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Brayand Alexander Herrera Cotóm.

Carné. 201630062.

Tricentenaria Universidad de San Carlos de Guatemala.


Centro Universitario de Occidente.
División de Ciencias Jurídicas y Sociales.
Carrera de Abogacía y Notariado.

Investigación sobre Contrato Mercantil,


Contrato de Depósito en Almacenes Generales de Depósito.

Estudiante: Brayand Alexander Herrera Cotóm.

Carné: 201630062.

Curso: Derecho Mercantil III.

Catedrático: Lic. Teódulo Cifuentes.

Décimo Semestre.

Sección: A.

Jornada: Nocturna.

Quetzaltenango, agosto de 2020.


Brayand Alexander Herrera Cotóm.
Carné. 201630062.

Para poder dar inicio al análisis correspondiente de este contrato en particular es necesario dar
inicio por el factor histórico del cual provienen los actuales almacenes generales de depósito y es
que en el contexto del imperio romano surgen varias instituciones de derecho, un derecho sin
duda alguna adelantado a su tiempo y en el que se involucraban también nuevas actividades por
ejemplo la actividad mercante, marítima y también el surgimiento del derecho de comercio
antecedente directo del actual derecho mercantil; grandes barcos se involucraban más en la
aventura e investigación y con ello también en el descubrimiento, marinos se embarcaban en la
búsqueda de telas, especies y materiales totalmente desconocidos en su región natal para poder
comercializar con ellos, pero para que el viaje fuera provechoso no podían darse el lujo de
solamente transportar pequeñas cantidades de material sino que transportaban grandes cantidades,
al regresar a puerto muchas personas al notar la gran cantidad de material idearon la propuesta
que no era posible transportar todo ello en un solo día es aquí en donde surge la idea inicial de un
lugar en donde pudiera almacenarse parte o la totalidad de la mercancía, haciéndolo atractivo
para el comerciante ya que se le proponía también la idea de un custodio o guarda que velara por
el material que en este lugar se almacenara. En un principio las distintas transacciones se hacían
de forma oral, sin ninguna formalidad especial, pues el dueño o propietario del depósito era que
se le confiara la protección del producto, sin embargo con el transcurrir del tiempo esta acción
cada vez se fue transformando más, adquiriendo mayores formalismos y en la actualidad cuenta
ya hasta con un cuerpo normativo que regula esta actividad en particular, sin duda alguna esta
acción se relaciona con varias ramas del derecho y es que antes de la regulación vigente estaba
intrínsecamente relacionada con el derecho civil y con el derecho procesal civil, ramas que
definían las pautas, modalidades y también las distintas maneras en que podía una mercadería
almacenarse en un depósito; de igual manera se relaciona en una forma más actual con el derecho
penal puesto que en diversas ocasiones ha trascendido la noticia que objetos ilícitos como armas,
drogas o estupefacientes han sido encontrados en estos almacenes generales, la regulación para
evitar que se den este tipo de acciones existen, sin embargo es una realidad que muchas veces
estas acciones se continúan dando, entonces procedo de la siguiente manera a brindar detalles
más concretos respecto a la investigación que se me ha asignado indicando los elementos más
importantes y características esenciales que son necesarios para este trabajo de derecho mercantil.
Brayand Alexander Herrera Cotóm.
Carné. 201630062.

Concepto. El depósito, considerado como la prestación de un servicio, es un contrato por medio


del cual el sujeto depositario recibe na cosa que le confía el depositante, con la obligación de
custodiarlo y devolverlo cuando se le requiera. Como la función primordial del depósito es la
custodia de un bien, esta viene a ser la nota distintiva para no confundirlo con otros negocios
jurídicos como por ejemplo el arrendamiento. El acto de depositar puede estar relacionado con
distintas ramas de un sistema jurídico; depósito mercantil, cuando se trata de un negocio jurídico
mercantil.
Naturaleza. Atendiendo a la naturaleza del bien depositado y su restitución, el depósito puede ser
regular e irregular. Es regular cuando se devuelve el mismo bien que se depositó e irregular
cuando se devuelve uno distinto al depositado, de la misma especie y calidad o de valor
equivalente como en el caso del dinero; el regular es más común en las cuestiones civiles y el
irregular es más común en las cuestiones mercantiles, sin embargo, la custodia que se confía a
aun almacén general de depósito es regular y de carácter mercantil. El contrato de depósito
cumple con una función importante en el tráfico comercial, porque permite a los comerciantes
que no disponen de locales adecuados, la posibilidad de confiar a otro la custodia y
conservación de sus mercaderías. En lo subsiguiente es imprescindible indicar que existen tipos
de regulaciones en los distintos ámbitos del derecho mercantil y también de los distintos
contratos, sin embargo en lo que a los almacenes generales de depósito se refiere, como negocios
organizados técnicamente, facilitan el comercio de importación y exportación por medio del
depósito. Es pues, variada la posibilidad de este negocio. Pensemos en los tradicionales mesones
de la ciudad capital de Guatemala, en donde pequeños comerciantes guardan sus mercaderías de
consumo diario, sin que necesariamente se combine con un contrato de hospedaje. Y más aún los
aparcamientos de vehículos que proliferan en las ciudades de tránsito congestionando, son
verdaderos contratos de depósito por la custodia que se les confía al propietario de la empresa
aparcadora y no de arrendamiento como se ha pretendido, con el fin de eludir las
responsabilidades provenientes de una deficiente conservación del bien. En síntesis nos
encontramos ante uno de los contratos de mayor práctica para el desenvolvimiento comercial.
Caracteres. El contrato de depósito mercantil es bilateral, oneroso, conmutativo, principal, real y
de tracto sucesivo.
Brayand Alexander Herrera Cotóm.
Carné. 201630062.

Elementos. En un primer lugar pueden indicarse los elementos personales que intervienen y son
el depositante y también el depositario, elemento real el cual puede representarse de distintas
formas, mercaderías, joyas, telas, productos, especias y elemento formal en cuanto a la forma de
depósito, varía según la naturaleza y organización empresarial del sujeto depositario. Puede ser
que se formalice mediante simple acuerdo verbal, por un contrato de adhesión y por escrito, como
en el caso del depósito bancario o el que se hace en almacenes generales de depósito.
Sin embargo de vital importancia mencionar que existe un cuerpo normativo que regula lo
relativo a los almacenes generales de depósito y es el Decreto 1746 o Ley de Almacenes
Generales de Depósito, para Edmundo Vásquez Martínez y en concordancia con la Ley de
Almacenes Generales de Depósito, los Almacenes Generales de Depósito son legalmente
conocidos como empresas privadas que tienen el carácter de instituciones auxiliares de crédito,
constituidas en forma de sociedad anónima guatemalteca, cuyo objeto es el depósito,
conservación y custodia, el manejo y la distribución, la compra y venta por cuenta ajena de
mercancías y productos de origen nacional o extranjero, la emisión cuando así lo soliciten los
interesados de la emisión de certificados de depósito y bonos de prenda. La nota principal que
caracteriza a los almacenes genérales de depósito es que los certificados de depósito que
crean, trasferibles por simple endoso, representan a la mercancías depositada de tal modo
que la entrega del certificado equivale a la entrega de la mercancía en los actos traslativos
de dominio o de constitución de un derecho de garantía. Para la constitución del derecho de
prenda los almacenes generales crean el Bono de prenda, también trasmisible por simple
endoso. El régimen jurídico de los almacenes generales de depósitos e integran con la “Ley
de Almacenes Generales de Depósito”.
El régimen jurídico del Certificado de Depósito y del Bono de Prenda se integra, por la
disposición, del Código de Comercio que señala que “como consecuencia de depósitos de
mercaderías, los Almacenes Generales de Depósito debidamente autorizados, podrán expedir-
certificados de depósito y bonos de prenda” según el Artículo 584, la norma de remisión
conforme a la cual “el certificado de depósito y el bono de prenda se regirán por la ley específica
de Almacenes Generales de Depósito y en lo que les fuere aplicable, por las disposiciones de este
Código” y, consecuentemente, por la “Ley de Almacenes Generales de Depósito”.

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