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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERIA QUIMICA

INGENIERIA DE BIOPROCESOS

DR. PAVEL DELGADO

AREQUIPA-PERU
2020
 La ingeniería genética
 Aplicaciones industriales
 Aplicaciones medioambientales
 Aplicaciones agrícolas, ganaderas
y piscícolas
 Aplicaciones médicas
 Aplicaciones jurídicas
La ingeniería genética, conocida también como manipulación genética, surge
en los años 70 (siglo XX) cuando se consigue introducir material genético
de una especie en células de otra especie muy distinta.

La biotecnología manipula y modifica microorganismos o células obtenidas de animales


y plantas, en el ámbito industrial (medicina, farmacia).
No se incluyen actividades que manipulen animales o plantas enteras, aunque éstas son
necesarias posteriormente.

En la naturaleza se produce una transferencia de material genético entre bacterias,


fenómeno llamado transformación.

La transferencia de forma artificial se realiza mediante la técnica del ADN


recombinante. A ésta se han ido sumando otras técnicas de ingeniería genética que se
analizan seguidamente.
Se basa en la capacidad de ciertas bacterias que contienen enzimas llamadas
restrictasas o endonucleasas de restricción (actualmente se comercializan más de cien
enzimas diferentes) que cortan el ADN por sitios específicos que reconocen,
obteniéndose fragmentos de restricción. Para que se puedan unir después los
fragmentos de ADN extraño y el ADN que se utilizará como vector, se han de cortar
ambos con la misma restrictasa. Comparando dichos fragmentos, se construyen los
mapas de restricción, los cuales se usan para comparar genomas de especies diferentes
y establecer cambios evolutivos así como para detectar mutaciones cromosómicas como
delecciones e inserciones.

Restrictasa Secuencia Fragmentos


(Bacteria origen) reconocida de restricción

A-A-T-T- C...
EcoR1
(Escherichia coli) ...G-A-A-T-T-C...
...G-T-T-A-A-G...
...C-T-T-A-A

Cuadro I: Fragmentos de restricción originados por la enzima EcoRl


La transformación de bacterias con ADN extraño se produce en muy pocas células (baja
eficacia) en condiciones de laboratorio. Por ello, se emplean vectores genéticos que
funcionan como taxistas que transportan a un cliente el ADN recombinante.

Los vectores más usados son:

a) un plásmido (fragmento extra de ADN bicatenario circular de unos 4,3 kb, que
existe en algunas especies de bacterias).

b) un cósmido (similar al plásmido pero de mayor longitud, unos 40 kb).

c) un virus vector ( en este caso el ADN extraño que se quiere transferir se


incorpora al ADN vírico y funciona como ADN recombinante).

Si la introducción de ADN extraño se realiza en células eucariotas no reproductoras


se denomina al proceso transfección.
Si la introducción se realiza en células reproductoras de plantas y animales, la
alteración génica va a estar presente en todas células del cuerpo, en este caso se
habla de transgénesis
La multiplicación de las células que contienen el ADN recombinante
(ADNr), ya sea en un plásmido o en un cósmido, o en su propio ADN (si se
usó un virus vector), produce una clonación de éste, es decir, la
producción de múltiples copias idénticas de ADNr que lleva el gen
extraño, una copia en cada célula.

Pero cada clon de células tendrá un fragmento de ADN extraño distinto.


Al conjunto de estas copias de ADNr diferentes se denomina biblioteca
genómica.

Lo que se tiene que hacer ahora es seleccionar el clon de células (colonia


crecida en agar) en cuyo interior está contenido el fragmento de ADN
con el gen que interesa.

Esto se consigue mediante la obtención de una molécula de ADN


complementario (ADNc) a partir de su propio ARNm procedente del gen
extraño que se ha expresado.
El siguiente paso es localizar la posición del gen (región codificante de
proteína) que interesa en el fragmento que está clonado en la colonia de células
seleccionada.

Se emplea la técnica de transferencia de Southern (su inventor fue E.M.


Southern).

Esta técnica se basa en la obtención de fragmentos de restricción del clon


seleccionado y el tratamiento con ADNc radiactivo que hibridará con la región
transcrita del gen porque el ADNc se ha obtenido a partir del ARNm producido
en la transcripción de las células del clon seleccionado. Como el ADNc se ha
construido con isótopos radiactivos funciona como una sonda y marcará en una
autorradiografía la posición de los fragmentos que hayan hibridado (unión según
bases complementarias de los nucleótidos) con el ADNc radiactivo. En esta
técnica se basa el procedimiento para la obtención de "huellas genéticas".
La técnica de la clonación de ADN ha permitido obtener gran cantidad
de este ácido nucleido para que pueda realizarse su secuenciación y
conocer la composición química de cada gen, conocimiento que se
considera de incalculable valor. Esto ha posibilitado la obtención de
secuencias de genomas completos (son cada vez más los organismos y
virus que son secuenciados, incluida la especie humana).

La técnica de Sanger (o del didesoxi), que es como se llama, se basa en la


síntesis de ADN, usando como molde una versión monocatenaria del ADN
que va a ser secuenciado. La técnica utiliza cuatro nucleótidos
especiales, los didesoxinucleótidos (de aquí el nombre de la técnica) que
provocan la terminación de la síntesis de fragmentos de ADN, los cuales
según su longitud se situarán en distintos sitios en una placa de gel y de
ahí se deduce la secuencia de nucleótidos.
Mediante la técnica de la reacción en cadena de la polimerasa (PCR en inglés) se pueden obtener
grandes cantidades de ADN que permiten diferentes análisis, a partir de cantidades mínimas.
Se basa en el proceso de replicación del ADN, para ello se utilizan unos oligonucleótidos
que se han de diseñar como cebadores que inician la replicación "in vitro". La replicación
se repite multitud de veces duplicando en cada ciclo la cantidad de ADN obtenido.

Esta síntesis artificial de ADN se ha de


realizar a altas temperaturas para que las
dos cadenas de ADN no se enrollen entre
sí, lo cual puede realizarse gracias a una
enzima ADN polimerasa obtenida de una
bacteria termófila.

Esta técnica tiene múltiples utilidades:


realizar pruebas de paternidad o averiguar la
autoría de un delito; diagnosticar
enfermedades hereditarias antes del
nacimiento, analizar restos de tejidos en
huesos para hacer estudios filogenéticos;
realizar secuenciaciones de genomas (mucho
más rápido que a partir de la clonación en
células), etc.

Figura 1: Clonación de ADN por la reacción en cadena de la polimerasa


Existen en la naturaleza unos
centenares de especies de
microorganismos (bacterias, levaduras,
mohos, algas unicelulares) que producen
sustancias que presentan algún interés
para la especie humana.

Cuadro II: Algunos de los principales productos


industriales obtenidos con la ayuda de los
microorganismos

Los productos que tienen un interés comercial se pueden agrupar en cuatro clases:

a) productos del metabolismo primario( dióxido de carbono, etanol, ácido acético, aminoácidos, etc.).

b) productos del metabolismo secundario (antibióticos, toxinas).

c) macromoléculas (polisacáridos, enzimas); y

d) células microbianas (pienso animal llamado proteínas microbianas – Mac Donald).


La industria farmacéutica produce
actualmente toda una gama de
sustancias que obtiene de
microorganismos como son: sustancias
antimicrobianas (sobre todo
antibióticos de diversos tipos), vacunas,
vitaminas, hormonas peptídicas (como
la insulina, la hormona del crecimiento o
somatotropina), factores hipotalámicos
(como la somatostatina, ver figura) y
enzimas.

Figura 2: Síntesis de la somatostatina en


Escherichia coli
El proceso de fermentación ha
sido manipulado por el hombre
de diversas formas para
obtener toda una serie de
alimentos y bebidas.

Así, por fermentación láctica


se produce queso y yogur;
la fermentación alcohólica se
emplea para la elaboración de
pan fermentado (en este caso
se aprovechan las burbujas de
dióxido de carbono para
esponjar el pan) y bebidas
alcohólicas como el vino, la
cerveza (ver figura 3), sidra,
etc.
En la fermentación alcohólica
se emplean diferentes
especies de levaduras (hongos
unicelulares) del género
Saccharomyces
Figura 3: Producción de la cerveza
Diversos tipos de industrias utilizan microorganismos para la obtención de
sustancias de interés como aminoácidos (ácido glutámico en forma de
glutamato monosódico usado como potenciador de sabores y aromas); ácidos
orgánicos como cítrico, acético (utilizado en la fabricación de acetatos,
películas fotográficas, etc.); butanol (empleado en la fabricación de
plastificantes), etanol (como combustible), enzimas como proteasas (usadas
en detergentes), etc.

En las industrias mineras se utilizan microorganismos para extraer por


biolixiviación metales preciosos, metales pesados, uranio y petróleo.
Para la protección del medio ambiente se
utilizan técnicas de biorremediación
empleando microbios que son capaces de
metabolizar el petróleo en casos de mareas
negras y en el lavado de tanques petroleros;
así como para descontaminar aguas
residuales de diferente industrias que
contengan metales pesados, uranio,
hidrocarburos, etc.
Las técnicas biotecnológicas se aplican a la agricultura y a la ganadería para obtener
mayores cosechas y mejores alimentos con plantas y mayor cantidad y calidad en la cría
de ganado, así como evitar el fraude en el consumo de alimentos (comercializar unas
especies piscícolas por otras, alimentos transgénicos, etc.).

Se trabaja en tres líneas biotecnológicas:

a) para obtener múltiples individuos iguales con una característica que interese.

b) Modificación genética de especies con características nuevas (transgénesis)

c) Desarrollo de huellas genéticas para identificar especies o búsqueda de


genes concretos.
La clonación en plantas se consigue sobre todo mediante la manipulación de cultivos celulares.
La principal técnica empleada es la micropropagaciónn o propagación vegetativa in Vitro, la cual
permite clonar en corto tiempo un gran número de especies. Este procedimiento se utiliza para la
selección y producción de plantas en grandes cantidades, así como para la investigación en biología
vegetal.

Se consigue mediante la obtención de unos


fragmentos o explantes de la planta madre.
Los explantes se colocan en un medio de
cultivo adecuado y produce un callo (masa
de células sin diferenciar); los callos pueden
dividirse en multitud de fragmentos o
incluso hacerse una suspensión de células.
En el momento que se desee, se cambian las
concentraciones de hormonas auxina y
citoquinina, esto hace que se diferencien las
células de los callos con lo que originarán
plantas enteras. Esta técnica puede ser
muy útil para la conservación de especies y
variedades en peligro de extinción, así como
para hacer más rentables la producción de
flores o de metabolitos secundarios
(perfumes, pigmentos, etc.)

Figura 4: Método de obtención de callos caulinares


Para obtener plantas transgénicas con genes de otras especies ( sean plantas, microbios o
animales) se pueden utilizar dos grupos de técnicas: las indirectas y las directas.

La más usada es la transformación de células


mediante la bacteria Agrobacterium
tumefaciens.

Esta bacteria vive en el suelo y produce en


las plantas dicotiledóneas una enfermedad
tumoral llamada "agalla de cuello".

Cuando contacta con las células de la planta


les transfiere un segmento de ADN del
plásmido Ti (inductor de tumores) que
contiene la bacteria. Este plásmido puede
integrarse en uno o más cromosomas de las
células vegetales, por lo que puede utilizarse
como vector de genes que se deseen
introducir en plantas de especies
dicotiledóneas.

La célula que recibe genes extraños puede


regenerar una planta entera mediante la
técnica de la micropropagación y obtener así
una planta transgénica. Figura 5: Transferencia de ADN extraño a una célula vegetal mediante el
vector bacteriano Agrobacterium tumefaciens
Entre las diversas técnicas de
transferencia directa de material
genético una de las más empleadas
es la "de la perdigonada" o
transformación biolística. Se trata
de disparar bolitas de oro que llevan
fragmentos de ADN adheridos, con
una especie de pistola, sobre una
población de células. Las bolitas que
queden en el citoplasma pueden
transferir el ADN que transportan a
algún cromosoma de la célula
bombardeada.

Las aplicaciones agrícolas van desde


el mejoramiento de procesos básicos
como la fotosíntesis y la fijación de
nitrógeno atmosférico por parte de
las plantas, hasta la resistencia a
herbicidas, agentes patógenos y
factores de estrés (salinidad del
suelo, sequía, etc.), así como la
obtención de productos agrícolas de
mejor calidad y características
nuevas.

Figura 6: Obtención de una planta transgénica por transformación biolística


La obtención de un gran numero de animales con alguna característica común (producir mucha leche,
engordar rápidamente, producir lana azul, etc.) es una aspiración de muchos ganaderos. La forma de
conseguirlo es mediante la clonación con la que se consiguen animales genéticamente idénticos. Se usan
para ello dos técnicas:

a) la disgregación de células embrionarias a


partir de un embrión, de modo que cada
célula separada funciona como un zigoto y
originará un animal.

b) la transferencia nuclear; ésta consiste en


obtener óvulos enucleados (se les ha extraído el
núcleo por microsucción) y conseguir introducir un
núcleo de una célula embrionaria o de una
diferenciada (especializada), con esta última
modalidad se obtuvo la famosa oveja Dolly. Cuanto
más diferenciada esté una célula más difícil es
conseguir su reprogramación para que funcione
como un zigoto y origine un nuevo animal.

Obtención de reses clónicas mediante la transferencia


de núcleos de células embrionarias de mórula
En los animales el ADN extraño o transgén se
introduce en zigotos de modo que el embrión que
resulte haya integrado el transgén en todas las células
y origine un organismo transgénico. Una forma de
conseguir la transgénesis es mediante la técnica de la
microinyección de zigotos, en la que se inyecta con una
micropipeta el material genético que se desee. Otra
posibilidad es utilizar células embrionarias en las que
se inocula el transgén mediante diversas técnicas
(electroporación, transfección con virus o por
microinyección).

Aparato de microinyección

Las aplicaciones son múltiples, como con las plantas,


desde el uso de animales como biorreactores para la
producción de proteínas de interés (humanas o de otro
tipo), hasta el estudio de genes específicos y la
posibilidad de la terapia génica en humanos.

Cuando el ADN extraño que se introduce no afecta a


células germinales, sino a las células somáticas, se
denomina al proceso transfección y para conseguirla se
usan distintas técnicas. Las células transfectadas tienen
gran interés en la obtención de líneas celulares alteradas
capaces de producir compuestos comerciales.

Fases en la transfección de ADN según diversas técnicas


Este proyecto de investigación tiene como objetivo
averiguar la secuenciación completa de nucleótidos
de los 23 pares de cromosomas humanos, para
conocer la composición química exacta de todos los
genes (genoma) y su ubicación en cada uno de los
cromosomas, así como toda la información adicional
extra no codificante (el llamado ADN basura) y
estudiar su función.

En 1997, el Genoma humano fue declarado


patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, para
evitar que se comercialice con él. En junio del año
2001 se presenta una primera aproximación de la
secuencia completa, descubriéndose que tenemos
muchos menos genes (unos 30.000) de los
inicialmente previstos (100.000).

Ubicación de algunas enfermedades genéticas


conocidas en el mapa genético humano
Las enfermedades genéticas debidas a un solo gen defectuoso ascienden a más de
4000, de las cuales 345 afectan al cromosoma X, por lo que serán transmitidas a los
niños varones, si su madre posee uno de esos defectos genéticos.

La terapia génica está siendo considerada la cuarta revolución de la medicina


(después de las medidas de salud pública, la anestesia, y las vacunas y antibióticos).
Para su aplicación se siguen dos estrategias:

a) Insertar una copia sana de un gen en las células del paciente con una
enfermedad genética, para compensar el efecto del gen defectuoso ( esto se
consiguió con una niña que tenía una inmunodeficiencia grave).

b) Introducir un gen especialmente diseñado para que proporcione una nueva


característica a las células (por ejemplo, introducir en linfocitos un gen que
produzca un inhibidor del virus del sida en pacientes afectados por el VIH).
Las vacunas contienen un agente patógeno causante de una enfermedad infecciosa, pero o
está muerto o está atenuado (son cepas muy poco virulentas). También se puede vacunar con
subunidades del patógeno, éstas pueden hoy día fabricarse mediante ingeniería genética en
gran cantidad. Las subunidades son proteínas con poder antigénico. Así, se ha conseguido
obtener la vacuna de la hepatitis B mediante la tecnología del ADN recombinante. El gen de la
subunidad proteica del virus de la hepatitis fue introducido en la bacteria Escherichia coli y en
la levadura Saccharomyces cerevisiae, las cuales produjeron en cultivo la proteína del virus.

Los anticuerpos sirven como defensa frente a enfermedades infecciosas y sustancias extrañas,
pero además son un medio de curación para aquellos enfermos que no son capaces de
producirlos.
La técnica de los anticuerpos monoclonales permite obtener gran cantidad de ellos y sin
impurezas; consiste en inmortalizar las células responsables de su fabricación, las células
plasmáticas que se forman por activación de los linfocitos B. La forma de conseguirlo es
hibridando células plasmáticas y células tumorales con capacidad para multiplicarse
indefinidamente (células de mielomas), el resultado son células híbridas llamadas hibridomas
que se pueden clonar. Cada clon (procedente de un solo hibridoma) producirá un anticuerpo
monoclonal.
La biotecnología se puede aplicar a otras facetas de la vida social además de las mencionadas. De entre todas
ellas es de destacar su utilización en relación con el derecho y la ciencia forense.

En el esclarecimiento de un crimen puede ser crucial la


prueba que aporte el biólogo forense al determinar la huella
genética del criminal a partir de un resto de saliva en un
cigarrillo (contiene células de la mucosa bucal), una mancha
de sangre (leucocitos), restos de semen (espermatozoides)
o un simple pelo (células del folículo piloso). La técnica que
se aplica es la del perfilado del ADN o prueba del ADN . Se
basa en la presencia de regiones en el material genético no
codificante que se denominan minisatélites , y que contienen
muchas repeticiones en tándem de una pequeña secuencia de
nucleótidos. Para su detección se utilizan sondas génicas
(oligonucleótidos marcados con átomos radiactivos), de modo
que cada sonda detecta un minisatélite. Estos minisatélites
son de diferente longitud en cada persona puesto que el
número de repeticiones en tándem es variable.

La huella genética también puede utilizarse para realizar


pruebas de paternidad y para identificar a personas
desaparecidas de las que se tengan sus huesos; esto ocurrió
con los restos óseos de los miembros de la familia del último
zar de Rusia asesinados por los bolcheviques.
Técnica utilizada en la prueba del ADN
La posibilidad de clonar animales mamíferos,
tanto a partir de células embrionarias como de
células diferenciadas (caso de la oveja Dolly),
abre la puerta para la clonación de humanos.
Para mayor polémica se publica en 1993 un
experimento de clonación humana hecho con
embriones humanos que no podrían haber
sobrevivido, pero que mediante la disgregación
de sus células se obtuvieron 48 embriones
clónicos (idénticos genéticamente) que fueron
posteriormente destruidos.

Clonar personas enteras está prohibido en


muchos países y condenado por muchas
instituciones, pero clonar tejidos humanos con
fines terapéuticos es pedido por multitud de
científicos, sobre todo desde que se puede
dirigir la diferenciación de células madre hacia
la obtención de tejidos concretos.

Técnica de clonación

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