Perú: ¿Economía de Mercado o Mercantilismo?

El Perú ingresa en el siglo XX con una economía de apertura en el mercado internacional,

momento en el cual capital extranjero empieza a ingresar a trabajar en diferentes sectores de
nuestro emergente mercado. Definitivamente pronto nos vemos envueltos en una subida del
PBI per cápita, la acentuación de una incipiente industria local y una movilización geográfica
hacia la capital, ya que el nivel de ingresos aumentaba significativamente para los obreros que
fueron ocupando una modesta clase media dentro de nuestro estrato social.

Nuestro país, tuvo durante este siglo dos grandes problemas políticos y económicos que
afectaron en nuestra economía que fueron: (i) los acontecimientos internacionales como la
gran depresión, las dos guerras mundiales, le guerra fría, la caída del muro de Berlín, etc. y (ii)
Los golpes militares que aplicaron políticas económicas Keynesianas como aumento del gasto
público, sobreendeudamiento internacional, sobre regulación y proteccionismo económico.

No obstante, estas taras también han afectado de igual o peor manera a otros países que
también decidieron por una economía libre, pero que diferencia del nuestro si han logrado
consolidarse como por ejemplo Corea del Sur, Alemania Occidental (durante su vigencia),
Chile, etc. Cabe preguntarnos entonces cual ha sido el factor diferencial, es que para ello
primero tenemos que conceptualizar y entender que es una economía de libre mercado: el
mercado está formado por individuos que intercambian bienes y servicios, cooperan, venden y
compran según los deseos, gustos y necesidades de cada uno. Por ende, el libre mercado no es
más que nosotros con la libertad de intercambiar a nuestro propio gusto lo que queramos,
compitiendo entre sí para ofrecer un mejor producto o servicio a favor del consumidor.

Teniendo esa definición, parece que en nuestro país se ha aplicando en ciertos sectores una
economía de libre mercado que ha traído en sus momentos un aumento considerable de la
riqueza (acentuado mucho más después de la constitución del 93), no obstante, un lastre que
seguimos arrastrando es el mercantilismo en la cual estamos sumidos. El mercantilismo no es
inherente a nuestro actual sistema, hay data que nos muestra que proviene incluso desde el
Virreynato (con las facilidades a los importadores de tabaco), es que cuando los agentes del
mercado no compiten prefieren entonces usar a los políticos de turno para que mediante el
imperio de la ley favorezcan sus negocios, protejan sus intereses económicos, crear cárteles y
oligopolios. No podemos hablar entonces de una economía de libre mercado cuando en el
Perú desde el siglo XX hasta la actualidad persiste el mercantilismo, donde son los burócratas
quienes al final tienen cierta discrecionalidad creando un caldo de cultivo para la corrupción,
cuando se permite a los privados no competir, cuando las barreras de entrada siguen siendo
muy altas como por ejemplo la financiera, la energética, la de saneamiento, la provisional, la
de telecomunicaciones, etc.

En el siglo XXI la prosperidad en nuestro país es innegable, hemos sido ejemplo de crecimiento
regional, somos un país que redujo la pobreza de 49% hasta 12.97%, que es sujeto de
confianza crediticia internacional y bien reconocido en la OCDE. Pero ya han pasado casi 27
años desde que nuestra carta magna reconoce la importancia del mercado en nuestro sistema
económico pero el mercantilismo sigue siendo un cáncer que no nos permite despegar, nos
amarra de tal manera que poco a poco deja espacio a que ideas delirantes del pasado vuelvan
a sumarse al debate en la actualidad.
Ahora en tiempo de pandemia, se evidencian los errores de gestión por parte de los políticos
en todos estos años respecto a nuestro precario sistema de salud, educación y seguridad; es el
momento en el cual podemos tomar conciencia que necesitamos abrir los ojos al mundo, ver a
los países que han logrado hacerlo mejor que nosotros e intentar asimilar sus experiencias a la
nuestra.

Amerson Edward Mendoza Morales

Abogado de la USMP