Está en la página 1de 2

La influencia de la luna llena en los gatos

Nuestros peludos son muy influenciables con la luna llena hasta el punto de alterar su estado
anímico. Los gatos, muy en especial, se sienten más alocados y deambulando como verdaderos
zombies cuando hay luna llena. La fuerza de la luna sobre los felinos es muy potente y puede
incluso llevarles a variar sus hábitos durante el tiempo que dura su influjo.

Realmente no está nada probado que los gatos se sientan influenciados realmente por la luna
llena, más bien se trata de datos sin constatar. Sin embargo, cuando los médicos del Bradford
Roya Infirmary, en el norte de Inglaterra, examinaron dos años de registros médicos, encontraron
el doble de pacientes ingresados por ataques de gatos cuando había luna llena que cuando había
luna nueva.

Aunque la ciencia no haya encontrado datos convincentes para determinados comportamientos


de los gatos en las noches de luna llena, muchas son las personas que no ponen en duda que sus
peludos (muy especialmente los perros y gatos) poseen capacidades perceptivas extraordinarias
que se ven afectadas por el poderoso influjo de la luna.

Realmente todo se deba a los mitos ancestrales que aseguran que los ciclos lunares influyen sobre
la conducta de nuestros amigos de cuatro patas, datos que nos remontan a la época de los griegos
clásicos. Desde entonces relacionan los comportamientos de los felinos extraños (y más animales)
con las personas.

ambién puede suceder que simplemente coincidan los cambios de comportamiento de los gatos
cuando hay cambio de ciclo lunar, realmente incluso a los humanos se les achacan cambios de
comportamientos con la luna, por lo tanto, nada puede hacernos pensar que no sean ciertas las
teorías, aunque no tengan una base científica.
¿Cómo les afecta la luna llena a los gatos?

Bueno, no a todos los gatos les afecta, ni en el mismo grado. Pero los que sí experimentan algún
cambio pueden volverse por ejemplo más curiosos. Hay que saber que estos animales tienen de
por sí mucha curiosidad, por todo y por todos los que les rodean; sin embargo, durante esos días
en los que la luna es llena pueden ser aún más curiosos, tanto, que tendremos que estar más
alerta a los posibles peligros que traigamos a la vivienda o que ya tengamos en ella, como
productos de limpieza, objetos punzantes, cintas o similares, etc.

Otra cosa que podemos detectar es que se vuelven algo irritables, pudiendo volverse agresivos. De
ocurrir, simplemente lo que tenemos que hacer es procurar jugar con ellos para que descarguen
toda su energía, siempre haciendo movimientos sutiles, evitando las brusquedades y los ruidos
fuertes. Por esos ratos, debemos de convertir el juguete -pelota, cuerda, peluche- en una presa, y
hacer que se ‘comporte’ como tal.

También podría gustarte