Como agentes educativos tenemos como recurso la mayor riqueza
neuronal debido a que los niños en su primera infancia tienen la
mayor capacidad de aprendizaje significativo gracias a la característica propia del cerebro llamada neuroplaticidad. Para explicar un poco más este tema debemos entender que es una neurona: Las neuronas son células del cerebro encargadas de hacer las funciones de Recibir transportar y dar respuesta a los estímulos externos e internos. Son las encargadas del proceso de cognición, entre muchas otras funciones físicas y psicológicas, pero en esta ocasión hablaremos de la parte educativa. Existe información que nos indica que los niños de 0 a 7 años de edad tienen la mayor la producción de MIELINA que es la encargada de conducir los estímulos de una forma eficiente.
A la conducción que se realiza entre ellas de le llama sinapsis .
Gracias a estas conexiones y a la producción generosa de la
mielina se crean conexiones eficientes dando como resultado el proceso de cognición que permite la adquisición de nuevos aprendizajes y mapas mentales de conocimientos. Además de que permite un mayor desarrollo motor que condiciona la movilidad y el descubrimiento del medio externo. Por esta razón los agentes educativos de la primera infancia tenemos en nuestras manos las mayores oportunidades de generar y direccionar este desarrollo por medio de actividades que hagan que las niñas y los niños comprendan y se interesen por ser parte del mundo que los rodea. En los primeros años los pequeños se enfrentarán a desafíos muy grandes como aprender a gatear, caminar, hablar, controlar esfínteres etc. Aunque parezcan cosas cotidianas para los adultos, estas representan un reto para los bebés que llegando al mundo deben entender su entorno desde cero y sin conocimientos previos. Como agentes educativos no siempre podemos llevar el mundo real a un aula, pero sí podemos hacer adecuaciones a nuestras secuencias didácticas para proveer de recursos de aprendizaje significativos a las niñas y los niños en Centros de Atención Infantil, por ejemplo, cuando una educadora o educador quiere enseñar a los niños el proceso para obtener un alimento de la tierra no lo hará a través de dibujos o de manualidades. Un agente educativo debe proporcionar una situación didáctica donde pueda vivenciarlo, de manera que una opción sería realizar una pequeña parcela para sembrar cilantro o alguna otra semilla de fácil cuidado y rápido crecimiento, así las niñas y los niños pueden participar en este proceso dentro de las instalaciones del plantel y no perderse ninguno de los momentos que dan como resultado este gran descubrimiento.