Biblia de Estudio

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del Expositor

Jimmy Swaggart Ministries

provided by Centro Cristiano de Apologética Bíblica 2020

 BIBLIA DE ESTUDIO
DEL
EXPOSITOR
(SAMPLE EDITION)

Versión Textual Expositora

(2011)

Jimmy Swaggart
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EL LIBRO DEL PROFETA

EZEQUIEL
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Edición Digital e-Book: by ApologeticsCenter- CCAB
Este e-Book no está vinculado con los propietarios del copyright.
Solo para uso personal. Prohibida su venta o utilización comercial.,
por lo que rogamos, adquirir la obra impresa.
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Traducida de las lenguas originales y con traducciones anteriores comparadas
y revisadas diligentemente. Los comentarios exclusivos subsiguientes de cada
Versículo de los sesenta y seis Libros de la Biblia fueron escritos por el
Evangelista Jimmy Swaggart. Diseñada para ayudarle a todo el que desea
entender la Biblia mejor y disfrutarla más, las anotaciones del expositor están
seguras de ser de beneficio al estudio Bíblico de toda persona sedienta por la
Palabra de Dios.

MINISTERIO DE JIMMY SWAGGART

P.O. Box 262550

Baton Rouge, LA 70826-2550, Sitio de Internet: www.jsm.org

ISBN: 978-1-934655-65-8 (Edición Regular de Cuero Reconstituido Color Vino
Tinto 08-601)

ISBN: 978-1-934655-79-5 (Edición de Tapa Dura 08-602)

©2011, 2013 DERECHOS RESERVADOS

Publicada por y propiedad única del MINISTERIO DE JIMMY SWAGGART,

BATON ROUGE, LA, EE.UU.

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76543

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DATOS DEL E-BOOK
Tipo: Biblia de Estudio
Canon: 66
Denominación: Evangélico
Características: Notas
Versión: 1.5
Fuente: DIGITAL y Comparada Impresa
Compilador: CuatroSeresVivientes
Revisión: 18 de JUNIO de 2020
Email: e.sword.biblioteca.hispana.int@gmail.com
cuatroseresvivientes@yahoo.com.ar

Este módulo ha sido creado por un particular para Equipo Biblioteca Hispana
con el fin de llevar la palabra de Dios a todas las naciones de habla hispana y no
pretende de ningún modo lucrar con ella. Solo para uso personal. Prohibida su
venta. Esperamos le sea de bendición.

Contenido del e-Book:

1.- Biblia de Estudio Con Comentario Incrustado.

2.- Anexos en forma de Libro.

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Acerca de la Obra

PROLOGO

La Biblia de Estudio del Expositor es una de las más singulares de su tipo en el

mundo hoy en día. Está diseñada con un solo pensamiento en mente, que es
ayudar al estudiante de la Biblia a entender la Palabra más adecuadamente. Para
hacer esto, hemos utilizado unos de los mejores eruditos Hebreos y Griegos,
junto con nuestros sesenta años de estudio Bíblico personal.

Las dos palabras, «Expositor» y «Comentario» son muy similares en significado,

sin embargo, la palabra «Expositor» se refiere a un enfoque más clínico, que se
refiere al hecho de que hemos dado pocos pensamientos personales con respecto
al Texto, pero hecho todo lo posible en analizar cada Escritura de acuerdo a su
significado. De esta manera, creemos que estamos siguiendo fielmente lo que el
Espíritu Santo, Quien es el Autor de la Palabra de Dios, desea.

Lamentable y tristemente, la Biblia es un libro poco leído. Esto es trágico, puesto

que la Palabra de Dios es la única Verdad revelada en el mundo hoy en día, y, de
hecho, que ha sido.

Demasiados creyentes simplemente no leen la Biblia, al menos como debieran,

dando la excusa de que sencillamente no pueden entender lo que dice.
Esperamos que la BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR ayude a resolver ese
problema al hacer que el Texto sea más fácil de entender.

Con el fin de basar el significado del estudio bíblico en un Texto fiel a las Sagradas
Escrituras y claro de entender en el castellano, le presentamos al lector con una
nueva traducción, la VERSIÓN TEXTUAL EXPOSITORA. Por la palabra «Textual»
queremos decir que transmite, sin perjuicio, la intención, lucidez y fuerza del
Texto original. Por la palabra «Expositora» queremos decir que por la sana
exegesis del mismo Texto el comentario aplica conclusiones que resultan en el
significado apropiado de la Escritura. De este modo, se hace realidad un
entendimiento mayor de lo que el Espíritu Santo dice en la Biblia y lo que
significa para la vida espiritual del lector.

Al estudiar la Biblia y el significado de las palabras presume que el Texto Bíblico

es una traducción fiel de las Sagradas Escrituras según fueron escritas
originalmente en hebreo, arameo y griego. Las traducciones de la Biblia abarcan
un amplio espectro de métodos de traducción que por un lado comienza con la
traducción literal textual, palabra por palabra, y por el otro lado concluye con la
llamada traducción dinámica de tendencia parafrástica que no es fiel al texto
original sino guía mal al lector al hacerle suponer que tiene en sus manos la
Palabra de Dios cuando es realmente palabra de hombre que tergiversa el Texto
original con el motivo de propagar un credo personal. Por eso urge una
traducción de la Biblia en el castellano que es fiel al Texto original y al mismo
tiempo clara en su lenguaje. Confiamos que esta nueva versión castellana de la
BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR aproxima este fin para la Gloria de Dios y
beneficio al lector.

Durante la década de 1990, el Señor comenzó a tratar con mi corazón en cuanto

a esta obra, que ahora ha sido completada. Al principio, el Señor no me dio
instrucciones de cómo debía hacerlo, y me refiero al formato — ¡sólo que se debe
hacer! Y en el año 2001, el Señor empezó a darme el formato que debíamos
seguir, que, hasta donde yo sé, es único.

Escribí las anotaciones del Nuevo Testamento primero. Cuando lanzamos el

NUEVO TESTAMENTO DEL EXPOSITOR al público general, yo estaba contento
con la respuesta favorable. Decenas de personas han escrito o enviado mensajes
de correo electrónico diciendo: «Hermano Swaggart, el NUEVO TESTAMENTO
DEL EXPOSITOR me ha ayudado a entender la Palabra de Dios a un grado mayor
que nunca antes». Por supuesto, esa es la meta que siempre buscamos, una
comprensión mayor de la Palabra de Dios. Y si nuestros esfuerzos lo ocasionan,
hasta el grado más mínimo, entonces todo el trabajo y mano de obra ha valido la
pena.

Después de que El NUEVO TESTAMENTO DEL ESPOSITOR fue lanzado y recibido

tan favorablemente, con solicitudes constantes de que también hiciéramos lo
mismo con el Antiguo Testamento, y sabiendo también que esto era lo que el
Señor deseaba, inmediatamente empezamos a hacerlo una realidad.

Hoy en día, la Palabra de Dios está bajo ataque, posiblemente como nunca antes,
al menos desde la Reforma; sin embargo, el ataque es sutil, sin emplear un asalto
frontal, sino más bien atacando la Biblia al simplemente ignorarla, concentrando
interés en libros religiosos de toda clase. De alguna manera, mego que nuestros
esfuerzos por la BIBLIA DE ESTUDIO DEL ESPOSITOR tengan un efecto positivo
en el cambio de esta tendencia errónea. ¡Nada puede ocupar el lugar de la Biblia!

Como el lector observará, utilizamos exclusivamente la nueva VERSIÓN

TEXTUAL EXPOSITORA. Al leer esta BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR el
lector observará que muchas de las palabras llevan mayúsculas, lo que en el
castellano no las llevan normalmente. Es debido al hecho de que no pudimos
subrayar muchas palabras en este Nuevo Testamento y decidimos ponerle
mayúsculas a las palabras para recalcar su importancia en la lectura de esta
Biblia. Por ejemplo, en el castellano no se escribe con mayúsculas los meses del
año ni los nombres de los idiomas. Sin embargo, va a encontrar palabras como
éstas y otras que llevan mayúsculas en el texto. Sólo tiene que recordar que tiene
el fin de poner en relieve esas palabras en lugar de subrayarlas. Además, el Texto
de las Escrituras está en negro, con las anotaciones del expositor en rojo. Esto
permite que el Texto de las Escrituras se destaque, separándolo así de las
anotaciones.

Creemos que la BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR es muy fácil de usar.

Decenas de personas nos han dicho que las anotaciones en muchas Biblias de
estudio, mientras que son de ayuda, a veces son difíciles de encontrar. Como
resultado, muchos no toman el tiempo para seguir adelante. Nuestras
anotaciones expositoras siguen inmediatamente después de cada Versículo, que
lo hace muy fácil de ver, leer y entender.

Deseo expresar mi más profundo agradecimiento a mi amorosa esposa, Frances,

que se ocupa de muchos deberes en el Ministerio, que me permite tiempo para
hacer el trabajo y la investigación necesaria para un Tomo como este. Nuestro
hijo, Donnie, entra en esta misma categoría.

Además, deseo extender mi gratitud a; mi secretaria, Nikki Tracy, que trata de

evitar que mi teléfono suene más de 100 veces al día; Misionero Jaime Woolsey,
el editor y traductor que produjo la nueva VERSIÓN TEXTUAL EXPOSITORA del
Texto de la Biblia del hebreo y griego y la traducción de las notas expositoras del
comentario a base de la versión inglesa: The EXPOSITOR S STUDY BIBLE;
Amanda Chow, Daniela Brown, Cherry Guidry y Jeannette Black que pasaron a
máquina todas las palabras de esta Biblia además de revisarla; Jean Woolsey por
revisar y hacer correcciones al borrador del NUEVO TESTAMENTO DEL
EXPOSITOR; Isabel de Gasc, M.A., Instructora del Departamento de Idiomas,
Louisiana State University por sus sugerencias de mejora gramatical en los libros
de Génesis y Mateo; todo el personal del Ministerio de Jimmy Swaggart por
ayudar directo e indirectamente en esta magna tarea; Donna Simpson y Sharon
Whitelaw del Departamento Gráfico que organizaron y pusieron todo en
conjunto — una tarea monumental, por decir lo menos.

Sin embargo, toda esta obra ha sido una labor de amor, pues no hay nada más
provechoso que el estudio de la Palabra de Dios. Por lo tanto, todo lo bueno que
proviene de este esfuerzo, le damos toda la alabanza y gloria al Señor Jesucristo.
En 1997, el Señor me dio una Revelación de la Cruz, que ha transformado mi vida
y ministerio. No fue algo nuevo, en realidad es lo que le fue dado al Apóstol Pablo.
Como resultado, siento que mi entendimiento personal de la Palabra de Dios ha
aumentado grandemente. De hecho, la historia de la Biblia es la historia de
«Jesucristo y Él Crucificado». También se puede decir que la historia de
«Jesucristo y Él Crucificado» es la historia de la Biblia. En verdad, la Cruz de
Cristo es el Fundamento de toda gran Doctrina de la Palabra de Dios. Pedro dijo:

«Sabiendo que habéis sido rescatados de vuestra vana conversación (estilo de

vida), la cual recibisteis de vuestros padres no con cosas corruptibles, como oro
o plata; «Sino con la Sangre Preciosa de Cristo, como de un Cordero sin mancha
y sin contaminación: «Ya preordinado desde antes de la fundación del mundo,
pero manifestado en los últimos tiempos por amor de vosotros» (1Pe_1:18-20).

Esto significa, como dicho, que la Doctrina de la Cruz se formuló en la mente de

la Trinidad incluso antes de la fundación del mundo, por lo que es el Fundamento
de todo tema en la Palabra de Dios, eso es, si todo tema se interpreta
correctamente.

Siendo generoso, se podría decir que cerca del 10% de la Biblia se dedica a la
información sobre la Salvación. Cerca del 90%, o más, de dedica a la instrucción
en cuanto al vivir para el Señor. Y toda esta instrucción se puede resumir en
forma extremamente abreviada en solamente tres frases: 1. La Cruz de Cristo; 2.
Tu fe, 3. El Espíritu Santo. En forma simplista, estas tres frases describen el Orden
de Victoria Prescrito por Dios.

Hemos hecho el mayor esfuerzo en explicar toda Escrituras en la Biblia entera de

acuerdo con esta iluminación.

JIMMY SWAGGART

Para obtener información sobre la BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR o el

NUEVO TESTAMENTO DEL EXPOSITOR — Ediciones en Español e Inglés, por
favor llame al 1-800-288-8350
COLABORADORES

LESLIE E. CARLSON, Th. D., Profesor de Antecedentes Bíblicos y Arqueología,

Seminario Teológico Bautista Sudoeste

Dr. LOWELL COOLIDGE, Presidente del Departamento de Inglés, Colegio de Wooster

Dr. Earl L. CORE, Presidente del Departamento de Biología, Universidad de Virginia

Occidental

HUBER L. DRLIMWRIGHT, Th. D ‫ ״‬Profesor de Nuevo Testamento, Seminario Teológico

Bautista Sudoeste

VIRTUS E. GIDEON, Th.D., Profesor de Nuevo Testamento, Seminario Teológico

Bautista Sudoeste

SIETE RAZONES POR LAS QUE LA BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR LE AYUDARÁ
A ENTENDER LA PALABRA DE DIOS

1. Utiliza la VERSIÓN TEXTUAL EXPOSITORA que es fiel al original con el Texto que es
mucho más fácil de entender.

2. Comentarios después de casi toda Escritura, dando un significado ampliado a cada

Pasaje.

3. La palabra «Expositivo» presenta un significado clínico, a fin de permanecer fiel al

Texto.

4. Nos hemos valido de los conocimientos de unos de los mejores Eruditos del Hebreo
y Griego.

5. Enseña puntos de perspicacia teológica.

6. Comparte el significado de ciertos individuos y acontecimientos, en relación con

tipos y sombras de verdades espirituales más profundas.

7. Presenta aplicaciones prácticas, por lo que la BIBLIA DE ESTUDIO DEL EXPOSITOR

es una de las herramientas más útiles disponibles hoy en día, con respecto al
entendimiento de la Palabra de Dios.
 EL LIBRO DEL PROFETA

EZEQUIEL
1
Ezequiel en Babilonia
(595 a.C.)
1 Y FUE que a los treinta años, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando
yo en medio de los cautivos junto al río de Quebar, se me abrieron los cielos, y vi
visiones de Dios. («A los treinta años» probablemente se refiere al trigésimo año del
Imperio Babilónico. «Junto al río Quebar», no dice exactamente donde estaba
Ezequiel. Algunos creen que este es el río que se conoce ahora como Khabur [antes
Habor, Habur, o Kaboras], que es un tributario del río Éufrates y que fluye unos 322
kilómetros [200 millas] al norte de Babilonia. De todos modos, estaba en alguna
parte de Babilonia. La frase, «se me abrieron los cielos», significa el comienzo del
Ministerio Profético de Ezequiel.)
2 A los cinco días del mes, en el quinto año de la deportación del rey Joaquín (en esta
oportunidad, Ezequiel había estado en cautiverio aproximadamente cinco años. En
este tiempo, los falsos profetas de Judá estaban profetizando la derrota de Babilonia
y el regreso de Joaquín dentro de dos años [Jer_28:3]. Las expectaciones que se
levantaron probablemente fueron compartidas por muchos de los compañeros de
Ezequiel en el exilio. Sin embargo, Ezequiel sabía que no era así, adhiriéndose a los
consejos de la carta que Jeremías había enviado a los Judíos en cautividad [Jer_29:1-
23]. Por lo tanto, él comenzó sus Profecías en este ambiente),
3 Vino Palabra del SEÑOR expresadamente al Sacerdote Ezequiel, hijo de Buzí, en
la tierra de los Caldeos, junto al río Quebar; vino sobre él la mano del SEÑOR. («Vino
Palabra del SEÑOR expresadamente al Sacerdote Ezequiel», significa «en realidad»
o «sin duda». «En la tierra de los Caldeos», se refiere a la Verdad Divina que
dondequiera que haya un corazón que Le busque, Dios será encontrado. En realidad,
entre más profundo las tinieblas, más brillante es la Luz.)
La gloria del Señor
4 Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un
fuego fulgurante, y en derredor suyo un resplandor, y en medio del fuego una cosa
que parecía como bronce refulgente. («Y miré, y he aquí», o sea, que lo descrito se
podía ver. En otras palabras, no era producto de la imaginación de Ezequiel. La
frase, «venía del norte un viento tempestuoso», trata del Espíritu Santo. Equal como
el «viento recio» que vino en el Día de Pentecostés [Hch_2:2]. En realidad se puede
decir, que a Ezequiel le fue dada una visión del Trono móvil de Dios.)
5 Y en medio de todo, se veía una semejanza de cuatro seres vivientes. Y esta era su
apariencia; había en ellos semejanza de hombre. (Aprendemos del Versículo Eze_10:1
que estos «Seres Vivientes» eran Querubines.)
6 Y cada uno tenía cuatro rostros, y cuatro alas. (Sus manos y sus alas estaban
proporcionadas, lo que significa que eran de inteligencia igual que moraba en todo
su ser, y un Solo Espíritu los vigorizaba a todos.)
7 Y las piernas de ellos eran rectas, y la planta de sus pies como la planta de pie de
becerro; y centelleaban a manera de bronce muy bruñido. (La frase, «Pies derechos»,
significa que estaban formados como los de un buey, con énfasis en que no se movían
caminando. Aunque como un buey, hasta este punto es semejanza y nada más.)
8 Y debajo de sus alas, a sus cuatro lados, tenían manos de hombre; y sus rostros y
sus alas estaban por los cuatro lados. (El número «cuatro» tiene gran significación.
Cuatro se refiere a cuadruplicado y, por lo tanto, «consumación», es decir, completo
en sí misino, que sólo puede hablar del Creador, y no de la Creación. Estas Criaturas
asisten al Trono de Dios [Apo_4:6-8].)
9 Con las alas se juntaban el uno al otro. No se volvían cuando andaban; pero cada
uno se movía derecho hacia adelante. (Cuando se agrega los Versículos Eze_1:11 y
Eze_1:24, dos de las alas siempre estaban abajo, y, cuando los Seres Vivientes se
movían, dos estaban extendidas hacia arriba, para que sus puntos tocaran, y en cierto
sentido estaban «unidos». Cuando descansaban, de nuevo estas quedaban abajo. «No
se volvían cuando andaban», se refiere que las cuatro alas no estaban en moción
como sería normalmente cuando el Querubín se movía. En otras palabras, el poder
de su movimiento no estaba en sus alas.)
10 Y la figura de sus rostros era rostro de hombre; y rostro de león a la parte derecha
en los cuatro; y a la izquierda rostro de buey en los cuatro; asimismo todos los cuatro
tenían también cara de águila. (Primeramente, es imposible agotar el significado del
simbolismo dado aquí. Se puede conectar todo esto con la cara humana del Hijo de
Dios, Quien compartió en la Gloria del Padre; de Buey, con Su Sacrificio; de León,
con Su Soberanía, como el León de la Tribu de Judá [Apo_5:5]; de Águila, con Su
remontar a Su Pueblo, sobre Sus Alas del Águila hasta los cielos más altos
[Éxo_19:4; Deu_32:11].)
11 Tales eran sus rostros; y tenían sus alas extendidas por encima, cada uno dos, las
cuales se juntaban; y las otras dos cubrían sus cuerpos. («Tales eran sus rostros»,
parece implicar que el Espíritu Santo desea que nosotros entendamos el simbolismo,
¡al menos hasta donde sea posible que el hombre pueda entender!)
12 Y cada uno caminaba derecho hacia adelante; hacia donde el Espíritu les movía
que anduviesen, andaban; y cuando andaban, no se volvían. («Y cada uno caminaba
derecho hacia delante», parece implicar que de punto a punto, se movían en línea
derecha, de este modo, denota el conocimiento perfecto de dirección y la habilidad
perfecta para ir por un curso designado. La frase, «Hacia donde el Espíritu les movía
que anduviesen, andaban», se refiere al Espíritu Santo que da la dirección, la cual el
Querubín al instante obedece. [La palabra Hebrea para «Espíritu» es un sustantivo,
y debiera traducirse «el Espíritu», como en Gén_1:2.])
13 En cuanto a la semejanza de los Seres Vivientes, su aspecto era como de carbones
de fuego encendidos, parecían antorchas encendidas que se movían entre los Seres
Vivientes; el fuego resplandecía, y de él salían relámpagos. (Parece que estos «Seres
Vivientes» fueron bañados, por decirlo así, en el fuego que rutilaba como un baile de
antorchas que se movía de un lado a otro entre los seres vivientes, pero no eran
consumidos. El «Fuego», distinto de la «Luz», parece ser el símbolo del Poder de
Dios, como se manifiesta en contra del mal [Deu_4:24; Heb_12:29].)
14 Y los Seres Vivientes corrían y volvían a semejanza de relámpagos. (La idea es
de una velocidad incomprensible a la mente humana y sobrecogedora en su
brillantez. Tal vez se pueda decir que viajaban a la «velocidad del pensamiento».)
15 Y estando yo mirando los Seres Vivientes, he aquí una rueda en la Tierra junto a
los Seres Vivientes, a los cuatro lados. (Las «ruedas» representan dirección, de este
modo los «ojos» en el Versículo Eze_1:18.)
16 Y el parecer de las ruedas y de su hechura parecía al color del topacio. Y las cuatro
tenían una misma semejanza: su apariencia y su obra eran como rueda en medio de
rueda. (Por extraño que sea, como veremos, estas «ruedas» que acompañaban a los
Querubines no estaban sujetas de ninguna manera. «Una rueda en medio de rueda»,
parece indicar dos ruedas en una.)
17 Cuando andaban, se movían sobre sus cuatro costados: no se volvían cuando
andaban. («No se volvían cuando andaban», probablemente indica que ellas se
movían en una línea derecha y que las «ruedas» no se volvían como las ruedas
normalmente hacen. Da la idea de una función ordenada y armoniosa.)
18 Y sus aros eran altos y espantosos, y llenos de ojos alrededor en las cuatro. (Juan
el Amado, en la Isla de Patmos, describió los Seres Vivientes que él vio, «llenos de
ojos delante y detrás» [Apo_4:6], mientras Ezequiel describe los suyos como los
«aros [aros de las ruedas] llenos de ojos alrededor en las cuatro». Estos «ojos» ven
toda la Santidad de Dios [Apo_4:8].)
19 Y cuando los Seres Vivientes andaban, las ruedas andaban junto a ellos: y cuando
los Seres Vivientes se levantaban de la Tierra, las ruedas se levantaban.
(Primeramente, debemos entender que las leyes de la naturaleza no tienen
absolutamente nada que ver con estos Querubines. Ellos parecen no estar sujetos a
ninguna ley excepto en la esfera que corresponde a su propia creación y designio de
Dios.)
20 A dondequiera que el Espíritu les movía, ellos iban en la dirección que el espíritu
quería ir; las ruedas también se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los Seres
Vivientes estaba en las ruedas. («A dondequiera que el Espíritu les movía», se refiere
al Espíritu Santo, y debiera de haber llevado mayúscula en la traducción Inglesa y en
el Castellano porque es uno de los nombres del Dios Trino, el Espíritu Santo. Además,
la frase, «Ellos iban en la dirección que el espíritu quería ir», implica su propio
espíritu, alma y cuerpo personal, en cuanto a estos «Seres Vivientes». Sin embargo,
se debe hacer énfasis en que su cuerpo tío es físico, sino más bien un «cuerpo
espiritual». La frase, «Porque el espíritu de los Seres Vivientes estaba en las ruedas»,
parece estar vinculado con los «ojos» y corresponde a su habilidad de «saber».)
21 Cuando ellos andaban, andaban ellas; y cuando ellos se paraban, se paraban ellas;
asimismo cuando se levantaban de la Tierra, las ruedas se levantaban tras ellos; porque
el espíritu de los Seres Vivientes estaba en las ruedas. (Este Versículo es muy similar
al Versículo Eze_1:20. Las leyes autóctonas al hombre son solamente una parte de
las leyes creadas por Dios. Presenciamos ahora las leyes de la creación Celestial,
que son más avanzadas de cualquier cosa que en la actualidad conocemos.
Conoceremos estas leyes después de la Resurrección de Vida, cuando se nos dará
Cuerpos Glorificados.)
22 Y sobre las cabezas de cada Ser Viviente aparecía expansión a manera de cristal
maravilloso, extendido encima sobre sus cabezas.
23 Y debajo de la expansión estaban las alas de ellos derechas la una a la otra; a cada
uno dos, y otras dos con que se cubrían sus cuerpos.
(Según el Versículo Eze_1:9, cuando los Querubines se movían, sus alas estaban
extendidas hacia arriba con los extremos tocándose. Cuando ellos se detenían, se
bajaban las alas apuntando hacía adelante con los extremos tocándose. El otro par
de alas « cubrían sus cuerpos».)
24 Y oí el sonido de sus alas cuando andaban, como sonido de muchas aguas, como
la voz del Omnipotente, como ruido de muchedumbre, como la voz de un ejército.
Cuando se paraban, aflojaban sus alas. (Aunque no hay evidencia que las «alas» se
movían excepto de una posición vertical a una horizontal cuando se detenían, todavía,
él «oyó el sonido de sus alas». La única explicación es que su movimiento significaba
gran alabanza a Dios [Apo_19:6].)
25 Y cuando se paraban y aflojaban sus alas, se oía voz de arriba de la expansión que
había sobre sus cabezas. (Esta es la Voz de Dios, aunque no nos dice qué decía.)
26 Y sobre la expansión que había sobre sus cabezas, se veía la figura de un trono y
que parecía de piedra de zafiro; y sobre la figura del trono había una semejanza que
parecía de hombre sentado sobre él. (Aquí Ezequiel ve la apariencia de Dios, similar
a la de un «Hombre», pero con cuerpo espiritual.)
27 Y vi apariencia como de bronce reluciente, como apariencia de fuego dentro de
ella en contorno, por el aspecto de Sus lomos para arriba; y desde Sus lomos para
abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor. (Ezequiel no dijo
que Dios está vestido de fuego, sino que tiene «la apariencia de fuego en Su
contorno». En otras palabras, había un resplandor que hizo que el Cuerpo Espiritual
del SEÑOR pareciera como si estaba ardiendo con fuego.)
28 Como la apariencia del arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el
parecer del resplandor alrededor. Esta fue la visión de la semejanza de la Gloria del
SEÑOR. Y cuando yo la vi, me postré sobre mi rostro, y oí la voz de uno que hablaba.
(Ezequiel vio el arco iris alrededor del Trono de Dios exactamente como Juan lo vio
en su visión [Apo_4:2-3], La «Gloria de Dios» denota la revelación del ser,
naturaleza y presencia de Dios a la humanidad, que a veces como aquí es
acompañado con fenómeno material y espiritual, como aquí. «Y cuando yo la vi [la
Gloria de Dios], me postré sobre mi rostro», muestra la experiencia de la mayoría
bajo estas circunstancias [Mat_17:1-8; Mar_9:2-8; Luc_9:28-36; Gén_17:3;
Éxo_3:1-6; Núm_22:31; Jos_5:14; Dan_8:17; Jua_18:6; Hch_9:4]. Esto declara
que el «ser postrado en el Espíritu» es conforme a las Escrituras.)

2
Llamada de Ezequiel
(595 a.C,)
1 Y ME dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y Yo te hablaré. (Aparte de los
cuatro Evangelios, el término, «Hijo de hombre», no se usa en el Nuevo Testamento;
y aparte de Ezequiel, sólo se encuentra en Dan_8:17. Aquí y en otras partes se
describe la completa Gloria de Dios; el hombre postrándose sobre su rostro delante
de Él declara su estado caído como resultado de la caída en el Huerto de Edén. «Hijo
de hombre, ponte sobre tus pies», refleja la experiencia de «nacer de nuevo», y el
hombre levantándose de su estado caído.)
2 Y entró en mí el Espíritu (Espíritu Santo) luego que me habló, y Me afirmó sobre
mis pies, y oí a Aquel que Me hablaba. (La frase, «Y entró Espíritu en mí», se refiere
a Ezequiel que le fue dado el Espíritu Santo para desempeñar un servicio en
particular. Esto no es lo misino como el Bautismo con el Espíritu Santo, que se podía
recibir después de la Cruz de Cristo [Jua_14:17].)
3 Y Me dijo: Hijo de hombre. Yo te envío a los hijos de Israel, a una nación rebelde
que se rebelaron contra Mí: ellos y sus padres se han rebelado contra Mí hasta este
mismo día. (Ezequiel, en este Libro, es tratado como «hijo de hombre», y no como
hijo de Abraham, porque Israel ya era Lo-Ammi [Ose_1:9]. Jesús era «El Hijo de
Hombre». Este fue Su título en el rechazo; por lo tanto, Él prohibió a Sus Discípulos
anunciarle como el Mesías, porque Él, como «El Hijo de Hombre», tendría que sufrir
[Luc_9:1-62], «Yo te envío a los Hijos de Israel», se refiere a la primera Comisión
de Ezequiel. En realidad, este gran Profeta comenzó su Ministerio unos cinco o seis
años antes de la destrucción de Jerusalén en 586 a.C.)
4 Yo pues te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así
ha dicho el SEÑOR Dios. (Estas palabras que Ezequiel tendría que hablar habían de
ser las palabras de Adonai Jehová. Dios era su Autor. En el Hebreo, el Nombre
«SEÑOR Dios» es «Adonai Jehová». Como tal, es característico de las Profecías de
Ezequiel. Ello ocurre unas 214 veces.)
5 Acaso ellos escuchen; y si no escuchan, pues son casa rebelde, siempre conocerán
que hubo Profeta entre ellos. (¡Por primera vez, el SEÑOR designa el llamado de
«Profeta» a Ezequiel! El SEÑOR está hablando primordialmente de los Exiliados.)
6 Y tú, hijo de hombre, no temas de ellos, no tengas miedo de sus palabras, aunque
te hallas entre zarzas y espinas, y tú moras con escorpiones: no tengas miedo de sus
palabras, ni temas delante de ellos, porque son casa rebelde. (Su rebelión era contra
de Dios, a pesar de los milagros, Ley, Patriarcas y Profetas. Ellos simple y llanamente
no querían obedecer la Biblia.)
7 Les hablarás pues Mis Palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy
rebeldes. («Les hablarás pues Mis Palabras», es muy animador en que las Palabras
que se les hablarían serian aquellas dadas por Jehová. Al mismo tiempo, hay una
advertencia en contra de entremezclarse con los conceptos bajos y el mensaje
originado en el hombre, que es la ruina de la Iglesia moderna. ¡Como Jehová le habló
a Ezequiel de antaño, hoy en día Él habla igual! Solamente que las Palabras de Dios
deben ser dadas al pueblo.)
8 Pero tú, hijo de hombre, oye lo que Yo te hablo; no seas tú rebelde como la casa
rebelde: abre tu boca, y come lo que Yo te doy. («No seas tú rebelde como la casa
rebelde», es una advertencia contra la debilidad natural del Profeta. «Abre tu boca,
y come lo que Yo te doy», corresponde al SEÑOR cuando le da las Palabras que él
debe decir.)
9 Y miré, y he aquí una mano me fue enviada, y en ella había el rollo de un libro (los
«libros» de ese entonces en realidad eran pieles entretejidas en forma de un
pergamino largo que era enrollado en cada extremo. «Una mano me fue enviada»,
parece implicar que aunque vino de Aquel que estaba en el Trono, todavía, estaba
separada de Él o de los Seres Vivientes. Da a entender que apareció misteriosamente
por sí sola, como en la historia de la fiesta de Belsasar [Dan_5:5]. ¡En un sentido de
la palabra, como escribió la condenación del reino de Belsasar años más tarde, ahora
era la escritura de la condenación del Propio Pueblo de Dios, Judá y Jerusalén!).
10 Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito delante y detrás: y lo escrito en él
eran endechas, lamentaciones y ayes. (Como el SEÑOR «lo extendió delante de él»,
así descubre que no es un mensaje de buenas nuevas, sino en cambio de «endechas,
lamentaciones y ayes».)
3
(595 a.C.)

1 Y ME EL dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a
la Casa de Israel. («Come lo que hallas», es un recuerdo que el Verdadero Profeta no
escoge su mensaje [Hch_4:20], sino entrega lo que le da el SEÑOR. Además, la
palabra «comer» significa que él tiene que estar perfectamente familiarizado con su
contenido para poder entregar este mensaje a «Israel».)
2 Y abrí mi boca, y Me hizo comer aquel rollo. (Esto implica que el SEÑOR ayudó a
Ezequiel a entender lo que estaba escrito. En realidad, él no comió literalmente el
Libro o Rollo, porque todo esto fue dado en visión [Eze_1:1]·)
3 Y Me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre y llena tu estómago con este rollo
que Yo te doy. Y lo comí y, fue en mi boca dulce como la miel. (La Palabra de Dios
es siempre dulce al paladar espiritual; sin embargo, es amarga a la cante [Eze_3:14];
porque la Palabra del SEÑOR juzga la naturaleza y las actividades de la carne, y
anuncia la Ira de Dios que está por venir sobre ella.)
4 Me dijo luego: Hijo de hombre, ve y entra a la Casa de Israel, y habla a ellos con
Mis palabras. (El Ministerio de Ezequiel comienza aquí. Su carácter se compara con
el de Jeremías. Su Ministerio comenzó al menos mientras Dios estaba en relación con
Israel, y mientras Él todavía se refería a ellos como «Mi Pueblo».)
5 Porque no eres enviado a pueblo de habla profunda ni de lengua difícil, sino a la
Casa de Israel (como Ezequiel fue enviado a «Israel», del mismo modo, Cristo fue
enviado a Israel. Como Israel no le prestó atención, ¡Israel no prestaría atención a
Cristo! ¡En ambos casos, ellos atrajeron juicio!).
6 No, no a muchos pueblos de profunda habla ni de lengua difícil, cuyas palabras no
entiendas; De seguro que si te enviara a ellos, te oirían. (La declaración Divina, «De
seguro te oirían», deslumbra un rayo de luz a través de las tinieblas del mundo
pagano, y en realidad, en una sombra en figura, declara la venidera Iglesia Gentil.)
7 Pero la Casa de Israel no te querrá oír, porque no Me quieren oír a Mí: porque toda
la casa de Israel es testaruda y obstinada de corazón. (La palabra «testarudo» significa
despectivo, y en este sentido estimar la Palabra de Dios con desprecio y mostrar una
arrogante osadía. La palabra «obstinada de corazón» significa «sin sentimiento e
implacable».)
8 He aquí que he hecho tu rostro fuerte contra los rostros de ellos, y tu frente dura
contra sus frentes. (Como la rebelión es profunda, el SEÑOR dio a Ezequiel una
unción poderosa para que él fuera capaz de continuar ministrando a pesar de su
obstinación.)
9 He hecho tu frente como esmeril, más dura que el pedernal; no los temas, ni te
acobardes por sus semblantes; porque casa rebelde son. (La Palabra «esmeril»
debiera traducirse «diamante», que es la sustancia más dura conocida al hombre. La
frase, «No los temas ni te acobardes por sus semblantes», declara que el Profeta tenía
una tendencia natural de retraerse de sus amenazas, jactancias y sus miradas con el
ceño fruncido. Independientemente de lo que ellos hicieran, él debía entregar el
Mensaje, aunque ellos «son casa rebelde».)
10 Y Me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas Mis palabras que Yo te
hablaré, y oye con tus oídos. (El énfasis está en la palabra «todas». El Profeta no
debe escoger el Mensaje, sino entregar «todo el consejo de Dios» [Hch_20:27].)
11 Y ve, y entra a los cautivos, a los hijos de tu pueblo, y les hablarás y les dirás: Así
ha dijo el SEÑOR Dios; ya sea que escuchen, o que dejen de escuchar. («Y ve, entra
a los cautivos», se refiere a su Mensaje que estaba dirigido a este grupo. Debido a
que el Reino del Norte había sido tomado cautivo hacía más de cien años, y algunos
del Reino del Sur ahora llevados cautivos, el número total en cautividad hubiera sido
enorme. La responsabilidad de Ezequiel era de entregar el Mensaje, más bien que su
reacción a ello.)
12 Y me levantó el Espíritu, y oí tras de mí una voz de gran estruendo, que decía:
Bendita sea la Gloria del SEÑOR desde Su lugar. (La exclamación, «Bendita sea la
Gloría del SEÑOR desde Su lugar», probablemente significa que la Gloria despierta
la Alabanza por dondequiera que va y por lo tanto pudiera ser de Babilonia el «Lugar
de Dios». «Y me levantó el Espíritu», se refiere al Espíritu Santo, Quien vigorizaba
los Querubines y las ruedas, y luego tomó a Ezequiel para vigorizarle.)
13 Oí también el sonido de las alas de los Seres Vivientes que se juntaban la una con
la otra, y el sonido de las ruedas delante de ellos, y sonido de gran estruendo. (Ezequiel
estaba observando todo esto, como los Querubines, etc., ¡ahora él es parte de todo
ello!)
14 Me levantó, pues, el Espíritu, y me tomó; y fui en amargura, en la indignación de
mi espíritu: Pero la mano del SEÑOR era fuerte sobre mí. (La frase, «Y fui en
amargura, en la indignación de mi espíritu», se refiere a la ira o enojo del Profeta
respecto a los pecados del pueblo y su oposición y rebelión contra Dios.)
15 Y vine a los deportados en Tel Aviv, que moraban junto al río de Quebar, y me
senté donde ellos estaban sentados, y allí permanecí siete días desconsolado entre
ellos. (Todo lo que se conoce de «Tel Aviv» se relata aquí. Está junto al «río de
Quebar». «Y me senté donde ellos estaban sentados», se refiere a Ezequiel que
comenzó su Ministerio en silencio.)
 Un atalaya para Israel
16 Y aconteció que al cabo de los siete días vino a mí Palabra del SEÑOR, diciendo
(¡Ezequiel no se movió hasta que el SEÑOR le dijo que lo hiciera!):
17 Hijo de hombre. Yo te he puesto por atalaya a la Casa de Israel: oirás, pues, tú la
palabra de Mi boca, y los advertirás de Mi parte. (En el mundo antiguo, el atalaya
caminaba sobre los muros para poder detectar cualquier acción hostil contra la
ciudad. También ellos estaban allí para dar aviso al rey de cualquier persona que se
aproximara al muro de la ciudad [2Sa_18:24-27; 2Re_9:17-20]. Ezequiel debía ser
un «atalaya».)
18 Cuando Yo dijere al impío: De cierto morirás: y tú no le amonestares ni le hablares,
para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá
por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. (El Pasaje nos dice que la
ignorancia del Evangelio no salva a nadie. Además, el Predicador debe advertir al
impío, y en términos claros. Si no se advierte a los impíos, lo que significa que el
Predicador predica un falso mensaje, mientras la persona impía morirá en su pecado,
todavía, su sangre será requerida de la mano del falso predicador. Realmente, todo
Predicador y cada uno en el mundo debería leer diariamente este Texto.)
19 Pero si tú amonestares al impío, y él no se convierte de su impiedad y de su mal
camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma. («Pero tú habrás
librado tu alma», significa que el juicio predicado por el Profeta no depende de los
resultados de su Ministerio, si los hombres lo escuchan o ignoran, él «habrá librado
su alma», es decir, «ha cumplido su obligación como atalaya». Por lo tanto, la
implicación es que el Profeta perdería su alma si no entrega fielmente la Palabra de
Dios.)
20 Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere Yo tropiezo delante
de él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y sus justicias que
había hecho no vendrán en memoria; pero su sangre demandaré de tu mano. (Este
Pasaje desecha para siempre la doctrina no según las Escrituras de la Seguridad
Eterna Incondicional. Además, el Predicador no sólo debe predicar a los perdidos,
sino también tiene que advertir a los justos que se apartan de su justicia. Si el
Predicador no lo hace, otra vez, aunque la persona se perderá, el SEÑOR dice,
«Demandaré de tú mano» la sangre de ese individuo. ¿Cuántos Predicadores
modernos están siendo fieles en advertir a los impíos? ¿A los justos?)
21 Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá,
porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma. (Esto nos dice que los justos
tienen que ser constantemente advertidos, de otra manera muchos, si no la mayoría,
de los justos se desvían. Esto impone una tremenda responsabilidad sobre el
Predicador del Evangelio. ¡ Que Dios nos ayude si no cumplimos con esta
responsabilidad!)
22 Vino allí la mano del SEÑOR sobre mí, y Me dijo: Levántate, y sal al campo, y
allí hablaré contigo. (Al escuchar la Palabra de Su Boca, el siervo del SEÑOR debe
estar dispuesto a retirarse a un «campo» o «lugar de espera», porque es ahí
precisamente que el Maestro habla con el siervo y se revela a Sí Mismo de nuevo en
Su Gloria a él, y en donde él recibe una investidura fresca del Poder Espiritual. [En
el Hebreo, la expresión, «campo», significa «un lugar bajo que se alcanza con
dificultad a través de obstáculos»])
23 Y me levanté y salí al campo: y he aquí que allí estaba la Gloria del SEÑOR, como
la gloria que había visto junto al río Quebar; y me postré sobre mi rostro. («Y me
postré sobre mi rostro», habla de Ezequiel seis veces [vv. Eze_3:23; Eze_1:28;
Eze_9:8; Eze_11:13; Eze_43:3; Eze_44:4]. Otra vez, esto nos dice que es conforme
a las Escrituras que individuos sean «postrados en el Espíritu».)
24 Entonces entró el Espíritu en mí, y me afirmó sobre mis pies, y Me habló, y me
dijo: Entra, y enciérrate dentro de tu casa. («Entonces entró el Espíritu en mí», se
refiere al Espíritu Santo, Quien nos guía a toda Verdad [Jua_16:7-15].)
25 Y tú, oh hijo de hombre, he aquí que pondrán sobre ti cuerdas, y con ellas te
ligarán, y no saldrás entre ellos (cuando se está bajo el control del Espíritu Santo
[control que a propósito tiene que ser dado libremente], entonces se sabrá cuando se
debe guardar silencio y cuando se debe hablar).
26 Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y no serás a ellos varón
que reprende: porque son casa rebelde.
(«Porque son casa rebelde», implica que esas personas eran más «rebeldes» de lo
que él se daba atenta, y él debe tener la absoluta guía del Espíritu Santo en toda
acción de su Ministerio. Además, el SEÑOR tenía otras cosas que Él quería tratar
con el Profeta antes de que él comenzara su Ministerio de predicación, como
confirmarán los dos siguientes Capítulos.)
27 Pero cuando Yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Dios
el SEÑOR: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son.
(Estos Pasajes declaran como obra el Espíritu Santo sobre impartir la Palabra al
oidor. Se hace por medio del mensajero que proclama el Mensaje, y el individuo que
escucha lo que se proclama [Rom_10:17].)

4
Representación del asedio de Jerusalén
(595 a.C.)
1 Y TÚ, hijo de hombre, toma una tablilla de barro, y ponía delante de ti, y diseña
sobre ella la ciudad de Jerusalén (la «tablilla» era la manera en la cual los registros
eran guardados durante los tiempos de antaño. Eran de varios tamaños, con la más
acostumbrada que medía cerca de casi 61 centímetros [2 pies] de longitud y 30
centímetros [1 pie] de anchura. Estaban cubiertas de escritura muy pequeña, al
menos en la mayoría de los casos y, a veces, representaciones gráficas. El simbolismo
de la «tablilla» es el primero que el SEÑOR empleará por medio de Ezequiel, todo
para ilustrar Su Mensaje. Una descripción del plano de la ciudad de Jerusalén debía
ponerse en la tablilla):
2 Y pondrás sitio contra ella, construirás contra ella fortaleza, sacarás contra ella
baluarte, y asentarás delante de ella campo, y pondrás contra ella arietes alrededor.
(Esto estaba aconteciendo en Babilonia aproximadamente cuatro años antes de que
Jerusalén fuera destruido por Nabucodonosor; por lo tanto, el momento de la
destrucción se acerca, lo que el SEÑOR desea mostrar a los Exiliados. El Profeta
debía exhibir esta «tablilla» mostrando un bosquejo de Jerusalén, y hacer de madera
o barro todos los artículos necesarios de la destrucción contra la ciudad, que describe
el «sitio». Esta representación probablemente fue dejada en un lugar conspicuo
durante mucho tiempo, y sin duda estudiado minuciosamente por muchos de los
Exiliados, quienes con bastante facilidad podían discernir su mensaje.)
3 Toma también una sartén de hierro, y la pondrás por muro de hierro entre ti y la
ciudad: afirmarás luego tu rostro contra ella, y será un lugar de cerco, y la sitiarás. Es
señal a la Casa de Israel. (La «sartén de hierro», o una plancha de hierro, significaba
un «muro de hierro» que rodeaba la ciudad de que se está tratando, o por lo menos
desde el lado del sitio, que demostraba el poder del ejército de los Babilonios.)
4 Y tú dormirás sobre tu lado izquierdo, y pondrás sobre él la maldad de la Casa de
Israel: el número de los días que dormirás sobre él, llevarás sobre ti la maldad de ellos.
(El SEÑOR ahora usa otro tipo de simbolismo, Ezequiel físicamente acostándose
sobre su lado izquierdo 390 días, y luego sobre su lado derecho durante unos 40 días.
Esto debía ser hecho por varios minutos cada día. El simbolismo tenía que demostrar
tanto el Reino del Norte de «Israel» como el Reino del Sur de «Judá». Tenía como
propósito mostrar estos dos reinos derribados hasta el suelo.)
5 Yo te he dado los años de su maldad por el número de los días, trescientos noventa
días: y llevarás la maldad de la Casa de Israel. (Los «390 días» eran para representar
los «390 años de su iniquidad», una cuenta tanto del Reino del Norte como el del Sur.
El SEÑOR se disgustó en extremo con el Reino del Norte como resultado de su
división de la nación y por acudir a la idolatría [1Re_12:16-20; 1Re_12:28-30].)
6 Y cumplidos estos, dormirás sobre tu lado derecho segunda vez, y llevarás la
maldad de la Casa de Judá cuarenta días: un día por cada año te he señalado. (Como
el Reino del Norte había sido simbolizado, del mismo modo, será simbolizado el Reino
del Sur de Judá por los «40 días» en que Ezequiel se acostaría sobre su «lado
derecho». Esto no iba a ser 40 días agregados a los 390 días, sino más bien que los
40 deben de ser simultáneos con los 390, con los dos plazos terminando con la caída
de Judá y Jerusalén.)
7 Por lo tanto fijarás tu rostro hacia la sitiada Jerusalén; y con tu brazo desnudo,
profetizarás contra ella. (Ezequiel acostándose sobre su lado izquierdo y luego sobre
su lado derecho ocurrió posiblemente inmediatamente antes del simbolismo de la
«tablilla». Él debe «fijar su rostro» hacia este modelo de sitio, con un brazo
«desnudo». Esto tiene por objetivo denotar que tanto Judá como Israel, debido al
pecado, estaban desnudos al juicio de Dios.)
8 Y he aquí Yo he puesto sobre ti cuerdas, para que no te vuelvas de un lado a otro,
hasta que se acaben los días de tu sitio.
9 Y toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, millo y avena, y ponlo en una vasija,
y hazte pan de ello el número de los días que durmieres sobre tu lado: trescientos
noventa días comerás de él. (Los «390 días» no significaban que el sitio duraría este
plazo de tiempo; de hecho, duró cerca de 2 años. Más bien, tenía como objetivo
implicar que la destrucción de Jerusalén y Judá correspondía al tiempo entero de la
iniquidad, que era 390 años, al menos para el Reino del Norte, y que incluía el Reino
del Sur de Judá.)
10 Y la comida que has de comer será por peso de veinte siclos al día: de tiempo a
tiempo lo comerás. (Los «veinte siclos al día» comprarían cerca de doscientos
ochenta y tres gramos [10 onzas], que debía ingerirse cada día. Mientras Ezequiel
pasaba por este régimen cada día, la monotonía del procedimiento tendría que tener
un afecto duradero sobre los Exiliados, mientras el simbolismo Profético demostraba
lo que iba venir en breve a Jerusalén.)
11 Y beberás el agua por medida, la sexta parte de un hin: de tiempo a tiempo beberás.
(«La sexta parte de un hin» era cerca de 24 litros [media pinta]. Esto, como la
comida, era racionado una vez al día. «Y beberás el agua por medida» demostraba
que en el próximo sitio, el agua sería escasa, así como la comida.)
12 Y comerás pan de cebada cocido debajo de la ceniza; y lo cocerás a vista de ellos
con los estiércoles que salen del hombre. (La implicación del SEÑOR es que el
combustible para calentar los hornos sería tan escaso que la población sería forzada
a usar el contenido seco de los desaguaderos de Jerusalén para combustible para
poder intentar cocinar su comida, que fue lo que sucedió.)
13 Y dijo el SEÑOR: Así comerán los hijos de Israel su pan inmundo, entre los
Gentiles a donde los lanzaré Yo. (Bajo la Ley ceremonial de Moisés, el pan cocinado
por combustible del estiércol humano era «profano». Esto tenía que servir como
simbolismo del destierro de los Judíos entre los Gentiles, a los cuales los Judíos
llamaron inmundos. ¡Como tal, ellos se consideraban constantemente profanados e
inmundos en el sentido ceremonial!)
14 Y dije: ¡Ah SEÑOR Dios! He aquí que mi alma no es inmunda, ni nunca desde
mi juventud hasta este tiempo comí cosa mortecina ni despedazada, ni nunca en mi
boca entró carne inmunda. (Ezequiel, como Sacerdote, fielmente había seguido la Ley
de Moisés, y se había empeñado en hacer lo mejor para guardarse de cualquier tipo
de inmundicia. Esto de lo que él habla se nota en Éxo_22:31 y Lev_7:24; Lev_11:39-
40 y Lev_17:15.)
15 Y Me respondió: He aquí Te doy estiércoles de bueyes en lugar de los estiércoles
de hombre, y dispondrás tu pan con ellos. (En respuesta al pedido del Profeta, el
SEÑOR permitió a Ezequiel emplear «el estiércol de bueyes» más bien que el
«estiércol de hombre». Sin embargo, esto también era más que probable inmundo en
el sentido ceremonial, pero al menos no era tan repugnante a la vista de Ezequiel. Sin
entrar en explicación, estas eran leyes ceremoniales y no morales, lo que significa
que en ambas formas no había pecado involucrado.)
16 Me dijo luego: Hijo de hombre, he aquí quebrantaré el sostén del pan en Jerusalén,
y comerán el pan por peso, y con angustia; y beberán el agua por medida, y con
espanto (esto corresponde a la hambruna terrible que surgió como resultado del sitio
de Jerusalén, y que también fue descrito por Jeremías en el acto de su cumplimiento
[Lam_4:8-10]).
17 Porque les faltará el pan y el agua, y se espantarán los unos con los otros, y se
consumirán por su maldad. (Al horror de la hambruna y su privación física, debía de
ser agregada la consciencia de que todo era causado por sus propios pecados.)

5
Jerusalén será destruida
(594 a.C.)
1 Y TU, hijo de hombre, tómate un cuchillo agudo, una navaja de barbero, y hazla
pasar sobre tu cabeza y tu barba: luego tomarás unos balances de pesar, y dividirás
los pelos en tres partes. (Otra vez, el SEÑOR emplea el simbolismo para mostrar el
Mensaje que Él desea dar. Es el símbolo de la «navaja de barbero». Durante los
tiempos del Antiguo Testamento, cuando afeitarse la cabeza y la barba representaban
vergüenza, y era simbólico del leproso que le era requerido afeitar su cabeza y barba.
Por lo tanto, Judá y Jerusalén fueron calificados por el SEÑOR como «leprosos
espirituales».)
2 Una tercera parte quemarás con fuego en medio de la ciudad, cuando se cumplieren
los días del cerco, y tomarás una tercera parte, y herirás con cuchillo alrededor de ella;
y una tercera parte esparcirás al viento, y Yo desenvainaré espada en pos de ellos. (La
acción simbólica predijo que el fuego, es decir, la Ira de Dios [en pestilencia y
hambruna], destruiría aproximadamente un tercio de la nación, con la guerra
destruyendo una segunda parte, y los Exiliados que representaban la tercera parte,
que sería «esparcidos al viento». Muchos de estos también iban a perecer por la
espada y la hambruna. ¡En pocas palabras, la matanza, cuando de hecho aconteció,
fue terrible, por no decir más!)
3 Tomarás también de allí unos pocos por cuenta, y los atarás en la falda de tu capa.
(Este «número» representaba los «pocos» que caerían en las categorías del Versículo
Eze_5:2. ¡En una población de unos cuantos millones, tal sería normal! El siguiente
Versículo relata lo que les acontecerá.)
4 Y tomarás otra vez de ellos, y los echarás en medio del fuego, y los quemarás a
fuego; y de allí saldrá fuego contra toda la Casa de Israel. (El juicio tendría que ser
tan completo que incluso aquellos que creían haber escapado, por cualquier medio,
hallarían el «fuego» del juicio persiguiéndoles, del cual no podrían escapar.)
5 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Esta es Jerusalén: la puse en medio de las naciones
y de las tierras alrededor de ella. (¡La frase, «Esta es Jerusalén», es efectivamente
muy fuerte! Ella, que representaba el todo de Israel, fue ubicada en el centro de las
naciones para poder esparcir sobre ellas la luz del Evangelio. Pero se rebeló contra
la Verdad más que los paganos, multiplicó los ídolos, y se hundió moralmente más
bajo que sus vecinos.)
6 Y ella cambió Mis Decretos y Mis Ordenanzas en impiedad más que las naciones,
y más que las tierras que están alrededor de ella; porque (los Judíos) desecharon Mis
Decretos y Mis Mandamientos, y no anduvieron en ellos. (¡«Ella cambió Mis
Decretos y Mis Ordenanzas en impiedad», se refiere a la Ley de Moisés, que no
solamente fue ignorada, sino tergiversada y «cambiada» para tener una significación
enteramente distinta!)
7 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR: ¿Por haberos multiplicado más que las naciones
que están alrededor de vosotros, no habéis andado en Mis Mandamientos, ni habéis
guardado Mis Leyes? Ni aun según las leyes de las naciones que están alrededor de
vosotros habéis hecho (la idea de este Versículo es que las naciones paganas eran
por lo menos fieles a los dioses que ellos adoraban, mientras que Jerusalén se había
rebelado contra Jehová);
8 Así pues ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo estoy contra ti; Sí, Yo, y aún Yo
haré juicios en medio de ti a los ojos de los gentiles. («Sí, Yo, y aún Yo», enfatiza la
certidumbre de la Ira de Dios, así como Isa_43:25 hace énfasis en la certidumbre del
Amor perdonador de Dios; y reprende la incredulidad del corazón natural que niega
estas actividades de la Esencia Divina.)
9 Y Yo haré en ti lo que nunca hice, ni jamás haré cosa semejante, a causa de todas
tus abominaciones. («Y Yo haré en ti lo que nunca hice», se refiere a la pronta
destrucción de Jerusalén. «Ni jamás haré cosa semejante», tiene referencia al
presente y al futuro. ¡Llevaba tanto una Promesa como Juicio!)
10 Porque los padres comerán a los hijos en medio de ti, y los hijos comerán a sus
padres; y haré en ti juicios, y esparciré a todos vientos todo tu remanente. (Esto
literalmente fue cumplido durante el sitio de la ciudad por los Caldeos, como ya había
ocurrido hacía años antes en el sitio de Samaria [2Re_6:28-29], y estaba por
acontecer después, en conexión con el sitio por los Romanos en el año 70 d.C.)
11 Por tanto, vivo Yo, dijo el SEÑOR Dios, ciertamente por haber tú violado Mi
Santuario con todas sus contaminaciones, y con todas tus abominaciones, te
quebrantaré Yo también: Mi ojo no perdonará, ni tampoco tendré Yo misericordia.
(Los justos Juicios, consiguiente a las abominaciones de este Versículo, que están
detallados en los Versículos Eze_5:8-17, todavía están en operación, y alcanzarán el
punto de crisis bajo el reinado del Anticristo, cuando la «indignación» contra Israel
será consumada [Dan_11:36; Dan_12:1].)
12 La tercera parte de ti morirá de pestilencia, y será consumida de hambre en medio
de ti; y la tercera parte caerá a cuchillo alrededor de ti; y la tercera parte esparciré a
todos los vientos, y tras ellos desenvainaré espada. (Ezequiel saca este Pasaje, sin
duda, de Lev_26:33. Versículo Eze_5:12 describe la manera como el juicio vendrá.)
13 Y se acabará Mi furor, y haré que cese en ellos Mi enojo, y tomaré consuelo; y
sabrán que Yo, el SEÑOR, he hablado en Mi celo, cuando halla cumplido en ellos Mi
enojo. (La justicia tiene que ser, por su misma naturaleza, inquieta hasta que el mal
sea juzgado. Luego viene el consuelo. Tal fue el efecto del Juicio del pecado en el
Calvario; y para aquellos quienes reconocen este hecho del Evangelio y se refugian
en el gran Dios y Salvador, el SEÑOR Jesucristo, Quien era el Participante en ello,
saborean la dulzura del consuelo Divino.)
14 Además, te reduciré a soledad, y te pondré por oprobio de las naciones que están
en tus alrededores, a los ojos de todo transeúnte. (De todo el sufrimiento
experimentado por Judá, tal vez lo peor de todo fue el «oprobio entre los gentiles», y
«a los ojos de todo transeúnte».)
15 Y serás oprobio, y deshonra, y castigo, y espanto a los gentiles que están alrededor
de ti, cuando Yo hiciere en ti juicios en furor e ira, y en represiones de ira. Yo, el
SEÑOR he hablado. (Tal vez esto fue sacado de Deu_28:37. La frase, «Y serás
oprobio, y deshonra, y castigo, y espanto», se refiere a Jerusalén que había de ser la
gran lección práctica en la educación de la humanidad de parte de Dios. La idea era
que si Jehová hacía esto a Su Propia Ciudad y Pueblo, Él al menos haría lo mismo a
los paganos. ¡Esto es precisamente lo que Él hizo, y esto es lo que Él hace! Él lo llama
«reprensiones de ira».)
16 Cuando dispare Yo contra ellos las perniciosas saetas del hambre, que serán para
destrucción, las cuales enviaré para destruiros, entonces aumentaré el hambre sobre
vosotros, y quebrantaré entre vosotros el sustento del pan. (Como una flecha tirada
por un tirador experto va directo a su blanco, así estas «saetas» serán lanzadas por
el SEÑOR. Serán «saetas» del «hambre» y «destrucción». Por lo tanto, son
necesariamente «saetas de mal». «Y quebrantaré entre vosotros el sustento del pan»,
se refiere a que Judá siempre cosechaba abundantes cosechas, y por consiguiente
creía que la «hambruna» era imposible. ¡Sin embargo, el SEÑOR les advierte que no
solamente eso es posible, sino ciertamente vendrá, lo que aconteció!)
17 Enviaré pues sobre vosotros hambruna, y malas bestias que te destruyan; y
pestilencia y sangre pasarán por ti; y meteré sobre ti espada. Yo el SEÑOR he hablado.
(¡Las «malas bestias» hablan de la multitud Babilónica! El Capítulo termina con las
palabras, «Yo el SEÑOR he hablado», que es el último golpe de todos, que garantiza
que aunque las palabras venían de Ezequiel, ellas, necesariamente pertenecían al
SEÑOR. Como tal, era garantizado que se cumplirían.)

6
Juicio contra la idolatría
(594 a.C.)
1 DE NUEVO me vino Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, pon tu rostro hacia los montes de Israel, y profetiza contra ellos
(mientras el Mensaje anterior atacaba la idolatría de la ciudad de Jerusalén, este
Mensaje la ataca en la Tierra de Judá. Los «montes de Israel» están señalados de
manera especial porque los templos idolátricos, que normalmente fueron levantados
sobre las montañas y colinas, y junto a los cursos en donde corría el agua, y en los
valles. Estos eran como debe ser obvio, un insulto a Jehová. A pesar de las repetidas
amonestaciones, ellos no quitaron esos templos. Ahora serían quitados a la fuerza).
3 Y dirás: Oh Montes de Israel, oíd Palabra del SEÑOR Dios: Así dijo el SEÑOR
Dios a los montes y a las colinas, y a los arroyos y a los valles: He aquí que Yo, aún
Yo Mismo hago venir sobre vosotros espada, y destruiré vuestros lugares altos. (De
igual modo como el Profeta [1Re_13:2] desdeñaba hablar al rey y se dirigió al altar
idolátrico, así también aquí Ezequiel se dirige a los centros de idolatría.)
4 Y vuestros altares serán asolados, y vuestras imágenes del sol serán quebradas: y
haré que caigan vuestros muertos delante de vuestros ídolos. (La frase, «Y vuestros
altares serán asolados», se refiere a que estos «altares» eran de ellos y no de Dios.
El SEÑOR solamente tenía un Altar, que representaba el Calvario y el Sacrificio de
Su Único Hijo, que acontecería en el futuro. Todos los demás altares representaban
un falso camino a la Salvación.)
5 Y pondré los cuerpos muertos de los Hijos de Israel delante de sus ídolos; y vuestros
huesos esparciré en derredor de vuestros altares. (La idea de este Versículo es que
Dios no tolerará cualquier otro «altar» que Su Altar Sagrado del Calvario. ¡Como
era verdad en ese entonces, definitivamente es así ahora!)
6 En todos los lugares de vuestra habitación, las ciudades serán asoladas, y los lugares
altos serán hechos una desolación; a fin de que vuestros Altares sean asolados, y
vengan a ser una desolación, y sean quebrados y se acaben vuestros ídolos, y sean
cortadas vuestras imágenes del sol, y vuestras obras serán desechas. (Este Versículo
ilustra la expresión, la «abominación de desolación», que es precisamente la
desolación que viene como resultado moral y material de la idolatría. Este
fundamental principio moral, es decir, que la desilusión se produce por la idolatría,
se puede verificar en los tiempos modernos así como en los tiempos antiguos, porque
hoy en día las vastas porciones de los distritos más ricos en el mundo ya son desiertos
debido a la idolatría. En el caso de las multitudes, ¡una triste experiencia personal
demuestra este hecho, también! Si el corazón es regido por un «ídolo», y los ídolos
religiosos son los peores de todos, hay una desolación interna, con el fruto, riqueza
y hermosura espiritual prácticamente desconocido [Apo_3:17].)
7 Y los muertos caerán en medio de vosotros; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Se
puede conocer a Dios en la Gracia o en la Ira, en la Salvación o en el Juicio. Israel
por experiencia tuvo evidencia de Dios como Salvador cuando Él les redimió de
Egipto [Éxo_10:2]; del mismo modo, por experiencia tuvieron la evidencia de Él
como Juez cuando les abandonó al exilio debido a la idolatría, como muestra este
Versículo.)
8 Pero dejaré que haya de vosotros quien escape de la espada entre las naciones,
cuando fuereis esparcidos entre los países. («Cuando fuereis esparcidos entre los
países», ocurrió durante la época de Ezequiel, pero ocurrió por completo en el año
70 d.C., cuando Tito destruyó Jerusalén, con más de un millón de Judíos que murieron
en ese horror, y con más de un millón vendidos en esclavitud.)
9 Y los que de vosotros escaparen, se acordarán de Mi en medio de las naciones a
donde fueren llevados cautivos, porque Yo me quebranté a causa de su corazón
fornicario, como que se apartó de Mí, y a causa de sus ojos, que fornicaron tras sus
ídolos; y serán confusos en su misma presencia, a causa de los males que hicieron en
todas sus abominaciones. (La frase, «porque Yo me quebranté a causa de su corazón
fornicario», pudiera traducirse para significar que el corazón de Dios fue
quebrantado debido a la obstinada idolatría de Israel. «Y serán confusos en su misma
presencia, a causa de los males que hicieron», en realidad no será cumplida hasta la
Segunda Venida [Zac_12:10].)
10 Y sabrán que Yo soy el SEÑOR: no en vano dije que les había de hacer este mal.
(Alguien ha dicho que la cosa más grande que alguien puede hacer en cuanto al
SEÑOR es simplemente creer Su Palabra. ¡Lamentablemente, la mayoría no lo
hacían en ese entonces, y la mayoría no lo hacen ahora!)
11 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Hiere con tu mano, y golpea con tu pie, y di: Ay de
los males de la Casa de Israel por todas las abominaciones porque con espada, y con
hambre, y con pestilencia caerán.
12 El que estuviere lejos, morirá de pestilencia; y el que estuviere cerca caerá a
espada; y el que quedare, y fuere cercado, morirá de hambre: así cumpliré en ellos Mi
enojo. (Esto es maravilloso cuando uno considera las Profecías continuadas de
Jeremías y Ezequiel que declaraban juicio venidero, ¡y aun no prestaron atención!)
13 Y sabréis que Yo soy el SEÑOR, cuando sus muertos estarán en medio de sus
ídolos, en derredor de sus Altares, en toda colina alta, y en todas las cumbres de las
montañas, y debajo de todo árbol frondoso, y debajo de toda encina espesa, lugares
donde dieron olor suave a todos sus ídolos. (La frase, «Y sabréis que Yo soy el
SEÑOR», implica que Judá poco creía las predicciones del Profeta.)
14 Y extenderé Mi mano sobre ellos, y haré la tierra más asolada y devastada que el
desierto de Riblá, y en todas sus habitaciones; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (¡El
Espíritu Santo por medio del Profeta no continuaría declarando, «Y sabrán que Yo
soy el SEÑOR», si la incredulidad de Judá, Jerusalén, y los exiliados no hubiera sido
tan pronunciada!)

7
El día de la ira del Señor
(594 a.C.)
1 VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Y tú, hijo de hombre, así ha dicho el SEÑOR Jehová a la tierra de Israel: El fin, el
fin viene sobre los cuatro extremos de la tierra. (¡El «fin» de los ruegos por medio de
Jeremías y Ezequiel para que Judá y Jerusalén se arrepientan había llegado! ¡Ellos
habían rehusado arrepentirse y por lo tanto, vendrá juicio!)
3 Ahora será el fin sobre ti, y enviaré sobre ti Mi furor, y te juzgaré según tus caminos;
y pondré sobre ti todas tus abominaciones. (Este Versículo declara un lado del
SEÑOR que es mayormente negado, el lado del Juicio. Sin embargo, si se rechaza la
Misericordia, en ese entonces o ahora, por último el Juicio tiene que venir.)
4 Y Mi ojo no te perdonará, ni tendré misericordia; antes pondré sobre ti tus caminos,
y en medio de ti estarán tus abominaciones; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Si los
hombres no se arrepienten, el SEÑOR no puede «perdonar» ni «tener misericordia».)
5 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Un mal, he aquí que viene un mal único. (Este «mal»
se refiere a la pronta y venidera invasión Babilónica. «Un mal único», corresponde
a que todo será juicio, sin misericordia ni piedad alguna. ¡En otras palabras, no
habrá alivio! La frase, «He aquí que viene», se refiere a la Verdad que si el pueblo
se arrepentía, aunque sus almas serían salvas, la Ciudad, el Templo, y la tierra no
serían perdonados. Un arrepentimiento durante una oportunidad más temprana
pudiera haber evitado esto, pero ahora es demasiado tarde para salvar la Ciudad y
el Templo.)
6 Viene el fin, el fin viene: se ha despertado contra ti; he aquí que viene. (La
repetición garantiza la certidumbre de su cumplimiento.)
7 La mañana viene para ti, oh morador de la tierra; el tiempo viene, cercano está el
día; día de alboroto, y no de alegría sobre las montañas. (El Versículo significa:
mientras el día comienza, el Juicio está comenzando. El Profeta dice, «el tiempo
viene», o sea «ha llegado la hora».)
8 Ahora pronto derramaré Mi ira sobre ti, y cumpliré en ti Mi furor, y te juzgaré según
tus caminos; y pondré sobre ti tus abominaciones. (Este Versículo es muy similar al
Versículo 3. Su repetición, dada por el Espíritu Santo, solamente aumenta su
severidad.)
9 Y Mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia: según tus caminos pondré sobre ti,
y en medio de ti serán tus abominaciones; y sabréis que Yo el SEÑOR soy El Que
hiere. (El SEÑOR puede tocar para sanar, como fue mostrado en Cristo, Quien no
vino para condenar, sino para salvar, pero si se rechaza, «herirá», exactamente como
Jerusalén fue herida en el año 70 d.C.)
10 He aquí el día, he aquí que viene: ha salido la mañana; ha florecido la vara, ha
reverdecido la soberbia. (La frase, «ha florecido la vara», se refiere a
Nabucodonosor, quien estaba listo para invadir. «Ha reverdecido la soberbia»,
corresponde al pecado determinado de Israel que requería la vara, y es único aquí.
Significa «la exuberancia orgullosa». En otras palabras, las Bendiciones de Dios
habían sido convertidas en licencia.)
11 La violencia se ha levantado en vara de impiedad; ninguno quedará de ellos, ni de
su multitud, ni uno de los suyos; ni habrá quien de ellos se lamente. (La «violencia»
va junto a «soberbia» del Versículo Eze_7:10. En dondequiera que hay «soberbia»
habrá «violencia», ¡mientras los hombres auto-justificados exigen su propio camino!
«La violencia se ha levantado en vara de impiedad», se refiere al hecho de que por
la injusticia violenta ellos se destruyeron y empobrecieron el uno al otro. Como los
Nobles de Judá practicaban esta «vara de impiedad» sobre los débiles y los
impotentes, ¡el SEÑOR lo practicó en ellos!)
12 Llegó la hora, se acercó el día: el que compra, no se alegre, y el que vende, no
llore: porque la ira está sobre toda la multitud. (La idea es: la conducta de los
negocios, que había llegado a ser supremamente importante a Judá, pronto
terminará. Esto, en sí mismo, era el extremo del témpano de hielo respecto al juicio
que estaba por venir.)
13 Porque el que vende no recuperará lo vendido, aunque queden vivos: porque la
visión sobre toda su multitud no será cancelada; y ninguno podrá, a causa de su
iniquidad, amparar su vida. (La frase, «Porque el que vende no recuperará lo
vendido», se refiere a las falsas profecías que afirmaban la restauración inmediata
de los Exiliados. ¡«Los que venden» no verán sus haciendas otra vez, aunque sus hijos
talvez las verán! Ellos habían de estar en Babilonia durante unos 70 años, al menos
desde el momento de la primera deportación, de lo cual quedaban todavía unos 50
años más.)
14 Tocarán trompeta, y prepararán todas las cosas, pero no habrá quien vaya a la
batalla: porque Mi ira está sobre toda su multitud. («Tocarán la trompeta», se refiere
al Año del Jubileo, cuando las tierras que habían sido vendidas volverán de nuevo a
sus dueños originales [Lev_25:1-55]. La predicción aquí era que ninguno de estos
vendedores y compradores vivirían para ver el próximo Jubileo. De hecho, la
«trompeta» sonaría, pero no sería para el año del Jubileo, sino más bien para la
«batalla».)
15 La espada por fuera, y por dentro la peste y el hambre: el que estuviere en el campo
morirá a espada; y al que estuviere en la ciudad, lo consumirá hambre y pestilencia.
(La idea es que ninguno podrá escapar del Juicio venidero.)
16 Y los que escaparen de ellos, huirán y estarán sobre los montes como palomas de
los valles, gimiendo todos, cada uno por su iniquidad. (Es una Ley de Dios que si
alguien no «gime» por su pecado, ellos «gemirán» debido a su pecado [Gál_6:7-8].
Todo verdadero Arrepentimiento nace del sentido de pecado contra Dios.)
17 Todas las manos serán descoyuntadas, y declinarán como aguas todas las rodillas.
(Todo esto por temor a los Babilonios.)
18 Se ceñirán también de saco de silicio, y les cubrirá temblor; y en todo rostro habrá
vergüenza, y todas sus cabezas estarán rapadas. («Se ceñirán también de saco de
silicio», habla del arrepentimiento de último momento. ¡Pero será demasiado tarde!)
19 Arrojarán su plata por las calles, y su oro será desechado; ni su plata ni su oro
podrá librarlos en el día del furor del SEÑOR; no saciarán su alma, ni llenarán sus
vientres, porque será ocasión de tropiezo por su iniquidad. (La «ocasión de tropiezo
por su iniquidad» era su pecado de hacer ídolos de plata y oro, y la idolatría
subsiguiente. Ellos habían cambiado a Jehová por un ídolo de tonta apariencia hecho
de metal o madera. Por consiguiente, ellos habían llegado a ser como el ídolo al cual
adoraban — mudo, tonto, inconsciente y sin inteligencia espiritual. Tal caracteriza
casi a todo el mundo en la actualidad.)
20 Por cuanto la belleza de Sus ornamentos convirtieron en objeto de orgullo: e
hicieron en ella imágenes de sus abominaciones y de sus cosas detestables: por eso se
lo convertiré en algo repugnante para ellos mismos. («Por cuanto la belleza de Sus
ornamentos convirtieron en objeto de orgullo», se refiere al Templo en Jerusalén. «Y
de sus cosas detestables», se refiere a los idólatras Hebreos quienes levantaron ídolos
en el Templo.)
21 Y en mano de extraños la entregaré para ser saqueada, y en despojo a los impíos
de la Tierra, y la contaminarán. (Esto se refiere al Templo y todos sus ornamentos que
serán entregados a los Caldeos, quienes eran «extraños» a Dios.)
22 Y apartaré de ellos Mi rostro, y violarán Mi lugar secreto; pues entrarán en él
destruidores y lo profanarán. («Mi lugar secreto» correspondió al «Lugar Santísimo»,
en donde residía el Arca del Pacto, el Propiciatorio y los Querubines, y en donde
Dios también habitaba. Cuando Jerusalén cayó, los Babilonios paganos se meterían
dentro del «Lugar Santísimo».)
23 Haz una cadena: porque la tierra está llena de juicios de sangres, y la ciudad está
llena de violencia. (Las palabras, «Haz una cadena», son una predicción simbólica
del cautiverio, así como la «vara de impiedad» predijo la invasión del Versículo
Eze_7:11.)
24 Traeré por tanto los más malos de las naciones, los cuales poseerán las casas de
ellos; y haré cesarla soberbia de los poderosos, y sus santuarios serán profanados. (Los
«más malos de las naciones» se refiere a los Babilonios que se aproximaban. Es como
si el Espíritu Santo les estuviera diciendo a los líderes religiosos de Jerusalén,
«Desean practicar la maldad; por lo tanto, Yo traeré sobre ustedes aquellos que son
expertos en esta práctica».)
25 Destrucción viene; y buscarán la paz, y no la habrá. (¡«Y buscarán la paz, y no la
habrá», se refiere a los intentos hechos a los generales Babilónicos, que fueron
rechazados!)
26 Calamidad vendrá sobre calamidad, y habrá rumor sobre rumor; y buscarán
respuesta del Profeta, pero la Ley perecerá del Sacerdote, y el consejo de los ancianos.
(En la víspera de la destrucción, el pueblo de Jerusalén volvería a los «Profetas,
Sacerdotes y Ancianos». Pero, ay, éstos eran corruptos. Por consiguiente, ninguna
ayuda vendría de esa fuente.)
27 El rey se enlutará, y el príncipe estará vestido de desolación, y las manos del
pueblo de la tierra se debilitarán: Según su camino haré con ellos, y con los juicios de
ellos los juzgaré; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. («Y el rey se enlutará»,
probablemente se refiere a Sedequías. Y con razón él tenía de qué lamentar, pero
también él era un individuo débil, que le hubiera agravado su estado mental. «Y las
manos del pueblo de la tierra se debilitarán», se refiere a todo el comercio, la vida
política y los negocios — hasta a los mismos peones. Todo llegaría a un alto total.)

8
Abominaciones en el templo
(594 a.C.)
1 Y ACONTECIÓ en el sexto año, en el mes sexto, a los cinco días del mes, mientras
que estaba yo sentado en mi casa, y los ancianos de Judá estaban sentados delante de
mí, y allí cayó sobre mí la mano del SEÑOR Dios. (Esta es la segunda visión de
Ezequiel, o más bien una serie de visiones, y acontecería «en el sexto año», que se
refiere a su sexto año de cautividad, que fue aproximadamente cinco años antes de la
destrucción de Judá y Jerusalén. Esta Profecía termina en el Capítulo Eze_11:1-25.)
2 Y miré, y he aquí una semejanza que parecía de fuego: desde donde parecían Sus
lomos para abajo, fuego; y desde Sus lomo arriba parecía como esplendor, como el
aspecto de color de bronce pulido. (La apariencia ardiente que Ezequiel vio tenía la
semejanza de un hombre. Él era el Dios de Israel y estaba acompañado de Gloria. Y
fue Él Quien habló en la visión al Profeta.)
3 Y aquella semejanza extendió la mano, y me tomó por las guedejas de mi cabeza;
y el Espíritu me alzó entre el Cielo y la Tierra, y me llevó en visiones de Dios a
Jerusalén, a la entrada de la puerta de adentro que mira hacia el norte, donde estaba la
habitación de la imagen del celo, la cual provoca a celos al SEÑOR. (Todo esto estaba
en una visión. «La imagen de celo», era probablemente «Aserá», que fue erigido
cerca del «Altar de Bronce». Este ídolo estaba sobre un pedestal, hiriendo con celo
el Amor que resplandecía en la Gloria de Dios. La frase, «La cual provoca celos»,
corresponde a Éxo_34:12-14.)
4 Y he aquí allí estaba la gloria de Dios de Israel, como la gloria que yo había visto
en la llanura. (El Espíritu Santo tiene cuidado en dar énfasis en que es «la Gloria del
Dios de Israel» ¡la cual ellos habían abandonado por este ídolo de piedra!)
5 Y Él me dijo: Hijo de hombre, alza ahora tus ojos hacia el lado del norte. Y alcé
mis ojos hacia el lado del norte, y he aquí al norte, junto a la puerta del Altar, la imagen
del celo en la entrada. (Algunos de los líderes religiosos de Judá habían colocado este
ídolo «en la entrada junto a la puerta del Altar». Este era el Altar de Bronce, donde
los Sacrificios del Templo supuestamente fueron ofrecidos por los pecados del pueblo,
que tipificaba el Calvario. ¿Cuantos «ídolos» en la actualidad hemos agregado a la
Cruz? La psicología humanística definitivamente es uno. Y cualquier otro camino
además de «Jesucristo y Él Crucificado» también tiene que ser tomado como un
ídolo.)
6 Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿no ves lo que éstos hacen, las grandes
abominaciones que la Casa de Israel hace aquí, para alejarme de Mi Santuario? Pero
vuélvete aún, y verás abominaciones mayores. («Para alejarme de Mi Santuario», se
refiere al SEÑOR que deja el Templo como Ezequiel en breve dará el resumen. Este
ahora era un lugar «sin Dios». Su visitación ahora sería de Juicio y como un
Destruidor.)
7 Y me llevó a la entrada del atrio, y miré, y he aquí en la pared un agujero. (La
«entrada», de cualquier capacidad en el Templo, se refería a Cristo. Esta «entrada»,
parece, estaba tapada con «una pared».)
8 Y Él me dijo: Hijo de hombre, cava ahora en la pared. Y cavé en la pared, y he aquí
una puerta. (Al Profeta se le demandó «cavar en la pared», es decir, «derrumbar la
pared», para que la puerta fuera claramente visible.)
9 Y Él me dijo luego: Entra, y ve las malvadas abominaciones que éstos hacen allí.
(Estas «malvadas abominaciones» eran practicadas y llevadas a cabo en el mismo
Templo de Dios, que era Su Lugar de residencia [1Co_3:16].)
10 Entré pues, y miré, y he aquí toda forma de reptiles y bestias abominables, y todos
los ídolos de la Casa de Israel, que estaban pintados en la pared en derredor. (Esto fue
durante la época del reinado de Sedequías, cuando él estaba intentando conseguir
una alianza entre él y el Faraón. Para impresionar a los Egipcios, él había permitido
que su culto fuera traído dentro del Templo, que se describe por el Espíritu Santo
como «toda forma de reptiles y bestias abominables».)
11 Y delante de ellos estaban setenta varones de los ancianos de la Casa de Israel, y
Jazanías hijo de Safán en medio de ellos, cada uno con su incensario en su mano; y
subía una nube espesa de incienso. (En esta recámara de la idolatría Egipcia, en el
mismo Templo, estaban parados todos los setenta miembros del Sínodo Hebreo que
adoraban a los reptiles repugnantes pintados en las paredes. El dolor profundo de
esta escena se hace más agudo por la presencia de Jazanías. Su padre, Safán, había
participado en la reformación piadosa de Josías [2Re_22:1-20], y dos de sus
hermanos eran amigables con Jeremías [Jer_26:24; Jer_36:10; Jer_36:25].)
12 Y Él me dijo: Hijo de hombre, ¿has visto las cosas que los ancianos de la Casa de
Israel hacen en tinieblas, cada uno en sus cámaras pintadas de imágenes? porque dicen
ellos: No nos ve el SEÑOR; el SEÑOR ha abandonado la Tierra. (Los hombres niegan
el Juicio futuro, y afirman que si Dios existe, no toma en absoluto parte activa en los
asuntos del hombre. ¡Ellos están terriblemente equivocados en esto: así como Judá
de antaño estuvo!)
13 Y me dijo después: Vuélvete aún, verás abominaciones mayores que hacen éstos.
(El grado del mal ahora aumentará, así como todo mal se aumenta a menos que sea
desarraigado por Cristo.)
14 Y me llevó a la entrada de la puerta de la Casa del SEÑOR, que está al norte; y he
aquí mujeres que estaban allí sentadas endechando a Tamuz. («Tamuz» era una
deidad Filistea. Era en el mes de Julio cuando las ceremonias respecto a esta
supuesta deidad debían ser celebradas. Las mujeres debían derramarse en
lamentaciones sobre la imagen de cera de un hermoso hombre muerto quien había
perecido en medio de su juventud. Además, debían participar en un gozo orgiástico
por su regreso a la vida, que trajo la temporada de lluvia y el avivamiento
subsiguiente de la naturaleza.)
15 Luego Dios me dijo: ¿No ves, hijo de hombre? Vuélvete aún, verás abominaciones
mayores que éstas. (El único poder en el Cielo o en la Tierra que puede romper el
ciclo mortífero del pecado es la Fe en Cristo y lo que Él ha hecho por nosotros en el
Calvario. ¡Esto solo libera al cautivo! El culto Católico a la Virgen María, aunque
con un cambio de nombres, es derivado del culto a Tamuz, ¡que el SEÑOR mostró a
Ezequiel como abominación!)
16 Y Él me metió en el atrio interior de la Casa del SEÑOR: y he aquí junto a la
entrada del Templo del SEÑOR, entre la entrada y el Altar, como veinticinco varones,
sus espaldas vueltas al Templo del SEÑOR y sus rostros al oriente, y se encorvaban
al nacimiento del sol. (¡La forma más atroz y final de la abominación idolátrica fue
la del Sumo Sacerdote y los Jefes de los veinticuatro grupos de Aarón de pie en el
Lugar Santo en el Templo, dando su espada al Lugar Santísimo, adorando al sol! La
adoración del sol aquí tenía carácter Persa, siendo ofrecido al sol mismo como un
dios solar. De tal culto, hay rastros en Deu_4:19 y Deu_17:3, Job_31:26 y 2Re_23:5;
2Re_23:11; era totalmente prohibido.)
17 Y Él me dijo: ¿No has visto, hijo de hombre? ¿Es cosa liviana para la Casa de
Judá hacer las abominaciones que hacen aquí? Después que han llenado la tierra de
maldad, y se volvieron a irritarme, he aquí que aplican el ramo a sus narices. (Cuatro
veces en las Escrituras Hebreas, el Espíritu Santo llama al Mesías «el Ramo», eso es,
el Autor de la Vida. La parodia de Satanás de eso era la «Aserá» — el Falo Griego,
transliterado Phallós [órgano reproductivo del hombre]. Los antiguos, en su esfuerzo
por alcanzar el origen de la vida y adorarlo como un dios, llegaron a la profundidad
más baja de la degradación moral e intelectual con la institución del culto Fallaco.
Que esto es la profundidad más honda de la abominación se confirma por las
palabras de la indignación ardiente: «¡He aquí, llevan el ramo a sus narices!» o
traducido libremente: «¡Míralos; ellos están extendiendo el ramo hasta Mi Misma
cara!»)
18 Pues también Yo procederé en Mi furor; no perdonará Mi ojo, ni tendré
misericordia, y gritarán a Mis oídos con gran voz, y no los oiré. (¡La idolatría
enceguece! El Dios de la Gloria en realidad estaba presente en Su Templo [v.
Eze_8:4], pero los Sacerdotes y Ancianos declaraban que El no estaba allí. Esta
ceguera es afirmada otra vez en el siguiente Capítulo [vv. Eze_8:3; Eze_8:9]. Tal
ceguera existe hoy. El corazón es regido por cualquier forma de idolatría, sea
material, científica o filosófica, es insensible para tener comunión con Dios, y no
puede ver Su Gloria como revelada en la Faz de Jesucristo [2Co_4:6].)

9
Muerte de los idólatras
(594 a.C.)
1 Y CLAMÓ en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han
llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir. (Se debe considerar
la «gran voz» del Versículo Eze_8:18 del Capítulo 8 con la «gran voz» en el Versículo
Eze_9:1 de este Capítulo. La anterior «gran voz» representa un corazón no
arrepentido que exige misericordia, con la posterior «gran voz» que garantiza juicio.
La frase, «Los verdugos de la ciudad han llegado», se refiere a los siete seres
supernaturales que señalarán a cada individuo para muerte o para vida, a base de su
relación con Cristo. Esto nos da un vistazo dentro del mundo espiritual de la acción
de Dios respecto a los eventos.)
2 Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia
al norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había
un Varón vestido de lino, el cual traía a Su cintura un tintero de escribano; y entrados,
se pararon junto al altar de bronce. (Estos siete seres eran obviamente sobrenaturales.
Aunque Ezequiel habló de ellos como hombres, ellos eran, en realidad, Ángeles. Seis
eran ministros de ira y uno de Gracia. «Y había un Varón vestido de lino», parece
implicar que Él formaba parte de los seis. Sin embargo, el Hebreo original Le pone
aparte de los seis, haciendo un total de siete. Porque Él estaba «vestido de lino», que
simboliza Justicia, y porque Su Ministerio tenía el propósito de poner una señal
Divina sobre todos que juzgaban y se lamentaban de las abominaciones que eran
practicadas en la Ciudad y en el Templo, este Ministro vestido de manto blanco
muestra el Verdadero y Gran Sumo Sacerdote de Israel, el SEÑOR Jesucristo
[Apo_7:1-17; Apo_14:1-20].)
3 La Gloria del Dios de Israel se elevó de encima del Querubín, sobre el cual había
estado, al umbral de la casa: y llamó el SEÑOR al Varón vestido de lino, que tenía a
Su cintura el tintero de escribano (El Que estaba haciendo el llamado parece ser Dios
el Padre, mientras a Quien Él llama es Dios el Hijo),
4 Y Le dijo el SEÑOR: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y
ponles una señal en la frente de los hombres que gimen y que claman a causa de todas
las abominaciones que se hacen en medio de ella. (Esto se refiere a la totalidad de la
población que justamente era poca.)
5 Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de El, y matad; no
perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia (los «otros» se refiere a los «seis» que
estaban programados a señalar para el Juicio, como «El Que» estaba programado a
señalar para Salvación y Protección).
6 Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno:
pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por Mi
Santuario. Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del
Templo. (Estos Ángeles en realidad no mataron a este pueblo, solamente les
señalaron para destrucción; esta acción fue invisible y no sentido por los individuos
involucrados. Los pocos que fueron señalados para justicia iban a ser perdonados.
«Comenzaréis por Mi Santuario», declara que el «Juicio comienza por la Casa de
Dios» [1Pe_4:17]. Hay un latido de amor angustiado en las palabras, «Mi
Santuario».)
7 Y les dijo: Contaminad la casa, y llenad los atrios de muertos: salid. Y salieron, y
mataron en la ciudad. (Como dicho, el Juicio comenzaría por la Casa de Dios.)
8 Aconteció que cuando ellos iban matando y quedé yo solo, me postré sobre mi
rostro, y clamé, y dije: ¡Ay, SEÑOR Dios! ¿Destruirás a todo el remanente de Israel
derramando Tu furor sobre Jerusalén? («Y quedé yo solo», se refiere a todos los
Sacerdotes señalados para la muerte excepto él mismo. Como es obvio aquí, casi todo
el pueblo, que incluye los Sacerdotes, fue señalado para destrucción.)
9 Y Me dijo: La maldad de la Casa de Israel y de Judá es grande sobremanera, pues
la tierra está llena de sangre, y la ciudad está llena de perversidad: porque han dicho:
Ha abandonado el SEÑOR la Tierra, y el SEÑOR no ve. (Mientras es verdad que él
SEÑOR no ve los pecados que fueron lavados en la Sangre del Cordero, todavía,
definitivamente Él ve los pecados de los Creyentes que quedan sin confesar y por los
cuales no hay ningún Arrepentimiento [Jua_1:6-10].)
10 Así, pues, haré Yo; Mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia: haré recaer el
camino de ellos sobre sus propias cabezas. (Tres veces está declarado que la
«misericordia» no será mostrada [Eze_8:18; Eze_9:5; Eze_9:10]; pero esto no es el
lenguaje triple del placer, sino de agonía. Es el Amor constreñido para recordar la
triste necesidad del Juicio.)
11 Y he aquí que el Varón vestido de lino que tenía el tintero en Su cintura, respondió
una palabra, diciendo: He hecho conforme a todo lo que Me mandaste. (Como dicho,
«El Hombre vestido de lino» era probablemente una aparición pre-encarnada de
Cristo [2Ti_4:1]. «El tintero en Su cintura» declara los nombres de los redimidos
escritos en el «Libro de la Vida del Cordero» [Apo_20:15].)

10
La gloria del Señor abandona el templo
(594 a.C.)
1 Y MIRÉ, y he aquí en la expansión que había sobre la cabeza de los Querubines
como una piedra de zafiro, que parecía como semejanza de un trono que se mostraba
sobre ellos. (La salida de la Gloria de Dios del Templo es la Visión de este Capítulo.
No se retira voluntariamente. Su Trono era el Lugar Santísimo. Este Capítulo más el
siguiente mostrará al Dios de Israel en un Amor persistente que abandona Su Ciudad
y Templo, para no volver hasta Eze_43:4, que todavía yace en el futuro. También
aprendemos aquí que los «Seres Vivientes» son los «Querubines».)
2 Y habló al Varón vestido de lino, y le dijo: Entra en medio de las ruedas debajo de
los Querubines, y llena tus manos de carbones encendidos de entre los Querubines, y
derrama sobre la ciudad. Y entró a la vista mía. (La Justicia es el fundamento de la
acción Divina, no importa si es en la Redención o en el Juicio. El Que en Gracia
colocaba una señal sobre los redimidos también echa un fuego ardiente sobre los
rebeldes. La Justicia de Dios en Su Juicio sobre el pecado en el Calvario y en Su
Fidelidad en cumplir Sus Promesas para el Creyente es el fundamento de la certeza
Cristiana de la Salvación. Y es la Justicia de Dios que asegura la condenación eterna
al que rechaza a Cristo. Los «Carbones de fuego encendidos de entre los Querubines»
son los mismos como Eze_1:13. Ellos significan el Juicio de Dios contra el pecado.)
3 Y los Querubines estaban a la mano derecha de la casa cuando este Varón entró; y
la nube llenaba el atrio interior. (La frase, «Y la nube llenaba el atrio interior», fue la
misma nube que llenó la casa más de 400 años antes cuando Salomón dedicaba el
Templo [2Cr_5:14]. En ese entonces estaba llegando, ahora está saliendo. El Lector
debe sentir la gran tristeza que llenaba el corazón del Profeta mientras él observaba
esta escena.)
4 Y la Gloria del SEÑOR se había levantado del Querubín al umbral de la puerta; y
la casa fue llena de la nube, y el atrio se llenó del resplandor de la Gloria del SEÑOR.
(Mientras Él sale del Templo, la «Gloria del SEÑOR» hace una pausa «sobre el
umbral de la puerta», que es la entrada. Es así como si Él no quisiera salir, pero no
tiene alternativa, porque ya no le quieren más. Se puede sentir literalmente el
patetismo del corazón de Dios en esta descripción.)
5 Y el estruendo de las alas de los Querubines se oía hasta el atrio exterior, como la
voz del Dios Omnipotente cuando habla. (Es hermoso e incluso maravilloso que el
Espíritu Santo emplea el Nombre «el Dios Omnipotente» con respecto a este evento.
En el Hebreo, dice «El Shaddái», que significa «El Que Nos Cuida con Su Corazón»,
o «El Todo Suficiente». Pero aun, Judá no sacaba ventaja alguna de Éste Quien puede
suplir toda necesidad.)
6 Aconteció, pues, y al mandar al Varón vestido de lino, diciendo: Toma fuego de
entre las ruedas, de entre los Querubines, Él entró, y se paró entre las ruedas.
7 Y un Querubín extendió su mano de en medio de los Querubines al fuego que estaba
entre ellos, y tomó de el y lo puso en las manos de Aquel que estaba vestido de lino,
El Cual lo tomó y salió. (Esto es similar a lo que juan vio cuando habló del «Ángel,
que tomó un incensario, y lo llenó del fuego del Altar, y lo echó en la Tierra»
[Apo_8:5].)
8 Y apareció en los Querubines la figura de una mano de hombre debajo de sus alas.
(La declaración detallada de los Versículos Eze_10:8-22 no es una repetición sin
sentido del Capítulo Eze_1:1-28. Lo que el Espíritu Santo repite reclama la atención
más profunda del Creyente. Aquí se da mucha instrucción. El Dios de la Gloria Quien
apareció a los cautivos obedientes por el Río Quebar en bendición era el mismo Dios
de la Gloria Quien apareció en Juicio a los rebeldes en Jerusalén. Este concepto
estaba en oposición a la manera de pensar religiosa de los ciudadanos de esa ciudad
culpable. Ellos se creían bendecidos y los cautivos maldecidos.)
9 Y miré, y he aquí cuatro ruedas junto a los Querubines, junto a cada Querubín una
rueda; y el aspecto de las ruedas era como de crisólito. (La indicación es que las
«ruedas» tienen algo que ver con la dirección debido a los «ojos» [v. Eze_10:12].)
10 En cuanto a su apariencia, las cuatro eran de una misma forma, como si estuviera
una en medio de la otra. (La «rueda en medio de una rueda» simula la actividad
constante, que se refiere a una dirección segura y cierta.)
11 Cuando andaban, hacia los cuatro frentes andaban; no se volvían cuando andaban,
sino que al lugar adonde se volvía la primera, en pos de ella iban; se le volvían cuando
andaban. (Las «ruedas» normalmente giran, pero estos no hacen así: «no se volvían
cuando andaban». «Sino que al lugar adonde se volvía la primera, en pos de ella
iban», se refiere al «jefe» o la rueda «principal», que parece que determinaba el
curso de los demás. Todo esto está más allá de la comprensión del hombre. Aunque
la visión fue dada a Ezequiel, todavía, el SEÑOR no explicó nada de estas cosas
respecto al Trono de Dios. Por lo tanto, Ezequiel solamente relataba lo que él vio,
sin explicación alguna.)
12 Y todo su cuerpo, sus espaldas, sus manos, sus alas y las ruedas estaban llenos de
ojos alrededor de sus cuatro ruedas. (En Eze_1:18 Ezequiel dijo que los «anillos» o
«arcos» de las ruedas estaban «llenos de ojos alrededor de sus cuatro ruedas». Sin
embargo, en este Pasaje, lo agrega, diciendo que «todo su cuerpo» de los Querubines,
que incluía sus «espaldas», «manos» y «alas», estaban «llenos de ojos alrededor».)
13 A las ruedas, oyéndolo yo, se les gritaba: ¡Rueda! («Rueda», debiera leerse, «En
cuanto a las ruedas, se les decía a cada una de ellas, '¡Muévete!'» Eso es, cada una
de las ruedas fue mandada a moverse para ejecutar el propósito Divino.)
14 Y cada uno tenía cuatro caras. La primera era rostro de Querubín; la segunda, de
hombre; la tercera, cara de león; la cuarta, cara de águila. (Esta descripción es un poco
diferente de la primera, puesto que como el «Querubín» fue sustituido por el «buey»
[Eze_1:10]. Aquí, es el primero en orden en lugar de existencia, como allí, el tercero.
Es como si, en esta segunda Visión, él reconoce que ésta era categóricamente la
forma del Querubín. En otras palabras, la cara del «buey» debido a la Gloria del
SEÑOR, fue hecha para que apareciera como Querubín.)
15 Y se levantaron los Querubines; este es el Ser Viviente que vi en el río Quebar.
16 Y cuando andaban los Querubines, andaban las ruedas junto con ellos; y cuando
los Querubines alzaban sus alas para levantarse de la Tierra, las ruedas tampoco se
apartaban de ellos. (Las «ruedas» y las «alas» de los Querubines todos se movían
como un solo impulso armonioso.)
17 Cuando se paraban ellos, se paraban ellas, y cuando ellos se alzaban, se alzaban
con ellos: porque el Espíritu de los Seres Vivientes estaba en ellas. («Porque el
Espíritu de los Seres Vivientes estaba en ellas», implica el Espíritu Santo, como lo
hace en Eze_1:20.)
18 Y la Gloria del SEÑOR se elevó de sobre el umbral de la casa, y paró sobre los
Querubines. (Esto muestra el Espíritu Santo que sale del Templo en Jerusalén. Se
hace recordar de la esposa de Finés, quien, justo antes de morir, «nombró al niño
Icabod, diciendo, traspasada es la Gloria de Israel» [1Sa_4:21].)
19 Y alzando los Querubines sus alas, se levantaron de la Tierra delante de mis ojos:
cuando ellos salieron, también las ruedas al lado de ellos: y se pararon a la entrada de
la puerta oriental de la Casa del SEÑOR, y la Gloria del Dios de Israel estaba arriba
sobre ellos. (Esto describe el lugar de la partida de la «Gloria del SEÑOR» y también
su regreso, como descrito en Eze_43:4, que todavía no había acontecido, sino
seguramente acontecerá, cuando el Templo sea restaurado después de la Segunda
Venida de Cristo.)
20 Este es el Ser Viviente que vi debajo del Dios de Israel en el río Quebar; y conocí
que eran Querubines. («Este es el Ser Viviente que vi debajo del Dios de Israel», se
refiere a los Querubines que formaban parte del Trono de Dios, del cual atestiguó
Juan el Amado [Apo_4:6-11].)
21 Cada uno tenía cuatro rostros, y cada uno cuatro alas, y figuras de manos humanas
debajo de sus alas. (La diferencia en la descripción de Juan y la de Ezequiel es que
los de Juan tenían seis alas, mientras los de Ezequiel tenían cuatro alas [Apo_4:8].)
22 Y la figura de sus rostros era la de los rostros que vi junto al río Quebar, su mismo
parecer y su ser; cada uno caminaba derecho hacia adelante. (La frase, «Cada uno
caminaba derecho hacía adelante», significa que con «el Padre de las Luces no hay
mudanza, ni sombra de variación» [Stg_1:17].)

11
Juicio contra los consejeros perversos
(594 a.C.)
1 Y EL Espíritu me elevó, y me metió por la puerta oriental de la Casa del SEÑOR,
la cual mira hacia el oriente: y he aquí a la entrada de la puerta veinticinco varones,
entre los cuales vi a Jazanías hijo de Azur, y a Pelatías hijo de Benaías, príncipes del
pueblo. («Y el Espíritu me elevó», se refiere al Espíritu Santo. Tres veces se dice que
el Espíritu alzó al Profeta [Eze_3:14; Eze_8:3; Eze_11:1]. Además dice que lo llevó
[Eze_37:1]. Los «veinticinco varones» pudieran haber sido aquellos mencionados en
Eze_8:16. Sin embargo, esos eran probablemente Sacerdotes, o al menos dos de estos
fueron nombrados como «príncipes del pueblo». Independientemente de quienes
fueran ellos, representaban rebelión contra Dios.)
2 Y me dijo: Hijo de hombre, estos son los hombres que maquinan perversidad, y dan
en esta ciudad mal consejo («Y dan en esta ciudad mal consejo», se refiere a cualquier
consejo que contradice las Profecías de Jeremías y Ezequiel, pero mayormente se
refiere a Jeremías, porque él fue el que profetizó en Jerusalén. Estos hombres
negaban cualquier invasión venidera por los Babilonios, y que su ciudad sería
destruida, junto con el Templo);
3 Los cuales dicen: No será tan pronto; edifiquemos casas: ésta ciudad es la olla de
cocinar y nosotros somos la carne. («Esta ciudad es la olla de cocinar y nosotros
somos la carne», se refiere a las afirmaciones por estos falsos profetas que los
habitantes de Jerusalén estaban tan seguros como si estuvieran rodeados por
hierro.)
4 Por tanto profetiza contra ellos, profetiza, hijo de hombre. (El Espíritu Santo dice
que el Profeta debe oponerse fuertemente al mensaje falso de estos falsos profetas.
Asunto concluido para aquellos que afirman que tal Prédica no debe ser permitida.)
5 Y cayó sobre mí el Espíritu del SEÑOR, y me dijo: Di: Así ha dicho el SEÑOR:
Así habéis hablado, oh Casa de Israel, y Yo he conocido los pensamientos que surgen
en vuestra mente. Yo las he entendido. (La Omnisciencia del SEÑOR se pone en
relieve en esta declaración, «Y he conocido los pensamientos que surgen en vuestra
mente, Yo las he entendido». Esta es en respuesta a la declaración de Judá, «Ha
abandonado el SEÑOR la Tierra, y el SEÑOR no ve» [Eze_9:9].)
6 Habéis multiplicado vuestros muertos en esta ciudad, y habéis llenado de muertos
sus calles. (La idea de este Versículo es que la terrible destrucción venidera sobre
Jerusalén no es culpa de Dios, sino culpa de los líderes espirituales en su rebelión
contra Dios. Por lo tanto, el SEÑOR echa la culpa a estos líderes.)
7 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Vuestros muertos habéis puesto en medio
de ella, ellos son la carne, y ella es la olla de cocinar; pero Yo os sacaré a vosotros de
en medio de ella. (Los príncipes declaraban que esta ciudad tiene un aro de hierro
alrededor de sí, es decir, ellos afirmaban que es inexpugnable. En cambio iba a ser
una olla hirviente, es decir, una «caldera», y el pueblo dentro de ella «carne». Como
resultado, los «muertos» serían muchos. «Pero Yo os sacaré a vosotros de en medio
de ella», corresponde a algunos de los príncipes, si no todos, quienes serían llevados
cautivos a Riblá y allá asesinados.)
8 Espada habéis temido, y espada traeré sobre vosotros, dice el SEÑOR Dios.
(Mientras observaban el Imperio Babilónico que buscaba extender sus fronteras, y
ya haber sufrido dos deportaciones, los Nobles de Judá y Jerusalén, a pesar de su
jactancia y bravuconadas, temían a las multitudes que se aproximaban. Ellos estaban
bien al tanto de la fiereza de los Babilonios, y con razón «temían la espada».)
9 Y os sacaré de en medio de ella, y os entregaré en manos de extraños, y Yo haré
juicios en vosotros. («Y os sacaré de en medio de ella», se refiere al pasado a las
palabras de Moisés. El dijo, «La tierra no os vomitará, por haberla contaminado,
como vomitó a la gente que fue antes de vosotros» [Lev_18:28].)
10 A cuchillo caeréis; en la frontera de Israel os juzgaré, y sabréis que Yo soy el
SEÑOR. («En la frontera de Israel os juzgaré», se refiere a los príncipes cuando
fueron llevados a Riblá y allí asesinados.)
11 Esta ciudad no os será por caldera (fortaleza), ni vosotros seréis en medio de ella
la carne (protegidos en la fortaleza): Yo os juzgaré en la frontera de Israel (el SEÑOR
aquí no estaba hablando de la mayoría de la población de la ciudad, sino del rey y
muchos de los nobles quienes creían que podían escapar).
12 Y sabréis que Yo soy el SEÑOR: porque no habéis andado en Mis Ordenanzas, ni
habéis hecho Mis Juicios, sino según los juicios de los paganos que están en vuestros
alrededores habéis hecho. (¡El Creyente está «en» el mundo, pero él no debe ser «del»
mundo!)
13 Y aconteció que, estando yo profetizando, Pelatías hijo de Benaías murió.
Entonces caí sobre mi rostro, y clamé con gran voz, y dije: ¡Ah, SEÑOR Dios! ¿Tú
va a acabar con el remanente de Israel? (Pelatías, a propósito, era uno de los líderes
de aquellos quienes «dieron consejos malvados en Jerusalén» [vv. Eze_11:1-2]. El
énfasis está en que su muerte era juicio de parte de Dios.)
 Nuevo corazón y espíritu para Israel
14 Y vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo:
15 Hijo de hombre, tus hermanos, tus hermanos, los hombres de tu parentesco y toda
la Casa de Israel, toda ella son aquellos a quienes dijeron los moradores de Jerusalén:
Alejaos del SEÑOR; a nosotros es dada la tierra en posesión. (Ezequiel es consolado
por el Mensaje de que sus hermanos y parentescos genuinos eran los cautivos en
Babilonia, al menos aquellos quienes verdaderamente servían al SEÑOR, y no los
Sacerdotes en Jerusalén, quienes habían exclamado orgullosamente a los Exiliados,
«¡Alejaos del SEÑOR; a nosotros es dada la tierra en posesión!»)
16 Por tanto di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Aunque los he echado lejos entre los
paganos, y los he esparcido por las tierras, con todo eso les seré por un pequeño
Santuario en las tierras a donde llegaren. (El consuelo que el SEÑOR dio a Ezequiel
fue profundizado por la Profecía que aunque los cautivos no tenían un Templo
material, Dios Mismo sería para ellos un Santuario «mientras tanto» su exilio
duraría, es decir, los setenta años predichos. La idea es: «La Presencia del SEÑOR»
es el Santuario, y no el Santuario que asegura la Presencia.)
17 Di por tanto: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Yo os recogeré de los pueblos, y os
congregaré de las tierras en las cuales estáis esparcidos, y os daré la tierra de Israel.
(Esto fue cumplido en parte cuando los Exiliados unos setenta años después volvieron
de la primera deportación; sin embargo, su cumplimiento total aun habla de un
momento futuro, que en realidad acontecerá en la Edad del Reino venidero.)
18 Y vendrán allá, y quitarán de allí todas las cosas detestables y todas las
abominaciones. (Otra vez, esta Profecía será cumplida totalmente después de la
Segunda Venida de Cristo.)
19 Y he de darles un corazón, y espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el
corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne (esto será
cumplido en la Segunda Venida de Cristo y la aceptación de Él como su Salvador);
20 Para que anden en Mis Ordenanzas, y guarden Mis Juicios y los cumplan, y Me
sean por pueblo, y Yo sea a ellos por Dios.
21 Pero a aquellos cuyo corazón anda tras el deseo de sus cosas detestables y de sus
abominaciones. Yo traigo sus caminos sobre su misma cabeza, dijo el SEÑOR Dios.
(Este Versículo ahora regresa al presente y la rebelión de Israel contra el SEÑOR.)
22 Después alzaron los Querubines sus alas, y las ruedas en pos de ellos; y la Gloria
del Dios de Israel estaba por encima, sobre ellos. («La Gloria del Dios de Israel» era
la fuerza de esta Tierra, Ciudad, Templo y pueblo, pero ellos poco lo supieron o
entendieron. Ahora están por perderla.)
23 Y la Gloria del SEÑOR se fue de en medio de la ciudad, y paró sobre el monte
que está al oriente de la ciudad. («Sobre el monte que está al oriente de la ciudad» es
el Monte de los Olivos. «Y la Gloria del SEÑOR se fue de en medio de la ciudad»,
denota una renuencia para salir. Sin embargo, el Espíritu Santo ya no es amado ni
deseado; por lo tanto, Él no tiene alternativa sino salir. Salir del Templo con desgano,
la Gloria luego abandonó la ciudad, demorando por un poco de tiempo con un Amor
doliente sobre este Monte. Pero la Gloria regresó a ese Monte, encubierto en la cante
sin pecado del Mesías; una vez más el amor miró la Ciudad Amada pero rebelde y
lloró por ella [Luc_19:41]. Una pocas semanas después, Cristo ascendió de ese
mismo Monte; e incluso, en un día futuro, en la Gloria de Su Segundo Advenimiento,
Sus Pies otra vez se posarán sobre él [Zac_14:4]. Entonces Israel tendrá un corazón
y un nuevo espíritu.)
24 Luego me levantó el Espíritu, y me volvió a llevar en Visión del Espíritu de Dios
a la tierra de los Caldeos, a los deportados. Y se partió de mí la Visión que había visto.
(«Y me volvió a llevar en Visión», denota el hecho de que Ezequiel no fue a Jerusalén
en el sentido literal, sino solamente en «Visión».)
25 Y hablé a los deportados todas las palabras del SEÑOR que Él me había mostrado.
(Mientras Ezequiel les relataba a sus compatriotas lo que el SEÑOR le había
demostrado, ellos estaban sin duda muy consolados con la revelación maravillosa de
que el Dios de la Gloria de Israel estaba en su medio como un Santuario, un Templo
Verdadero y Puro; que Él continuaría así durante todo el plazo de la cautividad; que
Él compartía su Exilio con ellos; y que Él de seguro les restauraría a su propia
tierra.)

12
Representación del destierro de Judá
(594 a.C.)
1 ENTONCES vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo:
2 Hijo de hombre, tú habitas en medio de casa rebelde, los cuales tienen ojos para
ver, y no ven, tienen oídos para oír, y no oyen; porque son casa rebelde. (La idea,
como dada por el Espíritu Santo, es que ellos tenían «ojos espirituales», pero
rehusaron ver, y «oídos espirituales», pero rehusaron oír.)
3 Por tanto tú, hijo de hombre, hazte aparejos de marcha, y parte de día delante de
sus ojos; y te pasarás de tu lugar a otro lugar a vista de ellos; no verán porque son casa
rebelde. (La enseñanza por medio de la Visión cesa, y ahora lo del mensaje directo o
actos simbólicos se resumen. En esta lección práctica, el Profeta predijo el intento de
escapar y la captura del rey Sedequías. La Profecía precedió el evento de casi cinco
años. Ezequiel fue mandado a hacer un bulto como para un viaje, que iba a mostrar
el intento inútil del rey Sedequías para escapar. Hay toda razón para creer que
Sedequías recibió el Mensaje de parte de Ezequiel, pero, lamentablemente, lo
rechazó.)
4 Y sacarás tus aparejos, como aparejos de partida, de día delante de sus ojos: pero
tu saldrás por la tarde a vista de ellos, como quien sale para partirse, a la manera de
los que van en cautiverio. (Los «aparejos» representaban el bagaje de Sedequías, que
serían recogidos para el intento de escape.)
5 Delante de sus ojos abrirás un hueco en el muro, y saldrás por el. (El Profeta, en su
lección práctica, no debía llevar los «aparejos» por la puerta de la casa, sino más
bien «cavar un hueco a través del muro», de este modo ilustra el intento del escape
de Sedequías por medio de pasar por una parte rota del muro de Jerusalén.)
6 Ante su vista llevarás tus pertenencias al hombro, de noche los sacarás; cubrirás tu
rostro, y no mirarás la tierra: porque por señal te He dado a la Casa de Israel. (¿ Qué
debía haber sido la respuesta de Sedequías cuando él leyó estas predicciones de parte
de Ezequiel, como él, al mismo tiempo, había escuchado Profecías similares de
Jeremías?)
7 Y yo hice así como me fue mandado: saqué mis aparejos de día, como aparejos de
partida, y a la tarde cavé un hueco a través del muro con mi mano; salí de noche, y los
llevé sobre los hombros a vista de ellos. (¿Me pregunto cuántos del pueblo tomaron
esta lección en serio, y cuántos ridiculizaban el «sensacionalismo» del Profeta?)
8 Y vino a mí palabra del SEÑOR por la mañana, diciendo:
9 Hijo de hombre, ¿no te ha dicho la Casa de Israel, aquella casa rebelde: Qué haces?
(Aunque el Profeta llevó a cabo lo que el SEÑOR le había dicho que hiciera, todavía,
parece que a esta etapa, él poco sabía lo que esto representaba; por lo tanto, él tenía
que decirles que esperaría y vería lo que el SEÑOR le había dicho, que estaba por
venir muy pronto, en realidad la siguiente «mañana».)
10 Diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Al príncipe en Jerusalén es esta carga, y a
toda la Casa de Israel que está en medio de ellos. (La frase, «Al príncipe en Jerusalén
es esta carga», se refiere a Sedequías. La palabra «príncipe» [en lugar de «rey»] fue
empleada por el Espíritu Santo porque, al menos en la Mente de Dios, Sedequías no
era el verdadero rey de Judá, solamente que servía en forma provisional. En la Mente
de Dios, Joacim fue el último rey, al menos en el linaje de David — el linaje que fue
absolutamente necesario para poder sentarse en el Trono. En realidad, Sedequías era
tío de Joacim, con la palabra «hermano», al menos en este relato, significaba
«pariente cercano» [2Cr_36:10].)
11 Diles: Yo soy vuestra señal: Como Yo hice, así les harán a ellos: al pasar a otro
país irán en cautiverio. («Diles: Yo soy vuestra señal», se refiere a Ezequiel y los
cautivos, quienes eran una «señal» al pueblo de Judá y Jerusalén, que significaba
que ellos habían sido traídos en cautiverio, «así les harán a ellos», es decir, Jerusalén
será llevado a cautividad.)
12 Y al príncipe que está en medio de ellos llevarán a cuestas de noche, y saldrán;
ellos cavarán huecos a través de la pared para sacarlo por ella; cubrirá su rostro para
no ver con sus ojos la tierra. (¡El detalle minucioso por el cual esto fue dado a Ezequiel
es efectivamente asombroso! Sin embargo, se debe decir rápidamente que fue hecho
procedente del Amor de Dios para el rey en Jerusalén, pero todavía sin prestarle
atención.)
13 Pero Yo extenderé Mi red sobre él, y será preso en Mi malla, y lo haré llevar a
Babilonia, a tierra de Caldeos; pero no la verá, y allá morirá. (Todo, como predicho,
se cumplió [2Re_25:1-30; Jer_39:1-18]. Sedequías, disfrazado para no ser
reconocido, y con unos poeos artículos para el viaje, abandonó la ciudad durante la
noche por un hueco hecho en el muro de la ciudad, y huyó a la llanura de Jericó.
Pero Dios, que empleaba el ejército Caldeo como una red, le capturó y le trajo a
Riblá; ellos le sacaron los ojos y le transportaron a Babilonia, donde él murió. Josefo
dijo que esta Profecía fue enviada a Sedequías. Pero él declaró que Jeremías
contradijo el Versículo Eze_12:13 de este Capítulo, porque decía que él no vería a
Babilonia, y Jeremías predijo que sería llevado allá. Él, por lo tanto, concluyó no
creyendo ninguno de los dos [Jer_24:8-9].)
14 Y a todos los que estuvieren alrededor de él para su ayuda, y a todas sus compañías
esparciré a todo viento, y desenvainaré espada en pos de ellos. (De este modo, las
falsas expectaciones de los cautivos que ellos serían inmediatamente restaurados a
su tierra natal y la igualmente falsa esperanza del pueblo de Jerusalén de que ellos
nunca serían conquistados por los Babilonios fueron inmediatamente destruidas por
la Profecía simbólica de estos Versículos. Así como hizo Sedequías, Acab, muchos
años antes, intentó, pero en vano, de ser más listo que Dios. Sus acciones eran las
más impías porque Dios, en Su Amor y misericordia, les dijo de antemano su destino
si ellos persistían en su necedad. Él no quiso que ellos perecieran.)
15 Y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando los esparciere entre las naciones, y los
derramare por la tierra. (Todos los que rehúsan huir de la Ira venidera tienen que
conocer a Dios en el Juicio. Los que obedecen Sus Mandatos le conocerán a Él en
Gracia, como el siguiente Versículo implica.)
16 Y haré que de ellos queden pocos en número, de la espada, del hambre y de la
pestilencia, para que cuenten todas sus abominaciones entre los paganos adonde
llegaren; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (Los pocos que fueron salvos de la
destrucción fueron perdonados para que pudieran vindicar la acción de Dios por
medio de informar a las naciones de las abominaciones que la justificaba. Dan_9:5-
14 ilustra esta predicción.)
17 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
18 Hijo de hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento, y
con ansiedad (todo esto era para simbolizar el juicio venidero sobre Judá y
Jerusalén).
19 Y dirás al pueblo de la tierra: Así ha dicho Dios el SEÑOR respecto a los
habitantes de Jerusalén, y sobre la tierra de Israel: Su pan comerán con temor, y con
espanto beberán su agua; porque su tierra será asolada de su multitud, por la violencia
de todos los que en ella moran. (La frase, «Por la violencia de todos los que en ella
moran», se refiere a la razón por la cual vino el Juicio. Cuando se niega al SEÑOR,
la Misericordia y la Gracia ya no existen, con las actitudes, acciones y esfuerzos de
los hombres que luego llegan a ser «violentos».)
20 Y las ciudades habitadas serán asoladas, y la tierra será desierta; y sabréis que Yo
soy el SEÑOR. («Asoladas» y «desierta» son dos palabras que describen aquello que
está por venir pronto.)
21 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
22 Hijo de hombre, ¿qué refrán es este que tenéis vosotros en la tierra de Israel,
diciendo: Se prolongarán los días, y perecerá toda visión? (Tan corrupto e incrédulo
es el hombre que él convierte la paciencia y la longanimidad de Dios en un proverbio
burlón.)
23 Diles por tanto: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Haré cesar este refrán, y no repetirán
más este dicho en Israel. Diles pues: Se han acercado aquellos días, y el cumplimiento
de toda visión. (El SEÑOR le dice al Profeta que instituya un nuevo proverbio: «Se
han acercado aquellos días y el cumplimiento de toda visión». En otras palabras, la
verdadera visión no faltará; está por venir; toda palabra será cumplida en total
realidad.)
24 Porque no habrá más alguna visión vana, ni habrá adivinación en lisonjeros en
medio de la Casa de Israel. (La «visión vana» y la «adivinación de lisonjeros»
corresponden a los mensajes de los falsos profetas. El Espíritu Santo está diciendo
que pronto estos mensajes serán descubiertos por lo que en realidad son: mentiras.)
25 Porque Yo el SEÑOR hablaré; se cumplirá la palabra que Yo hablaré; no se
dilatará más: antes en vuestros días, oh casa rebelde, hablaré palabra, la cumpliré, dice
el SEÑOR Dios. (La palabra de Dios se aprecia aun más que Su Nombre. Tiene la
garantía de Su Poder que la respalda para que sea cumplida [Sal_138:2].)
26 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
27 Hijo de hombre, he aquí que los de la Casa de Israel dicen: La visión que éste ve
es para muchos días, y para lejanos tiempos profetiza éste. (Los que estaban en Exilio
con Ezequiel no le llamaban falso profeta, pero en cambio dijeron que sus Profecías
tenían poco que ver con lo presente, sino más bien correspondían a un futuro distante.
En otras palabras, ellos anhelaban creer a los falsos profetas quienes proclamaban
que los Exiliados serían restaurados a Judá dentro de unos cuantos meses.)
28 Por tanto: Así a dicho el SEÑOR Dios: No se dilatarán más todas Mis palabras:
se cumplirá la palabra que Yo hablaré, dice el SEÑOR Dios. (Esta declaración insinúa
que el cumplimiento de las Profecías de Juicio en efecto habían sido «dilatadas», o
sea demoradas para que Judá y Jerusalén pudieran arrepentirse, ¡pero en vano!
Ahora, el Espíritu Santo dice «La dilatación ha terminado».)
13
Condena de los falsos profetas
(594 a.C.)
1 Y VINO a mi Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y di a los que
profetizan de su corazón: Oíd Palabra del SEÑOR (¡como habían falsos profetas y
profetisas en Jerusalén, también los habían entre los Exiliados! ¡El Espíritu Santo
ahora dirige Su atención a ellos en términos inequívocos!).
3 Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Ay de los profetas insensatos, que andan en pos de
su propio espíritu, y nada vieron! (La frase, «Que andan en pos de su propio espíritu»,
significa que ellos no siguieron al Espíritu Santo. Ellos predicaron lo que la gente
quería escuchar, en este caso una restauración rápida a la Tierra de Judá.)
4 Como zorras en los desiertos fueron tus profetas, oh Israel. (Las zorras hicieron sus
hogares en el desierto entre las ruinas. Los falsos profetas del mismo modo se
aprovechaban de ganancia financiera de la ruina de Israel, y, en efecto, hicieron que
la ruina fuera peor.)
5 No habéis subido a los portillos, ni echasteis vallado en la Casa de Israel, estando
en la batalla en el día del SEÑOR. (Estos «profetas insensatos» sacaron ganancias
deshonestas de la época por decir al pueblo una mentira en lugar de la verdad. Ellos
les hicieron sentir cómodos en sus pecados, y además les dijeron que la paz y la
prosperidad estaban por llegar. Esto desacreditaba las Profecías de Jeremías y
Ezequiel, y en efecto también difamaba a Dios.)
6 Vieron vanidad y adivinación de mentira. Dicen: Ha dicho el SEÑOR; y el SEÑOR
no los envió: y hacen esperar que se confirme la palabra. (La frase, «Vieron vanidad
y adivinación de mentira», significa que ellos habían creído sus propias mentiras y
habían intentado confirmar sus propias predicciones. Ellos lo hicieron así por
afirmar, «Ha dicho el SEÑOR», cuando de hecho «el SEÑOR no los envió», y no les
había dicho nada.)
7 ¿No habéis visto visión vana, y no habéis dicho adivinación de mentira, por cuanto
decís, dijo el SEÑOR; no habiendo Yo hablado? (El SEÑOR llamó las palabras de
estos falsos profetas «visión vana» y «adivinación de mentira». Tristemente, es lo
mismo en la actualidad en la Iglesia moderna. ¡Los falsos profetas abundan!)
8 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: por cuanto vosotros habéis hablado vanidad,
y habéis visto mentira, por tanto, he aquí Yo estoy contra vosotros, dice el SEÑOR
Dios. (La palabra «vanidad» significa «naderías vacías», que constituían los
mensajes de estos individuos. Además, ellos «habían visto mentiras» porque no vieron
la Palabra de Dios.)
9 Y será Mi mano contra los profetas que ven vanidad, y adivinan mentira: no serán
en la congregación de Mi pueblo, ni serán escritos en el libro de la Casa de Israel, ni
a la tierra de Israel volverán; y sabréis que Yo soy el SEÑOR Dios. (El Juicio
proclamado contra estos profetas era que en el acto de la restauración de Israel, que
por último se cumpliría, ellos serían excluidos de la Iglesia y el pueblo y la Tierra de
Israel, por lo tanto sus nombres serían borrados del Libro de la Vida. ¡En otras
palabras, ellos perdieron sus almas!)
10 Por tanto, y por cuanto engañaron a Mi pueblo, diciendo, Paz, no habiendo paz; y
el uno edificaba la pared, y he aquí que los otros la encostraban con lodo suelto (en la
falsa doctrina hay seducción, porque le dice al pueblo lo que ellos quieren escuchar
en lugar de lo que necesitan escuchar);
11 Di a los que ponen el estuco de lodo suelto, que caerá; vendrá lluvia inundante, y
daré piedras de granizo que la hagan caer, y viento tempestuoso la romperá. (Cristo
dijo que estas tempestades vendrán, y solamente la casa que está edificada sobre la
Roca permanecerá. Es muy posible, que Cristo tenía en mente este mismo Pasaje
cuando Él habló estas Palabras en Mat_7:1-29.)
12 Y he aquí, cuando la pared habrá caído, no os dirán: ¿Dónde está la embarradura
con que la recubristeis? (El falso mensaje de paz dado por los falsos profetas fue
asemejado a un muro construido con «lodo suelto», que tiene que ver con el estuco
que no mantendrá las piedras juntas; es realmente lodo que se seca rápidamente, que
pierde su habilidad para adhesión. Cuando este muro caiga, hablando en sentido
simbólico, el pueblo que había sido seducido por el mensaje falso luego interrogarán
al falso profeta, pero será demasiado tarde. Ellos debían indagar lo que habían
escuchado en el comienzo.)
13 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Y haré que la rompa viento tempestuoso
con Mi ira, y lluvia inundante vendrá con Mi furor, y piedras de granizo con enojo
para consumir. (¡Los pensamientos del SEÑOR en cuanto a estos falsos profetas
pueden sumarse en las palabras empleadas en este Versículo: «ira» y «furor»!)
14 Así desbarataré la pared que vosotros recobrasteis con lodo suelto, y la echaré a
tierra, y será descubierto su cimiento, y caerá, y seréis consumidos en medio de ella;
y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (La casa de lodo en ese entonces y la casa de lodo
ahora son ambos construidos por aquellos que no desean obedecer a Dios ni a Su
Palabra; ellos están siendo «engañados», de manera falsa, por los «Predicadores
modernos».)
15 Cumpliré así Mi furia sobre la pared y en los que la recubrieron con lodo suelto;
y os diré: No existe la pared, ni aquellos que la recubrieron (la frase, «Cumpliré así
Mi furia sobre la pared», se refiere a la Ira de Dios contra todo lo que es falso),
16 Los profetas de Israel que profetizan a Jerusalén, y ven para ella visión de paz, no
habiendo paz, dice el SEÑOR Dios. (Hasta donde se sabe, al menos en esa época,
Jeremías y Ezequiel fueron los únicos dos Profetas usados de Dios respecto al destino
de Judá y Jerusalén. Daniel fue usado poderosamente durante esa época, pero en
otra capacidad. Sin embargo, los «profetas» de los cuales se habla aquí parece haber
sido muchos, así como los falsos profetas abundan en la actualidad.)
17 Y tú, hijo de hombre, pon tu rostro a las hijas de tu pueblo que profetizaban de su
corazón, y profetiza contra ellas. (Además de los falsos profetas, había falsas
profetisas. A Ezequiel se le dijo, «Profetiza contra ellas». En la Iglesia moderna eso
es «algo inadmisible». Pero según la Palabra de Dios, alguien tiene que pararse y
decir, «¡Esto es lo correcto!» o «¡Esto es incorrecto!»)
18 Y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Ay de aquellas que cosen cojines de amuletos
mágicos atados a sus manos, y hacen velos mágicos sobre la cabeza de toda edad para
cazar las almas! ¿Habéis de cazar las almas de Mi pueblo, para mantener así vuestra
propia vida? (La «pared» de los Versículos Eze_13:10-15 no era literal; más bien
tenía la intención de simbolizar la enseñanza falsa. Del mismo modo, los «cojines» y
los «velos» de este Versículo son simbólicos, también. La implicación es que los
varones profetas construyeron la casa, y las mujeres profetisas la amueblaron. Los
«cojines» simbolizaban la enseñanza que daba falso reposo, y que el pueblo deseaba
escuchar. Las coberturas ornamentales para la cabeza son un cuadro de las doctrinas
atractivas y agradables que oscurecen los hechos de muerte y juicio venidero.)
19 ¿Y habéis de profanarme entre Mi pueblo por puñados de cebada y por pedazos
de pan, matando las almas que no mueren, y dando vida a las almas que no vivirán,
mintiendo a Mi pueblo que escucha la mentira? (La idea de este Versículo es que las
falsas profetisas estaban traicionándose, es decir, «puñados de cebada y por pedazos
de pan». Sin embargo, independientemente de la cantidad de dinero, fama o
popularidad recibidos por la falsa adivinación, todavía, la idea de vender sus
mentiras en el Nombre del SEÑOR les traería justo juicio sobre sus cabezas.)
20 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo estoy contra vuestros cojines,
con que cazáis ahí las almas volando; Yo las arrancaré de vuestros brazos, y dejaré
las almas, las almas que cazáis volando. («Que cazáis volando» se refiere a hacer que
sus oyentes vuelen a sus redes de esclavitud para poder saquearlos. «Yo las arrancaré
de vuestros brazos, y dejaré las almas, las almas que cazáis volando», se refiere al
pueblo que fue «librado del lazo del cazador» [Sal_91:3; Sal_124:7]. Esta gente ya
no estaría bajo el poder de aquellos que jugaban con su credulidad.)
21 Romperé asimismo vuestros velos, y libraré Mi pueblo de vuestra mano, y no
estarán más en vuestra mano para caza; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (La idea es
que aunque el pueblo había sido engañado por esos falsos profetas y profetisas, aun
el SEÑOR ha prometido moverse y «librar a Mi pueblo de vuestra mano». Además,
no habrá ninguna duda en absoluto en cuanto a Quien ha hecho esto. «Y sabréis que
Yo soy el SEÑOR».)
22 Por cuanto entristecisteis con mentira el corazón del justo, al cual Yo no entristecí,
y fortalecisteis las manos del impío, para que no se apartase de su mal camino, a fin
de preservar su vida (el corazón de Ezequiel fue entristecido enormemente por los
mensajes falsos de estos individuos quienes «habían fortalecido las manos del impío»
por prometerles vida eterna sin que ellos tuvieran que abandonar su mal camino.
Además, tal caracteriza la mayoría de las Iglesias modernas. Eso debería entristecer
«el corazón de los justos».);
23 Por tanto no veréis vanidad, ni más adivinaréis adivinación; y libraré Mi pueblo
de vuestra mano; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Esto precisamente fue cumplido
por los pocos que fueron liberados cuando Judá y Jerusalén fueron destruidos.
Todavía, su cumplimiento espera una fecha futura.)

14
Condena de los ancianos idólatras
(594 a.C.)
1 Y VINIERON a mí algunos de los ancianos de Israel, y se sentaron delante de mí.
(Los «Ancianos de Israel» corresponden a aquellos que estaban entre los cautivos.)
2 Y vino a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
3 Hijo de hombre, estos hombres han puesto sus ídolos en su corazón, y establecido
el tropiezo de su maldad delante de su rostro: ¿acaso he de ser Yo verdaderamente
consultado por ellos? (La fiase, «Estos hombres han puesto sus ídolos en su corazón»,
llega al mismo blanco del problema. La declaración significa que los Ancianos
añoraban el falso culto de antaño en el cual una vez participaron. Ellos habían dejado
Egipto, por decirlo así, pero Egipto todavía estaba en ellos. De hecho, este único
Versículo caracteriza mucho al Cristianismo moderno. El «ídolo» en el corazón era
tan real como si ellos se hubieran postrado a los dioses falsos como hacían los
paganos.)
4 Por tanto háblales, y diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Cualquier hombre de la
Casa de Israel que hubiere puesto sus ídolos en su corazón, y establecido el tropiezo
de su maldad delante de su rostro, y viniere al Profeta, Yo el SEÑOR responderé al
que viniere en la multitud de sus ídolos (Dios no puede tener comunión con el mal.
El, por lo tanto, no solamente rehúsa responder a tales oraciones, sino que Él les
responde a ellos con justos juicios. Permítame decir rápidamente: Cualquier objeto
además de «Cristo El Crucificado» se constituye por el SEÑOR como «ídolo»
[1Jn_5:21]);
5 Para tomar a la Casa de Israel en su corazón, que se han apartado de Mí todos ellos
en sus ídolos. (No importa cuán atractiva pueda parecer la profesión externa de fe en
Dios, el Espíritu Santo puede desenmascarar el mal que se aloja en el corazón.)
6 Por tanto, di a la Casa de Israel: Así dice Dios el SEÑOR: Arrepentíos, y volveos
de vuestros ídolos, y apartad vuestro rostro de todas vuestras abominaciones. (Dios
amaba y tenía compasión de estos hipócritas y el hecho de Su Amor agregaba a la
certidumbre y horror del justo juicio que se les aproximaba. Él les suplicó que se
arrepintieran, que no se alejaran de Él, y Él los recibiría y reconocería como «Mi
pueblo».)
7 Porque cualquier hombre de la Casa de Israel, y de los extranjeros que moran en
Israel, que se hubiere apartado de andar en pos de Mí, y hubiere puesto sus ídolos en
su corazón, y establecido delante de su rostro el tropiezo de su maldad, y viniere al
profeta para preguntarle por Mí, Yo el SEÑOR le responderé por Mí Mismo (la idea
es: estos individuos en particular querían la ayuda de Dios, pero no querían dejar
sus pecados. «Yo el SEÑOR le responderé por Mí Mismo», se encuentra en el
siguiente Versículo; sin embargo significa que uno no puede aferrarse a Dios con una
mano mientras se aferra al mundo con la otra):
8 Y pondré Mi rostro contra aquel hombre, y le pondré por señal y proverbio, y lo
cortaré de en medio de Mi pueblo; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Las amenazas
de esta Profecía son, en sustancia y lenguaje, halladas en Levítico y Deuteronomio.
Este Pasaje, como tantos otros, refuta completamente la doctrina no conforme a las
Escrituras de la «Seguridad Eterna Incondicional». Yo «lo cortaré de en medio de Mi
pueblo», dice, al mismo tiempo, que para que uno sea «cortado», en primera instancia
debe estar adjunto.)
9 Y el profeta, cuando fuere engañado y hablare palabra, Yo el SEÑOR engañé al tal
profeta; y extenderé Mi mano sobre él, y le raeré de en medio de Mi pueblo Israel.
(«Yo el SEÑOR engañé al tal profeta», en realidad significa que el SEÑOR permitió
que el profeta se engañara, y en realidad asistió el proceso, porque esto es
precisamente lo que el profeta quería. Es más justo que Dios permita a alguien que
engaña a los demás que se engañe a sí misino. La historia de Jacob ilustra este
principio moral.)
10 Y llevarán su iniquidad: como la iniquidad del que pregunta, así será la maldad
del profeta (ambos, tanto el falso profeta como sus oyentes pueden esperar juicio.
Esta es una clara condenación, no solamente para el falso profeta, sino también para
aquellos que entretienen y apoyan su mensaje falso);
11 Para que no yerre más la Casa de Israel de en pos de Mí: ni más se contaminen en
todas sus transgresiones, y Me sean por pueblo, y Yo les sea por Dios, dice el SEÑOR
Dios. (En este Versículo el corazón de Dios se agita. Es el clamor del Espíritu Santo
que todas las «transgresiones» sean quitadas, y que este pueblo «Me sean por pueblo,
y Yo les sea por Dios». Finalmente será realizado en la Tierra Nueva [Apo_21:3-7;
Apo_22:3].)
Jerusalén no será librada
12 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (aquí, comienza una nueva sección de
Profecía. Lo que sigue es notablemente similar a Jer_15:1-2):
13 Hijo de hombre, cuando la tierra pecare contra Mí rebelándose pérfidamente, y
extendiere Yo Mi mano sobre ella, y le quebrantare el sustento de pan, y enviare en
ella hambre, y talare de ella hombres y bestias (encontramos de este Versículo que la
prosperidad de una nación está directamente enlazada a la prosperidad espiritual de
su pueblo);
14 Si estuvieren en medio de ella estos tres varones, Noé, Danielyjob, ellos por su
justicia librarían únicamente sus propias vidas, dice Dios el SEÑOR. (En Jer_15:1,
se dijo que la Intercesión de Moisés y Samuel [Éxo_32:11-14; Núm_14:13-20;
1Sa_7:8-12] fracasaría en revertir la perdición venidera de Jerusalén. En este
Capítulo se agrega que la presencia de Noé, Daniel y Job también fracasaría para
preservarlo de la destrucción. De esto, aprendemos que los pecadores no pueden
salvarse por la justicia de los demás.)
15 Y si hiciere pasar bestias feroces por la tierra, y la asolaren, y fuere desolada que
no haya quien pase a causa de las bestias (los cuatro juicios penosos mencionados en
este Capítulo son: hambruna [v. Eze_14:13] bestias salvajes [v. Eze_14:15], guerra
[v. Eze_14:17], y pestilencia [v. Eze_14:19]),
16 Y estos tres varones estuvieren en medio de ella, vivo Yo, dice el SEÑOR Dios,
ni a sus hijos ni a sus hijas librarán; ellos solos serán libres, y la tierra será asolada.
(Otra vez, permítanos decir: la justicia de los demás no puede salvar al pecador. Él
tiene que personalmente venir al SEÑOR y ser Nacido de Nuevo [Jua_3:3].)
17 O si Yo trajere espada sobre la tierra, y dijere: Espada, pasa por la tierra; e hiciere
talar de ella hombres y bestias (siempre cuando la guerra viene a un pueblo o a una
nación, este Pasaje más otros nos dice que el SEÑOR lo permite debido a la iniquidad
del pueblo. Además, proclama que los Piadosos, por sus vidas Piadosas e Intercesión,
pueden a veces detenerlo. Sin embargo, la iniquidad de un pueblo puede llegar a un
punto culminante que aún los justos no puede retener el Juicio),
18 Y estos tres varones estuvieren en medio de ella, vivo Yo, dice el SEÑOR Dios,
no librarán sus hijos ni sus hijas; ellos solos serán libres. (Cuatro veces el Espíritu
Santo repite esta fraseología [vv. Eze_14:14; Eze_14:16; Eze_14:18; Eze_14:20].
Tal repetición tienen la intención de recalcar sobre todos la severidad de la
situación.)
19 O si envío pestilencia sobre esa tierra, y derramo Mi ira sobre ella en sangre, para
cortar de ella hombres y bestias, (En el Hebreo, la palabra «sangre» expresa todo
tipo de muerte que no es natural.)
20 Y estuvieren en medio de ella Noé, Daniel y Job, vivo Yo, dice el SEÑOR Dios,
no librarán hijo ni hija; ellos por su justicia librarán su propia vida. (El SEÑOR
testifica aquí de la Justicia de Noé, Daniel y Job. De los tres, Daniel todavía estaba
vivo.)
21 Por lo cual así ha dicho el SEÑOR Dios: ¿Cuánto más, si mis cuatro malos juicios,
espada, hambre, fieras y pestilencia, enviare contra Jerusalén, para cortar de ella
hombres y bestias? (¿El argumento de este Versículo es que si estos tres varones no
podían desviar ni un solo juicio, entonces cómo podrían ellos desviar cuatro juicios
severos?)
22 Sin embargo, he aquí quedarán en ella un remanente, hijos e hijas, que serán
llevados fuera: he aquí que ellos vendrán a vosotros, y veréis su camino y sus hechos;
y tomaréis consolación del mal que hice venir sobre Jerusalén, de todas las cosas que
traje sobre ella. (El «remanente» mencionado aquí corresponde a los pocos quienes
serían salvos de los juicios del Versículo Eze_14:21 y traídos como cautivos a
Babilonia. Esto significa que la nación sería perdonada. ¡Y así ha sido!)
23 Y os consolarán cuando viereis su camino y sus hechos, y conoceréis que no sin
causa hice todo lo que habré hecho en ella, dijo el SEÑOR Dios. (Sin duda muchos
de los cautivos fieles tenían parientes muy cercanos y amados que estaban todavía
viviendo en Jerusalén. Que la Ira de Dios caería sobre estos hubiera dejado a los
Exiliados perplejos y profundamente agitados. Pero cuando se les dijo del mal e
iniquidad de Jerusalén, aun entre sus líderes espirituales, ellos fueron consolados con
respecto al mal que Dios traería.)

15
"Jerusalén, una vid inútil"
(594 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, ¿en que será mejor la madera de la vid que cualquier madera o
rama que está entre los árboles del bosque? (En las Escrituras, Israel es simbolizado
como una «Vid», como un «Olivo», y como una «Higuera». La «Vid» simbolizaba
privilegio espiritual. El único propósito de la Vid es producir uvas. De otro modo es
inútil, excepto como leña [Jua_15:6]. Israel era la Vid que fue sacada de Egipto, cuya
única responsabilidad y privilegio era producir el fruto moral a Dios [Mat_21:33-
46]. La pregunta, «¿En que será mejor la madera de la Vid que cualquier madera o
rama?», se refiere a la verdad de que si la Vid no produce fruto, ni siquiera vale más
que las otras maderas o que las ramas de los árboles del bosque. Su única función es
producir fruto.)
3 ¿Tomarán de ella madera para hacer alguna obra? ¿Se hace con ella una clavija para
colgar alguna vasija? (La analogía que el Espíritu Santo emplea es que la Vid no se
puede usar sino para producir fruto. Es inútil y sin valor aun como leña, y en realidad
ni siquiera califica para fabricar unas simples clavijas «para colgar alguna vasija».)
4 He aquí, que es puesto en el fuego para ser consumido; sus dos extremos consumió
el fuego, y la parte del medio se quemó; ¿servirá para obra alguna? («He aquí, que es
puesto en el fuego para ser consumido», se refiere al juicio que iba a venir a esta
«vid» debido al pecado. «Y la parte del medio se quemó», se refiere a Jerusalén, que
en ese entonces estaba a punto de ser quemado por los Caldos. La pregunta,
«¿Servirá para obra alguna?», se refiere a la Obra de Dios, y es contestada en el
siguiente Versículo.)
5 He aquí que cuando estaba entera no era para obra alguna: ¿cuánto menos después
que el fuego lo hubiere consumido, y fuere quemado? ¿Servirá más para alguna obra?
(Antes de que Jerusalén fuese quemada, era inútil como agente moral; por lo tanto,
quedó completamente inútil cuando fue quemada. Su propósito total era ser un
reflector de la Luz de Cristo. Con el reflector manchado debido al pecado, Israel ya
no servía de uso alguno.)
6 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Como la madera de la vid entre los maderos
del bosque, el cual di al fuego para que lo consuma, así haré a los moradores de
Jerusalén. (2Re_25:9 registra el cumplimiento de esta predicción.)
7 Y pondré Mi rostro contra ellos; aunque del fuego escaparon, pues el fuego los
consumirá; y sabréis que Yo soy el SEÑOR, cuando pusiere Mi rostro contra ellos.
(«De fuego escaparon», se refiere a la destrucción de Jerusalén, cuando multitudes
perecieron. «Y fuego los consumirá», se refiere a la cautividad, durante la cual mucho
del remanente pereció.)
8 Y haré que sea la tierra una desolación, porque ellos totalmente han transgredido,
dice el SEÑOR Dios. (La causa de su perdición es declarada en este Versículo. Ellos
profanamente cayeron en la rebelión determinada. En otras palabras, pecaron contra
la Luz. Por consiguiente, ellos no eran meramente pecadores, como las naciones que
los rodeaban; eran peores, porque eran apóstatas, transgresores y rebeldes. Ellos
pecaron contra la Luz, porque solamente a ellos les fue dada la Ley, es decir, «la
Biblia».)

16
La novia infiel del Señor
(594 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, denuncia a Jerusalén sus abominaciones («Jerusalén» es el tema,
porque ella, como la capital y donde el Templo está ubicado, responde por la
totalidad de Judá),
3 Y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios sobre Jerusalén: Tu origen y tu nacimiento es
de la tierra de Canaán; tu padre fue Amorreo, y tu madre Hitita. (La frase, «Tu origen
y tu nacimiento», se refiere a su origen, que no era celestial, sino terrenal. Eso se
dice porque el orgullo religioso había llenado tanto a Jerusalén, ella suponía ser
espiritualmente mayor que las demás ciudades y naciones, y ella no se veía por lo que
en realidad era. Con un golpe penetrante, el Espíritu Santo por medio del Profeta le
hiere en su orgullo, diciendo, «tu nacimiento es de la tierra de Canaán».)
4 En cuanto a tu nacimiento, el día que naciste no fue cortado tu ombligo, ni fuiste
lavada con aguas para purificarte ni frotada con sal, ni fuiste envuelta en pañales. (La
interpretación de esta Profecía corresponde a aquella ciudad y nación, pero en su
aplicación verdaderamente describe la condición moral de todos los hombres por el
nacimiento natural; porque estos Versículos dan un cuadro genuino de la corrupción
esencial del hombre.)
5 No hubo ojo que se compadeciese de ti, para hacerte algo de esto, teniendo de ti
misericordia; sino que fuiste echada sobre la faz del campo, con menosprecio de tu
vida, en el día que naciste. («No hubo ojo que se compadeciese de ti», se refiere a
todas las naciones de alrededor, desde ese entonces hasta ahora.)
6 Y Yo pasé junto a ti, y te vi sucia en tus sangres, y te dije: ¡Vive! Sí, te dije cuando
estabas en tus sangres: ¡Vive! (La Gracia del Redentor, amando a un ser tan
degradado, haciéndola Su Novia y dándole tan valioso ajuar, sobrepasa toda
experiencia humana.)
7 Te hice multiplicar como la hierba del campo, y te aumentaste y te hiciste grande,
y tú viniste a ser adornada grandemente; tus pechos se habían formado, tu pelo había
crecido; pero tú estabas desnuda y descubierta. (En realidad Israel nunca llegó a ser
una nación hasta el advenimiento de David como rey. Bajo Saúl, quien fue elección
del hombre [como David fue elección de Dios], Israel poco se reunía como pueblo
unificado. Solamente bajo David, del cual estos Pasajes hablan, Israel llegó a ser una
entidad cohesiva. «Y tú viniste a ser adornada grandemente», se refiere al Arca del
Pacto, y por último el Templo, donde habitaba Dios. Ninguna otra nación en el mundo
fue bendecida con ser «adornada grandemente», que también inspiró la enemistad de
las naciones. «Tus pechos se habían formado», se refiere a su madurez espiritual, en
que ella había de nutrir las naciones del mundo con el conocimiento de Dios.
¡Tristemente, en esto fracasó!)
8 Y pasé Yo otra vez junto a ti, y te miré, y he aquí que tu tiempo era tiempo de
amores; y extendí Mi manto sobre ti, y cubrí tu desnudez; y te di juramento, y entré
en pacto contigo, dijo el SEÑOR Dios, y fuiste Mía. («Y extendí Mi manto sobre ti, y
cubrí tu desnudez», es ilustrado por Rut cuando se acostó a los pies de Booz
[Rut_3:9]. El «Pacto» al cual el SEÑOR entró con Israel en realidad fue el Pacto de
Éxo_24:7-8. Todo esto se explica en detalle en Deu_28:1-68. Allí se dan los positivos
y negativos del Pacto. ¡El SEÑOR nunca quebrantó el Pacto, Israel lo hizo repetidas
veces! La fidelidad de Dios al Pacto es declarado en las palabras, «Y te di juramento,
y entré en Pacto contigo».)
9 Y te lavé con agua, y lavé tus sangres de encima de ti, y te ungí con aceite. (El
«agua» se refiere a la Palabra de Dios, y el «aceite» al Espíritu Santo, que de entre
todas las naciones sólo Israel tenía.)
10 Y te vestí de bordado, te calcé de tejón, te ceñí de lino y te cubrí de seda. (Este
Pasaje habla de lo siguiente: A. «Te vestí de bordado»: habla del «Manto de
Alabanza» [Isa_61:3]; B. «Te calcé de tejón»: tipo de la Encarnación de Cristo; C.
«Te ceñí de lino»: habla de la Justicia; D. «Te cubrí de ceda»: es prosperidad)
11 Te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus brazos, y collar a tu cuello. (Más
regalos: E. «Te atavíe con adornos»: consistió de los utensilios sagrados usados en
el Templo para el culto a Jehová; F. «Y puse brazaletes en tus brazos»: son las
Bendiciones de Dios; G. «Y collar a tu cuello»: tipifica el cordón umbilical a Cristo.)
12 Y Yo puse joyas en tu frente, y zarcillos en tus orejas, y diadema de hermosura en
tu cabeza. (Los regalos continúan: H. «Y Yo puse joyas en tu frente»: habla de la
posesión, y significa que Israel pertenecía únicamente al SEÑOR; I. «Y zarcillos en
tus orejas»: significa que ellos debían escuchar solamente Su Voz; J. «Y diadema de
hermosura en tu cabeza»: como tal, ellos significaban la cabeza de todas las
naciones.)
13 Y fuiste adornada de oro y de plata, y tu vestido era de lino, de seda y de bordado;
comiste flor de harina de trigo, miel y aceite; y fuiste hermoseada en extremo, y has
prosperado hasta reinar. (Las bendiciones continúan: K. «Y fuiste adornada de oro y
de plata»: el oro habla de la Deidad, y la plata de la Redención. Jehová era su Cabeza
y Él les había redimido; L. «Comiste flor de harina de trigo»: muestra la encamación
del Hijo intachable de Dios; M. «Y miel»: tipificaba la dulce «Palabra de Dios»
[Sal_119:103]; N. «Y aceite»: como sería obvio, tipifica el Espíritu Santo, que es la
segunda vez que Él es tipificado, que denota gran ayuda [Vs. Eze_16:9]; O. «Y fuiste
hermoseada en extremo»: ellos eran la nación de las naciones; sin embargo, toda su
bendición y hermosura vino total y únicamente del SEÑOR; P. «Y has prosperado
hasta reinar»: bajo David y Salomón ellos llegaron a ser la nación más poderosa en
el mundo.)
14 Y salió tu renombre entre las naciones a causa de tu hermosura; porque era
perfecta, a causa de Mi hermosura que Yo puse sobre ti, dice el SEÑOR Dios. (Es
maravilloso que un Príncipe poderoso haga de un infante abandonada Su Reina. Pero
lo que se agrega a la maravilla de todo esto es que el Príncipe Divino sabía de
antemano que Su Novia le abandonaría y por último Le traicionaría y Crucificaría.
Tal afecto es imposible entre los hombres, porque cuando un hombre adopta a un
niño, él tiene esperanza de una recompensa en el amor del niño; ¿pero quién
adoptaría a un niño a sabiendas de antemano que el niño odiaría y asesinaría a su
benefactor? El Amor que proveyó tal matrimonio, como descrito en los Versículos
Eze_16:10-14, es un Amor que sobrepasa el conocimiento.)
15 Pero tú pusiste confianza en tu propia belleza, y fornicaste a causa de tu renombre,
y derramaste tus fornicaciones a cuantos pasaron; suya fuiste. (Las dos características
muy horribles de las formas impuras y crueles de la idolatría a la cual Jerusalén
locamente se entregó están descritas en los Versículos Eze_16:15-34. Ellos eran
impuros; porque en su vehemente frenesí por la idolatría, especialmente adoptaron
las idolatrías de Egipto y Caldea, ambas caracterizadas por obscenidad. La crueldad
de su forma favorita de culto era quemar vivos a niños pequeños en honor del dios
ídolo, Moloc.)
16 Tomaste de tus vestidos, te hiciste diversos lugares altos, y fornicaste sobre ellos:
cosa semejante nunca había sucedido ni volverá a suceder más. (¡La fiase, «Cosa
semejante nunca había sucedido ni volverá a suceder más», se refiere al fervor
frenético del libertinaje que jamás había sido presenciado antes, al menos a este
grado, y nunca más será atestiguado!)
17 Tomaste asimismo tus hermosas alhajas de oro y de plata que Yo te había dado, e
hiciste para ti imágenes de hombres, y fornicaste con ellas («Y te hiciste imágenes de
hombres, y fornicaste con ellas», se cree que implicaba el culto falso, es decir, el
Aserá — el órgano reproductivo del hombre.).
18 Y tomaste tus vestiduras de diversos colores, y las cubriste; y Mi aceite y Mi
incienso pusiste delante de ellas. («Y Mi aceite y Mi incienso pusiste delante de ellas»,
se refiere a este ídolo obsceno posiblemente puesto aún dentro del mismo Lugar
Santísimo junto al Arca del Pacto, o al menos en el Lugar Santo junto al Altar de
Adoración. Se cree por algunos que Manasés hizo esto [2Cr_33:3-7].)
19 Mi pan también, que Yo te había dado, la flor de la harina, el aceite y la miel, con
que Yo te mantuve, pusiste delante de ellas para olor suave; y fue así, dice el SEÑOR
Dios. (La frase, «Y fue así, dice el SEÑOR Dios», significa «Lo vi; es realmente
verídico, dice Adonai-Jehová». El sentido aquí es: ¿Cómo podía ser que un objeto
tan vergonzoso de culto, hecho de madera, piedra o metal, proporcionara «descanso»
al corazón o a la consciencia?)
20 Además de esto, tomaste tus hijos y tus hijas que Me habías engendrado, y los
sacrificaste a ellas para que fuesen consumidos. ¿Es poco, esto de tus fornicaciones?
21 Y sacrificaste Mis hijos, y los diste a ellas para que los hiciesen pasar por el fuego.
(La agonía palpitante de estos Versículos la puede sentir el Lector. La indignación y
angustia Divinas combinadas con su clamor a su esposa infiel, «Tan mala fue su
conducta en abandonarme por unos viles y despreciables amantes, aun más enorme
es su culpa y crueldad en hacer morir a Mis hijos de una muerte tan horrible».)
22 Y con todas tus abominaciones y tus fornicaciones no te has acordado de los días
de tu juventud, cuando estabas desnuda y descubierta, cuando estabas envuelta en tu
sangre. (¡Israel olvidó que el SEÑOR la había levantado de la nada, y es posible aun
menos que nada!)
23 Y fue que después de toda tu maldad (¡ay, ay de ti! dijo el SEÑOR Dios [la frase,
«¡Ay, ay de ti!» se refiere al juicio venidero sobre Judá y Jerusalén por los Caldeos:
debido a «toda tu iniquidad»].)
24 Te edificaste lugares altos, y te hiciste altar en todas las plazas. (Estos «lugares
altos» o «lugar de prostitución» se refieren a estas ceremonias religiosas de la
idolatría.)
25 En toda cabeza de camino edificaste lugar alto, e hiciste abominable tu hermosura,
y te ofreciste a cuantos pasaban, y multiplicaste tus fornicaciones. («Edificaste...»,
declara la industria de Judá y Jerusalén en el aumento de su pecado.)
26 Y fornicaste con los hijos de Egipto, tus vecinos, de grandes carnes; y aumentaste
tus fornicaciones para enojarme. («Y fornicaste con los hijos de Egipto», señala las
alianzas políticas y comerciales en sí mismas como fornicaciones [Isa_23:17;
Nah_3:4]. Anótese los términos de «fornicación» y «prostituciones», que tenían que
ver en esencia con el «adulterio espiritual». El Apóstol Pablo usó prácticamente la
misma terminología respecto a los Cristianos, quienes están casados a Cristo pero
aun miran a otras cosas además de la Cruz para la victoria [Rom_7:1-4].)
27 Por tanto, he aquí que Yo extendí sobre ti Mi mano, y disminuí tu provisión
ordinaria, y te entregué a la voluntad de las hijas de los Filisteos que te aborrecen, las
cuales se avergüenzan de tu camino indecente. (¡«Las hijas de los Filisteos que te
aborrecen, las cuales se avergüenzan de tu camino indecente», es efectivamente
asombroso! Israel se había hundido aun más profundo que el pueblo pagano. Y luego
el juicio comienza, con el SEÑOR que intenta hacer volver a Israel a su lugar
apropiado.)
28 Fornicaste también con los hijos de Asiria, por ser insaciable; sí, fornicaste con
ellos; pero ni aun así te saciaste. («Fornicaste también con los hijos de Asiria», incluye
las alianzas políticas como la de Acaz con Tiglat Piléser [2Re_16:7], además de la
adopción de la idolatría. ¡La palabra «insaciable» es incapaz de estar satisfecho, en
este caso, deseaban más y más pecado!)
29 Multiplicaste asimismo tu fornicación en la tierra de Canaán y de los Caldeos: ni
tampoco con esto te has saciado. (La Tierra Santa llegó a ser «la tierra de Canaán»
en el sentido moral debido a su adopción de la religión vil y antigua de Canaán. «Ni
tampoco con esto te has saciado», otra vez refuerza la verdad que la codicia nunca
se satisface. Entre más peca alguien, más tiene que pecar.)
30 ¡Cuán débil es tu corazón!, dice el SEÑOR Dios, habiendo hecho todas estas
cosas, obras de una ramera sin vergüenza en triple grado (la frase, «Cuán débil es tu
corazón», se refiere a Israel, hablando en el sentido espiritual, que se entregó a sí
misma a cualquiera y a todos),
31 ¡Edificando tus altares en cabeza de todo camino, y haciendo tus altares en todas
las plazas! Y no fuiste semejante a una ramera, en que desdeñas la paga de prostitución
(«Y no fuiste semejante a una ramera, en que desdeñas la paga de prostitución», se
refiere a que una ramera se le pagaba por sus servicios, pero Israel estaba tan
ansioso de cometer adulterio espiritual que ella se entregó a cualquiera y a todos
simplemente cuando se lo pidieran; si no se lo pedían, se ofrecía gratuitamente),
32 Sino como mujer adúltera, que va a la cama con extraños en vez de con su marido.
(Dios consideraba Israel como Su esposa del Pacto. Ella le fue infiel a Él, en que
rindió culto y adoración a los «extraños en lugar de su marido», es decir, Jehová.)
33 A todas las rameras dan dones; mas tú diste tus dones a todos tus enamorados; y
les diste presentes, para que entrasen a ti de todas partes por tus fornicaciones. («Para
que entrasen a ti de todas partes por tus fornicaciones», señala a Judá y Jerusalén
que activamente solicitaba las alianzas con los paganos y ansiosamente deseaba
adorar sus dioses falsos.)
34 Y ha sido en ti al contrario de las mujeres en tus fornicaciones, ni nunca después
de ti será así fornicado; porque en dar tú dones, y no ser dados dones a ti, ha sido al
contrario. («Y ha sido en ti al contrario de las mujeres en tus fornicaciones», se refiere
a las otras naciones que permanecían fieles a sus dioses, y no asumían el culto a los
dioses de las otras naciones. Pero Judá abandonó el culto a Jehová, participando en
culto a los dioses foráneos. En esto, ellos eran diferentes a las demás naciones. La
frase, «Ni nunca después de ti será así fornicado», significaba que Judá, al menos
entre las naciones, estaba solo en cometer este vil pecado.)
35 Por tanto, ramera, oye palabra del SEÑOR (el Espíritu Santo por medio del
Profeta se dirige a Judá como ¡«ramera»! ¿Está el SEÑOR diciendo lo mismo en
cuanto a la Iglesia moderna? ¡Puesto que la Iglesia moderna ha dejado a Cristo, y,
de hecho, sirve a «otro Jesús», que significa que es un Jesús sin la Cruz [2Co_11:4],
luego la Iglesia moderna tiene que ser juzgada igual como Judá de antaño!):
36 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Porque tu inmundicia se ha derramado y tus partes
privadas se han expuesto por tus actos de fornicación con tus amantes; y por todos los
ídolos de tus prácticas abominables, y por la sangre de tus hijos, que tú les diste (la
palabra traducida «inmundicia» en realidad debiera haber sido traducido «bronce».
Probablemente se refería al dinero gastado por Jerusalén en el establecimiento y
mantenimiento de la idolatría. La plata figuraba como dinero limpio y hablaba de la
Redención, mientras el bronce figuraba lo inmundo. «Y por la sangre de tus hijos,
que tú les diste», se refiere a Judá acudiendo a la idolatría de tal extremo, y que
buscaba agradar a esos países extranjeros, que en realidad ella ofreció a sus propios
hijos en sacrificio a dioses paganos);
37 Por lo tanto, he aquí que Voy a reunir a todos tus enamorados con los cuales
tomaste placer, y todos los que amaste, con todos los que aborreciste; y los reuniré
contra ti alrededor, y les descubriré tu vergüenza, y verán toda tu desnudez. («Tus
enamorados», se refiere a los Asirios, Egipcios y los Caldeos. «Todos los que
aborreciste», se refiere a los Moabitas, Amonitas y los Filisteos. La frase, «Y verán
toda tu desnudez», corresponde a su derrota venidera que la expondrá a aquellos a
los cuales ella creía eran sus amigos, pero en realidad eran sus enemigos. También
se refiere a aquellos que siempre habían sido envidiosos de ella y ahora se regodean
de su derrota.)
38 Y Yo te juzgaré por las leyes de las adúlteras, y de las que derraman sangre; y te
daré en sangre de ira y de celo. (El Espíritu Santo, en este Pasaje, se refiere a
Lev_20:10 y Deu_22:22. Adjuntando el Versículo 38 con Rom_7:1-4, aprendemos
que Dios juzga como «adúltero espiritual» cualquier persona quien permite que el
objeto de su fe sea otra cosa aparte de la Cruz de Cristo.)
39 Y te entregaré en mano de ellos: y destruirán tu lugar de prostitución, y derribarán
tus altares, y te harán desnudar de tus ropas, y te llevarán las joyas de tu gloria, y te
dejarán desnuda y expuesta. (Este Versículo declara que no solamente sus lugares de
idolatría serían destruidos por los conquistadores venideros, pero la verdadera
gloria de Judá y Jerusalén también sería destruido.)
40 Y harán subir contra ti multitud de gente, y te apedrearán con piedras, y te
atravesarán con sus espadas. (La frase, «Te apedrearán con piedras», probablemente
se refiere a las grandes máquinas de guerra empleadas por los Caldeos, que tiraron
grandes piedras contra los muros de la ciudad, e incluso dentro de la ciudad.)
41 Y quemarán tus casas a fuego, y harán en ti juicios a ojos de muchas mujeres; y te
haré cesar de ser ramera, ni tampoco darás más paga a tus amantes. (Esto se refiere a
la ciudad cuando será saqueada y quemada y, por lo tanto, ya no capaz de financiar
la idolatría, ni siquiera participar en ella, excepto en sus corazones. «A ojos de
muchas mujeres», se refiere a las naciones de alrededor, que también fueron
asemejadas por el Espíritu Santo a rameras [v. Eze_16:34], que observarían con
regocijo la derrota y destrucción de Jerusalén.)
42 Y haré reposar Mi ira sobre ti, y se apartará de ti Mi celo, y descansaré de enojarme
más. (De la Palabra de Dios, aprendemos que la Ira de Dios es una realidad; el
lenguaje y la enseñanza de las Escrituras es con el propósito de hacerles ver la
severidad por la cual está caracterizada.)
43 Por cuanto no te acordaste de los días de tu juventud, y Me provocaste a ira en
todo esto, por eso, he aquí Yo también traeré tu camino sobre tu cabeza, dice Dios el
SEÑOR; pues ni aun has pensado sobre toda tu lujuria. («Por cuanto no te acordaste
de los días de tu juventud», presenta un tono más tierno que las declaraciones
anteriores, de este modo la Misericordia se mezcla con la Ira, por lo tanto perdona a
un Remanente.)
44 He aquí, todo el que usa de refranes te aplicará a ti el proverbio, diciendo: Como
la madre, tal la hija. (Porque Jerusalén adoptaba la forma asquerosa de idolatría
practicaba por los Cananeos, ella, por lo tanto, moralmente llegó a ser su hija.)
45 Hija de tu madre eres tú, que desechó a su marido y a sus hijos; y hermana de tus
hermanas eres tú, que desecharon a sus maridos y a sus hijos: vuestra madre fue Hitita,
y vuestro padre Amorreo. (Este Versículo declara que Judá estaba comportándose no
como que pertenecía al SEÑOR de la Gloria, sino más bien que pertenecía a las
naciones paganas de su alrededor, porque ella había adoptado todos sus caminos.)
46 Y tu hermana mayor es Samaria con sus hijas, la cual habita a tu mano izquierda;
y tu hermana la menor que tú es Sodoma con sus hijas, la cual habita a tu mano
derecha. (Históricamente, Sodoma, como la representación más antigua del mal,
parece haber reclamado la primacía. Sin embargo, Samaria influenciaba a Judá
mucho más en cuanto al mal, y era, por lo tanto, llamada su hermana mayor,
principalmente porque Sodoma había sido destruido aun antes de que Israel llegara
a ser una nación. Sin embargo, los imperios que influyeron sobre Judá enormemente
hacia el mal, tales como Asiria y los Caldeos, habían sido influenciados enormemente
por el mal de Sodoma, así como la totalidad del mundo de ese entonces, por lo tanto,
la frase, «Sodoma y sus hijas».)
47 Y aun no anduviste en sus caminos, ni hiciste según sus abominaciones; antes,
como si esto fuera poco y muy poco, te corrompiste más que ellas en todos tus
caminos. (La idea de este Versículo es: ¡Judá no solamente era tan mala como las
naciones paganas, sino en realidad llegó a ser aun mucho peor!)
48 Vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, Sodoma tu hermana, con sus hijas, no ha hecho
como hiciste tú y tus hijas. (¡Cuando Judá fue colocado junto a Sodoma, ella fue
hallada deficiente! Eso es inimaginable. E incluso, Cristo diría la misma cosa con
respecto a Israel de Su día [Mat_11:24].)
49 He aquí que esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia, glotonería y
abundancia de ociosidad tuvo ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y
del necesitado. (Aquí se mencionan cuatro pecados, que caracterizaban a Sodoma,
pero el «orgullo» o sea la soberbia, encabezaba la lista.)
50 Se llenaron de soberbia e hicieron abominación delante de Mí, y cuando lo vi, las
quité. (Las «abominaciones» que ellos cometieron fue la homosexualidad, es decir,
«sodomía».)
51 Sin embargo. Samaria no cometió ni la mitad de tus pecados; porque tú
multiplicaste tus abominaciones más que ellas, y has justificado a tus hermanas con
todas las abominaciones que hiciste. (La idea es: todas las naciones paganas, que
incluían a Sodoma, parecían inocentes en comparación con la culpa de Jerusalén —
no positiva, sino relativamente [2Re_21:9].)
52 Tú también, que juzgaste a tus hermañas, lleva tu vergüenza en tus pecados que
hiciste más abominables que ellas: más justas son que tú: avergüénzate pues tú
también, y lleva tu confusión, pues que has justificado a tus hermanas. (El SEÑOR
llamó a Judá «más abominable que ellas». Para hacer el caso más inexpugnable, Él
dijo: «más justas son que tú».)
53 Yo, pues, haré volver a sus cautivos, los cautivos de Sodoma y de sus hijas, y los
cautivos de Samaria y de sus hijas, y los cautivos de tus cautiverios entre ellas (la
Restauración futura de Jerusalén junto con Samaria y Sodoma es predicho en los
Versículos Eze_16:53-63. Esto acontecerá en la Edad del Reino venidero. La
naturaleza maravillosa de la Gracia que hará esta regeneración es precedida por el
argumento de los Versículos Eze_16:53-59, que parece ser que Jerusalén no tenía
más reclamo al perdón y Restauración que Sodoma y Samaria. Por lo tanto, su
recuperación como la de éstas era imposible. Sin embargo, el principio de la Gracia
ahora aparece como Pablo lo indicó en Rom_11:34. Pero una Gracia suficientemente
rica para perdonar Jerusalén tiene que ser, en su naturaleza, tan rica para perdonar
sus acompañantes menos culpables, porque no hay diferencia — todos han pecado),
54 Para que tú lleves tu confusión, y te avergüences de todo lo que has hecho,
siéndoles tú motivo de consuelo. (El hecho de perdón que fue otorgado a Jerusalén
trae «consuelo» a Samaria y Sodoma. Como dicho, ¡esto acontecerá en la Edad del
Reino venidero!)
55 Y tus hermanas. Sodoma con sus hijas y Samaria con sus hijas, volverán a su
primer estado; tú también y tus hijas volveréis a vuestro primer estado. (Es humillante
el orgullo religioso cuando es obligado a buscar Misericordia y compañía de los más
degradados y caídos, y aquellos que anteriormente fueron despreciados.)
56 Sodoma, tu hermana, no fue nombrada en tu boca en el tiempo de tus soberbias
(el nombre de Sodoma ni siquiera fue mencionado por Judá en los días de su
prosperidad. Era demasiado vil como para pronunciar excepto para ser sinónimo de
desprecio. Isaías en vano le hizo recordar que ella fue hecha como ellas [Isa_1:9-
10]. ¡Eso es la justicia propia!),
57 Antes de que tu maldad fuese expuesta en descubierto, como en el tiempo de la
vergüenza de las hijas de Siria y de todas las hijas de los Filisteos alrededor, que te
menosprecian en contorno. («Antes de que tu maldad fuese puesta en descubierto»,
se refiere a Judá cuando fue humillada como aquellos a los cuales ella había
despreciado.)
58 Tú has llevado tu lujuria y tus abominaciones, dijo el SEÑOR. (Esta Escritura
presenta la razón por la cual Judá se hundió a un grado espiritual, incluso más bajo,
que sus vecinos paganos de alrededor, es decir, «lujuria» y «abominaciones».)
El pacto eterno de Dios
59 Pero así ha dicho el SEÑOR Dios: ¿Haré Yo contigo como tú hiciste, que
menospreciaste el juramento para invalidar el Pacto? (El «Juramento» y el «Pacto»
formaban el lazo matrimonial de Sinaí, que era la Ley'. Jerusalén fue infiel a ese lazo;
pero no así su Marido Celestial, como el siguiente Versículo declarará.)
60 Antes Yo tendré memoria de Mi Pacto que concerté contigo en los días de tu
juventud, y te confirmaré un Pacto Sempiterno. (Aunque Judá no guardó el Pacto, el
SEÑOR sí lo hizo. Y como tal, Él ha hecho un lazo de matrimonio sempiterno con
ella. Esto todavía está en el futuro, cuando ella será completamente restaurada, lo
que acontecerá en la Segunda Venida, cuando Israel se arrepentirá y por fin aceptará
a Cristo como su Salvador, Mesías y SEÑOR. «Yo tendré memoria de Mi Pacto que
concerté contigo en los días de tu juventud», se refiere a las Promesas hechas a
Abraham, los Patriarcas y los Profetas. A pesar de la iniquidad de Israel, y debido a
su Arrepentimiento, cada una de estas Promesas será cumplida en su totalidad. El
«Pacto Sempiterno» se refiere al Nuevo Pacto de la Gracia ya dada, que Israel no
aceptó, pero ahora aceptará por completo [Heb_13:20].)
61 Y te acordarás de tus caminos y te avergonzarás, cuando recibirás a tus hermanas,
las mayores que tú con las menores que tú, las cuales Yo te daré por hijas, pero no por
tu pacto. (En la época en la cual este Nuevo Pacto será ratificado con Israel, y en el
acto de su aceptación de Cristo como su SEÑOR y Salvador, Él, al mismo tiempo, le
dará, como damas de honor, por así decirlo, sus hermanas, Sodoma y Samaria. Esto
acontecerá poco después de la Segunda Venida [Zac_13:1].)
62 Y confirmaré Mi Pacto contigo, y sabrás que Yo soy el SEÑOR (¡el «Pacto» del
cual el SEÑOR ahora habla no es la Ley' de Moisés, sino más bien el «Nuevo Pacto»
perfeccionado por Cristo cuando dio Su Vida en la Cruz del Calvario, y al hacerlo
para la totalidad del mundo, Israel incluido!);
63 Para que te acuerdes, y te avergüences, y nunca más abras la boca a causa de tu
vergüenza, cuando Me aplacare para contigo de todo lo que hiciste, dice el SEÑOR
Dios. («Cuando me aplacare para contigo», significa que Israel es perdonada. El
SEÑOR ha aceptado una propiciación por Israel. Esta propiciación fue consumada
en el Calvario. Les provee a los justos una base sobre la cual Dios puede encontrar
y perdonar a los pecadores más viles sin dañar la Justicia que es el establecimiento
de Su Trono. Porque si Dios perdonara los pecados injustamente, Él arruinaría Su
Trono y cesaría de ser Dios.)

17
Parábola de las dos águilas y la vid
(594 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, propón una figura, y compón una parábola a la Casa de Israel
(«Propón una figura», habla de un enigma — un dicho oculto. Además era una
parábola, esto es, la comparación de una cosa a otra).
3 Y dirás: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Una gran águila, de grandes alas y de largos
miembros, llena de plumas de diversos colores, vino al Líbano, y tomó la rama más
alta del cedro («Una gran águila, de grandes alas», habla de Nabucodonosor. «Vino
al Líbano», en realidad habla de Jerusalén; las casas dentro de ella fueron
construidas de cedro del Líbano. La frase, «Y tomó la rama más alta del cedro»,
habla de Joacim que fue llevado cautivo después de servir como rey de Judá
solamente tres meses [2Re_24:8; 2Re_24:15-16]):
4 Arrancó el principal de sus renuevos, y lo llevó a la tierra de mercaderes, y lo puso
en la ciudad de los negociantes. (Esto habla de los ciudadanos más eminentes de
Jerusalén que también fueron llevados cautivos junto con Joacim.)
5 Tomó también de la simiente de la tierra, y la puso en un campo bueno para sembrar,
la plantó junto a grandes aguas, la puso como un sauce. («Tomó también de la simiente
de la tierra», se refiere a Nabucodonosor que hizo a Sedequías rey de Judá. «Y la
puso en un campo bueno para sembrar», se refiere a la posibilidad de que el reinado
de Sedequías fue fructuoso, con la tierra de Judá disfrutando de prosperidad, eso es,
si él solamente se hubiera sometido a si mismo a Nabucodonosor, como el SEÑOR
había dirigido. Sin embargo, esto no es lo que él hizo.)
6 Y brotó, y se hizo una vid de mucha rama, baja de estatura, que sus ramas la
miraban, y sus raíces estaban debajo de ella: así que se hizo una vid, y echó
sarmientos, y echó mugrones. («Y brotó», se refiere a la prosperidad bajo Sedequías,
al menos durante un corto plazo.)
7 Había también otra gran águila, de grandes alas y espeso plumaje; y he aquí que
esta vid juntó cerca de ella sus raíces, y extendió hacia ella sus ramas, para ser regada
por ella por los surcos de su plantío. (La «otra gran águila, de grandes alas y espeso
plumaje» era Faraón-Hofra, rey de Egipto.)
8 En buen campo, junto a muchas aguas fue plantada, para que hiciese ramas y llevase
fruto, y para que fuese vid robusta. (La idea de este Versículo es que si Sedequías
hubiera obedecido al Profeta del SEÑOR, colocándose él como también Judá bajo el
dominio de Nabucodonosor, Judá hubiera disfrutado de una medida buena de
prosperidad. La vid hubiera producido fruto.)
9 Diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¿Será prosperada? ¿No arrancará sus raíces, y
destruirá su fruto, y se secará? Todas las hojas de su verdura secarán, y eso sin gran
poder ni mucha gente para arrancarla de sus raíces. (La pregunta, «Así ha dicho Dios
el SEÑOR: ¿Será prosperada?», se refiere a esta alianza entre Sedequías y el Faraón.
La respuesta es: «No». Porque Nabucodonosor, desarraigaría a Sedequías y
destruiría su reino.)
10 Y he aquí está plantada; ¿será prosperada? ¿No se secará del todo cuando el viento
solano la toque? En los surcos de su verdor se secará. (La frase, «En los surcos de su
verdor se secará», significa que esta alianza con Egipto en el acto de nacer morirá,
y enfurecerá a Nabucodonosor, con resultados espantosos.)
11 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
12 Di ahora a la casa rebelde: ¿No habéis entendido qué significan estas cosas? Diles:
He aquí que el rey de Babilonia vino a Jerusalén, y tomó a tu rey y a tus príncipes, y
los llevó consigo a Babilonia. (Esto es lo mismo que los Versículos Eze_17:3-4, que
hablan de Nabucodonosor cuando llevaba a Joacim y los príncipes a Babilonia.)
13 Tomó también de la simiente del reino, e hizo con él alianza, y le trajo a juramento;
y tomó los fuertes de la tierra (la «simiente del reino» era Sedequías, a quién él hizo
rey de Judá. «E hizo con él alianza, y le trajo a juramento», se refiere a que Sedequías
hizo esto en el Nombre de Jehová, y el SEÑOR esperaba que lo guardase),
14 Para que el reino fuese abatido y no se levantase, sino que guardase su alianza y
permaneciese en pie. («Y permaneciese en pie», se refiere al propósito amante de
Dios, que era la paz y prosperidad de Su Pueblo en sujeción a los Gentiles, al menos
durante esa época; y que ellos debieran ser testigos de Él. De este modo ellos
hubieran sido Su Pueblo reconocido y una Luz para alumbrar a los Gentiles. Pero su
rebelión perdió esta prosperidad y gloria.)
15 Se rebeló no obstante contra él enviando sus embajadores a Egipto, para que le
diese caballos y mucha gente. ¿Será prosperado, escapará el que estas cosas hizo? ¿Y
el que rompió la alianza, podrá huir? (Esto se refiere a Sedequías cuando activamente
buscaba alianza con los Egipcios, que estaba totalmente en contra de la Voluntad de
Dios, y que traería ruina a Judá.)
16 Vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, que morirá en medio de Babilonia, en el lugar del
rey que le hizo reinar, cuyo juramento menospreció, y cuya alianza hecha con él
rompió. (Sedequías fue tomado cautivo por Nabucodonosor, enceguecido, y luego
enviado a Babilonia, donde murió. Ya basta de una alianza con Egipto. Esta Profecía
probablemente fue escrita cuando las esperanzas de Sedequías y de sus consejeros
estaban en su punto más alto, cuando los Caldeos de hecho habían quitado el sitio de
Jerusalén en anticipación de la llegada del ejército Egipcio [Jer_37:5-11]. Ezequiel,
como Jeremías, esperó que el alivio fuera solamente temporáneo. ¡Y así sucedió!)
17 Y ni con gran ejército, ni con mucha compañía hará el Faraón nada por él en la
batalla, cuando se levanten vallados y se edifiquen torres para cortar muchas vidas (El
Faraón que vino en contra de Nabucodonosor probaba ser más palabrería que
cualquier otra cosa. Egipto fue rápidamente neutralizado).
18 Por cuanto menospreció el juramento y quebrantó el pacto, cuando he aquí que
había dado su mano, y ha hecho todas estas cosas, no escapará. (Como dicho, cuando
Sedequías rompió el Pacto con Nabucodonosor, fue lo mismo que romperlo con el
SEÑOR.)
19 Por tanto, así ha dicho Dios el SEÑOR: Vivo Yo, que el juramento Mío que
menospreció, y Mi pacto que ha quebrantado, lo traeré sobre su misma cabeza.
(Sedequías libremente se puso de acuerdo por el Pacto para regir a Judá bajo
Nabucodonosor. Él hizo juramento de obedecerle, pero se rebeló después de señarle
durante varios años. Él acudió a Egipto por ayuda. Por esto, Dios le maldijo.)
20 Extenderé sobre él Mi red, y será preso en Mi lazo, y lo haré venir a Babilonia, y
allí entraré en juicio con él, por su transgresión con que contra Mí se ha rebelado. (Las
palabras, «Y allí entraré en juicio con él», junto con Jer_32:5 y Jer_34:4-5, sugieren
que en su prisión Terrenal y ceguera física, la Gracia le dio a Sedequías vista interior
y libertad espiritual. En otras palabras, parece que él por fin hizo paz con Dios,
incluso después de muchos años de rebelión.)
21 Y todos sus fugitivos con todas sus tropas, caerán a espada, y los que quedan serán
esparcidos a todos los vientos; y sabréis que Yo el SEÑOR he hablado. (Este Pasaje
se refiere a la terrible matanza que se desarrolló cuando Jerusalén fue derrotada por
los Babilonios.)
22 Así ha dicho Dios el SEÑOR: Tomaré Yo del cogollo de aquel alto ramo, y lo
plantaré; del principal de sus renuevos cortaré un tallo, y lo plantaré sobre el monte
alto y sublime (el Reino predicho en los Versículos Eze_17:22-24 es el del Mesías.
Acontecerá en la Edad del Reino venidero).
23 En el monte alto de Israel lo plantaré, y alzará ramas, y dará fruto, y se hará
magnífico cedro; y habitarán debajo de él todas las aves de toda especie, a la sombra
de sus ramas habitarán. (El Reino del Mesías no tendrá fin. En esa oportunidad, todas
las naciones del mundo mirarán a Cristo para toda prosperidad. ¡Ellas no serán
desilusionadas!)
24 Y sabrán todos los árboles del campo que Yo el SEÑOR abatí el árbol sublime,
levanté el árbol bajo, hice secar el árbol verde, e hice reverdecer el árbol seco. Yo el
SEÑOR lo he dicho y lo haré. (Las frases, tanto el «árbol Sublime», como el «árbol
Verde», se refieren al dominio orgulloso del hombre, que será derribado y secado. El
«árbol Bajo» y el «árbol Seco» se refieren a Israel, que en ese entonces se le hará
prosperar, y llegará a ser la nación más poderosa en el mundo. Como dicho, esto
acontecerá en la Edad del Reino venidero.)

18
El alma que peque morirá
(594 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 ¿Qué pensáis vosotros, vosotros que usáis este refrán sobre la tierra de Israel,
diciendo: Los padres comieron las uvas agrias, y los dientes de los hijos tienen la
dentera? (Las miserias sufridas por el pueblo en Jerusalén debido a la guerra
Babilónica fueron declarados por ellos ser debido a los pecados de sus padres,
porque ellos mismos, o así lo afirmaban, eran justos. De este modo, el proverbio del
Versículo Eze_18:2, repetido en el Versículo Eze_18:19, se enfatiza en los Versículos
Eze_18:25 y Eze_18:29. Eso es, ellos culparon a Dios de injusticia, porque el hombre
siempre echa la culpa a Dios, así como hizo Adán [Gén_3:12; Éxo_20:5])
3 Vivo Yo, dice Dios el SEÑOR, que nunca más tendréis por qué usar este refrán en
Israel. (En realidad, este proverbio declaró, incluso de una manera indirecta, que
había injusticia con Dios. Ellos estaban empleando un proverbio que contenía cierta
medida de verdad y tergiversándolo para que fuera una falsedad.)
4 He aquí que todas las almas son Mías; como el alma del padre, así el alma del hijo
es Mía; el alma que pecare, esa morirá. (Prácticamente, el SEÑOR por medio del
Profeta declara que esta gente está sufriendo por sus propios pecados, no los pecados
de sus padres. «El alma que pecare, esa morirá», declara la verdad de que Dios juzga
a cada persona sobre sus propias acciones, no sobre la base de las acciones de los
demás.)
5 Y el hombre que fuere justo, y que actuara conforme al derecho y la justicia (el
principio de justicia sobre el cual Dios actúa para perdonar el pecado original y los
pecados personales es revelado en Rom_3:21-26);
6 Que no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la Casa de Israel,
ni violare la mujer de su prójimo, ni llegare a la mujer menstruosa. (La idea de esto y
los siguientes Versículos no es fomento de Salvación por obras, sino más bien que si
una persona verdaderamente se ha arrepentido y está intentando actuar conforme al
«derecho y la justicia», tal acción definitivamente se mostrará en un estilo de vida,
demostrando así Verdadero Arrepentimiento.)
7 Ni oprimiere a ninguno; sino que al deudor devuelve su prenda, no cometiere robo,
diere de su pan al hambriento, y cubriere al desnudo con vestido (la verdadera Fe,
que es en Cristo y la Cruz, siempre produce buenas obras; sin embargo, las buenas
obras nunca pueden producir la verdadera Fe),
8 Que no prestare con interés, ni recibiere aumento; de la maldad retrajere su mano,
e hiciere juicio de verdad entre hombre y su prójimo (¡características de los justos!),
9 En Mis ordenanzas caminare, y guardare Mis derechos para hacer verdad, éste es
justo: éste vivirá, dice el SEÑOR Dios. (Otra vez, declaramos: la verdadera Fe
siempre da por resaltado, de una manera u otra, verdaderas obras.)
10 Pero si él (el hombre justo) engendrare hijo ladrón, derramador de sangre, o que
haga alguna cosa de éstas (los Versículos Eze_18:10-13 muestra al hijo malvado de
un padre justo, en que la justicia del padre no expía la iniquidad del hijo),
11 Y en el camino de su padre justo no ha andado; antes comiere sobre los montes, o
violare la mujer de su prójimo (otra vez, la verdad que se expresa es que los individuos
injustos producen actos injustos),
12 Al pobre y menesteroso oprimiere, cometiere robos, no devolviere la prenda, o
alzare sus ojos a los ídolos, e hiciere abominación (como el justo siempre asciende, el
injusto siempre desciende),
13 Diere a usura, y recibiere aumento: ¿vivirá éste? No vivirá. Todas estas
abominaciones hizo; de cierto morirá; su sangre será sobre él. («De cierto morirá»,
significa que él perderá su alma, eso es, si continúa en tal estilo de vida.)
14 Pero si éste engendrare hijo, el cual viere todos los pecados que su padre hizo, y
viéndolos no hiciere según ellos (este hijo es todo lo opuesto del hijo del Versículo
Eze_18:10; él será tratado como corresponde, lo que el Espíritu Santo pone en alto
relieve),
15 No comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la Casa de Israel;
la mujer de su prójimo no violare (el Espíritu Santo no escatima esfuerzos para hacer
responsable al individuo involucrado, que significa que cada persona dará cuenta,
independientemente de la disposición de su padre, fuere justo o injusto),
16 Ni oprimiere a nadie; ni retuviere la propiedad prendada, ni cometiere robos; al
hambriento diere de su pan, y cubriere de vestido al desnudo (el Cristianismo que no
demuestra amor para su prójimo, a pesar de una profesión en voz alta, no tiene amor
para Dios) ;
17 Apartare su mano de oprimir al pobre, usura ni aumento no recibiere; hiciere según
Mis Derechos, y anduviere en Mis Ordenanzas, éste no morirá por la maldad de su
padre; de cierto vivirá. («Este no morirá por la maldad de su padre; de cierto vivirá»,
hace responsable al individuo involucrado. El padre no es responsable, hablando en
sentido espiritual, para los pecados de su hijo, como el hijo no es responsable por los
pecados del padre. Cada persona, a los Ojos de Dios, es responsable por sus propios
pecados.)
18 Su padre, por cuanto hizo agravio, despojó violentamente al hermano, e hizo en
medio de su pueblo lo que no es bueno, he aquí que él morirá por su iniquidad. (El
Espíritu Santo repetidas veces declara la verdad que el padre impío no se salva como
resultado de su hijo Piadoso, así como tampoco el hijo impío no es salvo como
resultado de un padre Piadoso.)
19 Y si dijereis: ¿Por qué el hijo no llevará por el pecado de su padre? Porque el hijo
hizo juicio y justicia, guardó todas Mis Ordenanzas, y las hizo, de cierto vivirá.
20 El alma que pecare, esa morirá: el hijo no llevará por el pecado del padre, ni el
padre llevará por el pecado del hijo: la justicia del justo será sobre él, y la impiedad
del impío será sobre él. (Esto proclama en términos inequívocos que la Salvación es
enteramente un asunto personal.)
21 Pero el impío, si se apartare de todos sus pecados que hizo, y guardare todas Mis
ordenanzas, e hiciere juicio y justicia, de cierto vivirá; no morirá. (Está tan lejos de
Dios castigar al hombre por los pecados de otros, que Él tampoco le castiga por sus
propios pecados, si se arrepiente y aprovecha de la Salvación de Dios, que es Cristo.
¡Además, esta Promesa es dada a cualquiera y a todos, sin excluir a nadie!)
22 Todas sus rebeliones que cometió, no le serán recordadas: en su justicia que hizo
vivirá. (En realidad, este Pasaje, aunque de manera encubierta, habla de la
Justificación por la Fe.)
23 ¿Quiero Yo la muerte del impío? Por supuesto que no dice el SEÑOR Dios. ¿No
quiero Yo más bien que abandone su mal camino y que viva? (La pregunta de este
Versículo es contestada en el Versículo 32. El SEÑOR no se agrada en ver a los
impíos morir. En realidad, para cada una de las personas impías que mueren sin
Dios, la terrible muerte de Cristo en el Calvario fue en vano.)
24 Pero si el justo se apartare de su justicia, y cometiere maldad, e hiciere conforme
a todas las abominaciones que el impío hizo; ¿vivirá él? Todas las justicias que hizo
no vendrán en memoria; por su rebelión con que prevaricó, y por su pecado que
cometió, por ello morirá. (Así como todos los pecados son borrados en el acto del
arrepentimiento de alguien, del mismo modo, todas las justicias son borradas si uno
cesa de tener fe en Cristo y lo que Él hizo en la Cruz. Esto, por lo tanto,
completamente refuta la doctrina que no es según las Escrituras de la Seguridad
Incondicional Eterna [Heb_6:4-6; Heb_10:26-29].)
25 Y si dijereis: No es derecho el camino del SEÑOR: oíd ahora. Casa de Israel: ¿No
es derecho Mi camino? ¿No son vuestros caminos torcidos? (Los hombres
autojustificados se oponen a la justicia de Dios, no importa cuán claramente es
manifestada, porque ellos no quieren reconocerla. Ellos quieren que Dios tolere el
pecado, o sea quieren que Él ignore eso. ¡Sin embargo, si Él permanece fiel a Su
Naturaleza, Él no puede hacer eso!)
26 Apartándose el justo de su justicia, y haciendo iniquidad, él morirá por ello: por
su iniquidad que hizo, morirá. («Apartándose el justo», en realidad significa
«cualquier hombre justo», y denota que Dios no hace acepción de personas. Todos
están bajo las mismas reglas, no importa si son injustos o justos, es para el beneficio
de todos.)
27 Asimismo y apartándose el impío de su impiedad que hizo, y haciendo juicio y
justicia, hará vivir su alma. (La palabra, «Asimismo», se refiere al Espíritu Santo que
se preocupa en repetir la misma cosa que Él dijo en el Versículo Eze_18:21. Otra vez,
la oferta se extiende para que todas las transgresiones pasadas sean borradas y una
vida nueva sea dada al individuo. ¡Es la oferta más grande para la humanidad! El
Espíritu Santo categóricamente dice, «Hará vivir su alma». La manera en que esto se
hace es que el individuo acepta a Cristo y lo que Cristo ha hecho por nosotros en la
Cruz [Jua_3:16].)
28 Porque él consideró y se apartó de todas sus transgresiones que había cometido,
de cierto vivirá, no morirá. («No morirá» se refiere a la muerte espiritual, no la
muerte física».)
29 Si aun dijere la Casa de Israel: No es recto el camino del SEÑOR: ¿No son rectos
Mis Caminos, Casa de Israel? ¿No es antes así que no son rectos vuestros caminos?
(Los Caminos del SEÑOR siempre son rectos, porque Él exige lo mismo de todos,
independientemente de su estatus, posición, sexo o la época en la cual ellos viven. Los
caminos del hombre en total no son rectos, porque los jueces injustos se pueden
comprar. Los legisladores promulgan leyes que les favorecen a unos y abusan a otros,
con parcialidad racial, religiosa y con prejuicio que juegan sus papeles insidiosos
respecto a la humanidad. ¡Para ser franco, los caminos del hombre son tan desiguales
hasta ser absurdos! ¡Y como los caminos del hombre son desiguales en extremo, así
en el otro extremo son rectos los caminos de Dios!)
30 Por tanto. Yo os juzgaré a cada uno según sus caminos, oh Casa del Israel, dice el
SEÑOR Dios. Convertíos, y volveos de todas vuestras iniquidades; y no os será la
iniquidad causa de vuestra ruina. (El Espíritu Santo por medio del Profeta ahora hace
un Llamado al Altar. Es uno de los más claros, más apasionados ruegos que se
encuentra en la totalidad de la Biblia.)
31 Echad de vosotros todas vuestras iniquidades con que habéis prevaricado, y haceos
corazón nuevo y espíritu nuevo. ¿Y por qué moriréis. Casa de Israel? (La Conversión
y la Regeneración sólo pueden efectuarse por el Espíritu Santo. Pero el pecador es
responsable de arrepentirse y buscar esta nueva naturaleza moral. Directamente él
intenta proveerse a sí mismo con esto, él descubre su impotencia. Quebrantado en
espíritu y buscando a Dios para la Salvación, el Espíritu Santo le revela a Cristo y,
de este modo, obra el poderoso milagro del Nuevo Nacimiento.)
32 Porque no tengo placer en la muerte de nadie que muera, dice el SEÑOR Dios,
convertíos pues, y viviréis. (Dos veces el Espíritu Santo recalca la verdad de que el
SEÑOR no se complace en la muerte del malvado. La repetición no es por
casualidad.)

19
Lamento por los príncipes de Israel
(594 a.C.)
1 Y TÚ levanta esta lamentación sobre los príncipes de Israel (la palabra
«lamentación» se emplea refiriéndose al lamento por la nación de Judá por las
acciones impías de dos de sus reyes, Joacaz y Joacim. El que se lamenta es Emanuel):
2 Y dirás: ¿Qué era tu madre? Una leona entre leones. Echada en medio de leoncillos,
crió a sus cachorros. (La pregunta, «¿Qué era tu madre?», se refiere a Jerusalén como
la gran leona, y en un sentido bueno [Isa_29:1]. ¡«Echada en medio de leoncillos»,
son las naciones paganas que la rodeaban, de las cuales ella supuestamente debía
conducir a Dios, pero en cambio ella misma se descarrió! Ella adoptó su crueldad y
fiereza, perdiendo así la Gloria de Dios. La frase, ella «en medio de los leoncillos,
crió a sus cachorros», trata de Joacaz y Joacim tomando sugerencias, o sea consejos,
de los «leoncillos», es decir, «los reyes de las naciones que la rodeaban», más bien
que de Dios.)
3 E hizo subir uno de sus cachorros: vino a ser leoncillo, y aprendió a prender presa,
y a devorar hombres. («Uno de sus cachorros», señala a Joacaz, quien llegó a ser
como los príncipes paganos de los países circundantes.)
4 Y las naciones oyeron de él: fue tomado con el lazo de ellas, y lo llevaron con
grillos a la tierra de Egipto. (Joacaz fue llevado prisionero por Faraón-Necao y traído
en cadenas a Egipto.)
5 Y viendo ella que había esperado mucho tiempo, y que se perdía su esperanza, tomó
otro de sus cachorros, y los puso por leoncillo. (Esto tiene que ver con Joacim, quien
reinó durante once años y fue hecho rey en lugar de su hermano, Joacaz.)
6 Y él andaba entre los leones; se hizo leoncillo, aprendió también él a arrebatar la
presa, devoró hombres. («Y él andaba entre los leones», se refiere a que él se asociaba
con las naciones paganas, exactamente como su hermano, Joacaz. Josefo, el
Historiador Judío, dice: «El era injusto e impío por naturaleza, y ni siquiera reverente
hacia Dios ni bondadoso al hombre».)
7 Y conoció sus palacios desolados, y asoló sus ciudades; y cuanto había en ella, a
causa del estruendo de sus rugidos. («Y conoció sus palacios desolados», significa
que él asoló la nación para poder pagar a Egipto y construir sus edificios costosos.
«Y cuanto había en ella, a causa del estruendo de sus rugidos», es su naturaleza
violenta al imponer su voluntad sobre Judá.)
8 Entonces se echaron sobre él las naciones de las provincias por todos lados, y
extendieron sobre él su red; fue preso en su hoyo. (En perder el tiempo con Egipto, él
enfureció a los Babilonios, y ellos «entonces echaron sobre él las naciones de las
provincias por todos lados».)
9 Y lo pusieron en cárcel con cadenas, y lo llevaron al rey de Babilonia; lo metieron
en fortalezas, para que su voz no se oyese más sobre los montes de Israel. («Y lo
llevaron al rey de Babilonia», no significa que él fue llevado a Babilonia, sino que él
fue llevado delante de Nabucodonosor. Aunque las Escrituras no nos dicen cómo
murió, se cree que él murió en camino a Babilonia, arrastrado y echado fuera y no
fue sepultado. ¡Él tenía 36 años cuando murió, sin Dios y sin lamento alguno sobre
él!)
10 Tu madre fue como una vid en tu sangre, plantada junto a las aguas, haciéndolo
fruto y echando vástagos a causa de las muchas aguas. («Tu madre fue como una vid»,
en Eze_17:6 se refiere a esto, y se refiere a Judá como una Vid. La frase, Ella estaba
haciendo «fruto y echando vástagos a causa de las muchas aguas», son las
bendiciones de Dios que le fueron dadas, que hizo que las naciones la envidiaron.)
11 Y ella tuvo varas fuertes para cetros de señores; y se levantó su estatura por encima
entre las ramas, y fue vista en su altura, y con la multitud de sus ramas. («Y ella tuvo
varas fuertes para cetros de señores», se refiere al linaje real de David, ordenado de
Dios, y de este modo bendecido, en realidad llegó a ser la más grande entre las
naciones.)
12 Pero fue arrancada con ira, derribada en tierra, y viento solano secó su fruto;
fueron quebradas y se secaron sus varas fuertes; las consumió el fuego. («Pero fue
arrancada con ira», se refiere al Juicio de Dios que le vino debido a su gran pecado.
El Juicio no fue ligero, pero vino en etapas.)
13 Y ahora está plantada en el desierto, en tierra de sequedad y de aridez. (Mientras
una vez estuvo «plantada junto a las aguas», es decir, las Bendiciones de Dios, ahora
ella está «en tierra de sequedad y de aridez», es decir, sin sustancia espiritual alguna,
debido a su rebelión contra el SEÑOR.)
14 Y ha salido fuego de la vara de sus ramas, ha consumido su fruto, y no ha quedado
en ella vara fuerte, cetro para enseñorear. Endecha es esta, y de endecha servirá. («Y
ha salido fuego de la vara de sus ramas», se refiere a la mala capacidad de sus reyes
después de Josías, y del Juicio de Dios que se aproximaba rápidamente, como tal,
toda la gloria descrita en los Versículos Eze_19:10-11 ahora desvaneció, y el pecado
«ha consumido su fruto». «Endecha es esta, y de endecha servirá», se refiere a
Sedequías, cuyo juicio estaba todavía en el futuro en el momento en que esta
Lamentación fue dada por el Espíritu al Profeta.)
20
Rebelión continua de Israel
(593 a.C.)
1 Y ACONTECIÓ en el año séptimo, en el mes quinto, a los diez días del mes, que
vinieron algunos de los ancianos de Israel a consultar al SEÑOR, y se sentaron delante
de mí. (Esta es una nueva Profecía; comienza con este Versículo y sigue a través de
la conclusión del Capítulo Eze_23:1-49. El «séptimo año» corresponde a la duración
de la cautividad del Profeta hasta este momento. Los Ancianos vinieron a Ezequiel
debido a los falsos profetas entre los Exiliados que durante esta oportunidad estaban
prediciendo una restauración rápida para Judá [Jer_28:11]. Estos Ancianos
deseaban que Ezequiel predicara el mismo mensaje suave, pero él rehusó hacerlo. Al
contrario, él expuso la idolatría profundamente arraigada en sus corazones y anunció
un aumento de la Ira de Dios sobre ellos.)
2 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
3 Hijo de hombre, habla a los ancianos de Israel, y diles: Así ha dicho el SEÑOR
Dios: ¿A consultarme venís vosotros? Vivo Yo, que Yo no os responderé, dice el
SEÑOR Dios. (¡La última frase es efectivamente una declaración asombrosa! El
SEÑOR no accederá a su pedido y tampoco escuchará sus oraciones. Estos hombres
exteriormente profesaban culto a Dios, pero interiormente amaban la idolatría.)
4 ¿Quieres tú juzgarlos? ¿Los quieres juzgar tú, hijo de hombre? Notifícales las
abominaciones de sus padres (El Espíritu Santo, por medio de «notificarles las
abominaciones de sus padres», en términos inequívocos declara la justicia de las
acciones de Dios; además, Él les mostrará su propia culpabilidad);
5 Y diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: El día que escogí a Israel, y que alcé Mi
mano por la simiente de la Casa de Jacob, y que fui conocido de ellos en la tierra de
Egipto, cuando alcé Mi mano a ellos, diciendo: Yo soy el SEÑOR vuestro Dios (la
frase, «El día que escogí a Israel», retrocede al Capítulo Eze_16:1-63, que
demostraba la verdad de que el SEÑOR no les escogió porque ellos fueran grandes
ni grandiosos, sino más bien porque Él les amaba);
6 Aquel día que les alcé Mi mano, jurando así que los sacaría de la tierra de Egipto y
los llevaría a la tierra que les había proveído, que fluye leche y miel, la cual es la más
hermosa de todas las tierras («Que fluye leche y miel», aparece primeramente en
Éxo_3:8, y llegó a ser proverbial. Este Versículo entero también es un cuadro del
gran Plan de Redención proporcionado en la Salvación de Dios. El SEÑOR no
solamente libera al pecador de la esclavitud, sino también le lleva a las Bendiciones,
todo por Cristo, y por medio de la Cruz);
7 Entonces les dije: Cada uno eche de sí todo culto de dios fabricado por su camal
parecer, y no os contaminéis con los ídolos de Egipto. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
(Este Versículo muestra el hecho de que ellos eran idólatras en Egipto, y el SEÑOR
les demandaba apartarse de tales abominaciones.)
8 Pero ellos se rebelaron contra Mí, y no quisieron obedecerme: no echó de sí cada
uno las abominaciones de sus ojos, ni dejaron los ídolos de Egipto; y dije que
derramaría Mi ira sobre ellos, para cumplir Mi enojo en ellos en medio de la tierra de
Egipto. («Para cumplir Mi enojo en ellos en medio de la tierra de Egipto», muestra
los errores de Israel, aun en medio de ser liberado. Esto no está resumido claramente
en el Libro del Éxodo, debido de que ese relato se enfoca más en su liberación que en
su obediencia; de todos modos, es un cuadro de la verdad de que Dios estaba casi tan
enfadado con los suyos así como él estaba con los Egipcios. Este Pasaje nos dice que
había poca, si alguna, diferencia entre los dos pueblos.)
9 Con todo, a causa de Mi Nombre, para que no se infamasen los ojos de las naciones
en medio de las cuales estaban, en cuyos ojos fui conocido de ellos, actué para sacarlos
de tierra de Egipto. (La frase, «A causa de Mi Nombre...actué» se refiere a que ellos
fueron perdonados no por su propia santidad, sino Su Santidad y «a causa de Su
Nombre».)
10 Los saqué pues de la tierra de Egipto, y los traje al desierto;
11 Y les di Mis Ordenanzas, y les hice conocer Mis Decretos, por los cuales el hombre
que los cumpla, vivirá en ellos. (Las «Ordenanzas» y «Decretos» aquí corresponden
a la Ley de Moisés dada a los Hijos de Israel en el Monte Sinaí. Ellos debían «vivir»
por estas Leyes.)
12 Y les di también Mis Sábados que fuesen por señal entre Mí y ellos, para que
supiesen que Yo soy el SEÑOR Quien los santifico. (Los «Sábados» eran típicos del
«reposo» que puede ser encontrado solamente en Cristo. Al Servir a Cristo hoy
constituye «guardar el Sábado»; ese día en particular ya no está vigente, porque
aquel que lo tipifica, el SEÑOR Jesucristo, ya vino. El Título Divino «Jehová-
Cadásh» [Lev_20:8] está repetido aquí en las palabras, «Yo soy el SEÑOR Quien los
santifico». Esto muestra el hecho de que Israel no pudo santificarse a sí mismo, y
tampoco ningún Creyente moderno. En la actualidad, todo Creyente es santificado, y
permanece así, simplemente por mirar constantemente a Cristo y lo que Él ha hecho
por nosotros en la Cruz. Luego el Espíritu Santo puede efectuar la Santificación
dentro de nuestras vidas, y sobre una base constante [Rom_8:1-2; Rom_8:11].)

13 Pero se rebelaron contra Mí la Casa de Israel en el desierto; no anduvieron en Mis

Ordenanzas, y desecharon Mis Decretos, los cuales el hombre que los hiciere, vivirá
en ellos; y Mis Sábados profanaron en gran manera; dije, por tanto, que había de
derramar sobre ellos Mi ira en el desierto para consumirlos. (Cuando los padres están
endurecidos en el pecado, como los Versículos Eze_20:13-17 mostrarán, la esperanza
recurre a sus hijos; ¡pero en ese entonces, como ahora, ellos poseían la misma
naturaleza corrupta de sus padres, y por consiguiente amaban los mismos pecados,
como los Versículos Eze_20:18-21 declararán!)
14 Pero obré a causa de Mi Nombre para que no se infamase a la vista de los paganos,
delante de cuyos ojos los saqué. (Esto, como el Versículo Eze_20:9, muestra la razón
por la cual Dios no destruyó a los Hijos de Israel.)
15 Y también Yo les alcé Mi mano en el desierto, que no los metería en la tierra que
les di, que fluye leche y miel, la cual es la más hermosa de todas las tierras (de este
Pasaje, aprendemos cuán absolutamente cerca estuvo Israel de ser totalmente
aniquilado en el desierto. Solamente fue la intercesión de Moisés que de cierto modo,
causó que fueran perdonados [Núm_14:11-35]);
16 Porque desecharon Mis Decretos, y no anduvieron en Mis Ordenanzas, y Mis
Sábados profanaron: porque tras sus ídolos iba su corazón. (Este Pasaje nos muestra
la verdad de las Leyes, que aunque si no se originaron con el SEÑOR, no pueden
cambiar al individuo. Solamente una obra efectuada en el «corazón» puede lograr
este cambio. Se llama el «Nuevo Nacimiento» [Jua_3:3].)
17 Con todo los perdonó Mi ojo, no matándolos, ni los consumí en el desierto. (Su
«ojo los perdonó» por amor de Su Nombre.)
18 Antes dije en el desierto a sus hijos: No andéis en las ordenanzas de vuestros
padres, ni guardéis sus leyes, ni os contaminéis en sus ídolos (la frase, «Antes dije en
el desierto a sus hijos», se refiere a la generación quienes seguían a aquellos que
mulleron en el desierto debido a su rebelión).
19 Yo soy el SEÑOR vuestro Dios; andad en Mis Ordenanzas, y guardad Mis
Decretos, y ponedlos por obra:
20 Y santificad Mis Sábados, y sean por señal entre Mí y vosotros, para que sepáis
que Yo soy el SEÑOR vuestro Dios. (Otra vez, el guardar un día en particular
llamado el «Sábado» no es impuesto sobre los Cristianos, el Sábado del Antiguo
Pacto era un día de «descanso». Tipificaba a Cristo, quien daría un descanso perfecto
a aquellos que habían de creer en Él [Mat_11:28-30]. Al servir a Cristo ahora
constituye guardar el Sábado.)
21 Y los hijos se rebelaron contra Mí: no anduvieron en Mis Ordenanzas, ni
guardaron Mis Decretos para ponerlos por obra, los cuales el hombre que los
cumpliere, vivirá en ellos; profanaron Mis Sábados. Dije entonces que derramaría Mi
ira sobre ellos, para cumplir Mi enojo en ellos en el desierto. (Como ellos lo hicieron
en Egipto, como descrito en el Versículo Eze_20:8, y como sus padres lo hicieron en
el desierto, los hijos tenían la misma naturaleza corrupta de sus padres. Por
consiguiente, ellos amaban los mismos pecados.)
22 Pero retraje Mi mano, y obré por causa de Mi Nombre para que no se infamasen
a vista de los gentiles, delante de cuyos ojos los saqué. («Por causa de Mi Nombre»
el SEÑOR permitió la segunda generación entrar en la Tierra Prometida. Él lo hizo
así para que los paganos no pudieran burlarse de Su Nombre por medio de afirmar
que Él les había sacado al desierto y no podría liberarlos.)
23 Y también les alcé Yo Mi mano en el desierto, y juré, que los esparciría entre los
gentiles, y que los aventaría por las tierras (ellos no debían creer que porque Él les
permitió entrar en la Tierra, que era una señal de Su aprobación);
24 Porque no pusieron por obra Mis Decretos, y desecharon Mis Ordenanzas, y
profanaron Mis Sábados, y tras los ídolos de sus padres se les fueron sus ojos. (¡Como
los padres habían pecado, así hicieron los hijos! ¡Como sus padres fueron juzgados,
así también ellos!)
25 Por eso Yo también les di ordenanzas no buenas, y decretos por los cuales no
viviesen (la frase, «Por eso Yo también les di», significa que Él les permitió
profanarse a sí mismos);
26 Y les contaminé en sus ofrendas cuando hacían pasar por el fuego todo
primogénito, para desolarlos y hacerles saber que Yo soy el SEÑOR. (Dios ordenó
que sus hijos se entregaran a Él y vivieran. La idolatría demandaba que los
entregaran a Moloc y murieran.)
27 Por tanto, hijo de hombre, habla a la Casa de Israel, y diles: Así ha dicho el SEÑOR
Dios: Aun en esto Me afrentaron vuestros padres cuando cometieron contra Mí
rebelión.
(En realidad dice, «Ellos transgredieron una transgresión». Eso es, eran culpables
de una transgresión suprema, es decir, asociaron ídolos con Dios.)
28 Porque Yo los metí en la tierra sobre la cual había alzado Mi mano que les había
de dar y miraron a todo collado alto y a todo árbol espeso, y allí sacrificaron sus
víctimas, y allí presentaron la irritación de sus ofrendas, allí pusieron también el olor
de su suavidad, y allí derramaron sus libaciones. (La repetición cuádruple de la
palabra «allí», que estipula los lugares de la idolatría, es empleada para hacer
énfasis en el contraste con el único lugar Divino ordenado de aceptación, es decir, el
Calvario, como prefigurado en el Monte Moría. El acceso a Dios, el perdón y la
justicia, como Abel probó, sólo puede ser disfrutado por medio de la Expiación de
Cristo; porque Él es, como Él Mismo dijo, el Único Camino a Dios [Jua_14:6].)
29 Y Yo les dije: ¿Qué es ese lugar alto adonde vosotros vais? Y fue llamado su
nombre Bama hasta el día de hoy. (La palabra «Bama» significa «lugar alto». Esta
palabra llegó a ser sinónimo con expresar el disgusto de Dios sobre tales lugares —
un memorial de la culpa del pueblo. De hecho, el mismo nombre, «lugar alto»
convenció a estos adoradores de rebelión, y no de la ignorancia [Deu_12:1-5].)
30 Di, pues, a la Casa de Israel: Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¿No os contamináis
vosotros a la manera de vuestros padres, y fornicáis tras sus abominaciones? (Este
período de la historia idólatra de Israel es el tema de los Versículos Eze_20:30-32.
Corresponde a los Exiliados. Cada evidencia señala al hecho de que ellos se
profanaron con la idolatría en pos de sus padres. Porque las palabras, «vosotros» y
«vuestros», de estos Versículos son enfáticas, y la forma interrogativa es adoptada
aquí para expresar una fuerte afirmación.)
31 Porque ofreciendo vuestras ofrendas, haciendo pasar vuestros hijos por el fuego,
os habéis contaminado con todos vuestros ídolos hasta hoy: ¿y he de responderos Yo,
Casa de Israel? Vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, que no os responderé. (Ezequiel, por
Inspiración, rehusó orar por sus visitantes. Ellos debían estar bien airados con él,
porque, en lugar de predicarles los mensajes suaves que los demás profetas
anunciaron, él expuso sus idolatrías, hipocresías y predijo su ruina eterna, como es
dicho en el Versículo Eze_20:38. La expresión, «Vivo Yo», y como se emplea por el
SEÑOR, fue para dar énfasis en la Verdad absoluta de lo que estaba siendo hablado.)
32 Y no ha de ser lo que habéis pensado. Porque vosotros decís: Seamos como los
paganos, como las familias de las naciones, sirviendo a la madera y a la piedra. (Si el
Templo era destruido, como Jeremías y Ezequiel estaban profetizando, esto
Significaría, al menos en sus mentes, que ellos ya no adorarían a Jehová, ¡y serían
libres para «ser como los paganos», para servir «a la madera y a la piedra»! En su
manera de pensar, si no era la intención de Jehová que ellos hicieran esto, luego no
habría destrucción del Templo, y no habría dispersión entre las naciones. ¡Ellos no
pudieran estar más equivocados!)
El Señor restaurará a Israel
33 Vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, que con mano fuerte, y brazo extendido, y enojo
derramado, he de reinar sobre vosotros (el SEÑOR ahora contesta los pensamientos
de sus mentes cuando les declara que ellos no podrían abrogar su posición alta; ellos
quedarían bajo la carga de sus responsabilidades):
34 Y os sacaré de entre los pueblos, y os juntaré de las tierras en que estáis esparcidos,
con mano fuerte, y brazo extendido, y enojo derramado. (Estas indagaciones sin base
por los Ancianos de Judá en exilio dieron el Espíritu Santo la oportunidad de dar
estas Profecías profundas con respecto a la Salvación futura de Israel. Esta Escritura
no será cumplida hasta la Segunda Venida y el comienzo de la Edad del Reino, que
es en el futuro.)
35 Y os traeré al desierto de los pueblos, y allí litigaré con vosotros cara a cara. (Este
Pasaje corresponde a la época cuando el Anticristo en realidad invadirá a Israel y la
derrotará, con un millón o más personas que escapan al «desierto», es decir, a
«Petra», que es la moderna Jordania. Luego Israel se dará cuenta de cuán necios
han sido en pensar que el Anticristo era el Mesías. En esa época, el SEÑOR realmente
comenzará a tratar con ellos [Isa_16:1-5; Isa_42:11-13; Ose_2:14-23; Apo_12:6;
Apo_12:13-16].)
36 Como litigué con vuestros padres en el desierto de la tierra de Egipto, así litigaré
con vosotros, dice el SEÑOR Dios. (Durante esta época de «súplicas», ellos serán
traídos «cara a cara» con sus fracasos, rebeliones e iniquidades.)
37 Y os haré pasar bajo la vara y os traeré en los vínculos del Pacto (la frase, «os
haré pasar bajo la vara»; se refiere principalmente a la vara del castigo.
Corresponde a la segunda mitad [3 años y medio] de la Gran Tribulación, cuando
Israel se aproximará a la extinción. Jesús dijo que sería el peor momento que jamás
han conocido [Mat_24:21]);
38 Y apartaré de entre vosotros a los rebeldes, y a los que se rebelaron contra Mí: de
la tierra de sus peregrinaciones los sacaré, pero a la tierra de Israel no entrarán; y
sabréis que Yo soy el SEÑOR. (La purga acontecerá durante los últimos tres años y
medio de la Gran Tribulación, y tendrá que ver con los dos tercios de quienes serán
destruidos durante esa época, y especialmente durante la Batalla de Armagedón.)
39 Y a vosotros, oh Casa de Israel, así ha dicho el SEÑOR Dios: Andad cada uno tras
sus ídolos, y servidles, si es que a Mí no Me obedecéis; pero no profanéis más Mi
Santo Nombre con vuestras ofrendas, y con vuestros ídolos. (El Espíritu Santo por
medio del Profeta ahora trae la Profecía del futuro hacia el presente. Los Ancianos
son tratados aquí. El SEÑOR les dice: «Andad cada uno tras sus ídolos, y servidles»,
pero no cometan el peor pecado con la hipocresía de un culto que no es genuino, al
mezclar el Nombre de Jehová con el ritual de Moloc. Por su doble culto a Él y a los
ídolos, ellos estaban «profanando Su Santo Nombre».)
40 Pero en Mi Santo Monte, en el alto monte de Israel, dice Dios el SEÑOR, allí Me
servirá toda la Casa de Israel, toda ella en la tierra: allí los aceptaré, y allí demandaré
vuestras ofrendas, y las primicias de vuestros dones, con todas vuestras cosas
consagradas. (Ahora el Espíritu Santo regresa a las Profecías correspondientes al
futuro. Israel redimido, en el día alegre de su gloria futura, reconocerá y confesará
que toda su felicidad es debido al apreciado Nombre de Jesús, y no de cualquier valor
moral en ella misma, porque sus «caminos» eran malos y sus «hechos» fueron
corruptos. Este Pasaje corresponde al Reino Milenario venidero, cuando Cristo
Personalmente reinará supremo en Jerusalén. En ese entonces la protesta de la tierra
terminará.)
41 Como en incienso agradable os aceptaré, cuando os haya sacado de entre los
pueblos, y os haya congregado de entre las tierras en que estáis esparcidos; y seré
santificado en vosotros a los ojos de las naciones. (La aceptación de los adoradores
es el resultado del valor de la víctima ofrecida en Sacrificio por el pecado. De este
modo, los Creyentes son aceptados por gracia en el Amado [Efe_1:6], Cristo; porque
nosotros no tenemos Gracia en nosotros mismos.)
42 Y sabréis que Yo soy el SEÑOR, cuando os hubiere metido en la tierra de Israel,
en la tierra por la cual alcé Mi mano que la daría a vuestros padres. (¡Esto se refiere
a las Profecías tremendas que parecen tan imposibles a la mente natural, y aun, que
el SEÑOR declara que Él es capaz de cumplir, y seguro Él lo hará!)
43 Y allí os acordaréis de vuestros caminos, y de todos vuestros hechos en que os
contaminasteis; y seréis confusos en vuestra misma presencia por todos vuestros
pecados que cometisteis. (Esto corresponde a la aceptación de Israel de Cristo en la
Segunda Venida, cuando ellos se darán cuenta de Quién es Él, y especialmente como
ellos le crucificaron y trajeron sobre ellos tal juicio y dolor.)
44 Y sabréis que Yo soy el SEÑOR cuando hiciere con vosotros por amor de Mi
Nombre, no según vuestros caminos malos, ni según vuestras perversas obras, oh Casa
de Israel, dice el SEÑOR Dios. (Israel sabrá en ese día que su Salvación y
Restauración no son llevadas a cabo debido a su propia santidad; de hecho, sus
caminos fueron «malos» y sus hechos fueron «perversos». Su Restauración será por
amor de Su Nombre.)
45 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (el resto de este Capítulo habla del
juicio próximo sobre Judá y Jerusalén. Como ahora es muy obvio, la rebelión contra
Dios oculta en su idolatría fue básicamente la causa):
46 Hijo de hombre, pon tu rostro hacia el sur, y derrama tu palabra al sur, y profetiza
contra el bosque del campo del sur (esta Profecía forma una introducción de los
Capítulos Eze_21:1-32; Eze_22:1-31; Eze_23:1-49; Eze_24:1-27; Eze_25:1-17;
Eze_26:1-21; Eze_27:1-36; Eze_28:1-26; Eze_29:1-21; Eze_30:1-26; Eze_31:1-18;
Eze_32:1-32. La frase, «Pon tu rostro», determina la dirección y la certidumbre del
cumplimiento. La repetición cuádruple de la palabra «sur» indicó que ciertamente
Judá es la escena del juicio que se aproximaba).
47 Y dirás al bosque del sur: Oye Palabra del SEÑOR: Así ha dicho el SEÑOR Dios:
He aquí que Yo enciendo en ti fuego, el cual consumirá en ti todo árbol verde, y todo
árbol seco: no se apagará la llama del fuego; y serán quemados en ella todos los
rostros, desde el sur hasta el norte. (El «árbol verde» simboliza los justos, mientras
que el «árbol seco» simboliza los malos. La inclusión de los justos con los malos en
los juicios nacionales y universales es uno de los principios del gobierno moral de
Dios. Es importante reconocer este principio. Él no promete la exclusión de su pueblo
del sufrimiento que justamente sigue el pecado nacional; pero Él hace una gran
distinción: que los malos perecerán bajo tal sufrimiento, mientras los justos serán
apoyados en medio de ello, y por fin, en la Resurrección, liberados de ello
[Heb_11:35].)
48 Y verá toda carne que Yo el SEÑOR lo encendí; no se apagará. (El cumplimiento
de la predicción prueba el origen Divino de la Profecía.)
49 Y dije: ¡Ay, SEÑOR Dios! Ellos dicen de mí: ¿No profiere éste parábolas? (¡La
burla de la incredulidad muchas veces es más penosa que la ira de la incredulidad!)

21
El Señor ha desenvainado su espada
(593 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo (esta es parte de la Profecía del
Capítulo anterior, que continúa sin interrupción):
2 Hijo de hombre, pon tu rostro contra Jerusalén, y derrama palabra sobre los
Santuarios, y profetiza sobre la tierra de Israel (este Versículo es muy similar al
Versículo Eze_20:46 del Capítulo anterior, con las palabras, «Jerusalén» y «Los
Santuarios», reemplazando la palabra «sur» en ese Versículo. Las palabras «Los
Santuarios», se refiere al Templo en Jerusalén);
3 Y dirás a la tierra de Israel: Así ha dicho el SEÑOR: He aquí, que Yo estoy contra
ti, y sacaré Mi espada de su vaina, y talaré de ti al justo y al impío. (Como en el
Versículo anterior, las palabras, «al justo y al impío», reemplazan «el árbol verde y
el árbol seco» del Versículo Eze_20:47 en el Capítulo anterior. ¡«Así dice el SEÑOR:
He aquí, que Yo estoy contra ti», muestra la condenación de Judá, y nada más!)
4 Y por cuanto talaré de ti al justo y al impío, por tanto. Mi espada saldrá de su vaina
contra toda carne, desde el sur hasta el norte («Contra toda carne, desde el sur hasta
el norte», se refiere a la destrucción total del país, que no deja parte sin tocar, y que
no tiene misericordia ni para los ancianos, ni para los niños):
5 Y sabrá toda carne que Yo, el SEÑOR saqué Mi espada de su vaina; no la envainaré
más. («Mi espada» declara el hecho de la acción independiente de Dios.)
6 Y tú, hijo de hombre, gime con quebrantamiento de tus lomos, y con amargura;
gime delante de los ojos de ellos. (La fiase, «Y tú, hijo de hombre, gime», se refiere a
Ezequiel que al estar tan agobiado con el portento de este desastre que se avecina
que tiene «quebrantamiento de sus lomos», es decir, quebranta su corazón.)
7 Y será, que cuando te dijeren: ¿Por qué gimes tú? Dirás: Por la noticia que viene; y
todo corazón se derretirá, y toda mano se debilitará, y se angustiará todo espíritu, y
todas las rodillas estarán débiles como el agua: he aquí que viene, y se hará, dice el
SEÑOR Dios. (Lo que Ezequiel ahora experimenta será exactamente lo que
acontecerá a la totalidad de los Exiliados unos cuatro años más tarde, cuando la
palabra fue recibida de la caída y destrucción de Jerusalén. Esta está enfatizada en
las palabras, «Por la noticia». ¡La noticia será efectivamente terrible!)
8 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (el Espíritu Santo ahora va a detallar
minuciosamente con respecto a la matanza que se aproxima, que tiene por propósito
mostrar al pueblo la severidad del juicio, y con la esperanza de provocar el
Arrepentimiento; sin embargo, ¡el Arrepentimiento nunca fue posible!):
9 Hijo de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Di: La espada, la
espada está afilada, y también bien pulida. (Este Versículo habla de la misión Divina
de la espada Caldea, es decir, el ejército Babilónico, y su éxito contra Judá y contra
Amón. Esta Profecía precedía la destrucción de Judá por unos cuatro o cinco años,
y de Amón, por diez años. La minuciosidad del detalle de estas predicciones, años
antes de que en realidad ellos quedaran en la historia, es uno de los hechos más
asombrosos de Inspiración.)
10 Para degollar a víctimas está afilada, pulida está para que relumbre. ¿Hemos de
alegramos? Cuando el cetro de Mi hijo desprecia toda vara como si fuera cualquier
palo de escoba. («Para degollar a víctimas está afilada», se refiere al SEÑOR cuando
entrega la espada afilada al asesino Caldeo para que la pudiera usar contra el
malhechor en Judá.)
11 Y la dio a pulir para tenerla a mano: la espada está afilada, y está pulida para
entregarlo en mano del matador. (El Monarca Babilónico sin duda creía que actuaba
por sí solo. Pero mucho antes de su campaña contra Judá, su victoria sobre
Sedequías, su recurso a la adivinación en la bifurcación de los altos caminos en el
norte de Israel, y su victoria sobre los Amonitas, todo fue predicho aquí.)
12 Clama y aúlla, oh hijo de hombre; porque ésta será sobre Mi pueblo, será ella
sobre todos los príncipes de Israel. Temores de espada serán a Mi pueblo: por tanto,
hiere el muslo. (En el Versículo Eze_21:10, el Espíritu Santo emplea la frase, «Mi
hijo», como Él lo emplea en este Versículo, «Mi pueblo». La Gracia y el Amor que
reconoce aquí al Judá idolátrico en esta capacidad despierta asombro y adoración
en el corazón.)
13 Porque es una prueba. ¿Y qué, si la espada desprecia aun el cetro? El no será más,
dice el SEÑOR Dios. (El significado de este Pasaje es que una prueba de fuerza entre
Nabucodonosor y Sedequías está muy pronto a comenzar; el último será derrotado,
su cetro quebrantado para siempre.)
14 Tú pues, hijo de hombre, profetiza y bate una mano con otra, y dóblese la espada
la tercera vez, la espada de muertos: ésta es espada de gran matanza que los penetrará.
(«Dóblese la espada la tercera vez», predice la tercera y final campaña contra
Jerusalén. La primera invasión aconteció 605 a.C., la segunda aconteció 597 a.C., y
la última ocurrió 586 a.C., que estaba unos cuatro o cinco años en el futuro.)
15 Para que el corazón desmaye, y los estragos se multipliquen: en todas las puertas
de ellos he puesto espanto de espada. ¡Ah! dispuesta está para que relumbre, ha sido
afilada para la matanza. (Judá tuvo muchas oportunidades para arrepentirse, pero en
cambio ellos endurecieron sus corazones. Cada vez que rehusaron la admonición de
Jeremías y Ezequiel, ellos «multiplicaban» el juicio que estaba por venir,
«multiplicando los estragos».)
16 Ponte a una parte, ponte a la diestra, o ponte a la siniestra, hacia donde tu rostro
se determinare. (La idea de este Versículo es que la espada tendrá éxito en cualquier
dirección a que se dirija. Tal es declarado por el SEÑOR.)
17 Y Yo también batiré Mi mano con Mi mano, y haré descansar Mi ira. Yo, el
SEÑOR, he hablado. («Y haré descansar Mi ira», se refiere a la verdad de que Su ira
no descansará hasta que cada una de las predicciones sea cumplida respecto a la
destrucción de Judá y Jerusalén. Para dar énfasis a la certidumbre de esta acción, el
Espíritu Santo dice, «Yo, el SEÑOR, he hablado».)
18 Y vino palabra del SEÑOR a mí, diciendo (Ezequiel ve, como en Visión, a
Nabucodonosor y su ejército en marcha)‘
19 Y tú, hijo de hombre, señálate dos caminos por donde venga la espada del rey de
Babilonia: de una misma tierra salgan ambos: y pon una señal al comienzo de cada
camino, que indique la ciudad a donde va. («Señálate dos caminos», se refiere a dos
caminos distintos. Cuando Nabucodonosor alcanzó Damasco [o alguna parte cerca],
había una bifurcación; un camino conducía a Rabá, la capital de los Amonitas
[Deu_3:11; 2Sa_11:1], y el otro camino iba a Jerusalén. Los Exiliados y el pueblo
de Judá creían que Rabá sería el destino de Nabucodonosor y, por lo tanto, Judá
sería perdonado. ¡No sería así!)
20 El camino señalarás por donde venga la espada a Rabá de los hijos de Amón, y
Judá contra Jerusalén la fuerte. (¡El resto de este Pasaje en realidad habla de la
espada llegando a ambas ciudades, pero ahora la decisión tiene que ser hecha de
cual de los dos sería la primera!)
21 Porque el rey de Babilonia se paró en una encrucijada, al principio de dos caminos,
para tomar adivinación: sacudió las saetas, consultó a sus ídolos, miró el hígado. (Dos
flechas, una marcada con «Anión» y la otra marcada con «Jerusalén», fueron
colocadas en una aljaba por Nabucodonosor. Cualquiera de las dos que el rey
escogió fue aceptado como presagio. Además, el hígado de una bestia o un ave
ofrecido en sacrificio también fue examinado; su condición sana o deteriorada era
aceptada como favorable o no favorable. Sin embargo, y desconocido a
Nabucodonosor, el SEÑOR haría la selección.)
22 La adivinación fue a su mano derecha, sobre Jerusalén, para poner capitanes, para
abrir la boca a la matanza, para levantar la voz en grito, para poner arietes contra las
puertas, para levantar terraplenes y construir torres de asedio. (Nabucodonosor metió
su mano en la aljaba para sacar una de las flechas; la miró y vio que significaba
Jerusalén. La frase, «Para poner capitanes», se refiere a las ordenes e instrucciones
que fueron dadas para sitiar a Jerusalén.)
23 Y les será como adivinación mentirosa en sus ojos, por estar juramentados con
juramento a ellos: pero él trae a la memoria la maldad, para prenderlos. («Y les será
como adivinación falsa en sus ojos», se refiere a los falsos profetas en Jerusalén,
quienes todavía continuaban predicando paz y prosperidad, causando que el rey y el
pueblo creyeran que Nabucodonosor no vendría a Jerusalén. «Por estar
juramentados cotí juramento a ellos», se refiere a Sedequías, quien había hecho
juramento a Nabucodonosor pero que había demorado con la facción Egipcia, que
conspiraba para librarse de su subyugación. De hecho, Sedequías se fue a Babilonia
en el año 593 a.C., posiblemente para disipar sospechas con respecto a su
participación en el complot [Jer_51:59].)
24 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto habéis hecho venir en memoria
vuestras maldades, manifestando vuestras traiciones, y descubriendo vuestros pecados
en todas vuestras obras; por cuanto habéis venido en memoria, seréis tomados a mano.
(Este Versículo da más énfasis en la traición de Sedequías. La iniquidad, la
transgresión y el pecado fue la rotura de este voto de alianza tomado en el Nombre
de Jehová. El plural de la majestad se emplea aquí para dar énfasis en que había
gran transgresión y gran pecado.)
25 Y tú, profano e impío príncipe de Israel, cuyo día vino en el tiempo de la
consumación de la maldad (el Espíritu Santo llama a Sedequías «profano e impío
príncipe de Israel»);
26 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Depón la tiara, quita la corona: ésta no será más así;
al bajo alzaré, y al alto abatiré. («Depón la tiara», se refiere a la Mitra del Sumo
Sacerdote, quien no tendría más un Templo ni lugar para sus servicios. «Quita la
corona», se refiere al Trono de Judá cuando fue abolido por Nabucodonosor. La
Mitra y la corona también desaparecerán — quitadas de sus indignos portadores.)
27 Yo trastornaré, trastornaré, lo trastornaré; y no será más, hasta que venga Aquel
Cuyo es el derecho, y a Él se lo daré. («Yo trastornaré, trastornaré, lo trastornaré»,
se refiere a Judá cuando es destruida como nación, y especialmente su autoridad
suprema y su Trono nunca más serán establecidos, al menos no «hasta que venga
Aquel Cuyo es el derecho». Este es precisamente el despreciado Jesús de Nazaret,
Quien regresará. A Él será dada la tiara que fue quitada, «Cuyo es el derecho a ella».
Mientras tanto, Dios trastorna todos los esfuerzos para dar la corona a otro.)
28 Y tú, hijo de hombre, profetiza, diciendo: Así ha dicho Dios el SEÑOR respecto
de los hijos de Amón, y su oprobio. Dirás pues: La espada, la espada está
desenvainada para degollar; pulida para consumir con resplandor («Así a dicho Dios
el SEÑOR sobre los hijos de Amón» se refiere a los enemigos antiguos de Israel.
Cuando Nabucodonosor escogió el camino a Jerusalén en lugar de venir por Rabá,
los amonitas pensaban que seguramente ellos habían escapado el Juicio. ¡Esta
Profecía declara todo lo opuesto! «Y su oprobio» corresponde a su regocijo por la
destrucción de Jerusalén. Sin embargo, unos cinco años después de la caída de
Jerusalén, los Caldeos invadieron a Amón; lo destruyeron tan efectivamente que cesó
de existir como nación).
29 Te profetizan vanidad, te adivinan mentira, para entregarte con los cuellos de los
malos sentenciados a muerte, cuyo día vino en tiempo de la consumación de la
maldad. (La frase, «Te profetizan vanidad», se refiere al orgullo de Amón. «Te
adivinan mentira», son los adivinos quienes adivinaron que Nabucodonosor les
atacaría como él hizo con Jerusalén, pero que ellos serían perdonados. El Espíritu
Santo llamó su adivinación «una mentira».)
30 ¿La volveré a su vaina? En el lugar donde te criaste, en la tierra donde has vivido,
te juzgaré. («En el lugar donde te criaste, en la tierra donde has vivido, te juzgaré»,
habla de Nabucodonosor cuando trae su ejército directamente dentro de la tierra, y
destruyó a Amón para que no existiera más.)
31 Y derramaré sobre ti Mi ira: el fuego de Mi enojo haré soplar sobre ti, y te
entregaré en manos de hombres brutales, altamente hábiles en la destrucción.
(Ninguna misericordia sería mostrada por los Babilonios a Amón. Fue así por su
regodeo sobre la caída de Judá y Jerusalén.)
32 Serás, oh Amón, como combustible para el fuego; tu sangre será en medio de tu
misma tierra; no habrá más memoria de ti: porque Yo el SEÑOR he hablado. («Ya no
habrá más memoria de ti», indica que toda esperanza de restauración sería borrada.
Por lo tanto, parece que Dios les juzgó más severamente aun que a Sodoma
[Eze_16:53]. La Profecía declaraba su condenación eterna. Sin embargo, su
destrucción no fue instantánea. Ellos sobrevivieron hasta incluso el Segundo Siglo
a.C., que fue cerca de 300 años después de esta Profecía. Hoy no hay más Amonitas
y nunca más habrán.)

22
Derramamiento de sangre de Israel
(593 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Y tú, hijo de hombre, ¿no juzgarás tú, no juzgarás tú a la ciudad derramadora de
sangre, y le mostrarás todas sus abominaciones? (Como la Profecía anterior trataba
con la tierra de Judá en su totalidad, esta Profecía trata con la ciudad de Jerusalén.
Con respecto a la ciudad, y junto con el repaso de la historia moral de Israel en el
Capítulo Eze_20:1-49, y con la totalidad del Libro de Jeremías, debe de haber un
interés extraordinario porque estas cosas señalan la transferencia del gobierno del
mundo de Israel a los Gentiles.)
3 Dirás, pues: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Ciudad derramadora de sangre en medio
de sí, para que venga su hora, y que hizo ídolos contra sí misma para contaminarse.
(La sangre derramada en la ciudad era de los niños sacrificados a Moloc, y del
pueblo asesinado para la ganancia [vv. Eze_22:6; Eze_22:9; Eze_22:12-13].)
4 En tu sangre que derramaste has pecado, y te has contaminado en tus ídolos que
hiciste; y has hecho acercar tus días, y has llegado a tus años: por tanto te he dado en
oprobio a los gentiles, y en escarnio a todas las tierras. («Y has hecho acercar tus
días», se refiere al juicio que se avecina.)
5 Las que están cerca, y las que están lejos de ti, se reirán de ti, amancillada de
nombre, y llena de confusión. (La frase, «Y llena de confusión», es Jerusalén en un
estado de tumulto y desorden moral como resultado de su culpa.)
6 He aquí que los príncipes de Israel, cada uno según su poder, fueron en ti para
derramar sangre. (Los reyes de Israel utilizaban su poder para la violencia, la
injusticia y asesinato, y no para protección, paz y justicia. «Cada uno según su poder,
fueron en ti para derramar sangre», es que no había restricción sobre el hacedor del
mal fuera de la limitación de su capacidad.)
7 Al padre y a la madre despreciaron en ti: al extranjero trataron con calumnia en
medio de ti: al huérfano y a la viuda despojaron en ti. («En ti», se refiere a Jerusalén,
que debió de haber provisto el liderazgo pañi la totalidad de las naciones y, de hecho,
el mundo; ¡sin embargo, hicieron todo lo opuesto!)
8 Mis cosas santas has despreciado, y has profanado Mis Sábados. (La frase, «Mis
cosas santas», se refiere a la totalidad de la Ley y de las Ordenanzas Divinas. Ellos
no solamente las abandonaron, sino que las «despreciaron», probando que el pecado
nunca es estático, sino siempre se involucra en su aumento.)
9 Hombres hay en ti que usan de calumnias a fin de derramar sangre; y en ti están los
que comen sobre los montes: execrable maldad han cometido en medio de ti.
(«Hombres hay en ti que usan de calumnias a fin de derramar sangre», corresponde
al SEÑOR que conoce y ve a través de cada complot, independientemente de cuánto
creen los hombres que sus pecados están escondidos.)
10 Han descubierto la desnudez del padre en ti; humillan la mujer en la inmundicia
de su impureza, en ti. (La frase, «Han descubierto la desnudez del padre en ti», habla
del incesto entre un hijo y su madre, que constituía lo más vil de los pecados, y tan
horrible como es, parece que era muy común. En que «humillan la mujer en la
inmundicia de su impureza», se refiere a las mujeres cuando eran forzadas a actos
sexuales incluso durante el tiempo de su periodo menstrual. Esto era prohibido por
el SEÑOR, porque el periodo menstrual de la mujer, que elimina impurezas de su
cuerpo físico, fue destinado por el SEÑOR para mostrar como tal la Caída del hombre
y la condición espiritual subsiguiente de todos los bebés nacidos a partir de ese
entonces. Como resultado de servir como símbolo, el SEÑOR prohibió las relaciones
sexuales durante este plazo en particular cada mes. Al ignorar este mandato del
SEÑOR, al menos durante ese plazo, la persona culpable estaba, en efecto, refutando
cuán perdido estaba el hombre y la necesidad de un Salvador.)
11 En tanto que uno comete abominación con la mujer de su prójimo; otro comete
algún acto lujurioso profanando a su nuera; y cada uno forzó en ti a su hermana, hija
de su padre. (Este Pasaje, además, habla del adulterio y del incesto.)
12 Precio recibieron en ti para derramar sangre; usura y logro tomaste, y a tus
prójimos defraudaste con violencia: te olvidaste de Mí, dice el SEÑOR Dios.
(Agregada a la inmoralidad sexual estaba la inmoralidad del asesinato y la
avaricia.)
13 Y he aquí, que herí Mi mano a causa de tu avaricia que cometiste, y a causa de tus
sangres que fueron en medio de ti. (El SEÑOR ya no tolerará más sus acciones, y el
gesto significa una conclusión pronta con el gran juicio próximo. La idea es: ¡el
SEÑOR detendrá el mal, y empleará cualquier medio necesario para hacerlo!)
14 ¿Estará firme tu corazón? ¿Tus manos serán fuertes en los días que obraré Yo
contra ti? Yo el SEÑOR he hablado, y lo haré. (La pregunta de este Versículo implica
una respuesta en lo negativo.)
15 Y Yo te esparciré por los paganos, y te aventaré por las tierras; y haré fenecer de
ti tu inmundicia. (Las acciones amenazadas en el Versículo Eze_22:14 están descritas
en los Versículos Eze_22:15-16. El propósito Divino era que Israel debía estar apane
de las naciones y entronado como Reina sobre las naciones de la Tierra; pero su
propia conducta fue causa que perdiera esa supremacía, y de este modo, ella se
profanó por hacerse una nación común.)
16 Y tomarás heredad en ti a los ojos de los paganos; y sabrás que Yo soy el SEÑOR.
(Su herencia fue desperdiciada por intentar a llegar a ser como los «paganos».)
17 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
18 Hijo de hombre, la Casa de Israel se Me ha tomado en escoria: todos ellos son
bronce y estaño y hierro y plomo en medio del horno; escorias de plata se tornaron.
(Este Pasaje se refiere a la mixtura profana de la idolatría con la adoración del
Verdadero Dios. La plata se emplea por el Espíritu Santo como un símbolo de
Redención y Justicia. Los metales menores eran usados como símbolos de injusticia.)
19 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto todos vosotros os habéis
tornado en escorias, por tanto, he aquí que Yo os junto en medio de Jerusalén. («Por
cuanto todos vosotros os habéis tornado en escorias», habla de los pocos justos que
quedaban en la ciudad que no fue posible perdonarla.)
20 Como quien junta plata y bronce y hierro y plomo y estaño en medio del horno,
para encender fuego en él para fundir; así os juntaré en Mi furor y en Mi ira, y os
pondré allí, y os fundiré. (El SEÑOR llama al Arrepentimiento; si tal se produce,
siempre encuentra aprobación y bendición. Si no hay arrepentimiento, el juicio es el
único otro recurso. Y siempre se hace en «Mi furor y en Mi ira».)
21 Yo os juntaré y soplaré sobre vosotros en el fuego de Mi furor, y en medio de él
seréis fundidos. (Esto se refiere a los fuelles que soplaron sobre el fuego en el crisol,
que proveía más oxígeno y, de este modo, mayor calor. El SEÑOR aquí dice que Él
servirá como estos fuelles.)
22 Como se funde la plata en medio del horno, así seréis fundidos en medio de él; y
sabréis que Yo el SEÑOR habré derramado Mi enojo sobre vosotros. (¡La frase, «Y
sabréis», declara la verdad de que aunque ellos no creyeron anteriormente, llegaría
una hora, y muy pronto, que ellos creerían, pero sería demasiado tarde!)
23 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (una tercera Profecía ahora se abre,
con el Profeta que se dirige no solamente a Jerusalén, sino a la totalidad de la tierra
de Judá):
24 Hijo de hombre, di a ella: Tú no eres tierra limpia, ni rociada con lluvia en el día
del furor. (La consciencia que no es limpiada por la Preciosa Sangre de Cristo y el
corazón no fertilizado por la lluvia del Espíritu Santo es necesariamente impura, no
importa cuán adornados puedan estar con las ceremonias religiosas de la vida
externa.)
25 Hay conjura de sus profetas en medio de ella, como león rugiente que arrebata
presa: devoraron almas, han robado riquezas y objetos de valor, aumentaron sus
viudas en medio de ella. (La frase, «Hay conjura de sus profetas en medio de ella»,
se refiere a los falsos profetas quienes conspiraron contra Jeremías y Ezequiel, pero
en particular contra Jeremías, porque él profetizaba en Jerusalén. Ellos
determinaron por la colusión llenar la tierra con sus falsas profecías y, de este modo,
contrarrestar sus verdaderas Profecías.)
26 Sus Sacerdotes violentaron Mi Ley, y profanaron Mis cosas sagradas: entre lo
santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y
de Mis Sábados escondieron sus ojos, y Yo era profanado en medio de ellos. («Sus
Sacerdotes violentaron Mi Ley», no significa que los Sacerdotes suprimían la Biblia,
de la cual eran los conservadores, sino que la violaron. Por ejemplo, ellos negaron
su Inspiración y Autoridad; profanaron sus enseñanzas, eso es, ellos rebajaron el
Libro a un nivel común de los demás libros; desecharon sus enseñanzas en cuanto a
la separación del mal; y por medio de hacer los Sábados como bajo la Ley similar a
los días de descanso de la semana, ellos degradaron su Autor a una posición en la
multitud común de los dioses, y de este modo Le profanaron.)
27 Sus príncipes en medio de ella como lobos que arrebataban presa, derramando
sangre, para destruir las almas, para obtener ganancias injustas. (El Espíritu Santo se
refirió a los líderes de Judá como «lobos que arrebataban presa».)
28 Y sus profetas revocaban con lodo suelto, profetizándoles vanidad, y
adivinándoles mentira, diciendo: Así ha dicho el SEÑOR Dios; y el SEÑOR no había
hablado. (Los príncipes y sus Predicadores populares tenían un solo objeto a la vista
—amasar riqueza por medios justos o injustos.)
29 El pueblo de la tierra usaba de opresión, y cometía robo, y al afligido y
menesteroso hacían violencia, y al extranjero oprimían sin derecho.
(No solamente eran los líderes y los profetas corruptos, sino el pueblo común de la
tierra cayó en la misma categoría; ellos tomaron su dirección de los líderes y de los
profetas.)
30 Y busqué entre ellos un varón justo que hiciese vallado y se pusiese en la brecha
delante de Mí, a favor de la tierra, para que Yo no la destruyese; y no lo hallé. (¡«Y
busqué entre ellos un varón justo», muestra a Judá y Jerusalén efectivamente en
grandes apuros! Jeremías, es verdad, estaba allí; pero él había sido quitado de entre
ellos por Dios y prohibido orar por ellos [Jer_11:14]. Entre los ciudadanos, ninguno
se encontraba capaz o dispuesto a intentar una reformación ni llamar a la nación a
la oración.)
31 En vista de todo esto derramaré sobre ellos la indignación Mía, los consumiré con
el fuego de Mi furor; y haré caer sobre su cabeza el castigo de sus malas obras, dice
el SEÑOR Dios. (Ni siquiera un reformador [«el vallado»] ni un Intercesor [«la
brecha»] fue encontrado en la ciudad culpable para salvarla de la destrucción. «En
vista de todo esto derramaré sobre ellos la indignación Mía».)
23
Ahola y Aholiba
(593 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo (este Capitulo clara y gráficamente
ilustra el pecado y la impiedad tanto del Reino del Norte como del Sur de Samaria y
de Judá):
2 Hijo de hombre, hubo dos mujeres, hijas de una madre (muestra a ambos Reinos,
Samaria y Judá. La frase, «Hijas de una madre», se refiere a Sara, quien dio a luz a
Isaac, quien prohijó Jacob, del cual salieron doce hijos que representaban las Doce
Tribus de Israel),
3 Las cuales fornicaron en Egipto; en su juventud fornicaron. Allí fueron apretados
sus pechos, y allí fueron estrujados los pechos de su virginidad. (Este Capítulo repasa
su conducta en Egipto hasta la destrucción final de su ciudad y la nación. De este
modo, bajo esta prueba larga de casi 1.100 años fue demostrada la idolatría
incurable de la naturaleza caída del hombre. La idolatría continúa hoy en la esfera
de los Creyentes que hacen algo además de la Cruz de Cristo el objeto de su fe.)
4 Y se llamaban, la mayor, Aholá, y la meñor, Aholibá; las cuales fueron Mías, y
dieron a luz hijos e hijas. Y se llamaron. Samaria, Aholá; y Jerusalén, Aholibá.
(«Aholibá» en el Hebreo significa «Ojolibá», y se refiere a Jerusalén y significa «Mi
tienda está en ella». «La mayor», se refiere a «Aholá» [Samaria], probablemente
hubiera sido mejor traducido «la más glande» porque, al menos en el comienzo, el
poder del Reino del Norte de las Diez Tribus fue mayor, porque ellos superaban en
número enormemente la populación de las Dos Tribus de Judá.)
5 Y Aholá cometió fornicación aun cuando ella pertenecía a Mí: y se prendó de sus
amantes, los Asirios sus vecinos («Y Aholá cometió fornicación», se refiere a que ella
adoptó los dioses de los «Asirios». Esto era probablemente el culto a Istar [Astoret]
como la Reina del Cielo. «Cuando ella pertenecía a Mí», se refiere a la totalidad de
Israel que pertenecía al SEÑOR por el Pacto Mosaico, que el SEÑOR había hecho
con ellos, lo cual le hizo Su esposa por la relación del Pacto [Isa_54:5]),
6 Vestidos de azul, gobernadores y magistrados, jóvenes deseables todos ellos,
caballeros que andaban a caballo. (Este Pasaje nos muestra la magnífica selección de
la Caballería Asiria — una fuerza en que Israel, a través de su historia, fue deficiente
[Jue_5:10; Zac_9:9; Isa_36:8].)
7 Y puso sus fornicaciones con ellos, con todos los más escogidos de los hijos de los
Asirios, y con todos aquellos de quienes se enamoró: se contaminó con todos los
ídolos de ellos. (Esto se refiere al Reino del Norte de Samaria que se enamoró del
poder y la pompa de los Asirios. «Se contaminó con todos los ídolos de ellos», declara
su intento de ganar las aclamaciones de «todos sus más escogidos de los hijos de los
Asirios» por aceptar sus ídolos.)
8 Y no dejó sus fornicaciones de Egipto: porque con ella se echaron en su juventud,
y ellos comprimieron los pechos de su virginidad, y derramaron sobre ella su
fornicación. (Esto nos dice que el culto de los ídolos Egipcios nunca fue
completamente expurgado de Samaria. Además, la presencia de esta iniquidad le hizo
más fácil aceptar los ídolos Asirios.)
9 Por lo cual la entregué en mano de sus amantes, en mano de los hijos de los Asirios,
de quienes se había enamorado. (Lo que los Creyentes quieren, si ellos insisten en
ello, el SEÑOR en último caso les permitirá tener, sea para su bien o para su mal.)
10 Ellos descubrieron su desnudez; tomaron sus hijos y sus hijas, y a ella mataron a
espada: y vino a ser famosa entre las mujeres, pues en ella hicieron juicios. (Ser
«desnudo» significaba ser expuesto al Juicio de Dios, que permitiría a las naciones
paganas hacerles lo que a ellos se les antojara, como con Asiria. «Y vino a ser famosa
entre las mujeres», en realidad significa que ella llegó a ser de reputación infame
entre las naciones circundantes, debido al Juicio de Dios sobre ella.)
11 Esto lo vio su hermana Aholibá, y enloqueció de lujuria más que ella; sus
fornicaciones fueron peores que las fornicaciones de su hermana. (El Juicio, que ya
había destruido Samaria cuando arrebató su gente a la cautividad, ahora una
condenación similar está pendiente sobre Jerusalén. Ella, lejos de tomar en cuenta la
advertencia de parte del destino de su hermana norteña, se sumergió más profundo
en las abominaciones de la idolatría. No había diferencia moral entre estas
hermanas. La misma conducta mostraba la misma naturaleza. El corazón hasta el
final era lo mismo que como en el principio. Las dos eran idólatras.)
12 Se enamoró de los hijos de los Asirios, sus vecinos, capitanes y príncipes, vestidos
en perfección, caballeros que andaban a caballo, todos ellos jóvenes codiciables.
(Jerusalén, como su hermana norteña, buscaba la alianza de los reyes de Asiría, como
en el caso de Acaz [2Re_16:7-10] y Tiglat Piléser. Incluso Ezequías siguió en la
misma dirección, aunque su confianza estaba en Egipto — y después se rebeló.
Manasés también pagaba tributo e hizo Jerusalén una escena de idolatría conjunta,
que incluía la de Asiria.)
13 Y vi que se había contaminado: un camino era el de ambas (esto se refiere al
camino de la desobediencia más bien que el Camino de Dios).
14 Y aumentó sus fornicaciones: pues cuando vio hombres pintados en la pared,
imágenes de Caldeos pintadas de color (esto corresponde a los cuadros de dioses, que
eran pintados en las paredes de varios edificios gubernamentales en Babilonia),
15 Ceñidos de talabartes por sus lomos, y tiaras pintadas en sus cabezas, teniendo
todos ellos parecer de capitanes, a la manera de los hombres de Babilonia, nacidos en
tierra de Caldeos (cuando Judá comenzó a perder su camino, debido a su alejamiento
más y más lejos de Jehová, ellos perdieron la Presencia de Dios, y luego el brillo de
las otras naciones llegó a ser muy seductor),
16 Se enamoró de ellos en viéndolos, y les envió mensajeros a la tierra de los Caldeos.
(Esto se refiere a Judá que activamente buscaba alianzas con los Babilonios, lo que
no era del agrado del SEÑOR. La idea es: para todas las cosas el Creyente tiene que
poner total y plena confianza y fe en el SEÑOR. Si miramos al hombre, recibimos lo
que el hombre puede proveer, que es nada. ¡Si miramos a Dios, recibimos lo que Dios
puede proveer, que es todo!)
17 Y entraron a ella los hombres de Babilonia a la cama de los amores, y la
contaminaron con su fornicación; y ella también se contaminó con ellos, y su deseo
se hastió de ellos. (Todos estos términos, tales como «fornicación», etc., correspondía
a Judá que era infiel al SEÑOR, y lo hizo por medio de la idolatría. ¡«Y su deseo se
hastió de ellos», es una declaración extraña! Significa que lo que ella pensaba que
estaba obteniendo, no lo recibió. El amor impuro normalmente termina en odio
abierto. Entonces Israel, a fin de cuentas, odiaba a los Egipcios, a los Asirios y a los
Babilonios, y ellos la odiaban a ella.)
18 Así hizo patentes sus fornicaciones, y descubrió sus vergüenzas: por lo cual Mi
alma se hastió de ella, como se había ya hastiado Mi alma de su hermana. (Debido a
su pecado, el «Alma» del SEÑOR fue hastiada de Judá. No importa si fuera Judá o
un solo Creyente, el resultado final de tal disposición de parte de Dios es
catastrófico.)
19 Aun multiplicó sus fornicaciones trayendo en memoria los días de su juventud, en
los cuales había fornicado en la tierra de Egipto. (Al llamar a la memoria con
frecuencia los pecados de antaño conduce a una reanudación de ellos.)
20 Y se enamoró de sus rufianes, cuya carne es como carne de asnos, y cuyo flujo
como flujo de caballos. («Y se enamoró de sus rufianes», se refiere a los príncipes
Egipcios, cuyos favores Judá buscaba. Ella se entregó a sí misma con desenfreno a
participar en los rituales idolátricos de Egipto con una pasión orgiástica. La última
frase se asemeja a una esposa que, en su infidelidad, no solamente comete adulterio
con un hombre, sino que tiene relaciones sexuales con un animal. Él emplea tal como
un ejemplo para mostrar que Judá cuando dejaba Su Presencia por la presencia de
la idolatría pagana hacía lo mismo.)
21 Así tornaste a la memoria la suciedad de tu juventud, cuando comprimieron tus
pechos en Egipto, los pechos de tu juventud. (La nación ramera volvió, por así
decirlo, a su primer amor y renovaba sus fornicaciones de su juventud, en realidad,
las mismas fornicaciones de las cuales ella fue liberada [2Pe_2:20-22].)
22 Por tanto, Aholibá, así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí que Yo despierto tus
amantes contra ti, de los cuales está ya harta tu alma, y los reuniré contra ti en derredor
(el Pasaje se refiere a los Babilonios y otros, que se volverán contra Judá. ¡En otras
palabras, la misma seguridad y protección que ella buscaba y pensaba que había
obtenido se convertiría ser todo lo opuesto!);
23 Los de Babilonia, todos los Caldeos, los de Pecod, Soa y Coa, todos los de Asiría
con ellos: jóvenes todos ellos de codiciar, capitanes y príncipes, nobles y principales,
que montan a caballo todos ellos. («Pecod, Soa y Coa» eran naciones orientales.
Todos ellos fueron nombrados en las inscripciones Babilónicas. «Que montan a
caballo», se refiere a algo que una vez impresionó enormemente a Judá: pero ahora
ellos cabalgan sobre ella en destrucción.)
24 Y vendrán sobre ti carros, carretas y ruedas, y multitud de pueblos. Escudos,
paveses y yelmos pondrán contra ti en derredor; y Yo daré el juicio delante de ellos,
y por sus leyes te juzgarán. (El Pasaje se refiere a que no habrá piedad alguna para
el Judá desafortunado.)
25 Y pondré Mi celo contra ti, y obrarán contigo con furor; te quitarán tu nariz y tus
orejas; y lo que te quedare caerá a espada. Ellos tomarán tus hijos y tus hijas, y tu
remanente será consumido por el fuego. (La frase, «te quitarán tu nariz y tus orejas»,
se refiere a la manera como los Babilonios mutilaban a sus prisioneros cortándoles
la nariz y orejas. Ellos asesinaron a otros, o incluso los quemaron vivos. A otros, les
quitaron su propiedad y ropa, haciéndoles esclavos.)
26 Y te desnudarán de tus vestidos, y robarán tus hermosas joyas.
27 Y haré cesar de ti tu suciedad, y tu fornicación de la tierra de Egipto: ni más
levantarás a ellos tus ojos, ni nunca más te acordarás de Egipto. (El hecho de que
Israel era idólatra en Egipto es otra vez recordado, porque ella nunca había vencido
completamente la tendencia hacia este mal.)
28 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí. Yo te entrego en mano de aquellos
que tú aborreciste, en mano de aquellos de los cuales se hastió tu deseo (se refiere al
amor anterior por Babilonia que ya se había convertido en odio. Ahora recibirán con
disgusto la hartura del cual una vez habían buscado tan ardientemente):

29 Los cuales obrarán contigo con odio, y tomarán todo lo que tú trabajaste, y te
dejarán desnuda y descubierta: y se descubrirá la torpeza de tus fornicaciones, y tu
suciedad, y tus fornicaciones. (Todo esto habla de que ellos abandonaron a Jehová y
recurrieron a los ídolos.)
30 Estas cosas se harán contigo, porque fornicaste en pos de los paganos, con los
cuales te contaminaste en sus ídolos. («Con los cuales te contaminaste en sus ídolos»,
se refiere a lo que siempre acontece al hijo de Dios respecto a involucrarse con el
mundo. Siempre trae «contaminación espiritual».)
31 En el camino de tu hermana anduviste: Yo pues pondré su copa en tu mano. (Esto
se refiere al Reino del Norte de Samaria, a su manera de referirse a la idolatría y,
sobre todo, el camino del mundo en lugar del Camino de Dios.)
32 Así ha dicho el SEÑOR Dios: De la copa de tu hermana beberás, la cual es honda
y ancha; que es de gran capacidad; de ti se mofarán las naciones, y te escarnecerán.
(«De la copa de tu hermana beberás, la cual es honda y ancha», corresponde al juicio
que será mucho más severo de lo que cualquiera pudiera haber contemplado. La
frase, «De ti se mofarán las naciones, y te escarnecerán», se refiere a ellos que se
burlan de las Profecías de Jeremías y Ezequiel, enviados por el SEÑOR. Ahora, a su
vez, las naciones circundantes harán lo mismo a Judá cuando caiga. ¡«Que es de
gran capacidad», se refiere a que ellos contestaban a los Profetas con decir que
contenía muy poco!)
33 Serás llena de embriaguez y de dolor por la copa de soledad y de desolación, por
la copa de tu hermana Samaria. (La «embriaguez» de la primera frase no se refiere al
estado de estar embriagada con bebida alcohólica, sino en cambio la embriaguez de
angustia — una angustia tan grande como para causar que los cautivos se golpeen
al pecho en desesperación.)
34 Lo beberás pues, y lo agotarás, y quebrarás sus tiestos; y tus pechos arrancarás;
porque Yo he hablado, dice el SEÑOR Dios. («Lo beberás pues, y lo agotarás», se
refiere no solamente de que la copa entera fue tomada, sino que se consumió hasta
las heces amargas del fondo. La mutilación de sus propios «pechos» se refiere a la
angustia que sería tan severa que muchos tomarían un pedazo de «tiesto» o un
fragmento de un elemento quebradizo y, cortarse con ello.)
35 Por tanto, así ha dicho Dios el SEÑOR: Por cuanto Me has olvidado, y Me has
echado tras tus espaldas, por lo mismo, carga tú también con tu execrable lascivia y
tus fornicaciones. (La primera frase corresponde a Judá abandonando la Palabra de
Dios y, así abandonaba a Dios. La última frase se refiere a la idolatría que conlleva
espíritus demoníacos.)
36 Y me dijo el SEÑOR: Hijo de hombre, ¿no juzgarás tú a Aholá, y a Aholibá, y les
denunciarás sus abominaciones (la frase, «y les denunciarás sus abominaciones»,
corresponde nombrar los pecados, lo que eran en realidad)?
37 Porque han adulterado, y hay sangre en sus manos, y han fornicado con sus ídolos;
y aun sus hijos que Me habían engendrado, hicieron pasar por el fuego, quemándolos.
(«Porque han adulterado», se refiere a la idolatría, porque el SEÑOR mira a Judá
como Su esposa y Él, su marido [Isa_54:5]. La frase, «Hicieron pasar por el fuego,
quemándolos», tenía que ver con Judá cuando ofrecía sus hijos en sacrificio humano
al dios horripilante, Moloc.)
38 Aun esto más Me hicieron: contaminaron Mi Santuario en aquel día, y profanaron
Mis Sábados. (La fiase, «Aun esto más Me hicieron», declara la verdad de que la
profundidad más honda del mal es asociar la idolatría con Dios, ¡lo que Judá hizo!)
39 Pues habiendo sacrificado sus hijos a sus ídolos, se entraban en Mi Santuario el
mismo día para contaminarlo: y he aquí, así hicieron en medio de Mi Casa. (En otras
palabras, ellos habían ofrecido a sus hijos como sacrificio por la mañana [horrible
más allá de la comprensión], y luego llevaban un cordero al Templo la misma tarde
y ofrecerlo en Sacrificio.)
40 Y cuanto más, que enviaron por hombres que vienen de lejos, a los cuales había
sido enviado mensajero: y he aquí vinieron; y por amor de ellos te lavaste, y pintaste
tus ojos, y te ataviaste con adornos. (Esto se refiere a los embajadores que habían
sido enviados de vez en cuando tanto por Samaria como por Jerusalén a Egipto,
Asiria y Babilonia, buscando alianzas. Para asegurar aquellas alianzas, ellos
adoptaron la idolatría de cada respectivo país.)
41 Y te sentaste sobre suntuoso estrado, y fue preparada mesa delante de él, y sobre
ella pusiste Mi incienso y Mi aceite. («Y te sentaste sobre suntuoso estrado», tiene
referencia al Altar o «Mesa de culto», que se asentaba delante del Velo justo frente
al Lugar Santísimo. Ahí los Sacerdotes ofrecían Incienso después de participar de la
idolatría.)
42 Y se oyó en ella voz de compañía que se solazaba con ella: y con los hombres de
la gente común había Sabeos traídos del desierto; y pusieron brazaletes en manos, y
coronas magníficas sobre sus cabezas. («Y se oyó en ella voz de compañía [tumulto]
que se solazaba con ella», se refiere a que Jerusalén se había alejado tanto de Dios
que ahora los paganos «se solazaba con ella». La razón: ¡la religión de Judá no era
diferente de las demás!)
43 Y dije respecto a la envejecida en adulterios: ¿Todavía cometerán fornicaciones
con ella, y ella con ellos? (Esto corresponde a las naciones paganas a las cuales Judá
buscaba, y ya por mucho tiempo estaban en el libertinaje — en realidad durante toda
su existencia.)
44 Porque han venido a ella como quien viene a mujer ramera: así vinieron a Aholá
y a Aholibá, mujeres depravadas. (Aquí el SEÑOR llama a Samaria y a Jerusalén,
«mujer ramera».)
45 Por tanto, hombres justos las juzgarán por la ley de las adúlteras, y por la ley de
las que derraman sangre: porque son adúlteras, y sangre hay en sus manos. (La idea
de los Versículos Eze_23:45-49 es puesto que Jerusalén es tanto asesina y adultera,
ella sufrirá el castigo de ser apedreada, que la Ley mandaba para tales [Lev_20:10;
Deu_22:22; Deu_22:24]. ¡Ello se refiere a sentencia de muerte, que los Babilonios
llevaron a cabo!)
46 Por lo que así ha dicho el SEÑOR Dios: Yo haré subir contra ellas compañías, las
entregaré a turbación y a rapiña. (La frase, «Las entregaré a turbación y a rapiña»,
se refiere al pueblo siendo quitado de la Tierra Prometida.)
47 Y la compañía de gentes las apedreará con piedras, y las acuchillará con sus
espadas: matarán a sus hijos y a sus hijas, y sus casas consumirán con fuego. (¡Como
dicho, la sentencia era la «muerte»!)
48 Así haré cesar tan execrable lujuria de la tierra, y escarmentarán todas las mujeres,
y no harán según vuestras perversidades. (La «lujuria» se refiere a la idolatría, que
hará «cesar de la tierra». ¡Y esto es exactamente por último lo que aconteció!
«Escarmentarán todas las mujeres de modo que no harán conforme a vuestra
execrable lujuria», se refiere a las naciones paganas a quienes se debía haber
enseñado acerca del SEÑOR por Judá, pero en cambio fueron enseñados de otro
modo. Por lo tanto, al menos en parte, ellos se abrogaron su misma razón de
existencia.)
49 Y recompensarán vuestra execrable lascivia sobre vosotras, y harán recaer sobre
vosotras vuestras lujurias, y llevaréis los pecados de vuestra idolatría; y sabréis que
Yo soy el SEÑOR Dios. (Jerusalén sufrió la justa condenación de una adultera; sus
muros fueron aplastados con piedras, sus casas quemadas con fuego, y sus hijos
matados con la espada. Esta condenación temible fue ocasionada por su propia
conducta; no se podía atribuir a la injusticia Divina. «Y recompensarán vuestra
execrable lascivia sobre vosotras», se refiere a que ella recibió todo lo opuesto de lo
que ella pensaba que recibiría por sus alianzas con las naciones paganas.)

24
El asedio de Jerusalén
(590 a.C.)
1 Y VINO a mí palabra del SEÑOR en el noveno año, en el mes décimo, a los diez
días del mes, diciendo («Y vino a mí palabra del SEÑOR en el noveno año, en el mes
décimo, a los diez días del mes», se refiere al mismo día en que Nabucodonosor vino
contra Jerusalén para destruirla completamente. El sitio duró casi 18 meses antes de
la caída de la ciudad):
2 Hijo de hombre, escríbete el nombre de este día: el rey de Babilonia se puso sobre
Jerusalén este mismo día. (Durante unos 38 años, Jeremías había estado profetizando
precisamente de este momento, y Ezequiel durante 4 años. Trágicamente, incluso con
Nabucodonosor a la puerta, y nadie permitido salir ni entrar en la ciudad, el pueblo
todavía no se arrepentía. Sus esperanzas estaban en que Egipto vendría a su rescate,
y no el SEÑOR. Tal muestra la disposición incurable de sus corazones malvados, en
que ellos se rebelarían contra del SEÑOR aun hasta el mismo fin.)
3 Y habla a la casa de rebelión por parábola, y diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios:
Pon una olla, ponía, y echa también en ella agua (Jerusalén era la olla, y el fuego bajo
ella representaba los Babilonios, quienes estaban sitiando la ciudad):
4 Junta sus piezas en ella; todas buenas piezas, pierna y espalda; llénala de huesos
escogidos. (Las expresiones, «todas buenas piezas» y «huesos escogidos»
representaban los nobles y ancianos del pueblo. El intento de la declaración es que
estos sufrirían el mismo destino como el pueblo común.)
5 Toma una oveja escogida; y también enciende los huesos debajo de ella; haz que
hierva bien; coced también sus huesos dentro de ella. («Haz que hierva bien», se
refiere a la agonía de ese tiempo que no sería corto, sino al cambio prolongado y
extremadamente doloroso.)
6 Pues así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Ay de la ciudad de sangres, de la olla no
espumada, y cuya espuma no salió de ella! Por sus piezas, por sus piezas sácala; no
caiga sobre ella suerte. (La frase, «Y cuya espuma no salió de ella», se refiere a la
totalidad de la olla siendo «espuma» que es como el SEÑOR caracterizaba a
Jerusalén.)
7 Porque su sangre fue en medio de ella: sobre una piedra alisada la puso; no la
derramó sobre la tierra para que fuese cubierta con polvo (esto se refiere a la Ley
como ordenado en Lev_17:13. Declaraba que la sangre debe estar escondida en la
tierra. La culpa de Jerusalén era visible y abierta, y clamaba tan alta por juicio como
la sangre expuesta sobre la cumbre de una roca. Dios, por lo tanto, trataba con ella
como una ciudad manchada de sangre).
8 Habiendo, pues, hecho subir la ira para hacer venganza. Yo pondré su sangre sobre
la dura piedra, para que no sea cubierta. («Yo pondré su sangre sobre la dura piedra,
para que no sea cubierta», en su forma más simple significa que si ellos no Le
permitían a Cristo cubrir sus pecados, sus pecados y el juicio resultante serían
manifiestos para todos.)
9 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Ay de la ciudad de sangres! Pues también
haré Yo gran hoguera. (Otra vez, y acerca de Jerusalén, tenemos las palabras que
Nahúm había empleado de Nínive debido a su crueldad terrible.)
10 Multiplicando la leña, encendiendo el fuego, para consumir la carne, y hacer la
salsa; y los huesos serán quemados. (Este Versículo expresa la severidad del juicio
que ya ha comenzado.)
11 Asentando después la olla vacía sobre sus brasas, para que se caldee, y se queme
su fondo, y se funda en ella su suciedad, y sea consumida su herrumbre. («Herrumbre»
muestra la idolatría, como el pueblo había llegado a ser como aquello al cual ellos
adoraban; ellos debían, por lo tanto, ser «consumidos».)
12 En fraude se cansó, y no salió de ella su mucha herrumbre. En fuego será su
espuma consumida. («En fraude se cansó», se refiere a todo lo que no es de la Palabra
de Dios. Jerusalén escogió creer a la mentira en lugar de creer la verdad.)
13 En tu suciedad perversa padecerás: porque te limpié, y tú no te limpiaste de tu
suciedad: nunca más te limpiarás, hasta que Yo haga reposar Mi ira sobre ti.
(«Suciedad» tiene que ser purgado por el Calvario, o por el juicio, ¡pero de todos
modos será purgado!)
14 Yo el SEÑOR he hablado; vendrá, y lo haré. No Me tomaré atrás, ni tendré
misericordia, ni Me arrepentiré: según tus caminos y tus obras te juzgarán, dice el
SEÑOR Dios. (Lo esencial de este Versículo es que Judá había progresado tanto en
el camino de la impiedad que aun el Arrepentimiento no perdonará la nación, aunque
salvaría sus almas.)
 Muere la esposa de Ezequiel
15 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
16 Hijo de hombre, he aquí que Yo te quito de golpe el deseo de tus ojos: pero no te
lamentes, ni llores, ni dejes correr tus lágrimas. (Por las palabras, «El deseo de tus
ojos», nos damos cuenta que la relación de este marido y su esposa era muy cercana.
Su amor para ella fue excedido solamente por su amor para Dios. La muerte de la
esposa del Profeta iba a ser una señal a los Exiliados.)
17 Reprime el suspirar, no harás el duelo de muertos; ata tu turbante sobre ti, y pon
tus zapatos en tus pies, y no te cubras con rebozo, ni comas pan de consuelo. (Un hijo
de Aarón, como Ezequiel era, le era permitido quitar su turbante como una señal de
dolor [Lev_10:6; Lev_13:45; Lev_21:10]. A Ezequiel le fue negado este privilegio.
¡Él no debía mostrar en lo más mínimo ninguna señal de lamento!)
18 Por la mañana le hablé al pueblo, y por la tarde murió mi esposa. A la mañana
siguiente hice lo que se me había ordenado. (Ezequiel, dándose cuenta de que su
esposa solamente tenía unas cuantas horas más para vivir, aun obedeció al SEÑOR
en la conducción del servicio «por la mañana». El Texto dice simplemente: «Y por la
tarde murió mi esposa». Cuando ella expiró, él, sin duda, estaba a su lado. Su mano
debía sostener la suya y la acarició tierna y suavemente, pero luego el «golpe»
mortífero vino, y ella ya se fue.)
19 Y me dijo el pueblo: ¿No nos enseñarás qué nos significan estas cosas que tú
haces? (No hay manera alguna que alguien pudiera conocer el dolor que llenó el
corazón de Ezequiel esa noche llena de incidentes. E incluso, su conducta extraña,
que el SEÑOR le exigía, tenía el efecto que fue destinado tener. Despertó a estos
Exiliados para preguntar.)

20 Y yo les dije: Palabra del SEÑOR vino a mí, diciendo (parece que el SEÑOR le
había dado a Ezequiel poca razón de por qué su esposa era quitada. Pero ahora, casi
de inmediato después de su muerte, la explicación será dada):
21 Di a la Casa de Israel: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo profano Mi
Santuario, la gloria de vuestra fortaleza, el deseo de vuestros ojos, y el regalo de
vuestra alma: vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis, caerán a espada. (La esposa
de Ezequiel era un símbolo del Templo, el deseo de los ojos de Israel. Como su esposa
murió, así el Templo moriría.¡Y no hay manera alguna que alguien pudiera explicar
apropiadamente lo que significa la perdida del Templo para Israel, y el caso es para
la totalidad del mundo! Este estaba en donde Dios moraba, entre el Propiciatorio y
los Querubines. Era Su edificio y, de hecho, el único edificio sobre la Tierra que había
sido diseñado y ocupado por Él, al menos en ese entonces. De ahí Él gobernaba Su
Pueblo, con Su Presencia constantemente suspendida sobre ellos.)
22 Y haréis de la manera que Yo hice: no os cubriréis con rebozo, ni comeréis pan de
hombres en luto. (Como una señal de los Exiliados desafortunados, Ezequiel no había
sido permitido por el SEÑOR lamentar ni llorar sobre su esposa fenecida. Del mismo
modo, los Exiliados no debían llorar sobre la ruina de sus seres queridos en casa.)
23 Y vuestros turbantes estarán sobre vuestras cabezas, y vuestros zapatos en vuestros
pies: no endecharéis ni lloraréis, sino que os consumiréis a causa de vuestras
maldades, y gemiréis unos con otros. (La idea, como presentado por el SEÑOR, es
que la calamidad nacional iba a ser tan severa que la angustia personal sería
absorbida por ese dolor. Además, el pueblo tenía que entender que esta calamidad
había venido sobre ellos por culpa de «vuestras maldades».)
24 Ezequiel, pues, os será por señal; según todas las cosas que él hizo, haréis: al venir
esto, entonces sabréis que Yo soy el SEÑOR Dios. («Al venir esto», se refiere a la
destrucción de Jerusalén que estaba todavía en el futuro, pero solamente dentro de
unos cuantos meses.)
25 Y tú, hijo de hombre, el día que Yo quitaré de ellos su fortaleza, el gozo de su
gloria, el deseo de sus ojos, y el cuidado de sus almas, sus hijos y sus hijas. («El día
que Yo quitaré de ellos su fortaleza», se refiere al Templo, que será destruido, y que
es su fortaleza. De hecho, ellos habían cesado de entender lo que el Templo en
realidad representaba.)
26 En aquel día vendrá a ti un escapado para traer las nuevas, para hacértelo oír con
tus oídos. (Todo lo que Jeremías y Ezequiel habían profetizado, a lo cual el pueblo
había rehusado creer, ahora ellos «lo oirán con sus oídos».)
27 En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el escapado, y hablarás, y no estarás
más mudo; y les serás por señal, y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (Después de este
mensaje, parece que el Profeta no habría de hablar más a su pueblo, sino al contrario
debe estar «mudo» hasta la llegada de unos cuantos meses más tarde de los
mensajeros que anunciarían la caída de Jerusalén y la destrucción del Templo.)

25
Profecía contra Amón
(590 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, pon tu rostro hacia los hijos de Amón, y profetiza contra ellos (el
país de Amón, con Rabá como su ciudad principal, colindaba con Israel en el lado
oriental [Jordania moderna]. El Espíritu Santo le dice a Ezequiel: «Profetiza contra
ellos»).
3 Y dirás a los hijos de Amón: Oíd palabra del SEÑOR Dios: Así ha dicho el SEÑOR
Dios: Por cuanto dijiste ¡Ea! contra Mi Santuario cuando era profanado, y contra la
Tierra de Israel que era desolada, y contra la Casa de Judá cuando iba en cautiverio
(los Amonitas se regocijaban cuando Judá y Jerusalén cayeron. Debemos aprender
de esto que no debemos regocijarnos cuando Dios castiga a los hombres culpables,
porque traerá Su Ira sobre aquellos que lo hacen. Sal_83:1-18, la Profecía de Abdías,
Sal_137:1-9, Amó_1:11, y Lam_4:1-22 se debe leer en conjunto a esta Profecía);
4 Por tanto, he aquí. Yo te entrego a los Orientales por heredad, y pondrán en ti sus
apriscos, y colocarán en ti sus tiendas: ellos comerán tus sementeras, y beberán tu
leche. («Los Orientales» se refiere a Babilonia. Cerca de cinco años después de la
destrucción de Jerusalén, los Babilonios tomaron a Amón.)
5 Y pondré a Rabá por habitación de camellos, y a los hijos de Amón por majada de
ovejas; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Como Anión había humillado a Judá, ahora
ellos serían humillados.)
6 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto tú batiste tus manos, y pateaste, y
te gozaste del alma en todo tu menosprecio sobre la tierra de Israel («Pateaste»,
significa que ellos bailaban con gozo cuando el Templo fue quemado y Jerusalén fue
destruido);
7 Por tanto, he aquí Yo extenderé Mi mano sobre ti, y te entregaré a los paganos para
ser saqueada; y Yo te cortaré de entre los pueblos, y te destruiré de entre las tierras: te
raeré; y sabrás que Yo soy el SEÑOR. (Exactamente como predicho, los Babilonios
destruyeron a Anión, y el país en realidad cesó de existir cerca de 300 años más
tarde.)
Profecía contra Moab y Seir
8 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto dijo Moab y Seír: He aquí la Casa de Judá
es como todos los paganos (el pecado de «Moab» y «Seír» fue como el de Amón en
que ellos se exaltaron en la caída de Jerusalén);
9 Por tanto, he aquí que Yo abro el lado de Moab desde las ciudades, desde sus
ciudades que están en sus fronteras, las tierras deseables de Bet Yesimot, y Baal
Megón y Quiriatayin (Moab y Seír colindaba con Israel en el lado oriental y yacía
inmediatamente al sur de Anión),
10 A los hijos del oriente contra los hijos de Amón; y la entregaré por heredad para
que no haya más memoria de los hijos de Amón entre las naciones. (Esta es la segunda
vez que el SEÑOR dice que Anión ya no existirá. No es una repetición vana, sino que
denota la certidumbre de la acción prometida.)
11 También en Moab haré juicios; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (Como Amón, el
SEÑOR dice, «Así será Moab».)
Profecía contra Edom
12 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por lo que hizo Edom tomando venganza de la Casa
de Judá, pues pecaron en extremo, y se vengaron de ellos (el juicio es pronunciado
sobre Edom del mismo modo, y por el mismo pecado de regocijarse en la caída de
Judá y Jerusalén);
13 Por tanto, así dice el SEÑOR Dios: Yo también extenderé Mi mano sobre Edom,
y talaré de ella hombres y bestias, y la asolaré: desde Temán y Dedán caerán a espada.
(El juicio sobre Edom es demandado en Gén_25:23.)
14 Y pondré Mi venganza en Edom por la mano de Mi pueblo Israel; y harán en
Edom según Mi enojo y según Mi ira: y conocerán Mi venganza, dice el SEÑOR Dios.
(Edom tomó venganza sobre Judá [v. Eze_25:12], y ahora el SEÑOR tomará
venganza sobre ellos.)
Profecía contra Filistea
15 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto los Filisteos obraron con venganza,
tomando revancha y destruyendo con malicia de corazón, destruyendo debido a su
odio antiguo. («Odio antiguo», declara el hecho de que los Filisteos e Israel habían
sido enemigos durante siglos. Es de parte de su nombre que el nombre moderno
«Palestina» es derivado. Sin embargo, los Palestinos modernos no son los
descendientes de los Filisteos, sino más bien ellos son Egipcios, Sirios, Jordanos,
etc.)
16 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR: He aquí Yo extiendo Mi mano sobre los
Filisteos, y talaré los Quereteos, y destruiré el resto que queda en la costa del mar.
(Los «Quereteos» eran probablemente los mismos «Quereteos» de antaño [2Sa_8:18;
2Sa_15:18]. Ellos también serían destruidos. Todo esto declara el dominio del
SEÑOR sobre todos los poderes Gentiles, de hecho, sobre la totalidad del mundo.)
17 Y haré en ellos venganzas grandes, y con represiones furiosas; y conocerán los
Filisteos que Yo soy el SEÑOR, cuando diere Mi venganza en ellos. (De este modo,
estas cuatro naciones [vv. Eze_25:5; Eze_25:11; Eze_25:14; Eze_25:17] sabrán,
para su propia tristeza, que el Dios de Israel existe, y que Él juzga el pecado.)

26
Profecía contra Tiro
(588 a.C.)
1 Y ACONTECIÓ en el undécimo año, en el primero del mes, que vino a mí palabra
del SEÑOR, diciendo (el Espíritu Santo dedica los Capítulos Eze_26:1-21; Eze_27:1-
36 y Eze_28:1-26 a Tiro. Encontraremos el motivo a medida que avancemos):
2 Hijo de hombre, por cuanto dijo Tiro sobre Jerusalén: Ea, bien: quebrantada es la
que era la puerta de los pueblos: a Mí se volvió: Yo seré llena; ella desierta (según
Heródoto, Tiro fue fundada en 2700 a.C.; la ciudad llegó a ser próspera y a ser el
puerto principal Filisteo que controlaba la costa Filistea. Estaba en la frontera de
Israel en el norte. «Puerta de los pueblos», se refiere a Jerusalén, declara el hecho
de la supremacía de Jerusalén. También Tiro se regocijó de su caída).
3 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo contra ti, oh Tiro, y haré subir
contra ti muchas naciones, como el mar hace subir sus ondas. («Como el mar hace
subir sus ondas», se refiere a la primera gran ola de Babilonios contra Tiro, y la
última, los Griegos; porque la Profecía de este Capítulo abarca ambas
destrucciones.)
4 Y demolerán los muros de Tiro, y derribarán sus torres: y raeré de ella su polvo, y
la dejaré como una roca desnuda. (Los «muros» se refieren a la primera destrucción
por Nabucodonosor, con la frase, «Y raeré de ella su polvo», se refiere a Alejandro
el Grande, quien construyó una carretera elevada para poder atacar al nuevo Tiro.
La historia registra que sus soldados, que para completar la carretera elevada,
recogieron el polvo del Tiro antiguo en canastas y la vaciaban en las aguas,
cumpliendo esta Profecía.)
5 Tendedero de redes será en medio del mar, porque Yo he hablado, dice el SEÑOR
Dios: y será saqueada de las naciones. (Todo esto fue cumplido en totalidad.)
6 Y sus hijas que están en el campo, serán muertas a espada; y sabrán que Yo soy el
SEÑOR. (Las «hijas» se refieren a los pueblos vecinos que eran dependientes de
Tiro.)
7 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí que del norte traigo Yo contra Tiro a
Nabucodonosor, rey de Babilonia, rey de reyes, con caballos, y carros, y caballería, y
compañías, y mucho pueblo. («He aquí que del norte traigo Yo contra Tiro...», se
refiere al señorío de Cristo como Potentado Soberano sobre todos. Se puede notar
que el título, «rey de reyes» fue dado a Nabucodonosor por el Espíritu Santo. Esto
fue así, porque muchos otros reyes se sometían a él. Sin embargo, Cristo es «El Rey
de reyes», y es el Único Quien jamás servirá en esta capacidad.)
8 Tus hijas que están en el campo matará a espada; y pondrá contra ti baluarte, y
escudo afirmará contra ti. (Este Versículo declara la naturaleza del sitio que
Nabucodonosor levantaría contra Tiro. El sitio duró trece años antes de que Tiro por
fin cayera.)
9 Y pondrá contra ti arietes, contra tus muros, y tus torres destruirá con sus hachas.
(Los «arietes» consistían de enormes catapultas diseñadas para arrojar grandes
piedras a los muros para poder hacer una brecha entre ellos.)
10 Por la multitud de sus caballos te cubrirá el polvo de ellos: con el estruendo de su
caballería y de las ruedas y de los carros, temblarán tus muros, cuando entrare por tus
puertas como por portillos de ciudad destruida. (Cuando abrieron por fin una brecha
en los muros por Nabucodonosor, la fuerza y poder de su ejército y caballería
rápidamente invadieron la ciudad.)
11 Con los cascos de sus caballos él pisoteará todas tus calles; a tu pueblo él matará
a espada, y las estatuas de tu fortaleza caerán a tierra. («Él» y «tu» de los Versículos
Eze_26:9-11 declaran que es Nabucodonosor; los «ellos» del Versículo Eze_26:12,
los soldados de Alejandro. Las dos invasiones estaban separadas entre cerca de unos
150 años.)
12 Y ellos robarán tus riquezas, y saquearán tus mercaderías: y ellos arruinarán tus
muros, y tus casas preciosas destruirán; y ellos pondrán tus piedras y tu madera y tu
polvo en medio de las aguas. (Como dicho, la última frase de este Versículo, con
respecto al «polvo en medio de las aguas» se refiere a la invasión de Alejandro.)
13 Y haré cesar el ruido de tus cantos, y no se oirá más el sonido de tus arpas. (Tiro
no fue menos eminente por su cultura como por su comercio.)
14 Y te pondré como una roca desnuda: tendedero de redes serás; ni nunca más serás
edificada: porque Yo el SEÑOR he hablado, dice el SEÑOR Dios. («Y nunca más
serás edificada», habla de esta «roca» en donde el Tiro de la antigüedad estaba
ubicada. Hoy, así como durante los siglos pasados, la vista de la ciudad antigua,
como descrito aquí, es una roca lisa sobre la cual los pescadores estiran sus redes
para secarlas. Sin embargo, un breve tiempo antes de la II Guerra Mundial, una
nueva ciudad de Tiro fue construida un tanto tierra adentro, pero extendiéndose al
mar. En la actualidad tiene una población de 10.000 — 20.000.)
15 Así ha dicho el SEÑOR Dios a Tiro: ¿No se estremecerán las islas al estruendo de
tu caída, cuando gritarán los heridos, cuando se hará la matanza en medio de ti? (Lo
que aconteció a Jerusalén por último acontecería a Tiro.)
16 Entonces todos los príncipes del mar descenderán de sus sillas, y se quitarán sus
mantos, y desnudarán sus bordadas ropas: de espanto se vestirán, se sentará sobre la
tierra, y temblarán a cada momento, y estarán sobre ti atónitos. («Los príncipes del
mar», se refiere a los príncipes mercantes quienes habían hecho de Tiro uno de los
centros más grandes de comercio en el mundo. Ahora ellos quedan asombrados frente
a la caída de Tiro, que ellos creían no podría acontecer.)
17 Y levantarán sobre ti este lamento, y te dirán: ¿Cómo pereciste tú, poblada de los
mares, ciudad que fue alabada, que era fuerte en el mar, ella y sus habitantes, y ponían
su espanto a todos sus moradores? (Debido a las riquezas y poder de Tiro, los países
circundantes no creían que ella caería, y especialmente al darse cuenta que requirió
13 años para que Nabucodonosor pudiera sujetar la ciudad.)
18 Ahora se estremecerán las islas en el día de tu caída, sí, las islas que están en el
mar se espantarán a causa de tu fin. (La preocupación de los países circundantes es
debido al comercio de Tiro, el cual había contribuido a su prosperidad, pero ahora
sería perdido.)
19 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: Yo te convertiré en ciudad desolada, como
las ciudades que no se habitan; haré subir sobre ti el abismo, y las muchas aguas te
cubrirán (la ciudad que había sido tan rica y próspera ahora será «desolada»).
20 Cuando te haré descender con los que descienden a la fosa, con el pueblo de
antaño, te haré habitar en las partes más bajas de la tierra, en las ruinas antiguas, con
los que descienden a la fosa, para que nunca más seas poblada; y Yo daré Gloria en la
Tierra de los Vivientes («Cuando te haré descender con los que descienden a la fosa»,
es en realidad un cuadro del Infierno mismo, y ella encerrada con los antediluvianos,
es decir, con el «pueblo de antaño». «Y daré Gloria en la Tierra de los Vivientes», se
refiere al Mesías cuando por último reina en Gloria en la Tierra de los Vivientes, en
Jerusalén, en medio de los hijos redimidos de Israel, que acontecerá en la Edad del
Reino venidero.).
21 Yo te convertiré en espanto, y no serás: y serás buscada, y nunca más serás hallada,
dice el SEÑOR Dios. (Este Pasaje y toda la información dada acerca de Tiro [que
representa el sistema de este mundo] muestran que este sistema por último va a
perecer, y Jesucristo reinará supremo. ¡De hecho, ese momento está más cerca ahora
que nunca!)

27
Lamento por Tiro
(588 a.C.)
1 YVINO a mí palabra del SEÑOR diciendo (la razón por la cual el espíritu Santo
da detalle respecto a Tiro es porque la ciudad es un símbolo de los esfuerzos de
Satanás para edificar un reino terrenal y, de este modo, suplir las necesidades del
hombre sin Dios. Como tal, Tiro sirve en el Antiguo Testamento como un símbolo del
sistema corrupto del mundo, así como una Babilonia reconstruida servirá en el Nuevo
Testamento. ¡Como el SEÑOR destruyó a la anterior, del mismo modo Él destruirá
la última!):
2 Y tú, hijo de hombre, entona una lamentación sobre Tiro (la «lamentación» para
Tiro es dada por el Espíritu Santo porque esta ciudad y su comercio fue ayudada
enormemente por Satanás, y fue, de este modo, empleada como una proyección
espiritual de su evangelio de engaño).
3 Y dirás a Tiro, que está asentada a las entradas del mar, mercadera de los pueblos
de muchas islas: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Tiro, tú has dicho: Yo soy de perfecta
hermosura. («Tiro, tú has dicho: Yo soy de perfecta hermosura», se refiere al orgullo
de esa ciudad, que el Capítulo Eze_28:1-26 tratará más a fondo. De hecho, la misma
frase es empleada por Satanás [Eze_28:12].)
4 En el corazón de los mares están tus términos: los que te edificaron completaron tu
belleza. (La frase, «Los que te edificaron completaron tu belleza», se refiere a los
mercantes de esa ciudad de esa gran actividad comercial, en efecto, adiestrados por
Satanás con respecto a la prosperidad de la ciudad.)
5 De los cipreses de Senir te han hecho todas tus tablas: tomaron cedros del Líbano
para hacerte el mástil. (Hacía mucho antes, estos «cipreses» habían sido usados para
construir el Templo, la morada de Jehová bajo el antiguo sistema de Dios.)
6 De las encinas de Basán hicieron tus remos: fabricaron tus bancos de marfil
embutido en madera de boj, traída de las Islas de Chipre. (El uso del marfil en la
construcción de naves o cosas parece ser uno de los artes por el cual Tiro era
famoso.)
7 De lino fino recamado traído de Egipto eran tus velas, para que te sirviese de
bandera; azul y púrpura de las Islas de Elisa formaban tu toldo. (Esto se refiere a
algunas de las velas finas bordadas que adornaron algunas de las naves de Tiro, en
comparación con algunas velas comunes de la mayoría de los barcos.)
8 Los moradores de Sidón y de Arvad fueron tus remeros: tus sabios, oh Tiro, estaban
en ti; ellos fueron tus pilotos. (El propósito de este Versículo es declarar el hecho de
que los marineros comunes eran oriundos de Sidón y Arvad, mientras Tiro
proporcionaba los oficiales. ¡Por lo tanto, tenía un rango mayor a los demás, así
como Satanás quería! [Sidón, a veces deletreado «Zidón», estaba cerca de 48
kilómetros (30 millas) al norte de Tiro].)
9 Los ancianos de Guebal y sus más hábiles obreros calafateaban tus junturas: todas
las naves del mar y los remeros de ellas fueron en ti para negociar, para participar de
tus negocios. (Esto se refiere a la actividad constante de negocios de los barcos
mercantes cuando continuaban, y sin faltar, de aumentar las riquezas de Tiro.)
10 Persas y los de Lud y Fut fueron en tu ejército tus hombres de guerra: escudos y
yelmos colgaron en ti; ellos te dieron tu esplendor. (La frase, «Ellos te dieron tu
esplendor», significa que ellos guardaban las riquezas.)
11 Y los hijos de Arvad con tu ejército estuvieron sobre tus muros alrededor, y los
Gamadeos en tus torres: sus escudos colgaron sobre tus muros alrededor; ellos
completaron tu hermosura. (Estas Escrituras declaran el poder militar de Tiro; por
consiguiente, ella era tan fuerte que si el SEÑOR no le hubiera ayudado a
Nabucodonosor, él no hubiera podido conquistar la ciudad.)
12 Tarsis era tu mercadera a causa de la multitud de todas tus riquezas en plata, hierro,
estaño, y plomo, comerciaban en tus ferias. (La frase, «Tarsis era tu mercadera», se
refiere a España, adonde Jonás intentó huir [Jon_1:3].)
13 Grecia, Tubal, y Mésec, adquirían tus mercaderes a cambio de hombres y con
vasos de bronce, dieron en tus ferias. («Adquirían tus mercaderes a cambio de
hombres y con vasos de bronce», habla de la compra y venta de esclavos, así como
mercadería.)
14 Los de la casa de Bet Togarma, con caballos y corceles y mulos, negociaban en
tus mercados. («Bet Togarma» estaba en Armenia. Esa región era notoria por sus
«caballos, corceles y mulos».)
15 Los hijos de Dedán eran tus negociantes: muchas islas tomaban mercadería en tu
mano; cuernos de marfil y ébano por pago. («Ébano» es una madera dura como
piedra, que se producía por unos viejos árboles dicotiledóneos tropicales. Era muy
costoso y usado para fabricar muebles finos, etc.)
16 Siria fue tu mercadera por la multitud de tus productos: con perlas, y púrpura, y
vestidos bordados, y linos finos, y corales, y rubíes, dio en tus ferias. (Como es obvio
en estos Pasajes, Tiro era el centro de comercio del mundo. ¡Por lo tanto, su riqueza
debía de haber sido muy extensa, por decir lo menos!)
17 Judá y la tierra de Israel comerciaban contigo con trigos de Minit y Panag, miel,
aceite y resina, a cambio de tus mercancías. (Cuando se menciona «Judá» y la «Tierra
de Israel», aunque el Espíritu Santo no las pone en relieve, todavía, les da cierto
reconocimiento.)
18 Damasco, tu mercadera por la multitud de tus labores, por la abundancia de todas
riquezas, con vino de Jelbón, y lana blanca.
19 Asimismo Dan y el errante Javán dieron en tus ferias, para negociar en tu mercado
de hierro labrado, mirra destilada, y caña aromática. (El «Dan» que se refiere aquí no
es la Tribu de Dan, sino más bien un lugar en Arabia conocido por su hierro usado
en las filas de espadas, de lo cual Yemen era notorio, por ende, «hierro labrado».)
20 Dedán fue tu mercadera con paños preciosos para carros. (Probablemente esto se
refiere a un tipo de alfombra colorida usada como almohadillas de albarda. Además,
el material fue usado para adornar en el sentido ritual las carrozas costosas.)
21 Arabia y todos los príncipes de Cedar, mercaderes de tu mano en corderos, y
carneros, y machos cabríos: en estas cosas fueron tus mercaderes. (Tanto «Dedan»
como «Cedar» estaban en Arabia.)
22 Los mercaderes de Sabá y de Raama fueron también tus mercaderes: con lo
principal de toda especiería, y toda piedra preciosa, y oro, dieron en tus ferias. (Está
claro que toda cosa en el mundo de ese entonces fue comerciada, con Tiro siendo el
centro de toda esa actividad.)
23 Jarán, y Cané, y Edén, los mercaderes de Sabá, de Asiria y Quilmad, contigo
contrataban. («Jarán» era la misma ciudad en donde Abraham vivió en una
oportunidad antes de ir a la Tierra de Canaán. Esta cerca de 483 kilómetros [300
millas] al norte de Damasco.)
24 Estos tus mercaderes negociaban contigo en varias cosas: en mantos de jacinto, y
bordados, y en cajas de ropas preciosas, enlazadas con cordones, y en madera de
cedro.
25 Las naves de Tarsis, tus cuadrillas, fueron en tu negociación: y fuiste llena, y hecha
muy gloriosa en medio de los mares. («Tarsis» estaba en España, que muestra hasta
la distancia del alcance del comercio. «Y hecha muy gloriosa en medio de los mares»,
se refiere a los buques de todas partes del mundo de ese entonces, que significaba
que el puerto de Tiro fue su destino.)
26 Tus remeros te han traído en medio de grandes aguas; el viento solano te quebranta
en medio de los mares. (Desde este Versículo a través del resto del Capítulo fue
predicho que toda la gloria y esplendor de Tiro traído hasta la ruina, y con la
intención de servir como un símbolo de Satanás y su reino de tinieblas por último
siendo llevado a la destrucción.)
27 Tus riquezas, tus mercaderías, tu negociación, tus remeros y tus pilotos, los
reparadores de tus hendiduras y los agentes de tus negocios, y todos tus hombres de
guerra que hay en ti, con toda tu compañía que en medio de ti se halla, caerán en
medio de los mares el día de tu caída. (Como dicho, como el SEÑOR destruyó el Tiro
del Antiguo Mundo, también Él destruirá el Tiro del Nuevo Mundo [Babilonia], los
dos símbolos de los esfuerzos de Satanás para construir el Huerto de Edén sin el
beneficio del Árbol de Vida, Quien es el SEÑOR Jesucristo. De hecho, Apo_18:1-24,
corresponde con los Versículos Eze_27:27-36 de este vigesimoséptimo Capítulo de
Ezequiel.)
28 Al estrépito de las voces de tus marineros temblarán las costas. (La caída de Tiro,
que vino unos 15 años más tarde, y que la ciudad creía imposible, que resultaría en
un «temblor» de todas las ciudades hermanas y los países que dependían de ella.)
29 Y descenderán de sus naves todos los que toman remo; remeros, y todos los pilotos
del mar se pararán en tierra (como dicho, esto tiene una similitud de la próxima
destrucción de Babilonia, que todavía está en el futuro [Apo_18:18-19]):
30 Y harán oír su voz sobre ti, y gritarán amargamente, y echarán polvo sobre sus
cabezas, y se revolcarán en la ceniza.
31 Y se raparán las cabezas por ti, vistiéndose de cilicio, y entonarán por ti
lamentaciones amargas, con amargura de alma. (¡Las riquezas eran su dios, y ahora
puesto que las riquezas se perdieron, ellos no tienen nada! Tales son todos los que
ponen su confianza en cualquier cosa además del SEÑOR. ¡No sólo pierden sus
almas, sino que también pierden la misma cosa por la cual vendieron sus almas!)
32 Y levantarán sobre ti endechas en sus lamentaciones, y endecharán sobre ti
diciendo: ¿Quién como Tiro, como la destruida en medio del mar?
33 Cuando tus mercaderías salían de las naves, saciabas muchos pueblos: a los reyes
de la Tierra enriqueciste con la gran abundancia de tus riquezas y mercancías. (Al
tomar en cuenta las riquezas de Tiro, ¿por qué Nabucodonosor quiso destruirla? Las
que sean sus razones personales, el factor sobresaliente era que el SEÑOR le había
escogido como instrumento de la destrucción de esta ciudad. ¡Del mismo modo,
muchas naciones del mundo en la actualidad no entienden por qué los líderes de la
anterior Unión Soviética, que exteriormente parecía tan monolítica, permitió ser
destruido delante de todo el mundo! Pero incluso, fue hecho porque Dios ordenó
eso.)
34 En el tiempo que serás quebrantada de los mares en lo profundo de las aguas, tu
comercio y toda tu compañía caerán en medio de ti. (¡Como dicho, porque el SEÑOR
lo requirió así!)
35 Todos los moradores de las islas se maravillarán sobre ti, y sus reyes temblarán de
espanto: demudarán sus rostros. (El Versículo entero indica que los líderes mundiales
fueron espantados como resultado de la destrucción de Tiro.)
36 Los mercaderes en los pueblos silbarán sobre ti; conturbada fuiste, y nunca más
serás para siempre. (Con su destrucción por Nabucodonosor, y otra vez cerca de 150
años más tarde por Alejandro el Grande, la grandeza y la gloria de Tiro murió, para
nunca levantarse otra vez. Esto es precisamente el cuadro Antiguo Testamentario de
aquello que acontecerá en un día próximo, cuando la Babilonia reconstruida será del
mismo modo destruido, que significa el fin de un sistema que sólo ha traído muerte,
destrucción, y tinieblas. De hecho, como Tiro fue destruido, del mismo modo
Babilonia y todo su sistema también serán destruidos. Esto acontecerá
inmediatamente antes de la Segunda Venida [Apo_17:1-18; Apo_18:1-24].)

28
Profecía contra el príncipe de Tiro
(588 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo (con respecto al mundo del espíritu,
este Capítulo es uno de los más notables en la Biblia. Como el Espíritu Santo por
medio de Ezequiel se había preocupado por la ciudad, ahora Él se preocupa por su
gobernador, simbólico de Satanás. De hecho, este Capítulo, en combinación con
Isa_14:1-32, nos da un entendimiento profundo en cuanto al gobernador de las
tinieblas, Lucifer):
2 Hijo de hombre, di al príncipe de Tiro: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto se
enalteció tu corazón y dijiste: Yo soy un dios; en el trono de Dios estoy sentado en
medio de los mares; siendo tú hombre y no Dios; y pusiste tu corazón como corazón
de Dios (es notable que la descripción de Pablo del «hombre de pecado» [2Ts_2:3-
4] muestra el mismo cuadro en casi las mismas palabras. Aunque este Pasaje habla
del «Príncipe de Tiro» Terrenal, sin embargo es Satanás mismo quien vigoriza su
víctima. La caracterización de este príncipe terrenal es el «orgullo», que indica el
pecado fundamental de todo pecado):
3 He aquí que tú eres más sabio que Daniel; no hay secreto que te sea oculto (en
realidad él no era más sabio que Daniel, solamente más sabio en su propia opinión);
4 Con tu sabiduría y con tu prudencia te has juntado riquezas, y has adquirido oro y
plata en tus tesoros (la sabiduría de Daniel fue usada para llevar a cabo la Voluntad
de Dios, mientras esta sabiduría del hombre fue usada para ganar riquezas, así como
la mayoría de la sabiduría de este mundo se utiliza con este fin);
5 Con la grandeza de tu sabiduría en tu comercio has multiplicado tus riquezas; y a
causa de tus riquezas se ha enaltecido tu corazón (si tienen éxito, y aun en las cosas
del SEÑOR, los hombres rápidamente se enaltecen a sí mismos).
6 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto pusiste tu corazón como corazón
de Dios (este es el gran pecado de la humanidad, alimentado por el orgullo. Satanás
quiere ser Dios, y todos los que siguen a Satanás tienen el mismo espíritu),
7 Por tanto, he aquí Yo traigo sobre ti extraños, los fuertes de las naciones, que
desenvainarán sus espadas contra la hermosura de tu sabiduría, y ensuciarán tu
esplendor. (Esto se refiere al ejército de Babilonia, que estaba pronto a venir contra
la ciudad rica y su rey'. ¡Los hombres dominan, pero Dios predomina!)
8 Al hoyo te harán descender, y morirás con la muerte de los que mueren en medio
de los mares. («Al hoyo te harán descender», se refiere al Infierno mismo «Y morirás
con la muerte de los que mueren en medio de los mares», significa que él ni siquiera
tendría entierro real, sino que su cuerpo sería tirado a las aguas, como todos los que
mueren en barcos en alta mar. No se sabe a base de la historia secular exactamente
lo que aconteció a Itobaal, Rey de Tiro. Nabucodonosor, como dicho, asedió la ciudad
durante trece años. Después de su conquista, los jueces fueron asignados, y estos
gobernaron durante un plazo de varios meses cada uno. Todo esto indica un período
de confusión y anarquía — la consecuencia de una gran catástrofe. A menos que una
fecha específica sea dada, se tiene que recordar que la mayoría de las Profecías
brotan durante un plazo de tiempo. Esto significa que lo que el Profeta vio en una
visión, como desenvuelto en un momento de tiempo, en realidad era el resultado, al
menos en muchos casos, del lento deterioro de los siglos, y de catástrofes separados
el uno del otro por un lapso largo de historia decreciente. A veces, los hechos
principales de esa historia pueden ser dichos brevemente, con la totalidad de la
Profecía que abarca muchos años, hasta siglos, pero por último será cumplida.)
9 ¿Hablarás delante del que te mate, diciendo: Yo soy Dios? Tú, en la mano de tu
matador, eres un hombre y no Dios. (Junto a Nabucodonosor, el Monarca de Tiro no
será competencia, porque Nabucodonosor era instrumento de Dios.)
10 De muerte de incircuncisos morirás por mano de extraños: porque Yo he hablado,
dice el SEÑOR Dios. (Estas Escrituras se refieren al Monarca de Tiro que murió
perdido.)
Lamento por el rey de Tiro
11 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (el término del texto de este Capítulo
ahora cambiará del Monarca terrenal, el «Príncipe de Tiro», a su auspiciador,
Satanás, del cual el rey terrenal era un símbolo):
12 Hijo de hombre, levanta una lamentación sobre el rey de Tiro, y dile: Así ha dicho
el SEÑOR Dios: Tú eres el sello de perfección, lleno de sabiduría, y de hermosura
perfecta. (Como es obvio, aunque el rey de Tiro se usa como símbolo, las
declaraciones nunca podrían referirse a cualquier mortal. De hecho, ellos se referían
a Satanás. La frase, «Tú eres el sello de perfección», significa que Lucifer, cuando
fue creado originalmente por Dios, era la perfección de la sabiduría y hermosura. De
hecho, la frase insinúa que Lucifer era el más sabio y hermoso Ángel creado por Dios,
y sirvió al SEÑOR en Santidad y Justicia durante un plazo de tiempo. «De hermosura
perfecta», significa que él era el más hermoso de la creación Angelical de Dios. El
Espíritu Santo ahora aun denominaba su hermosura como «perfecta».)
13 En el Edén, en el huerto de Dios estuviste: toda piedra preciosa fue tu vestidura;
de sardio, topacio, diamante, crisólito, jade, topacio, cornalina, jaspe, zafiro, granate
y esmeralda. Tus joyas y encajes estaban cubiertos de oro, y la hechura de tus
tamboriles y flautas estuvieron preparadas para ti desde el día en que fuiste creado.
(«En Edén, el huerto de Dios estuviste», en realidad no se refiere al «Edén» de
Gén_3:1-24, sino más bien al «Edén» que existió en este planeta antes de Adán y Eva,
que a propósito fue gobernado por Lucifer antes de su rebelión. «Toda piedra
preciosa fue tu vestidura», se presenta en una forma muy similar a la vestidura del
Sumo Sacerdote de Israel [Éxo_28:17-20]. «La hechura de tus tamboriles y flautas»,
tiene que ver con la música. Hay toda indicación que el liderazgo de Lucifer tenía
algo que ver con la adoración a Dios. Además, él es llamado, «Oh Lucero, hijo de la
mañana» [Isa_14:12]. Cuando la Tierra fue originalmente creada, las Escrituras
dicen, «A una cantaron las estrellas de la mañana, y gritaron de alegría todos los
hijos de Dios» [Job_38:4-7]. Por lo tanto, si la expresión, «hijo de la mañana», se
puede entrelazar a las «estrellas de la mañana», estos Pasajes nos dicen que Lucifer,
al menos antes de su caída, fue enormemente usado para dirigir la Adoración a Dios.
De hecho, esta es precisamente la razón por la cual Satanás ha hecho todo dentro de
su poder para corromper la música del mundo, y sobre todo corromper la música de
la Iglesia. Puesto que el Libro de los Salmos es el Libro más extenso de la Biblia,
aprendemos de esto que la música y el canto están entre las formas más altas de
adoración al SEÑOR.)
14 Tú, Querubín grande que cubre: Yo te puse en el Santo Monte de Dios. Allí
estuviste; en medio de piedras de fuego has andado. («Tú, Querubín grande que
cubre», significa que Lucifer fue escogido y «ungido» por Dios para una tarea y
servicio particulares. Probablemente esto era la «adoración» a la cual acabamos de
eludir. «En el Santo Monte de Dios. Allí estuviste», habla de su lugar y posición con
relación al Trono [Apo_4:2-11]. «En medio de piedras de fuego has andado», tiene
referencia a su cercanía al Trono [Eze_1:26-27]. Además, la frase, «Has andado»,
parece implicar que no a cualquier Ángel se le hubiera dado tal libertad.)
15 Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste criado, hasta que se halló
en ti maldad (el orgullo fue la forma de su iniquidad [Luc_10:17-18]; la rebelión de
Lucifer contra Dios probablemente causó la catástrofe que aconteció entre el
Primero y Segundo Versículos de Gén_1:1-31).
16 A causa de la abundancia de tu comercio fuiste lleno de violencia, y pecaste: por
lo que Yo te eché del Monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh
Querubín que cubre. («Violencia» ha sido el signo del dominio y reino de Satanás en
el mundo de las tinieblas [Jua_10:10]. Lucifer cuando fue «echado» del «Monte de
Dios» se refiere a que él perdió su lugar y posición, que había ocupado con Dios
desde su creación. Fue porque «él pecó», que habla del orgullo que causó que se
enalteciera contra Dios.)
17 Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa
de tu esplendor: Yo te arrojaré por tierra; delante de los reyes te he dado por
escarmiento. («Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura», nos dice la razón
de su caída. Como dicho, fue orgullo. Él quitó su mirada de Cristo, al darse cuenta
de su propia hermosura mientras aumentaba más gloriosa a su vista. Al mismo
momento, su «corazón» fue cambiado de Cristo a sí mismo. Según tenemos entendido,
este fue el origen del mal en toda la creación de Dios. «Corrompiste tu sabiduría a
causa de tu esplendor», no se refiere a la pérdida de la sabiduría, sino más bien a la
sabiduría corrompida, de este modo, el designio insidioso practicado sobre la familia
humana [Jua_10:10]. «Yo te arrojaré por tierra», se refiere a su derrota final
[Apo_12:7-12]. «Delante de los reyes te he dado ser escarmiento», se refiere a que
él por último será echado al Lago de Fuego, donde todos los reyes de la Tierra
quienes han muerto perdidos le contemplarán en su humillación [Mat_25:41;
Apo_20:10].)
18 Con la multitud de tus maldades, y con la iniquidad de tu comercio ensuciaste tu
santuario: Yo pues saqué fuego de en medio de ti, el cual te consumió, y te puse en
ceniza sobre la Tierra a los ojos de todos los que te miran. (Cuando Satanás al fin será
echado al Lago de Fuego [Apo_20:10], todos los billones que él ha engañado,
quienes también estarán en el Infierno debido a él, le odiarán con una pasión que las
palabras no pueden ni siquiera comenzar a expresarlo adecuadamente, y un odio que
durará para siempre jamás.)
19 Todos los que te conocieron de entre los pueblos, se maravillarán sobre ti: en
espanto serás, y para siempre dejarás de ser. (En ese entonces la oración de Cristo,
«Sea hecha Tu Voluntad, como en el Cielo, así también en la Tierra», finalmente será
contestada y cumplida [Mat_6:9-10].)
Profecía contra Sidón
20 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
21 Hijo de hombre, pon tu rostro hacia Sidón, y profetiza contra ella (Sidón
[nombrado en algunas otras versiones como Zidón] estaba cerca de 48 kilómetros
[30 millas] al norte de Tiro. Tiro y Sidón eran ciudades hermanas, pero todavía Tiro
servía como la ciudad principal);
22 Y dirás: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo estoy contra ti, oh Sidón, y en
medio de ti seré glorificado: y sabrán que Yo soy el Dios, cuando hiciere en ella
juicios, y en ella Me santificare. (El sufrimiento, pero no la extinción, fue el juicio de
Sidón. Ella existe hoy, pero su historia ha sido una de pestilencia y sangre. La frase,
«En ella Me santificare», se refiere a la verdad de que el SEÑOR será santificado o
por el vivir rectamente de parte de Sus súbditos o el juicio justo sobre aquellos que
rebelan contra Él.)
23 Y enviaré a ella pestilencia y sangre en sus plazas; y caerán muertos en medio de
ella; con espada contra ella alrededor; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (La
«pestilencia» y la «sangre en sus plazas» tienen que ver con las terribles invasiones
que ella sufriría desde ese momento en adelante.)
24 Y nunca más será a la Casa de Israel espino que le punce, ni zarza que cause dolor,
en todos los alrededores de los que los menosprecian; y sabrán que Yo soy el SEÑOR.
(Ellos — los Sidonios — sabrán [para su propio dolor] que Yo soy Jehová-Adonai.
¡Ellos no «maltratarán» más a Israel!)
Israel reunido en seguridad
25 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Cuando Yo haya recogido a la Casa de Israel de los
pueblos entre los cuales están esparcidos, entonces Me santificaré en ellos a los ojos
de los paganos, y habitarán en su tierra, la cual di a Mi siervo Jacob. (La reunión de
nuevo de Israel, como dicho aquí, acontecerá en la Edad del Reino venidero. «Y
habitarán en su tierra, la cual di a Mi siervo Jacob», se refiere al conflicto más largo
en que este planeta haya estado involucrado, que habla del conflicto sobre la Tierra
de Israel. En este Pasaje y muchos otros, el SEÑOR declara que Él ha dado esta
Tierra a Su Pueblo; Él también especifica exactamente dónde está esta Tierra
[Gén_15:18]. Cuando Él emplea la frase, «Mi siervo Jacob», Él, al mismo tiempo,
está diciendo que Él no la dio a Esaú, es decir, a los Árabes. Los palestinos, como
también la totalidad del mundo, deben leer este Versículo.)
26 Y habitarán en ella seguros, y edificarán casas, y plantarán viñas, y habitarán
confiadamente, cuando Yo haré juicios en todos los que los despojan en sus
alrededores; y sabrán que Yo soy el SEÑOR su Dios. (El regreso de los Hebreos a la
Tierra de Israel está predicho en muchas Profecías [Deu_30:3-4; Isa_11:11-13;
Isa_27:12-13; Jer_31:8-10; Jer_32:37; Eze_34:13; Eze_37:21; Amó_9:14-15;
Rom_11:1-36].)

29
Profecía contra Egipto
(589 a.C.)
1 EN el año décimo, en el mes décimo, a los doce días del mes, vino a mí Palabra del
SEÑOR, diciendo (esta Profecía fue dada cerca de seis meses antes de la caída de
Jerusalén. Las profecías abarcaron el período desde 587-572 a.C.; aparecen en un
orden moral, y no en un orden cronológico. De hecho, cada una de estas Profecías
[o una porción de la Profecía] fue emitida para tratar con los eventos políticos de
esa época, y debe ser estudiado en conexión con ellos):
2 Hijo de hombre, pon tu rostro contra el Faraón rey de Egipto, y profetiza contra él
y contra todo Egipto (Egipto es el último reino del mundo que fue tratado por
Ezequiel. Es el primero que fue tratado por Jeremías [Jer_46:1-28], mientras
Babilonia es la última [Jer_50:1-46]).
3 Habla, y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo estoy contra ti. Faraón rey
de Egipto, el gran dragón que yace en medio de sus ríos, el cual dijo: Mío es mi río, y
yo me lo hice. (Este Versículo comienza un juicio pronunciado contra Egipto, que
aseguraría su denigración, al menos hasta la Segunda Venida del SEÑOR. El Faraón
se consideraba ser dios, y por tanto, el creador, que le causó exclamar de sí mismo:
«Mío es mi río, y yo me lo hice.)
4 Yo pues, pondré anzuelos en tus mejillas, y pegaré los peces de tus ríos a tus
escamas, y te sacaré de en medio de tus ríos, y todos los peces de tus ríos saldrán
pegados a tus escamas. («Los peces de tus ríos» se refiere a los adherentes del Faraón.
La idea es que el Faraón y la totalidad de la tierra de Egipto serán destruidos.
Trágicamente, este hombre, el Faraón-Hofra era al mismo en que Sedequías confiaba
para la liberación de Nabucodonosor.)
5 Y te dejaré en el desierto, a ti y a todos los peces de tus ríos: sobre la faz del campo
caerás; no serás recogido, ni serás juntado: a las bestias de la tierra y a las aves del
Cielo te he dado por comida. (Se dice que el Faraón atacó a Tiro y Sidón y luego
fracasó en un intento contra Cirene. Él luego fue depuesto por Amosis en 596 a.C.
Fue probablemente en esta expedición contra Cirene que promovió la sublevación de
Amosis contra Faraón-Hofra, que resultó en su derrota, ¡a la cual esta Escritura y
otras se refieren!)
6 Y sabrán todos los moradores de Egipto que Yo soy el SEÑOR, por cuanto fueron
bastón de caña a la Casa de Israel. (Por lo menos una de las causas de la gran Ira de
Dios delineadas contra Egipto es debido a su traición de Judá. Aunque era la
Voluntad de Dios que Babilonia sirviera como castigador de Judá, todavía, Su Ira
contra Egipto por haber prometido lo que ellos no pudieran entregar, que a lo menos
en alguna manera se agregó a los aprietos de Judá, ahora causaría que el Juicio les
viniera a ellos.)
7 Cuando te tomaron con la mano, te quebraste, y les rompiste todo el hombro: y
cuando se recostaron sobre ti, te quebraste, y les rompiste sus lomos enteramente.
(Como resultado de las promesas de Egipto que ellos librarían a Judá, Sedequías se
mantenía en contra de Nabucodonosor. Esto encolerizaba al Monarca Babilonio y le
causó tomar una terrible venganza cuando su ejército por fin abrió brecha en los
muros de Jerusalén. Egipto en parte era responsable por esto; de esto es que el
SEÑOR habla aquí.)
8 Por tanto, así ha dicho Dios el SEÑOR: He aquí que Yo traigo contra ti espada, y
cortaré de ti hombres y bestias. (Esto se refiere a lo que los Babilonios les harían; y
fue designado por el SEÑOR.)
9 Y la tierra de Egipto será asolada y desierta: y sabrán que Yo soy el SEÑOR: porque
él (Faraón) dijo: Mío es mi río, y yo me lo hice. (El Espíritu Santo por medio del
Profeta se refiere al orgullo jactancioso del Faraón por la frase que el Monarca
Egipcio empleaba: «Mío es mi río, y yo me lo hice». La idea es: si el Faraón creó el
río, seguramente él puede detener la «desolación y ruina». Pero, por supuesto, si el
Faraón es impotente para hacer esto, porque, a pesar de su jactancia, él es solamente
un hombre, y como tal es impotente delante de la Faz de Dios.)
10 Por tanto, he aquí Yo estoy contra ti, y contra tus ríos; y pondré la tierra de Egipto
en asolamientos de la soledad del desierto, desde Migdol hasta Sevene, hasta el
término de Etiopía. (Debe leerse, «desde Migdol a Sebene, aún hasta la frontera de
Etiopía». Migdol representaba la extremidad norte de Egipto, como Sevene
representaba la del sur; por lo tanto, la totalidad de Egipto está incluido en la
declaración.)
11 No pasará por ella pie de hombre, ni pie de bestia pasará por ella; ni será habitada
por cuarenta años. (La idea es que ningún «hombre» ni «bestia» pasará por Egipto
en cuanto a la prosperidad de la nación. Por cierto habría hombres y bestias allí,
pero estarían sujetos a los gobernadores foráneos, que en realidad duró por
«cuarenta años».)
12 Y pondré a la tierra de Egipto en soledad entre las tierras asoladas, y sus ciudades
entre las ciudades destruidas estarán asoladas por cuarenta años: y esparciré a Egipto
entre las naciones, y los esparciré entre los países. (Aunque no hay ningún registro
histórico del cumplimiento de estos Pasajes en particular, todavía, al darse cuenta de
que Nabucodonosor invadió a Egipto después de la destrucción de Jerusalén,
podemos suponer, con poco riesgo de duda, que él «esparció a Egipto entre las
naciones». Tal fue la práctica de los invasores, a fin de despojarlo de su elite y, por
lo tanto, incapaz de una insurrección.)
13 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: Al fin de cuarenta años juntaré a Egipto de
los pueblos entre los cuales fueren esparcidos (aproximadamente al mismo tiempo que
Israel fue permitido por Ciro regresar a la Tierra Prometida, del mismo modo, Egipto
luego fue permitido una medida de existencia como estado):
14 Y volveré a traer los cautivos de Egipto, y los volveré a la tierra de Patros, a la
tierra de su habitación; y allí serán un reino despreciable. («Un reino despreciable»,
significa un reino subordinado, que Egipto ha sido desde aquel entonces hasta ahora.
En otras palabras, su grandeza del pasado nunca más fue repetida.)
15 En comparación de los otros reinos será humilde; ni más se alzará sobre las
naciones: porque Yo los disminuiré, para que no se enseñoreen de las naciones.
(Sucedió exactamente como el SEÑOR dijo. Hoy, Egipto es básicamente nada más
que un lugar raído de antiguos sepulcros; sin embargo, en la Edad del Reino
venidero, Egipto será restaurado y bendecido [Isa_19:1-25].)
16 Y no será más a la Casa de Israel por confianza, que haga acordar el pecado,
mirando en pos de ellos; y sabrán que Yo soy el SEÑOR Dios. (Israel «miraba en
pos» de los Egipcios en lugar de «mirar hacia» Jehová; por haberlo hecho así, ellos
seguían trayendo iniquidad [incredulidad] a la memoria de Dios. La frase, «Y no será
más a la Casa de Israel por confianza», se refiere a la Verdad Bíblica que el SEÑOR
desea que Su Pueblo, o sea Israel de antaño o la Iglesia moderna, confíe únicamente
en Él en lugar del mundo. ¡Como esta fue la gran tentación de Israel, es la gran
tentación de la Iglesia moderna también!)
17 Y aconteció en el año veintisiete, en el mes primero, al primero del mes, que vino
a mí palabra del SEÑOR, diciendo (adjuntando los Versículos Eze_29:1 y Eze_29:17,
nos damos cuenta de que la Profecía de los Versículos Eze_29:17-21 fue dada unos
diecisiete años después de la Profecía de los Versículos Eze_29:1-17. Fueron
introducidos aquí para obtener la unidad del tema):
18 Hijo de hombre, Nabucodonosor rey de Babilonia hizo a su ejército prestar grande
servicio contra Tiro. Toda cabeza se encalveció, y se peló todo hombro; y ni para él
ni para su ejército hubo paga de Tiro, por el servicio que prestó contra ella (como
dicho, el asedio de Tiro duró unos 13 años. El rey Babilonio lo emprendió por
Mandato de Dios [Jer_25:9]. Él capturó la ciudad, pero no consiguió tesoro alguno,
pues los de Tiro lo habían tomado y enviado a otras ciudades por el mar).
19 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí que Yo doy a Nabucodonosor,
rey de Babilonia, la tierra de Egipto; y él tomará sus riquezas, recogerá sus despojos
y arrebatará el botín, y así habrá paga para su ejército. (Por supuesto, Nabucodonosor
no tuvo conocimiento de lo que el SEÑOR estaba haciendo; ¡no obstante, el Monarca
Babilonio llevó a cabo la Voluntad de Dios, se diera cuenta de eso o no!)
20 Por su trabajo con que sirvió contra ella le he dado la tierra de Egipto: porque
trabajaron para Mí, dice Dios el SEÑOR.
21 En aquel día haré reverdecer el cuerno a la Casa de Israel, y te daré apertura de
boca en medio de ellos; y sabrán que Yo soy el SEÑOR. (Las palabras, «En aquel
día», se refieren a la restauración de Israel en el principio de la Edad del Reino.
Israel será la nación central en medio de todas las naciones del mundo, porque en
ese entonces Cristo será su culminante Rey, aun «El Rey de reyes», que significa que
Él será el SEÑOR de la totalidad de la Tierra.)

30
Lamento por Egipto
(572 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo (Williams dice, «El corazón natural
rápidamente se cansa de estas amenazas repetidas de juicio, de este modo, el Libro
de Jeremías y Ezequiel son por lo general impopular en el Cristianismo, y
mayormente no leídos. Pero estas repeticiones revelan el Corazón de Dios y el
corazón del hombre — el uno tan amante, el otro tan vil. El amor busca
continuamente salvar; la rebelión rehúsa continuamente escuchar):
2 Hijo de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Lamentad, ay de
aquel día! (Este Capítulo básicamente está dividido en dos secciones. Los Versículos
Eze_30:1-9 tratan de la Gran Tribulación venidera, mientras los Versículos
Eze_30:10-26 tratan con el juicio que Egipto estaba por enfrentar de Babilonia en el
día de Ezequiel. «Ay de aquel día», en realidad dice, «Ay sea para el día». Se refiere,
como dicho, a la Gran Tribulación venidera. En realidad, será un tiempo cuando la
totalidad del mundo se «lamentará».)
3 Porque cerca está el día, cerca está el día del SEÑOR; día de nublado, día de castigo
de los paganos será. («El día del SEÑOR», se refiere al Segundo Advenimiento de
Cristo y continúa a través del Milenio. El Espíritu Santo por medio del Profeta está
diciendo que la Gran Tribulación significa que la Segunda Venida «está cerca». La
frase, «Día de nublado», habla de los juicios a los cuales acaba de referirse, que
abarcará la totalidad de la humanidad. Este «día de nublado» durará por unos siete
años, llamado la «septuagésima Semana de Daniel» [Dan_9:27].)
4 Y vendrá espada a Egipto, y habrá miedo en Etiopía, cuando caerán heridos en
Egipto; y tomarán su multitud, y serán destruidos sus fundamentos.
5 Etiopía, Libia, Lidia y todo el conjunto de pueblo, y Fut, y los hijos de los países
aliados, caerán con ellos a espada. (Estos dos Versículos tienen que ver con la
apertura del «segundo sello» en la Gran Tribulación venidera, cuando el poder será
dado al Anticristo para «quitar la paz de la Tierra» [Apo_6:4]. Aunque la Tribulación
será mundial, su más grande concentración será, según la Biblia, en la región
alrededor del Mediterráneo y África del Norte.)
6 Así ha dicho el SEÑOR: También caerán los que sostienen a Egipto, y la altivez de
su fortaleza caerá: desde Migdol hasta Sevene caerán en él a espada, dice el SEÑOR
Dios. (La descripción proporcionada en este Pasaje corresponde desde «un extremo
de Egipto hasta el otro».)
7 Y serán asolados entre las tierras asoladas, y sus ciudades serán entre las ciudades
desiertas. (La desolación a la cual se refiere en este Versículo tendrá su cumplimiento
en el «tercer sello». Allí dice, «Ven y ve. Y miré y he aquí, un caballo negro; y el que
estaba sentado encima de él, tenía una balanza en su mano» [Apo_6:5]. Esto habla
de la hambruna terrible, resultando en una desolación terrible, que tomará a Egipto
cuando esa nación sea destruida por el Anticristo.)
8 Y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando pusiere fuego a Egipto, y fueren
quebrantados todos sus ayudadores. (Aunque el Anticristo atacará a Egipto, en su
intento para ganar el dominio mundial, del cual Egipto será el primero, todavía, el
SEÑOR es El Que pone los parámetros para el Anticristo, y en realidad para todo lo
demás.)
9 En aquel tiempo saldrán mensajeros de delante de Mí en navíos, a espantar a Etiopía
la confiada, y tendrán espanto como en el día de Egipto: porque he aquí viene.
(«Porque he aquí viene», declara la certidumbre de estas Profecías. ¡No hay manera
alguna que el hombre puede evitarlo, sino con una excepción! Y me refiero al
Arrebatamiento de la Iglesia [1Ts_4:13-18; 1Ts_5:9].)
10 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Haré cesar la multitud de Egipto por mano de
Nabucodonosor, rey de Babilonia. (Así como muchas veces se hace con la Profecía
Bíblica, el impulso de la dirección cambiará automáticamente, y sin advertencia
[Isa_61:1-3; Luc_4:18-19]. Ahora, el Espíritu Santo por medio del Profeta está
hablando de la destrucción que está por venir pronto sobre Egipto por
Nabucodonosor.)
11 Él, y con él su pueblo, los más fuertes de las naciones, serán traídos a destruir la
tierra: y desenvainarán sus espadas sobre Egipto, y llenarán la tierra de muertos. («Los
más fuertes de las naciones», se refiere al poder de los Babilonios como quienes han
de ejecutar los Juicios Divinos.)
12 Y secaré los ríos, y entregaré la tierra en manos de malos, y destruiré la tierra y su
plenitud por mano de extranjeros: Yo el SEÑOR he hablado.
13 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Destruiré también las imágenes, y haré cesar los
ídolos de Nof; y no habrá más príncipe de la tierra de Egipto, y en la tierra de Egipto
pondré temor. («Nof» era el Griego Menfis, capital del Egipto bajo y el centro
principal del culto del dios «Ptah». Estos fueron destruidos por los Babilonios
invasores. La frase, «Y no habrá más príncipe de la tierra de Egipto», tuvo un
cumplimiento inmediato, porque desde los días de los Persas a través del dominio
Romano, que duró cerca de unos 1.500 años, los reyes de Egipto no eran Egipcios
por raza. Debido a su subyugación y descenso subsiguiente, de este modo, siempre
estando bajo la mano de conquistadores, había un perpetuo «temor en la tierra de
Egipto».)
14 Y asolaré a Patros, y pondré fuego a Zoán, y haré juicios en Nof. (Estas eran todas
las mayores ciudades de Egipto; cada una era la ubicación del culto idolátrico
concentrado.)
15 Y derramaré Mi ira sobre Sin, fortaleza de Egipto, y talaré la multitud de Nof.
(«Sin» era la mayor ciudad Egipcia en el Delta Egipcio. Estaba ubicada en la rama
oriental del Nilo, rodeado de pantanos, y su posición la hizo, en terminología
moderna, la «clave» de Egipto. Ezequiel, la describió como la «fortaleza de Egipto»,
declara su ubicación estratégica. «Nof» era otra ciudad mayor de Egipto, ubicada en
el riachuelo en que estaba ubicada la ciudad de Taniz en el delta del Nilo. Era un
nombre sagrado de Tebas en Egipto.)
16 Y pondré fuego a Egipto; Sin tendrá gran dolor, y Nof será destrozada, y Memfis
tendrá continuas angustias. (Los Babilonios estaban tan seguros de su victoria que
ellos no daban importancia a las defensas Egipcias, como fue Profetizado por
Ezequiel.)
17 Los jóvenes de Avén y de Pibeset caerán a espada; y las mujeres irán en cautiverio.
(Estas dos ciudades, «Avén» y «Pibeset», son Eliopolis y Bubastis, donde estaba
ubicado un famoso templo al Sol. Bubastis estaba situada a la orilla de lo que ahora
es el Canal de Suez; su nombre se derivó de la diosa que tenía apariencia de cabeza
de gato, «Bastit»; era el asiento principal del nomo que fue nombrado a base de su
nombre. ¡Los juicios especiales parecen haber sido proporcionados hacia estas
ciudades sumergidas en la idolatría pagana!)
18 Y en Tafnes se oscurecerá el día, cuando quebrantaré el yugo de Egipto, y se
acabará la altivez de su poder: en cuanto a ella misma, la nube la cubrirá, y sus hijas
irán en cautiverio. («Tafnes» era la «Tafnes» de Jer_43:7. Estaba ubicada en la
frontera Sirio de Egipto. «Cuando quebrantaré Yo allí el yugo de Egipto»,
corresponde al dominio opresivo impuesto sobre otras naciones. «En cuanto a ella
misma, la nube la cubrirá», se trata de las predicciones dadas por el SEÑOR con
respecto de que ella llegó a ser «un reino despreciable» [Eze_29:14]. La frase con
respecto a sus «hijas» tiene referencia no solamente a las mujeres que fueron llevadas
en cautiverio, sino también a sus ídolos, es decir, «hijas», que fueron tomadas por
Nabucodonosor a Babilonia, donde él se los hubiera salvaguardado en el templo del
dios Bel.)
19 Haré pues juicios en Egipto y sabrán que Yo soy el SEÑOR. («Y sabrán que Yo
soy el SEÑOR», se emplea repetidas veces por el Espíritu Santo por medio de
Ezequiel. ¡La declaración fue hecha para poder contrarrestar las actitudes
jactanciosas, orgullosos y arrogantes de no solamente Egipto, sino de todas las demás
naciones también!)
Egipto caerán ante Babilonia
20 Y aconteció en el año undécimo, en el mes primero, a los siete días del mes, que
vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (esto fue cerca de tres meses antes de la
destrucción de Jerusalén [2Re_25:2-3]. Además, fue cerca de 16 años antes de que
Nabucodonosor invadiera a Egipto; los Versículos Eze_30:20-26 parecen haber sido
escritos cerca del mismo momento en que el intento abortivo del Faraón-Hofra para
acudir al socorro de Jerusalén):
21 Hijo de hombre, he quebrado el brazo del Faraón rey de Egipto; y he aquí que no
ha sido vendado poniéndole medicinas, poniéndole faja para ligarlo, a fin de
fortalecerle para que pueda empuñar espada. (Este Versículo corresponde a la
destrucción de Egipto por Nabucodonosor, y ella nunca se levantará otra vez como
un poder mundial.)
22 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Heme aquí contra el Faraón rey de Egipto,
y quebraré sus brazos, el fuerte y el fracturado, y haré que la espada se le caiga de la
mano. («Y quebraré sus brazos», en realidad tiene referencia a dos entablamentos
distintos. El primer brazo fue quebrado en Carquemis por Nabucodonosor, como
profetizado por Jeremías [Jer_46:2]. El otro brazo también fue quebrado por
Nabucodonosor cuando él invadió a Egipto unos cuantos años después.)
23 Y esparciré los Egipcios entre las naciones, y los dispersaré entre países. (¡Esto es
precisamente lo que Nabucodonosor hizo!)
24 Y fortaleceré los brazos del rey de Babilonia, y pondré Mi espada en su mano;
pero quebraré los brazos del Faraón, y delante de aquel gemirá con gemidos de herido
de muerte.
25 Fortaleceré pues los brazos del rey de Babilonia, y los brazos del Faraón caerán;
y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando Yo pusiere Mi espada en la mano del rey de
Babilonia, y él la extendiere sobre la tierra de Egipto. (Los hechos son: el SEÑOR
«fortalecerá» el «rey de Babilonia», mientras Él «debilitará» los «brazos del
Faraón». Como resultado, sus brazos «caerán».)
26 Y esparciré los Egipcios entre las naciones, y los dispersaré entre las tierras; y
sabrán que Yo soy el SEÑOR. (Después de esparcirlos, ellos se darán cuenta que
habían estado luchando contra Dios. Entonces el Profeta termina este Capítulo con
la fórmula que siempre se repite, «y sabrán que Yo soy el SEÑOR».)

31
Faraón morirá
(588 a.C.)
1 Y ACONTECIÓ en el año undécimo, en el mes tercero, al primer día del mes, que
vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (este Capítulo fue escrito cerca de dos o tres
meses antes de la caída de Jerusalén. Ello trata con la ruina de los dos imperios
poderosos, Egipto y Asiria [el posterior había caído años antes], y su expulsión al
Infierno eterno. El lenguaje es asombroso, y no deja nada a la imaginación):
2 Hijo de hombre, di al Faraón rey de Egipto, y a su pueblo: ¿A quién te comparaste
en tu grandeza? (La pregunta, «¿A quién te comparaste en tu grandeza?», está
hablando de Assur-Uballit II, el último rey de Asiria, quien fue conquistado por
Nabucodonosor. ¡Posiblemente, el Faraón admiraba ahora este déspota muerto; sin
embargo, su fin será igual al de Assur-Uballit II, derrotado y perdido!)
3 He aquí era el Asirio, un cedro en el Líbano, de ramas hermosas, y de sombra
espesa, y de elevada altura, y su copa estaba entre densas ramas. (El Profeta asemeja
los imperios a grandes árboles, y sus reyes como las ramas más altas. La Profecía
penetra al mundo de los muertos, y revela los espíritus incorpóreos de los reyes
finados y ya no más como personajes reales, sino miembros de la multitud general de
los muertos y los condenados. De este modo, este Capítulo es uno de los pocos que
revela el misterioso mundo del espíritu.)
4 Las aguas lo hicieron crecer, lo encumbró el abismo: sus ríos iban alrededor de su
pie, y a todos los árboles del campo enviaba sus corrientes. («Las aguas», «el
abismo», y los «ríos» muestra las naciones que contribuyeron a la riqueza del
imperio; y «los árboles del campo» simbolizaban los reyes subordinados. Tal se
muestra así para declarar el esplendor del reino Asirio, y como se creía que sería
imposible llevarlo a la destrucción.)
5 Por tanto, se encumbró su altura sobre todos los árboles del campo, y se
multiplicaron sus ramas, y a causa de las muchas aguas se alargaron sus ramas que
había echado. (La «exaltación» fue disfrutada debido a la supremacía del imperio
Asirio; sin embargo, esta supremacía fue vencida por el terror y fuerza bruta.)
6 En sus ramas hacían nido todas las aves del Cielo, y debajo de su ramaje parían
todas las bestias del campo, y a su sombra habitaban muchas naciones. («Y a su
sombra habitaban muchas naciones», marca el hecho de que muchas de las riquezas
y grandezas del imperio Asirio se derivó de un impuesto pesado de aquellas naciones
subyugadas.)
7 Se hizo, pues, hermoso en su grandeza con la extensión de sus ramas; porque su
raíz estaba junto a muchas aguas. (El Espíritu Santo emplea la palabra «grandeza»
para describir el imperio Asirio, pero aun así era una «grandeza» a los ojos del
hombre, y no a Dios.)
8 Los cedros no lo cubrieron en el Huerto de Dios: las hayas no fueron semejantes a
sus ramas, ni los castaños fueron semejantes a su ramaje: ningún árbol en el Huerto
de Dios fue semejante a él en su hermosura. («En el Huerto de Dios», representa la
Soberanía del SEÑOR sobre las naciones, aunque ellos no le conocían, ni aun le
reconocían, sino más bien eran idólatras.)
9 Lo hice hermoso con la multitud de sus ramas; y todos los árboles de Edén, que
estaban en el Huerto de Dios, tuvieron de él envidia. («Tuvieron de él envidia», no
solamente corresponde al Faraón, sino también a todas las demás naciones del
mundo. Trágicamente, hasta Israel, el Reino del Norte, que debe ser el pueblo de
Dios, y por consiguiente mirando a Jehová, en cambio «tuvieron de él envidia», es
decir, de «Asiria».)
10 Por tanto, así dijo el SEÑOR Dios: Por cuanto te encumbraste en altura, y puso su
cumbre entre las densas ramas, y su corazón se elevó con su altura («por cuanto te
encumbraste en altura», revela la razón por la destrucción de Asiria. ¡Fue su gran
orgullo!),
11 Yo lo entregaré en mano del fuerte de los paganos, que de cierto le manejará: por
su impiedad lo he arrojado. («El fuerte de los paganos» se refiere a Nabucodonosor,
quien subyugaría el poderoso imperio Asirio, porque el SEÑOR lo estimaba
necesario.)
12 Y le cortarán extraños, los fuertes de las naciones, y lo abandonarán: sus ramas
caerán sobre los montes y por todos los valles, y por todas las barrancas de la tierra
serán quebradas sus ramas; y se irán de su sombra todos los pueblos de la tierra, y lo
dejarán. (La idea del Espíritu Santo es para mostrar al Faraón la causa de la
destrucción del orgulloso imperio de los Asirios, y que los Egipcios estaban por
enfrentar la misma ruina, porque estaban viajando en la misma dirección malvada.)
13 Sobre su ruina habitarán todas las aves del Cielo, y sobre sus ramas estarán todas
las bestias del campo: (La idea de este Versículo es que una vez este árbol estaba en
alto y orgulloso, pero ahora ya no existe, y los buitres y chacales rondan y avanzan
lentamente sobre los cadáveres de un tronco muerto y deteriorado.)
14 Para que no se eleven en su altura los árboles todos de las aguas, ni levanten su
cumbre entre las espesuras, ni en sus ramas se paren por su altura todos los que beben
aguas: porque todos serán entregados a muerte, a la Tierra baja, en medio de los hijos
de los hombres, con los que descienden al abismo. (La fraseología en este Versículo
sugiere que el Infierno [o She'ol] está situado en el centro de la Tierra. En ese
«abismo», los monarcas más grandes se clasifican con los espíritus incorpóreos de
la generalidad de los hombres. Los más poderosos y los más eminentes están «en
medio de los hijos de los hombres, con los que descienden al abismo». ¡Que
advertencia para toda la humanidad! ¡Pero, por lo general, se ignora!)
15 Así ha dicho el SEÑOR Dios: El día que descendió a la sepultura, hice hacer luto,
hice cubrir por él el abismo, y detuve sus ríos, y las muchas aguas fueron detenidas:
y al Líbano cubrí en tinieblas por él, y todos los árboles del campo se desmayaron.
(«El día que descendió a la sepultura», no se refiere a la sepultura de un cuerpo en
un sepulcro, como la palabra se emplea comúnmente, sino más bien se refiere al
«She'ol». Este es el lugar de los espíritus difuntos quienes están en el Infierno, y
quienes tienen plena consciencia. Jesús lo dijo así [Luc_16:19-31].)
16 Del estruendo de su caída hice temblar las naciones, cuando les hice descender al
She'ol con todos los que descienden al abismo; y todos los árboles de Edén escogidos,
y los mejores del Líbano, todos los que beben aguas, fueron consolados en lo profundo
de la Tierra. («Cuando les hice descender al She'ol con todos los que descienden al
abismo», corresponde al SEÑOR cuando echa fuera el último rey del imperio Asirio,
Assur-Uballit II, hasta el She'ol, es decir, el Infierno. La fiase, «Fueron consolados
en lo profundo de la Tierra», trata de los imperios y naciones poderosas, ya caídos y
que están en el Infierno. Ellos son «consolados» con el concepto de que aun otro
reino más poderoso que ellos ha caído como ellos.)
17 También ellos descendieron con él al She'ol, con los muertos a espada, los que
fueron su brazo, los que estuvieron a su sombra en medio de los paganos. (Triste y
lamentablemente, así muere toda la humanidad, perdidos eternamente, lo que
significa que se fueron al infierno. Jesús lo dijo así [Mat_7:13-15].)
18 ¿A quién te has comparado así en gloria y en grandeza entre los árboles de Edén?
Pues derribado serás con los árboles de Edén en lo profundo de la Tierra: entre los
incircuncisos yacerás, con los muertos a espada. Este es el Faraón y todo su pueblo,
dice Dios el SEÑOR. (La pregunta, «¿A quién te has ...?» está repetido como en el
Versículo Eze_31:2. La respuesta aquí es que el Faraón fue solamente comparable a
los monarcas ordinarios, y que su muerte sería sin honor. Y así sucedió, porque él fue
estrangulado. Por lo tanto el Profeta declara, señalándole: «Este es el Faraón».)
32
Lamento por Faraón y Egipto
(587 a.C.)
1 Y ACONTECIÓ en el año duodécimo, en el mes duodécimo, al primer día del mes,
que vino a mí Palabra del SEÑOR, diciendo (esta Profecía fue dicha más de un año
después de la destrucción de Jerusalén);
2 Hijo de hombre, levanta lamentaciones sobre el Faraón rey de Egipto, y dile: A
leoncillo de las naciones eres semejante, y eres como la ballena en los mares: que
secabas tus ríos, y enturbiabas las aguas con tus pies, y hollabas sus riberas. (La
primera Profecía de este Capítulo [vv. Eze_32:1-16] enlaza los Juicios Divinos en
Egipto en el tiempo del Éxodo [vv. Eze_32:6-7] con aquellos que están por ser
ejecutados, y con los Juicios futuros del Anticristo y su reino, del cual el Faraón y
Egipto son símbolos.)
3 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Yo extenderé sobre ti Mi red con reunión de muchos
pueblos, y te harán subir con Mi red. (Es una ilustración apta, «Mi red», que significa
que los Babilonios que fueron ordenados por el SEÑOR para derribar a Egipto, lo
que hicieron.)
4 Y te dejaré en tierra, te echaré sobre la faz del campo, y haré que se sienten sobre
ti todas las aves del Cielo, y saciaré de ti a las bestias de toda la Tierra.
5 Y pondré tus carnes sobre los montes, y llenaré los valles de tus montones.
(Mientras el Faraón examinaba sus tropas y, sin duda, admiraba su supuesto poder,
poco se daba cuenta que su destino ya había sido decidido, y que aquellos de los
cuales él estimaba tanto pronto serían solamente cadáveres putrefactos.)
6 Y regaré de tu sangre la tierra donde nadas, hasta los montes; y los arroyos se
llenarán de ti. (El Valle del Nilo está formado por las Montañas Orientales y
Occidentales. Como las aguas fueron convertidas en sangre durante los días de
Moisés, así también la tierra será empapada con sangre en los días de
Nabucodonosor.)
7 Y cuando te habré muerto, cubriré los Cielos, y haré entenebrecer sus estrellas: el
sol cubriré con nublado, y la luna no hará resplandecer su luz. (Este Versículo se
refiere a la plaga de las tinieblas que tomó a Egipto durante la época de Moisés
[Éxo_10:21]. En ese entonces fue literal; ahora es poético, y tiene la intención de
vencer los gobiernos imperiales y ejecutivos. Como tal, su luz se apagará y ellos no
existirían más.)
8 Todas las lumbreras de luz haré entenebrecer en el Cielo por ti, y pondré tinieblas
sobre tu tierra, dice el SEÑOR Dios. (Este Versículo, aunque oscuro y poco estimado
[como sus Pasajes circundantes], tiene mucho que ver con el levantamiento y caída
de las naciones. El grado de su Juicio tiene que ver con la Luz que una vez les fue
dada, y rechazada.)
9 Y entristeceré el corazón de muchos pueblos, cuando llevaré tu quebrantamiento
sobre las naciones, por las tierras que no conociste. (La idea es: con respecto al
«entristeceré el corazón», si Egipto no pudo contra los poderosos Babilonios, ¿dónde
quedaban las naciones más pequeñas y débiles?)
10 Sí, haré que muchos pueblos se quedan atónitos por ti; y a causa de ti sus reyes se
estremecerán de terror, cuando Yo blandiere mi espada delante de sus rostros: y
temblarán a cada momento, cada cual por su propia vida, en el día de tu caída. (La
idea de este Versículo declara la impotencia de aquellos quienes se habían jactado
de su invencibilidad, y de este modo, «tiemblan a cada momento». Los hombres
fácilmente pueden jactarse de su poder, pero cuando Dios comienza a hacer sentir
Su Poder, los poderosos esfuerzos de hasta los más fuertes rápidamente muestran ser
insignificantes.)
11 Porque así dice el SEÑOR Dios: La espada del rey de Babilonia vendrá sobre ti.
(Bien claro, el Profeta declara la próxima destrucción de Egipto por los Babilonios,
y aun varios años antes de que en realidad aconteció, pero sin ninguna respuesta del
Faraón. El Faraón no creyó en Jehová, ¿entonces por qué debía creer a Su Profeta?)
12 Con espadas de fuertes haré caer tu pueblo; todos ellos serán los fuertes de las
naciones: y destruirán la soberbia de Egipto, y toda su multitud será deshecha. (La
frase, «Y destruirán la soberbia de Egipto», se refiere al orgullo de Egipto, que estaba
jactándose por medio del Faraón-Hofra; sin embargo, esta «soberbia» sería
destruida, como él fue estrangulado y muerto por sus propios hombres.)
13 Todas sus bestias destruiré de sobre las muchas aguas: ni más las enturbiará pie
de hombre, ni pezuña de bestias las enturbiarán. («Pie de hombre», corresponde a los
individuos quienes pedaleaban unos aparatos diseñados para levantar el agua del
Nilo para irrigar la tierra. La invasión de Nabucodonosor causaría que el ganado
fuera matado o llevado como premio de guerra, con toda la irrigación detenida, que
significa que las cosechas serían inexistentes ese año.)
14 Entonces haré asentarse sus aguas, y haré ir sus ríos como aceite, dice el SEÑOR
Dios.
15 Cuando asolaré la tierra de Egipto, y la tierra fuere asolada de su plenitud, cuando
heriré a todos los que en ella moran, sabrán que Yo soy el SEÑOR. (La idea es: los
paganos no creyeron las Profecías, a los Profetas ni a Jehová Quien los enviaba; sin
embargo, su incredulidad no tendría ningún afecto sobre el cumplimiento de estas
Profecías. Ellos sabrían que Jehová era «el SEÑOR Dios», en contraste con sus
dioses, que no tenían poder alguno contra el Altísimo.)
16 Esta es la lamentación, y han de cantarla: las hijas de las naciones la cantarán:
lamentarán sobre Egipto, y sobre toda su multitud, dice el SEÑOR Dios. (En las
mentes de los paganos, la disputa siempre estaba entre los dioses. Por lo tanto, antes
del hecho, era risible la idea de que Jehová, Quien ya había sufrido derrota por los
Babilonios [al menos en su concepto], fuera más fuerte que sus dioses. Y luego,
cuando la destrucción vino, su «lamentación» fue enorme, no solamente por la
destrucción de Egipto, sino por la prueba de Jehová a sus dioses ¡que los puso en
peligro, también!)
17 Y aconteció en el año duodécimo, a los quince días del mes, que vino a mí palabra
del SEÑOR, diciendo (estos Pasajes son algunos de los pocos que permiten un vistazo
momentáneo al misterio espantoso del mundo del espíritu):
18 Hijo de hombre, lamenta sobre la multitud de Egipto, y despéñalo a él, y a las hijas
de las naciones poderosas, a lo profundo de la Tierra, con los que descienden al
abismo. (Las frases, «A lo profundo de la Tierra» y «Al abismo», se refiere al
«Infierno». Este, como se ha dicho, está en el centro de la Tierra. ¡La pérdida de su
nación fue espantosa por decir lo menos, pero la pérdida de sus almas fue aun peor!
De este modo, el Espíritu Santo registra el hecho.)
19 Porque eres tan hermoso, desciende, y yace con los incircuncisos. (La palabra,
«incircuncisos», ocurre unas diez veces en esta Profecía. Expresa una relación no
existente con Dios y corresponde a la palabra moderna «inconverso».)
20 Entre los muertos a espada caerán: a la espada es entregado: traedlo a él y a todos
sus pueblos. (La fiase, «Los muertos a espada caerán», se repite doce veces en esta
Profecía. Significa el Juicio Divino.)
21 De en medio del Seol hablarán a él los fuertes de los fuertes, con los que le
ayudaron, que descendieron, y yacen con los incircuncisos muertos a espada. (Los
«fuertes» se refieren a los otros Faraones y a los otros reyes poderosos, tales como
los Asirios, quienes ya habían ido al Infierno y «le hablarán a él», es decir, al Faraón.
Eso de lo que ellos hablarán no serán palabras de aliento, respeto ni estima, sino en
cambio palabras de escarnio.)
22 Allí está Asiria con toda su multitud: a su alrededor están sus sepulcros: todos
ellos cayeron muertos a espada (la palabra, «sepulcros» al menos en este caso, se
refiere a la tumba o el sepulcro, el lugar del cuerpo, no el lugar del alma. Solamente
significa que ellos habían muerto, con los siguientes Versículos que relatan la morada
eterna de sus almas y espíritus).
23 Sus sepulcros fueron puestos a los lados de la fosa, y su gente está por los
alrededores de su sepulcro: todos ellos cayeron muertos a espada, los cuales
sembraron el terror en la tierra de los vivientes. (La idea es: los más poderosos de los
poderosos en la Tierra, cuando están en el Infierno, no tendrán más dominio ni
influencia que el más bajo de los humildes.)
24 Allí Elam, y toda su multitud por los alrededores de su sepulcro: todos ellos
cayeron muertos a espada, los cuales descendieron incircuncisos a los más profundos
lugares de la tierra, porque pusieron su terror en la Tierra de los vivientes, pero
llevaron su vergüenza con los que descienden al abismo. (La frase, «Su vergüenza»,
se refiere al hecho de que en la Tierra ellos estaban vestidos de honra, mientras en el
Seol, estaban vestidos de vergüenza.)
25 En medio de los muertos le pusieron cama para ella con toda su multitud: a sus
alrededores están sus sepulcros: todos ellos incircuncisos muertos a espada, porque
fue puesto su espanto en la tierra de los vivientes, pero llevaron su vergüenza con los
que descienden al abismo: él fue puesto en medio de los muertos. (El pronombre
«ellos», se refiere a Asiria y Elam. El pronombre «ella» se refiere a Egipto; el
pronombre «él» se refiere al Faraón.)
26 Allí Mésec, Tubal y toda su multitud: sus sepulcros están todo alrededor de él:
todos ellos incircuncisos muertos a espada, porque sembraron su terror en la tierra de
los vivientes. (El pronombre «él» se refiere otra vez al Faraón. Él está en medio de
estos otros caídos y muertos: «Mésec, Tubal» y los demás mencionados.)
27 Y no yacerán con los fuertes que cayeron de los incircuncisos, los cuales
descendieron al Infierno con sus armas de guerra, y pusieron sus espadas debajo de
sus cabezas: pero sus pecados estarán sobre sus huesos, porque fueron terror de fuertes
en la tierra de los vivientes. (La idea es que «Mésec» y «Tubal» tienen un lugar más
profundo en el Infierno, si tal es posible. «Los cuales descendieron al Infierno con
sus armas de guerra», no significa que tales artículos fueron llevados al Infierno con
sus almas perdidas, sino que no había honra alguna en su muerte, y ellos fueron
sepultados sin honra de guerra. En otras palabras, las espadas no estaban colocadas
debajo de sus cabezas en su entierro.)
28 Tú pues serás quebrantado entre los incircuncisos, y yacerás con los muertos a
espada.
29 Allí Edom, sus reyes y todos sus príncipes, los cuales con su poderío fueron
puestos con los muertos a espada: ellos yacerán con los incircuncisos, y con los que
descienden al abismo. (¡«Allí Edom», se emplea por el Espíritu Santo como una
exclamación! Se dice de esta manera debido a la exaltación que los Edomitas habían
demostrado sobre la caída de Jerusalén [Sal_137:7] que había agravado su
condición espiritual ya arriesgada. Como tal, esto garantizaría su destrucción.)
30 Allí los príncipes del norte, todos ellos, y todos los Sidonios, que con su terror
descendieron con los muertos, avergonzados de su poderío, yacen también
incircuncisos con los muertos a espada, y comparten su confusión con los que
descienden al abismo. (En la medida en que el Espíritu Santo por medio del Profeta
nombra los «Sidonios» y los «príncipes del norte», sugiere la dirección de la Asiria
del Norte, que incluye ciudades como Damasco, Jamat, Arfad, y otras. ¡Estas también
se fueron al Infierno!)
31 A estos verá el Faraón, y se consolará sobre toda su multitud; al Faraón muerto a
espada, y todo su ejército, dice Dios el SEÑOR. (Mientras las otras naciones fueron
regocijándose que el Faraón se reuniría con ellos en el Infierno y del mismo modo
comparten su miseria, ahora el Faraón se regocija al ver a otros venir a compartir
su miseria. Todos son compartidores iguales en el genio diabólico que exalta en las
miserias de los demás.)
32 Porque puse Mi terror en la tierra de los vivientes, también el Faraón y toda su
multitud yacerán entre los incircuncisos con los muertos a espada, dice Dios el
SEÑOR. (La selección de Nabucodonosor como la «espada» y «terror» de Dios es
uno de los grandes hechos de las Escrituras. La espada humilló a Egipto, en el cual
Israel confiaba. También humilló a todas las naciones vecinas y, de este modo,
destruyó muchas trampas en las cuales estaban atrapados los hijos de Israel. Todos
estos juicios hablan de un día futuro, y será seguido por el establecimiento en Gracia
de las naciones redimidas en unión con el Nuevo Israel [Isa_19:1-25], formando de
este modo un solo rebaño de Jua_10:16 en el cuidado Pastoral del Mesías.)

33
"Ezequiel, atalaya de Israel"
(587 a.C.)
1 Y VINO a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere Yo espada
sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de sus términos, y se lo
pusiere por centinela (una gran parte de este Capítulo trata con el Ministerio del
«centinela», al cual Ezequiel es ordenado por el SEÑOR. En Eze_24:15-27, el Profeta
ha sido sometido a silencio, al menos en cuanto a Israel, pero ahora le es permitido
resumir su ministerio a los Exiliados),
3 Y si al ver la espada venir sobre la tierra, y tocare la trompeta y avisare al pueblo
(la responsabilidad del «centinela» es «ver» y «advertir» correctamente. Él había de
«advertir» por «tocar la trompeta». El Predicador moderno debe hacer lo mismo al
predicar correctamente el Verdadero Evangelio [1Co_1:17]);
4 Entonces cualquiera que oiga el sonido de la trompeta, y no tomare aviso, de modo
que viniere la espada y le arrebatare, su sangre será sobre su propia cabeza. (Si se
puede notar, hay una exigencia por el Espíritu Santo que demanda que al pueblo le
sea permitido «oír» la Verdad. Lo que ellos hagan estará «sobre su propia cabeza».)
5 El sonido de la trompeta oyó, y no se dio por avisado; su sangre será sobre él: pero
el que hubiera seguido el aviso, salvará su vida. (La oportunidad de aceptar o
rechazar es demandada por el Espíritu Santo. Por lo tanto, es necesario que el
Verdadero Predicador del Evangelio dé aviso cierto y seguro. La responsabilidad
luego cae sobre el oidor. Si él «no se dio por avisado» la pérdida de su alma será su
propia responsabilidad.)
6 Pero si el centinela viere venir la espada, y no tocare la trompeta, y el pueblo no es
avisado, y viniendo la espada, tomare de él alguno; por causa de su pecado fue
tomado, pero demandaré su sangre de mano del centinela. (Dos tipos de advertencia
se dan en este Pasaje: el «aviso» que el centinela fiel debía haber dado al pueblo; y
el «aviso» que el Espíritu Santo debía haber dado al centinela infiel.)
7 Tú pues, hijo de hombre. Yo te he puesto por centinela a la Casa de Israel, y oirás
la palabra de Mi boca, y les advertirás de Mi parte. (La comisión es dada otra vez a
Ezequiel. Él es llamado, «hijo de hombre», que es la misma designación que será
dado al «Hijo del Hombre» el SEÑOR Jesucristo, [Mat_13:37; Luc_9:44;
Luc_9:56].)
8 Cuando Yo le diga al impío: Impío, de cierto morirás; si tú no hablares para que se
guarde el impío de su camino, el impío morirá por su pecado, pero Yo demandaré su
sangre de tu mano. (Este Capítulo es similar en muchas maneras y en gran parte al
Capítulo Eze_3:1-27. La repetición, debido a la seriedad extrema del asunto, es a
propósito.)
9 Y si tú, de tu parte adviertes al impío para que se aparte de su camino, y él no se
apartare de su camino, por su pecado morirá él, y tú libraste tu vida. (El Verdadero
Predicador no es responsable por la respuesta que el individuo da al Mensaje, sino
el Verdadero Predicador definitivamente es responsable que el Mensaje correcto sea
entregado.)
"¿Por qué has de morir, Israel?"
10 Tú pues, hijo de hombre, di a la Casa de Israel: Vosotros habéis hablado así,
diciendo: Nuestras rebeliones y nuestros pecados están sobre nosotros, y a causa de
ellos somos consumidos: ¿cómo pues viviremos? (Estas Escrituras tratan del
escarnio, la incredulidad y mofa acumulada sobre el Profeta, cuando él habló del
juicio venidero. El pueblo confiaba en las promesas de los falsos profetas [Eze_13:6].
Ahora ellos se enfrentan cara a cara con el cumplimiento de las palabras del Profeta.
La pregunta, «¿Cómo pues viviremos?», declara la impotencia del pueblo, hasta tal
punto que ellos ahora se dan cuenta de la seriedad de su pecado.)
11 Diles: Vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, que no quiero la muerte del impío, sino que
se aparte de su camino y viva. Volveos, volveos de vuestros caminos: ¿y por qué
moriréis, oh Casa de Israel? (¡Este es un ruego para el Arrepentimiento, sin lo cual
estos individuos serán perdidos!)
12 Y tú, hijo de hombre, di a los hijos de tu pueblo: La justicia del justo no lo librará
el día que se rebelare; y la impiedad del impío no le será estorbo el día que se volviere
de su impiedad; y el justo no podrá vivir por su justicia el día que pecare. (Este Pasaje
y muchos otros son una reprimenda simple y clara a aquellos quienes enseñan la
doctrina no según las Escrituras de la Seguridad Eterna Incondicional. Si el Creyente
se aparta de su justicia y comienza a vivir una vida de pecado y rehúsa arrepentirse,
él morirá perdido. A la inversa, si el individuo impío detiene su impiedad por
convertirse al SEÑOR, su impiedad no será contra él.)
13 Cuando Yo le diga al justo: De cierto vivirá, y él confiado en su justicia hiciere
iniquidad, todas sus justicias no vendrán en memoria, sino que morirá por su iniquidad
que hizo. (La idea de este Versículo es: si un individuo cree que puede confiar en sus
justicias pasadas para salvarle cuando él ha cometido pecado y continúa en ellos, y
rehúsa arrepentirse, «todas sus justicias [pasadas] no vendrán en memoria». Otra
vez, esto completamente refuta la doctrina no según las Escrituras de la Seguridad
Eterna Incondicional.)
14 Y cuando Yo le diga al impío: De cierto morirás; si él se volviere de su pecado, e
hiciere juicio y justicia,
15 Si el impío restituyere la prenda, devolviere lo que hubiere robado, caminare en
las ordenanzas de la vida, no haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá.
(«Devolviere lo que hubiere robado», ilustra el poder de la nueva vida en Cristo para
cumplir los requisitos de la Ley Moral como fue mostrado en la conversión de Zaqueo
[Luc_19:1-10].)
16 No se le recordará ninguno de sus pecados que había cometido: hizo juicio y
justicia; vivirá ciertamente. (La primera parte de este Versículo constituye la
justificación por la Fe. Estos pecados ya no se mencionan más porque en la Mente de
Dios ya no existen y de hecho nunca han existido. «Vivirá ciertamente», constituye la
Salvación, es decir, «la experiencia de nacer de nuevo», que anula la muerte
espiritual [Jua_3:3]. Esto constituye la cosa más grande que jamás pudiera acontecer
a cualquier corazón y vida humana.)
17 Luego dirán los hijos de tu pueblo: No es recto el camino del SEÑOR: Pero el que
no es recto es el camino de ellos. (Israel, como la mayoría, estaba afirmando que su
justicia e injusticia debía balancearse la una contra la otra. Ellos interpretaron los
Caminos del SEÑOR como que no eran cabales, en la medida en que Él no juzgara
de esa manera. De hecho, no eran los Caminos de Dios que no eran cabales, sino los
suyos. Aun en la aplicación práctica de la vida, lo que ellos habían afirmado, el
balance del uno contra el otro, no es verídico. Por ejemplo, si un hombre vive 1.000
días sin tomar veneno y luego en el día 1.001 toma el veneno, todos los días anteriores
libres del veneno no mitigará los resultados.)
18 Cuando el justo se apartare de su justicia, e hiciere iniquidad, morirá por ello. (El
Espíritu Santo es enfático en que la condición presente es lo que vale para con Dios;
también es lo que debe valer para con el hombre.)
19 Y cuando el impío se apartare de su impiedad, e hiciere juicio y justicia, vivirá por
ello. (Además, el SEÑOR juzga al «impío» exactamente como el juzga a los «justos»,
todo conforme a su estatus presente. Si el impío se arrepiente, el SEÑOR al instante
lo salva, horrando toda la impiedad pasada.)
20 Y si dijereis: No es recto el camino del SEÑOR. Yo os juzgaré, oh Casa de Israel,
a cada uno conforme a sus caminos. (El amor perfecto se vislumbra en el Versículo
11; la justicia perfecta, en el Versículo 20. El juicio es justo, equitativo, parejo y
correcto en que «a cada uno se juzgará conforme a sus caminos», que demuestra la
imparcialidad.)
 Jerusalén derribada
21 Y aconteció en el año duodécimo de nuestro cautiverio, en el mes décimo, a los
cinco días del mes, que vino a Mí un escapado de Jerusalén, diciendo: La ciudad ha
sido conquistada. (La frase, «La ciudad ha sido conquistada», aunque dicho por el
mensajero [quienquiera que fuera], se da con un sollozo por el Espíritu Santo. ¡Cuán
innecesario fue esto! ¡Pero aun, fue hecho después de que el SEÑOR había agotado
todos los medios para traer al pueblo al Arrepentimiento, pero en vano!)
22 Y la mano del SEÑOR había sido sobre mí la tarde antes que el escapado viniese,
y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya yo
no estaba mudo. («Y abrió mi boca, y ya yo no estaba mudo», se refiere atrás a
Eze_24:26-27. No se sabe exactamente durante cuanto tiempo no le fue permitido
profetizar con respecto a Judá. Pero ahora él ha de profetizar otra vez.)
23 Y vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
24 Hijo de hombre, los que habitan aquellos desiertos en la tierra de Israel, hablando
dicen: Abraham era uno, y poseyó la tierra: pues nosotros somos muchos; a nosotros
es dada la tierra en posesión. (¡El argumento de este remanente impío era que si una
nación poderosa era nacida de un solo hombre, Abraham, cuanto más poderosa una
nación pudiera ser engendrada de muchos hijos de Abraham quienes fueron dejados
en Judá por el rey Babilonio! De hecho, la fe que dijo, «a nosotros es dada la tierra
en posesión», era una fe orgulloso y camal y no sería honrada por Dios. El juicio
sobre sus iniquidades, no bendiciones tomadas a la fuerza por la presunción, sería el
resultado de su manera de pensar carnal e impía.)
25 Por tanto, diles: Así ha dicho Dios el SEÑOR: ¿Comeréis con sangre, y a vuestros
ídolos alzaréis vuestros ojos, y derramaréis sangre, y poseeréis vosotros la tierra?
(«Comer con sangre» violaba Lev_19:26 y fue hecho en honra a un ídolo. Por
consiguiente, este fue un pecado doble contra la Ley. Aunque ellos afirmaron ser hijos
de Abraham [por lo tanto, Hijos de Dios], ellos eran idólatras, confiaban en sí
mismos, violentos e impuros.)
26 Estuvisteis sobre vuestras espadas, hicisteis abominación, y contaminasteis cada
cual a la mujer de su prójimo: ¿y habréis de poseer la tierra? (El Espíritu Santo por
medio del Profeta, aunque a centenares de kilómetros distantes del Judá destruido,
todavía, habla lo mismo como el Profeta Jeremías había profetizado. A pesar del
juicio, este «remanente» en Judá continuaba siendo idólatra, rebelde contra Dios y
dependiente sobre su propia débil preparación militar; esto en realidad rayaba en la
idiotez, puesto que ellos eran un pueblo derrotado.)
27 Les dirás así: Así ha dicho Dios el SEÑOR: Vivo Yo, que los que están en aquellos
lugares asolados caerán a espada, y al que está sobre la faz del campo entregaré a las
bestias que lo devoren; y los que están en las fortalezas y en las cuevas, de pestilencia
morirán. (Con respecto al remanente impío en Judá, Ezequiel profetiza, exactamente
como Jeremías había profetizado, que no había escape para ellos de la Mano de Dios
que les juzgaría, y con razón, debido a su rebelión.)
28 Y convertiré la tierra en soledad y desolación, y cesará la soberbia de su poderío;
y los montes de Israel serán asolados hasta que no haya quien pase. (¡Con respecto a
Judá, la frase, «Y cesará la soberbia de su poderío», se cumplió en realidad absoluta,
innegable para todos!)
29 Y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando pusiere la tierra en soledad y desolación,
por todas las abominaciones que han hecho. (En cualquier momento en el transcurso
de este tiempo, si se hubieran ocupado en el Arrepentimiento de estas
«abominaciones», hubieran sido perdonados al instante, con Misericordia y Gracia
extendida a ellos. ¡Puesto que no había Arrepentimiento, sus pecados, es decir, las
«abominaciones», trajo la desolación, así como lo mismo traerá desolación a
cualquier nación, corazón, o vida!)
30 Y tú, hijo de hombre, los hijos de tu pueblo se mofan de ti junto a las paredes y a
las puertas de las casas, y habla el uno con el otro, cada uno con su hermano, diciendo:
Venid ahora, y oíd qué palabra sale del SEÑOR. (En algunas versiones la palabra
«de» fue traducido «contra» que no sería correcto. Por lo tanto, cuando dice «se
mofan de ti», significa que los Exiliados estaban orgullosos de su Profeta Ezequiel,
que admiraban su prédica y se juntaron a escucharle, pero ni siquiera por un
momento tenían la intención de efectuar un cambio de conducta en sus vidas.
Características similares se presentan hoy en día en la Iglesia Cristiana profesante.)
31 Y vendrán a ti como viene el pueblo, y se estarán delante de ti como Mi pueblo, y
oirán tus palabras, y no las pondrán por obra: antes hacen halagos con sus bocas, y el
corazón de ellos anda en pos de su avaricia. (Las palabras, «Como Mi Pueblo»,
significa «que profesan ser Mi Pueblo». «Su avaricia», se refiere a la adquisición del
dinero y todas las formas del egoísmo. «Antes hacen halagos con sus bocas», significa
que ellos profesan amor pero en verdad no tienen el amor de Dios, ni de Dios.)
32 Y he aquí que tú eres a ellos como cantor de amores, gracioso de voz y que canta
bien: y oyen tus palabras, pero no las pondrán por obra. («Como cantor de amores»,
se refiere al pueblo que venía a escuchar al Profeta como ellos oirían a un cantor
contratado para un banquete. Hicieron caso omiso a las palabras del Profeta y no
les dejó ninguna impresión duradera.)
33 Sin embargo, cuando ello viniere (he aquí viene) sabrán que hubo Profeta entre
ellos. (La Revelación de la corrupción rebelde de los corazones de los oidores guardó
el Profeta de la corrupción complacida de sí de su propio corazón, que su
popularidad como un Predicador desde luego incitaría. «Cuando ello viniere», se
refiere atrás a los Versículos Eze_33:10-20 y demanda arrepentimiento. Significa que
a menos que ellos se arrepintieran, «seguramente morirán». El Espíritu Santo hace
énfasis en la declaración por medio de decir, «he aquí viene», que significa la hora
del destino eterno. Cuando esta hora viene, ellos «sabrán que hubo Profeta entre
ellos», y que ellos habían estado escuchando, no a un cantor contratado, sino a un
Profeta de Jehová.)
34
Profecía contra los pastores de Israel
(587 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR diciendo:
2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y diles a los
pastores: Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¡Ay de los pastores de Israel, que se
apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores los rebaños? (Los «pastores» de
este Capítulo se refiere a los dirigentes, más específicamente, los últimos cuatro reyes
de Judá; sin embargo, el sentido general definitivamente incluye a los líderes
espirituales de cualquier índole.)
3 Coméis la leche, y os vestís de la lana: la gruesa degolláis, no apacentáis las ovejas.
(El único motivo de estos falsos pastores es adquirir, en lugar de dar.)
4 No fortalecisteis las flacas, ni curasteis la enferma: no vendasteis la perniquebrada,
ni volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida; sino que con fuerza las
habéis regido, y con crueldad. (Las «flacas» son las ovejas débiles, mientras la
«enferma» son aquellas quienes están sufriendo más enfermedades definidas. La
«perniquebrada» son aquellas que han caído de una roca, o de algo así como un
precipicio y se lastimaron y quedaron lisiadas. Cada caso requería el tratamiento
apropiado. Además, el cuádruplo «no» y «ni» se debe notar. La idea es: ¡el Espíritu
Santo denota cada necesidad en particular y el cuidado requerido para esa necesidad
por los verdaderos pastores, que ellos no eran!)
5 Y así es como Mis ovejas fueron esparcidas por falta de pastor; y son presa de todas
las fieras del campo, y se han dispersado. (No tenían verdadero pastor para
protegerlas [Mat_9:36].)
6 Y anduvieron perdidas mis ovejas por todos los montes, y por toda colina alta: y en
toda la faz de la Tierra fueron esparcidas Mis ovejas, y no hubo quien las buscase, ni
quien preguntase por ellas. (Del Reino del Norte de Israel, ni siquiera un solo pastor,
es decir, rey, era Piadoso. Reconocidamente, unos cuantos en Judá eran Piadosos,
pero de los últimos cuatro, como dicho, todos eran menos Piadosos. Estos cuatro
eran: Joacaz, Joacim, Joaquín y Sedequías.)
7 Por tanto, pastores, oíd palabra del SEÑOR (a Ezequiel se le había dicho «oirás la
Palabra de Mi Boca y los amonestarás de Mi parte» [Eze_33:7], y ahora vendrá la
advertencia vendrá, entregada fielmente por el Profeta):
8 Vivo Yo, ha dicho el SEÑOR Dios, que por cuanto Mi rebaño se ha convertido en
objeto de presa, y Mis ovejas han venido a ser comida de toda bestia del campo, sin
pastor; ni Mis pastores buscaron Mis ovejas, sino que los pastores se apacentaron a sí
mismos, y no apacentaron Mis ovejas (¡«Vivo Yo, ha dicho el SEÑOR Dios», es
efectivamente fuerte! En realidad es un voto tomado por el SEÑOR que los pastores
serían destruidos, al grado como ellos destruyeron las ovejas. ¡El moderno
«evangelio de avaricia» encuadra en esta descripción!);
9 Por tanto, oh pastores, oíd palabra del SEÑOR:
10 Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí. Yo estoy contra los pastores; y requeriré
Mis ovejas de su mano, y les haré dejar de apacentar las ovejas: ni los pastores se
apacentarán más a sí mismos; pues Yo libraré Mis ovejas de sus bocas, y no les serán
más por comida. (Esto no se cumplirá hasta la Edad del Reino venidero, cuando Israel
por fin aceptará al Gran Pastor, el SEÑOR Jesucristo [Zac_13:1].)
El Señor Dios recogerá a sus ovejas
11 Porque así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí. Yo, Yo Mismo iré a buscar Mis
ovejas, y las reconoceré. (La acción, el amor y la ausencia del egoísmo del Verdadero
Pastor están indicados en los Versículos Eze_34:11-16.)
12 Como reconoce su rebaño el pastor el día que está en medio de sus ovejas
esparcidas, así reconoceré Mis ovejas, y las libraré de todos los lugares en que fueron
esparcidas el día del nublado y de la oscuridad. (El «día del nublado y de la
oscuridad» se refiere a la Gran Tribulación próxima, cuando Israel estará al borde
del exterminio. Zacarías dijo que dos tercios del pueblo serán destruidos
[Zac_13:8].)
13 Y Yo las sacaré de los pueblos, y las juntaré de las tierras: y las meteré en su tierra,
y las apacentaré en los montes de Israel por las riberas, y en todas las habitaciones del
país. («Y las meteré en su tierra», se refiere al país prometido a Abraham, Isaac y
Jacob; suyo para siempre — la Tierra de Israel.)
14 En buenos pastos las apacentaré, y en los altos montes de Israel será su majada:
allí dormirán en buena majada, y en pastos gruesos serán apacentadas sobre los
montes de Israel. (La repetición dada en los Versículos Eze_34:13-14 fue hecha a
propósito. El Espíritu Santo pone en alto relieve la verdad de la sinceridad, paz,
satisfacción, cumplimiento y aceptación. Todo esto por fin se hace debido a una
relación recta con Cristo. Esto acontecerá, como dicho, durante la Edad del Reino
venidero.)
15 Yo apacentaré Mis ovejas, y Yo les haré tener majada, dice el SEÑOR Dios. («Yo
apacentaré Mis ovejas», se refiere al cuidado tierno del Pastor que vigila con un
cuidado individualizado sobre cada oveja que ha sido devuelta. Toda extremidad
quebrada será vendada. Toda enfermedad será tratada con su medio apropiado de
sanidad. «Y las haré yacer tranquilas», se refiere a la serenidad, paz, seguridad,
protección, dependencia, confianza y certidumbre total sobre el SEÑOR, el Gran
Pastor.)
16 Yo buscaré la perdida, y traeré de regreso a las descarriadas, y vendaré la
perniquebrada, y fortaleceré la enferma: pero a la gorda y fuerte destruiré. Yo las
apacentaré en juicio. (En este Versículo, «La gorda y fuerte» es contrastada con la
«perniquebrada» y la «enferma». La idea es: Cuando Él venga, el Gran Pastor, el
SEÑOR Jesucristo, «destruirá la gorda y fuerte», que se refiere a las naciones del
mundo que se unieron con el Anticristo, en su intento para destruir Israel. Ellos serán
«apacentados en juicio», y no más será dado lugar y posición con respecto a la
supremacía.)
17 Pero vosotras, ovejas Mías, así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo juzgo entre
oveja y oveja, entre carneros y machos cabríos. (Este Pasaje en realidad tiene que ver
con el juicio de las naciones, que tomará lugar inmediatamente después de la
Segunda Venida de Cristo [Mat_25:31-33].)
18 ¿Os es poco que comáis los buenos pastos, sino que holléis con vuestros pies lo
que de vuestros pastos queda; y que bebiendo las aguas sentadas, holléis también con
vuestros pies las que quedan? (Esto corresponde a las naciones del mundo que,
durante el tiempo de la Gran Tribulación, intentarán dañar a Israel.)
19 Y mis ovejas comen lo hollado de vuestros pies, y beben lo que con vuestros pies
habéis hollado. (En otras palabras, los Judíos, al menos en las mentes de muchos,
fueron considerados como desperdicios.)
20 Por tanto, así les dice el SEÑOR Dios: He aquí. Yo, Yo juzgaré entre la oveja
gorda y la oveja flaca. (En el comienzo de la Edad del Reino, el SEÑOR juzgará a
todas las naciones, y el juicio será conforme a como ellos trataron a Israel.)
21 Por cuanto empujasteis con el lado y con el hombro, y acorneasteis con vuestros
cuernos a todas las flacas, hasta que las esparcisteis fuera (¡no importa si fueron
naciones que se enseñorearon sobre los Judíos, o los falsos pastores de Israel, todos
tendrán que responder!).
22 Yo salvaré a Mis ovejas, y nunca más serán en rapiña; y juzgaré entre carnero y
carnero. («Entre carnero y carnero», probablemente hubiera sido mejor traducido,
«entre oveja y oveja». En la Edad del Reino venidero, y después de que Israel ha
aceptado a Cristo, ya no estarán más a la merced del mundo, así como han estado
durante tantos siglos.)
23 Y despertaré sobre ellas un pastor, y él las apacentará; a Mi siervo David: él las
apacentará, y él les será por pastor. (El Texto Griego lee así, «Un Solo Pastor», eso
es, Un Preeminente y Único Pastor — el Único de Su índole, al Cual ninguno es
comparable. La palabra «David» aquí significa «El Amado», es decir, el Verdadero
David, el Mesías [Isa_55:3-4; Jer_30:9; Ose_3:5]. Sin embargo, como se refiere al
«Hijo de David», también se refiere a «David» el mismo David quien fue escogido
por Dios y ungido por Samuel. ¡El gobernará Israel bajo Cristo!)
24 Yo el SEÑOR les seré por Dios, y Mi siervo David príncipe en medio de ellos. Yo
el SEÑOR he hablado. (La frase, «Y Mi siervo David príncipe en medio de ellos»,
cumple la promesa hecha a David por el SEÑOR, como registrado en 2Sa_7:8-29.)
 Pacto de paz del Señor
25 Y estableceré con ellos pacto de paz, y haré cesar de la tierra las malas bestias; y
habitarán en el desierto con seguridad, y dormirán en los bosques. («Y estableceré con
ellos pacto de paz», será llevado a cabo, y puede ser llevado a cabo, debido a la
aceptación de Israel de Cristo. «Y haré cesar de la tierra las malas bestias», es un
eufemismo que se refiere a los espíritus demoníacos como «bestias».)
26 Y daré a ella, y a los alrededores de Mi colina, bendición; y haré descender la
lluvia en su tiempo, habrá lluvias de bendición. (La frase, «Habrá lluvias de
bendición», ¡primeramente se refiere a las bendiciones espirituales que producirán
las bendiciones económicas, físicas y domésticas, también!)
27 Y el árbol del campo dará su fruto, y la tierra producirá cosechas abundantes, y
estarán sobre su tierra con seguridad; y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando
quebrare las coyundas de su yugo, y los libre de mano de los que se sirven de ellos.
(Hay dos detalles que están anotados en esta Escritura: la primera es, el «fruto, la
producción de cosechas abundantes y la seguridad»; el segundo es, «coyundas rotas
y liberación». Lo anterior es el resultado del posterior.)
28 Y no serán más presa de los paganos, ni las bestias de la Tierra las devorarán; sino
que habitarán con seguridad, y no habrá quien las espante. (Por fin, Israel será lo que
el SEÑOR había determinado todo el tiempo. ¡Como dicho, será durante la Edad del
Reino venidero!)
29 Y levantaré para ellos una planta de renombre, y no serán ya más consumidos de
hambre en la tierra, ni ya más serán avergonzados por las naciones. (La «Planta de
Renombre» no es nada menos que el SEÑOR Jesucristo, a Quien ellos rechazaron,
pero ahora lo aceptarán. Esa «Planta» será tan rica con nutrimento que los que se
alimentan de ella no experimentarán más el aprieto del hambre, y su condición alegre
conseguirá Renombre para la Planta y no para ellos mismos. Sin embargo, al
conseguirlo para «Él», ellos, al mismo tiempo lo conseguirán para ellos mismos.)
30 Y sabrán que Yo, el SEÑOR su Dios, estoy con ellos, y ellos son Mi pueblo, la
Casa de Israel, dice Dios el SEÑOR. (Aunque ellos son el pueblo de Dios, todavía,
abandonaron al SEÑOR; por consiguiente, Él no ha estado con ellos, excepto de lejos,
durante unos 2.000 años. Ahora, al aceptarle, el SEÑOR Jesucristo, esta «Planta de
Renombre», este «Renuevo» [Isa_4:2; Isa_11:1; Jer_23:5; Jer_33:15], ellos sabrán
que Él «está con ellos». Luego el SEÑOR genuinamente podría decir de ellos, «Ellos
son Mi Pueblo».)
31 Y vosotras, ovejas Mías, ovejas de Mi pasto, hombres sois, y Yo vuestro Dios,
dice el SEÑOR Dios. (La idea de este Versículo es que aunque la palabra «oveja»
fue empleada como metáfora, todavía, el SEÑOR está hablando de «hombres», y no
meramente de «ovejas». Pero hay aquí también un significado más profundo.
«Hombres» inútiles y pecaminosos nunca podrían realizar tales maravillas,
solamente el Dios Quien es Adonai-Jehová.)
35
Profecía contra el monte Seir
(587 a.C.)
1 Y VINO a mí Palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, pon tu rostro hacia el Monte de Seír, y profetiza contra él (esta
Profecía corresponde a Edom; por lo tanto, deja el futuro glorioso y vuelve al
presente destituido. Una de las glandes razones para la Ira de Dios contra Edom es
la ira de este país contra Israel, que no solamente se estimaba como algo personal,
sino que también fue expresivo de la enemistad del hombre contra al pueblo de Dios
en todas las edades),
3 Y dile: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí Yo estoy contra ti, oh Monte de Seír,
y extenderé Mi mano contra ti, y te convertiré en desolación y en soledad. (¡Tener
una nación en contra de otra nación es una cosa, pero tener a Dios contra de una
nación es algo distinto totalmente!)
4 A tus ciudades asolaré, y tú serás asolado; y sabrás que Yo soy el SEÑOR. (Ezequiel
anteriormente había profetizado contra Edom [Eze_25:12-14], pero esa Profecía fue
unos cuantos años antes de la caída de Jerusalén. Esta Profecía es después de la
caída de la ciudad y trata de la disposición de Edom en esa época, junto con sus
pecados anteriores contra el Pueblo de Dios.)
5 Por cuanto tuviste enemistades perpetuas, y esparciste los Hijos de Israel a poder
de espada en el tiempo de su aflicción, en el tiempo extremadamente malo (Edom
había sido el enemigo hereditario desde los días de Esaú y Jacob [Gén_25:22;
Gén_27:37]; sin embargo, lo que llevaba todo esto a un punto decisivo era que Edom
se regocijaba en la caída de Jerusalén; y en realidad ellos ayudaban a los Babilonios
matar a los Israelitas. ¡Cuando ellos hicieron eso, fueron al extremo!);
6 Por tanto, vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, que a sangre te diputaré, y sangre te
perseguirá: y pues la sangre no aborreciste, sangre te perseguirá. (En que Edom no
«odiaba» ni detestaba el derramamiento de «sangre» del pueblo de Judá y Jerusalén,
el Espíritu Santo hace énfasis en que la «sangre» sería su destino — su sangre.)
7 Y pondré al Monte de Seír en asolamiento y en soledad, y cortaré de él al que va y
al que vuelve. (El SEÑOR decide aquí la controversia entre Edom e Israel. Al uno Él
sentencia desolación perpetua; al otro, la prosperidad sempiterna. ¡Este es el último
mensaje de Esaú, por decirlo así!)
8 Y llenaré sus montes de sus muertos: en tus colinas, en tus valles y en todos tus
arroyos, caerán muertos a espada. (Algunos serán ofendidos con la terminología dada
aquí. Sin embargo, nadie culpa a un cirujano por quitar una malignidad. ¡Del mismo
modo, ninguno culpará al SEÑOR por hacer lo mismo!)
9 Yo te pondré en asolamiento perpetuo, y tus ciudades nunca más se restaurarán; y
sabréis que Yo soy el SEÑOR. (El uso de la frase, «Y sabréis que Yo soy el SEÑOR»,
significa que Edom tomaría nota, de su dolor, el poder de Jehová para castigar.)
10 Por cuanto dijiste: Las dos naciones y las dos tierras serán mías, y tomaré posesión
de ellas; estando allí el SEÑOR (la palabra, «las dos naciones» se refiere a Efraín, el
Reino del Norte, y Judá, el Reino del Sur. Edom codiciaba esta Tierra. Hubieran
hecho mejor haber codiciado cualquier otra tierra en todo el mundo excepto esta
Tierra. ¡Los Palestinos y los Árabes deben leer este Pasaje, también!);
11 Por tanto, vivo Yo, dice el SEÑOR Dios, Yo haré conforme a tu ira, y conforme
a tu celo con que procediste, a causa de tus enemistades con ellos: y seré conocido en
ellos, cuando te juzgue. («Cuando te juzgue», resume este Versículo. El sufrimiento
que la gente desea para los demás a veces cae sobre ellos mismos. Lejos de que Edom
podía adquirir Israel, en última instancia ella sería privada de su propia tierra, y de
hecho perecería para siempre como nación.)
12 Y sabrás que Yo el SEÑOR he oído todas tus injurias que proferiste contra los
montes de Israel, diciendo: Destruidos son, nos han sido dados para que los
devoremos. (Perseguir a aquellos quienes son de Dios es perseguir a Dios Mismo.
Del mismo modo, calumniar a uno de los que pertenecen a Dios es calumniar a Dios
Mismo.)
13 Y os engrandecisteis contra Mí con vuestra boca, y multiplicasteis contra Mí
vuestras palabras. Yo lo oí. (¡Estos Pasajes deben servir de lección solemne para
todos! «Palabras amargas contra el pueblo de Dios están contados por Dios como
habladas contra Sí Mismo». La frase es enfática, «Yo lo oí».)
14 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Cuando se regocije toda la Tierra, a ti te haré una
desolación. (La idea es: cuando los hijos del Reino entren a su gozo, estos
aborrecedores descenderán a la perdición.)
15 Como te alegraste sobre la heredad de la Casa de Israel, porque fue asolada, así te
haré a ti: asolado será el Monte de Seír, y toda Idumea, toda ella; y sabrán que Yo soy
el SEÑOR. («Asolado será el Monte de Seír», es este Versículo en suma. ¡Es
exactamente lo que aconteció!)

36
Profecía sobre las montañas de Israel
(587 a.C.)
1 Y TÚ, hijo de hombre, profetiza sobre los montes de Israel, y di: Montes de Israel,
oíd Palabra del SEÑOR (esta Profecía está dividida en dos partes, con los Versículos
Eze_36:1-15 conectados con el Capítulo anterior, y la segunda parte comenzando
con el Versículo Eze_36:16 y terminando en Eze_37:14. El tema de la primera parte
es la restauración de Israel):
2 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto el enemigo dijo sobre vosotros: ¡Ea!
también las alturas perpetuas nos han sido por heredad (este «enemigo» era Edom);
3 Profetiza por tanto, y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Pues por cuanto os asolaron
y os tragaron de todas partes, para que fueseis heredad de los otros gentiles, habéis
subido en bocas de lenguas, e infame del pueblo (el sentido del Versículo Eze_36:3
es que los paganos culparon a Jehová de ser incapaz de proteger Su Tierra);
4 Por tanto, montes de Israel, oíd palabra del SEÑOR Dios: Así ha dicho el SEÑOR
Dios a los montes y a las colinas, a los arroyos y a los valles, a las ruinas y
asolamientos, y a las ciudades desamparadas, que fueron puestas a saco y en escarnio
de los otros gentiles alrededor (Dios castiga a Su Pueblo, como este Versículo declara,
pero destruye a sus enemigos);
5 Por eso, así ha dicho el SEÑOR Dios: He hablado por cierto en el fuego de Mi celo
contra los demás paganos, y contra toda Edom, que se disputaron Mi tierra por
heredad con alegría de todo corazón, con menosprecio de ánimo, echándola a saqueo.
(Edom no solamente propuso tomar «Mi Tierra», sino hacerlo con alegría «de todo
corazón», y con «menosprecio de ánimo», es decir, «con desprecio de alma», que
significa que Edom miró con desprecio tanto a Judá como al Dios de Judá, Jehová.)
6 Por tanto, profetiza sobre la tierra de Israel, y di a los montes y a las colinas, y a los
arroyos y a los valles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí, en Mi celo y en Mi furor
he hablado, por cuanto habéis llevado el oprobio de los paganos (la clave de este
Versículo es la frase, «Habéis llevado el oprobio de los paganos», que significa que
la vergüenza del Pueblo de Dios es temporaria, mientras la de sus enemigos es
perpetua. La Ley de Retribución es demandada por la Justicia absoluta de Dios. Es
una imposibilidad que las visitaciones justas de Dios son unilaterales. Lo que ha sido
proporcionado a Israel por su pecado también será proporcionado a Edom, así como
todas las demás naciones que se le oponen).
7 Por lo cual así ha dicho el SEÑOR Dios: Yo he alzado Mi mano, que los paganos
que os están alrededor han de llevar su vergüenza. (La certidumbre se encuentra en
esta frase, «Yo he alzado Mi mano», que se refiere a Dios tomando un voto de lo que
Él ha dicho acerca de los paganos y su castigo se cumplirá.)
8 Pero vosotros, oh montes de Israel, daréis vuestras ramas, y llevaréis vuestro fruto
a Mi pueblo Israel; porque cerca están para venir. (Las frases, «Oh montes de Israel»
y «Las colinas eternas» de Gén_49:26, son términos expresivos de la elevación moral
de Israel sobre la elevación física de Edom.)
9 He aquí, Yo estoy por vosotros, y a vosotros Me volveré, y seréis labrados y
sembrados (el SEÑOR dijo que Él está en «contra de Edom» [Eze_35:3], Él, a la
inversa, dice de Israel, «Yo estoy por vosotros»).
10 Y haré multiplicar sobre vosotros hombres, y toda Casa de Israel, toda ella; y las
ciudades serán habitadas, y edificadas las ruinas (como el SEÑOR delineaba la
destrucción de Edom y otras naciones, aquí Él delinea la bendición y prosperidad
venideras de «la Casa de Israel»).
11 Multiplicaré sobre vosotros hombres y ganado, y serán multiplicados y crecerán:
y os haré morar como solíais antiguamente, y os haré mayor bien que en vuestros
principios; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. (Esto corresponde a la Edad del Reino
venidero.)
12 Y haré andar hombres sobre vosotros, a Mi pueblo Israel; y te poseerán, y les serás
por heredad, y nunca más les matarás los hijos. (Edom dijo que ellos poseerían la
Tierra. Ellos son indicativos de los Palestinos modernos. El SEÑOR dice, «Mi pueblo
Israel te poseerá», es decir, la Tierra.)
13 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Por cuanto dicen de vosotros: Comedora de
hombres, y matadora de los hijos de tus naciones has sido (¡respecto a Israel, los
paganos difundieron un mal reporte, que la Tierra de Israel había devorado sus
habitantes y por lo tanto, era maldecida!):
14 Por tanto, no devorarás más hombres, y nunca más matarás los hijos de tu nación,
dice el SEÑOR Dios. (La idea es esto: el gran conflicto espiritual entre la luz y las
tinieblas ha producido esta terrible contienda por la Tierra de Israel, que comenzó
de inmediato en su mismo principio, y que ha continuado a través de su historia. En
el momento del regreso de Cristo, la causa de este conflicto será quitada; por lo tanto,
«no devorarás más hombres, y nunca más matarás los hijos de tu nación».)
15 Y nunca más te haré oír injuria de los paganos, ni llevarás más el vituperio de los
pueblos; pues que no destruirás más a tu nación dice el SEÑOR Dios. (Esto no fue
cumplido, ni en el más mínimo en el momento del regreso de los Exiliados de su
esclavitud, pero será cumplido totalmente en la Edad del Reino venidero.)
El Señor santificará su gran nombre
16 Y vino palabra del SEÑOR, diciendo:
17 Hijo de hombre, morando en su tierra la Casa de Israel, la contaminaron con sus
caminos y con sus obras: como inmundicia de menstruosa fue su camino delante de
Mí. (La «inmundicia» muestra la vileza del pecador a los ojos de Dios. La primera
declaración del Versículo Eze_36:29 declara que el Salvador es capaz de limpiar
total y completamente al pecador. «Como inmundicia de menstruosa», se refiere al
periodo menstrual de la mujer, y fue usado como un ejemplo de la inmundicia de
Israel.)
18 Y derramé Mi ira sobre ellos por las sangres que derramaron sobre la tierra; porque
con sus ídolos la contaminaron (este Versículo declara que la idolatría producía el
derramamiento de sangre y el ofrecimiento de niños pequeños en sacrificios humanos.
Debido a esto, la ira del SEÑOR no conocía límite).
19 Y los esparcí por los paganos, y fueron aventados por las tierras: conforme a sus
caminos y conforme a sus obras los juzgué. (Esto no solamente corresponde al día de
Ezequiel, sino también corresponde con el año 70 a.C., cuando Tito destruyó a
Jerusalén. Esto fue hecho porque ellos habían den amado «la Sangre de Cristo».)
20 Y entrados a los paganos a donde fueron, profanaron Mi santo nombre, diciéndose
de ellos: Estos son pueblo del SEÑOR, y de Su tierra de Él han salido. («Estos son
pueblo del SEÑOR», es la frase clave de este Versículo. Cuando ellos fueron
derrotados esto causó a los paganos concluir que Jehová se había comportado
caprichosamente con Su Pueblo y les desechó, o había sido insuficiente para
protegerles. En cualquier caso, la honra de Jehová había sido disminuido en la mente
y desacreditada por las palabras de los paganos. Esto fue producido por el pecado
de Israel.)
21 Y he tenido dolor al ver Mi santo nombre, el cual profanó la Casa de Israel entre
los paganos a donde fueron. (La idea es: el SEÑOR restaurará a Israel, pero no
debido a un bien que ellos han hecho, sino por el bien en Sí Mismo.)
Pondré dentro de vosotros mi Espíritu
22 Por tanto, di a la Casa de Israel: Así ha dicho el SEÑOR Dios: No lo hago por
vosotros, oh Casa de Israel, sino por causa de Mi Santo Nombre, el cual profanasteis
vosotros entre los paganos a donde habéis llegado. (Esta Escritura además refuerza
la declaración con respecto al Versículo Eze_36:21, en que el SEÑOR no está
haciendo lo que está haciendo a causa de Israel, sino más bien «por causa de Mi
Santo Nombre».)
23 Y santificaré Mi gran nombre que ha sido profanado entre los paganos, el cual
vosotros habéis profanado en medio de ellos; y conocerán los paganos que Yo soy el
SEÑOR, dice el SEÑOR Dios, cuando Yo fuere santificado en vosotros delante de su
vista. (Los actos de la Grada de Dios hacia los hombres culpables — son solamente
debido a Su Nombre como Salvador y no debido a cualquier excelencia moral en ellos
— como mostrado en los Versículos Eze_36:21-23 y Eze_36:32. El único reclamo del
pecador para la Vida y la Justicia es admitir su pecaminosidad y no su justicia, de la
cual él no tiene nada.)
24 Pues Yo os tomaré de entre los paganos, y os recogeré de todas las tierras, y os
traeré a vuestra propia tierra. (¡Este Pasaje no fue cumplido cuando los Hijos de Israel
regresaron de la cautividad Babilónica, y aun todavía no ha sido cumplido hasta
ahora! Será cumplido inmediatamente después de la Segunda Venida de Cristo.)
25 Luego rociaré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpios de todas vuestras
inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. (La palabra «luego» señala el
momento para el cumplimiento de estas Profecías. Israel, como una nación, no será
ganado para Cristo hasta que el Anticristo sea derrotado por la Segunda Venida de
Cristo. Israel «luego» aceptará a Cristo como Salvador, SEÑOR y Mesías.)
26 También os daré un nuevo corazón, y pondré un espíritu nuevo en medio de
vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de
carne. (Esto habla del Nuevo Nacimiento, y totalmente refuta las afirmaciones de
aquellos que dicen que el Israel moderno no será restaurado, y que ellos no tendrán
arte ni parte en el programa del Evangelio, en la actualidad ni en el futuro.)
27 Pondré también Mi Espíritu dentro de vosotros, y haré que andéis en Mis estatutos,
y guardéis Mis leyes, y las pongáis por obra. («Pondré también Mi Espíritu dentro de
vosotros», se refiere tanto a la regeneración, como llevado a cabo por el Espíritu
Santo en el momento de que uno Nace de Nuevo, y también en el Bautismo con el
Espíritu Santo, que fue primeramente evidenciado en el Día de Pentecostés [Hch_2:1-
4]. La entrada del Espíritu Santo se hace posible solo por la Cruz de Cristo
[Jua_14:17], y los «Estatutos» y los «Juicios» caen en la misma categoría. En otras
palabras, sólo se pueden guardar por y a través del Poder del Espíritu Santo, Quien
obra exclusivamente dentro de los parámetros de la Obra Terminada de Cristo, que
demanda Fe constante del Creyente [Rom_6:3-5; Rom_8:1-2; Rom_8:11; Luc_9:23-
24].)
28 Y habitaréis en la tierra que di a vuestros padres; y vosotros Me seréis por pueblo,
y Yo seré a vosotros por Dios. (El conflicto en cuanto a la Tierra de Israel será
resuelto solamente cuando Cristo vuelva otra vez. Todo gira alrededor de Cristo,
como todo siempre ha girado alrededor de Cristo.)
29 Y os guardaré de todas vuestras inmundicias; y llamaré al trigo, y lo multiplicaré,
y no os daré hambre. (La regeneración, no la reformación — un nuevo corazón, no
un corazón cambiado — es esencial para la Salvación.)
30 Multiplicaré asimismo el fruto de los árboles, y el fruto de los campos, para que
nunca más recibáis oprobio de hambre entre los paganos.
31 Y os acordaréis de vuestros malos caminos, y de vuestras obras que no fueron
buenas; y os avergonzaréis de vosotros mismos por vuestras iniquidades, y por
vuestras abominaciones. (El efecto de la Gracia es el juicio de sí mismo, que luego
hará posible la Bendición del Versículo Eze_36:30.)
32 No lo hago por vosotros, dice el SEÑOR Dios, que os conste: avergonzaos y
confundíos de vuestras iniquidades, Casa de Israel. (Todo lo que se hace para el hijo
de Dios se hace «por amor a Cristo» [Efe_4:32; 1Jn_2:12].)
33 Así ha dicho el SEÑOR Dios: El día que os limpiaré de todas vuestras iniquidades,
haré también habitar las ciudades, y las asoladas serán edificadas. (La conversión de
Israel a Cristo precipitará su Bendición. Solamente cuando todas las iniquidades han
sido «limpiadas» puede el individuo luego «morar» en la herencia, con las
«asoladas» luego reclamadas, es decir, «edificadas».)
34 Y la tierra asolada será labrada, en lugar de haber sido asolada en ojos de todos
los que pasaron. (Durante casi 2.000 años, la Tierra de Israel ha estado «asolada».
Esta era la Tierra Prometida, y además con poca semejanza de aquella que fue
originalmente. Ahora está comenzando a ser restaurada, pero no completamente
hasta la Venida del SEÑOR.)
35 Los cuales dijeron: Esta tierra asolada fue como Huerto de Edén; y estas ciudades
desiertas y asoladas y arruinadas, fortalecidas estuvieron. (Tiro y Asiria afirmaron ser
como el Huerto de Edén. Pero esta similitud corresponde solamente a Israel
[Eze_28:13; Eze_31:8-9; Isa_51:3].)
36 Y las gentes que fueron dejadas en vuestros alrededores, sabrán que Yo edifiqué
las derribadas, y planté las asoladas: Yo el SEÑOR he hablado, y lo haré. (Todo lo
que el SEÑOR dice que Él hará en este Versículo está predicado sobre la aceptación
de Israel de Él como SEÑOR y Salvador.)
37 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Aun seré solicitado de la Casa de Israel, para
hacerles esto: los multiplicaré de hombres a modo de rebaños. («Aun seré solicitado
de la Casa de Israel», se refiere a la Gran Tribulación en el futuro, que les traerá
completa desolación y amenazará con exterminio, que precipitará su clamor a Él
para Liberación. Esto traerá Israel a un Arrepentimiento pleno y una dependencia de
Dios [Isa_64:1-12; Zac_12:10; Zac_13:1; Mat_23:37-39; Rom_11:25-29].)
38 Como las ovejas santas, como las ovejas de Jerusalén en sus Fiestas solemnes, así
las ciudades desiertas serán llenas de rebaños de hombres; y sabrán que Yo soy el
SEÑOR. (El tema de estos Capítulos es la relación entre Jehová y Su Pueblo. Por
eso, no hay detalles respecto al Primer Advenimiento. Los Capítulos revelan un
cuadro general de los Últimos Días, del renacimiento de Israel, y de su deleite de la
Gloria y Bendición Terrenal, que tomará lugar en la Edad del Reino venidero.)

37
El valle de los huesos secos
(587 a.C.)
1 Y LA mano del SEÑOR vino sobre mí, me llevó en el Espíritu del SEÑOR y me
puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos (como el último Capítulo
gráficamente hablaba de la Restauración venidera de Israel, el Capítulo Eze_37:1-
28 gráficamente muestra la restauración espiritual).
2 Me hizo pasar cerca de ellos, a su alrededor, y vi que eran muchísimos sobre la faz
del campo, y por cierto secos en gran manera. (La repetición de «he aquí» fija la
atención sobre dos hechos — que los huesos eran muchos y muy secos. «Secos en
gran manera», habla de ausencia total de espiritualidad.)
3 Y Me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: SEÑOR Dios, Tú lo
sabes. (La respuesta de Ezequiel a la pregunta del SEÑOR, «SEÑOR Dios, Tú lo
sabes», ¡significa que dentro del reino del empeño humano la tarea era imposible!)
4 Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra
del SEÑOR. (Al Profeta se le dijo que debía «Profetizar sobre estos huesos», lo que
significa que el SEÑOR dará una «Palabra» que garantizará su Restauración y
Renovación; sin embargo, eso sólo podría ser hecho por la «Palabra del SEÑOR».)
5 Así ha dicho Dios el SEÑOR a estos huesos: He aquí. Yo hago entrar aliento en
vosotros, y viviréis (este «aliento» es el mismo aliento cuando Dios «sopló en su nariz
aliento de vida», a Adán, y él «fue un ser viviente» [Gén_2:7]. La vida de la cual se
habla en este Pasaje es la vida nacional y la vida espiritual. La vida nacional de la
nación ha comenzado, tuvo su comienzo en 1948 y continúa. Sin embargo, la vida
espiritual comenzará en la Gran Tribulación venidera, cuando 144.000 Judíos
aceptarán a Cristo como su Salvador. Pero la plenitud de la Vida Espiritual no vendrá
hasta la Segunda Venida [Zac_13:1; Zac_13:9]).
6 Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré
de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que Yo soy el SEÑOR. («Y
viviréis», es decir, «volveréis a la vida otra vez, para que lleguen a conocer que Yo
soy Jehová». Dios muestra Su Existencia y Poder por levantar a los muertos
[Jua_5:21; Rom_1:3; Rom_4:17; 2Co_1:9].)
7 Profeticé, pues, como me fue mandado; y hubo un ruido mientras yo profetizaba, y
he aquí un temblor, y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso. («Y he aquí un
temblor» en el Hebreo en realidad dice, «Una voz».)
8 Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por encima
de ellos: pero no había en ellos espíritu. (Como se ha dicho, Israel nacional comenzó
en 1948; sin embargo, la frase, «Pero no había en ellos espíritu», significa que Israel
nacional en la actualidad no tiene vida espiritual.)
9 Y Me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha
dicho el SEÑOR Dios: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos,
y vivirán. («Profetiza sobre los cuatro vientos», en el Hebreo significa, «Profetiza al
Espíritu». «Ven de los cuatro vientos», en realidad dice en el Hebreo, «ven de los
cuatro alientos». El número «cuatro» es simbólico de «cuádruplo», que denota
Restauración absoluta, total y completa.)
10 Y profeticé como Me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y
estuvieron sobre sus pies, un ejército grande en extremo. (Como los Versículos
anteriores hablan de la identidad nacional de Israel, ahora este Versículo habla de
la identidad espiritual de Israel, que significa su avivamiento espiritual, que
acontecerá en la Segunda Venida. La frase, «Y estuvieron sobre sus pies», habla de
Vida Espiritual dándoles facultad para lograrlo. Durante un largo plazo, aun a través
de 2.000 años, Israel no se ha «parado sobre sus pies» en el sentido espiritual. ¡Pero
en ese alegre día venidero, ellos lo harán! Entonces serán «un ejército grande en
extremo», pero un «ejército grande en extremo» para el SEÑOR).
11 Me dijo luego: Hijo de hombre, estos huesos son toda la Casa de Israel. He aquí,
ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra esperanza, y somos del todo
destruidos. («Toda la Casa de Israel», habla de la totalidad de las trece Tribus. La
última parte de este Versículo, «he aquí que dicen», se refiere a la última mitad de la
Gran Tribulación venidera. En esa época, parecerá que la totalidad de su nación será
totalmente destruida, con la «esperanza perecida» y «del todo destruido». Esto tiene
referencia a la Profecía de Zacarías, cuando él dijo, «las dos terceras partes serán
cortadas en ella, y se perderán» [Zac_13:8].)
12 Por tanto, profetiza, y diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí. Yo abro
vuestros sepulcros, pueblo Mío, y os haré subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la
tierra de Israel. (Como sucede a veces con la Profecía, el Versículo anterior hablaba
de los últimos meses o aun semanas antes de la Venida del SEÑOR y, por lo tanto, el
socorro de Israel, mientras este Versículo regresa hasta la II Guerra Mundial y hacia
delante.)
13 Y sabréis que Yo soy el SEÑOR, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de
vuestras sepulturas, pueblo Mío («Y os saque de vuestras sepulturas», tiene referencia
a la totalidad del hecho que Israel, y en realidad, en la Batalla de Armagedón será
casi totalmente destruido; en realidad, no hay manera Terrenal alguna de que ellos
pueden ser rescatados. Sin embargo, ¡hay un Camino Celestial! Y ese Camino
Celestial es Cristo).
14 Y pondré Mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra tierra;
y sabréis que Yo el SEÑOR hablé, y lo hice, dice el SEÑOR. (Este Pasaje señala el
gran Avivamiento que acontecerá en Israel en la Segunda Venida del SEÑOR.
Zacarías dio más detalle del acontecimiento de este gran mover del Espíritu Santo
[Zac_12:10-14; Zac_13:1; Zac_13:9].)
Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo
15 Vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo (ahora comienza la segunda Profecía
que predice la unidad de la nación, y su feliz establecimiento bajo el gobierno del
Mesías):
16 Hijo de hombre, toma ahora un palo, y escribe en él: Para Judá, y para los Hijos
de Israel sus compañeros. Toma después otro palo, y escribe en él: Para José, palo de
Efraín, y para toda la Casa de Israel sus compañeros (estos «dos palos» representan
las dos Casas de Israel, la Confederación del Norte de Israel, a veces llamado Efraín
o Samaria, y el Reino del Sur conocido como Judá. «Sus compañeros», se refiere a
Benjamín y a Leví, y también posiblemente Simeón, que serán reunificados con Judá.
Las demás Tribus corresponden a Efraín).
17 Júntalos luego el uno con el otro, para que sean uno solo, y serán uno solo en tu
mano. (Este Versículo predice que los dos Reinos ahora llegarán a ser un solo Reino,
que significa un pueblo, que sólo se puede realizar por la «Mano del SEÑOR», que
significa que ellos nunca más serán divididos.)
18 Y cuando te pregunten los hijos de tu pueblo, diciendo: ¿No nos enseñarás qué te
propones con eso? (Esta Profecía, que incorpora el resto del Capítulo, predice la
reunión futura de las Tribus, su Restauración a la Tierra de Israel, y su
establecimiento bajo un Solo Pastor, y enseña que una unión producida Divinamente
es real y duradera, y trae a sus súbditos en comunión con Dios, y los dispone
alrededor de un centro Divino.)
19 Diles: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí, Yo tomo el palo de José que está en
la mano de Efraín, y a las Tribus de Israel sus compañeros, y los pondré con él, con
el palo de Judá, y los haré un palo, y serán uno en Mi mano. (Cuando Dios toma dos
grupos de Sus siervos y los une, en realidad ellos llegan a ser uno en Su Mano. Esto
significa no solamente que la antigua división desapareció, sino la causa de la
división también ha sido borrada.)
20 Y los palos sobre que escribas, estarán en tu mano delante de sus ojos. (Es
maravilloso que el SEÑOR tomaría algo tan simple, tales como los «palos», para
expresar y mostrar algo de tan vital importancia [1Co_1:27].)
21 Y les dirás: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí. Yo tomo a los Hijos de Israel
de entre las naciones a las cuales fueron, y los recogeré de todas partes, y los traeré a
su tierra (el cumplimiento total de esto acontecerá en la Edad del Reino venidero):
22 Y los haré una nación en la tierra, en los montes de Israel; y un Rey será a todos
ellos por Rey: y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán divididos en dos
reinos. («En la Tierra», se refiere a la Tierra de Israel, como prometido a Abraham
[Gén_12:7]. Su frontera al lado occidental es el Mediterráneo; en el sur, el Canal de
Suez, que incluye la Península Arábica; al lado oriental el Río Éufrates; en el norte,
el Líbano.)
23 Ni más se contaminarán con sus ídolos, y con sus abominaciones, y con todas sus
rebeliones: y los salvaré de todas sus rebeliones en las cuales pecaron, y los limpiaré;
y Me serán por pueblo, y Yo a ellos por Dios. (Esto acontecerá casi inmediatamente
después de la Segunda Venida de Cristo.)
24 Y Mi siervo David será rey sobre ellos, y a todos ellos será Un Pastor: y andarán
en Mis Preceptos, y Mis Ordenanzas guardarán, y los pondrán por obra. (David
siempre fue mirado como un ejemplo por todos los reyes de Israel, y por consiguiente
bajo Cristo servirá en esta capacidad para siempre.)
25 Y habitarán en la tierra que di a Mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros
padres, en ella habitarán ellos, y sus hijos, y los hijos de sus hijos para siempre; y Mi
siervo David será príncipe de ellos para siempre. (Este Pasaje regresa a la Promesa
Mesiánica de 2Sa_7:12-16. Algunos han concluido que el nombre «David» se refiere
al Mesías; sin embargo, el Espíritu Santo emplea esta frase, »Mi siervo David», pero
ni siquiera una vez llama a Cristo «Mi siervo David». Por lo tanto es obvio que el
Rey David es el que será «príncipe de ellos para siempre».)
26 Y concertaré con ellos Pacto de paz. Pacto perpetuo será con ellos: y los asentaré,
y los multiplicaré, y pondré Mi Santuario entre ellos para siempre. (La localidad del
«Santuario Divino» en Jerusalén causará a los paganos saber que Dios ha escogido
especialmente Israel como Su tesoro peculiar. Este Santuario está descrito en los
Capítulos Eze_40:1-49; Eze_41:1-26; Eze_42:1-20; Eze_43:1-27; Eze_44:1-31;
Eze_45:1-25; Eze_46:1-24; Eze_47:1-23; Eze_48:1-35.)
27 Y estará en ellos Mi Tabernáculo, y seré a ellos por Dios, y ellos Me serán por
pueblo. (Este «Tabernáculo» se refiere a un tipo de cubierta de ozono, mucho más
grande que en la actualidad, que será durante el Milenio, cuando la luz del Sol
aumentará siete veces y la luz de la luna será como la luz actual del Sol [Isa_4:5].)
28 Y sabrán los paganos que Yo el SEÑOR santifico a Israel, estando Mi Santuario
entre ellos para siempre. (La Presencia de Dios con Israel es una señal que Él está
con ellos y que el mundo tiene que reconocerla, y de hecho, reconocerá su
aprobación.)

38
Profecía contra Gog
(587 a.C.)
1 Y VINO a mí palabra del SEÑOR, diciendo:
2 Hijo de hombre, pon tu rostro contra Gog en tierra de Magog, príncipe de la
cabecera de Mésec y Tubal, y profetiza sobre él («Gog» es otro nombre para el
Anticristo),
3 Y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios: He aquí que estoy Yo contra ti, oh Gog, príncipe
de la cabecera de Mésec y Tubal (durante muchos años, los maestros Bíblicos han
pensado que estos Pasajes se refieren a Rusia, pero una investigación acerca de las
declaraciones prueban lo contrario; por lo tanto, la frase, «he aquí, Yo estoy contra
ti, oh Gog», no se refiere a Rusia, sino más bien al Anticristo).
4 Y Yo te haré dar media vuelta, y pondré anzuelos en tus quijadas, y te sacaré a ti, y
a todo tu ejército, caballos como jinetes, todos completamente equipados, gran
multitud con paveses y escudos, todos ellos portando espadas (esta Profecía se refiere
a la Batalla de Armagedón, que será la segunda invasión del Anticristo a Israel, en
la cual él será totalmente destruido. La primera invasión acontecerá en medio de la
Gran Tribulación, cuando el Anticristo en esa oportunidad mostrará quién es en
realidad):
5 Persia, Etiopía y Libia con ellos; todos ellos con escudo y yelmo:
6 Gómer, y todas sus compañías; la casa de Bet Togarma, a los lados del norte, y
todas sus compañías; pueblos muchos contigo. (Estos Pasajes meramente refuerzan
las declaraciones hechas anteriormente, que el ejército del Anticristo consistirá de
gente de muchos países, que incluye Rusia.)
7 Prepárate y disponte, y toda tu multitud que se ha reunido a ti, y tú sé guarda para
ellos. («Prepárate», meramente se refiere a una bigardía dada por el Espíritu Santo
al Anticristo. En otras palabras, «prepárate a lo mejor sea posible al alcance de tu
habilidad, pero no valdrá la pena, porque tú serás totalmente derrotado.)
8 Después de muchos días serás tú visitado: al cabo de los años vendrás a la tierra
salvada de la espada, recogida de muchos pueblos, a los montes de Israel, que siempre
fueron para asolamiento: pero fue sacada de las naciones, y todos ellos morarán
confiadamente. (Las dos frases, «Después de muchos días» y «Al cabo de los años»,
se refieren al tiempo presente y al futuro inmediato; por lo tanto, cualquier
afirmación que este Capítulo ya ha sido cumplido es espuria. «La tierra salvada de
la espada», se refiere a los muchos conflictos que Israel ha tenido desde que llegó a
ser una nación en el año 1948. «Recogida de muchos pueblos», se refiere a varias
naciones, como por ejemplo Egipto, Siria, Irak, etc., que no desearon que Israel
llegara a ser una nación, y que, por lo tanto, se le oponían enormemente. «Pero fue
sacada de las naciones», corresponde a las Naciones Unidas que votó que Israel
debía ser un Estado, incluso Rusia dio su voto de aprobación. «Y todos ellos morarán
confiadamente», se refiere al horror terrible del Holocausto en la II Guerra Mundial,
cuando unos 6.000.000 de Judíos fueron matados por Hitler, e Israel luego que
demandaba una patria en lugar de estar esparcidos por todo el mundo. El sentimiento
fue que si ellos pudieran obtenerla, luego estarían «seguros».)
9 Y subirás tú y vendrás como tempestad; como nublado para cubrir la tierra serás tú,
y todas tus compañías, y muchos pueblos contigo. (Como dicho, esta es la Batalla de
Armagedón.)
10 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Y será en aquel día, que subirán palabras en tu
corazón, y concebirás mal pensamiento (el «mal pensamiento» consistirá de los
planes del Anticristo, inspirados por Satanás, para destruir a Israel y a todos los
Judíos. ¡Ese plan es la Batalla de Armagedón!);
11 Y dirás: Subiré contra tierra de aldeas, iré a gentes reposadas, y que habitan
confiadamente: todos ellos habitan sin muros, no tienen cerrojos ni puertas (las frases,
la «tierra de aldeas», «todos ellos habitan sin muros», y «no tienen cerrojos ni
puertas», se refiere a los esfuerzos de Israel para movilizarse que es algo sin fuerza,
al menos en la mente del Anticristo):
12 Para arrebatar despojos y para tomar presa; para volver tu mano sobre las tierras
desiertas ya pobladas, y sobre el pueblo recogido de entre las naciones, que se hace
de ganados y posesiones, que mora en la parte central de la tierra. (Esta es la invasión
de Israel por el Anticristo, llamada la «Batalla de Armagedón», que precipitará la
Segunda Venida del SEÑOR.)
13 Sabá y Dedán, y los mercaderes de Tarsis, y todos sus príncipes, te dirán: ¿Has
venido a arrebatar despojos? ¿Has reunido tu multitud para tomar presa, para quitar
plata y oro, para tomar ganados y posesiones, para tomar grandes despojos? (Las
preguntas hechas por estas naciones individuales no tienen la intención de declarar
una posición adversaria; de hecho, ellos probablemente decidirían compartir la
suerte del Anticristo, con miras de adquirir una parte del gran «despojo».)
14 Por tanto profetiza, hijo de hombre, y di a Gog: Así ha dicho el SEÑOR Dios: En
aquel tiempo, cuando Mi pueblo Israel habitará seguramente, ¿no lo sabrás tú? (La
idea es: a pesar de que el Anticristo invade Israel y la denota a la mitad de la Gran
Tribulación, quebrantando su pacto de siete años, todavía, debido a que tiene asuntos
apremiantes en otro lugar [Dan_11:44], Israel luego regresará poco a poco a la
tierra, ocupándola de nuevo, y aparentemente habitará seguro. ¡Esto sin duda
enfurecerá al «hombre de pecado», y él emprenderá a solucionar la situación de una
vez para siempre!)
15 Y vendrás de tu lugar, de las partes del norte, tú y muchos pueblos contigo, todos
ellos a caballo, grande reunión y poderoso ejército (las «partes del norte» no se refiere
a Rusia, como algunos creen, sino más bien a Asiria. De hecho, el Anticristo [Gog]
vendrá de Siria; sin embargo, la Siria de las Profecías de Daniel, de la cual esto
habla, incluye la Siria, Irak e Irán modernos):
16 Y subirás contra Mi pueblo Israel como nublado para cubrir la tierra; será al cabo
de los días: y te traeré sobre Mi tierra, para que los paganos Me conozcan, cuando
fuere santificado en ti, oh Gog, delante de sus ojos. («Al cabo de los días», se refiere
a los últimos de los últimos días, que corresponden al presente y el futuro cercano.
En otras palabras, estas Profecías ya han comenzado a cumplirse, y, con cada día
que pasa, se acelerará su cumplimiento.)
17 Así ha dicho el SEÑOR Dios: ¿No eres tú aquél de quien hablé Yo en tiempos
pasados por Mis siervos los Profetas de Israel, los cuales profetizaron en aquellos
tiempos que Yo te había de traer sobre ellos? (¡El SEÑOR en realidad está hablando
aquí de las Profecías dadas a Ezequiel, de las cuales esta es una, así como las de
Isaías, Daniel, Zacarías y otros!)
18 Y será en aquel tiempo, cuando vendrá Gog contra la tierra de Israel, dijo el
SEÑOR Dios, que subirá Mi ira en Mi enojo. (Otra vez, esta es la Batalla de
Armagedón «Subirá Mi ira en Mi enojo», corresponde a la declaración de Zacarías
[Zac_14:3].)
19 Porque he hablado en Mi celo, y en el fuego de Mi ira: Que en aquel tiempo habrá
gran temblor sobre la tierra de Israel (el «gran temblor sobre la Tierra de Israel» sólo
podrá pasar en la Batalla de Armagedón y solamente por la Mano del SEÑOR);
20 Que los peces del mar, las aves del Cielo, las bestias del campo y toda serpiente
que anda arrastrando sobre la Tierra, y todos los hombres que están sobre la faz de la
Tierra, temblarán a Mi presencia; y se arruinarán los montes, y los vallados caerán, y
todo muro caerá a tierra. (Este Versículo corresponde a la Segunda Venida, que será
el evento más catastrófico en la historia humana.)
21 Y en todos Mis montes llamaré contra él espada, dice el SEÑOR Dios: la espada
de cada cual será contra su hermano. (¡Esto muestra que el SEÑOR tiene control sobre
todas las cosas!)
22 Y Yo litigaré con él con pestilencia y con sangre; y haré llover sobre él, y sobre
sus compañías, y sobre los muchos pueblos que están con él, impetuosa lluvia, y
piedras de granizo, fuego y azufre. (Este Versículo declara que el SEÑOR emplea los
elementos, sobre lo cual ni el Anticristo ni ningún otro hombre tiene control alguno.)
23 Y seré engrandecido y santificado, y seré conocido en ojos de muchas naciones;
y sabrán que Yo soy el SEÑOR. («Y seré engrandecido», tiene referencia a la ira
restringida por un plazo largo de tiempo, y luego explota con furia indescriptible.)

39
(587 a.C.)

1 TÚ pues, hijo de hombre, profetiza contra Gog, y di: Así ha dicho el SEÑOR Dios:
He aquí Yo estoy contra ti, o Gog, príncipe de la cabecera de Mésec Y Túbal (este
Capítulo declara la derrota de Gog por el SEÑOR Jesucristo. Como dicho, es la
Batalla de Armagedón, descrita en [Apo_16:16]):
2 Y te quebrantaré, y te sextaré, y te haré subir de las partes del norte, y te traeré sobre
los montes de Israel (cinco-sextos del ejército del Anticristo serán matados por la
Segunda Venida del SEÑOR. «Y te haré subir de las partes del norte», como dicho
anteriormente, no se refiere a Rusia. En cambio, se refiere a la ruta invasora que
sería la misma como lo fue para los Asirios, Babilonios, Grecos y otros en el pasado);
3 Y sacaré tu arco de tu mano izquierda, y arrancaré tus flechas en tu mano derecha.
(El Anticristo, llamado «Gog», creerá que está peleando contra Israel solamente,
cuando, en Verdad, está peleando contra el SEÑOR, una batalla que él ni siquiera
podría esperar ganar.)
4 Sobre los montes de Israel caerás tú, y todas tus compañías, y los pueblos que fueron
contigo: a toda ave y a toda cosa que vuela, y a las bestias del campo, te he dado por
comida. (La idea es que la derrota del Anticristo y sus ejércitos será tan severa que
los buitres y bestias se alimentarán sobre las multitudes de los cadáveres muertos
esparcidos por los «montes de Israel». «Caerás tú», no significa solamente la derrota
del «hombre de pecado», sino también el colapso de la corrupta sociedad humana,
que incluye el corrupto gobierno humano.)
5 Sobre el campo abierto caerás: porque Yo he hablado, dice el SEÑOR Dios.
(«Campo abierto», se refiere al momento de la derrota del Anticristo. Será en medio
mismo de la batalla, con el Anticristo presionando contra Jerusalén, creyendo que la
victoria está al alcance de sus garras [Zac_14:1-3].)
6 Y enviaré fuego sobre Magog, y sobre los que moran confiadamente en las islas; y
sabrán que Yo soy el SEÑOR. («Enviaré fuego sobre Magog», simplemente significa
que el SEÑOR personalmente empleará los elementos de los cielos para destruir los
vastos ejércitos Gentiles que siguen al Anticristo. «Y sobre los que moran
confiadamente en las islas», corresponde a las otras naciones del mundo, que, a su
criterio, son neutrales y que sencillamente ignoran la matanza en masa contra Israel
por el Anticristo.)
7 Y haré notorio Mi Santo Nombre en medio de Mi pueblo Israel, y nunca más dejaré
amancillar Mi Santo Nombre; y sabrán los paganos que Yo soy el SEÑOR, el Santo
en Israel. (¡Este Versículo capta todas las Promesas hechas por el SEÑOR a los
Patriarcas y Profetas de antaño!)
8 He aquí, vino y fue, dice el SEÑOR Dios: este es el día del cual he hablado. (Este
Versículo corresponde a la Gran Tribulación venidera, y más específicamente a estos
eventos en la conclusión misma de esa época en particular, que incluyen la Batalla
de Armagedón [Zac_14:7].)
9 Y los moradores de las ciudades de Israel saldrán, y encenderán y quemarán armas,
y escudos, y paveses, arcos y flechas, y bastones de mano, y lanzas: y las quemarán
en fuego por siete años (pensar en algo que está ardiendo «en fuego por siete años»
nos permite tener un concepto de la magnitud de la destrucción).
10 Y no traerán leña del campo, ni cortarán de los bosques, sino que quemarán las
armas en el fuego: y despojarán a sus despojadores, y robarán a los que los robaron,
dice el SEÑOR Dios.
11 Y será en aquel tiempo, que Yo daré a Gog lugar para sepultura allí en Israel, el
valle de los que pasan al oriente del mar, y obstruirá las narices de los transeúntes,
pues allí enterrarán a Gog y a toda su multitud: y lo llamarán. El valle Amón Gog.
(Sin duda, varios millones de hombres van a ser matados en la «la Batalla de
Armagedón». A pesar de emplear equipo moderno para apresurar la sepultura de
tantos cuerpos humanos, todavía, el hedor «obstruirá las narices de los
transeúntes».)
12 Y a la Casa de Israel los estará enterrado durante siete meses, para purificar la
tierra:
13 Sí, todo el pueblo de la Tierra estará enterrándolos; y será para ellos célebre el día
que Yo fuere glorificado, dice el SEÑOR Dios. (El SEÑOR une este espectáculo a la
santificación de Su Nombre.)
14 Y tomarán hombres de jornal, los cuales vayan por el país con los que viajaren,
para enterrar a los que quedaron sobre la faz de la tierra, a fin de limpiarla: al cabo de
siete meses harán el reconocimiento. (El Gobierno Ejecutivo de Israel empleará y
pagará a los hombres descritos en este Versículo para recolectar los huesos humanos,
dondequiera que se encuentren, y los sepultarán en una tremenda zanja o área como
dice el Versículo Eze_39:11. Este proyecto requerirá siete meses.)
15 Y pasarán los que irán por el país, y el que viere los huesos de algún hombre,
edificará junto a ellos una señal, hasta que los entierren los sepultureros en el Valle
de Amón Gog. (Parece que todos los huesos serán recolectados y llevados al «Valle
de Amón Gog», y allí enterrados. Si este es el caso, será hecho por un motivo, para
mostrar eso como un monumento a la derrota de Satanás, y la victoria, aun la gran
victoria, del SEÑOR Jesucristo.)
16 Y también el nombre de la ciudad será Amona; y limpiarán la tierra. (El nombre
«Amona» significa «multitud». Sin embargo, será una «ciudad» de sepulturas,
acomodando a los muertos insonoros, y no una ciudad de vivientes.)
17 Y tú, hijo de hombre, así ha dicho el SEÑOR Dios: Di a las aves, a todo volátil, y
a toda bestia del campo: Juntaos, y venid; reuníos de todas partes a Mí víctima que os
sacrifico, un sacrificio grande sobre los montes de Israel, y comeréis carne y beberéis
sangre. (Esto es lo mismo mandado en Apo_19:17-18; Apo_19:20.)
18 Comeréis carne de fuertes, y beberéis sangre de príncipes de la Tierra; de carneros,
de corderos, de machos cabríos, de bueyes, de toros, engordados todos en Basán. (Las
palabras, los «fuertes» y «príncipes» significan la elite militar y político del ejército
del Anticristo. ¡Además, los «carneros, corderos, machos cabríos y bueyes»
significan lo mismo!)
19 Y comeréis gordura hasta hartaros y beberéis hasta embriagaros de sangre, de Mi
sacrificio que Yo os sacrifiqué. (La idea es que si ellos no aceptaban el Sacrificio de
Cristo en el Calvario, ellos serían hechos un sacrificio, lo que así fue, pero que no
salvaría sus almas, sino que serviría como parte de la salvación del mundo.)
20 Y os saciaréis sobre Mi mesa, de caballos, y de jinetes fuertes, y de todos los
hombres de guerra, dice el SEÑOR Dios. (El Anticristo pensará poner «mesa» para
mostrar la derrota de Israel, pero en cambio él y su ejército serán la «mesa», es decir,
«Mi mesa», es decir la Mesa del SEÑOR.)
21 Y pondré Mi gloria entre los paganos, y todos los paganos verán Mi juicio que
habré hecho, y Mi mano que sobre ellos puse. (La Biblia considera a «los paganos»
todos los que no aceptan al SEÑOR Jesucristo como su Salvador. Por lo tanto, eso
incluye a casi todo el mundo.)
22 Y de aquel día en adelante sabrá la Casa de Israel que Yo soy el SEÑOR su Dios.
(Junto con «los paganos» que presencian este espectáculo glorioso, del mismo modo,
«la Casa de Israel» ahora «sabrá» exactamente Quién es el Mesías. Ellos se darán
cuenta que Aquel que ellos rechazaron y crucificaron es en realidad «el SEÑOR su
Dios». Ellos lo sabrán «desde aquel día en adelante».)
23 Y sabrán los paganos que la Casa de Israel fue llevada cautiva por su pecado; por
cuanto se rebelaron contra Mí, y Yo escondí de ellos Mi rostro, y los entregué en mano
de sus enemigos, y cayeron todos a espada. (Las dispersiones bajo los Sirios y los
Romanos que habían sido efectuados por la espada, así como todos los que habían
sido exiliados durante los siglos, y más en particular el terrible Holocausto de la II
Guerra Mundial, se puede decir justamente: «cayeron todos a espada». Ellos «se
rebelaron contra Mí», se refiere a la rebelión de Israel desde el mismo comienzo, que
por fin requería su destrucción y dispersión; sin embargo, la «rebelión» culminante
de todo fue su rechazo a Cristo y Su Crucifixión. Como resultado, ellos fueron
entregados «en mano de sus enemigos», en donde han quedado por casi 2.000 años.)
24 Conforme a la inmundicia y conforme a sus rebeliones hice con ellos: y de ellos
escondí Mi rostro. (Como ellos no lo deseaban, Él «de ellos escondió Su rostro».
¡Esto es todo lo que Él pudo hacer! Lamentablemente, este escenario todavía no ha
terminado. Al continuar rechazándole, Israel en cambio aceptará a «otro» como su
Mesías [Jua_5:43]. ¡Esto acontecerá en el futuro cercano, y traerá a Israel a otro
Holocausto! [Mat_24:21-22]. Sin embargo, y por fin, Israel saldrá de la oscuridad a
la luz, y aceptará a Cristo como su Salvador y Mesías. ¡Los siguientes Pasajes nos
dicen cómo!)
El Señor restaurará a Israel
25 Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: Ahora volveré la cautividad de Jacob, y
tendré misericordia de toda la Casa de Israel, y celaré por Mi Santo Nombre (Él tendrá
«Misericordia» debido a su Arrepentimiento, que acontecerá en la Segunda Venida.
La frase, «Y celaré por Mi Santo Nombre», es una declaración temible. «Su Santo
Nombre» respalda Su Palabra. Él es «celoso» que Su Honor sea protegido y que cada
una de las Profecías sean cumplidas.).
26 Y ellos sentirán su vergüenza, y toda su rebelión con que prevaricaron contra Mí,
cuando habitaren en su tierra seguramente, y no habrá quien los espante. (La idea de
esto y los Versículos siguientes es la explicación de la palabra «ahora» en el
Versículo anterior. La «vergüenza» que resulta de la «rebelión» ahora terminó.
«Ahora» pueden «habitar en su tierra seguramente, y no habrá quien los espante».)
27 Cuando los volveré de los pueblos, y los juntaré de las tierras de sus enemigos, y
Yo sea santificado en ellos en ojos de muchas naciones
(esta gran reunión acontecerá después de la Segunda Venida de Cristo, y incluirá a
cada Judío de todos los países del mundo, que será alegremente traído a Israel. «Y
Yo sea santificado en ellos en ojos de muchas naciones», se refiere a Su Plan para
ellos por fin cumplido).
28 Y sabrán que Yo soy el SEÑOR su Dios, cuando después de haberlos hecho pasar
a los paganos, y que fui Yo Quien los reunió en su propia tierra, sin dejar más allá
ninguno de ellos. (Tan cierta es la Restauración futura de Israel que el tiempo pasado
se emplea aquí en predecirla.)
29 Ni esconderé más de ellos Mi rostro; porque habré derramado de Mi espíritu sobre
la Casa de Israel, dice el SEÑOR Dios. (Este Pasaje y muchos otros enfáticamente
dicen que Israel nunca más se desviará debido al «derramamiento del Espíritu de
Dios» sobre ellos. La Visión abre y cierra con el valle de los huesos secos. La primera
Visión vio la resurrección de estos huesos [Eze_37:1-28]; en la segunda parte de la
Visión, solamente huesos quedarán, que significa el fin catastrófico de los ejércitos
del Anticristo. Entonces estos dos valles contrastan el uno al otro —uno, un testimonio
a la fidelidad y amor de Dios, el otro, a Su fidelidad y juicio.)
40
Visión del nuevo templo
(574 a.C.)
1 EN el año veinticinco de nuestro cautiverio, al principio del año, a los diez días del
mes, a los catorce años después que la ciudad fue herida, en aquel mismo día fue sobre
mí la Mano del SEÑOR, y me llevó allá. («En el año veinticinco de nuestro
cautiverio», trata con la primera invasión de Babilonia a Jerusalén, que aconteció en
el año 605 a.C. Durante esa invasión, la ciudad fue destruida parcialmente y mucho
del pueblo fue llevado en cautiverio. Después la ciudad fue desolada en el año 597
a.C. y finalmente quemada y devastada en el año 586 a.C.)
2 En Visiones Dios me llevó a la tierra de Israel, y me puso sobre un monte muy alto,
sobre el cual había como edificio de una ciudad, hacia la parte del sur. (Los eventos
de los Capítulos Eze_40:1-49; Eze_41:1-26; Eze_42:1-20; Eze_43:1-27; Eze_44:1-
31; Eze_45:1-25; Eze_46:1-24; Eze_47:1-23; Eze_48:1-35 tienen que ver con cosas
en la Edad del Reino, cuando Cristo gobernará Personalmente desde Jerusalén. Esto
seguirá inmediatamente a la Batalla de Armagedón y la Segunda Venida del
SEÑOR.)
3 Y me llevó allí, y he aquí un Varón, Cuyo aspecto era como aspecto de bronce, y
tenía un cordel de lino en Su mano, y una caña de medir: y Él estaba a la puerta. (Si
comparamos las descripciones dadas en Eze_1:26-27, Dan_10:6, y Apo_1:15, el
«Varón, Cuyo aspecto era como aspecto de bronce» es Cristo. En forma personal, Él
dará al Profeta la información en cuanto a la Gloría y grandezas próximas de la
Jerusalén y el Templo restaurados. «Y tenía un cordel de lino en Su Mano, y una caña
de medir», eso habla de Justicia.)
4 Y me habló aquel Varón, diciendo: Hijo de hombre, mira con tus ojos, y oye con
tus oídos, y pon tu corazón a todas las cosas que te muestro; porque para que Yo te
las mostrase eres traído aquí. Cuenta todo lo que ves a la Casa de Israel. («Hijo de
hombre, mira con tus ojos, y oye con tus oídos», muestra la Verdad de que todo lo
que fue dado con respecto a las medidas, cuadros y especificaciones tienen referencia
espiritual, todo corresponde a Cristo. ¡El corazón carnal verá poca bendición en
estas declaraciones y medidas tediosas, y por consiguiente logrará poco! Sin
embargo, el corazón espiritual escudriñará e investigará para que estos trozos de oro
espiritual puedan subir a la superficie [Col_2:3].)
La puerta oriental que da al atrio exterior
5 Y he aquí, un muro fuera de la casa: y la caña de medir que aquel Varón tenía en la
mano, era de seis codos (3 metros [10 y 1/2 pies]), de a codo y palmo menor: y midió
el espesor de muro de una caña (3 metros [ 10 y 1/2 pies]), y la altura, de otra caña (3
metros de alto [ 10 y 1/2 pies]). (Una «caña» representaba más o menos 10 y 1/2 pies.
Es interesante que el Tabernáculo no tuviera muro, tampoco el Templo, o al menos
ningún muro que era parte esencial de la Estructura Sagrada. Aquí, sin embargo, el
muro constituye una porción integral del todo, y fue diseñado «para hacer una
separación entre el Santuario y el lugar profano. Este «muro» encerraba el cuadrado
en el cual se erigirá el Palacio Sagrado.)
6 Después vino a la puerta que mira hacia el oriente, y subió por sus gradas, y midió
un poste de la puerta, de una caña de ancho (3 metros de ancho [10 y 1/2 pies]), y el
otro poste de otra caña de ancho. (En la construcción de estos tres Lugares de Culto,
nada fue dejado al gusto o imaginación del hombre. Todo, hasta el asunto de las
medidas, fue mandado por Dios, y, como dicho, contiene gran significado espiritual.
Por ejemplo, la frase, «Y subió por sus gradas», corresponde al Plan de Dios de la
Salvación. Aunque el número de las gradas no se da aquí, está mencionado en los
Versículos Eze_40:22 y Eze_40:26 respecto a las Puertas del Norte y del Sur sumando
«siete». «Siete» es el número de Dios, que implica perfección, terminación y
totalidad. Así es la Salvación de Dios, proporcionada por Cristo Jesús y ofrecido
gratuitamente al hombre.)
7 Y cada cámara tenía una caña de largo, y una caña de ancho; y entre las cámaras
había cinco codos en ancho; y cada poste de la puerta junto a la entrada de la puerta
por dentro, una caña. (En realidad estas cámaras son designadas para los centinelas
Levíticos quienes vigilaban la Casa. No es que se requiere guardias; ¡es sólo para
propósitos ornamentales! Sin embargo, la aplicación espiritual es apropiada. Al hijo
de Dios le es mandado «vigilar» y «orar» [Mar_13:33].)
8 Midió asimismo la entrada de la puerta por dentro, una caña.
9 Midió luego la entrada del portal, de ocho codos, y sus postes de dos codos; y la
puerta del portal estaba por el lado de adentro. (Cristo establece las medidas; como el
SEÑOR de la Gloria, Él es Perfecto en Su Diseño.)
10 Y la puerta oriental tenía tres cámaras a cada lado, las tres de una medida: también
de una medida los portales a cada lado.
11 Y midió el ancho de la entrada de la puerta, de diez codos; y la longitud del portal,
de trece codos. (Este es la Puerta Oriental al Templo; mide cerca de siete metros de
altura [22 pies y 3/4].)
12 Y el espacio delante de las cámaras era de un codo a un lado, y de otro codo al
otro lado; y cada cámara tenía seis codos por un lado, y seis codos por el otro. (Esta
área o «espacio» justo delante de las «cámaras pequeñas» es muy probable tenían el
propósito de permitir a los guardias observar los acontecimientos en el Portón sin
tener que ir e interrumpir a aquellos que entraban y salían. En el sentido espiritual,
¿qué tipo de guardia tenemos nosotros que observa lo que entra y lo que sale? Nada
que mancha, corrompe, contamina o arruina debe ser permitido entrar.)
13 Midió la puerta desde el techo de la una cámara hasta el techo de la otra,
veinticinco codos de ancho, puerta contra puerta. (Si las Cámaras de los Guardias
estaban bajo tanto escrutinio minucioso, en cuanto a la medida y la dirección,
entonces nosotros no debemos olvidar el significado. Guardar nuestra mente, que es
el portal de nuestro espíritu, para que la profanación no entre, sólo se puede hacer
cuando el Creyente coloca su Fe en Cristo y lo que Cristo ha hecho por nosotros en
la Cruz. En esencia, Cristo no debe de estar separado de la Cruz, y nos referimos a
sus beneficios [Rom_6:3-5; Rom_8:1-2; Rom_8:11; 1Co_1:17-18; 1Co_1:23;
1Co_2:2; Gál_6:14].)
14 Y midió los postes, de sesenta codos, cada poste del atrio y del portal todo en
derredor. (Estos «postes» son veintisiete y medio metros [90 pies] de alto, y son
distintos de los pequeños postes cortos mencionados en el Versículo Eze_40:10. Yo
creo que el Espíritu Santo no quiere que este «poste» de veintisiete y medio metros de
alto sea contrastado con el pequeño «poste» de solamente un metro de alto [v.
Eze_40:9]. Servir en cualquier capacidad en el Reino de Dios tiene sumo significado.
¡Como se requiere el uno, se requiere también el otro!)

15 Y desde el frente de la puerta de la entrada hasta el frente de la entrada de la puerta

interior, cincuenta codos. (Los «cincuenta codos» son veinticinco metros [82 pies].
Esta medida consistía de la longitud total del Portón Oriental, desde la entrada
exterior hasta la salida interior.)
16 Y había ventanas estrechas en las cámaras, y en sus portales por dentro de la puerta
alrededor, y asimismo en los corredores; y las ventanas estaban alrededor por dentro;
y en cada poste había palmeras. (Ventanas similares existían en el Templo de Salomón
[1Re_6:4]. Es notable que el único tipo de árboles mencionados como parte del
adorno del Templo Milenario sea la «palmera». Este árbol simboliza «descanso».)
El atrio exterior
17 Me llevó luego al atrio exterior, y he aquí, había cámaras, y estaba enlozado todo
en derredor: treinta cámaras había alrededor en aquel atrio.
18 El enlozado a los lados de las puertas, en proporción a la longitud de los portales,
era el enlozado más bajo.
19 Y midió la anchura desde el frente de la puerta de abajo hasta el frente del atrio
interior por fuera, de cien codos hacia el oriente y el norte. (La palabra Hebrea para
«enlozado» sugiere pavimento decorativo. El pavimento del Atrio Exterior era
llamado «el pavimento de abajo» para distinguirlo de lo puesto en el Atrio Interior,
que estaba a un nivel más alto.)
La puerta norte
20 Asimismo midió la puerta del atrio exterior, que mira hacia el norte, midió su
longitud y su anchura.
21 Sus cámaras eran tres de un lado, y tres del otro; y sus postes y sus arcos eran
como la medida de la puerta primera: cincuenta codos de longitud y veinticinco de
ancho.
22 Y sus ventanas, y sus arcos, y sus palmas, eran conforme a la medida de la puerta
que estaba hacia el oriente; y se subían a ella por siete gradas, delante de ellas estaban
sus arcos. (No habrá Puerta al Occidente, porque el Mesías, cuando se siente en Su
Trono dentro del Templo, dará cara hacia al Oriente; los adoradores entrarán por
las Puertas del Norte y del Sur y se pararán delante de Él; detrás de Él, donde están
los Querubines de Gloria. Las «siete gradas», como hemos explicado, denotan
perfección, totalidad, terminación y universalidad; «siete» es el número de Dios y se
aplica a Cristo Mismo.)
23 La puerta del Atrio Interior estaba enfrente de la puerta hacia el norte; y así al
oriente: y midió de puerta a puerta, cien codos. (La distancia es idéntica desde el
norte, este y sur: 45.72 metros [150 pies].)
La puerta sur
24 Me llevó después hacia el sur, y he aquí una puerta hacia el sur: y midió sus
portales y sus arcos conforme a estas medidas.
25 Y tenía sus ventanas y sus arcos alrededor, como las otras ventanas; la longitud
era de cincuenta codos, y el ancho de veinticinco codos.
26 Sus gradas eran de siete peldaños, con sus arcos delante de ellas; y tenía palmeras,
una de un lado, y otra del otro lado, en sus postes. (Todas las tres puertas, este, norte
y sur, tienen «siete gradas» que conducen del exterior al muro interior. En realidad,
el diseño del área del Templo es muy simple, formando un cuadrado, con las medidas
idénticas desde todas las entradas. Esto muestra la exactitud, perfección y armonía
del Plan de Salvación de Dios, personificado en Cristo, Quien es Perfecto en todo
aspecto. De cualquier forma que alguien mire a Cristo, sólo ve perfección. Si uno
entra por la Puerta Sur, es idéntico a si entrara por la Puerta Norte; por lo tanto, por
dondequiera que alguien entre, no hay confusión. ¡Que cuadro tan hernioso del
verdadero Cristianismo Bíblico!)
27 Había también puerta hacia el sur del atrio interior: y midió de puerta a puerta
hacia el sur cien codos.
El atrio interior
28 Me llevó después en el atrio de adentro a la puerta del sur, y midió la puerta del
sur conforme a estas medidas.
29 Sus cámaras y sus postes y sus arcos eran conforme a estas medidas, y tenía sus
ventanas y sus arcos alrededor: la longitud era de cincuenta codos, y de veinticinco
codos el ancho.
30 Y los arcos alrededor eran de veinticinco codos de largo, y cinco codos de ancho.
31 Y sus arcos caían afuera del atrio, con palmeras en sus postes; y sus gradas eran
de ocho peldaños. (Había «ocho peldaños» que conducían a la Puerta Interior del
Sur, mientras había «siete» que conducían a la Puerta Exterior del Norte. El número
de Dios, que es «siete» no se puede mejorar, y no tiene propósito de ser mejorado;
por lo tanto, el número «ocho» con respecto a los peldaños que conducen al «Atrio
Interior», debe ser agregado a siete, por un total de quince. Esto corresponde a los
Salmos Peregrinos, o «Cánticos Graduales» o «Ascenso» que son quince. Son los
Sal_120:1-7 al Sal_134:1-3. Debían ser cantados, uno sobre cada grada, por el coro
de Levitas, mientras ellos ascendían primeramente al Atrio Exterior y luego al Atrio
Interior del Templo de Salomón. Estos «Cánticos Graduales» simbolizaban el viaje
espiritual de todo Creyente. El primer Salmo de cada grupo habla de aflicción y
angustia [Sal_120:1-7; Sal_123:1-4; Sal_126:1-6; Sal_129:1-8; Sal_132:1-18]; el
segundo Salmo de cada grupo habla de confianza y liberación por Dios [Sal_121:1-
8; Sal_124:1-8; Sal_127:1-5; Sal_130:1-8; Sal_133:1-3]; el tercer Salmo de cada
grupo habla de Bendición y Triunfo sobre Sión [Sal_122:1-9; Sal_125:1-5;
Sal_128:1-6; Sal_131:1-3; Sal_134:1-3].)
32 Y me llevó al atrio interior hacia el oriente, y midió la puerta conforme a estas
medidas.
33 Eran sus cámaras, y sus postes, y sus arcos, conforme a estas medidas: y tenía sus
ventanas y sus arcos alrededor: la longitud era de cincuenta codos, y la anchura de
veinticinco codos.
34 Y sus arcos caían afuera al atrio, con palmeras en sus postes de un lado y de otro;
y sus gradas eran de ocho peldaños.
35 Me llevó luego a la puerta del norte, y midió conforme a estas medidas:
36 Sus cámaras, sus postes, sus arcos y sus ventanas alrededor: la longitud era de
cincuenta codos, y de veinticinco codos el ancho.
37 Sus postes caían afuera al atrio, con palmeras a cada uno de sus postes de un lado
y de otro; y sus gradas eran de ocho peldaños. (Otra vez se repiten las mismas
especificaciones minuciosas, para mostrar que todas las partes de este edificio
formado Divinamente son de igual importancia y, por lo tanto, simbolizan a Cristo.)
38 Y había allí una cámara, y su puerta con postes de portales; allí lavarán el
holocausto. (Los Sacrificios incluían el «Holocausto», que hablaba de Cristo que dio
Su todo.)
39 Y en la entrada de la puerta había dos mesas a un lado, y otras dos al otro, para
degollar sobre ellas el Holocausto y la Expiación y el Sacrificio por el Pecado.
40 A un lado, por fuera de las gradas, a la entrada de la puerta del norte, había dos
mesas; y al otro lado que estaba a la entrada de la puerta, dos mesas.
41 Cuatro mesas a un lado, y cuatro mesas al otro lado, junto a la puerta; ocho mesas,
sobre las cuales degollarán las Víctimas.
42 Las cuatro mesas para el Holocausto eran de piedra labrada, de un codo y medio
de longitud, y codo y medio de ancho, y de un codo de altura: sobre éstas pondrán los
utensilios con que degollarán el Holocausto y el Sacrificio.
43 Y adentro, ganchos, de un palmo menor, dispuestos en derredor; y sobre las mesas
la carne de la ofrenda. (En realidad, tres tipos de Ofrendas serían ofrecidos aquí, el
«Holocausto», la «Ofrenda por el Pecado» y «la Ofrenda de Expiación». Habían
doce mesas en total, ocho sobre las cuales los Sacrificios fueron colocados, y cuatro
en que colocaban los instrumentos empleados para matar los animales. Aunque
reinstituido, bajo del Antiguo Pacto, los Sacrificios ya no quitan el pecado como lo
hicieron en ese entonces [Heb_10:4]. Los Sacrificios son meramente simbólicos, y
tienen la intención de demostrar el Gran Sacrificio hecho por Cristo en el Calvario.
Esto no se debe olvidar nunca; la ofrenda diaria de los Sacrificios será un ritual
constante, para que el mundo entero nunca olvide. Lo que salvó al hombre, el
derramamiento de la Sangre de Jesucristo en el Calvario, no se logró de forma fácil;
por lo tanto, es un concepto tan alto en la Mente de Dios, y con razón, que la
repetición que nunca termina de los Sacrificios serán ofrecidos constantemente como
un recuerdo perenne.)
Las cámaras de los sacerdotes
44 Y fuera de la puerta interior, en el atrio de adentro que estaba al lado de la puerta
del norte, estaban las cámaras de los cantores, las cuales miraban hacia el sur: una
estaba al lado de la puerta del oriente que miraba hacia el norte. (Los «cantores», cuya
adoración acompañará los Sacrificios, muestran la Verdad que el gran precio pagado
en el Calvario trajo gozo eterno al corazón humano, y siempre ha de ser expresado
como corresponde. Por lo tanto, la Verdad es evidente aquí que si la Iglesia va más
allá del Calvario, pierde su camino con Dios. Además, si el Calvario es siempre
ensalzado como el punto focal de la Redención y Santificación del hombre, que
ciertamente lo es, entonces gran gozo acompañará esta gran Verdad [Rom_6:3-14].)
45 Y me dijo: Esta cámara que mira hacia el sur es de los Sacerdotes que hacen la
guarda del templo. (La indicación es que esta Cámara es exclusivamente para los
«Sacerdotes».)
46 Y la cámara que mira hacia el norte es de los Sacerdotes que hacen la guarda del
Altar: estos son los hijos de Sadoc, los cuales son llamados de los hijos de Leví para
ministrar al SEÑOR. (Estas dos Cámaras mencionadas en ambos Versículos
Eze_40:45-46 corresponden a los Sacerdotes. Las mencionadas en el Versículo
Eze_40:45 miran hacia el sur y son para los que tienen el cargo del Templo. La que
mira hacia el norte es para aquellos que tienen el encargo del Altar.)
47 Y Él midió el atrio, cien codos de longitud, y cien codos de anchura; era cuadrado;
el Altar estaba delante de la casa. (El «codo» tenía cerca de 45.72 centímetros [18
pulgadas] de longitud. El Gran Altar estaba ubicado en el centro mismo de los cuatro
cuadrados, y es de 5 y 1/2 metros [18 pies] cuadrado. La Revelación de todo esto
testifica del interés de Dios en Su Pueblo. Él reconstruirá Su Santuario entre ellos; y
Él les ha informado de este hecho, y de sus detalles, como un testimonio de Su fiel
amor, y como un Mensaje a los corazones y consciencias. Por lo tanto, el Profeta fue
mandado mostrar estas cosas a la Casa de Israel [v. Eze_40:4].)
El pórtico del templo
48 Y me llevó al pórtico del templo, y midió cada poste del pórtico, cinco codos de
una parte, y cinco codos de otra; y la anchura de la puerta tres codos de una parte, y
tres codos de la otra.
49 La longitud del pórtico veinte codos, y la anchura once codos, al cual subían por
gradas: y había columnas junto a los postes, una de un lado, y otra de otro. (El «Lugar
Santísimo», específico en el Versículo Eze_41:4 del siguiente Capítulo, es más grande
que el «atrio de la Casa», o la entrada, de este modo significa que la Gracia de Dios
es mucho más grande que cualquier otra cosa que se puede llevar a ella. Por
consiguiente, este hecho ilustra la gran Verdad espiritual. En este edificio y sus
dependencias, las medidas de los «fundamentos» y los «postes» tienen gran
importancia; porque la palabra anterior expresa estabilidad, la otra, permanencia.
En la Biblia, los «postes» de la puerta significan la totalidad de la casa como una
estructura derecha, y sirven de figura de su fuerza. Ello es imitado en los postes de la
puerta de piedras masivas de los Templos Egipcios. Por lo tanto, si los postes de la
puerta se sacuden, toda la casa se sacude. En esta Casa de Jehová, todos los
fundamentos serán de igual medida que significa su Gran Fuerza, que es Cristo.)

41
El interior del templo
(574 a.C.)
1 ME METIÓ luego en el templo, y midió los postes, siendo el ancho seis codos de
una parte, y seis codos de otra, que era la anchura del Tabernáculo. (Lo masivo y altura
de los «postes» o sea los «pilares» declaran la fuerza y magnificencia del Templo.
«Seis» se emplea con razón, porque denota el número del hombre, y corresponde con
las Palabras de Cristo [Apo_3:12].)
2 Y la anchura de la Puerta era de diez codos; y los lados de la puerta, de cinco codos
de una parte, y cinco de otra. Y midió su longitud de cuarenta codos, y la anchura de
veinte codos. («Y la anchura de la Puerta era de diez codos», se refiere a la «Puerta»
que conducía al Lugar Santo, que tenía una anchura de 4 y 1/2 metros [15 pies]. Esto
corresponde otra vez a Jesús como «la Puerta» [Jua_10:7]. El Lugar Santo tenía una
longitud de 18 metros [60 pies] y una anchura de 9 metros [30 pies]. Estas eran las
mismas dimensiones del Templo de Salomón.)
3 Y El pasó al interior, y midió cada poste de la Puerta de dos codos; y la Puerta de
seis codos; y la anchura de la entrada de siete codos. (La frase, «Y Él pasó al interior»,
habla del Lugar Santísimo, que estaba ubicado inmediatamente detrás del Lugar
Santo. Ninguno excepto el Sumo Sacerdote podía entrar al «Lugar Santísimo», y
solamente una vez al año; por lo tanto, Cristo, parece, entró Solo, quedando Ezequiel
afuera. La altura de la Puerta es «seis codos»; esto se refiere a Cristo como Puerta
para la Salvación, es decir, la vía de entrada del hombre a Dios, puesto que «seis» es
el número del hombre; la anchura de la Puerta es «siete codos», que muestra la
Salvación Perfecta de Dios en Cristo, el número de Dios es «siete», que habla de
perfección.)
4 Midió también su longitud, de veinte codos, y la anchura de veinte codos, delante
del Templo: y me dijo: Este es el Lugar Santísimo. (El «Lugar Santísimo» es el lugar
en donde el Arca del Pacto era guardada en el Tabernáculo y en el Templo de
Salomón. En realidad, las dimensiones eran las mismas del Templo de Salomón:
nueve metros [30 pies] de longitud y nueve metros [30 pies] de anchura. En el Templo
de Salomón, el «Altar» tenía nueve metros [30 pies] de longitud y nueve metros [30
pies] de anchura, el mismo tamaño como «el Lugar Santísimo». Sin embargo, en el
Templo Milenario, el «Altar» será más pequeño que el Lugar Santísimo, solamente 5
y 1/2 metros [18 pies] cuadrados. El Altar de Salomón era más grande porque
representaba un precio que había de ser pagado, mientras el «Altar» en el Templo
Milenario es más pequeño, porque representa un precio ya pagado [2Cr_4:1;
Eze_43:16].)
5 Después midió el muro de la casa, de seis codos; y de cuatro codos la anchura de
las cámaras, en torno de la casa alrededor. (El muro de esta «Casa» será «seis codos»,
o sea 2 y 3/4 metros [9 pies], de anchura. La anchura masiva del «muro» sin duda
servirá como un símbolo de fuerza e indestructibilidad respecto a Cristo como el
Verdadero Templo. ¡En otras palabras, esta Casa está segura, mientras la casa
construida por el hombre cae!)
6 Y las cámaras eran cámara sobre cámara, treinta y tres por orden; y entraban
soportes en la pared de la casa alrededor, sobre los que las cámaras se apoyaban, y
para que no se apoyaran en la pared de la casa.
7 Y había mayor anchura y vuelta en las cámaras a lo más alto; el caracol de la casa
subía muy alto alrededor por dentro de la casa: por tanto la casa tenía más anchura
arriba; y de la cámara baja se subía a la alta por la del medio. (La anchura de la pared
del primer piso era de dos metros veintinueve centímetros [7 y 1/2 pies], mientras
esta fue disminuida a un metro con ochenta centímetros [6 pies] para el segundo piso,
y a un metro con cuarenta centímetros [4 y 1/2 pies] para el tercer piso.)
8 Y miré la altura de la casa alrededor: los cimientos de las cámaras eran una caña
entera de seis codos de largo. (Los «cimientos» de estas cámaras eran de una anchura
de dos y tres cuartos metros [9 pies], que constituían un «fundamento firme».)
9 Y la anchura de la pared de afuera de las cámaras era de cinco codos, y el espacio
que quedaba de las cámaras de la casa por dentro. (El simbolismo aquí tiene la
intención de dar a conocer el mensaje espiritual deseado: en este caso, el fundamento
firme de nuestra experiencia espiritual en Cristo, junto con los muros firmes que
denotaban la estructura de la Salvación y del reinado de Cristo como absolutamente
seguros y eternos en su resultado.)
10 Y entre las cámaras había anchura de veinte codos por todos lados alrededor de la
casa.
11 La puerta de cada cámara salía al espacio que quedaba; una puerta hacia el norte,
y otra puerta hacia el sur: y el ancho del espacio que quedaba era de cinco codos por
todo alrededor.
12 Y el edificio que estaba delante del espació abierto al lado del occidente era de
setenta codos; y la pared del edificio, de cinco codos de grueso alrededor, y noventa
codos de largo. (Este edificio era un lugar separado, o estructura, que fue construida
detrás del Templo en el lado occidental, separado del resto de la tierra sobre la cual
el Templo, con sus Atrios y Cámaras, estaba erigido; es muy probable que fue
dedicado a unos propósitos menos sagrados. En realidad, detrás del Templo de
Salomón yacía un espacio similar [2Re_23:11; 1Cr_26:18].)
13 Luego midió la casa, cien codos de largo: y el espacio abierto y el edificio y sus
paredes, de cien codos de longitud.
14 Y el ancho del frente de la casa y del espacio abierto al oriente, era de cien codos.
(Lo que está instituido, aunque contendría algunos de los vestigios de la Ley Mosaica,
todavía, se presenta como un símbolo o memorial que los hombres nunca deben
olvidar lo que Cristo hizo en la Cruz por la familia humana para que los hombres
pudieran ser salvos.)
15 Y midió la longitud del edificio que estaba delante del espacio abierto que había
detrás de él, y las cámaras de uno a otro lado, cien codos; y el templo de dentro, y los
portales del atrio.
16 Los umbrales, y las ventanas estrechas, y las cámaras, tres en derredor a la parte
delantera, todo cubierto de madera alrededor desde el suelo hasta las ventanas; y las
ventanas también estaban cubiertas,
17 Por encima de la puerta del Templo Interior, y el Exterior de todas las paredes
alrededor, las midió por dentro y por fuera. (Estas casas de tres pisos, como el Palacio
mismo, serán terminadas con un revestimiento ornamentado de madera con
Querubines y Palmeras. Sin duda, la madera tipificaba la Encamación de Cristo,
cuando Dios se hizo Hombre para llegar a ser el Último Adán, y para poder redimir
a la humanidad.)
18 Y estaba labrada con querubines y palmeras: entre querubín y querubín una
palmera: y cada querubín tenía dos rostros (como en el Templo de Salomón
[1Re_6:29], el revestimiento fue adornado con cubiertas artísticas de Querubines y
Palmeras, una Palmera y un Querubín alternativamente. Como la madera denotaba
la humanidad de Cristo, del mismo modo, los «Querubines» denotaban Su Santidad.
Las «Palmeras» denotaban la abolición de la maldición de la Tierra y del hombre,
con la armonía ya prevaleciente, que tipificaba el «reposo»):
19 Un rostro de hombre hacia la palmera de un lado, y rostro de león hacia la palmera
del otro lado, por toda la casa alrededor. («Un rostro de hombre hacia la palmera de
un lado», se refiere a Dios que se hizo Hombre, «El Hombre Cristo Jesús», para
poder redimir y quitar la maldición. La frase, «Y rostro de león hacia la Palmera del
otro lado», se refiere a Cristo que llega a ser «el León de la Tribu de Judá»
[Apo_5:5].)
20 Desde el suelo hasta encima de la puerta había querubines grabados y palmeras, y
por toda la pared del Templo. (A través del Templo, aun «hasta el Templo Interior»
[v. Eze_41:17], el Lugar Santísimo estarán los símbolos.)
21 Cada poste del Templo era cuadrado, y la delantera del Santuario era como la otra
delantera. (Eran «cuadrados», que significa el Evangelio cuádruplo de Jesucristo: la
Salvación por la Sangre, el Bautismo con el Espíritu Santo, la Sanidad Divina y la
Segunda Venida de Cristo. Todo ahora, en la Edad del Reino, son realidades, por lo
tanto, la apariencia de uno de ellos como la apariencia del otro.)
22 La altura del Altar de madera era de tres codos, y su longitud de dos codos; y sus
esquinas, y su superficie, y sus paredes, eran de madera. Y me dijo: Esta es la mesa
que está delante del SEÑOR. (Esto no es el Altar del Sacrificio que fue asentado en
el centro cuadrado de cien codos cuadrados y delante del Templo, sino más bien el
«Altar del Incienso». Está en el Lugar Santo, inmediatamente delante del Lugar
Santísimo, exactamente donde se asentaban el Tabernáculo y en el Templo de
Salomón.)
23 Y el Templo y el Santuario tenían dos puertas. (Estas «puertas» conducían al
«Lugar Santo» y al «Lugar Santísimo».)
24 Y en cada puerta había dos hojas, dos hojas que giraban: dos hojas en una puerta,
y otras dos en la otra.
25 Y en las puertas del Templo había grabados de querubines y palmeras, así como
estaban hechos en las paredes, y gruesa madera sobre la delantera de la entrada en el
exterior. (Como el Templo de Salomón también representaba la Edad del Reino
venidero, del mismo modo, este Templo, que es de la Edad del Reino, tiene los mismos
símbolos. Ellos representan Santidad y Armonía.)
26 Y había ventanas estrechas, y palmeras de uno y otro lado por los lados de la
entrada, y de la casa, y por las vigas. (El Templo de Salomón fue decorado
enormemente con oro, mientras que eso no está presente en el Templo del Reino,
porque Cristo, a quien el oro representaba, ahora está presente; por lo tanto, el oro
ya no es necesario. La implicación es esta: la abundancia de oro hizo que el Templo
de Salomón fuera hermoso; sin embargo, Cristo eclipsará tanto la brillantez del
mismo oro que aún si el oro estuviera presente, su brillo disminuiría por la Gloria
del SEÑOR.)

42
Las cámaras del templo
(574 a.C.)
1 ME SACÓ luego del atrio exterior hacia el norte, y me llevó a la cámara que estaba
delante del espacio que quedaba enfrente del edificio de hacia al norte. (El Atrio
Exterior en realidad se refiere al «Atrio de Afuera». El plano del Templo ya ha sido
completado, y Ezequiel fue llevado afuera por Cristo al «Atrio Exterior».)
2 Por delante de la puerta del norte su longitud era de cien codos, y el ancho de
cincuenta codos. (La longitud es de 45 y 3/4 metros [150 pies]; la anchura de casi 23
metros [75 pies]. Este edificio contiene las Cámaras de los Sacerdotes.)
3 Frente a los veinte codos que había en el atrio interior, y enfrente del enlozado que
había en al atrio exterior; estaban las cámaras, las unas enfrente de las otras en tres
pisos. (Este edificio tiene tres pisos altos, con una «galería» o sea un «pórtico» que
corre la longitud del edificio en los tres pisos.)
4 Y delante de las cámaras había un corredor de diez codos de ancho hacia adentro,
con una vía de un codo; y sus puertas estaban al norte.
5 Y las cámaras más altas eran más estrechas; porque las galerías quitaban de ellas
más que de las bajas y de las de en medio del edificio: (Este Versículo parece
significar que las «Cámaras más altas», el segundo y tercer piso, eran más pequeños
que el piso bajo.)
6 Porque estaban en tres pisos, y no tenían columnas como las columnas de los atrios:
por tanto, eran más estrechas que las de abajo y las de en medio desde el suelo. (Los
pisos bajos que eran más pequeños sugiere, en el sentido espiritual, una visión
ampliada que se disfruta en la comunión; los pisos altos que son más pequeños
sugiere una experiencia humillante que se gana en el servicio. En comunión con el
SEÑOR, y al darse cuenta de Su Gran Presencia, el recipiente de su Presencia, y por
el momento, se cree capaz de eventos milagrosos. Sin embargo, el servicio actual
rápidamente demuestra las inhabilidades de la carne y haciendo humilde al
participante.)
7 Y el muro que estaba afuera enfrente de las cámaras, hacia el atrio exterior delante
de las cámaras, tenía cincuenta codos de largo.
8 Porque la longitud de las cámaras del atrio de afuera era de cincuenta codos: y
delante de la fachada del templo había cien codos.
9 Y debajo de las cámaras estaba la entrada al lado oriental, para entrar en él desde
el atrio de afuera. (Es muy probable, que la elevación de este edificio, con respecto al
nivel del suelo, era más alto que el Atrio Exterior, pero más bajo que el área del
Templo. Por consiguiente, la «entrada» se muestra como que está debajo de las
Cámaras.)
10 A lo largo del muro del atrio hacia el oriente, enfrente del patio, y delante del
edificio, había cámaras.
11 Y el corredor que había delante de ellas era semejante al de las cámaras que
estaban hacia el norte, conforme a su longitud, asimismo su anchura, y todas sus
salidas; conforme a sus puertas, y conforme a sus entradas.
12 Así también eran las puertas de las cámaras que estaban hacia el sur, tenía una
puerta al principio del camino, del camino delante del muro hacia el oriente a los que
entran.
13 Y me dijo: Las cámaras del norte y las cámaras al sur, que están delante del patio,
son cámaras santas, en las cuales los Sacerdotes que se acercan al SEÑOR comerán
las santas ofrendas. Allí pondrán las ofrendas santas: la Ofrenda de Grano, la
Expiación y el Sacrificio por el Pecado: porque el lugar es santo.
14 Cuando los Sacerdotes entraren, no saldrán del lugar santo al atrio de afuera, sino
que allí dejarán sus vestimentas con que ministrarán, porque son santas; y se vestirán
otros vestidos, y así se allegarán a lo que es del pueblo. (La regla en cuanto a los
vestidos Sacerdotales de los hijos de Sadoc revela una característica de la vida
espiritual en particular al Cristianismo moderno, que existan afectos, energías y
ministerios que pertenecen exclusivamente a la vida de comunión e intercesión, y
deben ser, por lo tanto, reservados expresamente para el SEÑOR. Refrescado y
habilitado por esta comunión interna, el Cristiano luego puede salir a ministrar al
mundo. Al contemplar a Cristo como Rey de reyes y SEÑOR de señores, a pesar de
las señales de los clavos en Sus Manos, resplandeciente en su hermosura y gloria,
uno tiene la tendencia de olvidar lo que Él hizo para redimir a la humanidad. Estos
repetidos rituales sacrificiales serán un recuerdo constante.)
15 Y luego que acabó las medidas del interior de la casa, me sacó por el camino de
la puerta que miraba hacia el oriente, y lo midió todo alrededor. (Mientras el SEÑOR
mide las dimensiones para el Templo del Reino, del mismo modo, Él mide el gobierno,
operación y servicio de Su Iglesia. Como Sus medidas son exactas para el Templo
venidero, del mismo modo, son exactas para Su Iglesia.)
16 Midió el lado oriental con la caña de medir, quinientas cañas de la caña de medir
en derredor.
17 Midió al lado del norte, quinientas cañas de la caña de medir alrededor.
18 Midió al lado del sur, quinientas cañas de la caña de medir.
19 Rodeó al lado del occidente, y midió quinientas cañas de la caña de medir. (Esto
se llama el «Atrio de lo Más Exterior» o el «Lugar Profano», que podría ser usado
por el pueblo que llega al mismo Santuario.)
20 A los cuatro lados lo midió: tuvo el muro todo alrededor quinientas cañas de
longitud, y quinientas cañas de anchura, para hacer separación entre el Santuario y el
lugar profano. (Los Santuarios dados por Inspiración a Moisés y a David fueron
construidos, y así puestos visiblemente delante de los ojos de Israel. El Santuario
dado en Visión a Ezequiel está por ser construido. Pero sus detalles son revelados
por escrito [Eze_43:11] como un testimonio e instrucción a Israel. Los detalles hacen
vividos los intereses de Dios para Su Pueblo antiguo, y da sustancia a Sus Promesas
para establecer Su hogar entre ellos. Por lo tanto, esta Visión es un llamado perpetuo
al Arrepentimiento [Eze_43:10-11].)

43
La gloria del Señor llena el templo
(574 a.C.)
1 ME LLEVÓ luego a la puerta, a la puerta que mira hacia el oriente (efectivamente
este Capítulo es glorioso, puesto que anuncia el regreso del Espíritu Santo al Templo
Milenario y, por lo tanto, a Israel. Ezequiel lo vio salir [Eze_11:23] y ahora él lo ve
regresar. La expiación, como el fundamento eterno de la relación de Dios cotí el
hombre, es la idea clave de este Capítulo, que ocasionará la Venida del Espíritu.
Como dicho, esto será en el comienzo de la Edad del Reino);
2 Y he aquí la Gloria del Dios de Israel, que venía de hacia el oriente; y Su sonido
era como el sonido de muchas aguas, y la Tierra resplandecía a causa de Su Gloria.
(¡Israel le rechazó y por lo tanto Él salió! Ahora Israel ha sido lavado y limpiado por
la Sangre del Cordero y, por lo tanto, Él regresa.)
3 Y la Visión que vi era como la Visión, como aquella Visión que vi cuando vine
para destruir la ciudad: y las Visiones eran como la Visión que vi junto al río de
Quebar; y caí sobre mi rostro. (Al tomar nota de la última frase primero, «Y caí sobre
mi rostro», nos ha dejado con la posición apropiada en la Presencia del SEÑOR de
la Gloría. ¡La frase, «Como aquella Visión que vi cuando vine para destruir la
ciudad», no significa que Ezequiel personalmente la destruyó, sino que él anunció
este evento trágico! La idea de la terminología de Ezequiel es que como Dios, en el
pasado, Se mostró como Uno de Justicia y Juicio al vencer y destruir lo antiguo, del
mismo modo, ahora Él se mostrará como un Dios de Gracia y Misericordia al
dignarse establecer Su morada en el nuevo. ¡Por consiguiente, Ezequiel vio la
destrucción y la restauración, y de manera no era semejante a ningún Profeta antes
ni después!)
4 Y la Gloria del SEÑOR entró en la casa por la vía de la puerta que daba cara al
oriente (llega al nuevo Templo Milenario recién construido).
5 Y me alzó el Espíritu, y me metió en el atrio interior; y he aquí que la Gloria del
SEÑOR llenó la casa. (El SEÑOR ahora está entrando y tomando posesión de la
«Casa», como anteriormente Él había entrado y tomado posesión del Tabernáculo y
del Templo de antaño [Éxo_40:34-35; 1Re_8:10-11].)
6 Y oí uno que me hablaba desde la casa: y un Varón estaba junto a mí. (El Espíritu
Santo le está hablando a Ezequiel. Además, el «Hombre» de pie junto a Ezequiel es
nada menos que el SEÑOR Jesucristo, Quien le ha conducido a Ezequiel a través de
la totalidad de esta manifestación [Eze_40:3-4].)
7 Y me dijo: Hijo de hombre, este es el lugar de Mi Trono, el lugar para las plantas
de Mis pies, y en el cual Yo habitaré entre los Hijos de Israel para siempre: y nunca
más contaminará la Casa de Israel Mi Santo Nombre, ni ellos ni sus reyes, con sus
fornicaciones, y con los cuerpos muertos de sus reyes en sus altares: (Las palabras,
«Este es», están delante del «Lugar de Mi Trono». La frase, «En el cual Yo habitaré
entre los Hijos de Israel para siempre», va más allá de cualquier cosa que se haya
comunicado respecto al Tabernáculo de Moisés o el Templo de Salomón.)
8 Y poniendo ellos su umbral junto a Mi umbral, y su poste junto a Mi poste, y no
más que pared entre Mí y ellos, contaminaron Mi Santo Nombre con sus
abominaciones que hicieron: los consumí por tanto en Mi furor. (La manera de decir
«su umbral», «Mi umbral», «su poste», y «Mi poste» se refiere a su templo idolátrico
erigido junto a la Santa Casa de Dios, que por supuesto ocasionó su destrucción.)
9 Ahora echarán lejos de Mí su fornicación, y los cuerpos muertos de sus reyes, y
habitaré en medio de ellos para siempre. (La teología aquí presentada armoniza con
la de los escritores del Antiguo y Nuevo Testamentos, quienes invariablemente
proclamaban la pureza de corazón y vida como una condición necesaria para que
Dios morara en el corazón, y al mismo tiempo afirmando que tal residencia Divina
en el corazón como el único Creador definitivo de tal pureza; porque uno mismo tío
puede crear tal para sí mismo [Isa_1:16; Isa_1:25; Isa_26:12; Jua_14:23;
2Co_6:17; Stg_4:8]. La idea de este Versículo no es que tal pecado habita en Israel
en este período en particular [la época del Milenio], sino que la actitud de Dios hacia
el pecado nunca cambia. ¡De hecho, tal pecado nunca acontecerá otra vez en Israel!)
10 Tú, hijo de hombre, muestra a la Casa de Israel esta casa, y avergüéncense de sus
pecados, y midan ellos el diseño de ella. (Esto se refiere a las iniquidades del pasado,
y no del presente. Pero todavía ellos deben avergonzarse de su pasado, como nosotros
debemos avergonzarnos de todo pecado, especialmente el pecado personal. «Y midan
ellos el diseño de ella», corresponde al Gran Santuario, que será el lugar de la
morada de Dios. Al comparar este glorioso Palacio con los Templos paganos y
Papales de la idolatría, el pueblo se avergonzará de santuarios pequeños, tanto
antiguos como modernos, de los cuales ellos ahora son tan orgullosos. De modo
semejante, una comparación entre el Camino de Salvación y de Santidad diseñado en
las Escrituras y aquellos inventados por el hombre llenan el corazón contrito con
auto-condenación.)
11 Y si se avergonzaren de todo lo que han hecho, hazles entender el diseño de la
casa, su disposición, y sus salidas y sus entradas, y todas sus formas, y todas sus
descripciones, y todas sus configuraciones, y todas sus leyes: y descríbelo delante de
sus ojos, para que guarden toda su forma, y todas sus reglas, y las pongan por obra.
(La idea de este Versículo es que Dios no habitará en nada excepto lo que Él Mismo
ha hecho. Solamente lo que es de Dios, todo de Dios y únicamente de Dios, será
aceptado. Y precisamente esto ha sido el problema del hombre religioso desde el
mismo comienzo hasta ahora. Él busca introducir lo que es de su propia hechura en
vez de lo de Dios, que el SEÑOR nunca tolerará. El Mensaje siempre ha sido, y
siempre será, «Jesucristo y Él Crucificado» [1Co_1:23].)
12 Esta es la Ley de la Casa: Sobre la cumbre del monte, el recinto entero, todo en
derredor, será santísimo. He aquí que esta es la Ley de la Casa. (Como el Lugar
Santísimo, el Tabernáculo y el Templo de antaño eran «santísimos», asimismo, la
totalidad de lo que pertenece a este Santuario será considerado como un «Lugar
Santísimo». De hecho, la cumbre entera de este monte será reservado para
Emanuel.)
El altar
13 Y estas son las medidas del Altar por codos (el codo de a codo y palmo menor).
La base, de un codo, y de un codo el ancho; y su moldura por su borde alrededor, de
un palmo. Este será el zócalo del Altar. (Como dicho al comienzo de este Capítulo, la
Expiación es el fundamento eterno de la relación de Dios con el hombre, del cual el
«Altar» es simbólico. Tal simboliza el Calvario, y siempre servirá como recuerdo y
memorial de lo que Cristo hizo para que la humanidad fuera redimida.)
14 Y desde el seno de sobre el suelo hasta el lugar de abajo, dos codos, y la anchura
de un codo: y desde el lugar menor hasta el lugar mayor, cuatro codos, y la anchura
de un codo. (El «codo» es aproximadamente 46 centímetros [18 pulgadas] de largo.)
15 Y el Altar, de cuatro codos, y encima del altar, cuatro cuernos.
16 Y el Altar tenía doce codos de largo, y doce de ancho, cuadrado a sus cuatro lados.
17 Y el área, de catorce codos de longitud y catorce de anchura en sus cuatro lados,
y de medio codo el borde alrededor: y el seno de un codo por todos lados; y sus gradas
estaban al oriente. (Este Altar era 5 y 1/2 metros [18 pies] de largo y 5 y 1/2 metros
[18 pies] de ancho. Es aproximadamente 3 metros con 20 centímetros [10 y 1/2 pies]
de alto.)
18 Y me dijo: Hijo de hombre, así ha dicho el SEÑOR Dios: Estas son las ordenanzas
del altar el día en que será hecho, para ofrecer sobre él Holocausto, y para esparcir
sobre él sangre. (Las «Ordenanzas del Altar», como dadas aquí, no pertenecen a las
regulaciones del culto Sacrificial que sería después ofrecido sobre este Altar, porque
los ritos que habían de ser observados durante esa época eran para su consagración
solamente. En otras palabras, había de ser dedicado en una ceremonia especial antes
de estar disponible para el uso ordinario. Lo mismo fue hecho para el Tabernáculo y
el Templo de Salomón [Éxo_29:1-46; Lev_8:11-33; 1Re_8:63-66; 2Cr_7:4-10].)
19 Darás a los Sacerdotes Levitas que son del linaje de Sadoc, y que se allegan a Mí,
dice el SEÑOR Dios, para ministrarme, un becerro de la vacada para expiación. (Los
«Sacerdotes» quienes participarían en esta dedicación y limpieza debían de ser «del
linaje de Sadoc», el Sumo Sacerdote fiel de David. Por lo tanto, por haber escogido
estos «hijos de Sadoc», el Espíritu Santo nos declara el valor de adherirse fielmente
a la Voluntad de Dios, en lugar de la voluntad del hombre.)
20 Y tomarás de su sangre, y pondrás en los cuatro cuernos del altar, y en las cuatro
esquinas del área, y en el borde alrededor: así lo limpiarás y purificarás. (La «sangre»
formaba una parte integral de cada una de las ofrendas expiatorias. Debía de ponerse
sobre los «cuatro cuentos» del Altar, que señalaban a toda dirección en contorno,
que significa que la Redención era lo mismo por todas partes del mundo. También
debe de estar esparcida sobre las «cuatro esquinas», que formaba parte de la base o
fundamento del Altar. También debía esparcirse sobre el «borde», implicando que la
sangre era esparcida en todo el borde. De este modo el «Altar» fue limpiado y
purgado. Por consiguiente, cuando Cristo murió en el Calvario, Su Sangre, manchó
la Cruz y la Tierra debajo de ella, purgó y limpió esta misma más vil forma de
muerte.)
21 Tomarás luego el becerro de la Expiación, y lo quemarás conforme a la Ley de la
Casa, fuera del Santuario. (La idea es: la piel y el estiércol del buey deben ser
quemados fuera del campamento [Éxo_29:14; Lev_4:12; Lev_4:21; Lev_9:11;
Lev_9:15].)
22 Y al segundo día ofrecerás un macho cabrío sin defecto, para Expiación; y
purificarán el Altar como lo purificaron con el becerro.
(El Lector quizá se pregunte de la necesidad de diferentes animales, o cierto animal.
En realidad, había cinco Ofrendas Levíticas dadas en la Ley de Moisés, con todas
tipificando lo que Cristo haría en el Calvario. En otras palabras, se requería cinco
Ofrendas para ilustrar totalmente Su Única Ofrenda Sacrificial en la Cruz. Ellos
eran: el Holocausto, la Ofrenda de Paz, la Ofrenda por el Pecado, la Ofrenda de
Transgresión, o sea Expiación, y la Ofrenda de Grano o de cereal.)
23 Cuando acabares de expiar, ofrecerás un becerro de la vacada sin defecto, y un
carnero sin tacha de la manada:
24 Y los ofrecerás delante del SEÑOR, y los Sacerdotes echarán sal sobre ellos, y los
ofrecerán en Holocausto al SEÑOR. (Una comparación aquí con Levítico es muy
instructiva. Allá, el Holocausto precedía la Ofrenda por el Pecado; aquí, lo sigue. En
ese entonces la Fe alabó mirando delante a la Ofrenda por el Pecado en el Calvario;
en el día futuro, la Fe alabará mirando hacia atrás al Calvario. De este modo la gran
Ofrenda por el Pecado del Cordero de Dios se sitúa en medio de las edades, y es
precedida y seguida por la alabanza. En realidad, no habrá Día de Expiación en el
Culto Milenario; porque en ese entonces los Sacrificios harán recuerdo de la Única
Todo-Suficiente Expiación perfeccionada en Gólgota. La «sal» colocada sobre las
Ofrendas tipificaba el hecho de que todo esto es conforme a la Palabra de Dios.)
25 Por siete días sacrificarán un macho cabrío cada día en Expiación; asimismo
sacrificarán el becerro de la vacada y un carnero sin tacha del rebaño. (La perfección
de la Expiación aparece en los siete días de esta acción. «Siete», como el número de
Dios, denota perfección, terminación, cumplimiento, totalidad y universalidad.)
26 Por siete días expiarán el Altar, y lo purificarán; de este modo quedarán
consagrados. (Así mismo, como esto consagró a los Sacerdotes, también consagra a
todos quienes creen en la Ofrenda vicaria, expiatoria de Cristo en el Calvario.)
27 Y acabados estos días, al octavo día, y en adelante, sacrificarán los Sacerdotes
sobre el Altar vuestros Holocaustos y Ofrendas de Paz; y me seréis aceptos, dice el
SEÑOR Dios. (Como resultado del Calvario, esta Casa permanecerá, mientras toda
otra casa ha caído. Dios sólo puede aceptar a la humanidad sobre la base del
Sacrificio del Calvario, y nuestra Fe en esa Obra Terminada. Por cualquier otro
camino además de la Cruz, la aceptación es negada [Efe_2:13-18].)

44
La puerta del príncipe
(574 a.C.)
1 ENTONCES me trajo de vuelta por el camino de la puerta exterior del Santuario
que mira hacia el oriente; la cual estaba cerrada. (Puesto que el Mesías ha entrado en
Su Palacio, la Puerta Interior de la entrada oriental será cerrada, dando memorial
del hecho, y seguridad que Él nunca más abandonará Su Templo.)
2 Y me dijo el SEÑOR: Esta puerta ha de estar cerrada: no se abrirá, ni entrará por
ella hombre, porque el SEÑOR Dios de Israel entró por ella; estará por tanto cerrada.
(Jehová, el Dios de Israel, es el Mesías. Las Puertas del Norte y Sur serán las entradas
principales de los adoradores día y noche, quienes sin duda vendrán continuamente
de todas partes del mundo.)
3 Sólo el príncipe, por ser él el príncipe, él se sentará en ella para comer pan delante
del SEÑOR: por el camino de la entrada de la puerta entrará, y por el camino de ella
saldrá. (¡Exactamente quien es este «Príncipe», no se sabe! Sin embargo, él es
probablemente el Gran Sacerdote.)
4 Y me llevó hacia la puerta del norte por delante de la casa, y miré, y he aquí, la
Gloria del SEÑOR había llenado la Casa del SEÑOR: y caí sobre mi rostro. (El
resultado de la «Gloria del SEÑOR» llenando la casa fue que Ezequiel cayó sobre su
rostro. ¡Así el hombre es humillado!)
5 Y me dijo el SEÑOR: Hijo de hombre, presta atención, y mira con tus ojos, y oye
con tus oídos todo lo que Yo hablo contigo sobre todas las ordenanzas de la Casa del
SEÑOR, y todas sus leyes: y pon tu corazón a las entradas de la casa, y a todas las
salidas del Santuario. (La frase, «presta atención», significa «pon tu corazón en o
considera en tu corazón». El corazón, los ojos y los oídos deben todos estar ocupados
con la Casa del SEÑOR y sus Ordenanzas, Leyes y Estatutos. Al entrar en la
Presencia de Dios, es de suma importancia que el corazón sea profundamente tocado;
también estar profundamente ejercitado cuando sale de la Presencia Divina.)
6 Y dirás a los rebeldes, a la Casa de Israel: Así ha dicho el SEÑOR Dios: Basta ya
de todas vuestras abominaciones, oh Casa de Israel (en realidad, el SEÑOR lleva al
Profeta de regreso a los acontecimientos originales de la Puerta del Norte, porque
esta fue la escena de las «abominaciones», que, al menos en parte, causaron la
destrucción original de Judá y Jerusalén [Eze_8:5]. Por consiguiente, se da un
recuerdo y advertencia severos para que las naciones ahora sean preservadas de caer
en similar transgresión. Agradecidamente, no habrá repetición por Israel de estas
«abominaciones»).
7 De haber vosotros traído extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos de
carne, para estar en Mi Santuario, para contaminar Mi casa; de haber ofrecido Mi pan,
la grosura y la sangre: e invalidaron Mi pacto por todas vuestras abominaciones.
(Aquellos que no conocen al SEÑOR profanan un verdadero templo de culto por
profesar ser lo que no son.)
8 Pues no han observado las leyes que Yo les di respecto a estas cosas santas, sino
que habéis puesto extranjeros como guardas de Mi ordenanza en Mi Santuario. (La
implicación es: en el Sistema Antiguo de Dios, los Levitas, debían atender a las
responsabilidades del Templo, se cansaron de este servicio, y contrataron a otros,
aun Gentiles [incircuncisos en la carne y corazón], para cumplir los servicios
[Neh_13:3-9].)
9 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Ningún hijo de extranjero, incircunciso de corazón e
incircunciso de carne, entrará en Mi Santuario, de todos los hijos de extranjeros que
están entre los Hijos de Israel. (Por este Versículo parece que en la Edad del Reino
venidero la intención del SEÑOR es que solamente Israel sirva en el Templo, y ciertas
personas en Israel, «los Hijos de Sadoc», con los «Levitas» en unas posiciones
menores. Israel debe ser lo que el SEÑOR determinó para ellos desde el mismo
comienzo, «un Reino de Sacerdotes» [Éxo_19:6].)
10 Y los Levitas que se apartaron lejos de Mí cuando Israel se alejó, el cual se desvió
de Mí en pos de sus ídolos, llevarán su iniquidad. (Debido a las transgresiones del
pasado, de las cuales los Levitas eran algunos de los líderes, ahora ellos no pueden
participar en el ministerio sagrado del Templo Milenario. Sin embargo, serán usados,
pero en un tipo menor de servicio.)
11 Y serán ministros en Mi Santuario, porteros a las puertas de la casa, y sirvientes
en la casa: ellos matarán el Holocausto y la víctima al pueblo, y ellos estarán delante
de ellos para servirles.
12 Por cuanto les sirvieron delante de sus ídolos, y fueron a la Casa de Israel por
tropezadero de maldad; por tanto, he alzado Mi mano acerca de ellos, dice el SEÑOR
Dios, que llevarán su iniquidad. (Los Levitas asignados a enseñar la Ley se apartaron
del Sagrado Libro y enseñaron los caminos del hombre para la salvación. En esto,
ellos tienen muchos imitadores modernos.)
13 No se acercarán a Mí para serme Sacerdotes, ni se acercarán a ninguna de Mis
santificaciones; a las Santidades de Santidades; sino que llevarán su vergüenza, y sus
abominaciones que hicieron. (Los Levitas estarán confinados al Atrio de los
Sacerdotes y no permitidos entrar en el Templo mismo. Tal será su castigo durante
toda la Edad Milenario.)
14 Los pondré, pues, por guardas de la guarda de la casa en todo su servicio, y en
todo lo que en ella hubiere de hacerse. (Algunos creen cruel la sentencia sobre estos
Levitas, quienes no tenían nada que ver con los pecados cometidos por sus padres
muchos, muchos siglos en el pasado; sin embargo, el SEÑOR no les hace
responsables personalmente, ¡sino solamente el Orden mismo de los Levitas! En
realidad, es la Gracia alimentada por Amor que les proporciona aun este privilegio.
¡Como un Judío, tener el privilegio de servir en el Santuario en cualquier capacidad,
independientemente de cuán pequeño que pareciera ser, es efectivamente un
privilegio!)
Reglas para los sacerdotes levitas
15 Pero los Sacerdotes Levitas, hijos de Sadoc, que guardaron el ordenamiento de Mi
Santuario, cuando los Hijos de Israel se desviaron de Mí, ellos se acercarán a Mí para
ministrarme, y delante de Mí estarán para ofrecerme la grosura y la sangre, dice el
SEÑOR Dios. (Estos «hijos de Sadoc» quienes habían permanecido fieles al Reino
del Sur tendrán cargo de los servicios más santos en el Templo Milenario.)
16 Esos entrarán en Mi Santuario, y ellos se acercarán a Mi mesa para ministrarme,
y guardarán Mis ordenanzas. (Otra vez, estos son los hijos de Sadoc [1Re_2:35].)
17 Y será que cuando entraren por las puertas del atrio interior, se vestirán de
vestimentas de lino: no asentará sobre ellos lana, cuando ministraren en las puertas
del atrio de adentro, y en el interior. («Se vestirán de vestimentas de lino», sugiere la
justicia de Cristo, de la cual ellos eran símbolos. «Y no asentará sobre ellos lana,
cuando ministraren», corresponde a lo que podría causar sudor, que simbolizaba los
esfuerzos de uno mismo. La Salvación no es por obras; es un Don de Dios [Efe_2:8-
9].)
18 Tiaras de lino tendrán en sus cabezas, y pañetes de lino en sus lomos: no se ceñirán
para sudar. («Tiaras de lino tendrán en sus cabezas», implica que ellos deben entender
plenamente, que su Justicia es de Cristo, y no de sí mismos. Además, los «pañetes de
lino es sus lomos» simboliza la Verdad que todo lo que se hace por Cristo es debido
a Su Justicia gratuitamente imputada a nosotros que creemos, y no por nuestras
propias habilidades.)
19 Y cuando salieren al atrio exterior, al atrio de afuera al pueblo, se desnudarán de
sus vestimentas con que ministraron, y las dejarán en las cámaras del santuario, y se
vestirán de otros vestidos: así no santificarán al pueblo con sus vestimentas. (Que no
santificarán al pueblo con sus vestimentas tiene por propósito hacer una declaración.
¡El hombre es profano, mientras Cristo es santo! Además, no hay nada que el hombre
puede hacer en sí mismo para obtener la santidad, excepto admitir voluntariosamente
que él es profano, y luego mirar exclusivamente a Cristo y la Cruz; sobre la base de
la Fe, Cristo luego le imputará gratuitamente la Santidad y la Justicia a tal
Creyente.)
20 Y no raparán su cabeza, ni dejarán crecer el cabello; sino que lo recortarán
trasquilando sus cabezas. (Los sacerdotes Egipcios y los monjes Romanos se
rasuraban la cabeza y los de la iglesia Griega dejan que su cabello crezca y
permanezca largo. Los Sacerdotes de Dios no seguirán ninguno de estos modos.)
21 Y ninguno de los Sacerdotes beberá vino cuando hubiere de entrar en el atrio
interior. (Tomar bebidas intoxicantes causó las muertes de Nadab y Abiú, hijos de
Aarón. Ellos ofrecieron fuego extraño delante del SEÑOR [Lev_10:1-2; Lev_10:9].)
22 Ni viuda, ni repudiada (divorciada) se tomarán por mujeres; sino que tomarán
vírgenes del linaje de la Casa de Israel, o viuda que fuere viuda de Sacerdote. (Por
consiguiente, el celibato no es recomendado ni aprobado, excepto en ciertos casos;
¡por lo tanto, el celibato de los Sacerdotes Católicos Romanos ha ocasionado sin fin
de problemas para la Iglesia Católica, porque no es natural y además no es conforme
a las Escrituras!)
23 Y enseñarán a Mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano, y les
enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no limpio. (Esto siempre ha sido
responsabilidad del Predicador llamado de Dios para el Evangelio, no importa si
eran Sacerdotes bajo el Sistema Antiguo o Predicadores bajo el Nuevo Pacto
[2Ti_4:1-2].)
24 Y en el pleito ellos estarán para juzgar; conforme a Mis Derechos lo juzgarán: y
Mis Leyes y Mis Decretos guardarán en todas Mis Fiestas Sagradas, y santificarán
Mis Días de Reposo. (Esto simplemente significa que todo debe ser «juzgado»
conforme a la Palabra de Dios.)
25 Y no se acercarán a hombre muerto para contaminarse; pero por padre o madre o
hijo o hija, hermano, o hermana que no haya tenido marido, se contaminará.
(A los Sacerdotes no les era permitido tocar ningún muerto, con excepción de los
parientes más cercanos. La muerte es simbólica del fruto del pecado y, por lo tanto,
la prohibición [Rom_6:23].)
26 Y después de su purificación, le contarán siete días. (Aun al tocar a un difunto de
un pariente cercano, el Sacerdote tenía que pasar por una ceremonia de purificación
durante siete días.)
27 Y el día que entrare al Santuario, al atrio interior, para ministrar en el Santuario,
ofrecerá su Expiación, dice el SEÑOR Dios. (junto con pasar por los siete días de
purificación ceremonial, tal Sacerdote también debía ofrecer una «Ofrenda por el
Pecado». Esto no significa que personalmente él había pecado, sino que en sus
responsabilidades, perteneciente a tocar un difunto, lo cual hablaba de los efectos
terribles del pecado.)
28 Y habrá para ellos heredad: Yo seré su heredad; y no les daréis posesión en Israel:
Yo soy su posesión. (Este Pasaje declara que durante el Reinado Milenario todos los
Sacerdotes deben tener a Jehová como su posesión, y ningún trecho territorial o tribal
es asignado a las demás Tribus [Eze_48:1-35].)
29 La Ofrenda de Grano, y la Expiación, y el Sacrificio por el Pecado, comerán; y
toda cosa dedicada en Israel, será de ellos. (Toda su sustancia vendrá del Templo y
sus muchos servicios.)
30 Y las primicias de todos los primeros frutos de todo, y toda ofrenda de todo lo que
se ofreciere en todas vuestras ofrendas, será de los Sacerdotes: daréis asimismo las
primicias de todas vuestras masas al Sacerdote, para que haga reposar la bendición en
vuestras casas. (Las primicias, probablemente un décimo, de todos los diezmos que
van al Templo pertenecen a los Sacerdotes. La frase, «Para que haga reposar la
Bendición en vuestras casas», implica que si el pueblo no obedece, la Bendición
cesará; este principio automáticamente asegura la obediencia.)
31 Ninguna cosa mortecina, ni desgarrada, así de aves como de animales, comerán
los Sacerdotes. (La idea es: Los animales traídos para el Sacrificio no deben ser
animales que han muerto de causas naturales ni que han sido matados por bestias,
sino más bien los más sanos de los sanos. El Calvario, del cual todo esto es un Tipo,
debe ser demostrado como el Centro Divino de los Propósitos de Dios de la Gracia
y de la Ira.)

45
La tierra consagrada
(574 a.C.)
1 Y CUANDO repartáis por la suerte la tierra en heredad entre las Tribus de Israel,
apartaréis para el SEÑOR una porción que le consagréis en la tierra, de longitud de
veinticinco mil cañas y diez mil de ancho: esto será santificado en todos sus límites
en todo su contorno. (Los Versículos Eze_45:1-8 representa las porciones de tierra
en Israel que deben permitirse para el Santuario, la Ciudad y el Príncipe. La longitud
de esta Santa Oblación [área de tierra] es cerca de 67 y 1/2 kilómetros [42 millas].
La anchura es aproximadamente 27 kilómetros [17 millas]. «Cuando repartáis por
la suerte la tierra en heredad», probablemente significa que esta es el área que ya ha
sido asignada por el Espíritu Santo.)
2 De esto serán para el Santuario quinientas de longitud, y quinientas de ancho, en
cuadro alrededor; y cincuenta codos en derredor para sus ejidos. (Esto probablemente
se refiere al Atrio Exterior, que es 228 y 1/2 metros cuadrados [750 pies cuadrados].
Esta área incluye no solamente el Atrio Exterior, sino el Atrio Interior, así como el
Templo y el área del Altar. Todo esto se considera primordialmente como el
«Santuario». El Amor de Dios para el hombre y Su odio a la injusticia aparecen en
Su hechura de Su lugar de morada entre ellos, y en Sus Leyes con respecto a la tierra
[v. Eze_45:8], las Cortes de Justicia, la tasación de impuestos excesivos, la acción de
desahucio [v. Eze_45:9], y la propiedad comercial [vv. Eze_45:10-12]. De este modo,
los pobres e indefensos serán cuidados por Él.)
3 Y de esta medida medirás en longitud veinticinco mil cañas, y en anchura diez mil,
en lo cual estará el Santuario y el Lugar Santísimo. (En esta área, unos 67 y 1/2
kilómetros [42 millas] de longitud y 27 kilómetros [17 millas] de anchura, el
«Santuario» y el «Lugar Santísimo» estarán situados.)
4 Lo consagrado de esta tierra será para los Sacerdotes ministros al Santuario, que se
llegan para ministrar al SEÑOR: y les serás lugar para casas, y Lugar Santo para el
Santuario. (Esta área será ocupada no solamente por el «Santuario» sino también
por las «casas» de los Sacerdotes.)
5 Asimismo veinticinco mil de longitud, y diez mil de anchura, lo cual será para los
Levitas ministros de la casa, en posesión, con veinte cámaras. (La porción de los
Levitas, con 67 y 1/2 kilómetros [24 millas] de largo y 27 kilómetros [17 millas] de
ancho, será lo mismo como la porción de los Sacerdotes. Todos los Sacerdotes eran
Levitas, pero no todos los Levitas eran Sacerdotes.)
6 Y para la posesión de la ciudad daréis cinco mil de anchura y veinticinco mil de
longitud, delante de lo que se apartó para el Santuario: será para toda la casa de Israel.
(Este Pasaje representa una tercera repartición del territorio exclusivamente para
Jerusalén misma. Es aproximadamente 67 y 1/2 kilómetros [42 millas] de largo y
aproximadamente 13 y 3/4 kilómetros [8 y 1/2 millas] de ancho, que constituye una
ciudad bastante grande.)
La porción para el Príncipe
7 Y la porción del príncipe será junto al terreno que se apartó para el Santuario, a
ambos lados, y junto a la posesión de la ciudad, delante del terreno apartado para el
santuario, y delante de la posesión de la ciudad, desde el rincón occidental hacia el
occidente, hasta el rincón oriental hacia el oriente: y su longitud total será
correspondiente a la de cualquiera de las otras porciones, medidas desde el término
occidental hasta el término oriental. (A base de esta descripción, parece que la
«porción para el príncipe» ya será en ambos lados de la Santa Porción, o las
porciones de los Sacerdotes y los Levitas. Aunque las Escrituras no son exactamente
claras en cuanto al tamaño de estas «porciones», todavía, algunos creen que sería
bastante grande, hasta cerca de seis y medio kilómetros [4 millas] cuadrados. Esto sí
sabemos: el Príncipe estará a cargo de todo el Culto Milenario [vv. Eze_45:16-17].)
8 Esta tierra tendrá por posesión en Israel, y nunca más mis príncipes oprimirán a Mi
pueblo: y darán la tierra a la Casa de Israel por sus Tribus. (Estas Escrituras debieran
leerse, «En cuanto a la tierra, esta será porción cuya en Israel», es decir, el Príncipe
no tendrá otra Tierra fuera de estas dos porciones.)
9 Así dice el SEÑOR Dios: Basta ya, oh príncipes de Israel: dejad la violencia y la
rapiña: haced juicio y justicia; quitad vuestras imposiciones de sobre Mi pueblo, dice
el SEÑOR Dios. (El «Príncipe» ha de poner el ejemplo para la totalidad del mundo,
lo que hará bajo Cristo. Y por primera vez, la totalidad del mundo experimentará
equidad, honestidad e integridad en el gobierno.)
10 Peso de justicia, efa de justicia, y bato de justicia, tendréis.
11 El efa y el bato serán de una misma medida: que el bato tenga la décima parte del
homer, y la décima parte del homer el efa: la medida de ellos serán según el homer.
12 Y el siclo será de veinte geras: veinte siclos, con veinticinco siclos, y quince siclos,
os serán una mina. (La idea de estos Pasajes es presentar un sistema de justicia que
no se puede comprar, sobornar ni despojar. En otras palabras, ¡no habrá
favoritismo! El «efa» y el «bato» son lo mismo, siendo cerca de un busel [37 litros].
Un «homer» o un «coro» son cerca de diez buseles [370 litros]. El «siclo», como se
presenta aquí, tendría el valor de cerca de diez mil dólares en moneda del año 2011.
Sin embargo, es muy difícil valorar el poder adquisitivo del dinero de la Biblia con el
de la actualidad.)
13 Esta será la ofrenda que ofreceréis: la sexta parte de un efa de homer del trigo, y
la sexta parte de un efa de homer de la cebada.
14 Y la ordenanza del aceite será que ofreceréis un bato de aceite, que es la décima
parte de un coro: diez batos harán un homer; porque diez batos son un homer.
15 Y una cordera de la manada de doscientas, de las gruesas de Israel, para sacrificio,
y para Holocausto y para las Ofrendas de Paz, para Expiación por ellos, dice el
SEÑOR Dios. (La palabra «Oblación» significa lo que se ofrece como Sacrificio o
Dádiva a Dios. Las cantidades aquí presentadas, o la equivalencia en dinero, habían
de ser entregados al Santuario por todos los Israelitas para poder sostener a los
dirigentes de Israel.)
16 Todo el pueblo de la tierra será obligado a esta ofrenda para el príncipe de Israel.
(¡Estas Ofrendas serán obligatorias para todos!)
17 Pero del príncipe será el dar el Holocausto, y el Sacrificio, y la Libación, en las
Fiestas Solemnes, y en las Lunas Nuevas, y en los Sábados, y en todas las Fiestas de
la Casa de Israel: él dispondrá la Expiación, y la Ofrenda de Grano, y el Holocausto,
y los Pacíficos, para expiar la Casa de Israel. (La frase, «Para expiar la Casa de
Israel», se refiere a la Expiación; sin embargo, siempre se debe entender que es
solamente simbólico, porque Cristo ya ha hecho la Expiación, de este modo,
reconcilió a Israel y a todo el mundo a Dios por Su muerte en el Calvario.)
18 Así ha dicho el SEÑOR Dios: El mes primero, al primero del mes, tomarás un
becerro sin defecto de la vacada, y expiarás el Santuario. (El contraste entre la
legislación de los Versículos Eze_45:18-25 y la de Levítico hace énfasis en la
diferencia, entre el Culto Mosaico y el del Milenio. Aquí el año comienza con una
demostración de la Redención completada y la provisión de una base pura de
adoración. De este modo, la Expiación será hecha para la casa en el primer día, y
para los adoradores en el séptimo día. El año comenzará, por lo tanto, con el
memorial de una Expiación consumada por el pecado. En Levítico el año clausuró
con una Expiación que señalaba hacia delante a una limpieza aun por cumplirse.)
19 Y el Sacerdote tomará de la sangre de la Expiación, y pondrá sobre los postes de
la casa, y sobre los cuatro ángulos del área del Altar, y sobre los postes de las puertas
del atrio interior. (Como el «becerro» del Versículo Eze_45:18 tipifica a Cristo, Quien
murió en la flor de Su Juventud, este Versículo tipifica Su Sangre derramada, sobre
la cual el fundamento de la Salvación está basado. Puesto que estos Sacrificios
seguirán para siempre, y estrictamente como un memorial de lo que Cristo hizo en el
Calvario, esto, sin duda, nos presenta el valor que el SEÑOR da a la Obra Terminada
del Calvario.)
20 Así harás el séptimo del mes por los errados e ingenuos; y expiarás la casa. («Los
errados», se refiere a aquellos que se han desviado de la senda derecha por la
ignorancia o necedad. Los «ingenuos» son los que, por cualquier razón, no entienden
plenamente las ramificaciones de sus acciones. Estos Pasajes presentan el
aborrecimiento absoluto que tiene el SEÑOR por el pecado y, por lo tanto, absoluta
perfección es demandada. Puesto que tal es imposible aun para el hombre redimido
[que no está aun en su estado glorificado], aquí se hace provisión.)
21 En el mes primero, a los catorce días del mes, tendréis la Pascua, Fiesta de siete
días: se comerá pan sin levadura. (Las dos Fiestas de la Pascua y los Tabernáculos
serán señaladas por las Ofrendas séptuples, en contraste a las dobles de Levítico. Y
esto porque estas Ofrendas testificarán a la perfección de la purificación del pecado
cumplida en el Calvario. El carácter del culto en ese día futuro y el sentido de la
suficiencia del Sacrificio de Cristo de Sí Mismo como la Ofrenda por el Pecado y el
Holocausto serán perfectos. De este modo, estas dos Fiestas celebrarán la perfección
y suficiencia de la Obra Expiatoria de Cristo. Juntas con las Fiestas del Sábado y de
la Luna Nueva, ellas testificarán del cumplimiento de las Promesas de Dios a Israel
en traerles al reposo y hacerles una luz a los Gentiles [Isa_60:1-22; Isa_66:1-24].)
22 Y aquel día el príncipe sacrificará por sí, y por todo el pueblo de la tierra, un
becerro por el Pecado. (La «Pascua», como se celebra aquí, continuará para siempre,
cumpliendo Éxo_12:14.)
23 Y en los siete días de Fiesta hará Holocausto al SEÑOR, siete becerros y siete
carneros sin defecto, cada día de los siete días; y por el Pecado un macho cabrío cada
día.
24 Y con cada becerro ofrecerá Ofrenda de un efa, y con cada carnero un efa; y por
cada efa un hin de aceite. (El «Príncipe» estará a cargo de los Sacrificios, que es
tarea del Sumo Sacerdote.)
25 En el mes séptimo, a los quince del mes, en la Fiesta, hará como en estos siete
días, cuanto a la Expiación, y cuanto al Holocausto, y cuanto a la Ofrenda de Grano,
y cuanto al aceite. (En tanto que la Pascua era celebrada en el primer mes, esta Fiesta
es celebrada en el séptimo mes, de este modo representa la Fiesta de los
Tabernáculos. Como dicho, estas dos Fiestas, la Pascua y los Tabernáculos, serán
celebrados para siempre.)

46
El príncipe y las fiestas
(574 a.C.)
1 ASÍ dice el SEÑOR Dios: la puerta del atrio interior que mira al oriente, estará
cerrada los seis días de trabajo, y el día del sábado se abrirá: se abrirá también el día
de la luna nueva. (Este Capítulo comienza con «Así dice el SEÑOR Dios», que hace
énfasis en la seriedad de estos Mandatos así como el obedecerlos garantiza
prosperidad, tanto en lo espiritual como en lo económico, para la totalidad del mundo
[Isa_60:3].)
2 Y el príncipe entrará por el camino del portal de la puerta exterior, y estará al umbral
de la puerta, mientras los Sacerdotes harán su Holocausto y sus Ofrendas de Paz, y
adorará a la entrada de la puerta: después saldrá; pero no se cerrará la puerta hasta la
tarde. (El Príncipe proveerá las Ofrendas y los Sacerdotes las presentarán. Las
Ofrendas del Sábado serán siete, que denota la Perfección de Cristo pero no habrá
vino. En Levítico, ellos eran cuatro en número, y con vino.)
3 Asimismo adorará el pueblo de la tierra delante del SEÑOR, a la entrada de la
puerta, en los Sábados y en el día de la luna nueva. (La razón por la cual el Príncipe
tiene mayor acceso, aun hasta el pórtico, es debido a que él es un Tipo de Cristo. Sin
embargo, él no puede pasar por la puerta interior. El «Sábado» significa «reposo»
proporcionado solamente en Cristo, que Israel verdaderamente tendrá en la Edad del
Reino Venidero. La «Luna Nueva» significa la perpetuidad de este «reposo», que
garantiza su existencia para siempre.)
4 Y el Holocausto que el príncipe ofrecerá al SEÑOR el día del Sábado, será seis
corderos sin defecto, y un carnero sin tacha:
5 Y por Ofrenda un efa con cada carnero; y con cada cordero una Ofrenda conforme
a sus posibilidades, y un hin de aceite con el efa. (El fundamento Divino ya puesto —
la sangre y el aceite — el corazón es otorgado la libertad para expresar su gozo y su
comunión en la Ofrenda del Grano, es decir, la comunión con Dios en el disfrute de
Cristo como el Pan que bajó y que baja del Cielo, del cual si un hombre comiere,
nunca morirá [Jua_6:50-51].)
6 Pero el día de la luna nueva, un becerro sin tacha de la vacada, y seis corderos, y
un carnero: deberán ser sin defecto.
7 Y hará Ofrenda de un efa junto con el becerro, y de un efa junto con cada carnero:
pero con los corderos ofrendará conforme a sus posibilidades. Y ofrecerá un hin de
aceite por cada efa. (Las Ofrendas de las Fiestas de la Luna Nueva son nueve en
número sin vino; esto está en contraste con las diecinueve de Levítico con vino.)
8 Cuando el gobernante entre, entrará por el camino del portal de la puerta: y por el
mismo camino saldrá. (El «Príncipe» es el Sumo Sacerdote, y, como un Tipo de
Cristo, entrará al Santuario por el camino de la Puerta Oriental.)
9 Pero cuando el pueblo de la tierra entrare delante del SEÑOR en las Fiestas, el que
entrare por la puerta del norte, saldrá por la puerta del sur; y el que entrare por la
puerta del sur, saldrá por la puerta del norte: no volverá por la puerta por donde entró,
sino que saldrá por la de enfrente de ella. (La idea es, uno tiene que participar en todo
lo de Cristo y no solamente en una parte. Para pasar por todo el camino a la salida,
independientemente del lado por el cual entrare, significa participar en todo
[Jua_6:53].)
10 Y el príncipe, cuando ellos entraren, él entrará en medio de ellos: y cuando ellos
salieren, él saldrá. (Este Versículo parece implicar que en tales momentos de culto, el
Príncipe parará a un nivel con el pueblo, y ambos entrarán y se retirarán por la
misma puerta. Esto significa a Cristo, Quien llegó a ser Uno con el pueblo en su
Encarnación. Sin embargo, Él no llegó a ser uno con ellos en su pecado; esto está
representado aquí por el «Príncipe» que se asocia con el culto del pueblo solamente
en cierto nivel, y en ciertas oportunidades.)
11 En las Fiestas y en las demás asambleas solemnes la Ofrenda de Grano será un efa
por cada becerro, y un efa por cada carnero; y con los corderos, lo que le pareciere; y
un hin de aceite por cada efa. (Las cantidades estipuladas aquí son diferentes de la
Ley de Moisés en que son aumentadas [Núm_15:1-9]. Tal tipifica el cumplimiento de
la Promesa, mientras que la Ley de Moisés tipificaba la Promesa del cumplimiento.)
12 Pero cuando el príncipe libremente hiciere Holocausto u Ofrendas de Paz al
SEÑOR, le abrirán la puerta que mira al oriente, y hará su Holocausto y sus Ofrendas
de Paz, como hace en el día Sábado: después saldrá; y cerrarán la puerta después que
saliere. (Como dicho repetidas veces, todas las Ofrendas Tipifican a Cristo, y serán
hechas como un memorial de lo que Él hizo en la Cruz. Por lo tanto, esta ocasión
transcendental, que aconteció hace tanto tiempo, nunca perderá su significado y lo
que representa para el pueblo, y continuará presentando la razón de nuestra
liberación y bendición.)
13 Y sacrificarás al SEÑOR cada día en Holocausto un cordero de un año sin defecto,
cada mañana lo sacrificarás.
14 Y con él harás todas las mañanas Ofrenda de Grano (cereal) de la sexta parte de
un efa, y la tercera parte de un hin de aceite para mezclar con la flor de harina: Ofrenda
para el SEÑOR continuamente por estatuto perpetuo.
15 Ofrecerán pues el cordero, y la Ofrenda y el aceite, todas las mañanas en
Holocausto continuo. (Bajo la Ley' de Moisés, estaba el Sacrificio Matutino y
Vespertino, pero bajo la Justicia perfeccionada, que caracteriza el Milenio, habrá
solamente un Cordero Matutino; porque para ese día no habrá atardecer.)
16 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Si el príncipe diere algún don de su heredad a alguno
de sus hijos, será de ellos: posesión de ellos será por herencia.
17 Pero si de su heredad diere don a alguno de sus siervos, será de él hasta el Año de
Libertad, y volverá al príncipe; pero su herencia será de sus hijos. (A diferencia de los
dones para sus hijos, que son para siempre, los que se dan a los siervos serán suyos
sólo hasta «el Año de la Libertad», es decir, «el Año del Jubileo», que llega cada 50
años. En esa oportunidad, el «Don» será devuelto al Príncipe.)
18 Y el príncipe no tomará nada de la herencia del pueblo, por no defraudarlos de su
posesión: de lo que él posee dará herencia a sus hijos; para que Mi pueblo no sea
echado cada uno de su posesión. (El aborrecimiento de Dios del robo, opresión e
injusticia aparecen en la legislación de los Versículos Eze_46:16-18; y Su cuidado
amante para las necesidades físicas de Sus siervos se muestra en los Versículos
Eze_46:19-24.)
Cocinas para las ofrendas
19 Me metió después por la entrada que estaba hacia la puerta, a las cámaras santas
de los Sacerdotes, las cuales miraban al norte, y había allí un recinto a los lados del
occidente.
20 Y me dijo: Este es el lugar donde los Sacerdotes cocerán el Sacrificio por el Pecado
y la Expiación: allí cocerán la Ofrenda de Grano, por no sacarlo al atrio exterior para
santificar al pueblo. (En este Versículo hay tipificado un Ministerio a Dios solamente,
mientras en el Versículo Eze_46:24 hay tipificado un ministerio al hombre. En el
servicio para el SEÑOR, esta diferencia debe ser observada; y más enriquecido será
el ministerio al hombre si lo que es de Dios se le da el primer lugar. La idea de este
Versículo es: Tales Ofrendas como especificadas aquí eran solamente para los
Sacerdotes, y de este modo, tipificaban su culto personal del SEÑOR. También esto
tipifica que aunque ellos eran los escogidos de Dios, y aun Sacerdotes, todavía eran
pecadores, y por lo tanto, en necesidad desesperante de un Salvador.)
21 Luego me sacó al atrio exterior, y me llevó por los cuatro rincones del atrio; y en
cada rincón había un patio. (Este Versículo significa que en todas las cuatro esquinas
del Atrio Exterior estos lugares estaban ubicados para que los Sacerdotes pudieran
preparar Sacrificios para ellos mismos.)
22 En los cuatro rincones del atrio había patios juntos de cuarenta codos de longitud,
y treinta de anchura: tenían una misma medida todos los cuatro a los rincones.
23 Y había una pared alrededor de ellos, alrededor de todos los cuatro, y chimeneas
hechas abajo alrededor de las paredes.
24 Y me dijo: Estos son los aposentos de los cocineros, donde los servidores de la
casa cocerán el sacrificio del pueblo. (Los Sacrificios debían estar preparados de
cierta manera, y estos lugares fueron asignados para esa preparación.)

47
Agua fluye desde el templo
(574 a.C.)
1 ME TRAJO de vuelta a la entrada de la casa; y he aquí que aguas salían por debajo
del umbral de la casa hacia el oriente: porque la fachada de la casa estaba al oriente:
y las aguas descendían por debajo, hacia el lado derecho de la casa, al sur del Altar.
(Los primeros doce Versículos muestran el Río del Santuario, con el resto mostrando
las Fronteras de la Tierra. «La Entrada de la Casa» habla del Santuario de donde
fluirán las aguas. Además, la «Entrada» o sea «la Puerta» es Cristo [Jua_14:6]. «Y
he aquí aguas que salían», significa el Espíritu Santo, Quien fluye de Cristo. No es
«agua» sino «aguas». Literalmente sale de la «Casa» con su Fuente el mismo Trono
de Jehová [Jua_7:37-39]. «Que salían por debajo del umbral de la Casa hacia el
oriente», muestra que las aguas acrecentarán de sí mismas, y no, como en la
naturaleza, por la entrada de otros riachuelos tributarios. Este «umbral» habla del
suelo, y, en el sentido espiritual, denota humildad. «Al sur del Altar», denota el canal,
o curso, del Río. Es el Altar de Jehová, es decir, el Calvario.)
2 Y me sacó por el camino de la puerta del norte, y me hizo dar la vuelta por el camino
exterior, fuera de la puerta, al camino de la que mira al oriente; y vi que aquí las aguas
salían del lado derecho. («Me sacó por el camino de la puerta del norte», simplemente
significa que la Puerta Oriental Interior estaba cerrada, y que la Puerta Exterior al
Oriente estaba cerrada también; por lo tanto, el SEÑOR le guió afuera por el Atrio
Interior y Exterior por la Puerta del Norte. Hay un significado espiritual en este
aparente Pasaje oscuro. Muchos están hambrientos por el SEÑOR, pero no saben
exactamente cómo recibirle. Reconocidamente, el curso, aunque directo, no se
alcanza de una manera directa. Sin embargo, todos quienes persistan recibirán,
porque todos están invitados a venir [Apo_22:17].)
3 Salió el Hombre hacia el oriente, llevando un cordel en la Mano. Midió mil codos
y me hizo pasar por las aguas, que me llegaban hasta los tobillos. (¡El «Hombre» es
Cristo! Mientras las aguas salen por debajo del umbral del Santuario, y mientras
ellas fluyen al oriente, el canal comienza a ensancharse. En esta primera etapa, tiene
cerca de 457 metros [1.500 pies] de ancho, y no es muy profundo todavía, solamente
«hasta los tobillos». Los «tobillos» representan la entrada al Río, de este modo
representan la Salvación.)
4 Y midió otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta las rodillas. Midió luego
otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta los lomos. (Las «rodillas» significan
oración y dependencia total en el SEÑOR, estas cosas hechas por el Poder del
Espíritu Santo en lugar de la cante. Por lo tanto, las «rodillas» también representan
el Bautismo con el Espíritu Santo [Hch_2:4]. ¡La implicación en estos Pasajes es que
«el Hombre con un cordel en Su Mano» debe ser seguido, que es Su intención! Los
«lomos» representan la parte procreativa del hombre, que señala el Poder milagroso
de Dios, que debe ser predominante en todas las personas Bautizadas con el Espíritu
Santo.)
5 Y midió otros mil, y era ya un Río que yo no podía pasar: porque las aguas se habían
crecido, y el Río no se podía pasar sino a nado. (El arroyo ya ensanchado, hasta ahora
es «un Río que no se podía pasar». Este «Río» representa la última progresión, con
esta en sí dejada abierta, que simboliza el Evangelio completo para el hombre
completo. En cierto sentido, el «Río» es un tipo físico del Espíritu Santo, y Su Obra
dentro de nuestras vidas.)
6 Y me dijo: ¿Has visto, Hijo de hombre? Después me llevó, y me hizo volver por la
ribera del Río. (Ahora Cristo llama la atención de Ezequiel al «curso» del Río a la
«Fuerza» del Río. Por lo tanto, en este escenario, se tiene la «Fuente», que es el
Santuario, y el «Curso», que está junto al Altar, y ahora la «Fuerza», que representa
lo que el Río hace.)
7 Y volviendo yo, he aquí en la ribera del Río había muchísimos árboles por un lado
y el otro. («Muchísimos árboles» significa «mucho fruto» [Jua_15:5]. Los «árboles»
crecen a ambos lados del Río.)
8 Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán a la llanura, y
entrarán en el mar: y entradas en el mar, recibirán sanidad las aguas. (La idea del Río
es traer vida al «desierto», como el Espíritu Santo Solo por medio de Cristo puede
traer vida al hombre no regenerado, quien está muerto en transgresiones y pecados.
Literalmente, esto habla del Mar Muerto, que no contiene vida alguna. El «Mar
Muerto» luego será sanado, simbólico de lo que el SEÑOR puede hacer por medio
del Espíritu Santo en la vida de una persona [Jua_7:37-39].)
9 Y será que toda alma viviente que nadare por donde quiera que entraren estos dos
Ríos, vivirá: y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán
sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este Río. (La palabra «Ríos» significa los dos
grandes Ríos. Mientras este Río fluye hacia el oriente del Santuario, luego dará vuelta
al sur hacia el Mar Muerto. A alguna altura en su curso hacia el sur, se dividirá, con
un lado que continuará hacia el Mar Muerto, con el otro siguiendo su curso hasta el
Mediterráneo [Zac_14:8]. Como resultado, y por cualquier medio, mientras el Mar
Muerto anteriormente no contenía vida, ahora «habrá muchísimos peces», que
significa abundancia de vida. Otra vez, esto representa lo que Cristo puede hacer en
el corazón y vida de cualquier individuo. «Y vivirá todo lo que entrare en este Río»,
representa el resultado de la vida Nacida de Nuevo, llena del Espíritu.)
10 Y será que junto a él estarán pescadores; y desde Engadi hasta Eneglayin será
tendedero de redes: según su especie será su pescado como el pescado del gran mar,
en grandísima abundancia. (Esto se refiere al Mar Muerto, que ya no es muerto, sino
sobreabunda con vida. Esto habla de los muchos diferentes tipos de pez, «en
grandísima abundancia». Esto habla de la cosecha, en la cual el Espíritu Santo
siempre está ocupado.)
11 Sus pantanos y sus lagunas no se sanearán; quedarán como salinas. (La razón por
la cual estos lugares no son sanados es debida a la imperfección que continuará a
existir durante el Milenio, porque el hombre todavía estará bajo prueba. Él tendrá
libre albedrío con la libertad de selección. Si él acepta el dominio del Mesías,
disfrutará de las bendiciones mostradas en los Versículos Eze_47:1-10 y versículo
Eze_47:12. Pero si él rechaza ese gobierno, él como la esposa de Lot, se convertirá
en sal, porque la Gracia despreciada involucra amargura y muerte. [Esto habla de
la gente natural y no de los Santos Glorificados.] Las Bendiciones Milenarias serán
poderosas y permanentes. Superará enormemente y casi borrará el mal, pero no
completamente. Porque solamente en el Nuevo Cielo y la Nueva Tierra habrá
perfección.)
12 Y junto al Río, en su ribera a uno y otro lado, crecerá todo árbol de comer: su hoja
nunca caerá, ni faltará su fruto: a su tiempo madurará, porque sus aguas salen del
Santuario y su fruto será para comer, y su hoja para medicina. (Ahora a Ezequiel le
fue mostrado el propósito de estos árboles milagrosos que crecen junto a cada lado
de estos Ríos. Estos «árboles» perpetuamente producirán nuevo fruto porque están
nutridos por aguas que salen del Santuario. El fruto sanará así como nutrirá. Tal es
el carácter de una Vida y Ministerio basado en el Calvario, y vivificado por el Espíritu
Santo. De hecho, la población del mundo [que incluirá a todos, con la excepción de
los Santos Glorificados] continuará viviendo perpetuamente por medio del «fruto» y
la «hoja» de estos árboles. En otras palabras, el proceso de envejecimiento será
detenido. [Los Santos Glorificados no necesitarán de tal.])
División de la tierra
13 Así ha dicho el SEÑOR Dios: Este es el término en que partiréis la tierra en
heredad entre las doce Tribus de Israel: José recibirá dos porciones. (En Josué, la
Tierra fue dividida desde el sur hasta el norte. En el día venidero de la Restauración,
será repartida desde el norte hasta el sur. «José recibirá dos porciones», es porque
él personalmente no recibió ninguna, sino más bien esas se entregaron a sus dos hijos,
Manasés y Efraín.)
14 Y la heredaréis así los unos como los otros: por ella alcé Mi mano que la había de
dar a vuestros padres: por tanto, esta tierra os caerá en heredad. («Y la heredaréis así
los unos como los otros», se refiere a cada Tribu, independientemente de su tamaño,
recibiendo porciones iguales. La frase posterior declara la certeza de esta acción.)
15 Y este será el término de la tierra hacia Ja parte del norte; desde el gran mar,
camino de Hetlón hasta la entrada de Zedad;
16 Jamat, Berotá, Sibrayin, que está entre el termino de Damasco y el termino de
Jamat; Jazar Haticón, que es el termino de Jaurán.
17 Y será el termino del norte desde el mar de Jazar Enán al término de Damasco al
norte, y al término de Jamat al lado del norte. (La Frontera del Norte de la Tierra
Prometida, al menos en ese día, comenzará en el Mar Mediterráneo e irá al otro lado
de Damasco, que incluirá toda la Siria moderna.)
18 Al lado del oriente, por medio de Jaurán y de Damasco, y de Galaad, y de la tierra
de Israel, al Jordán: esto mediréis de término hasta el mar del oriente. (La Frontera
Oriental de la Tierra Prometida en ese día se incluirá toda la Transjordania moderna,
por «Galaad» es esa área. El «Mar del Oriente» probablemente se refiere al Golfo
Pérsico.)
19 Y del lado meridional, hacia el sur, desde Tamar hasta las aguas de las rencillas;
desde Cades y el Río hasta el gran mar: y esto será el lado meridional, al sur. (La
Frontera del Sur se extenderá hasta dentro del Sinaí, porque esto es precisamente
donde está ubicado Cades. En realidad esto no incluye todo el Sur de la Tierra
Prometida; esa incluirá toda la Península Arábica, cuando se cumpla Gén_15:18-21
e Isa_11:13-16 y Isa_19:17-25. Además, la Frontera Oriental, como dada en
Versículo Eze_47:18, se extenderá al Río Éufrates, que significa que al menos una
parte de Irak estará incluido.)
20 Y al lado del occidente del gran mar será el término hasta en frente de la entrada
de Lebó Jamat: este será el lado occidental. (La Frontera Occidental se define
fácilmente: el Mar Mediterráneo.)
21 Repartiréis, pues, esta tierra entre vosotros por las Tribus de Israel.
22 Y será que echaréis sobre ella suertes por herencia para vosotros, y para los
extranjeros que peregrinan entre vosotros, que entre vosotros han engendrado hijos: y
los tendréis como naturales entre los hijos de Israel; echarán suertes con vosotros para
heredarse entre las tribus de Israel.
23 Y será que en la Tribu en que peregrinare el extranjero, allí le daréis su heredad,
ha dicho el SEÑOR Dios. (La palabra «extranjero» se refiere a los Gentiles. Herencia
a los Gentiles fue prohibido bajo la Ley; pero, en EL Milenio, será plenamente
otorgada. Entonces el propósito original de Dios será efectuado — Israel será el primero
poseído, y luego será asegurado el territorio más grande prometido a Abraham.)
48
(574 a.C.)

1 Y ESTOS son los nombres de las Tribus: Desde la parte del norte por la vía de
Hetlón viniendo a Lebó Jamat, Jazar Enán, al término de Damasco, al norte, al término
de Jamat: tendrá Dan una porción, siendo sus extremidades al oriente y al occidente.
(«Tendrá Dan una porción», muestra a esta Tribu mencionada primero. Como es
obvio, es el Espíritu Santo que delinea las «porciones». Ninguna fue decidida por los
hombres, todo por el SEÑOR.)
2 Y junto al término de Dan, desde la parte del oriente hasta la parte del mar, tendrá
Aser una porción.
3 Y junto al término de Aser, desde el lado oriental hasta la parte del mar, tendrá
Neftalí, otra.
4 Y junto al término de Neftalí, desde la parte del oriente hasta la parte del mar,
Manasés, otra.
5 Y junto al término de Manasés, desde la parte del oriente hasta la parte del mar,
Efraín, otra.
6 Y junto al término de Efraín, desde la parte del oriente hasta la parte del mar, Rubén,
otra.
7 Y junto al término de Rubén, desde la parte del oriente hasta la parte del mar, Judá,
otra. (Siete Tribus tendrán su posesión al norte de la Oblación, y cinco Tribus, al sur
de la Oblación, es decir, los «Sacrificios».)
8 Y junto al término de Judá, desde la parte del oriente hasta la parte del mar, será la
Suerte que apartaréis de veinticinco mil cañas de anchura, y de longitud como
cualquiera de las otras partes es a saber, desde la parte del oriente hasta la parte del
mar; y el Santuario estará en medio de ella. (Esta porción es aproximadamente 67 y
1/2 kilómetros [42 millas] de largo y 67 y 1/2 kilómetros [42 millas] de ancho. Parece
estar fuera de proporción en comparación con la repartición de las otras Tribus. Sin
embargo, se cree por algunos que es muy probable que las porciones respecto a los
Sacerdotes, Levitas y la Ciudad fueran incluidas en esta porción. Esto es cierto: La
totalidad de la Tierra Prometida en la Edad del Reino venidero será
aproximadamente 100 veces más grande que en la actualidad.)
9 La suerte que apartaréis para el SEÑOR, será de longitud de veinticinco mil cañas,
y de diez mil de ancho.
10 Y allí será la suerte santa de los Sacerdotes, de veinticinco mil cañas al norte, y de
diez mil de anchura al occidente, y de diez mil de ancho al oriente, y de veinticinco
mil de longitud al sur: y el Santuario del SEÑOR estará en medio de ella. (Como todas
las Tribus fueron repartidas alrededor del Tabernáculo en el desierto [Núm_1:1-54;
Núm_2:1-34; Núm_3:1-51], ellas asimismo están repartidas aquí, aunque no en el
mismo orden. ¡Y aun, como todo entonces estaba en relación con el Tabernáculo,
ahora todo está en relación con el Santuario! La razón es simple, ¡es donde habita el
SEÑOR! Esta es la Verdad culminante representada por el Espíritu Santo en estas
direcciones e instrucciones.)
11 Los Sacerdotes santificados de los hijos de Sadoc, que guardaron Mi observancia,
que no erraron cuando erraron los Hijos de Israel, como erraron los Levitas.
12 Ellos tendrán por suerte, apartada en la partición de la tierra, la parte santísima,
junto al término de los Levitas. (La fidelidad de «Sadoc» [1Re_1:8] siempre se toma
en cuenta, ¡como siempre la fidelidad será recordada! El área del Versículo
Eze_48:12 llamado «santísima» es el área del «Santuario».)
13 Y la de los Levitas, será delante del término de los Sacerdotes, de veinticinco mil
cañas de longitud, y de diez mil de anchura: toda la longitud de veinticinco mil, y 13
anchura de diez mil.
14 No venderán de ello, ni permutarán, ni traspasarán las primicias de la tierra: porque
es consagrado al SEÑOR. (La porción aquí descrita es la que está reservada para los
Levitas, quienes tendrán parte en las responsabilidades del Santuario, pero no en los
Sacrificios. Ese será atendido sólo por los «hijos de Sadoc». Su porción será cerca
de 67 y 1/2 kilómetros [42 millas] de largo un poco más de 27 kilómetros [17 millas]
de ancho. No podrán «vender, ni permutar, ni traspasar» esta porción. Es santa. Las
«primicias» de la tierra, es decir, las primeras cosechas que la tierra produce, no
serán vendidas, sino más bien dadas al SEÑOR como una ofrenda. ¡Esto tipifica
nuestra herencia en Cristo!)
15 Y las cinco mil cañas de anchura que quedan de las veinticinco mil, serán profanas,
para la ciudad, para habitación y para ejido; y la ciudad estará en medio de ella. (El
término, «profanas», simplemente significa que no está dedicado a uso sagrado en el
mismo sentido del Santuario. El área será cerca de 67 y 1/2 kilómetros [42 millas] de
largo y casi 13 kilómetros [8 millas] de ancho. «La ciudad estará en medio de ella»,
corresponde a una ciudad sin igual que el mundo jamás ha visto ni conocido. Será
una ciudad totalmente libre de crimen, pobreza, hambruna, odio, guerra, avaricia,
etc., aunque todas las demás ciudades en el mundo en esa época caerán en la misma
categoría, todavía, ninguna tendrá la Gloria de Dios como esta «ciudad» [Isa_62:2-
3].)
16 Y estas serán sus medidas: a la parte del norte cuatro mil quinientas cañas, y a la
parte del sur cuatro mil quinientas, y a la parte del oriente cuatro mil quinientas, y a
la parte del occidente cuatro mil quinientas. (Estas dimensiones hablan de la ciudad
misma, que corresponde al negocio, etc. Será cerca de ocho kilómetros [5 millas]
cuadrados. La medida se da para cada lado de la ciudad en repetición para dar a
conocer que esta ciudad es tan grandiosa en un lado como en el otro.)
17 Y el ejido de la ciudad será al norte de doscientas cincuenta cañas, y al sur de
doscientas cincuenta, y al oriente de doscientas cincuenta, y de doscientas cincuenta
al occidente. (Será cerca de 800 metros [1/2 milla] de franja que rodeará la ciudad
por todos lados llamada «los suburbios», que probablemente será dejado como un
jardín o parque.)
18 Y lo que quedare de longitud delante de la porción santa, diez mil cañas al oriente
y diez mil al occidente, que será lo que quedará de la porción santa, será para sembrar
para los que sirven a la ciudad.
19 Y los que servirán a la ciudad, serán de todas las Tribus de Israel. (Estas Escrituras
muestran el hecho de que dos secciones de la tierra serán reservadas, para cultivo de
la tierra, en el otro lado de la ciudad. Cada lado medirá aproximadamente 27
kilómetros [17 millas] de largo y casi 13 kilómetros [8 millas] de ancho. Esta sería
suficiente tierra para sostener la ciudad con comestibles, más el área del Santuario.
Puesto que la maldición será quitada, la abundancia producida será más que
suficiente. La frase, «Para los que sirven a la ciudad», probablemente serán
representantes de todas las Tribus de Israel; por lo tanto, no habrá parcialidad
alguna, ni favoritismo.)
20 Toda la porción de veinticinco mil cañas por veinticinco mil en cuadro, repartiréis
por suerte para el Santuario, y para la posesión de la ciudad. (La totalidad del área,
que incluye la ciudad, los suburbios, la tierra para el cultivo y el lugar del Santuario,
medirán cerca de 67 y 1/2 kilómetros [42 millas] de largo y 67 y 1/2 kilómetros [42
millas] de ancho. Será, como dicho, «cuadrangular», por consiguiente, significa la
totalidad del Evangelio de Jesucristo como el Evangelio completo para el hombre
completo. De todas partes del mundo, esta área será lo más importante sobre la
Tierra, porque Cristo está allí.)
21 Y del príncipe será lo que quedare a uno y otro lado de la porción santa, y de la
posesión de la ciudad, esto es, delante de las veinticinco mil cañas de la porción hasta
el límite oriental, y al occidente delante de las veinticinco mil hasta el límite
occidental, delante de las porciones dichas será del príncipe: y suerte santa será; y el
Santuario de la casa estará en medio de ella. (La tierra al lado Oriental y al del
Occidental de la Santa Oblación será para el Príncipe de Israel. Esta área en ambos
lados se llama «el resto de la franja» o sea, «el residuo». Parece que estas porciones
que le serán dadas serán cerca de 13 y 1/2 kilómetros [8 y 1/2 millas] de largo y 13
y 1/2 kilómetros [8 y 1/2 millas] de ancho. Estarán en los rincones del Este y del
Oeste, respectivamente. Por lo tanto, él tendrá acceso a todo lo que se le requiere
desde cualquier lado. Otra vez, el Espíritu Santo por designio repite la frase, «Y el
Santuario de la Casa estará en medio de ella». Tiene el propósito de recalcar al
Creyente que todas las Bendiciones fluyen desde este Santuario y, por lo tanto, de
Cristo.)
22 Y desde la posesión de los Levitas, y desde la posesión de la ciudad, en medio
estará lo que pertenecerá al príncipe. Entre el término de Judá y el término de
Benjamín estará la porción del príncipe. (Una porción para el Príncipe [el Sumo
Sacerdote] colindará con la Tribu de «Judá», mientras la otra porción colindará con
la Tribu de «Benjamín». Estas fueron las dos Tribus que quedaron fieles al Templo y
al Culto de Dios cuando la nación de Israel fue dividida cuando murió Salomón. Por
lo tanto, su fidelidad no será olvidada, sino siempre mostrará su lealtad al SEÑOR
de la Gloria y Su Palabra.)
23 En cuanto a las demás Tribus, desde la parte del oriente hasta la parte del mar,
tendrá Benjamín una porción.
24 Junto al término de Benjamín, desde la parte del oriente hasta la parte del mar,
Simeón, otra.
25 Y junto al término de Simeón, desde la parte del oriente hasta la parte del mar.
Isacar, otra.
26 Y junto al término de Isacar, desde la parte del oriente hasta la parte del mar.
Zabulón, otra.
27 Y junto al término de Zabulón, desde la parte del oriente hasta la parte del mar,
Gad, otra.
28 Y junto al término de Gad, desde el Neguev, hacia el sur, el límite correrá desde
Tamar al agua Meribá Cades y el arroyo hasta el gran mar.
29 Esta es la tierra que repartiréis por suertes en heredad a las Tribus de Israel, y estas
son sus porciones, ha dicho el SEÑOR Dios.
(«Que repartiréis por suertes», originalmente se refirió al Urim y el Tumín, que eran
llevados por el Sumo Sacerdote y empleados para discernir la Mente de Dios
[Jos_13:7; Jos_15:1; Jos_16:1; Jos_17:1]. Por lo tanto, la declaración, como
registrada aquí, simplemente significa que cada posesión y sus límites fueron
decididos por el Espíritu Santo. La frase, «Estas son sus porciones, ha dicho el
SEÑOR Dios», declara el hecho de que las porciones nunca más serán cambiadas ni
quitadas por un enemigo.)
Las puertas de la ciudad
30 Y estas son las salidas de la ciudad a la parte del norte, cuatro mil quinientas cañas
por medida. (Esta porción final está dedicada a las puertas, dimensiones y nombre
de la ciudad. «Y estas son las salidas de la ciudad», se refiere a los muros alrededor
de la ciudad y sus medidas, que serán cerca de 12 kilómetros [7 y 1/2 millas] en cada
lado.)
31 Y las puertas de la ciudad serán según los nombres de las Tribus de Israel: tres
puertas al norte: la puerta de Rubén, una; la puerta de Judá, otra; la Puerta de Leví,
otra. (Esta ciudad será cuadrangular, con tres Puertas en cada lado, por un total de
doce Puertas; los «nombres de las Tribus de Israel» estarán sobre la doce Puertas.)
32 Y a la parte del oriente cuatro mil quinientas cañas, y tres puertas: la puerta de
José, una; la puerta de Benjamín, otra; la puerta de Dan, otra.
33 Y a la parte del sur, cuatro mil quinientas cañas por medida, y tres puertas: la
puerta de Simeón, una; la puerta de Isacar, otra; la puerta de Zabulón, otra.
34 Y a la parte del occidente cuatro mil quinientas cañas, y sus tres puertas: la puerta
de Gad, una; la puerta de Aser, otra; la puerta de Neftalí, otra.
35 En derredor tendrá dieciocho mil cañas. Y el nombre de la ciudad desde aquel día
será Jehová-Sama. (La ciudad será cerca de 48 kilómetros [30 millas] de
circunferencia en su perímetro. Aunque este Nombre Glorioso, «Jehová-Sama» se da
aquí, es solamente uno de un número de nombres nuevos para la Jerusalén Terrenal.
La frase, «Jehová-Sama» o «Adonai-Sama», significa en el Hebreo, «el SEÑOR está
aquí», que significa literalmente lo que dice. Porque el Mesías estará allí reinando
visible y eternamente en Israel [Isa_9:6-7; Luc_1:32-33; Apo_11:15; Apo_20:4-
10].)