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DIPLOMADO DE DERECHO DEL TRABAJO

ABG. CARMEN BEATRIZ SEGURA


Cedula N° 5.606.551
SECCION “A”
PROFESORA: EVELIN SALAS

LA SUSTITUCION DE PATRONO EN FASE DE JECUCIÓN,

El presente tema, constituye un aspecto que fue controvertido en los inicios del
desarrollo del nuevo proceso laboral; toda vez que en nuestro país las relaciones
obrero-patrono o empleado patrono eran originalmente concebidas dentro del
marco de una legislación laboral de concepción civilista en la cual la relación entre
las partes se consideraban como parte de una obligación bilateral en la cual ,
ambas partes se encontraban “en igualdad de condiciones” y por tanto el proceso
se sujetaba a la pautado en el contrato y lo no previsto se aplicaba supletoriamente
lo que estuvieses previsto en la Ley Orgánica del Trabajo.

Un cambio de paradigma, ocurre a partir de la puesta en vigencia de la


Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en la cual los derechos
laborales se constitucionalizan dándole el carácter de derechos humanos. Dentro
de este marco Ley Orgánica Procesal del Trabajo, en virtud que se ponen en
vigencia los principios del derecho del trabajo que favorecen una transformación de
dicha relación entre las partes antes indicadas. Sin embargo en este ámbito tanto
en los procesos laborales ante de la nueve era un criterio sostenido en el tiempo
tanto por la Corte Suprema de Justicia como con el Tribunal Supremo de Justicia,
la posibilidad que el trabajador hiere valer sus derechos declarado como fueren
mediante sentencia los mismos, era posible en fase de ejecución, abrir articulación
probatoria del articulo 607 del Código de Procedimiento Civil, para que no
quedasen ilusorios los derechos del extrabajador, frente al patrono que decidiere
defraudar los mismos, declararon si a si los elementos de la parte actora crearen
convicción en el Juez, pudiese declarar la sustitución de patrono.

Ahora bien, es importante destacar la importancia de los derechos del trabajador


señalados en el articulo 89: el principio de progresividad e intangibilidad de los
derechos laborales, principio de aplicación de la norma mas favorable; el principio
de irrenunciabilidad de los derechos laborales; principio de no discriminación; este
norma destaca su importancia por incluir el principio protectorio del derecho del
trabajo.

En el contexto del desarrollo del proceso laboral de la Ley Procesal del Trabajo
desde el año 2003, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en
sucesivas sentencia, como la que sigue Tribunal Supremo de Justicia en Sala de
Casación Social de fecha 11 de marzo de 2008, caso JAVIER MARRIAGA
DÁVILA, contra la sociedad mercantil TALLERES AUTORIZADOS MERCEDES,
C.A., lo siguiente :

“..(..)En resumen, considera la Sala que si la sustitución de


patrono opera, como en el presente caso, con anterioridad al
pronunciamiento de la sentencia definitiva, el patrono sustituto
adquiere la condición litigiosa pasiva, de demandado, y por tanto
la sentencia puede ser ejecutada en su contra sin que pueda
alegarse válidamente que se trata de un tercero ajeno a la relación
procesal. Se reitera, el causante del ciudadano Giorgio Giannone
fue citado a juicio y al adquirir sus derechos y operar la sustitución
de patrono, el ciudadano Giorgio Giannone asume la condición de
demandado. Queda entendido que un eventual
desconocimiento por parte del patrono sustituto de la
existencia de demandas que cursen en contra del patrono
sustituido al verificarse la sustitución, no puede ser alegada
en perjuicio del ex–trabajador demandante a los fines de
enervar la ejecución de la sentencia. Entonces, asentado que
el ciudadano Giorgio Giannone no es un tercero ajeno a la
controversia, no resultaba procedente la oposición por él
formulada.
En la Ley Orgánica del Trabajo de 1997, establecía una normativa específica al
respecto, los artículos del 88 al 92, a saber indicando los elementos que podrian
presentarse para señalar la sustitución de patrono,:

Artículo 88. Existirá sustitución del patrono cuando se trasmita la


propiedad, la titularidad o la explotación de una empresa de una
persona natural o jurídica a otra, por cualquier causa, y continúen
realizándose las labores de la empresa.

Artículo 89. Cuando el nuevo patrono continúe el ejercicio de la


actividad anterior con el mismo personal e instalaciones
materiales, independientemente del cambio de titularidad de la
empresa, se considerará que hay sustitución del patrono.

Artículo 90. La sustitución del patrono no afectará las relaciones


de trabajo existentes. El patrono sustituido será solidariamente
responsable con el nuevo patrono por las obligaciones derivadas
de la Ley o de los contratos, nacidas antes de la sustitución, hasta
por el término de prescripción previsto en el artículo 61 de esta
Ley.

Concluido este plazo, subsistirá únicamente la responsabilidad del


nuevo patrono, salvo que existan juicios laborales anteriores, caso
en el cual las sentencias definitivas podrán ejecutarse
indistintamente contra el patrono sustituido o contra el sustituto. La
responsabilidad del patrono sustituido sólo subsistirá, en este
caso, por el término de un (1) año contado a partir de la fecha en
que la sentencia quede definitivamente firme.

Artículo 91. La sustitución del patrono no surtirá efecto en


perjuicio del trabajador si no se le notificare por escrito a éste.
La sustitución deberá además notificarse por escrito al Inspector del
Trabajo y al sindicato al cual esté afiliado el trabajador.

Hecha la notificación, si el trabajador considerase


inconveniente la sustitución para sus intereses, podrá exigir la
terminación de la relación de trabajo y el pago de las
prestaciones e indemnizaciones que le corresponderían en caso
de despido injustificado.

Artículo 92. En el caso de que se le paguen al trabajador


prestaciones e indemnizaciones con motivo de la sustitución del
patrono y continúe prestando sus servicios a la empresa, el pago
recibido se considerará como un anticipo de lo que en
definitiva le corresponda al terminar la relación de trabajo.
Ahora bien, vale señalar lo que establece la nueva Ley Orgánica del Trabajo, las
Trabajadoras y Trabajadores con respecto a la figura de la sustitución de patrono, a
saber:

“Artículo 66. Existirá sustitución de patrono o patrona,


cuando por cualquier causa se transfiera la propiedad, la
titularidad de una entidad de trabajo o parte de ella, a través
de cualquier título, de una persona natural o jurídica a otra,
por cualquier causa y continúen realizándose las labores de
la entidad de trabajo aún cuando se produzcan
modificaciones.
Artículo 67. No se considerará sustitución de
patrono o patrona, cuando después del cierre de una
entidad de trabajo, el Estado realice la adquisición
forzosa de los bienes para reactivar la actividad
económica y productiva, como medida de protección al
trabajo y al proceso social de trabajo,
independientemente que sean los mismos trabajadores
y trabajadoras y sean las mismas instalaciones.
Las deudas del patrono o patrona con los trabajadores y
trabajadoras, serán canceladas por dicho patrono o
patrona, o descontadas del precio convenido a pagar por el
Estado, o garantizando su pago por éste en acuerdo con los
trabajadores y trabajadoras.

Artículo 68. La sustitución de patrono o patrona, no


afectará las relaciones individuales y colectivas de trabajo
existentes. El patrono o la patrona sustituido o
sustituida, será solidariamente responsable con el
nuevo patrono o la nueva patrona, por las obligaciones
derivadas de esta Ley, de los contratos individuales, de
las convenciones colectivas, los usos y costumbres,
nacidos antes de la sustitución, hasta por el término de
cinco años.
Concluido este plazo, subsistirá únicamente la
responsabilidad del nuevo patrono o de la nueva patrona,
salvo que existan juicios laborales anteriores, caso en el
cual las sentencias definitivas podrán ejecutarse
indistintamente contra el patrono sustituido o la patrona
sustituida o contra el sustituto o la sustituta. La
responsabilidad del patrono sustituido o patrona sustituida
sólo subsistirá, en este caso, por el término de cinco años
contados a partir de la fecha en que la sentencia quede
definitivamente firme.

Artículo 69. La sustitución del patrono o de la patrona


deberá ser previamente notificada a los trabajadores,
trabajadoras y su organización sindical; al inspector o
inspectora del trabajo. La sustitución de patrono o patrona
no surtirá efecto en perjuicio del trabajador o trabajadora.
Hecha la notificación, si el trabajador o trabajadora
considerase inconveniente la sustitución para sus
intereses, dentro de los tres meses siguientes, podrá
exigir la terminación de la relación de trabajo y el pago
de las prestaciones e indemnizaciones conforme a lo
establecido en esta Ley.

Artículo 70. En el caso que se pague al trabajador o


trabajadora prestaciones e indemnizaciones con motivo de
la sustitución de patrono o patrona y continúe prestando sus
servicios a la entidad de trabajo, el pago recibido se
considerará como un anticipo de lo que en definitiva le
corresponda al terminar la relación de trabajo.”

Asimismo el artículo 45 ejusdem establece que para los fines de esta Ley se
entenderá por entidad de trabajo lo siguiente:

a) La entidad de trabajo o unidad de producción de bienes o


servicios constituida para realizar una actividad económica de
cualquier naturaleza o importancia.

b) El establecimiento o la reunión de medios materiales y de


trabajadores y trabajadoras permanentes que laboran en un mismo
lugar, en una misma tarea, de cualquier naturaleza o importancia, y
que tienen una dirección técnica común.

c) Toda combinación de factores de la producción sin personalidad


jurídica propia, ni organización permanente que busca satisfacer
necesidades y cuyas operaciones se refieren a un mismo centro de
actividad económica.

d) Toda actividad que envuelva la prestación del trabajo en


cualquiera condiciones.

e) Los órganos y entes del Estado prestadores de servicio”.

Por tanto, existirá sustitución de patrono o patrona, cuando por cualquier


causa se transfiera la propiedad, la titularidad de una entidad de trabajo o parte de
ella, a través de cualquier título, de una persona natural o jurídica a otra, por
cualquier causa y continúen realizándose las labores de la entidad de trabajo aún
cuando se produzcan modificaciones. La diferencia con Ley Orgánica del 1997, con
la de 2012 es que establece que en caso que el Estado por razones de protección
del proceso social trabajo el Estado procede a cerrar una empresa o explotación
económica se entenderá que procede al figura de sustitución de patrono, y que las
deudas que tenga el patrono se descontaran del precio convenido con el Estado a
pagar por la entidad de trabajo. Asimismo, se establece como lapso para la
subsistencia de responsabilidad solidaria en caso de sustitución de patrono por
cinco (05) años.

Asimismo, pertinente es señalar que dicha institución encuentra su


justificación en el hecho de preservar la fuente de trabajo, y por ende, la
permanencia de la actividad comercial, siendo que la Ley in comento considera que
la misma ocurre aun cuando se produzcan modificaciones y continúen realizándose
las labores de la entidad de trabajo.

Siendo la Ejecución una fase del proceso en la que se aplica de conformidad del
artículo 11 de la Ley Orgánica Procesal de Trabajo, por analogía y
subsidiariamente, el Código de Procedimiento Civil a partir de ll articulo 523 y
siguientes, tenemos que el artículo 533 prevé que las incidencias se tramitaran de
acuerdo al procedimiento del articulo 607 de dicho código.

En sentencias reiteradas de este Circuito del Trabajo, se declaro por diversos


Tribunales de Primera Instancia Mediación y Ejecución de este Circuito del Trabajo,
procedente la sustitución de patrono, algunos casos como sigue

Tribunal 38° de Primera Instancia de Primera Instancia Mediación y Ejecución de


este Circuito del Trabajo, expediente N° AH23-L-1999-000081, parte actora:
CARLOS DOMINGO HERRERA GARCIA, vs TENKA MOTORS C.A. y RODELCA
MOTORS C.A.

Tribunal 5° de Primera Instancia de Primera Instancia Mediación y Ejecución de


este Circuito del Trabajo, caso: expediente N° AP21-L-2011-003991; parte
actora: :MODESTO ENRIQUE DURÁN IBARRA, CARMEN BEATRIZ DÁVILA,
ELENA PATRICIA BARRIOS TRUJILLO y JAIDY YURIMA LUNA TORRES, vs
PARTE EJECUTADA: NEW STYLE HM C.A., y PRESUNTO TERCERO
OPOSITOR: INVERSIONES GMS 2021, C.A.

En dichos casos los Jueces procedieron a la aplicación del procedimiento señalado


en el Código de Procedimiento Civil, determinaron en el contexto de cada caso, el
valor probatorio de cada documento consignado en autos, el cumplimiento de los
supuestos de hecho de conformidad con la ley sustantiva que se cumplieron; en
aplicación de las sentencias de la Sala Constitucional en materia de Pruebas, si era
necesario; y procedieron a declarar la procedencia o no de declaratoria de
sustitución de patrono, en dicha fase.

Este criterio de declarar la sustitución de patrono en esta fase, es un criterio que


cambio mediante sentencias reiteradas de la Sala de Casación Social del Tribunal
Supremo de Justicia, Magistrada Ponente Carmen Zuleta de Merchán, en
fecha:6/12/2013 caso: la ciudadana CORIMAR ANDREÍNA URDANETA
TORREALBA, contra las sociedades mercantiles TIJERASO T.M.T, C.A., c y
ALMACENES EL CORTE LARENSE, C.A., intervino como TERCERO OPOSITOR
la sociedad mercantil COMERCIALIZADORA LAS PRINCESAS, C.A., señala que
se violenta el debido proceso, el derecho a la defensa y la igualdad de las parte, al
respecto señala textualmente:

Ahora bien, el artículo 49, numeral 4 de la Constitución de la República


Bolivariana de Venezuela, establece que: “el debido proceso se aplicará a
todas las actuaciones judiciales y administrativas; en consecuencia, (…).
Toda persona tiene derecho a ser juzgada por sus jueces naturales en las
jurisdicciones ordinarias, o especiales, con las garantías establecidas en
esta Constitución y en la ley (…)”.

En tal sentido, el artículo 15 del Código de Procedimiento Civil, dispone el


deber que tienen los jueces de “garantizar el derecho de defensa, y
mantendrán a las partes en los derechos y facultades comunes a ellas, sin
preferencia ni desigualdades y en los privativos de cada una, las
mantendrán respectivamente, según lo acuerde la ley a la diversa
condición que tengan en el juicio, sin que puedan permitir ni permitirse
ellos extralimitaciones de ningún género”, por tanto, constituye deber de
los jueces mantener y proteger las garantías constitucionalmente
establecidas, evitando extralimitaciones, desigualdades o incumplimiento
de formalidades esenciales que puedan generar un estado de indefensión
a las partes involucradas en el juicio.

En un caso análogo, la Sala Constitucional en sentencia N° 1787 de fecha


25 de septiembre de 2001 (caso: Inversiones Hermisant C.A.), estableció:

La Sala observa que la sentencia consultada se ajustó a derecho, al


estimar infringido los derechos constitucionales a la defensa y al
debido proceso, pues constituye un flagrante quebrantamiento de
tales derechos la condena, en este caso a pagar una suma de dinero,
de una sociedad mercantil que no fue parte en el juicio laboral.
En efecto, está plenamente comprobado en autos que la demandada, en el
juicio cuya pretensión fue el pago de la diferencia de prestaciones sociales,
fue Hotelera Latinoamericana S.A. y no INVERSIONES HERMISANT, C.A.
También está plenamente probado en autos que se trata de dos
sociedades mercantiles distintas y que la única relación que las vincula
es una persona que es accionista de ambas compañías, pero que, en todo
caso, no fue demostrado en el juicio laboral, así como tampoco se
alegó en ningún momento, que se produjo una sustitución de
patrono, hecho que, además de la necesidad de haber sido alegado,
tuvo que haber sido probado.
 
Asimismo, la Sala considera que, aun en el caso de que haya habido la
sustitución, se ha debido traer a juicio al sustituyente. En este caso, la
vulneración de los enunciados derechos constitucionales de la
demandante se configuró aún más, cuando el tribunal de la causa
decretó embargo sobre bienes de la aquí demandante para garantizar
la ejecución de una sentencia proferida en una causa en la que no fue
parte. En conclusión, la Sala considera que el Juez de la sentencia
impugnada actuó fuera de su competencia en el sentido
jurisprudencialmente acordado por esta Sala, razón por la cual debe
restablecerse la situación jurídica infringida y, con ese sentido, se deja sin
efecto la orden de ejecución del fallo condenatorio expedida contra
INVERSIONES HERMISANT C.A., así como también la medida de
embargo decretada sobre bienes de la mencionada compañía. (…).

El anterior criterio jurisprudencial ha sido ratificado por la Sala


Constitucional en sentencias números 3297 de fecha 1° de diciembre de
2003 (caso: Emilio Romero Arias), y 2785 de fecha 3 de diciembre de 2004
(caso: Hanover PGN Compressor C.A.), en esta última, reiteró:

De otra parte, observa también la Sala que la Corte Primera de lo


Contencioso-Administrativo no advirtió que el Juzgado Superior en lo Civil
y Contencioso-Administrativo de la Circunscripción Judicial de la Región de
Los Andes infringió el derecho a la defensa y al debido proceso de la
accionante, cuando en fase de ejecución de sentencia, dictó auto que
resolvió puntos esenciales no controvertidos en el juicio en su fase
de conocimiento, y sin que mediara el debido contradictorio,
determinó sin formula de juicio que la hoy accionante, resultaba ser la
sustituta del recurrente en la relación laboral cuando consta en autos
que la accionante no fue parte principal ni llamada en tercería, con lo
cual no sólo violó el derecho a la defensa y al debido proceso de la
empresa accionante, consagrado en el artículo 49 de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, sino que además extendió los
efectos de la cosa juzgada a un tercero que nunca formó parte de la
relación procesal. Así se decide. (Negrillas de la Sala). Subrayado de
quien suscribe
En sujeción a los criterios jurisprudenciales expuestos, colige esta Sala
que no puede el Juez en fase de ejecución de sentencia, resolver puntos
esenciales no controvertidos en el juicio principal en su fase de
conocimiento, esto es, sin que medie el debido contradictorio, y menos
aún determinar que una persona jurídica o natural que no ha sido parte
en el juicio, resulte ser el patrono sustituto, pues tal conducta violenta el
derecho a la defensa y al debido proceso, consagrado en el artículo 49
de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en
concordancia con los artículos 12 y 15 del Código de Procedimiento Civil,
normas de orden público, cuya tutela corresponde a los jueces en el
ejercicio de sus funciones, garantías infringidas por el Juez de Alzada,
al confirmar el fallo que declaró la sustitución de patrono de la empresa
mercantil Comercializadora Las Princesas, C.A., con las comendadas
Tijeraso, T.M.T, C.A., y Comercial El Corte Larense, C.A., y ordenó la
ejecución del fallo de manera indistinta sobre bienes propiedad del
patrono sustituido o sustituto. Subrayado de quien suscribe.

Este sentencia la Sala de Casación Social estableció que los jueces de trabajo
no pueden determinar la existencia de una sustitución de patronos en la fase de
ejecución, pues tal declaratoria se trata de un punto esencial que no fue
controvertido en el juicio y que requiere de un debate probatorio. Tal
pronunciamiento se produjo con ocasión de un embargo que se ordenó ejecutar
en los bienes de un tercero que no formó parte del juicio, pero que la
trabajadora alegó, en fase de ejecución, que se trató del patrono sustituto.
Sobre esto, la Sala adoptó el criterio de la Sala Constitución según el cual “…
constituye un flagrante quebrantamiento de tales derechos [a la defensa y al
debido proceso] la condena, en este caso a pagar una suma de dinero, de una
sociedad mercantil que no fue parte en el juicio laboral.” Y, en consecuencia,
sostuvo “…determinar que una persona jurídica o natural que no ha sido parte
en el juicio, resulte ser el patrono sustituto, (…) violenta el derecho a la defensa
y al debido proceso…” y, en consecuencia, declaró que “…la existencia de la
sustitución de patrono, es un alegato que debe ventilarse en el contradictorio
del juicio, a fin de garantizar el derecho a la defensa de las partes y el debido
proceso, a través de la promoción y evacuación de medios de pruebas que
permitan establecer o desvirtuar su existencia y no en fase de ejecución de
sentencia, como erróneamente el fallo interlocutorio recurrido confirmó
Al respecto, se debe señalar que esta Sala ha establecido en su sentencia
Nº 903/14.05.2004, que “En la fase de ejecución de sentencia, donde no hay un
proceso de cognición, tal situación de extensión de la fase ejecutiva a quien no ha
sido demandado como miembro del grupo, no podría ocurrir, ya que el
principio (salvo excepciones) es que el fallo debe señalar contra quién obrará y, de
omitir tal señalamiento, la sentencia no podría ejecutarse contra quien no fue
condenado” (subrayado nuestro).

La sentencia objeto de revisión, aplicó el criterio de poder extender los


efectos del fallo del 13 de diciembre de 2004 dictado por el Juzgado Primero de
Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Trabajo de la Circunscripción
Judicial del Estado Falcón, ya en etapa de ejecución del mismo, a VALORES
ABEZUR, C.A., Luis Enrique Manetta Migliore y Gieancarlos Carlos Manetta
Migliore, por considerar que existió una sustitución de patrono. Lo anterior es
contrario a lo establecido por esta Sala en sentencia N°  900/06.07.2009, con lo
cual se violó el principio de la seguridad jurídica y garantías constitucionales de la
accionante en amparo.

En el presente caso, se observa que ninguno de los supuestos que harían


procedente la declaratoria de solidaridad patronal en el proceso, se dan en el caso
de autos, pues la accionante nunca fue demandada, citada, hecha intervenir o
identificada en el juicio antes de dictarse la sentencia de fondo y, por ende, no
aparece incluida en la sentencia, razón por la cual, no podía condenársele por
separado en violación del artículo 272 del Código de Procedimiento Civil, que
prohíbe a los jueces volver a decidir la controversia ya decidida por una sentencia
anterior. Ahora bien, de la revisión efectuada a las diferentes actas que conforman
el presente expediente y de la lectura de la sentencia objeto de impugnación,
quedó plenamente comprobado que en el caso de autos, la demanda fue
interpuesta única y exclusivamente por la sucesión Suplicio Guevara contra Moisés
Udelman, individuo éste que mediante sentencia dictada por el Juzgado Primero de
Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Trabajo de la Circunscripción
Judicial del Estado Falcón, quedó condenado al pago de cierta cantidad de dinero a
favor de la sucesión de Suplicio Guevara; posteriormente, en fase de ejecución de
sentencia, con ocasión a la  solicitud efectuada por el apoderado actor el 19 de
febrero de 2008, se declaró con lugar su pretensión respecto a la sustitución de
patronos a VALORES ABEZUR, C.A., Luis Enrique Manetta Migliore y Gieancarlos
Carlos Manetta Migliore, a los fines de hacer extensiva la ejecución de la sentencia
y responder de las obligaciones económicas de la parte perdidosa.
Tal decisión, la efectuó incluso desatendiendo el criterio emanado de esta
Sala Constitucional en sentencia Nº 903 de fecha 14 de mayo de 2004
(Caso: Transporte Saet C.A.), según la cual, se puede condenar a miembros de un
grupo económico, aun cuando no hayan sido demandados ni citados, siempre que
hayan pruebas inequívocas de ello, lo cual se trata de una “excepción”, según la
cual, se puede ejecutar una sentencia contra un grupo aunque no se haya
mencionado, siempre y cuando se logre demostrar su existencia mediante el aporte
del correspondiente cúmulo probatorio, que en el caso de autos se verificó
mediante la apertura de la incidencia probatoria conforme el artículo 607 del Código
de Procedimiento Civil.

Vinculado al fallo anterior, esta Sala Constitucional, en sentencia Nº 979 del


26 de mayo de 2005, estableció:

 “Del fallo de esta Sala parcialmente transcrito, con anterioridad, se


desprende, que cuando se demanda a un grupo económico, es necesario
alegar la existencia del grupo, su conformación, y señalar cuál de sus
componentes ha incumplido y en la sentencia, el Juez podrá levantar el
velo de la personalidad jurídica a los integrantes del grupo y determinar la
responsabilidad de alguno de sus miembros, aunque ellos no hayan
mantenido directamente una relación jurídica con el demandante, en un
proceso determinado.  En esos casos, al sentenciar al grupo económico,
puede condenarse a uno de sus miembros referidos en el fallo que,
igualmente fueron mencionados en la demanda, aunque no hayan sido
emplazados, siempre y cuando en el debate probatorio se haya
demostrado la unidad económica que conforma el grupo.

Por otra parte, la Sala debe señalar, ajustado al criterio del fallo citado up
supra, que el principio antes expuesto sufre una excepción, que es cuando
se esté en presencia de una materia de orden público, supuesto en el cual,
se entiende que a pesar de no haber sido demandado el grupo económico
como tal, sino contra uno de sus componentes, si de autos quedan
identificados los miembros del grupo y sus características, la sentencia
podrá abarcar a los miembros de éste no mencionados en el libelo.

En el caso bajo análisis, el demandante en el juicio de intimación de


honorarios profesionales, demandó a una sociedad mercantil que fue
contra parte de su representada en un juicio de ejecución de prenda, en su
escrito de intimación de honorarios, no invocó ni señaló la existencia de un
grupo económico conformado por la empresa demandada y
APLICACIONES TUBULARES C.A. (ATUCA), argumento que, igualmente,
no esgrimió a lo largo del contradictorio.  En la sentencia que declaró el
derecho a cobrar honorarios por parte del ciudadano Rafael Aponte
Martínez, no se condenó a grupo económico alguno, ni se mencionó a la
referida empresa.  Es sólo en la fase de ejecución de sentencia, una vez
librado el mandamiento de ejecución cuando la parte intimante alega la
existencia de un grupo económico que conforma la sociedad mercantil
intimada,  TUBOS REUNIDOS S.A. y APLICACIONES TUBULARES C.A.
(ATUCA) y solicitó la extensión de la medida ejecutiva de embargo a los
bienes de la prenombrada compañía.

Asimismo, considera esta Sala que al encontrarse el proceso en fase de


ejecución y no tratarse, el caso de autos, de una materia que afecte al
interés general, ni que afecte al orden público, no puede ser aplicada la
excepción al principio desarrollado por esta Sala en la sentencia del 14 de
mayo de 2004 (caso: Transporte SAET S.A.), de manera tal, que la
decisión impugnada atenta contra la garantía constitucional al debido
proceso y el derecho a la defensa de la accionante ya que decretó la
medida de embargo ejecutivo sobre sus bienes, sin que haya sido
sometida a un proceso y haya sido condenada por una sentencia judicial,
alegando en fase ejecutiva su pertenencia a un grupo económico, sin que
se encuentren involucradas materias que atiendan al orden público.

Cabe destacar, que como el objeto del juicio principal, en este caso, es el
cobro de honorarios profesionales de abogados, originados por sus
labores prestadas en un juicio por cobro de bolívares, si bien, como se
señaló con anterioridad no es posible en el caso sub iúdice  decretar, ya
en la fase de ejecución, la medida de embargo ejecutivo sobre una
empresa, distinta a la intimada, que supuestamente forma parte de un
grupo económico, al que pertenece ésta, sin que haya sido alegada al
momento de intimar dichos honorarios la existencia del grupo económico;
lo anterior no obsta para que, la parte intimante, al ver frustrado su
derecho al cobro de honorarios profesionales por la insolvencia de la
intimada, pueda por nueva demanda accionar por cobro de honorarios
profesionales, por el contenido laboral que ello encierra, contra otra
empresa que forme parte del grupo económico al que pertenece su
originaria deudora, y se le reconozca tal derecho al cobro, siempre que
durante el contradictorio se alegue y demuestre la existencia del grupo, su
conformación y se pruebe dicha existencia a fin de que la condena pueda
recaer sobre otro de sus miembros.

En consecuencia, considera la Sala que la decisión impugnada, contentiva


de un burdo razonamiento constituyó una extralimitación en la
competencia de la juez, y atenta contra el derecho a la defensa y al debido
proceso de la accionante, garantizados por la vigente Constitución, motivo
por el cual, esta Sala declara sin lugar la apelación ejercida por el tercero
interesado, confirma la sentencia dictada por el a quo, el 19 de julio de
2004, que declaró con lugar la acción de amparo interpuesta la nulidad de
auto dictado el 26 de marzo de 2004 por el Juzgado Cuarto de Primera
Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial
del Área Metropolitana de Caracas, así como la nulidad de las diligencias
dictadas en ese procedimiento, durante la fase de ejecución, del
mandamiento de ejecución librado y de las diligencias de embargo
practicadas. Así se decide…”.(subrayado de la Sala)

Así las cosas, tal y como se desprende del contenido parcial de la sentencia
mencionada, en cualquiera de los escenarios en que se pretenda la declaratoria de
la existencia de un grupo económico o sustitución de patronos, a los fines de hacer
extensiva la responsabilidad del cumplimiento de determinada obligación, el
denominador común es: a) que en autos queden identificados quiénes conforman el
nuevo patrono o grupo y sus características y, b) que tal declaratoria se efectúe en
la sentencia definitiva. Ello, obviamente a los fines de garantizar el derecho a la
defensa de las partes que eventualmente pudieran ser afectadas por la declaratoria
de la existencia de la unidad económica, de manera que puedan hacer uso de los
medios de impugnación existentes.          

De lo anteriormente expuesto, se deriva la imposibilidad de que en fase de


ejecución de sentencia, se pretenda dilucidar la existencia y consecuente extensión
de los efectos de una condena a quien no ha sido parte en el juicio, pues la
apertura de una articulación probatoria, dada su brevedad, es insuficiente para
garantizarle a las partes el ejercicio pleno de su derecho a la defensa donde
puedan desarrollar en toda su extensión el contradictorio con sus excepciones
respectivas y las pruebas que a bien tuvieran promover.

 El artículo 607 del Código de Procedimiento Civil, aplicado al caso de autos
para sustanciar la incidencia que dio lugar a la sentencia objeto de la presente
revisión, establece:         

“….si por resistencia de una parte a alguna medida legal del Juez, por abuso
de algún funcionario, o por alguna necesidad del procedimiento, una de las
partes reclamare alguna providencia, el Juez ordenará en el mismo día que
la otra conteste en el siguiente, y hágalo ésta o no, resolverá a más tardar
dentro del tercer día, lo que considere justo; a menos que haya necesidad
de esclarecer algún hecho, caso en el cual abrirá una articulación por ocho
días sin término de distancia.

Si la resolución de la incidencia debiere influir en la decisión de la causa, el


Juez resolverá la articulación en la sentencia definitiva; en caso contrario
decidirá al noveno día…”. 

Sin lugar a dudas, el procedimiento incidental a que hace referencia el


artículo trascrito, tiene por finalidad dilucidar cualquier asunto que en el transcurso
del juicio se presente y carezca de un procedimiento determinado para su
resolución. Lógicamente, es imposible efectuar un catálogo de las numerosas
incidencias que se pudieran presentar en juicio, pero en aras de la seguridad
jurídica, se previó la manera de sustanciarlas. Como se puede evidenciar de la
lectura de la referida norma, la misma, sólo tiene aplicación cuando se está en
presencia de un incidente surgido en juicio, donde entre las partes, entiéndase
actor y demandado, surge alguna inconformidad. De lo que se deriva, que la
mencionada norma no puede servir de fundamento para llamar a un tercero ajeno
al juicio en fase de ejecución de sentencia y emplazarlo para que al día siguiente
conteste, so pena, de condenarlo en las mismas condiciones de la parte perdidosa,
o peor aún, no emplazarlo y aplicarle una sentencia definitiva de un proceso en el
cual no formó parte, tal como ocurre en el presente caso. 

            La postura anterior aplicada al caso de autos, permite afirmar a esta Sala
Constitucional que la sentencia dictada el 30 de septiembre de 2009, por el
Juzgado Superior Primero del Trabajo de la Circunscripción Judicial del Estado
Falcón, que confirma lo establecido el 27 de abril de 2009, por el Juzgado Primero
de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Trabajo de la Circunscripción
Judicial del Estado Falcón,incurrió en una violación de preceptos constitucionales,
como lo es el derecho a la defensa y el debido proceso de VALORES ABEZUR,
C.A., de Luis Enrique Manetta Migliore y Gieancarlos Carlos Manetta Migliore, al
extender los efectos de la ejecución forzosa de la sentencia dictada en el juicio
seguido por la sucesión de Suplicio Guevara contra Moisés Udelman, sin que en el
transcurso del juicio hubiesen sido citados o mencionados y sin que tal
condenatoria se efectuara en la sentencia definitiva.

El cambio de criterio Jurisprudencial realizado por la Sala constitucional en


forma alguna iría en detrimento de lo establecido en el articulo 94 de la Constitución
de la Republica Bolivariana de Venezuela, que establece que, las
responsabilidades que correspondan a los empleadores, sean personas naturales o
jurídicas en cuyo provecho se presta el servicio; en mi opinión, al no poder
decretar una sustitución de patrono en fase ejecutiva, afectaría de manera profunda
la progresividad de los derechos humanos alcanzados hasta hoy, y el carácter
eminentemente social que ostentan las normas laborales, creando una situación
especialmente negativa para los trabajadores, que en definitiva no tendrían o no
habría quien en definitiva cancele sus pasivos laborales, simplemente luego de
haber obtenido una solución satisfactoria, por una sentencia dictada a su favor,
dejando a la deriva e inejecutables todos los derechos alcanzados.

BIBLIOGRAFIA

Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela

Ley Orgánica del Trabajo, Gaceta Oficial N° 5.152 Extraordinaria, del 19 de junio de
1.997

Ley Orgánica del Trabajo, de los Trabajadores y las Trabajadoras, Gaceta Oficial
N° 6.076 del 07 de mayo de 2012.

Portal Web: tsj.gov.ve/regiones Juzgado Séptimo Superior del Trabajo de la


Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, 27/04/2015. AP21-R-
2015-39.

Tribunal Supremo de Justicia en Sala de Casación Social de fecha 11 de marzo de


2008, caso JAVIER MARRIAGA DÁVILA, contra la sociedad mercantil TALLERES
AUTORIZADOS MERCEDES, C.A.

http://www.tsj.gov.ve/decisiones/scs/diciembre/159459-1239-61213-2013-13-075.HTML

http://www.tsj.gov.ve/decisiones/scon/Abril/523-25412-2012-10-0786.html

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