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la
música medieval gallega
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Criterios, fuentes y materiales para la interpretación de la
música medieval gallega
1 * El presente trabajo se presentó en el Simposio "O feito diferencial galego na Música" que organizó O
Museo do Pobo Galego en Santiago de Compostela, en 1997 (del 15 al 18 de diciembre), y tuvo como
complemento de la ponencia la actuación de In Itinere, Grupo de Cámara de la Universidad de
Santiago. He de agradecer a la Universidad de Pennsylvania (USA) el haberme recibido como visiting
Professor durante el segundo semestre del curso 1996-7, período en el que preparé los materiales para
el presente trabajo, y, en especial a los profesores Thomas Connolly y Norman Smith por sus
atenciones y consejos profesionales; igualmente a la Biblioteca de la Universidad de Penn y a su
responsable de la sección de Música, Marjorie Hassen. Tambien expreso mi agradecimiento a la Xunta
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que hay que jerarquizar muchas hipótesis, según su mayor grado de medievalidad o
de modernidad 2
Historicismo
Existen en este planteamiento de reconstrucción dos posturas antagónicas cuyos
presupuestos se han visto enfrentados y se han radicalizado en las tres últimas
décadas; diatribas y polémicas que, en definitiva, han arrojado sobre el tema gran
cantidad de información y de enriquecedores contrastes. Por un lado, una postura
historicista que cifra en las herramientas del musicólogo y del organólogo la garantía
6
de Galicia (Dirección Xeral de Universidades) que me facilitó una ayuda para financiar aquella
estancia; y al profesor J. López-Calo que, una vez más, en mi ausencia, me ayudó generosamente
cubriendo la docencia de alguna de mis clases.
Le Vot, G., "Sur l' interpretacion musicale de la chanson des trouvadours". Actes du colloque Musique,
Litérature et Societé au Moyen Age. Danielle Buschlinder (ed.). Marzo, 1980, p. 3
2
Ibidem
3
Taruskin, R., Text and Act. Essays on music and performance. Oxford U. Press, 1995
4
Cohen, J.&Snitzer, H., Reprise. The extraordinary revival of Early Music. Little Brown and Company.
Boston, 1985, p. XII
5
Crutchfield, W., "Fashion, Conviction, and Performance Style in a Age of Revivals". Authenticity and
Early Music. A symposium. Edited by N. Kenyon. Oxford U. Press, 1988, p. 26
6
Montagu, J., "The sound of music" The Consort 36(1980)355; Kenyon, N., "Authenticity and Early
Music: Some Issues and Questions". Authenticity and Early Music. A symposium. Edited by N. Kenyon.
Oxford U. Press, 1988, p. 1; Lindley, M., "Authentic Instruments, Authentic Playing". The Musical Time,
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de su legitimidad ante la tarea de reconstruir el pasado. Su equipaje es fuertemente
academicista y sus máximas podría resumirse: a) en la búsqueda sin tregua de la
voluntad del compositor, b) en el descubrimiento del sonido auténtico, y c) en la
repetición ideal de aquel concierto celebrado hace setecientos años, con todas las cir-
cunstancias que lo acompañaban, tanto en el número de músicos y sus instrumentos,
como en su técnica interpretativa.
Los postulados elementales se resumirían, pues, en la recuperación de lo anti-
guo con los instrumentos y las voces existentes en aquel momento, usando la técnica
adecuada, la afinación precisa, y la pronunciación correcta, sirviéndonos para ello de
los documentos idóneos y rehaciendo el entorno (marco, vestuario, programa, etc.) de
la manera más aproximada, a fin transmitir la música con credibilidad, con auten-
ticidad . 7
nº 1610 April (1977); Planchart, A.E., "The performance of Early Music in America" The Journal of
Musicology 1(1982)19; Donington, R., "The present position of Authenticity". Performance Practice
Review 2(1989)117; Page, Ch., Voices and instruments of the Middle-Ages: instrumental practice songs in
France, 1100-1300. J.M.Dent and Sons, London, 1978
7 Montagu, J., "The sound of music". Op. cit., p. 357
7
8
Vid. Haskel, H., The early music revival. A history. Thames and Hudson. London, 1988. De entre las
revistas periódicas Early Music es la que, por su carácter editorial pragmático y abierto, recoge los más
interesantes y variados artículos de opinión sobre este tema, con plumas de gran prestigio tanto en el
mundo de la teoría como en el de la interpretación.
9
Montagu, J., "The sound of music". Op. cit., p. 360
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marcos para los conciertos, puesta en escena, contextos litúrgico, etc . La convivencia 10
10
Kenyon, N., "Authenticity and Early Music" Op. cit., p. 7
11
Vid. López-Calo, J. (edit.), Los instrumentos del Pórtico de la Gloria. Su reconstrucción y la música de su
tiempo. 2 vols. Fundación Barrié de la Maza. La Coruña, 1994; se recogen los trabajos de investigación
que acompañaron a la reproducción de los instrumentos del Pórtico de la Gloria (entre los años 1990-
1991); en el proyecto, dirigido por los Dres. J. López-Calo y C. Villanueva, participaron los luthières:
F. Luengo, Ch. Rault, S. Jensen, C. Paniagua, Y. D'Arzizas, R. Z. Taylor, L. Pérez, R. R. Casal, M.
Brañas, y J. Wright, junto con investigadores españoles, europeos y norteamericanos. La exposición
permanente de los instrumentos se halla en la sede de la Fundación Barrié en La Coruña. El Grupo In
Itinere, de la Universidad de Santiago, ha grabado con dichos instrumentos el CD Os sons do Pórtico da
Gloria. Ed. Fundación Barrié. La Coruña, 1995
12
Kenyon, N., "Authenticity and Early Music". Op. cit., p. 9
13
La mayor parte de los artesanos participantes en el Proyecto del Pórtico de la Gloria cuenta con
monografías de reconocimiento internacional sobre la construcción de instrumentos . Vid. Bibliografía
general.
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antigüedad» . La acentuada uniformidad de la interpretación de la música antigua en
14
consistente , etc. Y lo que resulta aún más frustrante: el total desconocimiento de todo
19
todos los intentos de rescatar el pasado inmediato (el Jazz de New Orleans de los años
XX, o las técnicas interpretativas de Bruno Walter) han sido un auténtico fracaso,
porque este fantasioso intento requeriría el encuentro de la tradición perdida, las
mismas condiciones que se dieron en aquella interpretación perdida. ¿Y qué decir del
pasado remoto? 21
14
Taruskin, R., Text and Act. Essays on music and performance. Oxford U. Press, 1995, p. 102
15
Leech-Wilkinson, D., "The limits of authenticity". EM 12(1984)14
16
Cohen, J.&Snitzer, H., Reprise. The extraordinary revival. Op. cit., p. XI
17
Brown, H. M., "Pedantry or Liberation? A Sketch of the historical Performance Movement".
Authenticity and Early Music. A symposium. Edited by N. Kenyon. Oxford U. Press, 1988, p. 27
18
Homo-Lechner, C., Sons et instruments de Musique au Moyen Age. Editions Errance. Paris, 1996
19
Montagu, J., "The sound of music". Op. cit., p. 358
20
Cohen, J.&Snitzer, H., Reprise. The extraordinary revival. Op. cit., p. X
21
Ibidem
22
Hughes, A., Style and Symbol. the Institute of Medieval Music. Otawa, 1989, p. 7
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Esto, necesariamente, exigirá forzar la reconstrucción del contexto musical. La
belleza de esta música medieval se percibe como un fuerte ejercicio de intelecto
(información y comprensión) y de imaginación (reconstrucción del ambiente). Muchas
de aquellas composiciones nos resultan familiares porque usaban técnicas de la
música actual (repetición, imitación, improvisación, etc.). Sin embargo, a veces, en un
producto de sofisticada técnica como es, se amplía la recepción si nos acercamos
intelectualmente a su contexto. La reconstrucción del contexto musical nos lleva ne-
cesariamente a introducirnos en otras áreas: liturgia (ceremonias, vestuario, símbolos,
etc.), contexto acústico (eco/resonancia, tapices, apagadores...); intelectualización de la
afinación (el concepto de consonancia/ disonancia es puramente intelectual; aplicando
la afinación pitagórica ciertas consonancias hoy nos sonarían disonantes) 23
acreditar como autentico, como genuino, lo mas antiguo, dando por buenos los errores
antiguos. Así enmascaramos nuestros propios errores. Resulta de espúrea auten-
ticidad la manía de editar fuentes para dar consistencia y verosimilitud a las propias
afirmaciones» 25
De todos modos, ningún cambio ha sido tan profundo como el que se ha pro-
ducido en el terreno del movimiento interpretativo desde hace tres décadas. El cre-
cimiento de nuevos comportamientos interpretativos ha venido de la mano de nuevos
hábitos de escucha y merced a la aproximación del intérprete a las fuentes. El nuevo
posicionamiento del intérprete es uno de los elementos más estimulantes tanto para el
escucha de discos como para el que asiste a los conciertos . 26
Los presentistas
Podemos definir esta corriente con una máxima contundente de su más clari-
vidente representante, Richard Taruskin: «La espontaneidad como esencia de la in-
terpretación» . Según los presentistas, la actividad musical está centrada en la in-
27
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resulta totalmente artificial. La asimilación de los detalles, la incorporación de la
emoción y de la espontaneidad del intérprete contribuye enormemente a hallar la
expresividad de la composición antigua . El empeño no es un salto al pasado en una
28
28
Idem, p. 9
29
Dreyfus, "Early Music defended against devotes", Cit. por Cohen, J.&Snitzer, H., Reprise. The
extraordinary revival. Op. cit., p. 90
30
Planchart, A.E., "The performance of Early Music in America". Op. cit., p. 21
31
Vid. estas aplicaciones en Cohen, J.&Snitzer, H., Reprise. The extraordinary Op. cit., p. 91, bajo el
epígrafe: ¿Tiene futuro el pasado?
32
Crutchfield, W., "Fashion, Conviction, and Performance Style". Op. cit., p. 22
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tivas. «Fueron buenos profetas los que supieron apostar por ese otro futuro que hoy
triunfa y que, sin duda, tendrá su relevo antes o después» . 33
La tradición del pasado cuyo rastro hemos perdido irremisiblemente, nos diría
un presentista, se nos ofrece de manera más objetiva y detallada; así caemos en la
tentación de reconstruir la música en términos puramente de práctica documental,
que es apta para ser percibida, congelada, en un estado de perpetua perfección, no da-
ñada por el paso del tiempo . Vista la imposibilidad de encontrar cualquier medio
34
nunca podremos llegar a recrear el aura de lo original, como diría Walter Benjamin , 36
entre otras razones porque el papel del compositor y todas sus intenciones terminan
allí donde empiezan las del intérprete, y mucho más si nos referimos al mundo
medieval . 37
33
Brown, H. M., "Pedantry or Liberation?. Op. cit., p. 50
34
Morgan, R. P., "Tradition, Anxiety, and the Current Musica Scene" Authenticity and Early Music. A
symposium. Edited by N. Kenyon. Oxford U. Press, 1988, p. 68
35
Idem, p. 70
36
Idem, p. 71
37
Taruskin, R., Text and Act. Op. cit., p. 98
38
Boulez, P., "The Vestal Virgin and the Fire-stealer: memory, creation and authenticity". EM
18(1990)356
39
Jackson, R., "Invoking a Past or Imposing a Present? Two views of performance practice". Performance
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Atendiendo a las partituras, las ediciones son necesariamente restrictivas para
la mejor y más adecuada transmisión de una música que es sustancialmente de
tradición oral; son la antítesis de la libertad del intérprete. El texto (la partitura) ata, es
convencional, mientras que el acto es espontaneidad, revitalización. El historicismo no
tiene nada que ver con esa espontaneidad y esa revitalización. «Las partituras per se —
dice Taruskin— no garantizan una interpretación vital. Las partituras, por definición,
reciben de los intérpretes toda la luz de la tradición y el peso de su particular
experiencia, que se debe enriquecer con las artes visuales, los datos históricos, los
tratados de época, el conocimiento de las grafías, para multiplicar por mil la
potencialidad de una partitura» . 40
Sin embargo, como decíamos, ningún cambio ha sido tan profundo en la mú-
sica como el que se ha producido en el terreno del movimiento interpretativo. Y en
todo caso, el encuentro de estas dos corrientes —historicista y presentista—irreconci-
liables en apariencia, se nos presentan en realidad como las dos caras de una misma
moneda: texto y acto de toda reconstrucción del pasado.
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