Las identidades se conforman mediante discursos, estas dan la forma al contenido

subjetivo para poder luego realizar acciones conforme con lo planteado, la

construcción de identidades en una primera instancia son ideas trazadas a partir
de la subjetividad de los individuos, estos sujetos a partir de su experiencia crean
un discurso y establecen formas de identificación observables.

En este sentido, las identidades son fluctuantes, estas no son estáticas, se las
observa a través del actuar y contienen una significación subjetiva que se
desprende de las interacciones entre individuos en escenarios específicos.

Butler (1998) entiende la identidad desde una perspectiva de imposición y

repetición de actos estilizados iterativos, los cuerpos al realizar las diferentes
prácticas reinterpretan lo hegemónico normado constituyendo la ilusión de un yo
generalizado permanente.

(la identidad) …requiere una conceptualización de

temporalidad social constituida… significativamente (…) la
apariencia de sustancia es entonces precisamente eso, una
identidad construida, un resultado performativo llevado a
cabo (por) la audiencia social mundana, incluyendo los
propios actores, han venido a creer y a actuar como creencia.
(Butler, 1998, p. 297)

En este entendido concordando con Butler la identidad también puede ser

construida desde la subversión y la apropiación de los cuerpos, resignificando la
forma en que deben ser vistos los individuos apoyándose en performances con
contenido subjetivo propio.

Cuando un individuo o un grupo se afirman como tales, lo hacen como un medio

de diferenciación en relación con alguna otra persona o grupo con el que se
confrontan; es una identidad que surge por oposición, implicando la afirmación
del nosotros delante de los otros, sin afirmarse jamás en aislamiento.
Cuando una persona se identifica con otra se considera que es una forma de
emulación que busca borrar las diferencias entre uno mismo y la persona o grupo
(objeto), para el individuo el otro representa un modelo ideal al cual piensa
asemejarse, la asimilación total es imposible por lo que comparten rasgos
específicos que los identifica como semejantes.

En este entendido, la identidad social se encuentra circunscrita a varios grupos con

diferente nivel de adscripción (familia, barrios, pueblos, categoría profesional,
grupos de edad, nivel educativo, etc.), la identidad personal se construye desde
diferentes aspectos como la propia biografía, la red de relaciones personales o el
apego a distintos objetos, así, podemos observar que existe una identidad parcial y
fragmentada.

Las identidades confluyen entre sí, estas interactúan en diferentes espacios

socioculturales para componerse,

…las identidades se activan dependiendo de la escala en las

que se despliegan, esto es, una identidad local adquiere
relevancia con respecto a otra, pero ambas pueden
subsumirse en una identidad regional con respecto a otra.
Por tanto, del hecho que las identidades sean múltiples se
deriva que un individuo o colectividad específica siempre
operan diferentes identidades al mismo tiempo. (Restrepo
2007, p. 26)