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¿Qué es el Átomo?

El átomo es una estructura en la cual se organiza la materia en el mundo físico o en la


naturaleza. Los átomos forman las moléculas, mientras que los átomos a su vez están
formados por constituyentes subatómicos como los protones (con carga positiva), los
neutrones (Sin carga) y los electrones. (Con carga negativa).

Cada átomo se compone de un núcleo y uno o más electrones unidos al núcleo. El núcleo
está compuesto de uno o más protones y típicamente un número similar de neutrones.
Los protones y los neutrones son llamados nucleones. Más del 99,94 % de la masa del
átomo está en el núcleo. Los protones tienen una carga eléctrica positiva, los electrones
tienen una carga eléctrica negativa y los neutrones tienen ambas cargas eléctricas, por lo
que son neutros. Si el número de protones y electrones son iguales, ese átomo es
eléctricamente neutro. Si un átomo tiene más o menos electrones que protones, entonces
tiene una carga global negativa o positiva, respectivamente, y se denomina ion (anión si es
negativa y catión si es positiva).

Los electrones de un átomo son atraídos por los protones en un núcleo atómico por la
fuerza electromagnética. Los protones y los neutrones en el núcleo son atraídos el uno al
otro por una fuerza diferente, la fuerza nuclear, que es generalmente más fuerte que la
fuerza electromagnética que repele los protones cargados positivamente entre sí. Bajo
ciertas circunstancias, más acentuado cuanto mayor número de protones tenga el átomo,
la fuerza electromagnética repelente se vuelve más fuerte que la fuerza nuclear y los
nucleones pueden ser expulsados o desechados del núcleo, dejando tras de sí un
elemento diferente: desintegración nuclear que resulta en transmutación nuclear.
¿Qué son los modelos atómicos?
Se conoce como modelos atómicos a las distintas representaciones mentales de la
estructura y funcionamiento de los átomos, desarrolladas a lo largo de la historia de la
humanidad, a partir de las ideas que en cada época se manejaban respecto a de qué
estaba hecha la materia.

Modelo atómico de Demócrito (450 a.C.)


La “Teoría atómica del universo” fue creada por el filósofo griego Demócrito y su mentor,
Leucipo. En aquella época los saberes no se alcanzaban mediante la experimentación, sino
el razonamiento lógico, basándose en la formulación de ideas y su debate.

Demócrito propuso que el mundo estaba formado por partículas mínimas e indivisibles, de


existencia eterna, homogéneas e incompresibles, cuyas únicas diferencias eran de forma y
tamaño, nunca de funcionamiento interno. Estas partículas se bautizaron como átomos,
palabra que proviene del griego ἄτομοι y significa “indivisible”.

Según Demócrito, las propiedades de la materia estaban determinadas por el modo en


que los átomos se agrupaban. Filósofos posteriores como Epicuro añadieron a la teoría el
movimiento azaroso de los átomos.

Modelo atómico de Dalton (1803 d.C.)


El primer modelo atómico con bases científicas nació en el seno de la química, propuesto
por John Dalton en sus “Postulados atómicos”. Sostenía que todo estaba hecho de
átomos, indivisibles e indestructibles, incluso mediante reacciones químicas. Los
elementos conocidos dependían de sus átomos, que poseían la misma carga e idénticas
propiedades, pero un peso atómico relativo diferente: esto debido a que, comparados con
el hidrógeno, mostraban masas diferentes.

Dalton dedujo que los átomos se agrupan guardando proporciones distintas y así se
forman los compuestos químicos.
Modelo atómico de Lewis (1902 d.C.)
También llamado el Modelo atómico cúbico, proponía la estructura de los átomos como
un cubo, en cuyos ocho vértices se hallaban los electrones. Fue propuesto por Gilbert N.
Lewis y permitió avanzar en el estudio de las valencias atómicas y las uniones moleculares,
sobre todo luego de su actualización por parte de Irving Langmuir en 1919, desarrollando
así el “átomo del octeto cúbico”.

Estos estudios dieron pie a lo que hoy se conoce como diagrama de Lewis, a partir del cual
se conoce el enlace atómico covalente.

Modelo atómico de Thomson (1904 d.C.)


Propuesto por J. J. Thomson, descubridor del electrón en 1897, este modelo es previo al
descubrimiento de los protones y neutrones, por lo que asumía que los átomos consistían en
una esfera de carga positiva y distintos electrones de carga negativa incrustados en ella, como
las pasas en el pudín. Dicha metáfora le otorgó al modelo el epíteto de “Modelo del pudín de
pasas”.

Modelo atómico de Rutherford (1911 d.C.)


Ernest Rutherford realizó una serie de experimentos en 1911 a partir de láminas de oro y
otros elementos, gracias a los cuales determinó la existencia de un núcleo atómico de
carga positiva en el cual se hallaba el mayor porcentaje de su masa. Los electrones, en
cambio, giraban libres en torno a dicho núcleo o centro.

Modelo atómico de Bohr (1913 d.C.)


Este modelo da inicio en el mundo de la física a los postulados cuánticos, por lo que se
considera una transición entre la mecánica clásica y la cuántica. El físico danés Niels Bohr
lo propuso para explicar cómo podían los electrones tener órbitas estables rodeando el
núcleo, y otros pormenores de los que el modelo previo no lograba dar cuenta.

Este modelo se resume en tres postulados:

 Los electrones trazan órbitas circulares en torno al núcleo sin irradiar energía.
 Las órbitas permitidas a los electrones son calculables según su momento angular
(L).
 Los electrones emiten o absorben energía al saltar de una órbita a otra y al hacerlo
emite un fotón que representa la diferencia de energía entre ambas órbitas.

Modelo atómico de Sommerfeld (1916 d.C.)


Fue propuesto por Arnold Sommerfield para intentar llenar los baches que presentaba el
modelo de Bohr a partir de los postulados relativistas de Albert Einstein. Entre sus
modificaciones están que las órbitas de los electrones fueran circulares o elípticas, que
los electrones tuvieran corrientes eléctricas minúsculas y que a partir del segundo nivel de
energía existieran dos o más subniveles.

Modelo atómico de Schrödinger (1926 d.C.)


Propuesto por Erwin Schrödinger a partir de los estudios de Bohr y Sommerfeld, concebía
los electrones como ondulaciones de la materia, lo cual permitió la formulación posterior
de una interpretación probabilística de la función de onda, por parte de Max Born.

Eso significa que se puede estudiar probabilísticamente la posición de un electrón o su


cantidad de movimiento, pero no ambas cosas a la vez, debido al célebre Principio de
incertidumbre de Heisenberg.

Este es el modelo atómico vigente a inicios del siglo XXI, con algunas posteriores
adiciones. Se le conoce como Modelo cuántico-ondulatorio.
¿Qué es una batería?
Una batería eléctrica, también llamada pila o acumulador eléctrico, es un artefacto
compuesto por celdas electroquímicas capaces de convertir la energía química en su
interior en energía eléctrica, mediante la acumulación de corriente alterna. De esta
manera, sirven para alimentar distintos circuitos eléctricos, dependiendo de su tamaño y
potencia.

Las baterías están plenamente incorporadas a nuestra vida cotidiana desde su invención


en el siglo XIX y su comercialización masiva en el XX, de la mano de la electrónica.
Controles remotos, vehículos automotores, relojes, computadores de todo tipo, teléfonos
celulares y un enorme etcétera de artefactos contemporáneos utilizan pilas como método
de alimentación eléctrica, por lo que se fabrican en diversas potencias y proporciones.

Las baterías poseen una capacidad de carga determinada por la naturaleza de su


composición, y que se mide en amperios-hora (Ah), lo cual significa que la pila puede dar
un amperio de corriente a lo largo de una hora continua de vida. Mientras mayor sea su
capacidad de carga, más corriente podrá almacenar en su interior.

Por último, el breve ciclo de vida de la mayoría de las baterías comerciales las ha


convertido en un potente contaminante de aguas y suelos, dado que una vez cumplido su
ciclo vital no pueden recargarse ni reusarse, y son desechadas. Tras oxidarse su cubierta
metálica, las pilas vierten al medio ambiente su contenido químico y alteran su
composición y su pH.

¿Cómo funciona una batería?{


El principio fundamental de una batería consiste en las reacciones de oxidación-reducción
(redox) de ciertas sustancias químicas, una de las cuales pierde electrones (se oxida)
mientras la otra gana (se reduce), pudiendo retornar a su configuración inicial dadas las
condiciones necesarias: la inyección de electricidad (carga) o el cierre del circuito
(descarga).
Las baterías contienen celdas químicas que presentan un polo positivo (cátodo) y otro
negativo (ánodo), así como electrolitos que permiten el flujo eléctrico hacia el
exterior. Dichas celdas convierten la energía química en eléctrica, mediante un proceso
irreversible (prácticamente) que una vez consumado, agota su capacidad para
recibir energía. En eso se distinguen dos tipos de celdas:
Primarias. Aquellas que, una vez producida la reacción, no pueden volver a su estado
original, agotando así su capacidad de almacenar corriente eléctrica.

Secundarias. Aquellas que pueden recibir una inyección de energía eléctrica para
restaurar su composición química original, pudiendo así ser empleadas numerosas veces
antes de agotarse del todo.

Tipos de batería
Existen muchos tipos de baterías, atendiendo a los elementos empleados en su
fabricación, tales como:

 Baterías alcalinas. Comúnmente desechables, emplean hidróxido de potasio como


electrolito, junto con zinc y dióxido de magnesio para suscitar la reacción química
que produce energía. Son sumamente estables, pero de corta vida.
 Baterías de ácido-plomo. Comunes en vehículos y motocicletas, son pilas
recargables que poseen dos electrodos de plomo. Durante la carga, el sulfato de
plomo en su interior se reduce y deviene plomo metal en el ánodo, mientras en el
cátodo se forma óxido de plomo. El proceso se invierte durante la descarga.
 Baterías de níquel. De muy bajo coste pero pésimo rendimiento, son algunas de
las primeras en manufacturarse en la historia. A su vez, dieron origen a nuevas
baterías como:

 Níquel-hierro (NI-FE). Fáciles y económicos de fabricar, consistían en tubos finos


enrollados por láminas de acero niquelado. En el interior de los tubos se usaba
hidróxido de níquel y como electrolito potasa cáustica y agua destilada. Sin
embargo su rendimiento no superaba el 65%.
 Níquel-cadmio (NI-CD). Con ánodo de cadmio y cátodo de hidróxido de níquel, e
hidróxido de potasio como electrolito, estos acumuladores son perfectamente
recargables, pero presentan baja densidad energética (apenas 50Wh/kg).
 Níquel-hidruro (Ni-MH). Emplean hidróxido de níquel para el ánodo y una aleación
de hidruro metálico como cátodo, fueron las pioneras en usarse para vehículos
eléctricos, dado que son perfectamente recargables.
 Baterías de iones de litio (Li-ION). Las baterías más empleadas en la electrónica de
pequeño tamaño, como celulares y otros artefactos portátiles. Destacan por
su enorme densidad energética, sumados a su liviandad, pequeño tamaño y buen
rendimiento, pero poseen una vida máxima de tres años. Además, al
sobrecalentarse pueden explotar, ya que sus elementos son inflamables.
 Baterías de polímero de litio (LiPo). Variación de las ordinarias baterías de litio,
presentan mejor densidad de energía y mejor tasa de descarga, pero presentan el
inconveniente de quedar inutilizadas si pierden su carga por debajo de 3 voltios.
Pila y batería
Los términos pila y batería en este contexto son sinónimos, y provienen de los tiempos
iniciales de la manipulación humana de la electricidad. Los primeros acumuladores
consistían en agrupaciones de celdas o discos metálicos para aumentar la corriente
suministrada inicialmente, y que podían disponerse de dos formas: uno sobre el otro,
formando una pila, o uno junto al otro, en batería.

Debe aclararse, no obstante, que en muchos países de habla hispana se emplea


únicamente el término batería, prefiriendo acumulador para otros artefactos eléctricos,
como los condensadores, etc.
SEMICONDUCTORES
Los semiconductores son elementos que tienen una conductividad eléctrica inferior a la
de un conductor metálico pero superior a la de un buen aislante. El semiconductor más
utilizado es el silicio, que es el elemento más abundante en la naturaleza, después del
oxígeno. Otros semiconductores son el germanio y el selenio. Los átomos de silicio tienen
su orbital externo incompleto con sólo cuatro electrones, denominados electrones de
valencia. Estos átomos forman una red cristalina, en la que cada átomo comparte sus
cuatro electrones de valencia con los cuatro átomos vecinos, formando enlaces
covalentes. A temperatura ambiente, algunos electrones de valencia absorben suficiente
energía calorífica para librarse del enlace covalente y moverse a través de la red cristalina,
convirtiéndose en electrones libres. Si a estos electrones, que han roto el enlace
covalente, se les somete al potencial eléctrico de una pila, se dirigen al polo positivo.

SEMICONDUCTORES TIPO P Y N
Al añadir impurezas a los semiconductores provocamos que estos tengan una mejor
conductividad eléctrica. Este proceso se conoce como dopado, se puede realizar de dos
formas:

Impurezas pentavalentes: Son elementos que podemos encontrar en la tabla periódica cuyos
átomos cuentan con cinco electrones de valencia en su orbital exterior. Entre estos elementos
podemos encontrar el Fósforo, Antimonio y Arsénico.

Impurezas trivalentes: Son elementos cuyos átomos tienen tres electrones de valencia en
su orbital exterior. Podemos encontrar entre ellos el Boro, Galio e indio. Cuando un
elemento entra a la red cristalina del Silicio que tiene cinco electrones se completan los
cuatro electrones de valencia que se precisan para llegar al equilibrio y por lo tanto
quedaría un quinto electrón que permite al elemento ser mucho mejor conductor. Un
semiconductor dopado con impurezas pentavalentes se dice que es de tipo N. Si en la red
cristalina de Silicio se introduce una impureza trivalente se forman tres enlaces covalentes
con tres átomos de Silicio vecinos, quedando un cuarto átomo de Silicio con un electrón
sin enlazar, provocando así un hueco en la red cristalina. Un semiconductor dopado con
impurezas trivalentes se dice que es de tipo P.

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