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1.

Hechos numéricos: comprensión de todas las posibles combinaciones que


van a generar un determinado número. Se trata de que los niños puedan
comprender que la composición de dos números pequeños puede formar uno
más grande, de esta manera cuando ya conozca estas combinaciones lo
pueda hacer de forma automática, ya que estarán instaladas en su memoria.
Se basan en métodos de conteo, para resolver operaciones, puesto que a
medida que el niño aumenta, progresa y fortalece sus métodos de conteo va
a desarrollar los hechos numéricos.

2. Cálculo manipulativo: es la primera fase del cálculo desarrollado a una


edad temprana. Es un proceso en el cual los niños desarrollan tres
estrategias de conteo: la primera es “contar todo”, que es cuando los niños
cuentan la totalidad de los números por separado y luego todos juntos, la
segunda es “contar desde el principio” donde cuenta el primer sumando y
luego lo junta con el segundo, y por último, “contar a partir del sumando
mayor”, aquí empieza a contar por el número más grande y luego el menor,
esta última es fundamental para avanzar con las siguientes fases. Está
relacionado con 3 importantes principios del conteo: correspondencia uno-
uno, cardinalidad y orden estable.

3. Cálculo representacional: es la segunda fase del cálculo. Es un proceso


donde los niños aprenden: la estructura de las operaciones (algoritmos), que
cada una de estas operaciones tienen procesos particulares para resolverse
y que los números tienen un valor posicional (unidad, decena, centena, etc.).
Esta fase se desarrolla primero a través del cálculo verbal y posteriormente
con el cálculo procedimental.

4. Cálculo mental: es la tercera fase del cálculo. Es una serie de


procedimientos, de diversas estrategias, por el cual los niños logran
desarrollar operaciones matemáticas utilizando solo el cerebro, sin la
necesidad de utilizar instrumentos concretos (lápiz, papel, calculadora, etc.),
obteniendo una respuesta exacta, poniendo en juego sus concepciones sobre
los números, la numeración decimal y las propiedades de las operaciones. El
cálculo mental se caracteriza por ser holístico, variable, flexible y
constructivo. Existen dos tipos, el cálculo mecánico o estímulo respuesta,
basado en la recuperación de hechos numéricos, trabajando con la memoria
a largo plazo, y el cálculo reflexivo o pensado basado en la descomposición
numérica.

5. Fluencia o fluidez del cálculo: consiste en resolver los problemas de


manera eficiente y precisa para poder desarrollar aprendizajes matemáticos
determinados que le permiten al estudiante realizar un razonamiento
estratégico y una mejor resolución de problemas. Se basa en dos elementos
importantes, el acierto en el cálculo (resultado correcto) y la rapidez de
desarrollo del cálculo, es decir, en la eficiencia y automatización en los
procedimientos del cálculo. La fluidez del cálculo y sentido numérico están
íntimamente relacionados, ambos se desarrollan juntos y uno no puede vivir
sin el otro.

6. Habilidades aritméticas: son aquellas habilidades y/o capacidades que se


desarrollan de forma gradual y duradera, para realizar diversas operaciones
básicas de la aritmética, que son la adición (suma), sustracción (resta),
multiplicación y división, considerándose esenciales para nuestra vida
cotidiana en una sociedad numerada. Estas habilidades permiten
comprender, reproducir o crear una sucesión de pasos para lograr solucionar
cierta clase de ejercicios.

7. Enumeración: procedimiento que colabora con el desarrollo de las


habilidades aritméticas básicas, por el cual se enuncian sucesiva y
ordenadamente los elementos de un conjunto, es decir, se realiza
correspondencia de una secuencia numérica a los elementos. Existen dos
clases diferentes de enumeración, la enumeración como el procedimiento
para listar todos los miembros de un conjunto en una sucesión definida, la
que consiste en la realización de una lista completa y exacta de los
elementos que forman parte de un conjunto, y la enumeración como el conteo
de elementos de una clase determinada.

8. Esquema de aumento y disminución de cantidades: este procedimiento


mental nos permite sumar y restar verbalmente, consiste en que los niños
tengan conocimiento de cuando se agregan o quitan elementos a un conjunto
establecido. Está vinculado a los procedimientos de enumeración y secuencia
numérica, que se desarrollan en colaboración con las habilidades aritméticas
básicas.

9. Estimación: cantidad no exacta o aproximada de datos de un valor


cuantitativo que se da como respuesta a una determinada operación con los
datos que se tienen presentes. Es de gran utilidad y es frecuente su uso en
diversos contextos de la vida cotidiana, cuando no es necesaria una
respuesta exacta. Algunos autores dicen que el uso del cálculo mental y de
las destrezas de estimación ayudan a la resolución de problemas desde
edades tempranas.
10. Sentido numérico: es un conjunto de habilidades que nos permite entender
el significado de los números, las múltiples relaciones que hay entre ellos,
sus magnitudes relativas y los efectos de las operaciones. Además, es
aquella capacidad primitiva de reconocer y representar cantidades sin utilizar
símbolos numéricos, realizar juicios matemáticos y desarrollar estrategias
para la solución de problemas complejos.

11. Estrategia de contar desde el primero: forma parte de las estrategias de


conteo. Es un proceso más eficiente y rápido que consiste en que los niños
visualizan el primer conjunto a contar y ya asumen la cantidad para luego
agregar el segundo sumando a su cuenta. Explicado de otra forma, cuando el
niño cuenta 4 + 3, comienza ya asumiendo el número 4 (sin la necesidad de
contar número por número hasta llegar al 4) y después continúa contando
para completar la suma: 5, 6 y 7.

12. Métodos de conteo: son aquellas estrategias utilizadas para determinar el


número total de resultados que pueden haber a partir de hacer
combinaciones dentro de un conjunto. Cuando el niño potencia los métodos
de conteo va a desarrollar hechos numéricos, por esta razón, estos
conceptos se encuentran estrechamente vinculados. Además, ambos
conceptos sirven para encontrar respuesta a las tareas de suma y resta, se
van integrando gradualmente produciendo que el niño empiece a establecer
relaciones numéricas para adquirir las características del sistema numérico.

13. Estrategia de recuperación: es el nivel de estrategias del cálculo más alto,


se presenta cuando los niños responden rápido a un determinado problema
matemático, trayendo de su memoria la respuesta correcta sin la necesidad
del uso de las estrategias de conteo. El niño no es capaz de explicar cómo
llegó a la respuesta del cálculo cuando se le pregunta cómo lo realizó, ya que
lo ha trabajado de tal forma que el resultado se encuentra interiorizado en su
memoria a largo plazo.

14. Algoritmos: es un conjunto ordenado de operaciones sistemáticas para


resolver un cálculo matemático y hallar la solución a un tipo de problema.
Antes de que inicien este cálculo escrito, los niños deben adquirir los
conceptos de suma, resta, multiplicación, división y los conocimientos de los
símbolos que indica cada operación. Estos requieren el establecimiento de
los nexos entre contenidos, cálculos y operaciones de menor complejidad ya
aprendidos. Dicho de otra forma, el niño al resolver la operación matemática
12 + 5, primero debe sumar las unidades y luego la decena para llegar al
resultado final que sería 17.

15. Percibir y Razonar: son unas de las habilidades más importantes para que
los niños se instalen en las habilidades aritméticas básicas, comprendiendo
que cuando se combinan cantidades de números, estas pueden cambiar
aumentando o disminuyendo el numeral. Es fundamental que las habilidades
de percibir y razonar se desarrollen antes de que el niño represente el
número o haga una operación.

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