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interna y externa:
Notas sobre el caso colombiano
Patricia Co rrea"'
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La conocida hipótesis de paridad en tasas de inte- b) Si la tasa de cambio es una variable fija o
rés nominales para una economía abierta y pe- controlada por las autoridades, y el shock inicial
queña2, formula que en condiciones de movilidad en i se percibe como transitorio, el ajuste tendrá
perfecta de capitales e inexistencia o indiferencia que realizarse en el mercado financiero doméstico
ante el riesgo financiero, existe un vínculo entre +
ya que (i* d•) permanecerá inalterado. Este pue-
las tasas de interés nominales interna y externa y de tener lugar a través de un incremento en la
las expectativas de devaluación (i,i* y d•, respecti- oferta monetaria causada por el influjo de capita-
vamente), que se puede expresar a través de la les, que contrarrestará inmediatamente el efecto
siguiente ecuación: del apretón sobre i, reduciendo nuevamente las
tasas de interés domésticas.
[1) i=i*+d·
e) Naturalmente, en la práctica el ajuste se puede
Si algún shock inesperado genera un diferencial dar a través de una combinación de estos dos
entre la tasa de interés ofrecida por los activos mecanismos, según el grado de flexibilidad
financieros domésticos y la rentabilidad esperada cambiaria del país en cuestión. Por ejemplo, en
de activos externos de similares características (en Correa (1990) se demuestra que éste fue el caso en
cuanto a plazos, riesgo, etc.), las fuerzas del mer- Colombia durante la década de los ochenta, cuando
cado se encargarán de eliminarlo, de tal manera operó un mercado de cambios dual ("negro" y
que los agentes no puedan real izar oficial). Por un lado, las variaciones en la tasa de
sistemáticamente ganancias extraordinarias ven- cambio negra ejercieron un importante papel como
diendo activos en un mercado y comprando en el mecanismo de ajuste cuando se presentaron va-
otro. Si, por ejemplo, se llegara a producir un riaciones significativas en la tasa de rentabilidad
incremento exógeno en i (generado por un apretón relativa entre los activos financieros domésticos y
monetario sorpresivo), el exceso de demanda por externos, al tiempo que variaciones en la oferta
activos domésticos que se generaría inicialmente monetaria, a través de cambios en las reservas
se corregiría rápidamente a través de cualquiera internacionales causados por sub o sobrefac-
de estos mecanismos: turación de operaciones legales, también ejercie-
ron presión sobre las tasas de interés domésticas.
a) Si la tasa de cambio se determina libremente, y Este resultado se ve corroborado por la investiga-
la inflación es relativamente inflexible en el corto ción de Herrera (1990), quien encuentra una rela-
plazo 3 , el influjo de capitales provocado por el ción estrecha entre el diferencial de rentabilidades
diferencial ocasionará una revaluación nominal y el diferencial entre la tasa de cambio negra y
temporal del tipo de cambio, colocando la tasa de oficia1 4 , y también se enfatiza en el análisis de
cambio real por debajo de su nivel de "equilibrio" Clavija (1990).
y por ende, generando expectativas de devaluación.
Así, el ajuste se dará a través de d•, variable que Cuando existe aversión al riesgo y éste se asocia
cerrará el diferencial. con la economía doméstica, la ecuación [1) se
puede replantear en términos más generales así:
2
" Pequ eña" en el sentido de que sus operaciones con el
resto del mundo no alcanzan a afectar ni los precios ni las
lasas de interés externos. • En Correa(1990), a través de análisis de cointegración de
3
Es decir, los precios lardan tiempo en responder a las series mensuales, se demuestra que utilizando la devaluación
variaciones del tipo de cambio y a otras variables financieras en el mercado negro como indicador de d•, no se puede re-
voláti les, como se enfatiza en el artículo clásico de Dornbusch chazar la hipótesis de convergencia de largo plazo entre i y (i*
(1976). + d•), es decir, la hipótesis de paridad de interés nominal.
R2 = 0.32
b. No obstante lo anterior, la tendencia de largo
Durbin-Watson: 0.22
plazo de las dos variables (r y r*) es muy similar, lo
que constituye un primer indicio de que existe una
estrecha relación de largo plazo entre ellas.
Antes de sacar conclusiones respecto a la existen-
c. Las dos variables no parecen exhibir un com- cia o no de paridad de interés real en Colombia,
portamiento estacionario, lo cual debe tenerse en conviene hacer las siguientes consideraciones, las
cuenta al realizar pruebas econométricas con ellas. cuales sugieren que el anterior no es probablemente
el camino más adecuado para comprobar empíri-
Otra forma de investigar la hipótesis "fuerte" de camente si existe un vínculo de largo plazo entre
paridad de interés real (suponiendo que no hay las tasas de interés reales interna y externa .
riesgo, ni ajuste parcial de precios, etc.), que fue
común en la literatura empírica sobre el tema hasta En primer lugar, la especificación descrita en [8]
mediados de los ochenta , es correr una regresión no considera la posibilidad de problemas de ajuste
entre el diferencial de inflaciones y el diferencial de dinámico que discutimos en la sección anterior.
tasas de ineterés nominales, y hacer el test para a Debido a rezagos en la respuesta de algunos pre-
=0 y ~ =1, utilizando una ecuación como: cios, la TCR puede tardar tiempo en ajustarse a su
nivel de equilibrio, lo cual se reflejaría también en
[9] p- p· =a+ ~(i- i") + <1> el comportamiento del diferencial r-r* .
Los resultados de un ejercicio de ese estilo para el En segundo lugar, no es claro cuál debe ser la
caso colombiano, utilizando índices de precios al causalidad entre el diferencial de inflaciones y el
consumidor y tasas de interés pasivas, aparecen en de tasas de interés nominales. Como ya se analizó,
el Cuadro 1. A pesar de que el coeficiente de ~ lo más probable es que sea de doble vía, lo cual
resulta ser estadísticamente significativo,- fenóme- rompería con los supuestos básicos para que el
no que no ocurre en la experiencia de otros países 16 , método de mínimos cuadrados sea válido para
y no poderse rechazar la hipótesis a =0, los resul- comprobar una hipótesis. Esto, además, se ve re-
tados son a todas luces insatisfactorios. Por una forzado por el hecho de que las variables
parte, ~ =1 se rechaza al 95% de confianza, el involucradas en la regresión no son estacionarias.
ajuste de la regresión es pobre, y la presencia de
problemas de autocorrelación sugiere que hay fa- Los argumentos anteriores nos llevan a concluir
llas en la especificación dinámica del modelo. que el análisis de cointegración 17 es el más ade-
cuado para establecer si existe una relación de
" También es posible que esto se ex plique por razon es
fiscal es. 17
Véase al respecto , Engl e y Granger(1 987) o Chica y
" Véase Cumby y Obstfeld (1984), por ejemplo . Kamírez (1991) .
Prueba:
16 Excepcio nes son los recientes trabajos de Herrera(199 O), Clavijo(1990) , Ten jo (1991 ), entre otros.
REFERENCIAS Bl BLIOGRAFICAS
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