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1 Al 100 Señor Ticengo PDF
1 Al 100 Señor Ticengo PDF
"Mmmm..."El dolor de la parte privada causó que Calor abriera los ojos del letargo.La
habitación estaba oscura y no se veían los dedos de la mano.Todo lo que podía oír era
la pesada respiración del hombre y el dolor que se le causaba a ella.Se empujó y le tiró
al hombre, pero fue como si su puño hubiera golpeado el algodón, en vano.No podía
emitir el grito y sólo podía rezar en su corazón para que se detuviera....Cuando se
despertó de nuevo, el cielo ya había aclarado.Calor abrió los ojosmirando a la
habitación desconocida. Saltó de su mentela encantadora imagen de anoche .Se sentó
de repente, y sintió una dolorosa hinchazón en su cuerpo.Saliendo de la cama y viendo
la pequeña flor roja que manchaba las sábanas, apretó el puño.No era un sueño...La
puerta del baño se abrió.Un hombre salió del baño.Viendo la cara de la persona, se
cayósentada en la cama con una mirada de horror, ¿cómo podría ser él?El hombre, que
sólo estaba medio envuelto en una toalla de baño, le miró y dijo natural y
perezosamente, "¿Despierta?"Calor tragó la saliva, se ponía tensa y luchaba por
ponerse de pie: "Jorge...Sr. Jorge."El hombre se limpió naturalmente las gotas de agua
de su cabello: "Si hay algo que decir, más tarde, entra y lávate primero."Calorbajó los
ojos: "No es necesario, yo... tengo cosas que hacer, tengo que ir primero.""Profesora
Calor, ¿no necesita una explicación para lo que pasó anoche?"Ella se sonrojaba
pensando que de este tipo de cosas, ¿qué más explicación se necesita?¿Hacerle un
informe de que ella estaba borracha y no sabía lo que pasó?Calor exhaló, levantó la
cabeza y miró a Ticengo Jorge: "Sr. Jorge, estoy muy limpia y sana, no tengo la
enfermedad de ese aspecto, y no creo que el y luchaba por ponerse de pie: "Jorge...Sr.
Jorge."El hombre se limpió naturalmente las gotas de agua de su cabello: "Si hay algo
que decir, más tarde, entra y lávate primero."Calorbajó los ojos: "No es necesario, yo...
tengo cosas que hacer, tengo que ir primero.""Profesora Calor, ¿no necesita una
explicación para lo que pasó anoche?"Ella se sonrojaba pensando que de este tipo de
cosas, ¿qué más explicación se necesita?¿Hacerle un informe de que ella estaba
borracha y no sabía lo que pasó?Calor exhaló, levantó la cabeza y miró a Ticengo
Jorge: "Sr. Jorge, estoy muy limpia y sana, no tengo la enfermedad de ese aspecto, y
no creo que el Sr. Jorge perdiera nada anoche, entonces, ¿podemos fingir que no
sucedió nada?"De hecho, ella parecía justa, pero la última frase era muy débil."Sé que
estás limpia, después de todo, lo he comprobado yo mismo."Ella se ruborizó
ligeramente, pensando que no había necesidad de decirlo anuque lo sabía, qué
vergüenza."Lo que dije sobre la explicación, sólo para preguntarte si hay algo que
necesites que haga por tiy no creo que quieras que te envíe un cheque."Calor se
suspendió: "No necesito nada, sólo espero que el Sr. Jorge pueda mantener este
asunto en secreto.""¿Eso es todo?""Sí", ella respondió en serio.Ticengo Jorge levantó
sus profundas y hermosas cejas, midió a la esbelta chica que tenía delante y,
finalmente, asintió con un rostro inexpresivo.La chica agarró su ropa y su bolso y salió
volando de la habitación del hotel.Ticengo Jorgesonrió malvadamente.Esta mujer es...
interesante.Calor sólo tenía un pensamiento en su corazón, que se fue inmediatamente
del lado de Ticengo Jorge.En la Ciudad Norte, Ticengo Jorge, el CEO del Grupo de
Emblemas Imperiales, que sólo tenía 27 años, representaba el poder, la riqueza y... el
peligro.Dicen que para tomar el puesto como CEO del Grupo, mató a su hermano
mayor y mutiló a su segundo hermano, y finalmente logró ascender al trono.Si hay una
persona que hace que Calor nunca se atreva a pensar ni codiciar,entonces, esta
persona debe ser el Tercer SeñorJorgedelante de ella.Porque el Grupo de Emblemas
Imperiales es el némesis del Grupo Blanco.Y ella, por su vida, no quería tener nada más
que ver con Los Blanco.Al salir del hotel, se dio una palmada en ella misma."¿Estás
loca?, un sapo de dos patas es más fácil de encontrar que Ticengo Jorge, cómo acabas
de elegir..."Sacudió la cabeza, sin querer pensar en las consecuencias.Si ese asunto
era conocido por esa persona de la familia Blanco...El teléfono sonó en este
momento.Lo sacó y lo miró, era Ticengo Jorgequien llamó.Sus dedos temblaron dos
veces, y esta fue la primera vez que su número apareció en la pantalla de su
teléfono.¿Por qué la llama?Si no contesta el teléfono, ¿parecerá vanidosa?Cuando el
timbre del teléfono casi termina, ella contestó: "Sr. Jorge.""Como compensación por
tomarte tu primera noche, te prometo que me puedas pedir que yo haga una cosa por ti
cuando quieras, exceptoque me enamore de ti."Calor se suspendió por un momento, y
luego dijo fríamente: "Sr. Jorge, creo que has entendido mal, no estoy en venta."
● Capítulo 4 La abrazó.
El auto se detuvo en la calle Qingxue y abrió la puerta para salir del auto.Ticengo Jorge
le dijo al conductor: "Consigue un paraguas para la profesora Calor."El conductor le
trajo uno y se lo entregó.Calor levantó su paraguas, salió del coche, se giró hacia
Ticengo Jorge y dijo:"Sr. Jorge, gracias hoy.""Gracias, no es para decir, sino para
hacer." La expresión de Jorge era clara y fría.Aunque tenía razón, ella sintió que había
algo malo con las palabras."Adiós." Dio un paso atrás, dio la vuelta caminando cojeara
hacia eledificio residencial no muy lejos.Dentro del auto, acabó de ponerse en el
camino, Ticengo Jorge le dijo al conductor, "Detén el auto."Después de que el coche se
paró, sostuvo el otro paraguas, salió, alcanzóa la chica y la tiró.Se dio la vuelta y lo vio,
sorprendida, "¿Sr. Jorge?""Súbete al coche.""¿Por qué?""Estás herida y necesitas ir al
hospital." Esta mujer, ¿cuánto no le importa su propio cuerpo y ni siquiera sabe que está
herida?La chica miró sus piernas, "Estoy bien, un par de días de indulto serán
suficientes.""¿Eres médica? ¿Todavía puedes prescribirte? Entra." Cuando terminó,
lepuso el paraguas en la mano, la abrazó horizontalmente y caminó hacia el
coche.Calorgritó un susto y el paraguas de su mano izquierda se le cayó al
suelo.Ticengo Jorge ignoró el paraguas y la empujó dentro del auto.La chica estaba
ansiosa: "De ninguna manera, no puedo ir al hospital, tengo un trabajo a domicilio que
hacer."¿"Enseñanza en casa?" Entonces, ¿lo que dejaste fue sólo un trabajo de tutoría
para Tiren Jorge?""Yo ..." Ella no sabía qué decir en el momento.Porque, así es la
verdad.Ticengo Jorge gruñó fríamente, se sentó en el coche, y le dijo fríamente al
conductor, "Ve al hospital."Al mirar el vecindario cercano, se sentía ansiosa, pero no
podía decir nada, después de todo, era culpable.Una vez en el hospital, la llevó al
departamento de ortopedia.El doctor le preguntó qué parte le dolía y ella se ruborizó:
"En ninguna parte... en ninguna parte."El doctor le dio a Ticengo Jorge una mirada
desconcertada diciendo: "Señorita, ya que vienes al hospital para hacer un examen,
tienes que cooperar con el doctor."Alotro lado, Jorge se abrazó y dijo con calma:
"Háganle un examen completo."Calor en seguida dijo: "No, no, no, ¿cuánto cuesta?, no
lo haré.""Tienes que hacerlo, lo pago, para evitar que en el futuro vengas a mí
achantajerme y decir que todas las incomodidades que tienes son las secuelas del
accidente de coche de hoy."Ella lo miró con un leve enfado en su cara, "Yo no haría
eso.""Es difícil de predecir el corazón de la gente. Hay alguna persona que, para no dar
clases a mi hermano, dijo que estaría ocupada con su tesis, pero resultó que había
mentido por el tratamiento diferente. La gente que sabe mentir no puede verlo en sus
caras, y todos pueden ser inocentes e inofensivos."La chica estaba ansiosa: "Yo..."Sólo
para no avergonzarse más tarde.El doctor hizo la lista y le dijo a la enfermera que
lallevara para un examen.Calor salió y le preguntó en secreto a la enfermera: "¿Cuánto
cuesta este conjunto de pruebas?"La enfermera miró el precio, "Más de seis
mil."Inmediatamente arrebató la lista de la mano de la enfermera y se volvió cojeada
hacia Ticengo Jorge."Me gustaría hablar contigo a solas.""Habla."Ella mordió el labio:
"No necesito revisar, mis piernas están bien, no son mis piernas las que me duelen,
es..."Bajó los ojos y se ruborizó.Ticengo Jorge miró , "¿Qué es?"Levantó los ojos con
exasperación y le miró con ira: "Me duele la parte privada mía."
● Capítulo 50 Hospitalización.
Se apresuró a bajar las escaleras, "¿Estás... estás bien?""Sálvame, salva a nuestro hijo,
yo, yo estoy sufriendo." Después de decir eso, se desmayó.Moran Gabriel se molestó y
miró hacia Calor, "¿Por qué la empujaste?""No lo hice", Calor la miró, "No la
empujé.""Fuiste tú quien levantó la mano y ella se fue rodando."Calor respiró
bruscamente, "Realmente no lo hice, mi mano no la tocó en absoluto.""¿Así que quieres
decir que se bajó ella misma? Se preocupaba tanto por este niño que¿cómopodía
aprovecharlo para controlarme? ¿cómo podría hacerlo? Calorita, yo tampoco iba a
quedarme con este niño, pero no deberías haberlo hecho así."Moran Gabriel tomó a
Sora por los cuernos, se dio la vuelta y se fue a un ritmo rápido.Calor estaba en la
puerta de la cafetería y todo su cerebro estaba un poco inflamado.¿A qué tipo de
persona la tomó el Moran Gabriel?Estaba parado detrás de ella y no podía ver nada, así
que ¿por qué dijo que ella empujó a Sora?Alargó la mano y cubrió su corazón que
estaba realmente obstruido.Ella vino por venganza, pero al final, se convirtió en la que
más tenía que perder.
Para Sora, eso es su propia carne y sangre.Se dice que un tigre no se come a sus hijos,
pero cómo podía...Cuando se trataba de luchar despiadadamente, ella no era realmente
la oponente de Sora.Pero no va a dejarlo pasar así.Ella definitivamente, definitivamente
no dejaría que Sorale tendiera trampas por esto.Exhaló, ordenó su humor, bajó
rápidamente las escaleras y salió del café, tomando un taxi de regreso a su casa.Dos
horas después, apareció en el hospital.Sora fue hospitalizada por un aborto.Cuando
entró en la habitación del hospital con un ramo de flores, Sora estaba acostada en la
cama del hospital llorando.Y Gabriel estaba sentado en una silla a un lado sin expresión
en su cara.Al ver Calor, Sora siseó: "Calor, ¿por qué me hicistes esto? Si me odias, ven
a mí, ¿por qué haces daño a mi hijo?."Con emociones estimuladas, Soragritó
angustiosamente.Viendo esto, Moran Gabriel se levantó y se acercó a Calor: "Vuelve tú
primero."Calorinclinó la cabeza para mirar a Moran Gabriel, caminó a su alrededor, se
dirigió a la cama del hospital y dejó las flores: "No grites, no estoy aquí para
pelear.""Vete a la mierda."Sora la miró con lágrimas en los ojos.
Exhaló Calor, "Moran Gabriel, fuera tú.Necesito hablar con Sora a solas por un
rato.""Ella ya está así, y tú estás...""¿Qué, todavía tienes miedo de que me la
coma?"Calor se volvió para mirarlo con una nebAlayaa en sus ojos, "¿Soy una demonia
en tus ojos?"Moran Gabriel dijo, "No la irrites, el doctor dijo que el aborto también
debería permanecer en silencio durante un mes." Después de eso, se dio la vuelta y
salió.La puerta se cerró, Calor exhaló, se dio la vuelta y caminó hacia la cama, mirando
a Sora."¿Por qué hicistes eso?""No sé de qué estás hablando.""Obviamente no te
empujé", apretando Calor los dientes casi hasta las lágrimas, "¿por qué lo hiciste?"Sora
apretó los dientes: "Calor, no puedes conmigo, Moran es mío.""Para conseguir a Moran
Gabriel, ¿así es como lo usas? ¿Qué hizo mal el niño? ¿No se te ocurrió, antes de
caerte, que perderías a este niño?""Originalmente este niño tampoco era bendecido,
Moran no lo quería, y la rectora me dijo que lo abortara. Y acordar el aborto de este niño
a cambio de que no puedas seguir en la escuela fue un trato que hice con La rectora.
Te agradecería que me dieras una oportunidad tan adecuada, que has mantenido a
Moran atrás, él no podía ver nada, así que, Calor, ahora estás atónita, eres la asesina
que mató a mi primer hijo con Moran."Calor doló y se sintió para el niño que ni siquiera
llegó al mundo.
"Es tu hijo, ¿tu corazón se hace con hierro?""En cualquier caso, mi propósito se ha
logrado, y sólo cuando soy despiadada, puedo hacerte desaparecer completamente del
mundo de Moran Gabriel. ¿Cómo puede Moran Gabriel amar a los demás si no
desaparece? Calor, estoy realmente harta de ti hasta la médula, y por el resto de mi
vida, no quiero volver a tener nada que ver contigo, ¿sabes?"Se rió: "Cuatro años en el
mismo dormitorio, realmente no lo sabía que era tal existencia a tus ojos que me
odiastesilenciosamentepor cuatro años.Sufriste mucho. Pero... Sora, tengo miedo de
decepcionarte, porque como retribución por la muerte de tu propio hijo, no podrás
conseguir a Moran Gabriel y el trabajo, lo recuperaré, espera y verás."
Se dio vuelta para irse.Sora se rió fríamente, le gustaría ver de qué manera podría
comprobarse.Calor salió de la sala.Moran Gabriel, que estaba apoyado en la pared, se
enfrentó a ella oblicuo.Ella lo miró su mirada fría.Moran Gabrieldijo, "Sé que no lo dijiste
a propósito, sólo porque estabas demasiado enfadada en ese momento, por eso
fallaste, pero Calor, lo malo ha sido malo, tú..."Calorinclinó su cabeza, sacó una
grabadora de su bolsillo y la abrió.La grabación comenzó desde cuando ella entró en la
sala, y él la escuchó tranquilo.Cuanto más escuchaba, la cara más dura parecía, y al
final, simplemente apretaba los puños.
Cuando la grabación terminó, Calor apagó la grabadora y la puso de nuevo en su bolsa,
mirando hacia él.GabrielMoranmovió su mirada remordido, "Calor, lo siento, yo...""La
palabra amor, no la digas a la ligera en el futuro, después de todo, el hombre con un
corazón diferente es la escoria. Moran Gabriel, me odio por una vez por creer en ti, y te
odio, y en el futuro, no me busques nunca más, y mucho menos me hables de amor, no
me mereces."Se fue con la cabeza alta y orgullosa.Moran Gabriel apretó los dientes
mientras abría la puerta de la sala con fuerza y se acercó a la cama, mirando a Sora
que tenía la cara destrozada.Sora todavía tenía lágrimas colgando de su cara, "Moran,
¿no me dejarás sólo porque el bebé se ha ido, verdad? Me gustas mucho, así que...
nunca me dejarás.""No finjas, he oído todo lo que tú y Sora acaban de decir."Sorase
suspendió.¿Como podía ser? Estaba tan lejos de la puerta aquí, y el sonido de ellos no
era tan grande..."De ahora en adelante, aléjate de mí todo lo que puedas y no me dejes
volver a verte, me das asco."Moran Gabriel se dio la vuelta y se fue indiferente,
cortando todas sus facturas médicas, que fue la retribución que recibió por lo que se
culpó a sí misma.Sora tenía una mirada de pánico en su cara, por lo que estaba
pasando.En el taxi, Calor vaciló y vacilóque llevó a la marcación del teléfono de Ticengo
Jorge."Soy yo.""Lo sé", la voz de Ticengo Jorge era tranquila, "Hoy es realmente un día
memorable, esta es todavía la primera vez que tomaste la iniciativa de llamarme, ¿qué
te parece?, ¿todavía estás enfadada conmigo?"Después de un largo período de
entusiasmo, dijo: "¿Es válida aún la condición que me prometiste?"Ticengo Jorge
sonrió, el pequeño pez quedó enganchada."Claro. ¿Quieres usarla?""Creo que me
gustaría recuperar mi estado de retención, ¿puedes ayudarme?""Vale, para que no te
duela la conciencia por mi gran favor, esta noche, me invitas a cenar, y después de
cenar,estaremos en paz con este trato, ¿vale?"
● Capítulo 60 La tercera.
Calor insistióen bajar en un cruce que estaba a un paso de la compañía.Después de
salir del coche, llevó su bolsa a la espalda y trotó hasta la oficina.Tuvo prisa y no llegó
tarde.Pero al entrar en la oficina, descubriendo que ella era la que había llegado más
tarde.Regresó a su lugar con algo de timidez, calmando su respiración que se había
vuelto más rápida por correr, luego empezaó a hojear los datos.Después de más de dos
horas, se puso de pie, flexionó sus músculos, llevó su propio vaso de agua a tomar el
agua a la sala de despensa.Dentro, había algunos murmullos de mujeres."El cien por
cien es ella.""No necesariamente.""¿No viste ese vestido en ella?Es el estilo nuevo más
popular de la temporada en los Manlytons, y acabó de lanzarse al mercado hace una
semana. Costará 110 mil yuanes.Soy fanática de esta marca, y no puedo equivocarme,
eso es 100% producto estandarizado.""Tienes razón, ¿cómo puede una estudiante
universitaria recién graduada permitirse comprar un Manlyton, eso parece correcto,
debe ser la tercera del general Mazur.""Así es, miren su cara que parece una persona
que hace sufrir a la nación y al pueblo."Calor empujó la puerta y entró.
Varias personas la vieron y estaban silenciadas inmediatamente.Sonrió educadamente
a algunas personas, tomó el agua y dejó la despensa.En su asiento, sonó su
celular.Viendo que era Nanson Blanco quien llamaba, directamente cerró su teléfono y
no respondió.Al mediodía era la hora de salir del trabajo y todos se fueron.Sara Garcia,
que había venido a trabajar como temporal durante el mismo período, se le
acercó."Calor, ¿quieres venir conmigo a la cantina para cenar?"Cerrando el archivo,
Calor dijo: "Qué bueno."Las dos bajaron juntas a la cantina y ella pidió un tazón de
fideos.Mientras esperaba fideos, sonó el teléfono de Calor.Viendo que era el tercer
joven maestro de la familia del propietario llamando, le dijo a Sara Garcia, "Voy a tomar
una llamada."Se fue a un lado con el teléfono en la mano, lo cogió y dijo en voz baja,
"Hola.""¿Cuándo sales del trabajo?""Estoy fuera de trabajo y estoy comiendo en la
cafetería de la empresa.""¿Qué pasa con mi almuerzo?""Ni siquiera pude hacerlo esta
mañana, ¿no lo sabías?""Así que lo que estás diciendo es que ¿me dejas en
paz?"Calor hizo una mueca con la boca diciendo: "No cociné, ¿cómo puedo
preocuparme por ti?""Haré que el secretario se prepare, y tú subes a comer conmigo,
aburrido de comer solo.""Pero vine al restaurante con una colega, los fideos fueron
ordenados y no es un buen momento para salir."Sólo había terminado cuando ya había
llamado a su número de fideos.Ella dijo rápidamente: "Sin más preámbulos, iré a
brecogerlos fideos."Se colgó el teléfono, Ticengo Jorge no estaba feliz, pero no era
bueno estar demasiado ansioso.Calor trajo los fideos y se sentó.Sara Garcia sonrió y
dijo: "Todavía es la primera vez que veo a gente rica comiendo fideos, pensé que
ustedes no comían estas cosas.Cuando fui a buscarte para que bajaras a comer juntas,
estaba un poco preocupada de que me rechazaras.No lo esperaba que fueras
extraordinariamente agradable para llevarse bien.""¿Rica?"Calor se quedó perpleja por
un momento, "¿Te refieres a mí?""Sí."Calor sonrió, "No soy una persona rica, soy tan
rica que sólo me falta dinero.""Te encanta bromear."Se preguntó a sí misma: "No estoy
bromeando, soy pobre.¿Es raro que cómo puedas tener un malentendido así?""Si una
persona que lleva ropa deManlyton es pobre, pues,se pude decir que somos
indigente."¿Manlyton? Era la segunda vez que escuchaba la palabra hoy.
Miró su propia ropa, ¿podría ser que la ropa que Ticengo Jorge había preparado para
ella fuera de Manliton?No sabe nada de marcas, sólo las usa directamente.Entonces,
¿de qué hablaba el grupo en la despensa esta mañana sobre la tercera, hablando de
ella?"La ropa es una imitación." Dijo con calma."Cómo puede ser?Hay una hermana en
nuestra sección, una fanástica de Manlyton, quien dijo que este vestido tuyo, cien por
ciento era auténtico.""No voy a comprar ropa así de cara, cuando todavía alquilo una
habitación para vivir." Ella frunció los labios y comió los fideos suavemente.Sara Garcia
la miró incrédula, "¿En serio?"Ella sonrió, "¿Por qué te estoy mintiendo?"Sara Garcia lo
creerá, pero no dijo nada más.Después de la comida, las dos subieron juntas.Mucha
gente en la oficina se reunió para charlar, y cuando vieron que las dos volvían, alguien
les echó una mirada.Sara Garcia volvió a su escritorio.Calor les ignoró, tomó el vaso y
fue a la despensa, sirvió un vaso de agua y marcó el teléfono de Tona mientras la
bebía.Tona cogió el teléfono y dijo perezosamente, "¿estás sobria?""¿Qué me pasó
anoche?""¿Cómo lo sabía? Parece que estabas desesperada por beber. Espera un
minuto, no hables de esto. Tu ese hermano desvergonzadoes demasiado guapo. ¿Está
sin novia?"Viendo que las noticias no han dicho que tiene una novia. ¿Crees que tengo
la oportunidad de presentármele? Quien está cerca de la torre, toca la luna primero. Si
soy un fénix, seré una cuñada delante de ti, me divertiré sólo de
pensarlo.""¿Hermano?"Se dudó si su hermano había venido a verla anoche."Espera un
minuto, vale, deja clara, ¿qué hermano?""¿No sabes quién te llevó a casa
anoche?"Calor dijo: "¿Quién?""Hombre.Realmente no lo sabes. ¿Tu hermano te envió a
casa y se fue?""¿Cuál de mis hermanos es?" Estaba aún más confundida, ¿no fue
Ticengo Jorge quien la trajo a casa ayer?Pensando que hay tantos hermanos en la
familia Jorge, dijo: "El dueño de la pluma, en la Ciudad Norte, una figura parecida a un
dios, Ticengo Jorge.""Hm, eso... bueno, en realidad...""Bueno, no lo escondas, lo vi todo
ayer, fue el que vino al restaurante a recogerte. No me lo esperaba quefueras la
princesa invisible, tu hermano es demasiado mimado para ti.""¿Me mimó?""Sí, joder, me
avergüenzo de ti ahora que lo pienso, ¿recuerdas todo eso de que estabas borracha y
tuviste que coger el colgante de cristal del candelabro del restaurante de alguien?"Calor
se ruborizó, "¿Existe tal cosa?""Hay.""El ... y el resultado?""Como resultado, tu
hermano, sin decir una palabra, sacó su tarjeta bancaria, la tiró al camarero del
restaurante, luego saltó a una silla, se agachó y tiró una bola de cristal para ti y te dijo
que te la diera.""Eructo."Pensando en el colgante de cristal que había visto en su casa
esta mañana, Calor se acercó para cubrirse los labios y colocó el vaso en el mostrador,
agachándose y cubriéndose la cara.Dios mío, qué pena.¿Cómo podría enfrentarse a
Ticengo Jorge en el futuro?Ah, ¿qué hacer?No hay manera de vivir.Alguien empujó la
puerta desde fuera y vio a Calor agachada y despeinada, la entrecerró y se fue a hacer
café.Calor se levantó y le dijo a Tona, "Bien, todavía tengo algo aquí, así que te dejaré
en paz y volveré contigo para la cena."Colgando el teléfono, cogió su vaso y estaba a
punto de salir.Resultó que en ese momento, la empleada que acababa de entrar
también se dio vuelta.Los dos ni siquiera se habían choqueado cuando una taza llena
de café recién hecho del personal salpicó a Calor.
● Capítulo 61 Escaldadura.
Calor de un grito de dolor, levantó inmediatamente la ropa delante de su
cuerpo.Mientras abanicaba de un lado a otro, corría al fregadero con su propia taza
recogió un vaso de agua fría, vertiéndola sobre su propia ropa.Pero como era un vestido
de blusa y falda, no podía levantarlo para inspeccionarlo.La otra parte vio a
Calorsufriendo, se desnaturalizó la boca, y luego dijo falsamente, "Oops, interna, lo
siento mucho. No lo hice a propósito."Calor la miró.Si la otra persona no lo hizo en serio,
olvídalo.Pero..."No nos tocamos juntas, así que ¿por qué derramaste el café
primero?""¿Qué quieres decir con eso? Nos encontramos explícitamente y ahora dices:
"¿Te salpiqué a propósito?""¿No es así?"Las discusiones de las dos rápidamente
atrajeron a una multitud de gente.La empleada tiró aCalor de la despensa, con una cara
de inocencia a la humanitaria que la rodeaba, dijo: "Queridos, vengan y ayúdenme a
evaluar el razonamiento.Hace un momento hice una taza de café, cuando me di vuelta,
accidentalmente me topé con esta trabajadora temporal, el café se derramó un poco
sobre ella, como resultado, incluso dijo que lo hice a propósito, jaja, yo realmente...
afortunadamente, me disculpé, si no me disculpé, ¿quieres decir que maté a
propósito?"Calor miró a la otra parte con una cara malvada y estaba algo
exasperada.¿Esto es una plaga del cielo?Algunas personas de alrededor comenzaron a
hacer las paces, pero como ella era una trabajadora temporal, todos ayudaron a la
empleadaoficial."Calorita, no te enfades, nuestra oficina siempre ha sido armoniosa,
nadie te atacará deliberadamente.""Eso es, no es para tanto.Ella te pidió perdón, y
olvídalo, el asunto pasará."Observando las útiles palabras del grupo, Calor sabía que
aunque explicara que las dos no se habían chocado y que la otra lo había hecho a
propósito, nadie lo creería.O, en realidad lo creen, pero aún así elegirían ayudar a una
trabajadora contratada como ellos en vez de a una trabajadora temporal como ella.Calor
miró fríamente a la Supe, se dio la vuelta y se alejó de la multitud para ir al
baño.Lentamente levantó su vestido, una rebanada completa alrededor de su pequeño
vientre por encima de sus pantalones blancos de seguridad, todo ya está roja e
hinchada.En la entrada, justo a tiempo alguien entró, se sorprendió cuando vio la herida
en su estómago.Le acudió diciendo: "¿Por qué es tan grave, Calorita, tienes que ir al
hospital a examinar."Calor también sintió que podría inflamarse si esto continuaba.
Luchó contra el dolor, salió del baño y fue a su supervisor inmediato para un
permiso.Cuando oyó que iba al hospital, Supe dijo displicente, "Oh, tan petulante, el
agua derramada en tu cuerpo, ¿todavía quieres ir al hospital?"Calor dijo fríamente: "Eso
era agua caliente hirviendo.""¿No tienes todavía una capa de ropa?"La empleada que
salió del baño lo oyó y acudió diciendo: "Hermana Supe, Calor le está haciendo
ampollas en el estómago, es bastante grave."Supe miró fríamente a la otra parte,
"Gisele, ¿qué tiene que ver esto contigo? Sé que no me miras favorablemente, pero no
eches más leña al fuego aquí.""¿Cómo eché combustible al fuego, lo vi con mis propios
ojos, la chica se quemó el estómago por ti, y nadie puede decirlo?"Justo entonces, la
puerta de la oficina del gerente se abrió, y el general Mazur salió, disgustado, "Qué
pasa, qué es todo ese ruido durante las horas de trabajo, ¿no queréis trabajar
ya?."Supe caminó al lado de Vicente Mazur, quejándose: "general Mazur, este trabajo
no puedo hacer, soy una antigua empleada, pero me ha apretado una nueva
trabajadora temporal. ¿Qué es esto?"Supe tomó las palabras que había dicho antes en
la puerta de la despensa y se las dijo de nuevo a Vicente Mazur.Antes de decir
algoVicente, Gisele se acercó y se puso de pie al lado de Calor y dijo: "Jefe Vicente,
deje que Calor vaya al hospital primero, tiene ampollas en el estómago, si esto continúa,
retrasará las cosas." No podemos abusar de la gente sólo porque son trabajadores
temporales, ¿verdad?"Supe dio un paso al frente, dijo: "Gisele, ¿qué quieres decir con
que?¿Estoy intimidando a la gente?""Si hay matones o no, ¿no lo sabes en tu propio
corazón? Tú eres la que dio el golpe, ¿qué te hace tan arrogante?""Dios. ¿Ya no hay
ley?Hace un momento le tiré agua encima, ya he dicho que he sido demasiado
humilde.Ella fue la que me difamó primero, diciendo que no nos habíamos encontrado,
le tiré agua a propósito, sólo me estaba apuntando.""Calor acabó de empezar a trabajar,
hoy es sólo el segundo día de trabajo, ¿qué necesidad hay de que ella se dirija a
ti?"Vicente Mazur estaba disgustado y les regañó: "¿Qué quieren hacer?¡Cállense!"Se
acercó a Calor: "Calorita, si tu lesión es realmente grave, ve primero al hospital, no te
demores."Calor giró su cabeza y echó una ojeada a Supe, "La gente está haciendo
cosas y los cielos están mirando, quien esté calumniando a alguien lo sabe en su
corazón."Terminó, se dirigió a la mesa, tomó su bolso y se fue.Vino al hospital, el doctor
le examinó y dijo que era una quemadura y algo de edema.Afortunadamente, su ropa
estaba gorda y amortiguada cuando llegó el agua. Agarró la herida con agua fría a
tiempo, de lo contrario sería muy grave.El doctor le dio una medicina y volvió a envolver
la herida con gasa.Después de instruirla en algunas precauciones, pagó su cuenta y se
fue del hospital.Cuando estaba a punto de salir de la cirugía de emergencia, vio por
casualidad a Ticengo Jorge corriendo de la puerta de la sala de emergencias.Vio a
Calor de una mirada y se acercó a su lado: "¿Cómo estás?"Calor sorprendida, "¿Cómo
llegaste aquí?""Te pregunto, ¿cómo está la lesión?"Calor agitó la factura en su mano
delante de él: "No es nada importante, el doctor se encargó de todo por mí.""¿Cuál
doctor se encargó de eso por ti?""Cirugía de emergencia, eh."Ticengo Jorge se acercó y
buscó al doctor para preguntarle sobre Calor, y estaba seguro de que era una
quemadura por un tiempo, y de hecho había sido atendida, lo que sólo le tranquilizó un
poco.Aliviado, se acercó a Calor y le dijo un poco infeliz: "¿Por qué no me llamaste
cuando algo pasó?"Calor le miró: "No eres médico.""Pero yo soy tu jefe."Se rió:
"Entonces me atrevo a preguntarle al jefe, ¿puede considerarse como lesión laboral
mientras herí durante las horas de trabajo? ¿Será reembolsado?"Ticengo Jorge la miró
y suspiró indefenso, todavía con ganas de bromear.Sólo la asustó a principios.Los dos
salieron del hospital juntos y entraron en el coche, y justo cuando estaba a punto de
ponerse el cinturón de seguridad, dejó escapar un suspiro de dolor.Ticengo Jorge la
miró, "¿Qué pasa?""Duele abrocharse el cinturón.""Ve a sentarte atrás."Calor salió del
coche y llegó a la última fila, se sentó en el asiento del conductor, la miró con
preocupación, y dijo con odio: "¿Cuál empleada es tan indiferente, ni siquiera puede
sostener una taza firme, no trabaje, ¡qué desperdicia!""Es una antigua empleada,
llamada Supe, que se ha disculpado conmigo y ha dicho que no quería hacerlo."La miró
por el espejo retrovisor con una mirada de odio, "¿Y qué? ¿Y tú hiciste un gran
escándalo y dijiste que estaba bien?"
● Capítulo 75 Tú me tienes.
Después de comer con Tona, las dos caminaron alrededor de la escuela brazo a
brazo.En este momento, los cuatro años verdes que han pasado juntas son como
cruzar frente a sus ojos.Tona se apoyó contra el hombro de Calor: "El tiempo pasa
volando, ¿no es así?""Sí, cuatro añospasaron en un abrir y cerrar de ojos.""¿Todavía
quieres ir a la escuela de posgrado?""Sí", asintió Calor, "También sabes que con mi
actual diploma, aunque me quede en la escuela para enseñar, no estoy calificada para
estar en el podio, no siempre puedo estar en un puesto administrativo, ser consejera de
por vida, eso también va en contra de mi intención original.""Pero, es difícil
permanecerte en la escuela y estudiar al mismo tiempo.""Estar vivo en sí mismo va a
ser duro, y además, trabajo en una escuela y tengo un mejor ambiente de aprendizaje,
me gusta eso."Tona se quedó sin palabras: "Te convencí de verdad, otras personas
entraron en la universidad, luego empiezaron todo tipo de relajación, tú eras lo contrario,
vivías más cansada, no sabes, te perdiste los mejores cuatro años de tu vida...""Bueno,
te conocí al menos en los cuatro años.""Oye, boquita tan dulce, si no fuera por el hecho
de que tengo una visita privada esta noche, me gustaría voltear tu placa.""Eso sería un
verdadero placer para mi."Las dos se sonrieron y se burlaron de que sus días de
universidad habían terminado.Por la noche, cuando Tonase fue, no fue a despedirle.No
tenía miedo de que llorara Tona, pero tenía miedo de no poder contener sus
lágrimas.Después de todo, Tona la acompañó durante cuatro años de su mejor
juventud, y fue la mejor amiga que le gustó en su corazón.Por la noche, cuando Ticengo
Jorgevino a cenar, estaba sentada en la mesa de acebo frente al edificio, mirando al
cielo con incredulidad.Salió del coche y se acercó a ella: "¿Qué estás mirando?"Señaló
al aire: "El avión.""¿Qué tienen de bueno los aviones?""¿No tienes curiosidad por saber
qué clase de persona se sienta ahí, adónde va, qué clase de secretos tiene en su
corazón, qué parientes tiene en casa?""¿Tona está en el avión ahora?"Ticengo Jorge se
sentó a su lado.Sacudió la cabeza: "Ella se fue en tren de alta velocidad.""¿Así que
todavía ves aviones?""La envidio", dijo francamente, "Cada año cuando las vacaciones
terminan y los estudiantes dejan la escuela uno tras otro para ir a casa, los envidio
especialmente por tener un hogar al que volver, cuando la escuela comienza, traen
muchas especialidades de la casa y dicen, esto lo prepara mi padre, esto lo hace mi
madre, siempre que esta vez, me siento avergonzada de yo misma.Ahora que me he
graduado y cada uno ha tomado su camino por separado, sólo yo todavía soy esa
Calor, sin hogar, sin parientes, sin pensamientos o sueños, sintiendo la vida, de
verdad..."Ella lo miró mientras hablaba: "Por cierto, no me compadezcas, no digo eso
para que la gente me compadezca, sólo estoy siendo celosa y envidiando a los
demás."Ticengo Jorge extendió la mano y naturalmente rodeó sus brazos alrededor de
sus hombros: "Nadie se compadece de ti, ¿dónde te compadeces, crees que los que
tienen más parientes deben ser felices? En realidad no, tienen mucho de qué
preocuparse. Además, ¿quie¡én dice que no tienes familia ahora?, me tienes."El
corazón de Calor se tocó y sus ojos estaban rojos.Probablemente la cosa favorita que
se escucha de alguien que ha estado solo por mucho tiempo es "me tienes."Ticengo
Jorge la miró y sonrió con ojos mimados."Calor, espero que un día puedas ante mí
levantar la guardia contra mí, quitarte la armadura y aferrarte a mí para calentarnos, y
en ese momento ninguno de los dos estará solo."Calor casi olvida que Ticengo Jorge,
también era una persona solitaria.
...En la madrugada del sábado, antes de que Calor pudiera despertarse, su teléfono
móvil sonaba.Pensando que era un despertador, lo apagó casualmente.No pasó mucho
tiempo antes de que el teléfono volviera a sonar.¿No apagó su despertador anoche
cuando se le calentó el cerebro?Abrió los ojos y sacó su teléfono y lo puso delante de
sus ojos, era de Tiren Jorge.Este chico, en el fin de semana, le llamó de alguna
manera.Levantó el teléfono, su voz algo lánguida: "Hola.""Tercera cuñada, ¿por qué me
has colgado el teléfono, todavía no estás despierta?"¿Tercera cuñada?La denominación
era realmente extraordinariamente dura."Tiren , tu hermano y yo no estamos casados
todavía.""Está bien, enamórense, yo así lo llamé primero, ¿cuándo vas a venir?"Calor
tejió sus cejas: "¿Venir? ¿A dónde?""Estás dormida, ¿no es así?", dijo mi hermano que
te lo había dicho. Hoy todos se van de vacaciones juntos a un centro turístico
suburbano."Se había olvidado de ello.Iba a dormir hasta que se despertara
naturalmente, se levantara y limpiara, y luego saliera de compras a relajarse.El
resultado…
"Mejor no me voy, tengo otras cosas que hacer hoy.""Cualquier cosa se pospone, un
momento después te recojo en el camino con mi tercer hermano, nos esperas en
casa."Después de terminar, Tiren Jorge colgó directamente el teléfono.¿Cuándo
aprendió el chico a tomar el asunto en sus propias manos?Se quedó sin habla, y
después de frotarse el pelo largo en señal de molestia, se levantó de la cama y
comenzó a lavarse.Justo después del desayuno, el teléfono volvió a sonar.Viendo que
era Ticengo Jorgeel que llamaba, estaba indefensa y respondió."Hola.""Ve abajo, te
veré abajo.""¿No puedo no ir?""¿Qué piensas?" La voz de Ticengo Jorge era tranquila:
"¿Debes bajar tú sola, o debo subir y llevarte abajo?"Colgando el teléfono, Calor llevó
su propia pequeña bolsa por las escaleras.Se subió al auto y se sorprendió al ver a
Ticengo Jorge solo, "¿Por qué solo tú?""No es suficiente yo solo para recogerte?""No
quería decir eso, sinoporque hace un momento Tiren me llamó, y dijo que iba a venir
también."Ticengo Jorge soltó una brasa, "Lo dejé ir directamente con el coche, ¿qué
bombilla es entre nosotros dos?"Calor lo miró, sin palabras, "¿Bombilla? ¿Dice eso de
tu propio hermano?"
Ticengo Jorge enganchó sus labios: "Pensé que estarías más atenta a que diga que los
dos estamos juntos en esto."Frunció el ceño: "Esta...también me importa.""Tarde." Se
rió.Ella le dio una mirada desdeñosa, "¿Podemos volver temprano esta tarde? Mis
cobertores de la colcha deben ser lavados hoy.""No volvemos hoy.""¿Eh?"Calor se
congeló por un momento: "¿Qué quieres decir con que no puedes volver esta
noche?""Nuestro viaje es de dos días y una noche.""Entonces, ¿por qué no lo dijiste
antes?", se apresuró a decir Calor."Te dije antes que liberaras dos días el sábado y el
domingo.""Pero no dijiste que ibas a salir por dos días, pensé que no estabas seguro de
cuál día."Deprimida: "Date la vuelta, me voy a casa.""Es demasiado tarde.""Pero no he
traído ningún equipaje, sólo he sacado esta pequeña bolsa.""¿Qué más quieres
empacar? Son sólo dos días y una noche, ¿y mudarse de la casa?""Ni siquiera tengo un
pijama que ponerme.""Entonces usa el mío."¿Uso... el suyo?