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ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE IBAGUE

CIENCIAS SOCIALES

GRADO OCTAVO

LAS EXPLORACIONES GEOGRAFICAS ABREN EL CAMINO A LA


EXPANSION COLONIAL Y LAS FORMAS DE DOMINIO EN AFRICA, SU
REPARTICION

DESEMPEÑO: Analiza las exploraciones imperialistas en el siglo XIX , al igual que


la repartición de África por parte de países europeos, determinando su incidencia
en la organización socio-política.

NOMBRE DEL ESTUDIANTE _________________________________________

Existieron diversas formas de dominio, ya lo habíamos visto, como eran las


colonias, protectorados y concesiones. Las colonias eran aquellos lugares
sometidos totalmente a la soberanía de la potencia. Los protectorados
mantenían su administración interna, mientras que el país dominante controlaba la
política externa y la explotación de determinadas riquezas. Las concesiones
permitían mantener la independencia de los territorios a cambio de algunas
licencias, tales como la cesión de puertos, la ocupación de lugares estratégicos,
explotación de recursos, entre otras.
Las potencias europeas presentaban profundas diferencias entre ellas. Inglaterra,
Francia y Alemania, por ejemplo, eran naciones consideradas desarrolladas ya
que habían logrado llevar a cabo el proceso de industrialización. Mientras que
países como España, Italia, Portugal, Rusia o Austria-Hungría, presentaban
débiles economías, dependientes de la agricultura. Este fue uno de los motivos
por lo que las potencias desarrolladas lograron conquistar mayor cantidad de
territorios que las que no lo eran. Es así como Inglaterra y Francia se
constituyeron como las principales naciones europeas del siglo, disputándose la
supremacía del mundo. Estados Unidos y Japón impulsaron también su expansión
imperial. El proceso de colonización llevado a cabo por las potencias occidentales
en África y Asia no estuvo exento de problemas, ya que incluso generó conflictos
bélicos entre naciones europeas. Los numerosos intereses puestos en la región
llevaron al canciller alemán Otto von Bismarck, con el apoyo de Francia, a
convocar la Conferencia de Berlín, entre 1884 y 1885, para dirimir las rivalidades
entre las potencias coloniales y establecer las bases de la ocupación en el
continente africano. Entre las medidas adoptadas por la Conferencia se encuentra
el establecimiento del derecho que tenía un país que habitaba las costas de un
territorio para ocupar su interior, la determinación del libre tránsito por los ríos
africanos, y la prohibición de la comercialización de esclavos. A finales del siglo
XIX, prácticamente todo el continente africano se encontraba en poder de alguna
potencia europea. La dominación europea en África no solo fue política y
económica, sino, además, cultural.

LAS EXPLORACIONES GEOGRAFICAS ABREN EL CAMINO A LA


EXPANSION COLONIAL

En el contexto del gran desarrollo económico, científico y tecnológico que


experimentó Europa especialmente durante la segunda mitad del siglo XIX, se
generó un considerable interés por impulsar exploraciones geográficas que
permitieran conocer aquellas partes del planeta que permanecían ignoradas para
el europeo.

Fue así como se organizaron innumerables


sociedades científica que impulsaron una serie de
viajes exploratorios. Las regiones más visitadas
correspondieron a Asia y, especialmente, al África,
de la cual se conocían principalmente sus fajas
costeras. También revistieron mucho interés las
exploraciones realizadas por el polo. En 1909
Peary logró llegar al polo norte y tres años más
tarde Amundsen hacía lo propio en el polo sur. La
gran importancia de las exploraciones geográficas
citadas, así como también de otras de menor
repercusión, radicó en el hecho de que los exploradores prepararon el camino a
las empresas comerciales, a los Estados y a los ejércitos de los países europeos
en proceso de expansión, los que así veían facilitada su labor de incorporar dichos
territorios como áreas de dominación colonial.
En Asia, el proceso de colonización presentó mayores dificultades para las
potencias europeas, en comparación con el caso africano. Primero, la resistencia
fue mayor, porque el nivel de desarrollo de algunos países también lo era como el
caso de China. A su vez, las milenarias culturas del continente asiático
despertaban en los colonizadores un cierto respeto. De este modo, a diferencia de
África, la ocupación en gran parte de Asia fue política y económica, manteniendo
la autonomía cultural.
REPARTO COLONIAL DE AFRICA

El reparto colonial de África por las potencias europeas fue el producto


del imperialismo generado tras la revolución industrial a fines del siglo XVIII.
El reparto y apropiación de las tierras africanas se hizo, al principio en desorden,
y luego, al finalizar el siglo XIX, arbitrariamente.

EXPLORACIÓN
Las exploraciones se llevaron a cabo debido a la acción de las sociedades
integradas por pocos, pero selectos miembros, como la African Association, la
Real Sociedad Geográfica de Londres, o la de París.

La exploración siguió siendo durante mucho tiempo patrimonio de las viejas


naciones coloniales.
Portugal tomó la iniciativa en el África austral y central, cuando la instalación de
los ingleses en El Cabo (1795) le hizo temer una intrusión en sus posesiones
litorales de Angola y Mozambique. Al mismo tiempo comenzó la exploración de la
cuenca de río Níger y de la región central de Sudán.
Las expediciones alemanas vinieron a continuar, en la segunda mitad del siglo,
las exploraciones británicas. Reconocieron la región comprendida entre el Níger y
el Chad. Más tarde, entre 1860 1875 otros viajes se orientaron más hacia el
Sahara y el Sudán oriental.
Poco antes de 1850, el doctor Krapf exploró la región de los montes Kilimanjaro y
Kenia, y se multiplicaron varios viajes ingleses para explorar la zona de los
grandes lagos, y el origen del río Nilo.
Más hacia el sur, Livingstone atravesó el África austral, y exploró largamente la
región antes de morir. Su viajes comenzaron a interesar al gran público europeo.
Un periódico contrató al periodista Stanley para buscar a Livingstone, a quien
finalmente halló, no sin antes confirmar que el Nilo se originaba en lo que ellos
llamaron el lago Victoria. Además, siguió explorando la región del Congo.
Cataratas Victoria, las más grandes del mundo, exploradas por Livingstone
OCUPACIÓN
Pero una vez que se hubo saciando la curiosidad europea respecto a la geografía
de África, comenzaron los primeros intentos políticos por colonizar la nueva tierra
explorada.
En 1877, Stanley se puso al servicio del rey Leopoldo II de Bélgica, y con el
tiempo formaron la idea de un estado africano en la cuenca del Congo, del cual
Leopoldo sería soberano.
Esta iniciativa suscitó la desconfianza de Inglaterra, y todavía más de Francia,
que acababa de encomendar la exploración, tras su larga presencia en las costas
de Senegal y Gabón.
Así se pasó, sin transición, de la era de los viajes a la de las rivalidades
territoriales entre las potencias europeas.

En la década de 1860, la ocupación del interior dio sus primeros pasos en el oeste
del África negra.
Los ingleses habían creado desde comienzos de siglo dos colonias oficiales: 
Sierra Leona en 1808, y Gambia, en 1816. Pero en torno a la tercera, Costa de
Oro, la colonización comenzó a expandirse lentamente.
Los colonizadores comenzaron a intervenir en los asuntos internos de las
confederaciones tribales africanas, anexando regiones y pueblos.
Además, los comerciantes ingleses comenzaron a sustituir a los locales de la
organizar a su conveniencia el circuito de los productos.

En África central, la situación fue haciéndose cada vez más tensa. Leopoldo


II mantenía sus ambiciones colonialistas, y Francia impuso su protectorado al
mismo tiempo al rey de Túnez.
Mientras tanto, Inglaterra intervenía en Egipto, y Alemania en el África tropical,
ecuatorial y Austral.

REPARTO
Esta situación provocó la necesidad de los países imperialistas europeos de llegar
a acuerdos para evitar una guerra por las nuevas tierras que se apropiaron.

En 1885, se convocó en Berlín una conferencia internacional que logró diferir los


conflictos entre las diversas potencias, aunque imponiendo el arbitraje alemán (y
la conducción de Bismark), tanto en las colonias como en Europa.
La costa mediterránea africana quedó en manos de Francia y el Reino Unido. La
costa oriental se dividió entre los alemanes al sur y los británicos al norte. La costa
occidental africana quedó en poder de los belgas, franceses y británicos.
Los españoles se hicieron con el Sáhara Occidental, los italianos consiguieron
Somalia y los portugueses extendieron o afianzaron su control sobre Angola, Cabo
Verde y Guinea-Bissau, Santo Tomé y Príncipe y Mozambique mientras
los alemanes obtienen Namibia.
Si bien los europeos evitaron por algunos años (hasta 1914) entrar en una  guerra,
las poblaciones y culturas nativas de África fueron totalmente desestructuradas,
cuando no aniquiladas, por la intervención imperialista y la intrusión de sus
gobiernos y economías.

ACTIVIDAD COMPLEMENTARIA

1. Explica la imagen teniendo en cuenta la dominación y repartición de África.

2. Explica cada palabra resaltada con rojo estableciendo la relación con el


tema trabajado en la guía.
3. Elabora el mapa de la repartición imperialista de África, ubica en los los
lugares mencionados en la guía.
4. Elabore un dibujo donde muestre la diferencia entre protectorado y
colonialismo.

NOTA: EL TRABAJO DEBE SER ELABORADO A MANO

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