El hada Iara sintió la llamada de un alma en pena y acudió a consolarla. Era Ilaila, una mujer que sufría por la injusticia de la muerte y quería dejar de ser humana. Iara la ayudó a transformarse en un hada de la luna, donde ahora Ilaila puede consolar otras almas que vagan y sentirse plena como guardiana lunar.
El hada Iara sintió la llamada de un alma en pena y acudió a consolarla. Era Ilaila, una mujer que sufría por la injusticia de la muerte y quería dejar de ser humana. Iara la ayudó a transformarse en un hada de la luna, donde ahora Ilaila puede consolar otras almas que vagan y sentirse plena como guardiana lunar.
El hada Iara sintió la llamada de un alma en pena y acudió a consolarla. Era Ilaila, una mujer que sufría por la injusticia de la muerte y quería dejar de ser humana. Iara la ayudó a transformarse en un hada de la luna, donde ahora Ilaila puede consolar otras almas que vagan y sentirse plena como guardiana lunar.
a luna Cuentan que un hada un día....................
Salió de su flor de magnolia, perfumada dejaba un rastro a
lluvia, se alimentaba de sol, en cuanto lo sentía abría su boquita de piñón y aspiraba todo el calor que en ella cabía, así tenía alimento para poder estar tranquila mientras se ocupaba de posarse en forma de cortina de lluvia blanca en el alma de los seres con más bondad.
Sentía su llamada cuando sus alas se movía de izquierda a
derecha, se dejaba mecer en el viento y directamente llegaba al alma que necesitaba su consuelo, de vez en cuando alguna mariquita le inyectaba una pizca de luz para poder hacer más blanca la cortinilla de lluvia que se iba apagando en su interior, eran tantas las llamadas................................... Aún estaba dormida, acurrucada en los pétalos de su Magnolia, la noche abrigaba su descanso, algo extraño notó, sus alas batían de manera desigual, ¿que sucede? ¿Quien me reclama? que clase de alma necesita mi consuelo? Iara sabía que debía acudir, se dejo mecer por la brisa impregnada de los destellos de luna, cerró los ojos y se dejó llevar.
Abrió lo ojos cuando notó que el viento la posaba en un
nenúfar, las aguas estaban brillantes, hermosas, y el aroma a hierba mojada transportaba sus sentidos a otros tiempos, hace cientos de años. Un gemido atrajo su mirada a la orilla del lago, una mujer lagrimeaba desconsolada, ella se dio cuenta que alguien revoloteaba a su alrededor.- ¿quien eres? dijo entre sollozos, - soy iara .-porque estás aquí ? yo no te llamé. -Tu alma me llamó.-No, yo no te llamé.--Tu nombre es Ilaila y aunque tu no sepas quien soy tu alma si, No sabes que ayudo a las almas en pena a recobrar su luz?- Yo no quiero recobrara mi luz, solo quiero desaparecer.--Del mundo?.-No, no quiero desaparecer del planeta, solo quiero resurgir en otra forma, fuera de lo humano.--Porque? no has sido feliz?- Fui feliz alguna vez, di mucho amor, recibí mucho amor pero el sufrimiento, la injusticia de la vida pudieron conmigo.--De que injusticia hablas?-La muerte, porque tenemos que morir y convertirnos en nada? Donde queda toda la inteligencia, el aprendizaje, los sentimientos, las personas queridas que se nos van, donde están?--En tu corazón.- Si, pero no es suficiente.-- Acepta como es la vida y no pienses más.-Estoy decidida , ayúdame .--Nunca te arrepentirás?-Nunca. Iara se posó en su pelo y le dijo: Cierra los ojos, déjate llevar, Ilaila notó que en su interior un calor se apoderaba de ella, flotaba en el espacio, en ese tiempo sufrió una transformación, sentía pesadez en el cuerpo, la mente iba relajándose, quietos sus miembros, ingrávidos.....
No supo cuanto tiempo transcurrió, abrió los ojos, se sentía
ligera, algo en su espalda se movía, algo muy liviano, se miró y unas alas transparentes y enormes revoloteaban, a su lado estaba Iara, Ilaila sonrió y entendió sin hablar, porque ahora se comunicaban en su idioma. Ilaila, la luna será tu hogar, eres su guardián y aquí esperarás y consolarás a otras almas que vagan en la atmósfera, te sentirás plena de alma y de corazón HADALUNA.