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EL DERECHO A LA PEREZA

La burguesía siendo una clase social dominante dueños de propiedades y gran capital, eran
individualistas egoístas que trasformaron el mundo feudal logrando implantar el capitalismo y
estado liberal, luchaban contra la nobleza sostenida por el clero, una vez tuvieron la gloria
cambiaron de apariencia, de este modo apoyando a las religiones y productores con el fin de
reducir al mínimo las necesidades eliminando sus gustos para someter al individuo de lleno en su
labor.
Esta unión con doble propósito genero gran locura de amor hacia el trabajo, donde los obreros
laboraban incansablemente hasta agotar sus fuerzas arriesgando su salud, debido a que
economistas, moralistas y religiones santificaban la honra de actuar con buena fe en las
actividades que desarrollaran en pro de su beneficio de la sociedad capitalista. El surgimiento de
la civilización evoluciono la industrial para suprimir la esclavitud humana remplazándolos por
maquinas, la realidad de este cambio trajo mayor esclavitud porque les hacían y aun nos hacen
creer que para tener mayor bienestar se debe trabajar incansablemente, cuando la realidad es que
los grandes capitalistas son los únicos beneficiados de este acto forzado de manera intelectual y
física sin la previa necesidad de sacrificar su mayor tiempo, estos aportando poco para el
desarrollo empresarial.
En las épocas anteriores manejaban ideales forzosos los cuales hacían creer que el individuo
debía pasar tiempos completos realizando actividades para evitar coger malos vicios o fomentar
la pereza, inclusive los patronos tenían sitios de alojamiento especial para obreros, estos debían
trabajar 14 horas diarias tanto hombres, mujeres y niños a partir de los ocho años, este acto
privaba a los pequeños explotar su inteligencia todo esto con el afán de generar mayores lucros,
es por esto que las generaciones crecieron pensando que al cooperar largas horas de trabajo
estaban haciendo bien, bajo la inocente perspectiva esclavista.
Un ejemplo de ello y ocurrió en Mulhouse en 1813, se le llamaba edad de oro por que todos los
obreros tenían casas, pequeños campos y tiempo suficiente para dedicar a sus hogares tanto en
ciudades y pueblos, la industria de algodón aún no había invadido a sus géneros,veinticinco años
después la industria de algodón había llegado para apoderarse completamente de este lugar, sacar
los obreros de sus hogares y explotarlos sin compasión; su fuerza física tanto a hombres, mujeres
y niños obligándolos a trabajar quince horas mínimo, mientras que los miembros de los
fabricantes se daban lujos, sus hijos a la edad de los veinte aún no habían ingresado a trabajar
como solía suceder con los pequeños de la clase obrera. Tras la fomentación de estas grandes
fábricas de algodón y por la explotación masiva de esta generación empezó a surgir la miseria en
gran escala como reflejo de esclavitud que atravesaban estos individuos oprimidos por la ley
capitalista, mientras que los dueños directores enriquecían sin necesidad de trabajar.
La sobreproducción trae graves consecuencias a los fabricantes ya que disminuyen el número de
compradores desesperados buscan diferentes maneras de vender mientras que otros
aprovechaban la situación ofrecían precios bajos, los productos empiezan a deteriorarse y deben
deshacerse de ello, las fabricas cierran quedando con grandes deudas los depósitos quiebran
originando escases de comida, esta situación causa revolución, los obreros salen aexigir
soluciones era injusto porque dedicaron tiempos enteros para abastecer las fabricas sin el previo
consentimiento del exceso de producto que los llevaría a tener necesidades futuras y crisis
económica en el sector, más adelante Inglaterra y Francia tuvieron encuentros mortales tratando
de decidir quien tendría el privilegio de vender en América y las Indias.
A medida que la maquina es perfeccionada y remplazo el trabajo humano se crea una especie de
competencia del hombre con la maquina este redoblar su trabajo deteriorando su salud para
generar suficiente producción a las fábricas y a su vez estos deben consumir lo que producen, la
clase capitalista trabaja menos y gozan más, sus utilidades crecen gracias a este tipo de
explotación obrera quienes trabajan incesantes ilusionados en lograr mejores futuros.
La ideología antigua que se le inculco a las generaciones de trabajar exhaustamente no fue
idónea son perversas ya que el trabajo desenfrenado trae graves consecuencias en el sector
económico y social.
Los ingleses dedujeron que para aumentar la potencia de la productividad humana no era
necesario trabajar largas jornadas, era importante que los trabajadores tuvieran días de fiestas
buenas remuneración, días de descanso y pocas horas de trabajo, para que estos no agotaran sus
fuerzas, estos fue lo que causo nuestro grande filósofos Aristóteles y Pitágoras.
Para concluir, hoy día gozamos de la gran evolución industrial y avance tecnológico a nivel
global,viene acompañada de beneficios y perjuicios, como gran número de desempleos para
personas de escasos recursos, para los grandes capitalistas su utilidad aumenta en gran
proporción gracias al abastecimiento del pueblo al que se somete y gracias a la ignorancia que el
mismo gobierno ayuda a generar creando leyes de supuestas protecciones infantiles para que sus
padres no los eduquen con grandes principios y por el contrario se limiten a estos actos, de esta
manera tener un pueblo sin sabiduría ignorante que agache la cabeza ante las leyes de opresión
que surgen para su conveniencia.
El pensamiento ancestral aquel que se debía trabajar inagotablemente para tener mejor futuro,
aun vaga en nuestra cultura, básicamente se enfoca en las sociedades de escasos recursos quienes
han tenido que sobrevivir bajo la opresión política y económica acompañada de inocencia e
ignorancia. La industrialización trajo centenares de perjuicios para quienes no estén a su nivel y
creo en el pensamiento del hombre que no hay derecho a la pereza, ya que acostumbrados a la
esclavitud ni siquiera conocían lo que era descansar o hacer un poco de pereza, se les quito el
derecho a su descanso, algo muy inhumano.

BIBLIOGRAFIA
Lafargue Paul: El Derecho a la Pereza
(refutación del derecho a la pereza de 1848)

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