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Al son de la tierra

Músicas tradicionales de Colombia


p l a n n ac i o n a l d e m ú s i ca p a r a l a c o n v i v e n c i a

Ministerio de Cultura
Fondo Cultural Suizo
2005
Contenido M I N I S T E R I O D E C U LT U R A E M BA JADA D E S U I Z A
María Consuelo Araújo Castro Thomas Kupfer
Ministra de Cultura Embajador de Suiza
Adriana Mejía Hernández Alain Gashen
Viceministra de Cultura Consejero Cultural
María Beatriz Canal Acero Denise Waelti
Secretaria General Asesora Consejero Cultural
E l P l a n Nac i o n a l d e M ú s i ca Clarisa Ruiz Correal
Directora de Artes FO N D O C U LT U R A L S U I Z O
pa r a l a C o n v i v e n c i a
Alejandro Mantilla Pulido
por María Consuelo Araújo Castro   4 Asesor de Música

dir ección de artes


plan nacional de música
p r e s e n tac i ó n    7 pa r a la con v i v enci a
Clarisa Ruiz Correal
por Thomas Kupfer Directora de Artes
Alejandro Mantilla Pulido
Asesor de Música
N e r eo Ló p e z, U n a s e m b l a n z a    8 María Rosa Machado Charry
Coordinadora del Plan Nacional de Bandas
por Sergio Zapata
Leonardo Garzón Ortiz
Coordinador Programa de Músicas Populares

gru po de pol í t ic a s c u lt u r a l e s
y asu n tos i n ter naciona les
Luis Armando Soto Boutin
Al son de la tierra: músicas Coordinador
Mabel Díaz Beltrán
tradicionales en Colombia   10 Asesora

Músicas de islas en el Agradecimientos

mar de los siete colores   11 Ministerio de Relaciones Exteriores


Museo Nacional de Colombia
Biblioteca Nacional de Colombia
Músicas vallenatas   13 Sociedad de Amigos del Museo Nacional de Colombia
asa Fototaller

Músicas de pitos y tambores   15

Músicas del Pacífico   17


Ministerio de Cultura
Dirección de Artes
Músicas andinas   20 Calle 9 8 - 31
Bogotá, d.c.
Colombia
Músicas llaneras 25 Tel: [1] 342 4100; 336 9238
Fax: [1] 336 9241 Investigación y textos
amantilla@mincultura.gov.co; Sergio Zapata, Andrés Gómez Rey
Músicas de frontera   27 lgarzon@mincultura.gov.co
Grupo de Música de la Dirección de Artes
del Ministerio de Cultura
www.mincultura.gov.co
Selección de temas musicales
Omar Romero Gary, con la colaboración
BIBLIO G R A F í A    30 Embajada de Suiza del Centro de Documentación Musical de
Cra. 9 74-08 la Biblioteca Nacional de Colombia, y el
Piso 11 Grupo de Música de la Dirección de Artes
del Ministerio de Cultura
Bogotá, d.c.
Diseño gráfico
Colombia
Camilo Umaña Caro
Tel: [1] 349 72 30
Impresión y embalaje
Fax: [1] 349 71 95 D’Vinni Ltda, Bogotá
www.eda.admin.ch/bogota 2005
Al son de la tierra
Músicas tradicionales de Colombia p l a n n ac i o n a l
d e m ú s i ca
para la
convivencia

f o t o g r af í a s
de nereo lópez

Ministerio de Cultura
Fondo Cultural Suizo

2005
El Plan Nacional de Música
para la Convivencia
En la memoria de cada ciudadano colombiano habitan
músicas de muy distintos orígenes y caracteres, que no
sólo conforman un patrimonio sonoro que es evocado y
recreado en forma permanente por la necesidad ex-
presiva individual y por la capacidad que tiene de servir
como símbolo colectivo, sino que es testimonio del largo
proceso de mestizaje y de la rica variedad geográfica de
las regiones de Colombia. Esta diversidad musical
requiere ser visibilizada, valorada y fomentada de manera
que pueda transformarse y mantener su capacidad de
expresar e identificar a las generaciones del presente y del
futuro.
La preservación de esta herencia cultural es una
prioridad del Gobierno Nacional que, a través del Plan
Nacional de Desarrollo “Hacia un Estado Comuni-
tario”, ha puesto en marcha el Plan Nacional de Música
para la Convivencia (pnmc), como parte de su Pro-
grama de Fortalecimiento de la Convivencia y los
Valores1
El Plan focaliza sus objetivos en la atención de la
población infantil y juvenil mediante la creación y
fortalecimiento de escuelas de música. Para el logro de
este propósito, se fomenta el fortalecimiento institu-
cional y comunitario, se ofrece formación para músicos y
docentes de todos los municipios y se apoya la dotación
de instrumentos, repertorios y materiales pedagógicos.
Asimismo, el Plan fortalece la práctica, la creación y la
investigación mediante la divulgación de la actividad
musical y el establecimiento de un sistema de infor-
mación y evaluación del campo musical en el país.
La música participa activamente en la construcción de
identidades culturales2 en la medida en que aporta a los
individuos mecanismos de reconocimiento individual y
colectivo. Así, podemos comprender la práctica musical
como un espacio primordial de expresión y como un
hecho comunicativo, económico y social.
En el Plan la música es asumida desde su naturaleza
intrínseca y su fuerza propia y como un instrumento que
posibilita un mejor desarrollo perceptivo, cognoscitivo y
emocional de los individuos y contribuye a fortalecer
valores sociales.
El hecho de que el fenómeno musical tenga la facultad
de conmovernos, esto es, de dar forma y expresión a
nuestros mundos afectivos, lo ubica como una alter-
nativa de vital importancia en la construcción de tejidos
el plan nacional de música

sociales. Los hábitos, los saberes y las formas de ex- coros y orquestas. Estas escuelas deben articular los
presión de un grupo social están determinados por unos procesos existentes en las modalidades formal e informal
parámetros éticos. Así, la música y las formas de sociali- y brindar a las nuevas generaciones la posibilidad de
zación de la misma, son manifestaciones estéticas que tener un nivel básico de formación musical, como
legitiman y fortalecen los principales valores de todo garantía y aporte a su derecho fundamental a la edu-
grupo cultural. Además, la aptitud de la música para cación integral y a su libre desarrollo de la personalidad.
hacernos experimentar nuestros cuerpos en concor- El Plan propone la creación de escuelas que desa-
dancia con sus gestos y ritmos, hace que habite un rrollen relaciones dinámicas con las comunidades
espacio de intersección entre los valores culturales y los gestoras; escuelas en donde se implemente la mediación
espacios públicos y privados, constituyendo diferentes desde la academia pero donde sean también actores
modos de manejar la interrelación entre estas dimen- importantes los músicos mayores, portadores vivos de los
siones de la vida. 3 sonidos tradicionales. En fin, una escuela que no pierda
El Plan constituye una alternativa para afianzar la la conexión con la cotidianidad de la vida en las comuni-
democracia y para fortalecer las iniciativas de convi- dades, entendidas éstas como entes organizativos vivos,
vencia en la medida que aporta equilibrio de oportuni- con intereses específicos e historias comunes4.
dades de práctica cualificada, formación y expresión En síntesis, la escuela de música debe entenderse
musical entre las diferentes regiones del país y los como:
diversos grupos poblacionales; también al promover la • Un proyecto educativo y cultural construido
concertación entre las comunidades y los entes guberna- colectivamente, que articule a los distintos espacios y
mentales; y finalmente, porque favorece el encuentro y la actores de educación musical existentes en el municipio,
integración en torno a la música, y posibilita las maneras de carácter público y privado, urbano y rural.
de comprender e impulsar la actividad musical. • Un programa de educación musical no formal, con
El Plan da prioridad al fortalecimiento de las prácticas una estructura organizativa, pedagógica y musical, a
musicales colectivas de diversos formatos, las cuales partir de las características e intereses culturales de cada
responden a las realidades sonoras e intereses locales del contexto y de las capacidades y recursos reales de que se
país: las músicas populares tradicionales, las bandas de disponga.
viento, los coros y las orquestas infantiles y juveniles. Por • Una oportunidad educativa para niños y jóvenes de
tanto, estas prácticas contribuyen a la construcción de cobertura masiva y de naturaleza incluyente, orientada
proyectos comunes a partir del aporte individual, la por una metodología de diálogo de conocimientos
diferencia, el diálogo y la toma concertada de decisiones. populares.
El Plan se estructura y opera como una oportunidad El Plan es una experiencia de construcción de pro-
abierta e incluyente de construcción de autonomía desde yecto social por cuanto parte de las prácticas musicales
los procesos de desarrollo musical, convocando y articu- arraigadas en los municipios, promueve la formación
lando a diversos actores, promoviendo el encuentro entre musical de niños y jóvenes en todos los contextos y
saberes populares y académicos y haciendo presencia en establece un escenario de concertación entre músicos,
todos los municipios y departamentos del país. Por lo comunidades e instituciones, para la consolidación de un
tanto, su implementación respeta y fortalece la descen- proyecto colectivo en torno a la música. De esta manera,
tralización y promueve la participación local, pues los intereses culturales que lo sustentan y los actores
involucra a las instituciones departamentales y munici- sociales que lo agencian son garantía de sostenibilidad y
pales, y a las organizaciones comunitarias como actores de pertinencia como política concertada a largo plazo.
fundamentales.
Esta política se orienta a fomentar la formación y la Músicas tradicionales
práctica musical, y a ampliar las posibilidades de con- Si bien el Plan Nacional de Música para la Convi-
tacto y disfrute de la música para la población. Por esta vencia reconoce y fomenta diversidad de modelos de
razón, ha focalizado como objeto central la creación o escuelas de música no formales, una de sus prioridades es
fortalecimiento de Escuelas de Música de modalidad no la de fortalecer las escuelas de música tradicional, en
formal en los municipios, en torno a los conjuntos de torno a las expresiones musicales de los contextos locales.
música popular tradicional y las prácticas de bandas, Se busca que estos espacios se afiancen como ámbitos de
el plan nacional de música 

reflexión para los músicos, posibilitando la sistemati- 9  Músicas Andinas centro-occidente


zación de sus conocimientos y la recreación de las Pasillo, bambuco, shottis, porro paisa y otros
músicas. Las prácticas musicales en las escuelas buscan Valle del Cauca, Antioquia, Quindío, Risaralda
adquirir significado para los niños y los jóvenes, y y Caldas.
convertirse en vehículo efectivo de comunicación de sus
10) Músicas Llaneras
intereses y su sentir contemporáneo.
Joropo
En el caso de las músicas tradicionales, las escuelas
Vichada, Arauca, Guaviare, Meta, Casanare
han sido pensadas para responder a las necesidades y
y oriente de Cundinamarca y Boyacá.
circunstancias de cada cultura musical. Por este motivo,
el Plan plantea once ejes que dan cuenta de los contextos 11) Músicas de frontera
y funciones sociales, los elementos musicales y las Forró, bailôes, porsam y variadas mezclas entre lo
realidades simbólicas de las prácticas musicales: urbano y lo campesino
Caquetá, Amazonas, Putumayo, Guaviare,
1  Músicas isleñas
Vaupés y Guainía.
Calypso, shottish y otros
San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Estos once ejes constituyen una clasificación
2  Músicas vallenatas aproximada desde las músicas, los formatos y la in-
Paseo, son, merengue y puya fluencia territorial de las mismas, que no pretende ser
Guajira, Cesar y Magdalena. excluyente ni exhaustiva. Se ha estructurado para
facilitar el estudio de las músicas tradicionales y la
3  Músicas de pitos y tambores implementación de la propuesta formativa del Plan
Gaita larga y corta, cañ´emillo, baile cantao, tambora Nacional de Música para la Convivencia en el país. Es
y bandas tipo pelayera por todos conocido que en cada uno de los ejes existe
Atlántico, Bolívar, Sucre, Magdalena y Córdoba. una gran diversidad de géneros, formatos y variaciones
4  Músicas del Pacífico norte regionales.
Porro chocoano, abozao, alabaos y otros La diferencia es tal que Colombia encuentra cada vez
Chocó y Urabá Antioqueño. más ritmos, aires y danzas que conviven junto a tradi-
ciones gastronómicas en una sola gran fiesta que se de
5  Músicas del Pacífico sur forma permanente y ante la que la única posibilidad es
Currulao, berejú, juga y otros abrirse sin prejuicios. Al recorrer el país no sólo es
Litoral Pacífico del Valle del Cauca, Cauca y posible asistir al espectáculo de una geografía inconmen-
Nariño. surable, también presenciamos el movimiento de un
pueblo diverso, alegre, entregado al campo con espíritu
6  Músicas Andinas sur-occidente
festivo, que celebra su diferencia en múltiples festivales
Son sureño, sanjuanito, bambuco viejo,
de música tradicional que se suceden en el calendario
pasillo y otros
siguiendo el impulso y el orden que dicta el sentimiento
Cauca, Nariño y Occidente del Putumayo.
de hombres y mujeres enriquecidos por siglos de inter-
7  Músicas Andinas centro-sur cambio cultural.
Rajaleña, caña, sanjuanero y otros
Huila y Tolima. m a r í a consu e l o a r aú jo c a st ro
m i n i s t r a de c u lt u r a
8  Músicas Andinas centro-oriente
Rumba, bambuco, carranga, guabina,
torbellino y otros
Norte de Santander, Santander, Boyacá y
Cundinamarca.
el plan nacional de música

Presentación
La Constitución Suiza evoca en su preámbulo el hecho permita expresarse, que se les abra un espacio, ellas se
de que sólo es libre quien usa su libertad y que la fuerza disiparán. Que se venzan, ellas se acumularán como un
de la comunidad se mide con el bienestar del más débil gas en una olla haciendo saltar la tapa. Las diferencias
de sus miembros. culturales no deben percibirse como un mal o una
En Colombia, el Ministerio de la Cultura ha desarro- desventaja. Por el contrario ellas son fuente de una gran
llado una visión de democracia construida sobre la riqueza. Cultivar esta riqueza, es poner las bases del
cultura. El Estado favorece, por una política de recono- futuro: una sociedad armoniosa, un tejido social fuerte,
cimiento, de impulsos y de estímulos, la participación sin exclusión ni indiferencia. La tolerancia y el respeto
pública. Él abre espacios permitiendo a las ciudadanas y de la diversidad facilitan la promoción y la protección
ciudadanos desarrollar su propia identidad; especial- universal de los derechos fundamentales de la persona,
mente desarrollar sus proyectos de vida en un medio así como el ejercicio para todos de todos estos derechos.
ambiente de cohesión social, sin rumbo de exclusión, de El Ministerio de la Cultura desarrolla esfuerzos
violencia o intolerancia frente a la diferencia. considerables para la protección, el respeto y la difusión
Suiza comparte esta visión de democracia cultural y del patrimonio cultural colombiano, tanto material
de participación ciudadana. Para Suiza, la existencia como inmaterial. La música es un excelente ejemplo de
misma del país depende de esos factores. Manteniendo tradiciones, de mezcla de diversas influencias (de cul-
ciertos equilibrios, Suiza asegura la cohesión y la prospe- turas y de instrumentos indígenas, antillanos, africanos o
ridad nacional. europeos), un punto de encuentro entre mujeres y
El respeto de las diferencias culturales y de las mi- hombres, entre generaciones, entre jóvenes.
norías así como de un sistema político descentralizado, La exposición “Al son de la tierra. Músicas tradicio-
cercano al ciudadano y motor de paz (federalismo), nales de Colombia” nos invita a descubrir esta riqueza de
caracterizan una Suiza multicultural y plurilingüe. Suiza diversidad y de tradiciones. La visita no es solamente
está orgullosa de su equilibrio institucional, cultural, instructiva. Las fotografías de Nereo López nos trans-
político y religioso. Desde luego, Suiza también ha portan a un mundo que va más allá del conocimiento.
confrontado fenómenos de exclusión. Sólo su capacidad Debo felicitar al Ministerio de la Cultura por su
de integración (se piensa en los migrantes, el choque iniciativa de hacer conocer esta parte importante del
entre generaciones, o también en las nuevas formas de patrimonio cultural colombiano y me alegra que Suiza
vida social) hará que Suiza continúe siendo un país esté asociada estrechamente. Estoy convencido que los
respetuoso de las diferencias y de las libertades funda- municipios de Colombia aprovecharán la ocasión que se
mentales, un país donde cada uno desarrolle un fuerte les ofrece de reunir su población alrededor de proyectos
sentimiento de pertenencia. culturales. De abrir espacios de curiosidad y de acerca-
El lugar e importancia que le han reservado a la miento, de apertura antes que rechazo.
cultura es un indicador de libertad. Las diferencias El patrimonio cultural colombiano es rico en tradi-
culturales pueden ser fuente de tensiones. Que se les ciones llenas de vida. Los invito a apreciarlas.

thom as k upfer
embaja dor de suiza en colombi a
el plan nacional de música 

Nereo López
Una semblanza por Sergio Zapata

Nereo ha cultivado la palabra y las imágenes a lo largo de


sus ochenta y cinco años de vida. Nació en 1920, en
Cartagena, y antes de cumplir los veinte años se en-
contró, casi por accidente, con una cámara fotográfica
entre las manos. A partir de ese momento ha acumulado
miles de negativos y de fotografías que hoy conforman
uno de los patrimonios gráficos más importantes del
país. Ha guardado historias, una agilidad sorprendente,
vitalidad y la irresistible energía que le impide detenerse
aunque sólo sea un momento para descansar entre sus
múltiples ocupaciones. Mientras está en Bogotá, unos
pocos meses al año, despierta temprano, come frugal-
mente un platón de cereales o una fruta e inicia su
jornada todos los días a las cinco y media de la mañana.
Su alimentación se limita a dos comidas diarias, que
controla religiosamente y lo mantienen en forma. Nereo
ha sido casi autodidacta: aprendió de un fotógrafo
itinerante los secretos del revelado y los puso en práctica
utilizando platos de cocina como recipientes para las
películas, en una época en la que escaseaban los insumos
fotográficos y en la que comenzó a adquirir libros sobre
la materia cuando aún eran una rareza en el país. Hoy, su
apartamento del centro de Bogotá no suma más de
cincuenta metros cuadrados y está lleno de archivos de
todo tipo: una colección de libros sobre fotografía,
enciclopedias, cintas magnetofónicas, discos de larga
duración y cajas con cientos de negativos que están
catalogados con una precisión y un código sólo com-
prensibles por él mismo.
Nereo habla. Cuenta sin parar historias inconfesables
que se resisten a ser registradas por cualquier grabadora
de bolsillo, y le abre las puertas de su casa a cualquiera
que quiera conversar con él. Recuerda sus tiempos de la
Langosta azul, cuando fue llamado a participar, en
calidad de director de fotografía, en el rodaje de la
primera película colombiana “con un argumento surrea-
lista de ciencia ficción” y terminó siendo el actor prin-
cipal; se pasea por el recuerdo de amigos, por los días de
La Cueva en los que intimó con el grupo de Barran-
quilla, regresa a sus correrías y a su dedicación al admi-
nistrar el Teatro Libertador de Barrancabermeja cerca de
1947. ¿De donde ha sacado tanta energía este hombre
que no para de reírse con sus propios cuentos y que baja
 el plan nacional de música

la voz socarronamente cuando decide relatar una


aventura con una mujer perdida en la geografía colom-
biana? Del trabajo, confiesa. Y de la búsqueda incansable
de la imagen perfecta. Y de la curiosidad. Y de las ganas
de vivir a plenitud. Aunque ha conocido personajes
encumbrados Nereo no cambia. Habla con el hombre de
la esquina como lo haría con un presidente. Observa a
las mujeres con el ojo del fotógrafo y con el ojo del
hombre caribe que es. Regala con sus historias al vecino
más cercano y es atento, siempre ofrece bebida a sus
visitantes.
Entre 1952 y 1957 se convierte en corresponsal para Ba-
rranquilla de los periódicos El Tiempo y El Espectador.
Poco después se le ve en Bogotá como jefe de fotografía
de la revista Cromos. En el 58 funda su propia agencia
noticiosa. En los últimos años ha sido galardonado con
numerosos premios, entre ellos el Premio Vida y Obra
que otorga el Ministerio de Cultura, en el 2002, la Cruz
de Boyacá en el 2000, condecoración más importante
que otorga el Gobierno Colombiano a aquellas persona-
lidades colombianas y de países amigos que han sobre-
salido por la excelencia en sus servicios al país y recibió el
Homenaje Nacional de Fotografía, junto con la “Gran
Orden del Ministerio de Cultura” en 1997.
Nereo está acostumbrado a calzar botas. No entiende
de otro vestido para sus pies. Y duerme sobre un ca-
mastro sencillo y duro, como lo haría un asceta en su
celda. ¿Guardar para el futuro? Esa no es una posibilidad
para Nereo, quien vive su día como si fuera el último.
Recorrió el país cuando trabajaba como corresponsal
para la revista brasilera O’Cruzeiro en la década de 1960
y aún conserva material que le daría para hacer una
decena de libros. De ahí sale buena parte de las imágenes
que conforman esta exposición sobre músicas tradicio-
nales de Colombia. Siempre con el ojo en la escena
callejera, entrenado en el oficio de la reportería gráfica,
Nereo retrató la vida cotidiana de los colombianos
incansablemente y ahí reúne imágenes para más publica-
ciones. Las tiene organizadas por temas, con textos
breves escritos por Manuel Zapata Olivella, en encuader-
naciones rústicas que paga de su bolsillo y que presenta
con vehemencia. Conserva una colección enorme de
discos de vinilo y un reproductor estereofónico inva-
luable. Vive en Nueva York y tiene planes para embar-
carse en un motor que lo conducirá a lo largo del
Amazonas desde Leticia hasta Manaos. ¿Sus fotografías?
Son tantas, están cruzadas por tantos personajes cap-
tados al vuelo, se entremezclan con paisajes y hombres
el plan nacional de música 10

anónimos y se animan unas a otras alimentadas por la Al son de la tierra:


vigencia estética de su textura que sería inútil hablar de músicas tradicionales en Colombia
ellas. Lo dicen todo en sí mismas. Sin embargo, Nereo Cuando se le pregunta a un fabricante de gaitas, o a
las revisa una y otra vez, en un afán por digitalizarlas que un músico gaitero de la costa norte colombiana, cuál es
las convierte en documentos vivos de su tiempo, que no el tamaño adecuado para la caña de una gaita, es normal
es otro que el de la segunda mitad del siglo xx. Aunque que estire uno de sus brazos y señale desde el hombro
ha realizado su obra él se resiste a terminarla, la actualiza hasta la punta de sus dedos la longitud ideal. Su res-
con puntadas casi a diario, la reinventa y se reinventa a sí puesta es nítida y no admite controversia, la longitud es
mismo. Sus archivos, gran parte de ellos al cuidado de la esa que muestra, no otra, pero al preguntársele a otro
Biblioteca Nacional de Colombia, responden a distintas músico éste no señalará el brazo de su compañero, sino el
catalogaciones: hombres de música, regiones geográficas, suyo. Todos los fabricantes de gaitas e intérpretes de este
personajes del común, toros, ríos y mujeres, siempre instrumento que habitan las sabanas del norte del país
mujeres que se cuelan entre los negativos del fotógrafo podrían desfilar señalando sus brazos desde el hombro
para ser luego examinados con paciencia y transfor- hasta la punta de sus dedos, siempre ofreciendo la misma
mados en imágenes cargadas de color, porque Nereo respuesta: el largo ideal de la caña es el de sus brazos.
experimenta, se alimenta de nuevos materiales y le da a Pero ¿cuál es verdaderamente la longitud adecuada?
su oficio un nuevo aire producto de su contacto con la Habría que embalsamar los brazos de esos hombres y
tecnología. Durante más de medio siglo ha captado la mostrarlos cuando surgiera la ocasión. No hay un
vida de un país que hoy vuelve sobre sus tradiciones al estándar, una medida oficial, un metraje único. Esa es tal
desarrollar, dentro del Plan Nacional de Música para la vez la mayor virtud de las músicas tradicionales en
Convivencia, un Programa de Músicas Tradicionales, el Colombia y al mismo tiempo un gran reto: no hay dos
mismo que es presentado ahora y en el que se reconoce la gaitas iguales en el Atlántico, así como no hay dos
vigencia de un trabajo gráfico que se preocupa por la marimbas de chonta iguales en el Pacífico sur, ni dos
tierra, sus habitantes y las costumbres que los identifican. golpes de tambor que se repitan exactos aunque pro-
duzcan el mismo sonido, o dos abozaos idénticos en el
Chocó. Virtud porque expresa una fecunda diversidad
creativa y una riqueza inconcebible en las formas de
interpretar esos instrumentos, en los sonidos que pro-
ducen y en el color de la fiesta o el acontecimiento que
con ellos se acompaña. Reto porque implica generar
conceptos y métodos específicos y porque resulta arduo
delimitar los géneros, los toques o los instrumentos y
sistematizarlos, o encontrar matrices y bases que per-
mitan definir lo que es un vallenato sin despertar el
descontento de alguien que considera que es otra cosa
muy distinta. O establecer sin lugar a discusiones lo que
es el abozao chocoano en Quibdó cuando en Nuquí le
cambian alguna nota.
Las músicas tradicionales en Colombia son tantas, tan
variados sus ritmos, tan diferentes sus instrumentos, tan
diversas las formas de interpretarlos y tan dispares las
miradas que cada uno de sus intérpretes, que es evidente
la ausencia de reglas que puedan establecerse, o incierto
trazar líneas fijas que las definan histórica y territorial-
mente en sus componentes musicales más íntimos.
La música es como el lenguaje. A partir de elementos
de base como las palabras y sus gramáticas se pueden
establecer tantas maneras diferentes de hablar como
11 el plan nacional de música

individuos hay que hablen una misma lengua, ya sea por Músicas isleñas
los acentos que emplean para pronunciar esas palabras, o
por el significado que les atribuyen. De igual forma, L a m ú sica en el mar
partiendo de los sonidos que se arrancan al cuero de un de los siete colores
tambor cununo pueden construirse bases rítmicas y En el territorio de San Andrés, Providencia y Santa
tímbricas únicas que varían entre los miembros de una Catalina se hace presente una variedad muy amplia de
misma familia del pacífico nariñense. formas musicales que son interpretadas por buena parte
Música y lenguaje están vivos y cambian, se recogen, de la población, pero su principal característica es que
son reinventados y mutan permanentemente a una conviven a diario combinándose entre ellas el calypso y
velocidad vertiginosa, por lo que es casi imposible el mento con canciones y bailes de salón europeos que
atraparlos en el papel. Es innegable también que ese tienen más de quinientos años de antigüedad.
cambio representa el sentir de los hombres y mujeres que Estas formas musicales, que constituyen la base de un
interpretan y escuchan esas músicas, y que en torno a sonido tradicional, provienen de distintos lugares y
ellas se establecen diálogos, puntos de encuentro y culturas y se han convertido en la identidad musical de
situaciones de convivencia en las que el respeto por la las islas en las que además se combinan lenguas como el
diferencia y por lo que el otro tiene que decir emergen inglés creole y el español. Entre ellas también se en-
sin dificultad. Así en la diversidad de sus prácticas cuentran otras formas típicas como el foxtrot, el waltz,
musicales Colombia encuentra una puerta abierta al el pasillo, la mazurca, la polca y los shottish, que se
intercambio cultural; y abre por medio de sonidos y unen y suenan junto a la soca, el suck y el reggae, que
melodías disímiles, un terreno para la comprensión entre son más populares y no tan antiguas.
habitantes de regiones disímiles. Los cantos religiosos, interpretados por coros en
El Plan Nacional de Música para la Convivencia, templos e iglesias, añaden vigor con sus voces a una
inspirado en el valor de la música para construir nación, tradición musical que ha sabido enriquecerse perma-
busca aportar a la valoración y promoción de la diver- nentemente sin dejar de reflejar nunca el sentir de una
sidad cultural expresada en la música, mediante el comunidad.
fomento a las prácticas colectivas de las orquestas
infantiles y juveniles, las bandas de viento, los coros y las Para acercarse a la situación actual de las que han
agrupaciones de músicas tradicionales que vibran al son sido denominadas músicas isleñas es necesario com-
de la tierra. Cada una de estas prácticas posibilita el prender que se inscriben en una zona de gran diver-
diálogo y la interacción entre las culturas, engrandece sidad cultural: El Caribe. Si bien el litoral colombiano
nuestro patrimonio cultural, expresa nuestras identi- que se extiende desde el Golfo de Urabá hasta la
dades, interpreta nuestras aspiraciones más profundas, península de La Guajira puede considerarse como la
promueve el pluralismo, contribuye a la convivencia y zona caribeña de Colombia, son las islas de San
llena de alegría nuestro paso por el mundo. Andrés, Providencia y Santa Catalina y sus cayos
Al son de la tierra busca celebrar la diversidad de circundantes el territorio que geográficamente acoge
nuestras músicas tradicionales, mantenida de generación las que han sido denominadas por el Plan como Mú-
en generación, transmitida con sabiduría y generosidad sicas Isleñas. Habitadas por indígenas que fueron
por nuestros creadores, enriquecida por millares de exterminados en su mayoría luego del descubrimiento
jóvenes que hoy reinventan nuestras músicas, enraizados de América, las islas y costas que están bañadas por el
en tradiciones que permanecen vivas, que evolucionan, mar Caribe fueron muy importantes para los imperios
que se fusionan con otras músicas y renuevan, cada vez que se disputaron la soberanía del continente durante
con más vigor, nuestras memorias e identidades. muchos años, porque eran la puerta de entrada y de
A continuación se hará una aproximación a las salida a las tierras reclamadas por los españoles. Allí
músicas tradicionales en cada una de las regiones dis- llegaron no sólo ellos: debido a su ubicación estratégica,
puestas por el Plan Nacional de Música para la Convi- holandeses, ingleses y franceses hicieron de las islas
vencia, se dará una mirada sobre los instrumentos que las caribeñas un lugar en el que se comerciaba con
caracterizan y se esbozará el estado actual en el que se hombres, oro, azúcar, armas, tabaco y tierras. Este
encuentran. rincón del Océano Atlántico fue asolado por piratas en
el plan nacional de música 12

los siglos xvii y xviii y vio mezclarse diferentes razas andina o como el Pacífico norte, acogieron también
y modos de ver el mundo, al igual que géneros musi- manifestaciones musicales como el pasillo, el vals (waltz),
cales. la mazurca, el shottish y la polca. Y desde el punto de
El Caribe fue para los europeos una despensa en la vista de los instrumentos, la mandolina permite un
que se cultivaba y desde la que se distribuía azúcar, y en punto de contacto muy importante entre las Músicas
la que los barcos que zarpaban hacia el viejo continente Isleñas con la bandola en las zonas andinas y llanera. La
se detenían para cargar víveres y prepararse para el largo guitarra también está presente en todas las regiones, y la
viaje, y en muchos de sus rincones se levantaron planta- carraca es común con Santander y Huila. También el
ciones a las que llevaron a trabajar esclavos provenientes acordeón de botones permite establecer una relación con
tanto de África como de islas cercanas. A Providencia la música vallenta y el violín con Músicas Andinas del
llegaron, cerca del año de 1630, algunos puritanos sur. Asimismo, los bailes de salón europeos fueron el
ingleses que se instalaron con un contingente de esclavos origen para todos los géneros “criollos” en las cuatro
que conformaron un primer núcleo de población. Es éste regiones mencionadas: andina, llanera, pacífico e islas,
el punto de partida para el intercambio musical de esta pero cada una de ellas los incorporó a su vida cotidiana
zona, porque los esclavos, que venían de África unos de formas diferentes, particularizando sus necesidades
(otros ya habían estado en islas como Jamaica), hablaban expresivas.
una lengua única, producto de la fusión entre el inglés, el Los músicos tradicionales presentes en estas islas
francés, el español y palabras de los propios esclavos ejecutan su armonía a partir de instrumentos como la
mezcladas con otras indígenas pronunciadas por los guitarra acústica y el bajo tina, al tiempo que nuevos
Misquitos, pobladores originales que fueron expulsados músicos, más jóvenes, se valen de guitarras y bajos
y exterminados con la llegada de los españoles. No sólo eléctricos. Se acompañan en la percusión, además de la
se originó una lengua: los esclavos de la plantación carraca, con maracas.
adoptaron algunos elementos de culto de la religión Los marineros han sido una pieza clave para alimentar
inglesa, entre ellos el canto de los coros en la iglesia. el repertorio de estas formas musicales, porque intro-
También se originaron instrumentos, como la tradi- ducen nuevos temas para las canciones, así como ten-
cional carraca de percusión, o mandíbula de res o de dencias musicales provenientes del sur de Estados
burro, que sirvió de base rítmica a las canciones. Unidos, por ejemplo. Hoy en día, no sólo circulan y
En este territorio existe una variedad muy amplia de suenan el reggae, la soka, el suck, el foxtrot y el mento.
formas musicales que son interpretadas por buena parte La influencia del vallenato, la terapia y la champeta, que
de la población, pero su principal característica es que se han trasladado desde tierra firme, también alimentan
conviven a diario combinándose entre ellas el calypso y estas músicas.
el mento con canciones y bailes de salón europeos que Antes de hablar de los instrumentos musicales que
tienen más de quinientos años de antigüedad. Estas conforman las diferentes agrupaciones de esta región, es
formas musicales, que constituyen la base de un sonido importante hacer algunas apreciaciones acerca de los
tradicional, provienen de distintos lugares y culturas y se géneros. Así pues, el calypso es una especie de música de
han convertido en la identidad musical de las islas. Entre origen afro americano y europeo; el polka, shottish y
ellas también se encuentran otras formas típicas como el quadrille -conformado por mazurca, minué, vals (waltz)
foxtrot, el vals (waltz), el pasillo, la mazurca, la polca y y galop- son versiones caribeñas de bailes europeos; y el
los shottis, que se unen y suenan junto a la soca, el suck y mento, juba y el top-dance son géneros de origen antillano.
el reggae, que son más urbanas y no tan antiguas. Muchos de los bailes y las tradiciones de esta región se
Para los habitantes de Old Providence, uno de los asocian también con creencias de carácter religioso,
municipios que conforman el archipiélago de San místico o mitológico, como el Boca -de pronunciación
Andrés, Providencia y Santa Catalina, es tan fácil entrar vernácula buoca-, con el cual se espanta a los niños. El
en contacto con personas de islas como Trinidad, Haití duppy que es un sinónimo de ghost, palabra anglosajona
o Jamaica, debido a la cercanía geográfica, como con con que se identifica al espíritu de los muertos, al cual los
habitantes del interior de Colombia. Algunas de sus supersticiosos temen y creen que aparece de noche o se
músicas tradicionales no se muestran distantes en su manifiesta en lugares solitarios o en los sueños, y el
forma de las del resto del país; otras regiones, como la booboo, que se pronuncia como buba.
13 el plan nacional de música

Ahora bien, los instrumentos musicales más usados en Músicas vallenatas


estas músicas son:
R ecorriendo la tierra
La mandolina, empleada para llevar la melodía
habitualmente, es un cordófono, es decir, un instru- La península de la Guajira y la vertiente oriental de
mento en el cual el sonido es producido por una cuerda la Sierra Nevada de Santa Marta vieron nacer a los
en tensión5 que posee caja de resonancia6 formada por acordeoneros, quienes inicialmente fueron hombres que,
costillas en forma cóncava con una tapa armónica e armados con su acordeón, se movilizaban de pueblo en
incrustaciones. El clavijero7 es metálico y tiene cuatro pueblo contando noticias y sucesos cotidianos. No tenían
cuerdas metálicas principales y cuatro que acompañan o más instrumentos que ese, y lo empleaban para darle un
duplican8 las mencionadas9. Generalmente se toca con fondo musical a sus narraciones. Fueron juglares,
plectro o uña. Su función melódica es remplazada en herederos de una tradición que provenía de Europa,
ocasiones por la guitarra, el violín o el acordeón. Su cuando músicos a pie recorrían grandes distancias para
afinación es la misma del violín, es decir, de agudo a transmitir en voz alta las decisiones de reyes o las
grave: Mi, La, Re y Sol. noticias de reinos vecinos.
La guitarra es un instrumento cordófono, que posee La música que interpretaban pasó a popularizarse en
una caja10 de resonancia, elaborada –casi siempre- en la primera mitad del siglo xx como música vallenata,
cedro, con una tapa de pino. Esta guitarra es general- pero sus inicios sonoros ya estaban arraigados en la
mente conocida como acústica y posee dieciocho trastes, cultura tradicional del litoral. El acordeón sustituyó
que son aquellas divisiones que tiene el mango para instrumentos como las gaitas y las flautas de millo y se
superponer los dedos sobre las cuerdas y así obtener las alejó de los orígenes para constituirse como insignia de
diferentes tonalidades. Ésta experimenta la conjugación un género musical independiente. Actualmente se han
de seis cuerdas de nylon o tripa afinadas de agudo a identificado cuatro focos de influencia que son los que
grave, de la siguiente forma: Mi, Si, Sol, Re, La y Mi. (E, determinan las escuelas de música tradicional para las
B, G, D, A y E 11) músicas vallenatas. El primero de ellos es Valledupar,
El tub-bass, 12 tináfono o tinajo es otro cordófono13. que domina la Zona central, el segundo es El Paso, que
Se fabrica utilizando una tinaja de zinc -boca abajo-, a la funciona como epicentro de la zona negroide. Con-
cual se le coloca una cuerda gruesa y una vara de madera tinúan la Zona Ribana, cuyo foco es Fonseca, y una
para estirarla y obtener la tensión deseada, que permite Zona Ribereña, de la que Plato es su epicentro. Cierra
su afinación. Este es una forma simple de contrabajo y el mapa la zona de influencia del vallenato en guitarra
produce un sonido seco que cumple funciones de bajo que tiene como eje a Codazzi en el Cesar.
armónico y de efecto de percusión.
La carraca o quijada es la mandíbula inferior del Los botones del cambio
equino, llamada jawbone. Es un idiófono14, es decir un Con el tiempo los acordeoneros, pasada la primera
instrumento en el que el sonido se produce en su propio mitad del siglo xviii, habituados ya a los acordeones
cuerpo. La carraca produce tres sonidos principalmente, el de botones y debido al impacto que causaban a donde
primero de ellos resulta al ser golpeada, el segundo es llegaban (que frecuentemente solía ser el de una
producido por los dientes o muelas sueltas de la man- parranda cantada con amigos y licor), se acompa-
díbula a causa de la vibración del golpe, y el tercero, es el ñaron con otros instrumentos fáciles de llevar en el
producido por el roce de una vara con los dientes de la viaje, como la guacharaca y un tambor portátil que
misma. hoy recibe el nombre de caja vallenata. Esta inno-
Las maracas. Existen muchas formas de maracas en vación empató con los antiguos géneros provenientes
Colombia que varían según su tamaño y materiales de de regiones ubicadas al occidente de la Sierra, en los
fabricación. Las maracas de esta región se pueden describir cuales se impulsaron cambios como la vinculación
así: La cabeza está construida por calabazos de forma tardía del baile, pues inicialmente la parranda
esférica, que se llenan en su interior con semillas secas y (llamada también ‘colita’ porque alargaba la fiesta)
producen su sonido a través de la agitación del instrumento. que se organizaba espontáneamente en torno al
El mango del mismo no posee ningún rasgo característico y cantor de noticias, se hacía en un grupo de personas
son fabricadas con cualquier tipo de madera. sentadas a su alrededor.
el plan nacional de música 14

Vale la pena destacar que siendo el vallenato una cación de los acordeones que se popularizaron en
música de raíz tradicional, ha conquistado los mercados Colombia fue alemana, de la casa Höhner, y el instru-
como ninguna otra expresión musical colombiana; pero mento predominante fue el de botones o dígitos, que se
además, pervive el vallenato juglar, de los músicos que le empleó tempranamente para la base melódica en las
siguen cantando a su cotidianidad valiéndose de un gran composiciones.
virtuosismo en la interpretación del acordeón, puesto en Se pueden establecer cinco zonas de influencia en las
evidencia en los festivales, en donde los eruditos del tema que se gestaron las más importantes escuelas que hoy
se esfuerzan por definir, clasificar, legitimar o rechazar, y definen la música vallenata. En primer lugar se encuentra
los músicos en lucir su dominio sobre el instrumento y un área central que se mantiene como la de mayor
conquistar aplausos. influencia, y que tiene como epicentro a Valledupar en el
La música vallenata se expresa en cuatro géneros departamento de Cesar, y Villanueva en el departamento
musicales bien diferenciados. Son ellos el son, que es una de la Guajira. Resulta importante el hecho de que la
forma de canto con reminiscencias trovadorescas que zona central haya conocido los principales instrumentos
evolucionó a comienzos del siglo xx. Su principal de origen indígena que precedieron a la llegada del
característica es la versificación, lo que le permite al voca- acordeón, lo que le otorga una carga de tradición que
lista contar historias y acontecimientos con una cadencia pervive en el acervo cultural de los pobladores. Una
sostenida. Los instrumentos que lo acompañan son el segunda escuela es la de El Paso, Cesar, que ha sido
acordeón o la guitarra, la guacharaca y la caja. denominada como zona de influencia negra por la
En segundo lugar está el paseo, que tiene mayor masiva población de origen africano que fue trasladada
velocidad que el son y por tanto permitió también el allí como mano de obra para trabajar en el Hato El Paso.
baile, que inicialmente no encontró en el son la velo- Sus principales manifestaciones musicales se vieron
cidad adecuada para ser ejecutado. atravesadas decididamente por la gaita, el canto y las
El merengue se toca con los mismos instrumentos que tamboras. Otras dos zonas de influencia son la zona
el paseo y el son, pero con mucha más velocidad. Como Ribana, con epicentro en Fonseca, Guajira y la zona
expresión musical el merengue se puede encontrar tanto ribereña, con epicentro en Plato, Magdalena. Final-
en las Antillas como en otras regiones de Colombia, con mente, la zona de influencia del vallenato en guitarra
diferentes estructuras musicales. tiene como epicentro a Codazzi en el Cesar. Para al-
La puya es la forma más rápida de las cuatro, pero al gunos investigadores esta práctica constituyó un antece-
mismo tiempo la de menor duración. Fue interpretada dente de la producción de música vallenata que fue
tradicionalmente con gaita, acompañada por la gua- seguida de la música de acordeón.
characa y por la caja, pero luego, a comienzos del siglo El vallenato es uno de los géneros musicales folclóricos
xx, el acordeón entró a reemplazarla. La puya siempre Colombianos que más éxitos y variaciones ha tenido a
tuvo un carácter retador y controversial y pretendía través del tiempo. En la actualidad el conjunto vallenato
lanzar indirectas a algún miembro de la concurrencia o a está conformado por el acordeón de botones o la gui-
otro músico o cantor. Actualmente la puya es un género tarra, la guacharaca, la caja y el bajo eléctrico15; aunque
vigente en la región de pitos y tambores. algunas veces se le suman instrumentos membranófonos
Estos aires tuvieron su auge y evolución principal- -instrumentos donde el mecanismo de producción de
mente en las llanuras costeras del litoral Atlántico, como sonido puede ser la percusión directa, indirecta, la
expresiones musicales que dieron cabida a las necesidades fricción u otra acción sobre una membrana16 en tensión-
socio culturales de los pobladores de la zona ribereña del o aerófonos17 -instrumentos donde el sonido se produce
Magdalena, gran parte de Bolívar, las llanuras de por la vibración de una columna de aire generalmente
Córdoba y Atlántico y el Cesar y La Guajira. dentro de un tubo-. Podemos encontrar en esta región
La entrada del acordeón en su zona de influencia ha los siguientes instrumentos:
sido muy discutida, pues hay quienes señalan que fue El acordeón de botones es un instrumento musical
introducido por contrabando a La Guajira; otros sos- aerófono18, de origen europeo19, formado por un fuelle
tienen que llegó solicitado por músicos de salón del en cuyos extremos juegan cierto número de botones que
interior del país y algunos que hizo su entrada por el proporcionan los sonidos que emite, dotados con un
puerto de Barranquilla. De cualquier manera, la fabri- mecanismo de lengüetas metálicas libres. El acordeón
15 el plan nacional de música

más común usado en los conjuntos vallenatos es el de


doce bajos. Fue inventado en Alemania en el año 1829
por el austriaco Kiril Damian y perfeccionado por el
francés Buffet. Tuvo mucha acogida en los países del
centro de Europa, especialmente en Francia e Italia a
mediados del mismo siglo, este último país fue el que
más lo comercializó20.

La guitarra. Instrumento referenciado


en el eje de músicas isleñas.
La caja21 es un instrumento membranófono de origen
africano, que consiste en un tambor cónico de más o
menos unos cuarenta centímetros de diámetro. Sólo
tiene una membrana que originalmente fue de venado,
chivo, ovejo u otros animales; actualmente es de mate-
riales sintéticos. Su otro extremo es hueco o de fondo
abierto. Su sistema de tensión22 es mecánico23 .
La guacharaca se conoce también como raspa. Es un
idiófono24 tubular de fricción25, fabricado con una
sección de caña26 que es dentada en la parte frontal y La gaita, uno de los instrumentos característicos de las
hueca en la posterior. Para interpretarla se frota la parte sabanas del norte de Colombia, proviene del cruce entre
frontal con un tenedor metálico27. un pato macho viejo y una especie de abeja llamada
Angelita. Luego de ser mezclada con carbón molido y
Músicas de pitos y tambores miel, la cera que produce esta abeja montañera se emplea
para fabricar la cabeza del instrumento, dentro de la que
D el indio las flautas , se ubica el cañón del ala remera del pato. La cabeza va
del ne g ro el tambor montada sobre uno de los extremos de una caña de
Con la llegada de los españoles, las tribus que madera de cardón y, a través del hueco del cañón el
poblaban la región norte de Colombia fueron diez- músico, emite los sonidos que caracterizan a las agrupa-
madas, no sin oponer resistencia. Pero cuando se dio la ciones de gaiteros de la costa norte colombiana.
entrada de los esclavos traídos de África los indios que La gaita, al igual que la flauta hecha con caña de millo,
quedaban eran tan pocos que fue necesario que abando- es la herencia que los indígenas precolombinos de la zona
naran la lucha violenta contra los colonizadores para han legado a la música del litoral caribe. La primera aún
buscar otras formas de convivencia y no desaparecer. persiste como instrumento tradicional de comunidades
Cimarrones e indígenas se acomodaron y se inició un Cunas y Kogui, pero recibe el nombre de suarras y kuisi,
proceso de mestizaje en el que se fundieron las tradi- respectivamente. Las manifestaciones musicales que se
ciones de los blancos, negros e indios. A lo largo del desarrollaron en torno a estos instrumentos se acompa-
litoral se difundieron gaitas, ‘pitos’ o flautas y tambores, ñaron originalmente con un tambor hembra y un
a los que se sumaron luego, durante el siglo xviii, llamador (tambor pequeño) y con la maraca. Luego se
instrumentos como los platillos, el bombardino, las sumaron el bombo y el guacho. Los cañamilleros,
trompetas y los clarinetes con los que harían su inter- conjuntos en los que la flauta de millo es protagonista,
vención las bandas que llegaron para interpretar bailes interpretan ritmos como la Puya, el Bullerengue, el
de salón como mazurcas, polcas y valses, que hoy Chandé, Cumbia y otros.
reinterpretan los ritmos tradicionales y representan un
El mestizaje, fabricante de pitos
fuerte movimiento de bandas pelayeras en las sabanas.
La cumbia, el porro y la puya, entre otras formas Con la llegada de los españoles las tribus que po-
musicales de la zona, fueron instrumentales en un blaban la región fueron diezmadas, no sin oponer
principio, pero el canto no tardó en aparecer. resistencia, pero cuando se dio la entrada de los esclavos
el plan nacional de música 16

convirtieron en canto. La mezcla de razas trajo consigo


ingredientes como las coplas y décimas del español, que
enriquecieron estos repertorios, así como los instru-
mentos para acompañarlos. Por su parte, los cantos
mortuorios han perdurado con el paso del tiempo y aún
hoy se escuchan principalmente en las sabanas de
Córdoba y Sucre, donde reciben el nombre de zafra
mortuoria, así como en San Basilio de Palenque, corregi-
miento en el que son llamados lumbalú. Existen expre-
siones similares en otras zonas del país como la Costa
Pacífica, los Llanos Orientales y algunas comunidades
indígenas.
En las tamboras, agrupaciones que están acompa-
ñadas por las ‘tablitas’, las palmas y guachos, se mantiene
viva la tradición africana. El tambor hembra y el macho
ejecutan el ritmo que se complementa con cantos
improvisados en el que mujeres y hombres dan palmas, o
golpean las ‘tablitas’ llevando el ritmo.
La expresión musical de esta región se mantiene
traídos de África los indios que quedaban eran tan pocos vigente en celebraciones anuales como las corralejas de
que fue necesario que abandonaran la lucha violenta distintos municipios y corregimientos, así como en el
contra los colonizadores para buscar formas de convi- Carnaval de Barranquilla.
vencia y no desaparecer. Cimarrones e indígenas se Entre los principales instrumentos encontramos:
acomodaron y se inició un proceso de mestizaje en el que La flauta, conocida también como caña de millo o
se fundieron las tradiciones de blancos, negros e indios. pito28, es un instrumento melódico, aerófono, de len-
A lo largo del litoral se difundieron gaitas, ‘pitos’ o güeta libre. Es fabricada por lo general con caña de millo
flautas y tambores, a los que se sumaron luego, durante el o sorgo. Posee en su cuerpo cuatro orificios que al ser
siglo xviii, instrumentos de cobre como platillos, cerrados o ahogados por las yemas de los dedos producen
bombardinos, trompetas y clarinetes con los que harían las diferentes alturas. Generalmente la lengüeta se separa
su intervención las bandas que llegaron para interpretar un poco del cuerpo del instrumento con un hilo, para
bailes de salón como mazurcas, polcas y valses, y que hoy facilitar su vibración29.
reinterpretan los ritmos tradicionales y representan un La tambora es un tambor cilíndrico, fabricado con
fuerte movimiento de bandas pelayeras en las sabanas. madera de orejero, banco, o uña de mono. Posee dos
La cumbia, el porro y la puya, entre otras formas musi- membranas de piel de venado, chiva o ternero, ancladas a
cales de la zona, fueron instrumentales en un principio, un sistema de tensión con aros y abrazaderas. Se toca con
pero el canto no tardó en aparecer. En él puede rastrearse baquetas: una larga, llamada machuquito, para tocar los
la influencia española, pues la estructura de los cantos aros; y otra más pequeña y gruesa, llamada fondiado,
está dada por estrofas, una manifestación textual que se para tocar los parches.
originó en Europa. Los tambores llamador y alegre son dos tambores
Las principales manifestaciones vocales de la zona, cónicos de una sola membrana cada uno, con sistema de
que comprende los territorios de Sucre, Bolívar, tensión por cuñas de madera resistente, de diferentes
Córdoba, Atlántico y parte del Magdalena, se derivaron tamaños. El más pequeño es el llamador y el grande es el
de dos aspectos diferenciados de la vida cotidiana: los alegre, que están hechos con madera de banco, carito,
cantos de trabajo y los cantos funerarios. Por ser una ceiba o palmiche; su parche es de cuero de chiva y sus
región rica en campos dedicados al pastoreo y a la aros de bejuco, chupa o culatero.
agricultura, las jornadas bajo el sol, que hoy continúan El arco musical es un instrumento cordófono neta-
siendo largas y extenuantes, permitieron que surgieran mente indígena, que es fabricado a partir del arco de
expresiones, gritos de monte, dichos y arreos que se caza, al cual se le pone un cordón de fibras de hoja que
17 el plan nacional de música

produce un sonido bajo. Se interpreta con los dedos, atención y lentamente va cediendo a las insinuaciones del
jalando dicho cordón y acortando la distancia que existe parejo. Cuando éste obtiene respuesta demuestra su hombría
entre sus dos extremos. castigando el piso con sus pies descalzos. La marimba suena
El guache es un idiófono que hace las veces de una todo el tiempo y otras parejas se suman al baile, cargando la
sonaja tubular, fabricada por lo general en un tubo de atmósfera con un rito en el que la tensión entre hombres y
latón30 con semillas secas de acacia, capacho o bijao en su mujeres es febril.
interior. Se interpreta agitando el instrumento.
La guacharaca o güiro es un instrumento idiófono, El Chocó
conocido también como calabazo o puro, que consiste en La chirimía chocoana fue introducida en la zona por
un óvalo que posee ranuras en todo su cuerpo y produce José Dolores Zante en 1915. En una región que fue
su sonido al entrar en fricción con un trozo de hueso; es colonizada por los españoles a lo largo del siglo xvii,
fabricado con un calabazo hueco al cual se le hacen los este formato musical compuesto por el clarinete como
cortes a través de su cuerpo. instrumento melódico, el bombardino y la percusión se
Las maracas son instrumentos idiófonos, los cuales hizo fuerte sólo a partir de principios del siglo xx,
representan a la hembra y al macho31, se hacen de totumo cuando el intendente de Quibdó quiso conformar una
con unos pequeños orificios para permitir que “respire el banda musical en esta población.
instrumento32” y tienen por dentro semillas secas de El Chocó ganó importancia para los colonizadores
acacia, capacho o bijao. Su sonido se produce al agitarlo. cuando se descubrieron importantes yacimientos de oro
Las gaitas son instrumentos aerófonos fabricados con y platino, por lo que los españoles hicieron entrar
caña de cardón33, que poseen un canal externo de cañón esclavos africanos de una forma masiva luego de exter-
de pluma de ave, fijado con una pasta de cera (o asfalto). minar casi en su totalidad a los antiguos pobladores,
Existen tres clases de estas gaitas: dos gaitas largas, la conformados por indígenas emberas, cunas, noanamá y
primera de ellas, conocida también como gaita hembra o waunana. De esta forma, los esclavos pasaron a ser los
pito cabece’cera34 es de tipo melódico y tiene cinco principales ocupantes del territorio, ya que los colonos
orificios, y la segunda es conocida como gaita macho y no se adaptaron fácilmente a las condiciones climáticas y
posee dos orificios. La tercera es conocida como gaita prefirieron asentarse en centros alejados de la costa como
corta o machi´embriá, que tiene seis orificios. Quibdó y Nóvita. El proceso de mestizaje fue amplio y
aunque los mulatos se mantuvieron alejados de los
blancos, el comercio entre ellos fue intenso, gracias a los
Músicas del Pacífico abundantes ríos, especialmente el Atrato y su salida al
Atlántico, a través del cual se mantenía un contacto
U n solo mar , dos maneras
permanente con Cartagena.
de h acer m ú sica
Dolores Zante llevó la música de bandas militares del
Musicalmente el Pacífico colombiano se divide en dos Sinú a Quibdó y con ello trasladó la médula de las
zonas bien diferenciadas: La primera es el norte, que está tradiciones musicales sinuanas, que mantienen un
determinada por el departamento del Chocó y en la que la cargado contenido de porros y fandangos. De esa forma
chirimía, una manifestación musical heredera de las se fabricaron instrumentos a imitación de los de metal y
bandas militares tradicionales que llegaron con los españoles se produjeron flautas traversas en materiales como la
al continente, convive con los alabaos, arrullos y cantos de caña. Junto a esta intervención se desarrolló el abozao,
boga que se hacen sentir entre los ríos. En el sur, el territorio una danza que algunos asocian con la marinería y con
conformado por la zona costera de los departamentos de un canto de pescadores del río Magdalena. La zona
Cauca, Valle del Cauca y Nariño, la principal expresión cuenta con otros géneros como el porro chocoano o
musical está marcada por la marimba, un instrumento bambazú que es manifestación de la influencia sinuana,
fabricado con láminas de madera de chonta y resonadores de así como nuevas formas de apropiación de los antiguos
bambú, que al ser interpretado abre paso a una actividad bailes de salón europeos: pasillo, mazurca jota, entre
fundamental en las tradiciones del litoral: el currulao. Los otros, que permiten establecer una conexión con la
cuerpos de una pareja establecen un diálogo sin tocarse. El región andina e isleña. Algunos de los instrumentos que
hombre corteja a la mujer, quien en un principio no le presta se hacen presentes en esta zona son:
el plan nacional de música 18

El clarinete pertenece a la familia de instrumentos madera de chonta y resonadores de bambú, es el instru-


denominados de viento-madera. Habitualmente está mento central en estas expresiones musicales y abre paso
hecho de ébano aunque también los hay de materiales a una danza irremplazable en las tradiciones del litoral
sintéticos. Consta de cinco partes que son: boquilla, que, además, se ha constituido como la principal ex-
barrilete, cuerpo superior, cuerpo inferior y campana. presión cultural de los pobladores: el currulao. La
La boquilla es la parte del instrumento que se coloca marimba imprime el carácter al género acompañada por
en la boca del instrumentista. Ésta lleva adosada una otros instrumentos tradicionales como los cununos y los
lengüeta o caña que es aquella que produce el sonido bombos, que se denominan machos y hembras.
mediante su vibración. El barrilete hace parte del cuerpo Entre los toques tradicionales del currulao se en-
del instrumento y de acuerdo a su longitud varía la cuentran el bunde, la juga, el berejú, el patacoré, el
afinación del mismo. En los cuerpos reposa el meca- bambuco viejo, y el pango.
nismo de orificios y llaves que al ser accionados varían las Un ejemplo de copla actual, inspirada en la situación
alturas. Por último encontramos la campana, que tiene de las músicas tradicionales de la zona y en la cotidia-
por función proyectar el sonido del clarinete. nidad de sus habitantes es el que presenta un músico
El bombardino es un instrumento de viento35 que joven de la región:
pertenece a la familia de los fliscornos, también conocido Yo Fabriqué una marimba que no era casi tan larga,
como un euphonium, término griego que significa “voz y la’ tabla’ y lo’ canuto’ todo’ eran hecho de guadua.
suave”. Puede ser acompañante o melódico. El bom- Allá debajo de un horno que mi abuela tenía,
bardino es básicamente un tubo de metal cónico que se fabriqué yo mi marimba y tocaba tó’ lo’ día.
va ensanchando de la boquilla a la corneta. Está provisto Yo el tiempo lo aprovechaba cuando no tenía qué hacer,
de tres o cuatro pistones o cilindros que cumplen la tocando mi marimbita porque quería aprender.
finalidad de transformar la distribución del aire en el Como quería aprender todos los días tocaba,
interior del tubo para, de esta forma, producir diferentes con un señor Bonifacio, que a mí siempre me enseñaba.
frecuencias. Él me agarraba laj mano cuando yo iba a practicar,
La tambora chocoana es un Instrumento membra- hasta que así juí aprendiendo a acompasar y a tocar.
nófono36 de forma cilíndrica con dos membranas, que es Tu marimba ejtá muy mala, me dijo el señor Viviano que
tocado con dos baquetas recubiertas con un material vive allá en Tangarial,
esponjoso. Las tamboras generalmente poseen dos porque en marimba de guadua no hay quien aprenda a tocar.
sistemas o mecanismos de tensión, uno de ellos con Me dijo don Bonifacio,
tornillos y otro con aros y abrazaderas. buscáte una chontadura y la ponés a secar
Los platillos son instrumentos idiófonos, fabricados para hacerte una marimba pa’ que aprendás a tocar.
con dos láminas metálicas –hierro y aleaciones- que Yo busqué una chontadura allá en el río Satinga,
forman dos circunferencias que producen su sonido al y se la traje a Don Bonifacio pa’ que me hiciera la marimba.
ser estrelladas entre sí. Me enseñó Don Bonifacio la marimba a acompasar,
El redoblante es un instrumento membranófono37 de que si no está acompasada no hay quien la aprenda a tocar.
forma cilíndrica que tiene dos membranas. Se toca con Un amigo a mí me dijo, que vive allá en mi vereda,
baquetas. Cuenta con un mecanismo de fibras metálicas que aprendiera cosas nuevas, no aprendiera cosas viejas.
que repercuten sobre el parche inferior al cual está fijado, Yo también le contesté, no ofendiéndolo tan mal,
y que le proporciona su principal característica tímbrica. esto que estoy aprendiendo, son cosas tradicional.
También no le hice caso y pensé jué en adelante,
Litoral de Cauca, Valle del Cauca y Nariño porque todo’ mis anhelo’ era aprender este arte.
La música interpretada por las negritudes de esta zona Como estaba acompasada no demoré pa’ aprender,
tiene una fuerte relación con las formas musicales de y hoy le doy gracias a este hombre, que me enseñó su saber.
distintas regiones de África. En ella perviven no sólo Muchas marimbas he hecho, y algunas las he vendido,
instrumentos que fueron importados por los esclavos entonce’ este buen saber bastante a mí me ha sevido.
africanos que llegaron con la colonización del territorio, Despué’ me dijo mi amigo, perdóneme la ofendida,
sino cantos similares a los que emplean los africanos en porque todo arte que uno aprende, mucho le sirve en la vida.
sus velorios. La marimba, fabricada con láminas de
19 el plan nacional de música

La música tradicional del Pacífico acoge una variedad Hay dos clases de bombo: macho40 y hembra41. Son
de culturas afroamericanas que habitan la región. instrumentos membranófonos42 tocados con baquetas –
Teniendo en cuenta que comprende varias subregiones, dos palos llamados el boliche o mazo y el apagante-. El
se ha tomado la determinación de examinar todos los primero se utiliza para golpear el bombo y está recu-
instrumentos sin discriminación del lugar donde se bierto con un trozo de tela en la parte superior. El
encuentren, de la siguiente manera: apagante es empleado para detener la vibración del
La marimba es un instrumento de percusión38 con bombo por el parche que no se golpea. La construcción
resonadores de aproximadamente veinticuatro láminas, del bombo se hace con un tronco hueco43 de nato,
que es interpretado con baquetas llamadas tacos, los iguanero u otros. A este último se le ponen dos parches
cuales están recubiertos con caucho en un extremo; por medio de aros metálicos amarrados con bejucos, uno
tocan simultáneamente dos personas - una en el registro de cuero de venado44 y otro de tatauro, que deben ser,
alto conocida como tiplero o requinta y otra en el re- uno de un animal hembra y el otro de un macho que son
gistro bajo conocida como bordonero-. La marimba se remojados para ablandar el cuero y poder retirar los
fabrica con madera de chonta, extraída de la palma de pelos del animal.
chontaduro, que luego de ser cortada y raspada se expone Los cununos son instrumentos membranófonos45,
al humo por un mínimo de tres meses para que seque más específicamente, dos tambores altos, macho46 y
bien y produzca el sonido esperado –el sonido depende hembra, que son tocados con baquetas o las manos
del tiempo de secado-; después se corta la chonta en mientras son sostenidos entre las piernas del ejecutante.
tablas o láminas que tienen una longitud de entre veinte Son de fondo cerrado y poseen una sola membrana que
y setenta y cinco centímetros. Estas láminas se colocan tiene un sistema de tensión por cuñas. Para su fabri-
amarrándolas con una cuerda o piola, sobre dos cabe- cación se toma un tronco ahuecado de balso macho,
zales o cabeceras construidas de cualquier madera nato, u otro árbol y se tapa su extremo inferior con un
resistente como tangará o cuangaré que forman una trozo de madera cualquiera, al cual se le hace un pe-
cama o mesa, obteniendo la figura de un cuadrado queño agujero –para que respire el instrumento47-. Se
irregular, que se recubre con trozos de costal de majagua coloca en el otro extremo un parche de piel de venado o
o bagazo de palma de coco, para amortiguar el golpe de tatauro (casi siempre uno diferente para cada tambor,
los tacos. Debajo de cada lámina de chonta se pone uno hembra y macho). Y el mismo se tensiona con bejuco
tubo –o resonador- en forma decreciente. La guadua o llaré o matamba hacia la parte central-inferior del
bambú es el material con el que se fabrican los resona- instrumento. Es común ver que los cununos machos
dores, y su longitud varía entre los veinticinco y setenta y posean siete ataduras y los hembra seis.
cinco centímetros. Son ensartados en una varilla de Igualmente se pueden encontrar subregiones en las
metal o bejuco que los sostiene. cuales se pueden encontrar idiófonos construidos con
El guasá o guasa es un instrumento idiófono39 que caparazón de tortuga, que son interpretados al golpear
consiste en una sonaja de recipiente tubular y se en- en ellos palos de madera.
cuentra varias veces repetido en cada conjunto, pero con Actualmente, las músicas de marimbas y la de chi-
variaciones de tamaño y decoración. Está fabricado con rimías se hacen presentes también en agrupaciones que
una parte del tronco de la guadua, que es perforada fusionan los instrumentos tradicionales con otro tipo de
varias veces para obtener unos pequeños agujeros a lo instrumentos como el bajo eléctrico, los teclados y el
largo de su cuerpo. Son cerrados por los dos extremos: saxofón, y de allí se han originado expresiones impor-
por uno con el nudo de la guadua y por el otro con un tantes de la salsa, representadas en orquestas de salsa de
pequeño pedazo de balso. En su interior se pueden proyección internacional, que han terminado por
encontrar un conjunto de semillas secas de achira que revitalizar, así como por popularizar y llevar estas
producen el sonido. Son generalmente interpretados por músicas fuera de las fronteras de Colombia.
mujeres y su cuidado depende de ellas; se acostumbra En cuanto al trabajo en las escuelas de música tradi-
guardarlo debajo del humo para que tome un color café cional, los chocoanos han adelantado investigaciones
oscuro y para que se mantenga caliente, hecho que que documentan no sólo la historia de sus músicas, sino
mejora su sonido según el conocimiento tradicional de la que adelantan esfuerzos para preservarlas y alimentarlas
región. constantemente. Entre otros muchos ejemplos, han
el plan nacional de música 20

desarrollado un aprendizaje por registro de instru- Antiguamente, para fabricar una tambora tú cogías un
mentos como el clarinete, en el que los músicos, especial- trozo de árbol, no de cualquier árbol, uno especial, como
mente jóvenes, siguen visualmente las notas el balso, que permite que se le trabaje. Ahuecabas el trozo,
interpretadas por otro músico directamente en el aunque ahora también se hace con tablillas porque la tala
instrumento, y luego aprenden sus nombres y la manera de árboles está muy controlada, ya no puedes ir tum-
de escribirlas en el pentagrama. bando árboles para hacer una tambora. Lo importante es
Leonidas Valencia, quien asesora el eje de música el cuero. Ese es el que da la sonoridad. El cuero es de
tradicional del Chocó para el Plan Nacional de Musica taturo, un animal parecido al zaino, pónle un cerdo de
para la Convivencia tiene claro el pasado y las tradi- monte, salvaje. Para que de la sonoridad tienes que matar
ciones de su región: un macho y una hembra, una tapa de cada uno por cada
Inicialmente la música en el Chocó se interpretaba en el lado. Si le pones dos tapas de macho te queda sorda la
sexteto, que llevaba flautas de carrizo, si vas por Nuquí tambora, igual si le pones dos de hembra.
encuentras todavía flautas de esas. Hubo chirimías, que
eran instrumentos de origen árabe, pero realmente a lo Músicas andinas
que se le llamó chirimía fue a una manera de hacer
M ú sicas A ndinas C entro
música, mediante unos instrumentos base que eran el
clarinete, el redoblante, los platillos y la tambora. Esos Voces y baile: color a la montaña
instrumentos, traídos por las bandas de guerra espa- Desde Cundinamarca, pasando por Boyacá y enfi-
ñolas, se mezclaron con los del sexteto y así se produjo lando hacia los Santanderes, y desde las montañas que
eso que hoy llamamos formato de chirimía. La gente no dominan el Eje Cafetero y Antioquia, las músicas
sabía cómo llamarle, y el nombre se quedó por casua- tradicionales varían no tanto por los límites departa-
lidad. Es importante reconocer que en el Chocó hay un mentales, sino por antiguas expresiones que han
matrimonio indisoluble entre música y danza. Porque el quedado impresas en el territorio desde tiempos de la
hombre afro vive la música, la maneja con el cuerpo. Nueva Granada. Así, en la zona que se dispara hacia el
Adonde tú vayas en esa zona, suene lo que suene, el que oriente se imponen géneros como el de la guabina
esté cerca va llevando el ritmo con el cuerpo casi sin torbellino y la música de carranga, y hacia el occidente,
darse cuenta. Nosotros tenemos danza, contradanza, el pasillo y el bambuco se hacen fuertes.
pasillo, mazurca, polca… todos géneros europeos que se Los instrumentos que caracterizan a las músicas de
han readaptado con el tiempo y que ahora son tradicio- estas regiones son la guitarra, la bandola, el requinto, el
nales de acá. En cuanto a la situación actual de las tiple y una variedad de instrumentos de origen indígena
músicas se han presentado algunas situaciones. La y campesino como el quiribillo, las cucharas, el chucho,
tambora, por ejemplo, que solía fabricarse artesanal- la guacharaca y la marrana.
mente, de un tiempo para acá le ha quedado corta a los La de la región andina es música campesina que
jóvenes. Ellos tienen afanes y para salir a las festividades rompe la idiosincracia de hombres y mujeres enjutos,
en lugares como Quibdó quieren mayor sonido, más para permitirse cantarle a las situaciones cotidianas de
amplitud, por lo que han recurrido al bombo grande, de las que resulta imposible hablar o quejarse, porque
parches sintéticos, que además aguanta el clima. ocupan la totalidad de la existencia. Es música,
Nosotros vivimos en una zona donde llueve mucho y además, que se revitaliza día a día, pues ha recibido la
eso afecta a instrumentos como la tambora, que son fuerza de jóvenes que la reinventan, inyectando a la
hechos con cueros de animales y madera. Si tú ibas con tradición el sentir de una academia que vuelve sobre sus
una chirimía tocando por la calle y comenzaba a llover raíces y abre paso a vanguardias y nuevas sonoridades.
tenías que parar, porque donde la tambora llevara agua
hasta ahí llegaba el cuero. Por facilidad, los bombos de
M ú sicas A ndinas S ur
ahora funcionan mejor. Claro que hay momentos donde
se respeta el instrumento tradicional. En el festival Una cordillera que se moviliza con la música
Petronio Álvarez el formato chirimía tiene que salir con La música tradicional producida por los campesinos
su tambora original, si vas a tocar en las fiestas de San del Huila y Tolima le canta al goce permanente de estar
Pacho, también. vivo. Las coplas, utilizadas dentro del rajaleña de una
21 el plan nacional de música

manera mordaz y graciosa, le han permitido a los territorio andino son ejemplos vivos de esta circuns-
habitantes de la zona expresar los diferentes momentos tancia.
de la vida al aire libre valiéndose de personajes que Para efectos del análisis musical y de los procesos de
todos conocen y admiran, o de los que se burlan cariño- investigación y formación de las escuelas de música tradi-
samente. A su manera, los pobladores del Macizo cional, el Plan Nacional de Música para la Convivencia
Colombiano y su área de influencia en Cauca, Nariño y acoge una división por zonas en la región andina que
Putumayo, han encontrado en las flautas y otros reconoce características socioculturales y musicales
vientos, en los instrumentos de cuerdas y en la per- específicas que han resultado de la configuración y
cusión, la forma de construir sus sonidos para dialogar transformación de las prácticas culturales de la po-
con un paisaje de cordilleras anudadas, por donde los blación en determinados territorios: Sur-Occidente;
Andes entran a Colombia, y se despliegan perfilando Centro-Occidente; Centro-Oriente; Centro-Sur.
rostros y territorios.
Los valles interandinos del Magdalena, del Cauca y Aproximación histórica
del Patía, entre otros, han visto circular a hombres que, La fusión o conjugación histórica de la música tradi-
empuñando guitarras y tiples, flautas, quenas, cha- cional de la región andina está influenciada por tres
rangos, y acompasados por el chucho, la guacharaca, la vertientes foráneas básicas: La primera de ellas es la
marrana, los mates, las tamboras, le han sacado gusto a música militar española traída al continente por los
las tradiciones gastronómicas de la región, así como a los primeros colonizadores que llegaron con instrumentos
comportamientos humanos más expresivos. El baile, como pífanos, clarines, atabales, trompetas, chirimías y
componente fundamental de estas músicas ha cobrado sacabuches. La segunda, –igual de importante- es la
vida bajo los árboles, los rayos del sol y las lluvias, con música religiosa o litúrgica50 traída por el clero y/o
una gracia atemperada por los diferentes climas y la capellanes al país, en la que encontramos instrumentos
fertilidad de estas tierras. como las violas de arco, las arpas, los rabeles, los bajones
y los órganos pequeños. La tercera y más influyente –
Tradicionalmente se ha entendido la región andina de pero de menor importancia en su época- fue la música
Colombia, incluyendo sus valles intramontañosos, como popular o típica del entretenimiento secular o civil, que
una unidad demogeográfica-cultural48. Esta descripción se valía de instrumentos como las vihuelas –de arco y de
es muy amplia e indeterminada por cuanto existen otras mano-, las guitarras de cuatro cuerdas, los laúdes, las
concepciones acerca de la división territorial del país, arpas, los dulcémeles y otros.
diferentes a la que administrativamente posee la nación, Además, es imposible ignorar la presencia de la
la cual tampoco es suficiente al referirnos a la des- cultura tradicional indígena y negra, y sus posteriores
cripción musical. repercusiones en los hijos mulatos y mestizos que
En esta enorme región se encuentra la mayor parte nacieron en América, la cual, más que una vertiente
de la población colombiana, fenómeno que contrasta básica musical - instrumental ha sido considerada un
con la organización demográfica de otros países en punto de fusión de la misma.
donde la mayor concentración se da hacia las costas; La música de la época colonial se desarrolló por
esta situación favorece la presencia de una gran diver- medio de lecciones, salmodias y motetes religiosos;
sidad cultural 49 y musical en ella. De igual forma, los villancicos, canciones, romances y madrigales y por
núcleos de mayor poder económico de la república se último, versos, tientos, fantasías, glosas y diferencias;
encuentran aquí, lo que ha contribuido a la permanente que al ser aprendidas por los colonizadores criollos,
movilidad de las músicas tradicionales, pues el terri- soldados, religiosos o migrantes de la zona andina,
torio se ha globalizado económica, cultural y social- dieron el punto de creación y confluencia de las dife-
mente, y por su puesto, la música se ha alimentado de rentes vertientes de la música andina, que ha sido
esta situación. La venta a gran escala de discos de reelaborada, alimentada por otras culturas y modi-
música vallenata en el interior del país, la gran oferta de ficada a través del tiempo. Este fenómeno, más que una
emisoras de música llanera en Sogamoso –Boyacá-, la regeneración, o una reestructuración de esas músicas,
adopción del tango argentino en Medellín o la in- puede verse como el surgimiento de una nueva manera
clusión de la música mariachi –mexicana- dentro del de expresarse, una reinvención51.
el plan nacional de música 22
De los conjuntos, ritmos o géneros pañada por tiples y guitarras se convirtieron en una de
musicales y sus instrumentos las células básicas de la difusión de la música en los
Al establecerse lo que hoy podrían llamarse géneros Andes colombianos.
tradicionales –el bambuco, la guabina, el vals, el inter- La cucamba o conjunto rajaleñero, está conformado
mezzo, el pasillo, el torbellino, la contradanza, el bunde, por voces e instrumentos de cuerdas como el tiple
las gavotas, y las danzas, junto con sus variaciones requinto, el tiple y la guitarra; y percusión entre los que
regionales como el rajaleña y el sanjuanero- las músicas se destacan la tambora andina, el carángano y el
se van sectorizando a través de la gran región montañosa ciempiés, junto a otros comunes con otras agrupaciones
colombiana, produciendo diferentes estructuras para su como la esterilla, el chucho, los mates, la zambumbia y la
interpretación. guacharaca. Se encuentra especialmente en el departa-
No hubo una manera homogénea de agrupar los mento del Huila.
instrumentos dentro de las diferentes regiones, pues es El conjunto guabinero, se encuentra fundamental-
posible encontrar vihuelas, castañetas, sonajas, clarines, mente en el departamento de Santander y, como su
cajas, pífanos y trompetas en Girón y en San Ignacio nombre lo indica, tiene su mayor expresión en la
(Cauca) chirimías, flautas, clarines, clave, guitarra y guabina, en la que se alternan los interludios instrumen-
arpas52 . Sin embargo, al correr el tiempo, después de un tales de torbellino y las secciones a capella de tonadas a
adormecimiento musical debido a las guerras de inde- dueto de guabina con textos poéticos o picarescos. Su
pendencia, a la pobreza y a la ausencia de escuela, se conformación es muy similar a la de la Cucamba,
fueron conformando agrupaciones definidas como: excluyendo el carángano y el ciempiés e introduciendo
La estudiantina, que actualmente está compuesta otros instrumentos de percusión como el quiribillo y la
principalmente por guitarras, tiples, bandolas, con- quijada.
trabajo y percusión. La denominación estudiantina se El conjunto carranguero se conforma predominante-
aplica a diferentes tipos de formato e indica fundamen- mente con tríos o cuartetos de tiple requinto o guitarra
talmente un grupo de estudiantes; también hubo en puntera, tiple y guitarra, y en algunos casos la gua-
ellas, especialmente a comienzos del siglo xx (dentro de characa. Este conjunto acompaña a un solista vocal con
la denominación Lira, como la Lira Colombiana de coros en dueto. Se encuentra especialmente en los
Pedro Morales Pino), la inclusión de instrumentos de la departamentos de Cundinamarca, Boyacá y Santander,
tradición sinfónica como el violín, el clarinete y la flauta. aunque su influencia se ha ampliado hacia otros espacios
Esta denominación Estudiantina, también se encuentra de la zona andina y de colonización.
en otros países, como Venezuela. La chirimía caucana o banda de flautas: su mayor
El trío instrumental, conjunto que antecedió a la presencia está en los departamentos de Cauca y Huila al
estudiantina y que conformó su núcleo esencial, se igual que en la zona de Río Sucio en Caldas y en el
encontraba integrado por tiple, bandola y guitarra, lo litoral Pacífico. Se compone de flautas traversas con una
que permitía a sus miembros explorar una variada gama líder o prima acompañada de otras denominadas segun-
de sonidos, amplitud musical y color, manteniendo una deras que llegan a producir muchas voces simultáneas.
estructura reducida, lo cual fue beneficioso debido a la La percusión básica es de bombo y redoblante junto a
facilidad en el transporte de los instrumentos y la instrumentos como maracas, charrasca y triángulo entre
rapidez con la que los músicos podían comenzar a otros.
interpretar sus repertorios. Otro tipo de agrupaciones, compuestas por instru-
Hacia 1930, con la aparición de los hermanos Her- mentos como el piano, la flauta, el contrabajo, los
nández, se demostró que este tipo de agrupaciones violines, violas e idiófonos –más los instrumentos
podía abarcar los géneros y partituras más complicadas, mencionados en las anteriores formas de conjuntos-
con lo que se configura un conjunto de cámara, donde posibilitaron la interpretación de los géneros colom-
cada instrumento comparte el protagonismo en la bianos y fueron popularizados en la Sabana de Bogotá, a
interpretación. principios del siglo xx.
El dueto vocal instrumental, conformado por voces Puede afirmarse que en la zona de Antioquia y el Eje
masculinas, acompañadas por tiples y guitarras y El Cafetero tiene una mayor presencia la bandola y menor
solista, integrado por voz masculina o femenina acom- presencia el tiple requinto. Aun así vale la pena destacar
23 el plan nacional de música

que en la mayor parte de las regiones andinas, los géneros debido a la localización geográfica en la cual se desarrolló,
o formas musicales comunes son: El bambuco, el pasillo, la integrada por los departamentos de Antioquia, Boyacá,
guabina, la danza, el vals (waltz) y el intermezzo. Ritmos Caldas, Cauca, Cundinamarca56, Huila, Nariño, Norte de
que podemos clasificar dentro de los conjuntos típicos que Santander, Quindío, Risaralda, Santander, Tolima y Valle
los conforman y dentro de estos, sus instrumentos. del Cauca. Su papel principal ha sido el de llevar la línea
La presencia de los géneros y los instrumentos musi- melódica dentro del bambuco, pasillo, torbellino y otros
cales en la región no es homogénea; sin embargo, se géneros musicales. Hace parte, dentro del esquema de
pueden proponer algunas aproximaciones. En toda la Sachs-Hornbostel, de los cordófonos pulsados, es decir, de
zona andina existen los instrumentos de cuerda mencio- aquellos instrumentos que producen su sonido por la
nados, así como una rica gama de percusiones. vibración de una cuerda en tensión57.
Los géneros musicales presentes en toda la zona La bandola andina ha sufrido muchas modificaciones
lograron expresiones sub-regionales gracias al uso, entre técnicas a través de la historia58 ya que ha tenido dieciséis
otras manifestaciones, de la coplería, a la diferencia de cuerdas, catorce y como actualmente se conoce en algunas
usos de la música en la vida social y a las necesidades regiones: doce cuerdas. También ha visto reducir el largo
expresivas de los músicos y, aunque conservaron una base de su mástil59 para permitir la afinación en do, entre otras.
instrumental unificada, hoy es posible encontrar carac- Actualmente existe una familia de bandolas (bandolas
teres propios que identifican a cada una de estas zonas. bajos y otras) típicas de estas zonas de Colombia.
Así, el bambuco es un género que está presente en la Ahora bien “La bandola es un instrumento de cuerdas
mayor parte de la región, como núcleo común de una pulsadas y mástil trasteado que se toca con plectro60. Se
cantidad importante de variantes subregionales. El compone de seis órdenes y se afina por intervalos de
pasillo también está presente en toda la región53, al igual cuartas justas”61. Posee una caja acústica ovalada o mejor,
que la guabina; ésta existe en forma instrumental en en forma de gota de agua, fabricada generalmente62 en
Antioquia y el eje cafetero así como en Huila y Tolima, y madera de cedro para los aros y la tapa posterior; pino
se diferencia de la Santandereana, que es a capella. El canadiense o suizo para la tapa armónica y ébano o
Altiplano Cundiboyacense tiene a la música de carranga maderas duras para el diapasón, el puente y la ti-
como manifestación propia; de la zona del macizo racuerdas63. Su afinación es, de agudo a grave: Sol, Re,
antioqueño son las músicas de parranda. En la cuenca La, Mi, Si y Fa#.
del alto y medio Magdalena se hacen sentir el sanjuanero El tiple pertenece a la familia de los cordófonos,
y el rajaleña. Y en el Macizo Colombiano, Cauca y permite la realización de la escala cromática, y está
Nariño, además del bambuco, el son sureño y el san- equipado con mango y caja de pulsación digital. Su
juanito marcan la identidad. afinación de agudo a grave es en Mi, Si, Sol, Re, y está
No es posible hablar de regiones originarias de dotado de doce cuerdas metálicas agrupadas en cuatro
determinados ritmos ya que su configuración como tal órdenes. En las cuerdas Si, Sol y Re posee dos cuerdas
dependió de procesos de emigración y fusión y de delgadas de acero en los extremos y una entorchada en el
procesos socioculturales simultáneos que no necesaria- centro, afinada una octava debajo de las anteriores. Las
mente fueron sincrónicos, sino que se dieron frecuente- primeras, Mi, se afinan al unísono. Tiene su origen en la
mente con independencia unos de otros. guitarra española, razón por la cual utiliza sus mismos
Dentro de cada uno de los departamentos de la región materiales de construcción, aunque en la actualidad se
andina hay zonas de clima frío y otras de clima cálido, y hayan incorporado otros tipos de maderas en su fabri-
ambas influyen en los ritmos y en el carácter de las cación. El tiple requinto. Es un cordófono compuesto
músicas, de tal forma que dentro de cada uno de los de mango, cuello, caja y ordenes combinadas. De eje-
departamentos existen variaciones interpretativas, cución digital con plectro. Es fabricado en cedro –el
estilísticas y estructurales en la música. mástil y la tapa posterior-, Yolombó –en los aros- y pino
Los principales instrumentos que conforman los –en la tapa frontal. Tiene clavijero mecánico y diez
distintos grupos musicales de la gran región andina, son: cuerdas metálicas conocidas como requintillas, distri-
La bandola andina54 de Colombia55 es un instrumento buidas así: primer orden dobles. Segundo y tercero
que proviene de las vihuelas de péñola, antecesoras de la triples, cuarto dobles. Este instrumento adquiere su
bandurria y la mandolina. Es llamada de esta forma nombre del tipo64 de encordado que maneja ya que sus
el plan nacional de música 24

cuerdas son simplemente metal como ya se dijo –no son de cuero de ovejo que son atados a la madera por medio
entorchadas, de cobre, nylon o tripa, como en otros de cuatro aros de bejuco. Se afina por medio de la
instrumentos de cuerda. Su afinación de agudo a grave tensión que ejercen las “manillas” o “cabuyas” sobre los
es: mi, si, sol y re (E, B, G y D). Esta palabra, con la que aros y los parches. Se interpreta con baquetas al golpear
se ha llamado genéricamente a un instrumento de cuerda de tres maneras: una sobre el aro de bejuco, otra sobre el
quiere decir pequeño o agudo. Se usa para tiple requinto, vaso y otra sobre el parche.
guitarra requinto, clarinete requinto, entre otros. El redoblante es un instrumento de percusión
El contrabajo es un instrumento cordófono de origen parecido a la tambora, aunque un poco más pequeño.
europeo, de la familia de las cuerdas sinfónicas frotadas. Posee dos membranas que son atadas al cuerpo por dos
Es fabricado con maderas finas, o tríplex laminado. aros internos; tiene igualmente dos aros externos que
Posee cuatro cuerdas cuya afinación de agudo a grave es: sujetan los internos y tienen como finalidad última
Sol, Re, La y Mi, su interpretación se hace con arco o con ejercer la tensión necesaria para afinar el instrumento.
los dedos. Como se describió anteriormente, es el mecanismo de
La flauta travesera es el instrumento melódico del fibras metálicas que repercuten sobre el parche inferior el
conjunto de chirimía; está hecho con el tallo de un que le proporciona su principal característica tímbrica.
arbusto llamado carrizo y está provisto de un agujero en Mates o guache son instrumentos idiófonos que
la parte superior o cabeza que se denomina embocadura, producen su sonido al ser sacudidos. Son elaborados con
y que sirve para soplar el aire que lo accionará. Su cuerpo dos totumos cortados a la mitad, recubiertos con tela y
tiene una serie de agujeros que se tapan y destapan con la llevan en su interior semillas de achira o maíz.
yema65 de los dedos para obtener los diferentes tonos de La charrasca es un instrumento de percusión,
la escala. Hay que aclarar que a lo largo de toda esta idiófono por fricción, que se elabora con un fruto
región existen muchas variaciones de esta flauta. llamado calabaza o totumo67, el cual es vaciado por
La zampoña siringa, capador o sikusi es un instru- medio de un pequeño agujero. Al estar terminado este
mento indígena tradicional panica66 que es utilizado en proceso, se hacen unos cortes transversales a lo largo del
Nariño y se compone de una serie de dos hileras de siete cuerpo del instrumento, que producen su sonido al
u ocho tubos de bambú o caña de diferentes tamaños, frotarlo con un tridente de metal o madera llamado
cerrados en sus extremos inferiores y unidos por ata- trinche. En el sur del país recibe el nombre de charrasca
duras de hilos de colores, atadas entre sí en forma de y en el centro es llamada guacharaca y se construye de
balsa. Se soplan de manera vertical descendente por los caña.
bordes de los orificios superiores de los tubos y así La esterilla es fabricada con varas de guache de pindo
producen su sonido. o con flautilla de castilla que se cortan de igual tamaño,
El rondador es una especie de zampoña usada en perforándose entre si para poder unirlas con una pita. Se
Nariño, hecho de cañabrava, que posee un buen número toca haciendo fricción entre sus tubos o cañas.
de tubos en orden descendente, unidos por una cuerda los quiribillos se fabrican con un grupo de cañas
llamada “cabuya”. huecas de igual tamaño atadas con cuerdas que las
El pito es una flauta de caña con aeroducto interno en atraviesan longitudinalmente; en los extremos se
forma de bloque de cinco a seis orificios perforados al amarran dejando unas asas para sacudir el conjunto de
fuego. Su longitud aproximada es de veintiséis centí- las cañas.
metros y posee un diámetro de dos centímetros. La pandereta es un Instrumento membranófono, de
El marimacho, quena o quenamacho. Es una flauta origen europeo. Está formado por un aro de madera que
originaria de América del Sur que posee por lo general hace las veces de cuerpo en el que encontramos varios
de cuatro a siete orificios. El material usado para su orificios. En estos últimos se encuentran varias sonajas o
construcción ha sido por tradición la caña, aunque se cascabeles, incrustadas por medio de un vara de metal o
han encontrado de hueso, barro cocido y plumas de madera. El cuerpo está recubierto por un vano de piel de
cóndor. chivo o venado estirado. Se interpreta hiriendo el cuero
La tambora es un instrumento de percusión, mem- con los dedos o con toda la mano.
branófono, elaborado con un tronco de madera hueco La zambumbia. Este tambor de fricción, también
que varía según la región o con tríplex; posee dos parches conocido como marrana, puerca y furruco es un instru-
25 el plan nacional de música

mento membranófono. Está fabricado con un calabazo nivel de comercialización y difusión en Colombia y
recortado que forma la caja de resonancia y va recubierta Venezuela.
con vejiga de vaca. En el centro del cuero y a través de él,
lleva incrustada y asegurada una varilla de madera68. Se Los hombres de los Llanos Orientales están acostum-
interpreta halando la vara de arriba hacia abajo y, de esta brados al caballo, al monte y al cuchillo. Viven de
manera, haciendo vibrar la membrana. apacentar ganado y de marcarlo, de corretear la vida
El chucho. Este es una sonaja tubular, un instru- entre los ríos y las extensas llanuras que se abren al
mento idiófono que se elabora generalmente con ci- oriente de Colombia. Sus voces son templadas, agudas y
lindros de madera, a los cuales se les introducen semillas potentes y animan tanto una jornada de trabajo como el
de mararayes, pipos o tocuas. Su interpretación se descanso necesario después de ella. Los llaneros le
efectúa al sacudirlo rítmicamente. cantan y le han cantado siempre a la vida diaria y por eso
El carángano es una guadua de gran tamaño a la que los temas que les importan han cambiado tanto con el
se le hacen cortes longitudinales los cuales permiten que paso del tiempo. Sus necesidades, en especial en los
quede parte de la misma corteza como cuerdas para ser últimos años, han cambiado.
percutidas con baquetas o vejigas de res infladas y
rellenas con semillas. Movimiento de pueblos
En esta zona, al igual que en las músicas tradicionales La música de los llanos orientales de Colombia ha
de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, también se estado fuertemente influenciada por los movimientos en
emplea la carraca. la población del país. Sacudidos por la violencia, muchos
El triángulo es un instrumento de percusión de habitantes de zonas como Huila, Tolima y el Magdalena
origen europeo. Como su nombre lo indica su forma es Medio, han incorporado nuevos temas al repertorio
triangular y está elaborado con una varilla de acero. Se llanero y modificado las formas tradicionales de subsis-
interpreta sosteniendo el triángulo con algún material tencia. Sin embargo, la salida de muchos pobladores del
como tela o paja que permita la expansión del sonido Llano hacia ciudades como Villavicencio o Bogotá ha
luego de que es golpeado con otra varilla. permitido que la música de esta región se comercialice y
sea difundida no sólo dentro, sino fuera del país.
El arpa es al músico de los Llanos Orientales lo que el
caballo es al llanero que colea y derriba novillos. Es una
Músicas llaneras extensión de sus cualidades, un artefacto que sin im-
portar su tamaño debe trasladar consigo a donde vaya y
E l arpa y la vida a la
al que le arranca notas que exteriorizan su más hondo
intemperie : un contrapunto
sentir. A ella se suma la voz, que expresa en un lamento
Cuando las lluvias se esconden y le ceden paso a las prolongado y festivo las vicisitudes de su vida en el
brutales sequías bajo las que el territorio de los Llanos monte y fuera de él.
Orientales se ha forjado, el hombre llanero organiza El arpa fue un instrumento introducido por los
un joropo para alumbrar a un santo. Hay bebida, españoles en los siglos xvii y xviii. Se popularizó en el
baile, música de arpa y maraca, carne en abundancia Llano en la primera mitad del siglo xx, aunque durante
y familia. Se le pide al santo que envíe lluvias, y se el siglo xviii, la población mestiza recibió instrucción
bebe y se baila en su nombre. Todos los parientes, musical de los misioneros jesuitas, quienes introdujeron
trabajadores y llaneros del hato que organiza el el arpa en sus repertorios de música religiosa. Antes de
parrando se hacen presentes, y el joropo, animado ella los aires propios de la región se interpretaban con
incansablemente por el arpa y los capachos se puede otros instrumentos centrales como el bandolín, el
extender tres días con sus noches. requinto, el guitarrón, la vihuela y la sirrampla, pero la
El llanero no sólo canta, también recita y declama situación comenzó a cambiar con la llegada de Arturo
pasajes, corridos y poemas. El arpista es virtuoso y se Lamuño, quien a partir de 1925 comenzó a enseñar a los
entrega con una concentración a toda prueba a la pobladores de los llanos el manejo del arpa.
interpretación de su instrumento, lo que ha llevado a La improvisación al cantar hechos de la vida coti-
que el joropo haya alcanzado en los últimos años un alto diana, de las jornadas de trabajo y de acontecimientos
el plan nacional de música 26

importantes, se hace en forma de coplas y es una de las corresponde en la notación tradicional a las notas de si,
manifestaciones musicales que tienen mayor relevancia. fa#, re y la (B, F#, D y A. )
Los intérpretes son acompañados por músicos y recitan La bandola llanera proviene directamente de la
al pueblo con habilidad y humor cuando lo hay, pero guitarra renacentista española. Se compone de cuatro
siempre con un hondo sentimiento sobre el ideal de la cuerdas y su afinación es variable aunque la más genera-
vida y sus necesidades. Esta improvisación da paso a una lizada, denominada natural de bandola es, de agudo a
expresión propia de los llanos: el contrapunteo, en el que grave: Mi, La, Re y La. Posee un mango de diez trastes:
dos vocalistas se alternan al cantar sus coplas, impri- ocho en el diapasón y dos en la tapa. Es fabricada de
miéndole su ingenio a la continuación de la copla dejada alguno o varios de los siguientes materiales: pino abeto,
por su interlocutor. Cuando el centro de la música es el palisandro (Palo Santo de la India), ébano o cedro.
arpa ésta se acompaña por el cuatro y las maracas. Existe también una bandola marcante llamada pin pon
La vida en el llano es cruda, y los veranos son tan que sólo tiene tres cuerdas.
intensos como la temporada de lluvias; por eso resulta El bandolín, es un cordófono derivado de la man-
impactante la confabulación que se da entre un instru- dolina o del tiple requinto santandereano; se afina con la
mento como el arpa, que en principio fue empleado para misma relación interválica de la bandola llanera, pero
interpretar música religiosa, y la voz y el sentimiento de dependiendo de su tamaño, varían los sonidos reales.
hombres que se enfrentan a diario con las inclemencias Tiene cuatro órdenes dobles. , mi, la, re, y sol
del medio ambiente. El guitarro, también conocido como el tiple común
En esta región podemos encontrar que la música gira en la región andina, es utilizado melódica o armónica-
alrededor de un instrumento llamado líder o melódico mente.
(arpa, bandola, bandolín o guitarra) y dos instrumentos Los capachos o maracas son los únicos idiófonos75u-
acompañantes que generalmente son el cuatro y las tilizados en la música que prevalece en esta región. La
maracas, que popularmente son reconocidas como fabricación de las maracas esféricas u ovoides, se lleva a
capachos69. cabo con dos76 calabazos secos, que llevan dentro una
El arpa es un instrumento cordófono compuesto, casi diferente cantidad de semillas secas de capacho, para
siempre construido en cedro aunque su madera puede obtener distintos sonidos. Existen dos tipos, las denomi-
variar, siempre y cuando sea resistente y duradera. La nadas macho y las hembras. Cascabel, cascabelina o
más usada en la música de esta región es la conocida cunchas.
como arpa de marco diatónico, heredada de los jesuitas. La sirrampla es un arco musical constituido por una
”Este instrumento fue muy utilizado en todo el terri- caña con una cuerda y una clavija para tensionarla77; su
torio hispanoamericano durante los siglos xvii y xviii sonido varía al acortar la distancia vibrante de la cuerda
como instrumento solista y armónico tanto en la música y al modificar la posición bucal que sirve de caja de
religiosa como en la profana. Posteriormente, durante el resonancia.
siglo xviii, se consolidó como el instrumento principal El furruco es un instrumento usado para marcar los
de varios géneros de música regional tradicional latinoa- bajos en sus canciones. Las partes que integran este
mericana70” instrumento son: Un cilindro de madera hueco en los
El cuatro71 tiene una caja de resonancia y se interpreta extremos y en uno de ellos recubierto con piel de algún
mediante el rasgueo y pulsación digital en el mango;72 es equino o bovino78. Una barra de caña brava, recubierta
más corto y pequeño que la guitarra, de donde pro- de cera de abeja, clavada o insertada en la mitad del
viene73. Posee cuatro cuerdas que en sus comienzos eran cuero que al ser presionada hacia abajo o hacia arriba
de tripa y ahora son de plástico, que vienen atadas al produce un sonido muy grave. Los tonos de este instru-
puente y salen directamente al clavijero mecánico. El mento varían de acuerdo a la presión que se ejerza sobre
diapasón se extiende sobre la mitad de la tapa frontal en la vara, la rapidez con la que entre, la profundidad que
una misma placa de madera, de corte muy fino que casi alcance y otras variables que hacen muy complicada su
siempre posee figuras decorativas o chapillas en la interpretación.
mediatapa, que lo protegen de las uñas ya que es un Carlos Rojas, músico de la región que asesora el eje
instrumento que se interpreta por medio del rasgueo74 para el Plan Nacional de Música para la Convivencia ha
recio. Su afinación de agudo a grave por cada cuerda dedicado la mayor parte de su vida a trabajar por la
27 el plan nacional de música

identidad musical de los llanos y por la perfección en su


interpretación del arpa; en alguna ocasión encontró a un
hombre de la calle que definió para él las músicas tradi-
cionales de los Llanos Orientales de Colombia:
En 1989 contacté algunos músicos que tenían expe-
riencia en los cantos de velorio para hacer un trabajo con
ellos. Estaba en Arauca, en el casco urbano, y durante el
proceso de la entrevistas para establecer una génesis del
joropo me topé con un zorrero, un hombre que conducía
un carro e’ burro y que además era un excelente ejecu-
tante de cuatro, aunque sin ninguna formación aca-
démica en el asunto. La información que me dio cuando
le pregunté lo que él conocía sobre música araucana fue
valiosa y lapidaria. El hombre me dijo: «nosotros aquí
tenemos cantos de ganado, música de santos y sones de Santander como en los Llanos Orientales y en La
parranda». Lo que quería decir era que tenían tonadas Guajira, del Tapón del Darién en el que Panamá y
de labor, asociadas al trabajo en el Llano; lo que el llamó Colombia se funden, de lugares como Puerto Le-
música de santos no es otra cosa que tonos y cifras de guízamo, Mitú, Inírida, Iquitos o Tulcán en Ecuador.
velorio, que perviven desde el medioevo traídas por los Su riqueza y supervivencia dependen de las idas y
españoles y que se han asociado siempre a cultos de vueltas por fronteras en las que los límites territoriales
santos y tradiciones religiosas. Finalmente los sones de se entrecruzan por la música.
parranda, el mismo joropo, que conocemos hoy como
música bailable llanera. Juan Galea, ese zorrero, hizo en El devenir caracteriza al arte, y la música, como
ese momento la definición musicológica más precisa de expresión artística es un documento vivo que suena sin
la que yo haya tenido noticia en el llano. detenerse a lo largo del cambio, que es permanente. Las
fronteras de Colombia, establecidas sobre un territorio
que antaño compartían las etnias indígenas precolom-
Músicas de frontera binas, son testigos móviles de ese devenir. Los ríos, que
siempre han facilitado la división de zonas geográficas,
L a identidad nace
son el conducto mediante el cual esas fronteras se
de la diferencia
mantienen vigentes y activas, como referente de los
Forró, bailôes, samba, marchas, dobrados, batuques y países que los circundan. El Amazonas, el río mar de
xotes del Brasil, mixtianas marineras, valses criollos y más de seis mil trescientos kilómetros de longitud que
hwaynos del Perú, y bambucos, joropos y pasillos desemboca en el Océano Atlántico, fluye permitiendo
colombianos se sumaron a las músicas traídas por los que el devenir de la música discurra sobre él, en contravía
habitantes de la costa Caribe colombiana, que fueron o impulsado por la corriente, pero siempre cargado con
trasladados a la Amazonía por sus conocimientos en la novedad que va y viene desde los puertos fluviales del
marinería cuando fue necesario custodiar las aguas Brasil, de Colombia o de Perú, los tres países que do-
fluviales territoriales del país muy cerca de la mitad del minan sus riberas.
siglo xx. El resultado fue una mixtura riquísima ¿Cómo establecer cuáles son las músicas tradicionales
musicalmente, en la que hoy predominan géneros como de frontera en un país que tiene más de tres mil kiló-
la lambada o el carimbó, e incluso como el porrosamba, metros de líneas divisorias sólo con Perú y Brasil? Si se
conocido por los habitantes de la zona como “porsam”. tuviera en cuenta únicamente el Amazonas, frontera
Las músicas tradicionales de frontera del territorio natural que divide a Colombia de Perú en tan sólo un
colombiano se alimentan de la variedad lingüística y centenar de kilómetros, habría que decir que las músicas
racial, de nuevos ritmos que se replican desde puertos que transitan el río se alimentan de fuentes tan diversas
como Manaos y Leticia en la cuenca amazónica, de las que encuentran su origen y difusión en la ciudad de
zonas que limitan con Venezuela, tanto en el Norte de Belem do Pará, casi en la desembocadura sobre el
el plan nacional de música 28

Atlántico, o de Iquitos, ubicada cinco mil kilómetros culturas que se han arraigado en el territorio y/o la
atrás, en el interior del continente, en pleno territorio cultura y que actualmente son interpretados. Lo que se
peruano; que todas las etnias asentadas en las riberas encuentra son instrumentos indígenas, que son uno de
han regalado su cuota musical a la vertiente del río, y que los factores de fusión de los instrumentos tradicionales.
portugueses y españoles regaron con sus tradiciones
musicales durante más de trescientos años las mismas
aguas. Notas
Las músicas que hoy existen en la región sólo pueden 1 Desde el Estado se han formu lado lineamientos de política
revisarse desde la comprensión de un territorio que para el fomento de la música a través de los Conpes 2961
trasciende las fronteras, y que no es otro que el de la vasta de 1997: Autorización a la Nación-Ministerio de Cultura
para contratar un crédito externo destinado a financiar
cuenca del Amazonas, con todos los tributarios que en él
el proyecto de bandas; 3134 de 2001: Plan Colombia:
desembocan y con las ciudades que, como Manaos, se Infraestructura Social y Gestión Comunitaria; 3191 de
originaron en su orilla. Estos centros, que tuvieron su 2002: Fortalecimiento del Programa Nacional de Bandas;
desarrollo a partir de la explotación del caucho durante y 3208 de 2002: Lineamientos para una política de la
el siglo xviii, recogen las músicas que trae el río Negro Música Sinfónica en Colombia.
desde el norte y las replican hacia Colombia y hacia el 2 Al igual que la lengua, el cuerpo, la comida y el territorio,
sur de Brasil. También desde los múltiples movimientos la música es un elemento fundamental de los grupos
migratorios que han llevado habitantes de regiones de sociales para pensarse frente a otros grupos en contextos
nacionales, transnacionales o locales.
Colombia como el Tolima, el Huila, los Llanos Orien-
3 ochoa, Ana María, Tradición, Género y Nación en El
tales, Antioquia y el Putumayo, quienes, a su vez,
Bambuco. En A Contratiempo No. 9. p 35 ss. Ministerio de
enriquecen permanentemente el caudal de estas músicas. Cultura, Bogotá: 1997.
Forró, bailôes, samba, marchas, dobrados, batuques y 4 romero Ómar, rojas Carlos y valencia Victoriano,
xotes del Brasil, mixtianas marineras, valses criollos y Escuelas de Música Tradicional. Documento sin editar.
hwaynos del Perú, y bambucos, joropos y pasillos colom- Ministerio de Cultura. Bogotá : 2003. 30 páginas.
bianos se sumaron a las músicas traídas por los habi- 5 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
tantes de la costa Caribe colombiana, que fueron instrument/cordo. htm 1:46pm del 6 de julio de 2005.
trasladados a la Amazonía por sus conocimientos en 6 Es el cuerpo del instrumento, aquella parte que permite la
marinería cuando fue necesario custodiar las aguas amplificación del sonido.
fluviales territoriales del país, muy cerca de la mitad del 7 Lugar donde llegan las cuerdas para ser estiradas y obtener
siglo xx. El resultado fue una mixtura musical, en la que la afinación deseada.
hoy predominan géneros como la lambada o el carimbó, 8 Esto se conoce como cuatro (4) órdenes de cuerdas.
e incluso como el porrosamba, conocido por los habi- 9 Abadía morales, Guillermo, Instrumentos Musicales de
tantes de la zona como porsam. Colombia, Fundación Bogotá Colombia, Bogotá, 2003
Las músicas tradicionales de frontera del territorio 10 La caja es aquella parte del instrumento que permite su
colombiano se alimentan de la variedad lingüística y amplificación.
racial, de nuevos ritmos que se replican desde puertos 11 Cifrado musical occidental.
como Manaos y Leticia en la cuenca amazónica, de las 12 Es un bajo acústico de una sola cuerda.
zonas que limitan con Venezuela, tanto en el Norte de 13 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
Santander como en los Llanos Orientales y en La instrument/cordo. htm 1:56om del 6 de julio de 2005.
Guajira, del Tapón del Darién en el que Panamá y 14 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
Colombia se funden, de lugares como Puerto Le- instrument/idio. htm 2:08 del 6 de julio de 2005.
guízamo, Mitú, Inírida, Iquitos o Tulcán en Ecuador. 15 Esporádicamente.
Son músicas indefinibles. Su riqueza y supervivencia 16 Generalmente cuero y se apodan parches.
dependen de las idas y vueltas por fronteras en las que los 17 abello, Margarita, Manifestaciones del carnaval de
límites territoriales se entrecruzan por la música. Barranquilla, Bogotá, Tesis de grado, Universidad de los
andes, 1981.
En esta zona podemos encontrar básicamente que no
existen instrumentos tradicionales como tal, ya que estos 18 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
instrument/aero. htm 8:59pm del 5 de julio de 2005.
son el producto histórico de un cúmulo de eventos y
29 el plan nacional de música

19 Que llega a Colombia a finales del siglo xviii. instrument/membra. htm 3:06 am del 6 de julio de 2005.
20 http://www. elvallenato. com/articulo. php?not=184&mas 46 Es el más alto.
=Historia%20del%20Acorde%C3%B3n%20en%20el%20fol 47 Se cree en la región que no es lo mismo poner una tapa con
clor%20Vallenato 9:39pm del 6 de julio de 2005. una ranura.
21 Al individuo que toca o interpreta la caja se le conoce como 48 Música tradicional y popular de Colombia, Procultura,
cajista. fascículo 12.
22 El sistema de tensión en los membráfonos es la forma en 49 Desde comunidades indígenas como los paeces, hasta
la que se estira la membrana para encontrar diferentes el centro urbano de mayor importancia administrativo-
tonalidades. político-organizacional del país.
23 De tornillo. 50 Usada como método de promoción o publicidad en el
24 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ proceso de catequización del país.
instrument/idio. htm 9:12pm del 5 de julio de 2005. 51 bermúdez, Egberto, El bambuco: La invención de la
25 francisco zea, Lucía de, Vallenato, hombre y canto, música nacional Colombiana 1829-1860, ms. inédito,
Colcultura. Bogotá, 2000.
26 O el tronco de una planta conocida como “uvita de lata”. 52 davidson, Harry, Diccionario folklórico de Colombia.
27 Realmente son tres varas de metal muy finas unidas por un Música instrumentos y danzas, Banco de la Republica,
mango común. Bogotá, 1970, 3 vols.
28 http://www. kuba-cuba. com/diccionario. htm 9:59pm del 53 Ya se mencionó arriba que el pasillo también tiene gran
6 de julio de 2005. vigencia en otras regiones del país como el Pacífico Norte
y San Andrés y Providencia. también ha sido considerado
29 bermúdez, Egberto, Los instrumentos musicales en
por muchos el género “nacional” de Ecuador. En Venezuela
Colombia, Universidad Nacional, Centro Editorial, Bogotá,
existe con la denominación de “vals venezolano”
1985.
conservndo las mismas características rítmicas y
30 Aunque antiguamente lo hacían de caña. acentuales.
31 De acuerdo a su tamaño. 54 http://members. tripod. com. co/nogalorquesta/cont/
32 Aunque la función técnica del hoyuelo en el instrumento recursos/instrumentos. htm 8:37pm julio 1º
es permitir la expulsión del aire y de esta forma mejorar su 55 Si no se llama “bandola colombiana”, se debe a que
sonido. también existe en nuestro país la bandola llanera, que
33 Es un cactus. como su nombre lo indica, se toca y se ha desarrollado
34 En algunas regiones, como Sucre y Córdoba se fabrica en los llanos orientales de Colombia y occidentales de
también de metal o plástico (pvc). Venezuela principalmente. Sin embargo, a pesar de las
similitudes es un instrumento bien diferenciado de la
35 Que se clasifica como corno con válvulas.
Bandola Andina Colombiana.
36 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
56 añez, Jorge, 1982-1952 Canciones y recuerdos: Conceptos
instrument/membra. htm 11:17pm del 5 de julio de 2005.
acerca del origen del bambuco y de nuestros instrumentos típicos
37 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ y sobre la evolución de la canción Colombiana a través de sus
instrument/membra. htm 11:17pm del 5 de julio de 2005. afortunados compositores e interpretes, Ediciones Mundial,
38 Se clasifica, según algunos autores, como un instrumento Bogotá, 1968.
de percusión con placas. 57 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
39 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ instrument/cordo. htm 8:17 pm del 4 de julio de 2005
instrument/idio. htm 11:43pm del 5 de julio de 2005. 58 Llevado a cabo por Pedro Morales Pino y Luís Fernando
40 Lo que los diferencia son su tamaño. El más grande es la León.
hembra. 59 Realizada por Diego Estrada hacia 1961.
41 colcultura, Descripción de los instrumentos 60 bermúdez, Egberto, El bambuco: La invención de la música
folclóricos. nacional Colombiana 1829-1860, Ms Inédito, Bogotá, 2000.
42 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ 61 http://www. cui. edu. co/museo/cuatro. php
instrument/membra. htm 3:06 am del 6 de julio de 2005.
62 Se dice “generalmente” ya que esto depende mucho del
43 Si no se encuentra uno hueco se perfora y pule. gusto del artista ya que las madreas duras producen
44 Que es el parche más resistente, razón por la cual se toca sonidos brillantes y las blandas lo contrario.
por ese lado. El otro parche, dicen los habitantes de la 63 Este se puede sobreponer a la superficie del instrumento y
región, encierra la voz del bombo. atornillarse al mismo o incrustarse en su rabiza.
45 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/
el plan nacional de música 30
64 miñana blasco, Carlos, Música campesina de flautas y BIBLIOGRAFíA
tambores en el Cauca y Sur del Huila, Mimeo, 1989, 210
páginas.
65 colcultura, Instrumentos musicales folklóricos. aa.vv. Reglamento de la Sociedad Unión Musical, Bogotá,
66 En honor al dios Pan, iku o antara. Imprenta de la Nación, 1958.
67 Que se da en clima calido. a ba dí a mor a les, Guillermo, Instrumentos musicales de
Colombia, Fundación Bogotá Colombia, Bogotá, 2003.
68 bermúdez, Egberto, El bambuco: La invención de la música
nacional Colombiana 1829-1860, Ms Inédito, Bogotá, 2000. abello, Margarita. Manifestaciones del Carnaval de
Barranquilla, Bogotá, Tesis de grado, Universidad de los
69 cortés, Jaime, La música nacional y popular en Colombia
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1924-38, Tesis de Maestría, Universidad Nacional de
agudelo, Alejandro. Lecciones de Música. Precedidas de una
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Artes, 2000.
1858.
70 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ Archivo Central del Cauca, Popayán, Expediente 96-98, Col.
instrument/cordo/24-ins. htm 1:22am del 7 de julio de iii-21 dt.
2005. a ñ ez , Jorge. 1982-1952 Canciones y recuerdos: Conceptos acerca
71 Instrumento nacional venezolano y usado en los llanos del origen del bambuco y de nuestros instrumentos típicos y
orientales Colombianos. sobre la evolución de la canción colombiana a través de sus
72 bermúdez, Egberto, Los instrumentos musicales en afortunados compositores e interpretes, Ediciones Mundial,
Colombia, Universidad Nacional, Centro Editorial, Bogotá, Bogotá, 1968.
1985. bedoya sá nchez, Samuel. Regiones musicales y campesinas.
Propuesta para la investigación interregional integrada,
73 Entre otros como el timple canario y el ukelele hawaiano.
ponencia presentada al primer foro taller nacional de música y
74 http://www. cui. edu. co/museo/cuatro. php 8:05pm del danza campesinas de Boyacá y sus regiones de interfluencia.
julio de 2005. Tunja, mayo de 1985.
75 http://www. banrep. gov. co/blaavirtual/letra-i/ ber mú dez , Egberto. Historia de la música vs. historias de los
instrument/idio. htm 8:33pm del 5 de julio de 2005. músicos, Revista Universidad Nacional, Segunda Serie, i, 3,
76 Generalmente uno es mas pequeño que el otro. 1985.
77 bermúdez, Egberto, Los instrumentos musicales en ber mú dez , Egberto. Los instrumentos musicales en
Colombia, Universidad Nacional, Centro Editorial, Bogotá, Colombia, Universidad Nacional, Centro Editorial, Bogotá,
1985. 1985.
ber mú dez , Egberto. Historia de la música en Colombia:
78 Tradicionalmente fue con piel de venado. Música indígena, tradicional y cultura musical durante el
periodo colonial siglos xvi-xviii, ms. inédito, Bogotá,
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mi ña na bl asco, Carlos. Kuvi. Música de flautas entre los
paeces, Informes Antropológicos - Revista del Instituto
el plan nacional de música 32
El Plan Nacional de Música para la Convivencia, inspirado en el
valor de la música para construir nación, busca aportar a la
valoración y promoción de la diversidad cultural expresada en la
música, mediante el fomento de las prácticas colectivas de las
orquestas infantiles y juveniles, las bandas de viento, los coros y
las agrupaciones de músicas tradicionales que vibran al son de la
tierra. Cada una de estas prácticas posibilita el diálogo y la
interacción entre las culturas, engrandece nuestro patrimonio
cultural, expresa nuestras identidades, interpreta nuestra aspira-
ciones más profundas, promueve el pluralismo, contribuye a la
convivencia y llena de alegría nuestro paso por el mundo.

Al son de la tierra busca celebrar la diversidad de nuestras mú-


sicas tradicionales, mantenida de generación en generación,
transmitida con sabiduría y generosidad por nuestros creadores,
enriquecida por millares de jóvenes que hoy reinventan nuestras
músicas, enraizados en tradiciones que permanecen vivas, que
evolucionan, que se fusionan con otras músicas y renuevan, cada
vez con más vigor, nuestras memorias e identidades.

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