Engorde y terminación de ovinos

Bqca. A. Jorgelina Flores. EEA INTA Mercedes

Introducción

La producción zafrera del sistema ovino en Corrientes presenta el problema

de los corderos que quedan refugados, por falta de peso o nacimientos
tardíos, y pasan el invierno siguiente en el campo. La calidad y producción
forrajera durante el período invernal es escasa, por lo tanto, las ganancias
de peso son pobres, aumentan la carga del sistema y pierden la categoría
de corderos (pasan a borregos) afectando su valor en el mercado.

Desde la EEA INTA Mercedes (Ctes.) se han evaluado diferentes alternativas

nutricionales para mejorar las ganancias invernales, desde la
suplementación a campo y verdeos, hasta el encierre a corral, para
desestacionalizar la oferta de carne ovina llevándolo a otra categoría
(cordero pesado).

En diferentes trabajos realizados en suplementación invernal se logran

ganancias de peso que promedian los 100 g/d), pero la duración de la
alimentación a campo para terminarlos es superior a 120 días. En el caso
de los verdeos, las ganancias diarias son mayores pero todavía no están
muy difundidos para los sistemas ovinos de la zona, salvo en ovejas
melliceras, por los altos costos.

El engorde a corral surge como otra posibilidad para solucionar este

inconveniente. Hay antecedentes locales de ganancias próximas a los 200
g/an/d, con dieta adecuada y condiciones de sanidad y manejo correctas
(Robson, 2002; Flores y otros, 2008). El confinamiento podría plantearse
como una alternativa interesante para diferentes épocas del año; por
ejemplo en verano, cuando hay cantidad pero la calidad del pasto es
limitante, o durante el invierno para manejar mejor la carga o en
situaciones favorables en la relación insumo/producto.

Manejo nutricional para corderos refugo

Las alternativas para mejorar las ganancias diarias de peso en el período

invernal son:

- Suplementación: logran mejores ganancias (65 a 100 g/d) de peso.

El tiempo de alimentación a campo requerido para terminar los
animales, generalmente, es superior a los 100 días.

La técnica de suplementación se basa en aportar los nutrientes que le faltan

al forraje base, en el caso particular del campo natural o pasturas
subtropicales en invierno, es principalmente proteína. La suplementación
proteica invernal mejora la eficiencia de utilización del forraje, aumentando
el consumo e incrementando las ganancias de peso.
Cuando se cubre la principal deficiencia nutricional, por ejemplo proteína de
la ración, el agregado de una fuente de energía (granos o balanceados
energético) o una suplementación más completa mejora las ganancias de
peso.

- Verdeos: comienzan a difundirse en la zona pero son cultivos

costosos para destinarlos a esta categoría. Las ganancias diarias de
peso podrían llegar a los 200 g/an/d.

Los verdeos (avena o raigrass) complementan muy bien el bache invernal

antes mencionado. Deben manejarse con sistema de pastoreo rotativo para
mayor eficiencia de utilización de la pastura.

- Encierres: las ganancias obtenidas a corral pueden superar los 200

g/an/d y permite sacar a la venta animales terminados en corto
tiempo y manejar mejor las cargas del campo natural en invierno.

Los antecedentes de engordes a corra de corderos demuestran que es

factible obtener buenas ganancias de peso en estas categorías aplicando
estrategias de alimentación y de esa manera poder comercializar, en poco
tiempo, estos animales en una época en la que es difícil encontrar corderos
con buen peso en el mercado local.

Cordero pesado: permite diversificar la producción ovina

El cordero pesado es un cordero de recría de entre 35 y 40 kg de peso vivo

y con una res mayor a los 13 kg. Para que se lo incluya dentro de la
categoría cordero es necesario que el animal tenga dientes de leche, ya que
cuando cortan 1 ó 2 dientes permanentes pasan a la categoría borrego y el
precio en el mercado disminuye.

Aplicar alguna tecnología que permita mejorar las ganancias y obtener

corderos pesados en poco tiempo (2 a 3 meses), es una alternativa para
aumentar el peso de faena y la cantidad de carne de las reses en aquellos
corderos que quedaron en el campo. Permite vender carne de cordero en
contra estación, logrando diversificar la producción ovina.

Trabajos realizados en la EEA INTA Mercedes

Suplementación de corderos

Al suplementar se debe tener en cuenta:

- disponibilidad y oferta de forraje con la que se dispone
- calidad del forraje, identificar cual es la limitante nutricional de este
forraje.
- tipo de suplemento adecuado para suplir la deficiencia de la base forrajera
- Nivel o cantidad de suplemento que se suministra

Los resultados de la suplementación dependen de:

- Factores del animal (potencial genético, estado fisiológico, condición
corporal, etc.)
- Factores de la dieta (calidad y cantidad)
- Factores de manejo, carga y sanidad
Suplementación energético-proteica de corderos sobre CN (Robson y
otros, 2001)

Se suplementó sobre campo natural durante el período invernal a 131

corderos que pastoreaban a una carga de 3,3 cord/ha. La suplementación
de realizó al 1%PV con pellet de trigo (16%PB y 2,5% Mcal EM/MS)

El resultado obtenido fue de 100 g/an/d de ganancia de peso y llegando a

peso de faena al final del invierno con 42 kg.

Evaluación de niveles de suplementación (Franz y otros, 2009)

Se realizó un suplementación invernal durante los años 2007, 2008 y 2009

sobre campo natural a una carga de 0,7 EV/ha. Se evaluaron y compararon
los resultados de no suplementar, dar al 1 % PV y al 2% del PV una ración
al 18% PB durante 47 días.

Los respuesta animal mejoró al aplicar la técnica de suplementación,

aunque las ganancias estuvieron en el orden de los 55-60 g/an/d y no
alcanzaron el objetivo planteado inicialmente, posiblemente como
consecuencia de la baja disponibilidad de forraje en ese periodo.

Verdeos

Se realizó la terminación de 36 corderos sobre praderas de avena y raigrass

con un manejo rotativo a una carga de 11,5 cord/ha.
Las ganancias obtenidas fueron de 195 g/an/d y los animales salieron a
venta en 50 días. (Sampedro y col, 1997).

Encierre de corderos

Existen muchos antecedentes de engorde a corral de ovinos, siempre que

se cuente con una dieta de engorde adecuada y que cubra los
requerimientos, instalaciones y manejo apropiado, y un control sanitario
correcto los corderos pueden alcanzar ganancias superiores a 200 g/d en el
corral. Esto permitiría su terminación en un corto período de tiempo.

En la EEA Bariloche, por citar alguno de los trabajos realizados, con una
dieta conformada por una mezcla de maíz entero-pellet de soja (80-20) y
heno de alfalfa picado, encontraron ganancias de peso diarias entre 210 a
250 g/animal/d. Las mismas ganancias fueron encontradas en la EEA
Mercedes (Robson y otros, 2002; Flores y otros, 2008; Flores y otros,
2013).

Los puntos en común para todos los encierres son:

Corrales: son de alambrado eléctrico (4 hilos) y de tamaño adecuado,

otorgando aproximadamente 7 m2 por animal. Los animales tienen acceso
permanente a agua limpia y fresca y a una batea con sales minerales.
Cuentan con piso firme, sombra y pendiente adecuada para el escurrimiento
del agua en los días de lluvia.

Plan sanitario especial para condiciones de encierre al inicio:

• Muestreo de materia fecal (HPG) al inicio y a los 14 días de la
aplicación del antiparasitario para verificar el control de parásitos (Prueba
de eficacia).
• Aplicación de vacunas policlostridiales
• Suministro de coccidiostáticos (tratamiento aplicable al agua)
• Aplicación inyectable de un complejo mineral de marca comercial
(Magnecal plus), como preventivo de enfermedades podales y para los
requerimientos no cubiertos por la dieta.

Es muy importante el período de adaptación al alimento, entre 15 a 20 días,

donde se comienza con mayor porcentaje de fibra hasta llegar a la ración
final de la dieta cuando todos los animales comen en las bateas.
En todos los ensayos se trata de que, durante el período de adaptación, los
corderos sean esquilados

La duración del encierre no debe prolongarse demasiado para que no se

diluyan las ganancias de peso logradas y venderlos ni bie se determinan
que están terminados (condición corporal >3,5, escala 1 a 5 de Russel).

Foto 1.- Encierre de corderos por grupos en condiciones experimentales

Algunos trabajos realizados en la EEA Mercedes (Ctes)

Engorde de corderos: evaluando de la fracción fibrosa en dietas a corral
(Flores y otros, 2008)

El ensayo se llevó a cabo en la Unidad de Cría de la EEA INTA Mercedes

durante los meses de junio y julio de 2008. Se utilizaron corderos faltos de
terminación, es decir, baja condición corporal (peso promedio inicial:31,5 y
CC promedio inicial: 1,7).
Las dos dietas se diferenciaban en la fuente de fibra: una era heno de moha
picado (Heno) y la otra fibra proveniente de silo de planta entera de sorgo
forrajero (Silo). El alimento se suministró una vez por día ad libitum. El
encierre duró 45 días.
El final del ensayo estuvo determinado por el estado de terminación de los
corderos, es decir, cuando éstos alcanzaron peso y CC considerados
adecuados para la venta.

Los corderos que consumían la dieta que tenía Heno tuvieron mejores
ganancias diarias de peso que los alimentados con Silo (306,9 vs. 226,2
g/animal/d). Estos resultados coinciden con lo encontrado por Dulce y otros
(2000) cuando estudiaron corderos alimentados con heno de alfalfa (solo y
con diferentes suplementos energéticos-proteicos) vs silo en iguales
condiciones.

Engorde de corderos cola de parición: campos de productores de la

zona de Curuzú Cuatiá (Flores y otros, 2008)

El trabajo se realizó en dos establecimientos del Dpto. Curuzú Cuatiá. Se

trabajó, en este caso, con corderos livianos con pesos entre 22-25 kg y que
fueron rechazados en las ventas. El alimento utilizado fue un balanceado de
20% de PB y heno de alfalfa.

Las ganancias diarias estuvieron entre 170 a 200 g diarios. Las ganancias
de peso obtenidas en estos ensayos de engorde a corral, realizados en los
campos de la zona centro-sur correntina, fueron similares a la encontrada
en la bibliografía (Giraudo y otros, 2002; Giraudo y otros, 2001a; Dulce y
otros, 2000; Sampedro y otros, 1997) y confirman que esta estrategia de
engorde y terminación de corderos es factible.

Engorde de corderos: evaluando dietas potencialmente modificadoras de

lípidos (Flores y otros, 2013)

El ensayo se realizó durante 3 años consecutivos, desde 2010 a 2012. Se

utilizaron 36 corderos de un peso inicial promedio de 26,2 kg y condición
corporal (CC) inicial de 1,7. Las dietas fueron formuladas tratando de lograr
que sean isoproteicas e isoenergéticas. La cantidad de ración, que se
corregía en función del peso vivo (PV) de los animales en las sucesivas
pesadas, fue del 4% del PV y se entregaban 2 veces al día.

Las dietas evaluadas (Tratamientos) fueron: TP: 45% maíz, 35% pellet de
girasol y 20% fardo de alfalfa; TL: 43% maíz, 17% pellet de girasol, 30%
semilla de lino y 10% fardo de alfalfa y TG: 33% maíz, 17% pellet de
girasol, 40% semilla de girasol y 10% fardo de alfalfa. Las raciones se
homogeneizaron mediante molienda, mezclado y pelleteado por el alto
grado de selección que presentaban los animales a los diferentes
componentes de la ración (rechazaban las semillas).

Las ganancias de peso obtenidas estuvieron en el orden esperado, siendo la

dieta testigo (TP) la de mejor resultado a corral (180 g/an/d), sin embargo
la dieta con semilla de lino (TL), además de tener ganancias de peso
aceptables, se acompañó con deposición de grasa, que fue medida por la
CC, y que permitió lograr la terminación de los animales de ambas dietas.
Aquella dieta que contenía semilla de girasol obtuvo menores ganancias y
por tal motivo los animales debieron quedar más tiempo en el corral para
llegar al mismo punto final de terminación.

Con respecto a los parámetros de calidad de carne, la dieta con semilla de

lino mejoró significativamente el perfil de ácidos grasos de los corderos
faenados que consumían este tratamiento, comparado con los otros.

Foto 2.- Encierre de corderos en campo de productor

Engorde de corderos donde se evalúa niveles de afrecho de arroz

(Flores y otros, datos no publicados)

Actualmente se busca abaratar el costo de la ración reemplazando el maíz

en la dieta de engorde por un producto zonal que se consigue a mejor
precio como es el afrecho de arroz. Con las dietas evaluadas, afrecho de
arroz al 0, 15 y 30% de la ración, se encontraron ganancias similares (entre
180 y 200 g/an/d) que permiten vender los animales terminados en menos
de 80 días de planificado en encierre.

Consideraciones finales

Para superar el problema de los corderos que no logran venderse en el

momento de la zafra y tienen que estar un invierno más en el campo hay
alternativas tecnológicas que permiten mejorar las ganancias de peso,
mediantes mejoras en el plano nutricional, y posibilitan comercializarlos
terminados en otro momento del año sin que pierdan la categoría de
corderos.

Los resultados obtenidos, localmente y los de bibliografía, permitirían

suponer que en el engorde en condiciones de encierre, independientemente
de la dieta (siempre que ésta cubra los requerimientos), se pueden lograr
ganancias diarias superiores a las obtenidas sobre campo natural o con
suplementación.