipio. i:ür3Í:lcs :u:
¿iie se :scdbe asi:

l,j..fr ¡c¡lraaanrrla. ¿s rras::¡ioso -Jue irs ¡i:ler¡-s:::'i:cio¡i¿s,ie L:c::r. cuc ro


oreselt¡bu¡ iin embar3o ias misnas iiircuitües. ieall * -lfa.:i neciCr:bandcnaC.::¡ -io l7..il c:fr¿rjo ,iel :ro-,Jiic::nci¡do se rgveió cr¡ciil ca¡::'.:es',¡c:siuiio.IÍc;'3rer::2, ,rl
,.;re mosiiuía que l:s;iiicuit¡cjes invent:¡iaijas mds:riba prrec::: :e:er lgranl. {n J§le í'Aimée i¿ !¿ctn oo. ctt-
lsun!o. i3.-i¿cqu¿s L:c:.r .ti./.. ;e:rinano inÉiito..;esión iei lS Je iibrero ¡e l9lj':e :rovo
sobre 1¡ meio: 'rersrón qu: iirpcnjo. iebiu¿ .¡. I{cnluue Choii¿!).
.?..1.¡-.. -r lc-f¡als § lll
l1O Freud. v descués L¡ctn
;'
la nominación y del sirnbóiico. Llega a mencionaí, además de ia
norninación simbóiica, una nominación imaginaria y una ncminación
real. En cslo esiá ';irtr:aimer¡e ia e scirura de un nuCo Ce seis. Ahora bien.
en un gclpe ¡e:tral, a partir ie ia siguiente sesién, que es también la
primera:0 dei seminírio Le slnthome, trimanCo nota de la eiación rnaníaci
ral cornc había sidc inducido a leerla en Finnegans Wake, nos conliesa
que fue iievacio a piantear la ecuación ''Joyce el síntoma". Luego sgresa:

Es por eso que. en snro* me dejé desvíar [el subrayado es mío] de mi


proyeclo, que este a-ño era -se los habÍa anunciado ei año pasarlo- druiar
ei presente serrinano Quarre, cinq et sLt. lle
conrenté con el cuatrc y
me aiegro. pues el cuero cinco seis me habna rolastado seguramente.
figura I Esio no quiere decir que ei curtro d¿i cual se treta i:re sel sin embirsc
menos pesetlol

puesrc que hemos desisnado estadupiicidad como "punto-nudo"' xbordé$osla Pue,Je .¡érselo con claridad: soiamente ia serie de títuios cie esos dos
riiielenres vías, Ui ccmo pueCe hacerse t¡atr1xdose de una
encnrci.,iada seminaios consecutirios , R.S.!.-í e sintkom.e conlirma que ei "desr'ío:' ;e
.oor
ei'ec¡uó reaimente. Pero ta¡:rbién se ve que, Ce este modo. ,Dermanece ríln
planreada la cuestión del lazo es1:ecífico con ei simbó1ico, de al':o que, ;in
1'' via : el desvío embarso. Cebe ser disringurdo ,lesta exigencia subsiste, la cuai prci'.lc¿
ruoturx ¿n relación a io oue se cíeÉ tcdavía gue es ei simbrSiico según
Lecrn.; v rlue en principio se llarna ''nominación::".
parf, pcder
En principio. es posibie 'Jecir lo que Llcan debió Cescarisr
.line nsicncs' R. 10.-C;r:ecclón: .:s'.a:¡ir:::¡ción io se sosiícne :nis;ue si sc rdmite üue:ls \eslcres,::i
.n,..i¡i.i,. Es. a jaber' una rlupiicicrti de ceda una de las
)¿mtna.áo :cn soirrnente i:s ¡ua i:relcn ¿nuacirdas .ioaoo :xies. Esl¡r ¿iec:;ón iie:.e ,u
esle'Juplicación
S. e 1.. la cue Jaí¿ un :ruCo Je seis' La pcsibilidaii 'le ,iq:c:. iero ?i:.ri¿l lrcbl.cm¡s. sobre lorio en ios úiÚmos irios dei asrruno ¿blc¡:u :or
en ¿l ',:c¡:. En ;ar¡cuia¡. ro c:L'er ;uC¿s ie que i:r ccnr'ere::cil 'l,;rce ic siritliom¿ '. .i:¿¡ cor
iripie, pcr iu' iai'lio ¿se nudo Ce seis, csiá en .]ue3o e:'piíc::ar::enle L:c:n:i 1ó.:e junioie l9::-.:noc$ión'ieia¡cerur¡ieicutntcstn:ccj,oJ¡lnes j¿vc:.
R.S.¡. Al1í
.urro i. ia ú.ii*a joraada Je i seminaio pre.:*cenie iiiul¿co. "sii]]bóiicc"' io¡:nó l¿.r¡e ie su senin¡':o 197 j-19:6.:iel cuai coostitutri. pues' li xmer¡ jssióo' lci
Llc:n !uv.o c,üe ¿nirenter el hecho ie que si los eori:u'res :l :úbiico ii ei itgr;cr.ti'.:-n :esoiver::r io cue respec:a : s:ber st lú il¡el.,¿nc:Ón':r:i 'je
Llc:r :ori:ó () ao ca.r:: J¿ su ¡erniaano. .\sí. la ¡svisu i'.1/¡3 I e" i. .]bdl-mayo. i98 1 ) iiere
':inrgin,,.'o';1, "re:ll" hacen sendco, ac pcf ¿so tieian 'jc ser los ;cmbres lnij¡¡nenios para irecel;tiuliSo ''':¿ Sérninire oe C;¡acas" ¡ l¡ ,:on¡e:ensi: r.lue',ilo Íií
Cei simbólico
. u., ,lon'to i:ies. ros ;cnstiñen a 'jisdngulr la lominación L¡c,:'l :rr i930. .{i :nlcio :t il!i'.t:iot¡ "e se :odía iee:: P'¡es :lo irav ,iiierenc;¡ ¿nre l:
ijebitia ¡ la irrnaiizecicn loricmeenlr :¿ie.,,:sión,v ci cúbiicc :rte :i cuai 5ai,'ié:e:¿e,.t¿c: ¡¿nto:ie:¡cc. io ij'-e.se il¡Ín¡ rm
i observac:cn :bsoiuumenle iue';¡''¡
.;enina.¡:o.'iJ. L:c:n. iiii'-i;;r,'a r¡. ,;::.. 197i. il ¿s.ca.¡ioi. R;r.lioioníe;; leielis:ún. i'.:.
tle R.S.i.): .f,.nig:inj- 3¿¡c:icn:- l'.li?. :. :-l).
I ls¡edel ll..Jrc;u¿s l-x:n. ,l¿ ,:¿¡ttltoñe. semtnldo inéciio. :esión iei i3 ,i¿;lovie:rbre ¿e l9:-<
ei :incuiico
i...lle::colinación ¿malriresii' tii;orno
parcc3' r:::o .:sie semi;r¡co :a l¿ :¿:sion ai:ucx Jsilblec:ca ;or ln :;¡rei ccmoucstc ccr lert
!,r
tU:uu---^i.pn .
¡
.. ::,il. tal'reZ ;ecucrccl qua un jía -"-O leS Í'Ü:;i:: la r:g'.lrl iilcuch. Da:lreile .\ir'lcu-\. .\ibcr ionilne 7 E:k ?cr-se).
. i ¡
,"'¡ re: ¡¡Lrv¡¡e^''n,'':urndo que:encs icn:e:'irr''ill :u''c .ü -"':i:c'- J'nilÚs ll.-ei arobie:r¡ ¡irc :c:b: :e :;¿r iiscuuio tluscl inuy'ltc:l : ¡ué -¿en3Íc ú¿ icsli¿ :si:
i-sv
j¿:i:¡:c¿:r: l:c:u¡:.:: *-::n :'tú i:§-:c i:.i :ir¡.:É \u :cntcx:i !'. jt lc:lc.:lc' jci
',,r yuuev
¡¡ ^¡¡¿r¡' ,lccir ¿s üu¿. si inrlcduclr:ros lr r'c'Linrl:-'r' ::t :sc ri' :l' ;cnis ¿sc¡ics je L;cm. i;: c:¿c:o.
alu,v asñr¿rao qu¿ :onsülu1;s: .or :ctos o se 2u:de':esl:cr'
:;\r:a(:ue J.es :iocs Je :lorainacion. lslo:e;::. :i* ¿¡nccl:o.
isi: :s -tn .:urÍc ¿ie$e::tü"'' .:n

:esiiz le h i.clurl ,u¿5. ¡,!:Éndoio. je j¿scullanr. ¿i ¡:unr-:ccnl:l:;:t::0:o ':ntJs


I:e ::-: ),:: ;u :' :::r :' L:cln lle" rj ¿3rcnces h:s:: :' li:': :is':cl:ci¿r: ;e :¡a¡c:io. ¿i ,'r.ec10.:¿ :u¿ L-c::1. l¿sclÉs.i¿ i:b¿Í i3Lll::do .¡na::i .iisiiición cctó ¡cr
.rD ,c.:'lif j:iix ¡tsia ,. ic: :J ::.í'jlc. ::c:sa lr:,iue ::: :s¿:irr:,J-,-!'.:!i. aesuhl h¿a:a jldo ':n
.r:a ii :icao .,üníii.
!12 F,eul. ,-,[¿:úués lac¿n
R.l.5-. ,t ,le.rpués Í 113

habían podido ser abordacjos de frenre hasta el aconrecinienro del


2d" vía: tra inconveniencia del nudo borromeo. ¿Por qué tres regisros y no más, o menos? ¿Por qué esos rr.§?
d,e tres
¿Cuáles son las relaciones que se establecen de dos en dos, perc rambién
entre los tres? ¿Qué'medida común permitiría e.-,aminar la e.risrencia
Escrib ir borromeanamenie ra distinción der simbólico y de ia nominación misma de tales relaciones? ¿i{av prevaiencia Ce uno ..ie ellos? ¿y scbre
y, ai mismo tiempo, el lazo privilegiado que mantienen cuiÍtr? ¿Sobre otro? ¿Cuál? ¿Sobre los orros dos? ¿Ccnsi,Jerad,os juntos o
.sas dos cuerd.as
reouiere un nudo de cuatro. se debeda encontr¿¡.r lnscrito en separadarnente? Etc.
ei nud.o
mismo, un acoplamiento del simbólico y de la nominación, io
cual, de Se podria realizar toda una ielectura de los seminarios pre-boriomeanos
rebote, dene muchas posibilidades de acáplar el imaginario y
el real. Sin en la que se pondría de relieve qué respuesras parciales fueron yir
embargo, este probiema tal como acabamos de formularlo que
va a ;, aponadas a dichas cuestiones. Neda obliga, en ef'ecrc, a considerar quc
desernbocar en la escritura de la duplicicad s. E. con un
nucio bonom.o esas respuesias havan debido permanecer iCénticas iuranre rios decenios.
de cuarro redondeles de hilo, no iue posibre más que
apar{r del rnomenro De es¡e modo se manifestaia ¿n sus iinearnientos ;r en su hisroria aquella
en que Lacan entrevió al menos un pocc una cierta inconveniencia
del tercera veta que, por sí sola. hace dei psicoanálisis un casc episterrológi"-o
nudo de ires en su factura casi clásica:3.
inclasificable. Se mejance es:udio, al cuai le hemos consagraCo un año Ce
sen:inario, equi',,aldda a ua Libro; sin errbargo, no parece que esas
conclusio.nes cbje tararr eso cue salta a la vista Ce quien :ome en ;lienta l,-s
úitimos seminarios de Lacen. a saber, ei hecho de que con :i bcr:cmec las
cuestiones que conciernen ,iirecramenle al ternar:o F-.S."[. se iorna¡ n:ás
explíc.itrmente aborCables 1r. [o cue es más, Ce unr. bueila naner¡. dicho
de otro modo, tomúndclas en ia ¡:i ,ie un materna.

Luego ,Jei proviCencial o milaeroso enc,Jenrrc de los i;es Je R .5.I. ccn ios
rres redondeies Ce hilo del nudo boromec, lleee ei n'iancnlo ie ia
Eot,rn )
recoiec:ión ce ics i:-.lios, v isos ¡'rr:tos resul¡an ser... orcblemas. A1
a,üentr:rse más :n :l esttbieciniei¡o bor¡ornec ,.ie su :enerio. Llcan.
pocc a:cco, d.escuDn¡á tcaa ui'la sede de dificult:ies ,;. --sceciaimente,
En r:n prir,:er riernoo, ese nuco de ¡res nuco haberle rarecidc r agueila ligad.a a la homogeneizrción d.e las ¡res Circio)-nrnsicnes.
Licrn que
convenía'ie uneÍri.neilc3si nila,¿rosa. rirei'ec:o,ofrece l¡dci:le,¡encr.ia Despr:és ce lacer s;.lo recibiia cono una solución. ¿sl: hcri':cse:leizac,ión
de hon:osenei.zrr ei real. el simbóiico el imaginar:o (carji unc es ierminó. en :iec:o. por rlanieri'.rn probierra. iie acuí. ei iJ ¿e iicienbre
;., lrna
cueria) v'ie orcrgules. en el nudo misno, u¡a m¿cida ccmún ísi ;e cona ie l9l-1. bien scbre :i ccniie¡¿o dei serninair: R. j.1.:
cuaiquicra ce ias cuerc¿s, :i nudo se aeshace); h¿bía rllí d.e iec¿n¡e riay rcs -.sijdie:tt¿s: una ,iue nos ilev¡ r hcncq:n¿iz::rirs, lo ,¡ue --s
una
esnecle ie aperurr.. ¿lC¿velamienlo tje ua conjunro,le prcoie:nas qu¿ ¡crico. porque ¿cué ie iactones hay elrie :iias )
sin
iudas se enconrraba.r -¿n iodo ceso rjgunos Ce elics Ce cier:
,"n.,"-
:y ltri,rrr rl¡¡s T¡§.¡i -:r.:
muy presexres dcscie la conr'erencia iei ,3 ile juiio cc [9i]:., :a :i :lrso
,j.e lr. ;uai L:c:n había :oortado
cor piine:r ,¡e, su i:r::i(), :src cui itc P--1,: ¿s ;cr hcmcg:nei;:rles itu¿ :io ies Co1, .::a ;cns:si:ncl:. y
hcr:l;'gel:l::rils ¿s ilc:tils voive:' rl '.,aicr ie ic :u: :i,.rnúnñ:tt:
l-i.-"i...lei lutio iorromco.;io ¿s icr:csar¡crre lc tue lcs he.jibulaic.::cr:tcs
¿e ,,ec:sj..
:s:cn;i;:::.t-1ü acano lo nás bajo -uno se L1i:,lui.i:'::: noiibre d.
J¡cgues L.:cr¡..?.J'..1., oa.,::;.. sgsión lgl il;: icni ,je i97j. 'r'-- ¡t i.-'¡ rr-,¡ ..,r¡,.i-..- lr..t-:r :.--....-S-.. ,:rl
:.1.- ;. lriu. "*: svctc,;.iquc. i i:::;,::rl:::::.¿::.i..
i
: l?.4 Frewl, Y desPu¿i Lorrn
,i i
i ccÍlieoza una y ciónde iermina le oira; la dit'erenciación de los tres colores
.iinaginano. Es precisamente aquÍ en donde hay rlgo que cor€gir.
I ( o de ias tres Cimensiones R.S.I.) ya no quiere decir nada (sen'ía para
Esta afir:nación represenia otfa nueva coÍrección, Duesio que hasta idenriticar las cuerdas, por io tanto no puede h¡ber, por definición. ries
enionces Lacrn habÍa pensado la consisiencia cc la cuerda como real. s:n coiores para una cusrCe).
ernbargo el problena no esraba regiadc. Ltn mes nás tarde (et ig de
raarzo de 1975), Lacan cita un Dequeño escriro iecibioo de piene Souq;:
T¿l ¿s. pues, el punto calastróñco para el ¡ernario R.S.I. al que aiuie
f ecin :n ei horizon¡e de io que observa acerca de la cadena Ce i¡es; a
¿Qué quiere decir homogeneizar? Es evidenre, cr:mo obseniaba saber, la analo-eía (para no cecirequivaiencia) de las ties cuerCes, su no-
1a
orecedeniercente Pierre Soury en una oequeña aota que rae ha distinción. De allí, el recurso a una cadena de cuarrc inmediairmente
cnviado -pcrque me ocupo rnucho de ,iarie r cada uno su mereciCo-
después:
que lienen aigc de semejante. Como ei mismo piese Soury to hacía
,:bserysr : Ce lo semejanre r lo mismo -es de é1- hay iugar pa.a una E¡ una figura. en u¡r¡ cidena 'oor¡omee. ¿ec3sc no se Done de
diftrencia. Pero pone: el acentc rn lo sernejante. es precisarn¿nie en rnütir'iesto que ri miniinun está sien¡re consiir:riíjo por i:n autlo de
lo que consisre la homogeneizeción[...] cuitlo?
Se tiene aquí. pues, la razón de ser del seiaiamienio del carác:er Es evidelte. La cari.ena,ie ires cr¡nriucina r honogeneizar Cem.asiadc. a
iraaginadc cie la consisrencia; es una semeianzf,. Pero esi3 dii'e:eacia de hornogenelzar ai punto de poner en candnuidad ias tr;s cuerCes. Cichc rie
lo seme.,jante a io n"iismo ¿dará una solución a esia doble exieer:cia de orrs n'iilner3. al punto ,1e percier la crdera de ¡res. En vista de es¡a
horncgeneizrr las tres consistencias (tle mrnera cile se ¿srudien sus ieconveniencia Ce la cadena de ires, la ,ie cuatro redondeies ¿:ireccr3.
i'eiaclones ) l; Ce Ciíerenciarlas ( sin io cual la cues*ón C¿ sus ielr.cicnes enioncss corno ia pcsibiii,lad .Je un (parcia.l) recurso. Diremos ,lhorx e$
no se.Diantearía)? La iespuesia es no. Sin embargo. soio después tiei ,-.'-1

des.iío que Jclrce ini-ligien ¡i crmino abienc icr Lrcln. eslará éste en
condiciones rj.e r-ieciric. poniendo en jueeo en su r3zon¿mienio aigo ,lsi
coÍno un pasaje al iímire5, 3o vía : síntom¿ e inconscienle.

Si son tan aniiiosos. lacesü no pcdemos j:lpone. que sex un:i sÍntoma -" sírnboio
ccn¡irluiriai'J

Pu-r "ccntinuid¡d" Lacan ¿nrienrie aquí el hecnr: ,Je to i¿l.rer ;nás cue rini.]
; Es:: c:de na -ho rio n:ea iieberá iiEar real e imrgiilano ¡ ; ímbo io siric mi:
cuer;r É:t iu,¿:1r c¿ if3s. Esio se cbtienc a p""r'r:e un i:uio bor:omeo Je "
ie:eri Dressnrf,í cienas irooie'iad,¿s es¡ecíi:-c:s:t, .n pai:icr:ler. q-;:-
tres. ioi la ocencirln llamacia "ouesia en conrinui,iad", oue consis¡e :e -:cr;.olanie¡rc¡ de lr;s cutr;O eienieil¡OS de ¿Os:li ¿os iieri; i:tasinirr:ci
coritr:,' lue'¿o volver I unil las cuerias, de manera :d cue nc quece nas sínbolo:r síntorre). trn irc:denadecur,ircque pic-DLlne ¡hcri Í :c:n,:sie
qri,e iri'ta ¡n iug:r de ires. Evidenter¡lenie, ya no ie ir:ii, lhora tiei rnisno
:ccol¿¡ni¿nto ¿s iai cue si los ¿iemen«,.s S.§. R.i. s¡;n ,ni¿:cuicl:.bies

ocjelc "ouesta ;:i ccniinuiiru" reriize un
'opc.iógicc, la ocereción de en cua::c a su posición ne'iiana o i.\ir3nl ax L)lil.s --ll:.br::. ;i .'ca
veriacerc ,:rmbio ,.ie .¿s;r¡c:ura. Si ias tres cuerd,as inrci:ies esiabrn -:cÍe:eciri. jn iL\n::r:a::ii. :i:rls
:irer:rnciabies:r b:x::,f,f, i; Ju¿
i,i,e:eici:d,:s{pc;:;:l-r:lo.;:,olc.eliquerr.R.S.i.':;oioreri:scr)nv¿rc: ,-Lrr¡Dirnciones n() son ,:csibies :e-§De.io'ie ir ¡t:a:;;:jr i: :.::'.ellic's.
;ojo nc::o;. i: li¡ic: j'ieíci,:esi1:-tie licar:c3il,: ne.j;Crque se ia::c:i:r
Dc rsie r:cdo. S. o !. tc :ue'ie n :cm¿¡ ¿i lu'{:r cc R. o [. ¿n ias ::r.:c:ones
con ¿i ieco, coior verde. luego rota, iuegc iegrr ir; sucgsil.an'lenle
m3rcxdL P,.S.l.) sin iisccnti;iuid:ri.: va io ie Du.¿c Jet3r'i.¡:inal ión,ie
12! {re*!, y desgzés lacsn R-l.S..vdesouésS l¿7

i
de la pareja R. - I., ni pueden R. o I. romar éi lugar Ce S. o E. en ia relación
de la pareja S. - E. ,\
í lnhibición
¿¡(r\\\\\\1.
Vemos que hay aquí una heterogeneidad intema a la cadenc que no 1 1 'lnconsciente
proporcionaba la cadena de tres y que permite, al rnenos parcialmenre, \\\\\\\\
cifra¡ ciertas diferencias que hasu aquí no esiaban riaramenre distinguidas
d.e una rnanera eÍiernc a la escdlura nodoiógica.

Sin ernbargo, esta heterogeneidaC interna de la cual se revela ponadora


la cadena de cuatro no es tal que engendre por sí soia las dilerencirs Sínioma
sostenidas por Ios nombres "imaginario", "real". "símbolo" y "síntoma".
¿Por qué estos nornbres y no orros? ¿Por qr:é haber elegido "Cupiicr" ei
simbólico en esta oareja símbolo y síntorna y no aleuna otrr. consistencia
en rai otra pareja? Esra cadena, como tal, no proporciona una iespuesia
a esias piesunns y nosotros, al perinanecer centndos en ia oareje lio,,,n ?

símbolo-síntoma, no las abordarernos m;is que paici.a-hcente.


Pcr eiio, tomerrlos impulso desCe un poco más lejos en los senr.ina¡ics de
Se imponen equí oiras obser¡aciones: Se irara de un nuio de ires y nc se
Lecan.ürequntánd.onos: ¿Cómo Ia inter.,,ención qiei nu¿c borrorneo ¡udo
consitiera que las cuerdas cono iaies ciiien .:l incoi'lscieirre o ei sínroma
permitir hasia aquí inscribir ei sínicma? Lecan no necesi¡ó del nuiia
ni carnpoco cr(tctamenre las ,.lavas qu¿ su pues:. ¿ ci-:lo Ceterrnina: son
borromeo oara siruar el síntoma, no scbre un soio iesis¡io sino sobre ios
otias plavas ciet-iaidas de una manera topo15eicemeni,: cuiosa: por un
Ccs regisiros Cel simbólico y cei eeel ¡la ali:cinición es louí el cnso
i:CD. sr:cias arsix puesrt ¿oiano Cei nudo de ires (io que, :opolóeiclnenre
naradigmatico. pero iam,bién .l síntomr hisrénco recien:r se: siruaio Ce
habietdo, sisue sienCo "or:odoxo"), pero rambién ior ories 1íne:s aue. al
esie moCo). Ei ;rudo borcmec. al nccniuar eún i;:ás :i i:iieres ie Lecrn
ienet un e sr¡.Lr-rs d.iferente ai de rcueii¿s quc su ruism. ¿ ¡iano de:rl¡iia.
pcr ioio lo u-ue es ienaio en Freuc, hizo eviCenre cue ia lna,il ir:hibición
¡l:;scibrn ias cuerdas lel ¿siacr:s iccológicc ie iich:s iíaeas no es ciaio
síniom.r :nqr-:stia ad,¡ieniera ei ¡nEel ¡:iano. Al corilienzo ¿ei serrinlro -: ii5a.r.!U:.
-:;.,-; --...
ill
R..S.i., ¡etomii:co ¿icha in¿Ce. L.¡cen siiúa "ciisicli:icni." i resne.ic d,j
lo que ,.j,ecíl :nies) el irntome ccrno ''efec:o d,.i sinbóiico en ¿l ¡eri::". E:: lcs seniner:i-.s de l-.:can .je ¿sa jccca. va'jno i:eee que vélsei:s. pu¿s,
Pero ei rucu. boric¡¡reo cie R.S.i. ie perir,:ie ahe.ru. lcc:iiz:¡, :s decir, e prcctísiro cei síncornl. con 'Jn¿ :ar:ja (síliccra-inccnscie:lti) qu3 30 ¿s
esci-ibir il:e i:ciun d.el síntori: ccn ei iaconscier:re Celiniio Ce clJ.no. ::s i aquella cu'/e eine rgencie hencs ¿s¡uiie,jc acuí i¿l ;er S. - s.). Uiio :ie:e
iriviaim¡n::. ':ci-eo 'r iLr Que iespcnrie riel síntcma":s. que vé::elrs iri:'ibiin con ia pieccu¡ación ¿e .:scibir ¡i sínicna;rn el
nuio boriomeo. L¿ al,.eflt:ir3. ;:ódcr cue hencs de con.ii,ie:ir ccmclc;r
l{e Lcur :sia l,-',c:ii¿ación en Ia que se i)bser'¡a. resDec:c tje nue,c:¡e. Lc:uai
consistirá l.- en ce;:rbiar uno de ios :ér:::incs .Jc ;sa :i:eja. 'l-cn caser tc
'iisc:sión. \lue rs el inccnscienr: -:./ no ei :;ímboio- ic cue se incueti;a
il c:i¿ra:e :::s a ia je;uar:o'r -:.-¿n ,rescinc.il..je ies suprric:es pa::
accpiaio c'-.n ei sin¿orra:
Jr)niarr:r;:¿ ccn lts c'-¿Íc:.j. ¿C::ái:s jon. j:.i:ci:c:s.'ls :c:.jsies Je:s;:
tnpie ,:enibiLr. es;e.lrñenre ¿n io que ccncie=e ¿i ;imbditcol
123 Freul. t desaués ltcct
R.ii..v¿yc;rási il9

Rebatir el inconsciente sobre el sirnbólico :


Ei punr'o de emoalme con nsestro aciual problema inieryiene a panir ce
ia sesiqn sigr:ienre cel seminario, ia <jet r 1 de enero de i 975, en la!u. .ria
"realidad psíouica" es muy f¡euciianamente refen,Ja a la runción
Fr¡e sobre iodo para cifrar su reiación con Freud que L¿c3n prcrcovió el y luego ésra, mu/ poco íieudianamenre y gracias al concepto ie pare-
!ur.*"
nudo de cuatro. "Freud ::o era lacar¡iano:e", y es de suFoner que no tenía versiansa referida al sínlo¡ta:
más que la sospecha Ce R.S.I. No se puede, pues, más que ciesiizarle bajo
ics pres esas ires cuerdas gn fon-fla disociada. no anudada. En ni caso, [...] su perversión, única garantía de su fi.rnción de padre (pére), la;uai
pcdía ccnerse de manil'ies¡o que Freud las habna borlomeanaiiiente es la runción de sínrorna nl como ia he escnto aiií-
:nudaCc ccn la ayuCa de una cua¡ia cuerd,a, la que corresoonde a lo que Advirtamos que io que Lacar: dibuja ese día es rodavía una suoedlc.ie
ii iiema "r-e:iiceci ps:cuice" -no cs una de im r:nenores conseaue:c:es ¿¿l (enmarcada corao la del síatoma, figura 3), en ei ¡-comenrc mismo
en ilue
c¿rnbio de par:digma, del pasaje clel caso pararlignráric,; (Freuc) r ia una cadena sirnbdlica (iealidari psíquic.: - función paierna - sínrcma) está
ir:aldz paraoigildlrce íR..S.i.), el cie pocier pres;inCir cie esa hi:ó¡esis ya siruada, [a que hará de vecior paia dar al sínrcma consistencia de
se:uiar según la cuai habna una realid¿ci osíquica. cueroa y no de superticie (en este iiempo de giro, el primer iérniac de esra
cadena de equi'aiencia es una cuerda, et úitimo una sucerricie).
¿Cómo se ciira rquí la secuencii consecuti','r. FisuüLac¡.n'l Trcs cuerias
,jispuestas una sobie ia cr¡ (tigura -l) pueden pemirir la ccnstir,-lción Ce
¿Qué vendrá a resol,¿er esta discordarci¿? un acro ce Lac:n. ocumci el
una carlena borrornea de dcs maneras. ilianera "L:cm" (i-r;lura ó), con I 5 de abril de I 975. Este acto es una palabra, oalabn q ue
cueie ,aiecsr
nc¡diticrción ,ie ics arnba, abajo; manen Freud según L¿cen (fig,;ra 5), e srar basada ex le que Lacan habría hecho en ei pasad,o
ílo cuai no es iai-so
ccn una cuans cuer,ja qu. rasa por abajo ie ia que está ¡ba-io. arnba,je si se riene en cuenia que Í'!o ha-,- pasado m¿s qus pcr ia gracia del a,zriis-
la qr:e esiá ari'oa 1,' :baio de ia que está enire las dos. couo), pero que. más raiicainente, ¡ieÍle el ¡.lcei:c: de un :er:.cr-maii.¡o:
.\l rrb¿rir el inconscienre sobre ¿i sirnbólicc. es iec:r scbre io que :er
a^ !^- signiricente hace agujero, yo hrgo lcomo verncs. esií uicic cn
-^--^^-:;^
-a¿ ¡¿tt^=1¡a¡ ¡=aai¡ orese::i=l rlgo. Dios mic. sue :e juzgará oor sus elec:o:, *n .;u
i'ecunciiied: asio iI1e parecs q'¿e se inpone desie ¡ues¡¡a nis¡:la
^-;^.:^^
Flr:.cr:ca iff: tcen
^,-^- ie Lpcyl acui no cn:i cc.r;o tieuciiro
sii-.o c:: la pric::ca

6)
instaunda ccr:i mé:oio rreucianol que esiá lejcs Ce :ci:r;ont¿rra¡¡e
ccn ijna:eleiencia oscura:l insiinto. cQmo se cbs¡ina *n i¡etiucir ia
¡rilh.r i-z:»a
( ¡ ;9U -q i¡sij¡
Yt¡ l¡r5:Lo.

R¿r'niriise a ia ii'iuia 3 permire laorar hasil qué :unio'.Rcbarir ¿l


inconscienre sob¡e:l sinbólicc" es.úit !:esic cle lo inás;cncie:o,:i ce
ioniljr ccn ir n:¿;u.. :cr l:i:ba;,, :or .r :er:cra C: es;l :i.:.,:::. :i e;<:;-¡=o
ie ll líner'de punti-.s ,v iuego. ile.¡a¡io l:;'lano hacl: ia cai:: inr'eicr,.te
ia hi-.ja. inregr:r¿icn¿ !ínee a lacei círcuio cei simbrjiico iie rsie i-noco
jí3!$¿ ) jesacar:ce ael iibr.:jo C¿ nutlc irna iíi:ea,je j:recano isi:ixs
=se :cpolósicc ).

iC.-Se ;e:rrir.¡ :§ui ur¿ :i-¡eba ;uui¿:::cntanr ic :: :ests kf,i-..ti;n¿ \cc,.ir. i¡ :f,ai :x1.
inccn¡n:::sureoiiiJed :nre dcs i¿r:dignas. il :Éc¡o. ri;o :ciic ,i, .,rr"_rrrr,ui,
De:¡flu:cc¿ rc locrii¿:bie ion .is ccoíicraif,s auc,ic ,rovee F:e.ri.
.'--:u,Jo i€ ii:i.: -::
r;iv; i --¡.¡¡"- ¡ér¿).;¿:á:tcc::¿Í:u ::r:l; :r .:i.js ,ucdi¡:;¿í jEa,¿:so ,)(,^-.¿ij : .r.i.
i l-:c; ,esi,rn ..1:i ii :,; :r:r¡ :erl).- l
l3O FrcLd. t tlesoués lltcan

..rebatir" termina así por barrer, en el senddo domésticc del término' plena)
Ese
esmba localizxio; i-undamentalmenre volvía luestión por laco-cet'inición dei
la superficie en la que, hasta entonces, el inqonsciente "r.rpu.rrá "n
iignificante y del Sujeto: el signiticanre reDresenr¿ al sujeto para oro
an.astrarloconlaescobahastareciucirloanadaentantoquesuperficie' signifrcante (S/ S, --> S,).¡l{e aquí, pues;.que en 1975, con ei des.¿ío q¡:e
ahí' consüruÍa su
hasia coiocailo enlacuerda del simbólico que' hasta Joyce obliga a hacer a Lacan, vuelve el rénnino de símboio I Formulenrs
bord,e . A paair de allí (jugando Lacan el
juego de su matema' haciéndose
estaba definid¿ la pregunta que se desprende de esro: ¿qué reiación marliie ne la pareja
el inceuto), y puesto qu*.o supeiicie del inconsciente sínbolo-síntorna con aquella otra pareja devenida canónica: S, _> S,?
que de cuerde
como lo qr" ,.rp"ndía del síntoma, no podrá katarse más Y' si hay inrervención de aquélla sobre ésrx, ¿cómo aparlce ésie
éste ya no podrá
v yx no d" ,up.tt"i" para el sínloma' Al mismo dempo'
con"' que no es posibie ¡ransforrnada'l En tai caso,l/ puesro que se trata de uno de sus "teoremas"
.ntrr, *¿, en relación con ei inconsciente sino 1o
más imponantes, se puede conjeturar que las consecuencias para la
llamar exactxmente el simbóiicc sino"' el símbolo' Cocrrina lacaniana hoy serin considerables.
¿Por qué razón no puede
llamiirselo más el simbólico? De-spués de Ia
la respuesra Lacan, en esta muy decisiva primeia sesión del seminaio Le sinihome,
J,_o.""ion que acaba ce ser hecha del recorrido de Lacan, aborda e.-.plícitamente la cuestión. y la manera e n que la rrrn nos inreresa
resultacasitrivial:e§porqueelsimbólicorecibelamarcs',elcuñod'ei ranro más cuanio que dicho katarniento se presenta como una nc¡abie
inconsc.iente.¿Semide,conestaconsecuencia.elcrrácterautocríticoque r.niculación de su álgebra con su escrirurr ncdciósica (dicho cie otro
el sirnból1co"? Todo
ccmportael eriunciado "rebatirei inccnscienle sobre modo, ai hacer esto, iealizs un verdarjero trabajo de escueia).
unpol*odelaenseñanzacieLecrn(dondeladistincióndelinconscien¡e
Tcilo pane de la ¡omr. de posición sin la cual la orác¡ice csicoanalíiica no
,ra.t-simAOti.coeracruciai-sinlocualelWbEsw-Grsoll[citvverdenno
vez asumido en su punto' pero
lenÍa ningún sentirjo) se encuentra esí ¡ Ia se:ia concebible, uaa roma de pcsición rnarceda, en sus ¡érmincs. ccn el
que poco después'
ranbién verdaderamente destruido' Lo cierto es seilo rie Jr¡vcs el artista:
de su enseñanza' Lacr'n designará
ccn¡irrn;rnio ltAttfiiebungde lse pahoo ¿Es imoosible que ia .;erdad cevetga un prociucto iei saber hacer.l
ligeda al síniorna
como inconscienre aquelia ccnsiitencia especi:linenre \io.
iigatla ri síntom'¡
en une crd.ena d,e cuatio'', Ll cueld,a que se eflcuentrs
il¿nada ianto sírnboir: L::e.,:o, inileCiirament¿ iiescués.je habel dioo ese ,aso que, pcr ienei
-figuil i-.ie una inanerl privilegiaCa cueCe scr
co rno i Lc r-' r:sc :e n cei:.
:oio ¿i acoy.'o iel ejercicio lirerario joy.clar:c. no .ieja ie ser ¿:iocne
lL:c:n lC Sabía. lrl COrnO nerS lO inCiC: i¿ ¡eorrri..,idr,-i .r:i -,.,,..j",1O),

Ei maiemr S,-'S' transliler¡do Pero e lia i'lo será. .ntcncis, rn:ls sue se.ni-oichc...

en l¡ cad?ni de cutiro R'5'I"§' i{::ta rouí. iodo '¡: bien. Uno se enc!.lenilx
¿:;rirrti¡::. P:ro ia iiase con¡irua:
...enc¡.rnándcse --n un S. Ce signiitc::nie. rilíConde se rccesilr:i ¡nenos
-r^i,ie:eLe:rcs'lnirlcÍllcÍ'itc'Ílesi3ll.iilto'::cs;lrec::ár:uve:t:l:noqut i.1cs ra¡¡:ue l:¡'inic:. la mujel i...'] <;er ncari>.
":ímbcio"' lue'-:c i; halrag3¡159¡"'eic
L;c:l. ,talre cromovido la pai:cre 'ius
en ir paiabra "si¡rb''iiico"' pare hiceria sur-zi; r-.¿ ¿cuí una narcaci.óa del S, corno ¿ncanación ie i¿ ve:dad: si se
cor un :i?l"npo.ngarz:C"
nL]e.l.ai].ignle¡¡cntlnur'c.iónjusio;uandc.jichclé:nirio-,-tod,ol:uac.C :e.:',;erci ahora cue L:can ;ece:ijame:ie er ei oasado 'll:bía defirlCo 1z
:;:irio ¿i S. ci¡rio ia cii;a cel se'¡er. cr:c j;ncs concluir que ,:i nirema
I i -i. í-:crn. L¿ s¡n!hr]fr'!, t;¡ ::l ' 'esiúr ''lci lá 'ie '::cisrnor: ic
,l:.- Pr¡ ln: Jise usión ::lr\
jsllii:if, 'l¿ ¿sie :unLc' is :(--1i:i :i:l'i'l1iia : ií.;r?!I¿.1i3 .,1
| .\t¡té¿ J¿ i;:c:t¡t.,¡c f;¡.. , :ll--:1;'
Fryui, y .ltsoués lscad

debe admiiir ai conj;:nio corrc eieneaio rercero en juego bina¡io ,le ros
§, S. cifiaia
le reiación cie la verdad con el saber. Antes bien, se iif,ia er
->
cie icmar nots qlie tal ;onciusión no es arjecuada. Intlican por 1o pronic
0 y rle los i:
est¡ inadecuación ios términos que. en esaéroca, dan a la palabra un lugar fs de esre rncric que iil ieoría,ie Cantor debe partir nuevamenre
de la
total;nente distir:¡o al que se le reconocía ¿n ia época de el Discurso de pareja. pero rhora ;r conjunrc ¿s alri rercerc.-De prir-aer
i con¡un,o .r
,4-ona: el "paliorecr"", el "bla-bia" o incluso eijuego picante de palabras otic. erl se crcduce junción.
sobre Ia oraiida,i,:i "ce qu'on Cit menf1", "io que se iiice mieile", Es¡o. sr-rbre el regisrroie ia escri*ra nod¿r, abre ei ca¡nino ar oro paso
"condimento"., con aquei otro bnzc Ce Ias ie:razas que apresan 1a paiabra, ce ia i¡ar,sliier:ción, iquei Dor el tua] S, el símbolo,
se engancha'a la
ie peiabra iiapuesi:.1e1 psicórico, c¿ ailí en más, aCmitiCa en su aicance pareja R..I.
i : .---.i,i ^^
,4: -^{U ' 5l r¡dL:LV,
-^
Es en io aue ei sÍni:clo .,ueive a pon¿rs?-
[y.o subral..o] :obre el
tri rais;nc Llc:rn inscibe una prirneracomprobación estai.nadecuación:
Ce irr.ag:rario.
e i S, no pccln: vaier corio nombre d.e un coitceDao, aunque fuera e I ,ie la
"Yueive a ponerse" uene ¡cuí un senddo rnás que concrero,
vcrdad; cusrto mis se iraia Ce un ínCice: puesio cue
ia e.rpresión iesignr ei anudarnienro ie S ccn ei par R. -
t. fv¡a t.l-
[...,] rclarc cue nuesiia insciipción S , S íntiice l. se iee ie ¿se rncdo.
Luego, inmeCiaramenre iespués, se prosisue cca:les¡abieci.miemo
no ccnsiiiuye al uno sino que io indica como pu'Jienio no contener i¿ ia
natll :cr::o un seco vacío.
transliteración (hernos e,,'aiu¡do yr hasia qué punro ésia es
¡i_qurosa, es
cecir, oreci:a '¡ ;e:lizjndose pasc a
.raso, letn.p.or iera):
Ciarlmente se'/e gue el I es ei probienSricc: si S, no consiiruye r^i uno
sini: cue soiamenle indica, .va no poiren:os, cie ahcra:n mds. aimitii
1o
Ei <símbcro> riene :r ínsice r. es decir. que a.r indicrr sue hace
pire,i:.. inrrcriuc: la iivisión -- ¿i si:jero. cualquiera
inocen¡emenre ,lue LN signiiicante pueda:epresenir:ri sujelo pui otro .n,r¡-i,' ir Lr^i,. a.'í a I
sea ió cue se
gr ¡l!v:rV
si-¿riilcen¡e. t' lúa más. este probierna Cel L:}'í ¿s dobie: hay ahí ui
¡rr¡ ..,.]

p.robiern;r de in<ie¡.ilción (ie la denotación ccmo operxción: ¿qué rndica


:l irde:.?) 1., un prcbiema de ia reltreicia como tii (¿qué es ¿se L-\_- dei
obierc iencr:iol). Al:ora bien, este probiena del L.}i se lgreva más
:r;i¡,','ia cuini» Llcan subral/a que ei i:úmero (dicho de ,:t¡o mcio' ¿sc
ci:n io cuai ;e :icrnz: unii pafii: de ieal) "¿s binano". Este linadsmc io
i1¿,¡a r conciuir c'.re;

Ei imaginrnc nuesili acuí su hcmogeneldad :cn :l r::i [.-.]

.\.sí iues. ia ,lis;aniii incluiia en ia ca.ie:la'¡o¡ionee ce :ua¡ro R'.I.S.''.


.ielioS ',,iSiür,iL:e ¿ilt une jAs hik¡S le 3os cn iu.S). §e presentn r-Crrio Ui1
;:;:eco posi-".ic ü. esit hu.rnogeneid:d:ei irneginaric;v 'jei :eli: ¿n:stll
:icenr, [ ;r R per:r:utan fáciilnente. Lc ine':iirc ¿s cue :cs icncr::; ra.,,:n yiS¡c :nu;,, bien cue :i símicic
Tri :s : i pri cner :aso ce urr lr:ns ii telación. ¿sc ituia al':e'c raic¡ escl::'J ie :l rociia set:njs iluj it::ii.:3...tIJ.:i 3sio. ji :ue!-e ijealiio, slen¡re.
:.cd:i. ei curi ncs :nunci¿ inrneCie:¿nente ei seg'lndo. ?:r)lcnsin"lü su !e:e curl llo taviÍi.,,is¡O::l .¡ i;rtc:.:il taélc,-la,::..¿se Sienr-re... iu¡
asc ioírccfi::ba j¡ ,"¡nlceti;, ia ;ec:piccic:c :ei ste:riiceni¡ v iet
:eilr'.irin soor': *i .lúrero, Lacan cbser'"'a r.horaci.lc i¡ ie(lr',a ie C;::tor
srgniiicaric: consecuen;:::.ii!a. q,jj _-i signi:icluc. .n *o a"i...
,r§,..- -.!r -.\ r.. á.i . .
v--.r.bs4-rcr.u;5..r+....i.1
^.,¡. ,-.1i1 "i,aa".
;:i:-o.:ifa:..:::,r:ri1-i3,:c:-;:,::.i:ic:¡l::,
_-.. :.!_...-.
.. -. \ -:-:_--; _i -,... i-
.-. ",..i .:\-. Jq.{ .r !.e-v.!l jjl.)S.
-j
li
I
I

134 Freud. v desoui§ bcan


I
"Pieza rota", acuñadolcon el índice 2' el símbolo se desdobla y se torna
Efectuar el análisis, por el discurso del amo
así, en ranro que desdbbiacio, generador d.e la división del sujeto (éste
recibe, pues, una nueva definición aquf. Una cadena inscribe, por otro
La cita anterior prosigue así:
lado, ese desdoblamiduto del símbolo en símbolo y síntoma, así ccmo la
reiación particular que la pareja símbolo/sÍntoma puede tener con ei real Mienrras el discurso der amo reine, el s, se divide, y esta división es
por una parte y con el imaginario por otra. la división dei símbolo y del síntcma. pero esta división del símbolc y
del síntoma está. si podemos decirlo asi rerlejada en la di'¡isión del
sujeto. Es porque el sujeto es eso que un significante represenh para
otro significante que ncs es necesario mostm.r, por su inrermedio, que
uno de los dos significanres.dei simbólico toma su apoyo en cl sínroma.

sólo el discurso dei amo (erninentemente privilegiado puesto que se


presenta ¿n su escritura como el único d.e los cuatro discursos isomortb
con la dei'inición dei significanre) cia su luga"r al s-, en ranro di.¡idido en
síntoma y símbolo.

J i--s2
\/
A \/l
\/i
i
\//\ I

I /\l I

figura 76 rl
I

i - \*
..Jo¡-ca
s.tmprÓme" (tórmulaque se esrabilizaríefl"Jo-vce le sinthome".
le
*"i." dei deseaganche teórico que ac..:bamos de e.xponer) es el desvío El iugar tiei s. es, en esra escriüra. el del orro. De este lugar. ie rlií iie
que obiiga a Lacan, ei que le sugiere esia lücturx del S, desdcbiarlo en -a
donde s" pueie ser diviciido ea símbolo,v síntorna. es cue se ersencrr.
ínoclol sínroma. P.¡corCenos aquí eue ia cuestión inicial era la cje enronces br. Ia. t"lecira desceadenre de s. hacie ¿ minuscuia). e i objerc e
delerrniner si la verCa'J oodÍr ser protiuc:ode un saber::rcer' Ese S'\ts
ER/ '
rainúscula ccmo un prcducro {L¿can ¡ilóir. acuel día.jicna prc,Jucción
i{.{cER. joyceaco se esc:tbida. en suíie. sil. Joyce, le sin¡horte. es et'
con una tlecha).
ar:esaao. el anífice 'je eso con 1o que :;e hace el nudo' Bajo el nombre 'jc
Esto concierne ai psicoanálisis ¿n su prác:ica ri:s lc:uar. si uno se hace
:inthome. e I saber H¡.CER tbrma pane ccl nudo'
el incruro de ¿sras casi úitinas indicr.cicnes ce Lacan. debera rcnirir,:ue
Esio no quiere decir soianenrc que psiccanalizer is enseñxr ai ;ujeto
e
no ha'ie ;s;en; procucción ce r ninúscula, dicho de orra m¿ln¿ra. ciere
'-hacel ccn" su síntoma. puesio qu3. al .:cntrr.¡io, ia cuesiión p lanteida cc.:r ei'eciivo,je un lnálisis r paniice un cuibio de tjiscurso ¡¿i ccmo el xc::so
L::c:i'l con Jr::"ce es le Je rlelermincr si ei anesano' si el inista ai ciiscurso analíiico (ionde. Dor orra. oane, ai ¿snr el i,-b:;erc'r a niiiúscula
";esbarrrir" c I sintoma (s ;marcme) por rneciio o¿l' sinthome ' 'ue'ie
en e I iugar cel :genie, no ar:ed.e ilegr.r a ocucar e i cie ia crocucsicn -io que.
.\ilí está ei irÍesxno. :lÍ'lesano ¿n ianto que por ia ccnjunción'ie ios no obsiante. sigue siend.oexigibie según ladcc:ina,lei :c¡c nsiccaraiír:cc).
signiticrci:s es cxpaz tle pror3ucir 1o que reclén ilar¡:é el ob;eto a
Ei osiccanalizar. si se cei'ini¿n ccrno eI acro de iesba¡aia¡ el ;ín¡oma
minúsculs. (s;;npráme)porei:!ruhame(enicdosiossentiuos,i.ei;ér::lr¡o,,aéjouer',..
,jesoar:tar, ilrcel llacasar, casaÍnar), decenCe:'?.. ,ues. ce .rin:l ci¡i::
)6.-t":, .ii.:rquzr;.t:r t)u !'.'\.¡t¿( J¿ u:,ctt¡t i¡¡o' -':¡.. o.l0l) liu-tué ipero. r:l:¡t'iose '.le
l¡¡
i:..krJ :,)ñtnca -le : :lro rudcs ¿c ::ebot, : ::r .i3'rr:c:un .:ti mlsr:u ::t:.
Freud v,l¿spués {¿ctn

efeciuación dei discurso dei amo, irna efectuación que quebraría ei


faniasma que ese discurso acoge, para ha'olar con propiedaC, por
debajo
(se lee, bajo las dos barras, s barradaounzón aminúscuia),
unaefecruación
en que ia cadena borromea de cuatro, R.I.s.r. inscribiría, juaro ccn las
consrricciones, la ao-imposibiiidad.

Ind.ex

I¿s nombr* proVios de .qread y i;;can, asi como 4 té¡mino ,.psicoantilísb,' no sOn
mencicncdos ea esie InCex 1a que fgur,tn ¡rtict'cs1i¿ftte ¿r, cada página d,¿ ¿sre libro:

ABRAIiA¡,f, K¡¡i:9? Bílansmc:21.23


ACCEiTO, Torquaro: ó4, 68-69 B L.\NC"S.r.NCI{E4 -!{ireiile: 6j-óó. 69
,\clins-lut: ]03 tsLiULER. Eugtn: 9ó
Actc: ó3 BOiCiC:5i
,"igr:/mc: 29 ' BCUP.CICNON. A. : 1^
: orriern.l ^C BRAQUE, Cecige: 1t
r '\ióE. f {
SRE¡-'ER,. Jcser: 4C-¿i, 50
.rLLOUCH..ie:rn: 2ó, 39. 33.36. 9?. 9-1. i i:- BliO§ACORSi: 55
C¡CE. ioirn: 110
.¡.i-iiiu§SER, Lcuis: !-.i C.{§ROBERT: 1C6
.¡.iuc:nación: 116 í-: NiñA ñ-n¡o. r,l1
vev¡ i. :JJ

Aiumno: 90.95. 103-i t0 C.rrnpor 21. l:, 5:, i7. 6:, ;i -;+. 75-Í. 3_i.
.{¡¡or: i04 39. i:.i0:. i07
-{aalisis: -<? C::¡nco i¡eudiano: 17. 18, 71, 7_1-:?. ;'r-¡i.
Angustia; iü3, l:ó 3¿. 39, 9:. 95. ,99, l0i-lc-1. i0_<
.\.\zlE1--. Diriic: 9¿ C-sc: 13. 1' -ló. ¿9-::. j5-5:. óJ-5j. 95.
ANZIÉU. .',ia¡gueit:: 64. f8 i01. Iü-<. Ii-1
.\tiJxro lsíquico: l' C::str:r:ón: li. l0i
i. c r i : -t: :.¡ uo : 3'0. Lü3 ¡-..¡.5J i,'¿. 5ütü3¡¡,: r _i
iR.iSTDT:l §S: +7. ji.59.3l C¡usa: jj
{¡,),OU,(. D¡¡ieile: 31. ill r-r5-^ ::
AiiQüil,tEDES: 13 Ciencrr: i:- i:. l:. :-q. i9. 7j-;5. i9
l-! i¡". i'1
Asccir¡cron lib¡e: t t, 15. ó7 Ciiirco: ll. iil. lii
.:.qhebut<: i)ü Citar iC9
f:rr'-l--iñ §i Iir ;l CL:R.ÁUBA UI-T, CaéIan CA ÍT.\N :c: j3.
6¿. 3l
3i:.{:5CN. i'{¡nri: 5i
! ELli I-{.iR. D. Thcms: iC Cl,rwn.' JB
e5l-f í I ¡\i ! !^t-L-. .1 ,l
L-'jiJr)i )r-n-

I
Indet 139
Comillas: t09 Edipo:26, lOa
Concepto:75, 13? Historia: 50.93 )
i!{etáfor¡: 14
EINSTEIN, Alb€rr: t02
Condensación: 14 HOL.!ÍES, Sherlock: 23 !
lvleapsicologÍa 57
EISSLER: 32,93
Conec¡oc ll HO,!ÍBRE DE LOS LOBOS: Js. ss Método: 11, ti,37,69,71_73,92, 89, i07.
EITINCTON:78
Conflic¡o: 23 EKELAND, Ivar:49
HOMBRE DE LAS RAT.{S:95 l ll, t29
Conocimicnto pamnoico: 32 FIOIvIERO: i4 Metonirni¿: 27-i8
EMPÉDCCLES: ?3 \
Consciencia:.10 Identificación:6& 98 MILLER, Jacques-Alain: 33, 50. lO0
Consisteacia: 124
Entonces (el puJs): 9- I I fdiorez: 5.t Mirada: 104
Episremcicgra: l2-13,t6, lB Ignorancia: t.l, l6
CONTE Claude: 83 ESCHER:83 Modelo: 94
rf1TE?
ve.!¡t D.
r..
Imposibilidad: 90 üÍOLiERE: 53
'.
i_
Escuelc 26, 33,.t5, 73-77,91,8i-8.t, 107.
Cos¿ freudi¿na; 37, i +76 fnconscienre: 14,2 I -25, .+ l, .t9, 67, 77, 90, 39, Momento de concluir: l5
126
CUVIER. Georges: 23 Esadio del espejo: 25, 60, 92.94,98,99,
96. ll5.
126-130 MONT.{ICi\¡E: 57-64. I I I
108 InCicio: 23
CYRANO de BER.CERAC: 103 Esr¡uctura: 124 Narcicismo: 25, 27, 96, lLs
CHAMPOLLION, Jean-Frangois: 75 I¡ihibición: 103, i16 . Necesidad: 103
Esrupidez: 38
CHERKI. A.:22 Ins¡¡¡re de ver: 15.91 NEWTON. Isaac: 56, 102. I I I
Evidencia: 14-16
Chiste: 43, 68 JONES: 108 NIETZSCHE, Friecirich: 15
Erpenencia: ?5
CI{OLLET, Monique: I l9 Fuding: 16
JOYCE. James:11. ll9. t:1. t:¿, til, l-1¿ NICRO, S¿lvuorc:64
Decir: 66-69 Juegos de Ienguaje: 55 No es eso: t5-i7, I li-t 14
Frs¡nn illannaire: 23
Det'ensa: 67 JULIEN. Phiiippe: I I Nombrc propio: 23, I l0
Fa¡tasÍa: 27
Delirio: 43 JUNC, C¡rl:22,i5,96 l,íominación: l2l
FELLIIiI, Federico: 38
Demrnda: lOi KIERKERCAARD. Süren: 30. 88 No-sabido: l.l, l6
FERENCZI. Sandor: *1. 8t
Demencia pr.-coz:9i KR.{EPELíN. Émile: l3 Nudo Borromeo: 24,29, i.l, 37, lC4,
Filosofía: 30, .l8 107.
KLEIN. Mélanie: I l, 12, 77 , 90
Denegación: 103 FLIESS. Wilhem: 50
KUHN, Thomas: 13,l,t-27, 57,72. ICO-10?.
I l3-t 16. I 19. 122. L?3. t16. tli
DELEUZE. Cilles: 71,76. B.r. t04 Foiie d deux: 82 l'iúrnero: 133
DE¡V{ÓCRITo: +7 r05. I ir O..{nna: 64
FONT.{INE, .{tben: l?l
DERR iDA, Jacques: 83 L.{ BOETIE. Érienne de: 60 Cbjeto: l.¡, l7
Fcrciusion:10-l
DESAN. Philippe: 39, jO-,r.t. _<8.6t. I L.{}íTERI-L.\UR.{. Ceorges: 7l Objero a:21. 104. t l.t, tj¿.
l0 Formalización: :1. 19. 5l-57 135
L.¡. RAMtrE. Pierie de: 5i-5i1, 57-i8. 53-ó.r p
DESC.{RTFJ, René: 17, 3;, r7, 52-j+. i;. Fort-,lu: l0-1
Lec¡ura: li. 13-19
O ne - bo d1; -
r- c ho i o gy : 61
i8. ói-64,90. 105. I t0 Fcnuna: il.5i Ot¡c: 60
Deseo:11, LECL.{lRE S.: i3 Palabra:79, ii2
103 FOtjf.1gi1, ,\fichel: 10. 79, Br. t04 LE CAUFEY. Cuy: 38
Desplczamiento: l.l, I l-13 ¡Kr,!ts. uotilcD: ;_\ P:¡rdiema: ll, li, t7, :.r-16. :3-:i. ¿5. _ró.
Ltr'JEl'. L.:l'lsua¡: ú/
i :^--

Desoués i.¿r cuis) 9-i0. lB. 105-iOg, I i I 51,71. t00-102. tl1, li6
^.

FREUD. A¡na: 77, 79


Determinismo: {1 LEIBIiiZ W.: jj P:radoja: i0. *.5. 75
Frus¡¡ación: l0l Le:rguaje: ót)
Dirnensioncs: I 15, l:0. l:l- l:-r F,:nc:cn :rtcn¡: ll? Pa¡¡¡oia: :6. 17, i0
Din,¡ td¿¡¡ ir13 u.1Ll:.'¡u: ¿--: l
P*!'Atre:'t.l
Disciciina: l:. I l. ::-:7. LiDlt:o: 9, P,{PPENHEi}Í. Betha: "ll, ói
7 i. 16. 99, i0l. lr.r5 CLOVER.. Eriwa¡d: -t
Locur¡: 17. .li. á-<.30. 32. t0l.
Discurso: l,f. t7. l0J Crsmiric¡: i-i
i0i PA.A.}IÉNIDES: ]O
Discurso ¡¡lirrco: I l. ii5 L¡cure : Jos: t:r !ilie i deus Pasaje C ¡c¡o: ó1. i03
Cocc: 68
Discurso,iei ¡mo: i35 LOE]&'ENFELD: i9 P.{ULHAN. Jc¡r: 39
Coc: Jel Or¡o: 103
LUIS il ¡ie 3avreru: l3 ll
Discurso unive::ir¡.no: il Coce üiico: iCl ?giRC:. Ch¿¡;cs S¡nde¡s:
División dei su3ero: i.1.1. ilí GLILBALIT: lii
!1.r.3 iLI-ON. ic:ir: li Pglea: i l0
Dogna: i3 aÍ'f¡,l7ef 'D/: r,-r^, a': - !
)fA.iOR. Rcné: 33 PS:.RIER, Franqcis: SJ
uonirnlo: /)-i, 1f .iQr- l.iYELf,. §icci¿s: ¡;. j:. +1.:-. PersonaiiCad: il-:i, :1, 96-97
i{.r.,1íLETr 37. -tj -<C-
i-r. i7. i3. ó3-i5. :l
DCR.{: 95 :'iEiD3CCER.. \'t.¡:":r::: _: i. j j l,lasocuismo: 5i
Pire "-ersión: 129
Duda: i3-j¿. i9-ót.90 P:¡;e:siin: I 19

iiipnosis:57
!{atema: !5. ii. -<7. gl. l0¿. lti. l:C. ::-1. PiCIiOi.i. E.: 100
I --iL] Pf-ATON: -r9. -¡7, 5:-j4. iB.
DUF. UR,. Dany-Roixn: 39. ll+ :i+r-..,.. rr 6i, i i0
DU¡,{ONCEI-. ic:¡-¡1auie: j \í¿renúic¡: ó1. i ló PLUT,{RCO: .¡.9. ó0
-i H¡R.SCH).ÍüLLER.,{ibe¡:: .!C
¡'{.{,;RO. i,¡ilic ie: 3.¿
Sciios¡¡se: ó8 i{isicni: l5..li). ri- i:5 !{el:iee_eua;e ll lOllt:aC:'rj-:J)
ll0 Freud. v d.espués ltccn

PCPPER, K¡¡l: 14, i04 STRACIIEY:39


PORCE,ETik: 15. 121 §ubjeüvación: 104
Prácdc¡: 42,45 Sueño: 46. 5l Indice
Privación: 103 Sujeto: 58, 61,63-U,69, 105-106, 13t. 134
Proceso: 39 Sujeto supuesto sabe¡: 16, 89, 104
Piogr:so: l7 TACITO:59
Fsicouralisrc 18. 37. 6E Técnica: 4142, 55,i6
.'sicasis: 25, -13, 89, 9ó, 99, t 12 Teri¡cr: i03, 105, l 14. 117
Psiquiátrico:26, 72 Tercen persona: 73 Introducción Y entonces, no es eso..... .........-.........- 9
Públicc:51,6?, l?1 Tern¡rio: 17. 24, 27, 29-33, 63. 9?-95. 105.
Puesn en conrinuiriad: I ?5 107, I lt-u2. 115-1 19. 125
Pulsion: 17 TIiCtufÉ. Michel: 87 P¡imera parte: De un manifiesto
Puisidnde muene: !-<, 103 Tiemoo iógico: t5 Freud Cescla:ado. .......:... 1l
Punto:115 Tiemoo para comprencier: 15. 9 t
PURKYNE. Jan: ?3 Tooologra: 35
p-.¡. r< aa
Tr¿duccidn: 58
ReCitiad: 29,62,9i-98 Transferencia: I t, 16, 82. 104
Rcr.lidad psíquica: 38, l?9 T¡anslireración: 21. 29, 1-?0-136
tscsir ¡undamenr¡l: 9 Tr-¿nsmisión: 12, ió, 88, 89. 107-t09
Religón: 30. t 17 Tiayectoaa: 39
Rcprese:rtación: 29 VALÉRY, Paul: 31. 32
Rctrrmo a: I I, iC VAPPER.E.\U, Jea¡r-illichst: 106
Reicrno ¡ Freud: 30,3?. 95,98 Ver<i¿d: 5i,60. 6i. 65. 132-133
¡lEY, .:.nne: 110 Verdari etem¡.: 52- 62
ROSSEI. Clómenr: i,l. l16 Venión: 14..92
R.OUD{I§ESCO. Elisabe¡h: 9-1. ICO vON GL,DDEN: l3
R.USSiLL. Ben¡r¡d: 3i Voz: lO¿i
Saber: I ?.- i.l. I 6, 17, -10, -¡i. +9, 5 t. -<9. 5 t. 53, W.\G¡íER. Richa¡d: 15
ói. ;ó. 90-91. 10¿. lll-133 W,rHL. Frenqcis: 1C0
S,{ i,SS'úRE. Feriiiaxnd ..:ie: 3.1 iViNNICOTT, Don¿id v!oods: 79-30. S0
Sl-l.i.iFER.. Flcy: -:8 WIITELS. F.: ¿1
SCijREBER: 115 WfiTGENSTEiN: 16, iC. 55-ió. 3i
Secrc:¡¡io: i7. )0, á0. í&59 I,Ya * war
;oil lcn wercen: I j. ]].A
-:-,--.
)¿.\ti-A: ¡U v.:..Q '1^ i?-.iñ Á1 Ái o.--la
Scnrido: IC3
Scsicnes ccnas: 15
SH.r.K:SPE..\R E. Wriliarn: -17
Si3nr:ic:nre: ló.:3.r0. 3J.39. L i:-i l.¡. l:9.
I I l- il:. l-15
:' .:---,tó: .-:,-,,1..^ -¡r¡¡1.,¡,r.
-: -¡-.. -
Siiencro: 6ó .'....-.' -'.¡¡ ¡,li¡ a ¡¡
AI
-^l-..
iincoiicc: ILr7. I l:. I ir-; i;. I i9. i: )- i::,
i:;-il0
Sínboio: t30-ti6
61
jí¡toma: il,.lC. 5;-53. óó.¡7. 39, i0l. i0i.
i07, l ió. l i9. l:?-ti6
Sofísiicr: ?l
St)Sa, .\f iguci: 73

ST:R3.{. F: ió. 3¿
I

I
I

..,...............¡ t::J /

Se ¡,,::'n.,inó ile :r:.lniil:.ti¡


¡',rI i,r.
:l:.r/i¡",,^.., i .
L-i ir-: -..t.i..-
/- -.: . .
!. :-. :j i:.i l_':L
':'.ll:r.,' lilí) (l.i i r ::i i it,-:*
:-.ri
ei i;lcs cie scpire l:-,i:rt ,-:,: i!.rr).t

También podría gustarte