Radionovela

Narrador: Era una tarde radiante en un pueblo llamado Koco-nut, un lugar muy
hermoso de paisajes gloriosos una isla de belleza natural, donde dos jóvenes
fueron los protagonistas de este hecho.
Cayendo el ocaso se encontraban Juan y Mariana en la montaña que se
encontraba detrás del pueblo, recolectando frutas y flores para la celebración
venidera, mientras caminaban fue cayendo la noche…
Juan: Oye Mariana! Que noche más hermosa no lo crees?
Mariana: Lo creo Juan! Es tan radiante y esplendorosa que me quedaría
observándola toda la noche.
Juan: deberíamos quedarnos un rato más aún es temprano…que te parece la
idea.
Mariana: bueno está bien porque no… (Sonríe) además hoy es la noche de vista-
nueve.
Narrador: Vista-nueve para ellos es una celebración que se extiende hasta el
amanecer, que les recordaba el pacto de la salvación.
Mariana: Juan que piensas sobre la celebración? Crees que este año sea
diferente a los anteriores?
Juan: si te soy sincero… no creo en nada de lo que dicen los ancianos, es solo un
invento para tener al pueblo engañado sobre un ser de otro mundo, los espíritus
no existen, todos los años es igual no pasa nada diferente a lo acostumbrado.
Narrador: Mariana se sorprende por las palabras de Juan y le dice;
Mariana: Pero, no crees que los ancianos y todo el pueblo lo celebra por alguna
razón que nosotros aún no sabemos.
Narrador: Juan no creía en lo que le contaban los ancianos, por otra parte
Mariana creía firmemente en la noche de vista-nueve.
Juan: se ríe…. Tendría que verlo con mis propios ojos para creer en algo como
eso
Narrador: al terminar Juan de decir estas palabras una brisa fría y helada se hace
sentir en medio de ellos, haciendo que Mariana temblara de miedo.
Mariana: Juan creo que ya deberíamos bajar tengo un mal presentimiento…
(Mientras se frotaba los hombros.)
Juan: quédate tranquila chica, aguanta un poco más ya casi llegamos.
Narrador: Pero, de lo que no se daban cuentas los jóvenes fue que al caminar no
se estaban acercando al pueblo sino alejándose, porque estaban bajo el encanto
de Noven. Después de caminar tanto Mariana se detiene y le dice a Juan.
Mariana: Espera Juan… hacia donde nos dirigimos?
Juan: (reacciona) donde estamos, que es este lugar? Este no es el camino que
seguíamos hace un momento.
Narrador:
Juan: se supone que ya deberíamos de haber llegado al pueblo.
Mariana: Pero, al parecer estamos perdidos y tengo algo de miedo Juan.
Juan: cálmate no debemos estar muy lejos subamos a esa colina para ver mejor.
Narrador: Mientras subían la colina delante del camino aparece un personaje
misterioso el cual los mira fijamente, los jóvenes quedaron perplejos ante aquella
figura, al ver lo atemorizados que estaban les dice:
Noven: No tengan miedo no les hare nada, solo os desvíe un poco del camino
para contarle el porqué de la celebración de la noche de Vista-nueve, me llamo
Noven soy el embajador de los espíritus en esta isla.
Narrador: Juan aun estando asombrado ante aquel personaje todo tembloroso y
tartamudeando dice:
Juan: y-oo…yo-o-o…yo soy Juan y ella es mi amiga Mariana.
Narrador: A Mariana no le salía palabra alguna de su boca, estaba tan impactada
que solo se limitó a escuchar, Noven le pregunta a Juan.
Noven: Juan porque no crees en los espíritus? Dijiste que deberías ver para creer
no es así.
Juan: si… si lo he dicho.
Noven: por eso los he traído hasta aquí, fui enviado a ustedes con el propósito de
que: Juan crea y a contarles un poco sobre la celebración de esta noche.
Narrador: el silencio los arropo por un momento y la noche hermosa con la luna
brillante hacía de escenario, Noven cuenta la historia.
Noven: Ocurrió hace ya dos décadas y media cuando aconteció aquel incidente,
un pueblo viajaba en busca de alimentos y de un hogar donde establecerse, una
noche encontrándose muy debilitados por los días que transcurrieron sin comer.
Fue cuando llegaron a la isla ya no les quedaba fuerzas, en ese momento se les
apareció una figura esplendorosa que les pregunto.
Figura: Quienes son y de dónde vienen? Están en territorio sagrado, esta isla nos
pertenece a nosotros los espíritus.
Narrador: a lo que el jefe del pueblo responde con cansancio a poca voz.
Jefe: Somos…. Via---jeros que bus...camos un lugar donde—habi-tar, llevamos
días sin probar un bo—cado estamos al borde de perecer, permítanos ha—bitar
en este lugar por favor.
Narrador: al a aquella gente sufriendo se compadeció y dijo.
Figura: por cuanto has sido sincero y posees un gran corazón te permitiremos a ti
y a tu gente vivir aquí. Pero, deberán de darnos una ofrenda cada año en esta
misma fecha de los frutos y alimentos que produzcan en la isla estás de acuerdo
con eso. Yo enviare a un embajador para que se encargue de las ofrendas.
Jefe: está bien le aseguro que mi gente cumplirá, de verdad se lo agradezco de
todo corazón.
Narrador: De esta manera se formó un pacto entre los espíritus y el pueblo y
llamaron a esa noche Vista-nueve.
Noven: es de esta manera que surge la noche de Vista-nueve como celebración
por haberlos salvado de perecer en el mar. Ahora que piensan hacer?
Narrador: los jóvenes se quedaron un momento en silencio… luego Mariana
responde.
Mariana: yo seguiré con la celebración como de costumbre, al conocerte
comprendí muchas cosas que no entendía hasta hoy, ahora veo por qué en esta
isla no falta el alimento.
Narrador: Mariana al terminar las palabras una lagrima cayo por su mejilla.
Juan: de ahora en adelante no juzgare cosas que no vea, tratare de hacer las
cosas bien.
Narrador: Después de lo ocurrido, se dispusieron a bajar la montaña, en el
camino Juan le dice a Mariana.
Juan: Tenias razón en todo lo que habías dicho….también quería disculparme por
todo lo que te dije.
Mariana: está bien, todo quedo atrás, pensemos en el presente debemos contarle
al pueblo sobre lo sucedido aquí acerca de los espíritus.
Juan Estoy de acuerdo… que gran susto nos llevamos no…pero, nos ayudó a
comprender muchas cosas, ahora veo porque es tan importante este día.
Mariana: Lo vez… no solo porque no veamos algo no quiere decir que no exista,
debemos tener más fe...
Juan: Así es Mariana, gracias por acompañarme…
Mariana: Fue un placer acompañarte.
Narrador: Los jóvenes al llegar al pueblo reunieron a toda la gente empezando
por los ancianos, le contaron lo ocurrido en la montaña de Noven de las
experiencias e historias, luego continuo la celebración de Vista-nueve llena de
alegría y entusiasmo. Al culminar la noche los dos jóvenes decidieron hacer un
pacto de no olvidar jamás lo acontecido esa noche, que si alguno se desviaba del
camino el otro se encargaría de recordarle cual era el camino por el cual
decidieron andar…

…“Simplemente porque no veamos algo no significa que no exista ese

algo….Solo debemos buscar en nuestro corazón y encontrar nuestra propia
respuesta ante la situación”