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Vegh, I. Bembibre, C. Furman, R. Etc. - La Angustia en La Dirección de La Cura PDF
Vegh, I. Bembibre, C. Furman, R. Etc. - La Angustia en La Dirección de La Cura PDF
BEMBIBRE
LA ANGUSTIA
ROSA FURMAN EN LA
ELENA JABIF DIRECCION
M.
STELLA RlvADERO
MABEL RODRÍGUEZ
DE LA
ANALÍA STEPAK
CURA
ANALÍA STEZOVSKY
DANIEL ZIMMERMAN
Prólogo
ISIDORO VEGH
.I(.Aj
Lugar Editorial
LA ANGUSTIA
EN LA DIRECCIÓN DE LA CURA
C. H. BE:\IBIBRE
R. FURM.A1~
E. JABIF
S. :\I. RIYADERO
J\L RODRÍGUEZ
A. STEPAK
A. STEZOVSKY
D. Z1\'l-rtIBRrv1Al'{
Prólogo
I. VEGH
LrGAH EDITORL-\L
Prólogo
ISIDORO VEGH
8 9
Los grafos. si los sacamos de eso que parece una complejidad inex- Hay una fónnula que quisiera escribir para ustedes:
tricable por su esrructura de maternas y los nombrarnos con su termi-
nología freudiana. no son más que la exposición articuiada de los gran-
des conceptos freudianos: ello. superyó. fantasma. síntoma, ideal del
yo. Son los grandes conceptos freudianos.
Me animo a proponerles esta lectura: me parece que la estrategia
de la enseñanza de-Lacan es haber abierm err ca:da: uno de·los concep- Son dos trtáng:ulos que se irrtersectan. La S barrada (Sl con la cual.
tos que acabo de mencionar. sin excepción, que su lugar fundan te es Lacan escribe sufern. dividido entre lo que dice y lo que sabe. rnmbién
la referencia al Otro. dividido entre el saber significante y el goce del objeto. -
Por lo menos. hay dos lugares donde esto no nos parece tan sim- El Otro, que también está bajo Ja barra (.:.\). como una manera de
ple. Cualquiera podría objetarme: ¿Cómo. también la pulsión se fun- presentificar que no hay conjunrn universal. que por ser sujeros del
da en el campo del Otro? ¿Tarnb:én el narcisismo. que parecería lo len<1uaje estamos ine.xorablememe condenados. o quizás esa sea nues-
opuesto a la realización objetal. st funda en el campo del Otro? Pues rra ~alvación. a una lógica de Ja incomplemd. En ténninos socráticos,
bien: estas serán temáticas a desp.egar. es otro modo de decir que la falta es la que constituye el deseo.
Lacan avanza en algunos orros seminarios con distintos vaivenes En la intersección de ambos. el objern .. a .. . A lo larg~tj~ este semi-
resnecto a cuales términos de ia estructura quiere desarrollar: apare- nario. hav varias frases de La.can que habian de i<(~guslia.) a eilas
cer{ los dos g:randes seminarios de los años '60: el seminario donde lle-
alude este esquema: ~fie~..::_~ ~~_!::.g~_~Ija_~:I23.!.:e~<:::~e~~_:;-~9
va al e,'{rremo de la lógica de la incorripletud. la lógica de la castración. del Otro: otra dice que la angusua no es sm objeto: otra que fa c:r'..~'.-15. ~
lo que llamamos la batería significan:e como orden de lo simbólico: es Gaes señalparaei-suje'to: · ··· ·· ·· " ' · · ·--· ···
el seminario de la Identificación. ¿Cómo seáñ:rculfiliesas tres fórmulas? Bien: eso quedara para las
l'~,1 es casual. como Laca11 mismo Ju dice-"yo no elijo mis semina- próximas clases: es mi gusto por el radioteatro y el susper.so.
rios porque me dan ganas de trabajar m tema y en otro momemo me Articulación emonces. en esre seminario: del sujeto barrado IS) con
dan ganas de trabajar otro"-. En eso es consecuente: si dice que el el objeto ·a" y el Otro(~); también articulación. para los que están más
sujeto es efecto de la relación de un sigrillcante con otro, eso también avanzados en el tránsito entre maternas lacanianos. del menos fi minús-
vale para su ensef..'.UlZa; es su mismo Stminario el que lo lleva ine.xo- cula (-<p) con el que Lacan presentillca la castración imaginaria y el
rablemente del seminario "La Identificación" al seminario de "La An- objeto ·a": articulación de la castración imaginaria con la castración sim-
gustia". Porque ia practica del psicoanálsis no es la práctica del sig- bólica: diferencias entre la castración en freud y la castración en La-
nificame; sino hasta el e.memo donde la ialabra encuenrra un limite can y su conseéuencia. con la cual termina este seminario a media-
que es una pequeña cuota de goce. Cuotade goce que en la termino- dos del '63:
lo~ia freudiana se llama fiiación cuando alí retiene al sujeto.
·secruramente conviene aue el analista sea aauei aue ha\·a nodido.
- Es entonces ine\itable-. para esta enseñmza consecuente. el pasa- ::>or má~ poco que sea. por al~ún sesgo. por algún.borde. hac.er basran-
je del seminario de "La Ide~ti11cación" al seninario "La Angustia·. te emrar su deseo en este ·a- irreductible. para oírecer a ia cuesuón dei
Las nuevas consecuencias de esre semir->-Iio. que brevememe diré. concepto de la angustia. una garanúa real. -
se cumplen en dos seminarios claves: "La ógica del fanrasrna· y ·s¡ Si me dirijo a coiegas. este tema no es teórico. Nos concierr.e. cie?i-
acto analítico·. cados a esta práctica eniE:márica. Valor de este seminario que nos ru-
Esre seminario. "La Angustia·. nos da la •porrunidad de recoger en zo elt$rlo. pu~ no sólo im-piica una articulación teórica rifSurosa áe con-
srarus nascendi. en el momento mismo de s1 gestación.. lo que Lacan cepws nodaies. sino consecuencias practicas que definen modos dis-
\'ªa llamar las especies del objeto ·a·. Es en este seminario donde va a timos de establecer la dirección de la cura.
despleg:arpor primera vez. uno por uno. cada:ino de los obietos ·a· co- ··--xreiñfiñOa:-sosfe:TierOU-és~ñ-¿fa.rialisra se sitúe en rdación a la
mo ·especie diíerente: la \·oz. ia Inirada. las he:es. el pene. cl pecho. anoustia. se ouede aefini!- el modo de. .. entender
::- ... - ..
' -V '...oracticar
•' .
ei
. ' .~ análisis
'• ..... ' ·-
.- ...
10 ,• ,1
Para concluir, voy a leerles una frase de un auwrvalorado por La-
Anticipo tar:nbién a medias. al modo del oráculo: ~-~~gl}_~tia es
can Y seguramente por quienes hayan hecho la prueba al~una vez de
señal de la segunda muerte. -.._ .
recorrerlo: escribió un tratado importante sobre la angustia; es
Ki erkegaard: -Segunda muerte. que como recuerda Lacan, Sade: el dhino. el mar-
qués , equivoca: en realidad antecede a la pnmera, _ .
-La angustia es la realidad de la libertad como posibilidact antes de
la posibilidad." Seounda muerte que sólo a los hablantes. los parlerres, nos concier-
ne. N~estro acuerdo con la palabra nos deja para siempre deudores
12 de junio de 1991 con el sexo. Es esto lo que cambia y nos aparta de una ética que en
Oráculos de la angustia en la clínica psicoanálitica nuestra cultura es dominante . Si la culpa nos afecta. no siempre nos
afecta del mismo modo: la ética del análisis sitúa al sujeto de la culpa
en una perspectiva muy distinta a Ja ética dominante de nuestra cul-
Voy a hacer apenas una breve introducción: no hago sino repetir con
tura. También lo digo a medias. es una de las tantas formas en que se
alguna diferencia. lo que ocurrió en la vuelta anterior. Cuando esa
dice la marcha de u-n análisis: si se cumple. el sujeto pasa de sentirse
~xperiencia concluyó. en diferencia con los tres mosqueteros. no que-
aamos concertados para un nuevo encuentro. culpable del Otro a s~t~a~~e c~Jpab!e . ~~ 1<? __13_e_?J_: el de:>fil~9er~ que \·a
de una culpa a otra. sitúa la señal de la angustia. .
En el interin. \·an os de los presentes. nos hicieron llegar. a mi. y a
t:n los anuncios del Seminario para este año. los temas que seran
otros colegas. la preguma acerca áe si esto iba a conrinuar. incluso las
ganas de que asi fuera. presemados son: El objeto a en la transferen~ia, Contrat:ansfer-
encia y deseo del analista, Duelo y melancolía, La pesadilla y lo
_Que hoy nos encontremos aquí. también reconoce una parte de su
siniestro, La mirada en la clínica, Pasaje al acto y suicidio .
r'.3-2on en aquellas cuestiones que nos quedaron pendientes: eso garan-
Es un modo. también. de ex·poner que adentrarnos en ias cuestio-
tiza que por lo menos mayoritariamente no somos psicóticos: algo de
nes de la angustia nos lleva a una diversid ad de puntos nodale s de l_a
la iníinitud fálica juega y nos relanza. Que es temos aquí en rela~ión a
teoria. esenciales de nuestra práctica y de lo que concierne a la posi-
esos pedidos es una manera de dar prueba que es la demanda Ja que
asegura la existencia. ción del analista. Situarse en ese movimiento en d que el sujero se
reconoce culpable de lo Real es aceptar a}go q'.J.~. i_I!!l2..~S~_n!J.~_q:3._ub i
El titulo que hoy nos convoca tiene su referente en el Seminario
cación como dice Lacan en S.l}_ii~.Q.i.Qgi_?m.9: . in~mundo. Una ubicación
que Lacan diera en tomo a la angustia: es el seminario lacaniano del
que in:.mun.-ci.o·n-os--Sitüa en lo que es ~l_caroz~ de eso que .cada uno
afecto. Ustedes habrán escuchado alguna vez decir que a la enseñan-
reconoce como el mundo. carow e~gmatico. oQ¡etC2_9ll_e nof!.!Q.@rri_os a_,
za lacaniana le falta uria teoria del afecto. Este es el seminario del afec-
to. porque la angustia es un afecto. Oráculos de la anoustfa:-ciecide-en las variantes de los trazos que
lo bordéan ven la clife~encia de sus especies una fórmula singular que
Esta vez somos convocados por u~ título levemente desplazado.
decide también la diferencia de los estilos .
nos ;...ni.mamos a utilizar una esdrújula. oráculos: Oráculos de Ja ane:us-
tia . _:i la clinica psicoanalitica. ~ Reconocerse in-mundo es una cuestión ética. es·poder re~rneme.
disfrutar de Ja diferencia de los estilos que cada uno puede orrecer.
St irá desple?ando en la serie de charlas pero al menos vov a citar-
Es lo aue iniciarnos el año pasado. en el cual cada uno de los que
les una frase de Heráclito: -~¡ S_~!lQc_cuyo oró.rul.o es el que esrá én Deifos.
ocuparon ~ste lugar. intentó d~ de:3de su fórmula. su lectura. s~s retle-
!2~. a.;~~: _n_i 29!1rCl. ~e ~((resra par ~e.ñCiles·n angustia cfueñüs"c:ifros - :dones. a partir de un rraoajo reatizaao en conjunto. una manera ae expo-
renemos corno re iereme es la angustia senaL Oráculos de laAngustia.
ner esa ló!!ica tan dificil oara Ja neurosis en la que se articula el Su_1e-
oráculos que ni dicen. ni cailan:·dmrsf!ú~es. ¿señales de aué? -
Lo v el Otro .
_Enu:e _dos .rnuenes, _dice. Lacan,. cJi?cµ_rre un _análisis. Recuerdo Jo
. Quienes i~tentarán jumo a mí y yo jumo a eilos . despiegar esta
que ustedes ya saben. esa_~_q11i...:ajep_s:la freudiana muene=castración:
mas_fácil recordarla que despiegar su lógica.
aqu1 nos com·ocamos.
para es
des-plega;Ía q~e
tematica son:
Esperamos que ustedes nos acompañen acti\•ameme en este reco-
rrido que hoy retomamos. ¡..¡.de agosw cie 1992
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La emergencia de la angustia
CARLOS HoRAcro BDrnIBRE
. ·Ahora. bien; que Lacan subraye que Ja angustia es nada más ni na- d (a) > i (a) : d (..~
oa menos que ].12.~ec~•.~e~ulta casi paradójico. en tanto aún mantie-
ne en suspenso su espeónc1dad, pero al mismo tiempo marca sus coor- pudiendo leerse que el deseo del sujeto-d(a)- en tanto ->-se sopor-
denad~ de fuerte connotación clínica_ Si bien no alcanza a definirla, ta de una imagen -i(a)- que cubre aquello que está más allá del signi-
algo s1tña en. tomo a ella. por su mismo carácter de afecto. ficante. en tanto apuma a un objeto que opera con las envolturas nar-
cisistas de la imagen. es equivalente-:- al deseo del Otro -d(}J-. pero
.Ya en lo~ prir:ieros trabajos freudianos. por ejemplo en "Neuropsi- deseo del Otro barrado. definido por su falta.
cos1s de Delensa ( 1894). planteaba Freud la di\'ercrencia radical enrre
el destino de la represen ración y el destino del afe~to. El afecto inerva Que ame la sensación del deseo del Otro sea la angustia su regis-
una ~ona somática en la histeria o se desplaza a una representación tro. pone en juego -en tanto la angustia es ame todo señal que se pro-
an~ en l~. neurosis obsesiva. El afecto no se reprime; va a la deri- duce a nivel del moi- no solamente al Otro. sino que i:a.mbién implica
va. siempre aispuesto a enlazarse a una representación. al Sujeto. Se pone en juego el Otro, pero también el Sujeto. bajo la for- _ .
ma del ¿Che_Vuoi? ¿Qué quieres en lo concemierne a rrú? ¿Que me .
En ese sentido. la represión recae -en términos freudianos- sobre auieres? De donde se trata en los tiempos de angustia. de mi relación
las represenra?ones: no sobre los afectos. Es decir que son los sirmifi- ¿on su deseo. Una doble puesta en juego.
cames Jos pasibles de ser reprimidos. Hay una profunda divergencia
. -: .• · ,'
i i
Es en la misma clase del 21/11/62 donde se plantea esa doble se inscribirá como conciente, barrado -S-:-. atravesado por la palabra.
implicación que la angustia patentiza y que toma corno articulador el Del lado del Sujeto, el Otro pasa como A al campo de la subjeti'widad.
objeto que entre ambos se perfila:
El hecho de que el sujeto mítico. merced al goce del Otro. encuen-
• ... el Otro está allí como inconsciencia constituida como tal, e in- tre en ese campo el significante que lo inscribe, no agota al Otro; no lo.
teresa a mi deseo en la medida de lo que le falta a él y él no lo sabe. A aniquila. No es una división exacta. Queda un resto que no es subsu-•.
nivel de lo que le falta' y· él mr Ju sabe. me· encuentro interesado de la mi ble porel sigrrillcante; ese resto es lo que llamamos objeto "a".
manera más absorbente porque no hay para mi otro rodeo que me per-
mita encontrar lo que me falta como objeto de mi deseo." Esto en un primer movimiento instituyente. Ahora bien: el sujeto
tiende a restituir ese tiempo mítico. imperio del ser para el Otro. iden-
Esta dependencia al deseo del Otro y el lugar privilegiado que adquie- . tificándose al objeto y así aparece en los tiempos iniciales del análisis .
re el objeto recortado del campo del Otro y promoviendo la escisión del
Sujeto, cobra mayor precisión con la presentación del cociente que for- A S Goce
mula Lacan y que le permite dar cuenta de lo que podemos llamar un a A Angustia
tiempo instituyeme en la constitución del sujern y el engendramiento
del objeto. · Deseo
Previo a toda posibilidad de constitución de lo que habrá de ser un Esta ligera modificación que inrroduce Lacan en el cociente. modi-
sujeto deseante. Sujeto en tanto un significante lo representará para ficación que tiende a plasmar la identificación del sujeto al objeto. per-
otro significante. previo a esto. un postulado freudiano fundamental mite considerar tres tiempos: Goce - Angustia - Deseo.
impera. Me refiero al antecedente del Complejo de Edipo: es decir. una
mujer posicionada en un movimiento de obturación de su falta a tra- Tres tiempos que definen una función y un lugar. Ja angustia como
vés del hijo, produciendo la ecuación niño=falo. Insostenible desde la medio entre el goce y el deseo: la angustia como antesala del deseo y sali-
empiria en tanto no se trata de la falta de pene. pero válido desde la lógi- da del goce, Ja angustia en ese tiempo donde el ~a· se presentifica. donde
ca que si.¿stenta en tanto se trata· de un significante: el falo. Otro sin el advenimiento del sujeto deseante se anuncia como posibilidad.
barrar, inexistente, aunque pr_9duce efectos. En este caso, un movi-
miento instituyente para el sujeto, ya que se trata de un Otro que por Así situado ese objeto ·a· como resto de una operación enrre el Su-
su deseo introduce en el mundo un sujeto. jeto y el Otro, ese objeto que es un resto desprendido del Otro. lleva_a
que de ahí en más no haya posibilidad de acceso al Otro sino a u-aves
Esto delinea un campo. el campo del Otro (A) y en contraposición de ese resro. Es a rravés de ese resto que la angust:.ia se const:iruye en
el campo del Sujeto (S). Sujeto sin barrar. sin arravesar por la fun- su única traducción subjetiva. lo cual, para dar cuenca dei momento
ción de la palabra. también inexistente. dado que seria suponerlo preciso de su emen:!encia. lo lleva a Lacan a replantear el modelo ópti-
iu era del campo del lenguaje. Ine.,jsrencia duplicada que lleva a plan- co trabajado en 19-53 (Seminario 1) y luego en 1960 ¡-obserrnciones
tearlo como un tiempo inaugural. mítico. tiempo de un goce, goce del sobre el informe de LagacheT
Otro. inexistente pero eficaz en tanto el neurótico lo ubica en el hori-
zonte. La preocupación de Lacan en esas ocasiones era trabajar cómo ei
sujeto descubre su imagen. que es la propia del yo ideal. que se cons-
En ese tiempo mítico, tiempo en que la puesta en acto de la metá- tituye en el campo del Otro. Ahora nuevamente va a trabajar este mode-
fora paterna opera. se produce un corre que precipita eíectos tanto en lo. pero para situarorras cuestiones que hacen a la especificidad de ia
el campo del Orro como a nivel del Sujern. Del lado del Otro, el Sujeto emergencia de ia angustia.
18 19
Recordemos que Lacan toma la e:\.-periencia de Bouasse que gira alre- En un primer tiempo instituyente. el Sujeto se constituye en el cam-
dedor de la visualización de la imagen real que produce la reflexión en po del Otro. Ahí constituye su yo ideal articulado a la antecedencia de la
un espejo cóncavo. de un objeto ubicado en el centro de la curvatura. demanda del Otro. Por eficacia de cierta operación. el espejo rota. el Su-
jeto descubre su condicionamiento a esa imagen teal ..ad\.ierte que ese yo
ideal en el cual se alienaba depende del Otro. Descubre que eso que cree
ser no es más que algo que se produce gracias a la sanción del Otro.
El jarrón invertido, reflejado sobre el espejo cóncavo a la altura de Allí donde debería realizarse en la imagen virtual, por su propia
su centro de curvatura. cumpk las leyes de la óptica: un espejo cón- condición de no especularidad. pasa corno un blanco, una a usencia
cavo produce una imagen real invertida. Real en tanto ubicada-en el que genera una eficacia. Ese blanco es notado por Lacan como-{!), fa-
espacio, no visible para el sujeto, a no ser por la mediación de· un espe~ lo imaginario en tanto operador de la castración. diferenciable del ó. sig-
JO plano en el que pueda re1lejarse -en el espacio virtual- esa iina- niGcante del goce.
gen real que ha producido el espejo cóncavo. Espejo plano con el que
1 Lacan apelará al campo del Otro.
Podemos afirmar que la inscripción ima ginaria del falo sólo es en
1 tanto falta: o más aún. que el falo en tamo falta. sólo se inscribe en ia
, Por la mediación del espejo plano. el obserYador Yerá.· ahora sí. en .. dimensión imaginaria. ~implica que en el campo del Otro. ei Sujeto
1
e1 espacio \irtual. la imagen virtual de la imacren real: imagen virtual cae corno objeto que él es para el Otro y deja un blanco. El -<..1 silü a la
t noi.ada como i'(a). "' ~
dimensión de la falta.
, Lo único que el Sujeto conoce de sí mismo. es lo que encuentra en Mientras este operador esté vigeme. no hay angustia en tanto la
e1 c_ampo del Otro~· donde se producirá esa imagen virtual. El i(a) está falta es la condición del deseo. ~-~g~.St!él ª2..~!~ cuando algo apa-
daao en la experiencia especular. pero esa e..meiiencia debe ser auten- rece en ese bJanco ...en esalalta_o mejor:. aún --si~uiendo la propuesta
tificada por el Otro. y como tal. a nivel del i"(a). de -Lacan-· cuando Ja f~_t~ V!ene_a faltar. -
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· El aforismo "La angustia no es sin objeto·, afortsmo que ha cobrado
un tinte inercial en nuestras teoriiaciones: resulta mucho más fácil de
"La angustia guía
repetir como cantinela adormecedora, que soportar sus consecuencias . ia práctica deL anaiista"
. ;.;::·
Que sea la angustia el anuncio de un corte en suspenso que da STELL\ MArus RlvADERO
señales de la posibilidad de dilución de un punto de goce en vía de la
constitución deseante-, pone err juego en la corrduccfórr de un análisis
una otra vertiente que no tiene que ver con el significante y que al mis-
mo tiempo. paradójicamente, es su efecto.
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. Eri esa-p fe'gtlnti ~(n¿~rótlco compromet~ -~~ ·~d~. para hacer con- •¿p_ól)Qe_bq.bita_eldeseo?_en el fantasma.: El a soporte del deseo
sistir a un Otro, en verdad inexisten~e. '·"''~ . :: --- en el fantasma no es visible para él. "El neurótico nunca hace gran _. __
Remarco; no basta que uñ sujeto sufra para que acuda al análisis, cosa con su fantasma·. nos dice Lacan. · --
es necesario· que algó..del confort del goce fantasmático vacile y que - "Este logra defenderlo contra la angustia en lá. medida en que es un
.una verdad se anuncie en el síntoma. - · a postizo", -es el· cebo·correl·que· consiguen al otro-; es eso que lo sus-
· Urr aná:lists comienza porl'a:~:'orrlenaciórr de síntomas~ y eI neuró- trae de quedar atrapado como puro objeto del goce del otro.
tico debe--a prender a damos 's u angustia. cosa que no hará facilmen- · Por un lado es propiciatorio, pero por otro es un inconveniente pues
_ te; entonces tendrá que damos su equivalente: el síntoma. el neurótico queda fljado a ese lugar. Por eso. decía que también es
Má$ allá de las intenciones_del analista. si éste está bien posicio- necesario una vacilación fantasmática. una grieta en la fijeza para que
nadcr:-ante lo que_ la _clinica k .ofrece. _tarde o temprano deberá vérselas alguien acuda al análisis.
con Ja angustia y tendrá ql!e to!Ilar arueella una pos1cion étlca. Será El Otro le ofrece un lugar. pero no cualquiera. el lugar ofrecido es
Su." fuñCión hacerla emén!.er-pero también dosificarla. Será el deseo del el del goce. Para que el sujeto pase del goce al deseo tendrá que sopor-
ánál.ista el que sostenga -esa función. Y allí enrrará en juego su propio tar ese tiempo de angustia. Pero esa caída del lugar de objeto tiene un
análisis para poder sostener dicha función. pr~cio que el neurótico no siempre está dispuesto a pagar.
Nuestra posición corno analistas es disiméuica: .nos deja en una Un breve fragmento de la clínica para puntuar-una entrada singu-
situación particularmente ventajosa. Ventaja que no excluye el males- lar al análisis.
tar. ventaja que enfatiza y subraya la responsabilidad. A quien llamaré Juan. llega al análisis en un estado de máxima
Si decirnos que tanto el analista corno el analizante están hechos angustia que Je impedía hacer algo en su -vida. prácticamente no podía
de la misma pasta. ¿Cómo acotar el goce del analista para que se escu- salir a la calle. Relata con muchas dificultades que hace tiempo está
che el decir del analizame? angustiado. estaba estudiando mediciJ1a y cuando estaba pró~o a reci-
Un sujeto acude al análisis pegado a la demanda del Otro. de allí birse aparecen las crisis de angustia: fue a consultar con alguien que
que. al comienzo de un análisis. entremos en la ficción en la cual él le indicó dejar su carrera porque ésta le hacia "demasiado mar . Evi-
r'e cuffe a la demanda. El neurótico quiere que el analista le demande dentemente esa persona tenia otra posición con respecto a la clínica de ·
algo y como éste no le demanda nada. él comienia a enunciar sus pro- la angustia. el ·remedio" era evitarla, taponarla. sin poder leer alli los
pias demandas. En ellas podremos leer una respuesta. que comienza si!mificantes mismos de la alienación del sujeto al'\:ampo del Otro. .
a perfilarse en relación a qué es él para_el deseo del Otro. - El amaba su carrera. sin embargo la abandona. a pesar del dolor
Es en la serie de las demandas, el "lugar donde el deseo se sostie- que eilo le ocasiona: obedece esa indicación. con la vana ilusión de que
- ne. siendo lo esencial del deseo no estar satisfecho. En la medida en la angustia desaparecería.
. que el analista sopona ese avance por dicha serie. hasta el fondo del Al tiempo se da cuenta que a pesar de su renuncia. la angustia va
tazón. hasta la demanda cero, es aue se podrá leer la relación del suie- in-crescendo (la renuncia al propio deseo conduce a Jo peor). tiene .
to a la castración. ~--"' ___:: .. _>·- -";'.'.::-: ~--:::::_._,;· • - miedo a salir a ia calle. no puede manejar. oene miedo de -volverse lo-
La operación analítica a través de Ja interpretación o de una imer- co· . no puede reiacionarse con ninguna mujer: entonces decide con-
\'ención en lo Real permite al sujeto consumir su goce. recordando que sultar esta \·ez. a un analista.
el goce es eso que no sin·e para nada. es esa fijación en la cual un suje- En aauel momento. el de la primera consulta. una angustia difu-
to queda en posición de objeto frente al capricho del Otro. sa lo inva"dia. Mienrras aue en el momento en que acude al análisis. lo
_- Es por ese moti\'O que el analizante deberá caer de ese lugar de hace va con un desnlie!:!i.ie en el campo sintomático e inhibiciones que
objeto. para que advenga algo del orden de su deseo. -- - Jo lirrÍitan: es así au·e ei -analizan te comienza a advertir que sus dificul-
Es en d. cuerpo donde se genera la demanda pulsionaL es desde d Otro. tades tra.scienden·a su carrera. Y en relación a ésta aoarecen las deman-
aue en la sunerñcie dd cuerno se uroáuce una linea.. una marca. que en das familiares: su madre le pedía ·serás el mejor médico clínico. ei que
~ro marca. implica un corre. genera un borde. una zona eróg~ a mi me cure de rodas mis dolencias". Su padre: "Deberás ser un bu.?n
26
_,
ry-
·médico cin.ifano porque tendrás que poner en alto nuescro apellido" , sus Asimismo para el analista. los ·análisis que.conduce has.ta .el llnal . .·.
hermanos esperaban ansiosamente ese titulo y alguna:- especialidad concluyen con su caída de la posición de semblant de a. :· · · .· •
rentable para que Juan los sacara de la pobreza. Siguiendo con otra de las lineas tomadas por Lacan en. estas clases, -
· · Ante semejantes expectativas, él no sabía para qtúén era el título puntuaré, a modo de pincelada, la aparición de la-angustia en Juanito.
y si de su titulo podía hacer algún uso. El que era un modelo de hijo y Lacan nos dice "no es el ritmo de la alternancia de la presencia.
. de hermano mayor, siempre obediente y complaciente. ahora ya no. ausencia de la madre. lo que importa. Y la prueba de ésto es el hecho de
podía obedecer y complacer. El análisis permitió la interrogación de que el niño se campfo.ce errrercovarese'juego de presencia-ausencia.. La
ese lugar ofrecido al altar del Otro. posibilidad de la ausencia es la seguridad de la presencia-. ·
-Es por la incidencia del amor que es posible que el goce condescien- Lo más angustiame para el niño es que justamente esa relación
da al deseo". sobre la cual él se instituye por la falta que le hace desear. esa relación
Esta frase del seminario la pensaba en relación al amor de trans- resulta ser la más perturbada cuando no hay posibilidad de la falta :
ferencia y a la oferta que hace el analista para que el analizan te lo revis- cuando la madre le está todo el tiempo encima.
ta con sus objetos famasmáticos. Modelo de la demanda que no podria desfallecer y en otro nivel mas
El ir ocupando ese Jugar de semblant de a permitirá el trabajo elevado en el tiempo siguiente, el de la pretendida pérdida del pene.
analítico. ¿Qué vemos al comienzo de la fobia de Ju anito?
El neurótico al ir ofreciéndose aJ goce que la versión paterna pro- En Juanito. hay un tiempo primero de la angustia, luego se insti-
mueve. hace consistir a un Otro, para que haya garantías. tuye la fobia como remedio sintomático a la angustia.que irrumpe.
Cuando esa posición de objeto comienza a trastabillar. emerge la En algunos lugares se plantea la aparición de Ja angustia en rela-
angustia con todo su brillo. Angustia señal de un cone en relación a ción al nacimiento de la hermana. La lectura lacaniana nos propone
~~-d_~_~o por venir y un goceapei-der. --·· · · otra perspecti\·a.
Si el sujetc)acepra esa larga y ardua rravesía del análisis. para poder Juanito comienza a sentir sensaciones en su pene~· a masturbar-
ubicarse en otro lugar en relación al Otro . tendra que soportar un tra- se. ¿qué relación tiene esa aparición en lo Real y la aparición de la
bajo de duelo que implique modificar las condiciones de goce. que le angustia?
permitan una ubicación que no sea la de esclavo del Otro. tendrá que Hasta el momento en que aparece su pene en erección. esa irrup-·
aceptar el duro precio de enfrentarse con la ine.'Cistencia del Otro. ción de goce fálico. Juanito era objeto de goce para el Otro primordial.
Tiempo que el analista d'ebera acompañar v sostener a lo largo de su madre: él es el falo imaginario de ella.
la cura. Sabemos asirnismó que es necesario que haya un tiempo ins- El conflicto surge cuañdo en esa díada madre-niño. en ese idilio\
tituyente. de una pregunta dirigida al Otro;;que el Otro haga soste.ni- hace irrupción un tercer elemento que quiebra esa armonia e incorno-/
ble como para que después de ese Otro alguien pueda tallar su propia da ese goce en el cual Juanito estaba cómodamente instalado. No sola•.
pérdida_ mente lo incomoda a él. sino que también es un anuncio de que su
Se puede rerroceder ame la angustia. entonces se \'Ue!ve al confort goce. el propio. incomoda al goce del Otro. Uil anuncio de que antes que-. ·
objetal. que no siempre es lo mejo~. a \·eces conduce a lo peor. daba a merced del capricho del Otro. ·
O se puede avanzar como Ifigenia... la heroína f!rie!!a. sin temor \" Para Juaniw se trata de una lerrible disyuntiva.. corno io es para w-
sin piedad.. Avance que implica también al analistc3: a sostener su de- dos los neuróticos. ser ei.Jª19_g_u~completa al Qtro_Q..29~r su propio
seo cie analista. deseo que lleva las marcas del propio análisis. p_ene~s:er_ o_ce_ner. · ~-
Al final de un análisis el sujew quedará advertido de las marcas Los dos momentos subravables son: cuando anarece su oene real
.del Otro que lo habita y habra una cierta labilidad en relación a ese
J ugar.de goce que le propone el Otro.
a
y cuando él intenta seducir su madre. fracasando. ya que es recha-
zado por ésra qtúen le dice que su pequeño pito es una porquería Es-
· El planteo lacaniano permite pensar la cura más alla áei falo. más to resignificaria el nacimiento de Hanna como prueba de la insuficii:..ri-
allá del padre. ba1Jiéndose servido lo necesario y suficiente de éi. cia de JuanilO. Por 01.ro lado. la madre de Juaniw no renuncia a tra-
28 29
tarlo como su pequeño apéndice. mientras tanto el padre está dema-
siado prendado del matriarcado. La angustia de castración no es por-
Perversión: La angustia de LOtro
que el niño tiene miedo de perder las cartcias de su madre, Juanito lo
dice. aunque su madre lo acomp2ñe. su angustia permanece. MABEL RODRÍGUEZ
Ersíntoma fóbico aparece par2. arerrua:resra carencia del padre re-
al, de esa manera Juanito se sostiene frente a la angustia de devora-
ción materna.
El síntoma juega un rol estructuran te . reparador, mediador. el
miedo que no proviene de la palabra del padre vendrá del caballo.
El objeto de la fobia es el Significante que sustituye al significante
del Nombre del Padre. ·· -· · ·
· ... juanito tendrá que dejar ese goce para avanzar en su deseo. para
ir hacia las mujeres. la única vía será por identificación al padre. debe-
rá abandonar esa identificación a la madre. desde donde espera parir
a las niñas. Dejar de serlo para tenerlo . Lacan va a hablar, en las clases que van del 1.9 al 23 de enero de
1963, del Seminario de La Angustia. acerca del objeto a. El objeto ha-
cia el que nos orienta el aforismo de que la angustia no es sin objeto.
La única traducción subjetiva del objeto a es la angustia.
Se refiere. emonces . a la fórmula del @n@srna.(S...Q_ a)_c_om_q sop()r·
t_e_del d_e?eo y se pregunta si el objeto del deseo está adelante. Plantea
que esto es un espejismo. que el objeto a no está en la intencionalidad
del deseo sino que ese objeto debe ser concebido como la causa del de-.
seo; tl,9..Qjru¿.es.táJietrás del deseo.
Dice La.can~ "Para representarlo. no por azar me serviréfdel fetiche.
donde se revela la dimensión del objeto como causa del deseo. Porque
lo deseado no es el zapatito. ni el pecho. ni lo que fuere que encarne el·
fetiche: el fetiche causa el deseo que va a engancharse donde pue<le.
sobre aquella que de ningún modo es necesarto que lleve el Za.patito.
el zapatito puede esrar en los alrededores: tampoco es necesario que
Bibliograf.a ella UeYe el pecho. el pecho puede esrar en la cabeza. Como todo el
mundo sabe para el fetichista es preciso que el fetiche esré alli. el feti-
rR.EüD. Si.l),munci: -.4ncilisi.s cie laJobia cie un niño cie cJJCO aiios -.
che es la condición de la que se sostiene el deseo-. - - -
FRUID. Si.gmuná: -Inhibición. süuorroll y angustia·. El fetiche funciona com9_obje~9 a que viene a tapar lo que fue abier-
to por la casi::racióf1. _desmiente la tachadura.del Otro. $jp _ e:::nb~g_~~
C..\ZOTTE.. Jacques: •EJ diablo enamorndo-. mismo tiemuo desiima la casrración materna. En la Verleu!!nune: se
t...::at.aife aesinenll- fo que se regTuo.=o.----- ··· - -
LACAN. Jacqucs: -La angustia" linedito) Escuda Frcuciiana cie Buenos Aires. -
El primer saber del chico es la premisa universal del pene: '"Todos
\'C:GJ-l_ lsidoro: ·EJ cb1ew y sus ciesiin.os- fichas de la Escue.ia freuciiana de Bu~os tienen·. Cuando este saber cae. cuando se niega este primer saber.
Aires. aparece el: -~o todos tienen·. El~!olj~_t_~ 2~01 e~o ya a_n~garJa .:n~;;
-La c:lí1ticn freuti.iar.a • L<J gar Ediior.al. ción de la premisa universal del pene: Rer:iegac:i~~ El enunciado que
30 31
traduce esta posició-ry ~s: -w_sé.P-.er(éci:irnente.~p_eio no obsta.OtC... :. · tatable empíricamente; se trata de un tiempo mítico donde"' aparece e}
En la clinicade perversos la renegación aparece insistentemente: "sabia Otro primordial sin barrar dado que está el infar:is como falo imagina-
que no tenia que robar lo matar. o-estafar, o mentir, etc.) ... pero, sin rio que lo completa. El S también lo escribirnos sin barra porque aún
embargo. lo hice". La clave es que no nos obnubilemos con la primera carece de palabra, está fuera del campo del lenguaje. Debemos recor-
parte de la frase, descuidando la importancia de la segunda. dar que este tiempo del incesto, del narcisismo primario. no es un tiem-
Con la ayuda del objeto fetiche el sujeto intenta colmar la falta del po cronológico sino lógico.
Otro. hacerexistir al Otro, proceso que implica situarse-como·instru-
mento del goce del Otro. · A j S.
¿Seria muy aventurado pensar como componente estructural de
todas las perversiones la constitución de un fetiche o algo similar? En el segundo tiempo, como resultado de Ja operación del lengua-
¿Que en toda perversión habría un fetiche que funciona como objeto je, de la prohibición del incesto en sus dos vertientes: "no reincegrarás
a para sortear la castración? tu producto" para el Otro primordial y "no te acostarás con tu mad re"
· 1'>:1.~~~_te el feticpe se intenta_reti:>_roar_al_goce..incestuoso. restituir para el infans, advendrán ambos barrados.
ese goce primero.de.A antes de A..si~_~so no hay ero.tismo. Esta operación se marca por la bari:-a y La Madre pasa a ser una mu-
Es imponante establecer la diferencia de estructura enue el obje- jer que se define por ser no toda (era completa en la medida en que el
to fetiche y el objeto fóbico. Este último tiene un carácter netamente hijo ocupaba el lugar de su falta como falo imaginario). Pasa. entonces.
significante. prima en él la metáfora. Su función es suplir el Nombre del lado de Ja subjetividad constituyendo el inconsciente del sujeto. Es
del Padre. ayudar al cone de la función paterna. Cuando Juanito es- la batería signillcante del niño, el Otro subjetivado, incorporado (J) .
tá apresado como objeto imaginario de la madre, el "caballo" Viene a avu- Simultáneamente, el S del primer tiempo va a quedar también barra-
dario a Ja castración. Por eso en Ja clínica no se trata de arruinarlé al do al pasar del lado de Ja objetividad: quedará diVidido entre lo que
paciente su objeto fóbico sino de descubrtr su estructura. El objew dice conscientemente (Zl y lo que sabe inconscientemente (Al.
fóbico e~<:-~dl~ión de la s'!:li.9_<i.d.e....un.goce. --
~@bjet~~ch~· en_ ~bio. es_<;o!!_dición_cie_yn. goce: su carácter pre- A 1 S
dominantemente metonímico lo diferencia del objeto metafórico de la $ ;,.
fobia y en lugar de ser puro significante.como eL"caballo" deJuanito.
va a ser: ubicado por Lacan entre Jo simbólico, lo imaginario y lo real. Pero ésta no es una división-exacta: pues de esti; cruce que Jos ba-
Al neurótico. la posicióñ propia· del perverso: ser objeto.Je provoca rra a los .dos queda un resto. un plus de goce que es el objeto a: resm
horror: Apela al Nombre del Padre, como en la fobia, porque teme per- de Ja relación al Otro al que el sujeto accederá en su vincula-con el go-
derse en La Madre. · ce. A partir de este momento ya no va a haber goce completo: para el
El perverso, en cambio. cree poder lograr el goce de La Madre sin sujeto que habla nQJ1ª._Q@_Rosib\_4Q.ª-g_q~oza.r.pe1_0tro .más .que por
perderse en ella: guardando para si el saber de su propia adecuación pedazos. ya que el a no es un signillcante sino un pedazo del. cueroo
imaginaria a tal goce. El neurótico no se aUibuye tal saber. por lo tan- del Otro. Esta división. por consiguiente. precipita el objeto a que i.rls- ·
to ser objern de un goce iogrado. el objeto de La Madre. significa.ria para taura la falta y provoca el deseo.
él desaparecer como sujeto. Sin embargo, no se puede gozar de La
Madre pues no hay La Madre. El padre presenti.fica la castración del
Otro. Al Otro sólo lo hago e.x:istir si me ofrezco como falo.
En relación a lo que venimos desarrollando vamos a recordar el a
esquema que.realiza La.can de los tiempos lógicos de la constitución
del sujeto. . .. . . . . _ Si ~egáramos un rombo del lado de-la objetividad. enrre el $ v el
El primer tiempo es •ma anticipación lógica que hacen;0s.-no-cons- objeto i obtendríamos la fórmula del fantasrri'a: SO a. -
32 33
Mas esta caida de la posición de falo imaginario del Otro, este ser
nada para_ el _(_?tro. '~ªa ser insoponable para el neurótico; que tratan- bién su razón. Los largos discursos que enuncia el libertino no son
do de resnturr el pnmer tiempo de completud con el Otro, se identifi- para atenuar la tensión de la acción sino que habla para ejercer la \iO-
~ a alguna vari~te del objeto a en el fantasma.. marcando así su posi- lencia. La victima debe acatar.
cwn de goce. El sujeto se V?._ajdemificar al a para hacerle.Jalia al Otr~ Si el significante es lo que representa al sujeto para otro significan-
cubrir lo oue l~Jaltay_hacerle falta.para que. elQJ:ro lo_b.usnue. te, se trata de que no haya ningún significante que represente a la vic-
Llegar al análisis identificado al objeto a no es patrimoñio de nin- tima para otro significante. El obj~t!_v:o es tr~sformarlo en un obieto_
guna estructura. Pero, cuando luego del primer tiempo del análisis, se Los campos de concentración y las cárceles lo evidencian con claridad:
·recorte y presentifique este objeto a que se es para el Otro. va a emer- se les rapa a todos el pelo por igual. se retira la ropa personal para que
ger angustia. Vemos así que la angustia no es sin objeto. El neurótico usen uniforme. se les borra el nombre poniéndoles un número. Se per-
se va~ angttStiar ante la presentificación del objeto a. Lacan loeséii=- sigue no dejarles nada que Jos represente como sujetos.
be de la siguiente manera: En los regimenes políticos dictatoriales se detiene a los opositores.
aunque no hayan realiZado acciones \iolentas contra el gobierno. y se
A S Goce los mantiene encarcelados. sin condena judicial. hasta que se consi-
a A .-illgustia dere que están -quebrados" . que se les "lavé el cerebro-. que se arra-
$ Deseo só con cada una de las ideas que tenían. Lo mismo que hace el liber-
tino en las novelas de Sacie: le destroza al otro la razón.
El neurótico, como objeto a del f~tasma. queda fijado a algo del Otro El sádico presentifica el costado arbitrario e irresponsable de la ley.
a'º1
cual el Nombre del Padre no hizo corte. La anaustia va a señalar Se podria enunciar como "ésta es la ley porque Jo digo yo". Es una ley
ese lugar de fijación al objeto. ·----"" sin atenuantes. que no permite malentendidos ni interrogaciones. La
¿Qué pasa. en cambio. con la angustia en la perversión? Lacan va vertiente significante de la ley se encuentra aqui ausente.
a decir que la intención sádica no es tanto el sÜúimiento del otro lo Se trata de hacer surgir la \"OZ del Otro y dejar al panenaire sin
que busca sino su angustia. Trataremos de desuleaarlo. palabra. soportando la angustia y Ja división subjetiva. La dimensión
En los libros del marqués de Sade vemos que ei""Ubertino obtiene a de la voz que emerge es la presencia descamada del superyo como ley:
sus victimas por la_f~erza: comprándoselas al padre. raptándolas de hay un solo mandato: Goza. go~ ¡-cumple con lo que yo te ordeno para
un convento. enganandolas con artimañas_ Su pareja no podria ser mi goce"). ·
un masoquista. pues_ la grac1:i es que el otro no esté ahi por su propia En el libertino se ve la identificación a un Dios oscuro que pide sacri-
voluntad. ~ol~l_o fis1ca y ps1qwcameme es lo que se persigue; de Jo ficios y propone a sus fieles el lugar de la victima El es un gran traba'.'
contrano. e. sad1co perdena algo de su goce. Utiliza el ooder v la fuer- jador del goce de Dios. aunque éste sea un Dios Supremo en Maldad..
za para someter. · - Si el dolor empieza donde el placer termina. más allá del placer es-
Tiene. asimismo, importancia trascendental aue las \ÍCtimas a tá el goce. El dolor del otro es un estimulo para el sádico pues goza por
corromper sean jove!!citas de convento o rüñas reli0~sas v vmrenes. La proc!-lració_n. quedándole velado que el paroxismo de la \ictirP...a es ei paro- ·
ir1tención es a..,.,-asaries toda su moral v sus orincfoios. - "" xismo también de su goce. El dolor despiena su excitación: intentara.
En la _pelicula -Las relaciones ~eÚgros~s-. dirigida por Stephen por consecuencia. que el panenaire llegue a una máxima aproxirn.ación
Frears. dice el protago°:1sta masculino: -seducir a una mujer renom- al limite de la muerte sin que perezca: si Jo hiciera se acabaJia su goce.
brada por su honor. su le religiosa y su dicha matrimonial ·oué ouede ELsádico proclama saber sobre ~u de?_~_'._Ill~ejar ei iantasrna. Su
haber de rná~ prestigio? \D quiero_\·encer sus prejuicios: Gquiero que \"Olumad de g:oce es oresentada como eiección deliberada: sin embar-
te..riga fe en Dios. la v1rrud y la sanndad del manimonio y que aún asi go está marginado del goce como cualquier parletre: ~e .idenrifira a i
no pueda aguam:arse. Quiero tener la emoción de verla traicionar to- Otro paraaseg.ur.ar su_goce. El acto perverso es una respuesta al ime-
dos sus prí.ncipios-. :-;·o sólo se trata de a.!a.Sar su cuerpo sino tam- rro!:?:anre oor el e:oce del Otro.
-t:n la perversión el fanrasma se afirm;;i. _rnrno vp_lumad. q~ goc~ dei
9_!!2.&é!!!3-lo__cual el sujeto se hace instrumento de ese goce. Tratando dencian la falsedad del planteo perverso de su nos_yjeción a ley alguna
de restituir el objew a en el Otro con el acto perverso, semtenta des- . v su libre dedicación a gozar. En verdad. se trata de sacfit}qu:s.~-
conocer la falta. Se consagrará. entonces. a un acto monótonamente pTeTar ·af otr.Q;_-se llame-éste Naturaleza, Lucifer o Dios. .
repetitivo y fallido que intentará completar al Otro en términos de goce. No ceder en el deseo implica suspender un goce: No es lo rrusmo a\an-
Consecuentemente. sólo en apariencia es una relación dual la que se zar como sujeto del deseo QUe s~r el sujeto del g9ce. Est_e _l!lt.irno call:u-
plantea en el acto perverso. pues en realidad ambos panenaires son no Jo deja@ al perverso e11 po~ición_ pe obji:_!:o d~g_~~_c;l_el_Otro... Es él ani- .
instrumerrtos del goce del Otro. - ·- - - - mado p-or la· YOluntad de-goce-quien deviene objeto pues lo determi-
-La IDa::'xíma· que regfa el ·goce sádico es: íengo derecho a gozar de nante no es su deseo sino la exigencia del goce del Otro.
tu cuerpo. puede decirme quien quiera y ese derecho lo ejerceré. sin que El sujeto perverso cree saber en acto sobre el goce. no pregunta ni
ningún limite me detenga en el capricho de la exacciones que me ven- se interroga. Esto dificulta. si llega al consultorio psicoanaliúco. la ins-
ga en ganas saciar de ff. Vemos que el sádico lanza el proceso como talación de la transferencia. Si hav para el perverso un Sujeto Supuesto
agente. desde su voluntad de goce, ocultando que él es objeto. instru- Saber. és~-~ _el mismo.:._Esta postura c!eSuJeroSüpuesto Saber_Gozar
mento del goce del Otro. Que no es su voluntad la que comanda sino rascina al neurótico que, al tener un fantasma perverso. suena con
un imperativo del Otro. respecto del cual él está esclavizado. aprender de él y sepultar así sus inhibiciones_. Por esca vía se comier-
· En Ja "Filosoíia del Car:1erin- de Sacie. dice la señora de ·Saint Ange: te en el panenaire ideal del per\'erso. Pero esto es una ilusión pues el
Sea cual sea el estado en que se encuentre una mujer, querida mia. perverso también está dividido. Su limite se revelará a pesar suyo. Este
soltera, casada o viuda: ella no debe tener jamás otro objetivo. otra rexto lo explicita. Luego de las innumerables escenas grupales de se..xo .
ocupación . orro deseo . que hacerse follar de la mañana a la noche: Eugénie le solicitará a Dolmancé perder su virginidad con él. Frente a
para ese único fin la ha creado la Naturaleza ... nuestros desórdenes en este pedido él se verá obligado a confesar algo sorprendente. dirá: ·Eso
este género. cualquiera que sea el exceso a que podamos llegar. lejos no es posible. angel mío; yo nunca en Ja \ida he cogido por el coño:
de ultrajar a la Naturaleza. no son otra cosa que un sincero homena- permitidme no empezar ya a mi edad". El sabio del goce~, del se..'<O no
je que le rendimos: ceder a los deseos que ella misma ha puesto en puede realizar un coito común v corriente.
nosoa-as, es obedecer sus leyes: solamente las ultrajariamos resistién- -Lacan va a tratar de dilerenciar al sádico del masoquista. Señalará
donos a ellas·. Este discurso forma parte del adoctrinanúento que se como elemento común a ambos que la identiikación al objeto se Ya a
realiza con la doncella Eugénie; el que se compone de prácticas se>..'Ua- presentar sobre\una escena. pero afirmará que.reconocerse como obje-
Jes grupales y disertaciones que las fundamentan. to del propio deseo es siem~~-qiass>quj~ta. ¿Qué querrá decir esto?
En otro pasaje afirma el libertino Dolmancé: -.. .el culo de un chico ~=r.:.a Venus defas Pieles" de Sacher Masoch. el protagonista mas-
joven. es preciso convenir en ello. me da más voluptuosidad aún que el culino. Severino. sueña con ·ser esclavo de uña mujer. de una hermo-
de una chica. A los que se entregan a esta pasión se les suele llamar buja- sa mujer a la que ame y adore. Que me ate y azote. que me rechace
rr~nes.- Aho~ ~ien._cuando uno es bujarrón. Eugénie. hay que serlo del con el pie mienrras pertenece a orro·. Argumenta que -sólo pue<le amar-
toao. ae \'eroaa. Follar a las mujeres por el culo es serlo a medias sola- se \'erdaderameme a quien nos domina.:\. una mujer que nos some[e .
mente: es en el hombre en el que la Naturaleza quiere que el hombre sir- por su belleza. por su temperamento. por su espíritu y su \·oiunraó.
Ya esta íarnasia y es especialmente por el hombre por io aue ella nos ha üna mujer que se compona corno una déspota·.
dado el gusw _de haceri~. Es absurdo decir que esta ma'rua ia ultraja. De esra manera seáucwra inremará convencer a la pareja de ?ie-
¿Acaso es posible cuanao ella misma nos la insnira? 6·Puede ella dictar g:arla a su g:oce. El estilo no es arrasador como el del sádico.:..~ maso-
aigo que la degracia? No. Eugénie. no: se ia s~e tan bien así como de quista precisa de. lo. literario. ~ene .~Uf!E?_ua9ir: ;;in embargo~ a."un-
otro modo, y quizá más santamente aún. La propagación no es otra que aparezca como_:_ic;~a_.e_a~~"'.~- ia_escen~~~~~- :.Jo es goi-
cosa que una tolerancia por su pane. ¿Cómo oodria ~lla haber dictado peado. se hace -golpear. no es degradado. se hace degraci.ar. b~~·un
como ley un acto que ia pri\d. de los derechos.de su omnipotencia. .. T. !1oce. El suieto se i:l.ace_¡¿oner_P.or el otJ::Q_ep_posició.n._p~iva.. se uoica
¡:;- .. . •
'-stos mscursos que constantemente e:iunc1an los ·educadores· e\i- como Oó}eto-deoesecho. . -
36 37
cerán en posición de$. angustiados y pidiendo la respuesta de la que
La orden imperiosa que transparentemente enuncia el sádico, apa- momentáneamente carecen. · · ·· __
rece en la escena masoquista más velada: no obstante es igualmente En este trance es posible que concurran a un analista: lo que no
imprescindible. Masoch, a lo larg~~~'!ic!ª.Jo_ co_!:!_s_ig~ió -~~a~é_:_ de impedirá que, de acuerdo con su perversiói:1· trat~n lo antes posible de
contratos g_~~finnaba, ~n Jos que ::;e__comprometia a ser esclavo de encaminar nuevamente a su deseo en Ja V1a habitual de su fantasma
sucesivas. m1=1ieres. Este hecho· también ocurre en la novela. severino . donde el deseo se presenta como voluntad de goce.
fogra, contrato mediante. ubicarse corno objeto de desecho de Wanda
(la protagonista femenina). La posición pasiva es engañosa: el contra-
Bibliogra.fia
to aparenta qu~el sujeto está a merced d~~tro_._pero el mo~taj~ de la
esceriá lo tiene al masoquista como sujeto. Esto es lo que intentará Marques de Sade: -Lafilosofin del Camerin ·.
ou~ queae velado. - -----·--· · ·· · ·- --
Su intención es ubicarse en el centro de la escena como el objeto Leopold Von Sacher-Masoch: -r..a Venus de las Pieles·.
del c~al depende el goce deÍ part~n~re. Tratando de conseguirlo Se-
vennole soliCitará a Wanda que incluya en el contrato la cláusula de Rodriguez. Mabel: "Acro pen:erso y angustia-.
que no se separará jamás completamente de él. Lacan. Jacques: -Las relaciones de oq;ero-.
Asimismo. es ilustrativo el discurso de Wanda con el que se sella ·r..a angustia-.
este contrato: •... Tú ya no tienes ningún derecho y no puedes hacer
valer ninguno de los que has tenido. Mi poder sobre ti no puede tener f"reud. Sigmund: -Análisis de lajobia de un niño de cinco afias- (caso Juanilo).
-Fetichismo-.
limites. Piensa que ahora no vales más que un perro o que un objeto.
Eres una cosa mía. el juguete que puedo romper si eso me procura un Ve~h. lsidoro: "La clinicaJreud.iana ·.
instante de placer. Tú no eres nada y yo soy todo ... •.
Desde el lugar del maso~ista su pareia va_ a.?~!"~ Otro. sin falta:
pueS.}l§!!_ I?.lar:i~ea ~orno el .objeto a qu~jQ_COf!12J~t_a en t~r:~os de
goce._pesdeel lug~d-~_pane.!:1_~~. ?i es_Deurótico,. va a_bs..Q~ang~
J:ia: La.posibijidad de que falte Ja falta es condición erótica para el per-
..Jle.l:S.Q..y_~usa de an!!ustia PaTa:. el neurótico . ...,..- -
Como confirmación de lo anterior se puede leer el desenlace de este
relato: será Wanda la que no soportará y pondrá fin al acuerdo. Su par-
ticipació0-en el juego perverso se puede entender como una aventura
histérica. que no se motiva en una auténtica voluntad·de goce. sino en
sü determinación de acomodarse en el fantasma a la demanda del Otro.
-vemos aSI queei deseo del masoqÜista-ío lleV:a-a)ugar a ser el obje-
~o de ?.u propio dese9_ para gozar. _ -- ·- -. · · · -· - - -
A traves del desarrollo realizado desplegamos que tamo el sádico
corno el masoquista suscitan angustia. Pero ellos ¿no .s e.. ang.ustian
nunca? Es dificil que lo hagan porgu_~ esto es lo aue le ofertan al Otro.
Ño obstante. a veces ocurre. Cuando no oueden colmar;.. con a. ante
la aparición de. la división (generalmente-en los dueloS:~andono de
una pareja. muene de algún familiar importante. etc.). si el fantasma
ya no les alcanza para obrurar la falta del Otro por la aparición de lo
real de la falta. o tienen dificultades para rionerlo en práctica: apare-
39
38
·La angustia y el goce de Dios
ELEXAJABIF
Lucía convenció a su madre. enferma sin esperanzas, de que_las También la iglesia niega que esos ojos que l<!_imagen de Santa Lucia
hemorragias que ningún médico podía detener cesarian mediante el porta en bandeja tengan que ver con su martúio, y dice que se trata de
auxilio de la santa. y ambas partieron en peregrinación a Catania. una leyenda que data de la época medieval. y que se inventó para enfa-
donde oyeron misa y oraron. Durante el oficio religioso. se leyó un tro- tizar cuánto desprendimiento es necesario para acceder al reino de los
zo del evangelio de San Mateo que. curiosamente trataba de una cura- cielos.
ción semejante. La leyenda apócrifa cuenta que, durante su arresto. el prefecto trató
Esto fue lo que escucharon: "Y he aquí una mujer enferma de flu- de conmoverla pintándole con-vivos colores el amor que su prerendien-
jo de sangre doce años había. llegándose por detrás, tocó la franja de le le profesaba. Lucía entonces le preguntó: --Pero ¿qué halla de her-
su vestido porque decía entre sí: si tocare solamente su vestido, seré moso en mí ese hombre?"- Y el Prefecto le respondió: -"Ese hombre
salvada. ha sido embrujado por la luz y el esplendor de tus ojos--.
Más Jesús. volviéndose y mirándola. dijo: -confia, hija. tu fe te ha Esto bastó para que Lucia se arrancara los ojos. los depositara so-
salvado-. Y la mujer fue salvada desde aquella hora·. bre la bandeja y le dijera: --Llévaselos. ya que tanto los admira--.
Madre e hija presintieron que sus oraciones serian escuchadas. y El martirio de Santa Agueda o Agata también comienza con un pre-
luego. Lucía fue vencida por el sueño junto al sepulcro de la samá. tendiente despechado.
quien se le apareció y le prometió la curación de ia madre por la fe de El oobernador de Sicilia estaba enamorada de ella. v ..\!!ata no só-
la hija. a más de decirle que su voto de \irginidad complacía a Dios. lo se n~gaba a casarse con él. sino que fue a esconderse. lejos de Carn-
En efecto. la madre quedó curada. y Lucia entonces le reveló su fe nia para que la olvidara. ·
y le pidió que vendiera sus bienes para darlos a los pobres, a lo que la Al principio. Quinúniano. que así se llamaba. creyó que la movia el
madre finalmente accedió. orgullo. puesto que A.gata pertenecía a una de las mejores familias de
En Siracusa. todos vieron claro que sólo Ja fe cristiana podía impul- la provincia. pero luego descubrió la verdad: Agata era cristiana. In-
sar semejante decisión. y quien se sintió más ofendido fue el prometi- mediatamente que lo supo. la hizo prender. y durante largo tiempo le
do de Lucía, que asi se quedaba sin novia y sin dote. Por despecho, Ja rogó que renunciara a sus creencias y volviese a la fe de Roma. pero
acusó al prefecto de la ciudad y éste la hizo prender según la ley del todo fue inútil. y lo que había sido amor se trocó en un odio violento
emperador. que lo llevó a encerrarla en un calabozo, cargada de-cadenas que sólo
Tocio acusado de ser cristiano recuperaba su libertad por el simple le quitaba para atormentarla en el potro. A cada negativa de Agata de
expediente de ofrecer-el sacrificio acostumbrado a los dioses de Roma renegar a Dios, las cuerdas se tensaban un poco más. hasta que .la
pero Lucia se negó a hacerlo y se declaró cristiana. asegurando que el ver- presión dejó los huesos al descubierto.
dadero sacrificio es consagrarse a Dios como una victima pura y santa. Ni aun así consiguió persuadirla. Entonces furioso. Quintiniano le
El Prefecto de Roma la amenaza con torturas y la condena a ser cercenó los pechos con su espada y la devolvió a la cárcel. donde murió
deshonrada en el prostíbulo. pero no hav hombres ni fuerza suficien· desangrada en el suelo de su celda. sin que un sólo gemido escapara
te para moverla de donde está parada. Ei Prefecto sospecha que se tra- de sus-labios. sorniendo dulcemente hasta que sobrevino la mu.ene.
ta de magia. y llama a sus propios magos para que ejerzan un contra- Para La.can. las imágenes de Lucia y Agata también son irn~enes
hech.izo más poderoso que el de ella. de angustia. ya que esos ojos y senos posados sobre las fuenles. mues-
Los magos deciden someterla a una aspersión de orina_ que no tran lo peculiar del objeto a. pedazos de real arrancados del cuerpo del
sun:e eíecto alguno. y se opta por quemarla \iva ahí mismo donde se O y presentados bajo una forma positiva..
encuentra. El fuego tampoco puede c::in ella. y sólo muere cuando es ..\mbas mártires son la imagen de la angustia. en tamo en la fuen-
decapitada te se ofrece el objeto a (ojos y senos positivizados): predominancia del
Esta es la historia que se cuenta; una .historia que no e..xplica por camp0 escópiroen un tiempo que queda situado al modo de señuelo.
qué Santa Lucía es invocada protectora de los ojos y la >ista La igle- la frase que lo puede resumíres:-MNo-mc-ves-allidonde te miro-.
sia dice que esto se debe a que ~Lucia" deriva de -1uz·. Cito a La.can: La posición sádica () masoquisra bien puerie es~ · :
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repres~;tida en las fig·J~ de estas mártires, ya que su ciave es la como "Yo soy el que soy'. es un Dios que hace enigma. La posición maso-
angustia. . ···· · ~:e:• ~:.. : ., ..;
quista del hijo como base de la religión de la gracia. salva al padre". La
· Masoquismo que emerge de la letra y el nombre de un escritor lla- relación con Dios comenzó con un drama. una posición en la que alguien
~ado_ Sacher M~ch, nacido en Lember, Galitzia, hijo del jefe de poli-
se hizo ~alma" de Dios.
cia..eJer:_<?-e..~ens~a.m.a:.ca.mo profesor de.hisioria.y del romanticismo Urr hijo que se hace alma del padre. se-hace-alma de Dios-. identi-
· alemán.·"·",.. ,.,,.. , .~,, , .,_ . ,, . ·--'" ?''· ;···:·· ,, .•_.;;;;.-,· ·.:. ·
ficado al residuo del objeto a, en su imagen de caida. su posición maso-
En 1873 .se casa conAur~ra Rümelling cuyo seudónimo es wru:ida.
quista lo convierte en cordero sacrificial.
~can subversiona el concepto de sadornasoquisrno. poniendo de
¿Qué pasa con el partenaire del masoquista? Es presa de una tram-
rnamfiesto la estructura dialéctica diferente de ambos. Una misma pa. La trampa es quedar al libre albedrio de su capricho. ya que el
posición los caprura: ante el Otro real. ambos se identifican al objeto masoca. como único amo del juego~ a través del contrato. le arranca la
a. objeto del goce de Dios.
palabra.
Esta diferencia y simetría tornan imposible la relación sadomaso- A partir de dicha ley perversa. su función será Ja de sostener al ·
quista como ~ar antitetico pulsionaJ.. siendq la relación padre-hijo el úni- masoquista en el cenrro de la escena. Si la pareja del masoquista es neu-
co lugar posible donde se realiza el sadomasoquismo: el sadismo es rótica. como la protagonista de -La Venus de las Pieles-. ella se ane:us-
para el pa~re y el rna~oquismo es para el hijo. Lacan esgrime su pre- tia. su escrucrura ruge ante la perversión. Su misión. como roda \icti-
gunt;a ¿Cuál es la posic10n masoquista? ¿Qué le oculta su fantasma? ma. será la de encarnar la parte maldita y satánica que está más allá
¿Que busca el masoquista en el Otro?
de Ja palabra.
Desd~ una vertiente de andrajo humano el masoquista se ofrece
Pero el perverso instituye un O incastrable e inagotable. las pare-
como objeto de goce del O, esa es su propia voluntad de croce. Esta jas del perverso se tornari insuficientes. motivo por el cual las renue-
identificación como residuo del a. le permite alcanzarse a si ~ismo. en va compulsivamente.
su miseria última ¿Q~é busca en el otro? Su angustia. se responde La- ¿Y el famoso masoquismo femenino? Es más bien una avenmra
can. que no es cualquier angustia, es la angustia de Dios . . histérica. en donde la mujer lleva al extremo su ausencia de si rrúsma.
.. El mas?ca. como buen estratega. debe convencer a su victima que que ella intenta reatrapar a través del hombre que ella hace existir en
lo acampane enla_escena perve.fSa: Dicha escena tiene como pivote un el sufrimiento. Si bien el hombre la fantasmatiza masoquista este ide-
contrato. ·
al no basta para pervertirla.
Sache~ Massch le-~ide a su dama que lo torne corno esclavo, que
H_?-cer del sadismo. tan sólo. Ja posición invertida del masoquisrnd:
abuse de el, que lo latigue hasta el paroxismo de su crueldad. Dicho es una comprensión tramposa. Lacan plantea que en el sádico. la
. contrato. escrito por él. tiene coma fin reducirlo al silencio, privarlo de angustia está menos escondida. incluso hace de la ane:ustia de la vic-
lo que lo hace hombre. ya que toda su palabra de hombre se acrota en tima. la condición. ¿Qué busca el sádico en el O? Lacañ se dice aue es
su conrrato. · ::.
bien evidente que para él. el O existe. es esencial. el O como tal fonna ·
Contrato mediante. el goce está pre\isto: aun peor. el goce se hace parte de su designio. Lacan cita eI1 el Seminario X la aruculación hecha ·
ley. tomando estatuto de oblie:atorio . por él mismo eIJ.rre Sacie y Kant.. ya que ambos se unen en el esencial
. ¿Qué es el dolor del masoqllista? ¿Cuál es su búsqueda a través del cuestionamierno del O. aue lle!!a a simular las e..x:ie-encias de la lev
rmsmo dolor? El dolor. el vértigo, señala la irrupción del Otro, él hace moraL Kant plantea que l~ novedad de su método reSide en que la ley
soporte d~l dolor absoluto-_ El_ Otro lo muerde. lo pellizca.. lo golpea en ya no defiende el Bien. sino que la ley tiene valor en sí misma. se funde
su carne. 10 marca. A rraves ae su dolor autentifica sus lazos. El des- en ella misma sobre su propia forma. sin indicar su objeto. La ley
pli_egue f~~co en lo realmuesrra su goce parético. pero sólo en moral no se sabe en qué consiste. pero actúa.
pnmera ID:5~cia. ya q1:1e su búsqueda lo lleva más allá de éL Lo que ¿Qué dice Sade en relación a la lev?
el ~oqwsta ousca mas allá del goce. es la angustia de Dios. -La ley es un engaño. su régimen és de tiranos v tiranizados. nadie
·· Dice La.can: "Dios es un Dios que habla. que se define a si mismo es tiranizado sino a rravés de la ley". Sade dice erÍ Julieue: ·ws tira-
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nos nunca aparecen con la anarquía.. siempre crecen a la sombra de niveles, y que promueve la función del O, justamente por ese motivo
las leyes o aprovechándose de ellas·. . buscado es la angustia del Otro-; pero lo que se oculta detrás de la bús-
Partiendo de la idea de que la ley no puede fundarse sobre el bien. queda de dicha angustia es en el sadismo la búsqueda del objeto a.
sino sobre su forma, el personaje sádico inventa una nueva manera Tomemos como referencia los fantasmas sadianos. que de manera
de trascender la ley, creando otra ley cuyo enunciado sostiene la per- ejemplar se despliegan en -Los ciento veinte días de Sodorna ·. te.\.'to
versión.."Gozarás del cuerpo del Otro"_ Esta ley perversa responde a del Marqués de Sade.
otra moral, distinta a la instituida por el Nombre del Padre; el iinpei;a- ·Las ciento veinte jomadas"o "los ciento veinte días de Sodoma"
tivo de gozar sin limites del cuerpo del O, la convierte en satánica, casi comprendían todas las perversiones, desde el voyeurismo y el exhibi-
demoniaca. ya que instituye un Otro, supremo de maldad, al cual el sádi- cionismo hasta la necrofilia, pasando por la tortura y el asesinato co-
co, como buen creyente. entrega toda su existencia. mo condiciones imprescindibles para el goce su¡Jremo.
Lacan dice . en el Seminario de La Angustia, que los textos sadia- Ambientado en la época de Luis XIV. este registro diario de iniqui-
nos cobran su valor ahí, donde los personajes se ocupan en saciar so- dades relata cuatro meses en la vida de cuatro amigos, cada uno de ellos
bre las victimas elegidas, su avidez de tormentos. entrando en un capri- casado con la hija del orro. iniciada y sometida por su propio padres .
choso. singular y curioso trance y que se expresan en las exr:rañas y engendrada sólo a este propósito.
palabras: . Los cuatro señores. maestros en violaciones, corrupción. estupro .
"He tenido. exclama el torturador. he tenido la piel del imbécil". bestialidades y hasta asesinato, -puesto que el veneno o las rrarnpas
(J"al eu. s'écrie le tormenteur, j'al eu la peau du Con). de la ley les han servido ya para deshacerse de madres odiadas. espo-
El fantasma sadiano desplegado en lo real. reniega, vela, tapona. sas molestas o testigos indiscretos- planean una estadía de piacer en
la verdad de la castración del O. verdad que enuncia la universal inexis- el castillo de uno de ellos. un castillo aislado y amurallado como una
tencia del O. fortaleza. al que es imposible acceder sin ser invitado. y mucho menos
El artilugio perverso hace consistir al Otro no a través del amor. ni abandonar sin que sea permitido.
de una falta, que le haga falta el O como en la neurosis. sino que el Pero no irán solos. Llevarán consigo a ocho doncellitas y ocho joven-
Otro consiste, cuando él le impone su voluntad de goce al pequeño otro citos vírgenes. de entre doce y quince años, de belleza e inocencia per-
(es decir ala victima). fectas. raptados especialmente para ellos en los cuatro confines d e
Paradoja sadiana: ahí donde la victima soporta el d~lor sin desma- Francia; a ocho "jodedores", ya hombres; que ve~dránporpropia volun-
yarse; _si puede ir más-allá del Principio del Placer. _alcanza el goce: el tad. atraídos por la paga que se les promete, y elegidos por el tamañC-
pequeno otro, en tanto goza se convierte en el gran A la cara de la vic- descomunal de su miembro; a.cuatro alcahuetas, mujeres ya mayo-
tima es la cara del goce de Dios. En el goce de la victimase sabe del goce' res. expertas en todos los vicios y todos los crímenes. que oficiarán de
oel o motivo por el cual el sádico se convierte en un mero instrumen- narradoras. de modo que sobre sus historias se han de modelar las
to del goce del O. orgías y los suplicios: a cuarro viejas si.nientas. crapulosas y carcomi-
Cito a ~can: ·El desplie?ue del fanrasma sacliano, si algo nos sugie- das por las eníermedades venéreas y marcada alguna por ei hierro de
re: es en cieno modo e.l caracterinstrumemal al que se reduce la fun- la ley: y, por supuesto. a sús esposas e hijas respectivamente. para
c1on del _agente. Lo q~e en cieno modo esconde. salvo en relámpago. quienes maquinan desde el comienzo un destino terrible. rivalizando
es el caracter de trab3.Jo de su operación. También él tiene relación con padres y maridos en el odio que estas mujeres les excitan.
Dios: esto se manifiesta por doquier en el texto de Sade. No puede avan- Los señores toman muy en serio esta empresa: se dan un regla-
zar un paso sin esa referencia a un Ser Supremo de Maldad. de quien menw muy severo donde se especifica qué niña y qué jovenc:iro sera des-
tan claro resulta para él y para el que habla. que se trate de Dios. Hace \irgado por cual de ellos por delante y por cual por detrás_ y en qué
un esfuerzo loco.Y considerable. agotador. para realizar el goce de Dios". fecha sucederá esto; tuando será entregada la victima a la asamblea
En la clase ael 13 de marzo de 1963. Lacan retoma el tema sadia- . para que cada quien goce de ella según su gusto. y cuando será sacri-
no y dice: -Del lado del sadismo. bajo todas sus formas, en todos.sus ficada y se establecen multas severas para cualquiera de lD:?.,cuarro que
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ella conoce y de la que sabe que tiene la ventaría muy baja: se le ad:rn-
cometiere faltas menores -por ejemplo, emprenderla c_on el personal nisua opio y cuando está bien dormida se la transpona a una ?abita-
de servicio. lo que en verdad llega a suceder-. ción i!!ual a Ja suva cuya ventana es muy alta y da sobre agu?as pie-
Las faltas mayores , como apropiarse de la persona indebida en el dras. Luego se entra precipitadamente en la habitación provocánaole gran
momento que no corresponde. se penan con mutilaciones fisicas. y es- terror. Le dicen que van a matarla. Ella. que sabe q~e la ventana es ba-
tQ.porque. lQs.señores-se conocen muy bien entre-si. ja. Ja abre y se arroja precipitadamente. pero cae soo.re las aguda: pie-
En efecto. por tumo, van reclamando uno a uno la entrega inme- dras desde más de treinta pies de altura y se mata sm ser tocada ..
diata de alguna persona en particular. para llevarla a la cámara de tor- ¿Y después de las detalladas descripciones de las tortu~.s. que?
turas. de donde no saldrá ya viva. y ofrecen fortunas para rescatar este Después hay una cuenta. que resulta de los cuentos. Prolija~' deta-
privilegio que jamás se concede. dado que todos son riquísimos y su inte- llada. como si hubiera que rendir cuentas ·del empleo de todos los
rés no está en el dinero. sujetos- (cita tenual) .
A lo largo de las jornadas. cada parte del cuerpo es glorificada para
ser mancillada enseguida y vuelta a glorificar: Ja boca que se besa con -Eran en total 46. a saber:
deleite es la que recogerá las heces para ser vuelta a besar: los dedos
que han procurado el placer serán los que se amputen: el pecho que •
- senores ................................... . .,. 1
se chupa será luego quemado. Y aquella persona que. entera. ha teni- - viejas .......... .. .......... .......... ..... . 4
do la dese:racia de enamorar. es la que despierta primero el furor del - en la cocina ............................ 6
asesino. El duque. quien se ha enamorado de una de las niñas. Agusti- - narradoras ... .......................... ~
na. ruee:a casi de rodillas que le permitan matarla ya. - jode~or~s .. ...... ..... .. .. .... ... .. ...... 8
Matar es una manera de decir. Estos hombres no matan. sino que - mucnacnos ........ ..................... S
su \ictima. azorada. descoyuntada. despellejada. cortada en pedazos. - esnosas ........ .. .. .. .... .... ....... .. ... -<
converr.ida en un arúmal ciego y sangrante. en algún momento muere. - rn~chachas ... .. ............ ..... ...... . 8
Es cierto que ellos deciden cuando llevar la tortura hasta ese exue-
mo. y que ames de estar dispuesros a perder su presa definitivamen- Total ..................... ,. .............. .. . 46
te. van graduando los tormentos y practicando las curaciones para
que sirva una y otra vez. - "De ese total hubo 30 inmolados y dieciséis que regresaron a Paris-.
¿Qué buscan los victimarios? P.ropongamos por ahora una respues-
ta desde el psicoanálisis y escuchemos lo que ellos dicen. puesto que Bibliografia consulrad.a
en verdad están poniendo a prueba una teoría. Cuando una de las
alcahuetas cuenta cómo envenenó a su benefactora. y cómo presenció J2cques Lacan. Seminario La Anguscia.
su ae:orúa. sin moverse de su lado hasta que e..'\.-uiró. uno de los seño- :-\2.r.r rnn Sacie. E:soiros.
res le pregunta: - -¿No es cierro que te masturbaste mirándola agoni- ..\.'!ton Chejo,·. Obrns C.omple!as.
zar? ¿No es cien.o que gozasteT- Y la mujer lo admite. ante la e.xcla-
mación triunfal de Jos cuan-o: el goce se;i...1..1al de la mano de Ja muene. Sóíocies. Edipo en c.oiona.
simultáneo con la muerte. Sacher :Viassoch. La Venus de lns Pieies.
Y sin embargo. para ellos no se trata aquí estrictamente de la muer- Sibcny. Pen.:ersIDnes.
te. sino del mie<lo que ia prece<le. la inrroduce y persiste aun cuando
la muerte misma atisbe por un instante y sea desviada de momento. \laraués de Sacie- LDs cienw t·eirue ciias cie Sod.oma.
E:u:iclaoedia Grandes .\faesuus de la Pintura. Sama L:.:cia y Sar:ta -~ata..
Para áar unos pocos ejemplos. citemos a Sade: ·euelgan a Aline y Sa.i."1toral.
la descuelgan rápidamente, y roáos eyaculan al verla colgada·.
·un hombre deja acostarse a una prostituta en una habitación que
51
50
Sobre la angustia del analis_ta
DAt~IEL ZL\!?Y1ER'vL.\i\
Oráculos de la angustia
60 61
ma clase retoma efcüadi-o donde situó el acting out y el pasaje al ac- De las relaciones de la mujer .
to para producir una nueva sustitución: s_uicidio en el lugar del pasa-
je al acto; y a nivel del acting out. la función del duelo. como psicoanalista con la posición ·
Oiñcultad deDonJuan
lnhibféiúi Impedimento Embarazo ,
DANIEL ZIMMER\1AN
Movimiento Emoción Síntoma Suicidio
Turbación Duelo Angustia
T
Situar. entonces. el objeto a como tal en el campo del Otro. Esto es
lo que denominamos posibilidad de transferencia -dice Lacan-: lo
que hace de cada psicoanálisis una aventura única es esrn búsqueda
del agalma en el campo del Otro.
Conviene emonces que el analista. concluye Lacan. "sea aquél que Concebir la función de la falta en su estructura orü:inal es un mo-
ha podido. en la medida que fuese y por algún sesgo. por algún borde. do de abordaje clave de la experiencia analitica. Y hab-rá aue \"Olver a
reintegrOJ su deseo en ese a irreductible, y en grado suficiente como ella muchas veces. como adviene Lacan. para no faltarle. Recordemos
para poder ofrecer a la cuestión del concepro de la angustia una garan- que es cuando lo que constituye la falta no falta. que sure:e Ja ane:us-
tía rear. ria. La angustia es. justamente. señal de que el objeto ño falta.- Así
Aunque no articule de una manera completamente evidente v clara pues. el camino de Ja angustia apunta a la función del objern con reia-
el resane de sus intervenciones. Margaret Liule nos ofrece en s·u artí- cion al deseo : permite situar al deseo en relación a la función del resto.
culo un valioso aporte en el camino para lograrlo. L.'.l angustia, entonces. nos permitirá introducir con singular claridad.
el limite donde se instaura Ja falta. ·
analista fue conmovida: e~· tanto fue p~~sta en el plano del amor. El . •· respecto del paciente mismo. En el primer caso la protección intentaba
segundo caso. en cambio, fracasó justamente porque tal cosa_no fue .. e\itar un trastorno secundario en la mujer del paciente: ella al!:!una vez
alcanzada. · había sido considerada psicótica porun psiquiatra y LucyTowe-;. de nin-
El artículo se propone demostrar la relevancia de los fenómenos guna manera quena una descompensación de·su parte. En el otro caso
contratransferenciales. ofrecer evidencia de su importancia. y contri- d paciente mismo había sido diagnosticado como psicótico.
buir a rastrear sus origenes, desarrollo y resolución en d curso de un La sintomatología que llevó a estos pacientes a buscar tratamien-
. tratamiento analítica~ Para nosotros·. ciertos detalles.. de esta.observa: to. también era similar: angustia difusa con algo de depresión; una
ción clínica y su incidencia en el desarrollo del tratamiento. p~iti- _ fuerte conciencia de su irrhibicíórr masiva, cierto monto de confusión.
rán abordar el tema de la angustia en su función mediadora entre el pa.rticulannente en lo que a los roles sexuales concernía. Lucy Tower
deseo y el goce y, por tratarse de dos historias de amor, nos llevará los encuadra entonces como neurosis de angustia.
ineludiblerneme a la pregunta por la función del deseo en el amor. Otro rasgo que ambos tenían en común eran los trastornos en la
Lucy Tower ha escogido para revisar conjuntamente dos análisis que. comunicación: uno v otro eran dubitativos. reiterativos. minuciosos v
según su criterio. dan lugar a muchas comparaciones. Se trata de dos hablaban farfullando. Problema de comunicación que. en el primer ca-
hombres. ambos exitosos en los negocios. de un entorno más o menos so. Lucy Tower lo refiere a una ·resistencia fuertemente estructurada -.
s imilar. Ambos eran inteligentes. casados. y con hijos. Tanto uno co- Si asi sucedía v Lucv Tower lo atribuve a la resistencia. cabe pensar
mo otro se habían analizado anteriormeme y por largo tiempo. que. en tanlO lá resistencia de]~ que se trata en el análisis es efeCÜ\'(l.-
Lucy Tower no oculta que inicialmente estaba inclinada más favo- mente la del propio analista. ella misma no era ajena a dicha situación.
rablemente hacia el segundo paciente ya que se mostraba más moti-
vado por el tratamiento y su desarrollo psicosexual parecía más nor- Un sueño crucial
mal. Sin embargo las cosas resultaron de manera opuesta.
Las parejas de los padres de ambos habían sido estables: los padres · El momento crucial en el análisis del primero de esws dos hom-
de alguna manera pasivos pero exitosos. y sus madres francamente bres. sucedió cerca del segundo año. A pesar del u-abajo intelecrna.i
compulsivas. Los dos pacientes padecían serios defectos de desarrollo sobre sus dificultades. parecía no haber ninguna mejoria en Ja situa-
en su relación con la madre. Los dos presentaban problemas de inhi- ción matrimonial, ni en el bloqueo en la comunicación. A esta altura.
bición de su afirmación masculina ven s u adolescencia tardíahabían la mujer del paciente desarrolló una seria enfermedad psicosorna tica.
desarrollado sin tomas neuróticos. -Los igualaban también sus rasgos Lucv Tower refiere no .haber descuidado este-hecho consid eránd olo
esquizoides. - ü1c!Üso una buena vía para ligar aquella angustia que parecía tan :pr~
Sús esposas eran atractivas: comuulsiva.s. trastornadas v tan fuer- psicódca. La enfermedad podría ayudarla así a abandonar su actitud
temente defendidas que se negaban a~ toda idea dehacenm ITara.mien- controladora y de ataque. haciéndola sentir mas confiada en su mari-
to. Maridos devotos. ellos se esforzaban para que los maUimonios do y en la situación matrimonial.. ·
siguieran adelante. r ecurriendo a múltiples conductas para compen- ..\hora bien. prosigue Tower. ·aquello que regiscré conscienremenre
sar su agresión. Eran hombres agradables pero muy aferrados a su ciebe iw.ber permanecido. sin embargo. desiigado de lo que ya. se des·
mujer.. Ellas. muy posesivas, los despreciaban de una manera muv cumilaba en rrú inconscienremente como el núcleo de una oeaueñ.a reac-
refinada y trataban de boicotear sus máli.sis; por su parte se encon- ción conrrarransferencial hacía la sirua.ción wral-.•-\sí pu.es.·a pesar de
traban muy frustradas. por aquella ·falta de afirmación masculina todas las precauciones que había tomado. se había sentido G:npercep-
suficiemememe libre de in.bibición·. tiblemente empujada por las presiones rransferenciales a vera esa mu-
Todas estas cuestiones, aclara Lucv Tower. fueron extensamente jer más problemática de lo que aparentaba. No advirtió que a esta altu-
interpretadas y elaboradas. pero sinrungún resultado. Asimismo. reco- ra ella ya no constituía un problema tan grande porque. ·a pesar de la
noce que inicialmeme atravesó. en ambos casos. una fase de protección. exa.sperarue y crónica resisrencia del pacieme. él se escaba. manrjan.do
En el primero. respecto a su manimonio y a su mujer: en el segundo ~n la sirua.ció_n doméstica con más aplomo y gentileza-.
64 65
La situación va a llegar a su punto culminante con un sueño. Un Luc~ Tower continuaba abrumada. Sin embargo~ a pesar de la den~i
sueño que resultará crucial para la dirección de ese análisis, y que sor- dad· de este periodo. súbita y hasta casi diverti~ament:. esa. sensac10n
prende ante todo por trata..--se de un sueño de la propia analista. desapareció. "Me tenía que _ir un~ tarde de vac~nes. ae_spues de ~er
Ya había transcurrido un año desde la aparición de la enfennedad ~-i.sro al paciente por la manana -refiere la analtSca-. ~ depreswn .~
psicosomática de la mujer. Lucy Tower continuaba a la vez frustrada la irrimción que sentía duró apenas unas horas y despues .desaparecw
e-incómoda con el carácterdepresiva de la: resistencia: de su pacieme. complewmente. Nada extraño sucedió para eUo ni tampoco hice un esfaer~
"Un buen día tu.ve un sueño que me estremeció. El sueño era muy sim- zo consciente para lograrlo. Creo que en esas vacaciones apenas Ueg~e
plemente que yo estaba de visita en la casa de mi paciente. Sólo su espo· a pensar en ese paciente y silo hice.fue enf?rmapur~eme c~ual .
sa estaba ahí. parecía estar comenta de recibirme y se mostraba de lo ·Cómo considerar todo lo que ha sucedido? Segun la propia ana-
más hospitalaria. y afable. El tono general de la visita era el de una tarde list;. las cosas se encaminaron en la medida que s'-'. inconsciente fin~
de charla amistosa entre esposas cuyos maridos quizás eran amigos o meme se puso a tono con el inconsciente del pac1em~. Y en tanto el
colegas·. L. Tower insiste: ·esce sueño vagamente me percurbó" . Un pudo descargar su sadismo, -e1 afecro d.e preswo pudo lwrarse del auw·
sueño que la estremece, que la perturba. Es evidente: ese sueño la desprecio y la culpa. para tomar la cualidad. de un verd~ro duelo por
angustia. el objew de amor perdido". Lucy Tower concl.uye: ·Fue solo .cuando su
No lo descuida. Todo lo contrario. le otorga la mayor trascenden- inconsciente percibió que realmente me habiaforza~o haC!a una res·
cia. Logra advertir así que ya· hace tiempo sabe que la mujer no inter- ouesca conrracransferenciaL que esce hombre se L'olvw su.fi:ientememe
fiere en el tratamiento del marido y que ello se debe a un mejor ajuste ·confiado de sus poderes para injluenciarme y de mi disposi.af?n_: al menos
de él (y por lo tanto a una mayor confianza de ella) respecto a la ana- en una pequeña parre. a ser influenciada o sojuzgada por el .
lista. "Me di cuenta de que inconscientemente yo había desarrollado Verdadera victoria sobre la analista en el terreno de la t.i-ansferen-
W1a acrirud en cierro modo fija. y había ignorado la mejoría temerosa de c:a que pennitió a Lucy Tower. ya sin angustia. ·responder a es_re hDm·
su pocencial psicóti.co ". En consecuencia se propone abordar otra vez bre. en W1a pequeña pero quizás crucial medida. como una ~era un
la escena doméstica y desde un punto de vista totalmente diferente. hombre. al mismo tiempo que la relación predominanre ha.cin el era La del
Los efectos que produce este cambio de orientación, ¿cuáles son? médico hacia su paciente". Conclusión de este relato clirJ.ico que con-
Lucy Tower refiere que el paciente tomó rápidamente el análisis con firma de modo elocuente que no se ha tratado de otra Fºsa que de una
mucha afirmación. Su actitud de bajo voltaje; quejosa.:. de casi tres verdadera historia de amor.
años empezó a rnovil..izarse con renovado empuje. Aparecieron elabo-
raciones de recuercfos tempranos. surgieron nuevos sueños; y junto Posición de Don.Juan
con estas modificaciones el bloqueo en la comunicación también des-
apareció. El paciente se inclinó hacia un material "más profundamen- Retomemos nuestro comentario a partir de lo que la propia analis-
te oral sádico·. 1a considera el punto crucial: el sueño. A partir de él. Lucy Tower ~e
Parale!ameme comenzó en el análisis una etapa de gran tensión. ::iercató de aue uor efecto de lo que ella denomina su com.rarrans1e-
Dice Lucy Tower -.\.fe someria al más persistente. minucioso e incómo· ~encia . había de.scuidado la justa apreciación del deseo de su pacien-
do esCT1.1IiniD. como si me esruL·iera desgarrando céluia. por célula. Ca· 'i:e. Acr:ertida de ello. pudo dar al paciente la impresión de que era ~e,:i ·
da mor.:imienw mío. ca.da palabra de mi parre eran observad.os can de sible a alQo cuvo descubrüniento ella misma acababa de hacer: a.I un
cerca que me parecía que. si yo daba el más leve pa.so en falso. todo ,. al cabo el naciente se ocupaba mucho más de su mujer. era más_case-
e.sraria. perdido". -;..o en el interior del circulo convue:al. de lo que ella había sospecnado.
"El eíecto que sllll!ió en mí-. continúa. ·era de tal índole oue llee:ué ~n orras palabras. afirma Laran.-el deseo propio del paciente no está
a pensar que si yo llegaba afallar en este encuentro él se derrumba- tan a la dertva: "Es capaz de tomarse por aquello de lo que se trata Y
rla. v nunca más volveria a confiar en orro ser humano". Durante este cuva dit!nidad hasta enwnces se le rehusaba. tomarse por un hom-
periodo cada sesión resultaba e.'\.Lenuame y una vez finalizada la hora bre. obstinarSe en ello~.
66 67
Una vez reconocida la verdad de su deseo. el comoortamiento del más precisamente: el psicoanalista se hace de objeto a; lo que debe
paciente reflejará aquello que está en cuestión: a saber. la búsqueda entenderse -<:orno advierte Lacan-:- se hace producir con objeto a. Por
del objeto. Como en la búsqueda sádica. lo que pretende es el pedaci- obra de aquella rectificación que Lucy Tower operó en el curso del aná-
to que falta. Procura hacer brotar en el panenaire lo que debe estar en lisis. el deseo de su paciente pudo ser devuelto ·a su lugar. Pero no oh·i-
el supuesto lugar de la falta. En esto consiste la tormenta que Lucv demos que el problema de este hombre radicaba justamente en que
Tower se atrae sobre sí. Parafraseando a Lacan podemos: afirmar que nunca había podido encontrar ese lugar. Tal es su neurosis de angus-
el pacieme· dice en suma a Lucy Tower, su analista: -yo te amo. pero tia.. Lucy Tower pudo conser:ar sus distancias frente a esa búsqueda.
porque inex-plicablemente amo en ti algo más que a ti -el objeto a señala Lacan. pues nunca fue cuestión de que errcontrase. se trara.
minúscula-yo te mutilo ... " precisamente. de que él advierta que no tiene nada que encontrar. Lo
Habiendo buscado el deseo del hombre. lo que Lucy Tower encuen- que él busca es menos phi; lo que le falta a ella. Es de esto que tiene
tra como respuesta no es la búsqueda de su propio deseo . sino la del que hacer un duelo.
objeto a. vale decir de aquello que está en juego en el deseo. Y la efica- :\mar es esencialmente querer-ser amado: -persuadiendo al olro
cia del viraje. de este recentrarniento en relación al deseo de su pacien- de que liene lo que puede completarnos. nos aseguramos precisamen-
te. es posible en la medida en oue su deseo la ha involucrado Lo aue te rie que podremos seguir ignorando qué nos falta". Dejar \'er su de-
el deseo busca en el ou-o es el deseante. Deseo al ou-o como d~sea~te. :'co para este paciente (como para todo hombre) es. esencialmente. de-
Deseando el deseo. Lucy Tower no encuentra a su pacieme deseándo- _pr \·er lo que no hay.
la. sino encaminado en la búsqueda de lo que le falta. Lucy Tower afirma que su paciente realizó un trabajo de duelo. To-
La operación y la maniobra de la transferencia, dice Lacan. hay que do marchará bien. afirma Lacan. cuando él hava hecho el duelo de
regularlas de modo que se mantenga la distancia entre el punto donde encontrar en el panenaire su propia falta (menos phi). la castración
el sujeto se ve amable y ese otro pumo donde el sujeto se ve causado prima!ia fundamental del hombre. Gracias a ese duelo habrá fran-
como falta por a. Y es en ese punto de falta donde el sujeto tiene que queado esa etapa ame!ior en la que él soportaba todo el peso de su
reconocerse. casr.ración.
En el análisis. seguimos la huella del sujeto del deseo. y no del suje- El neurót.ico retrocede -insistamos en subrayarlo- por hacer de
to del amor. Por la simple razón de que no se es sujeto del amor; habi- su castración algo positivo que es fa garantía de la función del Otro. El
tualmente se es su víctima. nos recuerda Lacan. Jo que·es absolutamen- neurótico consagra su castración a la garantía del Otro, afmna Lacan.
te diferente. Así p~es. la_obseivación de Lucy Tower nos cónfl.ITI1a que: Y allí queda detenido. Ocurre que el objeto que el sujeto pierde como
el deseo. en ramo mterviene en el amor. no concierne al objeto amado. una parte de sí mismo. es también lo que le falta al Otro en él. La angus-
Finalmente. aquella etapa de agotador escrutinio de pronto se des- tia surge en tamo el pequeño a es soportado por intermedio del deseo
vanece; todo ese clima agobiante desaparece en forma súbita v di\'er- del Otro. La angustia se constituye en el umbral para el deseo. que se
tida. Lucy Tower es la encarnación del más libre v aéreo Do~ Juan. ;islumbra como posible cuando esa garantía del Otro se desmorona.
comenta Lacan. saliendo de Ja habitación donde acaba de hacer de las . Luc': Tower encuentra. por la \ia que le ofrece su sueño. la ocasión
suyas. ¿Y por qué la situación de la psicoanalista sugiere a Lacan la ;:¡ara advertir su falra de manejo en la relación que. en ta.I1to Otro. ha
illlagen de Don Juan. aquel de las ·seícenw e auarama in Italia. in Ger- ~swblecido con el hombre que tiene en análisis. Inquietante encruci-
rnania. duocemo e u-enruna. cenw in Francia. &i Turchi.a no1.:amuna. ma ;ada que la confronta con la pregunta por el_manejo de la íalta. es de-
ínlspagna son gia mille e u-e"?. . c:.r. por su relación con el objeto a.
La compleja relación del hombre con su obieto está borrada oara ..\si. este historial \iene a confirmar que lo que el analista tiene para
él pero al precio de la aceptación de su radical tnoosrura. El orest2io dar. en oposición a la pareja del amor. ·es lo que la novia más Della del
de Don Juan eslá ligado a la acepla.C.ión de esa imoostura Siemore es- mundo no puede superar. a saber, lo que tiene". Y lo que tiene. como
tá allí, en el_ lugar de otro; es. por así decir. el obj~to absoluto. • nos enseña Lacan. ·no es más oue su deseo. al i!!ual oue el analizan-
El a en Ja operación del análisis. es encarnado en el analista. O. te. haciendo la salvedad de que 'serrara de un deseo advertido-.
68 69
. Al ~eintegrar su deseo en ese a irreductible. soportando las conse- Contratransferencia y angustia·
c~encias q1:1e de _ello r~sultan. Lucy Tower permite a su hombre enca-
rrunarse mas alla del lirrúte de la angustia... versus deseo del analista
MABEL RoDRíGUEZ
. 71 .
El sujeto l~ cuenta qú°e ci~o día que él vertla de realizar una audi- .
~ió:1 radi~ audición cuyo tema interesaba al propio analista; éste le di- · . el método más apropiado para promover Ja identificación del pacieme
JO: Hablo usted muy bien ayer. pero hoy veo que está deprimido; segu- con la personalidad más sana del analista~ ' · -
ramente es el temor de haberme herido al haber invadido mi terreno·. En este segundo artículo ella presentará el material clínico de Frida.
Dos año~ más tarde (habiendo finalizado ya este análisis). el pacien- Mi intención es trabajar una de las intervenciones· de Margaret Little.
te se percato. en ocasión de un nuevo aniversario de la muerte de su acerca de la cual Lacan realiza su _c omentario. Para ubicamos brindaré
madrey que lo que había originado su tristeza era el dolor de que· su sólo algunos datos. Frida fue derivada al tratamiento por cleptomania.
madre no estuviera allí p·ara disfrutar de su éxito. En vez de anular el ·Su padre egoísta y rnegalomaníaco había muerto en un campo de con-
programa había actuado maniacamente, negando su duelo. La inter- centración en Alemania; no había huido pensando que nada podía ocu-
pretación del analista había sido correcta para él mismo: se hallaba rrirle. Frida era castigada por él, especialmente cuando rehusaba arre-
muy apenado del triunfo de su paciente. pentirse por desobedecer a su madre. Esta también la someúa a cas-
· Este episodio le ocurrió en realidad a la propia Marcraret Little en Ligos severos. la golpeaba y la encerraba en un armario para escobas.
su análisis didáctico de siele años con Ella Sharp. Cu;stionando su Los hijos de Frida eran extensiones de su propio cuerpo como ella lo
validez reirticia más tarde otro con Winnicott. había sido de su madre. El tratamiento duró diez años v durante los
En verdad no era un programa de radio de lo que se trataba. sino primeros siete las interpretaciones de transferencia habian sido com-
la memoria que Liule debia defender para su candidatura a la Socie- pieramente inoperames. Pero. de pronto todo cambió. esle rratamien-
dad Psicoanalitica de Londres. La fecha de este evento era una sema- to se ve conmoVido súbitamente cuando muere Ilse. amiga de los pa-
na después de la muerte. no de su madre. sino de su padre. En su diá-· dres que se había comportado como una madre cariñosa con Frida.
lago con Roben Langs. ella cuenta que en el articulo de 1949 sobre la cuando ésta era niña.
contratransferencia. escrito dos años después de finalizado este aná- Frida entra en una crisis de desesperación que se prolonga por cin-
lisis. se eVidencia en realidad su duelo por la muerte de su padre v por co semanas. no comía ni dormía y su \ida estaba en peligro. tanto por
el f~ de su.analisis. Podriarnos aventurarnos a pensar entonces que d riesgo de suicidio, corno por estar exhausra. Margaret Little prueba
la dificultad para elaborar estos duelos, especialmeme el del analista todas las interpretaciones que se le ocurren para sacarla de este esra-
ide~~º· ~rnpregna la tesis de este arúculo; cuyo punto central es Ja do: le mostró su culpa acerca de la muerte de Ilse, su ira hacia ella y
obligac10n oel an~sta de_confesar la comratransferenciaal paciente su miedo de ella; al mismo tiempo que ella sentía que llse le había si-
pues de lo contrano esta.ria actuando hipócritamente al igual que Jos do robada por la analista, que ella quería que la analista comprendie-
padres Y otros educadores. y obstruyendo el proceso analítico. ra su tristeza como Ilse .había comprendido su infelicidad infantil y que
En su ~tro articulo sobre la ·contra transferencia "La respuesta to- simpatizara con ella. etc.
tal del ~alista a las necesidades de su paciente". de 1954. plantea que Todo esto no surtía ningún efecto y Margaret Little sentía que tenía
el analista es responsable en un l 00% de la respuesta a las necesida- que romper esa situación. finalmente entonces le dijo: -gué dolorosa
des de su pacieme. ·1a capacidad última del pacieme para asumir sus :-esultaba su pena no sólo para su familia sino para mí. Le dije que
propias respor:sabilidades depende de que se encuenrre ame una per- ninguno ooci.ia estar cerca de ella en ese estado sin sentirse ororunda-
sona responsaole con la cual puede contar. con la cual se indentifica ·. meñte afectado. que me sentía muy apenada por ella y con ·ella en su
El_analista ~~be brindarse sin reserTas. totalmeme. dado que Ja ?érdida'.
expenencia analiuca es una relación enrre dos personas que se encuen- El efecto fue instantáneo v muv e:rande. Dentro de la misma bora
tran: i.u:a- con necesidades y ia ocra. ei analisra. con algo para dar. al- ella se calmó y empezó a llorar de.ui1a manera medianamente triste.
go de mas para repartir ("person v.ith something to spare meets person E:mpezó a cuidar de su familia nuevamente. etc.
\vilh needsl. Esta ~mervención.oper~rno..imeqirerarión pues produjo una
. La proposición d~ Margaret Liule es que la expresión de los senti- transf6i-rnación. fµe un acto consecuencia de la apuesta de M~.,si.ret
rruentos contrarrans1erenciales. incluso Jos sentimientos negativos. es · · Llttle a la éticadel-deseG--del-analista: ~a ética que la hace ir más allá
de la contrarransiereg_cia.
72 . .
73
Ahora. ¿qué se jugó en esta intervención atípica que introdujo una Se me ocurría que La.can apuntaba con esta afirmación fuerte a
funció.ILde..co.rte? · resaltar que el analista es de la misma pasta que el analizan te. no per-
Podríamos decir que por primera vez Margaret Little. lue!!o de ato- tenece a una élite superior, refutando así la teoría de los autores ingle-
sigar a Frid~@nte.Jii.ele...añP..?~rfil_rp.r...e..tai;_i9n~s· de trans(eren- ses sostenedores de !a relación analítica como dual, esnecular. imagi-
9ª·· ~-~-~µ_estr:a_ ang~~i:J_a.9p.~impoteme. Aoarece en fa~ n~: naria. donde el analista funciona de espejo. no tiene efe~tos de incoñs-
aa· mas.,..gm::..c;twl~. O~Jª-9~...Q.~~lJJJgai.J.kl_Q!r.o. Al no tener certe- ciente p-orque se supone que el análisis didáctico los borró. y
zas acerca de Frida se reinstaura en el cammo dél deseo del analista. proponiéndose Ideal plantea el fm de análisis corno la identificación
en el que podrá permanecer si deja de idem:ificarse al lugar del saber. del paciente con él. ·
En el seminario -r.a transferencia- Lacan dice que el analista "debe En la práctica clínica. a diario nos ocurre que con ciertos pacien-
saber en particular que el criterio de su posición correcta no es que tes nos abunirnos. nos admirarnos . nos enojarnos. olvidamos el hora-
comprenda o que no comprenda. No es absolutamente esencial que no rio de una sesión. etc.: o en tal recorrido de los análisis nos adorme-
comprenda. Yo diría que hasta cierto punto esto puede ser preferible cemos. nos erotizamos. nos apiadamos. y esto no lo evita la rigurosa
a una confianza demasiado grande en su comprensión. En or.ros tér- formación teórica. la pertenencia a determinada institución analfüca.
minos. que debe siempre poner en duda lo que comprende y decirse que los años del propio análisis. lndudablememe no somos nunca iguales
lo que busca alcanzar. es justamente lo que en principio no compren- :i. nuestra función. aunque se haya producido la mucación en la eco-
de. Es ciertamente en tanw que sabe lo que es el deseo. pero que no nomía del deseo que nos permite conducir un análisis: Si el Yo del ana-
sabe qué es lo que desea este sujeto con el cual está embarcado en la lista debe comportarse como un mueno . la comrarransíerencia que lo
aventura analítica. que está en posición de tener en si el objeto de ese obstaculiza ¿es una imperfección que compromete el curso de los aná-
deseo·. lisis? Dependerá de cómo se resuelva en cada _si_t1:1_a~ióq,_ _ ... . .
S~~aJ...ru~.Q.:,i:ESi.~~--~9,_et~B-t,~.iilisis.~pero . Margaretl..ittle,.tratan- Lacan afürna en -La Angustia· que .:es:::C.Onu:arr.ansfe_r_en_ci~ to_d.o
.do_d_~:..~~ .~.!Jen ra_ ~t?.r.!c;:ª__
qe~ ella . se .~qu_iyoca: supon~_}l4.Llé3-.,~\-prs:si9,n .:iquello que: de-10 que r-ecibe en el análisis como_signjJi_c_;;tll~. . . ~Lpsico
.Qe ,~~>.~.~~~ümientos~orr;ia pane,.de.J~r.espuesta-total7_q\A~~!:~g¡i analisra reprj_Jile·: por consecuencia. es necesario qu~ la contrarrans-
~!?e. a~,a.Ja_s .neces1daa~ ..9.~~~1:!::Pªºeme,_ral como el titulo del traba- fereñCfa.'púeda ser puesta en relación a la represión qlle le da lugar.
jo indica. No s_~per:.cara,que.l0-propiciatori0-fue...su..coo::imiemo-del-lu Esto imp_~~a_un ~~~9__Ror el analisra . idealiz.adQ~poi;:!_~ nuesrra
.gar_ de. Otr_o C:?.!!1PJ~~9_qµ~impedía el establecimient~ de-la~trall.síe.ren~ falla conréspecto a la función: pues la contratransferencia se relacio-
c1asfmooTiéa. _ ña c·on fa irnposíbilidadde.3.lcanzar el pleno ejercicio de la función de-
-c¡ pena que Margaret Little muestra ~una expresiQn_de.-amor, seo del analista y con uno de los factores_ que hicieron plantear a freud
pero del amor más allá del narcisismo. No estamos hablando acá del la rarea de psicoanalizar como imposible.
arrióren-sü d.lmensión IInagmani el que aparece ante el reflejo de una Nos interrogamos em:onces por el luQar del analista ocunado oor un
imagen de uno mismo: g~l amor. q!:.H~ aquí se.trata.es...delque.s!!,.anicu- analisra. la incidencia o no de su prcioio faniasma eñTa _direéción de
la con ei deseo. El arno(_que..permire al deseo_condesc.ender el croce: .el :a cura. ¿Qué hacer con esrn a lo qu.e no somos ajenos n0..-güñüéie
aIJ.1_9r OU~-e-s~9_a_f lq__gue I}Q_S_~_tiene. ia falia. Allí tenemos para L.2can la nosotros? ¿Se trata de recomendar más y más análisis para el anai.ís-
posición del analista. que ie permite suoerar la an!!ustia v la parálisis :a con el fm de borrar su inconscieme? ¿No esta.riamos adhiriendo al
en ia que se encontraba por eíecro de s~ conrrar.rañsfere~cia: ideal del analis.ta csano- cuyos pensamientos y sentimientos penur-
En el Seminario XI se expresa; "La rransferencia es un fenómeno badores de esta supuesta salud se deben a factores que han quedado
en el cual están incluidos conjumameme el sujeto y el psicoanalista. sin resolver en su análisis? No olvidemos que e] análisis didáctico era
Dividirlo en los términos de transierencia y conrrarransierenci.a. por pensado en Ja década del 60. por Jos analistas argentinos . como el I!le-
mucha que sea la audacia la desenvoltura. de las declaraciones que dio para barrer todos los eíectos molestos del inconsciente.
se pernüie!l algunos sobre este terna. siempre es una forma de eiudir Para ellos lo que el analista experimenta por su paciente proviene
la cuestión-. de ios impulsos inconscientes del propio pacieme: esta explicación de
74
lo_ que le sucede al analista con su paciente desde lo que éste proyec- e;tamos refüiend-o al relato donde la analist~ rectifica el rumbo del tra-
ta, se sostiene en el ideal del equilibrio psicológico que el analista debe- i.amiento a partir de un sueño soñado por ella misma. _ _
. ria haber alcanzado para poder ofrecérselo a su anaJizante. .Garanti- Se los recuerdo: ·1a analista estaba de visita en la casa del pacien-
zar esto requiere del analista que se encuentre fuera de perturbacio- te. Estaba solamente su esposa en la casa y parecerla contema de ver-
nes inconsciemes. ya en el paraíso del amor genital. Pero ¿de dónde han la. se mostraba hospitalaria y afable. El tono general de la \isita pare-
surgido estas teorias? --. cía el de una charla vespertina entre dos esposas amigas cuyos mari-
Veamos qué dice Freuci El menciona la palabra contratransfe- dos eran quizás amigos o colegas-:
rencia sólo en dos artículos de su obra. E.!11910. en una coriferen- Este sueño le hace pensar a Lucy Tower que la actitud negativa
cia pronunciada en el Segundo Congreso Psicoanalítico Privado de que ella suponía en esta mujer con respecto al tratamiento de su mari-
Nüremberg, tüulada -El pon·enir de Ja terapia psicoanalítica". allí do con ella. era equivocada. La esposa queria que Lucy Tower emre en
dice: "Otras innovaciones de la récnica se refieren a la persona mis- su casa v tenoa una buena imagen de ella. hacia mucho que no obs-
ma del médico. Se nos ha hecho visible Ja contratransferencia que - "' ~
taculizaba el análisis. La artimaña de este paciente era enfremarla con
surge en el médico bajo el inl1ujo del enfermo sobre su sentir inco~s su mujer. Pero en realidad él estaba ubicado como hombre y su espo-
cieme, y nos hallamos muy inclinados a exigir. como norma general. sa le imporrnba más de lo qUe dejaba uaslucir en sus dichos.
el reconocimiemo de esta comrnuansferencia por el médico mismo Lacan dice: -¿Por qué la cosa salió bien? En un caso eUa misma
y su vencimiemo". fue conmovida. no fue ella quién conmovió al otro. fue el otro quien la
En l.!ll5.. en "Observaciones sobre el amor de transferencia" dirá: puso a ella en el plano del amor... . ·
"Nuestro- dominio sobre nosoi:ros mismos no es tan grande que des- Lucy Tower puede reubicarse en la medida en que se ha ofrecid.o a
carte la posibilidad de encontrarnos de pronto con que hemos ido más una historia de amor desde la posición femenina. A partii- de alh la
all.á de lo que nos habíamos propuesto. Así. pues mi opinión es que no :inalista -recentra su relación con el deseo de su paciente- y el trata-
deoemos apartarnos un punto de la indiferencia que nos procura el miento avanza dejando atrás el estancamiento en el que se nailaba. La.
vencimiento de la contratransíerencia". diíicultad no estaba del lado del paciente sino del lado del analista.
Más adelante e.'<IJresará que la cura debe desarrollarse en Ja abstinen- Lucy Tower se quejaba también del fenórneno de carry over que sufría
cia pero se interroga sobre los limites de su posibilidad en la práctica.. con este paciente. Lacan dirá quealli pueden denotarse los efectos de
Como vemos Freud nos insta a estar prevenidos acerca de la con- la comratransferencia: cuando-uno sigue-pensando en un paciente
tratransferencia... a!J<rrece preocupado por la irrupción en el tratamien- lueE!o de la finalización de su sesión o estando ya con otro.
to de elementos inconscientes -no reconocidos· del lado del analista -Entre una función y el ejerci~o de ésra por un sujeto dhidido hay
pero ~tea en ~gún.momemo que lo que el analista exoerimen- una hianc.ia. Cuando falla la función deseo del analista emerge la con-
~_:'.:-1 paciente provenga del propio pacieme. Esta.posiciÓn -delós trarra.nsferencia. ésta nos muestra el borde de la función.
ana.liSras argeritihos.prO\iene. del auge del kleinismo v lo escrito-a."cer- En -1men-ención sobre la transferencia- Lacan habla de -1a con-
ca de la conuarransferencia por algunos e.\.-ponemes ineJeses: Hein- <ratransierencia como la suma de los prejuicios. de las paswnes. de
rich ~.cker. Paula Ht:im~. entre orros. Lacan se basa en_ellos_ para.. las perplejidades. incluso de la insuficiente información del analista
acusar_a los ingleses_de querer borrar.con el concepm.de contrar:rans- en tal momento del proceso dialéctico-. El deseo del analista en cam-
ferencia la resoonsahilidad delanalista.. bio implica una elección: ocupar el lugar de objeto para que ei sujeto
---sm embargo. ~o-os aut~res ingleses han escrito cosas mas intere- del inconsciente lo tome oor causa de su deseo. renunciando par con-
sames sobre el tema: a esros autores se remite en esras clases. Dirá oue
se equivocan e.n la teorización del material clinico que presentan. co- le
secuencia al poder que otorga ocupar el lugar del Orro qu~ !e con;:
fiere el pacie.me. Para ello el analista habrá tenido que nacer su pro-
mo es el caso ae Margaret Llttle. pero no en su intervencióIL pia exuerie.ncia como analizan re Más. a pesar de es ro. es propio de las
Tomará despues a Lucy Tower en cuya presentación clinica se e\i- ~icisirudes del ira.bajo analitico.enconrrarnos con eclipses de ia fun-
dencia el ):'.~~aje de ia comratransíerencia al deseo del analista. Nos ción deseo del analista. imposibilidades rran.sitorias de ubicarnos ce-
76 11
. rno semblant de a. captaciones imaginarias, aparición de prejuicios o entonces la pregunta de qué hacer cuando ella aparece. Y aquí. nue-
ideales, etc. Nadie está exento de esto. aunque sólo sea por un breve vamente Lacan nos da la pista con los historiales de Margaret Llttle y
lapso . . ·· · LucyTower. Margaret Little le confiesa a Frida que no comprende na-
.·· .. ·., -.Freud_tapipoco pudo evitar estas dificultades. Como ejemplo pode- da. que no tiene nada que decirle. nada que darle; aparece su casrra-
mos recordar a Dora. La.can en el Seminario l dice que Freud intenta- ción, con lo cual concomitantemente Frida cae como objeto a que la
ba rehacer, modelar el ego de Dora y más adelante. dirá'q.ue.la trans- completaba y emerge"su.deseo. ~-a.,fgar..e.LLittle..deja de .oc1 ip.ai:...cll_u-
ferencia negativa de Dora es una réplica a la contratransferencia de crar del Ideal que obstruye la prosecu_9.ón ~ 8..D:?lisi~_Je.P-as.a al deseo
Freud. A Freud se le escapa la identificación viril de Dorá. pues no def analisg_qµ¿_1o_posibilita~-Eg~_pasaje..no..se.rá sin.angustia del a na-
había hecho todavia la distir1dón entre el objeto de amor y el objeto de lista. ¿Por qué? Porque cuand~eTge ~a-~on~~tn.~.nsfe'.encia f~-~ 19-
identificación. Su prejuicio de que ·como el hilo es para la aguja. la falta. la _3:11gustia pr_eseñüf¡Cala posibiliaad. ~ _q~e el corte. nq_~p.r_o
muchacha es para el muchacho" lo hace perderse. El desconocimien- duzca: se maniiiesta en el tiempo previo.a.la caida del objeto~
to del deseo de la histérica en Freud explica su comratransferencia. ~no es el corte sino el tiempo previo al cone Al realiza~
En MFunción y Campo de la Palabra .. : Lacan va a c;l.ecir: "cuando los ella desaparece.
prejuicios del analista (es decir. su conrratransíerencia. término cuvo -- Pero nos preguntábamos antes qué hacer frente a la contratrans-
empleo correcrn en nuestra opinión no podría ·e.xtenderse mas alla de ferencia. Lucv fower lo resuel\'e no haciéndose la distraída con su
las relaciones dialécticas del error) lo han extra\riado en su interven· sueño: la ime-rrogación acerca de él evidencia la presenci~ dei analis-
ción. paga inmediatamente su precio mediante una transferencia nega- ta. Un posible camino seria entonces interrogarnos tratar100 de desen-
tiva". Y en "Intervención sobre la transíerencia" dirá que "Es por haber- rrañar en qué nos hemos e..\.vaviado. si aún así no encomramos la pun-
se puesto un poco excesivamente en el lugar del Sr. K por lo que Freud ta del ovillo pensamos al control como el lugar donde analizar la con-
esra vez no logró conmover al Aqueronte·. El amor que Freud le imnu- tratransíerencia del analista. aquello de su estructura que ie impide
raba a Dora por el Sr. K es consecuencia de una imoorrame resisten- :ns talarse en el deseo dei analisrn y encontrar así su estilo.
cia. pero una resistencia del analista. Freud se coloca como el amo de Lacan va a decir que las mujeres se manejan mejor con la conr.ra-
la verdad impidiéndole a Dora descubrir el objeto de su deseo: la Sra. transíerencia y comprenden muy bien el deseo del analista.. ¿Cuál ~~.rá
K. En 1923 Freud dirá: "Antes de llegar a individualizar la importan- la lógica de esta afirmación? Paso a citarlo: "Si hubo personas que 01Je-
cia de la corriente horno.se.mal en los psiconeuróticos. me quedé muchas ron 'á..lcro sensato sobre la conrrarransferencia íueron sóio mujeres· y
veces atascado o caí en toral confusión... • esw ~así por "la función del deseo en el amor·, pues ·en ~a medidaj
Otro hubiera siclo el desenlace de este tratamiento de haberse reco- en que el deseo interviene en el amor. del cual es. puedo oecir. une:
nocido el deseo de Dora. el abandono del análisis se podria haber evi- clave esencial. el deseo no concierne al objeto amado·.
tado. Ameriorrneme nos preguntábamos qué consecuencias podía traer Orro elemento a tomar en cuenta es el comentario donde dice que
la conrrarransferencia del analista. encontramos en este caso al~una !a relación de Luc\' Tower con sus dos paciemes son dos historias de
respuesta. Si ei analista persiste en perder el rumbo del deseo uno de amor y aue con reiación al paciente que trabajamos "ella se atrae una
los efectos posibles es que el paciente llame a la interoretación median- :orméma v con respecto a un personaje con el cual sólo se ha puesto
te actings: o que realice un pasaje al acto. · ~n funcióñ a oanir del momento en que su deseo la ha concernido-.
Si imerprerar es interprerar la castración. la del Otro. se trata de Se t..a.ta. por consiguiente. de cómo funciona ei deseo y ei amor en
q~e~a.iga,._~l ~~j~to a_g~~l sujern_es Péi§.~tOtro. El ~cúng_out es _un las mujeres sobre io que debemos rrabajar.
p~~d~_!:merpret.?c1on _qu.e_apurua.a una_caj_Q¡;i._que...no...se...prod uce. ¿Qué ocurre en la re}a<;ión a}!lor:osa? La muj~r debe s~po_~ serel
Dora. cuando no puede caer como objeto a de Freud, se va del trata- objeto a cáusa del deseo de un hombre. El homore va a ta ousqueca
. miemo. La :esistencia' que le· es falsamente imputada por Freud se - del objeto a que ella encarna. aunque en realidad su verdadera ~are
debe a que él desconoce la suya propia. A.si La.can va a decir que ·no ja no es otra aue su ob~19~p_tlfa!_!_~ma. La mujer se presentara con
_hay, or.ra ,r._esistencia al análisis que la del analista mismo~. Nos surge la aparfencia del \caso que contiene el objeto del deseo ciei hombre y él
· ·· ··.-
79·
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se engañará yéndolo a buscar. ~Q - 2!J_ede h_aber. del.lado_masculino te y no como sujeto. En la dirección de la cura en un priIE.~~-~e~p_q_ ~l
atractiv~ - ~lg1:1~º en r~la~ió_n_ª-.!a __mujer_sino P.2fque__es..Y.elo.del...objeto Sujeto Supuesto Sabér-es ffpivote-d~_Jfun.s.ferenCia. está velacjo en
-ª-<;i.e_su f?-.!1~ªs1Eª· Que todo esto no sea más que una ficción, ya que este tierñ-po que la causa aéla mis~ª-~s_s!J objeto a. El analista \·a a que-
no hay nada que encontrar, no significa que carezca de eficacia. ka. rer poñer fiiia ..estaTciealiZácioñque encarna como efecto de la trans -
~tr.:iJ:\'.!gia,.. d el analista _e?__
s~cg:_haceLde..semblant..de...a..deLfantas ferencia del paciente; debe querer caer "para ser el soporte del a sepa-
ma de su p_acien_te. rador·. La operación analítica está dirigida a mantener la máxima dis-
.. . Las·mujeresrIO'sonrnasoquistas por ofrecerse al deseo deurrhom:- tancia entre el fdeal y el objeto del deseo. El principio que La can
. bre. pues ·no es sólo ése su goce. avanzando por él pueden acceder al · · promueve como consecuencia de esto se basa en el rechazo radical de
goce suplementario de Ja mujer. más allá del goce fálico. El analista toda identificación del paciente con el analista.
tampoco es masoquista por ofrecerse en ese lugar de objeto. pues el obje- Lacan fmaliza el seminario de "La Angustia .. con el siguieme párra-
to n.o lo propone él según su propio fantasma sino que debe estar dis- fo: "LO que hace de cada psicoanálisis una aventura única es esta bús-
ponible para encarnar los diversos objetos que proponen los analizan- queda del agalma en el campo del otro. Varias veces les interrogué so-
tes. A esta docilidad no podemos asimismo catalogarla como maso- bre qué conviene que sea el deseo del analista para que. si tratamos de
quista pues no se motiva en una voluntad de goce del Otro, al analista impulsar las cosas más allá de la angustia. el trabajo resulte posible".
ya le ha sido re\'elado que no hay Otro a quien hacer gozar. Su deter- ¿)fo podriamos pensar que una de b.s lecturo.s de este ir más allá del
minación de acomodarse como semblant de objeto a se origina en el de- limite de la angustia para que el trabajo resulte posible podria ser ir más
seo del analista que intenta lograr el viraje de posición del paciente. allá de la contratransferencia? Esa contrarransferencia·que impide que
identificado al objeto a de su fantasma cuando llega al consultorio. el analista se coloque en posición de representar. de ser el agente. la
para reinstalarlo como sujeto deseante. Si el analista sostiene el lugar causa del deseo: esa contratransferencia que angustia al analista por-
de semblant de objeto es para mantenerse alejado del goce que podria que falta la falta. porque al paciente se lo ha ubicado. aunque sea u-an -
resultar de su posición. sitoriameme. como objeto a.
A través del desarrollo que hicimos se desplegó porqué la estrate- Continúo con la cita: • ... Sin duda. conviene que el analis ta sea
gia del analista se toca con la posición femenina en el amor: Se rela- aquél que ha podido. en la medida que fuese y por algún sesgo. por al-
ciona entonces al deseo del analista con posiciones en la sexuación v gún borde, reintegrar su deseo en ese a irreductible. y en grado sufi-
se pone en duda que responda a lo masculino. I¿i. capacillª-.d..de.baccr- ciente como para ofrecer a la cuestión del concepto de la angustia lll1.a
se cau~a ~g-~l deseo .para.un sujetoirnµlica...en..eLanalista..una.posición garanúa real". ·
femenina que le posibilite.funcionar.comG-Qbjeto..a. polivalente....amer-
ced del fantasma de ~~d-~ '!!:!º de los sujetos. Esto llevó a Lacan a de-
cir que las mujeres eran quizás las mejores analistas cuando no eran
las peores y que ellas sabían muy bien qué era el deseo del analista. Bibliografia
Continuando con la preocupación por el lugar del analista en er
-Reverso del Psicoanálisis" dirá que en la: pareja analizante-analista ._;_ Lacan: ·La.anguscia'.
no hay espacio para el ·sujeto" analista. Dado que el analista está lla- "La. rronsferencia ·
"!..os c:ua.rro con.cepws Jund.ament.ales del Psicoanciii.si.s -.
mado a encarnar el objeto a. de allí en más enfrentamos a un solo suje- -Los e.scricos recnicos de Freud". .
w. que es el sujeto mismo del fantasma Ya en ·Los Cuatro Conceotos "El rE"~'eTSO del Psicooruilisis.
Fundamentales del Psicoanálisis" La.can develó el misterio de la ·liira- -iru.en:ención sobre la 1roI1S1erencia-
zón del deseo del analista al deseo del paciente". Este encuentro-es ·.runción y campo cíe ia po.Iábro. y del lenguaje en Psicoanálisis"
lógico. ~hay necesidad de distinguir dos deseos relativos a dos ind1- -1.a direa::ión. de la cwu y los pnncipios de su pod.er-
viduos. No hay dos _d~seos as1 como no hay lugar para dos...objetOS. :.1. Llt+Je: ·eonowiu.ns_r~n;.u:ia.-y la-~~puesia a.ei .iJacienre·.
pues el analista esta en Ja cura corno el obiern del fantasma del pa_cien- .. -La. respues1.a. w1al ciei anaiisw. a las necesidades de su pac•.en.1e·.
80 81
L. Tower: -1..a concratransferencia".
Goce, angustia y deseo
Aberaslury. Cesio, Ganna. Smolensk-y y Zac: "Transferencia y contratronsjerencia •.
ANALÍA STEPAK
H. Racker: "Estudios sobre la técnica psicoanálilica •.
M. Rodríguez: ·¿Las mujeres son las mejores analistas? Actas de la reunión La-
canoamericana cie Porto Alegre. 19931.
Por qué para situar la angustia tendrá que hablar del campo del
goce.
A S Goce
a .l. Angustia
S Deseo
· Am:erionneme se nos proponía que el tiempo de la angustia no es-
:.á ausente en la constitución del deseo. en cuanto es franqueada.. el de-
seo se constituve. ·
82 S3
Nos proponíamos hablar de la angustia y Lacan nos dice que para eso Freud subraya que este rasgo sobreestirnador. que comierte a es-
va a tener que hablar del goce. Pues bien. si del goce se trata revisare- tas mujeres en únicas, también proviene del vinculo con la madre. To-
mos muy brevemente qué nos dice Freud en dos de los tex'tos que se dos los objetos de amor serán en principio subrogados de la misma.
engloban bajo el titulo de ·contribuciones a la psicología del amor". 1
De algunos hombres se nos dice: ·cuando arrian no desean y cuan-
En estos textos encuentro una frase que había olvidado: "Para aque- do desean no aman". Si algún rasgo del objeto elegido les recuerda el obje-
llos que ejercen el psicoanálisis los motivos más frecuentes por los que to. inc.es.tu.aso... so.br.e.viene. la.impo.tenc:ia y para. pr:o.tegerse. de.. es ta per-
se consulta son prescindiendo de la angustia, las múltiples fonnas de turbación se vale de un recurso: la degradación psíquica de un objeto
la impotencia psíquica·. · se.\.-ual. Si degrada logra tener potencia y \ililidad. cosa que no le suce-
deria con su educada esposa. Es más. en relación a los hombres nos dice
De aquello que más nos ocuparnos en la clínica es de la angustia, que podrán ser realmente libres o tener una vida sexual plena quienes
y de las cuestiones que conciernen a la llamada elección de objeto de hayan superado el respeto a la mujer y hayan admitido suficientemen-
amor. ya que nadie podria negar que las perturbaciones de la vida amo- te la representación del incesto con la madre o con la hennana.
rosa son una parte importante de la labor analítica. tanto como la famo-
sa cuestión de la impotencia psiquica. situada en relación al Otro mater- En relación a las mujeres. sostiene que es muy raro que degraden
no. según Ja cuai. algunos hombres sólo pueden funcionar bien con ai objeto se.\.-ual. Tampoco se produce en ellas la sobreestlrnación se.\:ual
objetos degradados. prostitutas o símiles. caracterislica del varón. Freud plantea que la condición de lo prohibi-
do P§!ª ella. seria equip~co~ !.?-.Ji~g!::~dación para~éL Sin esta pro-
Freud nos propone para Ja elección masculina de objeto una serie hibición. nos dfrá:-sé muestra muchas veces frigida. Frigidez que se
de condiciones de amor: enlazará con alguna figura muy idealizada. la de su padre o herm a no.
La condición del tercero perjudicado: el señor en cuestión nunca ele- Ya en 1912 se nos planlea Ja pregunta ¿por qué es tan diversa la
giría a una nujer libre, siempre apunta a aquella sobre la cual otro relación del amante con su objeto se.wal?. e inclusive se nos propone
ejerza ciertos derechos de propiedad (novio o marido). que hay algo que en la pulsión sexual humana hace que el logro de la
satisfacción no sea posible. Situando al objeto siempre como perdido.
El amor por mujeres fáciles: de cuya reputa~ión se pueda dudar.
Por un lado se ~atisfacer:ian mociones hostiles .. hacia el hombre Las vias que atañen al goce y al amor. nos van llevando por lineas
que le saca a la mujer que arna (el tercero perjudicado es siempre divergentes:
el padre) y por orro lado aparecen los celos que son una necesidad.
Si un sujeto está muy fijado a obtener el goce del Otro. ahí sobre-
En cuanto a la conducta de ésws hombres podriamos decir: ·:endra la tan memada imootencia. En tanto no se reaiice nara el la .
degradación en relación a ~n ideal. no puede gozar. A esta ~ujer ta.J.1
Tratan a estas mujeres como objetos de supremo valor. u.nhelada no podrá aITancarle un pedazo. la rebanada de sa1..11ón. co-
:no a la bella carnicera.
No las aman de por \ida: escenifican las mismas condiciones varias
\•eces. con las mismas caracter.sticas en las que un objeto de amor Freud cuando intenta hacer su orimera aorox:imación 3.l tema de
se suslituve a orro v se llega a la formación de una larga serie. Tan- ia angustia nos habla del coitus int~ptus. ·cuando el SUJern puede
to las condiciones de amoi como su conducta provienen de la ·cons- liegaia una eyaculación. pero es al e..x"te.rior. y la angustia seria provo-
telación materna- y se remontan a la fijación infantil con la madre. cada por ei hecho de -1a puesra fuera de juego del aparato. del insUlJ-
;nento de goce-. dirá Lacan.
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Lacan propone que estos transtomos son efecto de una estructu- un mal temido (enfrentarse con la castración-del Otro) en un mal menor
ra fundamental e irreductible. · (no poder) .
En e..?te_Seminario, se_plantea qg-a cuestión oue también podria En el ser humano el fajo será significativo por su posibilidad de ser
E!Q2Sl~rse.como_de es.tructura: el Otro tiende a presentarse como objeto caído más que por supresencia.
aquel~me. g1:!_i~re..como. objeto.• al, modo de la rnantis religiosa,Jan-
ª?
to ,p__ara el hombre ~?rn~ ~a:a .~_ 1!1_l_lJer.-de-ahí que nos interese @.<U
es la __~g~~-ti~.P.?I"ª ~~y cuál para __ ¿de qué goZ?- e]Jc;,_será acaso Jo
rñisl:p9__con lo que goia:él?Téñ- relación al amor ¿se posicionarán de
~_illis, en cambio, nu..nec6itan degradar. ~!las ta_¿nbién aQ!Jn-
tg.n_al_falo, pero en tanto es más...al.l.á_del_falo, que e_lla_ pu~d-~S'._nc;_911t.rcg"
otra. cosa. ot.r..9_gQCe. aquel que en Encore es nombrado como goce suple-
i@al.. modo?_ - · · ---- -- meñt~iio . En el seminario de la angustia. se nos dice que gozan más:
~Las mujeres en el dominio del goce son algo así como superiores".•
En Introducción al narcisismo 2 f~e!W plantea que habría dos tipos Del mismo modo que estarían menos interesadas por el deseo que el
de ~c:ción~ck.Qbj_~to__a_los que se podría responder: .narcisista º-22!:. hombre.
apuntalamiento.
La.can nos recuerda a Tiresias . el famoso \idente de Tebas. aquel
....fü..~-~-~U~~r_aQ.1,1Júalaq1_i~t.Q..sería característico del hombre, que que fue siete años mujer. Paseando un día por el monte Cileno. el joven
sobreestima sexualmente a la mujer. Esta sobreestirnación. viene del Tiresias vió a dos serpientes copulando: hay versiones distintas de lo
narcisismo originario del niño. y así lo transfiere sobre su objeto de que hizo. una dice que las golpeó. otra que mató a la hembra. Sea lo
amor. que fuere . como resultado de su intervención quedó convertido en mu-
jer. Siete años más tarde. paseando por el mismo lu gar volvió a \·er a
Las mujeres. en cambio. dirá. en panicular cuando son hermo- dos serpientes acopladas. e inte11ino del mismo modo. asi recuperó
sas. establecen una complacencia consigo mismas. "'Tales mujeres se su sexo primitivo. Su desdichada aventura lo había hecho célebre . ü n
aman en rigor a sí mismas con igual intensidad al hombre· que las dia que Zeus y Hera discutian acerca de quién gozaba más. el hombre
ama". Ellas necesitan ser amadas y se ligarán con el hombre que las o la mujer. se les ocurrió consultar a Tiresias que era el que había he- .
ame. Si bien hay mujeres que aman según el modelo masculino. ·~A..un cho la doble experiencia. Sin vacilar, Tiresias les responde que si el
para las mujeres narcisistas las que permanecen frias ante los hom- goce del amor se componía. de-diez partes. la mujer se quedaba con
bres. hay un camino que lleva al pleno amor de objeto. En el hijo que nueve panes y el hombre con una sola. Esta respuesta encolerizó a
dan a luz se les enfrenta una parte de su cuerpo propio como un obje- Hera. quién vió develado el secreto de su se.xo y privó a Tiresias de la
to extraño. al que ahora pueden brindar desde el narcisismo el pleno \ista. Zeus como compensación le dió e.l don de la videncia. 5
amor de objeto".3
Podríamos oiantear entonces ai~unos interrogantes: como rn diii- .
E_odriamos propon?" en este punto lo siguiente: si la relación entre :nos. se dice o~e ellas gozan más: cil-culan, de acÜerdo a las esrructu-
los panenaires avanza es porque el hombre degradó lo suficiente. para !"as element.ai~·de parémescó: oonanJQy_Üy_~~ pr~eman_ b.Ej_Q. el _m_o-
abordar a esa mujer y la mujer soportó allí el lugar de objeto a. causa do de la mascarada...\hora bien: ¿será oue gozan sólo de eso. de oire-
· .de su deseo. cersec0mo·o-bietos? Lacan resoonde con· una-trasecóñrundeme: -El
masoq_aj_?.IpO i~memD.::o-es_@ fanl4_~1Jla m~_cy.iin9" . -
Si la castración del Otro se ha.ce insoponable para el hombre. lo
más probable es que aparezca la impotencia o la eyaculación precoz. De hecho. los casos de masoquismo planteados por Ueuct ~eiie
tendremos a un sujeto que se sustrae a un !!<>Ce. v conviene a la detu- ren. ?Jan..rac:iac: rna.sculí.!JJls.: Ser castrado. ser poseído serualrneme o
mescencia. en algo así corno una función de prÓtección: transforma parir. Freud dice: · por eso. le he dado a esa íonna de maniiesración
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del masoquismo el nombre de femenino aunque muchos de sus ele- En el juego amoroso el hombre va a la búsqueda de ese objeto. que
mentos apunten a la vida i.n.íantil". 5 El verdadero masoquista es aouel ella encama. pero si el objeto se presentifica alú. hay angusua, a él se
que ofrece su mejilla cada vez que se presenta la oportunidad de r~ci- hará presente que está dividido.
bir una cachetada. ·
Que haya angustia cuando el objeto se presentifica. implica varias
Que la mujer se ofrezca como objeto a. al_deseo de un· hambre no cuestiones:
implica que ella_g~e_allí. ª_cjif~~D:Q?.. delmascquista q.ue,goza.J::i~
pando ese lugar.sJ.~_QQj_eto par:a_eLOtro. id~!1~fi_cad_o_~Q!J1PlS!_tam_enr.uJ Que algo tiene que caer: para que haya goce tiene que haber detu-
~ha. La muJer soporta ese lugar ya que si avanza tiene la chance mescencia.
de acced~~--9.t!::() goce, más ~lá__Q_eJ gor;:eJaj_i50. En la tercera Lacan
nos dice: "que en ocasiones la mujer sea el objeto a del hombre, no si!!- Que el hombre va a buscar el objeto en el campo del Otro . y en tan-
nilica para nada que sea de su gusto-. 7 - to el objeto no es ftjo. dependerá también del campo del Orro. enton-
ces nuevamente nos encontraríamos con el ¿qué me quiere?. momen-
Si ella ocupa ese lugar. posiblemente. y desde va no en todos los ca- to angustiante para él. y para ella.
sos_. podrá a\·~~ar más allá de lo propuesto por Freud. en lo que seria
el fmal de ~nans1s. la roca vwa. para una mujer: "el penis neid". Un Por último. para él. ¿perder el instrumento impli~ará perder el ser?
IDUJer podra_entonces. tener la chance de ser algo más que alguien que
se pasa la vida anhelando tener un pene. Este seria el avance de La- La angustia en el hombre. nos dice Lacan. es: "La posibilidad de no
can. que se podrá leer con más claridad en Encore. Pero es importan- poder". La detumescencia presentifica la función del resto. Nos recuer-
te ver como C'Offilenza a gestarse en el Seminario de la Angustia. da que el objeto cae del sujeto esenciaimente en su relación con el de-
seo ... El falo es más significmi\·o por su caída. por su posibilidad de ser
_ Plantear que el deseo es falta. implica presentificarque no hav ob- objeto caído. que por su presencia y esto es lo que designa ia posibili-
jeto del cual el deseo_ se satisfa_ga. aun cuando haya objetos que son-cau- dad del lugar de la castración en la historia del deseo-. "Es en r.anto ella
sa de deseo. La mujer tratará entonces de hacer desear a al<1uien. un quiere mi goce, es decir gozar de mí. que la mujer suscita mi angustia ...
objeto, del cual no tiene necesidad. Ella se tienta tentando al::.Otro · del Es en la medida que se trata de goce. en que es mi ser lo que ella quie-
mismo modo que Eva tienta a Adán en el paraíso con una man~a re. que la mujer no puede alcanzarlo sino castrándome-. 9
con un objeto cualquiera. por más superfluo que parezca. "Será al de~
seo del Otro como tal a lo que está enfrentada". ¿Será acaso ésto lÓ an- No es la propia castración Ja que angustia al neurótico. lo realmeme
gustiante p~ ella? Si dijimos que-la angustia es ante el deseo del Otro. insoporrable es la castración del Otro_ Si un hombre avanza en el consu-
ame el ¿que me quiere?. parece que \'amos bien orientados si trala- mo de esos pedazos. se presentilka que al cuerpo del Otro le íalr.a aigo.
mos de averiguar de .qué se u-ata su angustia. Si bien lo que a ella !e
1meresa ~s el deseo ael Otro. en algún punto se le torna angustiame. Los hombres sólo quieren -eso- dicen algunas mujeres. y eilas quie-
Ser el ob3eto en el centro de un deseo. será lo aue <1enere la an<1us- :-en su ser. dicen los hombres. tenerio todo. a éL lr a ia búsqueda dei
tia de ella. · ::. ::> objeto confiesa una posición fálica. ?ero en tamo quiero al Ótro. sólo
encuentro un peáazo.
Y ¿cuál será la anguslia para el hombre cuando aborda a una mujer?
Lacan nos propone que ella es tejedora y él alfarero .
. __ Lacan nos dice: en él "el deseo no hace más que recubrir la ane:us-
ua 5 y esa angustia es casi condición de su goce. ~ ¿Qué hará ella con su vacio? De acuerdo con lo que haga tier1e ia
chance de situarse de distintos modos.
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El será ceramista y estará más ligado al deseo; ella tejedora, y más expresa en sus provocaciones se..wales a loºs hombres. una vez finali-
ligada al goce. La· mujer se presenta con la apariencia del vaso y esto zadas las conferencias.
es lo que engaña al partenaire. Se nos habla de las vasijas y leemos,
que se hablará de las mujeres ¿y por qué lo engañará al presentarse Joan Riviere interpreta el sin toma así: Una vez rnosrrado ·en públi-
con la apariencia del vaso? En tanto él va a ir en su busca imaginan- co, su brillo intelectual que representaría un éxito. actuaria bajo el rno~
do que ese vaso puede tener el obieto de su deseo. Pero siempre entre do.de..una exhibición. tendieme·amostrarqueella poseeria el pene del
Io que se busca y-lo que se encuentra hay una distancia. padre. Luego la invadía un miedo horrible a que el padre la castrara.
Se ofrecía a los hombres para aplacar la represalia. La paciente se pon-
Si bien él va a buscar algo, se trata de que no hay nada que encon- dria la máscara de la inocencia asegurándose la impunidad. Esta posi-
trar. Al igual que el alfarero que crea una vasija. en cuyo interior hay ción de ir a la búsqueda. de ser cortejada. es para la autora una coar-
un vacío. el hombre deberá recrear ese vacío. El construve el cántaro tada para suavizar la represalia temida. Joan Riviere. presenta como
pero lo más importante es e~ vacío que yace dentro del ccintaro. hipótesis que la mascarada es constitutiva para la mujer.
¿Ella será tejedora sólo para cubrir la ausencia de pene? No lo pro- ¿Y si propusiéramos otra cosa? Ella se cubre no porque reniegue
ponemos de este modo, esto seria dejar todo en la dimensión fálica. de la castración. Podríamos pensar. a diferencia de J. Riviere. que es-
Isidoro Vegh propone -que ella es tejedora para cubrir otra diferencia. ta mascarada tiene un valor positivo. algo que atrae la rniraáa del hom-
entre un goce que ofrece, y otro que lo excede". "Lo e..'{cede a este goce bre. porque ella puede estar dispuesta para el juego amoroso.
que ofrece, no es un goce fálico, también lo excede a él. El nunca lo
alcanza". 10 La mujer no sólo cubre un vacío. el de la falla de pene. ese cubri-
miento también implica crear un borde necesario. que le permita pre·
En el reino del hom~re. primará la impostura. En el de la mujer. semificar el objeto para su panenaire. Con este cubrimiento indicarja
el disfi:_?Z,. - - -- que algo le falta. Oculta lo que tiene de fálico y a la vez devela su falta.
En tanto se presema como alguien a quien le falta algo. una mujer con- . .
Lacan subraya que mientras ella se manifiesta poco preocupada voca a un hombre a que acuda al lugar de su falta. Que haya disfraz o .
por su equivocación, él sí habria de tener en cuenta la equivocación mascarada. quitarla el tono angustian te, no se trata ya del horror que
de su deseo, ya que su capacidad es evaluar. provoca la falta; la cabeza de medusa.
. El dejar que se vea. para la mujer. es dejar ver lo que hay. en tan- Para la paciente de Joan Riviere. la angustia se presemifica como
to hav una falta. ésto es lo que cubre la mascarada o el disfraz. si no para cualquier otra mujer. delante del deseo del Otro. Ella en relación
hay gran cosa para mostrar. es angustiante. pero siempre es lo que al falo es no toda. deberá hacer de un objeto anatómico. un objeto
hav. En cambio para el hombre es dejar ver lo que no hay. De ahí se c2usa de deseo. para eso se seni,¡,_ del disfraz.
fuñdaria su impostura. En relación a la mascarada o al disfraz. Lacan
cita un trabajo de Joan Ri\'iere. donde despliega el tema del complejo Y la impostura ¿qué será? Lacan. la an:icuia con el rruto del Don
de masculinidad. haciendo un relato muy detallado de una paciente. .Juan. "El Don Juan es un fantasma femenino-. ~ 1 nos áice: -Don Juan
La misma tiene una carrera profesional muy exitosa. le va muy bien con es aquel que en su impostura radical. lo tiene siempre. no puede per-
su esposo y desempeña muy bien las tareas de su casa. No obstante derlo. o·e este modo les asegurarla a las mujeres que hay un hombre que
padece de un sin roma. Ella debe hablar en público por razones de tra- no io pierde en ningún caso-. En principio. podriamos punruar que la
bajo. y la noche que sigue a sus conferencias. que suelen ser muy e..'Ci- compleja relación del hombre con su objeto está borrada para éL El no
tosas. se arui:ustia. teme haber hecho el ridículo. v siente emonces la e\"alúa. Je vienen bien rodas. pero al precio de una impostura radirat
necesidad compulsiva de tranquilizarse, ne.cesidad que también se siempre está en el lugar de otro. Es el objew absoluto. nunca cae.
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· Ú~~:n'o ~inos di~e' q{ie~i'DonJuan inspire deseo, si bi.en se des- Así ácÜden los neuróticos a nuestra consulta. Si un análisis avan-
liza en la cama de las mujeres. El se encuentra cumpliendo cierta función .. za en el mejor de los casos obtendremos lo si~uien_te:
El Don Juan no es un personaje angustiante para ella, ya que ella en par-
ticular, no es el objeto en el centro de su deseo. A.él le viene bien cualquie- A S
ra, puede con tocias. a diferencia de otros hombres, cuya angustia es la $. ;..
posibilidad de no poder. y a los cuales no todas le vienen bien, mejor di- a
cho no cualquiera!. Pero ¿p.or.qué.eLDon.Juan.ser:ía.un.s.ueñ.o femenina?
La.can dice es el anhelo en la mujer. de una imagen que juega su función, Un sujeto barrado en relación a un objeto que lo causa.
hay un hombre que lo tiene. él lo tiene siempre y no puede perderlo. Ningu-
na mujer puede tomárselo. esto es lo esencial. esto es lo que tiene de Entonces. al final del análisis, los sujetos ¿no se angustiarán más?
común con la mujer. a ella no se le puede tomar. porque no lo tiene. Por supuesto que no es así ... seguramente se podrá acudir nuevamen-
te a ser el objeto para el Otro. pero con una diferencia. ya no se tendrá
En Encore Ll!can propone que el ser se:-.LJado exige el una por una. la fijeza que caracterizaba el primer tiempo. habrá cierta flexibilidad que
Y nuevamente habla del Don Juan: lo esencial en el mito del Don Juan !e permitirá al sujeto pasar de un cociente al otro. Podrá ofrecerse co·
es que las posee una por una. -desde el momento en que hay nombres. íiiO objeto. para el goce de su partenaire. sin temer quedar arrapado allí:
se puede hacer una lista de las mujeres y contarlas. eso es muy dis- podrá ofrecerse. pero también salir de esa posición.
tinto al uno de la fusión universal. si la mujer no fuese no toda. nada
de esto se sostendría-. El una por una podria plantearse en tanto nin- Un sujeto podrá prestarse. a ser objeto del Otro.· sin pensar que
guna es toda. siempre hay un resto de goce no alcanzado. por eso va a perder su deseo. Advertido del goce que el Otro le propo-
ne. el hombre buscará en los objetos de amor aquello que perdió irre·
En RSI vuelve a la famosa pregunta freudia.1a acerca de ¿qµ_t_~ i11ediablememe. La renuncia al goce permitirá cierta articulación con
una mujer? Para respondemos que una mujer en la Vida de un hom- el deseo.
·bre es-álgo en lo que él cree. El cree que las mujeres pueden decir al-
go_ "Uno cree lo que ella dice. Eso es lo que se llama el amor". 13 Que yo recuerde, La.can da pocas indicaciones. una de ellas es dosi-
ficar la angustia, ésto será una tarea para poder avanzar de ese tiem-
En tal caso él se.garantizará algo al creerle a ella: la compañía. no po medio para que un sujeto no ceda en su deseo. Nuestra propu,e sta
está más solo. para este Seminario es avanzar hasta donde podamos. pru.a. desplegar
esrn.
La.can nos propuso articular la angustia con el goce y por algún
azar llegamos al amor. .. ¡Nada más por hoy!
'.::'.GH. Isidoro! Seminario "La Femirieidad'" ( 19891 - Editado por la Escuela Freu-
;'.;ar:a de Buenos Aires. Cuando en el Seminario X Lacan comienza a investigar la íunción
"deseo del analisi:a" y lo hace a través de Jos testimonios clinicos de
L.\C.-\!'1. Jacques. Seminario N~ X '"LaAnguscia'". mujeres analistas. no vacila en calificar los textos que Lucy Tower pro-
duce de su practica clínica en términos de "historias de amor·.
!...\C..i,.,"li, Jacques. Seminario N~ XX Encare - Editorial Paidós.
:...-\C..\..'11. Jacques. Seminario RSJ .. Traducción de R Rodri!_!uez Ponte. para circu- Lo sorprendente no es tanto Ja nominación que hace de esas curas.
2ción de la Escueia F'reudiana de Buenos Aires. sino Ja sólida coherencia lógica que mantiene a lo largo de su obra. en
especial con el Seminario \11ll -"La Transferencia·- donde el amor se
plantea corno condición de posibilidad de la entrada en análisis. al
tiempo que bajo la continua invocación socrática se perfüa con preci-
sión la estrategia del analista en su estricta articulación con la posi-
ción fernenina en ei amor.
Avancemos en el tiempo inicial de este amor. Tiempos de una ama- Un pequeño paréntesis que permita situamos en los tiempos ini- ·
ble indiferencia. ciales de este amor. En materia de las relaciones eróticas entre Jos par-
lantes. la cosa se juega no sin trastocamientos. No siempre el macho
. Oderte es presentada a Swann diciéndosele que es una mujer difí- de la especie se posiciona cOJ;no caballero. De hecho. el abordaje lo hace
cil. pero de la que se pueden conseguir favores. A S\vann no Je resul- Odette y Swann. a lo sumo. se.deja conejar.
ta agradable. Si bien admitía que no era fea, no tenia para él encamo
alguno._ Hasta Sw~ registraba en ella una especie de belleza que le Y no se trata de que Swann haya sido tan idiota como para no intuir
produc1a una repuls10n fis1ca. En especial. unos ojos demasiado gran- qué se jugaba alli. ni mucho menos que no supiera qué hacer ante una
des, a su gusto. que le daban una expresión de malhumor. mujer. Es aquí la dama quien lo aborda. quien insiste. quien lo busca.
::l. enfrascado en sus cuadros.
¿Quién i.W&.i_ª-.~l juego amoro_s_g_7 ¿Quién inicia el abordaje? No es
Swann. sino Odene. Después de ese encuentro, ella le manda una Cuando Odette se iba. Swann sonreía al recordar que ella le decía
esquela donde le pide que él le muesrre su colección de cuadros. qué largo iba a ser el tiempo hasta que pudiera \'erlo nuevamente. Son-
risa que delata un cierto lugar de goce al proponerse como objeto ama-
A instancias de ella se producen varias visitas en las que a Swann ble ante Odette. ante esos ojos grandes. casi repulsivos. que lo miran
le resulta indiferen~e. Nos dice Swann: esperando una señal. que lo miran como un cuadro.
"Lamenta~a. mie~tras ella charlaba. que la gran belleza que tenia En este primer tiempo de esta historia de amor. queda en claro la
no fuera del genero ae la que espontáneamente habria preferido". puesta en juego de una partición subjetiva fundamental y fund arne
del amor. Posición del ·erastés". el amante en Odette. y dei lado de
. Un nue\·~ 1abor?aje: ella Jo im'.ta a tomar el té a su casa. cosa que Swann. posición del ·eromenós-. el amado.
el rechaza. aJe¡ganao esr:a.r ocupaao en sus trabajos.
Posición del -erastés-: encamada en Odette. precisamente carac-
Oderte ins~ste: -yo nunca tengo nada que hacer. Siemore esW\' li- terizada oor lo aue le falta. en tanto lo aborda como deseante. En Sv.cmn.
bre y para usted lo e~taré siempre. No importa la hora dei día 0 cíe Ja en tanro.·eromenós·. simado como aquel que no sabe io que tiene que
noch: en que le pueaa resuir:ar cómodo \'erme: há~ame buscar v seré io torna apetecible.
muy reliz de concunir. ¿Lo hará ustedr - -
Discordancia de dos términos que constituyen en su esencia un
:' .Y por sin? le qu~. claro a Swann de qué se traraba. agre~ó: -y0 . doble movimiento: por un lado una "in-ciencia- en tanto ella como dese-
lo uruco que ousco y dana mi \ida. es por encontrar un amor-~ · ·•· . :lnte no sabe qué !e falta y él como deseado no sabe qué tiene: por oau
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lado una no coincidencia. dado que debemos sostener la pregunta: ¿lo -El la miraba; un fragmento del fresco aparecía en su cara. y en su
que busca ella. sin saber lo que le falta. es de la misma naturaleza de cuerpo, que a partir de ahl siempre iria a buscarlo. ora estuviera con
lo que él tiene. sin saber que lo tiene? ¿Qué busca ella? Por lo pronto. Odette, ora pensara en ella. y aunque no le gustara ev1der:iternente el
tomando a la letra el historial, ser amada: "daría mi vida por encontrar fresco florentino más que por parecerse a Oderre. este parecido la reves-
un amor·. tia a ella de mayor y más valiosa belleza (... ):
Y bien, esta hisrnría: de amor avanza, y si avanza es por un e:iro -Aquellas dos paJabras. 'obra florentina' 1:-icieron ª. ~wann un gran
radical que se produjo. giro que implica un colapsarniento de la p'ósi- favor. Ellas abrieron para Odette, corno un utulo nobiliano . las puer-
ción de amable indiferencia, del quietismo de Swann. ubicable en el tas de un mundo de sueños que hasta entonces le estaba cerrado y
registro del impedimento en su posición ante el amor, y que inaugura donde se revistió de nobleza( ... )."
el segundo tiempo.
-colocó encima de su mesa de trabajo una reproducción de Céfo-
Después de tanta insistencia. Swann acude a visitarla a su casa. ra. como si fu era una fotografia de Odette. Admiraba .l?s º)~S grandes.
En esa visita aparecen dos elementos que quiero rescatar. por la impor- el rostro delicado . donde se adivinaba la imperfecc10n. ne1 cu.~1s . los
tancia que tendran después. mara\illosos bucles en que ca ia el pelo por las cansaaas mejilla~. Y
adaprando lo que hasta entonces le pareció hrerm.oso de mo.do est~u
El primer elemento está centrado en las flores favoritas de Odette: co a la idea de una mujer de verdad. lo transrormaba en memo: lis1-
las catleyas . variedad de orquídeas. que adornaban los jarrones de la cos que se felicitaba en encontrar todos juntos en un ser que podia ser
casa y que ella le muestra a él. Comenta Odette: ·uenen el gran méri- suyo( ...).-
to de no parecerse a las flores . sino de ser de seda. de satén. como
recortadas del forro de mi abrigo. - -cuando estaba muchos ratos mirando ai Boticelli. pensaoa iuego
en el Boticelli suyo que le parecía aún más hermoso. y al _apretar con~
El segundo elemento que rescato, en medio de toda una minucio- tra el pecho la fotografia de Céfora. se le figura que abrazaoa a Oderre.
sa descripción que hace Proust del encuenrro. es una taza de té. Oderte
prepara un té para Swann. té con crema. con un poco de crema. "una Un giro se produce y arranca a Swann de l~ c_omplacencia de su
nube", como decía ella. · indiferencia amable. de su posición de -eromenos . Y ese giro se ~ro:
duce en tomo a la mirada. Ya no es más Swann, todo ei idend.ficao? a
¿P6r qué rescato ésto? Por el efecto que produjo en Swann. Cuan- un cuadro. el que se propone a Odette. Esos ojos grar:des_.. sm bru:o
do Swann se marcha. y durante todo el día. no podía dejar de pensar oue hasta le producían repulsión cobran una dimens10n rus unta. .Ya
en lo e..xquisito de ese té. Se repetía a sí mismo: -¡qué agradable debe no son un par de ojos . son los ojos de Céfora. Odene entra como ?1en
ser tener una persona así que ie pueda dar a uno en su casa una cosa éice Proust. denu-o del universo estético de Swann . por esa miraaa.
tan rara como un buen té!-
?\os recuerda Lacan en la ciase del S/5/63:
Pero lo decisivo en el giro de la posición de indiferencia de S\varm. se
produce después de este episodio -que fue sin dudas su antecedeme- -;-.;o somos objetales -lo que quiere decir objeto del des.eo- sino
en la segunda \isita. •.\lli. miernras Odene miraba unos crabados. S\l.rarm como cuerno. punto esencial de recordar puesto que consmuye.~o
descubre que esos ojos sin brillo que 1.amo io habían impactado como un de ¡05 campos creadores de ia denegación apelar a orra cos.a. a aigun
rasgo desatrci.dable. se parecían a les de la Mura de Céfora. la hiia de Jerro. sustiruto que sLri embargo. siempre resuita en úl~o t~o. ~eseo
que Boticelli pintó en la Capilla SLxtina A partir de ahí. Oderte cobra un dei cuerpo. deseo del cuerpo del Otro y nada mas q:.ie aeseo ae su
la
vaJor insospechado hasi:a emonces. VaJe pena que lo leamos: cuerpo.
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Pero al cuerpo del Otro sólo se accede por partes, por trozos . Jo ¿Qué p~ecipita esa anf!usúa? ¿Se trata de Ja ausencia? ¿Se trata del
que Lacan llama ·1a tripa causal"_ Se apunta ali (a). objeto amable en poder perderla? Es justaii-tente en esa ausencia de Odette donde más
lo real, en tanto en sus envolturas imaginarias se incluye como núcleo se hace presente, donde más se patentiza un brtllo que por su ausen-
de lo real el objew.
cia encandila hasta el enceguecimiento, donde más se hace palpable
ta dependencia con quien en lo real alberga ese carozo de su ser.
Y aquí vemos un giro en la posición inicial de Swann. Cae como
"eromenós". como amado, )'"desde la dimensiórr de la falta apunta al Una reflexión. deLnan:ad.or:.lo. confirma: "q,uizá a esa angustia se
Otro en el cual busca el objeto. ¿Cómo se recorta ese objeto? Dentro debía la importancia que había tomado Odette para Swanrr. -
de dos temas que lo implican a Swa.nn: una obra pictórica y el tema bíbli-
co de Céfora. Temas que lo implican a él en tanto coleccionista de cua- Odette no está y se torna presente, colosalmeme preseme. angus-
dros y judío.
tiosamente presente. en la medida que una pregunta transila hasta la
conmoción en Swann. ¿Qué quiere? ¿No Je hago falta?
. ¿Quién es Céfora? Más allá del personaje bíblico. aparece en este
mismo Seminario de "La Angustia". invocado por La can. Céfora. Ja mu - La encuentra por la calle a altas horas de la noche y la imita a subir
jer de Moisés . aquelJa que salva a Moisés de la ira de Dios. circuncidan- a su coche. Odeue está adornada con sus llores de caLleyas en el esco-
do a su hijo y rozando con el prepucio separado ya del cuerpo de su hi- te. La mirada de Swann no puede apartarse de las catleyas. Si ames
jo. el pie de Moisés. Céfora revivida en Odette y que con esa libra de carne estaba apresado en la angustia. son las catleyas las que lo hacen arder
inaugura la posibilidad de la emergencia de un deseo. abriendo la en deseos. ·
dimensión de la falta. La Céfora con el cuchillo en alto. a punto de pro-
ducir un corte.
Le pregunta si puede acomodárselas porque están algo ilo_jas. Las
hunde entre sus pechos. le pregunta a Odette si puede aspirar el perfu-
No obstante. Swarm finge indiferencia. inventa pequeñas desilu- me de esas flores. oler alli donde precisamente no huelen. ya que son
siones que hacen temblar a Odette: busca que ella le confiese su amor inoioras. Oderte. algo desconcertada ante tantos miramientos consiente.
al tiempo que evita dar señales del suyo.
Swann sólo llega hasta alli. Pide disculpas y por más que Odette le
_ Su viraje en tor!ll) al posicionamiento ame al Otro dexo requiere dice que le gusta. sólo llega hasta allí. La escena se repite varias veces .:.
aun_de.otro paso_para que se plasme en toda su dimensión y ese paso Swann acomoda catlevas. las huele apasionadamente; Si Odette apa~
no es sm angusua.
recia vestida sin caLleyas. Swann con decepción comentaba: ¿hoy no
hay catleyas?
Es a partir de la angustia que esca historia de amor prosiQ:ue. a van- .
za. Swaun no se queda fijado a un tiempo comemoiativo. -adorando !...J.s c;;.t.ie\·as. esas flores que acompañaron ei primer encuentro con .
una pieza de museo. Es a partir de !a angustia que' se abre un tercer Odette en la -escena del te que lo conmovió por primera vez.. esas flores
tiempo en el cuai ei amor florece.
aue ei discurso de Odeue situó rnetonimicarneme ("parecen recona-
d;;s ciei forro de mi abrigo") pasan a constituirse en fetiche que se alza
Swann concurre como es habitual a la casa de los Verdurtn v con en ei mismo limite de la angusóa y como tal. revista condición de goce.
sorpre~a a~ene que Odene no está. Sobreviene una gran crisis de
angusna. Le meen que Oderre se marciló v esto lo orecioita a salir a bus- Condición que no deviene en carácter absoluw ya que~ fetiche
carla desesperad.amenre por las calles de Paris.
te y centro nocturno hubiera.
en
c~anto restauran- en lo real cae. es prescindido en la medida en que pasa a .tunc1onar
ciiscurs1vameme a rúvel metafórico para nombrar el acw sexual.
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Ya no se requiere en 1ci real la flor como sostén del deseo; sí a nivel . Irrumpen desmesuradarneme los celos: sWan.n se consume en una
discurs_ivo: "¿hacemos.catleyasT. Incluso Odette comparte esta propues- pasión que lo lanza a armar escena tras escena, escenas nunca del to-
ta: "Hoy me duele 'la cabeza: no hay catleyas". . do aclaradas por el autor. Los más IIÚ.Pirnos elementos se tornan en
·. .. · .~:·,,, ~_~::,.·· :· , ..:~:'.:.. ..t ,:'l'\ ·..
· indicios que un febril afán interpretativo monta la escena de los celos.
. Swann visita todos los días a Odette. se aparta de sus 'amigos y i:le
los vinculos.social.es·q11~-fr~~uentabcr. Seconsa:gra plenamente a: ado- Odette, acosada por las recriminaciones y dudas de Swann. man-
,.,.; rara Odette y a hacer catleyas. Con cuidado de no ofender a Ja ama- tiene un clima de enigma: dice. se contradice. confiesa algún que otro
da. deja en cada visita importantes sumas de dinero y joyas. Su vida episodio para luego mentir que ha mentido ... La atmósfera del tex'1o
cobra un nuevo senti~o que grafica la servidumbre amorosa. se torna asfixiame. sin salida. Incluso sospechas de lesbianismo caen
sobre Odette , sospecha que ella no confirma plenamente. pero tampo-
Joyas-dinero-regalos. ilusoria estrategia de procuración del bien- co las niega. ·
estar de la amada, vana pr~te.llsión de realización del bien del orro.
Swann desfallece consumido por los celos. atormentado por sú
Y sin embargo. esta aparente estabilidad se quiebra. Este mundo pasión. pasión que lo arraslra a \igilar a Odette día y noche . a espe·
artificial que le había y se babia forjado muestra su inconsistencia. Se rarla. a seguirla y que genera el malrraw de ella. retorno que alimen-
quiebra precisameme en lo· que se constituye como paradigma de la ta aún más su frenesí. La mirada de,·ota. adoradora de S\va.Im. se con-
necedad en la posición viril: el pensar el amor en términos de dar Jo que viene en mirada controladora. vigiiante. El sufrimiento de este tiempo
se tiene. pasional lleva al amor al limite de su deslizamiento al odio.
No por colmarla -y con holgura- en sus más ~inimos pedidos. le . Celos que enraízan un sufrir y que desembocan en el ociio. odio co-
aseguraban la penenencia de Odene al igual que los cuadros desuco- mo señal de la caída de la suposición del bien del otro. que es el del suje-
lección. Así como sonreía. dando por falsos los recuerdos que se le pre- w. señal de la puesta en juego de la radicalidad del otro sexo como
sentaban sobre los rumores que se decían de Oderte cuando la cono- "héteros·. Tiempos de -hainemoration-. odiomoración. donde el odio
ció. su sonrisa se quebraba cuando la entrega de dinero le abría una se parenúza como desembocadura de la pasión amorosa. ·
pregunta: si ella lo acepta, ¿no es· una mantenida? ¿Entonces eran
ciertos los rumores?_ Y sin embargo esra historia sin salida. se resuelve muv bruscarnen-=
te. Oderte, acosada por la vigilancia y las escenas de cel¿s se au~nta.
La misma condici?n que dió inicio a la relación: -mujer de la que Se debilita la pasión de Swann y allí mismo. cuando la pasión se atem·
se pueden conseguir lavores· se toma en el mavor de los obstáculos. · pera. le ofrece casamiento . y no sólo para dar su nombre ai embarazo
¿Para quién se arregla cuando yo no estoy? - de Odene.
Entre preguntas sin respuestas y esbozadas sosoechas. se abre a Ss el duelo por la ilusión del Uno aue la fusión de la \·e:-:::e:1te ima·
rravés de los ceios una rerceridad en la relación duai.que-sufrirnien- ,jinaria del amor reclama. el aue disoi~·erá el oretendido saber sobre el
ro mediante- reafirma aun el deseo en tamo que al tiempo que intro- bien del otro. reílejo del Bien.Supremo. del gian eromenós.
duce la pregunta acerca del goce de ella. rubrica su prop.ia fcilta.
Y este duelo no se constiruve -ai menos el hisrorial así io presen-
Swann cae en desgracia dentro del circulo de los Verdurin cuando ta- aislado de la mediación d.e la metáfora paterna que atempera la
éstos toman conocimiento de sus conexiones con la aristocracia. No pasión aniquila.me y lleva al amor al plano de lo vivible ... lo neurótica-
es más invitado a las veladas\' aoarece en escena M. Forcheville. con meme \ivible.
quien_O~eue ilinea. . · ·
106 107
_:_Alli donde se desapasiona; se casa. Casamiento que promueve un . ELjaLo y -eL objet() a.··:
escándalo social, que generó que se le cerraran todas las puertas de sus
círculos habituales. Casamiento que lo arroja en un quietismo aletar- A.NALÍA STEZOVSKY
gado, pero que hace que ya no esté solo, que hasta pueda construir un . .
mundo para ella donde él pueda transitar los tiempos de su propia ·
metafortzación. -Agape frena la: vertiginosa carrera.de. "&os". ASwann
. le queda un amor tolerable y caminos del Eros con alguna esporádica
amante o algún prosóbulo de moda. '·
l 10
Y relata una e..\.-periencia personal en una calle desierta v descono- lo. éste también desaparece por las características propias de la cópu-
cida de una pequeña ciudad italiana. Vagaba por estas calÍes cuando la y finalmente termina por sufrir la detumescencia. Si el falo no es-
se_da cuenta que fue a parar a un barrio de prostitutas ya que sólo se tá, y éste es el punto de angustia, yo puedo ser llevado a ocupar
ve1an, asomadas a las ventanas de las pequeñas casas, mujeres pin- ese lugar con mi ser. Si el falo aparece como -qi, la castración ya se pro-
tarrajeadas. · dujo , "este menos, dice La.can. se presenta en el campo de la conjun-
Freud se apresura a emprender la retirada pero vuelve. n~ una vez ción sex'Ual, en tanto que constituye el campo del Otro corno falta·. Es
sino tres veces a encontrarse en el mismo lugar. dond.e.va..comenzab.a esaJalta.lo que el sujeto. puede.ser llamado a colmar..
a lfama:rla atención. '
Se apodera de él una sensación de siniestro y respira aliviado cu~ Las últimas clases del Seminario X están dedicadas al objern excre-
do finalmente logra encontrar la salida hacia la plaza del pueblo. mencial y su relación con la sintornawlogía y el deseo en el neurótico
obsesivo. ·
¿Qué es esta sensación de siniestro al retornar siempre al mismo
lugar. no pudiendo encontrar la salida? ¿Por qué dedicarle toma mención a es[e objew en un seminario so-
bre la angus[ip.?
¿Acaso no r:os enseña La.can que lo angustian te es justamente la Es porque el a excremencial es un objeto que sin•e panicularmen-
a..11enaza d~ ~'?!ver a ese tiempo primero. tiempo de goce?; angustia te por uno de sus tiempos para simbolizar la castración.
ante la posibilidad que la castración no se produzca. Es a nivel anal donde el sujeto tiene. por primera vez, la ocasión de
Nuevame_~te debemos remarcar que la castración de que se trata íeconocerse en algo, en un objeto alrededor del cual gira la deman da
es la castrac1on del Otro. ¿castrado de qué?. del sujeto en tanto pro- de la madre.
puesto como falo. Es entonces por intermedio de la demanda del Otro. representado
en este caso por la madre. que el excrememo entre en la subjeti\'ación .
. . Veremos ahora qu_e sucede en la situación puntual que es Ja rela- Habíamos dicho que el recorte del objeto lo producía la demanda del
c10n sexual. en relacion al falo y al punto de anciustia. En la clase del Otro.
5 de junio de 1963 del seminario de La Angu;tia. Lacan plantea lo Es una parte del cuerpo que se debe retener por cieno tiempo y
siguiente: · luego soltarla, pero se suelta a pedido: esta demanda hace que el e.-xcre-
; "Que el falo no se er:cuentre allí donde se lo espera. allí donde se mento sea valorizado y elevado a la función de pane. pane del cuerpo
lo exige. ~saber. en el prano de la mediación genital. esw explica que \'alorizado porque satisface la d~rnanda del orro. Es así como el e.xcre -
l~ angusua sea la verdad de la se.irualidad . es decir. lo que aparece ca- mento asume.la función de agalma, (Agalma es una palabra griega que
ª.ª vez que su flujo se rer:ira y muestra la arena. La castración es el pre- significa adorno. envoltura. manera de presemar algo pr~ioso).
~10 de .esa estructura. se_ sus muye a esa verdad. Pero este es un juego El ae:alrna en sí. nos dice La.can. no es concebible sino en r-elación
uusono : 1:1º hay _castrac10n. porque en ei lugar donde tiene que produ- con el fálo. con su ausencia y con la angustia fálica. Pero es en tamo
cirse. n? nay objeW !?ara casrr-ar. Para eso ha.ria falta que el falo esru- que simbolizame de la casrración (un pedazo del cuerpo que se despren-
'\1era allí. Pues bien solo está allí para que no hava anO"ustia ". Hasta aquí de). que este a excremencial toma esa función.
la cita. - ""
Veamos cómo lo dice Freud en "La trasmutación de los instintos
Entonces. en_ la relación ;;e.::u_
al el falo aparece como falta, es por es- y el erotismo anar.
to que la angusua es la Yeraaa ae la sexualidad. nos dice La.can.
Pareciera ser entonces que en ia relación sexual el falo es necesa- -En el hombre se hace mucho más uerceutible oa-o frae:memo áei
rio como mediador. Si el faio no está. y no está en princiuio uoroue ni oroceso aue sure:e cuando la investigación ~ex-ual del niño le lle\.-;:¡ a
a
eUa lo es ni el lo tiene. Pero aun ele,·ando el pene la caieg~ria de fa- comprobár la íalta del pene en la muj-er. .
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. El pene queda a.Si reconocido como algo separable del cuerpo y rela- El don es en la relación sexÚal una metáfora. Es justamente de la
cionado; por analogía. con el e.xcremento, primer trozo de nuestro cuer- esfera anal que está tornada esta metáfora del don.. .
~ al que tuvimos que renunciar. El antiguo desafio anal entra de este Para el niño el excremento es un regalo. un don de amor. Pero si el
n-.odo en la constitución del complejo de castración". · objeto e.xcremencial en su tiempo de evacuación simboliza al falo en tan-
to que pérdida. vamos a ir entendiendo por qué el obsesivo retiene.
En_ este. textu f re.ud. afu:ma. que. eL e.'CCT.emento es eL primer regalo. El obsesivo retiene-para tener eso para dar, porque-si lo diese-ya· no
:;tl'antil. En este regalo el sujeto se reconoce. Pero dada la índole del obje- le quedaría nada.
tf.> éste es al mismo tiempo admirado y desaprobado. Una madre po-
drá decir ·¡Qué linda caquita! pero no permitirá que el niño lo mani- Esto nos introduce de lleno en el deseo del obsesivo. Los deseos del
fieste ni tern~a ningún contacto con ella. Para eso está la témpera. la obsesivo son deseos imposibles. haga lo que haga para realizarlos. no
:;!astilina. la arcilla. etc. lo consie:ue.
· Este objeto. en esa primera relación con la demanda del Otro, es él ¿Por~qué es[a relación tan particular del obsesit:o con su deseo?
'.'no debe ser él. y sobre todo no es de él ya que al darlo no sabe adon-
". e va a parar. La educación del aseo da la iunción de retener y esto establece la
Si lo da no sabe dónde va a ir a parar. pero no sólo eso. si lo da ya estructura fundamental dei deseo anal.
:-:o lo tendrá más para darlo .
De aquí surge la ambivalencia obsesiva. El a es la causa de esa Para e:-..-plicar el fantasma. el deseo. el punto de angustia en la neu-
ambivalencia. es mío. pero sin embargo no es mío. El sujeto obsesivo rosis obsesiva Lacan va a trabajar con tres términos.
se constítuve como ambivalente en relación con la demanda del otro .
Inhibición
Habíamos dicho que la angustia surge ame el deseo del Otro . Para Deseo como defensa
cubrir el deseo del Otro. para evitarlo. el obsesivo recurre a su deman- Acto
da. Necesita que el otro le demande y lo autorice.
En la medida en que el evitamiento del obsesivo es la cobertura del Veamos como se definen y como se aniculan.
deseo del Otro por:la demanda. el objeto como causa, el a. se sitúa allí
donde la demanda domina. justamente en el nivel anal. donde a es el La inhibición la define como la introducción en una función de otro
excremento que cobra su valor en tanto que es demandado. deseo. diferente de aquel que la función satisface de manera narurai.
El objeto a. en relación.con el deseo, cumple la función de causa. Y es aquí donde se intrcrduce el concepto de deseo como defensa.
A nivel anal. el excremento es la causa del deseo. del deseo anal. ya veremo~ de qué. .
Pero. podriamos preguntarnos ¿por qué toda la importancia del obje-
to a excremencial no oueda reducida al inrroducirse la dimensión dei El acto sería una acción en tanto se manúieste el deseo rrüsmo que
deseo se.xual? Es exactamente porque este objeto puede simbolizar. en habría estado destinado a inhibirle.
su tiempo de e\'acuación. en el estadio fálico. al falo en tanto que pér- En Ja medida en oue se manifieste un deseo podemos decir que en
dida. desaparición. el acto.es un corre: el. sujeto deseame implica uñ corrimiento. despia-
Habíamos dicho anteriormente oue la no presencia del falo en la rela- zamiento del sujeto del lugar de identificación al objeto que completa
ción se.xual es el punto de 2.ngustiá. El falo no está presente y el órga- al Otro ..
no a rravés del cual el hombre está en la mujer es un órgano caduco . Emonces decimos que en el obsesivo los deseos se ma.niiiestan en
la
detumesceme y del cual está casrrado por misma relación sexual. su función de defensa. en el piano de ia inhibición. El deseo anal. deu-
En esta relación. en la relación se.xual ni el hombre ni la mujer dan nido por el deseo de retener v cenrrado sobre un objeto primordial: el
nada. .. escíoaJo. Pero ¿por qué y de qué se defiende el obsesivo? .
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Por un lado, y esto se manifiesta en sus .síntomas, que es donde .
·busca ·reencontrar la causa de todo este proceso: se defiende porque El shofar y la voz
encontrar esa causa es encontrar ese objeto abyecto, ridículo. .· _ -
Es por esto que su búsqueda queda en suspenso, gira indefinida- ROSA FuR.'\1Ai'1
mente y se-manifiesta en el síntoma fundamental de la duda, que mar-
ca a todos los objetos de sustitución aplazando el momento del acceso
al objetO' último que es:· un excremento. Este es el punto de angustia ... ·
Por otra parte para explicar el deseo como defensa hay que intro-
ducir el a en el nivel del deseo genital, dando su posición central al de-
seo sexual. ·
La función de a en el nivel del deseo sexual se simboliza por-<¡>. Ese
agujero central. que confiere a la angustia de castración su valor pri-
vilegiado. en ese mismo lugar de la falta de objeto entra a jugar en el
obsesivo ese otro deseo. Es aquí que el a excremencial, causa de rete- Vov a trabajar alcrunas clases del Seminarto X. que se sitúa crono-
ner. torna el valor de tapón. de a como objeto del don y retiene al suje-
to en el borde del agujero castrativo.
lógic~ente entre et'Seminario de La Identificación y el de Los Cuatro
Conceptos Fundamentales. . · .
En la última clase del Seminario de La A.ngusna. Lacan anuncia
Si de lo que no quiere saber nada el neurótico es de la castración. que su próximo Seminario será el de Los Nombres del Pa~e. Este semi-
de Ja castración del Otro. el obsesivo se detiene allí. ya que si hubiera nario concluye en su primera reunión. dado que el conflicto con la IPA
castración se caería del lugar de completar al Otro. eclosiona ese año desautorizando el Seminarto de Lacan corno modo
Habíamos afirmado que el sujeto. en el mismo movimiento que lo de formación de analistas.
constituye y que barra al Otro. va a constituir su fantasma identifi- Es en ese momento que Lacan resuelve suspender su Seminario y
cándose a ese objeto que se desprende y así intenta volver a comple- tiempo después. en 1964, funda L' ~ole Freudienne de Paris.
tar al Otro.
a
y cada uno. se propondrá en ese lugar de acuerdo la o las espe- Al aforisrÍio freudiano de que la angustia es sin objeto, Lacan va a
cies del objeto donde está fijado.
oponer que la angustia ño es sin objeto. . .. .
El neurótico obsesivo lo hace a.st con las características que con- Al'avanzar en la especificidad de ese objeto, en relac1on al cual
diciona fundamentalmente el objeto excremencial. ·
Freud había abierto la sene con el seno. las heces. el falo. Lacan agre-
!2:a la mirada v la voz.
- De la lineá.lidad evolutiva propuesi:a por Abraham,
Referencias bibliogr~fica.s
J. D. Nasio. -El magnifiro niño del psicoanálisis·. lo saca y lo presenta bajo la forma del grafo. donde se rompe la noción
de progresión. ·
S. F'reud. Obras rompieras.
116 117
falo La egipcia es una religión pptica. La relii°ión judía es una religión
acústica.
. Entonces dado que Lacan, a nosotros psicoanalistas, para hablar-
nos de la voz se sirve del Shófar. deberemos hacer un rodeo sobre Ja
historia de los judíos.
LaTorá:escrita:que Dios-le errtrega a Moisés es la condensación del
anal_ espíritu del Pacto en acción.
mirada La historia hebrea comienza con la emigración de Egipto a Canaán
v es en ese retorno a Canaán que sucede el hecho más memorable de
Ía historia judía, porque en su marcha a través del desieno fueron con-
ducidos al Monte Sinaí. v allí recibieron los diez mandamiemos.
Los cinco libros que penenecen al .-illtiguo Testamento son:
oral - Génesis
,, voz
- Exodo
- Levítico o Deuteronomio
De este abanico de especies de objeto a. trabajaré la voz. - Pentateuco
Lacan para hablarnos de la voz se sirve de un instrumento: El sho- - Deuteronomio
far. y con .respecto a_ los objetos a. nos dice que cada uno es generador En esa Lev hav enseñanza. También se hizo Ja transmisión oral de
y correlauvo de un upo de angustia. y anuncia que a través de Ja mira- ia Torá que sé llama Mishná y la interpretación de su lectura que es el
da abordará el oído. \1idrash.
Lacan desarrolla en todos esws niveles cuái es la función del de- El pueblo elegido hace constantes esfuerzos por diferenciarse de
seo y dice que no se pueden separar. las culturas idolátricas. La religión judía se caracteriza por la ausen-
Hace una critica del post-freudismo y se va a detener a hablar de cia de imágenes corpóreas. En el Antiguo Testamento hay prohibición
Theo~ore R_e~_que e.sel autor de numerosos trabajos que Reik llama de idolatrar imágenes.
d.e Ps1coanális1s Aplicado. Se refiere a los trabajos que hizo sobre el Lli. palabra escrita u oral tienen lugar de privilegio. Es por lo tanto.
ntual Y que aparece publicado en el Intemational Journal en !macro una religión acústica.
en ~ 919. acompañado por _otros trabajos_ Años después, el autor ya
radicado en los Estados Urudos. publica en inglés una de esas traduc-
·y Jehová dijo a Mózsés. escribe tú esras palabras que por el dicho
c10nes a la que tenemos acceso . de esf.a.s palabras he hecho Pacto contigo y con Israel" (Exodo X\..'CTV, 27)
.Freud p~olog~ ~l texto de Reik en 1919. y lo consideró ·como lo .El judaísmo entonces no es una religión óptica. no otorga ninguna
~eJor en el area_ ae1. ~sic_oanálisis Aplicado·. Lacan, quien encuenu-a \isión de Dios. pero hace que oiga su \'OZ y su voluntad. es d~ir que
1mpr~?1an:eme milizaaa esta calificación. lamenta que -l.a.l brillo \' susoendelaiconogra.fia .
fecun01dad no ttrnera."1 la prosecución que merecían. · . Yes de la palabra escrita que nace la palabra de Dios. que crea ia ley.
Reilc en la may~ria de sus trabajos despliega un amplio material La estructura oral de la transmisión ya ia encomramos en el pacto
de con?crmemos soore co~rumbres y mitos de pueblos primitivos. con original (de Abraham con Dios). Palabra de Dios que se hace oir.
un estilo atrayente. e.-..::cesrrn para un Freud que lo reorenclia en sus -El deseo auarece en los suierns desoués de ia orohibición.
Cartas por SUS ·desviaciones" hacia la literatura V encara el intento de No hay pos1Dilidad de que Adán sea pecador antes de que Dios di-
interpretar p~ico~ali~~eme iln .objeto que c~mo el Shófar gozaba ga: "de este árbol no comerás~_
de un lugar ae tal prrvueg.ro en los nruales judíos. - Adán v Eva en el oaraí.so tenían todo. entonces entrar en ei camoo
La religión judía hace un interno de adorar a un solo Dios. de la ley és entrar en. el campo del deseo. .
118 119
¿A qué a2UP.taestaley? Esta lev apunta a_la..prohibición del incesto. nos o personas respetab~s. en una oración silenciosa. Silencio que
Lacan dice algo interesante respecto de los diez mandamientos. remarca la posición del o nte al oído. ·. _ · ·
Dice que pueden ser tomados simplemente como una metáfora de Tocar el Shófar para lo religiosos es un ritual que comprende. varios
la prohibición del incesto. elementos simbólicos: ·
"No desearás a la mujer de tu prójimo" y ¿cuál es tu prójimo más
próximo? Tu padre. lf Despertar al pueblo para la reflexión
MHonrarás a tu padre y a tu madre". Es también prohibir el incesto. 2) Anunciar lalleg.ada.delañ.o. Nuevo
Ef pueblo elegido usó fa transmisión oral de la Torá por varios siglos. 3) Declarar la Fe en el futuro sonido del cuerno, que anunciará el
Dios habló a Moisés v éste descendió del Monte Sinaí cuarenta días advenimiento del tiempo mesiánico.
después , y dió a conoce~ al pueblo lo que había oído.
El pueblo sólo oyó una voz fuerte. pero no distinguió palabras. Con el Shófar se reclama renovación de la vida.
"Oísteis una voz, pero no visteis figura alguna". (Deuteronomio V, Estremecimiento. pero optimismo de fiesta.
20). Según la liturgia antigua. diez dias antes de la Teshuvá que es el
Sólo una voz. No se han dicho las palabras. final. es el Rosh-Hashaná. Comienzan a tocar el Shófar treinta días
"Sólo Moisés oyó las palabras y las informó.. (Deuteronomio IV, 12). ames a Tishri durante el mes del Elul. Es decir. que el elemento sim-
En Ja clase del 22 de mayo hay una cita que hace Lacan: -He aquí que bólico sigue pero ha cambiado el ritual.
yo vengo a ti en una nube espesa para que el pueblo oiga miemras hablo El primer día de ese mes, subió Moisés al Monte Sinai. acompaña-
contigo y también para que te crean para siempre" (Exodo XIX, 9) . do por el sonido del Shófar. Dije que estuvo ahí cuarenta días . Son Jos
-... Y dijeron a Moisés. habla tú con nosotros y nosotros oiremos pero diez días de Teshuvá, que se cumplen el diez de Tishri en lorn Kipur.
que no hable Dios con nosotros para que no muramos" (Exodo XX. 19). día de la gracia del perdón.
Y dice La can: -oe esca voz se traca. un sonido profundo y sin inter- Tomo otra cita de Lacan: "Ningún insuumemo. por grave o retum-
valo- ... "Voces y relampagos· ... -como el trueno y el fuerte resonar de bante que sonara su voz, lograría llegar al corazón del judío con la mis-
las trompetas". ma efectividad con que llega a ellos el toque del Shófar. sonido pecu-
Sólo la voz. la voz de Dios, ninguna palabra. liar, estridente. falto de armonía_ .
. Pero, ¿qué es el Shófar? ¿Qué nos dice Lacan en el Seminario de Ja M¿Cómo se explica.que esa voz surgida de un cuerno dé camero. ten-
Angustia? ga la virtud de sobrecoger a los oyentes. llenándolos de una emoción
· .. ."Es un cuerno. trn. cuerno por el que se sopla y que deja oír un en la que se mezcla el temor y la esperanza?"
sonido. que seguramente. no puedo sino aconsejar. a quienes no Jo "Es un símbolo y éste y el sonido van enlazados ...
hayan oído que en el reconido ritual de las fiestas que siguen al Año En el campo más limitado.del presente. el Shófar sirve- de heraldo
Nuevo. fiestas que terminan el día del Gran Perdón, se procuren su al año nuevo y toque de clarín a las conciencias judias."
audición" (clase 22-5). La razón principal para tocar el Shófar es inducir a la geme al arre-
El judío no ignora el pecado original. Ora en Año Nuevo en señal de pentimiento.
arreoemimiento. Dice Maimónides: -aunque soplado es mandato bíblico. hay allí
El sonido del Shóíar tiene tres modalidades: involucrada una sugestión que reza: Despierten durmientes . contem-
plen vuestros actos y regresen arrepentidos. -
1) un sonido iargo y sostenido que se llama Teki'ha Esta inducción al recoeimiento en la lev. termina ocho días des-
2) tres sonidos sucesivos que se llaman Shevmim pués del Día del Año Nuevo en el Día del Perdón.
3) un sonido que se divide en nueve: Teru"ah · En su final se escucha nuevamente. pero por única vez su sonido
será señal de júbilo. .
Tocar el Shófa.r es un arte. no lo toca cualquiera En general los rabi- ·. El cuerno de carnero aparece en la Torá por primera vez. en el
120 121
momento del pacto de Abraharn con Jehová. Cl.lando el Angel detiene después del Pacro lo que marca la linea di\isoria -entre Goce 'de Dios y
su mano filicida. sus ojos descubren a sus espaldas un carnero traba- Deseo de Dios. Los dioses piden.sacrificios y no se angustian.
do en un zarzal por sus cuernos. · El pacto de Abraham con Sadday, "Berit Miláft (Pacto de la circun-
-- "'Y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo.· (Exodo XXII. 13). cisión) es el signo de la alianza del pueblo_ Se hace sobre el órgano de
goce, ese pedacito de carne cortado, esa libra de carne caida. es el
El cuerno será privilegiada. y s.nporta.Iá.múlíiples. sentidos.a lo.largo pequeñoª" . . _ . .
de todo el texto >":•·';.;;,;·~= · ~-, ... ·· ; .:~ ·~ Vemos como la ley le llega al 5 a través de la palabra del Otro. El
¿Qué sentidos adopta el sonido del Shófar? Shófar indica entonces pre-ley y post-ley.
La voz es una forma de objeto a. Jo cual implica algunas vueltas.
1) como llamado de Dios a su pueblo El a son pedazos del cuerpo del Otro. A su vez. el a. es producto
2) en señal de júbilo del entrecr'uzam~ento de lo~.r~~ r_eg_is_~~os.: -~~9._o. - --
3) en señal de castigo
está detenido el$ que nos consulta. Este objeto a no es especulariza- el Padre Real, que imaginarizad~ ~~mo Padre arbitrario de l~- Horda,
ble y ~gustia nos señalará el lugar de fijación del objetg. · : '. ·guarda para sí todo el goce. :. ··
Es porque el Otro me habita que hago sin~ (El Elohim. que nos Debemos entonces diferenciar lo que es fa función que es estruc-
habita). . . . . . . : turante, de cómo funciona en la historia para cada uno de nosotros.
a
e . ,. •. • • • ,• , • •
. 'Cuando aparece un anali.iallte la consulta' si le preguntáramos Es el Padre Real. el del bramido, el que Lacan ubica como agente
frente a sus síntomas ¿de aué sufris?, del Otro seria la respuesta. Es- de la castración. Decía entonces, diferenciar la función y agente de la
to quiere decir que err eI síntoma hay siempre una referencia al' Otro castración y-el objeto voz- que-viene del Otro·..
(diríamos que habla el Otro pero el Z encuentra el significante que lo La función es de corte y la tienen el Padre Real y el Padre Simbólico.
represénta. el S 1). La _relación al Otro reenvía a la voz, o sea que es .ese objeto que
Cuando un Z nos viene a consultar no viene en esta posición: SO a · viene del Otro.
(fórmula del fantasma). Sino que llega en esta posición: El bicho humano está marcado desde el primer momento de su vi-
da por la mirada y la voz del Otro. Los sujetos tienen fijación a distin-
tos objetos. En el caso del Hombre de los Lobos era a la mirada.
La lengua es materna pero la voz es del padre. En la \'OZ hay incor-
A poración. operación primaria de incorporación de Jo Real de la voz.
a La introyección es lo simbólico de Ja voz y la proyección es lo ima-
ginario. Al padre primordial se lo incorpora como voz ..
Si observarnos un bebé. veremos y escucharemos cómo el chico
juega con la voz (laleo) y el tono.
Viene ubicado corno qQjeto a del Otro, a la deriva del goce del Otro. La voz del padre es la que lo va a apanar de la demanda pulsional.
Está coagulado en esta posición. En el proceso del análisis deberá En un análisis debernos interrogar este lugar más allá del padre.
pasar de la posición de objeto de la pulsión a objeto causa. Esto se lle- Lo Real del Otro es un goce. recordemos que los dioses DO se
vará a cabo si a través de la interpretación separamos al S del Á angustian.
El objeto a. en tanto mirada y en tanto -voz son muy importantes; En este punto me queda recordarles algo sobre el Shófar de Reik y
ya que:a parttr de él, el bicho humano constituye su fantasma.. comentarles cuál es la critica que le.hace Lacan al articulo.
El chico escucha La voz y no entiende qué diablos le quieren decir. Freud además de prol0gar este texto, se carteaba con frecuencia
Eso es lo Real: la voz sin sentido. con Reik y a propósito de este trabajo. el dia 11 de julio de 1919 le
Se oye la voz sin comprensión dela palabra, igual que cuando escu- escribe esta carta: ·
chamos un idioma extranjero que desconocemos.
Siempre queda un hiarus entre lo que se dice y aquello que se quie- "Querido Doctor: el articulo sobre el Moisés que acabo de leer es muy
re decir. En el hiatus está la posibilidad del deseo. ingenioso y ·convincente ..Sin embargo puede conducir a un malenten-
En los religiosos el cuerno funciona como un sonido que está expli- dido. Uno podria llegar a creer que hubo en orro tiempo una revolución
cado por un simbolismo recordatorio: da una explicación al rito pero del hijo en la que Dios-Padre fue susútuido por el Dios-Hijo. C:sto me
hay algo más abi. parece imposibie. porque el totemismo es por entero una religión Padre
Lacan intenta con el Shófar incluir un sonido sin significación que y las religiones hijo sólo comienzan mucho después de haberse esta-
conserva lo Real de la voz. que implica un pacto. un goce. . blecido la_9eidad antropomórfica y cuando sólo quedan rasrros del
La voz tiene do_:u:eui_Qltes: la de la lev v la del Superyó gozante: totemismo. En consecuencia se deduce que una religión mucho más
·Por eso el Padre Terrible pone un orden a las cosas. limita. separa pero tardía del hijo fue. por así decirlo descolocada regresivamente hacia
al mismo tiempo es arbirrario y gozante.. . . adelante y formulada en el lenguaje totémico. Todas las demás cosas
El agente de la casrración. para Lacan. no es el Padre Simbólico. sino son válidas. Además yo no incluiria que el cambio del toro por el cor-
124 - 125
dero representó un cambio de tótem. Dichas cosas son totalmente Reik. pone en juego toda la escena totémica y hace que el Shófar
injustificables. Es probable que haya habido una condensación de los sostenga una múltiple condensación.
mitos de dos tiibus diferentes. Esperando tenga un buen verano. Suyo. Otro punto es la interpretación que hace del sacrificio de Isaac que
Freud." Abraham interrumpe a pedido de Jehová.
El holocausto del carnero en lugar de Isaac arroja aquí toda su
ELartículo.sobre d Shófar escrito por Reik fue-publica:do tr-es a cua:- similitud.
tro años d.espués que Freud escribiera "Tótem y tabú". Presumo por lo El Bull-Roaer era para las tribus salvajes el instrumento apropia-
tanto Ja influencia que habrá tenido sobre el autor para confundirlo. do para imitar la voz de Dios.
Este desarrollo no pasa de lo introducrnrio. anecdóticov carente de sus- Dice Reik que el Shófary el Bull-Roaer serían para el caso dos ins-
temo. Sin embargo. destaca Reik. el lugar de este sonido particular. la trumentos que sonoramente rememorarían los deseos inconsciernes de
escucha producida. la influencia que ejercía la historia que generaba. muene contra el padre. la escena de su muene. el arrepentimiento a
Todos los escritos de Reik tienen esta característica. la particular que es llamado y la retaliación.
relación de Reik con la palabra de Freud. A lo mejor será éste el cami- El tercer movimiento que realiza este trabajo es promO\ido en su
no que. de seguirse en la obra. apasionante sin duda. permitirá res- interpretación. por el análisis del Moisés de Miq:uel Angel. Se deuene
ponder a la preguma que se fonnula Lacan: "¿cómo es posible que nin- sobre la estarna y resalta que los cuernos que asoman en su cabeza le
guna barrera detenga a Reik en su análisis y finalmente le impida id en-. permiten disparar toda la escena del ?-.forne Sinaí. ·en la cual Moisés
ti.ficar a Yahvé con el Becerro de Oro?" (Seminario de LaAngustia 22-5-63) habría dado muene a Jehová y tomado sus atributos. El cuerno sería
Sus primeras proposiciones parten de una contradicción aparen- el sopone de una identificación con la deidad por el recorrido que hace
te en los dichos bíblicos. el autor y los cuernos y la piel de carnero sobre sus hombros. para
En el Monte Sinaí. Dios impone su prohibición para el ascenso. mostrar su desembocadura en el Talet (manto que usan los ,·arones reli-
hasta que el pueblo no escuchase -r..as trompetas". ¿Que tocará quién? giosos). serían sus residuos.
A la vez suenan a rndo lo largo del diálogo con Moisés. ~ Sigo el comentario de Reik: Moisés se apropia de los atriburns divi-
¿Cómo puede este horrible sonido ser compatible con la escucha del nos y aterroriza al pueblo como Jehová Jo aterrorizó a él.
interlocutor? ¿Quién sopla el instrumento? Y responde Reik ~: ..Todas "Es up. Dios-Hijo que mató a un Dios-Padre y que al bajar del Monte y
estas contradicciones pueden ser solucionadas si asumimos que el soni- destruir al Becerro de Oro. hacerlo polvo y dár:>elo de beber a los judíos.
do del cuerno es la voui.e Dios. La identificación de la voz de Dios en el realiza una doble destrucción de este último. el Moisés se mara a sí mis-
sonido del cuerno es el residuo de antiguas religiones totémicas en las mo para purgar su asesinato. pero de tal manera que repite un deicidio".
cuales el carnero. toro o animal similar eran deidades. La construcción
que encuenrra en Tótem y Tabú, le permite formalizar aquí que la reli- Vuelvo a la critica que hace La.can al texto de Reik situada en un
gión. en el parricidio de aquel Padre Terrible. su rnuem. da lue:ar a dis- marco de eiogio y respeto . pero lo consideró inconducente en el mane-
tintos caminos identi.ficarnrios. Presemificar el Dios totémico pu~e darse jo analógico dei simbolo.
por el camino de la voz. en el caso de los animales. la danza. el mugido. La voz es algo propiamente vocal. acto emitivo. por eso es e.iemolar
El rabino sopla el Shófar en las íestividades religiosas para procla- el Shóíar como instrumento de presem.ación del lue:ar de ia voz. Voz..
mar su identificación con Dios por imitación de su voz. como los inte- cuva íunción esoecilica es hacer recordar el oact:o del oueblo elee:ido
grantes del clan hacían con el mugido de su animal Tótem. con Dios. como forma de renovación dei mismo. . -
Dice Reik: "El severo silencio oue cae sobre la corutree:ación duran- -¿Pero quién tiene que recordar? - ciL.--á Lacan-. ¿Por qué pensar
te el soplo deLSbófar... corresponde a la confesión del crtmen cometi- que son los fieies . ya que justamente acaban de pasar cieno tiempo de
do y a su e."'Cpiación." reco!ÚIIliento alrededor de este recuerdo?
De ésto se trata en el ritual de Año Nuevo. Este es el arrepentimien- Esta \paz de Dios se nos apai""tte e~ forma separada y que recuer-
to que está implícito. da a Dios mismo. a aquel del pacto. con su mandamiento y deseo.
126 127
bilidad- se articula del Otro. que cubre la angustia. Si nuesu-a fórmu-
Estamos en el campo del Otro. ¿Cómo intervendrá?-se pregunta La- la es correcta. algo como el deseo del .o tro debe estar aquí interesado-.
<::an- este objeto por su cara por fin revelada bajo su fonna separable?"
Es desde el campo del Otro. que recibe el$ su mensaje en forma
:nvertída. que tiene que ver con su propio Otro.
Para el$ que se está constituyendo es del lado de una.voz. des-
prendida de lo que soporta. donde debemos buscar ese resto.
En los instrumentos de viento es el vacío el que determina que se
tmita tal o cual sonido. El sonido depende de un vacío y en el caso de
1a voz ese vacío es del Otro. No hay garantías de la propia voz y eso se
debe al Otro.
El significante opera en el campo del Otro y la voz ahí es un resto.
i::ntonces ¿qué será ahí el Shoíar? Será. pues, productor de la voz y la
·;oz misma.
"El Shófar modela el lugar de nuestra angustia. pero observémos-
:n. sólo después . que el deseo haya tomado forma de mandamiento.·
Este es el punto importante. el sonido del Shófar puede inducir-
nos a la culpabilidad o al perdón como instrumento para paliar la
angustia. introduciendo un primer orden diferente lo que de encuen-
tro con el objeto causa. ex""j)lica el sentimiento de culpabilidad.
"Lo dicho primero decreta. legisla. aforiza. es oráculo. confiere al Otro
Real su oscura autoridad· (La Subversión del Sujeto).
En ese Real del Otro. el religioso asume su Dios. Bibliografia
El que asume la religión es un Otro sin barrar. El neurótico se engan-
FREUD . Si!!mund. Obras Completas .
cha con esto porque no quiere saber nada de su propia castración. Prólogo del texto de Theodor Reik. "E! rilual".
Angustia es aquella que no engaña. De lo que hay certeza..
Indica .no :sólo que el objeto está presente, sino ante el deseo del Nuem Biblia de Jerusalem
Otro. Dijimos que aparece la angustia cuando algo en la i:_elación al
objeto está en juego, y en referencia a la.voz y su articulación con la BARYLKO. Jaime. Celebro.cionesjudaicas.
Usos y cosrumbres de! pueblo judío.
angustia emergerá. cuando eso Real de la voz que es solamente soni- De Adán al Mesias .
. rlo. se juegue en un punto en que no se sabe qué me quiere el Otro. en El .\fidrash.
el punto dónde como con la Mantis se está a merced. a signykado ae la Creación.
En tanto algo de la casrración no está jugado es que aparece el pun-
to de angustia. -:-REPP. !.eo. Una hi.swria de la e\perienC:ajudia.
Entonces lo Real de la voz corresponde al sonido sin sentido y lo que rRO:'v1M. E. Y seréis romo Dioses.
angustiaría ahl al Sujeto es estar a merced del goce del Otro. o algo del R.EiK. Th~dor. :h:eruuras de la im-esr:igación psiroanalirica. . . . ..
orden del cone sin producirse por la ley. :::1 Shóiar. i:swáios psicoonaií!iros del riw.aL (!ned.ito) Traauccion ce ."'.na Menner.
Vale decir que la ley ampara del goce del Otro.
1 :\CAN Jacaues. Seminario sobre la.o\Jlguslia. (Inédito)
Para concluir. una cita de La.can: - La .Sub~ión del Suiero. Escritos i. Buenos Aires. Siglo XXI 1975.
Serrww.r.o sobre Los j\iombres del Padre. (lnéditol
"Dije que no sabia qué cosa en el Shofar--Oigamos clanlor de culpa- -
129
128
La mirada en la clínica
ROSA FuR.!'viA:'l .
anal T
oral~
146 .-
1-r/
, . Habiamo~ vÍ~to que el trabajó de duelo implicaba una movilización_ ·.• ... En un a."1.álisis -que hace La.can de Hamlet, publiéadoen Offiicar?
· 1'::sistema significante. Todo lo simbólico se pone en juego para cubrir (1983). hablando de la melancolia dice lo siguiente: -se nos dice que
~.e agujero creado en la existencia. > el duelo tiene lugar en razón de una introyección del objeto perdido ..
. -•. Como no es posible cubrirlo, se bordea este agujero lo cual penni- Pero para que el objeto sea introyectado existe una condición pre-
~~ abandono del objeto de amor y la caida del objeto a que el objeto via y es que esté constituido en tanto objeto~. ·
1.e amor guardaba. · - · . Lacan no continúa este· desarrollo, pero es exactamente lo que
.. ,• Sf en la melancolía la movilización significante no fogra· producir podria:rnos-pregurrtamoserrel casu cte la melancofür ¿el a· está cons-
~.e desenlace tenemos que pensar que hay aquí algo fallido. El obje-· tituido? ·
~t>t!e amor es soporte de la castración del sujeto, en tanto el a es esen- Si es en la circunstancia de una pérdida que reenvía la castración
::'..almente un objeto-falta. Cuando desaparecido el objeto amado la al sujeto que se produce un acceso melancólico.
'/...~tración vuelve al sujeto debe haber a nivel significante algo que de Si esta castración del Otro que vuelve al sujeto (desde lo real) se le
-::;enra de la castración. toma insostenible ¿no podriamos hablar aquí de forclusión?
Falla en la inscripción del Nombre del Padre que hace imposible ya
A S no la caida del a. sino su misma constitución.
$ A Se nos presemaria entonces el acceso melancólico como un imen-
a to restitutivo de inscripción significante y de constitución del objeto
falta . .
Si retomamos la división que formula La.can en el seminario de La
.l_-:~ustia para dar cuenta de la constitución del a como resto de la
rr,nstitución del sujeto en el campo del Otro. vamos a ver que tan te el
>l;}eto como el Otro en un segundo tiempo, tiempo de constitución. es-
litn atravesados por Ja barra.
En la barra reconocemos la función paterna, el Otro es un Otro
castrado y el sujeto maréado por la barra de la represión. un sujeto
dividido entre lo que dice y lo que' sabe; y dividido por la castración y
por ella sujeto en falta. - ·
Hay un Otro en falta y un sujeto !!~ falta. La significación del falo
setntroduce por la metáfora paterna. Sin la función fálica no hay posi-
bilidades de que el a se constituya como objeto falta.
Aquella primera identificación al padre. génesis del ideal. condi-
ción de la represión.
Referencias bibliográficas
En la melancolia Freud habla de una especial sensibilidad del Ideal
'!Ue atonnenra al yo modificado por la identificación al objeto que no se "Duelo y meiancoiia-, S. Fn:ud
ha podido resignar.
En la última clase del Seminario de La Angustia. Lacan nos dice -El yo y ei ello-. S. Freud
que el sujeto melancólico ar.aca su propia imagen~i{a) desgarrándola para
poder alcanzar ese objeto a cuyo mando se le escapa y cuya caída lo -lmroducción al narcisismo". S. Freud
arrastrará al suicidio. Seminario X; La Angustia J. La.can
,·."_,._ Está claro que en el sujeto melancólico el objeto ario cae; la única posi-
bilidad de caida es con la caída del sujeto mismo en la identificación. Revista Omicar? J. La.can
> :~!..:-.'.~: ·· .. ·. · · :. ~..:. '.:;_e ~ · · · ·¡,·.: , -- .. .. :.
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148 149
Sueños de angustia y pesadil[as
STELL\ 1v1ARis RIVADERO
154 155
' ·: ""'.'.•' . ·· . ."· .. : ~·: ~ . · . . ......................."".' " '~.::. " :..... " ~ : . . ·· •. ···;·:r ·· · . ... '!'" '• ·.-
so.' realizar deseos: Cabe preguntarse: ¿Por qué algunos sueños angus- . cuidado. pero la mujer se deja seducir por el aror:r.ia de unas salchi-
tian? ¿Por qué algunos sueños despiertan? ¿Qué hay de realización de chas. que cocinan en la choza de al lado, y entonces desea para si un
deseos en los sueños? El despertar. el estatuto y representación del par de salchichas, e inmediatamente un par de salchichas. v1enen .
cuerpo del soñante, su yo, el escenario del sueño, son aludidos y comien- volando; es el primer cumplimiento de deseo. entonces el marido se
zan a ser trabajados en la Traumdeutung. enoja y en su bronca desea que las salchichas Je queden pegadas, a su
- .. Haytambiérr urr sueño· eff el cual ve·a su madre.dormida.siendo. mujer. en la nariz, cosa que efectivamente ocurre, es el segundo deseo
llevada ¡)or unas figuras con cabeza de pájaro y otro sueño en que su ' cumplido; las salchichas no pueden moverse-de ese lugar: pero el de-
cuerpo es diseccionado y otras escenas a lo que siguen un despertar seo fue del hombre, esto a Ja mujer no le gusta nada y puesto que en
y
brusco angustiado. el fondo los dos son uno. marido y mujer, el tercer deseo tiene que ser
El sueño donde él ve a la madre, dice: -yo mismo no he tenido nin· que las salchichas se aparten de la nariz de Ja mujer.
gún sueño genuino de angustia desde hace décadas. de cuando tenía - El cumplimiento de deseos de uno de los sistemas puede significar
siece u ocho años recuerdo uno, uno que sometí a la imerpretación rrein· displacer para el otro, cuando los dos no están de acuerdo entre si. La
ta años después fue muy vívido, y me mosrró a la madre querida con realización de deseos debería ser por cierto. causa de placer ¿para quién?
una expresión durmienre de extraña calma en su rosuo, que era lleva· Alrededor de esta fábula aparecen cuestiones relativas a un proble-
da a su habitación y depositada sobre su lecho por dos o tres persona- ma. como el de la realización de deseos o ei cumplimiento de deseos en
jes con pico de pájaro -. Lo que él dice. es: -Desperté llorando y gritan- el sueño.
do y turbé el sueño de mis padres·. ¿Recordaban estos sueños? En la interpretación, Freud muestra una de las posibles y manifies-
En el trabajo freudiano sobre "Lo siniestro", (1919) aparece la his- tas puertas de entrada a la -or:ra escena-. En varios de los pasajes que
toria de un personaje martüizado demoniacameme por dobles que se Lacan dedica el tema del sueño. habla de la "otra escena-. término
reproducen una y otra vez y aparecen incesantemente. tomado de fechmer. que alude a la otra ·realidad psíquica-.
En la historia que Freud nos cuenta acerca del pintor Cristopher Recordemos la situación del que duerme y es molestado por una
Haitzmann. aparece el "Señor del mal" en dos figuras donde se mues- mosca. Ese fastidio que le ocasiona. lo lleva a tener que espantarla ca-
tran caracteres incúbicos pesadillescos. da vez para poder seguir durmiendo, pero cada vez que espanta la mosca
- En ese texto. en la segunda aparición. el diablo nos muestra su se despierta. sin lograr el deseo principal que es continuar durmiendo.
carácter andrógino. seno_s abundantes. combinados' con barba.. bas- Es el punto en que-se- plantea que todo dornúr implica necesaria-
tón. garras y un gran pene rematado en serpiente. mente un despertar para seguir durmiendo. "Un sueño-dice Borges-
La.can ha trabajado las conexiones de Jo real en el sueño. el ombli- es un despertar que comienza".
go del sueño, el punto de acmé. el cuerpo mismo del soñante. lo real Esre planteo se reitera más adelante cuando al e.'\.-poner el fenóme-
en el despertar. la posible realización de deseos en el sueño. no del sueño en términos energéticos. Freud concluye que aun el dor-
Cabe pregunrarse si el sueño al realizar un deseo preserva el dorirur. mir más profundo supone un mínimo de gasto de atención puesto al ser-
y repito la pregunta ¿por qué hay sueños que interrumpen el dormir? \icio precisamente de la preservación de la función principai dei dormir.
La.can cita en varios te..'(T.OS el comenrarto freudiano del hada y el Hay múltiples ejemplos donde se analiza este factor que el sueño
matrimonio de ias salchichas para interrogar est:.a cuestión del deseo: desempeña en el juego del -ierárgico placer- del dormir. Por e1ernoio
¿el deseo es causa de placer? ¿para quién? El deseo pertenece a un los sueños de comodidad. - ·
sistema el Inconsciente. mientras que el sistema del preconcieme..lo Es el despenar por la ~austia lo que viene a cuestionar de la mane-
ha desestimado y sofocado. ra más incisiva la función placentera del sueño al servicio del dormir.
A pesar de lo conocido del relato de Fm.i.d voy a hacer referencia a él. freud dice: -La angustia en los sueños. permitaseme insistir. es
. . Una hada buena protege a una pareja pobre, marido y mujer. y les un problema de angustia y no un problema del sueño-.
promete el cumplimiemo de tres deseos. de los primeros rres que se les Es precisamente el despertarpesadiilesco el que nos interroga acer-
· ocurran. ésw los llena de dicha y se proponen escogerlos con mucho ca de esta realización de deseos. Los sueños de angustia. los -sueños
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traumáticos y las pesadillas conforman un conjunto en esta dirección. En la pesadilla. la vacilación en el juicio de existencia se experi-
cuestionan para Freud a veces enigmáticamente la función placente- menta en su transcurso aplicada a la oposición sueño-realidad. Pero
ra del sueño. en los sueños comunes hay un \ivo sentimiento de realidad. y lo que
Es el punto en que el sueño fracasa y se abre el punto también. de a veces no se sabe demasiado bien es si uno estaba en el sueño o no:
estallido de -1a otra escena". en la pesadilla siempre se tiene la ceneza de que el soñante está pre-
Es el vacío de representación. Ja caida de las identificaciones que sente. O sea que.es eLpr:otag.onis.ta.deJa pesadilla. en los sueños a ve-
comandan el montaje de -1a otra escena-. ces puede haber una duda, si uno estaba mirando la escena del sueño,
En el trabajo sobre -Lo siniestro". es el propio Freud, que nos per- si estaba adentro o estaba afuera.
mite continuar en este punto. Para Janes la diferencia está en la pesadilla a través del coito. en
Freud sorpresivameme se encuentra paseando por un barrio de los sueños de angustia la perversión polimorfa infantil suministra las
prostitutas. Se quiere ir de allí. pero al intentar salir de esa escena vuel- fantasías del encuentro: oral. anal. sádicas ambas.
ve repetidamente y no deliberadamente a ese lugar que le resulta cono- La.can en "Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis-
cido. que se le transforma en familiar: tal vez el despertar a la vigilia lo nos dice: -La angustia de cascración es como un hüo que acraviesa ro-
vuelve a sorprender angustiosamente en esas calles amenazantes. Des- das las erapas del desarrollo". decía que en cada estadio. surge por
pués de varios imemos llega por fin al lugar conocido de su partido. relación a las \icisitudes del encuentro con el Otro. el sujeto en tamo
Si acercamos la pesadilla a lo siniestro ¿no se podría llegar a redu- objeto se propone como objeto devorable. como dopación. y como cap-
cir la fórmula a lo que Jones ya decía que la realización del deseo inces- turable por la mirada y por la voz del Otro.
tuoso implicaba un goce insoportable? En los dos primeros ténninos se u-ata de Ja demanda del Otro. en
Los sueños. sus manifestaciones sü(nificantes. v sus vericuetos Jos dos últimos del deseo del Otro.
imaginarios. con frecuencia han sido m"étaforizados-por el laberinto. Lacan sostiene que la angustia en ia pesadilla es experimemada
Pero lo que en ellos angustian. lo que de pronto despiena. no es tamo como goce dei Otro. como Ja dimensión dominame del encuentro .
el hecho de perderse en el laberinto sino más bien la ·eventualidad· Prevalece sobre el deseo y la demanda del Otro.
de un encuentro. A tal goce nos aproximamos por \ia de lo siniestro v lo ubicamos
Si el comen.ido de la pesadilla es esquemático en el despertar se más allá del principio del placer, en esa dimensión se juega un encuen-
presenta una variabilidad que lleva a pensar que lo que fracasó en el tro con Jo real que pone en relación la opacidad de la presencia del
sueño encuentra en el despertar uná oportunidad. La fenomenología Otro con el sujeto en posición de pequeño a. de objeto.
del despertar de los sueños de angustia y de la pesadilla presenta tan- Esto se manifiesta en Ja inhibición del movimiento, en esa indefen-
to un despertar en que el sujeto rápidamente encuentra tranquilidad sión frente al Otro. En la misma secuencia se puede inscribir algo esen-
en el reconocimiento visual del medio habitual y la recuperación del rrim.i - cial en el fracaso de cualquier llamado. El sujeto no puede insÜUmen-
rniento inhibido. como el despenar prolongado en que la angustia per- tar su propia voz. no logra articular un llan1ado dirigido al Otro. tal es
ma....riece y el malestar se impone. su posición de eritrega en el fantasma. -
Suele sucecier que ciertos sueños que al tener tanta fuerza. en el día Podemos decir de-la pesadilla que su contenido manifiesw es gene-
nada merece nuestra atención. es como si siguiéramos soñando aun ralmente estereotipado. se acerca a ia reproducción. La \ida oñi.nca
despienos. de las neurosis traumáticas también mues u-a este carácter. recondu-
En el despertar de la pesadilla pueden aparecer fragmentos -alu- ce al eníermo una y orra \·ez a la situación de su r:rauma. de lo cual
cinatorios". sensaciones hipocondriacas. sentimientos intensos de despierta con renovado terror. El enfermo se sostiene íijado psiquica-
odio o uisteza. desamparo. con frecuencia jumo al olvido del sueño. meme al trauma.
La duda de carácter mnémico recae sobre la identidad de los ele- En la .pesadilla el sujeto aparece pegado al a que el sujern es. El
mentos del sueño (presencia-ausencia. orden de la secuencia. etc.) y sujeto puecie escapar a la ,-erdad y pasar del soñar despie::w al soñar
se presenta en el relato. durmiendo con soio cambiar de teión.
158 159
Lo\CAN. Jacques. Seminario X ·La. angustia- (Inédito) Escuela freudiana. de Buenos
En la pesadilla el sujeto está amenazado de reintegración al Otro Aires.
en la fonna de resto. de a. Los cuatro conceptos f1ui~_amencales. (Paidós).
Me serviré del teAio de una pesadilla de un analizante, a modo ilus-
trativo: JONES. ErnesL On the Nighrmare. Grove Press.
·Anoche tuve una pesadilla atroz. siniestra. no podía despertarme. GÓMEZ. Elena. El despertar de la pesadilla. Revista Conjetural N2 18.
cuando lo hice estaba bañado en sudor. agarrado a la cama y la cama
mancharla: de-semen. KOOP. Guillenno.ELpunw.de.acmé.ene.lsueño.. Revista Conjetural N~ 18.
Veía un gusano, su cuerpo se movía cadendosamente. no podía de-
jar de mirarlo. mi cabeza se caía. al gusano también se le perdía la cabe- GRUNER. Eduardo. Borges. la pesadüla. Revista Conjetural N2 18.
za. pero sus ojos seguían mi mirada. en una danza mortífera. la cabe- ;>!AUPASSANT. Guy de. Comes Choisis.
za caminaba. yo me arrasrraba. volvía a tener mi cabeza. estaba rigida..
no podía volver mi cabeza a otro lado. la cabeza del gusano se tocaba. BORGES, Jorge L. Siete noches. (Fundo de Cultura Económica) .
era gelatinosa. esos ojos eran iguales a los de mi madre". Me envolvía
una sensación de piacer y temor. Borges en la Escuela Freudiana. Editorial Agalma. Buenos Aires
Bibliograjia consuiwda
160 161
~g~aje _
_al acto y suicidio
ELENA JABIF
El suicidio es una de las arisras más espinosas del PA. ya que con-
\'Oca al analista a interrogarse por su responsabilidad en la cura. estra-
tegia de la pra'Cis y por la búsqueda de una causa. para la cual ineluc-
tablemente. encuentra Yarias. freud mosiró interés por el suicidio en
relación a la hennana del -Hombre de los lobos-. incluso oor el mismo
hombre de los lobos cuando se expone a ser barrido por las armas
rusas. en los impulsos obsesh·os del -Hombre de las raras- de conar-
se el cuello, interpretados como mandaws reactivos ante su cólera.
[Freud aclara que esto disminuye el riesgo del acto suicida). la amena-
za de Dora [a través de una carta a su padre como extorsión y el pasaje
al acto de la joven homose..wal paradígma del acto suicida que mues-
tra en el Niederkommen. la tentiva fallida de parirse como S.
En -Psicoparología de la vida corid.iana". Freud nos relata la deci-
sión de un paciente que se suicida por una perturbación se..'\llal incu-
rable: la frase del paciente se liga a faniasias de se..'\llalidad y muerte.
Freud silencia esta anécdota en un viaje que realiza y con cuyo
compañero de \'iaje. había entablado una discusión en relación al \'a-
lor aue los turcos le daban a la sexualidad. El esfuerzo oor ohidar el
suicldio. le hace oividar el nombre del ointor de O.ieno. 'este e9isociio
se lo relata a su amigo Fliess. en septiérnbre de 1898 y lo publica me-
ses después en "El mecanismD psíquico de los oli.•idos·. Lo que insis1e
es el silencio sobre el suicidio del paciente como desencadenante es-
pecífico del ohido. hasta que en "Psicopmología de la L'ida corid.íana-
lo retoma en términos de síntoma. ya que el S queda impl.icado en él:
sin embargo ericuentra rrazos propios. al no poder universalizar' sus cau-
sas en una estrucrura. queda desestimado corno síntoma.
163
Los kleinianos intentaron darle sentido al enigma del acto suicida, d~~¡;melancólico. siendo d~1"ci~"p6 de ia."melancoifu: de donde surge
desplegando un saber que intentará hacer conjunto de los factores que la mayor cantidad de los ejemplos de este particular PA · ·
Freud detecta en los diferentes intentos de suicidio. sadismo, vuelto con- Lacan articula que en un tiempo instituyente. la construcción de
. tra sí mismo, agresividad y melancolía. fracasos de los instintos de la tópica imaginaria, propicia el júbilo, ante el ilusorio triunfo de Ja
autoconservación. pulsión de muerte. castigo por culpa inconsciente imagen del niño en el espejo. coordinada fugaz. anticipada¡rp~r la
en relación al panicidio. Pero sólo a partir de Lacan. en el Seminario mirada del O. tiempo de fascinación y muerte que de~liega-e·n la
·de ~ Angusticr, recortamos una lógica del acto que nos permite dife- identificación rrarcisis~; . el' esplendor~maginarí?· ~e- hac~r/de dos.
ren~1_arlo del acting-out. en términos de PA. que nos propicia alguna uno. _
tors10n en la estrategia de la economía subjetiva del PA. Freud nos recuerda en -El Malestar... ~ la tendencia innata del S a
Desde tiempos inmemoriales. el hombre ha tratado de. preservar- la maldad. el funcionamiento inevitable de esa agresividad cuando se
s~- d~l retorno terrorífico de sus muertos. Desde los tiempos de la reli- trata de las relaciones con el semejante, inducido a teorizarla como
g1on JUdeo-cristiana todos coinciden en que los suicidas no pueden ser pulsión de muerte no erotizada, que se opondrá al progreso de la civi-
enterrados con los otros muertos y que deben tomarse. con sus cadá- lización. pero también a los proyectos de vida de un$.
ver~s. medidas especiaks. Sin embar:~o el cuerpo del suicida desplie- Tn el fondo del hombre -dice Lacan en La Etica- esrá el odio a sí
ga u:1ª escena que precipita lo real :-OJce Lacan- que exhibe que cuán- mismo: pero cambién al orro en sCmismo-. Esta lógica de la relación del
to mas precioso es·W1 objeto, se sufre la centación de no retenerlo. en S con el A nos permite interrogar a la letra las condiciones del Pasaje
una caída. esperando váyase a saber qué milagro, en esa suerte de al Acto. Pasaje al Acto que implicarla, que_en _el..mO\'im,iento_d.elH la
catáscrofe". Consurnacfon del ac·to se encuentra obstaculizado. dicho JJaSaje, alú
~ fa~ación de un gesto irremediable que intenta arañar Ja peste mmd·e a.rs-;-a:Jgo l~-~~:.t~liüs·a;@.:_efpasaje se c~-~'!.~!!.e en_~~~j_a}~ ae
de lo 1mpos1ble. la muerte propia. que en palabras freudianas es inima- ida:-cu\'o'pünki.a~_, p,at:tida.es la_pJ:Qp_i.ªjl').JI1.Qjªción. 2_~11dQ_ el.crimen.s_u
ginable y ante la cual somos meros espectadores. ¿Darse muerte. no h.omorffé~ ·-cua-ñdo un S se mata. mata; fórrnula.Jceudiana_aJa_cua.\_
implica. acaso preguntarnos. si el suicidio es un acto en términos de Iae:añierespefa-su\rigenciá~· ------ - -·-· _.
rebelión, para sustraerle al O divino, la decisión sobre un bien propio -- La pérdida del Ó del amor ya no sostiene en lo real. el lugar que
del$? asegura al$; su ser. el duelo incumplido del melancólico persiste co-
Freud nos dice en "El Malestnr ... •. "que si bien llevamos en la san- mo sombra en el S. ··
gre e.l ~eseo de~ nuesc;-a razón y nuesuo sentimieruo se niegan a Ante el agujero real. el S carece de un significante.que lo cubra en ·
admitU" una asoo.aczon tan esuecha entre el amor y el odio". _ - su falta. fórmula inapelable de que el S se hace objeto a. identificación
.. In_auguramos el aco~t~er de nuestra condición subjetiva, siendo narcisista. al lado oscuro del objeto a que muesrra que lo odiado por
hijos mcurables de la filiac10n. condición que nos constituve en crimi- su vo es a su vez. al orro.
nales. a panir de la ex:periencia original dei asesinato del padre. · ·La pérdida del ideal le da al suicidio melancólico. su clínica de pér-
. Sin embargo. esta deuda de sangre por Ja vía de la incorporación dida insopon:able.
primaria. nos preserva de la satisfacción del Goce del O. Freud no vaci- Lacan dice del duelo -No estamos de duelo sino por alguien a quien
ló en bordear el sesgo biológico. planteando el retorno a Jo inanimado. podemos decimos yo era su falta-. En el escenario del mundo. esr.a
en el instinto de muerte. disyunción que muestra en su medida las estructura del duelo melancolizado ante la pérdida del O del amor. se
operaciones lógicas (separación-unión) que interpretan ias uniones del desolieQa en la historia de las suttees.
par mítico Eros v Tánaws. · Los -británicos habían prohibido la costumbre Brahaman del Sut-
En el suicid.i-o se pierde la vida de ningún modo se renuncia a la tee por inhumana: sin embargo todos sabían que seguía practicándo-
existencia.. Si bien no podemos reducirlo e.xclusivameme a una econo- se en pequeños estados remows e independientes.
mía narcisista, debemos distingutr. cuando los términos del conilicw Si bien la práctica del suttee era un acto voluntario. consistente en
¡:on.d ucen a _Wla afección narcisista que freud ubica en el cenrro del que las \iudas se inmolaran en la pira funeraria junto al esposo muer-
164 165
~· en la práctica. alg;mas m~jeres se veían forzadas a realizarlo por Jos nerse. según Lacan, en su estructura de sujeto historizado que cae
•alares emergentes ael propio contexto social. esencialmente fuera de la escena. ·
Una Viud~ ~o ?odia usar ropa de valor, ni joyas, debía afeitarse la La literatura velarte han hecho letra de amores pasionales impli-
~beza Y_ vestir uz:i.icamente ?e _blanco. No podía volver a casarse. y de- cados en tragediás suicidas. . · ·
bia tenrun~ su Vlda como Sll"Vlema. sin paga. en la familia de su mari- Madame Bovary, la protagonista de la obra del mismo nombre, de
do. de_spreciada~causa- de-su sexoy-mira:d'a: con desconfianza porque Ffauberr. es Victima de urnr educación frívola. se envenena cuando sus
se creia que pod~a provocar mala suerte. No seria sorprendente pensar amantes. Rodolfo v León. la abandonan.
que muchas mujeres h_ayan preferid~ convertirse en suttees antes que Goethe. con ·ios amores deljoven Werther· difunde entre la juven-
enfrentars.e a la~ penunas de largos anos de servidumbre v humillación. tud romántica la tesis del suicidio por amor: más de treinta mil perso-
~ continuac1on paso a describir el ritual de las suttées: nas se suicidaron por influencia del te....::ro.
Uev~a la cabeza erguida y los pies descalzos(... ) estaba vestida En cambio. León Tolsw. i luego de concebir en su \ida agitada "La
como el dia de su casamie~w. y sus cabellos escaban suelcos como para guerra y la paz·. ve acentuados sus deseos de entregarse a una \ida pia-
la noch_e de bod~. Parecia cocalmente ajena a las multitudes que la dosa y tranquila. lee la vida de los sanrns rusos y continúa estudian-
~plaud1an. le pedian una bendición y se esforzaban oor tocar el borde do a los clásicos griegos. En esa época logra e:.\."Presar sus e.-dgencias
ae ~ufal~a. (... ) s.W: labios se movian en la anrigua inv~ación que acam- de crecimiento espiritual en la obra de "A.na Karenina-. Ana. dama de
pana el ultuno viaje de los muerros·Ram. .. Ram. Ram. .. • · la alta aristocracia. se dejó arrastrar por la pasión. después de haber
~ viudas que se convertían en surrees eran santificadas y venera- luchado largo tiempo contra el amor de un hombre. Engaña a su mari-
das. No ~bstcmce era jrecuenre que llegaran drogadas a la pirCL no sien- do. y no pudiendo resistir a los reproches de su conciencia. se tiraba-
do consciences de_ sus acr_os. Los sacerdores solían apilar algodón entre jo un tren para poner fin a ese tormento moral. muerte que la reduce
los rronws y vertian ace1ces y mameca derrerida. por lo cual una vez a convertirse en pedaciros de nada.
encendida. probablemence morían asfixiadas. Este argumento define claramente el credo espiritual que atravie-
·Las multitudes silenciosas quedaron inmóviles. nadie se movió cuan- sa el acro suicida ·no se puede vivir enjimción de los sencidos, sino en
d~ la surreee subió.ª la pira y s_e senró en la postura del loto. Arregló los visw a ennoblecer el al.ma". agrega Tolstoi. -
pliegues de su vestido y levanto suavemente la cabeza del muerro sobre Privilegiar la nobleza del alma en un acto que muestra -en pala- ·
sujal.da.:." "Uno de lo~ brahmanes rodaba al muerto y a su viuda. con bras de Lacan- "la exclusión" fundamental de la relación del S con lo
agW?- rrm~ del Sagraao Rio-Ganges. el "Madre Gunga". mienrras orros que él es como a. Si la lógica del fantasma se enlaza a la articulación
ven:an mas aceite perfimu:ido en los rroncos de cedro-y sándalo ... • que hace posible. la relación de un S di\idido. atravesado por la cas-
Las ~s del peque~o Rana (: .. )guiadas por el brahman. bajaron tración del O y lo real. del objeto perdido. causa de su deseo. la exclu-
la anrorcna nasra. q~e roco la pira a los pies del TTlllerro. Brillances }lores sión. daria cuenta del colapso fanr.asmár.ico, que lo arroja al Sal mun-
de fuego surgieron ae la madera{... ) y una vez oue el nuevo Rana hubo do puro. exclusión de lo simbólico que lo ·catapuita como señal peren-
c.umplido su deber con ei L'írjo. el sacerdote wmÓ la anwrcha y fue ráni- ne en ei recuerdo de ios otros-.
aameme_ al ocr? exrrei:io de la pira. para cocar los rroncos derrás de. la Lo peli!:!roso: la pérdida de la oosición en ténninos de tener. tocio
swt~e. Una ~rill.ame Lengun..dejuego ascendió y simulráneameme la objeto preciado. tiene valor fálico.' y esto ie da su brillo. la ceneza que
mulnrud rugw. su homenaje de aprobaó.6n ·. . rernma al S suicida es que si no tengo. no soy. "súbita puesta en juego
La ~gustia. plamea Lacan. e.11 el último pensamiento freudiano. es -<lice Lacan- en relación con lo que él es como a. así se lanza a }a
una senal en ~l yo. si está en alguna pane está en el vo ideal. es decir búsqueda. al encuemro de aigo rehusado por doquier-.
~-~e es _u~ fe:iomeno de borde en el campo imaginario del vo. La cues- Lacan menciona la oosición sacri.ficial del PA. deslizamiento inevita-
uon swodamterroga los rrasromos del "majestic baby", que en el pasa- bles en Ja ló!tica suiciaa cuando un oarire se instituve como O absoluco.
je al acto toz:i~ el rostro rrusmo de la emoción. majestuoso niño que se !:i \'OlO de Jefré y el sacrilicio de su hija reiatado en Ja Bibiia. en el
prec1p11.a allí donde está el lugar de la escena. donde puede mame- iibro de ios jueces. constituye la obra mas antigua que tenemos cono-
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cimiento con el sacrificio ritual de un ser amado. rito que responde al suicidio en el Africa. por culturas tribales es considerado "El juicio de
siglo IXa. de J .C. Dios": las partes en litigio deben tomar un recipiente lle.no de un bre-
En Israel por esa época nace el voto de Jefté, relatado luego en diez baje preparado por el hechicero. esperando que la bebida del culpa-
versículos de la Biblia. ble. se transforme en veneno mortal. ·
Jefté, guerrero de la tierra de Galaad, promete a Jehová. un .sacri- Esto significa en los nativos. un freno contra la violencia de condu ~- _
ficio a cambio de ayuda en las ba tallas. ta y de lenguaje. y de cualquier desvío en las. costumbres de la trad i-
La: promesa-fue íe ofrezca en holocausto a quien quiera que sea. ción. así, el acto suicida se convierte-en: un solido purrtal de la· ley Y el
el primero que venga hacia mí, desde mi casa". orden.
Sin saber Jefté que esa persona seria su hija amada. Jaalá. En el texto titulado "Massada. cuando las rocas no pueden cortar-
Cuando el guerrero. angustiado, refiere a su hija cómo Jehová había se con espadas". evocaba una frase de Tótem y Tabú: "El crimen que se
aceptado su voto. Jaaláreacciona de manera inesperada, con un gesto trata de expiar. no es otro que el del asesinato del padre. el holocausto
festivo fue iluminado su rostro y declara: -,L\.labo a Jehová con todo mi de la propia existencia. indica que lo que se redime es una deuda de
ser. cuánta gracia me ha otorgado porque se deleita en ti. y porque yo sangre·. . - - .
soy tu sangre", dice la cita: "Ya . gozando por anticipado. sentía su En ese texto me oree:untaba si el asesinato del padre siempre con -
unión. Jehová y su padre. se fund ían en uno para ella". duce de manera ine\~table a la inmolación . Me comes raba que ésto era
"Cuando Jefté rogó a su hija que íuera a la soledad de las monta- un mito freudiano. ya que el mismo dispositivo analítico Y. la a~u~sta
ñas para. purificarse. la muchacha se sintió desilusionada "Mi padre, del fin del análisis. lo lanza al $. más allá de un borde. mas alla ae la
no debe creer que tengo miedo -arguyó-, no retrocederé. mi sangre castración del padre. experiencia que quizás. nos permite adverti r que
está llena de gozo y buena voluntad por servir a Jehová". Jaalá se pre- lo insoportable de la no relación. es mucho más livianita de lo que se
paró para el destino de grandeza que la esperaba, el día del sacrificio. teme. Lacan plantea que el suicidio como pasaje al a~to e.s un u.ama-
saludó con aire sublime y severo al padre. eligió el Jugar del sacrificio. do al Otro post monem. donde se precipita lo real a la bus_queaa. de
rechazó una pócima que Je ofrecía su tía para insensibilizarla, no acep- que la escena se convierta en la escena del O. Otro que sera convoca-
tó ayuda de su madre. se preparó a ejecutar s u suicidio. Ella Jo dese- do, a hacerse cargo del cuerpo como un resto. despojo , que despliega
aba y no sentía temor alguno. El voto a Jehová fue por fin cumplido". el despedazamiento inaugural que nos habita. _ . . . .
Cuando el deseo del padre, hace del deseo del O. ·la ley, el holo- La historia de Safo es interesante porque muestra la nnplicanoa ael
causto de Ja propia existencia. se imoone. La reconciliación con un suicida con el criminal. .
Dios Padre justo y bondadoso. procura acotarJos sentimientos hosti- Safo. poetisa griega. desdeñada por su ama:ite (V? ma.rtr:ol se sui-
les que odian y temen al padre y que encuentran su e."(¡Jresión en Ja cre- cida entreciándose al mar. Considerada la poetisa mas alta ae Grecia.
ación demoniaca -que rebaja al padre. agrega Freud- a un padre al verse e;vejecer. su alma padece. en su dese.speranza se da rn~ene
caprichoso y cruel. donde el sacrificio en términos de honor. se comrier- en los acantilados de la Luicardia. lugar elegido para los sacntic1os
te en el argumento pivote del PA, el O toma la estructura del Ideal. _:-:.tuales. en ia fiesta anual a Apoio y cuya \rictima era un crirninal que
mienuas que el $ comete su acto de enrrega como a en términos de oae:aba en el rito. los pecados del pueblo. .
sublime victoria. · - Otra aiternativa que propicia ei suicidio se enrreteJe en_su valor.de
Goethe decía: -Lo que has heredado de tus padres, gánalo. si quie- revés. como estrategia del S ante el Orro real donde el her oe tra.gico
res poseerlo". Poseerlo corno el único camino para transponerlo: cuan- desolie!!a su acto en términos de rebelión. .
do la herencia fracasa aparece el peligro en términos de suicidio que BeaÜi.z Marcer. en su te.xto tirulado ·Masoquismo. pulsion de muer-
lanza al S "al mundo puro~. Dice Lacan; "El camino de la fuga. que te v suicidio en la bio~rafia de Mishima-. puntúa algunas cuestiones
implica. que en su panida (su vicge) el S siempre puesro en posición infan- sobre la infancia de Mishima. que en mi lectura sitúa el pasaje al ac-
riL hace WlQ. sali.cia vagabunda al mundo puro ". to como un acto restituti.Yo de máxima división .
En vida e historia de las culturas. Key Birkit Smitb nos dice que el .\lishima ad'\oiene al mundo. para el goce espúreo de la abuela pater-
168 169
na~ quien a los cuarenta 'f cinco días de vida lo sustrae de la crianza tra que irremediablemente la entrega del S al A. es en términos de
de sus padres. La abuela del pequeño constituía el rostro de un- O fe- ·• carencia. Así el pasaje al acto muestra en Mishima el carácter restitu-
roz y vociferante. que odiaba y despreciaba a su marido, por la falta de tivo del suicidio que recupera fallidameme al $ su má.xima división.
espíritu de Samurai ·de sus antepasados. incriminándolo por su falta división que evoca el retorno a una deuda ancestral del hijo con el
de amor propio. · •· padre. renovación del pacto Samurai como pacto de las alianzas. que
. . El: pequeñu· es~:rcemrdo err el' cuarto corr straóuefa. inmovilizado y ~recnpem-err palabras de Mishima- el lugarque por derecho le corres-
cnado como una mna con fuenes restricciones. Su abuela oadecía neu"-· ponde a la.función del padre".
ralgias craneanas insoportables y una sífilis contagiada p~r su marido. Mi encuentro con un paciente rravestti, se produce en carácler de
Beatriz Marcer comenta ·que la sombra de la enfermedad del o se urgencia. ante un grave intento de suicidio. que hacia serie con otros
convierte en su propio calvario". A los cuatro años se enfenna casi mor- pasaje al acto de su historia.
talmente ~e una enf~nn~_da.d diagnosticada por los pediatras japone- Ella se dice Vanessa. vestida de mujer. exhibe un cuerpo transfor-
se.s como a~tointo.xicac1on . que le implica un largo y doloroso trata- mado por siliconas industriales. Sobre su piel lle\·a mtiltiples tatuajes
miento con myecc10nes que lo convienen al infantil$ en "acerico·. en fonna de corazón acompañados por el nombre femenino con el cual
recuerden el martirio de San Sebastián. se autonomin::i. Los corazones sorprenden por enmarcar cicatrices de
Su crecimiento es acompañado por fantasías de martirio. envuel- gr::ives lesiones . por golpes y quemaduras .
to en belleza y muerte. martirio que se eleva hasta el paroxismo del Ejerce la prostitución. trabajo que en palabras de ella ·1e permice.
orgasmo. a pesar del riesgo. escar en complew libenad-. Vanessa se ha cortado
Empieza lentamente el culto por la muerte violenta en ténninos de casi toda la superficie de su cuerpo. incluidas las muñecas.
honor. acto que consuma a los cuarenta y cinco años v con el orcrulJo Dice que fue abandonada por su amor y que su vida es una trage-
del sacrificio samurai. · .::>
dia. siempre marginal. no querid a . rechazada por la sociedad~· por los
Su discurso de despedida. hará mención al honor del Emperador. hombres.· Desam~r que ie recuerda un ieroz maitralO infamii. por pane
al cual entrega todo su ser, siendo su frase póstuma "Mi padre. el Em- de la madre adoptiva. y que se enlaza al abandono de su madre bioló-
perador. no ocupa el lugar. el lugar al que tendria derecho". gica. quién Ja rechaza por ser el producto -deleznable· de la \iolación
Dice Lacan, en el seminario de·La Angustia. "la voluntad de goce sufrida a los trece años, por el patrón de Ja casa. Motivo, por el cual la
es l°: v~l.un.tad de ~der.: voluntad que.fracasa cuando encuentra su pro~ regala a padres adoptivos. '
pw limite. su propio .freno. sn el ejercicio del deseo como ral es decir. en Ella dice: -Mi \ida es una aventura. quizás sangrienta. a veces en
el fjercuio que el S hace de su división·. - la calle. te golpean. te ponen presa por inmoral. quizás te matan o te
El escritor Kin Kon Yannata describe el ritual Samurai v dice: ~En moris de Sida. Es mi destino. el estar al filo de Ja navaja. pero me con-
silenciosa dignidad. se arrodilla sobre el colchón ritual v s~ hiere so-· suelo pensando que al final es una e.x:periencia de vida-. ·
bre el ombligo en el seno donde reside el alma-. · En ei hosoita.l k !!ritaba a todo aouei oue ouisiera escucharla ¡¿Quién
El autor re!ala e! suicidio de la esposa del General Nogui. luego del
suyo propio Y dice: -_.;, pocos pasos de su izouierda. estaba su esoosa
de ustedes se
atre;e a tanto, a tanto -riesgo por su vida?!
El acto suicida de Vanessa consistió en oroducir en cada cicatriz de
Shirouko. de rodillas~ postrada en una actitud de dulzura v tranauila su cuerpo. un corte: con:e ejecutado soore las huellas que e:ocaban el
dignidad. con la cara blanca_ los ojos cerrados v la cabellera brillante ieroz maltrato materno.
cayendo a sus espaldas. Según la moda antiQ'.ua-ella se había atado las
rodillas para que la agonia no descompusiése su rectitud. ·Por fm v
también ella se doblegó sobre el puñal·. Bibliogra_ña consuiro.da
Un cone en el alma. un cone Samurai que relanza a Mishima. en
una partida con el Otro ReaJ de un tiempo instituveme. donde la car- :=-~t.:D. Sl~:r.l.!.!!c. ·?sicopruoiogia áe ia L' l!ÍD. cori.d.:a.n.a. •.
ta que define elju70. soporta la huella de un coñe. cone que mues-
170 171
l.ACA.i"l ,Jacques. Seminario -La. Elica-.
-
'
Conceptualización de la ang112tia :
GOETI!E •."Los amores deljot.-en \Verther-. en Freud y Lacan; su incideQ.cia .·. .
TOLSTO!, León. -La. guerra y la paz-. en la dirección de la cura ~ ·
.: · ~ ·•.· ·' ,¡ . ~-.:.:-. ~ .· •
En 1916 en ·1ruroducción ai psicoanálisis- \-a a piantear la angus- Hans sale a la calle con la niñera y no dice de qué tiene _mi~~- .~
tia como señal de aiarma desencadenada por el yo. aunque no q~eda poco lo sabe. sin embargo. lo que si dice. es que por la calle 1e !alta la
claro allí cuál es el peiígro que la desencadena.. En -inhibición_ simoma mamá.
y angusria- nos encontramos con una modificación de sus primeras
teorizaciones: -El motor de la represión (nos dirá) es la ane:ust.ia de Sóio los vehículos carf!ados
-
Jo angustian_ cuando
.
un carro está
. ?
vacío
castración y no a la inversa -.: - no sieme miedo ¿qué seran estos carros cargaoos que angusuan.
i75
174
El miedo d_e J~anito es que los caballos se pongan _en marcha rápi- tia: la angustia produce la represión, el miedo a la castración fue moti-
damente y le unp1dan hacer el movimiento de descargarse de ese lu- vo de la· represión y en tanto el yo reconoce el peligro de la castración
gar. de caer. daria la señal de angustia e inhibe por medio de la instancia placer-dis-
placer el proceso amenazador.
~ tratará de una caída en la emergencia de la angustia, c~erse o
queaar retenido. . Si tal como nos- propone-Freud la angustia es- la reac.ción.,-señal.an te
la pérdida de un objeto, tal como la del medio uterino envolvente, la
La. angustia aparece para Hans ante la turgencia de su pene. con madre considerada como objeto, la pérdida del pene. o la pérdida del
la presentificación del objeto. Será cuestión para él de perder un goce, amor ¿cómo entender que aunque pasee por la calle con su mamá la
ser el falo que completa a su madre o poseer su propio pene. Momen- angustia no se disipa? Una vez desencadenada, podríamos decir que
to de crisis para todo neurótico. La fobia aparecerá lueO"o, como reme- no hav retorno.
dio sintomático para la angustia que irrumpe. Freud llama a la fobia
de ~uanito "la tontería· y a su Yez nos dice en el historial que la neu- Que una madre esté pegada todo el tiempo. que un hijo no pueda
rosis no es nada toma: es preferible un miedo bien localizado. miedo descargarse y caer. que un padre no separe suficientemente y se pue-
al caballo. que el colmo de Ja angustia. La fobia vendría entonces des- da seguir jugando al juego del engaño alli donde se es para una madre
pués de la angustia. todo Jo que una madre quiere. ¿no será acaso ésto lo apgustiante?
_ ~reud nos va a proponer en "Inhibición. sinwma y angustia· lo Podríamos plantear entonces que~!i~ª es tentación. no pér-
s1gwente: dida del objeto. sino justamente presencia por el hecho que el objew
no falta .
. _. ·ne este ~odo. lo que en la fobia sucede no es más que la sustitu-
c1on de un pelig~o extenor p~r otro peligro e::\."terior"'.4 El verdadero peli- Mientras Freud afirmará que el mjedo angustioso en las zoofobias
gro e.nen_or sera p_ara freua: el peligro de Ja castración. ¿Será efecti- es el miedo del vo a Ja casrración. La.can nos propondrá e..xactameme
vamente ese el peligro? Freud insiste con su afumación en 1927 en el lo contrario: la ángusti.a aparece. cuando se presentifica el objeto. ante
articulo sobre el fetichismo: nos recuerda que el niño rehusó a darse la turgencia del p~ene de Juanito, pubto pnvilegiado de su angustia.
p_or enterado que su mad!e y otras mujeres no terúan pene. Si ella es- La amenaza de castración proferida por su madre no parece haberlo
ta ca.su:ada la posesión de su pene conia peligro. "Acaso el adulto viven- angustiado. de hecho no hay amenaza que logre quebrantar para na-
ciará con pánico semejante si se proclama oue el trono y el altar tam- da el ~O"oce que encuentra Juanifo en masturbarse. es más. no hav
balean. "5 · - un
solo indice en el historial aue nos hae:a \islumbrar que esta actividad
¿Será que trono y altar tambalean ame la propia castración 0 tai hava sido imerrumoida. ~·ºes la amenaza de castración lo aue orü!i-
co~o la plantea Laca,:· la única. castración que ei sujeto no puede na-Ja an<1ustia sino' las manifestaciones de su oene aue
~ ~ . auiebran
. -la
e::rre.:rar y ante la cua.1 es capaz oe cualquier mutilación es la casua- armorúa reinante.
aorr ael Otro? Lacari nos dirá: -El neurótico retrocede no ame lacas-
uación. sino por hacer de su castración. la prouia. lo aue le falta aJ Prooonemos así como oumo orívi.lei!iado de emergencia de la angu~;
ºt:º· -~ yor hacer de su castración algo positivo. ·que es ia garanúa de tia el riiomento en aue se anuncia...aue..DOO:n:a--=-aavé:rff&"'él""coñe~-p-ero
la Iunc10n del Otro·. 6 rambfén,_qu.~.p~ri"á:ñoh.áEé~ne!'. .
_ ~opuesta que se cono-a.dice con aquello que lo que an~ustia es el Ya Kierkee:aard. en su libro "El concepto de la angusria- al pregun-
IID~o ~la i;:as~oón tal como nos proporúa Freud en 1926 alli donde
nos mruca aespues de varias vacilaciones su segunda teoría de la angus-
tarse ¿qué es"° la angustia responde: -r..a angustia es Ja aparición de i::
libenad en ramo posibilidad-: La. angusria.,es ei'·vén:igtfde la libenad-. '.
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17/
~l objeto a que emerge se presentifica como angustiante. cuando la ~nm..í![Cada. Ella emergerá cu~ndo en el marco aparece lo que esia-
líoertad que se anuncia como posibilidad .podría no suceder. ba mucho mas cerca. Será el surgimiento de lo Heimlich (lo familiar)
:. :·· p . :.~_.... ·... .,. ..._
e1~ el marco. que termina..-ia por tornarse Unheimlich. lo siniestro.
·· Para desar:r~llar la noción de la angustia Kierkegaard toma la idea Freud _afirma que la angustia carece de objeto. La~an pro2on~ : ·1a
del pecado ongmal: a partir de Adán todos somos pecadores. Hubo a:ñgüStia no es sil} ob.j_etp- atm.QJl..e...a veJ;es n_g sepamO::s d_u¡ut.QQJetQ
. u::i~ ~~ohibicion:. ·oela.i:bo.L del saber no ·corneras-·~ a:rrteS' de esa pro- se-trata. Es· un objewque errra:l caso· va más allá d·el objeto empírtco.
hib1c1~n todo en el paraiso estaba a su disposición. Adán es tentado es un objeto estruch.irado por la reja del corte. del surco. Sin ese corte.
despues de una prohi~ición q1:1e instaurará que a partir de alli, alg~ sin ese surco en lo real. la emergencia del deseo es ímpensabie. ·
es~ en f~lta. Ya?º seran _los rrusmos después de comer del árbol, per-
der~n la mocenc1a, se veran desnudos, reconocerán al otro se.xo: cono- Freud nos enseñó que esa angustia es señal. hov podríamos pro-
ceran la vergüenza. poner que es señal de que cierta posición fantasmatica es conmo\•i da.
momento de vacilación enrre el S v el a. No se rrata de definir cual es
Transgres~ón que desoye el mandato paterno. Transgresión que si eLo.bj.elo..delque..hablamos_enJa_anguslia....sino_de...situar...en..c ada
no se pone e~~uego no hay chance para que allí emerja un sujeto dese- momento de la cura. cuál es: de las especies del objeto a. el aue es.Jª.
anre en relac10n a un objeto que lo cause. puesco en cuesrión en ese momenro de ,·acilación famasmarip .
. Adan y Eva son ·expulsados del paraíso y a panir de alli no serán Proooner el..:.no sin· en_elno_sin oojetQ. ?_lude a la fórrnula __q~_e:_
mmortales, se.·m~dad y muerte. les aguarda en la senda de la vida. Lacan refiere en relación al falo . "El no es sin tenerlo". No ser sin tener
1:-a puerta del para.isa puede.abrirse ¿y si no se abre del todo? Es ahí . no quiere decir de qué objeto se Lrata. Lacan nos dirá que ·sus recur-
oonde situamos la emergencia de la angustia. ]\fomento de conmoción: sos son oscuros·. El ·no ser sin rener· es tamoién --eso no se ve -:-Si
cuando la salida que se anuncia~~ plani.eamos..que....si.5.e..ye...eüaktbªy-~g\J$Jiª,__s~rá en ronces_Q.!:!.~1::!.'Yl
do se presenpilauen el falo. el escibaj_~l....P.~~-ón. la voz o la mirada.
S~rá entoz:ces por_ el surco que cava Ja angustia que una analista tendremos gue abordar C}Ial es 1~a.ru.cu)_~9_a_<:i __g~?~_ t'.?.t.<!-!.l.!.!_Q_p~
p_odra leer alh el caIIllno que rrata de abrirse el deseo . .Lo temido es el analiza.me en cuestión.
siempre "Eso no falta-.
. Si hay corte. ~i se av~nza por esa via. por esa ruta que trata de Tendremos que introducirnos en la radicalidad que plamea la fun-
~onrse la ang1,1stia. hay enance de situarse respecto de su deseo. del ción de la falta v s_Utialta •iene a faltar. será alli cuando nos encon-
ae c~~a quien. ¿Se tratará acaso para_nosotros de que un sujeio ·se tremos con un sujeto angustiado.
cure ·._La.can nos advierte que nada mas vacilante que el concepto de
curac1o_n. aunque propone que ·nuesrra justificación v nuestro deber Tal como lo plantea :t:üenne Gilson: · La existencia es un poder inin-
son mejorar la posición del sujeto":' · terrumpido de activas separaciones-.
Si ~te la aparición del objeto el sujeto vacila. será cuestión de ooe- ¿Qué aporta de nue\'o entonces la enseñanza de Lacan·?
rar alh. en el punto que siruamos como íueme de la angustia: ese s~r-
gmuemo de Ja falta bajo una forma positiva. - Si retorna a la propuesta freudiana aquella que Freud nos iegó por
los últimos años de su elaboración. que la angustia señal se produce
~i el vacío a presen-ar está coima.do. es allí donde surge la penur- en el-Yo en lo reiath·o a un oelie:ro interno. se 1.ratará entonces de un
bac10n de la angustia. - signo. y como signo represental-a algo para alguien. No se trata de un
peiigro interno sino de la angusua ante el deseo del Otro como tal.
Tal como nos lo propuso Freud acordamos con que Ja _a ngustia es- .
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.· ~~ ~ieri el Yo es el lugar de la' 5eñal no es para el Yo para quien se Desco~pÍet.ar al Otro. t~ndrlt e~tonc~s un predo muv caro' para el'
da esa señal. Se presentifica a nivel_pel Yo para que el sujeto advierta neurótico: su pwgia gérdida. •i .· · ·· ·· · ·
que es allí donde él está concernido: Alli donde el Otro lo pone en cues-
tión; ~lí donde solicita su pérdida: eso es la angustia, y su dimensión . Si ~n s~1jeto grita con su~ si~tomas ~q;JeÍlo que e~ la verdad. de lo
temporal. ''·· · ' · · · • ~ . que ese deseo fue en su historia ¿cómo interverúr allí? El acto ~~lana~
lista debería elevarse al de un cirujano que corta con prec1s10n. allí
. Plantearque' de· todaS' las señales la angustia es: fa que no em!'añcr dorrde hay que hacerlo; tambiérr d·ependera·d·e cómO' se-sttüe-el a~alis- .·
res pla.:itearrú más ni menos que es señal de lo real. Aparece en tanto ta de modo tal que un analizante quede o no fijado a un determinado
los ob¡etos que son ob¡etos separables; son separables, porque están destino.
enganchados.
Momento de corte, que generalmeme presentifica un jirón san.~rien
Podríamos proponer entonces que lo que nos ocupa es pensar la to en tanto siempre se paga con una libra de carne y en lo pos1ole lo
angustia como estructura radical en el enfrentamiento del Sujeto al más cerca del corazón. ·
Otro. allí donde el neurótico tiende a identificarse. para que el Otro no
aparezca castrado. en tamo cuando el objeto a. cae. se constituye para Se u-atará de preserYar el lugar del deseo en una cura. aquel qu~ man-
un sujeto su posición deseante. ·· tiene la dirección del análisis más allá de los efectos de la demanaa
Si el Otro está colmado. está colmado con el neurótico en posición "Tanto el hombre como la mujer tendrán que aceptar tenerlo y no
de objeto. Es allí que acudimos con todo nuestro ser. una v otra vez. tenerlo. si bien en relación al falo en los dos casos su deseo es de serlo".
no le faltamos. Será cuestión entonces de soportar una intei-pretación
que cone. soponar un tiempo dificil de duelo. Ser o no ser el falo ima- Todo neurótico se figura que el Otro pide su castración.
ginario d~l O~o, trampa narcisística de Ja cual no conozco a nadie que
haya podido librarse. salvo a condición de interrogar ese Jugar. Tarea Lacan en "La subversión del sujeto" propone:
ardua. dolorosa pero sin duda fructífera. en la cual todo neurótico se
embarca cuando inicia un análisis. cuando avanza en él. El ser no...es_ ·por eso la cuestión del Otro que regresa al Sujeto, desde el lugar de
otro. que el Jugar del objeto v el des-ser Jngar..que..a.tañe.aLsuj.e.to.' donde espera un oráculo bajo la etiqueta del che vuoi? ?Qué quieres?.
es la que conduce mejor al camino de su propio deseo ..s1 se .pone a .rea-
Si uñ análisis avanza no hay chance que no emerja la angustia, nudar. f!racias al savoir faire de un compañero llamaao psicoanalista.
dimensión temporal. donde se verá confrontado a arriesgar. más allá · aunque-fuese sin saberlo bien. en el sentido de un ¿qué me quiereT.9
de todas las garantías posibles. El riesgo mayor es quedarse defmiti-
\'ameme en ~se lugar de objeto. · Proponemos con Lacan que es la e.\.-periencia del análisis. aquella
en Ja cual la regulación del deseo se dará solamente a partir de la e.\.-pe-
"Si ~crnar es arran~arle a la anQ:ustia su certeza· podriamos pen- riencia de castración.
sar que es lo gue nos aetiene como neurótic9s. en tantos derroteros
de la vida. y allí nos atañe tanto a nosotros corno analistas. como a los . No hav chance nosible de evitar la angustia. En el pasaje que lleva
analizan tes. -- del goce ci1 deseo ei pun.i.o..medio .a auavesar es la angustia.
ISO
Así comienzan generalmente los análisis. momento de corre donde la angustia puede ser esperada. en tanto lo
que el Otro quiere. aunque él no lo sepa. es mí angustia.
En el comienzo de este seminario hablamos de los oráculos. que
en la antigua Grecia eran la contestación que las pitonisas y sacerdo- Cito a La.can. el Seminario que tanto nos ocupó:
tes pronunciaban como dada por los dioses. ante.las consultas. que se
les hacfarr a sus ídolos. Oráculos tales corno el famoso de Zeus en w5¡ al final del análisis freudiano ·el paciente sea varón o mujer, nos
Olirnpia. en los cuales los sacerdotes responden a las preguntas des- reclan1a el falo que Je debemos. en función de ese algo insuficiente, por
lo cual Ja relación del deseo con el objeto. que es fundamental no es
..
pués de examinar las entrañas .de las victimas.
distinguida. en cada nivel de aquello de que se trata. como falla cons-
El oráculo ni dice ni oculta y es indispensablemente consultado: tituyente de Ja satisfacción .. ." 10 · •·
Función de corre que se pianrea como ph·ore en'.· todo rratamiemo. La ley del Otro es una ley de capticho. ley arbitrar'.a. también de orá-
183
182
culo. ley de signos en la cual el sujeto no tiene necesariamente garan·
úas. Sn ia culpa tal como la plantea Freud. se trataría de un sujeto
sujerado a la demanda del Otro, ligado incestuosamente. La culpa,
seria entonces el vestigio del amor al padre.
184
PRÓLOGO ..............................:...................... :..........•..........;... :·.... :.. ··· 7
ISIDORO VEGH
R. Ft:R.\1AN
L\ ?111R.\D.-\ E\' U CL~::JC.-\ . ........... ...... ...................... .'................ .. . !3i
R. FL"rt.\!A."
EL OBJETO E\' E!.. DL'ELO Y::::; U ~.r::U..\COÜ.; ........ ................ .. . ...• •)...)
~
A. ST::ZOVSKY
SL.:EXOS DE A:~GL"STL; Y PESADILL-\S. ......................................... ¡5 l
S . .\l. R.'\'.>.DE~O
?:\S.-\JE AL ACTO Y SL"1CIDIO. ..............•....................................•.... l 63
E. J.l.3:r
CONCEPTIJALIZACIÓN DE L.\ ANGUSTIA E.\ FRECD y EN l..AC:\S .
SU li\ClDENCL-\_E:i L-\. D!RECCiÓl'f DEL-\ CLlR..\.. ..• .,••••.....•............ --
l
...
I .J
A. S!E:?.>.K
Hablar de la angustia es nombrar la castra-
ción; nos retorna a un punto crucial en la es-
tructuración del sujeto. Adentrarnos en sus
cuestiones no sólo implica una articulación
teórica rigurosa de conceptos nodales, tam-
bién las consecuencias prácticas que se leen
en los modos distintos de establecer la direc-
ción de la cura.
Según el analista se sitúe en relación a la
angustia, se puede definir su modo de enten-
der y practicar el análisis.
Entre dos muertes, dice La.can, discurre un
análisis. Recuerda la equivalencia freudiana
muerte-castración; más fácil evocarla que
desplegar su lógica, para alcanzarla nos con-
vocamos.
La angustia es señal, de la segunda muerte.
Que sólo a nosotros, hablantes, nos concier-
ne; antecede a la primera, invirtiendo la cro-
nología sadiana.
La ética del análisis sitúa al sujeto de la cul-
pa en una perspectiva distinta a la moral do-
minante. A través de un análisis el sujeto pa-
sa de sentirse culpable del Otro a situarse cul-
pable de lo Real. En el desfiladero que lleva
de una culpa a otra, la angustia es señal.
Isidoro Vegh
. Lugar Editorial