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Guy de Maupassant
la funesta personalidad de los burgueses a lo largo de este escrito, al igual que su afán de mostrar
la realidad bélica que se presentaba entre los prusianos y los franceses, mostrando así un
decaimiento bastante abrumador de una sociedad que en tiempos anteriores era símbolo de
La historia inicia con los sucesos del triunfo de los prusianos contra los franceses,
mientras que los primeros disfrutaban de su poderío masacrando a quien les fuera posible con tal
pérdida de su Francia excelsa e ilustre, deciden recorrer desde Rouen hasta el puerto de Dieppe,
con tal de conseguir algo de paz en medio de los truculentos sucesos de los enardecidos
prusianos.
A los prusianos no les interesa generar miedo con tal de conseguir lo que desean y
mostrando su poder. De alguna u otra manera los burgueses son como los segundos prusianos
pues a estos no les interesa mostrar una cara amable con tal de conseguir lo que desean para
Una gran parte de la historia se desarrolla en el carruaje que de Rouen se dirige al puerto de
Dippe, en este se encuentra la protagonista de tan suntuosa obra francesa, Bola de Sebo, una
mujer con una obesidad precoz, meretriz y a su vez la más inteligente de los individuos dentro
del carruaje pues es la única que llevaba comida en un canasto. En los demás personajes se
encuentran:
Dos monjas
Cornudet fiero
Estos personajes son indiferentes ante la presencia de Elisabeth Rousset “Bola de Sebo”
hasta que se dan cuenta de su comida y la comienzan a incluir en sus conversaciones con tal de ir
tomando poco a poco los productos de su conasta. Al caer la noche pernoctan en el Hotel del
Comercio, en donde el general prusiano a cargo hace una indecente propuesta ante los burgueses
y sobre todo a Bola de Sebo, en donde enuncia que podrán salir al día siguiente de él haber
estado con Elisabeth, a lo que Bola se Sebo, de primeras, se niega sin embargo las artes de
persuasión que los deplorables burgueses tienen entran en acción hasta el punto de convencer a
Rousset para estar con el general y así seguir su camino. Sin más remedio ella acepta y concede
A la mañana siguiente continua con el recorrido y pese al gran sacrificio que hizo la
protagonista, los demás personajes la señalan como pecadora sabiendo que lo hizo por todos y no
solo por ella. Comienza a llorar y los indolentes personajes secundarios dan como causa del
Bola de Sebo enseña lo manso que puede ser el humano en casos difíciles con tal de salvar su
su vida y su entorno. De igual manera da a conocer que pocos o nadie van a agradecer los
sacrificios que haces por ellos, pues se pierden rápidamente en la memoria de aquellos que salen