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Universidad de El Salvador PRI-115

Facultad de Ingeniería y Arquitectura


Escuela de Ingeniería Química e Ingeniería de Alimentos

LABORATORIO N° 4

“ PREVENCIÓN Y PROTECCIÓN CONTRA LA CORROSIÓN.


PROTECCIÓN POR ÁNODOS DE SACRIFICIO”

Si necesidades del servicio obligan a diseñar sistemas en los que es factible que se pueda
llegar a tener pila de corrosión, la previsión del fenómeno y el conocimiento de la secuencia
de procesos que conlleva nos abre los ojos sobre medios que hay para combatirla. A
continuación se citan algunos ejemplos ilustrativos.
Si la unión de piezas de diferentes materiales, por ejemplo, hierro y cobre, son necesarias,
un aislamiento eléctrico entre ambas nos incrementa la resistencia, disminuyendo la
intensidad de corriente de corrosión.

Otra solución puede ser o bien recubrimiento exterior del hierro o del cobre, o de ambos,
por aplicación de pintura.
Otra alternativa es la protección catódica, que es aplicada en casos de estructuras de acero o
hierro en bodegas industriales, cascos de buques, puertos marítimos, estructuras enterradas
o sumergidas, etc. Hay dos medios de llevar a cabo esta protección catódica. En ambos la
protección se fundamenta en convertir dichos ánodos potenciales en cátodos.

Protección catódica con ánodos de sacrificio.


En este sistema se disponen elementos o piezas de un metal más activo que el que se quiere
proteger unidos eléctricamente. En estas circunstancias dichas piezas se corroen
sacrificándose en beneficio del metal protegido. Es típico disponer de ánodos de sacrificio
de zinc electrolítico (muy puro) para protección de estructuras diversas de acero.

La chapa galvanizada (por inmersión o electrodeposición), el acero cadmiado (siempre por


electrodeposición), etc., son casos en que la propia pieza lleva su protección catódica; pues,
el Zn y el Cd, más activos que el Fe, se sacrifican en su beneficio.
Universidad de El Salvador PRI-115
Facultad de Ingeniería y Arquitectura
Escuela de Ingeniería Química e Ingeniería de Alimentos

Protección catódica con ánodos por corriente impresa.


En este caso, como se dispone de ánodos menos activos que el del metal que se quiere
proteger, el proceso se fuerza aportando energía eléctrica desde el exterior.

MATERIAL Y EQUIPO.
6 botes de vidrio tipo Gerber
1 beaker de 100 ml
1 probeta de 100 ml
1 espátula
1 agitador de vidrio
Hilo de nylon

METALES A UTILIZAR.
Hierro
Zinc

REACTIVOS.
Ácido clorhídrico concentrado
Agua destilada
Agua de mar o solución salina de 28,000 ppm (sal solar)
Agua de chorro

PROCEDIMIENTO.
1. Coloque en un frasco 50 ml de agua destilada y 4 gotas de ácido clorhídrico concentrado,
en otro frasco 50 ml de agua de mar ó solución salina de 28,000 ppm y en un tercer frasco
50 ml de agua de chorro. Rotule cada frasco.
2. Coloque en cada uno de los frascos un pedazo de lámina de hierro previamente lijada
hasta brillo metálico.
3. Repita el numeral 1. Coloque en cada uno de los frascos un pedazo de lámina de hierro
previamente lijada hasta brillo metálico al cual le sujetará un trozo de zinc.
4. Observe lo ocurrido a cada uno de los frascos a diario durante una semana.

CUESTIONARIO.
1. Explique lo ocurrido al hierro en los diferentes ambientes.
2. Mencione ventajas y desventajas de la protección mediante ánodos de sacrificio.
3. Mencione ventajas y desventajas de la protección catódica por corriente impresa.
4. Para proteger estructuras de la corrosión ¿qué otras alternativas se pueden utilizar y en
qué consisten?

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