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Cuándo un aceite esencial tiene como característica que es “quimiotipado”, significa que se
ha hecho sobre él una cromatografía o dicho de otra manera, se ha analizado sus
características bioquímicas según dónde y cómo ha crecido la planta de la que se extrae.
Cuándo conocemos el quimiotipo, también podemos conocer la toxicidad eventual de la
molécula que más destaca.
CANNABIS
Introducción
Cannabis sativa es una planta de hierba anual que si la tierra, el agua y el sol le son
propicios puede llegar normalmente a tres metros de altura. Se da bien en regadíos
porque necesita mucha agua. Las hojas se disponen enfrentadas salvo en la parte alta
del tallo y tienen nervadura palmeada. Las hojas están divididas en cinco, siete, nueve
u once gajos tan profundos que llegan hasta el peciolo que los sostiene. El gajo mayor
es el central, siendo los menores los más laterales. Cada uno de estos segmentos tiene
forma lanceolada, a veces muy estrecha, los bordes regularmente aserrados y enteros
en los extremos.
Es posible que los efectos de la latitud donde está el cultivo influyan en el quimiotipo
de las planta; es decir, una buena semilla del quimiotipo I, procedente de Colombia, a
lo largo de varias generaciones de estar plantada en España, podría en un momento
dado haber perdido ese quimiotipo en los descendientes, pasándose al quimiotipo II ó
III (es decir, tenderá a cañamizarse).
Etienne P. M. de Meijera, Manuela Bagattab, Andrea Carbonib, Paola Crucittib, V. M. Cristiana Moliternib,
Paolo Ranallib, and Giuseppe Mandolinob
a HortaPharm B.V., 1075 VS, Amsterdam, The Netherlands
b Istituto Sperimentale per le Colture Industriali, 40128 Bologna, Italy
Corresponding author: Giuseppe Mandolino, Via di Corticella 133, 40128 Bologna,
Italy., g.mandolino@isci.it (E-mail)
Four crosses were made between inbred Cannabis sativa plants with pure cannabidiol (CBD) and pure -9-
tetrahydrocannabinol (THC) chemotypes. All the plants belonging to the F1's were analyzed by gas
chromatography for cannabinoid composition and constantly found to have a mixed CBD-THC
chemotype. Ten individual F1 plants were self-fertilized, and 10 inbred F2 offspring were collected and
analyzed. In all cases, a segregation of the three chemotypes (pure CBD, mixed CBD-THC, and pure
THC) fitting a 1:2:1 proportion was observed. The CBD/THC ratio was found to be significantly progeny
specific and transmitted from each F1 to the F2's derived from it. A model involving one locus, B, with
two alleles, BD and BT, is proposed, with the two alleles being codominant. The mixed chemotypes are
interpreted as due to the genotype BD/BT at the B locus, while the pure-chemotype plants are due to
homozygosity at the B locus (either BD/BD or BT/BT). It is suggested that such codominance is due to
the codification by the two alleles for different isoforms of the same synthase, having different specificity
for the conversion of the common precursor cannabigerol into CBD or THC, respectively. The F2
segregating groups were used in a bulk segregant analysis of the pooled DNAs for screening RAPD
primers; three chemotype-associated markers are described, one of which has been transformed in a
sequence-characterized amplified region (SCAR) marker and shows tight linkage to the chemotype and
codominance.
Los micronutrientes son aquellos nutrientes que la planta necesita en bajas cantidades en comparación a los
macronutrientes de los cuales requiere de mucha más cantidad. Estos alimentos son necesarios para un
desarrollo correcto del metabolismo de las plantas pues sin ellos muchas de sus funciones vitales no podrían
llevarse a cabo.
El zinc es un elemento necesario para las plantas de marihuana ya que interactúa directamente en la creación de la
clorofila. Está directamente relacionado en la creación de auxinas y hormonas del crecimiento, cabe decir que
asimilación del zinc dependerá del el ph del sustrato y de la concentración de fosfatos que pueda haber de otros
nutrientes como en el caso del exceso de fósforo.
Es absorbido por parte de las plantas en forma de ión bivalente (Zn2+) siendo también absorbido con facilidad a
partir de la epidermis y por las ramas. En los suelos con un PH muy ácido el zinc no podrá ser absorbido y
trasladado de las raíces a la parte aérea de la planta así como en sustratos expuestos a temperaturas bajas y una
humedad prolongada provocada por lluvias.
Detección/Solución:
La carencia de zinc se detecta mediante la observación en la aparición de una clorosis en las hojas más
jóvenes de la planta. Aparecen quemaduras en los bordes de las hojas y las plantas sufren un desarrollo
muy lento.
Se encuentran anormalidades en el desarrollo de las hojas, alargándose junto con una reducción de la
distancia internodal a la vez que las hojas tienden a realizar rosetas.
Para solventar esta carencia de Zinc podemos aplicar un lavado de raíz para aliviar cualquier tipo de
bloqueo derivado de otro elemento nutritivo y utilizar abonos ricos en macro y micro elementos de rápida
absorción.
Si la carencia está avanzada se puede pulverizar un mono nutriente de zinc en las hojas para una mayor
asimilación por parte de la planta.
Un exceso de zinc provoca en las plantas una muerte muy rápida debido a su gran toxicidad. Las carencias
de hierro también vienen derivadas de un exceso de zinc.
Solución exceso: La solución al exceso pasa por realizar un lavado de raíz con el PH estable junto con un
rompedor de sales para ayudar a limpiar el sustrato. Seguido de un abonado ligero y completo con macro y micro
elementos.
El hierro no es un elemento móvil y aunque no forma parte de la clorofila sí que contribuye a la pigmentación y la
respiración de las hojas de las plantas de marihuana. Aparte también interactúa directamente en la creación de
enzimas. La planta lo puede asimilar en forma de ion férrico (Fe++) aunque también puede ser absorbido en forma
orgánica.
En los cultivos las carencias de este elemento suelen venir precedidas de un PH en el sustrato superior a 7.0 en el
cual la planta no lo puede absorber a través de sus raíces. No podrá ser absorbido en aquellos suelos muy alcalinos
ni muy calcáreos.
Existen otros motivos por los cuales el hierro deja de ser asimilable por la planta aún estando presente en el
sustrato, estos casos pueden tales como: altos niveles de carbonatos, atla salinidad, una humedad constante,
temperaturas bajas o exceso de otros micro elementos que provocan su carencia.
En este caso las hojas más jóvenes, las de la parte más alta de la planta, sufrirán una clorosis férrica
manteniendo los nervios verdes. Si no se actúa en consecuencia las hojas irán decolorándose quedando los
nervios de color verde.
Estos quelatos estabilizan los iones metálicos mejorando su resistencia a la oxidación del hierro contribuyendo a que
no se precipiten con tanta facilidad. Cabe decir pero que los quelatos pueden entrar en competitividad con otros
iones de otros elementos como el calcio y magnesio que harán desplazar los iones de hierro.
Tipos de quelatos:
Fe-EDTA: Este quelato es adecuado para sustrato con un PH inferior a 6.0 aunque con un Ph por encima de 6.5 la
mitad del Hierro no estará disponible de modo que no será muy funcional.
Fe-DTPA: Este quelato es conocido por mantenerse estable en un PH 7.0 y por no desplazar el hierro por parte del
calcio.
Fe-EDDHA: Este quelato se mantiene estable hasta PH de 11.0 aunque cabe decir que es también el más caro.
En estos casos, cuando se trata de una planta madre será mejor podar la parte aérea afectada (si no es mucha)
siempre es la parte superior de la planta situada en los nuevos brotes dado que el hierro no es un elemento móvil.
Si no se trata de una planta madre y estamos en el periodo de crecimiento podemos rectificar el PH, abono,
temperatura y demás condiciones y no pasarlas a floración hasta que estas estén bien recuperadas. En el caso que
crezcan mucho por tenerlas más tiempo en crecimiento nos podemos ayudar de las podas o ataduras para un
control de la altura.
Por lo contrario en estas dos siguientes fotos observamos como la carencia de hierro está ya presente desde un
estado inicial en el cultivo. Este problema viene precedido de una mala gestión de la alimentación para cultivar con
un sustrato no del todo adecuado a las necesidades de las plantas. En este caso deberemos de aportar un alimento
rico en NPK y micro nutrientes para que la planta pueda tener una nutrición equilibrada y evitar estas carencias.
Si el PH del sustrato es inferior a 7.0 el magnesio podrá ser fácilmente absorbido por las plantas de cannabis,
pero si es muy ácido , por debajo de 5.0 su disposición será mucho menor o nula y deberemos proceder a aumentar
el Ph del sustrato mediante caliza dolomita antes de empezar a cultivar en el sustrato si fuera necesario.
Existen también en el mercado productos que incorporan este elemento para poder dosificarlo en cada riego en el
caso de no poder disponer de caliza dolomita para mezclar con el sustrato para el cultivo del cannabis.
Este es un elemento móvil de modo que las carencias de este nutriente serán visibles en primera instancia en las
hojas más viejas y bajas de la planta. A medida que la carencia avanza será la parte central la que junto con la parte
baja de la planta se vea afectada por la falta de este nutriente.
El magnesio es un nutriente que como el nitrógeno es fácil de arrastrarmediante abundante agua. Si realizamos
lavados de raíz por haber sobre fertilizado las plantas con otros nutrientes (N, P, K) deberemos reponer nuevamente
los niveles de magnesio (y calcio para mantener el equilibrio) aportando dos partes de Ca por una de Mg de EC
0.0 hasta 0.4.
Avance de carencia de Magnesio
Es importante destacar que hay otros factores que merman o anulan la absorción del magnesio aún estando
presente en la tierra, como una humedad continuada en el sustrato y una baja temperatura o también un sustrato
ácido y frío. En el caso de tener casi siempre el sustrato muy húmedo procederemos a introducir un ventilador en el
cultivo que apunte directamente a la maceta donde se halla el sustrato humedecido en exceso de modo que
podamos facilitar el secado del sustrato y mejorar la asimilación del magnesio.
Una vez el sustrato se haya recuperado regularemos la cantidad de riego para favorecer absorción del Mg y evitando
a su vez también una posiblepodredumbre radicular que suelen ser muy dañinas y mortales para las plantas de
cannabis. Estos casos pueden darse en los cultivo de interior cuando las temperaturas de cultivo no están bien
controladas sobre todo cuando las plantas se encuentran en periodo nocturno.
Para solventar este inconveniente deberemos instalar una fuente de calorque aporte una mayor temperatura al
cultivo con una mínima no inferior a los 18º para no frenar el desarrollo de las plantas y resolver el problema con la
absorción del magnesio.
Carencia de Mg
El calcio es un nutriente secundario de gran importancia dada la gran cantidad que necesita la planta durante
todo su cultivo. Ya desde un buen inicio, en la etapa de germinación de las semillas, el calcio interviene
directamente en el desarrollo de las raíces y participa directamente en la síntesis de proteínas siendo a su vez un
activo para las enzimas. Es absorbido por las raíces en forma de ión de Ca++.
También realiza la función de soporte de otros elementos que combinados, como en el caso del calcio, participan en
diferentes procesos metabólicos como en la creación de vitaminas, en este caso la vitamina B12. Estas vitaminas,
se adhieren y forman parte de las paredes celulares de los tejidos de las plantas, haciéndolas más resistentes a los
ataques de patógenos, manteniendo vitales y activas sus células.
Funciones del calcio en las plantas de marihuana
El calcio es necesario para el desarrollo de las paredes celulares del sistema radicular.
Es un elemento inmóvil.
Ayuda a la degradación de la materia orgánica para la asimilación de nutrientes por parte de la planta.
Realiza una función de puente entre el humus y los nutrientes.
Carencia intermedia de Ca
Carencia de Calcio
El calcio es un elemento fácil de encontrar en la tierra pues su disposición para las plantas es abundante y no
suelen haber carencias de este elemento excepto en aquellos suelos con un PH muy ácido.
Las carencias, pueden estar más presentes en los cultivos hidróponicos ya que el sustrato utilizado es inerte (coco,
arlita, lana de roca, mapito…) o inexistente como en el caso de los cultivos aeropóncios.
En estos casos debemos asegurarnos que el aporte de calcio para cannabis es el adecuado para no sufrir carencias
desde un inicio. Muchos de los abonos que encontramos en el mercado están diseñados con un aporte de
calcio aunque a veces no es suficiente para evitar carencias, sobre todo si se trabaja con agua osmótica sin
nutrientes.
En este caso deberemos de adecuar a la solución nutriente, antes de aplicar cualquier otro abono, con dos partes
de calcio por una de magnesio de EC 0.0 a EC 0.3-0.4
Síntomas visibles de la carencia de calcio en el cannabis
Las hojas más jóvenes de la planta son las primeras en ser visiblemente afectadas.
Se retarda el desarrollo de la parte alta de la planta.
El sistema radicular se ve afectado con lo que la absorción de los nutrientes se reduce.
A medida que avanza la carencia las hojas más jóvenes nacen amarillentas e irán deformándose a medida
que la carencia avance.
La producción de los cogollos se ve seriamente reducida.
Para ayudar a erradicar la carencia de calcio podemos realizar aplicaciones foliares de Ca con un Ph 7.2
directamente a las hojas afectadas junto con otro aporte mediante el riego añadiendo calcio y magnesio subiendo
la EC inicial en 0.2 puntos durante unos 5 días.
Carencia Avanzada de Ca
El exceso de calcio de hace de difícil detección, pues es el causante del bloqueo de varios nutrientes
creando carencias de potasio, magnesio, manganeso y hierro. En los diferentes sistemas de cultivo hidropónicos
cuando existe un exceso de calcio en el tanque este entra en contacto con el azufre de la solución
nutriente precipitándose quedando en el fondo del deposito. En este caso deberemos de cambiar la s/n del
deposito para volver a adecuarla a las necesidades del cultivo.
El calcio es un elemento que va directamente relacionado con la transpiración de las plantas. Este control de la
transpiración procede en escénica de las raíces y los estomas los cuales son unos puntos situados en las hojas,
lugar por donde transpira la planta. En muchas ocasiones es posible que los estomas se cierren por un exceso de
calor causando una quemadura superficial, confundiéndola con un síntoma de carencia de calcio.
Aunque cabe destacar que con una carencia de este elemento las plantas son siempre más susceptibles a sufrir
un estrés térmico dado que el calcio contribuye en la creación de proteínas que hacen que la planta sean más
resistente a la calor.
Como aportar calcio a las plantas de marihuana
Como ya hemos comentado anteriormente, si el agua utilizada para el riego de las plantas de marihuana es
osmótica deberemos añadir Calcio y Magnesio antes de aportar los abonos. El agua osmótica tiene la peculiaridad
de no contener ningún nutriente de modo que su EC inicial siempre será 0.0.
Los abonos de marihuana ya contienen los micro elementos necesarios para la vida de la planta, pero hay nutrientes
como el calcio o magnesio que deben tener una mayor concentración inicial para asegurarnos que las plantas de
marihuana dispondrán en su justa medida de estos elementos nutritivos.
Si utilizamos agua del grifo con una EC de 0.3-0.4 será una EC adecuada para poder realizar la mezcla con los
abonos asegurándonos que ya contienen unas cantidades adecuadas de Ca y Mg. Cabe destacar que según
variedad cultivada habrá que realizar aportes de calcio y magnesio durante la floración para evitar la aparición de
carencias a partir de la 4º-5º semana de floración cuando están plena floración.
En este caso será importante este aporte para que las plantas puedan por un lado reducir cualquier tipo de estrés
durante todo el cultivo y por el otro y en consecuencia poder cosechar la mejor calidad y cantidad de cogollos
posible. Para estos casos podemos utilizar Regulator de Aptus, durante todo el cultivo, reduciendo las necesidades
hídricas de la planta, en hasta un 30%, haciéndolas más resistentes a las deshidrataciones causadas por altas
temperaturas o periodos de sequedad.
Identificar carencia de calcio en las plantas de marihuana:
El ciclo del fósforo se conoce como ciclo biogeoquímico y este se da siempre en un ecosistema dentro de un ciclo
cerrado que se repite constantemente en nuestro planeta. Son los seres vivos los que se alimentan del fósforo ya
sea a través de procesos de descomposición por fosfatos o a través de rocas ya fosfatadas.
Estos fosfatos entran en contacto con los vegetales a través de la tierra. Los animales se alimentan de estos
vegetales los cuales contienen fósforo de modo que va a ser aportado nuevamente en forma de excrementos al
subsuelo, para posteriormente ser tratados por la micro vida adecuando nuevamente el fósforo en forma de
fosfatos para poder ser absorbidos otra vez por parte de las plantas, cerrando así el ciclo del fósforo.
Por otro lado una gran parte de estos fosfatos presentes en el sustrato son arrastrados hacia al mar de modo que
toda la fauna y flora marina queda impregnada de este mineral. El fósforo vuelve al medio terrestre mediante dos
sistemas; el primero, a través de los excrementos de las aves marinas, peces etc que previamente se han
alimentado de las algas de las cuales también han absorbido fósforo en sus organismos. El segundo método es a
partir de los movimientos de tierras que emergen al exterior, movimientos de placas tectónicas, aunque este
proceso dura miles de años.
El fósforo es un elemento nutritivo esencial para las plantas de marihuana. Se conoce que mucha de la energía que
recibe la planta aportada por la luz solar es posteriormente almacenada gran parte en forma de fósforo.
Posteriormente es utilizado para poder realizar los diferentes procesos metabólicos como la fotosíntesis siendo a su
vez un componente del ADN.
Podemos decir que este nutriente es muy importante para el desarrollo de las plantas en sus diferentes etapas de
vida, desde la germinación, crecimiento radicular, crecimiento de la parte aérea, clonación y floración.
Las plantas absorben el fósforo bajo forma de ion monovalente y bivalente aunque el más utilizado por la planta es
el ion monovalente el cual estará más o menos disponible dependiendo del rango de PH del sustrato. Cuanto más
alto sea el PH menor será la absorción de este nutriente por parte de la planta induciéndola a una carencia.
A partir de la absorción de este macronutriente las plantas pueden realizar diferentes acciones bioquímicas tales
como la respiración, aparte de sintetizar las proteínas junto con los hidratos de carbono que desembocan en:
Un mayor desarrollo radicular
Un mejor aprovechamiento del agua del sustrato
Estimula la vigorosidad general de la planta de marihuana
Tallos más robustos
Más resistencia a las heladas, ataques de insectos y a las enfermedades.
La duración del periodo vegetativo se reduce significativamente dada la explosión vegetativa producida por
un rápido crecimiento radicular. Se podrá cambiar al periodo de floración de manera anticipada y en
consecuencia se reducirá el tiempo total necesario para poder realizar un cultivo de cannabis.
Favorece la producción y mejora de la calidad de los cogollos y semillas.
Influye directamente en la producción de hidratos de carbono, mejorando la producción de azucares,
almidones, etc produciendo frutos de mejor calidad.
Una mala asimilación del fósforo se traducirá en una carencia de este elemento. Este nutriente es móvil, se mueve
con facilidad dentro del organismo de la planta trasladándose a aquellas zonas con más actividad, como son
las hojas más jóvenes.
Cuando este elemento se mueve de las hojas más viejas a las más jóvenes, éstas sufren una clorosis volviéndose
de color amarillo. Las hojas más viejas y bajas de la planta realizan la función de reserva de nutrientes que la
planta usará cuando lo requiera.
A medida que la carencia se va desarrollando, la clorosis avanzará por la planta afectando a todas las
hojas, tornándose de color amarillo. Si no se le pone remedio la planta sufrirá una defoliación masiva quedándose
sin hojas para poder realizar sus funciones vitales viéndose avocada a una muerte prematura.
Exceso de Fósforo
El exceso de fósforo repercute en la planta bloqueando muchos otros elementos nutritivos como; calcio, cobre,
hierro, magnesio y zinc, siendo el micro elemento más fácil de bloquear el zinc. De modo que deberemos estar
atentos a otras carencias de otros elementos para saber la severidad del exceso de Fósforo.
En el caso de existir un exceso de este elemento deberemos realizar un lavado de raíz con un mínimo de 3 veces la
capacidad de la maceta. El agua del lavado puede estar compuesto de un rompedor de sales para facilitar su
limpieza junto con el PH estable según el estadio de vida en que se encuentre la planta de marihuana.
Inicio de carencia
El potasio es uno de los elementos nutritivos más importantes para las plantas de marihuana y aunque no tengan
tanta presencia en los tejidos de las plantas si que se realizan importantes funciones de catalizador de muchos
procesos metabólicos como los que podremos ver a continuación:
Interviene en la fotosíntesis favoreciendo la síntesis de los hidratos de carbono.
Interviene en la síntesis de proteínas y aminoácidos los cuales provienen del nitrógeno en forma de
amonio, de modo que la interacción entre los dos nutrientes es vital para realizar los diferentes procesos
metabólicos de las plantas.
Aumenta la resistencia de la planta en los periodos de sequía.
Aumenta la consistencia y dureza de de los tejidos de las plantas.
Aumenta junto con el fósforo la dureza y resistencia del sistema radicular.
La resistencia a las heladas aumenta haciendo una función de anticongelante, actuando dentro de la savia
de la planta.
Incrementa el peso, densidad y volumen de las flores.
En el caso de existir una carencia de Potasio las plantas tendrán unos síntomas visibles que nos ayudarán a
detectar dicha carencia. Este es un elemento móvil de modo que cuando la planta lo necesite se trasladará de las
hojas más viejas a las más jóvenes siendo siempre la parte de la planta con más actividad en su metabolismo.
Debemos tener cura de que no falte este nutriente en los cultivos dado que una carencia de potasio visible y
avanzada significa que la producción de la planta ya habrá quedado mermada.
En el caso de tener carencias de Potasio deberemos añadir más fertilizante rico en este elemento ya sea de origen
biológico o mineral. El abono bio es de más lenta absorción que el de formato mineral el cual en poco tiempo habrá
sido capaz de solventar dicha carencia y poder cosechar unos cogollos decentes. Si la carencia es prematura
podemos simplemente aumentar la dosis de abono en formato bio o mineral según las preferencias de cada
cultivador.
Fase avanzada de Potasio
Exceso de potasio
Síntomas del exceso de potásio:
Bloquea la absorción de otros elementos tales como el calcio, magnesio junto con el zinc y el hierro.
Se deberá realizar un lavado de raíz con un mínimo del triple de agua de la capacidad de la maceta
ayudados de un rompedor de sales para poder lixiviar el sustrato. Posteriormente deberemos regar con un
abonado ligero, completo y equilibrado.
Foto 1: carencia de potasio
La planta de marihuana que se observa en la fotografía nº1 vemos que durante el transcurso de su cultivo ha sufrido
una carencia de Potasiode la cual se ha podido ir recuperando poco a poco sin perder mucha producción y calidad
final en las flores.
Esta planta de marihuana fue cultivada en un medio inerte como es el coco como sustrato hidropónico y sufrió de
una carencia derivada de una falta de nutrición de potasio en aquellos momentos de la floración que más requería
de este elemento, entre la semana 6-7 en una planta de cannabis que requiere de unas 8-9 semanas para ser
cosechada.
En la foto nº 2 podemos observar como esta planta de marihuana ha sufrido una carencia más severa de potasio.
A media altura de la planta podemos divisar la carencia en las hojas más grandes viendo como las puntas de éstas
están quemadas. A parte se observa con mucha facilidad la decoloración de las hojas a un tono más amarillo que
verde.
Foto 2: Carencia de potasio
En la parte superior de la planta podemos ver fácilmente la parte que ha repercutido negativamente en el cultivo. Es
fácil ver que los cogollos no han podido desarrollarse por completo y han quedado en un estado bastante
decadentes.
Los cogollos de esta planta no tendrá un excelente olor ni sabor dado que el potasio es uno de los elementos que
hace que los terpenos contengan importantes cargas olfativas y gustativas.
En la foto nº3 observamos con facilidad que esta planta de marihuana también tubo una carencia bastante
marcada en las penúltimas semanas de floración, cuando la planta está empezando a crear flores en su máxima
expresión.
En esta etapa de vida de la planta si no se aportan los nutrientes necesarios la producción quedará mermada. Los
cogollos no serán duros ni compactos y la producción de resina será mínima.
Foto 3: Carencia media de potasio
Estas carencias se denotan más y aparecen con más asiduidad en variedades índicas las cuales se cultivan sin
mucho conocimiento, dado que el proceso de floración es mucho más rápido que en las plantas de cannabis
sativas y el punto álgido en el consumo de potasio se concentra en no más de una semana o dos según variedad
cultivada.
En las plantas sativas, como estas son mucho más lentas floreciendo, sus necesidades de alimentarias serán más
progresivas que las genéticas indicas. Aunque cabe destacar que las variedades sativas tienen más facilidad para
sobre fertilizase dado que aguantan unos niveles de EC inferiores que las plantas índicas, en consecuencia habrá
que cuidar su alimentación para tener un cultivo libre de carencias y excesos.
Así pues, escoger una variedad híbrida al 50% ayudará a poder controlar con más facilidad todos los excesos y/o
carencias de potasio y otros minerales como el nitrógeno o el fósforo.
El nitrogeno regula la capacidad que tienen las plantas de marihuana para la creación de proteínas, aminoácidos,
enzimas, clorofila, alcaloides y ácidos nucleidos. Siendo el principal responsable del crecimiento del tallo, hojas,
ramas y vigor en general.
El nitrógeno se puede encontrar en diferentes formatos: orgánico, amoniacal y nítrico. La diferencia básica entre
estos formatos está en la velocidad de absorción del nitrógeno por parte de la planta, siendo el formato amoniacal el
de más rápida absorción y en consecuencia el que puede llegar a producir un exceso de este nutriente con más
facilidad.
Por el contrario el nitrógeno en forma de nitrato es también fácilmente absorbible por la planta aunque lo hace más
lentamente. Es por este motivo que en los botes de abonos líquidos encontraremos el nitrógeno mezclado en
ambos formatos para poder equilibrar la absorción del nitrógeno por parte de las plantas sin que lleguen a sufrir un
exceso o una carencia de este macro nutriente.
Si la demanda de las plantas es superior al nitrógeno que tiene a su disposición, sufrirán una carencia, en cambio
si los niveles de este elemento son superiores a los que la planta necesita sufrirá una sobre fertilización.
Los abonos los podemos encontrar en dos formatos tales como el mineral o el orgánico. El formato mineral tiene una
absorción más rápida por parte de las plantas ya que este no debe de ser procesado previamente por la micro vida
bacteriana que vive en simbiosis con la tierra para poder ser absorbido por las plantas.
Un óptimo nivel de nitrógeno en las plantas se traducirá en:
Vigorosidad vegetativa
Color verde vistoso en las hojas debido a la producción de clorofila.
Aumento en el número de hojas de la planta, envergadura del tallo, frutos y semillas.
Mayor resistencia de las plantas frentes los hongos.
Mayor resistencia de las plantas frente a los insectos.
Mayor resistencia a heladas y granizadas.
Cuando las plantas de cannabis no disponen de una nutrición equilibrada y se produce una falta de este elemento,
se originan anormalidades en su desarrollo siendo visibles a través de la morfología de la planta, las cuales
denominamos carencias.
El crecimiento de las plantas es mucho más lento.
Las hojas amarillean poco a poco empezando por la parte baja de la planta. La clorosis empieza en las
puntas y va aclarándose hacia el centro de la hoja.
Las plantas tienen menos defensas contra plagas, enfermedades y granizadas.
La floración y producción de semillas queda seriamente mermada.
Defoliación masiva tras una clorosis avanzada.
La carencia avanza de abajo hacia arriba, afectando en último lugar a las hojas más jóvenes.
Para solucionar rápidamente el problema se deberá de añadir a la solución nutriente un abono rico en nitrógeno para
que las plantas puedan recuperar sus niveles óptimos de este nutriente unos días después de realizar el riego.
Cabe destacar que cuando las plantas ya presentan estas carencias su capacidad para producir ya habrá quedado
mermada, de modo que es importante mantener una alimentación equilibrada durante todo el cultivo para obtener
una calidad y producción optimas.
Por el contrario los excesos de nitrógeno en las plantas de marihuana también les pasan factura reduciendo su
producción y calidad de las flores. Estos excesos se pueden reconocer
En el caso de haber sufrido una pequeña sobre fertilización o en el caso contrario en el que se ha producido una
carencia del mismo elemento, la planta de cannabis siempre tardará unos días a recuperarse. La velocidad en la
recuperación dependerá siempre del grado de carencia o exceso que pueda tener la planta, de modo que una rápida
detección ayudará siempre a facilitar la recuperación de las mismas en un tiempo más reducido.
Dependiendo del sustrato junto con los abonos utilizados las plantas se podrán recuperar más o menos rápido. En
los sistemas de cultivo hidropónico la velocidad en la recuperación de la planta será mucho más rápida que en un
cultivo en tierra con abonos orgánicos. Como ya hemos comentado al inicio del post, según el formato en que se
presenten los nutrientes estos serán de más rápida o lenta absorción.
Avance de carencia de nitrógeno
En la fase de crecimiento y en el caso de una pequeña sobre fertilización cuando se sufre un exceso de este
elemento, procederemos a reducir o eliminar durante unos riegos el abono de crecimiento.
En el caso de estar utilizando aditivos para la marihuana estos los podemos seguir añadiendo de una manera
habitual ya que no contienen alimento, solo elementos que harán que la planta pueda metabolizar el exceso de
alimento creando más hojas, ramificaciones… en definitiva que crezcan y gasten los nutrientes que contienen.
Durante la fase de floración si sufrimos una sobre fertilización deberemos actuar según semana de cultivo nos
encontremos. En el caso que suceda durante las dos primeras semanas post cambio de fotoperiodo actuaremos de
la misma manera que si estuviéramos en crecimiento dado que las plantas aún crecerán casi hasta entrada la 3a
semana cuando los cogollos empiezan a mostrarse.
Por el contrario si nos encontramos ya entrada en floración, los excesos de nitrógeno no suelen ser tan habituales,
pero en el caso de haberlas entonces deberemos retirar el abono base, para seguir abonando solo con un PK el cual
no contiene nitrógeno añadido. De este modo las plantas pueden seguir alimentándose para crear los cogollos
según la fase en que se encuentren y eliminar al mismo tiempo los excesos del nitrógeno. En el caso de existir una
sobre fertilización más acentuada previamente podemos realizar un lavado de raíz para limpiar un poco el sustrato
del exceso de nutrientes y seguidamente realizar un riego con las dosis adecuadas de PK.
El boro y la marihuana
El boro es un elemento nutritivo necesario para el desarrollo de muchas de las funciones fisiológicas de las plantas
de marihuana, como es la formación de la pared celular. Es un elemento que le es muy difícil desplazarse por la
planta de modo que sus carencias serán detectables en los brotes más jóvenes de la planta aunque cabe decir que
cuando lo absorbe bien las partes más jóvenes gozan del doble de cantidad de este elemento que las hojas más
viejas.
Cabe destacar también que el boro será absorbible por parte de la planta con un PH estable de 5.0 a 7.0 puntos y
ayudará en la estabilidad de otros elementos evitando por ejemplo la carencia de calcio a parte de contribuir en la
modificación de algunos procesos hormonales, como en la floración y fructificación de los cogollos. Los ovarios
de las flores hembras ensanchan los conductos facilitando la entrada de polen para una mejor fecundación y
creación de semillas.
El exceso de otros elementos nutritivos como en el caso del nitrógeno provocará un bloqueo del Boro que se
traducirá en una clara carencia de este elemento, es decir, aunque el alimento se encuentre en el sustrato éste no
podrá estar disponible para las plantas de marihuana.
Detección/Solución
Crecimiento anormal de las extremidades de las plantas, las raíces se hinchan y dejan de crecer.
Aparecen quemaduras en las hojas de las plantas que pueden llegar a confundirse con las típicas
quemaduras por irradiación calorífica del foco HPS. Se desarrolla necrosis entre los nervios, las raíces se
tornan blandas facilitando la aparición de posibles hongos. Las hojas aumentan de grosor, estando
decaídas con clorosis y necrosis.
Una alta concentración de calcio provoca boratos cálcicos poco solubles para las plantas.
Exceso de materia orgánica hace que el boro se retenga bajo formas complejas que liberan muy
lentamente el boro.
Los sustratos arenosos con gran abundancia de agua puede existir una carencia dada la facilidad con que
se arrastra el boro del sustrato.
En los casos en que se produce una sequía severa los elementos suben al sustrato por capilaridad
haciendo que el boro quede inaccesible para las raíces.
Para tratar la carencia de boro podemos aportar a las plantas una cucharada de ácido bórico cada 4
litros de agua o regar con abonos quelatados ricos en boro.
El exceso de boro se detecta a nivel visual a través e un amarillamiento de las hojas. Los bordes de las
hojas se vuelven necróticas hacia el centro de la hoja. Hay insecticidas que pueden contener altas
concentraciones de ácido bórico, evitar el contacto de insecticidas en el sustrato.
Solución exceso: Para solucionar el exceso se deberá de realizar un lavado de raíz con el ph estable en 6.0 y el
triple de agua que la capacidad de la maceta.
El azufre y la marihuana
La carencia de azufre es muy poco frecuente en los cultivos de marihuana si se cultiva con un sustrato enriquecido
desde un inicio. Aunque puede ser frecuente en suelos muy explotados y que no han sido renovados tras el paso de
los años.
En el caso de sufrir una carencia de este nutriente deberemos asegurarnos de que no se trate de una carencia de
nitrógeno, pues es muy parecida en su detección, una decoloración/clorosis en las hojas de la parte superior de la
planta que se vuelven de color amarillo.
A medida que avanza puede afectar a la parte media/baja de la planta confundiéndose con la carencia de
nitrógeno. De modo que la detección precoz evitará confusiones con la carencia de nitrógeno.
Detección/Solución
Las hojas de las plantas adquieren un color verde lima tornándose amarillentosiendo las hojas más
jóvenes las primeras en verse afectadas. Los tallos se vuelven leñosos, morados y le sigue un exceso de
calcio y a su vez, este exceso, bloquea la absorción del azufre.
Esta carencia de Azufre se soluciona con un riego rico en azufre en formato mineral para una rápida
absorción de este elemento con el PH estable según medio de cultivo utilizado.
El exceso de azufre se denota en la planta por un crecimiento lento y un desarrollo de las hojas de la planta
siendo de menor tamaño junto con clorosis en las puntas y bordes si el exceso es severo.
Solución exceso: Realizar una limpieza del sustrato con el triple de agua que la capacidad de la maceta para seguir
de un leve abonado rico en micro y macro elementos.
Detección/Solución
La carencia se detecta inicialmente en las hojas más jóvenes y avanza alcanzando las hoja más viejas con
un crecimiento casi nulo y una lenta floración.
Para solucionar la carencia deberemos de estabilizar el PH del sustrato y regar con abonos de rápida
absorción y rico en micro elementos.
Un exceso de manganeso actúa creando unas manchas naranjas en las hojas que a medida que avanza
el exceso de tornan de color marrón. A parte se produce una carencia de Zinc y hierro por bloqueo del exceso
de manganeso.
Solución exceso: La solución al exceso es realizar un lavado de raíz con el triple de agua que la capacidad de la
maceta con el PH estable según sustrato.
El hierro no es un elemento móvil y aunque no forma parte de la clorofila sí que contribuye a la pigmentación y la respiración de
las hojas de las plantas de marihuana. Aparte también interactúa directamente en la creación de enzimas. La planta lo puede
asimilar en forma de ion férrico (Fe++) aunque también puede ser absorbido en forma orgánica.
En los cultivos las carencias de este elemento suelen venir precedidas de un PH en el sustrato superior a 7.0 en el cual la planta
no lo puede absorber a través de sus raíces. No podrá ser absorbido en aquellos suelos muy alcalinos ni muy calcáreos.
Existen otros motivos por los cuales el hierro deja de ser asimilable por la planta aún estando presente en el sustrato, estos casos
pueden tales como: altos niveles de carbonatos, atla salinidad, una humedad constante, temperaturas bajas o exceso de otros
micro elementos que provocan su carencia.
En este caso las hojas más jóvenes, las de la parte más alta de la planta, sufrirán una clorosis férrica manteniendo los nervios
verdes. Si no se actúa en consecuencia las hojas irán decolorándose quedando los nervios de color verde.
Las plantas utilizan diferentes y variados mecanismos para poder absorber el hierro que hay en el sustrato pero que se presenta en
un formato poco asimilable para la planta. Mediante el mecanismo de quelación que se basa en la creación de sideróforos que
entran en confluencia mediante diferentes bacterias harán que el hierro sea más aprovechable para las plantas de
marihuana. Continuar leyendo →
El magnesio es un nutriente secundariomuy necesario en todas las fases de vida de la planta y requerido en gran cantidad. Es el
átomo central de la clorofila y tiene una incidencia directa en la absorción de la energía solar para poder ser posteriormente
procesada y utilizada por la planta en la creación de azúcares y carbohidratos.
La planta de cannabis absorbe el magnesio en formato de ión Mg +2 siendo esta la formulación del magnesio que podemos
encontrar en la tierra. La absorción de este nutriente irá supeditado al formato disponible que se encuentre este elemento en
el sustrato de marihuana.
Es importante encontrar un equilibrio entre el magnesio disponible del suelo y el no disponible. El magnesio no disponible aún
no ha sido transformado por parte de la micro vida no siendo apto para ser consumido por la planta. Es importante saber la
cantidad de magnesio disponible para la planta (lo que es muy difícil de saber sin analizar el sustrato) eso no ocurre con
los sustratos inertespero si con el agua de grifo a no ser que sea analizada.
Entonces ¿cómo proceder cuando cultivamos en tierra o hidro para tener controlados los niveles de magnesio en el sustrato?
Como es un mineral, podremos realizar un aporte mediante un mononutrinte en formato Mg +2 u otros productos que
contengan gran parte de Mg para una absorción directa por parte de las raíces sin tener que esperar a que la micro vida realice su
transformación en abono asimilable para la planta.
Inicio carencia de Ca
El calcio es un nutriente secundario de gran importancia dada la gran cantidad que necesita la planta durante todo su cultivo.
Ya desde un buen inicio, en la etapa de germinación de las semillas, el calcio interviene directamente en el desarrollo de las
raíces y participa directamente en la síntesis de proteínas siendo a su vez un activo para las enzimas. Es absorbido por las raíces
en forma de ión de Ca++.
También realiza la función de soporte de otros elementos que combinados, como en el caso del calcio, participan en diferentes
procesos metabólicos como en la creación de vitaminas, en este caso la vitamina B12. Estas vitaminas, se adhieren y forman
parte de las paredes celulares de los tejidos de las plantas, haciéndolas más resistentes a los ataques de patógenos, manteniendo
vitales y activas sus células.
Funciones del calcio en las plantas de marihuana
El calcio es necesario para el desarrollo de las paredes celulares del sistema radicular.
Es un elemento inmóvil.
Ayuda a la degradación de la materia orgánica para la asimilación de nutrientes por parte de la planta.
Realiza una función de puente entre el humus y los nutrientes. Continuar leyendo →
El ciclo del fósforo se conoce como ciclo biogeoquímico y este se da siempre en un ecosistema dentro de un ciclo cerrado que se
repite constantemente en nuestro planeta. Son los seres vivos los que se alimentan del fósforo ya sea a través de procesos de
descomposición por fosfatos o a través de rocas ya fosfatadas.
Estos fosfatos entran en contacto con los vegetales a través de la tierra. Los animales se alimentan de estos vegetales los cuales
contienen fósforo de modo que va a ser aportado nuevamente en forma de excrementos al subsuelo, para posteriormente ser
tratados por la micro vida adecuando nuevamente el fósforo en forma de fosfatos para poder ser absorbidos otra vez por parte de
las plantas, cerrando así el ciclo del fósforo. Continuar leyendo →
El nitrogeno regula la capacidad que tienen las plantas de marihuana para la creación de proteínas, aminoácidos, enzimas,
clorofila, alcaloides y ácidos nucleidos. Siendo el principal responsable del crecimiento del tallo, hojas, ramas y vigor en
general.
El nitrógeno se puede encontrar en diferentes formatos: orgánico, amoniacal y nítrico. La diferencia básica entre estos formatos
está en la velocidad de absorción del nitrógeno por parte de la planta, siendo el formato amoniacal el de más rápida absorción y
en consecuencia el que puede llegar a producir un exceso de este nutriente con más facilidad.
Por el contrario el nitrógeno en forma de nitrato es también fácilmente absorbible por la planta aunque lo hace más lentamente.
Es por este motivo que en los botes de abonos líquidos encontraremos el nitrógeno mezclado en ambos formatos para poder
equilibrar la absorción del nitrógeno por parte de las plantas sin que lleguen a sufrir un exceso o una carencia de este macro
nutriente.
Procesos del nitrógeno
Si la demanda de las plantas es superior al nitrógeno que tiene a su disposición, sufrirán una carencia, en cambio si los niveles
de este elemento son superiores a los que la planta necesita sufrirá una sobre fertilización.
Los abonos los podemos encontrar en dos formatos tales como el mineral o el orgánico. El formato mineral tiene una absorción
más rápida por parte de las plantas ya que este no debe de ser procesado previamente por la micro vida bacteriana que vive en
simbiosis con la tierra para poder ser absorbido por las plantas.
Un óptimo nivel de nitrógeno en las plantas se traducirá en:
Vigorosidad vegetativa
Color verde vistoso en las hojas debido a la producción de clorofila.
Aumento en el número de hojas de la planta, envergadura del tallo, frutos y semillas.
Mayor resistencia de las plantas frentes los hongos.
Mayor resistencia de las plantas frente a los insectos.
Mayor resistencia a heladas y granizadas
Cuando las plantas de cannabis no disponen de una nutrición equilibrada y se produce una falta de este elemento,
se originan anormalidades en su desarrollo siendo visibles a través de la morfología de la planta, las cuales
denominamos carencias.
El crecimiento de las plantas es mucho más lento.
Las hojas amarillean poco a poco empezando por la parte baja de la planta. La clorosis empieza en las
puntas y va aclarándose hacia el centro de la hoja.
Las plantas tienen menos defensas contra plagas, enfermedades y granizadas.
La floración y producción de semillas queda seriamente mermada.
Defoliación masiva tras una clorosis avanzada.
La carencia avanza de abajo hacia arriba, afectando en último lugar a las hojas más jóvenes.
Para solucionar rápidamente el problema se deberá de añadir a la solución nutriente un abono rico en nitrógeno para
que las plantas puedan recuperar sus niveles óptimos de este nutriente unos días después de realizar el riego.
Cabe destacar que cuando las plantas ya presentan estas carencias su capacidad para producir ya habrá quedado
mermada, de modo que es importante mantener una alimentación equilibrada durante todo el cultivo para obtener
una calidad y producción optimas.
Por el contrario los excesos de nitrógeno en las plantas de marihuana también les pasan factura reduciendo su
producción y calidad de las flores. Estos excesos se pueden reconocer
En el caso de haber sufrido una pequeña sobre fertilización o en el caso contrario en el que se ha producido una
carencia del mismo elemento, la planta de cannabis siempre tardará unos días a recuperarse. La velocidad en la
recuperación dependerá siempre del grado de carencia o exceso que pueda tener la planta, de modo que una rápida
detección ayudará siempre a facilitar la recuperación de las mismas en un tiempo más reducido.
Dependiendo del sustrato junto con los abonos utilizados las plantas se podrán recuperar más o menos rápido. En
los sistemas de cultivo hidropónico la velocidad en la recuperación de la planta será mucho más rápida que en un
cultivo en tierra con abonos orgánicos. Como ya hemos comentado al inicio del post, según el formato en que se
presenten los nutrientes estos serán de más rápida o lenta absorción.
Avance de carencia de nitrógeno
En la fase de crecimiento y en el caso de una pequeña sobre fertilización cuando se sufre un exceso de este
elemento, procederemos a reducir o eliminar durante unos riegos el abono de crecimiento.
En el caso de estar utilizando aditivos para la marihuana estos los podemos seguir añadiendo de una manera
habitual ya que no contienen alimento, solo elementos que harán que la planta pueda metabolizar el exceso de
alimento creando más hojas, ramificaciones… en definitiva que crezcan y gasten los nutrientes que contienen.
Durante la fase de floración si sufrimos una sobre fertilización deberemos actuar según semana de cultivo nos
encontremos. En el caso que suceda durante las dos primeras semanas post cambio de fotoperiodo actuaremos de
la misma manera que si estuviéramos en crecimiento dado que las plantas aún crecerán casi hasta entrada la 3a
semana cuando los cogollos empiezan a mostrarse.
Por el contrario si nos encontramos ya entrada en floración, los excesos de nitrógeno no suelen ser tan habituales,
pero en el caso de haberlas entonces deberemos retirar el abono base, para seguir abonando solo con un PK el cual
no contiene nitrógeno añadido. De este modo las plantas pueden seguir alimentándose para crear los cogollos
según la fase en que se encuentren y eliminar al mismo tiempo los excesos del nitrógeno. En el caso de existir una
sobre fertilización más acentuada previamente podemos realizar un lavado de raíz para limpiar un poco el sustrato
del exceso de nutrientes y seguidamente realizar un riego con las dosis adecuadas de PK.
3. PROPIEDADES DE LOS
CANNABINOIDES.
El 9-THC es el cannabinoide con mayor
potencia psicoactiva, por lo que estas propiedades
en una muestra de cannabis dependerán
de su contenido en este compuesto. El
9-THC presenta propiedades hidrófobas por
lo que es muy soluble en lípidos. Esto le confiere
unas características, en relación con su distribución en el organismo y con su eliminación,
que le diferencian de otras drogas de
abuso. Es bastante inestable, pudiendo ser
degradado por el calor, la luz, los ácidos y el
oxígeno atmosférico, lo que podría explicar la
perdida de potencia que se produce durante
su almacenamiento. Los otros cannabinoides
presentes en la planta de los que más datos
se dispone son:
1) El 8-THC que tiene un perfil farmacológico
muy parecido al del 9-THC, aunque algo
más bajo, por lo que se esta investigando
para el diseño de fármacos sin efectos psicoactivos.
Sólo aparece en algunas variedades
de la planta y su concentración es
muy pequeña en comparación con la del
9-THC (Mechoulam, Devane y Glaser,
1992). El 8-THC podría estar implicado en
el efecto cataléptico atribuido a los cannabinoides,
ya que este compuesto, o alguno
de sus metabolitos, presenta en ratones
una buena correlación entre sus concentraciones
y la aparición de catalepsia (Ohlsson
y cols., 1980a).
2) El CBN también tiene propiedades psicoactivas,
entre las que se encuentran las
relacionadas con los estímulos discriminativos
del THC (Järbe y Mathis, 1992). Esta
actividad es, en animales de experimentación,
aproximadamente una décima parte
de la descrita para el THC. Sin embargo,
los resultados obtenidos en humanos
fueron bastante contradictorios. Algunos
autores han indicado que, tras su administración
intravenosa, el CBN produce efectos
similares a los descritos para el THC
(Pérez-Reyes y cols., 1973a), mientras que
otros no los han encontrado cuando la
administración fue por vía oral (Hollister,
1974). En comparación con el THC, el CBN
presenta mayor afinidad por el receptor
CB2 que por el CB1 (Munro y cols., 1993).
Al ser el CB2 un receptor periférico, esto
podría implicar a este compuesto en los
efectos producidos por el cannabis fuera
del sistema nervioso central. Así, el CBN
parece participar en la modulación del sistema
inmune atribuida desde hace tiempo
a los cannabinoides. Su actuación sobre el
receptor CB2 en esplenocitos y timocitos,
al inhibir la adenilato ciclasa, reduce la actividad
de la proteína quinasa A y de los factores
de transcripción ligados al AMPc
(Herring, Koh y Kaminski, 1998). Esta
reducción, implica, a nivel genético, una
disminución en la transcripción del gen
para la IL-2, proteína que participa en la
regulación de la actividad del sistema
inmune. La disminución de su liberación
podría contribuir a explicar la capacidad de
inmunomodulación atribuida a los cannabinoides
(Condie y cols., 1996).
3) El CBD es un compuesto bicíclico, al estar
el anillo de tetrahidropirano escindido. Es
un cannabinoide prácticamente desprovisto
de propiedades psicoactivas. De hecho,
el CBD no es capaz de desplazar del receptor
CB1 ni a un agonista como el CP-
55,940 ni a un antagonista como el
SR141716A (Thomas y cols., 1998). Sin
embargo, a concentraciones micromolares,
actúa como antagonista de los receptores
cerebelares para cannabinoides,
cuando se utiliza GTPgS como índice de
activación de este receptor (Petitet y cols.,
1998). Al tratarse de una sustancia no-psicoactiva,
se ha profundizado en la exploración
de sus posibles efectos clínicos. Se
ha descrito un caso en el que el uso oral
del CBD (disuelto en aceite de maíz y
empaquetado en cápsulas de gelatina) ha
sido efectivo en un tratamiento a largo
plazo de la psicosis (Zuardi y cols., 1995).
Cuando se utiliza una mezcla de cannabinoides
o el producto natural, el efecto
antipsicótico podría estar enmascarado por
los efectos indeseados del THC.
Investigaciones realizadas con roedores,
han demostrado que el CBD, a dosis relativamente
bajas, produce efectos ansiolíticos en
estos animales (Onaivi, Green y Martin,
1990). Los datos obtenidos en humanos son
contradictorios. Unos investigadores han
observado que el tratamiento con CBD atenúa
las alteraciones psicológicas inducidas
por altas dosis de THC (0.5 mg/kg.), como por
ejemplo los sentimientos de ansiedad y de
pánico (Zuardi y cols., 1982). Otros investigaviamente
ningún efecto modulador del CBD
sobre la actividad psicótropa del THC (Hollister
y Gillespie, 1975).
La única característica farmacológica del
THC que parece compartir el CBD es la actividad
anticonvulsivante, aunque posiblemente
utilizando diferentes mecanismos de actuación.
Por otro lado, al administrar CBD a
pacientes epilépticos, disminuía el desacoplamiento
comportamental relacionado con el
THC (Izquierdo, Orsingher y Berardu, 1973).
Esta propiedad del CBD abrió la posibilidad
de su utilización en el tratamiento de la distonía,
el corea de Huntington o el dolor neuropático
(Consroe y Sandyk, 1992). Se ha atribuido
recientemente al CBD un papel
neuroprotector al comprobar su actuación
como antioxidante frente a los efectos oxidativos
producidos en las neuronas por la liberación
de glutamato (Hampson y cols., 1998).
Aunque los resultados son preliminares, al
tratarse de un estudio en cultivo de células
de rata, apuntan a una posible actividad protectora
de este compuesto en el cerebro.
El CBD ha sido relacionado desde hace
tiempo con el sistema inmune. Suprime la
producción de anticuerpos en cultivos celulares
de bazo de ratón, en presencia de células
T y de macrófagos activados (Baczynsky y
Zimmerman, 1983). Recientemente, se ha
visto que en algunas líneas celulares del sistema
inmune, el CBD inhibe la producción de
diversas citoquinas (IL-8, IL-10, TNF-, IFN-).
Estos resultados, que indican sus posibles
efectos beneficiosos en enfermedades inflamatorias/
autoinmunes, también advierten de
su peligrosidad en relación con el SIDA,
tumorogénesis e inflamación alérgica en pulmones
(Srivastava, Srivastava y Brouhard,
1998).
3.1. Relación estructura-actividad.
Las propiedades de estos cannabinoides
dependen de su estructura química. Variaciones
mínimas en los componentes de la molécula
del THC pueden provocar cambios
importantes en su actividad. La disposición
de sus átomos en el espacio y la posible existencia
de enantiómeros también puede influir
en las propiedades de la molécula. Diversos
estudios realizados desde la década de los
sesenta han servido para caracterizar la
estructura de estos compuestos. Además, la
cristalografía de rayos X y la resonancia magnética
nuclear han permitido dilucidar la geometría
de los cannabinoides tanto en estado
sólido como en disolución. Esto ha facilitado
los estudios sobre las interacciones que se
producen entre estos compuestos y su
receptor.
Estas investigaciones han permitido establecer
algunas de las “reglas” que debe cumplir
una molécula para poder presentar actividad
cannabimimética (Mechoulam, Devane
Biosintesis de los canabinoides
Hasta el momento se han aislado un total de 66 cannabinoides procedentes de la
planta de Cannabis sativa aunque tres de ellos son los los mas conocidos:
THC (delta-9-tetrahidrocannabinol) es el componente activo principal del cannabis, y
es el responsable de los efectos psicoactivos de la planta, a partir de la cual se obtiene
la marihuana y el hachís. Desde un punto de vista clínico, es útil para aliviar el dolor
moderado pues posee un efecto analgésico además de ser neuroprotector.
Δ-9-tetrahidrocannabinol y Δ-8-tetrahidrocannabinol, imitan la acción de la anandamida,
un neurotransmisor producido de forma natural en el organismo. El THC produce el
“subidón” asociado al cannabis a causa del enlace con el receptor CB1 del cerebro.
Tricomas glandulares canabis
El THC se sintetiza en las glándulas de resina, unas células especializadas que
segregan una mezcla de resinas, aceites esenciales y cannabinoides (THC, CBD,
CBDA, CBN, etc.). Estas glándulas de resina que recubren a modo de pelos la
superfície de las flores (cogollos) y hojas pequeñas, se llaman tricomas glandulares.
Durante las últimas semanas de vida, el cannabis empieza a segregar THC. Cuando
los tricomas están llenos la planta deja de segregar más THC y éste va desapareciendo
lentamente, degradándose en CBN. Una planta con más concentración de THC y
menos de CBN y CBD será más psicoactiva, en cambio una planta con mayor
concentración de CBN y CBD será más narcótica, más calmante.
Las rutas biosintéticas de los cannabinoides en la planta se han logrado establecer muy
recientemente. Dichas rutas comienzan desde terpenos precursores como el isopreno y
el ácido mevalónico, seguida por la combinación del ácido olivetólico y el geranil
pirofosfato. La unión de estos dos compuestos forman la molécula cannabinoide
precursona básica, el ácido cannabigerólico (CBGA), que se convierte a ácido
cannabigerólico monometil éter (CBGAM) y al ácido hidroxicannabigerólico (hidroxi-
CBGA). Durante la transición de estos compuestos, se generan los ácidos
cannabicroménico (CBCA) y los ácidos cannabidiólico (CBDA) y
tetrahidrocannabinólico (THCA).
Hasta hace muy poco tiempo se pensaba, de forma errónea, que el ácido
cannabidiólico (CBDA), se ciclaba a ácido tetrahidrocannabinólico (THCA), significando
que si no había transformación o bien ésta era escasa, del ácido cannabidiólico (CBDA)
al ácido d-9-tetrahidrodannabinólico (THCA), habría poco o ningún THC en las plantas
y mucho CBD. Recordemos que el THC se forma por la eliminación (desacarboxilación)
del grupo ácido (COOH) del THCA. En 1997, el Profesor de farmacobotánica, Yukihiro
Shoyama de la Universidad Kyushu de Japón, estableció al fin, científica y claramente
la ruta biosintética de los cannabinoides, al lograr aislar las enzimas sintasas del THCA,
CBDA y CBCA. Este descubrimiento reveló que “los caminos biosintéticos del
cannabinoide precursor CBGA (Acido Cannabigerólico) a CBDA, THCA y CBCA,
existen cada uno independientemente”. Este hallazgo tira por tierra las consideraciones
de investigaciones anteriores en las que se afirmaba que era necesaria para la
biosíntesis del THC, la formación del cannabinoide CBDA para luego ciclarse a THCA.
De ahí la importancia de la capacidad biosintética de cada planta para poder sintetizar
la enzima específica para desarrollar el THCA. Si una variedad no tiene la capacidad
genética de fabricar cantidades importantes de “sintasa THCA”, no tendrá un potencial
adecuado como semental productor de THC”.
Receptores de cannabinoides
Antes de 1980, hubo mucha especulación sobre los efectos producidos sobre el físico y
la psique a través de vía inespecífica en las membranas celulares por parte de los
cannabinoides. El descubrimiento del primer receptor de cannabinoides en los años
ochenta ayudó a resolver este debate. Estos receptores eran comunes en animales y
fueron encontrados en mamíferos, aves, peces y reptiles. Actualmente hay dos tipos
conocidos de receptores: el CB1 y el CB2.
El cáñamo se obtiene de los tallos de "Cannabis sativa", de la familia de las urticáceas, que se cultivan
preferentemente en climas templados. Las fibras del cáñamo se asemejan a las del lino, aunque son más bastas,
más largas y mucho más resistentes, presentando extremidades redondeadas. Su longitud media es de 28 mm y su
diámetro medio de 35 micrómetros. Químicamente, se componen de un 86 % de celulosa, un 6 % de lignina y un 8
% de pectinas, ceras y hemicelulosa (ASOCAE, 2007).
La tela de Cáñamo absorbe mejor la humedad que la del algodón y su cualidad térmica la hace más fresca en
verano y cálida en invierno.
De las fibras largas del Cáñamo se obtienen telas de alta resistencia para prendas de vestir y para la industria: telas
- finas o para el trabajo -, calcetines, zapatos de lona, bolsas, alfombras, cordelería en general y un sin fin de usos,
desde las velas que aparejaba Cristóbal Colón hasta los primeros vaqueros Levi Strauss.
Por su cultivo y tratamiento ecológico, la ropa de Cáñamo es muy adecuada para pieles sensibles.
CARACTERÍSTICAS
Porte: hierbas erguidas o trepadoras, generalmente ásperas. Con estructuras secretoras distribuidas en las
inflorescencias y en las hojas superiores.
Hojas: Pecioladas, alternas u opuestas, enteras, lobuladas o palmadas.
Flores: Actinomorfas, dioicas, pequeñas, dispuestas en panojas, amentos o glomérulos. Estaminadas: perigonio 5-
partido de tépalos libres, de prefloraciónimbricada. Estambres 5, erectos con anteras biloculares de dehiscencia
longitudinal Pistiladas: con perigonio gamotépalo, envolviendo apretadamente al ovario. Gineceo unilocular, súpero y
uniovulado.
Fruto: aquenio, cubierto por el perigonio.
Semilla: Con endospermo carnoso y embrión curvo o espiralado (UNNE, 2007).
FENOLOGÍA
Esto permite programar adecuadamente el uso del suelo, las labores de cultivo y la cosecha, permite comparar el
rendimiento de las especies según el suelo, así puede predecir cuándo habrá una mejor producción que comportará
una mejor cosecha
Para sacar el mayor rendimiento a estas plantas de floración automática, es recomendable que sean cultivadas bajo
foco en fotoperíodo de 18 horas de luz y 6 horas de oscuridad, desde la germinación hasta la cosecha. Para su
cultivo exterior, los mejores meses son mayo, junio y julio,aunque por su cruce con una Rudelaris(planta originaria
del este de Europa) se adapta bien a cualquier época del año.
La floración del cannabis se activa cuando la planta produce una hormona llamada" florigen ", pero para ello el
cáñamo necesita recibir un fotoperiodo adecuado a cada variedad de cannabis (UNNE, 2007).
Técnicas de cultivo
Probablemente el cáñamo es de los cultivos mejorados más eficaces de todos que pueden entrar en rotación;
mejora las condiciones físicas del suelo sin empobrecer su fertilidad y tiene un efecto de contención de malas
hierbas. Las condiciones de suelo son mejoradas por la tupida red de raíces secundarias que facilitan la
estructuración del suelo. El desarrollo de las malas hierbas es frenado por la fuerte competencia ejercida por el
cultivo, bien a través de los efectos físicos directos o por la acción de filtro de la radiación luminosa y de
sombramiento , o bien por el "mulching" formado por las hojas de la porción basal y media de la planta que caen
sobre el suelo recubriéndolo parcialmente , las hojas de cáñamo caen durante el periodo de cultivo o en la
maduración, cerca de 1/3 del peso totral de la planta, restituyendo al suelo la totalidad de de K extraido y casi el 60
% de P. También las raíces que repersentan el 10 % del peso total de la planta, con un contenido de elementos muy
próximos al de los tallos, contribuye a la restitución de la cuota de nutrientes extraídas (LÓPEZ, 2002).
GERMINACIÓN
Se ha hablado mucho sobre la germinación de semillas en general, relacionando este hecho con las fases lunares.
Hay quién dice que es mejor plantar en luna nueva y otros dicen que es mejor hacerlo cuando está llena.
No está demostrada la influencia de la luna al germinar una semilla en el interior. Lo que si se sabe es que las
semillas son delicadas y les puede afectar tanto la excesiva humedad, como la falta de agua. El hecho de que el
medio esté tibio ayudará a la germinación. Venden mallas eléctricas construidas para tal fin, también se utilizan
yogurteras eléctricas con muy buenos resultados. Si se utilizan fluorescentes se pueden instalar los cebadores en la
parte inferior de la cubeta para que proporcionen el calor justo. Se debe insistir en el hecho de que las semillas
deben ser de calidad garantizada y adaptadas a interiores, pues el trabajo que se emplea y el dinero invertido es el
mismo para una semilla mala que para una de buena, mientras que los resultados son bien distintos.
Las semillas buenas son de colores diversos según el origen de la planta, pero suelen ser atigradas y no
forzosamente de gran tamaño. Las semillas de cáñamo o cañamones, de los que se dan a los pájaros son más
grandes que las de marihuana aunque de igual forma. Las semillas que no han madurado bien tienen un tono
verdoso y suelen romperse con una ligera presión de los dedos, no se puede asegurar que el código genético quede
intacto si la semilla no ha madurado lo suficiente en la planta, cuando eso sucede, la semilla si resiste una ligera
presión y adquiere un tono tostado. Las semillas de compra no tienen una garantía absoluta, pues se trata de
material vivo, pero si que están bien maduradas y tienen denominación de origen.
Se pueden enterrar las semillas directamente en la tierra, regar a continuación y esperar que salgan.
Este sistema dependerá demasiado de la suerte. Se recomienda poner las semillas en un vaso de agua tibia (añadir
unas gotas de lejía para evitar que se pudra el agua). Al cabo de un día las semillas se hundirán, las que no lo
hagan seguramente no germinarán. Al cabo de unos días las semillas sanas se abrirán y dejarán asomar una punta
blanca, la raíz. No conviene dejar asomar mucho la raíz. En ese momento conviene enterrarlas a 1-1'5 cm. de
profundidad y cubrirlas suavemente con un poco de tierra, regar a continuación pero nunca demasiado. El punto
exacto de agua sería mantener el medio húmedo pero no mojado, quizás un sistema de goteo podría ser un buen
sistema si se le pilla bien el punto. Otra forma de provocar que se abran y asome la raíz sería poner las semillas
sobre una servilleta de papel en un plato, colocar otra servilleta encima y regar suavemente por encima, mantener
húmedo. No será necesario que tengan luz hasta que no broten. En ese momento, será indispensable.
Nunca se debe dejar encharcar el medio, se pudrirían, al igual que no es conveniente que el medio sea demasiado
poroso ni demasiado abonado. Un buen medio sería substrato mezclado con lava o perlita. Lo más adecuado son
los potes de turba degradables, se colocan directamente en el recipiente definitivo en cuanto las raíces asoman por
sus paredes. Son muy prácticos, pero también se pueden utilizar pequeños tiestos de plásticosprovistos de agujeros
de drenaje. Si se hacen germinar todas en un tiesto se pueden trasplantar con una cuchara sopera procurando
llevarse el mayor volumen de medio posible sin que afecte a la recién brotada semilla, aunque es fácil romper alguna
raíz y no se puede asegurar el éxito del trasplante por más cuidado conque sea hecho
No se puede saber el sexo de una planta hasta que no aparecen flores, cosa que ocurre cuando el proceso ya está
avanzado. La proporción de machos y hembras es de 1: 1, las buenas condiciones pueden favorecer la germinación
de un mayor número de hembras y si las condiciones son malas tendremos más machos. El sexo ya viene
determinado en el código genético de la semilla, pero los factores que permiten su germinación son a veces un
misterio, parece que una semilla sepa si tiene otra plantada al lado.
Las semillas pueden ser plantadas nada más ser recogidas. También se pueden conservar durante mucho tiempo,
incluso años, pero deben envasarse bien secas y a salvo de la luz o de fuentes de calor, si es posible al vacío. La
edad afectará a la germinación, haciéndolo menor número de ellas, así como pueden experimentar una pérdida de
vigor y probablemente también de potencia si son muy viejas o no han sido bien conservadas.
SIEMBRA
El cáñamo requiere de una buena preparación del lecho de siembra, con labores de afinamiento durante el invierno
en los terrenos arcillosos o de textura media y al final de invierno para los terrenos sueltos, más fácilmente
sometidos a la formación de costra(LÓPEZ, 2002).
La siembra según condiciones ambientales, debe realizarse lo más precoz posible, cuando el terreno se haga
practicable y la temperatura se aproxime a los 10 – 12 °C (LÓPEZ, 2002).
La semilla debe enterrarse a una profundidad de 2 – 4 cm, con una separación entre líneas de 15 a 20 cm
y densidad de siembra que permita obtener 90 – 100 plantas/m2 en la recolección. La dosis de semilla debe ser por
tanto superior para evitar los riesgos de baja emergencia o mortalidad de plantas, sin olvidar la capacidad de auto
regulación del cultivo que modifica el nivel de supervivencia y de reaccionar al disminuir la poblaciónincrementado
proporcionalmente el peso medio de la planta. Este fenómeno es menos marcado en condiciones de disponibilidad
de N. Cultivos pocos densos suministran plantas más altas y más gruesas y con mayor contenido porcentual de
corteza y de fibra. Por el contrario, las plantas más débiles obtenidas a una densidad mas elevada tiene mayor
contenido en fibra, aunque presenta también una mayor deformidad de altura y diámetro. Teniendo en cuenta todo lo
anterior es recomendable sembrar 150 – 170 semillas viables/m2, que corresponden a 35 – 40 kg de semilla/ha,
en función de la germinabilidad y del peso medio de la semilla, para obtener, considerando la falta de emergencia y
la mortalidad durante el periodo de crecimiento, 90 – 100 plantas/m2 en la recolección (LÓPEZ, 2002).
Cuadro 01. Influencia de la densidad de plantas en diferentes parámetros cuantitativos y cualitativos de la
producción de cáñamo para fibra.
Fuente: Venturi y Amaducci, 1999
FASE DE CRECIMIENTO
Sólo se debe abonar si se observa que las plantas palidecen o pierden vigor. No es necesario durante esta fase del
proceso más cuidados que el suministro de agua, la vigilancia de la altura de las luces y el giro las plantas sobre sí
mismas periódicamente así como la sucesiva colocación de las que más crecen en los lados. Conviene que el jardín
sea lo más uniforme posible. Cuando todas las plantas tengan las alturas deseadas (20-38 cm. ), será el momento
de cambiar el régimen de luz (12 horas de luz-12 horas de oscuridad) lo que las forzará a florecer. Se deben cortar
esquejes antes de pasar a la fase de floración si se desea perpetuar el sistema. El simple hecho de conectar la luz a
un temporizador a 12 horas provocará la fase de floración. Será muy importante que el periodo nocturno sea
totalmente oscuro, por lo que se tendrá que comprobar que no haya rendijas por las que se cuele la luz desde el
exterior si esta existiera. El uso de ventiladores, primordial durante el crecimiento (KENDER, 2005).
FERTILIZACIÓN
El cáñamo tiene una respuesta muy moderada a la aportación de P y K, aunque éste último mejora las
características cualitativas de la fibra para la industria textil. Para ambos nutrientes la fertilización debe limitarse, por
tanto, a restituir las exportaciones del cultivo, que equivalen, para una producción de 10 t de tallos secados al aire, a
50 – 60 kg de P2O5/ha, considerando la cuota de insolubilización, y a una dosis igual de K2O, sólo en las
situaciones de carencia de este nutriente (LÓPEZ, 2002).
Como ya se ha dicho el N favorece fuertemente el desarrollo vegetativo y aparentemente el desarrollo vegetativo y
aparentemente, por tanto, su aportación resultan de particular utilidad. Sin embargo, su influencia en el rendimiento
de tallo es frecuentemente modesta, mientras incrementa el desarrollo del aparato foliar y sobre todo la humedad en
la fase final del crecimiento. Esto dos factores suponen más dificulta para operación de recolección. Por otro lado, si
se aplica el N en exceso puede resultar peligroso porque favorece el encamado y el tronchamiento de la planta. En
general también el N aumenta la mortalidad y en consecuencia el diámetro y altura de las plantas supervivientes, el
aumento del diámetro empeora la relación superficie – volumen de los tallos y puede disminuir el contenido
porcentual de corteza. En la mayoría de las situaciones la aportación de N puede estar comprendida entre 80 – 120
kg/ha (LÓPEZ, 2002).
Bibliografía
ASOCAE. 2007. Fibras y textiles. La industria textil. [En línea]: Natureduca, (, Documento 22 de Septiembre de
2009).
KENDER. 2005. La amrihuana. [En línea]: (http://kalamudia.kender.es, Documento 25 de Septiembre de 2009).
LOPEZ, L. 2002. Cultivos industriales; Cáñamo. 1era Edición. Madrid – España, Ediciones Mundi – prensa. P. 457 –
470.
Leer más: http://www.monografias.com/trabajos79/manejo-cultivo-canamo-cannabis-sativa/manejo-cultivo-canamo-
cannabis-sativa2.shtml#ixzz4nsCxaISz